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Sistemas Fluviales

Violeta Muñoz
Laboratorio de Sedimentología

Los depósitos fluviales están constituidos por sedimentos que se acumulan a partir
de la actividad de los ríos. Estos depósitos se generan en diversas condiciones climáticas,
desde desérticas hasta glaciales, sin embargo, en función de su sinuosidad (longitud del
canal/longitud del valle) se reconocen tres sistemas fluviales bien definidos: sistema de ríos
trenzados (braidded), sistema de ríos meándricos (meandering), y sistema de ríos
anastomosados (anastomosing) (Fig. 1). Se incluyen también dentro de la clasificación de
depósitos fluviales a los procesos de deslizamiento por gravedad asociados (sistema de
abanicos aluviales)

Fig. 1 Diferentes tipos de canales dentro de los sistemas fluviales.

Los sistemas fluviales han sido ampliamente estudiados y una compilación de


trabajos importantes pueden ser encontrados en: Collison y Lewin (1983), Miall (1985),
Flores y otros (1985), Reading (1986), y Ethridge y otros (1987), Miall (1992), Bridge and
Mackey (1993), y Miall (1996), entre otros.
1. Sistema de Ríos Trenzados
Sinuosidad<1.5.

Figura 2: Río trenzado

a. Procesos de depósito:

Este sistema fluvial es caracterizado por muchos canales separados por barras y
pequeñas islas (Fig.2), y es muy común encontrarlos donde los sedimentos son abundantes,
las descargas de agua son altas y esporádicas, y los ríos son sobrecargados con sedimentos;
esto ocurre generalmente en las partes distales de los abanicos aluviales. Durante los
períodos de descarga alta, la corriente en los canales es rápidamente sobrecargada de
sedimentos gruesos, formando barras alrededor de las cuales la corriente se desvía; un
desarrollo repetitivo de estas barras y la separación consecuente de los canales, genera el
aspecto trenzado de este sistema fluvial.
Los sistemas de ríos trenzados son definidos a partir de los diferentes tipos de barras
que en ellos se generan, y que pueden ser agrupadas en tres tipos básicos (Fig.3):

Barras Longitudinales: Son las barras que se forman en la parte media de los
canales cuando los sedimentos más gruesos incluidos en la corriente (gravas y arenas), son
depositados debido a la pérdida de competencia en el transporte, orientándose con el eje
principal paralelo a la dirección de la corriente. La fracción gruesa del material se
concentra a lo largo del eje principal y en la parte basal de la barra, tendiendo a existir una
disminución en el tamaño del grano hacia arriba de la misma, y corriente abajo. La
estructura interna de las barras longitudinales está representada por una estratificación
principalmente masiva, aunque pueden presentarse capas con una estratificación horizontal
pobremente desarrollada.
Barras Transversales: Se forman de manera transversal al flujo principal de la
corriente, y son muy características en sistemas de ríos trenzados que transportan una
mayor carga de detritos de tamaño arena. Las barras transversales presentan formas
rómbicas.
Barras Laterales: Son barras muy largas que se desarrollan en áreas de energía
relativamente baja a lo largo de las porciones laterales de la corriente principal.

Fig 3 Características morfológicas de un sistema fluvial trenzado

b. Características de los sedimentos


La sedimentación dentro de los sistemas de ríos trenzados se da esencialmente en
dos porciones (Miall, 1985): en la proximal, con el desarrollo de secuencias tipo Scott y
Donjek; y en la distal, con secuencias tipo Platte y Bijou Creek (Fig. 4).
La típica secuencia vertical en la porción proximal está representada por la
secuencia tipo Scott, en donde los sedimentos importantes son gravas que se presentan
como depósitos de barras. Interestratificados con estos horizontes, se tienen estratos
lenticulares de arena que representan el depósito en canales abandonados o en los límites de
las barras. En todo caso, el porcentaje de gravas en los depósitos tipo Scott siempre será
mayor del 60%. Sin embargo, existen regiones donde los flujos no son tan constantes, lo
que permite que la arcilla y el lodo puedan ser depositados sobre estas porciones, y con
ello, preservar secuencias verticales donde la proporción de gravas varíe del 10 al 70%; en
estas secuencias, llamadas del tipo Donjek, la estratificación cruzada plana y cóncava son
las estructuras primarias más características de los horizontes arenosos.
En las planicies distales las corrientes son distribuidas por canales muy someros.
Los gradientes en la pendiente y la competencia en el transporte de las corrientes son más
bajas que en la porción proximal, por lo que la arena es el producto más característico de
sedimentación en estas áreas. Las típicas secuencias verticales que se generan en las
planicies distales se conocen como del tipo Platte, en donde horizontes de arena con
estratificación cruzada plana representan los sedimentos más abundantes; aunque también
pueden llegar a desarrollarse horizontes de gravas debido a la formación de barras
longitudinales, o bien, depósitos finos de desbordamiento de canal. La secuencia vertical
tipo Bijou Creek representa planicies distales en donde la canalización es muy incipiente y
los canales son muy someros, llegando a depositar arenas muy finas con laminación
horizontal.

