Episodio Uno: La Espiritualidad: Una ingeniería humana mal entendida

Antes de iniciar el tema, es necesario atender por lo menos una condición relevante
para escuchar:

1. Tener Apertura mental.

Me explico:

¿Por qué se debe tener Apertura Mental? Porque habrá puntos de vistas que no
concordará con lo que usted piensa, con lo que usted cree y con lo que ha aprendido.
Apertura Mental, no significa que se va a creer todo lo que se diga, sino dejar el Juicio en
suspenso e intentar comprender, aplicando un principio bíblico: «Examinadlo todo;
retened lo bueno»; para ser protagonista y no simplemente un espectador de nuestra
historia.

Nosotros somos seres muy «complejos» y en la mayoría de las veces ni nosotros mismos
nos entendemos. Tenemos momentos eufóricos y otros de angustias. Un día nos
levantamos con el pie derecho y el otro con el pie izquierdo. La interrogante es: ¿Por
qué reaccionamos así? Puede ser que una gran parte de las causas la conozcamos, pero
otras muchas, pasaron inadvertidas. Y de aquellas que conocimos, generalmente la
vemos como una causa externa a nosotros mismos, pero muy rara vez, reconocemos
que viene desde nosotros mismos.

Hemos sufrido cambios imperceptibles de nuestra personalidad; Y, esto, tiene que ver
mucho con la espiritualidad de la persona. Concepto mal entendido, sobre todo en el
mundo cristiano. Por lo tanto, debo hacer una aclaración respecto a este adjetivo
(“espiritual”).
Por muchos años se ha creído definiéndose como perteneciente solo a lo
divino, como vinculado entre la persona y Dios; como decir: “la oración, el
canto religioso, los cultos son parte de la espiritualidad humana. En
términos más prácticos, podemos decir; Que ir a la Iglesia es un acto espiritual.
Ir a la playa, es un acto carnal; si se vas a orar, eres espiritual; si vas a un cumpleaños,
eres carnal. No obstante, esto es lejos de la realidad bíblica,

La enseñanza teológica de la constitución del hombre como un ser

tripartito (cuerpo, alma y espíritu), descuartizó y fragmentó a la
humanidad; no por ser falsa o incorrecta, sino porque pasó por alto la
totalidad del ser humano como una constitución material e inmaterial,
entrelazados de tal manera que lo hacen inseparables, intrínsecos e
inherentes.
La teología, desvinculó al sujeto de su espiritualidad como algo que está
por sobre o fuera de él, pero no parte de él; estructurando una forma de
pensar, un modelo de pensamiento para pararse frente a la vida en
dimensiones opuestas e irreconciliables, por ejemplo: Espiritualidad v/s
Humanismo; espíritu v/s carne; vida espiritual v/s vida mundanal. Desde
entonces, el cristiano en su práctica devota, vive desde una trinchera,
porque todo lo que forma parte de este mundo, lo hace enemigo de Dios.

Estas posiciones teológicas bifurcaron en direcciones tan opuestas, que

un Pastor llamado Clyde Narramore difunde en los años 50 la idea en la
cual divide a la persona en tres áreas:
1. Si está enfermo, debe ir al médico.
2. Si tiene un problema espiritual, debes ir a un Pastor.
3. Si tienes un problema del alma, debes ir a un psicólogo.
Esto, es una radiografía de cómo se segmenta y se atomiza al hombre.
Entonces, es necesario rectificar este concepto «espiritual», como todo
aquello intangible que no puede ser percibido físicamente, imposible de
tomar y palpar, imposible de manipular, imposible de verlo
concretamente, como son las emociones, los miedos, los temores, el amor,
el cariño, el fracaso, las frustraciones, el odio, el estrés. Es decir, todo
aquello que no tiene un soporte físico.
Este conocimiento es de vital importancia, precisamente porque somos
responsables de la formación de cada persona desde su génesis. Si somos «mal
enseñados» enseñaremos mal, si fuimos «mal formados», conforme a esa «formación»
formaremos. Y, nadie puede enseñar lo que no se sabe y nadie puede entregar lo que no
tiene.

