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Litigio, proceso y

procedimiento.
Partes procesales.

Mtro. Jesús Palma.


Litigio. Concepto.
Para Francesco Carnelutti el litigio es “el conflicto de
intereses calificado por la pretensión de uno de los
interesados y la resistencia del otro".
El conflicto de intereses solo se convierte en litigio cuando
una persona formula contra otra una pretensión, es decir,
exige la subordinación del interés ajeno al interés propio; y
frente a esa pretensión, la otra parte expresa su
resistencia, o sea, se opone a la misma, negando
subordinar su interés propio al interés hecho valer
mediante la pretensión.
Elementos del concepto de
litigio.

1. Dos sujetos, uno que pretende y otro que


resiste, ambos son partes del litigio.
2. Un bien jurídico, que puede ser material o
inmaterial.
3. Un conflicto de intereses, el cual debe ser
jurídicamente calificado.
Importancia del litigio para el
derecho procesal.
En primer termino, es útil para determinar cuando un
conflicto de intereses puede ser considerado un litigio y
es susceptible, por tanto, de ser sometido al
conocimiento y resolución del juzgador, a través de un
proceso.
En segundo lugar, este concepto sirve para delimitar la
materia, el contenido o el tema sobre el cual va a versar
el proceso, pues el litigio es precisamente el objeto del
proceso.
Procedimiento.

La palabra procedimiento significa solo la


manifestación externa, formal, del desarrollo
del proceso, o de una etapa de este, pero no
comprende las relaciones jurídicas que se
establecen entre los sujetos del proceso, ni la
finalidad compositiva de este.
Proceso.

Para Carnelutti el concepto de proceso


denota “la suma de los actos que se
realizan para la composición del litigio”.
Diferencias entre proceso y
procedimiento.
Para el jurista español Alcalá – Zamora y Castillo, la
distinción radica en:
El proceso se caracteriza por su finalidad jurisdiccional
compositiva del litigio, mientras que el procedimiento... (que
puede manifestarse fuera del campo procesal, cual sucede
en el orden administrativo o en el legislativo) se reduce a ser
una coordinación de actos en marcha, relacionados o
ligados entre si por la unidad del efecto jurídico final, que
puede ser el de un proceso o el de una fase o fragmento
suyo (por ejemplo, el procedimiento incidental o el
impugnativo).
Sujetos procesales.
Los sujetos principales que intervienen en la relación jurídica
procesal son la parte que reclama (actora o acusadora), la parte
contra quien se reclama (demandada o acusada) y el juzgador,
quien debe conocer y resolver el litigio surgido entre aquellas.
Tanto las partes como el juzgador tienen como característica
común la de ser sujetos procesales. Pero a diferencia de las
partes, que son sujetos con interés jurídico en el litigio, el
juzgador debe ser, por definición, el sujeto procesal sin interés
jurídico en la controversia; el sujeto procesal imparcial, ajeno a
los intereses en pugna. Sin embargo, no son los únicos que
tienen el carácter de sujetos procesales, también lo son los
testigos, peritos, auxilares del juzgador, el Ministerio Público, y
cualquier otra persona que intervenga en un proceso.
El juzgador.

Alcalá-Zamora escribe que “por juzgador en


sentido genérico o abstracto entendemos el
tercero imparcial instituido por el Estado para
decidir jurisdiccionalmente y, por
consiguiente, con imperatividad un litigio
entre partes.”
Partes en el proceso.

Para Alcalá – Zamora las partes son “los


sujetos que reclaman una decisión
jurisdiccional respecto a la pretensión que en
el proceso se debate”.
Parte formal y parte material.
Parte formal. Se refiere a aquella persona que
interviene en un proceso como simple
representante.
Parte material. Se refiere al sujeto del nexo
material o de fondo que está por debajo o atrás
del proceso, es decir, aquella persona a la cual el
resultado del proceso, la probable sentencia,
estará en posibilidad de afectarle su ámbito
jurídico de una forma particular y determinada.
Capacidad para ser parte.
La capacidad procesal es la aptitud para
comparecer en juicio y realizar válidamente los
actos procesales que corresponden a las partes.
La regla general es que todas las personas, tanto
físicas como jurídicas (o morales), pueden ser
parte en el proceso. Además de las personas,
también pueden ser parte determinados
patrimonios autónomos confiados a un
administrador, como es el caso de las sucesiones
Capacidad procesal.

Es la capacidad para ejercer o hacer valer


por sí mismo, los derechos u obligaciones de
los que se es titular.
Por lo que concierne a la capacidad procesal,
la regla es que todas las personas en pleno
ejercicio de sus derechos pueden
comparecer en juicio.
Legitimación.
La legitimación debe entenderse como una situación del sujeto
de derecho, en relación con determinado supuesto normativo
que lo autoriza a adoptar determinada conducta.
Legitimación ad causam. Es la legitimación de fondo, la cual
es la que tiene toda parte material, y está íntimamente ligada
con la capacidad de goce. Ej. Un menor de edad o un incapaz.
Legitimación ad procesum. Es la que tienen aquello sujetos
válidamente facultados o autorizados para actuar por sí o en
representación de otros.
Litisconsorcio.

Con esta expresión se designa el fenomeno


que se presenta cuando dos o mas personas
ocupan la posición de la parte actora
(litisconsorcio activo), la posición de la parte
demandada (liticonsorcio pasivo) o las
posiciones de ambas partes (litisconsorcio
mixto).
Terceros y terceristas.
• La expresión tercero, dentro del derecho procesal, se
define por exclusión: es tercero todo aquel que no es
parte en un proceso. En este sentido, son terceros tanto
aquellas personas que no han participado en el proceso
como las que han intervenido en el mismo, pero sin
tener el carácter de parte: por ejemplo, los testigos, los
peritos, etcétera.
• Terceristas. Son las personas, que en principio fueron
terceros pero que al comparecer o ser llamados se
convierten en verdaderas partes procesales.

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