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Revista Ocupación Humana

Vol. 16 • Número 2 • 2016

La revista Ocupación Humana es el órgano oficial del Colegio Colombiano de Terapia


Ocupacional, orientada a difundir resultados de investigaciones y experiencias
profesionales por medio de la publicación de artículos originales que aporten al cuerpo
de conocimientos y la práctica profesional de la Terapia Ocupacional. La revista está
dirigida a los terapeutas ocupacionales profesionales y en formación dentro y fuera de
Colombia, así como a profesionales afines a los campos de la Terapia Ocupacional y la
Ciencia de la Ocupación.

ISSN: 0122-0942
Editora
Clara Duarte Cuervo. T.O. Esp. Mg.

Comité Editorial
Pamela Talero Cabrejo. T.O. OTD, OTR/L. Thomas Jefferson University, School of
Health Professions, Filadelfia, PA, Estados Unidos.
Jaqueline Cruz Perdomo. T.O. Esp. Teorías y Métodos Sociológicos. Mg. Filosofía.
Universidad del Valle, Colombia.
Diana Rocío Vargas Pineda. T.O., Mg. Salud Pública. Escuela Colombiana de
Rehabilitación, Colombia.
Representante del Consejo Directivo del CCTO: Aida Navas. T.O. Colombia.

Comité Científico
Liliana Álvarez Jaramillo. T.O. Mg. PhD. University of Western Ontario, Canadá.
Aleida Fernández Moreno. T.O. Mg. PhD. Universidad Nacional de Colombia.
Alejandro Guajardo Córdova. T.O. Esp. Mg. Universidad de Santiago de Chile, Chile.
Lida Pérez Acevedo. T.O. Mg. PhD. Universidad Nacional de Colombia.
Liliana Tenorio. T.O., Mg. Universidad del Valle, Colombia.

Colaboradores
Revisión de estilo textos en inglés: Johanna Useche Rodríguez.
Apoyo editorial: Deisy Carolina Moya. T.O.
Imagen de portada: Pamela Talero Cabrejo

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional


El Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional –CCTO– es una organización
profesional con carácter democrático, civil y privado, con personería jurídica, sin
ánimo de lucro; con plena capacidad legal para el cumplimiento de sus objetivos y
la posibilidad de recibir funciones públicas que le sean delegadas de acuerdo con
lo que establezca la Constitución Política de Colombia, las leyes y reglamentaciones
vigentes.

Cra. 94g No 86B - 15


Bogotá D.C., Colombia
www.tocolombia.org
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Tel: (57)(1) 4606559

Consejo Directivo Nacional Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional


Presidenta: Solángel García Ruiz
Vicepresidenta: Marby Natalia Peña Rodríguez
Secretaria General: Olga Marcela Alejo Fonseca
Tesorera: Yurani Vecino Martínez
Suplente de Tesorería: Oscar Javier Larrota Veloza
Fiscal: Clemencia Martínez
Regional Occidente: Presidenta: María Claudia Montoya Mejía
Vicepresidenta: Yasneidy Herrera Mora
Secretaria: Johana Ruiz Zúñiga
Regional sur:
Presidenta: María Claudia Trujillo
Secretaria: Juliana Guevara
Tesorera: Diana Ximena Martínez
Fiscal: Jaqueline Cruz Perdomo

Diagramación e impresión:
ARFO Editores e Impresores Ltda.
Cra. 15 No. 54-32 Tel.: 2494753
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Bogotá, D. C.

Las opiniones expresadas en los artículos son responsabilidad exclusiva de los


autores y no representan necesariamente los criterios de la Revista Ocupación
Humana, ni del Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional.
Se autoriza la copia de artículos y textos para fines de uso académico o interno
de instituciones, citando la fuente. Para impresos y artículos en formato digital,
dirija la solicitud al correo editorial@tocolombia.org.
Contenido

Editorial....................................................................................................................... 3

Prólogo
Los inicios: una visión de futuro de la Terapia Ocupacional
Carmen Helena Vergara, Liliana Tenorio......................................................................... 5

Investigación
Reflexiones sobre los orígenes de la formación en Terapia Ocupacional en Argentina
María Marcela Bottinelli, Mariela Nabergoi, Marcela Cecilia Mattei, Federico Juan
Manuel Zorzoli, Francisco Manuel Díaz, Natalia Milagros Spallato, Maureen
Mulholland, María Magdalena Martínez Del Pezzo Bredereke, Agustina Mariel García
Sartirana, Julieta Briglia, Sara María Daner..................................................................... 11

Terapia Ocupacional: una perspectiva histórica desde la Universidad Nacional de


Colombia (1966-1989)
Laura Rodríguez Mendoza, Nathalia Camargo Carrero, Xiomara Escobar Jiménez............ 26

Terapia Ocupacional en el sector trabajo: formación y prácticas en Barranquilla,


Colombia, 1996 - 2016
Clara Duarte Cuervo, Diana Sofía Bravo Serrano............................................................ 46

Reflexión
Mujer, género, educación, servicio social y ocupaciones. Un atisbo a la historia
de las ocupaciones femeninas 1955-1969
Karol Vanessa Martínez Naranjo, Estefanía Vergara Buriticá............................................. 68

Mujer ciudadana, universitaria y terapeuta ocupacional. Contrastes contextuales


de los años sesentas y setentas desde la Universidad del Valle y la Universidad
Nacional de Colombia
Lizeth Lorena Gómez Valencia, Daniela Vanessa Palma Arroyo, Laura Vanessa Rodríguez
Mendoza...................................................................................................................... 81

Precursores de la Terapia Ocupacional en Colombia: sujetos, instituciones, oficios


Clara Duarte Cuervo, Aleida Fernández Moreno, Jaqueline Cruz Perdomo,
Solángel García Ruiz...................................................................................................... 93

Lecturas y relatos históricos de la Terapia Ocupacional en Suramérica.


Una perspectiva de reflexión crítica
Alejandro Guajardo Córdoba......................................................................................... 110

Epílogo
La importancia de la historia para el desarrollo de la Terapia Ocupacional
Liliana Tenorio Rebolledo.............................................................................................. 118

Documento CCTO
Plan de Acción 2016 - 2026
Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional............................................................... 122

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Editorial

Compartir, contar, reconstruir, escribir, comprender las historias


de las terapias ocupacionales colombianas se convierte en un mo-
vimiento de la Terapia Ocupacional orientado a contar historias
“desde abajo y desde el sur”, como diría Torres (2013), con expre-
siones históricamente situadas y perspectivas políticas que ayuden
a develar luchas, opresiones y exclusiones.

Este número especial de la Revista Ocupación Humana está dedi-


cado a recoger y recrear historias que se cuentan desde distintos
lugares. Desde el Caribe hasta el Amazonas, desde el Pacífico a los
Llanos Orientales, las terapias ocupacionales han tenido orígenes y
formas de transcurrir particulares en cada territorio. Recorrer esas
historias ha significado desentrañar ideas, pensamientos, prácticas,
conocimientos que hacen que hoy seamos lo que somos, pero so-
bre todo, que nos ayuden a comprender y proyectar el futuro de
nuestro hacer y saber como profesión.

Algunos de sus artículos se originaron a partir del encuentro entre


escuelas de formación y colegas de todo el país interesadas en mi-
rar y comprender de manera reflexiva y curiosa el pasado; espacio
que cobró vida en el 2014. Otros se escriben desde Chile y Argen-
tina, donde colegas nos antecedieron e inspiraron para emprender
este camino.

La Revista se abre y se cierra con las invitaciones a la reflexión


que desde Cali hacen Carmen Helena Vergara y Liliana Tenorio,
gestoras y protagonistas de muchas de las luchas y recorridos de
la Terapia Ocupacional colombiana. De otro lado, un grupo de
colegas argentinas nos ubican en la década de 1950, cuando se
conformó en su país la Escuela Nacional de Terapia Ocupacional-
ENTO. Relatan detalles de la influencia de la escuela europea, el
protagonismo de las mujeres y otras circunstancias que desempe-
ñaron un papel relevante en su creación y en la formación que
allí se ofreció durante aquella época. Estos antecedentes ayudan a
entender las dinámicas regionales de mediados del siglo XX, pocos
años antes de que llegaran las primeras terapeutas ocupacionales y
se crearan los primeros programas de formación en Colombia, en
la década de 1960.

Desde los programas de la Universidad Nacional de Colombia, en


Bogotá, y Metropolitana, en Barranquilla, se presentan dos artícu-
los que abordan algunos recorridos en esas instituciones. El prime-

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 3


ro, el surgimiento e inicios de la formación en el país a nivel técnico, avanzando a la
profesionalización; el segundo, el conocimiento y la práctica en el área laboral como
campo de ejercicio profesional en la costa Caribe colombiana.

Dos artículos más abren la puerta a la reflexión alrededor de la Terapia Ocupacional


y otras profesiones que se posicionaron como opciones de educación superior para
las mujeres colombianas en las décadas del cincuenta y sesenta del siglo pasado.
Ambos textos proveen una visión del contexto en el cual la Terapia Ocupacional
llegó al país y dan pie a una línea de análisis necesaria para entender las dinámicas
de género y poder en las cuales se ha movido la profesión en estos cincuenta años.

Para este número, desde el grupo de investigación en Historias de las Terapias Ocu-
pacionales - HiTOs quisimos indagar sobre el uso de oficios en nuestro territorio
antes de su configuración como terapia, encontrando raíces en la caridad y la be-
neficencia, las personas socialmente marginadas y las prácticas de corrección y nor-
malización.

Es en este escenario situado, particular y complejo en el que Alejandro Guajardo


hace un llamado a pensar y comprender la Terapia Ocupacional latinoamericana
como un dispositivo tecnológico conformado en estrecha relación con la historia
social y política de nuestra región.

Para terminar, y como mirada hacia lo que viene para el Colegio Colombiano de Te-
rapia Ocupacional, este número presenta el Plan de Acción que el Consejo Directivo
Nacional 2016 - 2018, junto a otras colegas que apoyan la gestión, han planteado
como horizonte de sentido para nuestra agremiación en los próximos diez años.

Así, con este recorrido entre pasado y futuro, la Revista Ocupación Humana cierra
un ciclo. En adelante nuestra publicación abandona el papel y se inserta en el mun-
do de las revistas electrónicas arbitradas de acceso abierto, poniéndose a tono con
las dinámicas actuales de difusión y apropiación social del conocimiento, y buscan-
do aprovechar las oportunidades tecnológicas para seguir contribuyendo al fortaleci-
miento del conocimiento y la práctica profesional.

Este número está entonces cargado de un significado profundo para nuestra profe-
sión y nuestro gremio, es tal vez búsqueda y ruptura, y al mismo tiempo, proyec-
ción, esperanza, sueños.
Solángel García Ruiz
Clara Duarte Cuervo
Jaqueline Cruz Perdomo
Aleida Fernández Moreno
Grupo de Investigación en Historias de las Terapias Ocupacionales - HiTOs

Referencias
Torres, A. (2014). Hacer historia desde abajo y desde el sur. Bogotá: Desde Abajo.

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Los inicios: una visión de futuro
de la Terapia Ocupacional

Prólogo
The beginnings: a vision of the future of Occupational Therapy
Carmen Helena Vergara1
Liliana Tenorio2

“…y uno se cree


que las mató el tiempo y la ausencia
pero su tren
vendió boleto de ida y vuelta.
Son aquellas pequeñas cosas
que nos dejo un tiempo de rosas
en un rincón, en un papel o en un cajón…”
Joan Manuel Serrat

Sucedían los años sesenta, y un mundo de sol a sol, siete días a la semana, y
lleno de maravillas llegó a invitarnos a esa experiencia nos permitió abrirnos
participar en él. La televisión nos abrió el camino de la vida a machete lim-
las comunicaciones y las tendencias pio y enfocarnos en una profesión que
tecnológicas nos permitieron acercar- ahora tiene un lugar en nuestro país.
nos a otros modos de pensar, a otras
creencias e intereses, a incursionar Desde el atardecer de la vida, hoy po-
en política –“hágase el amor y no la demos mirar atrás para traer algunas
guerra”– y en educación. Los tiempos vivencias, como pequeñas cosas coti-
nos sedujeron, como a algunos ado- dianas que recrean esta profesión ma-
lescentes de la época, a enfocarnos en ravillosa y, al exprimir los recuerdos,
el conocimiento… y fuimos a la uni- poder dejar algunas reflexiones que
versidad. La formación fue intensiva, sigan impulsando el camino de esta la-
1
Fisioterapeuta. Terapeuta Ocupacional. Magíster en Economía. Especialista en Planeación en Educación. Pro-
fesora Escuela Colombiana de Rehabilitación (1970-1974). Centro de Rehabilitación Profesional (1971-1974).
Asesora OIT y GLARP, entre otros organismos internacionales (1974-1986). Funcionaria y consultora en política
social en Planeación Nacional, Ministerios de Educación, Salud y Protección Social, entre otros organismos na-
cionales e internacionales (1990-2013). Profesora Ad-Honorem, Universidad del Valle (1995-2013). Aportó en
la formación de las primeras promociones de Terapia Ocupacional en la Escuela Colombiana de Rehabilitación.
Hizo parte del grupo fundador de la Asociación Colombiana de Terapia Ocupacional (hoy Colegio Colombiano
de Terapia Ocupacional) y fue integrante de sus primeras juntas directivas. Iniciadora de las metodologías de
evaluación pre-vocacional y de servicios de rehabilitación profesional en Colombia y varios países de Latino-
américa. Promotora de la formulación de política pública en discapacidad. vercarmenh@gmail.com
2
Terapeuta Ocupacional graduada de la Escuela Colombiana de Rehabilitación en 1974. Magíster en Econo-
mía. Especialista Certificada en Método Tomatis. Profesora de la Escuela Colombiana de Rehabilitación (1975-
1977). Profesora de la Universidad del Valle (1987-2016). Co-creadora del grupo de investigación Cátedra
de Discapacidad, que ha realizado aportes a la construcción de la discapacidad desde un enfoque social en
el país. Ponente en distintos Congresos de Terapia Ocupacional sobre el rol del Terapeuta Ocupacional en
diversos campos de actuación. Miembro activo del Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional en diferentes
momentos, cargos y delegaciones. Actualmente es miembro del Comité Científico de la Revista Ocupación
Humana. lilianatenorio@gmail.com

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 5


bor. Los invitamos a adentrase en este ese aprendizaje que traían de otras
texto desde un símil que nos cautiva: latitudes, norte y sur del continente,
la Terapia Ocupacional es semejante a y de otros saberes, lograran construir
un puerto, donde se refugian y abaste- un lugar de conocimiento, menos
cen todo tipo de embarcaciones. incierto, más seguro. Un espacio del
saber ocupacional protegido por fuer-
Imaginen con nosotras cómo comen- tes amarres que convirtieran ese lugar
zó a construirse ese puerto en una en querencia fértil y consistente, para
Colombia de los años sesenta; con que cada nave pudiese atracar a for-
unas valientes mujeres que decidieron talecerse y lograse zarpar hacia Ítaca,
compartir su saber con otras perso- yendo al encuentro de sus propias
nas para construir ese puerto sólido. aventuras y riesgos, sabiéndose respal-
Como pioneras, la fuerza de impul- dado por ese puerto del conocimiento
sar el sueño hizo que el trabajo fuera que lleva en su interior la fuerza para
codo a codo, para que inspiradas en afrontarlos.

Tercera promoción del programa de Terapia Ocupacional de la Escuela Colombiana de Rehabilitación


(entonces vinculada a la Universidad del Rosario), junio de 1974.
Foto: Liliana Tenorio.

¿Qué ha significado ese puerto com­partido, razón que nos hace ser
sólido? terapeutas ocupacionales. Parte im-
portante de este saber, atesorado cual
Su solidez es el profundo valor que legado con ese grupo de pioneras, es
tiene el campo del conocimiento el convencimiento de tener un propó-

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sito claro, el mismo orienta toda ac- 1. La articulación de la Terapia Ocu-
ción, aun cuando nos rodee la incer- pacional con el entorno en lo co-
tidumbre. Nuestra profesión empezó tidiano. Las intervenciones de este
como formación técnica, sin instru- profesional se desarrollan en la
mental disponible y con escasas inves- vida común de las personas, en las
tigaciones que soportaran el quehacer ocupaciones que desempeñamos
diario. Sin duda, la persistencia y rigu- los seres humanos en el diario vivir;
rosidad de hacer las cosas con convic- por ello, se hace necesario ahon-
ción propiciaron la puesta en marcha dar en las relaciones del cotidiano
de un sinnúmero de reflexiones sobre devenir, en sus implicaciones en el
la práctica cotidiana que, alimentadas desarrollo de las capacidades, del
por el trabajo con otros saberes tales conocimiento de sí mismos, y en
como la Psicología, la Medicina, la confrontar las potencialidades con
Ingeniería, la Economía, entre otros, los requerimientos de esas ocupa-
fueron cimentando el cuerpo de co- ciones. Más allá del ejercicio pro-
nocimiento en la disciplina que hoy fesional como prestadores de ser-
tenemos. Las preguntas que se hicie- vicios, responsables del suministro
ron aquellas personas han orientado de técnicas y proyectos, se abría
los grandes debates que soportan las paso el ejercicio de la responsabi-
vigas de amarre del puerto para faci- lidad por el desarrollo de las capa-
litar la ampliación, transformación y cidades de las personas, para im-
crecimiento del mismo; muchas de pulsarlas a ser capaces de aportar,
aquellas inquietudes siguen vigentes. desde su red de experiencias y vi-
Por eso podemos afirmar que este vencias cotidianas, a las decisiones
puerto sólido con el que contamos del colectivo al que pertenecían,
hoy se empezó a construir en esos bien en el plano individual o desde
años, con la tenacidad compartida de las organizaciones sociales.
cada una de las personas que creyó
que era posible alcanzar el propósito 2. La rehabilitación basada en la rela-
común de trabajar por el crecimiento ción con el entorno y la productivi-
disciplinar de la Terapia Ocupacional. dad. Aún hoy, hay grandes vacíos
que tendríamos que seguir profun-
El futuro del puerto del conocimiento dizando para que Terapia Ocupa-
de la Terapia Ocupacional se constru- cional potencie su capacidad de in-
ye hoy; hay algunos hechos portadores tervención en la rehabilitación in-
de futuro que fueron avizorados por tegral, en el logro de una vida digna
las pioneras y que han ubicado a esta de las personas con discapacidad;
profesión en un lugar importante en todavía constituye un reto el enfo-
el país. Esos hechos, que fueron ama- carse en las capacidades y hacer de
rres fundamentales del ejercicio de la ellas una oportunidad para el de-
Terapia Ocupacional en Colombia en sarrollo de personas más íntegras y
sus inicios, mantienen su importancia más libres. Ya desde los inicios del
y habría que seguir construyendo en ejercicio de la Terapia Ocupacio-
torno a ellos: nal en Colombia, en los primeros

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 7


años de los setenta, se reconocía a tante, eso te hará desarrollar la
las personas como sujetos de de- capacidad de ser valorado por
rechos, indivisibles y universales3, los demás. Vincula la acepta-
con un conjunto de capacidades, ción social con el resultado del
entre ellas la de ser capaz de es- esfuerzo personal.
tablecer compromisos vinculares. • Ser Útil: Si cuentas con tu capa-
Entonces ya era visible un ejerci- cidad de establecer relaciones
cio profesional comprometido con sociales recíprocas que faciliten
potenciar sus capacidades de par- la confianza en los otros, en ser
ticipación y aporte para ampliar el solidario, en realizar trabajos de
abanico de oportunidades y faci- manera colaborativa y ser reco-
litar su desarrollo. El eje de inter- nocido también por los demás.
vención se alejó muy pronto de un • Ser Capaz: Si reconoces y ejer-
enfoque centrado en el individuo, citas tus habilidades y potencia-
para construir una acción centra- lidades para realizar acciones
da en las relaciones que establece; con un propósito común y cla-
inicialmente con la familia, que ro que apropias para tu propia
como base de la estructura social, vida.
es el primer garante del desarrollo • Ser Trascendente: Si tienes un
de sus miembros como sujetos de sueño que te has empeñado en
derechos. A su vez, se fue consoli- construir y valoras lo que haces
dando un trabajo que trascendió a porque alcanzarlo está lleno de
la familia para incursionar en con- significado.
textos comunitarios y sociales mu- • Ser Productivo: Si eres capaz de
tuamente influyentes. movilizar recursos internos para
gestionar acervos externos y así
3. El ejercicio de la Terapia Ocupacio- desarrollarte como ser social.
nal potencia las capacidades socio- • Ser Tú mismo: Si valoras las
productivas. Al ejercitar en diversos características personales que
entornos las capacidades que re- te hacen único para obrar con
quiere el aporte productivo, cada sello propio y asumir las conse-
persona logra consolidar su desa- cuencia de tus actos.
rrollo humano. ¿Cómo sabremos
que estamos consolidando esas Estos tres puntos estrechamente rela-
competencias? Cuando hacemos cionados se aproximan a una declara-
evidente que, en la cotidianidad ción de principios y, por eso, mantie-
de su intervención ocupacional, nen su vigencia como amarres funda-
esa persona es consciente de su ca- mentales; porque hacen presente que
pacidad de: lo ocupacional es siempre una activi-
• Sentirse Importante: Si crees dad con sentido, ya sea individual o
que haces parte de algo impor- social y, en consecuencia, su fragmen-

3
Recordemos que la Declaración de los Derechos de los Impedidos, Resolución 3447 de Naciones Unidas, fue
proclamada el 9 de diciembre de 1975 y, en 1976, la Asamblea General proclama 1981 Año Internacional de
los Impedidos, Resolución 31/123, con el lema “la plena participación y la igualdad”.

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tación es generadora de inseguridad e se menosprecian, que la excelencia
incertidumbre para todos los actores en la formación se reduce, que no nu-
de la intervención. trimos con rigurosidad el puerto dis-
ciplinar, que anclan cada vez menos
El tener un puerto sólido disciplinar navíos en este puerto, la calidad del
ha convocado a quienes se unen a él abastecimiento se deteriorará y ello se
a prepararse, abastecerse, orientar su reflejará en disminuciones de la pro-
rumbo, crecer en su saber y equiparse ductividad y la competitividad de los
para trazar su ruta. Así, soltar amarras, navíos para enfrentarse a los avatares
levar anclas y buscar su propio trase- de su recorrido, surcar los mares de la
gar profesional es fundamental antes vida, correr sus propios riesgos y vi-
de surcar el mar de la vida, y represen- vir sus convenientes aventuras profe-
ta el propósito de la comunidad disci- sionales. Es pues responsabilidad del
plinar que el puerto consolida a través colectivo de navegantes de la Terapia
de los aportes que cada nave desem- Ocupacional mantener colmado el
barca. Cada experiencia enriquece, puerto de experiencias, reflexiones,
con los recorridos por mares diversos, cuestionamientos, indagaciones, ma-
el acervo que crece en este puerto dis- pas y marcos conceptuales, modelos,
ciplinar; gracias a la productividad in- paradigmas y teorías que robustezcan
dividual se ha conformado un cúmu- el puerto del conocimiento de la Tera-
lo de conocimiento que hoy soporta pia Ocupacional.
el navegar de cada embarcación en
el océano de la vida. Cuidar de este Sabemos que el puerto es el lugar
puerto disciplinar es competencia de más seguro para cada embarcación,
quienes pertenecen a la comunidad sin embargo, los navíos no han sido
de terapeutas ocupacionales, ya que construidos para permanecer en él,
su riqueza radica en el conjunto de debemos prepararlos para navegar
experiencias que nutren el saber co- mar adentro y encontrar su lugar, con
lectivo. la certeza de que lo que llevan les
será útil para su jornada. El puerto no
Mantener el puerto fuerte y activo podrá trazar la ruta de cada persona,
significa aportar desde cada experien- mas sí puede equiparlos con los instru-
cia, crecer con las reflexiones colecti- mentos disciplinares. No podrá seguir
vas que lleven al puerto a consolidar la travesía de cada uno, pero sí puede
el conocimiento, establecer debates, mostrar las rutas de otros navegantes,
tanto con los navíos propios como las contingencias y beneficios de las
con otros puertos de saberes, para en- experiencias de todo tipo de navíos,
contrar las características que nos den desde petroleros y trasatlánticos hasta
identidad, para que se aproximen kayaks. El equipamiento en el puerto
todo tipo de navíos y puedan abas- del conocimiento favorece la movili-
tecerse y timonear con seguridad, dad social de cada navío, pues podrá
orientados hacia el desempeño de vigorizarse y engalanarse para ascen-
esta profesión. Por ello, si llegara a su- der y dejar más estela en el mar. El
ceder que las reflexiones individuales puerto también otorga claridad en los

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 9


conceptos para disminuir la brecha de cicio científico. Atracar en este puerto
la desigualdad del conocimiento, fa- le significa a cada navío una situación
vorece la consecución de herramien- favorable y lo convoca a ser accionista
tas como mecanismos ágiles de inter- fundamental de su crecimiento.
vención, para evitar problemáticas ya
superadas o cuando hay condiciones La invitación es a hacerse activos en
del tiempo difíciles que podrían hacer este puerto, a tener carácter para fijar
naufragar la embarcación. Propicia el su rumbo, y disciplina para llevarlo a
fortalecimiento de las capacidades de cabo. A ser partícipes de esta colecti-
cada navío, identifica las caracterís- vidad y generosos con su trabajo, para
ticas de los mercados, las normas de que los que vendrán en el futuro se
navegación, las tendencias ocupacio- beneficien de los frutos que ustedes
nales y las necesidades de este profe- están sembrando hoy.
sional en los diversos campos del ejer-

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Reflexiones sobre los orígenes de la formación
en Terapia Ocupacional en Argentina

Investigación
Reflections on the origins of Occupational Therapy
training in Argentina
María Marcela Bottinelli1
Mariela Nabergoi2
Marcela Cecilia Mattei3
Federico Juan Manuel Zorzoli4
Francisco Manuel Díaz5
Natalia Milagros Spallato6
Maureen Mulholland7
María Magdalena Martínez Del Pezzo Bredereke8
Agustina Mariel García Sartirana9
Julieta Briglia10
Sara María Daneri11

Recibido: 14 de octubre 2016 • Aceptado: 5 de diciembre 2016


Botinelli, M., Nabergoi, M., Mattei, M., Zorzoli, F., Díaz, F., Spallato, N.,… Daneri, S. (2016). Reflexiones sobre los orígenes de
la formación en Terapia Ocupacional en Argentina. Revista Ocupación Humana, 16 (2), 11-25.

Resumen: Esta investigación tuvo como finalidad caracterizar el surgimiento y desarrollo de


la formación de terapeutas ocupacionales en Argentina entre 1956 y 1965, identificando
acontecimientos relevantes ocurridos desde el inicio de la carrera en la Escuela Nacional

1
Licenciada en Psicología. Especialista y magíster en Metodología de la Investigación Científica. Doctora en
Salud Mental Comunitaria. Docente investigadora Universidad Nacional de San Martín, Universidad de Buenos
Aires, Universidad Nacional de Lanús. Buenos Aires, Argentina. mmbottinelli@yahoo.com.ar
2
Licenciada en Terapia Ocupacional. Especialista en Metodología de la Investigación Científica. Doctora en
Salud Mental Comunitaria. Docente investigadora Universidad de Buenos Aires, Universidad Nacional de San
Martín, Universidad Nacional de Lanús. Buenos Aires, Argentina. mnabergoi@yahoo.com.ar
3
Licenciada en Terapia Ocupacional. Equipo de investigación Universidad Nacional de San Martín. Buenos
Aires, Argentina. marcelamattei@hotmail.com
4
Licenciado en Terapia Ocupacional. Maestrando en Salud Mental Comunitaria. Docente investigador
Universidad Nacional de San Martín. Buenos Aires, Argentina. jmzorzoli@hotmail.com
5
Licenciado en Audiovisión. Especialista en Metodología de la Investigación Científica. Docente investigador
Universidad Nacional de Lanús. Buenos Aires, Argentina. franciscomdiaz@hotmail.com
6
Licenciada en Terapia Ocupacional. Maestranda en Metodología de la Investigación Científica. Docente
investigadora Universidad Nacional de San Martín. Buenos Aires, Argentina. nataliaspallato@hotmail.com
7
Licenciada en Terapia Ocupacional. Equipo de investigación Universidad Nacional de San Martín. Instituto
Municipal de Rehabilitación de Vicente López, Dr Anselmo Marini. Buenos Aires, Argentina. maureenmulvey@
hotmail.com
8
Licenciada en Terapia Ocupacional. Equipo de investigación Universidad Nacional de San Martín. Buenos
Aires, Argentina. magdabre@yahoo.com.ar
9
Licenciada en Terapia Ocupacional. Docente investigadora Universidad Nacional de San Martín. Hospital de
Rehabilitación Manuel Rocca. Buenos Aires, Argentina. toagustinagarcia@gmail.com
10
Licenciada en Terapia Ocupacional. Equipo de investigación Universidad Nacional de San Martín. Centro de
Salud y Acción Comunitaria 9. juliet_173@hotmail.com
11
Licenciada en Terapia Ocupacional. Maestranda en Ciencias Sociales y Humanidades, mención en Sociología.
Equipo de investigación Universidad Nacional de San Martín. Docente Instituto Universitario Gran Rosario.
Buenos Aires, Argentina. saramdaneri@gmail.com

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 11


de Terapia Ocupacional - ENTO. Los datos fueron recolectados mediante entrevistas en
profundidad y utilizando metodologías propias de la historia oral. Asimismo, se trabajó con
fuentes primarias y secundarias como documentos de época, material de archivo y planes
de estudio. El análisis permite ubicar a la ENTO en el marco de la apertura de carreras
de las áreas de salud y ciencias sociales, el proceso de incorporación de las mujeres a la
educación superior, y acciones de cooperación internacional para la instalación del modelo
de rehabilitación y la formación en disciplinas afines dentro de una estrategia desarrollista.
Con influencia de la WFOT, tomando el modelo de la Dorset House School, a través de
acciones de cooperación y un sistema de becas se formaron profesionales que desarrollaron la
disciplina en distintas regiones de Argentina y otros países de Latinoamérica. Estos resultados
permiten potenciar los diálogos hacia la comprensión de los procesos comunes y distintivos
que dieron lugar a la institucionalización de Terapia Ocupacional en nuestro continente.

Palabras clave: Terapia Ocupacional, rehabilitación, historia, recursos humanos en salud,


educación profesional.

Abstract: The purpose of this investigation was to characterize the origin and development of
the occupational therapy training in Argentina between 1956 and 1965, identifying relevant
events that took place since the beginning of the Occupational Therapy program at the Escuela
Nacional de Terapia Ocupacional (National School of Occupational Therapy). The data was
collected through in-depth interviews and using methodology pertinent to oral history. Primary
and secondary sources, such as documents pertaining to that period, archiving material and
study plans were also used. The analysis allows to locate the ENTO within the framework of
the opening of programs in social sciences and health areas, the process of incorporation of
women into higher education, and the international cooperation actions for the installation of
the rehabilitation model and for training in related disciplines within a developmental strategy.
Professionals who developed the discipline in different regions of Argentina and other Latin
American countries were formed with the influence of WFOT and the application of Dorset
House School model. These results strengthen the dialogue towards the understanding of the
common and distinctive processes that gave rise to the institutionalization of Occupational
Therapy in our continent.

Key words: Occupational therapy, rehabilitation, history, human resources in health,


professional education.

Introducción esta realizará a la sociedad, y permiten


comprender los avatares de su desa-
Los campos profesionales son defini- rrollo y potencialidad.
dos por los actores sociales que en un
contexto determinado los sustentan Asimismo, se pueden relevar períodos
y los promueven, tanto a nivel local de estabilidad y desarrollo de las pro-
como internacional. Ellos están de- fesiones, campos teóricos y de prác-
terminados por modelos explícitos e ticas, así como períodos de cambios,
implícitos en los currículos o planes propuestas y virajes hacia nuevas ne-
de formación que, en el caso de los cesidades. Toda profesión requiere
procesos de inicio de una disciplina o estar abierta a la detección de dichos
de la fundación o apertura de una ca- momentos, de modo que sea posible
rrera, marcan de manera matricial las adaptar sus prácticas y conocimientos
bases de las prácticas y los aportes que a las nuevas demandas y necesidades,

12 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


y dar cuenta de todas las funciones del formación de terapeutas ocupaciona-
quehacer científico y profesional, a les en Argentina en el período 1956-
saber: la producción de conocimien- 1965. Este período abarca, desde la
tos por los conocimientos mismos, la creación de la Comisión Nacional de
producción de conocimientos por las Rehabilitación del Lisiado, en el mar-
prácticas que de ellos se deriven y la co de la cual se inscribió la carrera, y
producción de conocimientos para la realización de los primeros cursos
la retroalimentación social (Samaja, breves de formación por parte de la
2003; Bottinelli 2003). terapeuta ocupacional inglesa Elizabe-
th Hollings; pasa por la creación de la
En este sentido, la investigación parte Escuela Nacional de Terapia Ocupa-
de la premisa de que toda disciplina cional (ENTO) en 1959, y va hasta el
tiene una dimensión histórica que momento en que las egresadas argen-
debe ser revisada y conocida para tinas se hicieron cargo de la dirección
comprenderla en profundidad, tan- de la carrera y de la formación en ma-
to en el surgimiento de su campo de terias específicas de la disciplina.
conocimientos y prácticas como en
su posicionamiento actual. Ello per- Metodología
mite pensar sus aportes y potenciali-
dades a futuro, tanto al interior de la Se trabajó con un diseño de tipo ex-
disciplina como en la formación de ploratorio descriptivo, retrospectivo,
nuevos profesionales y en la identi- con metodologías predominantemen­
ficación de las necesidades sociales te cualitativas, integrando diferentes
que los convocan, para realizar apor- técnicas de historia oral y de registro
tes en los campos en los que participa documental. El valor de estas técni-
(Bottinelli, 2003). Es por ello que el cas reside en la posibilidad de cap-
proceso de revalorización del pasado tar los sentidos y los significados de
constituye una posición epistemo- los acontecimientos humanos desde
lógica, ética y teórica del equipo de la perspectiva de los propios actores.
investigación. La revisión, análisis y triangulación
de la información recolectada con
En este marco y considerando que el material de archivo y bibliografía se-
Instituto de Ciencias de la Rehabilita- cundaria permitió someter las fuentes
ción y el Movimiento de la Universi- orales a la crítica documental (Valles,
dad Nacional de San Martín (ICRM- 2003) y poner en relación los discur-
UNSaM) albergan a la primera entidad sos con sus condiciones históricas de
formadora de terapeutas ocupaciona- producción, propios de un enfoque
les en Argentina, y que la Escuela Na- hermenéutico-dialéctico (De Souza
cional de Terapia Ocupacional (ENTO) Minayo, 2009).
es el lugar donde se formaron pro-
fesionales que abrieron los primeros En este sentido, se trabajó utilizando
servicios y escuelas de Terapia Ocupa- herramientas propias de la historia
cional del país y en algunos países de oral tales como relatos de vida (Ber-
Latinoamérica, nos propusimos carac- taux, 1999), que fueron recolectados
terizar el surgimiento y desarrollo de la a través de entrevistas en profundidad

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 13


con terapeutas ocupacionales y otros de discusión de resultados con diferen-
actores vinculados con la creación e tes actores. Dadas las características del
inicios de la carrera. Se formularon diseño, el procesamiento, sistematiza-
preguntas estructuradas y no estructu- ción y análisis de la información se rea-
radas, organizadas por ejes temáticos. lizó de manera procesual y paralela a la
profundización teórica y la recolección
Para la selección de las terapistas de datos. El análisis incluyó la revisión
ocupacionales y la realización de en- intra e interentrevista, triangulación de
trevistas se conformó una muestra in- fuentes y contextualización dentro de
tencional utilizando la técnica de bola las políticas de salud nacionales y las
de nieve. Los criterios de inclusión principales tendencias internacionales
fueron: primeros alumnos, primeros en Terapia Ocupacional y en rehabili-
profesionales, primeros supervisores tación.
de práctica clínica, fundadoras de aso-
ciaciones de profesionales, primeros Algunas de las líneas de análisis pro-
docentes, primeras directoras de ca- puestas inicialmente incluyeron la
rreras. identificación de momentos relevan-
tes y su contextualización en los mar-
Así mismo, se recolectaron documen- cos de la historia de la rehabilitación,
tos de época, material de archivo, de la salud en el país y en el ámbito
planes de estudio y bibliografía secun- internacional (Isuani & Mercer, 1988;
daria. Varios de estos documentos fue- Veronelli & Veronelli, 1991; Belmarti-
ron donados por las entrevistadas y se no & Bloch, 1994; Belmartino, 2005).
organizaron en la conformación de un El procesamiento y análisis de docu-
archivo digital documental. mentos (fuentes secundarias) permitió
Con motivo de la investigación identifi- comprender las dificultades que atra-
camos e iniciamos contactos con quie- vesaba Argentina para la época y los
nes pudieran brindarnos información a diferentes esfuerzos por crear la carre-
través de fuentes primarias: las prime- ra en el país y en la región. Además,
ras docentes del equipo inglés; dona- del proceso de entrevistas surgieron
ciones y material del Dorset House Ar- nuevos elementos y líneas de análisis
chive y la British Association of Occu- a considerar, tales como los modelos
pational Therapists, así como también implícitos y explícitos en los planes de
de colegas que viven en el exterior y estudio, los debates paradigmáticos de
de numerosas terapistas ocupacionales la época, la creación de nuevos espa-
de nuestro país. Para el control de la cios profesionales a través de progra-
información recolectada y la pertinen- mas de becas, las características de los
cia de la interpretación de resultados se actores involucrados y los requisitos
utilizaron las técnicas de triangulación de acceso a la formación y a cargos,
de fuentes y vigilancia del cumplimien- entre otras.
to de criterios de rigor para diseños Resultados
cualitativos (Sandelowski, citado en
Zaldúa et al, 2010). Para el criterio de La revisión de bibliografía secundaria
auditabilidad se realizaron reuniones y de antecedentes permitió identifi-

14 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


car en el ámbito nacional los produc- Fundamentos, del Programa de Pos-
tos de esfuerzos individuales y colec- Graduación en Terapia Ocupacional
tivos realizados desde la Asociación de la Universidade Federal de São
Argentina de Terapistas Ocupaciona- Carlos (UFSCar) en Brasil, coordinado
les (Monzón & Risiga, 2004a, 2004b; por Roseli Esquerdo Lopes y Ana Pau-
Fortain, 2003), trabajos finales de la Malfitano. En otros países sobresa-
grado y posgrado (Testa, 2011, 2012; len los de Moruno y Talavera (2007),
Testa & Spampinato, 2010; Daneri, Peters (2006), Schwartz (2005), Wil-
2005, 2010; Gracerón, 2000), algu- cock (2002), Reed (1998), Kielhofner
nos artículos, presentaciones en con- & Burke (1977), Collins (1989), entre
gresos y capítulos de libro que hacen otros.
referencia al tema (Sbriller & Suter,
1985; Warschavski & Sbriller, 1990; Momentos relevantes
Sbriller, 1997; Paganizzi, 2007; Go- y periodización
mez Mengelberg, 2007a, 2007b; Los orígenes de la formación en Tera-
Demiryi, 2001; Destuet, 1999; Villa- pia Ocupacional en Argentina se re-
rroel, 1985), así como otros trabajos montan a las epidemias de polio ocu-
individuales llevados a cabo por inte- rridas entre los años 1953 y 1955, mo-
rés particular de estudiantes de grado mento histórico que dio lugar al de-
y graduados. En estos documentos se sarrollo de las disciplinas relacionadas
refieren algunas dificultades respecto con la rehabilitación en Latinoamérica
de la recuperación de la historia de y a la introducción en la región de los
la profesión en el país, incluyendo la conocimientos y prácticas de salud
falta de recursos para trabajar el tema desarrollados en los países del norte
en profundidad, la escasez de archi- durante el período de posguerra mun-
vos institucionales que consultar y la dial (Teixeira Soares, 1991; Sbriller,
fragmentación de la información, que 1997; Guajardo, 2010).
llevan a la necesidad de reconstruir
la historia a través de los relatos de Ese acontecimiento impulsó la intro-
quienes la vivieron. ducción de la Terapia Ocupacional
como profesión de salud en Argen-
Por su parte, en el ámbito latinoameri- tina, mediante un convenio del Es-
cano se destacan los trabajos de Gua- tado con el Gobierno británico; tal
jardo (2010) y Gómez Lillo (2012) en acuerdo se concretizó a través de la
Chile, los de Teixeira Soares (1991) y contratación de un grupo de terapis-
Da Rocha Medeiros (2008) en Brasil, tas ocupacionales inglesas, quienes
Forn (2007) en Venezuela y el de Truji- en el año 1959 viajaron al país para
llo (2002) en Colombia. En los últimos organizar la formación profesional y
años además se han sumado nuevas dictar los cursos hasta que hubiera
incitativas con enfoques más participa- egresados en el país que pudieran
tivos, como los de Fernández, García, hacerse cargo de la misma. La ins-
Duarte & Cruz (2016) en Colombia, y titucionalización de esta formación
el del Grupo de Investigación Terapia se materializó en la creación de la
Ocupacional: memórias, histórias e Escuela Nacional de Terapia Ocupa-

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 15


cional (ENTO), en el marco de la Co- cargo de Miss MacDonald y un se-
misión Nacional de Rehabilitación gundo grupo con matices diferentes
del Lisiado, dependiente del Mi- en cuanto a sus antecedentes y for-
nisterio de Salud Pública (Spallato, mación, y 3. el comienzo del proce-
2010; Nabergoi et al, 2011). so de “argentinización”, iniciado con
el traspaso de la gestión y las tareas
Se pudieron diferenciar tres perio- docentes a las egresadas argentinas
dos dentro de la década estudiada: (1963-1965).
1. los antecedentes de creación de la
Escuela (1956-1959), que van desde Los cursos de Terapia Ocupacional y
la creación de la Comisión Nacional Fisioterapia previos a la creación de
de Rehabilitación del Lisiado (CNRL) la ENTO estuvieron a cargo del equi-
hasta la creación de la ENTO, e inclu- po inglés liderado por Mónica Martin
ye los cursos de formación de auxilia- Jones, con Elizabeth Hollings como
res de Terapia Ocupacional por parte docente de Terapia Ocupacional.
de Elizabeth Hollings en 1956 y Ruby Quienes participaron en estos cursos,
Kroom en 1957 (Figura 1); 2. un pri- como Carmen Forn, Marta Fortain y
mer período de la ENTO con el equi- Helvia Llambí, fueron luego estudian-
po de docentes inglesas a cargo de la tes de la primera cohorte de la ENTO
Escuela (1959-1963), se distinguen y líderes de la Terapia Ocupacional
en este período un primer grupo a en el país. 

