Está en la página 1de 7

TECNOLÓGICO NACIONAL DE MÉXICO.

CAMPUS: LOS REYES

CONDICIONES DE CONFORT DE UN SISTEMA DE AIRE


ACONDICIONADO AUTOMOTRIZ

UNIDAD IV

SISTEMAS DE AIRE ACONDICIONADO AUTOMOTRIZ.

PROFESOR: PROFESOR: M.C. HUERTA OROZCO JULIO CESAR

INTEGRANTES:
MADRIGAL MORALES JACQUELINE

PAREDES MURILLO ISAÍAS

TORRES VIVEROS FERNANDO

AGUILAR SÁNCHEZ JORGE LUIS

Los Reyes de Salgado Mich a 25 de noviembre del 2019

MATRIX
[NOMBRE DE LA EMPRESA]
INTRODUCCIÓN
Durante los inicios de la aparición del automóvil, tanto la calefacción como el
aire acondicionado en la cabina no tenían lugar pues en aquellos tiempos los
coches eran abiertos e incluían una capota como techo para protegerlos de la
lluvia, por lo que nadie perdía el tiempo pensando en un sistema de
climatización para el habitáculo automotriz. Al ir pasando los años, las
inclemencias del tiempo dieron origen a la idea de climatizar el interior del
automóvil. El primer intento de ello se produjo en el rally de Montecarlo en los
años 20 cuando uno de los participantes al tener tanto frio abrió un boquete en
el salpicadero de su coche para beneficiarse del calor que desprendía el motor.
Desde ese momento surgió la calefacción, la cual aprovecha el calor generado
por el motor para calentar la cabina en época de invierno.
A partir de 1908 cuando comenzó la producción de coches con la cabina
cerrada se presentaba este desafío, se hicieron algunos ajustes como levantar
el parabrisas o remover las cortinas laterales. La apertura lograda en el cristal
era de apenas unos 13 mm, lo que permitía que la cabina se mantuviera
presurizada y a la vez se minimizara que se colara el aire caliente que provenía
del motor. Adicional a esto, las ventanas podían ser subidas o bajadas para
obtener el flujo de aire deseado. Algunos coches disponían de algunas
compuertas de ventilación debajo del panel de instrumentos que permitían la
circulación del aire, pero estos sistemas eran rudimentarios y no ofrecían
protección para que el hollín, el polvo, el polen o los insectos entrasen al
interior del habitáculo, por lo que la calidad de aire que entraba por allí era muy
pobre.
Nace el aire acondicionado automotriz
A comienzos de los años 30 algunas firmas comerciales comenzaron a ofrecer
un sistema de aire acondicionado para vehículos, pero aquellos estaban
orientados solo a camionetas de pasajeros, limosinas o autos de lujo. Para ese
mismo año la firma C&C Kelvinator equipó un Cadillac con un sistema que era
propulsado por un motor a gasolina de 1.1 kw. Dos conductos a ambos lados
llevaban el aire frio a un abanico que circulaba el aire a través del
compartimiento de la cabina y se le colocó en la parte trasera del auto.
Para 1932 el Laboratorio de Estudios y Desarrollo de General Motors concibió
la idea del vapor comprimido mediante el refrigerante R-12, para ello se
estableció que la capacidad de enfriamiento no debía exceder 1 tonelada
(unos 3.5 kw). Este estimado es la mitad de la capacidad de un sistema
moderno hoy en día, dicha decisión se tomó en torno a que el enfriamiento se
basaba en la recirculación del aire y no en la ventilación externa, además, la
temperatura resultante no debía exceder los 5.6 grados centígrados ya que el
ocupante podía tener un shock termal al salir del auto y experimentar la
temperatura externa.
El primer auto con un sistema de refrigeración como el de la actualidad fue el
Packard de 1939 en el que una espiral enfriadora, que no era más que un
evaporador muy largo envolvía toda la cabina, y cuyo sistema de control era
el interruptor de un ventilador. Estos primeros sistemas de aire acondicionado
tenían una gran desventaja. No existía embrague en el compresor, por lo que
siempre estaba encendido mientras el auto estaba en funcionamiento, y para
apagar el sistema se tenía que detener el vehículo y apagarlo, salir de él, abrir
el capó y quitar la correa del compresor. Para ponerlo a funcionar se invertía
el procedimiento. No fue sino hasta después de la Segunda Guerra Mundial
que Cadillac promocionó una nueva característica: creó los controles para el
aire acondicionado. Estos controles se ubicaron en el asiento trasero para
apagar o encender el sistema, pero, aun así, esto resultó ser mucho mejor que
apagar el coche y desconectar la correa del compresor.
Es digno de mencionar que, aunque el sistema de aire acondicionado seguía
existiendo por décadas después de aquel mejoramiento, no era considerado
como algo esencial en el coche, de hecho, solo se ofrecía como una opción a
elegir por el cliente al adquirir un auto nuevo. El aumento de unidades de aire
acondicionado instalados entre los años 70 y 80 se debió a que a finales de
los 70, en los Estados Unidos muchas personas comenzaron a mudarse a
lugares más calurosos, por ello, al comprar un automóvil nuevo deseaban que
estos estuviesen equipados con todas las opciones disponibles, entre ellos el
aire acondicionado, por lo que finalmente se convirtió en un accesorio que
comenzó a venir de fábrica en el vehículo.
DESARROLLO
El confort se trata de aquello que brinda comodidades y genera bienestar al
usuario. Describe un delicado equilibrio de sensaciones placenteras del cuerpo
producidas por su entorno. Por ello la calefacción el aire acondicionado se
encargan de crear una atmósfera confortable para las personas.
El comportamiento fisiológico del cuerpo humano demanda que la cantidad de
calor interno producido por el cuerpo, sea igual a la cantidad de calor externo
perdido. El cuerpo humano tiene un sistema de control de temperatura para
regular sus pérdidas que ocurren por convección, radiación y evaporación. La
proporción relativa de cada una depende de la cantidad de calor generado por
el cuerpo, que a su vez depende de la actividad; también depende de la ropa
y de la temperatura condiciones del aire.
El confort proviene de:
• La temperatura: Una correcta calefacción está entre 20 a 23 ºC y refrigeración
entre 23 a 25 ºC. Si no hubiera control de temperatura, la vida seria imposible.
Por esto, el control artificial de la temperatura dentro de un espacio cerrado
fue el primer intento para lograr la “comodidad humana”.

