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República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del poder popular para la educación


Ministerio del poder polar para relaciones interiores de
justicia y paz
Universidad nacional experimental de la seguridad
l-Proceso investigación penal 2020 Ambiente #2

Marco Legal
“UPDF”
Profesor: Alumnos:

Luis Castañeda Christian Peña


Ci: 28160269

Jesús Carrera
Ci:28615675
Robert Rarez
Ci: 26071978
Genifer Reyes
Ci: 28467528
Robín Marín
Ci: 22873284

Wiliver Tovar
Ci: 27699247
Uso de Fuerza Policial.

Es la cantidad de esfuerzo intelectual y físico del funcionario policial,


manifestado a través de acciones inherentes al servicio de Policía dirigidas a
una ciudadana, ciudadano o grupo de estos, cuya aplicación debe ser
sistematizada y respetando el ordenamiento jurídico correspondiente a los
fines de controlar los niveles de resistencia de las (os) ciudadanas (os).

El uso de la fuerza es un acontecimiento relativamente infrecuente en el


desempeño de la policía. Ello no debe sorprender si pensamos un poco en
las actividades que típicamente llenan el turno de trabajo de un efectivo
policial cualquiera –patrullaje, observación, entrevistas, preparación de
informes, etc. Pocas son las ocasiones en que el policía se encuentra en
situaciones de urgencia, peligro o enojo, donde recurre a medios físicos
para lograr algún objetivo. La mayor parte del tiempo, o bien no hay
interacción con la ciudadanía, o esa interacción es pacífica. Lo que sí es
sorprendente es darse cuenta de que, pese a lo excepcional, la fuerza,
cuando se aplica, no siempre suscita una reacción social, esto es, alguna
actitud de evaluación de la actuación por parte de quienes no están
involucrados en el encuentro.

Muchas veces, se la trata como una ocurrencia natural–algo cuya aparición,


si se registra, no sale de los parámetros de lo esperado o tolerado.
Podríamos concebir a la policía como una de las agencias del Estado cuyo
uso de la fuerza no se encuentra, por lo general, sometido a evaluación ni
cuestionamiento.

Dado que el empleo de la fuerza psicológica, también llamada “fuerza no


física”. No suele afectar directamente la integridad corporal de quien la
sufre, la discusión entonces, en lo que a la policía concierne, estriba en el
adecuado uso de la fuerza física. La resolución de este dilema no es menor y
al respecto existe una amplia gama de experiencias, desde aquellas que
cuentan con una posición teórica de respaldo hasta aquellas que, en la
práctica, se resuelven -más mal que bien- a través de la experiencia que los
agentes pueden adquirir en el ejercicio cotidiano de sus funciones.

El uso legal de la fuerza no se satisface únicamente con la circunstancia de


que la actuación policial tenga base en un marco jurídico, sino que requiere
que la aplicación de la normativa específica se realice conforme a los
requerimientos de un estado de derecho, particularmente en lo referido a la
igualdad de aplicación de la ley.

Al respecto, se han realizado estudios que revelan cierta predisposición de


la policía para emplear la fuerza atendiendo a factores extralegales. Estos
factores pueden ser más bien objetivos, como el tipo de situación que se
requiere controlar, dependiendo de si ésta incluye o no la posibilidad de que
el policía sea agredido; o circunstancias respecto de las cuales prima la
apreciación subjetiva del agente, como la condición socioeconómica, los
antecedentes legales, el comportamiento moral o la posibilidad de reclamo
posterior por parte de aquel sobre quien recaerá la fuerza policial.

Principios que rigen la fuerza policial


Principios:
Legalidad.
Necesidad.
Proporcionalidad.
Ética policial.

LEGALIDAD: Son todos los actos que realizan los funcionarios policiales


dentro del marco jurídico vigente nacional e internacional. El uso de la fuerza
debe estar dirigido a lograr un objetivo legal.

NECESIDAD: Es la respuesta a una situación que representa una amenaza


y que requiere de una acción inmediata para evitar el agravamiento en actos
delictivos o ilegales. El uso de la fuerza física y armas de fuego es necesario
cuando no existe otra forma de lograr un objetivo legal.

