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Guía de Diseño.
Como Contraparte Técnica por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo han participado los
siguientes profesionales:
Director del Estudio Horacio Asserella C., Ing. Ejec, Div. Des. Urbano.
Equipo Técnico María T. Hortal S., Arquitecto, Div. Des. Urbano.
Renán Retamal S., Ing. Civil, Div. Des. Urbano.
Jaime Téllez T., Ing. Civil, SEREMI Metropolitana.
Arturo Muñoz F., Ing. Civil, SERVIU Metropolitano.
Nº 3 /
VISTO: Lo dispuesto en el D.L. Nº1.305, de 1976, el D.F.L. Nº458, (V. y U.) de 1976, el Oficio Ordinario Nº0031, de
14 de Enero de 1997 de la División de Desarrollo Urbano del Ministerio de Vivienda y Urbanismo y las facultades
que me otorga el Nº8 del artículo 32 de la Constitución Política, de la República de Chile,
DECRETO:
ARTICULO UNICO: Apruébase, con carácter indicativo, el volumen denominado “Técnicas Alternativas para
Soluciones de Aguas Lluvias en Sectores Urbanos. Guía de Diseño.”, un ejemplar del cual se acompaña y se
entenderá forma parte integrante del presente decreto.
Las técnicas Alternativas para Soluciones de Aguas Lluvias en Sectores Urbanos del texto que se aprueba,
deberán tenerse presente en tal carácter y, si procediere, en todo este tipo de obras que se contraten, aprueben,
supervisen o ejecuten por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, los Servicios de Vivienda y Urbanización, las
Municipalidades y, en general, por todo organismo público o privado que desarrolle algunas de dichas actuaciones.
DISTRIBUCIÓN
Contraloría
Diario Oficial
Gabinete Ministro
Subsecretaría
Divisiones MINVU
Secretarías Ministeriales (TODAS LAS REGIONES)
SERVIU (TODAS LAS REGIONES)
Oficina de Decretos
Oficina de Partes
CONTENIDO
Pág.
Capítulo 1. INTRODUCCIÓN ................................................................................1
ÍNDICE DE ANEXOS................................................................................................597
Anexo 1. Referencias Legales..................................................................................599
Anexo 2 Tipos de urbanización ..............................................................................607
Anexo 3. Modelos hidrológicos computacionales ...................................................617
Anexo 4. Antecedentes hidrogeológicos en Chile ...................................................625
Anexo 5. Coeficiente de rugosidad hidráulica y unidades.......................................631
Anexo 6. Glosario ....................................................................................................635
Anexo 7. Referencias ...............................................................................................647
al cauce. Así ocurre en varias ciudades como es el caso de Arica con el río San
José, San Fernando con el Tinguiririca y el Antivero, Santiago con el Mapocho,
Punta Arenas con el río las Minas, e incluso Antofagasta con la quebrada La
Negra. En estas ciudades existen situaciones relativamente recientes de
inundaciones con graves consecuencias. Desde el punto de vista urbano una
alternativa de solución global frente a situaciones de este tipo es la ocupación
restringida de las zonas inundables. Esto resulta muy difícil de materializar en
ciudades ya desarrolladas. Las medidas alternativas y complementarias que se
proponen en este estudio resultan ineficientes para enfrentar los problemas
generados por este tipo de inundaciones.
Existen otros cauces naturales que forman la red de drenaje de los sectores
urbanos propiamente tales y que provocan inundaciones. Cuando esto ocurre
normalmente se debe a que la urbanización ha cegado muchos de estos cauces
eliminando la red de drenaje natural sin reemplazarla por otra alternativa. A
ello debe agregarse el incremento de la escorrentía urbana sobre esa misma red
provocada por la impermeabilización del terreno. En casos de terrenos con
pendientes importantes los problemas de inundación se agravan por la erosión
del suelo, el arrastre de gran cantidad de material erosionado y su posterior
sedimentación en los sectores planos. Es común que se produzcan en algunas
ciudades costeras de la zona norte y central como Antofagasta, Tocopilla,
Valparaíso, en las cuales las pendientes son pronunciadas, con flujos de altas
velocidades, corrientes de barro debido a suelos erosionables las cuales derivan
en inundaciones ya que las redes de drenaje natural se encuentran obstruidas
por el tejido urbano. Los problemas provocadas en estos casos pueden ser muy
complejos y de graves consecuencias. Las soluciones debieran encaminarse a
la mantención en condiciones despejadas de las redes de drenaje naturales. Sin
embargo en situaciones consolidadas esto puede ser difícil. Algunas de las
obras alternativas podrían emplearse para la mantención en condiciones de
operación de este tipo de redes de drenaje. Pueden ser útiles los estanques y las
lagunas de retención si las pendientes del terreno no son importantes, así como
los canales de drenaje urbano.
Las inundaciones provocadas por la elevación del nivel del agua subterránea
están ligadas a zonas bajas de las ciudades, con acuíferos libres a poca
profundidad, en general en terrenos planos, en los cuales las inundaciones están
asociadas a períodos prolongados de precipitaciones. Esos terrenos tienen un
drenaje pobre cuyos efectos se ven además incrementados por la urbanización
de las zonas aguas arriba, que genera una mayor escorrentía tanto en volumen
como en gasto máximo. Estas zonas requerirían un sistema especial de drenaje
para deprimir el nivel del agua subterránea. Situaciones de este tipo pueden
encontrarse en el área poniente de Santiago, partes de la ciudad de Concepción,
sectores de Valdivia, y otras ciudades con zonas bajas que coinciden con los
sectores de descarga de los acuíferos.
En las ciudades de la zona central de Chile es común observar la coexistencia
de canales de riego en zonas urbanizadas. Estos canales están diseñados para
repartir agua sobre los terrenos agrícolas y se complementan con una red de
drenaje independiente para evacuar los excesos o derrames. Una vez que se
urbaniza es común observar que la red de drenaje natural se elimina y la red de
riego se pretende emplear para la evacuación de las aguas lluvias. Esto
inevitablemente provoca inundaciones en los terrenos bajos que antes se
regaban. Debido a la imposibilidad de eliminar totalmente estos canales de
riego en muchas zonas urbanas, por lo menos en las etapas iniciales de la
urbanización, sería conveniente adoptar las medidas necesarias para que no
sean empleados como red de drenaje, y además mantener la red de drenaje de
los terrenos abastecidos por estos canales. Las redes naturales de drenaje, así
como muchos de los canales artificiales que conduzcan aguas limpias, pueden
incorporarse de manera más amistosa al sistema urbano si se privilegian las
áreas verdes en los sectores bajos y se destinan espacios más generosos para
mantener los cauces y canales, con diseños mejor adaptados a las nuevas
condiciones urbanas.
1.4. RESPONSABILIDADES
La aplicación de las materias contenidas en esta Guía a casos concretos con
fines de diseño no reemplaza el conocimiento ni la experiencia del especialista,
quien debe conciliar los términos presentados en este volumen con las
particularidades del problema a resolver, de acuerdo con su criterio profesional.
El proyectista será el exclusivo responsable de su trabajo, no pudiendo eximirse
de esta responsabilidad aduciendo el uso literal de las recomendaciones
expuestas en este texto.
La regulación de los caudales cerca de sus lugares de origen permite reducir los
elementos de regulación en las redes mismas o en los cuerpos receptores.
Figura 2.4.1: Efecto sobre los hidrogramas de la tormenta de cada uno de los
enfoques conceptuales para la disposición local. 1.- Parte que sigue hacia aguas
abajo, 2.- Parte que es interceptada localmente.
Soluciones tipo A. En este caso sólo los caudales máximos son interceptados
para ser tratados localmente, mientras los caudales menores son trasladados
directamente hacia aguas abajo. Para ello el sistema de drenaje es diseñado
para transportar flujos hasta una cierta capacidad y los excesos son retirados
localmente fuera de la red para disponer de ellos en el lugar. La ventaja de este
esquema es la reducción del sistema de transporte o de los colectores urbanos
hacia aguas abajo. Por otra parte, la porción que es evacuada por la red es la
normalmente más contaminada, mientras la menos contaminada es retirada.
Soluciones tipo B. La idea de este tipo de soluciones es retirar de la red de
drenaje la primera fracción de la tormenta y disponer de ella localmente. Esto
puede lograrse conduciendo toda la crecida generada por las aguas lluvias hacia
una obra de intercepción hasta que se completa un determinado volumen, a
partir del cual el resto pasa directamente hacia aguas abajo. La ventaja de este
tipo de soluciones es que la parte inicial de la crecida es normalmente la que
contiene mayor cantidad de carga contaminante, producto de la limpieza de las
superficies, y se le puede dar un tratamiento local por infiltración, percolación,
o sedimentación. El volumen de intercepción puede ser suficientemente grande
como para retirar muchas, pero no necesariamente todas, las crecidas que se
generan en un sector. El porcentaje de eventos lluviosos que son retirados
totalmente dependen del volumen de almacenamiento de la obra y cómo este
2. DRENAJE URBANO DE AGUAS LLUVIAS
Soluciones tipo C. En este tipo de soluciones las crecidas son retiradas del
sistema de drenaje hasta un cierto caudal el cual si es excedido pasa hacia aguas
abajo. Esto se logra retirando de la crecida un gasto mediante un dispositivo de
capacidad limitada ( como una tubería de diámetro restringido o similar),
cuando se supera la capacidad del dispositivo, o el volumen del elemento de
intercepción, los caudales superiores pasan directamente a la red. Las ventajas
de este tipo de soluciones son prácticamente idénticas a las mencionadas para el
caso B precedente. Estas soluciones también interceptan completamente las
tormentas menores, pero el porcentaje de eventos totalmente interceptados no
depende sólo del volumen de los eventos sino también de su intensidad. Como
resultado de ello no todas las tormentas pequeñas son completamente
interceptadas, si sus intensidades son importantes, lo que ocurre con tormentas
de corta duración pero intensas.
2.5. OPORTUNIDADES
DE COLABORACIÓN
Las obras alternativas y complementarias de sistemas de aguas lluvias urbanas
requieren enfocar el ordenamiento del sector considerando las necesidades de
espacio y la organización del terreno para la ubicación de estas obras y su
operación posterior. Al justificar estas obras pueden considerarse sus usos
alternativos como la ordenación del paisaje, recreación o manejo de las aguas
lluvias como recurso. En muchas oportunidades el público en general visualiza
estos usos agregados como más importantes que los objetivos que estas obras
persiguen desde el punto de vista de las aguas lluvias. Estos usos alternativos si
son previstos desde el inicio, junto a las primeras etapas de la concepción de las
obras, pueden aportar interesantes oportunidades de cooperación para el
financiamiento de construcción y mantención. El urbanizador interesado en
estos desarrollos debe explorar las alternativas que se le presentan en cada caso
particular para aumentar las posibilidades de éxito de este tipo de alternativas y
minimizar las complicaciones que se presenten en la mantención y operación de
las obras. A continuación se mencionan algunas indicaciones generales que
pueden orientar la búsqueda de alternativas de colaboración.
Áreas verdes. La mayoría de las obras alternativas requieren disponer de
espacios público abiertos en los cuales se emplazan este tipo de soluciones. Así
ocurre con lagunas de detención, estanques de infiltración, estacionamientos y
similares. Debe entonces aprovecharse todas las oportunidades en que exista
interés por la formación de este tipo de espacios públicos para el desarrollo de
soluciones alternativas en ellos, agregando este tipo de soluciones en zonas en
las cuales el espacio haya ya sido destinado para parques, lugares comunes,
estacionamientos y similares. Esto puede ser de interés para Municipalidades,
instituciones públicas y privadas, campus universitarios, clubes deportivos,
grandes almacenes, zonas de recreo en general, tanto públicas como privadas.
Recarga de acuíferos. La infiltración de aguas lluvias en el lugar en que ellas
se generan puede llegar a ser una excelente alternativa para la recarga de
acuíferos en zonas urbanas, lo que permite acumular agua que posteriormente
es empleada por empresas de abasteciendo de agua potable o industrial. Para la
construcción de este tipo de soluciones sería interesante buscar como socios en
la construcción y mantención posterior de las obras de infiltración a los
posteriores usuarios del agua embalsada en los acuíferos. Este tipo de empresas
debieran considerar las obras alternativas de infiltración como propias
utilizando tanto el agua disponible en las tormenta como el espacio urbano para
el desarrollo de las obras como una colaboración en los objetivos de uso de los
acuíferos. Esta colaboración puede provenir de empresas de agua potable,
sanitarias, industriales, o instituciones del estado interesadas en la conservación
de los recursos subterráneos.
2. DRENAJE URBANO DE AGUAS LLUVIAS
Figura 3.1.1.1: Zonas climáticas en Chile continental. 1a.- Desierto árido, 1b.-
Árido altiplánico, 2.- Semiárido, 3.- Mediterráneo, 4a.- Templado húmedo, 4b.-
Templado húmedo oceánico, 5a.- Frío oceánico, 5b.- Frío patagónico.
Santiago Talca
450 450
400 400
350 350
300 300
250 250
200 200
m m
150 150
100 100
50 50
0 0
E F M A M J J A S O N D E F M A M J J A S O N D
Mes Mes
Concepción Valdivia
450 450
400 400
350 350
300 300
250 250
200 200
m m
150 150
100 100
50 50
0 0
E F M A M J J A S O N D E F M A M J J A S O N D
Mes Mes
d. Calidad de las aguas lluvias. Las aguas lluvias de sectores urbanos presentan una
polución relativamente importante. Descargarlas en los escurrimientos
superficiales o infiltrarlas en el suelo sin tomar precauciones puede contribuir a
la degradación del medio natural. En este acápite se analizan las fuentes que
producen los contaminantes y se dan algunas cifras del contenido de ellos en
las aguas lluvias. En Chile no existen mediciones de contaminantes de las
aguas lluvias en las ciudades o sectores urbanos, de manera que los valores
que se indican a continuación han sido obtenidos de estudios en ciudades
importantes en otros países y por lo tanto deben tomarse solo como referencia.
Es usual que la duración de diseño sea igual al tiempo de concentración del área
aportante, definido como el tiempo necesario para que la gota más alejada llegue a
la salida. Otros criterios, tienden a seleccionar duraciones de tormentas más o
menos largas, en el rango entre 24 horas y 48 horas, ya que es usual que las
crecidas importantes ocurran en temporales de duraciones significativas. Sin
embargo, en este caso, es necesario tener presente que implícitamente se está
incluyendo la probabilidad de ocurrencia de dicha tormenta, valor que se
desconoce.
En Chile hay muy pocos antecedentes sobre estudios de esta índole y en general la
red de estaciones no es lo suficientemente densa para poder abordarlos. Más aún,
3. MARCO GEOGRÁFICO
Obtención de las curvas IDF. Para determinar estas curvas se necesita contar
con registros continuos de lluvia en el lugar de interés y seleccionar la lluvia más
intensa de diferentes duraciones en cada año, para realizar un estudio de
frecuencia con cada una de las series así formadas. Es decir, se deben examinar
los hietogramas de cada una de las tormentas ocurridas en un año y de estos
hietogramas elegir la lluvia correspondiente a la hora más lluviosa, a las dos horas
más lluviosas, a las tres horas más lluviosas y así sucesivamente. Con estos
valores se forman series de la hora más lluviosa de cada año con registro, de las
dos horas más lluviosas, etc. Cada una de estas series se somete a un estudio de
frecuencia, asociando a cada serie un modelo probabilístico, o bien una frecuencia
empírica. Ello da como resultado una asignación de probabilidad a la lluvia
correspondiente a cada duración.
Curicó 0.12 0.19 0.29 0.40 0.52 0.59 0.68 0.72 0.82 1.0
Linares 0.12 0.19 0.29 0.40 0.52 0.59 0.68 0.72 0.82 1.0
Constitución 0.19 0.30 0.38 0.47 0.56 0.64 0.70 0.77 0.89 1.0
Concepción 0.19 0.30 0.38 0.47 0.56 0.64 0.70 0.77 0.89 1.0
Chillán 0.17 0.24 0.36 0.44 0.52 0.60 0.67 0.72 0.89 1.0
Temuco 0.19 0.31 0.47 0.58 0.65 0.71 0.79 0.82 0.91 1.0
Pto. Montt 0.16 0.23 0.34 0.46 0.54 0.61 0.67 0.73 0.86 1.0
Valdivia 0.16 0.23 0.34 0.46 0.54 0.61 0.67 0.73 0.86 1.0
Ancud** 0.19 0.31 0.47 0.59 0.66 0.78 0.82 0.86 0.91 1.0
Castro** 0.19 0.31 0.47 0.59 0.66 0.78 0.82 0.86 0.91 1.0
Pto. Cisnes** 0.19 0.31 0.47 0.59 0.66 0.78 0.82 0.86 0.91 1.0
Coyhaique** 0.19 0.31 0.47 0.59 0.66 0.78 0.82 0.86 0.91 1.0
Pto. Aysén** 0.19 0.31 0.47 0.59 0.66 0.78 0.82 0.86 0.91 1.0
Chile Chico** 0.19 0.31 0.47 0.59 0.66 0.78 0.82 0.86 0.91 1.0
Pta. Arenas** 0.19 0.31 0.47 0.59 0.66 0.78 0.82 0.86 0.91 1.0
Pto. Williams** 0.19 0.31 0.47 0.59 0.66 0.78 0.82 0.86 0.91 1.0
* No se dispone de información que permita proponer un valor de diseño. Lo más probable es
que las lluvias de 6 o más horas sean iguales a las de 24 horas. Para cada caso deberá
realizarse un análisis específico.
** Se han considerado los máximos estimados para la zona centro-sur
La información anterior puede utilizarse para estimar las curvas IDF en un lugar,
en base a la lluvia máxima diaria de acuerdo a la siguiente expresión:
En que :
PTt LLuvia con período de retorno de T años y duración t horas.
PD10 LLuvia máxima diaria (8 AM a 8 AM) de 10 años de período de
retorno.
CDt Coeficiente de duración para t horas ( entre 1 y 24 horas).
CFT Coeficiente de frecuencia para T años de período de retorno.
Pt50 = 11
, PD10 CDt CF 50 = 1,1 * 82,9 * CDt * 1,43 = 130,4CDt
Duración (horas) 1 2 4 6 8 10 12 14 18 24
Coef. de Duración 0,16 0,24 0,42 0,55 0,64 0,71 0,77 0,84 0,94 1,00
Precipitación (mm) 20,9 33,9 54,8 71,7 83,5 92,6 100,4 109,5 122,6 130,4
Intensidad (mm/hora) 20,9 16,9 13,7 12,0 10,4 9,3 8,4 7,8 6,8 5,4
donde t es la duración en minutos. Notar que para t = 60, es decir una hora, se
obtiene CD=1,00.
Siendo:
PTt Lluvia en mm de duración t minutos y T años de período de retorno.
T Período de retorno en años.
t Duración de la lluvia en minutos.
P6010 Precipitación de una hora y 10 años de periodo de retorno, en mm.
Esta descripción simplificada representa uno de los casos que puede darse y varía
notoriamente con los cambios de la lluvia en el tiempo y en el espacio y con las
condiciones del suelo y de la vegetación.
El método racional es ampliamente usado desde mediados del siglo XIX y tiene la
ventaja de ser aparentemente muy simple, ya que expresa que el caudal máximo
es proporcional a la lluvia caída en el área multiplicada por un coeficiente que se
denomina coeficiente de escurrimiento. Es apropiado para ser usado en áreas
pequeñas, preferentemente impermeables. Sus limitaciones principales se
relacionan con el hecho de suponer un coeficiente de escorrentía constante
independiente de las condiciones de humedad de la cuenca y la hipótesis de
igualar el período de retorno de la tormenta al de la crecida.
Los enfoques más simples, usan un procedimiento que tiene una pérdida inicial
que se resta a los primeros intervalos de lluvia y una pérdida constante o bien,
proporcional a la lluvia durante el resto de la tormenta. Los valores de pérdida
inicial y la proporción o constante se seleccionan de acuerdo a la experiencia del
proyectista o de acuerdo a lo que se haya podido observar o medir en situaciones
anteriores o similares. Valores máximos de infiltración para diferentes tipos de
situaciones y suelos se presentan en la mayoría de los textos de hidrología para
ingenieros.
CiA
Q= (3.1.2.5)
3,6
S1 = pendiente (%)
C = coeficiente de escorrentía
n = Coeficiente de rugosidad de Manning
CN = curva número, según S.C.S.
La tabulación siguiente muestra para cada tipo de superficie el área asignada a ella,
el coeficiente de escorrentía de acuerdo a la Tabla 3.1.2.7, el valor de la superficie
ponderada, que puede entenderse también como la superficie impermeable
equivalente a cada tipo. Finalmente se indica la suma de superficies ponderadas, la
que dividida por el área total entrega el coeficiente de escorrentía equivalente de
toda la urbanización.
Se puede notar que este valor, así obtenido, se encuentra dentro del rango
recomendado para áreas residenciales de condominios pareados o departamentos si
se considera el conjunto como una unidad homogénea.
( P − 0.2 S ) 2
Q= (3.1.2.6)
( P + 0.8S )
1000 (3.1.2.7)
S = − 10
CN
0,75 Q
qp = (3.1.2.8)
Tc
Tp = 0,67Tc (3.1.2.10)
Siendo:
qp = caudal máximo, en mm/s.
Tc = tiempo de concentración, en segundos.
Tb = tiempo de la base del hidrograma, en segundos.
Tp = tiempo al máximo, en segundos.
Q = volumen escurrido expresado en altura de agua, en mm.
donde los poros del suelo contienen agua y aire. Dentro de esta porción de
suelo, una parte del agua se detiene en la zona radicular de las plantas y es
devuelta a la superficie por éstas o mediante el fenómeno de capilaridad. Otra
parte se almacena, dando origen al agua vadosa o humedad de suelo. El exceso
de agua vadosa drena por gravedad, y continúa su movimiento descendente
hasta incorporarse al depósito subterráneo, proceso que se llama percolación o
infiltración eficaz. A cierta profundidad, el suelo se encuentra saturado de
agua, en la llamada zona de saturación. La superficie de esta zona de saturación
es llamada napa freática, superficie freática o nivel freático y el agua
almacenada en la zona de saturación se denomina agua subterránea. La
alimentación del agua subterránea se realiza por medio del proceso de
infiltración, en el cual parte de la precipitación traspasa la superficie del suelo.
Acuífero freático o libre es aquel cuyo límite superior queda definido por la
superficie freática misma, en la cual, el agua contenida en los poros del acuífero
se encuentra sometida a presión atmosférica. En cualquier nivel dentro de un
acuífero libre la presión hidrostática es equivalente a la profundidad media
desde la superficie freática hasta el punto en cuestión, y puede expresarse en
metros de columna de agua. Los acuíferos libres se forman cuando no hay
materiales impermeables sobre el acuífero. La napa freática se puede desplazar
hacia arriba o hacia abajo, en respuesta a recargas o descargas en el acuífero
(Fig. 3.2.1.2).
3. MARCO GEOGRÁFICO
Figura 3.2.1.2: Acuífero libre. 1.- Pozo, 2.- Zona no saturada, 3.- Napa
subterránea, 4.- Zona saturada, 5.- Río.
Figura 3.2.1.3: Acuífero confinado. 1.- Pozo freático, 2.- Pozo artesiano, 3.-
Pozo surgente, 4.- Superficie libre, 5.- Acuífero, 6.- Roca.
3. MARCO GEOGRÁFICO
Figura 3.2.1.4: Acuífero colgado. 1.- Acuífero colgado, 2.- Arcilla, 3.- Zona no
saturada, 4.- Napa freática, 5.- Manantiales.
c. Zonas del subsuelo. En una sección de un acuífero libre, se distinguen los siguientes
estratos o zonas (Fig. 3.2.1.5):
Figura 3.2.2.1: Esquema de infiltración. 1.- Zona vadosa, 2.- Napa freática, 3.-
Sobrecarga, 4.- Acuífero.
Las variables de interés que se deben considerar para evaluar las características
de un determinado sector, para ser usado como zona de infiltración de aguas
lluvias, están relacionadas con la cubierta vegetal, el suelo y el agua
subterránea, en los aspectos que se describen a continuación.
Cubierta vegetal. Gran parte del agua que se infiltra en el suelo es absorbida
por las raíces de las plantas y retorna a la atmósfera mediante la transpiración
con agua). En el caso de las arcillas este valor es del orden de 0,05, es decir,
sólo un 5% puede ser llenado con agua.
Procesos biológicos. En las capas más altas del suelo, la flora bacteriana,
fangosa, con algas y con fauna puede intervenir en la
descontaminación de las aguas infiltradas. Fauna y flora saprófitas
toman parte en la degradación de la materia orgánica y en la
purificación microbiológica. Los procesos bacterianos permiten la
degradación de ciertos hidrocarburos, la acumulación de fierro, la
nitrificación-desnitrificación (bajo condiciones específicas de
temperatura, pH, nutrientes, oxígeno). Por otro lado las sustancias
contenidas en las aguas lluvias reaccionan de una manera diferente
en contacto con el suelo.
v=ki (3.2.2.1)
H = h(θ) - Z (3.2.2.3)
Rocas masivas
Granito 0,3 4 0,2 <0,2 0,5 0,0
Caliza masiva 8 15 0,5 <0,5 1 0,0
Dolomia 5 10 2 <0,5 1 0,0
Rocas metamórficas 0,5 5 0,2 <0,5 2 0,0
Rocas volcánicas
Piroclastos y tobas 30 50 10 <5 20 0,0
Escorias 25 80 10 20 50 1
Pumitas 85 90 50 <5 20 0,0
Basaltos densos 2 5 0,1 <1 2 0,1
Fonolitas 12 30 5 5 10 1
Basaltos vacuolar
Rocas sedimentarias
Pizarras sedimentarias 5 15 2 <2 5 0,0
Areniscas 15 25 3 10 20 0,0
Creta blanda 20 50 10 1 5 0,2
Caliza detrítica 10 30 1,5 5 20 0,5
Formaciones sedimentarias
Aluviones 25 40 20 15 35 5
Dunas 35 40 30 20 30 10
Gravas 30 40 25 25 35 15
Loess 45 55 40 <5 10 0,1
Arenas 35 45 20 25 35 10
Dep. glaciares 25 35 15 15 30 5
Limos 40 50 35 10 20 2
Arcillas sin compactar 45 60 40 2 10 0,0
Suelos superiores 50 60 30 10 20 1
En la tabla 3.2.2.2 (Custodio, 1976) se presentan valores estimados de
porosidad efectiva y total para algunos suelos. La medida de la porosidad se
puede efectuar por diversos métodos, tanto en laboratorio como en terreno. Los
métodos de terreno son los mejores, pues miden el material en su estado
natural, mientras que los métodos de laboratorio suponen una alteración de la
muestra respecto a su estado inicial.