Entonces, si se tiene una mala base, la transmisión del conocimiento es deformada,

porque se construye desde un cimiento frágil. Por tal razón creo que es indispensable
hablar sobre la espiritualidad de la persona, su constructo, su formación y sobre todo su
génesis.
La espiritualidad tiene que ver con procesos de influencias en la Formación de la
Personalidad de cada individuo. Procesos como creencias culturales, de paradigmas, de
sus orígenes; tiene que ver con la formación político-social, religiosos y otros.

Para abarcar y contener todos estos procesos de influencias, lo denominaremos

Procesos de Programación y Modelación del hombre y la mujer.

Ahora, ¿Cómo afecta estos procesos a las personas?

Se nos ha presentado una falsa noción de lo que somos: Nos han hecho creer que somos
seres Originales, Únicos e Irrepetibles. Sin embargo, ¡Esto no corresponde a la realidad!
Lo que objetivamente somos: Somos una Copia Esculpida Única e Irrepetible de un
Sistema. ¿Por qué?

Porque son los procesos de Programación y Modelación Humana, las que nos van
definiendo y delimitando nuestras fronteras y alamedas.

Tenemos el primer modelo de Programación y Modelación que tiene que ver con:

La Concepción y Vida Intrauterina: Thomas Verny, autor del libro “La vida secreta del
niño antes de nacer” explica el cómo la vida intrauterina afecta el posterior desarrollo
de la personalidad de los seres humanos. Escribe fundamentado en sus estudios clínicos
de cómo la vida de los padres antes de la concepción, imprime el futuro del individuo;
señalando así, que la mujer no es una incubadora, sino una participante activa en la
formación del niño antes de nacer”. Por lo tanto, todo lo que haga (la madre) coma,
beba o se drogue, su estrés, su odio, su remordimiento, su envidia, su amor, etc.,
afectará la salud no solo de sus hijos sino hasta la de los nietos”.

El segundo modelo consiste en:

El Ambiente y Contexto: Una vez al ser introducido a este escenario, el infante es

sometido a toda una influencia, en especial, a la cultura familiar, y dentro de su
contexto sus amigos y el Medio.

El tercer modelo consiste en:

La Cultura y la Educación: Desde la educación formal e informal, con toda una base
intencionada de acuerdo al Sistema económico, político-social; sumándose la cultura, las
creencias y tradiciones.

Y un cuarto modelo, no científico consiste en:

El Modelo Bíblico: Según Jeremías 1:5 «Antes que te formase en el vientre te conocí, y
antes que naciese te santifiqué, te di por profeta a las naciones». En otras palabras,
Nosotros ya existíamos en la mente de Dios. Un Salmos dice: «Digo: ¿Qué es el hombre,
para que tengas de él memoria, el hijo del hombre, para que lo visites? 5 Le has hecho
poco menor que los ángeles, Y lo coronaste de gloria y de honra. 6 Le hiciste señorear
sobre las obras de tus manos; Todo lo pusiste debajo de sus pies».

Sobre esto, hablaremos más adelante.

En consecuencia, para reafirmar la idea de la Programación y Modelación del hombre, a

partir de estos modelos podemos inferir lo siguiente:

(1) Que el hombre y la mujer está atrapado en su propia circunstancia.

(2) Desde que llegamos a este mundo, nuestra lengua, nuestra religión y nuestros
valores, estaban presentes antes que naciéramos.
(3) Desde que nacemos venimos programado biológica e espiritualmente, para
llegar a un Sistema dentro de una sociedad que nos moldea desde el
inconsciente.

