Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
SOCIAL
JORGE BOTELLA
INDICE
INTRODUCCIÓN
CAPÍTULO 1
La creatividad.
La libertad.
La responsabilidad.
CAPÍTULO 2
EN RELACIÓN: LA SOCIEDAD
Concepto de relación.
Tipos de relación.
Causa de la sociedad.
La sociedad creada.
CAPÍTULO 3
LA ÉTICA EN LA SOCIABILIDAD
Concepto de ética.
La relación ética.
Relaciones de servicio.
Relaciones de dominio.
CAPÍTULO 4
El trabajo transformador.
Reinversión de recursos.
CAPÍTULO 5
VALORES SOCIALES
Naturaleza de valor.
Equidad.
Justicia.
Libertad.
Concertación y participación.
Solidaridad.
Globalización.
Paz.
CAPÍTULO 6
CONTRAVALORES SOCIALES
Poder.
Subyugación.
Marginación.
Corrupción.
Proteccionismo.
CAPÍTULO 7
COMUNIDADES DE CONVIVENCIA
Familia.
Tribu.
Municipio.
Nación.
Estado.
Instituciones internacionales.
CAPÍTULO 8
COMUNIDADES LABORALES
Explotación familiar.
Empresa.
CAPÍTULO 9
COMUNIDADES EDUCATIVAS
Derecho a la educación.
Libertad en la educación.
Difusión de la cultura.
CAPÍTULO 10
ASOCIACIONES
Concepto de asociación.
Políticas.
Esparcimiento.
Laborales.
Religiosas.
Asistenciales.
CAPÍTULO 11
EDADES SOCIALES
Conflicto generacional.
Jubilación.
Vejez.
INTRODUCCIÓN
Una forma de definir la Filosofía es considerarla como el conjunto de teorías que tienen
Desde esta perspectiva todas las demás ciencias guardan relación con la Filosofía en cuanto
que el conocimiento de los objetos materiales que abordan evidencian contenidos de verdad
de una parte de la realidad. Los ámbitos de las ciencias especifican el saber sobre una
realidad, pero como la realidad es la misma para todas las ciencias, predican de los mismos
objetos desde diversos aspectos, lo que puede ofrecer teorías distintas, pero que -no
sociales, la Sociología y la Moral; y además todas ellas estudian aspectos de la vida del ser
muy variadas disciplinas, las cuales cada una ofrece teorías sobre aspectos determinados y
concretos del saber específico sobre un contenidos de esa realidad. El conjunto de todo ese
sus tesis.
radicalidad.
Que las ciencias estudien la realidad no limita el ámbito de conocimiento de lo que pudiera
haber sido distinto, porque existe un factor de indeterminación que procede de las
aplicaciones de los actos de unos entes sobre otros que, aunque sigan una ley predecible,
los efectos pueden variar por la contingencia implícita de la misma ley, por lo que el
hubiera podido ser distinta. Desde ese punto de vista el conocimiento de la ciencia aplicado
sobre la realidad no puede ser considerado como un saber absoluto, porque lo que pudiera
las especies que pueda hacer desaparecer el hombre por su acción destructiva sobre la
naturaleza y el potencial genético evolutivo perdido de lo que la vida había destinado a ser.
Por ello se suele decir que ningún saber abarca toda la verdad sobre la existencia y la
realidad, incluyendo sus causas, determinaciones y fines, lo que no es lo mismo que admitir
que no pueda existir un conocimiento cierto sobre muchas cosas, del que se pueda asegurar
que domina la verdad sobre esas realidades, pero cabe la posibilidad de que ningún
conocimiento sea tan cierto que abarque la plena verdad de lo que algo es. Admitiendo que
el conocimiento cierto existe, posiblemente quepa que todo acto de conocimiento pueda
perfeccionarse penetrando más en la verdad de lo que cada ser es, por una mayor
especificación sobre su modo de ser. Ese es el empeño de progreso de todas las ciencias.
La Filosofía busca conocer de todo lo que es y cuál sea su respectiva forma de ser. Su
objeto material son las realidades materiales e inmateriales en cuanto que tienen ser por el
que son en cuanto entidad, incluso aunque fueran entes de razón, con independencia de la
composición de sus partes, que en cuanto elementos reales que son se estudian según su
entidad. Esto la distingue de las ciencias aplicadas, que estudian los objetos según "de lo
que son", o sea, su realidad determinada por la acción de lo que lo compone; a la filosofía
le interesan "lo que son" las realidades, y por eso su sistema teórico no se complementa con
Es de recta intención que quien quiera confiar en la ciencia filosófica requiera que se le
cada ente es. A lo largo de la historia se han formulado muchas concepciones de la verdad,
que se pueden especificar como: verdad lógica, verdad filosófica, verdad metafísica,
verdad nominal, verdad epistemológica... Cada una de ellas se define de acuerdo a una
aborda cada escuela. Hay que tomar en consideración que la filosofía se ejecuta desde el
intelectuales de las percepciones e intuiciones, por lo que no debe parecer extraño que haya
que definir en cada uno de esos procesos un método que garantice lo verdadero en cada
aplicación.
Considerar una definición de verdad que sea común a todas las aplicaciones de la Filosofía
puede ser muy discutida, pero conviene realizarla como garantía de credibilidad. Esa
posible definición podría ser: Verdad es lo que no admite contradicción. Si una verdad
puede ser contradicha o refutada, siendo esa refutación verdadera, habría que admitir que
afirmaciones que se puedan realizar de esa verdad sin que ninguna de ella pueda ser
rebatida. Una verdad será relativa siempre que se especifique que bajo determinadas
de todas esas condiciones es parte del proceso de conocimiento que permite aproximarse a
Cuando la Filosofía aborda el estudio de los actos humanos, lo que son y lo que podrían
haber sido es significativamente importante, porque, al ser el hombre una especie racional y
de lo que sus actos son no exime de la verdad de lo que su obrar pudiera haber hecho si
deliberadamente hubiera tomado decisiones distintas. Esto conduce a que se puedan llegar a
comparar qué contenidos de verdad son más propios de la condición humana de los
distintos que se hayan llegado a poner por obra entre unos hombres y otros, entre
Penetrando estas cuestiones de hacia dónde apunta el buen hacer del ser humano, a lo largo
que yerra con tanta asiduidad? Si esa verdad existe, no cabe que pueda haber contradicción
de conciencia sobre ella, dado que si pudiera ser tan cierta como su alternativa, no podría
homogéneo de la Filosofía, ya que además del problema de definir qué es esa verdad y
humana.
Si la rama que se quiere desarrollar de la Filosofía es el análisis de la verdad que rija los
actos sociales, la dificultad se agudiza, porque no sólo necesita especificar el qué y el cómo
de los actos humanos en cuanto causa y fin de la relación entre personas, sino definir las
vínculos sociales y hasta dónde la proyección de ese acto condiciona conductas ajenas e
históricas. Si se da por cierto que los actos humanos son creativos y libres, lo que pueden y
pudieran haber sido sus relaciones se abre hasta el infinito, lo que reta incluso si existe
Desde el siglo XIX se ha extendido un interés por desarrollar una ciencia sobre el hecho
social. Esta ciencia analiza la sociedad según los hechos históricos reales, los únicos que
puede observar y evaluar, por lo que su objeto material se constituye en saber cómo es la
sociedad y por qué se comporta así. Las reglas que su teoría evidenciará representan las
actitudes humanas cuando se agrupan en sociedad, cuya crítica de contrastes constituye una
parte de su interés. Esta ciencia conocida como Sociología comparte con la Filosofía Social
la Filosofía Social intenta definir "como debe ser la sociedad" en función de los contenidos
Con frecuencia se asimila al concepto de Filosofía Social la Ética del Derecho, o sea, a la
fundamentación ética que inspira las normas jurídicas para organizar las relaciones en la
voluntad de lo que las personas han decidido y deciden según su libre entendimiento de lo
cierto que la Ética del Derecho y la Filosofía Social coincidirán en muchos aspectos de su
desarrollo, pero las fuentes y los procedimientos las hacen tan distintas que a su vez
que puede entenderse por ciencia en virtud de que sea su saber la conclusión de la
experimentación probada de sus teorías, la Filosofía Social, como casi todas las ramas de la
Filosofía, no puede aplicarse el rango de ciencia, ya que su análisis de las causas primeras
del acto de relación y de su vinculación al ser humano, como sujeto y objeto de la relación,
no son experimentales en lo que son, sino sólo en cada uno de sus efectos concretos, que
negativas. Por una parte expresa su inagotable penetración en el ser de las cosas, lo que
probado. Tratar sobre los actos de relación humanos tiene como consecuencia que generará
que su libertad como cualidad de su esencia comprometa esa misma esencia de ser. La
la experimentación práctica es también lo que impulsa a esta joven disciplina a avanzar con
la humildad de percibir cuánto de su teoría puede ser verificado como positivo en las
aplicaciones prácticas que de ella se pudieran extraer, y qué condiciones pueden influir para
que aquellas definiciones puedan ser redefinidas con una mayor exactitud.
CAPÍTULO 1
El conocimiento es una facultad de los seres vivos por la que pueden aprehender una forma
abstracta de cualquier otro ente del que pudieran poseer información mediante los sentidos
más estudiado, debatido y controvertido de la filosofía. Dado que las informaciones que
intensidad de las señales que manifiesta, por la adecuación de la recepción de esas señales y
elaborada.
La descripción de todo ese proceso que estudia la filosofía es posible porque el ser humano
percibe lo que conoce, aunque esa idea no le asegura qué conoce, ni le afirma
categóricamente la realidad del objeto conocido más allá de la existencia en la propia mente
como idea conocida. Las distintas escuelas filosóficas han debatido a lo largo de la historia
si la experiencia del propio ser es quien identifica la realidad de los seres conocidos; o si la
imagen ideal de los demás entes es la que formaliza la propia imagen, atribuyendo a unas y
otras una forma cuya existencia no puede ser definida sino como realidad mental.
Sea cual fuere el procedimiento del conocimiento, lo cierto es que el ser humano tiene
experiencia personal de que conoce los objetos con los que convive; sabe su forma, sus
De su observancia en la naturaleza, por su progreso en las ciencias naturales, sabe que los
demás seres animados de la especie animal también conocen, porque poseen órganos
corporales semejantes a los del ser humano que les permiten tener percepciones sensoriales,
computar esas percepciones y elaborar ideas modélicas que les permiten gobernar sus actos
dando respuestas oportunas a las acciones externas que les acaecen siguiendo modelos de
animales se denominó instinto, para diferenciarlo del conocimiento racional del hombre.
acertado distinguir en cuanto a la forma de conocer entre especies, dentro del conocimiento
amplitud semántica del término instinto la misma aplicación para los animales que la que se
hace con el hombre cuando se quiere referir a reflejos condicionados del organismo, que
permiten obrar con actitudes propias en respuestas a las que no se concede un proceso de
evaluación mental, sino una correspondencia entre la acción y la reacción que se puede
posibilidades y cuantas más se innoven darán las ciencias, más pronto que tarde,
instinto y conocimiento sensible, y que tanto el uno como el otro son aplicables de modo
El conocimiento humano no sólo conoce los objetos que se le muestran a los sentidos, sino
que de forma muy significativa posee conciencia de sí mismo. Su propio ser es objeto de
conocimiento de quien es sujeto del conocer. Hasta donde llega la percepción sensible de la
materia propia corporal, es lógico que los propios sentidos tengan información de sí mismo
conocido, porque de ellas no puede poseer sino una representación abstracta e inmaterial,
que indica cómo el ser humano posee la capacidad de un sentido interno que interpreta
sensibles, los recuerdos, sino el hecho de conocer que ha conocido esos objetos del mundo
exterior. Ya que ese conocer que conoce es el que le va a permitir profundizar sobre sí
por las cosas que puede conocer, sino en el hecho mismo que puede conocerlas. En el acto
que es una segunda articulación del conocimiento cuyas percepciones no son sensibles sino
mentales, las cuales informan al sujeto de lo conocido que conoce. No se trata de un simple
facilitan al mismo sujeto de lo anterior conocido una nueva representación, que no es una
simple idea imaginaria sino una proposición capaz de alimentar un juicio racional de
Esa segunda articulación del proceso cognitivo, por su naturaleza plenamente abstracta, va
a permitir incidir sobre ella intuiciones de naturaleza psíquica o espiritual que son las que
ser del ser humano. A esta segunda articulación se la puede denominar entendimiento, para
intelectual, y que por igual repercuten sus respuestas a través de la actividad mental.
posibilidad combinatoria de las ideas o abstracciones del conocimiento, sino que sugiere
aplicaciones de interacción causa-efecto entre las causas que afectan a unos objetos cuando
se aplican a otros distintos. Ello permite reinventar una nueva dimensión de la realidad a
eficacia sigue al acto mental pero sin que exista certeza alguna que vincule la causa de esa
intuición a la propia naturaleza del procesamiento mental. Es cierto que sin actividad
sustenta sobre las ideas mentales que son la materia abstracta imprescindible para que
exista sobre lo que razonar. Lo que no quiere significar que esa materia por su condición de
Conviene especificar lo que se debe entender en filosofía por intuición, porque su campo
Por intuición se suele reconocer una facultad interna del ser humano que le permite
exterior que provoca la reacción de alguno de los sentidos externos, generando una
La intuición, por el contrario, es una facultad interna que carece de un estímulo material
externa a la mente, sino que se muestra en la propia conciencia, donde se dilucidan los
juicios, y desde ahí como aditivo del conocimiento tras el juicio del entendimiento va a
perceptivo. Cuando se tratara de una percepción exterior estaríamos ante una sensación;
cuando fuera interna, de una intuición. Este planteamiento reduce a la intuición a negarle
suponen más que reconocer lo ya conocido. Lo que una intuición aporta al entendimiento es
fin. Es una propuesta abstracta que sugiere el progreso de una resolución cognitiva
introduciendo una nueva variable en la ecuación que la razón debe dilucidar. Se puede
argumentar que las intuiciones inciden en los juicios analíticos incorporando una propuesta
creativa como objeto no incluido en el sujeto, como lo están todas las abstracciones
derivadas de la percepción, que captan las cualidades de las cosas. Esa intuición creativa,
priori. Este nuevo objeto considerado, en cuanto intuitivo, generará un juicio ideal, un
proyecto que una vez desarrollado puede derivar, confirmando su realidad, en un juicio
sintético a posteriori. Por ello es adecuado denominar a estas intuiciones como espirituales,
por su causalidad inmaterial; pero posiblemente les sea más propio denominarlas
intuiciones creativas, por el fin que logran de potenciar el conocimiento, el saber, la ciencia
y la técnica.
entidades en otras. Así se puede afirmar que las abstracciones derivadas de la percepción
sensible poseen la capacidad de asignar relaciones entre los objetos que conocen. La mente
entre los objetos conocidos, ya que la capacidad y agilidad mental es distinta de unas
especies de seres vivos a otras, y aunque todas conocen, no conocen en igual grado, porque
intuiciones interrogantes que el ser se hace sobre la naturaleza, la causa y el fin del qué
conoce, por qué conoce, cómo conoce y para qué conoce. Ello le permite obtener
síntesis de las partículas y sus aplicaciones de unas sobre otras, siguiendo el itinerario de
distintos-, dando un empleo comunicativo de una emoción interior a cada sonido, sino que
una vez descubierta la distinción sensible de esos sonidos los combinará aleatoriamente
para del resultado de esa combinación poder nombrar casi infinitos objetos con un número
para que sirvan de signo a la imagen de un objeto, siendo tan arbitraria esa asignación que
necesita el consciente acuerdo de la comunidad que utiliza el lenguaje del valor de cada
mental para exprimir las posibilidades articulatorias del organismo humano, y la segunda la
combinación algorítmica de esos sonidos para lograr crear signos capaces de designar
distintivamente cada objeto, idea o función, por mucho que estos aumenten, de un modo
volar. Por su percepción externa los hombres, como muchos otros animales, aprenden que
sucesivas le dan a conocer que las aves vuelan porque poseen alas y musculatura para
moverlas, y así poder desplazarse a su intención por el espacio. El hombre también conoce
que su organismo no posee alas, y que por tanto esa distinción le hace saber que su
intuición que le propone que si se dota de alas podría volar. Desde esa intuición creativa no
cesará a lo largo de la historia a aportar intuición tras intuición hasta conseguir hacer
realidad esas aplicaciones para lograr volar, incluso a donde las aves no llegan.
LA CREATIVIDAD:
La diferencia que el ser humano ha marcado con respecto a las restantes especies animadas
respecto a sus formas materiales, lo que ha sido capaz de hacer el hombre no tiene
parangón en la naturaleza, pues para bien o para mal, según se referencie esa
transformación para él mismo o para las restantes especies, el dominio sobre los demás
elementos es patente.
astronomía, las ciencias exactas, cada una de ellas supone un elogio de la inteligencia
humana, aunque se pueda contraponer el fin perverso con el que también se ha utilizado esa
inteligencia en cuanto al fin, por lo que cabe ser muy crítico con su forma de ser si se ha de
entendimiento que le reporta conciencia de sí, de sus relaciones con el medio y de poder
reconvertirlo para su servicio. Algún día la ciencia aclarará cada uno de sus factores
evolutivos y la secuencia de sus facultades. La Filosofía sólo puede admirar una dinámica
Que el ser humano sea creativo supone admitir juicios sintéticos apriorísticos que
determinen para algo una operación cuya aplicación sea novedosa de todo lo que se puede y
pueda percibir de ella de por sí. En un cierto rigor predicamental, todo lo que algo puede
obrar pertenece a ese ente como potencia, porque todo lo que algo puede ser, si no estuviera
en su potencia de ser no podría alcanzar serlo; pero ello es así en el orden predicamental del
ser, no del obrar, porque lo que uno no puede obrar por su propia naturaleza no pertenece a
su potencia, por eso las percepciones que estimulan el conocimiento sensible no pueden
estimula a obrar conforme se espera del enriquecimiento de su forma de ser. Eso es lo que
En el inicio del enriquecimiento de una forma de ser por un acto voluntario del ser humano
existe siempre una intuición que provoca un juicio en el que sobre todas las ideas previas
añade una presunción de verdad. Esa facultad de generar intuiciones sobre el previo
como lo son las intuiciones, y cuyo conocimiento se sigue del imaginario creativo, como
éste se deduce de los juicios inducidos a entender que se conoce concebir más allá de la
LA LIBERTAD:
El estudio de la libertad en la Filosofía Social puede seguir dos ramas distintas: Una,
ontológica, que estudia si el ser humano en su naturaleza es libre. Otra, social, que
primera es condicionaria de la segunda, porque si por su esencia los seres humanos no son
libres, tampoco lo pueden ser en sociedad. Así que la verificación ontológica sobre la
libertad humana será trascendental para la proyección posterior que sobre ello se realice.
Desde el punto de vista ontológico, la libertad no se define tanto respecto al obrar, como al
ser. Ser libre es el fundamento de obrar con libertad, pues incluso cuando se careciera de la
con conciencia de libertad. Para la Filosofía Social lo relevante será si la libertad es una
de ser. Un ser inteligente que gobierna sus actos será libre si se conoce como libre y capaz
de actuar con libertad. Conocerse como libre es saber dar una respuesta independiente de
todos los condicionamientos, aunque ello implique que esa respuesta precise un estímulo.
La libertad no implica el dominio sobre la posibilidad del estímulo externo, sino que radica
genera el ser, no pueda considerarse como una restricción de la libertad para ese ser.
El hecho de que el ser humano entienda que conoce le posibilita a saber cómo conoce y
cómo responde a las implicaciones del conocimiento. Si las respuestas a los estímulos son
equívocas, cabe que sea un defecto de computación o que variables ajenas al estímulo se
estímulo ofreciendo una respuesta modificada pero condicionada en el mismo sentido del
imperativo de esos estímulos. Si los modificadores son deliberativos se siguen de una o más
intuiciones que van a impulsar a la razón, desde la propia conciencia, para decidir una
respuesta no condicionada, que es lo que se conoce como libertad. Si esto es así, la libertad
radica más en la conciencia de las intuiciones deliberativas que en el acto de razón, porque
éste por naturaleza va a seguir la mayor conveniencia para el ser del conjunto de ideas e
intelectuales desde la conciencia personal, existirá más o menos grado de ellas en cada
persona, según sea su grado de conciencia. Del mismo modo, por un acto de reflexión del
sobre algo, sino como la composición de la argumentación para motivar a la razón a obrar
LA RESPONSABILIDAD:
Conocer es un acto personal que compromete al sujeto con la cosa conocida. Cuando se
conoce uno a sí mismo como quien conoce, esa reflexión relaciona al sujeto no sólo con lo
conocido, sino también con el proceso de querer conocer y dar respuestas adecuadas y
creativas a los influjos del conocimiento, por los que se quiere o detesta aquello conocido.
En la medida que una persona actúa con libertad, el primer movimiento de esa libertad es
complicarse o no con la percepción que motiva un acto intelectual. El interés que pueda
generar a la conciencia será la causa de que se creen iniciativas intuitivas sobre ese
contenido que se implique en una respuesta, o que ésta sea la simplemente determinada por
las ideas naturalmente sugeridas. Ese interés en el juicio de la razón por una motivación
medio con el que se relaciona y para las demás personas con que se entra en relación en el
medio. El interés que mueve al intelecto en conseguir un fin favorable en una acción logra
para ese sujeto un bien sensible, una satisfacción, o un bien intelectual, la autorrealización.
que las intuiciones pueden no ser las adecuadas para conseguir el fin. Eso constituye el
error en que puede caer la razón, porque, aun juzgando en verdad, si los sentidos le
Se podría objetar que las intuiciones espirituales, por su condición inmaterial, no deberían
poseer defectividad, o sea, que la propia conciencia no puede concebir confundir a la razón,
siendo actos de un mismo sujeto dirigidos a un mismo fin. Por ello es más lógico
previo juicio apriorístico, enseña que del obrar humano se puede seguir el mal, al menos
como oposición a un bien no alcanzado. Esto debe mover a la responsabilidad de que del
obrar humano se pueden seguir consecuencias negativas tanto para quien actúa como
cuando se entra en relación. En este último caso tanto más, pues el interés del fin de una
parte de la relación puede perjudicar el interés de la otra. Así, aun en cuanto la intuición
creativa sea adecuada y correcta, su utilización puede ser moderada por la razón, y lo debe
El miedo al error puede inducir a reprimir la creatividad, creyendo seguir los dictados de la
responsabilidad, pero el no actuar supone una negación de la potencialidad de la
exigencias de su realidad.
CAPÍTULO 2
EN RELACIÓN: LA SOCIEDAD
CONCEPTO DE RELACIÓN:
Por lo que conocemos, en la naturaleza los elementos se relacionan entre sí de formas muy
relación -que tiene variadas acepciones según cada lengua- el valor de acuerdo o concierto
ha tapado a otros más simples que sustentan toda la composición de la materia, como
pueden ser las relaciones entre protones, neutrones y electrones en el átomo, la de los
elementos químicos en las distintas partes de la célula, la de los parásitos, las atracciones
entre planetas, etc. Una gran parte de la existencia guarda relación entre sí, desde las más
conozcamos, las relaciones de la materia que nos es más próxima no impide que puedan
La relación se puede identificar cuando existe y si se puede presuponer según las leyes de la
física, aunque un elemento no pudiera haber sido percibido en su existencia real -como lo
de ser propio para hacerlo cuando el entorno es propicio para ello. De esas relaciones no
sólo se da la composición de nuevos objetos, sino también radiaciones energéticas que al
alcanzar otros objetos comunican propiedades que hacen posible la subsistencia de unos y
La Filosofía Social tiene por objeto específico las relaciones de la persona con el medio,
muy especialmente las relaciones entre personas, que es el fundamento de lo social. Así se
podría definir las relaciones humanas como el vínculo comunicativo en el que una, varias o
La Filosofía Social también se interesa de las relaciones del hombre con el medio, pero en
cuanto este medio adquiere un valor social por ser espacio común de convivencia. Las
desvirtuar que la relación material entre los otros objetos no tenga también un valor
comunicativo, pues de algún modo todo lo que de cualquier forma se une a otra cosa se
comunica en lo que en esencia cada cosa es, y la relación es exponente de la potencia para
establecer esa relación. Incluso los entes de razón, como los elementos matemáticos, deben
Las relaciones entre personas son posibles porque entre ellas existe un lenguaje
comunicativo, que no sólo es la lengua, sino que antes que el ser humano se constituyera
como sociedad y creara una lengua es necesario que existieran otros lenguajes más
que les habilitan para la percepción del mundo exterior, y el conocimiento, que les facilita
misma especie por su semejanza, que hace entender las actitudes ajenas en referencia a las
propias.