Capacidad de Infiltración. La infiltración es el proceso por el cual el agua
penetra en el suelo a través de la superficie de la tierra. La capacidad de
infiltración de un suelo es la máxima cantidad de agua que puede absorber en
una unidad de tiempo bajo condiciones definidas previamente. Depende de
3. MARCO GEOGRÁFICO
varios factores tales como las características del terreno y del fluido que se
infiltra, las condiciones de la superficie y las condiciones ambientales.
Existen tres tipos fundamentales de métodos para determinar las capacidad de
infiltración: a) Ensayos de infiltración en terreno. b) Análisis de escorrentía en
cuencas pequeñas. c) Lisímetros. Todos los métodos disponibles entregan
valores aproximados, incluso aplicados al mismo terreno pueden dar valores
diferentes. Para el diseño de obras de infiltración el método más empleado es el
de ensayos de infiltración en terreno ya que permiten determinar de manera
directa un valor de la capacidad e infiltración. Algunos de los ensayos más
usados se mencionan a continuación.
Ensayo Muntz o de cilindros concéntricos. Entrega una medida del coeficiente
de permeabilidad vertical en las capas superficiales del suelo y se
puede usar sólo si la napa es profunda. Es un método simple pero
necesita de aparatos específicos. El método consiste en hincar en el
suelo dos cilindros a una profundidad de 10 cm como se muestra en
la figura. El cilindro interior debe tener al menos un área de 100
cm2 y se debe mantener el nivel del agua en ambos cilindros a una
altura sobre el suelo de al menos 3 cm durante el ensayo.
V
f = 36.000
A∆t
R 2h + R
f = Ln 1 (3.2.2.4)
2( t2 − t1 ) 2h2 + R
100
90 5
80 4
Porcentaje retenido 70 3
60 2
50 1
40
30
20
10
0
100 10 1 0.1 0.01 0.001
Diam etro, m m
Por tratarse de una zona históricamente agrícola las ciudades del Valle Central
han crecido sobre los trazados de caminos, canales e infraestructura de
asentamientos agrícolas, que son los primeros que crean un sistema de división
de la propiedad y organización del territorio. Así las principales ciudades se
encuentran fundadas a orillas de los grandes ríos que tienen carácter de
torrentes cordilleranos. Por estar ubicadas en el centro del valle estas ciudades
tienen un relieve plano, con ligera pendiente ( 1 a 3 %) edificadas sobre
terrenos agrícolas con una capa superior más o menos profunda de carácter
arcilloso sobre depósitos aluviales. Existen dos excepciones destacadas que
corresponden a zonas urbanas ubicadas en la costa, Valparaíso y Concepción,
en las que la topografía es más accidentada. En toda la zona norte de este valle
central la cubierta vegetal de los espacios urbanos abiertos desaparece en el
verano, o durante todo el año, si no es especialmente cuidada, transformándose
en grandes extensiones de polvo o barro según la estación. En estas ciudades los
materiales básicos de la edificación son la albañilería de adobe o barro con
estructuras de madera, para las más antiguas o tradicionales, y albañilerías de
ladrillo, reforzadas o armadas con estructuras de hormigón armado, para las
edificaciones mayores.
3.3.2. RELIEVE.
Un aspecto relevante es el relieve de la zona, dado por las pendientes del
terreno, la existencia de zonas planas o abruptas, disposición de quebradas,
cerros, bajos, depresiones y similares. Para formarse una idea es esencial una
visita al lugar y disponer de un plano topográfico a una escala adecuada con
curvas de nivel que permitan captar las propiedades del relieve. Dependiendo
de la extensión de la zona estos planos pueden ser a escala 1/1000 con curvas
de nivel cada 0,5 metros para zonas relativamente planas, o cada 1 metro si la
pendiente es más pronunciada. Una información de interés a nivel más general
puede obtenerse de mapas del Instituto Geográfico Militar, IGM, en planchetas
a escala 1/50000 o 1/25000 en algunas zonas del territorio nacional. Estos
planos pueden entregar una idea general de la configuración del sector en el
cual se ubica la zona urbanizada, pero no tiene el detalle suficiente para el
diseño de las obras. En algunas municipalidades se dispone de planos a una
escala mayor con el detalle de calles y elementos urbanos de interés, con
información actualizada.
3.3.3. DRENAJE.
También es necesario tener una idea clara de la configuración de la red de
drenaje natural del sector. En condiciones naturales, para nuevas
urbanizaciones, esta red puede proporcionar sectores alternativos para disponer
en ella de algunos elementos de almacenamiento o para ser empleados como
parte de las soluciones propuestas manteniendo las condiciones naturales. Para
ello es necesario conocer la configuración morfológica de esta red, es decir sus
pendientes, secciones, vegetación y topología. Además se requiere tener
3. MARCO GEOGRÁFICO
3.3.4. RIEGO.
En muchas de las zonas de expansión urbana de las ciudades chilenas éstas se
desarrollan sobre terrenos agrícolas que cuentan con una bien formada
infraestructura de canales de regadío. Estos canales están diseñados para
conducir agua hacia los terrenos de cultivo, mediante una red normalmente de
forma arbórea, a partir de un canal troncal que toma las aguas desde un cauce
natural y se subdivide continuamente hasta llegar mediante pequeñas acequias a
los predios. Cuando estas zonas se urbanizan se producen conflictos entre los
regantes y los urbanizadores pasando por una etapa de transición en que parte
de los canales deben mantenerse funcionando mientras otros pierden su
utilidad. Esto requiere en muchos casos el abovedamiento de los canales de
riego, protecciones especiales o su incorporación muchas veces descuidada a la
infraestructura urbana. El uso de los canales de riego como elementos de la red
de drenaje de aguas lluvias en zonas urbanas debiera evitarse en general ya que
es muy difícil convertir una red de riego en otra de drenaje. Sin embargo en
ciertas condiciones podrían emplearse algunos elementos de ella como parte de
soluciones alternativas, extremando para ello las consideraciones de tipo
paisajístico, de seguridad y la urbanización de estos elementos. Antecedentes
sobre los canales de riego pueden obtenerse de las Asociaciones de Canalistas
responsables de cada sector, cuya identificación puede hacerse con la
colaboración de la Dirección General de Aguas del MOP. Para algunas zonas
del país existe información detallada de las redes de canales de riego elaboradas
3. MARCO GEOGRÁFICO
Para cada una de las obras alternativas propuestas se presenta un esquema que
incluye una descripción de ella en condiciones típicas, acompañadas de
figuras explicativas que permiten entender en que consiste la obra propuesta y
cuales son los principales objetivos que se persiguen o que se pueden lograr
utilizándola. En segundo lugar se detallan las ventajas e inconvenientes que
presenta, de manera que el proyectista pueda formarse una idea y lo
aproveche para potenciar las ventajas y tratar de minimizar los
inconvenientes. Después se explican las consideraciones generales y criterios
de diseño específicos. Las primeras se refieren a la disposición del sitio para
emplazar la obra, así como las condiciones y antecedentes que hay que tener
en cuenta para decidir su factibilidad. Los criterios de diseño apuntan a las
partes y elementos principales de la obra con recomendaciones de las
condiciones que conviene considerar para su dimensionamiento. Si bien
muchas de las obras propuestas tienen elementos similares y los criterios son
también parecidos, se ha preferido presentarlas separadamente incluyendo en
cada caso todos los criterios aunque ellos se puedan repetir para algunos
elementos comunes en las diferentes obras, con el objeto de hacer
autosoportante la presentación de cada obra alternativa. Finalmente se agrega
un ejemplo de diseño en el cual se pueden aclarar aplicaciones específicas de
los criterios de diseño propuestos. Los ejemplos que ilustran cada caso no
corresponden a obras existentes, construidas o proyectadas, que puedan
observarse en terreno, aunque partes de ellos se han tomado de casos reales.
Tanto la ubicación como las propiedades de todo tipo necesarias para
desarrollar los proyectos, se han seleccionado de manera de orientar la
secuencia de diseño, basados en antecedentes realistas, pero no pretenden en
ningún caso proponer soluciones para los lugares en los cuales se ubican. No
se trata tampoco de obras que pueden considerarse como obras tipo, sino de
proyectos especiales ilustrativos para el lugar y las condiciones consideradas
en cada caso.
Técnicas Alternativas para Soluciones de Aguas Lluvias en Sectores Urbanos 104
4. DISEÑO, SELECCIÓN Y PRESENTACIÓN DE OBRAS
Nivel 2. Como un accesorio del Nivel 1 este nivel comienza a actuar sobre las
calles interiores de los barrios, los pasajes o accesos a grupos de
viviendas. Para ello se reemplaza el diseño de la sección transversal
de las calles tradicionales con soleras por bermas permeables y
zanjas amplias de infiltración a lo largo de las calles. Se necesitarán
pequeñas alcantarillas en cruces de calles y en las entradas de
vehículos. Esto se hace en las calles de cabecera del sistema, hasta
que el tamaño de los elementos necesarios o la cantidad de agua que
puede juntarse sobrepase condiciones de operación mínimas de las
calles y los elementos de infiltración.
Nivel 3. Sumado a los Niveles 1 y 2, este nivel aumenta el tamaño de las zanjas
laterales de infiltración y configura las alcantarillas de los cruces de
calles y pasajes o entradas de vehículos para usar las hondonadas
cubiertas de pasto como una laguna de detención que tiene el
volumen suficiente para retardar el escurrimiento generado por
lluvias de 2, 5, 10 o 100 años de período de retorno. Esto además
retarda el escurrimiento y entrega otra oportunidad para la
infiltración. Para llegar a este nivel debe considerarse en la
urbanización los terrenos necesarios para disponer de este tipo de
elementos, normalmente vinculados a parques o áreas verdes
urbanas.
Las pendientes del sitio deben ser suficientes como para desplazar el agua lluvia
por gravedad en un flujo de poca altura y extendido desde los edificios, calles y
estacionamientos hacia áreas cubiertas de pasto o vegetación. Luego, este flujo
debe escurrir sobre estas áreas antes de alcanzar las hondonadas,
almacenamientos, colectores de aguas lluvia y por último, los sistemas de
transporte de esta agua. Es así como en lugares con suelos altamente
permeables (suelos de clase hidrológica A y B), el mismo suelo puede infiltrar
una parte importante del escurrimiento superficial.
Se puede tener una idea del efecto sobre los escurrimientos urbanos de esta
técnica la que se traduce en menores volúmenes escurridos para el caso de
lluvias de periodos de retorno inferiores a 2 años. Para tormentas menos
frecuentes y más intensas sólo presentan un efecto inicial poco importante.
Ello se debe a que medida que el tamaño de la tormenta aumenta, los efectos de
reducir la conexión entre zonas impermeables disminuye, de manera que para
tormentas de más de 10 años de periodo de retorno prácticamente no tiene
efecto. Para el caso de lluvias de periodo de retorno inferior a dos años el
efecto de la desconexión se puede estimar a través de una reducción del
80
70
N ivel 0
60
50
40
30
Nivel 1
20
N i vel 3
10 Nivel 2
0
0 20 40 60 80 100
% T o t a l d e s u e lo im p e r m e a b le
Techos 31.000 m2
Calles y veredas 12.000 m2
Áreas verde 8.200 m2
Patios, jardín y antejardín privados 47.000 m2
Superficie total 98.200 m2
Figura 4.1.5: Perfil en calles con bandejones. 1.- Calzada impermeable, 2.-
Solera discontinua, 3.- Superficie permeable, 4.- Zanja con vegetación.
C=1,0*0,438 + 0,35*(1-0,438)=0,635
Para estimar el efecto sobre los gastos máximos y los volúmenes hay que
considerar una lluvia típica de la zona y calcular el hidrograma de salida de los
terrenos en las diferentes condiciones. Para ello se elegirá una lluvia de dos
Técnicas Alternativas para Soluciones de Aguas Lluvias en Sectores Urbanos 114
4.1. DESCONEXIÓN DE ÁREAS IMPERMEABLES
P12 = 11
, CD124 CF210 P2410 = 11
, * 0,12 * 0,64 * 68,5 = 5,8mm
CiA
Qmax = (4.1.1)
3,6
V = DQmax (4.1.2)
4.2. OBRAS DE
INFILTRACIÓN
Los sistemas y elementos de infiltración captan el flujo superficial y permiten o
facilitan su infiltración en el suelo. Si funcionan correctamente son muy
efectivos en lograr reducir los gastos máximos y el volumen escurrido hacia
aguas abajo. Conviene emplear este tipo de obras sólo si el agua lluvia captada
alcanza a infiltrar antes de la próxima tormenta, de manera que la obra esté en
condiciones de operar. Además debe considerarse que la infiltración de agua en
el suelo no provoque problemas estructurales en él por esponjamiento, arrastre
de finos, subpresiones o exceso de humedad en general. Finalmente es
necesario verificar que la calidad del agua infiltrada sea tal que no contamine el
acuífero o el agua subterránea del lugar.
Entre los muchos tipos de elementos de infiltración que pueden emplearse están
los que operan en forma difusa o concentrada, los que consideran
almacenamiento o no, así como los superficiales o los subterráneos. En esta
guía se consideran los pavimentos porosos, los pavimentos celulares, los
estanques, las zanjas y los pozos de infiltración. En la Tabla 4.2.1 se presentan
las distintas alternativas de disposición de aguas lluvias mediante infiltración en
el suelo y se indican las características de cada una en cuanto a su extensión,
almacenamiento y ubicación.
Para ello se ubican atendiendo los escurrimientos de los techos y demás zonas
impermeables inmediatas en una urbanización, de manera que reciban aguas
relativamente limpias, antes de que escurran sobre terrenos que pueden
cargarlas de sedimentos.
b. Ventajas y desventajas. Al igual que todas las obras de infiltración, una de las
principales ventajas que presentan los estanques de infiltración es que permiten
reducir el gasto máximo del escurrimiento superficial y el volumen de aguas
lluvia que llega a las redes de drenaje, con lo cual disminuye el riesgo de
inundación hacia aguas abajo. Esto produce una disminución de los costos, ya
que se pueden reducir o incluso suprimir partes de las redes de colectores aguas
abajo de la zona drenada.
Plano a una escala adecuada (1/1000, 1/500, 1/200) en el que se muestren las
superficies que drenan al estanque y la naturaleza de cada una.
Debido a que existen propiedades del terreno que facilitan más que otras la
implementación de estanques de infiltración, se recomienda un método de
asignación de puntos de acuerdo a las características que se presentan en la
Tabla 4.2.1.1, en la cual se asigna un puntaje por cada una de las seis
características y la suma entrega el puntaje total asignado al sitio.
Entonces, si puntaje < 20 el sitio no se considera apto.
20 < puntaje < 30 el sitio es un buen candidato.
puntaje > 30 el sitio es excelente.
Este puntaje se puede emplear para la comparación de sitios alternativos.
Figura 4.2.1.6: 1.- Techo, 2.- Bajada aguas lluvias, 3.- Terraza, 4.-
Estanque, 5.- Rebase, 6.- Reja, 7.- Vereda, 8.- Calle.
Sí No
Sí
Sí No Sí No
Sí No Sí No Sí No
T = 5 años si hacia aguas abajo del lugar existe una red de drenaje
desarrollada.
Si la tasa de infiltración del terreno es siempre mayor que la lluvia, incluso que
la de menor duración, entonces no se requiere un volumen de acumulación en el
estanque, sino que bastará con la superficie para la infiltración.
Valm
h= (4.2.1.4)
Ae
V totall
t m
=
0,001C s f Ae
(4.2.1.5)
Es conveniente que este tiempo sea inferior a 36 horas para evitar daños
permanentes a la vegetación del estanque y facilitar otros usos.
Obra de rebase. Se debe considerar una obra de rebase o vertido, para evacuar
hacia el sistema de drenaje superficial, o hacia los colectores, los excesos de
lluvias mayores. Para ello se puede recurrir a cámaras de descarga sencillas
dimensionadas considerando el estanque de infiltración como un estanque de
retención seco. También se puede emplear un sumidero simple o un elemento
de rebase hacia aguas abajo. Más importante que la obra de rebase propiamente
tal es el nivel al cual se ubica. La obra de rebase puede ser simplemente un
rebaje en la solera de un borde para conectar el estanque con la calle.
f. Detalles. Consideran el resto de los elementos necesarios para que la obra opere
adecuadamente.
Los antecedentes del terreno indican que la pendiente del terreno es pequeña,
que la profundidad mínima estacional de la napa se ubica 15 m bajo la
superficie del terreno y se trata de un suelo tipo B compuesto por limo y arena.
De ensayos de infiltración realizados en el suelo del parque se obtuvo una tasa
media de infiltración de 19,6 mm/hora.
5) Cubierta vegetal :
pasto bien establecido.......................................................3 puntos
V afl
(t ) = 0,001 C A I t t = 0,001 C A P 5t (4.2.1.6)
Pt 5 = 11
, P2410 CDt24 CF105 (4.2.1.8)
24
CD t es el coeficiente de duración, que se obtiene de la Tabla 3.1.2.3 de
Coeficientes de duración para t entre 1 y 24 horas o de la expresión (3.1.2.2)
propuesta para lluvias menores de 1 hora.
Pt 5 = 11
, * 83,3CDt24 0,83= 76,1CDt24 para 24 horas ≥ t ≥ 1 hora
A partir de este valor se obtienen las precipitaciones menores de una hora con
los coeficientes de duración de la Tabla 3.1.2.5 como:
La profundidad del estanque resulta ser de sólo 4,7 cm. Dado que esta es la
profundidad de agua máxima presente en el estanque para las condiciones de
diseño, el estanque puede construirse de 5 ó 10 cm de profundidad para facilitar
su nivelación y excavación.
250
200
Volumen acumulado, m3
150
V Alm.
100
0
0 5 10 15 20 25
V 920 * 0,07
t = alm
= = 7,1 horas (4.2.1.11)
m
0,001 fC s A estanque
0,001 *19,6 * 0,5 * 920
Unitario Subtotal
1 Excavación, en terreno blando, hecha a
mano, sin agotamiento ni entibación,
incluye el descepe y limpieza del terreno,
así como el emparejamiento, nivelación y
limpieza de fondo. m3 354,2 0,252
89,258
2 Transporte de excedentes de la excavación
incluyendo carguío y depósito, a distancia
menor a 10 km. m3 333,3 0,063
20,998
3 Suministro y colocación de una capa de
arena sin contenido de arcilla de 3 cm,
esparcida y compactada con pisón. m3 25,9 1,081
27,998
4 Suministro y colocación de una capa de
5 cm de tierra de hojas, esparcida y nivelada.m3 43,1 1,019
43,919
5 Suministro, distribución y siembra de césped
artificial. Incluyendo colocación de arena, tierra
de hoja, semilla, sembrado, riegos y cuidados
hasta el primer corte del pasto. m2 861,9 0,104
89,638
6 Suministro y colocación de solerillas tipo
jardín de cemento comprimido. Colocadas
apoyadas sobre mortero de cemento y niveladas.
Incluye mortero m 175,6 0,167
29,325
Total 301,207
Nota: Precios de referencia en UF ( Unidades de Fomento, 1 UF=$13.081,89 al
7 de Octubre de 1996), según “Lista Oficial de Precios de Obras de
Pavimentación para Cobro por Gastos de Inspección año 1995”, MINVU
y el “Boletín de Precios Nº 276 de Mayo-Junio de 1996” del SERVIU
Metropolitano.
Frente a los cinco objetivos básicos propuestos para las obras alternativas de
drenaje urbano el comportamiento de las zanjas de infiltración es el siguiente:
Para lograr estos objetivos las zanjas de infiltración se ubican inmediatas a las
zonas impermeables que atienden, de manera de recibir aguas limpias,
preferentemente en sectores estrechos como pasajes, bandejones centrales de
calles, fondos de patios, en los bordes de estacionamientos y lugares similares.
Una zanja de infiltración es una obra sencilla que admite varios elementos
opcionales para la alimentación y descarga. El esquema siguiente muestra los
elementos típicos de una zanja y la relación funcional entre ellos.
Zanja de infiltración inicial. Su diseño tiene por objeto retirar del flujo
superficial sólo la primera parte de la tormenta, con el objeto de mejorar la
calidad del agua. El volumen de almacenamiento permite guardar el flujo
provocado por los primeros 10 mm a 15 mm de la tormenta de diseño, el cual
posteriormente se infiltra. El exceso se rechaza o es retirado por drenes.
Plano a una escala adecuada en el que se muestren las superficies que drenan a
la zanja y la naturaleza de cada una.
Sí No
Sí
Sí No Sí No
Sí No Sí No Sí No
A perc = 2 h ( L + b ) (4.2.2.3)
h L
b
Vzanja = L b h (4.2.2.5)
Figura 4.2.2.10: A.- Nivel máximo del agua, S.- Pendiente del terreno,
H.- Profundidad de la zanja, Lmax..- Longitud máxima.
H
Lmax = (4.2.2.7)
2S
El gasto de diseño de esta tubería puede estimarse como el aportado por una
tormenta corta, de duración 5 a 10 minutos sobre el área aportante, de manera
de tomar en cuenta la parte más intensa de la lluvia, que es la que genera los
mayores caudales a ser distribuídos en la zanja:
Q = CI 52min A (4.2.3.8)
1 1
D = 0,286L 6 Q 3
(4.2.2.9)
Figura 4.2.2.12: 1.- Relleno, 2.- Cubierta, 3.- Tubería perforada o dren,
4.- Cámara salida.
f. Detalles. Debe completarse el diseño con los detalles necesarios para que la obra
funcione correctamente.
Pozo de observación. Se recomienda instalar un pozo de observación por
cada 25 m de longitud de la zanja. Este puede consistir en una tubería vertical
perforada o abierta en su parte inferior, conectada a la superficie que permita
medir el nivel del agua en el interior de la zanja. Se recomienda emplear un
tubo de acero galvanizado de dos pulgadas de diámetro con una tapa rosca en
su extremo exterior para evitar problemas de vandalismo.
Figura 4.2.2.15: 1.- Sumidero, 2.- Cámara, 3.- Zanja, 4.- Cuneta,
5.- Solera, 6.- Tubería de conexión.
Control de los aportes de tierra desde zonas cercanas. Evitar los aportes de
tierra hacia la zanja mientras dura la realización del proyecto, para lo cual se
debe poner en servicio la zanja dentro de las últimas etapas de la construcción
de la obra si ella está incluida en un programa de construcción más amplio. En
caso de ser necesario se debe instalar una solución transitoria en el lugar para
recoger y evacuar las aguas lluvias. Además hasta que no se encuentren
totalmente terminadas es conveniente separar el drenaje desde las superficies
que producen los finos (áreas verdes, zonas con tierra) de las superficies
impermeables drenadas por la zanja.
V afl
(t ) = 1,25 * 0,001 C A I t t = 1,25 * 0,001 C A P5t (4.2.2.10)
Pt 5 = 11
, P2410 CDt24 CF105 (4.2.2.12)
Pt 5 = 11
, * 82,3 * CDt24 * 0,87 = 78,7 * CDt24 para 24 horas ≥ t ≥ 1 hora
Las precipitaciones menores de una hora se obtienen a partir de esta con los
coeficientes de duración de la Tabla 3.1.2.5 como:
Az = 2h(L+b) (4.2.2.14)
250
200
Volumen acumulado, m3
150
100
V Alm.
Vol. Afluente acumulado
50
Vol. Infiltrado acumulado
0
0 5 10 15 20 25
Lmax = 1,8/(2*0,02) = 45 m.
7,1* 21 1 3
Q= = 0,0039 m /s =3,9 l/s.
122 5 * 60
/6 1/3
D = 0,286 * 201 * (0,0039) = 0,074 m = 74 mm.
Unitario Subtotal
1 Excavación, en terreno blando, hecha a
mano, sin agotamiento ni entibación,
incluye el descepe y limpieza del terreno,
así como el emparejamiento, nivelación y
limpieza de fondo. m3 220,8 0,252
55,642
2 Transporte de excedentes de la excavación
incluyendo carguío y depósito, a distancia
menor a 10 km. m3 220,8 0,063
13,910
3 Suministro y colocación de geotextil
colocado según las especificaciones
del proyecto. m2 768,2 0,096
73,747
4 Suministro y colocación de bolones para
relleno. Tamaño medio 20 cm, limpio,
sin material fino. Colocado en el interior de
Frente a los objetivos perseguidos por las técnicas alternativas los pozos de
infiltración se encuentran en la siguiente situación:
requiere una mantención durante la vida útil de la obra. Una alternativa para
reducir este problema previamente es instalar un filtro en la parte superior
haciendo pasar el agua a través de él antes de que pase al pozo o instalar un
decantador previamente. En casos extremos se puede recurrir a un filtro de
arena similares a los empleados en las piscinas.
Plano a una escala adecuada en el que se muestren las superficies que drenan al
pozo y la naturaleza de cada una.
