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Cuestionario de Conductas Antisociales-D PDF
Cuestionario de Conductas Antisociales-D PDF
53--1
Cuestionario de Conductas
Antisociales-Delictivas
(A-O)
Editor Responsable
Lic. Lorena Blanca
Editorial El Manu al Moderno
'
D.R. © 200J
ISBN 968-426- 891 -2
Editori al El Manual M oderno, S. A. de C. Y.,
v. Sonora núm. 206,
Col. Hipódromo,
Deleg. Cuauh t ' moc,
06100 México, D . F
Miembro de la Cámara Nacional
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~ manual moderno®
Editorial El Manual Mod erno, S.A. de C .v.
Manual MP 53-1
Cuestionario MP 53-2
íNDICE
Pág.
Material para la apl icación................... .... .. .. ... .. .. ..... ................ ........................... ........ ........... ... .. ... .. ............. 2
Reglas de aplicación ........ .. .. .. ..... ............ .... ...... .... .. .. ... .......................... ......................... ..... .. ... .................... 3
Reglas de calificación y puntuación .. ................... .... .. .. ............... ..... ....... ..... ...... .................. .. ........ ...... .. ....... 4
Estudio experimental para su construcción .............. ...... .............. ..... .. ......... ............. ............ ....................... . 5
Análisis factoriales .......................................................... ... .. ...... .... ..... ....................... ..... ....... ....... ,.............. . 6
Confiabilidad ............................. .................... .... ........ ..... .... .... .......... ...................................................... ....... 7
Validez .... .............................. ............. ............... ............... ....... ....... .................. ........... ................................... 7
Correlaciones con otras variables ...... ..... ... ... .. .................. .... ... .. ... ........ ...... ...... ........... ........... ............. ......... 8
Índices de atracción ..... ...... ............... ........ ............. ................ ...... .. ... ...................... ............... ...... ..... ............ 9
Muestra de estandarización .... ...................... ... ........................ ... .. .. ... ... .. ..... ... ...... ..... ................................... lJ
Tabla de conversión ............... ......... ... ..... ....... ..... ................................. .. .... ... .. .. ... ..... .............. ...................... 12
introducción ...... .. ....... ..... ..... ... ...... ......... ..... .. ........... .. .......... .... .. ............ .... ..... .......... ..... ..... .......... .... .. ... ...... .
Metodología ... ......... ... .......... ...... ........ .. ............. ........ ......... ...... .............. .......... ....... ........ .. ...... ............ .. ....... .
Población y muestra ... .. .... .. ... ..... ....... ......... .. .. ...... .. ... ... ... ....... .. ........... .. .......... ... ... ........... ... ... ................... .. ..
Resultados .. ...... ....... ...... .. ...... ........... .... .... ......... .. .... ............. ....... ...... ......... ........ ..... ........... ..... ..................... .
Nonnas pa.ra la población mexicana .. ..... .. ............. .. ...... .... .... ............. ... .. .......................... ... ...... ..... ... ........ ..
Comparacione por género .... .. ............. ........ ....... .. ...................... ....... .... ..... .. .... .. ........ ... .. ........................... .
Validación de ~on structo ...... .......... ... .. ... ... ................... .......... ....... ...... .... ..... .............. .. ... .... ........ ... .............. .
Versión mexi cana compactada ........... ...... ......... .... ............ .. ............. .. ............. ........ .. ..... ................. ............ .
Apéndice A ............................................................................................................................................................. .
Bibliografía ...............................................................................................................................................................
INTRODUCCiÓN
Entre los adolescentes, la conducta antisocial (y tamb ién la deli ctiva) es un hecho que se detecta a nuestro alrededor
y en diversas manifestaciones de la sociedad: en el cine, en la televisión, en la prensa, en la calle, en el centro escolar y,
a veces, por desgracia, también en ambientes muy próximos a no otros mismos y a nuestra familia. En la actualidad el
problema ya no es sólo de uno grupos marginados, se e lá extendiendo y aparece tanto en los centros urbanos como
en los pequeños núcleos de población.
Siempre han existido en algún grado esas conductas, pero en e tos tiempo se han multipli cado las oportun idades por
circunstancias extern as al mismo sujeto. En determin ados aspectos parece que el problema sólo obede e a fac tor s
ambientales, pero lo má probable, como ha sido señalado por diversos autores, e. que subyac nte a todo ell o se
encuentre un determi nado lipo de personalidad que facilite la desinhibición de los imp ulsos agr si vos que, en principio,
existen en todos los individuos.
En cuanto al desarrollo y maduración de este tipo de conducta, la edad de comienzo parece centrarse estadísticamente
haci a los 15 años , aunque ciertos comportamientos antisociales se hacen notar en la misma infancia. En ésta, los hechos
delicti vos (tales como el robo) son más frecuentes que lo que indican las e tad ística j udiciales ; existe una "cifra n gra",
es decir, actos delictivos no registrados oficialmente, que ha sido destacada por los criminólogos y que representa el
volumen más importante de los comportamientos antisociales . Aunque la delincuencia penalizada oficialmente es má
abundan te en los "cuello negros" (personas de niveles socioeconómico baj os), también existe en los "cuellos blancos",
pero en éstos , tal vez por su mayor cultura (de mayores faci lidades socioeconómicas), su delincuencia suele ser más
sofisticada y encubierta, a la vez que, por el estatu s de sus fa milias, sus actuaciones rara veces llegan a un tribunal (lo
cual podría, en parte, explicar esas correlaciones negativas halladas entre el ni vel socio conómjco y la delincuencia).
Hace ya algunos años, y con ocasión del estudio en muestras españolas de la escala CA (conducta antisocial) que
en su oligen tenia el Cuestionario EPQ-J * (Eysenck y Eysenck, 1975), estos autores nos pusieron en contacto e n
AlIsopp y Feldman, cuyo trabajo (1 76) nos 'irvió de base y estímulo para comenzar el estudio.
