Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
net/publication/305387777
Diagnóstico y Comorbilidades
CITATIONS READS
0 140
4 authors, including:
Hugo Rodríguez
32 PUBLICATIONS 12 CITATIONS
SEE PROFILE
All content following this page was uploaded by Julio Torales on 17 July 2016.
Prof. Dr. Julio Torales, Dr. Hugo Rodríguez, Dr. César Ruiz Díaz
& Univ. Oscar García
El Criterio A requiere que el arrancamiento de pelo genere pérdida del mismo; no obstan-
te, muchos pacientes afectos de TTM pueden arrancarse el pelo de manera difusa, por lo
que la pérdida podría no ser fácilmente detectable. Por su parte, el malestar significativo
enunciado en el Criterio C indica que la conducta de arrancamiento causa efectos negati-
vos que pueden ser experimentados por los pacientes, tales como sentimientos de pérdi-
da del control, vergüenza y culpa. Asimismo, el deterioro funcional puede manifestarse
en diversas áreas (social, laboral, académica y de placer), en parte por evitar asistir al
trabajo, a la escuela o participar de otras situaciones públicas.
El arrancamiento puede acompañarse de una serie de conductas y rituales que involucran
al pelo. Por ejemplo, los pacientes pueden buscar un tipo particular de pelo que arrancar
(según su textura o color), pueden tratar de arrancarse el pelo de una manera específica
(para que la raíz salga de manera intacta) o pueden examinar visual, táctil u oralmente
el pelo luego de ser arrancado (hacer rodar el pelo entre los dedos, morderlos y cortarlos
con los dientes o tragarlos) (American Psychiatric Association, 2013).
El arrancamiento del pelo puede estar precedido o ser acompañado por diversos esta-
dos emocionales; asimismo, puede ser desencadenado por sentimientos de ansiedad o
20 aburrimiento, puede ser precedido por una sensación in crescendo de tensión (inmedia-
tamente antes de arrancar el pelo o al intentar resistir la urgencia de hacerlo), o puede
generar sensaciones de gratificación, placer o alivio cuando el pelo es arrancado. Se hace
necesario destacar que en los niños puede faltar el componente de tensión-gratificación
(Cather & Clay, 2005).
Hasta el momento, solo existen escasas investigaciones que se centren en las comorbi-
lidades que pueden presentar niños y adolescentes con TTM (Flessner, 2012). En 2007,
un estudio reportó que el 39,1% de niños con TTM tenía otra comorbilidad psiquiátrica.
De estos niños, el 30,4% presentaba un trastorno del espectro ansioso; y el 10,9%, un
trastorno externalizante (ya sea trastorno por déficit de atención con hiperactividad,
trastorno oposicionista desafiante y trastorno de conducta) (Tolin, 2007).
Asimismo, otros estudios arrojaron como comorbilidades más frecuentes en niños con
TTM al trastorno de ansiedad generalizada (13%), trastorno de ansiedad social (8,7%),
trastorno obsesivo compulsivo (6,5%), trastorno por déficit de atención con hiperacti-
vidad (8,7%) y trastorno oposicionista desafiante (6,5%) (Flessner, 2012). Un estudio 21
llevado a cabo por Internet encontró que el 38,3% de los niños con TTM tenía al menos
otro diagnóstico comórbido. Entre estos diagnósticos, el trastorno de ansiedad (24,1%),
los trastornos del humor (18,8%) y el trastorno por déficit de atención con hiperactividad
(16,5%) fueron los más comunes (Franklin, 2008).
Aunque arrancarse el pelo a una edad temprana podría considerarse un hábito benigno,
la comorbilidad psiquiátrica es evidente incluso en niños menores de 3 años (Flessner,
2012). Un estudio encontró que el 50% de los niños de entre 1 a 3 años que se arrancaba
el pelo, cumplía con criterios de trastorno de ansiedad, 40% presentaba problemas del
desarrollo, 20% tenía enfermedades médicas crónicas y 100% de la muestra se desenvol-
vía en ambientes con estresores familiares (separación de los padres, falta de hogar, des-
empleo, enfermedades mentales en los padres, entre otros) (Wright & Holmes, 2003). No
obstante, existen aún pocas investigaciones en este grupo etario, por lo que se necesita
de una cuidadosa valoración y precaución al trabajar con esta población de niños.