Figura 1. Primeras egresadas y docentes de los cursos de Terapia Ocupacional


y Fisioterapia previos a la creación de la ENTO.

Foto: Archivo digital de las investigaciones llevadas a cabo por los autores. Año 1956 (probable).

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Contextualización en los marcos tación importado centralmente desde
de la historia de la rehabilitación Inglaterra, a diferencia de otros países
y de la salud en Argentina y en de la región en los que las influencias
el ámbito internacional fueron norteamericanas y de otros paí-
ses europeos (Teixeira Soares, 1991).
Al poner en diálogo las narrativas con
los diferentes contextos meso y ma- También contextualizamos dicha aper-
cro políticos, ubicamos la ENTO en el tura desde la perspectiva de género,
marco de la apertura de diversas carre- ubicando algunas hipótesis en relación
ras de las áreas de la salud y las cien- con el proceso de incorporación de las
cias sociales (Ej. Psicología, Sociología, mujeres a la vida de la educación su-
Ciencias de la Educación y Escuela de perior y universitaria de la época, en
Salud Pública), así como de los cam- aspectos novedosos o emergentes (ej.
bios en el campo de la atención en profesionalización de las prácticas,
discapacidad y en salud mental. Pudi- remuneración de la tarea) y en otros
mos observar que si bien el emergente que reeditaban los tradicionales roles
socio sanitario de la creación de la ca- sociales atribuidos a la mujer, como el
rrera fue la epidemia de poliomielitis, cuidado de los otros, la atención de
otras necesidades sociales y procesos la salud, la subordinación a la figura
de debate y transformación tenían masculina del médico, las damas ro-
lugar en ese momento, los cuales se sadas y voluntarias (Nabergoi 2013a).
articularon con la nueva formación y
abrieron nuevas líneas de indagación Características de la propuesta
no previstas en dicho proyecto. formativa

Como parte de la estrategia desarro- El plan de estudios de la carrera se es-


llista, característica del gobierno del tructuró con el fin de cumplir con los
entonces Presidente Frondizi, la crea- requisitos de la Federación Mundial
ción de la ENTO también forma parte de Terapeutas Ocupacionales (WFOT),
de un conjunto de acciones de coope- creada pocos años antes. Ello supuso
ración internacional para la instalación la incorporación de la formación en el
del modelo de rehabilitación y forma- campo de salud mental, que no forma-
ción en las disciplinas afines, promo- ba parte de las demandas de asistencia
vidas por organismos internacionales en el área física relacionadas con la po-
como la Organización Mundial de la lio, y la necesidad de realizar gestiones
Salud (OMS), la Oficina Sanitaria Pa- específicas para la aceptación local de
namericana y la Organización Interna- dicha propuesta y la apertura del cam-
cional del Trabajo (OIT). Otras accio- po. Así, desde el comienzo el plan de
nes de cooperación que determinaron estudios contempló la formación en los
la formación y creación de la ENTO campos físico y mental con igual valo-
incluyeron acuerdos entre el Gobier- ración. El currículo se estructuró con
no Argentino y el British Council. Todo tres tipos de materias: asignaturas teó-
ello implicó que la capacitación ini- ricas, actividades prácticas y práctica
cial en Terapia Ocupacional estuviese clínica, cuya distinción permanece en
marcada por un enfoque de rehabili- los currículos actuales.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 17


La ENTO se organizó con base en el de la época, como la Escuela de Lon-
modelo de escuela a la cual pertene- dres, por la selección estricta del curso
cía mayoritariamente el equipo inglés de ingreso (estudiantes jóvenes con lí-
contratado, la Dorset House School de mite de edad superior de 35 años) y el
Oxford, de la cual era directora la res- énfasis en la necesidad de fundamen-
ponsable del equipo. La Dorset House tar científicamente la profesión, entre
School fue la primera escuela de Te- otras. Los aspectos formales así como
rapia Ocupacional de Inglaterra, y se los actitudinales eran muy enfatizados
caracterizaba y diferenciaba de otras en la formación (Figura 2).
Figura 2. Manuscrito del plan de formación de la ENTO, 1959.

Manuscrito elaborado por Miss Mac Donald, directora de la Dorset House School y líder del equipo
de terapistas inglesas contratadas por la CNRL para abrir la carrera en Argentina. Presenta un esquema
de organigrama y estructura de Plan de Estudios con materias teóricas, actividades (centro) y prácticas
clínicas en áreas física y psicológica (a los lados).
Foto: Archivo digital de las investigaciones llevadas a cabo por los autores.

En consecuencia, las primeras docen- profesión. La responsable del equipo


tes inglesas eran muy jóvenes, aunque en calidad de asesora, Miss Macdo-
presentaban experiencia de trabajo en nald12, tenía al llegar a Argentina más
las áreas de su responsabilidad y con- de veinte  años de experiencia en la
ducían las materias específicas de la dirección de la formación en su país y

12
De esta forma la conocían y denominaban las entrevistadas, su nombre completo era Evelyn Mary Macdonald.

18 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


había estado a cargo de la formación pacionales, más de la mitad de ellas
en Terapia Ocupacional en países de provenían de 12 provincias del país y
distintos continentes. De otra parte, cinco llegaron a estudiar desde Chile.
los docentes de materias básicas eran También estudiantes provenientes de
locales, en su mayoría profesionales otros países ingresaron a la ENTO por
del Instituto de Rehabilitación, lo mis- medio de becas y convenios  nacio-
mo ocurría con los docentes de acti- nales  e internacionales con organiza-
vidades prácticas (Nabergoi, 2012, ciones como la OPS/OMS, la Funda-
2013a) (Figura 3). ción Elizabeth  Kenny y gobiernos de
la región (OPS, 1994; Nabergoi et al,
Figura 3. Clase de telar en la ENTO, 2013a, 2013b).
1960 (probable).
De esta manera, en la ENTO se for-
maron profesionales que desarrolla-
ron la disciplina en distintas regiones
de Argentina y que, siendo argentinos
o provenientes de la región, abrieron
campos de actuación y escuelas en
otros países de Latinoamérica, en el
marco del desarrollo de una política
regional en materia de rehabilitación
(Bottinelli et al 2011b; Nabergoi et al
Foto: Contribución de Helvia Llambí.
2013c).
La formación para los campos físico
Creación de nuevos espacios y mental
profesionales a través de programas
de becas Uno de los requisitos de la propues-
ta formativa inicial fue que la misma
La política pública nacional consistió preparara a los futuros terapistas ocu-
en organizar, con instituciones de Ca- pacionales para el desempeño tanto
pital Federal13 y las provincias, un sis- en el llamado campo físico como en
tema de becas a nivel federal a través el campo psiquiátrico o mental, con el
de las cuales las estudiantes accedían argumento de que ello era necesario
a formarse en la ENTO y debían re- para el reconocimiento del título por
tornar a tales instituciones para abrir la WFOT, creada apenas pocos años
servicios de Terapia Ocupacional. Es- antes que la ENTO. De acuerdo con el
tas becas fueron otorgadas inicialmen- Archivo Dorset House, esta titulación
te con base en las recomendaciones conjunta era el resultado de un acuer-
de la terapista norteamericana Helen do realizado en Inglaterra a partir de
Dahlstrom y la fisioterapeuta Vivian los límites que implicaba la formación
Hannan.  Entre 1961 y 1965 se reci- especializada por campos. Este ar-
bieron en la ENTO 76 terapistas ocu- gumento, presente con fuerza en los
13
Capital Federal es el distrito correspondiente a la actualmente denominada Ciudad Autónoma de Buenos
Aires, capital de Argentina.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 19


discursos de las entrevistadas, fue una El interés por la historia y el trabajo
importante estrategia de validación de que hemos venido realizando también
la propuesta formativa y fue utilizado fue expresado por diferentes profesio-
para negociar el acceso a espacios de nales que hoy, insertos en servicios, re-
práctica clínica, el sostenimiento del fieren desconocer el origen y antece-
contrato de las primeras docentes, en- dentes de sus prácticas profesionales,
tre otros, en diversas instancias institu- dadas las vicisitudes de las políticas de
cionales y gubernamentales. El análisis salud, en particular en las áreas de re-
de las transformaciones en el campo habilitación y salud mental en nuestro
de salud mental a nivel local permitió país, que devinieron en suspensiones
reconocer que fueron estas las condi- y momentos de reinicio de espacios
ciones de posibilidad de la aceptación de práctica, con escaso o nulo registro
de un plan de estudios con tales ca- de las experiencias previas.
racterísticas (Nabergoi, 2013b, 2013c;
Bottinelli, Nabergoi, Mattei, Mullho- Es importante destacar también, que
lland & Spallato, 2013). si bien la disciplina ha experimenta-
do un crecimiento exponencial en
Palabras finales la última década en Argentina, en la
que se multiplicaron los espacios de
Como producto de este trabajo y en formación y el número de alumnos
el contexto del 50° aniversario de la y profesionales14, los mayores es-
Terapia Ocupacional en Argentina fuerzos en el período reciente estu-
(1959-2009), también realizamos la vieron destinados a la consolidación
edición de un video documental ho- del nivel de grado. En este marco, la
menaje titulado La ENTO. Un docu- producción científico académica de
mental de la creación de la Escuela la disciplina en nuestro país requie-
Nacional de Terapia Ocupacional en re aún de esfuerzos para impulsar
Argentina (Bottinelli et al, 2011a). Este su desarrollo en lo que refiere a la
fue realizado con base en las catego- formación de recursos humanos en
rías y ejes de análisis que fueron sur- investigación, la incorporación de
giendo en el proceso de investigación. docentes y alumnos en la actividad
El material bibliográfico, documental y científica, la promoción del aumento
testimonial fue organizado y trabajado de la cantidad y la calidad de la pro-
para su análisis y presentación en este ducción y su puesta en circulación,
material de 22 minutos. El cortometra- que asegure la transferencia en los
je reúne material inédito, se destacan diferentes ámbitos y niveles de for-
fotografías y videos de época facilita- mación e intervención.
dos por entrevistados y colaboradores,
elementos de archivo de la Dorset El proceso de profesionalización de la
House School y de la Biblioteca del Terapia Ocupacional sufrió diferentes
ICRM-UNSAM, así como también ex- avatares desde la creación de la ENTO
tractos de entrevistas realizadas por el hasta la actualidad. Las líneas de inda-
equipo de investigación. gación presentadas continuaron sien-
14
Al igual que en otras profesiones como Enfermería y Trabajo Social.

20 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


do profundizadas por el equipo de in- así como su posicionamiento actual,
vestigación en los proyectos Creación e contribuye a poder pensar en sus
Institucionalización de la Terapia Ocu- aportes y potencialidades a futuro,
pacional en Argentina. Los Comienzos tanto al interior de la disciplina como
de la Formación y el Desempeño Pro- respecto de la formación de profesio-
fesional de Terapeutas Ocupacionales nales y frente a las necesidades socia-
en Argentina desde la Apertura de la les que los convocan.
Escuela Nacional de Terapia Ocupacio-
nal15 (2011-2012) y la tesis El Proceso Referencias
de Transformación de la Atención Psi-
Belmartino, S. (2005). La atención médica
quiátrica hacia el Enfoque de Cuidados argentina en el siglo XX. Instituciones y
en Salud Mental en Argentina. Partici- procesos. Buenos Aires: S. XXI.
pación de Terapia Ocupacional en la
Construcción del Campo de la Salud Belmartino, S., & Bloch, C. (1994). El Sector
Salud en la Argentina: Actores, Conflic-
Mental en la Ciudad de Buenos Aires tos de intereses y modelos organizativos,
(1957-1976) (Nabergoi, 2013b). En 1960-1985. Buenos Aires: OPS. N°40.
este proceso hemos logrado diversos
aprendizajes, hemos tenido la opor- Bertaux, D. (1999). El enfoque biográfico: su
validez metodológica, sus potencialida-
tunidad de ver resurgir el interés por
des. Proposiciones, 29, 1-23.
los inicios de la profesión en distintos
países de Latinoamérica y de inter- Bottinelli, M.M. (2003). Metodología de la
cambiar experiencias con equipos de investigación. Herramientas para un pen-
investigación de la región en el tema. samiento complejo. Buenos Aires: Gra-
fika Hels.
Actualmente la carrera de Licenciatu- Bottinelli, M.M., Nabergoi, M., Pellegrini,
ra de Terapia Ocupacional en Argen- M., Mulholland, M., Martínez del Pezzo
tina se dicta en 14 universidades na- Bredereke, M., Spallato, N., & Zorzoli,
J.M. (2011a). La ENTO. Un documental
cionales. Algunos de los aspectos que
de la creación de la Escuela Nacional de
marcaron los inicios de la formación Terapia Ocupacional. F.M. Díaz (Edición
profesional han permanecido hasta y realización) [Video documental]. Ar-
nuestros días, resignificados en los gentina: Universidad Nacional de San
diversos contextos histórico sociales Martín.
en los que tuvo su desarrollo, otros Bottinelli, M.M., Nabergoi, M., Pellegrini,
se han modificado significativamente. M., Mattei, M., Mulholland, M., Del Pez-
Dado que los contextos determinan zo Bredereke, M., Spallato, N., & Zorzo-
la posibilidad de surgimiento, y que li, F. (2011b, octubre). Entramados inter-
las perspectivas de los actores socia- nacionales en la historia de la formación
de terapeutas ocupacionales. Indicios
les involucrados permiten compren- en los comienzos de la formación profe-
der el sentido de los mismos, reali- sional en Argentina. En CLATO XII Con-
zar acciones que permitan historizar greso Brasilero de Terapia Ocupacional y
y comprender el surgimiento de un IX Congreso Latinoamericano de Terapia
campo de conocimientos y prácticas, Ocupacional. Sao Paulo, Brasil.

Bottinelli, M.M., Nabergoi, M., Mattei, M.,


15
Proyectos SJ10/48 y R007 del ICRM-UNSaM.
Mulholland, M., & Spallato, N. (2013,

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 21


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Terapia Ocupacional: una perspectiva
histórica desde la Universidad Nacional
de Colombia (1966-1989)1
Occupational Therapy: a historical perspective
from Universidad Nacional de Colombia (1966-1989)
Laura Rodríguez Mendoza2
Nathalia Camargo Carrero3
Xiomara Escobar Jiménez4
Recibido: 25 de octubre de 2016 • Enviado para modificación: 11 de enero de 2017 • Aceptado: 24 de febrero de 2017.
Rodríguez, L., Camargo, N., & Escobar, X. (2016). Terapia Ocupacional: una perspectiva histórica desde la Universidad Nacio-
nal de Colombia. Revista Ocupación Humana, 16 (2), 26-45.

Resumen: Este trabajo constituye uno de los primeros aportes al macroproyecto Historias
de las Terapias Ocupacionales en Colombia. La investigación describe los hitos y sucesos
que antecedieron, dieron origen y evolución al primer programa de formación en Terapia
Ocupacional en el país, ofrecido por la Universidad Nacional de Colombia. Se empleó la
metodología de investigación histórica a partir del reconocimiento de tres categorías: sujetos,
discursos e instituciones; las cuales convergen en los contextos sociales, políticos, económicos
y culturales de las décadas de los sesenta, setenta y ochenta, y en los escenarios internacio-
nal, nacional, local (Bogotá), la Universidad Nacional y la carrera de Terapia Ocupacional.
Las fuentes consultadas incluyen documentos y relatos de protagonistas del programa en el
periodo estudiado. Con la información obtenida se consolidan tres líneas de tiempo, una por
cada década, en las que se recuperan los planes y reformas curriculares de la formación técni-
ca, transformada en licenciatura a partir de 1976 y configurada como profesional a partir del
Decreto Ley 80 de 1980. Se invita a la realización de investigaciones en clave histórica como
una posibilidad de empoderamiento profesional que aporta a la comprensión del devenir de
la Terapia Ocupacional.

Palabras clave: Historia, Terapia Ocupacional, investigación histórica, memoria colectiva.

Abstract: This work constitutes one of the first contributions to the macro project: Stories
of occupational therapies in Colombia. The research describes the milestones and events

1
Artículo derivado de la investigación Terapia Ocupacional: una perspectiva histórica desde la Universidad
Nacional de Colombia (1966- 1989), realizada por las autoras como trabajo de grado para optar al título de
terapeutas ocupacionales de la Universidad Nacional de Colombia y dirigida por la docente Aleida Fernández
Moreno. Trabajo ganador del segundo puesto del Premio de Investigación Alicia Trujillo Rojas, decima versión
(2016), en la categoría estudiantes.
2
Terapeuta Ocupacional. Estudiante Maestría en Neurociencias, Universidad Nacional de Colombia.
Laboratorio desarrollo, juego, aprendizaje y lúdica, Departamento de la Ocupación Humana, Universidad
Nacional de Colombia. Grupo de Investigación Historias de las Terapias Ocupacionales en Colombia – HiTOs.
lvrodriguezm@unal.edu.co
3
Terapeuta Ocupacional. Unidad Terapéutica Integral BITA. Grupo de Investigación Historias de las Terapias
Ocupacionales en Colombia - HiTOs. naacamargoca@unal.edu.co
4
Estudiante de Terapia Ocupacional, Universidad Nacional de Colombia. xcescobarj@unal.edu.co

26 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


that preceded, and gave origin and evolution to the first training program in Occupational
Therapy in the country, offered by the Universidad Nacional de Colombia. The methodology
of historical research was used, from the recognition of three categories: subjects, discourses
and institutions. These converge in the social, political, economic and cultural contexts of
the 60s, 70s and 80s and in several scenarios: international, national, local (Bogotá), the
Universidad Nacional and the occupational therapy program. The sources consulted include
documents and stories of central characters of the program in the period studied. With the
information gathered, three timelines were obtained, one for each decade. The lines retrieve
plans and curricular reforms to technical training, transformed into a Bachelor’s degree from
1976 and configured as a professional degree in Law 80 of 1980. We invite to the conduction
of research in historical terms, as a possibility for professional empowerment that contributes
to the understanding of the evolution of occupational therapy.

Key words: History, occupational therapy, historical research, collective memory.

Introducción los sesenta, setenta y ochenta del siglo


XX. Se busca con él que las y los tera-
La historia continúa, es el correlato peutas ocupacionales, profesionales y
indispensable de la función fundadora en formación, así como las nue­vas ge-
del sujeto: la garantía de que todo cuanto neraciones, puedan conocer registros
le ha escapado podrá serle devuelto; primarios y hacer una lectura detalla-
la certidumbre de que el tiempo no da de los antecedentes del surgimien-
dispersará nada sin restituirlo en una to de la formación en Terapia Ocupa-
unidad recompuesta; la promesa de que cional en la Universidad Nacional de
el sujeto podrá un día (bajo la forma Colombia. Se toma como referente
de la conciencia histórica), apropiarse uno de los fundamentos del Grupo
nuevamente todas esas cosas mantenidas HiTOs: “reconocer el pasado para
lejanas por la diferencia, restaurará su
comprender el presente y visualizar el
poderío sobre ellas y en ellas encontrará
futuro” (Fernández, Cruz, Duarte, &
lo que se puede muy bien
García, 2015).
llamar su morada.
Foucault, 1979, p. 21. Para ello, la investigación tuvo en
cuenta la perspectiva para la recons-
Esta investigación estuvo dirigida a trucción histórica planteada por el
aportar desde la Universidad Nacio- sociólogo y filósofo Michael Foucault,
nal de Colombia a la reconstrucción quien sugería tener en cuenta tres ca-
histórica de la Terapia Ocupacional tegorías: en primer lugar los Sujetos,
en el país, como respuesta al llamado entendidos como personas bajo sus
que con ese fin realizó desde 2014 el distintas nominaciones históricas, con
Grupo de Investigación Historias de el fin de vislumbrar la evolución ter-
las Terapias Ocupacionales– HiTOs. minológica (terapeutas ocupacionales,
Como tal, se centró en la descripción técnicas, licenciadas); las institucio-
del devenir histórico del primer pro- nes, lugares en los que se desarrolló la
grama académico de Terapia Ocupa- profesión o en los que se dieron los su-
cional en Colombia en las décadas de cesos, y donde emergen los discursos,

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 27


entendidos como una “enunciación finalmente profesionales, y la confi-
individual o correlativa” que permite guración de las prácticas o ejercicio
la aproximación a los hechos y a las profesional, entre otros resultados
transformaciones generadas (Foucault, emergentes.
1979).
Finalmente, con esta investigación se
A su vez, se identificó que todo he- logró aportar a la invitación que hicie-
cho era determinado por un contexto ra la profesora emérita Alicia Trujillo
configurado cronológica y sistémica- (2002), a propósito de la importancia
mente, por lo que de forma breve y de estudiar la historia de la Terapia
general se sustentan los contextos po- Ocupacional: “En Colombia, las fuen-
lítico, económico, social y cultural. El tes que estudian las raíces sociales de
contexto político se refiere a sucesos la Terapia Ocupacional son casi inexis-
en un determinado espacio de deli- tentes (…). Una profesión como la Te-
beración pública y de poder (Mouffe, rapia Ocupacional no puede sustraer-
1999); el económico, a las formas de se de reconstruir y entender la crucial
utilización, administración y distribu- influencia que las condiciones cultu-
ción de los recursos limitados para el rales y eventos y coyunturas políticas,
consumo y la satisfacción de las ne- económicas, educativas, de salud y de
cesidades de los miembros de la so- trabajo han ejercido en su aparición y
ciedad (Capó, s.f.); el social engloba configuración”(p.472).
a los grupos que conforman distintas
organizaciones que construyen lo cul- Metodología
tural, influyendo y trascendiendo en
costumbres y acciones que definen La metodología de investigación histó-
la identidad de las sociedades en un rica, al ser utilizada por primera vez
tiempo y espacio (Reyes, 2011). Tales dentro de un grupo cuyas integrantes
contextos se entienden en las esferas son terapeutas ocupacionales, no his-
macro (internacional y Latinoamé- toriadoras, se convirtió en un reto. En
rica), meso (nacional y Universidad este trabajo se adelantaron cuatro eta-
Nacional) y micro (carrera de Terapia pas: contextualización; definición de
Ocupacional). categorías y archivos; lectura y cate-
gorización de información, y escritura
De esta manera, como lo sugiere descriptiva alrededor de los hallazgos.
(Foucault, 1979), se transformaron Estas etapas se fueron configurando
“los documentos, en monumentos” de la mano del Seminario Permanen-
de tal forma que se describiera de for- te, estrategia que ha hecho parte del
ma comprensiva y veraz la trayectoria desarrollo del macroproyecto Histo-
histórica de sucesos significativos en rias de las Terapias Ocupacionales en
la Terapia Ocupacional de la Univer- Colombia.
sidad Nacional en las tres décadas
abarcadas. Estos son: el proceso de La etapa de contextualización tuvo
transformación de la titulación de te- como fundamentos los aprendizajes y
rapeutas ocupacionales, inicialmente acuerdos de trabajo de las dos prime-
como técnicos, luego licenciados y ras sesiones presenciales del Semina-

28 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


rio, realizadas en Bogotá, en julio de Con base en este aprendizaje se con-
2014, y en Cali, en octubre del mismo vocó a las profesoras pensionadas y
año (HiTOs, 2014). En ellas se abarca- de larga trayectoria en el programa
ron: lo que se comprende por historia, de la Universidad Nacional a un Té
cómo comprenderla, cómo justificar de homenaje, el cual se realizó el 21
el estudio histórico y estructurarlo, la de abril de 2015 y contó con las na-
construcción del archivo. Desde allí se rrativas de Alicia Trujillo Rojas, Laura
establecieron las primeras categorías Álvarez de Bello, Emma Grimaldo,
de análisis y objetivos. Ana María Gómez y María Victoria
Zapata (Figura 1), logrando recolectar
Más adelante, en la sesión realizada información desde sus experiencias y
en la ciudad de Pasto, emerge la etapa trayectorias. De otro lado, en la Lí-
de definición de categorías y archivos. nea de Profundización de Estudios en
Con el apoyo de expertos se analiza- Discapacidad se realizaron conver-
ron algunas categorías, se definieron satorios individuales con otras profe-
los sujetos, discursos, instituciones soras pensionadas y egresadas de las
y contextos que darían sustento a la primeras cohortes.
clasificación de la información encon-
trada en términos de acontecimientos Por otra parte, el Archivo Histórico y
en esferas sistémicas. Allí se determi- Central, y la Biblioteca Gabriel García
nó que los discursos no solo podían Márquez de la Universidad Nacional
constituirse a partir de la lectura de de Colombia, sumados a las biblio-
documentos escritos, también me- tecas personales de algunas docen-
diante recursos narrativos y utilizando tes que acompañaron el proyecto, se
dispositivos para activar y aprovechar constituyeron en fuentes de informa-
la memoria viva y colectiva de las pre- ción documental.
cursoras de la profesión.
Figura 1. Profesoras y autoras durante el Té de Homenaje, abril de 2015.

Parte superior,
de izquierda a
derecha: Alicia
Trujillo Rojas,
Laura Álvarez
de Bello, María
Victoria Zapata,
Emma Grimaldo y
Ana María Gómez.
Parte inferior,
de izquierda a
derecha: Xiomara
Escobar, Nathalia
Camargo y Laura
Rodríguez.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 29


Posteriormente se realizó la lectura y A nivel internacional iniciaron las lu-
categorización de información, que chas políticas entre capitalismo y co-
recogió las reflexiones del seminario munismo como la Guerra de Corea
llevado a cabo en la Escuela Colom- (1946 - 1950), la Guerra Fría (1953 –
biana de Rehabilitación en junio de 1962) y, en Latinoamérica, el periodo
2015 (HiTOs, 2015). En esta etapa se de transición de la Revolución Cubana
estableció una matriz de síntesis de la en 1953, que finalizó con la posesión
información recolectada, la cual faci- de Fidel Castro como presidente de
litó su clasificación en las categorías Cuba en 1959 (Harina, 2010).
y contextos definidos. Luego se hizo
una lectura transversal de esas catego- Mientras tanto, en Bogotá tuvo lugar
rías y contextos década por década, y un periodo de violencia que resultó
se trazó una matriz que más adelante del asesinato del caudillo liberal Jorge
se convirtió en líneas de tiempo. Esto Eliécer Gaitán en 1948, el cual desen-
permitió configurar cronológicamente cadenó El Bogotazo. Para esa época
los hechos históricos de forma legible. Colombia se dividía ideológicamente
Con este ejercicio de análisis se evi- en dos partidos políticos, liberal y con-
denciaron además hechos cuya im- servador, cuyos debates por el poder
portancia se reiteraba; uno de ellos, el dieron pie a la conformación del Fren-
proceso de transformación del progra- te Nacional, “sinónimo de moviliza-
ma curricular y del título de formación ción social, sindicalismo y movimien-
obtenido. La triangulación de fuentes tos estudiantiles” (Gutiérrez, 2015).
(estudiante de la época, docente y Atendiendo a las necesidades políticas
normativa) permitió identificar hitos emergentes luego del Bogotazo, en
históricos en ese proceso. 1954 las mujeres obtuvieron el dere-
cho al voto; sin embargo, solo hasta
Finalmente, se realizó la escritura des- 1957 pudieron ejercerlo por primera
criptiva alrededor de los hallazgos, vez. Con el sufragio femenino se con-
para lo cual se asistió a dos talleres solidaban las luchas originadas en los
de escritura coordinados por la Tera- años treinta (Cohen, 2001).
peuta Ocupacional Solángel García,
Hacia finales de la década de los cin-
integrante del grupo HiTOs. De esta
cuenta el total de estudiantes de la
forma fue posible realizar una descrip-
Universidad Nacional de Colombia,
ción que pasara del esquema a la na-
mayoritariamente hombres, represen-
rración, de forma que la historia con-
taban el 50% de aquellos que ingresa-
tada lograra ser legible.
ban a la educación superior en el país
Resultados tras cumplir la exigencia de culminar
sus estudios como bachilleres. Las mu-
Antes de la creación del programa jeres entre tanto eran tenidas en cuen-
de Terapia Ocupacional, el ambiente ta en la “universidad femenina”5 para
de las primeras décadas del Siglo XX ser formadas según sus características

5
Para Cohen (2001), la universidad femenina representó el intento de algunos grupos de mujeres por ocupar
espacios de poder, controlando estas instituciones a través de alternativas educativas prácticas que permitieran

30 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


y sin que “compitieran con los varo- tar el número de mujeres vinculadas
nes por los mismos puestos de traba- a programas de educación universi-
jo” (López, 2002, p. 71). Las que ac- taria (UNESCO, 1998), y la memoria
cedían a la universidad superaban los cultural que compilaron los intelec-
prejuicios al ser minoría, salvo quie- tuales con sus ideas o acciones ayu-
nes ingresaban a estudiar Enfermería, dó a fomentar la construcción de una
dado que ya contaban, como gremio, utopía revolucionaria que promovió la
con un estatus profesional (Gómez, et modernización universitaria y la críti-
al., 2011). ca hacia el modelo de educación su-
perior norteamericano. Todo ello tras
Década de los sesenta: el augurio de la ruptura de las relaciones políticas,
grandes cambios económicas, sociales y culturales de
Por esta época, a nivel internacional, Cuba con los Estados Unidos, que dio
la instalación soviética de platafor- su nombre a la Revolución Cubana
mas lanza misiles en territorio cubano (Urrego, 2002).
representó para la Casa Blanca una Finalizando la década, en 1969, el
amenaza nuclear sin precedentes, de hombre llegó a la luna ocho años des-
tal magnitud que el mundo se arries- pués de viajar por primera vez al es-
gaba a comenzar una Tercera Guerra pacio. Este hecho representó el cum-
Mundial. Fue entonces cuando Cuba plimiento del sueño del presidente
comenzó a “exportar” la revolución de Estados Unidos John F. Kennedy,
comunista al resto de los países lati- asesinado en 1963, quien lo visuali-
noamericanos con el apoyo económi- zaba como una forma de superar los
co y político de la Unión Soviética, lo avances científicos y tecnológicos de
que significaba una agresión al sistema la Unión Soviética (Dunbar, 2008).
democrático capitalista pregonado,
“difundido y hasta impuesto por los Kennedy visitó Colombia en 1961, he-
Estados Unidos de América en el resto cho que consolidaba la Alianza para
de los países latinoamericanos” (Men- el Progreso, un programa de ayuda
go, 2004, p. 42). externa a América Latina propuesto
por Estados Unidos con el fin de crear
Lo anterior influyó en una serie de condiciones para el desarrollo y la es-
transformaciones culturales que pro- tabilidad política y económica de la
movieron el reconocimiento de la región, y con el cual se habría de fi-
diversidad de pensamiento, especial- nanciar mayoritariamente la Reforma
mente político. Esto se manifestaba en Patiño en la Universidad Nacional de
un tipo de escritura tensionante que Colombia (Carrillo, 2014).
dinamizó la expresión de las nuevas
concepciones entre quienes escribían Posteriormente, en 1966, se confor-
y sus relaciones con el Estado. Las co- maron en Colombia los grupos guerri-
rrientes feministas lograron incremen- lleros Ejército de Liberación Nacional

a las mujeres hacer compatible su vida familiar y profesional. Fue una manera de influir en la transformación de
los valores imperantes en la sociedad, convencidas de que ellas mismas debían crear nuevos modelos.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 31


(ELN) y Fuerzas Armadas Revoluciona- ción de rehabilitación, derivada de la
rias de Colombia (FARC), ello como situación de violencia que atravesaba
fruto de la exclusión social y política, el país, por lo que vieron la necesidad
la distribución desigual de las tierras de constituir equipos completos de sa-
y la injusticia social vividas hasta ese lud en rehabilitación (Pardo, 1972). En
momento en el país (Mengo, 2004). consecuencia, desde el Hospital San
Juan de Dios se solicitó a la Facultad
Por otra parte, la Universidad Nacio- cubrir estas necesidades por medio de
nal de Colombia empezó a recono- la formación en el área. Así, median-
cerse como una institución pública, te el Acuerdo 04 del 20 de enero de
autónoma y con identidad corporativa 1966 (Consejo Superior Universitario,
legal por medio del proyecto de re- 1966), el Consejo Superior Universita-
forma universitaria establecido por el rio autorizó a la Facultad de Medicina
médico y rector de la Universidad José para que en la “Sección de Rehabili-
Félix Patiño. Dicha reforma, aprobada tación” iniciaran labores tres carreras
por el Consejo Superior Universitario técnicas que vendrían a llenar el vacío
a través del Acuerdo 059 del 25 de existente en el campo de las ciencias
marzo de 1965, constituyó la enton- de la salud: Terapia Física, Terapia de
ces llamada ciudad universitaria (Gu- Lenguaje y Terapia Ocupacional (Par-
tiérrez, 2015), estableció la división do, s.f.). Inicialmente las admisiones
académica de la universidad y definió serían semestrales.
sus funciones y organización general
luego de la crisis de infraestructura Los tres programas creados tenían una
y bienestar en la que se encontraba duración de seis semestres y com-
(Mengo, 2004). partían en el primer año asignaturas
como Anatomía, Física, Psicología
El 1 de septiembre de 1959 la Facul- Ge­neral, Sociología, Orientación, Pri-
tad de Medicina de la Universidad meros Auxilios, Fisiología Neuromus-
había creado el Servicio de Medicina cular, Anatomía Funcional, Patología
Física y Rehabilitación, una unidad General y Neuromuscular, Psicología
dependiente de la sección de Medi- Médica, Kinesiología e Inglés; poste-
cina Interna del Hospital San Juan de riormente recibían clases propias de
Dios que efectuaba actividades admi- cada área. Al terminar se recibía el
nistrativas, docentes y asistenciales, título de técnico (Pardo, s.f). En 17
las cuales dieron origen en 1960 a la de diciembre de 1968 se presentó el
formación posgraduada de médicos primer Acta de Grado Colectivo para
especialistas en Medicina Física y Re- Técnicas en Terapia Ocupacional de
habilitación en la Universidad (Pardo, la Universidad Nacional de Colombia,
1972). con un total de nueve graduandas6.
Posteriormente las directivas de la Fa- Para el caso de Terapia Ocupacional,
cultad de Medicina detectaron una inicialmente la dirección del programa
amplia demanda de servicios en la sec- estuvo a cargo del director del Depar-

6
El Acta fue recuperada y transcrita, está disponible en el informe final del trabajo de grado.

32 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


tamento de Rehabilitación, Jorge Par- de Dios (…) Bueno... Patricia de Pardo,
do Ruiz, y las terapeutas ocupaciona- excelente profesora, con nosotras era
les Patricia Ann Lang de Pardo, de pro- (…) exigente, disciplinada, ella ma-
cedencia Norteamericana y graduada nejaba San Juan de Dios, nos dictaba
de la Western Michigan University en la teoría de Incapacidades Físicas,
(Registro de personal docente, s.f.), y nos hacía la práctica ahí en el Servi-
Alicia Trujillo Rojas, colombiana con cio de San Juan de Dios, entonces ella
formación en la New York University fue una de mis profesoras. Después
(Trujillo, 2002). en la parte de niños mi profesora fue
Margarita Rojas, que era de la prime-
Instituciones y prácticas en los ra promoción, (…) Salud Mental en la
sesenta clínica Santo Tomás, y entonces allá
cuando a mí me tocó Salud mental mi
Según lo establecido en el Acuerdo 04 profesora fue Alicia (…). En la Unidad
de 1966 del Consejo Superior Univer- del San Juan íbamos era a una clase
sitario (Consejo Superior Universita- de Psiquiatría... sólamente en San Juan
rio,1966), a partir del segundo año de con doña Patricia, en Santo Tomás con
formación el mayor número de horas Alicia, y en Propace7 con Margarita
a la semana se dedicaba a las Prácti- Rojas... también recibí clase de Confe-
cas Clínicas, Férulas y Adaptación de rencias Clínicas con los profesores que
Equipos, Artes Manuales y Artesanía. nos daban Kinesiología, también nos
En el tercer año se realizaban prácti- dictaban otra vez conferencias clínicas
cas clínicas en Pediatría, Psiquiatría de todas las patologías, todo lo de pa-
y Rehabilitación, que para la época tología nos lo dictaban esos doctores
implicaban la asistencia al Hospital (…) por la tarde veníamos aquí a la
universidad y nos dictaban Cerámica
San Juan de Dios, principalmente, así
(…) y Férulas también las hicimos allá
como a otras instituciones. Así lo con-
en San Juan de Dios en un salón gran-
firma la terapeuta ocupacional, Emma
de que nos tocó limpiar y arreglar... (E.
Grimaldo, docente pensionada de la Grimaldo, comunicación personal, 15
Universidad Nacional de Colombia: de marzo de 2015).
…Aquí [refiriéndose a la Universidad]
Respaldando lo mencionado por la
recibíamos Kinesiología en un salón
profesora Grimaldo, el Hospital San
de Odontología y nos la daba el Dr.
Pardo, el Dr. Rangel, el Dr. Avelin Rus-
Juan de Dios es identificado por las
tedes, el Dr. Vega, todos esos docto- docentes como la institución más im-
res nos daban Kinesiología, y entonces portante para el programa de Terapia
Morfo aquí (…) eran todos los médi- Ocupacional de la Universidad Na-
cos…claro, el profesor Rubiano, todos cional de Colombia, dado que es allí
los médicos (…). Luego, después eran donde surgió. Sobre este espacio la
como tres bloques, tres áreas, que era profesora Nohora Díaz refiere:
en ese entonces Incapacidades Físicas
…teníamos cuatro espacios, al princi-
en Niños, que era Incapacidades Físi-
pio estábamos en la Sección de Hos-
cas en Adultos, que era en San Juan

7
Asociación Colombiana Pro Niño con Parálisis Cerebral- PROPACE.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 33


pitalización y Salud Mental, también de rehabilitación para la atención de
entrabamos a Cuidados Intensivos. niños con todo tipo de “incapacidad”.
Luego cuando las personas salían de Un año después se creó allí “la escue-
estar hospitalizadas ingresaban a Re- lita de educación especial”, donde se
habilitación, teníamos talleres de artes, atendían niños con “incapacidades
con hiladoras, cerámicas y en fin… Di- físicas” y trastornos severos, pensan-
bujé caras felices porque siempre las do en aquellos que no podían asistir
personas entraban y salían muy felices a la escuela regular por su condición
del servicio de Terapia Ocupacional, de hospitalización (Pardo, 1972). En la
teníamos incluso una cafetería… (N.
Tabla 1 se relacionan las instituciones
Díaz, comunicación personal, 11 de
en la que se desarrollaron prácticas
marzo de 2015).
del programa de Terapia Ocupacional
En 1967 se instauró en el Hospital de en la década del sesenta.
La Misericordia otro servicio adjunto

Tabla 1. Instituciones donde desarrolló prácticas el programa de Terapia Ocupacional


en la década de 1960.

