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Enero-Febrero, 1956
RESERVADO
para
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INTRODUCCIÓN
JL
A aparición del primer número de nuestro Boletín es otro paso más,
firme y seguro como los anteriores, que la Agrupación Almeriense dá
hacia esa meta dorada y lejana que todos los que nos afanamos en
este bello arte de la fotografía no concretamos de una manera neta y
definida por temor a llegar demasiado pronto a ella y entonces sentir
que ya no tenemos alas. Debemos marcarnos, más bien, jalones de un
largo camino que nos llevará a un ideal de superación de muy remo-
tas posibilidades y asi poder ir señalando con alegría las etapas con-
seguidas sin reducir por ello la lejana belleza del máximo objetivo.
Primero fueron las obras y luego las palabras, marchando noso-
tros a contrapelo de la costumbre. Porque tuvieron realidad las pri-
meras ediciones de nuestros Salones Marineros y solo después llega-
mos a constituirnos como Sociedad. Pero Sociedad volante, sin domi-
cilio y sin nada. Sin nada más que entusiasmo y fé. Y movidas por
esas dos palancas vinieron las demás cosas: el local social, el mobi-
liario, el embrión de biblioteca, el bar, el germen del laboratorio... y el
aumento lento pero constante de socios, único barómetro auténtico del
éxito o el fracaso de cualquier Sociedad.
En Agosto celebramos la VI edición de nuestro Salón Nacional del
Mar superándose la fría estadística de participantes y obras sobre
años anteriores y casi a continuación se inició la organización del
I Gran Salón de Invierno con tema libre, que en estos momentos tene-
mos colgado en la Biblioteca «Francisco Villaespesa» con un éxito
arroUador de público que Un e honor a la calidad y cantidad de fotos
recibidas. Y aún sin descolgar dichas obras ya está circulando por
España la convocatoria de otro Salón Nacional para el mes de Abril,
con tema sacro, para el que el Seminario de Almería tiene prepara-
das unas bellísimas Vírgenes de plata. ¿Y qué más? Concursos socia-
les, excursiones para la inmediata primavera, definitivo montaje del
laboratorio, decoración del local para su utilización como sala de ex-
posiciones...
Paralelo a todo ello ahora sale a la luz el primer número de nues-
tro Boletín, pero con ambición de ser bastante más que una mera hoja
volante para exclusivo uso de socios. Mucho más que eso, con ser ello
algo. Más bien coi rabiosas ganas de servir a todos los aficionados
de España en este b.ien momento fotográfico que vivimos. Con deseo de
que El Ferrol y Iluelva y Castellón y Gerona quepan en sus páginas,
que irán en aumento para constituir un pequeño portavoz indepen-
diente de las inquietudes de lodos los grupos fotográficos, noveles o
señeros, que coincidan con nosotros.
Portada: «STUDI-
de José Obré
Así pues, amigos, hermanos, eslas páginas son también vuestras-
n.« PREMIO •GEVALUXE-) Os esperamos en ellas
TROYANO
Material Fotográfico y Laboratorio para aficionados
Generalísimo, 4 ALMERÍA
LUIS GUERRY
Estudio Fotográfico
Generalísimo, 25 ALMERÍA
LEÓN
Trabajos de Laboratorio pata aficionados
Ricardos, 9 ALMERÍA
FOTO-ESTUDIO CRISTÓBAL
Material Fotográfico y Laboratorio Fotográfico para aficionados
Generalísimo, 86 ALMERÍA
calendario de salones
l.er Salón Nacional de Fotografía
de Tema Sacro.—Organizado por la
Agrupación Fotográfica Aimeriense.
Tema: Religioso en sus diferentes INSTANTÁNEAS
aspectos. Número de pruebas: Cua-
tro como máximo. Plazo de admi- por C A R L O S P É R E Z S I Q U I E R
sión de obras: Hasta el 30 de mar-
zo. Derechos: 15 pesetas. Envíos al
Apartado 115. Almería.
IV Salón Internacional de Foto- • Conectaba la radio en el laboratorio y to-
grafía.—Organizado por la Sociedad das las tardes oía música de cámara obs-
Fotográfica de Alicante. Tema: Libre cura.
inéditas en este Salón. Número de
pruebas: Máximo de cuatro. Plazo
de admisión: Hasta el 15 de enero. • A aquel aficionado le llamaban presumido
Derechos: Ninguno. Envíos: A don
porque hacía demasiado uso del fijador.
José Martínez Jover. Apartado de
Correos, 282. Alicante.
RESERVADO
para
" B A M B I " de Petar Kocjanclc
He aquí un par
'CRISTAL D I B U J A D O " de José Veiga Roel
lo mismo ideo.
