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de escasos recursos que se ubicó en las faldas del ce- haciendas agroindustriales de la costa, en las que la
rro San Cristóbal–; en los Barrios Altos se estableció sindicalización había avanzado con la organización
la tristemente célebre Huerta Perdida. La otra gran de la Federación de Trabajadores Azucareros (bajo
expansión de barrios clandestinos o suburbanos se control del PAP) y la Federación de Yanaconas y
produjo en el distrito de La Victoria, que abarca la Campesinos del Perú (bajo control del PCP). En
zona que va desde la avenida Grau hacia las aveni- 1960, ambas federaciones se unificaron en la Fede-
das 28 de Julio e Isabel La Católica, y que de allí su- ración Nacional de Campesinos del Perú (FEN-
be hacia la carretera Central. Allí se establecieron El CAP). Entre 1957 y 1960 se desarrollaron impor-
Porvenir, Mendocita, cerro San Cosme, El Agustino, tantes movilizaciones en haciendas como Cayaltí,
cerro San Pedro, Santa Clara de Bella Luz, Doña Luz Pomalca, Casagrande y Paramonga, en las cuales se
e Independencia. Lima pasó de una población de realizaron matanzas de trabajadores.
533 645 habitantes en 1940 a 2 245 067 en 1971. El segundo tipo de movilización corresponde a
las haciendas tradicionales de la sierra. Allí cobró
EL CENSO DE 1961 gran importancia la toma de tierras (recuperación o
invasión, según el punto de vista) por parte de las
Este censo fue el VI de Población y el I de Vi- comunidades, especialmente entre 1960 y 1963.
vienda y se realizó el 2 de julio de 1961. Sus resul- Aquí también se cometieron matanzas contra los
tados señalaron un total de 9 906 746 habitantes, campesinos como en Calipuy, Rancas y Yantac. En
divididos en 4 925 518 hombres y 4 981 228 muje- la sierra sur se desarrollaron los sindicatos de arren-
res, con un ritmo de crecimiento de entre 2,5 y dires, allegados y feudatarios para defender sus tie-
3,5% al año. La población rural abarcaba alrededor rras y los intentos de monopolización de los benefi-
del 55% del total (5 208 568 millones) y la urbana cios de la producción de té y café. En 1962, el PCP
el 45% restante (4 698 178 millones). La población funda la Confederación Campesina del Perú (CCP)
de Lima llegaba a los 2 031 051 habitantes (casi el en contraposición a la FENCAP del PAP. Sin embar-
20%). La mayor concentración de población estaba go, ambas organizaciones fueron muy golpeadas
entre los 0 y los 9 años con casi un 30%. La PEA as- por los efectos desmovilizadores de la reforma agra-
cendía a 3 045 000 habitantes con 1 900 700 para el ria de 1962 y 1964, y por la represión derivada de la
campo y 1 144 300 para la ciudad. Como ha resal- lucha contra las guerrillas en 1965. Asimismo, en
tado Franklin Pease, a diferencia del Censo de 1964 la división al interior del PCP afecta a la CCP
1941, el de 1961 ya no incluyó variables altamente cuando uno de sus asesores, el abogado Saturnino
dudosas basadas en la composición racial, pues ca- Paredes, encabeza la línea maoísta.
tegorías tales como “indio” o “mestizo” no sólo eran Investigadores como Alberto Flores Galindo y
categorías raciales sino también sociales. Pero sí Pedro Gibaja dividen en tres momentos este perío-
mantuvo indicadores discutibles como la definición do de las luchas campesinas por la tierra. El prime-
de “centro urbano”: se consideraba urbana aquella ro, de 1945 a 1948 –bajo la influencia del PAP y las
población que vivía en las capitales de las circuns- posibilidades que ofrecía el régimen democrático de
cripciones territoriales o distritos, una distinción Bustamante y Rivero–, cuando diversas comunida-
arbitraria porque muchas de ellas podrían ser fácil- des de la sierra central comienzan a gestionar su re-
mente consideradas “rurales”. Es cierto que cual- conocimiento oficial de conformidad con la ley pro-
quier delimitación que se haga en este terreno sería mulgada durante el Oncenio, acontecimientos que
igualmente arbitraria, sea por circunscripción polí- fueron acompañados por el inicio o reinicio de pro-
tica o por núcleo de habitantes por poblado, desde cesos judiciales entre comunidades y haciendas. A
que la noción de “urbano” podría también pensarse su vez, al interior mismo de las haciendas las rela-
en relación con la presencia o ausencia de determi- ciones de dependencia personal ingresan a una cri-
nados servicios (educación, salud) o por el tipo de sis definitiva cuando los colonos organizan sus pri-
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dedicación laboral. meros sindicatos, sumándose a los del proletariado


agrícola y a los yanaconas de la costa. Este proceso
LAS MOVILIZACIONES CAMPESINAS fue interrumpido por la dictadura de Odría, que
(1945-1964) aplicó una dura persecución al sindicalismo comu-
nista y aprista. El segundo momento va de 1956 a
Según Sulmont, existieron dos tipos de movili- 1962, cuando la movilización campesina y el sindi-
zaciones campesinas: el primero corresponde a las calismo campesino se propagan de la sierra central

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Mujeres serranas de Sabino Springett. Una


de las repercusiones de las movilizaciones
campesinas fue el replanteamiento del
problema agrario y la urgencia de una
reforma. A pesar de la intención de
Belaunde por impulsar una legislación
agraria progresista, el tímido ensayo
legislativo de 1964 dejó pendiente el
problema hasta la reforma promulgada por
Juan Velasco Alvarado en 1969.

tas temerosos de la movilización


campesina, fue denominado “refor-
ma agraria privada”.
Flores Galindo ha resaltado algu-
nos rasgos de estas movilizaciones,
diferenciándolas de las ocurridas en
otros períodos históricos. En primer
lugar, las ocupaciones de tierras fue-
ron antecedidas por disputas judicia-
les entre las comunidades y las ha-
a otras áreas del país, en especial al departamento ciendas. Para ello, los campesinos recurrieron a per-
del Cuzco, teniendo su expresión más alta en la soneros o representantes legales como Genaro Le-
ocupación del valle de La Convención por los sindi- desma Izquieta y exhibieron títulos de propiedad
catos campesinos organizados por Hugo Blanco. El que en muchos casos databan del período colonial.
tercer momento, de 1962 a 1964, se caracteriza por Estos juicios mostraban el espíritu legalista que ca-
la generalización de las ocupaciones –o recupera- racteriza al campesinado andino, ya que las ocupa-
ciones– masivas de tierras a través de los sindicatos ciones eran anunciadas con anterioridad y en las
campesinos, pese a la represión estatal, situación primeras etapas ocurrieron sin producir enfrenta-
que se da a lo largo y ancho del país, aunque en me- mientos violentos (quienes recurrieron a la violen-
nor grado en el norte y la costa. Ello llevó a un re- cia fueron los hacendados o la policía, producién-
plantamiento del debate alrededor de la reforma dose masacres de campesinos y enfrentamientos
agraria. Desde 1964 se asiste a un descenso de la violentos entre 1962 y 1964). En segundo lugar, la
movilización campesina. Estos 20 años debilitaron movilización campesina abarcó gran parte del terri-
la economía terrateniente, afectaron los mecanis- torio nacional, de la sierra norte a la sierra sur, las
mos de reciprocidad entre hacen-
dados y colonos, y socavaron las
bases del poder local. Muchos ha-
cendados comenzaron a abando-
nar sus propiedades y otros a par-
celarlas o a venderlas a los campe-
sinos. Este proceso de parcela-
ción, realizado por los latifundis-

En la historia colonial los indígenas


exigieron el respeto de sus derechos
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ante los jueces y tribunales. Esta


práctica histórica, que es común a
muchos pueblos colonizados y
sociedades rurales, se prolongó en la
época republicana. Genaro Ledesma
Izquieta (al lado derecho) fue asesor de
comunidades campesinas en sus
disputas legales por tierras.

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zonas altoandinas y la costa, e incluso la ceja de sel- sina no pudo realizar una revolución agraria por sí
va, aunque no se llegó a constituir una dirección na- misma? La carencia de apoyo de otros sectores so-
cional unificada. En tercer lugar, a la participación ciales, su heterogeneidad y falta de centralización,
de las comunidades campesinas se suman de mane- la falta de una dirección política y la hábil política
ra masiva y por medio de la sindicalización, los co- del Estado de combinar represión con concesiones,
lonos de haciendas, lo cual dará a la movilización fueron las razones más importantes.
campesina un carácter ofensivo frente a los hacen-
dados. En ese sentido, la composición social de la LOS DEBATES ACERCA DE LA REFORMA
movilización campesina es vasta y heterogénea: co- AGRARIA
muneros, colonos, proletarios agrícolas y yanaco-
nas. En cuarto lugar, el predominio de los objetivos Como ha reseñado Henry Pease, hacia fines de
campesinos frente a las reivindicaciones étnicas. El los 50 la presión de la lucha por la tierra comienza
objetivo central de la movilización campesina fue la a tener efecto en el sistema político. Producto de
lucha por la tierra, al cual se suman claros objetivos una mayor integración debido al incremento de las
antifeudales: abolición de las formas serviles y el comunicaciones, las protestas campesinas comen-
trabajo gratuito a favor de la implantación del sala- zaron a tener rápido impacto en Lima, centro del
rio (o su aumento si existía), la jornada de ocho ho- sistema político. El campesino se hace oír en la ciu-
ras, el derecho a la escuela y otros servicios. dad a través de las cámaras de televisión, la prensa
Algunos componentes indígenas se mantuvieron y la radio. El debate parlamentario en los años 1958
en estas protestas, como el uso reiterado del que- y 1959 generó en la opinión pública la convicción
chua en mítines y asambleas, el empleo de la músi- de la urgencia de una reforma agraria. El gobierno
ca andina en las ocupaciones y los rasgos mesiáni- de Manuel Prado constituyó una comisión presidi-
cos que rodearon a líderes campesinos como Hugo da por Pedro Beltrán, en ese entonces premier y mi-
Blanco. Finalmente, el uso de símbolos como la nistro de Hacienda y Comercio, e integrada por
bandera y el himno nacional; por un lado, se usaban otros representantes de los propietarios de grandes
como un medio para buscar un terreno común de extensiones de tierra. Dicha comisión, al mismo
negociación y sortear la represión, pero significaban tiempo que una propuesta sobre la vivienda, elabo-
también la incorporación al mundo campesino de ró un proyecto de ley de Reforma Agraria centrado
un componente ideológico como es el nacionalis- en acciones de colonización, en el cual sólo los pre-
mo. Este aspecto de lo nacional también se puede dios no trabajados resultaban sujetos a afectación. A
encontrar en la búsqueda de apoyo en otros secto- partir de este proyecto se dictó una ley de Inmigra-
res sociales, especialmente urbanos. ción para facilitar la colonización de zonas de la sel-
Es obvio que estos rasgos están relacionados con va alta y favorecer la ocupación de predios no traba-
los cambios ocurridos en la estructura social: la pe- jados. Dicha ley se basaba en la desgravación de im-
netración del capitalismo en el
campo, la conformación de un
mercado interior y las migracio-
nes; procesos que confirieron mo-
vilidad al campesinado y amplia-
ron sus posibilidades de concien-
cia, a la vez que fueron articulan-
do los diversos espacios compo-
nentes del territorio peruano. Pe-
ro ¿por qué, pese a su fuerza y
amplitud, la movilización campe-
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Uno de los argumentos de los grupos


opuestos a una reforma agraria era la
colonización de la selva peruana para
usos agrícolas. La idea de una
“conquista del Este peruano” se tradujo
en una legislación dictada durante el
mandato de Manuel Prado Ugarteche.

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puestos a los capitales privados que incrementaran habían expropiado 769 942,53 ha, y 214 286,45 ha
la producción y propiciaran el afianzamiento de tenían concluidos sus trámites de expropiación, pe-
grupos humanos en la selva; las tierras selváticas no ro sin financiamiento para terminar el proceso. En
trabajadas que fueran útiles para colonización se- total se beneficiaron 11 760 familias.
rían revisadas y utilizadas para la formación de
granjas; se ofrecía asesoría técnica y crediticia al co- EL PROBLEMA DEL PETRÓLEO
lono por medio del Instituto de Reforma Agraria y
Colonización; los colonos preferenciales serían Como ha reseñado Kuczynski, desde la década
obreros excedentes de alguna compañía minera o de de 1930 el tema del laudo a La Brea y Pariñas no ha-
otras industrias que no podían ser absorbidos por bía vuelto a ser tocado. Ello se debió fundamental-
otras actividades. Debido a esta ley se establecieron mente a la falta de un punto de vista nacional úni-
colonias en los departamentos de Junín, San Martín, co acerca de la importancia económica de la IPC, su
Amazonas, Cuzco, Madre de Dios y Puno. impacto en las relaciones con Estados Unidos y las
Al asumir el gobierno, Belaunde se comprometió posibles ventajas de su nacionalización. Según
a ejecutar una amplia y resuelta reforma agraria. La Kuczynski, estaba comprobado que a fines de los
oposición APRA-UNO frenó sistemáticamente esta años 60 la IPC era el segundo contribuyente en el
reforma, logrando que la ley Nº 15037 de 19 de ma- Perú, ya que producía tres cuartos del crudo del
yo de 1964 no afectara los complejos agroindustria- país y era un gran proveedor de empleo, especial-
les azucareros mediante un estatuto de excepción; mente en la ciudad de Talara. Las posiciones contra-
la ley parecía entonces apuntar hacia el terratenien- puestas se reflejaron en los diarios más importantes
te tradicional de la sierra. Si bien al principio dicha de entonces: La Prensa defendió a la IPC, apoyada
afectación estaba permitida legalmente, la Coalición por el gobierno de Prado y el PAP. En cambio, El Co-
movió todos sus recursos en el Parlamento y el po- mercio denunciaba su presencia como un enclave
der Judicial para impedir su ejecución y la asigna- colonial, aglutinando a los partidos y sectores na-
ción de fondos y recursos para el pago de las expro- cionalistas. Paulatinamente, iba constituyéndose
piaciones. La ley contemplaba la afectación escalo- una opinión pública mayoritaria a favor de la expro-
nada según la extensión de tierras, disponiendo asi- piación.
mismo la abolición de los servicios personales vin- La posición de la embajada de los Estados Uni-
culados a la tierra y determinando un nuevo régi- dos varió con los años y no siempre fue similar a la
men de aguas. Sin embargo, la misma ley admitía de la empresa en cuestión. Sin embargo, su mensa-
los denominados “regímenes de excepción”, aplica- je en las décadas del 50 y 60 era que “dañar” o “ha-
bles a las haciendas cuyo producto fuese destinado cer algo” a la IPC sería muy malo para las relaciones
al abastecimiento de plantas industriales (haciendas con los Estados Unidos, ya que una acción en con-
azucareras y algodoneras). Se creó, además, un tra constituiría un precedente negativo para las re-
Consejo Nacional Agrario –integrado por delegados laciones entre las compañías norteamericanas y
del Ejecutivo y del Parlamento, así como por repre- otros países productores de petróleo. El gobierno
sentantes de los propietarios–, en el cual el Ejecuti- norteamericano incluso amenazó con aplicar la en-
vo estaba en minoría. Había dos representantes de mienda Hickenlooper, que obligaba al Ejecutivo de
los trabajadores: un delegado de la FENCAP y otro los Estados Unidos a cortar la compra de azúcar en
de la CTP, ambas controladas por el PAP. Había, ade- caso de realizarse expropiaciones que no fueran rá-
más, delegados de los grandes propietarios: de la pida y efectivamente pagadas. También se hallaba
Sociedad Nacional Agraria y de la Sociedad de Ga- latente la posibilidad de la suspensión total de la
naderos del Perú. Para distraer los esfuerzos de la ayuda norteamericana.
comisión se dio prioridad a la reforma en los luga- El diario El Comercio había atacado a la IPC des-
res donde existían feudatarios. Con ello no se afec- de antes de la Segunda Guerra Mundial, haciendo
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taba esencialmente el sistema de tenencia de la tie- campaña a favor de la expropiación desde fines de
rra y se conseguía el respaldo de miles de pequeños los años 50. Se decía que los sentimientos de su di-
propietarios. Paralelamente, se dejaba de lado toda rector, Luis Miró Quesada, contra la IPC, habían
acción contra los grandes propietarios. Poco a poco despertado cuando desembarcó en el puerto de Ta-
el gobierno de Belaunde se doblegó, frenando la re- lara, centro de operaciones de la IPC, a fines de los
forma agraria. El ritmo de afectación en el período años 20 y leyó un letrero que decía: “Talara. Puerto
fue muy lento: hasta el 30 de setiembre de 1968 se norteamericano”.

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La opinión del Ejército también evolucionó gra- La solución


dualmente. A partir de 1967, su posición era que la definitiva de las
IPC debía irse de una forma u otra. diferencias entre
el Estado
Bajo el gobierno de Odría, la IPC aceptó someter
peruano y la
sus operaciones al régimen normal peruano de im- International
puestos a la renta. En 1957, la compañía pidió al go- Petroleum
bierno de Prado transferir La Brea y Pariñas al siste- Company fue uno
ma de concesiones de la ley de Petróleo de 1952. La de los primeros
petición, sin embargo, fue rechazada, ya que la IPC puntos de la
quería seguir pagando impuestos a las tasas especia- agenda política
les más bajas aplicables a ella. de Fernando
En 1959 el suspenso de las relaciones entre la IPC Belaunde Terry.
La lenta
y el gobierno peruano terminó, pues Pedro Beltrán negociación
–como premier y ministro de Hacienda– decretó el produjo una
alza del precio de la gasolina, que implicaba un in- sensación de
cremento de los impuestos a las utilidades pagaderas malestar en la
por la IPC; asimismo, el decreto permitía que el go- opinión pública,
bierno negociara una concesión regular para La Brea a lo que se sumó
y Pariñas, de acuerdo a la ley de Petróleo de 1952, lo el escándalo de la
que fue condenado tanto dentro como fuera del llamada página
11 del Acta de
Congreso. Aunque el voto de censura contra Beltrán Talara.
fracasó, el arreglo con la IPC no llegó a concretarse.
Una serie de proyectos de ley para la nacionalización
de La Brea y Pariñas fueron presentados durante el
debate; aun cuando ninguno de ellos fue aprobado,
sirvieron para discutir nuevas alternativas.
Una de las razones del apoyo a Belaunde en 1962 igual que otras reformas importantes. No aceptó el
por parte de la junta militar había sido su posición proyecto de ley que devolvía la propiedad del sub-
respecto a la IPC. El día que asumió la presidencia suelo al Estado peruano, y más bien dictó leyes que
prometió entregar al Congreso, en 90 días, una pro- entorpecieron las negociaciones y sometieron cual-
puesta de arreglo definitivo con la IPC, nombrando quier posibilidad de acuerdo con la IPC a la mayo-
al independiente Mario Velasco para encabezar las ría parlamentaria de la Coalición.
negociaciones, pero no se llegó a ningún acuerdo. Belaunde no sólo debió enfrentar a la Coalición
Asimismo, la Coalición entorpeció los arreglos al sino además las divergencias al interior de su propio
partido, tanto de sectores conservadores
como radicales. Por otro lado, a lo largo
de la administración belaundista, el go-
bierno de Estados Unidos condicionó,
en diversos grados, la disponibilidad y
volumen de los fondos de la AID a la so-
lución del problema de la IPC, aunque
ninguna parte de las operaciones fue ex-
propiada. Dentro de este contexto, en
medio del proceso de recomposición de
las alianzas políticas en 1968, se produ-
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ciría el escándalo del Acta de Talara.

Gran parte de las propuestas de Fernando


Belaunde serían desvirtuadas por la oposición
conformada por el APRA y la UNO, que tenían
mayoría en el Congreso. Con Isaac Lindley, en
una fotografía de 1965.

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Portocarrero Grados

EL RÉGIMEN MILITAR
(1968-1980)

EL OCASO DEL PODER OLIGÁRQUICO sas de propiedad social. Estas medidas cuestionaban
el carácter privado de la propiedad, por lo que des-
Las reformas, al otorgar derechos económicos y pertaron entre los propietarios una resistencia ma-
sociales a las mayorías populares, tuvieron claros yor que la mostrada frente al crecimiento del Esta-
objetivos antioligárquicos y de búsqueda de una ba- do y su intervención en la economía, de la cual su-
se social que apoyara al régimen militar que se ini- pieron obtener importantes beneficios. Estas refor-
ciaba. Ello contribuyó al desarrollo de la organiza- mas, que buscaban contener una explosión social
ción popular autónoma frente al Estado y a los par- inminente, casi se constituyen en el germen de una
tidos políticos, la cual fue desde el inicio una de las revolución más radical.
contradicciones del proyecto reformista militar. Los
intereses económicos, políticos y sociales afectados EL MANIFIESTO DEL GOBIERNO
por las reformas vieron en la organización popular REVOLUCIONARIO DE LAS FUERZAS
un desafío sin precedentes, ya que no contaban con ARMADAS
el apoyo directo del Estado ni de los partidos políti-
cos, que se vieron recortados en su accionar duran- Mientras se realizaban las negociaciones para la
te todo el período. Habían perdido, pues, el control formación de la junta revolucionaria, fue lanzado
de la situación. un primer comunicado fechado el 2 de octubre, que
La capacidad del reformismo militar para imple- establecía las razones del golpe. En primer lugar, se
mentar dichas medidas y la de los sectores popula- señalaba la resistencia de “poderosas fuerzas econó-
res para organizarse autónomamente debe hallarse micas, nacionales y extranjeras, en complicidad con
en el llamado proceso de democratización social peruanos indignos” a la “realización de las básicas
abierto con la crisis del poder oligárquico desde la reformas estructurales”. En segundo lugar, una ne-
década del 50, expresada en el cuestionamiento de gativa marcha económica, donde además de la crisis
su dominación, vista como ilegítima. Gracias a tal generada “han quedado comprometidos nuestros
proceso fue posible la liquidación del terrateniente recursos en condiciones de notoria desventaja para
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tradicional mediante la reforma agraria; la obten- el país, lo que determina su dependencia de pode-
ción de importantes derechos económicos y sociales res económicos, lesionando nuestra soberanía y dig-
como la estabilidad laboral; la organización sindical nidad nacionales”. En tercer lugar, la inmoralidad
y una más real mediación del Estado en los conflic- en la administración pública, generada por la “am-
tos laborales; y el impulso a la participación de los bición incontrolada dentro del ejercicio de las acti-
trabajadores en la gestión y propiedad de las empre- vidades inherentes a los poderes Ejecutivo y Legis-
sas, mediante las cooperativas agrarias y las empre- lativo, (y) en el desempeño de los cargos públicos

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de administración”. Por
último, el fracaso del pro-
grama reformista de Be-
launde – “que fue esperan-
za de renovación y de
transformaciones revolu-
cionarias”– debido a “la
indefinición, la compo-
nenda, la inmoralidad, el
entreguismo, la claudica-
ción, la improvisación, la
ausencia de sensibilidad
social, caracteres constitu-
tivos de un mal gobierno,
que en tales condiciones
no debía seguir detentan-
do el poder”. Pero la gota
que derramó el vaso fue la
alianza de Belaunde con el
PAP y el Acta de Talara: El 3 de octubre de 1968 fue depuesto el arquitecto Belaunde. El gobierno militar impulsaría
“La culminación de los de- una serie de reformas que modificaron el perfil social y productivo de la sociedad peruana.
saciertos ha tenido lugar
en el uso incontrolado y doloso de inconstituciona- res morales que aseguren a nuestra patria la conse-
les facultades extraordinarias concedidas al Ejecuti- cución de sus superiores destinos”.
vo, así como en la seudo solución, entreguista, da-
da al problema de La Brea y Pariñas, que evidencian LA JUNTA DE GOBIERNO
que la descomposición moral en el país ha llegado a
extremos tan graves que sus consecuencias son im- El golpe había comenzado a ser planificado des-
previsibles para el Perú”. de los primeros meses de 1968 por oficiales del
Como programa y principios rectores el mani- Ejército, encabezados por el general de división
fiesto señalaba que: “La acción del gobierno revo- Juan Velasco Alvarado. El grupo estaba compuesto
lucionario se inspira en la necesidad de transfor- por cinco generales y cuatro coroneles; el núcleo de
mar la estructura del Estado, en forma tal que per-
mita una eficiente acción de gobierno; transformar
las estructuras sociales, económicas y culturales;
mantener una definida actitud nacionalista, una El general de
clara posición independiente y la defensa firme de división Juan
la soberanía y dignidad nacionales; restablecer ple- Velasco
namente el principio de autoridad, el respeto y la Alvarado
observación de la ley, el predominio de la justicia y encabezó la
junta que depuso
de la moralidad en todos los campos de la actividad a Fernando
nacional”. Asimismo, “el gobierno revolucionario Belaunde Terry
declara su respeto a los tratados que en el orden in- en 1968. Las
ternacional tiene celebrados el Perú; que se man- acciones de su
tendrá fiel a los principios de nuestra tradición oc- gobierno
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cancelaron a la
cidental y cristiana; y que alentará la inversión ex- llamada
tranjera que se sujete a las leyes e intereses nacio- oligarquía
nales”. Finalmente, el gobierno revolucionario peruana y a la
“hace un llamado al pueblo peruano a fin de que, vez iniciaron el
confundido con la Fuerza Armada, luche por lo- monopolio
estatal en varios
grar una auténtica justicia social, un dinámico de- sectores
sarrollo nacional y el restablecimiento de los valo- productivos.

