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ESCUELA PROFESIONAL DE INGENIERIA

forestal y ambiental

CURSO: Edafología y suelos forestales


TEMA: Resumen
ESTUDIANTES: Burga Mendoza Paulander
Zambrano Chávez Segundo Wilmer

DOCENTE: Dr. Ing Alejandro Seminario

CICLO: VII

CHOTA-2019
PROCESOS DE ALTERACIÓN (DEGRADACIÓN) DE LOS SUELOS

La degradación del suelo es la pérdida de equilibrio de sus propiedades, lo que


limita su productividad. Ella tiene expresión en aspectos físicos (erosión), químicos
(déficit de nutrientes, acidez, salinidad, otros) y biológicos del suelo (deficiencia de
materia orgánica).

Los procesos de degradación del suelo son fenómenos dinámicos e interactuantes


causante de los cambios que resultan en la disminución de la calidad de los
suelos. Se manifiestan de diferentes maneras. De acuerdo a la metodología
GLASOD, se pueden diferenciar dos grandes categorías de procesos de
degradación de suelos:

a. Aquellos relacionados con el desplazamiento de material del suelo por el agua o


el viento que conlleva a la ocurrencia de perdida de material del suelo o bien a la
deforestación, como efectos in situ.

b. Procesos que determinan el deterioro in situ de las cualidades del suelo. Tales
procesos pueden ser de naturaleza química (agotamiento de nutrientes, pérdida
de materia orgánica, Salinización, acidificación, contaminación), física (sellado y
encostramiento del suelo, compactación, anegamiento), y también biológica,
conducente a un desbalance de la actividad biológica en el episuelo.

Causas de la pérdida de tierras

Las causas principales son la expansión urbana, la construcción de carreteras, la


minería y la industria. Aparte de estas formas de pérdida, existen otras como:
 Acumulación salina
 Daños físicos y biológicos
 Erosión eólica
 Erosión hídrica

El daño físico se produce principalmente debido a la compactación que sufre el


suelo, ya sea por el uso continuo de maquinaria pesada o el pisoteo de ganado.
La degradación biológica ocurre cuando se pierde la materia orgánica o el humus.
La erosión eólica es la degradación en sus aspectos físico, químico y biológico,
causado por el viento, quien, además de despojar a las tierras de la capa arable,
sepulta campos, edificios, maquinarias.
La erosión hídrica es la forma más común de erosión, que causa daños masivos
en casi todos los países. En todo el mundo, las aguas arrastran cada año unos
25.000 millones de tierra.
Efectos de la degradación del suelo sobre la población
Si la erosión es para la tierra una enfermedad, la desertificación significa su
muerte. Hoy, la desertificación amenaza a unos 3.200 millones de ha de tierra, y
pone en peligro el sustento de más de 700 millones de personas.
La degradación del suelo, sustento fundamental de toda la población humana,
puede intervenir en la destrucción de civilizaciones enteras. Este es el caso de la
cultura Maya, que se mantuvo floreciente durante 1.700 años, en lo que es
actualmente el territorio de Guatemala. Entre las causas de su decadencia, hacia
el año 900 d.C., se menciona la drástica degradación que sufrieron sus suelos,
ocasionando una grave disminución de la productividad agrícola.
Al aumentar la presión demográfica, los Mayas comenzaron a talar árboles de las
laderas abruptas, para extender sus áreas de labranza. La tierra comenzó a sufrir
una fuerte erosión, decayó la capacidad de autoabastecimiento alimentario, y se
desmoronó la civilización.

LA EROSIÓN
La erosión corresponde al proceso de desgaste de la superficie terrestre,
provocada por la acción de las fuerzas de la naturaleza, contribuyendo a la
transformación del suelo. El suelo es un recurso no renovable y altamente
vulnerable a la acción antrópica y a las condiciones de variabilidad climática y de
cambio climático global.
La degradación química se puede definir como la pérdida de nutrientes (o la
acumulación excesiva de algún nutriente) y el aumento de la salinidad o la acidez.
La degradación biológica se ve representada por la reducción de materia orgánica.
El suelo es un recurso no renovable y altamente vulnerable a la acción antrópica y
a las condiciones de variabilidad climática y de cambio climático global.