Año Institución Práctica académica Docente a cargo


de inicio
1966 Hospital San Juan de Dios. Disfunciones Físicas niños. Jorge Pardo
Disfunciones Físicas Alicia Trujillo
adultos. Patricia de Pardo
Margarita Rojas
1967 Clínica Santo Tomás Salud Mental Alicia Trujillo
Hospital de la Misericordia. Disfunciones Físicas niños. Maria Helena Rubio
1968 Asociación Colombiana Pro Disfunciones físicas niños. Margarita Rojas
niño con Parálisis Cerebral - Emma Grimaldo
Propace.
Fuente: Elaboración propia a partir de los registros de archivo.

Década de los setenta: la se libró en los frentes políticos y eco-


licenciatura, implementación de nómicos” (Hobsbawn, 2000).
cambios de inicio a fin
En Latinoamérica ocurrieron crisis
Los setentas constituyeron una déca- políticas trascendentales. En Chile, el
da de transformaciones. A nivel Inter- golpe de Estado contra el presidente
nacional, “la Guerra Fría muestra una Allende en 1973 dio paso a la dicta-
larga y abierta rivalidad que enfrentó a dura militar del General Augusto Pi-
Estados Unidos y la Unión Soviética y nochet, lo que significó para miles de
sus respectivos aliados tras la Segunda chilenos el comienzo de una época de
Guerra Mundial. Este conflicto fue la exilios, desapariciones y torturas (Mi-
clave de las relaciones internacionales nisterio de Educación, Gobierno de
mundiales durante casi medio siglo y Chile, 2014). Situaciones similares vi-

34 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


vieron los argentinos bajo la dictadura mostró todo lo que el manejaba en re-
de Videla, que inició en 1976, y los habilitación… increíble. (E.Grimaldo,
uruguayos, desde 1973, con Juan Ma- comunicación personal, 15 de marzo
ría Bordaberry (Anderson, 1988). de 2015).

A inicios de los setenta nació en Co- Por otra parte en la Facultad de Medi-
lombia el grupo guerrillero Movimien- cina, durante la decanatura de Carlos
to 19 de Abril - M-19, el cual protago- Cuervo en 1972, la profesora Alicia
nizó en ese decenio sucesos como el Trujillo buscaba atender las necesi-
robo de la espada de Bolívar, la toma dades de actualización y continuidad
de la Embajada de República Domi- en la formación de quienes egresaban
nicana y el robo de armas del Cantón del programa de Terapia Ocupacional
Norte (Jaimes, 2012). Durante la pre- (A.Trujillo, comunicación personal, 21
sidencia de Alfonso López Michelsen de abril de 2015). Al respecto, la pro-
se presentó uno de los más fuertes fesora Laura Álvarez de Bello relata:
movimientos de inconformismo en el
país durante el siglo XX, el Paro Cívi- Las terapeutas ocupacionales para el
co Nacional de 1977 convocado por año 1972 empezaron a realizar un
curso en el Centro de Rehabilitación
las centrales sindicales del país, cuyas
Profesional para inválidos, que queda-
motivaciones incluían la situación de
ba en la Caracas con 24 y estaba di-
carestía que campeaba y las altas cifras
rigido por Hillary Schlesinger, que era
de desempleo (Tribuna Roja, 1977).
una delegada de la OIT. (L. Álvarez,
De otro lado, desde la rectoría de Ma- comunicación personal, 21 de abril
rio La Torre Rueda, en los años setenta de 2015).
se impulsaron los primeros programas
Más allá de estos esfuerzos, el interés
de educación posgraduada en la Uni-
de docentes, estudiantes y egresadas
versidad Nacional de Colombia. Entre
por profesionalizar la carrera, que se
1967 y 1973 fueron creadas las maes-
materializó en el logro de la licenciatu-
trías en Administración y en Educa-
ra en 1976, constituye para la historia
ción, primeras en el país y en América
del programa de Terapia Ocupacional
Latina. Adicionalmente, la Universi-
de la Universidad Nacional de Colom-
dad otorgaba becas a quienes se gra-
bia el hito más importante de la déca-
duaban en condiciones de excelencia
da de los setentas.
académica; así lo relata la profesora
Emma Grimaldo para el caso de Tera- Concentradas en ello y con la partici-
pia Ocupacional: pación activa de toda la comunidad
Quien obtenía el título de técnica en académica del programa, incluyendo
Terapia Ocupacional y lograra grado un importante liderazgo estudiantil,
de honor, la Universidad le daba una en 1973 se emprendieron en la Uni-
beca para ir a estudiar al extranjero, versidad Nacional y en el Hospital San
a Nueva York. Yo fui al Norwood Me- Juan de Dios “grandes luchas”, como
morial Hospital y el Dr. Pardo también sus protagonistas las denominan, para
me envió una nota a Howard Ruks impulsar la formación profesional.
en Nueva York, y él me recibió y me Para corroborar esta información se

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 35


realiza triangulación de tres discur- (L. Álvarez, comunicación personal, 21
sos importantes, el primero legislativo de abril de 2015). Estas personas reci-
(Acuerdo 15 de 1976 del Consejo Su- bieron su segundo grado el 22 de abril
perior Universitario) y los otros dos co- de 1977.
rrespondientes a las narraciones de la
profesora Alicia Trujillo y la Terapeuta De otra parte, Trujillo, Torres, Mén-
Ocupacional Aida Navas, quien para dez y Carrizosa (2011) refieren que
entonces era estudiante. “en este momento las profesoras de
Terapia Ocupacional comenzaron a
De este proceso se derivaron cambios ocupar cargos académico administra-
estructurales en el plan curricular del tivos los cuales, a través de su gestión,
programa, en donde se destacan la favorecieron roles decisivos en el rum-
introducción de la investigación y la bo de sus programas”(p. 44). Esto se
implementación de las estrategias de relaciona con otro hito en la historia
nivelación y actualización necesarias del programa de Terapia Ocupacional
para que quienes se habían gradua- de la Universidad Nacional de Colom-
do como técnicas pasaran a ser licen- bia, la creación en 1978 del cargo de
ciadas. director académico para las carreras
de Terapia del Lenguaje, Física y Ocu-
Primera reforma curricular del pacional.
programa
El Consejo Superior Universitario ha-
La primera revisión curricular del pro- bía reglamentado, a través del Acuer-
grama se consolidó en el Acuerdo 15 do 83 del 20 de septiembre de 1977,
de 1976 del Consejo Superior Uni- los cargos y funciones de los directo-
versitario, el cual dio paso al Acuerdo res académicos y los comités aseso-
0016 de 1977 del Consejo Superior res de carrera; en consecuencia, en
Universitario (Acta 7 del 15 de ene- 1978, mediante el Acuerdo 12 del 21
ro), a través del cual se aprobó el plan de febrero del Consejo Superior Uni-
de estudios para la Licenciatura de versitario “se provee una dirección
Terapia Ocupacional. En esta refor- independiente para las licenciaturas
ma se implementaron bases teóricas, de terapias”. En este último Acuerdo
metodológicas y aplicadas a la investi- se consideró además el aumento de
gación, exigiendo la realización de un cupos de las “carreras de terapia”, las
registro monográfico como requisito cuales hasta el momento eran dirigidas
de grado (Peñas, 2006). solo por el director del Departamen-
to de Rehabilitación, Dr. Jorge Pardo
Adicionalmente, quienes para enton- Ruiz, quien paralelamente dedicaba
ces tenían el título de técnicas (algunas sus esfuerzos al pregrado de Medicina
de las cuales ejercían ya como docen- (cuyos cupos también aumentaban) y
tes del programa) debían presentar y al programa de residencia clínica en la
aprobar un examen para acceder al misma disciplina. De esta manera se
título de licenciadas: “…tuvimos que autorizó “al Consejo Directivo de la
preparar un curso para las demás y así Facultad de Medicina para proceder
podían obtener el título de licenciado” a nombrar un director académico de

36 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


las carreras de Terapia del Lenguaje, rapeuta Ocupacional Margarita Gon-
Física y Ocupacional”, y a “separar las zález:
funciones de director de departamen-
Vino el Seguro Social que quería for-
to y de director académico de carre-
mar su primer Centro de Rehabilita-
ra” (Consejo Superior Universitario,
ción Profesional, y ahí estaban Carmen
1978). Helena Vergara y Hirally Schlesinger,
Instituciones y prácticas de los inglesa, (…) ella era experta, se llama-
setenta ba experta consultora de la Organiza-
ción internacional del Trabajo (OIT),
Paralelamente, la academia siguió for- y había formado el primer Centro de
taleciendo sus espacios de inciden- Rehabilitación Profesional en Argenti-
cia en atención a las necesidades de na con Antonio Lacar, quien fue el di-
la población. Para 1973 la profesora rector del GLARP en la última etapa en
Laura Álvarez de Bello continuaba los Colombia, prácticamente. (M. Gon-
programas y acciones para niños y ni- zález, comunicación personal, 20 de
ñas desescolarizados y con necesida- marzo de 2015).
des educativas especiales en el Hos- Por otra parte, Terapia Ocupacional
pital de la Misericordia, práctica que apoyaba con la profesora Emma Gri-
más adelante se consolidó en el área maldo el Programa Madre Canguro,
educativa: concebido en 1978 en el Hospital
Yo empecé en La Misericordia hacien- Materno Infantil para atender las ne-
do la práctica de niños, pero La Mise- cesidades de bebés prematuros cuyo
ricordia tenía una escuelita, que era la delicado manejo requería capacitar
escuela de sordos en 1973, entonces a las madres, familiares y al personal
en 1974 hablando con muchos niños hospitalario (Instituto Materno Infantil,
que no tenían escolaridad logramos 2003).
que el Dr. Gustavo Vega aceptara in-
… había mucho hacinamiento, mucha
cluir niños con déficit cognitivo, eran
crisis de que no tenían como manejar
los retardados mentales en ese mo-
a esos niños… entonces empezaron
mento. (L. Álvarez, comunicación per-
ahí en el Materno, después fue cuando
sonal, 21 de abril de 2015).
con UNICEF consiguieron plata para
Al mismo tiempo se ampliaron los hacer la casita… empecé yo en el Ma-
servicios en el Hospital San Juan de terno con estudiantes, y entonces yo
Dios, en donde se prestaba atención hacía eso con el Dr. Hector Martínez,
él era el encargado de los prematuros,
de Terapia Ocupacional en el área
entonces él los miraba y yo en el mis-
pre vocacional y de orientación labo-
mo consultorio, en la casita, evaluaba.
ral; también se empezaban a realizar
(E. Grimaldo, comunicación personal,
análisis de puestos de trabajo desde 15 de marzo de 2015).
la Universidad (Laserna, 1995). En
1973, luego de que desaparece el Adicionalmente, las prácticas de re-
Consejo Nacional de Rehabilitación, habilitación en disfunciones físicas
se crea el Instituto Colombiano de en niños y adultos en el Hospital San
Seguro Social, como lo explica la Te- Juan del Dios se mantuvieron en esta

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 37


década, y se dio por finalizado el con- resumen las instituciones en las que
venio con la Clínica Santo Tomás en se desarrollaron prácticas de Terapia
1974 (Trujillo, 1981). En la Tabla 2 se Ocupacional durante los setenta.

Tabla 2. Instituciones donde se inician prácticas del programa de Terapia Ocupacional


durante la década de 1970.

Año
Institución Áreas Docente a cargo
de inicio
1972 Hospital de la Misericordia Pabellón de Quemados. Lucy Carrizosa

Centro de Educación Espe- Laura Álvarez de Bello


cial – “La Escuelita”.
María Helena Rubio
Trastornos del Aprendizaje.
1973 Instituto Materno Infantil Neonatos Emma Grimaldo
1974 Hospital San Juan de Dios Salud Mental Alicia Trujillo
1978 Hospital Julio Manrique - Sibaté Salud Mental
Fuente: Elaboración propia a partir de los registros de archivo.

Década de los ochenta: se consolida terrorismo (Molina, 1988). En 1980,


la profesionalización en Nicaragua el ejército sandinista lle-
vó a cabo un golpe militar a la familia
Entre los hechos relevantes de este de- Somoza que instaura el Gobierno de
cenio a nivel Internacional, los países Reconstrucción Nacional; este pro-
asiáticos experimentaron un rápido ceso dejó consigo una economía de
desarrollo industrial que aún no se de- guerra y cuantiosos daños humanos
tiene; aumentaron las tensiones de la y económicos (Cuellar, 1999, 2000).
Guerra Fría entre los Estados Unidos En el mismo año, inició en El Salva-
de América y la Unión Soviética (Fon- dor una guerra civil que duró 12 años,
do Monetario Internacional, 2001); la esta generó una amplia migración de
existencia del Virus de Inmunodefi- su población hacia los Estados Unidos
ciencia Humana - VIH se hizo pública de América, acompañada de protes-
por primera vez en junio de 1981 y tas que reclamaban dar fin al apoyo
se presentó ante el mundo como una militar de ese país a El Salvador (De
epidemia de enormes proporciones Cesare, 2011).
(Herrera, s.f.), y la OMS publicó en
1980 la Clasificación Internacional de En Colombia los bajos precios del café
Deficiencias, Discapacidades y Mi- coincidieron con una profunda crisis
nusvalías (CIDDM), la cual se puso a económica y social que se acompa-
prueba en los años posteriores (OMS, ñó de desempleo, pobreza, hambre y
2001). enfermedad (Cano, Vallejo, Caidedo,
Amador, & Tique, 2012). Las llamadas
En Latinoamérica continuaron las des- mafias del narcotráfico comenzaron a
apariciones forzadas y se intensificó el mostrar su influencia en la vida polí-

38 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


tica nacional, así lo reveló el triunfo (…) Esta modalidad se orienta en dos
de Pablo Escobar con un escaño en direcciones: hacia las disciplinas pri-
el Senado en las elecciones de 1982, mordialmente académicas y hacia las
bajo el padrinazgo de Alberto Santo­ profesiones liberales” (Ministerio de
fimio Botero (Arias, 1993). El gobierno Educación Nacional, 1980).
del presidente Virgilio Barco Vargas
(1986-1990) fracasó en sus negocia- Fue más adelante, el 25 de octubre de
ciones con las FARC, al tiempo que 1982, cuando se sancionó la primera
aumentaba la violencia por cuenta de ley de Terapia Ocupacional en el país,
la guerra declarada por el Cartel de la Ley 31 de 1982. En ella se definía la
Medellín (Franco, 2012). Terapia Ocupacional como “una mo-
dalidad sistematizada de prevención,
Por otro lado, el país se vio afectado tratamiento y rehabilitación de algu-
por desastres de gran magnitud du- nas enfermedades físicas, mentales o
rante el periodo presidencial de Be- sociales” (Art. 1) (Ministerio de Educa-
lisario Betancurt (1982-1986). El 31 ción Nacional, 1982), destacándose el
de marzo de 1983 un sismo de 5.5 énfasis biomédico que para entonces
grados en la escala de Richter sacudió tenía. La ley además reglamentaba las
el departamento del Cauca y destruyó modalidades de formación en Terapia
la antigua ciudad de Popayán (Gros, Ocupacional de la época en el siste-
1987). En 1985 el Volcán-Nevado del ma de educación superior: intermedia
Ruiz hizo erupción generando una profesional, tecnológica, universitaria
avalancha de nieve y lodo que sepul- y avanzada de posgrado.
tó al municipio de Armero; cerca de
25.000 personas perdieron la vida y No ajena a la situación del país, y aun-
más de 20.000 quedaron damnifica- que ya con la malla que separaba el
das o heridas por este hecho (Rueda, campus de la sede Bogotá del resto
1999). Adicionalmente, apenas unos de la ciudad, la Universidad Nacional
días antes de la tragedia de Armero, el de Colombia era durante los ochenta
6 de noviembre de 1985, el M-19 se centro de debates, proposiciones y lu-
tomó el Palacio de Justicia en Bogotá chas en defensa de lo público. Como
(Correa, 2005). consecuencia, fue cerrada el 16 de
mayo de 1984 por espacio de un año,
En el ámbito educativo, en enero de para reabrirse en abril de 1985 con
1980 el entonces presidente Julio Ce- dinámicas y estructuras distintas, “las
sar Turbay Ayala firmó el Decreto 80, paredes eran totalmente blancas, la
con el cual se organizó el sistema de cafetería, un polideportivo y las resi-
educación post-secundaria en el país dencias sin funcionamiento, ahora la
y se reglamentaron las características Rectoría estaba bajo el cargo de Mar-
de los programas profesionales. En su co Palacios, primer encargado de eje-
artículo 30, dicho Decreto estableció: cutar reformas académicas, adminis-
“la formación universitaria se carac- trativas y estructurales” (Castro, 2009).
teriza por su amplio contenido social
y humanitario y por su énfasis en la De otro lado, respondiendo al marco
fundación científica e investigativa normativo trazado por la Ley 80 de

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 39


1980, la Universidad ubicó en la mo- académicos que implicaron una reor-
dalidad de formación profesional a va- ganización de las asignaturas teóricas,
rias de las carreras que ofrecía, entre los programas académicos de campo
ellas a Terapia Ocupacional, a través y el trabajo de grado, y se incluyeron
del Acuerdo 156 de 1980 del Consejo en los primeros semestres asignaturas
Superior Universitario. como Física, Morfofisiología, Antro-
pología, Psicología, Incapacidades Fí­
Entre tanto, las incalculables pérdi- sicas y Actividades Terapéuticas, en-
das que dejó el desastre de Armero tre otras.
abrieron a su vez un nuevo campo
de acción para Terapia Ocupacio- De acuerdo con Zapata (1994), las
nal. Desde la Universidad Nacional transformaciones vividas al final de
de Colombia se envió una comisión esta década, como el enfoque social
a prestar diferentes servicios al eje de la salud y la necesidad de los tera-
comunitario “haciéndose evidente la peutas ocupacionales del país de ge-
necesidad de darle atención priorita- nerar una mayor identidad profesional
ria, no solo a los “discapacitados” sino desde teorías propias, llevaron a que
también a las personas que se vieron se diera este proceso de reestructura-
afectadas por el cambio sustancial en ción curricular.
sus vidas, involucrando sus ocupacio-
nes. Margarita González relata que Discusión
los estudiantes de Terapia Ocupa- La historia es definida por la Real Aca-
cional de la Escuela Colombiana de demia de la Lengua Española (RAE,
Rehabilitación también acudieron a 2012) como la narración de sucesos
Armero para prestar apoyo durante la ocurridos en tiempo atrás que per-
crisis generada por la avalancha (M. miten la descripción y explicación de
González, comunicación personal, hechos pasados, que contribuyeron
20 de Marzo de 2015). en el presente; sin embargo Quiceno
La reforma curricular de los ochenta propone que para “comprender la his-
toria y lo que esta es, hay que mirarla
En 1988 se llevó a cabo una restruc- desde un punto de vista distinto, apar-
turación del programa curricular de tarnos de ella y dejar que ella hable”
Terapia Ocupacional de la Universi- (H. Quiceno, comunicación personal,
dad Nacional de Colombia, la cual se 17 de octubre de 2014)8.
hizo efectiva con la Resolución 067
de 1988, emitida por el Consejo Di- Quinceno soporta su postura en la
rectivo de la Facultad de Medicina. En obra de Michael Foucault (1979)9,
ella se establecieron nueve semestres quien argumentaba que la historia es
ver más allá de los “monumentos”, es

8
El profesor Humberto Quiceno ha acompañado el Grupo HiTOs y al macroproyecto desde el segundo
encuentro presencial del Seminario Permanente en la ciudad de Cali, realizado en octubre de 2014. Para
el cuarto encuentro presencial realizado en Bogotá aportó una conferencia virtual centrada en la lectura de
registros. Sus aportes han sido valiosos para la comprensión de la perspectiva histórica de Foucault.
9
De igual manera, la lectura de los textos de Foucault ha sido acompañada por las investigadoras del Grupo
HiTOs.

40 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


el conocimiento de todo lo que hay al- el surgimiento del programa y su de-
rededor de estos, encontrar y conocer sarrollo. Los hechos develados ayudan
porqué se configuró ese monumento a comprender lo que es hoy Terapia
para poderlo transformar en discursos. Ocupacional en la Universidad Nacio-
nal y en el país, en palabras de una
Sin embargo, ante estas definiciones de sus protagonistas “…constituirnos
que ayudaron a contextualizar la in- como profesionales fue el resultado de
vestigación, la historia fue comprendi- las grandes luchas que hicimos y traba-
da no solo como un ejercicio de iden- jamos” (A.Trujillo, Comunicación per-
tificación de sucesos del pasado, sino sonal, 21 de abril de 2015).
de re-creación de las circunstancias de
un hito histórico para comprenderlo y, Conclusiones
de esta manera, aproximarse a la re-
construcción histórica, lo que Foucault El trabajo realizado permitió recono-
(1979) plantea como “discursos”, es cer varios hitos históricos que antece-
decir, narrativas orales u escritas que dieron el surgimiento del programa
emergen a partir del conocimiento y de Terapia Ocupacional en la Univer-
las experiencias. sidad Nacional de Colombia, entre
ellos, el primera sufragio femenino,
Con estas conceptualizaciones como la reforma educativa que permitiría
referentes, la investigación realizó no el incremento de la participación de
solo una lectura documental, tam- la mujer en el ámbito universitario y
bién contó con la narrativa de la me- la importante etapa de violencia que
moria viva de las personas que con- incrementó la demanda de servicios
tribuyeron a la construcción histórica de rehabilitación en el país y generó la
de la Terapia Ocupacional. Todo ello necesidad de vincular personal capa-
permitió una lectura por categorías y citado para ellos.
adicionalmente aportó la contextuali-
zación de eventos en esferas sistémi- Así mismo, evidenció que durante los
cas a nivel sociopolítico, económico primeros treinta años las terapeutas
y cultural. Así, se pudieron identificar ocupacionales llevaron la profesión a
hitos históricos, pero también se pro- otros niveles, transformando sus prác-
porciona una descripción detallada y ticas y discursos en sintonía con las
fidedigna del devenir del programa de situaciones contextuales de cada épo-
Terapia Ocupacional de la Universi- ca. El quehacer profesional pasó del
dad Nacional de Colombia desde su ámbito exclusivo de la rehabilitación
creación hasta los años ochenta. Ésta física y mental a la rehabilitación pro-
descripción de la historia de las tres fesional, la promoción de habilidades
primeras décadas del programa se en escuelas y la integración de perso-
considera parte de la respuesta al reto nas en sus comunidades.
que la profesora Alicia Trujillo propuso
en el 2002, en el sentido de estudiar Este proyecto se transforma ahora en
los inicios de la profesión y articular una invitación a la comunidad de te-
los contextos políticos, económicos, rapeutas ocupacionales, profesionales
sociales y culturales que influyeron en y en formación, a creer en la historia,

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 41


a motivarse por su estudio y encontrar depart/deaweb/webpersonal/javiercapo/
nuevas brechas que permitan pensar rel_lab/temas/tema1_javi.PDF
desde lo colectivo y para la agremia- Carrillo, D. (2014) Construyendo las ciencias
ción. Queda además un nuevo reto sociales en Colombia: política, comuni-
para cada sujeto de la Terapia Ocupa- dades científicas y fundaciones filantró-
cional: conservar de manera especial picas en la Universidad Nacional de Co-
los discursos, la memoria escrita y fo- lombia (1958-1970). Bogotá, Colombia:
Universidad Nacional de Colombia.
tográfica de las experiencias, porque
cada momento es una historia que Castro, F. (2009). Universidad Nacional,
merece ser contada y escrita. tiempos turbulentos. Obtenido de des-
deabajo: https://www.desdeabajo.info/
Agradecimientos ediciones/item/4521-universidad-nacio-
nal-tiempos-turbulentos.html
Este trabajo fue realizado con la tuto-
Cohen, L. (2001). Colombianas a la vanguar-
ría de Aleida Fernández Moreno, apo- dia. Medellín: Universidad de Antioquia.
yado y acompañado por las profesoras
Jaqueline Cruz Perdomo, Clara Duar- Consejo Directivo de la Facultad de Medici-
te Cuervo y Solángel García Ruiz; con na. (1988). Resolución 67 de 1988. Por
la cual se aprueban unos cambios me-
quienes compartimos historias inédi- nores en el curriculum de la carrera de
tas que resignificaron no solo nuestra terapia ocupacional. Bogotá, Colombia:
comprensión de la historia de la Tera- Universidad Nacional de Colombia.
pia Ocupacional, también la nuestra.
Consejo Superior Universitario. (1966).
A ellas nuestra gratitud por apreciar Acuerdo 4 de 1966. Por el cual se crean
nuestro trabajo, por enseñarnos a des- las carreras de Terapia Física, Terapia
aprender y aprehender sobre el poder Ocupacional y Terapia del Lenguaje de
transformador de la historia. la Facultad de Ciencias de la Salud. Bo-
gotá, Colombia: Universidad Nacional
Referencias de Colombia.

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Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 45


Terapia Ocupacional en el sector trabajo:
formación y prácticas en Barranquilla, Colombia,
1996 - 2016
Occupational Therapy on the labor sector: training
and practices in Barranquilla, Colombia, 1996 - 2016
Clara Duarte Cuervo1
Diana Sofía Bravo Serrano2

Recibido: 30 de noviembre 2016 • Enviado para modificación: 18 de diciembre 2016 • Aceptado: 30 de enero 2017
Duarte, C. & Bravo, D.(2016). Terapia Ocupacional en el sector trabajo: formación y prácticas en Barranquilla, Colombia,
1996-2016. Revista Ocupación Humana, 16 (2), 46-67.

Resumen: El trabajo es para los terapeutas ocupacionales un asunto de interés central. En


Colombia el ejercicio profesional de Terapia Ocupacional en el sector laboral tiene sus ini-
cios en los años setenta, con la introducción de la rehabilitación profesional; no obstante, ha
trascendido este escenario alcanzando el de la salud y el bienestar de los trabajadores. La
apertura del programa de Terapia Ocupacional de la Universidad Metropolitana de Barran-
quilla en 1996 da lugar a la formación y la proyección profesional en este campo en la región
Caribe. Este estudio, de enfoque histórico, recurre a fuentes documentales y testimonios para
contextualizar y relatar el devenir de la profesión en dicho sector en esta región, especialmen-
te en el programa de la Universidad Metropolitana, haciendo énfasis en la década de 1990.
Se identifican prácticas precursoras alrededor de la rehabilitación profesional y la salud en el
trabajo, así como componentes de formación que han ocupado un renglón importante en el
plan de estudios del programa a lo largo de sus veinte años de existencia. El estudio concluye
que el análisis, la comprensión y la problematización de las realidades locales y del trabajo
como ocupación humana son hoy desafíos para la Terapia Ocupacional en Barranquilla.

Palabras clave: Terapia Ocupacional, salud laboral, ejercicio profesional, rehabilitación vo-
cacional, historia.

Abstract: Work is for occupational therapists a central concern. The beginning of the profes-
sional practice on the labor sector in Colombia has been situated on 70s, with the introduc-
tion of professional rehabilitation. Nevertheless, it has transcended this stage, reaching the
health and wellbeing of workers. In 1996 the Occupational Therapy program of the Univer-
sidad Metropolitana of Barranquilla was opened, giving a place to training and professional
projection in this field. The paper presents the results of a research with historical approach
that uses documentary sources and testimonies. It is oriented to contextualize and relate the
story of training and practice of the profession in this sector in the Caribbean region, especially
in the occupational therapy program of the Universidad Metropolitana, and emphasizing in

1
Terapeuta Ocupacional. Especialista en Administración en Salud Ocupacional, Magíster en Salud Pública.
Investigadora independiente y asesora en investigación Universidad Metropolitana. Grupo de investigación
Historias de las Terapias Ocupacionales en Colombia - HiTOs. Bogotá y Barranquilla, Colombia. claradc2002@
gmail.com
2
Terapeuta Ocupacional. Especialista en planeación, desarrollo y administración de la investigación. Docente
Universidad Metropolitana. Barranquilla, Colombia. diana.bravo@unimetro.edu.co

46 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


the 90s. Preceding practices are identified around occupational rehabilitation and health at
work, as well as training components that have occupied an important line in the curriculum
over the twenty years of the academic program existence. The research concludes that the
analysis, understanding and problematization of local realities and work as a human occupa-
tion are now challenges for Occupational Therapy in Barranquilla.

Keywords: Occupational therapy, occupational health, professional practice, vocational re-


habilitation, history.

Introducción 4 Nº 1 de 1991 (ACTO, 1991) y el vo-


lumen 7 Nº 2 de 1997 (ACTO, 1997).
Recientemente en varios paises de Este último fue dedicado a la celebra-
Latinoamérica se han cumplido cin- ción de los 25 años de creación de
cuenta años de inicio de la formación la Asociación Colombiana de Terapia
profesional en Terapia Ocupacional. Ocupacional (hoy, Colegio Colombia-
Este hecho ha despertado el interés no de Terapia Ocupacional). Estos tra-
por el desarrollo de estudios con en- bajos presentan cronologías suscintas
foques históricos. Se destacan los tra- de los programas y de sus aportes a
bajos realizados en Chile y Argentina la profesión. Desde el programa de
(Gómez-Lillo & Imperatore-Blanche, Terapia Ocupacional de la Universi-
2010; Gómez-Lillo, 2012; Palacios, dad Metropolitana se han realizado
Lagos, Morrison & Zegers, 2013; ejercicios similares (Universidad Me-
Bottinelli, Nabergoi & Mattei, 2013; tropolitana, 1997; Buitrago & Flórez,
Briglia & García, 2013; Testa, 2012, 2000), el útlimo de ellos hace ya más
2013), los cuales demuestran que la de quince años.
Terapia Ocupacional latinoamericana
ha gestado conocimientos y prácticas En sintonía con la dinámica latinoa-
propias, que significan contribuciones mericana, en el país un grupo de te-
centrales a la profesión. rapeutas ocupacionales da inicio en
2014 al macroproyecto Historias de
En Colombia varias terapeutas ocupa- la Terapia Ocupacional en Colombia,
cionales se han interesado en docu- el cual busca recuperar y analizar el
mentar los recorridos de la profesión. devenir de la profesión en los diferen-
Se identifican los trabajos publica- tes rincones del país, destacando la
dos por Trujillo (1989, 2002) y Pe- necesidad de reconocer las particula-
ñas (2005), que aluden al desarrollo ridades regionales y locales. Este gru-
del conocimiento y la práctica de la po retoma a Trujillo para recalcar que
Terapia Ocupacional en Colombia, “los estudios históricos sobre las raíces
centrándose en las tendencias do- sociales de la Terapia Ocupacional son
minantes. Desde los programas de muy pocos, siendo ellos estratégicos
formación se identifican diferentes para comprender la configuración de
aproximaciones, buena parte de ellas la profesión a partir de las influencias
publicadas en dos números de la Re- culturales, políticas, económicas. Ha-
vista Ocupación Humana: el volumen cer ejercicios de recuperación de la

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 47


memoria aporta a la construcción de en el sector trabajo, ni ha asumido una
identidades, devela nociones y pro- perspectiva regional o local.
blemas, configura futuros” (Fernán-
dez, Cruz, García & Duarte, 2016, De acuerdo con Trujillo (2002), el sec-
p.147). tor trabajo es un escenario natural para
el ejercicio de la Terapia Ocupacional.
El programa de Terapia Ocupacional El trabajo, como ocupación principal
de la Universidad Metropolitana de de las personas adultas, ha constitui-
Barranquilla se suma a esta iniciati- do desde los inicios de la profesión, al
va en el año 2015, lo que motiva la menos, un fin de su quehacer. Así, las
generación del proyecto de investiga- referencias a las prácticas precursoras
ción Historia del Programa de Terapia en Estados Unidos, durante y después
Ocupacional de la Universidad Metro- de la Primera Guerra Mundial, reve-
politana de Barranquilla, del cual se lan la urgencia de facilitar el retorno al
deriva este artículo. El proyecto busca campo de batalla o a la productividad
conocer, con perspectiva histórica, los de los soldados heridos, haciendo uso
orígenes y recorridos del programa; para ello de ocupaciones (Low, 1992;
reconocer el contexto social en el cual Schemm, 1994).
este surge y se desarrolla; identificar
De lo anterior devienen las prácticas
los principales hitos, actores, institu-
tradicionales en la rehabilitación voca-
ciones y prácticas claves en su deve-
cional o profesional, que de acuerdo
nir; develar los discursos que en él han
con Trujillo (2002), se introducen a
circulado, y reconocer sus procesos de
Colombia en 1970, bajo el impulso de
transformación. Todo ello con miras a
una terapeuta ocupacional británica
aportar al reconocimiento, la com-
que en ese entonces asesora a la Or-
prensión y la proyección de la Terapia
ganización Internacional del Trabajo.
Ocupacional colombiana.
Para dicha época se abren las primeras
Durante el desarrollo de la investiga- escuelas de formación en Bogotá.
ción se ha visto la necesidad de identi- Así, en 1984 Montenegro, Trujillo
ficar rutas o categorías que permitan ir y De Tovar identifican la valoración
reconstruyendo y analizando paulati- vocacional como uno de los cuatro
namente los recorridos del programa, niveles de intervención de Terapia
los campos del ejercicio profesional Ocupacional, definiéndola como “el
han servido a ese propósito. Este ar- procedimiento por medio del cual se
tículo aborda el hacer y la formación determinan las capacidades y limita-
en uno de ellos, el sector trabajo, de- ciones e intereses del individuo y los
finido como campo de ejercicio de requerimientos del puesto de trabajo,
la Terapia Ocupacional en Colombia con el fin de orientarlo en la práctica
en el numeral 4, artículo 3 de la Ley laboral de modo que pueda reinte-
949 de 2005 (Congreso de Colombia, grarse como miembro productivo de
2005). Exceptuando la retrospectiva la sociedad” (p.19).
presentada por Trujillo (2002), ningu-
no de los trabajos antes mencionados Para los años noventa la rehabilitación
ha relatado el devenir de la profesión profesional es un campo de ejercicio

48 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


profesional habitual para los terapeu- antecedentes antes esbozados. Cobra
tas ocupacionales en el país (Caicedo, entonces sentido preguntarse por las
1994; Trujillo, 2002). Caicedo (1994) características del contexto nacional y
la define como un proceso que lleva a local de la época en que este hecho
la adaptación y readaptación a través ocurre, y por su eventual influencia en
de la orientación y formación profe- el devenir de la formación y la práctica
sional, y que permite a las personas profesional en el sector trabajo, tanto
con limitaciones obtener y conservar en el programa de la Metropolitana
un empleo adecuado. como en la región.
Sin embargo, en Colombia la práctica En consecuencia, este estudio tiene
de Terapia Ocupacional en el sector por objetivos reconocer el contex-
trabajo ha trascendido el retorno a la to social, normativo y profesional en
vida productiva de las personas des- el cual surge la formación en el sec-
pués de una enfermedad, accidente tor trabajo en el programa de Terapia
o lesión. Su presencia en el terreno Ocupacional de la Universidad Me-
del mantenimiento de la salud y el tropolitana de Barranquilla; así como
bienestar de los trabajadores se docu- rastrear los orígenes y recorridos del
menta desde la década de 1980 (An- programa en este campo, identifican-
gulo, 1993; Trujillo, 2002; Rodríguez, do algunos hitos, actores, instituciones
Carrillo, Roa & Sarmiento, 2009), en y prácticas protagónicos.
el marco de la legislación desarrolla-
da desde 1979, que sienta las bases Metodología
de los programas de salud ocupacio-
nal en el país (Lee, citada por Truji- Para responder a estos objetivos se to-
llo, 2002). Para 1993 De Bastidas y maron como referencia algunos de los
De Tovar señalan la importante inje- elementos conceptuales y metodoló-
rencia y proyección profesional que gicos abordados en el seminario per-
esta área significa para los terapeutas manente desarrollado como parte del
ocupacionales, y más adelante Trujillo macroproyecto Historias de la Terapia
(2002) resalta el desarrollo en Salud Ocupacional en Colombia (Rodriguez,
Ocupacional como una dimensión in- García, Duarte, Fernández & Cruz,
novadora de la Terapia Ocupacional 2015).
colombiana.
Uno de esos elementos se relaciona
Los programas de formación respon- con la construcción del archivo his-
den a las dinámicas profesionales y tórico (Zuluaga, 1999) que desde la
contextuales de cada momento, lo Universidad Metropolitana se ha con-
cual tiene efectos sobre sus planes centrado, en una primera fase, en la
de estudios y sobre los saberes, las revisión e identificación de documen-
prácticas y los discursos que en ellos tos generados en el periodo compren-
circulan. El programa de Terapia Ocu- dido entre 1994 y 1998, el cual se ha
pacional de la Universidad Metropo- denominado Surgimiento del Progra-
litana de Barranquilla abre sus puer- ma. Las fuentes consultadas incluyen
tas en julio de 1996, en medio de los prensa local, actas y otros documentos

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 49


de gestión del programa de Terapia en una matriz en Excel diseñada por el
Ocupacional de la Universidad Me- grupo coordinador del macroproyecto
tropolitana, así como normatividad Historias de la Terapia Ocupacional en
colombiana relacionada con los cam- Colombia.
pos de ejercicio, en este caso, el sector
trabajo. Para el abordaje del contexto del sec-
tor se revisó la legislación colombiana
En cuanto a prensa local, se revisó relacionada con salud de los trabaja-
el periódico El Heraldo, el diario de dores y reintegración laboral, emitida
mayor circulación y tradición en la en la década de 1990. Inicialmente se
Región Caribe colombiana. Esta revi- utilizaron como guía los compendios
sión se realizó con apoyo de estudian- de normas legales sobre salud ocupa-
tes del semillero de investigación del cional emitidos en 1995 y 2001 (Ar-
programa, quienes visitaron para ello seg, 1995, 2001); las normas allí re-
el Complejo Cultural de la Aduana de feridas se consultaron y revisaron, en
la ciudad de Barranquilla, lugar donde términos de su contenido y vigencia, a
reposa el archivo histórico del perió- través de la página web de la Secreta-
dico. ría General del Senado (Congreso de
la República de Colombia, s.f.).
Los artículos de prensa aportaron
principalmente al reconocimiento del En cuanto a los documentos del pro-
contexto regional, económico, políti- grama, se revisaron actas y otros docu-
co, social y del sector trabajo, en me- mentos relacionados con su creación,
dio del cual surgió el programa de Te- con la apertura de escenarios de prác-
rapia Ocupacional de la Universidad tica para el área laboral desde 1996
Metropolitana. Por ello, se identifica- hasta la actualidad, y con las reformas
ron aquellos cuyos títulos o conteni- al plan de estudios que han sido apro-
dos se relacionan con los descriptores: badas durante la existencia del progra-
trabajo, trabajador, empleo, rehabili- ma. Estos documentos están disponi-
tación, discapacidad, terapia ocupa- bles en el archivo administrativo del
cional, integración social, inclusión programa de Terapia Ocupacional de
social, minusválidos, limitados (físicos, la Universidad Metropolitana.
visuales), lisiados3. Adicionalmente, se
identificaron aquellas noticias relativas Para hacer el reconocimiento de las
al contexto social, político y económi- tendencias e hitos del ejercicio y la
co de la ciudad de Barranquilla y de la formación en Terapia Ocupacional en
Región Caribe, que para la época es- el sector laboral en el país, se revisó
tudiada ocupaban las primeras planas el inventario de todos los artículos pu-
del periódico. Bajo estos criterios los blicados en la Revista Ocupación Hu-
estudiantes seleccionaron y digitaliza- mana desde 1990 hasta 2016 (Colegio
ron 65 artículos que luego registraron Colombiano de Terapia Ocupacional,
y clasificaron por categorías temáticas, 2016). Allí se identificaron 16 artículos

3
Estos términos se emplean como referencia en la búsqueda teniendo en cuenta que su uso era habitual para
la época abarcada en este estudio.

