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Conceptos Básicos de Composición Coreográfica

Coreografía, literalmente "escritura de la danza", (también


llamada composición de la danza). De las palabras griegas "χορεία" (danza
circular, corea) y "γραφή" (escritura). Es el arte de crear estructuras en las
que suceden movimientos; el término composición también puede
referirse a la navegación o conexión de estas estructuras de movimientos.
La estructura de movimientos resultante también puede ser considerada
como la Coreografía.

Hacer una coreografía, supone un acto de crear un discurso específico con


una intención personal en el que de una u otra forma se cumpla una
interacción con el público, siendo su destino final la exhibición.

El trabajo coreográfico es una elaboración del mundo interno del


coreógrafo que se esfuerza por traducir y mostrar a través de imágenes,
movimiento (corporal, espacial), música, argumento, texto, narración, etc
experiencias e interpretaciones subjetivas, sean de orden puramente
sensorial, emotivo, psíquico, físico o cualquier otro.

Este trabajo implica la apropiación y el conocimiento de una o varias


técnicas del movimiento, lenguaje corporal, composición coreográfica,
espacial.
El modo de proceder para componer una coreografía varía
considerablemente de un coreógrafo a otro, por ejemplo:
Algunos tienen una idea totalmente formada de la coreografía antes de
reunirse con los bailarines; otros conciben la coreografía al guiar la
improvisación de los bailarines. Otros desarrollan una estructura general y
después se deciden sobre las combinaciones específicas mientras trabajan
los bailarines, esta última es la que más se recomienda según los
coreógrafos expertos, pero es a comodidad del coreógrafo. Otros estudian
la partitura a partir de mediciones y exactitudes, otros simplemente
escuchan la música y se dejan llevar.

La Idea Coreográfica.

La idea coreográfica es la que guía el proceso de creación, es decir, un


coreógrafo no puede simplemente crear sin tener un camino que seguir. El
primer paso, dirían los expertos es delimitar el fin de la composición
coreográfica. El montaje debe ser coherente con la idea general que se
pretende expresar, por ello, clarificarla es parte determinante de la
construcción.
Algunas de las formas más comunes de abordar el desarrollo de la
coreografía son:
Elementos del movimiento.

Energía.
Propulsa, inicia o produce cambios en el movimiento o posición del
cuerpo. Todas las acciones motrices están ligadas a la energía, dado que
es necesaria para iniciar, controlar y parar el movimiento. El conocimiento
del grado de energía permite transformar el movimiento, logrando que
sea más expresivo, eficaz y estético. La cualidad del movimiento está
determinada por la manera en que es utilizada la energía, cuando se
mueven distintas partes del cuerpo en el tiempo y el espacio.
Generalmente se habla de pares opuestos: fuerte-débil. Teniendo en
cuenta la fluidez: continua-discontinua.

Forma.
Es la imagen que el bailarín describe con su cuerpo. También es el formato
que un grupo de bailarines compone en una agrupación. Ej. Círculo,
rombo, triángulo, media luna, etc. Se debe cuidar que en estos dibujos, los
bailarines se adapten unos a otros sin que se tapen los de atrás, a menos
de que la intención visual así lo requiera.

Tiempo.
Se marca estableciendo la velocidad, el acento, el pulso y el ritmo.
Espacio.
El espacio es de los principales elementos de la danza, junto con el cuerpo.
Puede clasificarse en personal, parcial, total y social.

Los parámetros del espacio son:

Dirección. Es el punto en el espacio circundante hacia donde se dirigen los


segmentos corporales, desplazamientos, etc. Las direcciones en las que
podemos movernos son seis: delante (señalado por el pecho), atrás
(señalado por la espalda), derecha, izquierda (señalados por los
hombros), arriba (señalado por la coronilla) y abajo (señalado por los pies.
Dimensiones. Se generan con ayuda de las direcciones; son tres
dimensiones: de profundidad (delante-atrás), de ancho (derecho-
izquierdo), de altura (arriba-abajo)
Ubicación. Con respecto al escenario, existen nueve ubicaciones básicas,
unas más fuertes que otras. Primero se dividen horizontalmente: la parte
de hasta adelante se le llama ‘abajo’, a la parte de en medio se le llama
‘centro’ y a la parte de atrás se le llama ‘arriba’; después, horizontalmente
se nombran las secciones según como lo ve el público, con lo que se
localizan los cuadrantes con coordenadas. Ej. Arriba-Izquierda, Centro-
Centro, Centro-Derecha, etc. O se localizan también con números:

