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Este documento describe una variante del juego de la rayuela llamada "la charranca" y ofrece sugerencias para adaptarlo a niños de diferentes edades y habilidades. Propone cambiar el diseño del tablero colocando nombres o símbolos en lugar de números, y variar las reglas requiriendo que los jugadores repitan los nombres de las casillas que pisan o cambiando la posición del cuerpo requerida. El objetivo es hacer el juego más desafiante mientras enseña contenido como los nombres de los apóstoles.
Este documento describe una variante del juego de la rayuela llamada "la charranca" y ofrece sugerencias para adaptarlo a niños de diferentes edades y habilidades. Propone cambiar el diseño del tablero colocando nombres o símbolos en lugar de números, y variar las reglas requiriendo que los jugadores repitan los nombres de las casillas que pisan o cambiando la posición del cuerpo requerida. El objetivo es hacer el juego más desafiante mientras enseña contenido como los nombres de los apóstoles.
Este documento describe una variante del juego de la rayuela llamada "la charranca" y ofrece sugerencias para adaptarlo a niños de diferentes edades y habilidades. Propone cambiar el diseño del tablero colocando nombres o símbolos en lugar de números, y variar las reglas requiriendo que los jugadores repitan los nombres de las casillas que pisan o cambiando la posición del cuerpo requerida. El objetivo es hacer el juego más desafiante mientras enseña contenido como los nombres de los apóstoles.
Seguro que conocéis este juego. El niño debe situase detrás
del primer número, con la piedra o un objeto liso en la mano, y ha de lanzarlo. El cuadrado en el que caiga se denomina "casa" y no se puede pisar, debe saltarse. El niño comienza a recorrer el circuito saltando a la pata coja en los cuadrados, o con los dos pies si se trata de un cuadrado doble.
Os propongo que lo adaptéis según las habilidades y
necesidades psicomotrices de vuestros hijos o hijas. Las variaciones pueden de tres tipos según la dificultad que deseéis alcanzar:
a. Variar el dibujo en el suelo. El diseño original se traza con tiza o cinta
adhesiva en el suelo y tiene 9 casillas, pero podéis cambiar la tiza o cinta por papeles de colores, folios o dibujos. Las casillas también se pueden organizar en función de los nombres que queráis que aprendan. Os adjunto un modelo como guía:
b. Variar los nombres para aprender. En lugar de poner números, podéis
utilizar nombres (los 12 apóstoles, los hijos de Jacob, las escrituras hebreas o las griegas…). En este caso, deberán repetir y memorizar los nombres de cada una de las casillas que pisen. c. Variar el pie que debe apoyarse y la posición. Si queréis trabajar más la coordinación y el equilibrio, podéis añadir dibujos de la planta de los pies y las manos hasta complicar el recorrido (¿conocéis el juego Twister? pues sería una mezcla de los dos). Éste sería un ejemplo para aprender los nombres de los apóstoles (en los cuadrados dobles he aprovechado para poner los que son hermanos y añadir alguna característica para fijar los nombres, como un trueno para Santiago y Juan, hijos de Zebedeo conocidos como “hijos del Trueno”):