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Portocarrero Grados

estos últimos fue el que fundamentalmente llevó a del golpe la “impostergable necesidad de poner fin
cabo el golpe de Estado (Jorge Fernández Maldona- al caos económico, a la inmoralidad administrativa,
do, Leonidas Rodríguez Figueroa, Enrique Gallegos a la improvisación, al entreguismo respecto a las
Venero y Rafael Hoyos Rubio). Según Kruijt, para fuentes naturales de riqueza y a su explotación en
realizar el golpe se movilizaron dos coroneles, nue- beneficio de grupos privilegiados, así como a la pér-
ve comandantes, diecisiete oficiales y ciento cin- dida del principio de autoridad y a la incapacidad
cuenta “rangers”. La Aviación y la Marina tuvieron en la dirección del Estado”.
que plegarse una vez consumados los hechos, aun- El art. 3 establecía que los comandantes genera-
que la segunda tuvo algunas vacilaciones; recién en les de las tres armas ocuparían los despachos de
horas de la tarde del día del golpe, las tres ramas lle- Guerra, Marina y Aeronáutica respectivamente, y
garon a un acuerdo. Sin embargo, el comandante que éstos designarían “por unanimidad (como) pre-
general de la Marina, vicealmirante Mario Castro de sidente de la República a un miembro de la Fuerza
Mendoza, solicitó su pase al retiro y fue reemplaza- Armada” (art. 4). Asimismo, que el ministro de
do por el contralmirante Raúl Ríos Pardo de Zela. Guerra ejercería la presidencia del gabinete y el res-
Asimismo, se le pidió su renuncia al general de di- to de ministros sería nombrado por el presidente,
visión Alejandro Sánchez Salazar, partidario de Be- “pudiendo ser miembros de la Fuerza Armada o ci-
launde y segundo hombre en la jerarquía del Ejérci- viles” (cabe señalar que no hubo civiles en el gabi-
to. De esa manera, el general Velasco pudo renun- nete hasta 1977). El gobierno revolucionario se re-
ciar a su cargo de comandante general del Ejército, giría por “las disposiciones del presente estatuto, y
dejando en su lugar al general Ernesto Montagne. las de la Constitución del Estado, leyes y demás dis-
La junta revolucionaria quedó así compuesta por posiciones, en cuanto sean compatibles con los ob-
el general Juan Velasco Alvarado, quien la presidía; jetivos del gobierno revolucionario” (art. 5). Con
el general Ernesto Montagne Sánchez, por el Ejérci- ello se hacía una declaración formal de un supues-
to; el vicealmirante Raúl Ríos de Zela, por la Arma- to respeto a la institucionalidad política anterior a
da; y el teniente general Alberto López Causillas, octubre de 1968, aunque era obvio que el nuevo go-
por la Fuerza Aérea, firmantes del estatuto del go- bierno establecería los términos de ésta según se
bierno revolucionario de la Fuerza Armada. Los ge- fueran desarrollando los acontecimientos y las ten-
nerales y almirantes en servicio activo ocuparon los siones internas en las Fuerzas Armadas. El presi-
principales ministerios y juramentaron en palacio dente cumpliría el rol del poder Ejecutivo y el gabi-
de Gobierno en la noche del 3 de octubre. Mientras nete en pleno el del Poder Legislativo (art. 6). Con
tanto, el grupo de coroneles que planificó y llevó a respecto a la relación entre el gobierno y las Fuerzas
cabo el golpe pasó a conformar el Comité de Aseso- Armadas, se respetarían las reglas de la institución
ramiento del Presidente (COAP), organismo creado militar: “Los comandantes generales de los institu-
la noche anterior como una especie de Estado Ma- tos armados continuarán rigiéndose, en lo que res-
yor político del primer mandatario. Más adelante, el pecta a su situación militar, por las disposiciones le-
general Velasco contaría con un importante grupo gales vigentes. Al pasar a la situación de retiro, la
de asesores civiles identificados como intelectuales designación de su sucesor recaerá en el oficial gene-
de izquierda. Entre otros estaban Augusto Zimmer- ral de mayor antigüedad dentro de su respectivo
mann (secretario de prensa de Velasco), Alberto instituto” (art. 9). Finalmente, el presidente juraría
Ruiz Eldredge (quien tuvo a su cargo el litigio con- el cargo y el cumplimiento del estatuto ante la jun-
tra la IPC), Augusto Salazar Bondy y Walter Peñalo- ta revolucionaria, y los ministros ante el presidente
za Ramella (encargados de las bases doctrinarias de (art. 10); el estatuto no sufriría modificaciones y se-
la reforma educativa), Carlos Delgado Olivera (se- ría refrendado “por los comandantes generales del
cretario de Velasco y uno de los ideólogos de la re- Ejército, Marina y Fuerza Aérea al constituirse en
volución), Héctor Cornejo Chávez, Héctor Béjar y junta revolucionaria” (art. 11). Ambas disposicio-
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Carlos Franco. nes se cumplieron en la noche del 3 de octubre.


En cuanto al poder Judicial, en diciembre de
EL ESTATUTO REVOLUCIONARIO 1969 fueron despedidos los vocales de la Corte Su-
prema y reemplazados por el Consejo Nacional de
El mismo 3 de octubre se promulgó el decreto Justicia, entre cuyas funciones se encontraba el
ley Nº 17063 o estatuto del gobierno revolucionario nombramiento de jueces y vocales. El Jurado Nacio-
de la Fuerza Armada. El art. 1 señalaba como razón nal de Elecciones dejó de funcionar hasta que sus

1090
El Perœ contemporÆneo

miembros fueron restituidos para la realización de trense. Cuando estos elementos fueron puestos en
las elecciones a la Asamblea Constituyente (1978). cuestión, comenzó también su declinar.

EL CARÁCTER INSTITUCIONAL DEL LAS BASES PROGRAMÁTICAS E


GOLPE IDEOLÓGICAS

Como ha resaltado Luis Pásara, un problema Aunque el documento “Bases ideológicas de la


central fue establecer la relación entre el gobierno revolución peruana” fue hecho público recién en
militar y las Fuerzas Armadas, lo cual tenía que ver 1975 –como consecuencia de los acontecimientos
con la representación institucional del régimen y su del 5 de febrero–, en sus términos fundamentales
legitimidad castrense. El golpe fue inicialmente la contiene los iniciales principios que rigieron el gol-
expresión de la voluntad política de un grupo de pe de octubre de 1968. En dicho documento la “re-
oficiales, posición que pasa a ser mayoritaria en las volución peruana” es definida como “un proceso
Fuerzas Armadas ante los hechos consumados; en autónomo que se desarrolla para transformar el sis-
ese sentido, el gobierno que surge de esta decisión tema político, económico y social del país y cance-
es institucional. El respeto a la forma institucional lar nuestra condición de sociedad subdesarrollada,
para integrar el gobierno es la base sobre la cual se capitalista, oligárquica y sometida a los intereses del
constituyó el régimen de las Fuerzas Armadas, res- imperialismo”. Es, asimismo, “nacionalista e inde-
petándose la jerarquía de grado y antigüedad. Sin pendiente” y doctrinariamente se basa en un “hu-
embargo, esto se vería afectado, en primer lugar, por manismo revolucionario de clara oposición a los
la constante manipulación de ascensos y nombra- sistemas de explotación social y a los dogmáticos y
mientos en las tres armas y, en segundo lugar, por la totalitarios, por tanto, recusa los sistemas capitalis-
existencia de un grupo “dirigente” que encabezaba ta y comunista”. Estas ideas estaban obviamente in-
el proyecto. De allí se podría deducir que este gru- fluenciadas por la Democracia Cristiana y el Social
po “dirigente” encubre la conducción del régimen Progresismo.
bajo el título de las Fuerzas Armadas. Aun así, ello Dentro del humanismo revolucionario, el docu-
no invalida el carácter institucional del conjunto mento recoge diferentes aspectos de diversas co-
del proyecto, ni la existencia de un grupo “más rrientes: socialista, libertaria y cristiana, mostrando
avanzado” a su interior, ya que las pugnas y las ma- el carácter ecléctico de estas bases ideológicas, que
nipulaciones sobre los ascensos pasaban a través de buscaban un consenso genérico al interior de las
las reglas de juego castrenses. Se combinaron, pues, Fuerzas Armadas para así proyectar una imagen de
ambos factores que de alguna manera afectaron el pluralismo político, económico e ideológico frente a
grado de radicalidad o los términos de la aplicación la sociedad, permitiendo que cualquier medida o
de las reformas; allí, el liderazgo
del general Velasco como ele-
mento dirimente tendría un rol
central. Entonces, a pesar del
carácter institucional del proce-
so durante toda su llamada “pri-
mera fase” el general Velasco im-
puso su mayor personalidad y li-
derazgo, combinando elementos
de fidelidad personal con el res-
peto a la institucionalidad cas-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

La toma de las instalaciones petroleras


de Talara, el 9 de octubre de 1968, y
la ley de reforma agraria promulgada
en 1969, entre otras medidas,
provocaron una relativa adhesión al
proyecto de la Fuerza Armada. En la
imagen, mitin de Juan Velasco
Alvarado en la ciudad de Iquitos.

1091
Portocarrero Grados

posición política al interior del gobierno pudiera ser reforma de la educación (1971); la estatización de la
fundamentada en dichas bases ideológicas. El docu- industria pesquera anchovetera (1973) y de la Ce-
mento termina con el planteamiento de “la cons- rro de Pasco Peruvian Corporation (1974); la ley de
trucción de una democracia social de participación propiedad social y la expropiación de los periódicos
plena” basada en: el apoyo popular, un sistema eco- de circulación nacional (1974); y la estatización de
nómico pluralista y en valores morales como “la los yacimientos mineros de Marcona (1975). El go-
justicia, la libertad, el trabajo, la participación, la bierno creó también numerosas empresas estatales y
solidaridad, la creatividad, la honradez y el respeto estableció un nuevo tratamiento al capital extranje-
por la dignidad humana”. Todos estos planteamien- ro, enmarcado en las normas fijadas por el Pacto
tos, como se sabe, no llegaron a cumplirse. Andino. Veámoslas en detalle.
a) El control de la banca y el sistema financiero. En
LA TOMA DE TALARA lo relativo al sistema bancario y financiero, en ene-
ro de 1969 se dictó una ley por la cual sólo podían
El 9 de octubre se efectuó la toma de Talara, que considerarse nacionales aquellas empresas cuyo ca-
abarcó los yacimientos, la refinería y las instalacio- pital estuviera en poder de peruanos en más del
nes de la IPC. Ese día fue declarado de la “Dignidad 75%, y cualquier nuevo banco que se estableciera
Nacional”, celebración que se mantuvo hasta 1979. debía tener la misma composición. Según Carlos
En un principio el gobierno declaró no estar obliga- Malpica se favoreció la fusión de bancos y se fijó en
do a pagar indemnización alguna, dado el monto de 150 millones de soles el capital mínimo para operar
los impuestos adeudados por la empresa; sin embar- en Lima. Asimismo, el Estado adquirió el Banco Po-
go, el gobierno de los Estados Unidos asumió la de- pular del Perú, la totalidad de las acciones del Ban-
fensa de la empresa amenazando con la aplicación co Continental y del Banco Internacional del Perú
de la enmienda Hickenlooper. Como ha sostenido (el primero perteneciente al Chase Manhattan Bank
Carlos Malpica, a los pocos días de expropiar La y el segundo al Chemical Bank of New York, la Bun-
Brea y Pariñas el gobierno otorgó nuevos contratos ge y Börn y al grupo Grace). En marzo de 1973 el
de exploración y explotación de los yacimientos del Banco Continental adquirió la totalidad de las ac-
zócalo continental a la empresa norteamericana Bel- ciones del Banco del Progreso, controlado por un
co Petroleum Corporation, que se convirtió en una grupo judío-peruano.
de las compañías productoras más importantes. Asi- A comienzos del gobierno de Belaunde los úni-
mismo, luego de la creación de Petroperú (en julio cos bancos privados que quedaban eran: el Banco
de 1969), el gobierno firmó numerosos contratos de Crédito del Perú (25% de sus acciones pertene-
con consorcios norteamericanos, europeos y japo- cientes a la Banca Comercial Italiana), el Banco de
neses para la explotación del petróleo descubierto Lima (controlado por el Credit Lyonnais), el Banco
en la selva por dicha empresa. Estos contratos se fir- Comercial del Perú (cuyos principales accionistas
maron bajo el llamado “modelo peruano” que obli- eran miembros de las familias Bertello y Aspíllaga)
gaba a las compañías a entregar al Estado el 50% de y el Banco de la Industria de la Construcción (BIC,
los crudos por concepto de regalía, avaluándose los controlado por Luis León Rupp). Se creó, además,
costos de producción en un 30%, de modo que las la Corporación Financiera de Desarrollo (COFI-
utilidades de las compañías estarían cercanas al DE), con autonomía económica y administrativa,
20% del valor bruto de los productos extraídos. Só- cuya función era coordinar la acción financiera em-
lo la Occidental Petroleum Company descubrió ya- presarial del Estado y fomentar la creación de em-
cimientos con valor comercial, por lo que se convir- presas, fortaleciendo las existentes. Con el avance
tió en la primera productora. de las reformas, el Estado –a través de la banca es-
tatal y asociada– asumió directamente la política
LAS REFORMAS ESTRUCTURALES monetaria, crediticia y cambiaria, adecuándola a las
ETAPA CONTEMPORÁNEA

políticas de desarrollo impulsadas por el gobierno.


Las principales fueron, en orden cronológico, las Para ello otorgó al Banco Central de Reserva y al
siguientes: la nacionalización de la IPC (1968); la Banco de la Nación facultades para actuar como
reorganización de la banca bajo control del Estado y agentes financieros.
la reforma agraria (1969); las leyes generales de in- b) La Reforma Agraria. El 24 de junio de 1969 el
dustria, pesquería y minería, y la creación de sus gobierno de la Fuerza Armada promulgó la ley de
respectivas comunidades laborales (1969-1970); la Reforma Agraria, iniciando un proceso de cambios

1092
El Perœ contemporÆneo

radicales. El lema principal de la reforma fue:


“Campesino: el patrón no comerá más de tu pobre-
za” y la primera acción gubernativa fue la expropia-
ción de los complejos agroindustriales de la costa
en los cuales el 60% de acciones fueran de propie-
dad extranjera. Se determinó la cancelación del lati-
fundio y se estableció una nueva distribución de tie-
rras basada en la mediana y pequeña propiedad, que
debía ser trabajada directamente por sus dueños. La
extensión máxima de las propiedades se estableció
de la siguiente manera: 150 ha en la costa, 1 500 ha
en las haciendas ganaderas, y de 15 a 55 ha en la sie-
rra y ceja de selva, pagándose a los propietarios una
indemnización en bonos y en efectivo, con el obje-
tivo de que los bonos fueran invertidos en la indus-
tria. Asimismo, la ley señaló que no habría excep-
ciones en cuanto a las dimensiones de la propiedad
y que éstas serían establecidas por el Tribunal Agra-
rio y los jueces de tierras. Se establecieron asimismo
diferentes formas de propiedad cooperativa y aso-
ciativa, destacando las Cooperativas Agrarias de
Producción (CAPs), formadas sobre la base de los
complejos agroindustriales; las Sociedades Agríco-
las de Interés Social (SAIS), integradas por los tra- Arrozales en la provincia liberteña de Pacasmayo.
bajadores de los antiguos latifundios y comunida- La ley de Reforma Agraria, promulgada el 24 de junio de
des dedicadas a la agricultura y la ganadería; y las 1969, estableció diferentes modalidades de propiedad
comunidades campesinas, reestructuradas para par- cooperativa y asociativa, como las Cooperativas Agrarias de
Producción (CAPs) y las Sociedades Agrícolas de Interés
ticipar de los beneficios de la ley de Reforma Agra- Social (SAIS).
ria. Cabe destacar que desde entonces el número de
comunidades campesinas reconocidas por el Estado
se ha incrementado notablemente; según Alberto Agropecuarios (EPSA) para encargarse de la comer-
Flores Galindo, suman más de 4 mil, convirtiendo a cialización de los productos del campo orientados
la comunidad en la institución política y económi- al mercado interno, otorgándosele en diciembre de
ca más importante del Perú contemporáneo. El go- 1972 el monopolio de la comercialización del café y,
bierno disolvió la Sociedad Nacional Agraria (SNA), en agosto de 1973, el de la fibra de algodón. Un mes
controlada por los grandes propietarios agroindus- después de la ley de Reforma Agraria, el 24 de julio
triales, y fundó la Confederación Nacional Agraria de 1969, se dictó una nueva ley de Aguas, señalan-
(CNA), conformada por los diferentes sindicatos y do que los recursos acuíferos eran de propiedad del
directivas de las nuevas organizaciones cooperati- Estado y que éste determinaría el régimen de su dis-
vas. Ello implicó una lucha frontal contra el sindi- tribución (anteriormente estuvo en manos de los
calismo azucarero aprista –que databa de la década grandes propietarios, quienes la usaban como me-
del 20–, una de las razones de la oposición del PAP dio para acrecentar sus propiedades). Para su cum-
a estas medidas. Según Daniel Carbonetto, la refor- plimiento se promovió la organización cooperativa
ma agraria implicó el reparto de 10 298 453 ha en- en su uso y explotación, complementaria al sistema
tre 399 576 familias campesinas –lo que representa- asociativo y cooperativo establecido en la propiedad
ETAPA CONTEMPORÁNEA

ba el 55,3% de la superficie agrícola y el 32,9% de de la tierra.


las familias en el campo– y la liquidación de la base c) La reforma de la educación. Debido al incre-
de poder de la oligarquía terrateniente. En cuanto a mento de la demanda de los servicios educativos, y
las empresas comerciales de exportación, las dedi- como una manera de frenar las protestas estudianti-
cadas a productos agrícolas (como la Grace y la Gil- les de 1969 frente a la pérdida de la gratuidad de la
demeister en el caso del azúcar) continuaron sus ac- enseñanza, el gobierno dictó en febrero de ese año
tividades. Se creó la Empresa Pública de Servicios la ley universitaria Nº 17437, que fortalecía la auto-

1093
Portocarrero Grados

ridad del rector y dismi- La reforma de la educación fue


nuía la presencia estudian- otra de las medidas impulsadas
por el gobierno militar. Para ello
til en los órganos de deci- se contó con el concurso de
sión de las universidades. asesores civiles, entre los que
Luego de dos años, en mar- destacaba Augusto Salazar
Bondy, reconocido profesor
zo de 1971, ante el patente universitario.
fracaso de la ley, se dictó
una ley integral de reforma
de la educación (Nº 19326) universitaria y del rector,
–es decir, en todos los nive- quienes a su vez elabora-
les–, cuyas bases doctrina- rían el estatuto universita-
les fueron formuladas por rio. Se reconoció a los tra-
Augusto Salazar Bondy y bajadores como estamento
Walter Peñaloza, basándo- de la universidad, aunque
se en modelos de las uni- nunca llegaron a participar
versidades norteamerica- de la asamblea universita-
nas y europeas. Los objeti- ria, y se desconoció a las fe-
vos planteados eran: edu- deraciones universitarias,
cación para el trabajo; edu- aunque se mantuvo al ter-
cación para el cambio es- cio estudiantil. Asimismo,
tructural y perfecciona- se creó el Consejo Nacio-
miento de la sociedad pe- nal de la Universidad Pe-
ruana; educación para la ruana (CONUP), como ór-
realización del hombre y la independencia nacional; gano de coordinación entre las diferentes universi-
estímulo de la conciencia crítica y la cooperación dades; las facultades fueron reemplazadas por los
nacional y fomento de la autoeducación. programas y departamentos académicos; y se esta-
La ley consideró varios niveles educativos: a) bleció el régimen de estudios semestral y por credi-
Inicial, para niños de 0 a 6 años, de aprestamiento taje. Según Carlos Malpica, debido a la elaboración
para los siguientes niveles; b) Básico, con dos mo- de estatutos universitarios que rebasaban los alcan-
dalidades: regular –para niños de 5 a 15 años– y la- ces de la ley, el gobierno no promulgó ésta dejando
boral –para mayores de 15 años–, que abarcaba tres a las universidades en un caos legal. Asimismo, la
ciclos con nueve grados; c) Superior, que abarcaba: disminución relativa de las rentas y el haber queda-
las ESEP (Escuelas Superiores de Educación Profe- do el gobierno de las universidades bajo diferentes
sional), donde se otorgaba el bachillerato profesio- formas de autoridades provisorias, nombradas por
nal; las universidades, escuelas de oficiales de las el CONUP, fueron las causas de la crisis universita-
Fuerzas Armadas y las Fuerzas Policiales, semina- ria bajo el gobierno militar.
rios religiosos y otras escuelas, que otorgaban el ba- d) Ley de Minería. El 8 de junio de 1969 el go-
chillerato académico y las licenciaturas profesiona- bierno promulgó la ley general de Minería –en
les; y la Escuela de Altos Estudios, donde se otorga- reemplazo de la dictada bajo el gobierno de Odría–
rían las maestrías y doctorados, que nunca llegó a que establecía la participación directa del Estado en
funcionar. Otras modalidades de estudios fueron: a) la explotación, producción y comercialización de
la Calificación Profesional Extraordinaria, que ca- los productos mineros. Éste sería el caso de los ya-
pacitaba en un corto tiempo para la realización de cimientos que después de un plazo establecido no
trabajos específicos en academias y centros de ins- fueran trabajados por los concesionarios. Asimis-
trucción de calificación profesional; b) la Educación mo, se establecieron medidas de protección y apoyo
ETAPA CONTEMPORÁNEA

Especial, orientada a niños con alguna incapacidad a la pequeña y mediana empresa minera, en cuanto
física, síquica o con problemas de índole social; c) al otorgamiento de créditos y de asistencia técnica.
la Extensión Educativa, que abarcaba múltiples ac- En octubre de 1970 se crean Minero Perú y Minero
tividades orientadas al público en general. Perú Comercial (MINPECO); el primero se encar-
En cuanto a la universidad, y específicamente a garía de la explotación directa de los yacimientos
su gobierno, la ley estableció el sistema electoral pa- mineros de propiedad del Estado y la segunda de la
ra el nombramiento de los miembros de la asamblea comercialización y exportación de los minerales. De

1094
El Perœ contemporÆneo

esta manera el Estado tenía


plena disponibilidad de las
divisas del sector minero y el
control de los costos y utili-
dades, evitando así una de
las formas más comunes de
evasión tributaria. También
se crearon Centromin Perú y
Hierro Perú para la explota-
ción de los minerales y la ad-
ministración de las fundicio-
nes de la sierra central.
Según Malpica, a excep-
ción de la compra por el Es-
tado de la Cerro de Pasco
Corporation y de la Marcona
Mining Company, las empre-
sas mineras continuaron
operando normalmente. En
diciembre de 1969, el gobier- En 1970 el Estado creó Minero Perú y Minero Perú Comercial, entidades que se encargarían
no firmó nuevos contratos respectivamente de la explotación y comercialización de los productos mineros. Para la
explotación de los yacimientos mineros de la sierra central fue creada Centromin Perú.
de explotación de los yaci-
mientos de Cuajone con la
Southern Peru Copper Corporation y continuó las partamentos aledaños. En los primeros meses de
negociaciones del gobierno de Belaunde con las em- 1974, el Estado adquirió por compra-venta y/o ex-
presas Anaconda, Cerro Corporation, American propiación Cemento Andino S.A. y Cemento Pacas-
Smelting and Refining Company y Kayser Alumi- mayo, transformándose en monopolista de este sub-
nium Company, para la explotación de Cerro Verde, sector industrial, pues ya le pertenecía la planta de
Toromocho, Michiquillay, Quellaveco y Bayóvar, cemento de Yura en Arequipa.
que funcionarían en base a empresas mixtas (nacio- e) Ley de Industrias. En julio de 1970 el gobier-
nales o extranjeras) o empresas estatales con crédi- no dicta la ley Nº 18350 o ley de Industrias que in-
tos externos. Si bien la ley de Minería recortaba al- troduce importantes cambios en el sector: las indus-
gunas ventajas otorgadas a las empresas extranjeras trias básicas (o de transformación de materias pri-
en el código de Minería del gobierno de Odría, el mas, que comprendían la industria siderúrgica, pe-
modelo de explotación se mantuvo dentro de una troquímica, de fertilizantes, cemento y papel) que-
orientación de promoción capitalista. daban reservadas para el Estado; se crea el sector
Con la ley de Comunidades Industriales se creó cooperativo; se establece la participación de los tra-
la comunidad minera, semejante a la industrial pe- bajadores tanto en las utilidades como en el capital
ro con la diferencia de que se le destinaba el 10% y y la dirección de la empresa, a través de la comuni-
no el 25% de las utilidades. Para equilibrar las dife- dad industrial; y se limita la participación del capi-
rencias de productividad entre empresas se creó la tal extranjero al 33% del valor accionario de las em-
comunidad de compensación minera, a la cual con- presas que operan en el país, salvo casos excepcio-
tribuían todas las empresas para redistribuir los in- nales. Además, se expropiaron las industrias del
gresos entre los trabajadores del sector. grupo Grace, la industria del cemento, del papel, de
En lo relativo a los materiales de construcción, los fertilizantes y algunas de la química básica. La
ETAPA CONTEMPORÁNEA

con el control del Banco Popular el Estado adquirió acción empresarial del Estado en el campo indus-
el 18% de las acciones de Cementos Lima S.A., la trial generó la formación de empresas como Sider-
mayor productora de cemento, y la mayoría de las perú, encargada de la producción de acero; Indupe-
acciones de Cemento Chiclayo S.A. de Cemento rú, para implementar los proyectos empresariales
Sur, de Cementos Especiales y Derivados S.A., y de del Estado mediante la prestación de servicios téc-
Distribuidora de Materiales, la compañía encargada nicos y gerenciales; Entur Perú, para impulsar el de-
de la comercialización del cemento en Lima y de- sarrollo de los servicios turísticos, entre otras.