50 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


relacionados con el ejercicio profesio- las personas entrevistadas sirvieron
nal en este campo y con la formación para hacer triangulación de fuentes y
en Terapia Ocupacional en la Univer- confirmar así datos y hechos. A par-
sidad Metropolitana. tir de ello se construyó una narración
que gira alrededor de dos momentos
Por último, se recogieron los relatos en el tiempo: la década de 1990 y del
de varias personas que han vivido 2000 a la actualidad. Para la década
el surgimiento y transcurrir del pro- de los noventa se interrelacionan los
grama de Terapia Ocupacional de la hallazgos atinentes al contexto, la nor-
Universidad Metropolitana, esto con matividad y el devenir del programa
el fin de complementar o confirmar en el sector laboral, intentando usar
información revelada de manera par- como eje esta última categoría. Para el
cial en los documentos revisados. segundo periodo solo se abordan los
Para ello se realizaron entrevistas recorridos del programa en el sector
no estructuradas a tres egresadas de trabajo.
las primeras cohortes: Lía Camacho,
Shirley Soñett y Lisseth Batista; así Resultados
como a las docentes Sandra Puer-
to, Gladys Martínez y Maitte Flórez, Los inicios de la formación en el
protagonistas en la creación del pro- contexto de la década de 1990
grama o relacionadas con las prácti-
cas académicas en el área de interés. Según se afirma en un artículo publi-
Durante las entrevistas se abordaron cado en la Revista Ocupación Hu-
interrogantes que resultaban de la mana (Universidad Metropolitana,
revisión de documentos y la recons- 1997), la apertura del programa de
trucción de hechos a partir de estos. Terapia Ocupacional en la Universi-
En ocasiones tales documentos y da- dad Metropolitana de Barranquilla se
tos se trajeron a colación durante las gesta desde el año 1991, teniendo en
entrevistas, sirviendo como dispositi- cuenta estudios sobre su pertinencia
vos de activación de la memoria (To- y que evidencian la necesidad de for-
rres, 2014). Algunas de estas conver- mación de estos profesionales en la
saciones se grabaron y transcribieron, región.
de otras se tomaron notas con datos A través del Acuerdo 002 del 23 de
relevantes para la investigación. To- agosto de 1995, el Consejo Directivo
das estas personas fueron informadas de la Universidad aprueba la creación
de los propósitos de la investigación y posterior funcionamiento del pro-
y accedieron de manera voluntaria a grama, dando vía libre a las terapeutas
participar y aportar sus testimonios. ocupacionales María Inés Arteta, Ro-
Para el análisis se realizó lectura y saura Salazar, Gladys Martinez Sosa,
relectura de los documentos para Gloria Rincón Vargas, Maireth Olive-
reconocer allí hechos y situaciones ra y Amparo Blanco para proyectar el
relevantes; ubicarlos temporal, geo- plan de estudios y los demás requeri-
gráfica y temáticamente, e identificar mientos exigidos por el gobierno co-
relaciones entre ellos. Los relatos de lombiano (Figura 1).

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 51


Figura 1. Gestoras del programa de Terapia Ocupacional de la Universidad Metropolitana, 1996.

Cinco de las gestoras del programa: Gladys Martinez Sosa, Maireth Olivera, Amparo Blanco, Gloria
Rincón y Rosaura Salazar, junto a Maitte Florez, docente de la época, Lilian Suarez, jefe del servicio
de Terapia Ocupacional y docentes de la Escuela Colombiana Rehabilitación, quienes desarrollaron en
1996, en la Universidad Metropolitana, un curso de ferulaje.
Foto: Programa de Terapia Ocupacional, Universidad Metropolitana.

Tras recibir la autorización del ICFES de una nueva constitución apalancan,


en marzo de 1996, el programa inicia entre otros, cambios en la organiza-
sus actividades académicas el 15 de ju- ción y administración de la seguridad
lio del mismo año con 23 estudiantes social (salud, pensiones y riesgos labo-
en su primera cohorte (Departamen- rales, entonces denominados “riesgos
to de Admisiones y Registro - Univer- profesionales”).
sidad Metropolitana, comunicación
personal, noviembre de 2016). Desde En el ámbito de la salud de los trabaja-
entonces y hasta hoy, el programa de dores antecede, durante 1979 y en la
la Universidad Metropolitana sigue década de los ochenta, la emisión de
siendo el único existente en la región un cuerpo importante de legislación
Caribe colombiana. Este nacimien- que atañe a la prevención frente a los
to se da en una década marcada por riesgos derivados del trabajo. En este
profundas transformaciones del país. sentido, se destacan la Ley 9ª de 1979
Las políticas económicas de apertura, (Congreso de Colombia, 1979), Título
el proceso de modernización del Esta- III, “Norma para preservar, conservar
do y la reciente entrada en vigencia y mejorar la salud de los individuos

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en las ocupaciones”, y el Estatuto de los riesgos profesionales (accidente
Seguridad Industrial, establecido me- de trabajo y enfermedad profesional
diante la Resolución 2400 de 1979 - ATEP); establece la clasificación de
(Ministerio de Trabajo y Seguridad So- las empresas de acuerdo a la clase de
cial, 1979). Adicionalmente, se gene- riesgo a la cual se exponen sus trabaja-
ran lineamientos para la organización dores, y define las prestaciones econó-
de la Salud Ocupacional en el país, ta- micas y asistenciales en caso de ATEP.
les como el Decreto 586 de 1983, que
De otro lado, en lo relacionado con la
crea el Comité de Salud Ocupacional
pérdida de la capacidad laboral resul-
(Presidencia de la República, 1983), y
tante de accidentes de trabajo o enfer-
el Decreto 614 de 1984, que deter-
medades profesionales, el SGRP pone
mina “las bases para la organización y
en manos de las Juntas de Calificación
administración de la Salud Ocupacio-
de Invalidez (Ministerio de Gobierno
nal en el país” (Presidencia de la Re-
de la República de Colombia, 1994,
pública, 1984).
Art. 44), creadas por la Ley 100 de
1993, la calificación de la pérdida de
Ya en la década de los noventa, como
capacidad laboral. Tales juntas deben
parte del Sistema General de Segu-
hacer uso para ello del “Manual Úni-
ridad Social creado través de la Ley
co de Calificación de Invalidez”4 y la
100 de 1993, Libro III (Congreso de la
“Tabla Única de Valuación de Incapa-
República de Colombia, 1993), se es-
cidades”.
tablece el Sistema General de Riesgos
Profesionales - SGRP, cuya administra- Estas dinámicas alrededor de los asun-
ción y organización se determinan a tos relacionados con la salud de los
través del Decreto 1295 de 1994 (Mi- trabajadores y la seguridad social ejer-
nisterio de Gobierno de la República cen influencias sobre el conocimiento
de Colombia, 1994) y sus posteriores y la práctica de la Terapia Ocupacio-
reglamentaciones. Este nuevo sistema nal en el sector laboral en el país. Esto
se enmarca en un modelo de asegu- se refleja en el posicionamiento que
ramiento que hace énfasis en la pre- adquiere el tema en la revista Ocu-
vención de riesgos y en la gestión de pación Humana, donde buena parte
las prestaciones que pueden derivarse de los artículos publicados entre 1993
de ellos. Así, establece las formas de y 1994 están dedicados a abordar el
afiliación y las competencias de los quehacer profesional en este ámbi-
diferentes actores del sistema; define to5. Cabe agregar que dichos textos se

4
Adoptado mediante el Decreto 692 de 1995 (Presidencia de la República, 1995), derogado en 1999 por el
Decreto 917 (Presidencia de la República, 1999) y actualizado en 2014 a través del Decreto 1507 (Presidencia
de la República, 2014).
5
El Volumen 5 No.2 de 1993 está dedicado completamente a este tema; se publicaron tres artículos: Aportes
de la Terapia Ocupacional al sector laboral. Parte I: condiciones de trabajo (De Bastidas, 1993); Programa
de vigilancia epidemiológica del ambiente y de los trabajadores expuestos al riesgo de posturas inadecuadas
y al manejo de cargas (Angulo, 1993), y El terapeuta ocupacional, un profesional clave en el bienestar del
trabajador y la productividad de la empresa (De Tovar, 1993). Posteriormente, dos de los cuatro artículos
publicados en el Volumen 5 No.3 de de 1994 también lo abordaron: Aportes de la Terapia Ocupacional al
sector laboral Parte II: Análisis ergonómico (Zapata y De Bastidas, 1994); La rehabilitación por medio del
trabajo en América Latina (Caicedo, 1994).

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 53


derivan de experiencias y reflexiones a los trabajadores alrededor de sus in-
gestadas en la academia y en la prácti- tereses avocacionales.
ca, y desde diferentes lugares del país:
la Universidad del Valle, el Instituto En el contexto local, la década de
de Seguros Sociales - Regional Cundi- 1990 señala para Barranquilla, como
namarca, la Universidad Nacional de puerto de entrada al comercio inter-
Colombia y la Escuela Colombiana de nacional, importantes desafíos que
Rehabilitación, para entonces vincula- incluyen el fortalecimiento de la in-
da a la Universidad del Rosario. fraestructura y de la formación técni-
ca y profesional, entre otros (López,
Así, en 1993 De Bastidas señala que 1994a, 1994b; Montaño, 1996a,
la misión de la profesión en este sec- 1996b,1997a,1997b). De otro lado,
tor es la de “promover y mantener el recrudecimiento del conflicto ar-
los más altos estándares en la función mado en la región Caribe desenca-
ocupacional y el bienestar de los tra- dena el desplazamiento forzado de
bajadores mediante estrategias que muchos habitantes de zonas rurales y
involucren aspectos adaptativos biop- pequeños centros urbanos que termi-
sicosociales del trabajador, y de esta nan encontrando en esta ciudad una
forma mejorar la eficiencia y producti- alternativa con mayores opciones de
vidad de la empresa” (p. 11); identifi- supervivencia (Ricaurte, 1994; Cardo-
ca los referentes teóricos que soportan zo, 1996; Buelvas, 1997; El Heraldo,
su hacer, así como las funciones inves- 1997a, 1997b).
tigativas, administrativas, asistenciales
y educativas que le atañen. Estas situaciones tienen implicaciones
sobre la dinámica laboral local. Así,
Dichas funciones abarcan, desde la aunque para finales de 1996 e inicios
selección de los trabajadores a través de 1997 Barranquilla es la segunda
de la realización de perfiles ocupacio- capital de departamento con menor
nales y profesionales del puesto y del número de personas desempleadas,
trabajador, pasando por el seguimien- después de Bogotá, y experimenta
to y control de la interacción hombre- un importante crecimiento económi-
puesto de trabajo, hasta la participa- co en sectores como la educación, el
ción en las actividades de medicina transporte y la vivienda; la ciudad a su
preventiva, seguridad e higiene indus- vez se ubica como la más cara del país,
trial, de acuerdo a las necesidades de vive un aumento en la tasa de desem-
cada empresa (De Bastidas, 1993). pleo que alcanza el 12,7% en marzo
de 1997, se incrementan las formas
De Tovar (1993), por su parte, enfatiza de trabajo informales y decrece la in-
en la importancia del terapeuta ocu- dustria manufacturera (López, 1997;
pacional en el sector laboral, identifi- Montaño, 1997c; Arteta, 1998).
cándolo como el profesional experto
en el bienestar del trabajador. Esto co- A este panorama se suman en la re-
incide con lo planteado por De Basti- gión problemáticas de violencia, con-
das (1993) en relación con sus funcio- sumo de drogas y alcohol, así como
nes, a las cuales agrega la orientación patologías físicas y mentales que ge-

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neran discapacidades en la población. cuadernación de documentos (Arteta,
De manera similar al resto del país, las 1998).
personas en estas situaciones han veni-
do siendo marginadas de la educación De acuerdo con Arteta (1998), en los
y el trabajo. Lo anterior hace evidente inicios del programa de Hospital Día
la demanda de servicios especializa- del CARI participan una terapeuta
dos para su reinserción social, familiar ocupacional y una “auxiliar de Terapia
y laboral (Universidad Metropolitana, Ocupacional”6, y las acciones de Tera-
1997; Arteta, 1998). pia Ocupacional giran alrededor de la
adquisición o recuperación de hábitos
Como respuesta a esta realidad, se de trabajo y la orientación vocacional.
destaca en la región la experiencia de La Jefe de Rehabilitación del CARI es
reconversión de los servicios de reha- para entonces la terapeuta ocupacio-
bilitación, gestada desde 1991 con la nal María Inés Arteta, protagonista en
transformación del Hospital Mental la gestación del programa de forma-
Departamental en un centro de re- ción de la Universidad Metropolitana.
habilitación integral manejado por el
Estado y que se materializa en 1995, En este contexto, el plan de estudios
con el nacimiento del Centro de Aten- del programa de Terapia Ocupacional
ción y Rehabilitación Integral -CARI de la Universidad Metropolitana de
(Arteta, 1998). Barranquilla incorpora desde sus ini-
cios al sector laboral como área de for-
Tomando como referencia el enfoque mación del futuro profesional a través
de rehabilitación profesional propues- de componentes teóricos y prácticos.
to por el Grupo Latinoamericano de Los teóricos incluyen: Ergonomía, en
Rehabilitación Profesional -GLARP quinto semestre, y Rehabilitación Pro-
y a través de su programa de Hospi- fesional y Salud Ocupacional, en sép-
tal Día, el CARI asume dentro de sus timo; la práctica en esta área se de-
propósitos la integración de personas sarrolla en octavo semestre (Programa
con “limitaciones funcionales” de di- de Terapia Ocupacional Universidad
ferente tipo (físico, sensorial y mental). Metropolitana, 1996). Para 1998 se
Para ello, pone en funcionamiento realizan las primeras visitas de obser-
una serie de unidades productivas vación al CARI, esto como parte del
institucionales - UPINS, en las cuales desarrollo de la asignatura Ergonomía
se desarrollan de manera simultánea (L.Camacho, comunicación personal,
actividades empresariales y terapéuti- octubre de 2016).
cas, a la vez que se provee a la misma
institución de elementos que requiere En 1999 se implementan cambios en
para su funcionamiento, tales como la organización del componente teó-
sábanas, pijamas, muebles, pan y en- rico. La asignatura Ergonomía conti-

6
Si bien Arteta (1998) no precisa en su artículo la formación y funciones de esta auxiliar, cabe mencionar que
la regulación vigente para la época, Ley 31 de 1982 (Congreso de Colombia, 1982), contemplaba que podían
ejercer la Terapia Ocupacional en el país quienes hubiesen obtenido el título en las modalidades de técnico
profesional intermedio, tecnólogo, universitario y de posgrado. Esta norma sería derogada por la Ley 949 de
2005, donde se delimita el ejercicio al nivel profesional.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 55


núa ofreciéndose en quinto semestre, micas y peligrosas; y Monómeros, em-
mientras Rehabilitación Profesional y presa colombo - venezolana produc-
Salud Ocupacional se fusionan para tora y exportadora de petroquímicos.
conformar una denominada Terapia
Ocupacional en el sector laboral, que Entre el 2000 y el 2003 las prácti-
se ofrece en sexto (Programa de Tera- cas formativas de los estudiantes de
pia Ocupacional Universidad Metro- octavo semestre en estas empresas
politana, 1998). Las visitas de obser- incluyen la participación en la orga-
vación de la asignatura Ergonomía en nización de los comités paritarios de
ese año se realizan en el periódico El salud ocupacional, el levantamiento
Heraldo y la Fundación Hospital Uni- de panoramas de riesgos, el análisis
versitario Metropolitano - FHUM (Pro- de puestos de trabajo y el seguimien-
grama de Terapia Ocupacional Uni- to a recomendaciones y mejoras para
versidad Metropolitana, 2002). la prevención de riesgos en el marco
de programas de vigilancia epidemio-
De acuerdo a lo relatado por las egre- lógica.
sadas entrevistadas, dichos compo-
nentes son impartidos por la docente La primera cohorte del programa se
Sandra Puerto, terapeuta ocupacional gradúa en el año 2000. Para entonces
egresada de la Universidad Manuela Buitrago y Flórez (2000) reportan que
Beltrán, especialista en Salud Ocu- ninguna de las 17 egresadas ejerce en
pacional de la Universidad del Norte el área laboral. Esto cambiaría con el
y quien para entonces está vinculada paso de los años.
laboralmente con la Administradora Recorridos de la formación desde la
de Riesgos Profesionales SURATEP7 en década del 2000
Barranquilla, siendo pionera en esta
área en la costa Caribe. Por disposiciones institucionales y de
acuerdo a los lineamientos pedagó-
Con el liderazgo de la profesora Puer- gicos de la Universidad Metropoli-
to se abren escenarios de práctica para tana, en 2001 el plan de estudios se
los estudiantes en industrias de quími- reforma nuevamente. Las diferentes
ca y manufactura con una importante asignaturas, que pasan a denominar-
tradición en la ciudad: Muebles Jamar, se estructuras de aprendizaje, se or-
fundada en 1951; Industrias Cannon ganizan de acuerdo al conocimiento
de Colombia, fundada en 1962 y de- básico o disciplinar que abarcan. Las
dicada a la producción y exportación del primer tipo se agrupan en bio-
de ropa de hogar; Laboratorios Asep- estructuras, psico-estructuras y socio-
tic, fundada en 1930 y enfocada en la estructuras; en tanto las disciplinares
producción de jarabes, alcohol y algo- corresponden a la denominación T.O.
dón antisépticos, entre otros produc- estructuras. Dentro de estas últimas,
tos farmacéuticos; Holanda Colom- lo relacionado con el ejercicio profe-
bia, empresa holandesa pionera en el sional frente a la ocupación trabajo se
transporte y manejo de sustancias quí- incluye en Análisis de Intervención del
7
Hoy Administradora de Riesgos Laborales - ARL Sura (Sura, 2016).

56 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


Desempeño Ocupacional en Adultos, esto debido a la disminución en el
ubicada en sexto semestre y que cu- número de estudiantes y a las nuevas
bre contenidos relacionados con salud reglamentaciones para la celebración
ocupacional y rehabilitación profesio- de convenios docente - asistenciales8.
nal (Programa de Terapia Ocupacional Así, las prácticas se llevan a cabo en
Universidad Metropolitana, 2001). las empresas: Concentrados del Nor-
te, dedicada al procesamiento y fabri-
La práctica académica relacionada cación de alimentos para animales;
con el área laboral en este plan se de- Incepal S.A., orientada a la fabricación
sarrolla en séptimo y octavo semestre de implementos de aseo; la Escuela de
(Programa de Terapia Ocupacional Suboficiales de la Armada y el Institu-
Universidad Metropolitana, 2001). to Nacional Penitenciario y Carcelario
Para entonces se cuenta con un me- -INPEC (Programa de Terapia Ocu-
nor número de escenarios para ello, pacional Universidad Metropolitana,

Figura 2. Estudiante de octavo semestre en el desarrollo de la práctica laboral, 2004.

Foto: Programa de Terapia Ocupacional, Universidad Metropolitana.

8
Para el año 2003 entra en vigencia el Acuerdo 003 de 2003 del Consejo Nacional para el Desarrollo de
Recursos Humanos en Salud (Ministerio de Protección Social, 2003), a través del cual se establecen los criterios
de evaluación y verificación relacionados con los convenios docente-asistenciales para los programas de
formación en salud.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 57


2005). En las dos primeras se desem- en la región, de acuerdo a lo relatado
peñan funciones similares a las que por la docente Maitté Florez, habría
venían desarrollándose, incluyendo iniciado a mediados de la década de
la participación en actividades admi- 1990, cuando ella es vinculada labo-
nistrativas con miras a la reintegración ralmente al establecimiento peniten-
laboral de trabajadores, además de ciario Las Mercedes de la ciudad de
procesos investigativos denominados Montería (M. Florez, comunicación
prácticas aplicadas, las cuales respon- personal, octubre de 2016).
den a las demandas de cada empre-
sa y a situaciones específicas de sus Para el 2006, con la renovación del
trabajadores (Figura 2) (Programa de registro calificado del programa, se
Terapia Ocupacional Universidad Me- reestructura el plan de estudios. Den-
tropolitana, 2005). Con el retiro de la tro del nuevo ordenamiento el com-
profesora Sandra Puerto, entre 2004 ponente teórico denominado Salud y
y 2010 la docente Gladys Martínez, Productividad I se desarrolla en quin-
jefe del servicio de Terapia Ocupacio- to semestre con temáticas de ergo-
nal en la FHUM, se hace cargo de los nomía y antropometría. En séptimo
componentes teóricos y del práctico. semestre se ubica la asignatura Salud
y Productividad II, donde se abordan
De otra parte, si bien el trabajo del conocimientos relacionados con la
terapeuta ocupacional con población intervención y la rehabilitación labo-
carcelaria se considera un campo de ral (Programa de Terapia Ocupacional
ejercicio diferente al que se aborda Universidad Metropolitana, 2006).
en este artículo, cabe mencionar que
para inicios de la década de 2000 En la actualidad los componentes teó-
los estudiantes del programa realizan ricos que abordan contenidos relacio-
prácticas en el Instituto Nacional Peni- nados con el desempeño del terapeu-
tenciario y Carcelario – INPEC, donde ta ocupacional en en el sector laboral
participan en la Junta de Evaluación incluyen: Ergonomía y Antropometría,
de Trabajo, Estudio y Enseñanza – JE- Salud y Seguridad en el Trabajo9, e In-
TEE, órgano encargado de seleccionar tervención y Rehabilitación profesio-
y asignar a cada interno condenado a nal, los cuales se ubican en cuarto,
una actividad de redención de pena; quinto y séptimo semestres, respecti-
así como en el Programa de Prepara- vamente (Programa de Terapia Ocu-
ción para la Libertad, a través del cual pacional Universidad Metropolitana,
se brindan herramientas de prepara- 2015a).
ción para la reinserción a la sociedad,
incluyendo el retorno a la vida labo- Además, las prácticas académicas se
ral (L. Batista, comunicación personal, desarrollan en séptimo y octavo se-
octubre de 2016). La incursión de te- mestre, bien dentro de la misma uni-
rapeutas ocupacionales en esta área versidad, a través del la Oficina de Se-

9
En concordancia con lo establecido por la Ley 1562 de 2012 (Congreso de Colombia, 2012) y el Decreto
1443 de 2014 (Presidencia de la República, 2014), a través de los cuales se establece el paso de los “programas
de salud ocupacional” al Sistema de Gestión de la Seguridad y Salud en el Trabajo (SG-SST).

58 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


guridad y Salud en el Trabajo de la ins- senta para el programa una oportuni-
titución, con la FHUM o en empresas dad de revisión y mejoramiento de su
con las cuales se celebran convenios. hacer. En consecuencia, se abren es-
Dentro de estas empresas está Pedro pacios para retroalimentar, fortalecer
Pablo Luzardo y Cia. Ltda., dedicada y reestructurar aspectos curriculares,
a la fabricación y comercialización de académicos e investigativos. Ello se re-
hierro y acero, donde los estudiantes fleja, entre otros aspectos, en un plan
adelantan acciones de elaboración y de estudios más sintonizado con las
ejecución de programas de vigilancia dinámicas actuales de la profesión y
epidemiológica, prevención de riesgos en una mayor cualificación del cuerpo
ergonómicos y programas de promo- docente.
ción de estilos de vida saludables. Con
la Oficina de Seguridad y Salud en el Además de los cambios en la nomi-
Trabajo de la Universidad se participa nación y ubicación de los compo-
en los programas de vigilancia epide- nentes, antes mencionados, en los
miológica para el control de riesgos últimos años se cuenta con docentes
ergonómicos. Por último, desde el con formación posgraduada y expe-
Servicio de Terapia Ocupacional de riencia en el área. Adicionalmente,
la FHUM, a través de convenios con en vista de la actualización que en el
Administradoras de Riesgos Labora- 2014 hace el gobierno colombiano
les (ARL), se realiza el levantamiento al Manual Único para la Calificación
de panoramas de riesgos, así como la de la Pérdida de Capacidad Laboral y
reubicación y adaptación de puestos Ocupacional10, algunos docentes del
de trabajo con personas que tienen programa se capacitan en su manejo
secuelas derivadas de ATEP. cursando un diplomado que ofrece
la Universidad Nacional de Colombia
Durante los últimos años el programa con el apoyo del Colegio Colombiano
ha vivido situaciones que han deter- de Terapia Ocupacional. Esta capaci-
minado cambios profundos. En el tación ha permeado los contenidos
segundo semestre de 2013 el Minis- teórico prácticos y las recientes modi-
terio de Educación le niega el registro ficaciones al plan de estudios.
calificado; por esta razón, no recibe
nuevos estudiantes entre 2014 y ju- De acuerdo al seguimiento realizado
nio de 2016, cuando le es entregado a los egresados en 2015, para ese año
nuevamente. A pesar de la reducción 15 de ellos se desempeñan en el sec-
en el número de estudiantes, los com- tor laboral en la ciudad de Barranqui-
ponentes teóricos y prácticos se siguen lla (Programa de Terapia Ocupacional
ofreciendo para los grupos que cursan Universidad Metropolitana, 2015b).
la carrera. Estos profesionales están vinculados a
ARL y otras empresas privadas; según
No obstante las afectaciones que lo lo referido por una de ellas, su ejerci-
anterior supone, este periodo repre- cio incluye aspectos de entrenamiento

10
Este manual corresponde a la actualización del Manual Único de Calificación de Invalidez creado en 1994 y
cuya última actualización había ocurrido en 1999 (Presidencia de la República, 2014).

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 59


ocupacional, análisis ocupacionales y A lo largo de los años, el plan de estu-
de puestos de trabajo, elaboración de dios del programa ha incluido temá-
perfiles y valoraciones ocupacionales, ticas de ergonomía y antropometría,
reintegros y reubicaciones laborales, las cuales, como lo señala Guzmán
orientación ocupacional y reconver- (2008), se consideran esenciales para
sión de mano de obra. Adicionalmen- el análisis de la relación entre traba-
te, como parte de los SG-SST, los pro- jador y puesto de trabajo y, por tanto,
fesionales participan en los programas para el diseño de intervenciones rela-
de vigilancia epidemiológica de ries- cionadas con la prevención y el con-
gos ergonómicos y psicosociales, en el trol de riesgos laborales.
fomento del autocuidado, la promo-
ción de hábitos y estilos de vida y tra- La línea de rehabilitación vocacional o
bajo saludables, y en la prevención de profesional se ha transformado de ma-
accidentes de trabajo y enfermedades nera importante con el paso del tiem-
laborales, entre otros aspectos. po, de la práctica mayoritariamente
institucionalizada (Montenegro, Truji-
Respecto al ejercicio relacionado con llo y De Tovar, 1984; Arteta, 1998) a
rehabilitación profesional, según lo los procesos individuales adelantados
manifestado por algunos egresados y desde consulta externa en servicios
docentes, en Barranquilla actualmen- de Terapia Ocupacional de institucio-
te es escaso. nes prestadoras de servicios de salud,
como el caso del FHUM.
Discusión
Adicionalmente, las aproximaciones
Los recorridos antes descritos eviden- desde la práctica muestran un acerca-
cian una sincronía entre el lugar prota- miento del programa, desde el inicio
gónico dado al ejercicio de la Terapia de la década del 2000, a las realidades
Ocupacional en la rehabilitación pro- y necesidades locales de la población
fesional y la salud en el trabajo en los carcelaria, en donde la participación
años noventa (Angulo, 1993; Caicedo, en actividades productivas y la pre-
1994; De Bastidas, 1993; De Tovar, paración para el retorno al trabajo,
1993) y el que ocupa en el plan de es- tal como se plantea en los principios
tudios del programa de la Universidad y fines de la rehabilitación profesional
Metropolitana que nace en 1996. (Caicedo, 1994), son asuntos de cen-
tral importancia. Esto coincide con las
Como lo describe Trujillo (2002) para dinámicas de la profesión en la región
el resto del país, en la región la for- y en el resto del país (Gómez & Mu-
mación y la práctica en este sector se névar, 1996; Cuartas, 1997; Barrera,
orientan básicamente en dos direc- 1997; Gómez, 2000), y muestran un
ciones: la rehabilitación vocacional punto de encuentro entre el conoci-
o profesional, que se lleva a cabo en miento aplicado en el sector laboral y
poblaciones con diferentes tipos de en la práctica con población carcela-
discapacidad, relacionados o no con ria. No obstante, el análisis de los reco-
ATEP, y la gestión de riesgos en los lu- rridos históricos en este último campo,
gares de trabajo. ameritan una investigación particular.

60 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


Si bien es escasa la literatura que per- fomento de la productividad de las
mita rastrear los recorridos recientes personas, que se vienen planteando
de la profesión en el sector trabajo, desde la Terapia Ocupacional Social
con base en las fuentes consultadas y las Terapias Ocupacionales del Sur
(Rodríguez, 2002; Guzmán, 2007; (Garcés, 2016; Guajardo, 2016), son
León, 2013; Rodríguez, Ramírez y asuntos pendientes en el análisis de
Suárez, 2016; Valero, Riaño y Rodrí- la formación y la práctica en el área
guez, 2016) puede plantearse que laboral. Aunque este estudio no abor-
hoy en día, como lo señalan en su da de manera suficiente el análisis de
momento Zapata y Bastidas (1994) y los discursos que circulan en la Terapia
Trujillo (2002), la inclusión laboral y Ocupacional en el sector trabajo, es-
la salud en el trabajo son escenarios tos temas constituyen retos investiga-
claves para el posicionamiento profe- tivos que pueden ser asumidos desde
sional, el avance del conocimiento y una mirada crítica de la historia de la
la práctica de la Terapia Ocupacional. profesión.
Ello se manifiesta en el lugar dado en
el programa de la Universidad Me- Por último, la participación en esce-
tropolitana a través de los años, así narios interdisciplinarios de toma de
como en la paulatina incursión de sus decisiones y el aporte a propuestas
egresados en el ejercicio laboral en conceptuales y políticas, como las
la región y en la formación posgra- presentadas desde otros lugares del
duada. país en el XVI Congreso Colombiano
de Terapia Ocupacional en torno a la
No obstante, es importante recono- baremología, la calificación de pérdi-
cer que las tendencias actuales en el da de capacidad laboral (Rodríguez,
mundo del trabajo, que incluyen for- Ramírez y Suárez, 2016) y el manejo
mas como el teletrabajo, el trabajo a de la información en salud y riesgos
través de contratos de prestación de laborales (Valero, Riaño y Rodríguez,
servicios y una creciente informalidad, 2016), abren la puerta a un perfila-
pasando por las diferentes maneras miento profesional con mayor empo-
de precarización del empleo (Santa- deramiento en lo político, lo adminis-
maría & Serrano, 2016), plantean al trativo y lo investigativo.
campo de conocimiento de la salud
en el trabajo y el bienestar de los tra- Tales desafíos apuntan también al pro-
bajadores, y a la Terapia Ocupacional grama de Terapia Ocupacional de la
en particular, desafíos que parecen no Universidad Metropolitana, inmerso
haber sido suficientemente debatidos en una región con problemáticas so-
y analizados. En este sentido, estudios ciales ineludibles y que vive en la ac-
posteriores podrían profundizar en el tualidad un momento de renovación y
abordaje de la Terapia Ocupacional reflexión tras la reciente recuperación
colombiana a estos asuntos. del registro calificado.

Asimismo, las reflexiones y cuestiona- Finalmente, los cambios paradigmá-


mientos políticos y éticos acerca del ticos en la comprensión de la disca-
papel de Terapia Ocupacional en el pacidad desde un enfoque social y

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 61


de derechos plantean cada vez más área y desempeñarse en cargos admi-
retos al hacer de la Terapia Ocupa- nistrativos y operativos que buscan, no
cional (Fernández-Moreno & García- solo el bienestar de los trabajadores,
Ruiz, 2016); ello aplica también en sino el posicionamiento profesional.
los aspectos políticos y prácticos de Infortunadamente, el ejercicio profe-
la inclusión laboral, la rehabilitación sional en rehabilitación profesional en
profesional y la calificación de la pér- la región parece no tener un panora-
dida de la capacidad laboral. En este ma tan fuerte, situación que amerita
sentido, algunas experiencias puntua- mayor exploración.
les de investigación en el programa
alrededor de la inclusión laboral de La formación y la práctica en el sector
personas con discapacidad muestran laboral en la Universidad Metropolita-
necesidades urgentes en la región en na requieren mantener y optimizar sus
este campo (Estrada, Oliveros, Pino, fortalezas en la prevención de riesgos
Ricardo & Zúñiga, 2015), las cuales, a y la promoción de la salud de los tra-
su vez, constituyen para el programa bajadores, al tiempo que demandan
oportunidades de acción e incidencia ampliar y complejizar las perspectivas
social, pero también llamados expre- de reflexión y abordaje del trabajo
sos al fortalecimiento de la formación como ocupación, en concordancia
para lograr mayor incidencia. con las tendencias actuales de la pro-
fesión que invitan al hacer consciente,
Conclusiones situado y consecuente con las realida-
des sociales.
La relación entre la Terapia Ocupacio-
nal y el mundo del trabajo tiene sus Esta apuesta investigativa ha permiti-
orígenes en la necesidad de vincular o do reconocer y comprender algunos
reintegrar a personas con discapacida- recorridos, relaciones con la realidad
des a la vida productiva. En Colombia, local y necesidades, que a su vez ha-
el terapeuta ocupacional se convierte cen llamados a la investigación, la
en un profesional clave en la preven- formación y la práctica de la Terapia
ción y el bienestar de los trabajadores. Ocupacional en el sector trabajo para
En la actualidad estos dos campos de la región y en la Universidad Metro-
acción permanecen, con los necesa- politana. Es pertinente y necesario
rios cambios que las transformaciones dar continuidad al estudio de la his-
sociales, económicas, políticas y disci- toria de la profesión en los diferentes
plinares suponen. campos de ejercicio profesional, en las
regiones y las escuelas de formación.
El ejercicio del terapeuta ocupacio- Aumentar las capacidades y oportuni-
nal en el sector laboral ha sido para el dades de investigación con esta pers-
programa de Terapia Ocupacional de pectiva aportará a una mayor com-
la Universidad Metropolitana, desde prensión del hacer y del conocimiento
sus inicios, un escenario esencial en profesional, así como a la reflexión en
la formación de sus estudiantes. Esto torno a nuestras identidades y proyec-
ha permitido a sus egresados inclinar- ciones.
se por la formación posgraduada en el

62 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


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Mujer, género, educación, servicio social
y ocupaciones. Un atisbo a la historia de las
Reflexión

ocupaciones femeninas 1955-1969


Woman, gender, education, social service and occupations
An observation to the history of feminine occupations
1955-1969
Karol Vanessa Martínez Naranjo1
Estefanía Vergara Buriticá2

Recibido: 7 de diciembre 2016 • Enviado para modificación: 2 de enero de 2017 • Aceptado: 2 de febrero de 2017
Martínez, K., & Vergara, E. (2016). Mujer, género, educación, servicio social y ocupaciones. Un atisbo a la historia de las ocu-
paciones femeninas 1955-1969. Revista Ocupación Humana, 16 (2), 68-80.

Resumen: Los acontecimientos históricos entre las décadas del cincuenta y sesenta del siglo
XX provocaron una serie de condiciones sociopolíticas y culturales que hicieron posible un
mayor ingreso de la mujer a la educación, que si bien promulgaba aires modernistas, en la
práctica seguía reproduciendo patrones culturales ortodoxos asignados tradicionalmente a su
sexo, como el de esposa y madre. No obstante, el transcurrir de los años traería consigo fuer-
tes cambios, produciendo con ello la modificación progresiva de las nociones de ser mujer
en la sociedad colombiana. Aquí se refieren, desde una perspectiva de género, las diversas
ocupaciones y opciones educativas a las que atendieron las mujeres de estos decenios, princi-
palmente en Santiago de Cali, además de resaltar el papel relevante del género femenino, de
acuerdo con un ideal mariano y piadoso, en la implementación de organizaciones de servicio
social y educación que velaban por el bienestar de los desamparados.

Palabras clave: Historia, mujer, género, servicio social, educación de la mujer.

Abstract: Historical events between the 1950s and 1960s in the XX century brought about a
series of socio-political and cultural conditions that made possible a greater access of women
to education, which, although promulgating a modernist attitude, in practice continued
reproducing the conventional cultural patterns traditionally assigned to gender, such as that of
wife and mother. Nevertheless, the passing of the years would bring strong changes, producing
a progressive change in the notions of being a woman in the Colombian society. This article
covers, form a gender perspective, the various occupations and educational options that the
women of Santiago de Cali had in those times; also highlighting the relevant role of the
female, according to a Marian and pious ideal, in the implementation of social service and
education institutions that looked after the welfare of the homeless.

Keywords: History, woman, gender, social service, women’s education.