PROPORCIONALIDAD: Es el equilibrio entre la gravedad de la amenaza y


la cantidad de fuerza policial empleada, considerando sus posibles
consecuencias para alcanzar el objetivo legal deseado.

ÉTICA POLICIAL: Conjunto de normas que provienen del interior del


individuo, que se estructuran en un tiempo o lugar determinado, y que le
permiten diferenciar lo bueno de lo malo.

Principios básicos sobre el empleo de la fuerza y armas de fuego por los


funcionarios encargados de hacer cumplir la ley.

Es una normativa de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas


para los Derechos Humanos adoptada en 1990, orientada a promover
prácticas de prevención del delito y tratamiento de las personas
involucradas que protejan la vida e integridad física y respeten los derechos
humanos, sin perder eficacia operativa.
Los Principios establecen que todos los países deberán elaborar
reglamentos sobre el uso de la fuerza, basados en normas éticas,
restringiendo progresivamente el empleo de medios represivos que puedan
ocasionar lesiones o muertes. La fuerza solo podrá utilizarse cuando sea
inevitable y luego de agotar los medios no violentos. La utilización de armas
de fuego debe ser moderada y proporcional, con previa advertencia,
reduciendo al mínimo los daños y lesiones, asistiendo de inmediato a las
personas heridas, avisando a la menor brevedad a los parientes o amigos de
las personas que resulten dañadas y comunicando de inmediato a los
superiores cuando se hubieren producido lesiones o muertes. Las
legislaciones nacionales deben castigar como delito el uso arbitrario de la
fuerza por parte de los funcionarios. Las autoridades no podrán invocar
circunstancias excepcionales para justificar el incumplimiento de los
Principios Básicos. Los Estados no podrán castigar a los funcionarios que
desobedezcan la orden de usar la fuerza, cuando fuera violatoria de los
Principios.

Los Principios constituyen una especie de reglamento del Código de


Conducta, por lo cual especifican las condiciones que deben cumplirse para
el empleo de armas de fuego, entre ellas:

Que la proporcionalidad debe evaluarse en relación “a la gravedad del


delito y al objetivo legítimo que se persiga”;
La necesidad de reducir al mínimo los daños y lesiones.

Bajo estas premisas, los Principios describen aquellas situaciones en que


podrán emplearse armas de fuego, siempre bajo las condiciones anteriores.

En defensa propia o de otras personas, en caso de peligro inminente


de muerte o lesiones graves.

Para evitar un delito particularmente grave que entrañe una seria


amenaza para la vida; y con el objeto de detener a una persona que
represente una seria amenaza para la vida y oponga resistencia a la
autoridad (requisitos copulativos) o para impedir su fuga, siempre y
cuando resultaren insuficientes medidas menos extremas.

En cualquiera de estas situaciones, solo se podrá hacer uso


intencional de armas letales cuando sea estrictamente inevitable para
proteger una vida, por lo cual se establece la obligación de los
gobiernos de proveer armamento no letal que permita el “uso
diferenciado de la fuerza y de las armas de fuego”.
Adicionalmente los Principios promueven:

La tipificación penal del empleo arbitrario o abusivo de la fuerza, o de


armas de fuego.

La responsabilización de los superiores por la conducta de sus


subalternos, cuando éstos recurran al uso ilícito de la fuerza y de
armas de fuego, en tanto los primeros no hayan impedido, eliminado o
denunciado su uso.

Que no se impongan sanciones a quienes se nieguen a ejecutar una


orden de emplear fuerza o armas de fuego o denuncien su empleo.

Que se informe de las violaciones de derechos humanos o del empleo


ilícito de la fuerza, utilizando incluso instancias extra institucionales.

Hoy un instrumento de valor incalculable para la orientación y valoración del


trabajo policial, y están ampliamente aceptados como doctrina jurídica
autorizada. Su uso es frecuente como referencia en tribunales
internacionales y otros organismos de derechos humanos, instituciones
internacionales y organizaciones de derechos humanos. Amnistía
Internacional se remite de forma habitual a los Principios Básicos en sus
declaraciones, informes y recomendaciones. Lamentablemente, en estos
informes suele ser necesario hacer hincapié en las deficiencias de la
aplicación de los Principios Básicos o en la ausencia de aplicación.

