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INFORME PRÁCTICA DE CAMPO

“GEOLOGÍA DE COLOMBIA Y TECTÓNICA”


25/Nov/19-28/Nov/19

POR:

LAURA XIMENA DUARTE PENAGOS


CÓD:
JOHANA HOSYRIS LÓPEZ APARICIO
CÓD:
LAURA DANIELA BECERRA CARREÑO
CÓD: 201620141

PRESENTADO A:
Esp. MARTHA LUDY MARTÍNEZ PÉREZ

UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA Y TECNOLÓGICA DE COLOMBIA


FACULTAD SECCIONAL SOGAMOSO
INGENIERÍA GEOLÓGICA
SOGAMOSO
2019

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OBJETIVOS

OBJETIVO GENERAL:
Verificar e identificar estructuras, litología, geomorfología, sucesos y procesos geológicos que han
intervenido en los tres ramales característicos de la Cordillera de los Andes, Colombia.

Objetivos específicos:
 Describir a detalle perfiles característicos de estructuras y aspectos geológicos que permiten
dar lugar a interpretación de la correspondiente reconstrucción geológica.
 Deducir a partir de aspectos diagnósticos del paisaje la caracterización del posible riesgo
geológico al que están expuestos diferentes municipios durante el recorrido, y a su vez,
sugerir posibles planes de contingencia.
 Caracterizar los diferentes rasgos petrográficos y físicos de las diferentes muestras que
permitieron evidenciar el cambio litológico que divide la Cordillera de Los Andes en tres
ramales, a partir de sus diferentes procesos geológicos de formación.

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1. SITUACIÓN GEOGRÁFICA

Colombia está situada, dentro del marco tectónico global, en la placa suramericana que sufre un
proceso de separación de la placa africana. El vestigio de esa separación es una sutura en el piso
del océano Atlántico denominada Rift. Por estar en la esquina noroccidental de la placa
suramericana, Colombia se encuentra en un sitio de choque entre la placa Pacífica, oceánica, y el
borde de la placa suramericana; allí la placa Pacífica empieza a penetrar debajo de ella, en un
evento conocido como subducción. La placa del Caribe también presenta una zona de subducción y
penetra a una velocidad de 1 a 2 cm por año. La placa Pacífica penetra a una velocidad mayor, 6
cm/año. Este juego de movimientos de placas produce una serie de fallas de sentido SE – NW,
como las falla de Romeral, Cauca-Patía, Soapaga y la del borde este de la Cordillera Oriental.
(Navas, 2003, p.1)
También se originan fallas de rumbo, como la falla de Bucaramanga-Santa Marta que desplazó la
Sierra Nevada de Santa Marta, un ente tectónico de la Cordillera Central, hacia el noroeste por va-
rios kilómetros. Debido a las fallas se genera mucho esfuerzo y acumulación de energía que, al
liberarse, da origen a un considerable número de sismos en la zona. La placa Pacífica subduce la
placa suramericana levantando las cordilleras. Una vez éstas se forman, comienzan eventos de
erosión, transporte y acumulación de materiales en una cuenca de sedimentación interna. (Navas,
2003, p.2)
Cuando la placa oceánica llega a cierto nivel de profundidad, se vuelven a fundir las rocas del piso
oceánico, entonces este nuevo magma busca zonas de debilidad y comienza a ascender generando
su enfriamiento y formando rocas intrusivas cuando se solidifican dentro de la corteza continental.
Por condiciones especiales del magma, puede haber emisión de gases que salen a la superficie
formando las rocas efusivas, volcánicas o explosivas. (Navas, 2003, p.3)
“En el país hay una cadena de volcanes que van desde Manizales, con el volcán Nevado del Ruiz, y
continúa hasta el Ecuador; esta serie de formaciones volcánicas obedece a dicho origen”. (Navas,
2003, p.3)
Como consecuencia del choque de placas emergió primero la Cordillera Central, después la
Occidental como consecuencia de un salto de la zona de subducción y posteriormente emerge la
Cordillera Oriental donde los restos de reptiles gigantes quedaron fosilizados y por ello es común
encontrarlos en zonas como Villa de Leyva y en los altiplanos de esta cordillera. (Navas, 2003, p.3)

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MARCO GEOLÓGICO

2. ESTRATIGRAFÍA

2.1. PALEOZÓICO

2.1.1. Complejo Cajamarca:

El Complejo Cajamarca (Pzc) senso Maya y González (1995), o en parte Terreno


Cajamarca senso Etayo-Serna (1986) y Grupo Cajamarca senso Nelson (1957) está
limitado al oeste por la Falla San Jerónimo (McCourt, 1984). Esta unidad está
compuesta por rocas metamórficas de bajo grado de edad Paleozoica, que constituyen
el basamento de la Cordillera Central. (López, M.p.12)

No es posible determinar el espesor con precisión debido al intenso plegamiento y


ausencia de capas guía, varía ampliamente la composición y es el resultado de varios
episodios de metamorfismo regional a los cuales se superponen efectos térmicos o
dinámicos de intensidad variable. Las características mineralógicas y facilidad de
identificación permitieron separar de la siguiente manera:

Grupo político: Constituido por filitas, esquistos sericíticos y micáceos (Pes) y


metasedimentitas (Pmm).

Grupo Cuarzo: Cuarcitas (Pq).

Grupo Básico: Esquistos verdes y anfibolitas (Pev).