1
Licenciada en Historia, Universidad del Valle. Santiago de Cali, Colombia. karol.martinez@correounivalle.
edu.co
2
Licenciada en Historia. Docente de cátedra. Universidad del Valle. Santiago de Cali, Colombia. estefania.
vergara@correounivalle.edu.co

68 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


Introducción mocracia, maltrecha debido a la crisis
moral que dejó la época de la Violen-
Colombia presentó durante el siglo cia3 y asimismo hacer frente a todos
XX una metamorfosis sin preceden- los impases que se pudieran presentar.
tes debido a su reciente inserción en
lo que significaba la modernidad; no Puestas estas cartas sobre la mesa, las
obstante, no sería sino hasta pasada la mujeres se hicieron con las mejores
segunda mitad del siglo que las gentes posibilidades, accediendo a una va-
de la nación percibirían verdaderos riedad de ocupaciones y estudios,
cambios, debido a que en la década los cuales serán tema principal de
del sesenta se gestaron impetuosos este documento por la importancia
progresos y revoluciones que produ- que implica para el desarrollo holís-
cirían la conjunción de circunstancias tico femenino. Así pues, este estudio
necesarias para marcar un nuevo hori- emprende la empresa de reflexionar
zonte en la historia mundial y particu- sobre el desarrollo del contexto y las
larmente en la del país. posibilidades en las que se desenvol-
vió la mujer en los años cincuenta y
Aunque es cierto que el desarrollo sesenta a partir de una revisión y aná-
material de las ciudades avanzaba no- lisis exhaustivo de bibliografía y artí-
toriamente, no sucedía lo mismo con culos de los diarios Relator y El País,
los imaginarios de sus habitantes; si los cuales abarcan su representación
bien nadie discutía que las ciudades y desarrollo en la sociedad colombia-
tenían que cambiar, no se opinaba lo na, vallecaucana y sobre todo caleña.
mismo con relación a la modificación Aunque estos diarios ilustran sobre
de los roles imperantes que definían el todo la concepción de mujer de la
ser hombre y mujer, los cuales, en su élite, también se encuentran en ellos
forma más ortodoxa, seguían reprodu- representaciones de la mujer de clase
ciendo arquetipos arcaicos. media y baja.
En este orden de ideas, en la sociedad En este texto se estudiaron los dis-
colombiana empezaron a presentarse cursos sobre la experiencia, más que
discrepancias frente al rol que debía las experiencias mismas, pues se tra-
cumplir la mujer, el cual se disputaba baja desde el ideal de la Nueva His-
entre las nociones tradicionales y las toria Cultural que “pone su énfasis
más progresistas, siendo así, las repre- en los modos de ‘representación’ y
sentaciones que se difundían en torno en la construcción cultural/discursiva
a la mujer empezaron a ser contradic- de identidades, etc., que reflejan un
torias; ahora ellas debían conservar su sesgo lingüístico” (Weinstein, 2000, p.
feminidad, pero también demostrar la 76-77). Estructuralmente este escrito
fuerza necesaria para restaurar la de- se divide así: primero se trabaja acerca

3
La Violencia hace referencia a un periodo histórico colombiano comprendido entre finales de los años cua-
renta y principios de los cincuenta durante el cual se presentaron conflictos políticos bipartidistas entre los ciu-
dadanos de filiación liberal o conservadora, época raíz de la cual surgieron figuras populares que infundieron
terror en la nación, como la “policía chulavita” en Boyacá, los “pájaros” en el centro del país, y por último, los
“bandoleros”, figura alegórica a una especie de héroe guerrillero defensor de los campesinos.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 69


del papel de la mujer como categoría adquirido un rol de inferioridad, de-
representativa desde la perspectiva de bido a instituciones de control social
género, que cuestiona los fundamen- como la Iglesia, la familia patriarcal,
tos asignados al “deber ser” de acuer- el Estado y las escuelas, que le han
do al sexo, en instituciones como la asignado, desde siglos atrás5, caracte-
Iglesia, la educación y el Estado; luego rísticas de sacrificio y humildad como
se describe el contexto histórico de dones propios de su sexo. Esto resulta
Cali durante las décadas de 1950 a visible aún para los años analizados en
1960, para poder entrar a situar a la esta publicación, pues los actores que
mujer en sociedad; después se trabaja desarrollan los roles hegemónicos de
el tema de las opciones educativas y género supeditan el accionar feme-
ocupaciones de la mujer de acuerdo nino al mero acompañamiento de la
a la clase social; para terminar se pre- función masculina, otorgándole pro-
sentan algunas conclusiones. hibiciones políticas y justificando su
accionar como producto de un orden
Como es posible evidenciar, Colom- universal.
bia gestó un sinfín de transformacio-
nes sociales, económicas y culturales Desde una visión de la Historia Uni-
que sugestionaron los primeros pasos versal, para algunos exponentes de la
de la incursión masiva de la mujer en filosofía griega y medieval, como Aris-
la educación básica y superior4. En tóteles y Santo Tomás, la vida de las
tanto es durante ese periodo cuando mujeres rondaba alrededor de la úni-
se inicia la formación y la práctica en ca misión de contribuir en la realiza-
Terapia Ocupacional en Colombia, ción del hombre, prolongar la especie
este artículo busca además aportar y cuidar del hogar. Su existencia por
elementos de contexto para la com- sí sola no tenía ninguna razón de ser,
prensión histórica de tales hechos. puesto que “la mujer es mujer en vir-
tud de cierta falta de cualidades –de-
La mujer en Santiago de Cali cía Aristóteles–. Y debemos considerar
desde la historia de género el carácter de las mujeres como ado-
leciente de una imperfección natural.
El marco teórico de este documento
Y, a continuación, Santo Tomás decre-
se desarrolla a partir de una perspec-
ta que la mujer es un «hombre falli-
tiva de género, en donde los sujetos
do», un ser «ocasional»” (De Beauvoir,
sociales constituyen construcciones
1977, p. 4).
culturales mediante la continua resig-
nificación de la experiencia colectiva. En el caso de las religiones abrahami-
Es así como la mujer de Occidente ha cas, se culpa a la primera represen-

4
Parte de los planteamientos expuestos aquí surgieron de la construcción del trabajo de grado La Sexualidad
Bajo la Custodia de lo Moral. Ética Sexual, Sexualidad y Mujer en las Representaciones Escritas en Cali - 1955-
1969 (Martínez & Vergara, 2016), por lo que se hará mención de temáticas y sustentaciones disponibles más
ampliamente en aquella investigación.
5
Para comprender un poco más el tema de las instituciones de control social se recomienda leer al autor Michel
Foucault en su obra Historia de la Sexualidad, que consta de tres volúmenes. Aunque no trabaja directamente
la historia de la mujer, hace continua referencia a su situación en la sociedad griega y medieval, sobre todo en
el tercer volumen La inquietud de sí.

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tante del género femenino del peca- pública, que exponían que la presen-
do original, el cual debe ser expiado cia de la mujer en la política era una
a través de la maternidad, que la re- monstruosidad, pues según ellos:
lega al ámbito doméstico y a la sumi-
Dios hizo a la mujer con fines muy
sión, es así como en la biblia se afir-
sublimes para hacer feliz a la huma-
man ideas del Apóstol Pablo como:
nidad, ya en el hogar, en el aula, en
“que las mujeres escuchen la instruc-
los hospitales, en la oficina y en mil
ción en silencio, con todo respeto. sitios que le corresponde actuar (...)
No permito que ellas enseñen, ni que La mujer en la política es funesta y
pretendan imponer su autoridad so- se desvía de su fin para el que fue
bre el marido: al contrario, que per- creada y se corrompe de tal manera
manezcan calladas”. (1 Tm 2, 11-12 que el marido y los hijos le huyen...
Versión Vaticano). (Otoya, 20 de junio de 1959, p. 1).
La educación, que a través de los si- La década de los sesenta trae consi-
glos ha sido considerada como la lla- go otros matices en donde la mujer
ve que conduce a la superación de encuentra mayor protagonismo, pero
los pueblos, contribuyó de manera no solo como objeto, sino como suje-
directa a consolidar estos postulados, to de construcción social. Empieza a
pues transmitió un ideal de mujer tra- apropiarse de su cuerpo, exhibiéndo-
dicional mariana y sumisa, orientado lo a través de la minifalda, decidiendo
únicamente a su papel de madre, con- sobre él por medio del control natal, y
sorte y ama de casa; esto lo hizo por eligiendo con quien establecer víncu-
medio de los manuales de conducta los parentales, por medio del divorcio.
escolares católicos, como el de Ma- Sin embargo, a pesar de todos estos vi-
nuel Carreño, que data del siglo XIX y sos progresistas, aún era prioridad que
define las relaciones entre los sexos de la mujer no perdiera su feminidad, ya
acuerdo a las “funciones naturales” de que ella “nunca dejará de ser la flor
cada uno; siendo así, perfumada del hogar, teniendo que
El hombre debe comportarse como soportar con cariño y renunciación,
varón, no debe ser delicado pero si todos los inconvenientes de la profe-
elegante y cortés; de otro lado, a la sión adoptada y armonizarlos con sus
mujer se le define como un ser bello deberes de esposa y madre. Pero así,
por naturaleza, pero como la natura- en adelante, será mayor su actuación”
leza no la conduce para comportarse (Martha, 15 de diciembre de 1967, p.
en sociedad desde su nacimiento, esta 12).
debe instruirse a través de la religión,
cultivando en ella el pudor y la ino-
Contexto histórico:
cencia (Carreño, 1964, p. 32), transformaciones en la
participación femenina en sociedad
que le harán atractiva, pura y ade-
cuada para el hombre. La década de 1950 trajo consigo gran-
des cambios económicos en el país,
Aún para 1959 en Cali persistían idea- ello gracias a la bonanza económi-
les tan androcéntricos en la opinión ca producto del abarcamiento de los

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 71


mercados desatendidos que dejó la de lo entendido como funciones natu-
Segunda Guerra Mundial. Así pues, rales del sexo femenino. Así la mujer
el país vivió un aumento en la agro- empieza a tener más espacio en las
exportación cafetera, la industrializa- relaciones públicas. Ejemplo de esto a
ción y la escalonada urbanización de nivel nacional y departamental fueron
las ciudades capitales. Empero, no las señoras Esmeralda Arboleda, ele-
ocurrió lo mismo con los imaginarios, gida como miembro de la Asamblea
los cuales debieron transformarse a Nacional Constituyente (ANAC) en
pequeños pasos, que ya venían dán- 1954 y senadora del Valle del Cauca
dose desde la inserción de la mujer en 1958, quien fue la primera mujer
en la vida pública del país a través del en el Congreso de Colombia, y Josefi-
sufragio ratificado en 1954 por el Ge- na Valencia de Hubach, miembro de
neral Gustavo Rojas Pinilla6 y ejercido la ANAC en 1954, primera goberna-
en el plebiscito de 1957 en el Frente dora del Cauca en 1955, ministra de
Nacional. educación (1956-1957), embajadora
de la UNESCO (1957-1958) y senado-
Las diferentes percepciones que ela- ra de la Alianza Nacional Popular en
boran los sujetos de la sociedad de los años sesenta.
Santiago de Cali en la década del
cincuenta en los medios de difusión Acerca del papel de Josefina Valen-
reafirman y confirman las nociones cia de Hubach y Esmeralda Arboleda
políticas de un país; además, ratifican como representantes políticas, se afir-
los roles de género y la participación maba en el Diario Relator:
en las relaciones públicas y privadas La verdad es que las dos señoras elegi-
“adiestrando a las niñas para activida- das en la Asamblea Nacional constitu-
des domésticas y a los niños para el yente han probado, (...) que se puede
dominio de lo público” (Bonilla, 2012, cumplir con todos los deberes, los de
p. 98). De esta manera, la mujer fue la casa y los que impone un cargo de
adquiriendo tintes que la definían orden público. Ahora esta teoría, que
como siempre bella, carismática, su- dejó de serlo para convertirse en prác-
misa. tica, va a tener una demostración de
mayor fuerza con la presencia de Jo-
Sin embargo, con el arribo de la mo- sefina Valencia en la gobernación del
dernidad y las pretensiones de los Cauca. Creo sinceramente, y al creerlo
nuevos gobiernos de encarrilarse en no quiero herir susceptibilidades mas-
el desarrollo mundial, las concepcio- culinas, que ella logrará para su región
nes estáticas de los roles de género se lo que ninguno de sus antecesores ha
desestabilizan, modificándose parte logrado (...). (Suárez de Zawadzky, 27
de octubre de 1955, p. 4).
6
El presidente Gustavo Rojas Pinilla fue apoyado con fuerza por las mujeres colombianas durante su gobierno,
ya que en ese entonces fue cuando se permitió que la mujer ejerciera el sufragio. De esta manera, periodistas
como la destacada Clara Inés de Zawadsky celebraba el accionar del mandatario, pues éste “decidió darle im-
pulso a la idea de que las mujeres debían tener directa y responsable participación en el manejo del Estado. (...)
rompió la sostenida tradición, defendida por algunos con criterio romántico, de que la mujer solamente servía
para el cuidado y dirección del hogar (...)” (Suárez de Zawadzky, 27 de octubre de 1955, p. 4). Lo anterior,
refleja cambios en la concepción de la participación ciudadana femenina.

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Por su parte, el contexto de los años varían al país de la crisis que se aveci-
sesenta estuvo marcado por el inter- naba (Fajardo, 24 de mayo de 1959).
vencionismo norteamericano en Lati-
noamérica, que influyó en todos los Con tal responsabilidad sobre sus
ámbitos de la vida ya que las modas in- hombros, las féminas se fueron en-
ternacionales capitalistas influenciaron contrando con nuevos focos de pre-
a las masas urbanas. En la Conferencia ocupación, entre los que destacan la
de Punta del Este (1961) se pactó el educación de sus congéneres, el de-
compromiso de ejecutar acciones para rrocar las leyes que reafirmaban su
“impedir la extensión de la revolución dependencia conyugal, combatir los
cubana (…). Jhon F. Kennedy creó va- problemas morales, defender la in-
rios organismos (…), como el progra- fancia e incentivar la educación de
ma de la Alianza para el Progreso y los las masas. No obstante, algunas de las
Cuerpos de Paz, los que tuvieron su instituciones educativas seguían em-
influencia en las políticas educativas” pecinadas en mantenerse inmutables,
(Helg, 1989, p. 138). Adicional a ello, por ello seguían concibiendo que solo
los movimientos juveniles influencia- debían “proporcionarle posibilidades
dos por corrientes culturales como de formación sin disolver la familia ni
el nadaísmo, el rock, el hippismo, la desnaturalizar la misión tradicional de
revolución sexual y la segunda oleada la mujer” (Helg, 1989, p. 131), conti-
del feminismo, alimentaron el desa- nuando así con el ideal de la reina del
rrollo de debates mundiales sobre el hogar.
control natal y los anticonceptivos, el Frente a estas posibilidades y bajo el
aborto, la prostitución, el matrimonio telón de fondo del panorama político
y el divorcio civil, haciendo temblar del Frente Nacional, muchas mujeres
fundamentos filosóficos de religiones colombianas, sobre todo aquellas re-
poderosas como el catolicismo. lacionadas con familias oligarcas o in-
Educación y ocupaciones tegrantes de comunidades religiosas,
de la mujer caleña 1955-1969 optaron por ejercer labores de servi-
cio social que consistieron en el tra-
Desde 1954 las mujeres, que hasta tamiento educacional como alternati-
entonces transitaban en un segundo va de reintegración para las personas
plano político, empezaron a participar de bajos recursos, brindando especial
en la vida civil nacional. Para este mo- atención a las mujeres y niños. Este
mento la feminidad se hizo tan tras- servicio social se regía bajo los supues-
cendental en lo político que el eslogan tos de la ética del cuidado7 y era re-
de las campañas resaltaba que cuali- forzado por las representaciones que
dades como el amor, la comprensión y imperaban alrededor de las ocupacio-
la tolerancia, propias de la mujer, sal- nes que debían desempeñar aquellas

7
La ética del cuidado, concepto acuñado por Carol Gilligan con base en los planteamientos de Emmanuel
Kant, estaba basada en la concepción de dos tipos de ética, una de la justicia y otra del cuidado. La ética de la
justicia se relacionaba con el género masculino y la del cuidado con el femenino, por lo cual se entiende como
ética del cuidado aquella basada en las cualidades de la empatía, la compasión, la simpatía, la solidaridad, que
sensibilizan al sujeto dándole equilibrio (Heinz, 2004).

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 73


mujeres que querían ser vistas como damas participaran como voluntarias
ejemplo social, entre las que destaca- en entidades como el Hospital Univer-
ban las primeras damas, las monjas, sitario del Valle (Relator, 5 de mayo de
las reinas de belleza y las señoras de 1958), así lo muestra el encabezado
élite. Es así como en las noticias de la de la noticia en la figura 1.
época es común encontrar que estas

Figura 1. Labor social como voluntarias realizan varias damas caleñas.

Fuente: Relator (5 de mayo de 1958, p. 9).

Con relación a lo anterior puede afir- a promocionarse el Servicio Social


marse entonces que las damas de cla- Obligatorio femenino. Esta iniciativa
se alta debían desempeñar una doble finalmente no tuvo éxito, pues si bien
función, esto es, ser buenas esposas para las mujeres de clase alta era po-
y madres, y además, reflejar la mejor sible prestar ese servicio, no sucedía
parte de la sociedad destacando en la lo mismo con el resto, porque estas
beneficencia; así: debían trabajar para colaborar en el
sostenimiento familiar (López, 17 de
Las mujeres de las élites urbanas no mayo de 1968).
solo debían cumplir estas tareas en sus
propios hogares, sino que debían con- La educación de la mujer se convir-
vertirse en una especie de misioneras tió en unos de los principales focos de
sociales que se encargaran de morali-
atención en el plano nacional, visto
zar a las mujeres y a los niños de los
como una necesidad debido a que
sectores pobres (Reyes, 1 de agosto de
las féminas abarcaban gran parte de
1995).
la masa analfabeta nacional. Sin em-
Era tan fundamental en la vida de una bargo, la inclusión educativa no fue
mujer el hecho de participar de la ca- la misma en todos los niveles, puesto
ridad, que incluso en la nación llegó que para 1951, aunque la proporción

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de hombres y mujeres que estudiaron Departamento Administrativo Nacio-
la primaria fue similar, a partir de la nal de Estadística – DANE, la mayoría
secundaria, y sobre todo en la edu- de hombres que accedieron a estudios
cación superior, resalta la diferencia superiores escogieron la universidad,
entre lo elegido por los géneros. Así, mientras las mujeres optaron por ca-
según los datos estadísticos de los cen- rreras de otro nivel (Tabla 1).
sos poblacionales de 1951 y 1964 del

Tabla 1. Población según grado educativo por grupos de edad y sexo.


Departamento del Valle. 1951 y 1964.

Otros estudios
(normalistas,
Primaria Secundaria Universitaria
comerciantes, artes
(5 años) (6 años) (6 años)
y oficios industriales,
técnicos, etc.)

Año Lugar Hombres Mujeres Hombres Mujeres Hombres Mujeres Hombres Mujeres

1951 Valle del Cauca 261.234 247.443 30.112 23.202 3.373 441 3.266 3.738
(Cabeceras)

Cali (Cabecera) x x x x x x x x

1964 Valle del Cauca 297.827 346.922 64.233 46.449 8.302 1.671 7.631 20.739
(Cabeceras)

Cali (Cabecera) 149.111 179.726 38.482 28.252 6.074 1.304 4.854 12.854

Fuente: Martínez & Vergara, 2016, p. 122.

En cuanto a educación superior, en tro en Medicina, tres en Filosofía y una


total “en el año de 1938 egresaron como magíster en Administración In-
de las universidades colombianas 278 dustrial (El País. 18 de junio de 1968).
hombres y 6 mujeres; (...) en 1950,
737 varones y 128 mujeres. Hasta el A este punto es relevante señalar que
año de 1965 (...) 2.784 hombres y 915 en los años sesenta la educación fue
mujeres” (Velásquez, M. 1989, p. 30). uno de los sectores que más cambios
En la Universidad del Valle de Cali, gestó, pues se hizo énfasis en fomen-
para 1964 se graduaron 26 mujeres, tar el acceso para toda la población.
cuatro de Medicina, dos de Ingeniería A pesar de ello, en los censos pobla-
Química, una de Técnicas de Labora- cionales a nivel nacional las damas
torio Químico, catorce de Técnicas de continuaban siendo mayoría en las
Laboratorio Médico, dos de Arquitec- estadísticas de analfabetismo, entre
tura, dos de Magíster en Planeamiento “1951 y 1964, las mujeres fueron ma-
y una de Economía Agrícola (El País, yoría dentro del grupo de analfabetas,
26 de junio de 1964). Ya para 1968 que constituían el (...) 52% y el 53%,
su lugar dentro de la Universidad del respectivamente. En el grupo de al-
Valle aumentó, pues dentro de los fabetas eran el 49%, (...) en 1951, y
357 títulos otorgados 124 fueron para el 51% en 1964” (Velásquez, 1989,
damas, destacándose la presencia de p. 27). Lo mismo ocurría en el De-
siete religiosas y veinticinco casadas; partamento del Valle y la ciudad de
dentro de las graduadas resaltan cua- Santiago de Cali (Tabla 2), a pesar de

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tratarse de una de las ciudades princi- que dificultó el acceso de cupos para
pales del país terminó saturada con las la educación básica, sobre todo en el
migraciones campesinas que provocó género femenino.
la Violencia para los años cincuenta, lo

Tabla 2. Población mayor de 7 años alfabeta y analfabeta. Valle del Cauca y Cali. 1951 y 1964.

Alfabetos Analfabetos
Año Lugar
Hombres Mujeres Hombres Mujeres
1951 Valle del Cauca
171.458 183.078 36.656 50.900
(Cabeceras)
Cali (Cabecera) 81.365 86.809 11.079 17.601
1964 Valle del Cauca
375.758 413.704 65.343 88.974
(Cabeceras)
Cali (Cabecera) 197.225 220.946 23.885 37.033
Fuente: Martínez & Vergara, 2016, p. 121.

Para el decenio de 1960, las principa- chillerato optaban por cursos variados
les alternativas de estudio posterior a en principios de contabilidad, socio-
la secundaria que tuvo la mujer de éli- logía, mecano taquigrafía8, dietética y
te en Cali, aparte de ingresar a la uni- nutrición, primeros auxilios, puericul-
versidad, incluían estudiar en el país tura y derecho familiar (El País,14 de
o en el exterior programas de econo- junio de 1967). De igual forma para
mía doméstica o cultura general, con estas damas estaban las opciones de
el objetivo principal de, al terminar su estudiar en entidades como la Normal
etapa académica, más que trabajar, lo- Femenina de Cali (El País, 26 de mayo
grar contraer matrimonio con un pro- de 1965, p. 11) y el Instituto Social de
fesional de igual o mejor clase social. la Mujer, creado en 1963 (El País, 23
de enero de 1969, p. 10), en el cual
En el caso de las hijas de la clase me- dictaban cursos para el hogar, secreta-
dia, estas elegían opciones como el riado y clases de orientación.
Colegio Universitario Femenino del
Sagrado Corazón de Jesús de Cali para Para las señoritas de las clases popula-
bachilleres y normalistas, al finalizar res estaban las opciones de emplearse
los estudios podían empezar un ciclo como obreras, establecerse como tra-
universitario o ejercer como profe- bajadoras independientes en oficios
soras (El País, 21 de mayo de 1965). como el de modista o acudir a la edu-
Quienes no habían terminado su ba- cación de las escuelas nocturnas, don-

8
La mecanotaquigrafía, contabilidad, entre otras habilidades propias de las secretarias fueron enseñadas en
las Escuelas de Comercio. El acceso popular de la mujer a ellas se debe a la industrialización nacional, que
demandaba la necesidad de mano de obra especializada en estos conocimientos, además del hecho que “la
educación comercial duraba aproximadamente dos años, (…) y no exigía el curso de la primaria completa para
el ingreso, una ventaja para las mujeres que no habían culminado su formación en esta etapa” (Velásquez,
1989, p. 26-27).

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de cursaban clases de lectura, escritura, En línea con lo anterior, en aras de
matemáticas, sociales, moral, y religión ocupar el lugar que para la época se
(Relator, 25 de febrero de 1956). Po- consideraba oportuno y eficaz para
dían acudir a la educación de benefi- la mujer se promovieron dentro de la
cencia en entidades de servicio social y sociedad con gran ímpetu las carreras
rehabilitatorio, como el centro peniten- de servicio social, sobre todo en la se-
ciario El Buen Pastor, donde se les brin- gunda mitad de los años cincuenta y
daban orientación moral y educación comienzos de los sesenta. Así se po-
pragmática (Margoth, 17 de enero de pularizaron oficios como la Enfermería
1958), esto era, según la época, coci- y la docencia, sobre todo en la clase
nar y coser. También estaban entidades media, que resultaban ser parte de los
direccionadas por señoras y señoritas máximos exponentes de las profesio-
de la alta sociedad y religiosas, como nes femeninas, puesto que acoplaban
El Amparo del Gamín (Relator, 24 de con eficacia las representaciones tra-
octubre de 1958), la Fundación Pío X dicionales con las más progresistas, al
(Relator, 16 de noviembre de 1958) y punto de considerarse que “ser buena
la Escuela Superior para niñas (El País, esposa es de por sí una profesión que
26 de marzo de 1956), de las religio- exige las cualidades que distinguen al
sas del Colegio María Auxiliadora, con diplomático, a la mujer de negocios,
el objetivo de alejar a los infantes del a la buena cocinera, a la enfermera, a
camino de la “gaminería” y la prosti- la maestra” (Relator, 4 de noviembre
tución, formando hombres decentes y de 1955).
esposas virtuosas.

Figura 2. Enfermería es femenina por excelencia… y recompensa su abnegación.

Fuente: El País. (28 de Junio de 1964, p. 3).

La profesión de Enfermería empezó a esta lo necesitaba. Para 1957 la Es-


popularizarse en la sociedad colom- cuela de Enfermeras de la Universidad
biana, pero no en la escala en que del Valle9 no había logrado satisfacer
9
La Escuela de Enfermería de la Universidad del Valle fue creada el 13 de octubre de 1952, mientras que
“en 1937 se creó en Bogotá la primera escuela de servicio social que vinculó mujeres a la acción social como
enfermería” (Hamón, 2007, p. 193).

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 77


la demanda para el Hospital Depar- causas contextuales del ingreso feme-
tamental Universitario y en los diarios nino a la misma.
se afirmó: “solo hay 700 enfermeras
graduadas en Colombia y se nece- Como puede verse, las mujeres ele-
sitan unas 20 mil, cada vez hay me- gían su profesión, más que por gusto
nos, el déficit se debe en gran parte personal, pensando en un oficio que
porque las señoritas que terminan el les permitiera ascender en la escala
bachillerato prefieren el matrimonio a social dándoles prestigio, en la medida
iniciar una carrera universitaria” (Re- que su sexo y clase se los permitiese;
lator, 2 de marzo de 1957, p. 3). Esta es decir, se trataba de gustos de liber-
situación cultural se veía agravada en tad o de lujo y de gustos de necesidad,
muchos casos por el componente eco- trabajados por Bourdieu10 (1988).
nómico, ya que no todas las mujeres Conclusiones
podían darse el lujo de estudiar, fue
por ello que Al analizar el ideal del deber ser feme-
nino en la época se muestra como la
En vista de la necesidad que tiene mujer continuó interiorizando como
el país de enfermeras profesionales
propias esas conductas que le eran
orientadas hacia la acción social que
impuestas socialmente y que le ceñían
presten su cooperación en las cam-
las cualidades piadosas para ser una
pañas asistenciales, la Cruz Roja Na-
cional Colombiana apoyada por el
buena hija, esposa o madre. Por ello
Gobierno Nacional ha creído conve- era tan común encontrar que las muje-
niente la intensificación de esta profe- res entraran en colectivos para ayudar
sión y para el efecto ha concebido un a los desfavorecidos, donde el funda-
número crecido de becas para varios mento de la espiritualidad se alcanza-
departamentos de Colombia entre los ba a través de la formación moral, así
que figura el departamento del Valle, como que prefirieran como desarrollo
al cual se le han asignado diez, para personal el matrimonio o las carreras
las mujeres que tengan interés en rea- consideradas como femeninas.
lizar estudios técnicos de tres años en
la Escuela de Enfermeras de Bogotá. Los patrones culturales contribuyen en
(El País, 24 de enero de 1956, p. 2). la determinación del accionar y los roles
de género. Pese a que algunas mujeres
Con respecto a la docencia, durante de clase alta conseguían hacerse con
la década de 1950 el magisterio sufrió el estudio de carreras profesionales11,
descalificación y desprestigio, pues no al identificar las tasas de analfabetismo
se necesitaba estar muy preparado y escolaridad en los censos nacionales
para ejercerla; ello bajó de nivel a la de población se corrobora que la ma-
profesión y se convirtió en una de las yoría de las mujeres de todas las cla-
10
“Los primeros son propios de aquellos individuos producto de unas condiciones materiales de existencia de-
finidas por la distancia con respecto a la necesidad, por las libertades o, como a veces se dice, por las facilidades
que asegura la posesión de un capital; los segundos expresan, en su propio ajustamiento, las necesidades de
las que son producto” (Bourdieu, 1988, p. 177).
11
Lo que puede verse en la descripción del perfil de cada novia en los anuncios matrimoniales de los medios
de difusión (El País, 17 de mayo de 1968).

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ses sociales acudían en mayor medida El País. (26 de Junio de 1964). Numeroso
al estudio de carreras o cursos cortos, grupo de nuevos profesionales entrega
mañana la Universidad del Valle. Santia-
más que a programas universitarios, a go de Cali, p. 17.
diferencia de los hombres.
El País. (28 de Junio de 1964). Enfermería es
Pese a todo esto, es importante desta- femenina por excelencia y recompensa
car que el factor fundamental de esta su abnegación. Santiago de Cali, p. 3.
reflexión es la determinación con la El País. (21 de mayo de 1965). Colegio Uni-
cual la mujer se ha hecho paso a tra- versitario Femenino. Santiago de Cali, p.
vés de los complicados senderos que 4.
le han construido las representaciones
El País. (26 de Mayo de 1965). Normal Fe-
sociales tradicionalistas; así pues, la menina de Cali fue aprobada por el Mi-
mujer ha salido triunfante en diferen- nisterio. Santiago de Cali, p. 11.
tes ámbitos que van desde su incur-
sión en la política, la educación y la El País. (14 de junio de 1967). Habla la Ma-
dre Paternot. Enseñamos a la mujer a
salud, así como también el empodera- amar a Dios para su vida y su felicidad en
miento sobre sí misma. todos. Santiago de Cali, p. 14.
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80 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


Mujer ciudadana, universitaria y terapeuta
ocupacional. Contrastes contextuales de los
años sesentas y setentas desde la Universidad
del Valle y la Universidad Nacional
de Colombia
Citizen, university student and occupational therapist woman.
Contextual contrast in the sixties to seventies from the
Universidad del Valle and the
Universidad Nacional de Colombia
Lizeth Lorena Gómez Valencia1
Daniela Vanessa Palma Arroyo2
Laura Vanessa Rodríguez Mendoza3

Recibido: 28 de octubre 2016 • Enviado para modificación: 4 de diciembre 2016 • Aceptado: 15 de enero 2017
Gómez, L., Palma, D., Rodríguez, L. (2016). Mujer ciudadana, universitaria y terapeuta ocupacional. Contrastes contextuales
de los años sesentas y setentas desde la Universidad del Valle y la Universidad Nacional de Colombia. Revista Ocupación
Humana, 16 (2), 81-92.

Resumen: La configuración de la Terapia Ocupacional en Colombia como una profesión


constituida para mujeres es uno de los hallazgos más significativos de dos trabajos de pro-
fundización e investigación que motivan este análisis, orientado a describir la conformación
del rol femenino en la Terapia Ocupacional dentro del contexto político, social, económico y
educativo colombiano en las décadas de los sesentas y setentas del siglo XX. Se trata de dos
investigaciones realizadas en lugares del país distintos (Santiago de Cali y Bogotá), ambas em-
plearon la metodología de investigación histórica en el marco del macroproyecto Historias de
la Terapias Ocupacionales en Colombia. Con base en el análisis crítico de hechos y eventos,
los dos proyectos convergen al encontrar la relación entre la construcción social de la mujer,
como ser dedicado al cuidado de otros, y sus opciones de participación en esferas políticas
y educativas, lo que resulta clave para la historia de la profesión y su trayectoria en el país.

Palabras clave: Terapia Ocupacional, educación de la mujer, participación de la mujer, in-


vestigación histórica

Abstract: The configuration of Occupational Therapy in Colombia, as a profession created


for women, is one of the most significant findings that has encouraged publishing the results
of two investigational products, with the aim of describing the formation of women’s role
in Occupational Therapy within the Colombian political, social, economic and educational

1
Terapeuta Ocupacional. Earlsdon Primary School. Coventry, Reino Unido. lizgova05@gmail.com
2
Terapeuta Ocupacional. Vicerrectoría de Bienestar Universitario, Universidad del Valle. Cali, Colombia. dan-
ielapalmaarroyo@correounivalle.edu.co
3
Terapeuta Ocupacional. Estudiante Maestría en Neurociencias, Universidad Nacional de Colombia. Labora-
torio desarrollo, juego, aprendizaje y lúdica, Departamento de la Ocupación Humana, Universidad Nacional
de Colombia. Bogotá, Colombia. lvrodriguezm@unal.edu.co

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 81


context during the 1960s and 1970s in the 20th century. This article is about two projects
conducted in two different regions of the country (Santiago de Cali and Bogotá). Both used
the historical research methodology within the project Historias de las Terapias Ocupacionales
en Colombia. According to a thorough analysis of the facts and events, both investigation
projects converge by finding a relationship between the social construction of the woman as
a care giver, and her options to participate in political and educational fields. This relation is
key in the history of the profession and its trajectory.  

Key words: Occupational Therapy, women’s education, women’s participation, historical


research.

Introducción de la historia como genealogía (Mel-


garejo, 2000), carácter particular del
Si educar a un hijo es hacer de él un
hombre, la educadora, (en tal caso la pensar histórico que permite cuestio-
madre) necesita conocer su misión, narse respecto a cómo se ha llegado a
necesita de cultura, autoridad, salud, ser lo que se es, y la memoria colec-
responsabilidad, libertad y fortaleza [...] tiva, como saber de la experiencia de
Nadie niega que la mujer nació para la un grupo de expertos, la forma como
maternidad, para el hogar, para la familia
[...] Pero ¿cómo se desempeña su altísima
conciben su pasado, como construyen
misión cuando ignora los deberes y el presente y planean su futuro.
derechos que le corresponden? Es preciso,
pues, que la mujer se eduque. Por su parte en la ciudad de Bogotá,
el grupo de la Universidad Nacional
(Correa, 1947, p. 128).
realizó su investigación bajo la mo-
dalidad de trabajo de grado, el cual
En el marco del macroproyecto His- describió los inicios y la trayectoria
torias de las Terapias Ocupacionales del programa de Terapia Ocupacional
en Colombia, diferentes universidades en los años 1966 a 1989. Se centró
del país han participado de la cons- en la comprensión, reconocimiento,
trucción del contexto de formación de relación y reconstrucción de sucesos
la profesión, entre ellas, la Universi- encontrados en documentos y relatos
dad del Valle, sede Santiago de Cali, y de actores relevantes en la historia de
la Universidad Nacional de Colombia, la Terapia Ocupacional de la Univer-
sede Bogotá. sidad Nacional (Escobar & Rodríguez,
2015).
En Cali se desarrolló, como proyecto
de profundización, la identificación de La investigación de Escobar y Rodrí-
los momentos de la historia, las prácti- guez (2015) permitió develar que el
cas y los discursos de la Terapia Ocu- primer programa de formación en Te-
pacional en esa ciudad en los años se- rapia Ocupacional del país emerge en
tenta (Palma & Gómez, 2015). Ello se la Universidad Nacional de Colombia
realizó a través de la conformación de durante los años sesenta, tras identi-
un archivo histórico y considerando ficarse la necesidad de formación de
como ideas centrales la construcción personal en el pabellón de rehabilita-

82 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


ción del Hospital San Juan de Dios de yor nivel de educación y el derecho al
Bogotá, y que la profesión se identifi- sufragio” (p.130). Estas se concretaron
có como femenina. Por su parte, aun- en la Ley 28 de 1932 sobre reformas
que en la Universidad del Valle aún no civiles y régimen patrimonial en el
se iniciaba la institucionalización de la matrimonio; un gran avance para la
Terapia Ocupacional, existen eviden- vida de la mujer de la época que más
cias de la participación de la mujer adelante daría lugar a fuertes debates
dentro del Hospital Universitario del sobre la remuneración que debían re-
Valle como voluntaria para el cuida- cibir por trabajar (en el momento era
do de enfermos por poliomielitis, y alrededor de la mitad del sueldo de un
posteriormente liderando prácticas hombre), el tipo de empleo (general-
de Terapia Ocupacional dentro de los mente de forma ocasional, en fábricas
servicios de Medicina Física y Rehabi- contratadas como “mano de obra no
litación en el Instituto Colombiano de especializada”),  la vinculación a las
los Seguros Sociales. universidades y el tipo de educación
que debían recibir. Aun así, ya existían
Motivadas por los hallazgos en tor- mujeres profesionales en Colombia,
no al género y la configuración de quienes habían tenido la posibilidad
la Terapia Ocupacional, el presente de formarse en el extranjero y regresa-
artículo propone un diálogo entre ban para ocupar altos cargos, apalan-
los eventos encontrados en las dos cadas por las facilidades económicas
investigaciones desde una perspec- de sus familias.
tiva interpretativa de los mismos. Se
pretende así describir y reflexionar De otra parte, las configuraciones de
en torno al contexto histórico en el la estructura social en el ámbito de
que transcurre la creación de los pro- la educación alimentaron el deseo
gramas de Terapia Ocupacional en la urgente de reformar la educación fe-
Universidad Nacional y la Universi- menina, ello implicaba el acceso al
dad del Valle, así como al proceso de diploma de bachiller, que incremen-
vinculación de las mujeres a la vida taría la matrícula universitaria. Fue a
educativa, política y social. partir de 1932 que en Colombia se
Mujeres y educación: dio apertura para que las mujeres de
contrastes contextuales la élite ingresaran a la universidad, a
carreras consideradas aptas para ellas
Las luchas y construcciones de la mu- y, en gran parte, sin necesidad de te-
jer alrededor de su identidad se han ner título de bachiller. Posteriormente,
ubicado desde los años treinta del si- “en 1933 el Decreto 227 hizo extensi-
glo XX, cuando, según Cohen (2001), va la reforma de la enseñanza prima-
“el movimiento emancipatorio que se ria y secundaria a los establecimientos
inició en 1930 impugnó las bases so- de educación femenina y posibilitó
bre las cuales se sostenía la posición la emisión de diplomas de bachiller”
de la mujer, dando lugar a tres tipos de (Herrera, 1993, p. 13). Sin embargo,
reivindicaciones: el manejo de los bie- la educación para la mujer se dirigió
nes por la mujer casada, acceso a ma- a inculcar conocimientos relacionados

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 83


con su condición de madre y esposa, la educación femenina, y con ella el
a buscar la formación de una mujer acceso de la mujer a la universidad,
moderna, preocupada por ser útil a constituye uno de los hechos más im-
la sociedad, pero evitando el conflic- portantes de la época, pues al finali-
to entre sus aspiraciones profesionales zar la República Liberal4 cerca de me-
y las funciones tradicionales que por dio millón de mujeres recibían edu-
naturaleza de género le habían sido cación. Este avance debe relacionarse
concedidas. con los logros alcanzados en el terre-
no de los derechos civiles y políticos,
Siendo el bachillerato un requisito que fueron consagrando en leyes los
para la admisión a estudios universita- forcejeos de la mujer por acceder a
rios, en esta época la vinculación de las los derechos ciudadanos en pie de
mujeres a la universidad era mínima, igualdad con el hombre.
quienes accedían lo hacían a progra-
mas propios del cuidado y la educa- Los discursos que justificaban el acceso
ción de otros. Así, Cohen (2001) refie- de la mujer colombiana a la formación
re que quienes emprendieron la lucha universitaria se empeñaban en esta-
por su acceso a la educación superior blecer que las áreas de conocimiento
se habían graduado como educadoras permitidas para ellas concordaran con
de escuelas normales, eran egresadas los roles en los cuales eran competen-
de institutos acreditados para ofrecer tes, siendo el objetivo preciso el de
cursos prácticos de comercio, artes fortalecer dichos conocimientos para
mecánicas y cuidado de la salud, ejer- desempeñarse de manera más idónea
cían como directoras y maestras en las en el lugar de la sociedad al que per-
escuelas femeninas de artes y oficios o tenecían. El siguiente enunciado, en-
eran estudiantes de colegios públicos contrado en uno de los números de la
y privados. Ya se evidenciaba un gran revista Letras y Encajes de 1947, hace
cambio en los proyectos de vida de las alusión a esta afirmación:
mujeres colombianas.
Es preciso pues que la mujer se edu-
Según Herrera (1993), en 1943 la que. Que vaya a las universidades no
mujer representaba el 43% de la para escalar las montañas en busca de
población estudiantil; si bien en tér- minas, ni para estudiar el manejo de
minos generales este no parece un las fuerzas que subyugan la naturale-
porcentaje bajo, es necesario mati- za, ni otras muchas profesiones que
zarlo a medida que se asciende en no están de acuerdo con su idiosin-
los niveles educativos, especialmen- crasia pero que estudie todo aquello
te en la educación superior, donde que tenga por meta elevar la condi-
solo representaba el 2% de los 5.113 ción moral de la mujer, la condición
estudiantes inscritos. No cabe duda de la familia y el mejoramiento de los
que la ampliación de la cobertura en pueblos (…) que luego con un gran

4
Se entiende la Republica Liberal como el periodo histórico comprendido entre 1934 y 1938, bajo el gobierno
de Alfonso López Pumarejo, durante el cual se llevó a cabo la reforma constitucional de 1936, que implicó
nuevas exigencias económicas, políticas y sociales producidas por las transformaciones coyunturales de 1930,
cuando se puso fin a casi medio siglo de gobiernos conservadores.

