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PSICOLOGÍA Y CÁNCER
Raúl Rivero Burón*
Asociación Española de Psicología Clínica Cognitivo
Conductual, España
José Antonio Piqueras Rodríguez
Universidad Miguel Hernández de Elche, España
Victoriano Ramos Linares
Servicios Sociales de Callosa de Segura, España
Luis Joaquín García López
Universidad de Granada, España
Agustín Ernesto Martínez González
Clínica Neuropsicológica Mayor, España
Luis Armando Oblitas Guadalupe
Universidad Nacional Autónoma de México
ABSTRACT
RESUMEN
E
sión, y, en tercer lugar, se comenzó a
l interés por los aspectos más
reconocer que determinadas variables
psicológicos en la enfermedad
psicológicas y del estilo de vida de las
del cáncer es relativamente
personas constituían factores de ries-
reciente. Llama la atención compro-
go para el origen y desarrollo del cán-
bar que no es hasta mediados de los
cer. Por ejemplo, los datos que
años 70 cuando se inició esta anda-
revelaban/confirmaban la asociación
dura en el ámbito internacional. Los
entre fumar cigarrillos y padecer cán-
factores que contribuyeron al desarro-
cer de pulmón fue un importante es-
llo de un mayor interés en los aspec-
tímulo para el empuje en el estudio
tos psicológicos del cáncer fueron
de variables psicológicas en pacientes
varios. En primer lugar, se produjo un
con cáncer.
cambio en la actitud hacia el cáncer
Por tanto, se comenzó a reconocer
debido a que dejó de verse como una
que los factores psicológicos (cognitivos,
enfermedad necesariamente mortal.
emocionales y motivacionales) son pro-
Al mejorar el pronóstico aumentó el
optimismo en la población y permitió ducto de la historia individual de cada
que el diagnóstico de cáncer fuera re- persona y del contexto sociocultural en
velado más frecuentemente. En se- el que ésta se desenvuelve e influyen
gundo lugar, se realizó un esfuerzo tanto en el proceso del enfermar huma-
para ofrecer un cuidado más humano no como en la prevención de los tras-
y espiritual a las personas con cáncer tornos y enfermedades, a la vez que en
terminal gracias al inicio del hospi- el mantenimiento de un nivel óptimo
dado que reduce el número y la acti- empresa Western Electric, las perso-
vidad de las células NK (natural killer) nas que presentaban puntuaciones
que se encargarían de identificar y elevadas de depresión en el cuestio-
destruir las células tumorales en el nario Minnesota Multiphasic
momento de su aparición y (b) de una Personality Inventory (MMPI) mostra-
forma directa, mediante algunos me- ban, diecisiete años más tarde, una
canismos que podrían tener un papel probabilidad doble de haber muerto a
más específico en el inicio del cáncer causa de un cáncer.
tales como son la reparación del ADN Al igual que en el apartado ante-
dañado y la apoptosis. rior, las estrategias de adquisición de
Por todo esto, desde el punto de vis- habilidades para hacer frente a la de-
ta de la prevención primaria y con un presión podrían resultar inexcusables,
abordaje eminentemente psicológico tanto desde un punto de vista profe-
se podría enseñar a las personas que sional como ético.
se encuentran en situaciones de alto 5. La personalidad Tipo C: La per-
riesgo de padecer estrés-como, por sonalidad Tipo C en sí misma puede
ejemplo, una prolongada situación de consistir tanto en un exceso de racio-
paro, la muerte de la pareja, un hijo o nalidad como de antiemotividad. Se
una jubilación forzosa- en estrategias caracteriza por una tendencia a repri-
adecuadas para afrontarlas con el mí- mir y negar emociones.
nimo peligro posible para su salud. Al Uno de los primeros estudios a este
hacerlo, posiblemente se consiga dis- respecto fue el llevado a cabo por
minuir el grado de vulnerabilidad del Grossarth-Maticek et al. (1985). Estos
individuo ante las enfermedades en autores encontraron que el estilo de
general y, en el caso del cáncer, inte- manejo racional/antiemocional era un
rrumpir un ciclo precanceroso en predictor de cáncer de todos los tipos.
marcha. Otra estrategia podría consis- En un estudio longitudinal en población
tir en implementar programas a eda- comunitaria más de mil personas fue-
des tempranas en las que se ron evaluadas en diferentes aspectos
enseñarán habilidades y recursos psicosociales. Diez años después, el
para hacer frente a las situaciones factor racionalidad/antiemocionalidad
estresantes que forman parte de la se encontraba en 158 personas de en-
vida. tre las personas que murieron de cán-
4. La depresión: la relación entre cer (n=166). Estas observaciones
estados depresivos e incidencia del apoyan fuertemente la relación ente
cáncer aunque menos documentada el control emocional y el cáncer. La
que con el estrés, parece existir. Para dimensión psicológica de racionalidad/
documentar lo expresado anterior- antiemocionalidad parece ser la apues-
mente, valga de ejemplo el estudio de ta más fuerte en la relación con el cán-
Shekelle et al. (1981) en el que en una cer de mama y con los cánceres en
muestra de 2020 empleados de la general. No obstante, se requiere una
precaución extrema al hacer una lec- 1997) se estima que el 35% de los cán-
tura de estos datos debido al escaso ri- ceres se atribuyen a la alimentación.