G U I L L E R M O BERJÓN
J O A Q U Í N P. SIQUIER
Hoy al hombre de su tiempo no sólo le atrae sino que le preocupa el Cine, fa-
buloso medio de expresión de alcance insospechado hace algunos años. Pero nues-
tra tarea, nuestra misión es orientar esa preocupación, esa atracción que el hom-
bre siente hacia la Cinematografía. ¿Cómo?. Mediante la educación del espectador
para que éste aprenda a distinguir los diferentes ualores que componen una pelí-
cula. Y mediante, una labor cuidada, inteligente, de Cine Club, que operando en
sus comienzos sobre una minoría selecta, extienda su campo posteriormente so-
bre una masa cada uez más numerosa de aficionados. Tarea que es nuestra la pri-
mera, y de nuestros queridos compañeros de fígrupación y nuestra también, la se
gunda.
N O T A S S O B R E EL D O C U M E N T A L
«He aquí un arte basado en la fotografía,
cuyo factor esencial han de ser hechos ob-
servados en la realidad».
Jitíiií Gríeraon
Es triste, verdaderamente triste, pen- los espectos más interesantes del cine, y
sar en la situación que ocupa el cine do- perdónesenos la redundancia, más genui-
cumental en nuestras pantallas. El corto- namente cinematográfico. Y tiene un es-
metraje figura en nuestras salas —cuan- pléndido desarrollo en Italia, Inglaterra
do figura—, como complemento de una y Francia.
película comercial de duración normal. Lo que sucede entre nosotros es que
Parece como si el cine documental se hu- los distribuidores y exhibidores no se
biera extinguido y no interesara a nadie, arriesgan a un cine que califican de «no
o a lo más consiga retener la atención comercial» y «aburrido». Esta postura
del espectador, no más allá de quince puede entrañar unaequivocociónque nos
minutos. Sin embargo, constituye uno de perjudica a todos, especialmente a los
jóvenes. Si no, que lo digan nuestros ma- también hay que tener en cuenta), y des-
yores, que fueron testigos —hace varias aparecerían los prejuicios existentes so-
decenas de años— del éxito de películas bre el supuesto «aburrimiento» del do-
como «Olimpiada», «Tabú» y «Hombres cumental.
de Aran». Hoy día, estas obras maestras, Y ¿qué es un d o c u m e n t a l ? . Es la pelícu-
y todo el cine documental que se produ- la que trata -creadora-mente» elmundo existente.
ce en el mundo está desgraciadamente Utilizando la idea del espejo que Sten-
fuera del alcance del verdadero aficiona- dhal ideó para definir la novela, podría-
do, que tiene que recurrir a las sesiones mos decir que la cámara es como un es-
que tras mil esfuerzos con- pejo que penetra en todas
siguen dar nuestros heroi- partes y que capta las co-
cos Cine Clubs. (Y nos re- sas reales sin falsearlas pe-
ro re-creándolas. (Y aquí
servamos para otro mo-
es donde interviene la ma-
mento en qué consiste esta
no del artista para elevar
heroicidad). Sin embargo,
el material con que opera
a despecho de este estado a la categoría de arte). La
de cosas y en contra de la realidad puede superar a
opinión existente, que es la invención y la vida ofre-
una opinión por ignoran- ce temas casi siempre más
cia, estamos seguros que apasionantes que los ima-
si se le diera oportunidad ginados. Las imágenes del
al público de conocer esta mundo que nos rodea, no
clase de películas, obten- del ficticio que se levanta
drían un g r a n éxito ar- en el estudio, es la esencia
tístico y comercial, (que del documental.
Para juzgar una película no es necesario haber visto muchas. (El que no bebe nunca nada más
que vino tinto no está en disposición de apreciar los vinos generosos).
1. Es preciso «escoger la película». Na hay que ir al cine, sino ir «a ver una película».
2. Escogerlas independientemente de la «publicidad». No solamente porque es una película de!
Oeste, una policíaca, un drama o un melodrama.
3. Escoger una película por el «director».
4. Aprender a «observar». Comenzar a observar el diálogo y sus mejores frases, la música, el
color, la impresión general. No os levantéis hasta que hayáis visto aparecer la palabra «fin'. Es posi-
ble que la última secuencia sea esencial y esté especialmente cuidada por el director.
(De «Revista ínternacifinal IÍL! Cine»)
N O T I C I A R I O
<•> Se celebró el III Festival de Cinematografía de Almería. Los premios de Interpretación fueron
concedidos a Carmen Sevilla por «La Fierecilla Domada», y a Juan José Menéndez por «Suspenso en
Comunismo». Consistieron en unas artísticas «Alcazabas de oro».
<•> Por una importante casa productora le ha sido encomendado la confección de un guión para una
película que se rodará en Almería, a nuestro Vocal de Cinematografía, D. Antonio Pumarola Bueno.
