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DEPARTAMENTO D E CONSTRUCCIÓN Y T E C N O L O G I A ARQUITECTÓNICAS -

TRATADO DE REHABILITACION

o
E
o
I Patología y técnicas de intervención,
Fachadas y cubiertas

•r
Organización del Master de Restauración Arquitectónica
Universidad Politécnica de Madrid. Departamento de Construcción y Tecnología Arquitectónicas.
Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid

Director del Master


Juan Monjo Carrió

Autores
3
Josep M. Adell Argües
Alfonso del Aguila García
Celia Barahona Rodríguez
Manuel Carbonell de Masy
Pedro Galindo García
Soledad García Morales
Félix Lasheras Merino
Javier León Vallejo
Lucio Maire Dorado
José Méndez Martín
Juan Monjo Carrió
a
José M. Quixal
Luis de Villanueva Domínguez

Edición de la presente publicación


Editorial Munilla-Lería

Dirección editorial
Luis M. Glbert Trueba

Coordinación
Rita Bestard Martínez

Colaboración
Begoña Valdés Tamames

Documentación
Rosa Bustamante Montoro

a
1 edición Febrero 1999
a
2 impresión Mayo 2000

Ninguna parte de esta publicación, incluido el diseño de la cubierta, puede


almacenarse o reproducirse con ningún medio, sea éste químico, eléctrico,
fotocopia, etc., sin la debida autorización de esta editorial.

© del texto, Universidad Politécnica de Madrid


© de la edición, Editorial Munilla-Leria
Editorial Munílla-Lería
Avda. Filipinas. 30 • 28003 Madrid (España)
Teléfono y Fax: 91 554 87 47

Fotocomposición y Fotomecánica: M J M Impresores


Impresión: Graficinco, S. A.
I.S.B.N. de la Colección: 84-89150-23-0
I.S.B.N.: 84-89150-26-5
Depósito Legal: M. 4.799-1999
Printed in Spain - Impreso en España
TRATADO DE REHABILITACIÓN
Departamento de Construcción. Universidad Politécnica de Madrid (OCTA UPM)

TOMO 1 - TEORÍA E HISTORIA DE LA RESTAURACIÓN


I. Teoría de la Restauración.
II Historia de la Restauración en España.
III. Historia del.Sisterna Constructivo español.
IV. Ejemplos rie Intervenciones. "•

TOMO 2 - METODOLOGIA DE LA RESTAURACIÓN Y DE LA REHABILITACIÓN


. I. Metodología de la Restauración Monumental e Instrumentos de Intervención.
1
II. Incidencia-de la Arqueología"en ía Restauración.
.;. • 111/La Legislación en la Restauración.
IV. Ejemplos de Intervenciones.

TOMO 3 - PATOLOGIA Y TECNICAS DE INTERVENCIÓN. ELEMENTOS ESTRUCTURALES


I. Recalces, apeos y demoliciones.
II Obras de fabrica
III. Recuperación de estructuras de madera.
IV. Patología y recuperación de estructuras de hormigón y metálicas.

TOMO 4 - PATOLOGÍA Y TÉCNICAS DE INTERVENCIÓN. FACHADAS Y CUBIERTAS


I. Humedades y su tratamiento.
II. Patología e intervención en cerramientos y acabados.
III. Revestimientos continuos.'
IV. Patología y reparación de cubiertas.

TOMO 5 - PATOLOGÍA Y TÉCNICAS DE INTERVENCIÓN. LAS INSTALACIONES


I. La rehabilitacion.de las instalaciones de acondicionamiento higrotérmico.
I!. La rehabilitación de las instalaciones eléctricas/electromecánicas y de'alumbrado.
III. Acondicionamiento y aislamiento acústico en la rehabilitación.
. IV. La rehabilitación de las instalaciones de fontanería, saneamiento
y protección contra incendios. - . - .
Presentación

E
l Departamento de Construcción y Tecnología Arquitectónicas de la Universidad Politécnica
de Madrid lleva dictando el Curso Master en Restauración Arquitectónica (MRA) sin interrup-
ción desde 1990, compuesto, a su vez, de dos cursos de especialidad, el de Teoría e Historia
de la Restauración y el de Patología y Técnicas de Intervención.

En 1994/95, el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid publicó el contenido de este último en una
colección de cuatro tomos titulada Curso de Patología. Conservación y Restauración de Edificios,
hoy prácticamente agotada. Por ello, hemos considerado oportuno la presente publicación, que ac-
tualiza dicha colección y la completa con el curso de Teoría e Historia, por lo que constituye el tex-
to completo del MRA.

El título de esta nueva colección, TRATADO DE REHABILITACIÓN, trata de reunir el contenido de la


misma ya que la Rehabilitación es, precisamente el objetivo final de cualquier intervención en el
Patrimonio Arquitectónico, que lleva implícita, a su vez, la Restauración de los edificios con un de-
terminado valor histórico o artístico, así como la Reparación de todas aquellas partes del mismo
que sufren algún tipo de proceso patológico.

La Rehabilitación se convierte así en el proceso por el cual se recupera, la habitabilidad de un edi-


ficio cuando estaba deteriorada por su estado patológico, o se cambia la misma para darle un nue-
vo uso. Esta acepción del término en cuestión, tan aceptada y utilizada actualmente en todos los
ámbitos, no está recogida. Sin embargo, en el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española,
la razón es aparentemente clara: la etimología de rehabilitar tiene su origen en la palabra habilidad
y no en habitabilidad , por lo que parecería que su sema original no permite la acepción que le da-
mos. No obstante además del uso generalizado de esta acepción, lo que posibilitaría un cambio se-
mántico, cabe considerar la habitabilidad de un edificio como su habilidad más importante, por lo
que sí sería correcto el uso de esta acepción para la palabra rehabilitar.

En cualquier caso, consideramos importante desde el punto de vista arquitectónico el hecho de es-
tablecer una utilidad (habitabilidad) determinada cuando restauramos un edificio, de tal manera que
nuestra Intervención se oriente a conferirle esa utilidad, además de recuperar todos los valores his-
tóricos y artísticos del mismo. Un edificio restaurado sin uso, es un edificio de difícil mantenimien-
to y, por tanto, condenado a nuevos procesos patológicos que aumentarán su deterioro.

Tengamos presente, pues, en nuestras intervenciones la tríada vitrubiana y hagamos que el edificio
recupere su integridad (Fírmitas), su aspecto (Venustas) y su habitabilidad {Utilitas). En definitiva, RE-
HABILITEMOS el edificio a restaurar.

Madrid, abril de 1998


Juan Monjo Carrió
Director del MRA
Introducción

Juan Monjo Carrió


Coordinador de los lomos 3 y 4

• • • r a t a n estos dos tomos de analizar los procesos patológicos que sufren los distintos elemen-
tos constructivos de un edificio para proceder a su reparación inmediata mediante una serie
I de técnicas de intervención que deben aplicarse siempre en tres etapas diferenciadas:

- El estudio patológico previo para poder alcanzar un diagnóstico preciso que nos permita cono-
cer, con la mayor exactitud el proceso patológico que afecta al elemento en cuestión.
- La anulación de la causa que provoca el proceso patológico, con el objeto de que no vuelva a
aparecer una vez terminada la intervención.
- La reparación de la lesión que se ha manifestado como síntoma del proceso patológico y que
es, en definitiva, su aspecto más llamativo.

Estas tres fases de la intervención deben seguir siempre las misma secuencia y debemos comple-
tar cada una de ellas con el máximo cuidado y atención al propio edificio y a sus valores históricos
y artísticos.

En la primera, haremos uso de las técnicas de inspección que nos ofrece hoy la ciencia y que nos
permiten conocer el estado del edificio destruyéndolo lo menos posible. Me refiero a las técnicas
ópticas (fotogrametría, termografía, endoscopia, etc.). Otras veces no tendremos más remedio que
recurrir a la toma de muestras y a los ensayos destructivos, o al simple seguimiento ocular o con
aparatos de precisión como los extensómetros y comparadores mecánicos o eléctricos. En cual-
quier caso, no deberemos pasar a la intervención reparadora sin tener un diagnóstico lo más preci-
so posible, al igual que un médico no receta sin estar seguro de la enfermedad, con realización de
todos los análisis y seguimientos previos necesarios.

En la segunda, recurriremos también a las técnicas actuales que nos permita realizar cimentacio-
nes, reforzar elementos estructurales, drenar, impermeabilizar y ventilar cimentaciones y arranques
de muros, mejorar aislamientos de fachadas y cubiertas, etc.. con el objeto de anular el origen de
los procesos patológicos, originados normalmente por errores de diseño y ejecución o, simplemente,
por el paso del tiempo.
En la tercera, por último, actuaremos con sumo cuidado para, por una parte realizar una intervención que per-
mita recuperar la funcionalidad constructiva del elemento lesionado y, por otra, ser respetuosos con la arqui-
tectura del propio edificio, con sus valores históricos y constructivos. Unas veces deberemos recurrir a las téc-
nicas constructivas originales para mantener la imagen inicial tal como preconizaba Viollet le Duc, otras podremos
aportar tecnología y materiales actuales, siempre que no interfiera en el aspecto ni el funcionamiento construc-
tivo del propio edificio o elemento, otras, por fin, no tendremos más remedio que demoler, haciendo caso omi-
so a las exigencias del arqueólogo Ruskin, para después reponer, si cabe, con materiales originales o moder-
nos, conservando la imagen original o aportando soluciones técnicas y formales contemporáneas, que permanezcan
como hitos históricos de la evolución arquitectónica del propio edificio y faciliten así su lectura sincera en tiem-
pos venideros.

Para alcanzar todas esas etapas, el texto se ha dividido en dos tomos, uno referido básicamente a elementos
o
estructurales (el 3 .), tanto de obras de fábrica, más antiguas, como a estructuras ortogonales y reticulares de
madera, hormigón y acero que, aún siendo más próximas en la historia, tienen también su tradición y, en mu-
o
chos casos, su valor histórico y artístico. El otro (el 4 .) referido a elementos de cerramiento y acabados, es de-
cir, fachadas, cubiertas y acabados en general, Incluso elementos decorativos. En cada uno de ellos, los distin-
tos tipos o materiales disponen de un capítulo específico que analiza las tres etapas antedichas para cada caso.

Comoquiera que son diversos los autores de los distintos capítulos, resulta inevitable la repetición de concep-
tos básicos y de soluciones técnicas para la intervención. A veces la repetición es coincldente y otras es con-
tradictoria, lo que podrá sorprender al lector. A pesar de ello y en aras de la diversidad, hemos preferido mante-
ner esas repeticiones e, incluso, contradicciones, en la confianza de que el técnico que consulte el texto obtenga
sus propias conclusiones.
Indice

Presentación
Juan Monjo Carrió 7

Introducción
Juan Monjo Carrió 9

I. HUMEDADES Y SU TRATAMIENTO

1. Comportamiento hídrico de los edificios de construcción tradicional y


de sus materiales. Criterios generales
Soledad García Morales 15

2. Humedades en obras enterradas. Técnicas de drenaje e impermeabilización


Félix Lasheras Merino 29

3. Técnicas y ejemplos de hidrofugación en masa


Manuel Carbonell de Masy 47

4. Humedades en fachadas
Juan Monjo Carrió 55

5. Técnicas y ejemplos de hidrofugación en superficie


Manuel Carbonell de Masy 77

II. PATOLOGÍA E INTERVENCIÓN E N C E R R A M I E N T O S Y ACABADOS

1. Grietas en fachadas y tabiques de fábrica


Juan Monjo Carrió 89

2. Prevención del agrietamiento de fachadas con la fábrica armada


a
Josep M . Adell Argües 121

3. Fisuras en acabados superficiales


Juan Monjo Carrió - ^45

4. Patología y reparación de pavimentos


Juan Monjo Carrió 157

5. Desprendimientos y reparación de acabados por elementos


Juan Monjo Carrió ' 79
6. Patología de fachadas prefabricadas de hormigón
Alfonso del Aguila García 193

7. Ensuciamiento físico de fachadas. Limpieza y prevención


Javier León Vallejo 205

8. Oxidación y corrosión de elementos metálicos de fachada


Juan Monjo Carrió 237

9. Materiales, herramientas y técnicas de restauración de las artes decorativas


Lucio Maire Dorado 255

III. REVESTIMIENTOS CONTINUOS

1. Evolución de técnicas constructivas. Acabados actuales


Celia Barahona Rodríguez 263

2. Patología de los revestimientos continuos conglomerados


Luis de Villanueva Domínguez 273

3. Técnicas de reparación y reposición. Operaciones de mantenimiento


Celia Barahona Rodríguez 291

4. Revestimientos monocapa. Características y ejecución


José Méndez Martín 301

5. Pinturas y recubrimientos: Pliego de condiciones del sistema de pintado y patología


José M". Quixal 317

IV. PATOLOGÍA Y REPARACIÓN D E CUBIERTAS

1. Comportamiento y diagnóstico de la cubierta


Pedro Galindo García 331

2. Aleros y cornisas
Juan Monjo Carrió 341

3. Daños y reparación de cubiertas. Cubiertas de faldón estructural.


Cubiertas ventiladas y no ventiladas
Pedro Galindo García 361
capítulo I

Humedades y su tratamiento
capituíc I. Humedades y su tratamiento

1. Comportamiento Hídrico de los Edificios de


Construcción tradicional, y de sus materiales.
Criterios Generales
Soledad García Morales
Ora. Arquitecta

1. Introducción ción de que los materiales envejecidos van a


reaccionar frente a la humedad igual que los de re-
Para analizar el problema de la humedad en la edi- ciente fabricación. Al actuar así, es posible que se ob-
ficación, es preciso previamente comprender los me- serve con perplejidad cómo un muro en el que no exis-
canismos por los que el agua tiende a penetrar y mo- te fuente importante de humedad desde el terreno
verse en los materiales. Si se llega a alcanzar cierta presenta una mancha similar a la de una patología im-
connaturalidad respecto al comportamiento hídrico de portante de ascenso capilar, que no responde a los
los materiales, siempre será posible estudiar una nue- tratamientos de libro.
va solución constructiva, o ser capaces de interpre- En estos casos, y en muchos otros similares, se
tar un problema que no aparece descrito en la biblio- precisa un conocimiento detallado de los materiales
grafía. Es importante por lo tanto, llegar al constructivos y del agua. La intención del presente ca-
convencimiento de que no existen recetas previas a pítulo es presentar una aproximación a este estudio.
la hora de diagnosticar una patología producida por
el agua en los edificios. Hay muchos ejemplos que 2. Mecanismos de penetración y
nos permitirían ilustrar esta afirmación: movimiento del agua: descripción básica
• La evaporación de agua que atraviesa una so-
lera, puede no ser detectada originalmente como tal, El agua penetra y se mueve en los materiales prin-
y dar lugar a condensaciones en otros puntos de un cipalmente por causa de los siguientes mecanismos:
local.
• La utilización de las nuevas carpinterías, mucho Adsorción de vapor
más estancas al aire, es frecuente causa de proble- Un material seco contiene siempre una cierta can-
tidad de agua, y esta cantidad no es fija: depende de
mas de condensación en viviendas de construcción
un equilibrio que se establece entre él y el aire que lo
tradicional, que hasta entonces no habían presenta-
rodea.
do este tipo de lesiones. Esta patología es conse-
La superficie interna de los poros se recubre de
cuencia de no estimar adecuadamente ei papel difu-
moléculas de vapor de agua, por efecto de la atrac-
sor de vapor que se produce a través de las rendijas
ción existente entre ellas y las moléculas del material.
de ventana, y por ello no complementar el cambio con
Este mecanismo se denomina adsorción de vapor, y
un refuerzo de la ventilación artificial.
la cantidad de agua que llega a contener así un ma-
• En general, no es bien conocida la denominada terial depende, entre otros factores, de la humedad
humedad de equilibrio de un material, y cómo ésta se relativa ambiental, de la temperatura, de la estructu-
ve alterada por la presencia de algunas sustancias, ra porosa, etc. Para unas condiciones dadas de tem-
modificándose el comportamiento frente al agua del peratura y humedad ambiental, la máxima cantidad
material: resulta así que se proyectan intervenciones de agua adsorbida se denomina humedad de equili-
de rehabilitación, apoyadas en una errónea estima- brio, y este valor representará un umbral de contení-
Tema I Comportamiento hidrico de ios edificios

16

c d

1. Haloclastia. 2. Haloclastia.

do en humedad normal para un determinado material. dos como productos metabóllcos por los seres vivos.
Cualquier contenido que supere dicho valor estará in- Son frecuentes en terrenos que contienen materia or-
dicando la existencia de un foco de humedad (sea en gánica.
forma de vapor, sea en forma líquida), y, por lo tanto, Las sales penetran en los materiales vehiculadas
una patología. por el agua, y al evaporar ésta, quedan retenidas en
Cuando en un local se aumenta la humedad rela- los poros. Pueden dar origen a dos tipos de lesiones.
tiva, los materiales de los revestimientos, mobiliario, La primera se denomina haloclastia, y es el deterioro
etc.. empiezan a adsorber vapor, y cuando el ambiente por arenización, que se produce cuando la red poro-
se seca, lo ceden, actuando así como reguladores en sa no resiste las tensiones que se originan en ella al
estos intercambios, y contribuyendo al confort. En una crecer los cristales de las sales (Fig. 1 y 2). Los mate-
habitación donde los materiales tienen poca capaci- riales se disgregan, presentándose pulverulencias, pér-
dad de intercambio, el control ambiental debe ser. por didas de masa, abombamientos, etc.
lo tanto, más delicado. La otra forma de lesión es la condensación por hi-
La humedad de equilibrio de un material puede groscopicidad. Los materiales que contienen estas sa-
verse modificada por la presencia de sales higroscó- les, al aumentar la humedad relativa, empiezan a ad-
picas en sus poros. Estas sales son sustancias con sorber vapor de agua ambiental, a veces en tanta
gran capacidad de adsorción, que modifican el com- cantidad, que se produce condensación en los poros,
portamiento hídrico de un elemento constructivo, ha- y el material se presenta mojado, y en algunos casos,
ciéndolo ávido de agua (en forma vapor o líquida). saturado de agua, sin que exista fuente alguna de agua
El origen de las sales es muy variado. Pueden pro- en forma líquida. Esta sintomatología es causa de fal-
ceuer aei aeienoro ae las rocas, ae ios moneros, u 505 aiagnostiGos \nq. •Ó).
otros materiales: también pueden depositarse como
productos de reacción debidos al deterioro Difusión de vapor
de los materiales por la contaminación, o ser origina- Es el transporte de vapor a través de un elemen-
capítulo '•- Humedades y su tratamiento

to poroso, que separa dos ambientes con distintas medidas no son soluciones a un problema, sino un
presiones de vapor. Se produce un flujo de vapor de modo de ocultar los síntomas.
agua, en función de la permeabilidad del material, del
espesor de éste, y del gradiente de presiones a uno y Convección
otro lado. El aire es una mezcla de gases, de la que forma
Hasta la aparición de los materiales plásticos, el parte el vapor. Se denomina convección al transpor-
edificio siempre ha sido permeable al vapor de agua. te de moléculas de vapor de agua en el aire en movi-
La capacidad de difundir el vapor, unida a la adsor- miento (ventilación), y éste es el modo natural de eva-
ción y desorción del mismo, al variar las condiciones cuación de la humedad de los locales, y el más eficaz.
ambientales, es lo que hoy en día se viene denomi- No se trata en este capítulo de desarrollar toda la
nando respiración de los paramentos, y esta propie- teoría de ventilación, pero sí conviene recordar que
dad era un factor considerado jal menos de forma im- este apartado es uno de los más importantes a tener
plícita) en cuanto al confort. Si se modifica la respiración en cuenta a la hora de estudiar el comportamiento hi-
del cerramiento del edificio, se requiere reconsiderar grotérmico del edificio y sus materiales. El grado de
el diseño del acondicionamiento ambiental, para que humedad del aire exterior, y la producción de vapor
sea capaz de asumir esta función. interna en el edificio, determinarán el caudal de aire
de renovación necesario para asegurar el correcto
Evaporación equilibrio producción-eliminación. Este cálculo ha de
El agua abandona los materiales principalmente por completarse con un régimen de ventilación correcto,
evaporación, denominándose así al cambio de esta- pues no siempre la ventilación es beneficiosa. En cli-
do por el que el agua, a temperatura ambiente, pasa mas húmedos, por ejemplo, se producen con bastante
de líquido a vapor. El agua evapora siempre en su- frecuencia situaciones de aire cálido y húmedo que
perficie, debido a la diferencia de presiones de vapor entra en contacto con paramentos fríos del edificio;
que existe entre una primera lámina de aire en con- dando lugar a condensación, por la Inercia térmica de
tacto con el líquido (lámina saturada de vapor), y la los mismos. En estas situaciones, lo más correcto es
masa de aire más alejada, que tiene menor grado de precisamente no ventilar, esperando a momentos más
saturación. De esta forma, las moléculas de vapor sal- secos.
tan desde la superficie al aire, y se difunden por él ha-
cia zonas menos saturadas, siendo reemplazadas por Absorción de agua en forma líquida.
nuevas moléculas del líquido.
Se produce la absorción, cuando el agua penetra
En un cuerpo poroso mojado, la superficie del lí- en el material por efecto de cierta presión positiva
quido no tiene por qué coincidir con la superficie ex- (puede ser su propio peso, en caso de embolsamien-
terna y visible de dicho material. Esto es así porque to, o efecto de la presión hidráulica, o incluso efecto
el agua en estado líquido puede llegar sólo hasta de la fuerza del par agua-viento en el caso de la lluvia
cierto nivel, que es el que aparece visiblemente mo- que bate un cerramiento).
jado. En ese punto se produce una superficie agua-
aire, interior a los poros, que es el frente donde el
agua evapora ( y que denominaremos frente húme-
do). Es decir: el agua no evapora sólo en la superfi-
cie exterior del cuerpo, sino en su interior. Por esta
razón, los fenómenos asociados a la evaporación
pueden producirse en el interior de la masa del cuer-
po (por ejemplo, la cristalización de sales y el consi-
guiente deterioro).
Cuando el frente húmedo coincide con la superfi-
cie externa del material, la mancha húmeda se apre-
cia externamente. A veces, se intenta disimular esta
mancha, recubriendo el material con otro que sea más
poroso, y que deje el frente húmedo detrás del para-
mento visto, ocultándolo, pero sin disminuir la eva-
poración. Este es el funcionamiento de las cámaras
bufas, de los tabiques trasdosados, o de los llamados
revocos tipo draining. Es evidente que este tipo de 3. Condensación por mgroscopicidad.
capitulo I Humedades y su tratamiento

3. Abacos de comportamiento hídrico


de un material

Los gráficos que se presentan a continuación (ver


abacos 1 a 16) son un resumen de cómo se compor-
tan algunos materiales frente al agua, en forma vapor
o en forma líquida. Permiten relacionar la cantidad de
agua presente en un material, con el mecanismo que
dio origen a la penetración, y son, por ello, una ayu-
da a la hora del diagnóstico.
El abaco es fundamentalmente una escala que in-
dica los contenidos en agua ("h") (expresados en tan-
to por ciento en peso sobre peso seco) que un mate-
rial puede llegar a contener, veamos el ejemplo del 6. Succión capilar.
abaco 1. El tramo inferior de la escala (el más claro),
representa el intervalo de contenidos en agua que po-
drá contener el material cuando sólo adsorbe vapor
del ambiente. El valor h98 indica el límite de contení-'
do en humedad supuesto que no reciba agua más que - X j] 1
en forma de vapor, en una atmósfera con una hume-
dad relativa del 98%. Es decir, ésta zona del abaco 1 a - :
ñ
representa los contenidos en agua del material hú-
medo. a