1095
Portocarrero Grados

En setiembre de 1970, el gobierno promulgó la Una de las medidas de legislación laboral más
ley de Comunidad Industrial que otorgaba a los tra- importantes fue el decreto ley Nº 18471 del 10 de
bajadores la participación en la gestión y propiedad noviembre de 1970, llamado ley de Estabilidad La-
de la empresa mediante la comunidad industrial, boral. Esta ley limitaba a dos los casos en los que el
conformada por todos los trabajadores de cada fá- trabajador podía ser despedido: por “falta grave” y
brica. Su patrimonio estaba constituido por el 15% por “reducción o despido total del personal autori-
de las acciones anuales originadas para la reinver- zado por la autoridad de trabajo”. Según Denis Sul-
sión libre de todo impuesto a la renta, el cual se acu- mont, dicha ley fue duramente criticada por los em-
mularía hasta alcanzar el 50% del capital social de presarios que veían recortada su libertad frente al
cada empresa; ello le daba a los trabajadores una re- trabajador. La ley además, establecía determinadas
presentación proporcional en el directorio de la em- exigencias mínimas que el empleador debía cumplir
presa, sin sobrepasar el 50%. Un 10% de la renta se para proceder al despido, impidiéndose de esta ma-
repartía entre los trabajadores de acuerdo a los días nera muchas arbitrariedades y permitiendo que los
laborados durante el año. Se exceptuó de la comu- trabajadores participaran en la acción sindical con
nidad laboral a las pequeñas empresas privadas con ciertas garantías elementales frente a las represalias
un movimiento económico menor. patronales. Sin embargo, los empresarios siguieron
En abril de 1974 se promulga la ley de Empresas atentando contra la estabilidad laboral –en especial
de Propiedad Social, cuya principal característica contra los dirigentes sindicales–, ya que la ley deja-
era pertenecer íntegramente a sus trabajadores. Las ba un amplio margen de interpretación sobre lo que
EPS se formaban de acuerdo al principio de solida- podía considerarse “falta grave”. Esto llevaba a los
ridad para la realización de actividades económicas obreros a largos trámites para recuperar su puesto
y en ellas se buscaba cumplir con la participación de trabajo. Finalmente, el Estado mantuvo la facul-
plena de todos los trabajadores, quienes tenían de- tad de suspender la estabilidad laboral en ciertas
recho de intervenir en la gestión y en los beneficios empresas o sectores, disposición a la que recurrió
de la empresa, a la acumulación social y a recibir ca- para reprimir el movimiento sindical.
pacitación permanente. A pesar de que se formaron f) Ley de Pesquería. El 28 de marzo de 1969 se
numerosas empresas bajo este régimen, muchas de promulga la ley orgánica del ministerio de Pesque-
éstas no llegaron a prosperar; entre otras razones ría, donde se establece que la extracción de los re-
porque, como ha señalado Chirinos Soto, la propie- cursos pesqueros era de interés social y de necesi-
dad social no era entendida como propiedad indivi- dad pública. La acción estatal en este sector se ini-
dual o grupal de los trabajadores que la conforma- ció con la creación, en 1970, de la empresa de co-
ban. Más bien, las empresas pertenecían “al conjun- mercialización interna denominada Empresa Públi-
to de los trabajadores que integran el sector de pro- ca de Servicios Pesqueros (EPSEP) y de otra encar-
piedad social”. gada de la exportación de la harina y el aceite de
Uno de los objetivos de estas leyes era “acabar pescado, llamada Empresa Pública de Comercializa-
con la lucha de clases” mediante la “conciliación de ción de Harina y Aceite de Pescado (EPCHAP). Se
intereses entre el capital y el trabajo”. Sin embargo, estableció luego la comunidad pesquera, semejante
surgieron serias discrepancias y contradicciones al en sus lineamientos a la minera, otorgando partici-
interior del movimiento sindical, ya que si bien se pación a los trabajadores en la gestión y en las uti-
veía con simpatía dichas medidas, éstas planteaban lidades de las empresas; y la comunidad de compen-
en la práctica la desaparición de los sindicatos y de sación pesquera, que permitía proteger a todas las
su autonomía política frente al Estado. Esta contra- empresas, grandes o pequeñas. En mayo de 1973 el
dicción atravesó todas las reformas y no pudo impe- Estado expropia las acciones de las empresas que
dir que entre 1970 y 1975 se realizaran numerosas transformaban la anchoveta, cuyo accionariado en
protestas y huelgas sindicales. su mayoría se hallaba en manos extranjeras, creán-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

En cuanto a la legislación laboral, el gobierno dose Pescaperú. Para la explotación de la pesca de


reorganizó el ministerio de Trabajo, unificó los regí- consumo directo y elaboración de conservas se
menes de Seguridad Social (de obreros y empleados) crearon varias empresas mixtas y se suscribieron
y dio una serie de disposiciones sobre inspecciones, convenios con países tanto capitalistas como socia-
reclamaciones colectivas y denuncias. También fo- listas. En julio de 1976, el gobierno de Morales Ber-
mentó el reconocimiento oficial de los sindicatos, múdez privatiza la flota de Pescaperú autorizando
duplicándose el número de éstos entre 1968 y 1975. su venta a pequeñas empresas, lo cual provocó una

1096
El Perœ contemporÆneo

gran huelga de los pescadores


anchoveteros. En 1979, el go-
bierno denunció unilateral-
mente los contratos con Cuba
y Polonia.
g) La reforma del Estado.
Los cambios producidos en
todos los sectores de la pro-
ducción y de servicios en el
país hicieron necesaria una re-
forma del aparato estatal. Se
crearon nuevos ministerios
como Economía y Finanzas
(ex Hacienda y Comercio);
Energía y Minas; Industria,
Comercio, Turismo e Integra-
ción; del Interior (ex Gobier-
no y Policía); Transportes y La estatización de la actividad pesquera fue otra de las medidas del gobierno militar.
Comunicaciones; Vivienda y Progresivamente el Estado peruano fue monopolizando las principales actividades
productivas y creando entidades estatales para su explotación y administración.
Construcción; y Pesquería. En 1973 fue creada Pescaperú.
Asimismo, se fortaleció al Ins-
tituto Nacional de Planifica-
ción (INP) otorgándole el control de todas las in- 50% de las acciones de los canales de televisión y de
versiones del sector público y la responsabilidad de once radioemisoras de Lima. Se creó, además, el Sis-
la política económica de largo plazo. A modo de tema Nacional de Información (SINADI), encarga-
descentralización, se crearon los Comités Departa- do de los servicios informativos al interior y exte-
mentales con el fin de planificar y realizar las inver- rior, y el Estado comenzó a producir programas de
siones del Estado en cada departamento del país, televisión a través del canal estatal. En julio de 1972
mediante la coordinación de las entidades estatales el gobierno compró el 70% de las acciones de la
con organizaciones de diverso tipo. Compañía Peruana de Teléfonos S.A. perteneciente
h) Las telecomuni-
caciones. En diciem-
bre de 1969 el gobier-
no creó la Empresa
Nacional de Teleco-
municaciones (Entel
Perú) encargada del
establecimiento, las
operaciones y el desa-
rrollo de los servicios
de telecomunicacio-
nes dentro y fuera del
país, iniciándose el
ingreso del Perú al
sistema de comunica-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

ciones vía satélite y


vía microondas. En
noviembre de 1971 se
promulgó la ley de
Telecomunicaciones, Una de las herencias del docenio militar fue precisamente un complejo aparato estatal y una crecida
marco en el cual se burocracia. En la imagen, fachada de lo que fuera el ministerio de Pesquería, edificio construido
expropió más del durante el gobierno militar. En la actualidad funciona como Museo de la Nación.

1097
Portocarrero Grados

a la International Telephone and Telegraph (ITT), exportaciones peruanas. El excedente nacional, que
iniciándose la nacionalización del sector. También no escaparía entonces al exterior ni se concentraría
fue nacionalizada, e integrada a Entel Perú, la Com- en pocas manos, permitiría realizar inversiones pú-
pañía Nacional de Teléfonos, encargada del servicio blicas reproductivas al mismo tiempo que se obte-
del centro, norte y oriente de la República, subsidia- nían las divisas necesarias para abastecer al sector
ria de la ITT y de la Sociedad Telefónica del Sur industrial.
S.A., subsidiaria de la empresa sueca Ericksson. A El modelo mostró su debilidad por varios lados.
todo esto se agregó la nacionalización de la red de En primer lugar, muchas de las nacionalizaciones
ferrocarriles que se encontraba en poder de la com- no produjeron el efecto esperado y algunas de ellas
pañía inglesa Peruvian Corporation. En setiembre más bien ocasionaron un significativo desembolso
de 1972 fue creada la Empresa Nacional de Ferroca- de divisas. Las expropiaciones de la IPC y la Cerro
rriles del Perú (Enafer Perú). de Pasco Corporation requirieron de nuevas inver-
i) Otros sectores. Según Malpica, el Estado con- siones antes de mostrar utilidades significativas. La
troló la mayoría de las acciones de las Empresas comercialización de minerales, pesca y productos
Eléctricas Asociadas, entidad que siguió siendo la agrícolas en manos del Estado no dejó los márgenes
predominante en el sector correspondiente, cam- de utilidad que había alcanzado antes de la expro-
biándole el nombre por el de Electrolima. El resto piación. En segundo lugar, se siguió implementan-
de empresas estatales se agrupó en Electroperú. do una política de fomento a la sustitución de im-
Las empresas comerciales continuaron operando portaciones que resultaba adicta a un consumo de
igual que antes, produciéndose pocos cambios en el divisas cada vez mayor, puestas al alcance de la in-
sector, tales como la mayor participación del Estado dustria por el Estado. En tercer lugar, la necesidad
en la comercialización de los productos agropecua- del régimen de contar con un apoyo social lo llevó
rios a través de la Empresa Pública de Servicios a aplicar una amplia cobertura de subsidios a los
Agropecuarios (EPSA) y la intervención de las 14 productos de primera necesidad urbana, repercu-
tiendas de la cadena Supermarket, que pertenecía a tiendo de manera negativa en el presupuesto fiscal,
la familia Olcese. EPSA era la única entidad autori- la balanza comercial y la producción agrícola.
zada para importar carnes, grasas, frutas, productos En conclusión, el manejo económico del régi-
lácteos, licores, menestras, trigo, maíz y sorgo, y la men suponía un creciente gasto público y un con-
encargada del comercio del arroz y otros productos sumo ascendente de divisas, acrecentado por la re-
agrícolas con precios subsidiados. Junto con EPSEP ducción de la presión tributaria sobre el capital. El
y EPCHAP, el gobierno organizó la Empresa Nacio- camino para resolver estos problemas fue el endeu-
nal de Comercialización de Insumos (ENCI), encar- damiento público, cuyo proceso se aceleró en la me-
gada de la importación de insumos y artículos in- dida de la necesidad de garantizar que la economía
dustriales. Al desaparecer EPSA en 1979, ENCI asu- continuara funcionando.
mió sus funciones.
Las urbanizadoras continuaron operando sin al- LA POLÍTICA EXTERIOR Y EL
teraciones, salvo las disposiciones dictadas para PROTAGONISMO INTERNACIONAL
evitar el exceso de especulación, racionalizar la ex-
pansión de las ciudades, facilitar la adquisición de En el campo de las relaciones internacionales el
terrenos por cooperativas y asociaciones de vivien- gobierno militar obtuvo importantes éxitos. Dio
da, y recuperar los terrenos eriazos en poder de muestras de independencia frente a la política de los
particulares. Estados Unidos, que amenazó al Perú con sanciones
económicas, especialmente en relación al problema
LA POLÍTICA ECONÓMICA con la IPC; la defensa de la tesis de las 200 millas de
mar territorial peruano y la posición respecto al ca-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

Luis Pásara ha sostenido que el proyecto militar nal de Panamá. Ello llevó al retiro de las misiones
tenía una fórmula básica para financiar el desarrollo militares norteamericanas y a una apertura hacia el
nacional: concentrar en el Estado el proceso de acu- bloque socialista, restableciéndose relaciones diplo-
mulación que se hallaba en manos del capital ex- máticas y comerciales con casi todos los países de
tranjero y de los grupos nacionales de poder econó- dicho bloque, incluyendo Cuba y China, y com-
mico. Para ello se nacionalizaron las principales ac- prándose armamento a la Unión Soviética. Se conti-
tividades productivas y de comercialización de las nuó la política de integración de los países andinos

1098
El Perœ contemporÆneo

iniciada por el gobierno de Belaunde; en mayo de


1969 Bolivia, Colombia, Chile, Ecuador y Perú fir-
maron en la ciudad de Cartagena un acuerdo de in-
tegración subregional, llamado Pacto Andino o
Acuerdo de Cartagena. En 1973 Venezuela se unió
a éste y en 1976 Chile, bajo la dictadura del general
Augusto Pinochet, se retiró. El Perú fue anfitrión de
la reunión del Grupo de los 77 del Movimiento No
Alineado, realizada en Lima en octubre de 1971,
aunque sólo participó como observador; recién en
setiembre de 1973 se incorporó como miembro ple-
no, ubicándose en una posición de liderazgo a nivel
latinoamericano y del Tercer Mundo.
Los principios fundamentales en los que se basó
la política exterior peruana fueron los siguientes:
autonomía frente a cualquier forma de injerencia
extranjera; política antimperialista, contraria a toda
forma de dominación externa o de dependencia po-
lítica, social o militar respecto a cualquier centro de
poder internacional; respaldo a la lucha de los pue-
blos contra toda forma de imperialismo, colonialis-
mo y subordinación internacional; posición de país
no alineado y ubicación tercermundista; afirmación
de un nuevo concepto en las relaciones internacio-
nales sustentado en una efectiva comunidad de na-
ciones libres y soberanas basadas en la igualdad.
Los titulares en el ministerio de Relaciones Exterio-
res durante el gobierno del general Velasco fueron
Edgardo Mercado Jarrín, ministro de Relaciones Exteriores
los generales Edgardo Mercado Jarrín y Miguel An- durante el gobierno de Juan Velasco Alvarado, fue uno de los
gel de la Flor Valle. portavoces de la posición no-alineada del Perú en los foros
internacionales.
LA MOVILIZACIÓN SOCIAL

Con el fin de obtener una era congruente con el discur-


base social de apoyo al gobierno so oficial de “democracia so-
y dirigir “desde arriba” la parti- cial de participación plena” y
cipación de la población en el de “no partido”, aunque mu-
proceso de reformas, el gobier- chos integrantes del gobierno
no creó en junio de 1971 el Sis- vieron en el SINAMOS un an-
tema Nacional de Movilización tecedente de lo que debía ser
Social (SINAMOS), encabezado la constitución de un partido
por el general Leonidas Rodrí- político de la revolución pe-
guez Figueroa, sistema que arti-
culaba organizaciones de dife-
rente carácter, a través de las El SINAMOS fue creado con el
ETAPA CONTEMPORÁNEA

propósito de conseguir respaldo civil


cuales se realizaba campañas de al proyecto militar y contribuir a la
concientización y movilización gestación de una democracia de
política, pero también se canali- participación plena. Sin embargo, se
zaba las demandas de pequeñas convirtió en un “partido” del
gobierno militar y sus prácticas
obras públicas por medio de las
repetían el tradicional sistema de
Corporaciones Departamenta- favores que ha caracterizado a los
les de Desarrollo. Esta política movimientos políticos peruanos.

1099
Portocarrero Grados

ruana. Por el carácter militar del régimen, el SINA- sos por las inversiones realizadas por el gobierno en
MOS instauró una relación vertical y autoritaria con la minería y el petróleo. Los resultados, sin embar-
la población organizada en sus filas, a través de las go, no fueron inmediatos ni en los niveles previstos,
cuales también se establecieron lazos paternalistas y y la explicación de las causas de la crisis se volvería
de clientelaje político. Sin embargo junto con el reiterativa hasta el inicio del gobierno aprista. Nin-
proceso de reformas la organización popular co- guno de los ministros de Economía ni los presiden-
menzó a radicalizarse más y, en determinados mo- tes de turno quisieron reconocer la existencia de
mentos, a desbordar el férreo control gubernativo. importantes factores internos como la caída de la
Esta organización popular, paralela a la que fue ges- presión tributaria y de la inversión privada, así co-
tándose por impulso de la izquierda radical, fue uno mo la dependencia de divisas para el funcionamien-
de los más grandes temores de los empresarios y to de la industria, acrecentada por el modelo de sus-
propietarios, ante la perspectiva de una explosión titución de importaciones.
social incontrolable. Junto con el SINAMOS se creó En cuanto a la crítica por el desmesurado creci-
el Sistema Nacional de Defensa Civil, en marzo de miento del Estado y el incremento de su presencia
1973, orientado a la prevención y rápida moviliza- en la economía en desmedro de las actividades pro-
ción social en caso de desastres. ductivas privadas, hay que señalar que, según Car-
bonetto, pese a las reformas el sector privado man-
EL INICIO DE LA CRISIS ECONÓMICA DE tuvo su preeminencia en la generación del valor
1973 bruto de la producción, con un total del 58,4%
(43,1% nacional y 15,3% extranjero), mientras que
En 1973 comenzaron a manifestarse los prime- la propiedad estatal fue del 10,3% y la asociativa de
ros síntomas de la crisis: déficit en la balanza de pa- 8%. En cuanto a inversión, también el Estado incre-
gos, caída de las reservas internacionales, incremen- mentó su participación superando a la privada:
to de los servicios de la deuda externa y del costo de mientras el sector estatal controlaba la banca, la mi-
vida. Según Lynch, cuando las dificultades econó- nería, el petróleo y, a través de las empresas asocia-
micas fueron innegables, alrededor de 1975, el go- tivas, las grandes propiedades agrarias, el capital
bierno militar las atribuyó a la baja internacional de privado tuvo preeminencia en importantes segmen-
los precios de nuestras exportaciones, causante de tos de la industria, el sector más dinámico de la eco-
la falta de divisas necesarias para las importaciones nomía, con un crecimiento promedio anual del
que hacían funcionar el resto de sectores económi- 7,5% entre 1960 y 1975. Dentro de ella se encontra-
cos, especialmente la industria. La falta de divisas ban las unidades productivas más grandes, con más
intentó ser cubierta con préstamos externos a partir de 100 trabajadores, como en los sectores químicos
de 1974, utilizando como garantía los futuros ingre- y metalmecánicos, en manos de capitales norteame-
ricanos, que tendrían una gran
importancia en la política de
sustitución de importaciones.
Sin embargo, hay que reconocer
–como sostienen Schydlowsky
y Wicht– que, pese a las altas
inversiones, el sector estatal de-
bía enfrentar problemas como el
haber absorbido empresas con
dificultades económicas o insta-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

En 1973 el gobierno de Velasco


empezó a padecer los primeros
síntomas de la crisis económica.
Si bien entre 1970 y 1975 se
incrementaron la rentabilidad y
beneficios del sector privado, esto no
fue aparejado con un crecimiento de
la inversión. En la vista, una imagen
de Lima.

1100
El Perœ contemporÆneo

laciones obsoletas y la falta de


eficacia en el manejo interno de
dichas empresas.
En cuanto al sector agrario,
no cambiaron las desiguales rela-
ciones entre el campo y la ciu-
dad, manteniéndose los precios
agrarios bajos en favor de los sec-
tores urbanos, frenándose las po-
sibilidades de crecimiento del
sector agrario asociativo y del
agro en general.
Volviendo al punto de la in-
versión privada, el sector empre-
sarial argumentaba que su reduc-
ción se debía al incremento de la
presencia estatal en la economía,
pero especialmente al impacto de Planta y trabajadores de Industria Textil Perú S.A. La existencia de una legislación
los beneficios sociales otorgados laboral protectora fue subrayada por el sector privado como la principal razón para
a los trabajadores, como la esta- restringir sus niveles de inversión.
bilidad laboral y el incremento de
salarios. Según Dancourt, entre 1970 y 1975 la de- mostrado Carbonetto, éste es insostenible. Dan-
manda, producción, rentabilidad y beneficios del court atribuye esta falta de inversión a la ausencia
sector privado se incrementaron, pero la inversión de confianza empresarial, entendida como la capa-
no, debido a la falta de confianza empresarial por cidad de los empresarios de “disciplinar” a los tra-
las limitaciones impuestas en la toma de decisiones bajadores, particularmente a través del despido. Pa-
y en la obtención de mayores ganancias, aspectos ra los empresarios la estabilidad laboral significaba
relacionados al trato del factor trabajo. Ello a pesar una disminución de su poder dentro de la sociedad
de que el gobierno de Velasco otorgó importantes en favor de los sindicatos y de la competencia que
incentivos con el fin de compensar dichas limitacio- como empleador significaba el Estado. Los empre-
nes y dar mayor confianza a los empresarios, como sarios, acostumbrados a actuar sin competencia
son las múltiples exoneraciones tributarias, el au- económica ni respeto a los derechos laborales, no se
mento del gasto público y los mejores salarios, que sintieron cómodos con las nuevas condiciones im-
incrementaron la capacidad de compra de amplios puestas por el gobierno, por más que éstas significa-
sectores populares. Ello se ve reforzado con lo que ran mayores ganancias. Por su parte, el inversionis-
Carbonetto señala acerca de la relación entre ganan- ta extranjero que, como hemos señalado, mantuvo
cias y salarios al interior de la distribución nacional su presencia en el sector industrial –pese a su des-
de la riqueza; entre 1968 y 1975, las ganancias su- plazamiento de importantes sectores como la mine-
bieron del 22,4% al 28,2%, mientras los salarios ba- ría, el petróleo y el agro–, imitó el comportamiento
jaron de 77,6% al 72,6%. Es decir que, en términos del empresario peruano: no invirtió, debido a las le-
de distribución de la riqueza, los empresarios incre- yes sociales que beneficiaban a los trabajadores, a la
mentaron sus ingresos en desmedro de los trabaja- política de formación de empresas mixtas en la ex-
dores. Ello muestra que pese a las medidas dictadas plotación de nuestros recursos naturales, a las limi-
por el gobierno, éste mantenía su tendencia a bene- taciones en la repatriación de utilidades y a la pau-
ficiar al sector empresarial antes que a los trabaja- latina nacionalización de las empresas extranjeras.
ETAPA CONTEMPORÁNEA

dores. Además, las ganancias que no se dedicaron a Sin embargo, también se benefició ampliamente con
la inversión fueron orientadas al incremento del los incentivos del gobierno y el uso de las divisas
consumo personal de los empresarios, el cual subió peruanas, lo cual redundó en mayores ganancias.
del 40% al 70% entre 1968 y 1975. El argumento de Los estudios de Carbonetto, y de Schydlowsky y
señalar al incremento de los salarios como causa de Wicht, plantean que los problemas de fondo se die-
la crisis ha sido la posición oficial del empresariado ron con el modelo de desarrollo industrial basado
peruano hasta nuestros días; sin embargo, como ha en la “sustitución de importaciones” como princi-

1101
Portocarrero Grados

pio para la acumulación económica, que demanda- vino de la banca privada de los Estados Unidos y de
ba una gran cantidad de dólares para la importación Europa, debido al deterioro de las relaciones con el
de maquinarias e insumos, necesidad que se vio in- gobierno norteamericano. Desde 1972 los déficits
crementada con el creciente reclamo por aumentos presupuestales serían cubiertos con estos préstamos
salariales y del gasto público. externos y, recién en 1974, Perú y Estados Unidos
La crisis era inevitable si la producción para el llegaron a un acuerdo que restablece la fluidez de
mercado interno no contaba con las divisas necesa- recursos financieros. Asimismo, los gastos en defen-
rias. Esta situación se había iniciado en los años 60 sa se incrementaron al deteriorarse las relaciones
con la expansión de la producción de bienes de con- con Chile luego del golpe de Estado contra el presi-
sumo durables orientados a las clases medias y altas dente Salvador Allende. En agosto de 1975 se alcan-
(automóviles, televisores, refrigeradoras y otros zó un punto crítico que pudo llegar a enfrentamien-
productos para el hogar), que requería de maquina- tos armados: los gastos de defensa subieron de 58
rias e insumos importados; pero no se impulsó una millones de dólares en 1970 a 219 millones en
política orientada a promover una industria masiva 1975. Los ingresos por las exportaciones no sólo
de bienes de consumo con insumos nacionales y debían mantener en funcionamiento a la industria,
con maquinarias producidas en el país. Las escasas sino que también debían orientar más recursos a los
divisas existentes terminaron financiando una in- gastos militares y al pago de la deuda externa, que
dustria que no atendía sino las necesidades de un se incrementó del 14,6% en 1968 al 25,8% en 1975.
sector muy pequeño de la población y que no con- Una de las salidas podría haber sido realizar una re-
tribuía a una integración económica del conjunto forma del sistema tributario para mejorar los ingre-
de los sectores productivos; es decir, no se impulsa- sos del Estado, pero esa decisión política no se to-
ba el crecimiento del mercado interno. Se buscó cu- mó ante el temor de afectar las ganancias empresa-
brir la falta de divisas a través de préstamos exter- riales y los ingresos de la clase media alta, dos sec-
nos, cuyo monto subió de 1 100 millones de dóla- tores que a pesar de verse favorecidos por las políti-
res en 1968 a 2 542 millones en 1973 y a 3 990 mi- cas económicas inmediatas mantenían su distancia
llones en 1975. La mayoría de estos préstamos pro- ideológica frente al régimen.
El fracaso económico, expresado
en forma inmediata como apremio fi-
nanciero, fue causado por defectos
de un modelo de industrialización
consumidor y dependiente de divi-
sas, que no logró integrar a los diver-
sos sectores productivos y en el mar-
co del cual casi no se reinvirtió. La
baja en los precios de los productos
de exportación, los gastos en defensa
y en el pago de la deuda externa agra-
varon la situación pero no fueron su
causa. En ese sentido, los militares
continuaron y profundizaron un mo-
delo de desarrollo industrial iniciado
por el gobierno de Belaunde.