El Cuestionario EPQ-J, además de las escalas N (ln stabilidad), E (Extraversión), P (Mentalidad dura) y S (Since
ridad) con elementos independientes para cada un a de ellas, permite obtener una quinta escala (CA) con elementos
pertenecientes a las tres primeras. La escala otiginal inglesa CA cuenta con 40 ele mentos, pero cuatro de ellos fueron
desechados en la adaptación española y los que quedan son 10 de N, 15 de E y 11 de P. Es dec ir, se esperaba que el
sujeto que tu viera tendencia a mostrar conductas antisociale (CA) poseyera las características de mentalidad dura,
extraversión e inestabilidad.
No obstante, en algunos estudios que siguieron a la adaptación, los psicólogos españoles ob ervaron en su práctica de
psicodiagnóstico que la variable CA era p o cJj criminativa de lo que consideraban com c nducta antisocial. Quizá teman
razón; no ba ta el hecho de tener las características citadas para manife tar una conducta antisocial. Sin embargo. a
nuestro parecer se ba cometido en al guna ocasión el error de asimilar una puntuación alta en CA con una conducta
anti ocial; dicha puntuación tan sólo señala una propensión a dejarse llevar por los impul os antisociales/delictivos
cuando el ambiente y las circunstancias 1 favorezcan.
Por las razones anteriores, y con el deseo de comprender y medir mejor este tipo de conducta, no pu irnos en comuni
cación con los autores (Allsopp y Feldman) de los trabajos original s sobre conducta antisocial y ellos pusieron en
nuestras manos, a finales de 1978, dos instrumentos que sirvieron de base para el presente Cuestionario A-D. También
nos enlazamos con el profesor Dr. Jesús Val verde, quien tuvo oca ión de utili zar esos instrument s en los trabajo para
u te is doctoral y n s cedió sus dato directos (N = 25 ). Entonces se elaboró factorialmente una primera versión
experimental del A-D que ha sido revalidada en otras muestras y análisis.
Ya se han publicado al gunos res ul tados (Seisdedos, 1982), hemos esperado algún tiempo (tal vez más de lo
necesario) para que en u primera edición hubiera suficientes anáJi is y datos· in embargo, no nos atrevemo ' a retener
lo más, con la espera nza de que en futuras ediciones se vaya enriqueciendo con las aportaciones y colaboraciones
de los usuarios del instrumento. Ahora el Cuestionario A-D se presenta como una prueba factorialmente con lruida
(con adecuadas características de confiabilidad , validez y estandarización) para medir la existencia de conductas
antisociales y delictivas, creemo que el instrumento podría servir como una ayuda más para c mprender la conducta de
nuestro jóvenes.
Queremos agradecer en estas líneas la valiosa aportación que nos otorgan al cedemos los datos directos (1), así
como aprovechar esta ocasión para pedir y agradecer, de antemano, cualquier colaboración que nos puedan prestar
aquellas personas que en el futuro apli quen la prueba; estos datos 'erían recog idos e incorporados en la próxima edición
de este Manual.
Estamos agradeci dos una vez más con el pro fesor Valverd e por su col aboración, como tambié n, por la cesión de dalas directos, con los
profesores Jesús Navarro (Colegio Nacional Jesús Rubio, Madrid) y José Crespo Vasco (Facultad de Pedagogía, Madrid), además de con
nuestro profesor Dr. Juan Bosch Marln quien, desde la UNICEF, nos ha animado a publicar este instrumento y los resultados de nuestros análisis.
1
DESCRIPCiÓN GENERAL
• ACHA TÉCNICA
- Nombre: Cuestionario de Conductas Antisociales-Delictivas (A- O).
ver con cond ucta.' ntL o iales. Fruto de eso análisis ha sido llegar a un cuestionario factorial, imple con 40 elementos
con los que se pretende medir do dimensi nes claramente diferenciadas: la conducta an ti social y aquella otra que,
aunqu pudiera ser considerada también anti ocial. incorpora ontenidos o comportami ntos que con facilidad caen
fuera de la ley (son delictivos). Para cada una de las escala . e tomaron los 20 elementos que, entre los 137 existentes,
definían mejor l constru cto, tal como se especifica en el apartado de fundamentación estadíc; ti ca.
E ta versión definitiva del Cuestionario A-O ha ido aplicada y revalidada posteriolll1ente en tros estudio , lo '
datos directo ' de las muestras se han considerado nOffi1ativo para la elaboración de las normas. En el apartado de
Justificación estadística se recogen también estos análisis .
DE APLlCAOÓN
n principio, el A-O puede autoaplicarsc sin que sea necesaria la pre.·encia de un téc nico o de pe rson al
o. ésta resulta por lo general valiosa para la construcción de un clima que favorezca la sinceridad del sujeto y
r re puesta al Cuestionario .
'iLruccione necesarias para dicha respuesta e tán impre as en la portada del Cuestionario e inmedialamente
los e p cías destinados a los datos d idenLificación; éstos pueden dejarse en blanco cuando interese el
y con ello una mayor e operación a los tines del estudio. o bien e~ posible pedir otro datos que e consideren
te para wchos fines. La: instmcciones pueden ser leídas en voz alta por el examinador. cuando se trale de
olectiva mientras los sujetos las siguen en silencio. En el caso de un examen individual, I examinando
rl n!> para si y el examinador estar presente para aclarar cualquier duda.
cesario que los examinando'i hayan comprendido la tarea a la perfección antes de comenzar la prueba: el
or pondrá espe ¡al cuidado en 1a comprensión y aceptación de 10 punto esenciales de las instrucciones: f rma
las contestaciones. sinceridad y re puesta a todas las pregunLas. Por estas razones, e~ aconsejable que, una vez
la prueba y durante los pri meros momentos, se compruebe el <;egui mienlo de dichas instnlcciones, eviLéUldo
sjanifique una "fiscalización" de la respuestas concretas que se van dando.
prueba e aplicada p r personal aux.iliar. queda bajo la responsabilidad del psicólogo u otro profesional cualifi
esta tarea la comprobación de que Llicho per onal auxiliar tenga la competencia necesaria para la apl i ación
p de pruebas. de modo que se logre un buen clima y se conteste adecuadamente a las dudas o pregunta del
mIo.