La degradación química se puede definir como la pérdida de nutrientes (o la


acumulación excesiva de algún nutriente) y el aumento de la salinidad o la acidez.
La degradación biológica se ve representada por la reducción de materia orgánica.

La degradación es un proceso complejo, en el cual factores naturales y humanos


contribuyen a la pérdida de la capacidad de producción del suelo.
Entre las principales causas posibles de identificar se encuentran:

 Características propias del suelo, tales como material de origen, pendiente,


profundidad, textura y estructura.
 Frecuencia, intensidad y cantidad de las precipitaciones.
 Adopción de malas prácticas. tales como cultivos en pendiente, exceso de
laboreo, escasa fertilización, uso de fertilizantes acidificantes, exceso de
plaguicidas (herbicidas), pérdida de cobertura.

El transporte

La ablación y el desplazamiento de los materiales desgastados presuponen un


transporte; es la segunda fase de la erosión. La gravedad de una pendiente seca,
el viento, etc., aseguran este desplazamiento.

La acumulación o sedimentación

A su vez, el transporte provoca más pronto o más tarde una acumulación. Cuando
se verifica en el fondo de las aguas de un lago o de un océano de llama
sedimentación; esta operación modifica las formas del relieve terrestre, pero
cuando la sedimentación se efectúa al aire libre en un cono de deyección
torrencial.

Tipos de erosión

De acuerdo a las fuerzas que actúan y tiempos de ocurrencia, la erosión es de dos


tipos:
a) Erosión natural o geológica
Ocurre como consecuencia de las fuerzas de la naturaleza y cuyas tasas de
ocurrencia son generalmente bajas.
b) Erosión acelerada o inducida

Aquella en la que se agrega la acción del hombre a la acción de los agentes


naturales. Este tipo de erosión es propiciado por el mal manejo del suelo.

Formas de la erosión
a. Erosión por salpicaduras El salpicado de suelo se origina cuando las gotas de
lluvia caen directamente sobre las partículas de suelo o superficies de agua muy
delgadas, salpicando cantidades enormes de suelo debido a la energía cinética de
impacto.
b. Erosión laminar
La erosión laminar remueve uniformemente el suelo en estratos delgados, como
consecuencia del flujo superficial laminar que escurre en capas delgadas sobre el
terreno. El impacto de las gotas de lluvia, combinado con el flujo superficial, forma
los riachuelos microscópicos iniciales, Desde el punto de vista de la energía, la
erosión por las gotas de lluvia es muy importante, pues estas tienen velocidades
de flujo superficial que son mucho menores (aproximadamente de 0.3 a 0.6 m/s).

La fuerza abrasiva y la de arrastre de la corriente laminar están en función de la


profundidad y la velocidad de escurrimiento para una partícula o agregado de
suelo de tamaño, forma y densidad determinados.

c. Erosión en surcos
Cuando el flujo superficial se concentra, el agua actúa sobre el suelo
desprendiéndolo originando canales o arroyos pequeños bien definidos, conocidos
como surcos o canalillos. Este tipo de canales se vuelven estables y se les ve con
facilidad. El desprendimiento y transporte son más severos porque las velocidades
de escurrimiento son más altas y el esfuerzo hidráulico cortante aumenta con el
grado de la pendiente y el radio hidráulico de la sección del canal.

d. Erosión en cárcavas
Esta forma de erosión abre canales de mayores dimensiones que los surcos, los
cuales conducen agua durante o inmediatamente después de las lluvias y, a
diferencia de lo que ocurre en éstos, el paso de maquinaria difícilmente borra los
cauces sin dejar depresiones donde existían las cárcavas. Entonces, la erosión
que origina cárcavas u hondonadas es una etapa avanzada de la que produce la
erosión en surcos, del mismo modo que ésta, es una etapa posterior de la erosión
laminar.