<•> Es ya una alegre realidad la construcción en nuestra ciudad de un nuevo cine que por sus carac-
terísticas técnicas y artísticas, creemos ha de satisfacer al más exigente aficionado.
Jleaista de musías
^ODAS las revistas dedicadas a la fotografía abundan en
artículos de técnica fotográfica y son ya innumerables las
páginas dedicadas a hablar de reveladores, sensibilidad
de emulsiones, asociaciones de lentes, etc., etc. Para el
aficionado principiante, aquel que comienza a asomarse
al fabuloso campo de la fotografía, todos estos artículos
le sobran y aún le empavorecen, por suponer son necesa-
rios tantos y tan profundos conocimientos de química y
física para hacer buenas fotografías. Por eso, en esta Sección del Boletí», solo seleccio-
naremos artículos sobre lo más importante, a nuestro juicio, para cualquier aficiona-
do: el desarrollo de su gusto personal y la evolución y depuración de su propio yo a
partir de un mínimo de personalidad que debe caracterizar toda su obra, cada día
—naturalmente— más técnicamente conseguida.
Dedicamos el espacio de hoy al retrato, traduciendo y «digeslando», según el térmi-
no moderno, un artículo de la revista internacional PHOTORAMA que recibimos por
amabilidad de la Casa GEVAERT.
E L R E T R A T O Y EL P E Q U E Ñ O F O R M A T O
R. P. LONGINUS DE MUNTER, O. F. M. Lokeren
No puede uno por menos de sorpren- retrato representa una tarea tan difícil?
derse del número de estudios sobre el Se ha dicho que un buen retrato requie-
retrato fotográfico que comienzan por el re 25 ° 0 de técnica y 75 °/0 de psicolo-
decepcionante aviso de que todo está gía; por tanto, la formación del retratis-
ya dicho sobre ese tema y que por tanto ta debe comenzar por el propio retratis-
cuando pueda todavía escribirse a ese ta, y ésto no es un juego de palabras.
sujeto, no son más que lugares comunes La cuestión de srber si el fotógrafo que
y vanas repeticiones. Sin querer oponer- se arriesga al retrato hará o no buen
nos completamente a esta extendida opi- trabajo, está juzgada antes incluso de
nión, podemos sin embargo hacer cons- que el modelo intente la pose. Lo que es
tar, que la mayor parte de los fotógrafos primordial para efectuar un buen retra-
tanto p-ofesionales como aficionados to, no es la iluminación, ni la elección
que intentan el retrato, parecen desco- de un fondo, ni uno cualquiera de los
nocer cuanto es necesario para conse- problemas técnicos que surgen en el cur-
guir un retrato de calidad. Si todo ha so de la toma de un retrato, sino que lo
sido ya dicho, no todo está ya hecho. esencial es la habilidcd del fotógrafo
Un vistazo a la vitrina de la mayor par- para captar la expresión característica
te de los estudios fotográficos es frecuen- de su personaje, lo que él tiene de per-
temente decepcionante. sonal. Si el fotógrafo retratista no tiene
Muchos críticos y fotógrafos consa- el don de ver lo esencial, hay 90 proba-
grados coinciden en que el número de bilidades contra 100 de que su trabajo
buenos retratistas es muy reducido, ¿será sea más bien mediocre. Nunca se repe-
pues cierto que la confección de un buen tirá bastante que la primera tarea del
fotógrafo es la de «descubrir» a su mo- retrato, propiamente hablando, lo que
delo. Es mucho más importante aprender se ha llamado «candid photo»: instantá-
a ver, que aprender a iluminar, a reve- neas felices de una expresión divertida
lar, a ampliar. Por tanto, un tercio de accidental, de una actitud cómica o ridi-
cula, la fijación de quien llora con gran-
técnica y dos tercios de sentido psicoló-
des lagrimas o quien estalla en carcaja-
gico; sin ello es raro poder hacer un
das. Lo que sí es admisible como retrato
buen retrato. propiamente dicho, es lo que corriente-
Nosotros entendemos por retrato, la mente se llama foto clandestina o retrato
representación de un ser humano tal co- robado. Entendemos como retrato roba-
mo es realmente, interior y exteriormen- do, el golpe de obturador dado en el
te. Es sobre todo la representación de la momento preciso en que la persona que
personalidad interior lo que importa se encuentra delante de nosotros olvida
aquí. Lo que nosotros d e s e a m o s en- el aparato fotográfico que le vigila y
contrar en el retrato de los que conoce- por la causa que sea abandona su más-
mos, es precisamente esa característica cara para volver a ser la persona que
personal, su sello, la actitud adecuada, realmente es.