84 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


caudal de ciencia y una gran dosis de gobierno liberal de Alfonso López Pu-
responsabilidad, vaya a engrandecer marejo, abrió sus puertas por primera
el hogar ya formado y a mantener vez en Colombia a las jóvenes que as-
encendido, no el fuego material, sino piraban a cursar una carrera diferente
aquel que la mano omnipotente colo- al proyecto matrimonial y familiar al
có en sus entrañas y que solo manos cual habían estado adscritas de manera
de mujer pueden mantener encendi- exclusiva. La entrada de las mujeres a
do. (Correa, 1947, p. 118). la Universidad Nacional fue masivo al
llegar los años sesentas; según Munevar
Para ese mismo año fueron incluidos
(2015), anteriormente ingresaba una,
cursos de economía doméstica en el
dos, máximo tres, en los sesentas esto
ámbito de la enseñanza universitaria
cambió, ingresaban seis, siete y hasta
para las mujeres, entendidos no so-
más a varios programas. Para Cohen
lamente como el aprendizaje de las
(2001), “el respaldo a la reforma de la
labores domésticas tradicionales, sino
educación superior y de las profesiones
como un programa científico y de ma-
había aumentado durante los últimos
yor complejidad para mejorar la vida
años de manera constante en Colom-
familiar, y por su medio, a la comu-
bia y en consecuencia un número re-
nidad (López, 2002). Se destacaba
ducido pero creciente de mujeres in-
que las carreras femeninas debían ser
gresaba a la universidad” (p. 211).
aquellas relacionadas con la asistencia
social, la enfermería, la higiene y la Hacia mediados de la década del se-
educación, entre otras. senta el número de mujeres gradua-
das en las universidades colombianas
La construcción social de la mujer, y
había aumentado apreciablemente:
lo femenino, continuó hasta marcar un
de seis que obtuvieron sus títulos en
nuevo hito, conferido en el Acto Le-
gislativo Nº 3 de 1954, que otorgó a 1938, a 232 en 1955 y 915 en 1965
las colombianas el derecho a sufragar (Cohen, 2001). Así mismo, es funda-
(Aguilera, 2003). Este hecho generó mental mencionar que por ese tiem-
un cambio en la perspectiva feme- po el ingreso de las colombianas fue
nina, pues con él las mujeres serían transversal a dos momentos claves en
tomadas en cuenta como ciudadanas la historia de la Universidad Nacio-
aptas para tomar decisiones, no sólo nal; por un lado, la Reforma Patiño,
para elegir, también para ser elegidas: que constituyó la Ciudad Universita-
“se le dio así la posibilidad de inter- ria y otorgó posibilidades de vivienda
venir en la dirección y manejo de los y alimentación a las y los estudiantes
destinos del país y se ampliaron las que lo requerían a través de lo que
posibilidades de participar en la vida se conoce como bienestar universita-
laboral, cultural y científica de la Na- rio; por otra parte, la centralización
ción” (Subgerencia Cultural del Banco en el Estado, que implicó una nue-
de la República, 2015). va definición de la Universidad en la
que se afirma como institución de ca-
La Universidad Nacional de Colom- rácter público que responde y atien-
bia, en el ambiente de renovación del de a las necesidades del país (Soto,

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 85


2005). Por esta razón, el ingreso de Mujeres terapeutas, hallazgos para
la mujer a la Universidad Nacional de la década 1960 - 1970
Colombia posibilitó la investigación
en temas nuevos como los estudios Las funciones ejercidas por la mujer y
sistemáticos de la familia, la niñez en el contexto de aquella época la deter-
la calle, la vejez y las violencias en el minaron como un ser sin capacidad
país en términos de sus implicaciones de decisión, sujeto de instrucción y
(Ramírez, 2010). sacrificio. La Terapia Ocupacional em-
pieza a construirse alrededor de ese
De otra parte, la realidad en la capital contexto socio-histórico:
del Valle del Cauca no era muy dis-
tinta. En 1948 se graduó la primera Al ser una carrera femenina pues, tie-
promoción de la entonces denomina- ne relación directa en la visión de su
ejercicio por la sociedad, con lo que
da Universidad Industrial del Valle, en
la sociedad piensa que es el papel de
la ciudad de Santiago de Cali. El acta
la mujer en la misma. La TO cuando
de grado inicial, tipeada en máquina
empieza alrededor del 70, empieza en
de escribir, fue expedida por la institu- un mundo en el que las mujeres no
ción el 15 de julio de 1948 y firmada toman decisiones. Las decisiones las
por el rector Tulio Ramírez. En ese en- toman los varones. Solo en diciembre
tonces fueron 25 mujeres las primeras del año 71, y tras la aprobación de
egresadas que el alma máter graduó una ley, las mujeres toman decisiones
como enfermeras generales; de ellas de patria potestad. Hasta diciembre de
no se tiene ninguna noticia, no hay ar- 1974, solo en ese diciembre, la mujer
chivos de matrícula o registros de cali- no tuvo que pedirle permiso al marido
ficaciones, solo un acta de grado que para dar un permiso de viaje a los hi-
evidencia el importante papel que la jos, por ejemplo, una cosa tan simple.
mujer jugaba para entonces en los di- (C. H. Vergara, comunicación perso-
ferentes ámbitos de la vida académica nal, Marzo de 2015).
y laboral de la universidad.
Tras la caída del presidente Rojas Pinilla
Después de esta primera promoción en 1957, las mujeres pueden elegir y
y por varios años los egresados de la son alrededor del 50% de la población
universidad fueron médicos y quími- (Aguilera, 2003). Los contextos sociales
cos hombres, y mujeres enfermeras. y políticos que influyen en la creación
Solo hasta 1958 uno de los progra- de carreras para la mujer colombiana
mas académicos insignia de la institu- se relacionan con el logro del derecho
ción en la época graduó a la primera a decidir, a tener voz y voto con el pri-
arquitecta de la Universidad Indus- mer sufragio femenino, así como con
trial del Valle. En 1959 se graduó la las aperturas y cambios a nivel educati-
primera mujer Doctor en Medicina vo antes mencionados. Así, los sesentas
y Cirugía y la primera ingeniera; en serían la década con mayor número de
1967 la primera bióloga, la primera matrícula femenina en la Universidad
psicóloga en 1968 y la primera eco- Nacional, lo que debía generar trans-
nomista en 1969 (Universidad del Va- formaciones a nivel de programas aca-
lle, 2010). démicos acordes a sus capacidades.

86 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


El 1 de septiembre de 1959 la Facul- gran vacío existente en el campo de
tad de Medicina de la Universidad Na- las ciencias de la salud: los programas
cional de Colombia crearía el Servicio de Terapia Física, Terapia de Lenguaje
de Medicina Física y Rehabilitación, y Terapia Ocupacional, que tendrían
una unidad dependiente de la sección una duración de seis semestres, com-
de Medicina Interna del Hospital San partirían el primer año y posterior-
Juan de Dios de Bogotá que efectuaría mente recibirían clases propias de
actividades en los órdenes adminis- cada área técnica (Pardo, s.f). Mientras
trativo, docente y asistencial (Pardo, tanto, en Cali la jefa de sección de En-
1972). Ello dio origen en 1960 a la fermería del Hospital Universitario del
creación del curso para la educación Valle calificaba la situación de salud de
posgraduada de médicos especialistas la población como alarmante, y con-
en Medicina Física y Rehabilitación. vocaba a la Universidad del Valle, por
medio de la Facultad de Enfermería, a
Por la situación de violencia que ve- la instrucción de mujeres en el servicio
nía atravesando el país se detectó una y sacrificio en pro del cuidado de las
amplia demanda en la sección de re- personas afectadas (Taborda, 1970).
habilitación, por lo que resultaba ne-
cesario constituir equipos completos Un hallazgo que describe el origen y
de salud en dicha área (Escobar y Ro- concepto de las terapeutas ocupacio-
dríguez, 2015). Por su parte los me- nales de la época es el Prospecto de
dios de comunicación se referían a la la Carreras de Terapia (Figura 1), en el
aparición de brotes de enfermedades que se define que:
infecto-contagiosas como la poliomie-
litis, tanto en la ciudad de Cali como La terapeuta ocupacional tiene la
en Bogotá. Las estadísticas de la épo- obligación de planear y desarrollar un
ca indican que “entre 1966 y 1980 se programa de actividades para cada pa-
atendieron en el Instituto Colombiano ciente, a fin de ayudar a su recupera-
de Ortopedia y Rehabilitación Franklin ción física o mental, de acuerdo a la
Delano Roosevelt de Bogotá 1.449 ca- orden del médico... debe ser afable y
sos de poliomielitis aguda, de un total tener una personalidad bien equilibra-
de 22.022 pacientes vistos en primera da… (Pardo, s.f.).
consulta” (Malagón & Ávila, 1982).
A diferencia de la Universidad Nacio-
Es así como desde el Hospital San Juan nal de Colombia, para los sesentas y
de Dios de Bogotá se hace la solicitud setentas la Universidad del Valle aún
a la Facultad de Medicina de la Uni- no abría su programa académico en
versidad Nacional para cubrir estas Terapia Ocupacional. Sin embargo, al-
necesidades de formación. Por medio gunos hechos relevantes ya demostra-
del Acuerdo   04 del 20 de enero de ban la importancia de la participación
1966, firmado por el Consejo Superior de la mujer en el sector salud, en la
Universitario, se autoriza a la Facultad enseñanza y en procesos de liderazgo,
para que en la Sección de Rehabilita- así como la percepción de sí en aque-
ción se iniciaran labores de las tres ca- lla época. Un enunciado identificado
rreras técnicas que vendrían a llenar el en la sección Femeninas del periódico

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 87


Figura 1. Prospecto Carreras de Terapia. En Figura 2. El voluntario hospitalario necesita
el cual se dan las primeras definiciones de la más colaboradoras.
Terapia Ocupacional y del perfil
de las terapeutas.

Fuente: Fotografia tomada del original publicado en el diario


El País (p. 17) el 14 de febrero de 1971.

Como ocurría en la creación de la Te-


rapia Ocupacional en Argentina:
Fuente: Fotografía del original escrito por Jorge Pardo Ruiz, La cual estuvo atravesada por un sis-
(s.f).
tema de género que establece jerar-
quías, privilegios y desigualdades deli-
El País de 1971 expone la importan- mitando un campo profesional ligado
cia de la participación de la mujer en a un mundo considerado como na-
profesiones femeninas como Enfer- turalmente femenino constituido por
mería; así mismo, invoca el trabajo de las actividades de la vida diaria, las
la mujer para las labores de cuidado actividades artesanales y manuales, el
de personas enfermas que requieren cuidado de los niños y una cuota de
de mucha asistencia, esto a manera amor y abnegación para llevar adelan-
de voluntariado (Figura 2), es decir te el desafío de la rehabilitación (Testa
& Spampinato, 2010, pág. 178).
sin remuneración, indicando que el
Hospital Universitario afrontaba una De manera similar se originaron algu-
crisis económica debido a los distin- nas profesiones en Colombia, como la
tos frentes que debía atender con los Terapia Ocupacional; se enmarcaban
pacientes: medicamentos, aparatos en la mujer unas habilidades con las
ortopédicos y rebajas en los costos de que pudiera guiar a las personas en
hospitalización; además contaban con sus relaciones diarias, saber recono-
escasas voluntarias y aspiraban a que cer sus logros y estimularlos cuando
las señoras, tomando conciencia de lo fuera necesario. Lo anterior permite
que era el servicio a los semejantes, identificar una serie de funciones que
se animaran a ingresar al voluntariado debía ejercer, entre ellas: prestar ser-
(Guevara, 1971). vicios, dar medicamentos, proporcio-

88 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


nar aparatos ortopédicos, cumplir con de los juegos en silla de ruedas, la
prescripciones médicas, prestar aten- conformación de agremiaciones de
ción individual, guiar en las relaciones personas con discapacidad, el impulso
diarias, reconocer los logros del otro, de nuevos campos en instituciones de
cuidar a personas afectadas, hacer co- rehabilitación, entre otras situaciones
sas por los demás, llevar a cabo fun- y oportunidades para la población con
ciones manuales y artesanales, ense- discapacidad de aquella época. Así lo
ñar y adaptar a los niños y resolver sus refiere la terapeuta ocupacional Car-
necesidades particulares. Se atribuye a men Helena Vergara, en otro de sus
las mujeres la entrega total a los de- relatos:
más, el autocontrol de las emociones
En 1970, en el mes de enero, se hi-
y la suavidad; cualidades de sacrificio
cieron los juegos panamericanos en
similares a las virtudes de la vida reli-
silla de ruedas en la ciudad de Buenos
giosa y familiar, es decir, del ámbito de
Aires. Allí se encontraba un médico
lo privado. deportólogo de apellidos Torres Bal-
La creación de programas académi- dó, y con él trabajaba una mujer lla-
cos de Terapia Ocupacional en la mada Valery Tausend, fisioterapeuta.
Universidad Nacional de Colombia y Ella movilizó en este país mil cosas que
la gente ya no recuerda. Una de ellas
posteriormente en la Universidad del
fueron los juegos en silla de ruedas,
Valle fue impulsada y motivada prin-
asesorando a la Asociación Colom-
cipalmente por hombres médicos que
biana de Parapléjicos – ASCOPAR, y
tenían un interés marcado por el tema se impulsó la creación de una delega-
de la rehabilitación. Esta situación ción principalmente conformada por
permaneció con el paso del tiempo, el su gente para ir como observadores
médico hombre tuvo total influencia a los Juegos Panamericanos, y de allí
sobre las decisiones que las terapeutas salieron los paralímpicos en Colombia,
ocupacionales debían tomar, situación de esa delegación que fueron en enero
reconocida por terapeutas de la épo- de 1970 a los juegos. (C. H. Vergara,
ca: “…entonces cuando ustedes ven comunicación personal, 15 de 2015).
una profesión femenina y una profe-
sión paramédica en el año 70, es por- Además, se destaca el papel de distin-
que todo se hacía bajo prescripción tas terapeutas ocupacionales que du-
médica: la mujer no puede prescribir rante la década de los setentas impul-
porque no podía tomar decisiones que saron la creación de servicios de Te-
carguen con responsabilidad” (C. H. rapia Ocupacional en instituciones del
Vergara, comunicación personal, mar- Estado como el Hospital Universitario
zo de 2015). del Valle y el Instituto Colombiano de
Seguros Sociales. También el de aque-
Pese a estos roles asignados por una llas que crearon en Santiago de Cali
sociedad conservadora, industrial y los centros de atención diurna en el
patriarcal, las mujeres también asu- campo de rehabilitación psicosocial, y
mieron durante la década de los se- de quienes abrieron el campo educa-
tenta un papel de liderazgo en la mo- tivo para la integración escolar a través
vilización de sujetos para la creación de su participación en la Secretaría de

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 89


Educación (C. H. Vergara, comunica- rentemente femenina y orientada al
ción personal, 15 de 2015). cuidado de otros. Con el paso de los
años esta realidad se transformó con el
Todo lo anterior demarca el contexto empoderamiento de aquellas mujeres
en el cual nace la Terapia Ocupacio- por alcanzar una formación de mayor
nal en Colombia, puntualmente en las nivel y con capacidades de participa-
ciudades de Cali y Bogotá. Se empieza ción.
a construir una carrera paramédica al
servicio del cuidado de las personas, De otro lado, la entrada de las muje-
junto con otras profesiones como la res a la universidad entre los sesentas
Psicología, la Enfermería, la Fonoau- y setentas, y la consecuente conquista
diología, la Fisioterapia y la Pedago- de un título universitario potenciaron,
gía. La participación de la mujer en sin lugar a dudas, su autonomía y su
aquella época inscribe una pauta en el libertad de pensamiento (Soto, 2005).
desarrollo de profesiones para el cui- Esto se hace evidente al conocer que
dado de la comunidad; así mismo, la la creación de los programas acadé-
mujer es un sujeto importante que lu- micos de Terapia Ocupacional, tanto
cha contra el estigma de una sociedad en la Universidad Nacional como en
en donde la capacidad de decisión es- la Universidad del Valle, fueron im-
taba determinada por condiciones de pulsadas por dos médicos, Jorge Pardo
patria potestad y género. y Jaime Villaquirán, respectivamente,
mientras las terapeutas ocupacionales
Reflexiones y conclusiones se encontraban bajo su dirección. Esa
contrastadas situación se transformaría más ade-
lante con las reformas de plan curri-
Como se describe previamente, la cular, por ejemplo, en el paso de la
Terapia Ocupacional parece haberse formación técnica a la licenciatura en
iniciado como programa de forma- la Universidad Nacional de Colombia
ción alrededor de un contexto socio- en 1973 (Escobar & Rodríguez, 2015).
histórico en el cual la mujer adquirió
el derecho de participar en la toma de Este ejercicio reflexivo y las investiga-
decisiones políticas, económicas, edu- ciones que lo provocaron abren una
cativas y sociales, libertad que aparece perspectiva distinta para analizar el
luego de la legitimación del derecho al origen de la Terapia Ocupacional en
voto femenino. Sin embargo, los acon- el país, semejante a las adoptadas en
tecimientos aquí socializados hacen Argentina, Chile o Brasil. En ellas se
referencia al papel de la mujer como avanza en la comprensión de la pro-
un ser sin capacidad de decisión, su- fesión a partir de los contextos socios
jeto de instrucción y sacrificio, por lo históricos mencionados y la aproxi-
cual, su derecho se ejercía mediado mación a historias de vida de mujeres
por su desempeño en profesiones su- que iniciaron esta lucha. Aunque las
bordinadas, paramédicas, de cuidado mujeres de la época no enfrentaran las
del otro. La formación de terapeutas estructuras de poder existentes para
ocupacionales en el país, como se trabajar explícitamente por la equidad
ha descrito, fue en sus inicios prefe- de género, sí lograron utilizar efectiva-

90 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


mente los estereotipos que como mu- lisis histórico del rol y la participación
jeres se les imponían para plantear sus de mujeres y hombres en las trans-
intereses y exigencias en la formación formaciones, luchas y resistencias en
profesional. Fue así como se abrieron cualquier contexto. Estos constituirán
campo en el mundo laboral, mante- aportes a la Terapia Ocupacional para
niendo el reconocimiento social como desarrollar en profundidad la proyec-
cuidadoras del hogar y de los otros, ción de las y los futuros profesionales.
hasta lograr una formación adecuada
en áreas relacionadas con la solidari- Agradecimientos
dad y la asistencia social, pero que so- A Jaqueline Cruz Perdomo, Clara
cialmente continuaban siendo acep- Duarte Cuervo, Aleida Fernández Mo-
tadas como adecuadas para mujeres; reno y Solángel García Ruiz.
utilizaron el rol de madres para crear
la necesidad de recibir la educación y Referencias
el acompañamiento apropiados para
desempeñarlo. Aguilera, M. (2003). Por primera vez, la mu-
jer tuvo derecho a votar en 1853, 150
Así pues, la Terapia Ocupacional se años de la Constitución de la provincia
de Vélez. Revista Credencial Historia,
constituye en una oportunidad que (163), Recuperado de http://admin.ban-
tiene la mujer para declarar su auto- repcultural.org/node/74727
nomía como ser humano y desarrollar
su capacidad de contribuir a la socie- Cohen, L. (2001). Colombianas a la vanguar-
dia. Medellín: Universidad de Antioquia.
dad de una forma distinta a la decla-
rada como don natural. Cabe resaltar Correa, M. (1947, Abril). Contestación a la
que la Terapia Ocupacional colombia- encuesta. Revista Letras y Encajes Sema-
na ha cambiado, que en la actualidad na, (249), 128. Recuperado de http://
muchas terapeutas ocupacionales han www.bdigital.unal.edu.co/50196/1/le-
trasyencajesabril1947.pdf
encaminado su ejercicio a campos
que antes se consideraban masculi- Escobar, X., & Rodríguez, L. (2015). Terapia
nos, y que también hay un número Ocupacional: Una perspectiva histórica
creciente de hombres interesados en desde la Universidad Nacional de Co-
lombia (1966-1989). (Trabajo de grado).
la Terapia Ocupacional, con aspiracio- Bogotá: Universidad Nacional de Co-
nes profesionales diversas. lombia.
Finalmente, hacemos un reconoci- Guevara, E. (1971, 14 de Febrero). El volun-
miento a las mujeres, en particular a tario hospitalario necesita mas colabora-
las terapeutas ocupacionales de las dé- doras. El País, p. 17.
cadas de los sesenta y setenta, quienes Herrera, M. (1993). Historia de la educación
marcaron un punto de partida funda- en Colombia. La República Liberal y la
mental para el desarrollo de la profe- modernización de la educación: 1930-
sión, asumiendo de forma valerosa las 1946. Recuperado de http://www.pe-
decisiones respecto a la construcción dagogica.edu.co/storage/rce/articulos/
rce26_06ensa.pdf
de la profesión y la conformación de
un hogar. Esta también es una invita- López, R. (2002). La universidad femenina,
ción a participar en la lectura y el aná- la ideología de género y el acceso de las

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 91


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92 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


Precursores de la Terapia Ocupacional
en Colombia: sujetos, instituciones, oficios
Forerunners of occupational therapy in Colombia:
subjects, institutions, crafts
Clara Duarte Cuervo1
Aleida Fernández Moreno2
Jaqueline Cruz Perdomo3
Solángel García Ruiz4

Recibido: 5 de febrero 2017 • Enviado para modificación: 18 de febrero 2017 • Aceptado: 22 de febrero 2017
Duarte, C., Fernández, A., Cruz, J., & García, S. (2016). Precursores de la Terapia Ocupacional en Colombia: sujetos, institu-
ciones, oficios. Revista Ocupación Humana, 16 (2), 93-109.

Resumen: La investigación historiográfica en Terapia Ocupacional es un campo propicio


para proyectar estudios subalternos y decoloniales; este artículo hace una aproximación a la
comprensión y el análisis en clave de historia social de la profesión en Colombia. Hablar del
pasado en Terapia Ocupacional significa encontrar los sentidos de la ocupación a través de
las prácticas, las instituciones y los sujetos. El artículo se organiza en tres apartados: uso de
las ocupaciones en hospitales y otras instituciones durante la colonia en el Nuevo Reino de
Granada; prácticas e instituciones hacia la consolidación de la República, y entrada al siglo
XX: de la corrección a la terapia. Se identifican el trabajo y la instrucción en oficios como
opción correctiva y de redención empleada en hospicios, asilos y otras instituciones desde
el siglo XVII. Este recorrido sugiere una constante histórica: los oficios –la ocupación–, como
práctica de las instituciones y bajo principios de caridad y beneficencia, han sido utilizados
para formar, ocupar, corregir, normalizar y, en cualquier caso, hacer productivas a las personas
socialmente marginadas.

Palabras clave: Terapia Ocupacional, historia colombiana, problemas sociales, asistencia


social.

Abstract: Historiographic research in occupational therapy is a favorable field to project


subordinate and decolonial studies. This article tries to make an approach to the understanding
and analysis, in a socio historical mode, of the profession in Colombia. To talk about the past
in occupational therapy means to find the sense of occupation through practices, institutions

1
Terapeuta Ocupacional. Especialista en Administración de Salud Ocupacional. Magíster en Salud Pública.
Investigadora y asesora independiente. Grupo de Historias de Terapia Ocupacional en Colombia - HiTOs.
Nemocón, Colombia. claradc2002@gmail.com
2
Terapeuta Ocupacional. Magíster en Desarrollo Educativo y Social. Doctora en Ciencias Sociales. Profesora
Titular Universidad Nacional de Colombia. Grupo de Historias de Terapia Ocupacional en Colombia - HiTOs.
Bogotá, Colombia. cafernandezm@unal.edu.co
3
Terapeuta Ocupacional. Especialista en Teorías y Métodos Sociológicos. Magíster en Filosofía. Doctoranda en
Educación. Profesora Universidad del Valle. Grupo de Historias de Terapia Ocupacional en Colombia - HiTOs.
Cali, Colombia. jaqueline.cruz@correounivalle.edu.co
4
Terapeuta Ocupacional. Magíster en Desarrollo Educativo y Social. Oficina de Investigaciones y Cooperación,
Secretaría Distrital de Salud de Bogotá. Grupo de Historias de Terapia Ocupacional en Colombia - HiTOs.
Bogotá, Colombia. solecita_co@yahoo.com

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 93


and subjects. The article is organized in three parts: the use of occupations in hospitals and
other institutions during the colony in the Nuevo Reino de Granada; practices and institutions
toward the consolidation of the republic; and the entrance to the 20th century: from
correction to therapy. The use of work and crafts training as a corrective and redemptory
option in shelters, asylums and other institutions from the 18th century is identified. This route
suggests a historic constant: crafts –occupations– as practice in institutions that, under charity
and beneficence principles, have been employed to mold, occupy, correct and normalize
and, in any case, to turn up socially marginalized people into productive beings.

Key words: occupational therapy, Colombian history, social problems, social welfare.

Introducción por un lado, el uso de la laborterapia


“como forma empírica de atender los
Los trabajos sobre la historia de la Te- problemas de salud mental, las defi-
rapia Ocupacional en Colombia son ciencias sensoriales y el retardo men-
escasos. Para inicios del siglo XXI los tal” (Trujillo, 2002, p.474), y por otro,
más visibles habían sido realizados por el interés puesto en el adiestramiento
la terapeuta ocupacional Alicia Trujillo vocacional de personas con limita-
(1989, 2002), quien en 1989 defi- ciones visuales, auditivas o retardo
nió cuatro momentos en el surgimien- mental, como alternativa para su in-
to y actualidad –para la época– de tegración social. Adicionalmente, in-
la “disciplina de la ocupación huma- dicios respecto al manejo dado a las
na”, al primero de ellos lo denominó personas con trastornos mentales o
“precursor disciplinar empírico” (p. 9) cognitivos antes del siglo XX la llevan
y lo ubicó a comienzos del siglo XX. a concluir que para entonces el trata-
Posteriormente, en 2002, presentó miento se limitaría al simple hospe-
una retrospectiva de la profesión en daje o el encierro, la evangelización
cuatro períodos, entre ellos una fase y el alivio espiritual, sin considerarse
precursora referida a los antecedentes posibilidades de actividad u ocupa-
del inicio de la formación en Terapia ción.
Ocupacional en la Universidad Na-
cional de Colombia, en 1966. Dicho Ahondar en la comprensión de las
periodo es el que menos se desarrolla raíces y dinámicas de la profesión a
en ambos estudios. través del tiempo es un ejercicio ne-
cesario para reflexionar acerca de su
A partir de sus pesquisas, la autora lugar en la vida de las personas y su
sostiene que sería solo hasta inicios función en la configuración de la so-
del siglo XX cuando en el país se ha- ciedad, también para fortalecer las
bría empezado a reconocer el valor bases sobre las cuales se construyen
la ocupación en “la rehabilitación, la la identidad y el conocimiento de la
integración social, la utilización del profesión. En consecuencia, este ar-
tiempo y la productividad” (Trujillo, tículo parte de valorar la pertinencia
2002, p.475). Basa esta afirmación de profundizar en las prácticas, las
en algunos hallazgos que evidencian, instituciones y los sujetos precursores

94 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


de la Terapia Ocupacional en el país, Uso de ocupaciones en hospitales
buscando aproximarse a la compren- y otras instituciones durante la
sión del lugar que en diferentes mo- colonia en el Nuevo Reino
mentos ha tenido la ocupación como de Granada
forma de atención a poblaciones his-
tóricamente excluidas. La construcción y adecuación de hos-
pitales en las colonias españolas en
La institución con la que suele asociar- América inició en el siglo XVI, al con-
se la Terapia Ocupacional es el hos- siderarse un elemento necesario de la
pital, ello porque a través del tiempo vida de colonos e indígenas. Algunos
ha estado vinculada con la salud y su de los primeros existentes en lo que
recuperación en personas con trastor- hoy en día se considera territorio co-
nos físicos y mentales. En los orígenes lombiano funcionaron en Santa Ma-
de la profesión en Estados Unidos se ría la Antigua del Darién, Cartagena
señalan además los asentamientos o y Santa Marta; para la segunda mitad
casas en los que las personas pobres, del siglo entrarían en funcionamiento
migrantes y con trastornos mentales otros en Santa Fe, Tunja, Honda, Cali,
eran acogidas desde finales del siglo Medellín y otros lugares. Estas institu-
XIX; en esos lugares se usaban ocu- ciones eran dirigidas y administradas
paciones como forma de tratamiento por religiosos católicos que vinieron a
moral (Peloquin, 1989; Loomis, 1992; América con ese propósito, y bajo una
Reitz, 1992). filosofía de atención caritativa (Rome-
ro, Zambrano & Cárdenas, 2008; Fo-
Con los anteriores referentes como rero, 2011).
punto de partida, se decide rastrear Entre quienes acudían a los hospita-
las instituciones que en Colombia les se incluían enfermos, pobres, pe-
se han dispuesto para responder a regrinos, mujeres embarazadas, niños
las situaciones de discapacidad o de huérfanos y abandonados, ancianos
exclusión social, así como el uso de incapacitados. Para la época el térmi-
ocupaciones, particularmente el tra- no hospital comprendía nosocomios,
bajo y los oficios, como estrategia de hospicios, casas de misericordia, co-
atención en ellas. Se siguen además la fradías, obras pías y patronatos de le-
laborterapia y los sujetos de atención gos (Forero, 2011). Su misión no era
que identificó Trujillo (1989, 2002) exclusivamente la atención de enfer-
como precursores de la Terapia Ocu- medades, como lo entendemos ac-
pacional. Teniendo en cuenta la dis- tualmente; sus acciones se dirigían
ponibilidad de información, se hace también a otras personas objeto de
un rastreo amplio del periodo com- la caridad que brindaba la iglesia. No
prendido entre la época de la colonia obstante, se conoce que a través de
y el final de la década de 1950. Si ordenanzas emitidas por el Rey Felipe
bien se encuentran algunos indicios II, hacia mediados del siglo XVI, se dio
de instituciones y sujetos en el siglo el mandato de fundar hospitales se-
XVI, la mayor parte de los hallazgos parados para quienes padecieran en-
datan del siglo XVIII en adelante. fermedades consideradas contagiosas,

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 95


de manera que se evitara afectar por Otros historiadores en los campos de
su proximidad al resto de los habitan- la educación y de la infancia (Saenz
tes (Romero, Zambrano & Cárdenas, Obregón, Saldarriaga & Ospina, 1997;
2008; Forero, 2011). Martínez Boom, 2015) muestran que,
desde finales del siglo XVIII y duran-
En las fuentes consultadas no se en- te el siglo XIX, la práctica de oficios
contraron indicios del uso de ocupa- en talleres y hospicios6 se usaba para
ciones como parte de la atención que corregir a vagos, mendigos y pobres
se prestaba en estas instituciones en de ambos sexos, de diferentes eda-
el siglo XVI. Sin embargo, algunos in- des y etnias. De acuerdo con Ramírez
vestigadores han identificado formas (2000) y Martínez Domínguez (2009),
de trabajo y de instrucción en oficios los hospicios se habrían constituido en
desde el siglo XVII en algunas de ellas. la segunda mitad del siglo XVIII como
Restrepo Zea (2007), por ejemplo, “la institución reeducadora por exce-
refiere que la práctica del concertaje5 lencia” (Martínez Domínguez 2009, p.
habría incluido a los niños pobres o 226), en consecuencia, sus programas
abandonados, con el favor de institu- procuraban
ciones creadas para su atención. Es el
establecer un marco de actividades
caso de la Casa de Expósitos y de Re-
ordenadas y distribuidas a lo largo
cogidas, constituida en Santa Fe para de la jornada de modo que ocupa-
el año 1642, la cual “se ocupó de criar ran todo el tiempo material de los
a los lactantes, de instruir a los niños, hospicianos. Se trataba de estructu-
de albergar a las viudas y beatas, y de rar la vida personal de los internos
moralizar a las mujeres remitidas por adaptándola a los ritmos y hábitos de
la justicia (...) el centro guardaba a los la vida laboral normalizada. Como ca-
hijos de criollos empobrecidos, na- sas de educación y trabajo, sus princi-
turales, esclavos y mestizos para que pales actividades fueron la ocupación
aprendieran la doctrina y algunos ofi- en talleres y fábricas propias, general-
cios” (Restrepo Zea, 2007, p.266). De mente, y la instrucción elemental, que
acuerdo con la autora, cuando los ni- se añadía para los niños y las niñas,
ños allí internados alcanzaban la edad durante unas horas al día. (Martínez
de seis años eran dados en adopción Domínguez, 2009, p. 227).
a familias o entregados a maestros o
artesanos para que con ellos apren- De nuevo, el fin de estas instituciones
dieran y desempeñaran un oficio. La y prácticas era alejar de los vicios –a
práctica del concertaje laboral de ni- través de ocupaciones–, instalar los
ños abandonados se habría extendido hábitos y rutinas que se consideraban
hasta el siglo XIX. propios de la vida digna y con ello

5
El concertaje se estableció como una forma de contrato que obligaba a un indígena a realizar trabajos agríco-
las sin recibir o recibiendo muy poco salario (Restrepo Zea, 2007).
6
Según Martínez Domínguez (2009), la palabra “hospicio” significa, “un lugar donde refugiarse” (p. 225). Estas
instituciones dependían desde el Concilio de Trento (1545 -1563) de la Iglesia, por lo tanto, estaban bajo su
dirección, administración y supervisión; solo hasta el reinado de Carlos III en España, en el siglo XVIII, se con-
templaría la posibilidad de establecer hospicios de carácter secular.

96 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


proteger a las “personas de bien”. El la peligrosidad que la persona revistie-
encierro en las instituciones, la ree- ra para los demás. Su tratamiento “in-
ducación de hábitos, la realización de cluyó acciones de tipo farmacéutico,
oficios y la capacitación para el trabajo pero también reclusión, encierro, ais-
funcionaron entonces como estrate- lamiento e incomunicación” (p. 66).
gias para redimir y reformar el com- No obstante esta parece ser la conduc-
portamiento, que resultaban además ta acostumbrada para la época, Rosse-
funcionales a los intereses de la Coro- lli (1996) y Cruz Montalvo (2011) co-
na por preservar el orden y la produc- inciden en citar el tratado que Sobre
tividad en sus colonias. los Hipocondriacos7 escribió José Ce-
lestino Mutis a finales del mismo siglo,
De esta manera, tras el rastro de pre- y que según sus biógrafos estaría ba-
cursores de la Terapia Ocupacional sado en su propia experiencia con la
se va encontrando que instituciones enfermedad. Resulta interesante que
como los hospicios, las casas de expó- en él Mutis recomienda la actividad
sitos y recogidos, y estrategias como física moderada y la lectura de libros
el concertaje son antecedentes del como parte del tratamiento frente a
uso de las ocupaciones para prevenir esta afección. Aunque en las búsque-
la vagancia y para volver productivos, das realizadas no se encontraron otros
útiles, piadosos y obedientes a los ni- indicios relativos al uso de actividades
ños abandonados y a quienes eran
como parte del tratamiento de trastor-
considerados incorregibles de acuer-
nos mentales en esa época, este abre
do a las creencias y valores morales
una ventana para investigaciones pos-
de la época. Precursores de la Tera-
teriores que sigan esa pista.
pia Ocupacional en Colombia pare-
cen ser los sujetos excluidos y, en las Prácticas e instituciones hacia la
prácticas, el uso de los oficios como consolidación de la República
forma de corrección moral, útil para
algunas capas de la sociedad y para Las guerras en búsqueda de la inde-
el Estado. pendencia de España son un hito cen-
tral en la historia de hispanoamérica.
En cuanto a la atención de enfermos No obstante, los textos consultados
de locura, los hallazgos de Cruz Mon- reportan poco acerca de la atención
talvo (2011) indican que incluso en el de los heridos o las prácticas de re-
siglo XVIII no se habrían destinado aún habilitación en los primeros años del
instituciones para ello, puesto que las siglo XIX.
Ordenanzas Reales no contemplaban
qué debía hacerse con estas personas. Posteriormente vendría un periodo de
Ante esta situación, el confinamiento múltiples reformas en la organización
en cuarteles, cárceles, hospitales ge- de las antiguas colonias. En el contex-
nerales, o incluso en sus propias casas, to de la necesidad de conformar un
era la práctica común que respondía a sistema de organización social, polí-

7
De acuerdo con Roselli (1996), a lo que Mutis denominaba en su tratado hipocondrías, se le llamaría en la
actualidad “depresiones”.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 97


tico y económico que dejara atrás la válidos”; aquellos que aunque podían
impronta colonial, Botero (2012) se- laborar se dedicaban a la mendicidad
ñala la formulación de leyes contra la o a la vagancia, indeseados. Los po-
vagancia en la primera mitad del siglo bres “deseados” eran sujetos de asis-
XIX como una respuesta estatal ante tencia social, los “indeseados”, de jus-
el problema de grupos de pobladores ticia y medidas represivas (Hernández,
que se hallaban en los márgenes del 2002; Botero, 2012).
orden social. La ociosidad, la pereza y
la vagancia debían impedirse, de ma- Cabe subrayar que para la época el
nera que las ocupaciones de la época “inválido” no era visto como apto para
destinadas a la masa de pobres cum- trabajar; en consecuencia, si bien la
plían la función de proteger tanto al mendicidad se consideraba una con-
Estado como a los nobles. ducta penalizable, esto no aplicaba
para ellos, pues les estaba permitida
De acuerdo con Botero (2012), “la (Ley de 3 de mayo de 1826, citada
base de la República era la virtud; en por Botero, 2012). Llama la atención
consecuencia, el individuo virtuoso que dichas personas no estaban inclui-
debía ser aquel sujeto apto en la mo- das en el circuito del trabajo produc-
ral, en el trabajo y en la productivi- tivo; como es conocido, más adelante
dad” (p.56). Esta concepción sigue la la Terapia Ocupacional jugaría un pa-
línea de las prácticas de concertaje y pel central en su integración a este a
de corrección en talleres y hospicios, través de la rehabilitación.
antes mencionados, que habrían ini-
ciado en el siglo XVII. Así, en la Repú- Retomando las respuestas ante la po-
blica se consolidaba la práctica de ofi- breza, el trabajo, en tanto virtud, hacía
cios como virtud y como mecanismo parte de ellas. Buscando convertirlos
para corregir la vagancia. en sujetos útiles, las condenas para
vagos y delincuentes contempladas en
Las leyes que aludían a los pobres en las leyes de la primera mitad del siglo
la Gran Colombia8 partían de estable- XIX apelaban a ocupaciones peligrosas
cer distinciones entre ellos, con base para la vida y de cierta manera escla-
en las cuales se definían las respuestas vizantes; entre ellas se incluían tra-
que se les destinaban. Así, entre los bajos forzados en la colonización de
pobres se diferenciaban los deseados territorios inhóspitos, la construcción
–de bien, de “solemnidad”–, de los de caminos y el servicio a los ejércitos
indeseados - vagabundos, delincuen- (Botero, 2012).
tes. Uno de los elementos definitivos
en esta clasificación era precisamente De otro lado, para la década de 1840
la capacidad de trabajar: quienes no se empezaría a considerar el trabajo en
la tenían se consideraban pobres “in- los lugares de reclusión al servicio de

8
En el siglo XIX, lo que actualmente es la República de Colombia hizo parte de conformaciones políticas y
territoriales que se fueron modificando y recibieron diferentes denominaciones: Gran Colombia (1819 - 1831),
Nueva Granada (1830 - 1858), Confederación Granadina (1858 y 1863), Estados Unidos de Colombia (1863
a 1886), República de Colombia (Desde 1886).