Diagnósticos diferenciales psiquiátricos
Trastorno Características
La TTM debe diferenciarse de otras causas de alopecia no cicraticial (alopecia areata, alo-
pecia androgenética, efluvio telógeno) o cicraticial (lupus discoide crónico, liquen plano-
papilar, foliculitis decalvante, entre otras). Cómo se mencionó previamente en esta guía,
la biopsia confirmará el diagnóstico en caso de duda (American Psychiatric Association,
2013; Stefanato, 2010).
Referencias
American Academy of Child and Adolescent Psychiatry: Facts for Families: Hair Pulling
(Trichotillomania), 2013. Available at http://www.aacap.org/aacap/Families_
and_Youth/Facts_for_Families/Facts_for_Families_Pages/Hair_Pulling_Tri-
chotillomania_96.aspx. Accessed March 17, 2014.
American Psychiatric Association: Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disor-
ders, Fifth Edition. Arlington, VA. American Psychiatric Association, 2013.
Azrin NH, Nunn RG: Habit-reversal: a method of eliminating nervous habits and tics.
Behav Res Ther 11: 619-628, 1973.
Azrin NH, Nunn RG, Frantz SE: Treatment of hair pulling (trichotillomania): a compa-
rative study of habit reversal and negative practice training. J Behav Ther Exp
Psychiatry 11: 13-20, 1980.
Boudjouk PJ, Woods DW, Miltenberger RG, Long ES: Negative peer evaluation in adoles-
cents: effects of tic disorders and trichotillomania. Child Fam Behav Ther 22:
17-28, 2000.
Boughn S, Holdom JJ: The relationship of violence and trichotillomania. J Nurs Scho-
larsh, 35, 165-170, 2003.
Bloch MH, Landeros-Weisenberger AL, Dombrowski P, et al: Systematic review: phar-
macological and behavioral treatment for tricotillomania. Biol Psychiatry 62:
839-846, 2007.
Cather JC, Clay J: A child with nonscarring alopecia. BUMC Proceedings 18: 269-272,
2005.
Christenson GA, Pyle RL, Mitchell JE: Estimated lifetime prevalence of trichotilloma-
nia in college students. J Clin Psychiatry 52: 415-417, 1991.
Clark J, Helm TN, Bergfeld WF: Chronic alopecia. Trichotillomania. Arch Dermatol
131:131:720-721, 1995.
De Sousa A: An open-label pilot study of naltrexone in childhood-onset trichotilloma-
nia. J Child Adolesc Psychopharmacol 18: 30-33, 2008.
Diefenbach GJ, Tolin DF, Crocetto J, Maltby N, Hannan S: Assessment of trichotillo-
mania: a psychometric evaluation of hair-pulling scales. J Psychopathol Behav
Assess 27: 169-178, 2005.
Dimino-Emme L, Camisa C: Trichotillomania associated with the “friar Tuck sign” and
nail biting. Cutis 47: 107-110, 1991.
Dougherty DD, Loh R, Jenike MA, Keuthen NJ: Single modality versus dual modality
treatment for trichotillomania: setraline, behavioral therapy, or both? J Clin
Psychiatry 67: 1086-1092, 2006.
Figueroa Quintana A, Díez Suárez A, Soutullo Esperón C: Tratamiento farmacológico
del trastorno obsesivo compulsivo en niños y adolescentes, in Guía Esencial de
Psicofarmacología del Niño y del Adolescente. Edited by Soutullo Esperón C.
Madrid, Editorial Médica Panamericana, 2011, 231-245.
Figueroa Quintana A, Soutullo Esperón C: Tratamiento farmacológico de los trastornos
de ansiedad en niños y adolescentes, in Guía Esencial de Psicofarmacología del
Niño y del Adolescente. Edited by Soutullo Esperón C. Madrid, Editorial Médica
Panamericana, 2011, 211-229.
Flessner CA, Conelea CA, Woods DW, Franklin M, Keuthen NJ: Styles of pulling in tri-
chotillomania: exploring differences in symptom severity, phenomenology, and
functional impact. Behav Res Ther, 46, 345-357, 2008.