Estas facultades van a marcar las relaciones humanas de modo que en cada relación se
pueda analizar si favorece esos valores constitutivos de la esencia intelectual del ser
beneficios y detrimentos materiales que afectan a la integridad del cuerpo humano, sino que
estos se deberán interpretar en función de la coerción que se ejecuta desde las facultades
que permiten a cada ser humano obrar con conocimiento de causa. Toda relación funciona
como un binomio causa-efecto, porque toda relación procura un fin que justifica la
congruencia del acto. De ahí se derivará la responsabilidad de que del efecto de la causa de
la relación se derive un bien cuando los agentes o sujetos de la relación sean seres
El ser humano, en cuanto tiene conocimiento y puede juzgar cuanto le acontece, en sus
relaciones con otros actuará como sujeto agente y paciente. Como sujeto agente en cuanto
para que el hecho se de, dado que si falla una de ellas desaparece la transmisión y se
malogra la comunicación.
en la causa.
del empeño en la relación, respecto al fin logrado se aprende a modelar las relaciones de
forma perfectiva.
es que restringe la libertad. El segundo, posibilita ampliar el campo de acción, y con ello la
condiciones de verdad, si en cada relación se empeña parte de la autonomía personal por las
condiciones que se pactan, cuantas más relaciones se establezcan, tantas más restricciones a
la autonomía propia se establecerán. Esta será la causa de que buscando hacer prevalecer la
máxima libertad, se contaminen las relaciones sociales por los defectos de prevalencia en la
vida social. Una forma de lograrlo es restringiendo sus relaciones a las esenciales que le
social. Otra forma de lograr una mayor participación y dejar a salvo la libertad es imponer
en las relaciones condiciones de poder que garanticen la propia libertad con detrimento de
la de las otras partes, pero esto presenta restricciones éticas respecto a la igualdad de los
seres humanos, y además hace que las relaciones sean permanentemente inestables, porque
por naturaleza las partes afectadas tenderán a recuperar los contenidos de libertad
restringidos.
La creatividad y la libertad constituyen dos cualidades humanas que van ser determinantes
que la potencia personal individual se transmita a los demás, y así las inteligencias de unos
por la que cada cual va a preservar el ámbito de su inteligencia y voluntad como el mayor
relaciones cada persona va a confrontar el valor con el que se considera respecto a los
demás, y va a evaluar los límites de conveniencia de cada relación. Ese contraste entre lo
sociedad.
TIPOS DE RELACIÓN:
sea, que de la proximidad física no se sigue una relación humana si no existe una actividad
mental que la identifica como tal. La relación puede no haber sido voluntariamente
buscada, incluso que sea no querida, pero lo que la constituye como tal es que se pueda
Un dilema se presenta respecto a si se ha de considerar como real una relación ideal, que no
Un ejemplo de estas relaciones son las llamadas relaciones platónicas, en las que una
persona posee una auténtica actividad mental e intelectual respecto a otra, que no comparte
esa relación, e incluso la ignora por completo. Para quien posee la idea de la relación la otra
comportamiento.
En cuanto que una parte es motivada por un objeto real, la relación existe, y al ser sostenida
por un ser humano sobre la existencia de otro se puede considerar una relación humana,
aunque, al no haber comunicación bilateral, no puede ser calificada como una relación
social. Habría que distinguir de esos casos aquellos en que una de las partes, por
conformidad, cuando no además del agradecimiento, del vínculo de amistad por el que uno
Se podría resumir en que los seres humanos establecen relaciones que se podían clasifican
Relaciones con seres inanimados, como las que se establecen con objetos de propiedad,
alimentos, ocio, etc. Esos elementos pueden incluso alcanzar un valor simbólico que añada
considerarse sociales. Por ejemplo, la que se pueda sugerir respecto a una persona famosa,
Relaciones sociales, que son siempre entre personas, y que exigen un mínimo de
pueden incluir en las que existe la voluntariedad subjetiva en compartir fines colectivos; en
estos casos la comunicación se sobreentiende en el hecho de la cooperación colectiva a la
En sus principios generales las formas de relación social pueden distinguirse según la
Según la causa, las relaciones proceden porque se dé una razón de previa convivencia o
Según el fin, las relaciones se establecen para conseguir un bien particular, un bien
común o un bien ajeno. En cualquiera de los tres casos el sujeto se inclina a la relación
porque incluso de un fin para otro se sigue una satisfacción interior, que es la base o
distintas que motivan la relación en cuanto relación, sin distinguir en ellas las casuística de
promocionar un grupo o entablar una relación personal. Porque éstas, una vez considerado
una nueva convivencia; desde el fin de querer conseguir un bien propio, al bien común y al
bien ajeno; desde el medio establecido existente a la aplicación de una creatividad. De ello
se puede inferir que la implicación humana más elemental es desde una relación previa
existente, para buscar un bien propio y en un medio real; la mayor responsabilidad de
implicación intelectual estará en establecer una nueva convivencia, para bien ajeno, por
CAUSA DE LA SOCIEDAD:
de relación entre la madre y el embrión hasta que nace y con el nacido en el periodo
lactante y un entorno de relación familiar para la crianza. Todo ello es similar a otras
muchas especies animales, pero entre los humanos la diferencia está en que la relación se
configura no sólo para transmitir la especie, sino también el saber intelectual acumulado
generación tras generación. A la causa más primaria, que por naturaleza constituye la célula
familiar, le sigue una causa segunda con carácter extensivo de aquella, que es la tribu o
parentela que relaciona células familiares con el fin principal de facilitar las tareas del
Se pueden considerar otras causas de la sociedad, con carácter secundario, entre las que
destacan:
la defensa conjunta y la cooperación en el trabajo, y otras como el ocio, las artes, las
comunicación... Todas estas actividades hacen sociedad en la medida que por su causa se
natural, cuyas relaciones exigidas para la conservación de la especie vincula a grupos de
personas según un modo predeterminado por la naturaleza, mientras que las secundarias es
la atracción por un interés común el que engloba la causa de la relación, el modo y el fin.
cuerpo material o espiritual que en conjunto corresponda a una entidad superior, de la que
las personas que forman la sociedad fueran elementos con una función constituyente. La
consideración de las sociedades como corporaciones con fin propio no son sino imágenes
seres, y los fines sociales son fines comunes a los que opta individualmente la conciencia
social por naturaleza no cabe entenderlo como parte de una sustancia natural que se
corresponda con la sociedad. El hombre es sociable por interés de su propio desarrollo, pero
La dependencia social del ser humano está determinada sólo en la causa primaria por la que
por naturaleza nace de otros seres con los que posee convivencia. Pero esa relación
cuando el hombre adquiere uso de razón, o sea, cuando alcanza a reconocerse como ser
intelectual, su relación familiar pasa de ser dependiente a libre, lo que no indica que se
disminuya su vínculo.
Hasta cuánto cada ser es libre en sus relaciones representa un importante reto para la
filosofía, porque en la proporción que su libertad esté condicionada por la sociedad, esa
LA SOCIEDAD CREADA:
Puesto que el hombre nace en sociedad, podría pensar que la sociedad no es creación
de las relaciones sociales que han sido concertadas de acuerdo a la voluntad de cada grupo
agresión entre comunidades; en la defensa común del territorio, los ganados y las cosechas;
en la migración por suelos más fértiles y climas más benignos; en compartir un lenguaje
ciudades, puertos y barcos... y así hasta todas las realidades actuales en que la sociedad se
muestra como el fruto del progreso de los hombres para el hombre, pues aunque hayan sido
millones de seres humanos los que han encadenado el progreso actual, todo ello es en
Nacer no sólo se hace en en familia, sino también en sociedad, y ello es una de las razones
por las que se podría suponer que todo el bienestar que cada persona descubre a su
alrededor, conforme alcanza razón de las cosas, forma parte de la naturaleza propia del ser
y no algo construido desde la inteligencia y el esfuerzo de cientos de generaciones
humanas.
Cada bien que se disfruta ha debido ser pensado, diseñado, construido por la iniciativa de
No basta conocer la historia de lo acaecido, sino también justificar cómo es posible que el
ser humano lo haya hecho así. A las ciencias aplicadas les interesa saber cómo se ha
procedimientos mentales e intelectuales que desde el interior del hombre han dirigido todo
La referencia a la antigüedad más remota ilustra sobre los conceptos naturales y universales
de las disposiciones de la esencia humana para relacionarse, ya que aunque estos no puedan
confunde que las ideas sociales percibidas por la mente no fueran ideas innatas. Por el
contrario, toda la teoría sobre la sicología humana se establece como que el ser cuando nace
lo hace con una mente en "tabla rasa", igual que la de nuestros más antiguos ancestros. El
itinerario por tanto para sociabilizarse mentalmente es el mismo en todas las personas de la
historia, aunque el entorno y los medios puedan haber acelerado los tiempos de desarrollo
congnitivo.
CAPÍTULO 3
LA ÉTICA EN LA SOCIABILIDAD
CONCEPTO DE ÉTICA:
La ética se puede considerar como una disciplina social y como la norma que rige la
conciencia en relación a los actos sociales. La primera contempla los actos desde su efecto
misma entidad, la una como fin de las relaciones sociales y la otra en la causa que las
promueve, pero ambas entienden respecto a que los actos sociales sean adecuados a lograr
Sociología, pero con frecuencia no se desciende a exponer con claridad que se debe
considerar como bien común, y simplemente por bien. Para la Filosofía Social, más que la
sicológica que dirige los actos humanos y en su finalidad respecto a las relaciones entre
seres inteligentes. Desde esta perspectiva se podría definir el bien como el acto que
comunica una perfección. El bien común sería la proyección que alcanzan los actos que
proporcionan perfección al grupo social que afectan. Esa perfección es siempre individual,
modo paciente a quienes son objeto directo e indirecto de la acción. Las perfecciones
satisfacción por la creatividad empeñada en conseguir una perfección propia y/o para otros.
Por eso la ética que evalúa la consecución del bien común tiene una rama que contempla las
perfecciones añadidas al sujeto y otra las aplicadas sobre los objetos.
Una perfección es una aplicación ejecutada sobre una cualidad de un ente que le mejora
perfección es todo lo que logra que algo sea mejor. Por eso el bien es un acto positivo, el
si sus obras logran el fin de comunicar una perfección a quienes se dirige. Se puede
apreciar una parte subjetiva que se encuentra relacionada con la sicología, y una parte
objetiva que se emparenta con la sociología, pues los actos de bien común sólo lo son en
cuanto a su fehaciente ejecución, y por ello han de ser valorados a posteriori, como lo hace
ética es que es siempre una valoración personal de reconocimiento del valor de la causa por
valor de la conciencia del que obra, y secundariamente sirve como la recensión crítica del
juicio ajeno respecto del que obra, en cuanto ayuda a la valoración general de los actos por
que los provoca. La ética, por tanto, es una disciplina práctica que ayuda a la formación de
En una relación recíproca entre dos o más personas, la ética exige que la causa de la
relación entre los partícipes sea en sí buena, que el medio o contenido a tratar y colaborar
sea bueno y que el fin sea que consiga un bien proporcionado para todos los partícipes. En
esencia se podría decir que una relación recíproca es ética cuando se intercambian bienes o
perfecciones entre los concertantes de la relación, pues cuando no es así, y unos reciben
bienes y otros los pierden, la reciprocidad no es más que formal, ya que en cuanto el fin de
Respecto a los bienes materiales existen quienes defienden la dificultad de que las
relaciones se establezcan en equidad del fin del bien común, porque si unos obtienen un
beneficio material se teoriza de que otros han de aportar y perder ese bien. Lo que ocurre es
que eso sólo se da cuando lo que se intercambia entre quienes se relacionan es una única
cosa, de la que unos han de aportar lo que otros reciben. Un tipo de esta clase de relaciones
son las apuesta económicas vinculadas al juego o al azar. Contra esa visión parcial de las
relaciones hay que contraponer que en la mayoría de las relaciones materiales lo que se
busca es la permuta de bienes de unos a otros para obtener cada uno de lo que le falta y
ofrecer de lo que le sobra. En estas relaciones se consigue el bien común en cuanto cada
uno obtiene un beneficio que le era menester, por eso el conjunto de todas las relaciones
Cuando los beneficios de las relaciones mutuas son de orden mental o espiritual, el
beneficio podría ser infinito para todos sus partícipes, pues al tratarse de bienes inmateriales
son ilimitados en extenderse sin que nadie quien los aporte mengue en lo que posee. Aquí
Se dan relaciones que tienen por fin un intercambio de bienes materiales por bienes
inmateriales, en la que ambas partes quedan satisfechas por el bien que reciben, aunque
sean de cualidad tan distinta. Incluso hay relaciones que el bien común se logra en la
desigualdad del trato, si se estima también la retribución anímica personal como un bien
altera el que de esa relación se logre al bien común, el material para el que lo precisa y el
Las relaciones sociales mutuas engloban, además de las prestaciones que se intercambian,
esa disposición de prestaciones cuando se necesiten. Ese bien común latente constituye una
parte importante de la razón por la que las comunidades tienden a crecer y a estabilizar un
Desde el punto de vista de la ética, el bien común se genera tanto en las relaciones entre
particulares como en las relaciones universales, o sea las que agrupan al conjunto de un
colectivo. Por eso la ética de la aldea global radica tanto en el contenido y fin de las
concertaciones particulares como en las que afectan a todo el colectivo por igual. La
justificación hay que encontrarla en que, por ser la vida en sociedad un sistema, se
comunica todo en mayor o menor medida sobre el resto del sistema. Y así la autoridad de
una sociedad puede imponer reglas éticas de obligado cumplimiento también en las
aplicación ética en las relaciones más simples se sigue el buen hábito ético en las de mayor
trascendencia, y viceversa; de modo que está muy en juego la preservación del bien común.
persona humana puesto que ha de conseguir al menos el sustento diario para que funcione
su organismo. A partir de esa necesidad primordial se entiende que actúe para conseguir
otras muchas cosas que le satisfacen y le ayudan a su realización. Ese proceso de la acción
formular una idea intelectual que resuelva, al menos implícitamente, las cuestiones de qué,
para qué, por qué y cómo. Los seres no inteligentes a la imaginación de un quehacer
natural. La persona humana también obra de esa misma manera, que no se debe denominar
más allá evaluando causas, medios y fines se sigue del talento del que está dotado el
En todas esas obras existe un itinerario que va de cómo se ve la obra en la mente a cómo es
Aunque hay que tomar en consideración que el fin que se logra no es necesariamente el
enteramente personal. Cuando obra en concierto con otros, con los que se comparte el fin y
objeto de la acción, los beneficiados o damnificados son normalmente bastantes, aunque sin
embargo la autoría de la decisión intelectual de obrar así es de cada una de las personas que
interviene, pues el fuero interno de obrar de la razón es inviolable. De ello se deduce que la
subjetividad es siempre personal, y la objetividad es colectiva en función de a tantos como
Entre los primeros existe un cruce entre las respectivas subjetividades y los objetos
operados. Se cumplirá la equidad en la relación según que cada uno de los objetos obrados
Que concuerde la descripción de lo que pacta dar con lo que realmente imagina que
puede dar.
Que mienta describiendo lo que va a dar, de modo que no se ajuste a lo que realmente
explicó.
Que no se ajuste a lo imaginado por la incoherencia entre entre lo que el otro ofreció y
la realidad obrada.
Desde la objetividad de lo pactado:
bien objetivo en las relaciones humanas sea más probable o menos, no sólo por la intención
subjetiva de las personas, sino también de que se logre llevar a objeto una adecuada
sociales.
LA RELACIÓN ÉTICA:
Para que una relación entre personas se pueda considerar ética debe buscar el bien para
todos los participantes. El bien debe afectar a toda la dimensión personal, no sólo a que le
libertad, ni su dignidad.
derechos otorgados por anteriores relaciones. Parece que lo más convincente es que las
relaciones entre particulares no deben restringir derechos sociales, pues estos se consideran
consensuados en relaciones superiores y marcan la equidad del baremo con que la sociedad
marco de la comunidad, cabe entender que se pueda admitir redistribuir derechos, aunque
supongan restricción general o para parte del colectivo, porque sea lo que en un momento
determinado se considere bien común.
contrastarlo en función de la anuencia de la mayoría. Pero incluso así, deben quedar a salvo
dignidad de cualquier persona, porque no puede existir bien común donde quien forma
parte de una comunidad quedara como proscrita de la afectación del bien que le
Igual que la sociedad evoluciona, las relaciones sociales se han de adaptar a las nuevas
necesidades y a las nuevas ideas del pensamiento, porque lo contrario supondría encorsetar
a cada generación en los criterios de las anteriores generaciones. Esto constituye muchos
equívocos en las relaciones respecto al bien común, porque como en una misma época
conviven 2 ó 3 generaciones, las apreciaciones de que varíen las prioridades que legitiman
el bien común suele ser muy contestado, ya que las anteriores generaciones suelen
En las relaciones entre particulares la intención por las partes a conseguir el bien es más
concertarla. Hasta cuánto de bien se consiga es algo que queda en el juicio de los
concertantes valorar si justifica pactar esa relación. Una vez acordada la relación, la
cancelar la relación? Esto sólo puede contestarse desde la valoración del bien que se pierde
para cada parte al mantener la relación y al suspenderla, puesto que si la relación ha sido
correctamente aplicada no parece que por el detrimento de bien de una parte la otra o las
otras deban perder el bien para el que se concertó. La valoración ética debe medir los
la integridad de las personas. El resultado de todo pacto sin malicia puede y debe poder ser
reconsiderado cuando las condiciones éticas así lo aconsejen, porque el valor de sostener la
dignidad de las personas debe primar sobre los beneficios materiales desproporcionados
que se pudieran generar. Por eso las relaciones deben plantearse como revisables, en aras a
la defensa de la libertad.
Las relaciones éticas exigen también que no se anule la personalidad de los partícipes, en
aunque se quisiera justificar que suponga un bien para el agredido. El mayor bien que posee
una persona es su identidad, su yo, y el poder decidir desde el entendimiento del yo sin ser
sometido a una presión que pudiera alterar la deliberación de cada persona. Esta dimensión
ética afecta mucho a las relaciones que se dan en la mayor proximidad, como, por ejemplo,
en la familia, donde a veces se presiona sobre los sentimientos para que éstos alteren el
Existen en la sociedad muchas relaciones que transgreden la ética por sus medios y por sus
fines. Tantas que justifican que el mal que se detecta en la sociedad no es casual ni
pues cada uno en solitario tendría una existencia raquítica. La pasión por lo que se pueda
arrebatar a los demás ha determinado cómo se dominan las personas en vez de cooperar
Las relaciones entre personas, además de las naturales de familia, deben ser por naturaleza
particular, para colaborar juntos en una explotación, para compartir esfuerzos en un objeto
común, para defenderse colectivamente, para administrar orden, para enseñarse, para crear
El origen de estas relaciones hay que situarlo en la rentabilidad del trabajo en equipo y la
especialización, que permiten conseguir más bienes para cada uno de los miembros de una
progresiva de personas haya construido colectivos cada vez mayores que, aunque hacen
más ardua la tarea de identificar los intercambios de servicios, no debieran hacer perder la
referencia de que es eso lo que se realiza cuando se entrega un trabajo, se hace un favor o se
Un servicio es, ante todo, algo que le sirve a quien se le ofrece, y por ello se connota como
un bien. Si nadie tuviera una necesidad, el servicio sería innecesario, pero, desde que cada
cual ha de atender a esforzarse para cubrir sus necesidades, es lógico que se considere
intercambiar servicios como manera de rentabilizar el esfuerzo individual, pero para que
sea eficaz la relación es preciso que cada una de las acciones que se permutan sea eficaz en
servir a proporcionar el bien buscado. Eso es algo que toda persona logra cuando se
especializa en un oficio o tarea y de esa manera es capaz de hacerla antes y mejor, por lo
que la rentabilidad del esfuerzo empleado se mejora. Desde esa perspectiva el servicio se
lógica está en que en cada objeto como bien se contiene el esfuerzo debido a alguien en
realizarlo. Por ello la permuta de objetos materiales implica el intercambio implícito del
trabajo de quienes han producido esos bienes; de este modo casi todas las relaciones se
La necesidad prioriza qué clase de servicios son los más esenciales a generar, y para los
que se deben adiestrar prioritariamente las personas que entren en relación. Es vano e
injusto que por la iniquidad hubiera quien no fuera capaz de hacer nada útil para los demás,
La operatividad controla la disponibilidad real para prestar los servicios en que cada
sociedad para que la demanda de servicios pueda ser atendida tan bien como cuando quien
comunidad.
El cómputo del esfuerzo empleado es la medida objetiva que puede equilibrar las
relaciones de servicio para que el trabajo comprometido entre las distintas especializaciones
sea equilibrado. Ese esfuerzo debe comprender tanto el físico como el intelectual, y la
correcta consideración por todas las partes favorece la apreciación del trabajo como un
fuertes y los más sabios precisan de las atenciones y cuidados más simples. Considerar
mutuamente servirse es lo que permite, en gran manera, que cada cual se sienta útil,
respetable y realizado, siempre y cuando se emplee en hacer su labor con la honestidad con
intercambian sus cualidades profesionales para ser útiles a los demás favorece un marco de
RELACIONES DE DOMINIO:
El hombre es un ser posesivo, tendente a ejercer de sujeto que posee cosas, ya que sobre las
cosas puede establecer el dominio de utilizarlas para que le reporte bienestar. En el ámbito
capacidad de tener ideas propias, sentido del orden de lo afín que satisface y de que sólo
con el poder sobre las cosas que le rodean puede desarrollar sus ideas creativas.
Respecto a los elementos que no poseen vida propia, la posesión que las dirija no tiene más
trascendencia de que sus efectos sean provechosos, útiles y prácticos para quien las posee,
que no causen perjuicios a otros y que no se confiera un deterioro a la materia que redunde
Respecto a otras personas, la potestad total o parcial sobre las mismas limita la libertad y
rompe el equilibrio del derecho de toda persona a disponer de su propio ser. Las relaciones
entre seres humanos comprometen, de algún modo, la propia soberanía sobre su ser, en
cuanto que si se acuerda, intercambia o pacta algo ello crea una obligación de
comunicación, o bien son sociales en las que la comunicación es una exigencia a la otra
parte, por la que sólo se establece dependencia para la parte contraria; en este caso se puede
decir que se está estableciendo una relación de dominio de una, o unas, de las partes sobre
la otra, u otras.
En la sociedad, por el carácter posesivo del ser humano, existe una tendencia subjetiva a
convertir las relaciones de servicio en relaciones de dominio, en las que el fin del
intercambio sea más productivo o beneficioso para la respectiva parte actora, aunque se
mantenga la conciencia de la conveniencia del mutuo servicio que se prestan. Se induce así
para hacer prevalecer el propio derecho sobre el contrario, se lesiona la noción de equidad
que exige la justicia, que ha de ser continuamente reparado por la sociedad, lo que exige
Todas las relaciones de dominio entrañan violencia, aunque no siempre manifiesta. Dado
que la conciencia del ser humano no se somete sino a lo que aprecia como un bien, el ser
dominado no cabe que sea satisfactorio, salvo que ese dominio se reconozca como un bien.