Figura 4: secuencias tipo Scott, Donjek, Platte y Bijou Creek

2. Sistema de Ríos Meandricos

Los sistemas de ríos meándricos tienden a ser confinados a un canal principal que
presenta una sinuosidad mayor a 1.5. En estos sistemas el gradiente de la pendiente es
mucho menor, y los sedimentos involucrados en la carga de las corrientes son más finos.
Algunos ocurren como sistemas independientes, otros pueden representar un cambio
gradual (corriente abajo) de un sistema de ríos trenzados; comúnmente los grandes sistemas
de ríos meándricos desarrollan en su desembocadura sistemas deltaicos de depósito.
Algunos autores prefieren llamar sistema de ríos de alta sinuosidad a este tipo de sistema
fluvial (Miall, 1987).
Figura 5: Río meándrico

a. Procesos de depósito
Los principales elementos morfológicos de un sistema de ríos meándricos son el
canal principal, las barras de punta, los bordos naturales, las planicies de inundación, los
lagos laterales, y las áreas de desborde. Ya que en estos sistemas los sedimentos se
acumulan por la acción del canal principal y de la inundación periódica de la planicie
adyacente, los depósitos están asociados a estos elementos morfológicos:

Fig. 6 Características morfológicas de un sistema fluvial meándrico.

Depósitos de canal: Son depósitos compuestos generalmente de material grueso


que los ríos pueden mover o transportar durante los períodos de máxima energía. Este
material incluye gravas, troncos u otro material vegetal de grandes dimensiones, y lodo
parcialmente consolidado que ha sido erosionado de las paredes del canal. Tienden a ser
depósitos de forma lenticular, en donde lo más característico es la imbricación de clastos
que presentan.

Depósitos de Barras de Punta: Estos depósitos se generan en las partes interiores


de las curvas del canal a partir de un flujo en espiral que se crea en dicho punto. Debido a
este flujo, los granos más gruesos tienden a ser depositados en las partes basales de la barra,
y los sedimentos finos en la parte superior, dando como resultado una secuencia de
disminución de tamaño de grano hacia arriba de barra de punta. La estructura sedimentaria
primaria más característica de los depósitos de barras de punto es la estratificación cruzada
cóncava, tanto de pequeña como de gran escala.

Depósitos de Bordo: Estos depósitos se desarrollan en la porción cóncava de la


curva que delimitan los meandros. Son de mayor espesor y de grano más grueso cerca de
los canales, y se hacen más finos a medida que se avanza hacia la planicie de inundación.
Arenas finas con estratificación horizontal y rizaduras de corriente que subyacen bajo lodos
laminados, son muy comunes en los depósitos de muro.

Depósitos de Planicies de Inundación: Están constituidos por sedimentos finos


depositados por suspensión a partir de las aguas que inundan la planicie adyacente al canal.
Estos depósitos tienden a desarrollar poco espesor, y comúnmente contienen grandes
cantidades de material vegetal; así mismo, presentan una bioturbación moderada.

Depósitos de desborde: Estos depósitos se generan cuando las aguas de la corriente


principal logra romper los muros que la confinan. La sedimentación por tracción y
suspensión ocurre rápidamente cuando el agua cargada, tanto con material grueso como
fino, pierde su capacidad para transportarla, dando como resultado depósitos gradados.

