La metodología Scrum fue definida por Ikujiro Nonaka y Takeuchi a principios de
los 80. Lo hicieron en un estudio en el que analizaron la manera de desarrollar nuevos productos de empresas tecnológicas como Fuji-Xerox, Canon, Honda, NEC, Epson, Brother, 3M o Hewlett-Packard.
Para Nonaka y Takeuchi la nueva forma de trabajo en equipo se parecía al
avance en formación de melé de los jugadores de rugby. De ahí su nombre ya que melée se traduce como scrum en inglés. Así, Scrum es un modo de trabajar en equipo en el que el resultado se produce de forma incremental. Para lograrlo se establecen periodos cortos de trabajo en los que se sigue un mismo patrón. Y se ha demostrado que es aplicable a todo tipo de empresas, no sólo las de raíz tecnológica.
Ilustración 1 Metodología SCRUM
¿Quieres comenzar a aplicar la metodología SCRUM? Para ello, lo primero es que
entiendas el proceso y todos los elementos que intervienen. Básicamente hay 3 pasos que debes tener en cuenta: 1. El punto de partida es una lista de objetivos que deben priorizarse. Esta fase es esencial ya que dependiendo de lo que se priorice serán necesarios unos u otros requisitos. Será esta priorización la que determine las posteriores interacciones, así como las entregas. El equipo que la realiza es el que determinará, también, qué tareas son necesarias y cómo se asignan los trabajos entre los miembros. 2. Los sprints. La metodología SCRUM se caracteriza porque se ejecuta en bloques de tiempo periódicos y cortos. Se denominan sprints y son la base del método. Cada sprint dura entre 2 y 4 semanas y da un resultado completo. Este será un entregable. Todos los sprints tienen un formato idéntico. Para que funcionen debe existir una comunicación continuada. Además, se representan los avances de manera visual. 3. Feedback y reflexión. Al terminar cada ciclo se presenta el resultado para se aprobado o rechazado. Es el momento de que el equipo involucrado reflexione sobre cómo se ha trabajado en el sprint, lo que ha ido bien y mal y, sobre todo, cómo mejorarlo. Ejemplo practico
Esta metodología puede aplicarse en el área de la metalmecánica, ya que piens
que funcionaria de mejor manera en el área de producción, que en el área de la construcción o la integración de proyectos. A través de la realización de una lista de objetivos en el préstamo de servicios de valor agregado como lo es los mecanizados industriales y los sprints se realizarían semanalmente en las áreas que integran la empresa que podría ser por el tipo de mecanizado realizado, este tendría un subjefe de área que será quien se encargue del desempeño de dicha área y finalmente al termino de cada mes se realizaría la retroalimentación de si se lograron los servicios de mecanizado proyectados y también si las ganancias aumentaron para el bien de la empresa.