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APUNTES GARANTÍAS Y DERECHO CONCURSAL

Profs. Rodrigo Ochagavía y Alfonso Ugarte

02/08/2016
INTRODUCCIÓN

¿Qué son las obligaciones?Son un vínculo jurídico entre dos personas – o patrimonios-
que consiste en una prestación de dar, hacer o no hacer. En otros términos, son un vínculo
jurídico en virtud del cual una persona se encuentra para con otra en la necesidad de dar,
hacer o no hacer. La persona que está obligada a realizar determinada prestación es el
deudor y quien tiene derecho a recibirla es el acreedor. En caso de que el deudor no
cumpla con su obligación, el acreedor tiene, en primer lugar,el derecho a solicitar o pedir
el cumplimiento forzado de la obligación. Si bien esto es evidente en el derecho chileno,
en el derecho anglosajón esto no es tan así, pues en ese derecho la facultad para pedir el
cumplimiento forzado es excepcional. Junto con el cumplimiento forzado de la obligación,
el acreedor también puede solicitar la indemnización de perjuicios, y ¿de qué tipo son los
perjuicios que se piden cuando se pide la indemnización por el cumplimiento de la
obligación? Los perjuicios moratorios. Pedir el cumplimiento forzado de la obligación con
la indemnización de perjuicios es el primer derecho que tiene el acreedor.

La otra opción que tiene el acreedor o el comerciante es pedir la resolución del contrato,
y en ese caso el comerciante también tendrá derecho a pedir la indemnización de
perjuicios moratorios y compensatorios (Cumplimiento por equivalencia según
OCHAGAVÍA).

¿Sobre qué bienes el acreedor ejercerá cualquiera de estos derechos? Sobre aquellos
bienes comprendidos en el derecho de prenda general, el cual es un derecho del acreedor
sobre los bienes presentes o futuros del deudor para el pago de su obligación. Este
derecho no recae sobre los bienes pasados porque estos bienes ya no forman parte del

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patrimonio del deudor, por lo que este no los pudo tener en cuenta al momento de la
celebración del contrato. Este derecho de prenda general no es un derecho real, es decir,
no se tiene sobre uno o más bienes específicossin respecto a determinada persona, sino
que es la facultad que tiene el acreedor de perseguir el cumplimiento de su crédito sobre
el patrimonio del deudor, salvo los bienes inembargables. Empero, ¿son los bienes
inembargables la única limitación al derecho de prenda general?Los bienes inembargables
no son la única limitación al derecho de prenda general, sino que también hay otras
limitaciones más propias del derecho comercial: en un ejemplo en que una persona cae en
un procedimiento de liquidación. En el procedimiento de liquidación, una solapersona –el
liquidador- toma la administración del fallido, quien pierde la administración y la
posibilidad de disponer de los bienes. Si se supone que el fallido luego decide volver a
emprender, y se sabe que el derecho de prenda general recae sobre los bienes presentes
y futuros, además del hecho de que generalmente cuando se cae en liquidación se está en
una situación en que los pasivos superan a los activos, es decir, los bienes presentes no
son suficientes para pagar las obligaciones actuales, de modo que los acreedores no serán
pagados en todos sus créditos; ¿qué pasa si esa persona decide reemprender? Si esa
persona supiera que todo lo que ganará se irá directo a sus acreedores, decidirá qué es
mejor no invertir, lo cual supone un problema no sólo para sus acreedores, sino que para
la sociedad toda: si se hiciera una defensa paradigmática del derecho de prenda general,
se borrarían los incentivos para invertir y reemprender. Si una persona no reemprende, la
sociedad como un todo estará peor porque tendrá que hacerse cargo de esa persona el
Estado, pudiendo esos recursos haberse destinado para otros fines.

¿Cómo se soluciona lo anterior? Esto porque el art. 2465 se refiere a todos los bienes
presentes o futuros excepto los inembargables. Una posibilidad es establecer un modo de
extinguir las obligaciones que prevenga que el deudor tenga que pagar ilimitadamente
con los bienes futuros mediante la liquidación. Sin embargo, esta solución no es del todo
justa, por lo que la ley ha contemplado el mecanismo según el cual solamente estarán
excluidos los bienes adquiridos a título oneroso, mientras que los bienes adquiridos a

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título gratuito, puesto que no suponen el emprendimiento ni la inversión por parte del
deudor, no quedarán afectos a la liquidación. Pero los bienes adquiridos a título oneroso
no están del todo excluidos de la liquidación, sino que estos bienes en sí mismos quedarán
exentos de las facultades de administración del liquidador y del derecho de prenda
general de los acreedores, pero los frutos de esos bienes quedarán afectos a dichas
facultades y al derecho de prenda general. Sin perjuicio de lo anterior, históricamente la
ley de quiebras, y la ley Nº 20.720 no ha innovado al respecto,ha establecido un momento
en que las obligaciones se extinguen con el sobreseimiento definitivo del procedimiento
de liquidación, según el cual se extinguirán las obligaciones pasadas.

Este concepto está en el corazón de las leyes concursales y de insolvencia. Desde esta
perspectiva, ¿a quiénes favorecen las leyes de insolvencia? En parte, uno de los
beneficiados por este tipo de leyes son los insolventes, porque es una manera de
permitirles tener un nuevo comienzo, de partir nuevamente, y fomentar su
reemprendimiento.Empero, no se puede ignorar que además de favorecer al insolvente,
también favorece a los acreedores porque busca que todos ellos se paguen en un solo
procedimiento y el interés público del Estado, quien se eximirá de cierta manera de
mantener a los insolventes si estos logran exitosamente reemprender.

Ahora, ¿estos son los únicos derechos que tiene el acreedor? También tiene derechos
auxiliares tales como:

1. Acción pauliana o revocatoria. Están reguladas en el CC y en las acciones


concursales de la ley Nº 20.720. ¿Qué buscan en general las acciones revocatorias
o la acción pauliana? Buscan que ciertos actos o contratos celebrados por el
deudor con fraude pauliano y en perjuicio de sus acreedores no le sean oponibles a
tales acreedores. Es una especie de integración de patrimonio porque buscan que
bienes que habían salido del patrimonio del deudor se reincorporen o se entiendan
reincorporados al patrimonio del deudor para que se ejerza el derecho de prenda

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general sobre ellos. Que se entiendan reincorporados se refiere a que en los
hechos ocurre que se considera que la salida de los bienes del patrimonio del
deudor le es inoponible a los acreedores, es decir, se considera como que nunca
hubieran salido (art. 2468 del CC. y acciones concursales de la Ley Nº 20.720).

2. Acciones oblicuas o subrogatorias.Se trata del ejercicio de acciones que forman


parte del patrimonio del deudor, pero que pueden ser ejercidas por los acreedores
porque estas van en beneficio de estos y que no son ejercidas por el deudor. Como
el deudor no es diligente al ejercer sus acciones en contra de su propio deudor, la
ley le concede a los acreedores la facultad de ejercer las acciones que su deudor
tenga en contra de terceros. En nuestro derecho la acción oblicua o subrogatoria
también es una acción de integración de patrimonio, pues busca que el patrimonio
del deudor se mantenga incólume y no hay una norma genérica que consagre de
manera general las acciones oblicuas o subrogatorias, pero sí existen una serie de
ejemplos en que el CC permite ejercer la acción oblicua.

Otro derecho que tiene el acreedor son los privilegios y preferencias. Estos se dan toda
vez que un deudor tiene muchos acreedores y sus pasivos son mayores que sus activos, y
en esos casos la ley considera que hay acreedores que tienen mejor derecho que otros
para pagarse antes en virtud de un privilegio o una preferencia.

Los acreedores también tienen como derecho el impetrar medidas conservativas que
tengan por objeto conservar el patrimonio de sus deudores.

¿Esto es lo único que puede hacer el comerciante cuando contrata con otros
comerciantes? No, existen en nuestro derecho las garantías o cauciones. Las garantías son
cualquier obligación que se contrae para la seguridad de otra obligación propia o ajena y
se clasifican en personales y reales:

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1. Garantías reales.Las garantías reales afectan a un bien para la seguridad de una
obligación determinada. ¿En qué consiste lo anterior? Se le otorgará al acreedor,
en primer lugar, el derecho de persecución, el cual consiste en que se podrá
perseguir el bien en manos de quien lo tenga, es decir, sin respecto de
determinada persona aún cuando el deudor o el tercero haya enajenado el bien.
Una vez que el acreedor obtiene el bien no podrá quedarse con él puesto que en
nuestro país está prohibido el pacto comisorio, es decir, el acreedor está obligado
a vender el bien siguiendo un procedimiento judicial, generalmente de pública
subasta, y el acreedor generalmente se pagará con lo que obtenga de la venta de
ese bien. El acreedor también podrá pagarse con preferencia a los demás
acreedores, puesto que la prenda concede una preferencia de segunda clase. Entre
las garantías reales se encuentra:

(1) La hipoteca según la cual se puede hipotecar el dominio y el usufructo de un


bien inmueble, de naves mayores, aeronaves, los derechos de agua y las
concesiones mineras.

(2) La prenda.La prenda se puede clasificar en:

(a) Con desplazamiento.La prenda se perfecciona, se prueba y subsiste con la


entrega que el deudor hace al acreedor del bien dado en prenda. El
desplazamiento en las prendas busca proteger, en primer lugar, al acreedor
porque le otorga mayores seguridades de que ese bien no será utilizado
para darle garantías o para pagarle a terceros, de que no tendrá que
recuperar el bien en manos de quien lo tenga y de que obtendrá un mayor
cuidado del bien prendado. También busca proteger a terceros de que no
compren bienes prendados del deudor y a terceros que contraten con el
deudor celebrando cualquier tipo de contrato ya que al salir de la esfera de
control del deudor el bien, se tiene noción de un menor patrimonio del

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deudor, permitiendo obtener una idea real de cuales son las capacidades
económicas del deudor. Sin embargo, para un comerciante una prenda con
desplazamiento no es una opción puesto que requiere de los bienes que tal
vez hubiera prendado para el desarrollo de su negocio, por lo que para
estos es vital que existan prendas sin desplazamiento, así como es vital
para los acreedores del comerciante tener mecanismos que les permitan
conocer de la prenda sin la necesidad del consentimiento del deudor.

(b) Sin desplazamiento. Todas las prendas sin desplazamiento que han existido
en nuestra historia han buscado un mecanismo de publicidad para darle
conocimiento a terceros de la existencia de la prenda.

¿Qué bienes se pueden prendar? Se pueden prendar los bienes corporales o


incorporales muebles.

2. Garantías personales.Se trata de la afectación de otro patrimonio para la


seguridad de una obligación. En estos casos interviene una persona distinta del
deudor, la que se compromete a pagar la obligación en caso que este no pague la
obligación. Entre las cauciones personales se encuentran:

(1) Fianza. Es una obligación accesoria en virtud de la cual una persona se obliga a
pagar total o parcialmente una obligación del deudor en caso que este no la
pague. En general la solidaridad pasiva es una mejor garantía que la
subsidiariedad, ello en razón de la subsidiariedad y la accesoriedad. ¿Por qué la
accesoriedad sería un problema? Porque el contrato principal pudo haber sido
nulo, es decir, el hecho de que la obligación accesoria siga la suerte de la
principal, y que la obligación principal haya sido nula se trata de un problema.
Por esto es que en Francia existe la fianza a primera demanda, que es una

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fianza independiente no accesoria, de modo que la fianza no depende de los
términos y condiciones de la obligación principal.

(2) Solidaridad pasiva.

(3) Cartas de crédito stand-by.

(4) Boleta bancarias de garantía.

(5) Escrow o depósito de garantía.

(6) Seguro de crédito.

(7) Cláusula penal.

Existe un sinnúmero de cauciones personales, entre las cuales se encuentran


algunas accesorias y otras principales, las cuales subsisten y existen con
independencia de lo que ocurra con la obligación caucionada.

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03/08/2016
GARANTIAS PERSONALES

a) Fianza. Es un contrato accesorio por el cual una o más personas se obligan a pagar o a
cumplir con una obligación ajena para el evento que el deudor principal no pague o no
cumpla con esa obligación.

El art. 2335 del CC señala que: “La fianza es una obligación accesoria,en virtud de la
cual una o más personas responden de unaobligación ajena, comprometiéndose para
con el acreedora cumplirla en todo o parte, si el deudor principal nola cumple.”

No obstante el CC habla de una obligación accesoria, no cabe duda que la fianza es un


contrato.

Las partes de un contrato de fianza son el fiador y el acreedor de la obligación principal.


En este caso el deudor principal no es parte del contrato de fianza, e incluso, se puede
afianzar contra la voluntad del deudor principal.

Características del contrato.

1. Contrato unilateral. En virtud de la fianza solo resulta obligado el fiador, cuya


obligación consiste en cumplir con la obligación del deudor principal. Por regla
general el acreedor principal no asume ninguna obligación para el fiador, pero el
acreedor podrá resultar obligado para el fiador en el caso que se haya pactado una
remuneración.En el caso que se ofrezca una remuneración, esa figura es muy
similar a la de un seguro ya que el acreedor estaría pagando una cantidad de dinero
al fiador para que este pague en el caso de que el deudor principal no pague.

2. Contrato accesorio. Esto trae ciertas consecuencias:

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(1) Si se extingue la obligación principal se extingue la fianza, independiente del
modo de extinguir las obligaciones que se utilice para extinguir la obligación
principal.

(2) Es indispensable para que la fianza subsista que la obligación principal llegue a
existir, pero es perfectamente posible la fianza de una obligación futura, es
decir, de una obligación que no exista. En este caso el fiador tiene derecho a
retractarse mientras la obligación principal no exista, pero queda responsable
de los perjuicios que su retractación suponga (art. 2339).

“Puede afianzarse no sólo una obligación pura y simple, sino condicional y a


plazo. Podrá también afianzarse una obligación futura; y en este caso podrá el
fiador retractarse mientras la obligación principal no exista; quedando con todo
responsable al acreedor y a terceros de buena fe, como el mandante en el caso
del artículo 2173.” (art. 2339).

La accesoriedad de la fianza trae ciertos problemas: Un acreedor que le pide al


deudor un fiador lo hace porque no confía en la voluntad o en las capacidades
económicas de este deudor para cumplir la obligación que se contrae, y el hecho de
que en la extinción de la obligación principal se produzca la extinción de la fianza es
un problema que puede desincentivar a celebrar la fianza, ya que precisamente
sería muy útil una fianza en el caso de la nulidad de la obligación principal. Por esto
último es normal que no se vean fianzas puras y simples, sino que se vean fiadores
solidarios o fiadores y codeudores solidarios, así como las fianzas a primera
demanda, las cuales son independientes de la obligación principal y en que el fiador
está obligado al pago con independencia de la extinción o nulidad de la obligación
principal.

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3. Contrato consensual por regla general. La fianza civil es por regla general
consensual, ello (que sea por regla general) porque puede tener su origen en el
contrato o puede emanar de una decisión de un tribunal o de una disposición
legal.La fianza comercial es solemne según lo señala el art. 820 del C. de C.

“La fianza deberá otorgarse por escrito,y sin esta circunstancia será de ningún valor
ni efecto.” (art. 820 C. de C.).

El problema que se presenta en este caso es determinar cuándo la fianza es


comercial y cuando es civil: ¿Cuándo es comercial la fianza? OCHAGAVÍA cree que el
hecho de quien otorga o quien se beneficia de la fianza es irrelevante, por lo que
habrá que observar a la obligación principal, es decir, si la obligación principal es
civil, la fianza será civil, y si la obligación principal es comercial, la fianza será
comercial.

4. Contrato gratuito por regla general. Es por regla general gratuito porque el
acreedor pudo haber pactado una remuneración con el fiador. La fianza comercial
es por su naturaleza gratuita y la remuneración no se presume (art. 821 C. de C.).

“El fiador puede estipular con su afianzado una remuneración por la


responsabilidad que contrae en su beneficio.” (art. 821 C. de C.).

¿Qué lleva al fiador, desde la perspectiva de la causa como motivo que induce a
celebrar un acto o contrato, a celebrar una fianza? Por regla general, y salvo los
casos en que se ha convenido una remuneración, se trata de una relación personal
o comercial con el deudor, o el hecho de que el fiador es deudor del deudor
principal en otro negocio.

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¿Quétipo de obligaciones pueden afianzarse?Se pueden afianzar tanto las obligaciones
de dar, de hacer y no hacer. En los casos de la obligación de hacer o no hacer se afianza la
indemnización de perjuicios en que se traduce la obligación en caso de no cumplir la
misma. La obligación que asume el fiador es siempre de dar, es siempre una obligación de
pagar en dinero.

“El fiador no puede obligarse a más de lo que debe el deudor principal, pero puede
obligarse a menos.

Puede obligarse a pagar una suma de dinero en lugar de otra cosa de valor igual o mayor.

Afianzando un hecho ajeno se afianza sólo la indemnización en que el hecho por su


inejecución se resuelva.

La obligación de pagar una cosa que no sea dinero en lugar de otra cosa o de una suma
dedinero, no constituye fianza.”(art. 2343).

Siempre la obligación del fiador es la de pagar una cantidad de dinero.

Se pueden garantizar tanto obligaciones civiles como naturales.

Asimismo el art. 2347 señala que: “La fianza no se presume, ni debe extenderse a más que
el tenor de lo expreso; pero se supone comprender todos los accesorios de la deuda, como
los intereses, las costas judiciales del primer requerimiento hecho al principal deudor, las
de la intimación que en consecuencia se hiciere al fiador, y todas las posteriores a esta
intimación; pero no las causadas en el tiempo intermedio entre el primer requerimiento y
la intimación antedicha.”

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El fiador no puede obligarse a más de lo que se obliga el deudor principal, tal como señala
el inc. 1 del art. 2343: “El fiador no puede obligarse a más de lo que debe el deudor
principal, pero puede obligarse a menos.”Empero, ¿qué implica que el fiador no pueda
obligarse a más de lo que se obligó el deudor principal? Esto incluye tanto la cuantía,
como el lugar del pago, el tiempo del pago, etc. Sin embargo, el fiador si puede obligarse
más eficazmente que el deudor principal: Así, por ejemplo, el fiador puede constituir
garantías reales en sus propios bienes. El art. 2344 señala que:

“El fiador no puede obligarse en términos más gravosos que el principal deudor, no sólo
con respecto a la cuantía sino al tiempo, al lugar, a la condición o al modo del pago, o a la
pena impuesta por la inejecución del contrato a que acceda la fianza; pero puede obligarse
en términos menos gravosos.

Podrá, sin embargo, obligarse de un modo más eficaz, por ejemplo, con una hipoteca,
aunque la obligación principal no la tenga.

La fianza que excede bajo cualquiera de los respectos indicados en el inciso 1.o, deberá
reducirse a los términos de la obligación principal.

En caso de duda se adoptará la interpretación másfavorable a la conformidad de las dos


obligaciones principal y accesoria.”

En este caso se establece que la infracción de esta disposición no tendrá por sanción la
nulidad de la disposición, sino que se aplicará una reducción de la fianza.

Clasificaciones de la fianza.

1. En cuanto a su origen, a la obligación de otorgar un fiador.

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(1) Legal.

(2) Judicial.

(3) Contractual.

2. En cuanto a su naturaleza. Esta clasificación es relevante por el hecho de que la


fianza comercial es solemne, mientras que la civil es consensual. Que sea
consensual implicará que el consentimiento podrá otorgarse expresa o
tácitamente. Sin embargo, el art. 2347 señala que: “La fianza no se presume, ni
debeextenderse a más que el tenor de lo expreso (...)”. A partir de este último art.
se puede obtener que la fianza siempre debe ser expresa

(1) Civil.

(2) Comercial.

3. Aquella que distingue entre:

(1) La fianza propiamente tal;

(2) Fianza solidaria; y

(3) Fianza otorgada con garantías por parte del fiador.

¿Qué tipo de obligación es la del fiador? ¿Cómo se obliga el fiador? Por regla general
la obligación del fiador es subsidiaria. El fiador también se puede obligar
solidariamente, y puede hacerlo constituyéndose como fiador solidario o como fiador
y codeudor solidario. Ahora, ¿qué importancia tiene el constituirse como fiador

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solidario o como fiador y codeudor solidario? ¿hay alguna diferencia respecto del
acreedor? Respecto del acreedor no hay diferencia alguna, entonces ¿por qué tendría
importancia? La importancia que tiene es determinar la contribución de la deuda que
tienen los obligados al pago.

Efectos del contrato de fianza para las partes.

1. Efectos del contrato entre el fiador y el acreedor.

(1) Obligación de pagar la deuda en caso que el deudor principal no lo haga. ¿Es
necesario que el acreedor requiera de pago previamente al deudor principal
antes de cobrarle al fiador? No es necesario, el acreedor puede dirigirse contra
el fiador o el deudor principal indistintamente, pero en el caso del fiador, si el
acreedor no se ha dirigido previamente contra el deudor principal, el fiador
podrá oponerle el beneficio de excusión.

Entre los requisitos para poder impetrar el beneficio de excusión se


encuentran:

(a) Debe señalar bienes del deudor. No es necesario que sean suficientes para
pagar el total, y a diferencia de lo que ocurre en las reglas generales del
pago, el acreedor estará obligado a dirigirse contra el deudor por los bienes
que el fiador le señale, aún cuando estos no sean suficientes para pagar el
total de la deuda. Luego el acreedor podrá dirigirse por el déficit en contra
del fiador.
El art. 2359 señala los requisitos que deben observar los bienes para que
estos puedan ser señalados por el fiador:

“No se tomarán en cuenta para la excusión:

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1o. Los bienes existentes fuera del territorio del Estado;

2o. Los bienes embargados o litigiosos, o los créditos de dudoso o difícil


cobro;

3o. Los bienes cuyo dominio está sujeto a una condición resolutoria;

4o. Los hipotecados a favor de deudas preferentes, en la parte que


pareciere necesaria para el pago completo de éstas.”

(b) Que no lo haya renunciado.

(c) Que no se haya obligado solidariamente.

(d) Que no se haya afianzado una obligación natural.

(e) Que la fianza no haya sido ordenada por el juez.

(f) Se debe oponer en la primera gestión que se realiza en el juicio y por una
sola vez. La única hipótesis en que se puede impetrar el beneficio de
excusión por más de una vez es en el caso de que el deudor haya adquirido
nuevos bienes luego de la imposición del beneficio de excusión por primera
vez.

“Para gozar del beneficio de excusiónson necesarias las condiciones siguientes:

1a. Que no se haya renunciado expresamente;

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2a. Que el fiador no se haya obligado como elcodeudor solidario;

3a. Que la obligación principal produzca acción;

4a. Que la fianza no haya sido ordenada por eljuez;

5a. Que se oponga el beneficio luego que searequerido el fiador; salvo que el
deudor al tiempodel requerimiento no tenga bienes y después losadquiera;

6a. Que se señalen al acreedor los bienes deldeudor principal.” (art. 2358).

¿Qué pasa si hay varios fiadores? Por regla general los fiadores gozan del
beneficio de división según la cual el acreedor no puede exigir a los fiadores
más que su cuota. La cuota se determina, en principio, por partes iguales, pero
perfectamente se pudo haber pactado otra cosa. Este beneficio de división es
renunciable al igual que el beneficio de excusión.

“Si hubiere dos o más fiadores de unamisma deuda, que no se hayan obligado
solidariamente al pago, se entenderá dividida la deuda entre ellos por partes
iguales, y no podrá el acreedor exigir a ninguno sino la cuota que le quepa.

La insolvencia de un fiador gravará a losotros; pero no se mirará como


insolvente aquel cuyo subfiador no lo está.

El fiador que inequívocamente haya limitado suresponsabilidad a una suma o


cuota determinada, no será responsable sino hasta concurrencia de dicha suma
o cuota.” (art. 2367).

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¿Qué defensas puede tener el fiador en contra de la demanda del acreedor?
Además de los beneficios vistos recientemente, puede tener:

(a) Defensas inherentes a la obligación principal.Estas son las excepciones


reales.

(b) Defensas personales propias del fiador.

(c) Si hay varios fiadores, el fiador no puede oponer las excepciones


personales de los demás fiadores, salvo que se hayan obligado
solidariamente.

“El fiador puede oponer al acreedor cualesquiera excepciones reales, como las
de dolo, violencia o cosa juzgada; pero no las personales del deudor, como su
incapacidad de obligarse, cesión de bienes, o el derecho que tenga de no ser
privado de lo necesario para subsistir.

Son excepciones reales las inherentes a la obligación principal.”(art. 2354).

(d) Defensa consistente en la reclamación al acreedor de que este por hecho


o culpa suya ha puesto al fiador en una situación de que le ha vuelto
imposible subrogarse en los derechos que el acreedor tenía en contra del
deudor principal.De la misma manera, el fiador, una vez vencida la
obligación principal, y aún cuando no se le haya requerido de pago a este,
puede exigirle al acreedor que se dirija en contra del deudor principal y si el
acreedor no lo hace y en el tiempo intermedio el deudor principal cae en
insolvencia, el fiador podrá eximirse de su obligación.

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“Cuando el acreedor ha puesto al fiadoren el caso de no poder subrogarse en
sus accionescontra el deudor principal o contra los otros fiadores, el fiador
tendrá derecho para que se le rebaje de la demanda del acreedor todo lo que
dicho fiador hubiera podido obtener del deudor principal o de los otros fiadores
por medio de la subrogación legal.”(art. 2355).

“Aunque el fiador no sea reconvenido, podrá requerir al acreedor, desde que


sea exigible la deuda, para que proceda contra el deudor principal; y si el
acreedor después de este requerimiento lo retardare, no será responsable el
fiador por la insolvencia del deudor principal, sobrevenida durante el
retardo.”(art. 2356).

Si el fiador pagó, ¿qué acciones puede ejercer el fiador en contra el deudor?

(a) Acción de reembolso.

(b) Acción de subrogación. La subrogación se produce por el solo ministerio de


la ley para quien paga solidaria o subsidiariamente una obligación (art.
1610 Nº 3).

2. Efectos que tiene la fianza entre el fiador y el deudor.

(1) Derecho que tiene el fiador a exigirle que lo libere de la fianza, ya sea
pagando o constituyendo otra garantía o garantes.

(2) Acciones que tiene el fiador que paga en contra del deudor principal. Estas
acciones son de 2 tipos:

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(a) Acción de reembolso. El fiador que paga, paga una deuda que no es propia,
por lo que puede ejercer esta acción de reembolso que surge al momento
del pago. Esta acción es independiente a la que tiene el deudor principal.

(b) Acción de subrogación. Facultad de ejercer las acciones que tenía el


acreedor en contra del deudor principal (art. 1610 Nº 3).

¿En qué casos optará por una u otra? Si la obligación principal estaba
garantizada con prendas o hipotecas, o gozaba de alguna preferencia, el
fiador optará por ejercer la acción de subrogación por sobre la acción de
reembolso. En cambio, si la obligación principal estaba afecta a algún tipo
de excepción personal que beneficia al deudor o de otro tipo, debiera optar
por la acción de reembolso. Lo lógico es que el fiador optará por aquella
que es mejor, lo cual dependerá de las circunstancias.

¿Cómo se extingue la fianza?La fianza se puede extinguir por vía principal o por vía
accesoria:

1. Por vía accesoria. Por la extinción de la obligación principal, ya sea por pago o por
cualquier otro modo de extinguir las obligaciones.

2. Por vía principal.

(1) Por el cumplimiento de la obligación del fiador.

(2) En el caso de que el acreedor ha puesto en el caso de impedirle al fiador


subrogarse en sus acciones en contra del deudor o en el caso de la insolvencia.

(3) En caso de que el acreedor releve al fiador de la fianza.

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04/08/2016
b) Solidaridad Pasiva. El principal requisito para que se pueda pactar solidaridad pasiva es
que la obligación sea divisible, ello porque las obligaciones indivisibles exigen que por
su naturaleza se cumpla íntegramente la obligación. Con la solidaridad pasiva por regla
general los acreedores podrán exigir a cualquiera de los deudores solidarios el total de
la obligación, de manera que el sujeto pasivo no puede exonerarse del cumplimiento
de la obligación, sino que se verá obligado a pagar el total.

“Pero en virtud de la convención, del testamento ode la ley puede exigirse a cada uno
de los deudores opor cada uno de los acreedores el total de la deuda, yentonces la
obligación es solidaria o insólidum.

La solidaridad debe ser expresamente declarada entodos los casos en que no la


establece la ley.” (art. 1511 inc. 2 y 3).

De este modo, la solidaridad tiene 3 fuentes:

1. Legal. Entre algunos ejemplos de la solidaridad legal se encuentra:

(1) Sociedad colectiva comercial.En la sociedad colectiva comercial los socios están
solidariamente obligados al pago de las obligaciones sociales.

(2) En materia cambiaria.

2. Convencional.

3. Testamentaria.

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Tal como el acreedor puede exigir el total de la obligación a uno cualquiera de los
deudores, extinguida que sea la obligación por cualquiera de los deudores, se extingue
la obligación respecto de todos. Del mismo modo, si se interrumpe la prescripción
respecto de uno de los obligados solidariamente, la prescripción quedará interrumpida
también respecto de todos.

Si uno de los deudores paga la obligación, este podrá repetir contra los demás: para
determinar contra quién y por cuánto puede repetir, habrá que distinguir si quien pagó
tiene interés en la deuda y si los demás deudores tienen o no interés en la deuda.

“El deudor solidario que ha pagado ladeuda, o la ha extinguido por alguno de los
mediosequivalentes al pago, queda subrogado en la acción deacreedor con todos sus
privilegios y seguridades, pero limitada respecto de cada uno de los codeudores a la
parte o cuota que tenga este codeudor en la deuda.

Si el negocio para el cual ha sido contraída la obligación solidaria, concernía solamente


a alguno o algunos de los deudores solidarios, serán éstos responsables entre sí, según
las partes o cuotas que les correspondan en la deuda, y los otros codeudores serán
considerados como fiadores.

La parte o cuota del codeudor insolvente se reparte entre todos los otros a prorrata de
las suyas, comprendidos aun aquellos a quienes el acreedor haya exonerado de la
solidaridad.”(art. 1522).

c) Boleta bancaria de garantía. Esta es un documento emitido por un banco por el cual el
banco se obliga a pagar una cantidad determinada de dinero al beneficiario, a solicitud
de un cliente del banco (“tomador”), es decir, el cliente del banco se acerca al banco
señalándole que requiere emitir una boleta bancaria de garantía en favor del
beneficiario. Esta boleta representa una obligación incondicional e irrevocable de pago

21
del banco para con el beneficiario. Desde esta perspectiva, la boleta bancaria de
garantía es independiente de la relación que tiene el tomador con el beneficiario y
genera una obligación irrevocable e incondicional de pago por parte del banco, que
para hacerla efectiva contra este es necesario que se le presente el documento original
de la boleta (Documento indispensable para ejercer el derecho representado en él).

¿Por qué el banco emite una boleta bancaria de garantía?El banco genera o tiene una
relación con el tomador, pero como condición sine quanon para que el banco emita la
boleta, el tomador debe hacer una de 2 cosas: (1) Que constituya un depósito en el
propio banco por el mismo monto de la boleta bancaria y que quede en garantía en
favor del banco, de manera que si se cobra la boleta bancaria este cobrará dicho
depósito (no le entrega directamente el dinero al beneficiario porque la obligación
garantizada no necesariamente es de pagar una cantidad de dinero, sino que puede ser
una obligación de hacer o no hacer o el buen ejercicio de un cargo y además porque
normalmente el deudor tratará de retrasar lo más posible la entrega de cualquier tipo
de pago al acreedor); o (2) que solicite un crédito al banco y el banco contra ese crédito
emita la boleta bancaria de garantía. El banco le exigirá al tomador la emisión de un
pagaré, el cual tendrá una o más de sus cláusulas en blanco, ello porque, en primer
lugar, si la boleta no se cobra, el pagaré no se utilizará y nadie quiere pagar el impuesto
de timbres y estampillas en vano.

En tanto, la relación entre el banco y el beneficiario es muy simple: habrá un


documento por el cual el banco se obliga a pagar una cantidad de dinero al
beneficiario. Este documento no es transferible y solo es susceptible de un endoso en
comisión de cobranza. Este documento por regla general tendrá un plazo de
vencimiento, lo cual no obsta que pueda estar emitido por un tiempo indefinido. Este
documento podrá ser pagadero a la vista o a un plazo contado desde la vista: El
beneficiario preferirá una boleta bancaria de garantía a la vista porque, en principio, la
boleta bancaria de garantía es pagadera por el banco sin que el banco deba ni pueda

22
fiscalizar si está siendo bien cobrada o no (el banco no puede solicitar que el
beneficiario le demuestre el cumplimiento de las obligaciones del tomador para con el
beneficiario), pero si se emite pagadera a un plazo desde la vista, nada obsta a que el
tomador recurra a los tribunales en busca de una medida precautoria que le prohíba al
banco pagar, y nuestros tribunales han sido muy equívocos a este respecto: existen
fallos en los que se rechaza la solicitud de la medida precautoria, pero también hay
fallos en los que acceden a entrabar el pago de la boleta, muchas veces por un largo
periodo de tiempo. Entre los argumentos para entrabar el pago de la boleta se
encuentra aquel que señala que el cobro de la boleta es de cierta forma hacer justicia
por las propias manos, lo cual para OCHAGAVÍA es irrisorio. OCHAGAVÍA cree que si se
entraba el cobro de la boleta bancaria de garantía, y no se permite que el beneficiario
la cobre, lo que se logrará es que la boleta bancaria de garantía desaparezca como
instrumento y se utilicen otros instrumentos o mecanismos menos eficientes y más
problemáticos.

La relación entre beneficiario y tomador está fuera del ámbito de la boleta bancaria de
garantía, y es la relación extra causal a la boleta.

Pueden emitirse boletas para garantizar obligaciones de dar, hacer o no hacer, pero no
pueden, por regla general, garantizarse operaciones de crédito de dinero con estas
boletas, tal como lo señala el cap. 8-11 de la Recopilación actualizada de normas (RAN)
de la SBIF.

Un error común que se ve en los contratos es que en estos se señala que se emitirá una
boleta para garantizar cierta obligaciones (Ej. Se garantiza que el edificio no se caerá en
un contrato de construcción), pero no se establece ninguna cláusula penal que
determine los perjuicios, ello porque si no hay una cláusula penal por un monto igual o
similar al de la boleta, el beneficiario deberá demandar al tomador por la
indemnización de perjuicios, de modo que el tribunal pueda determinar el monto de

23
los perjuicios. Para evitar este problema la solución es establecer en el contrato una
cláusula penal que permitirá al menos evitar tener que demandar al contratante
infractor para la determinación de los perjuicios (de cierta forma traspasaría a la otra
parte la carga de demandar).

En el caso que existan, por ejemplo, terceros acreedores del beneficiario, ¿pueden
estos embargar la boleta bancaria al beneficiario? El art. 69 Nº 13 de la Ley General de
Bancos señala que los bancos pueden emitir boletas bancarias de garantía que son
inembargables por terceros.

“Los bancos podrán efectuar las siguientes operaciones:

13) Emitir boletas o depósitos de garantía, que serán inembargables por terceros
extraños al contrato o a la obligación que caucionen” (art. 69 Nº 13 LGB).

¿Cómo se extingue la boleta bancaria de garantía?

1. Por su pago.

2. Si expira el plazo de vigencia de la boleta.

3. Si el tomador le devuelve la boleta al banco para que la cancele.

d) Carta de crédito stand-by (SBLC).Las cartas de crédito son muy relevantes en el ámbito
del comercio exterior, en aquellos casos en que no existe tanta confianza entre
comprador y vendedor. Las cartas de crédito stand-by no se utilizan en el contexto de
una venta, sino que en el contexto de una garantía, en el sentido de que hay una parte
que no confía en el cumplimiento de la obligación de la otra parte, por lo que esta le
pide a un banco que garantice el cumplimiento de su obligación. El banco emitirá esta

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carta de crédito a solicitud del tomador (cliente) en beneficio del beneficiario, quien
podrá cobrarla de acuerdo a sus términos. ¿Cuáles serán estos términos? Normalmente
se le exigirá al beneficiario que presente una carta que demuestre su calidad de tal y
que el tomador no ha cumplido con sus obligaciones.

Estas cartas no están reguladas en nuestra legislación local y por regla general les son
aplicables las reglas y usos uniformes para créditos documentariosde la cámara de
comercio internacional (CCI).

¿Cuáles son las principales diferencias con la boleta?

1. La boleta bancaria de garantía solo existe en Chile, mientras que estas cartas de
crédito son de aplicación internacional. Sin embargo, no sólo se aplican para
transacciones internacionales.

Por lo mismo,tienen una legislación aplicable distinta (art. 69 Nº 13 LGB y el cap. 8-


11 de la RAN para las boletas bancarias, y las reglas y usos uniformes para créditos
documentarlos de la CCI en el caso de las cartas de crédito).

2. Las cartas de crédito admiten giros múltiples, es decir, si se tiene, por ejemplo, una
carta por $35 millones, no se está obligado a girar el todo o nada, sino que se
pueden hacer giros parciales y múltiples, lo que no ocurre con la boleta bancaria.
De este modo, las cartas de crédito están de cierta manera mejor pensadas para
obligaciones de garantía.

3. Sobre todo si se somete la carta de crédito a una ley extranjera, y a los tribunales
con asiento en ese país extranjero, no hay manera de entrabar el cobro de esa
carta de crédito, lo que no ocurre actualmente con las boletas bancarias de
garantía.

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Estas son las principales diferencias entre la boleta y la carta de crédito, pues en los
demás aspectos son muy similares entre ellas.

09/08/2016
e) Seguro de crédito. Por este seguro una persona tiene un crédito contra un tercero para
que este tercero le pague una cantidad de dinero, y lo que hace esa persona es
contratar con una compañía de seguro un seguro, de tal manera que sea esta la que le
pague, en caso de que el tercero no le pague. Esto está señalado en el art. 579:

“Por el seguro de crédito elasegurador se obliga a indemnizar al asegurado las


pérdidasque experimente por el incumplimiento de una obligación dedinero.”

Para OCHAGAVÍA la fianza y el seguro de crédito son en la práctica iguales, solo que
todos pueden ser fiadores, mientras que solo pueden asegurar las compañías de
seguros, las que deben ser S.A. especiales.

El seguro de caución es el seguro que contrata un tomador para el caso de que el


asegurado no pague. El tomador del seguro es el obligado al pago de una obligación, de
un crédito, y es él quien contrata con la compañía de seguro, y en la hipótesis que él no
lo pague, lo pague la compañía de seguro. Sin embargo, el seguro de caución puede
constituir conceptualmente el aseguro del dolo¿Cómo se evita que se asegure el dolo?
Es de la esencia del seguro de caución que el asegurador repita contra el tomador en
caso que él tenga que indemnizar al asegurado. Siempre la compañía de seguros se
puede subrogar en los derechos del asegurado, porque de lo contrario se está
asegurando el dolo del tomador (art. 582).

“Concepto. Por el seguro de caución el asegurador se obliga a indemnizar al asegurado


los daños patrimoniales sufridos en caso de incumplimiento por el tomador del seguro o

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afianzado, de sus obligaciones legales o contractuales. Todo pago hecho por el
asegurador deberá serle reembolsado por el tomador del seguro.

Las excepciones o defensas que el tomador oponga alasegurado, alegando que no ha


existido incumplimiento de las obligaciones garantizadas por la póliza, no obstarán a
que el asegurador pague la indemnización solicitada.”

En definitiva, entre el seguro de caución y la boleta bancaria de garantía no hay


ninguna diferencia: la compañía de seguro le paga al acreedor de la obligación a su
mero requerimiento, es decir, es una garantía independiente, en que se puede
demandar inmediata y directamente a la compañía de seguros. Por lo anterior es que
es común que se pueda sustituir una carta de crédito stand-by o una boleta bancaria
por un seguro.

En el seguro de crédito la aseguradora preguntará quién es el tercero asegurado y


pedirá antecedentes antes de cubrir el riesgo. El seguro de crédito es muy común enlas
exportaciones.

27
GARANTÍAS REALES

Las cauciones o garantías reales son aquellas que se constituyen sobre bienes afectos al
pago de una obligación, y el afectar al pago de una obligación significa que el acreedor
tendrá una serie de derechos respecto de ese bien: (1) un derecho de persecución
(perseguir el bien en manos de quien la tenga); (2) poner en venta ese bien para pagarse
con el producto de la venta; (3) que ese pago es con preferencia a otros acreedores que
pudiera tener el constituyente de la garantía o caución. Entre las garantías reales están:

a) Prenda. Es un contrato por el cual se constituye una garantía o caución sobre un bien
mueble para la seguridad de una obligación propia o ajena, facultándose al acreedor a
venderla y pagarse con el producto de la venta, con preferencia a otros acreedores del
constituyente.

1. Características.

(1) Es un contrato accesorio.

(2) Es un contrato real por regla general. Las prendas consagradas en los códigos
decimonónicos (CC y C. de C.) son prendas con desplazamiento, es decir,
prendas que se perfeccionan y subsisten por la entrega del bien dado en
garantía, y desde esa perspectiva, son contratos reales que se reputan perfectos
por la entrega de la cosa. Estas prendas con desplazamiento tienen como
ventajas el que el bien no salga de manos del acreedor y el que no se deteriore
por el mal uso que le podría dar el deudor si estuviera en sus manos (como
tiene el riesgo de perder el bien, tal vez no le pondrá el mismo cuidado que
tendría si no estuviera prendado).

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Sin embargo, respecto de los comerciantes es más dificultoso constituir prendas
con desplazamiento, ya que generalmente requerirá de aquellos bienes o
materiales que constituye en prenda, y así, por ejemplo, no le convendrá
prendar con desplazamiento las máquinas que utiliza para su industria.
Respecto a esta situación, una posibilidad que tiene el comerciante es constituir
garantías personales. Otra opción, y si el comerciante era dueño de su fábrica,
es hipotecar dicha fábrica. Sin embargo, estas soluciones se hicieron
insuficientes, lo que llevó a que en buena parte del siglo XX se dictaran leyes
que le permitieran al deudor o a un tercero constituir una garantía sobre un
bien mueble, permitiendo al acreedor venderlo y pagarse con preferencia sobre
los demás acreedores del constituyente, es decir, una prenda, pero
conservando el constituyente de la prenda la posesión y tenencia materialdel
bien prendado, vale decir, una prenda sin desplazamiento.

Lo anterior no se hizo de una sola vez para todos por igual, sino que se fueron
dictando una serie de leyes especiales que obedecerían a los intereses de
distintos grupos de presión: prenda agraria que le permitía al agricultor
constituir en prenda los frutos pendientes de ser percibidos, sus máquinas, sus
herramientas, etc. y así obtener créditos; prenda industrial, que le permitía al
industrial, en actividades propias de su giro -obligaciones industriales-,constituir
una garantía sobre sus maquinarias y acciones para garantizar las obligaciones
que contraía; ley de compraventa de bienes muebles a plazo, de manera que si
el retail (Ej. Falabella) vendía un traje, una pantalón, un refrigerador, o cualquier
otro artículo a plazo pudiera constituir una prenda sobre ese bien que se vendía
a plazo, y que le permitiera ir al domicilio del comprador y retirar ese bien en
caso de que el comprador no pagara; ley de prenda sin desplazamiento (Ley Nº
18.112), que ya no atendía al origen de la obligación o a la actividad del
constituyente, sino que simplemente permitía a una persona prendar un bien
mueble para la seguridad de una obligación, sin perder la tenencia de dicho

29
bien.Esta ley vino a crear una prenda genérica que le permitiera a cualquier
persona constituir una prenda sobre un bien mueble sin perder la posesión o
tenencia del bien. Esto vino a solucionar los problemasque existían hasta ese
momento respecto a las prendas sin desplazamiento, ya que se debía constituir
una prenda u otra dependiendo de la persona del constituyente o cual fuera la
obligación garantizada, y todas y cada una tenían normas especiales: había un
registro de prenda agraria, un registro de prenda industrial, la prenda de
compraventa de cosa mueble a plazo era solemne pero no se inscribía, la
prenda sin desplazamiento había que publicar un extracto en el Diario Oficial. Si
una persona celebraba un contrato con otra, aquella no tenía como saber si los
bienes que tenía el deudor estaban o no gravados con garantías en favor de
terceros, pues no había un registro centralizado de prendas agrarias o de
prendas industriales, sino que estos dependían del Conservador de Bienes
Raíces (CBR)del lugar donde ubicaba el bien prendado, pero esto suponía otro
gran problema puesto que los bienes muebles por definición se mueven, de
modo que si se constituía una prenda sobre un bien que generalmente va de un
lugar a otro se podía perder la prenda, por lo que generalmente se inscribía la
prenda en todos los CBR de todos los territorios jurisdiccionales. Esto suponía
un sinsentido porque imponía la carga al acreedor de ver todos los registros de
todos los territorios jurisdiccionales en los cuales pudiera estar el bien para
prendarlo y en los cuales estuviera inscrita.

Este sistema llegó finalmente a un colapso, porque nadie sabía cuáles eran las
garantías que existían sobre un bien mueble de una persona, lo que llevó a
reemplazar todas estas prendas por una nueva y general prenda sin
desplazamiento, y todas estas prendas especiales, incluida la prenda sin
desplazamiento de la ley 18.112, fueron derogadas, dictándose una nueva ley
de prenda sin desplazamiento(art. 14 de la Ley Nº 20.190).Esta Ley Nº 20.190
fue muy necesaria, en primer lugar, porque para muchas personas no era una

30
opción constituir una garantía perdiendo la materialidad del bien dado en
garantía.

Estas prendas sin desplazamiento, tanto las que existían y las que hoy existen,
son todas contratos solemnes, ello porque se busca dar certeza al acreedor
beneficiario de la prenda, de manera que tenga un mecanismo que le permita
probar que el bien que permanece en poder del deudor se ha constituido en
prenda (será necesario probarlo ante el tribunal cuando se trate de ejecutar la
prenda o frente a terceros que pretendan derechos sobre el bien, si el bien
cambia de manos). Además, que sea solemne es una manera de sortearalgunas
dificultades que se pudieran producir en caso que el deudor prende la misma
cosa 2 veces (lo cual no se puede realizar con la prenda con desplazamiento).
¿Qué problema supone que se prende la cosa 2 veces? Se debe establecer
como prefieren los acreedores prendarios unos a otros: si es solemne lo lógico
es que prefieran unos a otros según la fecha en que se haya cumplido la
solemnidad, es decir, se establece un sistema de preferencia de tal manera que
el mismo bien pueda constituir como garantía para más de una obligación
constituidas en diferentes épocas.

La nueva ley de prenda sin desplazamiento establece un sistema de inscripción


en un registro nacional de prenda sin desplazamiento que lleva el Registro Civil,
y es el notario, que interviene en la constitución de la prenda, quien deberá
notificársela e inscribirla en el registro nacional que lleva el Registro Civil. Esta
inscripción es rápida y de bajo costo, lo cual no ocurría con las prendas sin
desplazamiento anteriores.

La solemnidad busca, entonces, proteger a los contratantes con el deudor para


asegurarles que serán capaces de probar que tienen una preferencia y cuál es la
prioridad de esa preferencia, pero también para quienes contratan con el

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deudor sin ninguna garantía, pues si no hubiera un registro de acceso público
que mantenga la constancia de las garantías, estos terceros no tendrían como
enterarse cuál es la real situación financiera del deudor. Las solemnidades de la
prenda buscan establecer estas seguridades frente a este tipo de cosas.

*Todas estas leyes de prenda sin desplazamiento contienen tipos penales para
quien vende un bien constituido en prenda sin la autorización del acreedor
prendario o sin darle noticia al adquirente de la existencia de la prenda.

(3) De este contrato no solo emanan derechos personales, sino que emanan
derechos reales. Estos derechos facultan al acreedor a perseguir la cosa de
manos de quien la tenga, de modo que si el deudor vende o da en arriendo la
cosa, el acreedor prendario podrá dirigirse contra el comprador o el
arrendatario para proceder a venderla. Como dice el art. 891 del CC. se pueden
reivindicar los derechos reales al igual que el derecho de dominio.

(4) La prenda otorga una preferencia. ¿Qué tipo de preferencia otorga la prenda?
Es una preferencia de segundo grado y especial (solo respecto de el o los bienes
constituidos en prenda, de manera que solo podrá perseguir el pago de su
crédito sobre los bienes dados en prenda, y si subsiste un saldo sin pagar,
respecto de ese saldo será un acreedor o un crédito valista o quirografario), que
en el caso de las prendas sin desplazamiento, prefieren unas a otras según la
fecha de su inscripción en el registro especial de prenda sin desplazamiento.

*La prenda se puede clasificar en especial o general:La prenda será general


cuando se refiere al patrimonio del deudor, y especial cuando se refiere a uno o
más bienes determinados.

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¿Cómo una persona se cerciora que el deudor no haya constituido la prenda el
mismo día en otra notaría, por lo que no está inscrita todavía pero ya se
notificó? Si es una obligación de dar una cantidad de dinero, se protege el
acreedor por el hecho de estipular que se pagará el dinero si y solo si la prenda
está inscrita y no hay ninguna prenda previa inscrita antes de la que se quiere
inscribir.

(5) La prenda es indivisible. ¿Qué implica que la prenda sea indivisible? Se puede
perseguir el total de la cosa prendada para seguridad del pago de cualquier
parte de la obligación, además de que cada parte de la prenda garantiza el total
de la cosa prendada, de modo que el no pago de la obligación faculta para
perseguir toda la cosa prendada y el pago parcial no faculta al constituyente de
la prenda para pedir la restitución de ninguna parte de la cosa prendada.

¿Qué pasa si una persona es deudor de una obligación garantizada con una
prenda y le sobreviene una necesidad urgente de la cosa prendada? ¿Puede
obtener la restitución de la prenda? ¿Cómo podría obtenerla?

(a) Pagar la obligación garantizada.

(b) Sustituir la prenda o prendar otra cosa para la restitución de la prenda. A


satisfacción del acreedor se puede prendar otra cosa para seguridad del
crédito, de modo que se pueda recuperar la cosa y dar otra en garantía. De
esta manera se podrá recuperar la cosa prendada. Esto podría ser
conveniente para el acreedor en el caso que el nuevo bien prendado tenga
un mayor valor o sea más líquido. Sin embargo, no siempre será
conveniente para el acreedor esta sustitución porque puede haber
problemas respecto de la preferencia de la nueva garantía. Además, si una
persona constituye una garantía para seguridad de una obligación contraída

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antes, se podría entrar en el terreno de las causales de revocación de
acciones revocatorias concursales, en las que la ley presume en ciertos
casos el fraude pauliano y el perjuicio a los acreedores.

(6) Es un contrato accesorio. Se constituye para garantizar una obligación propia o


ajena que tiene el carácter de principal. Desde esa perspectiva, la prenda
seguirá la suerte de la principal, de modo que extinguida la obligación principal
se extingue la prenda, y habrá que proceder a restituirla (prenda con
desplazamiento) o a alzarla (prenda sin desplazamiento). Asimismo, la prenda
puede existir sin que exista la obligación principal, pero es necesario que la
obligación principal exista para que la prenda subsista, lo cual es absolutamente
cierto respecto de las prendas sin desplazamiento, pues así lo dice
expresamente la ley de prenda sin desplazamiento (se permiten constituir
prendas para obligaciones futuras). Sin embargo, más discutible es el hecho de
si se pueden constituir prendas para obligaciones futuras con las prendas
tratadas en el CC. y en el C. de C., pues en estos no se regula la prenda de
obligaciones futuras, sin perjuicio de que sí lo regula el CC. parala fianza y para
la hipoteca, las que están ubicadas geográficamente en el CC. inmediatamente
antes y después respectivamente de la prenda. La pregunta que surge,
entonces, es si la falta de regulación en el CC. se debe a un olvido del legislador,
o más bien fue hecho intencionalmente así, ello porque si se trata de un olvido
se puede concluir que se puede prendar un bien mueble para una obligación
futura, mientras que si la omisión fue intencional no se podría constituir una
prenda civil para garantizar una obligación futura. Esta pregunta es muy
relevante, ya que gran parte de las prendas que se constituyen en la actualidad
tienen una cláusula de garantía general, lo que implica que la prenda se
constituye paragarantizar cualquier obligación presente o futura que el deudor
tenga o pueda llegar a tener con el acreedor por cualquier causa u objeto, de tal

34
manera que cualquier obligación que tengan entre ellos queda garantizada por
la garantía que se constituye.

¿Es la cláusula de garantía general válida para las prendas que regula el CC. y el
C. de C.? SOMARRIVA piensa que la omisión de BELLO es intencional, ya que
piensa que no se puede disponer de un bien por una obligación que no existe y
que no se sepa que va a llegar a existir, y por ello no sería casual la omisión para
la prenda y no para las hipotecas.

En esa misma línea se suele citar como argumento lo que señala el art. 815 Nº 2
del C. de C.:

“Para que el acreedor prendario goce del privilegio enunciado en concurrencia


de otros acreedores, se requiere:

2°. Que la escritura o documento contenga ladeclaración de la suma de la deuda


y la especie y naturaleza de las cosas empeñadas, o que lleve anexa una
descripción de su calidad, peso y medida.”

Este requisito contenido en este art. se conoce como el conste de la prenda.


¿Se puede cumplir este requisito respecto de una obligación futura? Pareciera
imposible, y OCHAGAVÍA cree que el propósito del conste es el de limitar el
privilegio del acreedor prendario.

¿Es necesario que la obligación sea propia del constituyente? No es necesario


que la obligación sea propia del constituyente, puede ser propia o ajena,

(7) La obligación asegurada puede ser civil o natural.

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2. Naturaleza civil o comercial de la prenda. ¿Qué es lo que hace civil o comercial a la
prenda? La prenda no está señalada en el art. 3 del C. de C., de modo que
OCHAGAVÍA piensa que la prenda será civil o comercial dependiendo de si la
obligación principal es civil o comercial respectivamente. Esto no es baladí, ya que
el art. 815 Nº 1 establece que para la prenda comercial otorgue el privilegio al
acreedor es necesario que esta conste en escritura pública o instrumento privado
protocolizado ante notario. Esto es importante porque una prenda sin privilegio no
es muy distinta al derecho de prenda general.

“Para que el acreedor prendario goce del privilegio enunciado en concurrencia de


otros acreedores, se requiere:

1°. Que el contrato de prenda sea otorgado por escritura pública o en documento
privado protocolizado, previa certificación en el mismo de la fecha de esa diligencia,
puesta por el notario respectivo;” (art. 815 Nº 1 C. de C.).

10/08/2016
¿Se puede prendar un bien con una prenda civil o comercial para garantizar más de
una obligación y de acreedores distintos?Muchos autores señalan que no se puede
porque hay una imposibilidad material, ya que esas prendas se perfeccionan por la
entrega, pero OCHAGAVÍA cree que sí se podría en el caso de que esos acreedores
hubieren designado un mandatario común de común acuerdo para que tenga la cosa
por ambos. A él le parece que la cosa se le entrega al acreedor, sea él mismo, un
mandatario o un representante, y desde perspectiva no ve problema en que dos o más
acreedores se pongan de acuerdo para que una misma persona reciba y conserve la
cosa por ambos para seguridad de sus obligaciones.

¿Cómo preferirán estos acreedores que tienen una misma prenda? OCHAGAVÍA piensa
que debería ser a prorrata de sus créditos más que la fecha de constitución de la

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prenda, y se basa en el hecho de que los acreedores han consentido en que se
constituya una prenda para más de una obligación, por lo que sí no regularon la
preferencia en la que se pagarían, lo más razonable es que deba ser a prorrata de sus
créditos. Una cosa distinta es que uno de los créditos deba pagarse con anterioridad a
la otra.

3. Tipos de prendas.

(1) Prenda civil. Está regulada en el CC. y es un contrato real que se perfecciona por
la entrega de la cosa dada en prenda. Este contrato se celebra por el acreedor y
el constituyente de la prenda, el cual puede ser el propio deudor o un tercero
distinto del deudor, pero es menester que sea el dueño de la cosa prendada
(art. 2387). La prenda es un principio de enajenación, por lo que la tiene que
hacer el dueño, lo cual es relevante para efectos del art. 1464.

“No se puede empeñar una cosa, sino porpersona que tenga facultad de
enajenarla.” (art. 2387).

¿Qué pasa si se prenda un bien del que no se es dueño? Esa prenda será
inoponible al dueño de la cosa, es decir, la prenda será inexistente respecto del
dueño, pero este podría ratificar la prenda o transferir la prenda al acreedor
prendario.

¿Qué se puede prendar?Se pueden prendar bienes muebles corporales e


incorporales. ¿Las acciones de una S.A. o de una SpA son bienes corporales
muebles? No, son bienes incorporales pues la acción es mucho más que el
documento que da cuenta de quién es dueño de ellas y donde están
registradas.

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¿Se puede prendar un crédito?Sí; ¿cuándo se prenda un crédito, qué se
entrega? El título en el cual consta el crédito: el art. 2389 del CC. dice lo
siguiente:“Se puede dar en prenda un créditoentregando el título; pero será
necesario que el acreedor lo notifique al deudor del crédito consignado en el
título, prohibiéndole que lo pague en otras manos.”Empero, ¿cuál es el título?
¿Una copia o el original? Si se prenda un crédito que consta en un contrato
documentado en un instrumento privado, lo lógico sería prendar el original, ya
que una copia no presta ninguna seguridad.

Cuándo se prenda un crédito, ¿qué puede y debe hacer el acreedor prendario?


El art. 12 del DL 776 faculta y obliga al acreedor prendario de un crédito a
cobrarlo y a aplicar al pago de las obligaciones que tiene el deudor con el
acreedor prendario lo que le pague el deudor del crédito prendado.
Técnicamente este es un pacto comisorio, por lo que se puede decir que en la
prenda de crédito se permite el pacto comisorio.

“Si la prenda consistiere en un crédito por suma de dinero, el acreedor prendario


deberá cobrarlo a su vencimiento conforme a las reglas generales del Derecho,
entendiéndose representante legal del dueño del crédito para este efecto. Las
cantidades que perciba las aplicará, sin sujeción a las formalidades de los
artículos anteriores, al pago de su propio crédito, si éste fuera de igual
naturaleza y en seguida rendirá cuenta a su deudor.

Serán aplicables en seguida las reglas del título XIII, libro III del Código de
Procedimiento Civil.”(art. 12 DL 776).

En un ejemplo en que una persona le presta 1 millón de pesos a otra, y el


crédito vence el 31/12/2017, constituyéndole como garantía un crédito que
esta tiene por 200.000 pesos: ¿cuándo debiera cobrarse este crédito en

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garantía? Una posibilidad es decir que se cobre la garantía cuando se haga
exigible el crédito asegurado, pero esto solo será posible cuando el crédito
garantizado tenga un plazo próximo para su vencimiento, puesto que si no es un
plazo muy próximo, el crédito en garantía estará prescrito.De este modo, la
respuesta, en el caso de que no sea un plazo muy próximo, no puede ser que
deberá cobrar al momento del vencimiento de la obligación principal, sino que
debería ir a cobrarla cuando vence el crédito prendado, y por eso el art. 12 del
DL 776 es imperativo. Este art. prescinde por completo de la posibilidad que la
obligación principal no sea exigible, por lo que de cierta manera se puede decir
que la ley presume que ambas partes han pactado una cláusula de pago
anticipado en caso que el crédito prescriba. Esta es la misma solución que da el
C. de C. colombiano, y que a OCHAGAVÍA le parece la más sensata, ello
principalmente porque las otras opciones, tal como señalar que el acreedor
prendario debe cobrar y entregar los recursos al deudor o señalar que la
garantía sobre el crédito se subrogó sobre el dinero, de modo que permanece
vigente una prenda sobre el dinero (como el dinero es un bien fungible,
entonces sería más bien la prenda un título traslaticio de dominio, por lo que
finalmente sería la misma solución que el del art. 12, pero mucho más
alambicada), no parecen tan lógicas.

Ahora, ¿qué pasa si el crédito en garantía vence después que el crédito


garantizado? ¿Qué puede hacer el acreedor? ¿Puede ir a cobrar al deudor del
crédito en garantía? Podría ir a cobrarlo, pero el deudor alegará que todavía no
vence la obligación; ¿Podrá embargar el crédito? Sí, y OCHAGAVÍA no ve ningún
problema con que un crédito consistente en una obligacióndineraria sea puesto
en remate.

¿Qué derechos tiene un acreedor de una prenda civil?

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(a) Derecho a retener la cosa mientras no se le haya pagado íntegramente la
obligación principal.En la retención el acreedor prendario debe cuidar de la
cosa como un buen padre de familia. Esto no impide que los demás
acreedores del deudor puedan embargar la cosa, pero en ese caso el
acreedor prendario podrá ejercer una tercería de prelación.

(b) Derecho de persecución. Derecho de reivindicar y perseguir la cosa en


manos de quien la posea.

(c) Derecho a que la cosa se venda forzadamente por el ministerio de la


justicia. ¿Qué pasa si no hay interesados en la subasta? El acreedor tiene
derecho a que la cosa se avalué por peritos y se le adjudique al acreedor en
pago.

¿Se puede estipular en el contrato que si no se paga la obligación principal


el acreedor se quede o se haga dueño de la cosa? No, el pacto comisorio
está prohibido. Tampoco se puede hacer un pacto de retroventa o de
retrocompra, en vez de una garantía, ello porque el art. 1 del DL 776 señala
que:

“El acreedor de una obligación caucionada con prenda, podrá pedir, vencido
el crédito principal a que acceda que dicha prenda sea realizada con arreglo
al procedimiento establecido en la presente lei.

Se comprenden en las disposiciones de esta lei toda clase de garantías sobre


bienes muebles que se entreguen a un acreedor, sea bajo la forma de una
venta condicional, de un pacto de retroventa o de otra manera; sin que
valga estipulación alguna en contrario.

40
Tampoco podrá estipularse así a la fecha del contrato principal como en
ningun momento posterior, que el acreedor tenga la facultad de disponer de
la prenda, de apropiársela o de realizarla en otra forma que la prescrita en
esta lei.”

(d) Preferencia especial y de segunda clase que tiene el acreedor prendario


para pagarse con el producto de la venta con preferencia a otros
acreedores del constituyente de la prenda.

¿Cómo se extingue la prenda civil?La prenda se puede extinguir de forma


accesoria o directa:

(a) Accesoria.Extinguida la obligación principal se extingue la prenda. Sin


perjuicio de lo anterior, en la novación se pueden hacer reservas a la prenda
y que esta subsista no obstante se extinga la obligación principal.

(b) Principal.

a. Si la cosa dada en prenda se destruye.

b. Por la remisión de la prenda.

c. Si el acreedor prendario se hace dueño de la cosa dada en prenda.

(2) Prenda mercantil. La prenda mercantil, si bien es un contrato real, para efectos
de conferir el privilegio al acreedor, es necesario que conste por escrito, ya sea
en una escritura pública o en un instrumento privado inscrito y protocolizado
ante notario público (art. 815 Nº 1 C. de C.).

41
Para que el acreedor pueda gozar del privilegio es necesario que en el contrato
de prenda se haya dejado constancia de las sumas garantizadas con la
prenda(conste de la prenda).

“Para que el acreedor prendario goce delprivilegio enunciado en concurrencia


de otros acreedores, se requiere:

1°. Que el contrato de prenda sea otorgado porescritura pública o en


documento privado protocolizado, previa certificación en el mismo de la fecha
de esa diligencia, puesta por el notario respectivo;

2°. Que la escritura o documento contenga ladeclaración de la suma de la deuda


y la especie y naturaleza de las cosas empeñadas, o que lleve anexa una
descripción de su calidad, peso y medida.” (art. 815C. de C.).

¿Qué pasa si se estaba garantizado una obligación de $1 millón, pero que


devenga intereses y reajustes? ¿Cómo se sabe el monto de la obligación
garantizada si no se sabe cuánto se va a pagar? Señalando el valor que tiene el
capital y los accesorios que comprende la obligación.

Puede esta prenda recaer sobre bienes corporales e incorporales.

(3) Endoso en garantía. Prenda sin desplazamiento de títulos de crédito.

(4) Prenda sin desplazamiento (art. 14 ley 20.190).Esta vino a reemplazar una serie
de prendas especiales que existían hasta el momento de su dictación (prenda
agraria, prenda industrial, ley de compraventa de cosa mueble a plazo, prenda
sin desplazamiento de la ley 18.112). Estas prendas especiales creaban un
sistema bastante difícil de seguir; casi todas ellas eran aplicables solamentea

42
cierto tipo de constituyentes, por cierto tipo de obligaciones y sobre cierto tipo
de bienes, por lo que los acreedores asumían un gran riesgo de equivocarse.

Esta ley vino a tratar de simplificar y hacer más consistente el régimen de las
prendas sin desplazamientos, y derogó las cuatro leyes de prendas especiales,
sin perjuicio de que las prendas constituidas bajo esas leyes especiales siguen
vigentes hasta la fecha, ello porque esta ley 20.190 permitió a los acreedores
prendarios reemplazar las prendas especiales dentro de cierto plazo.

Este es un contrato solemne por el cual una persona constituye una garantía
sobre una o varias cosas muebles corporales o incorporales para caucionar
obligaciones propias o de terceros, presentes o futuras, conservando siempre el
constituyente la tenencia de la cosa.

“El contrato de prenda sin desplazamiento tiene por objeto constituir una
garantía sobre una o varias cosas corporales o incorporales muebles, para
caucionar obligaciones propias o de terceros, conservando el constituyente la
tenencia y uso del bien constituido en prenda.

En lo no previsto por la presente ley, se aplicarán las disposiciones del contrato


de prenda del Código Civil.” (art. 1 del art. 14 de la ley 20.190).

Las obligaciones propias o de terceros pueden ser presentes o futuras, estén o


no determinadas a la fecha del contrato (Art. 4).

“Podrán caucionarse con esta prenda cualquier clase de obligaciones, presentes


o futuras, estén o no determinadas a la fecha del contrato.” (art. 4).

43
Así, se eliminó gran parte de los problemas que presentaban las prendas sin
desplazamiento, permitiéndose expresamente la cláusula de garantía general.

Este contrato es solemne, y la solemnidad que se debe observar en este


contrato es doble: que se otorgue por escritura pública o bien por instrumento
privado autorizado y protocolizado ante notario público. Además de constar en
escritura pública el art. 25 es claro en señalar que la prenda nace, subsiste, se
conserva y se probará por la inscripción del contrato de prenda en el registro
especial de prenda sin desplazamiento que lleva el Registro Civil.

“El derecho real de prenda se adquirirá, probará y conservará por la inscripción


del contrato de prenda en el Registro de Prendas sin Desplazamiento. La prenda
sólo será oponible a terceros a partir de esa fecha.

En caso de bienes sujetos a inscripción obligatoria en algún otro registro, la


prenda será inoponible a terceros, mientras no se anote una referencia del
contrato de prenda al margen de la inscripción correspondiente.

Sin embargo, el derecho de prenda no será oponible contra el tercero que


adquiera el bien empeñado por venta al detalle en una fábrica, feria, bolsa de
productos agropecuarios, casa de martillo, tienda, almacén u otros
establecimientos análogos en que se vendan cosas muebles de la misma
naturaleza.”(art. 25).

Respecto de la generalidad de los bienes se adquiere y subsiste mientras la


prenda esté inscrita en el registro especial de prenda. Para estos efectos el art.
24 de la misma ley reglamenta que el notario público ante quien se ha otorgado
o protocolizado la prenda tiene que enviar el contrato al Registro Civil para que
lo inscriba dentro de tercero día, y la inscripción del Registro es automática.

44
“Dentro del plazo de tres días hábiles, exceptuados los días sábado, contado
desde la fecha de suscripción de la escritura pública en que consta el contrato
de prenda, su modificación o su alzamiento o, tratándose de instrumentos
privados, desde su fecha de protocolización, el notario deberá enviar para su
inscripción en el Registro de Prendas sin Desplazamiento, una copia autorizada
del contrato de prenda, de su modificación o su alzamiento y una copia de los
documentos en que consten las obligaciones garantizadas que se hubieren
protocolizado en su registro, si éstas no estuvieren indicadas precisamente en el
contrato de prenda.

Las copias de los actos y contratos a que se refieren los incisos anteriores
deberán ser enviadas por medio de soportes magnéticos o a través de
comunicaciones por redes electrónicas que aseguren la fidelidad y seguridad de
los antecedentes acompañados. Excepcionalmente, tratándose de notarías que
no cuenten con los medios tecnológicos necesarios para efectos de lo señalado
precedentemente, el Registro de Prendas sin Desplazamiento podrá recibir
copias físicas de los instrumentos requeridos, sin perjuicio de su derecho para
cobrar por la digitalización de dichos documentos de conformidad con el inciso
cuarto del artículo 28.

La omisión de las diligencias señaladas en los incisos anteriores no afectará la


validez del contrato de prenda ni la de su modificación o alzamiento, ni impedirá
su anotación o inscripción, pero hará responsable al notario respectivo por los
daños que se originen como consecuencia de la omisión, sin perjuicio de la
sanción disciplinaria de que pudiere ser objeto según lo establecido en el
artículo 440, inciso primero, del Código Orgánico de Tribunales. En este caso y
sin perjuicio de lo señalado en este inciso, el interesado podrá concurrir

45
directamente al Registro Civil y obtener la inscripción requerida conforme el
Título V siguiente.” (art. 24).

En el caso de los bienes registrales, es decir, aquellos bienes respecto de los


cuales existe un registro que tenga constancia de quién es su dueño, la prenda
debe además inscribirse en ese registro, sin lo cual no le es oponible a terceros.
Ej. Autos, naves menores, acciones, marcas y otros derechos de propiedad
industrial, etc.

11/08/2016
Menciones del contrato. Este contrato debe contener las menciones a que hace
referencia el art. 3 de la ley y además debe cumplir con los requisitos que se
desprenden del Decreto 722. Este último en su art. 5 señala una serie de
menciones que debe contener la inscripción, y eso implica que para que algo
esté en la inscripción debe estar además en la escritura.

“El contrato de prenda deberá contener, a lo menos, las siguientes menciones:

1) La individualización de sus otorgantes;

2) La indicación de las obligaciones caucionadas o bien de que se trata de una


garantía general. En caso que sólo se refieran los documentos donde constan las
obligaciones garantizadas y éstos no estuvieren incorporados en un registro
público, deberán ser protocolizados en copia simple al momento de la
celebración del contrato de prenda;

3) La individualización o la caracterización de las cosas empeñadas, y

46
4) La suma determinada o determinable a la que se limitare la prenda o la
proporción en que debiere caucionar diversas obligaciones, si fuere el caso.”

De esta manera, las menciones que debe contener la prenda son las siguientes:

(a) Partes.

(b) Cosa empeñada.

(c) Obligación garantizada y forma que se garantiza la obligación: este tiene


una opción doble:

a. Transcribir la obligación garantizada en la prenda.

b. Hacer referencia al documento del que emanan las obligaciones


garantizadas.

OCHAGAVÍA recomienda hacer la descripción de la obligación garantizada en el


propio contrato de prenda sin desplazamiento, porque este contrato tiene
respecto de la prenda y de la obligación garantizada descrita en él, título
ejecutivo. De tal manera que si se tiene una obligación que no consta en un
título ejecutivo, pero se garantiza con una prenda sin desplazamiento, se puede
hacer de un título ejecutivo con la simple descripción de la prenda.

Esta prenda tiene varias peculiaridades, entre las cuales se encuentra que la
tenencia y la conservación de la cosa permanece en poder del constituyente, y
así lo señala el art. 1 del art. 14 de la ley 20.190: “[...] conservando el
constituyente la tenencia y uso del bien constituido en prenda.”

47
¿De qué cuidado debe cumplir el constituyente de la prenda en la conservación
de la cosa prendada sin desplazamiento? El art. 18 señala que:

“El constituyente o el deudor prendario, en caso que fueren distintos,


conservarán la tenencia, uso y goce de la cosa dada en prenda, siendo de su
cargo los gastos de custodia y conservación. Sus deberes y responsabilidades en
relación con la conservación de la cosa dada en prenda serán los del
depositario, sin perjuicio de las penas que más adelante se establecen. Con
todo, los deberes, responsabilidades y penas mencionadas no serán aplicables
en el caso que legítimamente se haya procedido conforme al artículo 11
precedente.

Si se abandonaren las especies prendadas, el tribunal podrá autorizar al


acreedor, para que, a su opción, tome la tenencia del bien prendado, designe un
depositario o proceda a la realización de la prenda, considerándose la
obligación caucionada como de plazo vencido.

Tratándose de derechos, el constituyente estará obligado a evitar su menoscabo


o extinción. En caso de infracción a lo dispuesto precedentemente, la obligación
caucionada se considerará como de plazo vencido.

Lo anterior es sin perjuicio de las demás responsabilidades civiles o penales que


correspondan como consecuencia del abandono de las especies, así como del
menoscabo o extinción de los derechos prendados.”

¿Cuáles son los deberes y obligaciones del depositario? El depositario, en


principio, responde de culpa grave, ya que el contrato, salvo que sea
remunerado o necesario, solo tiene por objeto la utilidad del depositante. Sin
perjuicio de lo anterior, la ley señala que se establecerán sanciones penales a

48
quien infrinja sus deberes de cuidado y conservación, pero OCHAGAVÍA señala
que cuando se lee el art. 39, el único tipo que podría aplicar es el del art. 39 Nº
2, y respecto a estas pareciera más bien que se tratan de conductas bastante
específicas y no dicen relación con la conservación de la cosa. Este art. 39 Nº 2
dispone lo siguiente:

“Serán castigados con las penas señaladas en el artículo 473 del Código Penal:

2) El deudor prendario y el que tenga en su poder la cosa constituida en prenda


en conformidad a esta ley que, defraudando al acreedor prendario, la altere,
oculte, sustituya, traslade o disponga de ella, y”

Como se puede apreciar, no hay ningún concepto o verbo que se refiera a la


omisión de deberes de cuidado, sino que más bien dice relación con acciones.

(c) Se pueden garantizar todo tipo de obligaciones propias o ajenas, presentes o


futuras, y es completamente admisible la cláusula de garantía general. Sin
embargo, esta aparente amplitud no es tan cierta, y el art. 6 del art. 14 de la ley
20.190 establece ciertas restricciones o requisitos que se deben observar para
constituir determinados tipos de prendas.

¿Qué bienes se pueden prendar? Bienes muebles corporales o incorporales,


presentes o futuros:

(a) Bienes futuros. La ley expresamente autoriza a prendar un bien futuro, pero
el art. 9 señala que la prenda no va a existir, sino hasta que exista ese bien
futuro, pero una vez que el bien futuro existe, la existencia del derecho real
de prenda se retrotrae a la época en que se practicó la inscripción de la
prenda en el registro especial de prenda sin desplazamiento.

49
“El contrato de prenda sobre bienes o derechos futuros será válido, pero
mediante su inscripción no se adquirirá el derecho real de prenda sino desde
que los bienes o derechos empeñados lleguen a existir.

Una vez que los bienes o derechos señalados en el inciso anterior existan, se
entenderá constituido el derecho real de prenda desde la fecha de su
inscripción en el Registro de Prendas sin Desplazamiento.”(art. 9).

Una cosa similar establece el art. 14 respecto de los bienes inmuebles por
adherencia o por destinación. Si se constituye una prenda sin
desplazamiento sobre alguno de estos bienes, se trata como una prenda de
bienes futuros: esa prenda no va a existir sino hasta que ese bien se separe
del inmueble al cual fue adherido o destinado y solo en esa oportunidad se
estará frente a un bien prendado.

“La prenda sobre las cosas que la ley reputa como inmuebles por destinación
o adherencia no tendrá otro efecto que ser una prenda sobre bienes futuros.
En consecuencia, se le aplicarán las reglas del artículo 9° anterior,
entendiéndose que las cosas llegan a existir cuando son separadas del
inmueble al que acceden o cesa la afectación a un predio, por la voluntad o
el hecho de su dueño y el consentimiento del acreedor hipotecario, si fuere el
caso.” (art. 14 inc. 1).

¿Qué pasa si se prenda un bien mueble, y que este se adhiere o se destina a


un inmueble, y pasa a ser un inmueble por adherencia o por destinación?
¿Qué pasa si el inmueble al que se adhiere o se destina está hipotecado?
¿Qué pasa con la prenda sobre esos bienes? El art. 14 en su inc. 2 establece
una regla a este respecto: es posible mantener la prenda, pero para ello es

50
necesario anotar la prenda al margen de la inscripción hipotecaria, pues de
lo contrario, cuando se ejecute la hipoteca, se producirá la purga de la
prenda, es decir, ejecutada que sea la hipoteca, se tendrá que alzar la
prenda si es que esta no había sido inscrita.

“La prenda sin desplazamiento constituida sobre bienes corporales muebles


que posteriormente se transformen en inmuebles por destinación o
adherencia, subsistirá sin que sea necesario el acuerdo del acreedor
hipotecario y gozará de preferencia sobre la hipoteca, si se anotare al
margen de la correspondiente inscripción hipotecaria. Si no se practicare
esta anotación, la ejecución de la hipoteca producirá la purga de la prenda,
sin necesidad de notificación al acreedor prendario.”(art. 14 inc. 2).

Esto en la práctica es difícil, porque, por ejemplo, se podrían haber adherido


los bienes a un inmueble que con posterioridad se hipoteca, y por ello, el
acreedor prendario no tener conocimiento de la existencia de esa hipoteca
posterior.

(b) Bienes presentes.Es necesario distinguir entre los bienes corporales y los
incorporales:

a. Bienes incorporales. La ley establece distintas normas para los bienes


incorporales:

(i) Concesiones administrativas. Se excluyen las concesiones


mineras porque estas se pueden hipotecar y no prendar. Hay una
serie de concesiones que el Estado otorga para la realización de
ciertas actividades. El art. 6 se refiere a la prenda de alguna de
ellas:

51
i. Concesiones de obra pública.Ej. Autopistas y
aeropuertos. No puede prendarse la autopista misma,
pues esta es del Estado, sino que el concesionario tiene
un derecho para explotar ese bien. Para poder
financiarse, la ley permite prendar la concesión de obra
pública, que se extiende a los ingresos futuros que puede
obtener en su explotación, más cualquier pago que el
Estado se hubiera obligado a hacerle conforme al
respectivo contrato de concesión. Esta prenda de la
concesión solo se puede establecer para garantizar el
financiamiento de esa obra pública.

“Podrá constituirse prenda sobre los siguientes derechos,


y sus bienes asociados, en la forma que se indica:

1) El derecho de concesión de obra pública constituido al


amparo del decreto con fuerza de ley N° 164, de 1991,
cualquier pago comprometido por el Fisco a la sociedad
concesionaria a cualquier título en virtud del contrato de
concesión antes indicado, o los ingresos o flujos futuros
que provengan de la explotación de la concesión
antedicha, que sólo podrán prendarse a los financistas de
la obra o de su operación o en la emisión de títulos de
deuda de la sociedad concesionaria.”(art. 6 Nº 1).

“En todo lo relacionado con la realización de la prenda de


los derechos de concesión señalados en el artículo 6° de
esta ley, éstos sólo podrán transferirse a quien diere

52
cumplimiento a los requisitos establecidos en las leyes,
reglamentos y bases de licitación para ser concesionario,
según corresponda. Para estos efectos, el tribunal que
esté conociendo de la realización de la prenda oficiará a
los organismos que hayan otorgado el derecho respectivo,
y a los que hayan aprobado el otorgamiento de dicho
derecho, si procediere, ordenándoles informar acerca de
los requisitos para que pueda ser adjudicado en la
subasta. Estos requisitos se incluirán y formarán parte
integrante de las bases del remate. El acta de remate
deberá reducirse a escritura pública, la cual deberá ser
firmada por el juez, el adjudicatario y los organismos
respectivos dentro de un plazo de sesenta días, contados
desde la adjudicación. Si transcurriere dicho plazo sin que
los organismos respectivos hayan suscrito la escritura
pública, se entenderá que consienten en dicha
transferencia, a menos que manifiesten su oposición y la
notifiquen por medio de un ministro de fe al
adjudicatario.

Lo dispuesto en el inciso anterior no es aplicable en caso


que el acreedor prendario opte por proceder al embargo
de las utilidades o de cualquier otro pago que el contrato
respectivo contemple y que se encuentre prendado a su
favor. Embargados estos bienes, el depositario que se
nombre tendrá las facultades y deberes de interventor
judicial, de conformidad con el artículo 294 del Código de
Procedimiento Civil; y para ejercer las que le

53
correspondan al cargo de depositario, procederá en todo
caso con autorización del juez de la causa.”(art. 33).

ii. Concesiones portuarias.En este caso, además de


extenderse a los ingresos futuros que puede obtener el
concesionario por la explotación de la concesión, y los
pagos que le debe el Estado, se incluyen también aquellos
bienes muebles que pasan a formar parte de la concesión
pero que son del concesionario.

“Podrá constituirse prenda sobre los siguientes derechos,


y sus bienes asociados, en la forma que se indica:

2) El derecho de concesión portuaria constituido al


amparo de la ley N° 19.542, los bienes muebles de la
sociedad concesionaria, o los ingresos o flujos futuros de
ésta que provengan de la explotación de la concesión
antedicha, que sólo podrán prendarse con el objeto de
garantizar las obligaciones financieras que la sociedad
concesionaria contraiga para financiar el ejercicio,
equipamiento y explotación de dicha concesión.” (art. 6
Nº 2).

En este caso también hay una restricción respecto de las


obligaciones que se pueden garantizar.

iii. Concesiones para la construcción y explotación del


subsuelo. Ej. Estacionamientos operados por SABA. Si

54
bien el inmueble no es de propiedad del concesionario,
puede prendar la concesión que tiene sobre él.

“Podrá constituirse prenda sobre los siguientes derechos,


y sus bienes asociados, en la forma que se indica:

3) El derecho de concesión de construcción y explotación


del subsuelo, constituido al amparo de la ley N° 18.695,
cuya prenda deberá subinscribirse en el Registro Especial
de Concesiones establecido en el artículo 37 de la ley N°
18.695.”(art. 6 Nº 3).

iv. Concesiones de uso oneroso de bienes fiscales o CUOs.


Gran parte de los parques solares y parques eólicos del
norte están construidos sobre terreno fiscal.

“Podrá constituirse prenda sobre los siguientes derechos,


y sus bienes asociados, en la forma que se indica:

4) El derecho de concesión onerosa sobre bienes fiscales,


constituido al amparo del artículo 61 del decreto ley N°
1.939, de 1977, que para el concesionario emane del
contrato de concesión, o los ingresos o los flujos futuros
que provengan de la explotación de la concesión
antedicha, que sólo podrán prendarse con el objeto de
garantizar cualquier obligación que se derive directa o
indirectamente de la ejecución del proyecto o de dicha
concesión. Sin perjuicio de la obligación establecida en el
Título IV de la presente ley, esta prenda deberá anotarse

55
al margen de la inscripción exigida por el artículo 59 del
decreto ley N° 1.939, de 1977.” (art. 6 Nº 4).

v. Concesiones que se conceden sobre servicios sanitarios.

vi. Derecho a participar de proyectos de viviendas sociales.

vii. Concesiones de recintos o instalaciones deportivas.

“Podrá constituirse prenda sobre los siguientes derechos, y sus


bienes asociados, en la forma que se indica:

5) El derecho de explotación de concesiones de servicios


sanitarios, constituido en los términos de los artículos 7º y 32 del
decreto con fuerza de ley Nº 382, de 1988, del Ministerio de
Obras Públicas, Ley General de Servicios Sanitarios, para quien
explote la concesión sanitaria emanada del contrato de
transferencia del derecho de explotación de concesiones de
servicios sanitarios, o los ingresos o los flujos futuros que
provengan del derecho de explotación antedicho. Sin perjuicio de
la obligación establecida en el Título IV de la presente ley, esta
prenda deberá anotarse al margen de la inscripción en el registro
a que alude el artículo 19 de la Ley General de Servicios
Sanitarios.

6) Los derechos que para el participante emanen del contrato de


participación celebrado conforme a la ley N° 19.865, en aquellos
casos en que la obligación de éste comprenda la ejecución,
operación o mantención total o parcial de una obra, o que su

56
retribución consista en la explotación total o parcial de la misma
por un período de tiempo determinado, o los bienes muebles de
propiedad del participante o los ingresos o flujos futuros que
provengan del derecho de explotación antedicho, que sólo
podrán prendarse con el objeto de garantizar las obligaciones
financieras que el participante contraiga para financiar la
ejecución, operación, mantención y explotación de la obra.

7) Los derechos emanados del contrato de concesión de recintos


o instalaciones deportivas del Instituto Nacional del Deporte de
Chile constituido al amparo de los artículos 55 a 61 de la ley N°
19.712, que sólo podrán prendarse previa autorización de dicho
Instituto y para garantizar las obligaciones que deriven directa o
indirectamente de la ejecución del proyecto de la concesión.”(Art.
6 Nºs 5, 6 y 7).

Finalmente, el art. 6 Nº 8 señala lo siguiente: “Podrá constituirse


prenda sobre los siguientes derechos, y sus bienes asociados, en
la forma que se indica:

8) Todos aquellos derechos de concesión que, según las leyes


bajo las cuales se regulen, sean susceptibles de ser prendados,
conforme a los requisitos establecidos en las mismas.”

OCHAGAVÍA señala que es curiosa la redacción de este art.


porque existen muchas leyes que establecen concesiones que no
establecen si pueden ser prendadas (ej. Concesiones de
telecomunicaciones), por lo cual surge la pregunta de si se puede
constituir una prenda sobre el derecho de concesión conforme al

57
art 6 Nº 8 de esta ley. Para OCHAGAVÍA no se puede, lo cual no
quiere decir que la concesión no sea prendable, sino que se
puede constituir sobre ella, por ejemplo, una prenda comercial.

(ii) Créditos nominativos.En este caso no es necesario entregar el


título, pero si es necesario notificarle la prenda al deudor del
crédito prendado, prohibiéndolo que lo pague en otras manos, es
decir, es el mismo requisito de la prenda de crédito civil o
mercantil, con una diferencia:mientras en la prenda de crédito
civil o comercial la notificación solo podía hacerse por ministerio
de la justicia, esta prenda puede ser notificada también por un
notario.

No obstante no ser necesario la entrega del título donde consta


el crédito prendado, la ley exige que se protocolice la copia del
contrato de donde emana el crédito prendado junto con el
contrato de prenda.

¿A los contratantes les parece irrelevante que el contrato en que


consta el crédito se haga público? Esta es la principal razón
disuasiva para otorgar una prenda sin desplazamiento sobre un
crédito de relevancia para el deudor.

Otra diferencia que tiene la prenda de crédito nominativo, con la


prenda de crédito nominativo comercial o civil es que en estas
impera el art. 12 del DL 776, mientras que en esta prenda se
debe recurrir a la justicia y el deudor del crédito prendado debe
pagar en tribunales.

58
“Tratándose de prenda sobre créditos, podrá el ejecutante pedir
que el embargo se notifique por cédula al deudor del crédito
pignorado, a fin que retenga y consigne en la cuenta corriente del
Tribunal la suma que éste determine. La resolución deberá
identificar el crédito respecto del cual se solicita el pago e incluir
instrucciones para que el deudor del mismo pueda cumplir con lo
ordenado.

Si el obligado a la retención no cumpliere con lo ordenado, el


Tribunal, a solicitud del acreedor prendario, despachará en su
contra mandamiento de ejecución y embargo.

En caso que el deudor del crédito prendado no pudiere cumplir


con lo ordenado en el inciso primero, deberá comunicar al
Tribunal, dentro del tercer día, las causas que le impiden acatar
dicha resolución. Puesta dicha comunicación en conocimiento del
ejecutante, éste tendrá un plazo de cinco días para objetarla o
exponer lo que convenga a su derecho. El tribunal dará a la
objeción tramitación incidental y, en caso de ser rechazada, por
la sola solicitud del acreedor prendario despachará en contra de
aquél mandamiento de ejecución y embargo.” (art. 31).

“Si la prenda recayere sobre créditos con flujos periódicos, el


mandamiento de ejecución que se despache para el primero de
los pagos se considerará suficiente para el pago de los restantes,
sin necesidad de nuevo requerimiento.” (art. 32).

59
Por regla general, según OCHAGAVÍA, se debiera preferir una
prenda civil o comercial antes que una prenda sin
desplazamiento sobre un crédito nominativo.

“La prenda de créditos nominativos deberá ser notificada al


deudor del crédito pignorado, judicialmente o por medio de un
notario con exhibición del título, prohibiéndole que lo pague en
otras manos, salvo que mediare su aceptación por escrito; y en
caso contrario, le será inoponible. Una copia del título que
consigne el crédito nominativo que se otorgue en prenda será
protocolizada al tiempo de suscribirse el contrato de prenda y en
éste deberá hacerse mención de la protocolización de aquél.

Las obligaciones contenidas en este artículo no serán aplicables a


las prendas constituidas sobre los derechos señalados en el
artículo 6°.”(art. 7).

(iii) Títulos o valores desmaterializados. Los títulos de crédito se


pueden emitir sin Impresión física. En aquellos casos en que se
prenda, conforme a la ley de prenda sin desplazamiento, títulos
que no se han impreso fisicamente,la ley exige que se anote la
prenda en el registro que se lleve respecto de esos títulos.

“Los valores emitidos sin impresión física del título que los
evidencie, podrán ser prendados bajo las disposiciones de la
presente ley, en cuyo caso la prenda deberá anotarse en el
registro de anotaciones en cuenta que se lleve para estos efectos.

60
Tratándose de valores depositados en una empresa de depósito
de valores constituida de acuerdo a la ley N° 18.876, el acreedor
prendario podrá solicitar la anotación de la prenda directamente
a dicha empresa.

Lo dispuesto en los incisos anteriores es sin perjuicio de la


obligación establecida en el Título IV de la presente ley.”(art. 8).

b. Bienes corporales. La prenda de bienes corporales presentes no


presenta mayor dificultad. Sin perjuicio de lo anterior, la ley contempla
ciertas reglas que regulan ciertos aspectos de mayor complejidad:

(i) Bienes que no han llegado a Chile. En un ejemplo de un banco


en que un cliente solicita un crédito para financiar la importación
de autos que venderá en Chile. Si en ese caso el banco quisiera
constituir una garantía sobre los autos que importará el cliente,
pero estos se encuentran en un puerto de otro país. Respecto a
lo anterior se presenta el problema de que esos bienes podrían
estar regidos por la ley extranjera del lugar en que se encuentran
que estableciera normas distintas, tal como lo hace el art. 16 del
CC. (Los bienes situados en Chile se regulan por la ley chilena).

¿Qué pasa si en el ejemplo, los bienes vienen en tránsito?


Cuando se trata de mercaderías que vienen en tránsito a Chile, la
ley permite constituir una prenda sin desplazamiento sobre esos
bienes por la persona que conforme al conocimiento de
embarque, guía aérea, carta de porte u otro documento similar,
sea titular de los mismos. Esta prenda se considerará plenamente

61
válida para la ley chilena, pero no pasará lo mismo si los bienes
no llegan a Chile.

“Las cosas que no han llegado al país podrán ser empeñadas,


siempre que el constituyente de la prenda sea el titular del
conocimiento de embarque, guía aérea, carta de porte o
documento que haga las veces de cualquiera de los anteriores,
conforme a las normas que regulan la circulación de tales
documentos.”(art. 10 art. 14 ley 20.190).

La ley establece normas respecto de 2 conceptos distintos que en la


práctica pueden llegar a confundirse, y por ello los trata de igual forma:

(ii) Grupos de bienes.

(iii) Universalidades de hecho.

¿Qué pasa si se trata de prendar un computador fabricado? ¿Qué pasa si


se quiere prendar una fábrica? ¿Será necesario individualizar cada una
de las partes y cada uno de los bienes? OCHAGAVÍA cree que una
fábrica, el computador hecho, o una central hidroeléctrica debiera
considerarse como un grupo de bienes o una universalidad de hecho, y
la ley señala que si se prenda una universalidad de hecho o un grupo de
bienes se podrá modificar los bienes individuales que componen ese
grupo de bienes o esa universalidad de hecho. En el caso de un
comerciante que tenga prendado un inventario de bienes o de materias
primas, la prenda sobre grupos de bienes o universalidades de hecho le
permite que transforme esa materia y eventualmente la enajene, de tal
modo que no hay un incumplimiento de las obligaciones de la prenda y

62
se extinga la prenda con la venta, y los nuevos productos, materias y
bienes que adquiera el comerciante se subroguen a los bienes
prendados y queden afectos a la prenda. Se tiene una prenda sobre una
cantidad determinada de bienes o sobre una universalidad de hecho,
pero los componentes de ese grupo o universalidad pueden variar.

Esta prenda permite identificar a los bienes de una manera más


genérica. Esto trae ciertas consecuencias relevantes: (1) El constituyente
de la prenda puede modificar los bienes constituidos en prenda y puede
incluso enajenarlos, y una vez que lo hace se alza inmediatamente y de
pleno derecho la garantía, de modo que el tercero que lo adquiere, lo
hace sin prenda; (2) Los bienes que adquiera en el futuro el
constituyente de la prenda quedarán incluidos en la prenda. De este
modo se facilita la salida de bienes del conjunto de bienes constituidos
en prenda y permite, por otro lado, que otros bienes pasen a
constituirse en prenda por el solo hecho de haber sido adquiridos por el
constituyente de la prenda. Es muy importante en este caso definir de
forma muy precisa en qué consiste el grupo de bienes o la universalidad
de hecho, lo cual puede ser más o menos difícil según sean las
circunstancias: Puede ser muy fácil en el caso de, por ejemplo, un
computador construido, pero puede tornarse más complicado en
aquellos casos de inventario, por ejemplo.

“En el caso de prendarse grupos de bienes de una misma clase o


universalidades de hecho, tales como existencias, inventarios, materias
primas, productos elaborados o semielaborados o repuestos, o
maquinarias, redes o sistemas; los componentes de los mismos podrán
ser utilizados, reemplazados, transformados o enajenados, en todo o en
parte, salvo pacto en contrario.

63
Los bienes transformados en virtud de lo dispuesto en el inciso anterior
así como el producto elaborado con los componentes de dichas
existencias, quedarán de pleno derecho constituidos en prenda.

Aquellos componentes que salgan de la universalidad o grupo de bienes


empeñados quedarán subrogados por los que posteriormente lo
integren, hasta la concurrencia del total constituido en prenda.

Cuando se pignoraren universalidades o grupos de bienes en la forma


señalada en el inciso primero, el contrato de prenda deberá indicar el
valor del conjunto de bienes sobre los que recaiga la prenda, salvo que
las partes acuerden expresamente no asignarle un valor. En este último
caso, no será aplicable lo dispuesto en el artículo 1496, N° 2, del Código
Civil y el contrato de prenda deberá señalar las particularidades
tendientes a individualizar los bienes prendados, señalando si son
fungibles o no, determinando en el primer caso su especie, cantidad,
calidad, graduación y variedad.”(art. 11).

16/08/2016
Teniendo en cuenta que la prenda es solemne, ¿qué pasa si dentro del
grupo de bienes o dentro de la universalidad existen bienes registrales?
La ley no dice nada al respecto, por lo que OCHAGAVÍA piensa que la
obligación subsiste, de modo que para que la prenda alcance al grupo de
bienes registrales, es indispensable que se inscriba la prenda respecto de
esos bienes.

¿Qué pasa si se prenda un grupo de bienes, por ejemplo, una pantalla a una
persona, una cpu a otra y el teclado a una tercera persona, pero luego estas

64
piezas se ensamblan formando un computador? ¿Qué pasa con las prendas que
existían sobre los bienes iniciales? ¿Subsisten estas? Una opción es pensar que
la prenda subsiste en el monto de las acreencias garantizadas por cada bien,
mientras que otra opción es señalar que no subsiste la prenda porque se trata
de un bien distinto. OCHAGAVÍA cree que la que más sentido hace es considerar
el valor individual de los bienes prendados, porque eso es lo que realmente el
acreedor aceptó como garantía. No obstante lo anterior, la ley opta por una
tercera opción, y señala que las prendas subsisten y respecto de cada acreedor
se considerará el monto de los créditos a prorrata, prescindiendo de la fecha de
la creación de la prenda.

“En caso que dos o más bienes prendados se confundieren, mezclaren o


transformaren en uno indivisible o que su división causare detrimento en el
valor de la cosa, los acreedores prendarios mantendrán sus derechos en el bien
resultante a prorrata de sus créditos, sin preferirse por la antigüedad de sus
cauciones.” (art. 12 art. 14 ley 20.190).

Efectos del contrato de prenda.Quien conserva la tenencia de la cosa dada en


prenda es el constituyente de la prenda. Este, por disposición legal, responde de
su custodia y conservación en los mismos términos que el depositario, lo cual
resulta curioso porque este responde solo de culpa grave.

¿Qué pasa si el constituyente de la prenda abandona la prenda? La ley faculta


expresamente al acreedor para tomar posesión material de la prenda y
conservarla él, o bien solicitarle a un tribunal que la venda, en cuyo caso la
obligación garantizada se hace inmediatamente exigible. El constituyente, en
caso que la conservación y custodia se le haga muy dispendiosa o difícil, podrá
exigirle al tribunal que venda la prenda y se pague al acreedor prendario, y en
tal caso, las obligaciones garantizadas se hacen inmediatamente exigibles.

65
“El constituyente o el deudor prendario, en caso que fueren distintos,
conservarán la tenencia, uso y goce de la cosa dada en prenda, siendo de su
cargo los gastos de custodia y conservación. Sus deberes y responsabilidades en
relación con la conservación de la cosa dada en prenda serán los del
depositario, sin perjuicio de las penas que más adelante se establecen. Con
todo, los deberes, responsabilidades y penas mencionadas no serán aplicables
en el caso que legítimamente se haya procedido conforme al artículo 11
precedente.

Si se abandonaren las especies prendadas, el tribunal podrá autorizar al


acreedor, para que, a su opción, tome la tenencia del bien prendado, designe un
depositario o proceda a la realización de la prenda, considerándose la
obligación caucionada como de plazo vencido.

Tratándose de derechos, el constituyente estará obligado a evitar su menoscabo


o extinción. En caso de infracción a lo dispuesto precedentemente, la obligación
caucionada se considerará como de plazo vencido.

Lo anterior es sin perjuicio de las demás responsabilidades civiles o penales que


correspondan como consecuencia del abandono de las especies, así como del
menoscabo o extinción de los derechos prendados. ” (art. 18).

“Si los gastos de custodia y conservación del bien dado en prenda fueren
dispendiosos, el tribunal competente del lugar de suscripción del contrato de
prenda podrá, a petición del constituyente, ordenar su enajenación de la forma
más conveniente, sin previa tasación, pagándose al acreedor el producto de
dicha enajenación. En todo caso, la obligación caucionada se considerará como
de plazo vencido.” (art. 21).

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Como el acreedor prendario no tiene la posesión de la prenda, ¿cómo se
cerciora él de que el bien está siendo bien conservado? La ley le concede al
acreedor prendario un derecho de inspección, es decir, la facultad de
inspeccionar el bien para cerciorarse de que está en buenas manos, que no se
han violado disposiciones contractuales que las partes pudieran haber acordado
respecto de los bienes prendados y el lugar donde se encuentra la prenda. Este
derecho se debe ejecutar de forma razonable y prudente (ej. Horas prudentes).
Lo relevante es que si el constituyente se niega a dar acceso y priva del derecho
de inspección, el acreedor puede recurrir al juez para que venda el bien si es
que el constituyente persevera en su negativa, declarándose en ese caso la
obligación como vencida.

“El acreedor prendario tiene derecho para inspeccionar en cualquier momento,


por sí o por delegado, los efectos dados en prenda. Si con las visitas se irrogaren
daños o graves molestias al constituyente de la prenda, a falta de acuerdo entre
las partes, podrá el tribunal competente del lugar de suscripción del contrato de
prenda regularlas con la sola audiencia de las partes. Para designar delegado
que ejerza este derecho, bastará una simple comunicación escrita del acreedor
prendario.

En caso de oposición del constituyente para que se verifique la inspección, el


acreedor podrá exigir la inmediata realización de la prenda, siempre que,
requerido judicialmente el constituyente insistiere en su oposición,
considerándose la obligación caucionada como de plazo vencido.” (art. 20).

Las partes pueden convenir una serie de obligaciones de hacer y no hacer que
pueden afectar al constituyente de la prenda. Dentro de las principales
obligaciones de no hacer, la ley reconoce 2:

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(a) Cláusula en virtud de la cual el constituyente se obliga a no enajenar o
gravar el bien prendado. Se trata de una prohibición convencional de
disponer, enajenar o gravar el bien constituido en prenda, y esta prohibición
debe inscribirse en el registro especial de prenda sin desplazamiento.

“Si se ha convenido que las cosas dadas en prenda no pueden gravarse o


enajenarse, deberá mencionarse en el registro y su infracción dará derecho
al acreedor para exigir la inmediata realización de la prenda,
considerándose la obligación caucionada como de plazo vencido. El
desposeimiento del adquiriente se efectuará conforme al artículo 35, salvo
en la situación prevista en el inciso tercero del artículo 25.”(art. 17).