gor metodológico que presentan algunos La buena noticia es que al depender
de los estudios revisados y las contra- directamente de la conducta del hom-
dicciones en los resultados aportados bre se pueden prevenir con dietas
entre estudios. También deberíamos apropiadas. La Unión Internacional
destacar que, aunque el cáncer es una Contra el Cáncer propone las si-
enfermedad muy compleja, similares guientes recomendaciones: consumir
variables psicológicas parecen estar una dieta variada rica en frutas, ver-
normalmente en todos los estudios. duras y cereales; restringir el consu-
El abordaje psicológico para preve- mo de grasas; limitar o evitar el
nir la tendencia a reprimir y negar consumo de bebidas alcohólicas; guar-
emociones podría consistir en educar dar y preparar las comidas de modo que
a la población en general y en particu- se reduzca la contaminación por hon-
lar a la población con antecedentes gos, microbios y agentes cancerígenos;
familiares de cáncer de mama en la reducir el uso de la sal durante la pre-
importancia de expresar sentimien- paración y consumo de los alimentos;
tos negativos y en el aprendizaje de equilibrar la dieta consumida con el
maneras más adecuadas de expresar gasta energético para evitar un peso
las acciones que les sientan mal de excesivamente elevado y no depender
otras personas. de vitaminas y minerales empleados
6. La alimentación: los medios de como suplementos para sustituir a
comunicación nos bombardean conti- una dieta adecuada y equilibrada.
nuamente con noticias que denun- La contribución que puede reali-
cian que una ingente cantidad de zar la psicología en este ámbito es de
sustancias que ingerimos son cance- gran relevancia. Se ha probado que las
rígenas. Desde nuestro punto de vis- dietas alimenticias propuestas por
ta, la proliferación de tales noticias no otros profesionales de la salud se lle-
sólo no consiguen que la población eli- van a cabo con mayor éxito cuando los
mine de su dieta esa sustancia sos- psicólogos lo complementan con gru-
pechosa sino que otras que con mayor pos de apoyo social, se seleccionan
probabilidad pudieran serlo no sean metas concretas, objetivas y realistas,
tenidas en cuenta. A pesar de esta se incorpora a la familia en los pro-
afirmación, la importancia de la dieta gramas dietéticos, se realizan contra-
alimenticia en la etiología del cáncer tos conductuales y se promociona la
es importantísima. De hecho, en dos participación en actividades relacio-
revisiones relevantes de literatura nadas con la alimentación sana.
científica que asocian dieta y cáncer Igualmente se hace necesario llevar
(United Kingdom Department of Health, a cabo programas de educación e in-
1998; Word Cancer research Fund and formación para implantar estos com-
Americam Institute for Cancer Research, portamientos saludables.
Averiguar lo que el paciente desea Las náuseas y los vómitos son, para
saber. Este es un punto fundamen- la mayor parte de enfermos de cán-
tal. En ocasiones los pacientes nie- cer, los efectos secundarios más mo-
gan la situación en la que se lestos de la quimioterapia. Debido a
encuentran y prefieren olvidar o que los medicamentos diseñados para
evitar darse cuenta de su deterio- controlar estos desagradables sínto-
ro y otras evidencias de enferme- mas no son todo lo eficaces que se
dad. En este caso, es conveniente desearía, la psicología conductual ha
respetar la decisión del paciente y realizado un esfuerzo por explicar y
darle sólo la información que soli- tratar estas incómodas consecuen-
cite, revelándole su derecho a cam- cias que se pueden manifestar antes,
biar de opinión o a saber más si lo durante y mucho después de las se-
desea. Se sugiere preguntar direc- siones de quimioterapia. Uno de los
tamente al paciente la informa- estudios más relevantes en la etiolo-
ción que desea que se le transmita. gía de estos síntomas fue el llevado a
Una de las preguntas podría ser: cabo por los investigadores Redd y
Andresen en 1981. Estos autores des-
Si lo que le pasara no fuera nada bueno, cribieron las nauseas y vómitos
no sé si usted es de la clase de perso- anticipatorios (NVA) como la conse-
nas que les gustaría saberlo todo con cuencia de un condicionamiento clá-
respecto a la enfermedad y a lo que le sico pavloviano. Estímulos olfatorios,
está pasando o si por el contrario, es visuales o de cualquier otro tipo aso-
usted una persona práctica a la que le ciado con la quimioterapia pueden pro-
interesa centrarse en las diferentes al- ducir respuestas tales como nauseas y
ternativas de tratamientos que existen para vómitos en ausencia de fármacos a tra-
su caso y dejarse de explicaciones. vés del paradigma de condicionamiento
clásico. Tras sucesivas asociaciones,
Tener en cuenta que, aunque la
dichos estímulos, inicialmente neutros
información del diagnóstico o pro-
(sin poder emético) adquieren las carac-
nóstico puede hacerle sentir al pa-
terísticas de la quimioterapia, esto es,
ciente una mayor ansiedad
la capacidad de producir náuseas y
inicialmente, normalmente en
emesis, hasta producir ellos mismos
menos de 2 semanas estos nive-
dichas reacciones.
