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Angélica G. Mora
ANTES DE LA INDEPENDENCIA
No hubo grandes cambios en los sistemas productivos sin embargo, a pesar de extinguirse
la encomienda, poseedores de tierras y minas se beneficiaban de un servil trabajo por
parte de los indios. También hubo afinamiento de la rutina y creció producción para el
mercado urbano; en cuento a la agricultura se gestaron nuevas ideas de desarrollo, en
cuanto a la ganadería se notó un crecimiento de los viejos hatos y la minería se caracterizó
por la aparición de nuevas vetas.
DESDE LA INDEPENDENCIA:
Generó conmoción social, las tierras y minas cambiaron muchas veces de manos.
También cabe destacar que la liberalización del régimen comercial (en el que Portugal y
España suprimen trabas) generó la expansión de las metrópolis, ampliando las
perspectivas, se abren relaciones directas con los centros de comercio inglés y se
establecen los comerciantes extranjeros.
2. UNA SOCIEDAD CRIOLLA
Se presentan cambios en la sociedad de barroca a criolla (finales del s.XVIII) siendo los
principales:
A diferencia de la sociedad barroca que era estática, la nueva sociedad criolla era
dinámica.
Paralelamente, en lo rural empezó a formarse una sociedad marginal de
inmigrantes, esclavos libertinos y prófugos de la ley; gente campestre que luego
penetraron en la ciudad por los suburbios.
Al igual que las sociedades rurales, aparecieron de los grupos peninsulares las
nuevas burguesías con nuevas mentalidades mercantiles y a favor de los grupos
rurales y de la nueva sociedad.
Los grupos populares (populacho) tienen la posibilidad de un ascenso social y de
integración a la sociedad hidalga, y los españoles “blancos” pierden su
importancia.
El mestizo tiene una condición privilegiada (Real Cédula de 1795 de Caracas)
División entre criollos viejos (comprometidos con la nueva sociedad ) y nuevos
(comprometidos con las coronas europeas)
La Sociedad abigarrada se nota preocupada por la ostentación del nivel social y por el
ascenso del mismo y hay un Aumento de familias ilustres con la afirmación de la
conquista, que mostraban un interés de conservar un “modo de vida noble”, surgiendo así
un interés por el mundo mercantil y por alcanzar una educación acorde con la época de las
luces. Se difunde el gusto por las tertulias de sobre literatura, política, filosofía, economía y
ciencias. De este modo, las Ciudades se hallan politizadas y surgen movimientos
revolucionarios encabezados por las nuevas burguesías criollas.
Las principales repercusiones urbanas que se presentan en este marco de situaciones son:
La sociedad abigarrada usaba la ciudad más que antes y desbordaba los lugares públicos,
de modo que la preocupación por la limpieza elemental. El aprovisionamiento de agua y el
sistema de alcantarillado se mejoró en las capitales, en las que empezó a instalarse un
rudimentario alumbrado público. Así mismo, se dotó de equipamientos la ciudad como
hospitales, cementerios, hospicios.
Ciertas ciudades amenazadas erigieron nuevos fuertes, de acuerdo con las concepciones
dieciochescas de la ingeniería militar; y algunas levantaron y perfeccionaron sus murallas.
Se agregaron a las viejas capitales en el proceso de expansión las nuevas capitales de
intendencia que aparecieron al instaurarse el nuevo sistema administrativo español en
1788. Así mismo ciudades fueron fundadas como consecuencia de una marcada tendencia
a recoger la población dispersa por los campos, y algunas surgieron solas, como resultado
de una actividad económica muy productiva que las tonifico desde muy pronto.
4. REFORMAS Y REVOLUCIONES
“Un afán de saber y un designio de transformar el opaco mundo colonial vibraba en los jóvenes
que se acercaban a las fuentes del pensamiento moderno”.1
1
ROMERO, José Luis. Latinoamérica: las ciudades y las ideas. Medellín, Editorial Universidad de Antioquia,
1999
5. LAS BURGUESÍAS CRIOLLAS: ILUSTRACÍON Y CAMBIO
La burguesía criolla logra consolidarse de las pequeñas minorías comerciantes a una clase
social con mayor poder económico y político a finales del siglo XVIII. La filosofía de la
ilustración es aceptada por la burguesía criolla y a partir de ella construyen una ideología
de cambio para la economía y la sociedad.
Este proyecto de cambio de los burgueses generó, además de una población campesina
más “ilustre y útil para la sociedad”, un aumento favorable en la economía agrícola y
mercantil y en la calidad de vida de los criollos en general. Así, se establece una nueva
relación Explotador/Explotado con el campesinado, pero admitiéndolos como parte del
cambio social que generaban; desaparece la relación Vencedor/Vencido tradicional de la
hegemonía española.
La burguesía que había estimulado los cambios sociales del campesinado, ahora era
víctima de sus acciones, lo que la llevo a ceder ante las presiones de la revolución,
disolverse paulatinamente e ir perdiendo el carácter social conseguido.
BIBLIOGRAFÍA:
ROMERO, José Luis. Latinoamérica: las ciudades y las ideas. Medellín, Editorial Universidad de
Antioquia, 1999
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Óp. Cit. Capítulo V