2.técnica de Construcción

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Técnica de construcción

Tipos de cubierta

Formas de la popa

Mantenimiento

Durabilidad

ESTRUCTURA DE UN BARCO;
LAS CUADERNAS
Definimos las partes y la nomenclatura de la estructura de un barco: La
quilla, cuadernas, la roda, el codaste, el trancanil, los baos, la regala, los mamparos, el
plan, la sentina y los imbornales.

Quilla:

La quilla es una pieza larga y recta formada por un material robusto como puede ser la
madera o el hierro. Recorre la parte inferior del barco de proa a popa y forma la base de la
estructura del barco dándole rigidez y resistencia. También se puede definir como la
columna vertebral del esqueleto del barco. A la quilla se unen las cuadernas, la roda y el
codaste.
Cuadernas:

Las cuadernas las podemos definir como las costillas del esqueleto o estructura del barco.
Son unas piezas transversales en forma de U o V, que unidas a la quilla en su parte inferior
y hacia ambos lados dan forma al barco. La cuaderna más ancha, que suele estar situada
en el centro de la embarcación, se llama cuaderna maestra.

Roda:

La roda es la prolongación de la quilla en la parte delantera de la embarcación en sentido


vertical o inclinado, forma la proa del barco. Está construida del mismo material que la
quilla. La unión de la roda con la quilla se llama pie de roda.

Codaste:

El codaste es la prolongación vertical o inclinado de la quilla en la parte trasera del barco


para formar la popa. Está construida del mismo material robusto que la quilla.

Baos:

Los baos son unas piezas de refuerzo transversales situadas encima de las cuadernas
uniendo sus dos extremos superiores. Sobre los baos se sitúa la cubierta.

Trancanil:

El trancanil es una pieza longitudinal que va desde la popa a la proa de la embarcación


uniendo la parte superior de las cuadernas por ambos lados.

Borda:

La borda es la parte superior del costado del barco comprendido entre la cubierta y la
regala. La borda sirve de protección en cubierta para evitar caídas al mar. Los veleros y
barcos pequeños no tienen borda, para evitar las caídas se instalan unas barras verticales
llamados candeleros que sirven de soporte a un cable llamado guardamancebos.
Regala:

La regala es la parte superior de la borda, recorre longitudinalmente de popa a proa.


Cubriendo la regala y como remate o embellecedor está la tapa de regala.

Mamparos:

Los mamparos son los tabiques o paredes interiores de los barcos. Pueden ser
longitudinales o transversales.

El plan:

Es el suelo plano y más bajo de la embarcación. En el interior forma el suelo de camarotes,


aseos y demás estancias. Está construido encima de la quilla o sobrequilla.

Sentina:

Es la parte más baja del barco, está situada debajo del plan formando un canal donde se
recogen líquidos procedentes de filtraciones de agua de mar, agua potable o restos
oleosos procedentes de los motores del barco. En la zona más baja de las sentinas se
instala la bomba de achique para poder expulsar al exterior todos líquidos sobrantes.

Imbornales:

Los imbornales son orificios practicados en los costados, a la altura del trancanil y por
encima de la cubierta que atraviesan el forro externo para desalojar el agua embarcada en
la cubierta.

Clases de cubiertas[editar]