les se estabilizan, reducen o eli-
Debido a la alteración de la cali-
minan, y tanto los pacientes
dad de vida que supone en el enfer-
informados como sus familiares
mo, la elevada incidencia (entre el 25
por el médico. A esto se añade que son les, estrategias de autocontrol, entre-
manifestación de un gran sufrimien- namiento en solución de problemas y
to del paciente, independientemente relación de pareja.
de su intensidad. En ello radica la ne- La terapia cognitiva es la terapia
cesidad de identificar estos senti- desarrollada por Beck (1991). La tera-
mientos y de valorar tanto si forman pia cognitiva se conoce también y qui-
parte de un trastorno emocional ma- zá más propiamente dicho como
yor como si requieren un tratamien- terapia cognitivo-conductual, al punto
to especializado. incluso de que, según se ha dicho, pue-
La identificación y diagnóstico de de que sea su principio activo.
la sintomatología depresiva es com- La terapia interpersonal (Klerman,
pleja en oncología, puesto que, con fre- 1984) se centra en cuatro áreas pro-
cuencia, es una manifestación de blemáticas: el duelo, las disputas
trastornos orgánicos subyacentes o interpersonales, la transición de rol y
una consecuencia de la administra- los déficits interpersonales. El duelo es
ción de determinados fármacos. Deter- la pena o tristeza por pérdidas de al-
minar si el cansancio o la apatía, el guien o de algo valioso. Las disputas
insomnio o la falta de apetito son parte interpersonales se refieren, sobre todo,
de la enfermedad cancerosa o resulta- a los conflictos con personas del entor-
do de su impacto psicológico sobre el no cotidiano. La transición de rol en el
paciente puede ser, por tanto, una ar- cambio de un papel social a otro, debido
dua tarea. De ahí que se hayan descri- a modificaciones de la edad, del contex-
to varios métodos diagnósticos con el to, del estatus social o de otras circuns-
fin de facilitar el proceso del cual va a tancias. Cada cambio en este sentido
depender la implantación del trata- puede suponer una situación potencial
miento adecuado. de desconcierto, de modo que pese más
En cuanto a las diferentes modali- la pérdida de la posición anterior que la
dades terapéuticas que se aplican en posible ventaja de la nueva. Finalmen-
el control de síntomas depresivos, hay te, los déficit interpersonales tienen que
tres tratamientos psicológicos que tie- ver con patrones disfuncionales en la
nen mostrada su eficacia en la depre- relación con los otros.
sión. Son la terapia de conducta, la terapia Todas estas terapias constan de un
cognitiva y la terapia interpersonal. programa estructurado del orden de
La terapia de conducta presenta 12-16 sesiones. Todas disponen de un
varias modalidades, siendo el progra- manual de aplicación (incluyendo a
ma denominado curso de afrontamien- veces un manual del paciente).
to para la depresión, desarrollado por Igualmente, todas son susceptibles de
Lewinsohn y Gotlib (1995) la modalidad su aplicación en grupo, y no sólo como
de referencia. Este protocolo incluye la tratamiento agudo sino también como
realización de actividades agradables, un programa de prevención de recaí-
entrenamiento en habilidades socia- das y de seguimiento. En relación a la
dos de ansiedad derivados a partir del las ganancias obtenidas con la TCC
cáncer. (Brown y Barlow, 1995).