El tramo siguiente representa el intervalo de con-


tenidos en agua que se pueden presentar en un ma-
terial sometido a succión capilar. El valor hcap seña- /
i
la el límite de contenido en agua de un material, si no / \

se fuerza la absorción mediante presión. Encontraremos / "1


/
• v i
a
i
materiales con contenidos en humedad próximos a y A

hcap cuando se hallen cerca de un foco de penetra- L "A


0 5 10 15 20 25 30
ción por capilaridad. Cuanto más nos alejemos del fo-
humectad retativa (%) presión Ü M • en de agua
co, más bajos serán los contenidos en humedad. En
cualquier caso, hablaremos de material mojado, cuan- 7. Abaco.
do se encuentre en esta zona del abaco.
El último tramo de la escala, el más oscuro, re-
presenta los valores de "h" que se obtienen en un ma- con la humedad relativa del ambiente donde se en-
terial sometido a la penetración de agua bajo carga. cuentran las muestras tomadas. El punto de corte con
Se puede decir que el material estará saturado o ca- esta curva, llevado a la escala central, proporciona el
si saturado, cuando se encuentre en esta zona. dato de cuál sería la humedad normal de dicho ma-
Para utilizar los abacos en el diagnóstico de hu- terial (su humedad de equilibrio heq ) para el ambien-
medades, es necesario conocer: te dado). Todo valor de "h" que se encuentre por en-
cima de heq, requiere una fuente adicional de agua, y
- El tipo de material.
se considera anormal.
- La humedad relativa ambiental.
- El contenido en humedad de la muestra de ma- Para hacer el diagnóstico de la humedad que afec-
terial, "h". Ésta se determina tomando una muestra ta al material, se sitúa sobre la misma escala anterior,
del mismo, en el punto donde se desea hacer el diag- el valor de "h" obtenido en el muestreo (se denomina
ho en el abaco del ejemplo). Si "h" se encuentra por
capitule I. Humedades y su tratamiento

interrumpe el avance del frente húmedo (Flg. 9). La ca-


ra exterior actúa como de sacrificio, pues su espesor
no es grande y se humedece casi por completo, pe-
ro su menor espesor favorece la evaporación, siem-
pre que la cámara de aire sea ventilada adecuada-
mente. La hoja interior del cerramiento permanece
seca, si se tiende a impermeabilizar los puntos de con-
tacto de ambas hojas.
Este grupo de soluciones es ya tradicional en
países húmedos, que no pueden aspirar a un co-
rrecto secado del muro en todo su espesor, si éste
es grande.
Respecto al vapor de agua, el comportamiento de
los tres tipos de soluciones es:
a) El paramento permeable al agua es también
permeable al vapor, luego estos edificios permiten
un cierto flujo de vapor entre el interior y el exterior,
siempre que exista entre ambos ambientes un des-
fase de presiones de vapor en el aire. Este compor-
tamiento, que posibilita un autorregulado del am-
biente interior, se ha descrito antes como respiración
de los paramentos.
b) Si existe lámina impermeable, actúa limitando
el intercambio de vapor entre Interior y exterior (re-
tardadores de vapor). Esto ocasiona que el edificio 8. Comportamiento hídrico de un edificio.
impermeable deba acudir a un sistema adicional de
regulación de su ambiente interior (ventilación, acon-
dicionamiento ambiental,...), porque de lo contrario,
la humedad producida en los locales por el uso nor-
mal de los mismos, quedará retenida en ellos, con el
consiguiente peligro de condensaciones.
c) Las soluciones del tipo "c" son análogas
a las del tipo "a". Consisten en la creación de una
cámara de aireación que evacúa el vapor para
que no acceda a los locales que se quieren mante-
ner secos.
La humedad puede provenir también del terreno,
y la clasificación de las soluciones es similar. Siempre 9, Construcción con doble hoja.
encontraremos la diferencia entre aquéllas que plan-
tean un criterio permeable, y las que crean un vaso
estanco que impida el paso del agua.
El edificio que denominaremos histórico ha sido • Diseñar los elementos de forma que el agua no
tradicionalmente construido con materiales permea- permaneciera largo tiempo en contacto con los ma-
bles al agua en estado líquido o vapor. Por lo tanto, teriales. Así se conseguían, por ejemplo, cubiertas im-
para conseguir un espacio seco, las soluciones cons- permeables con materiales permeables como las te-
tructivas eran del tipo "a" o del tipo "c" (en climas más jas cerámicas, siempre que las pendientes fueran
húmedos). De esta forma, se detectan algunos crite- adecuadas.
rios generales: • Impedir el contacto puntual e intenso del agua
• Construir los cerramientos con sección suficien- sobre alguna zona: bien procurando el lavado unifor-
te para que el frente húmedo no alcanzara el interior del me de la lluvia sobre la fachada, o bien, si se recogía
recinto, durante las precipitaciones. Como quedó ex- en líneas preferentes de evacuación y escorrentía, ale-
plicado, la capacidad de evaporación de los materiales jando lo más posible el vertido del agua (vuelo de fal-
debía ser adecuada al intervalo entre precipitaciones dones y gárgolas, por ejemplo).
Tema 1. Comportamiento hidnco de ios edificios

• Respecto al terreno, se contaba con que el mu- • El deterioro de cubiertas, que da origen a filtra-
ro era capaz de evaporar ciertas cantidades de agua, ciones, a veces Importantes, de agua de lluvia en los
permaneciendo sometido a flujos de evaporación o edificios. Dentro de este apartado es especialmente
desecación. Para la ubicación de los edificios se pro- grave el caso de los edificios que han permanecido
curaba elegir terrenos lejos del nivel freático, y se des- largo tiempo en ruinas (Fig. 10). En muchos de ellos
viaban o canalizaban las corrientes subterráneas que la cimentación es de zanja corrida, y el agua se pue-
aparecieran durante la excavación. La humedad resi- de haber embolsado como en una piscina, filtrándo-
dual en el suelo, y la lluvia, eran evaporadas a través se muy lentamente a través de los muros. Como sue-
del terreno mismo, o del muro. En ocasiones se ace- le coincidir que los escombros de cubierta se
leraba este proceso creando cámaras ventiladas ba- amontonan en el suelo y junto a los muros, el agua ac-
jo las plantas habitables (cuevas, criptas), cuyo efec- cede a zonas anormalmente altas.
to era disipar el agua en un nivel inferior a la planta
• Un problema asociado a los anteriores es el de
baja. A su vez, la evaporación refrescaba los muros
la presencia de sales higroscópicas en los muros. El
de las cuevas, sirviendo de acondicionamiento natu-
muro afectado por este hecho, resulta excesivamen-
ral en épocas calurosas.
te sensible al agua, tanto en forma de vapor como en
A la hora de estudiar un edificio de este tipo, es estado líquido. A veces aparecen manchas húmedas
necesario considerar, por lo tanto, que fue concebido de varios metros de altura, que parecen de capllari-
como permeable, y que su comportamiento natural dad ascendente, y son en realidad producto de una
consiste en absorber una pequeña cantidad de agua, condensación producida en el muro por la hlgrosco-
para evaporarla después. picidad de los materiales. Esta patología es la más di-
Cuando se olvida este principio, se hace difícil in- fícil de reconocer en la práctica, porque aparece en-
terpretar de modo global la oportunidad de una inter- mascarada, y la hemos denominado humedad de
vención que modifique dicho equilibrio hídrico. Puede condensación higroscópica.
ocurrir que se impermeabilice excesivamente la su-
perficie de evaporación del muro, o que se impida el
Modificaciones del edificio o de su entorno
correcto funcionamiento de una cámara de aireación.
Normalmente, durante la vida de un edificio que
se mantiene en uso, se han producido modificaciones
en él, a veces tan importantes que cambian su com-
5. Patología de humedades de edificios
portamiento estructural, espacial, higrotérmico, etc.
permeables
Si en estos casos se han tenido en cuenta todos los
¿Cuándo comienza a ser patológico el compota- factores implicados, el resultado será un nuevo siste-
miento hídrico de un edificio de estas características? ma de equilibrio, diferente del original.
Sin ánimo de agotar el tema, se pueden agrupar las Se puede poner el ejemplo de las calles de reciente
causas en dos grandes apartados: pavimentación en torno a un edificio. Esta actuación
1- Humedades debidas al deterioro de los mate- ha alterado el equilibrio terreno-edificio, y ello obliga
riales o fábricas originales. a replantear el comportamiento de este último. Es po-
2 - Modificaciones del edificio o de su entorno, sible que se necesite establecer un drenaje perimetral
que rompen el equilibrio higrotérmico. o una cámara de aireación que cumplan las funciones
que antes realizaba el terreno. A su vez, el zócalo del
Deterioro de materiales o fábricas originales edificio posiblemente reciba ahora mayores caudales
Existen muchas posibles causas englobadas en es- de agua de escorrentía superficial, por lo que se ha-
te apartado. Algunos ejemplos son: ce preciso estudiar la aptitud del mismo para esta nue-
• El aumento de la permeabilidad de los muros va función
por deterioro de juntas, por grietas, por pérdida de re- Si al reformarse cualquier elemento no se ha teni-
vocos, etc. Podría darse también si el material hubie- do la precaución de analizar todos los factores, se
ra sufrido una disolución que aumentara su porosidad pueden originar incompatibilidades entre los elemen-
original. tos antiguos y los añadidos. Dichas incompatibilida-
El frente húmedo alcanzará un espesor anormal- des pueden ser constructivas, químicas, funcionales,
mente grande, apareciendo el agua dentro del recin- etc. Si en el ya comentado caso de la pavimentación,
no se ha revisado el estado de las redes urbanas, es
to. Como además los muros tienen huecos en su in-
probable que se produzcan fugas de agua bajo las ca-
terior si éstos son alcanzados por el agua, es fácil que
lles, que ahora no pueden evaporar a través de los
se embolse en ellos y quede retenida, a veces duran-
nuevos pavimentos. Buscando camino, el agua re-
te largo tiempo.
capitulo I. Humedades y su tratamiento

montará por los muros o aparecerá en sótanos que


tal vez no habían presentado antes ninguna lesión.
Otro ejemplo es la modificación de espacios que
fueron concebidos como ventilados, y que se ciegan
por diversas causas. Una cripta no ventilada no cum-
ple su función; la mancha de humedad asciende, y
además el aire se satura, difundiéndose el vapor por
muros y suelos hasta otras habitaciones. De aquí se
derivan nuevos problemas de condensación.
Hay casos como los de un tratamiento de facha-
da que impermeabiliza en exceso el material (una con-
solidación o hidrofugación, por ejemplo), sin analizar
la lámina escurrida que se va a formar. El agua, que
antes lavaba sólo una pequeña parte de la fachada, 10. Humedades en cubierta.
escurre ahora por el muro en mucha mayor cantidad,
alcanzando zonas que antes permanecían secas y que
no están protegidas. Detrás de un planteamiento de este tipo se en-
Junto a este problema está el de los tratamientos cuentra una filosofía armónica, que acepta la realidad
que han impermeabilizado demasiado un muro que de la inserción espacio-temporal propia de cada edi-
funcionaba como evaporador de agua, pero no han ficio, e incluso de cada elemento del edificio. Se tra-
actuado eficazmente para interrumpir la fuente de hu- ta, por ejemplo, de no reducir el conocimiento del ma-
medad. Al dificultarse la evaporación, la mancha au- terial o del terreno al de su coeficiente de resistencia;
menta. Conviene hacer notar a su vez que una fábri- o el espacio a una temperatura mínima, un nivel de
ca asentada en seco evapora en gran parte por las soleamiento, o un caudal de precipitaciones atmos-
juntas. Si se impermeabiliza la cara exterior de los si- féricas. Es también no reducir el confort al cumpli-
llares, el flujo a través de las juntas aumentará. miento de unas exigencias de aislamiento térmico o
Muchas veces, el correcto funcionamiento de un acústico. Tal vez una enseñanza de la Arquitectura de-
muro frente al agua está en la similitud del compor- masiado racionalista y compartimentada nos ha con-
tamiento del mortero y del material. No todos los ti- ducido a perder el punto de vista globaiizador, que
pos de ladrillo o de piedra pueden rejuntarse o re- permite la integración de todas las variables y la com-
vocarse con cualquier tipo de mortero. Por eso es prensión de sus relaciones.
conveniente un mínimo estudio de la permeabilidad Este" punto de vista es particularmente importan-
de uno y otro componente, a la hora de cualquier re- te cuando se trata de obras de rehabilitación o res-
novación. tauración, en las que el punto de partida lo constitu-
ye precisamente una realidad arquitectónica ya
edificada, con una historia propia (que ha influido en
su estado actual), con unos materiales que han ex-
6. Conclusión
perimentado un envejecimiento, con unas exigencias
Todo lo anteriormente expuesto no es más que una de origen que pueden no coincidir con las que la re-
aproximación a la comprensión de lo que venimos lla- habilitación plantea, etc. La introducción de un nue-
mando comportamiento hídrico del edificio, que se vo material en un muro puede suponer una revolución
apoya a su vez en el comportamiento ante el agua de arquitectónica de igual intensidad que levantar una
los materiales y del diseño de cada elemento. planta más, cambiar su sistema estructural, o el dise-
Se ve necesario abordar un planteamiento que es- ño de su fachada, pero al tratarse de una revolución
tudie este campo dentro de las variables del diseño a una escala menos visible, podemos tal vez no apre-
arquitectónico, como lo son los criterios estéticos, el ciarla como tal. En nuestra opinión, un buen proyec-
cálculo estructural, el dimensionamiento de las insta- to se basa en un conocimiento profundo de la reali-
laciones, o las exigencias constructivas y económi- dad. En nuestro caso particular, del agua y de los
cas. Se podría llegar, por este camino, a una mejor materiales.
comprensión del hecho arquitectónico como límite o
barrera de encuentro del hombre con el universo, co-
mo una respuesta humana al diálogo que se estable-
ce con la naturaleza.
Tama 1. Comoonamiento hídrico de 'os edificios

24 7. Abacos

adsorciónfieagu3 vapor • : = : • : : - : : -sea


a »
sorteros de cal Helerosfiecaí Tarteras de caí
•ta nía

nu..eq.iV •takMMfJj numecKS) coa en humedad ¡VI


30)

11 il 3J •) H U ) M 9C:30
;

0 5 10 15 20 25 30
o IO 21 x io»so ÍO n « i 0 5 10 15 20 25 30
humedad relativa (*] presión MM en cu se agua
humedad relativa (Vi presten hidrosl en cm d

1. Mortero de cal. Dosificación a/m = 0,23 2. Mortero de cal. Dosificación a/m = 0,23
a
T = 15 °C Contaminación: Na C l T* = 15 °C

adsorción de agua vapor itsoicion de agua «cuida adsorción de agua vapor aosoicion de agua iguida
n»i.r.w»M«i«ro | i,
adr tes •M:r.-xtmmn\mt j^gj,
ladrillos
M*á

non. eg. |%| HA en humedad (V¡ hum. eq. (%) conten humedad ¡Vi
30(— 30. , . , i ; i —
m 30I—i—i—

15-r 15 —

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i tt aa • si a na i 5 10 15 20 25 30 ;i»30 «o«se n se 90 ;x 0 ! 10 15 30 3Í 30
'jaeoa: re*w :r«Mhidrsslea cade agua iiineded relato |V| «sai ¡«dios! en cade agua

3. Ladrillo cíe tejar, nuevo 4 . Ladrillo de tejar, nuevo


T * = 15 " C T» = 15 °C
capitulo I. Humedades y su tratamiento

25

jdscrción de agua wscr a esa coi de agua Nuja M I É de agua iaow jcsaccn ce agua tquida
,l • •¡7,i-.:.-c-c.
¡OflCS ladrillos areniscas
•ra •ka areniscas

hura. eq. (%) conLennunieoadi',1 tura, eg. iV¡ CMienwjd!V¡

5I

a ti ra ai«so ra n n 90130
:
3 O»3aWU<0 70a)3O;X
0 5 10 15 20 25 X 0 5 10 15 20 2 5 30
rwmedad relativa (V| humedad relativa i Vi
pesia nMeicaraaraa

5. Ladnllo de San Salvador (SS 16 10 a) 6. Arenisca de Villamayor (cantera)


T« = 15 °C T*=15°C

idsucioa de agua vapor iosorcw ae agua aguda 3dsorcion se agua vapor adsorción ae agua tquida
ata ce i»poiitura raneo É irapl Eraran
areniscas mares mares

-.- s s m •• i 9HleiraraW(I|
«r-rrn-

si-

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a as J K SÍ a ! ) • » • » 0 5 13 ¡5 20 2 S :0!UI«ISi8CM!IHl'Ot 0 5 10 15 2 0 25 30
runedad relativa iV| cíes*» Posten cuaeagu •«»MM reuma iM cresion nares) a • se agua

7 Arenisca del Sepulcro de los Castilla-Honseca 8 Calcarenrta de Ibiza imares) icantera)


T*= 15 "C r=15"C
Tema /. Comportamiento hioríco de ios edificios

26

adsorción ce agua lapor adsorción de agua liquida adsorción de agua vapor absorción de agua liguida
calas calizas calizas caiizas
usas

conl. en humedad (*] mira. eq. |%| COÍIL en niunedad (%)

0 TO » 30<0 9 50 10 SO 90 i» 0 5 10 15 20 25 1 10 20 » (OSO S0 Í0 80 90 ICO


0

íiunwaad relativa (%) 0 5 10 15 20 2 5 3 0


presión en cm de agua humedad relativa |?,)
presión en cu de agua

9. Caliza de Colmenar (cantera) 10. Calzada de Valbuena de Duero


a
T ^ 15 °C a
T = 15°C

:3ir,»»«aiie*i»ra adsorción de agua vapor absorción de agua líquida


calizas calizas escayola :n a are:-. • escayola
acijes

MR eq.f.l conl en humedad fj| burs.eq.fW conl. en

25-
2 0 -

•¡ uaJ) to so so a soso ¡a 0 5 1 0 15 2 0 25 30 3 I», a M « 50 SO 70 80 90 100 0 5 10 15 - 20 2 5 3 0

mimedad relativa |" |


s lumedad relativa ¡*.l presión en c

11. Calzada de Fuentes de Nava 12. Escayola - Dosificación a/y = 0,85


T* - 15 "C T*=is°e
capitulo I Humedades y su tratamiento

27

loscrcm se aga nocí


u ¡dsotcioo :e agua .ipc.-
escayola y,:i .".•.•i-.t:.:Wtt Tírleroi cénenlo "c.-!;::s :er.eri:

lateo. |X| conl en bumeoad í tam.eg.|\| conl. en humedad' j

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OUSXlOMKTltSt 5 tO 15 2) 25 30 maanioana 5 H 15 ¡0 25
wmedad relativa líj presión en ca de agua Miiedad relativa (Vi
• •. .

13. Escayola. Dosificación a/y = 0,65 14. Mortero de Cemento Portland. Dosificación a/m = 0,75
T- = 1 5 C 0
T*=15°C

aosorcnn de agua vapor i absorción de agua -iqutda adsorción de agua «por aosorcion de agua ¡guida
torteros cemento ..i wrteroscíOíolo torteros emule

10 —

I 0 L -
c ;o aso «so so ¡o so so ico 5 10 15 20 3 30 I Ija JOtOiOSO I0S0 SO C
IO
0 5 10 15 20 25 30
uteoad relativa >.¡ presión encaje agua naedas rnauva N
desunen cade agua

15. Mortero de Cemento PorlanO. Dosificación a/m - 0,35 16 Mortero de Cemento Porland. Dosificación a/m _ 0.114
T* = 15 "C T*= 15 C U
capitulo I. Humedades y su tratamiento

29

2. Humedades en obras enterradas.


Técnicas de drenaje e impermeabilización

Félix L a s h e r a s M e r i n o
Dr. Arquitecto
Profesor titular E.T.S.A. - U.P.M.

1. Humedades en obras enterradas 1.2 C a u s a s m a t e r i a l e s d e la h u m e d a d

1.1 Introducción Con independencia de las causas últimas del


problema, podemos observar que si un elemento cons-
En la primera parte del presente capítulo se abor- tructivo, como el muro perimetral de un sótano, apa-
dan las causas inmediatas o materiales' de las hu- rece mojado, o húmedo, es porque se dan simultá-
medades que pueden aparecer en sótanos u obras neamente cuatro circunstancias, que podemos designar
enterradas y debidas a esta circunstancia, haciendo como c a u s a s i n m e d i a t a s del problema (figura 1):
una clasificación ordinal de ellas, para marcar unos - En primer lugar porque hay alguna fuenfe de
criterios básicos que permitan fijar un orden de prio- agua. La p r e s e n c i a d e a g u a , que puede ser líquida o
ridades a la hora de plantear su solución en una si- en forma de vapor, es imprescindible porque, eviden-
tuación real. Una vez encontrado éste, ya en la se- temente y por definición, en un ambiente seco no es
gunda parte del capitulo, se hace un repaso ordenado posible la humedad.
a algunas soluciones empleadas, más o menos habi- - En segundo lugar, por la f a l t a d e a i s l a m i e n t o
tuales y en el mercado, indicando sus características entre el elemento constructivo y el agua. Esta caren-
generales y su forma de actuación, así como sus ven- cia permite que el agua esté en contacto con el edifi-
tajas e inconvenientes más significativos. cio, que los materiales porosos puedan absorberla, o
que las grietas o faltas de estanquidad permitan su
penetración.
- En tercer lugar, porque existen v í a s d e p e n e -
t r a c i ó n en los elementos constructivos, y en forma de
aberturas, juntas, grietas, y/o poros. Estas aberturas
permiten la entrada, circulación y difusión del agua
1. Hay agua
por el interior de los materiales de construcción.
2. Falta aisla-
miento - Y en cuarto lugar por la imposibilidad o d i f i c u l -
3. Hay grietas o
poros
4. Ambiente sa- Entendernos como tales el conjunto de circunstancias materiales,
turado necesarias y suficientes, para que se hayan producido los efectos
observados; unas pertenecen al ambiente '.acciones! y otras a la
constitución material del producto o elemento constructivo estudia-
do propiedades!, y su conocimiento es imprescindible para abordar
la solución del problema patológico intentando su eliminación. Por el
contrario, entendemos que las causas últimas son las que expresan
las circunstancias que nan hecho posible la concurrencia de las cau-
sas inmediatas, siendo útil su conocimiento para asignar responsa-
oilidades y para evitar que los problemas de un edificio se repitan en
otro, de éstas no nos ocupamos en esta lección.
1, Causas inmediatas de la humedad.
Tema Z Humedades en obras enterradas

30 tad de secado o eliminación del agua presente, que


así permanece en el interior de los materiales o, a ve-
ces, en su superficie, si no es posible su rápida eva-
poración. Sin embargo, el agua no está inmovilizada,
sino que se mueve por el interior de los elementos con
la suficiente lentitud como para manifestar un sínto-
ma patológico. La lentitud del secado suele deberse
a circunstancias ambientales inapropiadas, que ha-
cen que el aire no sea capaz de absorber y evacuar
las cantidades de agua que suministra la fuente de
humedad y a la velocidad que requeriría su rápida eva-
poración, ya que la estructura capilar del elemento @ Eliminar el agua
constructivo es suficientemente fina como para rete-
ner el agua en su interior.
Notemos que de las cuatro causas citadas, la pri-
mera y la última afectan, principalmente, a las condi-
ciones ambientales, mientras que la segunda y la ter-
cera lo hacen a la constitución y propiedades de los
elementos constructivos afectados por el problema,
aunque no podemos olvidar la influencia que tienen
en las condiciones ambientales las circunstancias ar-
(B) Evitar contacto
quitectónicas y constructivas del edificio.