El sometimiento es lo que a veces hace que las relaciones de dominio no sean percibidas
persona distinga perfectamente el dominio al que se la somete, pero lo que puede ocurrir es
que aún bajo dominio entienda que puede obtener un bien necesario que renunciando a la
precisa. De lo que se puede colegir que la mayor parte de las relaciones de dominio se
Por dolo.
efectiva para dictar las normas de las relaciones unilateralmente, que deben ser acatadas por
las otras partes sin posibilidad de discutir su condicionalidad. Se producen siempre cuando
existe una parte poderosa y otra débil, cuya situación permite al poder imponer lo que el
o clases, cuya posición o poder se hereda y confiere la confianza del poder y la ignominia
oportunidades para todas las personas contienen en su sistema la doctrina para perpetuar las
relaciones de dominio.
2. Las relaciones de dominio con violencia tienen su imagen más concreta en todos los
el sometimiento no es por cubrir una necesidad, sino proviene de una apropiación física de
una persona por otro para tenerla a su servicio. Desde el dominio sin violencia a la
esclavitud radical caben muchas situaciones intermedias en que la parte con poder castiga
contra toda justicia a la parte débil que no posee recursos de defensa. Estas relaciones
perduran cuando los Estados las utilizan, permiten, toleran o ignoran; porque es tal su
perversión de la justicia que están repudiadas por la sociedad civil universal, por lo que sólo
en sus gobernantes. Dentro de estas relaciones de dominio con violencia están incluidas
todas las guerras. Se puede proponer excluir las guerras de justa defensa en proporcionada
respuesta, pero la realidad desmiente que haya guerra cuya estrategia no incluya la
3. Las relaciones de dominio también se pueden calificar así porque una de las partes
subyugue a la otra a aceptar la relación mediante una presión sicológica que altere la libre
decisión de su voluntad. Este tipo de dominio caracteriza a muchas relaciones del ámbito
familiar, la tribu o cualquier ámbito de inclusión social. En estos casos no existe una
violencia física, pero sí una presión sicológica que puede ser tan reductora como la
violencia física. La raíz se haya en que la parte dominante quiere imponer su criterio, y no
lográndolo por la razón, en vez de avanzar hacia el justo consenso que equilibre las
voluntades, se reduce la contraria hasta que lograda su anulación se somete sin voluntad a
4. Las relaciones de dominio por dolo son aquellas en que una parte engaña a la otra en lo
que están tratando, de modo que el conocimiento de la parte contraria no informa
correctamente a su voluntad, que podría estar pactando de hecho lo contrario de lo que cree
injusto por las consecuencias que se puedan seguir. Como el rigor de la verdad es el último
fin del entendimiento humano, si se altera la verdad se traicionan las condiciones del pacto
y quien obra con dolo, sobre todo si la falsedad no es vencible para la parte contraria,
RELACIONES EN JUSTICIA:
La justicia es una ciencia práctica porque se realiza cuando se aplica en las relaciones que
compete. Su fin es lograr que haya equidad entre el esfuerzo logrado por un empeño,
trabajo o creación, en el servicio que se presta y los bienes con que se retribuye en el
igualdad del valor de los medios empleados en los bienes que se ofrece. Esta característica
de equidad pregona una justicia equitativa respecto al tiempo y esfuerzo considerando todas
las dedicaciones igualmente valiosas. Pero la justicia puede también valorar la equidad
observando el beneficio prestado según su utilidad, para lo que se requiere que haya
correspondencia de valor de aplicación entre lo que se ofrece entre las partes de una
relación, aunque represente una diferencia de esfuerzo. Ello supone medir el objeto que se
esfuerzos como el de aplicación, y ello muestra cómo las tendencias a acordar las
relaciones varían a lo largo de la historia. Lo trascendente para la justicia es que se sostenga
la proporción de equidad entre lo que cada cual aporta en una relación para que tras el
intercambio subsista la equidad en lo que se recibe. Como el ser humano tiende a valorar en
exceso lo propio y a ser cicatero con lo ajeno, es por donde se empieza a quebrar la justicia
en las relaciones, y se impone la pretensión del dominio sobre la idea de servicio. Esto es
más proclive que se dé cuando las relaciones se valoran según la aplicación o la utilidad,
porque, cabe el que se quiera monopolizar la aplicación para poder imponer así un valor
más alto que el de la trascendencia del servicio que presta, por la necesidad que mantiene
por cubrir. Influir de esta manera restringiendo la generalización de que todos puedan
en su raíz, generando relaciones viciadas de principio que tienden a favorecer las relaciones
de dominio.
CAPÍTULO 4
EL ENTORNO MATERIAL:
Por tener una naturaleza corporal el hombre mantiene relaciones con las demás sustancias
de su entorno. Esas relaciones tienen como fin primario posibilitar la existencia, ya que el
hombre, como cualquier otro ser vivo, si pierde la capacidad de existir cierra el ciclo a la
especie; de este modo la supervivencia es la primera actividad de toda sustancia con vida, y
ello procura al relacionarse con cualquier otro ser que sirva para garantizar esa
supervivencia.
El ser humano, por poseer una potencia espiritual, puede llegar a contradecir
por una causa mayor, algo que hace con plena voluntad cuando posee claro conocimiento
del fin efectivo del acto que arrebata la vida. Pero, aunque su razón le pueda advertir o
indicar que puede determinar su supervivencia, su corporalidad tiende como fin natural a
incompatible con la vida. De este modo el ser humano, en cuanto su mente y entendimiento
conoce su modo de ser, sigue la exigencia de su corporeidad para buscar las relaciones que
le permitan sobrevivir, imponiendo esa prioridad sobre los demás seres del entorno.
En las relaciones del ser humano con la naturaleza, uno de sus descubrimientos es
animales. Ello podría ser un indicio de que la naturaleza provoca esa relación entre
sustancias diversas que se sirven para sostenerse las unas a las otras, sin menoscabo de su
propia integridad.
¿La supervivencia es un derecho? De igual modo que cada especie no se debe a sí misma la
existencia, sobrevivir como tal, más que un derecho, debe entenderse como una necesidad
vital de correspondencia con la causa que le ha hecho ser. El derecho a ser de cada cosa no
puede ser entendido y generado sino desde su causa eficiente, que le hace ser lo que es. Lo
que corresponde operativamente a lo que es, en todo caso, puede considerarse como el
naturales considerados en sí, y no sólo como beneficio de la especie que los aproveche.
El hábitat de las especies es un medio que les permite ser por el aprovechamiento de los
recursos que posibilitan su vida, de modo que cada especie se nutre de otras, según su
naturaleza, y sirve a su vez al provecho de más, formándose una cadena en que nada queda
excluido de utilidad. Con sus defensas cada cual se defiende del más fuerte, y con sus
Desde esa legitimidad que concede la naturaleza para que cada ser según su ingenio
sobreviva, también la misma coarta no destruir más que lo preciso para vivir, porque la
eliminación de los recursos más allá de la ley de su regeneración origina una matemática
autodestrucción futura de la propia supervivencia. Por eso el derecho natural a usar los
propagación de la especie.
El ser humano, por ser creativo, se ha mostrado especialmente dotado para ordenar el
física, a casi toda las especies animales y vegetales que podrían aprovecharse de él. Esa
relación de poder que ha garantizado su desarrollo no le libra del permanente esfuerzo para
dominar y no ser dominado, pues además de tener que lograr su sustento diario ha de
Se denomina trabajo el esfuerzo que aporta el ser humano para transformar y aprovechar
elementos de la naturaleza para que le sirvan de sustento y para cualquier otro fin que
El trabajo establece una relación peculiar entre el sujeto y el objeto que presenta dos
matices:
adaptarlo o componerlo.
Estos dos matices, próximos pero distintos, van a generar derechos fundamentales
derivados del trabajo que van a definir ámbitos de propiedad que pueden ser coincidentes o
no.
dictado y proclamación pública. Ejemplo de ello son los territorios apropiados por
que constituye el ser humano sobre una materia cuando se la apropia para trabajarla y con
su acción directa incrementarla con un valor de uso; por ejemplo, cuando se coloniza tierra
árida. En el primer caso sólo existe la propia voluntad de dominio; en el segundo, se crea
El trabajo crea relaciones de propiedad sobre el elemento trabajado que quizá sean las más
Que existan árboles silvestres que producen frutos. La propiedad de los frutos que se
Que existan árboles silvestres, pero que para que produzcan frutos sea necesario
trabajarlos con labores como podarlos, regarlos, abonarlos... En este caso los frutos, que
son el producto del trabajo, pertenecerán en totalidad a quien hacen que crezcan. Pero los
árboles, puesto que preexistían, sólo se podrán considerar propiedad de quien los cuida
mientras los cuida. Si abandona ese trabajo caducaría su propiedad sobre los mismos, y
Que los árboles sean plantados por quien los trabaja. En este caso árboles y frutos serán
de su plena propiedad.
Que sean los árboles propiedad de uno y otro quien los trabaja. La propiedad de los
Esto es lo que se deduce de la relación hombre naturaleza por los vínculos que crea el
trabajo, y que se puede interpretar para toda clase de trabajos, pues todos tienen su origen
factores y se olvida de esas raíces elementales que en la filosofía del trabajo se encuentran.
LA APROPIACIÓN DEL BENEFICIO DEL TRABAJO:
y otra que se pueda acceder al beneficio que de esa propiedad correspondería. La causa
grupo, que es la forma habitual de realizarlo una gran mayoría de la sociedad, da como
al grupo colectivamente, en cuanto que sin la existencia del mismo la actividad del trabajo
El primer caso engloba las múltiples posibilidades de agruparse las personas para llevar a
laborales de los que comparten esa relación. Ejemplos de esa realidad son: Las
personas que tenga entre su objeto la producción de cualquier bien a partir de los objetos de
colaboración pluripersonal se entiende porque no todas ellas planifican los medios y fines
del trabajo de la misma manera. Entre las multinacionales y las ONGs existe un abismo de
diferencia en la concepción, métodos y fines del trabajo, pero es común a todas ellas que
generan bienes y que esos bienes pertenecen a quienes han invertido su trabajo, aunque
estos entiendan muchas veces formas absolutamente distintas de reasignar esa propiedad y
esfuerzo intelectual de cada trabajador en cada fase del proyecto y producción. A veces se
puede interpretar tal similitud de ocupaciones que se reconozca igualdad de esfuerzo, pero
porcentaje de creatividad ejecutiva invertida por cada una de ellas. Considérese que en una
comerciales... con jefes y mandos intermedios en cada una de esas clases. Además a veces
concurren a una misma realización empresas distintas asociadas o con contratos parciales o
sectoriales de la producción. Toda esa diversidad es la que hace que al tender a simplificar
el reparto de beneficios sobre todos los actores laborales se pueda caer en la arbitrariedad
generada en común.
fin de la dedicación laboral es ofrecer servicios sociales cuyo beneficio se puede evaluar
más desde al aspecto ético que desde el práctico. Entre estos casos se puede incluir a una
gran parte de los funcionarios de las administraciones públicas, que con su trabajo facilitan
objetivable como si produjeran productos manufacturados. Sobre estos sin embargo recae
de las dificultades que crecen cuando lo hace la sociedad, ya que precisamente por esa
complejidad se podrían olvidar las referencias objetivas que yacen en los fundamentos de
las relaciones laborales que no deben obviar, sino potenciar, la naturaleza intelectiva,
que transforma la materia y le extrae su utilidad, es necesario primero: que el sujeto que
realiza el trabajo sea capaz de interiorizar la tarea que hace, por qué la realiza y el beneficio
que genera. Reconocer la tarea que se hace es la consecuencia directa de trabajar con
que se aplica. Saber por qué se realiza es distinguir el fin por lo que se hace, que puede ser
lograr un beneficio concreto o experimentar una idea. Conocer el beneficio que genera es
percibir el aprovechamiento del trabajo para producir una rentabilidad más o menos
inmediata, para el uso propio del sujeto o para intercambiarla en una relación de mercado.
creación o recreación, un servicio y un bien que posee un sujeto agente y un sujeto receptor,
que es el que en último término se beneficia del acto. Si el sujeto receptor no es el mismo
quien realiza el trabajo y sí es el que se beneficia de la acción, ello crea una dependencia de
débito respecto a quien le procura el beneficio, que sólo será compensado por el
equivalente al producto del esfuerzo animal o de una máquina, porque ninguno de estos
obra con percepción del dominio intelectual sobre lo que está realizando.
Una vez que las personas toman conciencia de la entidad de su trabajo y del dominio que
que por todos sea reconocida la trascendencia del mismo, no sólo personal sino para toda la
comunidad, en cuanto que, por la distribución de labores del trabajo, de lo de cada uno se
benefician muchos. Eso debería reconocer la propiedad que genera, que socialmente puede
ser interpretada como la individual de cada uno de acuerdo a lo que trasforma en su empleo
laboral, o colectivizar todas las propiedades como el beneficio común de todo el trabajo de
un colectivo en su conjunto. En este último caso no debe obviarse que en lo común pervive
el derecho a la parte de cada cual según lo que aporta, lo que le permite decidir en la
generando todo quien trabaja, ya sea en una explotación familiar, en un empresa, etc. Eso
REINVERSIÓN DE RECURSOS:
Hay trabajos que agotan su fin en el consumo del servicio que prestan, y trabajos que de la
actuación sobre la materia obtienen un producto que sirve para facilitar otros trabajos. Del
mismo modo existen quienes consumen sus beneficios y otros que consumen parte de los
la producción del trabajo. Así surge el capital o propiedad invertible, que invertida va ha
igualdad de derecho con el productor. Además del trabajador, el propietario de los bienes
medios de producción tendrá derecho a incrementar su propiedad en virtud del derecho que
solidariamente por todos esos elementos, ya que sin el concurso de cada uno de ellos no se
propiedades es quizá el empeño más necesario para lograr, mediante una apropiada justicia
distributiva, la paz social capaz no sólo de satisfacer a la ciudadanía, sino, en cuanto ella
Queda por aclarar cómo repercutirse la parte de propiedad que se deriva de la enunciada
CAPÍTULO 5
VALORES SOCIALES
NATURALEZA DE VALOR:
La filosofía tradicional no ha sido proclive a utilizar el término de valor fuera del contexto
de la filosofía económica, sin embargo, la sociedad contemporánea cada vez habla más de
valores, aunque quizá no esté bien asentada la extensión semántica que conviene al léxico
Una materia tiene valor cuando se aprecia que comunica algo bueno que hace desearla. Esa
bondad puede ser general o particular, por lo que esa sustancia puede ser apreciada por
todos o sólo por aquellos a quienes proporciona el apetecido bien que comunica, ya sea un
beneficio afectivo lucrativo, saludable, sensual, intelectual, sicológico, etc. Esa misma
que algo sea preciado como un valor cuando difunde un bien moral. En general se puede
aceptar definir que un valor es lo que comunica un bien. Así la ética subjetiva puede
Las relaciones sociales tienen como fin procurar a las partes el bien, pues las personas se
unen para lograr vivir mejor que distantes. Ese bienestar que se sigue de las relaciones
sociales no es algo que surja espontáneamente por el simple hecho de entrar en relación,
Obrar el bien exige -en un ser inteligente- pensar previamente cómo hacer las cosas de
modo correcto, y así se siga el propio beneficio y el del otro con quien se entra en relación.
Esa es la única garantía de sostener la paz social sin el recurso obligado de la fuerza.
De la consideración intelectual de cómo se deben hacer las acciones para que se siga de
ellas el bien, de la experiencia de cómo se consigue y de interesarse por la opinión ajena se
deduce que unas actitudes resuelven los objetos de las relaciones favorablemente y otras de
modo insatisfactorio. Esa apreciación lleva a descubrir qué valores son los que deben regir
Como se nace en sociedad existiendo una larga historia de experiencias sociales, se aprende
que muchos pensadores han ido descubriendo aquellos valores que han favorecido el bien
común y la dignidad de las personas, muchas veces reconocidos como virtudes en cuanto
que se presentan como que del ejercicio asiduo de haber obrado de ese modo se ha logrado
el bien común. Otras veces los valores hacen referencia a utopías aún no plasmadas en la
realidad social, pero cuya teoría se adapta a la personalidad ideal del ser humano y de cuya
Los valores ideales que rigen cada personalidad respecto al fin social suelen ser universales,
porque el bien no es patrimonio de ninguna cultura sino un sentimiento del ser humano; lo
que a veces es distinta es la categorización del bien según la civilización y las costumbres
de una región. Eso hace que unos valores se antepongan a otros en aceptación social,
aunque difícilmente se puede excluir alguno sino por situaciones morales muy
controvertidas. Esa visión universal hace que los principales valores sociales sean perennes,
por más que con mucha frecuencia el entendimiento sobre su aplicación sea tan deficiente
EQUIDAD:
La equidad es un valor por el que la propia conciencia reconoce en las demás personas la
igualdad de naturaleza, con independencia de raza, sexo, etnia, clase, edad, salud, cultura,
religión y cualquier otra posible justificación de discriminación que pudiera ser peyorativa
para la esencia del ser humano. Su fundamento proviene de que, al reconocer el derecho a
que cada persona desarrolle el modo propio de ser humano, implícitamente se aprueba la
legitimidad de la oportunidad de lograrlo por el ejercicio de sus potencias sin que otra
persona lo dificulte. La equidad se basa en ese respeto entre unos hombres y otros para no
obstaculizar o impedir el legítimo desarrollo de cada cual. Para ello, el interés propio no
relaciones con los demás seres de la naturaleza que no sean personas humanas. Esa
categorización de las relaciones supone la asunción de que con quienes se establecen son
también sujetos de derecho, y por tanto debe primar el acuerdo de razón que no
más poderosas por su capacidad física o actividad mental suelen causar de por sí la
admiración, ya que esas dotes facilitan a la percepción ajena el ser bien apreciados, en
cambio parece como si el menos favorecido por la naturaleza debiera justificar con sus
actos la condición racional que le iguale en el derecho. El intelecto de quien posee el valor
de la equidad está tan bien fundamentado como para desvelar en el juicio lo mejor de cada
uno de los demás, de modo que ello facilite su reconocimiento y consideración social, por
se pueda realizar en plena integridad del modo de ser humano; de lo que se sigue la
necesidad del acuerdo concertado en las relaciones humanas, lo que no sería preciso de
coincidir todos los hombres en la forma de ser, cuando la identidad de razón sería obvia.
La consideración de lo igual y lo distinto entre las personas debe mover a la tolerancia que
permita emerger y colaborar por el bien mutuo, que es el bien común. Esa tolerancia
supone sobreponer los aspectos positivos de cada personalidad sobre los negativos,
forjando una apreciación que sume los esfuerzos comunes de entendimiento sobre las
introspección como una perfección de la propia humanidad debida pero no exigida por la
vida en sociedad. Esta es la causa de la que equidad no se prodigue como valor social,
conciencia la comprensión efectiva de otros valores se logra sobre lo asentados que estén
los fundamentos de la equidad, por los que el reconocimiento de la igual dignidad de todos
JUSTICIA:
Si existe un valor que se considere primordial para facilitar la paz y la estabilidad de las
relaciones sociales, ese es la justicia. Porque busca reconocer a cada individuo lo que debe
hacer por el resto de la humanidad y el trato que debe esperar del resto de la humanidad, y
ello sólo porque se pertenece a una especie en que la razón debe primar sobre cualquier otra
derecho, ya que no tiene ante quien ejercer ese derecho, lo que sería algo vacío de entidad.
Cuando se entra en relación, al menos con una otra persona, surgen de esas relaciones
ejecutar un acto del contenido de lo pactado, lo que para la otra parte se constituye como
derecho el que se ejecute, en virtud de la voluntad comprometida. Para que ese derecho sea
legítimo de la voluntad, lo que quiere decir que tiene que ser razonado y libre, pues en caso
contrario existiría precariedad en la voluntad que pacta. El derecho sobre el deber ajeno
menoscabe el libre y racional ejercicio mental e intelectual de la parte contraria. Por eso,
cuando las relaciones de dominio establecen derechos, estos son tantos más moralmente
ficticios cuanto mayor sea el poder empleado. Desde esta perspectiva la justicia como valor
voluntad de respetar en todos los juicios el derecho ajeno legítimo, y discutir racionalmente
El ámbito institucional asume el valor de la justicia desde el rigor técnico que estudia las
establece se conciertan las condiciones que deben regir en el acuerdo, y en esas mismas
voluntad del pacto cabe que pueda darse que se actúe con prepotencia o intención de
dominio sobre las otras partes, lo que de manera implícita corrompe la justicia, ya que ésta,
como valor personal, debe regir el intelecto para crear proposiciones que no se
desentiendan de que el bien ajeno es tan trascendental como el bien propio cuando se busca
el bien común.
La raíz del desinterés moral por la justicia se puede encontrar en el abuso de la amistad,
cuando la relación que une a las personas y les facilita la ayuda mutua para una más fácil
realización personal pierde la perspectiva del servicio y se impone la génesis del dominio,
germen para concebir todas las relaciones sociales desde la concepción de una justicia
que las relaciones suponen un juego de intereses en el que cada uno gana lo que consigue
arrebatar al otro. Se genera así una dinámica de contrarios, en la que atendiendo cada uno a
configura desde la creatividad de cómo planificar cada trato para lograr concertarlo desde
una apariencia que engañe al contrario sobre el fin del beneficio. Siendo esto igual a que
cada uno sobre el otro dilucida la preeminencia de la astucia para imponerse sobre la
verdad. Una vez implantada la relación desde esa perspectiva, su ejecución va a ser un
permanente debate para lograr ser quien logre imponerse en el beneficio. Esa sociedad
injusta es la que hace considerar con Plauto y Hobbes que el hombre es un lobo para el
hombre.
Establecer relaciones justas debe ser el ánimo de todas las personas cuando entran en
relación con otros, ya sean amigos, parientes, vecinos, compañeros de trabajo o el gran
resto de la comunidad con quienes se forja la sociedad en la que cada uno se realiza como
persona, no sólo por lo que hace y logra, sino también por cómo trata a los demás.
La consideración que dirige una sociedad hacia la justicia es la de que las relaciones
humanas deben tener como fin lograr un beneficio común, no que se gane aunque otro
pierda. Ello en los afectos es siempre posible, pues no exigen un bien material finito que
poseerlo uno excluya a los demás de lo mismo. El objeto de la relación respecto a los
bienes materiales es que de la suma de lo que cada individuo aporta a la relación se obtenga
un incremento de valor de uso que permita a los partícipes obtener todos y cada uno una
parte de ese beneficio. Esa equidad es la que regula la justicia distributiva, que tiene como
fin el reparto del incremento del valor que se deriva del interés mutuo proporcionalmente a
la medida de esfuerzo, físico o intelectual, que cada uno aporta. Como puede
comprenderse, la justicia distributiva exige que el concierto social se constituya por medio
vez de distribuir.
definir como los que son generados porque existe relación entre varios o muchos. Lo que
cada uno obtiene de la naturaleza individualmente es un bien particular. Cuando esos bienes
son producidos por la participación solidaria de varios el bien es social, que pasa a ser
reparte. Existen bienes sociales producidos en colaboración que no son fáciles de distribuir
posibilidad del disfrute para todos los productores del bien social.