2.2. MESOZÓICO

2.2.1. Triásico – Jurásico.

2.2.1.1. Batolito de Ibagué:

La composición predominante del intrusivo es cuarzodioritica, con tamaño de grano


medio a grueso; el color es generalmente gris con diversos tonos, dependiendo del
contenido de minerales ferromagnesianos (hornblenda y biotita). El promedio
composicional modal, obtenido de contenidos realizados por C. J. Vesga y A. Núñez,
sobre secciones delgadas Standard, para todo el cuerpo es 59% plagioclasa, 25%, 4%
feldespato potásico, y 6% hornblenda, 4% biotita, más 2% de minerales accesorios
como opacos, allanita, apatito, zircón, esfena. Composicionalmente el Batolito presenta
cuatro facies; dentro de estas cuatro facies generales, ya sea por modificaciones
texturales y / o mineralógicas, se encuentran tres subfacies si así podemos
denominarlas. Las cuatro facies composicionales, en orden de predominio son:

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Facies cuarzodioritica: cuarzodioritica medio a grueso granular, es la composición
predominante del Plutón. Los minerales máficos comunes son hornblenda y biotita son
zonas irregulares en donde predomina un mineral sobre el otro.
Facies granodiorita: granodiorita medio a grueso granular, esta facies se producen por
aumento local en el contenido de feldespato potásico. El contacto entre estas facies y la
anterior es difuso.

Facies cuarzo mozonítica: es la facie más acida del batolito se localiza en las cercanías
del municipio de Roncesvalles (Tolima) y es desplazada en el norte por la falla del
Cucuana.

Facies Dioritica: por último, al occidente de San Antonio (Tolima) una facies diorítica a
micro diorítica se produce por asimilación de rocas metamórficas preexistentes.

2.2.1.2. Formación Guaduas (KPggu)

Aflora dentro del Sinclinal de Usme, y genera amplios valles separados por pequeñas
cuchillas, se puede dividir en tres niveles: uno inferior, con un espesor de 70 m,
constituido por arcillolitas grises amarillentas, con intercalaciones de areniscas de
cuarzo, finas, en capas medias a muy gruesas; suprayacido por una secuencia
alternante de limolitas de cuarzo, en capas delgadas a medias y arcillolitas grises
oscuras. La parte media está constituida por areniscas de cuarzo, finas a gruesas, en
capas muy gruesas, plano paralelas a ondulosas, con intercalaciones de arcillolitas
grises oscuras y amarillentas. Y la parte superior consta de lodolitas rojas, con
esporádicas intercalaciones de areniscas de cuarzo. La formación Guaduas abarca el
Cretácico Superior y también parte del Paleoceno. (Hubach, 1957)

2.2.2. Cretácico:

2.2.2.1. Grupo Oliní (Kso):

De Porta (1966) usa el término para describir una secuencia litológica compuesta por
dos niveles silíceos, denominados Lidita Inferior y Lidita Superior, los cuales se
encuentran separados por un nivel de lutitas; En el cerro Quininí , la unidad consta, en
su parte inferior de areniscas de cuarzo, finas, blancas, con cemento silíceo, en capas
delgadas a gruesas, plano paralelas y convergentes; hacia la parte inferior ocurren
esporádicas capas de lodolitas laminadas y unos 35 m cubiertos, el espesor total es de
280 m.

La parte media consta de lodolitas negras, con intercalaciones de areniscas de cuarzo,


finas, blancas, con cemento silíceo, en capas medias y delgadas, plano paralelas,

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liditas, limolitas de cuarzo y chert, en capas delgadas, plano paralelas, con
foraminíferos; el segmento presenta un espesor de 31 m.

La parte superior está constituida por una secuencia monótona de areniscas de cuarzo,
fina, blandas, en capas delgadas a medias, convergentes, con un espesor de 35 m, sin
observar su tope. La base de esta sección está afectada por una falla que pone en
contacto la secuencia descrita anteriormente sobre la Formación Conejo; esta falla hace
desaparecer la base de la unidad, y la cual se observa hacia el occidente; esta base
está conformada por un nivel de liditas y chert, que alcanza un espesor de 80 m.

2.2.2.2. Ultramafitas serpentinizadas de filadelfia (Kusf):

Las Ultramafitas serpentinizadas de filadelfia afloran en el extremo noroccidental de la


plancha 206 al occidente de la falla de Silvia-Pijao y se prolongan al norte de la plancha
187 Salamina y hacia el occidente en la plancha 205 Chinchiná, se representa
espacialmente relacionadas con metamorfitas del complejo Arquía y con gabros y es
cubierta, en parte, por sedimentitas cenozoicas de la secuencia Irra- Tres puertas
(Estrada y Viana, 1994), la población de filadelfia se encuentra ubicada sobre esta
formación.