LOS OBJETIVOS Y PRINCIPIOS DEL USO DE LA FUERZA


PUBLICA

Artículo 7.- Los objetivos del Uso Legítimo de la Fuerza son los siguientes:
Hacer cumplir la Ley;
Evitar la violación de derechos humanos de las personas y garantizar
el restablecimiento de la paz y el orden público;
Mantener la vigencia del Estado de Derecho;
Salvaguardar el orden y la paz públicos;
Evitar la toma, destrozo o incendio de la propiedad pública o privada y
de instalaciones o infraestructura destinados a los servicios públicos;
Garantizar el normal funcionamiento de servicios públicos y el libre
tránsito de personas y bienes
Disuadir mediante el racional despliegue de la fuerza a personas que
participan de manera violenta en conflictos que comprometen el
mantenimiento de la paz y el orden público.

Artículo 8.- En el uso de la fuerza pública, los Integrantes de las Instituciones


Policiales deberán apegarse a los principios

Siguientes:

I. Legalidad; II. Necesidad;


III. Proporcionalidad; IV. Racionalidad,
V. Oportunidad.

Artículo 9.- De conformidad con el principio de legalidad, todo servidor


público debe regir su actuación a lo que la Ley Específicamente le faculte,
así como para cumplimentar orden emitida por autoridad competente que
funde y motive la causa legal del procedimiento.

Artículo 10.- El principio de necesidad significa que sólo cuando sea


estrictamente necesario e inevitable los Integrantes emplearán la fuerza para
impedir la perturbación del orden público y para restablecerlo.

Artículo 11.- El principio de proporcionalidad implica que el uso de la fuerza


será adecuado y en proporción a la resistencia o agresión recibida,
atendiendo a su intensidad, duración y magnitud. Este principio impone que
no se deberá actuar con todo el potencial de una unidad si las personas
contra las que se usa la fuerza se encuentran en una situación cuantitativa y
cualitativa inferior. En consecuencia, la fuerza empleada debe ser prudente y
limitada, sólo para alcanzar el control y neutralización de la agresión. El uso
de la fuerza está en directa relación con los medios que emplean las
personas que participan en la agresión, su número y grado de hostilidad.

Artículo 12.- La racionalidad en el uso de la fuerza implica que ésta será


empleada de acuerdo a elementos objetivos ilógicos con relación a la
situación hostil que se presenta, a efecto de valorar el objetivo que se
persigue, las circunstancias del caso y las capacidades tanto del sujeto a
controlar como la de los propios Integrantes.

Artículo 13.- La oportunidad en el uso de la fuerza pública tenderá a la


actuación policial inmediata para evitar o neutralizar un daño o peligro
inminente o actual, que vulnere o lesione la integridad, derechos o bienes de
las personas, las libertades, la seguridad ciudadana o la paz pública

Principios de los derechos humanos según la Constitución de la República


de Venezuela
La aspiración de convivencia en libertad y felicidad en el logro de una mejor
existencia de todos los venezolanos, mediante un equilibrio entre la garantía
de los derechos humanos, la nacionalidad y la ciudadanías, los derechos
civiles, políticos, sociales y de las familias, culturales y educativos,
económicos, de los pueblos indígenas y ambientales, al establecer, como lo
hizo la primera constitución venezolana de 1811.

Aspectos Positivos de la Modificación Constitucional.

a).- Aumento de los Derechos Fundamentales de los Indígenas venezolanos


tanto en cultura, territorio e idiomas. Se distingue el término
de Pueblos Indígenas que le otorga ésta constitución del que se le da en el
Derecho Internacional.

b).- Aumento de los Derechos Políticos, Económicos, Sociales, Familiares,


Educativos, del Trabajo y de la Salud.

c).- La nacionalidad venezolana no se pierde al optar o adquirir


otra nacionalidad.

d).- Aparición de los Referendos Revocatorios para todos los cargos de


elección popular a mitad de su periodo Constitucional.

e).- Aparición de otros cargos públicos como El Defensor del Pueblo.

