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INTITUCIÓN EDUCATIVA TÉCNICA TOMÁS VÁSQUEZ RODRÍGUEZ.

ORIENTACIONES PARA EL TRABAJO A DESARROLLAR


DEL 11 DE MAYO AL 29 DE MAYO. AÑO 2020.
ÁREAS DE EDUCACIÓN RELIGIOSA Y EDUCACIÓN ÉTICA Y VALORES
HUMANOS.

Apreciadas Familias y estudiantes reciban un cordial saludo, esperando que todos


se encuentren muy bien.
Las siguientes indicaciones se van a desarrollar para las tres semanas siguientes
del Segundo Período Académico del presente año académico.
Estos temas son para desarrollarlos en Familia y al igual que aplicaremos el
trabajo Cooperativo y Colaborativo, bases fundamentales del Modelo Pedagógico
de la Institución.
1. Los talleres están distribuidos en “PARTES”, o secciones, cada parte
corresponde a cada semana.

2. La primera parte se desarrollará del 11 de mayo al 15 de mayo


La segunda parte se desarrollará del 18 de mayo al 22 de mayo
La tercera parte se desarrollará del del 25 de mayo al 29 de mayo.

3. En este período vamos a trabajar por equipos de tres estudiantes, si bien lo


desean, se comunicarán entre ustedes (OJO. NO SE PUEDEN REUNIR EN
ENCUENTRO PRESENCIAL, SÓLO POR VÍA INTERNET O
TELEFÓNICO) y me enviarán un solo informe con los respectivos nombres
y el grado correspondiente.

4. Cada encuentro entre ustedes y yo, hablaremos, de acuerdo al horario


establecido me enviarán los talleres desarrollados. NO se puede acumular
la entrega de los tres talleres para el final.

5. Estaremos en comunicación por vía WhatsApp, llamadas dentro del horario


para resolver inquietudes o por correo electrónico stellaostos95@gmail.com

6. Les recomiendo trazar hábitos de estudio, organización en los horarios,


hacer horarios en los hogares para que así puedan cumplir con todas las
áreas.

7. Ser creativos e innovadores en los talleres, estudiantes ya saben que


desarrollamos esas dimensiones, al igual que el Buen Trato, el Respeto en
todos los entornos en donde nos encontremos.

8. Mucha suerte y disciplina para salir adelante.


El estudio es la mejor herramienta para vencer los obstáculos en la vida y
enriqueciendo su Proyecto de vida con sus metas por cumplir.

ÁNIMO Y ÉXITOS.
SU DOCENTE.
GLADYS STELLA AMÉZQUITA OSTOS
INSTITUCIÓN EDUCATIVA TÉCNICA TOMÁS VÁSQUEZ RODRÍGUEZ.
PLANES METODOLÓGICOS NO PRESENCIALES DE ESTUDIO.
2020. SEGUNDO PERÍODO.

PROFESORA. GLADYS STELLA AMÉZQUITA OSTOS


EDUCACIÓN ÉTICA Y VALORES HUMANOS. GRADOS 11°
LA ÉTICA Y LA FAMILIA.
Respetar a una persona es tratarla como se merece, de acuerdo con su
dignidad de ser humano- todos somos iguales en este sentido-, y a la
posición que ocupa en una colectividad”.
UniTolima.
COMPETENCIA.
Reconocer que la unión familiar es el reflejo de los valores sociales.

PRIMERA PARTE.

VALOR: SERVICIO.

“QUIEN NO VIVE PARA SERVIR, NO SIRVE PARA VIVIR”.

En este adagio popular que encierra una profunda sabiduría, pues es verdad que
la vida ha sido otorgada a los seres humanos para hacer de ella un servicio a la
humanidad. Cuando esto no ocurre, entonces se convierte en algo monótono,
vacío y sin sentido.

El servicio es un valor a través del cual la persona presta ayuda, orienta o guía al
otro. El servicio supone entrega, generosidad, donación y en ocasiones, sacrificio.

El servicio es uno de los valores que contribuye a la armonía familiar; en este


sentido, el ejemplo de los padres debe servir de estímulo a sus hijos, quienes ha
de aprender de ellos, de su actitud de servicio generoso y desinteresado.

Cuando el ser humano se abre a la posibilidad de servir, se da cuenta de lo


importante y valiosa que puede resultar su acción a favor de los otros. Los
grandes avances de la humanidad, los grandes descubrimientos, los inventos que
han revolucionado al mundo no habrían sido posibles, ni se hubiesen convertido
en realidad, si no los hubieran liderado hombres y mujeres con vocación de
servicio.

