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Jesús recorría las poblaciones de los alrededores, enseñando a la gente.

Entonces llamó a los Doce y los envió de dos en dos, dándoles poder sobre
los espíritus impuros. Y les ordenó que no llevaran para el camino más que un
bastón; ni pan, ni alforja, ni dinero; que fueran calzados con sandalias y que
no tuvieran dos túnicas. Les dijo: «Permanezcan en la casa donde les den
alojamiento hasta el momento de partir. Si no los reciben en un lugar y la
gente no los escucha, al salir de allí, sacudan hasta el polvo de sus pies, en
testimonio contra ellos». Entonces fueron a predicar, exhortando a la
conversión; expulsaron a muchos demonios y curaron a numerosos enfermos,
ungiéndolos con óleo. Mc 6, 6b-13

Comienzo de la charla

Seguimos viendo a un Jesús dinámico, es decir un Jesús puesto en camino.


Que no permanece quieto. Vemos como llama a los discípulos y los envía.
Todo esto sucede en una dinámica de lo cotidiano. Pero no los envía solos
sino de dos en dos. Esta clave nos puede de entrever que este camino no lo
hacemos solo, sino acompañados. Como lo vinimos haciendo en este retiro

El evangelista Mc nos propone una lista de cosa que tenemos que llevar para
esta misión a la cual somos enviados. Diríamos que nos propone un mínimo de
cosas. Encontramos un:

 Un bastón
 No alforja (especia de bolso)
 Ni pan
 No dinero
 Calzados con sandalias
 Una túnica

Vamos ir desglosando estos elementos, que nos proponen llevar para esta
misión. Haciendo una analogía entre camino y montaña.

El bastón: La figura del bastón representa la fe. El bastón de la fe abre


siempre nuevas posibilidades. Además, la fe no sólo es simple como un
bastón. Pero ayuda a entender lo inentendible.

La figura del bastón, para subir la montaña también o seguir caminando. Se


puede transformar en algo que necesitamos apoyarnos, un sostén para seguir
caminando, donde apoyar nuestro cuerpo cansado. Muchas veces nos
apoyamos en un bastón lit. sino que nos apoyamos en los hombres de otros,
de nuestros familiares, amigos, pareja. Es ahí donde nuestra fe se termina
desenvolviendo profundamente. ¿tu fe sobre que esta apoyada? ¿Quiénes hoy
son tu “bastón” para poder caminar?

No alforja: Es un especie de bolso que utilizaban los viajeros. Jesús pide que
nos lo llevemos, quiere que vayamos lo más desprovisto de todo. Siguiendo la
analogía de la subida a la Montañana. Pensemos que si es una montaña baja
de ascenso rápido (unas 4 o 5hs) no hace falta que llevemos tanta cosas o si
ya hablamos de una travesía de días tenemos que cargar más el bolso y estar
más preparados. Acá no importa tanto llevar o no bolso en este camino, sino de
que manera lo llenamos. En los discípulos se pide que vivan de la providencia.
En nuestro bolso que usamos para subir la montaña, encontramos cosas que
son útiles. En tu acenso ¿con que cosas venís cargando esta mochila? ¿Qué
cosas Tenes que seguir cargando? ¿qué cosas pones igual y sabes que te
terminan siendo peso para subir y seguir?

Ni pan ni dinero: La providencia es la que nos mantiene muchas veces.


Muchas veces nos cuesta estar abiertos a esto. (pequeña anécdota del
Franciscano) La montaña también tiene un poco de esto de la providencia. La
subida implica mucho de la preparación, pero muchas veces entra en juego
otros factores tanto externos como internos. Externos como el clima, la calidad
de camino. De manera interna, tenemos el cansancio, la salud física, el hambre
etc. En la providencia se manifiesta la voz de Dios, que nos va diciendo por
donde ir. Para traducir esta voz necesitamos de gente que sepa
verdaderamente, como los guías de montaña que saben leer e interpretar los
signos “que dice la montaña”. En la vida de fe necesitamos, debemos tener
alguien que nos ayude a interpretar los signos del camino. Y esto puede ser un
guía no de montaña, sino un “guía espiritual” ¿en qué manera estas abierto a la
providencia? ¿los signos que voy encontrando en mi vida dejo que otro me
ayude a leerlos?

Túnica: La túnica representa la espiritualidad. A esta espiritualidad cristiana, en


su forma esencial de oración y sacramentos, tiene una función “arropadora” en
nuestra vida. No es casualidad que la Iglesia nos invite especialmente a la
oración y los sacramentos en los momentos más importantes de la vida. Dios
quiere “arroparnos” con su gracia especialmente en esos momentos clave de la
existencia humana. Por lo demás, llevar una túnica para el camino se vuelve
indispensable sobre todo cuando se prevé que habrá excesivo sol, lluvia,
viento, tal vez tormenta. La oración y los sacramentos constituyen lo básico de
todo Cristiano. Es la ropa básica y común que podemos llevar. ¿Cómo son mi
frecuencia con los sacramentos? ¿qué importancia tienen en mi vida?

Sandalias: Otra de las instrucciones simples de Jesús es llevar sólo un par de


sandalias. Las sandalias evocan inmediatamente la idea de caminar.
Normalmente las sandalias se hacen a la horma del pie. “A nuestra medida”
Cuando son nuevas, pueden resultar incómodas. Pero una vez que uno las
“camina”, se amoldan al propio pie y se vuelven cómodas. Las sandalias son
para caminar por el camino que nos propone Jesús. Hace la vez de la analogía
de la moral. ¿con que caminamos en este camino? ¿Nos cansa? ¿hacemos el
camino a nuestra medida?

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