Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Los estereotipos pueden ser de diferentes tipos como: tipo cultural, racial, de
género, clase social, social, sexual, de edad, de moda, religión , etc.
Las niñas, por el contrario, son ordenadas, obedientes, aceptan las reglas de la
madre, la ayudan en el trabajo del hogar, asumen la responsabilidad del cuidado
propio e incluso de hermanos menores. Cuando aparecen niños y niñas, el niño
suele ser protagonista. Y es en la publicidad de juguetes donde más se radicalizan
los distintos roles sexuales.
¿No sacan tanto Nestlé como Frigo helados para niños y helados para niñas?
Increíble pero cierto.
El de Frigo para niñas se llama Girlie y parece ser que con sabor a frambuesa
cubierto de perlas de azúcar, con forma de varita mágica que contiene
purpurina en el interior del palo.
Pues por la sencilla razón de las ideas preconcebidas que tenemos desde hace
mucho tiempo. Al parecer el mundo esta cambiando y va evolucionando a pasos
agigantados tales como la tecnología pero estas ideas todavía se ven como en la
realidad. Haceros una pregunta a vosotros mismos os parecería raro que un niño
le gustara jugar con muñecas? Porque tenemos que inculcarles a nuestros hijos a
que pueden jugar y que no? Porque no les dejamos que experimenten
libremente con ambos juegos y colores tanto para ambos y decidan jugar con el
que se sientan más cómodos? Yo considero que los niños están en una fase de
experimentar y no se les debe prohibir jugar con otros juguetes que nuestra
sociedad desde tiempos remotos les ha inculcado que muñecos son para ellos.
https://followyourdreamssisi.wordpress.com/2017/01/22/los-estereotipos-en-la-sociedad-actual/
ESPECIAL: Los estereotipos en la sociedad
Fri, Feb 25, 2011
Las noticias, películas y el Internet muestran muchos aspectos negativos de ciertos personajes de
etnias específicas con el fin de relacionarlos más a la audiencia gracias al comportamiento que los
hace reconocibles. Los aspectos culturales, el acento o el color de la piel pueden ser rasgos
espontáneos que ayudan a la identificación de los orígenes y antecedentes de ciertos personajes.
El comportamiento estereotipado entonces, procura la definición de la etnicidad en la mente de la
audiencia. Esto dificulta que la audiencia busque significados más profundos, animándoles a pasar
por alto los atributos significativos en los personajes y todas las personas que representan a ese
grupo étnico.
Los medios de comunicación ayudan a acrecentar la idea de que los Afroamericanos o los Latinos
son diferentes del resto de la sociedad, y las audiencias lo aceptan como si fuera un hecho. El
aspecto sorprendente de este asunto es que el hombre que ‘no es blanco,’ la mayoría de veces es
el villano, el ladrón, el asesino o el personaje corrupto. Las minorías están involucradas en la
mayoría de papeles negativos en las producciones de cine y televisión. Así, el valor de nuestra
cultura se ve disminuido y las personas relacionadas o identificadas con este grupo de acuerdo a la
sociedad son notables por sus papeles de ‘chicos malos,’ ‘pobres’ o sus acciones violentas.
Esto alimenta a los medios a seguir explorando los aspectos negativos de las culturas de las
minorías, haciendo énfasis en las diferencias entre la cultura Americana y las mismas, fomentando
el odio y un biculturalismo empobrecido.
Una idea errónea sobre las minorías en los Estados Unidos ha dado lugar a una serie de
incongruencias y una polarización cada vez mayor en toda la comunidad. Por ejemplo, no todos los
Latinos son ilegales, ni todos los Latinos ni todos los Afroamericanos son iletrados, no todos los
asiáticos son más inteligentes que el estadounidense promedio y no todos los Árabes son
musulmanes. Estas falacias generan malestar entre la sociedad, y más esfuerzo se muestra con
respecto a la causa de la distinción de estos individuos que en beneficiarse de una sociedad
diversa. Potter diría: “[Los estereotipos son] dañinos cuando conducen al público a creer que todas
las personas de cierto tipo comparten ciertas características negativas.”
Los Hispanos no sólo son una minoría o un grupo que no se siente representado en muchos
ámbitos. Los Hispanos son una cultura diversa que ha contribuido a sacar adelante a este país de
muchas maneras. Al igual que cualquier otro grupo étnico o cultural, nuestras tradiciones son
importantes, pero nuestro valor individual debe ser mostrado. Un grupo de personas no puede ser
reducido a un grupo de adjetivos sin precisión o veracidad al ser descrito.