El derecho emanado de la relación para cada ente social es el que las demás partes hagan lo
pertinente para que cada compromiso se vea recompensado. Eso es lo que da sentido a la
la ciudadanía de esa comunidad social. Para la garantía que ampare esos derechos se
establece la ley, que objetiva las obligaciones mutuas como explícito reconocimiento de
autoridad común consensuada. El compromiso del Estado con la justicia está en reconocer a
todos y a cada uno de los ciudadanos como sujeto de la relación social, y distribuir a cada
uno la parte de los bienes que proporcionalmente le corresponde, tanto por los beneficios
Como el Estado no es una entidad etérea, sino una estructura efectiva de gestión, cabe que
administraciones públicas utilicen los recursos del poder para beneficiarse personalmente,
depósito de poder sobre el Estado es mucho, pues no sólo administra los recursos públicos,
sino que también dicta las leyes que pueden lograr o distorsionar el bien común y
administrar la justicia que debe hacer efectiva la equidad de trato para todos los ciudadanos.
Todo ese poder queda en la facultad resolutiva de personas que pueden tener un
comportamiento justo o injusto, por lo que para un mayor control de la posible debilidad
humana es necesario que todos órganos de poder del Estado se rindan cuentas con
trasparencia mutua, como quien lo hace ante el pueblo, y que la organización judicial tenga
medios e independencia para juzgar a todas y cada una de las autoridades con un mayor
LIBERTAD:
capacidad de decidir lo que ha de obrar. En cada acto del ser humano se reflejan influjos del
especifican el modo de ser racional del ser humano son los que justifican la libertad en el
La libertad afecta a los propios actos que el hombre hace para sí en el entorno de la realidad
realidad social cada persona debe obrar en armonía con las demás con quienes se relaciona,
por eso la decisión que sigue a su reflexión debe conjugar la propia libertad con el respeto
de la libertad ajena.
El valor de la libertad en las relaciones humanas adquiere una trascendencia social cuyo fin
conciencia de libertad individual, sino también el ejercicio público de cada acto de libertad.
La conciencia humana es tan radicalmente libre por su condición inmaterial que puede ser
perturbada y violentada, pero no forzada sino por la desnaturalización mental que como
soporte de información a la razón le genere una confusión intelectual por la que la voluntad
razón que mueve a la voluntad a obrar con un déficit de conciencia sobre las consecuencias
de los actos apetecidos. Definirlo como un exceso de libertad sería como considerar la
ausencia de influjos determinantes externos en la motivación del acto humano, pero esos
influjos en cuanto determinaciones de la naturaleza son los que son, por lo que no influyen
sobre la responsabilidad del acto humano. De este modo la más perfecta libertad para poder
mal uso de la libertad, cualquiera que sea el grado de determinaciones naturales externas
Una de las implicaciones sociales del valor de la libertad radica en el respeto a la libre
decisión del otro en los asuntos de trascendencia común. Existe la tendencia racional a
pensar que como cada cual considera como acertado lo que defiende, lo que se oponga a
ello debería ser erróneo. Ello genera la tendencia a querer imponer un criterio y restringir
los contrarios, lo que implica negar la libertad a esgrimir un pensamiento para confrontarlo
responsabilidad de ofrecer la propia opinión y decisión sobre todos los asuntos que cada
abstenerse de participar, hacerlo supone reducir la dimensión del conjunto social que
decide, lo que no sólo merma las posibilidades de que la decisión adoptada coincida con la
propia, sino que reduce el ámbito de opinión sobre el que se concluye, lo que puede
A veces se cree que la efectiva libertad social reduce la capacidad de eficacia en la gestión
de lo público, pero lo que debería criticarse son las deficiencias de un sistema cuando no es
capaz de responsabilizar la implicación positiva que busca el bien común. De algún modo,
CONCERTACIÓN Y PARTICIPACIÓN:
Hombre y mujer deben emplearse con esfuerzo para lograr el bienestar, pues todo lo que se
es el instrumento propio y principal para lograr progresar en ese empeño. Entre todas las
resulta la sociedad; la que también genera zonas oscuras en las que la convivencia se
esencia, es la que hace que una y otra vez haya de refundarse sobre sus fundamentos de
servicio mutuo para lograr afirmarse como un valor. Lograrlo sólo puede alcanzarse
el bien común.
A lo largo de la historia la expresión de la concertación la constituye el acuerdo de
voluntades en torno a un objetivo que reporte beneficios para quienes consensuan obrar
juntos para alcanzar un fin. La formalización de ese acuerdo es lo que ha revestido plurales
formas de adhesión, pues según los entornos comunitarios se han dado muy variadas
con la política de representación, hoy en día -porque los medios técnicos también ayudan a
aplicación.
El valor del voto no debe desfigurarse como si un ciudadano fuera un mero refrendador de
la política que tejen los demás, sino la expresión última de su decisión participativa. Son las
implicaciones de la vida social las que cada ciudadano debe considerar, partiendo de
aquellas que más directamente le afectan, y dónde debe decidir cómo quiere configurarlas
de acuerdo con las demás personas con quienes convive en esas concretas circunstancias, y
desde esa participación en la base organizar los consensos necesarios en todo lo que le
afecta. Conseguir esa presencia personal en todos los estamentos de la relaciones sociales
es una de las reivindicaciones ciudadanas, cuyo empeño puede hacer remover los
Reclamar el igualitario derecho al ejercicio del valor de la participación ciudadana tiene sus
exigencias de responsabilidad, siendo éstas las del empeño por saber sobre los fundamentos
instrucción universal que no excluya a ninguna persona de poder obrar con fundamento.
Por eso los primeros pasos en la concertación exigen el ordenamiento social de una
SOLIDARIDAD:
Aunque los seres humanos se agrupan para mejorar sus posibilidades de sobrevivir y
progresar, no por ello deja de existir en su convivencia dos posiciones antagónicas: Una
que les lleva a la colaboración mutua, y otra que les enfrenta respecto al modo y gobierno
de cómo se deben ejecutar las cosas. Por ellas aun en las células más pequeñas de
Cada individuo aporta a las relaciones sociales lo que vertebra su personalidad, porque
aunque las acciones menudas reflejan el carácter, las cuestiones de más entidad, a las que se
presta más juicio, deben seguir los dictados de la razón, que son los que forjan la
personalidad; es esta misma la que enmienda los fallos del carácter con miras a facilitar la
vida y el bien común. Para que el ejercicio de la razón dicte a favor de la vida en sociedad
vicisitud se debate una gran parte de la existencia humana, que contrapone los esfuerzos y
El derecho a la libertad y las relaciones de equidad y justicia son el marco que determina la
viabilidad de la vida social, pues reconocen la concreción del bien común; claro que ello
casi nunca alcanza a satisfacer las necesidades de todos los ciudadanos. Esas diferencias de
retribución social entre unos y otros tiene causas muy diversas, unas debidas al sistema en
hacer personal ajenas en sí al entorno social, se podría aceptar que de estos últimos casos
conciencia que mueve, más o menos, a todas las personas a corresponsabilizarse de las
necesidades ajenas, aunque no fuera por otro motivo que considerar poder encontrarse un
Buscar el bien es el fin último del obrar humano. Remediar cualquier necesidad ajena es un
bien, por ello no debe extrañar que la conciencia lo estime. Cuando el bien corresponde a
extienda desde la justicia pero nunca la suplante, aunque a veces la conciencia se confunda
y busque compensar la falta en el deber de justicia con un acto de solidaridad, lo que nunca
justicia. Hacer bien a alguien puede ser un mérito de conciencia, lo que no revoca la
La solidaridad es un valor social que tiene alcance universal, ya que puede proyectarse
desde sobre el más próximo hasta cubrir necesidades de gente de pueblos remotos. Como
prioridad de los bienes sobre los que actuar, sin que pueda ser censurada por criterios de
valoración distintos.
La solidaridad como valor social presenta una vertiente particular, que atañe al bien
política social, que tiene por objeto que una comunidad en su conjunto incluya en el
puede considerar consustancial a la conciencia del ser humano, ya que ha existido siempre,
sus efectos, en cambio, no han sido lo suficientemente considerables como para haberse
GLOBALIZACIÓN:
Un valor social para toda persona es gozar de una amplia capacidad de relación. Pueden
existir muchos condicionantes para establecer relaciones mutuas, como pueden ser la
lengua o la desconfianza entre personas, pero las más determinantes provienen del propio
carácter y la personalidad forjada que pueden restringir, por desmedido respeto, temor o
acepción de personas, el círculo social de relación. Esos límites que alguien se imponga
Desde la antigüedad parece que los pueblos más abiertos a las vías de navegación, que les
Por las relaciones se aprende lo que otros has descubierto, de modo que se agranda la
perspectiva de progreso. Ese saber, e incluso las propias maneras de entender la vida,
inducen al hombre sabio a escuchar y asimilar, pues por mucho que sepa es mucho lo que le
queda por conocer. Si esa es la actitud del prudente, debería ser regla para todos los demás,
ya que del mismo modo que se afirma que el obrar sigue al ser, el obrar con provecho sigue
al saber.
de comunicación audiovisuales han potenciado tanto en el último siglo que hoy en día
prácticamente todo el mundo dispone de referencias ciertas sobre la vida en los cinco
Del conocimiento mutuo se sigue el que la mayoría de las personas se sientan atraídas a
desplazarse a los países que muestran mejores posibilidades de vida, de modo que la
bienestar.
La necesidad de materias primas para la industria mueve a que los países más desarrollados
tengan que proveerse en los territorios allá donde la naturaleza conserva importantes
recursos. Esto crea un flujo de comercio que cada país administra potenciando relaciones
Las estrategias económicas y políticas favorecen alianzas entre naciones y ello facilita el
valor de la globalización debe partir de que si cada cual hubiera sido educado en otro
ambiente probablemente sería como aquellos a quienes se detesta por su forma de actuar.
personalidad que la generalidad del comportamiento de una masa social. Entre las personas
sentido del bien guía en la misma dirección a todas las personas de la humanidad.
Si se piensa que es el ambiente o el entorno el que enrarece las relaciones humanas, el valor
de la globalización debe animar a la difusión de los fundamentos de una filosofía social que
PAZ:
La paz es el valor que mueve a las personas a superar las diferencias en las relaciones
relaciones se puede considerar tan alta que refrenda la realidad de la dinámica conflictiva,
por lo que la tendencia social, si no puede evitar la conflictividad, debe ser la de tratar de
aplicar la pacificación como forma de marginar la violencia; por ello el valor de la paz debe
cultivarse como fin social desde cada personalidad, pero también en cuanto colectividad, no
sólo en los problemas internos, sino también en la confrontación con otros colectivos.
Para que el valor de la paz logre efectividad, su arraigo debe adquirir una dimensión de
pasión tan grande como pudiera tener la violencia, pues en caso contrario en la mayoría de
La paz no equivale nunca a cesión, sino a convención de los ciudadanos en el respeto de los
La responsabilidad ética de los frustrados acuerdos de paz entre las naciones no conciernen
sólo a los políticos, sino que una parte importante repercute sobre la conciencia ciudadana,
cuya ideología es inspiradora e impulsora de la acción de gobierno, tanto por acción como
exigencia personal en ese valor de cada uno y todos los ciudadanos del mundo, cuya
CAPÍTULO 6
CONTRAVALORES
PODER:
El poder como valor se corresponde como la autoridad en quien se delega parte de la
distinción del poder como valor y contravalor radica en que como autoridad legítima
administra con justicia en los asuntos comunes de una colectividad, y como contravalor
El poder legítimo siempre está limitado en extensión y tiempo por la delegación que las
cede sin perderse, porque es una cualidad personal, su legitimación abarca a los contenidos
sobre los que se constituye esa cesión y por el tiempo que se acuerda, la vulneración por el
delegados; esa tentación, que no cabe en quien no tiene autoridad, constituye la causa
común de su corrupción.
El poder también se posee sin que haya sido delegado por la comunidad, cuando un
individuo posee medios para dominar a los demás. La inteligencia, la creatividad, la fuerza,
sometiendo las voluntades de los demás. Si el beneficio que genera esa superioridad de
interés propio. De esa forma se constituyen las marcas de poder que dominan en la
sociedad.
Nacer en una realidad marcada por el poder hace que se haya de aceptar como una
específica de los seres vivos, pues semejantes estructuras de poder se observan en las más
determinante.
El contravalor del poder en el ser humano, aunque tenga una causa determinada en su
naturaleza material, no puede ser identificado como tal sino por la deficiente intuición del
intelecto para corregir al razonar esa posición de dominio por la del mutuo servicio; es esa
decisión intelectual a favor del dominio la que consolida el poder, laa que se impone sobre
el colectivo social, aunque éste realmente lo sostiene mientras mantiene con él una relación
de sumisión.
El poder económico, la violencia física o el poder moral se hacen efectivos en las relaciones
igualdad. El producto de esa diferencia de posición es el que va a hacer crecer una parte de
la que hace del poder un contravalor que pone en riesgo la cohesión de la vida social.
SUBYUGACIÓN:
la dócil condición de individuo. Se puede ejercer con objetivo consciente de dominio ajeno
o sin propósito cierto de causar ese efecto, llegando incluso a poderse imaginar como un
dominio sobre la persona ajena para reportarla un bien que se es incapaz de procurar por sí
misma. En lo que supone de anular la libertad es un mal integral para la persona que lo
propio de cada persona es razonar sus particulares intuiciones, formular su propio querer y
obrar en consecuencia.
Todas esas formas comparten el que impiden el ejercicio libre de la propia conducta, para
La expresión más clásica de la subyugación es la esclavitud, por la que la total vida del
esclavo pasa a pertenecer al amo que detenta su dominio. Por más violenta que sea la
esclavitud, casi siempre cabe el que se sostenga un reducto de conciencia personal que
genera entre individuos unidos por algún vínculo de relación que sirve de causa para ejercer
el dominio. Esa subyugación de unas personas por otras se encuentra tanto menos o más
de esas personas se generará próxima a admitir un cierto dominio de unos por otros, lo que
La subyugación social es la que se ejerce desde los poderes reales de la sociedad hacia los
reivindicación de las libertades. Esa presión para dirigir las voluntades puede provenir del
poder político, del económico, del moral, o de cualquiera de las formas de dominio injusto
instauradas en una sociedad. Unas veces esa subyugación del poder público se realiza por
medios directos de leyes, sentencias, decretos... y otras mediante la propaganda
que pretenden apoderarse sin ser percibido de la voluntad de decisión de la masa para
hacerla adepta a un consumo que reporte beneficios. Métodos parecidos se utiliza para la
captación que tiene por objeto lograr la sumisión ideológica a las sectas.
parte dominante dista de la que posee la parte dominada para liberarse. Por ello, como
contravalor arraigado en la sociedad, se perpetúa más allá del aparente sistema de los
MARGINACIÓN:
facilita a cada persona la sociabilidad, en cuanto que es el medio necesario para establecer
una relación. Sin comunicación se podría vivir de un modo adyacente, pero sin participar en
peores disposiciones para entablar relaciones, cuyo conjunto determina la amplitud del
incorporación de nuevos vecinos o se resiste a ello. Esa resistencia puede ser genérica, de
modo que se dificulte la incorporación a foráneos, sean quienes sean, o que sea selectiva, de
modo que discrimine la incorporación a la sociedad a etnias, clases, procedencias, etc.
Podría pensarse que en una comunidad constituida sólo se podría marginar a quienes
inmigran para incorporarse a ella, pero lo cierto es que dentro de cada sociedad suele haber
discriminaciones entre sus mismos ciudadanos por razones semejantes con la que se juzga a
los extranjeros, casi todas fundamentadas en un íntimo concepto de clase por el que se
imperfectos ciudadanos.
históricas han quedado relegados por causas económicas, culturales, religiosas, laborales o
población por exclusión social causada por su modo de ser o comportamiento, o incluso por
La exclusión social es doble cuando una misma persona que padece una marginación
Toda marginación responde a una respuesta personal fraguada en una ambientación social.
sociedad. Esa valoración se realiza respecto a unos parámetros que la sociedad infunde a
través de su propia cultura, de modo que el prejuicio sobre el foráneo pesa en función a
criterios interiorizados por el discurso mayoritario de cada sociedad. Esa razón se evidencia
en que la mayoría de las comunidades acogen a quien aporta bienes, y se rechaza a quien
carece de ellos.
esa perspectiva agregarse es lo propio de la sociedad, lo que se niega cuando se actúa con la
reconocimiento que se debe a toda persona por ser persona, y a la valoración que puede
influencia negativa, y hay a quienes se repulsa porque se juzga a una persona por el
comportamiento de un colectivo con el que se la identifica. Hay que tener en cuenta que la
perspectiva con que se cuestiona. Cada clase o casta sostiene un prejuicio contra las demás
pueda estar condicionada por el entorno social, concierne a cada individuo editar suficiente
tolerancia como para no excluir a nadie, al menos de una relación de vecindad. Esa
tolerancia moral es compatible con la denuncia de las faltas o delitos que pudiera apreciar
en los demás, porque ello representa un acto de justicia con el resto de la sociedad
previniéndola del mal que pudiera causarle una conducta desaprensiva o inmoral.
CORRUPCIÓN:
sociedad lo causa aquellas actitudes ejemplares que desde una posición de dominio moral
mueven a obrar, con su ejemplo o su doctrina, de modo contrario al mutuo servicio. Como
una otra ajena impidiéndola generar el bien social debido. Admitiendo el fin social del ser
humano, lo que se opone a que logre ese fin, viciando el hábito operativo, supone una
inducción a la traición social. Eso ocurre cuando en la relación no se busca un intercambio
Todo mal social -como ausencia de bien- por su oposición al bien debido difunde
corrupción, pues aunque cada acción afecta a una parte atómica de toda la sociedad, su
comunicación contamina tanto cuanta confusión logre respecto a que la ausencia de ese
ética. La estabilidad que la justicia presta al sistema social se resiente cada vez que alguna
parte la vulnera, porque ello mismo se convierte en referencia de un modo de actuar que, si
la sociedad lo tolera, hace permisivo que se busque la relación mutua como fuente de
prosperidad particular. Esto adquiere auténtica relevancia social cuando quienes vulneran la
justicia son quienes la misma sociedad ha elegido como sus representantes políticos,
ocupan cargos públicos o son personas encumbradas socialmente por sus cualidades o
reconocía.
Egoísmo.
Perversión.
Malicia.
El egoísmo tiene su raíz en el progresivo egocentrismo que comienza por ignorar el derecho
ajeno, para progresivamente descontar la razón de existencia de los demás, fuera del
servicio que reportan. La corrupción el egoísta la asimila como un éxito de realización
personal, pues le facilita recursos económicos y poder, que le confieren tanto disfrutar de
diferenciación sobre los demás es lo que le configura como contravalor social, además del
con el progreso de los demás, pero el egoísmo añade a la ambición el acaparamiento a costa
La perversión es aquella actitud ética que conduce a una persona a congratularse con la
oposición a la ética, por la que se busca la vigencia del bien para el conjunto de la sociedad.
exaltación del dominio ligado a la potencialidad física y mental del ser humano. La
sociedad, ya que incluso los mejor dotados han de urdir permanentemente el disimulo de
sus debilidades.
orquestada desde el poder público, grupos de presión o medios privados afines, y se dirigen
Un estrato social.
Un estrato político.
Un estrato económico.
Aunque se haga esa diferenciación, lo cierto es que existen entre ellos muchos espacios de
libertad que también debe velar la política traspasa una gran parte de la responsabilidad a la
común. Aunque sólo sea como referencia de ámbitos de responsabilidad, vale sostener esos
El estrato social se corrompe especialmente por la acción de unas minorías sobre las
debilidades de las mayorías. Así se abusa sobre la pasión humana al juego, al placer y en
general a los deseos de satisfacción, incluso los más simples, como el simple interés por
los anhelos simplistas de las personas por mejorar en salud, bienestar, belleza, trabajo, etc.
corrupción en el estrato político son los intereses cruzados, por los que se reparten y reciben
favores creando una trama de beneficios múltiples tan difíciles de descubrir como de
controlar; por lo que cada político suele estar comprometido más por sus relaciones que por
sus decisiones.
controlan los resortes que permitan la especulación sobre las principales necesidades de la
sociedad. Como el ahorro para las contingencias es una prevención ciudadana casi
deficiente, los grandes emporios puedan negociar imponiendo a los ciudadanos condiciones
PROTECCIONISMO:
universalidad de la humanidad.
Puede ser:
Cultural.
Económico.
Laboral.
Religioso.
Ideológico.
Familiar.
El proteccionismo cultural es el conjunto de actividades que protege una nación para
intercambios internacionales, etc. Se puede opinar que estas restricciones a la libertad con
Proteger los intereses nacionales se considera tarea del Estado, pero el error radica en la
el comercio genera un beneficio global que favorece los intereses de todos y cada uno de
cuando esa racionalización se funda en la exigencia del fin social de las riquezas y de la
una defensa global de las protecciones sociales en la concepción del mercado, sino cuando
global.
causa, que debería ser objetivo de la labor concertada de todos los Estados. Por ello, un
proteccionismo sectorial y temporal sólo puede justificarse cuando de los beneficios locales
comercio internacional.
El proteccionismo religioso supone una implicación del Estado para proteger la práctica de
de los ciudadanos, ya que proteger una doctrina significa de hecho restringir los derechos
respeto a todas las creencias se enfrenta al derecho a la libertad religiosa como valor social.
ejercerse en ese ámbito, o sea, sostener los legados históricos en monumentos, literatura,
caracterización del Estado. Como contravalor se identifica con la resistencia a los cambios
global de los derechos humanos. Las ideologías presentan esa resistencia al cambio porque
toda evolución supone de hecho una superación de anteriores concepciones sobre las que se
fundamentó la ideología. El valor de las ideas sociales está en que ayudan a concebir unos
político. La defensa de esas ideas puede considerarse un valor, siempre que no se erijan en
unívocas de la identidad de una nación yerran como proyecto social tanto como su poder
los fines específicos de la familia, facilitando la protección y asistencia para que se logre
una estructura familiar que deba regirse por la tradición en vez de por la modernidad,
entendiendo ésta como la libertad para que los esposos y padres puedan elegir las formas de
evolución del orden legal y jurídico debe contemplar que la sociedad se estructura sobre la
familia real, tal y como ésta concibe su función en cada momento histórico, y no que ese
orden legal sea quien se imponga sobre los sentimientos y voluntades, que hacen que las
relaciones humanas tengan sus propias formas de reinventarse cómo vivir en familia.
CAPÍTULO 7
COMUNIDADES DE CONVIVENCIA
LA FAMILIA:
La familia es la relación más primaria entre personas, ya que la procreación sigue una
norma de la naturaleza que establece la causa del nacimiento del hijo a la voluntad de unos
nacido es incapaz de sobrevivir sin ayuda, los medios necesarios para alcanzar ese fin se
identifican como una relación padres-hijo capaz de conseguirlo. Ese conjunto de relaciones
Como el ser humano no sólo tiene como fin mantener la especie, sino que se conoce a sí
mismo intelectualmente como ser, la realización de su personalidad forma parte del fin de
ser de cada individuo, por lo que también ese fin de realizarse como persona, que tiene
sentimientos intelectivos de afecto se generan las relaciones de íntima amistad que produce
haberse ido generando la adecuación de la voluntad a cada una de las causas motivada por
su fin propio.