No son aptos para la instalación de pozos de infiltración los terrenos con suelos
con una permeabilidad menor que 10-5 m/s, o con una tasa de infiltración
inferior a 20 mm/hora o si existe algún estrato impermeable a menos de un
metro bajo el fondo del pozo. Si el nivel máximo estacional de la napa o algún
estrato impermeable se ubica a menos de 1m bajo la base del pozo se cataloga
como pozo de inyección. En este caso no deben infiltrarse aguas de mala
calidad, entendiendo por tales las que no satisfacen los requisitos de agua para
fines recreacionales o de agua para riego de acuerdo a las Normas NCh 1333
Requisitos de Calidad del Agua para Diferentes Usos.
V g = π R2 h (4.2.3.2)
Qi = 0,001 Cs f S (4.2.3.3)
S=πDH (4.2.3.4)
Qi = 0,001 Cs f π DH (4.2.3.5)
Qi = Cs π KD´H´ (4.2.3.6)
Sí No
Sí
Sí No Sí No
Sí No Sí No Sí No
Tiempo de llenado del pozo. El caudal que se infiltra desde el pozo depende
de la altura de agua en su interior, por lo tanto es variable en el tiempo a medida
que el pozo se llena. El volumen de agua acumulado al interior del pozo
aumenta mientras el gasto de entrada, Qe, es mayor que el que se infiltra, Qi.
El volumen de almacenamiento necesario del pozo se determina imponiendo la
condición de que para la lluvia de diseño el pozo se llena en el instante en que
el caudal de entrada es igual al de infiltración. Antes de ese momento se sigue
acumulando agua en el pozo y a partir de él en adelante el pozo comienza a
vaciarse. El tiempo de llenado del pozo se calcula entonces como el tiempo
transcurrido desde el inicio de la lluvia, para el cual Qe = Qimax, donde:
Vafl (t + ∆t ) − Vafl (t )
Qe (t ) = (4.2.3.8)
∆t
Para calcularlo es conveniente construir una tabla para diferentes tiempos desde
el inicio de la lluvia, con los valores de Vafl y obtener en cada fila el valor de
Qe(t). EL tiempo de llenado se selecciona de esa tabla como aquel para el cual
Si el pozo se llena con material de porosidad p, el volumen total del pozo debe
ser:
Rebase. No es conveniente entregar al pozo más agua que la que éste puede
almacenar ya que al actuar el volumen de almacenamiento del pozo como
decantador se produce una mayor colmatación. Es por ello que se recomienda
poner antes del pozo una cámara que evacue los excesos. En ella se debe evitar
que el agua de la red se introduzca al pozo por reflujo. Algunas alternativas de
diseño para esta cámara se ilustran en los siguientes esquemas.
Número de pozos. Se emplearán dos tipos de pozos. Unos para drenar el agua
proveniente de los techos, colocando un pozo cada dos edificios, denominados
tipo A. Otros, los tipo B, atenderán los sectores de jardines, colocando cuatro
de ellos distribuidos en todo el terreno.
Los pozos tipo A se alimentarán desde las bajadas de aguas lluvias de los
techos, que llegarán a un decantador y después se conectarán al pozo. En los
tipo B la alimentación será directa por la parte superior desde el jardín, con un
filtro granular en la cubierta superior.
Área Servida. El área total servida por los pozos tipo A es de 1954 m2, de
manera que cada pozo drenará un área de 489 m2, con un coeficiente de
escorrentía de 0,9. El área total de jardines, para los pozos tipo B , es de 5992
m2, de manera que a cada pozo le corresponden 1498 m2, con un coeficiente de
escorrentía de 0,22.
siendo Pt5 la precipitación total durante el tiempo t de una lluvia de cinco años
de periodo de retorno en Rancagua. Esta se estima con los coeficientes de
duración y frecuencia como:
Pt 5 = 11
, CDt24 CF105 P2410 (4.2.3.13)
Pt 5 = 11
, * CDt24 * 0,86 * 68,5 = 64,8 * CDt24 para 24 hora ≥ t ≥ 1 hora
(4.2.3.14)
Las precipitaciones menores de una hora se obtienen a partir de este valor con
los coeficientes de duración de la Tabla 3.1.2.5, de lo cual resulta:
Con estos valores se calcula el volumen afluente acumulado a los pozos tipo A
hasta el tiempo t con la expresión 4.2.3.12 como:
Qi = 0,001 Cs f π D H (4.2.3.17)
Para los pozos tipo A se considera agua de buena calidad, con un decantador y
una mantención regular, lo que significa un factor de seguridad de 1,0. Para los
pozos tipo B el agua es también de buena calidad pero no se considera
tratamiento ni decantación, con una mantención regular, de manera que el
coeficiente es 0,75. En ambos casos la tasa de infiltración es de 50 mm/hora.
Para estimar el caudal de infiltración debe tenerse una idea preliminar del
tamaño de los pozos. Para ello se considerará en una primera aproximación
D=3m y Hmax=4m. Con estos valores los caudales máximos de infiltración, en
m3/hora para cada tipo de pozo serían:
QAimax = 0,001*1,0*50* π∗3∗4 = 1,88 (m3/hora)
En los pozos tipo B el caudal de infiltración máximo sería:
Tiempo de llenado de los pozos. Para estimar el tiempo que tardan los pozos
en llenarse con el caudal afluente es necesario conocer el gasto instantáneo de
llenado, para lo cual es útil la siguiente tabla, en la que se indica para cada
duración, t, los coeficientes de duración correspondientes, que permiten estimar
la precipitación acumulada y en base a ella los volúmenes afluentes acumulados
a cada pozo. El caudal afluente a cada pozo para cada tiempo se estima como
la diferencia entre volúmenes acumulados consecutivos divididos por el
intervalo de tiempo.
Considerando una porosidad del relleno de 0,3 los volúmenes totales de los
pozos serían de
VA total = 9,42/0,30 = 31,4 m3
VB total = 7,17 / 0,30 = 23,9 m3
Si se consideran pozos de 4 m de profundidad útil los diámetros necesarios
resultan ser de
DA = 3,16 m
DB = 2,76 m
Ambas medidas resultan muy similares a los 3m supuestos para el diámetro
inicial de cálculo de los pozos, por lo tanto se aceptará que la estimación del
volumen necesario es correcta. Las dimensiones de los pozos deben ser las
siguientes:
Pozos tipo A, para techos: profundidad útil 4m, diámetro medio 3,2m
Pozos tipo B, para jardines: profundidad útil 4m, diámetro medio 2,7m.
Rebase. Los pozos tipo A dispondrán de un rebase en la cámara de llegada,
mientras los tipo B no tendrán este elemento.
Filtros y decantadores. En los pozos tipo A se dispondrá de un decantador
previo de un volumen igual al 50% del volumen de almacenamiento neto, es
decir de 5 m3. El gasto de diseño de este aparato será igual al caudal máximo
del afluente, que ocurre en los primeros 5 minutos de la lluvia de diseño, igual
a:
Qm = 16,8 m3/hr. = 4,7 l/s.
Los pozos tipo B no tendrán decantador pero si dispondrán de un filtro
superficial formado por una capa de ripio, otra de gravilla, y un geotextil en la
parte superior a través de la cual percolará el agua que entra al pozo. Cuando
este filtro se colmate es relativamente sencillo reponer estas capas por otras
nuevas y limpias.
Cubierta. Los pozos tipo A se cubrirán con una losa y tierra sobre ellos de
manera de emplear la superficie para otros usos. Los pozos tipo B se cubrirán
con un pavimento celular y pasto, formando un pequeño estanque de
infiltración en la superficie.
Piezómetros. En ambos casos se consulta colocar un piezómetro consistente
en un tubo de acero galvanizado de 50 mm de diámetro, abierto en su extremo
inferior y rodeado en un geotextil.
Desde el punto de vista del tránsito se ha comprobado que hacen más segura la
superficie para los automóviles durante las tormentas, reduciendo el patinaje y
mejorando la visibilidad al disminuir la frecuencia con que aparecen láminas de
agua en la superficie, en comparación con lo que ocurre con una carpeta de
rodado impermeable. Adicionalmente, poseen una macrotextura que favorece
la adherencia neumático-pavimento a altas velocidades. Si están correctamente
diseñados e instalados pueden tener una resistencia y duración similar a la de
pavimento convencional.
Plano a una escala adecuada en el que se muestren las superficies que drenan
sobre el pavimento y la naturaleza de cada una.
Espesor total del pavimento. El valor mínimo del espesor total que debe tener
el pavimento (desde la parte superior de la carpeta de rodado hasta la parte
superior de la subrasante), está condicionado por las características de
capacidad de soporte de la subrasante y por el tráfico. En el caso de pavimentos
porosos debe considerarse además las necesidades de almacenamiento de la
subbase. La capacidad de soporte del suelo se puede medir mediante el valor
Debo y Reese (1995) recomiendan los espesores totales del pavimento que se
indican en la tabla 4.2.4.1 de acuerdo a experiencias con este tipo de
pavimentos en E.E. U.U. para calles de bajo tráfico.
Tabla 4.2.4.1.- Espesores mínimos recomendados para el total del pavimento.
(Debo y Reese, 1995).
CBR Subrasante Espesor mínimo, cm.
menos de 6 no usar pavimento poroso
6a9 22,5
10 a 14 17,5
15 ó más 12,5
Se debe cumplir una relación mínima entre las capas base, subbase y la
subrasante, en cuanto al valor del C.B.R. se refiere, de manera tal de
lograr una armonía entre ellas, con el objeto de asegurar una
estabilidad estructural al mediano y largo plazo en el pavimento.
Existen dos tipos de subbases que pueden ser utilizadas en los pavimentos
porosos: las subbases tratadas y las no tratadas. Las subbases tratadas tienen un
contenido de cemento (120-170 kg. por m3) o asfalto (2-2,5 % en peso) que les
proporciona estabilidad, permitiendo reducir su contenido de finos.
Tabla 4.2.4.5: Composición de subbases no tratadas recomendadas por la
Portland Cement Asociation de EE.UU. (1)
Abertura Porcentaje pasante en peso
tamiz mm Iowa Kent. Michig. Miniap. New Jersey Pensilv. Wisc.
2” 50,8 _ _ _ _ _ 100 _
1 1/2” 38,1 _ 100 100 _ 100 _ _
1” 25,4 100 95-100 _ 100 95-100 _ 100
3/4” 19,1 _ _ _ 65-100 _ 52-100 90-100
1/2” 12,7 _ 25-60 0-90 _ 60-80 _ _
3/8” 9,52 _ _ _ 35-70 _ 35-65 20-55
#4 4,76 _ 0-10 0-8 20-45 40-55 8-40 0-10
#8 2,38 10-35 0-5 _ _ 5-25 _ 0-5
#10 2,00 _ _ _ 8-25 _ _ _
#16 1,19 _ _ _ _ 0-8 0-12 _
#30 0,595_ _ _ _ _ 0-8 _
#40 0,420_ _ _ 2-10 _ _ _
#50 0,2970-15 _ _ _ 0-5 _ _
#200 0,0740-6 0-2 _ 0-3 _ 0-5 _
k (m/día) 150 6100 300 60 600 300 5500
(1) “Concrete paving technology”, Portland Cement Asociation, 1991.
Las subbases no tratadas contienen una mayor proporción de finos para lograr
una adecuada estabilidad, lo que reduce la permeabilidad del estrato. La
Portland Cement Asociation de EE.UU. recomienda para subbases no tratadas
las granulometrías que se indican en la Tabla 4.2.4.5, de acuerdo a lo empleado
en algunos estados de EE.UU. Se indica también el coeficiente de
permeabilidad, k en metros por día, que se logra de acuerdo a medidas en
terreno. Similarmente, para el caso de subbases tratadas, se proponen los
valores que se muestran en la Tabla 4.2.4.6.
Sí No
Sí No Sí No
p es
tm = (4.2.5.5)
Cs f
f. Detalles. El diseño de detalles considera todos los elementos adicionales para que la
obra opere adecuadamente según las condiciones del lugar y los otros usos que
se le han asignado.
es
Lmax = (4.2.4.6)
2S0
La superficie drenante está sujeta a una colmatación superficial que debe ser
tratada en forma preventiva, ya que las acciones de decolmatación son más
complicadas, y difícilmente se puede regenerar completamente la superficie.
Una de la acciones preventivas más utilizadas, por su fácil uso y bajo costo, es
la hidrolimpieza o la aspiración, que se realiza a una presión de 4 Mpa. No se
recomienda el uso de barredoras, que tienen el inconveniente de hundir los
materiales colmatantes al interior de la superficie. Dentro de las medidas
curativas, que se efectúan cuando la superficie ya se encuentra colmatada, se
encuentran la aplicación de alta presión y aspiración, el fresado de la superficie
y el termorreciclaje de la superficie. Estas últimas técnicas se caracterizan por
sus elevados costos y difícil realización. Una guía de la mantención sugerida
para los pavimentos porosos, y la frecuencia con que ésta debe realizarse,
considerando aspectos preventivos y curativos es la siguiente:
Pt 5 = 11
, P2410CDt24 CF105 (4.2.4.9)
500
400
Volumen acumulado, m3
300
200
V Alm.
Vol. Afluente acumulado
100
Vol. Infiltrado acumulado
0
0 5 10 15 20 25
p es 0,3 × 240
t m
=
Cs f
=
1,0 * 28
= 2,57 < 48 Horas
Estas dos capas solas tienen un espesor de 30cm en conjunto, bastante mayor
que el total recomendado para el pavimento poroso desde el punto de vista
constructivo que es de 17,5 cm para el CBR de 14 de la subrasante. Por lo tanto
la base, o filtro granular superior, tendrá el espesor mínimo, que en este caso es
de 10 cm. Esta capa estará formada por grava de tamaño medio 1,2cm, máximo
2,5 cm y menos del 5% bajo los 0,2 cm. De esta forma el espesor total del
pavimento poroso es de 40cm. Sobre la subrasante se colocará un filtro
geotextil.
es 0,24
L= = = 24m
2S0 2 * 0,005
En los planos adjuntos se muestran los detalles para esta obra, incluyendo su
ubicación, planta, y perfiles constructivos, así como la cubicación de los
materiales y obras consideradas.
UnitarioSubtotal
Considerando los cinco objetivos básicos que pueden lograrse con las técnicas
alternativas de drenaje urbano, los pavimentos celulares se encuentran en la
siguiente situación:
Estos pavimentos están compuestos por varios estratos, tal como se muestra en
el esquema siguiente. De abajo hacia arriba por una subrasante formada por el
suelo existente inalterado, un filtro geotextil o filtro granular sobre la
subrasante, una subbase de material granular grueso, un filtro granular o base y
una cama de arena, sobre la cual se asienta la carpeta de rodado.
todo localmente, y para lluvias más intensas menos frecuentes, parte se drena
hacia aguas abajo.
Para poder infiltrar las aguas lluvias superficiales en el suelo, se debe verificar
simultáneamente lo siguiente: el suelo debe ser permeable; el nivel más alto de
la napa debe estar alejado del pavimento al menos 1 metro; el suelo debe
permitir la presencia de agua; el pavimento no debe encontrarse en una zona de
infiltración reglamentada.
Plano a una escala adecuada en el que se muestren las superficies que drenan
sobre el pavimento y la naturaleza de cada una.
Una vez que se determinan los ejes estándar equivalentes para el período de
diseño, que normalmente es de 20 años, se define la curva de tránsito
correspondiente, de acuerdo con la siguiente Tabla 4.2.5.2 la cual permite
obtener una guía general de clasificación de calles si no se dispone de
información previa. Para mayores detalles, el proyectista debe referirse al
citado manual.
Cama de arena. Tiene por función servir de base para la colocación de los
bloques de pavimento y proporcionar material para el relleno de los huecos.
Debe tener un espesor mínimo de 3 cm una vez compactada. En el “Código de
normas y especificaciones técnicas de obras de pavimentación” (MINVU, 1994,
sección 6.2.3.4) se entregan algunas normas de diseño para este estrato que son
válidas para los pavimentos celulares.
Filtro granular superior o base. El filtro granular debe tener como mínimo
10 cm de espesor, y estará formado por gravilla de 0,3 cm a 1,9 cm de
diámetro, limpia y bien graduada, es decir con una buena proporción de piedras
de todos los tamaños dentro del rango indicado. No es conveniente usar un
filtro geotextil en este estrato.
T=5 años, si hacia aguas abajo existe una red de drenaje bien
desarrollada.
T=10 años, si hacia aguas abajo no existe una red de drenaje bien
desarrollada.
Sí No
Sí No Sí No
Si la tasa de infiltración del terreno es siempre mayor que la lluvia, incluso que
la de menor duración, entonces no se requiere un volumen de acumulación en la
subbase, sino que bastará con la superficie de contacto con la subrasante para la
infiltración.
p es
tm = (4.2.5.5)
Cs f
f. Detalles. Se consideran los elementos adicionales necesarios para que la obra opere
adecuadamente según las condiciones del lugar y los otros usos que se le han
asignado.
Zarpas o separadores. En los pavimentos celulares se deben colocar paredes
de concreto verticales para separar los bloques porosos y cortar el flujo
horizontal de agua. El espacio entre las paredes debe ser tal que la distancia a
lo largo de la subbase de pendiente S0 no exceda Lmax dado por:
es
L max = (4.2.5.6)
2 S0
donde es es el espesor de la subbase en metros y S0 la pendiente longitudinal en
tanto por uno.
g. Construcción. Los pavimentos celulares para ser usados como elementos de drenaje
demandan un control y una instalación más rigurosa que la tradicional. En todo
caso deben seguirse las recomendaciones de construcción propuestas para los
pavimentos normales de adoquines y agregarse las que se mencionan a
continuación de manera de asegurar que adicionalmente satisfagan las
condiciones de permeabilidad e infiltración que los hacen útiles para el drenaje
urbano. Se recomienda adoptar las indicaciones de construcción elaboradoras
por el I.Ch.C. y H. en su Manual de Diseño y Construcción de Pavimentos de
Adoquines, (1991).
que significan una conservación técnica propiamente tal. En este último caso
tratándose de vías públicas, como calles, avenidas, veredas, pasajes y similares,
la responsabilidad por esta mantención técnica es del SERVIU. Algo similar
podría ocurrir con las obras alternativas de drenaje de aguas lluvias urbanas.
Sin embargo es necesario que esta responsabilidad quede establecida
legalmente en forma clara. Si las obras se encuentran en recintos privados, la
responsabilidad por su mantención es del propietario o de quienes detenten
legalmente el recinto. A continuación se presenta una guía de la mantención
sugerida para los pavimentos celulares y la frecuencia con que ésta debe
realizarse diferenciando entre una mantención preventiva y una curativa.
Estacionamiento: 2150 m2
Techos: 1920 m2
Jardines: 500 m2
Calles y veredas 2160 m2
Total: 6730 m2
Pt 5 = 11
, P2410 CDt24 CF105 (4.2.5.9)
del pavimento celular, 2150 m2 en este caso. Esto conduce a que el volumen
infiltrado se calcule como:
Vinf(t) = 0,001*0,75*23*2150*t = 37,1 *t
donde t es el tiempo acumulado en horas. Los valores obtenidos para los
coeficientes de duración, las precipitaciones y lo volúmenes resultantes del
agua afluente al pavimento y el agua infiltrada, así como el volumen
almacenado en la subbase del pavimento para distintas duraciones se presentan
a continuación:
500
400
Volumen acumulado, m3
300
200
0
0 5 10 15 20
donde Asubbase es la superficie del pavimento celular igual a 2150 m2. Desde el
punto de vista del drenaje el espesor necesario de la subbase del pavimento
resulta entonces de 11 cm.
p e s 0,3 * 110
t m
= =
Cs f 0,75 * 23
= 1,9 < 48 Horas
En los planos adjuntos se muestran los detalles para esta obra, incluyendo su
ubicación, planta, y perfiles constructivos.
Unitario Subtotal
1 Excavación, en terreno blando,
incluye el descepe y limpieza del terreno,
a profundidad menor de 1m.
Puede hacerse con máquina.
El fondo de la excavación a nivel de la
subrasante debe quedar limpio y nivelado. m3 911,0 0,308
280,588
2 Transporte de excedentes de la excavación
incluyendo carguío y depósito, a distancia
menor a 10 km. m3 911,0 0,06357,393
3 Suministro y colocación de geotextil
según especificaciones de proyecto m2 3061,0 0,096
293,856
4 Suministro y colocación de grava para la
subbase. Colocado en una capa de 11 cm
extendido con motoniveladora sobre el
geotextil, y compactado con rodillo. m3 23,8 0,117 2,785
5 Suministro y colocación de material de filtro
granular de arena gruesa, colocado en una
capa de 5 cm extendido y compactado
con placa. m3 54,0 0,28115,174
6 Suministro y colocación de adoquines huecos
prefabricados de hormigón de cemento tipo
rejilla hexagonal con aberturas rectangulares. m2 2160,0 0,446
963,360
7 Tierra de hojas para sembrar pasto en las
aberturas de las rejillas del pavimento. m3 65,0 1,01966,235
8 Suministro y colocación de semilla para
césped. Se incluye sembrado, riego y
cuidados hasta el primer corte del pasto. m2 1080,0 0,104
112,320
Estas obras pueden operar en serie hidráulica con otras obras alternativas, como
es el caso de obras de infiltración, o canales de drenaje urbano. De esta manera
pueden emplearse como elementos de almacenamiento para alimentar con
caudales reducidos obras de infiltración como zanjas, pozos o estanques de
infiltración, evitando que estos dispongan de grandes volúmenes de retención
para acomodar los gastos que reciben a los que pueden infiltrar.
Frente a los cinco objetivos básicos propuestos para las obras alternativas de
drenaje urbano el comportamiento de los estanques de retención es el
siguiente:
Figura 4.3.1.1: 1.- Manzanas de la zona urbanizada, 2.- Área verde, 3.- Red
interior de drenaje (opcional), 4.- Estanque de retención, 5.- Conexión a la red
general de drenaje.
Estos estanques están formados por una serie de elementos básicos cuya
disposición general se ilustra en la Figura 4.3.1.2.
Figura 4.3.1.3: Ejemplo de estanque de retención como parque a lo largo de una calle, Fort
Collins, E.E. U.U.
Figura 4.3.1.4: Estanque de retención de un sólo nivel en Fort Collins, Colorado, EE.UU.
Figura 4.3.1.5: Estanque de retención con un muro vertical en Fort Collins, E.E.U.U.
Como una ventaja adicional al control de crecidas la retención del agua lluvia
durante tiempos prolongados en el estanque, del orden de 12 a 36 horas,
puede tener efectos deseables en la calidad del efluente, debido a que la
remoción de sólidos suspendidos y metales puede ser de moderada a alta,
mientras la remoción de nutrientes es de moderada a baja. Si en el diseño se
considera una pequeña zona con una laguna permanente se hace más eficiente
la remoción de contaminantes solubles, así como también si se considera una
canalización para flujos menores. El principal actor para controlar la
remoción de contaminantes es el tiempo de vaciamiento proporcionado por el
diseño de los elementos de evacuación. Metales, grasas, aceites y algunos
nutrientes, tienen afinidad por los sedimentos suspendidos de manera que son
removidos parcialmente por sedimentación.
Debido a que son diseñados para vaciarse lentamente, sus fondos y las partes
más bajas son inundados frecuentemente y por periodos de tiempo
relativamente prolongados, dependiendo de la frecuencia de lluvias en el
lugar. En estas zonas frecuentemente inundadas los pastos tienden a morirse,
prevaleciendo especies que pueden sobrevivir a estas condiciones.
Adicionalmente el fondo es el depósito de todos los sedimentos que
precipitan en el estanque. Como resultado el fondo puede estar barroso y
presentar apariencias indeseadas. Para reducir estos inconvenientes y mejorar
la capacidad del estanque para otros usos, como recreación pasiva, se sugiere
considerar un sector reducido más profundo, o poner este tipo de estanques
aguas abajo de una laguna de retención, en la cual la sedimentación ocurre al
interior de la zona permanentemente con agua.
Plano a una escala adecuada en el que se muestren las superficies que drenan
al estanque y la naturaleza de cada una.
Debe considerarse la forma en que se evitará que una vez construida la obra
le lleguen aportes adicionales de cuencas laterales, por la urbanización de
sectores ubicados aguas arriba o por trasvases desde otras urbanizaciones.
CiA
Q= (4.3.1.1)
3,6
Figura 4.3.1.22: Definición de variables para el diseño del ducto de salida del
estanque. A.- Nivel del umbral de la cámara de descarga. B.- Nivel del
umbral del vertedero de seguridad. D.- Diámetro del ducto de salida.
H.- Carga hidráulica de diseño. L.- Largo del ducto de salida.
1/ 2
2 gH
Qevac = A ≤ Qmax (4.3.1.2)
K
L
K = 0,2 + 1,0 + f (4.3.1.3)
D
2 Ap
Qvaciado = 0,61 2 gh 3 / 2 < Qevac (4.3.1.4)
3(c + d )
10 cm
Canería de fierro
D uctil o Acero.
Columnas
D ETA LLE
D IB U JO N O A ESCALA
10000
Volumen Almacenado(m )
3
1000
Profundidad en
el vertedero
25 cm
100 30 cm
40 cm
50 cm
65 cm
90 cm
10 120 cm
1 10 100 1000
2
Area de perforaciones requerida por fila (cm )
2S h
t vac = (4.3.1.5)
Ca 2g
El gasto en m3/s que puede salir por este orificio está dado por:
También debe verificarse que es menor que el que puede evacuar el ducto de
salida.
Para un vertedero grueso sin aristas se puede adoptar m = 0,36 y para uno con
aristas vivas m = 0,31. ( F.J. Domínguez, Hidráulica).
Volúmenes de almacenamiento. En un estanque de retención seco el
volumen total es la suma de varios volúmenes parciales, cada uno de los
cuales se estima para satisfacer una función particular. La Figura 4.3.1.10
muestra estos volúmenes. A continuación se explica la manera en que pueden
estimarse.