2.2.2.3. Grupo Guadalupe:

Consta de capas muy gruesas, plano paralelas continuas, de cuarzoarenitas de color


crema, grano fino a medio, angular a subredondeado, moderadamente seleccionado con
cemento silíceo. No hay datos de espesor del Grupo Guadalupe en dicha área

2.2.2.4. Complejo Quebradagrande:

El Complejo Quebradagrande (Kq) senso Maya y González (1995). Este complejo forma
una franja alargada de dirección general NS limitada al este por la Falla San Jerónimo y
al oeste por la Falla Silvia-Pijao. Está compuesto por secuencias de basaltos, andesitas
y rocas volcanoclásticas. Ocasionalmente se reconocen secuencias ofiolíticas. Los
procesos de sedimentación más comunes en esta secuencia son flujos turbidíticos,
flujos de escombros y depositación hemipelágica (Gómez-Cruz et al., 1995). Los fósiles
encontrados en esta unidad indican una edad Cretácica Temprana. Según Moreno-
Sánchez y Pardo-Trujillo (2003) las rocas de este complejo formaron parte del
Protocaribe. (López, M.p.13)

Miembro volcánico (Kvc): Es una unidad litológica constituida por espilitas, basaltos y
diabasas de características toleíticas, con algunas brechas de flujo y tobas en franjas
alargadas en dirección norte-sur y estrecha en sentido este-oeste, en contacto tectónico
con el miembro sedimentario a lo largo de la falla de Romeral.

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Miembro sedimentario (ksc): Se refiere a las sedimentitas que se encuentran
intercaladas concordantemente con las rocas volcánicas , lo cual permite en parte definir
la edad de estas, aunque en muchas áreas los contactos son tectónicos debido,
probablemente a la diferencia en el comportamiento mecánico entre ambos tipos de
roca , donde el contacto actúa como una zona de debilidad a lo largo de la cual se
transmiten esfuerzos, afectando más intensamente las sedimentitas por su menor
competencia . Las sedimentitas predominantes corresponden a lutitas carbonosas y en
menor proporción a grauvacas, arenitas feldespáticas, limolitas, liditas y capas de caliza.

2.3. CENOZÓICO:

2.3.1. Paleógeno:

2.3.1.1. Grupo Gualanday (Pgg):

Este se divide en tres unidades según Raasveldt (196). En el municipio de Cunday


afloran las formaciones Gualanday Inferior y medio.

Formación Gualanday Inferior (PPgi): Está compuesta por una secuencia que a grandes
rasgos muestra una tendencia granocreciente, hacia la parte media inferior predominan
las areniscas con ocasionales lentes conglomeráticos sobre arcillolitas de color rojizo,
que subiendo en la secuencia se van haciendo cada vez más delgados y escasos; en la
parte superior predominan los conglomerados finos sobre areniscas y areniscas
conglomeráticas; en este sector las arcillolitas; en este sector las arcillolitas aparecen
ocasionalmente en capas delgadas uniformes.

Formación Gualanday Medio (PPgm): Está constituida por dos niveles; la parte inferior
(200 a 300 m) está compuesta por intercalaciones de arcillolitas rojas con areniscas
lodosas de color amarillo crema, verdoso y gris, con lentes delgados de conglomerados
de chert, cuarzo y ocasionalmente con fragmentos volcánicos y metamórficos,
ocalmente con cemento calcáreo. La parte superior (400m) está constituida
principalmene por arcillolitas de color rojizo, formando un nivel blando de morfología
suave que contrasta con las rocas del Gualanday Superior.

Formación Gualanday Superior (PPgs): Se encuentra sólo en el Sinclinal de Colombia,


es una unidad predominantemente de litoarenitas conglomeráticas de color amarillo
claro, con guijos de cuarzo, chert, roca ígnea y esporádicamente metamórfica con
interdigitaciones con areniscas y areniscas conglomeráticas separados por capas
convergentes de arcillolitas.

2.3.1.2. Lodolitas de Fusagasugá (Pgf)

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En el Sinclinal de Fusagasugá aflora una secuencia alternante de lodolitas y
areniscas feldespáticas y líticas, la cual se encuentra sobre la Formación Guaduas –
Seca con contacto erosivo discordante. Las Lodolitas de Fusagasugá son una unidad
relativamente más arenosa, presenta un espesor considerablemente mayor y está
dispuesta de forma discordante sobre la Formación Guaduas. La parte inferior está
compuesta por una sucesión de arcillolitas grises y rojizas, en capas delgadas,
ondulosas paralelas, y por intercalaciones de areniscas cuarzo-feldespáticas, finas a
gruesas, pardo rojizas, con cemento silíceo, en capas delgadas a gruesas, convergentes
y ocasionalmente plano paralelas. La parte media, está constituida por lodolitas y
arcillolitas rojas, con esporádicas intercalaciones de areniscas de cuarzo, finas a
medias, con cemento silíceo, en capas delgadas, plano paralelas y ocasionalmente
medias a gruesas, convergentes. Y la parte superior, consta de una alternancia de
arcillolitas rojas y grises y areniscas de cuarzo, medias a gruesas, pardas a rojizas, en
capas delgadas a gruesas, convergentes.

2.3.2. Neógeno:

2.3.2.1. Sedimentitas de Aranzazu (Ngsa):

Edad mioceno- plioceno. Conjunto de sedimentitas que rellenan un graben limitado por
las fallas de Silvia-Pijao, al este, y de La Merced, al oeste, entre las poblaciones de
Filadelfia y Aranzazu, de donde recibe el nombre esta secuencia. Las sedimentitas
corresponden a una secuencia de origen aluvial, bancos de hasta 2m de espesor,
compuesta por conglomerados hacia la base, con delgadas intercalaciones de arenas
gruesas tobáceas y hacia el tope por limos y arcillas con niveles carboníferos de
espesor variable.

2.3.3. Cuaternario:

2.3.3.1. Abanico Fluvio- volcánico de Ibagué:

Deposito formado por episodios de actividad volcánica y aluvio torrencial. Material


volcánico proveniente del nevado del Tolima, el cual, rellena una paleo-topografía
deprimida en un proceso de "pulsos" sedimentarios.