Si el dueño de la prenda enajena el bien en prenda sin señalar que está


prendado, comete un delito señalado en la misma ley.

(b) Desplazar el bien. Prohibición de trasladar el bien. Al acreedor prendario le


puede interesar que el bien no se mueva porque al hacerlo se pueden
acrecentar los riesgos respecto de ese bien.

Una obligación que se puede pactar como una obligación de hacer o bien de no
hacer, es la relativa al uso que se le dará al bien: Se puede establecer que el
bien prendado se utilice únicamente para determinados giros (Ej. Un auto en
prenda respecto del cual se prohíbe usar en carreras deportivas, no arrendar el
auto, etc.). En definitiva, se pueden pactar una serie de cláusulas que tengan
por objeto mantener el valor del bien.

“Si se ha convenido un lugar en donde deba mantenerse la cosa empeñada, ésta


no podrá trasladarse. Asimismo, si se ha convenido que la cosa empeñada se

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utilice de una forma especificada en el contrato, ésta no podrá utilizarse de
forma distinta a lo pactado. Las prohibiciones anteriores rigen salvo que el
acreedor consienta en ello o que el tribunal competente del lugar de suscripción
del contrato decrete su traslado o uso distinto para su conservación.

En caso de infracción a lo dispuesto precedentemente, el acreedor podrá exigir


la inmediata realización de la prenda, considerándose la obligación caucionada
como de plazo vencido.”(art. 19).

¿Se puede constituir más de una prenda sin desplazamiento sobre un mismo
bien? ¿Qué es lo que impide constituir en prenda civil o mercantil un mismo
bien para obligaciones diversas? La entrega, problema que no existe respecto
de la prenda sin desplazamiento. Si se constituyeren varias prendas sin
desplazamiento, estas prefieren por el orden de sus inscripciones en el Registro
de Prendas sin Desplazamiento.

“Se podrá constituir una o más prendas sobre un mismo bien, prefiriéndose por
el orden cronológico de sus respectivas inscripciones en el Registro de Prendas
sin Desplazamiento.”(art. 16).

¿Qué pasa cuando una persona tiene varias hipotecas sobre un mismo bien y
uno de los acreedores hipotecarios saca a remate la finca hipotecada?Se aplican
los arts. 2428 del CC. y 492 del CPC, es decir, la purga de la hipoteca, la cual
consiste en que si el inmueble hipotecado se saca a remate por alguno de los
acreedores hipotecarios, para que esta se enajene sin las hipotecas, es
necesario citar a los demás acreedores hipotecarios para que estos hagan valer
sus derechos; los acreedores hipotecarios preferentes podrán mantener su
hipoteca si es que sus créditos no han vencido, o pagarse con lo obtenido por el
remate. En el caso de la prenda sin desplazamiento, se establece algo

69
ligeramente distinto: Hay que citar a todos los acreedores prendarios, pero
estos necesariamente se pagarán y no pueden optar por conservar su prenda
independiente de si su obligación está o no actualmente exigible, de tal manera
que en un procedimiento de enajenación del bien prendado sin desplazamiento
por un acreedor prendario, se deberán pagar todos los acreedores prendarios
en el orden de preferencia según corresponda por lo señalado en el art. 16. Si
un acreedor hipotecario enajena un bien inmueble en el que hay bienes
muebles que por adherencia o destinación se reputan inmuebles, y estos están
prendados conforme a esta ley, igualmente se deberá citar a los acreedores
prendarios para que se produzca la purga de la prenda, de modo que se
adquiera el bien libre de hipoteca y prenda.

“En la realización de la prenda, junto con la notificación de que trata el inciso


segundo del artículo 30, deberá notificarse, del mismo modo, a los demás
acreedores prendarios que tengan derecho sobre el bien prendado, los cuales
serán cubiertos sobre el precio del remate en el orden que les corresponda,
independientemente que su crédito no se haya devengado.

Cuando se trate de la realización de inmuebles por destinación o adherencia a


que se refiere el inciso final del artículo 14, el acreedor hipotecario ejecutante
deberá citar a los acreedores prendarios de conformidad con el artículo 2428 del
Código Civil, teniendo lugar lo previsto en los artículos 492 y 762 del Código de
Procedimiento Civil, en la medida que resulten aplicables.”(art. 37).

La prenda sin desplazamiento produce o genera un privilegio o preferencia de


segundo grado y especial, que le permite al acreedor prendario pagarse con
preferencia a otros acreedores. Esta preferencia también se tiene sobre la
indemnización del seguro que pudo haber sido contratado respecto del mismo

70
bien y cualquiera indemnización de terceros que se deba en relación al mismo
bien (ej. Expropiación o destrucción del bien por parte de un tercero).

“El acreedor prendario tendrá derecho a pagarse, con la preferencia establecida


en el artículo 2474 del Código Civil, del total del monto del crédito, incluidos los
intereses, gastos y costas, si los hubiere. Este privilegio se extenderá, además, al
valor del seguro sobre la cosa dada en prenda, si lo hubiere, y a cualquier otra
indemnización que terceros deban por daños y perjuicios que ella sufriere.” (art.
15).

De este art. surge otra obligación que podría ser interesante incluir en un
contrato de prenda: la obligación de asegurar el bien prendado, de tal manera
que si se destruye el bien, el acreedor podrá ejercer su preferencia sobre el
valor pagado como indemnización por la compañía de seguros. En el caso de la
indemnización del seguro hay 2 subrogaciones: La subrogación de la
aseguradora en los derechos del constituyente de la prenda para ejercer las
acciones en contra de quien resulte culpable de la destrucción de la prenda, y la
subrogación real que se produce respecto de la indemnización, la que
reemplaza al bien para los efectos de los derechos que tiene el acreedor
prendario.

Cesión de un crédito prendado con una prenda sin desplazamiento. Si se cede


un crédito, esta cesión comprende sus créditos, fianzas y garantías (art. 1906
CC.). No obstante lo anterior, la ley de prenda sin desplazamiento, en su art. 38,
señala que la cesión de un crédito solo comprenderá la prenda sin
desplazamiento en la medida en que el crédito en cuestión haya constado
expresamente en la escritura de prenda, así como la posibilidad de cesión de la
prenda.

71
“La cesión de créditos caucionados con esta prenda se sujetará a las reglas que
correspondan a su naturaleza. Sin embargo, para que la cesión comprenda el
derecho real de prenda, manteniendo la prenda la preferencia que gozaba en
virtud del crédito cedido, en el Registro de Prendas sin Desplazamiento deben
constar expresamente el crédito garantizado y la posibilidad de cesión de la
prenda.”(art. 38).

Entonces, el art. 1906 del CC.no es automático para la prenda sin


desplazamiento, pues para que esta continúe en el crédito cedido, la prenda, en
primer lugar, deberá ser respecto de una obligación que específicamente esté
garantizada con prenda, por lo que si la prenda se constituyó con una cláusula
de garantía general, no se satisfaceeste requisito. Aunque esté expresamente
especificada la prenda, es necesario también que la escritura de prenda de
cuenta de la posibilidad de cesión de la misma. OCHAGAVÍA recomienda incluir
una cláusula de cesión de la prenda.

Ejecución de la prenda.Rigen en principio las normas del juicio ejecutivo de las


obligaciones de dar, y el contrato de prenda constituye título ejecutivo
suficiente tanto respecto de la prenda como respecto de las obligaciones
garantizadas si estas están individualizadas con precisiónen el contrato de
prenda, con su monto, fecha de pago, tasa de interés, etc. Esto constituye 2
excepciones a las normas del juicio ejecutivo: En primer lugar, una de las
maneras de constituir prenda sin desplazamiento es por medio de instrumento
privado autorizado ante notario y protocolizado (esto no es titulo ejecutivo
según el CPC). En segundo lugar, por la vía de este instrumento se puede
mejorar el título que se tenía contra el deudor.

“Para el cobro judicial de la obligación caucionada, la prenda será realizada de


acuerdo con las reglas del juicio ejecutivo en las obligaciones de dar

72
establecidas en el Título I del Libro III del Código de Procedimiento Civil, con las
modificaciones que se señalan en los artículos siguientes.” (art. 29).

“La escritura pública o la copia autorizada del instrumento privado en el que


conste el contrato de prenda, protocolizado de conformidad con el artículo 2° de
esta ley, tendrá mérito ejecutivo sin necesidad de reconocimiento previo,
respecto de las obligaciones que se contraigan en los mismos o que se
individualicen con precisión, en cuanto a su origen, monto, plazo e interés. Si en
el contrato de prenda no se indica la obligación caucionada, para proceder a la
ejecución deberá acompañarse un título con mérito ejecutivo en el que conste
dicha obligación.

La notificación de la demanda ejecutiva y el requerimiento de pago se regirán


por lo establecido en el artículo 553 del Código de Procedimiento Civil.

Notificados el deudor prendario y el constituyente de la prenda, si este último


fuere distinto, el acreedor prendario podrá pedir la inmediata realización de la
prenda, aunque se hubieren opuesto excepciones. Con todo, en este juicio sólo
serán admisibles las excepciones indicadas en el artículo 464 del Código de
Procedimiento Civil, salvo la 2ª, 4ª, 8ª y 15ª excepciones señaladas en dicha
norma. El tribunal resolverá, con citación del deudor prendario y del
constituyente de la prenda, y podrá exigir que el acreedor caucione previamente
las resultas del juicio.”(art. 30).

(5) Prenda de valores mobiliarios a favor de los bancos.Esta prenda tiene por
beneficiario a bancos nacionales o extranjeros, establecidos o que operen en
Chile, y algunas otras entidades mencionadas en el art. 7 de la ley 4.287 (ej.
CORFO).

73
Esta es una prenda muy atractiva puesto que tiene 2 grandes beneficios:

(a) No sólo se puede constituir cláusula de garantía general, sino que esta es de
la naturaleza de esta prenda, puessalvo que se exprese lo contrario, esta
prenda se entiende constituida para garantizar todas las obligaciones del
constituyente de la prenda con el banco.

(b) El procedimiento de ejecución que tiene esta prenda. Esta prenda se puede
ejecutar dándole una notificación judicial al constituyente de la prenda, y los
acreedores pueden proceder a rematar los bienes dados en prenda al
séptimo día en una bolsa de valores. No es necesario vender todos los
valores dados en prenda, sino que solo los que sean necesarios para pagar
el crédito garantizado.En definitiva, será el gerente de la bolsa quien deberá
firmar el documento que sea necesario para el acreedor poder registrar los
bienes constituidos en prenda a nombre del tercero adquirente.

“Vencida alguna de las obligaciones garantizadas con prenda de los valores


a que se refieren los artículos anteriores, podrá la empresa bancaria,
después de una simple notificación judicial al deudor y transcurridos siete
días, desde la fecha de dicha notificación, proceder a la enajenación de la
prenda sin más intervención de la justicia ordinaria que la expresada y sin
sujeción a los trámites establecidos por el Código de Procedimiento Civil y
por el decreto-ley número 776, de 19 de Diciembre de 1925, ni a las reglas
del artículo 2397 del Código Civil.

Sólo se venderán valores en cantidad suficiente para efectuar el pago de las


obligaciones vencidas y la venta se llevará a efecto en remate en una Bolsa
de Comercio, legalmente establecida, por orden escrita del Banco acreedor.

74
Si la prenda consistiere en acciones nominativas, la inscripción en los
registros de la sociedad a nombre del comprador, se hará en virtud de un
traspaso que firmarán el comprador y el Gerente de la Bolsa respectiva, en
representación del dueño de las acciones.” (art. 6 Ley 4.287).

Esta es, por distancia, la mejor prenda que existe en Chile en términos de
ejecución para los acreedores. ¿Cuál es el problema? Que el TC en un fallo
reciente señaló que esta ley infringe el debido proceso, es decir, que el
procedimiento de ejecución que establece no es válido, y si este no es
válido, no se podrá ejecutar por el DL 776 pues el mismo art. excluye la
aplicación de ese procedimiento, por lo que no se podrá ejecutar de otra
manera que con el procedimiento señalada en esta ley. Si bien el fallo del TC
solo aplica para el procedimiento en el cual se dictó, se produce el problema
de que en el futuro, los bancos al realizar esta prenda se exponen al riesgo
de que el TC vuelva a declarar que este procedimiento infringe el debido
proceso.

Los beneficiarios de esta prenda son los bancos establecidos en Chile, sean
nacionales o extranjeros, la CORFO, y en el caso de los bancos e instituciones
financieras extranjeras que otorgaren créditos a personas domiciliadas en Chile
también pueden beneficiarse de esta prenda en cuanto el crédito esté
autorizado por el BC de Chile (art. 13 DL 2.099). Respecto lo anterior, cabe decir
que actualmente solo se le informan al BC los créditos otorgados, por lo que
para OCHAGAVÍA, como no es una facultad del BC autorizar, se debe entender
autorizado el crédito por el solo hecho de informar (el BC no puede hacer más
de lo que la ley le permite). Esta misma posición es la que sostuvo el BC en una
carta dirigida a un miembro de un estudio de abogados.

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Esta prenda se puede constituir sobre valores al portador, en que básicamente
se requiere su entrega al banco, y de hecho la entrega de un valor en garantía a
un banco se presume hecha en prenda constituida en conformidad a esta ley
(art. 1). También pueden constituirse valores a la orden, para lo cual se
requerirá el endoso en garantía. En el caso de valores nominativos se requerirá
de una escritura pública o privada que se notifique al emisor por un ministro de
fe conforme a lo dispuesto en el art. 2389 del CC.

“Los bonos y cualesquiera otros valores mobiliarios al portador que se


entreguen a una empresa bancaria en garantía de operaciones o contratos que
se celebren o que hayan de celebrarse más adelante con la misma empresa, se
entenderán constituídos en prenda a favor de ésta, por su sola entrega, siempre
que no conste expresamente que dicha entrega se ha efectuado con un objeto
distinto.” (art. 1 Ley 4.287).

“Los créditos a la orden de cualquiera clase que sean, podrán darse en prenda a
un Banco mediante el endoso en garantía, en la forma establecida en el artículo
660 del Código de Comercio, modificado por el decreto-ley núm. 777, sin
necesidad de notificación al deudor.”(art. 2 Ley 4.287).

“La prenda a favor de un Banco sobre acciones nominativas de sociedades


anónimas o en comandita podrá constituirse por escritura pública o privada, y
deberá además notificarse por medio de un Ministro de Fe a la respectiva
Sociedad para los efectos de lo dispuesto en el artículo 2389 del Código
Civil.”(art. 3 Ley 4.287).

Ha habido discusión sobre si esta prenda se puede constituir para garantizar


solo obligaciones propias, o si también se pueden garantizar obligaciones de
terceros. Algunos autores señalan que solo se pueden garantizar obligaciones

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propias, y se basan en el tenor literal del art. 5, el cual dice que si no se expresa
lo contrario, la prenda se entiende constituida con cláusula de garantía general
para garantizar todas las obligaciones de cualquier clase que el dueño de la
prenda tenga o pueda tener con el mismo banco. A OCHAGAVÍA le parece que
la lectura es muy literal, y que es lógico pensar que se puede utilizar la prenda
para obligaciones propias y para obligaciones de terceros.

“Las prendas que se constituyan en favor de un Banco en conformidad a las


disposiciones de esta ley, servirán de garantía a todas las obligaciones directas e
indirectas de cualquiera clase que el dueño de la prenda tenga o pueda tener a
favor del mismo Banco, a menos que conste expresamente que la prenda se ha
constituído en garantía de obligaciones determinadas.”(art. 5 Ley 4.287).

17/08/2016
Esta es una prenda sobre valores mobiliarios (ej. Créditos, acciones de S.A. y
SpA, bonos, etc.). La ley distingue la forma de constituir la prenda según si estos
valores están constituidos a la orden, nominativos o al portador:

(a) Al portador. La mera entrega supone la garantía, salvo que conste se ha


entregado con otro propósito.

(b) A la orden.Por el endoso en prenda o el endoso en garantía.

(c) Nominativo.El contrato es solemne, y se realiza por medio de escritura


pública o privada, y además se debe notificar a la sociedad por un ministro
de fe.

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Es una prenda en que la cláusula de garantía general es de la naturaleza del
contrato, es decir, se entiende contraída con una cláusula de garantía general a
menos que se exprese lo contrario.

Es una prenda que tiene facilidad en su ejecución. El art. 6 de la ley 4.287


consagra uno de los procedimientos de ejecución más rápidos y eficaces, el que
consiste básicamente en que el acreedor prendario debe dar una notificación
judicial al constituyente de la prenda en la cual se señale que procederá a
realizar la prenda, notificación que se realiza en el marco de una gestión
voluntaria no contenciosa, y en 7 días más se procede a la realización de la
prenda. Esta nota característica llevó al TC a declarar inconstitucional al
procedimiento de ejecución de este art. en cuanto violaría el derecho a la
legítima defensa o a un procedimiento justo. Este fallo es lamentable para
OCHAGAVÍA pues, si bien el fallo tiene solo valor respecto de la causa en la cual
se dictó, siembra incertidumbre respecto de la constitución de la prenda bajo
las normas de esta ley y su procedimiento de ejecución, sobre todo lo relativo a
la posibilidad de que el deudor pueda recurrir al TC para declarar
inconstitucional dicho procedimiento.

OCHAGAVÍA cree simplemente que este procedimiento solo invierte el orden de


los factores, pues señala que nada obsta a que el deudor, siendo ya su prenda
realizada, demandar, en caso que esta haya sido mal ejecutada, por la
indemnización de los perjuicios que ello le pudiera haber causado. Además dice
que lo propio de los valores mobiliarios es que estos sean fungibles, lo que
implica que el que se hayan vendido no los hace desaparecer del comercio
humano, por lo que piensa que se podrían ir a comprar nuevamente al mercado
dichos valores. Otro argumento que menciona es el hecho de que la prenda fue
voluntariamente pactada por el constituyente, teniendo claro su procedimiento
de ejecución.

78
(6) Prenda de la ley de mercado de valores (LMV).Esta prenda está consagrada en
los arts. 173 y ss. de la LMV y tiene principalmente 2 peculiaridades:

(a) Quienes son las partes de este contrates, ya sea como constituyentes ya
como acreedores garantizados: Bolsas de comercio, corredores de bolsa y
los clientes de los corredores de bolsa.

(b) Se trata de operaciones de corretaje o accesorias al giro de los corredores


de bolsa.

“Las garantías sobre valores de oferta pública, monedas, oro, plata u otros
valores mobiliarios o títulos de crédito, que tengan por objeto caucionar
obligaciones de loscorredores de bolsa entre sí o con las bolsas de valores o con
sus clientes o de cualquiera de éstos para con aquéllos, por operaciones de
corretaje de valores o por las actividades complementarias que se les autorice
de conformidad a la ley, se constituirán en la siguiente forma:” (art. 173 LMV).

Se trata entonces de una prenda especialísima, pues solo se puede constituir


por las personas señaladas en la letra (a) en beneficio de las mismas personas,
respecto de las operaciones dichas en (b), y que puede recaer sobre bienes tales
como valores, monedas, oro etc.

Estos bienes sobre los que se constituye la prenda, en el caso que sean (a)
monedas, metales o valores al portador, la prenda se constituye por la entrega
de los valores y por un instrumento privado firmado por las partes y un
corredor de bolsa, que no puede ser el corredor que interviene en la operación.

79
“Las garantías sobre valores de oferta pública, monedas, oro, plata u otros
valores mobiliarios o títulos de crédito, que tengan por objeto caucionar
obligaciones de loscorredores de bolsa entre sí o con las bolsas de valores o con
sus clientes o de cualquiera de éstos para con aquéllos, por operaciones de
corretaje de valores o por las actividades complementarias que se les autorice
de conformidad a la ley, se constituirán en la siguiente forma:

a) Si la garantía recayere sobre monedas, oro o plata, o títulos de crédito o


valores mobiliarios al portador, la prenda se constituirá mediante el
otorgamiento de un instrumento privado, firmado por las partes ante un
corredor de bolsa que no fuere parte en las obligaciones caucionadas o ante el
gerente de la bolsa respectiva, en el que se individualizarán los bienes
empeñados.

Además, será esencial la entrega material de los bienes dados en prenda al


acreedor o al tercero que de común acuerdo designen las partes.” (art. 173 letra
a) LMV).

En el caso de (b) documentos a la orden o documentos nominativos respecto


de los cuales no esté prohibido el endoso, será esencial la entrega, pero se
reemplaza el documento exigido en la letra a) por el endoso mismo de la letra.

“b) Si la garantía recayere sobre títulos de crédito o valores mobiliarios emitidos


con la cláusula "a la orden" o que puedan transferirse mediante su endoso, la
prenda se constituirá mediante el endoso en garantía del título y la entrega
material del mismo, aplicándose lo dispuesto en las leyes Nos. 18.092 y
18.552.”(art. 173 letra b) LMV).

80
Tratándose de (c) valores nominativos que no puedan transferirse por endoso,
se requerirá la entrega, pero se exigirá el documento privado firmado por las
partes y un corredor de bolsa que no sea el que interviene en la transacción, o
el gerente de la bolsa respectiva.

“c) Si la garantía recayere sobre acciones, bonos o valores mobiliarios


nominativos, que contengan la cláusula de "no endosables", la prenda se
constituirá mediante el otorgamiento del instrumento privado a que se refiere la
letra a) precedente y la entrega material al acreedor de los títulos pertinentes,
en los que se dejará constancia bajo la firma del deudor de su entrega en
garantía al acreedor que señale. Si estas acciones, bonos o valores nominativos
estuvieren sujetos a inscripción obligatoria en un Registro, la prenda constituida
sobre ellos sólo será oponible a terceros desde su inscripción en el competente
Registro.

No obstante lo anterior, tratándose de garantías sobre los bienes


individualizados en esta letra sujetos a inscripción obligatoria en un Registro, el
deudor podrá constituirlas en favor del acreedor transfiriendo en dominio el
bien respectivo a la bolsa de valores correspondiente, previa aceptación de ésta,
la que detentará el bien a nombre propio. Cuando fuere necesario hacer efectiva
la garantía, la bolsa de valores la realizará extrajudicialmente, actuando como
señor y dueño, pero rindiendo cuenta como encargado fiduciario del
constituyente de la garantía. Lo anterior es sin perjuicio de lo dispuesto en el
artículo 179.”(art. 173 letra c) LMV).

Esta prenda favorece aún más al acreedor, pues en su procedimiento de


ejecución se puede simplemente solicitar a la bolsa que remate los valores, y
esta los hace como señor y dueño de los mismos. En este caso no hay ninguna
posibilidad de defensa al momento de la ejecución, pero la misma ley establece

81
la posibilidad de demandar por procedimiento sumario en caso que el deudor
se siente perjudicado.

“Una vez hechas exigibles cualquiera de las obligaciones garantizadas, el


acreedor prendario pondrá los bienes prendados a disposición de una bolsa de
valores, para que se proceda a su realización en subasta pública a más tardar el
segundo día hábil siguiente al de su entrega. Los créditos nominativos,
cualquiera sea la forma de su otorgamiento y las cláusulas que incluyan, se
entregarán endosados a la bolsa de valores respectiva por el acreedor
garantizado para que pueda perfeccionarse su transferencia.

Las garantías sobre acciones, bonos o valores nominativos sujetos a inscripción


obligatoria en un Registro, constituidas conforme al párrafo primero de la letra
c) del artículo 173, se realizarán por la bolsa de valores, previa entrega del
traspaso firmado por el acreedor prendario y del título de las acciones. En el
caso de las garantías constituidas conforme al párrafo segundo de la letra c) del
artículo 173, éstas se realizarán por la bolsa de valores, actuando ésta como
señor y dueño, previa solicitud del acreedor garantizado.

El producto que se obtenga en la subasta deberá entregarse al acreedor al día


siguiente hábil al de la realización de la prenda y éste procederá de inmediato a
efectuar la liquidación del crédito garantizado, debiendo obtener de la bolsa
correspondiente una certificación que dé conformidad a dicha liquidación.

Cumplido lo anterior, se aplicarán sin más trámite los valores obtenidos al pago
de la obligación, entregando en la misma oportunidad el remanente, si lo
hubiere, al deudor.”(art. 176 LMV).

82
“Una vez concluido el proceso de realización y liquidación de una prenda en
virtud de este Título, quien estimare haber sufrido perjuicios podrá demandar en
juicio sumario.”(art. 178 LMV).

El art. 177contiene una norma bastante curiosa y que se refiere al hecho de que
se tenga una prenda sobre un crédito que vence antes que la obligación
principal. En este caso se establece una subrogación real en que el dinero
reemplaza el valor mobiliario sobre el cual se había constituido la garantía, de
manera que se tiene una prenda sobre el dinero y sus frutos.

“Si antes de hacerse exigibles las obligaciones garantizadas vencieren los


créditos que caucionan su cumplimiento, el acreedor prendario o el depositario
de la prenda, según el caso, podrá proceder a su cobro y lo que obtuviere en
pago se entenderá legalmente constituido en prenda, para los fines, con la
vigencia y efectos a que se refieren estas disposiciones.

El dinero que el acreedor prendario obtuviere de acuerdo a lo dispuesto en el


inciso precedente, así como sus frutos e incrementos, serán conservados por el
acreedor o por el depositario de los bienes prendados, salvo que las partes
hubieren convenido expresamente que se depositen a interés o que el acreedor
consienta en la devolución del dinero a cambio de otros títulos que garanticen
las obligaciones caucionadas.” (art. 177 LMV)

b) Hipoteca. A pesar de que son lejanas al derecho comercial, se suelen usar


generalmente en el contexto de operaciones mercantiles.

La hipoteca es un contrato por el cual una persona constituye una garantía sobre un
bien que, en conformidad a la ley, es susceptible de ser hipotecado, para la seguridad
de una obligación propia o ajena, otorgándole al acreedor la facultad de vender el bien

83
y pagarse preferentemente con el producto de la venta si el deudor no ha cumplido
con la obligación principal.

¿Por qué, a diferencia de la prenda, se habla de los bienes que de conformidad a la ley
son susceptibles de hipoteca? ¿Qué bienes son susceptibles de hipoteca?

1. Los bienes inmuebles que se posean en propiedad o en usufructo.

2. Las naves mayores, es decir, aquellas que tienen un registro grueso superior a 500
toneladas.

3. Las aeronaves.

4. Derechos de agua. Hasta la dictación del Código de Aguas actual, las aguas si están
inscritas independientemente del bien raíz, son un bien distinto que se puede
hipotecar de forma distinta del bien raíz. Si no se inscriben de forma independiente
del bien raíz, se hipotecan junto al inmueble.

5. Concesiones mineras.

Como se puede apreciar, la ley consagra una serie de bienes que se pueden constituir
en hipoteca, no solo los inmuebles.

Características de la hipoteca.

1. La hipoteca es un contrato. Por regla generalísima la hipoteca es un contrato entre


el constituyente de la hipoteca y el acreedor hipotecario, en que no es necesario
que el constituyente de la hipoteca sea el deudor y que este comparezca en caso de
no ser el constituyente.

84
Es por regla generalísima porque existen ciertos casos en que se consagran
hipotecas legales.

2. Es un contrato solemne. Se otorga por escritura pública. Es necesario que este


contrato se inscriba en el Registro de Hipotecas y Gravámenes del CBR donde se
encuentra ubicado el inmueble.

Las hipotecas prefieren unas a otras según el orden de su inscripción. Esto no


siempre es así, ello debido a que puede haber lugar ala posposición de la hipoteca,
que es el hecho de que si un acreedor está garantizado con una hipoteca de primer
grado, él puede convenir con un acreedor hipotecario posterior que este pase a ser
un hipotecario de primer grado o intercambiar sus preferencias.

3. Es un contrato del que emanan derechos reales.El acreedor hipotecario tiene


derecho a perseguir el bien hipotecado de manos de quien lo tenga, vale decir, si el
dueño del bien hipotecado vende el bien, el acreedor hipotecario puede perseguir
la hipoteca de manos del nuevo adquirente.

4. De la hipoteca surge un privilegio especial para el acreedor. El acreedor se puede


pagar del producto de la venta del bien hipotecado con preferencia a otros
acreedores del deudor o constituyente de la hipoteca.

¿De qué grado otorga la preferencia la hipoteca? Es una preferencia de tercer


grado y especial, de manera que si el precio del bien que se vende es insuficiente
para cubrir el crédito y sus accesorios, respecto del saldo el acreedor tiene un
crédito valista que deberá perseguir en la generalidad de los bienes del deudor sin
ningún privilegio.

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5. Es un contrato accesorio. Para subsistir requiere de una obligación principal a la
que acceda, y si esa obligación principal se extingue, se extingue a su vez, y por vía
accesoria, la hipoteca.

¿Puede la hipoteca existir antes de la obligación principal? Se puede garantizar


con hipoteca una obligación futura, lo cual está señalado expresamente en el CC.,
de manera que la necesidad de la obligación principal es para que la hipoteca
subsista.

6. Es indivisible. Todo el bien hipotecado garantiza el pago de toda la deuda y sus


accesorios, de modo que un pago parcial no da derecho al constituyente de la
prenda para solicitar el alzamiento de parte de la hipoteca.

7. Es un principio de enajenación.Solo puede hipotecar quien tiene facultad de


enajenar el bien.

Si una persona tiene un derecho sujeto a una condición resolutoria sobre un


inmueble, ¿puede hipotecarlo?Si se hipoteca el bien sujeto a condición resolutoria,
se hipotecan solo los derechos que se tienen sobre el inmueble, por lo que la
hipoteca se encuentra sujeta a la posibilidad de perder el bien.

Hipoteca sobre bienes futuros.La hipoteca puede constituirse sobre un bien futuro.

¿Qué es un inmueble futuro? Salvo los casos de laboratorio de accesión, por regla
general los inmuebles no pasarán a existir, por lo que se referirá generalmente a, por
ejemplo, el lote que resulte de la división, los edificios que se vayan a construir, el
inmueble resultante de una fusión, etc. Pero para OCHAGAVÍA la hipoteca sobre “todos
los inmuebles que adquiera en el futuro” es sumamente dudosa respecto a su validez,

86
dado que tiene problemas respecto al objeto determinado o determinable que debe
existir en todo contrato.

¿Qué derechos otorga la hipoteca al acreedor? El acreedor hipotecario por regla


general no tiene la tenencia del bien hipotecado, sino que la tiene el constituyente o un
tercero que la tenga a nombre de él.

1. Derecho de persecución. Derecho de perseguir el bien hipotecado de manos de


quien lo tenga, sea que el tercero lo tenga como dueño, poseedor o mero tenedor.
El acreedor tendrá derecho a ejercerla acción de desposeimiento a través del
ministerio de la justicia.

2. Derecho de venta. Derecho a exigir que el bien se venda. El bien hipotecado se


vende en pública subasta por el juez que conoce de la causa.

3. Preferencia o privilegio. Derecho a que el producto de la venta se destine


preferentemente a pagarle su crédito y los accesorios del crédito.

¿La preferencia se tiene única y exclusivamente sobre el bien? La preferencia se


puede ejercer también sobre la indemnización del seguro o lo obtenido por
concepto de expropiación.

¿A qué se extiende la preferencia? A los aumentos y mejoras y a todo lo que está


construido y edificado en el bien (art. 2420).

“La hipoteca constituida sobre bienesraíces afecta los muebles que por accesión a
ellos sereputan inmuebles según el artículo 570, pero deja deafectarlos desde que
pertenecen a terceros.” (art. 2420 CC.).

87
Como se extiende la hipoteca a ellos, también se extiende la preferencia.

¿Qué pasa si sobre un mismo bien hay constituidas varias hipotecas? Se deberá
proceder a la purga de la hipoteca y citar a los acreedores hipotecarios para que
ejerzan los derechos que les concede la ley, de modo que el bien se pueda vender
libre de gravamen que pueda existir respecto de él (arts. 2428 CC. y 492 CPC).

¿Cómo se extingue la hipoteca?

1. Por vía accesoria. Se extingue por esta vía cada vez que se extingue la obligación
principal, sea por pago o por cualquier otro medio de extinguir las obligaciones. A
este respecto es importante recordar la reserva de accesorios de la novación, lo
cual es relevante porque mantiene la fecha de la inscripción.

2. Por vía principal.

(1) Si la hipoteca se constituyó bajo un plazo o condición, por el vencimiento del


plazo o el cumplimiento de la condición.

(2) Si se resolviere el derecho del constituyente sobre el bien hipotecado.

(3) Por confusión. Si el acreedor llega a ser dueño del inmueble hipotecado.

18/08/2016 UGARTE
Hipotecas no reguladas en el CC. y su rol en el financiamiento.

1. Hipoteca de derechos de agua. Los derechos de agua es un tema que ha ido


transformándose en fundamental, sobre todo para los proyectos mineros,
industriales y de energía. Por razones históricas el derecho de aguas nunca fue

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considerado separadodel inmueble, por lo menos para el derecho civil, pero a
medida que fueron adquiriendo importancia los derechos de aguas, y se fueron
transando estos, se les fue dando un tratamiento particular. Antiguamente lo usual
era que el derecho de aguas fuera considerado anexo al inmueble.

En 1980 cambia el Código de Aguas (C. de A.), con lo cual se busca darle un
tratamiento independiente y particular a los derechos de agua.

Naturaleza jurídica de los derechos de aguas. No existe el dominio sobre el agua,


sino que se tienen derechos de aprovechamiento del agua. Las aguas son muebles
atendido a su naturaleza, pero cuando se destinan al uso, cultivo o beneficio de un
inmueble, se reputan inmuebles (art. 4 C. de A.). Esto último es lo que se produce
en la generalidad de los casos, y una de sus consecuencias es que los derechos de
aprovechamiento de aguas se hipotecan y no se prendan.

“Atendida su naturaleza, las aguas son muebles, pero destinadas al uso, cultivo o
beneficio de un inmueble se reputan inmuebles.”(art. 4 C. de A.).

Puede hipotecarse cualquier tipo de derecho de aguas: para esto existen 2


clasificaciones de derechos de aguas:

Según si son permanentes o eventuales:

(1) Derechos de aguas permanentes. Esta clasificación atiende a si se tiene un


porcentaje absoluto a una cantidad de agua sobre un determinado cauce.

(2) Derechos de aguas eventuales. Son derechos que se tienen sobre el exceso o
sobre lo que le sobra a otra persona en sus derechos de agua. Ej. Derrame.

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Según si son consultivos o no:

(1) Derechos de aguas consultivos. Son derechos de aguas que dan derecho a
consumir una determinada cantidad de agua. Estos son la generalidad de los
casos.

(2) Derechos de aguas no consultivos.Estos dan derecho a utilizar el agua pero no a


consumirse. Ej. Hidroeléctrica.

Particularidades de la hipoteca sobre derechos de aguas. Estas se rigen


mayormente por la legislación civil, por lo que tiene escasas particularidades, cuya
regulación se encuentra principalmente en los arts. 110 y 111 del C. de A.:

“Los derechos de aprovechamiento inscritos pueden ser hipotecados


independientemente del inmueble al cual su propietario los tuviere destinados. Los
no inscritos sólo podrán hipotecarse conjuntamente con dicho inmueble.” (art. 110
C. de A.).

Esto tiene sentido por el hecho de que anteriormente se hipotecaban


conjuntamente los derechos de agua con el inmueble, por lo que se buscó crear un
régimen conservatorio particular, de manera que se pudiera dar garantías sobre los
derechos de aguas y no sobre el inmueble.

“La hipoteca de los derechos de aprovechamiento inscritos deberá otorgarse por


escritura pública e inscribirse en el Registro de Hipotecas y Gravámenes de Aguas
del Conservador de Bienes Raíces respectivo.” (art. 111 C. de A.).

90
¿Cómo se otorga la hipoteca? Por escritura pública inscrita en el registro de
hipotecas y gravámenes de aguas en el CBR respectivo (En realidad puede ocurrir
que en algunas zonas hayaconservadores de aguas).

¿Cuál es la función de la inscripción de la hipoteca? Algunos suelen decir que es la


oponibilidad a terceros, mientras que otros señalan que es la tradición del derecho
real de hipoteca. Está última posición es la mayoritaria, la cual consiste en que si no
se ha hecho la inscripción, no se tiene el derecho real de hipoteca, sino que
celebrado el contrato simplemente se tiene el derecho a exigir que se haga la
inscripción. En el C. de A. se menciona expresamente que la inscripción es la
tradición del derecho real de hipoteca (art. 117 C. de A.).

“La tradición de los derechos de aprovechamiento inscritos se efectuará por la


inscripción del título en el Registro de Propiedad de Aguas del Conservador de
Bienes Raíces.”(art. 117 inc. 1 C. de A.)

Cualquier hipoteca de inmueble en los cuales hay derechos de aguas sin inscripción
independiente, incluye estos derechos.

2. Hipoteca sobre concesiones mineras. En Chile existe un régimen particular de


propiedad (particular respecto del mundo), el cual consiste principalmente en que
pueden haber derechos de propiedad y mineros coexistentes en un mismo
territorio. ¿Cómo soluciona la ley este conflicto inherente a la diferencia de
dominios o de derechos coexistentes?La preferencia para la explotación la tiene
siempre el dueño de la concesión minera (ej. Puede tirar abajo la construcción que
tenga el dueño), lo cual se realiza jurídicamente a través de una servidumbre legal,
la que se debe solicitar a los tribunales de justicia (para UGARTE ha sido un gran
acierto). Los tribunales de justicia serán los que fijarán la indemnización que deberá

91
pagarse al propietario del terreno en caso que una persona quisiera hacer uso de la
concesión minera.

Si una persona, por ejemplo un dueño de un parque eólico, quisiera protegerse de


eventuales personas que quisieran explotar una concesión minera en dicha zona, la
mejor forma es pedir ella misma la concesión minera. Por lo anterior es que
generalmente se ven concesiones mineras en zonas agrícolas, industriales e incluso
residenciales.

La hipoteca sobre concesión minera esta regulada en el Código de Minería (C. de


M.), y se constituye también por escritura pública, la que debe ser inscrita en el
registro de hipotecas y gravámenes del conservador de minas respectivo.

Particularidades de la hipoteca sobre concesión minera:

(1) Extensión de la hipoteca. El código dice que la hipoteca sobre concesiones


mineras se extiende a los bienes señalados en el art. 3, que son los inmuebles
accesorios a la faena minera.

“Se reputan inmuebles accesorios de la concesión las construcciones,


instalaciones y demás objetos destinados permanentemente por su dueño a la
investigación, arranque y extracción de sustancias minerales.” (art. 3 C. de M.).

(2) El código aclara que respecto de la hipoteca de concesión minera no se aplica


el art. 2427 del CC., a pesar de que se le aplica supletoriamente este último
cuerpo legal.

“Si la finca se perdiere o deteriorareen términos de no ser suficiente para la


seguridadde la deuda, tendrá derecho el acreedor a que semejore la hipoteca, a

92
no ser que consienta en quese le dé otra seguridad equivalente; y en defectode
ambas cosas, podrá demandar el pago inmediato dela deuda líquida, aunque
esté pendiente el plazo,o implorar las providencias conservativas que el caso
admita, si la deuda fuere ilíquida, condicional” (art. 2427 CC.).

(3) En principio las concesiones mineras son inembargables, pero el art. 226 del C.
de M. señala que lo anterior es sin perjuicio de los derechos del acreedor
hipotecario.

“Sin perjuicio de los derechos de los acreedores hipotecarios, no se podrá


embargar ni enajenar la concesión del deudor, las cosas que se reputan
inmuebles accesorios conforme al artículo 3°, ni las provisiones introducidas
dentro de los límites de ella.

Lo dispuesto en el inciso precedente no será aplicable cuando el deudor tenga la


calidad de sociedad anónima.

El deudor puede, no obstante, consentir en el embargo y enajenación, siempre


que el consentimiento se dé en el mismo juicio.”(art. 226 C. de M.).

La otra excepción se refiere a que si el dueño de la concesión minera es una


S.A., entonces la concesión también es embargable.

3. Hipotecas de aeronaves. Las aeronaves son bienes registrales y se inscriben en un


registro de matrícula llevada por la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), y
tienen un registro de propiedad similar a los inmuebles. La principal diferencia
entre las aeronaves y los inmuebles es que aquellas tienen nacionalidad y pueden
mutar de nacionalidad, lo que no ocurre con los inmuebles (salvo guerra).

93
La hipoteca sobre aeronaves se puede constituir no sólo por escritura pública, sino
que también por instrumento privado autorizado ante notario(art. 116 Código
Aeronáutico). Este se inscribe en el registro de hipotecas y gravámenes llevado por
la DGAC. La fecha de la hipoteca será la del registro, y si no se inscribe no tendrá
valor alguno.

Particularidades:

(1) Se puede otorgar también por instrumento privado.

(2) En cuanto a la extensión. La hipoteca de aeronaves se extiende a los equipos y


piezas permanentemente destinados al servicio de la aeronave o que estén
incorporados a ella o se encuentren temporalmente separados.También se
puede extender a repuestos de la aeronave que no necesariamente están junto
con o en la aeronave (arts. 114 y 115 Código Aeronáutico).

Dentro de los bienes destinados a la nave se encuentran los manuales de


operación de la nave y de mantenimiento (no se puede pilotar la nave sin esos
manuales).

(3) Existen ciertos créditos privilegiados especiales que prefieren a la


hipoteca.Arts. 121 y 122 (Código Aeronáutico).

“Salvo estipulación en contrario, la hipoteca se extenderá a las indemnizaciones


del seguro por pérdida o avería del bien hipotecado y a las indemnizaciones por
daños causados a la aeronave por un tercero.

Será nulo el pago que haga el asegurador o el tercero en perjuicio de los


derechos del acreedor hipotecario.” (art. 121 Código Aeronáutico).

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“Las hipoteca sobre aeronaves confiere preferencia sobre todo crédito, excepto
los siguientes, que tendrán el carácter de privilegiados:

1.- Las costas judiciales de la acción en que se enajena forzadamente la


aeronave;

2.- Los gastos y remuneraciones por el salvamento de la aeronave, y

3.- Los gastos extraordinarios indispensables para la conservación de la


aeronave.

La hipoteca y los privilegios rigen sobre la aeronave, sobre sus piezas de


repuesto, en su caso, y sobre las indemnizaciones señaladas en el artículo 121.”
(art. 122 Código Aeronáutico).

4. Hipotecas de naves.En el derecho marítimo hay una distinción entre las naves
mayores y las naves menores (según si tienen más de 50 toneladas de registro
grueso): Las naves mayores se hipotecan y las naves menores se prendan.

Las hipotecas sobre naves se constituyen por escritura pública y se inscriben en el


Registro de Hipotecas de Naves Mayores llevado por la Dirección de Territorio
Marítimo y Marina Mercante (DIRECTEMAR).

Particularidades de la hipoteca de naves mayores:

(1) En cuanto a su extensión. Comprende el casco, las pertenencias fijas o móviles


de la nave, las maquinarias, el flete y las subvenciones subsidios otorgados por
el Estado si así se estipulare (art. 876 C. de C.). También se extiende a

95
indemnizaciones que provengan de seguros que haya tenido la nave o
indemnizaciones de terceros por daños ocasionados a la nave.Se extiende,
asimismo, a la contribución por avería común por daños materiales sufridos por
la nave o artefactos navales.

“La hipoteca naval comprende el casco, las maquinarias y las pertenencias fijas
o movibles de la nave.

Comprende también el flete y las subvenciones u otros subsidios otorgados por


el Estado, si así se estipulare.

Las partes comprendidas en la nave, no podrán ser objeto de garantías en


forma independiente.” (art. 876 C. de C.).

(2) Existe la hipoteca de la nave en construcción. En esta cambian las menciones


que tiene la hipoteca de la nave. La nave se mantiene hipotecada mientras se
construye, y todo lo que se agrega a la nave se entiende hipotecado.

(3) La prohibición de gravar y enajenar es inoponible a terceros, por lo que el CBR


deberá inscribir en caso que exista esta prohibición de gravar y enajenar, salvo
ciertas excepciones (art. 878). Lo usual es que se pacte junto con la hipoteca la
prohibición de gravar y enajenar. Esta limitación de gravar y enajenar no obsta
al CBR de inscribir en caso que se le presente a inscripción una determinada
enajenación o gravamen, pues solo se trata de una limitación convencional que
dará lugar a indemnización de perjuicios en caso de infracción.

La excepción se refiere al caso en que la transferencia o enajenación provoque


que la nave cambie de nacionalidad, pues en ese caso será oponible a terceros y
el CBR no podrá inscribir en caso que exista la prohibición. Esto tiene como

96
fundamento que el cambio de nacionalidad haría muy difícil de ejercer el
derecho de persecución.

“El propietario de la nave o del artefactonaval gravado por hipoteca, podrá


siempre enajenarlos o hipotecarlos, no obstante cualquiera estipulación en
contrario.

Sin embargo, la enajenación que diere lugar alcambio de la nacionalidad de la


nave o artefacto naval, y que no hubiere sido consentida por el acreedor
hipotecario es nula, constituye fraude y sujeta al vendedor a las penas indicadas
en el artículo 467 del Código Penal.”(art. 878).

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23/08/2016
MODERNIZACIONES A LAS GARANTÍAS EN EL MARCO DEL DERECHO MERCANTIL

Estos buscan solucionar problemas para la obtención de financiamiento dentro de nuestro


derecho.

a) Contrato de agencia de créditos o garantías .Este contrato fue introducido por la Ley
20.190 (Ley de mercado de capitales II o MKII), en su art. 18.

Concepto y origen en nuestro derecho.En un ejemplo en que un proyecto muy grande,


por ejemplo, Alto Maipo,el que necesita financiamiento del orden de 500 millones de
dólares. Este proyecto es controlado por 2 grupos empresariales, los cuales buscarán
limitar su responsabilidad, por lo que no asumirán todo su financiamiento. En un
crédito de esta naturaleza los bancos normalmente lo sindican, ya que tienen
limitaciones regulatorias para financiar a una misma persona, debiendo diversificar los
riesgos, y así, el crédito lo asumirán varios bancos. Además de sindicar el crédito, los
bancos solicitarán garantías, tales como hipotecas, prendas, fianzas, entre otras de
diversa naturaleza, y todas estas garantías pueden darse en diferentes grados, lo que
genera una estructura compleja de financiamiento. En este marco de estructuras
complejas de financiamientoes que surge la necesidad de importar el contrato de
agencia de créditos o garantías.

Este contrato está definido en el art. 1 del art. 18 de la ley 20.190 de la siguiente forma:
“La agencia de créditos o garantías es un contrato colectivo de mandato, en virtud del
cual dos o más acreedores acuerdan designar un agente común que les represente en
el otorgamiento o gestión de sus créditos, o en la constitución, modificación o
extinción de sus garantías, o en ambos, y para el ejercicio mancomunado de los
derechos que emanen de tales créditos o garantías.”

98
Su propósito es solucionar aquellas situaciones en las que se requiere gran
financiamiento para lo cual participaban una gran cantidad de agentes y una serie de
garantías.

Como se trata de un contrato colectivo de mandato, de forma supletoria a las normas


de este contrato se le aplican las normas sobre el mandato mercantil. La novedad de
este contrato es que es un mandato por todos los acreedores presentes y futuros del
crédito, lo cual permite ceder los créditos sin modificar las garantías y que el mismo se
pueda novar sin modificar las garantías: Todas las garantías las suscribe el agente por
cuenta de los acreedores presentes y futuros del crédito.

Para otorgar una agencia de garantía no es necesario tener la calidad de acreedor al


momento del otorgamiento del contrato, sino que se puede adquirir con posterioridad
esa calidad (art. 2).

“La calidad de acreedor o deudor se puede tener al tiempo de celebrarse el contrato o


adquirirse con posterioridad, por acuerdo entre las partes involucradas o por simple
adhesión al contrato, de acuerdo con las formalidades y modalidades estipuladas en el
mismo.” (art. 2).

El inc. 3 art. 3 señala lo siguiente: “Las garantías que se constituyan se otorgarán a


favor del agente, quien las aceptará por cuenta del conjunto de acreedores actuales y
futuros. Igualmente le corresponderá aceptar las modificaciones o sustituciones de las
garantías constituidas o consentir en su alzamiento, de acuerdo con los términos y
condiciones establecidos en el contrato, así como el ejercicio de los demás derechos que
emanen de tales garantías.”De acuerdo a este art.las garantías se entienden
constituidas en favor del conjunto de los acreedores presentes y futuros, lo que en

99
definitiva le permite al agente modificar las garantías y proceder a su alzamiento, según
lo que se señale en el contrato.

En esta misma línea el art. 7 dice que no es necesario identificar a los acreedores en el
otorgamiento de las garantías. Sin perjuicio de lo anterior, en la práctica en Chile no se
da esta situación.

“En los instrumentos de constitución y en las inscripciones de las cauciones que


consistan en hipotecas o prendas que se acojan a esta agencia de garantías, no será
necesario identificar a los acreedores, bastando individualizar el contrato y expresar el
nombre del agente. Se anotarán, además, al margen de la inscripción original, los
reemplazos del agente, cuando tuvieren lugar.".”(art. 7).

Facultades del agente de créditos o garantías (art. 3). Se debe estar en primer lugar a
lo que diga el contrato, pero si nada se dice, el agente tiene facultades de mera
administración, como la facultad de solicitar informes o de realizar inspecciones y
visitas.

En la práctica el agente generalmente tendrá facultades de pedir información, de


inspeccionar, de alzar garantías sin consentimiento de los acreedores bajo ciertos
supuestos (ej. El pago total del crédito), etc.

Asimismo, si nada se dijere el agente tendrá facultades de cobrar y percibir incluso


judicialmente, de otorgar carta de pago (finiquito y cancelación), y de alzar garantías.

“Si nada se dijere, se entenderá siempre que el agente tiene facultades de cobrar y
percibir, incluso judicialmente, otorgar carta de pago y cancelación, y de alzar
ilimitadamente garantías.”(art. 3 inc. 4).

100
Entre los actos que normalmente no se consideran de mera administración se
encuentran, por ejemplo, la posibilidad de declarar eventos de incumplimiento de los
contratos de crédito (para efectos de acelerar el crédito); la facultad de dar
autorizaciones para el cambio de control del deudor; entre otros.

También habrán una serie de actos que el agente podrá hacer con la aprobación de una
cierta cantidad de acreedores.

Solemnidades para la constitución de este contrato (art. 4).Se constituye básicamente


por escritura pública o por instrumento privado autorizado ante notario. En caso que se
otorgue por instrumento privado, debe ser protocolizado para darle fecha cierta. La ley
también da la opción de otorgarlo en el extranjero, señalando que debe ser
debidamente legalizado y protocolizado en Chile para que produzca sus efectos.

Se requiere que la agencia de garantías sea aceptada por el deudor, lo que se obtiene
con la comparecencia del deudor en el mismo documento o bien de forma separada.

“El contrato de agencia de créditos o garantías se celebrará por escritura pública o


privada, debiendo, en este último caso, las firmas ser autorizadas por un notario y el
instrumento protocolizado.

También podrá otorgarse por instrumento suscrito en el extranjero, debiendo


protocolizarse en Chile una copia del mismo, debidamente legalizada.

La designación del agente y su reemplazo se efectuarán en los mismos instrumentos


señalados.”(art. 4).

Se trata de un contrato solemne y que es remunerado por su naturaleza(art. 3 inc. 2).

101
“La función de agente es remunerada, salvo pacto en contrario.”(art. 3 inc. 2).

Reemplazo del agente. Esto se refiere a cambiar al agente de garantías. Respecto a


esto existen ciertas reglas:

1. El reemplazo se rige por los términos del contrato.

2. A falta de acuerdo pueden reemplazar al agente de garantías los acreedores con


la mayoría absoluta del saldo del capital adeudado. Lo normal es que se
establezcan quórums más altos de reemplazo.

3. Para reemplazar a un agente debe designarse simultáneamente a otro. En caso


que esto no ocurra, permanecerá obligado el agente original.

4. Los acreedores siempre podrán reemplazar al agente cumpliendo con el quórum


para ello. No obstante lo anterior, en caso que el agente no hubiese dado un
motivo para su reemplazo, el agente reemplazado tendrá derecho a ser
indemnizado.

“El reemplazo del agente deberá hacerse al amparo de los términos y condiciones
establecidos en el contrato, y en su silencio, deberá ser acordado por los acreedores
que representen a lo menos la mayoría absoluta del saldo adeudado bajo el contrato.
No podrá revocarse el mandato al agente, si simultáneamente no se designa un
reemplazante, con las formalidades correspondientes.

El reemplazo de agente podrá hacerse en contra de su voluntad. Si no hubiere dado


motivo a su reemplazo, por su culpa, tendrá derecho a ser indemnizado por el perjuicio
que se le cause con su remoción, salvo en cuanto se hubiere pactado otra cosa.” (art. 6).

102
Revocación del contrato. Esto se refiere a la terminación del agente de garantías, y se
usa el término revocación porque se trata de un contrato que puede ser terminado de
forma unilateral por los acreedores conforme a ciertos requisitos.

Debe estarse a lo que señale el contrato, pero si en él nada se dice, el contrato es


revocable o modificable con la voluntad de los acreedores con 2/3 del saldo del capital
adeudado.

Son curiosos los efectos que se producen respecto de la terminación: “Terminado el


contrato, el agente deberá rendir cuentas conforme a sus estipulaciones y si hubiere
créditos vigentes, deberá transferir las garantías a todos los acreedores, a prorrata de
sus acreencias, salvo que se haya estipulado otra cosa.”(Inc. final art. 5). El problema de
lo último es que no se puede realizar sin la cooperación del deudor, por lo que
resultaque este efecto es muy difícil que se de en la práctica.

“El contrato de agencia de créditos o garantías es revocable anticipadamente o


susceptible de modificación, únicamente en los términos contemplados en el mismo. Si
al efecto nada precisare, se entenderá que es modificable o terminable por la voluntad
de acreedores que representen al menos las dos terceras partes del saldo en capital
adeudado bajo el contrato.

Se podrá acordar en el contrato que los acuerdos de los acreedores se adopten bajo el
sistema de asambleas, que se llevarán a afecto según las formalidades que aquél
disponga.”(Inc. 1 y 2 art. 5).

Según el inc. 2 de este art. se puede acordar que los acreedores actúen como
asambleas, lo que consiste en que hay asambleas en las que los acreedores pueden
votar y actuar por ese medio (en la práctica es muy similar a las juntas de accionistas).

103
b) Subordinación de créditos o convenios de subordinación. Esta es una institución
introducida por la Ley Nº 20.190, la que modificó el CC. agregando ciertos incisos al art.
2489 relativo a la prelación de créditos.

Concepto. Se trata de convenios entre acreedores valistaspor medio de los cuales uno
subordina el pago de su crédito a otro.

¿Por qué un acreedor valista querría subordinar su crédito a otro acreedor?


Usualmente un convenio de subordinación se utiliza cuando el deudor tiene problemas
económicos, con lo que se busca conseguir mayor financiamiento para que este logre
salir adelante, subordinándose los actuales acreedores a los nuevos. Otra función que
normalmente tiene es que permite generar un valor distinto que puede tener
componentes de riesgo y rentabilidad distintos que los que originalmente tiene el
capital o la deuda, es decir, permite generar una estructura de riesgos y de rentabilidad
distinta: Podría generar una rentabilidad mayor al tener un riesgo mayor por la
subordinación. Se amplía la oferta de alternativas para el financiamiento.

En general la ley contempló en mayor medida la primera función, ello porque concibió
estos convenios de subordinación entre acreedores determinados y existentes a la
fecha, no permitió crear una clase o categoría subordinada que sea oponible respecto
de todos los acreedores valistas.

El inc. 4 del art. 2489 CC. define estos convenios de la siguiente forma: “La
subordinación de créditos es un acto o contrato en virtud del cual uno o más
acreedores de la quinta clase aceptan postergar, en forma total o parcial, el pago de
sus acreencias en favor de otro u otros créditos de dicha clase, presentes o futuros. La
subordinación también podrá ser establecida unilateralmente por el deudor en sus
emisiones de títulos de crédito. En este último caso, y cuando sea establecida
unilateralmente por el acreedor que acepta subordinarse, será irrevocable.”

104
También existe la posibilidad de que los deudores emitan títulos de crédito
subordinados (debió decir títulos de deuda según la mayoría de los autores, para no
limitar la posibilidad de que también se refiera a bonos, por ejemplo), es decir, crear un
título de deuda que sea subordinado y que se predique respecto a toda una clase de
acreedores o créditos.

¿Cómo se otorga la subordinación? Por escritura pública o por instrumento privado


firmado ante notario y protocolizado.

“El establecimiento de la subordinación y su términoanticipado, cuando corresponda,


deberán constar por escritura pública o documento privado firmado ante notario y
protocolizado. La subordinación comprenderá el capital y los intereses, a menos que se
exprese lo contrario.” (art. 2489 inc. 5 CC.).

Los convenios de subordinación son contratos entre acreedores, y en principio no es


necesaria la intervención del deudor, por lo que no obliga al deudor en principio. Esto
último se traduce en que el deudor podrá pagarle a cualquiera, lo que generará una
acción de reembolso contra el acreedor subordinado. Si obligará al deudor en el caso
que este sea parte del contrato, y lo obliga en aquel caso que sea notificado por un
ministro de fe con exhibición del acuerdo de subordinación.

“La subordinación establecida por uno o más acreedores será obligatoria para el
deudor si éste ha concurrido al acto o contrato o lo acepta por escrito con
posterioridad, así como si es notificado del mismo por un ministro de fe, con exhibición
del instrumento. El incumplimiento de la subordinación dará lugar aindemnización de
perjuicios en contra del deudor y a acción de reembolso contra el acreedor
subordinado.” (art. 2489 inc. 6 CC.).

105
Este convenio de subordinación tiene la facultad de suspender el plazo de prescripción
de las acciones de cobro del crédito subordinado, tal como señala el inc. final del art.
2489: “La subordinación obligará a los cesionarios o herederos del acreedor
subordinado y el tiempo durante el cual se encuentre vigente no se considerará para el
cómputo de la prescripción de las acciones de cobro del crédito.”

24/08/2016
A raíz del inc. final del art. 2489 surge la siguiente pregunta: ¿Puede el acreedor
subordinado exigir el pago del crédito del deudor antes que se encuentre vencido el
convenio de subordinación?¿Puede el acreedor subordinado pedir la liquidación
forzada del deudor antes de vencer el convenio de subordinación? Esto apunta al
hecho de si al convenir una subordinación el crédito del acreedor subordinado pierde la
calidad de exigible o no. Algunos autores sostienen que la obligación deja de ser
actualmente exigible hasta que se encuentre vencido el convenio de subordinación.
OCHAGAVÍA cree que el hecho de que exista un convenio de subordinación no impide
que el acreedor pueda requerir de pago y hacer exigible la obligación, demandar,
solicitar la liquidación forzosa, etc., pero si se le impide recibir los fondos sin que
primero se solucione la obligación del acreedor antepuesto.

Lo anterior es importante para los efectos de la facultad del acreedor subordinado de


solicitar la liquidación forzosa del deudor, verificar los créditos en la misma, entre
otros.

GARANTÍAS MODERNAS

Son figuras contractuales que no siendo cauciones propiamente tal, cumple la función
de una garantía.

106
a) Mandato irrevocable como garantía. ¿Por qué un mandato irrevocable podría servir
como una garantía? En el mandato irrevocable como garantía el mandante es el
deudor y el mandatario es el acreedor. Normalmente este mandato es un contrato
que permite al acreedor cobrar y percibir flujos que el deudor vaya a recibir en
razón de su actividad. En un ejemplo, el mandato irrevocable se daría al acreedor
para que cobre los pagos de un contrato de suministro eléctrico. El mandato sería
para que el acreedor cobre los flujos que el deudor vaya a recibir y los aplique
directamente al pago de su acreencia. En este caso no se otorga ninguna
preferencia, pero se intervienen las facultades de administración del deudor.

Respecto de estos mandatos irrevocables existen usualmente 2 modalidades:

1. Pura y simplemente. Lo que hace el acreedor es cobrar y aplicar al pago.

2. Que el mandato se ejerza solo en el caso que se declare un evento de


incumplimiento del contrato principal. En este caso se da de manera
condicional, y es más parecido a una garantía.

¿Qué problemas existen respecto de esta garantía?

1. Este sería un pacto comisorio, pues el acreedor puede aplicar directamente a


su crédito los pagos que perciba en virtud del mandato. Podría considerarse que
utilizar este mecanismo para el pago directo de la deuda podría infringir el art. 1
del Decreto 776, cuyo efecto propio por su incumplimiento es que se deberá
realizar ese acto conforme a las normas de realización de las prendas.

2. El mandato mercantil es un contrato cuya naturaleza es fiduciaria, en virtud


de la cual el mandatario se debe al mandante.

107
El carácter de irrevocabilidad del mandato es cuando el mandato interesa al
mandante y al mandatario. No existe norma expresa de que esto no se podría
hacer, pero si hay ciertos principios que supondrían que este mandato
irrevocable infringiría el carácter fiduciario del mandato.

Esto es muy similar a la cláusula de repactaciónautomática de La Polar.

3. Los mandatos por regla general terminan en caso de liquidación forzada o


insolvencia del mandante. Entonces, cuando generalmente más necesitan los
acreedores las garantías, esta se puede dar por terminada.

Esta es una garantía muy utilizada en el extranjero, pero es nuestro derecho tiene
estos problemas acá mencionados. Un proyecto de ley del año 2003 buscaba
eliminar el art. 241 del C. de C. prohibiendo que existieran mandatos irrevocables.

b) Cesión o ventas condicionales. Se trata de un pacto por el cual, en el evento que se


produzca un incumplimiento bajo el contrato de crédito, un determinado activo o
contrato es cedido al acreedor para que este pueda beneficiarse directamente de
él.

Esta figura tiene ciertos problemas:

1. Es un pacto comisorio expresamente prohibido por el DL 776, y por tanto,


debe considerarse como una prenda para su realización.

2. Los precios a los cuales se materializan las ventas son deprimidos, no son
reales o simplemente no existen. Por esto es que normalmente esta figura no
se utiliza para activos físicos, sino que generalmente se utiliza con contratos,

108
pues es más fácil argumentar su falta de precio o su costo 0 ya que estos
también envuelven derechos y obligaciones.

Ventajas respecto del mandato. Que ese activo o contrato cedido se saca de la
masa en el caso de liquidación forzosa. Ahora bien, existen ciertas acciones en
losprocedimientos concursales que permiten revocar este tipo de actos que van en
perjuicio de la masa.

En la práctica esta cesión o tradición de los activos o de los contratos se hace de


manera anticipada, al igual que el consentimiento de la contraparte del contrato.

c) Manejo del efectivo dentro del patrimonio del deudor . Es posible que cuando los
acreedores no reciben los pagos de acreencias es porque no hay fondos o porque
los deudores administren de forma inadecuada los fondos que tienen. Esta figura
consiste en regular todos los detalles en que los deudores van a administrar los
flujos que reciban, con el objetivo de mantener la solvencia del deudor y lograr el
pago del crédito. Lo que se hace es establecer una “cascada” en la cual se señala el
orden y uso de los dineros que reciba la sociedad o deudor. Esto último se realiza
en la práctica de 2 maneras: (1) confiar en el uso que vaya a realizar el deudor,
adecuándose a las instrucciones estipuladas; o (2) crear cuentas corrientes con
distintos objetos dependiendo del giro del deudor (ej. Se pacta esta figura con una
sociedad de proyecto, la que recibe U$1.000 y según lo convenido debe depositar
U$100 en una cuenta corriente para los insumos; luego deberá depositar U$200 en
otra cuenta para los servicios de la deuda, que permitirá pagar la deuda dentro de
los próximos 6 meses; el resto del dinero se podrá depositar en otras cuentas que
tengan otros objetos (ej. Para el pago de las comisiones del banco acreedor, para
reservas de catástrofes, en caso de fluctuaciones de mercado); la última cuenta
siempre será la de libre disposición o distribución). La idea de estas cuentas es

109
establecer un orden en el que se realizarán los pagos de la sociedad y de mantener
un mayor control en la administración de los flujos del deudor.

No se trata de una garantía que conceda una preferencia, pero sí concede gran
monitoreo al acreedor de la administración de los flujos del deudor, lo que a su vez
le permite detectar con mayor facilidad posibles desviaciones e insolvencia,
pudiendo declarar la liquidación forzosa con rapidez en caso que se den los
requisitos.

Esta figura normalmente se usa en los financiamientos de proyectos, en las cuales


las sociedades se constituyen con el solo objeto de llevar a cabo un proyecto
determinado (Ej. Sociedad para el desarrollo de un parque solar). Estas sociedades
tienen como característica unos flujos predecibles y muy determinados, una
administración relativamente sencilla, etc. También se usan generalmente para
sociedades de objeto único y específico.

110
25/08/2016
PROCEDIMIENTOS CONCURSALES

La expectativa de lucro del comerciante no siempre se materializa, y por diversas


circunstancias la empresa o el emprendimiento del comerciante puede fracasar, y puede
fracasar en términos que los bienes que tiene el comerciante no son suficientes para
cumplir oportuna y cabalmente sus obligaciones para con terceros. Lo anterior puede ser
producto de elementos que se encuentran fuera del control del comerciante (ej.
Industrias de télex, fax,vhs, etc.): Desarrollo tecnológico, pericia de los competidores,
cambios en los gustos de los clientes o de la comunidad como un todo; también se puede
deber a cosas que realiza o que hace el comerciante: el comerciante pudo haber sido
descuidado en la gestión de su negocio, pudo haber extendido créditos a personas que no
pagaron, pudo haber desarrollado su negocio en otra moneda; otra posible razón puede
deberse a culpa grave o dolo del comerciante: el comerciante destina las utilidades de la
industria para tomarse vacaciones en el Caribe, a comprarse una cuarta vivienda, u otros
gastos en cosas que no son útiles para la industria, sustrae dinero de la industria para
gastos personales, etc. En definitiva, las razones por las que la empresa de un comerciante
puede fracasar son múltiples.

¿Qué hacer en aquellas circunstancias en que el comerciante no es capaz de pagar sus


obligaciones de forma completa y oportuna? Muchas veces los acreedores querrán
amenazar al deudor o lisa y llanamente demandarlo, y dependiendo de como se haya
otorgado el contrato lo harán por un procedimiento ejecutivo o por un procedimiento
ordinario. En un escenario en que el patrimonio del deudor es suficiente para responder
de sus deudas, el resultado final de la demanda o las amenazas del acreedor será el pago
de las obligaciones existentes entre ellos. Ahora, ¿qué pasa si el patrimonio del deudor no
es suficiente para pagar todas sus deudas de diferentes acreedores? ¿A quién le pagará?
Seguramente le pagará a aquel acreedor que sea más efectivo en el ejercicio de sus
derechos en contra del deudor, y que los ejerza primero en el tiempo y de una forma

111
eficaz.Empero, en un escenario en que los acreedores no están ejerciendo sus derechos o
hay varios acreedores ejerciendo sus derechos, el deudor optará por pagarle a unos en
desmedro de otros, con base en consideraciones de carácter no necesariamente jurídica,
sino que más bien de índole personal (ej. Afecto). En este caso, ¿qué pasa si un acreedor
se entera que otro acreedor ya había empezado a ejercer sus acciones? Podría ejercer
este una acción propia, o bien una tercería de pago o de prelación, es decir, buscaría
sumarse al esfuerzo del otro acreedor y aprovechar todo lo que este había avanzado en el
cobro de las deudas, de manera de poder pagarse junto con o incluso antes del acreedor
que ya había iniciado sus acciones. De este modo, quien inició las acciones tiene una
ventaja, pero los demás acreedores igualmente pueden aprovecharse de esa ventaja si es
que ejercen sus derechos diligentemente. En la situación de que el deudor cite a sus
acreedores paraexplicarlesel escenario en que se encuentra, y que con los activos que
tiene no podrá pagar a todos los acreedores, lo más probable es que se genere entre los
acreedores una carrera por cobrar. Empero, este impulso de los acreedores por pagarse
podría haber impedido que Apple, por ejemplo, hubiera llegado a existir. Entonces, ¿cómo
frenar ese impulso o cómo evitar la carrera por cobrar que puede generarse entre los
acreedores?

El procedimiento de ejecución individual en que se basa el ordenamiento procesal chileno


no sirve en este caso, sino que se debe establecer un procedimiento colectivo, cuyo
objeto es permitir que todos los acreedores se paguen por igual, a prorrata, es decir, si no
hay una causal de preferencia legal o de prelación de créditos, y por tanto, todos los
acreedores son iguales, lo que se debe buscar es que los acreedores se paguen a prorrata,
independientemente de cuando concurran. Este concepto de la igualdad de los
acreedores, salvo que haya una preferencia o privilegio legal, se conoce como la par
condictiocreditorum, lo que quiere decir que los acreedores deben ser tratados de la
misma manera, salvo que la ley establezca una razón para discriminar entre ellos. Lo
anterior debiera de alguna manera desincentivar a los acreedores de iniciar una carrera
por demandar, y tranquilizar al deudor y decirle que no está a merced del acreedor más

112
eficaz y más efectivo. Entonces, lo que debiera primar en este procedimiento es la
razonabilidad, de manera que se pueda entender cuál es el problema del negocio o qué
anduvo mal: Si por ejemplo, el único problema del negocio era que el administrador era
muy negligente, entonces el problema se puede solucionar cambiando al administrador, y
no embargando los bienes y terminando el negocio de la sociedad.

¿Es relevante para la sociedad la solución de este conflicto entre acreedores y deudor? ¿Es
solo un problema entre privados en que la sociedad como un todo no tiene incidencia
alguna? Si una persona que tiene una idea innovadora tiene una alta probabilidad de
riesgo, y sabe que si le va mal ya nunca más podrá emprender nuevamente, llegará un
momento en que le pondrá límites a lo que podrá perder o sencillamente no emprenderá.
Si se extendiera el derecho de prenda general hasta el infinito, se genera un riesgo moral:
la persona a la que le ha ido mal, no hará nada después de que le fue mal si sabe que todo
lo que obtenga irá en favor de sus acreedor. Entonces, se genera un doble problema: (1)
No se desarrolla una actividad que puede ser provechosa para la sociedad; (2) Si en
definitiva se lleva a cabo la actividad, y a esta le va mal, la persona que la desarrolló no
hará nada posterior a eso porque todo lo que hará en un futuro irá a deparar a sus
acreedores. Estos problemas son malos para la sociedad, y a esta le preocupa la actitud
que puede tomar el deudor frente a esos riesgos a los cuales se ve enfrentado, ya que, en
el caso que no se desarrolle la actividad, perderá una actividad que podría haber sido muy
fructífera, y en el caso que el deudor decida no realizar ninguna otra actividad, deberá
gastar recursos en mantener a esa persona. Algo similar ocurre respecto del acreedor, ya
que si este sabe que el deudor no hará nada si es que le va mal, o que el deudor se podrá
escapar sin pagar sus créditos, entonces se generará un desincentivo respecto de los
acreedores para otorgar créditos, no generándose créditos en la sociedad. Para la
sociedad es indispensable que haya circulación de créditos dentro de la misma, ello
principalmente porque permite el crecimiento y la compra de bienes y servicios, y que
estos circulen de modo más rápido. En resumen, no se trata de un problema entre
privados, sino que es un problema que tiene un interés social profundo, pues la decisión

113
de cómo se buscará solucionar este problema generará un gran impacto económico: En
esta línea se querrá que aquellas buenas iniciativas que tienen la posibilidad de crear
riqueza, a pesar de que fracasen en una primera instancia, se lleven finalmente a cabo,
por lo que se buscará crear los incentivos para que entre acreedor y deudor haya una
negociación racional.

En el derecho romano la insolvencia o el no pago de las deudas iniciaba una ejecución del
deudor y su familia, desde el extremo de darle muerte hasta la esclavitud del deudor.
Luego de un tiempo esto fue modificándose, pasando de la persona del deudor a los
bienes de este, permitiéndole pagar sus obligaciones y quedar libre de sus deudas por la
vía de la cesión de bienes, aún cuando los bienes no fueran suficientes para el cabal pago
de sus obligaciones. Empero, no fue sino hasta la Baja Edad Media cuando realmente nace
el derecho concursal, considerado ya no como un elemento único de una relación
acreedor-deudor, sino que como una relación entre el deudor y todos sus acreedores, al
igual el Estado, el que también es parte de la ecuación por cuanto esta operación tiene un
interés público comprometido. por ello las normas concursales son de orden público.
Dada la raigambre española de nuestra legislación, esta encuentra el origen del derecho
concursal en las Siete Partidas, pero luego con la dictación del Código de Comercio y las
leyes Nº 4.558 de 1929, 18.175 de 1982 y20.073 de 2005 esto se fue de a poco
modificando. Todos los procedimientos y leyes mencionadas anteriormente lo que
buscaban era hacer los procedimientos lo más eficiente posible, pero cuando Chile ingresa
a la OCDE, esta señala que la legislación concursal en Chile era bastante deficiente y poco
eficiente (Ej. En promedio de la OCDE cada acreedor recuperaba 68,8% de lo que se le
debía, mientras que en Chile se recuperaba un 21,3%). Lo anterior llevó a que de alguna
manera, desde el año 2010 en adelante, se quisiera sustituir el procedimiento concursal
chileno: Se realizó un diagnóstico, en el cual se trató de determinar las causas por las que
el procedimiento chileno era tan malo en relación a los países de la OCDE, llegando a una
serie de conclusiones:

114
1. En Chile, hasta la Ley Nº 20.073, la quiebra es una materia entregada a la
jurisdicción común, es decir, además de que el tribunal está sobrepasado de
trabajo, este carece de los conocimientos y el entendimiento necesarios sobre
negocios en problemas.

2. El procedimiento es muy formal y muy lento.Se concluyó que el procedimiento


debía ser necesariamente simplificado, lo cual se buscó lograr por medio de la
oralidad.

3. La quiebra tiene un carácter infamante. En Chile se suele asociar la expresión


quiebra con un insulto, y una persona no quiere quebrar porque no quiere ser
tildado o cargar con el peso de haber quebrado, por lo que para evitar esta
situación recurrirá a cuantos medios pueda, y desde esa perspectiva, la comisión
encargada del diagnóstico buscó quitarle el carácter infamante a la quiebra.

4. La ley vigente hasta esa fecha contenía delitos relacionados con la quiebra, de
modo que quien caía en quiebra podía verse expuesto a delitos en caso que la
quiebra fuese declarada culpable o fraudulenta. Además, se establecían una serie
de presunciones de quiebra culpable o fraudulenta, y así por ejemplo, recurrir a
arbitrios ruinosos para pagar deuda era una presunción de quiebra culpable, y
podía considerarse arbitrio ruinoso el endeudarse por tasas de interés superiores
al mercado. La comisión concluyó que lo anterior era una causa más por la que el
deudor evitaba la quiebra, de modo que buscó modificar estos delitos,
estableciendo que la conducta punible no pasara por el hecho de estar sujeto a un
procedimiento concursal.

Estas cuatro conclusiones son las que finalmente formarán los fundamentos claves sobre
los cuales finalmente se dictó la Ley Nº 20.720, la que elimina la palabra quiebra de
nuestro ordenamiento jurídico, y establece los procedimientos de reorganización y

115
liquidación. Estos procedimientos concursales tendrán por objeto reorganizar o repactar
las obligaciones de una persona, o bien liquidar los activos de una persona para pagar sus
deudas: ese será el objetivo que tendrán los procedimientos concursales conforme al art.
1 de la nueva ley. Por lo anterior se distinguirá entre los acuerdos de renegociación y los
procedimientos de liquidación, distinción que, sin embargo, ya se encontraban en la
antigua ley, pero con distintos nombres (la quiebra y los convenios preventivos o
judiciales).

¿Qué se puede incluir en los acuerdos de reorganización o repactación? Que los


acreedores capitalicen parte de su deuda (que sean dueños juntos con el deudor),
prorrogar el plazo del crédito, condonar parte de la deuda, es decir, se pueden pactar una
serie de cosas en los acuerdos de reorganización o repactación, algunas de las cuales dirán
relación con la forma de administrar el negocio.

¿A quién se le aplica esta ley? ¿Solo a los comerciantes? ¿A cualquier persona? En su


origen histórico los procedimientos concursales se aplicaban solo a los comerciantes: el
deudor civil tenía para estos casos la cesión de bienes.

*Derecho concursal de Juan Esteban PUGA, y el índice del curso de derecho de quiebras
de PUELMA.

CLASE ISI EYZAGUIRRE 31/08/2016


a) Características generales de los procedimientos concursales en Chile .

1. Son procedimientos universales. Esto pues pretenden abarcar la totalidad del


patrimonio del deudor, y solucionar los problemas de pago que haya respecto de la
totalidad de este. En este sentido, los procedimientos concursales buscan una
solución definitiva al problema de incumplimiento de las obligaciones, y en general
cuentan con escasas excepciones.

116
La universalidad puede verse en 3 aspectos:

(1) Abarca todos los activos que tiene el deudor. Así, se puede ver que en todos
los procedimientos concursales que tienen carácter de voluntarios (el deudor
toma la iniciativa), se le requiere al deudor señalar cuales son todos sus bienes.
El objetivo de esto es que no quede ningún bien afuera.

Este principio no es absoluto, pues los procedimientos concursales no abarcan a


los bienes inembargables (art. 445 CPC).

Otra excepción a este principio (bienes que siendo embargables no están


sujetos a los procedimientos concursales) son los bienes futuros, que son
aquellos que adquiere el deudor con posterioridad a la resolución de liquidación
forzada o la que aprueba la reorganización. Los bienes futuros están regulados
en el art. 133 de la Ley 20.720, el que hace una distinción de acuerdo al título
bajo el cual fue adquirido el bien. Distingue si el bien fue adquirido a título
gratuito o a título oneroso:

(a) Sifueron adquiridos a título gratuito, esos bienes pueden ser objeto de la
persecución por parte del liquidador (síndico antiguamente).

(b) Si fueron adquiridos a título oneroso, la RG es que esos bienes no pueden


ser realizados como parte del procedimiento concursal, quedan fuera de
este.

Esto es un incentivo para reemprender. Lo que sí pueden hacer los


acreedores es aprovecharse los frutos que produzcan esos bienes onerosos
adquiridos en el futuro. Existe una excepción a esto, la cual está señalada en

117
el art. 276 para la quiebra de las personas naturales. Este artículo dice que
se pueden embargar las 3 remuneraciones siguientes desde la quiebra de la
persona. En realidad, estas remuneraciones constituyen bienes futuros
adquiridos a título oneroso, y de acuerdo al sistema antiguo no debieran
hacerse incluido en la quiebra. En consecuencia, según OCHAGAVÍA y
UGARTE, esto vino a empeorar la situación de las personas naturales.

“Situación de los bienes futuros. La administración de los bienes que adquiera el


Deudor con posterioridad a la Resolución de Liquidación se regirá por las reglas
que siguen:

a) Tratándose de bienes adquiridos a título gratuito, dicha administración se


ejercerá por el Liquidador, manteniéndose la responsabilidad por las cargas con
que le hayan sido transferidos o transmitidos y sin perjuicio de los derechos de
los acreedores hereditarios.

b) Tratándose de bienes adquiridos a título oneroso, su administración podrá ser


sometida a intervención, y los acreedores sólo tendrán derecho a los beneficios
líquidos que se obtengan.”(art. 133 Ley Nº 20.720).

“Inembargabilidad. Sin perjuicio de lo dispuesto en el número 2º del artículo 445


del Código de Procedimiento Civil, sólo podrá embargarse la remuneración de la
Persona Deudora hasta por tres meses después de dictada la resolución de
liquidación de los bienes de la Persona Deudora.”(art. 276 inc. 1 Ley Nº 20.720).

(2) Afectan a todos los pasivos que tiene el deudor, vale decir, todas las
obligaciones que tiene el deudor para con terceros quedan afectadas por este
procedimiento concursal, y su pago debe resolverse dentro de este
procedimiento concursal.

118
¿Qué manifestaciones hay de esto?

(a) En primer lugar el desasimiento, según el cual al momento de dictarse una


resolución de liquidación de un deudor, este pierde la administración de sus
bienes, y no puede negociar por fuera o por cuerda separadael pago de
obligaciones con terceros.

(b) La acumulación de juicios. Por ejemplo, el art. 129 Nº 5 de la Ley señala que
la resolución de liquidación debe contener la orden de acumular a la quiebra
todos los juicios en los cuales se discutan obligaciones pendientes, salvo las
excepciones legales: (i)acreedores preferentes. Estos pueden mantener la
ejecución individual, pues el pago de su obligación, en principio, no afecta el
procedimiento concursal, ya que se pagarán antes. Así, por ejemplo, si un
acreedor ya inició la ejecución de un bien dado en prenda por un crédito no
pagado, la ley permite no acumular ese juicio porque de todas formas se
pagará preferentemente. Esto no es siempre así; en ciertos casos podría
afectar a los créditos de 1ª clase, que están sobre las preferencias de 2ª y 3ª
clase. La ley dice que se permite la ejecución individual, con tal que el
acreedor preferente rinda caución para el pago de los créditos de los
acreedores de 1ª clase; (ii)materias de arbitraje forzoso; (iii)materias
sometidas a tribunales especiales;(iv)la insolvencia transfronteriza, que es
una regulación nueva que establece esta ley, la que norma lo que ocurre si
un acreedor tiene un deudor con obligaciones en distintos países, y
acreedores en todos ellos. En este caso, no va a necesitar acumular su
ejecución al procedimiento concursal chileno.

2. Son de carácter mixto o pueden ser mixtos.Esto en el sentido que puede ser
administrativo o judicial, lo cual dependerá del tipo de procedimiento. Hasta antes

119
de la Ley Nº 20.720, el rol de la Superintendencia de Quiebras era muy reducido en
esta materia. El procedimiento de liquidación sigue siendo judicial, pero
actualmente existen procedimientos concursales que son llevados en un 80% en
sede administrativa, ante la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento
(SUPERIR): se trata fundamentalmentedel procedimiento concursal de
renegociación, en el cual todo es negociado frente a la autoridad para
posteriormente dar ciertas causales específicas de impugnación. Otro es el acuerdo
extrajudicial de reorganización simplificada, el cual es una reorganización hecha de
manera privada entre las partes, con supervisión de la SUPERIR.

3. Se rigen por un principio rector: par conditiocreditorum (todos los acreedores de


una misma clase deben ser tratados de una misma manera). PUELMA dice que este
principio es incluso un principio de interpretación de las leyes concursales. Esto
implica que los acreedores se pagan a prorrata de su acreencia.

Manifestaciones de este principio:

(1) La forma como se paga a los acreedores es con sujeción estricta a las reglas de
prelación de créditos establecidas en el CC. Esto lo dice el art. 241 de la Ley.

(2) Art. 288:Este artículo habla de las acciones revocatorias, de manera que se
pueden revocar actos ejecutados hasta dos años anteriores a la liquidación, con
tal que estos hayan sido ejecutados(a) con terceros quehayan conocido del mal
estado del negocio del deudor y que estos (b) perjudiquen la masa de bienes o
la par conditiocreditorum.

b) Esquema de los procedimientos concursales existentes en Chile .En Chile existen 5 tipos
de procedimientos concursales distintos, los cuales buscan, de diversas maneras,
solucionar el problema de imposibilidad de pago de los deudores: 3 de ellos se utilizan

120
para la llamada empresa deudora, y 2 de ellos para la persona deudora. Nuestra
legislación anterior tenía una distinción parecida: quiebra del comerciante y quiebra del
no comerciante. Entonces se distingue:

1. Empresa deudora. Está definida en el art. 2º Nº 13 de la Ley 20.720. Es empresa


deudora“Toda persona jurídica privada, con o sin fines de lucro, y toda persona
natural contribuyente de primera categoría o del número 2) del artículo 42 del
decreto ley Nº 824, del Ministerio de Hacienda, de 1974, que aprueba la ley sobre
impuesto a la renta (se refiere a las personas que trabajan de forma independiente
y realizan profesiones liberales)”. Se trata entonces de personas jurídicas con o sin
fines de lucro, y las personas naturales que se acogen al régimen de empresario
individual.

El impuesto de primera categoría es el que se le aplican a las empresas sobre sus


ingresos. Esto lo pagan las personas jurídicas pero también ciertas personas
naturales como los de EIRL.

A ellas se les pueden aplicar 3 tipos de procedimientos concursales:

(1) Procedimiento concursal de reorganización.Este es un procedimiento judicial


en que se busca que el deudor y sus acreedores logren llegar a acuerdo en la
forma de reestructurar los activos o pasivos del deudor, para así lograr el pago
de todo o parte de las obligaciones que tiene el deudor.

¿Qué se puede reestructurar en el marco de este acuerdo? Rebajas o tasas de


interés, plazo de gracia, respecto de los activos se podría acordar la enajenación
de una cierta línea de negocios para el pago de sus acreencias, etc.

Es un procedimiento netamente judicial.

121
(2) Reorganización extrajudicial simplificada.Esto es similar a los “prearrange” o
“prepackagebankrupcy”.Los acreedores firman un acuerdo extrajudicial con el
deudor, el cual se somete posteriormente a la aprobación de un tribunal. Tiene
quórums de aprobación muy altos, y busca descongestionar la administración y
que las personas se arreglen de forma privada.

(3) Procedimiento de liquidación. Este puede tener un inicio voluntario o forzado.


Este es el que se conocía antescomo la quiebra propiamente tal, cuyo objeto es
la realización de los bienes del deudor y liquidar su activo. Es netamente
judicial.

2. Persona deudora. Está definida en el art. 2 Nº 25 de la Ley 20.720, según el cual son
persona deudora“[t]oda persona natural no comprendida en la definición de
Empresa Deudora.”Según esta definición, se trata de aquellos deudores que
tributan de acuerdo al art. 42 Nº 1 de la Ley de la Renta (trabajadores dependientes
sujetos al Impuesto de 2ª Categoría), y también las personas que no perciben
remuneraciones y que no tributan.

A ellas se les aplican 2 procedimientos:

1. Procedimiento concursal de renegociación de deudas. Es el equivalente al de


reorganización de la empresa deudora; son, sin embargo, diferentes, pues las
personas no se reorganizan, sino que renegocian. Tiene por objetivo
reestructurar el pasivo de la persona deudora.

Este es en un 90% administrativo, pues se llevaba casi íntegramente ante la


SUPERIRy solo contempla causales de impugnación judicial.

122
2. Procedimiento de liquidación de los bienes de una persona deudora. El
legislador se cuidó mucho de no decir procedimiento de liquidación de una
persona deudora, para evitar el carácter infamante de la quiebra. Esto es lo
mismo que conocemos como quiebra tradicionalmente, pero adaptada para
personas naturales, y puede tener un inicio forzado o voluntario.

01/09/2016
c) Sujetos de los procedimientos concursales.

1. Deudor o sujeto pasivo. El deudor es el sujeto pasivo en los procedimientos


concursales, porque es el que sufre la reestructuración o la realización de su
patrimonio.

Empero, ¿qué es deudor para nuestra legislación comercial? Actualmente se


distingue entre (1)la empresa deudora y (2)la persona deudora. Así lo señala la Ley
Nº 20.720 en su art. 1 Nº 12): “12) Deudor:Toda Empresa Deudora o Persona
Deudora, atendido el Procedimiento Concursal de que se trate y la naturaleza de la
disposición a que se refiera.”Luego, la ley define a ambas:

(1) La empresa deudora es “[ t]oda persona jurídica privada, con o sin fines de
lucro, y toda persona natural contribuyente de primera categoría o del número
2) del artículo 42 del decreto ley Nº 824, del Ministerio de Hacienda, de 1974,
que aprueba la ley sobre impuesto a la renta.”

(2) Espersona deudora “[t]odapersona natural no comprendida en la definición de


Empresa Deudora”.Por tanto, son personas deudoras las personas naturales
que son trabajadores dependientes que tributan bajo el art. 42 Nº1) de la ley
sobre impuesto a la renta, el que se refiere al impuesto de segunda categoría o

123
impuesto de retención, o bien las personas naturales que no tienen rentas, y
por ende no tributan, o tienen rentas y no tributan.

Los procedimientos antiguos solo regulaban la quiebra para los comerciantes,


basado en que la quiebra tenía con objeto reemprender y quienes reemprendían
eran únicamente los comerciantes. Hoy en día no es así y no se hace diferencia
entre comerciante o no comerciante para distinguir entre empresa o persona. De
esta manera quien realiza empresas agrícolas es una empresa deudora no
obstante no sea una actividad comercial.

Hay distintos procedimientos concursales que aplican según cada persona. De


todos los procedimientos concursales está el procedimiento de renegociación de
deudas, y este es el más novedoso. ¿Hace sentido que el procedimiento de
renegociación se aplique únicamente a personas naturales que son dependientes?
No, porque la persona que trabaja dependiente normalmente no es una
emprendedora, y estos normalmente son los independientes, buscando poner fin a
un negocio que no funcionó y quieren empezar otro, debiendo ser entonces estos
quienes tengan más facilidades para renegociar sus deudas. Generalmente el
negociador dependiente va a renegociar sus deudas y seguir trabajando en el
mismo lugar. Por ende, para UGARTE esta distinción no tiene mucho sentido.

¿Por qué se hizo? Porque la Superintendencia consideró que el trabajador


dependiente que conseguía dinero con su trabajo y no con activos, por lo que no
podía optar a procedimientos de reorganización similares a los de las personas
jurídicas y los independientes (lo único que podían hacer era cambiar plazos), los
que al manejar y administrar activos si podrían someterse a un proceso de
reorganización.Igual se privó a los independientes y a la empresa deudora de
haber reorganizado de manera administrativa lo que puede considerarse
perjudicial sobre todo para el caso de las pequeñas y medianas empresas.

124
Nuestra ley cambió la forma de clasificar al deudor. En realidad, quienes
emprenden y quienes deberían tener las mayores facilidades para reemprender
son los independientes, quienes generalmente buscarán poner fin a un negocio
que no les dio resultado, para rápidamente dar inicio a otro. Para UGARTE no hace
demasiado sentido el hacer esta distinción. La superintendenciaconsideró que
como el trabajador dependiente adquiere dinero casi exclusivamente de su
trabajo, mientras que un independiente que trabaja con activos y no sólo con el
fruto del trabajo, es más lógico que éste pueda optar a una restructuración y
reorganización más que a un proceso de renegociación.

Si bien pareciera que a primera vista está definición abarca todo tipo de
instituciones e individuos de nuestro derecho, existen una serie de situaciones y
entidades en las que pareciera que no son regidas por la legislación concursal o no
les aplica la legislación concursal:

(1) Sociedades especiales. Ej. Bancos, compañías de seguros, AFPs, AGFs. Estas
sociedades tienden a tener procedimientos de liquidación propios regulados
por sus propias leyes. Los bancos no quiebran, sino que estos son intervenidos
por la SBIF, la que le impone a los dueños de los bancos medidas para volver a
los niveles de solvencia requeridos, y si no lo hacen venden sus carteras de
créditos a otros bancos. Con las compañías de seguros y las AFPs es similar, con
la diferencia de que se puede oponer o solicitar la liquidación forzada de esas
entidades. Lo que ocurre en esos casos es que se oficia a los superintendentes
respectivos, y si ellos consideran que la sociedad es viable y pueden establecer
otras medidas para recuperar su solvencia, se hace esto primero antes que
liquidar.

125
(2) Sociedad nula. Es discutible, lo que dependerá de la discusión sobre si la
sociedad nula mantiene su personalidad jurídica antes de declarada su nulidad.
OCHAGAVÍA cree que mientras no sea declarada se pueda pedir la liquidación
forzada, pues una vez declarada la nulidad se forma una comunidad, por lo que
ya no se puede pedir su quiebra, sino que se deberá cobrar a cada uno de los
comuneros la porción que le corresponde en el crédito, pudiendo pedir la
liquidación forzada del comunero en caso que este sea insolvente.

(3) Sociedades disueltas. ¿Se puede pedir la liquidación forzada de una sociedad
disuelta? Habrá que distinguir si tiene personalidad jurídica o no: En el caso de
las sociedades civiles una vez disueltas se forma una comunidad, por lo que no
hay personalidad jurídica, y por tanto, no habrá lugar a la liquidación forzada.
En las sociedades mercantiles, en cambio, sí hay personalidad jurídica, ya que
esta subsiste durante la liquidación. Entonces, se entiende que se puede pedir
la liquidación forzada de una sociedad disuelta si esta es una sociedad
mercantil.

(4) Empresas del Estado. ¿Se puede pedir la liquidación forzada de una empresa
del Estado? Asumiendo que son empresas que no tienen una personalidad
jurídica del Fisco, esto se discutía, habiendo distintas posiciones y fallos al
respecto. Existían fallos que decían que las empresas del Estado, por el hecho
de que su personalidad jurídica emanaba del mismo Fisco y que prestaban
servicios que son relevantes para la comunidad, no podían ser objeto de
medidas de apremio. La principal objeción con que se pueda pedir la
liquidación forzada respecto de empresas del Estado es que se pierde la
administración de los bienes y pasan a manos de un administrador, lo que el
Estado no está dispuesto a tolerar. Nuestra legislación resolvió este asunto,
señalando expresamente que las empresas deudoras serán personas jurídicas

126
de derecho privado, siendo que las empresas del Estado son de derecho
público.

(5) Los fondos de inversión. Es un patrimonio de afectación administrado por una


administradora. Los fondos no tienen personalidad jurídica, por lo que sí se lee
la definición, no cabe dentro de ninguna de las definiciones de empresa
deudora o persona deudora. UGARTE cree que no se debería hacer una lectura
tan literal de la definición, y le parece que los fondos son patrimonios propios,
y a pesar de no tener capacidad, pueden tener obligaciones propias, y en la
medida en que ello ocurra, no ve problema con que se pueda solicitar la
liquidación forzada del fondo. Este tema se ve mitigado porque los fondos lo
único que hacen es invertir en sociedades, por lo que los que quiebran son las
sociedades de abajo y no elfondo propiamente tal.

(6) Respecto de la mujer casada, el menor adulto y los incapaces. ¿Qué bienes
son los afectados cuando cae en liquidación la mujer casada bajo sociedad
conyugal? Nuestra legislación no tiene normas expresas, a diferencia de lo que
ocurría anteriormente, en que se señalaba que para la liquidación forzada
bastaban los bienes que administraba la mujer, y no los bienes de la sociedad
conyugal, pues estos respecto de terceros le pertenecen al marido. En realidad
se debiera considerar que se siguen las mismas reglas, ya que actualmente no
hay regla expresa.

Respecto al menor adulto también se puede solicitar la liquidación forzada si es


que contrajo obligaciones con su peculio personal o profesional.

Los incapaces, en cuanto estén autorizados a contraer obligaciones con


terceros, sí puede aplicársele la liquidación forzada respecto de aquellos bienes
que administran.

127
2. Acreedor. El acreedor podría decirse que es el sujeto activo del procedimiento
concursal y es quien persigue el pago de sus obligaciones por medio de un
procedimiento concursal. A diferencia de lo que ocurre con el deudor, la legislación
no priva a nadie de ser acreedor de un procedimiento concursal, pues no establece
ninguna definición ni privación de ciertas personas para participar, pero sí
establece distintos tipos de acreedores que participan de los procedimientos
concursales:

(1) Acreedores preferentes. Los que tienen alguna preferencia o privilegio legal de
conformidad a las normas de prelación de crédito establecidas en la legislación
civil. Hay 5 clases de créditos de acuerdo a estas normas:

(a) Primera clase. Esta es una preferencia general, y está compuesta por los
créditos que tienen la prioridad más alta en el pago (ej. Impuestos que
deben pagarse al Fisco, remuneraciones a los trabajadores, gastos en que
se incurrirá en el procedimiento concursal, etc.). Estos se encuentran en el
art. 2472 del CC.

(b) Segunda clase. Esta es una preferencia especial, y comprende


fundamentalmente a ciertos acreedores que tienen ciertos derechos de
retención o un derecho de prenda. Estos se encuentran en el art. 2474 CC.

(c) Tercera clase. Estos son los acreedores hipotecarios (art. 2477 CC.).

(d) Cuarta clase. Se trata de ciertos créditos especiales que dicen relación con
los representados contra sus representantes y en relaciones familiares (art.
2481).

128
(e) Quinta clase. Esta es la clase de los acreedores valistas.

(f) Sexta clase. No se trata de una sexta clase propiamente tal, pero se quiere
referir a los acreedores subordinados, quienes son reconocidos por la
legislación concursal.

La legislación concursal respeta los órdenes de prelación del CC. y el liquidador


en el procedimiento de realización está obligado a pagar conforme a los
órdenes de prelación del CC.

(2) Acreedores condicionales. ¿Quépasa si un acreedor tiene un crédito cuya


existencia pende de una obligación? ¿Qué pasa si un tercero solicita la
liquidación del deudor? El acreedor tiene derecho a que el liquidador retenga
lo que se le debe pagar en razón de la existencia de su crédito, o bien se les
entreguen los fondos rindiendo una caución para el caso que no se verifique la
condición (art. 249 Ley 20.720).

“Acreedor condicional. El acreedor condicional podrá solicitar al tribunal que


ordene la reserva de los fondos que le corresponderían cumplida la condición, o
su entrega bajo caución suficiente de restituirlos a la masa, con el interés
corriente para operaciones reajustables, para el caso de que la condición no se
verifique. La caución señalada deberá constar en boleta de garantía bancaria o
póliza de seguro, debiendo ser reemplazada o renovada sucesivamente hasta
que se cumpla la respectiva condición.” (art. 249 Ley 20.720).

Se suelen utilizar pólizas de seguro y boletas bancarias como las cauciones que
exige este art.

129
(3) Acreedor a plazo. Es aquel cuyas obligaciones todavía no se han hecho
actualmente exigibles. Los procedimientos concursales contemplan que en
virtud de la dictación de la resolución de liquidación, se hacen exigibles
inmediatamente los créditos de los acreedores a plazo (Arts. 136 y 137).

“Exigibilidad y reajustabilidad de obligaciones. Una vez dictada la Resolución


de Liquidación, todas las obligaciones dinerarias se entenderán vencidas y
actualmente exigibles respecto del Deudor, para que los acreedores puedan
verificarlas en el Procedimiento Concursal de Liquidación y percibir el pago de
sus acreencias. Estas últimas se pagarán según su valor actual más los
reajustes e intereses que correspondan, de conformidad a las reglas del artículo
siguiente.” (art. 136).

“Determinación del valor actual de los créditos. Para determinar el valor actual
de los créditos se seguirán las siguientes reglas:

1) El valor actual de los créditos reajustables en moneda nacional, no vencidos


a la fecha de la dictación de la Resolución de Liquidación y que devenguen
intereses, será el capital más el reajuste convenido e intereses para
operaciones reajustables devengados hasta la fecha de dicha resolución.

2) El valor actual de los créditos reajustables en moneda nacional, no vencidos


a la fecha de la dictación de la Resolución de Liquidación y que no devenguen
intereses, será el capital más el reajuste convenido hasta la fecha de dicha
resolución.

3) El valor actual de los créditos no reajustables en moneda nacional, no


vencidos a la fecha de la dictación de la Resolución de Liquidación y que

130
devenguen intereses, será el capital más los intereses para operaciones no
reajustables devengados hasta la fecha de dicha resolución.

4) El valor actual de los créditos no reajustables en moneda nacional, no


vencidos a la fecha de la dictación de la Resolución de Liquidación y que no
devenguen intereses, se determinará descontando del capital los intereses
corrientes para operaciones de crédito de dinero no reajustables desde la fecha
de la Resolución de Liquidación hasta el día de los respectivos vencimientos. Si
no fuere posible determinar el índice de reajustabilidad o si éste hubiere
perdido su vigencia, se aplicará lo dispuesto en el número 3) anterior.” (art.
137).

Este art. establece qué es el valor presente para nuestra legislación, pero en
todas las hipótesis en se pone se debe pagar el capital completo, más los
intereses y el reajuste que corresponde al tiempo de la dictación de la
resolución de liquidación.

(4) Acreedores relacionados. Estos son acreedores que son personas relacionadas
al deudor bajo el concepto de persona relacionada establecido expresamente
en la legislación concursal (Ley 20.720). La nueva ley estableció una serie de
normas que castigan duramente a los acreedores relacionados: ej. No
participan en las decisiones de nominación de los liquidadores o de los
veedores, o de las demás personas que administran en la liquidación; se les
excluye de los quórums para tomar la mayoría de las decisiones en la
liquidación; su crédito queda pospuesto en ciertas circunstancias a la de los
acreedores valistas (art. 63); la ley mandata al liquidador a estudiar
especialmente los créditos de los acreedores que son relacionados para efectos
de su objeción (art. 73); entre otras.

