Se desatan los vientos

Los versículos que vamos a tratar a continuación son de suma importancia para usted, por favor, preste
atención y tome conciencia de este mensaje que se nos envía desde el cielo cuando todavía Dios tiene su
brazo extendido para salvar a todo el que acuda a él en busca de auxilio.

Apocalipsis 7:1-3
1
Después de esto vi a cuatro ángeles en pie sobre los cuatro ángulos de la tierra,
que detenían los cuatro vientos de la tierra, para que no soplase viento alguno sobre
la tierra, ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol.
2 Vitambién a otro ángel que subía de donde sale el sol, y tenía el sello del Dios vivo;
y clamó a gran voz a los cuatro ángeles, a quienes se les había dado el poder de hacer
daño a la tierra y al mar,
3 diciendo:No hagáis daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos
sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Dios.
Definimos a continuación las partes que hemos destacados en negrita y en rojo:
Cuatro ángeles: hace referencia a ángeles reales que se encargan de la protección del
mundo. Satanás y sus demonios quieren destruir la tierra, pero mediante sus agentes
invisibles, los ángeles, Dios protege el planeta tierra. (ver Hebreos 1:14; Génesis 24:7;
48:16; Éxodo 23:20: 33:2; Daniel 6:22; 10:1-21; 2Reyes 6:11-17 Salmos 34:7; Isaías
63:9; Apocalipsis 5:11; 10:1-7; 18:1,21)
Cuatro ángulos de la tierra: señala la totalidad de la tierra. Indica los cuatro puntos
cardinales; norte, sur, este y oeste. (ver Mateo 24:31; Zacarías 6:1-7; Marcos 13:27;
Ezequiel 12:14; Jeremías 49:36; Isaías 11:12; Apocalipsis 20:8)
Los cuatro vientos de la tierra: hace referencia a los desastres naturales, luchas
políticas, contiendas humanas, y a destrucciones caudas por el hombre, pandemias,
plagas, etc. (ver Job 1:18,19; 1Reyes 19:11; Mateo 7:25-27; Job 30:22,23; Salmos
1:4; 11:6; 48:7; 55:8; Génesis 41:6, 23, 27; Ezequiel 17:10; Éxodo 10:13)
Los cuatro ángeles están en la tierra para evitar desastres o catástrofes de carácter
global, tienen el poder de parte de Dios para salvaguardar la tierra de la posible
extinción. 1Hay ángeles que rodean el mundo, rechazando las pretensiones de
supremacía que presenta Satanás, por causa de la vasta multitud de sus adherentes.
No oímos las voces, no vemos con nuestra vista natural la labor de estos ángeles, pero
sus manos están unidas alrededor del mundo, y con atenta vigilancia mantienen a raya
a las huestes de Satanás, hasta que se complete el sellamiento del pueblo de Dios.
Estos ángeles se unen al Espíritu de Dios para contener las paciones humanas e impedir
desastres a grandes escalas. Ellos vigilan el mundo y las acciones de los hombres (ver
Daniel 4:13,17,23,24; Proverbios 15:3; Hebreos 4:13; Job 34:21,22), hasta que el
mensaje de Dios sea predicado en toda la tierra.
Si usted nota querido amigo, estos ángeles fueron enviados por Dios para detener los
vientos ¿recuerda que significan los vientos? Destrucción, desastre en general, estos
ángeles estarán sosteniendo los vientos hasta que Dios se los ordene. Dios los envía
porque ama a los hombres, y antes de que la destrucción se desate sobre el mundo,
Dios enviará su último mensaje de misericordia para que aquellos que hagan caso
a su palabra puedan escapar de la ira venidera (Mateo 3:7). Dios no los envía a
destruir, sino, a proteger, para que el mensaje pueda avanzar en toda la tierra. Quien
destruye es Satanás (Isaías 14:16,17; Juan 10:10; Job 1:18,19).