Por lo tanto, los problemas de la humanidad son más complejos de lo que creemos. Por
un lado, la ciencia médica ha atomizado al hombre en diferentes especialidades,
también fragmentándolo. Pero analicemos esto en un simple ejercicio práctico:

Cuando una persona se enferma del estómago: Le duele la cabeza, le da jaqueca, tiene
problemas digestivos, a veces se afiebra, pierde el apetito, es irritable, es sensible a la
luz, pierde la concentración, etc. ¿Por qué? Por qué es un «Todo».

El Hombre y la Mujer es un «todo» desde la programación de lo imponderable, es decir,

desde la Concepción; Modelado desde el entorno y su contexto y desde los Paradigmas
de una sociedad.

En consecuencia, el ser humano debe entenderse como un ser en su totalidad. Es decir,

del alma-cuerpo y espíritu surgen los pensamientos; del alma-cuerpo y espíritu surgen
los sentimientos, del alma-cuerpo y espíritu surgen las emociones, las decisiones, su
«todo» como estilo de vida.

Bien, gracias, ¡Nos veremos en el siguiente episodio!

 Episodio Dos: La Espiritualidad: Una ingeniería humana mal entendida

En el Episodio Uno, hablamos de los Paradigmas de Programación y Modelación en la

construcción de la personalidad de cada individuo, que diseñaron un «tipo» de hombre y un
«tipo» de mujer, con toda la carga biológica e espiritual transferida, desde antes de nacer.

Por otro lado, dentro del cristianismo más convencional, nos han hecho creer que todos nosotros
somos obra de Dios. Sin embargo, las Escrituras nos dice que Dios creó a dos seres en este
universo: Adán y Eva. ¡Nada más! ¡Nosotros no fuimos una creación directa de Dios!, sino somos
el producto de estos dos, llevando su imagen y la programación biológica e espiritual a
perpetuidad.

Parlamentemos un poco en detalle cómo influenciaron estos modelos.

Primero, se nos formó dentro de un mundo desde el vientre de la madre. ¡No nuestro
mundo! sino el mundo de nuestros padres; ellos nos dijeron “así es el mundo”, “no
metas las manos en el enchufe” “no pongas las manos sobre la plancha caliente”, “hay
que estudiar para ser alguien en la vida”, “no debes ser como nosotros sino mejor”,
etc.

Esto, no está mal, pero nos enseñaron otro «mundo», otra forma de «ver» y «concebir»
la realidad, bajo los moldes de las ideas, la cultura, la forma de comer y de hablar de
nuestros padres. Nos dijeron: «esto está malo porque no se hace así», creando así una
cosmovisión distinta bajo la convicción y certeza de otro.
Se creó una historia sobre una tabla rasa dominado por una autoridad: Lo dijo el
“papá”, lo dijo la “mamá” o lo dijo el “profesor”.
Por lo tanto, para toda persona, independiente a su creencia religiosa, ha estado bajo
estos mismos contextos de moldes y patrones paradigmáticos.
Tal vez, sea este el origen de una adolescencia rebelde y confundida, donde todo se
cuestiona, sobre todo la autoridad. Etapa que va más allá de ser un fenómeno
biológico, sino también cultural, social y psicológico en la construcción de la propia
independencia de vida, como un proceso de depuración de las taras heredadas.
Por lo tanto, se debe reflexionar respecto a la postura del Doctor Verny en su libro: “La vida
secreta del niño antes de nacer”, donde nos explica el cómo la vida intrauterina afecta el
posterior desarrollo de la personalidad de los seres humanos, y su salud no solo de sus hijos sino
hasta la de los nietos”.

¡Por si no lo ha dimensionado usted! Esto quiere decir que existen estados mentales y
emocionales patológicos, trancas psicológicas que proliferan en el tiempo, el cómo «encaja» en
su entorno y su relación, el sentido de violencia y timidez y el cómo se relaciona con los demás,
dependen de patrones heredados.
Por lo tanto, todo individuo necesita una «liberación», una especie de “sanidad interior”, un
“nacer de nuevo”, para desprenderse de taras heredadas que les generó una espiritualidad que
le hizo tener una vida constipada y atrapada en su proceso de vida.