Éstas fueron personas que dejaron huella en la historia, porque su vida traspasó
las fronteras del egoísmo, del pensar en sí mismas, y se abrieron a la posibilidad
de ayuda y de servicio a los demás.

Pero no sólo en el campo de la ciencia y de la técnica se encuentran modelos de


servicio. También en lo político, lo religioso, lo social y lo cultural, personajes como
Gandhi, Nelson Mandela, Teresa de Calcuta, Juan Pablo II han sido, para el
mundo, testimonio de entrega y de servicio alegre y desinteresado a favor de los
más pobres; digno de especial mención es también Martin Luther King, un ser que
sólo vivió para amar y servir. En el último discurso, antes de ser asesinado en
1968, él dijo cómo quería ser recordado al morir: “Yo quiero que en mi funeral se
diga que siempre traté de servir a los demás. Que se diga que Martin Luther King
trató de amar a todas las personas. Quiero que se diga que durante mi vida traté
de alimentar al hambriento y vestir al desnudo. Quiero que se diga que traté de
visitar a los que estaban en prisión, y traté de amar y servir a la humanidad”.
Pero también se puede hablar de modelos de servicio más cercanos, personas
que tal vez ejercen esta misión de manera silenciosa y oculta: los padres de
familia, que sirven sin esperar nada a cambio, con el único fin de ser útiles y de
hacer felices a sus hijos.

El valor del servicio que se ejerce en el hogar muchas veces es visto más como
una obligación que como una actitud abnegada y generosa. Qué necesario es
estimular a los hijos para el reconocimiento y la cooperación. El servicio debe ser
una actitud recíproca entre todos los miembros de la familia. Aprender a agradecer
y aprender a ofrecer un servicio de desinterés y alegría.

EL PLACER DE SERVIR.

“Toda la naturaleza es un anhelo de servicio; sirve la nube, sirve el aire, sirve el


surco. Donde haya un árbol que plantar, plántalo tú; donde haya un error que
enmendar, enmiéndalo tú; donde haya une esfuerzo que todos esquiven, acéptalo
tú. Sé el que aparte la estorbosa piedra del camino, sé el que aparte el odio entre
los corazones y las dificultades del problema.

Existe la alegría de ser sano y de ser justo; pero hay, sobre todo, la hermosa, la
inmensa alegría de servir.

¡Qué triste sería el mundo si todo en él estuviera hecho, si no hubiera un rosal que
plantar, una empresa que acometer!

Que no te atraigan solamente los trabajos fáciles: ¡Es tan bello hacer lo que otros
esquivan!

Pero no caigas en el error de que sólo se hace mérito con los grandes trabajos;
hay pequeños servicios que son buenos servicios: Adornar una mesa, ordenar
unos libros, peinar a una niña. Aquel es el que critica, éste es el que destruye, sé
tú el que sirve.
El servir no es faena de seres inferiores. Dios, que da fruto y la luz, sirve. Pudiera
llamársele así: El que sirve. Y tiene sus ojos fijos en nuestras manos y nos cada
día: ¿Servirte hoy? ¿Al árbol? ¿A tu amigo? ¿A tu madre?”. Gabriela Mistral.

TALLER.
1. ¿Qué significa para su familia, el servicio?
2. ¿Somos serviciales en nuestras relaciones interpersonales?
3. ¿Cuándo prestamos un servicio lo hacemos en forma desinteresada y de
buen modo?
4. ¿Qué medios nos pueden ayudar para mejorar nuestra actitud de servicio
en el hogar?
SEGUNDA PARTE.
VALOR: BUEN TRATO.
A todas las personas les gusta que se las trate bien. Que se las atienda, respete y
escuche. Nada realza o daña más la imagen de una persona que la manera de
tratar a los otros. Dice la Sagrada Biblia que:
“No hay árbol bueno que pueda dar fruto malo, ni árbol malo que pueda dar fruto
bueno, cada árbol se conoce por su fruto, no se cosechan higos de los espinos, ni
se recogen uvas de las zarzas. El hombre bueno dice cosas malas porque el mal
está en su corazón. Pues de lo que abunda en su corazón habla la boca”. San
Lucas 6, 43-45
Esta cita tiene mucha aplicación a la vida del hogar, a la formación de la familia,
porque es una realidad que el niño da aquello que ha recibido, y no sólo el niño,
sino todos los seres humanos, en una u otra forma, son el producto de lo que han
recibido.
Es claro, entonces, que el buen trato es un valor de vital importancia y de
trascendencia en la familia, en donde debido a factores económicos y sociales
queda poco espacio para compartir los buenos modales, la urbanidad, la cortesía,
que para muchos parece haber pasado de moda.
Una persona que hace uso de la cortesía se esfuerza por guardar las normas
sociales establecidas, es considerado con el otro, tiene como norma de vida el
principio de “No hagas a los demás lo que note gustaría que te hicieran a ti”,
maneja unas buenas relaciones humanas que le ayudan a crecer como persona y
a crear un ambiente agradable con quienes la rodean.
En el mundo familiar, laboral o social, nadie tiene derecho a hacer a las otras
víctimas de sus estados de ánimo. Las demás personas no tienen la culpa de las
cosas que suceden en un momento determinado, y si así fuera, tampoco resulta
correcta la actitud de agresividad o desquite con la que en ocasiones se actúa.
El buen trato es signo de buena educación, de equilibrio y madure en las
personas; pero es, además, testimonio elocuente para los otros, especialmente
para los menores. Un padre que trata a sus hijos con grosería o agresividad…
¿con qué autoridad moral puede exigir, después, que ellos lo respeten o le
obedezcan…? Para cosechar hay que sembrar, y se recoge lo que se siembra.