LA EXPROPIACIÓN DE LOS
MEDIOS DE COMUNICACIÓN
ETAPA CONTEMPORÁNEA

Entre los primeros sectores afecta-


dos por las medidas del gobierno es-
tuvieron los periodistas y los medios
Una manifestación a favor de la expropiación de los diarios en 1974. En julio de
dicho año las sedes de La Prensa, El Comercio, Ultima Hora, Correo y Ojo de prensa que eran voceros de los
fueron ocupadas y posteriormente transferidas por el gobierno militar a los partidos políticos afectados por el
llamados “sectores sociales organizados”. golpe o que en general se opusieron

1102
El Perœ contemporÆneo

a él. Los diarios Expreso y Extra (ambos de propie- que el gobierno no lograba alcanzar legitimidad y
dad de Manuel Ulloa Elías) y la revista Caretas fue- apoyo social para las reformas.
ron clausurados en noviembre de 1968. Para en-
frentar a los medios de prensa opositores al gobier- LA CRISIS DEL VELASQUISMO
no, en marzo de 1969 se crea la Oficina Nacional de
Información, como vocero oficial. En marzo de La crisis política del gobierno militar no fue sino
1970 se concreta la expropiación de Expreso y Extra. la expresión de los conflictos al interior de las Fuer-
En abril es declarada en quiebra y clausurada La Tri- zas Armadas, relacionados con el rumbo que estaba
buna, vocero del PAP; asimismo, con la compra del tomando el proceso de reformas. Una de las preocu-
85% de las acciones del Banco Popular, el gobierno paciones más importantes era el movimiento social
obtuvo el diario La Crónica. En noviembre de 1971, –con signos de una rápida radicalización– que em-
se decreta la compra por parte del Estado del 51% pezaba a romper los marcos estrechos de la organi-
de las acciones de los canales de televisión privada, zación corporativa dada por el SINAMOS, agudiza-
con lo que asumió su control. Las empresas de ra- da por los primeros signos de la crisis económica. El
dio y televisión productoras de programas conti- elemento aglutinador del liderazgo del general Ve-
nuaron en manos de sus propietarios; el Estado creó lasco alrededor de las reformas comenzó a romper-
Telecentro, una empresa mixta con los antiguos se, situación impensable al inicio del gobierno mili-
dueños. Los únicos medios escritos que mantuvie- tar, aunque ya Velasco había enfrentado algo similar
ron su autonomía frente al gobierno fueron La Pren- a fines de enero de 1969 cuando le tocaba pasar al
sa (de propiedad de Pedro Beltrán), El Comercio (de retiro. El estatuto del gobierno revolucionario esta-
propiedad de la familia Miró Quesada), Ultima Ho- blecía que el presidente era elegido entre los miem-
ra, y Correo y Ojo (de propiedad del empresario pes- bros de las Fuerzas Armadas, sin especificar su si-
quero Luis Banchero Rossi). tuación de actividad o retiro. En caso de interpretar-
En la madrugada del 27 de julio de 1974, las se- se que debía ser un oficial en actividad y respetan-
des de estos diarios fueron ocupadas, dictándose esa do la jerarquía militar, la presidencia debía recaer en
misma mañana un decreto por el cual se confisca- el general Ernesto Montagne, que ya concentraba
rían; en adelante el gobierno nombraría a los direc- los cargos de presidente del Consejo de ministros,
tores y a los gerentes de las empresas editoras. Se- ministro de Guerra y comandante general del Ejér-
gún el decreto, el gobierno no asumiría directamen- cito. El general Montagne intentó un “golpe de ma-
te el control de los diarios sino que éstos serían no” al interior del Consejo de Ministros, pero fraca-
transferidos a los sectores organizados de la socie- só ante la actitud decidida del general Velasco de
dad: El Comercio sería entregado a los campesinos; mantenerse a la cabeza del gobierno.
La Prensa a las comunidades laborales; Expreso y Una nueva oportunidad para un cambio de lide-
Extra a la comunidad educativa; Correo a los profe- razgo se presenta en febrero de 1973, cuando el ge-
sionales; Ultima Hora a los trabajadores de servi- neral Velasco sufre la ruptura de un aneurisma de la
cios; y Ojo a los intelectuales. La Crónica depende- aorta abdominal. Su situación se agrava a inicios de
ría directamente de la presidencia de la República. marzo, por lo que se le amputó la pierna derecha;
Dichas transferencias nunca se concretaron. Las ante la posibilidad de su muerte, empieza a discu-
agencias noticiosas internacionales siguieron ope- tirse al interior del gobierno el tema de la sucesión
rando y se reincorporó el servicio de Prensa Latina, y a organizarse posiciones en relación al futuro del
la agencia del gobierno cubano, clausurada en di- proceso de reformas. El ministro de Marina, almi-
ciembre de 1959 por el gobierno de Manuel Prado. rante Luis Vargas Caballero, manifiesta abiertamen-
Con respecto a las revistas extranjeras, Life y The te sus discrepancias ideológicas, criticando las posi-
Economist dejaron de circular en su versión castella- ciones socialistas y marxistas del gobierno, defi-
na y se prohibió el ingreso de Visión por su posición niendo al Perú como un “país occidental y cristia-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

antiperuana. A fines de 1975, se prohibió la impor- no” que debía ser salvado de “la infiltración comu-
tación de revistas frívolas (Playboy, Cosmopolitan), nista”. Estas declaraciones contaron con el apoyo de
en tanto que, de las revistas nacionales, continuaron su institución, que desde el inicio había estado en
apareciendo Caretas y Oiga. Durante la segunda fa- desacuerdo con el proceso de reformas. El sector ve-
se se fundaron numerosas revistas políticas como lasquista logra que la junta de gobierno entregue
Marka, Amauta, Equis X, Opinión Libre y El Tiempo, momentáneamente las atribuciones del presidente
expresión de una inminente crisis política debido a de la República al entonces presidente del Consejo

1103
Portocarrero Grados

de Ministros, general Ed- NAMOS, que había esta-


gardo Mercado Jarrín. do en manos de “los pro-
Ante la crisis política gresistas”. Para inicios
que se abría al interior de 1975, Velasco toma
del gobierno, el propio abierta posición a favor
general Velasco –visible- de “la Misión”.
mente enfermo– hace un
esfuerzo supremo y reto- EL 5 DE FEBRERO
ma sus atribuciones, tra-
tando de mantener la La crisis política del
unidad de las Fuerzas gobierno también co-
Armadas. A fines de ma- menzó a expresarse en
yo el almirante Vargas manifestaciones de des-
Caballero hace nuevas contento popular que
declaraciones, esta vez Javier Tantaleán Vanini, ministro de Pesquería entre 1970 y
incluían a miembros de
en defensa de la propie- 1975 y sindicado como el jefe de “la Misión”, grupo de la policía, mayoritaria-
dad y la empresa priva- ministros considerados de orientación conservadora al interior mente procedente de
da, solidarizándose con del gobierno militar. sectores populares y me-
los gremios empresaria- dios bajos. A inicios de
les. El propio general Velasco lo desautoriza y le febrero de 1975 se producen reclamos por mejoras
exige su renuncia, siendo reemplazado por el almi- salariales, contra la corrupción administrativa y
rante José Arce Larco; sin embargo, ello no solucio- por maltratos de parte de altos oficiales. El reclamo
nó las contradicciones al interior de las Fuerzas Ar- de los subalternos se extendió de comisaría en co-
madas y el incidente afectó más bien su unidad ins- misaría, conformándose una comisión representa-
titucional. tiva que se instaló en la sede de Radio Patrulla en
Al interior del sector velasquista también co- el centro de Lima, amenazando con una huelga de
menzaron a manifestarse posiciones discrepantes no atenderse sus reclamos; al fracasar las negocia-
alrededor de temas como la unidad institucional de ciones, hacia la medianoche del 4 al 5 de febrero, la
las Fuerzas Armadas, la agudización de la moviliza- huelga entró en vigencia. Unidades blindadas del
ción social y la crisis económica. Según Nicolás Ejército sitiaron Radio Patrulla exigiendo la entrega
Lynch, en lo que respecta a la movilización popular de los dirigentes policiales y el fin de la huelga; al
–quizá el tema que más preocupaba a las Fuerzas no haber respuesta, se produce la toma violenta del
Armadas por sus implicancias en cuanto a las posi- local, y debido al control militar de la zona nunca
bilidades revolucionarias de su movilización autó- se pudo precisar el número de muertos y heridos
noma– se manifestaron dos posiciones: por un lado entre los huelguistas. Luego el Ejército se retiró.
estaba el grupo de ministros conocido como “la Mi- Las horas siguientes en las calles del centro de Li-
sión”, que apoyaban una política de control del mo- ma fueron de incertidumbre. La gente temía salir
vimiento social a través de los servicios de inteli- de sus casas, pero poco a poco comenzó a darse
gencia y el paralelismo sindical, enfrentando la in- cuenta de la falta de control. En la mañana, la pro-
fluencia creciente de los partidos políticos de la iz- testa estalló tanto en Lima como en el Callao; para-
quierda radical. Los miembros de este grupo, enca- lelamente a los saqueos de tiendas de ropa y elec-
bezado por el ministro de Pesquería, general Javier trodomésticos, fueron incendiados el casino mili-
Tantaleán Vanini, eran incondicionales del general tar, el diario Correo, las oficinas del SINAMOS, el
Velasco, ganándose paulatinamente su confianza. El centro cívico. Los ataques a estos últimos, al pare-
otro grupo –conocido como “los progresistas” y cer, estuvieron encabezados por estudiantes apris-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

conformado por los antiguos coroneles que organi- tas que trataron de dirigir la espontánea explosión
zaron el golpe de 1968 junto con el general Velas- popular.
co– promovía un acercamiento cada vez más estre- Desde palacio de Gobierno se ordena la salida de
cho al movimiento social y evolucionaba hacia po- las tropas de la segunda región militar (Lima y Ca-
siciones más radicales, cercanas al socialismo y al llao) a cargo del general Leonidas Rodríguez, miem-
marxismo. El apoyo del general Velasco a “la Mi- bro de “los progresistas”; éstas salen recién a medio-
sión” se evidenció al entregarle la dirección del SI- día y reprimen a sangre y fuego tanto a los saquea-

1104
El Perœ contemporÆneo

quería reforzar su relación con las or-


ganizaciones populares mediante la
creación de un partido político. Unos
y otros parecerían haber estado de
acuerdo al respecto: los de “la Mi-
sión”, porque ello les permitiría conti-
nuar su política de control del movi-
miento social; “los progresistas” por-
que con ello se podría recuperar la re-
lación “pueblo-Fuerza Armada” y dar
concreción a “la democracia social de
participación plena”. El 25 de febrero
el gobierno publica las “Bases ideoló-
gicas de la revolución peruana” y en
julio se anuncia la formación de la Or-
ganización Política de la Revolución
Peruana (OPRP), que no tendría éxi-
to, y que languidecería con la salida de
Velasco.

LA CAÍDA DE VELASCO

Los hechos del 5 de febrero abrie-


ron espacios a los sectores conserva-
dores de las Fuerzas Armadas. Ade-
El 5 de febrero de 1975 la ciudad de Lima quedó desguarnecida al decretarse más de la situación política y econó-
una huelga de la Guardia Civil, produciéndose el robo y saqueo de numerosas mica, y de la posibilidad de un con-
tiendas del centro de Lima, así como el ataque a diarios de filiación flicto militar con Chile, las Fuerzas
gobiernista como Correo. Armadas temían que las protestas y
movilizaciones populares se incre-
mentaran favoreciendo a los partidos
dores como a los manifestantes. Asimismo, median- de la izquierda radical. La Marina recuperó posicio-
te comunicado oficial, el gobierno suspende las ga- nes cuando en julio de 1975 logra que el general
rantías y declara el toque de queda a partir de las 6 Velasco retire al comandante general de la Marina
de la tarde. El saldo oficial fue de 86 muertos, 155 nombrado por él, a favor de uno elegido por la pro-
heridos, 1 012 detenidos y 53 policías enjuiciados, pia arma. Al interior del Ejército comenzó a deba-
según datos de Aldo Panfichi y Dirk Kruijt. El go- tirse nuevamente el tema del relevo de Velasco: un
bierno acusó oficialmente al PAP de alentar los dis- grupo de oficiales se pone en contacto con colegas
turbios y protestas, cosa que éste siempre negó. de la Marina y la Aviación, y con el presidente del
Como ha sostenido Lynch, por primera vez se Consejo de Ministros y comandante general del
produce una manifestación abierta de descontrol Ejército, general Francisco Morales Bermúdez. A
social y de represión contra la población en Lima. pesar de los objetivos diferentes, los diversos secto-
Estas situaciones se habían presentado al interior res al interior de las Fuerzas Armadas estaban de
del país, en Ayacucho (1969), el centro minero de acuerdo en la necesidad del recambio del general
Cobriza (1971) o Andahuaylas (1974), pero no en Velasco: la Marina y los conservadores querían un
ETAPA CONTEMPORÁNEA

Lima. Los sucesos del 5 de febrero mostraron la pér- relevo para dar marcha atrás en las reformas, “la
dida de la legitimidad que los militares habían con- Misión” deseaba fortalecer su política de control
seguido con las reformas. Ello puso en debate ya no del movimiento social, y “los progresistas” querían
sólo el problema del recambio del general Velasco, continuar con el proceso de reformas. Pero cada
sino también el de la búsqueda de salidas políticas sector era incapaz por sí solo de imponerse a los
que mantuvieran la unidad institucional de las otros, por lo que se plantearon establecer un míni-
Fuerzas Armadas; pero, sobre todo, el gobierno mo de acuerdos en garantía de la unidad institucio-

1105
Portocarrero Grados

nal de las Fuerzas Armadas. En-


tonces ya se barajaba el nombre
del general Francisco Morales
Bermúdez como un hombre de
consenso, quien además seguía
jerárquicamente al general Velas-
co y había negociado con los di-
ferentes comandantes de las
Fuerzas Armadas pero sin llegar
aún a acuerdos definitivos. Mo-
rales Bermúdez aprovecha un
viaje al sur del país y desde la
ciudad de Tacna se subleva, lo-
grando la adhesión de los co-
El 5 de febrero de 1975 generó una fuerte crisis al interior del gobierno militar,
mandantes de las diferentes re-
sumada a los padecimientos físicos de Juan Velasco Alvarado y los enfrentamientos giones militares. Al mediodía del
entre facciones al interior del gabinete ministerial. Finalmente, el 29 de agosto de 29 de agosto de 1975 el general
1975, en Tacna, Francisco Morales Bermúdez, entonces comandante general del Velasco abandona palacio de
Ejército, anunció el relevo de Velasco. Gobierno.

II

LA SEGUNDA FASE rales Bermúdez mostró cierta apertura política hacia


los sectores civiles, revocando las deportaciones
Inicialmente el desplazamiento del general Ve- dictadas a principios de agosto contra políticos y
lasco de la presidencia de la República no significó periodistas, a excepción de Eudocio Ravines, quien
ningún cambio sustancial, lo que permitió al discur- moriría en su exilio en México, en 1979. También
so oficial señalar que se trataba del cumplimiento de se dio una relativa apertura a la prensa mediante la
las normas internas de las Fuerzas Armadas, dado autorización de publicación a revistas y semanarios
que el general Velasco ya no se hallaba en actividad. políticos, que harían de este período una de los más
Se anunció asimismo la profundización de las refor- ricos en debate político y de mayor politización so-
mas y el cumplimiento de la transferencia del poder cial. Entre ellos destacan, además de la revista Care-
al pueblo organizado. En ese sentido, la salida del tas, Oiga, Equis X (de Ismael Frías), El Tiempo (de
general Velasco fue presentada como el inicio de Alfonso Baella Tuesta), Opinión Libre (vinculado al
una “segunda fase” de la revolución peruana. Pero diario La Prensa) y Marka (perteneciente a un con-
realmente, ante el adelanto de los planes por parte glomerado de partidos de izquierda). Sin embargo,
del general Morales Bermúdez, las diferentes posi- los nuevos diarios, debido a la incertidumbre del
ciones castrenses entraban a una nueva situación curso político y a los elevados costos, funcionaron
ETAPA CONTEMPORÁNEA

frente al rumbo que debía tomar el gobierno. al ritmo de constantes clausuras y reaperturas.
Inicialmente, el general Morales Bermúdez man- Morales Bermúdez inició también el desplaza-
tuvo el discurso reformista radical, con el objetivo miento de los integrantes de “la Misión”, los cola-
de no provocar las protestas del movimiento social boradores más cercanos del general Velasco. La ten-
ni producir giros abruptos. Se abrían nuevas posibi- dencia más radical, la de “los progresistas”, manten-
lidades de negociación, tanto dentro como fuera de dría su presencia en el gobierno durante un año
las Fuerzas Armadas; para iniciarla, el general Mo- más. Se dictaron asimismo medidas de radicaliza-

1106
El Perœ contemporÆneo

ción e impulso de la reforma agraria y de la propie-


dad social y, en un nuevo intento por institucionali-
zar el proceso de reformas, se crea el Frente de De-
fensa de la Revolución Peruana (FDRP), encabeza-
do por el dirigente campesino Avelino Mar. Final-
mente, se nombró una comisión para la formula-
ción de un nuevo plan de gobierno que sería cono-
cido como “Plan Túpac Amaru”, cuyas propuestas
no pasaron de ser meras declaraciones retóricas y
formales.
En su papel de mediador de las tendencias al in-
terior de las Fuerzas Armadas, Morales Bermúdez
dictó también medidas orientadas a favorecer a los
sectores conservadores: hacia mediados de 1976,
desplazó del gobierno a “los progresistas”, recortó
la estabilidad laboral, encarceló en la colonia penal
de El Sepa a un importante grupo de asesores sindi-
cales y flexibilizó el trato a los empresarios. Esto
provocó un paro regional de la CGTP en Lima y el
Callao el 29 de diciembre de 1975, el primero des-
de 1968.

RECOMPOSICIÓN POLÍTICA AL
INTERIOR DEL GOBIERNO
Francisco Morales Bermúdez sucedió a Juan Velasco Alvarado
Como se señaló anteriormente, el general Mora- en la conducción del gobierno militar, con lo que se dio inicio
les Bermúdez desplazó a los colaboradores más cer- a la llamada Segunda Fase que significó la transición hacia
canos del general Velasco. A fines de octubre de un gobierno civil.
1975 se pasa al retiro a los generales José Graham
Hurtado, jefe del COAP, y Leonidas Rodríguez, jefe cales al interior de las Fuerzas Armadas. En julio de
de la segunda región militar. Si bien estos cambios 1976, el general Carlos Bobbio se subleva desde la
se realizaron respetando las normas institucionales Escuela Militar de Chorrillos, lo cual trajo como
de las Fuerzas Armadas, favorecieron a los sectores consecuencia los pases al retiro de los generales Jor-
conservadores, actitud reflejada en casos como el ge Fernández Maldonado –presidente del Consejo
del general Luis Cisneros Vizquerra, nombrado jefe de Ministros, ministro de Guerra y comandante ge-
del SINAMOS en setiembre de 1975 y, posterior- neral del Ejército– y Enrique Gallegos Venero. Se-
mente, ministro del Interior. Con ánimo de reforzar gún Lynch, al parecer existieron conatos similares
una línea institucional, el COAP es desplazado por en diferentes puntos del país, pero todos fueron de-
el Consejo de Ministros en la formulación de planes belados.
y proyectos de ley, y en la toma de decisiones polí-
ticas, que antes eran meramente formales; con ello EL DESMANTELAMIENTO DE LAS
adquirieron fuerza los sectores opuestos a cualquier REFORMAS
profundización del proceso de reformas y que bus-
caban más bien, un retroceso. Todos los hechos señalan el giro político conser-
Los asesores civiles del gobierno también fueron vador del gobierno que lentamente desmantelaba
ETAPA CONTEMPORÁNEA

retirados de sus cargos. En setiembre es despedido las reformas, especialmente aquellas que beneficia-
Augusto Zimmermann del cargo de secretario de ban directamente a los sectores populares. Por ello,
Prensa del presidente de la República y en marzo de parte fundamental de este giro será la represión del
1976 son despedidos los directores de los diarios movimiento sindical que protesta ante el recorte de
expropiados dos años atrás, la mayoría de los cuales sus derechos, especialmente los de estabilidad labo-
era de filiación izquierdista. Esto produjo intentos ral, sindicalización y huelga. En abril de 1976 el go-
de “golpe de mano” por parte de los sectores radi- bierno declara en emergencia los sectores minero y

1107
Portocarrero Grados

la gestión; dispuso que las nuevas empresas no se


regirían por las leyes laborales aún vigentes, por lo
que muchas se declararon en quiebra; la reforma
agraria fue prácticamente paralizada y la protesta
social duramente reprimida. Esto generó la conde-
na de los sectores sociales y políticos que inicial-
mente habían apoyado al gobierno y la izquierda ra-
dical señaló que estas medidas desenmascaraban el
verdadero rostro del gobierno.
En diciembre de 1976, éste inicia un acerca-
miento a las fuerzas políticas existentes antes del
golpe de 1968 y que podríamos calificar como tra-
dicionales: AP, PPC, PAP, PCP, discriminando a los
partidos de la izquierda radical y a los sectores ve-
lasquistas. Ello se expresó en la vuelta a la circula-
ción de algunas revistas políticas, cuyos directores
llegaron a un acuerdo con Luis Cisneros Vizquerra,
ministro del Interior: no atizar la lucha de clases, no
apoyar la subversión ni atentar contra la unidad de
las Fuerzas Armadas; ello implicaba aceptar de he-
cho la censura del gobierno. Mientras tanto, los ge-
nerales velasquistas deportados meses atrás fueron
impedidos de regresar al Perú.

A pesar de una vigilada censura contra los medios de prensa,


revistas de inspiración izquierdista como Marka expresaban
sus críticas hacia la conducción económica del gobierno
militar, calificándola de antipopular y entregada al capital
extranjero. Un buen ejemplo de esta óptica se puede apreciar
en su portada del 27 de abril de 1978.

pesquero –importantes productores de divisas– pa-


ra poder reprimir la protesta sindical en puertos y
minas. Se producen huelgas entre los maestros y to-
ma de las fábricas ubicadas en la carretera Central
por sus trabajadores, amenazados con el despido.
En julio de 1976, junto con el primer “paquete”
de medidas económicas, y ante la protesta popular,
el gobierno decretó el estado de emergencia a nivel
nacional, suspendiéndose las garantías individuales
y los derechos laborales; se clausuraron las revistas
de oposición y se deportó a los generales velasquis-
tas en retiro. Junto con el estado de emergencia se
ETAPA CONTEMPORÁNEA

estableció el toque de queda, medidas que perdura-


ron hasta julio de 1977, cuando fueron derogadas
como resultado de un paro nacional.
En este contexto el gobierno devolvió a los em- Luis Cisneros Vizquerra, ministro del Interior, acordó con los
presarios la flota pesquera estatizada; modificó la dueños de algunas revistas políticas que su circulación estaría
ley de comunidad laboral, recortando los mecanis- permitida siempre y cuando no atentasen contra la llamada
mos de acceso de los trabajadores a la propiedad y a “unidad de las Fuerzas Armadas”.

1108
El Perœ contemporÆneo

LA POLÍTICA ECONÓMICA

Como primer objetivo económico se debía resol-


ver el problema financiero y de la balanza de pagos.
Cualquier reestructuración debía incluir el proble-
ma de la deuda externa, por lo que las instituciones
del sistema financiero internacional –especialmente
el FMI– tendrían papel destacado en la elaboración
de la política económica y en la aplicación de los
denominados “paquetes” de medidas, de carácter
ortodoxo y orientados a que los costos sociales fue-
ran pagados por los sectores de menos ingresos. Co-
mo ha sostenido Lynch, dichas medidas económicas
iban acompañadas de medidas de represión de la
movilización social. Según Iguíñiz, estas medidas
“correctivas” comenzaron a aplicarse desde junio de
1975, cuando el general Francisco Morales Bermú-
dez presidía el Consejo de Ministros. Dichos “pa-
quetes” tuvieron tres mecanismos definidos para re-
solver el problema de la balanza de pagos: la eleva-
ción de los precios controlados, especialmente de la
gasolina y de los productos de consumo popular; el
control de las remuneraciones, mediante el estable-
cimiento de topes y pequeños incrementos del Sala-
rio Mínimo Vital; y la devaluación monetaria, meca-
nismos que regirían la política económica en los 15 El primer ministro civil del gobierno militar fue Luis Barúa
Castañeda, en la cartera de Economía y Finanzas. Alentó una
años siguientes. Según Lynch, el diagnóstico que serie de drásticas medidas como la devaluación de la moneda,
comienza a aparecer detrás de las medidas “correc- el ajuste de precios y el control en el alza de las
tivas” es el de un “exceso de demanda”, que debía remuneraciones. Sus medidas económicas no tuvieron éxito y
ser restringida mediante la reducción de la capaci- renunció a su cargo en mayo de 1977.
dad de compra de la población y la disminución del
gasto público y de las importaciones que no estuvie- gímenes; mantenimiento del precio de productos
ran orientadas a favorecer a las empresas privadas. como el arroz, el azúcar, kerosene doméstico, gaso-
El gobierno militar asumió el diagnóstico de los gre- lina de avión y otros; congelamiento hasta el 31 de
mios empresariales pero no redujo el gasto público, diciembre de 1975 de los nuevos precios; reducción
ya que ello habría implicado reducir drásticamente de subsidios del gobierno; y reajustes leves en los
la presencia del Estado en la economía, disminuir el sueldos y salarios. Dichas medidas apuntaban a no
gasto militar –en un contexto de tensiones con Chi- sacrificar el crecimiento, manteniendo importantes
le– y no enfrentar el problema de la deuda externa. niveles de inversión pública, pero a su vez tratando
Como ya se señaló anteriormente, el primer “pa- de elevar las tasas de rentabilidad y ganancia de las
quete” de medidas se dictó en junio de 1975. Las ra- empresas. Como parte de la apertura política hacia
zones que se dieron incluían un desajuste en los los partidos políticos tradicionales y al empresaria-
precios de los productos controlados y no controla- do, en setiembre de 1975 se nombró al primer mi-
dos; divergencias entre los precios internos y exter- nistro civil del gobierno militar, Luis Barúa Casta-
nos; el alza de los insumos, que afectaba la rentabi- ñeda, hecho significativo ya que se trataba del mi-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

lidad y la producción de las empresas; la necesidad nisterio de Economía y Finanzas. Casi inmediata-
de evitar nuevos préstamos para garantizar los pro- mente se anunció una medida complementaria al
gramas de inversión; una estructura de precios per- “paquete” económico: la devaluación de la moneda,
judicial; y que el incremento de sueldos y remune- elevando el tipo de cambio de 38,70 a 45 soles. Sin
raciones crearía un déficit fiscal difícil de cubrir. Las embargo, no se logró los resultados esperados, por
medidas fueron: elevación de los precios controla- lo que en enero de 1976 el ministro Barúa anuncia
dos, de los fiscalizados y de los no sujetos a estos re- un nuevo “paquete” de medidas con los mismos

1109
Portocarrero Grados

mecanismos que el anterior: reducción de subsidios de la población, se vuelven prioritarios al interior


y elevación del precio de la gasolina y de los pro- de la estructura tributaria, y se incrementaron de
ductos básicos, disminuyendo la capacidad adquisi- manera real en 10%. Los impuestos directos, es de-
tiva de las remuneraciones y el poder de negocia- cir, a la renta, a la propiedad y a las exportaciones,
ción del trabajador. Nuevamente aumentaron los disminuyeron en 15%. El gobierno, sin embargo,
precios de la gasolina y de los alimentos, así como volvió a recurrir a la emisión monetaria en el último
levemente las remuneraciones. Los incrementos au- trimestre del año. Ante el fracaso de las medidas im-
tomáticos de sueldos y salarios por negociación co- plementadas, el ministro Barúa plantea un nuevo
lectiva quedaron suprimidos, al igual que las peti- incremento a la gasolina para cubrir el déficit fiscal,
ciones por condiciones de trabajo. Asimismo se de- a lo que el gobierno se opone; en mayo de 1977 re-
claró nulo todo pacto o convenio que excediese los nuncia a su cargo.
topes fijados, con el objetivo de evitar que los incre- Walter Piazza Tangüis, un importante miembro
mentos salariales gravaran a las empresas. Para fo- de los gremios empresariales, asume en junio de
mentar las exportaciones se dispuso reintegros y 1977 el ministerio de Economía y Finanzas, con la
exoneraciones a diversos impuestos y derechos promesa de tener libertad de decisión en las medi-
aduaneros, modificando el sistema de Certificados das económicas. Los objetivos de su programa eco-
de Reintegro Tributario a la Exportación (CER- nómico eran recuperar la confianza de los empresa-
TEX). Por último, se restringió la base monetaria en rios en el gobierno, fomentar el ahorro interno, re-
términos nominales y reales. visar los programas de inversión pública y reducir el
A lo largo del año se dictaron nuevas medidas, gasto público, entre otros. Para lograrlo planteó las
aunque éstas se concentraron en junio. Se dieron siguientes medidas: reducir drásticamente el gasto
incrementos de precios en productos que afectaban público, incrementar el precio de la gasolina en un
a las empresas públicas. La política salarial apuntó a 50%, reducir las importaciones del Estado, dar un
la capacidad adquisitiva de las remuneraciones más leve incremento de remuneraciones y negociar un
altas y a incrementos que no se acuerdo con el FMI por un
trasladaban al Salario Mínimo monto de 250 millones de dó-
Vital, haciendo más precario el lares. Sin embargo, al no obte-
ingreso de los más pobres. ner el apoyo mayoritario del
También se postergaron por gabinete para disminuir el gas-
seis meses los topes a los con- to militar, y al incrementarse la
venios colectivos, para que no movilización social a lo largo
se produjeran aumentos. Co- del año en contra de la política
mo resultado de ello, entre económica, Piazza renuncia a
1975 y 1976, el subempleo se principios de julio, cuando ya
incrementó de 18,2% a 28,3% se anunciaban las coordinacio-
y se estancó el empleo en el nes para la realización de un
sector moderno de la econo- paro nacional.
mía. En julio se devaluó la mo- Ante esta situación, el go-
neda en un 44,4%, pasando de bierno endurece su posición y
45 a 65 soles. A partir de en- nombra a un militar en el mi-
tonces se iniciaron las minide- nisterio de Economía, el gene-
valuaciones, con las cuales al
final del año el dólar costaba
69,40 soles. Walter Piazza Tangüis sucedió a
En cuanto a la política tri- Luis Barúa en la cartera de
ETAPA CONTEMPORÁNEA

Economía y Finanzas. Miembro


butaria, se incrementaron los importante de la clase empresarial
impuestos a las ventas de bie- peruana, uno de sus principales
nes y servicios (de 17 a 20%) y objetivos era devolver a los
a los bienes de lujo (de 27 a empresarios la confianza en el
gobierno militar. Sin embargo,
40%), así como el de la gasoli- discrepancias con el gabinete
na; este último y los impuestos ministerial apresuraron su salida;
indirectos que paga la mayoría su gestión duró escasas semanas.

