EXAMEN 2º BTO.-Artículo de J.M.

de Prada-Solucionario
DEPARTAMENTO DE LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA.
IES VILLA DE VALDEMORO. EXAMEN 2º DE BACHILLERATO

Nombre y apellidos:……………………………………………………………………………….
Quizá sin saberlo, usted padezca ‘tecnoestrés’, una nueva y todavía no suficientemente
explorada patología que alimenta en el paciente una dependencia progresiva de los
artilugios tecnológicos. Se trata de una enfermedad de crecimiento subterráneo, cuyos
primeros síntomas no afloran hasta que el paciente ha adquirido, sin siquiera saberlo, una
adicción. El más frecuente y reconocible de estos síntomas consiste en desarrollar una
sensación de cotidiano fracaso, cuando nuestros actos no se acompasan a la velocidad del
vértigo que impone la tecnología; la certeza de que nuestra inteligencia, por laboriosa o
perseverante que sea, nunca viajará a la misma velocidad que los impulsos electrónicos nos
convierte en frustrados perseguidores de una quimera. Cualquier obstáculo que medie entre
nuestras expectativas y su consumación se convierte en un incesante y atosigador motivo
de insatisfacciones. Se calcula que una de cada cinco personas padecen hoy esta patología
en diverso grado; proporción que se incrementa (uno de cada tres) entre quienes, por la
naturaleza de su trabajo, están sometidos a una mayor ‘presión tecnológica’.
El ‘tecnoestrés’ altera, al principio de forma imperceptible, pero enseguida de un modo
insidioso y asfixiante, nuestros hábitos: los límites entre la jornada laboral y el tiempo
reservado al ocio se difuminan; los vínculos de cohesión familiar se hacen quebradizos y el
autismo afectivo acaba sustituyendo las naturales expansiones sentimentales que regían el
trato con nuestros allegados; toda la liturgia de aproximaciones y tanteos que componen el
cortejo erótico son suprimidos, en el afán de obtener una satisfacción sexual expeditiva e
inmediata; el flujo incesante de información que nos proporciona la tecnología nos impide
adiestrar la capacidad para digerirla, lo que inevitablemente erosiona nuestro mundo
interior, hasta tornarlo raquítico o inane. Pero quizá el efecto más estragante del
tecnoestrés –y lo que lo convierte en una enfermedad adictiva– sea la conciencia o
complejo de inferioridad que instila en el enfermo, que llega a confundir el desasosiego
abrumador que la tecnología ha introducido en su existencia con una carencia personal que
sólo puede corregirse... mediante una mayor dependencia tecnológica.

Juan Manuel de Prada, ‘Tecnoestrés’, El Semanal, 3 de julio de 2005

1.- Haga un comentario de texto del fragmento que se propone contestando a las preguntas siguientes:
a) Enuncie el tema (0,5 p.); b) Detalle las características lingüísticas y estilísticas del texto (1,25 p.);
c) Indique qué tipo de texto es. (0,25 p.)
2.- Redacte un resumen del contenido del fragmento. (1 p.)
3.- Exponga su opinión sobre la influencia de la tecnología en la sociedad actual. (1,5 p.)
4a.- Analice sintácticamente las siguientes oraciones. (2 p.):
-El flujo incesante de información que nos proporciona la tecnología nos impide adiestrar la capacidad
para digerirla.
-Se calcula que una de cada cinco personas padecen hoy esta patología en diverso grado.
4b.- Analiza la estructura morfológica de inevitablemente, su proceso de formación y la categoría
gramatical a la que pertenecen. (0,5 p.).
4c.- Explique el concepto de antonimia e indique un antónimo de inane (0,5 p.)
5.- Tema de literatura (2,5 p.)
 EXAMEN 2º BTO.-Artículo de J.M. de Prada-Solucionario
1.- Haga un comentario de texto del fragmento que se propone contestando a las preguntas
siguientes:
a) Enuncie el tema (0,5 p.); b) Detalle las características lingüísticas y estilísticas del texto (1,25 p.);
c) Indique qué tipo de texto es. (0,25 p.)

1.a) La nueva dolencia conocida como ‘tecnoestrés’, sus síntomas y las consecuencias para el paciente.