Volumen principal. El volumen de almacenamiento principal de un
estanque de retención seco corresponde a la capacidad del estanque hasta el
umbral del vertedero de seguridad. Equivale a la suma de V1+V2+V3 en la
Figura 4.3.1.10. Este volumen se calcula para retener la crecida generada por
tormentas medianas, del orden de 10 a 20 años de periodo de retorno, con la
cuenca aportante en su condición de desarrollo máximo, de manera que hacia
aguas abajo del estanque no se entreguen caudales máximos mayores que los
permitidos.
Existen varios procedimientos para estimar el volumen necesario. Para
disponer de una idea preliminar se puede recurrir a un método simple que
supone una crecida de forma triangular de acuerdo al método Racional
Modificado ( ver 3.1.2.d), y un gasto de salida por el evacuador que crece
linealmente hasta el máximo. Entonces el volumen necesario está dado por:
Vestanque = 0,5Tb (Qme − Qevac ) (4.3.1.9)
dV
= Qe − Qs (4.3.1.10)
dt
(I t + I t + ∆t )
Qe = (4.3.1.11)
2
(Et + Et + ∆t )
Qs = 4.3.1.12)
2
∆t ∆t
Vt + ∆t − Vt = (I t + ∆t + I t ) − ( E t + ∆t + E t )
2 2
2Vt 2V
(I t + I t + ∆t ) + ( − Et ) = t + ∆t + Et + ∆t (4.3.1.13)
∆t ∆t
Se supone que todas las cantidades al principio del intervalo son conocidas.
Además se conoce el valor del gasto de entrada al final del intervalo y debe
determinarse el gasto de salida y el volumen almacenado al final del
intervalo. Una vez seleccionado el intervalo de tiempo ∆t se puede construir
una relación, gráfica o numérica, de la función 2V/∆t + E, en función de E,
del nivel o altura de agua, h u otra variable identificable. Además se supone
que se conoce la relación entre V y E. El esquema de solución es el siguiente:
Canal de flujos bajos. Este canal permite conducir los flujos menores
directamente desde la entrada hacia el nivel de almacenamiento inferior,
evitando que para ello ocupe todo el estanque. Se debe proveer de
protecciones para la erosión, especialmente en la llegada al nivel inferior.
Este canal puede consistir en una pequeña vereda pavimentada si los caudales
son pequeños, o en una acequia, o un tubo enterrado. En el caso de estanques
construidos en el curso de cauces naturales, este canal puede diseñarse como
un canal de drenaje urbano siguiendo los procedimientos que se detallan en
4.5.3.
Figura 4.3.1.28: Canal de flujos bajos en el fondo de un estanque en Fort Collins, EE.UU.
Taludes laterales del estanque. Los taludes deben ser estables y tendidos
para limitar la erosión y facilitar los accesos para la mantención del estanque
por parte de operarios y maquinaria. Se recomienda que los taludes interiores
de los muros sean al menos 4/1=H/V o más tendidos.
Entrada. Debe disiparse la energía del flujo a la entrada al estanque tanto
para evitar la erosión como para facilitar la sedimentación. Para ello se puede
recurrir a disipadores de energía convencionales o protecciones de enrocados.
Figura 4.3.1.30: Reja de acero galvanizado sobre la cámara de descarga, Fort Collins,
EE.UU.
Muros del estanque. Los muros deben diseñarse de manera que no sean
sobrepasados por tormentas mayores o extraordinarias de periodo de retorno
de 100 a 200 años. El nivel del coronamiento debe considerar al menos un
borde libre o revancha de 0,3m sobre el nivel máximo del agua para las
condiciones indicadas. Los taludes del muro deben ser por lo menos 3/1=H/V
o más tendidos, idealmente 4/1. Preferiblemente los muros deben plantarse
con pasto. Los suelos de mala calidad o pobremente compactados deben
removerse y reemplazarse en las zonas de fundación del muro. Los suelos de
éste deben compactarse al menos hasta un 95% del Proctor Modificado
Sondajes bajo la fundación del muro. Estos sondajes se realizan para asegurar
que la fundación será hecha en un lugar adecuado y que no se
verificarán problemas de falla en el suelo. Ellos pueden variar
mucho de una obra a otra y normalmente serán necesario si existen
dudas sobre las condiciones de fundación. Los más común es
recomendar sondajes de reconocimiento, ubicados a lo largo del eje
del muro y en forma perpendicular a este eje en el lugar más alto del
muro o ensayos en el lugar repartidos en el eje y el pie del muro en
sectores que pueden esperarse como conflictivos. Las zonas a priori
más críticas son las de mayor altura del muro, los extremos y los
anclajes de obras en hormigón incluidas en el muro como cámaras de
descarga, tubos de desagüe y vertederos. Todas estas zonas deben
estar particularmente bien caracterizadas. Para muros pequeños los
sondajes pueden ser reemplazados por calicatas.
Los materiales extraídos del sitio pueden servir para la fabricación del muro
del estanque o laguna, si sus características mecánicas e hidráulicas lo
permiten. Estas propiedades y las condiciones para ello deberán establecerse
como especificaciones técnicas especiales en el proyecto. En caso contrario,
se deben disponer en otro sitio y con otros usos.
Los antecedentes del terreno indican que la superficie libre del agua
subterránea se encuentra a más de 20 m de profundidad. Además existe por
el lado nororiente de los terrenos un cauce natural que puede servir para
descargar los caudales de aguas lluvias. Este cauce actualmente recibe las
donde P2410 = 83; CD124 = 0,16 según la Tabla 3.1.2.3 y CD3060 = 0,764 de
acuerdo a la expresión (3.1.2.2). Además para un periodo de retorno de 10
años CF10T =1. Entonces:
P3010 = 11
, (83)( 0,16)( 0,764)(1,0) = 11,2mm
lo que equivale a una intensidad de 22,4 mm/hora. Similarmente se pueden
calcular las precipitaciones para otros periodos de retorno:
Precipitación máxima en 24 horas = 83 mm
Coeficiente de duración de 24 horas a 1 hora = 0,16
Volumen principal del estanque. Aceptando que hacia aguas abajo del
estanque se puede evacuar el caudal máximo en condiciones naturales de la
crecida de 10 años de periodo de retorno, se aceptará un caudal de evacuación
máximo por la cámara de descarga de 92 l/s, con lo cual el volumen estimado
de almacenamiento mínimo para el estanque se calcula para una crecida de 10
años de periodo de retorno con la zona urbanizada, con la ecuación (4.3.1.8)
tomando en cuenta que según el método racional modificado el tiempo base
del hidrograma de entrada es igual al doble del tiempo de concentración de la
cuenca aportante:
Ves tan que = 0,5Tb (Qme − Qevac ) = 0,5(2∗30∗60)(0,188 − 0,092) = 172,8 m3
dos niveles, el inferior tendría un volumen del 20% del volumen total, igual a
40 m3. Dadas las condiciones del lugar se configurará como un estanque de
forma rectangular en planta con dimensiones en la superficie de 15 m de
ancho y aproximadamente 40 de largo, dispuesto paralelo a la calle Uno. Los
muros del estanque coincidirán con las veredas del sector. La profundidad
total de la parte más honda sería del orden de 0,7m donde se ubicará el
sistema de evacuación. A lo largo del estanque, por el medio, se dispondrá de
un canal de fondo, como una vereda pavimentada. El plano del fondo del
estanque tendrá una pendiente hacia el desagüe de 1%.
Volumen de tormentas menores. Bajo el umbral de la cámara de descarga
se dispondrá de un volumen para almacenar las tormentas menores. Este es
del orden del 50% al 80% del volumen principal. En este caso se dejará un
volumen del orden de 120 a 140 m3 para estos efectos.
Volumen de tormentas frecuentes. Debido a que la cantidad de tormentas
al año en la zona de las Condes no son muchas, del orden de 25 a 30, no se
dejará un volumen especial para ellas. Es decir en este caso el estanque será
de un solo nivel.
Vaciamiento. Para el vaciamiento total del estanque, lleno hasta la cota +0,5,
en el umbral de la cámara de descarga, se dispondrá de un orifico en la parte
inferior, con el eje en la cota +0,0, que descarga hacia la cámara. El caudal
que sale por este orificio de área a está dado por la ecuación (4.3.1.6):
Qvac = Ca (2 gh)0 ,5
estanque, sin gasto de entrada, y vaciándose sólo por este orificio, está dado
por la ecuación (4.3.1.5):
2S h
t vac =
Ca 2g
Para un vertedero con umbral horizontal de pared gruesa de ancho b, con una
carga de agua HV, el caudal está dado por la ecuación (4.3.1.7):
Q = 0,0213 h0,5
Q = 0,0897(h+0,2)0,5
200,0
180,0
160,0 Entrada
140,0 Salida
Gasto (lt/s)
120,0
100,0
Vol. Almac.
80,0
60,0
40,0
20,0
0,0
0 1000 2000 3000 4000 5000
Tiem po (segundos)
B Obras interiores.
Se considera la obra de entrada, el canal de
flujos bajos y la obra de descarga, en hormigón
y hormigón armado.
9 Hormigón grado H-30 con una dosificación
mínima de 385 kg. de cem. por metro cúbico,
colocado con moldaje en cámaras de entrada,
de descarga y vertedero de seguridad. m3 10,9 4,702 61,252
10 Emplantillado de ripio e=5 cm. m 3,0 0,117 0,351
11 Acero tipo A44-28H con resaltes para
hormigón armado, en barras, doblado y
colocado según los planos.
11.1 D=10mm Kg. 728,3 0,016 11,653
11.2 D= 8mm Kg. 7,7 0,016 0,123
12 Hormigón de 170 kg. cem /m3 para
cubiertas y veredas de canal de flujos
bajos. m3 8,6 3,250 27,950
13 Tubos de c.c. tipo alcantarillado para tubería de
descarga. Suministro y colocación
en zanja bajo el muro, emboquillados con
mortero 1:4, ø=20 cm. m 10,7 0,363 3,884
14 Bolones de 20 cm de diámetro medio
colocados a mano en una capa en el
pedraplén de la entrada. m3 0,3 0,294 0,088
15 Reja de acero en pletina de 50x5mm
soldada y galvanizada. Colocada en cámara
de descarga. Kg 12,9 0,250 3,225
16 Bolones de 30 cm de diámetro medio
colocados a mano en una capa en el
pedraplén de salida. m3 5,3 0,294 1,558
Total 1189,123
Nota: Precios de referencia en UF ( Unidades de Fomento, 1 UF=$13.081,89 al 7 de
Octubre de 1996), según “Lista Oficial de Precios de Obras de Pavimentación
para Cobro por Gastos de Inspección año 1995”, MINVU y el “Boletín de
Precios Nº 276 de Mayo-Junio de 1996” del SERVIU Metropolitano.
Frente a los cinco objetivos básicos propuestos para las obras alternativas de
drenaje urbano los que se pueden lograr con las lagunas de retención son los
siguientes:
Figura 4.3.2.1: 1.- Manzana de la zona urbanizada. 2.- Área verde. 3.- Red
interior de drenaje (opcional). 4.- Laguna de retención. 5.- Conexión a la red
exterior, o general, de drenaje.
Estas lagunas están formadas por una serie de elementos básicos cuya
disposición general se ilustra en el siguiente esquema:
Figura 4.3.2.6: Laguna de retención con zona litoral y de inundación, con embarcaderos.
Figura 4.3.2.7: Laguna de retención con un borde de muros verticales y zona litoral y de
inundación en un sólo lado.
Una de las principales desventajas de este tipo de obras son los problemas de
seguridad. Además en ellas resulta más difícil limpiar los sedimentos
atrapados que en los estanques, y si reciben aguas poco limpias pueden
observarse problemas de cuerpos flotantes, espumas, crecimiento
indiscriminado de algas, olores y en algunos casos mosquitos. El crecimiento
de plantas acuáticas puede causar problemas en los elementos de evacuación.
El volumen de agua permanente puede atraer una sobrepoblación de aves
acuáticas, lo cual puede producir suciedad por materia fecal y exceso de
nutrientes que entran y salen de la laguna, haciendo más difícil la mantención
del lugar y el control de la calidad del agua retenida.
Plano a una escala adecuada en el que se muestren las superficies que drenan
a la laguna y la naturaleza de cada una.
CiA
Q= (4.3.2.1)
3,6
Cámara de descarga. Esta es una obra que permite controlar los caudales
que la laguna entrega hacia aguas abajo, de manera que para las tormentas de
diseño no se sobrepasen los caudales máximos permitidos. El volumen de
almacenamiento de la laguna hasta el nivel del umbral de la cámara de
descarga permite almacenar las crecidas que llegan a él provocadas por
lluvias de periodo de retorno correspondientes a lluvias menores.
El fondo de la cámara se coloca a un nivel tal que sea posible vaciar
totalmente la laguna mediante un dispositivo especial para ello. El nivel del
umbral de la cámara se determina de manera que bajo él se puedan almacenar
las tormentas menores. Las dimensiones interiores deben permitir una
adecuada mantención, para lo cual se recomienda que sean al menos de 0,8m,
con una altura no superior a 2,0. Para alturas superiores a 1,5m es
conveniente disponer de escalines por la parte interior para acceder al fondo.
Existen diferentes alternativas de diseño para la cámara de descarga, la
mayoría de ellas en base a una cámara vertical conectada al sistema de
drenaje hacia agua abajo mediante una tubería que pasa bajo el muro
principal de la laguna. La cámara está abierta en su parte superior de manera
que a través de ella puede verter el caudal en exceso una vez que la laguna se
llena hasta ese nivel. En este caso la cámara debe disponer de dos elementos
adicionales. Uno para vaciar el volumen de crecidas y el otro para vaciar el
volumen permanente de la laguna para fines de mantención. La Figura
4.3.2.13 muestra un esquema general de la disposición de los elementos en la
cámara y los niveles a considerar para fines de dimensionamiento.
Figura 4.3.2.13: Elementos de la cámara de descarga : 1.- Base de anclaje, 2.- Tubería de
descarga, 3.- Descarga de fondo para vaciamiento total, 4.- Orificio para vaciamiento
del volumen de regulación de crecidas menores, 5.- Umbral de la cámara de descarga, 6.-
Reja, 7.- Puente de acceso (opcional), 8.- Baranda, (opcional). Niveles: A.- Fondo de la
laguna, B.- Nivel permanente, C.- Nivel de regulación para crecidas habituales o
menores de 2 a 5 años de periodo de retorno.
1/ 2
2 gH
Qevac = A ≤ Qmax (4.3.2.2)
K
L
K = 0,2 + 1,0 + f (4.3.2.3)
D
Figura 4.3.2.18: Cámara de descarga con tubo perforado para vaciamiento del volumen de
regulación de crecidas menores. 1.- Base de anclaje, 2.- Cámara ancho mínimo 0,8m, 3.-
Tubo de descarga, 4.- vaciamiento de fondo, 5.- Tapa del tubo, 6.- Reja, 7.- Pantalla , 8.- Tubo
perforado, 9.- Tubo de acero. C.- Zona perforada del tubo, d.- Distancia entre filas perforadas.
10 cm
Canería de fierro
Ductil o Acero.
Columnas
DETALLE
DIBUJO NO A ESCALA
10000
Volumen Almacenado(m )
3
1000
Profundidad en
el vertedero
25 cm
100 30 cm
40 cm
50 cm
65 cm
90 cm
10 120 cm
1 10 100 1000
2
Area de perforaciones requerida por fila (cm )
2S h
t vac = (4.3.2.5)
Ca 2g
El gasto que puede salir por un orificio de este tipo está dado por:
Para un vertedero grueso sin aristas se puede adoptar m = 0,36 y para uno con
aristas vivas m = 0,31 (F. J. Domínguez, Hidráulica, 1979).
dV
= Qe − Qs (4.3.2.10)
dt
(I t + I t + ∆t )
Qe = (4.3.2.11)
2
(Et + Et + ∆t )
Qs = 4.3.2.12)
2
∆t ∆t
Vt + ∆t − Vt = (I t + ∆t + I t ) − (Et + ∆t + Et )
2 2
2Vt 2V
(I t + I t + ∆t ) + ( − Et ) = t + ∆t + Et + ∆t (4.3.2.13)
∆t ∆t
Se supone que todas las cantidades al principio del intervalo son conocidas.
Además se conoce el valor del gasto de entrada al final del intervalo y debe
determinarse el gasto de salida y el volumen almacenado al final del
intervalo. Una vez seleccionado el intervalo de tiempo ∆t se puede construir
una relación, gráfica o numérica, de la función 2V/∆t + E, en función de E,
del nivel o altura de agua, h u otra variable identificable. Además se supone
que se conoce la relación entre V y E. El esquema de solución es el siguiente:
que éste sea capaz de evacuar la crecida correspondiente. Sobre esta altura de
agua se agrega una revancha de al menos 30 cm.
Flujo Base. Para que la laguna pueda contar con un volumen almacenado
permanentemente es necesario que el balance anual de agua sea positivo.
Ello puede lograrse si se coloca el nivel de vertido de la obra de evacuación
bajo el nivel de la napa freática del agua subterránea, con lo cual se asegura
una alimentación permanente y la obra se emplea como una obra de descarga
del acuífero. Para asegurar un volumen permanente es necesario que los
volúmenes que ingresan superen la pérdidas, para lo cual se puede emplear la
siguiente relación de balance:
Figura 4.3.2.24: Taludes laterales en base a un muro vertical, sin zona litoral.
Entrada. Debe disiparse la energía del flujo a la entrada tanto para evitar la
erosión como para facilitar la sedimentación. Para ello se puede recurrir a
disipadores de energía convencionales o protecciones de enrocados. El
volumen permanente puede facilitar la disipación de energía.
Reja para basura. Sobre la cámara de descarga se coloca una reja para
atrapar basura y cuerpos flotantes. Es conveniente que esta reja pueda
removerse para tener acceso al interior de la cámara. Para evitar problemas
de corrosión esta reja debiera ser de acero cincado o galvanizado. La Figura
4.3.1.30 muestra un ejemplo de una reja de este tipo.
Vegetación. Las bermas, los taludes y zonas laterales pueden plantarse con
vegetación natural o con pasto regado, dependiendo de las condiciones del
lugar y de los usos adicionales de la superficie que rodea la laguna. La zona
litoral menos profunda puede cubrirse inicialmente con una capa de suelo
vegetal y plantarse con especies acuáticas adecuadas a la condiciones del
lugar.
Accesos para mantención. Estas lagunas deben tener accesos para vehículos
que permitan llegar a la zona del desarenador y al elemento de descarga. Las
pendientes máximas de estos accesos no deben ser superiores al 8%. Cuando
sea posible se puede proveer de acceso pavimentados, o asfaltados y si no al
menos estabilizados con grava o maicillo.
Sondajes bajo la fundación del muro. Estos sondajes se realizan para asegurar
que la fundación será hecha en un lugar adecuado y que no se
verificarán problemas de falla en el suelo. Ellos pueden variar
mucho de una obra a otra y normalmente serán necesario si existen
dudas sobre las condiciones de fundación. Lo más común es
recomendar sondajes de reconocimiento, ubicados a lo largo del eje
del muro y en forma perpendicular a este eje en el lugar más alto del
muro o ensayos en el lugar repartidos en el eje y el pie del muro en
sectores que pueden esperarse como conflictivos. Las zonas a priori
más críticas son las de mayor altura del muro, los extremos y los
anclajes de obras en hormigón incluidas en el muro como cámaras de
descarga, tubos de desagüe y vertederos. Todas estas zonas deben
estar particularmente bien caracterizadas. En el caso de muros
pequeños, o suelos de fundación uniformes, estos sondajes pueden
reemplazarse por calicatas.
Los materiales extraídos del sitio pueden servir para la fabricación del muro,
si sus características mecánicas e hidráulicas lo permiten. En caso contrario,
se deben disponer en otro sitio y con otros usos.
Techos 112.000 m2
Calles 43.000 m2
Pasajes y veredas 25.200 m2
Estacionamientos 5.400 m2
Áreas verdes públicas 30.800 m2
Patios, jardín y antejardín 136.600 m2
Superficie total urbanizada 353.000 m2
P4010 = 11
, (105)(0,19)(0,858)(1,0) = 18,8mm
Se propone una laguna con una capacidad de regulación de 2500 m3. Para
tener una primera idea del tamaño se puede apreciar que este volumen se
logra con una superficie de 3000m2 y 0,83 m de profundidad media. Esta
superficie es menos de la mitad de la que se había estimado inicialmente para
el lugar. Se hará un diseño típico en dos niveles, empleando el inferior para el
agua permanente y el superior para la regulación de crecidas de aguas lluvias.
El nivel inferior estará ocupado por agua subterránea.
2 Ap h
Qvac = 0,61 2 gh
3(c + d )
2 * 0,0471 * 0,7
Qvac = 0,61 2 g 0,7 = 0,062 m 3 / s
3(0,7 + 0,1)
Para un vertedero con umbral horizontal de pared gruesa de ancho b, con una
carga de agua h, el caudal está dado por la relación 4.3.2.8:
Q=0,106(h-1,0)1,5
Para 1,7m < h < 2,0m
Q = 0,560 ( h + 0,2)0,5
Para 2,0m < h < 2,8m
Q= 5,578 ( h- 2,0)1,5 + = 0,560 ( h + 0,2)0,5
La laguna se supone que está llena hasta el nivel permanente (h=1,0), cuando
comienza una tormenta, de manera que el volumen de regulación se considera
a partir de este nivel hacia arriba.
Disposición general. En base a las dimensiones establecidas para el
volumen de almacenamiento y los niveles de los elementos de evacuación se
puede establecer una disposición general de la laguna, incluyendo los niveles
de los elementos de evacuación y descarga. El área inundada y el volumen
almacenado en función de la altura de agua se pueden determinar conocidas
las dimensiones de la obra y las curvas de nivel al interior de la laguna. Para
ello se mide el área encerrada por cada curva de nivel. Si Ai es el área
superficial de la laguna para la altura hi, el volumen parcial entre dos curvas
de nivel consecutivas se calcula como:
∆Vi =0,5(hi -hi-1)(Ai +Ai-1)
2000,0
1800,0
1600,0 Entrada
1400,0 Salida
Gasto (lt/s)
1200,0
1000,0
800,0
Vol. Almac.
600,0
400,0
200,0
0,0
0 1000 2000 3000 4000 5000
Tiem po (segundos)
D Muro vertical.
25 Hormigón grado H-30 con una dosificación
mínima de 385 kg. de cem. por metro
cúbico, colocado con moldaje. m3 140,4 4,702
660,161
26 Acero tipo A44-28H con resaltes para
hormigón armado, en barras, doblado y
colocado según los planos.
26.1 D=12mm Kg. 3596,0 0,016
57,536
26.2 D=10mm Kg. 2088,0 0,016
33,408
26.3 D=16mm Kg. 2552,0 0,016
40,832
Total 2561,386
Nota: Precios de referencia en UF ( Unidades de Fomento, 1 UF=$13.081,89 al 7 de
Octubre de 1996), según “Lista Oficial de Precios de Obras de Pavimentación
para Cobro por Gastos de Inspección año 1995”, MINVU y el “Boletín de
Precios Nº 276 de Mayo-Junio de 1996” del SERVIU Metropolitano.
Las franjas filtrantes y las zanjas con vegetación se consideran como obras
anexas importantes en la desconexión de áreas impermeables, lo que justifica
su inclusión, si bien se trata más de elementos complementarios que de obras
propiamente tales.
a. Descripción. Las Franjas Filtrantes son áreas planas regadas cubiertas de césped
denso o de otra cobertura atrayente que permita la infiltración, como gravilla
o piedrecilla de playa. Para favorecer la infiltración requieren de un flujo
parejo y de poca altura sobre toda la superficie. Las Franjas Filtrantes están
diseñadas para hacer escurrir el agua en forma de flujo superficial como
lámina continua, desde un extremo del plano hacia el extremo más bajo y no
de manera concentrada como ocurre con las canalizaciones (zanjas, soleras,
canaletas, etc.). Siempre que se produzca un flujo concentrado, este debe ser
distribuido uniformemente a lo ancho de la Franja Filtrante mediante una
franja de pavimento poroso u otra estructura que asegure un flujo en forma de
lámina. Estas franjas de pasto pueden combinarse con veredas,
estacionamientos o bermas adyacentes a zanjas de evacuación. Las franjas
filtrantes pueden tener repartidas dentro de ellas arbustos y árboles que
absorben nutrientes y dan sombra. En climas semiáridos es fundamental el
riego, pues se necesita mantener un pasto denso y saludable. Estas franjas no
son otra cosa que una forma de organizar los jardines y áreas verdes pequeñas
de manera de favorecer el escurrimiento uniforme en láminas y promover la
infiltración de las aguas lluvias en el lugar.
Las franjas filtrantes son estructuras sencillas, compuestas por unos pocos
elementos, cuya organización se muestra en la Figura 4.4.1.1.
El sitio debe tener una pendiente uniforme y ser capaz de mantener un flujo
superficial uniforme en todas partes. Las pendientes típicas de los sitios aptos
en condición original varían entre 2 y 10%. El área aportante depende de las
dimensiones de la Franja y de la capacidad de infiltración del suelo bajo ella.
Esta permeabilidad debe tomarse en cuenta para saber cómo puede afectar
esto a las estructuras y pavimentos adyacentes a las franjas.
Largo (en el sentido del escurrimiento). El largo (Lf) debe ser mayor que el
mayor de los valores siguientes para que resulte efectiva:
Lf > 2,5m (4.4.1.3)
a. Descripción. Las Zanjas con Vegetación se ven similares a una zanja cualquiera
pero son más anchas, funcionan como vías de drenaje con una densa
vegetación y pendientes bajas que conducen el agua lentamente y con baja
altura de escurrimiento. El diseño es similar al de un canal, pero su pendiente
longitudinal y el tamaño de su sección transversal está hecho de manera tal
que el escurrimiento superficial resulte lento y poco profundo, facilitando la
sedimentación y evitando la erosión. Se pueden instalar bermas y diques
pequeños si es necesario disminuir la velocidad de escurrimiento o favorecer
la sedimentación y la infiltración. Su objetivo principal no es conducir agua
como ocurre con los canales tradicionales.