¡Vamos a explicar esto de otra forma!

Hagamos un símil, con la gestación de un pollo hasta que eclosiona del huevo; si a los
21 días no comienza a romper el huevo para salir al mundo; aquello que le dio vida y le
permitió desarrollarse: ¡Eso mismo lo matará! ¡Toda una vida queda truncado o atrapado en un
proceso de vida! Por responder a esquemas de pensamientos empollados, como parte de
un constructo social.
Veamos cómo esta espiritualidad afecta, en lo referente a las emociones Negativas y su
Impacto en la Salud Mental y Física de una persona.
Obviamente, lo que voy a manifestar esta cimentado expertamente, según estudios científicos
de América Latina, el Caribe, España y Portugal, respecto a la relación mente y enfermedades,
llegó a las siguientes conclusiones:

a. Se estableció un vínculo entre emociones negativas y trastornos mentales y físicos.

b. El estado psicológico tiene relación con el colon irritable, la migraña, la sensibilidad, alergia
y la fatiga crónica.
c. Existe influencia entre emociones negativas en la conducta humana, en los hábitos y
conductas inadecuadas.
d. Se demostró que existe una Descodificación biológica de las enfermedades. Es decir, el
cuerpo y la mente actúan siempre en conjunto.
e. Y, por otro lado, la historia clínica se elabora desde el vientre materno hasta su
independencia y madurez.

Estas conclusiones, dan una mirada y un foco distinto respecto al origen científico de las
enfermedades. Según la ciencia se cree que las causas más comunes de los padecimientos
físicos, son provocadas por hongos, virus, bacterias y protozoos, microorganismos patógenos
que nos enferman.
No obstante a ellos, la misma ciencia ha explorado más allá de lo medible, es decir, de lo
concreto o de lo objetivo. Encontraron que muchas de las enfermedades físicas tienen un
origen psicológico, mental y emocional, además de estos microorganismos patógenos.
Hoy en día, se habla sobre nuevos conceptos, como Neurociencia, Neurolingüística, medicina
cuántica, etc.
Por lo tanto, necesitamos pulsar la tecla «pausar». Porque, tal vez, muchos de nuestros
padecimientos, mal vivir, estrés, relaciones sistemáticas enfermizas, enfermedades físicas,
resentimientos laborales, etc. Son nada menos que un síntoma, que nos quiere decir: ¡Algo le
está pasando a mi cuerpo! ¡Algo ocurre dentro de mí!
Los psiquiatras Mark Waldman y Andrew Newber concluyeron que las palabras producen una
carga emocional cambiando nuestro cerebro; por lo que existe una conexión entre el lenguaje y
el cerebro. Es decir, el cerebro escucha la palabra, este lo grava y lo programa para que la
persona actúe en consecuencia.
¡Esto no nos debe sorprender! La ciencia ha descubierto esta relación «cerebro-lenguaje», pero
es un Principio Bíblico develado miles de años atrás. La Biblia dice en:

1. Proverbios 18:21 dice: “La muerte y la vida están en poder de la lengua (palabra). Y el que la
ama comerá de sus frutos. Es decir, la palabra de cada persona afecta para vida o para
muerte, para salud o para enfermedad, para bendecir o maldecir; pero cada quien segará
como un bumerang de su propia palabra.
2. Marcos 11:23 se nos escribe “… si creyere que será hecho lo que dice, lo que dice será
hecho”. En otras palabras: «Lo que tú dices recibes».

De acuerdo al estado de arte, que habla sobre la Descodificación biológica de las enfermedades;
Las Escrituras demuestran esta correlación entre la espiritualidad humana y el cuerpo, miles de
años atrás, por ejemplo:

1. Proverbios 17:22: “El corazón alegre constituye buen remedio; más el espíritu triste seca los
huesos”.
2. Proverbios 18:24. “El ánimo del hombre soportará su enfermedad; más ¿Quién soportará al
ánimo angustiado?
3. Salmos 73:21: “Se llenó de amargura mi alma, y en mi corazón sentía punzadas”
4. Y el texto estrella es: Proverbios 23:07, “Porque cuál es su pensamiento en su corazón, tal
es él”

Bien, gracias, ¡Nos veremos en el siguiente episodio!