Aspectos Contradictorios de la Modificación Constitucional.

En cuantos algunos aspectos contradictorios de la modificación


constitucional citada, en relación a las garantías y calidades que esa misma
Carta Sustantiva debe acordar.

Incongruencia entre lo dispuesto en el Artículo 29 de la Constitución ubicado


en el Titulo III "De los Derechos Humanos y Garantías, y de los Deberes.
Capítulo I Disposiciones Generales"; y el artículo 285 que define
las Atribuciones del Ministerio Público. Los artículos contradictorios dicen lo
siguiente:
"Artículo 29.El Estado estará obligado a investigar y sancionar legalmente
los delitos contra los derechos humanos cometidos por sus autoridades.
Las acciones para sancionar los delitos de lesa humanidad, violaciones
graves a los Derechos Humanos y los crímenes de guerra son
imprescriptibles. Las violaciones de derechos humanos y los delitos de lesa
humanidad serán investigados y juzgados por los tribunales ordinarios.
Dichos delitos quedan excluidos de los beneficios que puedan conllevar
su impunidad, incluidos el indulto y la amnistía.

Análisis del artículo. 29:


Este artículo, obliga al Estado a investigar y sancionar legalmente los delitos
contra los derechos humanos, cometidos por sus autoridades. Declara como
imprescriptibles las acciones para sancionar los delitos de lesa humanidad,
violaciones graves a derechos humanos y crímenes de guerra. Estos delitos
deberán ser investigados y juzgados por los tribunales ordinarios, y quedar
incluidos de los beneficios que puedan conllevar a su impunidad, indulto o
amnistía.

Artículo 285 Son atribuciones del Ministerio Público:

Garantizar en los procesos judiciales el respeto a los derechos y garantías


constitucionales, así como a los tratados, convenios y acuerdos
internacionales suscritos por la República.

Garantizar la celeridad y buena marcha de la administración de justicia, el


juicio previo y el debido proceso.

Ordenar y dirigir la investigación penal de la perpetración de los hechos


punibles para hacer constar su comisión con todas las circunstancias que
puedan influir en la calificación y responsabilidad de los autores o las
autoras y demás participantes, así como el aseguramiento de los objetos
activos y pasivos relacionados con la perpetración.

Ejercer en nombre del Estado la acción penal en los casos en que para
intentarla o proseguirla no fuere necesaria instancia de parte, salvo las
excepciones establecidas en la ley.

Intentar las acciones a que hubiere lugar para hacer efectiva la


responsabilidad civil, laboral, militar, penal, administrativa o disciplinaria en
que hubieren incurrido los funcionarios o funcionarias del sector público,
con motivo del ejercicio de sus funciones.

Las demás que establezcan esta Constitución y la ley.

Estas atribuciones no menoscaban el ejercicio de los derechos y acciones


que corresponden a los o las particulares o a otros funcionarios o
funcionarias de acuerdo con esta constitución y la ley.

Análisis del artículo 285. La Fiscalía General de la República, que se encarga
de dirigir al Ministerio Público, cumplirá con las siguientes funciones:

Asegurarse sean respetados los derechos y garantías constitucionales y


los tratados, convenios y acuerdos internacionales en
los procesos judiciales.
Certificar que la administración de justicia y el juicio previo se lleven a cabo
con el debido proceso
 Decretar y regir la investigación penal aquellos actos que violen la
Constitución o la ley.
 Ejecutar la acción penal en nombre del Estado.
Juzgar las acciones que fuesen cometidas por los funcionarios del sector
público por causa del ejercicio de sus funciones.
Las demás funciones que establezcan la Constitución y la ley.

Algún artículo de la constitución que hace referencia a los


derechos humanos.