Estas zanjas se pueden usar para recoger las aguas que escurren
superficialmente de estacionamientos, edificios, jardines residenciales,
caminos y franjas filtrantes. Pueden ser parte de los planes de desconexiones
de zonas impermeables. Estas zanjas cubiertas de vegetación pueden usarse
como una alternativa a sistemas tradicionales de soleras y redes de colectores,
especialmente para sectores residenciales poco densos. Este tipo de zanjas se
ubican bajo el nivel del suelo adyacente, y la escorrentía superficial ingresa a
ellas desde superficies laterales, ya sean jardines o calles. Son obras típicas de
desconexión de zonas impermeables.
La figura muestra un esquema de los elementos básicos de una zanja con
vegetación.
d. Factibilidad. Las zanjas con vegetación son prácticas sólo en lugares con
pendientes menores que el 3 o 4% y definitivamente no lo son en lugares con
pendientes superiores al 6%. La pendiente longitudinal del canal debe ser
menor que 1%, y a menudo necesitan gradas, escalones o pequeños muros
transversales para reducir la pendiente longitudinal.
Figura 4.4.2.2: Sección típica de zanja. b.- Ancho basal, z.- Talud, h.- Altura
de agua.
La clave de este diseño es que las zanjas deben ser capaces de mantener
velocidades de escurrimiento bajas durante tormentas pequeñas y que recojan
y conduzcan las aguas de tormentas más grandes. El diseño debe considerar
condiciones en que el uso del suelo del área aportante está totalmente
desarrollado. Si no es así, se corre el riesgo de que la obra quede
subdimensionada.
Estas gradas son de poca altura, del orden de 0,30 m de altura máxima sobre
el fondo de la zanja, de manera que no presentan problemas estructurales o de
disipación de energía al pie. Es preferible recurrir a una mayor cantidad de
gradas, colocadas más cerca unas de otras, que a gradas de mayor altura. La
grada de control propiamente tal puede confeccionarse de piedras sueltas,
terraplenes de piedras, troncos, durmientes y materiales similares.
R2 / 3 I 1/ 2
V= (4.4.2.1)
n
A
R= (4.4.2.2)
P
Drenaje y control de crecidas. Verificar el nivel del agua para eventos más
grandes como tormentas de 50 ó 100 años de periodo de retorno de manera de
asegurar que el drenaje de estos eventos se puede conducir por las zanjas sin
provocar inundaciones en ninguna parte de su recorrido. Para estas tormentas
extraordinarias las velocidades medias no debieran superar los 2,0 m/s.
minutos en relación a las lluvias de una hora es de 0,31 según la tablas 3.1.2.3
y 3.1.2.5 respectivamente. Entonces la precipitación de 5 minutos de
duración y 5 años de periodo de retorno es:
P55min
añ os
= P2410horas
añ os
horas CD1hora CF10 añ os = 102,9∗0,16∗0,31∗0,89 = 4,54mm
1hora
CD24 5min 5 añ os
Detalles. El plano adjunto muestra los detalles de esta zanja con vegetación.
En muchas zonas que están por urbanizarse los cauces naturales son tan
pequeños que no se aprecian a simple vista. Sin embargo, prácticamente
siempre existe la posibilidad de seguir la trayectoria que tendría el flujo en
condiciones naturales, lo que puede ser una buena guía para la ubicación de
canales de drenaje. Un buen criterio de planificación urbana siempre debe ser
capaz de reflejar incluso estas pequeñas redes de drenaje natural para reducir
costos de desarrollo y minimizar los problemas de drenaje posteriormente.
En algunos casos la utilización del sistema de drenaje natural en forma
inteligente puede evitar la necesidad de construir costosas redes de colectores
subterráneos para el drenaje de aguas lluvias.
Canales de tierra sin revestir. Este tipo de canales no debe ser considerado
como una alternativa para cauces de drenaje urbano de aguas lluvias.
Plano del trazado en planta del canal, en el cual se indiquen la comuna, calle
o calles cercanas. Delimitación de las áreas aportantes de agua y
sector al cual entrega el caudal recolectado.
Entre los hidráulicos se cuentan los que definen las dimensiones principales
como son la pendiente de la canalización, el caudal máximo, la producción de
sedimentos de la cuenca, el ancho disponible, la topografía del terreno y la
habilidad del cauce para drenar los terrenos adyacentes.
A los gastos máximos así resultantes deben agregarse los aportes adicionales
generados por otras causas, o por los otros usos del canal si los tiene.
V
F= (4.4.3.3)
A
g
L
Técnicas Alternativas para Soluciones de Aguas Lluvias en Sectores Urbanos 451
4.4.4. CAÍDAS Y DISIPADORES DE ENERGÍA
donde V, m/s, es la velocidad media en la sección, A, m2, el área y L, m, el
ancho superficial. La aceleración de gravedad, g, puede tomarse como 9,8
m/s2. El valor máximo para el número de Froude también se indica en la
Tabla 4.4.3.1. En general se trata de mantener el escurrimiento en régimen de
río, con F < 1,0, evitando los torrentes.
Tabla 4.4.3.1: Velocidades máximas ( y números de Froude máximos)
recomendadas.
Cubierta de pasto Velocidad máxima, m/s (número de Froude)
Suelos cohesivo Suelos no cohesivos
Sin vegetación 1,2 (0,5) 0,7 (0,3)
Pastos de jardín, mezclas nativas 2,1 (0,8) 1,5 (0,6)
Pastos naturales, alfalfa 1,3 (0,5) 0,9 (0,3)
Altura de agua de diseño. La altura máxima de agua debe reconocer que el
potencial de erosión se incrementa con la altura de agua, y con el tiempo que
se mantenga al flujo. Como criterio preliminar se recomienda que la altura
máxima de agua sobre suelos con vegetación no sobrepase de 1,5 m.
Pendiente de fondo. Los canales revestidos de pasto para que funcionen
bien tienen pendientes entre 0,001 y 0,006. Cuando la topografía del terreno
presenta pendientes mayores es necesario recurrir a caídas.
Coeficiente de rugosidad. El coeficiente de rugosidad de canales artificiales
revestidos de pasto depende del largo al cual se corte el césped, el tipo de
pasto, así como de la profundidad relativa del flujo. En todo caso se pueden
emplear para el diseño los valores de la Tabla 4.4.3.2 para situaciones de
canales rectos, sin matorrales, maleza ni árboles al interior de la sección
mojada.
Figura 4.4.3.12: Canal con solera de fondo. b.- Ancho de fondo, F.- Solera,
ancho mínimo 1,2 m, C.- Camino, T.- Taludes de pasto, I.- Área inundada,
B.- Ancho total mínimo, H.- Altura de agua mínima, menor que 1,5 m, R.-
Revancha.
Canal de fondo. En zonas urbanas debe darse especial atención a los flujos
menores, a veces flujos base que ocurren con posterioridad a las tormentas.
Algunos cauces que normalmente están secos antes de la urbanización, con
posterioridad presentan un flujo permanente debido al riego de jardines y
áreas verdes. Estos flujos continuos sobre zonas de césped destruyen el pasto
y pueden causar la degradación de la sección transversal por erosión
localizada del fondo una vez que la capa de pasto desaparece.
Figura 4.4.3.13: Canal con cauce para flujos menores. b.- Ancho basal, E.-
Enrocados, C.- Camino , T.- Taludes con pasto, I.- Área inundada, B.-
Ancho total mínimo, H.- Altura de agua máxima, 1 a 1,5 m, R.- Revancha.
Para mantener una pendiente de fondo pequeña puede ser necesario disponer
de caídas. En estas condiciones existe tendencia a la erosión inmediatamente
aguas arriba y aguas abajo de la estructura, incluso si las caídas son de
pequeña altura. En este caso es necesario el uso apropiado de revestimientos
de enrocado y disipadores de energía.
Eje Hidráulico. Se designa como eje hidráulico a una línea por la mitad de
la superficie libre del agua en función de la longitud del canal. En base a ella
es posible apreciar el nivel del agua para cada sección y definir las cotas de
los bordes. Una vez definidas las características de cada tramo, y de las
obras de arte necesarias, es conveniente calcular el eje hidráulico del
conjunto, ya que en general las obras de arte pueden modificar las
condiciones de escurrimiento normal en sus cercanías. Para ello se deben
establecer las secciones control, es decir aquellas en las cuales la altura de
agua se puede estimar independientemente de las condiciones de aguas arriba
o de aguas abajo. A partir de estas secciones se calcula la influencia hacia
aguas arriba en los tramos con escurrimiento de río y hacia aguas abajo en los
tramos con escurrimiento de torrente, hasta alcanzar las condiciones de
escurrimiento normal. Al conocer en detalle las alturas de agua en cada
sección, así como las velocidades medias, es posible proponer las alturas
totales de los muros del borde, las revanchas y las protecciones contra la
erosión si ello es necesario.
Técnicas Alternativas para Soluciones de Aguas Lluvias en Sectores Urbanos 456
4.4.4. CAÍDAS Y DISIPADORES DE ENERGÍA
Sin embargo un buen diseño del canal y de las obras de arte considera que
estas no alteren demasiado las condiciones de escurrimiento normal en los
tramos inmediatos, de manera que el eje hidráulico no sea muy diferentes del
que corresponde al flujo normal.
Los criterios de diseño son similares a los de los canales revestidos con
pasto. La principal diferencia es que en este caso no se permite el uso de
soleras o del canal de fondo, aunque si se considera un canal para flujos
bajos. Adicionalmente deben considerarse dos condiciones de diseño en
relación a la rugosidad. Para asegurar las condiciones de estabilidad se
selecciona la pendiente de fondo suponiendo que no existe vegetación, es
decir como si se tratara de un canal nuevo. Después, para asegurar la
capacidad de diseño una vez que la vegetación esté establecida y ocurra un
cierto grado de depósito de material, la revancha del canal se calcula usando
coeficientes de rugosidad en condiciones de desarrollo total de la vegetación.
Lluvia de diseño. El gasto de diseño del canal debe considerar todos los
aspectos generados por una lluvia de un periodo de retorno seleccionado de
acuerdo a lo siguiente:
A los gastos máximos así resultantes deben agregarse los aportes adicionales
generados por otras causas, o por los otros usos del canal si los tiene.
nc =
(n0 P0 + nb Pb ) (4.4.3.4)
P0 + Pb
0.1
0.09
Rugosidad
0.08
0.07
0.06
0.05
0 1 2 3
Altura normal, m
Taludes. Los taludes laterales del cauce deben ser 4H:1V o más tendidos.
Los taludes del canal de fondo pueden ser 2,5H:1V o más tendidos.
Curvas. El radio de las curvas horizontales debe ser superior al doble del
ancho superficial para las condiciones de gasto máximo, y por lo menos de
30m.
Dadas las condiciones del lugar el ancho basal del canal será de 4,0m y los
taludes laterales 5/1. Debe considerarse un camino como paseo y de
Técnicas Alternativas para Soluciones de Aguas Lluvias en Sectores Urbanos 462
4.4.4. CAÍDAS Y DISIPADORES DE ENERGÍA
mantención general de las obra a lo largo del canal. Los caudales
permanentes se estiman en un 2% del gasto de diseño.
La pendiente de fondo del canal será de 0,00106, es decir 1,06 metros cada
kilómetro.
1000*0,00106+5H=1000*0,004
de donde se deduce que las caídas deben ser de una altura de 0,59m cada una.
Estas caídas serán del tipo Caída Inclinada con Enrocados (ver 4.4.4).
Qn 1,8 * 0,05
donde = = 2 ,76
i 0,00106
Entonces el valor de h se obtiene de resolver numéricamente la igualdad:
[h( 4 + 5h)]
5
3
2 ,76 =
( 4 + 10,2 h)
2
3
La pendiente de fondo del canal será de 0,0064, es decir 6,4 metros cada
kilómetro.
1000*0,0064+5H=1000*0,012
de donde se deduce que las caídas deben ser de una altura de 1,12m cada una.
Estas caídas serán del tipo Caída Inclinada con Enrocados. (Ver 4.4.4). Estas
caídas se dimensionarán de manera que para el gasto de diseño respeten las
condiciones de escurrimiento normal en los tramos de aguas arriba y aguas
abajo, con el objeto de que alteren lo menos posible el eje hidráulico del
canal.
hinicial nbinicial Po Pb nc h Po nb nc
0,50 0,110 4,12 3,00 0,067 0,62 5,11 0,10 0,059
0,60 0,100 4,95 3,00 0,060 0,59 4,87 0,10 0,060
Cuando el canal esté nuevo, sin vegetación, debe tener una velocidad menor
de 1,5 m/s. En estas condiciones para una pendiente de 0,0064, una
rugosidad de n=0,030 resulta una altura de agua de 0,33m de acuerdo a la
ecuación de Manning, y una velocidad media de 1,11m/s que cumple con la
restricción.
Curvas. El canal podrá tener curvas de radio superior a 30m en el eje del
canal.
Figura 4.4.4.2: Configuración general de una CIE. 1.- Canal aguas arriba,
2.- Canal aguas abajo, 3.- Rápido, 4.- Cubeta, 5.- Zarpa, 6.- Emplantillado
filtro, 7.- Grada de término de la cubeta.
En ambos tipos de caídas, si se usan enrocados, es importante que la
profundidad del mortero de consolidación del enrocado no sea menor de los
dos tercios inferiores del tamaño nominal de las rocas. La apariencia y la
disipación de energía se pueden mejorar si la profundidad consolidada del
enrocado se mantiene a un máximo de tres cuartos del tamaño de las rocas, tal
como se ve en la Figura 4.4.4.3. Para el éxito del diseño es importante
adoptar cuidados adecuados en relación al control de las filtraciones, para lo
cual es conveniente que el enrocado consolidado se apoye en una capa
drenante y se dispongan barbacanas de alivio en el eje de la obra.
Figura 4.4.4.3: Detalle del enrocado consolidado. D.- Tamaño medio del
enrocado, d.- Espesor de la consolidación, dado por 0,67Droca<d<0,75Droca.
Figura 4.4.4.4: Caída Vertical con Cubeta Reforzada. 1.- Muro de hormigón,
2.- Canal de flujos bajos, 3.- Canal de crecidas, 4.- Cubeta, 5.- Meandros y
rocas grandes, 6.- Piedras enterradas, 7.- Aproximación.
Figura 4.4.4.5: CVR. Corte AA. 1.- Pared de hormigón, 2.- Canal de flujos
bajos, 3.- Sección aguas arriba, 4.- Sección aguas abajo.
Figura 4.4.4.6: CVR. Corte BB. 1.- Cubeta, 2.- Canal de flujos bajos, 3.-
Rocas de mayor tamaño, 4.- Taludes de enrocado consolidado.
2
Qt
bt
Dt = (4.4.4.1)
gYf
Dm = (Qm/bm)2/(gYf3) (4.4.4.7)
Ancho de la cubeta. El ancho debe ser el menor entre el ancho basal del
canal de crecidas y el de la base del vertedero en el umbral de la caída.
Grada. Existe una grada al final de la cubeta para ayudar a que el agua
alcance la altura de río (subcrítica) dentro de la cubeta, de manera que el
resalto se desarrolle dentro de ella. La protección con enrocados también
debe usarse aguas abajo de la grada para minimizar cualquier socavación
local causada por el despegue de la lámina de agua.
H1 = Hc (4.4.4.9)
Q2
H1 = h1 + (4.4.4.10)
2 g (bh1 + zh12 ) 2
siendo h1: altura de agua normal en el tramo de aguas arriba, metros.
Q: Gasto de diseño del canal de crecidas en el tramo de aguas
arriba, m3/s.
b: Ancho basal del canal de crecidas de aguas arriba, m.
z: Talud del canal de crecidas de aguas arriba, como H:V=z:1.
g: aceleración de gravedad, 9,8 m/s2.
2
Q 3
Hc = 0,702 (4.4.4.11)
bv
Q2
H c = hc + (4.4.4.12)
2 g (bv hc + zhc2 ) 2
Q 2 (bv hc + zhc ) 3
= (4.4.4.13)
g bv + 2 zhc
Técnicas Alternativas para Soluciones de Aguas Lluvias en Sectores Urbanos 481
4.4.4. CAÍDAS Y DISIPADORES DE ENERGÍA
Continuar con el enrocado en el fondo y las paredes del canal de flujos bajos
hasta unos tres metros aguas abajo del fin de la cubeta.
e. Ejemplo de caída vertical reforzada. Dimensionar una caída del tipo vertical
reforzada para un canal trapecial de 4m de ancho basal y taludes 5/1 con una
altura total de 1,0m y un gasto de diseño de 1,8m3/s. El canal de flujos bajos
es de 1,0m de ancho y 0,2m de profundidad para conducir 36lt/s. La altura de
la caída es de Hd =0,59m. La altura normal del canal para el gasto de diseño
es de 0,5m y en el canal de flujos bajo de 0,18m.
Dt=(0,036/1,0)2/(g0,893)=1,67 x10-4
Ld=4,3D0,27 0,89=0,36m
Yp=1,0D0,22 0,89=0,13m
El largo mínimo requerido para la cubeta está dado por la ecuación (4.4.4.6):
Esta longitud es menor que el mínimo recomendado para esta obra, de manera
que la cubeta tendrá un longitud mayor que la indicada por este cálculo, lo
que se traduce en que el resalto que genera la caída de flujos bajos no
presenta dificultades para ser contenido en el interior de la cubeta.
El largo requerido para que la cubeta contenga la mayor parte del resalto
generado por el caudal de crecidas es:
( 2,8h )
3
c + 0,25hc2 1,8 2
= = 0,3306
2 ,8 + 2 * 0,25hc 9 ,8
Figura 4.4.4.8: Caída inclinada con enrocados. 1.- Canal de flujos bajos,
2.- Zona de aproximación, 3.- Plano del vertedero, 4.- Rápido de descarga,
5.- Cubeta de disipación, 6.- Grandes rocas, b.- ancho basal del canal
principal, bt .- ancho del canal de flujo bajos.
Q2
H1 = h1 + (4.4.4.14)
2 g (bh1 + zh12 ) 2
siendo h1: altura de agua normal en el tramo de aguas arriba, metros.
Q: Gasto de diseño del canal de crecidas en el tramo de aguas
arriba, m3/s.
b: Ancho basal del canal de crecidas de aguas arriba, m.
z: Talud del canal de crecidas de aguas arriba, como H:V=z:1.
g: aceleración de gravedad, 9,8 m/s2.
2
Q 3
Hc = 0,702 (4.4.4.15)
bv
Q2
H c = hc + (4.4.4.16)
2 g (bv hc + zhc2 ) 2
H R = H1 + Hd + B (4.4.4.18)
Con ella se estima la altura del torrente al pie del resalto con la ecuación:
Q2
H R = ht +
2
(4.4.4.19)
2 g (b h
v t )
hc h2 h h2
+ t 2 = c + 22 (4.4.4.20)
ht 2hc h2 2hc
LR = 6h2 (4.4.4.21)
La cubeta debe tener al menos una longitud igual al largo del resalto.
0,552
H1 = 0,5 + = 0,52 m
2g
( 2,8h )
3
c + 4hc2 1,82
= = 0,331
2,8 + 2 * 4 + hc 9,8
1,82
Hc = 0,3 + = 0,438m
2g (2,8 * 0,3 + 4 * 0,32 )2
H R = H1 + Hd + B = 0,52 + 118
, + 0,60 = 2,3m
Con ella se estima la altura del torrente al pie del resalto con la ecuación:
1,82
2,3 = ht + 2 2
2 g (1,5ht + 4ht )
de manera que separen partículas del tamaño de las arenas gruesas o mayores.
Además la remoción de los sedimentos se hará en forma manual y periódica
ya que no dispondrán de sistemas automáticos de lavado. Desde el punto de
vista de la operación serán de formas simples, sin mecanismos de operación o
regulación y de flujo horizontal.
2−n
4d 1+ n g ( ρ s − ρ f )
V = (4.4.5.2)
3Cρ f
Vd
R= (4.4.5.3)
ν
Volumen AH
tR = = (4.4.5.4)
Gasto Q
H
tS = (4.4.5.5)
V
Q
A= (4.4.5.6)
V
L
≥5 (4.4.5.7)
B
La norma Nch 1367 recomienda que la longitud del sedimentador sea 9 veces
la profundidad.
Q
H> (4.4.5.8)
BW
1,2m, sobre todo si la limpieza se hace en forma manual. La norma Nch 1367
recomienda profundidades entre 1,5 y 3 metros, pero debe recordarse que se
trata de desarenadores para plantas de agua potable en las cuales las faenas de
extracción de sedimentos pueden ser facilitadas por otros medios.
Vd 0,04∗0,0003
R= = =8
ν 1,5∗10−6
Según la Tabla 4.4.5.2 para este valor corresponde la fórmula de Allen con
a=18,5 y n=0,6. Entonces el coeficiente de arrastre, C adimensional, de las
partículas es:
de donde se obtiene V=0,81 cm/s. Que resulta bastante menor que la que se
había estimado inicialmente.
0,9 = 1 − e 0 , 04
Cámaras tipo A. Para ser usadas en lugares públicos en los cuales existe la
posibilidad de tránsito de vehículos sobre la cámara, como es el caso de
cámaras ubicadas en calzadas, estacionamientos, pasajes para vehículos, patios
de carga y descarga e incluso veredas. Estas se construyen en hormigón
armado y disponen para el acceso de una tapa circular tipo calzada.
Cámaras tipo B. Para ser empleadas en lugares sin tránsito de vehículos, como
es el caso de áreas verdes, recintos privados, patios, jardines, interiores de
instituciones de acceso controlado. Se pueden construir en albañilería de
ladrillo y disponen para su acceso de una tapa tipo calzada.
Adicionalmente también pueden usarse cámaras de inspección prefabricadas del
tipo de las empleadas en redes públicas de alcantarillado dimensionadas de
acuerdo a la Norma Chilena Nch 1623.
Para ambos tipos de cámaras se emplearán tapas tipo calzada con marco, según
norma Nch 1632. Of79. En el futuro la autoridad municipal o el SERVIU
podrán requerir el uso de tapas similares especialmente diseñadas para sistemas
de aguas lluvias en zonas urbanas.
4.5. SELECCIÓN Y
USO DE LAS OBRAS
A continuación se revisan cuatro aspectos básicos necesarios para seleccionar
obras alternativas de drenaje urbano en casos específicos. Ellos corresponden a
criterios de selección considerando las condiciones del lugar, de la
urbanización, las perspectivas de otros usos y la influencia de la ubicación
geográfica. Posteriormente se proponen acciones específicas para el uso de las
obras presentadas en este estudio en el caso de urbanizaciones consolidadas y
nuevas, de manera de lograr que las denominadas obras alternativas
contribuyan a solucionar los problemas de aguas lluvias en ambas situaciones
de zonas urbanas. Por último se hace un análisis de las probabilidades de
ocurrencia, periodo de retorno y riesgo en relación a las aguas lluvias, como
una guía para seleccionar las condiciones de diseño de cada obra en particular.
4.5.1. Criterios de selección. Como una guía para la selección de las obras posibles
de diseñar se propone en primer lugar revisar las propiedades del lugar en
términos físicos para visualizar el tipo de obra más conveniente, así como
descartar otras que no se recomiendan. Similarmente se puede observar los
posibles beneficios y desventajas que puede presentar cada tipo de obra frente a
las características de la urbanización. También es de interés analizar los
posibles usos adicionales que se pueden potenciar con cada obra. Finalmente se
hacen algunas observaciones en relación a la ubicación geográfica de las obras
y su efecto sobre la selección de soluciones. Todo esto en conjunto entrega una
primera visión global para plantear un esquema de solución en que el uso de
obras alternativas puede tener enormes ventajas en relación a soluciones más
tradicionales.
Esta revisión es importante para destacar los aspectos que se deben considerar
con especial atención al momento de decidir emplear cualquier tipo de obra
alternativa o estar atento a los inconvenientes que se pueden generar una vez
iniciado el proyecto. En particular no se debieran emplear estas obras en casos
en que pueden presentar conflictos o su eficiencia puede verse tan afectada que
al poco tiempo pierden su utilidad. Tampoco es recomendable emplearlas en
casos en que la mantención de la obra sea demasiado onerosa, o se tengan
antecedentes para predecir que no se realizará.
Tabla 4.5.1.1: Incompatibilidades de las obras con condiciones del lugar, (1).
Condiciones D.A.I Elementos de infiltración Elementos de
del lugar . almacenamiento
(2)
Pavimento Estanque Zanjas Pozos Estanque Laguna
Suelo poco Si el suelo presenta esponjamiento
propicio a la con el agua la infiltración puede
presencia de provocar inestabilidad de obras. Debe
agua considerarse una salida de rebase
hacia otro receptor.
Agua Pueden emplearse con reserva y previa
subterránea verificación de las medidas de protección del
vulnerable acuífero receptor y sus usos
Poca capa- Si la capacidad de
cidad de absorción profunda es
infiltración buena
Aguas con- Prever Prever pre- No para No para
taminadas pretratamien tratamient otros otros usos
to o usos
Aguas con Se colmatan Se colmatan rápidamente
sedimentos rápidamente Prever decantador
Agua Problema Mejor
subterránea s me- nos
poco construc- exten-
profunda tivos y dida y
es- más
tructurale profunda
s
Sin agua
permanente
Sin salida
posible del
agua
Tráfico No hay
intenso experiencia
Poca Puede Puede
capacidad provocar provocar
de soporte problemas problemas
Pendiente Disponer de En zonas Disponer En zonas bajas de la
fuerte divisiones bajas divisiones red de drenaje
natural
La Tabla 4.5.1.2 presenta para cada una de las categorías urbanas comentadas,
los elementos de decisión que pueden considerarse en relación a las obras
alternativas típicas.