Los productos resultantes se desplazaron por el cauce del río Combeima y, por las
características topográficas, fueron depositados como conos de deyección. Presenta
una morfología suavemente ondulada en su ápice, en la franja estrecha limitada por el
Batolito de Ibagué, donde se encuentra la mayor parte del área urbana, una región
plana, con una inclinación muy suave (alrededor de 3°) hacia el oriente y suroriente.
Tiene forma típica de abanico y patrón de drenaje radial a subparalelo.

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Los rasgos morfo- tectónicos son característicos de un fallamiento transcurrente,
como lomos de presión lineales, lagos de falla, lomos desplazados, drenajes
desplazados, trincheras de falla, escarpes de falla, escarpes de exposición opuesta,
entre otros. (Galvis, 2019)

2.3.3.2. Abanico El Guamo:

Forma valles profundos con escarpes de más de 50 m en el río Luisa al NW de Guamo,


constituye un paisaje de red dendrítica con alto grado de desarrollo. Su morfología es
levemente ondulada a plana, con inclinación muy suave hacia el SE en dirección al río
Magdalena. Presenta tres patrones de drenaje paralelos a subparalelos con direcciones
NE, SE y S. (Cepeda et al., 1995)

Su composición litológica está conformada por bancos arenosos con algo de gravas de
pumitas, rocas ígneas (como granito, pegmatita, sienita, gabro y dacitas) y rocas
metamórficas. Presentan, generalmente, compactación moderada a baja, lo que indica
una alta permeabilidad. (Álvarez, 2019)

De acuerdo a dataciones 14C, obtenidas en madera carbonzada, dan entre 5100 y 1200
años antes del presente.

2.3.3.3. Abanico El Espinal:

Se extiende desde Chicoral hasta el río Magdalena en la Vereda La Chamba y se


encuentra limitado al SW por la quebrada Guaduala (o Guaduas) y continúa más al
norte de Espinal hasta el Municipio de Girardot; la unidad puede seguirse hacia el sur
del río Saldaña hasta el suroccidente de Purificación. Su morfología es totalmente plana
en toda su extensión y forma una meseta con una inclinación casi imperceptible hacia el
río Magdalena. En general, estos depósitos son friables y pulverulentos, y presentan una
mediana compactación por cementación.

2.3.3.4. Flujos fluvioglaciares (Qf):

Se observan en el pie de la cuchilla Peñas Blancas, en cercanías al río Bogotá, estos


depósitos se disponen con dirección E-W y están constituidos por bloques y cantos,
angulares a subredondeados, de areniscas, provenientes del Grupo Guadalupe - Oliní,
los cuales se encuentran embebidos en una matriz de arena gruesa a arcilla.

2.3.3.5. Terrazas Altas (Qta):

La terraza de Fusagasugá consta de cantos y bloques, redondeados, de areniscas,


depositados posiblemente por el río Juan Viejo y transportados desde la región de
Pasca , donde los depósitos tienen características de flujos fluvioglaciares.

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2.3.3.6. Depósitos Aluviales (Qal):

Hacia las márgenes de los principales drenajes, tales como los ríos Muña, Bogotá,
Apulo, Lindo y Calandaima, se presentan depósitos aluviales. También en la red de
drenaje de la quebrada Chorreras, al sur de Sibaté, a lo largo del río Curubita, al sur de
la Represa de La Regadera y en el río Tunjuelito. Estos depósitos consisten en bloques,
redondeados y subredondeados, especialmente de areniscas de cuarzo, en una matriz
no consolidada de arenas y arcillas; presentan una expresión morfológica plana.

3. GEOLOGÍA ESTRUCTURAL

3.1. Pliegues: Los pliegues son uno de los rasgos geomorfológicos y estructurales más
importantes del área; corresponden a sinclinales amplios y anticlinales. Orientados
principalmente en dirección NNE-SSW.

3.1.1. Sinclinal de Chicoral, Anticlinal de Gualanday y Sinclinal del Aceituno:

Estas tres estructuras presentan características afines como son: su regularidad y


amplitud y también el paralelismo de sus ejes, en una dirección de NNE – SSW.
Los pliegues terciarios se encuentran formados por los sedimentos correspondientes a
la formación Gualanday, presentando terminaciones periclinales bien definidas, sobre
todo el sinclinal de Chicoral y el del Aceituno, ya que la terminación del anticlinal de
Gualanday se encuentra algo enmascarada por los sedimentos cuaternarios que
forman la terraza del Espinal.

En general estas estructuras son sencillas y no presentan ninguna complicación


aparente, no obstante, en el sinclinal del Aceituno, en su flanco E, se observa la
discordancia progresiva que se desarrolla aproximadamente a partir del nivel de
areniscas del Gualanday Medio.

3.1.2. Sinclinal de Gualanday:

Posee características parecidas con las anteriores (regularidad y terminacón periclinal


bien definida), aunque experimenta un cambio de dirección de su eje (NE – SW),
presentando una cierta oblicuidad respecto a ellas.

3.2. Fallas:

3.2.1. Sistema de fallas de Romeral:

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Las fallas de Romeral se encuentran asociadas a una discontinuidad cortical de
primer orden, esto hace referencia a una discontinuidad en la corteza sea oceánica o
continental.

Están definidas como el límite entre sedimentos cretáceos de plataforma continental al E


pertenecientes a la cordillera central (basamento andino) y secuencias oceánicas al W
pertenecientes a la cordillera occidental (corteza cretácea acrecionada), derivados de un
vulcanismo de arco.

