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Resistencia Indigena
Resistencia Indigena
Estos movimientos aparecen a finales del siglo XVIII y principios del XIX
aunque no llega a su objetivo fundamental plasman en nuestra historia un gran
paso, ya que se empieza a concientizar el pueblo de sus derechos y a su vez, se
despierta el espíritu de libertad en los venezolanos que abrazan la causa de la
independencia. En consecuencia se ponen de manifiesto las nuevas doctrinas
filosóficas y las repercusiones de la Independencia de los Estados Unidos, la
Revolución Francesa y la Independencia de Haití, hechos estos que vinieron a
reforzar la conciencia rebelde del pueblo que venía marcado por un injusto
régimen colonial español. Los movimientos pre independentistas fueron:
MOVIMIENTOS INDEPENDENTISTAS
CUARTA REPUBLICA
Este período está caracterizado por la dictadura del General Marcos Pérez
Jiménez, avance tecnológico y urbanista, el derrocamiento de la dictadura, las
reformas democráticas que dan paso a la alternancia política establecida en el
Pacto de Puntofijo, la nacionalización del petróleo en 1976 y por ello, el
nacimiento de Petróleos de Venezuela, S.A. (PDVSA). En el ámbito
internacional, Venezuela se convierte en miembro fundador de la Organización de
Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Durante los años 80 de este período se caracterizó por el florecimiento del
arte, la cultura y desarrollo artístico de la nación en los distintos medios, siendo el
más amplio la televisión (TV). Medios de comunicación pioneros como RCTV
hacen famoso al país suramericano con telenovelas de éxito internacional, como
Topacio, Cristal y Kassandra.
La FAN Y Papel Desarrollado Por La Asesoría Militar
Norteamericana: Desde la llegada de Hugo Chávez al poder la Fuerza Armada
Nacional Bolivariana ha estado en boca de la opinión pública, no obstante, los
principales críticos de la ruptura de paradigmas en la FANB han sido los antiguos
generales, quienes eran los encargados de avalar los diversos actos de corrupción
cometidos por los presidentes de turno, cabe destacar que entre estos arcaicos
oficiales podemos citar a: Vicealmirante Rafael Huizi Clavier, General de
División (Ej.) Fernando Ochoa Antich, General de División (Av.) Maximiliano
Hernández Vásquez, General de División (Ej.) Carlos Julio Peñaloza,
Vicealmirante Mario Iván Carratú Molina, Tcnel Iván Ballesteros, entre otros.
Es del conocimiento público que en la década de los años 80 y 90 las
Fuerzas Armadas Nacionales como eran denominadas anteriormente, estaban
orientadas y guiadas bajo la Doctrina de Seguridad impuesta por los Estados
Unidos. Cabe resaltar que esta dominación empezó con el Tratado Interamericano
de Asistencia Recíproca, suscrito en la ciudad de Rio de Janeiro en 1948 al poco
tiempo de haber culminado la Segunda Guerra Mundial. Es desde allí en donde
Venezuela quedó atada con el Imperio a cumplir su doctrina, adquirir su
equipamiento, adoptar sus maniobras, entre otras acciones que respondieron a los
intereses de los gringos con el objeto de mantenernos pisado con su bota.
Durante el generalato de los antes citados, se incrementó las listas de
oficiales venezolanos formados en la Escuela de las Américas, donde se le
adiestraba al personal militar en la persecución de grupos irregulares, en la tortura
y desaparición física de personas en contra del Gobierno. Tal cual como sucedió
el 4 de octubre de 1982, en la masacre de Cantaura, donde una operación militar
llevada a cabo por diferentes fuerzas de seguridad del gobierno de Luis Herrera
Campins masacraron a unos muchachos en las cercanías de la ciudad de Cantaura
en el estado Anzoategui. Del mismo modo, hablar del proceso de ascenso en la
Cuarta República es un tema que causa escozor en el sentir social, ya que los
procesos de méritos se daban de acuerdo a la influencia que pudiera tener el
Presidente del momento ante el Congreso. En ese período, las promociones tenían
un sello, eran adecas o copeyanas, y estas salían “beneficiadas o perjudicadas”, de
acuerdo al presidente que mandará en ese instante, acá el tema de exaltación no
era importante y se imponía el dicho del que, a buen árbol se arrima, buena
sombra lo acobija. La dirigencia de la Lusinchi, Pérez y Caldera le hacían ver a la
opinión pública que las FAN eran apolíticas y no deliberantes, sin embargo, eso
era una fachada, ya que existían dentro de las filas militares dos corrientes
partidistas.