1.3 Estrategias de actuación

Cualquier solución a un problema de humedad


se tiene que apoyar en la actuación sobre una o más
de las causas anteriores para intentar su eliminación.
Aunque suprimir una de ellas evita a las que le si-
guen en el orden expuesto (pero no a las anteriores),
y por razones de seguridad, es frecuente tomar me-
didas que inciden sobre más de una de las causas
citadas. Así pues, y en definitiva, el orden de priori-
dades de actuación para eliminar los problemas de
humedad, debe ser el que se indica a continuación
(figura 2):
Lo primero que debería hacerse es evitar la pre-
sencia de agua. Para ello hay que localizar sus fuen-
tes', captarla, conducirla y alejarla del edificio evitan-
do su contacto con el terreno, cimentación y muros
enterrados. A tal fin hay que asegurar el desagüe y
estanquidad tanto de las superficies de recogida (por

' La problemática especifica de la identificación y localización de las


luentes de agua se trata en otros capítulos, aunque resaltamos la im-
portancia de realizar mediciones cuantitativas de la humedad y 5u
distribución en diferentes puntos del cerramiento y del ambiente, así Tapar los síntomas (EL
corno su evolución temporal en un período mínimo de un año, salvo
que su procedencia quede claramente desligada de fenómenos es-
tacionales. 2. Soluciones
capítulo I. Humedades y su tratamiento

ejemplo patios y aceras) como de las redes de con- plementaria a las medidas anteriores, hay que facili-
ducción (por ejemplo la de saneamiento). Aunque hay tar la evaporación, secado, o paso del agua al am-
excepciones, en general las soluciones, según las fuen- biente interior". Se puede forzar el intercambio de hu-
tes de humedad, suelen plantear dos tipos de actua- medad con dos grupos de medidas:
ciones: - Actuando sobre los elementos de construcción,
- Evitar, desde el exterior, la presencia de agua por ejemplo incrementando la superficie de secado,
liquida, y o reduciendo su sección.
- Evitar, desde el interior, la presencia excesiva - Actuando sobre el ambiente, hasta conseguir un
de vapor. incremento suficiente en su capacidad de absorción
Lo segundo, si el agua no se puede evitar, o com- y transporte de agua.
plementariamente a las medidas tomadas según el Y por último, si no podemos actuar sobre las cau-
punto anterior, es impedir el contacto del agua con sas, podemos:
las partes enterradas del edificio, por ejemplo colo- - Asumir las consecuencias de la presencia de hu-
cando barreras impermeables. En este caso es muy medad.
importante garantizar la estanquidad del edificio y la - O actuar sobre los síntomas; la opción en este
inexistencia de trampas y puentes de humedad. Por caso, que no es ninguna solución, es ocultar la hu-
la problemática particular de los muros de sótano, medad, aunque seguramente el agua reaparecerá en
agruparemos los problemas de contacto del agua en otro sitio, trasladando en el espacio, y/o en el tiempo,
tres opciones: el problema'.
- Contacto puntual, en general causado por fa- En cualquier caso, y ante la imposibilidad de so-
llos de la impermeabilización o defectos locales. lucionar un problema, es importante meditar sobre la
conveniencia de no hacer nada antes que abordar tra-
- Contacto lineal por grietas o juntas del edificio,
tamientos que, en el mejor de los casos, pueden re-
como son las constructivas, de hormigonado, de di-
sultar costosos e Ineficaces; a veces también el tiem-
latación, de separación con edificios colindantes, etc.
po soluciona, o mitiga, algunas situaciones.
- Contacto superficial por defecto (o ausencia) de
impermeabilización. Para este caso existen dos tipos
1.4 Consideraciones prácticas
de barreras:
• Verticales y perimetrales al edificio. En la práctica habitual la mayoría de las solucio-
3
• Horizontales bajo soleras . nes que se adoptan pueden ser parcialmente redun-
Lo tercero, si lo anterior no es posible, o bien en dantes, de tipo mixto o múltiple, actuando por varios
forma complementaria, es impedir el movimiento y caminos a la vez, buscando así mayor seguridad en
flujo del agua por el interior de los materiales y ele- la solución del problema. Cualquier solución debe
mentos constructivos, con lo que indirectamente se adaptarse a las características mecánicas y a la per-
evitará, al menos parcialmente, la absorción de hu- meabilidad y humedad del terreno, debiéndose pre-
medad. Las soluciones típicas para ésto actúan en ver que estas condiciones puedan verse alteradas en
dos frentes: el futuro.
- Actuación en la masa interna de los elementos Algunas soluciones, por ser de tipo mixto, enca-
constructivos porosos, con impermeabilización en ma- jan con dificultad en la clasificación anterior aunque
sa, hidrofugación de la superficie interna de los poros en cualquier caso, y a nivel conceptual, es útil identi-
u obturación de éstos. ficar la línea de actuación de las soluciones alternati-
- Colocación o creación de barreras físicas en el vas que se puedan plantear en una situación real, con
interior de los elementos afectados, como barreras de la finalidad de poder evaluar mejor sus posibilidades
corte capilar o similares. de éxito o fracaso. En cualquier caso, los mejores tra-
En cuarto lugar, si no se puede evitar la presen- tamientos son siempre los preventivos adoptados du-
cia de humedad en los materiales, o en forma com- rante la construcción del edificio.

' En muros enterrados el ambiente exterior es el terreno (húmedo).


' Las Barreras noruontaies para cortar la ascensión capilar del agua, ' Esta situación también puede darse, con tanta mayor probabilidad.
y situadas por encima del nivel de la rasante del terreno, deben con- según nos vamos alejando, en nuestras actuaciones, del orden de
siderarse dentro del grupo siguiente, además únicamente protege- prioridades establecido; la única opción sequra es la primera, la se-
rán a ia parte aerea del edi'icio. gunda menos, y asi sucesivamente.
Tema 2. Humedades en obras enterradas

Por otro lado, el uso arbitrario de algunas solu-


ciones, más que inútil, puede resultar perjudicial, por
ejemplo:
- Las barreras impermeables y la reducción de la
porosidad reducen la transpiración de los elementos
constructivos y sus posibilidades de secado, y au-
mentan el riesgo de condensaciones.
- Las barreras impermeables, al impedir la circu-
lación del agua, incrementan la humedad de la zona
situada en el lado húmedo de la barrera, y por tanto
la acción del agua sobre ella.
- La obturación parcial de la red porosa de los
materiales puede provocar una mayor ascensión del
agua capilar, al disminuir el tamaño de los poros y di-
ficultar la evaporación superficial.
- Taponar una vía de agua puede obligar a ésta a
buscar otro camino, y a encontrarlo.
- El incremento de la evaporación fuerza un ma-
yor flujo de agua, y un mayor transporte de sales; su
3. Red evacuación del agua de lluvia.
cristalización y la formación de eflorescencias pueden
acabar rompiendo un cerramiento que, anteriormen-
te, sólo estaba húmedo. torno más inmediato, casi siempre se puede captar,
canalizar y evacuar.
- Ocultar una humedad capilar, con una barrera
Los elementos del cerramiento de un edificio siem-
impermeable, puede forzar al agua a remontarla y re-
pre están en contacto con dos ambientes, el exterior
anudar su evaporación por encima de ésta.
y el interior; en ambos puede haber fuentes de hu-
Como vemos, desgraciadamente la única y au-
medad, por lo que las zonas de actuación son dobles:
téntica solución al problema de la humedad es la de
desde el exterior y desde el interior.
garantizar un ambiente suficientemente seco:
Desde el exterior del edificio se trata de evitar, en
- Por el exterior evitando la presencia de agua.
general, el agua líquida meteorológica o procedente
- Por el interior facilitando una adecuada climati-
de las fugas de las instalaciones urbanas. Se deben
zación y ventilación.
comprobar las instalaciones de suministro y evacua-
El resto de las actuaciones tienen un resultado di-
ción de las redes públicas y de las edificaciones del
fícil de asegurar; no obstante vamos a exponer algu-
entorno, observando si en éstas también hay hume-
nos ejemplos de medidas y tratamientos destinados
dades, y como son, buscando las zonas más húme-
a eliminar o paliar las causas anteriormente citadas, y
das (probablemente más próximas a las fuentes de
bajo la óptica de una posible intervención en edificios
humedad), y su relación con la topografía; en algunos
ya construidos; el tratamiento de los problemas de es-
casos, un análisis químico del agua puede darnos idea
tanquidad, desde la óptica de un proyecto de nueva
de su procedencia. En general, se pueden plantear
planta, no será objeto de nuestra atención.
soluciones como las que siguen, que a su vez pueden
combinarse entre sí o con otras más:
- Sobre rasante las medidas más importantes
2. Técnicas de drenaje e impermeabilización tienden a canalizar el agua, y evitar que penetre al te-
rreno, donde su control es más incierto. La ejecución
2.1 Técnicas destinadas a evitar la presencia del y sellado de aceras y superficies de recogida es la
agua medida más frecuente, normalmente como alternati-
va o complemento a la red de evacuación del agua de
lluvia (figura 3). La pavimentación perimetral del edi-
En primer lugar, lo más importante es que ei dise-
ficio debe tener una anchura adecuada a la permea-
ño y la concepción arquitectónica del edificio ga-
bilidad del terreno y a la profundidad enterrada del
ranticen su impenetrabilidad frente al agua. Sin con- edificio, y Gomo loa pavimentos de patios, piaras, etc.,
siderar las posibles fugas de las instalaciones, Hay que evita la penetración de agua al terreno, siempre que
tener en cuenta que aunque el agua meteorológica es estas superficies sean estancas y canalicen el agua
imposible de evitar, no sucede así con la que circula recogida. Es importante cuidar las juntas y lí-
por el edificio y por el terreno que. al menos en el en-
^pítalo !. Humedades y su tratamiento

ra que impidan la penetración de partículas finas que


acabarían obstruyendo los agujeros de la tubería. La
eficacia de esta solución, especialmente útil para el
agua filtrada desde la superficie, depende de ia per-
meabilidad del terreno, y casi nunca es eficaz por de-
bajo del nivel freático, donde la presión del agua impi-
de su evacuación por gravedad y las necesidades de
bombeo pueden ser excesivas, aunque puede contri-
buir a bajar el nivel del agua; en el caso de no ser así,
no queda más remedio que en línea con las solucio-
nes del grupo siguiente, crear un vaso estanco ente-
rrado, sobre el que se construya el resto del edificio.
Como productos comerciales para este tipo de so-
luciones pueden citarse los geotextiles y láminas bo-
tonadas para drenaje, los tubos porosos, etc. Algunas
soluciones comerciales forman auténticos sistemas
con varios productos que se aplican complementa-
riamente; uno de los mejores es el sistema Delta-
4. Patio inglés. Dórken.
• El patio inglés es una trinchera perimetral y
neas de unión internas y con el edificio, y prever la po- abierta, que recoge el agua a la vez que permite la ilu-
sible movilidad o asiento diferencial del edificio y las minación y ventilación natural de las zonas bajo ra-
superficies perimetrales. Aunque hay que evacuar el sante (figura 4). Constituye también una de las mejo-
agua recogida, hasta alejarla de la construcción; un res .soluciones, aunque no siempre es posible en
impedimento total de la transpiración del terreno pue- situaciones urbanas; plantea también el problema de
de hacerle acumular humedad, por lo que tampoco duplicar el muro perimetral del edificio (el de conten-
debe pavimentarse más superficie que la estrictamente ción y el de cerramiento), teniéndose que evitar los
necesaria, y ésta debe combinarse con zonas abier- contactos directos, entre ambos para impedir que pa-
tas y permeables, con vegetación superficial que re- se la humedad de uno al otro.
tenga y atraiga la humedad del subsuelo, permitien- • En algunos casos, en edificios aislados, puede
do su eliminación. Por otro lado, los árboles cercanos ser posible la construcción de pantallas de conten-
al edificio, y con raíces profundas, pueden dar pro- ción o ataguías, realizadas aguas arriba de las co-
blemas de asientos, introducción de' raíces por fisu- rrientes freáticas y que intentan, más que contener-
ras y apertura de grietas, rotura de canalizaciones, etc. las, canalizarlas y desviarlas, alejándolas del edificio.
- Bajo rasante se deben desviar y/o canalizar las Esta solución, raramente planteable, puede ser muy
aguas perdidas, para alejarlas del edificio y, aunque útil en conjuntos histórico-artísticos a media ladera. A
es imposible dejar a cero la humedad del terreno, se veces se puede plantear inyectar en el subsuelo le-
debe captar el máximo de agua líquida. Hay que te- chadas de cemento o de arcillas para obturar los hue-
ner en cuenta que, a lo largo de la vida del edificio, las cos del terreno y reducir su permeabilidad, aunque el
condiciones de su entorno pueden cambiar, de forma control de los resultados es difícil y puede ser nece-
que aparezca agua donde antes no la había, por lo sario repetir la operación en varios tanteos. Otra so-
que es una medida que, de ser posible, debería adop- lución es la construcción de un muro pantalla peri-
tarse siempre. Como ejemplo de algunas actuaciones metral y de un hormigón de la suficiente compacidad
de este tipo están las siguientes: e impermeabilidad como para formar una barrera en
• El drenaje del terreno es la solución más habi- torno al edificio".
tual, y muy efectiva en suelos granulares si se hace • Una variante del anterior sistema son las cá-
bien, pero casi completamente inútil si se diseña o maras de ventilación, a medio camino con el siguiente
realiza mal. Se instala una red de zanjas drenantes,
tubos porosos y/o láminas de drenaje con geotexti-
les, que captan y conducen el agua en un nivel Infe-
rior al de apoyo de la cimentación. En esta solución, 1
También, y si el edificio tuviera prooiemas de cimentación, podría
plantearse la ejecución de este muro por dentro, inutilizando funcio-
por encima de los tubos, se debe instalar una cuña de nalmente al preexistente: las necesidades de una nueva cimenta-
captación rellena con áridos sueltos y permeables pe- ción y de una barrera perimetral podría justificar esta solución.
Tema 2. humedades er obras enterradas

grupo de soluciones. Estas cámaras suelen quedar bida al vapor producido por personas e instalaciones
tapadas superiormente, pero disponen de algún sis- y provocan humedades de condensación, una vez
tema de ventilación natural o forzada e, incluso, de descartada la fuga de las instalaciones, se pueden
climatización. Para ser efectivas deben llegar hasta el adoptar soluciones como las siguientes:
nivel de la cimentación y sobrepasar ligeramente el - Extracción del vapor (del aire), pues normal-
del terreno, y en zonas muy húmedas o frías deben mente no podemos impedir" su producción. Aunque
disponer de un sistema de evacuación de agua. Debe se puede condensar con aparatos para este fin, in-
asegurarse la ventilación de la cámara laminar resul- cluidos o no en instalaciones de acondicionamiento,
tante, así como la ausencia de puentes de humedad lo más fácil suele ser colocar un sistema de ventila-
y de penetración de agua en ésta, bien sea por sub- ción natural o mecánica que garantice la evacuación
presión o desde la superficie, de ser factible esta so- directa del vapor que se produzca. En el mercado exis-
lución también suele serlo, complementariamente, im- ten muchos productos como ventiladores, conduc-
permeabilizar la cara externa del muro enterrado tos, rejillas, etc., utilizables con esta finalidad.
mediante alguna solución del tipo que veremos en el
- La deshumidificación en obra del aire interior
grupo siguiente. Pueden utilizarse placas prefabrica-
puede hacerse con aparatos específicos que con-
das con una disposición tal que permitan el escurri-
densan el agua del aire, desaguando de forma auto-
miento y evacuación del agua por sus caras, y la for-
mática o manual, o con productos que, como la cal,
mación de una cámara ventilada. También es posible
el yeso, el cloruro calcico, el gel de sílice o sales hi-
disponerlas en horizontal, separando el suelo del só-
tano del terreno natural. groscópicas comerciales, absorben la humedad, aun-
que estas soluciones sólo pueden considerarse co-
• A veces es posible construir pozos sumidero. mo ocasionales o temporales.
En edificios exentos sobre terrenos muy anegados, y - Por otro lado también es posible que los ce-
situados sobre una capa impermeable, se pueden per- rramientos de un sótano estén cargados de sales hi-
forar pozos que atraviesen esta capa (si su espesor groscópicas que, por adsorción de la humedad del
no es muy grande) y. como sumideros, desagüen ha-
aire, provocan humedades de condensación; en és-
cia capas inferiores más permeables; los pozos se re-
te caso, la desalación y limpieza de los muros evi-
llenan con grava gruesa para evitar su desmorona-
ta la formación de nuevas humedades. El procedi-
miento sin perder permeabilidad. Los pozos sobre
miento, que también puede/equerir la limpieza
capas impermeables actúan como pozos drenantes,
biológica, suele hacerse con compresas de arcillas
que pueden desaguarse con bombas sumergidas. Ei
número, posición y tamaño de estos pozos depende absorbentes o con productos como los que se citan
de las características del terreno. más adelante.

• Una solución contraria, si la humedad no es 2.2 Técnicas destinadas a la creación de


muy alta, es la instalación de mechas verticales de
barreras impermeables
drenaje que, basadas en láminas geotextiles, absor-
ben la humedad y la ventilan oreando el terreno; po- Si no se puede evitar la presencia del agua, por no
dría, incluso, plantearse la construcción de unas chi- ser viables ninguna de las soluciones propuestas en
meneas que, porefecfo venturi, forzaran su ventilación. el apartado anterior, o se quiere complementar algu-
Por otro lado, en el caso de existir notable pre- na de ellas, la siguiente opción es la de evitar su con-
sencia de humedad en el interior, que suele ser de- tacto y penetración en los elementos constructivos,

5, Técnica para una obturación de una via de agua localizada.


capitulo I. Humedades y su tratamiento

para lo que hay que aislar y proteger al edificio me- expanden en contacto con el agua, y poliuretano in-
diante la colocación de barreras impermeables, sin ol- yectable y expandible, aunque también se pueden in-
vidar que al impermeabilizar el agua se acumulará jun- tentar utilizar, por su rápido fraguado, una mezcla de
to a la ba/rera, y generalmente se necesitará una vía cementos portland (con contenido mínimo de adicio-
de evacuación, es decir de drenaje. Si el agua viene nes) y aluminoso (tipos CEM-I y CAC) en proporción
del terreno, la barrera, necesariamente, ha de situar- deducida de pruebas previas.
se en la superficie exterior del elemento constructivo;
- En el caso de taladros para el paso de instala-
puede colocarse pegada, o adherida al soporte, o se-
ciones, con holguras entre tuberías y elementos de fá-
parada de forma que exista una pequeña cámara ven-
brica, la solución consiste en colocar un pasatubos y
tilada, en una solución muy cercana, cuando no coin-
retacar y sellar el espacio entre éste y la tubería con
cidente, con la de la cámara bufa exterior ya planteada
material elástico o, mejor, inyectando poliuretano o in-
en el anterior apartado. La barrera exterior que prote-
ja al edificio del contacto con el agua, y al contrario troduciendo algún producto que expanda con la hu-
que las soluciones que se emplean por encima del ni- medad, como las juntas de elastómeros expandióles
vel del terreno, no debe permitir tampoco el paso del o de bentonita sódica.
vapor, pues la aireación de la cara externa de un mu- Para realizar barreras lineales para grietas y jun-
ro enterrado es mínima. tas los tratamientos son diferentes según las vías que
se intenten obturar, y su previsible movilidad, aunque
Las obturaciones puntuales corresponden, ge- en caso de duda hay que tener en cuenta que una
neralmente, a defectos de construcción muy locali- grieta, una vez producida, siempre actúa como junta
zados en zonas de pequeña superficie, como son los de dilatación y constructiva, manifestando los movi-
huecos dejados por los latiguillos de los encofrados, mientos del edificio. En cualquier caso, y salvo que la
pasos de instalaciones, coqueras, etc. En muros en- compacidad del resto del cerramiento garantice su
terrados en zonas húmedas el agua suele penetrar
impermeabilidad, la actuación siempre debe abordarse
empujada por presión hidrostática, aunque también
desde el exterior. Si la impermeabilización existe y se
puede darse el caso contrario, es decir que el agua
ha roto, reparándola después de haber sellado la grie-
salga, por ejemplo en depósitos o piscinas. En es-
ta; si la abertura es demasiado profunda se colocará
tos casos, y si la compacidad del resto del cerra-
un fondo de junta que permita que la profundidad del
miento es suficiente, se utilizan desde el Interior se-
nadores minerales rápidos basados en cementos sellado sea del orden de la mitad de su anchura (fi-
modificados, aluminosos o clinkersin yeso. Obturada gura 6), pues en caso contrario la dificultad del relle-
la vía de penetración, hay que garantizar su estabi- no podría provocar la rotura adhesiva del sellado, mien-
lidad en el tiempo y, obviamente, intentar eliminar la tras que si el sellado es muy delgado se podría provocar
fuente del agua. su rotura cohesiva; como fondo de junta también pue-
den utilizarse cordones elastoméricos expandibles con
- En el mercado, casi todas las firmas comercia- la humedad (por ejemplo de caucho-butilo con ben-
les de productos químicos para la construcción tie- tonita). El material de sellado, preferiblemente bitumi-
nen productos destinados a este fin (figura 5), exis- noso o silicona sin disolventes y de reacción básica o
tiendo cartuchos de bentonita sódica (Volclay) que se
neutra, nunca debe adherirse al fondo de junta.
- Para aberturas en las que se prevean gran mo-
vilidad, se utilizan senadores plásticos, de tipo acríli-
co, o mejor elastoméricos, de tipo silicona, poliureta-
no o polisulfuro (thiokol), capaces de seguir los
previsibles movimientos de los bordes y mantener la
adherencia. Hay que tener en cuenta que los sellado-
res plásticos se comprimen y expanden con la junta,
sin solicitar a sus bordes, aunque suelen rigidizarse
con el tiempo, mientras que los elastómeros siempre
intentan volver a su forma inicial lo que, si retrae el
material o se abre la junta puede provocar su despe-
gue, aunque en el caso de obras enterradas los mo
vimientos térmicos suelen ser mínimos. Existen gran
cantidad de productos comerciales, pudiéndose uti-
lizar también algunos de los citados para el caso an-
6. Barrera lineal para gnetas y lisuras.
terior; los más interesantes son las juntas expandibles
Tema 2. Humedades en ooras entenadas

como Expandite o inyecciones de poliuretanos espu- Para las barreras verticales, siempre bajo rasan-
mables. te, se usan elementos en forma de láminas y placas,
- Las fisuras en las que se prevea poca movili- y otras en forma de mortero, pasta o líquido que pro-
dad, si tienen que transmitir esfuerzos mecánicos, y porcionan una protección sin juntas: Es conveniente
garantizar la continuidad del elemento constructivo, completar cualquiera de las soluciones con una cuña
se intenta su cosido rellenándolas con mortero o re- de grava o con un recubrimiento drenante adosado al
sina epoxi; si no trabajan mecánicamente se pueden muro, que formando una hoja externa permeable al
enmascarar simplemente con el recubrimiento im- agua, facilita el escurrimiento y evacuación del agua,
permeable, aunque conviene colocar una venda de a la vez que protege mecánicamente a la lámina im-
tejido metálico, de fibra de vidrio o de plástico que permeable del contacto directo con el terreno (figuras
cosa sus bordes. Como soluciones comerciales pa- 7 y 8).
ra este caso podemos citar las bandas de cosido de • Los elementos discontinuos se deben colocar
tejidos de fibra de vidrio, morteros y resinas para in- en capas solapadas a favor de la evacuación del agua,
yección epoxídicas, que también actúan como ad- como mínimo 10-30cm de solape vertical y 30cm en
hesivos. el horizontal. Aunque suelen colocarse adheridas al
Las barreras superficiales, en la estrategia que cerramiento soporte, existen soluciones autoportan-
estamos estudiando y que pretende evitar el con- tes que pueden colocarse simplemente en contacto
tacto del agua con los elementos constructivos, se con él. La mayoría de las soluciones utilizan produc-
colocan por el exterior del edificio, para lo que hay tos impermeabilizantes similares a los usados en cu-
que acceder al mismo haciendo la correspondiente biertas horizontales. Básicamente disponemos de los
excavación, por lo que también suele ser posible ins- siguientes grupos de materiales:
talar complementariamente una red de drenaje y eva- • Los bituminosos, que suelen adherirse al so-
cuación del agua liquida. Estas barreras tienen la ven- porte, excepto las placas onduladas de fibrobetún.
taja de apoyarse en el cerramiento en el sentido de que son autoportantes. Las láminas más adecuadas
la presión de agua, por lo que el sistema de fijación son las betún elastomérico (con SBS)', de 3-4kg/m . ;

no necesita ser muy riguroso, l a s barreras superfi- armadas con film de polietileno o con fieltro de po-
ciales destinadas a evitar las humedades del sub- liéster, pues son las más capaces ae absorber los mo-
suelo pueden ser de dos tipos: verticales y horizon- vimientos del muro soporte; los fieltros de poliéster
tales: tienen meior resistencia al punzonamiento. desgarre
capitulo I Humedades y su tratamiento

aunque conviene colocar algún tipo de protección me-


cánica contra el roce del terreno y algún sistema de dre-
naje.
- Las barreras horizontales colocadas bajo ra-
sante, por debajo del nivel del suelo o solera de los
sótanos, buscan evitar los efectos de la subpresión
del agua. La solución también debe prever el drena-
je y evacuación del agua recogida, así como una so-
lera a flexión capaz de aguantar la subpresión del
agua. La solución más empleada es la de colocar
una lámina de polietileno entre un encachado de gra-
va drenado y una solera de hormigón, o soluciones
análogas a las del apartado anterior, utilizando geo-
textiles, láminas sintéticas o bentoníticas, etc., aun-
que también pueden utilizarse casetones Iglú de po-
lipropileno (figura 9), que sirven como encofrado
perdido de soleras ventiladas y drenadas inferior-
mente.