1 2 3
4 5 6
7 8 9

Otra manera de localizar el espacio en el escenario sería por sus nombres


formales, es decir: Proscenio, que es el pedazo de escenario que sobresale
del telón, es el más cercano al público. Cuando un director dice "a
proscenio" significa que te tienes que acercar unos pasos en dirección al
público. Centro, que es la región central o media, va desde donde empieza
el telón hasta varios metros antes del foro. Foro, que es el telón de fondo.
Cuando un director te dice "a foro" significa que te tienes que mover del
centro hacia ese telón del fondo. Lateral derecho, que es derecho a la
vista del público. Lateral izquierdo, al revés que el derecho.

Orientación. Es el frente hacia donde los bailarines orientan sus cuerpos,


guiándose por el frente de sus caderas. La figura se puede orientar de
acuerdo a un cuadrado imaginario que rodea al bailarín, se dice que está
abierto cuando está dando todo su frente al público, cerrado cuando está
completamente de espaldas, de perfil cuando voltea hacia la derecha o
hacia la izquierda y a la vez, los cuadrados secundarios que forman esas
divisiones se vuelven a dividir y se forman las diagonales, marcando ¾ de
un lado y del otro.
Tamaño. Se utiliza para definir la amplitud de un movimiento o de una
figura en el espacio.

Foco. Pareciera que no, pero es importantísimo que en un diseño


coreográfico los bailarines dirijan su mirada hacia un mismo punto o un
punto previamente estudiado por el director, para que cree armonía.

Trayectoria. Se entiende como tales a las líneas descritas por cualquier


parte del cuerpo en el escenario, así como a las trayectorias que forman
los cuerpos en movimiento uno respecto a otro.

Niveles Espaciales. Ya estudiamos los puntos de ubicación del escenario y


las direcciones del cuerpo en él, pero falta explicar los niveles que dividen
el área donde el bailarín realiza el movimiento. Existen varias maneras de
clasificar los niveles espaciales esta es una de ellas: movimientos en el
suelo, como arrastrarse, acostarse, o para el raqs sharqi el suelo turco;
movimientos medios, como estar hincado, hacer arcos, etc; movimientos
de la posición en planta, la mayoría en el raqs sharqi; movimientos altos,
aquellos que se realizan a media punta y movimientos aéreos, como
saltos. O, para resumir, movimientos bajos, medios y altos.

Elementos del diseño coreográfico.

Desplazamientos. Sirven para entrar o salir del escenario y para concretar


ubicaciones y formas. Los desplazamientos deben ser claros en su
desarrollo.
Las líneas como desplazamientos o recorridos. Diagonales, horizontales y
verticales. Las líneas más dinámicas son las diagonales, en especial las que
se acercan al proscenio, por recorrer todo el espacio, posteriormente en
fuerza le siguen las que van del foro al frente y las menos dinámicas son
las horizontales.

Formaciones. El diseño grupal es una parte fundamental en la producción


coreográfica; según se agrupen los bailarines en el espacio escénico se
producirá determinado efecto en el espectador. El sentido o efecto que se
quiere comunicar está dado en cierta medida por la manera en que se
presenten las formaciones y las formas coreográficas.
Tipos de coreografía

Dependiendo del numero de integrantes, el uso del espacio, la música o la


referencia de creación, la coreografía puede clasificarse de diversas
formas.

 Coreografía grupal: ésta es la danza más usada en todo el mundo.


Estas se construyen por el coreógrafo quien corrige los movimientos
que se actuaran, para ser una coreografía grupal tiene que haber de 2
personas en adelante, o una persona que haga bailar al público.
 Coreografía expresiva: es aquella en la que recurren expresiones
interjectivas y diversas manifestaciones de la danza.
 Coreografía distributiva: está marcada por una división. Mientras que
las otras personas bailan, el principal hace actos pero vuelve a recurrir
a ellos, se pueden dividir entre las personas por ejemplo: la principal
danza igual que cinco personas colocadas atrás, mientras que dos al
lado del principal danzan igual pero diferente a los otros.
 Coreografía principal: es un solo baile realizado por solo una persona
en concreto
 Coreografía folclórica: ésta es la más usada entre los pueblos rurales
en la que destacan los bailes o danzas culturales sembrada en un país.
Ésta la usan más los países para destacar la cultura entre las personas y
dar conciencia al pueblo y entretenerlos.
 Coreografía histórica: es aquella en la que se reproduce un
acontecimiento histórico o de gran importancia.
 Coreografía simétrica: en las que los movimientos siguen un equilibrio
de simetria entre dos partes del cuerpo o del espacio.
 Coreografía asimétrica: es aquella en la que sus movimientos se
realizan teniendo en cuenta la simetría para desequilibrarla..
 Coreografía del espacio parcial: La que ocupa solo una parte del
escenario.
 Coreografía individual, es cuando un bailarín/actor/performer se
marca un solo.
Para hacer una coreografía se puede plantear de esta manera: se necesita
hacer una planigrafia, consistente en plasmar los movimientos de los
artistas en un papel; la planigrafia normalmente la hace el coreógrafo, ya
que con este material puede dirigir a un grupo grande de personas en el
escenario.
Rudolph Laban