~l ca o de un individuo analfabeto, invidente o con cualquier tro impedimento, el exam inador puede leer
di vo en voz alta y anotar la respuesta dada por el sujeto; en ningún cas se debe cambiar la redacción de lo
s. ampliarlos o interpretarlos, ni aeon ejar una de las respue taso
vez tinalizada la prueba y antes de que se retire el sujeto, convendría revis'Lr el Cue 'lionario (Hoja de respuestas
de corrección mecanizada), para comprobar que se han seguido las in:strucciones uadas; en caso contrario. ta l
o. ible pedirle que reconsidere esas deficiencia. , puesto que un Cuestionario ma l respo ndido pu de in alidar
'zo d toda la aplicación .
11
• N. de Ed.: La versión publicada por Editorial El Manual Moderno sólo incluye materiales para calificación man ual.
t Si esto no es posible y se desea hacer una estimación en la escala correspondiente, podrían seguirse es tos pasos:
a) obtener la puntuación con los elementos correctamente contestados.
b) mul tiplicar este valor por 20, número total de e lementos.
c) di vidir el resultado por el número de elementos contestad s.
d) redondear el cociente 1entero más pr ximo.
3
l' apartados de e te capítulo pretenden aportar información sobre anáJisis y resultados obtenidos en muestras e paño
i, e incluyen estadísticos que fu ndamentan las características psicométrica ' de este instrumento.
Q-J Yla versión española (en colaboradón con J. M. Val erde) de estos dos cue tionari os (ASB y Ce), fueron
'ados a una muestra experimental (N = 95) con problemas de conducta, otra de "protección" (N = 59) Y otra de
01 (N =99), Y sus resultados recogidos en la tesis doctoral del Dr. Valverde (1 980) .
as pruebas contestadas por estos sujetos (N = 253) fueron cedidas a la Sección de Estudi o de Tests de TEA
nes (en Madrid, España) y se continuaron los análisis ha ta llegar a una versión definitiva del A-D que luego flle
da a otras muestras de examinandos. Los res ultados han sido sometidos a análisis de elementos (atracción,
dad, homogeneidad y variabilidad) y de puntuacione directas (di. lribuciones. correlaciones y factoriaJes).
11
• ANÁLISIS FACTORIALES
En primer lugar se tomaron los 137 elementos aludido ' en el apartado anterior y re laci nados con conducLas anLisociale ,
y e sometieron a diver os análi. i. factoriales. considerando dichos elementos como variables (aunque en realidad
tienen poca variabilidad. pue to que la mayoría sólo liene do altemalivas de respuesta). Estos anáü sis han definido
varios factores expl icativos de los diferentes componel tes p icológico-comportamentales e instrumentales (propios de
lo cuestionarios) que los examinandos habían rcf1ejado en su respuesta .
Algunas de estas dimensione parecen ser complementos o especificaciones de factores más generales, ya que
definen conductas muy e pecíricas (tale como "fumar cuando no e tiene permiso para ello", "irse de pinta" o "faltar a
las obligaciones"). Por esto mi mo, en la siguiente fase de lo análisi . e hicieron intervenir la< variables de personalidad
(l as escalas de Inestabilidad, Extraversión, Dureza y Sinceridad del EPQ-J) y algun s de esos fa tores esp dfico , e
vincularon co n lo ra...;;gos de per onalidad, sobre todo aquellos que venían definidos por los 36 elementos propi s de la
escala CA.
En el paso siguiente, se tomaron sólo los elementos de los cuestionarios ASB y CC (un total de 101 reactivos
considerados como variables de conducta) y se ometieron a un análisi ' factorial ortogonal (Lipo Varimax) con compo
e
nentes principales. En ese momento, las dimensiones aparecieron más claras y, aunque seguían . urgiendo factores muy
e, pecíficos de unas detem1inadas conductas, se dirigió la atención a las dos dimensiones de mayor varianza común.
Éstas, n virtud de las salUraciones que las definen, apunlan a:
a) Un factor de conduela delictiva o delincuente, pues incorpora comportamientos que fácilmente caen fuera de la
ley; por estas razones e ha denominado D (Delictivo). Los elementos con las saturaciones más importantes
pertenecen al cue tionario CC, con conductas tales como "robar co a de los cocbes", " llevar algún arma, como
un cuchillo o navaja, por si es necesaria en una pelea" y "conseguir dinero amenazando a personas más débiles".
b) Un factor de conducta antisocial no cxpre amenle delictiva, el cual alude a comportamientos característicos d
esos "granujas" algo sociópatas que, en ocasiones, casi rozan la frontera de la ley. Sus elementos pertenecen
pri ncipalmente al cuestionario ASB y unos pocos al CC, y se asemejan a los de la e. cala CA del EPQ-J. Esta
dimens ión ha ido denominada A (Anlisocial), e incorpora conductas como "llamar a la puerta de alguna casa y
sali r corriendo", "ensuciar las calles o aceras rompiendo botellas O volcando cubos de la basura" y "coger fruta
que no es tuy a de un jardín o huerto".
D isponiendo de esta solución factorial y de la riqueza de un elevado número de preguntas. ha resu ltado fácil construir un
in strumento de medida de esas dos dimensiones, D y A; se l maron 20 e lemenlos de cada una, lo má, discriminativoíi.
aque ll os que recogían conductas no incluidas ya en otros reactivos, y el resultado ha ido el Cuestionario A-D. En el
cuadro L del Apénd ice*, y ordenado, los elementos seg ún la versión definitiva, se presentan las saturaci.ones factoriales
de cada l1110, así como su pertenenc ia a lo. eue tionarios oliginales de Allsopp y FeJdman . En esa versión definitiva del
Cuestionario se colocan en Plimer lugar los 20 reactivos de tipo A, y a continuación los de tipo O; de e te modo se
lograron dos objelivos:
1) Favorecer, en lo posible, la inceridad del sujeto quien, al princi pio, ' e encuentra con conductas socialmente más
aceptables (las de tipo A).