131
Esta profunda desconfianza de los acreedores relacionados se justifica porque
la presencia de una persona relacionada con el deudor podría prestarse para
burlar a los demás acreedores y al procedimiento concursal en general.
UGARTE, sin embargo, cree que la ley reguló de muy mala manera estas
situaciones, principalmente por 2 razones:

(a) En primer lugar, por la definición que hace de persona relacionada la ley:

“Definiciones. Para efectos de esta ley, se entenderá, en singular o plural,


por:

26) Persona Relacionada: Se considerarán Personas Relacionadas respecto


de una o más personas o de sus representantes, las siguientes:

a) El cónyuge, los ascendientes, descendientes y colaterales por


consanguinidad o afinidad hasta el sexto grado inclusive y las sociedades en
que éstos participen, con excepción de aquellas inscritas en el Registro de
Valores.

b) Las personas que se encuentren en alguna de las situaciones a que se


refiere el artículo 100 de la ley Nº 18.045, de Mercado de Valores.” (art. 2
Nº 26).

El hecho de que diga que llega hasta el sexto grado es muy amplio, y se
puede extender a muchos familiares, más si la ley se refiere a las
sociedades en que estos forman parte. Se producen muchos riesgos de
realizar contratos con acreedores relacionados sin que esa circunstancia se
sepa por parte de ambas partes, lo que genera grandes perjuicios

132
considerando el trato que la ley le da a los acreedores relacionados.
UGARTE cree que esta ley debería haber mantenido el criterio de la LMV.

(b) Lo anterior es muy grave porque existen muchas estructuras de


financiamiento que contemplan que se ingrese a una sociedad con deuda y
capital (Ej. Financiamiento de las empresas emergentes),y puede ocurrir
que ese préstamo quede con el carácter de un préstamo de una persona
relacionada ya que la misma persona ingresó con capital a la sociedad,
siendo que al momento de realizar el préstamo no se era una persona
relacionada.UGARTE cree que la legislación podría haber contemplado una
excepción a estas estructuras.

06/09/2016
d) Otros intervinientes en los procedimientos concursales . Principalmente se trata del
veedor y el liquidador, quienes son los nuevos funcionarios que estableció la Ley Nº
20.720 y que intervienen en los distintos procedimientos concursales. Son sucesores
del antiguo síndico de quiebras.

1. Liquidador. El liquidador está definido en el art. 2 Nº 19 de la Ley Nº 20.720 como


aquella persona natural sujeta a la fiscalización de la SUPERIR cuya misión es
realizar el activo del deudor y propender al pago de sus acreedores de la forma
establecida por la ley.

“19) Liquidador: Aquella persona natural sujeta a la fiscalización de la


Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento, cuya misión principal es
realizar el activo del Deudor y propender al pago de los créditos de sus acreedores,
de acuerdo a lo establecido en esta ley.”(Art. 2 Nº 19) Ley Nº 20.720).

133
Analizando esta definición, ¿en qué procedimientos interviene el liquidador? En los
procedimientos de liquidación. Uno de los objetivos de la ley es intentar que exista
una especialización de los intervinientes en los procedimientos de liquidaciones y
en los procedimientos de reorganización, teniendo diferentes aptitudes y
competencias. La ley busca este objetivo porque las competencias para ser
liquidador y para ser veedor son distintas.

Este es el verdadero símil del antiguo síndico de quiebras, compartiendo la mayoría


de sus funciones. Se trata de un interviniente regido y fiscalizado por la SUPERIR, es
decir, les son aplicables las normas dictadas por esta superintendencia y debe
someterse a ellas.

Principales deberes del liquidador. En el marco de los procedimientos concursales


los principales deberes del liquidador están regulados fundamentalmente por el art.
36 de la Ley Nº 20.720:

(1) Incautar e inventariar los bienes del deudor.Incautar es un símil al embargo en


el derecho concursal (en el derecho concursal los bienes se incautan, no se
embargan). Entonces, cuando parte el procedimiento concursal lo primero que
se hace es determinar qué es lo que se tiene (qué puede ser realizado) y qué es
lo que se debe.

(2) Liquidar los bienes del deudor. Esto lo realiza el liquidador a través de los
denominados repartos: Se junta todo lo que hay y se empieza a repartir cada
cierto tiempo entre los acreedores según sus preferencias. Estos repartos se
publican periódicamente en el boletín concursal, lo que permite ir realizando los
bienes.

134
(3) Cobrar los créditos que tenga el deudor. Por el desasimiento el liquidador
asume la administración de los bienes, y el mandato que tiene al cumplir esta
función no es necesariamente hacer lo que sea mejor para los negocios del
deudor, sino que más bien su mandato dice relación con conseguir la mayor
cantidad de bienes del deudor y hacer todo lo posible para reintegrar los bienes
a la masa. En razón de lo anterior es que tiene la facultad de cobrar los créditos
que el deudor tenga en contra de terceros.

(4) Exigir rendición de cuentas de cualquier tercero que hubiera administrador


bienes del deudor.

(5) Facultad de solicitar medidas precautorias o medidas conservativas respecto


de los bienes del deudor.

(6) Solicitar del deudor toda la información necesaria para el cumplimiento de su


cargo. Muchas veces el liquidador no sabrá que hay en el patrimonio del
deudor, por lo que requiere de esta información.

(7) Custodia de los bienes y del dinero del deudor. Debe depositarlos en las
cuentas especialmente señaladas para el procedimiento de liquidación.

(8) Llevar los libros del deudor.

(9) Ejecutar acuerdos que haya tomado la junta de acreedores. Ej. La junta de
acreedores puede decidir qué la mejor forma para la realización de los bienes es
mediante la venta de los bienes del deudor como una unidad económica, y
señalar la mejor forma de venderla a terceros, y será el liquidador quien
ejecutará este acuerdo.

135
Esta serie de funciones están destinadas a (1) determinar los bienes que hay,
acumularlos, recuperarlos, (2) custodiarlos y (3) realizarlos.

“Deberes del Liquidador. El Liquidador representa judicial y extrajudicialmente los


intereses generales de los acreedores y los derechos del Deudor en cuanto puedan
interesar a la masa, sin perjuicio de las facultades de aquéllos y de éste
determinadas por esta ley.

En el ejercicio de sus funciones, el Liquidador deberá especialmente, con arreglo a


esta ley:

1) Incautar e inventariar los bienes del Deudor.

2) Liquidar los bienes del Deudor.

3) Efectuar los repartos de fondos a los acreedores en la forma dispuesta en el


Párrafo 3 del Título 5 del Capítulo IV de esta ley.

4) Cobrar los créditos del activo del Deudor.

5) Contratar préstamos para solventar los gastos del Procedimiento Concursal de


Liquidación.

6) Exigir rendición de cuentas de cualquiera que haya administrado bienes del


Deudor.

7) Reclamar del Deudor la entrega de la información necesaria para el desempeño


de su cargo.

136
8) Registrar sus actuaciones y publicar las resoluciones que se dicten en el
Procedimiento Concursal de Liquidación en el Boletín Concursal.

9) Depositar a interés en una institución financiera los fondos que perciba, en


cuenta separada para cada Procedimiento Concursal de Liquidación y a nombre de
éste, y abrir una cuenta corriente con los fondos para solventarlo.

10) Ejecutar los acuerdos legalmente adoptados por la Junta de Acreedores dentro
del ámbito de su competencia.

11) Cerrar los libros de comercio del Deudor, quedando responsable por ello frente a
terceros desde la dictación de la Resolución de Liquidación.

12) Transigir y conciliar los créditos laborales con el acuerdo de la Junta de


Acreedores, según lo dispone el artículo 246 de esta ley.

13) Ejercer las demás facultades y cumplir las demás obligaciones que le
encomienda la presente ley.”(Art. 36 Ley Nº 20.720).

*La industria de los liquidadores es bastante poderosa, en el sentido de que un


liquidador o ex síndico de mucha reputación tiene muchas personas bajo su
dependencia para llevar a cabo las liquidaciones. En realidad, se ha
profesionalizado mucho el tema de los liquidadores.

Nominación del liquidador.¿Quién debiese nombrar al liquidador? Antiguamente


quien proponía al liquidador era el deudor, pero esto causaba que el incentivo para
el liquidador de hacer una efectiva realización de los bienes era bastante bajo. Esto
cambió con la ley de quiebras anterior en que el liquidador pasó a ser nombrado
por los acreedores mayoritarios. Los grandes perjudicados con este cambio fueron

137
los acreedores minoritarios, porque el interés de un liquidador de mantener
contentos a los acreedores mayoritarios será muy alto. UGARTE cree que lo más
sensato sean los acreedores quienes nombren al liquidador con alguna variante.

La ley nueva estableció un procedimiento de nominación en que quien denomina al


liquidador son los acreedores mayoritarios. Esto está regulado en el art. 37, y se
distingue entre el procedimiento de liquidación voluntario y el de liquidación
forzosa. Como en el procedimiento voluntario es el deudor quien solicita su propia
liquidación, será el deudor quien deberá presentar su solicitud ante el tribunal, y
una vez que este lo timbra, deberá ir a la SUPERIR para que esta notifique a los 3
mayores acreedores del deudor, de modo que estos propongan al liquidador y a
uno suplente, lo cual no es obligación de hacer por los acreedores. ¿Cómo se elige?
(1) Si los 3 acreedores proponen y se repite una nominación, dicha persona es
liquidador. Entre los 3 acreedores la votación es por cabezas, no dice relación con la
proporción de los créditos. Si la nominación no se repite, se elegirá al propuesto por
el que tenga el crédito más grande; (2) Si dos acreedores proponen, se elegiráa
dicha persona que se repite, y si nadie se repite, entonces se elegirá a aquella
persona propuesta por el acreedor que tenga el crédito más grande; (3) Si un
acreedor propone, entonces se nombra a aquella persona propuesta; (4) Si nadie
propone, la SUPERIR elige por sorteo de la nómina de Liquidadores llevada por la
misma superintendencia.

Para la liquidación forzada esto es igual, con la diferencia de que quien realiza los
trámites para la nominación es quien solicita la liquidación forzada.

Esta nominación del liquidación podrá ser revisada por la junta de acreedores, lo
cual, sin embargo, no es muy común porque generalmente los 3 principales
acreedores representan la mayor parte del crédito de la masa.

138
Requisitos para ser liquidador.Estos están señalados en el art. 32 de la Ley Nº
20.720:

(1) Contar con título profesional de contador auditor o con una profesión de al
menos 10 semestres de duración.En la práctica la gran mayoría de los
liquidadores son abogados.

(2) Requiere a lo menos 5 años de ejercicio de la profesión.

(3) Debe pasar un examen de conocimientos. El art. 14 de la ley establece un


examen de conocimientos aplicable a veedores y liquidadores.

(4) No estar sujeto a prohibiciones. ¿Cuáles son estas prohibiciones? Estas se


encuentran en el art. 17:

(a) Condenados por crímenes o simples delitos.La ley se excedió con esta
prohibición según UGARTE, pues piensa que nadie está libre de ser
condenado por un crimen o simple delito.

(b) Funcionarios de la administración del Estado, integrantes de empresas


públicas creadas por ley, quienes ejerzan cargos de elección popular, y
quienes presten cualquier tipo de servicios a la SUPERIR (remunerados o
no). Se excluye de estos casos a los profesores de universidades públicas.

(c) Incapacidad física o mental para ejercer el cargo. No hay antecedentes de


que si esto es algo que queda a criterio de la SUPERIR o si hay que ser
declarado incapaz.

139
(d) Quienes hubiesen sido excluidos de la nómina de Liquidadores. El art. 18
contempla las causales de exclusión de la nómina:

a. Si se es nombrado con infracción a la ley, es decir, si no se cumplen los


requisitos legales;

b. Dejar de cumplir con los requisitos del art. 13 (Ej. No cumplir con los
requisitos de otorgamiento de garantía, la cual es de 2000 UF duradera
por un plazo de 3 años renovables por todo el periodo en que se
encuentren en la nómina: La ley dice que se puede otorgar de dos
formas: boleta bancaria y póliza de seguros, sin perjuicio de que la
SUPERIR pueda aceptar otro formato de garantía por norma de carácter
general);

c. Si el liquidador adquiere para sí o para terceros bienes dentro del


procedimiento concursal u obtiene algún tipo de ventaja económica con
motivo del procedimiento concursal;

d. Enajenar o autorizar la enajenación de cualquiera de los bienes del


procedimiento concursal en que intervenga a:

(i) Sus personas relacionadas.

(ii) A una persona jurídica en la que tenga interés económico directo


o indirecto. Esta última causal de exclusión es discutible, ya que
ya está establecida la causal de persona relacionada, por lo que
surge la duda respecto de qué interpretación darle a esta causal,
la cual podría llegar a ser muy amplia;

140
(iii) Socios o accionistas de una sociedad en la que el liquidador
forme parte, o de las sociedades en las cuales tenga
participación, salvo aquellas que se encuentren inscritas en el
Registro de Valores y hagan oferta pública de ellos.

(iv) A personas con las que posea bienes en comunidad;

(v) A dependientes o profesionales que le presten servicio;

e. Haberse declarado por sentencia ejecutoriadasu responsabilidad


conforme al art. 27. Los veedores y liquidadores en el ejercicio de sus
funciones responden de culpa levisima; y la responsabilidad del art. 27
se da toda vez que hay un concierto entre el acreedor, el deudor y el
liquidador para dar una ventaja indebida al acreedor o a un tercero;

f. Por aplicación de sanciones gravísimas (letra c) art. 339);

g. Por reprobación del examen de conocimientos;

h. Por muerte;

i. El art. 34 agrega como causal de exclusión el hecho que el Liquidador se


niegue a asumir un procedimiento de liquidación sin causa justificada.

Existen también inhabilidades. Las inhabilidades se refieren a la imposibilidad


de participar en un determinado procedimiento concursal, y no se refiere a la
prohibición absoluta de ser liquidador. Las inhabilidades se encuentran en el
art. 21:

141
(a) No puede participar en procedimientos concursales en que sea persona
relacionada del deudor.

(b) No puede participar si es acreedor o deudor del deudor, o si tiene un


interés económico directo o indirecto en el procedimiento.

(c) No pueden participar los liquidadores que tienen objetada la cuenta final
de administración en un procedimiento concursal. UGARTE cree que este
es un error de orden de la ley, porque se trata más bien de una prohibición
temporal y no de una inhabilidad para participar de un procedimiento en
específico. También señala que es muy excesivo o exigente porque permite
o da la posibilidad a los acreedores de frenar el ejercicio del liquidador por
medio de objetar la cuenta final de administración.

(d) Que se encuentre suspendido (arts. 14 y 337 Nº 5). Este Nº 5 se refiere al


caso en que la SUPERIR objete la cuenta final de administración.

(5) Otorgar, en tiempo y forma, la garantía que se refiere el art. 16.

“Requisitos. Podrá ser Liquidador y solicitar su inclusión en la Nómina de


Liquidadores, toda persona natural que cumpla con los siguientes requisitos:

1) Contar con un título profesional de contador auditor o de una profesión de a lo


menos diez semestres de duración, otorgado por universidades del Estado o
reconocidas por éste, o por la Corte Suprema, en su caso.

2) Contar con, a lo menos, cinco años de ejercicio de la profesión que haga valer.

142
3) Aprobar un examen de conocimientos para Liquidadores, en los términos del
artículo 14.

4) No estar afecto a alguna de las prohibiciones establecidas en el artículo 17.

5) Otorgar, en tiempo y forma, la garantía señalada en el artículo 16.” (art. 32).

Responsabilidad. Los liquidadores responden de culpa levísima (art.


35):“Responsabilidad. La responsabilidad civil de los Liquidadores alcanzará hasta la
culpa levísima y se podrá perseguir, cuando corresponda, en juicio sumario una vez
presentada la Cuenta Final de Administración, conforme lo dispuesto en los
artículos 49 y siguientes de esta ley, y sin perjuicio de la responsabilidad legal en
que pudiere incurrir.

Sin perjuicio de lo anterior, si el Liquidador no rindiere su Cuenta Final de


Administración dentro del plazo regulado en el artículo 50, su responsabilidad civil
también podrá perseguirse desde el vencimiento de dicho plazo.”

La lógica que hay detrás de este tipo de responsabilidad es que se supone que son
personas profesionales y expertas en la realización de este tipo de procedimientos,
por lo que no se le puede exigir un estándar de hombre medio.

Normas relativas a los honorarios (Art. 39). Se trata de una tabla progresiva en
atención a la masa partible que fija los honorarios del liquidador. Estos honorarios
son las únicas remuneraciones a las que tiene derecho, y con esos honorarios debe
cubrir todos los gastos que tenga de asesores. Esto último es un incentivo para ser
medido en la contratación de asesores y de terceros.Cuando se requiere realizar
gastos muy grandes en contratación de terceros se requerirá aprobación de los
acreedores. Un ejemplo muy común es cuando hay que reconstruir toda la

143
administración de una empresa, en los que posiblemente se requerirá una asesoría
de una empresa grande.

Respecto de todos los honorarios de que tiene derecho el liquidador, hay un 10%
que quedará retenido hasta que rinda cuenta final de su administración. Esto
principalmente porque pasaba antes que los liquidadores se llevaban gran parte de
sus honorarios al principio de la quiebra, y luego estas se mantenían
indefinidamente sin que se terminaran, ello porque existían pocos incentivos para
que el síndico siguiera diligentemente con la quiebra.

El art. 41 dice que con un quórum calificado (mayoría absoluta de los créditos en
razón de su monto) se pueden hacer contrataciones especiales: “Contrataciones
especializadas. No obstante lo dispuesto en el artículo anterior y previo acuerdo
adoptado en Junta de Acreedores con Quórum Calificado, el Liquidador podrá
contratar, con cargo a los gastos del Procedimiento Concursal de Liquidación,
personas naturales o jurídicas para que efectúen actividades especializadas
debidamente calificadas como tales por la Junta de Acreedores.”(Inc. 1).

CLASE JESU ARGANDOÑA07/09/2016


2. Veedor.Surge precisamente por el objetivo de la ley de especializar el proceso de
liquidación mismo y los de reestructuración que no impliquen la liquidación de los
bienes del deudor. Los veedores buscan llegar a acuerdos con los acreedores para
reestructurar el pasivo del deudor.

Según el art 2 Nº 40) de la Ley 20.720 el veedor es “[a]quella persona natural sujeta
a la fiscalización de la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento, cuya
misión principal es propiciar los acuerdos entre el Deudor y sus acreedores, facilitar
la proposición de Acuerdos de Reorganización Judicial y resguardar los intereses de

144
los acreedores, requiriendo las medidas precautorias y de conservación de los
activos del Deudor, de acuerdo a lo establecido en esta ley”.

Tiene facultades menos definidas por la ley, ya que actúa como mediador y eso
supone facultades más amplias (hay un objeto más amplio que en un proceso de
liquidación, que está más reglado y es más estricto).

Principales deberes del veedor. Están puestos en términos mucho más genéricos.
Así, el art. 25 de la ley señala lo siguiente:

“Deberes del Veedor. La función principal del Veedor es propiciar los acuerdos entre
el Deudor y sus acreedores, facilitando la proposición y negociación del Acuerdo.
Para estos efectos, el Veedor podrá citar al Deudor y a sus acreedores en cualquier
momento desde la publicación de la Resolución de Reorganización hasta la fecha en
que debe acompañar al tribunal competente el informe que regula el numeral 8) del
artículo 57, con el propósito de facilitar los acuerdos entre las partes y propiciar la
celebración de un Acuerdo de Reorganización Judicial en los términos regulados en
la presente ley.

En el ejercicio de sus funciones deberá especialmente:

1) Imponerse de los libros, documentos y operaciones del Deudor.

2)Incorporar y publicar en el Boletín Concursal copia de todos los antecedentes y


resoluciones que esta ley le ordene. Las resoluciones son, por ejemplo, llamar a la
audiencia para determinar el pasivo.

3)Realizar las inscripciones y notificaciones que disponga la Resolución de


Reorganización.

145
4) Realizar las labores de fiscalización y valorización que se le imponen en los
artículos 72 y siguientes, referidas a la continuidad del suministro, a la venta
necesaria de activos y a la obtención de nuevos recursos.

5)Arbitrar las medidas necesarias en el procedimiento de determinación del pasivo


establecido en los artículos 70 y 71.

6)Realizar la calificación de los poderes para comparecer en las Juntas de


Acreedores e informar al tribunal competente sobre la legalidad de éstos, cuando
corresponda.

7) Impetrar las medidas precautorias y de conservación de los activos del Deudor


que sean necesarias para resguardar los intereses de los acreedores, sin perjuicio
de los acuerdos que éstos puedan adoptar. Una vez tomado el acuerdo de
reorganización, el veedor debe velar por su cumplimiento, para lo cual puede pedir
medidas conservativas. Los acuerdos de reorganización se diferencian
principalmente con los de liquidación por el hecho de que no hacen perder al
deudor la administración de sus bienes, de manera que el deber del veedor es más
bien de fiscalización.

8) Dar cuenta al tribunal competente y a la Superintendencia de cualquier acto o


conducta del Deudor que signifique una administración negligente o dolosa de sus
negocios y, con la autorización de dicho tribunal, adoptar las medidas necesarias
para mantener la integridad de los activos, cuando corresponda.

9) Rendir mensualmente cuenta de su actuación y de los negocios del Deudor a la


Superintendencia, y presentar las observaciones que le merezca la administración

146
de aquél. Esta cuenta será enviada, además, por correo electrónico a cada uno de
los acreedores.

10) Ejecutar todos los actos que le encomiende esta ley”.

Requisitos. Son prácticamente los mismos que para ser liquidador. Están señalados
en el art. 13 de la Ley Nº 20.720, el cual dispone lo siguiente:

“Requisitos. Podrá solicitar su inclusión en la Nómina de Veedores toda persona


natural que cumpla con los siguientes requisitos:

1) Contar con un título profesional de contador auditor o de una profesión de a lo


menos diez semestres de duración, otorgado por universidades del Estado o
reconocidas por éste, o por la Corte Suprema, en su caso;

2) Contar con, a lo menos, cinco años de ejercicio de la profesión que haga valer;

3) Aprobar el examen para Veedores a que se refiere el artículo siguiente;

4)No estar afecto a alguna de las prohibiciones establecidas en el artículo 17, y

5) Otorgar, en tiempo y forma, la garantía señalada en el artículo 16”.

En términos de prohibiciones y inhabilidades se mantiene lo mismo dicho respecto


de los liquidadores.

Existe un artículo transitorio que permite a las personas (ex síndicos) estar en
ambas listas por un plazo de hasta 5 años, de manera que una vez que se cumple
este plazo, tienen que optar por estar en una sola de ellas. Este es el art. 10

147
transitorio, el cual en su inc. 1 señala que: “Sin perjuicio de lo dispuesto en el
artículo 42 y por los primeros cinco años contados desde la publicación de esta ley,
los Liquidadores y los Veedores podrán estar inscritos a la vez en la Nómina de
Veedores y en la Nómina de Liquidadores”.

Nominación del veedor. La reorganización siempre la pide el deudor, ya que es un


procedimiento de mediación. Se hace la solicitud al tribunal, quien notifica a los 3
mayores acreedores del deudor y se sigue con el mismo procedimiento de
nombramiento del liquidador.

Normas relativas a los honorarios. Se determinan por un acuerdo de los


acreedores y el deudor en una audiencia establecida al efecto. La solución es esta
porque es un procedimiento más amigable que la liquidación, por lo que la ley
asume que se podrá llegar a un acuerdo. Al no haber gasto de quiebra, los
honorarios los soportará el deudor. Es importante que se dé el acuerdo y se exige,
porque el pago de honorarios afecta directamente al patrimonio del deudor y por
eso puede haber interés de los acreedores en la determinación del monto.

*Los veedores no tienen intervención en los acuerdos extrajudiciales de


reorganización, ya que esa es una negociación que se da aparte, y únicamente lo
que se hace es presentarlo al tribunal y ver si hay alguna de las causales que señala
la ley para impugnar el acuerdo.

Responsabilidad de los veedores.La regla relativa a la responsabilidad está


establecida en el art. 15, el cual dice lo siguiente:

“Responsabilidad. La responsabilidad civil del Veedor alcanzará hasta la culpa


levísima y podrá perseguirse cuando corresponda, en cuyo caso se aplicarán las
reglas del juicio sumario, una vez presentada la Cuenta Final de Administración,

148
conforme a lo dispuesto en el Párrafo 2 del Título 3 del Capítulo II de esta ley, y sin
perjuicio de la responsabilidad legal en que pudiere incurrir.

Sin perjuicio de lo anterior, si el Veedor no rindiere su Cuenta Final de


Administración dentro del plazo regulado en el artículo 29, su responsabilidad civil
también podrá perseguirse desde el vencimiento de dicho plazo”.

*En cuanto a la rendición de cuentas, prohibiciones, inhabilidades y todo lo demás,


le son aplicables por RG las normas que rigen a los liquidadores.

3. Arbitro concursal.La ley permite que la mayoría de estos procedimientos


concursales se realice por medio de arbitraje, debiendo ser un árbitro de derecho
(este arbitraje no puede ser secreto debido a la obligación de publicar las
resoluciones y todo en el boletín concursal). Por ser un procedimiento que tiene
importancia desde el punto de vista del orden público, podría pensarse que no
corresponde que se deje someterlo a arbitraje, y por ello se han establecido
quórums bastante altos para su determinación.

*Hay pocos incentivos para realizar estos procesos por medio de arbitraje, porque
al final, el hecho de llegar a la liquidación o reorganización implica que hay pocos
recursos para pagar todas las obligaciones que se tienen, y con los árbitros se
asumen costos muy altos.

Concepto de arbitraje concursal. Según la SUPERIR, se trata de un abogado con al


menos 10 años de ejercicio de la profesión, autorizado para actuar como tribunal
en procedimientos concursales.

Constitución. Pueden actuar tanto en procedimientos de liquidación como de


reorganización, y se constituye de distinta manera en cada uno:

149
“Constitución del arbitraje. Podrán ser sometidos a arbitraje los Procedimientos
Concursales de Reorganización y Liquidación.

En (1)el Procedimiento Concursal de Reorganización, el Deudor manifestará su


voluntad de someterse a arbitraje, acompañando al tribunal competente, junto con
los antecedentes singularizados en el artículo 56 de esta ley, las cartas de apoyo
suscritas por acreedores que representen a lo menos la mayoría absoluta del
pasivo del deudor, las cuales indicarán el nombre de los árbitros titular y suplente
designados por los acreedores y sus honorarios.

En (2)el Procedimiento Concursal de Liquidación, la Junta Constitutiva referida en


el artículo 193 (esta es la junta de acreedores, y además debe haber acuerdo del
deudor) de esta ley o cualquier Junta posterior podrá acordar, con Quórum Especial
(este implica que los acreedores tienen que representar 2/3 del pasivo), someterse
a arbitraje, designar a los árbitros titular y suplente, y fijar sus honorarios.

En ambos casos el nombramiento de los árbitros titular y suplente deberá recaer en


uno vigente de la Nómina de Árbitros Concursales y podrá ser reemplazado por otro
árbitro de la referida nómina, por acuerdo de los acreedores, con las mayorías
señaladas anteriormente, y con el consentimiento del Deudor en los Procedimientos
Concursales de Reorganización” (Art. 295 Ley 20.720).

Requisitos para formar parte de la Nómina de Árbitros Concursales.Estos


requisitos están señalados en el art. 297 de la ley, el cual establece:

“Nómina de Árbitros Concursales. Para formar parte de la Nómina de Árbitros


Concursales se requiere ser (1)abogado con una experiencia no inferior a diez años

150
de ejercicio en la profesión. (2)No podrán formar parte de esta nómina los
Veedores ni los Liquidadores.

Los abogados que postulen a formar parte de la Nómina de Árbitros Concursales


(3)deberán estar capacitados en derecho concursal y, en particular, sobre las
disposiciones de esta ley y de las leyes especiales que rijan estas materias.

Para los efectos de lo previsto en este artículo, la Superintendencia dictará los


cursos de especialización necesarios para la capacitación de los Árbitros
Concursales, al menos una vez al año.

La Nómina de Árbitros Concursales será llevada por la Superintendencia, y en su


formación, menciones y mantención, se estará a lo dispuesto en los artículos 9° y
siguientes de esta ley, en cuanto sea pertinente”.

Características del árbitro.De acuerdo al art. 296, el árbitro deberá ser de derecho
y unipersonal. Al efecto, este art. señala:

“Naturaleza del arbitraje y constitución del tribunal arbitral. El árbitro será de (1)
derecho y (2)unipersonal.

El árbitro se considerará constituido con su aceptación en el cargo y deberá prestar


juramento ante el secretario del tribunal al que le hubiere correspondido conocer
del Procedimiento Concursal respectivo. En este mismo acto, el árbitro fijará su
domicilio, el que deberá estar ubicado en la misma jurisdicción del tribunal
señalado.

El árbitro designará a un secretario, cargo que deberá ser ejercido por un abogado.

151
La competencia del árbitro se extiende a todo cuanto sea necesario para la
tramitación de los Procedimientos Concursales de Reorganización o de Liquidación y
a los incidentes que se promuevan durante ellos.

Si el Acuerdo de Reorganización Judicial fuere rechazado en los términos previstos


en el artículo 96 de esta ley, el árbitro remitirá el expediente al tribunal competente
que dictó la Resolución de Reorganización”.

Que sea árbitro de derecho quiere decir que tiene que ajustarse tanto a las normas
sustantivas como a las de procedimiento. Sin embargo, hay una norma especial
respecto de la apreciación de las pruebas, norma que está contenida en el art. 298:

“Facultades especiales del árbitro. El árbitro tendrá las siguientes facultades


especiales:

1) Podrá admitir, además de los medios probatorios establecidos en el Código de


Procedimiento Civil, cualquier otra clase de prueba y decretar de oficio las
diligencias probatorias que estime conveniente, con citación a las partes. Tendrá,
además, en todo momento, acceso a los libros, documentos y medios de cualquier
clase en los cuales estén contenidas las operaciones, actos y contratos del deudor, y

2) Apreciará la prueba de acuerdo con las normas de la sana crítica y deberá


consignar en la respectiva resolución los fundamentos de dicha apreciación”.

*Estas facultades especiales podrían ser un incentivo para querer pagar un árbitro
en vez de acudir a un tribunal.

Puede ser que en ciertos casos el árbitro necesite de facultades de imperio para
poder llevar a cabo algunas actuaciones (en el fondo, necesitar el auxilio de la

152
fuerza pública). En la ley no hay claridad sobre si es que el árbitro concursal puede
hacerlo él directamente, o si es que debe hacerlo necesariamente por medio de un
tribunal.

4. Martillero concursal.Es el individuo que saca a remate los bienes cuando se


produce el proceso de realización de bienes (no está típicamente en los procesos de
reorganización, aunque podría usarse si es que en el acuerdo se decide liquidar
algún bien, pero está pensada su figura para el proceso de liquidación). Para
hacerlo en el contexto de un procedimiento concursal hay que cumplir con ciertas
cosas.

El art 2 nº 20 Ley 20.720 define al martillero concursal de la siguiente manera: “20)


Martillero Concursal: Aquel martillero público que voluntariamente se somete a la
fiscalización de la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento, cuya
misión principal es realizar los bienes del Deudor, en conformidad a lo
encomendado por la Junta de Acreedores y de acuerdo a lo establecido en esta ley”.

Este es un interviniente que sigue las instrucciones del liquidador, no es que tome
decisiones por sí mismo.

En los procedimientos concursales se pueden realizar por medio de martillo, tanto


bienes muebles como inmuebles (en materia civil individual la venta de los
inmuebles se da únicamente por medio de subasta pública).

Requisitos para ser martillero concursal.Los requisitos están enunciados en el art.


213 de la ley. Este artículo dispone que:

“Del Martillero Concursal. Sin perjuicio de las disposiciones contenidas en la ley N°


18.118, sobre ejercicio de la actividad de martillero público, se entenderán como

153
martilleros habilitados para rematar bienes de un Procedimiento Concursal sólo
aquellos (1)incluidos en una nómina que al efecto confeccionará y llevará la
Superintendencia.

Cualquier martillero que (2)cumpla con los requisitos establecidos en el artículo 14,
en lo que les sean aplicables, y que (3)se someta voluntariamente a las
disposiciones de esta ley y a la fiscalización de la Superintendencia exclusivamente
respecto de los Procedimientos Concursales en los que participe, podrá solicitar su
inclusión en la Nómina de Martilleros Concursales”.

*Al final el (2) y el (3) son los requisitos para entrar en la nómina.

Honorarios del martillero. Se llevan comisiones sobre el precio de realización del


bien: máximo un 2% en los muebles y un 7% para los inmuebles. Este porcentaje lo
puede aumentar la junta de acreedores con quórum calificado (mayoría absoluta
del pasivo).

“Comisión del Martillero Concursal. El Martillero Concursal percibirá una comisión


única por el ejercicio de sus funciones, equivalente a un porcentaje sobre el monto
total de realización de los bienes encargados rematar. Esta comisión será de cargo
del adjudicatario.

La comisión señalada no podrá exceder de un 2% sobre el monto total de


realización de bienes inmuebles y de un 7% sobre el monto total de realización de
bienes muebles.
La Junta de Acreedores, con Quórum Calificado, podrá acordar aumentar la
comisión correspondiente a un Martillero Concursal, en cuyo caso el aumento será
de cargo del acreedor o acreedores que expresamente lo consientan. El señalado
aumento de comisión deberá consignarse en el acuerdo de venta al martillo.

154
Cualquier contravención a este artículo será sancionada conforme al artículo 27 de
esta ley.

A los Martilleros Concursales no les serán aplicables las comisiones reguladas en la


ley N° 18.118”(Art. 215 Ley 20.720).

Nominación del martillero. Lo propone el liquidador y lo aprueba la junta de


acreedores.

Tiene obligación de rendir cuenta, y se ajusta a las normas que rigen a los
liquidadores y a los veedores al respecto.

“Rendición de cuenta. Dentro del quinto día siguiente a la fecha del remate, el
Martillero Concursal deberá rendir ante la Superintendencia una cuenta detallada y
desglosada de los bienes rematados, así como de los ingresos, gastos y resultado
final del remate o subasta, y publicarla en el Boletín Concursal. La Superintendencia
podrá objetar u observar su contenido, conforme a lo previsto en el número 5) del
artículo 337.

Asimismo, el Liquidador, el Deudor y los acreedores podrán objetar la cuenta


presentada por los Martilleros Concursales, siendo aplicable lo dispuesto en los
artículos 49 y siguientes de esta ley en cuanto sea procedente” (Art. 216 Ley
20.720).

*No es que sea exclusivamente un martillero concursal, sino que igual podría
ejercer en procedimientos individuales y no concursales.

155
5. Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento.Es el organismo de la
administración pública que tiene por objeto fiscalizar, súpervigilar, a los
intervinientes en los procedimientos concursales (es común a todos los
procedimientos). Está a cargo del superintendente y que es un cargo de confianza
del presidente, al que se puede postular por medio de concursos públicos – es un
cargo de alta dirección pública, en que se busca que haya cierta meritocracia,
aunque igual no es tan así.

“Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento. Naturaleza Jurídica. Créase


una persona jurídica denominada Superintendencia de Insolvencia y
Reemprendimiento, como un servicio público descentralizado con personalidad
jurídica y patrimonio propios, en adelante la Superintendencia.

La Superintendencia será una institución autónoma, que se relacionará con el


Presidente de la República a través del Ministerio de Economía, Fomento y Turismo,
y se regirá por esta ley.

Su domicilio será la ciudad de Santiago, sin perjuicio de las direcciones regionales


que pueda establecer el Superintendente en distintas ciudades del país.

La Superintendencia tendrá, para todos los efectos legales, el carácter de institución


fiscalizadora de acuerdo a lo dispuesto en el decreto ley N° 3.551, de 1981, y su
legislación complementaria, y estará afecta al Sistema de Alta Dirección Pública
establecido en la ley N° 19.882”.

Facultades de la SUPERIR.

(1) Normativa. Puede dictar normas que son obligatorias para los intervinientes de
los procedimientos concursales.

156
(2) Fiscalizadora. Tiene manifestaciones de esto en la solicitud de rendición de
cuentas, objetar dichas rendiciones, etc.

(3) Sancionatoria. Puede imponer multas, solicitar remociones, etc.

(4) Consultiva. Tiene un rol como asesora del ministerio de economía en materias
concursales.

(5) Interpretativa. Sobre las normas relativas a procedimientos concursales.

La diferencia con otras superintendencias es que el ejercicio de ellas se da en el


contexto de un procedimiento concursal.

“Atribuciones y Deberes. Para el cumplimiento de sus funciones, la


Superintendencia tendrá las siguientes atribuciones y deberes:

1)Fiscalizar las actuaciones de los Liquidadores, Veedores, Martilleros Concursales


que se sometan voluntariamente al control de la Superintendencia en virtud de lo
dispuesto en esta ley, administradores de la continuación de las actividades
económicas y asesores económicos de insolvencia, en adelante en conjunto como
los "entes fiscalizados" o los "fiscalizados", en todos los Procedimientos Concursales
y asesorías económicas de insolvencias, en todos los aspectos de su gestión, sean
técnicos, jurídicos o financieros.

2) Interpretar administrativamente las leyes, reglamentos y demás normas que


rigen a los fiscalizados, sin perjuicio de las facultades jurisdiccionales que
correspondan a los tribunales competentes.

157
3) Examinar, cuando lo estime necesario, los libros, cuentas, archivos, documentos,
contabilidad y bienes relativos a Procedimientos Concursales o a asesorías
económicas de insolvencias. La no exhibición o entrega de lo señalado en este
numeral por parte del ente fiscalizado a la Superintendencia para su examen, se
considerará falta grave para los efectos del número 7) de este artículo.

Toda la documentación de los Procedimientos Concursales, del Deudor y la que se


genere en el desarrollo de asesorías económicas de insolvencia deberán ser
conservadas por el ente fiscalizado hasta por un año después de encontrarse
aprobada la Cuenta Final de Administración o de entregado el expediente de
asesoría económica de insolvencias, si no hubiese tenido reparos.

El Superintendente de Insolvencia y Reemprendimiento podrá autorizar la


eliminación de parte de este archivo antes de ese plazo y exigir que determinados
documentos o libros se guarden por plazos mayores. Podrá, asimismo, facultar a los
entes fiscalizados para conservar reproducciones mecánicas, fotográficas o digitales
de esta documentación en reemplazo de los originales.

En ningún caso podrán destruirse los libros o instrumentos que digan relación
directa o indirecta con algún asunto o litigio pendiente.

El Superintendente podrá autorizar a los entes fiscalizados para devolver al Deudor


parte de sus libros y papeles antes del plazo señalado en el párrafo segundo de este
numeral. Lo dispuesto en este numeral se entiende sin perjuicio de lo que disponga
el tribunal competente.

4) Impartir a los Veedores, Liquidadores, administradores de la continuación de las


actividades económicas, Martilleros Concursales que se sometan voluntariamente
al control de la Superintendencia y asesores económicos de insolvencias,

158
instrucciones de carácter obligatorio sobre las materias sometidas a su control y, en
especial, fijar normas para la presentación de informes, estados de avance y
cuentas provisorias o definitivas que deban presentar los fiscalizados.

5)Objetar las Cuentas Finales de Administración en conformidad a lo dispuesto en el


Párrafo 2 del Título 3 del Capítulo II de esta ley.

Asimismo, podrá actuar como parte en este procedimiento cuando la objeción fuere
promovida por los acreedores o el Deudor.

6) Actuar como parte interviniente en los procesos criminales respecto de los


delitos que cometiere el Veedor, Liquidador y demás entes fiscalizados,
interponiendo la querella respectiva ante el Juez de Garantía competente.
Asimismo, denunciará ante el Ministerio Público cualquier hecho que revista
carácter de delito del que tome conocimiento en el ejercicio de sus funciones,
proveyendo los antecedentes que obren en su poder.

7) Poner en conocimiento del tribunal de la causa o de la Junta de Acreedores


cualquier infracción, falta o irregularidad que se observe en la conducta del ente
fiscalizado y proponer, si lo estimare necesario, su remoción al juez de la causa o su
revocación a la Junta de Acreedores, en el Procedimiento Concursal de que se trate.

El tribunal, a solicitud de la Superintendencia, conocerá de la petición de remoción a


que se refiere el párrafo anterior, en la forma establecida para los incidentes,
cuando los fiscalizados incurran:

a) En faltas reiteradas.

b) En faltas graves.

159
c) En el incumplimiento del pago de las multas señaladas en esta ley.

d) En irregularidades en relación con su desempeño o si se encuentran en notoria


insolvencia.

Se entenderá que se incurre en faltas reiteradas cuando dentro un mismo


Procedimiento Concursal se cometan dos o más faltas, sin consideración de su
gravedad, habiendo sido éstas sancionadas previamente. Asimismo, se incurre en
falta reiterada cuando respecto de un mismo ente fiscalizado se han aplicado, en
uno o en distintos Procedimientos Concursales, seis o más sanciones en el plazo de
tres años, sin consideración de su gravedad, constituyendo este último caso una
falta gravísima.

El tribunal, de oficio o a petición del Superintendente, suspenderá al ente fiscalizado


mientras se tramita el incidente de remoción, cuando estime que se ha afectado o
se puede afectar la adecuada administración del concurso o considere que hay
presunciones graves de la existencia de las causales invocadas para la remoción.
Sin perjuicio de lo anterior, en cualquier estado del Procedimiento Concursal, el juez
de oficio podrá suspender al ente fiscalizado de sus funciones en él, cuando
considere que los antecedentes lo ameritan.

Podrán intervenir como coadyuvantes el Deudor y los acreedores individualmente.


Una vez firme la remoción, la Superintendencia podrá excluir al ente fiscalizado de
la nómina respectiva.

8) Informar a los tribunales de justicia y al Ministerio Público cuando sea requerida


por éstos, o le soliciten informes periciales en materias de su competencia.

160
9) Llevar los registros de los Procedimientos Concursales, continuaciones de
actividades económicas y asesorías económicas de insolvencias, los que tendrán
carácter de públicos, y extender las certificaciones y copias que procedan.

10) Asesorar al Ministerio de Economía, Fomento y Turismo en materias de su


competencia, y proponer las reformas legales y reglamentarias que sea aconsejable
introducir.

11) Recibir, dentro del ejercicio de sus funciones fiscalizadoras, las denuncias que
los acreedores, el Deudor, o terceros interesados formulen en contra del desempeño
del ente fiscalizado.

12) Llevar las nóminas de Veedores, Liquidadores, árbitros, Martilleros Concursales,


administradores de la continuación de las actividades económicas y asesores
económicos de insolvencias en la forma que las leyes le ordenen y verificar el
cumplimiento de los requisitos para que los referidos entes sujetos a su fiscalización
se mantengan en las respectivas nóminas.

13) Desempeñar las demás funciones que le encomienden las leyes.

Para el cumplimiento de las funciones fiscalizadoras señaladas en este artículo, la


Superintendencia tendrá las mismas facultades que el artículo 37 del Código de
Procedimiento Civil otorga a los funcionarios que indica, pudiendo retirar los
expedientes judiciales sin más formalidades que las prescritas para los receptores”

*UGARTE agregó algo sobre el rol de la superintendencia con el deudor...

En sus facultades sancionatorias, puede imponer multas de distinto tipo, pero


siempre tiene que cumplir con la normativa de procedimientos administrativos

161
(tiene que haber oportunidad para efectuar descargos, producir pruebas, poder
interponer recursos, que las resoluciones que se dicten estén fundadas). Las multas
son las que señala el art. 339:

“Sanciones. Las infracciones calificadas en el artículo anterior serán sancionadas


conforme a la escala siguiente:

a) Las infracciones leves serán sancionadas con censura por escrito o multa a
beneficio fiscal de 1 a 50 unidades tributarias mensuales.

b) Las infracciones graves serán sancionadas con multa a beneficio fiscal de 51 a


100 unidades tributarias mensuales o suspensión hasta por seis meses para asumir
en un nuevo Procedimiento Concursal.

c) Las infracciones gravísimas serán sancionadas con multa a beneficio fiscal de 101
a 1000 unidades tributarias mensuales, suspensión hasta por seis meses para
asumir en un nuevo Procedimiento Concursal, o la exclusión de la respectiva
nómina.

La multa específica se determinará apreciando fundadamente la gravedad de la


infracción y el perjuicio causado a la masa, al Deudor o a terceros que tengan
interés en el Procedimiento Concursal respectivo”.

El art. 338 inc 2º de la Ley Nº 20.720 es el que califica las infracciones: “Para los
efectos de la aplicación de las sanciones a que se refiere el inciso anterior, las
infracciones administrativas se clasificarán como leves, graves y gravísimas, tal
como se señala para las conductas descritas a continuación:

1) Leves:

162
a) El incumplimiento de plazos contenidos en instructivos o en instrucciones
específicas de la Superintendencia.

b) La infracción a las demás obligaciones previstas en las normas de carácter


general que haya dictado la Superintendencia y que no se consideren infracciones
graves o gravísimas.

c) El incumplimiento de leyes, instructivos, circulares o instrucciones particulares


emanadas de la Superintendencia, que no ocasionen perjuicio económico directo a
la masa, al Deudor o a terceros que tengan interés en el Procedimiento Concursal
respectivo.

2) Graves: incumplimiento de leyes, instructivos o circulares, que ocasionen perjuicio


económico a la masa, al Deudor o a terceros que tengan interés en el Procedimiento
Concursal respectivo.

3) Gravísimas: incumplimiento de leyes, debidamente representado por medio de


instrucciones específicas de la Superintendencia y que ocasionen perjuicio
económico a la masa, al Deudor o a terceros que tengan interés en el Procedimiento
Concursal respectivo”.

El recurso que procede en contra de este procedimiento administrativo es la


reclamación y quien conoce son los JL en lo civil.

163
08/09/2016 (UGARTE) Y 13/09/2016 (OCHAGAVÍA)
PROCEDIMIENTO CONCURSAL DE REORGANIZACIÓN

Es un procedimiento que aplica a las Empresas deudoras y busca la reorganización y


restructuración del pasivo y el activo del deudor para mantener a la empresa deudora
como una empresa viable en el tiempo, así como lograr el pago de los acreedores. No
tiene por objeto la realización de los bienes del deudor.

Bajo el antiguo sistema el juicio era muy difícil para la empresa con dificultades
económicas, era muy difícil tener una segunda oportunidad. La nueva ley busca que esta
empresa que se encuentre con dificultades económicas pueda reestructurar sus activos y
pasivos de manera de salir a flote. Si bien el C. de C. en las normas del Libro IV
contemplaba ciertos convenios que buscaban prevenir o alzar la quiebra, a la Comisión
Redactora de la Ley Nº 20.720 le parecieron insuficientes principalmente por 2 razones:

1. Producto de varias modificaciones a la ley, los acreedores podían obligar al deudor


a presentar un convenio judicial que le permitían continuar con su giro (firmar un
convenio judicial). Pero, ¿por qué los acreedores pueden obligar al deudor a
continuar con un giro que él no quiere continuar? Hoy los acreedores no pueden
forzar al deudor a someterse a un acuerdo de reorganización y estos solo tendrán
lugar por voluntad de la empresa deudora. Según OCHAGAVÍA, el argumento no es
del todo convincente, este se basaba únicamente en no caer en quiebra: Con la
antigua legislación el deudor que no cumplía con el convenio, la sanción era que
caía en quiebra.

2. La Comisión llegó a la conclusión de que el deudor no se encontraba en igualdad


de condiciones con sus acreedores para negociar la manera en que se iba a seguir
adelante con el negocio del deudor. Esto fue porque bajo las normas vigentes a esa
época, la presentación de un convenio por regla general no suspendía los derechos

164
que tenían los acreedores para ejecutar al deudor, de modo que mientras el
deudor negociaba con sus acreedores, los demás acreedores podían iniciar juicios
ejecutivos, juicios de desposeimiento, entre otros.Esto ponía al deudor en la
posición de negociarcómo salir adelante y también defenderse de los esfuerzos de
cobro que podían estar intentando uno o más de sus acreedores.
Excepcionalmente, solo en la medida en que la proposición de convenio se
presentara con el apoyo de una mayoría importante de los acreedores: 2/3 de los
acreedores por ejemplo (art. 177 bis del antiguo Libro IV del C. de C.)se suspendían
el derecho de los acreedores para ejecutar al deudor.

El derecho de ejecución de los acreedores no se suspendía salvo que el convenio


judicial preventivo se presentara con el apoyo de 2/3 o más de los pasivos del
deudor.

Desde esta perspectiva, no solo se estaba en una circunstancia en que el deudor


tenía que dividir sus esfuerzos: negociar y defenderse, sino que podía resultar que,
por ejemplo,si el terreno donde la fábrica del deudor estaba construida se
encontraba hipotecada en favor de un acreedor y dicho acreedor ejecutaba esa
hipoteca, a pesar de que hubiera logrado un gran acuerdo con la mayoría de los
acreedores, y así tener el respaldo mayoritario de los acreedores para sacar
adelante la empresa, pero resultar que por haber hipotecado la fábrica o el
inmueble en el cual realizaba el núcleo de sus operaciones a un acreedor no
favorable al acuerdo, perder esa fábrica por haberla ejecutado este acreedor en el
proceso de negociación. Entonces, no solamente dividía sus esfuerzos, sino que
estos podían sercompletamente infructuosos ya que nada obstaba a que se
perdieran bienes esenciales para la administración de la sociedad y para el manejo
y la continuación de la misma por el hecho de la realización de las garantías.

165
Desde la mirada del legislador de la Ley Nº 20.720 esto era un problema muy
complejo y que a juicio del mismo en esto residía la razón de que en Chile no
existieran muchos convenios judiciales exitosos, en los que hubiera sido posible
partir con una compañía en insolvencia que se transformara en una historia
distinta.

En cambio, en EEUU constantemente las compañías se acogen usualmente a una


figura llamada el chapter 11 de la ley de quiebras norteamericana, que son
básicamente acuerdos de reorganización en los que el deudor logra reestructurar
su negocio para que éste pueda funcionar.

Así, nuestra ley crea una institución nueva que es la protección financiera
concursal.

a) Características.

1. Procedimiento judicial. Siempre se realiza con la intervención de un juez o


eventualmente de un árbitro concursal.

2. Es un procedimiento con etapas similares a las de un procedimiento de


liquidación, en el sentido que el avance del proceso se realiza normalmente por
junta de acreedores.

3. Quien hace las veces de liquidador es el veedor,que interviene en el


procedimiento buscando llegar a un acuerdo favorable para los intervinientes.

4. Son siempre iniciados por el deudor. No existe en la ley la facultad de los


acreedores de dar inicio a un procedimiento de reorganización, se requiere que sea
el deudor quien esté dispuesto a hacerlo. La ley ha querido incentivar que los

166
deudores soliciten procedimientos de reorganización, y lo ha hecho otorgándole
periodos de protección financiera concursal, por el cual se produce una suspensión
de las acciones de ejecución de los bienes del deudor, y otras medidas que
configuran un periodo protegido para el deudor de manera que tenga incentivos
para poder llegar a un acuerdo.

Está regulado en el Cap. III de la Ley Nº 20.720, en los arts. 54 y ss.

b) Procedimiento propiamente tal. Procedimiento de reorganización concursal aplica a


Empresas deudoras exclusivamente. Bajo la nueva ley solo el deudor puede presentar
un acuerdo de reorganización y se inicia de la siguiente manera:

Se inicia mediante (1)una solicitud de reorganización que se realiza ante el tribunal


competente (el del domicilio del deudor).Esta solicitud que se presenta, en el caso de
Santiago, en el centro de distribución de causas, y en los casos en que no haya
distribución de causas ante el mismo tribunal, está basada en un formato que está
presente en la página web de la SUPERIR. La ley ha querido facilitar este trámite lo más
posible, tanto así, que el inc. 3 del art. 54 señala algunos elementos novedosos en
nuestra legislación que ayudan a esta tarea: “Un modelo de dicha solicitud se regulará
por la Superintendencia mediante una norma de carácter general, que estará
disponible en sus dependencias, en su sitio web y en las dependencias de los tribunales
con competencia en Procedimientos Concursales de conformidad a lo establecido en el
artículo 3º.”. El objetivo de lo anterior es que la reorganización sea lo más accesible
posible.

No se trata de una proposición de reorganización aún, sino que es una solicitud de


someterse al procedimiento de reorganización.

167
Una vez presentada la solicitud, se debe notificar a la SUPERIR (se debe llevar copia del
escrito timbrado por el tribunal competente o por la ICA competente), con lo cual (2) se
inicia el procedimiento de nominación del veedor (art. 55 Ley Nº 20.720). Este
procedimiento consiste en que se llevan los antecedentes de la solicitud de
reorganización a la SUPERIR, y esta notifica a los 3 acreedores más relevantes no
relacionados del deudor. La solicitud, entre otros antecedentes, tendrá un detalle de
todos los acreedores del deudor, y este detalle deberá ser respaldado por un informe
de un auditor independiente inscrito en un registro especial que lleva la SUPERIR,que
contenga un estado de deudas, el cual dirá quienes son los deudores, cuales tienen
preferencias o privilegios, cuales son relacionados: El certificado de un auditor
independiente contendrá básicamente un listado de las acreencias del deudor: cuales
son sus deudas, cuales son los montos, cuales es el origen, en que títulos constan,
quienes son sus acreedores, los datos de contacto de esos acreedores. ¿Por qué es
necesario hacer esto? Para que la SUPERIR cite a los acreedores conforme al art. 22,
oyendo a los 3 principales acreedores, quienes votarán por cabezas.

Con esa información, la SUPERIR notificará a los 3 mayores acreedores, quienes


propondrán a un veedor. El principio que hay detrás de la nominación es que primarán
lo que elija la mayoría, la cual se cuenta por cabeza entre esos 3 acreedores, y si no hay
mayoría se elegirá según quién tenga el mayor porcentaje de los pasivos del deudor.
Con ello la SUPERIR designará al veedor titular y al veedor suplente, emitiendo un (3)
certificado de nominación.

Con este certificado de nominación, y luego de que la SUPERIR notificará al deudor de


la nominación del veedor, el solicitante debe realizar una nueva presentación al
tribunal que corresponde, junto con el certificado de nominación del veedor y los
antecedentes que exige la ley (art. 56 Ley Nº 20.720). Estos son antecedentes que le
permitan al tribunal y a terceros entender cuál es la situación financiera del deudor

168
(también debe entregárseloal veedor). ¿Qué antecedentes serían útiles para este
efecto?

1. Relación de los bienes. Consiste en señalar todos los bienes que el deudor tiene, y
dentro de esta relación no sólo se tiene que presentar el detalle de los bienes de los
cuales el deudor es dueño, sino que también un detalle de los bienes de terceros
que garantizan obligaciones del deudor. Además, se debe presentar un detalle de
los bienes respecto de los cuales el deudor tiene la mera tenencia o la posesión, es
decir, aquellos bienes en los que no tiene el dominio. Todo lo anterior tiene por
objeto facilitar la determinación del pasivo.

En definitiva, el deudor deberá acompañar una descripción de todos sus activos, y


en esta descripción la ley le exige (a)el avalúo comercial de esos activos (cuánto
valen los bienes), además de señalar (b) si esos bienes son de su propiedad o son
bienes de tercero que el deudor los tiene bajo otro título; (c)si esos bienes son
esenciales para el desarrollo de su negocio o no (la ley no señala cuando un bien es
esencial, por lo que se deberá optar por aquellos bienes que para una persona
racional son esenciales); (d) y cuáles bienes se han dado en prenda o en hipoteca
de obligaciones del deudor, sea que se trata de bienes del deudor o de terceros.

“Antecedentes que deberá acompañar el Deudor. Aceptada la nominación por el


Veedor titular y suplente, la Superintendencia remitirá al tribunal competente el
Certificado de Nominación correspondiente. Paralelamente, el Deudor acompañará
lo siguiente:

1) Relación de todos sus bienes, con expresión de su avalúo comercial, del lugar en
que se encuentren y de los gravámenes que los afecten. Deberá señalar, además,
cuáles de estos bienes tienen la calidad de esenciales para el giro de la Empresa
Deudora;

169
2) Relación de todos aquellos bienes de terceros constituidos en garantía en favor
del Deudor. Deberá señalar, además, cuáles de estos bienes tienen la calidad de
esenciales para el giro de la Empresa Deudora;

3) Relación de todos aquellos bienes que se encuentren en poder del Deudor en una
calidad distinta a la de dueño;” (art. 56 Nºs 1,2 y 3).

2. El estado de deudas que se refiere el art. 55. Es el procedimiento por el cual se


determina preliminarmente el pasivo del deudor. Es preliminar porque en una
audiencia posterior se determinará más precisamente el pasivo. Este estado de
deudas hace las veces de determinación del pasivo del deudor y sirve a efectos de
contar los quórum.

El deudor deberá acompañar el mismo certificado de auditor independiente que el


que se mostró a la SUPERIR y que contiene un listado de todos sus pasivos, sus
montos, el título en que están justificados esos pasivos, quienes son sus acreedores
y cómo contactar a esos acreedores (Nº 4 art. 56).

“4) El certificado a que hace referencia el artículo 55, para la determinación del
pasivo afecto a los Acuerdos de Reorganización Judicial. El pasivo que se establezca
en este certificado deberá considerar el estado de deudas del Deudor, con una fecha
de cierre no superior a cuarenta y cinco días anteriores a esta presentación, con
indicación expresa de los créditos que se encuentren garantizados con prenda o
hipoteca y el avalúo comercial de los bienes sobre los que recaen las garantías. Este
certificado servirá de base para determinar todos los quórum de acreedores que se
necesiten en la adopción de cualquier acuerdo, hasta que se confeccione la nómina
de créditos reconocidos, conforme al procedimiento establecido en el Párrafo 2 del

170
Título 1 del Capítulo III de esta ley, con sus respectivas ampliaciones o
modificaciones, si existieren,” (art. 56 Nº 4).

3. Se deben presentar balances. Esto en el caso que el deudor lleve contabilidad


completa. Si se trata de personas jurídicas, por regla general llevarán contabilidad
completa, salvo ciertas excepciones (ej. sociedades agrícolas sujetas a renta
presunta, sociedades 14 ter, sociedades pequeñas con contabilidad simplificada).
Deben presentar un balance del término del ejercicio anterior y balances
provisorios que no deben tener una antigüedad mayor a 45 días desde la fecha de
la solicitud de reorganización.

De este modo, si la persona tiene un balance, debe llevar dicho balance,


correspondiente a su último ejercicio y un balance provisorio que tenga la
información financiera y contable con una fecha de cierre no superior a 45 días
anteriores al de la presentación (Nº 5 art. 56).

“5) Si el Deudor llevare contabilidad completa, presentará el balance


correspondiente a su último ejercicio y un balance provisorio que contenga la
información financiera y contable, con una fecha de cierre no superior a cuarenta y
cinco días anteriores a esta presentación.”(art. 56 Nº 5).

Hecho esto, el tribunal está en condiciones de (4) dictar la Resolución de


Reorganización, la cual es un AJ relevante en el procedimiento, y genera todos los
efectos de protección financiera concursal propios del proceso de reorganización. En
esta etapa el procedimiento de reorganización se transforma en un estado jurídico
excepcional, tal como lo son los procedimientos concursales, donde existen
excepciones a los principios generales del derecho (ej. Se modifican las normas del
derecho de prenda general). El rol de la SUPERIR en este periodo es bastante acotado a
fiscalizar los actos del veedor.

171
c) Menciones de la resolución de reorganización (Art. 57 Ley Nº 20.720) .

1. DeclaraIniciado el periodo de protección financiera concursal.Con esta resolución


se inicia un periodo durante el cual se debe llegar a un acuerdo, y si transcurrido
ese periodo no se ha llegado a acuerdo, cesa la protección financiera comercial, por
lo que pueden volver a realizarse los actos suspendidos por esta protección.La idea
de este periodo es darle al deudor las facilidades para poder reorganizarse y evitar
eventos que le impidan al mismo poder llegar a un acuerdo. Esta protección está
definida en el art. 2 Nº 31 de la Ley Nº 20.720, el cual señala lo siguiente: “31)
Protección Financiera Concursal: Aquel período que esta ley otorga al Deudor que se
somete al Procedimiento Concursal de Reorganización, durante el cual no podrá
solicitarse ni declararse su liquidación, ni podrán iniciarse en su contra juicios
ejecutivos, ejecuciones de cualquier clase o restituciones en los juicios de
arrendamiento. Dicho período será el comprendido entre la notificación de la
Resolución de Reorganización y el Acuerdo de Reorganización Judicial, o el plazo
fijado por la ley si este último no se acuerda.”

Hasta este momento (antes de la dictación de la resolución de liquidación) el


deudor no ha dicho en qué consiste la reorganización que pretende: nadie sabe si lo
que el deudor quiere proponer es la condonación del 100% de su deuda, o si
solicitará prorrogar sus deudas con una tasa de interés de mercado o prorrogarlas
sin una tasa de interés, o querrá capitalizar todo o parte de sus deudas, entre otras
cosas. La naturaleza de un acuerdo de reorganización es contractual, en el sentido
de que confluyen las voluntades de acreedores y del deudor. Hasta este momento
solo tiene conocimiento respecto de los acreedores, el deudor, sus bienes y el
estado de sus negocios, pero se desconoce lo que el deudor quiere hacer. No
obstante lo anterior, en la ley actual dentro de los 5 días siguientes a presentarse
los antecedentes requeridos por el art. 56, se exige al tribunal dictar una resolución

172
de reorganización, y esta resolución marca el inicio de la protección financiera
concursal. A partir de esa fecha y hasta la fecha que tenga lugar la junta de
acreedores que se pronunciará sobre el acuerdo de reorganización, el deudor se
encuentra en protección financiera concursal. Esta protección tiene un límite de
tiempo: La junta de acreedores no puede posponerse para siempre, sino que
necesariamente debe celebrarse el último día del periodo de protección financiera
concursal: Dicho periodo por regla general es de 30 días, pero se puede prorrogar
por 30 días más con el acuerdo de acreedores que representan el 30% del pasivo
del deudor, excluyendo los pasivos que sean de propiedad de personas
relacionadas, y para prorrogar por 60 días más es el 50%, es decir, basta la mitad
para extender el periodo de protección por hasta 90 días. Esto último está señalado
en los arts. 57 Nº 1 y el art. 58:

“Resolución de Reorganización. Dentro del quinto día de efectuada la presentación


señalada en el artículo anterior, el tribunal competente dictará una resolución
designando a los Veedores titular y suplente nominados en la forma establecida en
el artículo 22. En la misma resolución dispondrá lo siguiente:

1) Que durante el plazo de treinta días contado desde la notificación de esta


resolución, prorrogable de conformidad a lo dispuesto en el artículo 58, el Deudor
gozará de una Protección Financiera Concursal en virtud de la cual: [...]”(Art. 57 Nº
1).

“Prórroga de la Protección Financiera Concursal. El plazo establecido en el número


1) del artículo anterior para la Protección Financiera Concursal podrá prorrogarse
hasta por treinta días, si el Deudor obtiene el apoyo de dos o más acreedores, que
representen más del 30% del total del pasivo, excluidos los créditos de las Personas
Relacionadas con el Deudor. Hasta el décimo día anterior al vencimiento del plazo
antes señalado, el Deudor podrá solicitar una nueva prórroga por otros treinta días

173
si obtiene el apoyo de dos o más acreedores que representen más del 50% del total
del pasivo, excluidos los créditos de las Personas Relacionadas con el Deudor.

Sin perjuicio de lo anterior, se podrá solicitar en un solo acto la prórroga del plazo
regulado para la Protección Financiera Concursal a que se refiere el número 1) del
artículo anterior hasta por sesenta días, si el Deudor obtiene el apoyo de dos o más
acreedores que representen más del 50% del total del pasivo, excluidos los créditos
de las Personas Relacionadas con el Deudor.

Los acreedores hipotecarios y prendarios que presten su apoyo para la prórroga de


la Protección Financiera Concursal no perderán su preferencia y podrán impetrar las
medidas conservativas que procedan.” (art. 58).

De este modo, a partir de la resolución de reorganización y hasta que se celebre la


junta de acreedores llamada a pronunciarse sobre la propuesta de reorganización
que hasta el momento se ignora. No obstante no tener alguna noción de lo que el
deudor propondrá, la ley le otorga a este un periodo de protección financiera
concursal que durará hasta la fecha de la celebración de la junta de acreedores que
se pronunciará sobre la propuesta de reorganización... ¿En qué consiste la
protección financiera concursal? Como el deudor antes tenía que negociar con sus
acreedores mientras estaba expuesto a ser demandado por los demás acreedores y
a que sean ejecutados sus bienes más esenciales, la protección financiera concursal
está establecida en el sentido de “nivelar la cancha”, es decir, que todos sean
iguales al momento de negociar. A consecuencia de que el deudor se encuentre en
el periodo de protección financiera, ¿qué cosas no pueden hacer los acreedores?

(1) No puede pedirse ni declararse la liquidación del deudor mientras esté vigente
el periodo.

174
(2) No pueden iniciarse ejecuciones individuales en contra del deudor. Las
ejecuciones en curso se suspenden en su tramitación.

(3) No pueden solicitar que se inicien en contra del deudor un juicio bajo el
contrato de arrendamiento que persiga la restitución de los bienes.

Si en los hechos alguno de estos procedimientos ya se hubiere iniciado en contra


del deudor, estos quedarán suspendidos durante el periodo de protección
financiera concursal sin que corran durante este periodo los plazos de prescripción.

Este principio tiene una excepción: En materia laboral cuando se persiguen créditos
de primera clase se puede proseguir la ejecución, y lo único que se suspende es la
realización de bienes. De esta manera, los únicos juicios que eventualmente se
pueden iniciar contra el deudor son aquellos juicios laborales por obligaciones que
conforme a la prelación de créditos sean preferentes y siempre y cuando no sean
personas relacionadas con el deudor.

Esto supone otorgar una protección al deudor de modo de evitar que se realicen los
bienes del deudor. El hecho de que existan ejecuciones individuales entorpece la
capacidad para llegar a acuerdo porque normalmente habrán acreedores con
mayor poder de negociación. Los primeros bienes en realizarse generalmente serán
los bienes dados en garantía, los que normalmente serán los bienes más
importantes para las empresas, y si se tiene a un acreedor que está ejecutando esos
bienes dados en garantía, dicho acreedor tendrá gran poder de negociación, lo que
finalmente dificultará la negociación.

“a) No podrá declararse ni iniciarse en contra del Deudor un Procedimiento


Concursal de Liquidación, ni podrán iniciarse en su contra juicios ejecutivos,
ejecuciones de cualquier clase o restituciones en juicios de arrendamiento. Lo

175
anterior no se aplicará a los juicios laborales sobre obligaciones que gocen de
preferencia de primera clase, suspendiéndose en este caso sólo la ejecución y
realización de bienes del Deudor, salvo que se trate de juicios laborales de este tipo
que el Deudor tuviere en tal carácter a favor de su cónyuge, de sus parientes, o de
los gerentes, administradores, apoderados con poder general de administración u
otras personas que tengan injerencia en la administración de sus negocios. Para
estos efectos, se entenderá por parientes del Deudor o de sus representantes
legales los ascendientes, descendientes, y los colaterales hasta el cuarto grado de
consanguinidad y afinidad, inclusive.

b) Se suspenderá la tramitación de los procedimientos señalados en la letra a)


precedente y los plazos de prescripción extintiva.”(letras a) y b) Nº 1 art. 57).

La letra c) para OCHAGAVÍA es un elemento totalmente inaudito: Si un acreedor


había celebrado un contrato con el deudor y había pactado que la presentación de
procedimientos bajo una ley de insolvencia generaba un derecho que pudiera tener
el acreedor a acelerar el cumplimiento de una obligación, a exigir el término del
contrato o a ejercer cualquier otro derecho, dicho acreedor podría decir que tiene
un derecho de propiedad sobre la cláusula pactada a su favor. Pues bien, esta letra
le prohíbe a las personas, durante el periodo de protección financiera concursal,
terminar anticipadamente en forma unilateral, exigir anticipadamente el
cumplimiento o hacer efectivas garantías contratadas, invocando como causal el
inicio de un procedimiento concursal de reorganización. Si en los hechos lo hacen,
la sanción que contempla la letra c) es que el acreedor que infringe queda
pospuesto hasta que se pague a la totalidad de los acreedores a quienes les
afectare el acuerdo de reorganización judicial, Incluidos los acreedores personas
relacionadas con el deudor, es decir, el acreedor que incumple y da por terminado
unilateralmente el contrato, acelera el cumplimiento del contrato o ejecuta las

176
garantías, queda en lo que pasa a ser “una séptima clase” de créditos, luego de los
acreedores subordinados.

Entonces, si hay otras causales de terminación, de aceleración u otras causales de


ejecución, se pueden invocar sin esta sanción, pues esta letra c) impide que se
invoque la presentación de la solicitud de reorganización como causal de
terminación anticipada, aceleración o de ejecución. Las leyes de quiebra rigen in
actum, y no existen respecto de ellas derechos adquiridos, por lo que es irrelevante
la fecha en las que se celebró el contrato. ¿Qué pasa si la cláusula está redactada en
términos tales que la terminación anticipada o la aceleración es automática u opera
sin necesidad de declaración judicial? ¿Se sanciona a ese acreedor? OCHAGAVÍA
cree que la manera razonable de interpretar esta norma es exigir una acción del
acreedor adicional a lo que diga el contrato, sustentándose de cierta forma en la
redacción misma de la letra c), ya que esta exige que se invoque una causal. Para él
no se debiera sancionar por la forma en la que se redactaron las cláusulas, sino que
se debiera requerir un acto positivo de los acreedores para que estos puedan ser
sancionados.

*OCHAGAVÍA cree que el deudor puede renunciar a la protección, pero podría


tener algunas implicancias con favorecer a algunos acreedores en perjuicio de
otros.

En la práctica, la mayoría de los contratos contienen cláusulas que suponen la


capacidad de término anticipado por el inicio de un procedimiento concursal.
¿Aplica esta norma para los contratos ya celebrados? Esto no está resuelto
expresamente. Muchas de estas cláusulas están redactadas en términos que la
terminación se produce de pleno derecho, por lo que ¿significa eso que el solo
hecho de existir la cláusula al momento del inicio del procedimiento de
reorganización genera la infracción a la prohibición? UGARTE cree que no porque

177
las leyes concursales están diseñadas para un acreedor que declara la terminación
del contrato. La sanción es que el acreedor que da por terminado un contrato a
causa del inicio de un procedimiento concursal de reorganización queda pospuesto
respecto de todos los acreedores que participen del procedimiento, e incluso
respecto de los acreedores subordinados.

Desde el punto de vista del otorgamiento del financiamiento ha sido un gran


problema, porque normalmente los bancos y las entidades financieras extranjeras
exigen una opinión legal sobre la ejecutabilidad de las disposiciones de los
contratos de crédito.

*Esto aplica a las causales de exigibilidad o terminación anticipada por el inicio de


un procedimiento de reorganización, ya que en el caso de la liquidación ese es un
efecto ya previsto por la ley.

“c) Todos los contratos suscritos por el Deudor mantendrán su vigencia y


condiciones de pago. En consecuencia, no podrán terminarse anticipadamente en
forma unilateral, exigirse anticipadamente su cumplimiento o hacerse efectivas las
garantías contratadas, invocando como causal el inicio de un Procedimiento
Concursal de Reorganización. El crédito del acreedor que contraviniere esta
prohibición quedará pospuesto hasta que se pague a la totalidad de los acreedores
a quienes les afectare el Acuerdo de Reorganización Judicial, incluidos los
acreedores Personas Relacionadas del Deudor.

Para hacer efectiva la postergación señalada en el inciso anterior, deberá solicitarse


su declaración en forma incidental ante el tribunal que conoce del Procedimiento
Concursal de Reorganización.”(art. 57 Nº 1 letra c) Ley Nº 20.720).

178
Esta letra c) también hace mención de que no podrán “hacerse efectivas las
garantías”. Respecto a esto cabe decir que las garantías pueden ser reales o
personales: ¿qué pasa si la garantía es una hipoteca dada por un tercero sobre un
bien inmueble que queda en poder del tercero? ¿qué pasa si ese tercero otorgó
una fianza o se constituyó en codeudor solidario para garantizar las obligaciones del
deudor? ¿Se puede hacer efectiva esa garantía? En otros términos, ¿el efecto de la
protección financiera concursal es relativo a la persona del deudor que solicita o
alcanza también y beneficia también a los terceros que constituyeron garantías
reales o personales por las obligaciones del deudor? En primer lugar se debe
señalar que ese bien dado en garantía no es un bien útil para el desarrollo del giro
del deudor. Entre los argumentos para sostener que tampoco se pueden hacer
efectivas las garantías constituidas por terceros se encuentran: (a) El tenor de la ley
es claro, y donde la ley no distingue, no le es lícito al intérprete distinguir; (b) Si se
ejecuta al dueño de la finca o bien dado en garantía, dicho tercero que ha sido
ejecutado en su bien podrá ir a presionar al deudor para que este le pagara lo
pagado por la garantía. (c) Se da como argumento también la igualdad de los
acreedores. ¿Qué pasa si se otorgó una carta de crédito stand-by o una boleta
bancaria de garantía cuya fecha de expiración está dentro del periodo de
protección financiera concursal? No se podrá exigir a los bancos una prórroga
automática de los documentos, y el acreedor no podrá cobrar esta garantía pues
pasará a ser un acreedor más que subordinado. Para OCHAGAVÍA esta disposición
no fue muy bien pensada, y no se previeron sus consecuencias.

Ahora, respecto a esto es importante decir 2 cosas: (a) en el caso de las boletas
bancarias de garantías, letras de crédito stand-by, una opción para subsanar esta
norma es alegar que no son garantías, refugiándose en el tenor literal de la norma;
(b) puede que la sanción no sea grave, pues esta trata de que el crédito sea
subordinado, sobre todo en el caso de la restitución del arrendamiento, ya que lo

179
que busca el arrendador generalmente es la restitución de su inmueble, no el pago
de su crédito, el cual puede ni siquiera existir.

(4) Tampoco puede privarse al deudor de su participación en registros públicos de


contratistas oproveedoresde servicios.Otra cosa que no puede hacerse es que
si el deudor figura en algún registro público como contratista o prestador de un
servicio, no se le puede excluir de ese registro público única y exclusivamente
por haber presentado una proposición de reorganización. Si el deudor se
encuentra en cumplimiento de sus demás obligaciones con el mandante, la sola
presentación de la solicitud de reorganización no es razón suficiente para
excluirlo del registro público ni para discriminar en su contra a la hora de decidir
si se le da o no una nueva obra. Se está pesando en este caso en el Registro
Público de Contratistas del Estado, y el Estado solo puede contratar obras con
esas personas.

Si la principal fuente de ingresos de una empresa es sus contratos con el Estado,


la idea es que siga teniendo esos contratos para que su reorganización sea
viable.

La sanción es que la determinada administración pública que lo excluyó del


registro deberá indemnizar los perjuicios que ello le provoque.

“d) Si el Deudor formare parte de algún registro público como contratista o


prestador de cualquier servicio, y siempre que se encuentre al día en sus
obligaciones contractuales con el respectivo mandante, no podrá ser eliminado
ni se le privará de participar en procesos de licitación fundado en el inicio de un
Procedimiento Concursal de Reorganización. Si la entidad pública lo elimina de
sus registros o discrimina su participación, fundado en la apertura de un
Procedimiento Concursal de Reorganización, a pesar de encontrarse al día en

180
sus obligaciones con el respectivo mandante, deberá indemnizar los perjuicios
que dicha discriminación o eliminación le provoquen al Deudor.”(letra d) Nº 1
art. 57).

Esta norma pareciera indicar que en el caso que el deudor que no sea excluido
del registro, participe de una licitación y se sienta discriminado por el hecho de
estar en un procedimiento de reorganización, puede también demandar de la
indemnización de perjuicios.

A OCHAGAVÍA le llama la atención que la protección financiera concursal comience


con la resolución de reorganización, ello porque es un momento en que no se tiene
claridad respecto de lo que quiere hacer el deudor, esto porque recién 10 días
antes de la Junta de acreedores el deudor presentará la propuesta de
reorganización, lo cual podría darse incluso luego de 80 días de iniciada la
protección financiera concursal. OCHAGAVÍA critica esto porque se le dará una
protección al deudor sin que los acreedores tengan muy claro, y quizás el deudor
tampoco, cuál es la propuesta de este y que es lo que pretenderá hacer, además de
cuales son sus bienes. OCHAGAVÍA cree que hay un error conceptual profundo
respecto de lo que se está protegiendo, y para él se trata de una protección del
negocio en la forma tal como la había llevado hasta ese momento el deudor. En
segundo lugar, señala que este periodo de protección otorga al deudor
protecciones bastante eficaces no solo respecto de que no se inicien ejecuciones en
su contra o se suspendan las ya iniciadas, lo que ya constituye una complicación
para aquellos acreedores cuyos créditos ya están vencidos –independiente de que
el plazo de prescripción se suspenda- dejándolos en suspenso, sino que también
priva a muchos acreedores de ejercer derechos contractuales negociados con el
deudor (aceleración en la exigibilidad de una obligación, terminación anticipada del
contrato, ejecución de una garantía). Para él, lo peor es que a partir de la forma en
que quedó redactado el art. 57 Nº 1 letra c) es que esa protección financiera

181
concursal incluso se podría extender a terceros garantes, en circunstancias que no
ve la razón para serlo. Esto podría tener grandes implicancias para las boletas
bancarias de garantía.

Esta es la primera mitad del problema, es decir, que el deudor no sea apremiado
para poder reorganizar su negocio.La protección financiera concursal es una
defensa para que no ocurra nada malo al deudor, pero no es necesariamente un
incentivo para que las personas sigan contratando, tratando y trabajando con el
deudor. Esta no obsta a que terceros puedan seguir haciendo negocios con él, y la
Comisión redactora buscó una forma de incentivar a terceros para que contrataran
con el deudor o bien que no dejaran de contratar con él:

(1) Una de ellas es el art. 57 Nº 1 d) relativo a los registros públicos.

(2) La norma de los registros públicos dice que no se puede discriminar, por lo que
es una norma para que el Estado pueda seguir trabajando con el deudor, pero
¿qué se hace con los otros proveedores del deudor? ¿Cómo se convence a
terceros de que le vuelvan a prestar dinero al deudor que está en una situación
delicada? La ley se preocupó de este tema y trató de crear incentivos para que
los proveedores de bienes y servicios y de créditos siguieran contratando con el
deudor por la vía de asignarles a los créditos que esas personas adquieran para
con el deudor preferencias por sobre los demás acreedores del deudor. Estas
otras maneras de ayudar al deudor se encuentran en los arts. 72, 73 y 74 y se
refieren a crear incentivos para que terceros contraten con el deudor. Se trata
de que los créditos que esos terceros tengan contra el deudor por los contratos
que celebren con el mismo en esta circunstancia, son créditos preferentes y
gozan de la preferencia del Nº 4 del art. 2472 CC.

182
“La primera clase de créditos comprende los que nacen de las causas que en
seguida se enumeran:

4. Los gastos en que se incurra para poner adisposición de la masa los bienes del
fallido, los gastos de administración de la quiebra, de realización del activo y los
préstamos contratados por el síndico para los efectos mencionados;” (art. 2472
Nº 4 CC.).

Como se trata generalmente de una persona jurídica, no hay preferencias


respecto de los gastos funebres ni de enfermedades. (Nºs 1,2 y 3 del mismo
art.), por lo que se tratará de un incentivo de tener prácticamente la certeza
absoluta de que será pagado. Estos beneficios se consagran en el art. 72
respecto de quienes suministren bienes o servicios al deudor, en el art. 73 para
quienes otorguen financiamiento de operaciones de comercio exterior, y en el
art. 74 para quienes le otorguen créditos al deudor.

“Continuidad del suministro. Los proveedores de bienes y servicios que sean


necesarios para el funcionamiento de la Empresa Deudora, cuyas facturas
tengan como fecha de emisión no menos de ocho días anteriores a la fecha de la
Resolución de Reorganización y en la medida que en su conjunto no superen el
20% del pasivo señalado en la certificación contable referida en el artículo 55, se
pagarán preferentemente en las fechas originalmente convenidas, siempre que
el respectivo proveedor mantenga el suministro a la Empresa Deudora,
circunstancia que deberá acreditar el Veedor.

En caso de no suscribirse el Acuerdo y, en consecuencia, se dictare la Resolución


de Liquidación de la Empresa Deudora, los créditos provenientes de este
suministro se pagarán con la preferencia establecida en el número 4 del artículo
2472 del Código Civil.”(art. 72).

183
“Operaciones de comercio exterior. Los que financien operaciones de comercio
exterior de la Empresa Deudora se pagarán preferentemente en las fechas
originalmente convenidas, siempre que esos acreedores mantengan las líneas
de financiamiento u otorguen nuevos créditos para este tipo de operaciones,
circunstancia que deberá acreditar el Veedor.

En caso que no se suscribiere el Acuerdo de Reorganización Judicial y, en


consecuencia, se dictare la Resolución de Liquidación de la Empresa Deudora,
los créditos provenientes de estas operaciones de comercio exterior se pagarán
con la preferencia establecida en el número 4 del artículo 2472 del Código
Civil.”(art. 73).

“Venta de activos y contratación de préstamos durante la Protección Financiera


Concursal. Durante la Protección Financiera Concursal, la Empresa Deudora
podrá vender o enajenar activos cuyo valor no exceda el 20% de su activo fijo
contable, y podrá adquirir préstamos para el financiamiento de sus operaciones,
siempre que éstos no superen el 20% de su pasivo señalado en la certificación
contable referida en el artículo 55.

La venta, enajenación o contratación de préstamos que excedan los montos


señalados en el inciso anterior, así como toda operación con Personas
Relacionadas con la Empresa Deudora, requerirá la autorización de los
acreedores que representen más del 50% del pasivo del Deudor.

Los préstamos contratados por la Empresa Deudora en virtud de este artículo no


se considerarán en las nóminas de créditos y se pagarán preferentemente en las
fechas convenidas, siempre que se utilicen para el financiamiento de sus
operaciones, circunstancia que deberá acreditar el Veedor.

184
En caso de no suscribirse el Acuerdo y, en consecuencia, se dictare la Resolución
de Liquidación de la Empresa Deudora, estos préstamos se pagarán con la
preferencia establecida en el número 4 del artículo 2472 del Código Civil.”(art.
74 Ley Nº 20.720).

Vale decir, hasta cierto monto (20% de los activos en algunos casos, 20% de los
pasivos en otros), el deudor tiene libertad para seguir operando y que los
terceros continúen operando con el deudor no obstante haberse solicitado un
procedimiento de reorganización.

La preferencia arranca en caso que esto termine en liquidación, es decir, en el


caso que la junta de acreedores rechace la propuesta de reorganización del
deudor o que se de otras de las causales para la liquidación.

Uno de los efectos de la resolución de reorganización es el de generar la protección


financiera concursal, pero ese no es el único efecto, sino que también:

2. Fijará la fecha de la junta de acreedores, y la junta de acreedores corresponde al


último día del periodo de la protección financiera concursal. Como este periodo se
puede prorrogar de 30 a 60 o a 90 días, la fecha donde ocurrirá la junta también se
podrá prorrogar de la misma manera (art. 59).

“5) La fecha, lugar y hora en que deberá efectuarse la Junta de Acreedores llamada
a conocer y pronunciarse sobre la propuesta de Acuerdo de Reorganización Judicial
que presente el Deudor. La fecha de dicha Junta será aquella en la que expire la
Protección Financiera Concursal.”

185
3. La resolución de reorganización le ordena al deudor presentar la proposición de
reorganización a lo menos 10 días antes de la fecha fijada para la junta de
acreedores y dicha propuesta deberá publicarse en el boletín concursal, de manera
que todos los acreedores del deudor tengan acceso a ella y puedan conocerla. ¿Qué
pasa si el deudor no la presenta? Produce el mismo efecto que el rechazo de la
solicitud, es decir, produce la resolución de liquidación (antigua quiebra).

“4) La orden al Deudor para que a través del Veedor publique en el Boletín
Concursal y acompañe al tribunal competente, a lo menos diez días antes de la
fecha fijada para la Junta de Acreedores, su propuesta de Acuerdo de
Reorganización Judicial. Si el Deudor no da cumplimiento a esta orden, el Veedor
certificará esta circunstancia y el tribunal competente dictará la Resolución de
Liquidación, sin más trámite.”(art. 57 Nº 4).

4. Dentro del mismo orden de cosas, la resolución de reorganización le ordena al


veedor, que una vez que el deudor haya presentado el acuerdo de reorganización,
y no más tarde al tercer día previo a la junta de acreedores, presente un informe
sobre los méritos del acuerdo de reorganización que propone el deudor. ¿Qué
deberá analizar el veedor? En primer lugar, si la reorganización es susceptible de ser
cumplida habida las consideraciones del deudor. En segundo lugar, le exige la ley
analizar cuanto recibirían los acreedores del deudor si se procediera a la
liquidación, pues es ese será el punto de comparación al cual se tienen que medir
los acreedores (cuanto recibirían de vender todos los bienes del deudor). Esto
porque si de vender los bienes se pagarían en el 100%, entonces parecería más
seguro pagarse. Por último, la ley le exige al veedor informar si el acuerdo de
reorganización respeta las preferencias legales.

¿Qué pasa si el veedor no opina? Lo que se hace es que la SUPERIR puede


sancionar al veedor por no cumplir con sus deberes.

186
“8) La orden al Veedor para que acompañe al tribunal competente y publique en el
Boletín Concursal su informe sobre la propuesta de Acuerdo de Reorganización
Judicial, a lo menos tres días antes de la fecha fijada para la celebración de la Junta
de Acreedores que votará dicho acuerdo. Este Informe del Veedor deberá contener
la calificación fundada acerca de:

a) Si la propuesta es susceptible de ser cumplida, habida consideración de las


condiciones del Deudor;

b) El monto probable de recuperación que le correspondería a cada acreedor en sus


respectivas categorías, en caso de un Procedimiento Concursal de Liquidación, y

c) Si la propuesta de determinación de los créditos y su preferencia indicada por el


Deudor se ajustan a la ley.

Si el Veedor no presentare el referido informe dentro del plazo indicado, el Deudor,


cualquiera de los acreedores o el tribunal competente informará a la
Superintendencia para que se apliquen las sanciones pertinentes. En este caso, el
Acuerdo de Reorganización Judicial se votará con prescindencia del Informe del
Veedor.”(Art. 57 Nº 8).

5. La orden al deudor de proporcionarle al veedor todos los documentos que el


deudor le presenté al tribunal conforme al art. 56.

“10) La orden al Deudor para que proporcione al Veedor copia de todos los
antecedentes acompañados conforme al artículo 56. Estos antecedentes y la copia
de la resolución de que trata este artículo serán publicados por el Veedor en el

187
Boletín Concursal dentro del plazo de tres días contado desde su dictación.”(Art. 57
Nº 10).

6. La resolución citará dentro de quinto día de su dictación a una reunión a los 3


principales acreedores y al deudor para determinar los honorarios del veedor.

“9) Que dentro de quinto día de efectuada la notificación de esta resolución,


deberán asistir a una audiencia el Deudor y los tres mayores acreedores indicados
en la certificación del contador auditor independiente referida en el artículo 55. Esta
diligencia se efectuará con los que concurran y tratará sobre la proposición de
honorarios que formule el Veedor. Si en ella no se arribare a acuerdo sobre el monto
de los honorarios y su forma de pago, o no asistiere ninguno de los citados, dichos
honorarios se fijarán por el tribunal competente sin ulterior recurso.” (art. 57 Nº 9).

7. Orden al veedor de inscribir copia de la resolución de reorganización en el CBRen


que tenga propiedades inscritas el deudor. Esto para evitar que el deudor venda
los bienes en perjuicio de los acreedores.

“7) La orden para que el Veedor inscriba copia de esta resolución en los
conservadores de bienes raíces correspondientes al margen de la inscripción de
propiedad de cada uno de los inmuebles que pertenecen al deudor.”(art. 57 Nº 7).

8. Llamamiento a todos los acreedores para que concurran con un apoderado con
poder suficiente a participar del proceso de reorganización. Esto porque el
acuerdo de reorganización tiene una naturaleza eminentemente contractual: es un
contrato entre el deudor y todos sus acreedores. Respecto de la voluntad de los
acreedores prima el principio de que esta se formará por la mayoría de los
acreedores, de manera que los acreedores que no asistan pueden verse

188
eventualmente sujetos al acuerdo de reorganización aún cuando no hayan
concurrido a su aprobación.

“6) Que dentro de quince días contados desde la notificación de esta resolución,
todos los acreedores deberán acreditar ante el tribunal competente su personería
para actuar en el Procedimiento Concursal de Reorganización, con indicación
expresa de la facultad que le confieren a sus apoderados para conocer, modificar y
adoptar el Acuerdo de Reorganización Judicial.” (art. 57 Nº 6).

9. Declara que durante el periodo de protección financiera se aplicarán al deudor


una serie de medidas cautelares y de restricción. Por contrapartida, el periodo de
protección financiera concursal trae consecuencias que son negativas para el
deudor. Se trata de una serie de medidas conservativas o cautelares que se
imponen al deudor durante ese periodo y que restringen su actuar. Estas medidas
son:

(1) Con el inicio del periodo de protección financiera concursal el deudor queda
intervenido en la administración de sus bienes por el veedor, con las
facultades del art. 25 de la ley. Esto no es lo mismo que el desasimiento, pues
el deudor no pierde su administración, sino que esta solo es intervenida por el
veedor. Estas facultades son básicamente imponerse de los libros, documentos
y operaciones del deudor, valorizar activos, arbitrar medidas necesarias para la
determinación del pasivo, impetrar medidas de conservación de activos, entre
otras.

(2) Se limita la capacidad del deudor de enajenar y gravar bienes. Por regla
general no puede enajenar y gravar bienes, salvo aquellos que se refieran al giro
del deudor y las enajenaciones que resulten necesarias para el normal
desenvolvimiento y desarrollo de su actividad.

189
(3) En caso que el deudor sea persona jurídica, no puede modificar sus pactos y
estatutos sociales, ni su régimen de poderes. Esta disposición, según UGARTE,
fue redactada sin mucha reflexión: ¿Qué significa modificar los pactos? Una
opción es pensar que se trata de pactos de accionistas, lo cual es un poco
absurdo porque generalmente se tratará de sociedades con la responsabilidad
limitada, por lo que es poco relevante lo que pase con los accionistas, ni se
puede sancionar al deudor por un hecho de sus accionistas. Otra posibilidad es
pensar que se trata de los estatutos sociales, queriendo con ello redundar la ley.

UGARTE tampoco cree que el modificar el régimen de poderes tenga mucha


importancia, pero podría serlo si se piensa que se quiere que la persona natural
que estaba administrando lo siga haciendo. Otorgar un poder especial no
implica modificar el régimen de poderes.

Luego la ley dice que “[l]a inscripción de cualquier transferencia de acciones de


la Empresa Deudora en los registros sociales pertinentes requerirá la
autorización del Veedor, que la extenderá en la medida que ella no altere o
afecte los derechos de los acreedores. Lo anterior no regirá respecto de las
sociedades anónimas abiertas que hagan oferta pública de sus valores.”

UGARTE respecto de este enunciado piensa que una transferencia de acciones


en una sociedad de capital es difícil que altere los derechos de los acreedores.
Según él en este caso la ley parte de la base que si bien se trata de una sociedad
de responsabilidad limitada, si los accionistas son solventes no dejarán caer a la
sociedad: se valora de cierta forma la reputación crediticia y financiera de los
accionistas (Ej. Comfort Letter).

190
El principio que se establece en este caso es que se busca que no se modifique a
los dueños, pues estos de cierta manera son quienes han puesto su palabra de
salvar la empresa y reorganizarla.

“Resolución de Reorganización. Dentro del quinto día de efectuada la presentación


señalada en el artículo anterior, el tribunal competente dictará una resolución
designando a los Veedores titular y suplente nominados en la forma establecida en
el artículo 22. En la misma resolución dispondrá lo siguiente:

2) Que durante la Protección Financiera Concursal se aplicarán al Deudor las


siguientes medidas cautelares y de restricción:

a) Quedará sujeto a la intervención del Veedor titular designado en la misma


resolución, el que tendrá los deberes contenidos en el artículo 25;

b) No podrá gravar o enajenar sus bienes, salvo aquellos cuya enajenación o venta
sea propia de su giro o que resulten estrictamente necesarios para el normal
desenvolvimiento de su actividad; y respecto de los demás bienes o activos, se
estará a lo previsto en el artículo 74, y

c) Tratándose de personas jurídicas, éstas no podrán modificar sus pactos, estatutos


sociales o régimen de poderes. La inscripción de cualquier transferencia de acciones
de la Empresa Deudora en los registros sociales pertinentes requerirá la
autorización del Veedor, que la extenderá en la medida que ella no altere o afecte
los derechos de los acreedores. Lo anterior no regirá respecto de las sociedades
anónimas abiertas que hagan oferta pública de sus valores.” (Art. 57 Nº 2).

10. La fecha en que expirará la Protección Financiera Concursal.Esta inicialmente


durará 30 días, pero puede ser prorrogable por otros 30 días con el apoyo de

191
acreedores que representen a lo menos el 30% del pasivo (art. 58), y a su vez,
puede ser prorrogable por otros 30 días más con el apoyo de acreedores que
representen a lo menos el 50% del pasivo.

“3) La fecha en que expirará la Protección Financiera Concursal.”

14/09/2016
d) Trámites posteriores a la dictación de la resolución de reorganización .¿Qué hacen los
acreedores? Básicamente los acreedores al leer la resolución de reorganización se
pueden dar cuenta si en la nómina de acreedores que se acompañó a la SUPERIR
aparecen o no sus créditos. Si el deudor lleva contabilidad, lo lógico es que aparezcan
en la presentación que se acompaña a la SUPERIR todos los créditos que tenía el
deudor, y que no hayan errores en los montos de los créditos ni de las garantías a que
esos acreedores tienen derecho. Pero en la práctica se da que el deudor que llega a
esta situación no sea muy ordenado respecto de su contabilidad, por lo que se pueden
dar diversas posibilidades:

1. Que el acreedor revise la nómina de acreedores y vea que su nombre aparece,


además de que están bien identificados el monto de su crédito y la garantía que
acompaña a dicho crédito. Si este fuera el caso, el acreedor puede estar tranquilo y
esperar el avance del procedimiento..

2. Si este no fuera el caso, y no aparecieran los créditos de alguno de los acreedores,


el monto no es el correcto o no aparece una garantía que debiera aparecer, el
acreedor deberá comparecer y para esto la ley le concede un plazo de 8 días
contados desde la resolución de reorganización. Ahora, con todos los créditos que
se presenten dentro de estos 8 días el veedor publicará una nómina de créditos
dentro de los dos días siguientes. Luego de esto surge un nuevo plazo de 8 días para
que el deudor o los acreedores puedan impugnar la nómina.

192
“Verificación y objeción de los créditos. Los acreedores tendrán un plazo de ocho
días contado desde la notificación de la Resolución de Reorganización a que se
refiere el artículo 57 para verificar sus créditos ante el tribunal que conoce del
procedimiento. Con tal propósito, deberán acompañar los títulos justificativos de
éstos, señalando, en su caso, si se encuentran garantizados con prenda o hipoteca y
el avalúo comercial de los bienes sobre los que recaen las garantías. No será
necesaria verificación alguna si los créditos y el avalúo comercial de las garantías se
encontraren señaladas, a satisfacción del acreedor, en el estado de deudas a que se
refiere el número 4) del artículo 56 publicado en el Boletín Concursal.

Vencido el plazo señalado en el inciso anterior y dentro de los dos días siguientes, el
Veedor publicará en el Boletín Concursal todas las verificaciones presentadas,
indicando los créditos que se encuentren garantizados con prenda o hipoteca y el
avalúo comercial de los bienes sobre los que recaen las garantías.

En el plazo de ocho días siguientes a la publicación indicada en el inciso precedente,


el Veedor, el Deudor y los acreedores podrán deducir objeción fundada sobre la
falta de títulos justificativos de los créditos, sus montos, preferencias o sobre el
avalúo comercial de los bienes sobre los que recaen las garantías, que se indican en
el estado de deudas que presenta el Deudor, de conformidad al número 4) del
artículo 56 o en las verificaciones presentadas por los acreedores.

Los interesados presentarán sus objeciones ante el tribunal. Vencido el plazo


indicado en el inciso precedente, y dentro de los dos días siguientes, el Veedor
publicará en el Boletín Concursal todas las objeciones presentadas. Asimismo,
expirado el plazo que se señala en el citado inciso anterior sin que se formulen
objeciones, los créditos y el avalúo comercial de los bienes sobre los que recaen las
garantías no objetados, quedarán reconocidos.

193
El Veedor confeccionará la nómina de los créditos reconocidos, la que deberá
indicar los montos de los créditos, si éstos se encuentran garantizados con prenda o
hipoteca y el avalúo comercial de los bienes sobre los que recaen las garantías,
acompañándola al expediente dentro de quinto día de expirado el plazo para
objetar y la publicará en el Boletín Concursal, sirviendo ésta como única nómina
para la votación a que se refiere el artículo 78, sin perjuicio de su posterior
ampliación o modificación de acuerdo al artículo siguiente.”(art. 70).

El art. siguiente es el que dice básicamente la forma de resolver si han habido


impugnaciones u objeciones: se da un plazo de 5 días desde la publicación de la
nómina de créditos por parte del deudor para que estas sean resueltas.

“Impugnación de créditos. Si se formulan objeciones, el Veedor arbitrará las


medidas necesarias para subsanarlas. Si no se subsanan, los créditos y el avalúo
comercial de los bienes sobre los que recaen las garantías que fueren objeto de
dichas objeciones se considerarán impugnados, y el Veedor los acumulará, emitirá
un informe acerca de si existen o no fundamentos plausibles para ser considerados
por el tribunal competente, y se pronunciará fundadamente sobre el avalúo
comercial del bien sobre el que recae la garantía objetada.

El Veedor acompañará al tribunal competente la nómina de créditos impugnados


con su respectivo informe y la nómina de créditos reconocidos indicada en el
artículo 70, y las publicará en Boletín Concursal dentro de los cinco días siguientes a
la expiración del plazo previsto para objetar que se señala en el inciso primero del
artículo anterior.

Agregados al expediente los antecedentes que señala el inciso anterior, el tribunal


citará a una audiencia única y verbal para el fallo de las impugnaciones. Dicha

194
audiencia se celebrará dentro de tercero día contado desde la notificación de la
resolución que tiene por acompañada la nómina de créditos reconocidos e
impugnados.

A la audiencia podrán concurrir el Veedor, el Deudor, los impugnantes y los


impugnados. En ésta deberán resolverse las incidencias que promuevan las partes
en relación a las impugnaciones. El tribunal competente podrá, si fuere
estrictamente necesario, suspender y continuar la referida audiencia con
posterioridad. Con todo, la resolución que se pronuncie sobre las impugnaciones
deberá dictarse a más tardar el segundo día anterior a la fecha de celebración de la
Junta de Acreedores llamada a conocer y pronunciarse sobre la propuesta de
Acuerdo.

La resolución que falle las impugnaciones ordenará la incorporación o modificación


de créditos en la nómina de créditos reconocidos, o la modificación del avalúo
comercial de los bienes sobre los que recaen las garantías, cuando corresponda, y
será apelable en el sólo efecto devolutivo. El Veedor deberá publicar la nómina de
créditos reconocidos según la resolución anterior en el Boletín Concursal, a más
tardar el día anterior a la fecha de celebración de la Junta de Acreedores llamada a
conocer y pronunciarse sobre la propuesta de Acuerdo.”(Art. 71).

Solo tiene derecho a voto en el acuerdo de reorganización, es decir, en la junta de


acreedores que se pronunciará sobre la aprobación o rechazo del acuerdo de
reorganización los acreedores que figuren en la nómina de créditos reconocido o de
créditos adicionados en conformidad al art. 70 y 71. El hecho de que una persona
sea acreedora es irrelevante si no figura en la nómina. Desde esa perspectiva es
fundamental figurar en la nómina, además de figurar en la nómina por el monto del
crédito que uno cree tener y con las garantías que cree tener, así como que el valor
comercial asignado al monto del crédito y a las garantías sea el que corresponde.

195
Esto tiene relevancia respecto de la capacidad de voto de los acreedores y además
de por cuánto podrán votar (La decisión es por el porcentaje de los pasivos del
deudor).

Esa es la importancia que tiene todo este proceso que se conoce como (5)la
verificación de los créditos, la que se inicia con la resolución de reorganización hasta
que se resuelven las impugnaciones a la nómina de créditos reconocidos.

“Acreedores con derecho a voto. Sólo tienen derecho a concurrir y votar los acreedores
cuyos créditos se encuentren en la nómina de créditos reconocidos a que se refiere el
artículo 70 y aquellos que figuren en la ampliación de esta nómina, de acuerdo a lo
previsto en el artículo 71. En ambos casos deberá darse cumplimiento a lo ordenado en
el número 6) del artículo 57, relativo a la acreditación de personerías.