2.3 Técnicas destinadas a impedir el


9. Casetones Iglú. movimiento del agua

- En el caso de que sea imposible evitar el con-


tacto del agua con las partes enterradas del edificio,
y alargamiento, mientras que los de fibra de vidrio ofre- debemos intentar impedir que el agua circule y se di-
cen mejor resistencia a tracción y estabilidad dimen- funda en forma líquida por su interior, lo que puede
sional, aunque son menos deformables. suceder por:
• Las láminas sintéticas están constituidas por • Impulso de las fuerzas de succión capilar y/o
polímeros y copolímeros plásticos y/o elastoméricos, • Por presión hidrostática.
generalmente con mayor durabilidad y mejor com- Este grupo de soluciones, aún cerrando el paso al
portamiento que los productos bituminosos. Suelen agua líquida, debería mantener la suficiente permea-
ir clavados, adheridos perimetralmente, o son auto- bilidad al vapor como para permitir el secado del ce-
portantes, aunque algunos requieren protección es- rramiento por su cara al interior, aunque esta situa-
pecífica contra el roce de los áridos del terreno. ción es prácticamente imposible de conseguir en la
• También existen paneles de cartón kraft y lámi- práctica. En el caso de obras enterradas este grupo
nas geotextiles, rellenas con bentonita sódica, que de soluciones es más costoso y difícil de aplicar que
es una arcilla que se expande hasta multiplicar por 15 en elementos sobre rasante, aunque en algunos ca-
su volumen inicial, cuando entra en contacto con el sos es la única opción posible. Se actúa desde el in-
agua, creando una capa impermeable que se aprieta terior de los materiales, al contrario que el anterior, y
contra cualquier hueco, cerrándolo, con una presión las tres opciones básicas son la eliminación total o
del orden de 1 bkg/cm'. Su colocación es muy senci- parcial de la porosidad de los materiales, su hidrofu-
lla, y tienen la ventaja de compactar las holguras en- gación interna, o la inserción horizontal de una barre-
tre edificio y terreno. ra física. Las dos primeras opciones también contri-
• Como impermeabilizaciones continuas se pue- buyen a impedir o dificultar la absorción de agua, por
den utilizar morteros especiales y productos bitumino- lo que excepcionalmente y si se hicieran por la cara
sos o sintéticos, o mezcla de ambos En cualquiera de exterior, podrían englobarse en el grupo de solucio-
los casos el producto se aplica con brocha, rodillo o nes anteriores: sin embargo, no podemos olvidar que
paleta, y se deja endurecer antes de su recubrimiento, con cualquier solución de estas, parte del edificio se-
guirá estando húmedo, salvo que se apliquen además
otras técnicas que lo eviten, por lo que hay que vigi-
lar la posible existencia de puentes de humedad: cual-
quier fallo en la solución planteada devolverá el pro-
Cooolimera de estireno-txitadieno-estireno que se alea con <il be-
tún para dotarle de mayor elasticidad y durabilidad. blema a su estado inicial, o lo agravará, por lo que la
Tema 2. Humedades en odras enterradas

38

10. Inyección a presión. 11. Transfusión por difusión lenta.

aplicación de estas técnicas debe encomendarse a tal, se coloca una doble fila de taladros. La humedad
casas especializadas que garanticen los resultados. del muro, que no su saturación, facilita la dispersión
Para la obturación o hidrofugación de la red po- o difusión de los productos, que suelen ser resinas,
rosa de los materiales se emplean silicatos y/o resinas por lo que a veces puede ser aconsejable un secado
plásticas de diversos tipos (epoxídicas, látex, poliure- previo con alguno de los procedimientos indicados
tanos, siliconas o de poliéster), cales, cementos os- más adelante. Hecha la aplicación, los taladros se ob-
móticos, y otros productos capaces de endurecer por turan con resina o mortero hidrofugado y el revesti-
fraguado, mineralización o polimerización, y que son miento final del paramento se ejecuta de forma que
introducidos en los poros de los materiales por apli- no puentee la humedad, por ejemplo sobre una im-
cación superficial o mediante taladros de inyección he- primación impermeable. La aplicación suele hacerse
por alguno de estos sistemas:
chos al efecto, difundiéndose por presión y/o por ca-
pilaridad. Algunos de estos materiales también - Inyección bajo presión: tiene la desventaja
contribuyen a la consolidación física y mecánica de de conducir al líquido inyectado por los caminos más
materiales deteriorados, y aunque, en general, no sir- fáciles, por lo que si el material es muy heterogéneo
ven para obturar grietas, pueden cerrar fisuras. Los es difícil garantizar un reparto uniforme (figura 10).
productos suelen presentarse en disolución, que tie- El cerramiento debe estar suficientemente seco pa-
ne mayor poder de penetración que en emulsión que, ra que el volumen de la inyección pueda penetrar
además, introduce más agua en el muro; no deben re- por compresión del aire de los poros mejor que por
traer al endurecer y, si cabe, deberían tener una lige- desplazamiento del agua, que requeriría mayor pre-
rísima expansión que permitiera la obturación perfec- sión. Suele comenzarse a presiones del orden de
1atm para terminarse a 3-6atm mantenidas duran-
ta, aunque sin provocar presiones disruptivas en el
te unos 10-15min, para no provocar la ruptura del
material", también la presión de inyección debe evitar
material. Se utilizan unas boquillas especiales colo-
esta posibilidad. El prepoliuretano, por ejemplo, se ex-
cadas en unos orificios taladrados al efecto, que im-
pande al entrar en contacto el isocianato con el agua.
piden el retorno del producto, y que pueden dejar-
En los muros de sótano debe colocarse una barrera
se durante algún tiempo para volver a hacer nuevas
horizontal, a un nivel más alto que el del terreno, pa- inyecciones si fueran necesarias. Los consumos me-
ra permitir el secado del muro. Además, se garanti- dios, aunque muy variables según porosidad y es-
zará la penetración del producto, evitando que forme tado del muro, pueden estimarse en unos 200-
la capa impermeable únicamente en la superficie pues 250g/m.cm, o del orden del 25-30% del volumen de
favorecería la reaparición del agua a un nivel superior; la zona tratada.
como los muros suelen ser heterogéneos, y el producto
introducido siempre buscara los caminos más fáciles, Transfusión por difusión lenta, los depósitoo
es posible que quede alguna zona mal impregnada, del producto se sitúan entre el nivel del suelo y el al-
por lo que si el muro presenta grietas u oquedades canzado por el agua en el muro, lo que garantiza la in-
deberá consolidarse previamente. Si la fábrica es muy troducción capilar del producto, pues su presión es
irregular, y no es posible conseguir una línea horizon- mayor que la del agua del terreno, que está a menor
nivel (figura 11). La aplicación dura los dias necesa- Otra opción son las barreras electrofísicas que,
rios para garantizar la correcta penetración del pro- aunque se usan especialmente para formar barreras
ducto; los muros de hasta 40cm se suelen tratar por horizontales, podrían utilizarse para barreras verti-
una cara, y los de mayor espesor por las dos, si es cales, aunque con mayor coste y complejidad (figu-
posible el acceso a la cara exterior. Los taladros se in- ra 12). En estas soluciones se utiliza el fenómeno de
clinan hacia el interior del cerramiento, mejorando la la osmosis" para forzar el secado del edificio, invir-
penetración del producto. En general se perforan unos tiendo el sentido del flujo natural del agua, de forma
taladros de 10-15mm de diámetro separados entre sí que se obliga al terreno a absorber la humedad del
otros 10-15cm, preferentemente en las juntas de mor- muro, lo que se logra mediante la colocación de elec-
tero, introduciendo el producto desde los extremos
trodos catódicos (negativos) en el terreno y anódicos
del muro hacia su centro. Otra posibilidad es hacer ta-
(positivos) en el muro, por ejemplo de cobre y de hie-
ladros algo más grandes, en los que se introducen ci-
rro, para que, siendo menos electronegativo el se-
lindros de resina congelada que, al fundirse, pene-
gundo, actúe como cátodo. La separación y profun-
tra por capilaridad en los muros. Los cementos
didad de las picas catódicas depende del potencial
osmóticos son productos minerales de finísima gra-
eléctrico existente (suele estar en valores de 10-
nulometría, tal que son capaces de penetrar en los
materiales por capilaridad, y se suministran por Chembo 500mV). La electro-osmosis instalada, antiguamen-
PC (P. Cox), Cryvet srl y Cemeseal de Water-Stop. te activa y que necesitaba una conexión permanen-

1 artificiales, lo que permite desecar muros afectados por humedad ca-


La osmosis es un fenómeno físico que implica la circulación de un
pilar Por otro lado, la difusión de sales dentro de un liquido, desde
liquido (como el agua) a través de una barrera semipermeable (como
las zonas en las que tienen mayor concentración hacia aquellas en
el terreno o las fábricas de albañilena), desde zonas en las que exis-
las que es menor, suele llamarse halosis; la fóresis es un fenómeno
te menor concentración de sales disuenas hacia otras de mayor den-
análogo por el que se produce el movimiento de partículas en sus-
sidad. Se tiende asi a equilibrar la concentración de sales a ambos
pensión o dispersión, también hasta igualar sus concentraciones, y
lados de la barrera, que sólo permite el paso del liquido, cuyas mo-
¡unto con la electroósmosis se ha utilizado para saturar los poros de
léculas son más pequeñas que las del soluto Asi, en dos zonas co-
los materiales afectados por humedad capilar.
municadas e inicialmente con el mismo nivel de agua y distinta con-
Sí un muro ha estado sometido durante tiempo a la acción de agua
centración de sales, el agua se absorbe desde la zona de mayor
capilar cargada de sales, que su han depositado en sus poros, la pre-
concentración de sales, que eleva su nivel hidrostático hasta que se
sión osmótica incrementa el paso de humedad desde el terreno ha-
produce el equilibró) entre las presiones hidrostatica y osmótica La
cia el cerramiento cuando el pnmero tiene menor concentración de
osmosis aparece asociada a una ilifef encía de potencial eléctrico en-
saies. que es lo normal, actuando ambos, especialmente el cerra-
tre las zonas con diferente concentración ae sales, por eiemplo te-
miento, corno barreras semipermeables hl fenómeno depende de la
rreno y crecimiento, debido a la presencia de los iones disociados de
permeabilidad y composición del terreno y del cerramiento, aunque
las sales disueltas, el terreno actúa como ánodo (polo +) y el muro
es más importante cuando la presencia de agua es periódica, como
como cátodo (polo ) de tal forma que existe una corriente eléctrica
sucede si acompaña a los periodos de lluvia: la evaporación del agua,
hacia el cátodo que circula en el mismo sentido que el flujo de hu
precipita las sales, que saturan en el siguiente ciclo a la nueva agua
medad; el fenómeno se denomina electmósmosis. Sin embargo el
capilar, de forma que la solución saturada atrae nuevos aportes de
.'lujo puede invertirse mediante la introducción de carnoos eléctncos
humedad.
Tam 2 -'uredaces enobras enterradas

40 te a la red eléctrica, actualmente se hace con siste-


mas pasivos, al aprovechar la diferencia de poten-
cial creada por los electrodos entre muro y terreno,
que forman una pila electrolítica; la corrosión de los
electrodos se evita usándolos de titanio. La electro-
ósmosis-fóresis (procedimiento Ernst-Traber) per-
fecciona la barrera electro-osmótica ya descrita, col-
matando los poros del muro por la introducción en
los taladros de unos cartuchos de partículas en sus-
pensión (productos de fóresis) que obturan los po-
ros del material, formando así una barrera horizon-
tal más permanente.
Las barreras físicas horizontales sobre rasan-
te tienen la misión principal de evitar la ascensión
13. Corte con sierra.
del agua por capilaridad. La idea es insertar una lá-
mina impermeable en el espesor del muro. Su colo-
cación en edificios terminados es costosa, siendo ? )-> 2-
prácticamente imposible en el caso de muros de
mampostería; puede producir vibraciones dañinas
en los muros, especialmente si están debilitados, si
existe una carga de servicio importante, o si los
coeficientes de seguridad no son muy altos. Otro in-
conveniente suele ser la necesidad de ocultar la lá-
mina sin producir puentes de humedad. Las láminas
pueden ser metálicas, por ejemplo de plomo, alumi-
nio, o acero, o sintéticas, bien en forma de lámina
armada de PVC u otro polímero impermeable, o bien
minerales de pasta-mortero de resinas epoxi o de
poliéster, aunque ésta tiene una ligera retracción y
menor durabilidad en contacto con medios alcali-
nos, o de cemento sin retracción o, incluso de pie-
zas de cerámica compacta, pizarra, etc. La ejecu-
ción siempre se hace por tramos cortos o bataches,
previo apeo del edificio, teniendo en cuenta sus car-
14. Corte con hilo diamantado.
gas mecánicas, puede hacerse:

- Por ejecución manual alternada, picando el me-


nor número de hiladas posible.
- Mediante corte del muro con procedimientos
continuos o discontinuos, utilizando técnicas análo-
gas a las utilizadas para el corte del hormigón o de
las piedras en cantera; aunque existen sistemas de
corte con disco o sierra (figura 13), los más aconse-
jables son los de hilo diamantado (figura 14). Son los
sistemas más utilizados, rápidos y aconsejables pa-
ra esta opción.
- En algunos casos, hace años, se han utilizado
sistemas como el clavado de una lámina metálica,
como en el sistema Schóner Turn, o el taladrado su-
cesivo, como en el procedimiento Massari. El prime-
ro provoca golpes y vibraciones difíciles de absorber,
y el segundo implica una costosa mano de obra, por
lo que actualmente no se utilizan.
15. Revoco drenante.
capítulo I, Humedades y su tratamiento

2.4 Técnicas que facilitan evaporación del agua 41

En el caso de que tampoco sea factible aplicar


ninguna de las soluciones anteriores, se puede enfo-
car el tratamiento para potenciar el secado de los ele-
mentos húmedos, normalmente actuando desde el
interior del edificio, y evaporando también hacia el in-
terior, pues por este lado son más controlables las
condiciones ambientales, aunque no debería dese-
charse la posibilidad de hacerlo también por el exte-
rior. Un primer grupo de tratamientos actúa sobre los
elementos constructivos mejorando su capacidad de
transpiración, mientras que otro segundo lo hace so-
bre el ambiente, mejorando su capacidad humídica.
El incremento de la transpiración de un muro se
apoya en el hecho de que la evaporación es un fenó-
meno superficial, mientras que la cantidad o conteni-
do de agua es masivo o volumétrico y depende del
espesor del cerramiento, por lo que, generalmente,
se busca aumentar la relación superficie/ espesor del
elemento afectado, lo que puede hacerse incremen-
tando su superficie (de evaporación) o reduciendo su
espesor, o ambas cosas a la vez. Se pueden utilizar
procedimientos como los siguientes:
- Revestimientos difusores o macroporosos:
son revocos de una o más capas, raramente más de
tres, con una porosidad tal que su red capilar es ca-
paz de succionar el agua del muro y cederla al am-
biente. En los revocos multicapa, cada capa es más
porosa que la precedente pero con una red capilar
más fina que la anterior (figura 15) lo que, a grandes
rasgos, se consigue controlando la porosidad (total)
mediante la dosificación y proporción de agua y ce-
mento, y el tamaño de la red capilar a través de la gra-
nulometría de la arena, ayudándose también, para am-
bas propiedades, con aditivos aireantes. En cualquier
caso, el revoco ha de tener una estructura porosa tal
que disponga de un coeficiente de absorción alto, pa-
ra succionar el agua del muro soporte, y velocidad de
secado superior a la de succión, para evitar su satu-
ración y para que el secado tenga lugar en el interior
de los poros y no en la superficie del revoco, en don-
de aflorarían manchas y eflorescencias. Se utilizan
arenas silíceas y cementos resistentes a sulfatos y
cloruros, como los tipos lll/B y los SR o MR, pudién-
dose incorporar espumantes o dispersantes para ho-
mogeneizar el tamaño de poros. Obviamente, deben
pintarse con una pintura resistente a la humedad pe-
ro lo más porosa posible, o utilizar morteros colorea-
dos en masa. Su inconveniente es que, con el tiem-
po, se van cargando de sales que taponan su red
porosa, lo pueden manchar de eflorescencias, o pro-
vocar su desprendimiento.
Tema 2. Humedades en obras enterradas

- Otra posibilidad, aunque más teórica que real, molecularmente al agua interna del muro, favorecien-
es la reducción de la sección absorbente, lo que, si do su vaporización y eliminación, aunque son más ex-
se mantiene la superficie de secado, disminuye la can- perimentales y menos comercializados.
tidad de agua en el interior del muro, por lo que baja Otro grupo de tratamientos es el que busca au-
la altura del agua capilar. Es una solución de difícil mento de la capacidad humídica del aire climati-
aplicación práctica, en la que el coste difícilmente jus- zando el ambiente, de forma que se incrementan sus
tifica la pobreza de resultados; casi nunca es posible posibilidades de captación y eliminación de humedad.
reducir tanto el espesor de un muro como para que Las vías de actuación pueden ser directas sobre la hu-
este efecto sea considerable, aunque podría plan- medad e indirectas sobre la temperatura del aire, y su
tearse la sustitución parcial del espesor del muro con velocidad. Como regla general nunca deben usarse
otro material más impermeable, por ejemplo ladrillos estufas de butano, o similares, por la gran producción
o bloques de gres, o de hormigón compacto, en cu- de agua que implica la combustión de los GLP. Las
yo caso estaríamos muy cerca de la introducción de soluciones, en este caso, utilizan una o más de los si-
una barrera física. guientes procedimientos:
- Los sifones atmosféricos o de aireación au- - La deshumidificación directa del aire puede
mentan la ventilación del muro al ser colocados en su realizarse con los mismos sistemas que se citaron en
interior. Los resultados son diversos y, en cualquier el primer grupo de soluciones, al tratar la extracción
caso, han de completarse con un buen control am- del vapor.
biental apoyado en una ventilación garantizada. Los - La sustitución natural o artificial del aire (húme-
sifones Knapen son tubos de cerámica porosa que do) mediante ventilación, y su renovación con aire
atrae la humedad y la cede por evaporación al aire cir- exterior (más seco) también contribuye a reducir, in-
cundante (figura 16). Su diámetro interior es de unos directamente, la humedad del muro. Esta solución es,
3cm y la longitud es de unos 10-50cm, para ajustar- en definitiva, la única que permite secar los edificios,
se al espesor del muro, puesto que el sifón debe cu- siendo mejor recurrir a la ventilación natural forzada o
brir entre el 50-75% del grueso de la fábrica. Una va- a la mecánica controlada. Un caso particular es la uti-
riante son los sifones Raem, que incluyen unos lización de corrientes de aire rasantes sobre el para-
electrodos de cobre unidos a una masa de plomo, que mento.
pretende incorporar el fenómeno de la electro-osmo- - La climatización o calefacción del ambiente
sis pasiva al de sifonamiento aéreo (figura 17). En am- interior, generalmente incluyendo a una o más de las
bos casos se colocan unos tres sifones por metro li- soluciones anteriores, es otra de las soluciones que
neal de muro, inclinados hacia el exterior para producir contribuye a mejorar las condiciones de humedad
el efecto de sifonaje. Sin embargo, la falta de seguri- de los muros, especialmente si éstas no son dema-
dad en los resultados, y el desagradable efecto esté- siado graves.
tico que resulta de su colocación, han hecho que se
dude de su utilización. Otro inconveniente es que for- 2.5 Técnicas que ocultan la presencia del agua
man puentes térmicos en la parte trasera del tubo, y
que pueden incrementar el flujo de agua que ascien- Finalmente, si ninguna de las posibilidades ante-
de, lo que acaba provocando una mayor presencia de riores puede llevarse a cabo, se puede actuar desde
sales arrastradas, y si su efecto es dudoso en muros el interior del edificio sobre los síntomas; no se elimi-
aéreos, lo es bastante más en los enterrados, donde nan las causas, sino que se camuflan las manifesta-
además debería cubrir toda su superficie, con nota- ciones de la humedad, por lo que no son recomen-
bles incrementos del coste y del deterioro estético. dables, aunque puedan ser el parche más viable. Las
- Otra forma de mejorar la evaporación es la ca- opciones más utilizadas son la impermeabilización del
lefacción directa del muro mediante la inserción de paramento y su doblado interior; en ambas hay que
resistencias eléctricas o de cables calefactores a me- tener en cuenta que actúan en sentido contrario al gru-
dia o baja temperatura, por radiación infrarroja o por po de soluciones anterior, es decir que dificultan, cuan-
una corriente directa de aire caliente; en cualquier ca- do no impiden, la evaporación del agua, razón de más
so, lo que se pretende es aumentar la temperatura su- para limitar su utilización a casos excepcionales y en
perficial del muro y, en consecuencia, la velocidad de los que pueda asegurarse que la permanencia de la
vaporización de su humedad, a la vez que se evacúa humedad no va a provocar más daños, como corro-
el aire húmedo. Existen otras posibilidades de seca- siones, crioclastias, eflorescencias, etc. Asimismo de-
do electrónico, como ios basados en microondas, ul- be estudiarse con detalle su resistencia a la presión
trasonidos u otros fenómenos electrónicos que agiten del vapor y. en su caso, a la presión hidrostática, da-
capitulo I. Humedades y su tratamiento