Flessner CA: Diagnosis and comorbidity, in Trichotillomania, Skin Picking and other
Body Focused Repetitive Behaviors. Edited by Grant JE, Stein DJ, Woods DW,
Keuthen NJ. Washington DC, American Psychiatric Publishing, 2012, 83-96.
Flessner CA, Penzel F: Trichotillomania Learning Center–Scientific Advisory Board;
Keuthen NJ. Current treatment practices for children and adults with trichoti-
llomania: consensus among experts. Cogn Behav Pract 17: 290-300, 2010.
Franklin ME, Cahill SP, Roth Ledley DA, Cardona D, Anderson E: Behavior therapy for
pediatric trichotillomania: a randomized controlled trial. Presented at: Procee-
dings of the American Academy of Child and Adolescent Psychiatry; Boston, MA,
USA. 23–28 October 2007.
Franklin M, Flessner CA, Woods DW, et al: The Child and Adolescent Trichotillomania
Impact Project: descriptive psychopathology, comorbidity, functional impair-
ment, and treatment utilization. J Dev Behav Pediatr 29: 493-500, 2008.
Franklin ME, Edson AL, Ledley DA, Cahill SP: Behavior therapy for pediatric trichoti-
llomania: a randomized controlled trial. J Am Acad Child Adolesc Psychiatry 43:
234-245, 2011.
Franklin ME, Tolin DF: Treating Trichotillomania: Cognitive Behavioral Therapy for
Hair Pulling and Related Problems. Springer Science and Business Media; NY,
USA, 2007.
George S, Moselhy H. Cocaine-induced trichotillomania. Addiction 100: 255-256, 2005.
Golomb R, Franklin M, Grant J, Keuthen N, Mansueto C, Mouton-Odum S, Novak
C, Woods D: Expert consensus. Treatment guidelines for Trichotillomania,
Skin-Picking and other Body-Focused Repetitive Behaviors, 2011. Available at:
http://www.trich.org/treatment/Guiasparaeltratamiento.html. Accessed March
17, 2014.
Goodman WK, Price LH, Rasmussen SA, et al: The Yale–Brown Obsessive Compulsive
Scale. II Validity. Arch Gen Psychiatry 46: 1012-1016, 1989.
Goodman WK, Price LH, Rasmussen SA, et al: The Yale–Brown Obsessive Compulsive
Scale. I Development, use, and reliability. Arch Gen Psychiatry 46: 1006-1011,
1989.
Grant JE, Odlaug BL & Kim SW: N-acetylcysteine, a glutamate modulator, in the treat-
ment of trichotillomania. Arch Gen Psychiatry 66: 756-763, 2009.
Grant JE, Odlaug BL, Potenza MN: Addicted to hair pulling? How an alternate model
of trichotillomania may improve treatment outcome. Harv Rev Psychiatry 15:
80-85, 2007.
Hautmann G, Hercogova J, Lotti T: Trichotillomania. J Am Acad Dermatol 46: 807-821,
2002.
Hallopeau F: Alopecie par grattage (trichomanie ou trichotillomanie). Ann Dermatol
Syphilgr 10: 440-446, 1989.
Hernández Otero I: Psicofarmacología de la depresión mayor en niños y adolescentes, in
Guía Esencial de Psicofarmacología del Niño y del Adolescente. Edited by Soutu-
llo Esperón C. Madrid, Editorial Médica Panamericana, 2011, 119-138.
Keuthen NJ, Makris N, Schlerf JE, Martis B, et al: Evidence of reduced cerebellar volu-
mes in trichotillomania. Biol Psychiatry: 61, 374-381, 2007.
Keuthen NJ, O’Sullivan RL, Hayday CF, Peets KE., et al: The relationship of menstrual
cycle and pregnancy to compulsive hairpulling. Psychother Psychosom 66: 33-37,
1997.
King RA, Scahill L, Vitulano LA, & Schwab-Stone M: Childhood trichotillomania: clini-
cal phenomenology, comorbidity, and family genetics. J Am Acad Child Adolesc
Psychiatry 34: 1451-1459, 1995.
Koblenzer CS: Psychosomatic concepts in dermatology. Arch Dermatol 11: 501-512,
1983.
Komossa K, Rummel-Kluge C, Hunger H, et al: Olanzapine versus other atypical an-
tipsychotics for schizophrenia. Cochrane Database Syst Rev 3: 1–150, 2010.