Share
Reader Comments
G Fernandez
FEB 25 • el esterotipar a una persona es como ponerle una senal en la frente. Lamentablemente
en este pais, las razas y etnias son mal entendidas por la comunidad anglo. Si nos remontamos al
tiempo del Mayflower ellos eran una minoria al ingresar a un pais, que si cuentas con los dedos de
las manos ahora tiene una sola celebracion significante (dia de Accion de Gracias) y que sin
embargo para salir adelante de la rpimera depresion necesitaron de mas inmigrantes que
completaron los rincones de este pais. Con mucha pena nunca se toma en cuenta el arduo trabajo
que hacemos los Latinos, desde recolecctar las frutas en los arboles hasta limpiar sus casas y
cuidar a sus hijos para que trabajen tranquilos. La fortaleza de un grupo etnico se basa en sus
valores morales, costumbres y diversidad, ser Latina en este pais para mi no es facil, ser
esterotipada tampoco es facil pero si es facil para mi dar un paso adelante para que el espacio
entre las razas se acorte. .
Rubi-A
FEB 24 • Totalmente de acuerdo con el articulo. Aunque desgraciadamente entre los mismos
latinos tenemos nuestros propios prejuicios.Toda la programacion del grupo Televisa en sus
diversos medios monopolicos de transmision para la poblacion hispana en Estados Unidos, no es
mas que manipulacion romanica del vox populi. Contenidos burlescos del clascismo social latino,
donde las mujeres quieren ser rubias y tener novio de ojos azules, mientras que el hombre latino
sigue en su status quo de macho catedral con sus capillitas alrededor. No solo los descendentes
del Maryflower esteretipan al latino. Los latinos, por herencia espaniola, vomitan la apreciencia
fisical y social de la raza mestiza. No me creen o no entienden mi punto?...bueno, tan solo vean las
novelas en univision y vean la cantidad de steretipos que ahi se presentan.
1. Japón
© imgur © wikimedia
En Japón, ser un vagabundo es un estilo de vida. Los vagabundos tienen
su propio credo: ellos no se dedican al robo, no discuten con la policía
y generalmente tratan a los demás con respeto. Además, es raro encontrar
vagabundos que se dediquen a pedir limosna, esto va en contra de su honor.
Muchos vagabundos trabajan y ganan dinero, y pasan la noche en cajas
de carton. También hay quien eligió este “estilo de vida libre” para purgar sus
pecados del pasado. Estas personas se difieren de sus “colegas” los cuales
cuentan con departamentos o casas alquiladas.
2. Alemania
© imgur © imgur
En Alemania, cada ciudadano sin hogar tiene su propia identificación, la cual
le permite viajar gratuitamente en el transporte, alimentarse en comedores
comunitarios y dormir en los parques y el metro. Pero, incluso si no tienen
la identificación para vagabundos, cuentan con cafeterías especiales y refugios
que les brindan sus servicios por unos pocos centavos.
Los vagabundos alemanes se dedican a pedir limosna, pero discretamente. Son
pocas las personas que los miran con desprecio. Frecuentemente se puede ver
como las personas les llevan comida, ropa o los invitan a cubrirse de la lluvia
en sus casas.
3. Israel
© depositphotos
En Israel, el gobierno se encarga principalmente de los vagabundos. Los
trabajadores sociales constantemente buscan vivienda gratuita o económica,
hoteles, hostales y recámaras para ellos. Sin embargo, este proceso es muy lento.
La principal dificultad está en que 2 de cada 3 vagabundos son emigrantes,
quienes hablan muy poco hebreo o en general no saben nada del idioma.
El principal ingreso de los vagabundos locales proviene de los turistas, quienes
llegan para descansar y ver la ciudad.
4. Francia
© imgur
En París, a las personas sin hogar las llaman clochard y la cantidad de ellos
simplemente está por las nubes. En los últimos años, emigrantes de países pobres
se han sumado a los clochards locales.
Los vagabundos franceses viven por todas partes: en los parques, metro,
callejones. En la sociedad es los clochards existe una jerarquía: los novatos
se instalan en las áreas más remotas a las afueras, y los “experimentados” ocupan
los mejores lugares con muy buenas ganancias. Cuanto más alto sea el estatus
del clochard, tiene un lugar más rentable.
En general, el gobierno francés hace todo lo posible por las personas sin hogar:
les proporciona comida gratis y un techo en donde se puedan cubrir cuando hace
frío. Pero garantizar esto a una cantidad tan grande de personas es una tarea
difícil.
