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Distribución de momentos Método de Croos

1. Se aplica al cálculo de todo tipo de estructuras con nudos rígidos.

2. Momento transmitido es el momento que se produce en el extremo empotrado de una

viga por la acción de otro momento aplicado al extremo.

Considerémosla viga empotrada y articulada de la figura. Si se aplica en B un momento MB,

la viga se deforma con se indica, y se produce en A un momento Ma de empotramiento.

La desviación de B con respecto a la atíngete trazada pro A es nula debido al empotramiento

perfecto en A, por lo tanto:

El resultado demuestra que un momento aplicado en la articulación B transmite a

empotramiento A un momento de valor igual a un medio de aquél y de sigo contrario.


Un segundo concepto es el de rigidez de la viga, que es el momento necesario en el extremo

apoyado para producir un giro unitario en este extremo permaneciendo el otro empotrado.

Esto no quiere decir que se vaya a producir realmente un desplazamiento angular de la viga,

son simplemente que se trata del momento por unidad de giro.

Haciendo que el ángulo = 1 radian, se obtiene el valor de la rigidez absoluta de la viga

E es constante por lo tanto se tiene la rigidez relativa

Ahora ya se puede describir cualitativamente el método de distribución de momentos.

La viga continua de la figura 8-19a está perfectamente empotrada en A y C y simplemente

apoyada en B. Supóngase que, de momento, la viga no puede girar en B, como si estuviera

empotrada (nudo fijo), por lo que los tramos AB y BC trabajan como dos vigas perfectamente

empotradas en sus extremos, sometidas a las cargas P y Q, respectivamente, y en las que

aparecerán los momentos de empotramiento correspondientes. Supongamos que tales momentos,


que se llaman momentos de empotramiento perfecto (MEP), tienen los valores indicados en la

figura 8-19b.

Soltemos la sujeción que impedía girar a B; la diferencia entre los MEP a uno y otro lado del

nudo da lugar a un momento de 30 N·m que, al no estar equilibrado, hace girar al nudo B como

indica la figura 8-19c hasta que se equilibran los momentos a uno y otro lado. Es evidente que el

momento a la izquierda de B se incrementará en alguna cantidad, por ejemplo, 20 N.m y el de la

derecha disminuirá en 10 N·m, que es la diferencia respecto de 30, desequilibrio inicial de los

MEP. Se observa, pues, como el momento no equilibrado se distribuye entre los dos tramos al

permitir el giro de B. La rotación de B producida por estos momentos distribuidos induce en A y

C momentos transmitidos de la mitad de su valor y de signo contrario. En la figura 8-19c se

indica con unas flechas la transmisión de estos momentos.


El momento de 30 N·m (diferencia de MEP) en B se distribuye entre las dos vigas de forma que

ambas han de tener el mismo ángulo de rotación en B, lo que indica que un momento no

equilibrado se distribuye proporcionalmente a las rigideces de las vigas adyacentes y, por tanto,

cada una de dichas vigas tendrá un coeficiente o factor de distribución, FD, definido por:

siendo K la rigidez de la viga y EK la suma de las rigideces de todas las vigas que concurren en

un nudo. Si las vigas son del mismo material, como es corriente, basta con emplear la rigidez

relativa, y si además tienen la misma sección, el valor de K relativo es inversamente

proporcional a la longitud (ecuación 8-5). Al distribuir los MEP, el objetivo es llegar al

equilibrio en el nudo B, libre de girar.

Los momentos totales de la figura 8-19d se obtienen por superposición de los MEP de la figura

8-19b y de los momentos de distribución y de transmisión de la figura 8-19c.

Reglas de Signo

En el estudio realizado se han considerado los signos de los momentos convencionales. Este

método requiere que los momentos transmitidos sean de signos contrarios y, con frecuencia,

conduce a cierta confusión al tenerse que fijar muy atentamente en el signo del momento no

equilibrado que se ha de distribuir, especialmente cuando se trata de un nudo en el que concurren

más de dos barras.

Con este criterio, se consideran positivos los momentos que actúan en una viga en sentido

contrario al del reloj, y los pares en sentido del reloj, negativos. Como consecuencia, tienen lugar
dos modificaciones importantes. La primera es que los momentos transmitidos son del mismo

signo. La segunda es que, al distribuir el momento no equilibrado en cada nudo, los momentos

distribuidos son del mismo signo y están aplicados de forma que la suma algebraica de los

momentos totales en cada nudo es nula.

Resumiendo, el método de distribución de momentos tiene las siguientes fases:

1. Se supone que todos los nudos son rígidos y se calculan los momentos de emporra miento

perfecto (MEP) para cada claro, considerado como viga empotrada en sus extremos. La Tabla 7-

2 ayudará al cálculo de estos MEP.

2. Se deja girar libremente a cada nudo y se distribuye el momento no equilibrado entre todas las

barras adyacentes, por medio de los factores de distribución, ecuación (8-6). A continuación, se

vuelve a bloquear el nudo contra el giro.

3. Una vez distribuido el momento no equilibrado, se transmite su mitad con el mismo signo al

otro extremo de cada barra.

Esto completa un ciclo de distribución. Las fases 2 y 3 se repetirán, en general, debido al nuevo

desequilibrio producido por los momentos transmitidos. El procedimiento se realiza

iterativamente hasta que los momentos transmitidos sean nulos o despreciables. El cálculo
concluye con una distribución, no con una transmisión. La exactitud del resultado depende

iteraciones. En general, no son necesarios más de cuatro porque el desequilibrio producido por

los momentos transmitidos decrece rápidamente.

Los siguientes ejemplos muestran la forma de disponer los cálculos con algunas

modificaciones y simplificaciones del método.

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