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forestal y ambiental
CICLO: VII
CHOTA-2019
PROCESOS DE ALTERACIÓN (DEGRADACIÓN) DE LOS SUELOS
b. Procesos que determinan el deterioro in situ de las cualidades del suelo. Tales
procesos pueden ser de naturaleza química (agotamiento de nutrientes, pérdida
de materia orgánica, Salinización, acidificación, contaminación), física (sellado y
encostramiento del suelo, compactación, anegamiento), y también biológica,
conducente a un desbalance de la actividad biológica en el episuelo.
LA EROSIÓN
La erosión corresponde al proceso de desgaste de la superficie terrestre,
provocada por la acción de las fuerzas de la naturaleza, contribuyendo a la
transformación del suelo. El suelo es un recurso no renovable y altamente
vulnerable a la acción antrópica y a las condiciones de variabilidad climática y de
cambio climático global.
La degradación química se puede definir como la pérdida de nutrientes (o la
acumulación excesiva de algún nutriente) y el aumento de la salinidad o la acidez.
La degradación biológica se ve representada por la reducción de materia orgánica.
El suelo es un recurso no renovable y altamente vulnerable a la acción antrópica y
a las condiciones de variabilidad climática y de cambio climático global.
El transporte
La acumulación o sedimentación
A su vez, el transporte provoca más pronto o más tarde una acumulación. Cuando
se verifica en el fondo de las aguas de un lago o de un océano de llama
sedimentación; esta operación modifica las formas del relieve terrestre, pero
cuando la sedimentación se efectúa al aire libre en un cono de deyección
torrencial.
Tipos de erosión
Formas de la erosión
a. Erosión por salpicaduras El salpicado de suelo se origina cuando las gotas de
lluvia caen directamente sobre las partículas de suelo o superficies de agua muy
delgadas, salpicando cantidades enormes de suelo debido a la energía cinética de
impacto.
b. Erosión laminar
La erosión laminar remueve uniformemente el suelo en estratos delgados, como
consecuencia del flujo superficial laminar que escurre en capas delgadas sobre el
terreno. El impacto de las gotas de lluvia, combinado con el flujo superficial, forma
los riachuelos microscópicos iniciales, Desde el punto de vista de la energía, la
erosión por las gotas de lluvia es muy importante, pues estas tienen velocidades
de flujo superficial que son mucho menores (aproximadamente de 0.3 a 0.6 m/s).
c. Erosión en surcos
Cuando el flujo superficial se concentra, el agua actúa sobre el suelo
desprendiéndolo originando canales o arroyos pequeños bien definidos, conocidos
como surcos o canalillos. Este tipo de canales se vuelven estables y se les ve con
facilidad. El desprendimiento y transporte son más severos porque las velocidades
de escurrimiento son más altas y el esfuerzo hidráulico cortante aumenta con el
grado de la pendiente y el radio hidráulico de la sección del canal.
d. Erosión en cárcavas
Esta forma de erosión abre canales de mayores dimensiones que los surcos, los
cuales conducen agua durante o inmediatamente después de las lluvias y, a
diferencia de lo que ocurre en éstos, el paso de maquinaria difícilmente borra los
cauces sin dejar depresiones donde existían las cárcavas. Entonces, la erosión
que origina cárcavas u hondonadas es una etapa avanzada de la que produce la
erosión en surcos, del mismo modo que ésta, es una etapa posterior de la erosión
laminar.
TIPOS DE ESCORRENTÍA
La escorrentía es la parte de la precipitación que llega a alimentar a las corrientes
superficiales, continuas o intermitentes, de una cuenca. Es la porción de lluvia que
no es infiltrada, interceptada o evaporada y que fluye sobre las laderas. En
realidad, la escorrentía superficial, la infiltración y la humedad del suelo son
interactivas entre sí, por tal motivo se debe tener cuidado en seleccionar el modelo
adecuado para cada caso.
CONSERVACIÓN DE SUELOS
Con esta combinación se puede, al mismo tiempo, lograr los siguientes objetivos:
Controlar la erosión. La cantidad de suelo fértil que se pierde es muy alta,
esta pérdida erosiva da como resultado la pérdida de la capa productiva del
suelo y la formación de cárcavas, las prácticas de conservación de suelos
están orientadas a frenar la velocidad del paso de agua por sobre el suelo
(escorrentía).
Aprovechar mejor el agua. Aumentar la infiltración del agua en el suelo.
Fuera del suelo se pierde toda el agua de la escorrentía que no logra
infiltrarse en el suelo, esta agua no puede ser aprovechada por los cultivos,
las obras de manejo de suelo y agua permiten el almacenamiento y/o el
aprovechamiento del recurso hídrico, dando un uso sostenible al suelo.
Mejorar la fertilidad y prevenir con más eficiencia las plagas y
enfermedades. La conservación de suelos, además de contemplar la
construcción de obras físicas para el manejo del mismo, aplica medidas que
ayudan a mejorar la fertilidad del suelo con el propósito de evitar las
pérdidas de suelo por erosión y mejorar el rendimiento de los cultivos.
Barreras vivas
• Controlar la erosión.
Las coberturas vegetales y los abonos verdes, como una buena práctica de
conservación de suelo, tienen la finalidad de:
Incrementar la infiltración.