 Episodio Tres: La Espiritualidad: Una ingeniería humana mal entendida

En el Episodio Dos, ejemplificamos más en detalle de la carga biológica e espiritual transferida,

que diseñó la personalidad de cada individuo. Y, cómo esta espiritualidad tiene una correlación
con nuestro cuerpo, fundamentado por estudios científicos y por principios bíblicos.
Hablamos además de cómo se creó una historia en nosotros como una tabla rasa dominado
por la autoridad: Lo dijo el “papá”, lo dijo la “mamá” o lo dijo el “profesor”. Y, como todos
hemos estado bajo estos contextos y patrones paradigmáticos.
Terminamos nuestra conversación con un texto estrella: Proverbios 23:07, que dice: “Porque
cuál es su pensamiento en su corazón, tal es él”.
Profundicemos este texto, un momento:
Existen otras versiones que se leen: “Pues como piensa dentro de sí, así es”. Otro, “Porque
según piensa en su alma, así es”.
Este texto bíblico explica el ¿Cómo se conforma un individuo en “persona”? explica ¿Qué es
lo que determina su forma de ser? Explica ¿A qué se debe su “mentalidad” que asume?
Expliquemos esto:
Los pensamientos modelan nuestras estructuras mentales; de ahí emana el cómo concebimos y
percibimos nuestra realidad y todo lo que nos rodea. El pensamiento se estructura a una forma
determinada a través del conocimiento; se transforma o se modifica a medida que el
conocimiento ejerza influencia en el hombre.
Y, este conocimiento no se refiere a solo al saber científico, sino a todo saber del conocimiento
de lo que es formal e informal; toda información que recibamos y procesemos de nuestro
medio, de donde nos movemos, del núcleo familiar, etc.
Por lo tanto, de la manera que se procesa este conocimiento y forme sus representaciones
mentales o cognitivas, proyectará el “hombre” o la “mujer” que se es.
Expongamos esta idea en una forma más simple:
1. Lo que el hombre y la mujer piensa, eso se es.
2. Cada individuo en su manera de ser, proyecta su manera de pensar.
3. Lo que se proyecta externamente, es lo que se vive internamente.
4. Cada palabra, cada pensamiento, cada letra, cada dibujo, cada cosa que hagamos, es la
manera en la cual concebimos nosotros las cosas.
En consecuencia, ¡Y, esto es importante! todo cambio tiene su génesis y desarrollo en la mente
del individuo. La mente, es el motor para germinar el cambio. Cuando alguien dice: “Creo a mi
manera” alude a su forma de pensar y esta manera de pensar conlleva a una forma de vivir, una
concepción de ser y de actuar. Así, tenemos entonces, a la mente como una puerta de entrada y
de cultivo de los pensamientos para crear o modificar nuestra realidad.
Recordemos que el cerebro no distingue entre lo que es real y ficticio, por lo tanto todo
archivo gravado, al activarse actúa en consecuencia en forma conjunta, mente y cuerpo, es
decir toda su espiritualidad, siendo el cuerpo el receptor que sufrirá las consecuencias, sean
buenas o malas.
Esto expone explícitamente el concepto de la Biodescodificación de las enfermedades;
recordemos, que consiste en que el cuerpo y la mente actúan en conjunto.
Argumentemos esto científicamente: Veamos algunas estadísticas de estudios empíricos
respecto la salud mental de nuestro país, donde se presenta la relación entre la espiritualidad y
el cuerpo.
Las estadísticas de la salud mental de nuestro país, nos dicen.
Que en los últimos 20 años se incrementó la consulta por Dolores de Cabeza, de estómagos,
dolores de espaldas, colon irritable y fibromialgia, relacionado con el estrés y la sobre carga
emocional.
Por otro lado, uno de cada tres chilenos sufre de trastornos depresivos. El 58% de las licencias
son relacionadas con la salud mental: depresión, ansiedad y estrés.
Y se cree, que para el 2.020 la depresión será la segunda causa de años perdido de vida
saludable a escala mundial. Y, la primera en países desarrollados según estudios de American
Psychiatric Association, 1995.
Con respecto a la tasa de suicidios, en 2017, el promedio de fallecidos por mes es de 116.8 para
los hombre, y 20.0 para mujeres. Esto significa 3.8 fallecidos por día en hombres y 0.7 en
mujeres. Y, en horas significa 6 suicidios en hombre y cada 35 horas en mujeres. Siendo los
grupos etarios más vulnerables entre 25 a 44 años y el segundo entre 45 y 64 años.