SON EXPRESIONES DE BUEN TRATO…


1. En el caso de los padres, especialmente, brindar amor y protección a sus
hijos y viceversa, cuando los hijos hayan crecido y sean los padres los que
necesiten de su cuidado.
2. Contestar amablemente el teléfono.
3. Dar una información a tiempo y acertada.
4. Responder con amabilidad cualquier tipo de comunicación.
5. Llegar a tiempo. Ser puntual y no hacer esperar a los demás, pues cada
cual es dueño de su tiempo.
6. Es evitar la crítica, no hablar mal de nadie. La vida privada de toda persona
merece ser respetada.
7. Respetar el espacio de los demás.
8. Aceptar a las personas como son, ayudarse mutuamente a mejorar.
9. Ayudar a las personas a descubrir y valorar sus propias cualidades.
10. Evitar los términos despectivos, degradantes y altivos para dirigirse a los
otros. Hacer siempre uso de la amabilidad.
11. Llamar a las personas por su nombre, no hacer uso de apodos o
sobrenombres.
12. Escuchar a los otros cuando lo necesitan y lo solicitan. Mirar a la persona.
Hacerle sentir que en ese momento ello es lo más importante.
13. Reconocer sus diferencias, su individualidad, su riqueza interior.
14. Hablarle con la verdad, no manejar posturas hipócritas y falsas.
15. Confiar en las personas, ayudarles a sentirse capaces y seguras de lo que
están haciendo.
16. Evitar los golpes, el mal trato verbal o físico.
17. Estimular con palabras de felicitación, de ánimo, de agradecimiento.

Estas expresiones son válidas para todos los ambientes, para todas las
edades, “pues los actos de cortesía son definitivos para el buen
funcionamiento de nuestra sociedad. Quienes son lo suficientemente
considerados para pensar en las necesidades de los demás y ser corteses,
contribuyen a la amabilidad de la vida diaria y reducen los conflictos de
ésta, disminuyendo la violencia que contamina el ambiente que los rodea.
Esta ley de reciprocidad implica que la gente recibe lo que da. Esto
significaría, por lo tanto, que la cortesía suscita cortesía. Si esto es cierto,
entonces ¿por qué no existe menos grosería y más cortesía en las
relacione de la gente? Realmente estamos pasando por una hambruna de
cortesía. ¡Por favor, fomente los actos de cortesía y descubra lo bien que se
siente!”.

Es indispensable trabajar para disminuir la agresividad e intolerancia que se


ha apoderado de la sociedad, y que ha infiltrado los ambientes del trabajo y
la vida familiar. Pequeños actos de cortesía y buen trato, como los
anotados anteriormente, ayudarán a recordar la responsabilidad que se
tiene de ser felices y de hacer felices a los demás.

UNA PEQUEÑA HISTORIA PARA REFLEXIONAR.