 Primera cubierta o principal: la que en los navíos y fragatas sostiene la artillería de más
grueso calibre.
 Segunda cubierta: la superior inmediata a la principal en los navíos de tres puentes y la
del combés en los sencillos.
 Tercera cubierta: la superior inmediata a la segunda en los navíos de tres puentes.
 Cubierta alta: la superior, como su sobrenombre lo indica, la cual por excelencia se
llama cubierta.
 Cubierta del combés: la tercera en los navíos de tres puentes, la segunda en los sencillos
y la principal en las fragatas y en las corbetas de puente a la oreja.
 Cubierta del alcázar: la parte de cubierta alta comprendida entre el palo mayor y el
coronamiento de popa en los buques que no tienen toldilla ni chupeta y en los otros la
parte que hay desde el mamparo proel de uno de estos repartimientos hasta el palo
mayor.
 Cubierta del castillo: la más alta desde el palo trinquete hasta proa.
 Cubierta de la toldilla: la indicada por su sobrenombre.
 Cubierta del sollado: la indicada por su sobrenombre la cual regularmente sirve de techo a
la bodega.
 Cubierta del entrepuentes: la principal en los navíos y la del sollado en los demás barcos.
 Cubierta levadiza: la compuesta de cuarteles, que pueden quitarse y ponerse con
facilidad.
 Cubierta de guindaste: la que provisionalmente se hace entre el palo mayor y el trinquete
para alojar tropa de transporte. La que en los vapores destinados a llevar muchos
pasajeros, sirve de techo a las cámaras y salones y no llega hasta la amurada, sino que
entre ésta y los mamparos de las cámaras deja un corredor o pasamano.
 Cubierta de enjaretado: la que se compone de cuarteles de esta especie.
 Cubierta entera, corrida o de puente a la oreja: la que sigue sin interrupción de popa a
proa.
 Cubierta cortada o media cubierta: la que entre el palo mayor y el de trinquete está
interrumpida por el ojo del combés y sólo deja a uno y otro lado los corredorcillos que se
llaman pasamanos.
 Cubierta arqueada o quebrantada: la que ha perdido su arrufo o es más baja en las partes
de popa y proa que en el centro.
 Cubierta de pozo: la alta o principal de las embarcaciones de esta denominación.
 Cubierta de saltillo: la que no es seguida, sino que forma escalones, regularmente en las
partes de popa y proa.

Tipos[editar]
Según su forma se denomina:

 llana
 redonda
 tajada
 lanzada
 ancha
 de cucharro
 caída
 levantada
Sin embargo, los tipos más generalizados son:

 la popa de crucero
 la popa de espejo o estampa
Un buen mantenimiento del barco se puede considerar como una inversión y
no como un gasto. El beneficio es claro: prolongar la vida útil del barco y
sus equipos para disfrutar más y mejor al navegar.
 Para seguir un correcto mantenimiento de tu barco debes realizar todas
las revisiones cuando tocan.
 Cuando lleves un tiempo sin navegar, debes repasar cada función del barco:
desde motor y sistema eléctrico, hasta casco y velas.
Consideraciones a tener en cuenta en el mantenimiento de tu barco:
 Revisiones periódicas del barco
 Otras revisiones
 Cuaderno de bitácora
 Prestar atención al barco mientras navegas
 Repasar el barco a fondo
Revisiones periódicas del barco

Las revisiones periódicas te permiten descubrir los fallos en fase prematura y de


esta forma evitar reparaciones de mayor envergadura. Además, y aún más
importante, ayudan a que el barco no se deprecie tanto y a lograr mejores
condiciones a la hora de venderlo. Por supuesto, es más fácil llevar un correcto
mantenimiento cuando tenemos un barco nuevo, pero también es posible
encontrar un barco de segunda mano que haya sido cuidado a conciencia, con
previsión. Esto se hará evidente tanto en barcos de vela como de barcos a
motor cuando revises sus entrañas, la cámara del motor, las instalaciones
originales y agregadas.

La limpieza y el orden te darán una clara pauta de cómo lo habitaron las personas
que te precedieron. Si es posible mejorar el barco, lo haremos, para tener un
punto de partida en el que todo funciona y evitar reparaciones inesperadas.
Quizás sea buen momento para saber que la mayoría de las salidas que realiza
Salvamento Marítimo durante la temporada de verano es por averías simples,
incluso por falta de combustible, lo que debería ser el colmo de la vergüenza.

Leer más sobre: La importancia de Salvamento Marítimo para la navegación de


recreo

zz

Otras revisiones

Determinados elementos o acciones como el cambio de aceite del motor o la


revisión de la balsa tienen un período determinado, pero otros elementos como el
mástil o la jarcia tienen períodos de vida más largos y la revisión dependerá de la
intensidad de uso que reciban. Evidentemente, un barco de regata ha de tener un
mayor control sobre la jarcia y el mástil, y un período de vida más corto con
respecto a un barco de crucero. Además, un barco de competición navega
exigiendo al máximo las prestaciones y a su vez reduciendo al máximo el peso,
mientras que a uno de crucero se le exige menos y, por motivos de seguridad, la
mayoría de los elementos están sobredimensionados.