do que actúan en el lado opuesto al que lo hacen el bre el suelo de un sótano, con la precaución de apo-
grupo de soluciones tratado en segundo lugar. yarla sobre puntos impermeables, y ventilarla como
- El recubrimiento impermeable sólo debe plan- se ha expuesto anteriormente (figura 19).
tearse como última opción. Puede taparse la hume- - Soluciones comerciales de contramuro interior
dad con una barrera impermeable que cubra la cara son, por ejemplo, las de los sistemas Dórken - Delta PT
interior del cerramiento y esté anclada a él, colocada de Bettor, Pladur-al de Epysa, y similar de Knauf, etc.
después de eliminar partes sueltas y eflorescencias - En suelos con humedad se pueden hacer cá-
que dificultarían su adherencia e impermeabilidad. El maras, para tapar la de capilaridad, o para solucionar
sistema de fijación de ésta capa tiene que ser capaz la de condensación. En ambos casos debe colocar-
de aguantar la presión del agua, y la barrera debe ser
continua desde el suelo hasta el techo, plegándose
en el pavimento y en el forjado superior, donde debe-
ría empalmar con una barrera horizontal situada en el
espesor del muro y a un nivel superior al del terreno,
lo que permitirá, al menos, un ligero secado del muro
por el exterior. No olvidar que al tapar la superficie de
evaporación de un cerramiento, se provoca el ascen-
so de la humedad capilar. También es importante con-
siderar que de existir otra barrera exterior, aunque sea
defectuosa, no se deben crear trampas de humedad
que evitarían el secado del muro, por lo que en este
caso la barrera debería ser permeable al vapor. Una
solución adecuada, intermedia con la del doblado in-
terior, sería la de colocar un revestimiento retroventi-
lado, ligeramente separado del paramento, realizado
con materiales resistentes a la humedad y con juntas
abiertas que permitieran la aireación de la cara inter-
na del cerramiento.
• Las soluciones comerciales de revestimiento im-
permeable se presentan en forma de morteros, pintu-
18. Doblado del cerramiento.
ras, láminas estancas, cauchos líquidos, etc. Pueden
utilizarse los productos de obturación de poros co-
mentados anteriormente, pero aplicados superficial-
C A P V O W I V J A
mente con brocha, rodillo, etc., con mucha menor pe-
netración que en el caso de las inyecciones.
• Para ocultar la humedad en pavimentos, confi-
gurando a la vez una solución pisable, pueden utili-
zarse barnices o pinturas especiales que tienen gran
adherencia incluso aunque se apliquen sobre sopor
tes húmedos.
El doblado interior del paramento, o contramuro,
crea una cámara bufa húmeda, según una solución muy
empleada desde la antigüedad: que utiliza un tabique
interior separado de la pared húmeda y aislado del sue-
lo (para evitar puentes de humedad), apoyándolo en
materiales impermeables. Esta cámara debe ventilarse
hacía el exterior del edificio (el interior se satura fácil-
mente de humedad), y de forma cruzada, conectando
fachadas opuestas por el suelo, por las paredes o por
el techo (figura 18). Deben abrirse un mínimo de unos
¿
30cnf por cada m de muro, aunque esto depende mu-
cho de la humedad existente y de las corrientes de ven-
tilación. Una solución análoga puede establecerse so- 19. Cámara interior ventilada.
Tema 2. Humedades en obras enterradas

se una barrera impermeable, sintética o bituminosa, mente resistentes al ataque y crecimiento de micro-
bajo el solado o la cámara de aire. Para este fin pue- organismos.
den utilizarse soluciones comerciales de so/era seca
como las de Pladur o Knauf, siempre sobre una lámi-
3. Conclusión
na impermeable (por ejemplo de PE), o casetones Iglú
de polipropileno, como encofrado perdido de soleras El agua en la edificación, lo mejor es que no es-
ventiladas interiormente. té presente; cuanto más lejos, mejor.
- Pero si está, que no toque al edificio
2.6 Otros tratamientos complementarios - Si lo toca, que no penetre
- Pero si penetra, que no se traslade
La eliminación de eflorescencias, aunque no es - Y si se mueve, que se evapore con mayor ra-
estrictamente un tratamiento antihumedad, suele ser pidez que aquella con la que penetra.
necesaria antes o después de la aplicación de mu- En caso contrario el problema no tiene solución,
chos de los planteados en las líneas precedentes-. y deberíamos asumir las consecuencias de la hu-
Es una tarea delicada y difícil que solo puede abor- medad, aunque siempre podrán ocultarse durante
darse una vez eliminada la fuente de humedad, y algún tiempo.
después del secado de los paramentos, aunque en Frente a un problema de humedad, mejor preve-
el caso de que éstos sean muy débiles hay que la- nir que curar; para decidir su solución es primordial
varlos en húmedo, antes de que la cristalización de hacer un correcto diagnóstico que identifique la fuen-
las sales dañe su superficje. Antes de proceder a te o fuentes de la humedad y permita afrontar el pro-
cualquier tratamiento se debe probar en una peque- blema integralmente. No debemos olvidar que pueden
ña zona poco visible, esperando algunos días antes existir varias fuentes de humedad, y en este caso sus
de verificar los resultados; también es importante no manifestaciones superpuestas harán que se camuflen
impermeabilizar un cerramiento antes de eliminar es- unas a otras. Los posibles remedios deben estudiarse
tas sales. El tratamiento general, una vez secos los con criterios arquitectónicos, y los tratamientos espe-
materiales, consiste en cepillarlos minuciosamente cíficos contrastarse en laboratorio, comprobando su
(¡en seco!); los materiales poco porosos pueden la- eficacia y compatibilidad, pues los resultados varían
varse después con agua pura o con una solución de con las circunstancias materiales y ambientales de ca-
jabón sódico al 1 % si las sales son sulfatos alcali- da caso, para tener la seguridad de su eficacia y ren-
nos. Para carbonatos puede utilizarse ácido clorhí- tabilidad. No debemos fiarnos excesivamente de la
drico diluido (1:5-10) y después lavar abundante- propaganda y ensayos efectuados por los fabricantes
mente, aunque hay productos comerciales más o instaladores, a los que hay que exigir una garantía
específicos; en caso de paredes muy delicadas pue- de los resultados y de su duración, abarcando los ma-
den emplearse compresas de arcilla absorbente, por teriales y la ejecución, y por un período a estudiar en
ejemplo de celulosa con sepiolita o atapulgita-cao- cada caso, pero nunca inferior a los diez años.
lín. En cualquier caso, estos tratamientos dan mejor
resultado con tiempo seco y cálido (verano), pues los
secados lentos del invierno favorecen la aparición de Bibliografía
eflorescencias al producirse el secado en la superfi-
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cie y no en el interior del material. ción; Ed. CO.A.yA.T.; Madrid, 1993; 250p.
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Urbanos; Ed. Gustavo Gilí, Barcelona, 1988, 230 p.
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CIGNI, G. (1979): 'Degrado da umiditá e presidí controlo stesso"; 1°
lución de formol al 20-30% (formalina), sllicofluoruro
Corso di informazione ASSIRCO. Perugia, 6-8.NV.79; en: "La con-
de magnesio en agua (1:40), o productos comercia-
servazione dei Monumenti"; Ed. Kappa; Roma, 1981; pg. 45-56.
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siempre es mejor utilizar pinturas minerales que las Negli Edific": Ed. Kappa: Roma, 1987; 152 p.
que utilizan aglutinantes orgánicos, aunque para ca- COLLOMBEr, R. (1989). "L'Humidité oes Batiments Anciens"; Ed. du
sos especiales existen pinturas biocidas especial- Moniteur: París, 1989; 184 p.

1
Existe una excepción, que corresponde al caso de sales muy hi-
groscópicas que estén causando los problemas de humedad por ad-
sorción del vapor del aire interior; en este caso, la eliminación ae sa-
les también elimina la condensación de humedad.
capitulo I. Humedades y su tratamiento

C.S.T.C. (s/f): "Recomendaciones de la C.S.T.C para el tratamiento MASSARI, I. (1980): "Risanamento delie murature dall umiditá'; 3°
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1962).
capitulo I. Humedades y su tratamiento

47

3. Técnicas y ejemplos de hidrofugación en masa

Manuel Carbonell De Masy


Licenciado en Ciencias Químicas

1. Introducción rreno o disolviendo las existentes en el muro. En es-


te caso la humedad superficial es superior a la que le
Dado que la principal aplicación de la hidrofuga- corresponde en equilibrio con la humedad del aire que
ción en masa es para eliminar el ascenso de agua de le rodea.
capilaridad, es a ésta actuación a la que nos vamos a El determinar la causa o causas de la humedad no
referir en este capítulo. siempre es fácil y de ahí que en muchos casos, ade-
Cuando en las partes bajas de un muro se ven los más de la inspección del edificio, sea necesario dis-
efectos de la humedad como manchas, moho, eflo- poner de una amplia información sobre el mismo y
rescencias, es usual que se diga que es debido a las realizar una serie de ensayos in situ y en laboratorio.
humedades de capilaridad, pero esto habría que de-
mostrarlo. Los mencionados síntomas pueden ser hue-
llas de un pasado, en que efectivamente hubiera ha-
2. Ascenso capilar
bido ascenso capilar o ser debidos a otras causas
como condensación, higroscopicidad de sales exis- De las múltiples causas de humedad, la más difí-
tentes en el muro, o simplemente el resultado de una cil de resolver, es sin lugar a duda la del agua que as-
rotura en una conducción de agua. ciende del suelo a través de los capilares de los mu-
Lo anteriormente expuesto justifica, que ante una ros. Este agua, con sus sales disueltas, es uno de los
patología de humedades, se lleve a cabo un diag- factores que más influyen en el deterioro de los ma-
nóstico, para conocer las causas que han dado ori- teriales minerales de acabado cuando, tras la evapo-
gen a unos síntomas y a partir de ello proponer solu- ración del agua, sus sales cristalizan.
ciones. Cuando introducimos en una bandeja, que tiene
La humedad en el interior de una edificación pue- dos centímetros de agua, un ladrillo en posición ver-
de tener varias causas: tical, se observa que el agua asciende. Si antes de
a) La lluvia. Bien filtrándose a través de las cu- que el agua llegue a la parte superior,del ladrillo, lo sa-
biertas o por los muros. camos de la bandeja, el contenido de agua empieza
b) Accidentales: Roturas de conducciones o inun- a descender. Estos movimientos de succión y difusión
daciones. de agua son debidos a que en ése ladrillo, como en
c) Higroscopicidad de las sales que contenga el todos los materiales minerales de una construcción,
muro. Analizándolas se podría conocer su influencia existe una red de poros y capilares que les caracteri-
en la humedad. za. Ellos están representados, con diferentes conte-
d) Condensaciones. Cuando se alcanza en el mu- nidos de agua, en la figura 1. El nivel IV corresponde-
ro la temperatura de rocío del vapor existente. ría a la parte baja del ladrillo sumergido, o sea a la
e) El remonte capilar a partir de los cimientos y zona en que está saturada de agua, y el nivel I no co-
acompañando al agua ias sales procedentes del te- rresponde a la parte del ladrillo que parecía seca, si-
Tema 3. Técnicas y e/empkis de hidroiugacion en masa

48 no a la que resultaría de haber secado un trozo de la- Teniendo en cuenta que en construcción, más que
drillo a 105°C. El contenido de humedad de los ma- el porcentaje de absorción de agua en peso, interesa
teriales de un muro suele estar situado entre los dos conocer el porcentaje en volumen de los poros acce-
niveles indicados. sibles al agua, es por lo que se requiere también de-
La diferencia de peso entre un ladrillo saturado de terminar el peso de la muestra sumergida en agua y
agua (nivel IV) y una vez seco (nivel I), dividido por es- con este dato calcular su porosidad abierta.
te peso es lo que determina el porcentaje de absor- A título orlentativo, indicamos los valores de algu-
ción de agua de ese ladrillo y esto mismo se puede nos materiales:
hacer con todos los materiales minerales para deter-
minar su absorción de agua. Mortero de cal 25-35%
Ladrillo 20-30%
Piedra caliza 5-20%
Hormigón 5-15%
Piedra granítica 3-5%

El agua asciende por capilaridad, cuando se cum-


plen dos circunstancias:

- Existe humedad en el suelo.


- El muro en contacto con el suelo, presenta una
porosidad que permite el ascenso de agua hasta una
determinada altura.
La velocidad de absorción de agua por los capi-
lares es tanto menor cuanto más delgados sean los
capilares. Si los poros se reducen por debajo de 0,01
mieras, la velocidad de absorción prácticamente se
anula. Es lo que ocurre con un hormigón fabricado
con una relación agua/cemento < 0,5.
Al propio tiempo, si el agua no se evapora, cuan-
to más delgados sean los capilares mayor será la al-
tura alcanzada, de acuerdo con la Ley de Jurin que
está representada gráficamente en la figura 2.
En toda actuación para disminuir el ascenso ca-
pilar (h) de un muro de una determinada longitud (I) y
ancho (a), hay que intentar reducir el flujo de agua as-
cendente (Fa) y aumentar el flujo de evaporación (Fe).
Ello se deduce de la situación de equilibrio existente
en todo momento y que se refleja de la siguiente ecua-
ción:

Faxlxa = Fexlxh

h = a x Fa / Fe
Esta ecuación está representada en la figura 3. En
ella puede observarse que el ascenso de humedad es
superior en el centro del muro, ya que en los laterales
la evaporación es más fácil.
En la desecación de los muros, los primeros po-
ros en perder agua son los de mayor diámetro, parte
de cuya agua y sales pasan a los poros más peque-
ños. Esta situación está representada por el nivel III
de la figura 1. Cuando sólo queda agua en los pe-
I Distribución de agua en un material coroso.
queños -nivel II-, la reducción se hace más difícil has-
capitulo I Humedades y su tratamiento

Fa
I í í I
2. 3

ta que se alcanza la humedad de equilibrio del mate- a) Reducción de la humedad del suelo
rial con la humedad existente en el aire. Si además, Es tanto más necesario cuanto mayor sea la pre-
hay sales solubles, habrá que sumar la que aporta la sencia de agua en el terreno. La actuación prioritaria
higroscopicidad de las mismas. ha de estar encaminada a conocer el origen, localiza-
ción e intensidad de la humedad.
Si la humedad se debe a roturas de las redes de
abastecimientos o de saneamientos próximos a la edi-
3. Técnicas para eliminar la humedad de
ficación, habrá que proceder a su reparación.
capilaridad
Si la humedad del terreno se debe a la lluvia ha-
Es difícil y costosa una adecuada reducción de hu- brá que evitar que penetre a través de la acera y so-
medad de capilaridad. Lo que no hay que hacer es bre todo del encuentro de ésta con el muro. El caso
ocultar sus efectos sin suprimir las causas, pues se peor es cuando la cimentación del edificio está den-
podría agravar aún más el problema. Sólo es factible tro de la variación del nivel freático. Habrá entonces
ocultarlo, si se deja una cámara de aire que dé al ex- que construir un drenaje perimetral del edificio, a un
nivel inferior al de apoyo de la cimentación, que aleje
terior y se logre una buena ventilación.
el agua de la cimentación. Existe una amplia docu-
Para eliminar o reducir las humedades de capila-
mentación sobre las diversas técnicas de drenaje y en
ridad, hay varias técnicas que cumplen con las diver-
la figura 5 aparece una de las más modernas que he-
sas funciones:
mos extraído de la norma DIN 4095.
a) Reducción del agua del terreno que rodea a los
cimientos.
b) Aumento de la velocidad de evaporación de los
muros.
c) Obstrucción de los poros, reduciendo el diá-
metro de los mismos.
d) Hidrofugación de los poros en toda una sección,
pero permitiendo el paso del vapor.
e) Creación de una barrera estanca en el muro, pre-
vio corte del mismo.
Los dos primeros son fáciles de entender, ya que
están relacionados directamente con la ecuación co-
rrespondiente a la figura 3, y las otras tres técnicas
tienen como misión crear una barrera horizontal que 4.
reduzca o anule el ascenso de humedad. Gráficamente
están descritas en la figura 4, junto con el dibujo que
b) Desecación por incremento de la evaporación
representa lo que ocurre, cuando no se ha llevado a
De la observación de la figura 3, y concretamente
cabo ningún tratamiento.
de la ecuación de equilibrio entre el flujo ascendente
En los siguientes apartados se informa sobre ca- y el de evaporación, es fácil deducir como el incre-
da una de las técnicas indicadas.
Tema 3 técnicas y etemplos de "¡dwbgaoór en masa

mentó de la evaporación reduce el ascenso capilar. ducir en las partes bajas del mismo unos sifones de
La desecación más eficaz se lograría actuando lo aireación. Por ejemplo, insertando piezas cerámicas
más cerca de los cimientos y combinando cámaras de 5 a 15 cms. de diámetro con una ligera pendien-
de aire ventilando a ambos lados del muro por déba- te al exterior que quedan vistas en las partes bajas
lo del suelo, junto con un sistema de drenaje del agua del muro.
de lluvia. El primer trabajo que hay que realizar, en una in-
Se han desarrollado varios sistemas con el fin de tervención contra la humedad de capilaridad, es eli-
aumentar la velocidad de evaporación del agua exis- minar el revoco deteriorado, todo lo que impida res-
tente en los muros. Uno de ellos consiste en intro- pirar, así como las sales que pudieran existir. Y cuando
se tenga que revocar de nuevo -cuanto más tarde me-
jor- que se lleve a cabo con un material con una alta
permeabilidad al vapor de agua. A estos revoques se
les llaman de saneamiento. Lo mismo habría que de-
cir si se tuviese que aplicar una pintura.

c) Obstrucción de poros (Fig. 5)


CORTE Y
Al estrecharse los capilares se aminora la veloci-
ESTANQUE ID AD
dad de absorción de agua. En la práctica no es ne-

1(11 (D.b 9)
cesario ni por otra parte posible cerrar por completo
o s
' capilares. Es suficiente en general estrecharlos por
debajo de 0,010 mieras. A título orientativo, hemos de
indicar que la mayor parte de los poros de un ladrillo
tienen un diámetro comprendido entre 0,1 y 10 mieras
y ello explica su elevada absorción del agua.
Basado en lo anteriormente expuesto existen en
el mercado soluciones acuosas de compuestos mi-
HIDROFUGACION nerales que se introducen en el interior de los muros
POROS a través de unas perforaciones inclinadas realizadas
(D.b 8)
en la parte baja. Dichas soluciones ascienden por ca-
pilaridad reaccionando entre sí o con los componen-
tes minerales del muro y concretamente los iones cal-
cicos, para ir rellenando de minerales los conductos
capilares.
El mayor inconveniente de este procedimiento es
que se introduce todavía más agua en los bajos del
muro. El proceso de obstrucción de los capilares es
OBSTRUCCION muy lento, y siempre superior a los seis meses. En
POROS los edificios históricos, habrá que tener en cuenta el
(D,b 7)
hecho de que se pueden producir manchas blan-
quecinas -eflorescencias-, que pueden afectar a su
estética.
Es por ello que en los últimos años se han ido de-
sarrollando otros procedimientos para obstruir, pero
sin añadir agua, de los cuales mencionamos dos. Uno
de ellos está basado en prepolímeros de poliuretano,
que al ser inyectados reaccionan con el agua exis-
tente o el que pueda ascender, formando una espu-
SEN TRATAMIENTO ma impermeable de poliuretano.Tiene como inconve-
niente el de no poder introducirse en capilares infenores
(Dib 6) a 50mieras. Aún así, puede ser de interés como com-
plemento a la hidrofugación de poros, ya que imper-
meabiliza las oosibles fisuras. Si éstas no se sellasen,
J Barreras en red capilar.
¡os líquidos para impregnar se perderían.
capitulo I. Humedades y su tratamiento

El otro procedimiento se basa en obstruir de una


A—r
manera instantánea los capilares. Ello se consigue con
una cera sólida que se introduce caliente en una sec-
ción del muro que también se ha calentado. Se re-
quieren temperaturas mínimas de 90°C y realizar ta-
ladros equidistantes entre sí de 12 cms. En una prueba ¡ il || ¡i P L U S
de laboratorio en un ladrillo macizo se ha comproba-
do que la porosidad abierta se ha reducido del 32%
al 15% y con el porosímetro de mercurio se ha podi-
do detectar la obstrucción de la mayoría de los poros
con diámetros compendidos entre 0,1 y 10 mieras.
Entre los inconvenientes de este procedimiento está
por una parte el económico, dado el elevado consu-
A i-
mo de electricidad y por otro el estético cuando se in-
terviene en edificios con valor histórico-artístico, ya
6.
que hay que tener en cuenta las señales que van a de-
jar las perforaciones y que el tono de la piedra va a
subir.
del agua y al propio tiempo no entra agua proceden-
te de otras fuentes (lluvias, riegos, etc). Una primera
d) Hidrofugación de poros conclusión que se extrae de lo indicado anteriormen-
Una materia mineral se moja porque tiene propie- te es la necesidad de conocer la humedad existente
dades hidrófilas y ello es lo que explica el ascenso de en el muro y su variación a lo largo del año.
agua a través de los conductos capilares. Para que La perforación del muro se lleva a cabo siguiendo
descienda la humedad de capilaridad de un muro, es el esquema de la figura 6.
necesario transformar la superficie de los conductos Los taladros se realizan normalmente entre 10 y
capilares en hidrófuga y ello se logra impregnando to- 20 cms., en una o dos líneas. Serán con pendiente, si
da una sección con una solución de siloxanos., el muro está seco y no es muy ancho. El líquido se in-
Cuando una materia mineral se impregna con una troduce por gravedad a través de unos embudos co-
solución de siloxanos en una concentración del orden locados en los orificios. Si está húmedo o ha sido se-
del 6% y se espera un tiempo hasta que se haya eva- cado temporalmente por un medio artificial, es necesario
porado el disolvente, la materia hidrófila se ha trans- realizar la inyección a una presión que permita im-
formado en hidrófuga y la gota de agua en vez de ser pregnar toda la sección a hidrofugar, lo que conlleva
absorbida adquiere el efecto de un perleo. Se empe- a que el disolvente desplace parte del agua que to-
zaron a aplicar hace 40 años en la hidrofugación de davía pudiera quedar, y las perforaciones serán hori-
fachadas, e inicialmente como productos totalmente zontales, con el fin de encontrarse menos humedad
polimerizados (polisiloxanos), y posteriormente como en el centro del muro.
prepolímeros de alcoxisiloxanos (siloxanos), que ter- En el caso de que al perforar el muro se detecta-
minaban de reticular con la humedad del aire o del sen grietas o huecos, habría que rellenarlos previa-
material. mente con cementos o morteros expansivos.
La aplicación de los siloxanos para formar barre- Igualmente, si al introducir el líquido hidrofugante se
ras horizontales hidrófugas es de hace quince años y observase un consumo muy superior al previsto, lo
sus resultados han sido contradictorios. Ello tiene su más probable, es que fuera debido a la existencia de
explicación, ya que con independencia de fallos en la fisuras que habría que sellar. Sí éstas fisuras estuvie-
formulación empleada, la malformación de una ba- ran húmedas, el material más idóneo sería una resina
rrera hidrófuga continua puede estar ocasionada bien acuarreactiva como la indicada en c).
por la existencia de agujeros en las partes bajas del Si el tratamiento debe ser llevado a cabo cuando
muro por donde se pierde el líquido hidrofugante o por el contenido de humedad está por encima del míni-
existir zonas muy húmedas que imposibilitan que se mo requerido para una buena hidrofugación, habrá
lleve a cabo la impregnación. que rebajarlo. El procedimiento artificial más adecua-
Si el muro está seco es fácil formar una barrera hi- do se basa en acoplar a los mismos orificios que se
drófuga. Ello es posible si el tratamiento se realiza en perforan para introducir el líquido hidrofugante, unos
épocas y lugares en los que las condiciones higrotér- secadores de microondas con los que se consiguen
micas del medio ambiente favorecen la evaporación temperaturas de 90"C. Una vez se considere que ha
Tema 3. Técnicas y ejemplos de hidrofugación en masa