2) Facilitru' la caüficación y obtención de las puntuaciones nalurales de A y D ' basta contar la, veces que el
examinando ha contestado SÍ a los elementos I al 20, para tener la puntuación A, y las veces que se ha contes
tado SÍ a los elementos 21 a140 para obtener la puntuación D.
A continuación s obluvieron la puntuacio nes A y D de los sujetos de las mues tras anter iores (experi me ntal,
"protección" y control del profesor Valverde), se analizaron su distribuciones y se pusieron en relación con variables
previrunente utilizadas.
* Nota: Para ev itar sobrecargar estas páginas con tabla ' numéricas de gran tamaño, se decidió tras ladar dichas tablas al Apéndice que figura al
final del Mallual y a ellas se remite al lector.
Justificación estadísrica original • 7
'IABIUDAD
as psicológicas deben po eer una razonable confiabilidad si se pretende que sean útiles, tanto cuando se
on fine de investigación como cuando se aplican con un propósito práctico. Existen varios tip s de confiabilidad
!s métodos para su btención (test-retest, cansí tencía interna o coeficiente alfa. eLe. ).
leba de tipo cuestionario y en investigaciones que utilizan mues tras incidentales no es fácil aplicar el proce
'esr-retest para el estudio de la fiabilidad o e tabilidad de la medida. Sin embargo, sí puede serl o utilizar el de
(por mitade ) o pares-impares.
lplicar este procedimiento se obtuvieron las pu ntuaciones pares e impares en la dos escalas, A y D, en e l
¡ujetos de la muestra nonnaliva; manteniendo separado ambos sexo ,a continuación se calcularon las corre
ntre ambas parles de calla escala y los índices se corrigieron con la form ulación de Speann an-Brown. Lo
;, expresados como coeficiente de confia bilidad, vienen en 1 cuadro 1.
eficientes encontrados son bastan te satisfactorios para un in tru mento de tipo cuesti onario. Teniendo en
e tal vez han intervenido la sinceridad y la subjetiv idad a la hora de contestar las cuestiones del A-D, los
)del cuadro I muestran que puede esperarse alrededor de 13% (entre los varones) y 140/1 (en lre las mujeres)
. aleatorios en la medida de las variables.
El
ón básica de un índice de validez es el grado en que el instrumento mide lo que dice medir; en el caso de un
ainal o de con cimientos esa apreciación es fácil y se puede hacer directamente determi nando con claridad
I objetivo. Pero no ocurre sí cuando se trata de la medida de una característica comportamental de la
ad. ¿Qué es Jo que pretende medir el A-D? De acuerdo con la especificación de su denominación , el instru
ido concebido p' ra medir dos dimen iones o aspectos diferentes de la conducta s ci a!.
varios procedimientos e interpretaciones del concepto general de validez. Aplicados a la medida que intenta
as conductas desviadas, podrían ser los siguientes:
ez de constructo, grado en que la prueba mide una variable o conj unto de conductas definidas por el
tigador.
dez predictiva, O grado en que con la medida alcanzada se pueden estimar conducta. futuras del sujeto.
ez criterial, o grado en que la prueba discrimina entre varios grupos de sujetos claramente diferenóados
unos criteJios relacionados apiorísticamente con la variable estudiada .
.os realizados hasta el presente con el Cuestionario A-D no ha sido posible un análisis de seguimi nto de los
determinar en qué medida las puntuaciones A-D podrían utilizarse como predictores de conductas posterio
a medida. Así pues, en los párrafos siguientes se presentarán los análisis realizados en la línea de una
nstructo y riterial.
8 • Cuestionario de Conductas Antisociales-Delictivas (A-D) (Capítulo 3)
En cuanto a la validez de constructo o de e tructura, en los apartado anteriores (sobre todo el dedicado a los análisis
factoriales ) se justifican los conslructos Antisocial y Delictivo finalmente alcanzados. El conjunto de conductas implica
das en el Cuestionario se refieren con precisión a omportanúentos ociales claramente desviados y el análisi factorial
ha podido agruparlos en dos dimensiones diferentes pero no del todo independientes (como se puede ob ervar en la base
del cuadro 3 y en la exi tencia de saturaciones de alguno elementos en los dos factores ).
En cuanto a la validez criterial en los primeros análisis de construcción del A-D, tanto la puntuación A como D del
grupo experi mental (N = 95, adolescentes con problemas de conducta) eran superiores, a un elevado njyel de confianza
(p ~ .Ol) , a las del gmpo de control (N = 99), lo cual fue tomado como resultado de la capacidad di criminativa del
instrumento para diferenciar entre los grupos. Lo resultados de los análisis de varianza vienen en el cuadro 2.
En una muestra reciente eN = 1 080), se ha tomado como criterios para fOlmar grupos diferentes determinados
aspectos del comportamiento que, apriorísticamente, podrían ser considerado como predictores de conductas anti ciales
o delictivas. Los seis criterios uti lizados e tán rela ionado con el consumo de bebidas alcohólicas (en el sujeto o en su
familia), el haber probado alguna dro ga y el tipo de relación co n el padre; éstos fuero n to mados de una encues ta
contestada de forma anónima por los . ujelos. A partir de sus respuestas. se clasificaron en do o más grupo. y en ellos
se calcularon Jos promedios en la escalas A y D. Los re ulLados 'on los que presenta el cuadro 2 independientemente
para cada sexo.
El lector puede observar que a medida que disminuye la incidencia del criterio en el sujeto (sea la bebida o la
droga), son menores las puntuacione.' promedi lanto en la escala Antisocial como en la escala Delictiva y esto puede
ser tomado omo un índice de validez del instrumento para diferenciar grupos crileriales .