1110
El Perœ contemporÆneo

ral Alcibíades Sáenz Barsallo. Se


produce el paro nacional del 19
de julio de 1977, que el gobierno
reprimió violentamente; hecho a
partir del cual el gobierno ya no
trataría de cuidar su imagen, so-
bre todo en cuanto a medidas
económicas. El eje de su gestión
se centraría en llegar a un acuer-
do con el FMI, restableciéndose
las negociaciones en agosto. En
octubre el gobierno firma una
carta de intención, luego de que
el general Sáenz anunciara nue-
vas medidas de austeridad. En di-
cha carta, que debía aplicarse de
octubre de 1977 a diciembre de
1979, se diagnosticó el problema
económico como un exceso de Vista externa del Mercado Central de Lima durante el paro nacional del 19 de julio
demanda, producto del déficit fis- de 1977. Ante el evidente deterioro de la legitimidad del régimen, éste convocó a
cal. Frente a ello, el gobierno se elecciones para una Asamblea Constituyente, las que se realizarían en junio de 1978.
comprometía a reducir el gasto
fiscal de 8,5, a 3,3% en 1978 y a 2,3% en 1979; a ele- tes de su salida del ministerio de Economía y Finan-
var el precio de la gasolina en 20% antes de enero zas, el general Sáenz Barsallo dictó una serie de me-
de 1978; a incrementar el crédito de 29% a 32% pa- didas ya conocidas: una devaluación de 15,4%; un
ra 1978; a establecer una tasa de cambio libre; a res- incremento de 60% en el precio de la gasolina y de
tringir los incrementos salariales al 10% (con un 40% en los productos básicos; eliminación de la ma-
objetivo de inflación de 20% para 1978), ya que és- yoría de subsidios; implementación de nuevos im-
tos eran considerados culpables de la inflación; a es- puestos; incremento en las tasas de interés; y reduc-
tablecer límites al financiamiento externo de media- ción del gasto público.
no y largo plazo; y a reducir los controles a las im- En este nuevo contexto, a inicios de mayo de
portaciones. Dichas metas fueron consideradas por 1978, el gobierno llama nuevamente a un civil, Ja-
especialistas como punitivas, vier Silva Ruete, al ministerio
incumplibles e impuestas por de Economía. Como pieza fun-
el FMI. Tal era el caso que en damental de su propuesta eco-
febrero de 1978 el mismo FMI nómica, Silva Ruete nombró
criticó al gobierno por la masi- presidente del directorio del
va violación de las metas acor- BCR a Manuel Moreyra; ambos
dadas. El gobierno respondió dirigieron la política económi-
declarando “persona no grata” ca hasta julio de 1980, inicián-
a la representante del FMI, pe- dose un período de liberaliza-
ro continuó golpeando los de- ción y privatización de la eco-
rechos laborales y los ingresos nomía, que consistió básica-
de los trabajadores. En enero mente en devolver la toma de
de 1978 se volvió a prorrogar
ETAPA CONTEMPORÁNEA

la vigencia de las negociacio- Javier Silva Ruete asumió la cartera


nes colectivas por 18 meses y de Economía y Finanzas en mayo de
en marzo de 1978 se amplió el 1978, nombrando como presidente
período de prueba, condición del Banco Central de Reserva a
Manuel Moreyra Loredo. Su gestión
previa para obtener la estabili- tuvo relativo éxito, permaneciendo
dad laboral, de tres meses a hasta el final del gobierno militar en
tres años. En mayo, poco an- julio de 1980.

1111
Portocarrero Grados

decisiones a los empresarios en desmedro de los de- dinaciones fueron largas y tediosas debido al frac-
rechos laborales. Las medidas dictadas tuvieron un cionamiento político de las fuerzas de oposición
relativo éxito, ya que permitieron estabilizar la cri- que influían en la organización sindical y popular,
sis, mas no sortearla. Parte de este relativo éxito se especialmente de la izquierda radical con constan-
debió a un contexto favorable: el inicio de la transi- tes luchas por imponerse unas sobre otras. Los gru-
ción democrática, la derrota de la movilización so- pos prochinos, trotskistas y de la Nueva Izquierda
cial, la entrada en operaciones de grandes proyectos competían con el PC prosoviético que dirigía la
de inversión minera y petrolera iniciados durante el CGTP por el control de los sindicatos; sin contar
gobierno del general Velasco y una mejora en los con la CTP aprista, las organizaciones sindicales y
precios de nuestros productos de exportación. populares influenciadas por los velasquistas y otros
La respuesta de la movilización social a las me- grupos menores.
didas del general Sáenz recién se sintió los días 22 y Finalmente, el 14 de julio, 23 organizaciones
23 de mayo con un nuevo paro nacional que reme- sindicales se agrupan en un Comando Unitario de
ció el país. En ese entonces ya se había establecido Lucha (CUL) que convocó a un paro nacional de 24
el nuevo equipo económico y la medida de protesta horas para el día 19. El comunicado del CUL plan-
no modificó los rumbos de la política económica teaba las siguientes reivindicaciones: aumento ge-
del gobierno. El 18 de junio se realizaron las elec- neral de sueldos y salarios de acuerdo con el alza
ciones para representantes a la Asamblea Constitu- del costo de vida; oposición al programa económi-
yente. Inicialmente se afianzaron las medidas eco- co del ministro Piazza; congelamiento de los precios
nómicas dictadas en mayo, se inició una reducción de primera necesidad; vigencia de la estabilidad la-
drástica del gasto fiscal y se buscó sanear el sector boral y de los convenios colectivos sin topes ni re-
externo para garantizar el pago de la deuda externa; cortes; reposición de los trabajadores despedidos, li-
más adelante, se dictaron nuevas medidas de con- bertad de los detenidos y regreso de los deportados
trarreforma y se liberaron prácticamente todas las por razones sindicales y sociales; plenas libertades
importaciones. políticas, levantamiento de la ley de emergencia y el
toque de queda; y solución a gremios en conflicto:
LA CONVOCATORIA A ELECCIONES pesquero, agrario, universitario. El paro nacional, el
primero en la historia sindical peruana, fue acatado
Ya en febrero de 1977, con la presentación del mayoritariamente en casi todo el país, establecién-
denominado “Plan Túpac Amaru” y con su acerca- dose un patrón nuevo de protesta social: la identifi-
miento a los partidos, los militares estaban estu- cación de los trabajadores con la población. No só-
diando las posibles vías para una transferencia polí- lo pararon los sindicatos, tanto en la ciudad como el
tica del gobierno a los civiles y, en ese contexto, de- campo, sino también protestaron los asentamientos
bían enfrentar tres problemas fundamentales para- humanos y los barrios, que se movilizaron de los
lelos: las discrepancias al interior de las Fuerzas Ar- conos hacia el centro de Lima para converger con
madas, la crisis económica y la movilización social. los sindicatos. Para los partidos de la izquierda radi-
Los partidos políticos y los gremios empresariales cal, la insurrección revolucionaria de las masas y la
exigían claridad en cuanto a la forma y al cronogra- toma del poder político estaban a la vuelta de la es-
ma de la transferencia. En mayo de 1977 el gobier- quina, lo cual se vería reflejado en los debates a su
no convoca a conversaciones separadas a los parti- interior.
dos políticos que consideraba interlocutores váli- Ante la contundencia del paro, el gobierno auto-
dos, para conocer sus opiniones al respecto: AP, el rizó a las empresas –tanto públicas como privadas–
PPC, el PAP y el PC, este último por su influencia a despedir a todos los dirigentes sindicales que hu-
sindical; estas iniciales conversaciones no tuvieron biesen participado en él; así se despidió a alrededor
resultados concretos. Para el gobierno el problema de 5 mil trabajadores en todo el país con el objetivo
ETAPA CONTEMPORÁNEA

inmediato era estabilizar la crisis económica y en- de descabezar al movimiento sindical. Pero el go-
frentar la creciente movilización social, que había bierno también tomó conciencia de que su tiempo
aumentado notablemente desde la implementación político se agotaba; a pesar de que no se realizó nin-
de las primeras medidas en julio de 1975. Esto lle- guna de las reivindicaciones planteadas por el CUL,
vó a los diversos sectores laborales y a los partidos era evidente el grado de deterioro político del go-
de la izquierda radical a coordinar una medida de bierno frente a la población. El 28 de julio se anun-
envergadura como respuesta al gobierno. Las coor- ció la convocatoria a elecciones para elegir repre-

1112
El Perœ contemporÆneo

sentantes a una Asamblea Constituyente que fun- más bien predispuestos a desmantelar tales refor-
cionaría durante un año, luego de lo cual se convo- mas. La izquierda, en cambio, se opuso a las elec-
caría a elecciones generales. Estas dos medidas le ciones por cuestiones ideológicas, al considerarlas
darían un respiro al gobierno, ya que redujeron la como un espacio vedado para la acción política re-
beligerancia de los partidos políticos y del movi- volucionaria; sin embargo, la mayoría de sus repre-
miento social. Por un lado ganó tiempo para nego- sentantes participaría en ellas. Asimismo el decreto
ciar los términos de la transferencia abriendo un es- estableció los requisitos para los votantes: peruanos
pacio nuevo de confrontación política y, por otro, alfabetos mayores de 18 años. Los candidatos po-
logró mayor tranquilidad para la aplicación del pro- dían postular tanto por listas de partidos políticos
grama económico. A pesar de que los paros y huel- como de organizaciones gremiales. Como ha anota-
gas continuarían a lo largo del año, no será hasta los do Lynch, esta última figura buscaba todavía com-
días 22 y 23 de febrero de 1978 que se producirá binar el postulado de la “transferencia del poder al
una nueva medida que paralizaría al país, pero sin pueblo organizado” con los mecanismos electorales
la beligerancia del paro de julio. Tampoco esta vez tradicionales. Más adelante, la nueva Constitución
aceptó el gobierno ninguna de las reivindicaciones anularía la inclusión de las reformas y el mecanismo
del pliego nacional. de postulación vía organizaciones gremiales. Ade-
Sin embargo, tanto por la presión de la moviliza- más se cambió el postulado de “transferencia del
ción social como por la necesidad de crear mínimas poder al pueblo organizado” por “transferencia del
condiciones electorales, el gobierno levanta el esta- poder a la civilidad” y, para garantizar dicho viraje,
do de emergencia y el toque de queda a inicios del el SINAMOS fue disuelto. Para la organización, im-
mes de agosto. En setiembre de ese año vuelven a plementación y vigilancia de las elecciones se con-
circular las revistas clausuradas un año atrás y a fi- vocó al Jurado Nacional de Elecciones existente ha-
nes de octubre se formaliza la convocatoria a elec- cia octubre de 1968 cuyas funciones habían sido in-
ciones para la Asamblea Constituyente, señalándo- terrumpidas por el golpe militar.
se que uno de sus objetivos era institucionalizar las En la navidad de 1977 fallece el general Juan Ve-
reformas implementadas a lo largo del gobierno mi- lasco Alvarado, a quien se le tributaron honores de
litar. Esto fue considerado por los partidos políticos jefe de Estado y cuyo cortejo fúnebre fue acompa-
convocados a negociar la transferencia como una ñado por una multitudinaria manifestación popu-
injerencia del gobierno en las futuras decisiones de lar. Con su muerte, el velasquismo quedaba en ma-
la Asamblea Constituyente, ya que ellos estaban nos de sus antiguos colaboradores.

III

RECOMPOSICIÓN DE LAS FUERZAS vieron por su lado un inusitado crecimiento tanto


POLÍTICAS a nivel orgánico como en presencia social, aunque
debilitados por el constante fraccionamiento políti-
El impacto del golpe de 1968 en el sistema de co y las divisiones ideológicas; serían el PAP y el
partidos que rigió la vida política desde 1956, afec- conjunto de los partidos de izquierda los que man-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

tó sobre todo a aquellos que no tenían relaciones or- tendrían una vida política activa. Los partidos en su
gánicas con las organizaciones sindicales y popula- mayoría se movían en los espacios políticos propios
res, como AP, el PPC, la DC, el MDP y la UNO. El de la institucionalidad estatal (Parlamento, ministe-
PAP y el PC, a pesar de su paulatina pérdida de in- rios, procesos electorales) y fueron llamados “parti-
fluencia social, mantuvieron su presencia política dos tradicionales” por su falta de vínculos orgánicos
tanto de oposición como de apoyo al gobierno mili- con la sociedad y, en especial, con los sectores po-
tar. Los partidos políticos de la Nueva Izquierda tu- pulares. En cambio los partidos que consideraban

1113
Portocarrero Grados

que la política pasaba también por múltiples espa- zó un paro nacional los días 22 y 23 de febrero de
cios sociales (sindicatos, universidades, organiza- 1978, apoyado por un número de trabajadores cua-
ciones barriales, prensa), mantuvieron su actividad tro veces mayor al de julio de 1977, repitiéndose al-
política y hasta crecieron al interior del movimien- gunos patrones de movilización y protesta social:
to social, mientras los otros languidecían. Sin em- convocatoria amplia, movilizaciones regionales pre-
bargo, aun en el caso del PAP y de la izquierda radi- vias y protestas callejeras conjuntas entre los sindi-
cal, la mayoría de los nuevos dirigentes políticos catos y los barrios. Pero la plataforma de lucha era
que surgieron al lado de los antiguos líderes parti- básicamente la misma del año anterior, y el gobier-
darios e intervinieron en los sucesivos procesos no no dio marcha atrás. Su respuesta fue restablecer
electorales, provenía de las universidades. Los “par- el estado de emergencia y el toque de queda; cerrar
tidos tradicionales”, al ser elegidos como interlocu- las revistas y los espacios políticos en la radio y la
tores para la realización de la transferencia de go- televisión; ordenar la deportación de 16 dirigentes
bierno, volvieron a tener cierta vitalidad y, gracias a sindicales y políticos de izquierda, de generales ve-
su larga experiencia política, presencia electoral. lasquistas en retiro y del director de la revista El
La convocatoria llevaría a diferentes actitudes: Tiempo. Asimismo, se postergaron las elecciones
Acción Popular planteó la realización de elecciones por dos semanas, con la advertencia de que éstas só-
generales inmediatas y posteriormente de eleccio- lo serían posibles en un ambiente de “paz social”.
nes a la Asamblea Constituyente, como en 1931, En este contexto se conformaron e inscribieron las
procedimiento que –como se demostró después– listas de candidatos a la Asamblea Constituyente.
era inadecuado; finalmente, no participó. La iz- Trece de los dirigentes de izquierda deportados apa-
quierda radical, si bien rechazó la convocatoria a recieron en las listas y los velasquistas se agruparon
elecciones, comenzó a agruparse en frentes políti- en el Partido Socialista Revolucionario (PSR). Final-
cos. Los demás aceptaron participar con mayores o mente, las elecciones se realizaron el 18 de junio de
menores reparos. 1978, utilizando como mecanismos electorales el
distrito electoral único, la lista incompleta, la cifra
LAS ELECCIONES A LA ASAMBLEA repartidora y el voto preferencial para elegir a 100
CONSTITUYENTE representantes. Los partidos que participaron con
sus candidatos en cabeza de lista, fueron los si-
Ya hemos señalado que en este contexto se pro- guientes: Partido Comunista Peruano (PCP) con
dujo la entrada de un nuevo equipo económico en- Jorge del Prado, Partido Aprista Peruano (PAP) con
cabezado por Javier Silva Ruete y Manuel Moreyra. Víctor Raúl Haya de la Torre, Partido Popular Cris-
La política que se continuó aplicando produjo una tiano (PPC) con Luis Bedoya Reyes, Frente Nacio-
nueva respuesta de la movilización social que reali- nal de Trabajadores y Campesinos (FRENATRACA)
con Roger Cáceres, Acción Re-
volucionaria Socialista (ARS)
con Mario Villarán, Unidad De-
mocrática y Popular (UDP) con
Javier Diez Canseco, Partido So-
cialista Revolucionario (PSR)
con Leonidas Rodríguez Figue-
roa, Movimiento Democrático
Peruano (MDP) con Javier Ortiz
de Zevallos, Unión Nacional
ETAPA CONTEMPORÁNEA

Una mesa electoral durante los


comicios para Asamblea Constituyente,
en junio de 1978. En este proceso
intervinieron no menos de doce
agrupaciones políticas, incluyendo los
partidos de izquierda, a pesar de su
oposición inicial. Acción Popular, el
partido de Fernando Belaunde Terry,
se abstuvo de participar.

1114
El Perœ contemporÆneo

Odriísta (UNO) con Julio de la


Piedra, Democracia Cristiana
(DC) con Héctor Cornejo Chá-
vez, el Frente Obrero Campesino
Estudiantil y Popular (FOCEP)
con Hugo Blanco y el Partido De-
mocrático Reformista (PDR).
Los resultados oficiales fue-
ron los siguientes: PAP, 1 241
174 votos (37 representantes);
PPC, 835 294 votos (25); FO-
CEP, 433 413 votos (12); PSR,
232 520 votos (6); PCP, 207 612
votos (6); UDP, 160 741 votos
(4); FRENATRACA, 135 552 vo-
tos (4); PDC, 83 075 votos (2);
UNO, 74 137 votos (2); MDP, 68
619 votos (2); ARS, 20 164 votos
(0); PDR, 19 524 votos (0). En El candidato más votado para la Asamblea Constituyente fue Víctor Raúl Haya de la
Torre. El histórico líder del APRA se convirtió así en el presidente de la Asamblea
cuanto al voto preferencial, los Constituyente que redactaría la Carta Política de 1979, por lo que le correspondió
más votados fueron: Víctor Raúl presidirla. En la imagen, Haya de la Torre en el hemiciclo del congreso durante la
Haya de la Torre, 1 038 516 vo- instalación de dicha Asamblea.
tos; Luis Bedoya Reyes, 644 131
votos; Hugo Blanco Galdós, 268 885 votos; Leoni- una tribuna para denunciar al gobierno y a los par-
das Rodríguez Figueroa, 169 772 votos; Jorge del tidos políticos “tradicionales”. La votación de los
Prado, 150 960 votos; Genaro Ledesma Izquieta, 76 partidos vinculados al gobierno de Velasco (PC,
327 votos; Roger Cáceres Velásquez, 55 336 votos. DC, PSR) expresa que pese a las medidas de contra-
Como conclusión se puede señalar que la victo- rreforma, el proceso reformista tenía aún fuerte pre-
ria del PAP fue producto de su larga trayectoria his- sencia política y social. Los partidos del orden oli-
tórica, de su mejor cohesión organizativa y de su gárquico (MDP, UNO) estaban en agonía.
aún importante presencia en el movimiento social.
A ello habría que sumar sus exitosas relaciones con LAS RELACIONES DE LA ASAMBLEA CON
el gobierno, especialmente con el general Morales LA DICTADURA
Bermúdez, que lo presentaban como carta de re-
cambio lógico. La votación del PPC, expresión del El primer problema a resolver, luego de publica-
voto conservador, se vio beneficiada por la absten- dos los resultados oficiales, era establecer claramen-
ción de AP, ya que el PPC nunca pasó de represen- te las funciones de la Asamblea Constituyente. Si
tar a los sectores medios altos y altos de Lima. El ca- bien la convocatoria circunscribía su tarea a la ela-
so más saltante fue el de la Izquierda que, pese a su boración de la nueva Constitución, los acuerdos po-
fragmentación política, rondó el tercio de votos líticos entre el gobierno y los partidos que servían
convirtiéndose en una nueva fuerza electoral. Su al- de interlocutores sobre este punto fueron ambiguos.
ta votación expresaba su influencia en el movimien- Haya de la Torre, el candidato más votado, asume la
to social y el desarrollo político alcanzado durante presidencia de las juntas preparatorias y, luego de la
la implementación del proceso de reformas. Por ello instalación de la mesa directiva, es elegido por ma-
no es extraño que los dos dirigentes de izquierda yoría como presidente de la Asamblea. En su dis-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

más votados fuesen Hugo Blanco y Genaro Ledes- curso de iniciación de los trabajos, el 28 de julio de
ma, dos líderes vinculados al movimiento campesi- 1978, Haya de la Torre declaró que la Asamblea de-
no en su confrontación con la oligarquía. Pero la iz- bía ser “el primer poder del Estado”, aunque sin
quierda no supo sacar correctas enseñanzas de esto, cuestionar directamente la presencia de los milita-
ya que mantendría la fragmentación política e ideo- res en el gobierno. Con ello buscaba no sólo legiti-
lógica como característica central; considerando, mar la existencia del gobierno militar, pero también
además, a la Asamblea Constituyente sólo como declarar la independencia formal de la Asamblea

1115
Portocarrero Grados

La segunda fuerza política de la


Asamblea Constituyente fue el
Partido Popular Cristiano
(PPC). La cabeza de su lista fue
Luis Bedoya Reyes, quien fuera
en dos ocasiones alcalde de Lima.

el MDP y la UNO, tomaría


el control efectivo del traba-
jo de la Asamblea, y el go-
bierno militar se ocuparía
de la situación interna del
país. La mayoría de la
Asamblea se desvinculó
prácticamente de la movili-
zación social mientras que
la izquierda radical no se
frente al mismo. La izquierda radical presentaría preocupó tanto del debate constitucional como de
una moción para que además de las tareas constitu- la movilización social, realizando constantes de-
yentes, la Asamblea asumiera funciones legislativas nuncias y utilizando su inmunidad para interceder
en la solución de las demandas populares, la cual no por los gremios en conflicto.
prosperó. Aun así, la Asamblea se convirtió en caja Los constituyentes se dividieron en comisiones.
de resonancia de la protesta social, lo cual puso en En la principal, presidida por Luis Alberto Sán-
peligro su continuidad. Para garantizarla, en medio chez, se concentró la mayor parte del debate, que
de la discusión sobre el reglamento interno de la se inicia en abril de 1979 hasta mediados de julio,
Asamblea, el gobierno y los dos partidos con mayor cuando la Constitución es terminada. Durante la
votación (el PAP y el PPC) llegaron a un acuerdo es- mayor parte de este proceso Haya de la Torre no es-
tableciendo que la Asamblea se circunscribiría a sus tuvo directamente vinculado al debate constitucio-
tareas constituyentes sin cuestionar al gobierno, el nal, ya que debido a su edad enfermó gravemente y
cual no intervendría en los trabajos de la Asamblea fue trasladado a Houston en los Estados Unidos. A
y cumpliría con realizar las elecciones generales en su regreso, aunque no pudo seguir presidiendo la
1980. Así, la mayoría PAP-PPC, a la que se sumaron Asamblea, firmó la nueva Constitución antes de
morir. Ésta fue enviada a Morales Ber-
múdez para su promulgación, pero fue
devuelta por establecer la aplicación
inmediata de la Constitución y, por en-
de, adelantar la transferencia del go-
bierno. La Asamblea por unanimidad,
quizá la única, rechazó tales observa-
ciones. En la práctica dicho conflicto
quedó postergado, ya que la Constitu-
ción entraría en vigencia recién el 28
de julio de 1980.
A lo largo del año de trabajo de la
Asamblea la movilización social se agu-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

diza. Los maestros agrupados en el Sin-


dicato Único de Trabajadores de la Edu-
cación Peruana (SUTEP) realizaron una
huelga de tres meses, entre mayo y ju-
Las huelgas de los maestros agrupados en el SUTEP fueron una de las lio de 1978. También los empleados
mayores protestas que sufriera el gobierno militar, sobre todo en sus últimos públicos se movilizaron frente a los
dos años. En la imagen, una manifestación del SUTEP de agosto de 1979. anuncios de despido como manera de

1116
El Perœ contemporÆneo

reducir el gasto público, y en setiembre fundaron la electoral. Luego, su cadáver fue trasladado por tie-
Confederación Intersectorial de Trabajadores Esta- rra, en un largo y último peregrinaje, a la ciudad de
tales (CITE). A ellos se sumaron los trabajadores Trujillo donde fue enterrado. Sus partidarios lucha-
bancarios y los del sector Salud. La movilización so- rían por el control del PAP, que entró en su crisis
cial más importante fue la de los trabajadores mine- más importante hasta entonces.
ros, quienes realizaron marchas de sacrificio hacia Eudocio Ravines, uno de los personajes más in-
Lima acompañados de sus familias. El centro de Li- teresantes y controvertidos de nuestra historia polí-
ma se convirtió en escenario constante de enfrenta- tica, murió como un paria en México, exiliado
mientos, manifestaciones y ollas comunes. Todas cuando nadie lo era en el Perú. Condenado y odia-
las protestas fueron reprimidas violentamente por el do por la izquierda, a la que dedicó su juventud y
gobierno, ante la indiferencia de la mayoría de la parte de su madurez; olvidado y hecho a un lado
Asamblea Constituyente. El año 1978 se convirtió por aquellos que aprovecharon la experiencia de sus
en el año con mayor número de horas-hombre per- años de comunista para sostener un orden injusto,
didas durante toda la década. su vida ha sido distorsionada, especialmente por la
historia oficial del PCP. Sirvió fielmente a la revolu-
EL FIN DE UNA ERA

Con la promulgación de la nueva


Constitución, con un electorado repre-
sentado en más de un 30% por nuevas
fuerzas políticas y con la experiencia
de casi una década de transformaciones
estructurales, si alguien soñó con la
restauración del régimen existente an-
tes de 1968 lo hizo en vano. Expresión
final de esa era fue la muerte de tres
importantes personajes que sostuvie-
ron el orden oligárquico durante los úl-
timos 12 años de su existencia: Pedro
Beltrán, Víctor Raúl Haya de la Torre y
Eudocio Ravines, fallecidos todos ellos
en 1979. Un cuarto personaje, el gene-
ral Manuel A. Odría, ya había muerto
años antes.
Pedro Beltrán falleció en el mes de
febrero al regresar de los Estados Uni-
dos. Fue velado en la iglesia de San
Marcelo y en el local del diario La Pren-
sa. Beltrán representó el pensamiento
económico liberal moderno, aunque en
el campo político estuvo más cerca del
civilismo clásico. Queda pendiente el
estudio de su vida y obra para la com-
prensión de nuestra historia política y
económica contemporánea.
ETAPA CONTEMPORÁNEA

Haya moriría el 2 de agosto de 1979


en su casa, la Quinta Villa Mercedes.
Sus restos fueron velados en el local de
la Casa del Pueblo, en el Congreso y en
la catedral, recibiendo honores de jefe
de Estado, cargo al cual no accedió en Toma aérea de las exequias de Víctor Raúl Haya de la Torre, cuyo partido
vida ni por vía revolucionaria ni por vía tuvo rol determinante en la política peruana.