Que los ángeles estén reteniendo los vientos de las pasiones y contenciones humana
no significa que no ocurrirán acontecimientos dolorosos a nivel local. Jesús enseñó que
a medida que nos acerquemos al fin del mundo ocurrirían en diversos lugares
terremotos, guerras y pestes, y que esto causaría dolor (Mateo 24:7,8). En ocasiones
los ángeles sueltan un poco los vientos ¿por qué razón? Para que los que se han olvidado
de Dios por los placeres de la vida, y los afanes del diario vivir, y la búsqueda insaciable
de riquezas (Lucas 8:14), recuerden que le deben su existencia al Creador del universo,
que el Altísimo gobierna sobre los reinos de los hombres, y, por lo tanto, él tiene
derecho sobre ellos, y demanda nuestra obediencia voluntaria (Daniel 5:21)

Querido amigo, 2 los ángeles están hoy reteniendo los vientos de contienda, hasta que
el mundo sea advertido acerca de su inminente destrucción; pero se está preparando
una tormenta, que se va a desencadenar sobre la tierra, y cuando Dios ordene a sus
ángeles que suelten los vientos, habrá una escena tal de lucha que ninguna pluma la
puede describir… En distintas ocasiones en el pasado fueron desatados un poco los
vientos y el número de muertos que se registraron en esas ocasiones es aterrador. De
1914 a 1919, se registraron entre 15 a 31 millones de muertos por la Primera Guerra
Mundial, esto sin contar los más de 25 millones de muertos por la gripe española. Ese
es el resultado de dejar a los hombres cosechar el resultado de sus ambiciones y su
espíritu egoísta que los domina. Una vez más se sueltan los vientos de 1939 a 1945 y
el número de fallecidos aumenta considerablemente de 55 a 70 millones. Investigue
usted amigo la causa de estos terribles enfrentamientos y se dará cuenta que siempre
fue la ambición humana, las pasiones desenfrenas de los hombres en tener más o ser
mejores.

El siglo XX fue testigo de dos titánicas guerras cuando los vientos fueron soltados un
poco y terribles fueron los resultados. El siglo XXI verá la mayor y última catástrofe
global, producto del desatamiento de los cuatro vientos. Se está preparando una
tormenta que desencadenará sobre la tierra acontecimientos tan terribles que serán
inenarrables, y ningún lugar del mundo quedará sin ser afectado. Pronto, 3todo lo que
pueda ser sacudido lo será. Cuando Dios deje de sostener los vientos, entrará en
escena Satanás (que ya está obrando con cierta restricción), el cual ya no tendrá
restricción de parte de Dios, entonces sembrará el caos y la desolación por toda la tierra
como siempre ha sido su deseo Isaías 14:16, 17.

Un poco más adelante de la mitad de segundo milenio de la creación Dios apartó su

protección de los hombres y de la tierra y el mar (Génesis 6:3), y este es el triste relato
que nos queda:

Génesis 7:11, 19, 21-23

11 El año seiscientos de la vida de Noé, en el mes segundo, a los diecisiete días

del mes, aquel día fueron rotas todas las fuentes del grande abismo, y las
cataratas de los cielos fueron abiertas, 19 Y las aguas subieron mucho sobre la
tierra; y todos los montes altos que había debajo de todos los cielos, fueron
cubiertos. 21Y murió toda carne que se mueve sobre la tierra, así de aves como
de ganado y de bestias, y de todo reptil que se arrastra sobre la tierra, y todo
hombre. 22 Todo lo que tenía aliento de espíritu de vida en sus narices, todo lo
que había en la tierra, murió. 23 Así fue destruido todo ser que vivía sobre la faz
de la tierra, desde el hombre hasta la bestia, los reptiles, y las aves del cielo; y
fueron raídos de la tierra, y quedó solamente Noé, y los que con él estaban en el
arca.

Cuando el Espíritu de Dios abandonó la tierra y dejó de contender con los hombres en
tiempo del patriarca Noé, el mal del corazón humano quedó sin freno alguno. La
descripción que hace las Escrituras de la conducta seguida por los hombres dejados a
merced de sus bajas pasiones es como sigue: los hombres se casaban con dos y tres
mujeres, la maldad aumentó considerablemente, todo lo que se pensaba en aquellos
días era solo maldad, la tierra se corrompió y se llenó de violencia, hubo mucho
derramamiento de sangre Génesis 6:1, 5, 11,13.