La falla fundamental de Romeral se asocia a una zona d subducción debido a la litología


de la zona y esquistos azules dentro del basamento, que se genera entre la Placa
Suramericana y la Placa del Pacífico.

3.2.2. Falla de Áranzazu:

Esta falla tiene una dirección N-S buzando al W, la cual esta uicada al E del municipio
de Neira. Este municipio se encuentra sore depósitos piroclásticos aluviales.
La falla Áranzazu es una falla satélite del Sistema de fallas de Romeral.

3.2.3. Falla de Fusagasugá:

La Falla de Fusagasugá, al oriente de Fusagasugá y se extiende hacia el norte hasta el


Salto del Tequendama y hacia el sur hasta el Municipio de Arbeláez. Es una falla con
dirección aproximada N 10 OE, que cambia a N10 OW al norte y que buza hacia el
oriente; se evidencia en campo ya que rocas del Grupo Guadalupe cabalgan sobre
rocas de la unidad Lodolitas de Fusagasugá y de la Formación Guaduas.

3.2.4. Falla Silvia – Pijao:

Con orientación preferencial N25E, la falla Silvia- Pijao posiblemente tiene una
importante componente vertical de crácter inverso con un plano de falla que buza hacia
el noroccidente. (Arévalo et al, 2001)

3.2.5. Falla de San Jerónimo:

La falla de San Jerónimo está compuesta por numerosas fallas paralelas a subparalelas
inversas con dirección general NNE-SSW, y con un componente de desplazamiento
lateral izquierdo. Pone en contacto las rocas metamórficas continentales Paleozoicas del
Complejo Cajamarca al este, con rocas de afinidad oceánica y edad Cretácica del
Complejo Quebrada grande al occidente. (Mejía, 2012)

3.2.6. Falla Chapetón – pericos:

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Falla de tipo inverso ubicada al N-W de la microcuenca. Presenta una
disposición NE-SW con movimientos verticales de importante magnitud. Presenta
rasgos geomorfológicos importantes como facetas triangulares y control estructural de
drenajes. Afecta las secuencias Precámbricas de Anfibolitas y neises, los esquistos
paleozoicos yal Batolito de Ibagué poniéndolos en contacto en diversos sectores a lo
largo de la misma, desarrollando sobre estos rocas cataclásticas (Milonitas y
Blastomilonitas).

3.2.7. Falla Silvania:

Falla inversa, dirección NE – SW, buzando hacia el este.

3.2.8. Falla de Ibagué:

Falla rumbo-deslizante localizada hacia el sur de la microcuenca; atraviesa el casco


urbano de la ciudad de Ibagué con rumbo dominante 75ª al NE. Sus características
principales son alineamientos, control de drenajes, formación de lomos de presión,
facetas triangulares, sobre las rocas se evidencia en formación de diaclasas, planos de
falla y rocas cataclásticas. Se identifica fácilmente mediante fotografía aérea debido al
escarpe bien definido y continuo que presenta.

3.2.9. Falla Roldanillo:

Presenta una tendencia general de orientación Norte-Sur y rumbo de N17ºE, con


componente principalmente inversa, y es considerada potencialmente activa (Peña-
Martínez y Mosquera- Antury, 2010). La máxima magnitud alcanzada es de 6,5 en
escala Mw; en la zona de estudio tiene una longitud de ruptura de 20 kilómetros, donde
deforma las rocas de la formación Volcánica-Kv.

3.2.10. Falla Dagua – Calima:

Esta falla está orientada N35ºE, con componente normal y desplazamiento de rumbo
sinestral; su buzamiento es 70º al oriente (París et al., 2000). La máxima magnitud
alcanzada es 6,8 en escala Mw, con tasa de actividad de 0,2 mm/año (INGEOMINAS,
2005). Es considerada como una falla activa con período de recurrencia menor a 4.000
años (Peña-Martínez y Mosquera-Antury, 2010); en la zona de estudio tiene una longitud
de ruptura de 25 kilómetros, afectando las rocas que componen la Formación Espinal-
Ke (Barrero, 1979, en López, 2006).

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DESCRIPCIÓN DEL ITINERARIO PRÁCTICA DE CAMPO 25/NOV/2019 – 28/NOV/2019

DÍA 1. Recorrido Sogamoso – Ibagué

ESTACIÓN 1. ENTRADA FUSAGASUGÁ.

COORDENADAS GPS
E: 966 473. 140 N: 983 476, 798 Z: 1 901 m

Figura 1. Recorte plancha 246, Fusagasugá.

El municipio de Fusagasugá hace parte de los 116 municipios de Cundinamarca, se caracteriza por
ser uno de los 3 municipios más poblados después de Bogotá y Soacha. El municipio
geológicamente se sitúa sobre la terraza de Fusagasugá.
La terraza de Fusagasugá, de edad holoceno según hallazgos de restos de Mastodonte, es un
depósito cuaternario, litológicamente compuesto por clastos embebidos en una matriz areno-
arcillosa.
La terraza se encuentra limitada al oriente por los páramos de Sumapaz, Susacá, Piedra parada,
San Miguel, entre los más importantes, resultado de morrenas que se depositaron provenientes de
partes altas; hacia el occidente con la falla de Silvania con inclinación hacia el este, causante de que
se abra el río chocho –accidente geológico más importante en el modelamiento geomorfológico del
sector-, hacia el suroeste presenta un estrechamiento con fallas inversas más escalonadas y
limitada por el Grupo Gualanday, que sirve de barrera para el material y detiene la ampliación de la
terraza.
La terraza es intensamente afectada por fallas geológicas de tipo normal e inverso, buzantes hacia
el SE, presentando a su vez una imbricación hacia al occidente (cabalgamiento de un bloque
respecto a otro). Este téctonismo característico se explica por las siguientes 2 teorías:

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A. Dos fases de movimiento: Inicialmente la imbricación en tejas, producto del choque de
placas produjo fallamiento inverso y debido a procesos posteriores, se dieron movimientos
en el sentido del rumbo de las estructuras.