Artículo 19. El Estado garantizará a toda persona, conforme al principio de


progresividad y sin discriminación alguna, el goce y ejercicio irrenunciable,
indivisible e interdependiente de los derechos humanos. Su respeto y
garantía son obligatorios para los órganos del Poder Público de conformidad
con la Constitución, los tratados sobre derechos humanos suscritos y
ratificados por la República y las leyes que los desarrollen. toda persona
conforme a sus principios de progresividad y sin discriminación tendrá el
goce y ejercicio de sus derechos humano, para ello el estado los garantizara,
por cuanto es de suma obligatoriedad tanto para el estado como para los
poderes públicos de la nación.

Análisis del artículo. 19: Hace referencia a los principios de progresividad,


irrenunciabilidad, indivisibilidad e interdependencia de los Derechos
Humanos y establece en persona de todos los órganos del poder público
(tribunales, Ministerios, etc.) la obligación de respetar y garantizar estos
derechos. Se obliga en este caso el Estado Venezolano, a adoptar medidas
legislativas, económicas, políticas y sociales que nos conduzcan a
garantizar de una manera más efectiva en ejercicio de los Derechos
Humanos.

Artículo 20. Toda persona tiene derecho al libre desenvolvimiento de su


personalidad, sin más limitaciones que las que derivan del derecho de las
demás y del orden público y social.

Análisis del artículo. 20:


El derecho que tiene toda persona a desarrollar libremente su personalidad,
sin más limitaciones que las que tienen por finalidad garantizar el derecho
de los demás ciudadanos, y del orden público y social.

Artículo 21. Todas las personas son iguales ante la ley, y en consecuencia:

No se permitirán discriminaciones fundadas en la raza, el sexo, el


credo, la condición social o aquellas que, en general, tengan por
objeto o por resultado anular o menoscabar el reconocimiento, goce o
ejercicio en condiciones de igualdad, de los derechos y libertades de
toda persona.

La ley garantizará las condiciones jurídicas y administrativas para que


la igualdad ante la ley sea real y efectiva; adoptará medidas positivas a
favor de personas o grupos que puedan ser discriminados,
marginados o vulnerables; protegerá especialmente a aquellas
personas que por alguna de las condiciones antes especificadas, se
encuentren en circunstancia de debilidad manifiesta y sancionará los
abusos o maltratos que contra ellas se cometan.

Sólo se dará el trato oficial de ciudadano o ciudadana; salvo las


fórmulas diplomáticas.

4. No se reconocen títulos nobiliarios ni distinciones hereditarias.

Análisis del artículo. 21:


Se prohíben como política pública la discriminación por raza, credo, sexo,
condición social, o aquellas acciones que busquen menoscabar los
derechos y libertades de todos los venezolanos.

Garantizará además condiciones jurídicas y administrativas, así como la


protección de los grupos o personas que en un momento determinado
puedan ser discriminados, y sancionará los abusos o maltratos que en este
sentido se cometan.
Tomando en cuenta lo anterior, en el texto constitucional, se prohíben todo
tipo de discriminaciones, política pública que fue implementada en el país,
en virtud de los conflictos por raza y credo que existieron en el pasado en
países desarrollados como Estados Unidos y en Alemania con la existencia
de los Judíos y el exterminio Nazi, en virtud de estas acciones acontecidas
en las grandes naciones, Venezuela, decidió ser una país pluricultural, con
diversas de religiones y una amplitud de razas quienes de forma conjunta
integran esta nación.

Artículo 22. La enunciación de los derechos y garantías contenidos en esta


Constitución y en los instrumentos internacionales sobre derechos humanos
no debe entenderse como negación de otros que, siendo inherentes a la
persona, no figuren expresamente en ellos. La falta de ley reglamentaria de
estos derechos no menoscaba el ejercicio de los mismos.