Las relaciones de familia se pueden considerar como relaciones de amistad, que se suelen
definir como las que comparten esferas de realización de la personalidad desde la
pueden apreciar grados en función de un mayor o menor ámbito de la propia personalidad
personalidad, tal como uno se conoce a sí mismo, con la convicción de que esa
proyectos.
que se acuerdan vivir en común. Suele exigir confianza, consenso en los proyectos,
cumplimiento, y del trato mutuo surgen afectos más o menos sólidos y perdurables.
proceso de educación potencia crear esas aptitudes de acuerdo, afinidad y afecto. Entre
esposos o pareja la amistad íntima queda dependiente del grado de implicación personal
salvar las diferencias. Entre hermanos se da la amistad íntima, pero la amistad más común
es la amistad próxima, pues la íntima la ocupan preferentemente los padres y las relaciones
El fin de la familia, como el de toda relación, es procurar el bien a todos los partícipes,
padres e hijos, lo que se logra por los medios adecuados en los que cada miembro, como
sujeto activo, aporta la sensibilidad, la creatividad y la operatividad para ejercer los deberes
familiares con la perfectividad esperada por los otros miembros. Esa comunicación de
La desunión de la familia se produce cuando cada parte, o alguna de las partes, busca como
fin el bien propio particular en vez del bien común. Es la causa común de destrucción de
toda relación, porque al procurar cada uno su propio bien fuera del bien común se pierde la
Como en la familia tanto el bien común como el bien propio guardan una gran dependencia
convivencia genera desafecciones que perturban no sólo el bien común, sino los beneficios
particulares que cada parte pretendía como fin al proyectar la vida familiar.
Las verticales son las que se establecen entre padres e hijos. Tienen la particularidad de que
durante una etapa de la vida son relaciones de educación y enseñanza de quien tiene
experiencia en vivir al que no la tiene. Enseñar a hablar, leer, escribir, contar, ayudar a
maestro, que es una caracterización de las relaciones verticales: Enseñar al que no sabe.
La relación de los padres con los hijos, por depender de los progenitores la voluntad de
traerlos al mundo, implica unos deberes de consecuencia. Entre estos deberes se encuentra
el de educarlos, que atiende respectivamente al derecho del hijo a ser educado. El derecho a
ser educados reside en los hijos, y los padre debe cumplirlo atendiendo a su independencia
e individualidad, luego la patria potestad no genera derecho sino deberes. Éstos deben
educar al hijo cómo éste de mayor gustaría de haber sido educado. Ello puede incluir la
renuncia a preferencias tradicionales, en aras a apostar por elegir formas al uso prospectivas
En las relaciones verticales no sólo se enseña lo que se quiere, sino que la propia forma de
comportamiento es una referencia educativa, porque quien no sabe copia los modelos de lo
que ve, y tiende a interiorizarlos e imitarlos. Por eso la responsabilidad ética de los padres
no se limita a los contenidos que objetivamente tratan, sino también a la trascendencia que
querer proyectar la propia personalidad sobre los hijos. Las relaciones entre padres e hijos
nunca pueden obviar la auténtica esencia de una relación entre seres humanos libres y
distintos, con derecho a desarrollar su propia personalidad. Una cosa en enseñar contenidos,
acto con fin de dirigir la personalidad hacia la voluntad propia vaciando la autonomía del
menor. Ahí, donde se impone el poder del ascendiente, es donde pueden desviarse las
educación impuestas puede acontecer que el ascendiente crea prestar un buen servicio y el
Las relaciones horizontales son las que se establecen entre hermanos y primos, que con una
edad similar y en una misma generación conciben las relaciones como una complicidad
verticales. Cuando el ser humano conoce que conoce, identifica lo que se le enseña de la
Desde que el niño adquiere uso de razón, las intuiciones creativas van a dirigirle a descubrir
los significados personales que pueda reportarle la realidad, y ahí es donde va a buscar la
complicidad de las relaciones horizontales con sus iguales para lograr el apoyo común en la
aventura de la indignación.
Son relaciones familiares horizontales también las que afectan a los esposos, parejas, y en
mutuamente sobre la personalidad a lo largo de la vida. Ellos, igual que los niños, siguen
alimentándose de experiencias pues, aunque se podría pensar que con los años se tiene todo
sabido, las circunstancias originan continuas situaciones donde experimentar lo que las
hijo a cuando se ejerce de padre y cuando se llega a abuelo, las horizontales pierden
originalidad con los años, en cuanto parece que menos queda por descubrir en el entorno
exterior y menos puedan aportar los más allegados. Surge así una sustitución de parte de
esa relación social por una mayor introspección, donde la conciencia personal se afana en
identificar personalmente con mayor rigor los contenidos y condiciones de verdad de todo
lo aprendido y experimentado.
COMUNIDAD TRIBAL:
amistades consolidadas con las cuales se comparte una comunicación importante. Las
proximidad, lo cual no impide que a veces coexista con esa amistad grupal diferencias de
La causa de las relaciones de tribu se remonta a la ayuda mutua entre familias para atender
labor. También la mutua defensa y auxilio favoreció la agrupación de las familias durante
La esencia de las relaciones de tribu se reflejan de modo muy distinta en la vida rural y en
la vida urbana, aquí se desfiguran conservado sólo algunos de sus fundamentos, lo que ha
En la tribu rural la convivencia es alta, y se rige en mucho por las costumbres. Se nace
El fin de las relaciones que formalizan la tribu es la ayuda común, y constituye una
condiciones, a las que se exige guardar lealtad. En este marco que genera la costumbre es
donde aparece el primer esbozo social de la ley, por las obligaciones que se admiten
mutuamente, y de cuya regulación implícita hace que sus contenidos puedan ser exigidos
por la comunidad a cada individuo, existiendo una autoridad para juzgar los desafueros,
las relaciones que se puedan distinguir dentro de la sociedad. Así la tribu preserva la
independencia familiar, regula las relaciones entre familias, la distribución de las cargas de
que caracterizan una peculiar solidaridad formal. Pero la más característica relación que
autoridad no está fijada necesariamente por la ascendencia, sino que disputan esa potestad
componentes de la tribu.
que se desarrolle en un entorno cerrado, sino que a su vez mantiene como comunidad
organizada relaciones con otras comunidades vecinas, con las que comparte comercio,
defensa, y otras formas de ayuda mutua. La fuerza de su tradición hace que permanezcan
como comunidad cuando la sociedad se amplía y quedan insertas en estructuras que las
absorben.
tribu tradicional, pero entre personas que viven diseminadas en la ciudad moderna, donde
preservan una entidad moral con verdadero trato y relación particular. Suele tener su origen
en raíces de familia, raza, pueblo o religión, y quienes las integran mantienen una doble
relación social: Una más estrecha con su tribu y otra más genérica con los demás
delimita la comunicación por la lengua, cuando existen fobias contra razas o cuando la
propia religión exige replegarse hacia los correligionarios. Los límites de una tribu dentro
dado que los mismos fines que son causa de la tribu se identifican con los que inspiran las
las relaciones vecinales sustituyen, aunque con una gran merma de intensidad.
EL MUNICIPIO:
Las relaciones entre las personas en un municipio incluyen las relaciones interpersonales de
unos con otros ciudadanos por motivos familiares, laborales, de vecindad, de amistad, de
ocio..., y las relaciones entre los ciudadanos y la estructura administrativa y política que
rige y organiza la prestación de servicios y da las normas adecuadas para facilitar la vida en
común.
municipios es un simple hilo capaz de trasmitir más bien intenciones que opiniones o
proposiciones.
Toda relación que utiliza intermedios es una comunicación factible de sufrir distorsiones,
personal y profesional de las mismas. Por ello la estructura política tiene un reconocimiento
bastante desprestigiado y son muchos los individuos que no se sienten representados por
quienes habiendo sido delegados han defraudado las expectativas de quienes los eligieron.
demarcación territorial. Sus fines son similares a los de un grupo tribal, pero los medios
para lograrlos se confían en la cooperación de todos los habitantes del municipio, sean
menor que no se crea por asociación voluntaria de relaciones, sino que se constituye como
una sociedad a la que se pertenece por naturaleza de nacimiento o de residencia. Aquí está
límite que la geografía política le confiere. Que el municipio sea sociedad, lo es porque
forma parte de la estructura de un Estado, la cual define los medios y fines que son de su
competencia para atender a la causa que legitima ese reconocimiento de las relaciones
Uno de aquellos escollos con que se enfrenta la definición del fin del municipio es la del
municipal. Esto surge porque en las relaciones dentro de las sociedades, por ser de obligada
adscripción, sólo rige el fin del bien común, y éste puede ser concebido en su aplicación
penetrando más o menos para proteger a cada persona, lo que también procuran los grupos
y células sociales que se forman por asociación voluntaria de relaciones con un fin similar
al de la administración pública.
subsidiariedad, que defiende el que los fines de la relación deben ser atendidos por el grupo
natural más simple que pueda realizarlo, y cuando en esas relaciones se manifieste la
incapacidad de atender el fin, lo deba hacer la sociedad pública más próxima, que para una
gran parte de las necesidades habituales es el municipio. Esa teoría presenta el defecto de
que la estructura de los medios de atención universal tiene que ser planificada desde la
integración de todos los recursos ciudadanos y para todos los ciudadanos, y por ello su
esos servicios. La vocación de universalidad en las relaciones de servicio para lograr el bien
LA NACIÓN:
legado histórico. Una nación se hace a lo largo de una historia que deja influjos sobre la
forma de ser. Se identifican en su esencia con la familia y la tribu más que con el municipio
no de una legalidad. Una nación lo es mientras ese sentimiento avale una relación de
identidad entre sus miembros por la fidelización a una cultura común. Tanto es así, que una
nación no lo es por poseer una historia común, sino por el grado de concienciación con esa
historia común.
los juegos, las costumbres, la religión, el trabajo, el comercio, las formas políticas..., las que
en mayor o menor medida constituyen las referencias de las forma de ser que se asumen
unas y otras constituyen los valores que hacen que la nacionalidad no sea un sentimiento
muerto, sino en evolución, lo que no deja de constituir un permanente debate interno sobre
condicionada por la nacionalidad, tanto en lo que puede legar la raza como el influjo
cultural. Ello hace que exista una predeterminación a encarecer más unos valores que otros,
La estructura de la nación actúa como factor dominante sobre el conjunto de las personas
de una comunidad, en la que siempre hay minorías sin vinculación o quienes sienten poca
afinidad por lo nacional. Ese valor dominante puede caracterizarse como una expresión de
servicio entre quienes se aprecian y comparten una tradición, pero puede también
constituirse como un factor de dominio de la comunidad nacional sobre los que son
extraños a la misma. El respeto mutuo en la vida social exige que tanto la mayoría nacional,
como cualquiera con otra nacionalidad minoritaria o quienes son extranjeros en esa
comunidad, todos sirvan al bien común con el trabajo, el comercio y el cumplimiento de las
leyes. Es posible que los extranacionales puedan encontrar extrañas muchas costumbres
reflejadas en la ley como forma de concebir el bien común, lo que se supera con más
personalidad. Las propias maneras de ser de cada uno siempre repercuten en algo sobre
toda la colectividad, por lo que la integración no debe ser considerada como un riesgo de
disolución de la nación, sino signo de la universalidad de la humanidad, en la que las
similitudes de personalidad son mucho más relevantes que las diferencias que pueda marcar
la cultura.
La prioridad del sentimiento en la nacionalidad permite que una persona pueda integrarse
en una nación sin tener que renunciar a la propia anterior, porque esos vínculos, al ser de
relaciones los identifiquen con las mismas. La diversidad que así se constituye debería
ayudar a reconocer la dimensión universal de la humanidad y el papel que cada nación debe
Es una realidad que muchos Estados albergan en su espacio político más de una nación, en
monarquías, que llevaban a unificar bajo una misma corona naciones distintas que el
tiempo no ha podido unificar. Ello puede inducir hacia un foco de tensión entre
nacionalidades, al tener que convivir bajo el dictado de unas mayorías que generalmente
van a ser juzgadas desde el prejuicio de discriminación. Cuando el conflicto existe, más o
EL ESTADO:
El Estado es la entidad legal con reconocimiento nacional e internacional erigida para regir
definición territorial sobre la que ejercer la soberanía común de todos los ciudadanos que la
integran por derecho. El Estado se constituye por derecho consuetudinario o por derecho
origen en un conjunto de normas vinculante por su vigencia histórica, o que lo tenga en una
Se debe distinguir los Estados de los Imperios esencialmente por la forma de soberanía. Los
Imperios son aquellos territorios en cuyo dominio un soberano personal impone su voluntad
territorios en los que la soberanía recae en el pueblo, el conjunto de los ciudadanos, quienes
asunción del pasado histórico, junto a estructuras formales de soberanía popular a través de
Todo Estado se define por un sistema y una estructura. El sistema define los modelos
demás disposiciones que regulan la entidad de las instituciones y sus aplicaciones a los
El fin del Estado es el de dirigir la comunidad para lograr el efectivo bien común. Su
legitimidad para sumir esa dirección proviene de las relaciones ciudadanas que se
configuran en comunidad para entre todos lograr mayores beneficios que los que
que es un bien que repercute sobre todos y cada uno de los miembros de la colectividad.
Ese bien común exige que el Estado provea de los medios para la defensa de la vida y los
derechos de los ciudadanos, así como que logre la efectiva protección de los derechos que
La estructura de un Estado puede ser centralizada, en la que todo el poder lo depositan los
puede ser descentralizada, en la que los ciudadanos eligen representantes a distintos niveles
de la Administración del Estado para gobernar desde el grado de responsabilidad que les
La división de poderes dentro del Estado es algo que facilita la trasparencia y ahuyenta el
autoritarismo, aunque para que sea efectiva debe reconocer que cualquier poder es
confianza y deben poder ser revocados cuando esta falta. Una clásica división de poderes es
la que separa el poder ejecutivo, el legislativo y el judicial. Cada uno de ellos posee
establecidos por el sistema poderes que equilibran los otros, para que ninguno se propase en
asistencia del Estado a los ciudadanos en el desarrollo y protección de los derechos que le
confiere el sistema. Sea cual sea la forma de sistema del Estado, la administración pública
obstante existir esa especialización de una parte de los ciudadanos que les vincula en el
excepcionales graves lo exijan. Los demás ciudadanos sirven igualmente al Estado, pero en
las actividades liberales que generan la riqueza necesaria para el desarrollo de la sociedad.
El Estado puede considerarse como el grupo social organizado capaz de procurar a sus
ciudadanos de forma autónoma todo lo necesario para la digna supervivencia. Mejorar
INSTITUCIONES INTERNACIONALES:
Para consolidar esas relaciones se crean asociaciones de Estados con objetivos de mutua
comunitariamente se obligan.
la ecología, etc., desde las que desarrollan programas patrocinados para lograr objetivos
internacionales comunes.
Las relaciones internacionales son relaciones entre Estados y no entre pueblos, por lo que
su objetivo es político y no logra de por sí la integración entre los ciudadanos del mundo. El
gran problema con el que se encuentran los organismos internacionales es que cada Estado
procura imponer su hegemonía, procurando el bien particular de sus ciudadanos antes que
suelen pesar más los antagonismos históricos que el encarecimiento de los beneficios de
una globalización armónica. La adscripción sentimental a una cultura y a una nación es con
frecuencia tan radical que hace que prevalezca en muchos países el temor a ser reducidos
extrañas. Aunque es cierto que las tecnologías modernas de comunicación colaboran a abrir
las mentalidades, también comunican las enormes diferencias sociales que realimentan la
segregación internacional.
CAPÍTULO 8
COMUNIDADES LABORALES
EXPLOTACIÓN FAMILIAR:
Por explotación familiar se debe entender la finca agraria, centro ganadero, comercio, taller,
pequeña industria y similares cuya propiedad se concentra en uno o más miembros de una
es tan diversa como está presente en los más distantes y distintos países del mundo. Su
parentesco que compartiendo vecindad unen sus esfuerzos para conjuntamente acometer las
división del trabajo favoreció que cada explotación familiar se especializara en una tarea
peculiar de las demandadas por el vecindario, que si bien en un principio pudo existir una
Patriarcado.
Especialización.
Independencia.
Creatividad.
Responsabilidad.
Sucesión generacional.
Recapitalización.
familiar al especializarse en una tarea laboral, enseña el trabajo a los descendientes desde
donde el mayor suele ser quien dirige la organización, aunque en las explotaciones más
vincularlos de por vida a la tarea común familiar. Los hijos, aunque nacen en un hogar,
sensibilidad, y por tanto no deben considerarse obligados por deber de justicia a trabajar en
generados por el trabajo invertido sobre la misma por cada miembro de la familia. Ello
participa en función del trabajo. Esa propiedad dinámica es tanto más necesaria de
otros. La justicia distributiva exige que sobre la propiedad incrementada exista unos
estatutos consensuados por la unidad familiar que evite tanto la arbitrariedad patriarcal
del padre y las participaciones en la propiedad vinculadas por los restantes familiares
trabajadores favorece que tras el fallecimiento de cada uno se respeten los correspondientes
su tamaño habitualmente no puede abarcar distintas tareas. Ello le permite concentrar los
idéntica manera, pues la experiencia ayuda a corregir progresivamente los defectos y las
carencias, de modo que la regularidad en el trabajo del grupo familiar favorece que exista
una linealidad de superación, como quien es buen entendido en la materia que trabaja. Esa
La especialización del trabajo familiar, que hunde sus raíces en la remota antigüedad, tiene
su origen en el artesanado de los oficios, cuya técnica aún hoy en día se transmite de padres
a hijos donde no existen centros de enseñanza que faculten a los jóvenes en dominar un
pero también ocupa un destacado influjo en la industria auxiliar y los servicios de los
centros urbanos.
los demás para orientar sus productos a cómo son mejor recibidos por sus potenciales
pervivencia. La explotación familiar debe sentirse como sujeto del progreso y desarrollo del
entorno social, porque sólo así sus partícipes se reconocerán moralmente recompensados
ya que al ser los mismos propietarios y trabajadores gozan de una gran libertad para la
organización del trabajo de la forma en que alcanzan una mayor rentabilidad. Esta
independencia es una característica que debe ser bien gestionada por el grupo familiar para
explotación, pues una posibilidad es implicarse tanto en el proyecto laboral que termine
actualización de conocimientos, sino también el mutuo apoyo moral para superar las
más facilidades para paliar el posible aislamiento con los modernos medios de
comunicación, por eso debe ser un empeño corporativo exigir a las autoridades la ayuda
produce se deduce del esfuerzo aplicado por el grupo. Aguzar el ingenio para solventar las
dificultades es una constante, tanto más acentuada cuanta mayor sea la independencia
querida u obligada para la explotación. Aunque es cierto que también las deficiencias son
explotación se corresponde bastante con la idea que de lo suyo tienen los promotores,
trasluciendo su modo de ser, algo que nadie puede evitar transferir a sus obras, porque el
adaptarse a las demandas de los consumidores sin otro soporte que las propias decisiones de
la familia, por lo que la capacidad de imaginación debe ser tan trascendente como la
explotación, con discernimiento del objetivo neto que en cada memento se puede asumir.
malo, ello todo se asume en la individualidad, a veces también soledad, del promotor, o se
familia y el de el bien que se derive del trabajo y negocio emprendido. Respecto a la propia
familia, la capacidad de protección que se busca como fin no siempre se alcanza, pues las
posibilidades de la rentabilidad no se siguen sólo del empeño laboral, sino también se
deben al entorno y las circunstancias, siendo éstos quienes en gran parte delimitan los
recursos que se pueden aportar a la familia y los que definen el nivel de riqueza que se
puede alcanzar.
La responsabilidad por la obra bien hecha siempre se puede y se debe asumir, porque no
existe más que la propia limitación personal para hacer las cosas bien. La perfección no se
encuentra en lo mejor si no se dispone de los medios para ejecutarlo, por lo que el bien que
se sigue de todo negocio está en no defraudar la confianza de con quien se trata, así que,
como en toda explotación familiar la relación es muy directa, el bien que se dimana de la
educación de los hijos, por la cercanía que les concierna. Existen entornos sociales que
obligan a los hijos a incorporarse a temprana edad al trabajo familiar, pero ello no debe
descuidar el derecho a la correcta educación, que los padres siempre deben intentar
compatibilizar con la dedicación laboral. Como parte de esa formación también se recibe en
para que quien lo ejerce, aun el más joven, disfrute de la recompensa merecida por ello.
que pueden tener una raíz genética, transmitiéndose de padres a hijos, la mayoría de la
tiempo:
Enagenándolas.
Arrendando el negocio.
los promotores, cuando se han incorporado jóvenes al trabajo. Quizá porque han sido
presenta menos arraigo emocional con la actividad. Por eso en esta transmisión se suele
apreciar una cierta decadencia, quizá porque los gestores de la nueva generación dan por
hecha la rentabilidad sin el compromiso del esfuerzo. Cuando esto sucede, y no existe plena
bienes generados por padres y abuelos, dejando que nuevos emprendedores asuman la
familiar. Según que ese fin sea principalmente el beneficio económico, la realización
exigen disponer de capital para afrontar los costes de su ejecución. Cada actividad requiere
un mínimo de reinversión para seguir ofreciendo año tras año al menos la misma
beneficio, o no, porque el entorno económico marca unas pautas que hacen que, aun
mentalidad y riesgo de los propietarios. Cuanto más beneficio neto da una explotación, más
ampliación del negocio va a exigir más recursos humanos, con los que se debe contar para
los fines de la explotación, para evitar los desacuerdos que tengan su causa en una intención
segunda generación que se haga cargo de la actividad, y por ello conviene que en las
explotación.
que sí constituyen las más de las veces el alma de la explotación. Esa adaptabilidad es la
que hace que las explotaciones familiares no pierdan su carácter de forma próxima de
recurso de vida y realización personal del conjunto de una familia, en la que siempre
existirán diversos grados de identificación con la actividad, que hacen de unos más adeptos
a la reinversión y a otros tener las ilusiones en la disposición del capital que les permita
un vínculo laboral, y actuando éste como causa del contacto personal genera otras muchas
El trabajo absorbe una parte importante de cada jornada de los individuos. Si se descuenta
el tiempo que se emplea para dormir, se equipara el tiempo de contacto familiar con el que
se está en el centro de trabajo, de lo que se puede deducir que uno y otro conforman
ámbitos esenciales en la vida de los seres humanos durante su madurez. De ahí que cuando
se trabaja en una comunidad laboral se conciba esa convivencia con finalidad en el trabajo,
Una característica de las relaciones humanas laborales es que las posiciones de proximidad
normalmente no se eligen, sino que vienen dadas por el destino y las circunstancias, por lo
que integran en un grupo de gestión o producción a trabajadores que nunca antes se han
compañeros, para formar grupo en el puesto de trabajo se incorporan desconocidos que han
de permanecer cooperando al fin del trabajo haya o no sintonía personal. Para algunos
especialistas en sociología laboral, una de las ventajas de las máquinas es que no albergan
Pese a las divergencias de carácter, el trabajo en equipo ofrece muchas ventajas para el
grupo reaparecen muchas de las inclinaciones que hicieron a los primitivos seres humanos
De las relaciones que surgen del agrupamiento en centros de trabajo, cabrían distinguirse
De integración.
De competencia profesional.
De promoción y competitividad.
De amistad.
De indiferencia.
De enemistad.
Las de integración son aquellas relaciones que tienen como fin que cada trabajador se
identifique con el trabajo en consecuencia a cómo lo hacen los demás. Las actividades que
más permiten introducir la propia creatividad son las que se estructuran en forma de
racimo; las que menos, las que lo hacen en cadena, porque en éstas la concatenación de la
la cadena, quien se incorpora al equipo ha de hacer por integrar su propio modo de pensar y
hacer con las formas establecidas, salvo que se integre requerido con fin explícito de
Competencia profesional. Que se trabaje en grupo no debe relajar el interés que por la
propia realización del deber profesional se supone tener todo trabajador. Se sea autónomo o
mantiene entre cada individuo y la sociedad. Esa relación, por ser la más elemental entre el
ser y el universo, no se diluye ni por el tiempo ni por el espacio, y por ello es una
responsabilidad que acompaña a cada ser humano mientras haga vida en sociedad.
ponga en la tarea. Cada persona posee unas cualidades que debe hacer valer en su entorno
laboral, no para enorgullecerse, sino para rendir. Es competencia hacer un trabajo correcto,
en tiempo oportuno y que sea eficaz. La limitación y el soporte que ofrece trabajar en grupo
para desentenderse del compromiso social. Ello conduce a que el buen hacer profesional se
presente ante el colectivo como una obligación de la que no se debe hacer dejación. La
creatividad y el talento se debe prestar como una aportación normal del trabajador al grupo
de trabajo, de la que beneficia a los otros como sobre cada uno repercuten las cualidades de
los demás. Quien más puede aportar debe hacerlo como una extensión propia de su
personalidad que empujando la propia tarea ayuda a sacar adelante los objetivos colectivos.