Consiste en preparar las hileras del cultivo en contra de la pendiente siguiendo las
curvas a nivel. Así, cada surco o hilera de plantas forma un obstáculo al agua de
escorrentía que, al correr libremente, evita que adquiera la velocidad y fuerza
necesaria para generar erosión. Esta práctica contribuye a disminuir la escorrentía
del agua y el arrastre del suelo.
Es uno de los métodos más antiguos para conservar la productividad del suelo y
para controlar las plagas en cultivos. Está práctica debe programarse tomando en
cuenta las condiciones ecológicas y socio económicas de cada región.
Cultivos en fajas
Cultivos en fajas
Existen dos tipos de cultivos en fajas en función del objetivo que ellos cumplen: de
fajas transversales al viento, cuya finalidad es disminuir o minimizar la erosión
eólica en aquellos lugares donde el viento es el principal agente erosivo, consiste
en intercalar dentro del área cultivada de la chacra, fajas de un cultivo alto que
servirá como pequeñas cortinas corta vientos; y cultivos de fajas en contorno,
que controlan la erosión hídrica, donde el principal agente erosión es el agua de
lluvias, la conservación de suelos con cultivos en fajas en contorno, es una
práctica que debe complementarse con otras acciones similares, tales como
preparación del terreno y siembra en forma perpendicular a la pendiente, rotación
de cultivos, etc.
Barreras vivas
Terrazas
Son plataformas que se construyen en terrenos con pendiente cortando fajas que
siguen las curvas a nivel. Pueden ser del tipo de base angosta, terraza individual o
terrazas de banco.
Son estructuras en forma de media luna levantadas sobre curvas a nivel para
disminuir la velocidad del agua evitar pérdida de suelo en áreas de la parcela
donde se han producido cárcavas. Para la construcción de un dique se utilizan
diferentes materiales: piedra, madera, sacos de arena, llantas y otros materiales
disponibles en la finca.
Son canales que se construyen al contorno del terreno, siguiendo curvas de nivel
o desnivel trazadas con la ayuda del nivel A. Las zanjas de ladera tienen el
propósito de acortar el largo del terreno con la pendiente que provoca la erosión y
disponer del agua de la escorrentía de una manera planificada para que cause
menor impacto. La construcción de zanjas de ladera es una de las prácticas más
usadas para conservar los suelos y la humedad.
FERTILIDAD DE SUELOS
Esta categoría representa la más alta abstracción del Sistema, agrupa a las tierras
de acuerdo a su máxima vocación de uso, es decir, a tierras que presentan
características y cualidades similares en cuanto a su aptitud natural para la
producción sostenible, de cultivos en limpio, cultivos permanentes, pastos,
producción forestal, las que no reúnen estas condiciones son consideradas tierras
de protección.Los cinco (05) grupos de CUM establecido por el presente
reglamento, son:
a) Tierras Aptas para Cultivo en Limpio (Símbolo A): Reúne a las tierras
que presentan características climáticas, de relieve y edáficas para la
producción de cultivos en limpio que demandan remociones o araduras
periódicas y continuadas del suelo
b) Tierras Aptas para Cultivos Permanentes (Símbolo C): Reúne a las
tierras cuyas características climáticas, relieve y edáficas no son favorables
para la producción de cultivos que requieren la remoción periódica y
continuada del suelo (cultivos en limpio), pero permiten la producción de
cultivos permanentes, ya sean arbustivos o arbóreos (frutales
principalmente).
c) Tierras Aptas para Pastos (Símbolo P): Reúne a las tierras cuyas
características climáticas, relieve y edáficas no son favorables para cultivos
en limpio, ni permanentes, pero sí para la producción de pastos naturales o
cultivados que permitan el pastoreo continuado o temporal, sin deterioro de
la capacidad productiva del recurso suelo.
d) Tierras Aptas para Producción Forestal (Símbolo F): Agrupa a las tierras
cuyas características climáticas, relieve y edáficas no son favorables para
cultivos en limpio, permanentes, ni pastos, pero, sí para la producción de
especies forestales maderables.
e) Tierras de Protección (Símbolo X): Están constituidas por tierras que no
reúnen las condiciones edáficas, climáticas ni de relieve mínimas
requeridas para la producción sostenible de cultivos en limpio,
permanentes, pastos o producción forestal.
Clase de Capacidad de Uso Mayor de las Tierras
Limitaciones:
a. Limitación por Suelo (Símbolo “s”): Las limitaciones por este factor están
referidas a las características intrínsecas del perfil edáfico de la unidad de suelo,
tales como: profundidad efectiva, textura dominante, presencia de grava o piedras,
reacción del suelo (pH), salinidad, así como las condiciones de fertilidad del suelo
y de riesgo de erosión.
b. Limitación por Sales (Símbolo “l”): Si bien el exceso de sales, nocivo para el
crecimiento de las plantas es un componente del factor edáfico, en la
interpretación esta es tratada separadamente por constituir una característica
específica de naturaleza química cuya identificación en la clasificación de las
tierras, especialmente en la región árida de la costa, tiene notable importancia en
el uso, manejo y conservación de los suelos.
f. Limitación por Clima (Símbolo “c”): Este factor está íntimamente relacionado
con las características particulares de cada zona de vida o bioclima tales como la
ocurrencia de heladas o bajas temperaturas, sequías prolongadas, deficiencias o
excesos de lluvias y fluctuaciones térmicas significativas durante el día, entre
otras. Estas son características que comprometen seriamente el cuadro de
especies a desarrollarse.