UNA NUEVA TECNOLOGÍA REDUCE UN 80% EL TIEMPO DE

RADIOTERAPIA Y MEJORA EL CONTROL TUMORAL

El 21 de diciembre, se
celebra en todo el Estado el
día nacional del niño con
cáncer. Coincidiendo con
esta efeméride se ha hecho
público un artículo de
investigación aparecido en
el último número de la
revista científica
International Cancer Management and Research, ponía ya recientemente de
manifiesto que la nueva tecnología de radioterapia para pacientes con cáncer
denominada arcoterapia volumétrica de intensidad modulada (VMAT), mejora
sensiblemente la eficacia de la radioterapia a pacientes con cáncer.

Gracias a la tecnología VMAT, los pacientes oncológicos de radioterapia

pueden ser tratados en un menor tiempo, con una mayor intensidad de la
radiación sobre la zona tumoral y con una mayor protección para el tejido
sano circundante que la radioterapia convencional.

El VMAT se aplica con éxito en un amplio número de tumores. No obstante,

debido a la alta complejidad del proceso que sincroniza la entrega de
radiación en el tumor, incluso, con la respiración del paciente (es lo que se
conoce como tratamientos 4D que implican las tres dimensiones del espacio
junto con el tiempo) la optimización del plan de tratamiento y el cálculo de las
dosis es más complejo y requiere a los profesionales sanitarios más tiempo
de planificación.
Mejor control tumoral

Clínica IMQ Zorrotzaurre utiliza ya de forma habitual esta nueva técnica con
el acelerador lineal Varian TrueBeam de que dispone en su Unidad de
Oncología, el acelerador de última generación más avanzado del mercado y,
hasta hoy, con la presentación del nuevo acelerador lineal del Hospital
Universitario Cruces, el único que existía en Euskadi. Hace casi un año que
el centro hospitalario de IMQ emplea este dispositivo.

Según señala, el doctor Pedro Ensunza, presidente de Grupo IMQ, jefe de

servicio de Oncología Radioterápica de la Clínica Zorrotzaurre y responsable
del manejo del acelerador lineal, “la arcoterapia volumétrica dinámica de
intensidad modulada o VMAT nos permite realizar tratamientos más cortos,
con mayor seguridad y precisión, lo que permite irradiar volúmenes más
pequeños a dosis más altas, con menores dosis de radiación de los tejidos
sanos que rodean al tumor, y por lo tanto, con mayor eficacia en los
resultados, es decir, con mayores tasas de control tumoral y menor toxicidad
en los tejidos sanos”.

Reducción del tiempo de tratamiento en un 80%

Esta nueva técnica radioterápica “proporciona distribuciones de dosis más

conformadas y homogéneas si se compara con la radioterapia de intensidad
modulada segmentada o dinámica”, indica Pedro Ensunza. Al utilizar tasas
de dosis más altas, “se reduce de forma considerable el tiempo de
administración del tratamiento, consiguiéndose reducciones de hasta un 75 u
80% en la duración del tratamiento de cada sesión y, en consecuencia, el
tiempo que el paciente debe permanecer en la sala de tratamiento, en
comparación con la radioterapia convencional”.
Diversas localizaciones

La técnica del VMAT permite, al mismo tiempo, tratar “cualquier tipo de tumor
en cualquier localización anatómica”, según señala también el doctor. Las
patologías que más frecuentemente se abordan son “los tumores cerebrales,
los tumores de cabeza y cuello, cáncer de pulmón, cáncer de aparato
digestivo (esófago, páncreas, hígado, etc.), cáncer de útero, cáncer de
próstata y cáncer de vejiga, y metástasis vertebrales únicas, minimizando el
riesgo de lesión de la médula espinal”.
 Opinión

La nueva tecnología aplicada nos brinda como beneficio la reducción de

tiempo y daño en el tejido sano de un paciente, lo cual es un gran avance en
el campo de la medicina, ya que comparándolo con el método tradicional de
la quimioterapia convencional, se producía ese inconveniente.

En mi opinión personal puedo destacar lo siguiente por un lado se

beneficiaría por mucho el sector salud; ya que permite reducir el tiempo
estimado de quimioterapia, por lo que por un lado si nos ponemos a pensar
es una gran ayuda tanto para el enfermo como para el personal de medicina.

Además de que permite tratar diversos tipos de cáncer, por lo que es una
buena opción, ya que no se limita a uno solo. También, la razón de que sea
muy seguro es lo que beneficia.

Por ende, a mi consideración es una tecnología que debería de comenzar a

ser adentrada en los hospitales, ya que muestra resultados eficaces y
confiables, da esperanza de vida tanto a la familia y al paciente.

Reduciendo además la tasa de mortalidad y un tratamiento más eficaz y el

tratamiento un 80% más rápido siendo esto considerablemente un porcentaje
muy prometedor.

Si fuera mi situación me gustaría ser tratada con este proceso mucho más
corto, menos dañino y seguro a la vez, es una buena opción y un gran
avance científico.