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FUNDAMENTOS SOBRE LIQUIDOS DE FRENOS

Es el fluido encargado de transmitir la fuerza de frenado a través del sistema hidráulico.


Cuando el líquido de frenos es sometido a presión por el cilindro maestro, empuja los
cilindros de los calipers contra las pastillas, produciéndose así la acción de frenado.
El líquido de frenos posee unas características que son deseables para su buen
desempeño:
• Punto de ebullición alto
• Punto de congelación bajo.
• Baja viscosidad para desplazarse rápidamente por el sistema.
• Debe ser lubricante para asegurar el buen funcionamiento de los elementos móviles
del sistema de freno con los que se encuentra en contacto.
• Debe ser estable químicamente, para no corroer los elementos metálicos del sistema
de freno con los que se encuentran en contacto.
• Su composición no debe afectar las partes de hule que componen el sistema.

Los líquidos de freno automotrices deben satisfacer la normativa estadounidense de la


Federal Motor Vehicle Safety Standard número 116 (FMVSS 116). Para el cumplimiento
de dicha normativa, se realizan pruebas al líquido de freno, con el objetivo de garantizar
que sus principales parámetros de desempeño, se encuentren dentro de niveles
deseables. A continuación se presenta un resumen de las pruebas que avalan un líquido
de frenos para cumplir con la norma FMVSS 116.

• ERBP(Equilibrium Reflux Boiling Point): En esta prueba, se toman mediciones de la


temperatura de ebullición en seco o la temperatura de ebullición cuando el líquido es
“nuevo”. El valor de esta temperatura se debe encontrar significativamente por encima
de la temperatura promedio de operación del sistema de frenos, lo cual garantiza un
buen desempeño del fluido.
• WERBP(Wet Equilibrium Reflux Boiling Point): En esta prueba, se toman mediciones
de la temperatura de ebullición húmeda o temperatura de ebullición del líquido de
frenos luego de haber absorbido un 3% de su volumen en humedad. Debido a que el
líquido absorbe humedad, el punto de ebullición baja.
• Viscosidad a - 40 °C: Se busca probar que la viscosidad del líquido de frenos a
temperaturas muy bajas, se mantenga a un nivel tal que el sistema de frenos funcione
correctamente, evitando fallas en el sistema.
• Viscosidad a 100 °C: Bajo condiciones normales de operación, el líquido de frenos
alcanza con facilidad temperaturas cercanas a 100°C y su viscosidad cae
considerablemente. Al disminuir mucho la viscosidad, se pueden producir fugas de
líquido de frenos en el sistema hidráulico, lo que trae como resultado fallas en los
frenos. Esta prueba asegura la viscosidad del fluido de frenos necesaria, para un buen
desempeño a altas temperaturas.

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• Prueba de PH: Es una prueba química estandarizada que proporciona una medida
del balance de inhibidores que se deben añadir al líquido de frenos para proteger de la
corrosión a los componentes metálicos del sistema de frenos. Con esta prueba se
asegura que el líquido de frenos posea la formulación correcta para neutralizar el
efecto de los ácidos que se forman en el sistema hidráulico.
• Estabilidad a alta temperatura: El líquido de frenos opera a altas temperaturas por
largos períodos de tiempo. Si no se formula correctamente con agentes anti-
oxidantes, el líquido de frenos se degradará, dando como resultado la disminución del
punto de ebullición y la formación de corrosión. Esta prueba mide la resistencia del
líquido de frenos a degradarse por la acción del tiempo y las altas temperaturas.
• Estabilidad química: Esta prueba busca medir el nivel de compatibilidad química de
un líquido de frenos al mezclarlo con otros por extensos períodos de tiempo y altas
temperaturas. La prueba simula esta condición, utilizando una muestra de un líquido
de frenos de referencia que posee una composición definida y mezclando ésta en
iguales volúmenes con el líquido de frenos que estamos probando.
• Corrosión: En esta prueba se toman muestras de los siete metales más comúnmente
utilizados en el sistema de frenos hidráulico y se colocan en una muestra de líquido de
frenos usado, (que ya haya absorbido un porcentaje de humedad mayor al 2%), a
100°C por 120 horas.
Al final de la prueba se determina la pérdida de peso de las muestras de metal, así
como también, su apariencia. Los resultados de la prueba indican el grado de
protección contra la corrosión que el líquido de frenos puede proveer.
• Evaporación: El líquido de frenos opera a altas temperaturas por extensos períodos
de tiempo. Si el líquido de frenos no es formulado correctamente, puede evaporarse,
dando como resultado la disminución de su nivel. Mediante esta prueba se mide la
razón de evaporación del líquido de frenos, para asegurar su desempeño satisfactorio
en el tiempo.
• Gravedad específica: Es la relación del peso de un volumen dado de líquido de
frenos con el peso de un volumen igual de agua. Es muy útil, pues su valor nos indica
la consistencia del producto.

