La convivencia vecinal se basa en valores como la solidaridad, el respeto, la responsabilidad

mutua y la cooperación. El ejercicio de estos valores favorece el sentido de pertenecer a la

comunidad y ser considerado miembro de ella.

Cuáles son las normas de la convivencia vecinal

 En las áreas del edificio o conjunto residencial, no se arrojaran papeles ni desperdicios,

tampoco se puede ocupar espacios comunes con vehículos ni bicicletas.
 Limpiar el tramo correspondiente de la escalera, al menos una vez a la semana.
 Cuando realice remodelaciones o mudanzas, el responsable estará obligado a limpiar
todo lo que pueda ensuciar independientemente de la hora.
 No se modificarán las fachadas interiores o exteriores, el propietario que lo haga
se le exigirá que deshaga todo, y restablezca la fachada como se encontraba
originalmente.
 No se podrán colocar anuncios publicitarios, sin el consentimiento de la comunidad.
 Los copropietarios deben cuidar de no hacer ruidos que alteren la tranquilidad
del edificio.
 Se protegerán todos aquellos elementos que son de la comunidad.
 Se exigirá la reparación de los elementos comunes que hayan sido dañados.
 Los dueños de animales domésticos pondrán particular cuidado en que su presencia
no moleste a la vecindad, no está permitido que anden sueltos por las áreas comunes.
 Se recuerda a los propietarios que deben informar la posesión de animales ante
las oficinas municipales, la mascota deberá llevar siempre su identificación, ser
paseadas con su correa y, en caso de ser agresivos deben llevar bozal.
 Se prohíbe la permanencia de los perros en la terraza del edificio, es obligatorio que
pasen la noche en el interior de la vivienda.

Cuáles son los factores que favorecen la convivencia vecinal

1) Mantenimiento
Edificios y condominios cuentan con un encargado para el mantenimiento de las zonas
compartidas, esto se incluye dentro de tus gastos comunes mensuales.

2) Calidad de vida
El poder acceder a comodidades dentro del edificio o condominio, implica disfrutar de áreas
comunes para toda la familia en un entorno sano.
3) Servicios
Algunos condominios tienen beneficios como gimnasio de calidad, spa, piscina para que
puedas nadar tranquilo, entre otras actividades.

4) Precios
Los precios de arriendos pueden ser más asequibles en edificios. Te invitamos a que cotices
con calma y encuentres el que más te acomode.

5) Locación
Lo ideal es que la ubicación de tu departamento esté cercana a tu lugar de trabajo, centro de
estudios u otros lugares de esparcimiento como plazas, restaurantes, cine o centros
comerciales.

6) Seguridad
Los condominios y edificios suelen ser más seguros, esto debido a que, para ingresar, es
necesario pasar por la puerta principal, que comúnmente cuenta con un conserje. Las cámaras
de seguridad también son un plus, y además no debes olvidar que contarás con vecinos que
podrán alertarte en caso de que algo suceda.
Cuáles son los factores que favorecen la convivencia vecinal

Factores positivos para una buena convivencia:

 El respeto: debemos aceptar la dignidad de las personas con las que nos
comunicamos. No discriminarla ni tener prejuicios hacia ella. Y si tiene una opinión diferente a
la nuestra, no discutir por ello.
 La afabilidad: actitud positiva en nuestra relación con los demás. Un ambiente de
cordialidad facilitará nuestras relaciones con los demás, pero si nuestra actitud es recelosa o
indiferente, difícilmente nos llevará a una convivencia satisfactoria.
 La inteligencia: Para tratar con inteligencia a los demás, es importante saber escuchar
e intentar conocer a la otra persona y, en caso contrario, saber callar en determinados
momentos. Una persona socialmente inteligente sabe estar y comportarse con personas muy
diversas, social y culturalmente, aunque haya tenido quizá menos formación en la infancia.
  La educación: Es una de las bases de una buena convivencia, y la podemos
considerar como un resumen de los puntos anteriores.

Factores negativos para convivir:

 Los prejuicios: actitud negativa ante los demás dificultando enormemente la relación.
El prejuicio va en contra del respeto que cada persona merece.
  La intransigencia: Convivir con los demás supone un esfuerzo en conseguir puntos
de acuerdo. Para ello, todas las partes deben ceder a menudo en sus posturas. Cuando
alguien nunca está dispuesto a ceder, la convivencia no es posible.
 La falta de comunicación: la falta de comunicación provoca situaciones difíciles en
todos los ámbitos de nuestra vida, que podrían ser solventadas con una simple conversación.

Cómo se puede mejorar la convivencia en la comunidad.

La mala convivencia entre vecinos es uno de los mayores problemas con el

que se enfrentan las comunidades de propietarios. En muchos casos, “un vecino es
para siempre” por lo que se hace imprescindible forjar una buena relación con ellos por
el buen funcionamiento de la comunidad.
 Conoce a tus vecinos
De esta manera será mucho más fácil empatizar con ellos, conocer sus problemas,
sus peculiaridades… y así comprender sus comportamientos, hábitos y horarios.
Seremos mucho más comprensivos cuando un vecino tenga el volumen de la
televisión alto si sabemos que tiene un alto porcentaje de sordera o entenderemos por
qué la vecina enfermera sólo puede pasar la aspiradora de noche. Además, podremos
contar con ellos si necesitamos su ayuda en algún momento.  

2. Siempre con una sonrisa

En caso de que debamos recriminar el comportamiento molesto e incívico de un
vecino, debemos hacerlo -sin excepciones- de forma respetuosa, con mucha
educación y siempre con una sonrisa en el rostro. Debemos evitar los enfrentamientos
con los vecinos, tener mucha paciencia y ser siempre cordiales. El respeto y la
paciencia son las principales armas para una buena convivencia en la comunidad de
vecinos.  
3. Compromiso y sentimiento de pertenencia al grupo
Es importante integrarse en la comunidad, asistir siempre a las juntas de propietarios y
participar en ellas. El buen funcionamiento de la comunidad de vecinos, dependerá de
las decisiones que se tomen en juntas, por lo que no debemos mantenernos al margen
de los asuntos que afecten a la finca.
4. Respeto por las zonas comunes
Debemos considerar las zonas comunes (portal, rellanos, jardines, ascensores…) 
como parte de nuestro hogar, manteniéndolas limpias, cuidándolas y respetando los
horarios y normas de uso de las instalaciones (pádel, piscina, gimnasio…), así
aseguraremos una buena convivencia.

5. Comunicación
La comunicación es fundamental en todos los aspectos de la vida. Si vamos a realizar
obras en nuestra vivienda, vamos a celebrar una fiesta o vamos a realizar cualquier
otra actividad que pueda causar molestias a los vecinos, debemos informarles de ello.
En todas las situaciones, debemos apostar siempre por el diálogo y la escucha
activa.  

6. Apuesta por un sistema de videovigilancia

La instalación de sistemas de videovigilancia en las comunidades de vecinos, no sólo
previene delitos y amenazas externas, también soluciona buena parte de los
problemas internos (suciedad, vandalismo, pequeños hurtos…) y mejoran la
convivencia entre los vecinos. Cuando sabemos que estamos siendo grabados, somos
mucho más respetuosos y cívicos. 
7. Apóyate en tu Administrador de Fincas Colegiado
Recuerda que el Administrador de Fincas Colegiado es tu mayor aliado frente a los
problemas más habituales de convivencia, incluso puede ejercer de mediador en caso
de conflictos o rencillas entre los inquilinos.