La danza moderna y contemporánea utiliza algunas herramientas


conceptuales que le permiten generar movimiento. Esto se logra a partir
de la exploración de algunos de los componentes básicos de lo
coreográfico como son el cuerpo, el espacio y el tiempo, desde una
perspectiva abstracta, sin necesidad de acudir a temas, imágenes o
fuentes de inspiración externas a la danza misma.

Ahora bien, para improvisar de esta manera en la búsqueda de


movimiento, imagina que componer danza es como ensamblar un
rompecabezas. Se usan diferentes fichas y se disponen juntas para crear
una unidad orgánica.

Hablemos de esas fichas. Podemos improvisar para crearlas, explorando


las tres categorías principales que mencioné arriba:

EL CUERPO: las fichas serían movimientos de las articulaciones (ejemplo:


rodillas, caderas, codos…), movimientos de los seis segmentos principales
del cuerpo (piernas, brazos, tronco, cabeza…), movimientos de partes de
esos segmentos principales (ejemplo: antebrazos, pies, manos…),
movimientos de todo el cuerpo (el centro del cuerpo debe desplazarse en
el espacio), movimientos que crean contacto entre superficies de partes
del cuerpo o con otras cosas (un/a compañero/a, un objeto, el piso…),
movimientos que implican colocar el peso del cuerpo en otras partes que
no sean los pies (sobre los hombros, en la espalda, en los antebrazos…), y
por supuesto, otras posibilidades que tu inventes y que impliquen partes
del cuerpo.

El ESPACIO: hay dos maneras posibles de pensar el espacio.

1. Espacio kinesférico: rodea el cuerpo hasta los límites que pueden


alcanzar nuestras extremidades y viaja con nosotros a través del espacio
escénico. Para bailar con todo el cuerpo pensando en el espacio
kinesférico es necesario desplazar el centro del cuerpo. También podemos
mover partes de nuestro cuerpo al interior de este espacio sin
necesariamente desplazar el centro. Las ‘fichas’ kinesféricas para un
rompecabezas coreográfico son consideradas como movimientos en el
lugar (es decir que no viajan más de lo que uno se desplaza cuando cambia
el peso de un apoyo a otro).

Laban definió 27 direcciones principales hacia las cuales podemos


movernos al interior de la kinesfera:

1: Hacia abajo

2: Hacia arriba

3, 4 y 5: hacia la izquierda bajando, hacia la izquierda manteniendo el nivel


o hacia la izquierda subiendo (algunos lo llaman nivel bajo, nivel medio,
nivel alto).

6, 7 y 8: hacia la derecha bajando, hacia la derecha manteniendo el nivel o


hacia la derecha subiendo.

9, 10, y 11: hacia atrás bajando, hacia atrás manteniendo el nivel o hacia
atrás subiendo.

12, 13, y 14: hacia adelante bajando, hacia adelante manteniendo el nivel
o hacia adelante subiendo.

15, 16, y 17: hacia la diagonal izquierda de atrás, bajando, manteniendo el


nivel o subiendo.

18, 19, y 20: hacia la diagonal izquierda de adelante, bajando,


manteniendo el nivel o subiendo.

21, 22, y 23: hacia la diagonal derecha de atrás, bajando, manteniendo el


nivel o subiendo.

24, 25, y 26: hacia la diagonal derecha de adelante, bajando, manteniendo


el nivel o subiendo.
27: Hacia el centro de la kinesfera (como el centro del cuerpo coincide
con el centro de la kinesfera, no se puede mover hacia él; sin embargo,
partes del cuerpo o sus extremidades sí pueden hacerlo).

