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Cuando llevamos a cabo una planeación fiscal esta debe estar documentada y

soportada de tal manera que haya evidencia de las personas que intervinieron y
autorizaron las estrategias y el mecanismo de cómo llevarlas a cabo, donde se
definirán los objetivos y beneficios planeados para lo cual deberá elaborarse
un Manual de Políticas Fiscales que deberá estar debidamente integrado y que
incluirá lo siguiente:

 Soporte Legal

 Soporte Documental

 Soporte Contable

 Razón de Negocio.

Soporte legal. Es indispensable que toda la planeación sea sustentada bajo un


adecuado soporte Jurídico ya que en caso de justificarla o aclararla ante las
autoridades o terceros esta pueda defenderse y salir victorioso.

Los medios de sustento serán entonces:

· Las leyes,

· Reglamentos,

· Códigos, etc.

En fin toda la legislación utilizada para justificar y defender las actividades y


operaciones realizadas.
Vale la pena considerar lo que establece el Art. 5 del C.F.F. “Las disposiciones
fiscales que establecen cargas a los particulares y las que señalan excepciones a
las mismas, así como las que fijan infracciones y sanciones son de aplicación
estricta”.
Soporte Documental. Es común encontrar que una vez que realizamos la
planeación, tenemos la “idea clara” sin embargo, el soporte documental lo
dejamos al final si es que hubiera alguna aclaración, por lo que esto no deberá ser
así, ya que en el momento de la realización de cada operación el líder del proyecto
deberá asegurarse de que se cuente con el soporte como: contratos, actas,
documentación que avale la operación que reúnan los requisitos fiscales que las
leyes establezcan previamente.
Soporte Contable. Todas las operaciones deberán estar registradas en
contabilidad para que sean válidas, ya que así lo señala el Art. 31 Fracc. IV de la
Ley de ISR “Que estén debidamente registradas en contabilidad”.

Razón del Negocio o lógica Operativa. Este punto no debe pasar por alto ya que
en ocasiones en la planeación solo se “ven los beneficios fiscales” y se deja a un
lado la lógica operativa, tal es el caso de operaciones a valor de mercado o
deducciones de acuerdo al giro, así como la relación lógica que deben llevar los
ingresos y egresos conforme al flujo de efectivo, para estas situaciones
deberemos tener especial cuidado ya que existe el riesgo de perder la visión en la
compañía, es más factible que está situación se dé cuando la planeación la
componen empresas de un grupo que realizan operaciones o se prestan servicios
entre ellas y si no se tiene especial cuidado de este requisito puede ocasionar la
pérdida de control en la lógica operativa entre ellas, para lo cual el orden y control
que se deberá llevar serán requisito indispensable.
Soporte jurídico

Todo programa o actividad a desarrollar en la empresa debe quedar debidamente


soportada, para evitar caer en pago de impuestos excesivos o en un problema
fiscal y/o penal con las autoridades hacendarias: el soporte que debe hacer es:

a) Soporte Fiscal: Que la operación o actividad a efectuar esté dentro de las


leyes fiscales debidamente fundamentada.

b) Soporte Legal: Que tenga el soporte jurídico necesario para que en caso de
alguna discrepancia con las autoridades fiscales o cualquier tercero se pueda
defender la operación o actividad realizada.

c) Soporte Documental: Que se cuente con el documento, contrato, acta, etc.,


respectiva que sea necesaria. Existe el dicho “papelito habla”, lo que es totalmente
cierto.

d) Soporte Contable: Uno de los requisitos de la deducibilidad es el de registrar


contablemente todas y cada una de las operaciones efectuadas, ya que el no
hacerlo tiene como castigo la no deducibilidad de la partida, aunque se reúnan
todos los demás requisitos fiscales.
e) Razón de negocio: Que cuando se efectúe algún programa empresarial en la
empresa se realice no nada más por el aspecto fiscal, sino como consecuencia de
las actividades normales o cambios convenientes para el negocio, tendientes a
mejorar por una razón de negocios, por ejemplo: el constituir un corporativo de
servicios para evitar que una huelga paralice las actividades de la empresa.

f) Dictamen Fiscal: En toda la contribución es importante tener la seguridad de


que la información que se tiene para la toma de decisiones es confiable, así como
para tener una garantía jurídica en la implantación de un programa de
optimización fiscal, por lo que resulta un acierto el dictaminarse para efectos
fiscales y financieros.