Los usos más destacados se relacionan con el efecto sobre el agua subterránea,
para emplear las obras de infiltración en la recarga de acuíferos, el uso de los
terrenos para áreas verdes, paisajismo o recreación. Así como otros usos
destinados a disponer de reservas de agua para incendios, lavado o riego.
Además se indica cuando el fin de control de las aguas lluvias es considerado
importante por el público que no cuenta con antecedentes específicos sobre el
tema. Resulta curioso destacar que ello sólo ocurre en las obras subterráneas
(zanjas y pozos de infiltración) que no tiene usos destacados en la superficie.
En general puede apreciarse que en las ciudades del norte del país el problema
para el empleo de soluciones alternativas radica principalmente en la escasez de
precipitaciones, o en lo esporádico que se presenta el problema de aguas lluvias.
Esto hace que la mayoría de estas técnicas presenten problemas de mantención
para permanecer operativas frente a eventos demasiado distanciados en el
tiempo. Sin lugar a dudas en algunos casos especiales podrá justificares la
incorporación de obras como las que se proponen en este estudio, sin embargo
en términos generales la escasez de vegetación o las dificultadas para mantener
una cubierta vegetal sana, no sólo en la obra sino en toda el área aportante,
harán que este tipo de obras o se colmaten rápidamente o se transformen en
zonas barrosas una vez que comienzan a recibir agua. En estos casos debe
ponerse especial cuidado en las cubiertas de las capas superiores del suelo, las
que a falta de una vegetación sana, podrían emplearse con gravillas, maicillo,
filtros de arena u otras alternativas similares que no demanden una mantención
excesiva.
Aunque se adopten todo tipo de medidas para disponer localmente de las aguas
lluvias, y se incluyan ellas desde el inicio del proyecto de la urbanización, de
manera que no existan restricciones mayores para impulsar libremente todo tipo
de medidas, ello no significa que no deban abordarse la inclusión de sistemas
convencionales de drenaje, incluyendo las redes de colectores. De hecho una
de las medidas básicas que debiera tomarse en toda urbanización nueva es
considerar la forma en que el drenaje al interior de la urbanización se incorpora
en la red general de la ciudad, si ella existe, o cómo afecta al drenaje hacia
aguas abajo, se disponga o no de un sistema convencional o desarrollado de
drenaje.
Sedimentos. Como medida general hay que considerar que los problemas de
aguas lluvias se agravan si además estas vienen cargadas de sedimentos y
contaminantes. Es, por lo tanto, importante realizar todos los esfuerzos para
que la escorrentía urbana no erosione las superficies del suelo y no produzca
sedimentos. Las obras de infiltración deben disponerse para infiltrar aguas
limpias, antes que estas corran el riesgo de contaminarse. Los elementos de
retención que reciban sedimentos deben mantenerse periódicamente para que
recuperen su capacidad de retención. La labor más eficaz de mantención puede
consistir en evitar las superficies erosionables, ya sea cubriéndolas de
vegetación natural si no se necesita riego, de pasto artificial con riego si ello es
factible, o de otras cubiertas como maicillo, gravillas o jardines de rocas si la
naturaleza del lugar lo admite. Evitar la producción de sedimentos en los
aportes de aguas lluvias contribuye eficazmente a la solución de problemas.
Desconexión de las áreas impermeables. Esta es una de las medidas que
puede emprenderse con mayor facilidad en las nuevas urbanizaciones. El éxito
de esta medida depende de que se desarrolle ampliamente con una gran
cobertura de aplicación y no de una obra específica. Se puede imponer como
parte de los requisitos de la urbanización a todas las construcciones que se
realicen en su interior. Si ella se adopta junto con las primeras etapas de la
nueva urbanización tiene más posibilidades de contribuir a disminuir los
excesos de aguas lluvias generados en el lugar. Consiste básicamente en
recomendar que el agua que escurre desde cada superficie impermeable no pase
directamente a otra superficie impermeable, sino que antes escurra sobre una
permeable, permitiendo y favoreciendo su retención e infiltración.
Una medida eficaz en este sentido consiste en imponer a todos los sitios con
patio interior que las aguas lluvias de los techos sean dirigidas al fondo del
patio y que sólo rebasen a la calle después de haber escurrido sobre los jardines
interiores, si ellos se consideran en el lugar. Los jardines interiores deberán
diseñarse de manera que retengan el agua que escurre desde los techos de la
misma casa. Esta medida se complementa con la materialización de franjas
Franjas filtrantes. Las franjas filtrantes son planos cubiertos con vegetación que
reciben las aguas lluvias en toda su extensión por un extremo, las
retienen e infiltran para evacuar sólo los excesos por el otro. En una
urbanización nueva se puede asociar a todas las veredas, pasajes y
estacionamientos, que son impermeables, una franja filtrante a su
lado hacia donde escurre el agua que cae sobre ellas y tiene la
oportunidad de infiltrarse. Las calles con bandejones o jardines
centrales deben drenar hacia ellos, para lo cual estos jardines se
proyectan a un nivel inferior y conectados a las calle mediante
soleras discontinuas que permitan el paso del agua.
Zanjas con vegetación. En los lugares en que exista espacio, o cuando se junte
una cantidad de agua suficiente, a los costados de los caminos e
interceptando el flujo que sale de los terrenos privados, se puede
disponer de zanjas con vegetación que acumulen, retengan e
infiltren las aguas lluvias. Este tipo de obras depende de las
características de la urbanización ya que no siempre es posible
incorporarlas.
pueden predecir con exactitud sino sólo mediante una descripción estadística o
probabilística. Sin embargo, para determinar las dimensiones de las obras se
deben seleccionar valores concretos y específicos de las variables que definen
las lluvias. En todo caso, dada la naturaleza probabilística de los eventos
lluviosos es claro que siempre debe aceptarse un cierto riesgo de que la obra sea
superada, ya que aunque sea poco probable siempre es posible concebir un
evento peor al de diseño. Lo importante es seleccionar una lluvia de diseño que
entregue un riesgo razonable, o aceptable para los fines que persigue la obra y
concordante con la aversión al riesgo de mal funcionamiento que tenga la
comunidad a la cual sirve. Ello dependerá en gran medida de las consecuencias
que tenga el hecho de que la obra sea superada por eventos mayores que los de
diseño y la frecuencia con que ello ocurra.
1
T= (4.5.3.1)
P0
N
1
R = 1 − 1 − (4.5.3.2)
T
La Tabla 4.5.3.1 muestra valores del riesgo de falla para diferentes valores del
periodo de retorno de la lluvia de diseño y de la vida útil de la obra.
Tabla 4.5.3.1: Riesgo de falla en función del periodo de retorno (años) y la vida
útil de la obra (años).
Periodo de Vida útil de la obra ( años)
Retorno (años) 2 5 10 15 20 30 50 100
2 0.75 0.97 1.00 1.00 1.00 1.00 1.00 1.00
5 0.36 0.67 0.89 0.96 0.99 1.00 1.00 1.00
10 0.19 0.41 0.65 0.79 0.88 0.96 0.99 1.00
20 0.10 0.23 0.40 0.54 0.64 0.79 0.92 0.99
50 0.04 0.10 0.18 0.26 0.33 0.45 0.64 0.87
100 0.02 0.05 0.10 0.14 0.18 0.26 0.39 0.63
Otro valor de interés que se puede estimar a partir del periodo de retorno de la
obra y la duración de la vida útil es la cantidad de veces en promedio que se
espera que la obra sea superada por un evento peor que el de diseño. Este valor,
que puede definirse como el número esperado de fallas, es útil cuando las fallas
no son catastróficas, de manera que la obra sigue en pie y operando para otros
eventos, y el que sea superado el evento de diseño sólo significa problemas de
operación. Esos valores se presentan en la Tabla 4.5.3.2.
En el caso de las obras de infiltración se supone que los gastos no aceptados por
la obra cuando queda sometida a tormentas mayores que la de diseño en ningún
caso superarán los 0,1 m3/s. Para el caso de los vertederos de rebase de los
estanques y las lagunas de retención los caudales no debieran superar los 2 m3/s
para tormentas de 100 años de periodo de retorno. En todo caso caudales de
esta magnitud debieran ser conducidos hacia aguas abajo por una red de drenaje
adecuada, de manera de asegurar que no provoquen daños.
necesarias de las obras y por lo tanto más caras de construir. Sin embargo los
costos asociados a las fallas de operación se reducen.
Entre los costos de falla se debe considerar los efectos hacia aguas abajo, los
daños directos e indirectos. Estos tienen un carácter aleatorio por lo tanto
habitualmente se estima un valor esperado de los daños para cada año que
dependen del caudal por el cual la obra es excedida. Empleando una tasa de
interés adecuada se actualizan los costos anuales durante la vida útil de la obra,
obteniendo un valor actualizado de los daños anuales esperados de la obra.
Estos costos son decrecientes con el periodo de retorno de diseño. Es decir si el
periodo de retorno de la tormenta de diseño es grande los daños esperados son
menores. En el caso de obras de aguas lluvias urbanas uno de los aspectos que
resultan más complejos de evaluar son los efectos hacia aguas abajo de las
fallas de operación de las obras.
4.6. PRESENTACIÓN DE
PROYECTOS
4.6.1. Profesional responsable. Todo proyecto de obras alternativas de drenaje
urbano debe ser desarrollado por un profesional responsable, quien lo
presentará para su aprobación a la institución que corresponda. Los
profesionales habilitados para proyectar infraestructura de aguas lluvias son los
Ingenieros Civiles. Otros profesionales que pueden habilitarse para proyectos
de aguas lluvias, como Arquitectos, Constructores Civiles y otros, deberán
contar con la autorización de los servicios que aprueban los proyectos, o estar
inscritos en registros especiales que se consideren para tal efecto, siempre que
los caudales máximos del proyecto no sobrepasen los 50 litros por segundo, en
cuyo caso el profesional responsable será un Ingeniero Civil.
sector y sus principales accesos. Mostrar la red de drenaje hacia aguas abajo
hasta su descarga definitiva si se trata de una obra de almacenamiento. Dibujar
a una escala adecuada al tamaño del proyecto.
Plano de planta. Contendrá una relación de la obra y sus principales
elementos. Incluirá las referencias de ubicación en planta y altura para
emplazar cada uno de los elementos de al obra de acuerdo al proyecto. En
especial deben considerarse los siguientes aspectos:
Individualización de la zona servida o drenada hacia el proyecto, con indicación
de los límites de cada uno de los tipos de suelos o superficies comprometidas,
en su condición previa o natural si es necesario y urbanizado o totalmente
desarrollada.
Curvas de nivel que indiquen la forma del drenaje, natural o modificado, hacia
la obra. Elementos considerados para encauzar los caudales drenados hacia la
obra si se consideran en el proyecto.
Red de drenaje hacia la cual la obra descarga, si se trata de una obra de
almacenamiento o los rebases y caudales no aceptados en otros casos.
Indicación de ubicación, coordenadas y cota, de al menos un punto de
referencia para el emplazamiento de la obra de acuerdo al proyecto.
Ubicación en planta de los principales elementos de la obra referidos a puntos
de referencia topográficos.
Perfiles longitudinales. Estos considerarán los perfiles según el recorrido del
flujo, con indicación de las distancias y cotas de los elementos que conforman
el funcionamiento hidráulico de la obra, de manera que queden emplazados
tanto en planta como en elevación de acuerdo a los requerimientos del proyecto.
Elementos principales. Planta, perfiles y detalles necesarios para materializar
los elementos que conforman la obra. Indicación de espesores, fundaciones,
materiales, elementos estructurales, terminaciones, líneas de excavación y
relleno.
Detalles y obras complementarias. Incluir todos los detalles necesarios para
completar el proyecto en su conjunto, considerando incluso los usos
alternativos o secundarios considerados. Poner especial atención a los aspectos
de paisaje y adecuación al entorno. Indicar tipo y ubicación de plantas, zonas
con vegetación, sistemas de riego, accesos permanentes y demás detalles
necesarios.
a. Puntos de referencia. El constructor deberá colocar los puntos de referencia que sean
necesarios para el control de los niveles. Los puntos podrán materializarse
en estructuras vecinas o en monolitos especiales de forma tal que sean
permanentes y no sufran variaciones. En caso de proyectos de gran extensión,
con obras separadas a más de 300m deberán materializarse puntos de
referencia adicionales separados a menos de esa distancia.
El sistema de cotas será el del IGM de manera de poder relacionar los niveles
de la obra con la red de drenaje general del sector.
e. Taludes, pretiles y muros de tierra. Los taludes de muros formados por excavación
o relleno para formar los bordes de estanques o lagunas sobre los cuales se
pondrá vegetación o pasto, deberán seguir las líneas de los planos cuidando
especialmente el trazado y nivel de las líneas del coronamiento.
Las líneas del coronamiento de los muros no deben diferir de las teóricas en
más de 20cm en planta y sus niveles como máximo en 1cm.
5.1.2. Geotextiles. Los geotextiles han probado su efectividad en los últimos años en
una variedad de sistemas de drenaje construidos bajo la superficie del suelo.
Pozos. En el caso de pozos se trata de una obra sin una dirección preferente,
de manera que la tela deberá cortarse para su mejor aprovechamiento en
piezas que consideren las dimensiones del pozo. Se recomienda adoptar las
medidas que se indican a continuación.
Las ruedas de los camiones no deben entrar en contacto con las telas
geotextiles durante la etapa de vaciado de los agregados.
El peso específico del material deberá ser superior a 2,6 Ton/m3. Dicho valor
deberá ser certificado por un laboratorio autorizado y presentado por el
Constructor a la Inspección Técnica de la Obra antes de iniciar la explotación
de la cantera.
La forma de las rocas será tal que en cada una de ellas su mayor dimensión no
alcance al doble de la dimensión menor, excepto en los casos que se indiquen
específicamente en el proyecto.
Carguío de roca. El carguío de roca sobre los camiones tolva u otros medios
de transporte que utilice el Constructor, podrá realizarse con cualquier
método que prevenga la ruptura de las rocas.
Para ello deberá replantear mediante lienzas y/o tizas los ejes principales de
la obra, apoyándose en los PRs dispuestos con anterioridad en el terreno o en
forma propia por el Contratista según lo señalado en el punto 5.1.2a y cuidar
la elección de las rocas para usar en cada lugar de la obra, de forma tal de
mantener la buena apariencia de la estructura.
El mortero se ubicará entre los espacios de las rocas, cuidando que se rellenen
todos los espacios entre rocas hasta una profundidad no menor que los dos
tercios inferiores del tamaño nominal de las rocas ni mayor a los tres cuartos
de este mismo tamaño. Se debe cuidar la apariencia de las rocas, evitando las
salpicaduras de mortero. En caso de que esto ocurra se deberá proceder a la
limpieza inmediata para prevenir un daño definitivo.
5.1.4. Gaviones. Para atender las mismas necesidades que resuelve el enrocado, en
cuanto a protección de riberas, podrá utilizarse alternativamente las materias
primas y técnicas del engavionado, especialmente cuando explotar y
suministrar roca constituya circunstancialmente un problema en el área de las
obras.
El material deberá estar limpio, libre de finos de tamaño inferior a 0,1 mm.
Esto se consigue mediante el lavado en planta con agua limpia de dicho
material. No se emplearán para el relleno piedras provenientes de la
excavación que contengan capas superficiales de arcillas y limos.
Ninguna especie de pasto es ideal para todos los casos. Los tipos erectos de
mechones, como por ejemplo el género Festuca, forman un césped elástico
pero que no se propaga muy rápido. Las especies de Agrostis crecen hacia
afuera y luego erguidas, pero si se les estimula a desarrollarse más juntas
mediante riego, abonado y cortes frecuentes, forman un césped fino y tupido.
Las Gramineas rastreras como por ejemplo el género Poa tienen estolones o
rizomas horizontales y se extienden para formar un césped vigoroso. Las
especies de Lolium son efímeras y gruesas pero crecen con rapidez y resultan
baratas. Phleum Pratense es rastrera y se usa en campos de deporte. Las
semillas de césped que se encuentran en el comercio suelen contener una
mezcla de varias especies para combinar distintas características y garantizar
que al menos un componente prosperará en las diversas condiciones que
Entre las plantas palustres de mayor talla se encuentran los géneros Gunnera
y Phormium. La Nalca, Gunnera manicata, produce ejemplares vigorosos
con hojas enormes de 1,5m a 2m de diámetros sobre tallos de altura similar.
Entre las de mejor floración están los lirios Iris kaempferi y sus formas, de 60
a 90 cm.
5.2.1. Instalación. Previo a los inicios de los trabajos es necesario que el constructor
considera la realización de una serie de actividades destinadas a facilitar la
construcción. Esto supone pagar derechos, conseguir permisos, instalar
puntos de referencia y otras labores.
5.2.5. Rellenos. Antes de iniciar las labores de relleno debe haberse aprobado por
parte de la inspección de la obra los sellos de fundación o los niveles de la
excavación u otros elementos que vayan a quedar cubiertos por el material del
relleno.
Moldajes. Los moldajes deben estar firmes, con apoyos suficientes para no
experimentar movimientos durante la faena de hormigonado. Antes de
proceder al vaciado del hormigón las dimensiones de los elementos debieran
ser verificadas por la Inspección Técnica de la Obra, ITO.
5.2.8. Vegetación y césped. Una vez terminadas las obras de carácter subterráneo
y superficial de drenaje, así como definidas las cotas de las superficies
definitivas, se puede proceder a la colocación de la capa vegetal de acuerdo a
las condiciones definidas en el proyecto.
5.2.9. Elementos especiales y para otros usos. Una vez que se encuentren las
labores de movimiento de tierras y hormigones terminados se procede a la
colocación de elementos especiales y de otros usos.
Otros elementos. Pueden formar parte del proyecto de drenaje todas las
obras complementarias para aprovechar el espacio con otros fines. Esto
incluye la colocación de rejas, bancos, iluminación, veredas, y obras
complementarias consideradas en el proyecto.
Instalación
Topografía
Derechos y permisos
Trazado preliminar
Trazado definitivo
Seguridad
Preparación del terreno
Descepe, despeje y remoción
Accesos
Servicios
Excavaciones
Rellenos
Hormigón
Emplantillados
Moldajes
Enfierraduras
Insertos
Hormigonado
Desmolde
Enrocados, gaviones, cubiertas y protecciones
Vegetación y césped
Sistema de riego
Tierra de hojas
Siembra y plantación
Elementos especiales y para otros usos
Válvulas, compuertas y rejas
Otros usos
Limpieza y retiro
Inspección
La ficha que se propone contiene los siguientes apartados que deben llenarse:
identificación, ubicación, condiciones de la inspección, aseo y ornato,
prevención, reparaciones y observaciones.
Código = TO-P-T-AÑO
EI Estanque de Infiltración.
ZI Zanja de Infiltración.
PI Pozo de Infiltración.
PP Pavimento Poroso.
PC Pavimento Celular.
ER Estanque de Retención.
LR Laguna de Retención.
CP Canal de Pasto.
CG Canal de Vegetación.
FF Franja Filtrante.
ZF Zanja Filtrante.
SE Sedimentador.
CV Caída Vertical.
CE Caída de Enrocados.
ZI-M-GP-1996
INSPECTOR....................................................................FIRMA.........................................
Observaciones y recomendaciones........................................................................................
................................................................................................................................................
...............................................................................................................................................
...............................................................................................................................................
...............................................................................................................................................
...............................................................................................................................................
...............................................................................................................................................
...............................................................................................................................................
................................................................................................................................................
Si No Siembra de
césped, en m2..................................................................
Si No Pintura de elementos de
hormigón, en m2.........................................
Si No Control de vegetación
2
indeseada, en m ............................................
Si No Limpieza de alcantarillas, en
número................................................
Si No Limpieza de sumideros, en
número....................................................
Si No Limpieza de cámaras, en
número....................................................
Si No Limpieza de cunetas, en
metros....................................................
metros...........................................
Si No Limpieza de caídas, en
número....................................................
Observaciones y recomendaciones........................................................................................
................................................................................................................................................
................................................................................................................................................
REPARACIONES DE IMPORTANCIA
Si No Movimiento
de tierras. Excavaciones, rellenos, terraplenes y similares.
Indique..................................................................
Si No Obras de hormigón.
Pavimentos, radier, muros, y similares
Indique.............................................................................................
Si No Obras de acero sin mecanismos.
Tubos, rejas, barandas, y similares
Indique......................................................................................
Si No Obras de acero con
mecanismos. Válvulas, compuertas y similares
Indique......................................................................................
Si No Otras reparaciones mayores que
considere necesarias.
Indique......................................................................................
Frecuencia. La frecuencia con que deben realizarse las inspecciones dependerá del tipo
de obra y sus condiciones de operación, las que están dadas por el tamaño de
la zona servida, le exposición de la obra a otros usos y las condiciones
climáticas del lugar. Como referencia pueden considerarse las frecuencias
recomendadas en la Tabla 6.1.1, las que podrán modificarse a partir de la
experiencia que se adquiera en las primeras inspecciones.
6.2.1. Cuidados del césped y vegetación. Entre las labores rutinarias habituales debe
considerarse el cuidado de la vegetación que cubre la superficie de muchas de
estas obras. Se ha mencionado que una cubierta vegetal formada por pastos
sanos son la mejor solución para la erosión de los suelos, y además
proporcionan múltiples beneficios urbanos para otros usos.
En las zonas en que el cuidado del pasto resulte muy oneroso se puede
recurrir a otro tipo de cubierta para las obras alternativas que lo requieran, de
acuerdo a las recomendaciones que se hacen para el diseño de las obras.
Deben hacerse todos los esfuerzos de diseño para evitar que a las obras
lleguen cantidades importantes de sedimentos, para minimizar los problemas
de mantención. Esto se puede lograr mediante las siguientes acciones: a) las
superficies drenantes a la obra deben estar habitualmente limpias, para lo cual
6.2.3. Limpieza y retiro de basuras. Las obras no requieren de una labor de limpieza
especial más allá de las que habitualmente se realiza en espacios de uso
público, por lo tanto esta labor debe desarrollarse en conjunto con la del
entorno en el cual se ubican las obras de drenaje. Sin perjuicio de lo anterior,
por tratarse de lugares que reciben agua, es posible que acumulen basuras y
elementos extraños arrastrados por éstas durante las tormentas y por lo tanto
requieran de una atención más cuidadosa.
CONCLUSIONES Y
RECOMENDACIONES
ingreso medio de los habitantes de una zona. En este sentido muchas de estas
obras se justificarán económicamente en la medida en que se mejore el
ingreso per cápita del país y se incrementen los niveles de desarrollo.
También es posible observar que los beneficios pueden ser apreciados desde
el punto de vista social, el mejoramiento de la calidad de vida de sectores de
escasos recursos, o el mejoramiento de barrios deprimidos desde el punto de
vista comercial.
d. Empleo de la Guía. Esta Guía propone soluciones alternativas para los problemas
de aguas lluvias en sectores urbanos, desarrollando aspectos de diseño así
como generales y complementarios para abordar de manera completa las
soluciones propuestas. La parte principal de esta Guía está dedicada a la
selección y diseño de obras que puedan adaptarse a diferentes situaciones
específicas para la solución de problemas concretos. Adicionalmente se
presentan y discuten aspectos generales que orientan las soluciones y se
entrega información complementaria y antecedentes para el
dimensionamiento de las soluciones. La lectura de estos capítulos dedicados
a antecedentes específicos de hidrología, suelos, clima, urbanismo y legal
puede ser útil si se requieren para avanzar en la solución de situaciones
particulares, sin embargo no es necesaria su lectura completa para el diseño
de soluciones. En todo caso se recomienda que quien lea por primera vez la
Guía se familiarice con los aspectos generales y criterios básicos
considerados en el tipo de soluciones que se proponen. Un glosario de los
términos especiales relacionados con el tema puede ayudar a comprender
mejor los aspectos tratados. Si es necesario profundizar en el conocimiento
del tema se puede consultar las referencias que se mencionan.
e. Aspectos legales. No existe en Chile una Ley especial que regule los aspectos
legales relativos a las aguas lluvias en zonas urbanas, más bien se encuentran
dispersos en diferentes cuerpos legales que contiene artículos aplicables a
distintas situaciones. Son de interés las disposiciones que establece la
Constitución Política de la República, el Código Civil, el Código Sanitario y
el Código de Aguas entre otros. Además para obras o iniciativas que
emprendan los Ministerios de la Vivienda y Urbanismo y el Ministerio de
Obras Públicas deben considerarse las respectivas leyes Orgánicas. Similar
situación afecta iniciativas comunales en relación a la Ley de
Municipalidades. Respecto a las obras mismas, y dada su condición de obras
urbanas, deben considerarse las disposiciones de la Ley General de
Urbanismo y Construcción, así como la Ordenanza General. Otros cuerpos
legales que contienen referencias al tema son la Ley General de Servicios
Sanitarios y la Ley Orgánica de la Superintendencia de Servicios Sanitarios,
ambas en el sentido de desligar los problemas de aguas lluvias al tema de la
empresas sanitarias. La recientemente promulgada Ley sobre Bases
Generales del Medio Ambiente alude a algunos aspectos del tema.
f. Marco geográfico. Las soluciones propuestas en esta guía son aplicables a todo el
territorio nacional, reconociendo la gran diversidad de situaciones que en él
se presentan debido a las profundas diferencias climáticas, hidrológicas, de
suelos y urbanas que se pueden encontrar. Para poder compatibilizar las
soluciones con las condiciones de cada lugar se ha incorporado en la Guía un
capítulo dedicado a poner en evidencia los aspectos destacados de cada lugar
en relación al clima, el comportamiento de las precipitaciones, la
g. Diseño de las obras. El diseño de estas obras debe hacerse de manera específica
para cada lugar, ya que las dimensiones de la obra y sus principales
características están condicionadas por los factores climáticos, urbanos, de
suelos de cada lugar, así como el tamaño y tipo de las áreas servidas. En esta
guía se presentan los métodos para el diseño de estas obras.. A las
recomendaciones explícitas incorporadas deben agregase todas aquellas que
tiendan a mejorar las soluciones, como el conocimiento del lugar que tenga el
proyectista y su propia experiencia en obras similares. Dado el poco
desarrollo que tienen este tipo de soluciones en Chile es importante ir
acumulando experiencia para mejorar las soluciones en el futuro.
lo menos que no provoquen problemas hacia aguas abajo. Este tipo de obras
no tienen restricciones en cuanto a las condiciones del suelo, de manera que
pueden emplease cuando las obras de infiltración no se puedan construir, pero
requieren un mayor espacio en superficie. Debido a esto último son muy
ventajosas cuando se asocian a parques y espacios abiertos. Además se
proponen una serie de obras anexas que generalmente no operan solas pero
que pueden ser un muy buen complemento de las otras. Especial atención se
le ha dado a los cauces urbanos debido a que ellos han sido motivo de
conflicto permanente en las urbanizaciones de la zona central de Chile, y sin
embargo podrían incorporarse con ventaja a las nuevas urbanizaciones si se
consideran criterios de diseño adecuados como los que se proponen en esta
Guía.
