Tesis analítica de “la realidad de los profesionales de la salud”

El artículo nos refleja la cruda per necesaria realidad que están viviendo los
héroes y primeros batalladores en contra de una pandemia del Covid-19 que está
afectando a la gran mayoría de los países en el mundo. Demuestra que el
sacrificio, la dedicación y la ganas que le ponen tanto los médicos como todos los
personales de la salud a su profesión no se le está valorando, y esto se debe a
que las empresas públicas y privadas las cuales realizan sus contrataciones, no
observan o en la gran mayoría de los casos se hacen los “ciegos” a ver que sus
sueldos no son adecuados y sobre todo para unas personas que todos los días
luchan para mantener a una sociedad viva. Esto es una problemática que se viene
presentando hace mucho tiempo, solo que con la crisis que esta generando la
pandemia en los hospitales hace salir a la luz todas las crisis tanto financieras
como laborales que tienen todas están empresas.
Argumentos que sustentan la tesis
Un profesional de la salud debe atender 4 pacientes promedio por hora, lo cual en
8 horas trabajadas nos daría un total de 32 por día y si el promedio se mantiene
semanalmente atenderían a 160, y al mes 640 pacientes, lo cual reflejaría que el
salario devengado arroja el triste valor de $5.468 pesos por consulta, algo que
atenta contra la dignidad de todos los profesionales de salud .Argumentos de
hecho
El país cuenta con una red hospitalaria, tanto pública como privada, en situación
financiera precaria y al borde del colapso como lo pudo demostrar el Ministerio de
Salud en el año 2019, evidenciando que 165 hospitales públicos están en un
riesgo financiero alto, lo que a toda luz obliga al Estado a buscar una salida
urgente para lograr sostener lo insostenible. Argumentos de autoridad

Una consulta médica de calidad debe ser de al menos 20 minutos. Hoy en día los
facultativos están obligados a dedicar 10 minutos máximo a cada paciente. La
medicina no puede ser un negocio y esto quedará demostrado después de pasada
la tormenta de la covid-19 Argumentos de hecho

No es posible que actualmente un médico gane en promedio $3.500.000 al mes, la

gran mayoría vinculados por contrato de prestación de servicios y a esta
informalidad se le debe agregar la absurda carga laboral diaria, la cual realizan
muchas veces en ambientes no sostenibles y precarios. Argumentos de hecho
Ante esta gran crisis que llegó, a causa de un enema minúsculo que las
combinaciones inciertas de la genética originaron, tenemos un contingente de
soldados que son los héroes en esta lucha. Ellos son los médicos, todos esos
profesionales de la salud que arriesgan sus vidas mientras prestan su servicio en
las clínicas y los hospitales en el Mundo. Argumento racional.

Reflexión del grupo:

Mientras caen muertos y contagiados por el coronavirus, los profesionales de la
salud que constituyen el cuerpo “armado” de vanguardia en la guerra contra la
pandemia, reciben aplausos, homenajes en las redes y palmaditas en la espalda.
Pero, en la vida diaria, los discriminan en la calle y el sistema los maltrata
laboralmente: pese a su extensa preparación universitaria, no cuentan casi con
ningún derecho, se les está violando el derecho a la vida y a la dignidad, como
sabemos este virus directamente afecta la vida, La Ley Estatutaria de Salud es
muy clara en exigir respeto a la dignidad de los profesionales y trabajadores de la
salud pero, desafortunadamente, no ha sido implementada. La forma de
contratación de nuestros profesionales, es injusta: se les adeudan pagos por sus
servicios, sus ingresos no son razonables y no tienen cobertura en salud y
seguridad social porque se les vincula mediante un sistema que privilegia lo
financiero sobre el talento humano. Esta situación se hizo más crítica por el
surgimiento de la emergencia de la pandemia que puso en evidencia esa vieja
deuda social y, además, por la carencia de elementos de protección personal
para enfrentarla, lo cual los pone en una condición de mayor vulnerabilidad.
Los trabajos también tienen contrataciones injustas ya que no tienen contrato
laboral completo sino temporal. Ellos son llamados para hacer un trabajo
específico y cuando lo concluyen, se les termina el contrato. Por ejemplo, si a un
cirujano lo llama una IPS para realizar unas cirugías durante un tiempo estipulado,
se le paga por las cirugías pero no tiene ni estabilidad ni garantías: sin tiempo
permanente de servicio, sin vacaciones, sin compensaciones, sin seguridad social,
sin nada, son muy pocos los médicos que tienen un contrato fijo.
Como sabemos en los últimos días se han visto protestas de neustros médicos por
que para trabajar en áreas de alto aislamiento o cuidado intensivo se requiere una
indumentaria completa de protección compuesta por gorro, vestidos antifluido,
gafas herméticas, caretas, tapabocas N95, doble guante y polainas. Pero
solamente hay provisión de algunos de esos elementos: gorros, tapabocas
comunes , no los de mayor protección, guantes y polainas. El equipo está
incompleto. Esto implica una sobreexposición al riesgo de contaminación y si un
medico se enferma significa que no podrá seguir salvando vidas y aparte de eso
contagiara a su familia, allegados, compañeros, más personas.