Entonces: ¿Qué nos hablan estas estadísticas?

Reafirmar que el mayor problema de salud mental en Chile, tiene que ver con la espiritualidad
de las personas, es decir: relación mente-cuerpo, o en otras palabras más científicas:
Biodescodificación de las enfermedades.
Ahora bien,
Les presento una investigación muy interesante en la cual se hizo un seguimiento de un año en
personas cristianas que indicaron: (1) Tener un compromiso en su fe (Oración, meditación y
estudio bíblico). (2) En aquellos que indicaron menor compromiso de su fe.
La conclusión a que llegó esta publicación, en aquellos que indicaron un mayor compromiso
de fe; presentaron altos niveles de depresión, que los de menor compromiso.
Otro estudio en adultos Mayores; aquellos que tenían un estilo de vida de enfrentamiento
religioso negativos, es decir, creer en un Dios castigador, creer en espíritus demoniacos,
presentaron mayor depresión y un estado de salud precario y baja calidad de vida. Lo contrario
en creyentes que creían en un Dios benevolente, colaborador y en la búsqueda constante de
conexión, presentando en ellos un estado de salud saludable. (Koening, Pargament y Nielsen,
1998).
¡Esto da para pensar!
¿Qué significa esto? ¿Qué conclusiones podemos extraer de estas investigaciones?
La tesis final, a mí juicio sería:
a. Que el termómetro de salud humana, está en directa relación con problemas de la
espiritualidad de cada individuo.
Por lo tanto, el Estado debería invertir en Proyectos Sociales para la Salud Mental,
como el arte, la música, danzas, pintura o arte, talleres para Adultos Mayores, salidas y
contemplación de nuestros paisajes, actividades artísticas y recreativas, fortalecimiento
 de la espiritualidad humana, ayudas a las Iglesias e Instituciones como ONG que van
en beneficios a la sociedad, etc.
b. Los primeros síntomas de debilitamiento emocional, comienzan en la «mente» de las
personas; donde los pensamientos dibujan y moldean una realidad, con efectos nocivos en
el cuerpo físico, afectando sus emociones traducidos en conductas.
Esto, da entrada en lo que se llama Psicología Cognitiva que trata sobre la mente y la
conducta humana y sus emociones. A mi entender, la Psicología Cognitiva trata sobre
lo mismo de lo que le estoy hablando: La espiritualidad Humana.
c. Las personas reaccionan más en relación a lo que se piensa (siente o interpreta el
momento) más que en sus propias creencias. Más académicamente le llamaría:
Ambivalencia Emocional.
Esto queda demostrado en la Investigación de Koening, Pargament y Nielsen, 1998,
con seguimiento anual de las personas con creencia religiosa comprometida y en
adultos mayores.