TIPOS DE ESCORRENTÍA
La escorrentía es la parte de la precipitación que llega a alimentar a las corrientes
superficiales, continuas o intermitentes, de una cuenca. Es la porción de lluvia que
no es infiltrada, interceptada o evaporada y que fluye sobre las laderas. En
realidad, la escorrentía superficial, la infiltración y la humedad del suelo son
interactivas entre sí, por tal motivo se debe tener cuidado en seleccionar el modelo
adecuado para cada caso.

Existen distintos tipos de escorrentías dependiendo de su procedencia:


a) Escorrentía superficial o directa,
b) Escorrentía hipodérmica o subsuperficial y
c) Escorrentía subterránea.

a. Escorrentía superficial o directa


Es la precipitación que no se infiltra en ningún momento y llega a la red de drenaje
moviéndose sobre la superficie del terreno por la acción de la gravedad.

Se inicia un aguacero depende de las características del terreno: la primera lluvia


caída se invierte en llenar la capacidad de retención de la parte aérea de las
plantas y en saturar el suelo.

b. Escorrentía hipodérmica o subsuperficial

Es el agua de precipitación que, habiéndose infiltrado en el suelo, se mueve sub


horizontalmente por los horizontes superiores para reaparecer súbitamente como
manantial e incorporarse a microsurcos superficiales que la conducirán a la red de
drenaje.
c. Escorrentía subterránea
Es la precipitación que se infiltra hasta el nivel freático, desde donde circula hasta
alcanzar la red de drenaje.

FACTORES QUE CONDICIONAN LA ESCORRENTÍA


La escorrentía está influida por cuatro grupos de factores:
 Meteorológicos
 Geográficos
 Hidrogeológicos
 Biológicos.

CONSERVACIÓN DE SUELOS

Conservar el suelo significa la utilización de prácticas de protección y


mejoramiento, de tal forma que se controle la degradación física, química y
biológica, que permita el incremento de las cosechas. Es importante incorporar
todas las prácticas apropiadas a las condiciones biofísicas y ambientales dentro
del sistema de producción.

Con esta combinación se puede, al mismo tiempo, lograr los siguientes objetivos:
 Controlar la erosión. La cantidad de suelo fértil que se pierde es muy alta,
esta pérdida erosiva da como resultado la pérdida de la capa productiva del
suelo y la formación de cárcavas, las prácticas de conservación de suelos
están orientadas a frenar la velocidad del paso de agua por sobre el suelo
(escorrentía).
 Aprovechar mejor el agua. Aumentar la infiltración del agua en el suelo.
Fuera del suelo se pierde toda el agua de la escorrentía que no logra
infiltrarse en el suelo, esta agua no puede ser aprovechada por los cultivos,
las obras de manejo de suelo y agua permiten el almacenamiento y/o el
aprovechamiento del recurso hídrico, dando un uso sostenible al suelo.
 Mejorar la fertilidad y prevenir con más eficiencia las plagas y
enfermedades. La conservación de suelos, además de contemplar la
construcción de obras físicas para el manejo del mismo, aplica medidas que
ayudan a mejorar la fertilidad del suelo con el propósito de evitar las
pérdidas de suelo por erosión y mejorar el rendimiento de los cultivos.

Existen numerosas prácticas de conservación, todas giran alrededor de los


siguientes cuatro principios, para el manejo de suelos:

a. Proteger la superficie del suelo.


b. Reducir el largo de la pendiente.
c. Reducir la inclinación de la pendiente.
d. Incorporar materia orgánica.

CLASIFICACIÓN DE LAS PRÁCTICAS DE CONSERVACIÓN DE SUELOS

Barreras vivas

Esta práctica consiste en sembrar hileras de plantas perennes, de crecimiento


denso, Estas fajas suelen ser plantas gramíneas de tallo duro y porte erecto. Las
barreras vivas tienen los siguientes propósitos:

• Controlar la erosión.