Con las obras propuestas no se ha pretendido agotar el tema. Existe una gran
cantidad de obras posibles que no han sido abordadas en esta Guía y que
podrían ser la solución de diversas situaciones particulares. En especial no
se ha considerado el almacenamiento en techos, ni estanques enterrados, o
cañerías paralelas a redes, entre otros. Este tipo de obra requieren soluciones
más detalladas y por lo tanto se deja a criterio de los especialistas su empleo.
Las referencias incluyen las citadas en el texto y otras de carácter más general
que pueden ser útiles para quien aborde el tema de las obras alternativas de
drenaje urbano. Sin embargo se ha tratado de no incluir temas más amplios
de ingeniería para evitar una dispersión excesiva de referencias y no abrumar
al lector con la creencia de que es necesario revisar o disponer de una gran
cantidad de material bibliográfico para participar en las soluciones.
Actualmente el tema del drenaje urbano genera una gran cantidad de material
escrito en revistas especializadas y en congresos internacionales,
incorporándose cada vez nuevos aspectos, tecnologías y visiones del
problema.
Anexo 1
REFERENCIAS
LEGALES
Con todo, el sistema jurídico nacional posee respuestas legales suficientes para
obtener una solución competente y oportuna, al menos para los problemas de
aguas-lluvias de más ordinaria ocurrencia, tales como inundaciones o
anegamientos en calles y avenidas o en espacios de uso público en general.
1.1.2. Código Civil. El Código Civil sigue siendo una importante fuente de derecho
común para dilucidar algunas situaciones vinculadas con las aguas-lluvias, los
anegamientos e inundaciones. En este Código se hace referencia a la Naturaleza
jurídica de las aguas, la Administración y aprovechamiento de tales aguas, el
Riesgo por causa de inundación o anegamiento, la Ruina de un edificio, los
Depósitos o corrientes de agua, o materias húmedas y el tema de las
Servidumbres.
Las aguas son bienes nacionales de uso público y se otorga a los particulares el
derecho de aprovechamiento de ellas, en conformidad a las disposiciones que el
Código de Aguas establece (Art. 5). Entre estas disposiciones cabe destacar el
derecho de aprovechamiento, las condiciones de canales y cauces artificiales
los derrames, sistema de drenaje y las estadísticas pluviométricas.
1.1.6. Ley General de Urbanismo y Construcciones. Esta ley fue aprobada por
D.S. (V. y U.) N° 458, de 1976, publicado en el D/O del 13 de Abril de 1976.
Su Título II, "De la Planificación Urbana" permite situar el problema que
interesa en el marco general en que corresponde. El Art. 34, situado en el
párrafo 3° del título antes citado, se define y establece la estructura de
planificación urbana nacional, e indica que el desarrollo físico de las áreas
urbanas y rurales de diversas comunas que por sus relaciones se integran en una
unidad urbana , debe realizarse mediante un plan que se denomina Plan
Intercomunal y que cuando el tamaño de población de dicha unidad sobrepasa
los 500.000 habitantes, dicho plan se denominará plan Regulador
Metropolitano. Son relevantes las disposiciones en relación al Saneamiento de
poblaciones y Normas sobre diseños.
En la Ley General de Urbanismo y Construcción el tema de las aguas lluvias
debe buscarse en los apartados relativos a los problemas de Saneamiento de
Poblaciones, Normas de Diseño y Ejecución de Obras de Urbanización y
Edificación.
1.1.12. Ley sobre Bases Generales del Medio Ambiente. Esta Ley
corresponde a la Num. 19300, publicada en el Diario Oficial el 9 de marzo de
1994.
1.2.8. Normas Chilenas y otras que regulen la materia. A este respecto puede
señalarse que el Instituto Nacional de Normalización es el organismo
encargado de oficializar las normas técnicas exigibles en Chile. En materias de
aguas-lluvias propiamente tales no existen normas específicas que planteen
exigencia respecto de ellas.
TIPOS DE
URBANIZACIÓN
Para el tema que aquí interesa se pueden distinguir los siguientes tipos de
urbanización, de acuerdo a la forma física en que se hace la ocupación del
territorio: tradicional, en densidad, de ciudad jardín, nuevos barrios,
poblaciones de carácter social, semirural o parcelaciones, zonas industriales,
institucionales y de áreas verdes.
metros de lado. Esta urbanización se realiza a partir de una plaza central que
ocupa la superficie de toda una manzana. En las manzanas la edificación se
concentra en la periferia, con las construcciones conformando la línea de la
calle, hacia el interior diversos patios cada vez menos edificados dejan huertos
al interior de las manzanas. En los comienzos, y hasta la construcción de los
sistemas públicos de alcantarillado, existe una red de canales por el interior de
las manzanas que evacuan las aguas servidas y conducen las de riego. Las
calles son regulares y todas del mismo tamaño, generalmente no tienen árboles
y la vegetación se concentra en los patios y huertos interiores.
Este sistema crece por extensión, alargándose las calles, aumentando las
manzanas y la edificación, manteniéndose el esquema regular por un largo
periodo de tiempo que va desde el siglo XVI hasta mediados del siglo XIX.
En varias ciudades cuando este damero alcanza una cierto tamaño - doce a
veinte manzanas de lado- se cierra con un anillo de avenidas, o a veces sólo por
uno, dos o tres de los lados. Estas avenidas, designadas también como
alamedas, son mucho más anchas que las calles que forman el damero, llegando
a tener de treinta a cincuenta metros de ancho, con paseos, árboles y jardines.
Este sistema de urbanización ocupa hoy en día los centros de las ciudades y por
extensión es la forma en que se construyeron algunas expansiones urbanas
anteriores a 1930.
Los espacios públicos están conformados por calles, avenidas y pasajes, estos
últimos generalmente techados. Todo el espacio público está pavimentado, o
tiende a pavimentarse, sin embargo aunque las calles y avenidas tienen árboles,
los subsuelos de los espacios públicos están ocupados por gran cantidad de
instalaciones subterráneas de servicios. En algunos centros urbanos junto con
esta densificación se construyen sistemas tradicionales de recolección de aguas
lluvias en base a redes de colectores separadas de las aguas domésticas, como
ocurre en el centro de Santiago, Valparaíso, Viña del Mar, Quilpué por
ejemplo. Cuando no existe un sistema de aguas lluvias estas se dirigen
directamente a las calles por la vía más rápida posible.
Las áreas verdes públicas son plazas de tamaño aproximado a una manzana, o
avenidas con bandejones de diverso tamaño.
d. Nuevos barrios jardín. Las características de edificación aislada, y todas aquellas que
son consubstanciales a la urbanización de ciudad jardín, se mantienen como en
el tipo anterior, sin embargo aparecen otras nuevas que merecen destacarse.
Gran parte de las calles se constituyen como pasajes o áreas privadas de uso
común, siendo generalmente calles de una sola entrada, pudiéndose cerrar al
tránsito público. El perfil de las calles concentra el antejardín público junto a la
línea de edificación, o no existe, así como la arborización de las mismas,
confiándose la arborización sólo al predio privado.
En este tipo de urbanizaión debe ser fundamental para un buen control de las
aguas lluvias la regulación y el respeto del urbanizador de los cauces naturales
existentes antes de urbanizar la zona, así como el tratamiento de las superficies
no edificadas de modo que mantengan una cubierta vegetal. En estos casos ha
de incentivarse la idea de que la zona urbanizada no entregue un mayor gasto
de aguas lluvias que lo que la zona naturalmente entregaba previamente a
urbanizarse, para lo cual se pueden implementar diversos sistemas, ya sea
haciendo que las propiedades privadas no entreguen agua al sistema público,
infiltrándola en sus propios jardines, como implementando sistemas de
retención e infiltración en las áreas públicas. En estas nuevas urbanizaciones es
también importante incentivar el uso de pavimentos porosos.
i. Áreas verdes. Tradicionalmente las ciudades chilenas han carecido de dotación de áreas
verdes públicas. La plaza del tamaño de una manzana es el área verde
tradicional de las ciudades chilenas. Algunos cerros que han quedado dentro de
los límites urbanos, o las riveras de los ríos y las zonas de protección de los
mismos, se han llegado a implementar como parques. Algunas quebradas, zonas
escarpadas o de difícil acceso pueden considerarse también como áreas verdes,
aunque su régimen de propiedad no lo establezca claramente. Para algunas
ciudades los planes intercomunales definen zonas destinadas a áreas verdes que
sólo en los últimos años han comenzado a implementarse.
La gran mayoría de las áreas verdes al interior de los sectores urbanos son
clubes privados destinados para diversos tipos de deportes, generalmente
concentrados en las zonas urbanas más consolidadas. En este acápite han de
considerarse asimismo los cementerios de diverso tipos que existen en las
ciudades.
MODELOS
HIDROLÓGICOS
COMPUTACIONALES
En general se recomienda que para adquirir uno de estos modelos se realice una
evaluación que considere como aspectos básicos los siguientes: a) La existencia
de documentación para terceros sobre el modelo, su empleo y los algoritmos
que usa, b) La existencia de una institución o empresa de soporte para
solucionar posibles inconvenientes que se presenten durante el empleo en
etapas de producción y c) La disponibilidad de ejemplos concretos de uso
exitoso en variadas circunstancias.
Penn State. El modelo de Penn State Urban Runoff ( PSURM, Aron, 1987)
fue originalmente desarrollado en cooperación con la ciudad de
Philadelphia para el análisis de sus sistema de drenaje, de manera
de poder ser aplicado a los colectores unificados de la ciudad. Para
la generación de escurrimiento se emplea una subrutina basada en
un estanque no lineal, acoplada con un desfase definido por el
usuario en el sistema de colectores. Se incorpora un procedimiento
para dimensionar tuberías pero no se incluyen los aspectos de
calidad del agua. Este modelo ha sido muy empleado en el noreste
de Estados Unidos (Kibler y Aron, 1980; Kibler et al., 1981).
ANTECEDENTES
HIDROGEOLÓGICOS
EN CHILE
Técnicas Alternativas para Soluciones de Aguas Lluvias en Sectores Urbanos 627
Anexo 4. ANTECEDENTES HIDROGEOLÓGICOS EN CHILE
Zona Norte (lámina 2 del Mapa Hidrogeológico). Esta zona se extiende desde
el sur de Antofagasta hasta Los Vilos. Está formada principalmente
por zonas de muy baja a nula permeabilidad. Al Norte, cerca de la
frontera con Argentina, se observan extensas zonas de
permeabilidad alta a baja. En todo el sector existen intercalaciones
de zonas de permeabilidad alta a media. Hasta Copiapó, los pozos
existentes poseen una baja productividad, excepto en el salar de
Pedernales, en el cual la productividad es muy elevada. Al Sur de
Copiapó la productividad aumenta, ubicándose en un rango desde
media a muy elevada.
Zona Central (lámina 3 del Mapa Hidrogeológico). Esta zona se extiende desde
Los Vilos hasta Temuco. Se caracteriza por estar formada por
depósitos no consolidados del período cuaternario, intercalados con
zonas de muy baja o nula permeabilidad.
COEFICIENTES DE
RUGOSIDAD
HIDRÁULICA Y
UNIDADES
Anexo 6
GLOSARIO
acuífero: formación porosa (capa o estrato) de roca permeable, arena o gravilla, capaz de almacenar y
transmitir cantidades apreciables de agua.
acuífero colgado: estrato o formación geológica, saturado de agua que reposa sobre una capa o estrato
limitado de suelo impermeable.
acuífero confinado: (1) acuífero en el cual el agua ocupa todos los poros y está sometido a cierta presión
durante la perforación, al atravesar el techo de este acuífero se observa un ascenso rápido del nivel de
agua. (2) se usa algunas veces como sinónimo de acuífero artesiano.
acuífero libre: acuífero en el cual existe una superficie libre de agua en contacto con el aire y por lo tanto a
presión atmosférica.
acuífero semiconfinado: acuífero cubierto, por encima y/o por debajo, por una capa semipermeable,
relativamente delgada, a través de la cual tiene lugar el flujo hacia o desde el acuífero.
adsorción: concentración de una sustancia disuelta sobre la superficie de un sólido a alrededor de las
partículas.
aguas lluvias: agua proveniente de la precipitación desde la atmósfera en forma líquida.
aguas pluviales: ver aguas lluvias.
aguas lluvias aéreas: precipitación líquida antes de que tome contacto con la superficie terrestre.
aguas lluvias terrestres: aguas generadas por la precipitación líquida una vez que entra en contacto con la
superficie del suelo o de construcciones.
aguas lluvias superficiales: ver aguas lluvias terrestres.
albañal: canal de desagüe para las aguas servidas o inmundas.
almacenamiento: (1) acumulación de aguas en embalses de superficie o subterráneos, para su futura
utilización. (2) volumen de agua almacenada.
almacenamiento de aguas lluvias: acumulación temporal de aguas lluvias en estanques o embalses.
almacenamiento difuso: acumulación de agua sobre superficies extendidas y con poca altura de agua, sin
que necesariamente exista un confinamiento lateral.
almacenamiento localizado: acumulación de agua sobre superficies limitadas con claro confinamiento
lateral y alturas de agua apreciables.
almacenamiento fósil: volumen de agua almacenado, no utilizable normalmente.
altura de escurrimiento: distancia desde el fondo hasta la superficie del agua en un cauce.
altura crítica ( de agua): altura de agua correspondiente al escurrimiento crítico, en el cual la energía es
mínima.
altura normal ( de agua): altura de agua correspondiente al escurrimiento en condiciones normales, en el
cual la pérdida de energía por unidad de longitud es igual a la pendiente de fondo de la canalización.
ancho basal: ancho de la sección transversal de un canal en la zona inferior.
anticiclón: región de la atmósfera con alta presión alrededor de la cual el aire fluye en el sentido contrario a
las manecillas del reloj en el hemisferio sur y en el mismo sentido en el hemisferio norte.
área aportante: (1) el área de contribución de una cuenca de drenaje, expresada en m2, Km2 o cualquier
unidad de área. También se le llama cuenca aportante. (2) El área servida por un sistema de drenaje
que recibe las aguas lluvias y superficiales o de un curso de agua.
área inundada: superficie cubierta de agua temporalmente durante una tormenta o crecida.
barbacana: elemento que permite drenar el agua a través de una capa impermeable. Normalmente tubo que
une las capas filtrantes detrás de un muro o revestimiento con el exterior.
bocatoma: obra destinada a captar el agua desde un cauce.
C.N.: ver Curva Número.
calicata : Exploración de un terreno para conocer sus propiedades o composición.
canal: un curso de agua natural o artificial de dimensiones perceptibles que conduce agua en forma periódica
o continua o que forma una conexión entre dos cuerpos de agua.
canal artificial: canal construido por el hombre para fines específicos de conducción de agua.
canal con vegetación en el fondo: canal artificial que se caracteriza por mantener vegetación en el fondo.
canal de flujo bajo: canal diseñado para conducir esporádicamente flujos de pequeña magnitud,
normalmente en el fondo de obras de almacenamiento.
canal de fondo: canal construido en la parte inferior de una obra de almacenamiento para ayudar al
escurrimiento durante las últimas etapas del vaciamiento de la obra. Similar al canal de flujo bajo.
canal de tierra sin revestir; canal artificial construido excavado en tierra y sin ningún tipo de protección
contra la erosión.
canal natural: cauce natural empleado para conducir agua para diferentes fines, pero que mantiene sus
condiciones naturales, normalmente de pendiente estable, con vegetación, taludes estables y tendidos.
canal para drenaje urbano de aguas lluvias: cauce artificial empleado para conducir aguas lluvias.
canal revestido de enrocado: canal artificial con revestimiento de grandes bloques de piedra para evitar la
erosión y darle un carácter natural.
canal revestido de hormigón o albañilería: canal artificial con paredes y/o fondo revestidos de placas de
hormigón o albañilería de piedras o ladrillos.
canal revestido de pasto: cauce con revestimiento de pasto en los taludes y fondo.
canoa: en obras de conducción de agua se refiere a un tramo de canal en puente.
capilaridad: fenómenos asociados con la tensión superficial de los líquidos, particularmente en tubos
capilares y medios porosos en los que se juntan interfaces gaseosas, líquidas y sólidas.
cárcava: forma de erosión localizada del suelo con grietas profundas.
carga hidráulica: suma de la profundidad máxima del agua y de la energía específica cinemática media en
una sección dada.
cauce natural: curso por donde escurre agua en forma continua o intermitente (si es esta última, con algún
grado de regularidad) creado por condiciones y acciones naturales.
caudal: volumen de fluido que pasa en la unidad de tiempo a través de una superficie (p.ej. sección
transversal de una corriente), en una corriente determinada.
caudal base: caudal mínimo de una corriente de agua. Escorrentía observada, a la salida de una cuenca de
drenaje durante períodos largos en los que no se producen precipitaciones o fusiones de nieve.
caudal de punta: valor máximo del caudal para un período determinado.
caudal máximo: ver caudal de punta.
ciclo hidrológico: sucesión de etapas que atraviesa el agua al pasar de la atmósfera a la tierra y volver a la
atmósfera. Incluye evaporación del suelo, mar o aguas continentales, condensación de nubes,
precipitación, acumulación en el suelo o en masas de agua y reevaporación.
ciclón: región de la atmósfera con baja presión alrededor de la cual el aire fluye en la dirección de las
manecillas del reloj en el hemisferio sur y en la dirección contraria a ellas en el hemisferio norte.
clima: conjunto fluctuante de las condiciones atmosféricas caracterizado por tipos y desarrollo del tiempo
sobre un dominio espacial determinado, durante un período de tiempo suficientemente largo.
clima árido: caracterizado por ausencia de precipitación, alta radiación solar, condiciones poco favorables
para la vida y vegetación. En Chile desde el extremo norte hasta Copiapó.
clima mediterráneo: ver clima templado.
clima semiárido: clima de transición entre el desierto árido y el clima templado, caracterizado por
precipitaciones esporádicas, en invierno, y sequías prolongadas. En Chile desde Copiapó hasta el
Aconcagua.
clima templado: clima con una estación fría marcada en la cual se concentran las lluvias y estación cálida
seca. El aporte de humedad es similar a la evaporación. En Chile desde Aconcagua hasta el río
Imperial, o la zona de Temuco.
clima templado húmedo: clima con una temporada seca reducida, temperaturas menores y periodos
prolongados de lluvias. En Chile desde el río Imperial hasta el canal de Chacao.
climatológico: relativo al clima.
coeficiente de descarga: relación entre el caudal observado o real y el teóricamente calculado.
coeficiente de duración: razón entre la precipitación de una cierta duración y la precipitación de 24 horas, en
el caso de las lluvias de duraciones mayores a una hora. Para lluvias de corta duración se define en
base a la precipitación de una hora.
coeficiente de escorrentía: un número decimal usado en la fórmula racional que define las características de
escurrimiento del área aportante que se considera. Se puede aplicar al área completa como una
representación compuesta o en forma individual a cada uno de los elementos de la cuenca. Representa
la proporción de la lluvia caída que escurre.
coeficiente de escurrimiento: ver coeficiente de escorrentía
coeficiente de frecuencia: razón entre la precipitación de una cierta frecuencia y la correspondiente a 10 años
de período de retorno.
coeficiente de retardo: valor que afecta al tiempo empleado para recorrer una cierta distancia para considerar
efectos secundarios.
coeficiente de rugosidad de Manning: factor presente en la fórmula de Manning para calcular la velocidad
media en un curso de agua. Representa el efecto de la rugosidad del material de la superficie del curso
de agua sobre las pérdidas de energía del agua que fluye.
colmatación: obstrucción de los pozos o grietas de un estrato o formación geológica permanente debido a la
presencia de material fino aportado por el flujo.
conductividad hidráulica: medida de la capacidad de un suelo para conducir o transmitir agua.
conexión de superficies impermeables: ver desconexión de áreas impermeables.
convección térmica: propagación del calor por el movimiento del aire debido a diferencias de temperatura.
crecida: (1) elevación rápida y habitualmente breve del nivel de las aguas en un curso hasta un máximo desde
el cual dicho nivel desciende a menor velocidad. (2) caudal relativamente alto medido por altura o
caudal.
cubeta: estanque de pequeñas dimensiones regularmente empleado para concentrar en él la disipación de
energía al final de flujos de alta velocidad, como caídas, rápidos de descarga o al pie de compuertas.
cubierta vegetal: conjunto de masa vegetal que cubre una superficie.
cuenca aportante: ver área aportante
cuenca de infiltración: superficie de una cuenca aportante sujeta a la infiltración de las aguas superficiales
que pueden presentarse en .......o como precipitación.
cuenca tributaria: ver área aportante.
curva de succión: representación gráfica de la función que relaciona la presión de succión de un suelo y el
contenido de humedad.
curva granulométrica : Distribución del tamaño de los granos de un suelo en función de su porcentaje en
peso que pasa o es retenido por las mallas de diámetros establecidos.
curva IDF: ver curvas intensidad-duración-frecuencia
curva intensidad-duración-frecuencia: relación entre intensidad de la lluvia y duración para diferentes
frecuencias o períodos de retorno.
curva número: valor que representa en forma integrada la condición del suelo, la cobertura vegetal, el
tamaño de arreas impermeables, la intercepción, y el almacenamiento superficial del terreno. Se utiliza
en el método desarrollado por el Soil Conservation Service de Estados Unidos para estimar el volumen
escurrido en una tormenta.
curva PDF: función que relaciona la cantidad total de agua caída, precipitación, durante un intervalo de
tiempo, duración, para diferentes frecuencias.
derrames: se consideran las aguas superficiales que abandonan un lugar como excedentes no utilizados.
damero: disposición en forma de cuadrados, como en el tablero para el juego de damas.
desarenador: obra destinada a separar mediante precipitación localizada las arenas de un escurrimiento.
descarga: caudal de agua evacuado desde un estanque o lugar de almacenamiento.
descepe: eliminación de las cepas, o partes inferiores de tronco y raíces superficiales, de un terreno.
desconexión de áreas impermeables: procedimiento mediante el cual se eliminan las conexiones fáciles del
escurrimiento entre diferentes zonas impermeables de un mismo lugar.
disipador de energía: obra destinada a eliminar la energía del flujo en forma controlada.
distribución estadística: modelo matemático que representa la función de probabilidades de una variable
aleatoria.
dotación: cantidad de agua necesaria para satisfacer las necesidades de riego por unidad de área, o de
consumo humano por habitante.
dren: conducto o pequeño canal por el que se evacua el agua del suelo o de un acuífero, por gravedad, con el
fin de regular el nivel del mismo.
dren subterráneo: dren ubicado bajo el nivel del suelo.
dren urbano: dren ubicado en una zona urbana.
drenaje: (1) término general que se aplica a la remoción de agua superficial o subsuperficial de un área dada,
mediante bombeo o en forma gravitacional. (2) El término se usa en forma general al flujo de todos los
líquidos producto de la gravedad.
drenaje urbano: evacuación del agua desde una zona urbana.
eje hidráulico: línea que une los puntos medios de la superficie del agua en un curso con superficie libre,
representada a lo largo de la conducción.
enrocado: disposición de un conjunto de rocas de manera especial con el fin de proteger la superficie que se
encuentra bajo él.
escorrentía: parte de la precipitación que fluye por la superficie del terreno (escorrentía superficial) o en el
interior del mismo (escorrentía subterránea).
estanque de infiltración: estanque en depresión y a cielo abierto que permite almacenar aguas lluvias e
infiltrarlas directamente en el suelo bajo él.
estanque de retención: estanque que dispone de un volumen destinado al almacenamiento temporal de agua.
estival: referente a la época de estío, o verano. En Chile entre el 21 de diciembre y el 21 de marzo.
estudio de riesgos: documento técnico elaborado por un equipo interdisciplinario de profesionales
especialistas, cuyo objetivo es advertir sobre los peligros reales o potenciales para el emplazamiento
de los asentamientos humanos.
evaporación potencial: cantidad de vapor de agua que puede ser evaporado por una superficie de agua pura,
por unidad de superficie y unidad de tiempo, en las condiciones existentes.
evapotranspiración real: suma de las cantidades de vapor de agua evaporadas del suelo y transpirada por las
plantas, cuando el terreno tiene su contenido real de humedad.
filtro: elemento destinado a permitir el paso controlado de ciertos materiales y retener el resto.
filtro de grava fina: material granular de distribución granulométrica establecida que impide que circulen a
través de el partículas de suelo. El diseño de un filtro se efectúa en función del material granular en
contacto.
filtro geotextil: paño o tela de geotextil que impide el paso de partículas finas.
filtro granular: ver filtro de grava fina.
floculante: elementos destinados a la formación de flóculos, o pequeñas aglomeraciones de sustancias
presentes en el agua, con el objeto de facilitar su decantación.
flujo superficial: aquella parte del agua precipitada sobre la superficie del suelo que se abre camino hacia el
cauce de una corriente sin infiltrarse en el suelo.
fosa absorbente: obra lineal, a cielo abierto, que recoge aguas lluvias, las almacena y las infiltra en el suelo.
franja capilar: parte del suelo sobre la superficie freática en la cual el agua asciende por efectos de
capilaridad.
franja de pasto: superficies cubiertas de pasto sobre las cuales puede escurrir el agua en forma de lámina de
pequeña altura, facilitando la infiltración.
franja filtrante: superficies sobre las cuales puede escurrir el agua en forma de lámina de pequeña altura,
facilitando la infiltración.
frecuencia empírica: cantidad de veces por período que se presenta un fenómeno según lo observado en su
comportamiento reciente.
gasto máximo (ver caudal máximo)
pH: corresponde al logaritmo decimal del inverso de la cantidad de iones de hidrógeno en solución. Se
emplea como una medida de la acidez de la solución. Un pH igual a 7 indica una solución neutra.