5. China
© depositphotos
En China como en Japón, se cree que todos deben trabajar. El gobierno hace todo
lo posible para ayudar a los vagabundos a encontrar trabajo, les dan comida
y a veces un techo que los pueda proteger. Además, hay muchos baños gratuitos
y cafeterías con increíbles precios bajos.
6. EE.UU.
© Anti Nacos DF
En Estados Unidos es inapropiado mirar a las personas sin hogar con desprecio,
preferentemente, deben dirigirse a ellas con respeto y cuidado. Por ejemplo,
en California, frecuentemente se puede observar cómo un transeúnte se sienta
al lado de un “habitante callejero” y entablan una charla.
Existen campamentos de tiendas especiales. En ellos se puede encontrar
un televisor, computadoras y alguna otra tecnología no barata. A muchas
personas sin hogar se les proporciona trabajo y pueden alquilar departamentos,
pero eligen refugios en donde puedan lavarse, descansar y comer gratis.
Además, los vagabundos estadounidenses reciben subsidios por desempleo cuyo
beneficio es de 1200 a 1500 USD al mes; por eso, muchos pueden darse el lujo
de ser vegetarianos.
7. Gran Bretaña
© imgur
A diferencia de los EE.UU., donde los vagabundos viven principalmente del
presupuesto federal, en Gran Bretaña, una gran parte de la ayuda esté en manos
de organizaciones benéficas, las cuales les otorgan a las personas sin hogar una
vivienda, comida y ropa.
El gobierno también ayuda. Por ejemplo, si una familia completa se declara como
personas sin hogar, entonces por ley se les tiene que proporcionar alojamiento
gratuito, el cual necesariamente tiene que estar ubicado en el mismo barrio donde
estudien los niños, en caso de haber. Por lo tanto, como norma, dichas familias
se instalan en hoteles caros y casas alquiladas.
Sin embargo, un sistema tan generoso no estimula a las personas sin hogar
a trabajar y aprender. Una gran cantidad de personas sin hogar no tienen
educación y nunca han trabajado en ningún lado.
8. Australia
© wikimedia
La vida de vagabundo en Marruecos no es tan buena como en los países
europeos. La mayoría de los vagabundos son niños que se van a vivir a la calle
y pasan allí el resto de su vida. A veces, las familias mandan a los niños a la calle
a propósito porque no tienen dinero para mantenerlos a todos.
El gobierno prácticamente no les ayuda, sin embargo, hay una multitud
de organizaciones de beneficencia que intentan ayudar a los vagabundos
y remediar la situación. Por ejemplo, existe un centro diurno para los niños
vagabundos, donde tratan de darles de comer y hacerles participar en la vida
de la sociedad.
10. Rusia
© depositphotos
En Rusia, el 75 por ciento de vagabundos son personas en edad laboral entre 20 y
50 años. No obstante, la situación de apoyo a los vagabundos es mala.
El gobierno no les da ni prestaciones, ni viviendas subsidiadas.
Todo el apoyo viene de organizaciones de beneficencia y religiosas que consiguen
empleo para los vagabundos. Sin embargo, tales organizaciones son pocas
y existen normalmente en las ciudades grandes. Por ejemplo, en Moscú, hay tan
solo 5 organizaciones.
Compartir
El desprecio de los ricos por los menos privilegiados tiene raíces históricas, según la historiadora
Mary Beard, profesora de la Universidad de Cambridge.
En el siguiente artículo especial para la BBC, Beard explica por qué los prejuicios de clase no son
una novedad.
Había bandas de "buenos para nada" y "vagabundos" que pasaban toda la noche en bares de mala
muerte, ahogando sus penas en alcohol. Además de hablar sobre los conductores de cuádriga (el
equivalente antiguo de los futbolistas), su único entretenimiento era armar pelea y apostar.
Se sentaban en las mesas de juego, y hacían ruidos horribles con sus narices.
Saltar las recomendacionesQuizás también te interese
La Armada argentina confirma el hallazgo del ARA San Juan y cree que el submarino
"implosionó"
5 ventajas genéticas que la mayoría de la gente NO tiene
La historia detrás del video viral de un osito intentando alcanzar a su madre por una ladera
que causó sensación y rechazo al mismo tiempo
Está de más decir que esta imagen sobre la vida de un pobre en Roma no proviene de los mismos pobres.
Image captionMary Beard es profesora del mundo
clásico en la universidad británica de Cambridge.