B. Sistemas transpresivos: Movimiento oblicuo de las placas.


Las plataformas fluviales se componen de pequeñas plataformas sedimentarias, de la laguna de
Cajicá provienen materiales depositados en la terraza, se observan flujos fluvio-torrenciales y
depósitos cuaternarios de origen glacial – continental. La terraza de Fusagasugá descansa sobre la
formación Lodolitas de Fusagasugá que a su vez se encuentran sobre la Formación Guaduas.
Los riesgos de fenómenos de remoción en masa son altos, ya que la terraza presenta cantos de
areniscas embebidos en matriz arcillosa con cursos fluviales fuertes que ocasionan deslizamientos y
zonas inestables con alta inundación.

ESTACIÓN 2. CERRO QUININÍ.

COORDENADAS GPS
E: 958 395. 957 N: 977 278, 08 Z: 1 279 m

Figura 2. Recorte plancha 246, Cerro Quinini.

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Figura 3. Anticlinal tipo buzante. Tomada por Ximena Duarte. Editada por Laura Becerra.

El cerro Quininí es un anticlinal asimétrico tipo buzante, esto se evidencia en sus flancos con distinta
inclinación por esfuerzos de compresión presentes en la zona, está conformado por el grupo Oliní y
formación conejo. Su parte superior se encuentra erosionada y los esfuerzos presentes ocasionan
plegamiento, lo que se evidencia con grietas en la cresta, esto permite que haya paso de agua y
arrastre de material. El río Chocho da evidencia de falla en la zona, por el cambio en su curso en
codos perpendiculares, sobre la formación tabla. El fallamiento es principalmente de tipo inverso.
(Sistema de fallas Quininí)
Los colores rojizos de las rocas se deben a cambios bruscos de temperatura.

ESTACIÓN 3. TERRAZA DE MELGAR.

COORDENADAS GPS
E: 949 017. 95 N: 962 985, 62 Z: 815 m

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Figura 4. Recorte plancha 246- Fusagasugá.

La terraza de Melgar se encuentra en cercanía al río Sumapaz que está orientado en la misma
dirección de la falla Boquerón; este río es el nivel base de la zona.
La diferencia entre la terraza de Melgar y la terraza de Fusagasugá están basadas en su edad,
siendo la de Melgar más joven y composición (clastos redondeados, origen fluvial), ya que en la
terraza de Melgar la depositación se efectuó mediante 3 tipos de procesos diferentes denominados:
 Qt1: Es la más antigua de todas, tiene una inclinación hacia el occidente y ocupa
principalmente la parte norte de la quebrada palmara y las partes altas de las quebradas
melgara, agua fría y guaduala; su origen es fluvio-glacial y los materiales que la componen
son rocas del grupo Guadalupe, que consta de gravas, cantos y bloques de arenisca
cuarzosa en una matriz arcillosa.
 Qt2: Posterior a la formación Qt1 puesto que en varios sitios aparece disectándola y está
depositada a menor altura, tiene una ligera inclinación hacia el occidente la cual disminuye a
medida que se acerca al río Sumapaz. Su origen también es fluvio-glacial y está ubicada en
la parte alta de las quebradas melgara, agua fría y guaduala.
 Qt3: Es la más reciente y es de origen más fluvial que glacial, se circunscribe más a la
quebrada la guadala y algunas áreas que rodean a Melgar.
La terraza de Fusagasugá se encuentra interrumpida por la falla de Boquerón, que evito que la
terraza se extendiera y se conectara con la terraza de Melgar esto quiere decir que la falla Boquerón
fue posterior a la deposición de la terraza. El cambio de buzamiento en las rocas es una evidencia
contundente del efecto dinámico de la Falla.

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Figura 5. Terraza de Melgar. Tomada por Ximena Duarte. Editada por: Laura Becerra

ESTACIÓN 4. RECONOCIMIENTO RASGOS Y ESTRUCTURAS POR PLEGAMIENTO Y


FALLAMIENTO VÍA MELGAR.

COORDENADAS GPS
E: 946 342 N: 963 954 Z: 442 m

Figura 6. Recorte plancha 246.

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El objetivo para esta estación fue identificar rasgos y estructuras que dieran evidencia de
los procesos de plegamiento y fallamiento incipientes en la zona a causa de la Falla El Boquerón,
por la cual discurre el río Sumapaz.
 Roca triturada
 Roca sumamente afectada por diaclasamiento en sentido perpendicular a la estatificación.
 Inclinación prominente de los árboles.
 Plegamiento de las rocas.
 Evidencia de canaleamiento (paleo corrientes)

Figura 7. Diaclasamiento intenso, perpendicular a la estratificación.

Figura 8. Roca supremamente triturada.