Los acreedores cuyos créditos se encuentren garantizados con prenda o hipoteca


votarán de acuerdo al avalúo comercial de los bienes sobre los que recaen las
garantías, conforme conste en la nómina de créditos reconocidos y en su ampliación o
modificación, en su caso.

Cuando el avalúo comercial de los bienes sobre los que recaen las garantías exceda el
valor del crédito que garantizan, el acreedor correspondiente votará de acuerdo al
monto de su crédito, según conste en la nómina de créditos reconocidos y en su
ampliación o modificación, en su caso.” (art. 78).

Estos dos incisos finales señalan que en el caso de los créditos prendarios o
hipotecarios los acreedores deberán comparar el monto de la obligación garantizada
con el valor comercial del bien dado en prenda o hipoteca, y votarán por el menor de
ambos. Esto, sin embargo, tiene ciertas salvedades porque los acreedores podrían

196
votar hasta el valor comercial del bien como acreedor preferente y por el exceso votar
como valista.

e) Presentación que debe hacer el deudor .La ley dice poco respecto del acuerdo de
reorganización que debe presentar el deudor, y para OCHAGAVÍA es lo más relevante.

¿Cuándo deberá presentarla? Esta propuesta deberá presentarla a lo menos 10 días


antes de la junta de acreedores llamada a pronunciarse respecto de la propuesta. La
idea de estos 10 días es que los acreedores tengan un tiempo suficiente para revisar la
propuesta y analizar sus méritos. El deudor ha tenido un periodo de 20 días para
presentar y preparar su propuesta (esto es en el menor de los casos, porque también
podrá tener un plazo de 50 o 80 días).

¿Sobre qué puede versar la propuesta del deudor?La antigua ley de quiebras (Libro IV
del C. de C.) tenía un listado de cosas sobre las que podía versar la proposición de
convenio. A diferencia de la ley anterior, el art. 60 de la Ley Nº 20.720 dice que podrá
versar sobre cualquier objeto tendiente a reestructurar los activos y pasivos de la
empresa deudora. Empero, ¿qué es reestructurar activos y pasivos de una empresa
deudora? Se puede decir que el aumento del plazo es una manera de reestructurar
activos y pasivos, así como remitir parte de las deudas, o una combinación de ambas
opciones. En cambio, la remisión total podría no implicar una reestructuración de los
activos y pasivos. Lo anterior es relevante porque la antigua ley de quiebras aceptaba la
posibilidad de que como objeto del convenio hubiera una remisión total de las deudas
del deudor. A pesar de ser lícita en Chile la posibilidad de un convenio de remisión
total, es muy extraordinaria en la legislación comparada. OCHAGAVÍA cree que
teóricamente es posible una remisión total de las deudas, así como también cree que
es una manera de reestructurar los activos y pasivos la capitalización de todo o parte
de las deudas que tenía el deudor por la vía de un aumento de capital pagadero en
especie (créditos contra el deudor). También cree que es una manera de

197
reestructuración la venta de determinados bienes para el pago de algunas obligaciones
y la condonación de otras.

Algo que era muy usado bajo el imperio de la antigua ley de quiebras era tener
convenios de liquidación en que el objeto del convenio era la venta de todos los bienes
del deudor para pagar ordenadamente los pasivos del deudor conforme a la ley: ¿es
esta una reestructuración de los activos y pasivos del deudor bajo la nueva ley?
OCHAGAVÍA tiende a pensar que no lo es, esto es porque la razón de ser de un acuerdo
de reorganización es hacer surgir nuevamente la empresa del deudor, pero cuando se
liquida todo para pagar a los acreedores, no se está buscando conseguir ese objetivo.
¿Por qué se hacía antes? En primer lugar, (a)para evitar ser declarado en quiebra, ello
porque la declaratoria en quiebra tenía una connotación social y comercial negativa. En
segundo lugar, también se hacía porque (b) la declaratoria de quiebra era un
presupuesto básico para poder perseguir ciertos delitos asociados a la quiebra.
Atendido a que hoy en día la liquidación no tiene un carácter infamante y que no hay
delitos asociados a la declaración de liquidación, para OCHAGAVÍA ya no tiene sentido
que haya un acuerdo de reorganización cuyo objeto sea la liquidación total de los
bienes del deudor.

Presentada que sea la solicitud de reorganización y dictada que sea la resolución de


reorganización, así como (6)presentado el acuerdo de reorganización, el deudor no
podrá retirar el acuerdo que ha presentado, salvo que cuente con el apoyo del 75% de
los acreedores con derecho a voto. Si en los hechos lo retira, ello produce el mismo
efecto de no haber presentado la propuesta de reorganización, es decir, se dictará la
resolución de liquidación.

“Efectos del retiro del Acuerdo. Una vez notificada la propuesta de Acuerdo, ésta no
podrá ser retirada por el Deudor, salvo que cuente con el apoyo de acreedores que
representen a lo menos el 75% del pasivo.

198
Si la propuesta de Acuerdo es retirada por el Deudor sin contar con el apoyo referido en
el inciso anterior, el tribunal competente dictará la Resolución de Liquidación.” (art. 77).

La proposición que el deudor hace de acuerdo de reorganización, más allá de la


propuesta de reestructuración de activos y pasivos, va a incluir,si es aprobado por la
junta de acreedores, otras estipulaciones: (a) de la esencia; (b) de la naturaleza; y (c)
meramente accidentales:

1. De la esencia. Es de la esencia de un acuerdo de reorganización que el deudor


quede sometido a un interventor, que tendrá básicamente el deber de vigilar el
accionar del deudor al menos por un año contado desde la aprobación del acuerdo.
Este interventor necesariamente debe ser un veedor que figure en la nómina de
veedores de la SUPERIR.

2. De la naturaleza. Impone al deudor la prohibición de pagar y de efectuar cualquier


pago o reparto a sus accionistas o socios, bajo ningún concepto (art. 67).

“Prohibición de repartos. Se prohíbe a la Empresa Deudora repartir sumas a sus


accionistas o socios, bajo ningún concepto, ni directa ni indirectamente, sea por la
vía de reducción de capital, condonación de préstamos otorgados y/o repartos de
dividendos antes de haber pagado el 100% de las obligaciones emanadas del
Acuerdo de Reorganización Judicial, salvo que los acreedores expresamente lo
autoricen en la forma que lo determine el Acuerdo.”(art. 67).”

Mientras no se paguen todas las obligaciones que el deudor tiene que cumplir
conforme al acuerdo, este no puede efectuar ningún pago bajo ningún concepto a
sus accionistas y socios. OCHAGAVÍA crítica la redacción de este art., ello en razón
de que utiliza la palabra repartir, la que considera poco jurídica, prefiriendo la

199
palabra pagar. Se pregunta: ¿Qué pasa que si dentro de los acreedores que tenía el
deudor al momento de celebrarse el acuerdo de reorganización habían 2
accionistas que le habían otorgado créditos al deudor? ¿El pago de esos créditos es
un reparto a esos accionistas? La manera en que se redacta la norma implica no
tener tanta seguridad que los créditos que los accionistas hubieran podido otorgar
al deudor no queden comprendidos. ¿Qué pasa si el accionista o socio además de
serlo es proveedor del deudor de un insumo que este requiere para poder seguir
operando? ¿Se tratará de un reparto? OCHAGAVÍA tiende a pensar que no, y cree
que esta norma se refiere solamente a aquellos pagos que el accionista o el socio
recibe en su carácter de tal (distribución de dividendos y disminución de capital). Lo
que complica su posición es que uno de los ejemplos que la ley da es la
condonación de préstamos que la sociedad pudo haber otorgado a los socios o
accionistas, lo cual hace que la norma sea equívoca. Según OCHAGAVÍA el concepto
de reparto es más bien económico y se refiere a algo que uno recibe ya sea
gratuitamente o por la inversión en otra cosa, no a cambio de la prestación de un
bien o servicio.

Este es un elemento de la naturaleza porque es salvo los términos que se autoricen


en el propio acuerdo de reorganización.

Ahora, lo lógico y en la gran mayoría de los casos es que los acuerdos de


reorganización permitan pagos y repartos de beneficios al deudor, ello
principalmente porque, de lo contrario, los socios o accionistas de un deudor no
tendrían ningún interés en que su negocio funcione.

3. Meramente accidentales.Se encuentran también las proposiciones que son


accidentales, es decir, que pueden o no estar. Hay 3 que son más relevantes:

200
(1) Se puede someter la disputa a arbitraje. Las disputas que surjan entre el
deudor y sus acreedores se pueden someter a arbitraje de manera de obtener
una resolución más rápida del conflicto (art. 68).

“Cláusula arbitral en Acuerdos de Reorganización Judicial. En cualquiera de las


clases o categorías de un Acuerdo de Reorganización Judicial podrá estipularse
una cláusula arbitral, en cuyo caso las diferencias que se produzcan entre el
Deudor y uno o más acreedores o entre éstos, con motivo de la aplicación,
interpretación, cumplimiento, terminación o declaración de incumplimiento del
Acuerdo, se someterán a arbitraje. Éste será obligatorio para todos los
acreedores a los que afecte el referido Acuerdo.

Si el árbitro declara la terminación o el incumplimiento del Acuerdo, remitirá de


inmediato el expediente al tribunal competente para que éste dicte la
Resolución de Liquidación en conformidad a esta ley.”(art. 68).

No obstante haberse aprobado el acuerdo, si este se declara terminado o no


cumplido, ello derivará en una resolución de liquidación. Sin perjuicio de lo
anterior, ello no lo corresponde al árbitro, sino que este solo se dedicará a
declarar la terminación o el incumplimiento, y luego se remitirá el expediente al
juez competente para que declare la resolución de liquidación.

(2) El acuerdo de reorganización puede estipular la constitución de garantías para


garantizar a los acreedores el cumplimiento de las obligaciones contenidas en
el acuerdo (Art. 65).

“Constitución de garantías en los Acuerdos de Reorganización Judicial. En los


Acuerdos podrá estipularse la constitución de garantías para asegurar el

201
cumplimiento de las obligaciones del Deudor. Estas garantías podrán
constituirse en el mismo Acuerdo o en instrumentos separados.

Para estos efectos, los acreedores podrán designar a uno o más de ellos para
que los representen en la celebración de los actos que sean necesarios para la
debida constitución de las garantías.”(art. 65).

Esto es algo que es muy usual, como ocurre generalmente bajo el chapter 11.

Bajo la antigua ley de quiebras no existía expresamente la posibilidad de


constituir garantías, pero se hizo muy usual.

¿Puede pactarse una garantía en favor de algunos acreedores y no de otros?


Esto tiene serias implicancias con la par conditiocreditorum, es decir, el principio
según el cual los acreedores deben ser tratados por igual, lo cual no quiere decir
que se debe garantizar a todos o a ninguno, sino que OCHAGAVÍA cree que es
importante que si la garantía se constituye solo en favor de algunos
acreedores,se debe contar con la aprobación de los acreedores perjudicados, es
decir, aquellos que ven salir esos bienes de la esfera de su ejecución.

(3) El acuerdo puede contemplar la creación de una comisión de acreedores. Esto


en consideración a que juntar a todos los acreedores puede llegar a ser muy
engorroso.

“Interventor y Comisión de Acreedores. El Acuerdo de Reorganización Judicial


deberá estipular el nombramiento de un interventor por al menos un año
contado desde el Acuerdo, el que recaerá en un Veedor vigente de la Nómina de
Veedores. El interventor nombrado tendrá las atribuciones, deberes y
remuneración que el mismo Acuerdo señale. Si ellas no se especifican, se

202
entenderá que tendrá las señaladas en el artículo 294 del Código de
Procedimiento Civil.

El Veedor tendrá la obligación de poner en conocimiento, de forma fundada, el


incumplimiento del Acuerdo a la Superintendencia y a los acreedores que les
afecte, mediante notificación por Correo Electrónico.

Sin perjuicio de lo anterior, en el Acuerdo de Reorganización Judicial podrá


designarse a una Comisión de Acreedores para supervigilar el cumplimiento de
sus estipulaciones, con las atribuciones, deberes y remuneración que, en su
caso, señale el Acuerdo.”(art. 69 Ley Nº 20.720).

15/09/2016
En la antigua ley de quiebras el convenio (análogo al actual acuerdo de reorganización)
tenía que ser el mismo para todos los acreedores, lo que rigidizabaen demasía el
convenio, de modo que se hacía muy difícil su aprobación, ya que no todos los
acreedores eran ni son iguales, sino que requieren de un trato diferenciado: no se
puede tratar de igual forma, por ejemplo, a aquellos acreedores prendarios o a un
banco que le es más posible otorgar más facilidades al deudor.En un esfuerzo por
morigerar la norma que existía en la antigua ley de quiebras, la nueva ley permite en su
art. 61 que el acuerdo de reorganización que el deudor propone contemple clases de
acreedores.

Lamentablemente este intento de la nueva ley, según OCHAGAVÍA en la dirección


correcta, quedó corto porque contempla la posibilidad de solo 2 clases de acreedores:

1. Una clase para los acreedores valistas;

2. Otra clase para los acreedores prendarios e hipotecarios.

203
La decisión de si el acuerdo contemplará clases es del deudor, este tomará la decisión
de si divide o no a sus acreedores, pero la ley solo le faculta dividir a sus acreedores en
solo 2 clases. Comparando la ley nueva y la ley antigua, hay un doble cambio: (a) Se
pueden tener distintas proposiciones de convenio para cada clase, es decir, se pueden
proponer distintas proposiciones para cada clase, el convenio puede no ser el mismo
para todas las clases; (b) los acreedores prendarios e hipotecarios pueden votar y
participar en el acuerdo de reorganización. Con la antigua ley el acreedor hipotecario o
prendario podía participar si quería, pero si en los hechos lo hacía, estaba renunciando
a su prenda o hipoteca, es decir, estaba sacrificando su preferencia o prioridad para
participar de él, lo cual no ocurre hoy en día: Un acreedor hipotecario o prendario
deberá participar del acuerdo de reorganización ya sea en única clase si el deudor ha
decidido no dividir a los acreedores, ya sea en la clase de los acreedores hipotecarios o
prendarios si es que el deudor ha establecido una clase especial para ello.

El acreedor prendario o hipotecario puede renunciar total o parcialmente a su garantía


y votar en la clase de los acreedores valistas si así lo prefiere. ¿Cuándo le convendría al
acreedor hipotecario o prendario renunciar al menos parcialmente a su garantía? Un
acreedor hipotecario o prendario vota por el monto menor entre el valor comercial del
bien dado en garantía y el crédito garantizado. Si el monto garantizado es muy grande y
el valor comercial del bien dado en garantía es muy pequeño, le conviene renunciar a la
garantía por ese monto y participar como valista en la otra clase o lista. Si el acreedor
renuncia parcialmente, podrá votar en ambas clases.

Si una persona tiene un crédito garantizado por hipoteca o prenda la ley dice que su
voto está limitado al valor comercial del bien dado en garantía, es decir, si una persona
tiene un crédito de $1.000.000 y una garantía sobre un bien que vale $500.000, solo
podrá votar por $500.000. Con este busca quitarle poder a aquellos acreedores que
pudieran tener un gran crédito garantizado con una garantía por un monto menor,

204
pensando de algún modo que podrán tener menores incentivos para aprobar la
reorganización.

¿Cuándo le convendrá al deudor dividir la propuesta de acuerdo de reorganización?


Cuando tenga temor de que si los reúne a todos en una misma clase, ello supondrá el
fracaso del procedimiento de reorganización (votación desfavorable). Esto supone para
el deudor apalancarse en las diferencias de opinión de los acreedores con aras de
lograr el acuerdo de reorganización. Cuando el deudor divide a sus acreedores por
clase, deberán haber votaciones separadas por clase, lo que supondrá que se deberá
aprobar el acuerdo en cada clase, lo cual está sujeto a la condición suspensiva de que la
otra clase también apruebe el acuerdo.

Los acreedores no se pueden oponer a la división que el deudor hace. El deudor decide
los caminos a tomar.

OCHAGAVÍA cree que la posibilidad de dividir en solo 2 tipos de acreedores es muy


rígida, y no se tuvo en cuenta lo que en realidad ocurre en los negocios, en donde hay
un sinfín de posibilidades para clasificar a los distintos acreedores.

“Acuerdos de Reorganización Judicial por clases o categorías de acreedores. La


propuesta de Acuerdo podrá separarse en clases o categorías de acreedores y se podrá
formular una propuesta para los acreedores valistas y otra para los acreedores
hipotecarios y prendarios cuyos créditos se encuentren garantizados con bienes de
propiedad del Deudor o de terceros. Los acreedores hipotecarios y prendarios que voten
la propuesta del Acuerdo conservarán sus preferencias.

La propuesta de Acuerdo será igualitaria para todos los acreedores de una misma clase
o categoría, salvo que medie acuerdo en contrario, de conformidad a lo dispuesto en los
artículos 64 y siguientes.

205
Los acreedores hipotecarios y prendarios cuyos créditos se encuentren garantizados con
bienes de propiedad del Deudor o de terceros podrán votar la propuesta de Acuerdo
que se formule para acreedores valistas si renuncian a la preferencia de sus créditos y
no podrán votar la propuesta de Acuerdo que se formule para la clase o categoría de
los acreedores hipotecarios o prendarios, salvo que dicha renuncia sea parcial y se
manifieste expresamente.

Si los acreedores hipotecarios y prendarios votan la propuesta de Acuerdo de los


acreedores valistas, los montos de sus créditos preferentes se descontarán del pasivo
de su clase o categoría y se incluirán en el pasivo de la clase o categoría de los
acreedores valistas para efectos del cómputo a que se refiere el artículo 79 por las
sumas a que hubiere alcanzado la renuncia.” (art. 61 Ley Nº 20.720).

Según el inc. 2 del art. 61 la propuesta que se hace a cada clase es la misma para cada
uno de los acreedores de esa clase, salvo que tenga aplicación lo dicho en el art. 64, el
cual señala que se puede favorecer o perjudicar a alguno de los acreedores de alguna
clase, siempre que cuenten con el voto conforme de losdos tercios del pasivo de los
acreedores perjudicados con derecho a voto, es decir, se pueden establecer
diferencias en el trato de los acreedores dentro de una misma clase, siempre que los
que resulten perjudicados lo aprueben porQuórum Especial.

“Diferencias entre acreedores de igual clase o categoría. En las propuestas de Acuerdo


de Reorganización Judicial se podrán establecer condiciones más favorables para
algunos de los acreedores de una misma clase o categoría, siempre que los demás
acreedores de la respectiva clase o categoría lo acuerden con Quórum Especial, el cual
se calculará únicamente sobre el monto de los créditos de estos últimos.” (art. 64).

206
“32) Quórum Especial: El conformado por dos tercios del pasivo total con derecho a
voto verificado y/o reconocido, según corresponda, en el Procedimiento Concursal
respectivo.” (art. 2 Nº 32).

El perjuicio puede consistir en pedirles un porcentaje de remisión mayor, un plazo de


pago mayor, una capitalización en términos menos ventajosos, etc., lo que dependerá
de cada caso.

El deudor, en principio, tiene una sola oportunidad de obtener un acuerdo con sus
acreedores, pues si estos votan en contra el deudor será declarado en liquidación.
Desde esta perspectiva, es importante para el deudor tener la mayor cantidad de
opciones, y la posibilidad de dividir en clases y establecer diferencias entre los
acreedores de la misma clase le ayudan en dicha tarea. Otra cosa que le puede ayudar
aún más es establecer para los acreedores propuestas alternativas. Esto le otorga al
deudor una flexibilidad adicional al momento de discutir con sus acreedores: En la
mayoría de los casos, durante todo el procedimiento anterior a la propuesta de
reorganización el deudor está negociando con los acreedores, por lo que se podría
pensar que al momento de presentar la propuesta sabe donde están sus acreedores y
cuál es más o menos su postura. Lamentablemente, siempre hay un porcentaje de
acreedores respecto de los cuales no se tiene una noción clara de lo que harán
respecto de la propuesta de reorganización. La idea de tener la posibilidad de poder
presentar propuestas alternativas busca darle al deudor flexibilidad. Lo importante es
que la propuesta como un todo haga sentido, que le proporcione a los acreedores una
seguridad mayor de pago en caso de llevar a cabo el procedimiento de reorganización.

“Propuestas alternativas de Acuerdo de Reorganización Judicial. En cada una de sus


clases o categorías, la propuesta de Acuerdo podrá contener una proposición principal y
otras alternativas para todos los acreedores de la misma clase o categoría, en cuyo
caso éstos deberán optar por regirse por alguna de ellas, dentro de los diez días

207
siguientes a la fecha de la Junta de Acreedores llamada a conocer y pronunciarse sobre
la propuesta de Acuerdo.” (art. 62).

De acuerdo a este art. los acreedores tendrán un tiempo mayor (10 días posteriores a
la junta), el cual, según OCHAGAVÍA, no tiene mucho sentido, máxime considerando
que se amplía también el periodo de protección financiera.

f) Votación del acuerdo.¿Qué acreedores tienen derecho a voto? Solo tienen derecho a
voto aquellos acreedores que figuren en la nómina de crédito, aquellos que se han
reconocido sea en la nómina original sea en cualquiera de sus modificaciones una vez
resueltas las impugnaciones.

Hay ciertos acreedores que no tienen derecho a voto:

1. Aquellos acreedores que sean personas relacionadas con el deudor.No tener


derecho a voto es una sanción muy grave porque no se es considerado para efectos
del quórum, y la decisión la toman otros acreedores, siendo igualmente vinculante
para aquellos sin derecho a voto la decisión que tomen los acreedores que sí
pueden votar.

¿Quiénes son los acreedores personas relacionadas? La ley los define en el art. 2
Nº26:

“26) Persona Relacionada: Se considerarán Personas Relacionadas respecto de una


o más personas o de sus representantes, las siguientes:

a) El cónyuge, los ascendientes, descendientes y colaterales por consanguinidad o


afinidad hasta el sexto grado inclusive y las sociedades en que éstos participen, con
excepción de aquellas inscritas en el Registro de Valores.

208
b) Las personas que se encuentren en alguna de las situaciones a que se refiere el
artículo 100 de la ley Nº 18.045, de Mercado de Valores.”

La letra a) habla de colaterales por consanguinidad o afinidad hasta el sexto grado


inclusive y las sociedades en que estos participen, lo cual es sumamente amplio, ya
sea por parte de los parientes o por el hecho de participar en alguna sociedad, ya
que esta no exige porcentaje de participación.

¿Participar en una sociedad es solo tener propiedad en ella? A OCHAGAVÍA no le


parece evidente que la única manera de participar es teniendo propiedad, y
también podría considerarse que se extiende a trabajadores, directores y otras
personas que intervienen en la empresa. Esto se da ya que participación no tiene
una definición legal, lo que permitiría extenderla a otros supuesto distintos de la
propiedad.

“No podrán votar las Personas Relacionadas con el Deudor y sus créditos no se
considerarán en el pasivo.” (art. 79 inc. 3).

Además de no poder votar, la ley establece otras sanciones de igual o mayor


gravedad:

(1) Los créditos de las personas relacionadas pueden quedar pospuestos incluso a
los acreedores valistas, y existen 2 hipótesis de posposición que se encuentran
en el art. 63 de la ley:

(a) Los créditos de las personas relacionadas con el deudor que no estén
debidamente documentados 90 días antes del inicio del procedimiento
concursal de reorganización quedan pospuestas hasta que se paguen

209
íntegramente los créditos de los demás acreedores a los que alcance el
acuerdo.Esto implica que estos acreedores quedan pospuestos incluso
después de los acreedores subordinados.

OCHAGAVÍA cree que es una presunción de que algo extraño ocurre el


hecho de que un crédito de un acreedor de una persona relacionadano esté
debidamente documentado. Por documentación, él entiende una forma
amplia, pero le parece sospechoso que no exista ningún documento de un
crédito.

(b) La posposición se puede hacer aplicable a otros acreedores personas


relacionadas cuyos créditos se encuentran debidamente documentados,
siempre que cuenten con el informe favorable del veedor. De este modo,
un acreedor que es persona relacionada con el deudor de un crédito
debidamente documentado, igualmente puede ser sancionado.

“Posposición del pago a acreedores Personas Relacionadas. Los acreedores


Personas Relacionadas con el Deudor, cuyos créditos no se encuentren
debidamente documentados 90 días antes del inicio del Procedimiento
Concursal de Reorganización, quedarán pospuestos en el pago de sus créditos,
hasta que se paguen íntegramente los créditos de los demás acreedores a los
que les afectará el Acuerdo de Reorganización Judicial. Sin perjuicio de lo
anterior, el Acuerdo podrá hacer aplicable la referida posposición a otros
acreedores Personas Relacionadas con el Deudor, cuyos créditos se encuentren
debidamente documentados, previo informe fundado del Veedor.”(art. 63).

El plazo de 90 días a que hace referencia la primera oración de este art. ¿se
aplica a la segunda hipótesis? Porque en esta segunda hipótesis solo se habla de
otros acreedores cuyos créditos se encuentran debidamente documentados.

210
OCHAGAVÍA cree que la redacción no es clara, y si se llegara a la conclusión que
se puede posponer al acreedor con independencia de cuando se hubiere
documentado el crédito, le parece que dicha norma es expropiatoria. Él tiene
serios reparos respecto de la constitucionalidad de la sanción que se le puede
llegar a imponer a los deudores personas relacionadas. Esto supone problemas
como por ejemplo: si una persona le otorga un crédito a una sociedad en la que
tiene el 10% del capital (coligante), dicha persona sería persona relacionada con
ese sociedad,¿parece razonable al tener esa relación quedar pospuesto? Incluso
podía ocurrir que esa persona prestara el dinero sin tener el 10% en la sociedad,
y que luego producto de transacciones futuras se hiciera dueño del 10% de la
compañía (Ej. Capitalización por problemas de pago del deudor). ¿Qué pasa si
una persona que quiere desarrollar un proyecto invita a otras personas a
participar de él, quienes acceden a otorgarle crédito con la condición de tener
algún tipo de participación en la sociedad? Esto es algo que ocurre mucho en la
práctica, en que muchos acreedores buscan no sólo tener posiciones de
acreedor con sus deudores, sino que también tener participación de capital en
la sociedad. ¿Qué pasa si una persona deviene en acreedor por ejecutar la
prenda que tenía sobre las acciones de la sociedad?

No se considera, para efectos de la sanción, los créditos que las personas


relacionadas otorguen en conformidad a los arts. 72, 73 y 74 de la Ley Nº
20.720: “Tampoco regirá respecto de los créditos que se originen en virtud del
artículo 74, en la medida que se autorice por los acreedores que representen
más del 50% del pasivo del Deudor.” (última oración art. 63).

2. Aquellos acreedores que hubieren adquirido sus créditos por cesión dentro de los
30 días previos a la fecha de inicio del procedimiento concursal de reorganización.
Si una persona adquiere un crédito contra el deudor dentro de los 30 días previos al

211
inicio del procedimiento de reorganización no puede votar ni concurrir a la junta,
así como tampoco impugnar.

¿Cuál es la razón de ser de esta norma? Una persona que adquiere un crédito 30
días antes de la fecha indicada, pagará muy poco por ese crédito porque el estado
de los negocios del deudor es en ese punto muy malo derivando en que la
probabilidad de pago de ese crédito es muy baja, lo que a su vez implica que la tasa
de descuento de los créditos contra esa persona debiera incrementar. La ley dice,
entonces, que si un acreedor quiso hacerse de una buena opción por la vía de
comprar créditos del deudor pagando muy poco por créditos que valen más, sus
créditos quedarán pospuestos. OCHAGAVÍA cree que hubiera sido mejor haber
dejado votar a estas personas por el monto al cual adquirieron el crédito.

“Los cesionarios de créditos adquiridos dentro de los treinta días anteriores a la


fecha de inicio del Procedimiento Concursal de Reorganización, conforme se indica
en el artículo 54, no podrán concurrir a la Junta de Acreedores para deliberar y
votar el Acuerdo y tampoco podrán impugnarlo.” (art.79 inc. 4).

Todos los demás acreedores pueden votar, incluso una categoría que bajo la ley de
quiebra antigua no podían votar, como lo eran los acreedores garantizados, ya que si
estos votaban en los convenios, tácitamente renunciaban a su garantía. Los acreedores
garantizados con prenda o hipoteca no quedaban incluidos en el convenio porque la ley
entendía que tenían un derecho “sacrosanto” a continuar con su ejecución (incluso en
el caso de quiebra), por lo que no tenían porqué ir a votar a un procedimiento
concursal, y si en los hechos lo hacían, perdían su garantía –ya sea tácitamente o
expresamente-. La Comisión Redactora consideró que esto no era deseable, y en
definitiva la mayor cantidad de las veces los principales bienes del deudor –aquellos
que le permitían operar y continuar con el giro del negocio- eran aquellos que estaban

212
hipotecados o prendados, de manera que poco podía resultar de la aprobación de un
convenio si es que los principales bienes del deudor salían a remate.

Para OCHAGAVÍA la solución no fue la más adecuada, ya que actualmenteel otorgar un


crédito con una garantía no garantiza que ese crédito se va a pagar, ya que estos
forman parte del acuerdo pues son considerados para el quórum y deben votar.

No sólo los acreedores garantizados deben participar y votar, sino que la ley, para
efectos de determinar los efectos que el acuerdo de reorganización tiene sobre los
acreedores garantizados, distingue entre 2 tipos de bienes:

1. Aquellos bienes que son esenciales para el giro del negocio del deudor.

2. Aquellos bienes que no lo son.

De hecho esta es una de las cosas que puede clasificar el deudor cuando, en
conformidad al art. 56, presenta su proposición de convenio: cuál de esos bienes tienen
la calidad de esencial para el giro de la Empresa Deudora.La ley no da una definición de
esencial, por lo cual se trata de un asunto de hecho que deberá decidirse por el juez,
habiendo un incidente para determinar si un bien es esencial o no. En definitiva, la
determinación de si el bien es esencial o no, es lo que determinará qué efectos tiene el
acuerdo de reorganización respecto del acreedor hipotecario o prendario. Esto porque
si el bien no es esencial, sea que sea de propiedad del deudor o de un tercero, el
acreedor prendario o hipotecario, si quiere, puede hacer efectiva la garantía
hipotecaria o prendaria sobre el bien y ejecutarlo. La razón de ser de esta norma es que
los bienes no son esenciales, por lo que se le da la opción al acreedor de participar en el
acuerdo o bien ejecutar su prenda o hipoteca.

213
Respecto de los bienes de propiedad de terceros declarados no esenciales para el giro
del negocio del deudorla ley señala:

“Efectos del Acuerdo de Reorganización Judicial en las obligaciones garantizadas del


Deudor. Tales efectos serán los siguientes:

3. Respecto de las obligaciones del Deudor garantizadas con prenda o hipoteca sobre
bienes de propiedad de terceros, declarados no esenciales para el giro de la Empresa
Deudora de acuerdo a los artículos 56 y 94, deberá distinguirse:

a) Si el respectivo acreedor vota a favor del Acuerdo, se sujetará a los términos y


modalidades establecidos en el referido acuerdo y no podrá perseguir su crédito en
términos distintos a los estipulados.

b) Si el respectivo acreedor manifiesta su intención de no votar o no asiste a la Junta de


Acreedores llamada a conocer y pronunciarse sobre la propuesta de Acuerdo, su crédito
no se considerará en el pasivo con derecho a voto correspondiente a su clase o
categoría, y podrá cobrar su crédito respecto de las prendas o hipotecas otorgadas por
terceros.”(art. 95 Nº 3).

Si el acreedor ejecuta la prenda o hipoteca sobre los bienes del tercero, y no logra
pagarse por el 100% del crédito, este podrá optar que por el remanente no pagado se
le haga efectivo el acuerdo de reorganización.

El art. 95 Nº 2 tiene la misma norma respecto de los bienes no esenciales dados en


garantía, pero que son de propiedad del deudor:

“Efectos del Acuerdo de Reorganización Judicial en las obligaciones garantizadas del


Deudor. Tales efectos serán los siguientes:

214
2. Respecto de las obligaciones del Deudor garantizadas con prenda o hipoteca sobre
bienes de propiedad del Deudor, declarados no esenciales para el giro de la Empresa
Deudora de acuerdo a los artículos 56 y 94, regirá lo establecido en los incisos segundo
y tercero del artículo anterior.”(art. 95 Nº 2).

“El acreedor cuya garantía recae sobre un bien calificado como no esencial concurrirá y
votará en la clase o categoría de acreedores valistas, únicamente por el saldo del
crédito no cubierto por la garantía. El saldo cubierto por la garantía no se considerará
en el pasivo de la clase o categoría de acreedores garantizados.

El acreedor cuyo crédito no hubiere sido enteramente cubierto por la garantía podrá
solicitar, mediante un procedimiento incidental ante el mismo tribunal que conoció y se
pronunció sobre el Acuerdo, que dicho Acuerdo se cumpla a su favor, mientras no se
encuentren prescritas las acciones que del mismo emanen. El excedente que resulte de
la venta del bien declarado no esencial, una vez pagado el respectivo crédito, se
destinará al cumplimiento del Acuerdo.”(art. 94 inc. 2 y 3).

En definitiva, el acreedor que tiene una prenda o una hipoteca sobre un bien del
deudor no declarado esencial, la puede ejecutar, y por el remanente no pagado puede
pedir que se le haga aplicable a su crédito valista el acuerdo de reorganización.

El problema se presenta frente a los acreedores prendarios o hipotecarios que tienen


una garantía sobre un bien declarado esencial, esto porque si un acreedor tiene una
prenda o una hipoteca sobre un bien declarado esencial en la operación del deudor, el
acreedor prendario o hipotecario queda sometido a los términos del acuerdo:

“Efectos del Acuerdo de Reorganización Judicial en las obligaciones garantizadas del


Deudor. Tales efectos serán los siguientes:

215
1. Respecto de las obligaciones del Deudor garantizadas con prenda o hipoteca sobre
bienes de propiedad del Deudor o de terceros, declarados esenciales para el giro de la
Empresa Deudora, de acuerdo a los artículos 56 y 94, se aplicarán los términos y
modalidades establecidos en el Acuerdo de Reorganización Judicial.”(art. 95 Nº 1).

20/09/2016!
¿Cuáles son los bienes esenciales para el giro del negocio del deudor? Por ejemplo,
¿son esenciales la flota que tiene una empresa para distribuir sus productos? Estos
bienes son muy importantes, pero podría arrendar otros bienes, subarrendarlos, usar
otros servicios,etc. No hay jurisprudencia al respecto; PUGA dice que hay que estar a
que tan fácilmente pueden sustituirse o reemplazarse dichos bienes, porque las
consecuencias de que un bien sea declarado esencial son tremendamente gravosas
para el acreedor prendario o hipotecario, de manera que estadeclaración debe ser
específica, no genérica y estar basada en los hechos, y si un bien, según PUGA, es
fácilmente reemplazable, no hace mucho sentido calificarlo de esencial, ya que se
puede reemplazar por otro bien de similares características o por servicios prestados
por un tercero.

Es fundamental hacer esta distinción porque si el bien no es esencial, en principio, ese


acreedor hipotecario o prendario no es parte del acuerdo de reorganización, salvo que
quisiera ser parte, es decir, la ley lo faculta para ejecutar la prenda o hipoteca y solo
sería parte en el acuerdo de reorganización en cuanto hubiere hecho una de dos cosas:
(a) renunciado a su prenda o hipoteca; o (b) en cuanto lo que hubiere obtenido en la
ejecución de la prenda o la hipoteca no fuere suficiente para cubrir la totalidad de sus
créditos, pues en ese caso en el remanente es un acreedor valista (esto se desprende
del art. 95 Nº 2 y el Nº3, y de los inc. 2 y 3 del art. 94).

216
“El acreedor cuya garantía recae sobre un bien calificado como no esencial concurrirá y
votará en la clase o categoría de acreedores valistas, únicamente por el saldo del
crédito no cubierto por la garantía. El saldo cubierto por la garantía no se considerará
en el pasivo de la clase o categoría de acreedores garantizados*.

El acreedor cuyo crédito no hubiere sido enteramente cubierto por la garantía podrá
solicitar, mediante un procedimiento incidental ante el mismo tribunal que conoció y se
pronunció sobre el Acuerdo, que dicho Acuerdo se cumpla a su favor, mientras no se
encuentren prescritas las acciones que del mismo emanen. El excedente que resulte de
la venta del bien declarado no esencial, una vez pagado el respectivo crédito, se
destinará al cumplimiento del Acuerdo.”(Art. 94 inc. 2 y 3).

*No se considera en el pasivo de la clase porque puede ejecutar, por lo que no le


debería ser relevante el acuerdo de reorganización.

“Efectos del Acuerdo de Reorganización Judicial en las obligaciones garantizadas del


Deudor. Tales efectos serán los siguientes:

2. Respecto de las obligaciones del Deudor garantizadas con prenda o hipoteca sobre
bienes de propiedad del Deudor, declarados no esenciales para el giro de la Empresa
Deudora de acuerdo a los artículos 56 y 94, regirá lo establecido en los incisos segundo
y tercero del artículo anterior.

3. Respecto de las obligaciones del Deudor garantizadas con prenda o hipoteca sobre
bienes de propiedad de terceros, declarados no esenciales para el giro de la Empresa
Deudora de acuerdo a los artículos 56 y 94, deberá distinguirse:

217
a) Si el respectivo acreedor vota a favor del Acuerdo, se sujetará a los términos y
modalidades establecidos en el referido acuerdo y no podrá perseguir su crédito en
términos distintos a los estipulados.

b) Si el respectivo acreedor manifiesta su intención de no votar o no asiste a la Junta de


Acreedores llamada a conocer y pronunciarse sobre la propuesta de Acuerdo, su crédito
no se considerará en el pasivo con derecho a voto correspondiente a su clase o
categoría, y podrá cobrar su crédito respecto de las prendas o hipotecas otorgadas por
terceros.”(Art. 95 Nº 2 y 3).

Cuando se lee este art. 95 Nº 3 se puede llegar a la conclusión de que siendo acreedor
prendario o hipotecario de un bien no esencial no se debe votar en la junta de
acreedores que se pronuncia sobre el acuerdo de reorganización, puesto que de
hacerlo se somete al acuerdo de reorganización y se renuncia a la garantía, pasando a
ser un acreedor valista. Por el contrario, si el bien es esencial para el giro del deudor y
no es fácilmente reemplazable, al acreedor hipotecario y prendario le va a ser
oponible el acuerdo de reorganización, y él podrá participar del voto del acuerdo de
reorganización, pero no por el monto total de su crédito sino que solo por el monto del
avalúo comercial del bien.Esta última norma se opone a la indivisibilidad de la prenda o
de la hipoteca (cada parte del bien hipotecado o prendado garantiza todo y cada parte
del crédito garantizado), ya que la ley desmembró y separó el crédito garantizado para
decir que el acreedor hipotecario o prendario vota hasta por el monto del avalúo
comercial del bien, pero ¿por qué se da esto? para no sobreestimar el poder del
acreedor hipotecario o prendario; se busca minimizar el impacto del voto de estos
acreedores, que se estima pueden ser contrarios al acuerdo ya que de alguna manera
el resultado de sus gestiones de cobro está garantizado por la prenda o la
hipoteca,teniendo mayores incentivos para votar en contra del acuerdo que a favor del
mismo.

218
“Efectos del Acuerdo de Reorganización Judicial en las obligaciones garantizadas del
Deudor. Tales efectos serán los siguientes:

1. Respecto de las obligaciones del Deudor garantizadas con prenda o hipoteca sobre
bienes de propiedad del Deudor o de terceros, declarados esenciales para el giro de la
Empresa Deudora, de acuerdo a los artículos 56 y 94, se aplicarán los términos y
modalidades establecidos en el Acuerdo de Reorganización Judicial.”(art. 95 Nº 1).

¿Qué pasa con los acreedores que no tienen una garantía prendaria o hipotecaria, pero
sí tienen una fianza u otra garantía personal? La ley los trata, de alguna manera, de la
misma forma que a los acreedores hipotecarios o prendarios de un bien de un tercero
que no es esencial para el giro del deudor, de manera que estos acreedores, si quieren,
pueden participar y votar en el acuerdo como un acreedor valista,o por el contrario, si
manifiestan su intención de no votar o no concurren, pueden cobrar la garantía
personal que tienen.

“4. Respecto de las obligaciones del Deudor garantizadas con cauciones personales,
deberá distinguirse:

a) Si el respectivo acreedor vota en su clase o categoría de valista a favor del Acuerdo,


se sujetará a los términos y modalidades establecidos en el referido acuerdo y no podrá
cobrar su crédito en términos distintos a los estipulados.

b) Si el respectivo acreedor manifiesta su intención de no votar o no asiste a la Junta de


Acreedores llamada a conocer y pronunciarse sobre la propuesta de Acuerdo, su crédito
no se considerará en el pasivo con derecho a voto correspondiente a su clase o
categoría, y podrá cobrar su crédito respecto de los fiadores o codeudores, solidarios o
subsidiarios, o avalistas en los términos originalmente pactados.” (art. 95 Nº 4 letras a)
y b) Ley Nº 20.720).

219
Esta es una situación que es muy curiosa: ¿qué pasa con los acreedores garantizados
con una garantía personal y los garantizados por una prenda o hipoteca sobre un bien
declarado no esencial de propiedad de un tercero?Ellos ejecutan al tercero deudor
solidario o subsidiario o al tercero dueño de la finca hipotecada o bien prendado.
Ahora, ¿qué pasa si el acuerdo contempla una remisión del 50% de las deudas del
deudor? ¿Por cuánto perseguirán a los terceros estos acreedores que no participan del
acuerdo?No obstante que el acuerdo de reorganización pudo haber remitido parte de
las deudas, esa deuda en particular no se remitió y se puede cobrar al tercero por el
100% del monto de ella. ¿Qué derecho de subrogación tiene ese tercero contra el
deudor garantizado? Esto está regulado en el inc. final del art. 95, lo que se aplica tanto
a garantías reales como a las personales:

“El fiador, codeudor, solidario o subsidiario, avalista, tercero poseedor de la finca


hipotecada o propietario del bien prendado que hubiere pagado, de acuerdo a lo
establecido en la letra b) del número 3) o en la letra b) del número 4) anteriores, podrá
ejercer, según corresponda, su derecho de subrogación o reembolso, mediante un
procedimiento incidental, ante el mismo tribunal que conoció y se pronunció sobre el
Acuerdo, solicitando que éste se cumpla a su favor, mientras no se encuentren
prescritas las acciones que de él resulten.”

¿Qué significa que se cumpla a su favor si el acuerdo de reorganización contenía, por


ejemplo, una remisión del 50% de las deudas? Que él solo va atener derecho a
recuperar del deudor garantizado el 50% del crédito. En este caso se produce un efecto
contrario al principio de que lo accesorio sigue la suerte de lo principal.

¿Qué acreedores tienen derecho a votar en un acuerdo de reorganización? Solo


aquellos que figuran en la nómina de créditos reconocidas o en una de las ampliaciones
de dicha nómina. ¿Quiénes no tienen derecho a votar? Los acreedores hipotecarios o

220
prendarios de bienes no esenciales que opten por ejecutar; las personas relacionadas; y
quienes hubieren adquirido créditos por cesión en los 30 últimos días previos a la
presentación de la solicitud de reorganización, y lo que se dice de la cesión se debe
entender, según OCHAGAVÍA, restringido a la cesión y no a figuras similares... ¿Qué
figura produce un efecto similar a la cesión? El endoso (OCHAGAVÍA cree que el endoso
es una forma especial de hacer la cesión, por lo que sí debiera aplicar esta norma); la
subrogación (pago de una deuda ajena consintiéndolo expresa o tácitamente el
deudor; A OCHAGAVÍA le parece que en el caso de la subrogación legal no se tiene que
aplicar la norma de la cesión).

¿Cuándo y con qué quórum se aprueba el acuerdo de reorganización?El quórum para


aprobar es de los 2/3 de los acreedores presentes que representen al menos 2/3 del
pasivo con derecho a voto(Art. 79).

“Acuerdo de la Junta de Acreedores llamada a conocer y pronunciarse sobre la


propuesta. Cada una de las clases o categorías de propuestas de Acuerdo que establece
el artículo 61 será analizada, deliberada y acordada en forma separada en la misma
junta, pudiendo proponerse modificaciones, sin perjuicio de lo previsto en el artículo 82.

La propuesta se entenderá acordada cuando cuente con el consentimiento del Deudor y


el voto conforme de los dos tercios o más de los acreedores presentes, que representen
al menos dos tercios del total del pasivo con derecho a voto correspondiente a su
respectiva clase o categoría.” (art. 79 inc. 1 y 2 Ley Nº 20.720).

Desde la perspectiva de los acreedores se requiere un quórum doble: 2/3 de los


acreedores presentes que representen al menos 2/3 del pasivo.Esta es la razón de ser
de que los cesionarios no tengan derecho a voto, ello porque se podría manipular el
quórum relativo al número de acreedores por la vía de ceder el crédito a muchas
personas. OCHAGAVÍA cree que era mejor la norma que existía antes, que consideraba

221
a los cesionarios y al cedente como uno solo para los efectos del cómputo del quórum,
ello porque con la actual norma se le niega el derecho a voto a las cesiones totales, en
circunstancias en que no hay una alteración del quórum.

Ahora, es vital tener presente que no solo basta el voto favorable de los acreedores,
sino que también es fundamental el voto favorable del deudor, es decir, para que
exista el acuerdo en la Junta, es necesario que el deudor concurra y vote a favor, y lo
mismo respecto de los acreedores con el quórum respectivo. Si el deudor no asiste o
vota en contra, se entiende rechazado el acuerdo de reorganización y corresponde que
el juez dicte la resolución de liquidación, es decir, que declare al deudor en liquidación.

¿Qué pasa si no concurren a la Junta los acreedores? La ley no contempla una sanción
específica para este caso y, en primer lugar, cabe llamar la atención que la ley tampoco
contempla una norma de quórum especial para esta junta llamada a conocer sobre el
acuerdo, por lo cual debiera corresponder aplicar las normas generales sobre quórum
para juntas de acreedores, que implican, en definitiva, que hayan acreedores que
representen a lo menos un 25% del pasivo con derecho a voto (Art. 181). PUGA dice
que si no hay quórum corresponde hacer una nueva junta porque no cabe aplicar por
analogía lo que la ley establece para el caso que el deudor no comparezca o no vote a
favor. Esto le hace sentido a OCHAGAVÍA, pero ve un problema en la práctica: la junta
se hace el último día del término de la protección financiera concursal, por lo que si se
celebra la junta otro día, se debiera prorrogar la protección financiera, siendo que ello
no lo establece ninguna norma dentro de la ley, lo que sí se establece en el caso que la
Junta se suspenda.

*Según OCHAGAVÍA la naturaleza jurídica de la junta es contractual, no procesal.

¿Qué pasa si el acuerdo contemplaba clases de acreedores? Cada clase vota por
separado, pero es necesario que ambas clases aprueben el acuerdo para que este se

222
entienda aprobado, y si en los hechos una clase aprueba el acuerdo que se les presentó
y la otra no, se entiende rechazado el acuerdo. La votación de cada clase de acreedor
está sujeta ala condición suspensiva de que la otra clase también lo apruebe, de
manera que mientras todas las clases no lo aprueben, ninguna clase ha adoptado un
acuerdo vinculante.

“El acuerdo sobre la propuesta de una clase o categoría se adoptará bajo la condición
suspensiva de que se acuerde la propuesta de la otra clase o categoría en la misma
Junta de Acreedores, o en la que se realice de conformidad a lo previsto en el artículo
82.”(Art. 79 inc. final).

En la Junta se puede aprobar o rechazar, pero también se puede suspender la junta o


modificar. Se suspende la junta para analizar distintas propuestas para tratar de
convencer a quienes no están aún convencidos, pero ello solo se puede hacer
conforme al art. 82:

“Suspensión de la Junta de Acreedores. La Junta de Acreedores llamada a conocer y


pronunciarse sobre la propuesta de Acuerdo podrá acordar con, Quórum Calificado, su
suspensión por no más diez días, fijando al efecto nuevo día y hora para su
reanudación.

El Deudor conservará la Protección Financiera Concursal hasta la celebración de dicha


Junta.”

En este caso si se suspende se prorroga la protección financiera concursal.

A esta nueva junta pueden ir acreedores que no hayan ido a la primera Junta, siempre y
cuando tengan derecho a voto. No se trata de una continuación de la junta previa
desde esa perspectiva, sino que es una nueva junta.

223
La ley define lo que entiende por Quórum Calificado: “33) Quórum Calificado: El
conformado por la mayoría absoluta del pasivo total con derecho a voto verificado y/o
reconocido, según corresponda, en el Procedimiento Concursal respectivo.”(art. 2 Nº
33).

La junta también podrá pronunciarse sobre modificaciones al acuerdo presentadas por


el deudor. Estas no necesariamente son modificaciones al acuerdo de reorganización ya
aprobado –lo cual también es posible-, sino que también puede modificarse la
propuesta dentro de los 10 días antes de la celebración de la Junta. Esto es curioso, y es
una conclusión que se obtiene más de la práctica que de la ley, ello porque la
propuesta que presentó el deudor debía ser publicada en el Boletín Concursal, de
manera que si los acreedores la vieron y decidieron no participar no tendrán como
enterarse de las modificaciones hechas por la Junta. No obstante eso, siempre ha sido
el criterio bajo la ley antigua que en la Junta se puede modificar aunque no haya una
norma clara que lo sostenga, y la que más puede pensarse que va en esa dirección es el
art. 57 Nº 6.

Una novedad que introdujo la Ley Nº20.720 es que no todo tiene que ocurrir en la
Junta de acreedores, tal como ocurría con la antigua ley. La nueva ley introdujo un leve
cambio a esta norma: la facultad que le confirió al veedor de recabar votos de forma
previa a la Junta, de acreedores que este considere que no van a concurrir a la junta, de
tal manera que puedan votar antes, ya sea ante un ministro de fe o por vía de firma
electrónica avanzada.

“Procedimiento de registro de firmas. Para obtener las mayorías que exige el


Procedimiento Concursal de Reorganización, el Veedor podrá recabar la votación de
cualquier acreedor, mediante la suscripción de uno o más documentos ante un ministro

224
de fe o mediante firma electrónica avanzada, en que conste la aceptación de los
acreedores.

Los votos que se obtengan mediante este sistema se considerarán como votos de
acreedores presentes en la Junta de Acreedores llamada a conocer y pronunciarse sobre
la propuesta de Acuerdo, para los efectos del cómputo de las mayorías.

Los acreedores del Deudor podrán suscribir estos documentos desde la publicación de la
propuesta de Acuerdo en el Boletín Concursal, y hasta tres días antes de la fecha fijada
para la Junta de Acreedores llamada a conocer y pronunciarse sobre dicha
propuesta.”(Art. 80).

De este modo, puede darse que el veedor llegue a la Junta con el acuerdo ya votado y
listo para ser aprobado.

Este acuerdo, si se logran las mayorías que la ley establece, es vinculante para todos
los acreedores del deudor. En primer lugar para todos los acreedores que figuraban en
la nómina de acreedores reconocidos y sus ampliaciones, pero también para todos los
acreedores que tenía el deudor aun cuando no figuraban en esa nómina, en la medida
en que tuvieran la calidad de acreedores del deudor al momento de dictarse la
resolución de reorganización.

“Acreedores comprendidos en los Acuerdos de Reorganización Judicial. Los Acuerdos


sólo afectarán a los acreedores cuyos créditos se originen con anterioridad a la
Resolución de Reorganización regulada en el artículo 57.

Los créditos que se originen con posterioridad no serán incluidos en el Acuerdo de


Reorganización Judicial.”(art. 66).

225
Este es un caso de contratación forzosa, pudiendo ocurrir que acreedores que no
tuvieron derecho a votar (no aparecían en la nómina y no impugnaron o si impugnaron
fueron rechazados), o dieron su voto en contra, igualmente estarán obligados al
acuerdo,siendo este un contrato vinculante para ellos, constituyendo este un contrato
forzado. La única restricción que tiene la mayoría es que no puede establecer acuerdos
discriminatorios: se requiere de Quórum Especial (a lo menos 2/3), lo que se distingue
de la norma antigua en la que se requería unanimidad.
“Diferencias entre acreedores de igual clase o categoría. En las propuestas de Acuerdo
de Reorganización Judicial se podrán establecer condiciones más favorables para
algunos de los acreedores de una misma clase o categoría, siempre que los demás
acreedores de la respectiva clase o categoría lo acuerden con Quórum Especial, el cual
se calculará únicamente sobre el monto de los créditos de estos últimos.”(art. 64).

Si el deudor no comparece, vota en contra o los acreedores no comparecen, no lo


aprueban por los votos establecidos, o lo rechazan, la propuesta presentada por el
deudor se entiende rechazada y el tribunal debe proceder a dictar la resolución de
liquidación.

Ahora, si se aprueba el acuerdo de reorganización, este se puede modificar, y se puede


modificar, en primer lugar, de la misma manera que se aprobó, es decir, a través de
una Junta con la aprobación del deudor y la votación favorable de los mismos
acreedores que tenían derecho a participar de la primera junta, con los mismos
quórums y las mismas clases. La segunda posibilidad es que en los casos en que se haya
establecido una comisión de acreedores y se le haya concedido a esa comisión la
facultad de aprobar modificaciones al acuerdo.

La facultad de modificación no es absoluta, pues no se podría privar, por ejemplo, a


alguien de su calidad de acreedor, cambiar a un acreedor de clase, introducir

226
diferencias entre los acreedores de una misma clase salvo con los quórums del art. 64,
o los montos de sus créditos con sus preferencias.

“Modificación del Acuerdo. Las modificaciones al Acuerdo deberán adoptarse por el


Deudor y los acreedores que lo suscribieron agrupados en sus respectivas clases o
categorías, conforme al mismo procedimiento y mayorías exigidas en el artículo 79.

No obstante lo anterior, el Acuerdo que establezca la constitución de una Comisión de


Acreedores podrá facultarla para modificarlo con el quórum de aprobación que el
mismo Acuerdo determine, el que en ningún caso podrá ser inferior al Quórum Simple.

La modificación podrá recaer sobre todo o parte del contenido del Acuerdo, salvo lo
referente a la calidad de acreedor, su clase o categoría, diferencias entre acreedores de
igual clase o categoría, monto de sus créditos, sus preferencias, y respecto de aquellas
materias que el Acuerdo determine como no modificables por la Comisión de
Acreedores.

En las Juntas de Acreedores que se celebren con posterioridad a la aprobación del


Acuerdo por el tribunal, el derecho a voto se determinará en conformidad al artículo 78.
No tendrán derecho a voto los acreedores que tengan la calidad de Personas
Relacionadas con el Deudor.”(art. 83).

Ahora, en el caso que se tenga un acuerdo aprobado, ese acuerdo debe publicarse en
el Boletín Concursal (art. 84), y dentro de los 5 días siguientesa la publicación, los
acreedores que tuvieron derecho a participar en la Junta y los acreedores a quienes les
afecte el acuerdo (incluso aquellos que no hayan figurado en la nómina pero que
fueren acreedores del deudor a la fecha de la dictación de la resolución de
reorganización), pueden impugnarlo por las causales incurridas en el art. 85. Estas
causales pueden ser de forma (errores procesales) o de fondo:

227
“Causales para impugnar el Acuerdo. El Acuerdo podrá ser impugnado por los
acreedores a los que les afecte, siempre que se funde en alguna de las siguientes
causales:

1) Defectos en las formas establecidas para la convocatoria y celebración de la junta


de acreedores, que hubieren impedido el ejercicio de los derechos de los acreedores o
del deudor.En este caso la ley exige además una consideración de fondo: que se
hubiere impedido el ejercicio de los derechos.

2) El error en el cómputo de las mayorías requeridas en este Capítulo, siempre que


incida sustancialmente en el quórum del Acuerdo de Reorganización Judicial.Se exige
un defecto en el cálculo de los quórums con un requisito sustantivo: En la medida que
ese defecto haya influido en la aprobación del acuerdo.

3) Falsedad o exageración del crédito o incapacidad o falta de personería para votar


de alguno de los acreedores que hayan concurrido con su voto a formar el quórum
necesario para el Acuerdo, si excluido este acreedor o la parte falsa o exagerada del
crédito, no se logra el quórum del Acuerdo.Este numeral nuevamente exige un
requisito de forma con un elemento sustantivo: que no se haya llegado al acuerdo sin
el voto del acreedor que falsea.

4) Acuerdo entre uno o más acreedores y el Deudor para votar a favor, abstenerse de
votar o rechazar el Acuerdo, para obtener una ventaja indebida respecto de los
demás acreedores.A OCHAGAVÍA le parece que los términos y condiciones del acuerdo
no pueden ser una ventaja indebida en sí misma. El acuerdo es una negociación
contractual y como tal, siempre se dan y se reciben concesiones, y por consiguiente, lo
que está dentro del ámbito del acuerdo no debiera considerarse una ventaja indebida,

228
sino que esta debiera encontrarse en algo que no esté en el acuerdo (ej. Soborno). La
ventaja indebida debe estar fuera del ámbito del acuerdo.

5) Ocultación o exageración del activo o pasivo.En este caso se habla de que el deudor
exageró sus pasivos u ocultó sus activos o pasivos. Que haya engañado a sus
acreedores sobre el monto de sus bienes y/o pasivos.

6) Por contener una o más estipulaciones contrarias a lo dispuesto en esta ley.” (art.
85).

Todas las impugnaciones que se presenten se resuelven en una única audiencia ante el
tribunal que conoce del acuerdo, quien deberá pronunciarse sobre todas ellas dentro
de los 10 siguientes al vencimiento del plazo para impugnar.

Dentro del contexto de la ley estas audiencias son verbales y en ellas se resuelven
todos los asuntos que se pudieran presentar, de modo que el tribunal, en la misma
audiencia, deberá resolver todas las impugnaciones.

“Audiencia única de resolución de impugnaciones. Las impugnaciones al Acuerdo se


tramitarán como un solo incidente y se fallarán conjuntamente en una audiencia única,
que el tribunal competente citará para tal efecto, dentro de los diez días de vencido el
plazo para impugnar. Esta audiencia será verbal y se llevará a cabo con los que asistan.
En la misma audiencia deberán resolverse las incidencias que promuevan las partes. El
tribunal podrá, si así lo estima, suspender y continuar la referida audiencia con
posterioridad. La resolución que se pronuncie sobre las impugnaciones al Acuerdo
deberá dictarse a más tardar dentro de los treinta días siguientes a la fecha de
celebración de la referida audiencia.

229
La resolución que resuelva las impugnaciones se publicará en el Boletín Concursal. Esta
resolución será apelable en el solo efecto devolutivo.”(art. 87).

Una vez que la resolución que resuelve la impugnación queda firme, es necesario
distinguir por qué causal se impugnó: Si es por cualquiera de las cuales de losNºs1,2,3 y
6, la ley le otorga la facultad al deudor de presentar una nueva propuesta; Si se trata de
las causales de los Nºs 4 y 5 no concederá las mismas facultades, porque se refieren a
casos en que está involucrado el deudor en una actitud sancionada por la ley.

Si el deudor no presenta una nueva propuesta en estos casos, o dicha propuesta es


rechazada, o si en cualquiera de los otros casos se acoge la impugnación por los Nºs 4 y
5, el juez deberá dictar la resolución de liquidación.

“Nueva propuesta de Acuerdo. Si se acoge por resolución firme y ejecutoriada la


impugnación al Acuerdo por las causales establecidas en los números 1), 2), 3) y 6) del
artículo 85, el Deudor podrá presentar una nueva propuesta de Acuerdo, dentro de los
diez días siguientes contados desde que se notifique la resolución que tuvo por acogida
la impugnación referida, siempre que esta nueva propuesta se presente apoyada por
dos o más acreedores que representen, a lo menos, un 66% del pasivo total con derecho
a voto. En este caso, el Deudor gozará de Protección Financiera Concursal hasta la
celebración de la Junta llamada a conocer y pronunciarse sobre la nueva propuesta. La
resolución que tenga por presentada la nueva propuesta de Acuerdo fijará la fecha de
la Junta de Acreedores llamada a conocer y pronunciarse sobre dicha nueva propuesta,
la que deberá celebrarse dentro de los diez días siguientes contados desde que el
Deudor la presentó.

Si el Deudor no presentare la nueva propuesta de Acuerdo que reúna las condiciones


indicadas en el inciso anterior, dentro del plazo antes establecido, el tribunal

230
competente dictará, de oficio y sin más trámite, la Resolución de Liquidación de la
Empresa Deudora.

Si se acoge una impugnación al Acuerdo por las causales establecidas en los números 4)
y 5) del artículo 85, el tribunal, de oficio y sin más trámite, ordenará el inicio del
Procedimiento Concursal de Liquidación en la misma resolución que acoge la
impugnación, y el Deudor no podrá presentar nuevamente una propuesta de
Acuerdo.”(art. 88).

21/09/2016
La ley faculta a los acreedores para impugnar el acuerdo, y esta impugnación debe
producirse dentro del plazo de 5 días contados desde la fecha de publicación de la
acuerdo en el Boletín Concursal. Las causales de impugnación pueden ser por forma o
por fondo, y se deduce la impugnación el tribunal está llamado a resolver todas las
impugnaciones en una misma audiencia, la que deberá ser citada dentro de un plazo de
10 días después del término del plazo para deducir las impugnaciones. La resolución
que deshecha las impugnaciones no presenta mayor problema más allá de saber que es
apelable en el solo efecto devolutivo. La resolución que acoge una o más de las
impugnaciones es más compleja, y para entender sus efectos es necesario distinguir
cual fue la causal de la impugnación: Si la impugnación se basó en los Nºs4 y 5 del art.
85 (ocultación o exageración de activos o pasivos o acuerdo con los acreedores por los
cuales estos se abstuvieren de votar, o votar a favor o en contra asegurándoles un
beneficio ilegítimo), junto con acoger la impugnación, el tribunal deberá
necesariamente declarar la resolución de liquidación. En el caso de acoger las
impugnaciones por cualquiera de las causales de los Nºs 1, 2, 3 y 6 del art. 85, también
procede que el tribunal declare la liquidación, pero se le da la posibilidad al deudor
deque dentro del plazo de 10 días contados desde la fecha en que se acogen las
impugnaciones pueda presentar unanueva propuesta de acuerdo de reorganización,
pero deberá hacerlo con el acuerdo de 2 o más acreedores que representen a lo menos

231
66% del pasivo con derecho a voto. Este acuerdo de reorganización deberá ser
conocido en una nueva Junta de acreedores que sedeberá celebrar dentro de los 10
siguientes a la fecha en que se hubiera propuesto.

Si esta nueva proposición de acuerdo de reorganización ocurre, el deudor queda


amparado por la protección financiera concursal hasta la celebración de la nueva junta
llamada a conocer de esta nueva propuesta.

De esta manera, se puede observar que la ley no culpa al deudor por los errores
procesales que se hayan podido incurriren la celebración o convocatoria de la junta de
acreedores, o en el cálculo de los quórums o en las otras causales de impugnación.

La resolución que resuelve sobre la impugnación es apelable en el solo efecto


devolutivo (art. 87 inc. final).

En estos casos si se deduce contra la resolución de segunda instancia recurso de


casación, no se puede suspender los efectos de la resolución aún cuando se rinda
fianza de resultas (art. 89 inc. penúltimo).

“El recurso de casación deducido en contra de la resolución de segunda instancia que


desecha la o las impugnaciones, no suspenderá el cumplimiento de dicha resolución,
incluso si la parte vencida solicita que se otorgue fianza de resultas por la parte
vencedora.”(art. 89 inc. penúltimo)

Si se impugna el acuerdo de reorganización, ¿se aplica o no se aplica el acuerdo de


reorganización aprobado por la junta? ¿Las impugnaciones que se presentan en contra
del acuerdo suspenden la eficacia y la entrada de vigencia del acuerdo? Por regla
general la ley establece que no las suspende, y el acuerdo de reorganización se
comienza a aplicar no obstante estar pendiente el plazo para impugnar y no obstante

232
haberse deducido impugnaciones. La única excepción es si acaso las impugnaciones
fueron deducidas por acreedores que representan el 30% del pasivo con derecho a
voto o bien el 30% del pasivo con derecho a voto de la clase a la que pertenece el
acreedor impugnante, porque en ese caso, los efectos del acuerdo de reorganización
quedan suspendidos hasta que la impugnación se resuelva por sentencia definitiva y
ejecutoriada.

Todos los actos que se celebren durante este periodo no pueden impugnarse aun
cuando se acoja la impugnación, es decir, estos actos quedan protegidos por la ley, de
manera que no pueden impugnarse (inc. 4 del art. 89).

“El Acuerdo regirá no obstante las impugnaciones que se hubieren interpuesto en su


contra. Sin embargo, si éstas fueren interpuestas por acreedores de una determinada
clase o categoría, que representen en su conjunto a lo menos el 30% del pasivo con
derecho a voto de su respectiva clase o categoría, el Acuerdo no empezará regir hasta
que dichas impugnaciones fueren desestimadas por sentencia firme y ejecutoriada. En
este caso y en el del inciso segundo de este artículo, los actos y contratos ejecutados o
celebrados por el Deudor en el tiempo que medie entre el Acuerdo y la fecha en que
quede ejecutoriada la resolución que acoja las impugnaciones, no podrán dejarse sin
efecto.” (art. 89 inc. 4).

¿Cuándo entra realmente en vigencia el acuerdo de reorganización? Según la ley el


acuerdo de reorganización comienza a regir una vez que haya expirado el plazo para
deducir impugnaciones sin que estas se hayan deducido, y que el tribunal lo declare
así, de oficio o a petición de parte.Si por el contrario se deducen impugnaciones, será
hasta que se dicte una sentencia que cause ejecutoria.

“Aprobación y vigencia del Acuerdo. El Acuerdo se entenderá aprobado y comenzará a


regir una vez vencido el plazo para impugnarlo, sin que se hubiere impugnado y el

233
tribunal competente lo declare así de oficio o a petición de cualquier interesado o del
Veedor.

Si el Acuerdo fuere impugnado y las impugnaciones fueren desechadas, el tribunal


competente lo declarará aprobado en la resolución que deseche la o las impugnaciones,
y aquél comenzará a regir desde que dicha resolución cause ejecutoria.”(art. 89 inc. 1 y
2).

En este minuto entra a regir el acuerdo de reorganización. ¿A quiénes afecta este


acuerdo? A todos los acreedores del deudor sea que hayan concurrido o no a la junta
de acreedores, y OCHAGAVÍA señala que sea que hayan sido incluidos o no en las
nóminas de acreedores con derecho a participar de la junta de acreedores, en la
medida en que hayan sido acreedores del deudor a la época de dictarse la resolución
de reorganización porque ello es lo que dice el art. 66 (art. 66 y 91).

“Efectos. El Acuerdo, debidamente aprobado, obliga al Deudor y a todos los acreedores


de cada clase o categoría de éste, hayan o no concurrido a la Junta que lo acuerde.”
(art. 91).

“Acreedores comprendidos en los Acuerdos de Reorganización Judicial. Los Acuerdos


sólo afectarán a los acreedores cuyos créditos se originen con anterioridad a la
Resolución de Reorganización regulada en el artículo 57.

Los créditos que se originen con posterioridad no serán incluidos en el Acuerdo de


Reorganización Judicial.” (art. 66).

Desde esta perspectiva es fundamental determinar si una persona tiene o no el


carácter de acreedor a una fecha determinada. Esto presenta problemas en el caso de
que las obligaciones sean condicionales o en las obligaciones en que el deudor

234
desconoce (no porque ignora sino en aquellos casos en los cuales hay discusión
respecto de la existencia de la obligación por lo que habrá que litigar).

Para entender los efectos del acuerdo de reorganización necesariamente se debe estar
a los términos y condiciones del acuerdo de reorganización. Si el acuerdo establecía un
cambio de deudor o de objeto, el efecto de ese acuerdo es la novación. Si por el
contrario, el acuerdo impone una remisión, será la condonación total o parcial de las
deudas del deudor, o si el acuerdo impone la modificación del plazo, la tasa de interés,
u otros aspectos de la obligación, ese será el acuerdo. Se deberá distinguir qué es lo
que dice el acuerdo para determinar sus efectos.

“Efectos sobre los créditos. Los créditos que sean parte del Acuerdo de Reorganización
Judicial se entenderán remitidos, novados o repactados, según corresponda, para todos
los efectos legales.” (art. 93 inc. 1).

Ahora, la ley en el inc.2 y 3 del art. 93 se encarga de aclarar un tema tributario: Los
efectos de la condonación de un crédito para el deudor y para el acreedor. ¿Qué
efectos tiene la condonación para el deudor? A el deudor se le produce un incremento
patrimonial, es decir, deberá pagar impuesto a la renta, salvo que tenga pérdidas de
arrastre.

“Lo anterior, es sin perjuicio de la obligación del Deudor de reconocer como ingreso,
para efectos tributarios, aquellas cantidades que se hubieren devengado a favor del
acreedor y que se condonen o remitan.” (inc. final art. 93).

¿Qué efectos tiene la condonación para el acreedor? Tiene una disminución


patrimonial, pero ¿esa disminución es un gasto necesario para producir la renta? Esto
es relevante porque los gastos necesarios permiten reducir la base imponible. La ley, en
el inc. 2, califica en qué circunstancias esta condonación de créditos que pudo haber

235
tenido el acuerdo de reorganización es un gasto necesario para producir la renta,
estableciendo 2 requisitos:

1. Que no sea un crédito otorgado por una persona relacionada al deudor. Esto a
OCHAGAVÍA le parece un abuso para las personas relacionadas.

2. El crédito debe ser a lo menos 1 año antes de la celebración del acuerdo de


reorganización. Esto también es criticable para OCHAGAVÍA, ello porque no le ve
sentido a que no se le considere como gasto necesario a aquel que condona una
deuda en virtud de un crédito celebrado unos meses antes del acuerdo de
reorganización.

“El acreedor, contribuyente del impuesto de primera categoría de la Ley sobre Impuesto
a la Renta, contenida en el artículo 1º del decreto ley Nº 824, de 1974, podrá deducir
como gasto necesario conforme a lo dispuesto en el número 4º del artículo 31 de dicha
ley, las cantidades que correspondan a la condonación o remisión de deudas, intereses,
reajustes u otras cantidades que se hayan devengado en su favor, siempre y cuando
cumpla con las siguientes condiciones copulativas:

1) Que se trate de créditos otorgados o adquiridos con anterioridad al plazo de un año


contado desde la celebración del Acuerdo de Reorganización Judicial;

2) Que dicha condonación o remisión conste detalladamente en el referido Acuerdo o


sus modificaciones, aprobado conforme al artículo 89, y

3) Que no correspondan a créditos de Personas Relacionadas con el Deudor ni a


créditos de acreedores Personas Relacionadas entre sí, cuando éstos, en su conjunto,
representen el 50% o más del pasivo reconocido con derecho a voto.”(art. 93 inc. 2).

236
La ley reconoce, además de las impugnaciones del acuerdo, la posibilidad de solicitar la
declaración de nulidad del acuerdo o pedir que se declare su incumplimiento:

1. Nulidad del acuerdo de reorganización.La causal para pedir la nulidad del acuerdo
no dice relación con los requisitos de validez del mismo, sino que la causal para
pedir la nulidad de un acuerdo de reorganización es la exageración u ocultamiento
de activos o pasivos del deudor, es decir, es la misma causal que permite impugnar
el acuerdo de reorganización, con la peculiaridad de que se debe tomar
conocimiento de esta causal con posterioridad al vencimiento del plazo para
impugnar. El plazo para ejercer esta acción de nulidad es un año desde la fecha en
que el acuerdo de reorganización hubiere entrado en vigencia.

La nulidad del acuerdo de reorganización acarrea la nulidad de todas las garantías


que se hubieren constituido para garantizar su cumplimiento, ya sean sobre bienes
del deudor, de terceros o garantías personales constituidas por terceros. Esto no es
novedad ya que sigue el principio de quelo accesorio sigue la suerte de lo principal.

La nulidad en el derecho civil opera con efecto retroactivo, pero en este caso la
nulidad no operará jamás con efecto retroactivo (art. 99 inc. final).

“Nulidad del Acuerdo. No se admitirán otras acciones en contra del Acuerdo que las
fundadas en la ocultación o exageración del activo o del pasivo y de las que se
hubiere tomado conocimiento después de haber vencido el plazo para impugnar el
Acuerdo.

La declaración de nulidad del Acuerdo extingue de pleno derecho las cauciones que
lo garantizan.

237
Las acciones de nulidad del Acuerdo podrán interponerse por cualquier interesado y
prescribirán en el plazo de un año contado desde la fecha en que aquél comenzó a
regir.” (art. 97).

2. Incumplimiento del acuerdo de reorganización. La naturaleza jurídica de un


acuerdo de reorganización es contractual. Cuando se produce el incumplimiento de
un contrato se puede solicitar el cumplimiento forzado o la resolución del contrato,
y en ambos casos la indemnización de perjuicios. En este caso el incumplimiento
por parte del deudor habilita a aquel acreedor que se ve afectado por el
incumplimiento a pedir la declaración de incumplimiento del acuerdo de
reorganización. De este modo, solo tendrá legitimación activa el acreedor que se
vea afectado por el incumplimiento, a diferencia de lo que ocurre con la nulidad
(Cualquier persona que tuviere interés en ello).

¿Qué defensas podrá oponer el demandado o deudor ante esta acción? En el caso
en que un acreedor cualquiera demande al deudor en condiciones normales, este
podrá interponer la excepción de pago hasta la citación a oír sentencia en primera
instancia y hasta la vista de la causa en segunda instancia. Esta misma facultad que
la legislación general le concede al deudor de enervar la acción por la vía de cumplir
una vez que ha sido demandado, la Ley Nº 20.720 se la reconoce al deudor, y dice
que este una vez que se solicita la acción de incumplimiento, puede enervar la
acción cumpliendo pero solo una vez por cada clase de acreedores que solicitan el
incumplimiento, es decir, si un acreedor demanda por incumplimiento en una de
las clases, puede enervar la acción esa vez cumpliendo, pero no puede enervarla
otra vez más con otro acreedor de la misma clase. El plazo que tendrá para cumplir
es de 60 días contados desde que se solicita la acción de incumplimiento del
acuerdo.

238
Hay una segunda causal que existe para pedir el incumplimiento, la cual consiste en
el hecho de que se haya agravado el mal estado de los negocios del deudor de
forma que haga temer un perjuicio para los acreedores. Si los negocios del deudor
no repuntan, y sigue sufriendo pérdidas, en términos que haga temer que se
seguirá un mayor perjuicio a los acreedores, la ley faculta a estos para pedir la
declaración de incumplimiento. En este caso no hay un incumplimiento
propiamente tal, pero no obstante eso la ley faculta a los acreedores para solicitar
la declaración de incumplimiento.

En el caso que los negocios del deudor vayan mal y se deteriore su condición
financiera no habrá posibilidad de enervar. El plazo para pedir el incumplimiento es
de un año contado desde su fecha.

El incumplimiento por esta última causal lo puede pedir cualquier acreedor. El


incumplimiento no produce la extinción de las garantías que se hubieren otorgado
para garantizar el acuerdo.

“Acción de incumplimiento. El Acuerdo podrá declararse incumplido a solicitud de


cualquiera de los acreedores a los que les afecte por inobservancia de sus
estipulaciones.

Podrá también declararse incumplido si se hubiere agravado el mal estado de los


negocios del Deudor de forma que haga temer un perjuicio para dichos acreedores.

Si la acción de incumplimiento se deduce sólo por la inobservancia de las


estipulaciones de una de las clases o categorías del Acuerdo, el Deudor podrá
enervar la acción cumpliendo dichas estipulaciones dentro del plazo de sesenta
días contado desde la notificación de la acción. El Deudor podrá enervarla por una
sola vez para cada categoría o clase del Acuerdo.

239
Las acciones de incumplimiento del Acuerdo prescribirán en el plazo de un año
contado desde que se produce el incumplimiento.

La declaración de incumplimiento dejará sin efecto el Acuerdo, pero no extinguirá


las cauciones que hubieren garantizado su ejecución total o parcial.

Las personas obligadas por las cauciones señaladas en el inciso anterior y los
terceros poseedores de los bienes gravados con las mismas, según sea el caso,
serán oídos en el juicio de declaración de incumplimiento y podrán impedir la
continuación de éste enervando la acción mediante el cumplimiento del Acuerdo
dentro de los tres días siguientes a la citación.

Las cantidades pagadas por el Deudor antes de la declaración de incumplimiento


del Acuerdo y el producto obtenido durante el Procedimiento Concursal de
Liquidación servirán de abono a la deuda en caso que la caución se extienda a toda
la suma estipulada. Pero si comprende únicamente una parte de ella, sólo le servirá
para imputarla a la parte que reste de la cuota no caucionada.”(art. 98).

El tribunal competente para conocer de la acción de nulidad y de incumplimiento es el


mismo tribunal ante el cual se tramitó el acuerdo de reorganización. Se tramita en un
juicio sumario, y la resolución es apelable en ambos efectos. Si se acogen, no produce
efectos retroactivos.

“Procedimiento de declaración de nulidad e incumplimiento del Acuerdo. La nulidad o


incumplimiento del Acuerdo se sujetarán al procedimiento del juicio sumario y será
competente para conocer de estas acciones el tribunal ante el cual se tramitó el
Acuerdo.

240
La resolución que acoja las acciones de nulidad o incumplimiento del Acuerdo será
apelable en ambos efectos, pero el Deudor quedará de inmediato sujeto a la
intervención de un Veedor que tendrá las facultades de interventor contenidas en los
números 1), 7), 8) y 9) del artículo 25.

La declaración de nulidad o incumplimiento del Acuerdo no tendrá efecto retroactivo y


no afectará la validez de los actos o contratos debidamente celebrados en el tiempo
que media entre la resolución que aprueba el Acuerdo y la que declare la nulidad o el
incumplimiento.”(art. 99).

Firme y ejecutoriada la resolución que declara la nulidad o el incumplimiento, se


deberá pronunciar la resolución de liquidación (art. 100).

“Inicio del Procedimiento Concursal de Liquidación. Una vez firme y ejecutoriada la


resolución que declare la nulidad o el incumplimiento del Acuerdo, el mismo tribunal
dictará la Resolución de Liquidación de la Empresa Deudora, de oficio y sin más
trámite.”(art. 100).

Este acuerdo de reorganización tiene un solo objeto, que es evitar la liquidación:


reestructurar los activos y pasivos del deudor para así evitar la liquidación.

g) Acuerdo de reorganización que busca poner término al procedimiento de liquidación .


También es posible celebrar un acuerdo de reorganización una vez que el deudor ya ha
sido declarado en liquidación (arts. 257 y ss. Ley Nº 20.720). Estos se conocían antes
como los convenios simplemente judiciales y tienen por objeto poner termino al
procedimiento concursal de liquidación. Las normas de estos acuerdos no son muy
distintas a las que rigen los acuerdos de reorganización que buscan reestructurar
activos y pasivos. Estas diferencias que existen son:

241
1. Oportunidad. La estructura del procedimiento de liquidación no es muy distinto al
procedimiento de reorganización (ej. Etapa que busca determinar a los acreedores
del deudor). Solo se puede proponer un acuerdo de reorganización que busque
poner término al procedimiento concursal de liquidación una vez que esté
determinada la nómina de acreedores, es decir, una vez que se sepa cuáles son los
acreedores que tienen derecho a participar en ese procedimiento. El deudor deberá
acompañar la propuesta de reorganización judicial ante el mismo tribunal que
declaró la liquidación. Será ese tribunal quien mandará a publicar dicha resolución
al boletín concursal, de manera que todos los acreedores conozcan acerca de la
propuesta. El tribunal fijará fecha y hora para la Junta de acreedores, y no habrá
protección financiera concursal para el deudor.

“Término del Procedimiento Concursal de Liquidación por Acuerdo de


Reorganización Judicial. Durante el Procedimiento Concursal de Liquidación, una vez
notificada la nómina de créditos reconocidos, el Deudor podrá acompañar al
tribunal competente una propuesta de Acuerdo de Reorganización Judicial y le
serán aplicables las disposiciones contenidas en el Capítulo III de esta ley, en lo que
fuere procedente y en todo lo que no se regule en las disposiciones siguientes.

Presentada una propuesta de Acuerdo de Reorganización Judicial, el tribunal


dictará una resolución que la tendrá por presentada. Una copia de la referida
propuesta deberá ser publicada por el Liquidador en el Boletín Concursal.

En la misma resolución el tribunal competente fijará la fecha, lugar y hora en que


deberá efectuarse la Junta de Acreedores llamada a conocer y pronunciarse sobre la
propuesta de Acuerdo de Reorganización Judicial que presente el Deudor.” (art.
257).

*Los acuerdos de reorganización se pueden clasificar en:

242
(1) Judiciales.

(a) Propiamente tal.

(b) El que pone término al procedimiento de liquidación. Este acuerdo podría


contemplar clases de acreedores (valistas o prendarios e hipotecarios).

(2) Extrajudiciales.

2. Clases de acreedores. Este acuerdo también puede contemplar clases de


acreedores, pudiendo distinguir entre acreedores prendarios e hipotecarios y los
demás acreedores.

3. Quórum para su aprobación. En este caso se requiere para la aprobación un


quórum de 2/3 de los acreedores presentes que representen 3/4 del pasivo con
derecho a voto. El convenio no puede discriminar salvo que se cuente con el voto
favorable de 2/3 de los discriminados.

4. La ley no dice nada respecto del derecho a voto de los cesionarios. OCHAGAVÍA
tiene sus dudas respecto de si los cesionarios tienen o no derecho a voto
considerando que la ley no señala nada respecto de ellos.

“Acuerdo de la Junta de Acreedores. Cada una de las clases o categorías de


propuestas de Acuerdo de Reorganización Judicial acompañado por el Deudor será
analizada, deliberada y acordada en forma separada en la misma Junta, sin
perjuicio de lo previsto en el artículo 82.

243
La propuesta de Acuerdo de Reorganización Judicial se entenderá acordada cuando
cuente con el consentimiento del Deudor y el voto conforme de los dos tercios o más
de los acreedores presentes, que representen tres cuartas partes del total del pasivo
con derecho a voto, correspondiente a su respectiva clase o categoría. Las Personas
Relacionadas con el Deudor no podrán votar, ni sus créditos se considerarán en el
monto del pasivo.” (art.258).

5. En cuanto a la entrada en vigencia.Rigen las mismas normas del procedimiento de


reorganización: Si no se deducen impugnaciones, el acuerdo empieza a regir desde
que vence el plazo y el tribunal lo certifica de oficio o a petición de parte. Si se
deducen impugnaciones, una vez que se encuentre firme y ejecutoriadala
resolución que deshecha las impugnaciones.No obstante lo anterior, las
impugnaciones no suspenden su entrada en vigencia y su eficacia, salvo que haya
sido impugnado por acreedores que representen el 30% del pasivo con derecho a
voto o el pasivo con derecho a voto de la clase respectiva si fuere el caso.

La resolución que declara que no hay impugnación o que rechaza las


impugnaciones deberá poner término al procedimiento concursal de liquidación,
porque en ese minuto empezará a regir ese término.

“Vigencia del Acuerdo de Reorganización Judicial. El Acuerdo del Reorganización


Judicial regirá una vez vencido el plazo para impugnarlo, sin que se hubiere
impugnado. En este caso se entenderá aprobado y el tribunal competente lo
declarará así de oficio o a petición de cualquier interesado o del Veedor. En la
misma resolución declarará el término legal del Procedimiento Concursal de
Liquidación.

Si el Acuerdo de Reorganización Judicial fuere impugnado, regirá desde que cause


ejecutoria la resolución que deseche la o las impugnaciones y lo declare aprobado.

244
Las resoluciones a que se refieren los incisos primero y segundo de este artículo se
notificarán en el Boletín Concursal.

El Acuerdo de Reorganización Judicial regirá no obstante las impugnaciones que se


hubieren interpuesto en su contra. Sin embargo, si las impugnaciones fueren
interpuestas por acreedores de una determinada clase o categoría, que representen
en su conjunto a lo menos el 30% del pasivo con derecho a voto de su respectiva
clase o categoría, el Acuerdo de Reorganización Judicial no empezará a regir hasta
que dichas impugnaciones fueren desestimadas por sentencia firme y ejecutoriada.
En este caso, y en el del inciso segundo de este artículo, los actos y contratos
ejecutados o celebrados por el Deudor en el tiempo que medie entre el Acuerdo de
Reorganización Judicial y la fecha en que quede ejecutoriada la resolución que acoja
las impugnaciones, no podrán dejarse sin efecto.

El recurso de casación deducido en contra de la resolución de segunda instancia que


deseche la o las impugnaciones no suspende el cumplimiento de dicha resolución,
incluso si la parte vencida solicita se otorgue fianza de resultas por la parte
vencedora.

Si se acogen las impugnaciones al Acuerdo de Reorganización Judicial por resolución


firme o ejecutoriada, las obligaciones y derechos existentes entre el Deudor y sus
acreedores con anterioridad a dicho Acuerdo, volverán al estado en que se
encontraban en el Procedimiento Concursal de Liquidación.” (art. 259).

h) Acuerdo de reorganización simplificado o extrajudicial . La ley también contempla los


acuerdos de reorganización extrajudiciales o simplificados. Se querrá poder evitar un
acuerdo de reorganización propiamente tal porque si este sale mal terminará en
liquidación. La ventaja de un acuerdo judicial es que no se requerirá el acuerdo de

245
todos los acreedores, siendo que en un acuerdo extrajudicial se requerirá el acuerdo de
todos, ya que se deberá negociar con cada uno de ellos. De esa forma estaban
concebidos antes los convenios extrajudiciales, señalando que estos solo obligaban a
los acreedores que los suscribían, no obligando a nadie más. La Ley Nº 20.720 trató de
hacer un híbrido que permitiera al deudor, a través de un procedimiento extrajudicial,
obligar a los acreedores.

22/09/2016
El convenio extrajudicial como tal no es sino igual a cualquier contrato y, en principio,
el contrato solo obliga a las partes que lo suscriben –esto trataba de reflejar el art. 169
del Título IV del C. de C. cuando señalaba que el convenio extrajudicial solo regía para
aquellos que lo hubieran suscrito-.

La posibilidad de que la mayoría de los acreedores impusiera su parecer a la minoría de


los acreedores solo podía lograrse dentro del ámbito de un convenio judicial, mientras
que en el convenio extrajudicial solo era vinculante para quienes lo suscribían, por lo
que no era necesariamente muy útil. Obviamente un deudor tiene acreedores más
importantes que otros, ya sea por las garantías que se les concedieron, los montos de
sus créditos, la importancia práctica que tienen para el negocio, etc. pero cualquier
acreedor tiene la posibilidad de declarar en quiebra al deudor si es que por ejemplo, su
crédito consta en un título ejecutivo pendiente vencido o si tiene varias ejecuciones
pendientes en que no han consignado fondos en todas ellas para responder de las
deudas. Desde esa perspectiva, ese era el grave problema que tenían los convenios
extrajudiciales bajo la legislación antigua: no permitía al deudor imponerle el convenio
a los acreedores disidentes, no obstante que ellos representaran el 0,1% de los créditos
del deudor.

Por otro lado, el convenio extrajudicial tenía la ventaja de evitar la declaración de


quiebra al final de un proceso de convenio judicial preventivo, en caso que este fuere

246
rechazado. En el convenio judicialpreventivo permitía someter a todos los acreedores a
la voluntad de la mayoría de los acreedores, lo que no se logra con un convenio
extrajudicial.

Esta era la dicotomía que existía antes bajo la antigua ley: o convenio judicial
preventivo arriesgando la declaración de quiebra o la negociación con todos y cada uno
de los acreedores en forma extrajudicial, pero si alguno no quería llegar a acuerdo, este
podía solicitar la quiebra.

En EEUU el chapter 11 del código de quiebras americano establece algo conocido


comopre-packdeals, es decir, acuerdos pre acordados fuera del tribunal presentados
ante el tribunal para que este los sancione y les de la fuerza de un acuerdo judicial
como si esto se hubiera discutido en manos del tribunal, es decir, no existe el riesgo de
que el acreedor con el que se negoció de forma extrajudicial cambiara de opinión al
llevarlo al tribunal.

Teniendo en vista este modelo, la nueva ley reformuló drásticamente los acuerdos de
reorganización extrajudiciales. Básicamenteen esto consisteun acuerdo de
reorganización extrajudicial o simplificado, que supone un acuerdo celebrado fuera de
tribunales por el deudor con 2 o más de sus acreedores que se presenta ante el tribunal
para que este lo apruebe y tenga el mismo efecto que si hubiere sido un acuerdo de
reorganización propiamente tal.

El análisis que se hace a propósito de estos acuerdos es superficial por parte del
tribunal, ello porque el rol del tribunal es más bien limitado, es decir, el acuerdo lo
presenta, en el caso del acuerdo de reorganización propiamente tal, el deudor, lo revisa
el veedor, lo aprueban los acreedores y si no hay un acreedor que impugne el acuerdo
o que pida su nulidad o incumplimiento, el tribunal no dicta ninguna resolución; se
requiere algún tipo de solicitud de parte.

247
“Legitimación. Toda Empresa Deudora podrá celebrar un Acuerdo de Reorganización
Extrajudicial o Simplificado con sus acreedores y someterlo a aprobación judicial,
conforme a lo establecido en el presente Título. Para los efectos de este Título se
denominará indistintamente Empresa Deudora o Deudor.”(art. 102).

Una empresa deudora tiene 2 posibilidades para reorganizarse: (a) Ir al tribunal para
que se realice un procedimiento de reorganización; o (b) celebrar un acuerdo con sus
acreedores fuera del tribunal para llevarlo luego al tribunal para que lo apruebe.

No cualquier acuerdo con acreedores será un acuerdo de reorganización extrajudicial o


simplificado. ¿Sobre qué debe versar un acuerdo de reorganización?(1)
Reestructuración de los pasivos y activos del deudor; y (2) debe tratarse de una
empresa deudora. La ley establece un requisito adicional: este acuerdo extrajudicial
debe (3)celebrarse ante un ministro de fe (notario público) o bien ante un ministro de
fe de la SUPERIR.

“Formalidades. El Acuerdo Simplificado deberá ser otorgado ante un ministro de fe o


ante un ministro de fe de la Superintendencia, quien certificará, además, la personería
de los representantes que concurran al otorgamiento de este instrumento, cuyas copias
autorizadas deberán agregarse al Acuerdo respectivo.”(art. 104).

“El Acuerdo Simplificado podrá versar sobre cualquier objeto tendiente a reestructurar
los activos y pasivos del Deudor.”(art. 105).

Ahora, el último requisito de fondo que tiene el acuerdo de reorganización es que se


debe (4)celebrar con 2 o más acreedores que representen a lo menos el 75% del
pasivo con derecho a voto o el 75% de cada una de las clases en las que se haya
divido los pasivos del deudor.

248
“Quórum. El Deudor deberá presentar el Acuerdo Simplificado suscrito por dos o más
acreedores que representen al menos tres cuartas partes del total de su pasivo,
correspondiente a su respectiva clase o categoría. Las Personas Relacionadas con el
Deudor no podrán suscribir un Acuerdo Simplificado, ni sus créditos se considerarán en
el monto del pasivo para los efectos de la determinación del quórum de aprobación del
referido Acuerdo.

Los cesionarios de créditos adquiridos dentro de los treinta días anteriores a la fecha de
la presentación a aprobación judicial del Acuerdo Simplificado tampoco se considerarán
para el quórum señalado en el inciso anterior.” (art. 109).

De este modo, si un deudor tiene un acreedor que representa el 90% de los pasivos, no
basta su consentimiento para celebrar un acuerdo extrajudicial, sino que se requiere
otro acreedor.

Lo curioso es la norma de la cesión que establece el inc. final de este art. 109, porque
es una norma bastante fácil de eludir, ya que el plazo se cuenta desde la fecha de la
presentación a aprobación judicial, lo que es muy manejable por el deudor, teniendo
como contrapartida el hecho de que mientras no se presente a aprobación judicial no
hay protección financiera concursal.

Una vez celebrado el acuerdo en estos términos se puede someter a aprobación a un


tribunal –el mismo tribunal que hubiera conocido del acuerdo de reorganización
(tribunal competente según el domicilio del deudor)- y se aplican fundamentalmente
las mismas reglas que para el acuerdo de reorganización.

249
“Competencia. Será competente para aprobar el Acuerdo Simplificado el tribunal que
hubiere sido competente para conocer de un Procedimiento Concursal de
Reorganización del Deudor de acuerdo a esta ley.”(art. 103).

“Normas aplicables. Serán aplicables al Acuerdo Simplificado, cuando corresponda y


siempre que no contravengan lo dispuesto en el presente Párrafo, los Títulos 1 y 2 de
este Capítulo, en lo relativo a los acuerdos por clases o categorías de acreedores,
determinación del pasivo, propuestas alternativas, diferencias entre acreedores de
igual clase o categoría, condonación o remisión de créditos, constitución de garantías,
cláusulas de arbitraje, nombramiento del interventor y designación de la Comisión de
Acreedores.”(art. 106).

¿Cuál es el procedimiento para obtener la aprobación del acuerdo extrajudicial?En


primer lugar se parte con el acuerdo de reorganización, pues una vez que se tiene (1)se
debe presentar ante el tribunal competente, y también se debe presentar al tribunal
los (2)antecedentes que requiere el art. 56 cuando se presenta una solicitud de
reorganización: (a) Listado de bienes propios con avalúos comerciales y si son
esenciales; bienes de terceros dados en garantías del deudor; bienes de terceros que
son usados o están en posesión del deudor; (b) pasivos que tiene el deudor; (c) datos
de contacto de acreedores. Además se debe acompañar en esta instancia (3) el informe
del veedor. El procedimiento parte con el pronunciamiento del veedor, en los mismos
términos en los que se le exige en el procedimiento de reorganización, de manera que
debe versar sobre: (a) Si era posible cumplir con él; (b) una estimación del veedor de
cuánto recibirían los acreedores en un procedimiento de liquidación; y (c) si acaso las
clasificaciones de los acreedores y de los pasivos, y en términos generales el acuerdo
de reorganización está de acuerdo a la ley. En este caso el veedor será designado por el
deudor con sus 2 principales acreedores.

250
“Requisitos. Para la aprobación judicial del Acuerdo Simplificado, éste deberá
presentarse ante el tribunal competente junto con los antecedentes singularizados en el
artículo 56, acompañado de un listado de todos los juicios y procesos administrativos
seguidos contra el Deudor que tengan efectos patrimoniales, con indicación del
tribunal, órgano de la Administración del Estado, rol o número de identificación y
materias sobre las que tratan estos procesos.

Conjuntamente con la presentación del Acuerdo Simplificado, deberá presentarse un


informe de un Veedor de la Nómina de Veedores, elegido por el Deudor y sus dos
principales acreedores, que deberá contener la calificación fundada acerca de:

1. Si la propuesta es susceptible de ser cumplida, habida consideración de las


condiciones del Deudor;

2. El monto probable de recuperación que le correspondería a cada acreedor en sus


respectivas categorías, en caso de un Procedimiento Concursal de Liquidación, y

3. Si la determinación de los créditos y su preferencia, cuya propuesta acompañó el


Deudor, se ajusta a esta ley.”(art. 107).

De este modo, una vez presentado el acuerdo ante el tribunal, el deudor deberá
entregar los mismos antecedentes entregados al tribunal al mismo veedor que evacúa
el informe a que se refiere el art. 107 para que publique el acuerdo de reorganización
en el Boletín Concursal.

“Publicidad. Junto con presentar al tribunal el Acuerdo Extrajudicial o Simplificado con


los antecedentes señalados en el artículo 107, el Deudor deberá acompañar al Veedor
copia de éstos para que los publique en el Boletín Concursal y los acompañe a los
acreedores por medio de correos electrónicos, si lo tuvieren.”(art. 110).

251
Publicado que sea el acuerdo en el Boletín Concursal, hay un plazo de 10 días contados
desde la publicación para impugnarlo. ¿Quienes pueden impugnarlo? Aquellos
acreedores que figuren en el listado del deudor y que sean disidentes del acuerdo, y
aquellos acreedores que no figuren en el listado pero que sean capaces de justificar sus
créditos contra el deudor.

Causales de impugnación. Son básicamente las mismas que el art. 85 establece para el
acuerdo de reorganización judicial y una adicional: el hecho de que el listado de
acreedores presentado por el deudor conforme al art. 107 contiene errores en cuanto
al monto, la existencia o preferencia de los créditos. Puede haber pasado que el listado
tenga errores en cuanto al monto de los créditos, y con ello se hayan contado mal los
quórum. Ahora, las causales del art. 85 son en cuanto le resulten aplicables a este
acuerdo extrajudicial.

“Impugnación. Podrán impugnar el Acuerdo Simplificado los acreedores disidentes y


aquellos que demuestren haber sido omitidos de los antecedentes previstos en el
artículo 107, siempre y cuando la impugnación se funde en alguna de las causales
establecidas en el artículo 85 respecto de los Acuerdos de Reorganización Judicial, o
bien en la existencia, los montos y las preferencias de sus créditos.

La impugnación deberá presentarse ante el tribunal competente dentro de los diez días
siguientes a la publicación del Acuerdo Simplificado efectuada conforme al artículo
anterior. Una copia de la impugnación señalada y de los antecedentes correspondientes
deberán ser publicados en el Boletín Concursal por el Veedor.” (art. 111 inc. 1 y 2).

El inc. final del art. 111 establece como se resuelven las impugnaciones: en una única
audiencia que el tribunal debe citar y que se celebrará dentro de los 10 días siguientes
de vencido el plazo para impugnar.

252
“Las impugnaciones al Acuerdo Simplificado se tramitarán como incidente y se fallarán
conjuntamente en una audiencia única, que el tribunal citará para tal efecto y que se
celebrará dentro de los diez días siguientes de vencido el plazo para impugnar. Esta
audiencia será verbal y se llevará a cabo con los que asistan. La resolución que se
pronuncie sobre las impugnaciones se publicará en el Boletín Concursal”(art. 111 inc.
final).

El art. 112 establece una de las normas que para OCHAGAVÍA es de las más curiosas de
la Ley Nº 20.720. En este art. la ley establece que el tribunal puede citar a los
acreedores a los que les afecta el acuerdo, para que lo acepten ante el tribunal, y si lo
hace debe contar con el quórum del art. 109. Esta citación deberá hacerse dentro de
los 10 días siguientes de la publicación en el Boletín Concursal.

“Aprobación judicial. Dentro de los diez días siguientes a la publicación del Acuerdo
Simplificado, el tribunal podrá citar a todos los acreedores a quienes les afecte el
Acuerdo, para su aceptación ante el tribunal, la cual deberá contar con el quórum
señalado en el artículo 109.” (art. 112 inc. 1).

Esta norma no hace mucho sentido porque si el acuerdo ya se firmó con un


determinado porcentaje de aprobación ante un ministro de fe, por qué habrían de ir
esas mismas personas al tribunal a aprobar el acuerdo, y tampoco se señala en qué
forma deben concurrir los acreedores a aprobar el acuerdo si es en audiencia o bien
puede ser por escrito. Pareciera que el tribunal tiene la facultad de señalar que
desconfía que los acreedores realmente hayan aprobado el acuerdo.

Esta citación es opcional para el tribunal, y a OCHAGAVÍA le parece que si el propósito


es resolver el caso de que el acuerdo de reorganización extrajudicial no fuere
realmente votado por el 75%, entonces en ese caso la ley ha debido obligar al juez para

253
que citara a los acreedores a una junta para que se presenten formalmente esos
acreedores.

Si el tribunal citó a los acreedores y estos hubieren aceptado el acuerdo de


reorganización, o si el tribunal no citó y el acuerdo no hubiere sido impugnado,
entonces el acuerdo de reorganización extrajudicial deberá ser aprobado por el
tribunal, y lo mismo ocurrirá cuando las impugnaciones que se hubieren deducido se
rechazaren por resolución firme o ejecutoriada.

“Una vez aceptado el Acuerdo Simplificado, o vencido el plazo señalado en el inciso


anterior sin que el tribunal hubiere citado, y vencido el plazo para presentar
impugnaciones sin que se hayan interpuesto o si, deducidas, se hubieren rechazado por
resolución que se encuentre firme y ejecutoriada, el tribunal competente, previa
verificación del cumplimiento de los requisitos legales, dictará la correspondiente
resolución aprobando el Acuerdo Simplificado, debiendo el Veedor publicarla en el
Boletín Concursal.”(inc. 2 art. 112).

En este caso hay una resolución aprobatoria que es meramente formal, porque esta
debiera decir que no se dedujeron impugnaciones o si se dedujeron se resolvieron, por
lo que tiene por aprobado el acuerdo. Se trata de un acuerdo contractual y el tribunal
no es sino un mecanismo para dotar de un halo de buena fe o buena conducta al
acuerdo de reorganización extrajudicial.