El grado en que una prueba o variable se correlaciona con otra permite conocer mejor su naturaleza y caraclerís
ticas. Estos coeficientes pueden indicar, por ejemplo, si dos instrumentos miden idénticos o distintos rasgos, esto e. , si su
u o en una batería aumentaría el valor predictivo de la misma, o si repre entan una innecesaria duplicidad en la medida
dej mismo rasgo.
En lo. e tudios experimentales que permitieron de mir las variables A y D, Y una vez alcanzada esta fase. las
puntuaciones en ellas se pusieron en relación con las escalas del Cuestionario de personalidad EPQ-J aplicado también
aquella muestra de ad le centes (N = 253 ). Los resultados están recogidos como "e ' tudio EPQ-J" en el cuadro 3. En
ese mismo cuadr , como una segunda parte de la misma, se incluyen las relaciones encontradas con el Cuestionario
de per onalidad EPI Fomla A (incluyendo los do componentes de la extraversión, la impu L ividad y la sociabilidad) en
una muestra de 1 OI O adolescentes españoles clasificados por u sexo (dado que esta variable provoca diferencias
significativa en las medidas A-D) .
10 • Cuestionario de Conductas Anrisol'iales-Delic:tivas (A -D) (Capítulo 3)
b) En todo. los reactivos. los varone. pre. entan un índice mayor, y en más de 50% de ella ', la diferencia e
significativa al nivel de confianza de 1%.
e) En la escala A.los sujetos aceptan más unos elemento que otros. Así. el reactivo 5. "Decir 'gr serías' o pala
bras fuertes" , el 3. "Entrar en un itio proltibido (jardín privado,casa vacía)", y el 13 , "Gastar broma, pesadas
a la gente . . .", son má aceptados; mientras que lo son en mucha menor medida el 15, "AtTancar o pisotear flore '
o plantas de un parque o jardín", y el 12, "Romper o tirar al suelo cosas qu son de otra persona".
d) Algo parecido ocurre, aunque on índices menores de atracción, en la escala D donde el índice más elevad se
encuentra en ambos sexos en el reactivo 31, "Robar cosas de almacenes, supenllercados o tiendas de autoservi
cio, eSlando abiertos" , y la afirmación menos aceptada, también en ambos sexos, e. la 27, "Planear de antemano
entrar en una casa, apartamento, etc., para robar cos~ d valor (y hacerlo ~i se puede)" .
Las consideraciones anteriore. aconsejan. en una labor más clínica e individualizada, un análisi cualitativo de los
re ultados del Cuestionario A-D, para c no er en qué aspecto se manifiesta la conducta antisocial o del icti va del sujeto.
Por ejemplo, una misma puntuación natural en la escala D de 4 punto (que según las tablas nomlativas señala el
percentil 85) obtenida por do varones puede tener distinta valoración clínica de la conduela desviada según la especi
ficidad de Jos actos admitidos por cada examinado.
En el mismo cuadro se ha introducido también los índices de atracción de Jos sujetos de la muestra nonnativa que,
según el cuestionario de personalidad (EPI -A), presentaban una impulsividad (1M = 3) o una soc iabilidad (SO = 3)
elevadas, es decir, se encontraban en. aproximadamente, el tcrcio superior de las di stribuciones de e tas variable.
Tanto el sujeto impuls ivo como el sociable (más el primero que el segundo) elevan sus Índices en las escalas A y D
(en mayor medida en A): por otra parte. aunque todavfa siguen siendo superiores lo índices de los varones, la... diferen
cias con los de las mujeres , on menores a las observadas en la muestra total, quizá porque lo varones tiendan más
a la impul i vidad y las mujeres más a la sociabilidad.
Así pues, estas dos variables, componentes de la extraversión, están modulando e inciden e n la puntuacione.
obtenidas en el Cuestionario A-D. El psicólogo podría tenerlas en cuenta para caplar mejor la dinánúca de la conducta
del sujeto.
4
.,
PAUTAS PARA LA INTERPRETACION
z obtenidas las puntuaciones naturale de A y D para un examinando, es necesario interpretarlas. Esto puede
e de dos modos:
t nder a la cuantía de us valores abs lutos (de viaciones antisoc iales o delictivas mo. tradas o admitidas por el
individuo) y obrar en consecuencia: informe oral o escrito, tratamiento aconsejable, etc.
Obtener us valores relativos mediante la comparación de los resultados directo. con lo ' de una mue tra norma
tiva y su transfonnación en puntuaciones derivadas de signifi ación universal.
uellos casos en que se siga el segundo tipo de interpretación, en los dos párrafos siguientes se describe la
nOID1aliva existente y la utilización de las normas elaboradas.
UESTRA DE ESTANDARIZACiÓN
Iveniente que el usuario de un in trumento de medición psicológica conozca las caracteri ticas o composición
muestra o muestras empleadas para la elaboración de las nonnas. En el caso del Cuestionario A-O, una vez
I das las fa es de u construcción y análisis experimental , se ha considerado nonnativa la mue tra citada en
)5 apartados de la Justificación estadística; estaba constituida por 1 080 adolescentes españole, alumnos de
DI
NIVEL
TIPO DE CENTRO SOCIOECONÓMICO CURSO ESCOLAR;
~ N. de Ed. : En el si stema educativo español actual, la Educación General Básica (1 ° a 6° grados) recibe el nombre de Educación Primaria
Obligatoria, en tanto que r y 8e
de dicha Educación, así com o 1° y 2° del Bach illerato Unificado Poli valente, ahora se llama Educación
Secundaria Obligatoria.
TABLA DE CONVERSiÓN
Dado que en los análisis se había observado la intluencia del sexo en los resultados del Cuestionario, antes de conslruir
la tabla de nonnas se decidió considerar esta variable como el principal y único criterio diferencial; se elaboraron por
separado las di tribuciones de frecuencias de los varones y de las muj eres.