98 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


los intereses del Estado. Botero (2002) De manera similar, la instrucción en
y Cordovez Moure (2006) coinciden oficios a niños sin hogar, práctica que
en señalar el trabajo de prisioneros de como se ha mencionado existía desde
la Casa de Reclusión de Guaduas en el siglo XVII, permaneció e incluso se
el procesamiento del tabaco, industria fortaleció durante el siglo XIX en el te-
que para entonces hacía parte de los rritorio colombiano (Cordovez Moure,
monopolios estatales y que sería du- 2006; Restrepo Zea, 2012). Restrepo
rante ese siglo un motor importante de Zea (2007) relata que para 1834 el
la economía (Acevedo y Torres, 2016). antiguo Hospicio de Bogotá pasó a ser
La figura de los oficios se mantenía una casa de corrección cuyo objeto,
como medio para salir de la vagancia y bajo principios filantrópicos, era “en-
acceder a la moral católica, al tiempo cerrar a los condenados (...) con el fin
que creaba condiciones de mano de que enmendaran las faltas cometidas,
obra para la producción económica y y reformar las costumbres de los niños
el progreso, necesarios en el proyec- abandonados a través de la destreza
to de consolidación de la República. en un oficio” (p. 269). Así mismo, en
Esta alusión al trabajo en las prisiones 1882 abrió sus puertas la Sociedad
aparece como un antecedente de las Protectora de Niños Desamparados,
prácticas de Terapia Ocupacional en en donde los infantes cada día acu-
los centros de reclusión. dían a la escuela tres horas y al apren-
dizaje en talleres durante ocho horas.
Entre los sujetos de las leyes en contra Cordovez Moure (2006) por su parte
de la vagancia se consideraba también da cuenta de una casa de beneficen-
a las prostitutas. Según Botero (2012), cia fundada en 1881 en la capital, por
a ellas se les destinaban acciones po- iniciativa particular de “caballeros ca-
licivas pero también de instrucción y ritativos”; allí se recogía a los peque-
ayuda, en tanto se pensaba que po- ños que vagaban por las calles y se les
dían ser rehabilitadas a través del tra- enseñaban oficios, “los niños trabaja-
bajo. ban en los talleres de carpintería, za-
Otro precursor de la Terapia Ocu- patería, talabartería y sastrería; apren-
pacional parece ser la necesidad de dían a tocar algunos instrumentos de
contrarrestar la vagancia, la ociosidad música, y los más adelantados servían
y las malas conductas, ante las cuales como cajistas en la imprenta que ha-
resultaban apremiantes la prohibición bía en la casa” (p. 1456). La casa pasa-
y la cura, instituidas ahora a través de ría en 1888 a estar a cargo de la Junta
la ley. El trabajo y los oficios se ratifi- General de Beneficencia del Departa-
caron como estrategia para tal fin, y mento de Cundinamarca y a ser ad-
variaron en esfuerzo, peligrosidad y ministrada por religiosas9. De nuevo,
talento según el tipo de pobre que se se encuentran los oficios asociados
fuera y el género. a corregir, mejorar y prevenir. Poste-

9
Es importante tener en cuenta que las relaciones entre la Iglesia Católica y el Estado fueron conflictivas desde
la independencia. Para mediados del siglo XIX se daría una separación entre ellos e incluso se expulsarían del
territorio algunas comunidades que venían haciéndose cargo de entidades de educación y de caridad. Con

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 99


riormente, en las décadas de 1960 a y locas, como se les denominaba10,
1980, algunos de ellos (carpintería, za- obedeció primordialmente a la ne-
patería, entre otros) fueron usados en cesidad de preservar la tranquilidad
Terapia Ocupacional con las personas y el orden público, aunque también
con discapacidad. a valores morales de caridad y mise-
ricordia que alentaban a prestar ayu-
Restrepo Zea (2007) sostiene que has- da a los necesitados (Figura 1). Sería
ta 1885 se siguió practicando el con- solo hasta 1937 cuando se configu-
certaje laboral de niños y niñas desde rarían estos asilos como lugares de
estas instituciones con la anuencia del tratamiento y espacios para la clínica
Estado, esto en vista de las necesida- neupsiquiátrica (Ospina, 2006). De
des de mano de obra en haciendas, hecho, Quevedo et al. (2010) refie-
casas y talleres, y posteriormente en ren que durante el proceso de me-
las industrias, que para las últimas dé- dicalización del Hospital de Caridad
cadas de ese siglo se fortalecerían. (después Hospital San Juan de Dios
Desde pequeños los huérfanos y de Bogotá), en la década de 1870, los
abandonados, así como los infracto- profesores de medicina consideraban
res de la ley, eran corregidos a través que “los locos y los incurables debe-
de la enseñanza y el trabajo en oficios rían ser trasladados a otras institucio-
manuales. La práctica del oficio y las nes (asilos) para dejarles espacio en
virtudes asociadas al mismo eran una las enfermerías a los enfermos cuyas
manera de disciplinar y hacer obe- patologías fueran de interés para el
dientes a los niños. Estas prácticas, conocimiento científico, puesto que
bajo la figura de la caridad y luego estas eran las que servían para la en-
de la beneficencia, actuaron como señanza de la clínica” (p. 47).
estrategias promovidas para alcanzar
el progreso y el bien moral de ciertos Figura 1. Fiesta de caridad en favor del Asilo
de Locas de Bogotá, 1882.
sectores de la sociedad.
Por otra parte, diferentes autores
concuerdan en que la apertura de las
primeras instituciones destinadas a la
atención de las personas con trastor-
nos mentales habría ocurrido alrede-
dor de 1870 (Roselli, 1986; Ospina,
2006; Romero, Zambrano & Cárde-
nas, 2008; Quevedo et al., 2010). Se-
gún Ospina (2006) y Sacristán (2009), Fuente: Gran Fiesta de Caridad, 24 de julio de 1882.
la conformación de los asilos de locos

la firma del Concordato, en 1887, estas relaciones se restablecieron (González, 1993), de ahí el regreso de
religiosos al manejo de los hospicios y otras instituciones.
10
También se les denominaba casas de alienados mentales, aunque en los textos consultados es más frecuente
la alusión a los “asilos de locos”; posteriormente se les llamaría “manicomios”. A este respecto, Gutiérrez y Ma-
rín (2012) señalan que la Casa de Alienados en Medellín se convirtió en 1882 en el Manicomio de Antioquia.

100 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


Los hallazgos anteriores coincidirían La entrada al siglo XX:
con lo concluido por Trujillo (1989, de la corrección a la terapia
2002), en el sentido que el trata-
miento de las personas con trastornos En las primeras décadas del siglo XX
mentales antes del siglo XX se limitaría el país entraba a la modernidad y el
al aislamiento o el encierro y el ali- capitalismo, al tiempo que se adapta-
vio espiritual. Sin embargo, un infor- ba al Estado centralizado, protector y
me del señor Bernardino Medina a la católico delineado en la Constitución
Junta de Beneficencia en 1881 mues- de 1886. Estas circunstancias tuvieron
tra, cuando menos, la intención de efectos sobre las instituciones que se
emplear telares con las personas con vienen rastreando. Durante la Rege-
trastornos mentales internadas en el neración11 se reforzó la asistencia de la
Asilo de Varones de Bogotá. En tal do- Iglesia ante circunstancias de abando-
cumento el señor Medina reportaba: no, discapacidad, mendicidad y otras
“Los telares en que se tejían frazadas, (Ramírez, 2002). Al mismo tiempo, los
en lo cual se ocupaban los asilados, saberes y prácticas para contrarrestar
se hallan arrinconados en un cuarto” la degeneración de la raza y aumen-
(párr. 7). La pregunta por el lugar de tar la productividad en las regiones,
los oficios en los asilos de locos y locas así como las transformaciones en el
queda abierta, y amerita una identi- saber médico y pedagógico, permea-
ficación de registros de archivo que ron la organización y las prácticas en
permitan darle respuesta en investiga- hospitales, hospicios, asilos, escuelas
ciones futuras. y casas de menores (Quevedo et al.,
2010; Sánchez Salcedo, 2014; Yarza,
Adicionalmente, aunque sale del al- Ramírez, Franco & Vásquez, 2015).
cance de esta indagación, resultan
de interés las referencias de Roselli Para 1903, un documento de la Socie-
(1996) a los tratados que sobre el tra- dad de San Vicente de Paul titulado
tamiento de las afecciones mentales se “Memoria del Presidente” (Figura 2)
habrían generado en el siglo XIX en el hace referencia a cinco instituciones
país. Lo relatado por este autor hace en las cuales la práctica de oficios
pensar que algunos médicos de la cumpliría una doble función: ayudar
época habrían podido ser influencia- en la obtención de ingresos para la
dos por los principios del tratamiento manutención de las mujeres asiladas,
moral promulgados por Philipe Pinel por un lado, y educarlas para la vida,
a finales del siglo XVIII. Cabe recordar por el otro. Tales instituciones eran: el
que tales principios se han relaciona- Orfelinato de Jesús, María y José para
do con la Terapia Ocupacional en sus niñas huérfanas y la Escuela Práctica
orígenes en Estados Unidos (Peloquin, para la “enseñanza de letras, oficios
1988). e industrias” a niñas externas pobres,

11
Se conoce como Regeneración al proceso político y social que marcó la dinámica colombiana a finales del
siglo XIX e inicios del XX. En este proceso se enfatizaba el regreso del poder de la iglesia católica a los asuntos
nacionales y el fortalecimiento de un Estado centralizado y protector. Entre los hitos más significativos de este
proceso se incluyen la Constitución de 1886 y la firma del Concordato de 1887 (Cortés, 1997).

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 101


dirigidos por las Hermanas Terciarias prácticas caritativas de la iglesia (Mar-
Dominicas; el Taller de Costuras para tínez Domínguez, 2009) y con las le-
señoritas pobres y la Escuela de Ofi- yes contra la pobreza y la mendicidad
cios para huérfanas de corta edad y (Botero, 2002). Los oficios continúan
pobres, a cargo de las Hermanas de revelándose como fuente de forma-
la Caridad, y el Asilo de San Vicente. ción moral, religiosa y económica para
hacer de las niñas y las mujeres po-
Como se aprecia en el documento (Fi- bres, personas dignas de trabajo, bien
gura 2), la existencia de estas casas y fuese en la industria o empleadas en
su estilo de funcionamiento, justifica- casas particulares. En cualquier caso,
dos en la urgencia de facilitar medios la enseñanza y la práctica de oficios
de supervivencia a las viudas y huérfa- seguían funcionando como estrategia
nas que había dejado la Guerra de los para combatir las malas costumbres y
Mil Días, guardan clara relación con la pobreza, todo esto bajo los precep-
las reportadas en el siglo XVII, con las tos de la moral católica.

Figura 2. Memoria del Presidente y discurso del señor Francisco de Paula Barrera, 1903.

Fuente: Sociedad San Vicente de Paul, 1903.

También en el contexto de la atención cia de Cundinamarca, en la década


de niños y niñas pobres o abandona- de 1910, de tres establecimientos: el
dos, Sánchez Salcedo (2014) refiere Hospicio, el Asilo de Niños y el Asilo
la creación por parte de la Beneficen- de Niñas Desamparadas. Estos eran

102 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


administrados y atendidos en parte dagogía de “anormales” se aplicó en
por religiosas, aunque los médicos y diferentes departamentos de Colom-
maestros entrarían a jugar un papel bia, entre 1920 y 1950, en institucio-
importante en la determinación de nes como casas de menores y escuelas
los programas y formas de atención de trabajo, colonias vocacionales, es-
que debían brindarse. Sus objetivos cuelas y aulas especiales, en las cuales
incluían la protección de los infantes se llevaban a cabo procesos de medi-
y ofrecerles una alternativa de sub- calización y normalización, entre ellos
sistencia. El autor señala además que la educación concebida como tal, y
las rentas de los establecimientos eran que incluían “métodos de enseñan-
complementadas con el producido za especial y orientación profesional
de los talleres en los que trabajaban o en oficios” (p. 5). La educación de
los asilados, de manera que a los pro- los llamados “retrasados” ocurría en
gramas de asistencia e higiene se les instituciones en las que confluyeron la
sumaron la fundación de dos escue- pedagogía de anormales, la medicina,
las primarias y de talleres de herrería, la psicología y el uso de oficios. Un
latonería, carpintería y talabartería. La vínculo estrecho se empezaba a tejer
imagen (Figura 3) muestra que para entre los considerados “anormales”, la
1921 las niñas asiladas en institucio- educación especial y la enseñanza de
nes de la Beneficencia realizaban ade- oficios; esta última, facilitando ade-
más tareas en la huerta. más su entrada paulatina al circuito
del trabajo. Los anteriores elementos
En referencia a otros beneficiarios de muestran precursores de la Terapia
la asistencia para inicios del siglo XX, Ocupacional ligados a los oficios, aho-
Yarza, Ramírez, Franco & Vásquez ra embestidos de los saberes conside-
(2015) refieren que la educación o pe- rados científicos.

Figura 3. Niñas del Asilo de Preservación trabajando en la huerta.

Fuente: Junta General de Beneficencia de Cundinarmarca, 1921.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 103


A este respecto, en septiembre de Todas estas instituciones empezaron
1935 el Profesor Torres Umaña le re- a incorporar saberes considerados
portaba al director del Instituto para modernos, como la medicina y la pe-
Ciegos que la alimentación en dicho dagogía, los cuales estaban para en-
establecimiento era “suficiente como tonces atravesados por ideas sobre la
cantidad global de energía de acuerdo regeneración de la raza, y que a su
con el clima y de acuerdo con el tra- vez alimentaban las discusiones acer-
bajo realizado por los asilados” (Torres ca de la infancia y su manejo (Sán-
Umaña, 1936, p. 550). La fotografía chez Salcedo, 2014; Yarza, Ramírez,
Cestería, de Luis Benito Ramos (1936) Franco & Vásquez, 2015). Si bien en
(Figura 4), hace precisamente alusión los textos revisados no se hacen alu-
al trabajo de los niños en uno de los siones concretas a la normalización
talleres de ese establecimiento12. Adi- o la medicalización de los oficios en
cionalmente, Trujillo (2002) refiere estos establecimientos, es posible
que a partir de 1954 la Asociación Na- plantear que la práctica del uso de
cional del Niño Retardado empezó a talleres y oficios, además de sostener
ofrecer el Programa de adiestramiento el modelamiento de sujetos producti-
en oficios y actividades manuales. vos, pudo haberse empezado a con-
figurar en los primeros años del siglo
XX como tratamiento, es decir, como
Figura 4. Cestería, de la serie: Una Obra. El Insti-
tuto Colombiano para Ciegos. terapia, bajo la premisa de que estar
ocupados hacía útiles y virtuosos a
quienes se consideraban menos ca-
pacitados por la naturaleza.
Entre tanto, en los documentos relati-
vos a las instituciones que atendían a
las personas con trastornos mentales es
posible identificar con mayor claridad
cómo la actividad se va configurando
como tratamiento. En este sentido,
Casas (2008) refiere que para 1914 la
reglamentación del Manicomio De-
partamental de Antioquia, contempló
la actividad de los internos dentro del
proceso de tratamiento y asilo. Se re-
comendó entonces mantenerlos tra-
Fuente: Ramos, 1936.
bajando en talleres y ocuparlos en ofi-

12
Este es un tema relevante, pues usualmente se ubica la creación del Instituto Colombiano para Ciegos
-INCI en 1955, desconociendo algunos de sus antecedentes: el 11 de marzo de 1899, siendo Gobernador de
Cundinamarca Marcelino Vargas, firmó el Decreto número 33 “Por el cual se funda un Instituto para Ciegos
en la Ciudad de Bogotá”. Posteriormente, en 1903 (Decreto 179 del 10 de junio), se quiso revivir la idea de
una escuela para ciegos en Bogotá. En 1925 se fundó en Medellín la primera escuela para personas ciegas que
funcionó en Colombia (Decreto 4 del 27 de enero de 1925), y con la Ley 56 del 2 de noviembre de 1925 se
creó un instituto de sordomudos y ciegos en la capital de la República (Jiménez, 1999).

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cios domésticos, el cultivo de jardines dados por el director Carlos Gonzá-
y árboles y la agricultura en general. En lez, resolvieron crear un lugar donde
materia de recreación, se recomendó los pacientes pudieran ir a aprender
en este reglamento la proyección de a realizar una actividad y salir de su
películas y sesiones con gramófono (p. ocio. La llamada laborterapia comen-
137-138). zó a funcionar con actividades de car-
Si bien no se usa en ese documento pintería y sastrería, a las cuales luego
el término laborterapia para denomi- se agregaron colchonería y zapatería.
nar dichas prácticas, su descripción Así como en el siglo XVIII aprender
coincide con la definición que de y practicar oficios se hacía necesario
sus diferentes modalidades se hacía para evitar la vagancia, contrarrestar la
en 194413. Algunos años después, en pobreza y la mendicidad; ahora, ocu-
1954, se establecería en el Hospital parse en estas labores era una virtud
Mental de Antioquia14 el Departamen- que también debía inculcarse en los
to de Ergoterapia15, del cual hacían pacientes psiquiátricos y que entraba
parte áreas de deporte, espacios de al repertorio de la cura.
socialización y actividades manuales;
Estas alusiones marcan un giro en lo
esta sección, además de brindar un
relacionado con la ocupación de las
ambiente saludable, cumplía la fun-
personas en los asilos para enfermos
ción de reprimir comportamientos
mentales. Los beneficios de la ocupa-
considerados anormales (Cadavid,
ción, en este contexto histórico, pue-
2015). Ya Trujillo (2002) había iden-
den entenderse en el sentido de ha-
tificado experiencias de laborterapia,
cerse cargo de las actividades de auto-
ludoterapia y ergoterapia para perso-
cuidado, así como aprender y realizar
nas recluidas en hospicios y sanatorios
oficios asignados por la cultura a una
de Medellín, Bucaramanga y Bogotá,
clase social y a un género, lo cual re-
especialmente en la década de 1950,
sultaba congruente con los discursos
como precursores de la Terapia Ocu-
sobre la regeneración de la raza que
pacional en Colombia.
se incorporaron en la vida política y
Un reporte extenso del uso de la la- social del país en las primeras décadas
borterapia en el país se encuentra del siglo XX. Dentro de estas posturas,
en un texto de Sanín (1976). En él se cultivar las virtudes de la higiene y el
afirma que para 1965 en Sibaté, los trabajo se consideraba una manera de
miembros del “Club de los Externos” contrarrestar la degeneración racial
del Hospital Julio Manrique, respal- que agobiaba al país y frenaba su pro-

13
En el Tratado de Psiquiatría de Vallejo Nágera de 1944 (Citado por Conseglieri, 2008), se describían las
modalidades de la laborterapia así: “los trabajos manuales (trabajos domésticos, como en la cocina, despensa,
lavandería y costura; trabajos agrícolas como granja, huerta, parque o jardín; manufacturas como talleres car-
pintería, sastrería, panadería; trabajos de construcción o albañilería), trabajos intelectuales (oficinas del hospital
o auxiliares de los practicantes), o la ocupación de los enfermos en las horas de descanso (juegos sencillos,
teatro, cine)” (p. 142).
14
Antes Manicomio Departamental de Antioquia.
15
Esta alusión a la ergoterapia merece especial consideración, teniendo en cuenta que aún en la actualidad esta
denominación se usa en algunos países como sinónimo de Terapia Ocupacional.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 105


greso (Quevedo et al., 2010; Ospina contemporáneas resultan ser hegemó-
& Runge, 2016). nicos y a veces eugenistas.
Los primeros años de la década de Durante los siglos XVIII y XIX la ocupa-
1960 anunciaban la llegada de las pri- ción actuó como una estrategia para
meras terapeutas ocupacionales y de educar, hacer útiles y gobernar a los
la Terapia Ocupacional al país (Truji- empobrecidos, y de esa manera ca-
llo, 2002; Escobar & Rodríguez, 2015; minar hacia la modernidad y la pro-
Fernández, Cruz, García, & Duarte, ducción capitalista. Es de anotar que
2016). Las instituciones y prácticas uno de los referentes históricos para
que hasta aquí se han reseñado cons- la creación de la Terapia Ocupacional
tituyen parte de las bases sobre las fue la afiliación al Movimiento de Artes
cuales ese nuevo saber se instaló en y Oficios, que más allá de la industria-
el territorio colombiano. La forma en lización derivada de las revoluciones
que esas prácticas, saberes, discursos industriales, buscaba la recuperación
y sujetos se encontraron hace parte y dignificación del trabajo manual y
de las exploraciones que continúan artesanal con significado para las per-
y seguirán siendo materia de investi- sonas, asuntos que se reconfiguran en
gación para los diferentes grupos que épocas posteriores.
conforman el macroproyecto Historias
de Terapia Ocupacional en Colombia Estos antecedentes rastreados, entre
(Fernández, García, Duarte & Cruz, ellos la laborterapia y los talleres de
octubre de 2015). artes y oficios, si bien no muestran la
existencia de la Terapia Ocupacio-
Reflexiones finales y conclusiones nal antes del siglo XX, si empiezan
a configurar precursores del uso de
El trabajo, los oficios y su función oficios que con la modernidad, la
como opción correctiva y de reden- cientifización y la medicalización ha-
ción empleada en hospicios, asilos brían adoptado la forma de terapia.
y otras instituciones destinadas a las Como hipótesis inicial, se trazan las
personas consideradas peligrosas u tensiones existentes entre el capita-
objeto de caridad y beneficencia se lismo y la caridad/ filantropía en la
sugieren como constante histórica y se Terapia Ocupacional, las cuales me-
delinean como precursores de la Tera- recen posteriores diálogos y debates,
pia Ocupacional en Colombia, prác- relacionados con las que hoy día se
ticas que han sido tensionadas desde denominan Terapias Ocupacionales
visiones subalternas y decoloniales. Sociales y del Sur.
Desde el siglo XVII, el uso de ocupa-
ciones como dispositivo para corregir, Hasta el siglo XX los “inválidos” no
hacer obedientes y encaminar hacia la hicieron parte del circuito de produc-
vida virtuosa a pobres y delincuentes ción capitalista, la Terapia Ocupacio-
resulta funcional para contrarrestar la nal fue central en su incorporación a
vagancia y las malas costumbres, ello este por medio de la rehabilitación.
en favor de intereses sociales conside- Durante las guerras mundiales y con
rados superiores y que desde miradas la urgencia de la recuperación de los

106 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


soldados heridos para volver al fren- Cadavid, A. (2015). Los locos también hacen
te de batalla, las intervenciones de las historia. Salus Historia de la Salud, 1 (1),
27-58.
auxiliares de reconstrucción fueron tan
eficaces y eficientes que se incorpora- Casas Orrego, Á. (2008). Desplazamiento
ron a los sistemas de rehabilitación y y aislamiento. Alienados mentales en la
marcaron una tendencia de género en ciudad de Medellín. 1878-1930. Ascle-
la profesión. pio, 60 (2), 119-142.

Conseglieri, A. (2008). La introducción de


Por último, la ubicación de estos ha- nuevas medidas terapéuticas: entre la la-
llazgos en los discursos críticos sobre borterapia y el electroshock en el Mani-
el uso de la actividad o de las ocu- comio de Santa Isabel. Frenia. Revista de
paciones como dispositivos de nor- Historia de la Psiquiatría, 8 (1), 131-160.
malización o dominación, a través de Cordovez Moure, J. (2006). Reminiscencias
lo que después se desarrollaría como de Santafé y Bogotá. Bogotá: Fundación
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con los puntos de inflexión que al Cortés, J. (1997). Regeneración, intransigen-
respecto ha trazado Michel Foucault cia y régimen de cristiandad. Historia
en sus escritos sobre Vigilar y Casti- Crítica, (15), junio-diciembre, 3-12.
gar, la biopolítica y otros. Esto abre,
por supuesto a futuro, otras ventanas Cruz Montalvo, O. (2011). Expresiones de
la locura en el virreinato de la Nueva
de análisis y reflexión. Dado que se Granada durante el siglo XVIII. Frenia.
impone el valor positivo del trabajo Revista de Historia de la Psiquiatría, 11
productivo, la crítica sobre el sentido (1), 47-66.
de la ocupaciones en el sistema ca-
Escobar, X., & Rodríguez, L. (2015). Terapia
pitalista se hace necesaria para que Ocupacional: Una perspectiva histórica
la Terapia Ocupacional ayude a sig- desde la Universidad Nacional de Co-
nificarlas como prácticas de sí16 y no lombia (1966- 1989). (Trabajo de grado
perpetúe prácticas culturales de sub- de pregrado). Bogotá: Universidad Na-
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Social y de la Cultura, 39 (2), 41-68. yecto Historias de Terapia Ocupacional

16
Las prácticas de sí son, en resumen, aquellas a través de las cuales los sujetos actúan de manera deliberada
sobre sí mismos para autotransformarse (Sáenz Obregón. 2014).

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 107


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Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 109


Lecturas y relatos históricos de la Terapia
Ocupacional en Suramérica.
Una perspectiva de reflexión crítica1
Readings and historical accounts of Occupational Therapy
in South America. A critical reflection perspective
Alejandro Guajardo Córdoba2

Recibido: 13 de junio 2016 • Enviado para modificación: 22 de agosto 2016 • Aceptado: 20 de noviembre 2016
Guajardo, A. (2016). Lecturas y relatos históricos de la Terapia Ocupacional en Suramérica. Una perspectiva de reflexión
crítica. Revista Ocupación Humana, 16 (2), 110-117.

Resumen: Esta reflexión propone originalmente a la Terapia Ocupacional como un disposi-


tivo tecnológico (profesión) de carácter histórico y social. Su desarrollo y devenir deben ser
comprendidos y explicados en su estrecha relación con la historia social y política de la región
latinoamericana. El fundamento originario de concepción anglosajona ordena y domina los
conceptos y métodos de nuestra praxis en las primeras décadas, esto pone al oficio en la re-
gión en un orden subalterno. Desde una posición crítica, se debate la necesidad de construir
una historia propia, descolonizada, desde el Sur, que sitúe el quehacer disciplinar y profesio-
nal en estrecha vinculación con los problemas sociales, económicos y culturales que afectan a
los grandes grupos humanos excluidos; asimismo, el desafío ético de una Terapia Ocupacio-
nal comprometida con la humanización y la libertad humana. De otro lado, se problematiza
la expansión del oficio bajo el alero de políticas públicas y sociales, y su estrecha implicación
de carácter biopolítico; también, la manera en que se moldean sus objetivos, conceptos y
métodos. Finalmente, se propone una Terapia Ocupacional crítica, ética, fundamentada en
los derechos humanos, reflexiva, autoconsciente y permanentemente en rebeldía consigo
misma y con el contexto social.

Palabras clave: Historia, Terapia Ocupacional, América del Sur, ciencia y sociedad

Abstract: This reflection proposes originally occupational therapy as a technological device


(profession) of historical and social character. Its development and evolution must be
understood and explained in its close relation with the social and political history of the Latin
American region. The original foundation of Anglo-Saxon conception leads and dominates
the concepts and methods of our praxis in the first decades of occupational therapy and this
places our profession in the region as a subordinate of the Anglo-Saxon world. From a critical
standpoint, the need to construct our own, Southern, decolonized history is set, to place the
disciplinary and professional work closely linked to the social, economic and cultural problems
that affect the large excluded human groups; and the ethical challenge of an occupational
therapy committed to humanization and human freedom. Also, the problematization of
the expansion of the profession under the auspices of public and social policies, its close

1
Este artículo se basa en la ponencia presentada por el autor el 3 de marzo de 2016 en el panel inaugural del
XVI Congreso Colombiano de Terapia Ocupacional celebrado en Medellín, Colombia.
2
Terapeuta Ocupacional. Especialista en Derechos Humanos y Discapacidad. Profesor y Jefe Carrera de Tera-
pia Ocupacional. Universidad de Santiago de Chile. Observatorio de Derechos Humanos para Personas con
Discapacidad Mental. Santiago de Chile, Chile. alejandro.guajardo@usach.cl

110 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


relationship to the biopolitical nature, and the way in which its objectives, concepts and
methods are shaped, is presented. Finally, I propose a critical, ethical occupational therapy,
based on human rights, reflexive, self-conscious and in permanent rebellion with itself and
the social context.

Key words: History, occupational therapy, South America, science and society

Introducción comprendiendo esta noción –lo polí-


tico– como el lugar del bien común,
Ya nos dice Bachelar (Briones, 2006) de lo público y del interés colectivo,
que la historia constituye un aspec- lugar de reconocimiento de que todos
to central para reflexionar cualquier somos lo mismo.
tema en ámbitos como la ciencia, la
cultura, lo social. Ello previene de asu- Acerca de la historia y su relación
mir la realidad, las ideas, los concep- con lo político
tos de manera abstracta y naturaliza-
da. El análisis histórico es una condi- Toda narrativa de la historia institucio-
ción obligada para cualquier reflexión, nal es el discurso de nosotros mismos
pues nos remitirá siempre a una socie- sobre nosotros mismos bajo determi-
dad concreta y determinada. nadas condiciones históricas. Es decir,
es un sujeto que habla sobre el sujeto.
La existencia de la Terapia Ocupacio- La historia es el territorio producido
nal no es un hecho de carácter indivi- por nosotros, territorio que vivimos y
dual o personal. Tampoco es un hecho habitamos (Martínez, 2011).
natural que radique en el ámbito de
las ciencias naturales. La Terapia Ocu- Así, referirse a las condiciones históri-
pacional no es una práctica exterior a cas en las que la Terapia Ocupacional
la realidad humana, a la historia hu- es producida es no compartir la visión
mana. La Terapia Ocupacional es una de que esta ha evolucionado. Un en-
producción histórica. foque evolucionista alude a un desa-
rrollo, a una continuidad, a un deve-
De esta manera, la revisión y la re- nir, ir de un punto a otro, una meta
flexión sobre nuestro oficio y discipli- a la cual llegar y alcanzar. Ir desde lo
na desde una lógica histórica resultan simple a lo complejo, desde una mi-
trascendentes, pues darán cuenta de rada acumulativa de conocimientos
las condiciones objetivas, materiales, y experiencias, deshistorizada y fuera
políticas, económicas, culturales y de las condiciones sociales que han
subjetivas que nos pueden describir, producido dispositivos tecnológicos,
hacer comprender y explicar la exis- como la Terapia Ocupacional, es la
tencia de la profesión. concepción cientificista de orden po-
sitivista de la historia.
Así, la reflexión histórica por los cin-
cuenta años se transforma en un im- Por el contrario, una lectura historiza-
perativo necesario, de orden político, da entenderá la Terapia Ocupacional

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 111


como un dispositivo social que tiene transformación social y por la disputa
un origen suprapersonal y está más de modelos de desarrollo a impulsar
allá de los individuos y de las relacio- en todos los países de la región; por
nes microsociales. Comprenderá que ejemplo en Chile, la vía chilena al so-
la Terapia Ocupacional, así como otras cialismo. A nivel internacional, marca-
profesiones, son el resultado del mo- ban de modo significativo a la región
delo de desarrollo político, social y del latinoamericana la revolución cubana
grado alcanzado por una sociedad en y la contrapropuesta, desde los Estados
particular por la forma en que organi- Unidos, de la Alianza para el Progreso.
za la producción material y simbólica, Esta última, como sustrato de orden
por la organización del trabajo, por las macro social, generó condiciones para
relaciones entre clases sociales, por la la articulación de entidades como la
complejidad social alcanzada, por la Organización Panamericana de la Sa-
distribución de la riqueza social (Vidal lud, ministerios de salud y universida-
1990), en síntesis, por los procesos de des para la puesta en marcha de los
reproducción social. primeros cursos de Terapia Ocupacio-
nal en la región. Se trataba de mostrar
Entonces, cabe preguntarse ¿cuáles que no eran necesarias nuevas revo-
fueron las condiciones históricas que luciones de izquierda, y que Estados
hicieron emerger la Terapia Ocupacio- capitalistas, liberales y socializantes
nal? podían resolver los nuevos problemas
emergentes (Guajardo, 2014).
Desde la perspectiva señalada, pode-
mos decir que la aparición y la fun- En este acto fundacional también se
dación de la Terapia Ocupacional en instalaron determinadas formas de ver
Suramérica se dio en el escenario de el mundo, la práctica social, la activi-
un Estado protector y desarrollista, el dad humana y al sujeto. Nos referimos
cual, bajo la premisa de la universali- a la mirada que nosotros llamamos
dad, debía dar respuestas sociales am- anglosajona, de carácter pragmático,
plias y abarcadoras a diferentes pro- cientificista, positivista, de países ricos,
blemáticas de orden social, más aún traducida en perspectivas funcionalis-
luego de la Segunda Guerra Mundial tas de la Terapia Ocupacional. Como
y ante la necesidad de restablecer las profesiones fuimos producidos y co-
economías del planeta sobre la base lonizados cognitiva y subjetivamente
de un papel más activo del Estado. Así desde este lugar.
mismo, en lo particular en la región se
sumaban las condiciones socio-sani- Como he planteado, la Terapia Ocu-
tarias derivadas de las grandes epide- pacional tiene un origen claramente
mias de poliomielitis. político y no técnico, y su masifica-
ción y consolidación como profesión
Alrededor de 1960 se generaron las se entreteje muy fuertemente al desa-
condiciones para los cursos iniciales rrollo de las políticas públicas y socia-
de Terapia Ocupacional. Ese perío- les. Las políticas públicas no solo han
do se caracterizó por grandes deba- sido el contexto material a través del
tes políticos asociados a proyectos de cual se despliegan el actual modelo

112 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


neoliberal y la sociedad de mercado, y la violencia, entre otras. Esto conlle-
también han articulado y configurado va una obligada diversificación de las
técnicamente las prácticas interventi- praxis profesionales y una ruptura con
vas implementadas en la gran mayoría la exclusividad del campo clínico de
de las profesiones; la Terapia Ocupa- orden biomédico.
cional no ha sido ajena a ello. Es decir,
las políticas públicas han operado de Así, la Terapia Ocupacional se ve in-
modo significativo sobre los aspectos terpelada a incorporar conocimientos
técnicos y conceptuales de las accio- y tecnologías sobre lo social, la plani-
nes en Terapia Ocupacional. ficación estratégica, las políticas socia-
les, el desarrollo social y la interven-
La Terapia Ocupacional en Chile, a ción social y comunitaria.
corto andar de su fundación (1963
primer curso, 1972 la primera carre- Adquiere importancia en las estrate-
ra), quedó subsumida en la dictadura gias de intervención la categoría de
cívico - militar. Su instalación como lo social, con variables como género,
nueva profesión se dio en el marco de territorialidad, identidad y, en los años
las intervenciones institucionales, de 2000, fuertemente con el enfoque de
políticas públicas centradas de modo Derechos Humanos. Se abordan gru-
ahistórico en el individuo frente a pro- pos excluidos, en riesgo y vulnerados.
blemáticas médicas específicas. En Todo un nuevo campo discursivo y de
este contexto la Terapia Ocupacional praxis que da forma a la Terapia Ocu-
asumió un carácter claramente tecno- pacional de los años noventa en ade-
crático, sistémico funcionalista, que lante. Esto se traduce en la utilización
dicotomizó y desconoció los aspectos de fuertes componentes de modelos
estructurales que la sustentaban; se centrados en las competencias, las
desplegó en los grandes hospitales y, redes sociales, los cuales se articulan
en menor medida, en las instituciones muy bien con el enfoque de rehabili-
educativas y penitenciarias. tación psicosocial en salud mental y la
distribución de recursos para acceder
En el periodo posdictatorial (1990 a la rehabilitación en comunidad, al
a la fecha), la Terapia Ocupacional empleo y a la educación.
comienza a ser configurada por los
modelos de desarrollo social en cur- Habiéndome referido a Chile, consi-
so, introduciéndose con los años, dero que este proceso ha sido propio
con mayor sofisticación cada vez, en también de toda la región.
situaciones sociales definidas como
deficiencias o carencias de determi- Desde la política pública y la política
nadas personas o grupos. Los pasos social se han abordado nuevas proble-
de la Terapia Ocupacional en Chile máticas sociales. Aquí la Terapia Ocu-
comienzan a ser marcados por ob- pacional ha encontrado su expansión
jetivos como la integración social, la y consolidación en los diversos paí-
pobreza, la reinserción de menores o ses, promoviendo su diversificación
personas con enfermedades mentales, en múltiples tipos de prácticas. Es la
la prevención del consumo de drogas vinculación de la Terapia Ocupacio-

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 113


nal no con la enfermedad, sino con la social del capitalismo neoliberal y de
cuestión social. Hemos transformado mercado en problemas subjetivos a
los problemas en objetos sociales de la tratar terapéuticamente. Convierte las
Terapia Ocupacional, de estudios, in- aprensiones e inseguridades que deri-
vestigación y construcción de modelos van de la discriminación, la pobreza,
operativos. De esta forma, aparente- la violencia y la soledad en índice de
mente la intervención predominan- problemas internos, de dificultades
te ya no es individual en el contexto cognitivas o comunicacionales, en
médico clínico, sino más bien de gru- problemas de destrezas y habilidades
po: los talleres, los grupos psicosocia- sociales, en problemas de autoestima
les, la familia, la situación escolar, la y de capacidad de logro. La ausencia
situación laboral, la participación en de acceso a derechos humanos y vida
comunidad, entre otros. Esto ha gene- digna en deficiencias personales para
rado un profundo cambio en el per- la construcción del proyecto de vida.
fil profesional. Buena cuenta de ello
lo encontramos en los interesantes e Desafíos para la profesión y la
importantes desarrollos de la llamada disciplina en los escenarios actuales
Terapia Ocupacional Social en Brasil
(Esquerdo, Malfitano, Silva & Borba, ¿Cómo desarrollar la profesión y la
2015). disciplina en la sociedad contempo-
ránea?
Sin embargo, lo que creo que ha es-
tado sucediendo no es más que la te- El desafío histórico que interpela a
rapeutización (asumo que es un neo- la Terapia Ocupacional en estos cin-
logismo) en los ámbitos más variados cuenta años conlleva fijar una posi-
de la actividad humana, pero muchas ción ética y política de su fundamento
veces sostenidos con la misma lógica y hacer. No es posible la neutralidad
de la intervención clínica biomédica en una profesión cuyo centro es la ac-
positivista. Más que introducir modos tividad social manifestada como ocu-
de intervención más abiertos y ho- pación y materializada en sujetos que
rizontales, lo que se hace en la vida se encuentran en situación de exclu-
diaria concreta de los sujetos, en el sión, privación o segregación.
espacio de vida particular (calle, casa,
territorio), es generalizar la lógica de Implica una ruptura con el sustrato na-
la terapia médica a situaciones que turalista darwiniano, liberal del sujeto,
guardan relación con la vida social y a su manifestación en la ocupación
política, transformado la vida cotidia- como exterioridad del mismo y como
na en verdaderas terapias del mundo única vía de mediación con el entor-
de la vida. no. Se requiere de un quiebre con el
cientificismo, la medición objetiva, los
La terapeutización del contexto social modelos operativos y de la práctica
convierte en problemas individuales a ajenos a nuestra realidad social y cultu-
los fenómenos de orden social: el ago- ral. La exigencia es asumir una postu-
bio de la competitividad, la explota- ra crítica, decolonizadora, donde esté
ción, el sufrimiento. Convierte la crisis en juego no solo lo referido a la clase

114 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


social, la marginalidad y la exclusión, Ocupacional. Una que promueva la
sino también el tema cultural, identi- democracia, el bien común y no el sis-
tario, de género, el indigenismo, entre tema social en el cual se ha sostenido.
otros. Ser autores, con nuestra propia A esta Terapia Ocupacional la llamaré
voz, de los procesos que nos atañen Terapias Ocupacionales desde el Sur
y nos convocan. Con la producción (Guajardo, 2016).
de saberes regionales, en permanente
diálogo con escenarios situados en los Lo anterior exige asumir una posición
países de Latinoamérica. crítica explícita para los diferentes ám-
bitos de la práctica profesional e inves-
A modo de síntesis y propuesta tigativa, sea esta en salud, educación,
justicia, protección social. Así mismo
Somos el acto de habla de una so- en la intervención clínica, psicosocial
ciedad inequitativa. Existimos porque y comunitaria.
hay dolor y sufrimiento. La expansión
del oficio se debe a que cada vez hay En palabras de Foucault (1995), la crí-
más problemas sociales, mayor deshu- tica es el arte de no ser gobernado,
manización, mayor cosificación de las como una manera de desconfiar, po-
personas. Nuestra autonomía como ner en duda, cuestionar y transformar
profesión es relativa, pues no estamos aquellas prácticas que conforman el
fuera de la realidad que nos ha produ- arte de gobernar. El foco de la crítica,
cido. Somos el acto de habla de los es- según este autor, está en las relacio-
pacios de poder. Ser un acto de habla nes existentes entre poder, verdad y
es constituir un conjunto de enuncia- sujeto, en sus palabras: “la crítica es
dos, discursos (en ellos prácticas) que el movimiento por el cual el sujeto se
conforman y producen la realidad en atribuye el derecho de interrogar a la
el mismo momento del acto de enun- verdad acerca de sus efectos de po-
ciar. der, y al poder acerca de sus discursos
de verdad, pues bien, la crítica será el
Las prácticas de la Terapia Ocupacio- arte de la inservidumbre voluntaria, el
nal, así como sus fundamentos teóri- de la indocilidad reflexiva” (p. 8).
cos, producen la realidad que enun-
cian. El ahistoricismo, el individua- Recurriendo a Georg Luckács (1972),
lismo metodológico, nociones como debemos dejar de ser una profesión
ocupación en un sentido abstracto y enajenada, un sujeto en sí –compren-
naturalista, lo intrínseco y biológico diendo esto como una praxis tecno-
como procesos del ser, entre otros, re- crática, cientificista, reproductora del
producen el actual orden social. sistema social–, para transformarnos
en un sujeto para sí, es decir, en una
Lo que se requiere es una Terapia comunidad consciente de su posición
Ocupacional que transforme, que y su situación histórica, de su condi-
promueva otras formas de relaciones ción de clase y de las personas que la
sociales, otras formas de vida. Es de- conforman. Que la Terapia Ocupa-
cir, dejar de ser la Terapia Ocupacio- cional se asuma para sí implica, entre
nal que somos para ser otra Terapia otras cosas, la politización de la pro-

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 115


fesión; lo contrario, la despolitización de hacer? ¿Cómo propiciar una mejor
de nuestra praxis, se traducirá en una vida basada en los derechos funda-
ausencia de autoconciencia hacia lo mentales? ¿Cómo, desde la crítica y en
que podríamos denominar noción de contra de la despolitización de los ofi-
mundo en general, y de reconocernos cios, puedo contribuir a una vida más
como actores productores y reproduc- digna de las comunidades y personas
tores del mundo de la vida. con las que la Terapia Ocupacional in-
teractúa?
La escasa formación política de pro-
fesiones de la salud, entre ellas la El valor que tienen las Terapias Ocupa-
Terapia Ocupacional, y la excesiva cionales desde el Sur como manifesta-
racionalidad técnica de las profesio- ción de diversidad de la disciplina y
nes, centradas en el método y el saber la profesión (Terapia Ocupacional Po-
cientificista, no permiten advertir en lítica, Terapia Ocupacional Social, Te-
ellas visiones y epistemes disidentes, rapia Ocupacional Ecosocial, Terapia
resistentes al sistema, que generen Ocupacional y Derechos Humanos,
puntos de fuga a los procesos de do- Terapia Ocupacional e Indigenismo),
minación que la Terapia Ocupacional situadas desde las ciencias humanas,
estándar promueve y al régimen social es la posibilidad de desarrollar prác-
neoliberal actual en el cual se inser- ticas más allá de la reproducción de
ta. Por el contrario, precisamente, la dispositivos de salud, sociales, jurídi-
Terapia Ocupacional se extiende aquí cos y de administración de los sujetos.
como disciplina que funcionaliza sus Es tener la posibilidad de reconstruir
prácticas sociales, incentivando la a través de las prácticas ocupacionales
adaptación pasiva y privatizada de las el sentido de lo público, de promover
personas y los colectivos, lo que se in- prácticas deliberantes de las/os ciuda-
serta organizadamente en los engrana- danos, promover una vida digna para
jes micro y macro políticos del sistema un habitar de lo social común en la di-
actual de dominación. ferencia, promover una vida donde la
ocupación, que no es más que el suje-
Las Terapias Ocupacionales disponen to mismo, se fundamente y se sustente
de una posibilidad que otras profe- en una ética basada en los derechos
siones no tienen, pues se vincula y se humanos3.
remite siempre, como lo hemos se-
ñalado, al mundo de la vida, a la ac- Referencias
ción concreta sobre las personas, a las
Briones, G. (2006). Teorías de las Ciencias
ocupaciones cotidianas, a colectivos Sociales y de la Educación. Epistemología.
y comunidades y a sus circunstancias México: Trillas.
históricas. Remite siempre a la praxis
concreta, lo que abre la posibilidad de Esquerdo R., Malfitano A., Silva C., & Borba
P. (2015) Historia, conceptos y propues-
interrogarse: ¿Qué es lo que se pue- tas en la Terapia Ocupacional Social en

3
Referencia del profesor Iván Torres en relación a los desafíos que tiene la Terapia Ocupacional con respecto
a los Derechos Humanos. Procesos de supervisión de seminarios de títulos con estudiantes de Terapia Ocupa-
cional, 2015.