• Disminuir la velocidad del agua de lluvia que no se logra filtrar en el suelo.

• Atrapar los sedimentos, nutrientes y contaminantes que arrastra el agua de


lluvia, evitando que estos sean transportados a los cuerpos de agua.

Aumentar la filtración del agua ayudando a conservar por mayor tiempo la


humedad en el perfil del suelo.

• Mejorar el relieve para el cultivo, al formar terrazas.

Cultivos de cobertura y abonos verdes


Los cultivos de cobertura y los abonos verdes son cubiertas vegetales que se
utilizan como prácticas de conservación de suelo, para conservar, fertilizar y
mejorar el terreno, generalmente, se trata de especies leguminosas, fijadoras de
nitrógeno como el frijol.

Las coberturas vegetales y los abonos verdes, como una buena práctica de
conservación de suelo, tienen la finalidad de:

• Proteger la capa arable de la superficie del suelo.

• Agregar materia orgánica, lo que permite mantener e incrementar la fertilidad de


los suelos.

• Aumentar la capacidad de retención de humedad.

Incrementar la infiltración.

• Mejorar la estructura del suelo.

Cero labranza y labranza mínima

Ayuda a conservar las características deseables del suelo y a la conservación del


agua. Labranza cero implica la siembra sin remover el terreno. La labranza mínima
consiste en la rotura del suelo solo en las fajas o surco donde se va a sembrar la
semilla. Generalmente, cuando el agricultor realiza la labranza conservacionista,
utiliza el mulching, El mulching es el proceso de cubrir la capa arable con
materiales como hojas, hierba, ramitas, residuos del cultivo, paja y otros
materiales. Podemos mencionar las siguientes ventajas cuando esta práctica se
asocia con el mulch o los cultivos de cobertura:

• Proteger el suelo de la erosión causada por el viento y el agua.

• Mantener la humedad y reducir la evaporación.

• Mejorar la infiltración de agua pluvial y de riego manteniendo una buena


estructura del suelo.
• Impedir que el terreno se caliente en exceso.

• Aumentar el contenido de materia orgánica.

Siembra en contorno o en curvas a nivel

Consiste en preparar las hileras del cultivo en contra de la pendiente siguiendo las
curvas a nivel. Así, cada surco o hilera de plantas forma un obstáculo al agua de
escorrentía que, al correr libremente, evita que adquiera la velocidad y fuerza
necesaria para generar erosión. Esta práctica contribuye a disminuir la escorrentía
del agua y el arrastre del suelo.

Se recomienda el establecimiento de las siembras en contorno en terrenos con


pendientes mayores al 5%, y para siembras de cualquier cultivo. Es importante
reconocer que en pendientes mayores al 12%, generalmente, esta práctica por sí
sola no controla los efectos de la erosión y deberán utilizarse otras prácticas de
acuerdo a la disponibilidad de material y mano de obra.

Rotación de cultivos y asociación de cultivos

Es uno de los métodos más antiguos para conservar la productividad del suelo y
para controlar las plagas en cultivos. Está práctica debe programarse tomando en
cuenta las condiciones ecológicas y socio económicas de cada región.

Los cultivos permanecen más sanos y productivos, se hacen más resistentes al


ataque de las plagas, enfermedades y malezas. Si la rotación incluye cultivos
densos de buena cobertura, ofrece mayor protección al suelo contra la erosión,
disminuye el escurrimiento, y permite un mejor aprovechamiento de la humedad.