Los trastornos de ansiedad más fre- Con respecto al Trastorno de An-
cuentes entre los pacientes de cán- siedad Generalizada (TAG), la terapia
cer se encuentran el trastorno de cognitivo-conductual resulta la más
ansiedad generalizado (TAG) y el tras- eficaz. La técnica de la relajación,
torno de pánico (TP). Con respecto al aunque eficaz, no parece suficiente
primero, se ha puesto de manifiesto por sí sola. Por esta razón, ha de com-
que el tratamiento más eficaz es la binarse con procedimientos cognitivos
terapia cognitivo-comportamental es- para habilitar al paciente con el fin
pecialmente diseñada para el TP. En de que controle la preocupación.
este enfoque de terapia se suelen in-
cluir los siguientes componentes: un METODOLOGÍA CIENTÍFICA EN
componente educativo acerca de qué PSICOONCOLOGÍA (2)
es la ansiedad y el pánico, reestruc- La Asociación Americana Contra el
turación cognitiva, alguna forma de Cáncer (1982) ha priorizado los temas
exposición, entrenamiento en respi- de investigación en el marco de los prin-
ración y/o en habilidades de afronta- cipios psicosociales y comportamentales
miento. (Beck y Zebb, 1994). del cáncer. Se clasificaron los temas de
Con respecto a los tratamientos de investigación en tres:
psicoterapia y psicofármacos, Gould, Otto
y Pollack (1995), compararon la efectivi- a)Los propios enfermos oncológicos:
dad de los tratamientos cognitivos- que se centra en la experiencia subje-
comportamentales con los tratamientos tiva de la enfermedad (ansiedad, depre-
solamente farmacológicos. Los resulta- sión, desmoralización, hipocondriasis,
dos fueron: (i) 70% de sujetos mostraron desesperanza y función cognitiva), fun-
una remisión total del trastorno tras re- ciones somáticas (estatus físico, dolor,
cibir el tratamiento cognitivo-conductual náuseas, vómitos, y funcionamiento
y (ii) 57% en el caso de tratamiento sexual) y calidad de vida (trabajo, rela-
farmacológico. Resulta importante lla- ciones familiares, funcionamiento so-
mar la atención sobre los tratamien- cial, actividades de ocio y tiempo libre,
tos combinados. De momento no hay impacto de la enfermedad y tratamiento).
unos datos claros que demuestren la b) Su entorno social: que incluye el
eficacia de éstos ya que en la fase de funcionamiento familiar y social, in-
seguimiento no se mantienen y los fluencias culturales y apoyo social como
pacientes tienen un mayor nivel de un protector contra la enfermedad.
recaída.
c) Variables relacionadas con el
También resultan preocupantes
tratamiento antineoplásico: adhesión
algunos informes actuales que mues-
terapéutica, la calidad de vida, las per-
tran que las benzodiacepinas de alta
cepciones del enfermo acerca del cui-
potencia pueden interferir o perturbar
dado médico que recibía, y la comuni- Sin esta información es dudoso que
cación entre el enfermo y los profe- puedan llegarse a conclusiones claras
sionales sanitarios. y a que puedan replicarse los trabajos
que se realicen, igualmente debería-
Para realizar una adecuada in-
mos desconfiar de aquellas investiga-
vestigación en cualquiera de los te-
ciones en las cuales se utilicen sujetos
mas citados anteriormente, se
en los que los datos anteriores (tipo de
deberían tener en cuenta los si-
cáncer, estadio de evolución, etc.) apa-
guientes aspectos:
rezcan mezclados o poco especificados.
(i) Dado que los diferentes tipos de cán-
(ii) Para llevar a cabo un estudio de
cer se diferencian unos de otros en
investigación en psicooncología,
cuanto a su comportamiento, a las
deberíamos de seguir los siguien-
causas que los originan y a los fac-
tes pasos:
tores que pueden acelerar o
lentificar su evolución, el primer
1. Formular una hipótesis.
paso importante en la mayoría de las
investigaciones que se realicen de- 2. Realizar una extensa revisión biblio-
berá consistir en caracterizar la cla- gráfica: de esta manera podremos
se de cáncer sobre la que vamos a averiguar si lo que pretendemos
trabajar, de acuerdo con: hacer ya ha sido realizado por otros
a) Su apariencia al microscopio. investigadores y si así fuera cómo
lo hicieron
b) Su localización en el organismo.
c) Su estadio de desarrollo en el mo- 3. Considerar la posibilidad de llevar
mento en que se procede a la re- a cabo el estudio: es posible que nos
cogida de datos ya que la prognosis encontremos con la inexistencia
varía de acuerdo con el estado de de instrumentos de evaluación
evolución en el que se encuentra adecuados para valorar las varia-
la enfermedad. (En el estadio 1 el bles definidas o no poder controlar
cáncer se encuentra localizado. En variables extrañas o no contar con
el estadio 2 se aprecian metásta- el apoyo de la institución dónde
sis regionales cercanas al tumor deseamos realizarla
primario y en el estadio 3 existen
4. Selección de la muestra: tamaño
metástasis diseminadas por el or-
de la muestra, criterios de inclu-
ganismo en lugares alejados del
sión y exclusión
tumor primario).
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