Cuando Dios deje de intervenir por el hombre pecador, ¡cuán terribles escenas ocurrirán
sobre la tierra! Amigo, ahora es el tiempo de asegurar nuestra vida para ese momento
que pronto nos sobrecogerá, te aconsejo que sigas el consejo de Isaías 55:6,7 “6
Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano. 7 Deje
el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual
tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar”. Salmos
107:43 dice “el que sea sabio preste atención a estas cosas y entienda…”, Jesús lo dijo
de una manera simple “El que tiene oídos para oír, oiga”. Mateo 13:9. Ahora, usted
está siendo advertido de lo que vendrá, sea sabio y ¡Escape por su vida! Génesis 19:17.

Los tiempos que vendrán son tan peligrosos que nadie velará por el prójimo, los
gobiernos no podrán proteger a sus ciudadanos, la ONU, OEA, ninguno de estos
organismos internacionales podrá socorrer a ningún humano, la Biblia dice que,
aunque estos tres hombres, Noé, Daniel y Job, estuvieran en medio de ese país, ellos,
por su justicia, sólo se salvarían a sí mismos--declara el Señor Dios. Ni a sus hijos
salvarían Ezequiel 12:14,16. Amigo, sin ánimo de atemorizarlo, quiero que sepas que
usted posiblemente se coma a su hijo por falta de alimento, Lamentaciones 4:9,10,
(ocurrió una vez en el sitio de Jerusalén en el año 70 D.C), Pablo enseñó que en los
últimos días se perdería el afecto natural 2Timoteo 3:1-5, es decir, que el amor natural
que siente hacia su esposa e hijos ahora en tiempo de paz, no lo sentirá cuando todas
estas cosas empiecen a suceder.

Nuestra intención no es crear pánico, es darle una advertencia para que pueda escapar
de todo esto que viene para nuestra tierra. Esto va a ocurrir, ¿deberíamos callarlo con
el objetivo de no crear alarma? No amigo, porque cuando ocurra muchos lamentarán
no haber sido apercibidos. En el pasado cuando Dios envió a sus mensajeros a
advertirle al pueblo de la destrucción que se avecinaba, muchos se burlaban del
mensaje y del mensajero, sin embargo, su incredulidad no convirtió el mensaje en
mentira, al contrario, se cumplió delante de los que no creían y fueron destruidos. Antes
del diluvio Dios envió un mensaje mediante Noé su pregonero 2Pedro 2:5; antes de la
destrucción de las ciudades de la llanura, Sodoma y Gomorra, el Señor dio su testimonio
mediante Lot y Abraham Génesis 19:14, antes de Nínive ser destruida fue enviado el
profeta Jonás, Jonás 3:1-4, Antes de la destrucción de Jerusalén a mano del ejercito
romano Jesús apercibió a sus seguidores para que pudiesen escapar Mateo 24:15-22.
Todos los que hicieron casos a los mensajes enviados por Dios escaparon y salvaron su
vida, los incrédulos perecieron todos en la destrucción. Así también ocurrirá en este
desenlace de la historia entre el bien y el mal, los que crean y obedezcan se salvarán
los que no crean perecerán

Dios es quien pone freno a la maldad que hay en el corazón del hombre. Si el cielo
permitiera que el hombre impusiera su voluntad se vería el caos, sufrimiento y el
servilismo al que el hombre sometería a sus semejantes. Esta última década ha sido
testigo de lo que el hombre es capaz de hacer cuando da rienda suelta a sus paciones.
Recordemos algunos eventos de los últimos cinco años:

1. Las Vegas 1 de octubre 2017, Stephen Paddock, dispara contra una multitud
desde su habitación del Hotel Mandalay Bay asesinando a 59 personas y
dejando 851 heridos. ¿Por qué lo hizo? Se sabrá cuando Cristo venga.
2. Estados Unidos, Texas, Sutherland Springs, 5 de noviembre 2017, un hombre
entra a una iglesia bautista disparando a diestra y siniestra, dejando 26
muertos y 20 heridos. ¿Por qué lo hizo? No sabemos. Solo Dios sabe.
3. Orlando, 12 de junio del 2016. Hombre entra a una discoteca gay y mata a 50
personas y 53 quedaron gravemente heridas
4. 24 de marzo 2015, Andreas Lubitz estrella un avión muriendo en el acto 144
personas
 5. 2 de abril del 2015 Ataque yihadista a la universidad de Kenia, dejando 147
muertos
6. 29 de mayo 2016, más de 700 muertos en el mediterráneo por naufragio.

¡Acaso no indica esto que el Espíritu de Dios se ha entristecido y se está retirando de

la tierra! Efesios 4:30; Isaías 63:10. Cuando los hombres hacen a un lado la justicia y
extorsionan, roban, asesinan y cometen fraudes sin límites y rechazan el amor y la
misericordia que el cielo les ofrece, al Señor solo le resta desatar sus juicios, fue lo que
ocurrió en los días de Noé. Génesis 6:13 “Dijo, pues, Dios a Noé: He decidido el fin de
todo ser, porque la tierra está llena de violencia a causa de ellos; y he aquí que yo los
destruiré con la tierra”. 4Las calamidades en tierra y mar, la inestabilidad social, las
amenazas de guerra, como portentosos presagios, anuncian la proximidad de
acontecimientos de la mayor gravedad. Las agencias del mal se coligan y acrecen sus
fuerzas para la gran crisis final. Grandes cambios están a punto de producirse en el
mundo, y los movimientos finales serán rápidos.