Cultivos en fajas

Los cultivos en fajas se pueden definir como prácticas de conservación de suelos


en la cual se alternan fajas de cultivos de alta y baja densidad de siembra, o
cultivos de alto y bajo crecimiento, con el fin de evitar o minimizar la erosión eólica
o hídrica.
Existen dos tipos de cultivos en fajas en función del objetivo que ellos cumplen: de
fajas transversales al viento, cuya finalidad es disminuir o minimizar la erosión
eólica en aquellos lugares donde el viento es el principal agente erosivo; y cultivos
de fajas en contorno, que controlan la erosión hídrica, donde el principal agente
erosión es el agua de lluvias. Los cultivos en fajas se recomiendan para
pendientes de hasta 20%. En pendientes mayores, este sistema se reemplaza con
prácticas mecánicas de conservación como son las zanjas de infiltración y
terrazas.

Cultivos en fajas

Son prácticas agronómicas comunes de conservación de suelos. Los cultivos en


fajas se pueden definir como prácticas de conservación de suelos en la cual se
alternan fajas de cultivos de alta y baja densidad de siembra, o cultivos de alto y
bajo crecimiento, con el fin de evitar o minimizar la erosión eólica o hídrica.

Existen dos tipos de cultivos en fajas en función del objetivo que ellos cumplen: de
fajas transversales al viento, cuya finalidad es disminuir o minimizar la erosión
eólica en aquellos lugares donde el viento es el principal agente erosivo, consiste
en intercalar dentro del área cultivada de la chacra, fajas de un cultivo alto que
servirá como pequeñas cortinas corta vientos; y cultivos de fajas en contorno,
que controlan la erosión hídrica, donde el principal agente erosión es el agua de
lluvias, la conservación de suelos con cultivos en fajas en contorno, es una
práctica que debe complementarse con otras acciones similares, tales como
preparación del terreno y siembra en forma perpendicular a la pendiente, rotación
de cultivos, etc.

Zonas de exclusión de uso

Esta práctica se define como la segregación de un sitio al que por sus


características no puede dársele un uso productivo y que requerirá,
posiblemente, de prácticas para su recuperación. La exclusión puede ser de
carácter permanente o temporal. Donde hay cárcavas es recomendable utilizar la
práctica de exclusión. Las cárcavas son barrancos o zanjas, provocados por el
agua de lluvia que corre sobre el suelo, llevándose así grandes cantidades de
tierra. Las cárcavas pequeñas aparecen como surcos en un terreno desprotegido
donde se acumula el agua. Son fáciles de controlar haciendo pequeños esfuerzos
de trabajo. Las cárcavas grandes se van formando cuando no se controlan las
cárcavas pequeñas; los surcos se hacen más grandes y profundos a causa del
arrastre de tierra por el agua de lluvia y se requieren mayores esfuerzos para
recuperar el área, demandándose en muchos casos, excluir el área de usos
productivos.

Prácticas forestales agrostológicas.

La AGROSTOLOGÍA, es la ciencia que se ocupa del estudio de las especies


forrajeras, su clasificación, manejo y utilización, en la alimentación del ganado.

Barreras vivas

Son hileras de plantas colocadas con determinado distanciamiento horizontal y


sembradas a través de la pendiente siguiendo las curvas a nivel. Ofrecen las
siguientes ventajas: Evitan la erosión en terrenos inclinados, rompe vientos,
barrera natural de insectos dañinos, atracción de enemigos naturales para plagas,
abonos verdes, alimento para animales, proveen de madera y leña. Son ejemplos
de barreras vivas: vetiver, king grass, caña de azúcar, piña, flores, especies
leguminosas (leucaena, hualango, chugur), carrizo, maicillo, entre otros. Son
ejemplo de cercas vivas: especies maderables y leñosas.

Cortina rompe viento

Son aquellas plantaciones generalmente de árboles y arbustos de diferentes


tamaños, dispuestas en hilera o en surcos con la finalidad de disminuir la
velocidad de los vientos.

Prácticas mecánico estructurales

Terrazas

Son plataformas que se construyen en terrenos con pendiente cortando fajas que
siguen las curvas a nivel. Pueden ser del tipo de base angosta, terraza individual o
terrazas de banco.

Tienen el propósito de cortar la pendiente del terreno reduciendo el poder erosivo


del agua en las pendientes.