Fantasías de ricos
Los párrafos de más arriba citan, casi palabra por palabra, la descripción de las condiciones sociales en
la capital del Imperio Romano que ofreció un historiador pudiente del siglo IV, Amiano Marcelino.
Para ser justos con Amiano, también dijo muchas cosas crudas sobre la élite. "Son esas personas que un
día son demasiado amigables y al próximo ni te reconocen, que gastan demasiado dinero en comer bien
o -para introducir un toque característico de Roma- se rodean con batallones de sirvientes eunucos".
Pero esta visión sobre el comportamiento de la clase baja es el tipo de fantasía que han tenido los ricos
desde entonces.
Yo creo que Amiano nunca pisó un bar corriente cualquiera y nunca pensó en la falta de lógica de lo que
estaba diciendo: si estos personajes realmente eran tan pobres, ¿acaso cómo podían pagar por lo que
consumían toda la noche?
Doble moral
Y en cuanto a las apuestas, es el caso clásico de los dobles estándares morales. A la élite romana le
gustaba apostar.
El emperador Claudio incluso escribió un libro sobre cómo ganar con los dados y una de las frases más
famosas jamás pronunciadas por un general romano surgió justo en una mesa de apuestas: "Alea iacta
est" o, en español, "el dado está echado" o "la suerte está echada", como se cree que dijo Julio César.
Pero apenas los pobres mostraban un interés similar por las apuestas, la élite se asustaba y empezaba a
predecir un colapso moral inminente.
En términos generales, los romanos de clase alta no tenían mucho tiempo para dedicarle a los pobres, ya
fueran libres o esclavos, aunque también les tenían algo de miedo. Con frecuencia se referían a ellos
como una "turba" o "multitud".
Image captionLas
luchas de gladiadores eran un espectáculo popular en el mundo antiguo.
Pero más allá de los insultos o los apodos que usaban, lo cierto es que las fechorías que los ricos
atribuían a los pobres de la antigua Roma se parecen sorprendentemente a las que todavía escuchamos
hoy.
Para comenzar, se culpaba a los pobres de abusar de los servicios que se les ofrecían, no por parte del
estado de bienestar sino por sus benefactores ricos.
Amiano, por ejemplo, señaló con disgusto cómo los pobres pasaban sus días merodeando por los toldos
del teatro que se instalaban para que los asistentes romanos comunes y corrientes pudieran protegerse del
ardiente sol durante las presentaciones al aire libre.
"Aquí", vociferó, "hay personas que prácticamente están viviendo bajo los toldos".
Tal vez no se le había ocurrido que se trataba de personas que no tenían ningún lugar a donde ir para
refugiarse. Digo: ¿Por qué tendría alguien que pasar su vida deambulando si tiene una casa a donde
llegar?
El merodeo en los toldos del teatro no es un gran tema hoy en día. Pero, de todos modos, las quejas de
Amiano tienen mucho en común con las quejas modernas sobre los "parásitos de los subsidios".
Mi madre, que vivió durante la fundación del servicio de salud pública de Reino Unido, el NHS, se
acordaba de cómo en los '40 y '50 la prensa estaba llena de historias sobre cómo algunas personas
estaban poniendo casi de rodillas a la economía de la nación porque estaban comprando no uno sino dos
pares de anteojos del NHS, además de dos cajas de dientes postizos.
Image captionSegún Mary Beard, los ricos
actuales tienen prejuicios hacia los más pobres similares a los de los romanos.
Como señalaba con frecuencia, ¿para qué podría alguien necesitar dos cajas de dientes? ¿para tener una
de repuesto, por si la primera se pierde?
Algunas obsesiones más recientes se refieren a los holgazanes inmorales que aparentemente escogen
tener otro bebé para incrementar los subsidios que reciben del estado.
Supongo que debe haber algunas personas que sí intentan esto, pero en todo caso lo que necesitan no es
una clase de moral sino una de matemáticas y economía del hogar.
Pero imaginar que una gran cantidad de personas transitan por ese camino es una opinión absurda sobre
todo el proceso reproductivo y de sus incertidumbres, el dolor, las responsabilidades y los gastos.
La otra manera en que la clase alta tradicionalmente habla de los que son menos afortunados es, por
supuesto, dividiéndolos en los pobres buenos y los pobres malos.
"Familias trabajadoras"
En el siglo XIX se hablaba de los pobres de "mérito" y los de "poco mérito". Nuestro equivalente de los
de mérito son "las familias trabajadoras".