Los dictámenes que la empresa puede hacer son los siguientes:

 Para efectos fiscales y financieros.


 De enajenación de acciones.
 Para efectos del seguro social e INFONAVIT.
 Declaraciones para devoluciones del IVA.
 Para efectos financieros.
 Contribuciones locales.

Otras consideraciones de la planeación fiscal

 Bitácora de perdidas fiscales.


 Operaciones a valor de mercado.
 Informe de la situación fiscal a los accionistas de la empresa.
 Determinación exacta del Costo de lo Vendido.
 Presentación de Declaración Informativa como requisito de
deducibilidad.

Ejemplo: Sueldos y salarios.


Clientes y Proveedores
http://www.cefa.com.mx/articulos/di55p19.html

La planeación fiscal es un concepto es bastante utilizado en nuestro medio porque


tiene gran relevancia para los empresarios, sobre todo para aquellos que tributan
considerablemente y terminan culpando al contador por sus altos impuestos, pero
además es muy útil para nosotros los contadores, tanto que puede ser la diferencia
entre la molestia y la resignación del cliente al momento de tributar, pero…¿cómo
hacer la planeación de los impuestos?
Para muchos este puede ser un tema del día a día, pero para otros será toda una
pesadilla porque es algo de lo que muchos hablan pero pocos enseñan.

Recuerdo cuando inicié a incluir este concepto en mis servicios, busqué toda la
información que pude en todas las fuentes que se me ocurrieron para llegar a una
conclusión satisfactoria de lo que es la planeación fiscal pero siempre terminé
desalentado porque solo encontraba opiniones de personas basadas en su
experiencia cuando yo esperaba encontrar un formato o método único de hacerlo,
entonces comprendí lo más importante (para mi) de este tema: La Planeación fiscal
es un concepto subjetivo, no un método universal.

Tan crudo fue aprender esto que tuve un momento incómodo con mi docente de
planeación fiscal cuando cursaba mi especialización en Gerencia Financiera. El
docente nos entregó un modelo de planeación (basado en la matriz DOFA) con un
número definido de criterios que debíamos aplicar a una empresa y definir
acciones, yo decidí hacerlo más real y tomé a uno de mis clientes para aplicar el
proyecto pero el resultado no dejó satisfecho al teacher, quien me preguntó porque
en algunos de los criterios no tenía acciones y entonces respondí:

«La empresa que elegí para aplicar la planeación no cumple con las condiciones
del formato porque tiene obligaciones fiscales distintas y algunos de los aspectos
que usted nos solicita no le afectan en absoluto a esta empresa»

El docente me respondió: «Entonces el trabajo está incompleto».

Para no alargar la historia, después de una larga discusión con el docente (en el
buen sentido) y solicitar una segunda opinión que me fue negada, tuve que ceder,
aceptar una mala calificación en ese proyecto y repetir la materia. Si, me pareció
una locura pero lo acepté y la mejor la lección que aprendí en esa ocasión fue:
Planear no es un asunto de modelos sino de análisis.

No obstante lo anterior, algunos aspectos son fundamentales en la planeación de


cualquier proyecto y eso es justo lo que te mencionaré a continuación:

Así se hace una planeación fiscal


1. Presupuestar resultados:
Lo primero a considerar es la proyección de los resultados. Planear cuánto serán
las ventas, los costos, los gastos y las utilidades es el primer paso para conocer cuál
puede ser el monto de impuestos a pagar por el contribuyente en el año siguiente.

Generalmente los impuestos más representativos están relacionados con las ventas
y la utilidad, por eso esta proyección es esencial. Lo ideal es que este presupuesto
se haga los últimos 3 meses del año actual para estimar los resultados del año
siguiente.