52 sido suficientemente desecado, se extraen los apa-


ratos y se espera a que la temperatura descienda a
40°C para iniciar el tratamiento hidrófugo. El empleo
de microondas es muy usual en el norte de Europa,
donde las condiciones climatológicas no favorecen el
secado natural de un muro húmedo.
La foto de la figura 7, corresponde a una expe-
riencia del autor para confirmar la eficacia del secado
con microondas de un pilar de ladrillo sometido a un
ascenso constante de agua salina. Finalizada la im-
pregnación con siloxanos, se procedió a la rotura del
pilar y a controlar la humedad retenida que mostraba
el perfil que se indica en la figura 8.
Para la formación de barreras hidrófugas horizon-
tales es necesario que la empresa que las realice, es-
té preparada tanto a nivel humano como en medios
mecánicos y especialmente en los necesarios para el
control de humedad y temperatura.

e) Corte y estanqueidad del muro (Fig. 9)


De todos los procedimientos que existen para eli-
minar la humedad ascendente de capilaridad, sólo hay
uno que lo puede lograr de forma instantánea y se-
gurare incluso con exceso de humedad. Consiste en
seccionar la base del muro y posteriormente rellenar
el vacío creado con un material estanco.
Alguna firma utiliza para seccionar el muro y
crear la estanqueidad, planchas de acero inoxidable.
Este sistema, aparte del impacto que causa en un mu-
ro antiguo, produce una separación en el mismo y ello
expone a riesgos como los derivados de un movi-
miento sísmico.
El sistema más extendido se basa en seccionar el
muro con una sierra o con hilo de acero rodeado de
perlas de diamante, tal como se ejecuta para extraer
mármol. Para evitar movimientos o roturas del muro
se introducen a determinadas distancias unos calces
9.
especiales o el corte se realiza al tresbolillo. Se sella
todo el perímetro colocando unos tubos para la in-
yección y otros como testigos de que se está relle-
nando todo el vacío creado y se procede a la intro-
4. Conclusiones
ducción del mortero estanco. Éste además, une las
dos partes del muro. Tanto para el material de sella- De lo anteriormente expuesto, se pueden estable-
do como el de relleno, se emplean aglutinantes cons- cer las siguientes conclusiones:
tituidos por resinas reactivas con un contenido sólido a) Antes de cualquier intervención, hay que reali-
del 100%, que generalmente son de base epoxi o po- zar una diagnosis. Ello implica la medición de tempe-
liéster. raturas y humedad en el aire y en varios puntos del
La foto de la figura 9. corresponde a un momen- muro y en diversas épocas del año.
to de ejecución del corte. A la derecha dicho corte b) Hay que intentar poner en marcha todos los sis-
ya está impermeabilizado y un tubo vertical que ac- temas constructivos, que permitan incrementar la eva-
túa de testigo lo confirma. Junto a él se ve la má- poración del agua -por ejemplo, por medio de una
quina manual que se emplea para los cortes en las adecuada ventilación- y reducir la llegada del agua a
esquinas. las partes bajas del muro.
capitule I. Humedades y su tratamiento

c) Los sistemas basados en rellenar los poros, o a) Basados en la termoelectricidad engendrada


sea reducir su diámetro, se comprenden desde un por diferencia de temperaturas de diferentes conduc-
punto de vista teórico pero en la práctica o son len- tores.
tos, como es el caso de los realizados en medios acuo- b) Basados en la variación de la resistencia eléc-
sos, y su eficacia depende de la existencia de unas trica con la temperatura de un elemento metálico.
condiciones medioambientales que favorezcan una c) Basados en la radiación infrarroja que emite to-
buena impregnación y un buen secado, o son rápidos da superficie en función de su temperatura. Aventaja
y caros y su interés es más como complemento de a los otros tipos en poder medir la temperatura del ob-
una barrera hidrófuga, como ocurre con las resinas jeto a distancia.
acuarreactivas.
e) La formación de barreras hidrófugas, es relati- Contenido de agua en el material
vamente rápida, cuando las condiciones medioam- Para determinar el contenido de agua se suele ha-
bientales en el aire y en el terreno, favorecen el seca- cer uso de métodos indirectos por su rapidez, que
do de las partes bajas del muro. Si así no fuera habría conviene contrastar con los resultados que se obtie-
que secarlas artificialmente y realizar la hidrofugación nen con el directo.
por inyección. a) Método de doble pesada. Es el directo. Con-
f) El único sistema que elimina el ascenso de hu- siste en pesar la muestra recogida y volverla a pesar
medad capilar de forma instantánea, es el secciona- después de ser secada a 105°C. Para extraer
do del muro y el posterior llenado del espacio creado, muestras en obra se utilizan taladros con trépanos
con un material impermeable y adherente, pero es de widia.
también el procedimiento más caro. b) Medidor de resistencia eléctrica. Basado en ha-
cer pasar una corriente eléctrica a través de dos agu-
jas en contacto con el material. Es el método más rá-
pido, pero ha de tenerse en cuenta que sus valores se
5. Control de humedades
ven afectados por la presencia de sales solubles en
Tanto para diagnosticar una humedad, como pa- el material.
ra medir la intensidad de la misma y especialmente c) Medidor de la impedancia eléctrica. Se mide la
antes y después de un tratamiento antihumedad, se H.R. del aire en equilibrio con la del material. Si éste
dispone en el mercado de instrumental científico que es muy húmedo, el aparato es poco preciso. Hay que
facilita su control. conocer su isoterma de absorción.
d) Medidor de la constante dieléctrica. Sólo sirve
Condiciones higrotérmicas del aire para medidas en la superficie y siempre que ésta sea
El hecho de que todo material poroso contenga regular.
una humedad en equilibrio con la del aire que le ro-
dea, nos obliga, como primer paso en un diagnósti-
co, a determinar la humedad relativa y temperatura
Referencias
ambiental.
Ello se logra de una forma instantánea con apara- 1 L a s ilustraciones que figuran en este capítulo proceden de
tos digitales. Si se quieren conocer sus variaciones la ponencia presentada por el autor en el C O N G R E S O NA-
CIONAL D E T E C N O L O G I A E N A R Q U I T E C T U R A celebrado
con el tiempo, habrá que utilizar los termógrafos tra-
en Madrid en 1994.
dicionales.
2 Sifones Raen de Humitas, Procedimientos Knapen.
3 Mineralizador de Protec, Domosec de Domosystem (F)
Temperatura superficial del material 4 Emi-Beam de Fuktteknik (Suecia).
Si se quiere medir con precisión la temperatura su- 5 Edil Comer (I)
perficial no sirven los termómetros que determinan la 6 Protimeter (Neurtex). Digitron (Kainos). Novasina ¡Precisa),
del aire. Se han desarrollado tres tipos de termómetros: Reytex (Analab).
capítulo': Humedades y su tratamiento

55

4. Humedades en fachada. Filtración y condensación

Juan Monjo Carrió


Dr. Arquitecto
Catedrático de Construcción E.T.S.A, - U.P.M.

1. Introducción

La fachada, como elemento fundamental de la en-


volvente del edificio, actúa como barrera protectora
de las inclemencias atmosféricas y, por tanto, sufre,
como una de las agresiones físicas más importantes,
la del agua de lluvia. Ello provoca, evidentemente, un
intento de filtración del agua que produce humeda-
des de filtración como lesión más frecuente.
Pero éstas no son las únicas humedades que po-
demos encontrar en una fachada. También es corriente
encontrar otras lesiones de humedad donde el agua
tiene origen distinto. Así, debemos tener en cuenta,
además, en distintos grados:
1. Fachada chapada de piedra caliza después de la lluvia.
- Humedades de microcapilaridad
- Humedades de condensación
- Humedades accidentales

2. Tipología de humedades

2.1 Humedad de filtración

La humedad de filtración es la que aparece como


consecuencia de la penetración de agua desde el ex-
1. SATUíACCN 4, :AuiNA RITOA
terior hacia el interior del cerramiento, produciendo
las consiguientes manchas (Fig. 1). Dicha filtración se-
2 Interacción agua fachada. Fases.
rá mayor en los casos de presión hidrostática de agua
sobre el cerramiento (jardineras) pero lo corriente es
que aparezca sin necesidad de dicha presión y con la
simple presencia de la absorción del agua de lluvia, de su coeficiente de absorción, se facilita la filtración,
incluso en las primeras fases de mojado y saturación incluso con aparición del fenómeno físico de la capi-
(Fig. 2) de las que podemos considerar en la interac- laridad, con recorrido preferentemente horizontal del
ción agua-fachada. Entonces, en función de la es- líquido que penetra hacia el interior del espesor del
tructura porosa del material de fachada y, por tanto, cerramiento, pudiendo llegar a atravesarlo. En los ca-
r
ema J Hur-edades en fachada. Filtración y condensación

56 bien por filtración en el mismo del agua de lluvia o de


riego. Pero este tipo de humedad es el que se estu-
dia en las partes enterradas en los edificios. En las fa-
chadas, nos preocupará más la que podríamos llamar
humedad de microcapilaridad (Fíg. 3) y que podemos
considerar aquí como una variante de las filtraciones.
Entiendo por tal aquella que aparece en los paños ver-
ticales situados sobre plataformas horizontales exte-
riores (aceras, balcones, alféizares y molduras) que
desde éstas alcanza el arranque de aquellos y as-
ciende por capilaridad (microcapilaridad) en el aca-
bado exterior poroso (revoco, chapado de piedra, etc.).
Tiene, como veremos, su solución específica.

2.3 Humedades de condensación

Designamos asi a la aparición de humedad en un


cerramiento como consecuencia de la condensación
del vapor de agua que tiende a atravesarlo por al-
3. Microcapilaridad en zócalo de piedra caliza. canzar en algún punto de su recorrido la temperatura
de saturación o de rocío (tr) que, como sabemos, es-
tá en función de la presión de dicho vapor de agua
(Fig.4).
En efecto, ante el vapor de agua existente en un
© ambiente determinado, un cerramiento edificatorio re-
presenta una barrera superficial que dificulta el equi-
librio deseable de presión de vapor a ambos lados del
mismo. En consecuencia, se establece una corriente
de dicho vapor de agua que va desde el ambiente de
mayor presión al de menor presión. Esta corriente es-
tá en función, no sólo de la presión del vapor, sino
coNntNSAC'óN suprificwi. INTIRIOR
además, de la permisividad al paso del vapor de agua
de los materiales constitutivos del cerramiento. Dicha
4. Humedades de condensación. permisividad va desde 1, cuando la barrera no existe
(hueco abierto) hasta 0, cuando se trata de un mate-
rial totalmente impermeable (el vidrio). Las tablas 4.2.
sos en que la geometría de la fachada ofrezca plata-
y 4.3 de la NBE-CT nos dan las resistividades al pa-
formas exteriores horizontales o ligeramente inclina-
so del vapor de agua (inversa de la transmitividad) de
das (desde terrazas y balcones, hasta molduras) la
los materiales normalmente utilizados en las facha-
acumulación de agua será mayor y se podrá intensi-
das, que pueden sernos útiles. Por ello se reproduce
ficar la filtración. Es lo que ocurre en todos los diedros
en el cuadro 2.1
cóncavos, rincones, alféizares de ventanas, etc.
Por otra parte el agua, además de entrar a través En nuestro tipo de edificación es muy corriente el
de la estructura porosa del material, puede hacerlo uso de materiales porosos, por tanto relativamente
también a través de aberturas en los cerramientos, permisibles al paso del vapor de agua. No obstante,
sean estas constructivas (juntas de construcción, de ios cerramientos suelen estar constituidos por varias
dilatación o (juntas practicables) o sean grietas y fi- capas, de distinta permisividad, lo que complica algo
suras producto de lesiones previas. el proceso. En cualquier caso el vapor, al ir atrave-
sando el elemento constructivo va perdiendo presión,
pero se va encontrando con un gradiente de tempe-
2.2 Humedad de microcapilaridad
raturas que, en invierno, va disminuyendo a medida
La humedad capilar es aquella que aparece en los que se acerca al exterior, por lo que existen posibili-
cerramientos como consecuencia de la ascensión del dades (Je alcanzar ia temperatura de rocío en algún
agua contenida en el terreno, bien por nivel freático, punto del recorrido. También puede encontrarse con
npíUnS. Humedades y su tratamiento

Tabla 4.2. Revistividades al 57


vapor de agua
Resistividad al vapor r (1)
v

Material MN s/g m mmHg m' d¡a/g cm

Aire en reposo (cámaras) 5.5 0.004


Aire en movimiento (cámaras ventiladas) 0 0
Fábrica de ladrillo macizo 55 0.048
Fábrica de ladrillo perforado 36 0.031
Fábrica de ladrillo hueco 30 0.026
Fábrica de piedra natural 150-450 0.13-0.39
Enfoscados y revocos 100 0.087
Enlucidos de yeso 60 0.052
Placas de amianto-cemento 1.6-3.5 0.001-0.003
Hormigón con áridos normales o ligeros 30-100 0.026-0.086
Hormigón aireado con espumantes 20 0.017
Hormigón celular curado al vapor 77 0.06
Madera 45-75 0.039-0.065
Tablero aglomerado de partículas 15-60 0.013-0.052
Contrachapado de madera 1500-1600 1.30-5.20
Hormigón con fibra de madera 15-40 0.013-0.035
Cartón yeso en placas 45-60 0.039-0.052
AISLAMIENTOS TERMICOS
Aglomerado de corcho UNE 56 904 92 0.08
Espuma elastomérica 48000 416
Fibra de vidrio (2) 9 0.007
Lana mineral Tipos 1 y II 9.6 0.008
Tipos III, IV y V 10.5 0.009
Perlita expandida 0 0
Poliestireno expandido UNE 53 310
Tipol 138 0.12
Tipo II 173 0.15
Tipo III 173 0.15
Tipo IV 253 0.22
TipoV 253 0.22
Poliestireno extrusionado 523-1047 0.45-0.90
Poliestireno reticulado 9600 8.33
Polisocianurato espuma de 77 0.06
Poliuretano aplicado in situ, espuma de
Tipo I 96 0.083
Tipo II 127 0.111
Tipo III 161 0.142
Tipo IV 184 0.166
Poliuretano aplicado in situ, espuma de
Tipol -. 76 0.066
Tipo II 82 0.071
Urea formaldehido espuma de 20.30 0.017-0.026

(1) Es el inverso de la permeabilidad al vapor


(2) Cualquier tipo sin incluir protecciones adicionales que pudieran constituir barrera de vapor

Tabla 4.3. Resistencia al


vapor de agua

Resistencia al vapor (2)


Materiales en forma de lámina (1) MN s/g mmHg m' dia/g' cm

Hoja de aluminio de 8 mieras 4000 347


Lámina de polietileno de 0.05 mm 103 9
Lámina de polietileno de 0.10 mm 230 20
Lámina de poliester de 25 mieras 24 2.08
Papel Kraft con oxiasfalto 9.7 084
Papel Kraft 0.43 0cO37
Pintura al esmalte 7.5-40 U.65-3.48
Papel v'nílico de revestimiento 5.10 0.43-0.86

(1) Pueden considerarse como barreras de vapor aquellos materiales laminares cuya resistencia al vapor
está comprendida entre 10 y 230 MN s/g (0.86 y 20 mmHg m' dia/g)
(2) Es el inverso de la permanencia al vapor

CUADRO 2.1. Resistividad al vapor de agua de los materiales de cerramiento según NBE-CT.
Tema 4. Humedades en fachada. Filtración y xndensacór

58 2.3.1 Condensación superficial interior


Cuando se produce en la cara interior del cerra-
miento al ser la temperatura superficial de ésta infe-
rior a la de rocío (ti < tr). Como sabemos, este caso se
produce, sobre todo, por un aumento exagerado de
la presión de vapor en dicha superficie, lo cual, a su
vez, puede deberse, bien a la alta producción de va-
por en el local en cuestión (baños, cocinas, etc..) bien
a la impermeabilidad del material de acabado super-
ficial interior del cerramiento (azulejo, vidrio) bien a las
dos circustancias a la vez. En estos casos, y sobre to-
do en materiales de acabado muy impermeables, el
síntoma es un evidente goteo (ventanas, azulejos de
5. Mohos en la cara interior de fachai
baños.etc). También puede darse, aunque con me-
nor frecuencia, en locales con una producción de va-
por de agua moderada y con acabados superficiales
más porosos (dormitorios, salas de estar, etc,..).
Entonces la causa suele estar en un aislamiento in-
suficiente del cerramiento, sobre todo en determina-
dos puntos (puentes térmicos) o una producción ines-
perada de vapor de agua e inadecuada al uso del local
(cocción, humidificadores, etc.). En estos casos y de-
bido a la porosidad del acabado superficial y, por en-
de, a su capacidad de succión, el síntoma de la lesión
suele ser, primero la mancha y más tarde el despren-
dimiento de pinturas y los mohos (Fig. 5).
6. Manchas de eflorescencias por condensación intersticial en
puentes térmicos. 2.3.2 Condensación intersticial
Cuando el fenómeno físico se produce en algún
punto del interior del cerramiento gracias a que, por
la presión de vapor de agua que llega hasta él, la tem-
peratura existente es inferior a la de rocío. Esta con-
densación puede aparecer simultáneamente con la in-
terior ya que, aunque haya condensación en la superficie
interior, puede seguir pasando parte del vapor de agua
que sufre la condensación más adelante.
Como sabemos, este segundo tipo de condensa-
ción depende no sólo de la cantidad de vapor de agua
que atraviese el muro y del gradiente de temperatu-
ras del mismo, sino además de la constitución del pro-
pio cerramiento, la disposición de las distintas capas
7. Humedad por condensación higroscópica en el arranque de
que lo conforman y la permisividad al paso del vapor
un muro.
del agua de cada una de ellas, así como de su coefi-
ciente de aislamiento. Ambas características físicas
sales higroscópicas cristalizadas dentro de los poros
afectan a los gradientes de temperatura; la primera,
del material que absorben vapor de agua hasta con- al de la temperatura de rocío, al condicionar el paso
densarlo por acumulación. En ese momento aparece de vapor de agua a través de cada una de ellas, la se-
la humedad, normalmente sin control, y surge la le- gunda, al de la temperatura interna dei cerramiento al
sión en forma de mancha o de goteo inicial, que pue- producir mayor o menor aislamiento. El encuentro y
de dar lugar, a otras lesiones secundarias. En función cruce de ambos gradientes determina, geométrica-
del punto del recorrido donde se produzca la lesión, mente, la aparición del fenómeno de condensación y
asi como de las causas, podemos distinguir tres tipos nos da las pautas, como veremos más adelante, pa-
de condensaciones. ra su corrección y prevención.
capitulo! Humedades y su tratamiento

Otro tipo de condensación intersticial a tener en 59


cuenta aparece sobre las tuberías de agua fría o me-
tálicas alojadas en los cerramientos, sobre todo ta-
biques. En su superficie, la temperatura suele ser in-
ferior a la del resto del tabique, lo que facilita la
condensación del vapor de agua que lo atraviesa.
Ello suele ocurrir en tabiques que separan locales
con distinta presión de vapor, como son aseos o co-
cinas y otras habitaciones, tabiques que, por otro la-
do, son los que suelen contener ese tipo de con-
ductos.
Los síntomas de este tipo de lesión en las facha-
das suelen ser las manchas de humedad al exterior o
la alternativa de las lesiones secundarias (eflorescen-
cias, erosiones, organismos y desprendimientos).
Normalmente aparecen al exterior y en invierno, ya
que la condensación se suele producir hacia la cara
exterior del cerramiento (por temperatura más baja) y
la humedad, una vez condensada, sigue su camino
hacia el ambiente con menor presión de vapor (el ex-
terior). Además, suelen ser corrientes también en puen-
tes térmicos (es una de sus manifestaciones hacia el
exterior) por alcanzarse en ellos antes la condensa-
ción en el recorrido del vapor de agua, debido a su
menor capacidad de aislamiento (Fig.6). En el caso de 8. Manchas de humedad accidental producida por rotura de ba-
condensación sobre conductos empotrados en tabi- jante empotrada en fachada.

ques, la mancha suele transparentar el recorrido de


los mismos. co, significa que la humedad viene desde afuera y
se trata de una condensación higroscópica. Por el
2.3.3 Condensación higroscópica contrario, si la humedad aumenta hacia el interior si-
Cuando la causa fundamental es la presencia de gue siendo capilar, de filtración, o de condensación
sales higroscópicas en el interior de los poros del intersticial.
material. Se trata, por su localización, de una con-
densación intersticial pero conviene distinguirla de 2.4 Humedad accidental
ésta a los efectos de su reparación, ya que no nos
La humedad accidental aparece cuando alguna con-
preocupará tanto el aislamiento o la presión de va-
ducción de agua sufre una rotura, provocando el pa-
por de agua como la eliminación de las sales hi-
so del líquido al cerramiento que lo contenía o que es-
groscópicas que causan la acumulación del vapor
taba próximo.
de agua y su condensación. La presencia de dichas
sales suele ser consecuencia de su disolución y arras- Este tipo de humedad como lesión es, quizá, la
tre por anteriores humedades de capilaridad o de fil- más clara desde el punto de vista del proceso pa-
tración a lo largo del tiempo, que al ir evaporando tológico. El'efecto suele ser una mancha de hume-
desde los poros superficiales del material de acaba- dad en forma de nube circular alrededor del punto
do (enfoscados y revocos, normalmente) facilitaban de rotura, o de nube alargada, siguiendo el recorri-
su cristalización en ellos (Fig. 7). do del conducto afectado, puesto que es corriente
que el agua discurra desde la rotura por la superfi-
Más adelante, incluso después de haber repara-
cie del tubo en la junta superficial que se crea entre
do esas humedades, la presencia de las sales faci-
él y el material que lo contiene. Este segundo tipo
lita la condensación del vapor de agua del ambien-
de síntoma puede llegar a confundirse con la con-
te resultando una mancha de humedad muy similar
densación intersticial sobre tuberías ya comentado,
a la antigua de capilaridad o filtración por lo que pue-
aunque en la rotura, la cantidad de agua es eviden-
de inducir a confusión. Para comproDarlo, un méto-
temente mayor (Fig. 8).
do muy sencillo consistirá en calar parcialmente el
acabado en cuestión: si su trasdós permanece se- Podemos llegar a distinguir varios subtipos en fun-
Tema 4 Humedades en faenaría,filtracióny condensación

ción de la causa que ha producido la rotura del


conducto que, en principio, se pueden agrupar
en tres (Fig. 9).

Rotura del conducto por sobretensión en el mis-


mo debida a cambios dimensionales. El esfuerzo que
la provoca suele ser, tanto de tracción como cortan-
te. Así, debido a los cambios de temperatura que su-
fren las conducciones (sobre todo, las que tienen al-
ternancia de temperatura en su fluido; calefacción,
agua caliente) aparecen importantes variaciones di-
mensionales en los mismos que no son seguidas por
el cerramiento en el que están alojados. Si no disfru-
tan de la suficiente independencia dentro del mismo,
o la longitud es excesiva, la contracción introduce una
tensión de tracción que supera la capacidad del con-
ducto, produciendo su rotura. De un modo similar, los
encuentros entre conductos (empalmes, piezas en "T",
etc.) pueden ser puntos conflictivos cuando una de
las ramas dilata sin que la otra siga el movimiento.
Entonces aparece un esfuerzo cortante muy localiza-
do que puede provocar la rotura.
2.-ACCION MECANICA

Rotura por acción mecánica sobre el conducto.