1117
Portocarrero Grados

Eudocio Ravines, dad resultante se expresa a través de tres ordena-


controvertida mientos: el económico, el político y el de los dere-
figura pública chos ciudadanos. Conforme a este criterio Rubio y
peruana. Militó y
fue dirigente del Bernales reseñan la esencia de la Constitución de
Partido Comunista 1979.
Peruano, a) El sistema económico. El tratamiento normati-
renunciando vo era extenso aunque ello no significó un cambio
posteriormente y
fundamental en relación a lo que contenía en esta
convirtiéndose en
un furibundo materia la Constitución de 1933. La Asamblea
anticomunista. Su Constituyente precisó varias instituciones que exis-
polémica tían tácitamente en la Constitución anterior e incor-
trayectoria no ha poró otras tomadas de la modernización operada en
permitido todavía
un análisis sereno
la sociedad peruana en las décadas precedentes,
de su paso por la adaptándolas al modelo de 1933. Articuladas por
política peruana. un concepto tradicional de propiedad –inviolable y
de carácter privado–, las reglas básicas del sistema
económico eran la economía social de mercado, el
ción de la que fue ejecutor y también víctima, y lue- pluralismo empresarial y la libertad de comercio e
go a la oligarquía. El estudio de su vida, una vida industria. En dicha constitución se recogieron las
trágica y llena de contradicciones, debe realizarse transformaciones ocurridas en las décadas anterio-
no sólo por su importancia en la evolución de nues- res, pero bajo una normatividad ambigua entre un
tra historia política sino porque nadie merece un ol- régimen liberal y un régimen donde el Estado cum-
vido tan mezquino de los sectores a los cuales apo- plía un importante rol empresarial y de regulación
yó, aunque éstos hayan estado en bandos completa- de las relaciones sociales, tendencia que se venía
mente opuestos. dando desde la década del 60. Ello se pudo ver en
los siguientes casos:
LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE 1979 – La libre capacidad de las empresas quedó en-
cuadrada dentro de los procedimientos de autoriza-
Según Marcial Rubio y Enrique Bernales, la ción, como la exigencia de requisitos de constitu-
Constitución, en cuanto establece la funcionalidad ción empresarial o las oportunidades de inversión
del Estado y las reglas básicas de la sociedad, no re- en campos señalados como prioritarios y no priori-
sulta necesariamente del consenso de los diversos tarios. En otras palabras, se contraponían dos prin-
sectores de ésta, sino más bien de los componentes cipios que no funcionan armoniosamente juntos: la
de la Asamblea Constituyente, quienes establecen libertad de industria y comercio, y el sistema de
sus parámetros. En ese sentido, el modelo de socie- planificación.
– Bajo control o fiscaliza-
ción del Estado se recono-
ció toda una gama de for-
mas asociativas autoges-
tionarias, como cooperati-
vas o empresas de propie-

La constitución de 1979
reconocía como modelo
ETAPA CONTEMPORÁNEA

económico la llamada
“economía social de mercado”,
según la cual éste actúa como
centro de regulación de las
decisiones económicas y el
Estado se ocupa de asegurar la
libre competencia y prestar
ayuda a los individuos
marginados de sus beneficios.

1118
El Perœ contemporÆneo

dad social. Sin embargo, la Constitución se limitó a las normas establecidas en la Constitución. No eran
señalar que el Estado las “estimula y las ampara”. responsables por sus opiniones o acciones en el
Igual ocurrió con los mecanismos de participación ejercicio de sus cargos; no podían ser destituidos
de los trabajadores en la propiedad, gestión y bene- por ninguna razón política (salvo por comisión de
ficios económicos, especialmente las comunidades delito, con formulación de un antejuicio político y
laborales, en donde la Constitución limitó el acceso la suspensión en el ejercicio de la función); y no
a la propiedad a las empresas “cuya naturaleza no lo existían mecanismos de “democracia directa” para
impide”. Con ello se dejó este derecho en suspenso. que el pueblo pudiera intervenir en las decisiones
– La expropiación se restringió y la nacionaliza- entre elección y elección. Tampoco se previó la ins-
ción, que aparecía en la Constitución de 1933, no titucionalización de ningún organismo que, me-
fue normada expresamente. Con ello se disminuye- diante representación de ciudadanos, pudiera inter-
ron las posibilidades de regulación e intervención venir dictaminando o ejerciendo el derecho de ini-
del Estado en la vida económica. ciativa en materia legislativa o las renovaciones pe-
– La explotación de los recursos naturales y el riódicas parciales del órgano legislativo. De esta ma-
comercio exterior, que fueron reservados en su ma- nera, el sistema político era representativo en su va-
yor parte para el Estado por su importancia en la riante más clásica, restringiendo sustancialmente
propiedad de las divisas, no fueron del todo consi- las formas de participación popular a las elecciones
derados en la Constitución: se permitió concesiones quinquenales.
que otorgaban “un derecho real” en la minería y No es que se hubiera propugnado un sistema de-
propiedad particular sobre tierras de la selva; por mocrático más abierto. Fue una decisión conscien-
otro lado, se rompió el monopolio de la comerciali- te y voluntaria de mantener en lo sustancial el mis-
zación exterior. mo mecanismo y el mismo sistema político de la
– En cuanto a la propiedad agraria, si bien se Constitución de 1933. Hubo propuestas que busca-
mantuvo el principio de que la tierra debe ser con- ron enriquecer el modelo, como el referéndum rati-
ducida por el propietario directamente y se recono- ficatorio de legislación y decisiones políticas tras-
cieron las formas individuales y asociativas de con- cendentales, o el otorgamiento de participación ins-
ducción empresarial, las normas fueron confusas titucionalizada a las organizaciones sociales en la ta-
para definir la conducción directa, lo cual abrió las rea legislativa, como agentes dictaminadores y pro-
posibilidades de que se impusieran en el campo las pulsores de legislación; sin embargo, se optó por
sociedades de capitales. restringir estas atribuciones a los elegidos para ocu-
En resumen, en términos de propiedad, la par cargos de gobierno, debido al temor a las orga-
Constitución de 1979 recogió las transformaciones nizaciones sindicales y populares influenciadas por
operadas en años anteriores, pero con una normati- la izquierda en una coyuntura de fuerte confronta-
vidad ambigua favorable a cambios de carácter li- ción social.
beral. La utilización de la propiedad en armonía La reducción al mínimo de la democracia repre-
con el interés social es un concepto abstracto de sentativa se convirtió así en un instrumento de eli-
varios posibles significados. Dichas contradiccio- tización del poder, en manos de representantes con
nes aparecerían bajo los gobiernos de Belaunde nula responsabilidad frente a sus electores hasta los
(con su política de liberalización y privatización) y siguientes comicios. Ello facilitaba el control de las
de Alan García (con la estatización de la banca y la mayorías nacionales, en la medida que las decisio-
anulación de los contratos petroleros de la Belco). nes gubernamentales se hacían “en virtud del man-
En ambos gobiernos hubo posiciones discrepantes dato popular”, pero tomándolo como forma, no co-
sobre la interpretación de la Constitución en la mo contenido. Hay que reconocer, sin embargo, dos
aplicación de dichas políticas. La libertad de indus- modificaciones positivas: el otorgamiento del voto a
tria y comercio se convirtió así en garante del siste- los analfabetos y la eliminación de las restricciones
ETAPA CONTEMPORÁNEA

ma, pero enfrentada a las posibilidades y necesida- a la existencia de los partidos políticos.
des del control estatal. En la estructuración de los poderes del Estado se
b) El sistema político. El sistema político era el de innovó más en cuanto al Ejecutivo que al Legislati-
la democracia representativa. El presidente y los vo. A diferencia de la Constitución de 1933, hubo
miembros del Congreso serían elegidos cada cinco un reforzamiento de las atribuciones del primero
años, ejerciendo el gobierno con plena libertad de frente al segundo. En primer lugar, se mantuvo la
acción frente al pueblo, desde el punto de vista de censura ministerial, pero se instituyó la posibilidad

1119
Portocarrero Grados

de la disolución de la nos, que desgraciada-


Cámara de Diputados mente fueron violados
en caso de censura de sistemáticamente du-
tres gabinetes; se trata- rante la década del 80,
ba, pues, de una diso- entre otras razones
lución parcial, en si- porque, a pesar de su
tuaciones excepciona- tratamiento concep-
les. En segundo lugar, tual, se establecieron
se otorgó al presidente normas especiales que
la posibilidad de ejer- redujeron estos benefi-
cer el veto legislativo, cios, especialmente en
que no tenía en la los aspectos políticos.
Constitución anterior, Entre dichos artícu-
y la delegación de atri- los se encontraba, en
buciones legislativas, primer lugar, el que es-
aplicada con anteriori- La Carta Política de 1979 en su primer artículo subrayaba a la tablecía la posibilidad
dad aunque sin tener persona humana como el fin supremo de la sociedad y del Estado. de que las autoridades
una norma expresa. En A la vez ensayaba una larga enumeración de los derechos básicos pudieran detener pre-
tercer lugar, se otorgó de la persona en un listado que no estaba cerrado a la sanción judicialmente hasta
al presidente mayor normativa o al reconocimiento de nuevos derechos. por quince días a los
poder en materia pre- sospechosos de terro-
supuestal, lo cual le permitió una mayor capacidad rismo, espionaje o tráfico ilicíto de drogas; en se-
de implementar sus políticas. En cuanto al poder gundo lugar, se restringió la defensa a través del ha-
Judicial, se mantuvo casi la misma organización es- beas corpus; en tercer lugar, se normaron las excep-
tablecida en la Constitución anterior, incluyendo el ciones en lo referente a la inviolabilidad del domici-
nombramiento de los magistrados por los poderes lio, señalando que la autoridad o cualquier persona
políticos, lo cual le quitaba independencia; y se res- podría ingresar a un domicilio sin permiso del que
tableció el ministerio Público por mandato consti- lo habitaba y sin orden judicial, en caso de “flagran-
tucional al interior de la administración de justicia te delito o de peligro inminente de su perpetra-
y la defensa de los derechos. Como conclusión, los ción”. Como la excepción quedaba a criterio de
autores señalan que pese a las modificaciones he- quien ingresaba al domicilio y la causa que lo per-
chas –dadas las características señaladas líneas arri- mitía no era sólo el delito, sino el “peligro inminen-
ba– se dejaba abierta la posibilidad de una dictadu- te” de que existiera, se abría la posibilidad del alla-
ra legal. A todo esto habría que agregar el estableci- namiento clandestino; lo cual ocurrió constante-
miento de la separación de Iglesia y Estado, y la ple- mente, en contra de dirigentes políticos y sindica-
na libertad de cultos. les; en cuarto lugar, la libertad de reunión se sujetó
c) Los derechos constitucionales. A diferencia de a autorización por “motivos de seguridad”, que si
la Constitución de 1933, la de 1979 era extensa y bien en abstracto es una disposición razonable, en
explícita en estas materias, incorporando en su tex- lo concreto puede ser materia de indebida exten-
to una amplia gama de derechos. En adición a las sión. En lo que se refiere a la protección de los de-
libertades clásicas (personal, de reunión, de expre- rechos constitucionales hubo un avance significati-
sión, de tránsito, inviolabilidad del domicilio) y a vo: el habeas corpus, el amparo, la inconstituciona-
otros derechos sociales ya tradicionales (seguridad, lidad de leyes y decretos, así como otras normas
cobertura de riesgos, protección de minusválidos), complementarias, que brindaban mayores oportu-
añadió importantes normas sobre derechos del tra- nidades de defensa judicial. También se creó el Tri-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

bajador a la educación, a la ciencia y la cultura, así bunal de Garantías Constitucionales que, directa e
como un tratamiento moderno a la familia. Inclusi- indirectamente, era controlado por los poderes del
ve, se consideró que la declaración de derechos en Estado, los cuales también elegían a sus miembros.
el texto no era taxativa, sino que éstos estaban am- Finalmente, se establecieron dos figuras para los re-
parados constitucionalmente. Se había realizado gímenes de excepción: el estado de emergencia, que
una buena tarea de recopilación, síntesis y declara- suspendía las garantías por sesenta días, prorroga-
ción de los principales avances en derechos huma- bles, con mención expresa de que las Fuerzas Arma-

1120
El Perœ contemporÆneo

das asumían el control del orden


interno; y el estado de sitio, en
el cual se suspendía por 45 días
todos los derechos, salvo los que
expresamente se mantuvieran
en vigencia.

LAS ELECCIONES
GENERALES DE 1980

Para las elecciones generales


de mayo de 1980, se presenta-
ron en total 15 candidaturas:
Fernando Belaunde Terry (AP),
Armando Villanueva del Campo
(PAP), Luis Bedoya Reyes
(PPC), Hugo Blanco Galdós Mitin del cierre de campaña de Acción Popular en mayo de 1980. Fernando Belaunde
(Partido Revolucionario de los Terry alcanzó con este mitin la mayor convocatoria de toda la campaña electoral en
Trabajadores, PRT), Genaro Le- un apoyo que sería reafirmado en las urnas el domingo 18 de mayo, día de las
desma Izquieta (FOCEP), Hora- elecciones generales.
cio Zevallos Gómez (Unión de
Izquierda Revolucionaria, UNIR), general Leonidas loma (PS), Alejandro Tudela Garland (MDP), Car-
Rodríguez Figueroa (Unidad de Izquierda, UI: PC y los Carrillo Smith (UNO), y Waldo Fernández Du-
PSR), Gustavo Mohme Llona (Acción Política So- rán del Movimiento Popular de Acción de Integra-
cialista, APS), Roger Cáceres Velásquez (FNTC), ción Social (PAIS). Estas candidaturas expresaban el
Carlos Malpica Silva Santisteban (UDP), general Ja- grado de fragmentación política y de crisis de repre-
vier Tantaleán Vanini (OPRP), Luciano Castillo Co- sentación, resultado de la incapacidad para estable-
cer un nuevo orden formalmente democrático lue-
go de la desaparición del régimen oligárquico, y que
nacía con pies de barro. La crisis se expresó en la in-
capacidad de formar sólidos frentes políticos entre
partidos afines ideológicamente; sólo se lograron
alianzas electorales endebles y, en casos de partidos
como el PAP, luchas internas por su control.
En el caso del PAP, luego de la muerte de Haya
de la Torre se inició la pugna por la sucesión, en la
que por momentos hubo abiertos enfrentamientos
físicos, como la golpiza que le propinaron a Luis Al-
berto Sánchez –en ese entonces de 80 años– duran-
te el Congreso Nacional del PAP realizado en Truji-
llo a comienzos de 1980 para resolver los problemas
internos y de la sucesión. El debate sobre la direc-
ción del partido manifestó dos grandes tendencias:
la primera –encabezada por Luis Alberto Sánchez,
Ramiro Prialé y Andrés Townsend Ezcurra– repre-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

sentaba a los conservadores y anticomunistas; la se-

Armando Villanueva del Campo fue el principal


adversario de Fernando Belaunde en los comicios de
1980. Los conflictos dentro de su agrupación política,
la nacionalidad de su esposa y cierta simpatía del
desacreditado gobierno militar fueron factores que
jugaron en su contra durante la campaña electoral.

1121
Portocarrero Grados

gunda –encabezada por Armando Villanueva del tangencial a un problema más de fondo de la iz-
Campo y los jóvenes Carlos Roca y Alan García Pé- quierda, problema que la historia posterior demos-
rez– representaba a los moderados y reformistas de tró que era su talón de Aquiles: la incapacidad de
tendencias socialdemócratas. La primera sustentaba unidad, la incapacidad de dejar de lado ambiciones
la secretaría colegiada, para impedir la concentra- y mezquindades en favor de la revolución. Más bien
ción del poder partidario; la segunda defendía la se- los representantes de la izquierda utilizaron el nom-
cretaría general, para mantener la cohesión partida- bre de la revolución en favor de sus ambiciones y
ria bajo un mando único. La primera saldría derro- mezquindades. En total, la izquierda presentó cinco
tada tanto en el debate sobre la dirección del parti- listas, dos más que en 1978.
do como en la elección de la plancha presidencial En cuanto a AP y el PPC, el primero debía saciar
negociándose a última hora una plancha nueva: Vi- las ambiciones políticas de los caciques provinciales
llanueva, Townsend y Negreiros, y las candidaturas sobre quienes se sustentaba la organización de su
parlamentarias fueron negociadas al interior de la partido, por lo que empezó repartiendo las curules
nueva dirección. Sin embargo, no por ello se deja- entre sus familiares y colaboradores más cercanos;
ron de lado los fuertes rencores y discrepancias al segundo le sobraban provincias que repartir debi-
ideológicas, que llevaron a una ruptura en 1983. do a su poco peso político nacional, por lo que pu-
Cabe recalcar que el PAP se presentó como la mejor do ser generoso. Tal era el sistema de partidos sobre
carta de recambio del gobierno. el cual se levantaría el nuevo régimen.
La izquierda, en cambio, tuvo que enfrentar di- Los resultados presidenciales oficiales fueron los
ferencias políticas e ideológicas mucho mayores: siguientes: AP, 1 793 190 votos (45,2%); PAP, 1 087
prosoviéticos, maoístas, trotskistas, mariateguis- 188 votos (24,4%); PPC, 382 547 votos (9,6%);
tas, divididos a su vez en minúsculos partidos. Los PRT, 160 713 votos (3,9%); UNIR, 134 321 votos
resultados electorales de 1978 expresaban que la (3,2%); UI, 116 890 votos (2,8%); UDP, 98 452 vo-
izquierda no podía abstenerse de participar en la es- tos (2,3%); FNTC, 81 647 votos (1,9%); FOCEP, 60
cena oficial y que requería de la unidad para tener 853 votos (1,4%); UN, 18 170 votos (0,4%); OPRP,
un verdadero peso político nacional de representa- 17 737 votos (0,4%); APS, 11 607 votos (0,2%);
ción de los sectores populares. MDP, 9 875 votos (0,2%); PAIS, 9 350 votos (0,2%)
A inicios de 1980 comenzaron las negociaciones y PS, 8 714 votos (0,2%). Del total de votos emiti-
para la conformación de un frente político en pers- dos (78,7%), 14,5% fueron nulos y 7,7% blancos. El
pectiva a las elecciones de mayo. Las fuerzas políti- ausentismo fue del 21,3%.
cas más comprometidas fueron: el FOCEP por su Los resultados muestran una clara victoria de
alta votación, el PC por su fuerza sindical y la UDP AP, que superó ampliamente el 36% requerido; reci-
por su presencia en el movimiento campesino. A es- biendo mayor votación presidencial (45,2%) que
tos grupos se sumaron los maoístas, quienes no ha- para senadores (40,9%) y diputados (38,9%). Es
biendo participado en las elecciones a la Asamblea claro que Belaunde fue favorecido por una parte del
Constituyente “descubrieron” su importancia como voto en conjunto de la izquierda, cuya votación pa-
“espacio de lucha política revolucionaria”; de con- ra senadores (17,3%) y diputados (18,4%) fue ma-
cretarse dicha alianza se habría denominado Alian- yor que la presidencial (13,6%). La izquierda en
za de la Izquierda Revolucionaria (ARI). conjunto redujo su votación porcentual en 15,7%
Sin embargo, había demasiadas fracciones políti- en relación a 1978, debido al fracaso del ARI, y por-
cas y demasiadas ambiciones personales en juego, que una victoria de AP era vista como un mal me-
por lo que la alianza fracasó y estalló en pedazos. nor frente a la del PAP, que representaba la opción
Las versiones “oficiales” declaran a Hugo Blanco de recambio del gobierno militar. Asimismo, el PPC
Galdós como “el verdadero culpable”, pues se negó y el PAP también vieron reducidos sus porcentajes
a tomar la decisión política para la formación del de votación en relación a 1978: el primero en 14,2%
ETAPA CONTEMPORÁNEA

ARI, aunque habría que decir en su favor que para y el segundo en 11%, aunque la relación entre sus
entonces varias fuerzas políticas ya se habían retira- votaciones presidenciales y para senadores y diputa-
do de las negociaciones. El fracaso fue del conjunto dos era pareja. De todas estas reducciones provino
de la izquierda, pero había la necesidad, dentro de la votación de AP; la distribución del Congreso no
la vieja tradición stalinista, de señalar un “chivo ex- le fue adversa como en 1963: de 60 senadores obtu-
piatorio”, un “traidor”. La decisión de Blanco fue vo 26 y de 180 diputados obtuvo 98.

1122
El Perœ contemporÆneo

IV

EL IMPACTO DE LAS REFORMAS En cuarto lugar, se estableció una nueva relación


entre el capital privado y el Estado a través de dife-
Uno de los puntos más controvertidos acerca del rentes mecanismos que reglamentaban las formas
gobierno militar es la existencia previa o no de un de asociación, de inversión y reparto de ganancias.
proyecto castrense. La aparición tardía del “Plan In- En quinto lugar, se implementaron diversos siste-
ca”, las contradicciones al interior de las Fuerzas mas de participación de los trabajadores en el fun-
Armadas y la aplicación de medidas como respues- cionamiento de las empresas. En sexto lugar, se die-
ta a determinadas coyunturas políticas parecerían ron formas de relación corporativas y verticales que
desmentir su existencia. Sin embargo, como ha sos- buscaban articular la relación Estado-sociedad civil,
tenido Lynch, si bien al parecer no existía un mode- que si bien fracasaron, a la larga promovieron un al-
lo coherente y previamente diseñado, el comporta- to grado de organización social.
miento del gobierno militar tampoco fue errático. Veamos ahora algunas cifras. La PEA urbana cre-
Las primeras medidas enfrentaron la situación exis- ció de 37,6% en 1961 a 62,2% en 1972, redundan-
tente antes de 1968 y la conducta posterior debió do fuertemente en el proceso de urbanización, pero
responder a las situaciones creadas por la aplicación tuvo efectos desiguales en el de industrialización.
de éstas. A la larga, serán esas mismas condiciones En el mismo período, la fuerza laboral en el sector
creadas las que lo llevarían a su crisis. industrial manufacturero sólo creció de 13,2 a
Veamos cuál fue el impacto de las medidas refor- 15,1%, mientras que el sector terciario (comercio,
mistas en la estructura económica y social del país. servicios y gobierno) pasó de 27,8 a 34,7%, según
En primer lugar, se desplazó del poder a la oligar- datos de Sulmont. Dentro de este sector se ocultan
quía terrateniente y agroexportadora y al grupo de el subempleo, el comercio ambulatorio y la infor-
empresas extranjeras que habían dominado la polí- malidad. El empleo y el subempleo varían de 44,2%
tica económica y la conducción del Estado. En se- y 4,2% en 1972 a 52% y 6,5% en 1978, lo que mues-
gundo lugar, se impulsó la racionalización del siste- tra que el desarrollo industrial siguió siendo desi-
ma económico, en base a los planteamientos de se- gual y desarticulado de los otros sectores económi-
guridad nacional, garantizando el uso planificado cos, pese a las reformas, ya que el modelo de susti-
de nuestros recursos, la construcción de una in- tución de importaciones se venía aplicando desde la
fraestructura económica y un replanteamiento de década del 60.
nuestras relaciones con el merca-
do internacional, lo que provocó
un proceso de concentración y
centralización del capital. En ter-
cer lugar, el Estado asumió un
papel clave como articulador de
todo el proceso económico me-
diante su expansión en los diver-
sos sectores y la planificación.

Con el gobierno militar el Estado


ETAPA CONTEMPORÁNEA

asumió un importante rol como


promotor de la actividad económica.
Numerosos sectores de producción
fueron conducidos directamente por el
Estado que se convirtió además en el
principal agente económico como
Estado-empresario. En la ilustración,
una vista del muelle de Ilo.