Barreras muertas o pircas

Son prácticas que consisten en construir barreras o muros de contención de


piedras, tierra, troncos y ramas de madera, colocados en contra de la pendiente
del terreno.
Diques

Son estructuras en forma de media luna levantadas sobre curvas a nivel para
disminuir la velocidad del agua evitar pérdida de suelo en áreas de la parcela
donde se han producido cárcavas. Para la construcción de un dique se utilizan
diferentes materiales: piedra, madera, sacos de arena, llantas y otros materiales
disponibles en la finca.

Zanjas de ladera o de infiltración

Son canales que se construyen al contorno del terreno, siguiendo curvas de nivel
o desnivel trazadas con la ayuda del nivel A. Las zanjas de ladera tienen el
propósito de acortar el largo del terreno con la pendiente que provoca la erosión y
disponer del agua de la escorrentía de una manera planificada para que cause
menor impacto. La construcción de zanjas de ladera es una de las prácticas más
usadas para conservar los suelos y la humedad.

FERTILIDAD DE SUELOS

La fertilidad del suelo es una cualidad resultante de la interacción entre las


características físicas, químicas y biológicas del mismo y que consiste en la
capacidad de poder suministrar condiciones necesarias para el crecimiento y
desarrollo de las plantas. Estas características no actúan independientemente,
sino en armónica interrelación, que en conjunto determinan la fertilidad del suelo.

Fertilidad química del suelo

Se determina normalmente a través de la disponibilidad de nutrientes en el suelo,


más precisamente en la solución del suelo o en la fase intercambiable. La fertilidad
química hace referencia a la reserva de nutrientes en el suelo y su aporte a las
plantas, se caracteriza principalmente por las siguientes variables: la capacidad
de cambio de cationes y aniones, el pH, contenido de materia orgánica.

Fertilidad física del suelo

Capacidad del suelo en brindar las condiciones estructurales adecuadas para el


anclaje, sostén y crecimiento de la plantación forestal. Entre las propiedades
físicas que la definen están: la estructura, textura, la porosidad, retención hídrica,
densidad aparente, resistencia a la penetración, entre otras.

La estructura del suelo se afecta fuertemente por el impacto que ejercen


actividades en la plantación, tales como la cosecha de los árboles, la preparación
del sitio para la siembra, la fertilización inicial y el control de malezas. Estas
prácticas pueden alterar la estructura del suelo, causar compactación y reducir el
crecimiento de los árboles, ya que aumenta la resistencia del suelo a la
penetración de raíces, reduciendo la aireación y cambiando los flujos de agua y
disponibilidad de nutrimentos.

Fertilidad biológica del suelo

Se refiere al papel de los organismos vivos (macro y microorganismos) como el


caso de los microorganismos benéficos que se encuentran en la rizósfera y que
son determinantes en la salud de la planta y la fertilidad del suelo porque
participan en muchos procesos clave del ecosistema. Los microorganismos en el
suelo, lo componen las bacterias, actinomicetos, hongos, algas, virus y
protozoarios, la actividad de los microorganismos en el suelo está relacionada con
el contenido de humedad que se presente en el suelo.

La ley del mínimo

El rendimiento o el crecimiento, están limitados por aquel factor cuya proporción o


intensidad relativa es menor. Esta ley fue propuesta por JustusVon Liebig, en
1840. El elemento esencial proveído en menores cantidades (factor limitante)
determina el éxito del programa de fertilización. Es decir, si un elemento se
encuentra deficiente, el crecimiento y rendimiento del cultivo no será el óptimo, y
para poder incrementar la productividad (expresada en crecimiento o rendimiento)
es necesario suplir el elemento deficiente.

