Está en la página 1de 2

TEMA IV

EL PAPEL SOCIAL DE LA MUJER

( Contrastar la situación de hecho de la mujer en el Islam y la teoría de


Averroes).

Según Platón, para que en una sociedad las clases se mantengan con
pureza, sin mezcla alguna, cada clase social debe procrear sólo con aquellas
mujeres que pertenezcan a la suya propia y que hayan sido educadas
iguales que ellos.
Así se plantea un problema que requiere una investigación: Si las
mujeres tienen naturalezas que se asemejan a las de cada una de las clases
de los ciudadanos o si es distinta de la de los varones.
Si fuera por igual, la mujeres podrían gozar de la misma situación
que los varones, y por tanto, ser guardianes, jefes, filósofos. Etc.
Si no es así, la mujer sólo podría realizar actividades que por lo
general no realiza el varón como son el cuidado doméstico, procreación...
etc.
Sabemos que la mujer como ser semejante al hombre debe participar
en el fin último de éste, aunque haya más o menos diferencias; es decir, el
hombre es en una actividades más eficaz que la mujer. Estro no quiere decir
que la mujer no llegue a se más idónea en algunas ocupaciones que el
hombre, como en la Música, que resulta mejor cuando las melodías son
compuestas por el hombre e interpretadas por la mujer ( esto es una
costumbre islámica que estaba en uso en época de Averroes y que hoy en
día aún sigue conservándose ).
Sin embargo, en una sociedad en la que, como hemos demostrado, la
naturaleza del hombre y mujer es igual, deben desempeñar ambos las
mismas labores menos cuando las mujeres son más débiles, aunque está
demostrado que en algunas cosas las mujeres son más hábiles que los
hombres: tejer, coser... Así como para organizarse y en el arte de la guerra,
como se ha demostrado en la " Ciudad de las mujeres " y entre los
habitantes del desierto.
Las mujeres que han sido bien educadas pueden llegar a altos cargos,
como jefes filósofos, gobernantes y sumos sacerdotes, aunque algunas
religiones lo prohiben.
Las sociedades islámicas, sin embargo, desconocen las habilidades
de las mujeres ya que sólo se las utiliza para la procreación y se las destina
al servicio de los maridos y al cuidado, educación y enseñanza de los hijos.
Como no se las prepara para ninguna virtud humana, se asemejan a las
plantas y resultan una carga para los hombres, lo que hace que sean unas
sociedades pobres y en las que llegan a duplicar en número a los hombres.
Además no contribuyen en ninguna actividad excepto en tejer e hilar, cosa
que realizan la mayoría de las veces cuando necesitan subsistir. ( Por
algunos textos andalusíes parece que las mujeres del Al-Andalus tenían una
independencia mayor que su congéneres del Magreb).
Siendo así las cosas y dado que las mujeres comparten con los
hombres las actividades, conviene elegirlas con las mismas condiciones
que ellos y educarlas igual que a los hombres, en Música y en Gimnasia.
En cuanto a la reproducción no se les debe permitir cohabitar con
quien quieran sino que ha de ser el Estado el que elija y dirija la formación
de las parejas. No se les debe permitir el coito cuando gusten, sino para la
reproducción de la especie; por lo que ha de realizarse en el tiempo que
indique el Estado y sea propio para ello y el número de parejas que
considere el Estado adecuado para que no haya un aumento excesivo de
población.

También podría gustarte