1123
Portocarrero Grados

LAS EMPRESAS PÚBLICAS 134 empresas no financieras, 83 dependían del


grupo CONADE-ICSA, 47 de los ministerios, 2 de
Durante el docenio se produjo un evidente for- los municipios y 2 de la Beneficencia.
talecimiento del Estado, hecho relacionado con el Contrariariamente a lo que se cree, la actividad
nuevo rol que le asignó el gobierno militar: el de empresarial estatal no surgió con el gobierno mili-
empresario y regulador de la sociedad. Asumir estas tar. En el gobierno de Bustamante y Rivero se deba-
responsabilidades significaba un crecimiento cuali- tieron proyectos de ley (como el del Banco de la
tativo del aparato estatal, especialmente en ciertas Nación y la Corporación de Valores) que buscaban
áreas vitales de la economía. Por esta razón fue que, dar un nuevo papel al Estado, el que anteriormente
del conjunto de expropiaciones realizadas durante había asumido, de manera reducida, diversas acti-
el gobierno de Velasco, apareció un poder económi- vidades económicas no propiamente empresariales
co y social en manos del Estado que no fue transfe- sino más bien recaudadoras y reguladoras: los ca-
rido a la sociedad civil y que no decaería en los años sos de los estancos de la sal, el alcohol y la coca,
siguientes al gobierno militar, ya que el ordena- por ejemplo. Más tarde éstos se convertirían en
miento y funcionamiento de la economía suponían empresas como ENATA, EMSAL, ENACO y la Em-
y requerían tal presencia. El rol empresarial del Es- presa de Alcohol Industrial. En los años 60, la pre-
tado se realizó en detrimento de una parte del capi- sencia estatal se incrementa en campos como la si-
tal nacional privado y, sobre todo, recortó la presen- derurgia (SOGESA), el petróleo (Empresa Petrolera
cia del capital extranjero. Fiscal), el comercio exterior (Compañía Peruana
El gobierno militar controlaba un tercio del pro- de Vapores), el sistema financiero (Banco de la Na-
ducto nacional, una quinta parte de la fuerza de tra- ción), el sistema de agua y desagüe (Corporación
bajo del sector productivo moderno –sin contar los de Saneamiento de Lima), la energía eléctrica (Cor-
empleados públicos–, nueve décimas partes de las poración del Mantaro, Servicios Eléctricos Nacio-
exportaciones y la mitad de las importaciones. Se- nales y Corporación del Santa) y la construcción
gún Pásara, si bien el peso dominante del Estado en (Corporación de Vivienda). También se construye-
la economía está fuera de toda duda, éste no alcan- ron plantas industriales bajo control estatal como
zó el control del excedente productivo, ya que los la planta de fertilizantes de Cachimayo, la deshi-
sectores donde se dio la intervención estatal no eran dratadora de alimentos de Arequipa y la refinería
los que producían la mayor acumulación dentro del de petróleo de La Pampilla. En cuanto a la banca
proceso económico; el sector industrial nunca pudo de fomento, existían el Banco Agrario, el Banco In-
ser controlado por el Estado. No obstante el peso de dustrial, el Banco Minero, el Banco Central Hipote-
la intervención estatal, la planificación no se pudo cario y el Banco de Vivienda.
aplicar ni siquiera al conjunto de las empresas pú- A fines de 1968 había 40 entidades públicas –en-
blicas, pues éstas, que se hallaban bajo el control del tre corporaciones, institutos, empresas estatales y
ministerio de su sector y desarticuladas entre sí, no organismos del gobierno central– realizando activi-
generaron excedentes, y si lo hicieron, éstos fueron dades que bajo el gobierno militar habrían estado a
derivados a otros sectores, por lo que tuvieron que cargo de empresas del Estado. Como ya hemos vis-
recurrir al endeudamiento público para poder se- to, el crecimiento de las actividades empresariales
guir funcionando. del Estado está relacionado con una concepción que
Según datos de Luis Alva Castro, en 1968 el Es- le confiere un rol central en la promoción y gestión
tado tenía sólo 40 empresas públicas. A fines de de las actividades económicas. Según Alva Castro,
1985 el Estado contaba con 234 empresas bajo di- las motivaciones fueron las siguientes: la necesidad
ferentes modalidades: control total, participación de que el Estado contara con importantes exceden-
mayoritaria o participación simple. De esas 234 tes para el cumplimiento de sus funciones; la con-
empresas, 134 se ubicaban en el sector no financie- cepción de seguridad nacional, que implicaba el
ETAPA CONTEMPORÁNEA

ro y 100 en el sector financiero, si contamos em- control de los sectores estratégicos de la economía;
presas matrices y filiales. En 173 empresas el Esta- un mejor manejo de las divisas a través del control
do tenía más del 50% de las acciones y en 61 em- del comercio exterior; sustitución del capital priva-
presas menos del 50%. Del total, 20 empresas sig- do en sectores y empresas en crisis como el pesque-
nificaban el 90% del patrimonio y 9 empresas ro, el financiero y el de transportes; necesidad de un
constituían el 80% de los ingresos por ventas de la mayor control del sector financiero por su carácter
actividad empresarial estatal. Finalmente, de las especulativo y de impulsar nuevas actividades des-

1124
El Perœ contemporÆneo

Vista de la mina Casapalca. La herencia


del Estado-empresario forjada por el
gobierno militar fue asumida por los
gobiernos civiles de Fernando Belaunde
Terry (1980-1985) y Alan García Pérez
(1985-1990). Sin embargo, ya desde el
gobierno de Morales Bermúdez y de
Belaunde hubo intentos por privatizar y
liberalizar la actividad económica.

deñadas por el capital privado. A


fines de 1978 se inicia un proce-
so de privatización que se irá de-
sarrollando paulatinamente a lo
largo de la década de los 80. Sin
embargo, en la Constitución de
1979 se dio reconocimiento
constitucional a la actividad em-
presarial del Estado con el fin de
promover la economía, prestar
servicios públicos y alcanzar los
objetivos del desarrollo nacional. cuyo accionariado tenía mayoría el Estado: Epsep,
Durante el gobierno de Belaunde se aplicó un Ganadera Amazonas, Empresa Nacional de Tabaco,
concepto diferente sobre el Estado y su rol en el de- Cemento Yura, Cemento Sur, Enaco, Manylsa, Mo-
sarrollo nacional, aunque se dieron dispositivos le- raveco. Entre las empresas donde el Estado era ac-
gales importantes para tratar de ordenar el funcio- cionista minoritario: Cemento Andino, Cemento
namiento de las empresas públicas. El primero de Norte Pacasmayo, Cemento Lima, Bayer Industrial.
éstos creó la Comisión Nacional de Desarrollo (CO- En el sector financiero la presencia estatal estaba
NADE) como un ente normativo de la actividad em- agrupada en un total de 23 empresas: 7 bancos co-
presarial del Estado, convirtiendo a COFIDE en em- merciales asociados (Popular, Continental, Interna-
presa de derecho privado, y creó Inversiones COFI- cional, NorPerú, de los Andes, Sur Medio y Callao,
DE S.A. otorgándole funciones de inversión; el se- y Amazónico), 5 bancos de fomento (Industrial,
gundo normó la actividad empresarial del Estado, Agrario, Minero, de la Vivienda, Central Hipoteca-
otorgándole a CONADE funciones relacionadas con rio), 3 empresas financieras asociadas (Peruinvest,
el planeamiento, la orientación y el control de la San Pedro y Peruana), 3 almacenes generales de de-
gestión de las empresas estatales. Con estas medidas pósito (Almacenera Continental, Almacena y Kol-
no se logró un efectivo ordenamiento legal e insti- kandina), 3 empresas de seguros (Reaseguradora
tucional de las empresas del Estado, ya que no se le Peruana, Popular y Porvenir y Secrex), el Banco de
dio prioridad a una necesaria racionalización de las la Nación y COFIDE. Su peso puede ser medido de
empresas existentes, iniciándose más bien el aban- la siguiente manera: el 73% de los trabajadores del
dono de la actividad empresarial del Estado a través sector le pertenecían, así como el 80% de las colo-
de la desactivación, la liquidación o la privatización caciones y el 65% de los depósitos; en total tenía el
de las empresas públicas. 71% del patrimonio del sistema financiero.
Siguiendo con Alva Castro, de las 134 empresas
no financieras existentes al inicio del gobierno LA DEUDA EXTERNA
ETAPA CONTEMPORÁNEA

aprista, 27 representaban el 90% de su patrimonio:


Petroperú, Electroperú, Electrolima, Centromin Pe- Según Óscar Ugarteche, en los años iniciales del
rú, Hierro Perú, Minero Perú, Tintaya, Entel Perú, gobierno militar, el país contaba con una situación
Aeroperú, Enafer, Enapu, Corpac, Enatru, CPV, Si- de relativo saneamiento financiero, debido a las re-
derperú, Sociedad Paramonga, Fertisa, Incasa, Pes- financiaciones y renegociaciones realizadas entre
caperú, Sima Perú, Indumil, Enci, Ecasa, Emmsa, 1967 y 1968, y al “boom” pesquero de 1970; gracias
Senapa, Sedapal, Minpeco. Entre las empresas en a ello se abrieron perspectivas para un mayor en-

1125
Portocarrero Grados

deudamiento durante el primer quinquenio de la miento de la transferencia de gobierno. De este mo-


década del 70. El uso del crédito durante ese perío- do, en mayo de 1978 mientras se realizaban las elec-
do tuvo dos ejes: inversiones públicas y compra de ciones para la Asamblea Constituyente, se aplicó
armamento. La compra de armamento estuvo rela- una política de ajuste que terminó con el proceso
cionada al cese de la ayuda militar norteamericana, reformista iniciado por el general Velasco y con la
la compra de armas a la URSS, y a las tensiones di- política de sustitución de importaciones. Se redujo
plomáticas con Chile. Luego de la caída de Velasco el papel del Estado, se negoció el cese de 30 mil em-
y ante el incremento de la movilización social, los pleados públicos y se abrieron las puertas al comer-
gastos militares aumentaron. Las inversiones públi- cio y al capital internacional. Se inició así el camino
cas más importantes fueron el oleoducto norperua- neoliberal. Con la subida de los precios del petróleo
no y la mina de cobre de Cerro Verde, que culmina- y la plata en 1979, el problema del endeudamiento
ron en 1978. Ello generó serios problemas en la ba- externo pareció solucionado.
lanza de pagos, ya que los precios de nuestras ex- Luego del golpe de 1968 y debido a los conflictos
portaciones decrecieron levemente, mientras las im- con el gobierno norteamericano, el gobierno adoptó
portaciones y el servicio de la deuda se incrementa- la política de no buscar créditos en los organismos
ron. El Perú entró en crisis de pagos de deuda en di- multilaterales donde Estados Unidos tenía poder de
ciembre de 1976, al mismo tiempo que el endeuda- veto, como el Banco Mundial y el BID, orientándose
miento por defensa llegó al 75% del endeudamien- hacia los países socialistas de Europa Occidental y al
to total. Japón, así como a la banca privada internacional.
Entre 1977 y 1978 el Perú se ubicó entre los paí- Así, durante 1970-1975 la principal fuente de crédi-
ses con mayor crisis de endeudamiento, lo cual mo- tos fue la banca privada internacional, seguida de los
tivó el cierre de los créditos provenientes de la ban- créditos gubernamentales. En 1976, coincidente-
ca privada; a partir de entonces, las relaciones y ne- mente con la reapertura del crédito multilateral so-
gociaciones con el FMI tuvieron numerosos rompi- brevino el cierre de los créditos de la banca privada
mientos y conflictos. El general Morales Bermúdez internacional. Por ello durante el período 1976-
comprometió el apoyo del gobierno norteamericano 1980 la mayoría de los créditos provino de los países
a las negociaciones del FMI a cambio del cumpli- socialistas por la compra de armas, seguidos por los
otorgados por gobiernos occidentales.

EL CENSO NACIONAL DE 1972

Un elemento importante para la realización del


proceso de reformas era el manejo de información.
Por ello, el gobierno de Velasco dio impulso a enti-
dades como el Instituto Nacional de Estadística y el
Instituto Nacional de Planificación, a las que encar-
gó en 1970 la planeación de la realización de un
censo nacional para julio de 1972. Los resultados
confirmaron la tendencia de los cambios que se
operaban en el país desde 1940. Quizás la constata-
ción más importante fue que la población urbana
superaba a la población rural: la primera represen-
taba 8 058 495 personas (59,9%) y la segunda 5 479
713 personas (40,5%), con una población total de
13 538 746 personas. La distribución por regiones
ETAPA CONTEMPORÁNEA

era la siguiente: en la costa 9 113 500 pobladores,


en la sierra 7 329 500 y en la selva 1 311 900.

El gobierno militar llevó a cabo en 1972 una encuesta


nacional de población, cuyos resultados indicaban que el Perú
había dejado de ser un país eminentemente rural y la costa se
había convertido en la región más habitada por los peruanos.

1126
El Perœ contemporÆneo

LOS EMPRESARIOS Y EL RÉGIMEN que podría ser visto como realizado a costa del em-
MILITAR presariado privado, al que se le expropiaron ciertas
áreas que pasaron a ser reservadas para el Estado–,
El proceso de reformas implementadas por el ge- en realidad lo que se hizo fue delimitar sectores y
neral Velasco estuvo orientado a afectar los intere- niveles de actuación para la empresa privada, en los
ses de la oligarquía, con efectos importantes sobre que se desarrolló productivamente y obtuvo gran-
el poder económico de sus componentes, especial- des ganancias, gracias a que la industria fue coloca-
mente de los sectores más tradicionales del campo. da como eje del desarrollo económico. Por ejemplo,
Los modernos, en cambio, se desplazaron a otros la estatización del cemento aseguró su abasteci-
sectores económicos, conformándose una nueva miento a precios que dejaban un bajo excedente pa-
burguesía que se fue integrando a la ya existente: ra el Estado; Petroperú aprovisionó a la industria de
los denominados “nuevos ricos”, procedentes del combustible subsidiado; y Siderperú retenía un pe-
ahora denominado “sector informal”, así como co- queño excedente en la producción de acero, en be-
merciantes, intermediarios, profesionales y miem- neficio del sector metalmecánico en manos priva-
bros de las Fuerzas Armadas enriquecidos en el das. Sin embargo, los industriales no respondieron
ejercicio de cargos públicos en los ministerios o en de manera positiva, por razones más políticas que
las empresas estatales. Éste fue un lento proceso económicas, pues no estuvieron dispuestos a acep-
que se fue dando a lo largo de los doce años de go- tar el nuevo rol del Estado, no sólo como empresa-
bierno militar, promovido de alguna manera por és- rio sino como regulador arbitral de las relaciones
te, con la intención de que el empresariado nacional sociales. Esta diferencia de los industriales con el
asumiera el liderazgo en el desarrollo nacional en gobierno militar produjo desde el comienzo su dis-
reemplazo del capital extranjero. Por ello recibió tanciamiento, y no sólo ideológico. Las medidas to-
una serie de beneficios, como un
tipo de cambio sobrevaluado que
le permitía importar materias
primas y bienes de capital en
condiciones favorables; el esta-
blecimiento de una tasa nominal
de interés; control sobre los pre-
cios agrícolas, que benefició a los
sectores urbanos y que no se
ejerció sobre los bienes indus-
triales; y una política de protec-
ción del mercado interno como
nunca antes se había dado. Se-
gún Pásara, si bien el Estado ex-
pandió su rol empresarial –lo

El 28 de julio de 1970 Juan Velasco


ETAPA CONTEMPORÁNEA

Alvarado en su mensaje a la nación


anunció la creación de la comunidad
industrial, generando fricciones con
los grupos empresariales que la veían
como la concesión de un excesivo
poder a los trabajadores tanto en la
dirección como en la participación de
las utilidades de la empresa.

1127
Portocarrero Grados

cantes a la conciliación entre capital y trabajo tam- sión, ya que siendo sus integrantes en teoría los ac-
poco fueron bien recibidas y más bien se sospecha- tores claves del desarrollo nacional, no logran serlo
ba de ellas; éste fue el caso de la comunidad indus- en la práctica. Si a ello se suma el reto que significa
trial, vista como una interferencia obrera impuesta enfrentar a la movilización social, se entenderá el
por el Estado a su libre gestión de la producción. comportamiento de los industriales, quienes en lu-
Desde 1970 los empresarios deciden sabotearla me- gar de tener sentido del riesgo e iniciativa se convir-
diante una progresiva adquisición de comunidades tieron en personas temerosas. Durante el gobierno
industriales con una parte de las utilidades anuales, de Velasco su fuente de incertidumbre fue la acción
o mediante la burla de las utilidades. Como resulta- del Estado; durante el de Morales Bermúdez, la cri-
do, el conflicto entre capital y trabajo tiende a au- sis económica. Sus esperanzas se cifraron en el pro-
mentar en la empresa, en vez de disminuir. Al no lo- ceso de contrarreforma y de apertura política, pero
grar acuerdos, los empresarios intentaron influen- tuvieron que enfrentar aún otra década más de in-
ciar en el gobierno a través de los sectores conser- certidumbre.
vadores de las Fuerzas Armadas. Con la caída de Ve-
lasco y la apertura política del general Morales Ber- LA MOVILIZACIÓN POLÍTICA Y SOCIAL A
múdez, los empresarios logran una influencia direc- TRAVÉS DEL SINAMOS
ta sobre el gobierno, estableciéndose civiles vincu-
lados a los gremios empresariales en el ministerio Desde el inicio del proceso de reformas, el go-
de Economía y Finanzas. Sin embargo, la descon- bierno tenía clara la necesidad de establecer un con-
fianza persistió a pesar de las medidas de contrarre- trol político sobre los diferentes sectores sociales,
forma que afectaron los derechos laborales de los especialmente los beneficiados con las reformas. Se
trabajadores y beneficiaron ampliamente a las em- buscaba así garantizar el apoyo popular al proceso
presas. reformista y al gobierno, mediante un organismo
Francisco Durand tiene una visión más comple- administrativo que sustituiría a los partidos políti-
ja, pero complementaria a la de Pásara. Según él, el cos: el SINAMOS, a través del cual el “pueblo orga-
proceso de consolidación de una nueva burguesía nizado” haría llegar al gobierno sus reivindicacio-
librada del lastre de sus aliados tradicionales, a lo nes, especialmente a nivel local. Se buscaba así tam-
largo de la década del 70, se vio bloqueado por tres bién la conciliación de intereses, complementando
factores. En primer lugar, a pesar de que el proceso reformas como las comunidades industriales, para
reformista le dio un rol importante en el desarrollo lo cual se combinaban paternalismo y control auto-
económico nacional y la favoreció en la obtención ritario, elementos complementarios del comporta-
de grandes ganancias, también la subordinó a su miento del gobierno frente a la movilización social.
proyecto limitando el papel dirigente que se le que- Si bien el SINAMOS recogía iniciativas y reivindica-
ría atribuir. En segundo lugar, el proceso de acumu- ciones, las decisiones últimas estaban controladas
lación era inestable debido a la crisis internacional por el gobierno militar y se esperaba de sus inte-
y la burguesía fue incapaz de enrumbarlo, actuando grantes la actitud del subordinado pasivo y agrade-
de manera marcadamente coyuntural. En tercer lu- cido. El acento hacia uno u otro polo dependía de
gar, la presencia del capital extranjero en la estruc- las coyunturas políticas y del grado de cuestiona-
tura productiva deja a la burguesía los sectores me- miento al proceso reformista y al gobierno. Como
nos rentables, subordinándolos a sus intereses. Sin era de esperarse, el control autoritario se acrecentó
embargo, los empresarios nacionales no estaban con la contrarreforma. La organización del SINA-
dispuestos a una ruptura con el capital extranjero, MOS fue piramidal, de arriba a abajo, dividida en
ya que los proveía de insumos, créditos y tecnolo- niveles (nacional, departamental y local); era asi-
gía. A ello habría que agregar el hecho de que la si- mismo corporativo, ya que los organismos que lo
tuación mundial ya se orientaba hacia un reordena- integraban se dividían en sectores (comunidades in-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

miento caracterizado por la imposición de proyec- dustriales, cooperativas, pueblos jóvenes, sindica-
tos monopólicos y de apertura económica, que en tos, etc.). En ese sentido, la retención del poder por
un contexto de crisis como el que se vivía entonces las Fuerzas Armadas fue un rasgo esencial del go-
hacía a la burguesía vulnerable a su penetración. Es- bierno militar; sin embargo, el modelo del SINA-
tos factores hacen de la incertidumbre una caracte- MOS implicaba organizar a aquellos sectores que no
rística permanente del estado de ánimo de la nueva lo estaban y darles mínimos espacios de acción,
burguesía peruana, además del malestar y la desilu- aunque sin permitirles cuestionamiento alguno. De

1128
El Perœ contemporÆneo

esta manera se dio un proceso de orga-


nización y movilización social como no
se había dado antes, resultado no de-
seado por el gobierno militar.
Inicialmente, se impulsó al SINA-
MOS como una plasmación del postu-
lado de la “democracia social de parti-
cipación plena”, postura rechazada por
los diferentes sectores políticos, e in-
clusive por algunos del gobierno. Para
los conservadores se trataba de un plan
creado por la “infiltración comunista
en el gobierno”, y para la izquierda, de
un instrumento de control “fascista”.
Los vaivenes de su funcionamiento y
organización son también expresión de
los cambios en la coyuntura política y Mitin de apoyo al SINAMOS, junio de 1972. La organización de SINAMOS fue
del desarrollo de las contradicciones al jerárquica y piramidal y subordinó, en última instancia, las reivindicaciones
interior de las Fuerzas Armadas. A me- políticas populares a la dirección (y evidente supervisión) del gobierno militar.
dida que se desenvolvía el proceso de
reformas, SINAMOS se convierte en el centro de Confederación Nacional de Comunidades Indus-
fuertes tensiones, ya que de un organismo de con- triales (CONACI). Destaca la creación del Movi-
trol de la movilización social se convirtió, a la larga, miento Laboral Revolucionario (MLR), con el pro-
en uno de los elementos centrales de la concientiza- pósito de garantizar la estatización del sector pes-
ción política de los sectores populares. Este proceso quero, utilizando para ello métodos violentos.
no se dio sólo en las zonas urbanas, sino que tam- Podemos dividir la evolución del SINAMOS en
bién tuvo un rol muy importante en el campo, tres etapas: la primera, de 1969 a 1973, cuando el
creando e impulsando la orga- gobierno logra implementar
nización de las cooperativas las principales organizaciones
agrarias y de la Confederación de apoyo, en un contexto de
Nacional Agraria (CNA), co- iniciativa política en la puesta
mo única manera de garanti- en marcha del proceso refor-
zar la implementación de la re- mista; en la segunda, de 1973 a
forma del sector. Pero el SINA- 1975, el control gubernamen-
MOS no sólo organizaba, tam- tal se deja sentir sobre la movi-
bién practicaba el paralelismo lización social, realizando ope-
y la división de organismos rativos de paralelismo, divi-
existentes, como una manera sión y asalto a las organizacio-
de enfrentar a las fuerzas polí- nes sociales que mantuvieron
ticas con bases populares co- su independencia; en la terce-
mo el PAP y la Izquierda. Son ra, de 1976 a 1978, el SINA-
los casos, por ejemplo, de la MOS pasó a ser dirigido por
Confederación de Trabajado- los sectores más conservadores
res de la Revolución Peruana del gobierno, hasta su definiti-
(CTRP), creada en 1972 para va desactivación.
ETAPA CONTEMPORÁNEA

neutralizar a las otras centra-


les sindicales; del Sindicato de
Educadores de la Revolución Carlos Delgado Olivera, uno de los
Peruana (SERP), para contra- principales asesores civiles del
rrestar al Sindicato Único de gobierno militar de Juan Velasco
Trabajadores de la Educación Alvarado y alto funcionario de
(SUTEP); de la división de la SINAMOS.

1129
Portocarrero Grados

LA MOVILIZACIÓN OBRERA cal; durante esos años se reconocieron 2 115 sindi-


catos, casi tantos como los 2 279 reconocidos entre
Antes de octubre de 1968 solamente existía una 1936 y 1968, según datos de Teresa Tovar. Entre los
central de trabajadores, la Confederación de Traba- sindicatos más importantes cabe resaltar la creación
jadores del Perú (CTP), dominada por el PAP. En del SUTEP en 1971, aunque no fue reconocido por
1971 fueron reconocidas la Confederación General el gobierno. Se reconocieron además importantes
de Trabajadores del Perú (CGTP), controlada por el derechos sindicales –como la estabilidad laboral–
PCP, y la Confederación Nacional del Trabajo que otorgaban garantías mínimas al trabajador para
(CNT), de orientación católica. A fines de 1972 fue realizar libremente sus actividades sindicales. Hay
reconocida la Confederación de Trabajadores de la que señalar que el reconocimiento de la CGTP por
Revolución Peruana (CTRP), organizada por el mi- parte del gobierno tuvo una motivación política:
nisterio del Interior y por el SINAMOS; más tarde se contrarrestar la influencia de la CTP aprista. Sin
organizó el Comité Coordinador de Unidad Sindical embargo, cuando la CGTP cobró mayor influencia,
(CCUS) bajo influencia maoísta, que no prosperó. el gobierno impulsó la creación de la CTRP para
Según Sulmont, los datos del año 1974 señalan que neutralizar a apristas y comunistas mediante el ofre-
la CGTP contaba con un 37% de la afiliación sindi- cimiento de mejores ventajas sindicales y la forma-
cal, la CTP con el 29%, la CTRP con el 27% y la ción de sindicatos y federaciones paralelas.
CNT con el 7%. La CGTP se constituyó así en la A pesar del apoyo del gobierno a la organización
central sindical más importante del país. De igual sindical, hubo importantes huelgas y movilizacio-
forma, a partir de la ley de comunidades laborales nes sindicales y populares. En julio de 1969 fueron
(1970), se produce un crecimiento de la sindicaliza- abaleados en Huanta los manifestantes que protes-
ción en las pequeñas y medianas empresas bajo la taban por la suspensión de la gratuidad de la ense-
influencia de la CGTP. Ésta desarrolló las huelgas y ñanza, con un saldo de 25 muertos y 50 heridos; en
movilizaciones de mayor importancia, que en 1973 noviembre de 1971 cinco trabajadores mineros mu-
representaron el 47,8% de horas-hombre perdidas; rieron a consecuencia de la toma policial de las ins-
cifra que se elevó al 67% en 1975. Sin embargo, se- talaciones de las minas de Cobriza, que estaban en
gún Manuel Valladares, a pesar de la intensa labor poder de los huelguistas por las amenazas de cierre
de sindicalización llevada adelante por el gobierno y despido; la huelga de maestros de setiembre de
y los partidos de izquierda, ésta sólo alcanza a un 1972 también fue duramente reprimida. Con el
aproximado del 18% de la población asalariada. Co- agudizamiento de la crisis económica los conflictos
mo puede verse, bajo el gobierno del general Velas- se intensifican. En abril y octubre de 1973 se produ-
co se dio gran importancia a la organización sindi- cen enfrentamientos en Chimbote durante la huel-
ga pesquera y diversas protes-
tas en todo el sur andino; en
setiembre de 1974 se reprimió
a los campesinos de Anda-
huaylas que impulsaron to-
mas de haciendas no afecta-
das por la reforma agraria; fi-
nalmente sobrevendría la ex-
plosión social del 5 de febrero
de 1975.
Los años de 1973 a 1975
fueron los de mayor protesta
social, producto de la crisis
ETAPA CONTEMPORÁNEA

económica y política al inte-


rior del gobierno. Diversos
sectores demandaban la de-
fensa y radicalización del pro-
En 1971 fue reconocida la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP),
controlada por el Partido Comunista Peruano. El gobierno militar de Juan Velasco
ceso de reformas, a lo cual el
Alvarado quiso así contrarrestar la hegemonía de la Confederación de Trabajadores del gobierno respondió con fuer-
Perú (CTP) de influencia aprista. tes mecanismos de control so-