Es muy interesante reflexionar sobre esto último, porque tendemos a la tendencia de obrar
conforme a lo que creemos, en nuestra fe, empero este estudio demuestra que nuestro actual,
básicamente, se da en otro contexto, es decir, recibo la noticia y reacciones de acuerdo a mis
emociones, a lo que se siente en ese momento, sea de rabia, de dolor, de incomprensión o de la
presión del momento. Esto nos da a entender que la fe se relativiza según el concepto que se
tenga de «fe». Si se mira la «fe» de un evangelio donde se lucha, donde hay que estar preparado
de los embistes y estratagemas satánicos con el escudo de la «fe», se recibirá el «golpe» más
como una resignación, que una actitud de temple, de solidez y firmeza.

Bien, gracias, ¡Nos veremos en el siguiente episodio!

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limón fácil: Licencia

Entonces debe especificar el autor en su proyecto: Música de https://filmmusic.io
"Easy Lemon" de Kevin MacLeod (https://incompetech.com)
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(3695- 30 segundos)
Entonces debe especificar el autor en su proyecto:
Música de https://filmmusic.io
"Easy Lemon (30 segundos)" de Kevin MacLeod (https://incompetech.com)
Licencia: CC BY (http://creativecommons.org/licenses/by/4.0/)
Primero, explico el concepto de «ambivalencia». Según definiciones de la Internet, dentro del
estado de arte, se define como: La presencia de dos interpretaciones o valores opuestos frente
a un mismo objeto o también referida como conducta ambivalente. Esta palabra fue acuñada
por primera vez por el psiquiatra suizo Eugen Bleuler (1857-1939) combinando el latín ambi
que significa “ambos” y valentia que indica “valor” o “precio”. El concepto de la ambivalencia
fue luego popularizada por el psiquiatra Freud.
Algunos sinónimos de ambivalencia son: ambigüedad, duplicidad, contradicción,
indeterminado, polarizado. Y los Antónimos podemos encontrar las palabras definido, preciso,
exacto o claro.
El estado de arte, dice: “En psicología, la ambivalencia se refiere a un estado, temporal o
permanente, donde conviven dos sentimientos, generalmente, opuestos. Esta situación
ambivalente sucede cuando la actitud frente a un hecho u objeto se vuelve incoherente”.

Episodio Cuatro: La Espiritualidad: Una ingeniería humana mal entendida

Por lo tanto, esto es coincidente con lo que dice las Escrituras.

 Los psiquiatras Mark Waldman y Andrew Newber concluyeron que las palabras producen
una carga emocional cambiando nuestro cerebro; por lo tanto, existe una conexión entre
el lenguaje y el cerebro. Es decir, el cerebro escucha la palabra, este lo grava y lo programa
para que la persona actúe en consecuencia.
¡Esto no nos debe sorprender!
Proverbios 18:21 dice: “La muerte y la vida están en poder de la lengua (palabra). Y el que
la ama comerá de sus frutos.
Marcos 11:23 se nos escribe “… si creyere que será hecho lo que dice, lo que dice será
hecho”. En otras palabras: «Lo que tú dices recibes»
En consecuencia, existe una correlación entre la espiritualidad humana y el cuerpo,
demostrando así, que somos un «todo».
Las escrituras mismas hablan de la Descodificación biológica de las enfermedades. Por
ejemplo, tenemos:
Proverbios 17:22: “El corazón alegre constituye buen remedio; más el espíritu triste seca
los huesos”
Proverbios 18:24. “El ánimo del hombre soportará su enfermedad; más ¿Quién soportará
al ánimo angustiado?
Salmos 73:21: “Se llenó de amargura mi alma, y en mi corazón sentía punzadas”
Y el texto estrella es: Proverbios 23:07: “Porque cuál es su pensamiento en su corazón, tal
es él”