116 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


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Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 117


La importancia de la historia para el desarrollo
de la Terapia Ocupacional1
Epílogo

The importance of history for the development


of Occupational Therapy
Liliana Tenorio Rebolledo2
“Entre urdimbre y trama
se teje la vida.
Del nopal y el agua
el alma se pinta.

Siguiendo el compás
del hilo en mis manos
mira nada más
hasta donde he venido a parar”

Marta Gómez, 2013, de la canción Llévame en tus Alas

Carmen Helena Vergara y Liliana Tenorio, durante la lectura y discusión de este texto el
viernes 3 de marzo de 2017 en la Universidad del Valle.
Foto: Cortesía Mauricio Varela.

1
Este texto fue presentado el 3 de marzo de 2017 en el evento de inauguración de la Muestra Museográfica
Historias de Terapias Ocupacionales en Colombia en la ciudad de Cali, llevado a cabo en la Universidad del
Valle en el marco de la celebración de los treinta años de creación del programa de Terapia Ocupacional en
esa institución. En ese escenario, fue la base de una conversación entre la autora y su colega y amiga, Carmen
Helena Vergara; la fotografía registra ese momento.
2
Terapeuta Ocupacional. Magíster en Economía. Universidad del Valle. Cali, Colombia. lilianatenorio@gmail.
com

118 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


La Historia de la Terapia Ocupacio- tructura primigenia, son las que le han
nal vista desde hoy hacia atrás, desde dado con el tiempo su consolidación.
mi lugar más bien de frontera, la veo Como en toda pieza de tejido, hay ele-
con un pensamiento nómada que se mentos sueltos e incluso algunos que
mueve en un hilvanar de balbuceos hoy ya no están presentes; por ejem-
éticos, que se ubica en períodos y que plo, el conocimiento de los oficios y
no puede quedarse atrapada en con- de las actividades, o el conocimiento
ceptos fijos y definitivos. La reflexión de las ocupaciones del mundo labo-
se basa en una identificación de suce- ral, que fueron dejados por la Terapia
sos cotidianos que, aunque parecieran Ocupacional y tomados por la Salud
insignificantes y anecdóticos, ligados a Ocupacional. Al reconstruir la historia,
personas con rostros y a sus interaccio- en consecuencia, llama la atención la
nes, hoy consolidan un cuerpo del co- movilidad de la frontera de ese campo
nocimiento y pertenecen al desarrollo del conocimiento.
de la Terapia Ocupacional.
Si miramos nuestra pieza de tejido, hay
El devenir de la Terapia Ocupacio- elementos que estuvieron presentes
nal está ligado con su campo de ac- en sus inicios, pero que en determi-
ción. Ese campo de acción se puede nado período se han desvanecido. Por
comparar con una pieza de tejido en ejemplo, al comienzo de la historia de
donde se aprecia el entretejido de los la Terapia Ocupacional en Colombia
conocimientos, las experiencias, las había más preocupación por la identi-
acciones y las interpretaciones de las dad, pues las hebras de la urdimbre se
personas que se desempeñan en esa hicieron con las ciencias del compor-
profesión. Al interior del campo han tamiento humano, con las de la salud,
pasado muchas hebras que se mueven con las de la pedagogía, entre otras,
unas con otras y que han ido estruc- y esa inquietud se convirtió en intran-
turando la pieza. Para poder llamarla quilidad académica para profundizar,
pieza de tejido debe estar conforma- con otros profesionales, cómo se deli-
da por límites precisos que definen el mitaba la frontera de esta profesión al
tamaño, la forma y la cualidad de sus aceptar la incertidumbre y profundizar
materiales, es lo que conocemos en en la investigación. En la actualidad, a
su referente académico como frontera medida que se ha ampliado la fron-
de la ciencia. La delimitación de esa tera y se han delimitado sus elemen-
frontera del conocimiento identifica tos al interior, hay más profesionales
unas prácticas y unos saberes propios trabajando en sus prácticas sin temo-
de una disciplina, más allá de ella em- res de identidad, pues las puestas en
pieza la ignorancia. El movimiento de común han facilitado la delimitación
los límites entre los saberes, las prác- del campo del conocimiento. De ahí
ticas y la ignorancia sobre ciertos as- que la dificultad de armar la historia
pectos es lo que llamamos el devenir se centra en que, cada vez más, los
de una disciplina; las características nuevos conocimientos son complejos
de esa pieza de tejido, como el movi- de seguir, pues la amplitud del campo
miento de las hebras al interior, la tra- ha aumentado y la pieza de tejido se
ma de saberes y la urdimbre de la es- vuelve más elástica.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 119


Desde la responsabilidad de la acade- lorar al Otro frente a la exposición de
mia, ella debe situarse en la frontera, su argumento y pudimos conversar en
porque la investigación que acepta desacuerdos y acuerdos. Prevaleció el
la incertidumbre ayuda a delimitar el sentido de la profesión de manera que
borde. El riesgo es que la academia se mantuvo el valor del lenguaje ético,
sola quede de espaldas a la realidad más allá de los desarrollos personales,
por pensar en las utopías del cono- del discurso científicamente califica-
cimiento. Por ello, requiere de las do y de los tecnicismos. Un lenguaje
experiencias y vivencias de los pro- riguroso, con reglas sí, pero auténtico
fesionales que ejercen las competen- y que superó a cada una de las per-
cias disciplinares, para seguir tejiendo sonas involucradas. Se fundamentó en
conjuntamente la pieza del campo de una manera de ver las cosas, en gesto
acción de la Terapia Ocupacional. visual, es decir en una mirada, una óp-
tica, una forma de mirar. Fueron mo-
¿Qué aporta la historia al devenir dos de mirar limpiamente, con buenos
de la Terapia Ocupacional ojos que determinaron en cada quien
en Colombia? afectaciones positivas. Al mismo tiem-
po, también las conversaciones se lle-
Este es el tiempo y el espacio de poner
naron de sonidos, fue cuando pudimos
en común, de provocar otro tipo de
escuchar al Otro en la expresión de su
lenguajes.
idea, de su propia experiencia, de su
Remontarnos al revés en el tiempo es historia singular, de su respuesta no
reconocer un punto de partida frágil, universal. Fue empezar a construir un
pues al estar despojados de los saberes aprendizaje al diálogo, a la contención
establecidos, los períodos de la Tera- del Otro, lo que nos facilitó pertenecer
pia Ocupacional se han caracterizado a un colectivo en el que cada quien se
por momentos de encuentros y des- sintió con cohesión, decisión y seguri-
encuentros. Detenernos ahora para dad de aportar lo propio a la pieza de
identificar qué fue lo que se hizo en tejido de la Terapia Ocupacional.
esos momentos para avanzar hacia la
pieza de tejido que tenemos hoy, es El legado que dejamos a las nuevas
reconocer el peso fundamental que se generaciones de terapeutas ocupacio-
le dio a la conversación de las accio- nales consiste en una pieza de tejido
nes que cada quien realizaba. en donde el aprendizaje tiene sentido
como un espacio de Encuentro. El acto
Esas conversaciones se hicieron con del Encuentro se refiere al espacio de
lenguaje ético. El espacio para la descubrimiento con personas que tie-
conversación nos reunió, nos juntó y nen un nombre, un rostro, un lenguaje
nos puso en común en un tiempo de concreto; no conversamos en abstrac-
aprendizaje, de sabernos ignorantes, to. El espacio de Encuentro tiene una
de no tener tecnología, de incitar in- doble función: i) estar disponible para
quietudes y también de presentar con- el “Otro” que requiere el encuentro,
tradicciones y provocar pensamientos pero también, ii) estarlo para entrar en
no establecidos. Entonces, supimos va- relación “consigo mismo”.

120 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


En el Encuentro se pone en juego lo La construcción de la pieza de tejido
que llamamos “expresiones impercep- de la disciplina de la Terapia Ocupa-
tibles”, sobre las que hay que trabajar cional se realiza a través de aprendi-
muchísimo, porque hacen parte de zajes, del despliegue de los mundos
las experiencias cotidianas, que pare- narrativos de las personas que viven
cen sencillas pero son profundas. Esas momentos históricos complejos y de
expresiones mínimas representan las la consolidación de sus experiencias,
formas de pensar, de hablar con las que son reconocidos como un flujo
propias palabras acerca de las decisio- continuo de percepción y discrepan-
nes que se toman sobre las interven- cia, de resistencia y de confrontación,
ciones con los sujetos, sobre las formas en un colectivo que construye tramas
de ejecución de las actividades, sobre de autonomía, reflexividad, articula-
las interacciones, los materiales, herra- ción de sus acciones y que, por tanto,
mientas y, sobre todo, de los procedi- le da sentido a la pieza de tejido por-
mientos que se utilizan para el hacer. que configura el espacio público del
saber como un escenario de la rea-
Estar dispuesto para el Otro nos facili- lización política y la negociación del
ta la contradicción, pues provoca otro poder.
pensamiento, otro lenguaje, el que se
opone al orden establecido. El Otro Dejamos unas preguntas instaladas
presenta su peso, su fuerza, su existen- para este momento histórico:
cia en su pensamiento y sus códigos;
nos expone sus propias historias, por- • ¿Qué significado tiene para las
que está hablando en nombre propio. nuevas generaciones recapitular la
historia de la Terapia Ocupacional?
La relación consigo mismo exige de-
tenimiento, descubrimiento y libertad. • ¿La interpretación de los relatos del
Es una búsqueda de dónde estamos pasado resignifica nuestro queha-
a partir de la relación con el Otro; cer actual y nos permite reubicar-
es comprenderse a partir de las dife- nos en el presente para reconocer
rencias y semejanzas con él. Es dife- cómo esos referentes adquieren un
renciarse a partir de la evidencia del nuevo significado?
Otro, delimitado por el hálito de su • ¿Significa un espectáculo en el que
palabra. Es comprenderse despojado otros refieren vivencias que nos
de todo prejuicio de las intimidades producen curiosidad?
retadoras del yo y de las normas socia-
les aceptadas. Es reconocerse en sus
capacidades y retos.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 121


Plan de Acción 2016 - 2026
Docmento CCTO

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional1


Consejo Directivo Nacional 2016-2018
Solángel García. Presidenta
Natalia Peña. Vicepresidenta
Marcela Alejo. Secretaria
Yurany Vecino. Tesorera
Oscar Larrota. Suplente de Tesorería
Clemencia Martínez. Fiscal
Presidenta Regional Occidente: María Claudia Montoya Mejía
Secretaria Regional Occidente: Johana Ruiz Zúñiga
Presidenta Regional Sur: María Claudia Trujillo
Secretaria Regional Sur: Juliana Guevara

Delegaciones
Liliana Álvarez. Delegada WFOT
Margarita González. Delegada Alterna WFOT
Livet Cristancho. Delegada CLATO
Alexander Agudelo. Delegado suplente CLATO
Clara Duarte. Editora Revista Ocupación Humana
Pamela Talero. Comité de Comunicaciones
Aida Navas. Asesora incidencia política. Segunda delegada alterna WFOT
Aleida Fernández. Asesora investigación

Introducción Se creó como Asociación Colombia-


na de Terapia Ocupacional en 1972;
El Colegio Colombiano de Terapia a partir del año 2011 se convierte en
Ocupacional (CCTO) es una organiza- Colegio Colombiano de Terapia Ocu-
ción profesional con carácter demo- pacional con el fin de tener la posi-
crático, civil y privado, con personería bilidad de asumir funciones delegadas
jurídica, sin ánimo de lucro; con plena por el Estado.
capacidad legal para el cumplimiento
de sus objetivos y la posibilidad de re- Dentro de sus objetivos se encuen-
cibir funciones públicas que le sean tran: fortalecer la Terapia Ocupacio-
delegadas de acuerdo con lo que esta- nal como profesión; trabajar por el
blezca la Constitución Política de Co- desarrollo científico, investigativo,
lombia, las leyes y reglamentaciones ético y normativo de la profesión;
vigentes. velar por el cumplimiento del Código
de Ética consagrado en la Ley 949 de
2005; actuar como órgano consultivo
y asesor del Estado y el Gobierno Co-
1
Esta versión del Plan se concretó en junio de 2016. lombiano, y de organismos e institu-

122 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


ciones públicas y privadas en el estu- ció la necesidad de consolidar un plan
dio y definición de políticas públicas, de acción para el Colegio con un hori-
normas técnicas, tecnológicas y de zonte de diez años, el cual se presenta
ley en el ámbito de su competencia; en este documento.
agrupar y representar a los terapeu-
tas ocupacionales legalmente facul- Situación actual
tados para su ejercicio profesional;
actuar como vocero ante instancias El Plan de Acción del Colegio parte de
y organismos nacionales e interna- identificar su situación actual, cuáles
cionales de orden público y privado; son sus fortalezas y debilidades, y en
proponer investigaciones, ase­sorías y qué asuntos hay que organizar la ges-
proyectos; estimular la investigación tión en el contexto actual del país y de
científica; fortalecer el intercambio la profesión. Uno de los primeros pun-
científico y académico; trabajar de tos de análisis es entender que el sen-
manera conjunta con la Asociación tido de agremiación en sí misma no es
Colombiana de Facultades de Terapia una de las fortalezas de este colecti-
Ocupacional-ACOLFACTO; garanti- vo, son varias crisis vividas por él y la
zar el cumplimiento de las funciones representación en distintas instancias
públicas delegadas, entre otros. recae sobre pocas personas. Segura-
mente estos asuntos deberán ser ana-
El Consejo Directivo Nacional, elegido lizados y estudiados para avanzar en la
para el periodo 2016 - 2018, eviden- comprensión de la agremiación y de la

Tabla 1. Situación del CCTO a marzo de 2016.

Proceso Estado
Participación en mesas de trabajo convocadas por entes gubernamentales (Minsalud, z
Mintrabajo, Mineducación).
Implementación de los compromisos y obligaciones para ejercer las Funciones Públi- z
cas delegadas.
Activación y realización del XVI Congreso Colombiano de Terapia Ocupacional. z

Revista Ocupación Humana activa y en proceso de indización. z


Recursos económicos para el sostenimiento del Colegio. z
Definición de estrategias de comunicación. z
Reconocimiento Internacional. z
Organización de Capítulos.
z

Organización de Regionales.
z

Educación continua.
z

Organización de los estados financieros.


z

Organización administrativa del CCTO (inventarios, procesos y procedimientos, con-


z

tratos, etc.).
Página web
z

Fuente: Elaboración propia a partir de los procesos de empalme y los documentos disponibles.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 123


participación. En la Tabla 1 se puede Línea de Acción Desarrollo
ver de manera general en qué lugar Profesional
se encuentran algunos de los procesos
del CCTO, información construida a Definición: Son todas aquellas ac-
partir del proceso de empalme con el ciones tendientes a lograr el fortaleci-
anterior Consejo Directivo. miento y la cualificación de los pro-
fesionales de Terapia Ocupacional en
Estructura General del Plan todos los campos del ejercicio para
lograr un posicionamiento técnico y
Propósito: Realizar incidencia política político.
y técnica de la Terapia Ocupacional,
Objetivo: Enriquecer las competen-
como una profesión que contribuye
cias y la cualificación del terapeuta
con ocupaciones dignas y colectivas al
ocupacional a través del liderazgo de
desarrollo del país.
procesos de educación continua na-
Líneas de Acción: Se propone un plan cional e internacional.
con cinco líneas de acción (Desarrollo Actividades:
Profesional, Funciones Públicas, Inci-
dencia, Gestión del Conocimiento y Análisis de situación de las necesida-
Desarrollo Regional) y tres estrategias des de formación de los terapeutas
transversales (Comunicaciones, Redes ocupacionales colombianos para la
y Alianzas, y Sostenibilidad) (Figura 1), formulación de una agenda de educa-
cada una de las cuales se desarrolla a ción continua.
continuación.
Articulación con los Capítulos para el
fortalecimiento técnico y político de la
Terapia Ocupacional en Colombia.
Figura 1. Líneas y estrategias del Plan de Acción
del CCTO 2016 - 2026.
Metas a dos años:
Mantener base de datos actualizada
con los campos de ejercicio profesio-
nal de los terapeutas ocupacionales
colegiados.
Definir y movilizar una agenda de
educación continua determinando
periodicidad y temas a tratar.
Contar con un foro virtual por cada
Capítulo constituido.
Realizar un evento de educación con-
tinuada por cada región.
Apoyar la realización de un   evento
Fuente: Elaboración propia. nacional con invitados internacio­nales.

124 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


Metas a diez años: a los profesionales graduados a partir
de 2016 y a otros profesionales que lo
Contar con una agenda de educación soliciten.
continua reconocida nacional e inter-
nacionalmente. Meta a diez años: Continuar y forta-
lecer el proceso de Registro RETHUS y
Contar con una plataforma virtual de entrega de tarjeta profesional al mayor
cursos de educación continua dirigida número de profesionales.
a la ciudadanía, los terapeutas ocupa-
cionales y otros profesionales. Línea de Acción Incidencia

Contar con un análisis de la situa- Tiene a su vez dos líneas, Capítulos y


ción de los terapeutas ocupacionales Participación Política.
colombianos identificando áreas de
de­sempeño, poblaciones atendidas, Capítulos
condiciones contractuales, salariales,
niveles y campos de formación conti- Definición: Agrupación de profesio-
nua y posgraduada, entre otras varia- nales de Terapia Ocupacional dedica-
bles. dos al ejercicio en un sector o área co-
mún de desempeño profesional, debi-
Línea de Acción Funciones Públicas damente reconocida por el CCTO.

Definición: La función pública se re- Objetivo: Avanzar en la organización


fiere a toda actividad temporal o per- de los Capítulos como una estrategia
manente, remunerada u honoraria, para el fortalecimiento político y téc-
realizada por una persona en nombre nico regional de la Terapia Ocupacio-
del Estado o al servicio del mismo. En nal en Colombia.
este caso, se refiere a las funciones pú-
blicas delegadas establecidas en la Ley Actividades:
1164 de 2007, la Resolución 4192 de Estructuración y reglamentación de los
2010 y la Resolución que apruebe la Capítulos.
delegación al CCTO.
Conformación de los Capítulos.
Objetivo: Establecer la organización in-
terna del CCTO para el cumplimiento Metas a dos años:
de la propuesta presentada a la convo-
catoria de la Resolución 3392 de 2015. Construcción colectiva de la estructu-
ra básica de Capítulos.
Actividades: Diseñar, coordinar, im-
plementar y verificar los procesos, Formulación de los lineamientos bási-
procedimientos y funciones corres- cos para la estructuración y conforma-
pondientes. ción de Capítulos.

Meta a dos años: Realizar el Registro Conformación del 20% de los Capí-
de Talento Humano en Salud - RE- tulos planteados en los Lineamientos
THUS y entrega de tarjeta profesional Generales.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 125


Apoyo en la organización de los Capí- Meta a dos años: Lograr por parte del
tulos conformados. Estado colombiano un reconocimien-
to amplio permanente y específico de
Metas a diez años: la Terapia Ocupacional, sus compe-
Conformación del 80% de Capítulos tencias, impacto y responsabilidades
planteados en los Lineamientos Gene- en el diseño y operación de políticas
rales. públicas y normatividad en temas de
su competencia.
Apoyo en la organización de los nue-
vos Capítulos. Metas a 10 años:
Seguimiento al funcionamiento gene- Actualizar la Ley de Terapia Ocupacio-
ral de Capítulos mediante los procedi- nal.
mientos acordados en los Lineamien-
tos Generales. Obtener un completo reconocimiento
de la Terapia Ocupacional en el orden
Participación Política gubernamental e institucional y la ga-
rantía de participación profesional de
Definición: Identificación de escena- terapeutas ocupacionales en el territo-
rios, asuntos o situaciones relaciona- rio nacional en condiciones de estabi-
das con competencias y funciones de lidad y dignidad laboral.
la Terapia Ocupacional, cuya partici-
pación permita realizar análisis y  pro- Línea de Acción Gestión
puestas que contribuyan con el desa- de Conocimiento
rrollo del país desde la profesión.
También se desarrolla a través de dos
Objetivo: Identificar y garantizar los líneas: Publicaciones e Investigaciones
espacios de participación política, y Conferencias.
normativa y reglamentaria, interins-
Publicaciones
titucional, intersectorial e intergre-
mial en los cuales se deba fortalecer Definición: Proceso conducente a
la Terapia Ocupacional como profe- promover la generación, socialización
sión. Velar por las condiciones del y apropiación del conocimiento en Te-
ejercicio profesional y actuar como rapia Ocupacional en Colombia.
órgano asesor en el ámbito de su
competencia. Objetivo: Promover la socialización
y uso del conocimiento generado por
Actividades: Continuar y fortalecer y para la Terapia Ocupacional colom-
la participación activa en ámbitos biana.
gubernamentales e institucionales:
Ministerios de Salud, Trabajo, Edu- Actividades:
cación, TIC; DANE, Unidad de Vícti- Publicación de la Revista Ocupación
mas, Proyectos de ley, gobernaciones Humana.
y alcaldías, ONG, OIM, Instituciones
relacionadas de nivel público y pri- Publicación de libros de Terapia Ocu-
vado. pacional.

126 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


Metas a dos años: Actividades:

Revista electrónica de libre acceso con Desarrollo de eventos, congresos y co-


mínimo 15 artículos de alta calidad al loquios.
año, e indexada en mínimo dos bases
Desarrollo de investigaciones.
de datos de revistas científicas.
Meta a dos años: Realizar un Colo-
Haber apoyado (financiado) o realiza- quio Colombiano de investigaciones
do la publicación de un libro resultado en Terapia Ocupacional.
de investigación o sistematización de
prácticas de terapeutas ocupacionales Metas a diez años:
colombianos.
Realizar el Congreso Colombiano de
Metas a 10 años: Terapia Ocupacional cada tres años
Contar con una agenda de investiga-
Principal fuente de consulta de tera-
ciones y la financiación de investiga-
peutas ocupacionales colombianos e
ciones por parte del Colegio.
hispanohablantes, tanto en la investi-
gación como en la práctica. Línea de Acción Fortalecimiento
Regional
Haber apoyado (financiado) o reali-
zado la publicación de cinco libros Definición: Proceso conducente a la
resultado de investigación o sistemati- descentralización y organización local
zación de prácticas de terapeutas ocu- de la Terapia Ocupacional a través del
pacionales colombianos. desarrollo de las Regionales con sus
Juntas Directivas Regionales, definidas
Investigaciones y Conferencias en los Estatutos del Colegio.

Definición: Según Nonaka (2007), Objetivos: Avanzar en el fortaleci-


crear nuevo conocimiento tiene que miento y desarrollo local de la Terapia
ver tanto con ideales como con ideas. Ocupacional en Colombia.
Poner el conocimiento personal a dis-
Actividades: Organización y apoyo a
posición de otros es la actividad prin-
la conformación de las regionales.
cipal de la empresa creadora de cono-
cimientos. Metas:

Objetivo: Potenciar al CCTO como A dos años, contar con dos regiona-
centro de generación de conocimien- les establecidas y en funcionamiento.
to para la Terapia Ocupacional, ini- Esto significa, que tengan su junta es-
cialmente mediante la socialización y tablecida, plan de trabajo y desarrollo
difusión de las investigaciones realiza- de actividades propuestas.
das en el país, posteriormente finan-
ciando y desarrollando investigaciones A diez años, contar con cinco regiona-
propias. les establecidas y en funcionamiento.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 127


Estrategia de Comunicaciones Gestionar la generación de artículos
publicitarios del CCTO y empezar la
Definición: Estrategia que permite distribución en diferentes espacios.
enlazar, promover y difundir la gestión
de las diferentes líneas de acción del Generar cada año por lo menos una
CCTO a partir de tres áreas de infor- campaña alrededor del día colombia-
mación: interna (exclusiva para cole- no del terapeuta ocupacional.
giados), externa (para la comunidad
Informar oportunamente sobre las
de profesionales y estudiantes de Te-
convocatorias, campañas y eventos
rapia Ocupacional) y pública (para la
realizados o avalados por el CCTO.
comunidad general).
Difundir información sobre las labores
Objetivos:
de incidencia del CCTO.
Promover el posicionamiento del
Difundir la información de los avances
CCTO a través de la difusión de sus
de las regionales del CCTO.
labores y el fortalecimiento y consoli-
dación de su imagen. Consolidar la estrategia de boletín
informativo a través de correo elec-
Mantener informada a la comunidad
trónico declarando claramente su pe-
de profesionales y estudiantes de Tera-
riodicidad, contenidos y estrategias
pia Ocupacional, y a la comunidad en
de recolección y consolidación de la
general, con información pertinente y
información.
de calidad.
Metas a 10 años:
Modalidades de Acción:
Revisar y actualizar cada dos años la
Servicios a otras líneas de acción.
imagen y estrategias de comunicación,
Servicios propios de Comunicaciones. de ser necesario, de acuerdo a las ten-
dencias vigentes.
Medios de Comunicación:
A partir del tercer año, generar de-
Página web. manda de los productos publicitarios
Redes sociales (Facebook, YouTube, del CCTO por parte de la comunidad
Twitter, Instagram). general, recuperar la inversión y gene-
rar ganancias proporcionales a la mi-
Correo electrónico. tad del dinero invertido inicialmente.
Metas a dos años: Articular las campañas del día del tera-
peuta ocupacional con otros eventos.
Crear y difundir un eslogan que ca-
racterice la identidad corporativa del Consolidar los medios de comunica-
CCTO. ción del CCTO como fuentes de infor-
mación de primera línea por ser con-
Generar un documento de lineamien- fiable y de calidad.
tos de comunicación para cada una
de los medios de comunicación del Cumplir con los criterios de periodici-
CCTO. dad y calidad que se definan para el

128 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


boletín y consolidarlo como un privi- Metas a dos años:
legio para los colegiados.
Representar a Colombia en el Progra-
Contar con protocolos claros de co- ma de Investigación de la WFOT.
municaciones que sirvan como guía
ante los relevos en la gestión del Co- Obtener reconocimiento de la WFOT
legio. como asociación delegada para reali-
zar aprobación de programas en nom-
Estategia de Redes y Alianzas bre de la WFOT.
Implica responder a tres frentes: la Fe-
Diseñar e implementar una estrate-
deración Mundial de Terapeutas Ocu-
gia de acompañamiento para el de-
pacionales (WFOT), la Confederación
sarrollo de la Terapia Ocupacional
Latinoamericana de Terapeutas Ocu-
en países vecinos que lo han solici-
pacionales (CLATO) y otras agremia-
tado.
ciones.
Participación en la Federación Mun- Generar espacios efectivos de diá-
dial de Terapeutas Ocupacionales logo internacional a través de la
(WFOT) moderación oficial de dos foros de
OTION, la red en línea lanzada por
Definición: Desarrollo, fortalecimien- la WFOT.
to y divulgación de redes y alianzas in-
ternacionales que favorezcan el posi- Meta a diez años: Reconocimiento
cionamiento de los saberes y prácticas de la Terapia Ocupacional a nivel in-
de las terapias ocupacionales de Co- ternacional y posicionamiento de las
lombia y su diálogo enriquecedor con áreas del saber que han emergido en
aquellos que han emergido en otros nuestros contextos.
contextos y realidades. Participación en la Confederación
Objetivo: Promover el diálogo, cola- Latinoamericana de Terapeutas
boración y construcción colectiva de Ocupacionales (CLATO)
saberes y prácticas en Terapia Ocu- Definición: El CCTO, dentro de su mi-
pacional, por medio del posiciona- sión, contempla promover intercam-
miento de las terapias ocupacionales bios con otras agremiaciones naciona-
en Colombia y los factores históricos, les y extranjeras; en su visión, incluye
sociales, políticos y económicos que ser líder en el desarrollo y crecimiento
las han moldeado. científico e investigativo de la Terapia
Actividades: Ocupacional en el país y en Latino-
américa.
Delegación ante la WFOT.
Objetivo: Visibilizar y posicionar la
Proyectos de educación continua de Terapia Ocupacional colombiana en
carácter internacional. Latinoamérica a través de la participa-
ción en la CLATO.
Diseño de estrategias para el inter-
cambio internacional en investigación.

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 129


Actividades: Mantener coordinación y articulación
con otras redes de Terapia Ocupacio-
Avanzar en la construcción de una nal (Acolfacto, Sindicato, etc.).
agenda de cooperación en Latino-
américa para el CCTO. Fomentar la articulación con otras re-
des y asociaciones colombianas.
Buscar la participación del Colegio
con organismos internacionales para Metas a dos años:
América Latina.
Tener un plan de trabajo con los es-
Participar como delegado de Colom-
tudiantes de Terapia Ocupacional en
bia en la CLATO.
Colombia.
Metas a dos años:
Haber coordinado una actividad con
Contar con un Convenio Internacio- otras agremiaciones.
nal.
Meta a 10 años: Contar con alianzas
Liderar un proceso dentro de la y trabajo colectivo con otras asociacio-
CLATO. nes y agremiaciones.
Participar activamente en el Congreso Estrategia de Sostenibilidad
Latinoamericano de Terapia Ocupa-
cional. La sostenibilidad se plantea en dos
sentidos: finaciera y administrativa -
Metas a diez años:
operativa.
Tener reconocimiento a nivel latino-
americano. Sostenibilidad Financiera

Tener participación en distintas re- Definición: Se refiere  al conjunto de


des, consejos y alianzas latinoame- acciones desarrolladas por el CCTO
ricanas. para lograr capacidad de sostenimien-
to a nivel económico y financiero, y
Articulación con otras de esta manera, cumplir con el desa-
agremiaciones rrollo científico, investigativo y gremial
propuesto en el objeto del CCTO.
Definición: Establecimiento de inter-
cambios con otras agremiaciones de Objetivo: Consolidar un desarrollo
Terapia Ocupacional en Colombia. sostenible del CCTO a partir de acti-
Objetivo: Generar lazos de intercam- vidades de inversión y de consecución
bio, en beneficio de la Terapia Ocupa- de recursos de manera permanente y
cional colombiana, con otras agremia- confiable.
ciones locales.
Estrategias:
Actividades:
Afianzar relaciones con la empresa
Apoyar la Red de Estudiantes de Tera- privada (afín al quehacer del CCTO o
pia Ocupacional – RETO. de los terapeutas ocupacionales), que

130 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


permita intercambio y beneficio mu- tos para el CCTO (cajas de compensa-
tuo. ción familiar, editoriales, bibliotecas).
Consolidar un plan de beneficios para Considerar intercambio de servicios a
los afiliados del CCTO que satisfaga través de estrategias de economía so-
intereses académicos, científicos e lidaria.
investigativos, para lograr mayor par-
ticipación, confianza y motivación por Metas a dos años:
agremiarse. El CCTO tendrá capacidad de sosteni-
Establecer nuevas alianzas y conve- bilidad en gastos fijos para un tiempo
nios con organizaciones académicas, de dos años por concepto de afiliacio-
científicas y de prestación de servicios nes.
dentro del quehacer del terapeuta El CCTO recibirá ingresos fijos anuales
ocupacional. por concepto de eventos académicos
Estructurar un plan de inversión ajus- desarrollados a nivel nacional.
tado a las necesidades del CCTO, con- El CCTO tendrá el apoyo de una em-
siderando la capacidad de ingresos presa privada o socios que aportarán
por concepto de afiliaciones. económicamente para el sosteni-
Consecución de recursos: miento.

Reestructuración de ingresos por con- El CCTO tendrá un 10% de incre-


cepto de afiliaciones (grupos, tarifas, mento en el desarrollo de convenios
tiempos de afiliación, otros). y alianzas.

Búsqueda   a través del desarrollo de Metas a diez años:


eventos académicos. El CCTO tendrá capacidad financiera
Gestión de pautas para la financiación para crear alianzas con programas de
de Revista Ocupación Humana. Terapia Ocupacional y agremiaciones
a nivel de Latinoamérica para agenciar
Intercambio a través de estrategia de procesos de educación continua.
economía solidaria.
El CCTO tendrá un portafolio de servi-
Plan de Inversión: cios y beneficios activo para los afilia-
dos de manera permanente.
Estimar presupuestos ajustados a las
necesidades del CCTO. El CCTO tendrá capacidad económica
para realizar patrocinios a estudiantes,
Establecimiento de alianzas con uni- profesionales e investigadores en dis-
versidades de orden nacional e in- tintos escenarios académicos a nivel
ternacional para lograr desarrollo de nacional e internacional.
educación continua.
El CCTO tendrá una oferta de econo-
Descuentos y mayores beneficios para mía solidaria que favorezca el desarro-
los afiliados, que no representen gas- llo sostenible desde el intercambio de

Colegio Colombiano de Terapia Ocupacional 131


saberes y prácticas en beneficio de la Lograr la gestión de apoyo especializa-
Terapia Ocupacional en Colombia. do para la construcción de procesos y
procedimientos.
El CCTO tendrá la capacidad financie-
ra para sostener una plataforma virtual Actividades: Construcción del funcio-
que albergue la página web y la Revis- namiento estructural, funcional y pro-
ta Ocupación Humana. cedimental del CCTO.
Sostenibilidad de la Estructura Ope- Metas a dos años:
rativa
El CCTO contará con un mapa de pro-
Definición: Es el conjunto de proce- cesos y un documento soporte de los
sos y procedimientos que debe imple- principales procesos y procedimientos
mentar el CCTO para lograr óptimos administrativos, financieros, legales
desempeños a nivel administrativo, y científicos para el desarrollo de sus
financiero, legal y científico, que con- funciones.
tribuyan con el cumplimiento de la
misión del CCTO y de las funciones En el ejercicio formal, cada integran-
públicas delegadas por el Estado. te del Consejo Directivo Nacional del
CCTO tendrá soportes prácticos y evi-
Objetivo: Determinar e implementar dencias físicas acerca de los principa-
procesos y procedimientos para ga- les procesos y procedimientos deriva-
rantizar el buen funcionamiento del dos de su rol que le permitirán hacer
CCTO a nivel administrativo, finan- un empalme efectivo al consejo electo
ciero, legal y científico. 2018 - 2020.
Estrategias: Metas a diez años:
Identificar los principales procedi- El funcionamiento del CCTO tendrá
mientos y procesos a nivel administra- un soporte operativo eficaz, eficiente
tivo, financiero, operativo, científico e y oportuno frente al desarrollo de ac-
investigativo. tividades administrativas, financieras,
legales y científicas.
Conocer términos legales y jurídicos
acerca de los procesos de contratación Contará con los archivos organizados
interna y externa. y la memoria histórica del Colegio or-
ganizada.
Establecer protocolos para los princi-
pales procesos y procedimientos del
CCTO.

132 Revista Ocupación Humana • Vol. 16 No. 2 • 2016 • ISSN 0122-0942


Guía abreviada para autores nes de usuarios o pacientes, se debe anexar el
respectivo consentimiento para su publicación.
Antes de enviar un artículo a la Revista Ocupación
Humana, los autores deben asegurarse de haber Las figuras y tablas serán enviados en archivos
leído la “Guía de Autores” completa, disponible separados del texto, en formato Word para Win-
en la página http://www.tocolombia.org/revista- dows; deben ser legibles, presentados en blanco
oh/. Los artículos o documentos deben enviarse y negro o en escala de grises. Se deben seguir las
al correo electrónico editorial@tocolombia.org, normas de la American Psychological Association
adjuntando la carta remisoria con los nombres y (APA), en su última versión publicada.
firmas del autor o autores, especificando sus co-
rrespondientes datos de identificación (nombre, Las referencias bibliográficas se organizarán en
dirección, dirección electrónica y teléfonos). Se orden alfabético según el primer apellido del
anexará además una carta con la certificación de autor y se ubicarán en una hoja aparte al final
responsabilidad del (los) autor(es), la cesión de del artículo, con la estructura que se presenta a
los derechos de publicación y la declaración de continuación:
conflictos de interés. Una vez recibido el artículo
y tras la verificación del cumplimiento de los re- Trujillo, A. (2002). Terapia ocupacional: conoci-
quisitos, la Editora hace su presentación ante los miento y práctica en Colombia. Bogotá: Editorial
Comités Editorial y Científico, quienes evalúan su Universidad Nacional de Colombia.
mérito científico. Posteriormente el artículo será
sometido a evaluación por pares, quienes revisa- Otro tipo de citación (revistas, artículos electró-
rán y aprobarán su contenido y podrán realizar nicos, entre otros) será consultada por los autores
observaciones sobre el mismo. en la norma APA.

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tos de los siguientes tipos: Artículos de Investiga-
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