9. Humedades accidentales. Tipos.
Debemos incluir aquí el conjunto de acciones exte-
riores, normalmente puntuales, provocadas por el uso
(o mal uso) del edificio y su entorno. Así, considera-
mos, desde las obras de reparación o de manteni- perficie de los conductos que, ayudada por la falta
miento en el propio edificio o su entorno (incluso en de protección exterior de los mismos, acelera la co-
el propio cerramiento) que producen golpes de piqueta rrosión por inmersión o por aireación diferencial. Dicha
que provocan la rotura del tubo, inmediata o retarda- humedad, a su vez, puede surgir por dos razones bá-
da, hasta los movimientos del edificio, tanto térmicos sicas; bien por condensación de vapor de agua, ya
como elásticos (flechas) que introducen esfuerzos cor- comentada, bien por estar el conducto embutido en
tantes y aplastamientos, incluso el paso de personas mortero de yeso que, por su higroscopicidad, es ca-
o maquinaria sobre conductos empotrados bajo los paz de absorber y retener la humedad ambiente,
pavimentos. transmitiéndola directamente al conducto o facili-
tando su condensación, bien por agua de lluvia, cuan-
do el conducto es exterior.
Corrosión de los conductos metálicos, que pue-
de ser debida a varios factores. Al propio fluido que En cualquiera de los casos, la corrosión del tubo
discurre por su interior por la llamada corrosión por va disiminuyendo la sección de sus paredes hasta que
inmersión, ayudada, en la mayoría de los casos, por éstas no admiten la presión interior o ias tensiones de
la composición química de dicho fluido y por posi- tracción o esfuerzo cortante del punto anterior.
bles defectos de producción del conducto. A la apa-
rición de pares galvánicos en el conducto, bien en su
encuentro con otros elementos metálicos, bien en 3. Puntos conflictivos
abrazaderas y sujeciones, bien incluso, debidas a los
álcalis y ácidos contenidos en el material constituti- Al ser las fachadas elementos muy expuestos a las
vo del cerramiento que lo alberga. El primer caso inclemencias atmosféricas y estar constituidas por
aparece incluso, cuando la conexión entre las dos multitud de componentes, con gran cantidad de cam-
piezas metálicas no es directa, sino a través del pro- bios de plano, no es extraño encontrarnos con un nú-
pio fluido que, en su dirección de avance, arrastra mero elevado de puntos conflictivos. No obstante, pa-
los electrones en forma de partículas metálicas. En ra su estudio los podemos agrupar en siete básicos.
tercer lugar, a la aparición de humedad sobre la su- (Fig. 10)
capitulo\. Humedades y su tratamiento

3.1 Arranque de muros o zócalos permite (lo facilita por succión capilar), A través de
grietas y fisuras previas en la unidad constructiva (so-
Aparecen, sobre todo, humedades de capilaridad bre todo las primeras) con la presencia de agua y vien-
y microcapilaridad, aunque también de filtración. Juega to ayudadas, en este caso, por la constitución, nor-
un papel importante la existencia o no de acera con malmente capilar, de estas aberturas. Por último, a
zócalo y, sobre todo, la consideración de la imper- través de juntas constructivas mal resueltas (sin sola-
meabilidad del material de dicho zócalo, tanto frente
pe, sin sellado, etc.).
al agua que viene desde el suelo, como sobre todo, a
la que llega desde el pavimento (Fig. 3). En estos paños pueden aparecer, además, las hu-
medades de condensación, tanto las superficiales co-
mo las puntuales o lineales por puentes térmicos, así
3.2 Paño ciego
como las accidentales, cuando existen tuberías alo-
jadas en el cerramiento. Mención especial merecen
Es donde se produce la filtración propiamente di-
cha. Tenemos tres vías muy claras. A través del pro- los encuentros entre estructura y cerramiento donde
pio poro del material constitutivo del cerramiento, cuan- es muy corriente la existencia de puentes térmicos por
do la presión del agua es suficiente combinando su invasión de la estructura dentro del espesor del ce-
abundancia con el viento, y la estructura porosa lo rramiento e inevitable interrupción del aislamiento.
Tema 4. Humedades en /aerada. Filtración y condensación

62 ción de agua en períodos lluviosos sobre dichas pla-


taformas y la capilaridad de los revestimientos exte-
riores (enfoscados y revocos de mortero) o de los pro-
pios materiales constitutivos del cerramiento (ladrillo
visto, piedra, etc.) facilitan la aparición, por un lado,
de la filtración hacia el interior y, por otro, del fenó-
meno de capilaridad en los acabados y, por tanto, de
esta lesión a la que hemos llamado de microcapilari-
dad dadas sus características dimensionales. Esta le-
sión, además, acaba en otras secundarias de des-
prendimientos o erosiones físicas que son las que se
corrigen, olvidándose, muchas veces, de su origen.

11. Humedad en dintel de hueco por falta de goterón. 3.4 Hueco de ventana

En ellos se dan, por un lado, las condiciones re-


cién mencionadas, es decir, encuentro de planos per-
pendiculares formando diedros en los que coinciden
juntas constructivas (entre materiales distintos, pa-
ramento y carpintería). Si falla el material de sellado
la junta facilita la filtración de la posible agua acu-
mulada en cualquiera de los diedros. Por otro lado,
los huecos de ventana tienen otros dos puntos de
posible filtración. El dintel superior, que si no tiene
goterón suficiente facilita la escurridura hacia el in-
terior del agua que resbala por la fachada y su po-
sible filtración (Fig. 11). Además, las juntas practi-
cables de la propia carpintería de la ventana que, sí
12. Humedad en balcones con peto de obra por incorrecto dre-
naje.
no tienen bien resuelta su estanquidad (doble sola-
pe, cámara de descompresión, drenaje interior y vier-
teaguas en juntas horizontales) facilitan también la
entrada de agua de lluvia cuando ésta se ve impul-
sada por el viento.
Estos huecos, por último, presentan también dos
tipos claros de humedades de condensación. Por un
lado, el puente térmico perimetral, más difícil de evi-
tar en jambas y dinteles. Por otro, la condensación
superficial Interior sobre el vidrio provoca un lagrimeo
que acaba en el antepecho. Si no se recoge y cana-
liza este agua, puede ir afectando al material poroso
que tengamos debajo.

3.5 Balcones
13. Microcapilaridad sobre moldura horizontal con posterior des-
prendimiento. Además de la plataforma que ofrecen, que facili-
ta la estancia de agua y filtraciones consiguientes,
existe un punto conflictivo no suficientemente consi-
3.3 Plataformas horizontales derado.
En efecto, cuando la barandilla del balcón se re-
Me refiero a todos esos elementos salientes del suelve con múrete de obra (o, por lo menos, su par-
plano de fachada con pequeñas plataformas más o te baja) hay una solución, casi implícita, de drenaje
menos horizontales (normalmente imoermeables) bien mediante gárgola directa al exterior. Dicha gárgola, en
sean suelos de terraza, bien molduras horizontales, la mayoría de ios casos, es un simple tubo metálico
bien vierteaguas y albardillas. En ellos, la acumula- de reducida sección (de unos 3 cm de diámetro) que
capiti¡o\. Humedades y su tratamiento

arranca del mismo borde del pavimento y suele tener 4.1 De la humedad de filtración
poca inclinación y poco vuelo. El resultado funcional
es la obstrucción inmediata de la boca del tubo, o su La humedad de filtración aparece básicamente
saturación en un momento de gran afluencia de agua, en cinco de los puntos conflictivos estudiados.
y la filtración de ésta por sus bordes en el espesor de Veamos:
peto. En ocasiones, incluso, el agua llega a salir por a) En los remates superiores (cornisas y petos
el tubo, pero por su superficie exterior a través del mu- de terraza) si ha fallado la protección superior, proce-
ro. El proceso patológico genera, además de las pro- deremos a su reparación para conseguir su imper-
pias manchas de humedad, las consiguientes eflo- meabilización y correcto drenaje del agua. Para ello
rescencias y erosiones físicas (Fig.12). podemos distinguir varios casos tipo (Fig. 14 a):
Si la albardilla es de mortero, plana o en caballe-
te, y está erosionada, debemos proceder a sanearla
3.6 Relieves y rehacerla dando las pendientes adecuadas, o sus-
tituirla por otra de material impermeable y con sufi-
En todo tipo de molduras y salientes, en general,
ciente vuelo por ambos lados, de acuerdo con las in-
en el encuentro entre el plano de fachada y otro más
dicaciones de prevención.
o menos perpendicular, que sea horizontal, se puede
producir acumulación de agua con esas plataformas Si es de elementos prefabricados, la filtración se
horizontales que llegan a facilitar la filtración hacia el producirá normalmente por sus juntas o por las posi-
interior (además de la microcapilaridad ya comenta- bles perforaciones o, incluso, por su borde si no tie-
da) siempre que se den las condiciones adecuadas ne vuelo suficiente o goterón. Lo más seguro será su
de porosidad suficiente o de fisuras, grietas o juntas reposición, pero si las piezas están en buenas condi-
constructivas. ciones, con vuelo y pendientes correctas, podemos
reducir nuestra actuación al retacado de las juntas con
mortero de cemento, bien expansivo, bien de resinas,
3.7 Remate superior o bien a su sellado con productos elastómeros, en
función de las condiciones climáticas y el tipo de al-
En los remates superiores (cornisas y petos de te- bardilla.
rraza) si la albardilla es insuficiente o inadecuada (po-
En algún caso concreto, sobre todo si la albardi-
co impermeable, con escaso vuelo en los dos frentes,
lla está muy deteriorada, puede resultar conveniente
con juntas muy abiertas entre piezas, etc.) se puede
colocar una nueva de chapa metálica (cinc, plomo,
producir filtración, bien por los bordes, bien por las
cobre, acero galvanizado) directamente sobre la exis-
juntas entre las piezas, provocando las consiguientes
tente, con lo que nos podemos ahorrar trabajo de de-
manchas (Fig.13).
molición.
Cabe mencionar también que en algunos ca-
3.8 Conductos empotrados sos puede estar en buenas condiciones la albardilla
y, sin embargo, haber fallado el paramento vertical
Me refiero a todos aquellos puntos donde la obra del remate. No es lo más corriente y, en cualquier ca-
de fábrica aloja algún conducto de agua (a presión o so, su reparación viene contemplada en los paños
de saneamiento) y aquellos otros donde esos con- ciegos.
ductos atraviesan elementos estructurales horizonta- b) En los relieves (molduras en general, balcones,
les. Aparecen, pues, estas humedades en la línea de etc.) siempre que existen rincones, puede haber jun-
las bajantes de pluviales y en las zonas de cuartos de tas constructivas y éstas pueden facilitar la filtración.
baño y cocinas. El caso más corriente aparece en los diedros hori-
zontales donde, además de la microcapilaridad que
se estudia aparte, existe este nuevo peligro
La reparación consistirá, básicamente, en sellar
4. Actuaciones de reparación
esta junta constructiva, siempre que el elemento sa-
Recojo a continuación las medidas básicas para liente esté en buenas condiciones, ya que de lo con-
anular las causas que provocan las humedades en trario habrá que demoler y rehacer,
cuestión, bien entendido que ésta seria la primera me- Cuando de plataformas horizontales se trate, una
dida a tomar en cada caso. A continuación se proce- causa adicional puede ser la falta de pendiente en la
derá a reparar el efecto, saneando, cambiando el ma- misma. De ser así, debemos provocarla, normalmen-
terial, etc. (Fig. 14). te con adición de un elemento impermeable tipo se-
Tema 4. Humedades en fachada. Filtración y condensación

a) AlBARDILLAS
64

b) RELIEVES (ver figura 15) 3¡M7„ JUNTA PRACTICABLE

c) HUECOS DE VENTANA

VIERTEAGUAS

VIERTEAGUAS

GOTERON CAMARA DE
.NCORPORADC

\ / HUIDA A L

d) PAÑOS CIEGOS POROSOS

i?

í R3 i
PLACAS IMPERMEABLES AUCATADO O CHAPADO
PINTURA IMPERMEABLE
DE "PORO ABIERTO" O
HIDROFUGACIÓN SUPERFICIAL

B) DESAGÜE TERRAZA/BALCON

GARGOLA CON SUMIDERO

14. Reparación de humedades de filtración en fachadas.


capituio\. Humedades y su tratamiento

mialbardilla (chapa metálica, piezas cerámicas, prefa- ductos hidrofugantes, normalmente a base de siloxa-
bricados de hormigón, etc.). nos. Se aplican desde el exterior, a brocha o por pul-
Si la plataforma pertenece a una terraza o balcón verización, y el producto se queda adherido a la su-
accesibles, convendrá comprobar la existencia de ro- perficie exterior y en los poros superficiales repeliendo
dapié y solape de membrana impermeable bajo él, tal el agua y provocando el efecto del perlado.
como queda indicado al hablar de microcapilaridad. Aunque son transparentes, producen un ligero
c) En los huecos de ventana tenemos tres pun- cambio de aspecto (algo de brillo) y necesitan repo-
tos conflictivos, a saber: (Fig. 14 c). sición periódica (10 años). Deben aplicarse con la fa-
El vierteaguas, como plataforma horizontal y re- chada seca (en equilibrio húmedo). En cualquier ca-
mate superior, con todos los problemas mencionados so, se estudian con mayor extensión en el capítulo
en párrafos anteriores y sus consiguientes soluciones. siguiente.
Aquí hay que considerar, además, los diedros latera- e) En los balcones con peto de obra, la cues-
les del mismo que se deben resolver, bien con una tión fundamental está en que no se tiene en cuenta
pendiente fuerte, además de la obstrucción de la jun- que el balcón con peto de fábrica se convierte en una
ta, bien con pendientes encontradas en la bisectriz, cubeta que hay que tratar y desaguar como tal. Es de-
según indica la figura, para evitar posible acumulación cir, en primer lugar, impermeabilizar el forjado y la ba-
de agua y canalizarla hacia el centro del vierteaguas. se de sus paredes hasta el posible nivel del agua (por
El dintel, donde necesitamos goterón para evitar lo menos 15 cms.) y a continuación, realizar el drena-
la entrada de agua. Dicho goterón, si no existe, se je dando continuidad al material impermeable con la
puede añadir con un pequeño angular metálico en el boca del tubo drenante de manera que en su encuentro
borde. no se puedan producir filtraciones. Lo lógico es intro-
Las juntas practicables de las carpinterías, si no ducir una cazoleta sumidero entre el pavimento y la
tienen las condiciones adecuadas de drenaje debe- gárgola al igual que se hace para el drenaje de cual-
mos intentar añadirlas, lo que no siempre resulta fac- quier cubierta plana cuando se llevan las aguas a una
tible. En este caso debemos proceder a cambiarlas. bajante. Al fin y al cabo una gárgola es, desde el pun-
En cualquier caso, los puntos más conflictivos son: to de vista funcional, como el inicio de una bajante
- Falta de vierteaguas exterior en la base del mar- (Fig. 14 e).
co practicable (suele ser relativamente fácil de Para la reparación del efecto, una vez anulada la
añadir). causa, en la mayoría de los casos de humedades de
- Falta de cámara de descompresión (difícil de in- filtración comentados en los que se ha hablado de re-
tercalar). posición, ésta misma nos dará también la anulación
- Falta de drenaje de dicha cámara (se puede del efecto. Cuando, por el contrario, la actuación so-
realizar siempre que sobresalga sobre el vier- bre la causa sea un simple sellado, o si la reposición
teaguas del hueco). de elementos no anula el efecto, éste se tratará nor-
- Falta de sellado de los ingletes del cerco en la malmente de una mancha de humedad que habrá que
zona de la cámara de descompresión que facilita la tratar con los sistemas de limpieza adecuados.
filtración en las esquinas (fácil de realizar).
d) En los paños ciegos, la filtración se combate 4.2 De la humedad de microcapilaridad
en función de la causa. Si ésta es la propia porosidad
y está en una situación expuesta, debemos tratar de Cuando se trata de humedad ascendente desde el
impermeabilizarlo con un nuevo acabado que, sin em- terreno, su análisis y tratamiento corresponde a los
bargo, deje respirar al cerramiento. Ese nuevo aca- problemas de edificaciones enterradas, normalmen-
bado, en función de las necesidades, puede ir desde te a base de drenajes, cortes capilares y ventilación.
una pintura hidrófuga de poro abierto, preferentemente No entramos en su discusión.
del tipo mineral, hasta un aplacado con chapas me- Si se trata de problemas de los que hemos llama-
tálicas o de fibrocemento, pasando por meros enfos- do de microcapilaridad, la actuación de reparación
cados o revocos de carácter también hidrófugo, o por consiste, básicamente, en impedir que la humedad
alicatados o chapados de piedra (Fig. 14 d). llegue al arranque del paramento vertical susceptible
Todas estas soluciones implican una alteración evi- de capilaridad. Para ello tenemos también tres vías
dente del aspecto de la fachada ya que aparece un (Fig. 15):
nuevo material. Para paliar este problema, sobre to- - Aumentar la inclinación de la plataforma
do en casos de materiales vistos que se quieren con- hacia el exterior, para asi aumentar la velocidad de
servar (ladrillo, piedra, etc.) podemos recurrir a los pro- drenaje.
Tema 4. Humedades en fachada. Filtración y condensación

16. Reparación de condensación superficial interior.


capitu/OI. Humedades y su tratamiento

- Establecer un pequeño escalón impermeable to en función del tipo de superficie donde se dé. Si es
(unos 5 cms) entre plataforma y paramento, normal- pulida, se forman directamente las gotas de agua; si
mente del mismo material de la plataforma y como por el contrario es porosa, el agua que se condensa
continuidad de ésta. se aloja directamente en los poros y tarda algo en no-
- Colocar rodapié poco absorbente cubriendo el tarse hasta que se forma una mancha de humedad,
solape vertical de la lámina impermeable horizontal aparecen mohos o se desprende la pintura. En cual-
En el primer caso, inevitable cuando se trate de quiera de los casos, tenemos dos líneas distintas de
plataformas de elementos cerámicos, además de ase- actuación; evitar que haya condensación o preparar
gurar la entrega suficiente de la plaqueta para que la superficie para que el agua no produzca lesión en
exista siempre solape del paramento sobre ella, con- ella. Veamos cada una.
viene complementar con un sellante elastómero en la a) Para evitar que haya condensación tenemos a
unión constructiva horizontal entre ambos materiales. su vez dos caminos, dirigidos ambos a impedir que
En el segundo caso, más adecuado para plata- se alcance la temperatura de rocío (tr) sobre la pared:
formas metálicas (cinc, plomo, cobre, etc.) y moldu- - Aumentar la temperatura superficial interior del
ras pétreas prefabricadas, tampoco estará de más un cerramiento (ti)
sellado elastómero por encima. - Disminuir la presión de vapor de agua del local (Pv).
En el tercer caso, indicado para zócalos de fachada Gráficamente, lo que estamos haciendo es alejar
con acera y terrazas accesibles, dicho rodapié, de ma- la situación, hacia la derecha y hacia abajo, de la cur-
terial impermeable similar al utilizado para el pavi- va de saturación en el abaco psicrométñco.
mento, debe quedar convenientemente embebido en a.1.) Para aumentar la temperatura superficial in-
el acabado del paramento vertical para evitar filtra- terior podemos recurrir a medios activos (aumento de
ciones y debe proteger la lámina impermeable que cu- la calefacción interior) que, además de ser costosos,
bre toda la terraza y que debe subir hacia arriba unos no dan la seguridad permanente. Por el contrario, po-
10 ó 15 cms. en el borde del encuentro con el para- demos recurrir a métodos constructivos (que podría-
mento, aun cuando toda la plataforma esté protegida mos denominar pasivos) sin más que aumentar el co-
con algún tipo de cubierta (ver figura). eficiente de aislamiento del propio cerramiento. Para
ello, debemos considerar lo siguiente.
4.3 De la humedad de condensación - Este caso corresponde normalmente a paños
ciegos.
Se trata, como hemos visto, de un tipo de hume- - Debemos ver si afecta a todo el paño o a en-
dad algo especial, ya que tienen que confluir, para que cuentros del mismo con estructura u otros cerramientos
aparezca, varios factores físicos, concretamente la provocando los conocidos puentes térmicos.
presión de vapor suficientemente alta y la temperatu- - El aumento de dicho coeficiente se consigue por
ra suficientemente baja, ambas en la superficie o el incremento del aislamiento del cerramiento.
interior del cerramiento en un momento dado, de tal - Una decisión fundamental para el funcionamiento
manera que la humedad pueda aparecer de repente de la reparación está en la situación y tipo de ese ais-
donde antes no la había, lo que hace que, si no se ha lamiento.
estudiado previamente, resulta difícil de predecir a - Un aislamiento por el interior suele quedar inte-
simple vista. Por otra parte, por la forma de aparecer, rrumpido en forjados y tabiques, por lo que no anula
se confunde muchas veces con otros tipos de hume- los puentes térmicos, sino que los resalta todavía más.
dad, lo que provoca procesos de reparación contra- En función de estas consideraciones, los sistemas
producentes. de reparación más adecuados son:
Todo ello hace que sea importante un estudio es- a1.1.) Aplicación de una hoja exterior de material
pecífico de los sistemas de reparación de este tipo de aislante, de forma continua o puntual sobre los puen-
humedades que a veces resultan paradójicos, ya que tes térmicos, siempre que podamos variar la imagen
su proceso es indirecto, atacando factores como la exterior del edificio. Dicha hoja tendrá el espesor ne-
óaiada de temperaturas o la producción de vapor de cesario según sus características aislantes y el au-
agua. Para estudiarlos, veamos los tipos de humedad mento del coeficiente que necesitemos, estudiado en
de condensación enumerados. función de los grados de temperatura que queramos
elevar y las condiciones climáticas exteriores más ad-
Eliminación de las causas versas previsibles. Por otra parte, habrá que resolver
De la condensación superficial interior íFig.15) la protección exterior de la hoja al quedar ésta a la in-
En estos casos la humedad se aprecia muy pron- temperie.
Tema 4. Humedades en fachada. Filtración y condensación

a.1.3.) Colocación de planchas aislantes por el


interior del cerramiento, solución nada recomenda-
ble, aunque en ocasiones sea la única. En estos ca-
sos hay que tener en cuenta que la plancha sólo ais-
la. Conseguiremos, en efecto, aumentar la
temperatura superficial interior, pero el vapor de agua
seguirá pasando hasta la vieja superficie donde se
puede seguir alcanzando la temperatura de rocío y,
por tanto, se producirá una condensación superfi-
cial, ahora oculta, que provocará una humedad que
se descubrirá más tarde, resultando una lesión
peor que antes.
Para evitar esto, tenemos que usar un material ais-
17. Revestimiento exterior con poliestireno y revoco armado. lante con barrera de vapor hacia el interior del local,
de tal manera que, estudiando los gradientes de tem-
peratura nuevos, no se alcance la "tr" ni en la nueva
La solución actual más sencilla es la colocación superficie interior, ni en la antigua. Hay que tener pre-
en la fachada de planchas de aislante (poliestireno) sente que la barrera de vapor producirá una acumu-
convenientemente solapadas, sujetas y protegidas al lación del mismo que permitirá alcanzar el "tr" con una
exterior mediante un revoco de mortero armado con "ti" más alta, lo que nos obligará a aumentar el aisla-
malla de poliéster o de fibra de vidrio. Su aspecto fi- miento interior.
nal es el de una fachada revocada y las marcas co-
a.2.) Para disminuir la presión de vapor de agua
merciales suelen tener todo tipo de piezas especiales
del local, suponiendo que mantenemos su uso, sólo
para los distintos encuentros y remates (huecos de
nos queda como recurso el disipar dicho vapor me-
ventana, albardillas, etc.). (Fig.17)
diante la ventilación natural o mecánica.
Este sistema puede ser sustituido por la plancha La natural puede ser permanente o temporal. Esta
aislante protegida con otra hoja rígida exterior que última supone un control de los usuarios que no siem-
puede ser, desde el tabicón de L H D, con cualquier pre se da y que, en cualquier caso, no afecta a las so-
tipo de acabado de los Usuales de fachada, hasta cha- luciones de reparación constructiva más que en au-
pados de piedra, incluso transventilados. mentar la superficie de ventana practicable, por lo que
a.1.2.) Relleno de la cámara de aire con espumas, parece más adecuado hablar de la permanente. Esta
siempre que el cerramiento disponga de dicha cáma- se consigue actuando sobre las carpinterías y sus sis-
ra vacía y que el estudio del gradiente de temperatu- temas de obstrucción, o practicando aberturas per-
ras del mismo confirme esta posibilidad como positi- manentes (rendijas) convenientemente colocadas.
va para nuestro propósito y no productora de posibles En el primer caso, se trata de aumentar la per-
condensaciones intersticiales, según veremos más meabilidad al aire de las ventanas, solución que, en
adelante. principio, parece paradójica, pero en la realidad sue-
En cualquier caso, este relleno suele presentar le ser necesaria, sobre todo en climas húmedos. No
algunos problemas. En primer lugar, no anula en balde la propia Norma NBE-CT-79 exige permea-
los puentes térmicos, ya que la cámara suele bilidad de las ventanas mayor en dichos climas (A-3
estar interrumpida en los elementos estructu- para climas húmedos y A-2 para los secos). En la prác-
rales. Por otra parte, no es fácil asegurar la unifor- tica, esto puede exigir el cambio de las carpinterías o
midad de reparto de la espuma y, por consiguien- la eliminación de burletes y topes de goma. De hecho,
te, del coeficiente de aislamiento. Para contrarres- la experiencia nos ha dado casos de condensaciones
tar este efecto hay que medir el alcance de la es- interiores al poner los propietarios burletes en las ven-
puma inyectada mediante orificios y testigos. Por úl- tanas. La otra alternativa, la de rejillas, es similar a la
timo, algunas espumas que se han estado utilizan- usada para la ventilación obligatoria cuando existen
do en años atrás (de poliuretano) resultaban ser tó- instalaciones de gas y nos permite ahorrarnos la ac-
xicas, lo que se ha arreglado variando la composición tuación sobre las carpinterías.
química de los productos o utilizando lana de vidrio. No obstante, estas soluciones tienen una conno-
En contra de estos inconvenientes, el sistema resul- tación contraria al confort, sobre todo en lo que se re-
ta de mayor facilidad de aplicación que el del punto fiere a la temperatura interior del local "Ti", ya que és-
anterior. ta disminuye al aumentar la ventilación en invierno.
capitule' Humedades y su tratamiento