1.c) Nos encontramos ante un texto perteneciente a El Semanal, suplemento dominical que se publica con
varios periódicos españoles. Se trata de un texto periodístico de opinión, que, concretamente, presenta
todas las características propias de la columna: autor de reconocido prestigio literario, brevedad, voluntad
de estilo y, también, libertad temática; pues, en ella, no se analiza ninguna noticia en concreto; sino que se
habla de un tema de actualidad (los “efectos secundarios” de la tecnología) abordándolo desde una
perspectiva general y literaria, mucho más próxima al ensayo que a lo periodístico. La modalidad
expresiva predominante, en vista del tipo de texto, es la expositivo-argumentativa.

1.b) Pragmáticamente y atendiendo a las modalidades del discurso, el análisis del texto resulta
interesante. En él, el autor nos presenta una sintomatología del “tecnoestrés” en la que predominaría la
exposición, la descripción y un tono supuestamente objetivo. Sin embargo, ni el autor es médico, ni el
tecnoestrés es una enfermedad tipificada como tal. Un análisis más detenido revela que el texto es, en
realidad, una argumentación encubierta, en la que Juan Manuel de Prada utiliza esa aparente
objetividad y algunos recursos del lenguaje científico, como argucia para persuadir al lector de la
veracidad de su tesis: la tecnología es una adicción con efectos secundarios muy negativos.
Una tesis que se presenta en la primera oración del texto, y se reitera, a modo de conclusión, al
final (carencia personal que sólo puede corregirse… mediante una mayor dependencia tecnológica),
constituyendo una estructura perfectamente cerrada. El resto del texto constituye el cuerpo
argumentativo. En él, se presentan —extremando situaciones cotidianas hasta lo hiperbólico— los
“síntomas” del llamado tecnoestrés. Dicha presentación se lleva a cabo, entremezclando lo objetivo y lo
subjetivo, haciendo un uso literario de algunos componentes del discurso científico; pues esa fingida
objetividad además de contribuir a la persuasión del lector, imprime a la exposición de la ficticia
enfermedad una verosimilitud que inquieta al lector.
Un análisis del lenguaje del texto en sus diferentes planos abunda en lo que hasta el momento
hemos comentado, en su carácter híbrido.
Así en el nivel morfosintáctico podemos observar, por un lado: la tendencia al estilo nominal
(véase la primera oración); el uso del presente gnómico; la modalidad exclusivamente enunciativa de las
oraciones; la supresión del sujeto mediante estructuras impersonales (se calcula que) o la presencia de
incisos y subordinadas explicativas… Características todas ellas propias del texto científico, y a las que
se debe ese tono fingidamente objetivo al que hemos aludido.
Siguiendo en este mismo nivel y en un sentido opuesto, también nos encontramos con un amplio
repertorio de rasgos reveladores de una profunda subjetividad y del carácter literario, argumentativo,
propio del ensayo. Rasgos como el uso del plural asociativo y de la apelación directa al lector (quizá sin
saberlo usted), con el fin de inquietarlo, implicarlo y persuadirlo; la abundancia de sustantivos abstractos
típica del discurso humanístico o el uso de una adjetivación valorativa que, en ocasiones, raya lo
metafórico (autismo afectivo, progresión subterránea) e incluso, genera el ritmo, propio de todo texto
literario, por su aplicación binaria a diversos sustantivos (expeditiva e inmediata).
En lo que se refiere al plano léxico-semántico, los aspectos más destacables serían el uso de un
registro culto, que incluye tecnicismos médicos (síntoma, patología). La creación, por parte del autor de
un neologismo (tecnoestrés), que, de hecho, constituye el leit-motiv de toda la columna. La presencia de
un conjunto de adjetivos que conforman un campo semántico del malestar (estragante, etc…), que,
además de influir de forma capital en el sentido esencial del texto, funcionan como mecanismo de
cohesión. Y, finalmente, la presencia de determinadas anomalías semánticas en la combinatoria de
significados (erosión del mundo interior, persecución de una quimera), que aproximan dichas secuencias
al terreno de recursos como la metáfora y la sinestesia, desencadenando el efecto de extrañamiento, que
de nuevo ratifica el carácter literario de este texto fingidamente objetivo.
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2.-Resumen del texto:

El ‘tecnoestrés’ es una nueva dolencia no suficientemente estudiada, cuyo síntoma principal es la
sensación de fracaso que produce en el paciente, al subestimar su capacidad frente a los artilugios
tecnológicos. Entre sus consecuencias principales, destacan la alteración de los hábitos laborales, de ocio
e incluso sentimentales, la incapacidad para valorar y ‘digerir’ la ingente información que producen las
nuevas tecnologías y, fundamentalmente, una insatisfacción interior que solo se corrige con más
tecnología.