Por otra parte, teniendo en cuenta la asimetría de las di tribuciones de frecuencias (sobre tod en la escala D), s
eligió una tipificación o nonnativización que se ajustara a lo empírico de tale distribucione . es decir. se normalizaron las
puntuaciones derivadas a partir de las frecuencias observadas en intervalo ' de una unidad de amp litud.
Por último, atendiendo a que el ámbito más probable de aplicación del Cuestionario A-D sea el e 'colar. en las
normas se han empleado do escala derivadas muy conocidas en este ámbi to: la percenLilar de tipo ordinal (desde I 3
99) y la típica S de media 50 y desviación e ,tándar 20 (que en una distribución aproximadament normal se extiende
también de 1 a 99),
En la Tabla 3 se presenta las nolmas correspondiente ' a las do escala (A y O) en los do sexos. Una vez obten id'
las puntuaciones naturales en A y O. se entra en el cuerpo del cuadro por la columna de cada escala ha ta encontrare
valor directo. y a la misma altura se encuentran la puntuación percentil (en la primera columna de la izquierda) y I
puntuación S (en la última columna de la derecha). En la base de la tabla se encuenO'an los estadí ricos básico de lo
grupos nonnativo ,N (casos), X (media aritmética) y DE (desviación estándar).
5
VALIDACiÓN MEXICANA DEL
CUESnONARIO DE CONDUCTAS
ANTISOCIALES-DELICTIVAS (A-O)
• INTRODUCCiÓN
Como ha quedado establecido. el propósito del Cuestionario A-D es detectar el potencial de conductas antisociales y
delictiva en adolescentes e. colares, con fines primariamente de prevención.En este capítulo el lector encontrará el
informe técnico de los resultados y normas (parciales) para la población mexicana con base en el instrumento original
(Sei dedos, 1998), este último elaborado para la población española .
• METODOLOGíA
REVISiÓN LINGüíSTICA
Previamente a cualquier tipo de aplicación, un experto analizó el Cuestionario A-D desde el punto de vista estilís
tico, generándose, en consecuencia. algunas modificaciones li ngüística' sobre el instrumento original. Por otro
lado, al comenzar los trabajos para el estlldi de validación del eue tionario para p blación mexicana, se procedió de la
si uiente manera: en primer término, y antes de acceder a la población general, se llevó a cabo un estudio piloto COD 20
e ludiantes del primer año de licenciatura en educación que contestaron al instrumento y posteriormente se les pidió
que marcaran los enunciados poco claros o que se prestaban a e nfu ión. De esta revisión pil to se desprendió la
necesidad de modificar seis reactiven la fonna como se ilustra en el cuadro 5.
ID
10. Hacer pintadas en lugares prohibidos (pared, encerado, 10. Hacer graffitis o pintas en lugares prohibidos (pare
mesa, etc.). banco, mesa, etc.)
11. Coger fruta en un jardfn/huerto que pertenece a otra 11. Tomar frutas de un jardín o huerto que pertenece a 01
persona. persona.
21. Pertenecer a una pandilla que arma jaleos, se mete 21. Pertenecer a una pandilla que arma líos, se mete I
en peleas o crea disturbios. peleas o crea disturbios.
23. Forzar la entrada de un almacén, garage, guarda 23. Forzar la entrada de un almacén . garage, bodega o tle
muebles o quiosco. da de abarrotes.
31 . Robar cosas de grandes al macenes, supermercados 31 . Robar cosas de almacenes, supermercados o tiend
etc., estando abiertos. de autoservicio, estando abiertos.
Asimismo, a sugerencia de los partici pantes, se decidió que las respuesta al CLle tionario se proporcionar.rn
manera anónima con la finalidad de incrementar la celtidumbre de las respuestas .
• POBLACiÓN YMUESTRA
La versión modificada con los reactivos estructurados como 'e observa en el cuadro 5 se aplicó a una mue tra
adolescentes mexicanos. La muestra eleccionada para u validación en México, consistió en un grupo de 390 adolt
centes de 15 añ de edad, elegidos al azar de 4 escuelas secundarias (técnica, propedéutica, publ ica y privada) de
ciudad de Mérida, Yucalán bajo los siguientes supuesto : 1) dicha población es repre entati va de los adoJe. cenl
mexicanos de diversas regiones del pais; 2) la probabilidad de presentar tendencias antisociales es igual en la poblad
escolar que en la no e colarizada; y ) las norma, de eSla población pueden generali zarse a otros adolescentes laltn
americanos con condiciones sociales y culturales parecidas . Aunque no e intentó específi camente ejercer el control ~
la edad de los participantes, la aplicación del Cuestionario en el tercer año de Secundaria arroja la expectativa de u
edad m daJ de LS años.
De manera adicionaJ y para tines de comparación, también se aplicó la prueba a jóvenes residentes del Centro
Rehabi li tación para Menores (de uno II tro sexo) de la ciudad de Mérida, I s cuales se encontraban en el rango de ed
entre los 12 y 18 años.
Con la finalidad de establecer las normas y las puntuaciones para la mu estra mexicana, se optó por un mut
treo estratifíc ado proporcional, . ¡endo lo estratos categoría. ocioeconómicas similares al estudio español origin
con base en el tipo de e cuela: aJt (panicu lar), medio (propedéutica), bajo (escuela técnica). Se asignaron 1
cue tionario para ada escuela dejando que el azar dividiera a los participantes . El cuadro 6, ilustra los e tratos [
sexo y edad .
Valida ción mexicana del Cuestionurio de 'onductas Antisociale ·Delictivas (A-D) • 1
2. Federal 17 19 36 15.05
• RESULTADOS
ANÁUSIS DE REACTIVOS
indlces de atracción
Estos índices indican el porcentaje de la muestra que ha contestado sí a la conducta enunciada, con la finalidad
de estimar la capacidad de discriminación de cada reactivo. Lo' cuadros 7 y 8 describen lo índices obtenidos en la
aplicación.