18
Figura 9. Evidencia de diaclasas perpendiculares y roca muy triturada.

Figura 10. Adelgazamiento de canales, evidencia de movimiento del río Sumapaz.

Las diferentes observaciones permiten concluir los esfuerzos de tipo compresivo que predominan en
la zona, debido a la actividad de la Falla El Boquerón. De acuerdo a esta caracterización, el macizo
rocoso es sumamente inestable lo que significa un riesgo importante en la Vía hacia Melgar.
Litología predominante: Cuarzo - arenita.

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ESTACIÓN 5. AFLORAMIENTO GRUPO GUALANDAY.

COORDENADAS GPS
E: 936 475 N: 956 833 Z: 334 m

Figura 11. Afloramiento Grupo Gualanday.

Se observa la clara discordancia entre un depósito cuaternario aluvial producto del rio magdalena
(Terraza de Melgar, este muestra cantos bien redondeados los cuales evidencian un largo trayecto)
y la formación Gualanday medio afectada por una falla inversa la cual fue pos-depositación.
Formación gualanday: Esta unidad se divide en tres miembros: Gualanday inferior (arenisca
cuarzosa grisácea clara, con intercalaciones de conglomerados y arcillolitas), Gualanday medio
(arcillolitas rojizas, lodolitas de color crema y gris rojizo, con intercalaciones delgadas de areniscas
de grano medio y conglomerados), Gualanday superior (conglomerados clasto soportados
polimícticos con cantos de chert y cuarzo lechoso, intercalaciones de arcillolitas y de areniscas
ferruginosas).

ESTACIÓN 6. ABANICO EL ESPINAL Y ABANICO EL GUAMO.

COORDENADAS GPS
E: 936 475 N: 956 833 Z: 334 m

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Figura 12. Recorte plancha 264.

Abanico El Guamo.

Forma valles profundos con escarpes de más de 50 m en el río Luisa al NW de Guamo,


constituye un paisaje de red dendrítica con alto grado de desarrollo. Su morfología es
levemente ondulada a plana, con inclinación muy suave hacia el SE en dirección al río
Magdalena. Presenta tres patrones de drenaje paralelos a subparalelos con direcciones
NE, SE y S. (Cepeda et al., 1995)

Su composición litológica está conformada por bancos arenosos con algo de gravas de
pumitas, rocas ígneas (como granito, pegmatita, sienita, gabro y dacitas) y rocas
metamórficas. Presentan, generalmente, compactación moderada a baja, lo que indica
una alta permeabilidad. (Álvarez, 2019)

De acuerdo a dataciones 14C, obtenidas en madera carbonzada, dan entre 5100 y 1200
años antes del presente.

Abanico El Espinal:

Se extiende desde Chicoral hasta el río Magdalena en la Vereda La Chamba y se


encuentra limitado al SW por la quebrada Guaduala (o Guaduas) y continúa más al
norte de Espinal hasta el Municipio de Girardot; la unidad puede seguirse hacia el sur
del río Saldaña hasta el suroccidente de Purificación. Su morfología es totalmente plana
en toda su extensión y forma una meseta con una inclinación casi imperceptible hacia el
río Magdalena. En general, estos depósitos son friables y pulverulentos, y presentan una
mediana compactación por cementación.

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Principales conclusiones:

 Los abanicos del Guamo y Espinal se formaron gracias a la actividad volcánica


del Cerro Machín que conducía sus piroclastos a través de los ríos como el
Coello y el río Luisa.
 La composición litológica de estas unidades geomorfológicas es muy similar po
lo que su mayor diferenciación es su geomorfología.
 El abanico del Espinal es más joven y más bajo que el del Guamo.
 La barrera de la Formación Gualanday detuvo la expansión del abanico del
Guamo e Ibagué.

Figura 13. Roca piroclástica típica Abanico del Guamo. Matriz ceniza volcánica.

ESTACIÓN 7. ANTICLINAL DEL CHICORAL, SINCLINAL DE GUALANDAY, ENTRE OTROS.

COORDENADAS GPS
E: 936 475 N: 956 833 Z: 334 m

Estructuras anticlinales y sinclinales. Estructuras locales con radical importancia en el contacto


discordante con el Abanico del Espinal. Los esfuerzos de compresión al no ser uniformes confieren
el carácter asimétrico a estas estructuras. La dirección de su eje principal es NE-SW.

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Figura 14. Recorte plancha 264 - El Espinal.

Sinclinal de Chicoral, Anticlinal de Gualanday y Sinclinal del Aceituno:

Estas tres estructuras presentan características afines como son: su regularidad y


amplitud y también el paralelismo de sus ejes, en una dirección de NNE – SSW.
Los pliegues terciarios se encuentran formados por los sedimentos correspondientes a
la formación Gualanday, presentando terminaciones periclinales bien definidas, sobre
todo el sinclinal de Chicoral y el del Aceituno, ya que la terminación del anticlinal de
Gualanday se encuentra algo enmascarada por los sedimentos cuaternarios que
forman la terraza del Espinal.

En general estas estructuras son sencillas y no presentan ninguna complicación


aparente, no obstante, en el sinclinal del Aceituno, en su flanco E, se observa la
discordancia progresiva que se desarrolla aproximadamente a partir del nivel de
areniscas del Gualanday Medio.

Sinclinal de Gualanday:

Posee características parecidas con las anteriores (regularidad y terminacón periclinal


bien definida), aunque experimenta un cambio de dirección de su eje (NE – SW),
presentando una cierta oblicuidad respecto a ellas.