1130
El Perœ contemporÆneo

cial (rompimiento de huelgas, paralelismo, arres- debido al debilitamiento producido por las medidas
tos). De esta manera las movilizaciones fueron pa- del gobierno, y a los esfuerzos conjuntos de éste y
sando de un carácter meramente gremial a un carác- de los empresarios para neutralizarlo. En abril se
ter político de oposición al gobierno. Durante este producen enfrentamientos entre la policía y obreros
período hubo un encuentro entre los partidos de iz- que habían tomado la fábrica Cromotex, con un sal-
quierda y el movimiento sindical, que dio lugar a la do de 6 muertos; mientras, los maestros inician una
llamada “identidad clasista”, definida por autores nueva huelga entre junio y setiembre, exigiendo el
como Parodi y Balbi como una identidad basada en cumplimiento de las promesas del año anterior.
el poder colectivo de los trabajadores para deman- Luego se sumarían la Federación Nacional de Tra-
dar respeto a su dignidad y a sus derechos, cuestio- bajadores de la Universidad Peruana (FENTUP), los
nando la autoridad despótica de los empresarios y/o trabajadores del Banco de la Nación y el Seguro So-
supervisores dentro de la fábrica, y utilizando méto- cial. En ese contexto de rebrote de la movilización
dos de lucha tendientes a la confrontación. Resal- social, se organiza un nuevo paro nacional para el
tan, además, la igualdad jurídica que logra el clasis- 19 de julio, convocado por un amplio espectro de
mo entre patrones y obreros, permitiendo a los tra- organizaciones. El paro fue contundente pero, co-
bajadores un acceso a la ciudadanía del que antes mo en los casos anteriores, el gobierno no cambió la
carecían. Como señalamos anteriormente, diversas política económica ni su actitud contra la moviliza-
leyes refuerzan su situación. ción sindical, que ingresó debilitada al régimen de-
A la participación vía comunidades se suma el mocrático iniciado en 1980.
establecimiento del derecho a la estabilidad laboral,
beneficio sumamente apreciado por los trabajadores LA MOVILIZACIÓN CAMPESINA FRENTE
y que, pese a no eliminar de hecho el despido, am- A LA REFORMA AGRARIA
plía sus posibilidades de defender su empleo. Estas
leyes también dieron oportunidad de crecimiento y El objetivo central de la reforma agraria buscaba
fortalecimiento a la acción sindical, a lo que se su- una drástica redistribución de la propiedad y el im-
mó un alza del salario real entre 1968 y 1973, que pulso de formas cooperativas de producción, bene-
benefició al sector de la población empleado esta- ficiando preferentemente a los trabajadores del
blemente en empresas medianas y grandes, y ma- agro. Inicialmente la reforma agraria se implementa
yormente organizado en sindicatos. Pese a su esca- en las haciendas de la costa norte, ya que represen-
so número, los trabajadores conformaban un con- taban el sector moderno del agro y la base económi-
tingente importante por su peso en la economía y
por su fuerza organizada. Su mayor capacidad ad-
quisitiva también contribuyó a una expansión del
mercado y de la industria.
En 1976, bajo el estado de emergencia, la movi-
lización obrera decrece, pero lentamente comienza
a acumularse el descontento frente a las medidas
económicas y de control social. La excepción sería
la huelga pesquera de octubre de 1976 contra la pri-
vatización del sector. Las movilizaciones de 1977 a
1981 tendrán como objetivo enfrentar la política
económica del gobierno de Morales Bermúdez y de
los inicios del gobierno de Belaunde. Ya hemos re-
señado el contexto y hechos de los paros nacionales
de 1977 y 1978. Destacan, además, la huelga de
ETAPA CONTEMPORÁNEA

maestros entre mayo y julio de 1978, la de la Fede-


ración Nacional de Mineros y Metalúrgicos en agos-
to, y la formación de la Confederación Intersecto- Elección de una nueva directiva en una cooperativa agraria.
rial de Trabajadores Estatales (CITE). Las grandes haciendas del norte peruano fueron convertidas
en cooperativas y su dirección asumida por los propios
1979 fue un año de altas y bajas en la moviliza- trabajadores. Sin embargo, toda manifestación de disidencia
ción sindical. Se convocó a un nuevo paro nacional con el proyecto militar fue sancionada y reprimida por las
para los días 9, 10 y 11 de enero, pero éste fracasó autoridades.

1131
Portocarrero Grados

ca de los sectores agroexportadores –pilares de la MOS. Para el caso del agro, su objetivo fue movili-
alianza oligárquica– y porque allí se concentraba la zar a los sectores favorables a la reforma agraria sin
influencia del sindicalismo aprista, controlado por la intervención de los partidos. Con tal fin, se disol-
la Federación Nacional de Campesinos del Perú vió la Sociedad Nacional Agraria (SNA) que, como
(FENCAP), afiliada a la CTP. Será en estas propie- representante de los propietarios, había realizado
dades donde se producirán las primeras moviliza- constantes campañas contra la reforma agraria, fun-
ciones campesinas debido a que si bien formalmen- dándose en su lugar en 1974 la Confederación Na-
te las cooperativas pertenecían a los socios, el Esta- cional Agraria (CNA), que se dedicaría a la organi-
do ejercía el control efectivo en la dirección de és- zación de ligas agrarias, compitiendo con las orga-
tas. Entre 1970 y 1972 los trabajadores y el Estado nizaciones de izquierda que reactivaron la CCP ba-
se enfrentan en torno a la capacidad de decisión so- jo la hegemonía de VR. Las bases de la CCP estaban
bre las cooperativas, produciéndose huelgas en Po- compuestas mayoritariamente por campesinos no
malca, Cayaltí, Pucalá, Paramonga, Cartavio y Tu- beneficiados por la reforma agraria, que utilizaban
mán. El gobierno respondió con mayores controles la toma de tierras como mecanismo para obtener su
a través del Sistema de Asesoramiento y Fiscaliza- afectación, exponiendo la economía campesina.
ción (SAFCAP), y sancionando el recurso a la huel- A partir de 1973, la movilización campesina se
ga como delito de sabotaje a la reforma agraria, su- desplaza hacia la sierra, donde el gobierno no había
jeto al fuero militar. Más al sur se realizaron movili- ejercido mayor presencia ni se había implementado
zaciones campesinas para modificar el régimen de significativamente la reforma agraria. Las tomas de
parcelaciones por iniciativa privada, recogido por la tierras no sólo se ejercieron sobre tierras no expro-
ley de reforma agraria de 1969, ya que de esa mane- piadas sino también sobre aquellas asignadas a coo-
ra los propietarios se proponían evadir la expropia- perativas y a sociedades de propiedad social, como
ción. Éste fue el caso de la hacienda “Huando” en el en el caso de la SAIS Huancavelica, disuelta luego
valle de Huaral en 1970, donde la movilización bus- de una progresiva división de sus tierras entre las
có el desconocimiento de las parcelaciones realiza- comunidades circundantes, varias de las cuales
das y la cooperativización de la hacienda. En febre- eran formalmente socias de la empresa. La CCP di-
ro de 1971 la ley fue modificada, las privatizaciones rigió dos importantes movilizaciones entre 1973 y
fueron anuladas y se dio un nuevo 1975, orientadas a la adjudica-
impulso a la cooperativización; a ción de tierras a las comunidades
pesar de ello los propietarios per- campesinas mediante la toma de
sistieron en las parcelaciones, por tierras previa a la negociación
lo que la movilización se expandió con el gobierno: la primera se
a los valles de Cañete, Huaura y produjo en el departamento de
Nazca. Durante 1972 y 1973 se Piura, encabezada por Andrés Lu-
produjeron tomas de haciendas na Vargas, entre 1973 y 1975; la
que tuvieron como resultado la ex- segunda fue en Andahuaylas –en
propiación de los fundos. A dife- donde la reforma agraria no había
rencia de la costa norte, estas mo- avanzado–, encabezada por Lino
vilizaciones buscaban obtener del Quintanilla y Julio César Mez-
gobierno la afectación de tierras, zich. Entre julio y setiembre de
rebasando los cauces legales de la 1974 se produjeron tomas masi-
reforma agraria, radicalizándola. vas de tierras, sumando miles las
En este contexto de moviliza- hectáreas afectadas. Como conse-
ción campesina se crea el SINA- cuencia de ello, el gobierno firmó
actas de compromiso que in-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

cluían el establecimiento de co-


En 1974 se desarrolló en Andahuaylas mités campesinos de adjudica-
una gigantesca movilización campesina ción provisional y, no obstante,
en su lucha por la tierra y en sus procedió a arrestar a los dirigen-
exigencias por una mayor participación
política. Estas protestas fueron tes campesinos y estableció pena
encabezadas por Lino Quintanilla y Julio de cárcel para los que instigasen
César Mezzich (en la foto). o realizasen invasiones.

1132
El Perœ contemporÆneo

Otro tipo de movilización campesina se produjo zación vecinal de los 13 pueblos jóvenes de la zona,
entre los trabajadores agrícolas de las haciendas cir- formándose así el pueblo joven El Rescate. Dicha
cundantes a Lima, entre 1974 y 1975, con el objeti- dinámica se reproduce en las principales ciudades
vo de conseguir la derogatoria del artículo 42 de la del país, pero principalmente en la costa. El caso
ley de Reforma Agraria, que facultaba al ministerio más significativo fue el de Chimbote, cuya pobla-
de Vivienda la adjudicación de tierras y le permitía ción se quintuplicó entre 1961 y 1972 debido “al
definir los límites de la expansión urbana, lo que boom” pesquero, proceso que aún no ha sido sufi-
dio lugar a la especulación de tierras en beneficio de cientemente estudiado. Los pueblos jóvenes se con-
las grandes empresas inmobiliarias, que alcanzaron vierten en un fenómeno social incuestionable en
elevadas utilidades. Este proceso se había iniciado ciudades como Cuzco, Arequipa, La Oroya, Huan-
en la década del 50 con la compra de predios rústi- cayo, Trujillo, etc.
cos, mantenidos por las inmobiliarias como fundos Al inicio de la crisis económica, el gobierno no
de panllevar, y urbanizadas paulatinamente. contaba con recursos suficientes para dotar de ser-
vicios a los pobladores, pero mantuvo su política de
LOS NUEVOS ACTORES SOCIALES control de las organizaciones barriales. Poco a poco
surgieron luchas por la autonomía vecinal, acrecen-
Bajo el gobierno militar se plasman nuevos acto- tándose la influencia de la izquierda radical. El en-
res al interior de la movilización social, principal- carecimiento del costo de vida y el desempleo gol-
mente el movimiento de pobladores y los movi- pean duramente a los pobladores. Desde 1975 las
mientos departamentales y regionales. Hay que se- tomas de terrenos y las movilizaciones y protestas
ñalar que el gobierno militar no realizó una reforma por servicios se incrementan. Se pueden citar a este
urbana, debido a que hubiera afectado los intereses respecto la marcha de los pobladores de Villa El Sal-
empresariales de la construcción vinculados a im- vador, en abril de 1975, solicitando solución al pro-
portantes sectores económicos. Por ello, inicial- blema del agua y del transporte; la marcha de los
mente, el gobierno creó la Oficina Nacional de Pue- pueblos jóvenes de El Rescate en apoyo a los meta-
blos Jóvenes (ONDEPJOV), en diciembre de 1968, lúrgicos en marzo de 1974 y, posteriormente, los su-
cuya política se basó en el fomento de la autoayuda cesos de Vitarte en junio de 1976, donde la pobla-
y en el tradicional reparto de alimentos, establecien- ción se movilizó en apoyo a la huelga de los obreros
do una nueva forma de organización para las barria- de la Nylon.
das: las organizaciones vecinales, en base a los co- El cuestionamiento al gobierno, y particular-
mités por manzanas o cuadras. En este contexto se mente al SINAMOS, ya era patente al iniciarse el go-
producen las primeras movilizaciones de poblado- bierno de Morales Bermúdez y se manifestó clara-
res. La más importante del período fue la ocupación mente cuando las movilizaciones barriales se suma-
de terrenos en Pamplona en abril de 1971, que lle- ron al movimiento sindical en la realización de los
vó al gobierno a replantear sus relaciones con los paros nacionales de 1977 a 1979, sin cuya participa-
pobladores, reservando zonas de expansión y reubi- ción éstos no hubieran tenido éxito. El gobierno
cando a los invasores dando lugar a la formación de asumió entonces una política de represión y de ma-
Villa El Salvador y Villa María del Triunfo en 1972. yor control militar, por lo cual, durante el estado de
Se buscó encauzar la acción de los pueblos jóvenes emergencia y el toque de queda, las operaciones de
a través del SINAMOS y las “acciones cívicas” del intervención y rastrillaje en los pueblos jóvenes fue-
Ejército, en la realización de obras de infraestructu- ron bastante comunes.
ra, así como con la dación del DL 20066, que tipifi- Mientras tanto, proyectos ambiciosos de organi-
caba las invasiones como “delito de usurpación”. A zación vecinal y autogestión, como Villa El Salva-
pesar de estos intentos de encauzamiento, entre dor, son abandonados a su suerte. En esa situación,
1972 y 1973 se produjeron otras tomas de terrenos, se busca una solución a los principales problemas
ETAPA CONTEMPORÁNEA

siendo la más importante la de octubre de 1972 en de los pueblos jóvenes a partir de la iniciativa veci-
la Av. Argentina, por pobladores conocidos como nal; mediante la autogestión, se construyen come-
“los rescatadores”, quienes reivindicando el dere- dores populares, caminos, agua y luz, posta médica,
cho a una vivienda digna y cuestionando los crite- logros que de una u otra manera fortalecían la orga-
rios comerciales y de lucro, exigieron del Estado la nización barrial. Entre julio de 1979 y agosto de
expropiación de los terrenos ubicados en la margen 1980 se forman varias federaciones departamentales
izquierda del río Rímac y que se respetara la organi- de pueblos jóvenes, con el objetivo de crear una

1133
Portocarrero Grados

Central General de Pueblos Jóvenes, lo que no llega 1978 las reivindicaciones regionales y departamen-
a concretarse. Con la transferencia de gobierno, el tales incluyeron la reposición de los dirigentes des-
movimiento barrial comienza a independizarse del pedidos. A diferencia de otros movimientos, éstos
movimiento sindical y a dirigir sus reclamos a las mantuvieron su fuerza durante la década del 80.
instituciones representativas del Estado, cuya secto-
rización propició el debilitamiento del movimiento LOS PARTIDOS POLÍTICOS DURANTE EL
social en su conjunto. GOBIERNO MILITAR
Por su parte, los movimientos departamentales y
regionales están relacionados con el paulatino pro- En líneas anteriores hemos delineado el compor-
ceso de fortalecimiento y de centralización sindical tamiento político y electoral de los partidos, espe-
de diferentes gremios urbanos y rurales en diversas cialmente durante el gobierno de Morales Bermú-
partes del país. Son los casos por ejemplo de la Fe- dez. Veamos ahora algunos puntos referidos a su
deración de Campesinos de Piura (FEDCAP) y de la evolución interna. Al producirse el golpe de 1968
Federación de Trabajadores de La Libertad (FEDE- AP entró en un largo receso, interrumpido por in-
TAL), entre otros. Éstos se constituirían en la base termitentes comunicados sobre las medidas aplica-
para la movilización social a favor de las reivindica- das por el gobierno militar. Algunos de sus dirigen-
ciones regionales y departamentales, cuyas prime- tes sufrieron cárcel y deportación, así como acusa-
ras manifestaciones se inician en el sur: en agosto ciones de corrupción que fueron llevadas al poder
de 1971 en el Cuzco, encabezada por el Frente Úni- Judicial. Al igual que otros partidos, AP cobró bríos
co de Defensa de los Intereses del Cuzco; en abril de luego de la caída del general Velasco. Aunque regis-
1972 en Arequipa; y en junio de 1972 en Puno. En tró su inscripción como partido en el JNE, no parti-
1973 estos movimientos se incrementaron: en abril cipó en las elecciones a Asamblea Constituyente;
en Moquegua, por el Frente Único de Defensa de sin embargo, Fernando Belaunde Terry sería elegido
los Intereses de Moquegua; en mayo en Arequipa, nuevamente presidente de la República en las elec-
por la Federación de Trabajadores de Arequipa, y en ciones generales de 1980.
Chimbote, en solidaridad con los pesqueros; en no- La DC había entrado ya en crisis como partido al
viembre en Arequipa, Puno, Cuzco y Ayacucho. A producirse el golpe de 1968. En su congreso de
diferencia de los movimientos 1971 se produce una nueva
regionales de la década del 50, ruptura, esta vez de los sectores
liderados por industriales y co- radicales de la juventud, algu-
merciantes, los de la década del nos de cuyos integrantes eran
70 están encabezados por am- Enrique Bernales, Rafael Ronca-
plios sectores populares que les gliolo, Alfredo Filomeno, Henry
dan nuevo significado y que son Pease y José María Salcedo. Más
expresión inicial de la confluen- adelante, en 1976, Enrique Ber-
cia entre el movimiento obrero nales –junto con ex militares de
y otros sectores, especialmente la primera fase– formaría el Par-
el de pobladores; sólo en casos tido Socialista Revolucionario
significativos se logró una con- (PSR). Asimismo, la DC perdió
fluencia con el movimiento el control de la Federación de
campesino. Estos lazos se estre- Estudiantes de la Universidad
charían entre 1977 y 1980 con Católica (FEPUC) cuando una
los paros nacionales contra la lista encabezada por Carlos
política económica y la militari- Blancas fue derrotada por el
zación, cuyo éxito no hubiera Frente Revolucionario de Estu-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

sido posible sin la participación diantes Socialistas (FRES), cuya


masiva de todo el país. En los lista estaba compuesta por Ja-
meses previos al paro nacional vier Diez Canseco, Manuel
de julio de 1977 se produjeron Dammert y Agustín Haya de la
Caricatura del quincenario Monos y
importantes movilizaciones en Monadas del 17 de enero de 1980 donde
Torre. En mayo de 1972, la DC
Cuzco, Tacna, Ayacucho, Are- aparece el general Francisco Morales expresó su respaldo público al
quipa, Huancayo y Trujillo. En Bermúdez en primer plano. proceso revolucionario de las

1134
El Perœ contemporÆneo

Fuerzas Armadas, con el cual encontraba “coinci-


dencias ideológicas”, a pesar de que posteriormente
mostraría su desacuerdo con el contenido de la ley
universitaria y con la formación del SINAMOS. Im-
portantes dirigentes de la DC asumieron cargos pú-
blicos e influyeron en la elaboración de una serie de
medidas que incluían la socialización de los perió-
dicos de circulación nacional en 1974: al producir-
se la toma de los diarios, Héctor Cornejo Chávez re-
cibió la dirección del diario El Comercio, cargo que
ejerció hasta fines de agosto de 1975, cuando re-
nunció en solidaridad con el general Velasco, mo-
mento a partir del cual la DC pasó a la oposición del
gobierno de la segunda fase. En las elecciones a la
Asamblea Constituyente de 1978, la DC consiguió
dos curules: Héctor Cornejo Chávez y Carlos Mo-
retti. No se presentaría en las elecciones de 1980.
Producido el golpe, el PPC es uno de los prime-
ros partidos en pronunciarse en contra. Durante el
período de Velasco, las actividades políticas del PPC Héctor Cornejo Chávez, reconocido especialista en
Derecho de Familia, fue elegido como constituyente
se redujeron a constantes comunicados y tomas de para la Asamblea de 1978.
posición frente a las medidas gubernamentales pe-
ro, con el inicio de la segunda fase, asumió una ma-
yor presencia y actividad, volviéndose uno de los los pobladores de asentamientos humanos y pue-
principales interlocutores del gobierno militar, apo- blos jóvenes.
yando las medidas de desmantelamiento de las re- Asimismo, la izquierda estaba dividida por su
formas. Con la convocatoria a la Asamblea Consti- posición frente al régimen militar: mientras la iz-
tuyente, el PPC reimpulsa la organización del parti- quierda radical se opuso desde el principio, el PCP
do con el fin de participar en las elecciones, en las apoyó al gobierno del general Velasco y, luego de su
que obtendría el segundo lugar a nivel nacional des- caída, a sus partidarios. Ello produjo importantes
pués del PAP, y el primer lugar en Lima. Luis Bedo- debates internos referidos a la naturaleza del régi-
ya Reyes obtuvo la segunda votación preferencial a men y las reformas, la relación partido-masas, el ca-
nivel nacional, debido a la no participación de AP, rácter de la sociedad peruana y la estrategia para la
cuya votación le fue endosada al PPC. En las elec- toma del poder político. Un balance inicial nos
ciones de 1980, pese a su tercer lugar, su peso elec- muestra que, al margen de las formulaciones pro-
toral volvió a su nivel, es decir, a ser fuerza política puestas, la acción de la izquierda estuvo centrada en
sólo en Lima. actividades gremiales más inmediatas: lucha por el
La evolución política de la izquierda es bastante control de los sindicatos, movilizaciones por recla-
compleja. A pesar de que atravesó un período de de- mos económicos, de oposición al régimen. Los sec-
sarrollo y rápido crecimiento nunca pudo vencer el tores populares se sentían representados por la iz-
factor estructural que limitaba su conformación co- quierda, pero muchas movilizaciones y protestas se
mo una real alternativa nacional: su división políti- producían espontánea o paralelamente al impulso
ca e ideológica. Su expansión en las diversas organi- de los partidos que la integraban. Es decir, la fuerza
zaciones que conformaban el movimiento social fue social no logró ser capitalizada en el fortalecimien-
posible debido a los efectos contradictorios de las to de los partidos, siendo bastante relativa su capa-
ETAPA CONTEMPORÁNEA

medidas del gobierno para encauzarlo, así como a la cidad de arraigo y dirección del movimiento social;
inexistencia práctica de los partidos políticos tradi- constatación que no significa desconocer el impor-
cionales. La izquierda radical compite con el PCP tante rol de la izquierda en el desarrollo y represen-
por la influencia en el movimiento sindical; a su tación del movimiento social y en la obtención de
vez, los diversos grupos de la izquierda radical com- reivindicaciones políticas y económicas, especial-
piten entre sí, logrando influencia entre los campe- mente durante el gobierno del general Morales Ber-
sinos pobres o sin tierras, los maestros, los estatales, múdez. Todo se vio reflejado en el tercio electoral

1135
Portocarrero Grados

obtenido en 1978, pero sus debilidades la llevaron a cación Peruana (SUTEP), controlado por Patria Ro-
ver reducida más aún su fuerza electoral en 1980. ja. Su peso político fue mínimo pero, en los 80, Sen-
En cuanto a los partidos trotskistas, Ricardo Na- dero Luminoso irrumpiría en el escenario político
purí abandona en 1970 VR y constituye el Partido con el inicio de la llamada “guerra popular”. A lo
Obrero Marxista Revolucionario (POMR), del cual largo de la década del 70 Sendero Luminoso se pre-
se desprendería al año siguiente la Liga Comunista. para para sentar las bases de la lucha armada, espe-
El FIR, luego de la amnistía de Hugo Blanco por el cialmente a través del Comité Regional de Ayacu-
gobierno militar, intenta reorganizarse pero se divi- cho y de la Universidad Nacional San Cristóbal de
de en dos facciones: la Comisión Reorganizadora Huamanga, en donde actúa a través del Frente Es-
del FIR y el FIR-Combatiente; en 1974, la Comisión tudiantil Revolucionario (FER). Durante estos años
Reorganizadora asume la denominación de Partido Sendero Luminoso se dedica al estudio de la obra y
Socialista de los Trabajadores (PST), encabezado pensamiento de José Carlos Mariátegui y de la rea-
por Enrique Fernández Chacón. Para las elecciones lidad peruana e internacional; es opositor declarado
a la Asamblea Constituyente, el PST forma parte del del gobierno militar, al que caracteriza como fascis-
FOCEP, al cual también pertenecía el POMR. Luego ta, y busca diferenciarse de otros partidos de iz-
de las elecciones de 1978, Hugo Blanco y otros diri- quierda. Sin embargo, hacia 1974 se debilita su pre-
gentes de grupos menores fundan el Partido Revo- sencia al interior de la Universidad de Huamanga,
lucionario de los Trabajadores (PRT), que participa- donde pierde el control de la asamblea universitaria
ría en 1980 de las negociaciones para la formación y de la federación de estudiantes. Su presencia se re-
del ARI, en perspectiva de las elecciones generales. dujo en 1975 a la facultad de Educación, para aban-
Luego de la formación de Izquierda Unida (IU), donar la universidad un año más tarde y enviar a
partidos trotskistas como el PST y el PRT intentaron sus cuadros a trabajar con las bases de la región y a
un acercamiento a dicho frente, pero jamás fueron otros lugares del país, en tanto su núcleo dirigente
aceptados. continuaba el proceso de consolidación del partido.
Los grupos maoístas sufren varias divisiones du- En 1976, al producirse la muerte de Mao Tse-
rante los primeros años del gobierno militar. En Tung y la caída de la denominada “banda de los cua-
1969 había surgido Patria Roja y en 1970 Sendero tro”, que dio fin a la revolución cultural china, Sen-
Luminoso. En 1971 se produce una nueva ruptura dero Luminoso se declara opositor al nuevo régi-
al interior de Bandera Roja, de la cual surge el Par- men chino y mantiene su adhesión al maoísmo or-
tido Comunista del Perú-Estrella Roja. Durante to- todoxo. En 1977, a partir de una serie de organis-
do este período, estos grupos van a manifestar su mos generados, Sendero Luminoso se vuelca al tra-
presencia al interior del movimiento estudiantil bajo rural para sentar la base social de la “guerra po-
universitario y en algunos sindicatos importantes, pular” que se anuncia próxima, pasando a la clan-
como el Sindicato Único de Trabajadores de la Edu- destinidad. A principios de 1980 el comité militar
de Sendero Luminoso realiza la Prime-
ra Escuela Militar, denominada ILA 80
(Inicio de la Lucha Armada), a cuyo
término se acuerdan las acciones que
iniciarían la “guerra popular”. La pri-
mera acción registrada se dio el 17 de
mayo de 1980, cuando un grupo ar-
mado asaltó el local del JNE en el pue-
blo de Chuschi (Ayacucho) y quemó
las ánforas electorales. Se había inicia-
do la “guerra popular”.
ETAPA CONTEMPORÁNEA

Genaro Ledesma Izquieta, líder del FOCEP, y


Hugo Blanco Galdós se confunden en un
abrazo. Para las elecciones generales de 1980
se pensó en un frente único de izquierda
llamado Alianza Revolucionaria de Izquierda
(ARI). Diferencias internas desbarataron este
intento.

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