Luego, durante el transcurso del año vas llevando un control de lo presupuestado


y lo ejecutado para medir las variaciones y tomar medidas en el camino si ves que
la realidad superará significativamente tu proyección.

2. Identificar los riesgos:


Al decir riesgos me refiero a los rubros que pueden causar un incremento en los
impuestos más allá de lo presupuestado, encontrar cuáles son y como controlarlos
es la prioridad en este punto.

Solo hay 2 maneras de controlar los impuestos generados por el incremento de las
utilidades: Disminuyendo ventas o incrementando deducciones. La salida más fácil
(pero nada profesional) que aplican muchos comerciantes es NO FACTURAR
TODO, pero esto NO puede llamarse planeación sino evasión de impuestos y es
un camino que NUNCA te recomendaría.

Obviamente nadie quiere dejar de vender por eso los ingresos suelen ser uno de los
factores que menos se utiliza en planeación; alguna vez alguien con mala intensión
me dijo: Dígame una estrategia para no pagar tanto impuesto. Yo le respondí:
Cierre el negocio cuando crea que ha vendido demasiado.

Por otra parte las deducciones son más fáciles de manejar porque la empresa tiene
control sobre ellas, ya sea para incrementar los beneficios de terceros y disminuir
el impuesto (por ejemplo dando incentivos para aumentar los costos) o para
cambiar de proveedores que impiden la deducción de costos y gastos (porque sus
condiciones de facturación no se ajustan a las normas tributarias).
En ambos casos es necesario hacer un análisis de los proveedores de mercancía y
prestadores de servicios que pueden estar generando disminución en las
deducciones y buscar alternativas para aprovecharlas mejor.

3. Diseñar estrategias
Diseñar estrategias requiere de un conocimiento profundo de las normas aplicables
a cada tipo de contribuyente, de manera que se pueden realizar acciones que
mitiguen el impacto fiscal a lo largo del año.

Generalmente las estrategias de ingresos van relacionadas con la gestión comercial


y requieren un cambio profundo en la operación.

Ejemplo:

Una empresa decide que en adelante prestará sus servicios en la modalidad de


suscripción porque este concepto le permite facturar un ingreso diferido y el
impuesto NO recae sobre el total de la venta sino simplemente sobre la porción
que se causó como ingreso.

En el caso de las deducciones pueden existir varios caminos, en Colombia por


ejemplo, existen beneficios para las empresas que contraten personas jóvenes,
madres cabeza de familia, desplazados por la violencia o para quienes hagan
donaciones a corporaciones, fundaciones o asociaciones.

Cuándo tú conoces el resultado estimado para el año siguiente y la carga tributaria


que tendrá tu cliente (porque hiciste la proyección), le sugieres con tiempo algunas
de estas medidas para que puedan ser aplicables desde el primer día del año
siguiente y de esta manera cuando llegue el momento de pagar el impuesto ya se
haya venido minimizando en función de las estrategias implementadas
Esta es la razón por la cual las grandes compañías siempre forman entidades sin
ánimo de lucro, porque prefieren pagar sus impuestos con servicios sociales que
entregárselos directamente al estado y este también se beneficia de ello porque el
contribuyente reemplaza el impuesto con una función social que le corresponde al
gobierno.

Conclusión
La planeación NO ES un modelo o formato pre diseñado que todo mundo conoce
para diligenciarlo conforme a unos parámetros aprendidos, sino el resultado de tu
conocimiento de la norma y el contribuyente para tomar acciones preventivas
respecto a los impuestos a pagar.

Es este orden de ideas tú puedes tener tu propio modelo de planeación incluso


basándote en otros campos de la gerencia como el de planeación estratégica, lo
importante es que tu planeación contenga: Un presupuesto, la identificación de los
riesgos de incrementar impuestos y las estrategias para mantenerlos dentro de lo
presupuestado. Pero si aún sigues pensando que necesitas un ejemplo este te puede
ser útil.

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