El acuerdo aprobado judicialmente produce exactamente los mismos efectos que un


acuerdo judicial, y se producen desde ese momento los efectos del acuerdo.

“Efectos de la aprobación judicial. El Acuerdo Simplificado aprobado judicialmente de


conformidad a las disposiciones anteriores producirá, cuando corresponda, los efectos

254
previstos en el Párrafo 4 del Título 2 de este Capítulo, siempre que no contravenga lo
dispuesto en el presente Párrafo.” (art. 113).

La ley deja a salvo la nulidad o el incumplimiento del acuerdo extrajudicial, aplicándose


las mismas reglas que para el acuerdo judicial.

“Nulidad e Incumplimiento del Acuerdo Simplificado. Demandada la nulidad o el


incumplimiento del Acuerdo Simplificado, se aplicará lo dispuesto en el Párrafo 6 del
Título 2 de este Capítulo.”(art. 114).

Es importante tener claro que nada de lo que ocurra en este procedimiento


simplificado lleva a la liquidación del deudor. Si el acuerdo se impugna exitosamente no
derivará en un acuerdo de reorganización bajo la ley, pero ¿es vinculante para los
acreedores que lo suscribieron y para el deudor o no? ¿la impugnación del acuerdo de
reorganización es un efecto expansivo para hacerlo oponible a los demás acreedores al
deudor? OCHAGAVÍA no cree que la respuesta sea obvia porque cree que el
procedimiento de aprobación judicial del acuerdo tiene como objeto hacerlo oponible
a los demás acreedores que no lo suscribieron, y no necesariamente dejarlo sin efecto
respecto de todos. Los acreedores y el deudor pueden haber perfectamente llegado a
un acuerdo y no someterlo a aprobación judicial, y en ese caso les hubiere sido
aplicable solo a ellos, siendo las causales de impugnación de ese acuerdo las de todo
contrato, pero no otras que esas. Cuando se analiza el art. 85 y el art. 110, no
necesariamente todas caen en la hipótesis de inexistencia o nulidad del acuerdo de
reorganización, y tal vez la más cercana es aquella en que se hayan exagerado los
pasivos: esto podría suponer hipótesis de dolo o de error, pero ello es un juicio de
mayor mérito que para ser resuelto en una audiencia de reorganización.

255
27/09/2016
PROCEDIMIENTO CONCURSAL DE LIQUIDACIÓN

a) Insolvencia, cesación de pago y el rol de estos conceptos en la legislación concursal


referida a la liquidación. Opción de la legislación chilena.

¿Qué es la insolvencia?

1. Una primera posibilidad es decir que la insolvencia es el estado en que los pasivos
son mayores que los activos. Esta es la visión más tradicional de la insolvencia.
Esta definición, sin embargo, tiene ciertos problemas, entre los que se encuentra el
hecho de que una empresa puede ser muy rentable, y no obstante ello sus pasivos
superar sus activos. Ej. Un proyecto de parque solar respecto del cual la empresa
que lo lleva a cabo tendrá un gran crédito para cubrir la vida del proyecto, el que
también podrá tener pérdidas durante su vida.

Esta visión tradicional de la insolvencia es una visión insuficiente para nuestro


derecho concursal. PUGA dice que este concepto de insolvencia no tiene
fundamento dogmático ni etimológico (la palabra insolvencia proviene del latín
solvensque significa básicamente pagar, de modo que la insolvencia está más
relacionada con la capacidad de pagar obligaciones que con el estado patrimonial
de una compañía en un momento determinado).

Los tribunales han recogido un concepto similar: la insolvencia se produce cuando


un individuo se encuentra imposibilitado para pagar o cesa en el pago de sus
obligaciones por comprometer su patrimonio más allá de sus posibilidades(ICA de
Santiago).

256
Entonces, a partir de estas críticas, se puede decir que la insolvencia tiene más que
ver con el flujo de caja de una compañíay con la posibilidad de esta de cumplir con
sus obligaciones, que con su situación patrimonial.

2. PUGA habla de un desequilibrio entre el activo liquidable y el pasivo exigible de


una persona, de manera que esta persona no es capaz de cumplir actual o
potencialmente sus obligaciones en términos igualitarios y/o oportunos.

Se trata de un desequilibrio que puede ser tanto respecto de los montos como
respecto del plazo (ej. Desfase en el flujo de caja). Este autor usa conceptos más
acotados: activos liquidables (de fácil realización) y pasivo exigible (El capital por su
naturaleza no entra en la ecuación).

Es importante tener claro que a lo menos doctrinariamente la insolvencia tiene


más que ver con la posibilidad de pagar las obligaciones.

Doctrinariamente se considera que la insolvencia es principalmente el problema a


que es llamado a resolver el derecho concursal, ese es el fenómeno que trata. Por
esto es que la doctrina hace un intento de determinar, para efectos de la
liquidación, cuándo seestá en un estado insolvencia que permita declarar un
procedimiento de liquidación concursal. Por regla general se entiende que cuando
un deudor se encuentra en un estado de insolvencia tal que permite declarar el
procedimiento concursal de liquidación, se encuentra en cesación de pagos.

Algunos autores señalan que la cesación de pagos es el dejar de pagar una


obligación mercantil (PALMA, OLAVARRÍA). Este concepto, en realidad, no es tal
por razones históricas, es decir, si se revisa el origen del concepto de cesación de
pagos, este proviene de la legislación francesa, y para efectos doctrinarios, PUGA,
así como otros autores extranjeros, lo considera lo mismo que la insolvencia para

257
efectos del derecho concursal. De este modo la cesación de pago es un estado de
desequilibrio entre el activo liquidable y pasivo exigible, que es tal que permite la
declaración de un procedimiento concursal.

¿Qué problema puede haber con la definición de PUGA de insolvencia?UGARTE cree


que el problema que hay es que el concepto de activo liquidable es móvil, variable,
puesto que al final todos los activos son liquidables (algunos con castigo en su valor). El
desequilibrio es un concepto etéreo, lo que causa una gran falta de certezajurídica. Se
trata de una definición que hace de la insolvencia algo difícil de probar. Por esto es que
las legislaciones han tomado distintas teorías para determinar qué es la insolvencia o la
cesación de pagos (Se requiere aterrizar el concepto para evitar problemas probatorios
y para evitar discusiones respecto del valor del activo liquidable de una persona antes
de siquiera iniciar el procedimiento). Respecto de la insolvencia y la cesación de pago
se han elaborado distintas teorías:

1. Teoría materialista o restringida.Esta teoría dice que la insolvencia requiere


necesariamente que exista una infracción o cese en el pago de una obligación
mercantil. No puede haber insolvencia si alguien no ha dejado de pagar una
obligación mercantil. Se requiere el hecho objetivo del no pago de la obligación
para declarar la insolvencia. Este concepto proviene del código civil francés, y es el
concepto mayormente recogido en nuestra legislación, sobre todo a partir de la
nueva ley: el art. 117 de la Ley Nº 20.720 habla del cese del pago de una obligación
que consta en un título ejecutivo como causal de liquidación.

Esta forma de definir la insolvencia proviene de la necesidad de otorgar certeza


jurídica.

¿Qué problemas puede tener este concepto? Existen incontables motivos por los
cuales no se pudo haber pagado una obligación, no necesariamente debido a

258
problemas para pagar ni el estado patrimonial (ej. Actos de autoridad que impidan
pagar). La doctrina dice que en realidad para esos casos en los cuales se ha
incumplido una obligación que consta en un título ejecutivo existen otras
herramientas en nuestro derecho para lograr ese objetivo, tales como el juicio
ejecutivo. O sea, se trataría de la misma causal la del juicio ejecutivo que la de la
insolvencia. Es un concepto que no apunta a resolver el problema que el derecho
concursal está llamado a resolver.

Bajo esta teoría es muy posible que una compañía esté en un estado patrimonial de
solvencia, y que una persona le pida la liquidación igual. Lo mismo puede pasar
respecto de una persona que se encuentre en un estado de insolvencia, pero aún
así cumpla con sus obligaciones.

2. TeorÍa amplia o moderna. Esta teoría dice que es irrelevante si existe o no el


incumplimiento de una obligación para poder declarar la liquidación de un deudor.
Por ejemplo, si respectoun tercero se sabe que dejará de recibir un flujo de efectivo
importante, por lo que se puede dar que a pesar de haber pagos y cumplimiento de
las obligaciones, se podría pedir la liquidación si se tienen antecedentes que
demuestren que la personase encuentra actual o potencialmente en la
imposibilidad de cumplir con sus obligaciones.

Se le aplican a esta teoría las mismas críticas que se le hacen al concepto


doctrinario de insolvencia: Desde el punto de vista probatorio es muy difícil que
exista insolvencia sin que exista incumplimiento a las obligaciones.

3. Teoría intermedia. Señala que las infracciones o incumplimiento de obligaciones


son los hechos reveladores de la insolvencia, son el sustento probatorio de la
insolvencia, por lo que es relevante tener en la legislación causales que permitan la
declaración de liquidación por insolvencia verificando el incumplimiento de las

259
obligación, sin perjuicio de permitir al deudor demostrar que no se encuentra en el
estado genérico en el que sus activos liquidables son mayores que su pasivo
exigible a pesar de haber incumplido una determinada obligación.

Nuestra legislación antigua tenía resabios de esta teoría porque tenía, después de
la declaración de quiebra, un recurso de reposición de especial del deudor fallido,
pudiendo demostrar que no se encontraba en la imposibilidad de cumplir con sus
obligaciones. De este modo, la legislación antigua contemplaba instancias para
probar que no se estaba dentro del estado de insolvencia.

Nuestra legislación actual sigue la teoría materialista o restringida y básicamente


tiene causales de declaratoria de quiebra tales como la cesación de pago de un
título ejecutivo con el acreedor solicitante.

UGARTE cree que el legislador, en este caso, fue eminentemente práctico y está
pensando en el caso que si se tiene un título ejecutivo que no se pagó, y se solicita
la declaración de liquidación, el acreedor resolverá antes de la resolución de
liquidación su problema con el deudor.

27/09/2016 UGARTE
b) Procedimiento concursal de liquidación. Este procedimiento tiene por objeto, a
diferencia del procedimiento de reorganización, la realización de los activos del deudor
para el pago a los acreedores.

Respecto de este procedimiento, nuestra legislación ha adoptado en sus causales de


inicio una teoría materialista o restringida del concepto de insolvencia, limitándolo
básicamente al incumplimiento de obligaciones, y no a muchas consideraciones más:
no hay lugares en los cuales se pueda distinguir la situación patrimonial del deudor,
sino que se transformó en una alternativa más a la ejecución individual.

260
¿Quiénes intervienen en el procedimiento? Es un procedimiento eminentemente
judicial (interviene el juez), pues la intervención de los órganos administrativos es
limitada. Interviene primordialmente el liquidador, que será nombrado y tendrá como
principal función la realización y administración de los bienes del deudor. Existen
ciertas situaciones particulares en este procedimiento en las que puede intervenir el
veedor: mientras no se haya declarado la liquidación del deudor. También interviene el
deudor y todo acreedor que participe del procedimiento.

Tipos de procedimientos de liquidación.

1. En cuanto a su inicio.

(1) Voluntario. Puede ser pedido por el deudor.

(2) Forzoso. Cuando es solicitado por los acreedores del deudor.

2. En cuanto a su sujeto pasivo. La nueva ley tiene la intención de hacer un poco más
difícil hacer la liquidación forzada de una persona deudora, por lo que tendrán
diferentes causales. La idea de la ley es tener causales muy flexibles y fáciles de
detonar para la empresa deudora, a diferencia de lo que ocurre con la persona
deudora. Esto, según UGARTE, podría no tener mucho sentido porque cree que el
objetivo de la ley es favorecer el emprendimiento y una de las funciones propias de
la personalidad jurídica con responsabilidad limitada es justamente favorecer el
emprendimiento, pero si se quiere favorecer el emprendimiento, entonces porqué
se hace la distinción y se favorece la liquidación de las personas jurídicas. Aunque
reconoce que en la práctica no se crearán menos sociedades por el hecho de su
más fácil liquidación. Se distingue entonces:

261
(1) Procedimiento de empresa deudora.

(2) Procedimiento de persona deudora.

Inicio del proceso de liquidación concursal. Esto dependerá de si es voluntario o


forzoso, y la estructura es similar a la del procedimiento de reorganización:

1. Voluntario. Se inicia por solicitud del deudor (art. 115). Es interesante que la ley no
exige que el deudor invoque una causal de insolvencia o mal estado de los
negocios, sino que sólo exige que se presenten ciertos antecedentes. La ley no
exige que el deudor se encuentre en un estado de insolvencia para solicitar la
liquidación. ¿Puede un deudor solvente pedir su liquidación? Es muy probable que
el hecho de que un deudor solvente solicite su liquidación termine perjudicando a
sus acreedores pues ello producirá que se aceleren sus créditos, los que
normalmente no podrá pagar.

La solicitud se debe efectuar ante el tribunal del domicilio del deudor.

¿Qué hay que presentar en la solicitud?Los antecedentes se encuentran señalados


en el art. 115:

(1) Lista de bienes, el lugar en que se encuentran y los gravámenes que los
afectan.

(2) Relación de juicios pendientes.

(3) Estado de deudas.En este caso no se requiere de que sea analizado por un
auditor,entonces ¿por qué la ley es más exigente en el caso dela
reorganización? UGARTE cree que en la reorganización, para poder llevarla de

262
buena manera, se requiere de que sea certificado por una persona experta en el
tema, mientras que en la liquidación no sería tan necesario.

(4) Lista de bienes legalmente excluidos de la liquidación.

(5) Si el deudor llevara contabilidad completa, un balance.

(6) Lista de los acreedores con sus datos de contacto.

“Ámbito de aplicación y requisitos. La Empresa Deudora podrá solicitar ante el


juzgado de letras competente su Liquidación Voluntaria, acompañando los
siguientes antecedentes, con copia:

1) Lista de sus bienes, lugar en que se encuentran y los gravámenes que les afectan.

2) Lista de los bienes legalmente excluidos de la Liquidación.

3) Relación de sus juicios pendientes.

4) Estado de deudas, con nombre, domicilio y datos de contacto de los acreedores,


así como la naturaleza de sus créditos.

5) Nómina de los trabajadores, cualquiera sea su situación contractual, con


indicación de las prestaciones laborales y previsionales adeudadas y fueros en su
caso.

6) Si el Deudor llevare contabilidad completa presentará, además, su último


balance.

263
Si se tratare de una persona jurídica, los documentos antes referidos serán firmados
por sus representantes legales.

Para los efectos de este Capítulo se denominará indistintamente Empresa Deudora


o Deudor.” (art. 115).

El art. 116 habla de la tramitación o primera providencia que se debe hacer en


estos casos. El tribunal deberá revisar si la solicitud de quiebra cumple con los
requisitos establecidos en el art. 115 y deberá pronunciarse al respecto dentro de
tercero día.

“Tramitación. El tribunal competente revisará la presentación del Deudor y, si


cumple con los requisitos señalados en el artículo anterior, procederá dentro de
tercero día de conformidad a lo dispuesto en los artículos 37 y 129, aplicándose lo
establecido en el Párrafo 4 de este Título.”(art. 116).

El tribunal se pronunciarádando lugar al procedimiento de nominación del


liquidador. En este caso se debe solicitar a la SUPERIR que nomine al liquidador. El
procedimiento de nominación del liquidador será efectuado por la SUPERIR de
forma similar a la del procedimiento de reorganización.

Una vez nominado el liquidador, la resolución deberá volver al tribunal para que se
dicte la resolución de liquidación.

2. Forzoso.Este no es discrecional, un acreedor no puede sin más pedir la liquidación


de su deudor, sino que se debe cumplir con ciertas causales expresamente
señaladas en la ley en su (I) demanda de liquidación (art. 117):

264
(1) Cese en el pago de una obligación que conste en un título ejecutivo con el
acreedor solicitante (art. 117 Nº 1).

Esto hace el procedimiento de liquidación indistinguible de la ejecución


individual. UGARTE crítica esto porque le sirve al acreedor para llegar a una
negociación forzada con un deudor que no ha pagado un título ejecutivo, en
instancias que hay una serie de razones por las cuales no se ha pagado un
pagaré u otro título ejecutivo. Entonces, genera una situación bastante absurda
de facilitar que el procedimiento de liquidación se use como mecanismo de
negociación.

Esta causal no está disponible en todos los casos: no se puede solicitar respecto
de fiadores, codeudores solidarios o subsidiarios o avalistas de la empresa
deudora que ha cesado en el pago de obligaciones garantizadas por estos. De
este modo, la obligación debe ser propia. UGARTE cree que está distinción es
innecesaria si es que la ley ya ha distinguido entre la falta de pago de una
obligación y el mal estado de los negocios. Él también crítica el hecho de que la
ley no ha distinguido, respecto de los codeudores solidarios, si es que estos son
interesados o no interesados.

“Ámbito de aplicación y causales. Cualquier acreedor podrá demandar el inicio


del Procedimiento Concursal de Liquidación de una Empresa Deudora en los
siguientes casos:

1) Si cesa en el pago de una obligación que conste en título ejecutivo con el


acreedor solicitante. Esta causal no podrá invocarse para solicitar el inicio del
Procedimiento Concursal de Liquidación respecto de los fiadores, codeudores
solidarios o subsidiarios, o avalistas de la Empresa Deudora que ha cesado en el
pago de las obligaciones garantizadas por éstos.” (art. 117 Nº 1).

265
Esta causal no está disponible para la persona deudora, sino que solo para la
empresa deudora, y en este caso se manifiesta la diferencia en el tratamiento
de ambos deudores (más fácil de realizar contra empresas deudoras).

(2) Si existieren en su contra 2 o más títulos ejecutivos vencidos,provenientes de


obligaciones diversas, encontrándose iniciadas a lo menos dos ejecuciones, y
no hubiere presentado bienes suficientes para responder a la prestación que
adeude y a sus costas, dentro de los cuatro días siguientes a los respectivos
requerimientos (Art. 117 Nº 2).¿Por qué alguien quisiera usar esta causal si
tiene la posibilidad de recurrir por la Nº1? La Nº 1 exige que el título ejecutivo
sea del acreedor solicitante, mientras que este Nº 2 no lo exige, sino que se
puede solicitar por cualquier acreedor de demuestre la concurrencia de esta
causal. Esto es muy inusual en la práctica según UGARTE.

¿Qué significa que provengan de obligaciones diversas? Una interpretación


posible es que se trate de causas diversas, pero esto tiene el problema de que
hay muchos títulos que son incausados, por lo que podría darse que dos letras
con fechas distintas dadas para pagar una misma obligación a plazo podría
satisfacer esta exigencia. UGARTE cree que el tribunal, si el título ha circulado,
debería dar lugar a la liquidación, porque no se estaría reconociendo el efecto
de abstracción del título de crédito.

¿Qué significa que no se presenten bienes? Esto es un pequeño recogimiento


de que el deudor podría oponerse a la liquidación por no encontrarse en mal
estado de sus negocios. Sin embargo, igual existe la causal Nº 1, por lo que
podría no tener mucha aplicación.

266
“2) Si existieren en su contra dos o más títulos ejecutivos vencidos, provenientes
de obligaciones diversas, encontrándose iniciadas a lo menos dos ejecuciones, y
no hubiere presentado bienes suficientes para responder a la prestación que
adeude y a sus costas, dentro de los cuatro días siguientes a los respectivos
requerimientos.”(Art. 117 Nº 2).

(3) Cuando la empresa deudora o sus administradores no sean habidos y no


hayan dejado mandatarios con poder suficiente para dar cuenta de sus
obligaciones y contestar nuevas demandas (Art. 117 Nº 3). El sentido de esto
es que lo más fácil en estos casos es que se nombre un liquidador que
administre los bienes de la empresa.

Se puede invocar aún cuando haya un crédito que penda de un plazo o con una
condición suspensiva.Esto supone plantearse el siguiente problema: ¿Se puede
invocar la causal Nº 2 cuando el crédito no esté vencido? La causal Nº 2 no exige
que lo solicite un titular de un título ejecutivo vencido, por lo que se podría
preguntar si es que un tercero que tiene un crédito que no ha vencido o un
potencial créditopuede pedir la liquidación, dado que el Nº 2 nada señala y el
Nº 3 si lo ha señalado. UGARTE cree que se podría argumentar que una persona
que no tiene un crédito vencido todavía no es acreedor.

“3) Cuando la Empresa Deudora o sus administradores no sean habidos, y hayan


dejado cerradas sus oficinas o establecimientos sin haber nombrado
mandatario con facultades suficientes para dar cumplimiento a sus obligaciones
y contestar nuevas demandas. En este caso, el demandante podrá invocar como
crédito incluso aquel que se encuentre sujeto a un plazo o a una condición
suspensiva.” (art. 117 Nº 3).

267
Se suele criticar de estas causales que no se refieren al estado real de los negocios
del deudor.

Estas son las 3 causales que existen para una empresa deudora. Para la persona
deudora, la causal es una sola, y se encuentra en el art. 282:

“Causal para solicitar el inicio de un Procedimiento Concursal de Liquidación de los


bienes de una Persona Deudora. Mientras no se declare la admisibilidad de un
Procedimiento Concursal de Renegociación de una Persona Deudora, cualquier
acreedor podrá solicitar el inicio del Procedimiento Concursal de Liquidación de los
bienes de la Persona Deudora, siempre que existieren en contra de ésta dos o más
títulos ejecutivos vencidos, provenientes de obligaciones diversas, encontrándose
iniciadas a lo menos dos ejecuciones, y no se hubieren presentado dentro de los
cuatro días siguientes al respectivo requerimiento, bienes suficientes para
responder a la prestación que adeude y a sus costas.”

¿Qué requisitos debe cumplir la demanda de la liquidación forzosa?Esto está


señalado en el art. 118.

(1) Se deben presentar todos los antecedentes justificativos de la causal:Los


documentos o antecedentes escritos de la causal invocada (no se puede
configurar una causal a partir de testigos, sin perjuicio de que pueda pensarse la
posibilidad de hacerlo en la causal Nº 3 porque se trata de hechos negativos
difíciles de probar);

(2) Un vale vista o boleta bancaria expedida a la orden del tribunal por una suma
equivalente a 100 UF para cubrir los gastos iniciales del procedimiento de
liquidación concursal. Según UGARTE hay ciertas implicancias constitucionales

268
respecto de esta exigencia. De acuerdo a UGARTE esto tiene como fundamento
una moderación del ejercicio arbitrario de la causal Nº 1.

Este monto es de 200 UF para las personas deudoras.

(3) El acreedor puede designar a un veedor de la nómina de veedores. Esta es


facultativa para el acreedor. El veedor ejercerá sus funciones en caso que se
presente un juicio de oposición, es decir, la oposición a la dictación de la
resolución de liquidación. Si se está discutiendo la oposición, en el intertanto el
veedor tendrá las facultades de interventor, por lo que podrá impetrar medidas
conservativas y sus funciones consistirán básicamente en supervisar que el
deudor en el intertanto no se deshaga de sus bienes ni los distraiga.

(4) Solicitar medidas prejudiciales y precautorias. Esto es facultativo para el


acreedor.

No hay limitación respecto de las medidas que se pueden pedir.

(5) El nombre de los liquidadores titulares o suplentes para el caso de que el


deudor no efectuare actuación alguna en la audiencia inicial (audiencia en la
que el deudor puede presentar sus descargos en el procedimiento de
liquidación, y si no comparece el deudor en esa audiencia, quedará nombrado
un liquidador titular y suplente de manera provisional).

“Requisitos. La demanda se presentará ante el tribunal competente, señalará la


causal invocada y sus hechos justificativos y acompañará los siguientes
antecedentes:

1) Los documentos o antecedentes escritos que acreditan la causal invocada.

269
2) Vale vista o boleta bancaria expedida a la orden del tribunal por una suma
equivalente a 100 unidades de fomento para subvenir los gastos iniciales del
Procedimiento Concursal de Liquidación.

En caso que se dicte la correspondiente Resolución de Liquidación, dicha suma será


considerada como un crédito del acreedor solicitante, y gozará de la preferencia
establecida en el número 4 del artículo 2472 del Código Civil.

3) El acreedor peticionario podrá designar a un Veedor vigente de la Nómina de


Veedores, que asumirá en caso que el Deudor se oponga a la Liquidación Forzosa.
Dicho Veedor supervigilará las actividades del Deudor mientras dure la tramitación
del Juicio de Oposición, conforme a lo dispuesto en el Párrafo 3 de este Título, y
tendrá las facultades de interventor contenidas en el artículo 25 de esta ley. Los
honorarios del Veedor no podrán ser superiores a 100 unidades de fomento y serán
de cargo del acreedor peticionario. Asimismo, el demandante podrá solicitar en su
demanda cualquiera de las medidas señaladas en los Títulos IV y V del Libro
Segundo del Código de Procedimiento Civil. El Veedor estará facultado para solicitar
las medidas cautelares que estime necesarias, con cargo del acreedor peticionario,
para garantizar la mantención del activo del Deudor mientras dure el Juicio de
Oposición, quedando el Deudor sujeto a las restricciones señaladas en el número 2)
del artículo 57 de esta ley.

4) El nombre de los Liquidadores titular y suplente, para el caso que el Deudor no


compareciere o no efectuare actuación alguna por escrito en la Audiencia Inicial
prevista en el artículo 120.

270
El Liquidador o Veedor que hubiera ejercido como tal en algún Procedimiento
Concursal, no podrá asumir en otro procedimiento respecto de un mismo
Deudor.”(art. 118).

Se presenta esta solicitud, y hay una primera providencia en la cual se examina el


cumplimiento de los requisitos por un plazo de 3 días y en este caso, a diferencia de
la liquidación voluntaria, se tienen por cumplido los requisitos de la demanda, se
ordena la publicación de la providencia en el boletín concursal y se cita a las partes
a una audiencia inicial dentro del 5º día hábil siguiente a la fecha de la notificación
personal de las partes o la notificación por el art. 44 del CPC. Si el tribunal considera
que no se cumplen los requisitos, el tribunal ordenará la corrección de los
requisitos dentro de 3º día, y si estos no se corrigen, se tendrá por no presentada la
solicitud.

29/09/2016
Si el tribunal considera que se cumplen los requisitos de la demanda, ordenará la
publicación de la resolución en el boletín concursal y citará dentro de quinto día a la
(III) audiencia inicial. Desde la dictación de la nueva ley, el procedimiento concursal
se transformó en fundamentalmente oral y llevado en audiencias, en las cuales las
partes deben contestar, deducir y resolver recursos en las mismas audiencias
(generalmente). Se privilegia la oralidad, la eficiencia y velocidad del
procedimiento.

La audiencia inicial está regulada en el art. 120 y tiene por objeto intentar persuadir
al deudor de cumplir con sus obligaciones y terminar el proceso en ese momento.
Esto se ve, por ejemplo, en la obligación del tribunal de presentarle al deudor los
efectos de una eventual liquidación forzosa del mismo.

271
“Audiencia Inicial. La Audiencia Inicial se desarrollará conforme a las siguientes
reglas:

1) El tribunal informará al Deudor acerca de la demanda presentada en su contra y


de los efectos de un eventual Procedimiento Concursal de Liquidación.

2) Acto seguido, el Deudor podrá proponer por escrito o verbalmente alguna de las
actuaciones señaladas en los literales siguientes, debiendo siempre señalar el
nombre o razón social, domicilio y correo electrónico de sus tres acreedores, o sus
representantes legales, que figuren en su contabilidad con los mayores créditos. Si
el Deudor no cumple con este requisito el tribunal tendrá por no presentada la
actuación y dictará de inmediato la Resolución de Liquidación, nombrando a los
Liquidadores titular y suplente, ambos en carácter de provisionales, que el acreedor
peticionario hubiere designado en su demanda, conforme a lo dispuesto en el
número 4 del artículo 118. Las referidas actuaciones podrán ser:

a) Consignar fondos suficientes para el pago del crédito demandado y las costas
correspondientes. El tribunal tendrá por efectuada la consignación, ordenará
practicar la liquidación del crédito, la regulación y tasación de las costas y señalará
el plazo en que el Deudor deberá pagarlos, el que se contará desde que esas
actuaciones se encuentren firmes. Si el Deudor no pagare en el plazo fijado, el
tribunal dictará la respectiva Resolución de Liquidación.

b) Allanarse por escrito o verbalmente a la demanda, dictando en este caso el


tribunal la respectiva Resolución de Liquidación.

c) Acogerse expresamente al Procedimiento Concursal de Reorganización


contemplado en el Capítulo III de esta ley.

272
d) Oponerse a la demanda de Liquidación Forzosa, en cuyo caso se observarán las
disposiciones del Párrafo 3 del presente Título. La oposición del Deudor sólo podrá
fundarse en las causales previstas en el artículo 464 del Código de Procedimiento
Civil.

3) Si el Deudor no compareciere a esta audiencia, o compareciendo no efectúa


alguna de las actuaciones señaladas en el número 2 anterior, el tribunal dictará la
Resolución de Liquidación y nombrará a los Liquidadores titular y suplente que el
acreedor peticionario hubiere designado en su demanda, ambos en carácter de
provisionales, conforme a lo dispuesto en el número 4 del artículo 118.

De lo obrado en esta audiencia se levantará acta, la que deberá ser firmada por los
comparecientes y el secretario del tribunal.” (art. 120).

Actuaciones que puede realizar el deudor en la audiencia inicial.También ocurre


que el deudor puede proponer en esta audiencia, sea verbal sea por escrito, ciertas
actuaciones que tienen por objeto no llegar al procedimiento de liquidación. El
deudor puede:

(1) Consignar bienes suficientes para el pago del crédito del solicitante y las
costas correspondientes. Hayque tener cuidado con esta causal, pues en el caso
de la causal Nº2 para pedir la liquidación forzosa no se tiene claridad respecto
de qué es lo que se tiene que consignar, si los créditos de los títulos ejecutivos o
el crédito del acreedor solicitante, a pesar de que este no tenga un título
ejecutivo que justifique la causal. En este caso el tribunal liquidará el crédito y
fijará un plazo para el pago: si el deudor paga dentro de ese plazo, se termina el
procedimiento; si no paga dentro del plazo, se dictará resolución de liquidación.

273
(2) Allanarse. En este caso se dictará la resolución de liquidación (art. 120 2 b) Ley
Nº 20.720).

(3) Acogerse al procedimiento de reorganización. En la medida en que cumpla con


los requisitos necesarios puede acogerse a este procedimiento, lo cual
dependerá del apoyo de los acreedores, pues una vez que se entra en este
procedimiento se producirá la protección financiera concursal, cuya duración
dependerá de dicho apoyo. Esto tiene diversas posibilidades: Si hay acuerdo
entre los acreedores y el deudor, se acaba con este procedimiento; si no hay
acuerdo, en cambio, se dictará la resolución de liquidación.

(4) No comparecer. Como no hay un proceso que seguir antes de la resolución de


liquidación, se dictará la resolución de liquidación, con la diferencia que esta
resolución designará liquidador titular y suplente en forma provisoria.

(5) Oponerse. En este caso se iniciará el Juicio de Oposición, el que se desarrolla en


tres audiencias: (a) Audienci Inicial; (b) Audiencia de Prueba; y (c) Audiencia de
Fallo. Esto está regulado a partir del art. 121 y ss. de la Ley Nº 20.720.

Es importante señalar las causales por las cuales el deudor se puede oponer.
Solamente se puede deducir oposición fundada en las causales del art. 464 del
CPC, que son las excepciones que se pueden deducir en el juicio ejecutivo.
¿Cuáles son estas excepciones? Por regla general muchas de estas excepciones
son modos de extinguir las obligaciones. Hay otras que se refieren a la
incompetencia del tribunal, la falta de capacidad, la litis pendencia ante tribunal
competente (en este caso hay un tema de interpretación porque podrían haber
2 principios que pudieran contraponerse: la acumulación de los juicios en la
liquidación y esta litis pendencia ante tribunal competente: ¿si un acreedor
inició una ejecución contra el deudor, puede luego iniciar un procedimiento

274
concursal en su contra? UGARTE cree que el legislador no pensó en este tema, y
cree que no puede iniciar el procedimiento concursal en contra del deudor una
vez ha iniciado el procedimiento de ejecución individual), la ineptitud del libelo,
etc.. Estas excepciones no dicen relación con la situación patrimonial del
deudor.

Procedimiento. Este procedimiento partirá mediante un escrito de oposición,


que es lo mismo que la oposición como acción en la audiencia inicial (se debe
presentar en la misma audiencia inicial). El escrito debe señalar las excepciones
opuestas y las defensas invocadas con los fundamentos de hecho y de derecho,
con los antecedentes documentales que se acompañan, además de señalar u
ofrecer los medios de prueba que se pretenden hacer valer. Existen una serie de
requisitos relativos a la prueba que son particulares:

(a) En la prueba testimonial no se permiten más de 2 testigos por punto de


prueba.

(b) En la absolución de posiciones hay que acompañar pliego de posiciones en


el mismo escrito.

(c) Respecto a la prueba pericialse aplican las normas del CPC.

(d) En cuanto a la prueba documental, la única excepción que existe al hecho


de que se deba acompañar toda la prueba documental al escrito
documental, es por hechos que ocurrieron después del escrito de oposición.

El tribunal debe resolver si es que la oposición cumple con los requisitos


necesarios: Si considera que no cumple, dictará la resolución de liquidación con
designación de liquidador titular y suplente provisional (art. 123).Si cumple con

275
los requisitos, el tribunal puede determinar que no hay hechos sustanciales,
pertinentes y controvertidos que probar, y en ese caso se pasa directamente a
la Audiencia de Fallo; si considera que hay hechos pertinentes, sustanciales y
controvertidos, el tribunal dictará un auto de prueba, recibiendo la causa a
prueba y señalando los puntos de prueba (art. 124). Este auto de prueba será
susceptible de reposición dentro de tercero día.Además de lo anterior, el
tribunal, en una resolución distinta, se pronunciará sobre la admisibilidad y
pertinencia de la prueba presentada en el escrito de oposición. Si hay prueba
pericial y el tribunal la considera procedente, se determina la calidad del perito,
en que se insta a las partes a llegar a acuerdo, y si no, lo designará el tribunal.

La resolución de admisibilidad le concede al acreedor la oportunidad de rendir


prueba, la que debe ser presentada al día siguiente de la audiencia inicial. En
esta resolución también se cita a Audiencia de Prueba. Sobre esta resolución
procede recurso de reposición (art. 125).

“Resoluciones del tribunal competente. Deducida la oposición, el tribunal


constatará el cumplimiento de los requisitos legales y, si procede, tendrá por
opuesto al Deudor a la Liquidación Forzosa y por acompañados los documentos
regulados en el artículo anterior. En caso contrario, se estará a lo dispuesto en
el número 3 del artículo 120.”(art. 123).

“Trámites probatorios. Una vez decretada la oposición, el tribunal competente:

1) Existiendo hechos sustanciales, pertinentes y controvertidos que requieran ser


probados para una adecuada resolución de la controversia, recibirá la causa a
prueba y fijará los puntos sobre los cuales ésta deberá recaer. Dicha resolución
sólo será susceptible de recurso de reposición por las partes, el que deberá

276
interponerse dentro de tercero día. En caso contrario, citará a las partes a la
Audiencia de Fallo.

2) Una vez recibida la causa a prueba y fijados los puntos sobre los cuales
deberá recaer:

a) Se pronunciará acerca de la admisibilidad y pertinencia de las pruebas


ofrecidas;

b) Tratándose de prueba pericial, el tribunal determinará la calidad del perito y


los puntos sobre los cuales deberá pronunciarse, instando a las partes para que
acuerden su nombre. En caso de desacuerdo, el perito deberá ser designado en
ese mismo acto por el tribunal, y se fijará un plazo de siete días para que el
perito evacue su informe. No será necesario en estos casos practicar la
audiencia de reconocimiento.

c) Concederá al acreedor demandante la oportunidad de ofrecer prueba, la que


deberá ser singularizada y acompañada al día siguiente. La resolución acerca de
la admisibilidad y pertinencia de las pruebas del acreedor deberá ser
pronunciada antes de la Audiencia de Prueba. Contra lo resuelto, el Deudor
podrá interponer un recurso de reposición en la forma prevista en el artículo
125, tramitándose tal petición como cuestión previa.

3) Citará a las partes a una Audiencia de Prueba, la que deberá tener lugar al
quinto día siguiente, debiendo indicar la fecha y la hora de celebración. Las
partes se entenderán notificadas en ese mismo acto.

En caso de que se fijen nuevos puntos de prueba por haberse acogido la


reposición señalada en el número 1) anterior, el tribunal deberá resolver la

277
admisibilidad o pertinencia de las nuevas pruebas antes de la Audiencia de
Prueba señalada en el artículo 126.”(art. 124).

“Recursos. En contra de las resoluciones que se pronuncien en la Audiencia


Inicial acerca de la admisibilidadoprocedencia de las pruebas ofrecidas, los
puntos de prueba fijados, la forma de hacer valer los medios probatorios o
cualquier otra circunstancia que incida en éstos, sólo será procedente el recurso
de reposición, que deberá deducirse verbalmente por las partes y será resuelto
en la misma Audiencia Inicial.”(art. 125).

La Audiencia de Prueba es fijada para el quinto día siguiente a la dictación del


auto de prueba. Esta es una audiencia en la cual se rinde la prueba ofrecida,
fundamentalmente lo que se refiere a la prueba testimonial, pericial y
confesional. Se permite a las partes hacer observaciones a la prueba, de manera
oral y de forma sumaria.

“Audiencia de Prueba. A la hora decretada y con las partes que asistan, se


rendirá la prueba declarada admisible en el siguiente orden: confesional y
testimonial, iniciándose por la ofrecida por el Deudor.

Sólo se admitirá la declaración de dos testigos por cada parte respecto de cada
punto de prueba. Serán aplicables las reglas de los artículos 356 y siguientes del
Código de Procedimiento Civil respecto de la rendición de la prueba testimonial
y lo dispuesto en los artículos 385 y siguientes del mismo Código en relación a la
prueba confesional.

Concluida la recepción de la prueba, las partes formularán verbal y brevemente


las observaciones que el examen de la misma les sugiera, de un modo preciso y
concreto.

278
La Audiencia de Prueba terminará con la firma de un acta por los asistentes, el
juez y el secretario del tribunal. Desde aquel momento, las partes asistentes y
las que no hayan asistido se entenderán citadas y notificadas de pleno derecho
a la Audiencia de Fallo, la que deberá celebrarse al décimo día contado desde el
término de la Audiencia de Prueba, existan o no diligencias pendientes,
debiendo el tribunal fijar su hora de inicio.

Las pruebas señaladas se apreciaran por el tribunal de acuerdo a las reglas de la


sana crítica.”(art. 126).

Al final de la Audiencia de Prueba se firma un acta, con la transcripción de toda


la prueba rendida. A partir de esta acta quedan las partes inmediatamente
citadas a la Audiencia de Fallo, que debe realizarse dentro de los 10 días
siguientes a la fecha en la que termina la Audiencia de Prueba.

La Audiencia de Fallo consiste simplemente en una audiencia en la cual se lee la


sentencia de primera instancia, siendo notificadas las partes en ese mismo acto.
Si la parte no asiste se entiende notificada de pleno derecho, con el solo mérito
de la celebración de la audiencia.

En contra de la sentencia procede únicamente apelación en ambos efectos, la


que se ve de manera extraordinaria en la tabla de la ICA. Contra el fallo de
segunda instancia no procede recurso alguno.

La sentencia tiene 2 posibilidades:

(a) Si la sentencia rechaza la oposición, se dicta resolución de liquidación.

279
(b) Si la sentencia acoge la oposición, dependeráde la excepción presentada
para que se produzca cosa juzgada.

Cuando se dicta sentencia, cesará en sus funciones el veedor. Pudo haber


ocurrido que en la AudienciaInicial se haya solicitado el nombramiento de un
veedor que supervise al deudor durante todo el procedimiento.

c) Resolución de Liquidación. ¿Cuándo ocurre la dictación de la liquidación de resolución?

1. Si el deudor se allana en la audiencia inicial.

2. SI el deudor se acogió al procedimiento de reorganización y no se llegó a acuerdo.

3. Si el deudor no comparece a la audiencia inicial.

4. Si el deudor consigna bienes y no paga después del plazo señalado por el tribunal.

5. Si el tribunal considera que el escrito de oposición no cumple los requisitos.

6. En caso que el tribunal rechace las oposiciones presentadas por el deudor.

7. En caso de liquidación voluntaria.

La resolución de liquidación es el acto que transforma al procedimiento de liquidación


en un estado excepcional. Luego de esta resolución comienza el estado excepcional de
la liquidación.

04/10/2016

280
¿Qué menciones debe contener la resolución de liquidación? ¿Qué es lo que ordena?
(Art. 129).“Resolución de Liquidación. La Resolución de Liquidación contendrá, además
de lo establecido en los artículos 169 y 170 del Código de Procedimiento Civil, lo
siguiente:

1. Se trata de una resolución fundada: debe pronunciarse sobre las consideraciones


de hecho y de derecho de porqué se han rechazado las excepciones del deudor.
Esta es fundamental porque en contra de esta resolución procede el recurso de
apelación en el solo efecto devolutivo.

La sentencia del juicio de oposición solo es apelable en ambos efectos en caso que
se acoja la oposición.

“1) En caso de ser procedente, las consideraciones de hecho o de derecho que sirven
de fundamento para el rechazo de las excepciones opuestas por el Deudor.” (Art.
129 Nº 1).

2. La resolución de liquidación determina si se trata de una empresa deudora o una


persona deudora. Hay que recordar que según las definiciones de ambos conceptos
pueden haber discusiones respecto de la calidad del deudor.

“2) La determinación de si el Deudor es una Empresa Deudora, individualizándola.”


(Art. 129 Nº 2).

3. Designa al liquidador titular y suplente de manera provisional. Es provisional


porque el liquidador será nombrado por los 3 mayores acreedores de acuerdo al
art. 37.

281
“3) La designación de un Liquidador titular y de uno suplente, ambos en carácter de
provisionales de acuerdo a lo establecido en el artículo 37 de esta ley,(...)” (Art. 129
Nº 3 primer parte).

4. Orden al liquidador para que incaute todos los bienes del Deudor, sus libros y
documentos. Esta es otra manifestación del desasimiento.

“(...) y la orden al Liquidador para que incaute todos los bienes del Deudor, sus
libros y documentos bajo inventario, y de que se le preste, para este objeto, el
auxilio de la fuerza pública, con la exhibición de la copia autorizada de la Resolución
de Liquidación.”(art. 129 Nº 3 segunda parte).

5. Orden que las oficinas de correo entreguen al liquidador la correspondencia del


deudor. Esto es la primera manifestación del desasimiento, y tiene que ver con la
pérdida de la administración de los bienes.

“4) La orden para que las oficinas de correos entreguen al Liquidador la


correspondencia cuyo destinatario sea el Deudor.” (Art. 129 Nº 4).

6. La orden de acumular al Procedimiento Concursal de Liquidación todos los juicios


pendientes contra el deudor que puedan afectar sus bienes, seguidos ante otros
tribunales de cualquier jurisdicción, salvo las excepciones legales.A UGARTE le
llama la atención la frase “cualquier jurisdicción”, y cree que no se pueden acumular
otros juicios seguidos en otras jurisdicciones. Se suspende el derecho de ejecutar
individualmente al deudor y los juicios pasan a conocerse por el juez que lleva el
procedimiento concursal.

“5) La orden de acumular al Procedimiento Concursal de Liquidación todos los


juicios pendientes contra el deudor que puedan afectar sus bienes, seguidos ante

282
otros tribunales de cualquier jurisdicción, salvo las excepciones legales.” (Art. 129
Nº 5).

7. Advertencia al público que no pague ni entregue mercaderías al deudor bajo pena


de nulidad de los pagos y entregas.Ahora, si recibe pagos el deudor, tiene la
obligación de entregarles los dineros al liquidador para integrarlos a la masa.

“6) La advertencia al público que no pague ni entregue mercaderías al Deudor, bajo


pena de nulidad de los pagos y entregas, (...)” (Art. 129 Nº 6 primera parte).

8. Orden a las personas que tengan bienes o documentos pertenecientes al deudor


para que los pongan a disposición del liquidador dentro de tercero día.Se inicia el
periodo de verificación ordinaria.

“(...) yla orden a las personas que tengan bienes o documentos pertenecientes al
Deudor para que los pongan, dentro de tercero día, a disposición del
Liquidador.”(Art. 129 Nº 6 segunda parte).

9. Orden de informar a todos los acreedores residentes en el territorio de la


República el inicio del periodo ordinario de verificación.Los acreedores tiene el
plazo de 30 días para presentarse con los documentos justificativos de sus créditos
contados desde la publicación de la resolución en el Boletín Concursal. La
verificación, para efectos concursales, es el acto por el cual un acreedor justifica la
existencia de su crédito en el procedimiento concursal.

La ley establece un procedimiento de verificación ordinaria, y durante ese periodo


los acreedores irán presentando escritos con los cuales acompañan los
antecedentes de sus créditos. Dichos escritos o verificaciones pueden ser

283
impugnados por el Liquidador, el deudor y los demás acreedores, generando un
procedimiento en el cual se tramitan estas impugnaciones.

El efecto de esto es que esos acreedores serán afectados por el resultado del juicio
sin nueva citación. Sin perjuicio de lo anterior, el plazo de 30 días no es un plazo
fatal y no impide la verificación posterior de los créditos, pues la ley contempla la
posibilidad de verificación extraordinaria, que puede realizarse en cualquier
momento dentro del procedimiento concursal. Sin embargo, es muy importante
que un acreedor verifique en el periodo ordinario porque la verificación
extraordinaria no tiene efecto retroactivo, de manera que puede pasar que se
realicen repartos luego del periodo ordinario de verificación, y si una persona no ha
verificado sus créditos, no tendrá derecho a los bienes que han sido repartidos con
anterioridad a su verificación.

“7) La orden de informar a todos los acreedores residentes en el territorio de la


República que tienen el plazo de treinta días contado desde la fecha de la
publicación de la Resolución de Liquidación, para que se presenten con los
documentos justificativos de sus créditos bajo apercibimiento de ser afectados por
los resultados del juicio sin nueva citación.” (Art. 129 Nº 7).

10. La orden de notificar, por el medio más expedito posible, a los acreedores que se
hallen fuera del territorio de la república la resolución de liquidación. Llama la
atención que en realidad no hay normas particulares sobre notificación en el
extranjero a los acreedores, entonces se pueden tener 2 interpretaciones:

(1) Cuando la ley hace el llamamiento a aplicar el medio más expedito posible, en
realidad se trata de cualquier medio en que se le comunique la resolución (ej.
Mail).

284
En la práctica el liquidador tendrá el detalle de los acreedores y tratará de
ubicar a todos los acreedores para informarles de la resolución de liquidación.

(2) Debe tratarse de una notificación con arreglo al CPC, lo que finalmente sería
una notificación personal.

UGARTE estima que se refiere más bien a la primera interpretación al señalar que
se debe tratar del medio más expedito posible.

“8) La orden de notificar, por el medio más expedito posible, la Resolución de


Liquidación a los acreedores que se hallen fuera del territorio de la República.” (Art.
129 Nº 8).

11. La orden de inscribir la resolución en los CBR correspondientes a cada uno de los
inmuebles pertenecientes al deudor y de anotarla al margen de la inscripción
social de la empresa deudora en el registro de comercio. Esta es otra
manifestación del desasimiento. La gran pregunta que surge es: ¿qué ocurre si
antes de que se haya practicado la inscripción el deudor enajena el bien a un
tercero? Si se tratara de una promesa o una condición resolutoria se aplicaría el art.
1491, el que, según UGARTE, no aplica en materia concursal, es decir, respecto de
un tercero al cual se le ha enajenado un bien inmueble después de dictada la
resolución de liquidación, el liquidador podría alegar que dicho acto es inoponibley
que el bien debe reintegrarse a la masa, ello porque el desasimiento opera de pleno
derecho dictada la resolución de liquidación, tratándose de una norma de orden
público.

“9) La orden de inscribir la Resolución de Liquidación en los conservadores de bienes


raíces correspondientes a cada uno de los inmuebles pertenecientes al Deudor, y de

285
anotarla al margen de la inscripción social de la Empresa Deudora en el Registro de
Comercio, si fuere procedente.” (Art. 129 Nº 9).

12. Indicación del día, lugar y hora en la que se celebrará la primera Junta de
Acreedores. En esta primera junta se nombrará al Liquidador definitivo, se ratificará
la designación y se iniciará el proceso de realización del activo.

“10) La indicación precisa del lugar, día y hora en que se celebrará la primera Junta
de Acreedores.” (Art. 129 Nº 10).

¿Qué tipo de resolución es la Resolución de Liquidación? La etapa jurisdiccional del


procedimiento de liquidación de ciertomodo concluye con la resolución de liquidación,
por lo que se podría sostener que pone término al objeto del juicio, y lo que viene
posteriormente es la ejecución, y por consiguiente, se trataría de una sentencia
definitiva. En realidad, la discusión sobre la calidad o el tipo de resolución que es esta
resolución de liquidación respecto de los recursos que proceden en su contra no es
relevante, porque lo establece expresamente la ley:

“La Resolución de Liquidación se notificará al Deudor, a los acreedores y a terceros por


medio de su publicación en el Boletín Concursal y contra ella procederá únicamente el
recurso de apelación, el que se concederá en el solo efecto devolutivo y gozará de
preferencia para su agregación extraordinaria a la tabla, y para su vista y fallo.
Contra el fallo de segunda instancia no procederá recurso alguno, sea ordinario o
extraordinario.” (art. 129 inc. final).

Se notifica esta resolución por la publicación en el Boletín Concursal.

286
Efectos de la resolución de liquidación. En esto es importante recalcar que la
liquidación genera un estado excepcional, por lo cual dejan de regir una serie de
principios propios del derecho común. Estos efectos son:

1. Desasimiento. Es la pérdida de la administración de los bienes del deudor, siendo


este reemplazado por el liquidador y por la Junta de Acreedores en su
administración. En el fondo, el deudor pierde la facultad de administrar sus bienes,
salvo las excepciones legales, y pasará a administrar el liquidador, y en ciertos
casos, la Junta de Acreedores, la que debe aprobar la forma en la que se van a
enajenar ciertos bienes.

El desasimiento es más amplio que la simple incapacidad de usar, gozar y disponer


de los bienes, pues también impide al deudor realizar actos que afecten a sus
bienes que son objeto del concursocomo,por ejemplo, comparecer en juicio.

En cuanto a su naturaleza jurídica, es posible decir que el desasimiento se puede


asimilar con ciertas instituciones existentes en nuestro derecho:

(1) Medida precautoria.Según UGARTE no es asimilable a una medida precautoria


porque estas tienen por objeto asegurar el éxito del procedimiento, mientras
que el desasimiento no tiene ese objetivo, no tiene un carácter preventivo, sino
que más bien se trata de un medio aplicable en la fase de ejecución en que ya
se realizan los bienes.

(2) Mandato forzoso.

(3) Causal de incapacidad.Hay ciertos autores que dicen que se trata de una causal
de incapacidad. Según UGARTE no es una causal de incapacidad porque el
deudor no pierde la capacidad respecto de sus bienes inembargables, ni la

287
capacidad de comparecer en juicio en otros actos que no digan relación con sus
bienes (ej. Juicios de familia). Respecto a la sanción de los actos que realiza el
deudor, la mayoría de los autores entiende que no hay nulidad, en instancias
que si fuera incapaz habría nulidad.

La ley dice expresamente en el Nº 4 del art. 130 que el deudor puede


interponer por sí todas las acciones inherentes a su persona, y que no será
privado de sus derechos civiles (ej. Ejercicio del derecho a voto).

“Administración de bienes. Desde la dictación de la Resolución de Liquidación se


producirán los siguientes efectos en relación al Deudor y a sus bienes:

4) Podrá interponer por sí todas las acciones que se refieran exclusivamente a su


persona y que tengan por objeto derechos inherentes a ella. Tampoco será
privado del ejercicio de sus derechos civiles, ni se le impondrán inhabilidades
especiales sino en los casos expresamente determinados por las leyes.” (art. 130
Nº 4 Ley 20.720).

En definitiva, no se trataría de una causal de incapacidad porque el


desasimiento se refiere solo a ciertos bienes, y no obsta a que el deudor pueda
realizar otros actos.

(4) Embargo.La mayoría de la doctrina nacional asimila el desasimiento con un


embargo, diciendo que aquel es el embargo del procedimiento concursal, pues
comparte muchas características con esta institución.

El embargo es una actuación judicial realizada por un ministro de fe que tiene


por objeto tomar uno o más bienes del deudor, poniéndolos en poder del
depositario para el pago de una deuda.

288
Si bien el desasimiento no es exactamente igual en estas características al
embargo, si tiene cosas similares:

(a) Actuación judicial. El desasimiento no es un acto posterior, sino que se


produce por la sola dictación de la resolución de liquidación, es un efecto
propio de esta, mientras que para el embargo se dicta un mandamiento de
ejecución y embargo y la diligencia de embargo es realizada por un receptor
judicial, debiendo inventariar los bienes. Dado que el desasimiento tiene un
carácter universal y abarca todos los bienes, salvo los exceptuados por ley,
no es necesario realizar esta gestión, a menos que los bienes no se
encuentren en poder del deudor, en cuyo caso se realiza una gestión
llamada incautación, practicada por el liquidador. Ambos tienen un carácter
u origen jurisdiccional.

(b) El objeto es tomar uno o más bienes. Ambos se refieren a que se produce
una privación de los atributos del dominio (uso, goce y disposición).

¿Esto es así en el embargo? Si una persona enajena bienes respecto de los


cuales se ha trabado embargo hay objeto ilícito en dicho acto (art. 1464
CC.). En el desasimiento, en cambio, se produce la inoponibilidad.

(c) Poniéndolos en poder del depositario.En el embargo la regla general es que


el depositario sea el mismo deudor. En el procedimiento concursal el
depositario es el liquidador.

(d) Tiene por objeto el pago de una deuda. Ambos tienen este objeto.

Diferencias entre el embargo y el desasimiento:

289
(a) El embargo se refiere a bienes específicos identificados en el acta de
embargo, mientras que el desasimientotiene un carácter universal, es decir,
se refiere a la generalidad de los bienes del deudor, salvo las excepciones
legales.

(b) Puede haber más de un embargo sobre un bien, lo que no ocurre con el
desasimiento, ya que este es un estado general y universal que afecta a
todos los bienes del deudor.

(c) En cuanto al momento en el que se producen. El desasimiento se produce


al momento de dictación de la resolución de liquidación, no requiere de un
acto posterior de identificación de bienes.En el embargo, en cambio, hay
que realizar la diligencia de embargo por el receptor, no se produce por el
solo hecho de la dictación del mandamiento de ejecución y embargo.

(5) Expropiación. No se trata de una expropiación propiamente tal porque el


dominio de los bienes sigue siendo del deudor.

(6) Hay autores que dicen que el desasimiento es asimilable a la creación de una
persona jurídica.¿Qué quiere decir la doctrina extranjera con esto? Quiere decir
que habría un administrador separado, un patrimonio separado, y lo que quiere
decir la doctrina es que hay un administrador distinto, hay bienes que están
separados en un patrimonio distinto del deudor, con lo cual se podría sostener
que hay una nueva persona jurídica. Si bien esto no tiene una base legal en
Chile, se puede ver en la práctica que se hable de los acreedores dela masa y se
distinga de los acreedores enla masa:

290
(a) Acreedores de la masa. Cuando se produce la liquidación, la empresa sigue
funcionando y debe seguir realizando compra y venta de insumos,
suministros, etc. Es por esto que la ley hace la distinción de que después que
se haya dictado la resolución de liquidación, las personas que contraigan
obligaciones con el liquidador serán acreedores de la masa, es decir, es la
masa la que deberá responderles a ellos. Estos acreedores tendrán
preferencia y podrán perseguir individualmente al deudor.

(b) Acreedores en la masa.Aquellos acreedores que verificaron sus créditos y


que se rigen por las preferencias establecidas en el procedimiento
concursal. Son aquellos que tenían la calidad de acreedores antes de
dictarse la resolución de liquidación.

Respecto a los efectos propios del desasimiento, la ley es muy clara en señalar que
no se perderá el dominio sobre los bienes, sino que solamente la facultad de
disposición de ellos y de sus frutos (art. 130 Nº 2).

“Administración de bienes. Desde la dictación de la Resolución de Liquidación se


producirán los siguientes efectos en relación al Deudor y a sus bienes:

2) No perderá el dominio sobre sus bienes, sino sólo la facultad de disposición sobre
ellos y sobre sus frutos.” (art. 130 Nº 2).

La ley trata el desasimiento en los arts. 130 y ss., refiriéndose en primer lugar a los
efectos del desasimiento:

“Administración de bienes. Desde la dictación de la Resolución de Liquidación se


producirán los siguientes efectos en relación al Deudor y a sus bienes:

291
(1) 1) Quedará inhibido de pleno derecho de la administración de todos sus bienes
presentes, esto es, aquellos sujetos al Procedimiento Concursal de Liquidación
y existentes en su patrimonio a la época de la dictación de esta resolución,
excluidos aquellos que la ley declare inembargables. Su administración pasará
de pleno derecho al Liquidador.

En consecuencia, serán nulos los actos y contratos posteriores que el Deudor


ejecute o celebre en relación a estos bienes.

Losbienes presentes son los que existan en el patrimonio del deudor al


momento de dictación de la resolución de liquidación.

Respecto de los bienes futuros, hay normas especiales en la ley que distinguen
si estos son adquiridos a título gratuito o a título oneroso (Art. 133):

(a) A título oneroso. No forman parte del procedimiento de liquidación, pero la


masa se puede beneficiar de los frutos o beneficios líquidos que produzcan
esos bienes.

(b) A título gratuito. Forman parte del procedimiento de liquidación. En este


caso se entiende que los bienes son afectados por el desasimiento y por
ende son parte de la masa.

Una excepción a este principio es en la liquidación de las personas


deudoras, en que se pueden embargar las 3 remuneraciones siguientes a la
dictación de la resolución de liquidación. Esto sustenta la visión de PUGA de
que el desasimiento es el símil del embargo en el procedimiento concursal.

292
Situación de los bienes futuros. La administración de los bienes que adquiera el
Deudor con posterioridad a la Resolución de Liquidación se regirá por las reglas
que siguen:

a) Tratándose de bienes adquiridos a título gratuito, dicha administración se


ejercerá por el Liquidador, manteniéndose la responsabilidad por las cargas con
que le hayan sido transferidos o transmitidos y sin perjuicio de los derechos de
los acreedores hereditarios.

b) Tratándose de bienes adquiridos a título oneroso, su administración podrá ser


sometida a intervención, y los acreedores sólo tendrán derecho a los beneficios
líquidos que se obtengan.”(art. 133 Ley Nº 20.720).

05/10/2016
¿Qué pasa con los bienes pasados?Se trata de bienes que el deudor tuvo en su
patrimonio, pero ya no existen en este al momento de la dictación de la
resolución de liquidación. Esos bienes no serán objeto del desasimiento per sé,
pero existen numerosas acciones por medio de las cuales se pueden reintegrar
al patrimonio del deudor los bienes pasados. Por un periodo, que dependiendo
de las circunstancias va de 1 a 2 años desde la dictación de la resolución de
liquidación, es posible que ciertos actos en virtud de los cuales el deudor se ha
desprendido de sus bienes, sean revocados y se ejerzan acciones por el
liquidador para reintegrar los bienes a la masa. Existen ciertas causales para que
los actos sean revocados y los bienes reintegrados a la masa (ej. Contratos con
personas relacionadas).

(2) 2) No perderá el dominio sobre sus bienes, sino sólo la facultad de


disposiciónsobre ellos y sobre sus frutos.

293
(3) 3) No podrá comparecer en juicio como demandante ni como demandado, en
lo relativo a los bienes objeto del Procedimiento Concursal de Liquidación,
pero podrá actuar como coadyuvante.

(4) 4)Podrá interponer por sí todas las acciones que se refieran exclusivamente a
su persona y que tengan por objeto derechos inherentes a ella. Tampoco será
privado del ejercicio de sus derechos civiles, ni se le impondrán inhabilidades
especiales sino en los casos expresamente determinados por las leyes.

(5) 5) En caso de negligencia del Liquidador, podrá solicitar al tribunal que ordene
la ejecución de las providencias conservativas que fueren pertinentes.”(art.
130).

¿Qué bienes están exceptuados del desasimiento?

(1) Bienes futuros a título oneroso.Teniendo en consideración la excepción de los


frutos y la de las 3 remuneraciones de la persona deudora.

(2) Bienes que son de terceros. Si los bienes no son propiedad del deudor no caben
en el desasimiento. En el marco del procedimiento concursal se pueden dar una
serie de situaciones que pueden afectar bienes de terceros. Existen numerosas
normas en la ley que aclaran que los bienes de terceros están exceptuados del
desasimiento y la forma en la que los terceros pueden ejercer sus derechos
dentro del procedimiento.

Dentro de estos bienes hay reglas especiales.

294
(a) Bienes sujetos a usufructo legal (art. 132 Ley Nº 20.720).Se trata de
situaciones que se dan principalmente en el derecho de familia (ej.
Usufructo legal del padre sobre los bienes de los hijos).

“Administración de bienes en caso de usufructo legal. La administración que


conserva el Deudor sobre los bienes personales de la mujer o hijos de los que
tenga el usufructo legal, quedará sujeta a la intervención del Liquidador
mientras subsista el derecho del marido, padre o madre sujeto al
Procedimiento Concursal de Liquidación.

El Liquidador cuidará que los frutos líquidos que produzcan estos bienes
ingresen a la masa, deducidas las cargas legales o convencionales que los
graven.

El tribunal, con audiencia del Liquidador y del Deudor, determinará la cuota


de los frutos que correspondan a este último para su subsistencia y la de su
familia, habida consideración de sus necesidades y la cuantía de los bienes
bajo intervención.

El Liquidador podrá comparecer como parte coadyuvante en los juicios de


separación de bienes y de divorcio en que el Deudor sea demandado o
demandante.”(art. 132).

De esta manera, solo estarán estos bienes sujetos a facultades de


intervención, pero la administración seguirá en manos del deudor.

Los frutos de estos bienes ingresan a la masa, dado que son de propiedad
del deudor, con la salvedad de que se reconoce que el deudor sigue
teniendo la obligación de velar por la subsistencia de la familia, por lo que el

295
tribunal puede determinar que alguna cuota de estos frutos corresponda
para la subsistencia de su familia.

(b) Bienes que han sido comprados por el deudor pero que aún no han sido
entregados (arts. 154 y ss.). Ese bien no es jurídicamente del deudor ya que
no se ha hecho tradición del bien. La ley dice que el contrato de
compraventa puede resolverse por parte del vendedor del bien si es que el
deudor no ha cumplido con su obligación, salvo que se trate de una
compraventa de bienes muebles que ya se encuentran en poder del deudor.
De esta forma, la ley le permite al vendedor, en caso que no se haya hecho
la tradición de las cosas muebles, retractarse del contrato. Si ya se hubiera
hecho la tradición, pero no se ha pagado el precio, los bienes son del
Deudor y el vendedor tiene un crédito que deberá verificar en la masa.

“Resolución de la compraventa. El contrato de compraventa podrá


resolverse por incumplimiento de las obligaciones del Deudor comprador,
salvo cuando se trate de cosas muebles que hayan llegado a poder de éste.”
(art. 154).

La ley establece que la excepción es para bienes muebles que se encuentren


en poder del deudor. ¿Significa eso que respecto de bienes inmuebles se
podría resolver la compraventa, aun cuando se haya inscrito a nombre del
deudor, si existe un saldo de precio?Pareciera que sí. UGARTE cree que
como en Chile hay un régimen de posesión inscrita no hay una
incertidumbre como la que se podría dar respecto de los muebles, pero
responder afirmativamente a esta pregunta no sería una respuesta acorde
con la par conditiocreditorum, por lo que él que cree el acreedor del precio
por la venta de inmueble deberá igualmente verificar en la liquidación.

296
Respecto de la mercadería en tránsito, la ley dice que mientras las
mercaderías se encuentren en tránsito se puede resolver la compraventa. Se
puede dejar sin efecto la compraventa si no se ha pagado el precio.

“Facultades del vendedor respecto de las mercaderías en tránsito. Mientras


estén en tránsito las cosas muebles vendidas y remitidas al Deudor, el
vendedor no pagado podrá dejar sin efecto la tradición, recuperar la
posesión y pedir la resolución de la compraventa.

El vendedor podrá también retener las cosas vendidas hasta el entero pago
de su crédito.” (art. 156).

El art. 155 explica que se considera en tránsito para efectos de la


mercadería, lo que supone finalmente que se podrá dejar sin efecto la
tradición prácticamente durante todo el proceso.

“Definición de mercadería en tránsito. Para los efectos de lo dispuesto en los


artículos siguientes, se entiende que las cosas muebles están en tránsito
desde el momento en que las reciben los agentes encargados de su
conducción, hasta que queden en poder del comprador Deudor o de la
persona que lo represente.” (art. 155).

¿Qué pasa si las mercaderías venían en tránsito y el deudor las vende a un


tercero, percibiendo el precio? Básicamente ocurre que, como el deudor no
tendrá las mercaderías sino que dinero, no se podrá ejercer la acción del art.
156. Esto es acorde al principio de que no hay reivindicación de dinero.

Si el tercero que compró no ha pagado al deudor, el vendedor podrá pedirle


el precio a este tercero, mas no la cosa.

297
“Mercaderías en tránsito vendidas a un tercero. En caso que las cosas a que
se refiere el artículo anterior hayan sido vendidas durante su tránsito a un
tercero de buena fe, a quien se hubiere transferido la factura, conocimiento
o carta de porte, el vendedor no podrá ejercer las acciones que le confiere
dicho artículo.

Pero si el nuevo comprador no hubiere pagado el precio antes de la


Resolución de Liquidación, el vendedor primitivo podrá demandar su entrega
hasta la concurrencia de la cantidad que se le deba.” (art. 157).

(c) Bienes que el deudor tiene en leasing.¿Por qué la ley quisiera regular
especialmente los bienes dados en leasing? El leasing en realidad es una
figura moderna de contratación, pero es un constructo para financiar bienes
sin que estos entren al patrimonio de la persona que los debe. Se podría
decir que el leasing es una institución opuesta a los principios generales del
procedimiento concursal de liquidación. Esto porque una de sus ventajas es
que teóricamente el acreedor no tendrá que estar preocupado que su
deudor caiga en quiebra y salir a rematar el bien.

La ley establece ciertas normas especiales en relación a esta institución (art.


224 y ss.):

“De la incautación. Los bienes que el Deudor tenga en su poder en virtud de


un contrato de arrendamiento con opción de compra deberán ser
incautados por el Liquidador en la forma dispuesta en los artículos 163 y 164
de esta ley, debiendo dejar constancia en el acta que levante que se trata de
bienes objeto de un contrato de arrendamiento con opción de compra.

298
Los gastos que irroguen la conservación, custodia y/o bodegaje de dichos
bienes deberán ser asumidos por la masa. En caso de desacuerdo en el
monto correspondiente, resolverá incidentalmente el juez competente, sin
ulterior recurso.” (art. 224).

Un arrendador de un bien en leasing tratará de establecer ciertas


regulaciones especiales para el caso de que el arrendatario caiga en
liquidación: Una opción es acelerar las cuotas que no han sido pagadas, otra
es establecer un evento de terminación más ciertas multas. En la situación
de liquidación el acreedor preferirá la terminación porque le permitirá no
tener que competir con la masa para la recuperación del bien. Respecto a
esto la ley señala que independiente de lo que se ha señalado en el
contrato, la Junta de Acreedores será la que determinará qué hacer con el
bien: (i) Puede continuar con el contrato de arrendamiento, y en ese caso el
arrendador pasaría a ser un acreedor de la masa en las cuotas futuras; (ii)
Ejercer anticipadamente la opción de compra, lo que es difícil ya que se
requiere una desembolso importante de dinero; o (iii) terminar
anticipadamente el contrato y restituir el bien.

“Efecto de la Resolución de Liquidación en los contratos de arrendamiento


con opción de compra. La dictación de la Resolución de Liquidación no
constituirá causal de terminación inmediata del contrato de arrendamiento
con opción de compra.

La Junta Constitutiva de Acreedores deberá pronunciarse y acordar al


respecto alguna de las siguientes alternativas:

1.- Continuar con el cumplimiento del contrato de arrendamiento con opción


de compra, en los términos originalmente pactados.

299
2.- Ejercer anticipadamente la opción de compra, en los términos
establecidos en el respectivo contrato de arrendamiento con opción de
compra.

3.- Terminar anticipadamente el contrato de arrendamiento con opción de


compra, restituyendo el bien.

Para el caso en que no se celebrare la referida Junta, o ésta no se


pronunciare al respecto, se entenderá que se opta por la alternativa
regulada en el número 1 precedente.

Se tendrá por no escrita cualquier cláusula pactada en el contrato de


arrendamiento con opción de compra, en contrario a lo regulado en este
artículo.” (art. 225).

Las opciones que puede tomar la Junta de acreedores y su regulación


estáestablecidapor el art. 226:

“De la verificación. El arrendador podrá verificar siempre en el


Procedimiento Concursal de Liquidación del Deudor arrendatario aquellas
cuotas devengadas e impagas hasta la fecha de la Resolución de
Liquidación. Las cuotas que se devenguen con posterioridad a la Resolución
de Liquidación y hasta la Junta Constitutiva serán siempre de cargo de la
masa.

Respecto de las obligaciones que nazcan en virtud del ejercicio de las


opciones reguladas en el artículo anterior, se estará a lo siguiente:

300
a) Si la Junta Constitutiva de Acreedores acordare continuar con el contrato
de arrendamiento con opción de compra vigente en los términos
originalmente pactados, las rentas que se devenguen con posterioridad a la
fecha de la Resolución de Liquidación serán de cargo de la masa, y se
pagarán en los términos y condiciones originalmente estipulados en el
referido contrato.

b) Si la Junta Constitutiva de Acreedores acordare el ejercicio anticipado de


la opción de compra en los términos originalmente pactados, su pago será
de cargo de la masa. El Liquidador deberá efectuarlo dentro de los treinta
días siguientes a la fecha en que se adoptó el acuerdo, prorrogables por
igual período, previa autorización del tribunal.

Si el pago no se hiciere efectivo dentro del plazo señalado, el acreedor


arrendador podrá poner término al contrato de arrendamiento con opción
de compra, debiendo el Liquidador restituir el bien al arrendador.

c) Si la Junta Constitutiva de Acreedores acordare el término anticipado del


contrato de arrendamiento con opción de compra, se deberá restituir al
arrendador el bien objeto del referido contrato dentro de los 30 días
siguientes a la fecha en que se adoptó el acuerdo, prorrogables por igual
período, previa autorización del tribunal competente.

Si el contrato incluyese multas, ellas podrán ser verificadas únicamente con


el mérito de una sentencia definitiva firme o ejecutoriada que declare su
procedencia y que conceda las cantidades reclamadas, procedimiento que se
sustanciará mediante las reglas del juicio sumario.”

301
Cuando un tercero tiene bienes que están en posición del deudor, debe conseguir
la reivindicación de esos bienes o que se le restituyan de alguna manera. ¿Qué
medios tiene el tercero para conseguir esto?¿Qué puede hacer el tercero respecto
de sus bienes que han sido objeto de la incautación pero que no pertenecen a la
masa?

(1) Una tercería.La tercería de dominio se tramita de acuerdo a un juicio ordinario


con exclusión de la réplica y duplica. PUGA sostiene que se pueden tramitar
conforme a un procedimiento sumario.

El inc. 2 del art. 150 dice que con motivo de la resolución de liquidación se
acumulan las acciones ejecutivas en curso, pero respecto de las tercerías
permite que estas se sigan ejerciendo de la manera en la que se estaban
ejerciendo. Esto es importante porque antes había una discusión de si
procedían las tercerías de dominio en un marco de proceso de liquidación:
aquellos que estaban en contra sostenían que las tercerías eran excepciones y
que solo estaban establecidas para el caso del juicio ejecutivo, en el marco de
un embargo; quienes estaban a favor decían que el desasimiento era el símil del
embargo en el procedimiento de liquidación y no había una norma prohibitiva
que evitara la interposición de las tercerías. Los fallos más recientes tienden a
aceptar la interposición de tercerías. Después de la ley nueva es muy difícil
argumentar que no proceden las tercerías porque este inc. 2 del art. 150
mantiene subsistentes las tercerías que se hubieran ejercido con anterioridad.

“Las tercerías de dominio que estuvieren iniciadas a la fecha de dictación de la


Resolución de Liquidación continuarán tramitándose en conformidad al
procedimiento que corresponda.”(art. 150 inc. 2).

302
(2) Acciones propias del título de mera tenencia.Ej. Acción de terminación de
contrato de arrendamiento.

(3) Acción reivindicatoria. En este caso aplica todo lo que se establece respecto de
las acciones reivindicatorias en el CC.: Se conocen en un procedimiento
ordinario de lato conocimiento. PUGA sostiene que en realidad en el marco de
un proceso de liquidación es posible utilizar la norma que permite tramitar esto
en procedimiento sumario, ello en atención de que se requiere de una
tramitación rápida para que sea eficaz.

La ley establece ciertas acciones reivindicatorias especiales yparticulares (arts.


150 y ss.):

(a) Reivindicación de efectos de comercio. La ley admite expresamente la


reivindicación de estos bienes mientras no hayan sido pagados al deudor. Si
ya fue pagado no se puede reivindicar porque la reivindicación de dinero no
existe.

¿Por qué la ley incluye este art.? En Chile la reivindicación de bienes


incorporales está permitida, por lo que, según UGARTE, el único motivo es
que si ya fue pagado debe verificar en la masa porque no existe la
reivindicación de dinero.

“Reivindicación de efectos de comercio. Podrán ser reivindicados los efectos


de comercio y cualquier otro documento de crédito no pagado y existente a
la fecha de dictación de la Resolución de Liquidación, en poder del Deudor o
de un tercero que los conserve a nombre de éste, y siempre que el
propietario los haya entregado o remitido al Deudor por un título no
traslaticio de dominio.” (art. 151).

303
(b) Reivindicación de mercaderías (art. 152). La ley dice que pueden
reivindicarse siempre que hayan sido debidamente identificadas. En caso
que el deudor hubiere vendido esas mercaderías, podrá reclamar ese precio
directamente al comprador de esas mercaderías si es que este todavía no
las ha pagado.

“Reivindicación de mercaderías. Podrán ser también reivindicadas, en todo o


en parte y mientras puedan ser identificadas, las mercaderías consignadas
al Deudor a título de depósito, comisión de venta o a cualquier otro que no
transfiera el dominio.

Vendidas las mercaderías, el propietario de ellas podrá reivindicar el precio o


la parte del precio que no hubiere sido pagado o compensado entre el
Deudor y el comprador a la fecha de la Resolución de Liquidación.

No se entiende pagado el precio por la simple dación de documentos de


crédito, firmados o transferidos por el comprador a favor del Deudor. Si
existieren tales documentos en poder de éste, el propietario podrá
reivindicarlos, siempre que acredite su origen e identidad.” (art. 152).

2. Acumulación de juicios. La acumulación de los juicios consiste en que todas las


ejecuciones individuales que se estén llevando en contra del deudor se suspenden y
se llevan ante el mismo tribunal que lleva el procedimiento concursal, pasando a
ser conocidos por este. Dado que el procedimiento concursal es universal, es
necesario que todas las cuestiones relativas a los bienes del deudor se conozcan
por un mismo tribunal y, en la medida en que no sea ineficiente, en un mismo
procedimiento.

304
Esto está regulado en el art. 142 de la Ley Nº 20.720:

“Regla general de acumulación al Procedimiento Concursal de Liquidación. Todos


los juicios civiles pendientes contra el Deudor ante otros tribunales se acumularán
al Procedimiento Concursal de Liquidación. Los que se inicien con posterioridad a la
notificación de la Resolución de Liquidación se promoverán ante el tribunal que esté
conociendo del Procedimiento Concursal de Liquidación.

Los juicios civiles acumulados al Procedimiento Concursal de Liquidación seguirán


tramitándose con arreglo al procedimiento que corresponda según su naturaleza,
hasta que quede ejecutoriada la sentencia definitiva.”

Respecto a lo que señala este art. se puede decir:

(1) Juicios.La ley habla de juicios, por lo que una gestión preparativa de la vía
ejecutiva se tramitará en juicio separado, ya que es una gestión no contenciosa
o voluntaria. Es necesario que se refiere a una disputa, a un juicio.

(2) Juicios civiles. Por regla general la acumulación se refiere a juicios civiles, por lo
que es importante tener claro que la acumulación es una alteración de la
competencia relativa de los tribunales. La acumulación constituye una
alteración a los principios de territorialidad y distribución propios de la
competencia relativa. Lo importante es que si el juicio difiere por los factores de
la competencia absoluta (materia) y, por consiguiente, no debe ser conocido
por un tribunal civil, no debe ser acumulado.

(3) Contra el deudor. Solo procede la acumulación en aquellos casos en los cuales
el deudor es demandado.

305
Estos juicios se continúan tramitando de acuerdo a las leyes que les competen,
salvo que la ley establezca otra cosa. La ley, por razones de eficiencia, tratará que el
demandante verifique su crédito en el procedimiento concursal.

306
06/10/2016 JOSÉ MIGUEL RÍOS
PROCEDIMIENTOS CONCURSALES DE LA PERSONA DEUDORA

Uno de los grandes cambios que tiene la nueva ley es introducir la diferenciación entre la
persona y la empresa deudora. Antes la persona no tenía diferenciación de la empresa,
por lo que una persona que entraba en cesación de pagos no tenía un procedimiento
distinto del de la empresa, lo cual traía ciertos problemas:

1. Connotación negativa de la quiebra.

2. Procedimiento lento.

El efecto de estos problemas era que las personas naturales no participaban de estos
procedimientos concursales, lo que se buscó cambiar con la nueva ley.

La persona deudora, según la ley, es lo que no es empresa deudora, por lo que por
exclusión es que la persona deudora es quien tributa por el art. 42 Nº 1 de la Ley de Renta.
Esto se dice por conclusión, por lo que pondría extenderse a otras personas no incluidas
en dicho art.

Los procedimientos concursales hoy para la persona deudora son principalmente 2:

1. Procedimiento concursal de renegociación.Es de cierta manera el paralelo del


procedimiento de renegociación de la empresa deudora. Hoy en día de estos se
terminan 1257 de 1618 procedimientos iniciados.

2. Procedimiento concursal de liquidación.Este es de cierta forma el paralelo del


procedimiento de liquidación de la empresa deudora. La estadística de estos
procedimientos es que se han iniciado 928, de los cuales se han terminado 77.

307
Estos procedimientos son más simples y rápidos que los que se establecen para la
empresa deudora, ya que la persona deudor tendrá un patrimonio más simple y un poco
más fácil de determinar o de realizar. En el caso de la persona deudora hay actualmente
muchos más procedimientos de renegociación que de liquidación, mientras que en la
empresa deudora hay más procedimientos de liquidación que de reorganización. RÍOS
cree que esto se debe a que para una empresa es más difícil renegociar las deudas.

Procedimientos de la persona deudora:

a) Procedimiento concursal de renegociación .Es importante recalcar que el procedimiento


de renegociación es un procedimiento administrativo que se lleva adelante ante la
SUPERIR, buscando no judicializar estos procedimientos.

En un esquema general, este procedimiento se inicia con una solicitud de la persona


deudora, para pasar a un examen de admisibilidad. Luego de admitido, se cita a una
audiencia de determinación del pasivo en la que se cita a las acreedores.

Si en la audiencia de determinación de pasivo no hay acuerdo respecto de quiénes son


los acreedores de la persona deudora, se citará a una audiencia de ejecución, lo cual no
implica que se lleve a un procedimiento de liquidación. En la audiencia de ejecución se
busca llegar a un acuerdo sobre cómo se van a liquidar los bienes del deudor y cómo se
pagarán. En este caso, si en la audiencia de ejecución no hay acuerdo, la SUPERIR
deberá remitir los antecedentes al tribunal civil competente para que se inicie el
procedimiento de liquidación de la persona deudora.

Habiendo acuerdo en la determinación del pasivo, se cita a una audiencia de


renegociación en la cual se busca fijar los términos y condiciones de cual será el
acuerdo de renegociación al que se llegará. Si hay acuerdo, habrá un acuerdo de

308
renegociación en virtud del cual se novarán, renovará el plazo o se extinguirán las
deudas según se hubiere acordado. Si no hay acuerdo, se deberá citar a una audiencia
de ejecución.

En el caso del acuerdo de renegociación habrá un plazo para impugnar dicho acuerdo, y
si no hay impugnaciones se dictará la resolución que pone fin al procedimiento
concursal de renegociación. Esta resolución también es impugnable por vía de recursos
administrativos ante la misma SUPERIR. A este procedimiento se le aplican
supletoriamente las normas de procedimiento de la ley de base administrativa del
Estado.

Procedimiento propiamente tal.Antes de iniciar el procedimiento, la persona deudora


debe cumplir ciertos requisitos de fondo que dicen relación con su estado de solvencia,
los cuales están señalados en el art. 260, y consisten básicamente en que la persona
deudora:

1. Tenga 2 o más obligaciones vencidas por más de 90 días corridos.

2. Que estas obligaciones sean actualmente exigibles.

3. El monto total de estas obligaciones debe ser superior a 80 UF.

4. Que la persona deudora no haya sido notificada de un procedimiento concursal


de liquidación o de cualquier otro juicio ejecutivo en su contra.

“Ámbito de aplicación y requisitos. El Procedimiento Concursal de Renegociación será


aplicable sólo a la Persona Deudora, que para efectos de este Capítulo se denominará
indistintamente Persona Deudora o Deudor.

309
La Persona Deudora podrá someterse a un Procedimiento Concursal de Renegociación
si tuviere dos o más obligaciones vencidas por más de 90 días corridos, actualmente
exigibles, provenientes de obligaciones diversas, cuyo monto total sea superior a 80
unidades de fomento, siempre y cuando no haya sido notificada de una demanda que
solicite el inicio de un Procedimiento Concursal de Liquidación o de cualquier otro juicio
ejecutivo iniciado en su contra que no sea de origen laboral.

El expediente que se genere en la Superintendencia a raíz de las actuaciones y


resoluciones a las que se refiere este Capítulo será público, sin perjuicio de lo dispuesto
en el número 2 del artículo 21 de la ley de transparencia de la función pública y de
acceso a la información de la Administración del Estado, contenida en el artículo
primero de la ley Nº 20.285.” (art. 260).

El art. 261 regula como se inicia el procedimiento y sus requisitos formales. El


procedimiento se inicia mediante una solicitud de la persona deudora, llenando un
formulario de la SUPERIR, al cual deberá adjuntar una serie de antecedentes que exige
la ley:

1. Declaración jurada sobre la lista de obligaciones actualmente exigibles del deudor


y una lista de todos sus acreedores con indicación de los montos adeudados del
mismo, así como sus datos de contacto.

2. Declaración jurada de todos los ingresos que percibe la persona deudora,


singularizando cada uno.

3. Singularización de sus bienes, indicando aquellos que son inembargables.

4. Propuesta de renegociación.

310
5. Declaración jurada de que se trata de una persona deudora. En caso que no fuere
estrictamente persona deudora, que no haya prestado servicios remunerados o
iniciado actividades comerciales dentro de los 24 meses anteriores

6. Declaración jurada de que no se ha iniciado en su contra un procedimiento de


liquidación u otro juicio ejecutivo.

“Inicio del procedimiento. El Procedimiento Concursal de Renegociación se iniciará por


la Persona Deudora, ante la Superintendencia a través de la presentación de una
solicitud cuyo formato estará disponible en su sitio web y en sus dependencias. La
referida solicitud deberá presentarse adjuntando los siguientes antecedentes:

a) Declaración jurada con una lista de las obligaciones del Deudor, vencidas o no, sean
o no actualmente exigibles, y de todos sus acreedores con indicación del monto
adeudado a cada uno, o su saldo, según corresponda, expresando el nombre, domicilio,
teléfono, correo electrónico del acreedor y su representante legal, en su caso y si lo
conociere, y cualquier otro dato de contacto de cada uno de ellos;

b) Declaración jurada con la singularización de todos los ingresos que percibe, por
cualquier causa, sean éstos fijos o esporádicos, acompañando al efecto los
antecedentes que los acrediten;

c) Declaración jurada con el listado completo de sus bienes, con indicación de aquellos
que las leyes declaren inembargables, y de los gravámenes y prohibiciones que les
afecten;

d) Una propuesta de renegociación de todas sus obligaciones vigentes;

311
e) Una declaración jurada en que conste que es Persona Deudora o que, habiendo
iniciado actividades comerciales, no haya prestado servicios por dichas actividades
durante los veinticuatro meses anteriores a la presentación de la referida solicitud, y

f) Una declaración jurada en que conste que no se le ha notificado de la demanda de


Liquidación o de cualquier otro juicio ejecutivo iniciado en su contra que no sea de
origen laboral.”(Art. 261).

Presentada la solicitud, hay un examen de admisibilidadde esta por parte de la


SUPERIR, la cual tiene 3 posibilidades (art. 262):

1. Que se declare admisible.En este caso dictará una resolución de admisibilidad.

2. Que se pidan rectificaciones.

3. Que se declare inadmisible.

La resolución de admisibilidad debe contener las menciones que dice el art. 263:

“Resolución de Admisibilidad. La resolución de la Superintendencia que declare


admisible la solicitud de inicio del Procedimiento Concursal de Renegociación contendrá
las siguientes menciones:

1) El nombre y el número de cédula de identidad de la Persona Deudora.

2) El listado inicial de los acreedores informados por la Persona Deudora con indicación
de los montos adeudados por concepto de capital e intereses y sus preferencias.

312
3) El listado de bienes de la Persona Deudora informados por ella, con expresa mención
de aquellos que son inembargables, y los gravámenes y prohibiciones que los afecten, si
los hubieren, individualizando a los beneficiarios de estos últimos.

4) La comunicación a los acreedores y a terceros del inicio del Procedimiento Concursal


de Renegociación y de la fecha de celebración de la audiencia de determinación del
pasivo. Esta audiencia se celebrará no antes de quince ni después de treinta días
contados desde la publicación de esta resolución en el Boletín Concursal.

Esta resolución y los antecedentes a que se refiere el artículo 261 se publicarán en el


Boletín Concursal. Los acreedores individualizados en el listado del número 2) anterior
se entenderán legalmente notificados en virtud de dicha publicación, sin perjuicio de
que se le envíe copia de la referida resolución por correo electrónico, si éste hubiere
sido mencionado en los antecedentes que debe presentar el Deudor conforme al
artículo 261.”

De esta resolución los acreedores se entenderán notificados por la publicación de esta


en el Boletín Concursal, sin perjuicio de que se les envíe carta certificada a cada uno de
los acreedores. Asimismo, esta resolución los citará a la audiencia de determinación de
pasivo.

Efectos de la resolución de renegociación (art. 264). Esta resolución tiene efectos


importantes que se producen desde su publicación hasta el término del procedimiento
de renegociación. Estos efectos son muy similares a la protección financiera concursal
establecida para la empresa deudora en el procedimiento de reorganización.

1. No podrá solicitarse respecto de la persona deudora su liquidación forzosa ni


voluntaria.

313
2. No puede iniciarse en contra de la persona deudora juicios ejecutivos, ejecuciones
o restituciones de cualquier especie. Si en los hechos inician un juicio ejecutivo en
su contra, con la copia de la resolución de renegociación puede interponerlo como
excepción en dicho procedimiento.

3. Suspensión de los plazos de prescripción de las obligaciones de la persona


deudora.

4. No se devengan intereses moratorios respecto de las obligaciones de la persona


deudora.

5. Se mantendrán vigentes todas las condiciones de todas las obligaciones del


deudor. No se podrá, por consiguiente, acelerar créditos o hacer actualmente
exigibles las obligaciones. Si en los hechos un acreedor lo hace, este quedará
pospuesto para su pago.

6. *Cualquier interesado puede observar u objetar los créditos o bienes listados en


la resolución de renegociación hasta 3 días antes de la audiencia de
determinación del pasivo. Este no es un efecto propiamente tal.

7. Respecto de los bienes que se hubiesen señalados como inembargables, la


persona deudora queda con una prohibición de celebrar actos respecto de esos
bienes. La sanción que se establece es que quedará como depositario alzado
respecto de los bienes en los cuales infrinja.

Audiencia de determinación del pasivo. Está regulada en el art. 265 de la Ley


Nº20.720. Deben asistir todos los acreedores que están citados en la resolución de
renegociación, y la sanción que se establece es que les afecta lo que se pueda

314
establecer en el procedimiento. La audiencia se celebra ante el Superintendente o ante
quien este designe.

Es deber o carga dela SUPERIR hacer una primera propuesta de determinación del
pasivo. Esta propuesta la hará la SUPERIR teniendo en cuenta el listado acompañado
por el deudor y las posibles objeciones que se hubieren presentado dentro de plazo.

El quórum en esta audiencia para poder llegar a acuerdo respecto de cuál es el pasivo
debe ser con el voto de la persona deudora más 2 o más acreedores que representen
más del 50% del pasivo. El 50% del pasivo para efectos de determinarlo se hace con
base en la propuesta de la SUPERIR.

Si no se llega a acuerdo, la SUPERIR puede suspender la audiencia hasta por 5 días para
incitar que se llegue a acuerdo, y si aún así no se llega acuerdo se cita a una audiencia
de ejecución, la cual se debe llevar a cabo en no menos de 15 ni más de 30 días desde
que se cita a esta audiencia.

En caso que sí se llegue a un acuerdo, se dictará una resolución que cita a la audiencia
de renegociación. El plazo para llevar a cabo esta audiencia debe ser dentro de un plazo
no mayor a 30 ni menor a 15 días desde que se cita. Esta resolución señalará el pasivo
finalmente acordado o reconocido, el cual será importante para efectos de determinar
el quórum y los derechos de voto para la audiencia de renegociación.

Audiencia de renegociación. Se celebra ante la SUPERIR, y el quórum para llegar a


acuerdo es con el voto favorable del deudor más 2 o más acreedores que representen
más del 50% del pasivo. Para efectos de determinar este quórum la ley hace ciertas
exclusiones (acreedores que no se contabilizan para efectos del quórum):

1. Acreedores personas relacionadas de la persona deudora.

315
2. Acreedores garantizados que asistan y efectivamente voten en contra en la
audiencia. Esto porque estos no tendrán mucho interés respecto de los acreedores
valistas para aprobar un acuerdo, por lo que no les convendrá acordar algo distinto.
Tienen una situación distinta a la de los demás acreedores.

La ley, respecto de los acreedores garantizados regula los efectos de votar en contra o
a favor del acuerdo, y distingue entre:

1. Acreedores garantizados con cauciones personales. Se debe distinguir entre:

(1) Aquellos que votan a favor o no asisten a la audiencia. Su acreencia se


arreglará por lo que se hubiera acordado. Si es que lo que se acordó le hace
perder privilegio, se deberá estar al acuerdo.

(2) Si vota en contra. El crédito de ese acreedor no se contará para efectos del
pasivo, y dicho acreedor podrá perseguir el cumplimiento de la obligación en el
fiador, codeudor solidario u otro patrimonio por el cual se caucionó la
obligación. Si el fiador, avalista o codeudor solidario paga al acreedor
garantizado, los derechos que tendrá contra el deudor serán los que se
hubieren pactado en el acuerdo de renegociación.

2. Acreedores garantizados con cauciones reales.En este caso también se deberá


distinguir:

(1) Si vota a favor o no asiste. Su acreencia se cumplirá de acuerdo a lo acordado


en el acuerdo de renegociación.

316
(2) Si vota en contra del acuerdo. Mantendrá la garantía y la podrá hacer cumplir
específicamente en los términos en que se hubieren pactado. Solo para la
obligación que se hubiere caucionado, porque si tuviere otras obligaciones, el
acreedor deberá por estas atenerse a lo que se pactó en el acuerdo.

En el caso que las cauciones reales sean respecto de bienes de terceros, el


acreedor podrá dirigirse contra estos terceros y ejecutar esos bienes, para luego
el tercero poder dirigirse contra el deudor pero solo en los términos acordados
en el acuerdo de renegociación.

Si no se puede llegar a acuerdo en la audiencia de renegociación, la SUPERIR puede


suspender la audiencia hasta por 5 días para instar a acuerdo, y si aún así no se logra
acuerdo, se deberá citar a una audiencia de ejecución.

Audiencia de ejecución. Se celebra ante la SUPERIR, siendo una instancia en la que se


debe llegar a acuerdo sobre cómo se pagará la obligación y cómo se realizarán los
bienes del deudor. El quórum que se establece es el voto conforme del deudor más el
acuerdo conforme de 2 o más acreedores con un quórum de 50% de los pasivos del
deudor. Este quórum será determinado dependiendo de cómo se llegó a la audiencia
de ejecución:

1. Si es que se llegó por no haber acuerdo en la determinación del pasivo. El pasivo


que se considerará para efectos del quórum, será el pasivo que determinó la
SUPERIR para realizar su propuesta.

2. Si es que se llegó por no haber acuerdo en la audiencia de renegociación. El pasivo


que se considerará será el que se determinó para llegar a dicha audiencia.

Esta audiencia tiene 2 objetivos:

317
1. Determinar la forma de realización de los bienes del deudor.

2. La forma de pago de la deuda.

Cuando no se llega a acuerdo en esta audiencia, la SUPERIR deberá remitir los


antecedentes al tribunal civil para que déinicio al procedimiento de liquidación.

La ley señala que el plazo total para que se realice el activo y se pague la deuda no
puede ser superior a 6 meses porque la ley busca que sea un procedimiento expedito,
sin dilaciones indebidas.

Causales de término anticipado del procedimiento de renegociación (art. 269).Las


causales de término anticipado son:

1. Cuando la persona deudor infringe la prohibición de celebrar actos y contratos.

2. Cuando la persona deudora deja de cumplir los requisitos del art. 260.

3. Cuando no se arribe a acuerdo en la audiencia de ejecución.

4. Cuando con posterioridad al inicio del procedimiento concursal, aparecieren


bienes que la persona deudora no listó en su solicitud inicial.

“Término anticipado del Procedimiento Concursal de Renegociación y sus efectos. La


Superintendencia declarará el término anticipado del Procedimiento Concursal de
Renegociación:

1) Si la Persona Deudora infringe la prohibición establecida en el número 6) del artículo

318
264, sin perjuicio de la sanción propia establecida para el depositario alzado del artículo
444 del Código de Procedimiento Civil.

2) Si la Persona Deudora deja de cumplir alguno de los requisitos señalados en el


artículo 260.

3) Si no se arribare a acuerdo en la audiencia de ejecución.

4) Si con posterioridad al inicio del procedimiento aparecieren bienes no declarados por


la Persona Deudora en los antecedentes a que se refiere el artículo 261.”(art. 269 inc.
1).

Efectos del término anticipado.Los efectos son:

1. Se pone fin a la “protección financiera concursal”.

2. Se remiten los antecedentes del proceso al tribunal civil competente para dar
inicio al procedimiento de liquidación.

“Declarado el término anticipado del Procedimiento Concursal de Renegociación,


finalizarán los efectos de la Resolución de Admisibilidad regulados en el artículo 264.
Vencido el plazo para reponer administrativamente en los términos del artículo 270 sin
que se hubiere presentado un recurso de reposición, o habiéndose presentado se
hubiere rechazado, la Superintendencia remitirá los antecedentes al tribunal
competente, el que dictará la correspondiente resolución de liquidación de los bienes de
la Persona Deudora, de acuerdo a lo dispuesto en el Título 2 de este Capítulo.”(art. 269
inc. final).

319
Para que se declare esta resolución se deben haber vencidos los plazos para impugnar
el acuerdo de renegociación o de ejecución, o que habiéndose impugnado se tengan
por rechazadas las impugnaciones, en cuyo caso se dicta la resolución que tiene por
finalizado el procedimiento, la cual tendrá distintos efectos según si se llegó a un
acuerdo de renegociación o aún acuerdo de ejecución.

1. Acuerdo de ejecución. Todos los saldos insolutos de las obligaciones que son parte
del procedimiento se entienden extinguidas respecto de los créditos que fueran
parte del acuerdo.

2. Acuerdo de renegociación. Las obligaciones que fueron parte del mismo


procedimiento se entenderán extinguidas, novadas o redactadas según se hubiere
acordado.

Respecto de la resolución que declara finalizado el procedimiento se puede impugnar


según lo establece el art. 270, con un recurso de reposición administrativo que se
interpone ante la misma SUPERIR, según lo establece la ley 19.880. Si se deshecha este
recurso, se puede interponer un recurso de reclamación.

“Recursos y Limitación. Contra la resolución que declare finalizado el Procedimiento


Concursal de Renegociación o que lo declare terminado anticipadamente, procederá el
recurso de reposición administrativa en los términos establecidos en el artículo 59 de la
ley Nº 19.880.

En contra de la resolución que desecha la reposición interpuesta procederá el recurso


de reclamación en los términos que señala el artículo 341 de esta ley, en cuanto sea
aplicable. La interposición del recurso de reclamación señalado no suspenderá los
efectos del Procedimiento Concursal de Renegociación, el que continuará
sustanciándose conforme a las reglas de este Capítulo.

320
La Persona Deudora cuya solicitud de inicio del Procedimiento Concursal de
Renegociación fuere declarada admisible, no podrá solicitarlo nuevamente, sino una
vez transcurridos cinco años contados desde la fecha de publicación de la Resolución de
Admisibilidad.”

Recursos que establece el art. 272 para impugnar los acuerdos de renegociación. Este
art. establece cuales son las causales de estos recursos. Estos recursos no se
interponen ante la SUPERIR, sino que se interponen ante el tribunal civil que es
competente para conocer del procedimiento de liquidación de la persona deudora. El
plazo son 10 días desde la publicación del acuerdo de renegociación o de ejecución en
el Boletín Concursal. Causales para interponer el recurso de impugnación:

1. Error en el cómputo de las mayorías requeridas en este Capítulo, siempre que


incida en el quórum necesario para el acuerdo.

2. Falsedad o exageración del crédito de alguno de los acreedores que haya


concurrido con su voto a formar el quórum necesario para el respectivo acuerdo y
si, excluida la parte falsa o exagerada del crédito, no se lograre el quórum
necesario para el acuerdo.

3. Concierto entre uno o más acreedores y el deudor para votar a favor, abstenerse
de votar o rechazar el Acuerdo de Renegociación o el Acuerdo de Ejecución,
falseando, omitiendo o adulterando información para obtener una ventaja
indebida respecto de los demás acreedores.

4. Si con posterioridad a la celebración de un Acuerdo de Renegociación o de un


Acuerdo de Ejecución aparecieran bienes.

321
Esta impugnación se tramita por las reglas del juicio sumario, y contra la resolución que
resuelva sobre la impugnación no procede recurso alguno. Si se rechazan las
impugnaciones, la SUPERIR debe dictar la resolución que le pone fin al procedimiento
concursal.

Efectos de la interposición de estos recursos. La regla general es que la interposición


de la impugnación no suspende los efectos del acuerdo. Excepcionalmente si los va a
suspender en el caso que el recurso de impugnación sea presentado por acreedores
que representen el 30% o más del pasivo del deudor, y los suspenderá hasta que la
impugnación sea rechazada por sentencia firme.

¿Qué pasa con los actos intermedios si no se suspende el acuerdo? Todos los actos
intermedios de la persona deudora no se van a dejar sin efecto, por lo que quedarán
firmes. Esto para dar certeza jurídica de que dichos actos no se retrotraerán a como si
no se hubieran celebrado.

11/10/2016 JOSÉ MIGUEL RÍOS


b) Procedimiento de Liquidación. Existen diversas formas de dar inicio al procedimiento
de liquidación:

1. Voluntaria.

2. Contenciosa.

3. Refleja. Se trata de dos hipótesis señaladas en el Nº 4 y 5 del art. 286:

(1) Cuando en el ámbito del procedimiento de renegociación no se puede llegar a


acuerdo ni en la audiencia de ejecución y en ese caso la SUPERIR remite los
antecedentes al tribunal competente.

322
(2) En los procesos de renegociación cuando hay un término anticipado, en ese
caso la ley dice que se deben remitir los antecedentes ante el tribunal
competente

“Antecedentes que debe remitir la Superintendencia. Cada vez que la ley ordene que
la Superintendencia remita antecedentes al tribunal competente para que se dicte
la Resolución de Liquidación de los bienes de la Persona Deudora, se entenderá que
deberá remitir:

4) Copia del acta de la audiencia de ejecución, en que conste que no se arribó a


acuerdo.

5) Copia de la resolución que declare terminado anticipadamente el Procedimiento


Concursal de Renegociación, en los términos del artículo 269.” (Art. 286 Nº 4 y 5).