11. Tomar frutas de un jardín o huerto que pertenece a otra persona. .39
12. Romper o tirar al suelo cosas que son de otra persona. .28
------- ---- ---- ----
13. Gastar bromas pesadas a la gente, como empujarlas dentro de un charco o quitarles la silla cuando .46
van a sentarse.
- - - - - - - - - - -- - --------------------j---
14. Llegar, a propósito, más tarde de lo permitido (a casa, trabajo , obligación) .40
16 • ClIestionario de Condu.ctas Antisociales-Delicti vas (A -D)
Conducta antisocial in
15. Arrancar o pisotear flores o plantas de un parque o jardín. .2
-------------
16. Llama r a la puerta de alguien y sali r corriendo. .6
------------------------- - - - - ; -
17. Comer, cuando está prohibido, en el trabajo , clase. cine, etc. .~
-------------------
18. Contestar mal a un superior o autoridad (trabajo, clase o calle). A
19. Negarse a hacer las tareas encomendadas (trabajo, clase o casa) . .4
----~--------~----------------------~--
20. Pelearse con otros (con golpes, insultos o palabras ofensivas) . .61
Puede ob ervarse que, igual que con la p blación española. los elementos de la escala A muestran may r a
ción que los de la escala D . L os re. ultados sugieren que 10 de los 20 reactivos (marcados con asteri sco [*1 e
cuadro) de la escala Delictiva podrían obviarse por s u pobre poder de discriminación y qui zá reducir e a esc ~
10 reactivos. Esta medida se refuerza si sc considera la di tribución de la escala Delictiva que ubica el percentil 50
dos reacti vos conte. tados aíirmativamente. Empero, conforme a los criterios para la construcción del in trum
original se decidió tomar igual número de conduelas de cada variable para brindar al adolescente la oportunidn
encontrar. uando menos, unas cuantas de eUas que le implicaran .
2 1. Pertenecer a una pandílla que arma líos, se mete en peleas o crea disturbios.
.14
22 Tomar el coche o la moto de un desconocido para dar un paseo , con la única intención de divertirse
.Oc ~
30. Robar cosas de un lugar público (trabajo, colegio) por valor de más de 100 pesos. .m
31 . Robar cosas de almacenes, supermercados o tiendas de autoservicio, estando abiertos. .H
32. Entrar en una casa, apartamento, etc., y robar algo (sin haberlo planeado antes). .C!
33. Robar materiales o herramientas a gente que está trabajando. .01
34. Gastar frecuentemente en el juego más dinero del que se puede. .~
35. Robar cosas o dinero de las máquinas traga monedas, teléfono público, etc. .1!
36. Robar ropa de un tendedero o cosas de los bolsil los de la ropa colgada en un perchero. .o!
37. Conseguir dinero amenazando a personas más débiles. .1 :
38. Tomar drogas. .1:
39. Destrozar o dañar cosas en lugares públicos. .11
40. Entrar en un club prohibido o comprar bebidas prohibidas. .2:
Validación mexical/a del Cuestion.ario de Conductas AI/tisociales-Delictivas (A-D) • 17
Tabla 1. Tabla de conversión para población mexicana (con base en la versión española)
Puntuaciones naturales
Percentil Varones Mujeres S
Antisocial Delictivo Antisocial Delictivo
99 20 20 20 20 97
97 19 14 17 6 87
95 19 12 16 5 83
90 17 9 14 2 76
80 14 6 11 67
70 12 5 10 1 60
60 11 3 8 O 55
50 10 2 7 O 50
40 9 6 O 45
30 8 5 O 40
20 6 O 4 O 33
10 4 O 2 O 24
5 2 O O O 17
3 O O O 12
70
Varones mexicanos
60
50
C/)
ro
·0 40
e
<ll
:J
ü
<ll
30
ti:
20
10
Puntuación
35
30
25
C/)
ro
·0 20
e
<ll
::l
ü
Q)
15
ti:
10
O
(1-2) (3-4) (5-6) (7-8) (9-10) (11-12) (13-14) (15-16) (17-18) (19-20)
Puntuación
180
Varones mexicanos
160
140 a I
120
_\
~
el)
<1l
'ü 100
e
Ql
:::J
o 80 \\ J
al
u: 60 \\ J
40 \\
20 ~ ~
~
Jo.
~ ~
O
(1-2) (3-4) (5-6) (7-8)
I
(9-10)
I
(11-12)
I
(13-14)
-
(15-16)
J ~
(17-18)
J
(19-20)
I
Puntu ación
180
160
140
el)
120 \
ro
'ü 100
c;
\
Ql
:::J
o 80 1
~
u. 60 \ _:
40 \ I
20 \ I
\
O
(1 -2)
J
(3-4)
I
(5-6)
J
(7-8)
I
-
(9-10)
I
(11-12)
I
- - - -,
(13-14)
I
(15-16)
I
(17-18)
I
(19-20)
Puntuación
ALIDACIÓN DE CONSTRUCTO
\timo e analizó la validez de constructo, a través de análisi factoriales por cada uno de tales constructos: antiso
delictivo, utilizando una rotación varimax y la normalización de Kei ero Los cuadros sigujentes ilustran los factores
ado, en cada uno.
20 • Cuestionario de Conductas Antisociales-Delictivas (A -D) (Caprtulo 5)
Reactivos Factores
1 11 111 IV V
Puede observar e que en ninguno de los constructo se establece una e tructura unidimen ional. Ciertamente,
esto llama a mayor ¡nve tigación acerca de las propiedades p icométricas de este instrumento, a í como a establecer los
correlatos y dimensiones inlemas asociadas al ténnino genérico de conducta antisocial o conducta delictiva.
En el cuadro 9 se presentan los reactivos de conductas antisociales, mi mos que se agruparon en cinco factores: en
el primer [actor se tienen los reactivos correspondi entes a co nductas que tienden a romper las reglas sociales; en el
segundo. e agrupan las actividades que van en contra de la autoridad. En el tercer facto r. ex iste te ndencia a molestar
a terceras personas; en tanto que en el cuarto , los reactivos se relacionan con actividades para ensuciar el entorno.