Cuaderno de bitácora

Tanto en barcos a motor, como a vela es altamente recomendable llevar al día un


registro, el famoso “cuaderno de bitácora”, hasta tiene algo de épico anotar en sus
páginas los aconteceres de la navegación. De hecho, los capitanes profesionales
cuentan con programas especiales para la gestión de la embarcación, programas
que hoy podemos llevar en el móvil como una aplicación más.

He visto cantidad de artículos en los que se recomiendan las tareas de


mantenimiento para la época invernal y creo que es un gran error. El
mantenimiento del barco debe ser continuo porque cuanto antes descubras un
fallo, antes podrás solucionarlo y suele ser durante la navegación cuando se
descubren los fallos. No tiene mucho sentido romper el barco durante el verano
para arreglarlo en invierno. El riesgo de arruinar las vacaciones es elevado y las
posibilidades de realizar una reparación intensa durante el verano van
relacionadas, con la espera y el precio a pagar.
El mantenimiento de un barco debe ser continuo, no a temporadas.

Prestar atención al barco mientras navegas

Mientras navegas, dedica algún tiempo a revisar el barco y apunta pequeños


detalles o mejoras que quieres realizar. Es muy posible que estés pensando que
las vacaciones son para disfrutar y no para trabajar en el barco… de acuerdo, en
tal caso, es conveniente comprar tiempo ajeno especializado y hacer una revisión
antes de las vacaciones. Realizar una revisión o algunas comprobaciones no es
una tarea muy complicada ni lleva mucho tiempo. Además, no hay nada mejor que
conocer tu propio barco para poder solucionar inconvenientes cuando no existe la
posibilidad de llamar a un técnico. Cuando estés a unas cuantas millas mar
adentro, solamente podrás contar con tus conocimientos. El sentido común es de
gran ayuda, basta con utilizar el olfato para descubrir desperfectos: por ejemplo
cuando un motor funciona de forma incorrecta es muy posible que levante
temperatura sin llegar a quemar nada, pero el olor del barco cambia, olor a goma
quemada, a cable eléctrico.

Repasar el barco a fondo

Si en invierno no navegamos, algo lamentable pero desgraciadamente muy real,


en la primera navegada de la primavera hay que repasar cada función del barco.

Comprobaciones de motor
Comenzaremos por el motor, en principio, por la limpieza. En un motor limpio
(sentina incluida) cualquier pérdida de fluido se evidencia de inmediato. Primero,
revisa el circuito de combustible; es importante mantener los filtros de combustible
limpios. De hecho, lo ideal es que haya dos filtros, uno para partículas más
gruesas y otro para partículas más finas: así se reparte la carga de trabajo y
aumenta la eficiencia.

En realidad, lo más práctico es seguir los consejos del fabricante y realizar


los cambios de aceite y filtro según la cantidad de horas de uso que vayas dando
al motor (por eso es importante tener un "cuaderno de bitácora" que te ayude a
hacer este cálculo), pero la revisión visual la puedes realizar tu mismo, ya te irás
familiarizando con los elementos del motor.

Una de las averías del motor más habituales es que se rompa el impulsor de la
bomba de refrigeración. La reparación es muy sencilla y no se necesitan
herramientas fuera de lo común, ni conocimientos muy elevados. Lo bueno de
mirar el motor cuando todo funciona es que con un poco de memoria fotográfica o
apuntes, puedes controlar su correcto funcionamiento. Por ejemplo: la correa del
alternador ha de tener una tensión correcta y eso lo puedes verificar con el motor
parado, evidentemente. Si el alternador carga correctamente, la tensión está bien.
Mira apretando ambos lados largos de la correa para ver cuanto cede. Si en algún
momento ves que el alternador no carga correctamente lo primero que hay que ver
es si la correa está en buen estado y si la tensión ha variado. Si hay poca tensión,
intenta darle más, pero si no es posible utiliza esa correa de repuesto que siempre
debes tener a bordo y compra otra para tenerla a mano la próxima vez.
Reductoras, ejes, o transmisión por cola: en todos estos tipos de motor es
necesaria lubricación y según lo que corresponda a tu barco debes informarte para
aprender a hacerlo o para saber por lo que pagas.

El motor es mucho más que la propulsión de tu barco: aporta energía a las


baterías para la iluminación, instrumental, etc. y también para el encendido mismo
del motor. Algunos motores incluyen una serpentina alrededor del sistema de
refrigeración y escape, encargada de calentar el agua para el consumo a bordo.

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