Análisis del artículo. 22:


Es importante también destacar que nuestra constitución vigente, al igual
que la de 1961, reconoce el carácter constitucional de otros Derechos
Individuales que siendo inherentes a la persona humana no se hallen
previstos en la Constitución Bolivariana ni en los tratados internacionales
suscritos por la República. Así por ejemplo el caminar, el mirar o el respirar,
podríamos decir que son Derechos inherentes a la persona humana y por lo
tanto derechos individuales que gozan de jerarquía y protección
constitucional. En consecuencia no estaríamos obligados, como
ciudadanos, a correr, a dejar de respirar o a no mirar para donde
quisiéramos, ni siquiera por un lapso de tiempo muy breve, porque una
autoridad del Estado nos lo ordene, so pena para el funcionario de estar
violando un Derecho individual-humano reconocido por nuestra constitución
política.

Artículo 23. Los tratados, pactos y convenciones relativos a derechos


humanos, suscritos y ratificados por Venezuela, tienen jerarquía
constitucional y prevalecen en el orden interno, en la medida en que
contengan normas sobre su goce y ejercicio más favorables a las
establecidas por esta Constitución y la ley de la República, y son de
aplicación inmediata y directa por los tribunales y demás órganos del Poder
Público.

Análisis del artículo. 23:


Confiere una significación especial a los tratados, pactos, y convenios
suscritos y ratificados por Venezuela, en materia de Derechos humanos, y
les otorga validación de jerarquía constitucional, y prevalencia en el
ordenamiento interno, cuando contenga normas referentes a su goce y
ejercicio, que sean más favorables en comparación a las referidas en la
Constitución, y estas deberán ser aplicadas inmediata y directamente por los
tribunales y demás órganos del Poder Público.
Artículo 24. Ninguna disposición legislativa tendrá efecto retroactivo,
excepto cuando imponga menor pena. Las leyes de procedimiento se
aplicarán desde el momento mismo de entrar en vigencia aun en los
procesos que se hallaren en curso; pero en los procesos penales, las
pruebas ya evacuadas se estimarán en cuanto beneficien al reo o rea,
conforme a la ley vigente para la fecha en que se promovieron.

Cuando haya dudas se aplicará la norma que beneficie al reo o a la rea.

Análisis del artículo. 24:


Esta ley está orientada a garantizar un trato digno a los reos, referidas a las
entradas en vigencia de las leyes de procedimiento aun en los procesos que
se hallen en curso, y durante los procesos penales, las pruebas ya
evacuadas, se estimaran en cuanto sean de beneficios para el reo. Además,
establece que ninguna ley, tendrá efecto retroactivo, sobre otra, a menos
que sean para imponer menor pena.

Artículo 25. Todo acto dictado en ejercicio del Poder Público que viole o
menoscabe los derechos garantizados por esta Constitución y la ley es nulo,
y los funcionarios públicos y funcionarias públicas que lo ordenen o
ejecuten incurren en responsabilidad penal, civil y administrativa, según los
casos, sin que les sirvan de excusa órdenes superiores.

Análisis del artículo. 25:


Establece sanciones a los funcionarios públicos, que mediante un acto
dictado violen o menoscaben los deberes garantizados por la Constitución y
la ley, incurriendo en responsabilidad penal, civil y administrativa, sin que
sirva de excusa el que haya sido producto de ejecutar acciones mediante
órdenes superiores.

Artículo 26. Toda persona tiene derecho de acceso a los órganos de


administración de justicia para hacer valer sus derechos e intereses, incluso
los colectivos o difusos, a la tutela efectiva de los mismos y a obtener con
prontitud la decisión correspondiente.

El Estado garantizará una justicia gratuita, accesible, imparcial, idónea,


transparente, autónoma, independiente, responsable, equitativa y expedita,
sin dilaciones indebidas, sin formalismos o reposiciones inútiles.

Análisis del artículo. 26:


Le garantiza a todo ciudadano que pueda acceder a los órganos de
administración de justicia para hacer valer sus derechos e intereses, y a
obtener con prontitud la decisión correspondiente

Artículo 27. Toda persona tiene derecho a ser amparada por los tribunales en
el goce y ejercicio de los derechos y garantías constitucionales, aun de
aquellos inherentes a la persona que no figuren expresamente en esta
Constitución o en los instrumentos internacionales sobre derechos
humanos.