Los políticos de todos los partidos mencionan todo el tiempo esta frase en la radio o la televisión. Es casi
como si se les hubiera dicho que nunca pueden decir sólo "familias", sin su adjetivo acompañante.
Tal vez yo no soy muy influenciable, pero cada vez que los escucho siento simpatía hacia los
irresponsables, perezosos o -por Dios santísimo- por los solteros que no tienen familias. ¿Acaso son
menos dignos del tiempo de nuestros políticos y de nuestro cuidado sólo porque no tienen hijos?
Para comenzar, no se requiere mucho cálculo político para ver que si se considera a algunas personas "de
poco mérito", muy pronto se convertirán en eso. No hay mejor forma de convertir a un niño en un
problema que enviarlo al rincón como castigo.
Pero bueno, con el riesgo de sonar algo santurrona, también hay una pregunta irritante sobre el progreso
humano. Sería bueno pensar que hemos avanzado un poco desde la época de Amiano hace más de 1.500
años.
En algunos casos, por supuesto, lo hemos hecho. Nos podemos considerar afortunados de saber que los
ricos no se rodean de batallones de sirvientes castrados.
¿Pero no sería también una señal de progreso si tratáramos a todos como personas dignas de cuidado,
más allá de si tienen mérito o son trabajadoras?
Sería bueno pensar, en otras palabras, que podríamos convertir en prioridad el cuidado de los
antisociales, las personas con sobrepeso, los fumadores y hasta quienes hacen ruidos horribles con sus
narices.
Muchos empresarios suelen calificar al personal obrero o de menor rango dentro de su organización
como 'mal agradecido'. Este calificativo es utilizado muchas veces por este grupo al no recibir grandes
muestras de agradecimiento por parte del personal 'obrero' tras el pago de utilidades, de bonos de
productividad, etc. Pero resulta que estos pagos no van más allá del compromiso que debe tener el
patrono con sus empleados, por lo que, en verdad, no hay mucho que agradecer, pues es parte de su
respuesta.
Carlos Martins, Caracas, Venezuela
La paradoja del menosprecio del rico hacia el pobre es que muchas veces el rico fabrica pobres al
explotarlos e impedirles crecer para que dejen de ser pobres y por ende, una carga pública. Si el rico
pagara todos sus impuestos y aprendiera a ser justo y generoso con los menos favorecidos las cosas
cambiarían realmente en este mundo.
Sergio Andrés Silva, Buenos Aires, Argentina
Un rico puede afirmar que el pobre es flojo, y el pobre afirmar que el rico es egoísta.
El rico se equivoca, ya que el pobre por más que se esfuerce no le garantiza oportunidades que el rico si
tuvo, y el pobre se equivoca, pues el rico no es necesariamente egoísta, en muchos casos es lo contrario.
El tema es un problema mucho más profundo, es cultural y la forma en como se tiene acceso a las
necesidades, lamentablemente me resulta imposible ahondar en ello en solo 500 caracteres".
Diego Vera López , Viña del Mar, Chile
"Todos somos iguales ante los ojos de Dios, pero no es menos cierto que existen mujeres que dejan los
estudios tienen hijos y viven de beneficio social que por supuesto no hay gratuidad, eso sale de los taxes.
Los que se le brinda una ayuda económica y no se les exige nada a cambio o sea alguna actividad en
beneficio de la comunidad, esto es en síntesis porque en este tea hay mucha tela por donde cortar".
Amelia , España
En mi opinión personal, los ricos son ricos por la gracias de los pobres. En los tiempos pasados algunos
de los ricos se hicieron ricos esclavizando a los pobres, con la explotación del hombre por el hombre.
Por eso son ricos y ni así lo agradecen a los pobres. Siempre habrá menosprecio de los ricos hacia los
pobres mientras exista este mundo de desiguales.
Isaac Martinez, Nicaragua
En Colombia, la mayor parte de quienes se encuentran en una situación privilegiada consideran que esta
es sólo el resultado de sus propias acciones. Y bajo esta lógica niegan sus deudas con la sociedad, y es
así como se oponen al pago de impuestos, de salarios justos y reivindicaciones sociales. Los otros,
figuran entonces como una masa ignorante y perezosa. Estereotipo bien enraizado en este país, por una
oligarquía que publicita frenéticamente la igualdad de oportunidades para todos.