Mayor que 7 básica, y menor ácida.
piezómetro: aparato destinado a medir la altura piezométrica, es decir la presión de un fluido en un punto,
expresada como altura de la columna de ese mismo fluido que produce en su base
plan intercomunal: conjunto de normas y recomendaciones para la urbanización de una zona que abarca
varias comunas.
pluviógrafo: instrumento provisto de un dispositivo de registro cronológico de las alturas de agua de
precipitación.
pluviómetro: instrumento para medir la lluvia, expresada como altura de agua, o como volumen por unidad
de superficie.
pluviometría: relativo a la medida de la lluvia.
porosidad: (1) un índice de las características de los vacíos de un suelo, relacionado con la percolación. (2)
La razón, generalmente expresada como porcentaje, entre (a) el volumen de los vacíos de una cantidad
dada de material y (b) el volumen total de material, incluyendo los vacíos.
porosidad efectiva: relación entre el volumen de agua que puede drenar libremente por gravedad un suelo y
el volumen total. Índica la cantidad de agua que un suelo puede liberar o almacenar.
pozo artesiano: pozo en acuífero confinado en el cual el nivel piezométrico queda por encima de la
superficie del acuífero.
pozo de infiltración : pozo que permite la infiltración de las aguas lluvias a través de las capas permeables
de suelo. Las aguas no son ingresadas directamente en la napa.
pozo freático: pozo en un acuífero libre, en el cual el nivel piezométrico estático coincide con el de la napa
del acuífero.
pozo surgente: pozo en acuífero confinado en el cual el nivel piezométrico queda por encima de la superficie
del terreno.
precipitación anual: valor de lluvia acumulada que se observa en un punto a lo largo de un año.
precipitación efectiva: aplicado al análisis de escorrentía, se refiere a la parte de la precipitación que se
convierte en escurrimiento superficial.
precipitación máxima diaria: máximo valor de la precipitación acumulada en un día observada durante un
periodo de un año en un lugar.
presión atmosférica: fuerza por unidad de superficie que ejerce el aire en un punto dado.
presión de vapor: presión parcial ejercida por el vapor de agua en un espacio cerrado.
pretil: antepecho o muro destinado a evitar el rebase del agua desde una corriente hacia el exterior de ella.
También se emplea para referirse a la baranda de un puente.
probabilidad de ocurrencia: medida que indica la posibilidad que suceda un determinado evento.
radiación solar: cantidad de energía que se recibe del sol en un determinado punto de la superficie de la
tierra
radio hidráulico: en una sección transversal dada, el área mojada de la sección transversal de un curso o
conducto, dividida por su perímetro mojado.
rápido de descarga: tramo de una conducción con gran pendiente destinado a conducir el agua desde una
zona alta a otra más baja, en el cual el agua adquiere gran velocidad.
rasante: línea o superficie que limita la parte superior de una obra.
rebasar: pasar o exceder cierto límite. Empleado para indicar la acción por la cual el agua excede los límites
del recipiente que la contiene o conduce.
recarga: componente del balance hídrico que representa la cantidad de agua añadida al agua subterránea en
el período considerado.
recarga surgente: pozo en acuífero confinado en el cual el nivel piezométrico queda por encima de la
superficie del terreno.
recarga de napas: ingreso del agua a los acuíferos. En acuíferos libres se realiza principalmente por
infiltración de aguas superficiales y en acuíferos confinados a través de zonas acuíferas ubicadas aguas
arriba.
red de colectores: todas las tuberías usadas para conducir las aguas lluvia desde los sumideros a el punto de
disposición final.
red de drenaje: el camino o curso a lo largo del cual el agua se moverá o podrá moverse para drenar un área.
red vial básica: conjunto de vías existentes, que por su especial importancia para el transporte urbano,
pueden ser reconocidas como tales en los instrumentos de planificación territorial.
red vial estructurante: conjunto de vías existentes o proyectadas, que por su especial importancia para el
desarrollo del correspondiente centro urbano, deben ser definidas por el respectivo instrumento de
planificación territorial.
régimen pluvial: condición climática caracterizada por precipitaciones en forma de lluvia líquida.
resalto hidráulico, o resalto: zona de gran turbulencia superficial que ocurre cuando un régimen de torrente
pasa a uno de río, acompañado por gran disipación de energía.
retención superficial: las aguas lluvia producto de una tormenta que se encuentra sobre pavimentos,
superficies de suelo, techos y otras superficies expuestas antes de que alcancen un sumidero, canal,
curso de agua o cualquier punto de concentración.
revestimiento poroso: ver pavimento poroso.
riesgo de falla: probabilidad de que durante la vida útil de una obra ocurran eventos que provocan su falla o
colapso.
rugosidad: concepto que representa el efecto sobre el escarmiento de las asperezas de una superficie.
sedimento: material fragmentado originado por suelos y rocas transportado o depositado por el agua.
sedimentador: elemento u obra destinado a separa mediante precipitación localizada los sedimentos de una
corriente líquida.
sifón: conducto cerrado, una de cuyas partes está por encima del nivel del agua. Como resultado dicha parte
está sometida a una presión inferior que la atmosférica y por lo tanto requiere que se haga el vacío para
que funcione el sifón. El sifón utiliza la presión atmosférica para iniciar o incrementar el flujo del
agua a través de él. En la naturaleza se da en las regiones kársticas.
Sifón invertido: Conducto cerrado en el cual todas las partes están bajo el nivel del agua y por lo tanto
sometidas a presiones superiores a la atmosférica, normalmente empleado para pasar con un canal bajo
otro elemento como una calle.
sistema de riego: conjunto de elementos y obras necesarias para satisfacer las necesidades de agua a la
vegetación que cubre una superficie.
solera: paramento vertical o inclinado ubicado a la orilla de una calle o camino y con el cual normalmente se
forma la cuneta.
solera continua: solera sin interrupciones a lo largo, de manera que no permite la salida lateral del flujo.
solera de fondo: solera colocada en el fondo de una obra de almacenamiento para formar una cuneta que
conduce los caudales menores.
solera discontinua: solera con interrupciones frecuentes para permitir la salida lateral del flujo.
subrasante: suelo natural bajo el pavimento.
sumidero: obra destinada a captar el agua de un curso superficial y entregarlo a un sistema de conducción
subterráneo.
talud: inclinación de una superficie en el plano de su máxima pendiente.
tiempo de concentración: el tiempo requerido para que el agua caída en una tormenta escurra desde el punto
más lejano de la cuenca aportante hasta el punto de salida considerado. No es constante pues varía con
la profundidad del flujo y con las condiciones de los conductos y/o canales.
topología: parte de las matemáticas que trata de la continuidad y la disposición de elementos en sistemas
complejos.
tormenta: (1) viento cuya velocidad está comprendida entre 44 y 50 nudos (23 a 26 m/s) (fuerza 10 en la
escala Beaufort). (2) Fuerte precipitación de lluvia, nieve o granizo, acompañada de viento o no, y
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f. Normas del Instituto Chileno de Normalización. En general los proyectos y los procedimientos de
construcción deben cumplir con las normas oficiales que rigen sobre la materia. Existen una gran cantidad de
ellas que son de interés para las obras alternativas de drenaje urbano de aguas lluvias. A continuación se
mencionan un grupo selecto de ellas, cuya enumeración no pretende ser exhaustiva., pero puede servir de
guía para la selección de normas a consultar en el proyecto o para incluirlas en Especificaciones Técnicas
Especiales.
Normas básicas.
NCh 9.Of 70 Física. Sistema Internacional de Unidades (SI). Definiciones y
Símbolos
NCh 25.Of 71 Física. Parámetros Adimensionales.
NCh 711.Of 71 Arquitectura y Construcción. Designación gráfica de elementos para
instalaciones sanitarias.
NCh 1079.Of 77 Arquitectura y Construcción. Zonificación climática habitacional para
Chile y recomendaciones para el diseño arquitectónico.
Calidad del agua.
NCh 246.Of 64 Agua para análisis.
NCh 133.Of 76 mod 1987. Requisitos de calidad del agua para diferentes usos.
NCh 1367.Of 79 Agua Potable. Plantas de Tratamiento. Desarenadores y
Sedimentadores simples (sin coagulación previa).
Seguridad.
NCh 347.Of 55 Prescripción de seguridad en la demolición.
NCh. 349.Of 55 Prescripción de seguridad en excavaciones.
NCh 19.Of 79 Prevención de Riesgos. Identificación de Sistemas de
Hormigón armado.
NCh 204.Of 77 Acero. Barras laminadas en caliente para hormigón armado.
NCh 211.Of 70 Barras con resaltes en obras de hormigón armado.
NCh 218. Of 77 Acero. Mallas de alta resistencia para hormigón armado.
Especificaciones.
NCh 429. EOf 57 Hormigón Armado. Parte 1.
NCh 430. EOf 61 Hormigón Armado. Parte 2.
Cámaras, tuberías y piezas especiales.
NCh 895.Of 83 Válvulas de compuerta para obras hidráulicas en fundición de hierro.
Nch 1623.Of 80 Cámaras de inspección prefabricadas para redes públicas de
alcantarillado. Requisitos.
NCh 1676.Of 79 Cámaras de inspección prefabricadas para redes públicas de
alcantarillado. Losas, ensayos de carga.
NCh 1632.Of 79 Tapas y anillos de fundición de hierro para cámaras de válvulas de
agua potable ubicadas en calzadas.
Asbesto - cemento.
NCh 190.Of 51 Tubos y accesorios de asbesto - cemento para líquidos o gases sin
presión.
NCh 191.Of 80 Tubos de asbesto - cemento para conducción de fluidos a presión.
Requisitos.
NCh 192.Of 82 Asbesto - cemento. Tubos. Ensayos.
NCh 193.Of 51 Tubos de asbesto-cemento para líquidos o gases a baja presión.
NCh 404.Of 84 Accesorios de fundición gris para tuberías de asbesto-cemento.
NCh 725.Of 74 Alcantarillado. Tubos de asbesto-cemento. Especificaciones.
ÍNDICE DE TABLAS
Tabla 3.1.1.1: Precipitación anual en algunas ciudades ................................................. 36
Tabla 3.1.1.2: Evaporación potencial anual en algunas ciudades. (B.H.Ch.,
D.G.A. 1987)........................................................................................... 40
Tabla 3.1.1.3: Adherencia de contaminantes a la MES en % ....................................... 42
Tabla 3.1.1.4: Concentración y origen de metales pesados............................................ 43
Tabla 3.1.1.5: Concentración de otros contaminantes ................................................... 43
Tabla 3.1.2.1: Curvas IDF para Santiago, San Fernando, Concepción y Temuco......... 50
Tabla 3.1.2.2: Precipitaciones Máximas para 10 años de periodo de retorno................ 52
Tabla 3.1.2.3: Coeficientes de duración (Varas y Sánchez) .......................................... 54
Tabla 3.1.2.4: Coeficientes de frecuencia para lluvias de igual duración...................... 55
Tabla 3.1.2.5: Coeficiente de duración para lluvias de menos de 1 hora....................... 58
Tabla 3.1.2.6: Expresiones para calcular el tiempo de concentración ........................... 64
Tabla 3.1.2.7: Coeficientes de escorrentía ..................................................................... 66
Tabla 3.1.2.8: Valores de Curvas Número para Áreas Urbanas..................................... 69
Tabla 3.2.2.1: Valores de permeabilidad según la descripción del material .................. 85
Tabla 3.2.2.2: Valores estimados de porosidades totales y efectivas............................. 88
Tabla 3.2.2.3: Características de los Materiales que se grafican en las
curvas granulométricas de la Figura 3.2.2.10 ......................................... 95
Tabla 4.1.1: Pendientes máximas de terreno para diferentes tipos de cubierta......... 112
Tabla 4.2.1: Alternativas de disposición de aguas lluvias mediante infiltración. .... 119
Tabla 4.2.1.1: Puntajes para la factibilidad de estanques de infiltración .................... 128
Tabla 4.2.4.1: Espesores mínimos recomendados para el total del pavimento
(Debo y Reese, 1995)............................................................................ 218
Tabla 4.2.4.2: Proporciones de agregados utilizados en Meryland EE.UU ................. 220
Tabla 4.2.4.3: Agregados según diferentes autores...................................................... 220
Tabla 4.2.4.4: Recomendaciones de agregados empleados en diferentes países ......... 221
Tabla 4.2.4.5: Composición de subbases no tratadas recomendadas por la
Portland Cement Associación de EE.UU.............................................. 222
Tabla 4.2.4.6: Composición de subbases tratadas recomendadas por la Portland
Cement Associación de EE.UU. ........................................................... 222
Tabla 4.2.5.1: Factor de daño según la carga y ejes..................................................... 252
Tabla 4.2.5.2: Curva de tránsito y ejes estándar equivalentes...................................... 253
Tabla 4.4.3.1: Velocidades máximas (y Números de Froude) recomendadas ............. 427
Tabla 4.4.3.2: Coeficientes de rugosidad para canales de pasto .................................. 427
Tabla 4.4.5.1: Velocidad de sedimentación de partículas de arena.............................. 483
Tabla 4.4.5.2: Parámetros a y n en función del Número de Reynolds ......................... 484
Tabla 4.4.5.3: Estimación de la cantidad de sedimentos retenidos en
el sedimentador ..................................................................................... 490
Tabla 4.5.1.1: Incompatibilidades de las obras con condiciones del lugar .................. 505
Tabla 4.5.1.2: Incompatibilidades de las obras con características de la urbanización 507
Tabla 4.5.1.3: Potencialidades de las obras para otros usos......................................... 508
Tabla 4.5.1.4: Influencia de la ubicación regional.. ..................................................... 509
Tabla 4.5.3.1: Riesgo de falla en función del periodo de retorno (años) y la vida
útil de la obra (años).............................................................................. 519
Tabla 4.5.3.2: Número esperado de fallas en función del periodo de retorno
de diseño (años) y la vida útil de la obra (años).................................... 520
Tabla 4.5.3.3: Valores mínimos recomendados del periodo de retorno de
lluvias de diseño para obras alternativas............................................... 521
Tabla 5.1.1.1: Especies recomendadas de gramineas para césped............................... 553
Tabla 6.1.1: Frecuencia de las inspecciones, por año, según el tipo
de obra y ubicación .............................................................................. 574
Tabla 6.2.1: Frecuencia básica de riego y corte de pasto, veces por mes ................. 578
Tabla 6.2.2: Labores de extracción de sedimentos según el tipo de obra ................. 579
ÍNDICE DE FIGURAS
Figura 2.4.1: Efecto sobre los hidrogramas de la tormenta de cada uno de los
enfoques conceptuales para la disposición local..................................... 24
Figura 3.1.1.1: Zonas climáticas en Chile continental .................................................... 33
Figura 3.1.1.2: Precipitación en Chile, isoyetas medias anuales ..................................... 35
Figura 3.1.1.3: Detalle de la distribución de precipitación media anual según el
Balance Hídrico de Chile, (D.G.A. 1987)............................................... 35
Figura 3.1.1.4: Comparación gráfica de la precipitación media mensual en
algunas ciudades...................................................................................... 38
Figura 3.1.1.5: Detalle de las isolíneas de evaporación según el Balance Hídrico de
Chile (D.G.A. 1987)................................................................................ 39
Figura 3.1.2.1: Hietograma. ............................................................................................. 46
Figura 3.1.2.2: Curvas IDF para Santiago en Qta. Normal ( E. Schroder)...................... 50
Figura 3.1.2.3: Ejemplo de un sector del mapa con curvas de precipitación
máxima diaria para 10 años de período de retorno, (D.G.A. 1993)........ 51
Figura 3.2.1.1: El agua subterránea en el ciclo hidrológico ............................................ 72
Figura 3.2.1.2: Acuífero libre .......................................................................................... 74
Figura 3.2.1.3: Acuífero confinado.................................................................................. 74
Figura 3.2.1.4: Acuífero colgado..................................................................................... 75
Figura 3.2.1.5: Estratos presentes en la sección de un acuífero libre .............................. 76
Figura 3.2.2.1: Esquema de infiltración........................................................................... 78
Figura 3.2.2.2: Intercambio de agua en un suelo cubierto de vegetación........................ 79
Figura 3.2.2.3: Recarga y descarga de agua subterránea................................................. 81
Figura 3.2.2.4: Representación del experimento de Darcy.............................................. 84
Figura 3.2.2.5: Ejemplo de curvas de succión para suelos de diferente textura .............. 86
Figura 3.2.2.6: Ejemplos que muestran formas típicas de curvas de
conductividad hidráulica para diferentes materiales............................... 87
Figura 3.2.2.7: Infiltrómetro de cilindros concéntricos y curvas de infiltración,
f, e infiltración acumulada, F, en el tiempo............................................. 89
Figura 3.2.2.8: Infiltrómetro de cilindro excavado.......................................................... 91
Figura 3.2.2.9: Clasificación de los materiales granulares por el tamaño del grano ....... 94
Figura 3.2.2.10:Ejemplo de curvas granulométricas de 5 materiales de ......................... 95
Figura 4.1.1: Comparación entre un enfoque tradicional y uno que promueve
la desconexión de áreas impermeables ................................................. 108
Figura 4.1.2: Efecto de la desconexión de áreas impermeables en la reducción
del área impermeable equivalente......................................................... 112
Figura 4.1.3: Perfil transversal en pasajes .................................................................. 114
Figura 4.1.4: Perfil transversal en veredas. ................................................................ 114
Figura 4.1.5: Perfil en calles con bandejones ............................................................. 115
Figura 4.3.2.8: Laguna de retención en forma de canal con paredes verticales.......... 334
Figura 4.3.2.9: Volúmenes de almacenamiento.. ........................................................ 339
Figura 4.3.2.10: Disposición en planta de los elementos típicos de una laguna
de retención......................................................................................... 340
Figura 4.3.2.11: Elementos en el perfil longitudinal de la laguna.. .............................. 340
Figura 4.3.2.12: Perfil transversal de la zona litoral. .................................................... 341
Figura 4.3.2.13: Elementos de la cámara de descarga................................................... 344
Figura 4.3.2.14: Cámara de descarga con orificio de vaciamiento. .............................. 345
Figura 4.3.2.15: Cámara de descarga con vertedero. .................................................... 345
Figura 4.3.2.16: Cámara de descarga con tubo perforado............................................. 345
Figura 4.3.2.17: Definición de variables para el diseño del ducto de salida
de la laguna ......................................................................................... 346
Figura 4.3.2.18: Cámara de descarga con tubo perforado para vaciamiento del
volumen de regulación de crecidas menores. ..................................... 348
Figura 4.3.2.19: Determinación del número de perforaciones en el tubo
de vaciamiento.. .................................................................................. 349
Figura 4.3.2.20: Gráfico para la determinación del área de perforaciones por
fila necesarias para vaciar el volumen de regulación de la laguna
en 12 horas. ......................................................................................... 349
Figura 4.3.2.21: Definición de variables para el diseño del vertedero de seguridad.. .. 351
Figura 4.3.2.22: Volumen de almacenamiento principal d la laguna en relación
al hidrograma de la crecida que entra y la crecida evacuada hacia
aguas abajo.......................................................................................... 352
Figura 4.3.2.23: Taludes laterales con zona litoral y muros de tierra. ......................... 356
Figura 4.3.2.24: Taludes laterales en base a un muro vertical, sin zona litoral.. .......... 357
Figura 4.3.2.25: Dimensiones y niveles de la cámara de descarga .............................. 369
Figura 4.3.2.26: Hidrogramas de entrada y salida para una crecida de 10 años de
periodo de retorno............................................................................... 375
Figura 4.4.1.1: Elementos típicos de una franja filtrante. ........................................... 388
Figura 4.4.1.2: Ejemplos de franjas filtrantes ............................................................. 390
Figura 4.4.1.3: Distribución de flujos con soleras discontinuas (arriba) y con
zanja rellena (abajo)............................................................................ 391
Figura 4.4.1.4: Largo de la franja................................................................................ 393
Figura 4.4.2.1: Elementos de una zanja con vegetación ............................................. 401
Figura 4.4.2.2: Sección típica de zanja........................................................................ 404
Figura 4.4.2.3: Gradas de control. ............................................................................... 406
Figura 4.4.3.1: Canal Natural ...................................................................................... 416
Figura 4.4.3.2: Canal revestido de pasto ..................................................................... 417
Figura 4.4.3.3: Canal con vegetación en el fondo. ...................................................... 417
Figura 4.4.3.4: Canal revestido ................................................................................... 418
Figura 4.4.3.5: Revestimiento de enrocado................................................................. 418
Figura 4.4.3.6: Revestimiento de gaviones. ................................................................ 419
Figura 4.4.3.7:
Canal excavado en tierra..................................................................... 419
Figura 4.4.3.8:
Canal de pasto y protección de enrocados .......................................... 420
Figura 4.4.3.9:
Canal de pasto con alcantarilla bajo calzada. ..................................... 420
Figura 4.4.3.10:
Canal con vegetación en el fondo. ...................................................... 420
Figura 4.4.3.11:
Secciones típicas de canales revestidos con pasto.............................. 428
Figura 4.4.3.12:
Canal con solera de fondo.................................................................. 429
Figura 4.4.3.13:
Canal con cauce para flujos menores.................................................. 430
Figura 4.4.3.14:
Sección típica de un canal con vegetación en el fondo ...................... 433
Figura 4.4.3.15:
Estimación de la rugosidad del canal con vegetación en función
de la altura de agua normal. ................................................................ 435
Figura 4.4.4.1: Configuración general de una CVR.................................................... 456
Figura 4.4.4.2: Configuración general de una CIE...................................................... 457
Figura 4.4.4.3: Detalle del enrocado consolidado. ...................................................... 457
Figura 4.4.4.4: Caída Vertical con Cubeta Reforzada................................................. 459
Figura 4.4.4.5: CVR. Corte AA................................................................................... 459
Figura 4.4.4.6: CVR. Corte BB.. ................................................................................. 459
Figura 4.4.4.7: Parámetros que definen el funcionamiento hidráulico de la caída
vertical. ............................................................................................... 461
Figura 4.4.4.8: Caída inclinada con enrocados. .......................................................... 471
Figura 4.4.4.9: Perfil longitudinal de una CIE.. .......................................................... 471
Figura 4.4.4.10: Sección de la cubeta de una CIE....................................................... 472
Figura 4.4.5.1: Esquema de los elementos de un sedimentador convencional. .......... 482
Figura 4.4.5.2: Formas de entrada a un sedimentador................................................. 487
Figura 4.5.3.1: Selección del periodo de retorno óptimo desde el punto
de vista económico.............................................................................. 522
ÍNDICE DE LÁMINAS
Lámina 1 Ejemplo de Estanque de Infiltración. Plano 1/1.................................... 145
Lámina 2 Ejemplo de Zanja de Infiltración. Plano 1/2. ........................................ 175
Lámina 3 Ejemplo de Zanja de Infiltración. Plano 2/2. ........................................ 177
Lámina 4 Ejemplo de Pozo de Infiltración. Plano 1/2 .......................................... 205
Lámina 5 Ejemplo de Pozo de Infiltración. Plano 2/2. ......................................... 207
Lámina 6 Ejemplo de Pavimento Poroso. Plano 1/1 ............................................. 241
Lámina 7 Ejemplo de Pavimento Celular. Plano 1/1 ............................................ 273
Lámina 8 Ejemplo de Estanque de Retención. Plano 1/3...................................... 325
Lámina 9 Ejemplo de Estanque de Retención. Plano 2/3...................................... 327
Lámina 10 Ejemplo de Estanque de Retención. Plano 3/3...................................... 329
Lámina 11 Ejemplo de Laguna de Retención. Plano 1/3. ....................................... 379
Lámina 12 Ejemplo de Laguna de Retención. Plano 2/3. ....................................... 381
Lámina 13 Ejemplo de Laguna de Retención. Plano 3/3. ....................................... 383
Lámina 14 Ejemplo de Franja Filtrante. Plano 1/1 ................................................. 399
Lámina 15 Ejemplo de Zanja con Vegetación. Plano 1/1 ....................................... 413
Lámina 16 Ejemplo de Canal Revestido con Pasto. Plano 1/1 ............................... 445
Lámina 17 Ejemplo de Canal con Vegetación en el Fondo. Plano 1/1 ................... 453
Lámina 18 Ejemplo de Caída Vertical con Enrocados. Plano 1/1 .......................... 469
Lámina 19 Ejemplo de Caída Inclinada con Enrocados. Plano 1/1. ....................... 479
Lámina 20 Ejemplo de Sedimentador. Plano 1/1 .................................................... 493
Lámina 21 Ejemplo de Cámara de Inspección Tipo A. Plano 1/1 .......................... 499
Lámina 22 Ejemplo de Cámara de Inspección Tipo B. Plano 1/1 .......................... 501