El procedimiento de la acción de amparo constitucional será oral, público,


breve, gratuito y no sujeto a formalidad, y la autoridad judicial competente
tendrá potestad para restablecer inmediatamente la situación jurídica
infringida o la situación que más se asemeje a ella.

Todo tiempo será hábil y el tribunal lo tramitará con preferencia a cualquier


otro asunto.
La acción de amparo a la libertad o seguridad podrá ser interpuesta por
cualquier persona, y el detenido o detenida será puesto bajo la custodia del
tribunal de manera inmediata, sin dilación alguna.

El ejercicio de este derecho no puede ser afectado, en modo alguno, por la


declaración del estado de excepción o de la restricción de garantías
constitucionales.

Análisis del artículo. 27:


Este artículo defiende los derechos a todo ciudadano, de poder ser
amparado ante los tribunales, en el goce de sus derechos y garantías
constitucionales. También refiere que el amparo constitucional deberá ser
oral público, breve, gratuito y no estar sujeto a formalidad. Además,
establece que la acción de amparo podrá ser interpuesta por cualquier
persona, y el detenido será puesto bajo la custodia del tribunal de manera
inmediata. Establece también que el ejercicio de este derecho no puede ser
afectado en ninguna manera, por la declaración del estado de excepción o
restricción de garantías constitucionales.

Artículo 28. Toda persona tiene derecho de acceder a la información y a los


datos que sobre sí misma o sobre sus bienes consten en registros oficiales
o privados, con las excepciones que establezca la ley, así como de conocer
el uso que se haga de los mismos y su finalidad, y a solicitar ante el tribunal
competente la actualización, la rectificación o la destrucción de aquellos, si
fuesen erróneos o afectasen ilegítimamente sus derechos. Igualmente, podrá
acceder a documentos de cualquier naturaleza que contengan información
cuyo conocimiento sea de interés para comunidades o grupos de personas.
Queda a salvo el secreto de las fuentes de información periodística y de
otras profesiones que determine la ley.

Análisis del artículo. 28:


Otorga el derecho a todo ciudadano, de acceder a la información y datos que
sobre sí mismo o sobre bienes conste en registros oficiales o privados,
conocer el uso que se haga de los mismos, su finalidad; y además podrá
solicitar ante el tribunal competente la actualización, rectificación, y
destrucción de aquellos, si fuesen erróneos o afectasen ilegalmente sus
derechos. Sin embargo, regula algunas excepciones.
Artículo 29. El Estado estará obligado a investigar y sancionar legalmente
los delitos contra los derechos humanos cometidos por sus autoridades.
Las acciones para sancionar los delitos de lesa humanidad, violaciones
graves a los derechos humanos y los crímenes de guerra son
imprescriptibles. Las violaciones de derechos humanos y los delitos de lesa
humanidad serán investigados y juzgados por los tribunales ordinarios.
Dichos delitos quedan excluidos de los beneficios que puedan conllevar su
impunidad, incluidos el indulto y la amnistía.

Análisis del artículo. 29:


Este artículo, obliga al Estado a investigar y sancionar legalmente los delitos
contra los derechos humanos, cometidos por sus autoridades. Declara como
imprescriptibles las acciones para sancionar los delitos de lesa humanidad,
violaciones graves a derechos humanos y crímenes de guerra. Estos delitos
deberán ser investigados y juzgados por los tribunales ordinarios, y quedar
incluidos de los beneficios que puedan conllevar a su impunidad, indulto o
amnistía.

Artículo 30. El Estado tendrá la obligación de indemnizar integralmente a las


víctimas de violaciones a los derechos humanos que le sean imputables, y a
sus derechohabientes, incluido el pago de daños y perjuicios.

El Estado adoptará las medidas legislativas y de otra naturaleza, para hacer


efectivas las indemnizaciones establecidas en este artículo. El Estado
protegerá a las víctimas de delitos comunes y procurará que los culpables
reparen los daños causados.

Análisis del artículo. 30:


Establece la obligación que deberá tener el estado de indemnizar
integralmente a las víctimas de violaciones a sus derechos humanos,
incluso el pago de daños y perjuicios. Igualmente, protegerá a las víctimas
de delitos comunes, y procurará que los culpables reparen los daños por
ellos causados.