• Contenido de agua: Conforme el contenido de agua del líquido de frenos aumenta,


su punto de ebullición disminuye. Por tal razón es importante evitar el incremento del
contenido de humedad en el líquido de frenos. Este test se utiliza para determinar el
contenido de agua del líquido de frenos en cada

• Fluidez a bajas temperaturas: Es un test adicional al de viscosidad a -40°C. Se


realiza bajando la temperatura del líquido de frenos entre -40°C y -50°C y
determinando en qué punto, éste permanece en estado líquido. Con esta prueba se
asegura proporcionar al líquido de frenos un desempeño apropiado en condiciones
muy severas de baja temperatura.
• Tolerancia al agua: Mediante esta prueba se determina el comportamiento del líquido
de frenos a -40°C y 60°C después de un incremento en el contenido de agua. Esto
asegurará que el líquido de frenos permanezca en estado líquido y que su contenido
de agua no produzca la precipitación de los aditivos que posee, causando a su vez,
obstrucciones en las tuberías del sistema hidráulico.

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• Compatibilidad: Esta es otra prueba realizada para determinar el comportamiento de
un líquido de frenos al mezclarse con otros. En esta prueba, una mezcla del líquido
que se desea probar e igual volumen de un fluido de referencia, se almacenan a -40°C
y 60°C por espacio de 24 horas. Al final de la prueba, las muestras deben permanecer
con una coloración clara y libre de precipitaciones.

• Efecto sobre los elastómeros (Cauchos): Los elastómeros se utilizan para producir
sellos y mangueras que son parte integral del sistema hidráulico de frenos. Es
esencial que el líquido de frenos sea compatible con dichos elastómeros para
garantizar un buen desempeño del sistema de frenos hidráulico.
En esta prueba, se toman muestras de elastómeros y se colocan en recipientes con
líquido de frenos a altas temperaturas por un período de tiempo definido. Los cambios
presentados en las muestras, tanto en dimensión como en dureza, se comparan
contra parámetros establecidos, definiendo así, los niveles de tolerancia.

• Resistencia a la oxidación: El líquido de frenos debe presentar una gran resistencia


a la oxidación durante su vida útil. En esta prueba el líquido de frenos se somete a
condiciones extremas de funcionamiento y al final de ésta, se mide la corrosión
presente en el aluminio y el hierro fundido y la tendencia a la formación de residuos
gomosos que puedan dificultar el fácil deslizamiento de las partes móviles del sistema
de frenos.
• Prueba de "stroking": es una prueba en la que se utiliza una muestra de líquido de
frenos "envejecido" y se simula el proceso de frenado, repitiéndolo 85000 veces, bajo
condiciones variables de temperatura. Al final de la prueba, el sistema se examina
para buscar pérdidas de fluidos o daños en sus componentes. Si se obtienen
resultados que concuerden con los parámetros de la prueba, se asegura que el líquido
de frenos presentará un desempeño satisfactorio, por encima de su vida útil de
servicio estimada.