la expresión personal habitual en esas
Al profesional principiante que quiere
personas. Lo esencial reside más que en
el lenguaje de los ojos, de las manos o
de la boca, en la exteriorización de un
estado anímico. Podemos adoptar para
el retrato la delicada definición que nos
dá el poeta alemán Lessing: «la personi-
ficación de un alma individual». Estable-
ceremos por tanto una distinción entre
el retrato propiamente dicho y lo que
podemos denominar «ilustración». Esto
último no es otra cosa que la represen-
tación de una persona captada en un
hacer su escuela a sus propias expensas,
momento de suerte o con una actitud
o al aficionado que se arriesga a sus
conveniente, impuesta o espontánea. En
primeros retratos, les daremos el mismo
este caso, no tiene importancia que esta
consejo: elegir como modelos a viejos
ilustración esté en absoluta oposición
de clase humilde. Nada hay más apro-
con la esencia íntima y real de la perso-
piado para hacer retratos auténticos que
na. La fotografía de modas, entre otras,
estos pequeños viejos y su simplicidad.
pertenece a este género. El maniquí no
Esas gentes no posan, no llevan másca-
existe allí mas que por la ropa, el som-
ra; jamás abandonan su naturalidad. Los
brero o los zapatos.
jóvenes quieren siempre ser aventajados
No debemos, pues, creer que mímica por sus retratos; los viejos no tienen ese
y expresión sean una misma cosa. La mí- deseo. Es un hecho que la mayor parte
mica es la exteriorización de una emo- de los sujetos desean mostrarse bajo su
ción pasajera, mientras que la expresión aspecto más atractivo o ventajoso cuan-
es el reflejo de un estado de alma autén- do se retratan. Tienen muchas veces un
rico. El retrato de «ilustración» es narra- aire realmente hinchado. Incluso a me-
tivo; el retrato propiamente dicho des- nudo, querrían verse representados en
vela un alma interior. No es tampoco su retrato como desearían haber sido
hechos p o r la naturaleza. Para satis- por otra parte embellecimiento alguno.
facer a este género menos loable de Nos basta pues evitar los grandes erro-
vanidad, el p r o f e s i o n a l se atreve a res en la exposición, errores que preci-
«embellecerlos» a veces demasiado. Es- samente en más de una ocasión son los
tos embellecimientos comprometen auto- que obligan al profesional a retocar.
máticamente el parecido, los rasgos ca- No se me escapa que la polémica «pe-
racterísticos y los destruyen a veces com- queño o gran formato» es inagotable.
pletamente. El sofisma, peligrosamente La mayor parte de los adversarios del
extendido en los estudios de los retratis- pequeño f o r m a t o son desencantados
tas, según el cual «el cliente no está sa- que no han logrado asimilar la técnica
tisfecho más que cuando parece mejor del pequeño formato o los que han en-
en el retrato que en la realidad» es la contrado más fácil y agradable trabajar
muerte del verdadero retrato psicológi- sobre un negativo de gran formato. Es
co. Muchos fotógrafos han sucumbido a indiscutible por otra parte que la foto-
las exigencias de un público vanidoso y grafía con Leica es más exigente que el
vulgar. Pero quizá la culpa esté más en gran formato. No pretendo que existan
el fotógrafo que en el público que se de- aparatos apropiados y otros no apropia-
ja llevar de su egocentrismo. Un retrato, dos para el retrato; digo solamente que
en donde realmente se impongan los también es posible hacer retratos de alta
rasgos psicológicos del retratado, deja- calidad con Leica o Contax. Todo lo ya
ría contento a un número considerable hecho hasta aquí con Leica debería im-
de clientes que no habrían sido asesina- poner silencio a los detractores.- es estú-
dos por el embellecimiento. pido negar la evidencia. Me aventuraría
Afortunadamente, c o m o aficionados incluso a decir que en materia de retrato
como somos, no nos alcanza este aspec- la cámara no es más que un mero acce-
to comercial del problema. Nuestros mo- sorio y que para el retrato, tanto como
delos no se inquietan por una arruga de para la fotografía en general lo esencial
más o de menos. Y nuestros negativos no es el aparato, sino las aptitudes téc-
de pequeño formato, tampoco admiten nicas y estéticas d e l hombre que de
ella se sirve. Ya Lamartine d i j o
que «la fotografía es ante todo el
fotógrafo». Los buenos retratos no
os van a caer del cielo como el
maná de los tiempos bíblicos. Es
hacerse ilusiones imaginarse que
se hará buen trabajo en cuanto se
disponga de una costosa Linhof.
Linhof o Leica solo llegaremos a
conseguir bellas obras al precio de
perseverantes esfuerzos, tanto pa-
ra proporcionarnos el porcentaje
técnico necesario, como para lle-
¡Mira, Eduardo, prepara otra vez todo, que ya
varnos al porcentaje psicológico
sonríe el niño/
(•Collier's») más elevado.
para
Kodak
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para
IlffOMl