• La humedad: Se debe mantener una humedad en el aire alrededor del 40 a


60%. Al calentarse el aire, la humedad disminuye, colocando humectadores
(agua pulverizada o mantas humedecidas) a la salida de la batería del calor.

• La velocidad del aire: el aire debe ser distribuido y circulado uniformemente


por toda la habitación acondicionada, cuanto mejor sea su sistema de
distribución de aire, mejor acondicionada está la habitación.

• La limpieza del aire: respiramos 15 Kg, de aire diarios. El aire está


contaminado con impurezas, tales como polvo, y debe filtrarse colocando
filtros que permiten el paso de partículas de escasas micras de diámetro. En
los hospitales se agrega lámparas germicidas.

• La pureza (ventilación): Los olores y el humo que se acumulan en la mayoría


de las habitaciones deben diluirse por la aportación de aire exterior. Se puede
acondicionar (enfriar, calentar, filtrar) el aire exterior introducido para la
ventilación.

• La actividad metabólica de los ocupantes: a actividad metabólica de los


ocupantes (establecida para el máximo de ocupantes).
Es preciso hacer un balance energético entre las ganancias de calor y las
pérdidas, debidas a la ventilación, la apertura de ventanillas y puertas o a las
temperaturas extremas de las estaciones frías, para diseñar
convenientemente los sistemas de climatización

La temperatura ideal

La sensación térmica ideal en humanos varía entre 21º y 26º grados


centígrados. Cuando un auto está estacionado y expuesto al sol, puede
alcanzar una temperatura de 70º a 85º grados. En esas condiciones, lo
recomendable es abrir las puertas, prender el automóvil y salir. Debemos
esperar unos minutos hasta que los gases nocivos salgan del interior; luego
se sugiere posicionar el selector de ventilación a su máximo nivel con dirección
al frente y hacia los pies, no hacia el rostro, y luego prender el aire
acondicionado. Se aconseja rodar con el vehículo por unos minutos en estas
condiciones y con los vidrios abajo, hasta que el aire caliente haya circulado y
salido totalmente.

Cuidado con los gases que se generan


Es muy importante saber que un vehículo en la sombra acumula 400-800mg
de benceno, si un auto está expuesto al sol, con sólo 16 grados centígrados,
acumula más de 4.000 mg de benceno y eso ya es más de 40 veces los niveles
recomendados para la salud. Ahora, imaginemos un auto que está en una
región caliente donde la temperatura es de 30 grados o más, en esas
condiciones la temperatura dentro del auto cerrado, fácilmente supera el doble
de lo que marcaría el termómetro en el exterior.
El benceno es una toxina muy peligrosa para cualquier ser humano, más aún
para niños pequeños o mascotas que transportemos en el auto. La exposición
al benceno podría aumentar el riesgo de padecer leucemia y otras
enfermedades de la sangre.

Hay un botón importante en el panel que la mayoría no entiende su función, ni


le presta mucha atención, y es el de recirculación del aire. Este impide que el
aire de afuera entre al auto. Lo accionamos cuando pasamos por lugares con
malos olores o también cuando estamos atrás de un camión que arroja mucho
humo. Pero dejar este sistema prendido todo el tiempo no es bueno. Pues el
aire se va tornando viciado y con poco oxígeno. Use este sistema sólo cuando
sea estrictamente necesario. También debería ser usado en los primeros
momentos de encendido, hasta que alcance un nivel agradable para el
pasajero, en ese momento debe ser apagado para permitir la entrada del aire
externo.
¿Por qué hay malos olores al prender el aire acondicionado?

El sistema puede acumular hongos en la caja de aire y cañerías,


principalmente en períodos de lluvia, debido al agua condensada en esos
espacios o al taponamiento de respiración. Esta puede ser la causa de los
malos olores. Para evitar esto, en el caso de que haya taponamiento es
recomendable verificar el funcionamiento de la respiración de la caja de aire
durante las revisiones del vehículo. En los climas fríos, donde no es necesario
el uso de aire acondicionado, se aconseja prender el sistema de enfriamiento
de 5 a 10 minutos por semana. Cuando no se usa el aire, hay muchas
posibilidades de perder el gas refrigerante, lo que usualmente pasa en
vehículos usados con varios años de antigüedad.
Referencias

Varios. Aire acondicionado del automóvil. Centro Nacional de Automoción.


2000, Valladolid. Varios. Fichas técnicas de vehículos, Centro de Investigación
y Experimentación. CESVIMAP. 2001, Avila. Sagan, C. Miles de millones.
Editorial Suma de letras, S.L. 2001, Madrid.

https://es.scribd.com/doc/114239153/Condiciones-de-comodidad-del-aire-
acondicionado

https://www.dspace.espol.edu.ec/bitstream/123456789/17105/1/ProyectoCar
vajal.pdf

También podría gustarte