1. Voluntaria. Regulada en los arts. 273 y ss. de la Ley Nº 20.720. Como su nombre lo
indica se inicia por la solicitud de la persona deudora. A diferencia de la
renegociación, este es un procedimiento judicial tramitado en los tribunales civiles.
El art. 273 enumera los antecedentes que debe acompañar la persona deudora en
su solicitud:

“Ámbito de aplicación y requisitos. Toda Persona Deudora podrá solicitar ante el


tribunal competente la liquidación voluntaria de sus bienes, acompañando los
siguientes antecedentes:

1) Lista de sus bienes, lugar en que se encuentren y los gravámenes que les
afecten;

323
2) Lista de los bienes legalmente excluidos de laLiquidación de los Bienes de la
Persona Deudora;

3) Relación de juicios pendientes con efectos patrimoniales, y

4) Estado de deudas, con nombre, domicilio y datos de contacto de los acreedores,


así como la naturaleza de sus créditos.”

Esta primera solicitud es relevante, porque muchas veces en esta solicitud se van a
determinar los acreedores que participarán en este procedimiento y como los
procedimientos de la persona se dan en mayor cantidad que los de la empresa, en
la práctica va a terminar siendo perseguido por los que aparecen en esta solicitud,
ya que en este caso no se suele mirar el Boletín Concursal.

Designación del liquidador. Antes que el tribunal dicte su resolución debe designar
a un liquidador titular y suplente. Es el mismo procedimiento del art. 37 de la ley,
según el cual se cita a los 3 máximos acreedores.

Una vez recibido el certificado de la nominación de la SUPERIR, el tribunal dicta


resolución de liquidación. La resolución de liquidación que se dicta en este caso
tiene las mismas menciones que la de la empresa deudora que enumera el art. 129
y el tribunal tiene que hacerlo publicar en el Boletín Concursal.

“Tramitación y resolución. Conjuntamente con lo dispuesto en el artículo anterior, la


Persona Deudora solicitará la nominación del Liquidador de conformidad a lo
dispuesto en el artículo 37 de esta ley.

Recibido el Certificado de Nominación, el tribunal dictará la resolución de


liquidación de los bienes de la Persona Deudora, la que contendrá las menciones

324
señaladas en el artículo 129 y será publicada en el Boletín Concursal, conforme lo
dispone el inciso final de dicha norma.”(art. 274).

Efectos de esta resolución de liquidación. Están regulados en el art. 275 y son en


principio los mismos que produce la resolución en el procedimiento de liquidación
de la empresa deudora

“Efectos de la resolución de liquidación de los bienes de la Persona Deudora. Será


aplicable a este procedimiento lo dispuesto en los Párrafos 4 y 5 del Título 1 del
Capítulo IV de esta ley en todo aquello que no sea contrario con la naturaleza de la
Persona Deudora.”

Una excepción podría ser el tema de la inembargabilidad de los sueldos y la


regulación de la persona deudora. Uno de los efectos de esta resolución es el
desasimiento, pero respecto de los bienes futuros se distingue según como son
adquiridos; y los adquiridos a título oneroso no entran a la administración del
liquidador. En el caso de la persona deudora solo son embargables los primeros 3
meses de remuneración o sueldo que reciba dicha persona deudora, siendo un bien
adquridio a título oneroso que si entra al procedimiento de liquidación.

Esto es discutible porque es una excepción al tratamiento que le da la ley a la


embargabilidad de los bienes adquiridos a título oneroso luego de la resolución de
liquidación. Además, esta norma limita artificialmente los riesgos para la persona
deudora. El procedimiento concursal debe equilibrar los intereses del deudor y de
los acreedores, pero esta norma limita el riesgo para la persona deudora, por lo que
tiene mucho menos riesgo en perder sus remuneraciones, teniendo mayores
incentivos para someterse a un procedimiento de liquidación para extinguir sus
deudas. La limitación del riesgo del deudor hace que conductas más riesgosasper se
sean para él conductas menos riesgosas.

325
El art. 276 dice lo siguiente: “Inembargabilidad. Sin perjuicio de lo dispuesto en el
número 2º del artículo 445 del Código de Procedimiento Civil, sólo podrá
embargarse la remuneración de la Persona Deudora hasta por tres meses después
de dictada la resolución de liquidación de los bienes de la Persona Deudora.

Si la Persona Deudora se encontrare casada, se aplicarán a la realización de los


bienes de ésta, cuando procediere, las normas establecidas en los artículos
pertinentes del Código Civil y en leyes especiales, atendido el régimen de bienes que
hubieren pactado los cónyuges.”

Determinación del pasivo. Luego el art. 277 habla de la determinación el pasivo,


remitiéndose de cierta forma a las reglas generales.

“De la determinación del pasivo. La determinación del pasivo se realizará en la


forma establecida en el Párrafo 6 del Título 1 del Capítulo IV de esta Ley.” (art. 277).

Una vez determinado el pasivo, se deberá proceder a la celebración de las Juntas de


Acreedores, lo que es regulado en el art. 278. La ley regula la Junta Constitutiva,
que es la primera Junta de Acreedores que se celebra, la que se llevará a cabo al
trigésimo segundo día de dictada la resolución de liquidación. Esta norma regula las
materias a tratar en esta junta:

“De las Juntas de Acreedores. La Junta Constitutiva tendrá lugar en las


dependencias del tribunal o en el lugar que éste determine, y se celebrará al
trigésimo segundo día de publicada la resolución de liquidación de los bienes de la
Persona Deudora.

En dicha Junta se tratarán las siguientes materias:

326
1) El Liquidador titular provisional deberá informar respecto de los activos del
Deudor, efectuar una propuesta de realización de los mismos y una estimación de
los gastos.

2) La ratificación de los Liquidadores titular y suplente provisionales o la


designación de sus reemplazantes. Los Liquidadores que no hubieren sido
ratificados continuarán en sus cargos hasta que asuman sus reemplazantes. Deberá
suscribirse entre el Liquidador no ratificado y el que lo reemplace, dentro de diez
días contados desde la nueva designación, un acta de traspaso en que conste el
estado preciso de los bienes del Deudor y cualquier otro aspecto relevante para una
adecuada continuación del Procedimiento Concursal de Liquidación, debiendo
entregarse todos los antecedentes, documentos y otros instrumentos del deudor
que se encuentren en su poder. Una copia del acta antes indicada deberá ser
remitida a la Superintendencia.

3) La designación de un presidente y un secretario titulares y de un suplente para


cada uno de esos cargos, de entre los acreedores con derecho a voto o sus
representantes, para las sesiones de Juntas futuras, si hubiere.

4) Los honorarios del Liquidador, los que se regirán conforme lo dispuesto en los
artículos 39 y 40 de esta ley.

5) Cualquier otro acuerdo que la Junta estime conducente, pudiendo acordar desde
ya no celebrar otras Juntas, salvo citación del Liquidador o de cualquiera de los
acreedores que representen a lo menos el 25% del pasivo.

Sin perjuicio de lo señalado, en lo no regulado en este artículo será aplicable lo


dispuesto en el artículo 189.”

327
De acuerdo a este último inciso, se aplican las reglas sobre la empresa deudora, en
lo relativo a los acreedores con derecho a voto.

Realización del activo. Posteriormente se llevará a cabo la realización del activo


(art. 279). Este art. 279 remite al art. 204, que se refiere a la realización simplificada
de bienes, a propósito del procedimiento de liquidación de la empresa deudora. En
este tipo de procedimientos la ley opta que se haga de forma rápida y simple.

“De la realización del activo. La realización del activo se llevará a cabo conforme a
lo dispuesto en el artículo 204.” (art. 279).

El art. 204 distingue entre 2 tipos de bienes:

(1) Valores mobiliarios con presencia bursátil.Estos se venderán en remate en


bolsa, dado su presencia bursátil.

(2) Demás bienes muebles e inmuebles. Estos se realizarán mediante venta al


martillo, pero para proceder a ello se deberá designar al Martillero Concursal
por el liquidador, debiendo este confeccionar bases para el remate. Luego de la
confección habrá un periodo de 2 días para objetar las bases, y si se hubieren
hecho objeciones se citará a una audiencia verbal para discutir las objeciones.
Dentro de este tiempo (5 días) se publicarán las bases en el Boletín Concursal.
Para los bienes muebles se debe incluir una garantía de seriedad que equivale al
10%.

Respecto del mínimo del remate, la ley distingue entre los bienes muebles e
inmuebles:(a) El mínimo de los inmuebles o de derechos sobre ellos será fijado por
la Junta Constitutiva de Acreedores, y si no hubieran fijado un mínimo, este se fijará

328
de acuerdo al Avalúo Fiscal vigente al semestre en que ésta se efectúe, o a la
proporción que corresponda según dicho avalúo, respectivamente;(b)El mínimo de
los muebles será fijado por la Junta Constitutiva, o en su defecto, se subastarán sin
mínimo.

La ley exige que los bienes deberán venderse dentro de los 4 meses siguientes de la
celebración de la Junta Consultiva.

“Reglas de realización de los bienes. Los valores mobiliarios con presencia bursátil
se venderán en remate en bolsa. Los demás bienes muebles e inmuebles se
liquidarán mediante venta al martillo, conforme a las siguientes reglas:

a) El Liquidador designará a un Martillero Concursal.

b) Las bases y demás condiciones de venta serán confeccionadas por el Liquidador,


presentadas al tribunal y publicadas en el Boletín Concursal. Los acreedores y el
Deudor podrán, dentro de segundo día, objetar las bases. En tal caso, el tribunal
citará a las partes a una única audiencia verbal, que se celebrará a más tardar al
quinto día desde el vencimiento del plazo para objetar, con las partes que asistan.
La citación a audiencia se notificará por el Estado Diario.

El tribunal resolverá las objeciones deducidas en la audiencia y contra su resolución


sólo podrá deducirse verbalmente reposición, la que deberá ser resuelta en la
misma oportunidad.

El costo de la redacción de las bases será del Liquidador, con cargo al honorario
único que perciba en conformidad a lo dispuesto en el artículo 40 de esta ley.

329
c) Una vez resueltas las objeciones, las bases y las demás condiciones se publicarán
en el Boletín Concursal, con a lo menos cinco días de anticipación a la fecha del
remate y sin perjuicio de las restantes formas de publicidad que prevean las mismas
bases.

d) En el caso de bienes inmuebles, las bases deberán considerar el otorgamiento de


una garantía de seriedad exigible a todo postor de, a lo menos, el 10% del mínimo
por cada bien raíz a rematar. Dicha garantía subsistirá hasta que se otorgue la
escritura definitiva de compraventa y se inscriba el dominio del comprador en el
conservador de bienes raíces respectivo, libre de todos los gravámenes cuya
cancelación y/o alzamiento se hubiese comprometido en las bases.

e) El mínimo del remate de bienes inmuebles o de derechos sobre ellos


corresponderá al fijado por la Junta Constitutiva de Acreedores o, en su defecto, al
Avalúo Fiscal vigente al semestre en que ésta se efectúe, o a la proporción que
corresponda según dicho avalúo, respectivamente. En caso que no se presentaren
postores, se deberá efectuar un nuevo remate en un plazo máximo de veinte días, y
el mínimo corresponderá al 50% del fijado originalmente. Si tampoco se
presentaren postores en este segundo llamado, se deberá efectuar un nuevo remate
en un plazo máximo de veinte días, sin mínimo.

f) El mínimo del remate de bienes muebles corresponderá al fijado por la Junta


Constitutiva de Acreedores o, en su defecto, se subastarán sin mínimo.

g) El Martillero Concursal deberá rendir cuenta de su gestión en los términos del


artículo 216.

h) Los bienes deberán venderse dentro de los cuatro meses siguientes a la fecha de
celebración de la Junta Constitutiva o desde que ésta debió celebrarse en segunda

330
citación. Tratándose de bienes incautados con posterioridad a aquélla, el término se
contará desde el día de la diligencia de incautación.” (art. 204).

Pago del pasivo. El art. 280 se remite a las normas de la liquidación de la empresa
deudora para regular el pago del pasivo.

“Del pago del pasivo. El pago del pasivo se efectuará conforme a lo dispuesto en los
Párrafos 1 y 3 del Título 5 del Capítulo IV de esta ley.” (art. 280).

Para la regla del pasivo se siguen las reglas de la prelación de crédito del CC. y con
respecto de los acuerdos de subordinación que se hubieren celebrado también
conforme al CC.

“Orden de prelación. Los acreedores serán pagados de conformidad a lo dispuesto


en el Título XLI del Libro IV del Código Civil y, en el caso de los acreedores valistas,
con pleno respeto a la subordinación de créditos establecida en la referida
normativa. Para su eficacia, la subordinación deberá ser alegada al momento de la
verificación del crédito por parte del acreedor beneficiario o bien notificarse al
Liquidador, si se establece en una fecha posterior.

Los créditos de la primera clase señalados en el artículo 2472 del Código Civil
preferirán a todo otro crédito con privilegio establecido por leyes especiales.

Los acreedores Personas Relacionadas del Deudor, cuyos créditos no se encuentren


debidamente documentados 90 días antes de la Resolución de Liquidación, serán
pospuestos en el pago de sus créditos aun después de los acreedores valistas.” (Art.
241).

331
Con posterioridad al pago del pasivo, suponiendo que se realizaron todos los
activos y se pagó todo lo posible, se realizará la Cuenta Final de la Administración
del Liquidador, la cual está regulada de forma general en los arts. 49 y ss. de la Ley
Nº 20.720: El Liquidador debe realizar un informe o cuenta final de su gestión que
podrá ser objetada por los acreedores o el deudor.

“Cuenta final de administración y término de la liquidación de los bienes de la


Persona Deudora. Será aplicable a la liquidación de los bienes la Persona Deudora lo
dispuesto en los Párrafos 2 del Título 3 del Capítulo II, sobre Cuenta Final de
Administración, y 4 del Título 5 del Capítulo IV, sobre término del Procedimiento
Concursal de Liquidación.” (art. 281).

Una vez que esta cuenta está aceptada, o se resolvieron las objeciones, la cuenta
final pasará al juez para que dicte la Resolución de Término del Procedimiento de
Liquidación. Esta resolución está regulada en los arts. 254 y ss.

“Resolución de término. Una vez publicada la resolución que tuvo por aprobada la
Cuenta Final de Administración en los términos descritos en los artículos 49 y
siguientes, el tribunal, de oficio, a petición de parte o de la Superintendencia,
dictará una resolución declarando terminado el Procedimiento Concursal de
Liquidación.

Con la resolución de término del Procedimiento Concursal de Liquidación, el Deudor


recuperará la libre administración de sus bienes.” (art. 254).

El art. 255 señala cuáles son los efectos de la Resolución de Término del
Procedimiento Concursal de Liquidación:Se entenderán extinguidos los saldos
insolutos de las obligaciones contraídas antes de la resolución concursal de
liquidación.

332
“Efectos de la Resolución de Término. Una vez que se encuentre firme o
ejecutoriada la resolución que declara el término del Procedimiento Concursal de
Liquidación, se entenderán extinguidos por el solo ministerio de la ley y para todos
los efectos legales los saldos insolutos de las obligaciones contraídas por el Deudor
con anterioridad al inicio del Procedimiento Concursal de Liquidación.

Extinguidas las obligaciones conforme al inciso anterior, el Deudor se entenderá


rehabilitado para todos los efectos legales, salvo que la resolución señalada en el
artículo precedente establezca algo distinto.” (art. 255).

Recursos en contra de la resolución de término. Principalmente se trata del


recurso de apelación que se concede en el solo efecto devolutivo.

“Recursos contra la resolución de término. La resolución que declare terminado el


Procedimiento Concursal de Liquidación será susceptible de recurso de apelación, el
que se concederá en el solo efecto devolutivo, conservando en el intertanto el
Deudor la libre administración de sus bienes.”(art. 256).

2. Liquidación Forzada. Esto está regulado en los arts. 282 y ss. de la Ley Nº 20.720.

Inicio del procedimiento (art. 282). Mientras no se declare la admisibilidad de la


solicitud de renegociación, cualquier acreedor de la persona deudora podrá solicitar
el inicio de un procedimiento concursal de liquidación, siempre que:

(1) Existieren en contra de la persona deudora 2 o más títulos ejecutivos


vencidos.

(2) Que provengan de obligaciones diversas.

333
(3) Se encuentren iniciadas a lo menos 2 ejecuciones.

(4) No se hubieren presentado dentro de los cuatro días siguientes al respectivo


requerimiento, bienes suficientes para responder a la prestación que adeude
y a sus costas.

Como se puede apreciar, la causal es análoga a la del procedimiento concursal de


liquidación.

“Causal para solicitar el inicio de un Procedimiento Concursal de Liquidación de los


bienes de una Persona Deudora. Mientras no se declare la admisibilidad de un
Procedimiento Concursal de Renegociación de una Persona Deudora, cualquier
acreedor podrá solicitar el inicio del Procedimiento Concursal de Liquidación de los
bienes de la Persona Deudora, siempre que existieren en contra de ésta dos o más
títulos ejecutivos vencidos, provenientes de obligaciones diversas, encontrándose
iniciadas a lo menos dos ejecuciones, y no se hubieren presentado dentro de los
cuatro días siguientes al respectivo requerimiento, bienes suficientes para
responder a la prestación que adeude y a sus costas.”(art. 282).

Requisitos de la demanda de liquidación (Art. 283).La demanda debe presentarse


ante tribunal competente, indicar la causa invocada y sus hechos justificativos,
además de acompañar los siguientes antecedentes:

(1) Los documentos o antecedentes escritos que acreditan la causal invocada.

(2) Vale vista o boleta bancaria expedida a la orden del tribunal por una suma
equivalente a 200 UF.

334
(3) Nombre de los liquidadores titulares o suplentes para el caso que el deudor
no compareciere o no efectuare actuación alguna.

(4) El acreedor puede designar un veedor de la nómina de veedores en caso que


el deudor se oponga a la demanda de liquidación.

“Requisitos. La demanda se presentará ante el tribunal competente, señalará la


causal invocada y sus hechos justificativos, y deberá acompañar los siguientes
antecedentes:

1) Los documentos o antecedentes escritos que acreditan la causal invocada.

2) Vale vista o boleta bancaria expedida a la orden del tribunal por una suma
equivalente a 200 unidades de fomento para subvenir los gastos iniciales del
Procedimiento Concursal de Liquidación de los bienes de la Persona Deudora.

3) El nombre de los Liquidadores titular y suplente, para el caso que el Deudor no


compareciere o no efectuare actuación alguna por escrito en la audiencia prevista
en el artículo siguiente.

El Liquidador o Veedor que hubiese ejercido como tal en algún Procedimiento


Concursal no podrá asumir en otro procedimiento respecto de un mismo Deudor.

El acreedor peticionario podrá designar a un Veedor vigente de la Nómina de


Veedores, que asumirá en caso que el Deudor se oponga al Procedimiento
Concursal de Liquidación de los bienes de la Persona Deudora. Dicho Veedor
supervigilará las actividades del Deudor mientras dure la tramitación del Juicio de
Oposición, el que se sustanciará conforme a las normas de esta ley, y tendrá las
facultades de interventor contenidas en el artículo 25. Los honorarios del Veedor

335
no podrán ser superiores a 50 unidades de fomento y serán de cargo del acreedor
peticionario. Sin perjuicio de lo anterior, el demandante podrá solicitar en su
demanda cualquiera de las medidas señaladas en los Títulos IV y V del Libro
Segundo del Código de Procedimiento Civil.” (art. 283).

Luego de presentada la demanda habrá un examen de admisibilidad de la misma


(art. 284). Este art. 284 señala lo siguiente:

“Revisión, primera providencia y notificación. Presentada la demanda, el tribunal


competente examinará en el plazo de tres días el cumplimiento de los requisitos del
artículo precedente. En caso que los considere cumplidos, la tendrá por
presentada, ordenará publicarla en el Boletín Concursal y citará a las partes a una
audiencia que tendrá lugar al quinto día desde la notificación personal del deudor
o conforme al artículo 44 del Código de Procedimiento Civil, aun cuando no se
encuentre en el lugar del juicio. En caso contrario, ordenará al demandante la
corrección pertinente y fijará un plazo de tres días para que subsane, bajo
apercibimiento de tener por no presentada la demanda.” (Inc. 1).

Este art. 284 también regula la Audiencia Inicial. Este procedimiento es muy
similar al procedimiento de liquidación de la empresa deudora. En esta Audiencia
inicial la persona deudora puede adoptar diversas posturas, reguladas por el
mismo art.

Es relevante recordar que en este art. la ley establece una carga para la persona
deudora que consiste en que, independiente de la postura que tome, deberá
indicar el nombre o razón social, domicilio y correo electrónico de sus 3 mayores
acreedores. Esta es una carga porque el tribunal, si no se lleva a cabo esta
actuación, tendrá por no presentada la actuación que lleve a cabo el deudor,
debiendo dictar la resolución de liquidación.

336
Posturas que puede adoptar el deudor:

(1) Consignar bienes suficientes para el pago.

(2) Allanarse a la demanda.

(3) Oponerse a la demanda.

(4) No asistir o asistiendo, no tomar ninguna de las alternativas anteriores.

“La audiencia se desarrollará conforme a las siguientes reglas:

1) El tribunal informará al Deudor acerca de la demanda presentada en su contra y


de los efectos del Procedimiento Concursal de Liquidación de los bienes la Persona
Deudora.

2) A continuación, la Persona Deudora podrá proponer, por escrito o verbalmente,


alguna de las alternativas señaladas en los literales siguientes, debiendo siempre
señalar el nombre o razón social, domicilio y correo electrónico, si lo conociere, de
los tres mayores acreedores, o de sus representantes legales. Si el Deudor no
cumple con este último requisito, el tribunal tendrá por no presentada la actuación
que fuere del caso y dictará de inmediato la Resolución de Liquidación de los bienes
de la Persona Deudora, nombrando a los Liquidadores titular y suplente, ambos en
carácter de provisionales, que el acreedor peticionario hubiere designado en su
demanda, conforme a lo dispuesto en el número 3) del artículo anterior. De
acuerdo a lo señalado, la Persona Deudora podrá:

a) Consignar fondos suficientes para el pago del crédito demandado y las costas

337
correspondientes. El tribunal tendrá por efectuada la consignación, ordenará
practicar la liquidación del crédito, la regulación y tasación de las costas, y
señalará el plazo en que el Deudor deberá pagarlos, el que se contará desde que
esas actuaciones se encuentren firmes. Si el deudor no pagare en el plazo fijado, el
tribunal dictará la respectiva Resolución de Liquidación de los bienes de la Persona
Deudora.

b) Allanarse a la demanda, por escrito o verbalmente, caso en el cual el tribunal


dictará la respectiva Resolución de Liquidación de los bienes de la Persona
Deudora.

c) Oponerse a la demanda de liquidación forzosa, en cuyo caso se observarán las


disposiciones del Párrafo 3 del Título 1 del Capítulo IV de esta ley. La oposición del
deudor sólo podrá fundarse en las causales previstas en el artículo 464 del Código
de Procedimiento Civil.

3) Si el Deudor no comparece a esta audiencia o si, compareciendo, no efectúa


alguna de las actuaciones señaladas en el número 2) anterior, el tribunal dictará la
Resolución de Liquidación de los bienes de la Persona Deudora y nombrará a los
Liquidadores titular y suplente, ambos en carácter de provisionales, que el acreedor
peticionario hubiere designado en su demanda, conforme a lo dispuesto en el
número 3) del artículo anterior.

De lo obrado en esta audiencia se levantará acta, la que deberá ser firmada por los
comparecientes y el secretario del tribunal.”(art. 284 inc. 2 y 3).

Comparándolo con el art. 120, hay una alternativa que la empresa deudora si tiene
y la persona deudora no: Que la empresa deudora se acoja a un procedimiento de
reorganización. La ley no da la alternativa a la persona deudora de someterse a un

338
procedimiento de renegociación, ello para lograr que el procedimiento sea más
expedito y que la persona deudora no tenga la posibilidad de dilatar el
procedimiento.

En caso que la persona deudora quiera oponerse a la demanda, se seguirán las


mismas reglas de la oposición de la empresa deudora al procedimiento de
liquidación. La oposición solo puede deducirse por las excepciones del art. 464 del
CPC.

En esta materia, uno de los principales cambios de esta nueva ley es el orden en
que este procedimiento se da: Antes el acreedor interponía la solicitud de quiebra,
y el tribunal simplemente dictaba la resolución de quiebra, y solo una vez dictada
esta resolución de quiebra el deudor podía oponerse a ella a través de un recurso
de reposición especial, por lo que el deudor perdía la administración de sus bienes
antes de discutir la quiebra. Con este procedimiento se buscó trasladar la
oposición a antes de la resolución de liquidación, de manera que el deudor no se
encuentre en desventaja a la hora de discutir la liquidación. El problema que
puede presentar este cambio de orden es que permite a la persona deudora
enlentecer el proceso por la vía de oponerse antes, siendo contrario al interés
general de la ley de acelerar los procesos.

En caso que no se hayan deducido excepciones o estas hayan sido rechazadas por
sentencia firme, se dictará la resolución de liquidación (Art. 285). Básicamente se
seguirá el mismo orden seguido en la liquidación voluntaria.

“Resolución de Liquidación de los bienes de la Persona Deudora. La Resolución de


Liquidación de los bienes de la Persona Deudora se dictará conforme a lo dispuesto
en el artículo 274, y en la tramitación del procedimiento se estará a lo señalado en
el Párrafo anterior.”(art. 285).

339
12/10/2016
CONTINUACIÓN PROCEDIMIENTO DE LIQUIDACIÓN DE LA EMPRESA DEUDORA

Continuaciónefectos de la resolución de liquidación. Un efecto que está relacionado


con los bienes y con los juicios, es aquel que dice alusión a los contratos en los que es
parte el deudor. En nuestro derecho no existe una norma genérica que diga qué ocurre
con los contratos que ha celebrado el deudor. Hay algunas normas especiales respecto
de algunos contratos en distintos códigos y leyes:

1. Mandato. La insolvencia o liquidación del mandante o del mandatario es una causal


de terminación del mandato (art. 2163 Nº 6);

2. Sociedad. La insolvencia declarada de una de las partes es una causal que habilita a
los otros socios para ponerle término al contrato (art. 2106). Este art. declara que
los socios pueden dejar subsistente la sociedad no obstante la insolvencia de uno
de los socios, y en ese caso será el liquidador quien ejercerá los derechos de la
sociedad. Esta norma se aplica a la sociedad colectiva comercial y civil, y a la
SUPERIR.

3. Contrato de cuenta corriente mercantil. Es una causal de terminación de este


contrato.

4. Contrato de arriendo(art. 1968 CC.).

5. Contrato de leasing. Normas introducidas por la Ley 20.720, que es la única que es
de orden público entre las normas citadas en los números anteriores (art. 225 inc.
final).

340
¿Qué pasa con todos los demás contratos celebrados por el deudor? ¿Se mantienen
ellos vigentes o no? Si se asume que el contrato no dice nada al respecto y el deudor
cae en liquidación, ¿qué ocurre con esos contratos? En principio todos esos contratos
subsisten; la liquidación no es una causal de terminación de los contratos.

Si la ley no ha regulado estos contratos, ¿son válidas las estipulaciones en virtud de las
cuales las partes le atribuyen a la liquidación algún efecto (ej. causal que la permita a
una o ambas partes pedir la terminación o que se produzca la terminación
automática)? Hay acuerdo en la doctrina en que por regla general dichas estipulaciones
son válidas. OCHAGAVÍA cree que no son solo válidas, sino que muy útiles porque
generalmente no se querrá tener un contrato con una persona que esté en liquidación,
pues esa persona no tendrá la administración de sus bienes, sino que la tiene un
liquidador, que tiene el problema de administrar recursos escasos con un propósito no
necesariamente alineado con un contrato: liquidación de los bienes del fallido para
hacer pago a sus acreedores en conformidad a las preferencias que establece la ley. Es
importante tener presente que estas estipulaciones en virtud de las cuales puede
poner término al contrato son válidas salvo que exista una norma de OP que las
prohíba (ej. art. 225 inc. final de la Ley Nº 20.720 sobre los bienes en leasing). De
acuerdo a esto lo más probable es que siempre o casi siempre se debieran establecer
causales de terminación para una o ambas partes.

Sin embargo,lo anterior en realidad muchas veces no ocurre, por lo que, ¿qué hacer en
esa situación? Antes de responder esta pregunta es importante tener claro que si se
tiene la cláusula de término anticipado y hay una solicitud de reorganización en el
procedimiento de liquidación, hay que tener recaudos en caso de ejercer dicha causal
de terminación unilateral basada en el hecho exclusivo de que la contraparte en el
contrato haya iniciado un procedimiento concursal de reorganización, ya que ello
podría producir como sanción que se posponga los créditos de esos acreedores incluso
respecto de los créditos de los acreedores subordinados y personas relacionadas.

341
¿Respecto de qué contratos esto es un problema? En los contratos de tracto sucesivo o
bien en los contratos de ejecución instantánea en que la prestación de una o ambas
partes se ha diferido en el tiempo y la liquidación ocurre antes de que se hayan
cumplido la prestación de las partes (pendientes de cumplimiento al tiempo de dictarse
la resolución de liquidación):

1. Aquellos contratos en que el Deudor es acreedor. En un ejemplo en que el deudor


en liquidación vende un inmueble a plazo a un tercero, ¿el tercero puede invocar
la liquidación para dejar sin efecto el contrato de compraventa? OCHAGAVÍA cree
que no, porque ese tercero deudor del fallido no debiera tener una causal legal
que le permita dejar sin efecto el contrato, debiendo cumplir con sus obligaciones
cuando estas sean exigibles, ya que tampoco es lícito que se le aceleren sus deudas
por el solo hecho de la liquidación del acreedor. El liquidador es quien cobrará el
precio del inmueble.

2. Aquellos contratos en que el fallido es deudor. En este caso se trata de una


persona que le vendió un inmueble al fallido y este se obligó a pagar el precio en
un año más, siendo declarado en liquidación. ¿Puede el fallido o su contraparte
pedir la terminación del contrato? No, no pueden. ¿Se puede exigir la exigibilidad
anticipada de la obligación por parte del fallido, de tal manera que este tenga que
pagar antes? ¿Cómo se le exige el pago? Uno de los efectos de la resolución de
liquidación es que todas las obligaciones dinerarias se entenderán vencidas y
actualmente exigibles para que los acreedores puedan verificarlas y participar del
procedimiento concursal de liquidación (art. 136). En otras palabras, si el fallido es
el deudor se deberá distinguir si la obligación es dineraria o no:

(1) Si la obligación es dineraria. Esa obligación se hace exigible


inmediatamente(consecuencia de la caducidad legal del plazo). Esto porque si

342
no se hace así no se podrá tratar de igual forma a todos los acreedores, ya que
no se podría pagar a aquellos acreedores cuyos plazos no están vencidos sino
que estos tendrían que esperar que su crédito venza para poder cobrar el
mismo(subordinación estructural).

Para cobrar el crédito se debe verificar este en el procedimiento concursal de


liquidación como cualquier otro acreedor, y a este acreedor se le pagará en
moneda de quiebra (liquidación), es decir, que con la liquidación de los bienes
del deudor se le pague según su preferencia hasta lo que alcance con lo
producido de la liquidación de los bienes del deudor.

“Exigibilidad y reajustabilidad de obligaciones. Una vez dictada la Resolución


de Liquidación, todas las obligaciones dinerarias se entenderán vencidas y
actualmente exigibles respecto del Deudor, para que los acreedores puedan
verificarlas en el Procedimiento Concursal de Liquidación y percibir el pago de
sus acreencias. Estas últimas se pagarán según su valor actual más los
reajustes e intereses que correspondan, de conformidad a las reglas del artículo
siguiente.” (art. 136).

(2) Otras obligaciones. También pueden haber obligaciones de dar no dinerarias,


de hacer y de no hacer:

(a) Obligaciones de dar no dinerarias.En un caso en que el fallido se obligó a


entregar la casa a plazo, habiéndosele entregado el precio al contado;
¿puede el acreedor exigir el cumplimiento forzado y exigir que se le
entregue la casa? No hay ninguna norma que expresamente la prohíba,
pero no se puede porque ello contrariaría la par conditiocreditorum. Esta es
la conclusión lógica porque si se permite que el acreedor exija el
cumplimiento forzado de la obligación no dineraria, dicho acreedor podría

343
estar recibiendo mucho más que los demás acreedores. La par
conditiocreditorumse puede fundar en la norma que señala que la
resolución de liquidación fija irrevocablementelos derechos de todos los
acreedores en el estado en que se tenían al momento de su
pronunciamiento salvo las excepciones legales, y que esta no es una
obligación legal (art. 134), o, según otros autores, en el hecho de que el
deudor ya no tiene la administración de sus bienes por lo que no puede
cumplir con la obligación de dar, pero este argumento no es tan bueno
pues nada impediría en ese caso que el administrador cumpla con esa
obligación.

Lo anterior no estaba tratado en la ley antigua, pero tampoco está tratado


en la ley nueva.

Si el acreedor no puede pedir el cumplimiento forzado de la obligación,


podrá pedir la resolución del contrato junto con la indemnización
compensatoria y moratoria. A ese acreedor lo tratarán como un acreedor
dinerario más, es decir, le pagarán con moneda de quiebra.

Si se hiciera de esta manera, ¿cómo se conjuga el hecho de que no se era


acreedor dinerario al momento de declararse la liquidación, y que
devengue en acreedor dinerario en razón de un juicio de resolución de
contrato que fija la obligación de pagar el precio y de restituir los perjuicios,
el cual se inició de forma posterior a la resolución de liquidación? A este
respecto es importante tener en cuenta el art. 134 que dice que los
derechos de los acreedores quedan fijados irrevocablemente una vez
dictada la resolución de liquidación, y podría pensarse que el acreedor que
demanda la resolución está mejorando su situación como acreedor
después de declarada la liquidación por medio de una sentencia judicial

344
que declaró la resolución y condenó al deudor a restituir el precio e
indemnizar perjuicios después de dictada la resolución de liquidación. Para
un mejor análisis de lo anterior es necesario preguntarse: ¿una sentencia
que declara la resolución por incumplimiento de contrato y que obliga a
pagar una obligación dineraria qué tipo de resolución es? Es declarativa,
ergo, reconoce un estado de cosas que ya existía al momento de dictarse la
resolución de liquidación, por lo que para OCHAGAVÍA no viola el art. 134.
Él cree que el acreedor deberá demandar el incumplimiento en el tribunal
de liquidación y verificar como un acreedor condicional puesto que no
tendrá un crédito reconocido, pidiendo que se le reserve lo que le
correspondería en caso de ganar el juicio o que se le pague rindiendo
caución suficiente en caso que no se cumpla la condición.

(b) Obligaciones de hacer y no hacer. En un ejemplo en que el fallido es un


pintor que no ha cumplido con su obligación de pintar un cuadro. ¿Esta
obligación cae dentro del proceso de liquidación o del desasimiento?
PUELMA dice que la obligación de pintar un cuadro no está afecto al
desasimiento por lo que se le podrá exigir que cumpla con su obligación.
Esto es lógico desde el punto de vista del derecho civil clásico, pero podría
tener ciertas implicancias con la igualdad de los acreedores que debe haber
en el procedimiento concursal de liquidación, ya que a ese acreedor de la
obligación de hacer se le estará pagando íntegramente su obligación, en
instancias que a los demás acreedores posiblemente no. OCHAGAVÍA cree,
por tanto, que el análisis en las obligaciones de hacer o no hacer es el
mismo que se debe hacer en las obligaciones de dar, que implica decir que
no se puede pedir el cumplimiento forzado, sino que solo se puede pedir la
resolución del contrato con indemnización de perjuicios, pagándose con
moneda de quiebra, lo que no afecta la par conditiocreditorum por cuanto

345
es una sentencia declarativa que se pronuncia con base en hechos que
existían al momento de dictarse la resolución de liquidación.

(3) Fallido y tercero son recíprocamente deudores y acreedores.Es razonable


pensar que puede haber situaciones en que para el Deudor es conveniente
cumplir con su obligación. En un ejemplo en que el fallidocomprauna casa a un
tercero en un millón de pesos, los cuales todavía no son pagados y la casa
todavía es no entregada, es decir, ambas partes son recíprocamente deudoras
y acreedoras. En el caso que la casa, aún no siendo pagado el precio, aumenta
luego su valor a 1 millón 300 mil pesos; ¿qué pasa si es que hiciera sentido para
el deudor fallido cumplir con la obligación de tal manera de poder adquirir un
bien necesario para sus operaciones o que es valioso para sus demás
acreedores? ¿Es posible? No hay ninguna norma que lo regule, pero atendido a
que el liquidador es quien representa la persona del fallido y ejerce sus
derechos, nada priva al liquidador, que involucrando eventualmente a los
acreedores, decida cumplir una obligación de la cual el fallido es deudor o en la
cual el fallido y los terceros son recíprocamente acreedores y deudores.

¿En el ejemplo propuesto, puede el fallido exigirle al tercero que le entregue la


casa sin pagarle el precio? No, ya que el tercero podrá interponer la excepción
de contrato no cumplido, ergo, el tercero no estará obligado a entregarle la
casa al deudor si es que el fallido no le paga. En este caso en que la casa se ha
apreciado en el mercado, ¿se trata de un buen negocio para la masa comprar
la casa? Es un buen negocio comprarla, pero para ello se debe pagar el precio,
es decir, en este caso el liquidador puede decirle al tercero que cumple el 100%
de la obligación con él para hacerse del bien. Si bien esto no está dicho en la
ley, se trata de una consecuencia natural y necesaria de la excepción de
contrato no cumplido del art. 1552 del CC., y del hecho de que el liquidador
debe velar porque se provea al mejor resultado para los acreedores del deudor

346
y para el deudor: lograr que los bienes del deudor se vendan lo mejor posible.
Sin embargo, con esto se perjudica la par conditiocreditorumya que el tercero
tendrá el 100% de su crédito, pero la verdad es que esto es un distinto nivel de
eficiencia en el sentido de que se produce un bienestar mayor para todos los
acreedores.

¿Cuándo cumplir y cuándo no cumplir? PUELMA dice que el liquidador se


determinará a cumplir si le conviene a la masa, y no cumplirá cuando no le
convenga a la masa. El liquidador, como cualquier deudor tomará una decisión
racional: si cumple no hay ningún problema; si se incumple, nuevamente se
estará en una situación en que el tercero acreedor del fallido no puede pedir el
cumplimiento forzado, sino que deberá solicitar la resolución del contrato.

13/10/2016
En el caso que el liquidador incumpla, solo le cabrá al acreedor pedir la
resolución del contrato con indemnización de perjuicios. Empero,
normalmente el juicio ordinario para poder obtener la resolución del contrato
con la indemnización de perjuicios demora entre 5 a 8 años, mientras el
procedimiento concursal no debiera durar más de 2 años, entonces ¿cómo
conciliar ambos derechos? Se debieran entonces tratar de hacer una de 2
cosas: (1) Como acreedor tratar de transigir con el liquidador; o (2) verificar
como un acreedor condicional.

Efectos de la liquidación en ciertos contratos.Existen diversos contratos en los que se


les reconoce efectos a la liquidación:

1. Uno de ellos es el mandato civil o mercantil (art. 2163 Nº 6 CC.). Este art. 2163 Nº
6 elabora sobre una hipótesis en que se declara la liquidación del mandante o
mandatario con posterioridad a la celebración del mandato.

347
“El mandato termina:

6o. Por la quiebra o insolvencia del uno o delotro;” (art. 2163 Nº 6).

¿Por qué la liquidación pone término al mandato cuando el mandante es declarado


en liquidación? Porque una vez que se produce el desasimiento, el Deudor pierde la
administración de sus bienes, y si quedaran subsistentes los mandatos otorgados
con anterioridad a este, no produciría sus efectos propios, es decir, que la
administración pase a manos del liquidador.

¿Por qué la liquidación pone término cuando el deudor fallido era el mandatario?
Probablemente el mandante no quería confiarle un contrato de confianza a alguien
que cae en liquidación, es decir, si el mandante hubiera tenido en cuenta la
liquidación jamás le hubiera otorgado el mandato.

¿Qué pasa si el mandato se celebra después de decretada la liquidación? ¿Puede el


deudor fallido ser mandante o mandatario? No respecto de los bienes afectados
por el desasimiento y el procedimiento de liquidación, pero respecto de las
actividades que el fallido emprenda con posterioridad a la declaratoria de
liquidación, sí puede celebrar mandatos, así como respecto de aquellos bienes que
quedan fuera del desasimiento por su carácter de inembargables. Asimismo,
OCHAGAVÍA considera que también podría ser considerado como mandatario el
fallido, si es que así lo estima el acreedor. En ambos casos la causal del art. 2163 Nº
6 no sería suficiente para invocar la terminación del mandato, ya que no se trataría
de un hecho sobreviniente.

2. Sociedad (art. 2106). El art. 2106 señala lo siguiente:

348
“Expira asimismo la sociedad por laincapacidad sobreviniente o la insolvencia de
uno de los socios.

Podrá, con todo, continuar la sociedad con elincapaz o el fallido, y en tal caso el
curador o los acreedores ejercerán sus derechos en las operaciones sociales.”

Este art. 2106 se refiere a una hipótesis en que uno de los socios de la sociedad cae
en insolvencia, siendo esta una causal de disolución del contrato de sociedad.
Según se desprende del tenor literal del art. esta no es una causal que opere de
pleno derecho, sino que debe ser invocada por los socios y declarada por un
tribunal.

Se trata de sociedades de personas, y en particular de sociedades colectivas civiles,


siendo aplicables a las colectivas comerciales y a las sociedades de responsabilidad
limitada.

Si los socios invocan la causal, se deberá partir o liquidar la sociedad. ¿Qué pasa si
los socios no ejercen esta facultad que la ley les otorga de solicitar la disolución de
la sociedad? La ley dice que los acreedores ejercerán sus derechos en la sociedad.
En el caso de la sociedad, en realidad quien ejercerá los derechos será el liquidador
en representación del fallido. Ahora, ¿hasta dónde alcanza la representación del
liquidador? Los dividendos que reparta la sociedad a sus socios se le repartirán al
liquidador (Así lo decía el art. 27 de la antigua ley de quiebras, lo que no se recogió
de esa forma en el art. 36 actual). En el caso que el fallido tenía otras obligaciones u
otros derechos en la sociedad (ej. Que el fallido tenga el carácter de administrador
o de coadministrador), ¿quien ejercerá esos derecho u obligaciones? El art. 27 de la
ley antigua era bastante radical y decía que correspondía al síndico ejercer los
derechos que tenía el fallido en las sociedades en las cuales era socio. Esta misma
norma no fue recogida en el art. 36 (el que señala las facultades del liquidador), lo

349
que OCHAGAVÍA piensa que dice relación con una duda que siempre ha existido:
Las sociedades de personas son intuito persona, y por ende la consideración del
socio ha sido fundamental.Desde esa perspectiva los tribunales siempre han
reconocido que como tienen tal carácter, un extraño no puede cumplir las
obligaciones propias que el contrato de sociedad le imponía al fallido. De este
modo se produce una dicotomía, en que se dice el liquidador tenía derechos a los
dividendos, pero no tiene derecho a participar en la administración de la sociedad
ni en el cumplimiento de las obligaciones que para el fallido impone el contrato de
sociedad.

Atendida esta bifurcación entre el derecho a recibir dividendos y la decisión sobre si


se reparten o no dividendos, ¿cuántos dividendos se le repartirán al fallido
decretada que sea la liquidación? Lo lógico sería decir que no se le repartirá ningún
dividendo, por lo que para OCHAGAVÍA había que dictar una norma explicitando
que los fallos de los tribunales estaban correctos de acuerdo a esa legislación, pero
que había que cambiar la ley diciendo que correspondía al liquidador ejercer todos
los derechos en la sociedad, exceptuando la administración. Él piensa que tener
derecho a la repartición que se hagan en las sociedades pero sin derecho a
participar en la decisión de los repartos da pie a eventualmente no recibir nada.

Ahora, ¿pueden los acreedores y el liquidador sacar a la venta los derechos


sociales? No, porque la sociedad es intuito persona, y ningún socio, ni aun
ejerciendo las más amplias facultades de administración, puede incorporar a un
tercero a la sociedad, y los únicos derechos que tienen los acreedores de los socios
es embargar las distribuciones que le corresponden al socio por utilidad o por
disminuciones de capital.

Hay un fallo que sostenía que los acreedores podían vender el crédito, pero que la
venta del crédito no importaba la venta de la calidad de socio. Para OCHAGAVÍA

350
esto le parece irrisorio, pues piensa que no se pueden bifurcar los derechos
políticos y económicos en una sociedad de personas, sino que los derechos sociales
son uno solo. Desde esta perspectiva, piensa que no hay ninguna venta posible, y
solo es posible el embargo de los derechos económicos.

El art. 2106 habla sobre la liquidación o la insolvencia de uno de los socios, pero no
habla así de la disolución por causa de la insolvencia de la sociedad misma, salvo en
el art. 2100 que dice que la sociedad se disuelve a sí misma por la insolvencia.
OCHAGAVÍA cree que no hay duda que la liquidación es una demostración de la
insolvencia. Esta causal debe ser invocada y declarada por los tribunales, no opera
de pleno derecho. Lo curioso es que se debe tener claro que esto rara vez ocurre,
es decir, pocas veces pasa que se pida la disolución de una sociedad declarada en
liquidación, de manera que históricamente las sociedades que caían en quiebra
quedaban existentes pero “dormidas”.Normalmente estas sociedades tenían
muchas pérdidas, pero no obstante eso, durante mucho tiempo estas sociedades se
transaban: ¿por qué tenían valor estas sociedades para sus socios o accionistas?
Esto porque las pérdidas de arrastre compensan los ingresos, de manera que son
beneficiosas tributariamente, es decir, hacían rebajar los impuestos a pagar. Esto
último duró hasta que se modificó la ley de la renta para decir que las pérdidas de
arrastre no se pueden utilizar cuando una sociedad ha cambiado de propiedad o ha
cambiado de giro, es decir, si queda dentro del mismo grupo empresarial esa
pérdida se puede utilizar. Esta es una de las razones por las cuales esta causal de
disolución no era muy invocada

¿En las sociedades de capital es relevante la participación del accionista? No, es


absolutamente irrelevante. Desde esa perspectiva, si un accionista es declarado en
liquidación, la acción misma es un activo que se va a incorporar a la masa y el
liquidador ejercerá los derechos que le correspondan al deudor en esa sociedad,
tanto en los derechos económicos como en los políticos, y esas acciones las podrá

351
vender en un procedimiento concursal de liquidación, además de tener derecho a
los dividendos. Lo único que le podría preocupar al liquidador son los pactos de
accionistas que pudo haber celebrado el deudor antes de la resolución de
liquidación que pudieren perjudicar los derechos del fallido en la sociedad o bien
dificultar la realización de las acciones de la sociedad por parte del fallido.

¿Qué pasa si las acciones de la sociedad estaban suscritas por el fallido pero no
pagadas por él? ¿La sociedad es un acreedor más en la liquidación del accionista y
debe verificar su crédito? ¿Puede el liquidador ejercer los derechos económicos y
políticos que le corresponden a esas acciones? El tema no está resuelto
expresamente por la ley. Hay autores que sostienen que la acción no es un bien que
lisa y llanamente se compra, sino que es un conjunto de derechos y obligaciones, y
mientras no se pague la acción no corresponde ejercer los derechos sociales que no
tienen en virtud del contrato o dela ley, de modo que el crédito que tiene la
sociedad por el pago de la acción la convierte en un acreedor distinto que cualquier
otro acreedor del fallido, en virtud de lo cual la sociedad no tendría que verificar su
crédito en la liquidación ni pagarse en moneda de liquidación, sino que para ella
solo sería necesario esperar y no pagar los dividendos que le corresponden al
fallido. OCHAGAVÍA no le convence este argumento, y no ve diferencia alguna entre
la deuda por el precio de suscripción de acciones al crédito por la venta de un
inmueble o un mueble.

3. Contrato de cuenta corriente bancaria. Este también termina por la liquidación del
cuenta correntista. Respecto al banco se aplica el Título XV de la LGB.

4. Contrato de arriendo.El art.1968 del CC. dice que la insolvencia del arrendatario no
produce necesariamente la terminación del contrato de arriendo, sino que el
contrato puede subsistir si los acreedores del arrendatario dan garantía a
satisfacción del arrendador.

352
“La insolvencia declarada del arrendatario no pone necesariamente fin al arriendo.

El acreedor o acreedores podrán substituirse al arrendatario, prestando fianza a


satisfacción del arrendador.” (art. 1968).

Este art. habla en su inc. 1 de la insolvencia declarada, lo que OCHAGAVÍA piensa


que debe entenderse referido a los procedimientos concursales.

¿Si el arrendador es declarado en liquidación es esa una causal de terminación? No,


pero en el procedimiento de liquidación el bien arrendado se va a vender, y la
posibilidad de que el arriendo subsista o no estará relacionado con el art. 1962 del
CC.

5. Arriendo con opción de compra.El art. 224 y ss. de la Ley Nº20.720 establecen los
efectos que tiene la liquidación sobre los contratos de arriendo con opción de
compra.

¿Por qué se reguló esto? El leasing es un modo de financiar las operaciones que
utiliza el comerciante. En estos casos ocurre que el fallido tiene el derecho de usar
un bien, pero debe pagar rentas periódicas y al final de ese periodo tiene la facultad
de comprar el bien por el valor de una cuota. Si se leen los contratos de leasing
vigentes a la época de la dictación de la ley Nº 20.720, estos decían que producida
la quiebra del arrendatario, el contrato expiraba sin ningún derecho para el
arrendatario, y este debía restituir el bien y pagar al arrendador un monto igual a
todas las rentas pendientes.Esto trae ciertos efectos en el patrimonio del deudor:
Uno de ellos era un efecto práctico que se producía en el patrimonio del deudor, y
así, por ejemplo, en el caso de un leasing que se contrae por 5 años, cayendo el
deudor en liquidación a los 4 años y 6 meses de vigencia del contrato, habiendo

353
sido pagadas todas las rentas de arrendamiento anteriores, es decir, se habrá
pagado aproximadamente un 90% del valor del bien,se producía el efecto que se
perdía el bien a pesar de haber pagado casi la totalidad de su precio yse perdía
como activo de la quiebra un buen respecto del cual se había pagado el 90% de su
valor. Ahora, ¿qué pasaba si el bien dado en leasing era la fábrica o el bien más
importante de la fábrica? Se perdía casi la totalidad del valor de las operaciones o
del negocio del deudor, por lo que los acreedores se quedaban sin nada que
vender. Esto es lo que vino a solucionar el art. 225, y por ello este art. dice que no
obstante cualquier estipulación en contrario en el contrato de arrendamiento, en
cualquier época que haya sido celebrado e incluso antes de la ley Nº 20.720, los
acreedores del fallido puede optar entre 3 opciones:

(1) Mantener el contrato tal como se encuentra, y seguir cumpliendo con los
términos en que fue negociado;

(2) Ejercer anticipadamente la opción de compra en la oportunidad que ellos


estimen y en los términos y condiciones negociados en el contrato; o

(3) Ponerle término al contrato.

Si no ejercieren ninguna de estas facultades se entiende que optan por perseverar


en el contrato en los mismos términos celebrados.

“Efecto de la Resolución de Liquidación en los contratos de arrendamiento con


opción de compra. La dictación de la Resolución de Liquidación no constituirá causal
de terminación inmediata del contrato de arrendamiento con opción de compra.

La Junta Constitutiva de Acreedores deberá pronunciarse y acordar al respecto


alguna de las siguientes alternativas:

354
1.- Continuar con el cumplimiento del contrato de arrendamiento con opción de
compra, en los términos originalmente pactados.

2.- Ejercer anticipadamente la opción de compra, en los términos establecidos en el


respectivo contrato de arrendamiento con opción de compra.

3.- Terminar anticipadamente el contrato de arrendamiento con opción de compra,


restituyendo el bien.

Para el caso en que no se celebrare la referida Junta, o ésta no se pronunciare al


respecto, se entenderá que se opta por la alternativa regulada en el número 1
precedente.

Se tendrá por no escrita cualquier cláusula pactada en el contrato de


arrendamiento con opción de compra, en contrario a lo regulado en este
artículo.”(art. 225).

En el mismo ejemplo, suponiendo que a partir del año 4 el deudor no pagó las
cuotas de arrendamiento, y la empresa de leasing no hizo nada al respecto, por lo
que el contrato estaba vigente al momento de dictarse la resolución de liquidación
pero la empresa de leasing tenía un crédito por los 6 meses impagos. En cuanto a
esa deuda, ¿qué derechos tiene la empresa de leasing? Se trata de un crédito
común, y como tal tendrá derecho a verificar en la liquidación y que se le pague con
moneda de quiebra o de liquidación.

Suponiendo que los acreedores decidan ejercer la opción del Nº 1 del art. 225, es
decir, perseverar en el contrato de arriendo en los mismos términos, en ese caso se
tratará de una obligación de la masa (si la masa deja de pagar la empresa de leasing

355
podrá dejar sin efectos el contrato). Si ejercen la opción de compra por el precio
que corresponde pagar, se trata de una obligación de la masa pues la ejercen los
acreedores, es decir, la empresa de leasing puede encontrarse en una situación que
no es común para todos los acreedores, que es ser acreedor del fallido respecto de
las rentas de arrendamiento devengadas con anterioridad a la fecha de la dictación
de la resolución de liquidación, y ser acreedor de la masa respecto de las rentas
devengadas con posterioridad a esa fecha si los acreedores ejercieron la opción del
Nº 1 del art. 225 o ser acreedor respecto del precio de ejercicio de la opción de
compra si es que se ejerció la opción del Nº 2.

“De la verificación. El arrendador podrá verificar siempre en el Procedimiento


Concursal de Liquidación del Deudor arrendatario aquellas cuotas devengadas e
impagas hasta la fecha de la Resolución de Liquidación. Las cuotas que se
devenguen con posterioridad a la Resolución de Liquidación y hasta la Junta
Constitutiva serán siempre de cargo de la masa.

Respecto de las obligaciones que nazcan en virtud del ejercicio de las opciones
reguladas en el artículo anterior, se estará a lo siguiente:

a) Si la Junta Constitutiva de Acreedores acordare continuar con el contrato de


arrendamiento con opción de compra vigente en los términos originalmente
pactados, las rentas que se devenguen con posterioridad a la fecha de la Resolución
de Liquidación serán de cargo de la masa, y se pagarán en los términos y
condiciones originalmente estipulados en el referido contrato.

b) Si la Junta Constitutiva de Acreedores acordare el ejercicio anticipado de la


opción de compra en los términos originalmente pactados, su pago será de cargo
de la masa. El Liquidador deberá efectuarlo dentro de los treinta días siguientes a la

356
fecha en que se adoptó el acuerdo, prorrogables por igual período, previa
autorización del tribunal.

Si el pago no se hiciere efectivo dentro del plazo señalado, el acreedor arrendador


podrá poner término al contrato de arrendamiento con opción de compra, debiendo
el Liquidador restituir el bien al arrendador.

c) Si la Junta Constitutiva de Acreedores acordare el término anticipado del contrato


de arrendamiento con opción de compra, se deberá restituir al arrendador el bien
objeto del referido contrato dentro de los 30 días siguientes a la fecha en que se
adoptó el acuerdo, prorrogables por igual período, previa autorización del tribunal
competente.

Si el contrato incluyese multas, ellas podrán ser verificadas únicamente con el


mérito de una sentencia definitiva firme o ejecutoriada que declare su procedencia
y que conceda las cantidades reclamadas, procedimiento que se sustanciará
mediante las reglas del juicio sumario.”(art. 226).

Si los acreedores ejercen la opción del Nº 2 del art. 225 venderán un bien propio, y
en ese caso no habrá problemas. Empero, si la liquidación se dictó en una etapa
temprana del contrato de leasing, los acreedores con la empresa de leasing
negociarán una venta conjunta (normalmente la empresa de leasing no estará
dispuesta a recibir el bien). Esto es lo que de alguna manera reconoce el art. 227:

“Realización de bienes sujetos a un contrato de arrendamiento con opción de


compra. Sin perjuicio de lo señalado anteriormente, la Junta Constitutiva de
Acreedores, con Quórum Calificado, podrá acordar con el arrendador una fórmula
de realización que incluya los bienes objeto del contrato de arrendamiento con
opción de compra, en cuyo caso se estará a las estipulaciones pactadas, las que

357
deberán constar en el acta respectiva, la cual incluirá el valor que se asigna a dichos
bienes.

La parte del crédito verificado con ocasión del contrato de arrendamiento con
opción de compra que no alcance a ser cubierta con el producto de la realización del
bien objeto del referido contrato, se considerará incobrable para todos los efectos
legales a que hubiere lugar.”

6. Compraventa.Los arts. 154 y ss. de la Ley Nº 20.720 establecen ciertas normas


especiales y dicen relación con la facultad que tiene el vendedor que le ha vendido
un bien al fallido de resolver el contrato de compraventa. Estas normas consisten
básicamente en que si el fallido ha comprado un bien mueble, la ley le reconoce la
facultad al vendedor de resolver la compraventa si el bien mueble no ha llegado a
poder del deudor.

“Resolución de la compraventa. El contrato de compraventa podrá resolverse por


incumplimiento de las obligaciones del Deudor comprador, salvo cuando se trate de
cosas muebles que hayan llegado a poder de éste.”(art. 154).

De este modo se puede resolver el contrato de compraventa, salvo que tratándose


de cosas muebles estas hayan llegado a poder del deudor. Ahora, ¿cuándo se
entiende hecha la tradición en la compraventa mercantil? Uno de los casos que
establece el art. 149 del C. de C. es cuando se han enviado las mercaderías al
comprador. Si ya se efectúo la tradición el dueño de esas mercaderías es el
comprador, pero los arts. 155 y ss. dicen relación con las mercaderías en tránsito:
desde que las mercaderías se entregan a la empresa encargada de su transporte
hasta que llegan a su destino a poder del comprador, la ley faculta al vendedor al
que no se le ha pagado el precio para dejar sin efecto la compraventa, resolverla y
recuperar las mercaderías, salvo que estas hayan sido vendidas a un tercero de

358
buena fe, en cuyo caso el vendedor tiene derecho a que el tercero le pague la parte
del precio que no le hubiere pagado al fallido.

“Definición de mercadería en tránsito. Para los efectos de lo dispuesto en los


artículos siguientes, se entiende que las cosas muebles están en tránsito desde el
momento en que las reciben los agentes encargados de su conducción, hasta que
queden en poder del comprador Deudor o de la persona que lo represente.”(art.
155).

“Facultades del vendedor respecto de las mercaderías en tránsito. Mientras estén


en tránsito las cosas muebles vendidas y remitidas al Deudor, el vendedor no
pagado podrá dejar sin efecto la tradición, recuperar la posesión y pedir la
resolución de la compraventa.

El vendedor podrá también retener las cosas vendidas hasta el entero pago de su
crédito.” (art. 156).

“Mercaderías en tránsito vendidas a un tercero. En caso que las cosas a que se


refiere el artículo anterior hayan sido vendidas durante su tránsito a un tercero de
buena fe, a quien se hubiere transferido la factura, conocimiento o carta de porte,
el vendedor no podrá ejercer las acciones que le confiere dicho artículo.

Pero si el nuevo comprador no hubiere pagado el precio antes de la Resolución de


Liquidación, el vendedor primitivo podrá demandar su entrega hasta la
concurrencia de la cantidad que se le deba.”(art. 157).

El vendedor que ejerce la resolución deberá restituir lo que hubiere recibido a


cuenta del precio de forma previa a la resolución (art. 158).

359
“Efecto de la resolución de la compraventa. En caso de resolución de la
compraventa, el vendedor estará obligado a reembolsar a la masa los abonos a
cuenta que hubiere recibido.”(Art. 158).

El art. 161 reconoce el derecho que tiene el liquidador para enervar la acción de
resolución pagando.

“Oposición del Liquidador a la resolución o retención. En los casos a que se refieren


los artículos precedentes, el Liquidador podrá oponerse a la resolución o retención y
exigir la entrega de las cosas vendidas o retenidas, pagando la deuda, intereses,
costas y perjuicios, o dando caución que asegure el pago.”(art. 161)

18/10/2016
7. Contrato de trabajo.Hasta la dictación de la Ley 20.720, cuando se leían los arts.
159, 160 y 161 del Código del Trabajo, no había ninguna causal de término de la
relación laboral que se refiriera a la liquidación o quiebra del empleador, y la única
similar era la causal de término por caso fortuito o fuerza mayor. Empero, ¿la
quiebra era caso fortuito o fuerza mayor? ¿Satisface esta lo dicho por el art. 45 del
CC.? OCHAGAVÍA cree que la situación de insolvencia no es imposible de resistir, y
no obstante que los síndicos de quiebra insistieron en plantear que la quiebra era
un caso fortuito que ameritaba la terminación del contrato de trabajo, los
tribunales fueron enfáticos en señalar que no era un caso fortuito o fuerza mayor.
¿Supone esto no poder terminar el contrato de trabajo? Los síndicos finalmente
terminaron por utilizar el art. 161, es decir, recurrir a la causal de necesidades de la
empresa, lo que conllevaba la obligación de pagar indemnizaciones por los años de
servicio correspondientes. Esto llevó a que para evitar cualquier tipo de
discusiones, la Ley Nº 20.720 incorporó el art. 163 bis al Código del Trabajo. Este
art. señala lo siguiente:

360
“El contrato de trabajo terminará en caso que el empleador fuere sometido a un
procedimiento concursal de liquidación. Para todos los efectos legales, la fecha de
término del contrato de trabajo será la fecha de dictación de la resolución de
liquidación. En este caso, se aplicarán las siguientes reglas:

1.- El liquidador deberá comunicar al trabajador, personalmente o por carta


certificada enviada al domicilio señalado en el contrato de trabajo, el término de la
relación laboral en virtud de la causal señalada en este artículo, adjuntando a dicha
comunicación un certificado emitido por la Superintendencia de Insolvencia y
Reemprendimiento que deberá indicar el inicio de un procedimiento concursal de
liquidación respecto del empleador, así como el tribunal competente, la
individualización del proceso y la fecha en que se dictó la resolución de liquidación
correspondiente. El liquidador deberá realizar esta comunicación dentro de un plazo
no superior a seis días hábiles contado desde la fecha de notificación de la
resolución de liquidación por el tribunal que conoce el procedimiento concursal de
liquidación. El error u omisión en que se incurra con ocasión de esta comunicación
no invalidará el término de la relación laboral en virtud de la causal señalada en
este artículo.

Dentro del mismo plazo, el liquidador deberá enviar copia de la comunicación


mencionada en el inciso anterior a la respectiva Inspección del Trabajo. Las
Inspecciones del Trabajo tendrán un registro de las comunicaciones de término de
contrato de trabajo que se les envíen, el que se mantendrá actualizado con las
comunicaciones recibidas en los últimos treinta días hábiles.

La Inspección del Trabajo, de oficio o a petición de parte, constatará el


cumplimiento de lo establecido en este número. En caso de incumplimiento por
parte del liquidador, la Inspección del Trabajo deberá informar a la
Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento, la que podrá sancionar los

361
hechos imputables al liquidador, de conformidad con lo establecido en el artículo
338 de la Ley de Reorganización y Liquidación de Activos de Empresas y Personas,
sin perjuicio de la responsabilidad que le pueda corresponder en virtud del Párrafo 7
del Título IX del Libro Segundo del Código Penal.

Estas normas se aplicarán de forma preferente a lo establecido en el artículo 162 y


en ningún caso se producirá el efecto establecido en el inciso quinto de dicho
artículo.

2.- El liquidador, en representación del deudor, deberá pagar al trabajador una


indemnización en dinero, sustitutiva del aviso previo, equivalente al promedio de las
tres últimas remuneraciones mensuales devengadas, si es que las hubiere. En el
caso de que existan menos de tres remuneraciones mensuales devengadas, se
indemnizará por un monto equivalente al promedio de las últimas dos o, en defecto
de lo anterior, el monto a indemnizar equivaldrá a la última remuneración mensual
devengada.”(art. 163 bis Código del Trabajo Nº 1 y 2).

Este art. básicamente aclara una causal de terminación especial del contrato de
trabajo por la liquidación del empleador.

Acción reivindicatoria que terceros puedan tener contra el deudor. Si el deudor tiene
uno o más bienes de terceros en su poder, ¿pueden esos terceros reivindicarlos?
Producto de ciertas dudas y posiciones contradictorias en el derecho comparado,
nuestra legislación reconoce expresamente la facultad que tienen terceros de
reivindicartanto títulos de créditos como mercaderías que pudieran estar en poder del
fallido. De hecho, respecto de las mercaderías que el fallido tuviere en su poder o
hubiere recibido en depósito o en consignación (esta permitía en caso de quiebra del
consignatario recuperar los bienes), la ley permite reivindicar esos bienes, e incluso
permitereivindicarel precio o el saldo de precio directamente de los terceros, si es que

362
el fallido hubiera vendido esos bienes a terceros y todavía no hubiere recibido el
precio.

“Reivindicación de mercaderías. Podrán ser también reivindicadas, en todo o en parte y


mientras puedan ser identificadas, las mercaderías consignadas al Deudor a título de
depósito, comisión de venta o a cualquier otro que no transfiera el dominio.

Vendidas las mercaderías, el propietario de ellas podrá reivindicar el precio o la parte


del precio que no hubiere sido pagado o compensado entre el Deudor y el comprador a
la fecha de la Resolución de Liquidación.

No se entiende pagado el precio por la simple dación de documentos de crédito,


firmados o transferidos por el comprador a favor del Deudor. Si existieren tales
documentos en poder de éste, el propietario podrá reivindicarlos, siempre que acredite
su origen e identidad.” (art. 152 Ley Nº 20.720).

El art. que precede a este art. establece la posibilidad de reivindicar títulos de créditos
que el tercero ha entregado al deudor, sea que estén en manos del deudor o de un
tercero que los tenga a nombre de él, salvo que esos efectos de comercio se hayan
entregado por un título traslaticio de dominio.

“Reivindicación de efectos de comercio. Podrán ser reivindicados los efectos de


comercio y cualquier otro documento de crédito no pagado y existente a la fecha de
dictación de la Resolución de Liquidación, en poder del Deudor o de un tercero que los
conserve a nombre de éste, y siempre que el propietario los haya entregado o remitido
al Deudor por un título no traslaticio de dominio.” (art. 151 Ley Nº 20.720).

Si el fallido tiene un bien de un tercero, ¿cómo logra el tercero obtener su restitución


de la manera más eficaz posible? Una primera opción es solicitarle la restitución

363
directamente al liquidador. Si el liquidador no se allana a restituir, ¿cómo corresponde
ejercer la acción reivindicatoria? La acción reinvindicatoria se ejerce en un
procedimiento de lato conocimiento, lo cual no es muy útil considerando que al mismo
tiempo se lleva a cabo el procedimiento de liquidación, el que debería durar menos que
el procedimiento ordinario. En el caso que un acreedor del deudor le embargue los
bienes al deudor, se podría realizar una tercería de posesión o de dominio en el juicio
ejecutivo. Empero, ¿proceden o no las tercerías en el procedimiento de liquidación?
Esto ha generado grandes discusiones y confusión, y si se analiza el inc. 2 del art. 150
de la nueva ley, este señala lo siguiente:

“Las tercerías de dominio que estuvieren iniciadas a la fecha de dictación de la


Resolución de Liquidación continuarán tramitándose en conformidad al procedimiento
que corresponda.”.

Este inciso ha sido interpretado por parte de la doctrina y algunos de los tribunales
diciendo que si la ley dice que pueden seguir tramitándose las tercerías que estaban
vigentes al momento de la dictación de la resolución de liquidación,a contrario sensuno
es posible iniciar nuevas tercerías de posesión. PUGA y OCHAGAVÍA consideran que
esta interpretación no hace ningún sentido, y claramente de acuerdo a la naturaleza
del procedimiento de liquidación no es posible que se exija que el tercero dueño de
una cosa que estaba en poder del fallido tenga que iniciar un juicio de liquidación. Le
parece a OCHAGAVÍA que lo lógico es pensar que esa acción se puede interponer en la
forma de un tercería de posesión o de dominio. Una tercera vía para tratar de
recuperar el bien es impugnar el inventario que hace el liquidador, pero ello no es
propiamente tal una acción reinvicatoria.

Efectos de la liquidación en los acreedores y en los créditos del Deudor. ¿Qué efectos
produce la resolución de liquidación?

364
1. Fija irrevocablemente los derechos de los acreedores.“Fijación de derechos de
acreedores. La Resolución de Liquidación fija irrevocablemente los derechos de
todos los acreedores en el estado que tenían al día de su pronunciamiento, salvo las
excepciones legales.” (Art. 134).

¿Qué significa que se fijen los derechos de los acreedores? En primer lugar, no se
modificarán esos créditos y no cambiará su monto. Tampoco cambiarán las
preferencias de que goza el acreedor, si es que la tuviere, pues estas quedan
irrevocablemente fijadas. No puede el acreedor mejorar su situación, ya sea
aumentar sus créditos o preferencias, por hechos posteriores a la dictación de la
resolución de liquidación. ¿Qué pasa si alguien deviene en acreedor por un hecho
posterior a la dictación de la resolución de liquidación?El nuevo crédito y su
acreedor no quedan bajo los efectos de la liquidación ni dentro del procedimiento
de liquidación, pues es parte de lo que ocurre dentro del reemprendimiento del
fallido.

¿Qué pasa con el acreedor cuyo crédito está sujeto a una condición? Para efectos
de la liquidación el legislador consideró que la condición opera con efecto
retroactivo, ya que le permite al acreedor condicional verificar su crédito dentro de
la liquidación.

¿Qué pasa con las acciones que se quieren ejercer en contra el fallido por
incumplimiento de contrato? Esta es una de las cosas que es más discutible, pero
quedan dentro del procedimiento de liquidación. Es muy curioso porque podría
pasar que el liquidador decida él dejar de cumplir un contrato celebrado por la
empresa deudora, y en ese caso, podría el tercero ejercer una acción resolutoria y
obtener una indemnización de perjuicios, y en definitiva ser el fallido condenado a
realizar la restitución, convirtiéndose ello en un crédito en la masa, debiendo el

365
acreedor que obtiene la condena para ser pagado a verificar en el procedimiento de
liquidación.

2. Vencimiento anticipado de las obligaciones del fallido. Es muy curiosa la diferencia


entre la manera en que estaba redactada la antigua ley de quiebras y la nueva ley
de quiebras:

“Exigibilidad y reajustabilidad de obligaciones. Una vez dictada la Resolución de


Liquidación, todas las obligaciones dinerarias se entenderán vencidas y actualmente
exigibles respecto del Deudor, para que los acreedores puedan verificarlas en el
Procedimiento Concursal de Liquidación y percibir el pago de sus acreencias. Estas
últimas se pagarán según su valor actual más los reajustes e intereses que
correspondan, de conformidad a las reglas del artículo siguiente.”(art. 136 Ley Nº
20.720).

Con anterioridad a la dictación de esta ley, esto regía respecto de todas las
obligaciones del deudor sin ningún tipo de distinción, mientras que hoy en día es
solo respecto de las obligaciones dinerarias. Así, por ejemplo, quien tiene un
contrato para la venta de sillas en que las sillas debían entregarse a plazo, la fecha
de vencimiento para la entrega de las sillas será el mismo plazo; dicha obligación no
se anticipa, sino que solo se anticipan las obligaciones dinerarias, ello para lograr
darle plena aplicación al principio de lapar conditiocreditorum, porque si se dejaran
vigentes los plazos de los créditosque tiene el fallido, habría una situación en que
aquellos acreedores cuyos créditos están vencidos al momento de la dictación de la
resolución de liquidación gozan en los hechos de un mejor derecho para ser
pagados que aquellos cuyos créditos vencen 1 año, 2 años o más después de la
dictación de la resolución de liquidación, porque los bienes del liquidador tendrían
que destinarse primeramente al pago de las obligaciones vencidas, y luego, en la
medida en que existieran bienes, respecto de las obligaciones en la medida en que

366
vayan venciendo. Esto significaráque aquellos acreedores que tienen un plazo más
largo para la exigibilidad de su crédito probablemente no se pagarían en absoluto.
La única manera de tratar a todos los acreedores por igual es dar por vencidas
todas las obligaciones dinerarias, de modo de ver cuáles son los bienes, cuántas son
las deudas y de esa manera se pagarán.

En el caso que el fallido sea el obligado a entregar las sillas, es decir, sea el
vendedor ¿Qué pasa si el liquidador vende los bienes que se supone debía
entregar? En ese caso no tendrá los bienes para cumplir, por lo que no cumplirá el
contrato, y el acreedor no pudo exigir anticipadamente el cumplimiento de la
obligación, salvo que su contrato individualmente considerado haya contemplado
una causal de caducidad del plazo de la obligación de entregar los bienes.
OCHAGAVÍA cree que esto es muy grave, sin perjuicio de que entiende la
racionalidad que puede haber detrás (mayor flexibilidad al liquidador en la manera
en la que administra los bienes y negocios del deudor).

¿Cómo valorizar los créditos? La forma de valorizar los créditos se encuentra en el


art. 137. Si se piensa, al momento de dictarse la liquidación se pueden dar una serie
de situaciones: puede el deudor tener créditos que vencían en ciertos plazos,
algunos de los cuales vencían con posterioridad a la dictación de la resolución de
liquidación, pero ¿cuánto valen estos créditos que tenían o que tienen un plazo
posterior respecto de las cuales se anticipa su cumplimiento? Este art. 137
distingue entre aquellas que devengan reajustes e intereses, aquellas que solo
tienen reajuste, aquellas que solo devengan intereses, y aquellas que no devengan
ni intereses ni reajuste. Este art. 137 señala lo siguiente:

“Determinación del valor actual de los créditos. Para determinar el valor actual de
los créditos se seguirán las siguientes reglas:

367
(1) Obligaciones reajustablesy que devengan intereses. En este caso se valorizaran
de acuerdo al valor del crédito (capital) reajustadoe intereses para operaciones
reajustables devengados hasta la fecha de la fecha de la resolución de
liquidación.

“1) El valor actual de los créditos reajustables en moneda nacional, no vencidos


a la fecha de la dictación de la Resolución de Liquidación y que devenguen
intereses, será el capital más el reajuste convenido e intereses para operaciones
reajustables devengados hasta la fecha de dicha resolución.”

¿Cuándo dice intereses para operaciones reajustables habla del interés


convenido o el interés corriente?Al no calificar de que interés se esta hablando,
a OCHAGAVÍA le da la impresión de que se refiere al interés corriente. Esto es
un cambio que se da respecto de la antigua ley, y a OCHAGAVÍA le parece
expropiatoria, pues no entiende por qué se debiera aplicar una tasa distinta a la
convenida.

(2) Obligaciones no reajustables que devengan intereses. Este tiene el mismo


problema del número anterior.

“3) El valor actual de los créditos no reajustables en moneda nacional, no


vencidos a la fecha de la dictación de la Resolución de Liquidación y que
devenguen intereses, será el capital más los intereses para operaciones no
reajustables devengados hasta la fecha de dicha resolución.”
(3) Obligaciones reajustables que no devengan interés.El valor será la del capital
reajustado hasta la fecha de la resolución.

“2) El valor actual de los créditos reajustables en moneda nacional, no vencidos


a la fecha de la dictación de la Resolución de Liquidación y que no devenguen

368
intereses, será el capital más el reajuste convenido hasta la fecha de dicha
resolución.”

(4) Obligaciones no reajustables que no devengan intereses.En este caso se traerá


el crédito a valor presente, descontándolo según la tasa de interés corriente
que corresponda.

“4) El valor actual de los créditos no reajustables en moneda nacional, no


vencidos a la fecha de la dictación de la Resolución de Liquidación y que no
devenguen intereses, se determinará descontando del capital los intereses
corrientes para operaciones de crédito de dinero no reajustables desde la fecha
de la Resolución de Liquidación hasta el día de los respectivos vencimientos. Si
no fuere posible determinar el índice de reajustabilidad o si éste hubiere perdido
su vigencia, se aplicará lo dispuesto en el número 3) anterior.”

Si se mira la redacción de este art., se puede apreciar que esta es la regla que rige
para obligaciones en moneda nacional, ¿qué pasa con los créditos en moneda
extranjera? La única norma que existe a este respecto es el art. 139, que establece,
a propósito de los reajustes e intereses calculados durante la liquidación, que “[l]as
obligaciones contraídas en moneda extranjera se pagarán en la misma moneda
establecida en la convención y devengarán el interés pactado en ella.”

Se suele distinguir 2 tipos de obligaciones en moneda extranjera:

(1) Obligaciones denominadas en moneda extranjera pero pagaderas en moneda


nacional.En esta la moneda extranjera es una formula de reajuste, y por ende,
se aplicalas normas de la Ley Nº 18.010, según las cuales esas obligaciones no
admiten otra forma de reajuste.

369
(2) Obligaciones denominadas en moneda extranjera pagaderas en moneda
extranjera por permitirlo el BC o la ley. OCHAGAVÍA cree que atendida la
libertad cambiaria que existe por la disposición del art. 39 de la LOC del BC, si se
pactó una obligación pactada en moneda extranjera, se puede exigir libremente
el pago en dicha monedaextranjera.

La ley no lo aclara, y OCHAGAVÍA cree que las obligaciones denominadas en


moneda extranjera para pagarse en moneda nacional, se debieran aplicar las
normas de considerar que la moneda extranjera es una fórmula de reajuste, y en el
caso de las obligaciones denominadas en moneda extranjera para ser pagadas en
moneda extranjera se debiera aplicar el pago en moneda extranjera.

¿Por qué se valorizan todos los créditos a la fecha de la dictación de la resolución de


liquidación? ¿Qué importancia tiene? Esto será lo que determine cuánto pesa cada
acreedor: Para ver por cuanto vota cada acreedor (derechos políticos), y cuánto le
corresponde a cada acreedor de cada peso que el liquidador distribuya. Al acreedor
preferente se le pagará según el monto de su crédito y los acreedoresvalistas
concurren a prorrata, y la prorrata se determina llevando el valor todos de los
créditos a una misma fecha, de tal manera, que si el total de los créditos es, por
ejemplo, es 1 millón, y el crédito de un acreedor es 100 mil, a él le corresponderá el
10% de cada distribución que el liquidador haga en favor de los acreedores valistas.
En definitiva, este ejercicio se hace para determinar el poder relativo de cada
acreedor para efectos del voto, y para efectos del pago de las acreencias en caso
que los bienes de la masa no sean suficientes el 100% de los créditos.

¿Este vencimiento anticipado afecta al deudor o también afecta al acreedor? En un


caso en que el deudor, antes de ser declarado en liquidación, había celebrado un
contrato de compraventa de una casa, y se había obligado a pagarla a plazo, y el
vendedor, por su parte, se había obligado a entregar la casa en ese mismo plazo.

370
Como la obligación de pagar el precio es una obligación dineraria, esta se anticipará
en caso de que se dicte la resolución de liquidación antes del plazo establecido,
pero la caducidad legal no aprovechará a la obligación del deudor de entregar la
casa; no se produce la caducidad legal del plazo respecto del tercero que contrató
la obligación dineraria con la empresa deudora,pues la caducidad legal del plazo
solo opera respecto de la empresa deudor, lo cual es meridianamente claro del
texto de la ley: “(...) todas las obligaciones dinerarias se entenderán vencidas y
actualmente exigibles respecto del Deudor, para que los acreedores puedan
verificarlas en el Procedimiento Concursal de Liquidación y percibir el pago de sus
acreencias (...)”

¿Qué pasa con estos créditos después de la dictación de la resolución de


liquidación? El art. 139 dice que los créditos se seguirán reajustando y devengado
intereses según los términos originalmente pactados, en el entendido que aquellos
que no devengaban intereses empezarán a devengar intereses para operaciones no
reajustables, todo esto desde la fecha de la dictación de la resolución de liquidación
en adelante.

“Reajuste y cálculo de intereses. En virtud de la dictación de la Resolución de


Liquidación y desde la fecha de ésta, las acreencias del Deudor, vencidas y las
actualizadas de conformidad con el artículo 137:

1) Se reajustarán y devengarán intereses según lo pactado en la convención, en el


caso del número 1) del artículo 137.

2) Se reajustarán según lo pactado, en el caso del número 2) del mismo artículo.

3) Devengarán intereses corrientes para operaciones de crédito de dinero no


reajustables en el caso de los números 3) y 4) del artículo 137.

371
El Liquidador podrá impugnar los intereses pactados en caso de estimarlos
excesivos.

Las obligaciones contraídas en moneda extranjera se pagarán en la misma moneda


establecida en la convención y devengarán el interés pactado en ella.

Los reajustes y los intereses, en su caso, gozarán de iguales preferencias que el


respectivo capital al cual acceden.” (art. 139 inc. 1, 2, 3 y 4).

Los reajustes y los intereses en su caso gozarán de iguales preferencias que el


respectivo capital al cual acceder quiere decir, según OCHAGAVÍA, que si se tiene
un crédito garantizado con hipoteca, una cosa será lo que se valorizó para efectos
de determinar el derecho a voto y el derecho en los repartos, pero si los reajustes e
intereses que se devengan a partir de la fecha de liquidación tienen la misma
preferencia del crédito, quiere decir que cuando se ejecute la hipoteca, se deberá
pagar el capital reajustado y los intereses a esta fecha, calculados según el art. 137,
y los intereses y reajustes posteriores a la fecha de la resolución de liquidación y
hasta la fecha de pago, en conformidad a lo pactado o modificado, si es que fuera el
caso, según el art. 139. Empero, el inc. final del art. 139 dice lo siguiente:

“Sin embargo, los intereses que se devenguen con posterioridad a la dictación de la


Resolución de Liquidación quedarán pospuestos para su pago hasta que se pague el
capital de los demás créditos en el Procedimiento Concursal de Liquidación.”

El hecho de que los intereses y accesorios del crédito se pospongan al pago del
capital le parece a OCHAGAVÍA totalmente perjudicial para los créditos preferentes,
y cree que no hay ninguna razón para posponer los intereses devengados con
posterioridad a la liquidación si es que hay un bien que está adscrito a la seguridad

372
de los créditos y el interés es un accesorio al crédito. Se produce en la práctica,
entonces, una especie de octava clase de acreedores.

19/10/2016
La exigibilidad anticipada de las obligaciones dinerarias del deudor solo afecta al
deudor y no a la contraparte que sigue beneficiándose de los plazos o condiciones
que estén establecidos en el contrato para el cumplimiento de las obligaciones. La
única excepción a este respecto es la que establece el art. 138 de la Ley Nº 20.720,
la que se refiere a la situación en la que la empresa deudora es el liberador de una
letra no aceptada, el aceptante de una letra de cambio o bien el suscriptor de un
pagaré, pues en ese caso se produce la exigibilidad anticipada de ese título de
crédito respecto de todos los obligados al pago.

“Exigibilidad de otros instrumentos. Si el Deudor fuere aceptante de una letra de


cambio, librador de una letra no aceptada o suscriptor de un pagaré, los demás
obligados deberán pagar dichos instrumentos inmediatamente.”(art. 138).

3. Prohibición en la compensación. La compensación es un modo de extinguir las


obligaciones que opera en el caso de dos personas que son acreedores y deudores
entre sí, extinguiéndose sus créditos recíprocos hasta concurrencia de la deuda de
menor valor. Debe tratarse de cosas del mismo género y de deudas actualmente
exigibles.

¿Qué problema trae aparejada la compensación para la par conditiocreditorum?El


acreedor que es a la vez deudor del fallido verá satisfecho su crédito en el monto
del valor compensado, mientras que los demás acreedores no tendrán la misma
posibilidad y generalmente verán satisfecho su crédito en un monto menor
(moneda de liquidación). De este modo, la compensación sería una forma de
afectar la par conditiocreditorum, y esta forma de afectarla puede incluso elevarse

373
a una potencia: En el caso de que un acreedor no era acreedor del fallido al
momento de dictarse la resolución de liquidación, pero en dicho momento va a
comprar un crédito de un acreedor que es parte del procedimiento de liquidación,
el cual le saldrá menos en virtud de la gran tasa de descuento que pudiera existir en
ese momento. De este modo, se produce una “doble injusticia”, ya que vería
satisfecho su crédito y además adquiriría dicho crédito por un monto menor. Por
esta razón, la ley prohíbe por regla generalla compensación que no hubiere
operado por el solo ministerio de la ley antes de la dictación de la resolución de
liquidación.

En el caso de encontrarse una persona en una hipótesis de compensación, deberá


pagar al liquidador el monto del crédito adeudado al fallido, mientras que deberá
verificar el crédito que tenga contra el deudor y estar a las resultas, de manera que
ya no obtendrá el 100%, sino que obtendrá un porcentaje que muchas veces será
menor. Esto puede resultar altamente injusto en ciertos casos: Ej. Durante la
vigencia de la cuenta corriente mercantil, ninguna de laspartes es deudora de la
otra mientras no se liquide total o parcialmente el contrato. En el caso de que la
relación de acreedor y el deudor recíprocos sea en virtud de una relación de cuenta
corriente mercantil, sería muy injusto que si se hacían prestaciones recíprocas,
repentinamente el acreedor deba pagar todo y que solo podrán recuperar parte de
lo que le deban. Este problema no existe en el caso de la cuenta corriente mercantil
puesto que los arts. 611 y 613 del C. de C. señalan que la resolución de liquidación
produce la liquidación de la cuenta corriente mercantil y que las cantidades que
recíprocamente se deben se compensan, es decir, existe una excepción.

Respecto de otros contratos que no sean una cuenta corriente mercantil, en que
también las partes tienen obligaciones recíprocas, la disposición de la cuenta
corriente mercantil no les aplica. Estando consciente de estas injusticias, el art. 160
de la Ley Nº 20.720 que es continuador del antiguo art. 69, se exceptúan de esta

374
prohibición de compensar cuando las obligaciones son conexas, cuando emanan de
un mismo contrato o de una misma obligación, aunque sean exigibles en plazos
distintos.

Por muchos años ese fue el texto del art. 69 de la antigua ley de quiebras, y la
discusión que se producía era respecto de cuándo se entiende que dos obligaciones
son conexas: Cuando se entiende que emanan de un mismo contrato es fácil de
determinar porque si el contrato establece 2 obligaciones, se debiera decir que es
un tema documentario si el contrato es documental, pero si no es documental
vuelve a surgir la misma cuestión planteada.Esto se tradujo en algo particularmente
importante en el caso de la celebración de contratos de derivados. Es usual que una
persona expuesta a un riesgo cambiario quiera celebrar un contrato por el cual se
pueda eliminar o minimizar ese riesgo cambiario. Ej. Exportador chileno que vende
sus productos fuera del país, siendo pagado en dólares, pero este exportador para
pagarle a sus empleados debe pagar en pesos, igual que los impuestos que debe
pagar y los insumos comprados dentro del país, es decir, tiene una serie de
obligaciones en pesos chilenos. Para este exportador no es lo mismo que el tipo de
cambio sea 700 pesos a que sea 600 pesos. ¿Cómo se soluciona este riesgo? Una
alternativa es celebrar un contrato con el banco, en el cual el banco se obliga, a
través de un swap, a transferirle dólares y este a entregarle pesos a un tipo de
cambio cualquiera (ej. 650 pesos chilenos). Si el exportador cae en liquidación, y
dependiendo de donde se encuentre el tipo de cambio, algunos contratos pudieron
haber resultado en utilidad o en pérdida. Si al momento de la liquidación el tipo de
cambio se encontraba a 650 pesos chilenos, y el contrato de swap era por un tipo
de cambio a500, el banco será deudor del exportador, mientras que si el contrato
de swap era por un tipo de 700, el banco será acreedor del deudor. Existían dudas
respecto de si todos estos contratos celebrados entre las mismas partes eran o no
obligaciones conexas, y para clarificar esto se incluyeron un par de incisos que hoy
siguen vigentes en el art. 140, los que dicen lo siguiente:

375
“Para estos efectos, se entenderá que revisten el carácter de obligaciones conexas
aquellas que, aun siendo en distinta moneda, emanen de operaciones de derivados,
tales como futuros, opciones, swaps, forwards u otros instrumentos o contratos de
derivados suscritos entre las mismas partes, en una o más oportunidades, bajo ley
chilena o extranjera, al amparo de un mismo convenio marco de contratación de los
reconocidos por el Banco Central y que incluyan un acuerdo de compensación en
caso de Liquidación Voluntaria o de Liquidación Forzosa. El Banco Central de Chile
podrá determinar los términos y condiciones generales de los convenios marco de
contratación referidos en que sea parte una empresa bancaria o cualquier otro
inversionista institucional, considerando para ello los convenios de general
aceptación en los mercados internacionales.

Cada una de las obligaciones que emanen de operaciones de derivados efectuadas


en la forma antedicha, se entenderá de plazo vencido, líquida y actualmente
exigible a la fecha de la dictación de la Resolución de Liquidación y su valor se
calculará a dicha fecha de acuerdo a sus términos y condiciones. Luego, las
compensaciones que operen por aplicación del inciso precedente serán calculadas y
ejecutadas simultáneamente en dicha fecha.”(inc. 3).

OCHAGAVÍA dice que la redacción de este art. no es feliz, ello porque en estos actos
no necesariamente se cumplen los requisitos de la compensación, porque puede
ocurrir que no necesariamente sean de la misma moneda, pero ellas se
compensarán igualmente.

Actualmente el BC ha aprobado 3 contratos marco:

(1) Contrato conocido como ISDA Master Agreement (1992-2002).

376
(2) Contrato AByF.

(3) Contrato fijado por la Asociación de Bancos e instituciones financieras.

En la medida en que se hayan celebrado operaciones de derivados bajo cualquiera


de estos contratos marco, y en la medida en que esos contratos marco no se hayan
eliminado las estipulaciones sobre compensación global de operaciones, la
dictación de la resolución de liquidación produce la exigibilidad anticipada de todos
estos contratos, que se valoricen las obligaciones de cada parte conforme a los
términos del contrato y que se compensen las obligaciones de unos con otros.

El art. 250 establece como se deberá pagar el acreedor que no pudo compensar:

“Deudas y créditos recíprocos. Cuando un acreedor fuere a la vez Deudor de quien


está sujeto a un Procedimiento Concursal de Liquidación, sin que hubiere operado la
compensación, las sumas que le correspondan a dicho acreedor se aplicarán al pago
de su deuda, aunque no estuviere vencida.”

“Compensaciones. La dictación de la Resolución de Liquidación impide toda


compensación que no hubiere operado antes por el ministerio de la ley, entre las
obligaciones recíprocas del Deudor y los acreedores, salvo que se trate de
obligaciones conexas, derivadas de un mismo contrato o de una misma negociación
y aunque sean exigibles en diferentes plazos.

Para estos efectos, se entenderá que revisten el carácter de obligaciones conexas


aquellas que, aun siendo en distinta moneda, emanen de operaciones de derivados,
tales como futuros, opciones, swaps, forwards u otros instrumentos o contratos de
derivados suscritos entre las mismas partes, en una o más oportunidades, bajo ley
chilena o extranjera, al amparo de un mismo convenio marco de contratación de los

377
reconocidos por el Banco Central y que incluyan un acuerdo de compensación en
caso de Liquidación Voluntaria o de Liquidación Forzosa. El Banco Central de Chile
podrá determinar los términos y condiciones generales de los convenios marco de
contratación referidos en que sea parte una empresa bancaria o cualquier otro
inversionista institucional, considerando para ello los convenios de general
aceptación en los mercados internacionales.

Cada una de las obligaciones que emanen de operaciones de derivados efectuadas


en la forma antedicha, se entenderá de plazo vencido, líquida y actualmente
exigible a la fecha de la dictación de la Resolución de Liquidación y su valor se
calculará a dicha fecha de acuerdo a sus términos y condiciones. Luego, las
compensaciones que operen por aplicación del inciso precedente serán calculadas y
ejecutadas simultáneamente en dicha fecha.

En caso que una de las partes sea un banco establecido en Chile, sólo procederá
dicha compensación tratándose de operaciones con productos derivados cuyos
términos y condiciones se encuentren autorizados por el Banco Central de
Chile.”(art. 140).

4. Suspensión derecho de ejecución individual de cada acreedor. Dictada la


resolución de liquidaciónel acreedor no puede por regla general demandar al
deudor, sino que deberá verificar su crédito en el procedimiento de liquidación.
Excepcionalmente hay ciertos acreedores que pueden tener derecho a continuar o
iniciar juicios contra el deudor: Ej. Acreedores prendarios o hipotecarios.

La ley de quiebras antigua distinguía los efectos de la quiebra en efectos futuros (aquellos
que ocurren desde la dictación de la resolución de liquidación en adelante) de los efectos
retroactivos. Los efectos retroactivos de la resolución de liquidación son básicamente las
acciones revocatorias concursales. No obstante que la Ley Nº 20.720 no habla sobre los

378
efectos retroactivos, es importante entender que la resolución de liquidación no solo
puede tener efectos respecto de cosas que ocurren a partir de su dictación, sino que
también puede impactar cosas que ocurrieron antes.

¿Cuál es la situación de los bienes del deudor que se encuentran en liquidación?


¿Necesariamente todos los bienes del deudor están en poder del deudor al momento de
la dictación de la resolución de liquidación? No, ello en virtud de cualquier contrato en
que hubiera cedido la mera tenencia de sus bienes. Asimismo, el deudor puede tener en
su poder bienes que son de terceros. Una vez que el liquidador ha incautado los bienes del
deudor, obtendrá lo que se conoce como el activo de hecho, el cual debe transformarse
en un activo de derecho, que serán los bienes que realmente quedarán comprendidos en
el procedimiento de liquidación. De los bienes del activo de hecho se deberán sumar y
restar ciertas cosas:

1. Cosas que deberá restar. Se deberán restar los bienes de terceros en poder del
deudor. El liquidador deberá ver si los actos o contratos en virtud de los cuales el
deudor tiene esos bienes, habilitan a su titular –dueño- para pedir su restitución,
ya sea por haber ocurrido la liquidación o por cualquier otra causa. ¿Por qué ver el
acto o contrato? Porque respecto de los bienes arrendados se habilita a los
acreedores del arrendatario a rendir caución suficiente al arrendador de que
perseverarán en el acto, entonces no tendrán derecho a pedirlo y el liquidador y
los acreedores tendrán derecho a conservar el bien. En el contrato de leasing se
permite que los acreedores puedan perseverar el contrato tal cual está, ejercer la
opción anticipadade compra en los términos del contrato o ponerle término. De
este modo, se deberá ver los términos y condiciones de los contratos celebrados
por el deudor con sus acreedores para determinar si estos pueden reivindicar los
bienes o no. Si tuvieran derecho a solicitar la restitución, lo tendrán que hacer de
alguna de las siguientes maneras: (1) Hablar con el liquidador y solicitarle la

379
liquidación; (2) Impugnar el inventario preparado por el liquidador; o (3) ejercer
acciones reivindicatorias.

2. Cosas que deberá sumar:

(1) Bienes del deudor en poder de terceros. En este caso se produce el fenómeno
inverso, es decir, el liquidador deberá revisar los contratos de que el fallido era
parte y deberá ver si tiene derecho a pedir la restitución del bien, o cuándo
tendrá derecho a pedir la restitución del bien. Estos bienes están fácilmente en
el patrimonio del deudor, sin que los tenga fisicamente.

(2) Bienes que no están en el patrimonio del deudor pero debieran


estarlo.Ejemplos de esto:

(a) Actos o contratos simulados.

(b) Actos o contratos anulables respecto de los cuales se puede ejercer la


acción de nulidad para recuperar los bienes.

(c) Actos o contratos rescindibles por lesión enorme.

(d) Actos o contratos sujetos a condiciones resolutorias que de ocurrir le


permiten al liquidador incorporar nuevamente esos bienes.

(e) Acciones de integración de patrimonio. Estas fundamentalmente son de 2


tipos:

a. Acción indirecta, oblicua o subrogatoria. Esta consiste en permitirle al


acreedor de una persona ejercer una acción que esa persona tiene

380
contra un tercero. La ley percibe de cierta forma que una persona
puede no tener los incentivos para ejercer una acción y por eso le
permite a los acreedores de esa persona ejercerla.

En nuestro derecho no hay una acción oblicua genérica que le permita a


los acreedores ejercer cualquier acción que su deudor tenga, sino que
el CC. reconoce esas acciones oblicuas en ciertos casos.

Se podría decir que si bien en Chile no existe una acción oblicua o


subrogatoria general, en el caso de que el deudor esté en liquidación
esto no es tan grave, porque quien representa y ejerce los derechos y
obligaciones del Deudor, es el liquidador, y este, desde esa perspectiva,
puede ejercer cualquier acción en representación del deudor. Esto no
es tan cierto porque no necesariamente el liquidador tiene los
incentivos para ejercer todas las acciones, ya que pondera los costos y
beneficios del cobro de las acciones, así como el tiempo que su cobro
puede suponer. OCHAGAVÍA cree que el hecho de que el liquidador
administre los bienes y pueda cobrar las obligaciones como solución a la
falta de una acción subrogatoria genérica no es tan perfecta.

b. Acciones paulianas o revocatorias.Las accionesrevocatorias o paulianas


civiles están reguladas en el art. 2468 CC., el cual dice lo siguiente:

“En cuanto a los actos ejecutados antes de la cesión de bienes o la


apertura del concurso, se observarán las disposiciones siguientes:

1a. Los acreedores tendrán derecho para que se rescindan los contratos
onerosos, y las hipotecas, prendas y anticresis que el deudor haya
otorgado en perjuicio de ellos, estando de mala fe el otorgante y el

381
adquirente, esto es, conociendo ambos el mal estado de los negocios
del primero.

2a. Los actos y contratos no comprendidos bajo elnúmero precedente,


inclusos las remisiones y pactos deliberación a título gratuito, serán
rescindibles,probándose la mala fe del deudor y el perjuicio de
los acreedores.

3a. Las acciones concedidas en este artículo a los acreedores expiran en


un año contado desde la fecha del acto o contrato.”

El Nº 1 habla de rescisión... ¿Es realmente una acción de nulidad? Este


tema se discutió mucho, y hoy se piensa que es más bien una acción de
inoponibilidad que de nulidad propiamente tal porque no se refiere a la
omisión de un requisito de validez o de existencia al momento de
celebrar el acto o contrato.

*Hay un caso de nulidad que se produce por un vicio de nulidad


posterior a la celebración del acto o contrato en el contrato de
sociedad.

¿Cuáles son los requisitos para que proceda la acción pauliana civil?

(i) Debe tener la calidad de acreedor al momento de la


celebración del acto o contrato que se pretende revocar. Esto
porque cuando se celebra el acto o contrato el derecho de
prenda general es sobre los bienes futuros o presentes, no
respecto de los bienes pasados.

382
Si es acreedor estaba sujeto a condición suspensiva, y se estima
que esta ópera con efecto retroactivo, se debe concluir que
también pueden ejercerlo.

(ii) Que se produzca el eventusdamni, es decir, el perjuicio para los


acreedores.

¿Cuándo hay un perjuicio a los acreedores por la celebración de


un acto o contrato? Ej. Cuando el deudor compra una casa que
está tasada en $100 en $1000. Por regla general se suele decir
que el perjuicio a los acreedores se produce si es que el acto en
cuestión causa o agrava la insolvencia del deudor. PUELMA, en
cambio, piensa que no solo cuando causa o agrava la insolvencia
del deudor, sino que también cuando afecta, por ejemplo, su
liquidez. Desde esta perspectiva, no es lo mismo tener dinero en
el banco que tener un activo de difícil realización o acciones de
una S.A. y acciones de una sociedad de personas. Lo curioso de
todos los autores es que todos se enfocan en el patrimonio del
deudor como un todo, pero OCHAGAVÍA piensa que en realidad
cuando se lee el art., más que hacer un análisis patrimonial del
deudor, se debe analizar el efecto del acto o contrato en el
patrimonio del deudor. Ej. En el caso de que Luksic célebre el
mismo contrato del ejemplo anterior, ello no derivará en su
insolvencia o afectará su liquidez. OCHAGAVÍA se refiere a casos
en que la celebración del acto, por ejemplo, sea celebrado en
condiciones que no son de mercado. No cree que haya un
requisito de insolvencia dura.

383
¿Qué pasa si el acto no es válido? Si el acto fue declarado nulo,
no se puede revocar, ¿pero qué pasa si el acto es anulable? ¿se
puede ejercer una acción revocatoria en contra de un acto
anulable? OCHAGAVÍA cree que se pueden ejercer ambas
acciones, la de nulidad y la de revocación, debiendo elegir entre
una u otra. Algo similar ocurre con la simulación de los
contratos, en que el afectado tiene la opción de impugnar el
acto aparente para dejar subsistente el acto simulado, o bien
ejercer las acciones correspondientes en contra del acto
simulado.

(iii) Fraude pauliano.El fraude pauliano puede ser concebido de 2


maneras según la ley:

(I) Actos o contratos a título gratuito, prendas, hipotecas y


anticresis. En estos actos basta que concurra en el
deudor el fraude pauliano.