4.a.- Analice sintácticamente estas oraciones:

El flujo incesante de información que nos proporciona la tecnología nos impide adiestrar la capacidad para digerirla.

__ __ ________ __ ______ _____ __

Nx/CD SN/ N D N N SN/
CI CD
_______________ ________ ___ _____ ___ _______
SV/PV SN/S D N Nx SV/PV

_______ ________________________ ______ _________ ___________

N Prop. Sub. Adj. Rel. /Ady N SN/CD P. S. Adv. Final
(S. Contex: Nos.)
__ _______________________________ __________________________
E SN/T SV/PV (S. Contex: Nosotros)
_ __ _______ __________________________________ __ _____ __________________________
D N Ady SP/Ady SN/ N Prop. Sub. Sust. / CD
CI
____________________________________________ __________________________________
SN/S SV/PV
Oración compleja

Se* calcula que una de cada cinco personas padecen hoy esta patología en diverso grado.

____ ____ _______ ______ _____

D D N Ady. N
__ _______________ ___ ___ _______ __ ___________
E SN/T N D N E SN/T
___ _________________ ______ ____ ___________ _____________
N SP/Ady. N Sadv./ SN/CD SP/CCM
CCT
________ ___ _____________________ ___________________________________
N Nx SN/S SV/PV
________ _____________________________________________________________
SV/PV Prop. Sub. Sust. / Sujeto
Oración compleja

*Marca de pasiva refleja.

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4b.- Analiza la estructura morfológica de inevitablemente, su proceso de formación y la categoría
gramatical a la que pertenecen.

Evitar > Evitable > Inevitable > Inevitablemente (adverbio derivado)

Evit- (Lexema).
-a- (vocal temática de la 1º conjugación).
-ble- (morfema deriv. sufijo deverbal, que forma adjetivos a partir de verbos).
–mente (morfema deriv. sufijo deadjetival, que forma adverbios a partir de adjetivos)

4c.- Explique el concepto de antonimia e indique un antónimo de inane.

Se conocen como palabras antónimas aquellas que expresan ideas opuestas o contrarias y que
pertenecen a la misma categoría gramatical; así, por ejemplo, los nombres virtud/ vicio, trabajo/
descanso; los adjetivos claro/oscuro, triste/alegre; los verbos recordar/olvidar, ir/venir; los
adverbios antes/después, bien/mal; etc. Y como las relaciones de oposición entre dos palabras son de
diferentes tipos, suelen distinguirse hasta tres clases de antónimos, según que entre dichas palabras se
establezca una relación de complementariedad macho/hembra, de reciprocidad comprar/vender o de
antonimia propiamente dicha blanco/negro.
En efecto, dos palabras son complementarias cuando la negación de una supone
necesariamente la afirmación de la otra; tal es el caso de los antónimos muerto/vivo -si de una persona se
dice que no está muerta es porque necesariamente está viva; o a la inversa-, estimar/desestimar, etc. Y
dos palabras son recíprocas cuando el significado de una implica al de la otra, como sucede con los
antónimos cobrar/ pagar -el hecho de que alguien cobre supone que haya otra persona que pague; y a la
inversa, dar/recibir, etc. Finalmente, dos palabras son antónimas propiamente dichas cuando entre ellas
se extiende una gradación; tal es el caso de los antónimos alto/bajo -ya que lo contrario de alto no es
necesariamente bajo, pues entre ambos extremos cabe la existencia de grados intermedios -caliente/frío,
etc.
Asimismo, desde una perspectiva morfológica, podemos distinguir entre antónimos
gramaticales (para obtener de una palabra su contraria, en muchas ocasiones basta con anteponerle uno
de los prefijos que expresan negación, privación o inversión del significado de la palabra simple a la que
se anteponen; y, en tales casos, los antónimos se llaman gramaticales: normal/anormal, poner/deponer,
componer/ descomponer, sentir/disentir, sano/insano...) o antónimos léxicos (cuando las palabras
opuestas son absolutamente distintas porque sus lexemas son diferentes: bueno/malo, grueso/delgado,
etc.).
En el texto, inane tiene el sentido de “insustancial”, “fútil”, “vacuo”, “vano”, “vacío”. Por lo
tanto, un antónimo contextual adecuado sería “pleno” o “lleno”.