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Temas de nuestra américa, ISSN 0259-2239

Historia intelectual y estudios subalternos.


Posibilidades metodológicas para los estudios de
las mujeres
Marybel Soto Ramírez
Instituto de Estudios Latinoamericanos
Universidad Nacional de Costa Rica Palabras clave: estudios de las
mujeres, historia intelectual, es-
Resumen tudios subalternos, análisis del
El presente ensayo propone que la historia in- discurso
telectual y los estudios subalternos ofrecen he-
rramientas metodológicas para hacer lecturas y Keywords: Women Studies,
proponer re-lecturas de cómo las mujeres, desde la Intellectual History, Subaltern
cotidianidad, se han insertado en el mundo público Studies, Discourse analysis
y han dado –y dan— cuenta de ello, como un acto
social de sentido. Importa, en esta línea, estudiar la Introducción
inscripción de lo femenino en el mundo de lo público,
de cómo las mujeres han justificado su ser-en-el-mundo La historia de las mujeres
creando textos y discursos femeninos y feministas; a
es una gran veta para la in-
la vez que la sociedad occidental las ha interpretado,
vestigación a partir del uso
significado, contextualizado y textualizado.
de la categoría género. Los
Abstract estudios de las mujeres y lo
This paper suggests that intellectual history and sub- femenino refieren a un tipo
altern studies provide methodological tools for rea- de investigación donde todo
ding and propose re-readings on how women have aún está por hacerse; en tanto
got involved from their daily life into the public que lo femenino y las mujeres,
sphere, and have rendered–and are rendering– como sujetos subalternizados,
account of it, as a meaningful social action. In han sido, históricamente, invi-
this sense, it is important to study the feminine
sibilizados. Sin embargo, el que
mark in the public sphere, and how women
esta invisibilización se halla dado
have justified their being-in-the-world crea-
ting feminine and feminist discourses and no significa que las mujeres no estu-
texts, while the Western society has vieran allí, enseñando, llevando ho-
interpreted them, provided meaning gares, haciendo compras, amando, par-
to them, and contextualized and ticipando en revoluciones, escribiendo…
textualized them.
Por ello, que el acercamiento a la historia in-
telectual nos permite a todos aquellos y aquellas

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que nos asumimos desde el feminismo, planteamientos son susceptibles de ser


hacer lecturas y proponer re-lecturas de rastreados en un corpus específico, siem-
cómo las mujeres se han insertado en la pre en relación de red, con el contexto
cotidianidad, entendiendo esa inserción, de producción y recepción, así como de
como un acto social de sentido (Weinberg, las comunidades intelectuales donde se
2009) que equivale no solo estudiar a gestan y que da cuenta de la producción,
las mujeres excepcionales o a aquellas trasmisión, superación, valoración, ne-
imágenes femeninas de la historia tradi- gación del conocimiento, en el sentido
cional androcéntrica, que construidas a amplio de la palabra.
partir de la mirada masculina, axiológica
y ontológicamente, dice lo que es una Lo femenino se inscribe en la historia
mujer en el mejor sentido lacaniano. oficial y no oficial desde la femineidad o
desde lo patriarcal, pero en ambos casos,
Desde la subalternidad, como nos dice solo en forma incidental. Recordemos
Spivak, se identifica una doble condi- que la historia tradicional se preocupa
ción subalterna en ellas, como mujeres y por las hazañas de los grandes hombres
como mujeres del tercer mundo. Asimis- y que la categoría hombre, no engloba
mo, la historia intelectual nos permite lo femenino. Esta conceptualización es
acercarnos a los actos de significación evidentemente política. De allí que la
con que lo femenino se ha inscrito en historia intelectual como campo de tra-
el mundo público, de cómo las mujeres bajo que incluye lo político, nos permita
han justificado su ser-en-el-mundo defen- acercarnos y rastrear cómo han pensado
diendo textos y discursos femeninos y las mujeres –y los varones lo femenino,
feministas; a la vez que la sociedad oc- desde su intento de legitimidad de hacer
cidental las ha interpretado, significado, y ser, en el marco de ese pensamiento,
contextualizado y textualizado. occidental, tercermundista y femenino.