II. Quinto tópico: Clave de la Fortaleza Emocional.

En consecuencia, si existe una relación mente (espiritualidad) y cuerpo, es necesario tener
una Apertura Mental para entender este proceso.
De acuerdo al estudio de seguimiento sobre creencia, es necesario preguntarse ¿Por qué
tuvieron resultados tan diferentes unos de otros? Si todos tenían al mismo Dios, todos
nacieron de nuevo, todos eran Nueva Criaturas.
El contraste, emana en las creencias de cada uno de ellos; tal como concluía
anteriormente. Los que pensaban en un Dios Castigador, moldeaban su vida de acuerdo a
ello, y el hecho de creer en demonios asumían una vida de lucha espiritual y de trincheras.
Esto, tiene concordancia, de algún modo con lo que dijo Epicteto, filósofo griego. Dijo:
«No nos afecta lo que nos sucede, sino lo que nos decimos acerca de lo que nos sucede»
Nosotros no tenemos tal percepción; no tenemos esta «noción» de este concepto.
Tenemos a Job que no le afectó lo que le sucedió; no pensó en el ¿Por qué? No dijo: ¡esto
ya no lo aguanto! ¡Esta situación me deprime! ¡Me revienta!
Lo que vive cada persona en su espiritualidad, es lo que le enferma o sana de acuerdo a lo
que se piensa de ello y no el hecho.
Uno, es quién le da el poder a las otras personas. Uno da el poder a las palabras de los
demás. Y al entregar el poder, esos pensamientos, la vivencia espiritual, el estar pensando
de lo que le han dicho, tendrá un efecto nocivo sobre el cuerpo: “Porque lo que uno
piensa, tal cual es él.
 Por algo Pablo decía: Pensad en todo lo bueno, en todo lo de buen nombre, en todo lo
honesto, en todo lo amable, si hay virtud alguna, en esto pensad.

Existen tres factores que influyen en la fortaleza emocional.

PENSAMIENTO, EMOCIÓN Y CONDUCTA. Y, éstas se relacionan entre sí: Si tengo un

pensamiento negativo, esta se traducirá en una emoción negativa y a la vez en una
conducta negativa. Y así, sucesivamente.
Pero el elemento más importante de todos ellos (Pensamiento, Emoción y Conducta) es el
«PENSAMIENTO», es desde ahí donde emanó la fortaleza de Habacuc, de Job o de Pablo,
porque su fe y su esperanza triunfaron sobre las circunstancias, llamando las cosas que no
son como si fuesen; donde las circunstancias o los eventos, o los sucesos, más que una
debilidad son una fortaleza.
Y, este tipo de fortaleza, su sustento no está en las emociones, menos en la conducta de
una persona, sino cómo piensa el individuo. Pablo dijo: estamos atribulado en todo, más
no angustiados, en apuros, más no desesperados, derribados, pero no destruidos. (2
Corintios 4:8-9).
Esto, no se trata de «confesión positiva», sino que se va a un nivel de una calidad de
pensamiento que nos lleva a tener la mente de Cristo. Mi realidad puede ser que a tal
punto esté en apuros, pero no desesperado, porque todo lo puedo en Cristo que me
fortaleza, porque no miramos nuestra realidad, sino en aquello que no es, como si fuese.

III. Aplicación
Se puede estar en tres realidades:
a. Estar en una situación libre, sin ataduras ni complicaciones. En este caso, se debe
internalizar este aprendizaje, como una herramienta poderosa en el conocimiento
de la Palabra de Dios.
b. Estar en una situación de entrada a una espiritualidad compleja, de frustraciones,
de estrés, de dolor con síntomas de colon irritable, malestares estomacales y
migrañas. En esta situación, es bueno cambiar sus pautas de pensamientos; como
dice Pablo: «No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la
renovación de vuestro entendimiento…». Y, esta renovación implica un alto grado
de conocimiento de la Palabra, porque al conocer de ella, ella es la que nos liberta.
c. Estar en una situación, donde se está entre dos paredes; entre la espada y la
pared, con tratamiento y consulta psiquiátrica. Este es un escenario muy
complejo, donde se está destruido o débil interiormente; es donde se tiene fe y
esperanza, pero no convicción, porque ha sido permeado su espiritualidad. Por lo
tanto, se hace necesario una ayuda externa y de seguimiento hasta el logro de su
independencia.
d.

IV.
V. .