5 Elmomento actual es de interés abrumador para todos los que viven. Los gobernantes
y los estadistas, los hombres que ocupan puestos de confianza y autoridad, los hombres
y mujeres pensadores de todas las clases, tienen la atención fija en los acontecimientos
que se producen en derredor nuestro. Observan las relaciones que existen entre las
naciones. Observan la intensidad que se apodera de todo elemento terrenal, y
reconocen que algo grande y decisivo está por acontecer, que el mundo se encuentra
en víspera de una crisis espectacular. Los que no son religiosos ven esto, y usted ¿no
logra verlo?
Detrás de todos estos desastres que cobran la vida de cientos de personas esta la mano
destructora de Satanás, porque la mejor forma de asegurar a su víctima es matándolas,
ahora se le permite actuar bajo el poder restrictivo de Dios. Pero cuando sea quitado
de en medio lo que ahora lo detiene 2Tesalonicenses 2:7 ¿Quién podrá permanecer sin
recibir daños? Solo los que habiten bajo el abrigo del Altísimo estarán seguros y serán
protegido de la destrucción que ocurrirá en nuestro mundo Salmos 91
Dios es nuestra única esperanza en tiempos de tribulación Salmos 46:1-3, nuestra única
y mejor opción. Para los tiempos que vienen de nada nos servirá las riquezas
amontonadas Santiago 5:1-6, la sabiduría en los negocios no nos ayudará en nada
Jeremías 9:23,24; Ezequiel 28:4-7; Apocalipsis 18:11-15, confiar en el gobierno o
políticos no será seguro Salmos 146:3, ni siquiera confiar en la esposa será seguro
Miqueas 7:5 ¿entonces, en quien debemos confiar? Lea usted los siguientes textos y
saque la conclusión Salmos 127; 125:1; 146:5-7; Isaías 30:18-21. En los días de Noé,
cuando vino el diluvio, solo estuvieron seguros los que entraron en el arca que fue la
provisión que Dios hizo para salvar a todo el que creyera, igualmente ocurrirá en
nuestros días, solo estarán a salvos los que se acerquen a Dios a través de Cristo
Hebreos 4:16; 10:19-23. Cuando el mundo este pereciendo por hambre, los siervos del
Señor tendrán su pan y su agua asegurados Isaías 33:16, cuando el mundo este
temblando de miedo Ezequiel 7:17, los justos habitarán tranquilo y sin temor Proverbios
1:33, Deuteronomio 33:12
Actualmente no parece haber diferencia entre los que le sirven a Dios y los que no le
sirven Malaquías 3:18. Los malos y buenos parecen tener un mismo lugar y terminar
en la muerte sin importar el curso de vida que hayan llevado Eclesiastés 9:2. Sin
embargo, es en la crisis venidera que se revelará el verdadero carácter y se hará la
diferencia entre los que sirven a Dios y los que no. Las estrellas no brillan durante el
día, es cuando llega la noche que se ve su brillo, cuando la oscuridad llena el firmamento
es cuando las estrellas arrojan su luz, de igual modo, ocurre con los siervos de Dios.
En tiempo de paz, cuando todavía hay luz, todos parecen iguales, sin diferencia alguna,
pero cuando lleguen los tiempos de apuro de que habla la Biblia, los que no hicieron
preparativos para aquellos días, estarán atemorizados, se verán que llegó la crisis y no
tienen quien los defienda, en tanto que, los justos estarán a salvos y seguros bajo el
pabellón del altísimo Salmos 27:5; Apocalipsis 7:15
Recuerde amigo, que los ángeles fueron enviados a detener los vientos para que no
soplase viento alguno sobre la tierra, ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol
Apocalipsis 7:1. Estos tres elementos representan la vida del hombre en el planeta; la
tierra el lugar donde vive el hombre, el mar mantiene el equilibrio social y regula la
temperatura del planeta liberando oxígeno a la atmósfera, siendo además el depurador
natural por excelencia, y los árboles representan los alimentos de los hombres y de las
criaturas vivientes de la tierra. Que los vientos toquen la tierra significa terremotos,
derrumbamientos de tierra, erupciones volcánicas, guerras, etc., que toquen el mar es
sinónimo de sunami, inundaciones, tormentas, huracanes, y cualquier desastre que
produzca el mar; que los árboles sean afectados por los vientos es referencia de poca
producción, incendios forestales, plagas de cultivos y sus consecuencias derivantes.
La situación de inseguridad social, la inestabilidad política, la falta de equidad, la
explotación de la masa pobre debido a los altos impuestos impositivos de los hombres
ha desatado una ola de mal y desastres a nivel global. Basta con ver las noticias y nos
daremos cuenta de que el mundo está en conmoción. La gente está a punto de estallar
y armarse una revolución única en la historia de este siglo. 6El estado actual de las
cosas muestra que tiempos de perturbación están por caer sobre nosotros. Los diarios
están llenos de alusiones referentes a algún formidable conflicto que debe estallar