Depósitos de lago lateral: Consisten de sedimentos finos, arcillas y lodo, que han
sido introducidos a los lagos laterales durante las épocas de inundaciones. Son comúnmente
laminados, y pueden llegar a presentar restos de plantas, así como ostrácodos y moluscos de
agua dulce.

b. Características de los sedimentos

La sedimentación dentro de los sistemas de ríos meándricos se lleva cabo casi


simultáneamente en todos los sitios mencionados con anterioridad, ya sea sobre el canal o
sobre la planicie de inundación. Cuando el canal del río migra por su acción erosiva, los
diferentes ambientes del sistema migran también lateralmente y los sedimentos depositados
en ambientes continuos llegan a sobreponerse. Así, como resultado de la acción meándrica,
los depósitos gruesos de los canales tienden a subyacer bajo secuencias arenosas que
disminuyen su tamaño de grano hacia arriba (depósitos de barras de punta), los cuales a su
vez subyacen a lodos y arcillas de los depósitos de planicie de inundación. A partir de este
punto se da el modelo típico para un sistema de ríos meándricos (Fig.7) que fue propuesto
por Allen (1970), siendo retomado por diversos autores que han realizado trabajos sobre
este sistema fluvial (Cant, 1978 y 1982; Walker y Cant, 1984; Galloway, 1985; Fraser,
1989; Boggs, 1989; entre otros).
Fig. 7 Secuencia típica de disminución en el tamaño de grano hacia arriba en los depósitos de sistemas
fluviales meándricos.

Este modelo consiste de una secuencia de disminución de tamaño de grano hacia


arriba que da inicio con un conglomerado basal sobre una superficie de erosión. Esta
unidad basal es reemplazada por arenas con estratificación cruzada cóncava de una barra de
punta, cuyo tamaño de grano decrece hacia arriba; algunas arenas con laminación paralela
pueden estar presentes como cuerpos lenticulares (acreción lateral). La parte superior del
modelo está caracterizada por los lodos y arcillas de los depósitos de la planicie de
inundación que contienen restos de raíces, grietas de desecación, y posiblemente estructuras
de bioturbación (acreción vertical).

3. Sistema de Ríos Anastomosados

Este sistema ha sido considerado como un tipo especial de los sistemas de ríos
meándricos, en donde se desarrolla un sistema de canales de muy alta sinuosidad de manera
estable y permanente (Miall, 1977).
Figura 8: Imagen satelital de un río anastomosado

a. Procesos de depósito
Para Smith (1980), el término anastomosado es empleado para describir un complejo de
depósito fluvial de gradiente muy bajo (0.09 - 0.012 m/km), en donde se interconectan una
serie de canales de muy alta sinuosidad, angostos y relativamente profundos. Además, en
estos sistemas los canales son separados por planicies de inundación que consisten de islas
con vegetación, muros naturales y áreas donde pueden desarrollarse depósitos de desborde
(Fig.9). Los canales en estos sistemas son rellenados con arena y grava, formando depósitos
lenticulares, limitados por depósitos areno-arcillosos de muro natural. Por otra parte, en las
planicies de inundación, los depósitos característicos los constituyen materiales limo-
arcillosos finamente laminados, incluyendo depósitos finos de pantanos con un alto
contenido de materia orgánica.

Figura 9: Modelo arquitectónico de un río anastomosado.


b. Características de los sedimentos

Debido a que los depósitos de canal en estos sistemas contienen sedimentos muy
similares a los de los otros sistemas fluviales, esto es, gravas estratificadas y arenas con
estratificación cruzada cóncava (Cant, 1982), no pueden ser tomados como diagnóstico de
este tipo de sistemas. Sin embargo, de acuerdo a Smith (1983), las facies distintivas de los
sistemas de ríos anastomosados (Fig.9) son aquellas que se desarrollan en las áreas de
intercanales, siendo muy comunes los depósitos de desborde y de canal de desborde. Otra
de las características distintivas de los sedimentos finos generados en las planicies de
inundación de estos sistemas, es la presencia abundante de raíces y la acumulación de
materia orgánica.
Para Nadon (1994), los sedimentos de los ríos anastomosados están representados por
cuerpos elongados de arenisca, encajonados entre delgadas capas de areniscas de grano fino
y lutitas. Así mismo, Nadon (1994) concluye que para que una secuencia de este tipo de
sistema fluvial se preserve, deben de mantenerse las características de bajo relieve y muy
bajo gradiente por largos períodos geológicos; y que las cuencas de antepaís y de graben
son los sitios que mejor mantienen estas condiciones.

Referencias:

A. D. Miall, 1996. The Geology of Fluvial Deposits. Sedimentary facies, Basin analysis
and Petroleum Geology.
H. E. Reineck, I.B. Singh, 1980. Depositional Sedimentary Environments.
http://www.geologia.uson.mx/academicos/

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