Forma parte de la competencia profesional de los mejor dotados admitir que haya otros con
menos capacidades personales, a los que no se debe criticar, ni ningunear, sino respetar,
reconociendo esa diversidad como una expresión de la naturaleza que se comparte.
Promoción y competitividad. Entre las pasiones del dominio y el servicio, la que más
felicidad proporciona es la del servicio, pero la del dominio es la que se muestra como más
sugerente de alcanzar realización personal. El problema que entraña es que, como toda
La competitividad que mueve la pasión por el servicio es la de saber más y hacer el trabajo
mejor para ofrecer a la sociedad, tanto como, cuando se requiere de otros trabajadores, cada
individuo desea ser atendido. Esa competitividad por hacer lo que a cada uno le toca choca
frontalmente con la que pone como objeto del esfuerzo el ascender de categoría para
disfrutar de un mayor reconocimiento social. Aquel que tiene como fin el servicio vive
inquieto pero feliz, porque su ansiedad de hacer las tareas con perfección se enmarca en un
medio y el fin.
La competitividad que relega a un segundo plano el fin del servicio a la comunidad justifica
las influencias para hacerse valer por delante de otros compañeros y el fin en lograr poder y
reconocimiento. Ese modo de dirigir los objetivos del progreso personal adolece de la
quiebra del respeto debido tanto al entorno de trabajo como a la sociedad; así como de la
satisfacción moral del reconocimiento del bien, porque cuando se pierde la referencia del
trabajador pueden prevalecer las relaciones de servicio o las de dominio. Estas últimas son
las que mueven a dotar a todas las actitudes laborales de un trasfondo de ansiedad por
ocupar los puestos de mando no por responsabilidad, sino por el poder y prestigio que
deparan. Cuando se plantea desde esa perspectiva, el espacio laboral se contamina del
--guardando las correctas formas-- las limita la subjetiva ética personal. La promoción
dentro del ámbito de trabajo es un factor que ayuda a la integración profesional, pero
puede elucubrar.
La amistad se forja en el trato, especialmente cuando esa comunicación afecta a los temas
que interesan realmente a una persona. El centro de trabajo se constituye como un lugar de
estimulan el contacto entre trabajadores mediante una sección social que facilita la
bastantes aspectos de cómo es, lo que ayuda a que se creen lazos de sintonía que conducen
de ser y entender la vida que se compartan o no, cuando existe mutua comprensión,
constituyen una valoración del otro en la que cada persona se decante por destacar lo
positivo o lo negativo. Quien ensalza lo positivo de los demás presenta una posición
negativa de los demás presentan una clara tendencia a reducir las relaciones a un marco de
Ese juicio de valor no debe ser reprimible, al formar parte de la aplicación colectiva de
fuerzas para desarrollar la tarea común. Lo que no debe admitirse cada uno es la
descalificación pública hacia los compañeros de las debilidades de los demás, sobre todo
debieran considerar.
El despertar la amistad entre compañeros no hace que el juicio profesional sea más
benigno, sino que se afronta la realidad desde la perspectiva de --en base a la confianza--
profesional. Cuando las personas se tratan así, se sienten las espaldas protegidas, signo de
Indiferencia es lo que se muestra cuando una persona no hace suya las inquietudes del
pudiera constituir una implicación personal debida a la proximidad de trato con otra
comprenderse en un acto social, y por ello la marca de la relación laboral debe inhibirse de
cualquier otro sentimiento que no sea el de colaborar al buen fin de la tarea. Esta posición
cada persona en su actividad permanentemente, sin que puedan ser soslayados sino porque
conciencia respecto a su responsabilidad para obrar el bien está orientada a cumplir las
exigencias objetivas de la tarea profesional, pero ese ejercicio es compatible con la toma en
consideración del interés por la realidad que afecta a las personas próximas, haciendo que
del trato se siga la respuesta propia del modo de ser de cada persona.
Puede confundirse la indiferencia con las determinaciones del carácter que hacen a
personas ser más reservadas o tímidas en las manifestaciones afectivas. Esa información de
mentales que puede estar más o menos identificados con los sentimientos, pues se puede ser
La indiferencia, por tanto, debe ser tenida como un defecto de la sensibilidad afectiva hacia
los demás, entre los que se cuentan los compañeros de trabajo, que radica en el interés de la
La enemistad se genera más callada y lenta que la amistad, ya que lo natural en las personas
necesidades. Del mismo modo que el mal se define como una ausencia de bien, la
enemistad se podría considerar una cierta corrupción de la amistad debida entre personas
que entran en contacto, en especial en el ambiente laboral, donde ayudarse parece que
beneficia a todos. Como la enemistad es una realidad social, no debe dejarse de considerar
Respecto a las causas de la enemistad pueden diferenciarse la que procede de una iniciativa
originada por una percepción, que puede consolidarse como una fijación mental de
prevención respecto a la presencia de una clase determinada de formas des ser. Las más
comunes son las que se reconocen como fobias, por las que de determinadas percepciones
se sigue una actitud mental de prevención e incluso rechazo. Cuando el origen de la fobia
es la caracterización desde la que se interpreta el ser de una persona, existe un grado muy
alto de posibilidad de que se genere la enemistad, como natural defensa de caer en trato
con quien la mente previene con negatividad. Esa restricción mental es muy corriente,
siendo la causa de la mayor parte de las enemistades que carecen de fundamento racional.
Cuando la causa está ligada a una deducción intelectiva, una gran mayoría de veces lo es
por circunstancias de envidia, o sea, de la conciencia de valoración del otro respecto a los
cánones que se tienen reservados para sí. Sólo se envidia al que se considera mejor que uno
mismo respecto a alguno de los rasgos principales del modo de ser. Este modo de
otro es mejor en lo que se antoja como la actividad propicia para destacar. Ese
desplazamiento de la propia personalidad genera la envidia, que no es otra cosa sino una
animales delimitan, dado que la enemistad arrastra a separar a los amigos de con quien se
está enemistado, como si ese distanciamiento respondiera a una realidad social prevalente
sobre cualquier otra motivación. A veces son los prejuicios sociales los que inducen a la
enemistad, porque exista predisposición contra el trato con personas de determinada etnia,
religión o simplemente por el alineamiento con una posición política o la militancia en una
afición deportiva contraria. Esa segmentación de la sociedad que las enemistades procuran
choca con la necesidad de convivencia que el entorno laboral exige, creando situaciones
prestigio, aunque ello no suponga beneficio directo alguno para quien lo procura. Para ello
el arma inicial suele ser la crítica, se continúa con la difamación, para terminar recurriendo
señalar. Sólo la envidia puede justificar la denigración del enemigo, como si la caída del
normal es que del ejemplo de la enemistad siempre se siga una desfavorable valoración en
EMPRESA:
considerando como específicas bajo esta denominación las relaciones verticales, o sea: las
Que en la empresa existe una jerarquización es una realidad que se produce incluso en las
empresas cooperativas, donde todos los trabajadores son propietarios, ya que al desarrollar
una función laboral han de estar sujetos a la estructura de orden que hace viable la
productividad.
lograr alcanzar un objetivo dificultoso. Por ello, la denominación como agrupación del
colectivo laboral necesario para lograr un fin se ajusta más que la de compañía mercantil,
cuando se quiere referir al contenido de relaciones dentro del colectivo. Esa estructura de
jerarquía dentro de la empresa, independientemente de quien sea dueño del capital, tiene
como fin conseguir producir o dar el servicio que se constituye como objeto de la
institución laboral. Las relaciones que así se constituyen pueden dividirse de arriba a abajo
como relaciones de dirección y mando, y de abajo a arriba como relaciones de
necesarias para la buena marcha de la empresa, sin que se pueda decir cuáles son más
importantes, sino cuáles son más responsables respecto a la aportación laboral y al servicio
El estudio por separado de las características que deben presentar las relaciones de
dirección y las de subordinación responde a que son relaciones laborales humanas cada cual
con una vertiente específica, aunque ambas, por lo general, atañen a la mayor parte de los
común que muchos de ellos estén afectados por la subordinación a otros estamentos
dirigir.
Ejercer una función directiva no debe asimilarse únicamente al concepto de mando, pues
aun cuando ello pueda considerarse por el efecto ejecutivo de las decisiones, dentro de la
empresariales. Ello implica que cada director debe tener perfectamente identificado el
modo y manera de obrar para alcanzar el fin que sea el propio de su dirección para lograr
cooperar al fin colectivo fijado por los directores generales de la empresa. Para realizar de
El organigrama de personal.
La definición y operatividad de los medios que se han de emplear para lograr los objetivos
empresariales tiene una transcendencia de primera magnitud, ya que una gran parte del
éxito colectivo depende que se haya previsto con acierto la planificación de las fases de
los bienes de equipos, de la contratación del personal, del plan de trabajo general, de la
esta estructura, en lo que repercute sobre la comunidad laboral, debe ser transparente hacia
El colectivo laboral suele mimetizarse a la calidad del orden laboral, lo que facilita la
integración de las personas cuando ese orden se aprecia como efectivo, pero también causa
desasosiego laboral cuando el orden establecido choca con el criterio común de los
operativa de la empresa.
conozca su función, lo que supone reconocer una posición en la cadena operativa, el objeto
empresa, por ser empresa, cada órgano afecta, más o menos directamente, al resto, de modo
que la difusión del organigrama ayuda a que cada trabajador sea consciente de la mutua
dependencia que existe y del esfuerzo que puede repercutir de unos sobre otros por causas
enfermedad o el accidente.
del ejercicio y responsabilidad, el perfil adecuado del trabajador que haya de ocupar cada
del trabajo dentro de una empresa, que a su vez se especializa en una producción o servicio
director general como a cualquier productor, pues el acierto de todos genera el éxito
colectivo y el desacierto de cada uno es una traba a conseguir los objetivos del conjunto de
inversores y trabajadores.
una profesión. Esa responsabilidad la avala un organismo oficial o privado autorizado por
empresa en particular. Esta cualificación es necesario que sea la misma empresa quien la
imparta, ya que se trata de conocer y familiarizarse, para evitar el error, con la tarea
concreta que se va a realizar. El que sea la empresa quien procura atender la formación
profesional de sus trabajadores no busca como fin que sean más entendidos, sino que sepan
rendir más y mejor en su labor, pues ello evita fallos que suponen costes por defectos o
La cualificación específica debe ser considerada parte del trabajo ya que sirve a los
objetivos de la empresa, aunque también sea promoción personal del productor, pues éste
se beneficia de mejorar su saber práctico aplicado que puede aprovechar para trabajar en
sirve para integrarse en el grupo de trabajo y mejorar su rendimiento. Qué duda cabe que
todo trabajador aplicado mejora su perfil profesional cuanto más trabaja, y el que se pueda
mismo que la empresa recibe de quienes contrata con un bagaje similar ya adquirido.
Es tarea de los recursos humanos descubrir y fichar trabajadores con cualificación genérica
contrastada, pero también considerar la disposición para asimilar la específica, sobre todo
facilitar y mejorar el trabajo unos a otros. Una buena cualificación ayuda a la integración,
ya que todos los trabajadores agradecen que los demás sean eficientes en el trabajo, pues
que quien estorba esa tarea común debe ser corregido o sustituido.
del reconocimiento que se hace de su labor, que se objetiva en la promoción posible dentro
de la empresa y en la retribución económica. Estos dos aspectos dependen de tantos
factores que no necesariamente suponen un reconocimiento a una tarea concreta, sino que
los responsables de los recursos humanos han de evaluar la idoneidad de los trabajadores no
por el trabajo que desempeñan, sino por sus cualidades para el puesto a ocupar. Hay
personas que deterioran su relación laboral cuando no se sienten reconocidas para ascender,
pero también existen trabajadores que no rinden tanto como en su anterior empleo cuando
ascienden un escalón profesional que les demanda una mayor implicación intelectual. En
error, ya que el resultado supone una rémora para la productividad y una cierta quiebra de
la estima profesional.
independencia por parte de los responsables de recursos humanos, para que se cumpla el
medida que se quiebran estas premisas, la promoción de personal puede suponer un factor
aunque ese agravio sólo exista en la subjetividad del trabajador. Para evitar esas
factores de corrección y cuantos otros elementos repercutan sobre las retribuciones de cada
una de las categorías laborales existentes en la empresa. Lo que genera propensión al recelo
profesional en relación a las justas retribuciones proviene de la configuración idearia de
total autonomía de los consejos de administración respecto al cuerpo social que forma la
empresa. La opacidad de los resultados de gestión no sólo preocupan a los accionistas, sino
empresa. Ello exige una minuciosa disciplina de auditoría económica y técnica que suele
ser molesta para todos los trabajadores, ya que detectar los más elementales fallos en la
estructura del sistema ha de hacerse sometiendo a un meticuloso control a cada uno de los
mismas.
De ese seguimiento de los objetivos, que normalmente se plantean desde la gerencia, los
que esa estructura vertical de control concentra la exigencia en los puestos más altos y
quien sienta el peso de la responsabilidad debe reconocer que ese seguimiento de objetivos
por encima del rendimiento de cada trabajador, si la directriz estructural del trabajo alcanza
CAPÍTULO 9
COMUNIDADES EDUCATIVAS
CONCEPTOS GENERALES:
Respecto a la educación el derecho natural abarca lo que tiene su origen en la forma en que
la naturaleza hace que un nuevo ser nazca en un entorno social formado principalmente por
la familia y, por la extensión de las relaciones de ésta, con toda una comunidad. De alguna
pueda venir, al menos hasta que puedan ser satisfechas por ella misma. El cumplimiento de
las responsabilidades de ese contrato puede ser exigido a los padres por la sociedad en la
que se insertan, actuando sus representantes legítimos de oficio en virtud de la tutela social
del menor; y puede ser exigido por los padres, ejerciendo la patria potestad, ante la
sociedad por los compromisos sociales aceptados por la comunidad respecto a la protección
colectiva de los menores. Dentro de esas obligaciones con los menores está la de
aprendizaje de una lengua, las ciencias naturales que le ayuden a interpretar el mundo que
le rodea, las ciencias matemáticas que le permitan aprender a realizar cálculo con las
unidades de las materias que utiliza, los principios de la salubridad, el respeto a los demás,
etc. Educar es una de las tareas esenciales de la moral del hombre, necesaria para sostener,
Identificar a cada persona con la comunidad en que vive, trasmitiendo las formas
Trasmitir el contenido legado por las anteriores generaciones del saber humanístico,
científico y técnico.
permitan desarrollar sus facultades y habilidades para aprender de modo teórico y práctico
Enseñar para la atención del cuidado del propio cuerpo los hábitos de salud, la práctica
Desarrollar la conciencia del respeto a la naturaleza como hábitat común de todos los
hombres.
Exigir aprender para poder enseñar a la siguiente generación el elenco del saber
recibido.
Sobre esos, y cualquier otro objetivo que se pueda vislumbrar en la educación, lo
fundamental como derecho se identifica con el derecho a saber, ya que el ser humano no es
sólo capaz de percibir lo que se le muestra desde el mundo exterior, sino también asimila
abstracciones mentales propias en cuanto no entran en colisión con los juicios de la razón
del sujeto, sino que convergen en los mismos de modo similar a las intuiciones creativas,
con la única diferencia de que la creatividad aportada proviene del desarrollo intelectual de
las actitudes más coherentes con la esencia de la vida. Los hábitos sensibles incompatibles
con el medio tienden a perderse, y los compatibles a permanecer. De modo similar, de las
intuiciones creativas sólo fructifican las compatibles con la verdad, según el juicio de
conciencia cierto que sobre ello posee cada individuo. La infinidad de intuiciones que han
quedado constatadas en una proposición razonable por cualquier persona y que ésta ha
difundido hacia la sociedad es lo que forma la cultura de la humanidad, que, aun con el
interno de cada persona que lo aprende. Ese legado patrimonio de la humanidad es lo que
acceder.
voluntad humana, pero constituye la base de conceptos y juicios elaborados sobre los que el
conocimiento puede actuar para presentar a la conciencia las razones sobre las que deliberar
los contenidos de verdad que poseen, y las condiciones en que se dan, para mostrar su
adhesión o rechazo. Cuántos más razonamientos se puedan elaborar sobre una materia o
asunto, más información se posee para, con un mayor esfuerzo, realizar una más
Como la naturaleza del saber intelectual es inmaterial, aunque verse sobre la existencia
material, puede difundirse hasta el infinito sin que por ello merme la identidad de su
contenido, lo que produce que no pueda haber conflictos de derecho entre unas personas y
otras en el acceso al conocimiento, ya que por mucho que se estudie no se agota, más bien
comunicación entre unas personas y otras, que son quienes son dueñas del saber intelectual,
acto de su transmisión requiere una forma material que como medio permita el paso de un
emisor a un receptor.
Los medios para educar son limitados en bastantes aspectos, el primero de ellos es que
nadie puede enseñar más de lo que sabe, aunque sea consciente de que existe mucha otra
cultura, además enseñar contenidos concretos exigen tiempo de dedicación personal, que,
fundamentales, como es el trabajo. Medios materiales necesarios para enseñar son los
libros, los útiles de escritura, los mapas, los instrumentos musicales, las figuras
mecanizadas desmontables, la fotografía, las computadoras, las radio, las redes sociales, las
bibliotecas, la maquinaria de los talleres, los útiles de laboratorio, los edificios educativos,
etc. Todos ellos tienen en común que tienen un valor, resultante de una inversión con un
coste. Sobre todos los medios el más trascendente es el profesor, aquella persona que hace
dota la sociedad.
Una forma particular de la educación que no está limitada es la del ejemplo que se dimana
cada vez que una persona realiza su tarea ordinaria. Tanto en el trabajo, como en el hogar o
el ocio, mientras una persona actúa está mostrando esa forma de hacer a aquél que podría
no conocer algo de esa manera de obrar. De hecho, una gran parte de la educación se capta
por percepción directa, sin que obre en la causa una intención de enseñar. De lo que se
deriva una responsabilidad latente en todas las personas respecto a la cultura que se
muestra; atañendo esta responsabilidad especialmente a quien ejerce una autoridad, pues su
de él.
EL DERECHO A LA EDUCACIÓN:
Los ordenamientos sociales suelen decantarse por legislar a favor de una igualdad de
derecho a la educación para todas las personas. De modo que el aprovechamiento de los
recursos que hacen posible ese derecho quede bajo la responsabilidad de cada individuo, y
no se pueda criticar una distinción de derecho en origen porque la ley prime a unos sobre
otros. Esa intención loable, sin embargo, en muy pocas comunidades se logra, porque
intervienen tantos factores sobre la educación que hacen difícil conseguir realmente la
igualdad del derecho, lo que no desacredita que como objetivo se mantenga la perspectiva
De los factores que intervienen sobre la educación hay algunos que coadyuvan a marcar las
diferencias en posibilidades para acceder a una buena educación, y otros que favorecen una
El proteccionismo familiar.
La estratificación social.
La discriminación social.
La protección social.
La discriminación positiva.
Las influencias del entorno hacen de hecho imposible la vigencia de una igual oportunidad
a la educación, porque ello supondría de hecho que cada persona contara en sus relaciones
con un entorno similar. Cuanta más cohesión exista en la sociedad se hace más posible,
pero como cada cual recibe influjos directos del entorno próximo, por ejemplo: de la
estructuración familiar o de la pandilla de amigos, según las tendencias que tomen esos
entornos repercutirá en la educación real que se recibe, por más que la oficial pueda ser
igualitaria. En ello influye mucho el carácter de cada individuo y las determinaciones que
raciocinio.
no existe una conciencia social de que la educación es una labor colectiva de todos para
todos, porque, se quiera o no, la influencia del ambiente traspasa todas las prevenciones
posibles. Educar a los hijos favoreciendo una asepsia moral puede parecer blindar los
valores, pero crea una deficiencia de sociabilidad en la que se crece de espaldas a una
La estratificación social puede tener muchos orígenes, pero ninguno de ellos justifica las
repercusiones que genera en violentar un trato igualitario para quienes han llegado a la
sociedad sin elegir el estrato donde nacieron. Remediar esa realidad, allá donde se dé,
muestra como el agente más activo para neutralizar la distinción de clases entre las
reconocimiento de la igual dignidad de todas las personas. El argumento más cierto es que
individuales, sino de la praxis social, sólo puede ser superada por la concienciación en la
sociedad.
integración, lo que lleva por consecuencia a que participan deficientemente de los medios
de que la sociedad se dota para instruir y educar. Hay que tomar en consideración que el
igualdad de derecho de todos los ciudadanos a la educación que les preste la posibilidad de
para promocionarse, con independencia del entorno familiar y social que posean.
Reconocer el derecho de la persona es atender a cada individuo como si fuera el único y a
todos como si fueran ese uno. Para lograrlo, la implicación de la sociedad debe ser total,
considerando como un deber personal atender a la comunidad escolar como una extensión
de la responsabilidad paterna.
Una parte importante de esa protección social le corresponde al Estado, que la puede
Otra parte corresponde a que los ciudadanos se exijan una implicación personal con la
enciclopedia de enseñanza. El buen ejemplo hace comprensible los valores que se exponen
en las aulas. La contención en el gasto facilita la cohesión social de los menores, que deben
La extensión de la protección social educativa debe ser universal y progresiva, de modo que
los recursos deben reparar la desproporción de la renta familiar, para que en alguna manera
logra la igualdad de las mismas. Que la protección social de la enseñanza sea uno de los
mayores gastos del Estado se corresponde con la mejor inversión en país que se puede
planificar, pues el futuro de la producción depende no sólo del saber de las nuevas
que quienes las padecen puedan, igualmente que los demás ciudadanos, procurarse un
porvenir. Ello hace que la estructura social deba ser discriminatoriamente positiva en la
disposición de medios para ayudar a estas personas a alcanzar su fin. Durante siglos ha
integrador de ese derecho, el reconocimiento de una nueva perspectiva para esas personas
Uno de los conflictos que se presentan en torno a la educación es quién posee el derecho a
administraciones del Estado se reconocen con derechos a decidir sobre la educación de los
menores. Teniendo en consideración que el derecho surge de una relación que establece
derechos y deberes para las partes, los afectados correspondientes son por un lado los
menores, que deben ser educados, y por el otro los demás que puedan procurarles esa
educación. El derecho estaría en el menor y el deber en los otros con quien se relaciona.
Padres, profesores y asistentes sociales tienen el deber de educar, pero el derecho a ser
los padres a reclamar ese derecho la fundamentan en ser progenitores y por su voluntad de
haber dado la vida al menor, con lo que procede de responsabilidad de su bienestar. Los
profesores reclaman el derecho desde su papel profesional que les capacita como los
especialistas de la enseñanza y educación. Los abuelos y otros reclaman también el derecho
en función de los lazos afectivos que pueden surgir del trato. Todos ellos confunden que en
su relación con los menores ocupan una posición de servicio, la que no engendra derechos
sino deberes. Cuando los padres se arrogan el derecho a la educación se lo están detrayendo
al menor, como si este fuera un objeto y no un sujeto de derecho como persona, aunque sea
muy pequeño. Los derechos elementales corresponden a las personas con independencia de
su edad u otras condiciones, y no deben ser suplantados en ese ejercicio aun cuando no lo
relaciones sitúa a los padres y cualquier otra persona en la posición de servicio para cumplir
el deber de educar que satisfaga el derecho a ser educado. El hecho de que el menor no
pueda ejercer la acción para reclamar el derecho por sí obliga a los demás del entorno a
interpretar cuál sería el modo en que mejor le gustaría ser educado, y desde los criterios de
juiciosa voluntad del menor, la intuición debe suplir esa precariedad y actuar de acuerdo a
cómo el menor de mayor opinará respecto a cómo le gustaría haber sido educado.