dentro de poco. Son siempre más frecuentes los audaces atentados contra la propiedad.
Las huelgas se han vuelto asunto común. Los robos y los homicidios se multiplican.
Hombres dominados por espíritus de demonios quitan la vida a hombres, mujeres y
niños. El vicio seduce a los seres humanos y prevalece el mal en todas sus formas.
Ante tanto mal, ¿no hará justicia Dios? Os digo que sí, y prestamente Lucas 18:7,8. El
Señor se levantará para castigar las maldades de los hombres Isaías 26:21, la altivez
de los hombres será abatida, y la soberbia será humillada, solo el Señor será exaltado
en aquel día Isaías 2:17. Los únicos que serán protegidos de las calamidades que
vendrá sobre la tierra son los que reciban” el sello de Dios” (hablaremos sobre el sello de
Dios más adelante), estos son los que hagan caso al último mensaje de misericordia de
Dios enviado al mundo. ¿sabes cuál es ese último mensaje? ¿lo estas escuchando y
obedeciendo, o no lo conoces aún?
Estimado lector, ¿sabe usted qué causa que los vientos se desaten? Jeremías 2:17, 19;
Números 32:23; Isaías 59:2-15. La desobediencia a los mandamientos de Dios causa
que el Señor deje de contender con los hombres permitiendo que estos reciban las
consecuencias de sus acciones. El Señor en su infinita misericordia mitiga los males que
le corresponden al hombre por sus pecados, pero cuando estos rehúsan arrepentirse y
abandonar sus malos caminos, él permite que el curso de acción de sus obras siga los
resultados ineludibles, y es, entonces, cuando se cosecha los efectos de su proceder.
Que un acontecimiento catastrófico tome el protagonismo a nivel mundial es señal de
que los vientos están siendo sueltos. La Pandemia COVID-19, es un poco de viento
suelto para que veamos los hombres y los gobiernos qué tan frágiles somos. No somos
dioses, somos débiles mortales que necesitamos el auxilio del cielo. Si un poco de viento
ha desestabilizado el mundo, perturbado a las grandes potencias, desequilibrado a los
científicos, doctores y médicos, paralizado cientos de industrias y creado una situación
global jamás vista desde que existen hombres sobre la tierra, ¡Se imagina usted que
sucedería cuando no haya más restricción de parte de Dios!
El fin vendrá y sorprenderá a millones. ¡Cuántos entonces habrán deseado que se les
hubiese hablado la verdad de manera clara! Cuando la verdad de la Palabra de Dios es
presentada con toda su luz ante nuestra conciencia, se despierta temor y ansiedad,
esta, es la obra del Espíritu Santo, para que los hombres reconozcan su falsa seguridad
en la que se han dormido, siendo así, se ve el mal, somos inducidos a preguntar ¿Qué
debo hacer para ser salvo? Hechos 16:30. Cuando la verdad de Dios brilla en el corazón,
y somos iluminados por ella, nuestro corazón comienza a arder Lucas 24:32, esto lo
hace Dios para que comprendamos que necesitamos tomar una decisión. Quedarnos
sentados siendo incrédulos y viendo que pasa, o creer y obedecer el evangelio para
salvación.
Amigo, el brazo del Señor sigue extendido para salvar Isaías 59:1, el deseo de Dios es
que los hombres hagan paz con él Isaías 27:5. Dios desea que todos los hombres sean
salvos 2Timoteo 2:4. Los juicios de Dios se han tardados por misericordia a nosotros
¡Abusaremos de su misericordia! ¡Dejaremos pasar los tiempos oportunos de gracia!
¡Oh, No, amigo, crea en el evangelio, acepte a Jesús como su Salvador, ¡corra hacia
Cristo! ¡Sea salvo!
Usted puede asegurar el bienestar suyo y el de su familia si toma la decisión correcta.
La situación actual es un pálido reflejo de lo que acontecerá muy pronto. Escape por su
vida y por la de su familia, no sea incrédulo, no hay tiempo que perder. Ahora es el
tiempo de hacernos amigos de Dios. Juan 3:16; Apocalipsis 3:20
Ahora, mientras los vientos son retenidos por cuatro poderosos ángeles es el tiempo
cuando debemos acercarnos a Dios. Ahora, cuando esta pandemia está azotando al
mundo creando pánico y angustia en las gentes es cuando debemos investigar si
andamos correctamente con Dios y si hemos escondido nuestra vida en Cristo
Colosenses 3:3. La obra del Sellamiento avanza y no se detiene, comenzó como el sol
que al principio sus rayos son tenue y ligeramente cálidos hasta que avanza y alcanza
su punto más alto en el cenit y la luz alumbra toda la tierra claramente. Su luz sigue
aumentando hasta que todos puedan ser alumbrados por ella. Hebreos 4:16. El Señor
desea que usted sea salvo y pueda escapar de todas estas cosas, no es tiempo de
dudar, es tiempo de creer y crecer en la gracia de Cristo.

Referencias
1, 2 ¡Maranata: ¡El Señor viene! 15 de septiembre, página 264
3 ¡Maranata: ¡El Señor viene! 23 de agosto.
4, 5 Eventos de los Últimos Días, Capítulo 1, página 13
6 ¡Maranata: ¡El Señor viene! 27 de enero, página 35

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