Por último, en el quinto factor se reúnen las conduelas que presentan la tendencia a hacer trampas .
En el cuadro LO se muestran los reactivos de conductas delictivas, obteniéndose cuatro factores: el primero. concen
tra actividade r lacionada con robo; el segundo, abarca aquellas c nducta. que denotan tendencia a la obtenci ón ilegal
de dinero; el tercero contiene accione de violencia; y el cuarto, las actividades que 'on dirigidas al uso de la fuerza.
Va lidación mexicana del Cuestionario de Conductas Antisociales-Delictivas (A-D) • 2]
Reactivos Factores
I 11 111 IV
32. Entrar en una casa, apartamento, etc., y robar algo (sin haberlo planeado antes). .703
31. Robar cosas de almacenes, supermercados o tiendas de autoservicio,
estando abiertos. .592
21. Pertenecer a una pandilla que arma líos, se mete en peleas o crea disturbios. .681
29. Forcejear o pelear para escapar de un policía. .575
27. Planear de antemano entrar en una casa, apartamento, etc., para robar cosas
de valor (y hacerlo si se puede). .505
22. Tomar el coche o la moto de un desconocido para dar un paseo, con la única
intención de divertirse. .787
24. Entrar en una tienda que está cerrada, robando o sin robar algo. .513
te,
os
• VERSiÓN MEXICANA COMPACTADA
en Como se indicó antenonnentc, los resultados finales del estudio de a lidación presentad en este capítulo, pemú
el
ten sugerir una versión modi ricada para la población mexicana del instrumento original, bajo las iguiente considera
.ar
ciones generales: 1) se han aceptado las modi licaciones al texto de lo sei reacti vos identificados como poco claro
la.
durante la apl icación piloto; 2) con base en lo índi ces de discriminación, puede sugerirse una reducción de la escala de
conduelas delictiva a 10 reactivos (véase cuadro 8), considerando el comportamiento de la norma. En reaJidad. lo . 1
0 reacti vos con mayor discriminación podrán comportar e de m, nera poderosa para identificar el potend l delictivo. loda
:al vez que con sólo cinco reactivos señalados afirmativamente e alcanza el percentil70 en lo varones. y con dos reactivo
en esas mi ma condicione, e llega al percentil 90 en las mujeres.
22 • Cue lionario de Conductas Antisociale:i-Delictivll.\ (A -D) (Capítulo 5)
La Tabla 2 ilustra la. nonnas y la tabla d conversión para la versión mexicana compactada.
Tabla 2. Tabla de conversión para población mexicana (con base en la versión final compactada)
Puntuaciones naturales
Percentil Varones Mujeres S20
Antisocial Delictivo Antisocial Delictivo
99 20 10 20 10 97
97 19 9 17 6 87
95 19 8 16 5 83
90 17 7 14 2 76
80 14 6 11 67
70 12 5 10 60
60 11 3 8 O 55
50 10 2 7 O 50
40 9 6 O 45
30 8 5 O 40
20 6 O 4 O 33
10 4 O 2 O 24
5 2 O O O 17
3 O O O 12
'gen en e te Apéndice aquello:-, cuadros y tabla de la versión original e pañola que. por tener m ucha extensión,
entresacado del text úel Manual para hac r su lectura menos desordenada y confusa. Los cuadro. y tabla
:lsson:
aturac ione factoriales de los elementos A-D en las do dimensiones del Cuestionario, así como su pr cedencia
.tracción (%) de los elemen lo. A-D en cada sexo, en la muestra total españolay cuando IM =3 Y 0 = 3.
DI
24 • Cuestionario de Conductas Antisociales- Delictivas (A-D) (ApéncA
Consume bebida:
- Frecuentemente _......... 66 12.65 3.92 55 12.02 2.60
- En alguna ocasión ..... . 145 10.27 2.11 218 9.35 0.82
- Raramente ... .. ....... .. .... 126 9.27 1.33 208 6.95 0.38
- Nunca ...... ........ ........... 65 6.05 0.51 122 4.89 0.35
El sujeto se considera :
-Bebedor ...... .. ............. 80 12.75 4.06 83 11 .55 1.86
- Poco bebedor ............. 164 9.93 1.90 200 8.91 0.90
- No bebedor .. ... .. ... ....... 100 8.50 1.06 228 6.85 0.37
- Abstemio .. .. ................ 56 6.59 0.41 89 4.70 0.27
Probado Marihuana/Hachis:
- Sí .. .. .. ........ ............. .... 70 12.63 4.41 59 11.03 2 .54
- No ..... ..... .................... 332 9.04 1.38 540 7.50 0.52
La familia bebe:
- Frecuentemente ..... ..... 74 11 .11 2.16 89 8.72 0.79
- Ocasionalmente ........ .. 121 9.83 2.21 181 8.75 0.75
- Casi nunca ................. 155 9.59 1.77 247 6.76 0.62
- Nunca ......................... 50 7.56 1.26 86 8.24 1.00
Apéndi e. 25
ices de relación de los elementos 1-20 con A y 21-40 con D han sido corregidos (según la formu lación de McNemar) para eliminar
Jntaminación. puesto que el mismo elemento forma parte de la escala.
I
26 • Cuestionario de Conductas Antisociales-Delictivas (A- D) (Apéndice)
Cuadro 4. Atracción (%) de los elementos A-O en cada sexo, en la muestra total
y cuando 1M 3 Y 50 = 3=
_ _TOTAL _ _ __1M =3 _ _ __50=3 _ _
8 405 V 604 M 161 V 231 M 172V 259M
Puntuaciones naturales
VARONES MWERES
75 13 63
70 12 2 11 60
65 10 58
60 11 9 55
55 10 1 52
50 8 50
45 9 7 48
40 8 6 45
35 5 O 42
30 7 40
25 6 4 37
20 5 O 3 33
15 4 2 29
10 3 24
5 2 1 17
4 15
3 1 12
2 O 9
1 O 3
i'
I
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