Esta propuesta, de utilizar los estudios Cómo acercarse al lenguaje en uso o al


subalternos y la historia intelectual en uso del lenguaje en los discursos de las
el análisis de escrituras femeninas, es mujeres desde la historia intelectual
un camino a cuatro carriles y en doble
vía, donde lo discursivo, los actos de La función vital del lenguaje, cuyo uso
significación, lo representativo simbóli- en la historia intelectual, como indica
co y lo cultural, se concatenan en una Skinner (2000) nunca es transparente,
red de relaciones que va más allá de los lo que nos permite observar que, a través
itinerarios biográficos intelectuales, para de este, las mujeres son explicadas, ne-
acercarnos a propuestas de cartografías gadas, olvidadas, sometidas a escarnio y
del conocimiento. Ello en tanto estu- escrutinio desde los diferentes discursos
dio de una comunidad discursiva, cuyos y en ellos. Siguiendo a este teórico, el

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estudio del uso de las palabras y no su han tenido acceso al relato de su propia
significado, es parte fundamental de un marginación. La forma de producción
programa de historia de las ideas. y de recepción de estos discursos desde
lo femenino nos permiten valorar tanto
A partir de esta postura, salta la impor- lo ilocutivo (como condición necesaria
tancia de acercarse a los textos para ver- pero no suficiente), como intencionali-
los ya no necesariamente como un todo dad y lo perlocutivo, como el efecto que
orgánico en la búsqueda de la coherencia se busca producir en el receptor. Esto es,
de los discursos sino que, al ir más allá, se ni más ni menos, pragmática del discur-
los ve como estructuras de interacción, so, entendida como estudio de las emi-
como una red de relaciones, que precisa- siones de un acto ilocutivo y del discur-
mente evidencian su rasgo dinámico. De so como acción, dentro de un contexto
esta forma su análisis interno y externo comunicativo específico, pero marcado,
permite estudiarlos no como una suce- metodológicamente, con el objetivo po-
sión de oraciones o como una verdad lítico de un acto de comunicación.
inserta en un contexto específico, sino
como una estructura multidimensional y De esta manera, la ideología, desde la
compleja, más allá de la suma de sus par- historia literaria, puede verse como cate-
tes: no como un hecho de verdad, sino goría sociosemiótica para evidenciar el
como un hecho de significación que nos para qué de un texto. La ideología está
permite analizarlo como relato. presente en todo discurso, pues en el
uso del lenguaje, y no en el significa-
En los textos de las mujeres, con uso de do de las palabras como anteriormente
un registro de lenguaje que no les perte- acotaba, subyace dicha categoría. Uno
nece del todo y por el que usualmente son de los aspectos más apasionantes de la
motivo de sospecha y morbo, se puede investigación feminista, aplicado en
evidenciar la intención de dar cuenta de lingüística y literatura, es el uso del len-
sí. Este dar cuenta de sí es lo que interesa guaje en lo público y lo privado, los as-
en la historia intelectual. En la aproxima- pectos semióticos del mito1, el análisis
ción que hemos hecho a este campo dis- de las metáforas y hasta de la adopción
ciplinar, se comprende que es en ese dar y uso de los sistemas gramaticales. Para
cuenta de sí, donde radica la manifesta- ello, es necesario detenernos a pensar
ción del ser femenino, en tanto que con- que el uso del lenguaje o el lenguaje
forma un acto ilocutivo que nos permite en uso, convencionalmente responde,
cuestionarnos: ¿cuál es la intencionalidad
del discurso (enunciado) femenino? 1 Sobre estos aspectos en relación con la con-
dición femenina, la genial escritora Yadira
Calvo, ha vertido mucha luz, por ejemplo:
Recordemos, por un instante, que las Éxtasis y ortigas (2008), A la mujer por la pala-
mujeres solo hasta muy recientemente bra (1988).

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representa y ayuda en la formación y la historiografía tradicional; por ejemplo,