En los años 80, la capacidad operativa de las Fuerzas Armadas Nacionales
venezolanas era reducida a pesar de que muchos oficiales se habían formado en el
Norte, ya que no contaban con la práctica necesaria al momento de un conflicto y
tal situación se corroboró en el incidente de Caldas en agosto de 1987 en el Golfo
venezolano cuando el Ministro de Defensa, General de División, Italo del Valle
Alliegro, permitió que Jaime Lusinchi, Comandante en Jefe, dirigiera las acciones
bajo los efectos del alcohol…. Sin duda tal evento pudo haber culminado en una
guerra entre Colombia y Venezuela.
Además no podemos dejar pasar por alto en 1987 el momento en el que
Blanca Ibáñez se uniformó de General y comandó acciones de índole militar en la
tragedia del Limón en la ciudad de Maracay. Acá una vez más los integrantes de
esa abominable fuerza militar permitieron que los caprichos personales se
impusieran por encima de la Constitución del momento y las leyes. Y aplaudieron
tal ridiculez con honores militares.
Pensamiento Cívico Militar: es la conjunción de un conocimiento
acumulado por siglos -la teoría de la guerra y las actividades conexas- con la
conducta concreta en el espacio y el tiempo para realizar las tareas que el entorno,
nacional e internacional, demanda. El cambio en las condiciones políticas, tanto
en el ámbito nacional como en el internacional, son la fuente de orientación del
nuevo pensamiento militar en Venezuela y es lo que imprime cambios en el
ejercicio profesional militar. Frente a nuevos desafíos las operaciones militares
clásicas resultan insuficientes. De allí la necesidad de incorporar nuevos
conceptos y nociones que posibiliten enfrentar con éxito, desde el punto de vista
militar, las nuevas realidades.
Papel Jugado Por Las Masas Populares Durante: El Carupanazo, El
Portoñazo, La Lucha Armada, El Caracazo De 1989, El 4 De Febrero Y 27
De Noviembre De 1992, El Sabotaje Petrolero Y Golpe De Estado 2002.
El pueblo venezolano ha jugado un papel importante en el desarrollo social,
económico, cultural y político de la Nación. La importancia de esta participación
popular en el ejercicio directo de la soberanía está refrendada en el texto de la
Constitución, así como en la Ley Orgánica de los Consejos Comunales y otros
documentos jurídicos. Conocer y profundizar sobre el significado de la misma se
convierte en necesaria para los cambios y necesidades que demandan sus
habitantes.
El Carupanazo, El Portoñazo, La lucha Armada, El Caracazo de 1989, El 4
de Febrero y 27 de Noviembre de 1992 representaron movimientos en el que las
masas quisieron tomar justa venganza ante las humillaciones y ante las falsas
promesas seudo democráticas a que se habían visto sometidas durante tanto
tiempo. Se trataron de auténticas rebeliones populares o explosión social
espontánea. La representación de estos acontecimientos es el despertar abrupto de
la conciencia de un pueblo sometido a tanta explotación y desprecio por las
minorías adineradas nacionales y transnacionales; es indudable que se trató de una
rebelión sin precedente en la Historia de nuestro País.
El “Carupanazo” y “Porteñazo” representaron pronunciamientos militares
de Izquierda, durante el período conocido como la “Lucha Armada en Venezuela”
ocurridos durante la presidencia de Rómulo Betancourt (1959-1964). El primero
estalló el 4 de mayo de 1962, y el segundo el 2 de junio del mismo año, siendo
bautizados así por haber sido protagonizados por el Batallón de Infantería de
Marina acantonado en Carúpano y por oficiales de la Guardia Nacional, y de la
Base Naval de Puerto Cabello, respectivamente. En términos generales, ambos
movimientos formaron parte de la difícil situación económica y política de aquel
entonces.
El Caracazo o Sacudón fue una serie de fuertes protestas y disturbios en
Venezuela durante el gobierno de Carlos Andrés Pérez, que comenzó el 27 de
Febrero y terminó el 8 de Marzo de 1989 en la ciudad de Caracas, e iniciados
realmente en la ciudad de Guarenas, debido al mal manejo de los recursos
económicos del País y la aplicación de paquetes económicos neoliberales. En este
hecho las mayorías menos privilegiadas demostraron durante esa revuelta que no
son simples borregos que obedecen ciegamente a sus pastores, y que siempre
estarán prestas a luchar por una vida más digna.
El 4 de Febrero de 1992 un grupo de militares también manifestó su rebeldía
contra el presidente Carlos Andrés Pérez, debido a la crisis económica reinante en
aquel entonces, secundado por paquetes económicos que apretaban y sacrificaban
el buen vivir de la masa popular venezolana. Esta rebelión no logró sus objetivos.