Camilo Robarroz, Bucaramanga, Colombia
Opino que es igual a la antigüedad. E incluso pienso que hoy en día es peor, dado por el hecho de que
los mismos desposeídos, no buscan la forma de salir de la miseria en la que viven. Mientras no
cambiemos el nivel del Ser, será mas que imposible elevar las relaciones, la educación para dar el salto a
niveles económicos y sociales mas elevados. Los mismos pobres, somos los que hacemos que los más
ricos no nos ayuden, pues en la mayoría de las veces, defraudamos la confianza que depositan.
Roberto Fernandez, Azua. Republica Dominicana
Aunque también hay que mencionar que algunos gobiernos son paternalistas y hay personas que
obtienen recursos para paliar su estatus de pobreza y se reproducen para tener el recurso al número de
miembros que tenga la familia, el estado promueve estas acciones porque no las previene, las perpetúa.
Es como dijo Orwell, el doble pensar: falta educar, pero no como se cree bajo planes y programas, sino
bajo conciencia de lo que se debe saber y no lo que se obliga a aprender.
Marcos Santiz Velasco, San Cristóbal de las Casas, Chiapas, México
Ja, ja, nunca deja de asombrarme le ingenuidad que se trasluce en los artículos de la BBC. Llevan
adentro esa exhaustividad tan puramente europea, que llegan a caer en la obviedad. En ser capaces de
extraer la quinta esencia de lo manifiesto. Inútilmente.
Carlos Lucero, Mendoza, Argentina
otipos y Prejuicios
¿Y si descubrieses que tú también los tienes?
domingo, 27 de mayo de 2012
Sin embargo, en la mayoría de las ocasiones realmente esto no es así y aunque sí que es verdad que
se dan casos de personas sin hogar que llegan a esa situación por una adicción, también hay muchos
otros motivos: separación matrimonial, pérdida del puesto de trabajo, enfermedades, falta de
recursos económicos, un trastorno mental, la muerte de una persona querida, poca formación, etc..
No obstante, ninguna de estas circunstancias es suficiente para caer en una situación de exclusión
social, pero cuando se dan varias a la vez en un mismo individuo y en un espacio muy corto sí pueden
dar lugar a situaciones de exclusión social.
Otro estereotipo que tiene la sociedad es que todos los vagabundos son personas que viven en la
calle y aunque el mismo término “sin techo” nos indica que no tienen casa, en muchos casos, las
personas “sin hogar” duermen en pensiones baratas o albergues e intentan esconder su situación
precaria y solitaria.
También se cree que todos los vagabundos practican la mendicidad, no buscan trabajo, consumen
drogas, no tienen estudios, ninguno trabaja y sin embargo cómo podemos observar en los datos
obtenidos por el Instituto Nacional de Estadística de 2005, estas creencias son falsas y
hay personas sin hogar que nunca han consumido drogas, que trabajan, que tienen estudios
incluso superiores, que no practican la mendicidad, etc. y que han caído en la exclusión social por
alguno de los motivos expuestos anteriormente. (
http://www.arrelsfundacio.org/es/que-sabemos/las-personas-sin-hogar)
Datos:
el 83% son hombres, la edad media es de 38 años y sus ingresos son de 302 euros al mes.
el 37,5% llevan más de tres años sin alojamiento propio. La mitad busca trabajo.
el 14,2% practica la mendicidad
el 46% tienen hijos
el 30% son abstemios y nunca han consumido drogas
No hay comentarios:
Itziar Varela
Compartir en Facebook
Compartir en Twitter
Este último caso sucede muy a menudo con las ideas que nos proporcionan
los medios de comunicación, que en la sociedad en la que vivimos son los
principales formadores de opinión.
El mayor problema de los estereotipos es que son muy difíciles de eliminar y
casi siempre derivan en algún tipo de discriminación. En estos casos, los
individuos afectados por la aplicación del estereotipo pierden su
individualidad.
Estereotipos religiosos
En este caso, los estereotipos son formados sobre los valores y costumbres
de las religiones minoritarias.
Presenta una ironía, y es que estos estereotipos donde más aparecen son en
países más religiosos, donde la religión es algo intocable e incuestionable
Estereotipos políticos
Con los medios de comunicación que contamos hoy día, los pensamientos de
los políticos se difunden masivamente.
De esta manera, cualquier persona que pertenezca a su grupo político
automáticamente deriva sus pensamientos propios para adoptar los del
político o grupo político al que sigue.
Nade nace con una ideología preconcebida, por lo que en algún momento
decidió seguir al político o grupo político de forma racional.