El gran peligro en la educación de una persona menor es configurar una relación espejo en
la que ese derecho se interprete como una realización personal propia de quien tiene la
LIBERTAD EN LA EDUCACIÓN:
Educar debe adecuarse al modo de ser propio del ser humano, de tal forma que pueda
considerarse como un bien o perfección que se le otorga, ya que también cabe educar para
dominar, de modo que se busque como fin el bien o interés de quien educa, lo que
representa una forma de esclavitud. En esa adecuación al modo de ser propio de las
personas humanas destaca el derecho a la libertad, que debe procurarse como un bien
superior para el educando. No es que la libertad del educando limite la del educador, sino
que ésta se justifica en el respeto a aquella, porque cualquier relación de servicio debe
reivindicarla, debe ser protegida por todos los demás intervinientes en esa relación.
La libertad real de la educación abarca dos aspectos: Uno, el respeto a la libertad en los
Educar con libertad supone el ejercicio del respeto hacia la persona que se educa, de modo
que:
Se preserve su carácter.
No se enseñen modos de ser con los que pueda sentirse contrariado de mayor.
Se le enseñe la verdad.
El influjo del carácter sobre la determinación del modo de ser es algo que puede ser
moderado con la educación, pero nunca anulado, porque ello conlleva a trastornar la
consiste en enseñar a reconocer a cada cual su propio carácter, y en ello mostrar cómo
Respetar la libertad es que cada cual progrese apoyado en sus particulares cualidades, y no
forzado a configurarse a un esquema determinado. Hay que acompañar a descubrir el yo, y
Educar en la verdad es respetar en los menores el valor de la conciencia, que no debe ser
Aprender a utilizar las potencias intelectivas tiene como fin particular aprender a
sobrevivir, y como fin social responsabilizarse con los propios actos de hacer posible la
como soberanía personal no excluye que esa soberanía deba conjugarse con la de los demás
familiar, pero más en la escuela. Parte del aprendizaje de esa etapa debe estar dirigido a
enriquecen mutuamente.
La educación en valores ha de tener como objeto principal que los valores se enraícen en la
personalidad como actitudes libres y voluntarias que siguen el modo propio de ser de las
las relaciones y éstas son establecidas respetando la libertad de las personas para participar.
Cabría entender que hubiera quien en uso de su libertad decidiera negarse a recibir la
sociedad. En estos casos ¿debería primar la libertad o el derecho a recibir una educación
objeto fundamental de sus actos es obrar el bien. Ello no se lograría sin la conciencia moral
que le mostrara qué es el bien y su independiente voluntad para ejecutarlo como un acto
libre. Desde esta proposición, el acto libre precisa antes de la voluntad, que decide obrar, y
el conocimiento, que ilumina a la conciencia para discernir el bien. De modo que aunque la
libertar para obrar no precisa del juicio moral, para obrar bien si lo requiere. Por ello, si en
la estructura profunda de todo ser racional su esencia es obrar el bien, debe anteponer la
necesidad de la educación al ejercicio de la libertad, porque sin aquella cada uno de sus
actos libres podrían carecer de fundamento moral. Así se considera que el derecho a la
colectivo en el que se vive, a fin de alcanzar el saber común necesario de las disciplinas
LA DIFUSIÓN DE LA CULTURA:
La difusión de la cultura no sólo genera un bien particular a quien la recibe, sino que
representa un bien general para la sociedad, y por tanto entraña una responsabilidad ética
que afecta al colectivo o grupo social y a la personas particulares desde la doble perspectiva
Por cultura humana se debe entender el conjunto del saber que sobre todas las ciencias y
disciplinas los hombres y mujeres de todo tiempo y lugar han procesado por medio de su
esos conocimientos quien los elabora puede hacer partícipes a sus allegados, de modo que
mediante la crítica colectiva se perfecciona el pensamiento creativo y se difunden las
intuiciones personales. Mediante esa difusión se crea una memoria común que se comporta
como un soporte progresivamente ampliado para facilitar la actividad cognitiva. Ese poner
de esa creatividad, con lo que estudia y difunde del conocimiento anterior, con lo que
transcribe de lo que sabe, con lo que enseña, con los valores culturales que protege. Cada
manifiesten sus preferencias culturales, con las disposiciones legales para que existan
públicas con fin propio de enseñar, educar y exaltar la cultura, con la concentración y
intelectuales. Todas esas acciones, personales o colectivas, tienen en común que la difusión
se sigue de la comunicación, porque siendo la cultura un bien que trasciende el valor social
del acto personal, éste sólo alcanza a ser social cuando se comunica y es recibido por
alguien que lo reconoce como un valor. Ello es específicamente fructífero cuando quien lo
difusión. Esto hace que los valores culturales dependan en mucho de la estrategia de
difusión, haciendo que el valor real de su transcendencia intelectual quede relegado por la
En sí la cultura tiene un fin: Contribuir al progreso intelectual del ser humano. Para lo cual
debe seguir dos directrices: La primera es no perder nada del saber recibido en cada
pasión por la verdad es tan importante como la pasión por la sabiduría; ésta empuja al ser
No es extraño a la cultura entrar en una propia confusión interna al admitir como parte de
es con independencia de que haya sido intuido hace cientos o miles de años, por lo que no
se puede segregar lo antiguo como si fuera viejo o caduco sino, por el contrario, se debe
difundir como fundamentos de la cultura lo que siglo tras siglo la ciencia, técnica y la
especulación siguen avalando como cierto. Existe un saber incierto que se transmite
igualmente a través de las generaciones y que mucha gente lo acepta como cierto por más
que otra mucha lo cuestione por las contradicciones que aparenta tener respecto a la verdad.
La cultura debe ser objetiva y mostrar lo cierto como cierto, lo incierto como incierto y lo
falso como falso. Lo incierto puede serlo porque posea contenidos de verdad y contenidos
dudas sobre su veracidad según las condiciones de aplicación que de ello se haga. En todo
caso, forma parte del objetivo de la difusión de la cultura la crítica que cada generación
debe hacer sobre el legado recibido a la luz del nuevo conocimiento adquirido.
ser ciertos los hechos como acaecidos, hayan de ser reconocidos como actos acordes a la
pero sí la tiene cuanto pueda transcender de ello en la cultura. Mantener las tradiciones
bárbaras como hechos culturales históricos no puede justificar sostenerlas en el tiempo
cuando chocan con las nuevas concepciones de los valores de verdad contemporáneos. Las
tradiciones deben ser moderadas tanto como la sociedad progrese, porque la cultura debe
CAPÍTULO 10
ASOCIACIONES
CONCEPTO DE ASOCIACIÓN:
juntó a las familias vecinas en sociedades tribales, pueblos y naciones. A esta forma de
personas de un territorio, de modo que quien nace pertenece de hecho a esa sociedad.
Otra forma de agruparse es juntarse personas libremente para actuar de modo concertado en
etc.-- la filosofía social debe distinguir como concepto de sociedad la agrupación natural de
ciudadanos a la que se pertenece por una vinculación de derecho natural, de forma estable y
con consentimiento implícito. Las asociaciones, en cambio, son agrupaciones de
finalidades específicas y con una estructura de funcionamiento pactada entre los socios.
propio Estado. Las asociaciones tienen que sujetarse a las leyes vigentes que les afecten del
país donde se constituyen, pues forman parte de esa sociedad que gobierna el bien común.
ramificaciones de esa misma sociedad, pero la marca de distinción está en que ni son de
acceso directo a todos los ciudadanos, ni tienen un fin universal de bien común. Así, por
ejemplo, las sociedades mercantiles, los sindicatos, las asociaciones religiosas, las
Por muy extendida que se encuentre una asociación en un país, nunca se da que todos los
derecho y el poder de hacerlo, en las estructuras de sociedad, como son las entidades
municipales y el Estado.
Las asociaciones tienen su propia reglamentación interna, autónoma de la del país, aunque
sometida a sus leyes; pues de modo semejante a como cada ciudadano individualmente está
sujeto a la ley del país, cuando algunos de estos se asocian igualmente el grupo sigue
obligado a acatar lo indicado en esas leyes. Por ello existe legislación expresa para muchos
tipos de asociaciones, de modo que se garantice que sus actos y fines no perturban el bien
común.
conciencia como los compromisos entre personas físicas. En esto también se diferencian de
las sociedades, pues incluso suele existir en muchos países tribunales distintos para
entender de la justicia concerniente del derecho privado y de aquella que afecta a las
ASOCIACIONES POLÍTICAS:
Las asociaciones políticas se reconocen allá donde son legítimas, pues cada una de ellas
representa la unión de la parte de ciudadanos que comparten de modo activo una ideología.
político.
La condición esencial para que una asociación se la pueda considerar con finalidad política
es que tenga entre sus objetivos compartir un programa de acción dirigido a definir y
organizar la sociedad de la que forma parte. Existen otras asociaciones que también
comparten el interés por la definición de la sociedad, pero en el marco de las ideas, sin
según sea su propia especificidad, por más que compartan en el orden de las ideas la
definición de la sabiduría sobre la convivencia social carecen del objeto propio de la directa
acción pública.
Un escollo que se presenta para las asociaciones o partidos políticos es el reconocimiento y
casación de su identidad con la definición del sistema político que cada Estado se confiere,
porque los contenidos de verdad que asumen los ciudadanos que las integran pueden diferir
de las condiciones de verdad que el sistema admite, ya que todo sistema, por ser sistema,
tiende a delimitar según un modo de ser en sus relaciones, que inducen estructuras que
humanas.
El dilema formal de la identidad de todas las asociaciones políticas es si nacen del sistema o
generan el sistema. No cabe duda que los ciudadanos que deciden asociarse proceden de
una inserción social que les viene dada porque por naturaleza nacen y son educados dentro
en un partido está participado por la inmersión de sus miembros en las categorías del
sistema político en el que han sido educados. Nadie puede prescindir de los condicionantes
de percepción del tiempo y espacio social en el que vive, aunque la conciencia crítica pueda
creativa. Desde esta consideración todo partido se sabe engendrado del sistema.
El sistema social es un producto creado por el ser humano para organizar su convivencia.
Fuera de lo que pueda venir determinado por su forma material --como son, por ejemplo,
mantener estables las relaciones mutuas, que son ponderadas por la intuición creativa de la
inteligencia humana desde los principios morales universales de hacer el bien y evitar el
mal, proyectado socialmente desde el interés propio al de la persona próxima con quien se
establece lazo de convivencia. Como la disciplina social que crea la regulación del sistema
de convivencia es la política, es ser humano es necesariamente político y, cuando la
comunidad de convivencia supera la posibilidad del ámbito de gestión directa, los seres
humanos han ideado dotarse de una estructura de convergencia y representación para poner
cómo la voluntad particular humana pasa a generar las reglas de convivencia, mediante una
estructura de representación, un sistema político del cual los partidos, o cualquier otra
voluntad colectiva tanto para la definición del sistema como para su gestión.
Así es como los partidos políticos, siendo sólo asociaciones, se insertan en la estructura de
bien común.
Los partidos, como agrupaciones libres de personas, trascienden en su acción las pasiones
de los seres humanos que los forman, que por el objeto propio de unirse para hacer
prevalecer una ideología fácilmente yerran en verse abocados a interpretar su gestión desde
propios intereses de sus miembros al bien común, lo que supone la perversión y corrupción
Para configurar los partidos como servicio al bien común es necesario que su estructura
interna sea tan participativa como la sociedad en la que se integran, de modo que los
la sociedad, por ser una institución natural en cuyo conjunto conviven personas con
justa, por lo que esos valores sociales deben inspirar a los partidos en la didáctica propia de
miembros para que obren en los puestos públicos de responsabilidad de esa manera. Como
partido, que representa a una parte de los ciudadanos, debe considerar que, sea cual sea la
política favorezca las relaciones de servicio que avalan la justicia, ya que la tendencia
natural que otorga el alcanzar unas cotas determinadas de poder es imponer los propios
intereses de una parte de la ciudadanía, la que les ha votado, siendo que cuando se obra de
ese modo se asemeja más el ejercicio del poder al de un sistema autoritario temporal que a
la protección de derechos que tiene por objetivo la democracia. Aunque pueda parecer
contrario a la naturaleza de las asociaciones políticas, éstas tienen como fin procurar la
coherencia y cohesión social, de modo que no tienen como fin propio el que se perpetúan
las diferencias sociales que las hacen surgir, sino que, representando a parte de un todo,
reconozca como actora de una causa justa común. Considerar la oposición como estructura
política de la democracia supone una reminiscencia de los poderes autoritarios del antiguo
régimen, o sea aceptarla como una fase de transición en la que se ofrece el poder de forma
temporal y alternativa a una parte de la sociedad para que ejerza el dominio sobre las otras
partes, confiando que la alternativas sucesivas sean las que vayan equilibrando las leyes
hacia la justicia reconocida por todos. Lo que ocurre es que esa misma oposición
desfavorece el clima social de diálogo necesario para contrastar los contenidos de verdad de
las leyes y las condiciones que verifican que realmente alcanzan el bien común propuesto.
Por ello cuanta más oposición haya entre los partidos políticos, mayor suele ser la sinrazón
que les mueve a legitimarse en el dominio como forma natural de poder, cercenando la
evolución lógica de la sociedad hacia el diálogo social que garantiza relaciones de mutuo
servicio.
ASOCIACIONES DE ESPARCIMIENTO:
Aunque las personas humanas poseen un mismo modo de ser, según su especie, se
diferencian en los gustos y aficiones, compartiendo que gustan de disfrutar lo que satisface
a sus sentidos. Complacer esa necesidad, en lo que se reconoce como ocio, forma parte de
las necesidades físicas y anímicas del ser humano, ya que le conectan de modo positivo con
y atención de la familia puede lograrse con el reposo físico y con actividades de ocio, las
La proximidad de gustos en las personas hace que éstas se asocien para compartir
constituyen motivos para que las personas formen grupo para practicarlas conjuntamente,
accidentes para que exista el conocimiento de la afición común, que no se comparte hasta
que se da al agrupamiento para realizar la práctica en colectividad. Del interés del grupo
surge el acuerdo de estabilidad, que puede formalizase en una estructura formal estatutaria
Las asociaciones de este tipo pueden ser libres y restrictivas, pues como no afectan a
libremente los acuerdos de quienes se asocian restringiendo los modos de asociación tanto
socios, edad o sexo no supone discriminación social cuando responde al interés del objeto a
carácter, situación familiar, etnia o religión sin que se justifique un motivo que afecte al
La asociación como entidad tiene personalidad jurídica que implica en la legalidad de sus
actos colectivos según los acuerdos refrendados por los socios. Las actividades que
pudieran establecerse por un grupo de socios para fines distintos de los propios de la
asociación no tienen cabida legal en la misma, tanto más cuanto que esas actividades
pudieran estar encaminadas a fines ilícitos, en cuyo caso la responsabilidad civil y penal
será individualmente la de los componentes del grupo que las cometen. Sin embargo, si la
disimuladamente fines prohibidos, como por ejemplo: juego con apuestas, deportes
vedados, tráfico de arte, etc., todos los socios comparten, por acción u omisión,
responsabilidad en función del conocimiento que pudieran tener de esas actividades ilícitas.
cuanto ocupa un espacio propio de comunicación entre la ciudadanía para facilitar el debido
descanso y relación social. Por ello se supone un abuso de confianza el que, amparándose
en esa condición, se intentara encubrir fines distintos de los específicos que ampara la
ASOCIACIONES LABORALES:
Son asociaciones laborales las que reúnen a trabajadores para defender sus derechos y velar
sus obligaciones. Las asociaciones laborales, abarquen el ámbito que sea, mantienen una
conexión intensa con el resto de la sociedad al ser el trabajo una de las relaciones
fundamentales de supervivencia, por lo que desde ese principio las asociaciones laborales
deben coincidir en el fin del bien común que compete a las estructuras de la sociedad.
Los distintos sistemas políticos a lo largo de la historia han concebido dos grandes sistemas
existencia de una única agrupación que engloba a todos los trabajadores, cuya
participan como agentes sociales en la estructura del Estado. A los primeros se les reconoce
Las asociaciones laborales cuanto más libres son más se caracterizan pro constituirse por
elementos representativos de la polarización laboral de cada sociedad, de modo que se
agrupan los trabajadores por la semejanza de las condiciones laborales que se dan en los
clasificarse, según las maneras propias de ejercer el trabajo dentro de las estructuras
como asalariados.
Las diversas asociaciones laborales defienden los intereses de sus afiliados, que muchos
especialmente cuando las relaciones mutuas se orientan en cada parte como relaciones de
dominio, con desprecio de las naturales relaciones de servicio que deberían inspirar su
El nexo común de todas las asociaciones laborales debería ser la concertación de objetivos
que sirvan al bien común de la sociedad, con especial respeto de la justicia y los derechos
humanos. Si cada trabajador, esté situado en la posición que sea, como ciudadano debe
bienestar común, en su aplicación laboral es dónde mejor puede servir a ese fin realizando
un trabajo eficaz que aúne productividad y rentabilidad. Si ese es un fin intelectual de la
persona, debería mantenerse cuando se asocia entre sí un colectivo, y aún más cabría
exigirlo cuando los distintos grupos deban concertarse para aproximarse sucesivamente al
proyectar la estructura laboral hacia el bien común de la sociedad, que representa al menos
dominio son las personas idóneas para regir las asociaciones, porque ofrecen garantías de
consideración de las condiciones que en verdad rigen para alcanzar el mayor bien
comunidades. No se debería olvidar que tanto avala la naturaleza que el trabajo garantiza la
Cada asociación constituida por una parte de los trabajadores de un sector deben considerar
que sus actos sustentan relaciones de servicio cuando mejoran la justicia distributiva de
ello perjudicara a los demás. Así se deberían considerar, tanto personalmente como
implicadas en un conflicto.
legalidad del Gobierno, desde las estructuras económicas o entre los distintos sectores
laborales es tal que la pasión puede hacer perder la objetividad de la relativa posición
para proteger privilegios que se hubieran podido consolidar por la costumbre, ignorando los
vaivenes del sistema, se pueden estar defendiendo relaciones de dominio si se utiliza una
posición de fortaleza particular que entraña un real desequilibrio entre los beneficios que se
defienden y los perjuicios que se derivan para el resto de la sociedad. Piénsese, por
ejemplo, en una asociación patronal que para no reducir beneficios presionara con cerrar
sus producciones para evitar depurar sus residuos contaminantes, o el sector de mecánicos
de mantenimiento de una fábrica que para mejorar sus retribuciones hiciera una huelga que
impidiera la recogida de las cosechas. Aprovechar la presión social, donde se pueda hacer
más daño, para exigir una posición de dominio en el reparto de los recursos que debe regir
estudio de los caracteres que pueden identificar a las religiones como sociedades, frente a
comunidad social.
Las formas de las sociedades que pueden identificares en las confesiones religiosas son:
Ideología común.
Tradición.
Inserción.
aspecto la religión constituye una ideología común en cuanto aporta una doctrina espiritual
sobre la ubicación cosmológica del ser humano, las causas de la existencia, una ética
natural, una moral práctica y una proyección de la realización personal. En tanto en cuanto
esta doctrina es aceptada y compartida por una mayoría, o parte relevante, de la población,
los criterios convenientes de los ascendentes. Supone una depuración de las experiencias
Esta tradición inspira el respeto por la religión de modo preferente a como la han entendido
y practicado los antecesores, siendo a partir de las creencias compartidas donde cada
conceptual de las certidumbres en las que cada persona evalúa los contenidos de verdad que
su conciencia justifica.
La inserción por raigambre familiar se encuentra ligada a la confianza con que los niños
aprenden lo que les enseñan y ven en sus mayores. Por eso la religión se hereda en la
mayoría de las culturas como un proceso común de convivencia, como se heredan las ideas
políticas, aficiones, hábitos y en general las maneras y modos de ser de con quien se tiene
una intensa vida en común. Esto hace que se considere una determinada religión como un
elemento natural más de integración de la vida familiar, porque la misma proyecta una
Libertad de pertenencia.
Restricción de participación.
Objeto espiritual.
Derecho privado.
Economía autónoma.
Presencia diferenciada.
raíz semántica del lexema latino affilio, derivado de filius, en cuanto que las religiones en
general consideran a los hombres criaturas o hijos de Dios, y esa afiliación a la religión
Teóricamente las religiones predican una verdad universal, dirigida al conjunto de todos los
seres humanos, pero en cuanto confesiones específicas de la forma de relacionarse con Dios
voluntaria, pues en ella no se dilucida lo que sobrenaturalmente puede ser, sino la respuesta
consciente de cómo cada persona se reconoce en el modo propio de ser. De ahí que las
confesiones religiosas sean en cuanto existen hombres y mujeres que comparten una fe,
constituidas cada una de ellas por el conjunto de cuantos se incorporan a esa colectividad.
Con independencia de lo que cada religión pueda entender sobre la iniciativa de Dios, en lo
que afecta a la respuesta humana a la relación espiritual, la libertad para adherirse a una
religión se mantiene para poder separarse de esa fe, porque la naturaleza del vínculo no es
de orden de necesidad psíquica, sino que se sigue de una intuición intelectual y espiritual.
conjunto de quienes configuran la confesión religiosa definen la doctrina que aceptan como
propia, de modo que quienes quieran asociarse como miembros han de reconocerla, al
Las religiones suelen seguir un doctrina que se proclama recibida de Dios, pues no se puede
olvidar que el último fin de la religión es la relación con Dios. En toda confesión existe una
jerarquía de poder o autoridad moral que desarrolla la doctrina, en la que no suelen
participar todos los fieles asociados, sino estamentos selectivos; ello origina que muchos
acuerdo a su modo de ser, lo que origina disensiones en la comunidad, sin que el mayor o
menor compromiso haya de ser causa de renuncia o expulsión. Como en todas las
valor moral que expresa con los actos la coherencia con lo que se cree. La asociación en sí
Las confesiones religiosas se rigen por el derecho privado propio, que se establece y revisa
por los órganos reglamentados para hacerlo. Hay que tener en cuenta que esto sólo puede
afectar a los actos de relación entre fieles, pues de la espiritualidad interior sólo puede
privadas aunque puedan ofrecer servicios públicos. El proyecto de perpetuidad con que se
fundan estas instituciones hacen confundir se carácter privado con el público, pero las
provengan de donaciones, para discernir y defender la propiedad común tanto respecto a los
bienes públicos como a los de sus fieles, pues su propiedad suele restringirse a la utilidad
colectiva.