(II) Actos o contratos a título oneroso. Se requiere el fraude


pauliano tanto en el deudor como en el contratante, la
persona que celebró el contrato con el deudor.

¿En qué consiste el fraude pauliano según el CC.? Basta con que
se conozca el mal estado de los negocios del deudor, que en el
caso del deudor es básicamente un dato, pero en el caso de un
tercero esto no es necesariamente un dato, pues se puede
perfectamente ignorar cuál es el estado real de los negocios del
deudor. Ahora, la distinción entre actos o contratos a título
oneroso y a título gratuito busca proteger al contratante que

384
celebró un acto o contrato a título oneroso. A OCHAGAVÍA le
llama la atención dos cosas de estas normas: (I) Los actos
onerosos aleatorios se tratan igual que los onerosos
conmutativos, y OCHAGAVÍA no cree que ello haga mucho
sentido; (II) Lo segundo es que la norma iguale a los actos
gratuitos las hipotecas, las prendas y las anticresis. Esto porque
la anticresis en Chile no da preferencia.

El plazo de prescripción de la acción pauliana o revocatoria civil es de


un 1 año desde la fecha del acto o contrato que se pretende revocar.
Este acto o contrato debe ser celebrado antes de la apertura del
concurso o la cesión de bienes ¿A qué se refiere el CC. con la apertura
del concurso? En el caso de la legislación actual se refiere a la
resolución de liquidación. ¿Por qué después de dictada la resolución no
procede ejercer una acción pauliana o revocatoria, por qué los actos
celebrados con posterioridad no son impugnables por acciones
revocatorias? Porque son celebrados por el liquidador, y si los celebrare
el deudor serán nulos porque este pierde las facultades de disposición
luego del desasimiento.

Esta es la acción pauliana civil, y es relevante porque la ley Nº 20.720 se


remite a ella. Las acciones revocatorias concursales están predicadas
sobre la misma base que la acción pauliana civil, pero lo que buscan es
morigerar los requisitos para su ejercicio, es decir, hacer más fácil para
los acreedores del fallido ejercer las acciones revocatorias. De este
modo, la mayoría de las normas lo que buscarán es prescindir de la
necesidad de probar el perjuicio para los acreedores o prescindir de
probar el fraude pauliano, ya sea respecto de la persona del deudor ya
respecto de los contratantes del deudor.

385
20/10/2016
Nuestra legislación con el paso del tiempo incorporó las llamadas
acciones revocatorias concursales.

d) Acciones revocatorias concursales. Estas buscan en términos generales facilitar el


ejercicio de las acciones revocatorias por la vía de eximir de la necesidad de cumplir 1 o
más de los requisitos que exige la ley. La Ley Nº 20.720 reformó profundamente el
régimen de acciones revocatorias concursales que existía en la antigua ley de quiebras.
Los redactores de la ley buscaban clarificar, simplificar y facilitar el ejercicio de las
acciones revocatorias.

Estas acciones bajo el régimen de la Ley Nº 20.720se elaboran sobre la distinción de


aquellas que aplican a la persona deudora de aquellas que aplican a la empresa
deudora. Las diferencias no son tan dramáticas porque hay gran parte de las causales
de la empresa deudora que también se aplican a la persona deudora, y la gran
diferencia es que en el caso de la persona deudora para las causales de revocabilidad
subjetiva se hace referencia expresa al art. 2468 del CC. De esta forma se distingue:

1. Empresa deudora.

(1) Causales de revocabilidad.La ley distingue entre las causales de revocabilidad


objetivas y las subjetivas.

(a) Revocabilidad objetiva. Las contempladas en el art. 287. Estas se conocían


bajo la antigua ley como causales de pleno derecho. Hay 3 causales que no
admiten ninguna, en que respecto de ellas procede la revocabilidad
objetiva.

386
a. Cuando previo a la resolución de liquidación, a la resolución de
reorganización, o a la resolución de admisibilidad, según sea el
procedimiento concursal de que se hable, la empresa deudora efectuó
un pago anticipado de una deuda. ¿Qué sentido tiene que una empresa
que se encuentra en una situación difícil pague antes del vencimiento
una deuda? La ley equipara al pago anticipadoel descuento de
documentos, efectos de comercio o facturas, así como el hecho de que
la persona renuncie al plazo establecido en su favor y después paga
(Respecto a esta último si bien jurídicamente es distinto a pagar
anticipadamente, economicamente es lo mismo).

“Revocabilidad objetiva. Iniciados los Procedimientos Concursales de


Reorganización o de Liquidación, los acreedores podrán y el Veedor o el
Liquidador, en su caso, deberá deducir acción revocatoria concursal
respecto de los siguientes actos ejecutados o contratos celebrados por la
Empresa Deudora dentro del año inmediatamente anterior al inicio de
estos procedimientos:

1) Todo pago anticipado, cualquiera fuere la forma en que haya tenido


lugar. Se entiende que la Empresa Deudora anticipa el pago también
cuando descuenta efectos de comercio o facturas a su cargo y cuando lo
realiza renunciando al plazo estipulado en su favor.”(art. 287 Nº 1).

b. Cuando el pago se efectúa en una forma diversa en la forma


establecida en la convención. Quien recurre a otros activos para
extinguir sus obligaciones es un indicio de que algo no está bien.La
norma aclara que la dación en pago de efectos de comercio equivale al
pago.

387
“2) Todo pago de deudas vencidas que no sea ejecutado en la forma
estipulada en la convención. La dación en pago de efectos de comercio
equivale al pago en dinero.”(art. 287 Nº 2).

c. Toda hipoteca, prenda o anticresis constituida para garantizar el pago


de una obligación anteriormente contratada.El problema no reside en
el hecho de otorgar una hipoteca o prenda por un crédito que está
próximo a contratarse. Entonces, esta hipótesis dice relación con la
pregunta de por qué el deudor lo hace si no estaba obligado a ello.

Respecto de este tercer caso hay una situación que no está bien
regulada en la ley según OCHAGAVÍA: ¿qué pasa si se celebra una
promesa de constituir una hipoteca o una prenda sin desplazamiento
sobre el crédito, y estas se otorgan 6 meses antes de la resolución de
liquidación en cumplimiento de esa promesa? ¿Se aplica esta causal de
revocabilidad? ¿Se retrotrae la fecha de la hipoteca o prenda a la fecha
de la promesa en virtud de la cual se otorga?Algunos creen que se
retrotrae a la fecha de la promesa, ello porque hay varios casos en
nuestra legislación que la ley reconoce el efecto retroactivo de la
promesa, mientras que otros dicen que no porque, por ejemplo en el
caso de la hipoteca no se puede retrotraer la fecha de la inscripción de la
hipoteca. OCHAGAVÍA cree que no se retrotrae la fecha de la promesa, y
por tanto se le aplica esta causal, ello porque lo que buscan las acciones
revocatorias concursales es proteger la par conditiocreditorum, vale
decir, que en definitiva el deudor trate a todos sus acreedores por igual,
y el hecho de constituir prendas o hipotecas cuando se encuentra en una
situación de insolvencia es favorecer a unos acreedores en desmedro de
otros, y lo que debió haber hecho el deudor es someterse al
procedimiento concursal antes de tener que constituir la garantía

388
señalada en la promesa. Sin embargo, cree que es un tema bastante
discutible.

“3) Toda hipoteca, prenda o anticresis constituida sobre bienes del


deudor para asegurar obligaciones anteriormente contraídas.”(art. 287
Nº 3).

Estas corresponden a las causales que establecía el art. 76 del Libro IV del C.
de C. Asimismo, la ley antigua establecía otra causal de revocabilidad
objetiva que estaba en el art. 74, y el problema es que los redactores de la
nueva copiaron mal, porque la ley antigua distinguía entre los deudores que
ejercían una industria comercial, industrial, minera o agrícola y los que no,
pero la nueva ley eliminó dicha distinción sin incorporar al art. 287 la causal
que se aplicaba a todo deudor (art. 74 antigua ley) y no sólo a los deudores
que ejercen una actividad comercial, industrial, agrícola o minera. (Art. 76 se
aplicaba solo respecto de los deudores que ejercían una actividad comercial,
industrial, minera o agrícola, y el art. 74 se aplicaba a todo deudor).

d. Actos y contratos a título gratuito. Si la omisión hubiera sido total,


OCHAGAVÍA cree que esta no sería una causal de revocabilidad objetiva
hoy, pero el problema es que la omisión no es total.

“Tratándose de cualquier acto o contrato celebrado a título gratuito y de


los señalados en los números precedentes que se hayan celebrado con
Personas Relacionados a la Empresa Deudora, aunque se proceda por
interposición de un tercero, el plazo se ampliará a 2 años.”(art. 287 inc. 2
Ley Nº 20.720).

389
Este inc. 2 habla de que en ciertos y determinados casos cuando los
actos y contratosceden en beneficio de una persona relacionada se
extiende el plazo a 2 años. También hace referencia a los actos y
contratos celebrados a título gratuito, pero respecto de estos no hay una
causal de revocabilidad propiamente tal, sino que solo hay una
extensión del plazo.De este modo, se establece que se extenderá el
plazo de los actos y contratos gratuitos que beneficien a personas
relacionadas, pero no se establece ninguna causal que diga que los actos
y contratos a título se pueden revocar.

¿Se puede aplicar, en virtud del inc. 2 y una interpretación armónica de


la ley y de la justicia que debe imperar en el derecho, por analogía el
hecho de que esta sanción de revocabilidad objetiva se aplica a los actos
o contratos a título gratuito? De acuerdo a OCHAGAVÍA no se puede
porque las sanciones son de derecho estricto, y por ende, no se pueden
interpretar analógicamente. Él cree que no hay razón para darle lugar a
la revocabilidad objetiva respecto de los actos y contratos a título
gratuito.

¿Qué actos o contratos a título gratuito pueden dar lugar a revocabilidad


objetiva? Una donación, una condonación, constituirse como fiador o
codeudor solidario de una obligación o constituir una prenda o hipoteca
para garantizar una obligación ajena. Estos últimos son actos muy
complejos, especialmente hoy que existen grupos empresariales,
respecto de los cuales no es extraño que para otorgar un crédito a una
empresa del grupo se exija la garantía de alguien más. Ej. 2 situaciones:
en la situación 1 se otorga un crédito a C y B y A (accionistas indirectos
otorgan fianzas); la situación 2 es la misma, con la única diferencia que la
persona a la que se le otorga el crédito es A y quienes se constituyen

390
como fiadores son B y C. ¿Ambas fianzas son gratuitas para efectos de la
ley de quiebras? No, la situación 2 es gratuita, mientras que la situación
1, como la A y B son accionistas de C, recibirían indirectamente los
beneficios del crédito. (Es un caso en que B es accionista de C y A es
accionista de B).

Se tratan de causales de revocabilidadobjetiva por lo que dice el inc. 3 del


art. 287: “En las demandas que se deduzcan de conformidad a lo establecido
en el presente artículo, el juez deberá constatar si el acto ejecutado o el
contrato celebrado han tenido lugar dentro de los plazos señalados y si
responden a alguna de las descripciones previstas. Habiéndose constatado
la concurrencia de los requisitos anteriores, el tribunal dictará sentencia
acogiendo la acción revocatoria concursal interpuesta, salvo que el Deudor o
el tercero contratante acrediten que el acto ejecutado o el contrato
celebrado no produjeron perjuicio a la masa de acreedores. Todo lo anterior,
sin perjuicio de los recursos que procedan.”

Como se puede apreciar, el análisis que hace el tribunal se refiere a si


ocurrieron los hechos señalados en las causales, y de ocurrir, se debe dar
lugar a la causal. Empero, la parte final de este inc. 3 introduce un elemento
de distorsión que es que le concede al deudor o tercero contratante la
facultad de probar que el acto o contrato celebrado no produjo perjuicio a
la masa, aunque esto no atenta contra el carácter objetivo de las causales
porque se sigue prescindiendo del fraude pauliano, y se presume el
eventusdamni, siendo de cargo del deudor o tercero contratante probar que
no se produjo perjuicio a la masa de acreedores.

Siempre es necesario que hayan sido ejecutados o celebrados dentro del


plazo señalado por la ley, el cual es por regla general de un 1 año contado

391
desde de la resolución de liquidación, reorganización o de admisibilidad, o
bien si el acto o contrato ha sido celebrado o cede en beneficio de una
persona relacionada, el plazo será de 2 años. A este respecto la Ley Nº
20.720 simplificó de gran manera el régimen que existía bajo la antigua ley
de quiebras, la que elaborababajo el supuesto de que estos actos o
contratos debían celebrarsedurante el periodo sospechoso, que era el
periodo que corría desde la fecha de cesación de pagos del deudor hasta su
declaratoria en quiebra, pero el procedimiento para fijar la fecha de
cesación de pagos del deudor era de lo más discutible y complejo que
existía.

(b) Revocabilidad subjetiva. Las causales de revocabilidad subjetiva están


contempladas en el art. 288. Estas se refieren a la celebración de cualquier
otro acto o contrato ejecutado por la empresa deudora, pero bajo esta
hipótesis será necesario probar, en primer lugar, que quien contrató con la
empresa deudora tenía conocimiento del mal estado de sus negocios, es
decir, no se prescinde del fraude pauliano, el cual se requiere probar
respecto del tercero. También se requiere probar el eventusdamni, es decir,
el perjuicio a la masa o que el acto o contrato altere la posición de igualdad
que deben tener los acreedores en el concurso. Respecto del perjuicio a la
masa, la definición que da la ley atiende a que si el acto o contrato se
celebró en condiciones de equidad similares a las que habitualmente
prevalecían en el mercado a la época de haberse celebrado el contrato que
se revoca.

La ley no define cuando un acto o contrato altera la posición de igualdad


que deben tener los acreedores en el concurso. ¿Cuándo un acto o
contrato altera la posición de igualdad? Una hipótesis se da cuando se
constituye una prenda o hipoteca en favor de ese acto o contrato, y el plazo

392
de la revocabilidad subjetiva es de 2 años, por lo que una prenda o hipoteca
celebrada durante el segundo año que precedía a la resolución de
liquidación, reorganización o admisibilidad puede dar lugar a su
revocabilidad por una causal subjetiva. Pero, ¿qué otro acto puede dar lugar
a alterar la posición de igualdad que deben tener los acreedores en el
concurso? Con igualdad se refiere a ser todos acreedores del mismo grado,
por lo cual las hipotecas y prendas son un ejemplo claro. OCHAGAVÍA piensa
que esto se puede prestar para tratar de objetar actos por los cuales se dejó
de ser acreedor: pagos. Sin embargo, cree que esta interpretación es
totalmente errada.

Respecto de los actos y contratos en perjuicio de la masa, la ley clarifica que


solamente se considerarán para el valor de esos actos o contratos las
cantidades efectivamente pagadas al deudor. Hay 2 formas de mirar esta
norma: (1) no se ha pagado al deudor lo que al deudor se le adeuda; pero,
(2) ¿qué pasa si lo que ocurrió es que se compensó el crédito del deudor?
Esto es más complejo.

“Revocabilidad subjetiva. Serán también revocables todos aquellos actos


ejecutados o contratos celebrados por la Empresa Deudora con cualquier
persona, dentro de los dos años inmediatamente anteriores al inicio del
Procedimiento Concursal de Reorganización o de Liquidación, siempre que se
acredite en juicio la concurrencia de los siguientes requisitos:

1) Conocimiento del contratante del mal estado de los negocios de la


Empresa Deudora, y

2) Que el acto o contrato cause un perjuicio a la masa o altere la posición de


igualdad que deben tener los acreedores en el concurso. Se entenderá que

393
existe perjuicio cuando las estipulaciones contenidas en el acto o contrato se
alejen de las condiciones y precios que normalmente prevalezcan en el
mercado para operaciones similares a la época del acto o contrato.
Tratándose de la venta o permuta de activos, sólo se considerarán como
ingresos los montos efectivamente percibidos por la Empresa Deudora
producto de la transacción a la fecha de la interposición de la acción de
revocabilidad o el valor que el tribunal asigne respecto de los bienes dados
en permuta.”(art. 288).

El periodo sospechoso dentro del cual estos otros actos y contratos


debieron haberse celebrado para ser revocados por las causales de
revocabilidad subjetiva, es de 2 años contados desde la fecha de resolución
de liquidación, reorganización o admisibilidad.

(c) Modificaciones de pactos o estatutos sociales. Esto no estaba regulado


antes de la Ley Nº 20.720. OCHAGAVÍA interpreta esta norma diciendo que
solo se pueden revocar los pactos o estatutos sociales de dos sociedades: (i)
los dela empresa deudora; o (ii)modificaciones de los estatutos de las filiales
o coligadas de la empresa deudora que sean garantes de obligaciones de la
empresa deudora. Y unas u otras deben haber ocurrido dentro de los 6
meses anteriores al inicio del procedimiento concursal respectivo.

“Reformas a los pactos o estatutos sociales. Las reformas a los pactos o


estatutos sociales que se realicen dentro de los seis meses inmediatamente
anteriores al inicio del Procedimiento Concursal respectivo podrán ser
revocadas si importaren la disminución del patrimonio del Deudor.

Las reformas a los pactos o estatutos sociales que se realicen dentro del
plazo establecido en el inciso anterior que importaren la disminución del

394
patrimonio de las filiales y coligadas de la Empresa Deudora, cuando estas
últimas actúen como fiadoras o codeudoras solidarias del Deudor, le serán
inoponibles a quienes hubieren contratado con la Empresa Deudora con
anterioridad a dichas reformas.”(art. 289).

¿Qué modificaciones a los estatutos sociales de la empresa deudora pueden


producir un perjuiciopara los acreedores si importare una disminucióndel
patrimonio? Una disminución del capital social.

¿Qué modificación de los estatutos puede implicar la disminución del


patrimonio de una sociedad filial o coligada? Una disminución de capital.
Empero, ¿qué sentido tiene? ¿En una disminución de capital de la sociedad
filial o coligada quien recibe el dinero? Quienes sean los accionistas o socios
de esa sociedad; y si son filiales, mayormente la empresa deudora. Desde
esa perspectiva, a OCHAGAVÍA le parece que el perjuicio sería solamente
por la proporción de la disminución de capital que pueda deparar a manos
de tercero que no sea la empresa deudora, porque que el dinero esté en la
filial garante o en la empresa deudora, desde la perspectiva del deudor
debiera dar lo mismo. No obstante esto, la ley lo sanciona, y es más,
pareciera que cualquier acreedor de la empresa deudora está legitimado
activamente para ejercer esta acción y no solo el acreedor de la empresa
deudora que es beneficiario de la fianza o codeuda solidaria de la filial o
empresa coligada, lo que dice que es ridículo.

Cualquiera reforma de los estatutos sociales del deudor o de sus filiales o


coligadas que han garantizado obligaciones del deudor que impliquen una
disminución del patrimonio de unas u otras es revocable si ocurre dentro de
los 6 meses anteriores al inicio del respectivo procedimiento concursal.

395
(2) Legitimación activa.Está legitimado activamente cualquier acreedor, pero la ley
además establece la obligación para que el liquidador o el veedor las ejerza. En
la nueva ley, el art. 287 le establece la obligación al veedor o al liquidador de
ejercer estas acciones porque antes no era muy común que se ejercieran.

2. Persona deudora.

(1) Causales.Respecto de las causales, si bien la ley no distingue formalmente, si se


analiza el art. 290, este establece causales de revocabilidad objetiva, que serían
las mismas que las de la empresa deudora,de tal manera que, como dice el art.
290, si ocurre cualquiera de las 3 circunstancias del art. 287 dentro del plazo
que establece la ley, el tribunal debe revocar el acto o contrato, salvo que la
contraparte logre demostrar que no hubo perjuicio para la masa. Si bien las
causales son idénticas, respecto del pago anticipado no se hace mención a que
el descuento de documentos, efectos de comercio o facturas, o la renuncia del
plazo para después pagar son equivalentes al pago anticipado. OCHAGAVÍA cree
que no hay razón alguna para aplicar analogía entre los arts. 287 Nº 1 y 290 Nº
1, sino que el legislador estaba pensando en otra cosa distinta, y probablemente
es el hecho de que la persona deudora como tal es otro tipo de entidad a la que
no se quiere someter al estrés de si paga o no paga anticipadamente, si
renuncia o no al plazo.

Respecto de los otros actos o contratos, el art. 290 se refiere al art. 2468 CC.:

“Actos o contratos revocables celebrados por la Persona Deudora. Iniciados los


Procedimientos Concursales de Renegociación o de Liquidación de los Bienes la
Persona Deudora, los acreedores podrán deducir acción revocatoria concursal,
respecto de los siguientes actos ejecutados o contratos celebrados por la

396
Persona Deudora dentro del año inmediatamente anterior al inicio de estos
procedimientos:

1) Todo pago anticipado, cualquiera fuere la forma en que haya tenido lugar.

2) Todo pago de deudas vencidas que no sea ejecutado en la forma estipulada


en la convención. La dación en pago de efectos de comercio equivale a pago en
dinero.

3) Toda hipoteca, prenda o anticresis constituida sobre bienes del deudor para
asegurar obligaciones anteriormente contraídas.

Tratándose de cualquier acto o contrato celebrado a título gratuito y de los


señalados en los números precedentes que se hayan celebrado con Personas
Relacionadas a la Persona Deudora, aunque se proceda por interposición de un
tercero, el plazo se ampliará a 2 años.

En las demandas que se deduzcan de conformidad a lo establecido en el


presente artículo, el juez deberá constatar si el acto ejecutado o el contrato
celebrado han tenido lugar dentro de los plazos señalados y si responden a
alguna de las descripciones previstas. Habiéndose constatado la concurrencia de
los requisitos anteriores, el tribunal dictará sentencia acogiendo la acción
revocatoria concursal interpuesta, salvo que el Deudor o el tercero contratante
acrediten que el acto ejecutado o el contrato celebrado no produjeron perjuicio
a la masa de acreedores. Todo lo anterior, sin perjuicio de los recursos que
procedan.

Tratándose de otros actos ejecutados o de contratos celebrados a título


oneroso, con anterioridad al inicio del Procedimiento Concursal respectivo, se

397
estará a lo dispuesto en el artículo 2468 del Código Civil, presumiéndose que la
Persona Deudora conocía el mal estado de sus negocios antes del inicio del
Procedimiento Concursal respectivo.” (art. 290).

De este modo, es la acción revocatoria del CC. (art. 2468) pero se presume el
fraude pauliano respecto del deudor.Se trata del mismo plazo (un año) del CC.,
pero en este caso la revocabilidad subjetiva es un año contado desde el inicio
del procedimiento concursal.

(2) Legitimación activa.Cualquier acreedor.

Procedimiento: ¿Cuándo se ejerce la acción, dónde se ejerce y contra quienes se


ejerce? La ley dice respecto del cuándo se debe ejercer que es en el plazo de 1 año
contado desde la resolución de liquidación, reorganización o admisibilidad, y se ejerce
contra el deudor y el tercero que hubiere celebrado el acto o contrato que se pretende
revocar con el deudor, ante el tribunal que resulte competente conforme a las reglas
generales, y se tramita como juicio sumario.

“Plazo para la interposición de la acción y procedimiento. Las acciones a que se refieren


los dos Títulos precedentes deberán entablarse en el plazo de un año contado desde la
Resolución de Reorganización, de Liquidación o de Admisibilidad, según corresponda, y
se tramitarán con arreglo al procedimiento sumario, ante el tribunal que conoce o
debiera conocer de los referidos procesos.

Estas acciones se entablarán en el interés de la masa y se deducirán en contra del


Deudor y el contratante, si correspondiere. Para estos efectos, el Deudor ejercerá su
defensa en juicio, sin requerir la autorización o representación del Liquidador o Veedor.

398
Cuando fuere necesario asegurar las resultas de las acciones revocatorias impetradas,
el tribunal, de oficio o a petición de parte, podrá decretar las medidas cautelares sobre
los bienes que corresponda.”(art. 291).

¿Cuál es el tribunal competente cuando se ejerce una acción civil contra 2 o más
personas? El tribunal del domicilio de cualquiera de los demandados. Desde esa
perspectiva, si uno de los demandados es el deudor,no será necesariamente el tribunal
de la quiebra, sino que el del domicilio de cualquiera de ellos. Hay mucha discusión
respecto de si esta era una acción que debía acumularse al procedimiento concursal, en
el sentido de que si quedaba radicada en el juicio de quiebra o no. La ley aclaró que el
deudor es un demandado y que el liquidador puede ser un demandante, la defensa del
deudor le corresponde al mismo y no necesariamente la ejerce el mismo.

OCHAGAVÍA cree que hoy en día debiera entenderse que el tribunal competente para
conocer de estas accionesrevocatorias concursales es el tribunal ante el cual se está
tramitando ese procedimiento concursal.Así mismo lo entiende PUGA. La ley vino a
zanjar la discusión que existía antes, respecto a si era realmente competente el tribunal
según las reglas generales.

“Plazo para la interposición de la acción y procedimiento. Las acciones a que se refieren


los dos Títulos precedentes deberán entablarse en el plazo de un año contado desde la
Resolución de Reorganización, de Liquidación o de Admisibilidad, según corresponda, y
se tramitarán con arreglo al procedimiento sumario, ante el tribunal que conoce o
debiera conocer de los referidos procesos.”(art. 291 inc. 1).

Los referidos procesos son los de liquidación, reorganización o admisibilidad.

Son demandados tanto el tercero que contrató con el deudor como el deudor, y en
este caso el deudor comparece personalmente, no representado por el liquidador.

399
3. Efectos de la revocación. Si se revoca un acto o contrato, ¿qué debe ocurrir? La
sentencia que declara la revocación del acto o contrato, ¿qué debe establecer? Las
restituciones mutuas. Hasta la Ley Nº 20.720, se discutía sobre si el crédito
originado de las restituciones mutuas era un crédito de la quiebra o si por el
contrario era un crédito que se debía verificar en la quiebra.

25/10/2016
Respecto a la naturaleza jurídica de las acciones revocatorias, originariamente se
contempló que estas eran acciones de nulidad fundado particularmente en el
lenguaje utilizado por el art. 2468 del CC. cuando habla de rescisión. Luego, en la
Ley Nº 18.675 y particularmente producto de la última reforma que se le hizo a ella,
la gran mayoría de la doctrina sostenía que se trataban de acciones de
inoponibilidad. La Ley Nº 20.720 deja de hablar de inoponibilidad, con lo cual PUGA
piensa que se ha ratificado que la naturaleza jurídica de estas acciones es
revocatoria (OCHAGAVÍA no está tan de acuerdo porque no sabe de qué se trata
esta naturaleza “revocatoria”).

¿Qué debe ocurrir cuándo el tribunal declara la revocación? Si se está hablando de


un acto en virtud del cual se transfirió o se enajenó un bien, se debe restituir el
bien. ¿En qué estado? La ley nada señala, por lo que OCHAGAVÍA cree que se deben
aplicar las normas del CC. Él cree que se deben en el estado en que se encuentren.
Si lo que hizo el deudor es pagar anticipadamente o pagar una deuda distinta a la
convención, en ese caso la obligación es restituir el dinero que salió del patrimonio
del deudor, y OCHAGAVÍA cree que deberá ser reajustado por inflación.

En un caso en que el deudor enajenó su casa a un precio que no era el del mercado
y el comprador sabía del mal estado de los negocios del deudor, ¿qué se deberá
hacer? Habrá que devolver el precio. Si el acto o contrato era oneroso y la persona

400
que contrató con el deudor dio o hizo algo a cambio de lo que recibió, en ese caso
dicha persona tiene un crédito en contra del deudor. Durante mucho tiempo hubo
discusión acerca de si ese crédito era de la masa o bien era igual al de cualquier
otro acreedor del deudor. La Ley Nº 20.720 vino a solucionar esta cuestión,
diciendo que no solo es un crédito del deudor, en el sentido que es un acreedor
más que deberá verificar su crédito en los procedimientos de liquidación,
renegociación o reorganización según sea el caso, sino que además el pago de ese
crédito está subordinado hasta que se paguen íntegramente los créditos valistas. La
ley habla de posposición, no de subordinación, pero es el mismo efecto.

De esta manera, la ley sanciona al acreedor, y esta sanción es muy drástica porque
probablemente ese acreedor no se pagará de ninguna parte de su acreencia. A
OCHAGAVÍA no le parece que sea correcto en el caso de las causales de
revocabilidad objetiva, porque en este caso el acreedor no sabe o la ley no exige
que sepa el mal estado de los negocios del deudor. También cree que es muy
común que una persona pague antes de que venza el plazo o de una forma distinta
de la convención, ¿es un motivo para sancionar a los acreedores? A OCHAGAVÍA le
parece que no. Como “compensación”, la ley estableció una cosa muy curiosa: le
exige al juez que cuando revoque el acto o contrato declare cuál es la diferencia del
valor del acto o contrato que revoca y el valor que debía tener dicho acto o
contrato según las condiciones de mercado que prevalecían en ese momento.
Claramente la ley está pensando en los casos de revocabilidad subjetiva. ¿Para qué
exige la ley al juez que haga esto? Porque la ley le confiere a la contraparte del
deudor una opción: o (1) bien revocado el acto restituye lo que hubiere recibido del
deudor y se paga una vez que se hayan pagado todos los acreedores valistas del
deudor, u (2)optar por dejar subsistente el acto o contrato pagando la diferencia
que existía entre el valor de la transacción que él celebró o el valor que debió haber
tenido la transacción con las condiciones de mercados imperantes al momento de
celebrarse la transacción. Esta opción debe ejercerla dentro de los 3 días siguientes

401
de la fecha que se le solicite el cumplimiento incidental del fallo. Los demandantes
no pueden oponerse a la opción del tercero.

“Sentencia. La sentencia definitiva que acoja la demanda declarará la revocación


solicitada, ordenará la restitución y la práctica de las inscripciones y cancelaciones
que fueren pertinentes. Además, señalará en forma expresa el monto que el
tribunal estime correspondiente a la diferencia de valor entre el acto o contrato
revocado y el valor que considere prevaleciente en el mercado bajo similares
condiciones a las existentes a la época de dicho acto.

La parte condenada deberá restituir efectivamente la cosa a la masa y tendrá


derecho a la devolución de lo que hubiere pagado con ocasión del acto o contrato
revocado, debiendo verificar ese monto en el Procedimiento Concursal respectivo,
quedando pospuesto el pago hasta que se paguen íntegramente los créditos de los
acreedores valistas. Con todo, el demandado, dentro del plazo de tres días contado
desde la notificación del cumplimiento incidental del fallo, podrá acogerse al
beneficio de mantener la cosa en su patrimonio previo pago de la diferencia
señalada en el inciso anterior, debidamente reajustada, incluyendo los intereses
fijados por el juez, desde la fecha de celebración del acto o contrato hasta la fecha
del pago efectivo, una vez que la sentencia se encuentre firme o ejecutoriada.

El tribunal deberá practicar la liquidación de la suma a pagar inmediatamente


después de la dictación de la resolución que se pronuncia sobre el ejercicio de la
opción ya indicada. El demandado deberá efectuar el pago dentro del plazo de tres
días contado desde que el tribunal entregue la referida liquidación.

El demandante no podrá oponerse al ejercicio de ese derecho, salvo error de hecho


o meramente numérico del tribunal.

402
Si la parte condenada no restituyere la cosa o el valor que determine el juez, podrá
exigirse el cumplimiento forzado.

Para los efectos de la valoración de los bienes objeto de la acción, sólo será
admisible como prueba el informe de peritos.

Contra la sentencia definitiva sólo procederá el recurso de apelación, el que deberá


interponerse en el plazo de diez días contado desde la notificación del fallo. Dicho
recurso será concedido en ambos efectos y tendrá preferencia para su inclusión en
la tabla, su vista y fallo.”(art. 292).

No obstante ser un juicio sumario, este es uno de los casos en que la sentencia que
se dicta será apelable en ambos efectos.

Esta acción revocatoria no es necesario que sea ejercida junto con otra acción (ej.
Reivindicación). Esta es una acción que no requiere el ejercicio de otras acciones, como
podía ser el caso de las revocatorias civiles en caso de contrato simulado si se quería
hacer valer el contrato simulado.

Otra de las cosas que vino a aclarar la Ley Nº 20.720 es qué ocurre cuando la cosa en
cuestión ya no está en poder del tercero. ¿La acción revocatoria pasa o no pasa contra
terceros? Este tema fue muy discutido, y la nueva ley distinguió si los terceros tenían
conocimiento o no del mal estado de los negocios del deudor. Si el tercero que a su vez
adquiere la cosa enajenada del tercero que contrata con el deudor sabía del mal estado
de los negocios del deudor, entonces en ese caso también se puede ejercer la acción
revocatoria en su contra. OCHAGAVÍA cree que el conocimiento del mal estado de los
negocios del deudor no es el único elemento a tener en consideración, sino que
también se debe tener conocimiento de que a quien pertenecía el bien era al deudor
que tiene en mal estado sus negocios. Cree que el bien que está adquiriendo fue en

403
alguna época de propiedad de ese deudor, y que el que se lo vende lo compró de ese
deudor en condiciones que no eran las de mercado. Piensa que esta ley no aclara quien
sufre el perjuicio de la acción revocatoria, ello porque si se revoca el acto contra el
tercero, y este debe restituir a la masa, ¿contra quien tiene acción para recuperar lo
que dio por el bien? OCHAGAVÍA cree que debería tener acción contra su contratante
directo, y es ese contratante quien debiera verse expuesto a los efectos de obtener lo
que hubiera dado al deudor en el contrato revocado. Sin embargo, la ley nada dice.

“Efectos respecto de terceros. La revocabilidad concursal de los actos o contratos


afectará al contratante y terceros, cuando estos últimos conozcan el mal estado de los
negocios del Deudor al momento de ejecutar el acto o celebrar el contrato respectivo.
La sentencia definitiva que acoja la revocación de los actos o contratos que afecten a
estos terceros, determinará el valor de los bienes objeto de la revocación, para los
efectos del reintegro a la masa del bien o de su valor. Del mismo modo, dicha sentencia
ordenará la cancelación de la inscripción de los derechos del demandado vencido y la
de los terceros que corresponda y dispondrá la inscripción de reemplazo a nombre del
Deudor.”(art. 294).

La ley trato de solucionar un problema práctico que se daba en la historia de nuestro


derecho, que es el hecho de que estas acciones en general se ejercen muy pocas veces.
Así, la ley establece que el liquidador y el veedor deberán ejercerlas, pero además se
puso en otro caso: estableció normas sobre lo que se podría llamar como recompensa
respecto del acreedor que ejerce exitosamente una acción revocatoria concursal, y
señaló normas particulares respecto de las costas. De este modo, dispone que un
acreedor que no sea persona relacionada y que no haya adquirido su crédito con
posterioridad al inicio del procedimiento concursal respectivo y que decide ejercer una
acción revocatoria concursal, en el caso que tenga éxito tiene derecho a una
recompensa, es decir, en el caso que obtenga la revocación del acto o contrato, la
persona que era acreedor al momento del inicio del procedimiento concursal tiene

404
derecho a una recompensa, que es por lo menor entre el monto de su crédito y el 10%
del beneficio que el ejercicio de la acción revocatoria implique para la masa.

“Costas y recompensas. Los acreedores que no sean Personas Relacionadas con el


Deudor, que individualmente entablen las acciones revocatorias concursales en
beneficio de la masa y obtengan la revocación de actos o contratos por sentencia
definitiva firme o ejecutoriada tendrán derecho a que se les pague con los fondos de los
Procedimientos Concursales de Reorganización o de Liquidación todos los gastos del
respectivo juicio y los honorarios del abogado patrocinante, los cuales gozarán de la
preferencia del número 1 del artículo 2472 del Código Civil. Además, el acreedor
demandante tendrá derecho a que la sentencia definitiva le reconozca una recompensa
de hasta un 10% del beneficio que le reporte esta acción al patrimonio del Deudor o a la
masa. Dicha recompensa no podrá exceder al monto de su crédito verificado o
reconocido, según corresponda, y deberá fijarse en la referida sentencia definitiva,
señalando si será de cargo del Deudor o de la masa, en atención al Procedimiento
Concursal respectivo.

No tendrá derecho a recompensa el acreedor que hubiere adquirido su acreencia con


posterioridad al inicio del Procedimiento Concursal respectivo.” (art.293 inc. 1 y 2).

¿Cuál es el monto del beneficio que le reporte el ejercicio de esta acción al patrimonio
del deudor o a la masa a que se refiere el inc. 1 de este art.? Si se piensa en un ejemplo
en que en una venta de una casa que valía 1 millón, y se había vendido en 600 mil
pesos, y el tercero que contrató con el tercero optó por pagar el diferencial y pagó 400
mil. Si el tercero opta por restituir la cosa, la masa deberá restituirle, después de los
valistas, los 600 mil pagados; ¿el cálculo del beneficio de cuenta esos 600 mil o no?
Probablemente esos 600 mil no se paguen, por lo que OCHAGAVÍA cree que la ley
debió decir que no se debe considerar para efectos del cálculo del beneficio los 600 mil,
pero no lo hace la ley, de manera que hay un buen argumento para decirle al que

405
obtuvo la revocación y tiene derecho a la recompensa por consiguiente, que en uno u
otro caso tiene derecho al 10% de 400 mil, y que no tiene derecho al 10% de 1 millón,
aunque en justicia se debiera decir que tiene derecho al 10% de 1 millón puesto que
probablemente no se le paguen los 600 mil.

¿Cuándo se le paga a este tercero contratante en relación con las personas


relacionadas? La ley nada señala. Habrá una pugna por quien se paga en último lugar
entre estas personas y los que infrinjan el art. 57 Nº 1 letra c).

Respecto de las costas, la ley dice que cuando se ejerce una acción revocatoria
concursal siempre hay que condenar en costas. Si la acción se resuelve en favor del
demandante, este tendrá derecho a que se le pague el costo de su abogado y todos los
gastos del respectivo juicio, además de las costas que fije el tribunal. Por el contrario, si
se pierde la acción revocatoria, las costas deberán ser soportadas por el acreedor
demandante.

La ley estableció un procedimiento de que cuando un acreedor quiere ejercer estas


accionesdeberá avisar a la masa, para ver si la quiere ejercer ella o se contenta con que
la ejerza el acreedor.

“El acreedor que individualmente ejerciere acciones revocatorias en beneficio de la


masa deberá notificar al Liquidador o al Veedor correspondiente para que éste informe
a la Junta, dentro del plazo de 30 días desde que fuere notificado, a efectos que esa
instancia determine si se hace parte o no en la acción.

Si la acción fuere ejercida por el Liquidador o el Veedor, o por cualquier acreedor


mandatado al efecto por la Junta de Acreedores, los gastos que irrogue la sustanciación
de esta clase de acciones se considerarán gastos de administración del Procedimiento
Concursal respectivo. Asimismo, la sentencia que se pronuncie condenará en costas a la

406
parte vencida, salvo que el tribunal estimare la concurrencia de motivo plausible para
litigar. Si la parte vencedora fuere el demandante, corresponderá a quien hubiere
ejercido la acción perseguir el pago de las costas que fueren del caso. Si la parte
vencedora fuere el demandado, las costas que fuere pertinente solucionar serán
pagadas por la masa como gasto de administración del Procedimiento Concursal de
Liquidación y por el Deudor en un Procedimiento Concursal de Reorganización.

En el caso que el tribunal rechace por sentencia definitiva firme o ejecutoriada la acción
entablada, los demandantes soportarán los gastos del proceso y los honorarios de los
profesionales que intervinieron.”(art. 293 inc. finales).

e) Órganos del procedimiento concursal de liquidación.

1. Junta de acreedores.La Junta está definida en el art. 2 Nº 15 de la Ley Nº 20.720,


que la define como un órgano compuesto por todos los acreedores que forman
parte del procedimiento concursal:

“15) Junta de Acreedores: órgano concursal constituido por los acreedores de un


Deudor sujeto a un Procedimiento Concursal, de conformidad a esta ley. Se
denominarán, según corresponda, Junta Constitutiva, Junta Ordinaria o Junta
Extraordinaria, o indistintamente "Junta de Acreedores" o "Junta".”

Básicamente, entonces, la junta es un órgano, es más que la suma de los


acreedores del deudor sometido a un procedimiento concursal. Este órgano es
quien tiene una serie de funciones conforme a la ley, siendo una de las principales
la que señala el art. 207, que consiste en determinar la forma, los procedimientos,
las condiciones y los plazos como se realizarán los bienes del deudor.

407
“Principio general de realización ordinaria. La determinación de la forma de
realización de los bienes del deudor, sus plazos, condiciones y demás características,
corresponderá a la Junta de Acreedores.”(art. 207).

De este modo, la Junta es el órgano que, en principio, la ley declara soberano para
tomar una serie de decisiones, una de las cuales es el cómo se venderán los bienes
del deudor, en qué plazo y en qué condiciones.Ej. Decide si se procederá a la venta
inmediata de los bienes o se continuará con el giro del deudor.

Fundamentalmente la ley le encomienda a la junta esta decisión porque en


principio son estos acreedores los que se ven expuestos a las consecuencias de las
malas decisiones que se puedan tomar en relación con la realización de los bienes.
Empero, ¿son los acreedores los únicos afectados por una mala decisión de venta?
No, el propio deudor también se ve afectado, ello porque, por ejemplo, si los bienes
del deudor son muy valiosos y líquidos, puede ocurrir que no sean suficientes para
pagar toda la deuda si es que se venden mal, en instancias que hubieren alcanzado
sobradamente a pagar toda la deuda de venderse bien, y por consiguiente, no
quede nada para los accionistas del deudor. Por esto es que la ley restringe la
libertad que tiene la Junta para tomar decisiones de realización, porque entiende
que el deudor también se puede ver afectado por una mala decisión de venta,
también tiene interés.

¿Quiénes conforman la Junta de Acreedores?La definición de Junta se refiere a los


acreedores de un deudor sujeto a un procedimiento concursal, que son aquellos
que tenían la calidad de tales al momento de dictarse la resolución de liquidación,
reorganización o de admisibilidad. Ahora, ¿cuáles de esos acreedores tienen
derecho a voto? En primer lugar son aquellos cuyos créditos hubieren sido
reconocidos, es decir, aquellos que verificaron y su verificación fue aceptada –no se
objetó ni impugnó-. La ley también estableció un procedimiento para reconocerle

408
derecho a voto en una Junta de Acreedores a un acreedor que no había tenido aún
tenido su crédito por reconocido porque no llegó a tiempo, pero logró acreditar en
un procedimiento breve y sumario su calidad de acreedor y el monto de su crédito.
Este procedimiento está señalado en el art. 190.

“Del derecho a voto. Tendrán derecho a voto aquellos acreedores cuyos créditos
estén reconocidos y aquellos a los que se les haya concedido el derecho a votar de
conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo siguiente, aunque sus
créditos no estén reconocidos, hayan sido o no objetados o impugnados.”(Art. 189
Ley Nº 20.720).

Este procedimiento del art. 190 está diseñado para que en el día hábil
inmediatamente precedente a una Junta de acreedores, un acreedor pueda
obtener que el tribunal que conoce de ese procedimiento concursal le reconozca
derecho a voto y señale por qué monto tendrá derecho a voto. Esta audiencia se
celebra el día hábil precedente a la Junta de acreedores a las 15:00 horas para
conocer de esta solicitud, y en esta debe participar personalmente el liquidador, y
pueden participar otros acreedores (afecta su derecho a voto el hecho de que se le
reconozca el crédito a otro acreedor) y el deudor. El reconocimiento a derecho a
voto que se hace en esta audiencia especial es solo para una Junta de acreedores,
es decir, para la Junta que se va a celebrar el día hábil siguiente, no es permanente,
sino que sus efectos están limitados a esa Junta.

“Audiencia de determinación del derecho a voto. Corresponderá al tribunal


determinar el derecho a voto respecto de los acreedores indicados en el artículo
anterior cuyos créditos no estén reconocidos, debiendo sujetar su decisión a las
reglas siguientes:

409
1) Deberá celebrarse una audiencia el día inmediatamente anterior a la Junta de
Acreedores, ante el tribunal y en presencia del secretario, a la que asistirán el
Liquidador, el Deudor y los acreedores, estos dos últimos, si lo estiman pertinente.

2) La audiencia se celebrará a las 15:00 horas, horario que podrá ser modificado por
el tribunal, de oficio o a petición de parte.

3) La audiencia comenzará con la entrega de un informe escrito del Liquidador al


tribunal acerca de la verosimilitud de la existencia y monto reclamado de los
créditos no reconocidos. El informe se deberá referir especialmente a aquellos
créditos que estén en alguna de las circunstancias previstas en el artículo 188. El
Informe incluirá todos los créditos no reconocidos que se hubieren verificado hasta
el día inmediatamente anterior a dicha audiencia.

Del contenido del referido informe, el Liquidador será responsable de acuerdo a lo


señalado en el artículo 35.

4) A continuación, el tribunal oirá a aquellos acreedores que soliciten verbalmente


argumentar la inclusión o conservación de su propio crédito en el informe o bien la
exclusión de otros. No se admitirán presentaciones escritas para sustentar dichos
argumentos.

5) Acto seguido, el tribunal resolverá en única instancia, con los antecedentes


disponibles en dicha audiencia, los que apreciará de acuerdo a las normas de la
sana crítica, dejando constancia en el acta respectiva. Contra la resolución del
tribunal sólo procederá el recurso de reposición, que deberá ser interpuesto y
resuelto en la misma audiencia.

410
6) El acta indicará los acreedores y el monto concreto que gozará de derecho a voto
en la Junta a celebrar.

7) El reconocimiento de derecho a voto sólo producirá efectos para la Junta de


Acreedores en referencia y en nada limitará la libertad del Liquidador y de los
acreedores para objetar o impugnar el crédito y sus preferencias de acuerdo a esta
ley, ni la del tribunal para resolver la impugnación.

8) El Liquidador deberá asistir personalmente a las audiencias de determinación del


derecho a voto previas a la Junta Constitutiva y a la primera Junta Ordinaria de
Acreedores, pudiendo asistir su apoderado judicial a las restantes.”(art. 190).

Es solo para una Junta porque ese acreedor, en definitiva, no ha tenido su crédito
por reconocido, debe verificar su crédito y este ser susceptible de ser objetado o
impugnado. El art. 190 aclara que el pronunciamiento que tome el tribunal no lo
inhabilita para pronunciarse después sobre la verificación del crédito y las
eventuales impugnaciones que puedan deducirse respecto de esa verificación.

No tendrán derecho a voto en las Juntas (1) las personas relacionadas con el
deudor. La Ley Nº 20.720 contiene una norma que se refiere a los conflictos de
interés: pierden su derecho a voto respecto de aquellas materias en que tengan
conflicto de interés, (2) los acreedores en que ellos o su representante tenga
conflicto de interés con la decisión que va a tomar la Junta.

“Excepción y limitación al ejercicio del derecho a voto. Las Personas Relacionadas


con el Deudor no gozarán de derecho a voto, ni tampoco se considerarán en el
cálculo del respectivo quórum.

411
El acreedor o su mandatario que tengan un conflicto de interés o un interés distinto
del inherente a la calidad de acreedor del Deudor respecto de un determinado
acuerdo deberán abstenerse de votar dicho acuerdo y tampoco se considerarán en
el cálculo del respectivo quórum.” (art. 191).

Esta norma es curiosa porque un acreedor que tiene un conflicto de interés o un


interés distinto del inherente a la calidad deacreedor, respecto de determinado
acuerdo,debe abstenerse, es decir,no tiene derecho a voto, y se pueden concebir
transacciones o decisiones de la junta de acreedores que se presente ese caso: ej.
Pronunciamiento de la junta respecto de una acción revocatoria por el pago
anticipado de una deuda del deudor para un tercero, y este tercero ser todavía por
otra obligación o el monto no pagado acreedor del deudor, este tercero tiene un
conflicto de interés que lo inhabilita de votar. Este un ejemplo sencillo, pero hay
otros conflictos que pueden ser más difíciles de decidir, pudiendo la norma suscitar
problemas. OCHAGAVÍA cree que esta norma es errónea, e ignora por completo el
art. 1448 del CC. ya que exige que el acreedor o su mandatario tengan un interés
distinto del inherente a la calidad de acreedor o un conflicto de interés, esto porque
el interés del mandatario no importa en el análisis, puesto que el mandatario es un
mero instrumento, produce sus efectos en la persona del mandante. Desde esta
perspectiva, es completamente irrelevante la persona del mandatario, y no
obstante esto, la ley priva al acreedor de derecho a voto si su mandatario tiene un
conflicto de interés.

Otros acreedores que pueden verse afectados y perder su derecho a voto es


(3)quienes hubieren fraccionado sus créditos con posterioridad a la dictación de
resolución de liquidación, y se puede fraccionar el crédito por la vía de otorgar
distintos mandatos por parte de los créditos, o por la vía de hacer cesiones
parciales de los créditos.

412
“Prohibición de fraccionar los créditos. Se prohíbe fraccionar los créditos después de
dictada la Resolución de Liquidación y conferir mandato por una parte o fracción de
un crédito. El contraventor y los que representen las porciones del crédito perderán
el derecho a asistir a las Juntas de Acreedores. Todos los que hagan valer porciones
de un crédito fraccionado dentro de los treinta días anteriores al pronunciamiento
de la Resolución de Liquidación se contarán como una sola persona y emitirán un
solo voto, procediéndose en la forma establecida en el inciso final de este artículo.

Las disposiciones precedentes no serán aplicables al crédito dividido como


consecuencia de la liquidación de una sociedad, o de la partición de una comunidad
que no esté exclusivamente formada por dicho crédito.

El crédito perteneciente a una comunidad será representado sólo por uno de los
comuneros. Si no se acuerda la designación del representante, cualquiera de ellos
podrá solicitar tal designación al tribunal.”(art. 188).

Ahora, ¿por cuánto vota un acreedor? ¿Votan por cabeza? Hay quórums en que la
ley le adscribe importancia al número de acreedores, y ahí adquiere relevancia lo
dicho por el art. 188, pero la mayor parte de los quórums de la ley están
establecidos por el monto de los créditos, y desde esa perspectiva, a medida que
los créditos se van pagando durante el procedimiento de liquidación, el derecho de
voto de cada acreedor se va extinguiendo por los pagos que recibe.

“Participación de créditos pagados. Los acreedores no tendrán derecho a voto por


los créditos que hubieren sido totalmente pagados a causa de un reparto, de un
pago administrativo o por cualquier otra forma, incluso por un tercero. Si el pago
del crédito hubiere sido parcial, el acreedor tendrá derecho a voto sólo por el saldo
insoluto.”(art. 192).

413
Estos son los acreedores que tienen derecho a voto en la Junta de Acreedores, pero
la ley sin embargo, confiere derecho a voz a otras personas:

(1) El deudor.

(2) El liquidador.

(3) Todos los acreedores que hubieren verificado sus créditos, tengan o no
derecho a voto.

(4) La SUPERIR.

En general puede participar cualquier persona, aunque no tenga derecho a voto ni


a voz, ello porque las juntas de acreedores son públicas, y puede asistir cualquier
persona, salvo que por motivos fundados se restrinja su acceso.

“Asistencia y derecho a voz. Las Juntas de Acreedores serán públicas y el Liquidador


podrá disponer que, por razones de seguridad y previa autorización judicial, se
celebren sesiones con presencia limitada de público general.

Tendrán derecho a voz:

1) Todos los acreedores que hayan verificado sus créditos, tengan o no derecho a
voto.

2) El Liquidador.

3) El Deudor.

414
4) El Superintendente de Insolvencia y Emprendimiento, o quien éste designe.”(art.
182).

¿Cómo toman decisiones las juntas de acreedores? ¿Cómo se forma la voluntad


de este órgano? En primer lugar en sesiones, en una junta debidamente
constituida (sea la junta constitutiva, una junta ordinaria o una extraordinaria).
Estando debidamente reunida la junta de acreedores, ¿cómo toma decisiones?
¿Rige en estas juntas el principio mayoritario? Era absolutamente inviable exigir
unanimidad, y desde esa perspectiva, rige en estas juntas el principio mayoritario.
Existiendo un quórum de constitución, esa junta puede por regla general sesionar y
adoptar acuerdos por un quórum de mayoría. El quórum general de constitución de
una junta es de acreedores que representen el 25% de los créditos con derecho a
voto. El quórum para tomar decisiones por regla general es el de la mayoría del
pasivo con derecho a voto presente en una Junta de Acreedores.

“34) Quórum Simple: El conformado por la mayoría del pasivo verificado y/o
reconocido, según corresponda, con derecho a voto, presente en la Junta de
Acreedores, en el Procedimiento Concursal respectivo.”(art. 2 Nº 34).

“Del quórum para sesionar. Toda Junta de Acreedores se entenderá constituida


legalmente para sesionar si cuenta con la concurrencia de uno o más acreedores
que representen al menos el 25% del pasivo con derecho a voto, a menos que esta
ley señale expresamente un quórum de constitución distinto. Los acuerdos se
adoptarán con Quórum Simple, salvo que esta ley establezca un quórum
diferente.”(art. 181).

De este modo, el 12,5% de los acreedores podrían llegar a tomar las decisiones por
todos. Esto no es casual, sino que se contempló así porque la mayoría de los
acreedores tienen una tendencia muy alta a perder el interés en los procedimientos

415
concursales. La comisión se basó en un estudio que decía que los acreedores sólo
iban a recobrar el 25% de sus acreencias.

Los quórums diferentes a que se hace referencia en este art. son el quórum
calificado (mayoría absoluta del pasivo con derecho a voto) o el quórum especial
(2/3 del pasivo del pasivo con derecho a voto).

Las decisiones de una junta de acreedores ¿qué tipos de actos son? Son actos
jurídicos, son actos privados como los de una junta de accionistas o actos de
derecho público, o son actos jurídicos procesales. La pregunta no es vana porque
ello determinará como se podrá impugnar un acuerdo de una Junta de Acreedores.

26/10/2016
¿Qué tipo de acto jurídico es un acuerdo adoptado por la junta de acreedores?
Esta no es una pregunta meramente académica, porque en definitiva, dependiendo
de la conclusión a la que se llegue, debiera ser los mecanismos de impugnación que
se tengan en los casos en que un acuerdo de la Junta ha sido adoptado de forma
indebida. ¿Qué significa que un acuerdo se tome de forma indebida? Que, por
ejemplo, no se han cumplido con las formalidades de citación de la Junta, se
celebró la Junta en un lugar, hora y día diverso al que se citó, se tuvo constituida
una Junta donde no existía el quórum mínimo establecida en la ley, en la Junta
votaron acreedores que por la propia disposición de la ley no tienen derecho a
voto, se aprobó un acuerdo por el quórum distinto al señalado por la ley, etc. El
acuerdo lo querrán impugnar los acreedores, o también el deudor.

¿Es un acuerdo de derecho privado, es un acuerdo de derecho público o es un AJ


procesal? Si se considera que es un acto de derecho privado, se podría decir que es
un acto análogo a las decisiones adoptadas por las juntas de accionistas de las S.A.
Si es un AJ de derecho privado se podría pedir la nulidad de ese acto ante los

416
tribunales civiles (El que sea competente de acuerdo a las reglas generales) en un
procedimiento ordinario. Si se considera que es un AJ de derecho público, la
sanción sería la nulidad de derecho público, argumentando que es un acto
emanado de un procedimiento judicial, y que no debiera desde esa perspectiva
tener una diferencia con el acto emanado de un tribunal de justicia, de manera que
cuando el tribunal hace un acto indebido se aplica dicha nulidad. Si se considera
que es un AJ procesal, la nulidad de ese acto por regla general debe ser conocida
por el mismo tribunal que conoce de la causa o su superior jerárquico y dentro del
mismo procedimiento (in limine litis).

Para sostener que es un AJ procesal necesariamente se debe sostener que la Junta


es un órgano procesal o jurisdiccional. Algo referente a esto aduce la ley cuando
dice que es un órgano concursal, aunque no sea exactamente lo mismo.
OCHAGAVÍA cree que la manera correcta de concebir unaimpugnación de una
decisión adoptada por la Junta es dentro del mismo procedimiento. Está última es
la posición de PUGA: se trata de un AJ procesal que debe ser impugnado in limine
litis, ante el mismo juez que conoce del asunto y en el mismo procedimiento
concursal.

Los acuerdos son por regla general por mayoría simple, pero la ley establece otros
dos tipo de quórum:

(1) Quórum Calificado. Este es la mayoría absoluta del pasivo con derecho a voto,
es decir, no dice relación con los acreedores que estén presentes o
representados en la junta, sino que se requiere la mayoría del pasivo con
derecho a voto. Si en la Junta hay menos de la mayoría del pasivo con derecho a
voto, no hay quórum suficiente para adoptar la decisión.

417
“33) Quórum Calificado: El conformado por la mayoría absoluta del pasivo total
con derecho a voto verificado y/o reconocido, según corresponda, en el
Procedimiento Concursal respectivo.” (art. 2 Nº 33).

(2) Quórum Especial. Son los 2/3 del pasivo con derecho a voto.

“32) Quórum Especial: El conformado por dos tercios del pasivo total con
derecho a voto verificado y/o reconocido, según corresponda, en el
Procedimiento Concursal respectivo.”(art. 2 Nº 34).

De toda junta de acreedores debe levantarse una lista de asistencia y un acta de lo


tratado, discutido y acordado en el acta. La lista tiene por objeto saber quiénes
concurrieron y que quórum reunían. El acta tiene por objeto saber quién voto,
como voto y si en definitiva se reunieron los quórum especiales que señala la ley.

Si no se celebra una junta porque no hay quórum, el liquidador deberá certificar


esta circunstancia.

“Nómina de asistencia. Los acreedores que asistan a las Juntas de Acreedores que
se celebren con arreglo a este Párrafo deberán suscribir la correspondiente nómina
de asistencia que al efecto proporcione el Liquidador, indicando su nombre
completo o razón social y la individualización del apoderado que asiste en su
representación, en su caso. Igual deber pesará sobre el Deudor.”(art. 183).

“Del acta y su publicación. De todo lo obrado en la Junta de Acreedores, incluyendo


acuerdos adoptados y propuestas desestimadas, se levantará un acta, la que
deberá ser suscrita por el Liquidador, el Deudor si lo estimare y los acreedores que
para ello se designen en la misma Junta de Acreedores. Dicha acta será publicada al
día siguiente por el Liquidador en el Boletín Concursal.” (art. 184).

418
“Certificado de no celebración de la Junta de Acreedores. En caso que no se
celebrare una Junta de Acreedores por falta de quórum, el Liquidador certificará
dicha circunstancia y deberá publicar el correspondiente certificado en el Boletín
Concursal al día siguiente de aquel en que la Junta debió celebrarse.”(art. 185).

La Ley Nº 20.720 incluyó una norma (art. 186) que le otorga gran poder al
liquidador, que es la facultad que tiene este de suspender una Junta cuando, por la
abstención de uno o más acreedores, no se esté logrando o no se logre en la Junta
el quórum necesario para adoptar un acuerdo. La ley le permite al liquidador
suspender la Junta para que esta se reanude en una nueva fecha (segundo día hábil
siguiente a la fecha de la Junta que se haya suspendido, a la misma hora y en el
mismo lugar, salvo que por quórum simple se acuerde lo contrario). En esta nueva
Junta se presume de derecho que se mantiene quórum de asistencia de la junta
suspendida, no se pueden modificar los acuerdos que se tomaron, y en definitiva
quienes se abstuvieron la vez anterior tendrán que decidir si votar a favor o en
contra, pero si se abstienen de votar nuevamente o no asisten a la nueva junta, se
entenderá que votan a favor de la posición mayoritaria.Está facultad bien usada le
permitirá al liquidador aprobar acuerdos en casos en que en realidad no existía el
quórum suficiente.

“Suspensión y reanudación de Juntas de Acreedores. En caso que durante cualquier


Junta de Acreedores no se adoptasen uno o más acuerdos en razón de las
abstenciones de los acreedores presentes con derecho a voto, el Liquidador podrá, a
su sólo arbitrio, suspender la Junta de Acreedores una vez tratadas y votadas las
respectivas materias, a efectos de lograr los quórum legales para adoptar tales
propuestas.

419
La Junta suspendida se reanudará al segundo día en el mismo lugar y hora,
pudiendo en todo caso fijarse otro distinto por Quórum Simple. En caso que el
Liquidador haga uso de esta facultad se observarán las reglas que siguen:

1) Los acreedores se entenderán legalmente notificados de la fecha, hora, lugar y


materias de la Junta que se reanudará, por el sólo ejercicio de la facultad prevista
en este artículo.

2) Se levantará acta de lo obrado hasta el momento de la suspensión, según lo


previsto en el artículo 184, dejándose constancia del ejercicio de la facultad de
suspensión por parte del Liquidador, así como del porcentaje de votación favorable
que hubieren alcanzado el o los acuerdos no adoptados en razón de las
abstenciones de los acreedores presentes.

3) Los acuerdos que se hubieren adoptado antes de la suspensión no podrán ser


modificados o alterados en la Junta de Acreedores reanudada y deberán ejecutarse
conforme a las reglas generales, salvo que los mismos acreedores y por las mismas
acreencias que concurrieron con su voto consientan en modificarlo o dejarlo sin
efecto.

4) En la Junta de Acreedores reanudada se presumirá de derecho la mantención del


quórum de asistencia existente al momento de la suspensión.

5) Si los acreedores que se abstuvieron de votar un determinado acuerdo antes de


la suspensión de la Junta de Acreedores no asistieren a la reanudación de la misma
o si, asistiendo, se abstuvieren nuevamente de votar, se adicionará de pleno
derecho su voto a la mayoría obtenida para ese acuerdo, consignada en el acta a
que se refiere el número 2) precedente.

420
6) Se levantará una nueva acta de lo tratado en la Junta de Acreedores reanudada,
la que deberá ser suscrita por el Liquidador y los acreedores asistentes, y se estará a
lo dispuesto en el artículo 184.” (art. 186).

Los acreedores pueden comparecer personalmente o representados por un


mandatario. Si la Junta se celebra ante el tribunal (ej. Junta constitutiva) ese
mandato debe cumplir con lo señalados en los arts. 6 y 7 del CPC.Por el contrario,
en cualquierotra Junta, el mandato debe ser conferido por un instrumento público
o privado, y si es privado debe ser autorizado por el secretario del tribunal o por un
ministro de fe. El mandato debe ser conferido por todo el crédito de esa persona, y
no puede fraccionarse. Este mandato le otorga al mandatario las mismas facultades
que tenía el mandante, prescindiéndose de cualquier estipulación en contrario.

Si se tienen 3 créditos: por servicios legales que se prestó a una persona, un


préstamo que se otorgó a la misma persona, y por una casa vendida a plazo a la
misma persona, ¿El mandato que se confiere debe ser por los 3 créditos? ¿la
prohibición de fraccionamiento es por crédito o por acreedor? OCHAGAVÍA cree
que el tenor del art. da para pensar que es por crédito, de manera que en ese caso
se podrían otorgar 3 mandatos distintos por cada uno de los créditos que se tienen,
ello porque los créditos son distintos en su causa, y no se está fraccionando nada.

“Mandato para asistir a Juntas de Acreedores. La asistencia de los acreedores y del


Deudor a las Juntas de Acreedores que se celebren podrá ser personal o a través de
mandatario. A las Juntas de Acreedores que se celebren ante el tribunal, los
acreedores deberán comparecer debidamente representados conforme a lo
dispuesto en los artículos 6º y 7º del Código de Procedimiento Civil.

421
El mandato deberá constar en instrumento público o privado y, en este último caso,
la firma del mandante deberá ser autorizada por el secretario del tribunal
competente o por un ministro de fe.

Se entenderá que el mandatario tiene idénticas facultades que las de su mandante y


se tendrá por no escrita cualquier limitación que hubiere podido establecerse en el
mandato. El mandatario podrá votar todos los acuerdos que sean presentados en
cada una de las Juntas de Acreedores que se celebren.

Se prohíbe otorgar mandato para asistir a Juntas de Acreedores a más de una


persona, salvo para el caso de su reemplazo, pero un mismo mandatario puede
serlo de uno o más acreedores.” (art. 187).

La ley reconoce 3 tipos de juntas:

(1) Junta Constitutiva. Primera Junta que se celebra. Esta ha recibido en la ley un
tratamiento especial atendida su importancia. De hecho, la propia resolución de
liquidación fija el día, hora y lugar en que debe celebrarse esta Junta (art. 129
Nº 10).

Por ley se debe celebrar el trigésimo segundo día siguiente al de la publicación


de la resolución de liquidación en el Boletín Concursal. Por regla general se
celebrará en las dependencias del tribunal, salvo que la resolución de
liquidación haya señalado otra cosa, a la hora señalada por dicha resolución.

“De la Junta Constitutiva. Es la primera Junta de Acreedores que se celebra una


vez iniciado el Procedimiento Concursal de Liquidación. Tendrá lugar al
trigésimo segundo día contado desde la publicación en el Boletín Concursal de la
Resolución de Liquidación y se realizará en las dependencias del tribunal o en el

422
lugar específico que éste designe, a la hora que la misma resolución fije.”(art.
193).

En caso que no se reúna el quórum, una de las peculiaridades que tiene ña


Junta constitutiva es que por leyse procede inmediatamente y de pleno derecho
a considerar citados a los acreedores para el segundo día siguiente a la fecha
para la cual se había citado a la Junta constitutiva. En esta junta constitutiva,
cuando la primera no se pudiera celebrar por falta de quórum, la ley dice que
constituyen quórum los acreedores que asistan, cualquiera sea el porcentaje de
los créditos que representen. Esta segunda citación no requiere citación alguna
y se produce de cierta forma de pleno derecho.

“Segunda citación a la Junta Constitutiva. En caso de no celebrarse la Junta


Constitutiva por falta del quórum necesario para sesionar, ésta deberá
efectuarse el segundo día, a la misma hora y en igual lugar. El secretario del
tribunal deberá dejar constancia de esta situación en el acta que se levante y
desde entonces los acreedores se entenderán legalmente notificados de esa
segunda citación. La Junta así convocada se tendrá por constituida y se
celebrará con los acreedores que asistan, adoptándose las decisiones con
Quórum Simple de los presentes, sin perjuicio de las materias que exijan quórum
distintos.”(art. 194).

¿Qué pasa si en la segunda citación no concurre nadie? La ley dice que se


entienden adoptados ciertos acuerdos, que son los listados en el art. 195, y uno
de los principales de ellos es la ratificación del liquidador titular y suplente
provisionales. Se le encarga a este liquidador ratificado por doble inasistencia
publicar en el Boletín Concursal el certificado de que nadie concurrió a la junta,
se ratificó su nombramiento, y publicar las fechas y horas en que quiere

423
celebrar las juntas ordinarias, y el listado de los bienes del deudor con la cuenta
que a él corresponda.

“Inasistencia de acreedores en segunda citación. Si en la segunda citación no


asiste ningún acreedor con derecho a voto, el secretario del tribunal certificará
esta circunstancia, produciéndose los siguientes efectos, sin necesidad de
declaración judicial:

1) Los Liquidadores, titular y suplente provisionales, se entenderán ratificados


de pleno derecho en sus cargos, asumiendo ambos la calidad de definitivos, sin
perjuicio de la facultad prevista en el artículo 200 de esta ley.

2) El Liquidador publicará en el Boletín Concursal, dentro de tercero día contado


desde aquel en que la Junta de Acreedores en segunda citación debió
celebrarse, lo siguiente:

a) Una referencia a la certificación practicada por el secretario del tribunal,


indicada en el encabezamiento de este artículo.

b) La cuenta sobre el estado preciso de los negocios del Deudor, de su activo y


pasivo y de la labor por él realizada.

c) El lugar, día y hora en que se celebrarán las Juntas Ordinarias, que el mismo
Liquidador fijará.

3) El Liquidador dará inicio al procedimiento de liquidación simplificada o


sumaria.”(art. 195).

424
Entonces la Junta constitutiva tiene normas especiales respecto de (i) su
quórum y citación. También la Junta constitutiva tiene normas especiales
respecto (ii) del lugar en el que se celebra, quien la preside y quien actúa como
secretarioporque está Junta por regla general, y salvo que en la resolución de
liquidación se señale lo contrario, se celebrará en el tribunal, y va a ser presidida
por el juez, actuando en ella como secretario el secretario del tribunal.Por lo
mismo, el acta que se levante de la junta será firmada por el juez, el secretario,
el liquidador,el deudor si hubiere comparecido y quisiere firmar y los
acreedores que hubieren comparecido y quisieren firmar. El acta se incorporá
en el expediente del tribunal, debiendo publicarse en el Boletín Concursal.

“Formalidades de la Junta Constitutiva. La Junta Constitutiva será presidida por


el juez que esté conociendo del Procedimiento Concursal de Liquidación y
actuará como ministro de fe el secretario del tribunal. De los puntos tratados,
los acuerdos adoptados y demás materias que el tribunal estime pertinentes
deberá dejarse constancia en un acta que será firmada por el juez, el secretario,
el Liquidador, los acreedores que lo soliciten y el Deudor, si así lo decide. Una
copia autorizada de dicha acta será agregada al expediente, publicada en el
Boletín Concursal dentro del tercer día siguiente de levantada, e incorporada al
libro de actas que llevará el Liquidador.”(art. 197).

Otra característica particular de esta junta se refiere a(iii) cuales son las
materias que le corresponde tratar, y que están listadas en el art. 196:

(a) La primera de ellas corresponde a la ratificación del liquidador titular y


suplente provisionales, o bien la designación de un liquidador titular y
suplente distinto al provisional, debiendo, en caso que se designe una
persona distinta, el liquidador provisional hacer entrega de su cargo y de los

425
bienes del deudor que tenga en su custodia, al nuevo liquidador,
levantándose él acta respectiva.

(b) El liquidador provisional debe rendir cuenta a los acreedores, sea ratificado
o no. Esta rendición deberá referirse a lo menos a 3 materias:

a. Real estado de los negocios del deudor, el cual puede o no coincidir con
lo que el deudor haya señalado hasta esa fecha, o lo que los acreedores
han señalado hasta ese fecha si la liquidación fue solicitada por uno de
ellos;

b. La situación de los activos y pasivos del deudor, para que los


acreedores puedan tener una idea de cómo les irá en el procedimiento;

(c) Elección de un presidente y de un secretario tanto titulares como


suplentes de entre los acreedores con derecho a voto. Estos presidirán y
actuarán como secretarios en las juntas ordinarias y extraordinarias que se
celebren con anterioridad.

(d) Debe fijarse el día, hora y lugar en que se celebrarán las juntas ordinarias,
las que la ley ha exigido que se celebren a lo menos semestralmente.

(e) Un plan o propuesta de enajenación y liquidación de los bienes de la


empresa deudora, que pueden incluso incluir la proposición de continuar
el giro.

(f) Cualquier otro acuerdo que corresponda y que sea útil para estos efectos.

426
“Materias de la Junta Constitutiva. La Junta Constitutiva tratará las siguientes
materias:

1) El Liquidador titular provisional deberá presentar una cuenta escrita, la que


además expondrá verbal y circunstanciadamente, acerca del estado preciso de
los negocios del Deudor, de su activo y pasivo, y de la gestión realizada,
incluyendo un desglose de los gastos incurridos a la fecha. Asimismo, deberá
informar si los activos del Deudor se encuentran en la situación prevista en la
letra b) del artículo 203.

2) La ratificación de los Liquidadores titular y suplente provisionales, o bien, la


designación de sus reemplazantes. Los Liquidadores que no hubieren sido
ratificados continuarán en sus cargos hasta que asuman sus reemplazantes.
Dentro de diez días contados desde la nueva designación deberá suscribirse
entre el Liquidador no ratificado y el que lo remplace un acta de traspaso en que
conste el estado preciso de los bienes del Deudor y cualquier otro aspecto
relevante para una adecuada continuación del Procedimiento Concursal de
Liquidación. En el mismo plazo deberán entregarse todos los antecedentes,
documentos y otros instrumentos del Deudor que se encuentren en poder del
Liquidador no ratificado. Una copia del acta antes indicada deberá ser remitida
a la Superintendencia.

3) La determinación del día, hora y lugar en que sesionarán las Juntas


Ordinarias. Éstas deberán tener lugar al menos semestralmente.

4) La designación de un presidente titular y uno suplente y un secretario titular y


uno suplente, de entre los acreedores con derecho a voto o sus representantes,
para las futuras sesiones.

427
5) Un plan o propuesta circunstanciada de la realización de los bienes del
Deudor, la estimación de los principales gastos del Procedimiento Concursal de
Liquidación y la continuación de las actividades económicas, de conformidad a
lo previsto en el Título 4 de este Capítulo, en los casos que proceda.

6) Cualquier otro acuerdo que la Junta estime conducente, con excepción de


aquellos que recaigan sobre materias propias de Juntas Extraordinarias.”(art.
196).

Este art. da una idea de los pocos involucrados que están los acreedores con el
procedimiento concursal de liquidación. Si la ley da la opción de que las juntas
ordinarias se puedan celebrar semestralmente, entonces da cuenta del poco
compromiso de los acreedores y su lejanía con lo que ocurre, debiendo confiar
en la gestión del liquidador. Esto se ratifica aún más en las juntas ordinarias.

(2) Juntas ordinarias.Estas se celebran en el día, hora y lugar en que se haya


celebrado por la Junta Constitutiva o lo que el liquidador haya determinado
según el art. 195 letra c) cuando la Junta constitutiva no se ha podido realizar
por no haber quórum en primera citación y no concurrir ningún acreedor en
segunda citación.

Son presididas por el presidente titular o suplente y actúa como secretario el


secretario titular o suplente elegidos en la junta constitutiva.

Respecto de la primera Junta ordinaria el legislador ha señalado ciertas materias


que es necesario tratar, y especialmente si no han sido tratadas en la Junta
Constitutiva:

428
(a) El liquidador debe rendir cuenta del estado de los negocios del deudor y
de su activo y pasivo, incluyendo cualquier variación que haya ocurrido
desde la Junta Constitutiva.

(b) Propuesta de realización de los bienes del deudor: cómo se van a vender.

(c) Estimación de los principales gastos en que se va a incurrir.

Una cosa importante que puede ocurrir en esta primera junta es que tanto el
liquidador, como el deudor, como el presidente, como cualquier acreedor
concurrente con derecho a voto puede proponer la continuación del giro del
fallido.Con esto la empresa continúa operando tal como venía operando, y
continúa la explotación del giro del deudor. Una propuesta que puede hacer
sentido es continuar el giro para, por ejemplo, continuar la producción.

Los acreedores pueden decidir no volverse a reunir en Junta ordinaria, salvo que
el liquidador los cite especialmente a Junta Ordinaria en los términos del art.
198:

“De la Primera Junta Ordinaria. Son materias obligatorias a tratar en la Primera


Junta Ordinaria, si éstas no se hubieren acordado en la Junta Constitutiva, las
siguientes:

1) El informe acerca del activo y pasivo del Deudor, especialmente las


variaciones que hubieren experimentado desde la Junta Constitutiva, que el
Liquidador deberá presentar por escrito y explicar verbalmente;

2) El plan o propuesta circunstanciada de realización de los bienes del Deudor, y

429
3) La estimación de los principales gastos del Procedimiento Concursal de
Liquidación.

También podrá tratarse y acordarse, a proposición del Liquidador, del Deudor o


de cualquier acreedor asistente con derecho a voto, la continuación de
actividades económicas, de conformidad a lo previsto en el Título 4 de este
Capítulo.

Asimismo, los acreedores podrán acordar, con Quórum Especial, la no


celebración de Juntas Ordinarias por un período determinado, o bien, su
celebración por citación expresa del Liquidador o de acreedores que representen
a lo menos el 25% del pasivo con derecho a voto. En estos casos, el Liquidador
procederá de acuerdo al artículo 48 y no será necesario otorgar el certificado a
que se refiere el artículo 185.”

(3) Juntas extraordinarias.Como de alguna manera parecieran que van a haber


pocas juntas ordinarias, el legislador contempla la posibilidad de que hayan
Juntas Extraordinarias, y es extremadamente amplio tanto en las personas que
pueden solicitar que se cite a Junta Extraordinaria, como en las materias que
pueden tratarse en estas juntas.

¿Quiénes pueden citar a Junta Extraordinaria?

(a) El liquidador.

(b) El Tribunal.

(c) La SUPERIR.

430
(d) Junta Ordinaria por quórum simple.

(e) Acreedores que representen a lo menos el 25% del pasivo con derecho a
voto.

Cualquiera de estas personas puede exigir alliquidador que se cite a junta


extraordinaria, para que se conozca cualquier materia de conocimiento de una
junta de acreedores. La ley exige juntas extraordinarias en ciertos y
determinados casos:

(a) Si se quiere revocar a los liquidadores titulares y suplentes definitivos;

(b) Presentarse o pronunciarse sobre un acuerdo de reorganización que tenga


por objeto dejar sin efecto la liquidación;

(c) Celebrar contrataciones especializadas en los términos del art. 41 de la Ley


Nº 20.720;

(d) Si el liquidador requiere de un anticipo de fondos para llevar a cabo la


liquidación.

“Materias de Juntas Extraordinarias. Son materias de Juntas Extraordinarias las


solicitadas por el o los peticionarios señalados en el artículo anterior. Además,
serán materias exclusivas de Juntas Extraordinarias las siguientes:

1) La revocación de los Liquidadores titular y suplente definitivos.

431
2) La presentación de proposiciones de Acuerdos de Reorganización Judicial en
los términos del Capítulo III y del Párrafo 5 del Título 5 del Capítulo IV de esta
ley.

3) Los acuerdos sobre contrataciones especializadas previstas en el artículo 41


de esta ley.

4) Los anticipos de honorarios que solicite el Liquidador durante el


Procedimiento Concursal de Liquidación, de acuerdo a lo establecido en el
artículo 39 de esta ley.”(art. 200).

Cualquiera de estas personas pueden exigirle al liquidador que cite a una junta
de acreedores. ¿Cuándo tiene lugar la junta de acreedores? En el caso que el
tribunal o la SUPERIR se lo exija, en la fecha en que el tribunal o la SUPERIR lo
exija; cuando lo hace la junta ordinaria, en la fecha fijada en la junta ordinaria;
cuando lo hace el liquidador, cuando él diga; cuando lo hacen los acreedores, en
la fecha en que esos acreedores negocien o acuerden con el liquidador, y a falta
de acuerdo,en la fecha en que esos acreedores lo exijan.

La junta extraordinaria se va a citar por un aviso en el Boletín Concursal, y la


fecha en la que se realice debe ser a lo menos 3 días contados desde la
publicación del aviso en el Boletín Concursal. Este es un plazo bastante inferior
al de, por ejemplo, la citación a la junta de accionistas.

“Formalidades de la citación a Junta Extraordinaria. El peticionario deberá


requerir por escrito al Liquidador la citación a Junta Extraordinaria, acreditando
el cumplimiento de los requisitos señalados en el artículo 199. Si el peticionario
es el juez o la Superintendencia, bastará cualquier medio idóneo de
comunicación al Liquidador. En el requerimiento que se presente al Liquidador

432
deberá precisarse las materias a tratar en la Junta Extraordinaria y en ésta sólo
podrán discutirse y decidirse tales materias. En cuanto a la determinación de
día, hora y lugar se seguirán las reglas siguientes:

1) Si el requirente es el tribunal o la Superintendencia, se estará a la fecha que


éstos fijen, debiendo el Liquidador disponer los medios que permitan su
celebración.

2) Si el requirente es uno o más acreedores que representen al menos el 25% del


pasivo con derecho a voto, se estará a la fecha que de común acuerdo fijen con
el Liquidador. En caso de desacuerdo, se estará a lo señalado por el o los
requirentes.

3) Si la decisión ha sido adoptada en Junta Ordinaria de Acreedores, el acuerdo


deberá indicar la fecha de celebración de la Junta Extraordinaria, debiendo el
Liquidador ajustarse a dicha decisión.

El Liquidador deberá publicar la citación a la Junta Extraordinaria de Acreedores


en el Boletín Concursal al día siguiente a la solicitud, adjuntando copia de la
solicitud que se le haya presentado.

La Junta deberá celebrarse transcurridos a lo menos tres días desde la


publicación de la citación por el Liquidador en el Boletín Concursal.”(art. 201).

En la Junta extraordinaria pueden solamente tratarse aquellas materias para las


cuales fue citada, no tienen competencia general. Esto porque el acreedor es
libre de haber tomado la decisión de no asistir porque le parecía poco relevante
la materia a ser discutida.

433
2. Comisión de acreedores.La Ley Nº 20.720 incorpora esta nueva institución que
había sido usada hace mucho tiempo pero recién adquiere reconocimiento legal.
Solo tiene un solo art. referido a ella, y PUGA dice que la regulación es menos que
feliz.

“Comisión de acreedores. La Junta de Acreedores podrá acordar, con Quórum


Calificado, la constitución de una Comisión de Acreedores, para los efectos de
adoptar los acuerdos que se comprendan dentro de la órbita de su competencia con
validez general. Su composición, facultades, duración y procedimientos aplicables
serán determinados por la propia Junta de Acreedores, con el mismo quórum
anterior.”(art. 202).

En primer lugar está es una decisión que se toma en la Junta de Acreedores por un
Quórum Calificado. El tenor de este art. da para pensar que de alguna manera la
Junta ordinaria podría delegar todas sus atribuciones en la comisión de acreedores
y de conocer todas sus materias propias, e investirla así de un poder prácticamente
omnímodo que lleve a hacer completamente irrelevante la Junta de Acreedores.
PUGA dice que en un país como Chile los grandes acreedores de un procedimiento
concursal de liquidación son en primer lugar, por regla general los bancos, los que
se topan recurrentemente en este tipo de procedimientos; en segundo lugar, los
grandes proveedores. Dice entonces, que podría darse que el quórum calificado se
de exclusivamente por los bancos y por los grandes proveedores, pudiendo delegar
en la comisión de acreedores todas las atribuciones y las materias de conocimiento
de la junta ordinaria, haciéndola irrelevante, a la vez que les quita a los acreedores
minoritarios la oportunidad de participar. OCHAGAVÍA está de acuerdo con este
argumento pero piensa que igualmente los pequeños acreedores tienen poco para
influir en este procedimiento, por lo que serán los primeros en perder interés.

3. Tribunal.

434
4. Liquidador.

27/10/2016
f) Determinación del pasivo.La resolución de liquidación implica, entre otras cosas, la
suspensión de los derechos individuales de ejecución de los acreedores. Se ha
cuestionado si por esto quedan indefensos o si por el contrario estas personas tienen
algún derecho, y la verdad es que tienen TODOS los derechos, pero ya no en una
ejecución individual, sino que en un procedimiento de liquidación, lo que muchos
estiman es un proceso de ejecución colectiva.

Respecto a esto, en la resolución de liquidación, de acuerdo a lo dispuesto en losNºs7 y


8 del art. 129, existe la obligación de notificar a los acreedores del deudor para que
verificaran sus créditos:

“Resolución de Liquidación. La Resolución de Liquidación contendrá, además de lo


establecido en los artículos 169 y 170 del Código de Procedimiento Civil, lo siguiente:
7) La orden de informar a todos los acreedores residentes en el territorio de la
República que tienen el plazo de treinta días contado desde la fecha de la publicación
de la Resolución de Liquidación, para que se presenten con los documentos
justificativos de sus créditos bajo apercibimiento de ser afectados por los resultados del
juicio sin nueva citación.

8) La orden de notificar, por el medio más expedito posible, la Resolución de Liquidación


a los acreedores que se hallen fuera del territorio de la República”.

Si bien no lo señala, se debiese considerar que respecto de los acreedores fuera de la


república (Nº 8) también se producen los efectos que se señalan en el número 7.

435
Verificación de créditos.Laforma en que un acreedor se presente a un proceso de
liquidación para hacer efectivo sus créditos es mediante la verificación de créditos.
Básicamente el acreedor tiene que comparecer a verificar su crédito bajo
apercibimiento de ser afectado por sus resultados sin nueva citación.

Resulta novedoso este apercibimiento, ello ya que en una demanda civil lo normal es
que si el demandado siendo citado no comparece, se declare en rebeldía y se entiende
que contradice todas las afirmaciones; en el juicio ejecutivo se procede a la ejecución
sin previa discusión; pero ¿cuál es el efecto en este caso?El objetivo fundamental del
procedimiento concursal de liquidación es pagarle a los acreedores a través de la venta
de los bienes del deudor, cuyo producto se repartirá entre los acreedores: se va
liquidando y en la medida en que hay fondos suficientes para realizar un reparto
interesante, se le entrega a los acreedores.

En definitiva, lo que quiere decir la ley con esto que le afectarán los resultados del
juicio, es que si una persona comparece tardíamente a verificar, todos los repartos que
se hubieren efectuado a los acreedores con anterioridad a su verificación son válidos y
este acreedor no podrá reclamar que se le pague cantidad alguna, ya sea que el
liquidadorrepita contra los acreedores que ya han recibido dinero, o que este acreedor
pueda repetir contra los acreedores. Este acreedor que verifica tardíamente tiene a
salvo su derecho a comparecer y verificar hasta cierto tiempo, pero todo lo que ocurrió
antes le afecta, todas las resoluciones dictadas en el juicio son válidas y no se pueden
impugnar si es que los plazos para ello ya vencieron, además de que todos los repartos
que se hicieron a los acreedores son válidos, y este acreedor que verifica tardíamente
no tiene derecho a repetir contra los acreedores.

Se podría decir entonces, que realmente la verificación es una carga, ya que nadie
puede exigirle al acreedor que lo haga, pero si no lo hace, le afectan los resultados del
juicio, las resoluciones son válidas respecto de él, así como las ventas que se hicieron

436
de los bienes del deudor y los pagos totales o parciales que se hicieren a los demás
acreedores.

Desde esa perspectiva, el verificar es extremadamente relevante para el acreedor,


porque si este no verifica no va a obtener ningún tipo de pago de su crédito, ni siquiera
el pago en moneda de liquidación. De este modo, la ley llama al acreedor que verifica y
la verificación del acreedor sería una verdadera demanda en virtud de la cual el
acreedor hace valer sus derechos en el procedimiento de liquidación para obtener el
pago de su crédito, y en esa demanda, el liquidador deberá señalar cuál es su crédito, si
su crédito existe, cuál es el monto de su crédito, las preferencias que tiene el crédito, el
hecho de que uno o más créditos del deudor se encuentran subordinados al pago del
crédito del acreedor. La verificación como demanda debe cumplir con los requisitos
que establece el CPC en el art. 254 y con la ley de comparecencia en juicio, además de
acompañar los documentos fundantes. El crédito de esta persona, para poder
verificarlo, debe ser dinerario; no es necesario que sea actualmente exigible, porque la
dictación de la resolución de liquidación produce la exigibilidad anticipada de todas las
obligaciones dinerarias del deudor y quien tiene un crédito sujeto a condición
suspensiva puede verificar siempre que al hacerlo lo haga para que se le reserve lo que
le corresponde de cumplirse la condición o se le distribuya como si se le hubiera
cumplido la condición, pero en ese caso deberá rendir caución suficiente de restitución
en caso de no cumplirse la condición.

¿Qué pasa en los casos en que los que el crédito para con el acreedor no es dinerario?
Los acreedores deberán transformar sus créditos en dinerariospor la vía de deducir
demandas de incumplimiento de contrato y resolución por incumplimiento u otras
demandas que en definitiva terminen favoreciendo la transformación de los créditos en
créditos dinerarios.En estricto rigor un crédito que no es dinerario no puede ser
verificado, lo cual tiene un gran problema no solucionado por la nueva ley: si se tienen
un juicio de obligación de dar una cosa distinta de dinero, de hacer o de no hacer, la

437
única manera que tienen los acreedores es exigir el cumplimiento por parte del deudor,
y si este no cumple, ejercer la acción de resolución del contrato con indemnización de
perjuicios, lo cual es un procedimiento ordinario de larga duración, durante el cual el
acreedor no tiene ningún derecho. Podría convencerse al tribunal de tramitarlo en un
procedimiento sumario. OCHAGAVÍA piensa que se podría verificar con un crédito
evaluado en una cantidad determinada que corresponda a los perjuicios que se
demandan en un procedimiento, pero cree también que está verificación sería
fácilmente objetable porque esa verificación sería casi que un caso de autotutela en
que se designa por sí mismo el monto que se adeuda. Esto es lo que ocurrió en materia
laboral, pero es el único caso que la ley lo permite: se permite que los trabajadores
verifiquen sus créditos por terminación del contrato e indemnizaciones por años de
servicios, sujetos a la condición de que se dicte la sentencia y se reconozcan sus
derechos.

OCHAGAVÍA cree que se puede transar con el liquidador para la verificación del crédito
(ej. Reconocimiento de deuda).

¿Cuál es la naturaleza jurídica de la demanda de verificación?OCHAGAVÍA está de


acuerdo con PUGA en que se trata de una demanda ejecutiva. PUGA dice que en un
juicio ejecutivo, si el deudor no opone excepciones, se omite la dictación de la
sentencia y en definitiva se procede a la ejecución; de la misma manera si un acreedor
verifica y no se objeta el crédito, se procede a pagarle en moneda de liquidación al
acreedor a medida que se vayan liquidando los bienes del deudor sin que se dicte
ninguna sentencia. Solo en el caso en que el liquidador, el deudor u otro acreedor
objete el crédito del acreedor va a haber lugar realmente a un juicio para determinar la
existencia, monto y preferencia del crédito del acreedor.

Es fundamental en la verificación acompañar los documentos justificantes del crédito,


un acreedor no puede verificar sin acompañar estos documentos, y el hecho de no

438
hacerlo sería una causal de objeción del crédito. No es necesario que ese documento
sea un título ejecutivo o que tenga mérito ejecutivo, sino que cualquier documento
basta. ¿Qué documentos habitualmente existirán? Contratos, facturas, títulos de
créditos, contabilidad; la ley no pone límites en el documento que se acompaña, pero sí
se requiere de un documento. En este caso no hay lugar a prueba de testigos, a
absolución de posiciones: se requiere documentos.OCHAGAVÍA piensa que si no hay
ningún tipo de documento, se deberá recurrir al procedimiento ordinario.

Además de la demanda y los documentos justificativos, la ley señala que el acreedor


que verifica debe señalar una dirección válida de correo electrónico para recibir las
notificaciones que fueren pertinentes.

¿Desde cuándo y hasta cuándo los acreedores pueden verificar? Para estosefectos se
debe distinguir el periodo de verificación ordinaria del periodo extraordinario:

1. Periodo de verificación ordinaria.Aquel en que el acreedor diligente debiera


comparecer. Si no se verifica dentro de este periodo se puede hacer después
extraordinariamente, pero en ese caso se cae en el apercibimiento de ser oponible
lo ocurrido en juicio antes de la comparecencia.

El plazo para verificar ordinariamente es para todos los acreedores de 30 días


contados desde la fecha en que se les hubiere notificado la resolución de
liquidación. La diferencia surge en la manera de notificar a aquellos acreedores que
residen dentro del territorio de aquellos que residen fuera:

(1) Acreedores que residen dentro del territorio de la República.Se publica en el


Boletín Concursal la resolución de liquidación, y desde esa fecha estos
acreedores tendrán 30 días para verificar ordinariamente.

439
“7) La orden de informar a todos los acreedores residentes en el territorio de la
República que tienen el plazo de treinta días contado desde la fecha de la
publicación de la Resolución de Liquidación, para que se presenten con los
documentos justificativos de sus créditos bajo apercibimiento de ser afectados
por los resultados del juicio sin nueva citación.” (art. 127 Nº7).

(2) Acreedores que residen fuera del territorio de la República.Respecto de


acreedores solo dice que se notificarán por el medio más expedito posible. De
esta manera, cada acreedor que reside fuera del territorio tiene 30 días
contados desde la fecha en la que se le ha notificado a él.

“8) La orden de notificar, por el medio más expedito posible, la Resolución de


Liquidación a los acreedores que se hallen fuera del territorio de la República.”
(art. 127 Nº 8).

Este plazo de 30 días que se establece para los acreedores es un plazo fatal y
expirado que sea ese plazo, termina de pleno derecho y sin necesidad de ninguna
resolución, certificación o notificación, el periodo de verificación ordinaria. A partir
de este minuto, lo único que puede hacer un acreedor es verificar
extraordinariamente desde que se venció el plazo de verificación ordinaria y hasta
que quede firme y ejecutoriada la Cuenta Final del liquidador.

“Verificación ordinaria de créditos. Los acreedores tendrán un plazo de treinta días


contado desde la notificación de la Resolución de Liquidación para verificar sus
créditos y alegar su preferencia ante el tribunal que conoce del procedimiento,
acompañando los títulos justificativos del crédito e indicando una dirección válida
de correo electrónico para recibir las notificaciones que fueren pertinentes.

Vencido el plazo señalado en el inciso anterior, dentro de los dos días siguientes, el

440
Liquidador publicará en el Boletín Concursal todas las verificaciones
presentadas.”(art. 170).

“Término del período de verificación ordinaria de créditos. Vencido el plazo de


treinta días indicado en el artículo 170 se entenderá de pleno derecho cerrado el
período ordinario de verificación de créditos, sin necesidad de resolución ni
notificación alguna. Sin perjuicio de lo anterior, dentro de los dos días siguientes de
vencido el plazo señalado, el Liquidador publicará este cierre en el Boletín
Concursal, junto con el listado de todos los créditos verificados con sus montos y
preferencias alegadas.”(art. 172).

2. Periodo de verificación extraordinaria. Esta es solo para ser considerado en los


repartos futuros, es decir, que ocurran con posterioridad a la verificación del
crédito. Se puede verificar extraordinariamente desde que se acaba el plazo de 30
días para verificar ordinariamente hasta que quede firme y ejecutoriada la Cuenta
Final del liquidador.

“De la verificación extraordinaria de créditos. Los acreedores que no hayan


verificado sus créditos en el período ordinario, podrán hacerlo mientras no esté
firme y ejecutoriada la Cuenta Final de Administración del Liquidador, para ser
considerados sólo en los repartos futuros, y deberán aceptar todo lo obrado con
anterioridad.

Los créditos verificados extraordinariamente podrán ser objetados o impugnados en


conformidad al procedimiento establecido en los artículos 174 y 175, dentro del
plazo de diez días contado desde la notificación de su verificación en el Boletín
Concursal.” (art. 179).

441
Hasta la dictación de la Ley Nº 20.720 se establecía el plazo de 30 días más la tabla
de emplazamiento, pero esa mención ya no está.

Es relevante tener presente que la ley reconoce y entiende los problemas que tiene un
acreedor que reside fuera del territorio de la república para comparecer en el
procedimiento, y por eso, en los repartos que haga el liquidador, el art. 247 dice en su
Nº 3 que“el Liquidador deberá proponer a los acreedores un reparto de fondos siempre
que se reúnan los siguientes requisitos copulativos:

3) Reserva para responder a los acreedores residentes en el extranjero que no hayan


alcanzado a comparecer, de conformidad a los plazos previstos en el artículo 252.”

El art. 252 por su parte señala respecto de los acreedores residentes fuera del territorio
de la República: “Situación de acreedores fuera del territorio de la República. La
cantidad reservada para los acreedores residentes fuera del territorio de la República
permanecerá en depósito hasta el vencimiento del duplo del término de emplazamiento
que les corresponda. Vencido este plazo, se aplicará al pago de los créditos
reconocidos.”

“Duplo del término de emplazamiento”:¿Cuál es el término de emplazamiento para los


acreedores residentes fuera del territorio de la república? Para OCHAGAVÍA el término
de emplazamiento es el plazo para contestar (30 días), por lo que el duplo será de 60
días desde que se hubiera hecho la notificación, tiempo durante el cual podrá ser
reservada la cantidad que les correspondiere.PUGA respecto a esto dice que se debe
aplicar la tabla de emplazamiento que señala el CPC.

¿Cuál es la diferencia entre verificar ordinariamente y verificar extraordinariamente?

442
1. Plazo para impugnar u objetar la verificación.El art. 172 señala que una vez
vencidos los 30 días desde la publicación de la resolución de liquidación en el
Boletín Concursal, tiene el liquidador que al segundo día publicar en el Boletín
Concursal el hecho de que se ha cerrado el periodo de verificación ordinaria y un
listado de todos los acreedores que hayan comparecido indicando el monto de los
créditos y las preferencias que se hubieran alegado. Respecto de estos acreedores
el plazo para impugnar y objetar dichos créditos va a empezar a correr desde
quevenció el plazo de 30 días del periodo de verificación ordinaria. Por el contrario,
si algún acreedor verificó extraordinariamente, este deberá publicar la resolución
que se dicte respecto de su verificación en el Boletín Concursal y el plazo para
impugnar u objetar la resolución (10 días) empezará a correr desde esa fecha, es
decir, desde la publicación de la verificación extraordinaria, no desde el
vencimiento del plazo (Art. 179 inc. 2).

2. Apercibimiento en caso de no verificar ordinariamente. Esta es la diferencia más


relevante.El hecho de que se verifique extraordinariamente no puede objetar las
resoluciones dictadas con anterioridad, no puede pedir cantidad alguna por los
repartos que se hubieren efectuado con anterioridad a esa fecha, es decir, si se
efectuaron todos los repartos, quien verifica en el periodo extraordinario no tiene
derecho a nada.

¿Por qué una persona podría querer verificar un crédito a pesar de que se hayan
repartido todos los bienes? Para que un activo se pueda castigar tributariamente si
es que no se paga, se deben haber agotado prudencialmente los medios de cobro.

3. Otra diferencia entre verificar ordinariamente y extraordinariamente dice relación,


desde el punto de vista tributario, con que se puede pedir el reembolso del IVA
pagado por una factura que se emitió a un deudor que después cayó en

443
liquidación(recuperación del 19% del crédito). PUGA dice que este derecho solo se
tiene si es que se verifica ordinariamente.

El art. 172 dice que dentro de los 10 siguientes a la expiración del plazo de 30 días, el
liquidador, el deudor y los acreedores debieran analizar el listado de créditos
verificados, para determinar si la existencia de los créditos, el monto de esos créditos y
las preferencias invocadas hacen sentido. Si no les hicieran sentido, el liquidador, los
acreedores y el deudor pueden objetar los créditos, ya sea (1) por su existencia; (2) por
su monto(ej. Se computaron mal los reajustes o intereses); o (3) por las preferencias.
Esto que es facultativo para acreedores y el deudor, de cierta forma es imperativo para
el liquidador.

“Estudio de créditos y preferencias. En cumplimiento de sus deberes legales, el


Liquidador examinará todos los créditos que se verifiquen y las preferencias que se
aleguen, investigando su origen, cuantía y legitimidad por todos los medios a su
alcance, especialmente aquellos verificados por las Personas Relacionadas del Deudor.
Si no encontrare justificado algún crédito o preferencia, deberá deducir la objeción que
corresponda, de conformidad a las disposiciones del artículo 174.” (art. 173).

“Objeción de créditos. Los acreedores, el Liquidador y el Deudor tendrán un plazo de


diez días contado desde el vencimiento del período ordinario de verificación para
deducir objeción fundada sobre la existencia, montos o preferencias de los créditos que
se hayan presentado a verificación.

Las objeciones señaladas anteriormente se presentarán ante el tribunal que conoce del
procedimiento. Expirado el plazo de diez días que se indica en el inciso anterior sin que
se formulen objeciones, los créditos no objetados quedarán reconocidos. Asimismo,
vencido dicho plazo, y dentro de los tres días siguientes, el Liquidador publicará en el
Boletín Concursal todas las objeciones presentadas, confeccionará la nómina de los

444
créditos reconocidos, la acompañará al expediente y la publicará en el Boletín
Concursal.”(art. 174).

Este plazo de 10 días es fatal: si no se objeta dentro de este plazo un crédito publicado
en el listado, ese crédito se tiene por reconocido. Que se tenga por reconocido tiene
importancia porque ese acreedor tendrá derecho a voto y además se trata de un
acreedor que tiene derecho a recibir pagos en moneda de liquidación según el monto
verificado de su crédito y con las preferencias verificadas de su crédito,es decir, la
calidad de ese acreedor queda reconocida para todos los efectos legales en cuanto al
monto de su crédito y las preferencias que tuviere.

Si se presentaron objeciones, el liquidador debe publicar, dentro de los 3 días


siguientes, todas las objeciones que se interpusieron. El concepto de objeción es nuevo
en la ley, pues antes se hablaba fundamentalmente de impugnaciones.Respecto a esto
la ley dice que dentro de los 10 días siguientes a que se ha vencido el plazo para objetar
un crédito, el liquidador debe intentar subsanar las objeciones por la vía de acuerdos
entre los acreedores o con el deudor, de tal manera de superar estas. Si no se
subsanan, corresponde que el liquidador lo informe al tribunal y emita un informe
sobre los fundamentos de las objeciones y la existencia de los créditos. Solo respecto
de estas objeciones no subsanadas, se entiende que se transforman en impugnaciones.

