La maduración se puede considerar como la interrelación entre la herencia biología de
las personas y las condiciones ambientales a que se verá o ve sometido; esto se va a perdurar durante toda la vida del individuo. Es por ello que para que el niño aprenda a hablar tendrá que haber alcanzado una etapa madurativa determinada (se dará también cuando tiene que leer o caminar). A el niño se le tiene que dar ejercicios estimulantes estos serán los que predispongan al individuo para que se pueda abordar el tema del aprendizaje de la lecto-escritura. Existen factores para que el niño pueda aprender a leer con cierta posibilidad de acierto. Y son los factores fisiológicos que dentro de este se encuentran la visión, audición y motricidad, luego están los factores intelectuales que son edad mental y vocabulario, después los factores ambientales que en ello se encuentra el ambiente familiar, cultural y el problema del idioma y finalmente los factores emocionales.
La discriminación visual va a estar relacionada profundamente en el
desarrollo intelectual en los primeros años de vida del niño. Lo que va a medir la capacidad mental del niño (2años) va a ser que diferencia de las figuras geométricas como el círculo, triángulo y cuadrado. El test de Terman nos menciona que el niño en sus dos años y medio va a estar capacitado para copiar un círculo o trazar una línea vertical de la prueba. En los tres años y medio el niño podrá discriminar entre los círculos grandes y pequeños y también la diferenciación de un palo largo de otro corto. En sus cinco años ya copiara un cuadrado y señalara las diferencias de dos figuras geométricas (cuadrado y círculo), así como otras pruebas. La noción de cantidad está formado por la síntesis de formas geométricas variadas. El test de la Escala McCarthy nos ayudara a que edad pueden descrinarse estas nociones. Como separar dos bloques, tomas tres bloques más, contar los bloques separados, etc. La discriminación derecha-izquierda no estará dentro de la percepción visual pero si implícita. Hay otro factor determinante para diferencias los grafemas, que están dentro del test de la Escala de McCarthy, como el decirle al niño cuál es su oreja izquierda, su codo derecho, que señale su mano derecha, entre otros ítems. Hay varios resultados que mencionan que los niños de cinco años dominan las nociones derecha-izquierda relacionadas con la percepción de su propio cuerpo y comienzan a distinguir cual es la derecha y la izquierda. Strang menciona que para tener una impresión visual precisa y clara, los ojos deben funcionar de modo normal y para esto es necesaria su coordinación visual ya dicha coordinación se va a lograr en el segundo año del vida del niño, sin embargo, el globo ocular no alcanza su tamaño y proporción maduros hasta que el niño no llegue a cumplir los 7 u 8 años pero hay varios autores que no están de acuerdo y afirman que empezaría entre los 5 o 6 años. La oculografia ha permitido establecer varias conclusiones relativas a la forma como el ojo capa las informaciones impresas. Para tener una buena audición es fundamental la adquisición del lenguaje hablado si hay un déficit auditivo nos indicará negativamente un buen desarrollo de las capacidades psicolingüísticas y aparecerán alteraciones en la discriminación y adquisición de los fonemas. Muy aparte de las perdidas auditivas van a existir factores que pueden que pertuben la audición del niño como la falta de higiene y aseo personal, enfermedades infecciosas, problemas de discriminación figura-fondo, perturbaciones estereofónicas. De vez en cuando la dislalia es asociada a la hipoacusia que es uno de los factores por el cual se desarrolla y conlleva a un buen porcentaje de perturbaciones en lecto-escritura. El desarrollo psicomotor está íntimamente relacionado al desarrollo mental durante la primera infancia. Para fijar la atención, el niño debe ser capaz de controlarse, lo cual exige un dominio del propio cuerpo e inhibición voluntaria. Para tener éxito en la lectura siempre ha estado relacionado con la capacidad mental, hasta el extremo. La lectura es una transmisión informativa a través de la palabra escrita. Es por ello que la palabra escrita, cuando surge una alteración, el acto comunicativo queda interceptado y esto puede ser originado por diferente causas como el retraso en el vocabulario infantil o el utilizar os textos de un léxico que no forma parte del vocabulario básico infantil. El desarrollo del vocabulario está completamente unido al desarrollo intelectual en todas las edades. Se puede llegar a la conclusión de que para que el niño alcance una buena condición de aprender a leer o escribir debe reconocer las figuras geométricas, el dominio de la diferencia de conceptos espaciales, el recuerdo de secuencias.