Elementos minerales importantes para los suelos forestales

El suelo para la plantación forestal es aquel lugar donde se ubica el material


vegetal, crece y da producción, además, del suelo se extrae agua y nutrientes
requeridos en su etapa de desarrollo, igualmente, es un sistema que posee
horizontes que son el resultado de procesos patogenéticos que actúan sobre él;
por tanto, es una mezcla de componentes minerales, materia orgánica, bacterias,
aire y agua así, entender y reconocer estos elementos y sus horizontes es
importante para determinar sus potencialidades y limitantes en el desarrollo
forestal. Al igual que para cualquier otro tipo de plantas, los requerimientos
nutricionales de los árboles maderables son los mismos, unos en cantidades
grandes, llamados macronutrientes, tales como N, P, K, Ca, Mg y S, y otros se
requieren en cantidades pequeñas por lo que se conocen como micronutrientes o
elementos traza, entre ellos el Fe, Cu, Cl, Mn, B, Zn, Ni y Mo, los cuales son
absorbidos por la planta en medio líquido (agua). Además, el C, H y O son
tomados del aire vía fotosíntesis y del agua del suelo.
CAPACIDAD Y USO MAYOR DE LAS TIERRAS

Análisis de Decreto Supremo Nº 017-2009-AG

La Capacidad de Uso Mayor (CUM) correspondiente a cada unidad de tierra, es


determinada mediante la interpretación cuantitativa de las características edáficas,
climáticas (zonas de vida) y de relieve, los que intervienen en forma conjugada.

El Reglamento de Clasificación de Tierras por su Capacidad de Uso Mayor,


consta de Seis Capítulos, 17 Artículos, una 01 Disposición Especial y Cuatro
Anexos. Permite caracterizar el potencial de suelos en el ámbito nacional,
determinando su capacidad e identificando sus limitaciones, todo ello dentro del
contexto agrario, permitiendo implementar medidas de conservación y
aprovechamiento sostenido.

Grupo de Capacidad de Uso Mayor de las Tierras

Esta categoría representa la más alta abstracción del Sistema, agrupa a las tierras
de acuerdo a su máxima vocación de uso, es decir, a tierras que presentan
características y cualidades similares en cuanto a su aptitud natural para la
producción sostenible, de cultivos en limpio, cultivos permanentes, pastos,
producción forestal, las que no reúnen estas condiciones son consideradas tierras
de protección.Los cinco (05) grupos de CUM establecido por el presente
reglamento, son:

a) Tierras Aptas para Cultivo en Limpio (Símbolo A): Reúne a las tierras
que presentan características climáticas, de relieve y edáficas para la
producción de cultivos en limpio que demandan remociones o araduras
periódicas y continuadas del suelo
b) Tierras Aptas para Cultivos Permanentes (Símbolo C): Reúne a las
tierras cuyas características climáticas, relieve y edáficas no son favorables
para la producción de cultivos que requieren la remoción periódica y
continuada del suelo (cultivos en limpio), pero permiten la producción de
cultivos permanentes, ya sean arbustivos o arbóreos (frutales
principalmente).
c) Tierras Aptas para Pastos (Símbolo P): Reúne a las tierras cuyas
características climáticas, relieve y edáficas no son favorables para cultivos
en limpio, ni permanentes, pero sí para la producción de pastos naturales o
cultivados que permitan el pastoreo continuado o temporal, sin deterioro de
la capacidad productiva del recurso suelo.
d) Tierras Aptas para Producción Forestal (Símbolo F): Agrupa a las tierras
cuyas características climáticas, relieve y edáficas no son favorables para
cultivos en limpio, permanentes, ni pastos, pero, sí para la producción de
especies forestales maderables.
e) Tierras de Protección (Símbolo X): Están constituidas por tierras que no
reúnen las condiciones edáficas, climáticas ni de relieve mínimas
requeridas para la producción sostenible de cultivos en limpio,
permanentes, pastos o producción forestal.
Clase de Capacidad de Uso Mayor de las Tierras

Es el segundo nivel categórico del presente Sistema de Clasificación de Tierras.