Buen trato no significa exclusivamente dar cosas, que no les falte nada a
los hijos, que tengan comida, vivienda, ropa, educación, diversión. No se
puede sacrificar afecto por dinero, ni se puede cambiar la capacidad
económica para suplir caprichos, por el tiempo para compartir con la familia.
Buen trato es también darse a sí mismo, es compañía, permanencia,
afecto, ternura…

“Una joven pareja entró en el mejor almacén de juguetes de la ciudad. El


señor y su esposa se entretuvieron en mirar, sin prisa, los juguetes de
colores alineados en las estanterías; otros estaban colgados del techo, o en
alegre desorden sobre las mesas. Había muñecas que lloraban y reían,
juegos electrónicos, cocinas en miniatura en donde se podían hacer tortas y
pasteles. Como no lograban decidirse, se les acercó una empleada muy
simpática que atendía el almacén. La señora le comenta: “Nosotros
tenemos una niña muy pequeña, pero estamos casi todo el día fuera de
casa y a veces hasta muy tarde de la noche”
-¡Es una niña que apenas sonríe!..., comentó el hombre.
-Quisiéramos comprarle algo que la hiciera feliz, -añadió la mujer-; incluso
cuando no esté con nosotros… Algo que le dé alegría aún cuando esté
sola, algo que le quite la tristeza, y la motive sonreír.
- Lo siento, -sonrió la empleada con gentileza_ ¡Pero aquí no vedemos
padres! Autor desconocido.
TALLER.
1. ¿Qué significa en nuestra familia, el buen trato?
2. ¿Nuestras expresiones y actitudes para con los demás son demostraciones
de buen trato?
3. ¿En nuestras relaciones familiares evitamos la grosería, la vulgaridad y los
apodos?
4. ¿Qué actitudes se deben mejorar para generar un ambiente de buen trato y
cortesía?
TERCERA PARTE.
VALOR: EL AMOR.
LLORAR ABRAZADOS.
Había salido con algunos muchachos. Mis ansias de amistad, de comprensión, de
amor, eran muchas. Todo terminaba siempre mal. Quizás en el fondo, yo tenía la
culpa. Siempre hago pruebas con la gente y esto me ocasiona muchas veces
malas jugarretas.
Unas veces era al decirles lo de mi diabetes: otras, ya no me daban tiempo: algún
familiar, algún amigo, suyo o mío, qué más daba, les ponía en antecedentes y..,
punto final. ¡Así sin más aviso!
Eso me dolía. No comprendía una marcha así, sin un adiós, sin ninguna
explicación entre dos personas que se consideraban amigos.
A veces creía que esto sucedía por mi forma de pensar, de actuar. Había
estudiado siempre con monjas y tenía ideas muy personales sobre el amor, la
amistad, el matrimonio, sobre todo. Pensaba de forma distinta a las demás chicas
de mi edad. Ésta era mi gracia y mi fallo.
Me creía sincera. Había luchado desde muy niña, quizá debido a mi diabetes, para
superarme, para ser mejor, y estas cosas me dolían.
Aquel muchacho era distinto. Había tanta ternura en sus palabras, tanto cariño en
su mirada…Notaba que me estaba cogiendo demasiado cariño. Y yo sentí miedo
de volverme a enamorar. Sentí renacer mis ilusiones, mis esperanzas, y eso para
mí era como si me inyectara el doble de insulina sin ponérmela, como si realizara
el doble de ejercicio sin hacerlo.
Y no era justo, dejar crecer sus ilusiones y las mías y después darle el bombazo,
pues no sabía cómo se lo tomaría.
Un día le expliqué lo de mi diabetes, qué era, los riesgos que había al casarse,
que a lo mejor no podría tener hijos y, si los tenía, cómo podían salir. Se lo puse
tan negro como yo lo veía en aquellos instantes, tan negro como me lo habían
pintado a mí algunas veces.
Se lo decía todo sin mirarle, para que mis ojos no traicionaran la seguridad de mis
palabras. Al final le miré y con gran asombro vi cómodos lagrimones rodaban por
sus mejillas. No pudo decir nada; sólo sé que nos abrazamos y lloré con él.
Lloramos los dos. Todo terminó un año más tarde con un “sí, quiero” ante el altar.
Tuvimos que luchar. Pero hoy somos felices. A veces tropezamos, pero nuestro
mutuo amor nos ayuda a caminar.
Fátima.

TALLER.
1. Con base en el video compartido por WhatsApp, la historia del niño que
hizo un milagro, escribir qué valores recibió de casa para desarrollar y
potenciar el invento que desarrolló.
2. Recoger de l prensa y en la vida de cada día casos o ejemplos de
honradez, coméntelos y revise su propia vida.
3. Recopile canciones que canten al amor y analícelos sacando conclusiones.
4. Recopile y comente frases positivas sobre el amor.
5. Analice los programas de televisión que tratan sobre el amor, destacando
los aspectos positivos y los negativos.

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