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}

Figura 15. Panorámica pliegues anticlinales y sinclinales. Tomada por: Ximena Duarte. Editada por: Laura Becerra.

ESTACIÓN 8. ABANICO DE IBAGUÉ

COORDENADAS GPS
E: 895 709, 85 N: 986 938, 83 Z: 660 m

Figura 16. Recorte plancha 244.

Abanico Fluvio – Volcánico de Ibagué:


Eje longitudinal del abanico 35 km, extensión 700 km2, drenaje característico: dendrítico.
Su edad relativa es de 400.000 años esto se evidencia por dataciones radiométricas que sugieren
que la emisión de lava y la actividad explosiva del nevado del Tolima empezó desde hace 400.000
años.

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Depósito formado por episodios de actividad volcánica y aluvio torrencial. Material volcánico
proveniente del Nevado del Tolima (Cordillera central), al descender por medio del Río Combeima.
Petrografía: Depósitos poco consolidados principalmente flujos piroclásticos, lahares, depósitos
glaciáricos. La fracción gruesa se compone en un 85% de fragmentos de rocas volcánicas efusivas,
principalmente andesita, dacita y pómez, 10 % de roca metamórfica de tipo esquisto, neises y
anfibolita y un 5% de granodiorita.
El abanico de Ibagué discurre sobre el batolito de Ibagué.
Abanico de Ibagué limitado por: El grupo Gualanday hacia el NE (Funciona como barrera que impide
el avance del abanico), Batolito de Ibagué hacia el NW, Falla de Buenos Aires al SW.
“Este depósito rellena una cuenca tectónica que es el resultado de la actividad misma de la Falla de
Ibagué”. Marquínez (2001). En donde a lo largo dela Falla de Ibagué, el espesor del abanico
aumenta hacia el este. Esta es una falla transcurrente de movimiento principal dextral,
tectónicamente activa, con un potencial sísmico de magnitud 7 en la escala de Richter, traza caría
levemente alrededor de N65°E.
La mayor evidencia geomorfológica del trazo de la Falla de Ibagué son los lomos de ballena o
lomos de falla, generados por presiones que ocurren dentro de la corteza y de acuerdo a su
composición de material volcánico, se levanta y sufre plegamiento.
El modelo de RIEDEL (1929) explica la deformación adentro de una zona que sufre las fuerzas que
corresponden a una falla del rumbo (Falla de Ibagué).
Sistema de Riedel (según RIEDEL, 1929) son un conjunto de varias estructuras tectónicas a causa
de dos fallas de rumbo (fallas principales):

1. Fallas conjugadas (dextral o sinistral: las fallas que corren entre los dos sistemas principales.
2. Estructuras de transpresión: Cabalgamientos, fallas inversas, horst.
3. Estructuras de expansión: Diques, vetas, fallas normales, graben.
A lo largo de la Falla se conocen al menos 30 de estas estructuras, de diferente tamaño el cual varía
según la magnitud de los esfuerzos.
Aspectos morfológicos que destacan ligados a la Falla de Ibagué:
 Depresiones con agua.
 Espejos de fricción.
 Cambios repentinos en los drenajes.
 Lomos de ballena.

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Figura 17. Lomos de ballena. Tomada por Johana López. Editada por Laura Becerra.

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CONCLUSIONES

El marco tectónico sobre el cual se sitúa Colombia, es la principal razón por la cual se explica la
diversidad litológica que comprende el sistema orogénico de Los Andes. De acuerdo a aspectos
geomorfológicos, hídricos, litológicos, estratigráficos, entre otros, fue posible evidenciar y reconstruir
durante este recorrido los diferentes procesos que han transformado la corteza terrestre. Procesos
de continuo plegamiento y fallamiento son esenciales en el modelamiento del paisaje Colombiano,
los diferentes procesos magmáticos que sufre la corteza principalmente bajo la cordillera central es
la causa principal de estos procesos, además de eventos volcánicos y dinámicos que dan origen a
rocas de origen ígneo y metamórfico. Debido a esa fuerte actividad, se considera la cordillera central
aún en formación.

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BIBLIOGRAFÍA

Navas, O. (2003). Anatomía geológica de colombia. Diciembre, 06, 2019, de Sociedad Colombiana
de Geología Sitio web: https://www.sogeocol.edu.co/documentos/03ana.pdf
López, M. (s.f.). Análisis de deformación tectónica en los piedemontes de las Cordilleras Central y
Occidental Valle del Cauca, Colombia. Diciembre 06, 2019, de Universidad EAFIT Sitio web:
https://www.osso.org.co/docu/tesis/2006/piedemontes/Geotectonica.pdf
Arévalo, O., Mojica, J. Patarroyo, P., 2001. Sedimentitas del Altiplano Tardío al sur de Pijao,
Quebrada La Maizena, Flanco occidental de la Cordillera Central, Departamento del Quindío.
Bogotá: Geología Colombiana. No. 26. Universidad Nacional de Colombia, pp. 29-43.
Mejía, E. 2012. Características cinemáticas y Condiciones de Deformación de un Segmento de la
Falla Palestina al NE del Volcán Nevado del Ruiz. Tesis de Maestría en Ciencias – Geología
Universidad Nacional de Colombia. Recuperado en Diciembre 08 de 2019. Página web. Disponible
en http://www.bdigital.unal.edu.co/7110/1/194721.2012(A).pdf

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