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La SAE (Society of Automotive Engineers) y el DOT (Departament of Transportation), han
establecido especificaciones para el líquido de frenos, tomando como referencia su punto
de ebullición en seco y su punto de ebullición húmedo, (ERBP y W ERBP) .

DOT 3 DOT 4 DOT 5


Punto de ebullición seco (ERBP)
°F 401 446 500
°C 205 230 260
Punto de ebullición húmedo (WERBP)
°F 284 311 356
°C 140 155 180

Los líquidos de frenos DOT3 y DOT4 son fabricados a partir de éteres de poliglycol y
poseen la característica de ser higroscópicos, o sea, absorben humedad y se mezclan
con ésta fácilmente. Los líquidos de freno basados en éteres de poliglycol absorben
humedad dentro del sistema de frenos, a través de costuras microscópicas y alrededor de
los sellos. La humedad disminuye el punto de ebullición del fluido de frenos y provoca
corrosión en las partes del sistema hidráulico de frenos. La presencia de humedad
produce que el pedal se sienta esponjoso o que se vaya hasta el fondo.
Además, los líquidos de freno basados en éteres de poliglycol, son fuertes disolventes por
lo que no deben entrar en contacto con la pintura de los vehículos, piel, ojos o vías
respiratorias.

• DOT3: Es el más comúnmente utilizado, absorbe un 3% de su volumen de agua por


año, es un disolvente muy fuerte y se recomienda no tomarlo de un recipiente abierto
por su afinidad con la humedad.

• DOT4: Se le conoce como fluido LMA (Low Moisture Absortion o fluido de baja
absorción de humedad). El punto de ebullición de este tipo de fluido es mayor, lo cual
lo hace más apropiado para aplicaciones que exigen un máximo desempeño. Es más
costoso que el DOT3. Absorbe un 3.5% de humedad

• DOT5: Se le conoce como fluido de frenos de silicón, se fabrica a partir de polímeros


de silicio y es de color violeta. El fluido de frenos de silicona es no higroscópico, esto
es, que no absorbe ni se mezcla con el agua. El sistema hidráulico que utiliza DOT5
es más difícil de purgar pues el aire atrapado se expande al aumentar la temperatura
lo cual ocasiona que el pedal se sienta esponjoso, entonces la presión ejercida sobre
el sistema hidráulico comprime el aire del sistema y no se logra transferir la fuerza
requerida a los cilindros de las ruedas. Lo anterior se traduce en un bajo rendimiento
del frenado. Lo mismo ocurre cuando entra agua en el sistema y ésta se evapora por
efecto de la temperatura. Es importante resaltar que el fluido DOT5 no se debe
mezclar con ningún otro tipo de fluido de frenos. Su precio es superior al de los
líquidos DOT3 y DOT4. Encuentra sus principal aplicación en vehículos militares.

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• DOT 5.1: Es un líquido de frenos relativamente nuevo, que utiliza como base éteres de
poliglycol. Su codificación tiende a confundir, pues se pensaría que el líquido de frenos
DOT 5.1 es un DOT 5 mejorado. Sin embargo, se trata de un líquido DOT 4 mejorado.
Encuentra principal uso en aplicaciones de muy alto desempeño, pues posee un punto
de ebullición superior a cualquiera de sus predecesores.
ERBP (Punto de ebullición en seco): 275 °C
W ERBP (Punto de ebullición húmedo): 175-200°C

El líquido de frenos DOT 5.1 es compatible con todas las formulaciones de caucho. Al
igual que el resto de los líquidos de freno fabricados a base de éteres de poliglycol, es un
poderoso disolvente.

ACUMULACIÓN DE PRECIPITADOS EN EL SISTEMA DE FRENOS HIDRÁULICO

La acumulación de precipitados en el cilindro maestro, debe ser una alerta que nos indica
la presencia de corrosión en el sistema hidráulico. Además, nos indica que debemos
realizar cambio del líquido de frenos y una revisión rigurosa de todo el sistema. Por tal
razón, en el presente documento se ha querido tratar dicho tema aparte.

