En su trabajo como psicoterapeuta Carl Rogers se convenció de que quienes acudían a él
en busca de ayuda a sus problemas personales, realmente iban en busca de sí mismos. Mantiene que el desequilibrio y la falta de armonía psicológica es resultado de una discrepancia entre la concepción del yo y el yo real, y que la congruencia y el conocimiento de sí mismos promueven un desarrollo y funcionamiento saludable de la personalidad. Hablando de su posición sobre el yo, Rogers dice: "el yo era un elemento importante en la experiencia del cliente, y que en algún sentido extraño su meta era convertirse en su yo real”. Carl Ransom Rogers nació el 8 de Enero de 1902 en Oak Park, Illinois, Estados Unidos y murió el 4 de Febrero de 1987, San Diego, California, Estados Unidos. Psicólogo Estadounidense, iniciador junto a Abraham Maslow del enfoque humanista en psicología. Un estudio realizado entre psicólogos estadounidenses y canadienses en 1982 lo situó como el psicoterapeuta más influyente de la historia, por delante de Albert Ellis y Sigmund Freud.
Carl Rogers identificó cinco características de la persona plenamente funcional:
1- Apertura a la experiencia: Estas personas aceptan tanto las emociones positivas
como las negativas. Las emociones negativas no son negadas, sino examinadas (en lugar de recurrir a mecanismos de defensa del yo). Si una persona no puede abrirse a sus propios sentimientos, no se puede abrir a la actualización del yo.
2- Vivencia existencial: Esto consiste en estar en contacto con las diferentes
experiencias tal y como ocurren en la vida, evitando prejuzgar y las preconcepciones. Incluye ser capaz de vivir y apreciar de forma plena el presente, no estar siempre mirando al pasado o al futuro, ya que el primero se ha ido y el último ni siquiera existe. Esto no significa que no debamos aprender de lo que nos ocurrió en el pasado o que no debamos planificar cosas para el futuro. Simplemente, debemos reconocer que el presente es lo que tenemos. 3- Confianza en nuestro organismo: Hay que prestar atención y confiar en los sentimientos, instintos y reacciones viscerales. Debemos confiar en nosotros mismos y hacer aquello que creemos que es correcto y que surge de forma natural. Rogers se refiere con esto a la confianza que debemos tener en el propio yo, indispensable para estar en contacto con la auto-actualización.
4- Creatividad: El pensamiento creativo y la asunción de riesgos son características de la
vida de las personas. Esto incluye la habilidad para ajustarse y cambiar buscando nuevas experiencias. Una persona completamente funcional, en contacto con la propia actualización, siente el impulso natural de contribuir a la actualización de los que le rodean. Esto se puede realizar mediante la creatividad en las artes y las ciencias, a través del amor paternal o, simplemente, llegando a hacer lo mejor posible el propio oficio. 5- Libertad experiencial: Las personas plenamente funcionales están satisfechas con sus vidas, ya que las experimentan con un verdadero sentido de libertad. Carl Rogers afirma que la persona que funciona plenamente reconoce el libre albedrío en sus acciones y asume las responsabilidades de las oportunidades que se le brindan.