Las religiones por su arraigo tradicional y por su proyección universal gozan en cada
minoritarias en otros muchos. Esto muestra cómo son esencialmente diferentes de las
sociedades, cuya presencia es general en cada territorio, pues en otros aspectos las
confesiones religiosas están tan asentadas que atienden necesidades públicas de los fieles,
como pueden ser educativas, familiares, sanitarias, laborales, etc., de modo que a veces se
No obstante esas formas que comparten con el concepto de sociedad, en las confesiones
religiosas predominan los rasgos asociativos, aunque la razón del vínculo pueda
colectivamente las mismas obligaciones que las leyes imponen a cualquier ciudadano o
asociación en cada país en orden al logro del bien común, debiendo los representantes
legítimos de las confesiones dialogar con las autoridades públicas para resolver los litigios
que se pudieran plantear en el ejercicio de sus creencias y consecución de sus fines, dejando
Un conflicto tradicional entre las religiones mayoritarias y los Estados está en la moralidad
de las leyes, pues las religiones se atribuyen autoridad para definir la moral pública, y los
ciudadanos que forman los Estados se consideran con suficiente razón para decidir por sí
democráticamente lo que más conviene para el bien común. La superación de ese conflicto
debe resolverse por la adecuada distinción filosófica de lo que es la ley moral y lo que es la
ley social. La ley moral obliga a las conciencias particulares de los ciudadanos para que
obren el bien, y las religiones tienen derecho a orientar a sus fieles y por extensión a todos
los hombres de buena voluntad. Una vez informado del contenido de la ley moral según las
conciencia. La ley social, en cambio no tiene como objetivo hacer al hombre bueno, sino
organizar la convivencia social de acuerdo a los juicios comunes que reportan el bien
común. La ley social nace para regular la justicia en las relaciones entre las personas, por lo
que corresponde a esas personas decidir lo que perturba y favorece esa convivencia,
dejando al arbitrio de cada individuo para regular, de acuerdo a la propia conciencia, los
ASOCIACIONES ASISTENCIALES:
filantrópicas que dedican parte de sus haberes a alguna atención social concreta.
prestar un servicio social de ayuda para remediar una precariedad, una cooperación al
desarrollo o una concienciación tanto respecto a la capacidad para ejercer los derechos
intelectuales los que padecen las relaciones de dominio, sino también puede ser removida la
Los socios de estas agrupaciones pueden colaborar con su ayuda financiera y con su trabajo
personal, entendiéndose que cualquier responsabilidad que se ocupe ha de ser con fin
exclusivo de lograr los fines asistenciales de la asociación, lo que excluye el lucro propio
aceptadas por quienes sufren la precariedad que se pretende mejorar, pues los mismos
también poseen igual derecho al ejercicio de su libertad. Por eso las relaciones generadas
no de dominio, aunque se pueda suponer que se ejerce un poder con buen fin. Sólo quienes
estuvieran habilitados para tutelar a personas que sufran precariedades pueden hacer valer
su condición para forzar a remediar esa carestía. Ese respeto a la libertad parsonal es el que
debe velar en los estatutos de las asociaciones para no hacer prevalecer los hábitos de la
La filosofía de la ética de cada pueblo puede inclinarse a que sea la sociedad quien entienda
y la iniciativa ciudadana a constituir estas asociaciones, así como del respeto y colaboración
sociedad, pero debe tomarse en consideración que la numerosa actividad de las ONGs no
libera a todos y cada uno de los ciudadanos de su respectiva responsabilidad particular, que
CAPÍTULO 11
EDADES SOCIALES
presentan una posición especial en esas relaciones, entre ellas destacan los niños, que
siendo sujetos en los actos de relación que desde su nacimiento viven, sin embargo no
poseen la facultad para obrar y juzgar lo conveniente para ellos que no les haga víctimas de
las que como intervinientes sólo pueden ofrecer una pasiva irradiación de esperanza como
futuro de la humanidad.
Ese no poder concertar relaciones por sí, sino tener que asumir lo que se les ofrece y da,
debe alertar a la sociedad para velar porque el respeto que se les debe como personas se
ejerza en todas y cada una de las relaciones que incide sobre cada uno de esos niños durante
Podría pensarse que los padres, por la especial relación que supone la procreación, aseguran
los derechos de infancia, pero la dificultad surge cuando los progenitores carecen de medios
y cultura para distinguir esos derechos, o conociéndolos hacen dejación total o parcial de
esa responsabilidad.
El criterio de verdad más radical para la prevención de un derecho en una relación está en
el criterio de inversión, o sea, que las condiciones de aplicación sigan siendo tan favorables
para cada una de las partes cuando se permuta la posición contractual entre las mismas.
Como el niño no posee la capacidad para hacer esa valoración, habría que trasponerla
realizando una traslación temporal del contenido de la relación a que fuera plenamente
aceptada por él cuando sea mayor. Se podría resumir en la sentencia: Tratar a los niños
como de mayor les gustaría haber sido protegidos en las formas y en sus derechos.
Los derechos de los niños se pueden estructurar en dos grandes grupos: Los que
corresponden a la esfera de las relaciones de trato individual y los que se enmarcan en las
Derecho a la higiene.
Derecho a la protección.
Derecho a saber.
Derecho a la veracidad.
funcionamiento del metabolismo corporal encuentra dificultad para hacer funcionar algunos
proveerse, los niños, como no poseen capacidad para realizarlo por sí mismos, tienen
derecho, en razón de la relación que les une a sus progenitores y al resto de la humanidad,
a que con responsabilidad se les atienda del mejor modo posible, según las posibilidades al
alcance de su entorno.
cuando recibe los productos nutrientes directamente de la madre, de modo que esa especial
relación implica que la madre debe asumir en sus hábitos el no contaminar el alimento que
le da. Atender el derecho a una buena alimentación del niño supone el interés de la madre
para alimentarse correctamente, pero también la de todo el entorno de la madre que deban y
Responder a ese derecho especial de los niños obliga a todo quien tenga conocimiento de
esa necesidad, porque cada ser humano por serlo reclama de cualquiera con quien pueda
entrar en relación que le trate con humanidad, lo que se concreta en atenderle en sus
relación intelectual, implica una responsabilidad, aunque sea mínima, que cuando el poder
comunicaciones sirve a favorecer el contacto entre los pueblos más distantes, atender a la
convierte en un reclamo de primera magnitud ética, porque sólo logrando que esa
deficiencia quede subsanada puede garantizarse que todo ser que nace posea una
No se debe malograr una posible buena alimentación por atender al capricho inconsciente
del menor, que en su camino al pleno uso de razón se moverá exclusivamente por las
La higiene es tras la alimentación el hábito que que más contribuye a la salud. El niño, que
podría aprender esos hábitos por imitación de sus padres, durante el tiempo en que no
puede responder con el dominio de sus actos precisa de quien le aplique la mínima higiene
para evitar contagios e infecciones. Ese derecho se entiende en el saber común de sus
disponibles. El derecho que corresponde al niño es el trato normal que podría reclamar,
El derecho a la higiene no puede inducir una competición de padres por mostrarse más
efectivos, sino aplicar las costumbres que favorecen la buena salud, sin caer en la
más al negocio que a la salud. Los niños no tienen derecho a más de lo que correspondería
que ellos hicieran por sí mismos, por lo que si los padres viven con naturalidad la higiene
no tienen por que sobrepasarse en la atención de los hijos. No se puede olvidar que las
defensas propias del organismo tienen que aprender a usar sus estrategias, lo que malogra el
exceso de protección.
capacidad de defensa de un niño respecto a cualquier mayor frente a una gran cantidad de
animales o efectos físicos con los que inconsciente de su efecto pudiera accidentarse. Esa
protección obliga a sus más próximos cuidadores, pero también a cualquier persona persona
psique. De una falta de control puede derivarse un mal que repercuta en su vida posterior,
por lo que los niños conllevan un derecho de atención que crea un irrenunciable deber para
de sus mayores.
Proteger la mente de los niños hasta su pleno uso de razón supone potenciar la calidad de
computacional para evitar formas abstractas distorsionadas, pues éstas van a constituir el
que inquietan al niño aún incapaz de comprenderlas. Porque la mente de los niños y jóvenes
está ávida de aprender son muy propensos a creer, por lo que se les ha de habituar a
Derecho a la custodia familiar. Aunque entre los niños, sus padres y demás familia existe
una relación no elegida por los más pequeños, dado que ésta es consecuencia de una
física y corporal que precisan para ser criados, se da por supuesta una correspondencia
entre unos y otros que crea obligaciones y derechos en ese trato. Uno de esos derechos del
niño es a la realización de esa relación familiar en lo que atañe a la custodia del menor. Ese
que desde los padres puede proyectarse al entorno familiar que quiera asumir ese
compromiso en caso de precisa tutela por muerte o incapacidad paterna. Se suele interpretar
el derecho pertenece al menor a ser tutelado por el familiar más cercano que libremente
asuma esa responsabilidad. Representa ese derecho la pervivencia del vínculo familiar que
muchos códigos penales, por el abandono o entrega interesada de los padres u otros
El derecho a ser custodiado, cuidado y querido por familiares debe prevalecer a un supuesto
mayor bienestar para los niños proveniente de su adopción por quien dispusiera de mayores
bienes materiales. La adopción debe siempre defender el derecho del adoptado y no el del
adoptante, sobre todo cuando no existe una relación previa que, aunque no sea de vínculo
tiene por objeto suplir la imposibilidad del ejercicio de la tutela y custodia familiar, por lo
cercana que haya podido considerar y aceptar esa tarea. Por ello la adopción debe ser
escrupulosa en el país de origen de los menores, para que no se ignoren derechos por una
interpretación benigna del derecho del niño, inducida casi siempre por intereses ajenos.
pero la realidad demuestra que no todos los hijos son queridos por sus padres. Una causa de
esa desafección puede provenir de no ser un hijo deseado, sino accidental, ya que incluso
cabe que la falta de madurez pudiera inducir a ignorar esa consecuencia de la sexualidad.
Otras causas pueden provenir del contraste de una idealización de la paternidad con la
realidad de la exigencia que conlleva. De cualquier causa del posible desamor no se puede
en ningún caso culpar al niño, pues ni siquiera él puede ser considerado responsable de su
carácter.
única han de asumirla los padres para cumplir sus obligaciones, entre las cuales está dar el
afecto al menor que no sólo le haga sentir ser considerado y protegido, sino que también le
que muchos padres no posean la experiencia y el conocimiento para generar una relación
instruida con los niños, por eso el cariño ha de valer como el sustituto de las demás
carencias.
Como en la concepción habitual de los niños intervienen dos personas, el hijo de ambos
tiene derecho a ser amado por cada uno de ellos, sin que el mucho cariño de uno pueda
irresponsabilizar de su obligación al otro, y sin que ninguno de ellos deba presionar el hijo
El derecho a ser amado de los hijos no acaba en los padres y hermanos, sino que se
extiende a todos con quien por entablar relación se generan afectos mutuos. Es el caso de
conveniencia de la intensidad de las relaciones del niño con otras personas, pero una vez
habidos y creados los lazos de afecto se deben respetar esos sentimientos humanos.
lo que quiere decir que cada persona es única y con un modo de ser propio dentro de la
forma de ser común en una especie. Una parte importante de esa individualidad es el
carácter definido por la genética, que hace que todo el organismo, regido desde el cerebro,
respuestas son en parte comunes a la especie, en parte específicas a cada modo de ser y
algunas peculiares del individuo o grupo de personas afines. Cada persona ya desde niño
manifiesta esa forma de ser que le es propia y debe ser respetada como un derecho
reclamado por su singularidad.
El derecho a ejercer el propio modo de ser es lo que va a definir el carácter con el que cada
desde el exterior, especialmente cuando aún no posee el uso adecuado de la razón capaz de
juzgarlas como valores apropiados para asumirlos en su personalidad por el bien que le
pueden reportar.
La tendencia durante la educación no debe ser sustituir ese modo de ser por otro ajeno a la
persona, sino lograr que ese carácter sea autocontrolado para encauzarlo de la manera que
proporcione sentido de autorrealización. Esa tarea, que es la propia del intelecto y que
la persona nunca, por lo que violentarlo supone crear una tensión emocional en el
reconocimiento del ser, ya que ser quien no se es supone una pretensión desbarajustada de
la realidad.
configura como capaz de poseer un conocimiento que le permite saber lo esencial para
cumplir los fines de la especie. El ser humano, y por tanto cualquier niño, posee un
un saber adecuado a la naturaleza del ser humano, pero no le dispone para comprender las
mayor, tiene capacidad para entender sonidos diferenciados con carácter de signo, pero no
para comprender la forma estructurada de una lengua, que le ha de ser enseñada. Es ese
contenido de saber social el que el menor, por nacer en una sociedad con la que se
relaciona, tiene derecho a aprender para poder ejercer su ser social, que incluye las
El derecho a saber es ilimitado, pero debe ser atendido preferentemente por el entorno
conveniente a saber en cada momento de la vida para que el niño pueda ejercer sus ser. El
segundo es especulativo, y tiene como fin no dejar sin respuesta la legítima intuición de
cada persona. Hacer una y otra tarea con eficacia es por lo que la sociedad ha concebido
El derecho a igualdad de oportunidades se entiende como que en toda relación que une a un
niño con la sociedad no deben haber prejuicios respecto a la condición que el niño no se ha
conferido a sí mismo, y por tanto que todos poseen igual derecho a ser tanto como otro
cualquiera, al menos en todo lo que por encima de la vida familiar se eleve como
competencia colectiva de la comunidad, incluido el proyecto del bien común. Este derecho
puede considerarse que interfiere el de los padres a procurar lo mejor para sus hijos, pero
ello sólo se reconoce así si los padres olvidan que lo mejor para los suyos es crecer en un
marco de justicia que retribuya a cada cual por sus méritos y no por los de sus antecesores.
porque, sin el primero, lo que a uno le puede ser regalado no ayuda a crecer su
personalidad, que va a ser la que más va a influir en definir su forma de ser, y sin
El derecho integral a la salud es el que protege el modo de ser propio de todos los niños
evitando que alguna parte de su ser quede disminuido en su capacidad por efecto de una
enfermedad o accidente. Se reconoce como integral en cuanto no se aprecia que la
enfermedad pueda provenir por los hábitos inadecuados del pequeño, en cuanto éste no es
investigar y sanar, pues los recursos y la ciencia de cada comunidad son limitadas. No
obstante esas limitaciones la estructura de gobierno del país debe esforzarse en ofrecer una
sanidad infantil que sea universal, ágil y eficiente, porque de ella se sigue un gran bien para
los pequeños ciudadanos y sus familias, esforzándose en minimizar las secuelas que cad
enfermedad pueda dejar. Hasta donde la atención médica exija también el concurso de los
padres junto a sus hijos, deben facilitarse los permisos de trabajo para hacerlo, como parte
necesaria de la protección del menor. De modo parecido debe ejercitarse la acción solidaria
pueda dañar la integridad física o moral de los niños. Ni los rasgos étnicos, ni las
costumbres familiares, ni la religión, ni cualquier otra determinación del tipo que sea deben
justificar una repulsa a la inclusión del niño en el ámbito social, con los plenos derechos a
participar como uno más entre sus iguales, con independencia de las condiciones de vida de
Derecho a la veracidad en su formación tiene el niño desde su más tierna infancia hasta que
pueda discernir por sí mismo lo falso de lo cierto. Quien recibe todo su conocimiento del
entorno tiene derecho a conocer la verdad y no ser engañado, de modo que se le enseñe lo
cierto, como cierto; lo probable, como probable; lo dudoso, como dudoso; lo falso, como
falso. Esto hace que se crezca con confianza, la que se pierde cuando se descubre que lo
que le han enseñado como cierto es mentira. Construir medios para enseñar en verdad es
una necesidad de la sociedad, que puede hacer fábulas que no distorsionen la realidad más
veracidad exige que se le vaya desvelando la vida con la naturalidad propia de las leyes de
la existencia, sentando las bases de la distinción de los conceptos que le puedan ayudar a
encuentre sometida al desencanto de la contradicción. Hay que tener en cuenta que un niño
crece en relación con los próximos, y si no posee un acertado grado de instrucción real de la
posee la razón. El fin de la vida de los niños está en el círculo social, y éste, por constituise
defraudas la expectativa de los pequeños, no hay que olvidar que el ideal de los niños no lo
constituyen los conceptos adquiridos, sino las personas que se los confieren, en quienes no
sólo se ha depositada la confianza, sino que también se tiene puesta la imagen del modelo a
quien imitar.
razones que sean han de vivir un tiempo alejados de parte de los familiares. Por eso la
sociedad civil debe ayudar a la reagrupación familiar en todos los casos, primando este
derecho infaltil sobre otros de índole de rentabilidad, pues mantener los vínculos de sangre
matrimonios divorciados, los hijos siguen manteniendo el derecho al trato con ambos
progenítores con tanta intensidad como exija su afectividad y su atención, debiendo la
juticia, en el peor de los casos, arbitrar esa custodia acordada o compartida, pero siempre
favoreciendo la alternancia de convivencia para que ninguno de los padres pueda ser
los de relación lateral entre hermanos, o los algo más alejados de abuelos, tíos y primos.
pero existe un derecho del niño a no perder esa vinculación para poderla implementar
CONFLICTO GENERACIONAL:
Las relaciones que los pertenecientes a cada generación contraen con la sociedad en que
viven vienen definidas por las que los antecesores concertaron según su libre
creatividad. Esa doble convergencia de poner en valor las relaciones sociales tal y como se
reciben con las que se conciben desde cada nueva perspectiva social es lo que da origen al
conflicto generacional.
vivir los sucesivos grupos de personas, reflejando su creatividad en las costumbres, y por
tanto una disciplina propia del ámbito de la sociología. La filosofía social lo contempla no
Los modos de ser de las personas tienen particularidades en cada individuo, lo que marca y
afirma las variedades de cada personalidad; esas mismas distinciones se dan tanto en la
cadena diacrónica como en la red sincrónica, por lo que de por sí no justifican que cada
generación marque distinciones diferentes de las que se mantienen dentro de una misma
generación.
Otra de las causas posibles podría ser la proyección sobre el modo de ser generada por el
progreso que la sociedad se proporciona de forma continuada, justificando que los cambios
generacionales sean mayores cuánto con mayor vehemencia se producen los cambios que
puedan alterar las percepciones del entorno, desde las que se construyen las ideas abstractas
manera de ser abarca la evolución de los cambios en las percepciones que se siguen por la
alternancia tanto de las lógicamente generadas como de las inducidas, por lo que se podría
concluir que los cambios generacionales pueden seguirse tanto de la evolución del
Los cambios que se constatan en cada relevo generacional afectan al modo de ser común
propio modo de ser o de las cualidades de verdad que puedan ser apreciadas en las distintas
percepciones con que se motiva la mente. Tanto más cuanto se cuestiona la condición de
verdad del propio modo de ser, así será la profundidad esencial del conflicto generacional.
la necesaria convivencia entre dos o tres generaciones, cada una de las cuales intenta hacer
reclama la vigencia de la necesaria renovación. Lo que cada generación considera que está
correcto, pero cada nueva generación se exige la corroboración de esas mismas condiciones
compatibilizándolas con los avances creativos que se configuran como señales de su propia
identidad. Esta herencia, una vez criticada y justificada, es lo que va asumiéndose como la
siguiente generación.
pensamiento generacional.
JUBILACIÓN:
La relación del ser humano con la sociedad se establece con el nacimiento y perdura hasta
la defunción. Durante todo ese tiempo los derechos de las personas se sostienen
de los privilegios consecuentes de las relaciones de dominio, que pueden ser denunciadas
Entre esas consecuencias lógicas que se establecen en las estructuras sociales está el
cotizado de acuerdo a la ley para el aseguramiento de la misma, como parte integrante del
derecho solidario a la cobertura social garantizada por la riqueza total generada en un país.
El derecho a esa protección implica una relación entre las generaciones productivas y las
clases pasivas, establecida sobre criterios de justicia, de modo que ambas sean beneficiarias
de la estabilidad de un sistema económico que garantice que quienes sostienen esa relación
Las condiciones de justicia que garantizan una vida digna en la fase de la jubilación vienen
definidas en cada tiempo y lugar por las maneras de ser de los jubilados que sean
compatibles con las limitaciones que establecen las formas de generación de riqueza de la
generación de los productores, ya que son éstas las que determinan la financiación de la
riqueza real disponible en cada comunidad. La condición de pasividad de los jubilados les
activamente en los mercados. Esa posición de pasividad, que pudiera interpretarse como
limitativa, no les impide su actividad política de modo similar a cualquier otro ciudadano
mayor de edad, pero insertados en una sociedad plural deben compaginar las exigencias de
sus derechos y responsabilidades con el bien común, que puede exigir reconfigurar
derechos adquiridos en un contexto social anterior con las condiciones que limitan las
VEJEZ:
universal de las especies que hacen posible la renovación del universo, ya que si hubiera un
cuerpo cuya naturaleza no admitiera el cambio supondría que habría existido y existiría
siempre, por lo que exigiría un cosmos distinto del que conocemos. Esa exigencia de
Aceptar por tanto la vejez y la muerte como una parte más de la natural existencia del ser
humano implica reconocer en ello la persistencia de cada uno de los derechos y deberes, sin
que el deterioro físico pueda admitirse como argumentación para rebajar la condición
personal.
Como la vejez se alcanza tras muchos años de vida, no todas las personas la viven, pues las
vicisitudes de la existencia hacen que sean muchos quienes fallecen antes de llegar a la
obstante la consideración general, la vejez no deja de poseer un cierto rango subjetivo que
hace que haya quienes se sienten mayores o ancianos a una edad anterior o posterior a los
demás; o incluso que puedan considerarse aspectos de la vida de los mayores cuya
la ciudadanía no se pierde por la falta de vigor, ni por causa semejante, por lo que se
mismos.
Hasta cuánto cada persona quiera exigirse en el esfuerzo de cumplimiento de sus deberes es
un asunto tan personal que no cabe interpretación sustitutiva sobre sus sentimientos, ni
siquiera por el entorno familiar, pues nadie puede sustituir la intimidad personal al ejercicio
del propio ser, tan sólo los tutores legales pueden intervenir en algunas actuaciones que no
La protección social que custodie una vida digna presenta una especial relevancia en la
vejez ya que las posibilidades de proporcionársela uno mismo han quedado reducidas y
Una vida digna en la vejez es la que permite que se puedan ejercer los derechos humanos,
como son una alimentación suficiente, una atención sanitaria eficaz, el acceso a la
información -pues los ciudadanos mayores quieren saber del mundo como en sus épocas
y el decoro del hogar o lugar de residencia. Aunque esas protecciones sociales están
como la persona que los necesita los desea, según su manera de ser, pues igual que entre
distinciones, haciendo que lo que para unos es ideal a otros descontenta, de modo que se
debe abrir un abanico de oferta de posibilidades, dentro de la disposición de renta del país,
Dictar las disposiciones de transmisión de bienes es un derecho que debe facilitarse a todas
las personas cuando llegan a la vejez, si no se posee constancia de que lo hayan hecho con
para algunas tareas; por ello dejar constancia oficial de sus últimas voluntades puede
un derecho de ejercicio de la libertad que se debe facilitar, pues, fuera de lo que marquen
las leyes respecto al patrimonio, cada persona tiene una voluntad que debe dirigir la
propia conciencia. Aunque el no vivir se pueda considerar una contradicción del vivir, no la
hay tal si se considera que el fin de la vida no es diseño que cada persona pueda elegir, sino
que viene dado en el vivir, por lo que cada persona lo que puede llegar a elegir no es la
valoración de la dignidad de la vida. Cuando las circunstancias que rodean a una persona le
inclinan de desear abreviar el trance de la muerte no es que renuncie a la vida, sino a una
existencia con contradicciones que entran en colisión con el concepto que se puede tener
del sentido real del vivir. Ese juicio de conciencia no puede considerar enajenación mental
porque entre en colisión con el sentimiento general de la población, siempre que el mismo
de las percepciones, ideas e intuiciones que inciden sobre su razón al respecto. Sólo la
intimidad de la conciencia puede decidir que es lo que más conviene, con igual riesgo de
error con el que se ha desarrollado la vida, y con la misma fragilidad con que el no decidir
al respecto pueda dejar la propia vida en manos ajenas. Lo que de ninguna manera puede
caber respecto a la muerte es que sean otras personas ajenas al individuo interesado quienes
puedan decidir lo que pudiera violentar su conciencia; incluso de la familia más allegada no