2. Espacio escénico: es el espacio arquitectónico o geográfico definido


para la danza (puede ser un escenario, un estudio, el salón de danza, un
parque, etc.)

Laban divide el espacio escénico en 9 zonas principales que podemos


ocupar:

1: El centro del escenario.

2, 3, 4, and 5: Las cuatro esquinas (izquierda atrás y adelante, derecha


atrás y adelante).

6, 7, 8, and 9: Las cuatro zonas centradas restantes (atrás, adelante,


izquierda y derecha).

Podemos ocupar todas estas zonas del espacio escénico (y también


espacios entre ellas, si quieres) y para ir de una zona a otra creamos
desplazamientos (los desplazamientos serán las ‘fichas’ del rompecabezas
con las cuales lograremos ocupar diferentes zonas). Pueden ser en línea
recta (hacia las ocho direcciones básicas: atrás, adelante, izquierda,
derecha o una de las cuatro diagonales), pueden ser circulares (con
sentido hacia la derecha o hacia la izquierda) o combinando ambos
patrones. Estas formas mencionadas se refieren a las planimetrías
dibujadas con los desplazamientos y no a lo que hace el cuerpo mientras
se desplaza.

Otras formas de movimiento, importantes para lo coreográfico:


- Giros: Cuando cambiamos la relación de orientación frontal entre
nuestro espacio kinesférico y el espacio escénico, obtenemos los giros.
Podemos girar hacia la derecha o la izquierda, con todo tipo de grados
diferentes (por ejemplo medio giro, 3/4 de giro, 1/8 de giro, 3 giros, etc…),
en los tres niveles (bajo, medio o alto), apoyándonos sobre diferentes
partes del cuerpo, alrededor de los tres ejes principales (vertical,
horizontal y sagital), etc.

- Saltos: Si saltamos sobre las piernas (o pies), podemos clasificar los saltos
en cinco formas básicas, como lo ha hecho tradicionalmente el ballet:

1. De una pierna a la otra.

2. De una pierna a la misma pierna (es decir saltar en una pierna).

3. De una pierna a dos piernas.

4. De dos piernas a una pierna.

5. De dos piernas a dos piernas.

Por supuesto, hay muchas formas de exploración para encontrar


diferentes tipos de salto, si pensamos en los diferentes apoyos que
podemos usar para salir y luego caer. Piensa por ejemplo en saltos que
comienzan y terminan, desde y hacia, otras partes del cuerpo que no sean
las piernas (o pies). Verás cuántas ‘fichas’ encontrarás para tu
rompecabezas coreográfico.

EL TIEMPO

El tiempo es una característica que afecta tanto a los movimientos que


creamos pensando en el CUERPO como los que creamos pensando en el
ESPACIO. Les da su duración, nos permite bailar con ritmo y nos ofrece la
posibilidad de construir fraseos coreográficos con sentidos rítmicos o
musicales.

Antes de hablar sobre cómo aplicar variaciones de tiempo a nuestros


movimientos, es importante estar seguros de que comprendemos algunos
de los términos que tienen que ver con la categoría del tiempo en la
danza.

- La pulsación: es la unidad de medida y referencia para contar el tiempo.


Es aquello que enumeramos cuando definimos la duración de un
movimiento o fraseo. Establecemos la frecuencia de la pulsación de
acuerdo con las necesidades de la danza que estamos creando. Esta
frecuencia (o pulsaciones por minuto: ppm) se expresa en números y se
llama el tempo.

- El tempo (o ppm: pulsaciones por minuto; en inglés bpm): este es un


término perteneciente al lenguaje rítmico universal y es utilizado en danza
con el mismo significado. Expresa la frecuencia de la pulsación, en
números. Por ejemplo Tempo=60 ó Tempo =120. Esto significa que hay 60
o 120 pulsaciones en un minuto, respectivamente (mientras más elevado
el número, más veloz será el tempo). El tempo se mide con una
herramienta llamada el metrónomo.

- La duración: es la cantidad de pulsaciones que abarca un movimiento


(por ejemplo un paso adelante en tres pulsaciones, o ‘tiempos’, como
también se suele decir). Cuando bailamos rítmicamente, la duración
depende de las pulsaciones y su tempo. Cuando bailamos sin ritmo,
podemos medir la duración en segundos (las unidades cronológicas), que
es lo mismo que tener un Tempo = 60.

- Frasear (o componer frases coreográficas): disponer movimientos en


forma de fragmentos coreográficos que tienen una unidad y una
sensación de inicio y final.

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