Estereotipos raciales
Estereotipos de clase
Estereotipos de país
Estereotipos de género
A día de hoy, no nos parece extraño que una mujer trabaje y que sea una
gran profesional. Pese a esto, siguen sin tener la misma consideración que
los hombres y muchos estereotipos de género hacen que las mujeres en
mismos puestos desempeñados por hombres, cobren menos que estos.
Una cosa de la que se olvidan las personas que aún siguen creyendo en estos
estereotipos, es que la homosexualidad, que es la principal causa de la
creación de estos estereotipos, es una relación de pareja que existe desde la
antigüedad.
Con los años, muchos de los estereotipos que se han formado sobre las
relaciones sexuales han ido tomando un cáliz retrógrado, y haciendo que lo
sociedad se vuelva cada vez más intolerante.
Estereotipos físicos
Referencias
Lifeder
CULTURA GENERAL
HISTORIA
ADMINISTRACIÓN
LITERATURA
CIENCIA
PSICOLOGÍA
SUPERACIÓN PERSONAL
Compartir en Facebook
Compartir en Twitter
Los estereotipos sociales son una serie de creencias generales que están
relacionadas con un grupo o una clase de personas concretas. Suelen
aplicarse de manera que la persona que los posee piensa que todos los
pertenecientes a una categoría tienen un rasgo concreto.
Índice [Ocultar]
1 ¿Cómo surgen?
o 1.1 ¿Educación o naturaleza?
o 1.2 Influencia de la sociedad
o 1.3 ¿Ocultan algo de verdad?
2 Tipos
o 2.1 De raza
o 2.2 De género
o 2.3 De clase
o 2.4 De orientación sexual
o 2.5 De país
o 2.6 Religiosos
o 2.7 Políticos
3 Ejemplos
4 Referencias
¿Cómo surgen?
Los estereotipos sociales surgen debido a que nuestra mente está
constantemente categorizando el mundo a nuestro alrededor. Debido a que
la capacidad de procesamiento de nuestro cerebro es limitada, necesitamos
simplificar lo que nos rodea de tal manera que podamos dividirlo en
categorías más o menos claras.
¿Educación o naturaleza?
Influencia de la sociedad
Por otra parte, disciplinas como la sociología opinan que los estereotipos, a
pesar de tener una base biológica, se forman principalmente debido a la
cultura en la que estamos inmersos. Factores como la información que
recibimos de nuestros padres o los medios de comunicación pueden influir
en la formación de estereotipos.
Por ejemplo, según esta teoría tendemos a asociar rasgos positivos con los
grupos sociales que han sido históricamente privilegiados, y rasgos negativos
con aquellos que han estado en una situación de desventaja. Esta manera
de crear estereotipos se vería perpetuada por la educación, las expresiones
culturales y la vida social en general.
Los estereotipos sociales casi siempre tienen su origen en algo cierto. Sin
embargo, al estar basados en la observación de todo un grupo y no de un
individuo, regirnos ciegamente por estos puede llevarnos a no darnos cuenta
de las numerosas excepciones que existen.
Por otra parte, regirnos por los estereotipos sociales puede provocar también
que surjan la discriminación y los prejuicios. Por lo tanto, es necesario ser
conscientes de nuestros propios estereotipos y tratar de observar la realidad
de forma objetiva.
Tipos
Los principales tipos de estereotipos sociales son los siguientes: de raza, de
género, de clase, de orientación sexual, de país, religiosos y políticos.
De raza
De género
Otra de las características en la que más nos basamos para clasificar a las
personas es el género. En función de si alguien es un hombre o una mujer,
le atribuiremos una serie de características generales tan solo por pertenecer
a un determinado género.
De clase
Estos estereotipos tienen que ver con las creencias asociadas a determinadas
posiciones sociales; por ejemplo: empresarios, obreros, políticos o
funcionarios.
De orientación sexual
De país
Religiosos
Ejemplos
Algunos ejemplos de estereotipos sociales son los siguientes:
– Pensar que los hombres son más racionales que las mujeres.
– Creer que los asiáticos son muy buenos con las matemáticas.
– Opinar que los franceses son unos engreídos, y que los alemanes son todos
muy puntuales y eficientes.
– Creer que los empresarios son todos malvados y los obreros buenos y
honrados.
Referencias
1. “Where Bias Begins: The Truth About Stereotypes” en: Psychology
Today. Recuperado en: 26 Abril 2018 de Psychology Today:
psychologytoday.com.
2. “Stereotypes” en: Simply Psychology. Recuperado en: 26 Abril 2018
de Simply Psychology: simplypsychology.com.