Según estudios realizados, los precipitados que se encuentran en el sistema de frenos


hidráulico se pueden producir por dos factores principales.

• Corrosión:

La corrosión se produce al reducirse el porcentaje de inhibidores de corrosión


contenidos en el fluido de frenos y la acumulación de humedad en el mismo fluido.
Las evidencias de corrosión se presentan como picaduras en las partes del sistema de
frenos que son de fundición de hierro y algunas veces, estas picaduras se encuentran con
depósitos o formaciones de cobre, acompañadas de una sustancia gelatinosa.
Estudios han demostrado que el cobre es el principal contaminante que aparece en el
fluido de frenos, muy por encima de la humedad que se absorbe del ambiente. Tiene un
efecto directo en la corrosión del sistema de frenos e indirecto en la degradación o
"desgaste" del líquido de frenos.
El cobre aparece en el sistema de frenos, pues las tuberías del sistema se encuentran
recubiertas de una aleación de cobre. Las tuberías de freno son el componente del
sistema que posee una mayor área y sufre una corrosión que ocurre a una baja
proporción, a lo largo de todas las tuberías por meses o años. Esta lenta corrosión del
cobre, se va acumulando como cobre pulverizado en todo el sistema de frenos y da como
resultado la formación de iones de cobre en el fluido de frenos. Estos iones actúan como
agentes oxidantes y cuando los inhibidores de corrosión del fluido de frenos pierden
efectividad, estos iones comienzan a atacar las partes de aleación de hierro que
componen el sistema de frenos.
Según la hipótesis de la National Institute of Standards and Technology, la corrosión
del cobre inicia desde que el vehículo es nuevo y se produce a un ritmo que es limitado
por los antioxidantes contenidos en el fluido de frenos y la efectividad de los inhibidores
de corrosión, también presentes en el fluido de frenos.
El cobre se encuentra en estado galvánico, (corrosión galvánica), con otros metales
activos, la baja conductividad del líquido de frenos permite que el cobre tienda a corroer el
resto de las partes metálicas del sistema de frenos.
La corrosión producida por el cobre actúa como una alarma para el inicio de la corrosión
en otras partes del sistema. Cuando los niveles de cobre disueltos en el fluido de frenos,

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alcanzan niveles por encima de las 200 ppm, aparecen partículas de fundición de hierro
disueltas en el fluido de frenos. Si se observan cantidades significativas de hierro
disueltas en el fluido de frenos, entonces está ocurriendo una corrosión severa.

La humedad absorbida del ambiente por el fluido de frenos, al combinarse con el cobre
disuelto, da como resultado partículas de óxido de cobre e iones de hidrógeno que
provocan la corrosión del hierro. Por esto se dice que el cobre actúa como un catalizador
que acelera la corrosión en el sistema de frenos.
Se recomienda entonces, realizar el cambio del fluido de frenos cuando:

• El fabricante del fluido de frenos así lo indique.


• Los contenidos de cobre en el fluido de frenos, superan las 200 ppm. Esta proporción
se determina por medio de una prueba sencilla en la cual se introduce en el recipiente
del cilindro maestro "dipstick" provisto de un reactivo, que dependiendo del color que
presente luego de introducirse por un segundo en el fluido de frenos, se determina por
medio de una tabla de colores, la proporción de cobre disuelta en el fluido de frenos.

• Debida instalación de las pastillas

En menor escala, otra situación que produce la acumulación de precipitados en el cilindro


maestro, está relacionada con la debida instalación de las pastillas de frenos. Los
pistones de los callipers se encuentran expuestos a suciedad y humedad, parte de esta
suciedad se transfiere por el sistema de frenos hasta el cilindro maestro cuando se realiza
un servicio de cambio de pastillas y se fuerzan los pistones de los cilindros de los callipers
hacia atrás sin aislar los callipers del resto del sistema.

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