UNIVERSIDAD NACIONAL DE LOJA

CARRERA DE ECONOMÍA
Fecha: 18/05/2020
Tema: los pros y contra de la globalización en el ámbito económico y financiero.

Introducción
El mundo de hoy está marcado por lo que se conoce como el proceso de globalización, es decir,
la creciente gravitación de los procesos económicos, sociales y culturales de carácter mundial
sobre aquellos de carácter nacional o regional, la globalización como tal aunque no es un
proceso nuevo, sus raíces históricas son profundas, los drásticos cambios en los espacios y
tiempos generados por la revolución de las comunicaciones y la información le han dado nuevas
dimensiones, que representan transformaciones cualitativas con respecto al pasado.
La globalización brinda, sin duda, brinda oportunidades para el desarrollo, pero es necesario
comprender que las políticas nacionales para buscar desarrollo deben diseñarse hoy en función
de las posibilidades que ofrece y los requisitos que exige una mayor incorporación a la
economía mundial.
La dinámica del proceso de globalización está determinada, en gran medida, por el carácter
desigual de los actores participantes. En su evolución ejercen una influencia preponderante los
gobiernos de los países desarrollados, así como las empresas transnacionales, y en una medida
mucho menor los gobiernos de los países en desarrollo y las organizaciones de la sociedad civil.

Aspectos pro-globalización.
La globalización como tal, es un proceso que ha sido beneficioso en diversos aspectos de la
economía, pero sin duda hay dos sectores económicos que lograron despuntar gracias a este
proceso, por un lado tenemos al comercio el cual se consolido a partir del último cuarto del
siglo XX, en una fase clave para la globalización, cuyas principales características son la
gradual generalización del libre comercio, la creciente presencia en el escenario mundial de
empresas transnacionales que funcionan como sistemas de producción integrados, la expansión
y la considerable movilidad de los capitales, y una notable tendencia a la homogeneización de
los modelos de desarrollo, pero en la que también se observa la persistencia de restricciones al
movimiento de mano de obra; por otro lado el sector financiero vio en este proceso global la
oportunidad para crecer incluso muy por encima del comercio, es decir que la globalización
financiera ha sido más rápida que la comercial y productiva, y se puede argumentar, con razón,
que vivimos en una era de hegemonía de lo financiero sobre lo real, aunque ambos procesos
tienen como telón de fondo un profundo reordenamiento institucional a nivel mundial, cuyo
elemento esencial ha sido la liberalización de las transacciones económicas internacionales,
corrientes y de capital.
El factor esencial ha sido indudablemente la liberalización del comercio, de los flujos
financieros y de las inversiones en los países en desarrollo, que se ha acelerado en las dos
últimas décadas y que ha sido responsable también de la tan conocida revolución tecnológica y,
muy en particular, de las que han logrado reducir los costos de transporte, información y
comunicaciones, es decir que con la globalización se logró la disminución radical del espacio,
en el sentido económico del término, es un efecto acumulado de la reducción de los costos y del
desarrollo de nuevos medios de transporte, a lo que se une la posibilidad de transmitir
información en tiempo real, cuya primera etapa se logró por el mismo proceso de globalización,
el cual empezó con la invención del telégrafo y posteriormente con el teléfono y la televisión;
así mismo el acceso masivo a la información sólo se hace posible gracias a las tecnologías de
información y comunicaciones desarrolladas en los últimos años, que han permitido disminuir
drásticamente el costo de acceso a una gran cantidad de información. Cabe recalcar que los
progresos registrados en el transporte, la información y las comunicaciones forman parte de un
conjunto más amplio de innovaciones tecnológicas que hicieron posible adelantos sin
precedentes en la productividad, el crecimiento económico y el comercio internacional.

Aspectos No-globalización.
Por otro lado, existen también aspectos negativos que la globalización como proceso genera,
estos se traducen en riesgos originados en nuevas fuentes de inestabilidad, especialmente de
carácter comercial como financiero, estos riesgos de exclusión recaen para aquellos países que
no están adecuadamente preparados para las fuertes demandas de competitividad propias del
mundo contemporáneo.
Muchos de estos riesgos obedecen a dos características preocupantes del actual proceso de
globalización. La primera, existen fuertes restricciones a la libre movilidad de la mano de obra.
Esto se refleja en el carácter asimétrico e incompleto de la agenda internacional que acompaña a
la globalización, la cual no incluye, por ejemplo, temas como la mencionada movilidad de mano
de obra ni mecanismos que garanticen la coherencia global de las políticas macroeconómicas de
las economías centrales, pautas internacionales para lograr una adecuada tributación del capital,
y acuerdos de movilización de recursos para compensar las tensiones distributivas que genera la
globalización, tanto entre países como al interior de ellos. Estas carencias, a su vez, reflejan un
problema aún más inquietante: la ausencia de una gobernabilidad adecuada para el mundo de
hoy, no sólo económica como se ha hecho particularmente evidente en el campo financiero sino
también en muchos otros terrenos, debido al enorme contraste entre los problemas de alcance
mundial y los procesos políticos, que siguen teniendo como marco las naciones e incluso,
crecientemente, los espacios locales.
A esto se suma una carente regulación de los flujos migratorios de la mano de obra no calificada
la misma que tiende a movilizarse por canales irregulares expuestas al abuso y vulneración de
sus derechos, acentúa su indefensión ante las autoridades y genera otra presión a la baja de la
remuneración del trabajo menos calificado en los países receptores.

La globalización es también la posible fuente de dos problemas que se han agudizado con el
avance mismo de este proceso global, uno de ellos son los problemas ambientales de carácter
global, es así que en las tres últimas décadas se ha registrado científicamente una situación
planetaria sin precedentes, derivada de la escala creciente y acumulativa de las actividades
humanas, que tiene efectos de carácter mundial como el calentamiento global, el
adelgazamiento de la capa de ozono, la merma de la biodiversidad, y el avance de la
desertificación y la sequía. La otra es también vinculada al plano económico, es la expansión de
la delincuencia internacional: la producción, el comercio y el consumo de estupefacientes, y su
estrecha relación con el financiamiento del terrorismo, el tráfico de armas y la circulación
internacional de capitales ilícitos, derivada del tráfico de estupefacientes y de diferentes formas
de corrupción que trascienden las fronteras nacionales.
Conclusión: la globalización como tal es un proceso que tiene marcado su rumbo, no va a
desaparecer por los efectos secundarios negativos que genera, especialmente los ambientales y
sociales, en ese sentido hay que entender que la globalización será o no bien recibida
dependiendo de la ideología histórica de los gobernantes de cada país, pues es este el principal
detonante que en varias regiones del mundo no se la termine de aceptar, generando rezado y
exclusión en las economías que están en vías de desarrollo, cuando lo correcto sería no ir en
contra de la corriente, sino más bien legislar políticas que ayuden a una integración en el corto
plazo a la economía mundial y así obtener los posibles beneficios de economías interconectadas.
Fuentes:

Ocampo, J. A. (2002). Globalizacion y desarrollo. Comisión Económica para America Latina.

Sara Urionabarrenetxea, A. B. (s.f.). Influencia de la globalización financiera sobre el

crecimiento de la economía real: Propuesta en un marco explicativo. Conocimiento,
innovación y emprendedores.