Reúne a unidades de suelos tierra según su Calidad Agrológica dentro de cada
grupo. La calidad agrológica viene a ser la síntesis de las propiedades de
fertilidad, condiciones físicas, relaciones suelo-agua, las características de relieve
y climáticas, dominantes y representa el resumen de la potencialidad del suelo
para producir plantas específicas o secuencias de ellas bajo un definido conjunto
de prácticas de manejo. De esta forma, se han establecido tres (03) clases de
calidad agrológica: Calidad Alta, comprende las tierras de mayor potencialidad y
que requieren de prácticas de manejo y conservación de suelos de menor
intensidad; Calidad Media, corresponde a las tierras con algunas limitaciones y
que exigen prácticas moderadas de manejo y conservación de suelos; y Calidad
Baja, reúne a las tierras de menor potencialidad dentro de cada grupo de uso,
exigiendo mayores y más intensas prácticas de manejo y conservación de suelos
para la obtención de una producción económica y continuad.

Subclase de Capacidad de Uso Mayor de las Tierras

Constituye la tercera categoría del presente Sistema de Clasificación de Tierras,


establecida en función a factores limitantes, riesgos y condiciones especiales que
restringen o definen el uso de las tierras. La subclase de capacidad de uso,
agrupa tierras de acuerdo al tipo de limitación o problema de uso. Lo importante
en este nivel categórico es puntualizar la deficiencia o condiciones más relevantes
como causal de la limitación del uso de las tierras.

Limitaciones:

a. Limitación por Suelo (Símbolo “s”): Las limitaciones por este factor están
referidas a las características intrínsecas del perfil edáfico de la unidad de suelo,
tales como: profundidad efectiva, textura dominante, presencia de grava o piedras,
reacción del suelo (pH), salinidad, así como las condiciones de fertilidad del suelo
y de riesgo de erosión.

b. Limitación por Sales (Símbolo “l”): Si bien el exceso de sales, nocivo para el
crecimiento de las plantas es un componente del factor edáfico, en la
interpretación esta es tratada separadamente por constituir una característica
específica de naturaleza química cuya identificación en la clasificación de las
tierras, especialmente en la región árida de la costa, tiene notable importancia en
el uso, manejo y conservación de los suelos.

c. Limitación por Topografía - riesgo de Erosión (Símbolo “e”): La longitud,


forma y sobre todo el grado de pendiente de la superficie del suelo influye
regulando la distribución de las aguas de escorrentía, es decir, determinan el
drenaje externo de los suelos.

d. Limitación por Drenaje (Símbolo “w”): Esta limitación está íntimamente


relacionada con el exceso de agua en el suelo, regulado por las características
topográficas, de permeabilidad del suelo, la naturaleza del substratum y la
profundidad del nivel freático.

e. Limitación por riesgo de Inundación o Anegamiento (Símbolo “i”): Este es


un aspecto que podría estar incluido dentro del factor drenaje, pero, por constituir
una particularidad de ciertas regiones del país como son las inundaciones
estaciónales en la región amazónica y en los valles costeros, y que comprometen
la fijación de cultivos, se ha diferenciado del problema de drenaje.

f. Limitación por Clima (Símbolo “c”): Este factor está íntimamente relacionado
con las características particulares de cada zona de vida o bioclima tales como la
ocurrencia de heladas o bajas temperaturas, sequías prolongadas, deficiencias o
excesos de lluvias y fluctuaciones térmicas significativas durante el día, entre
otras. Estas son características que comprometen seriamente el cuadro de
especies a desarrollarse.

g. Presencia de Terraceo - Andenería (Símbolo “a”): Está referida a las


modificaciones realizadas por el hombre, en pendientes pronunciadas
construyendo terrazas (andenes), lo cual reduce la limitación por erosión del suelo
y cambia el potencial original de la tierra.

h. Riego permanente o suplementario (Símbolo “r”): Referida a la necesidad


de la aplicación de riego para el crecimiento y desarrollo del cultivo, debido a las
condiciones climáticas áridas.

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