“Impugnación de créditos. Si se formulan objeciones, el Liquidador arbitrará las


medidas necesarias para que se obtenga el debido ajuste entre los acreedores o entre
éstos y el Deudor, y se subsanen las objeciones. Si no se subsanan las objeciones
deducidas, los créditos objeto de dichas objeciones se considerarán impugnados y el
Liquidador los acumulará y emitirá un informe acerca de si existen o no fundamentos
plausibles para ser considerados por el tribunal.

El Liquidador acompañará la nómina de créditos impugnados conjuntamente con su

445
informe al tribunal y la publicará en el Boletín Concursal, dentro de los diez días
siguientes a la expiración del plazo previsto para objetar señalado en el inciso primero
del artículo anterior.”(art. 175 inc. 1 y 2).

Luego de que el liquidador acompaña al tribunal el listado con las impugnaciones y su


informe, corresponde al tribunal que ha declarado la resolución de liquidación, en una
única audiencia que pueden suspender hasta por una vez, resolver todas las
impugnaciones, y en esa audiencia pueden comparecer el liquidador, el deudor, los
acreedores impugnantes y los acreedores impugnados.

“Agregada al expediente la nómina de créditos impugnados con el informe del


Liquidador, el tribunal citará a una audiencia única y verbal para el fallo de las
respectivas impugnaciones, dentro de décimo día contado desde la notificación de la
resolución que tiene por acompañada la nómina de créditos impugnados. A dicha
audiencia podrán concurrir los impugnantes, el Deudor, el Liquidador y los acreedores
impugnados en su caso. El tribunal competente podrá, por una sola vez, suspender y
continuar la referida audiencia con posterioridad.

La resolución que falle las impugnaciones ordenará la incorporación o modificación de


los créditos en la nómina de créditos reconocidos, cuando corresponda. La referida
nómina de créditos reconocidos modificada deberá publicarse en el Boletín Concursal
dentro los dos días siguientes a la fecha en que se dicte la resolución señalada.”(art. 175
inc. finales).

La resolución que dicte el tribunal es apelable en el solo efecto devolutivo (art. 177).

“De la apelación. La resolución que se pronuncie sobre las impugnaciones será apelable
en el sólo efecto devolutivo, gozando de preferencia para su inclusión a la tabla y para
su vista y fallo.” (art. 177).

446
Esta audiencia debiera ser una que los acreedores debieran comparecer con los medios
de prueba que tengan para fundamentar sus impugnaciones en el caso de los
acreedores impugnantes o para defender la existencia, monto y preferencias de su
crédito en el caso de los acreedores impugnados.

A la fecha de celebración de la Junta Constitutiva (32 días después de la resolución de


liquidación) no hay ningún crédito reconocido, ya que los créditos reconocidos quedan
como tales cuando no han sido objetado dentro de plazo, se subsana la objeción o
cuando se resuelva la impugnación por sentencia definitiva. La nómina de créditos
reconocidos es relevante porque fija los derechos de voto y los derechos de los
acreedores para recibir pago.

“Las objeciones señaladas anteriormente se presentarán ante el tribunal que conoce


del procedimiento. Expirado el plazo de diez días que se indica en el inciso anterior sin
que se formulen objeciones, los créditos no objetados quedarán reconocidos. Asimismo,
vencido dicho plazo, y dentro de los tres días siguientes, el Liquidador publicará en el
Boletín Concursal todas las objeciones presentadas, confeccionará la nómina de los
créditos reconocidos, la acompañará al expediente y la publicará en el Boletín
Concursal.”(art. 174 inc. final).

“La resolución que falle las impugnaciones ordenará la incorporación o modificación de


los créditos en la nómina de créditos reconocidos, cuando corresponda. La referida
nómina de créditos reconocidos modificada deberá publicarse en el Boletín Concursal
dentro los dos días siguientes a la fecha en que se dicte la resolución señalada.”(art. 175
inc. final).

“Los créditos verificados extraordinariamente podrán ser objetados o impugnados en


conformidad al procedimiento establecido en los artículos 174 y 175, dentro del plazo

447
de diez días contado desde la notificación de su verificación en el Boletín
Concursal.”(art. 179 inc. final).

Esta ley trata de que se presenten la menor cantidad de impugnaciones y objeciones


posibles, para lo cual establece que si se impugna un crédito, debe necesariamente, si
se rechaza la impugnación, ser condenado el acreedor impugnante al pago de costas
por un monto equivalente al 10% del crédito impugnado, no pudiendo exceder de 500
UF.

De hecho, el liquidador debe perseguir el pago de estas multas, y se le autoriza que si


no se pagan las costas, las puede deducir de los repartos que tiene derecho a hacer.

“De las costas. El impugnante vencido será condenado en costas a beneficio del
acreedor impugnado, a menos que el tribunal considere que ha tenido motivos
plausibles para litigar. Las costas que se determinen serán equivalentes al diez por
ciento del crédito impugnado y no podrán exceder de 500 unidades de fomento.

Lo anterior no será procedente en caso que el impugnante sea el Liquidador.”(art. 176).

“Deber del Liquidador en los procesos de verificación e impugnación. El Liquidador


deberá perseguir judicialmente el pago de las costas y multas a beneficio de la masa,
pudiendo, al efecto, descontarlas administrativamente de cualquier reparto que deba
practicar al acreedor obligado a su pago.”(art. 178).

La obligación de verificar es una obligación que pesa en principio sobre todos los
acreedores. La única excepción que existe es respecto de ciertos acreedores laborales
por ciertas obligaciones en que eventualmente podrían no estar obligados a verificar.
Salvo los anteriores, todos los acreedores, sean valistas o preferentes, deben verificar.

448
“Procedencia y tramitación. Tan pronto existan fondos suficientes para ello y
precaviendo que el activo remanente sea suficiente para asegurar los gastos del
Procedimiento Concursal de Liquidación y el pago de los créditos de mejor derecho,
podrán pagarse por el Liquidador los créditos contenidos en el artículo 2472 del Código
Civil, según las reglas que siguen:

1) Los descritos en los números 1 y 4 podrán pagarse sin necesidad de verificación.

2) Los incluidos en el número 5 podrán pagarse previa revisión y convicción del


Liquidador sobre la suficiencia de los documentos que les sirven de fundamento, sin
necesidad de verificación ni de acuerdo de Junta que apruebe el pago.

3) Los establecidos en el número 8 se pagarán en los mismos términos del número


precedente, hasta el límite del equivalente a un mes de remuneración por cada año de
servicio y fracción superior a seis meses por indemnizaciones convencionales de origen
laboral y por las indemnizaciones legales del mismo origen que sean consecuencia de la
aplicación de la causal señalada en el artículo 163 bis del Código del Trabajo.

Las restantes indemnizaciones de origen laboral, así como la que sea consecuencia del
reclamo del trabajador de conformidad al artículo 168 del Código del Trabajo, se
pagarán con el sólo mérito de la sentencia definitiva firme o ejecutoriada que así lo
ordene.

4) Con todo, podrán verificarse condicionalmente los créditos que gocen de las
preferencias de los números 5 y 8, con el sólo mérito de la demanda interpuesta con
anterioridad al inicio del Procedimiento Concursal de Liquidación o con la notificación al
Liquidador de la demanda interpuesta con posterioridad al referido inicio.

449
El Liquidador deberá reservar fondos suficientes para el evento que se acoja la
demanda, sin perjuicio de los pagos administrativos que procedan, de conformidad a
los números precedentes.”(art. 244).

Un tema tratado a propósito de la verificación es ¿qué pasa con los acreedores que
proveen servicios de utilidad pública (Ej. Chilectra)? La ley establece que estas
empresas no pueden suspender sus servicios por el hecho de que se les deban
cantidades con anterioridad a la dictación de la resolución de liquidación, y si en los
hechos ya hubieren suspendido el servicio antes de la dictación de la resolución de
liquidación, el liquidador podrá solicitar al juez que ordene la reposición del servicio
aún sin audiencia de la empresa de servicios de utilidad pública. A partir de la dictación
de la resolución de liquidación ese servicio es una obligación de la masa que debe
pagarse con lo primero que obtiene el liquidador, pero no así necesariamente el
pasado.

*Según la ley de servicios eléctricos, si se ha suspendido los servicios de forma previa a


la resolución de liquidación, parte de ese crédito pasa al adquirente del inmueble que
utiliza el servicio.

“Acreedores prestadores de Servicios de Utilidad Pública. Lo preceptuado en el artículo


precedente también será aplicable a los acreedores que presten Servicios de Utilidad
Pública, quienes deberán verificar los créditos correspondientes a suministros
anteriores a la Resolución de Liquidación y no podrán, con posterioridad a ella,
suspender tales servicios, salvo autorización del tribunal, previa audiencia del
Liquidador.

Los créditos correspondientes a Servicios de Utilidad Pública que se suministren con


posterioridad a la notificación de la Resolución de Liquidación se considerarán incluidos
en el número 4 del artículo 2472 del Código Civil. La suspensión del servicio en

450
contravención a lo dispuesto en el inciso primero de este artículo, se sancionará
sumariamente por el tribunal con multa de 1 a 200 unidades tributarias mensuales,
debiendo restablecerse su suministro tan pronto el tribunal lo ordene.

Si a la fecha de la dictación de la Resolución de Liquidación los suministros se


encontraren suspendidos, el Liquidador podrá solicitar al tribunal que ordene su
inmediata reposición, solicitud que se deberá resolver a más tardar al día siguiente, sin
necesidad de oír al prestador del servicio.

Los créditos que nazcan como resultado del ejercicio de esta facultad, se considerarán
incluidos en el número 4 del artículo 2472 del Código Civil. El costo de reposición será de
cargo del respectivo prestador del servicio.” (Art. 171).

02/11/2016
g) Incautación y toma de inventario.Una de las teorías más plausibles es que el
desasimiento es el símil al embargo en el procedimiento concursal. Diligencias para
trabar embargo sobre un bien: Mandamiento de ejecución de embargo; diligencia de
embargo propiamente tal (receptor judicial se apersona ante el deudor, levanta un acta
de lo bienes que encuentre en el domicilio donde va a embargar). La incautación es el
símil a esa diligencia. La diferencia reside en que en un procedimiento de ejecución
individual hasta que no se trabe embargo sobre un bien, el bien es de libre disposición,
mientras que en el procedimiento concursal la pérdida de la disposición del bien se
produce al momento de la dictación de la resolución de liquidación y con el
consiguiente efecto del desasimiento.

¿Quién realiza la incautación? La realiza el liquidador, se trata de una facultad de él de


incautar los bienes del deudor. Lo hace una vez que asume el cargo. Esto está regulado
en el art. 163 y ss. Esta diligencia consiste en que el liquidador va al domicilio del

451
Deudor y levanta un inventario de la totalidad de los bienes en lo que se llama el acta
de incautación.

El acta de incautación debe singularizar los domicilios o sedes en los cuales el deudor
tiene bienes; singularizar el día y hora,y los asistentes a la diligencia de incautación; los
bienes sujetos a incautación; dejar constancia de todos los derechos o pretensiones
formulados por terceros en relación a los bienes del deudor (art. 164).

“Del acta de incautación. De las diligencias de incautación se levantará un acta que


deberá incluir, al menos, las siguientes menciones:

1) La singularización de cada uno de los domicilios, sucursales o sedes del Deudor en


que se hubieren practicado.

2) El día, la hora y el nombre de los asistentes a las diligencias practicadas.

3) La circunstancia de haber sido necesario o no el auxilio de la fuerza pública.

4) La constancia de todo derecho o pretensión formulados por terceros en relación con


los bienes del Deudor.

5) El inventario de bienes señalado en el artículo 165.

6) El nombre y la firma del Liquidador y del ministro de fe que estuvo presente en la


incautación e inventario de bienes.

Si aparecieren nuevos bienes por inventariar, se aplicará en lo pertinente lo dispuesto


en este artículo.” (art. 164).

452
Debe también mencionar si fue necesario o no hacer uso de la fuerza pública en caso
de que se haya negado el ingreso al lugar en el que se pretende hacer la incautación.

La individualización de los bienes o el inventario, regulados en el art. 165, debe incluir


un registro de todos los libros y correspondencia que tiene el deudor, la
individualización de los bienes del deudor y la identificación de los bienes que se
encuentren en arrendamiento con opción de compra, o aquellos bienes que se
encuentren en poder del deudor en una calidad distinta a la de dueño. Esto porque
como el liquidador es responsable de la conservación de los bienes del deudor, es
importante que cuando se practique la incautación quede constancia del estado de
conservación en el que se encontraban los bienes.

“Del inventario. El inventario de los bienes del Deudor que el Liquidador confeccione
deberá incluir, al menos, las siguientes menciones:

1) Un registro e indicación de los libros, correspondencia y documentos del Deudor, si


los hubiere.

2) La individualización de los bienes del Deudor, dejando especial constancia acerca del
estado de conservación de las maquinarias, útiles y equipos.

3) La identificación de los bienes respecto de los cuales el Liquidador constate la


existencia de contratos de arrendamiento con opción de compra, y de todos aquellos
que se encuentren en poder del Deudor en una calidad distinta a la de dueño.” (art.
165).

Antiguamente existía la posibilidad expresa de objetar el acta de incautación y el


inventario, y era otro de los métodos por los cuales se podía excluir un bien de los
efectos de la liquidación. Hoy no existe una diligencia propiamente tal de objeción del

453
inventario de incautación, sino que cualquier derecho de terceros deberá ejercerse por
la vía de reivindicación o de tercerías.

El acta de incautación y el inventario deben publicarse en el Boletín Concursal como


acto de publicidad, de manera que terceros puedan conocer de esta situación y ejercer
sus derechos. Esta publicación debe hacerse a más tardar al quinto día desde que se
practicó la diligencia.

En la diligencia de incautación el liquidador puede hacerse asesorar por terceros (en el


caso de existir incautaciones e inventarios muy complejos) y también por sus
dependientes. Los gastos no se cargaran a la masa, sino que saldrán de la comisión que
tiene derecho a percibir el liquidador.

“Asesoría técnica al Liquidador. El Liquidador podrá practicar la diligencia de


incautación y confección de inventario asesorado por un especialista en el giro del
Deudor, cuyos honorarios serán considerados gastos de administración del
Procedimiento Concursal de Liquidación. Asimismo, el Liquidador deberá dejar
constancia en el acta de la idoneidad técnica del asesor, reseñándose los antecedentes
que sirvan para acreditarla.

En todo caso, corresponderá a la Junta de Acreedores inmediatamente posterior


aprobar o rechazar en definitiva dicho gasto.” (art. 167).

“Asesoría general al Liquidador. En las diligencias de incautación e inventario también


podrán acompañar al Liquidador sus dependientes o asesores de confianza, cuyos
honorarios serán exclusivamente de cargo del Liquidador.” (art. 168).

El deudor tiene un deber legal de colaborar con la incautación, pero si no cumple no


hay una sanción definida para el deudor. La ley señala que cualquiera de sus

454
dependientes puede colaborar si así lo quiere. Se podrá solicitar el auxilio de la fuerza
pública en el caso de que no haya colaboración por parte del deudor

Puede ocurrir que en medio de un procedimiento de liquidación aparezcan nuevos


bienes cuya existencia no se tenía noticia. Respecto de estos bienes el liquidador
realizará diligencias de incautación particulares.

h) Realización del activo. La realización del activo dice relación con la venta de los bienes
en el procedimiento de liquidación, es la forma por medio de la cual se deben vender
los bienes en el procedimiento concursal de liquidación. Está regulada en los arts. 203 y
ss. de la Ley Nº 20.720. La ley, en el fondo, otorga gran libertad a la Junta de
Acreedores para decidir la forma en que se realizarán los bienes, y de hecho, respecto
de las formas de realización (sumaria o simplificada y la ordinaria). La junta es soberana
de determinar formas de realización distintas de los bienes, con contadas excepciones.

1. Realización sumaria o simplificada. Es la forma de realización sumaria supletoria en


la forma en que se realizaran los bienes, salvo que la Junta Constitutiva estime lo
contrario. Esta se aplica en la generalidad de los casos.

¿Cuándo aplica la realización sumaria? El ámbito de aplicación está definido en el


art. 203, el cual dice que aplica:

(1) Si el deudor califica como microempresade acuerdo a la Ley Nº20.416;

(2) Siempre que el producto de la realización se proyecte que no a a exceder las


5000 UF. En este caso, en la Junta Constitutiva el liquidador informará a los
acreedores que su estimación es que la realización no superará las 5000 UF y
por ello procede la realización sumaria. Los acreedores podrán en la primera
Junta oponerse a ello de forma verbal, y el tribunal decidirá en la misma Junta.

455
(3) Si la Junta Constitutiva no se celebra en segunda citación por falta de quórum.

(4) Si la Junta Constitutiva se celebra en segunda citación con menos de un 20%


de los acreedores.

(5) Si la Junta lo acuerda. La Junta puede acordarla no obstante no cumplirse los


requisitos. No hay quórum expreso por lo que se determina que es el quórum
normal.

(6) Según el art. 210. Esta es la razón por la cual se dice que la realización sumaria
es la norma supletoria. Este art. dice lo siguiente:

“Silencio de los acreedores. Los bienes cuya forma de enajenación no hubiere


sido acordada por los acreedores dentro de los sesenta días contados desde la
fecha de la Junta Constitutiva o desde la notificación del acta de incautación del
activo correspondiente en caso que ésta se practicare con posterioridad, se
enajenarán necesariamente de acuerdo a las reglas de la realización sumaria o
simplificada. El Liquidador deberá dejar constancia de esta circunstancia en el
expediente y, desde la fecha en que el tribunal lo tenga presente, se contará el
plazo para enajenar previsto en la letra h) del artículo 204.”

El art. 210 dice que si no hay nunca una junta que acuerde otra forma de
realización, se debe enajenar con la forma de realización sumaria o simplificada,
por lo que los demás casos de este art. 203 se deben entender como casos en
los que la Junta no tiene otra opción que realizar los bienes de la forma sumaria
o simplificada.

456
“Ámbito de aplicación. La realización simplificada o sumaria prevista en este Título
se aplicará en los siguientes casos:

a) Si el Deudor califica como micro empresa, de conformidad a lo dispuesto en el


artículo segundo de la ley Nº 20.416, circunstancia que será acreditada por el
Liquidador, para lo cual podrá requerir al Servicio de Impuestos Internos la
información relativa al nivel de ventas del Deudor.

b) Si el Liquidador informare a los acreedores en la Junta Constitutiva que el


producto probable de la realización del activo a liquidar no excederá las 5.000
unidades de fomento. Si el Deudor o cualquier acreedor no estuviere de acuerdo con
la estimación efectuada por el Liquidador, deberá formular verbalmente su
oposición en la misma Junta Constitutiva. El tribunal, luego de escuchar a los
interesados y al Liquidador, deberá resolver la controversia en la misma Junta.
Contra la resolución que pronuncie no procederá recurso alguno.

c) Si la Junta Constitutiva no se celebrare en segunda citación por falta de quórum.

d) Si la Junta Constitutiva se celebrare en segunda citación con asistencia igual o


inferior al 20% del pasivo total con derecho a voto.

e) Si la Junta lo acuerda.

f) Si fuere procedente la aplicación del artículo 210 de esta ley.” (art. 203).

¿En qué consiste esta realización?Desde el punto de vista conceptual, por


realización sumaria hay que distinguir entre 2 tipos de bienes:

457
(1) Bienes (acciones) con presencia bursátil. Estas acciones se enajenan por
remate en Bolsa. Que las acciones tengan presencia bursátil quiere decir que
tienen un marketmakero que dentrode un periodo de 180 días bursátilesque
existan más de 45 días en operaciones bursátiles de un monto superior a 1000
UF.

(2) Los demás bienes.Se enajenan mediante venta al martillo. El procedimiento de


pública subasta no se utiliza para el procedimiento concursal.

Estas son las formas de enajenar, salvo que la Junta por quórum calificado acuerde
otras formas de enajenación para ciertos bienes.

El remate en Bolsa consiste en que se pone la orden de rematar, con un mínimo


que lo decide la Junta o no haber mínimo y se saca a remate.

Procedimiento de venta al martillo (art. 204). En primer lugar se designa un


martillero concursal por parte del liquidador. El liquidador confecciona las bases
para la realización del bien. Estas bases deben ser publicadas en el Boletín y
presentadas en el tribunal, pudiendo ser objetadas por los acreedores. Un acreedor
puede tener interés en objetar las bases porque no está de acuerdo con el mínimo
establecido, siendo esta la principal razón para objetar las bases. También podrán
querer objetar las bases porque prefiere que se venda el bien como parte de una
unidad económica.

Desde que se publican las bases hay 2 días para objetar. Si se objetan las bases hay
una audiencia en que el tribunal resuelve dichas objeciones, la cual debe llevarse a
cabo dentro de los 5 días siguientes. Contra la decisión del tribunal solo cabe la
reposición verbal.

458
Una vez que se resuelven las objeciones, se vuelven a publicar en el Boletín
Concursal.

Solo existen normas respecto de los mínimos para los inmuebles, pues respecto de
los muebles cualquier mínimo que se proponga es aceptable. En cuanto a los
inmuebles, el mínimo no puede ser inferior al avalúo fiscal. Sea cual sea los
mínimos que se establezcan, si no hay postores, se realiza un segundo remate con
un mínimo que equivale al 50% del valor original. Si en este segundo remate no hay
postores, los siguientes remates se hacen sin mínimo.

Las bases establecen también:

(1) Garantías. Las garantías de seriedad deberánconsistir, en el caso de los bienes


inmuebles, de un 10% del mínimo. En los bienes muebles hay libertad para
establecer el monto de la garantía de seriedad.

(2) Día y hora en que se realizará el remate. No hay mayor regulación respecto de
la forma en que se hará el remate.

La ley establece plazos para la realización de los bienes. En este caso el plazo
máximo para realizar los bienes es de 4 meses contados desde la incautación del
bien a que se refiere la realización(art.204 letra h). Si no se cumple con este plazo,
la SUPERIR tiene facultades disciplinarias contra los liquidadores. Si esta institución
estima que el retraso se ha producido porque el liquidador ha sido negligente, está
facultada para sancionarlo. A este respecto el liquidador tiene un deber de informar
los casos en los cuales no se cumplirá con el plazo de 4 meses, entregando sus
razones para el incumplimiento. Esto debe hacerse con 15 días de anticipación al
vencimiento del plazo (Art. 205).

459
“Deber de información y cumplimiento de plazos. En el caso que no sea posible
cumplir con los plazos de realización fijados en la letra h) del artículo anterior, el
Liquidador deberá informar dicha circunstancia a la Superintendencia con a lo
menos quince días de anticipación al vencimiento, explicando las razones del
retraso. Lo anterior no lo exime de perseverar en la venta de los bienes, debiendo
justificar su demora cada treinta días. En caso que el retraso fuere imputable al
Liquidador, la Superintendencia podrá hacer uso de sus potestades sancionadoras,
de conformidad a esta ley.” (art. 205).

Este sistema aplica de manera supletoria.

2. Realización ordinaria.La Junta deberá acordar realizar los bienes bajo este
procedimiento de realización. Es muy similar a la realización sumaria.

¿Ámbito de aplicación?Su único ámbito de aplicación es cuando la Junta acuerda


este tipo de realización. Se puede ver la inconsistencia de la ley, ya que establece
requisitos para la realización sumaria, pero finalmente termina por disponer su
realización supletoria.

¿En qué consiste? Hay que distinguir:

(1) Acciones con presencia bursátil. Se venden mediante remate en bolsa.

(2) Demás bienes. Se realizan al martillo, por un procedimiento de venta al martillo


levemente alterado respecto de la realización sumaria. En este caso el
martillero es elegido por la Junta de una terna propuesta por el liquidador (art.
214). En lo demás el proceso es sustancialmente similar, vale decir, se
confeccionarán bases, las cuales podrán ser objetadas, y su objeción deberá ser
resuelta por el tribunal.

460
Se pueden fijar otras formas de realización con quórum calificado (art. 208 Nº 3).

“Fórmulas de realización ordinaria. Los bienes del deudor podrán realizarse


mediante:

1) La venta al martillo de bienes muebles e inmuebles.

2) La venta por medio de remate en bolsa de valores si se trata de valores


mobiliarios con presencia bursátil.

3) Otra forma distinta de realización de bienes, incluyendo entre ellas la venta como
unidad económica establecida en el artículo 217 y las ofertas de compra directa
previstas en el Párrafo 4 de este Título.” (art. 208).

En cuanto a los plazos, estos difieren de la realización sumaria, y se distingue entre:

(1) Bienes muebles. Hay un plazo máximo de realización de 4 meses (art. 209).

(2) Bienes inmuebles. Tienen un plazo máximo de realización de 7 meses.

“Plazos para la realización ordinaria. Cualquiera sea la forma de realización de los


activos, ésta deberá efectuarse en el menor tiempo posible, el que no podrá exceder
de cuatro meses para los bienes muebles, y de siete para los inmuebles, ambos
contados desde la fecha de celebración de la Junta Constitutiva o desde que ésta
debió haberse celebrado en segunda citación.” (Art. 209 inc. 1).

461
Estos plazos pueden ser prorrogados por 4 meses más por la Junta por quórum
calificado. Adicionalmente se puede prorrogar de manera indefinida con
autorización fundada de la SUPERIR.

“Con todo, los acreedores podrán acordar, con Quórum Calificado y antes del
vencimiento de los plazos señalados, su extensión fundada hasta por cuatro meses
más. Podrá procederse al otorgamiento de nuevas prórrogas, las que deberán
acordarse con el mismo quórum indicado anteriormente y contar con la
autorización fundada de la Superintendencia.

La extensión del plazo podrá referirse a bienes específicos o, en general, a todos los
bienes cuya realización esté pendiente.”(art. 209 inc. 2 y 3).

Las comisiones de los martilleros concursales están reguladas, por lo que no pueden
cobrar lo que sea por sus funciones. La Junta puede aumentar las comisiones que
pueden percibir los martilleros con quórum calificado, en cuyo caso las comisiones
adicionales serán de cargo de los acreedores que aprobaron.

“Comisión del Martillero Concursal. El Martillero Concursal percibirá una comisión única
por el ejercicio de sus funciones, equivalente a un porcentaje sobre el monto total de
realización de los bienes encargados rematar. Esta comisión será de cargo del
adjudicatario.

La comisión señalada no podrá exceder de un 2% sobre el monto total de realización de


bienes inmuebles y de un 7% sobre el monto total de realización de bienes muebles.

La Junta de Acreedores, con Quórum Calificado, podrá acordar aumentar la comisión


correspondiente a un Martillero Concursal, en cuyo caso el aumento será de cargo del

462
acreedor o acreedores que expresamente lo consientan. El señalado aumento de
comisión deberá consignarse en el acuerdo de venta al martillo.

Cualquier contravención a este artículo será sancionada conforme al artículo 27 de esta


ley.

A los Martilleros Concursales no les serán aplicables las comisiones reguladas en la ley
Nº 18.118.”(art. 215).

El martillero debe rendir cuenta dentro de los 5 días hábiles de concluido el remate a la
SUPERIR, incluyendo un detalle del precio en que se vendieron los bienes, los gastos en
los que se incurrió, etc. La SUPERIR puede objetar su cuenta.

Existen ciertos procedimientos especiales para la realización de los bienes, dentro de


los cuales se encuentran:

1. Enajenaciones impostergables. Que una enajenación sea impostergable puede


deberse a que se trata de bienes de fácil deterioro o de conservación dispendiosa,
en los cuales los procedimientos establecidos en la ley no sirven. La ley faculta al
liquidador para que se realicen los bienes en cualquier momento por venta al
martillo o por venta directa, cuando estos estén expuestos a próximo deterioro,
desvalorización inminente o exijan una conservación dispendiosa(art. 212).

“Regla especial para realizaciones impostergables. El Liquidador podrá realizar en


cualquier momento, al martillo o en venta directa, los bienes muebles del Deudor
que considere que estén expuestos a próximo deterioro o desvalorización inminente
o exijan una conservación dispendiosa. En la Junta inmediatamente posterior, el
Liquidador deberá informar a los acreedores sobre los bienes realizados, su forma
de enajenación y los recursos obtenidos de ella. Si no hubiere Juntas posteriores,

463
cumplirá informando en tal sentido a la Superintendencia y consignándolo en las
cuentas provisorias que deba rendir.” (art. 212).

El concepto de desvalorización inminente puede ser objeto de conflicto debido a la


amplitud que se le puede dar. Ej. Caso en que cae en liquidación un exportador de
frutas que tiene cerezas hace 3 meses controladas en una cámara de frío para ser
exportadas a Asia justo cuando allá se vive un periodo de crisis de la cereza.
UGARTE piensa que como se permite la venta directa de estos bienes, puede ser
fuente de eventuales conflictos y abusos.

Si esto ocurre, el liquidador debe informar a los acreedores sobre los bienes
realizados y el producto obtenido. Si no hay más juntas, se deberá incluir
directamente en las cuentas del liquidador.

2. Oferta de compra directa (art. 222 y ss.). La ley admite la posibilidad de que un
tercero le ofrezca al liquidador comprar un determinado bien dentro del pasivo. Si
el liquidador recibe una oferta escrita de un tercero, tiene el deber de exponérsela
a la Junta de Acreedores, la cual puede aceptar la oferta por quórum especial
(acreedores que representen 2/3 del pasivo). Si no se logra el quórum especial, la
Junta por quórum calificado y con conocimiento del oferente puede acordar que
esos bienes se saquen a martillo y que el precio mínimo sea el precio ofrecido por el
tercero, además de que si no hay postores en esa venta, que se venda
directamente al tercero por el precio ofrecido.

“Quórum y acuerdos. La aceptación por parte de la Junta de Acreedores de una


oferta de compra directa requerirá de Quórum Especial. Tratándose de ofertas cuya
venta no se pudo perfeccionar por no haberse logrado acuerdo con el quórum
exigido, la Junta podrá acordar, por Quórum Calificado y con el conocimiento del

464
oferente, que los bienes incluidos en la oferta de compra directa sean previamente
ofrecidos en remate al martillo a cualquier interesado.

Las condiciones del remate deberán ser incluidas en las bases que se confeccionen
y, en ellas, el precio mínimo de los bienes a rematar deberá ser igual al monto
ofrecido por el oferente. Si no se presentaren postores en esa oportunidad, se
llevará a cabo la venta propuesta por el oferente, en sus términos originales.”(art.
223).

3. Venta como unidad económica.Puede ocurrir en un escenario de procedimiento


concursal que exista una unidad económica, cuyo valor en conjunto sea mayor a la
de los bienes individualmente considerados, por lo que la ley ha autorizado la venta
de ciertos bienes como unidad económica.

¿Qué bienes se pueden vender como unidad económica? ¿Puede la Junta vender
bienes como unidad económica que no estén relacionados entre sí? ¿Es necesario
que haya una unidad económica específica y definida? PUGA opina que no, que
debe existir realmente una unidad económica. Sin embargo, no existe ningún
antecedente legal que lo prohíba. UGARTE estima que dado que los quórumspara
aprobar esta venta son bajos, el simplemente empaquetar ciertos bienes y
venderlos como unidad económica puede prestarse para obtener menos dinero por
su realización. El cree que debiera referirse a una unidad económica que haga
sentido, que lo sea realmente.

Esto no implica que la unidad económica deba ser la misma que existía antes de la
liquidación. Puede pasar que se reestructure y se reorganice y que se arme dentro
del procedimiento concursal una unidad económica que resulte atractiva para
adquirir.

465
La venta como unidad económica es fuente de muchos conflictos dentro del
procedimiento concursal. Esto porque trae problemas aparejados tales como la
determinación de los bienes que comprende la unidad económica. Normalmente
dentro de la unidad económica habrá un inmueble hipotecado, y por tanto, habrá
acreedores preferentes junto con acreedores valistas, lo cual produce una tensión
entre ambos tipos de acreedores sobre cuánto de la unidad económica tienen
derecho a recibir cada uno. Dado el perjuicio potencial que se podría producir a los
acreedores preferentes es que existe una regulación especial y detallada respecto
de cómo funcionan los intereses de estos acreedores preferentes versus los de los
acreedores valistas.

CLASE MACA REYNE 03/11/2016 UGARTE


En la venta como unidad económica existe una tensión entre dos tipos de
acreedores: preferentes y los demás. ¿Por qué pueden haber divergencia de
intereses? En el ejemplo de la salmonera que tiene su planta que está hipotecada a
favor del Banco por 100 y el valor del terreno es 250; y hay otros acreedores no
preferentes que se van a pagar después del Banco con lo que sobre y lo que se
pudiere obtener de otros bienes no sujetos a hipoteca o preferencia como las
jaulas, redes, sacos de alimentos, etc. El valor de estos bienes individualmente
considerados es muy bajo (30). En la realización ordinaria, se sacará a remate el
terreno, se obtendrán 250, por lo que el Banco se paga completo y el resto (150) se
va a los acreedores valistas que tenían créditos por 500, por lo que se pagarán con
180 sobre 500. Este es un mal negocio para los acreedores valistas, pero indiferente
para los acreedores preferentes.

El liquidador puede considerar de que en realidad el terreno con todos los otros
bienes constituyen una unidad económica que es atractiva desde el punto de vista
de su precio para la realización y puede considerar, por ejemplo, que esta unidad
económica podrá tener un mejor precio de realización que pudiera, incluso para

466
pagarle a los acreedores valistas. Esta situación genera una tensión natural dentro
de los acreedores, ya que el acreedor preferente sobre-garantizado no tiene ningún
incentivo y normalmente prefiere que esto se liquide rápido, dejándole el problema
al resto de los acreedores.

Por eso, la ley ha permitido que los bienes afectos a la liquidación puedan venderse
como una unidad económica, ya que así se maximiza la rentabilidad de la
realización del activo de la sociedad. En su concepción la ley ha favorecido que esto
sea aprobado por la junta incluso llegando a perjudicar los derechos de los
acreedores preferentes. ¿Por qué esto podría afectar a los preferentes? En primer
lugar, por la incertidumbre en cuanto a si lo que estimó el liquidador va a cumplirse.
También por el tiempo que esto conlleva, puesto que este tipo de realización puede
ser un proceso más largo en comparación a una realización de los bienes por
separado (implica negociación con terceros, con todo el tiempo que supone una
transacción privada); y por último por la proporcionalidad según la moneda de
quiebra.

Acuerdo de realización como unidad económica. ¿Cómo se toma este acuerdo?


Esto está tratado en los artículos 217 y ss. de la ley. No hay quórum ni calificado ni
especial para adoptar el acuerdo, sino que es el quórum general, es decir, mayoría
de los acreedores en la junta.

Respecto al contenido del acuerdo, este debe señalar (1)qué bienes están sujetos a
esta modalidad de venta, los cuales no necesariamente tienen que ser todos los
bienes de la empresa, sino que pueden ser solo algunos de ellos. PUGA considera
que deben ser unidades económicas que hagan sentido, no puede armarse una
unidad económica de bienes que en realidad no lo son, a pesar de que la ley no
señala nada al respecto. No es necesario que sean las mismas unidades económicas

467
que existían al momento de la resolución de liquidación, el liquidador tiene
facultades para armar una nueva unidad que haga sentido.

La ley trata el caso en que en realidad la unidad económica está sobre un inmueble
del cual no es dueño el deudor, deben incluirse en la venta los derechos que tenga
el deudor en esos bienes (ej.: arrendamiento). Llama la atención el hecho de que
como estos son derechos personales, no se puede forzar al dueño del terreno a
vender, de modo que UGARTE cree que esta norma no debe entenderse como una
norma que obligue a un tercero a respetar alguno de estos derechos, sino que
simplemente se dice que de haberlos y de ser posible, se deben incluir estos
derechos en la unidad económica.

Además, el acuerdo debe señalar (2)el precio, forma de pago, garantías, etc.

“Acuerdo. La Junta de Acreedores podrá acordar vender un conjunto de bienes bajo


la modalidad de venta como unidad económica. Esta modalidad se regirá por las
siguientes reglas:

1) El acuerdo deberá incluir los bienes sujetos a la venta, cualquiera sea su


naturaleza. En el evento de que se enajenare un conjunto de bienes ubicados en un
bien raíz que no sea de propiedad del Deudor, se incluirán en la venta los derechos
que en dicho inmueble le correspondan, cualquiera sea el tenor de la convención o
la naturaleza de los hechos en que se funda la posesión, uso o mera tenencia del
inmueble.

2) Asimismo, el acuerdo deberá señalar el precio mínimo de la venta del conjunto de


bienes, forma de pago y garantías, sin perjuicio de las demás modalidades y
condiciones de la enajenación que se puedan acordar.” (art. 217).

468
Un comprador de una unidad económica, ¿cómo negociaría el precio? UGARTE dice
que en el 90% de los casos de transacciones de compraventa de empresa el precio
se paga en ese acto, sin perjuicio de que exista normalmente un reajuste después.
Esta regla no es lógica de seguir en este caso porque hay una situación en que una
de las partes no tiene una situación de solvencia, es decir, no hay un gran
patrimonio detrás en el cual pagarse las posibles indemnizaciones. Una opción para
proteger al comprador en esta situación es retener parte del precio; otra opción es
celebrar un contrato de depósito con un banco o un escrow. En la determinación
del precio y la forma de pago se produce un problema, que es que el acuerdo va a
señalar algo y luego hay que salir a negociar lo que implica que varíe lo que
propone el acuerdo por lo que se tendrá que modificar posteriormente.

Efectos principales del acuerdo (artículo 218). El art. 218 dice lo siguiente:“Efectos
del acuerdo de venta como unidad económica. Acordada la enajenación como
unidad económica, se suspende el derecho de los acreedores hipotecarios,
prendarios y retencionarios para iniciar o proseguir en forma separada las acciones
dirigidas a obtener la realización de los bienes que garantizan sus respectivos
créditos y que se encuentren comprendidos dentro de la unidad económica. La
aprobación de las bases se entenderá como suficiente autorización para los efectos
contemplados en los números 3 y 4 del artículo 1464 del Código Civil.”

De este modo, se suspende el derecho de ejecución individual de los acreedores


preferentes para perseguir los bienes comprendidos dentro de la unidad
económica. Como no hay quórum especial, puede perfectamente ser acordado por
los valistas.

Este art. dice que la aprobación de las bases se entenderá como suficiente
autorización para los efectos contemplados en los Nºs 3 y 4 del art. 1464 CC., el cual
se refiere al objeto ilícito, por lo que con esto se entiende cumplido el requisito de

469
autorización del acreedor para evitar que la enajenación de los bienes embargados
en una ejecución individual tenga objeto ilícito.

En este caso podría haber un problema de proporcionalidad, es decir, de no saber


cuánto de lo obtenido de la enajenación de la unidad económica le corresponde a
los acreedores valistas y cuanto a los acreedores valistas.Esta discusión la trata de
resolver la ley en el artículo 219:

“Determinación del monto de realización de los bienes hipotecados, prendados o


retenidos. Cuando en el conjunto de bienes hubiere activos afectos a hipoteca,
prenda o retención, la Junta de Acreedores podrá acordar que se indique
específicamente en las bases la parte del precio de venta de la unidad económica
que corresponderá a cada activo en garantía, tanto respecto del precio mínimo
como de un eventual sobreprecio en caso de remate, para el sólo efecto de que
dichos acreedores puedan hacer valer los derechos que procedan de acuerdo a esta
ley. La parte del precio asignada al bien gravado con hipoteca, prenda o retenido no
podrá ser inferior al Avalúo Fiscal o a la valorización que efectúe el Liquidador del
bien gravado con prenda, salvo aceptación expresa del acreedor hipotecario,
prendario o retencionario.” (Inc. 1).

Así, el acuerdo podrá señalar qué parte del precio de venta le corresponderá a cada
acreedor preferente. Llama la atención el verbo rector de este art., que dice que la
junta “podrá”, pero esto, a juicio de PUGA, es algo que normalmente va ocurrir en
toda enajenación como unidad económica. La ley habla tanto del mínimo como del
sobreprecio, ¿qué lógica podría tener que las bases dijeran quesi se obtiene el
precio mínimo al acreedor le corresponderá un 25% y sobre el exceso que se
obtenga sobre el precio mínimo le corresponde un 10%? Esto podría tener lógica
porque no se sabe con certeza cuál es el valor de los bienes muebles, el que puede
ser incierto, a diferencia de los inmuebles respecto de los cuales existe una tasación

470
que es más o menos cierta. También hay dudas respecto de cuánto alguien podría
estar dispuesto a pagar por el conjunto.

Este acuerdo lo determina la junta con pocas limitaciones, siendo una de ellas que
el valor asignado a los inmuebles no puede ser inferior al del avalúo fiscal.

La ley le da un recurso a los acreedores preferentes que hubiesen votado en contra


(artículo 219 inc. 2), quienes pueden solicitar su rectificación al tribunal. El tribunal
cita a una audiencia verbal que se celebra al quinto día y resuelve las objeciones en
esta audiencia. Contra la resolución del tribunal solo cabe una reposición en la
misma audiencia. No se suspende el proceso de venta mientras se lleva a cabo la
audiencia.

“Los acreedores hipotecarios, prendarios o retencionarios que hubieren votado en


contra de la valoración asignada por la Junta de Acreedores podrán solicitar al
tribunal su rectificación, dentro de tercero día desde la adopción del respectivo
acuerdo. En tal caso, el acreedor hipotecario, prendario o retencionario podrá
acompañar siempre un informe pericial de tasación del respectivo bien, el cual
tendrá presente el tribunal para la determinación final del valor.

En virtud de lo anterior, el tribunal citará a una audiencia verbal, que se celebrará a


más tardar al quinto día con las partes que asistan. La citación a audiencia se
notificará por el Estado Diario. El tribunal resolverá las objeciones deducidas en la
audiencia y contra esa resolución sólo podrá deducirse reposición verbal, la que
deberá ser resuelta en la misma oportunidad.

La tramitación de la rectificación solicitada no suspenderá la ejecución del acuerdo


adoptado por la Junta de Acreedores.” (art. 219 inc. 2, 3 y 4).

471
Formalización de la venta. Las formalidades están en el art. 221 que señala que
esta venta debe constar en una escritura pública aprobada por el tribunal, en la que
se señalaran los hechos y requisitos que acrediten el cumplimiento de las
disposiciones anteriores. El tribunal va a ver los términos de la venta, cuando se
tomó el acuerdo, quienes votaron, la proporcionalidad, etc. por lo que no es mucho
lo que puede rechazar el tribunal. Una vez que lo aprueba, ordena alzar todos los
gravámenes, garantías y prohibiciones que existen sobre los bienes que forman la
unidad económica. Es una especie de purga de los gravámenes que hay.

Una vez adoptado el acuerdo, todos los bienes se entienden hipotecados o sujetos
a prenda sin desplazamiento por el solo ministerio de la ley para así garantizar el
saldo de precio que haya quedado pendiente de la enajenación, salvo que la junta
haya excluido a los bienes de esos gravámenes. A juicio de UGARTE, esto puede
traer una serie de problemas, ya que el legislador no se preocupó de resolver el
tema de cómo se adquiere el derecho real de hipoteca o prenda, ya que según las
reglas generales es mediante la inscripción y en este artículo se señala que es por el
solo ministerio de la ley, pero esto a su vez podría tener problemas con el artículo
1491 CC. Por esto mismo, otro problema que se genera es que no hay publicidad
para terceros. ¿La prenda sin desplazamiento trae aparejada la prohibición de no
enajenar si nada se dice? No. UGARTE cree que la ley debió haber desarrollado este
tema de manera más precisa.

“Trámites posteriores. La venta como unidad económica deberá constar en


escritura pública en la que se indicarán los hechos y/o requisitos que acrediten el
cumplimiento de las disposiciones anteriores. Dicha escritura será aprobada por el
tribunal, el cual ordenará el alzamiento y cancelación de todos los gravámenes y
prohibiciones que pesen sobre los bienes que integran la unidad económica.

472
Los bienes que integran la unidad económica se entenderán constituidos en
hipoteca o prenda sin desplazamiento, según su naturaleza, por el sólo ministerio
de la ley, para caucionar los saldos insolutos de precio y cualquiera otra obligación
que el adquirente haya asumido como consecuencia de la adquisición, salvo que la
Junta de Acreedores, al pronunciarse sobre las bases respectivas, hubiese excluido
expresamente determinados bienes de tales gravámenes.” (art. 221).

4. Bienes de difícil realización. Existen algunas normas que facilitan la venta de bienes
que son de difícil realización (artículos 228 y 229):

“Créditos morosos y activos muebles de difícil realización. La Junta de Acreedores


tendrá la facultad de vender, en la forma y al precio que estime convenientes, los
créditos morosos y activos muebles de difícil realización, cumpliendo los requisitos
que siguen:

1) Acuerdo de la Junta de Acreedores, adoptado por Quórum Calificado;

2) Que no se haya efectuado postura alguna respecto del bien, habiéndose ofertado
al martillo y sin precio mínimo, o

3) Si el Liquidador ha efectuado las gestiones para realizarlo al martillo y al menos


tres Martilleros Concursales hayan rechazado el encargo ofrecido por el bajo monto
esperado de realización.”(Art. 228).

Existe el derecho de la junta para no perseverar en la enajenación de ciertos


bienes cuando el precio de la enajenación es superior al precio de los bienes.

“Decisión de no perseverar en la persecución de bienes. La Junta de Acreedores


podrá acordar, con Quórum Calificado, la no persecución de uno o más bienes

473
determinados del Deudor, en atención a que el costo estimado para recuperarlos es
superior al beneficio esperado de su realización. Asimismo, el Liquidador podrá
hacer uso de esta facultad si no se hubiese adoptado el acuerdo respectivo en dos
Juntas de Acreedores ordinarias consecutivas por falta de quórum de asistencia,
siempre que dicho asunto haya estado incluido en la tabla de ambas sesiones.” (art.
229).

i) Continuación de actividades económicas. Existe una forma por medio de la cual la junta
puede decidir que le conviene pagarse con los frutos de los activos más que con los
bienes de la masa. En un caso en que Nintendo cae en liquidación, y al poco tiempo,
antes de la Junta constitutiva, uno de los técnicos de Nintendo inventa Pokemón GO,
con lo cual se producen grandes ingresos.Respecto a este caso la junta puede decidir
perseverar en la continuación de las actividades económicas de la empresa deudora
para así pagarse con los frutos de estas actividades. Se trata de un acuerdo tomado por
la junta en la cual se decide no proceder a la realización de los bienes que forman el
activo sino que perseverar en las actividades económicas de la empresa. En la práctica,
muchas veces la continuación del giro no se da exclusivamente para pagarse con los
frutos sino que puede ser porque las condiciones de mercado en ese momento estén
muy malas y se tiene una expectativa de que la realización de los bienes será más
prospera más adelante por lo que se decide que se seguirá administrando la empresa
como tal. Entonces, hay otros tipos de continuación que persiguen otros fines distintos
y que tienen importancias distintas.

La continuación puede ser provisional (artículo 231) o definitiva:

1. La continuación provisional es una medida conservativa que toma el liquidador que


dura entre la fecha en que tomó su cargo y la de la junta constitutiva, en la que
decide preservar en la continuación de las actividades económicas de la
empresa,cuyo objeto es aumentar el porcentaje de recuperación o propender a la

474
enajenación de una unidad económica, facilitar el pago de prestaciones pendientes,
etc.

El liquidador decide perseverar con la continuación de las actividades de la empresa


y no actúa como un liquidador como tal sino que más bien como un administrador.
El liquidador toma la decisión y le informa al tribunal y a la SUPERIR sus razones y
los bienes sujetos a la continuación.

La administración de los bienes durante la continuación le corresponde al


liquidador y tiene derecho a honorarios adicionales por estas funciones. El monto
de estos honorarios se determina en la junta constitutiva, es decir, ex post y si hay
desacuerdo lo resuelve el tribunal.

En la junta constitutiva el liquidador debe presentar un informe de su gestión


señalando los ingresos, los gastos y un resumen de la situación tributaria de la
continuación. En esta junta se va a decidir si se realiza el activo o si por el contrario
conviene acordar la continuación definitiva.

“Continuación provisional de actividades económicas. La continuación provisional


de actividades económicas del Deudor se regirá por las siguientes disposiciones:

1) El Liquidador deberá informar al tribunal y a la Superintendencia las razones que


justifiquen su decisión, los bienes adscritos a la continuación provisional y la fecha
exacta de su inicio. Estas comunicaciones deberán efectuarse al día siguiente de
aquél en que el Liquidador disponga la continuación.

2) La administración de la continuación provisional de actividades económicas


recaerá exclusivamente en el Liquidador, quien tendrá derecho a percibir un
honorario adicional por esa gestión. El monto a percibir será determinado en la

475
Junta de Acreedores Constitutiva y, en caso de desacuerdo, por el tribunal, en la
misma Junta y sin ulterior recurso.

3) En la Junta de Acreedores Constitutiva el Liquidador deberá presentar a los


acreedores un informe pormenorizado acerca de todas las operaciones ejecutadas
en el desarrollo de la continuación provisional de actividades económicas,
conjuntamente con un detalle de los ingresos y egresos del período y un resumen
sobre la situación tributaria de la continuación referida.

Una vez recibido el informe del Liquidador la Junta de Acreedores podrá acordar la
continuación definitiva de dichas actividades, en cuyo caso regirán las disposiciones
del artículo siguiente.” (art. 232).

2. La continuación definitiva es una decisión adoptada por la junta de acreedores con


quórum ordinario pero las prórrogas son con quórum especial. La administración
puede ser de dos maneras: recae en el liquidador o en un terceroque sea
administrador de la continuación. En este último caso puede ocurrir que se puede
actuar frente a él deudor en liquidación o frente al deudor en continuación,
pudiendo darse la situación de que se esté frente a personas distintas que
administran en esos casos.

Menciones del acuerdo. El acuerdo de continuación debe contener:

(1) Los bienes afectos a la continuación. Pueden ser todos o parte de los bienes.

(2) Las actividades Que se van a continuar. Pueden ser todas o ciertas líneas de
negocios.

(3) Identificar al administrador si es distinto al liquidador.

476
(4) Fijar sus honorarios, los cuales no están sujetos a otra restricción más que la de
la retención del 10% de sus honorarios en caso que sea pagos periódicos que se
paguen en forma mensual(artículo 39 Nº 6 Ley Nº 20.720).

(5) Señalar un plazo. El plazo no puede ser superior a un 1 año, en principio, y


puede ser prorrogable por un año más con quórum especial. Si se prorroga, el
liquidador debe forzosamente dejar su cargo y debe comenzar a administrar la
continuación un tercero por separado. Después de la prórroga de un año la
única forma que tiene la junta de prolongar la continuación de las actividades es
si es que a su vez acuerdan la enajenación como unidad económica de la
empresa, y durante todo el tiempo que sea necesario para esa enajenación.
Esta segunda prórroga también requiere de quórum especial.

“Continuación definitiva de actividades económicas. El acta de la Junta de


Acreedores en que conste la continuación definitiva deberá contener, a lo menos,
los siguientes puntos:

1) Actividades específicas a continuar.

2) Bienes adscritos. Si la continuación incluyese bienes hipotecados, prendados o


sujetos al derecho legal de retención se suspenderá el derecho de los acreedores
respectivos para ejercer sus acciones en tales bienes, siempre que hubieren votado
a favor de dicha continuación.

3) Identificación del administrador siempre que fuere distinto del Liquidador y sus
facultades. El acuerdo de nombramiento del Liquidador requerirá de Quórum
Especial.

477
4) Honorarios totales o fórmula de cálculo correspondiente al plazo que se acuerde
o resultados que se proyecten. Tratándose de pagos periódicos se aplicará al
administrador el deber de retención previsto en el número 6) del artículo 39 de esta
ley.

5) Plazo. No podrá ser superior a un año contado desde el acuerdo respectivo. Será
prorrogable por una sola vez, con Quórum Especial, mediante acuerdo obtenido en
Junta de Acreedores Ordinaria o Extraordinaria celebrada al menos diez días antes
del vencimiento. En caso de prórroga, la Junta deberá designar un administrador de
la continuación de las actividades económicas, nombramiento que no podrá recaer
en el Liquidador.

Si la Junta acordare la venta de los activos del Deudor como unidad económica,
podrá también acordar, con Quórum Especial, proseguir la continuación por el
tiempo indispensable para la concreción de ese acuerdo, aun cuando se exceda el
plazo máximo ya indicado.” (art. 233).

08/11/2016 UGARTE
La continuación la puede proponer el liquidador mismo o cualquier acreedor. La
SUPERIR mira con cierta sospecha la continuación de las actividades del deudor porque
en general la ley está la idea de terminar los procesos y sobre todo el proceso de
liquidación, por lo que junto con la proposición de la continuación de las actividades del
deudor, el liquidador debe informar a la SUPERIR las razones que justifican la
continuación.

El acuerdo de continuación debe señalar los bienes que se encuentran adscritos, esto
porque hay ciertos bienes que pueden quedar afectos y otros bienes que pueden seguir
su procedimiento de realización. La resolución debe señalar también la persona del
administrador de la continuación; básicamente cuando se decreta la continuación de

478
las actividades económicas del deudor, ciertos bienes del deudor serán administrados
por un administrador separados, mientras que los otros bienes seguirán siendo
administrador por el deudor. Lo anterior hasta tal punto, es que la empresa deudora
deberá identificarse como empresa en continuación de actividades, y los
representantes legales son distintos.

Es posible nombrar al mismo liquidador como administrador de la continuación, pero


ello requiere de quórum especial. Se deben señalar los honorarios, los que no están
regulados por la ley a diferencia de los honorarios de los liquidadores. Eso sí, si son
pagos periódicos, se aplica el art. 39 Nº 6, que establece la obligación de retener el 10%
de cada uno de los pagos para el final, con el fin de que el administrador termine
correctamente su labor. .

El plazo de la continuación puede ser hasta un año, el cual puede ser prorrogable hasta
por un año más, ello con quórum especial. En caso que se prorrogue, la administración
debe ser asumida necesariamente por un tercero administrador de la
continuación.Después de esto no puede prorrogarse, salvo que la Junta acuerde la
enajenación de la empresa como unidad económica.

En cuanto a la administración de la continuación, se produce un fenómeno de que se


tiene a 2 personas que se encuentran administrando bienes del deudor
simultáneamente, y que pueden tener conflictos entre ellos: respecto de los bienes
adscritos administra el administrador de la continuación, mientras que respecto de los
bienes no adscritos administra el liquidador. El liquidador tiene facultad de impetrar
medidas conservativas respecto de los bienes que están adscritos en la continuación,
pues sigue manteniendo el deber de evitar que se perjudique a los acreedores y las
controversias entre ellos las resuelve el tribunal mediante audiencia verbal (art. 234).

479
“Administración separada. Si la administración de la continuación definitiva de
actividades económicas recayere en una persona distinta del Liquidador, se observarán
las disposiciones siguientes:

1) Respecto de aquellos bienes no adscritos a dicha continuación, el Liquidador


mantendrá su administración y procederá de conformidad a las reglas generales.

2) Respecto de los bienes adscritos a dicha continuación, el Liquidador tendrá las


facultades del artículo 294 del Código de Procedimiento Civil, reportando a la Junta de
Acreedores Ordinaria las circunstancias que considere oportunas para el resguardo de
los intereses de los acreedores y el Deudor.

3) Cualquier controversia que se suscite entre el administrador de la continuación


definitiva de las actividades económicas y el Liquidador será resuelta por el tribunal en
una audiencia verbal citada al efecto, para lo cual podrá solicitar informe a la
Superintendencia.

4) La Superintendencia tendrá sobre el administrador de la continuación definitiva de


las actividades económicas iguales potestades que sobre los Liquidadores.” (art. 234).

Atribuciones del administrador. Sus atribuciones no están enumeradas como las del
liquidador, ello porque su objeto es la administración de la compañía, es decir, puede
realizar una serie de actos que tengan por objeto la continuación de la administración
de la compañía, pero siempre sujeto a los mismos tipos de fiscalización.

Dentro de sus obligaciones se encuentra la de presentar informes periódicos de gestión


a la junta de acreedores (Art. 235).

480
¿Cómo responde el administrador? De culpa levisima, al igual que el liquidador.
UGARTE cree que en este caso no se justifica tanto ya que la administración de la
continuación no tiene la especificidad que tiene la función del liquidador. Se trata de un
desincentivo a la realización de estas actividades (art. 238). Esta responsabilidad
subsiste hasta que se aprueba la Cuenta Definitiva de su gestión, y se persigue por
juicio sumario.

Si el administrador no rinde cuenta dentro del plazo de 30 días desde que termine la
continuación, se puede perseguir derechamente su responsabilidad sin necesidad de ir
a un proceso de cuenta final de administración.

Está la carga de siempre firmar con la razón social en liquidación. Si esto no se hace, la
sanción para el administrador que infringe es que se obliga solidariamente de las
obligaciones que contrae con infracción de dicha obligación.

En cuanto a la situación de quienes contratan con la continuación, está regulada en el


art. 239, el que señala:

“Los créditos provenientes de la continuación de actividades económicas del Deudor


podrán perseguirse solamente en los bienes comprendidos en ella y gozarán de la
preferencia establecida en el número 4 del artículo 2472 del Código Civil para el pago
respecto de los demás acreedores del Deudor.

Los créditos de la continuación de actividades económicas del Deudor preferirán a los


de los acreedores hipotecarios, prendarios y retencionarios que hubieren dado su
aprobación a dicha continuación, sólo en el caso que los bienes no gravados
comprendidos en ella fueren insuficientes para el pago. La diferencia, si la hubiere, será
soportada por los señalados acreedores a prorrata del monto de sus respectivos

481
créditos en el Procedimiento Concursal de Liquidación y hasta la concurrencia del valor
de liquidación de los bienes dados en garantía de sus respectivos créditos.

El acreedor hipotecario, prendario o retencionario que pague más del porcentaje que le
correspondiere de conformidad al inciso anterior, se subrogará por el exceso en los
derechos de los acreedores de la continuación de actividades económicas, en
conformidad a las normas del Párrafo 8 del Título XIV del Libro IV del Código Civil.

En el evento que en la continuación de actividades económicas se obtengan excedentes,


éstos corresponderán a los acreedores del Deudor hasta la concurrencia del monto de
sus créditos, reajustes e intereses, que corresponda pagar en el Procedimiento
Concursal de Liquidación, deducidos los gastos. El remanente, si lo hubiere, pertenecerá
al Deudor.”

Así se puede apreciar que se tratan de acreedores de la masa, con la diferencia de que
se pagan solo con bienes adscritos a la continuación. Dentro de los bienes adscritos a la
continuación pueden haber bienes que sean de acreedores preferentes (ej. Bienes
hipotecados), y dado que esta es una preferencia de primera clase, prefiere a los
demás acreedores preferentes de segunda o tercera clase, pero esto ocurre solo en el
caso de que hubieren bienes insuficientes para el pago de estos terceros que contratan
con la continuación, pues de lo contrario deberán pagarse primero con aquellos bienes
que no estén gravados con una prenda o hipoteca.

j) Pago del pasivo. Esto se da una vez que se ha realizado el activo y se encuentran los
recursos para pagar a los acreedores.

¿En qué orden se pagan los acreedores?Se sigue el orden de prelación de créditos
establecido en los arts. 2472 y ss. del CC. Este dispone 5 clases de prelación en las
cuales se pagan en orden desde la primera hasta la quinta. La primera clase por regla

482
general está constituida por los gastos de la liquidación, ciertas indemnizaciones
laborales y por los impuestos que son adeudados al Fisco. Se trata de una preferencia
general que afecta a todos los bienes de la masa, con la salvedad de que se trata de
que se pague con bienes no gravados para salvaguardar las preferencias. La segunda
clase corresponde a acreedores prendarios o retencionarios, que tienen un derecho de
prenda o de retención sobre ciertos bienes. Se trata de una preferencia especial, es
decir, se refiere sólo a ciertos bienes. La terceraclase se refiere a créditos hipotecarios,
y se trata de una preferencia especial respecto de la finca hipotecada. Dada la
naturaleza de los bienes no hay conflicto con la segunda clase. La cuarta clase se refiere
a ciertas preferencias particulares relacionadas generalmente con el derecho de
familia, que son las preferencias que tienen personas cuyos bienes son administrados
por terceros (ej. Personas sujetas a tutela o curaduría).La quinta clase se refiere a los
acreedores valistas.

1. Primera clase. En esta hay ciertas preferencias como por ejemplo las costas
judiciales que se causen en el interés general de los acreedores. Ej. Acreedor que
ejerce una acción revocatoria en interés de la masa que genera gastos propios de la
liquidación. También gastos que se incurran para poner a disposición de la masa
bienes del deudor. Los Nº 1 y 4 de esta primera clase (art. 2472 ) tienen como
objetivo asegurar el pago de los acreedores de la masa.

También destaca en la primera clase la preferencia que se tiene sobre los artículos
necesarios para la subsistencia del deudor y de su familia. Esto es el derecho del
deudor de recibir alimentos de parte de la masa (Nº 7).

En la primera clase se incluyen indemnizaciones de carácter laboral. Los


trabajadores tiene preferencia legal hasta el tope legal, de las indemnizaciones y de
las obligaciones de carácter previsional. Se busca salvaguardar los derechos de los
trabajadores.

483
2. Segunda clase. En este caso hay acreedores prendarios y retencionarios. Entre
estos últimos se encuentra el posadero y el empresario de transportes sobre los
efectos que tenga en su poder.

3. Tercera clase. Estos son los acreedores hipotecarios.

4. Cuarta clase. Se refiere a ciertos créditos que tiene el Fisco, la Iglesia y ciertas
personas jurídicas de derecho público en contra de los administradores y
recaudadores de sus bienes.

5. Quinta clase. Estos son los acreedores valistas.

Luego de estos acreedores se encuentran los acreedores subordinados, los acreedores


personas relacionadas, los acreedores en un proceso de reorganización que se
encuentran en la hipótesis del art. 57 Nº 1, los intereses de los créditos verificados
devengados con posterioridad a la verificación.

¿Cómo se pagan los acreedores?Existen 2 formas de pagar el pasivo en nuestra


legislación:

1. Los pagos administrativos, que son los pagos que realiza el liquidador sin necesidad
de que se haya verificado el crédito en la junta y sin necesidad de una aprobación
de un reparto por parte de la junta de acreedores (art. 254). El liquidador paga y
posteriormente rinde cuenta a los acreedores.

(1) Costas.Esto se refiere en primer lugar a las costas personales del acreedor
peticionario de la liquidación, esto porque la ley entiende que se podría
producir un problema de free-rider. La ley dice que debe pagarla tan pronto

484
cuando existan bienes suficientes para ello, y siempre y cuando existan bienes
suficientes para asegurar los gastos del procedimiento concursal. Respecto a
esto no es necesario verificar el crédito, sino que el liquidador puede pagarle
directamente las costas.

Estas no se pueden pagar en cualquier monto, sino que los montos con
preferencia están fijados por el art. 245, y los costos tienen un límite del 2% del
crédito invocado si este no excede de 10.000 UF. Si son más de 10.000 UF el
límite es de 1% del exceso.

El saldo de las costas es valista.

“Para efectos de lo dispuesto en el artículo anterior, el pago de las costas


personales se sujetará a las disposiciones siguientes:

1) En caso de Liquidación Forzosa, sólo procederán las correspondientes al


acreedor peticionario, las que gozarán de la preferencia del número 1 del
artículo 2472 del Código Civil.

2) En caso de Liquidación Voluntaria, las costas personales del solicitante


gozarán de la preferencia establecida en el número 4 del artículo 2472 del
Código Civil.

3) En ambos casos se aplicarán los siguientes límites al cálculo de costas:

a) El 2% del crédito invocado, si éste no excede de 10.000 unidades de fomento,


y

b) El 1% en lo que exceda del valor señalado en la letra anterior.

485
    
Para estos efectos, en casos de Liquidación Voluntaria, y siempre que el Deudor
invocare más de un crédito, se estará a aquél en cuyo pago hubiere cesado en
primer lugar. El saldo, si lo hubiere, se considerará valista.” (Art. 245).

(2) Gastos de la liquidación (art. 2472 Nº 4 CC.).Los gastos que se incurran para
poner a disposición de la masa los bienes del deudor. Este es
fundamentalmente el que cubre todas las relaciones por las cuales una persona
es acreedor de la masa. No hay necesidad de verificar estos créditos ni que la
junta de acreedores apruebe repartos sobre esos bienes.

(3) Indemnizaciones laborales de los trabajadores de la liquidación. Esto con el


tope imponible, pues las que son en exceso de dicho monto son de pago
ordinario.

¿Qué pasa si existe una demanda interpuesta? Se puede verificar


condicionalmente, y el liquidador tiene el deber de reservar esos fondos para
pagar en caso que se verifique la indemnización. En cuanto a estos créditos que
tienen los trabajadores por indemnizaciones laborales, estos son irrenunciables
(art. 246), salvo dos casos establecidos en el mismo art.

“Renunciabilidad de créditos de origen laboral. No podrán renunciarse los


montos y preferencias de los créditos previstos en los números 5 y 8 del artículo
2472 del Código Civil, salvo en la forma y casos que siguen:

1) Mediante conciliación celebrada ante un Juzgado de Letras del Trabajo, la


que podrá tener lugar en la audiencia preparatoria o de juicio y deberá contar
con la expresa aprobación del juez, y

486
2) En virtud de transacción judicial o extrajudicial que se celebre con
posterioridad a la notificación de la sentencia definitiva de primera instancia del
juicio laboral respectivo.”(Art. 246).

“Tan pronto existan fondos suficientes para ello y precaviendo que el activo
remanente sea suficiente para asegurar los gastos del Procedimiento Concursal de
Liquidación y el pago de los créditos de mejor derecho, podrán pagarse por el
Liquidador los créditos contenidos en el artículo 2472 del Código Civil, según las
reglas que siguen:

1) Los descritos en los números 1 y 4 podrán pagarse sin necesidad de verificación.

2) Los incluidos en el número 5 podrán pagarse previa revisión y convicción del


Liquidador sobre la suficiencia de los documentos que les sirven de fundamento, sin
necesidad de verificación ni de acuerdo de Junta que apruebe el pago.

3) Los establecidos en el número 8 se pagarán en los mismos términos del número


precedente, hasta el límite del equivalente a un mes de remuneración por cada año
de servicio y fracción superior a seis meses por indemnizaciones convencionales de
origen laboral y por las indemnizaciones legales del mismo origen que sean
consecuencia de la aplicación de la causal señalada en el artículo 163 bis del Código
del Trabajo.

Las restantes indemnizaciones de origen laboral, así como la que sea consecuencia
del reclamo del trabajador de conformidad al artículo 168 del Código del Trabajo, se
pagarán con el sólo mérito de la sentencia definitiva firme o ejecutoriada que así lo
ordene.

487
4) Con todo, podrán verificarse condicionalmente los créditos que gocen de las
preferencias de los números 5 y 8, con el sólo mérito de la demanda interpuesta con
anterioridad al inicio del Procedimiento Concursal de Liquidación o con la
notificación al Liquidador de la demanda interpuesta con posterioridad al referido
inicio.

El Liquidador deberá reservar fondos suficientes para el evento que se acoja la


demanda, sin perjuicio de los pagos administrativos que procedan, de conformidad
a los números precedentes.” (art. 244).

2. Los pagos ordinarios que se deben realizar previa verificación del crédito a un
acreedor cuyo crédito está verificado en la liquidación, previa aprobación de un
reparto con los requisitos que establece la ley para su aprobación.

Estos son los pagos mediante repartos de fondos. Estos corresponden a los
acreedores que están verificados en la liquidación, que tienen moneda de
liquidación y cuyos créditos no han sido objetados.

El reparto de fondos procede cuando se cumplen 3 requisitos:

(1) Que existan fondos por una cantidad que sea a lo menos 5% de los créditos. Si
no hay más bienes se debe repartir lo que haya. Este requisito es considerando
una reserva previa de los fondos suficientes para solventar los gastos de la
liquidación y para créditos de igual o mejor derecho que estén con una
impugnación pendiente.

(2) Se debe hacer una reserva de créditos con impugnación pendiente.

488
(3) Se debe hacer una reserva de créditos para responder a acreedores
extranjeros.

“Propuesta de reparto de fondos. El Liquidador deberá proponer a los acreedores un


reparto de fondos siempre que se reúnan los siguientes requisitos copulativos:

1) Disponibilidad de fondos para abonar a los acreedores reconocidos una cantidad


no inferior al cinco por ciento de sus acreencias.

2) Reserva previa de los dineros suficientes para solventar los gastos del
Procedimiento Concursal de Liquidación y los créditos de igual o mejor derecho cuya
impugnación se encuentre pendiente.

3) Reserva para responder a los acreedores residentes en el extranjero que no


hayan alcanzado a comparecer, de conformidad a los plazos previstos en el artículo
252.

4) Sujeción al procedimiento establecido en artículo siguiente.”(Art. 247).

Procedimiento aplicable: ¿Cómo se decreta un reparto? La propuesta de reparto


es presentada por el liquidador al tribunal, junto con la forma de cálculo, los
montos y los acreedores a quienes se pagará (art. 248). El tribunal deberá dictar
una resolución al día siguiente al de la propuesta, en la que tiene por propuesto el
reparto y ordena la publicación en el Boletín Concursal, la cual debe realizarse
dentro de los 2 días siguientes a esa resolución. Desde la publicación, los
acreedores tienen 3 días para objetar por distintas razones (ej. No se le paga el
porcentaje que les corresponde).

489
Para objetar el reparto se debe representar el 20% del pasivo con derecho a voto.
UGARTE cree que esta norma tiene ciertos problemas de debido proceso, ya que
podría conllevar eventuales implicancias relativas a que un acreedor que no tiene el
porcentaje de crédito necesario para impugnar no tendría como defenderse ante
un reparto que se le haga que sea en menor cantidad. (Art. 248 Nº 3).

La objeción puede ser de 2 tipos:

(1) Objeciones que afecten a la totalidad del reparto.En este caso no se puede
realizar el reparto hasta que se resuelva la objeción.

(2) Objeciones que no afecten a la totalidad del reparto. Si es que se está


disputando una porción menor del reparto, la ley dice que el reparto debe
seguirse adelante y procederse a repartir, con la salvedad de lo sujeto a debate.

Recibida la objeción, el tribunal da traslado al liquidador, quien debe responder


dentro de tercero día, y una vez que el liquidador ha evacuado traslado, el tribunal
debe resolver sin más trámite. En cuanto a la resolución, esta puede acoger la
objeción y en cuyo caso se deberá realizar una nueva proposición de reparto, o bien
rechazar la objeción, en cuyo caso se debe procedera la distribución de los fondos
dentro de tercero día de resuelta la objeción.

09/11/2016
Situaciones especiales. Dentro de los repartos hay ciertas situaciones especiales:

1. Situación de acreedor condicional.¿Qué puede hacer el acreedor condicional


respecto de los repartos de fondos? Este tiene la facultad de solicitar la reserva de
los fondos que le corresponderían cumplida la condición o que se le entreguen los

490
fondos que le corresponde rindiendo caución de restitución en caso de no
cumplirse la condición.

“Acreedor condicional. El acreedor condicional podrá solicitar al tribunal que ordene


la reserva de los fondos que le corresponderían cumplida la condición, o su entrega
bajo caución suficiente de restituirlos a la masa, con el interés corriente para
operaciones reajustables, para el caso de que la condición no se verifique. La
caución señalada deberá constar en boleta de garantía bancaria o póliza de seguro,
debiendo ser reemplazada o renovada sucesivamente hasta que se cumpla la
respectiva condición.” (art. 249).

2. Compensación de créditos y deudas recíprocas (arts. 250 y 251).La regla general es


que si una persona tiene créditos y deudas recíprocas con un deudor no puede
compensarlas dentro del procedimiento de liquidación. El problema que reside en
la compensación es que el acreedor compensado se pagará del 100% de su crédito,
si es que este era menor o igual a la deuda que tenía para con el deudor.

En este caso si se pueden hacer compensaciones en la etapa de repartos, una vez


que han sido aprobados estos. En el caso que a un acreedor se le apruebe un
reparto por una parte del crédito que este tiene, el liquidador puede no
distribuírselocompensando en atención a que le debía dinero al deudor, ello porque
es ta etapa es un contexto distinto. Sí se pueden hacer compensaciones en esta
situación.

“Deudas y créditos recíprocos. Cuando un acreedor fuere a la vez Deudor de quien


está sujeto a un Procedimiento Concursal de Liquidación, sin que hubiere operado la
compensación, las sumas que le correspondan a dicho acreedor se aplicarán al pago
de su deuda, aunque no estuviere vencida.” (art. 250).

491
Llama la atención la última frase de este art. 250, puesto que uno de los requisitos
para que opere la compensación es que los créditos sean exigibles, pero en este
caso puede operar incluso cuando la obligación del acreedor no se encuentre
vencida. Esto implica que cualquier acreedor que tenga una obligación a plazo se
podría ver en la obligación de pagarla antes del plazo por medio de la
compensación.

3. Verificación extraordinaria. Se trata de acreedores que verificaron en forma


posterior al periodo de verificación ordinaria (30 días posteriores a la resolución de
liquidación). La verificación extraordinaria no suspende la realización de repartos,
pero estando pendiente la determinación de si existe el crédito, se van a considerar
a los acreedores para efectos de determinar que le corresponde a cada cual en
virtud del reparto, manteniéndose los montos en depósito hasta que se resuelva la
existencia de su crédito.

¿Qué ocurre una vez que se reconoce un crédito en una verificación


extraordinaria? En un ejemplo en que hubo un primer reparto en el cual se repartió
el 10% de los créditos, y luego de eso una persona verificó extraordinariamente. En
este caso mientras la verificación está pendiente, se aplica la regla del párrafo
anterior. Luego cuando es resuelta la verificación, el acreedor cuyo crédito fue
verificado extraordinariamente tiene derecho a que se le pague preferentemente
hasta alcanzar lo pagado con anterioridad a su verificación. De cierta forma la ley le
permite al acreedor que verificó posteriormente “alcanzar” a los demás acreedores.
Ahora, puede ocurrir que solo había fondos disponibles para realizar el primer
reparto, o que los fondos del segundo reparto eran muy pocos, y en ese caso el
acreedor que verificó después no podrá exigir de los acreedores que ya se hubieren
pagado suma alguna.

492
“Acreedores que verifican su crédito extraordinariamente. La verificación de los
créditos de los acreedores realizada extraordinariamente no suspenderá la
realización de los repartos, pero si encontrándose pendiente el reconocimiento de
estos nuevos créditos se ordenare otro reparto, dichos acreedores serán
comprendidos en él, por la suma que corresponda, en conformidad al siguiente
inciso, manteniéndose en depósito las sumas que invocan hasta que sus créditos
queden reconocidos.

Reconocidos sus créditos, los reclamantes tendrán derecho a exigir que los fondos
materia de reparto que les hubieren correspondido en las distribuciones
precedentes sean de preferencia cubiertos con los fondos no repartidos, pero no
podrán demandar a los acreedores pagados en los anteriores repartos la devolución
de cantidad alguna, aun cuando los bienes sujetos al Procedimiento Concursal de
Liquidación no alcancen a cubrir íntegramente sus dividendos insolutos.” (art. 251).

4. Situación de los acreedores residentes en el extranjero.La ley entiende que los


acreedores extranjeros tienen más dificultades para concurrir a verificar su crédito,
por lo que señala que en el caso de los acreedores residentes en el extranjero la
cantidad reservada para esos acreedores permanecerá en depósito hasta el
vencimiento del duplo del término de emplazamiento que le corresponda. Si el
acreedor no concurre a verificar, se podrá pagar a otros créditos reconocidos.

“Situación de acreedores fuera del territorio de la República. La cantidad reservada


para los acreedores residentes fuera del territorio de la República permanecerá en
depósito hasta el vencimiento del duplo del término de emplazamiento que les
corresponda. Vencido este plazo, se aplicará al pago de los créditos reconocidos.”
(art. 252).

493
En cuanto a la obligación de los acreedores de concurrir al pago ode percibir los
fondos que están aprobados para el reparto, los acreedores deben concurrir dentro del
plazo de 3 meses a recibir lo que les corresponda producto del reparto, y si pasan esos
3 meses, el liquidador deposita esos fondos en la Tesorería general de la República a
nombre del acreedor. Si pasan 3 años sin que el acreedor concurra a percibir el reparto,
el dinero será destinado para el Cuerpo de Bomberos.

“Destino de los fondos en caso de no comparecencia. Si algún acreedor comprendido en


la nómina de reparto no compareciere a recibir lo que le corresponda tres meses
después de la notificación del reparto, el Liquidador depositará su importe en arcas
fiscales a la orden del acreedor. Transcurridos tres años desde dicho depósito sin que se
haya cobrado su monto, la Tesorería General de la República lo destinará en su
integridad al Cuerpo de Bomberos.” (art. 253)

k) Terminación del procedimiento concursal de liquidación .Normalmente hay 2 razones


para terminar el procedimiento concursal: (1) que no exista nada más que repartir o
que habiendo algo que repartir los costos son superiores a los beneficios que traería
repartir los bienes (terminación por la dictación de una resolución de termino, que es
dictada por el tribunal una vez que se aprueba la cuenta final de administración);(2)
que en el intertanto el deudor haya solicitado acogerse a un procedimiento concursal
de reorganización.

La ley dice que el procedimiento concursal de liquidación termina por resolución de


término o por acuerdo de reorganización:

1. Terminación por dictación de resolución de término (Art. 254 y 255). El art. 254
señala:

494
“Resolución de término. Una vez publicada la resolución que tuvo por aprobada la
Cuenta Final de Administración en los términos descritos en los artículos 49 y
siguientes, el tribunal, de oficio, a petición de parte o de la Superintendencia,
dictará una resolución declarando terminado el Procedimiento Concursal de
Liquidación.

Con la resolución de término del Procedimiento Concursal de Liquidación, el Deudor


recuperará la libre administración de sus bienes.”

Con esta resolución que aprueba la cuenta final el deudor recupera la libre
administración de los bienes. Este hecho ha sido criticado por PUGA porque pudo
ocurrir que la Cuenta Final de Administración no se aprueba porque el liquidador
incumplió sus obligaciones, distrajo fondos u otras infracciones, lo cual puede
tratarse de un procedimiento que dure mucho tiempo, y mientras tanto el deudor
no puede recuperar la libre administración de sus bienes. UGARTE cree que esto no
es tan grave porque generalmente luego de los repartos no quedarán bienes para
ser administrados por el deudor, pero sí tomará importancia cuando queden bienes
sujetos al desasimiento.

Efectos de la resolución de término:

(1) Deudor recupera la libre administración de los bienes objeto del


desasimiento.

(2) Una vez que se encuentre firme o ejecutoriada la resolución que declara el
término del Procedimiento Concursal de Liquidación, se entenderán
extinguidos por el solo ministerio de la ley y para todos los efectos legales los
saldos insolutos de las obligaciones contraídas por el Deudor con anterioridad
al inicio del Procedimiento Concursal de Liquidación.

495
(3) El deudor se entiende rehabilitado para todos los efectos legales, salvo que la
resolución establezca lo contrario. A lo largo de la ley existen ciertas
inhabilidades que se contemplan para ejercer determinados cargos.

Recursos que proceden respecto de esta resolución: Apelación en el solo efectos


devolutivo (art. 256).

“Recursos contra la resolución de término. La resolución que declare terminado el


Procedimiento Concursal de Liquidación será susceptible de recurso de apelación, el
que se concederá en el solo efecto devolutivo, conservando en el intertanto el
Deudor la libre administración de sus bienes.” (art. 256).

Presupuesto de la dictación de la resolución de termino es que sehaya aprobado la


cuenta final de administración.¿Qué se requiere para aprobar la Cuenta Final de
Administración? En primer lugar, el art. 50 señala cuando debe el liquidador
acompañar al tribunal la Cuenta Final de Administración:

(1) Que no haya más bienes.

(2) Que se hayan pagado todos los créditos.

(3) Que se hayan vencido los plazos de realización. Puede ocurrir que se hayan
vencido los plazos de realización ordinaria o extraordinaria y no se hayan
realizado todos los bienes, en cuyo caso el liquidador debe dar cuenta de por
qué no los realizó: una posibilidad es que se trate de bienes cuya realización sea
más gravosa que el beneficio que de su realización se podría reportar, o bien
porque el liquidador fue negligente en su administración, en cuyo caso la
cuenta final no se tendrá por aprobada, lo cual puede terminar en sanciones al

496
liquidador y la remoción del mismo, siendo sustituido por otro que realizará los
bienes.

(4) Cese anticipado del cargo del liquidador por cualquier razón.

“Oportunidad. El Liquidador deberá acompañar al Tribunal y a la Superintendencia


su Cuenta Final de Administración dentro de los treinta días siguientes a que se
verifique cualquiera de las circunstancias que a continuación se señalan:

1) Vencimiento de los plazos legales de realización de bienes.

2) Agotamiento de los fondos o pago íntegro de los créditos reconocidos.

3) Cese anticipado de su cargo.” (art. 50).

En cuanto al procedimiento, este consiste en que se presenta la cuenta ante el


tribunal y a la SUPERIR, y luego se cita a junta de acreedorespara aprobar la cuenta
final de administración mediante publicación del Boletín Concursal dentro de los 5
días siguientes a la resolución que tuvo por acompañada la cuenta final. Entre la
fecha de la publicación y la Junta no pueden transcurrir menos de 10 ni más de 25
días.

En la Junta los acreedores pueden objetar la Cuenta Final de Administración, pero


tienen la facultad de objetarla dentro de los 5 días posteriores a la celebración de la
Junta. Si se objeta, se entra en un procedimiento administrativo, en el cual se
presentan las objeciones de la SUPERIR y la petición de esta de informes del
liquidador. Esto concluye con un informe de la SUPERIR, ya sea aprobando o
rechazando la Cuenta Final de la Administración que se presenta al tribunal. El
tribunal, teniendo a la vista este informe, puede desechar las objeciones, en cuyo

497
caso se condena en costas a los objetantes, o bien acoge las objeciones, en cuyo
caso debe dictar una resolución en la cual puede señalar medidas para subsanar las
objeciones, o bien tener por rechazada la cuenta final.Esa resolución es susceptible
de recurso de apelación. Una vez que esté firme la resolución que rechaza la cuenta
del liquidador, se excluye al liquidador de la nómina de liquidadores, es decir, no
puede seguir llevando a cabo procedimientos concursales de liquidación.

2. Terminación del procedimiento concursal por acuerdo de reorganización judicial.


Esta causal se da en casos en que ocurren situaciones que vuelven a hacer a la
empresa deudora rentable y puede tener una oportunidad de reemprender. Puede
ocurrir que el deudor en cualquier minuto presente un acuerdo de reorganización
judicial, siendo regulado en el art. 257:

“Término del Procedimiento Concursal de Liquidación por Acuerdo de


Reorganización Judicial. Durante el Procedimiento Concursal de Liquidación, una vez
notificada la nómina de créditos reconocidos, el Deudor podrá acompañar al
tribunal competente una propuesta de Acuerdo de Reorganización Judicial y le
serán aplicables las disposiciones contenidas en el Capítulo III de esta ley, en lo que
fuere procedente y en todo lo que no se regule en las disposiciones siguientes.

Presentada una propuesta de Acuerdo de Reorganización Judicial, el tribunal


dictará una resolución que la tendrá por presentada. Una copia de la referida
propuesta deberá ser publicada por el Liquidador en el Boletín Concursal.

En la misma resolución el tribunal competente fijará la fecha, lugar y hora en que


deberá efectuarse la Junta de Acreedores llamada a conocer y pronunciarse sobre la
propuesta de Acuerdo de Reorganización Judicial que presente el Deudor.”

498
Al acuerdo de reorganización judicial se le aplican en su mayor parte las normas del
acuerdo de reorganización judicial preventivo, salvo las expresamente señaladas.
Diferencias y reglas especiales que tiene este acuerdo:

(1) No existe el efecto de la protección financiera concursal para este tipo de


acuerdos, ya que es previo a un procedimiento de liquidación que produjo sus
efectos propios.

(2) Tiene un quórum especial establecido en el art. 258: 2/3 de los acreedores
presentes que representen 3/4 del total del pasivo con derecho a voto
correspondiente a su respectiva clase o categoría.

“Acuerdo de la Junta de Acreedores. Cada una de las clases o categorías de


propuestas de Acuerdo de Reorganización Judicial acompañado por el Deudor
será analizada, deliberada y acordada en forma separada en la misma Junta, sin
perjuicio de lo previsto en el artículo 82.

La propuesta de Acuerdo de Reorganización Judicial se entenderá acordada


cuando cuente con el consentimiento del Deudor y el voto conforme de los dos
tercios o más de los acreedores presentes, que representen tres cuartas partes
del total del pasivo con derecho a voto, correspondiente a su respectiva clase o
categoría. Las Personas Relacionadas con el Deudor no podrán votar, ni sus
créditos se considerarán en el monto del pasivo.”(art. 258).

El acuerdo una vez aprobado puede ser impugnado. Las impugnaciones están
reguladas en el art. 259:

“Vigencia del Acuerdo de Reorganización Judicial. El Acuerdo del Reorganización


Judicial regirá una vez vencido el plazo para impugnarlo, sin que se hubiere

499
impugnado. En este caso se entenderá aprobado y el tribunal competente lo
declarará así de oficio o a petición de cualquier interesado o del Veedor. En la
misma resolución declarará el término legal del Procedimiento Concursal de
Liquidación.

Si el Acuerdo de Reorganización Judicial fuere impugnado, regirá desde que cause


ejecutoria la resolución que deseche la o las impugnaciones y lo declare aprobado.

Las resoluciones a que se refieren los incisos primero y segundo de este artículo se
notificarán en el Boletín Concursal.

El Acuerdo de Reorganización Judicial regirá no obstante las impugnaciones que se


hubieren interpuesto en su contra. Sin embargo, si las impugnaciones fueren
interpuestas por acreedores de una determinada clase o categoría, que representen
en su conjunto a lo menos el 30% del pasivo con derecho a voto de su respectiva
clase o categoría, el Acuerdo de Reorganización Judicial no empezará a regir hasta
que dichas impugnaciones fueren desestimadas por sentencia firme y ejecutoriada.
En este caso, y en el del inciso segundo de este artículo, los actos y contratos
ejecutados o celebrados por el Deudor en el tiempo que medie entre el Acuerdo de
Reorganización Judicial y la fecha en que quede ejecutoriada la resolución que acoja
las impugnaciones, no podrán dejarse sin efecto.

El recurso de casación deducido en contra de la resolución de segunda instancia que


deseche la o las impugnaciones no suspende el cumplimiento de dicha resolución,
incluso si la parte vencida solicita se otorgue fianza de resultas por la parte
vencedora.

Si se acogen las impugnaciones al Acuerdo de Reorganización Judicial por resolución


firme o ejecutoriada, las obligaciones y derechos existentes entre el Deudor y sus

500
acreedores con anterioridad a dicho Acuerdo, volverán al estado en que se
encontraban en el Procedimiento Concursal de Liquidación.”

501
10/11/2016
INSOLVENCIA TRANSFRONTERIZA

La nueva ley incluyó un título que regula la insolvencia transfronteriza, es decir, regula las
situaciones en que existe un deudor que tiene bienes en distintos Estados, y que cae en
distintos procedimientos concursales, no necesariamente de liquidación, ya sea en Chile
buscando perseguir ciertos efectos en el extranjero, o bien en el extranjero, buscando
perseguir ciertos efectos en Chile.

Anteriormente esto se regía por el Código de Derecho Internacional Privado, y si se


buscaban perseguir efectos en Chile de una sentencia dictada por un tribunal extranjero,
se podía realizar pero se debía pasar por el trámite de exequátur ante la CS, tramite por el
cual la CS controla si una resolución es contraria al ordenamiento jurídico chileno. Este era
un método extremadamente ineficiente para obtener ciertos efectos propios del
procedimiento concursal, como por ejemplo, el embargo y la realización de los bienes.
Respecto de Chile ante el extranjero, quedaba regido por la legislación de los países
extranjeros, pero se producía una situación similar.

La ley adoptó los principios de la CNMNUDNI(Comisión de las Naciones Unidas para el


Derecho Mercantil Internacional) que establecen básicamente (1)la posibilidad de solicitar
en el extranjero determinadas medidas relacionadas con procedimientos concursales
chilenos; (2)la posibilidad de que un procedimiento concursal sea reconocido en Chile, lo
que permite que ciertos efectos propios del procedimiento concursal se le apliquen al
deudor en Chile; y (3)coordina a los tribunales cuando hay procedimientos paralelos. Nada
impide que existan procedimiento concursales paralelos en contra de un deudor en Chile y
en el extranjero.

Ámbito de aplicación. Esto está regulado en el art. 300 de la Ley Nº 20.720, el cual dice
que:

502
“Ámbito de aplicación. El presente Capítulo será aplicable a los casos en que:

1. a) Un tribunal extranjero o un representante extranjero solicite asistencia a los


tribunales competentes, administradores concursales y demás organismos
involucrados en los Procedimientos Concursales con arreglo a esta ley u otras
normas especiales relativas a la insolvencia en relación con un procedimiento
extranjero;

2. b) Se solicite asistencia en un Estado extranjero en relación con un procedimiento


concursal que se esté tramitando con arreglo a esta ley o con arreglo a otras
normas especiales relativas a la insolvencia;

3. c) Se estén tramitando simultáneamente y respecto de un mismo deudor un


procedimiento concursal extranjero y un Procedimiento Concursal en Chile con
arreglo a esta ley u otras normas especiales relativas a la insolvencia, o

4. d) Los acreedores u otras personas interesadas, que estén en un Estado extranjero,


tengan interés en solicitar el inicio de un procedimiento concursal o en participar
en un procedimiento concursal que se esté tramitando con arreglo a esta ley u
otras normas especiales relativas a la insolvencia.Este último caso se rige más bien
por las reglas generales, ya que el extranjero deberá solicitar el procedimiento
concursal acá en Chile y acogerse a las normas generales.

El presente Capítulo no será aplicable a los procedimientos concursales regulados por la


Ley General de Bancos y por el decreto con fuerza de ley Nº 251, del Ministerio de
Hacienda, de 1931, sobre Compañías de Seguros, Sociedades Anónimas y Bolsas de
Comercio.”

503
Estas normas aplican a la generalidad de los casos, salvo respecto de la insolvencia que
pudiera existir de los bancos, compañías de seguros, y algunas otras sociedades
especiales, ello porque se entiende que el procedimiento iniciado en el extranjero podría
producir desajustes en Chile.

Análisis del ámbito de aplicación:

1. Asistencia que se requiera desde el extranjero en Chile. ¿Quiénes pueden pedir


asistencia?

(1) Representantes extranjeros. Este es un término genérico para referirse a los


intervinientes en procedimientos extranjeros que no son el tribunal: los
liquidadores, los síndicos, veedores, etc.

Estos representantes pedirán, por regla general, el reconocimiento del


procedimiento concursal extranjero en Chile, vale decir, que los tribunales
chilenos reconozcan que existe un procedimiento concursal en el extranjero y
por tanto que se producen ciertos efectos del mismo en Chile y que les
permitan adoptar ciertas medidas en Chile en relación con ese procedimiento
concursal.

Estos siempre deberán actuar por medio de abogado habilitado en Chile en sus
solicitudes al tribunal.

¿Cuáles son los principios que rigen el acceso a los tribunales de los
representantes extranjeros? Básicamente tienen derecho a acceder
directamente al tribunal mediante un abogado habilitado para el ejercicio de la
profesión, es decir, no requieren de asistencia del tribunal extranjero para

504
realizar peticiones en Chile. De este modo acceden directamente, y acceden
mediante una solicitud de reconocimiento del procedimiento extranjero.

Mediante esta solicitud de reconocimiento se pide el reconocimiento para (1)


producir ciertos efectos inmediatos respecto de los bienes del deudor en Chile;
y (2) para tener la oportunidad de solicitar ciertas medidas. Se debe presentar
ante el tribunal competente (domicilio del deudor: sucursal o el lugar en el que
se encuentran los bienes) y se deben acompañar una serie de documentos que
le permitan al tribunal extranjero determinar y validar que el procedimiento
extranjero existe (Ej. Copia de la resolución que declare iniciado el
procedimiento extranjero). Estos documentos deben ser presentados
legalizados y debidamente traducidos.

La ley establece ciertas presunciones en el art. 315 bajo las cuales el tribunal
debe reconocer un procedimiento extranjero:

“Presunciones relativas al reconocimiento.

1) Si la resolución o el certificado a que se hace referencia en el número 2) del


artículo 314 indican que el procedimiento extranjero y el representante
extranjero pueden ser calificados como tales conforme al presente Capítulo, el
tribunal estará a lo señalado en el certificado o resolución acompañada.

2) Los documentos que sean presentados en apoyo de la solicitud de


reconocimiento se entenderán auténticos si están legalizados con arreglo al
artículo anterior.

505
3) Salvo prueba en contrario, se presumirá que el domicilio social del deudor o
su residencia habitual, si se trata de una persona natural, es el centro de sus
principales intereses.”(art. 315).

La ley persigue que si el tribunal recibe documentos que están legalizados y


tengan apariencia de ser verdaderos, los tenga por auténticos.

Una vez analizada la solicitud, el tribunal deberá dictar una resolución de


reconocimiento. ¿Qué debe contener la resolución de reconocimiento del
procedimiento? La resolución tendrá por reconocido el procedimiento, y lo
hará cuando pueda validar que el procedimiento extranjero es un
procedimiento válido en el extranjero; cuando el representante extranjero era
un representante nombrado en el procedimiento. Lo reconocerá como de 2
tipos:

(a) Procedimiento extranjero principal.

(b) Procedimiento extranjero no principal.

Esta distinción se basa en que si por ejemplo hay un procedimiento seguido


contra una empresa que tiene su domicilio o centro de interés en un lugar
determinado, pero tiene bienes y sucursales en el resto del mundo, el
procedimiento será principal si se sigue en el lugar de su domicilio principal o
centro de interés. Si no es lugar donde tiene su domicilio principal o centro de
interés, lo reconocerá como no principal.

“Resolución de reconocimiento de un procedimiento extranjero.

506
1) Salvo lo dispuesto en el artículo 305, se otorgará reconocimiento a un
procedimiento extranjero cuando:

a) El procedimiento extranjero sea un procedimiento en el sentido de la letra a)


del artículo 301;

b) El representante extranjero que solicite el reconocimiento sea una persona o


un órgano en el sentido de la letra d) del artículo 301;

c) La solicitud cumpla los requisitos del número 2) del artículo 314, y

d) La solicitud haya sido presentada ante el tribunal competente conforme al


artículo 303.

2) Se reconocerá el procedimiento extranjero:

a) Como procedimiento extranjero principal, si se está tramitando en el Estado


donde el deudor tenga el centro de sus principales intereses, o

b) Como procedimiento no principal, si el deudor tiene en el territorio del


Estado del foro extranjero un establecimiento en el sentido de la letra f) del
artículo 301.

3) Se dictará a la mayor brevedad posible la resolución relativa al


reconocimiento de un procedimiento extranjero.

4) Lo dispuesto en el presente artículo y en los artículos 314, 315 y 317 no


impedirá que se modifique o revoque el reconocimiento en caso de

507
demostrarse la ausencia parcial o total de los motivos por los que se otorgó, o
que esos motivos han dejado de existir.” (art. 316).

Esta resolución puede ser revocada si se demuestra que ya no se cumple con


los requisitos o antecedentes necesarios.

La sola presentación de la solicitud de reconocimiento permite tomar ciertas


medidas en Chile en carácter de provisional, que tienen por objeto proteger los
bienes del deudor (art. 318):

(a) Suspensión de las ejecuciones individuales contra el deudor.

(b) Encomendar al representante extranjero o a una persona designada por


el tribunal competente la administración o la realización de todos o de
parte de los bienes del deudor que se encuentren en el territorio del
Estado de Chile, para proteger y preservar el valor de aquellos que, por su
naturaleza o por circunstancias concurrentes, sean perecederos,
expuestos a devaluación o estén amenazados por cualquier otra causa. A
UGARTE le parece esto poco realizable, pues deja una serie de dudas
respecto de las atribuciones que tendrá.

(c) En general la aplicación de medidas conservativas (ej. Nombramiento de


un interventor, prohibición de celebrar actos y contratos, etc.).

El tribunal al momento de dictar una resolución sobre un procedimiento


extranjero principal, dicha resolución tendrá efectos de pleno derecho (art.
319):

508
(a) Suspende los derechos de ejecución individual y las medidas de ejecución
que estén pendientes respecto de los bienes del deudor.Excepción: El
derecho a la ejecución individual no se entenderá suspendido si es
necesario para preservar un crédito en contra del deudor.

(b) Suspende el derecho del deudor de transferir y gravar bienes.

Si el procedimiento es uno no principal, estas medidas son facultativas para el


tribunal.

Además de lo anterior, el tribunal puede decretar las medidas del art. 320, que
se refieren por ejemplo al examen de testigos o la presentación de pruebas o
información que se ha solicitado, a encomendar al representante extranjero o
a la persona nombrada al efecto que realice los bienes. UGARTE cree que los
tribunales se verán fuertemente llamados a encargarle estas medidas a
liquidadores en Chile.

También se puede, una vez que se han realizado los bienes, procederse a la
distribución del producto de la realización de los bienes, y siempre
queeltribunal se haya asegurado de que los acreedores en Chile están
debidamente protegidos. El tribunal, de esta manera, tiene un deber de
proteger a los acreedores en Chile.

Al representante extranjero se le permite utilizar las herramientas de las


acciones revocatorias concursales chilenas para efectos de reintegrar bienes a
la masa (art. 322).

2. Administradores concursales chilenos van al extranjero a solicitar asistencia al


extranjero. Esto no está muy regulado, pero quien tiene potestad para actuar ante

509
tribunales extranjeros en procedimientos concursales es la SUPERIR. Este
organismoestá facultada para delegar esa facultad a los administradores
concursales que estén interviniendo en el procedimiento concursal chileno.

“Autorización para actuar en un Estado extranjero. La Superintendencia será el


órgano legitimado para actuar en un Estado extranjero en representación de un
procedimiento iniciado en Chile con arreglo a esta ley o a toda otra norma especial
relativa a la insolvencia, en la medida en que lo permita la ley extranjera aplicable.

La Superintendencia podrá delegar esta autorización para actuar en el


administrador concursal que esté conociendo del procedimiento. La
responsabilidad civil y administrativa en la que pudieren incurrir en el ejercicio de
sus funciones en un procedimiento extranjero se hará valer de acuerdo a los
términos establecidos en esta ley.” (Art. 304).

3. Que existan procedimientos concursales paralelos. Existen procedimientos


concursales en ambos países que están actualmente vigentes. La ley establece
deberes de cooperación entre los tribunales de ambos países (arts. 324 y ss.).

“Cooperación y comunicación directa entre un tribunal chileno y los tribunales o


representantes extranjeros.

1) En los asuntos indicados en el artículo 300, el tribunal competente deberá


cooperar en la medida de lo posible con los tribunales extranjeros o los
representantes extranjeros, ya sea directamente o por conducto de los
administradores concursales.

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2) El tribunal competente estará facultado para ponerse en comunicación directa
con los tribunales o representantes extranjeros o para recabar información o
asistencia directa de los mismos.

3) Toda cooperación y comunicación directa efectuada de conformidad al presente


artículo deberá ser publicada en el Boletín Concursal dentro del plazo de dos días
contado desde su realización. La falta de dicha publicación en ningún caso
invalidará la actuación realizada.” (art. 324).

Así, el tribunal estará facultado para ponerse en comunicación directa con los
tribunales o representantes extranjeros y deberá cooperar en la medida de lo
posible. La ley busca que los tribunales conversen acerca de cómo un
procedimiento puede estar afectando al otro.

Todo esfuerzo de cooperación debe ser publicado en el Boletín Concursal.

¿Formas en que pueden cooperar en la práctica? La ley dice que por cualquier
modo adecuado, y señala, entre otras cosas, mediante un representante del
procedimiento concursal chileno en el extranjero, mediante la entrega de
información, mediante la coordinación de la administración de los bienes.

¿Cómo se paga en el caso de procedimientos paralelos? La ley dice lo siguiente en


el art. 330:

“Regla de pago para procedimientos paralelos. Sin perjuicio de los titulares de


créditos garantizados o de derechos reales, un acreedor que haya percibido un
pago parcial respecto de su crédito en un procedimiento tramitado en un Estado
extranjero con arreglo a una norma relativa a la insolvencia no podrá percibir un
nuevo pago por ese mismo crédito en un Procedimiento Concursal que se tramite

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con arreglo a esta ley respecto de ese mismo deudor cuando el pago percibido por
los demás acreedores de la misma categoría sea proporcionalmente inferior a la
suma ya percibida por el acreedor.”

De esta manera, en la práctica se reconocerán como repartos recibidos, los que el


mismo acreedor ha recibido en el extranjero. En la práctica, se puede dar que un
acreedor extranjero haya recibido ya un 8%, y se acuerde en Chile un 20%,
entonces en ese caso recibirá 12%.

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