reproducción de un sistema androcéntri- panfletos y volantes, anuncios, registros
co, de orden patriarcal. matrimoniales, actas judiciales, revis-
tas femeninas, sermones religiosos, etc.
El uso del lenguaje o el lenguaje en uso Tanto desde la construcción del sujeto-
desde la historia intelectual, según la objeto de investigación, como de las
perspectiva que expone Skinner, nos fuentes estudiadas, analizamos los már-
permite seguir las acciones expresadas genes, las fronteras, aquello que no ha-
en significados y comprensión (mean- bía sido considerado digno o importante
ning and understanding) de las oraciones, para ser investigación histórica.
como formas de entendimiento.
Para responder a Spivak debemos remi-
¿Puede hablar el subalterno?, o la pro- tirnos a los estudios de la subalternidad o
puesta política de los escritos de las poscoloniales. En los estudios de las mu-
mujeres desde la historia intelectual jeres, la primera propuesta es descoloni-
zar el cuerpo femenino, históricamente
Si nos preguntamos, dónde radica la su- propiedad de otros o para otros y enun-
puesta marginalidad de este hacer feme- ciado filosóficamente la mujer definida
nino como discurso, debemos referirnos, como ser para otro, no para sí, cuyo ser y
brevemente, a Spivak (1988). valer con respecto al varón es diferente
en las construcciones sociales, generali-
Al considerar que lo femenino es el otro, zadas, jerarquizadas y dicotómicas.
comprendemos que, como colectivo, las
mujeres, son otros, seres los que el sistema Spivak apunta a que el subalterno no
patriarcal les niega su voz. Históricamente puede hablar porque carece de un lugar
a las mujeres se les ha negado el derecho al de enunciación que se lo permita. En el
acto de habla y, a la vez, se las ha negado caso de las mujeres, esta situación es cla-
en el acto de habla mismo desde la tra- ra: no pueden hablar, entendiendo dicha
dición occidental. La pregunta de Spivak acción como acto de habla, como hecho
sobre si puede hablar el subalterno es más ilocutivo y como afianzamiento de la
que pertinente, pues nos permite decons- subjetividad, porque no forman parte del
truir el silenciamiento sufrido por las mu- discurso, están invisibilizadas o solo apa-
jeres dentro de la narrativa histórica. recen, incidentalmente, dentro de este. La
negación del acto de habla apunta, pues,
La historia intelectual nos permite una a la enunciación de la que nos habla Spi-
forma novedosa, metodológicamente, vak y la negación en el acto de habla, a la
de abordar los discursos de las mujeres invisibilización de las mujeres y de lo fe-
y sobre lo femenino, al utilizar, fuen- menino. Doble invisibilidad que se ejerce
tes usualmente menospreciadas por la desde lo patriarcal y desde lo occidental.

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Si consideramos estos aspectos, vemos mientos descalificados como inadecua-


que el cuestionamiento de cómo y quié- dos, insuficientes en cuanto elaboración
nes representan en el discurso a ese otro intelectual desde el razonamiento pa-
femenino evoca la esfera del discurso triarcal y androcéntrico.
patriarcal del poder. De ahí cobra fuerza
la concepción política de la propuesta ¿Dónde escribieron esas mujeres? ¿Sobre
de Spivak desde la historia intelectual: qué escribían? ¿Quiénes las leían? ¿Qué
es un cuestionamiento que nos hace leían ellas? ¿Cómo tenían acceso a esas
considerar cuál es la relación de un su- lecturas? ¿Dónde y cómo se reunían?
jeto, el femenino, en una relación de ¿Cómo elaboran y responden a la
dominación, que tiene que ver con la concepción cívica de ciudadanía (de la
conciencia de sí, lo simbólico, la inten- que ellas carecieron hasta la mitad del
cionalidad y de la identidad que emer- siglo XX) trasmitida en la escuela como
gen de dicha relación (Ortner, 1995). institución pública?

En el caso costarricense, a manera de Tratar de responder estas interrogantes


ejemplo, es interesante plantear, ¿qué es incluir la voz de las mujeres sobre sí
importancia puede tener el estudio de la mismas, susceptible de rastrearse en los
formación de las maestras costarricen- discursos que las mencionan, repito, in-
ses de inicio de siglo XX para analizar el cidentalmente, pero también en los dis-
pensamiento político costarricense?, e cursos femeninos sobre la maternidad,
identificar un margen donde ubicar un la socialización de los hijos, la lucha co-
locus de enunciación: qué acto cometie- tidiana, la inserción cívica y política y
ron estas maestras al escribir. Así, encon- desde la marginalidad de lo cotidiano que
traremos que la profesión docente fue la la condición femenina representaba en la
primera, de nivel intelectual, a la que esfera pública. Siguiendo a Spivak, no se
tuvieron acceso amplio las mujeres. Des- trata, por tanto, de decir cómo fueron o
de el concepto de redes intelectuales, las han sido las cosas para las mujeres, pro-
maestras de primaria se reconocieron a sí puesta necesaria pero insuficiente desde
mismas como pares, trabaron contactos la historia intelectual, pero sí “de ofrecer
entre ellas y con otras mujeres del ámbito una relación de cómo una explicación o
internacional y con esos contactos bus- una narrativa, fueron establecidas como
caron promover actividades referentes a normativa” (1988:319) para explicar dis-
su trabajo, a la organización de asociacio- cursivamente y textualizar, a ese otro fe-
nes, a crear revistas, a la participación en menino, latinoamericano y costarricense.
logias y centros femeninos. Intuyo que
crearon una comunidad discursiva parti-
cular, que ha sido silenciada, ejerciendo
sobre ellas violencia epistémica: conoci-

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‹http://caosmosis.acracia.net›

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