3. “Stereotype” en: Wikipedia. Recuperado en: 26 Abril 2018 de
Wikipedia: en.wikipedia.org.
4. “Social Categorization and Stereotyping” en: Open Text BC.
Recuperado en: 26 Abril 2018 de Open Text BC: opentextbc.ca.
5. “Stereotypes, prejudice and discrimination” en: Open Text BC.
Recuperado en: 26 Abril 2018 de Open Text BC: opentextbc.ca.
6.
7.
8.
El inconveniente vagabundo
por David Montaño*
Resultan improvisadas las medidas con las que se atienden a esta población: del
paternalismo asistencialista de Petro, a la preocupación meramente estética y la negación
intencionada de Peñalosa.
*Antropólogo
A finales de mayo la alcaldía encabezó una intervención en el Bronx, uno de los expendios
de droga más grandes de todo el mundo. Las cámaras GoPro, con sus características tomas
en primera persona, como si de un videojuego se tratara, captaron las imágenes de cientos
de hombres del Ejército y la Policía, armados hasta los dientes y apuntando sus fusiles a
vagabundos que, en el ensueño del bazuco, apenas atinaban a proferir palabra y a hacer lo
que se les ordenaba. El video editado inundó las redes sociales. La Alcaldía estaba
actuando.
Las historias que se destaparon después de la intervención son escalofriantes. Niñas
menores de 14 años esclavizadas sexualmente a cambio de droga. Canecas para desaparecer
los cuerpos de los ajusticiados al interior de la olla. Policías asesinados y desaparecidos,
mientras que otros tantos en abierta connivencia o directamente empleados por los capos de
los expendios. Secuestros, torturas, muerte, dolor, sangre, mierda. El reino cochino, el
inframundo a 800 metros de la casa del Presidente de la República. Ante semejante
panorama nadie dudaría de la necesidad del accionar de la Alcaldía.
En 3 meses que han pasado desde esa madrugada, los residentes de Chapinero y el Centro
fueron testigos del éxodo de los indigentes (y los llamo así intencionalmente y no con el
eufemismo con el que nos lavamos la conciencia para sentirnos bien con nosotros mismos,
políticamente correctos). Algunos de ellos vieron en esas localidades su nuevo hogar, otros
tantos se apostaron en el caño de la calle sexta justo debajo de la carrera 30. Caño que
inundado por las lluvias de agosto y por la inmundicia de la ciudad arrastró a su paso todo
lo que tenía en frente, incluyendo a los alucinados que se apostaban en su ribera a pasar la
traba. De nuevo, la Alcaldía envió a la Policia para desalojarlos, nadie quiere tener de
vecinos a una banda de 300 chirretes. Otros tantos fueron a dar al “Samber”, unas cuadras
del barrio San Bernardo que cumplen la misma función del Bronx pero a menor escala.
Otros más se desperdigaron por la ciudad.
El vagabundo es el espejo que nos aterroriza con la imagen de lo que podemos llegar a ser,
el que desprecia todos los valores de la sociedad moderna pero se adapta y vive de ella, es
el cochino, el sucio, el ‘chirrete’, el bazuquero, el drogadicto, el maloliente, la rata, el
libertino, el vago. Es una realidad de Bogotá desde las pandillas de gamines de los sesenta a
los ‘chirris’ del siglo XXI. Y así no nos guste, la ciudad debe asegurarles su condición de
ciudadanos a todos los que en ella habitan. A todos. Por eso resultan improvisadas las
medidas con las que se atienden a esta población: del paternalismo asistencialista de Petro,
a la preocupación meramente estética y la negación intencionada de Peñalosa.
Sin una acción definitiva y certera sobre las cabezas de las mafias que controlan el negocio
de la droga en Bogotá, los desalojos no van a ser sino paños de aguas tibias, puesto que es
cuestión de tiempo para que vuelvan a levantar sus taquillas en otro lado de la ciudad. Es
como si prohibieran la venta de cabuya para controlar los suicidios. Inútil y tonto. Sumado
a esto urge la necesidad de una política pública integral que consista en algo más que
bañarlos, trabarlos y darles un plato de sopa. Algo que propenda por una solución más
incluyente en la que se plantee la posibilidad de la necesaria legalización de la droga, así
como el control de la misma por parte de entidades de salud. Entre tanto, no parece haber
solución a la vista y tendremos que convivir y acostumbrarnos como lo hemos hecho
durante años a su presencia en la ciudad, aunque nadie quiera tener de vecino a un ‘chirri