Entre los oficiales que comandaron esta maniobra se encontraban, principalmente,
cuatro tenientes coroneles del ejército: Hugo Chávez, Francisco Arias Cárdenas,
Yoel Acosta Chirinos y Jesús Urdaneta. Todos los participantes en esta acción
fueron llevados a prisión por su actuación en el hecho, siendo sus causas
posteriormente sobreseídas y puestas en libertad durante la presidencia de Rafael
Caldera.
Seguidamente, para el mismo año, el 27 de Noviembre se produce una
segunda manifestación militar. A diferencia de la rebelión anterior, éste fue
llevado a cabo por un grupo cívico-militar, integrado por altos oficiales de las 4
ramas de las Fuerzas Armadas, civiles pertenecientes a organizaciones y grupos
opositores al gobierno de Carlos Andrés Pérez. De alguna manera esta segunda
protesta, buscaba culminar con lo comenzado el 4 de Febrero del mismo año por
el Tcnl. Hugo Chávez Frías y un grupo de oficiales graduación media.
En relación al golpe de estado del 2002, otrora presidente Hugo Chávez
Frías, enmarcado en fuertes protestas y en una huelga general convocada por
Fedecámaras, que duró más de tres días, el 11 de abril de 2002, la oposición
convocó a una marcha permisiva entre los sectores caraqueños de Parque del Este
y PDVSA Chuao que luego fue desviada hacia al Palacio de Gobierno ubicado en
Miraflores, Caracas.
Alrededor del mismo se habían congregado simpatizantes de Hugo Chávez,
y cuando ambos bandos se encontraron se produjeron enfrentamientos que
causaron varios muertos en ambos bandos. Si bien todavía se discute quién inició
y quién continuó el tiroteo esa tarde, en la madrugada del día siguiente el Alto
Mando Militar venezolano anunció que Chávez había renunciado tras habérselo
solicitado.
Inmediatamente, militares adversos a Hugo Chávez ejecutaron un Golpe de
Estado que colocó en la Presidencia al presidente de Fedecámaras Pedro Carmona
Estanga. Luego de fuertes protestas de los simpatizantes de Chávez y algunas
presiones internacionales, ya que muchos países no reconocieron a Carmona, los
militares leales al Gobierno retomaron el poder y Chávez reasumió la Presidencia
en la madrugada del 14 de Abril de 2002.
Para el 2 de Diciembre del mismo año, inicia el suceso político conocidos
como “Paro Petrolero”, llamado también Paro Nacional o Huelga General
consistieron en una huelga o paralización de actividades laborales y económicas
de carácter general e indefinido contra el gobierno de Venezuela presidido por
Hugo Chávez, promovida principalmente por la patronal Fedecámaras y
secundado por la directiva y trabajadores de la nómina mayor de la empresa
Petróleos de Venezuela (PDVSA), los partidos de oposición agrupados en la
coalición Coordinadora Democrática, el sindicato Confederación de trabajadores
de Venezuela (CTV), diversas organizaciones como Súmate e incluso medios de
comunicación privados de prensa, radio y televisión. El paro se extendió hasta
Febrero de 2003, siendo una de las huelgas generales de mayor duración de la
historia.
Por los sectores simpatizantes del presidente Chávez, este evento es
denominado “Sabotaje petrolero” o “Golpe petrolero”, mientras que en los
sectores opositores se le ha llamado "Paro Cívico Nacional". Este hecho no fue en
modo alguno una huelga, en su precisa y correcta concepción jurídica, sino una
medida de protesta política cuyo objetivo fue presionar al presidente Chávez para
que sustituyese su política económica de corte socialista por una más proclive al
libre mercado o bien presentase su renuncia, doblegado ante las consecuencias
económicas derivadas de una acción de tal magnitud.
Para esa fecha en la que se inició este evento, no se dio a conocer ante la
opinión pública la apertura de pliego conflictivo laboral alguna, requisito básico
convocar a huelga. Por otra parte, sus convocantes no fueron trabajadores en
búsqueda de mejora de condiciones o beneficios laborales; en su lugar, quienes
figuran como principales convocantes son el gremio empresarial, a través de
Fedecámaras, así como buena parte de los empleados de PDVSA y la
Coordinadora Democrática. Los sindicatos, a través de la CTV, apoyaron la
convocatoria, pero no fueron convocantes.
Para finalizar, sin importar la ideología de los gobernantes de turno en
Venezuela y en el resto del planeta, éstos deberían afrontar en lo sucesivo las
consecuencias pacíficas y/o violentas tras la aplicación de medidas que sólo
garanticen la permanencia del capitalismo, y por tanto de una visión contraria al
bienestar general de la humanidad y a la existencia misma de vida en la Tierra.
Quizá sea necesaria una rebelión de dimensiones globales para ‘herir de muerte”
al capitalismo, y así estar a las puertas de un nuevo amanecer. La masa popular
venezolana estará siempre en pie de lucha defendiendo sus derechos.