Artículo 31. Toda persona tiene derecho, en los términos establecidos por
los tratados, pactos y convenciones sobre derechos humanos ratificados
por la República, a dirigir peticiones o quejas ante los órganos
internacionales creados para tales fines, con el objeto de solicitar el amparo
a sus derechos humanos.

El Estado adoptará, conforme a procedimientos establecidos en esta


Constitución y la ley, las medidas que sean necesarias para dar
cumplimiento a las decisiones emanadas de los órganos internacionales
previstos en este artículo.
Análisis del artículo. 31:
Le garantiza el derecho a todo ciudadano de la República a dirigir peticiones
o quejas ante los órganos internacionales, creados para tal fin, con el objeto
de solicitar amparo a sus derechos. Según este artículo, El Estado, adoptará
las medidas que sean necesarias para dar cumplimiento a las decisiones
emanadas de los órganos internacionales previstos en la este artículo.

Basamento legal del uso de la fuerza según la ley orgánica del Servicio de
policía y del cuerpo policía nacional 2008

La Policía y los agentes policiales son funcionarios estatales. En el ejercicio


de su función representan al Estado y, en términos prácticos, aplican el uso
de la fuerza. los policías son los actores claves que deben ser capacitados
en el uso válido de la fuerza para evitar excesos en la práctica, ya que “un
uso arbitrario de la fuerza puede equivaler, muy probablemente, a la
afectación de derechos”.

Articulo 70 criterios para graduar el uso de la fuerza


Los funcionarios y funcionarias policiales emplearan la fuerza física con
apego a los siguientes criterios:
El nivel del uso de la fuerza a aplicar esta determinado por la conducta de la
persona y no por la predisposición del funcionario o funcionaria
El uso diferenciado de la fuerza implica que entre la intimidación psíquica y
la fuerza potencialmente mortal, el funcionario o funcionaria graduara su
utilización considerando la progresión desde la resistencia pasiva hasta la
agresión que amenace la vida, por parte de la persona.
El funcionario o funcionaria policial debe mantener el menor nivel del uso de
la fuerza posible para el logro del objetivo propuesto
En ningún momento debe haber daño físico innecesario, ni maltrato morales
a las personas objetos de la acción policial, ni emplearse la fuerza como
forma de castigo directo

Análisis del artículo:70 criterios para graduar el uso de la fuerza

El nivel de fuerza a aplicar no lo decide el Policía sino la conducta de


ciudadano.

En ningún momento debe haber daño físico innecesario ni maltratos morales


a los ciudadanos objetos de la acción.

Debe mantenerse el menor nivel de fuerza posible para el logro de la misión.

El nivel de Fuerza a aplicar no está determinado por el tipo de falta o delito


cometido.
De igual manera se utiliza el uso de la fuerza en el código penal en el artículo
65
Artículo 65.- NO ES PUNIBLE:

El que obra en cumplimiento de un deber o en el ejercicio legítimo de un


derecho, autoridad, oficio o cargo, sin traspasar los límites legales.

El que obra en virtud de obediencia legítima y debida. En este caso, si el


hecho ejecutado constituye delito o falta, la pena correspondiente se le
impondrá al que resultare haber dado la orden ilegal.

El que obra en defensa de propia persona o derecho, siempre que concurran


las circunstancias siguientes:

Agresión ilegitima por parte del que resulta ofendido por el hecho.

Necesidad del medio empleado para impedirla o repelerla.

Falta de provocación suficiente de parte del que pretenda haber obrado en


defensa propia.

Se equipara a legítima defensa el hecho con el cual el agente, en el estado de


incertidumbre, temor o terror traspasa los límites de la defensa.

El que obra constreñido por la necesidad de salvar su persona, o la de otro,


de un peligro grave e inminente, al cual no haya dado voluntariamente
causa, y que no pueda evitar de otro modo.

Análisis del artículo 65: no es punible quien obra en el cumplimiento de un


deber o en ejercicio de derecho autoritario, oficio o cargo sin traspasar los
límites legales

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