Por esta razón esas soluciones pueden ser apropia-


das sólo en los locales que nc son de reposo, en los
cuales, de todos modos, hay que prever esa ventila-
ción permanente, según veremos en prevención. En
los locales para estancia o descanso, si se quiere ac-
tuar sobre la ventilación habrá que hacerlo mediante
control temporal a menos que se trate de casos muy
exagerados como los mencionados. En esos casos
podemos utilizar los sistemas de reducción del vapor
de agua recurriendo a los deshumidificadores, tanto
de condensación como de sales higroscópicas, que
resultan aparatos discretos y que, sin embargo, pue-
den obtener una reducción efectiva de la humedad
ambiente en el local. 18. Canaleta de recogida de aguas de condensación.
b) La otra solución alternativa, o complementaria,
a la de evitar que se alcance la "tr" consiste en pre-
parar la superficie del cerramiento para la posible con- introducir una canaleta de recogida de dichas aguas
densación. Se trata, básicamente, de disponer de una en la parte inferior de la capintería (Fig. 18).
superficie pulida e impermeable que no se vea afec-
tada por el agua que se condensa sobre ella y que De la condensación intersticial (Fig. 19)
permita su secado y limpieza con relativa facilidad. En su conjunto, resulta un proceso patológico más
Naturalmente esta actuación se refiere a aquellos complicado que el anterior por tener la lesión un ini-
casos en que la condensación se produce sobre su- cio oculto, puesto que la "tr" se alcanza en un punto
perficies porosas y no se puede anular por la vía an- interior del espesor del cerramiento y el síntoma no es
terior. Entonces, si el local lo admite, procederemos a tal hasta tiempo después, cuando la mancha, o la le-
impermeabilizar su superficie mediante la aplicación sión secundaria, aparece por el exterior.
de un acabado pulido, que puede ir desde un esmal- En este caso, la actuación sólo puede seguir una
te (no pintura plástica, que es porosa y no resuelve el de las líneas mencionadas en el punto anterior; la de
problema) hasta la ejecución de un alicatado o cha- evitar que se alcance la temperatura de rocío en nin-
pado de piedra, pasando por los revestimientos plás- gún punto del cerramiento. Para ello, podremos ir por
ticos de todo tipo, más o menos rígidos. tres caminos:
Cabe mencionar aquí el buen uso que se hace en - Aumentar la temperatura general en el interior
climas secos de los acabados continuos de yeso (guar- de la sección del cerramiento (que la gráfica del gra-
necidos y enlucidos) por su alto poder higroscópico. diente de temperaturas tenga curvatura convexa ha-
En efecto, los acabados de yeso tienen la capacidad cia arriba).
de absorber la humedad del ambiente en forma de va- - Disminuir la temperatura de rocío en la misma
por de agua, y retenerla hasta que aquella baja y la sección (curvatura convexa hacia abajo) para lo cual
vuelven a ceder. Ello produce una regulación de la hu- deberemos disminuir la presión de vapor de agua.
medad del local que es útil hasta cierto punto, hasta - Disipar el vapor de agua dentro del cerramien-
que se produce la condensación, condensación que to hacia el exterior donde se produce la condensa-
a veces se ve retardada por esa regulación, ya que re- ción.
trasa la acumulación de vapor de agua en la superfi- a) Para aumentar la temperatura general del ce-
cie. Este hecho, que resulta práctico en climas secos rramiento deberemos aumentar su coeficiente de ais-
mientras la presión de vapor no es excesiva, suele ser lamiento lo más al exterior posible, añadiendo ais-lan-
inútil en los climas húmedos, donde el propio acaba- te por su cara externa, tal como vimos en el punto
do de yeso ya está saturado con la humedad ambiente anterior, o. en contadas ocasiones, inyectando ais-
normal, con lo que queda anulada la regulación. No lante en su cámara de aire si el estudio de los gra-
en balde hay zonas de la costa de España (las islas dientes de temperatura así nos lo indica. Sin embar-
Canarias, por ejemplo) donde muy pocas veces se uti- go, nunca podremos resolver el problema añadiendo
lizan ese tipo de acabados. aislamiento por el interior.
Cuando el problema está en el lagrimeo del agua En este caso, resulta fundamental anular los puen-
condensada sobre el acristalamiento que afecta a los tes térmicos, puntos donde más comúnmente se pro-
materiales porosos de 'a base de éste, tenemos que duce la lesión, por lo que no tendremos más remedio
Tema <¡ Humedades en lacrada. Fllración y condensación

SITUACION TÍPICA AISLANTE AL EXTERIOR RELLENO DE CAMARA BARRERA DE VAPOR


DE CONDENSACIÓN AL INTERIOR
INTERSTICIAL

19. Reparación de condensación intersticial.

que aplicar el aislamiento por el exterior, lo que pue- deberemos cambiar la localización del conducto y
de hacerse puntualmente en dichos puentes. situarlo en otro lugar que permita las condiciones
b) Para disminuirla presión de vapor de agua ten- adecuadas.
dremos varios caminos. El más directo, el del aumento c) Fachadas ventiladas (cámaras de aire exterio-
de la ventilación, ya lo vimos en el punto anterior y res) (Fíg.20)
podemos seguir los mismos sistemas. Pero en este Si conseguímos disipar el vapor de agua que cru-
caso nos sirven también las barreras de vapor. En za el cerramiento antes de que alcance la temperatu-
efecto, podemos añadir por la cara interior del cerra- ra de rocío también conseguiremos evitar la conden-
miento una barrera de vapor que corta el paso del sación. Para ello existe una solución relativamente
mismo al interior y provoca, por tanto, un descenso antigua que consiste en introducir una cámara de ai-
de la temperatura de rocío, alejándose su gradiente re en el Interior del cerramiento, ventilada hacia el ex-
del de la temperatura del propio elemento. Dicha ba- terior, que disminuye la presión de vapor. Es una so-
rrera, no obstante, provoca una acumulación de va- lución bastante corriente en países húmedos que se
por de agua delante de ella que puede llegar a pro- conoce en Inglaterra con el nombre de cavity wall, es
ducir la condensación superficial. Por ello, antes de decir un doble muro con cámara interior; algo pareci-
aplicarla debemos estudiar bien los mencionados do al muro capuchino.
gradientes y conocer la permisividad al paso de va- En actuaciones de reparación podríamos añadir
por de agua de la barrera que vamos a poner. al muro afectado por la condensación intersticial una
La materialización de esa barrera se puede con- cámara de aire ventilada por el exterior, siempre que
seguir con cualquiera de los acabados impermeables dicha actuación fuera aceptable desde el punto de
interiores mencionados para la solución de la con- vista formal y constructivo. Si se admite cambiar su
densación superficial o podemos ir a aplacados más imagen podemos colocar por fuera una nueva hoja
permeables, pero con suficiente valor de barrera pa- separada que sea resistente a los agentes exteriores.
ra nuestros usos. En este sentido, el mercado ofrece Son útiles en este sentido los chapados de piedra ven-
algunos tipos de papeles y acabados plásticos o, in- tilados y los paneles de chapa metálica o de fibroce-
cluso, planchas de cartón yeso con laminados viníli- mento, todos los cuales pueden suplementarse con
cos que pueden cumplir bien su misión. un aislante previo aplicado sobre el muro antiguo.
Por último, cabe mencionar en este apartado el
caso de la condensación sobre tubería empotrada; De la Condensación higroscópica
en este caso, no habrá más remedio que rozar para Para eliminar este tipo de condensación habría que
alcanzar la tubería en cuestión, protegerla con co- deshacerse de las sales higroscópicas contenidas en
quina de espuma plástica o de fibra de vidrio, con el acabado del cerramiento en cuestión. Para ello po-
barrera de vapor exterior, y volver a tapar. Todo ello, dremos seguir dos métodos diferentes. El primero,
siempre que sea posible por el espesor del cerra- más drástico, consistirá en eliminar la capa de revo-
miento y el diámetro de la tubería. De lo contrario. co que aloja las sales a base de su demolición y sa-
•xoitix: Humedades y su tratamiento

neado. En cualquier caso, habría que comprobar que


no queda rastro de sales, para lo cual podremos pro-
vocar vapor de agua cerca del cerramiento y medir la
humedad en el paramento.
El segundo método es más complicado y debere-
mos utilizarlo cuando no podamos eliminar el acaba-
do afectado por algún motivo histórico o artístico.
Procederemos entonces a base de algún sistema con-
trolado de humedecer el revoco para disolver las sa-
CMAP»
les higroscópicas y absorber la humedad mediante •nucí
apositos o algún producto secante como arcillas, fiel-
tros, etc. FACHADAS VENTILADAS

En cualquier caso, antes de estas actuaciones de-


bemos asegurarnos que ya no van a aparecer más sa- 20. Cerramiento con cámara de aire ventilada.

les higroscópicas que puedan alojarse en su cerra-


miento provenientes de humedades de capilaridad o
de filtración, mediante la anulación previa de las mis-
mas.

Reparación del efecto


En los casos de la condensación superficial inte-
rior, si sólo actuamos sobre el incremento del aisla-
miento o sobre el aumento de ventilación y la super-
ficie interior era porosa, se habrán producido manchas
o desprendimientos que habrá que reparar mediante
reposición de los acabados, una vez que comprobe-
mos que el paramento se ha secado. Si actuamos so-
bre la superficie interior mediante la aplicación del aca- UNION RIGIDA COQUILLA

bado impermeable, dicha actuación constituye de por


Introducción de holgura para evitar sobretensiones
sí la reparación del efecto.
En los casos de condensación intersticial o su-
perficial sobre tuberías, una vez aplicadas las medi-
das correctoras indicadas, y asegurado el secado del
paramento, sobre todo en su cara exterior, habrá que
proceder a la eliminación de las manchas, o a la re-
posición del acabado erosionado o desprendido, al
igual que se ha indicado para lesiones de humedad
precedentes.
En los casos de condensación higroscópica, si he-
mos saneado el revoco que contenía las sales y una
vez seguros de que no quedan restos de las mismas,
podemos colocar un nuevo revoco según las necesi- UNION RIGIDA HOLGURA
EN TOOOS L O S SENTIDOS
dades funcionales. Si hemos diluido y extraido las sa-
2 1 . Reparación de humedades accidentales.
les, no será necesario ningún acabado especial ex-
cepto los propios de la decoración pictórica del
paramento.
conjunto de tuberías. No obstante y dada la variedad
de causas posibles, veamos cada caso particular, aun-
4.4 De la humedad accidental
que sea esquemáticamente.
Las actuaciones de reparación, en estos casos,
suelen ser muy puntuales, aunque en algunos, y da- A) Rotura por sobretensión (Fig. 21)
do que la causa afecta a toda la instalación, nos obli- Si los conductos no han sido colocados con la hol-
ga a una reparación integral con el cambio de todo el gura suficiente para su correcta dilatación y contrac-
Tema 4. humedades en fachada. Filtración y condensación

72

22. Protección mecánica de bajantes. 23. Protección de remate superior mediante chapa metálica.

ción, habrá que introducirla una vez cambiada la pie- cena, no hay más remedio que proceder a un cambio
za rota. Esta operación no resulta fácil ya que obliga integral de todos los conductos que están en la mis-
a dejar todo el conducto prácticamente visto para ro- ma situación (Los edificios con bajantes de fundición
dearlo de algún tipo de coquiila que le dé holgura con presentan un problema generalizado de corrosión y
respecto al cerramiento que lo sujeta. Caso más sen- rotura longitudinal de las mismas que obligan a su sus-
cillo será aquel en que el conducto está visto y suje- titución).
to con abrazaderas; bastará corregir éstas. En cual- Si el problema está en la aparición de un par gal-
quier caso, la introducción de holgura será fundamental vánico por su contacto con otro elemento metálico de
en el encuentro con elementos estructurales y en to- mayor potencial eléctrico, podemos tratar de introdu-
do tipo de quiebros y piezas de encuentro de varias cir un manguito aislante entre ambos elementos (nor-
líneas donde confluyen diferentes movimientos. malmente de materiales plásticos) para evitar el con-
tacto, lo que resulta una operación sencilla y necesaria
B) Rotura por acción mecánica en todos los puntos de contacto aunque no haya apa-
En este caso, la actuación es prácticamente la mis- recido la corrosión. Sin embargo, si el par galvánico
ma que en el anterior. Trata de evitar la acción direc- no ha aparecido por conducto directo sino por trans-
ta de los movimientos de la obra sobre el conducto, misión de los electrones a través del propio fluido en
lo que únicamente se logra mediante la independen- la dirección en que discurre, no tenemos más solu-
cia u holgura entre ambos elementos, tanto si el con- ción que cambiar la tubería afectada en toda su lon-
ducto está embutido como si es visto. gitud y sustituirla por otra que no sufra la afección,
En el caso de posibles acciones por el paso de sea ésta de otro metal o de material plástico.
personas o maquinaria, procederemos a una protec- Por último, si la corrosión aparece por la superfi-
ción mediante elementos rígidos. Si el conducto dis- cie exterior del conducto, como consecuencia de la
curre enterrado en el pavimento, protección de mor- acumulación de humedad, incluso con ataque de áci-
tero (no tan eficaz) o de tubos o semitubos de acero, dos, debemos proceder a la limpieza total de la su-
que a su vez, le dan independencia de movimientos. perficie y a la independencia de toda la tubería de di-
Si el conducto es exterior, protecciones metálicas dis- chos ataques mediante su protección con coquillas.
puestas en función de las posibles acciones mecáni- Si la humedad era de condensación, ya ha quedado
cas previsibles. (Fig. 22) mencionado. Si la humedad resulta aportada por ye-
so, además hay que retirar todos los restos del mis-
C) Corrosión mo. Si la humedad la aporta cualquier otro material
La reparación en este caso es algo más conflictiva poroso, incluso mortero de cemento (caso muy co-
y exige, en primer lugar, un estudio concreto de la cau- rriente, aunque haya una opinión generalizada en con-
sa de la corrosión. tra) aplicación de imprimación anticorrosiva y coqui-
Cuando se trata de un problema de constitución na de protección, que puede ser un simple tubo de
de la propia tubería, en función del líquido que alma- plástico.
capitulo I Humedades y su tratamiento

- Junta practicable bien resuelta con:


5. Medidas de prevención
• solape en número adecuado
De las técnicas de reparación vistas en el punto an- • cámara de descompresión
terior, podemos extraer las medidas de prevención • drenaje de dicha cámara
más adecuadas, en función del tipo de humedad y su • vierteaguas sobre la junta horizontal
localización, es decir, de la causa; veamos:
d) En los paños ciegos, hay que asegurar la im-
5.1 De las humedades de filtración permeabilidad de la superficie porosa en función de:
- nivel de exposición
Veamos los distintos puntos conflictivos (Fig. 14): - clima de la zona
- porosidad del material y su espesor (=6%)
a) En los remates superiores, colocación de pro- La impermeabilidad se podrá conseguir:
tección adecuada, preferentemente con albardilla de - Con un material constitutivo suficientemente com-
piezas metálicas, cerámicas o prefabricadas de hor- pacto (ladrillo visto por ejemplo).
migón, asegurando: - Con pinturas hidrófugas, de poro abierto.
- Impermeabilidad de las piezas o inclinación su- - Con revestimientos hidrófugos, como enfosca-
ficiente dos y revocos especiales.
- Vuelo suficiente de ambos frentes para evitar que - Con alicatados, chapados o aplacados.
el agua se filtre por el borde Resulta, cuanto menos, discutible la costumbre que
- Junta estanca entre piezas. Dicha junta puede han introducido algunos fabricantes de ladrillos de hi-
ser de tres tipos: drofugar éstos por inmersión en siloxanos antes de su
entrega. De hecho, con esta solución sólo se hidrófu-
• de mortero, con cierta separación entre piezas
ga la cara del ladrillo, pero no el mortero de tendeles
cuando éstas son pequeñas (peligrosa en zonas
y llagas ni las propias juntas constructivas entre la-
muy frías).
drillo y mortero que son las que facilitan realmente la
• de material elastómero, selladas, cuando se tra-
entrada del agua. Por otra parte, la hidrofugación de
te de piezas grandes.
las caras interiores del ladrillo no tiene, en principio,
• solapada, canalizando el agua que se pueda
ningún interés. Hay que pensar que para hidrofugar
colar.
una fachada hay que esperar a que esté estabilizado
su posible asentamiento constructivo y después apli-
También podemos recurrir a albardillas de chapa
car el hidrofugante por igual en toda su superficie.
metálica que reduce juntas (Fig. 23).
Además del remate final propiamente dicho y cuan-
5.2 De las humedades de microcapilaridad
do el nivel de exposición sea muy elevado, habrá que
cuidar la protección superficial del frente y trasdós de En estos casos, las medidas de prevención serán
los petos, lo que se puede lograr mediante resinas en- las mismas enumeradas en el apartado correspon-
durecedoras o simplemente senadoras, o con mate- diente de reparación, es decir (Fig. 15):
riales impermeables. - Inclinación suficiente en la plataforma hacia el
exterior, complementada con sellado elastómero.
b) En los relieves de fachada (molduras, balco- - Escalón de encuentro entre el cerramiento y pla-
nes, etc) debemos cuidar dos aspectos básicamen- taforma.
te. La estanquidad del ángulo diedro, normalmente - Solape hacia arriba de la membrana imper-
mediante sellado elastoplástico, y la impermeabili- meabilizante de la terraza protegida con rodapié de
dad e inclinación de todos los planos horizontales bajo coeficiente de absorción.
mediante chapas metálicas, piezas cerámicas, etc.
(Fig.15) 5.3 De las humedades de condensación

c) En los huecos de ventana, tenemos varios pun- En la prevención de este tipo de lesiones caben
tos conflictivos (Fig. 14 c): medidas relativamente fáciles a nivel de diseño y eje-
- Vierteaguas, que tendrá la inclinación adecua- cución que requieren, no obstante, un estudio con-
da, será impermeable, tendrá sellado su encuentro con cienzudo de los gradientes de temperatura, en fun-
ventana y jambas y volará lo suficiente con goterón ción de los materiales constitutivos del cerramiento,
- Dintel, que deberá disponer de goterón en su así como de las condiciones climáticas exteriores y
borde. las de confort interiores más probables, analizando
nades en fachada. Filtración v condensación

DELANTE DEL AISLANTE Y LAVABLE

24. Prevención de puentes térmicos en los frentes de forjado.

las situaciones más desfavorables. En cualquier ca- Por el contrario, si se trata de locales con alta pro-
so, veamos las consideraciones que debemos reali- ducción permanente de vapor de agua, lo mejor será
zar en cada uno de los tipos de condensaciones men- preparar la superficie interior de los cerramientos pa-
cionadas. ra la condensación sobre ellos, aunque con el aisla-
miento del punto anterior tratemos de disminuirla al
A) Superficial interior (Fig, 16) máximo. Para ello, usaremos cualquiera de las solu-
Si se trata de locales con una producción de vapor ciones vistas.
limitada (salas de estar, dormitorios, oficinas, etc.) don- En el caso de las ventanas, donde la condensa-
de lo normal es el uso de acabados superficiales po- ción superficial es prácticamente inevitable y además
rosos, debemos seguir el camino de evitar que se pro- se produce en cantidades importantes, hay que pre-
duzca la condensación elevando, en lo posible, la ver su recogida para evitar que afecte al resto de los
temperatura superficial interior "ti", tanto en el con- cerramientos. Para ello colocaremos carpintería con
junto del cerramiento (fachada o techo) como en los canaleta de recogida de aguas de condensación, cu-
posibles puentes térmicos, que deberemos evitar. Para ya misión es mantener el agua del lagrimeo hasta que
ello, estudiaremos la composición del cerramiento co- vuelva a evaporarse en el mismo ambiente. (Fig.18)
locando preferentemente el aislamiento hacia el exte-
rior y haciendo que éste sea pasante por delante de B) Intersticial
todos los elementos estructurales. (Fig. 24) En estos casos, las medidas van siempre encami-
En este sentido cabe mencionar que la antigua nadas a controlar las curvas de gradiente de tempera-
costumbre de colocar 1/2 pie de fábrica de ladrillo al tura y de rocío para evitar que no se crucen en ningún
exterior, trasdosada por el interior mediante una cá- punto. Para ello debemos jugar con la composición del
mara de aire, o una plancha aislante, con un tabique cerramiento, teniendo en cuenta clima exterior y am-
de hueco sencillo, debe ser abandonada, sobre todo biente interior en las condiciones más desfavorables.
en lugares frios. Como solución alternativa podemos Tampoco vamos a entrar aquí en los cálculos co-
ir al uso de 1/2 pie exterior de ladrillo perforado (vis- rrespondientes, que se pueden hallar en cualquier ma-
to o para revocar) y 1/2 pie interior de ladrillo hueco nual de diseño de confort, pero sí cabe mencionar al-
doble, con una plancha de aislante intermedia o, in- gunos de los aspectos más importantes, a saber.
cluso, con cámara de aire. (Ver Fig. 19).
En este caso, la hoja interior puede ir enrasada por - El aislamiento debe estar colocado hacia el ex-
su cara externa con el plano más saliente de la es- terior y ser continuo en toda la superficie del cerra-
tructura, de tal manera que la plancha aislante o la cá- miento, pasando por delante de la estructura, para
mara de aire, pueda ser pasante sobre ésta en toda evitar puentes térmicos.(Fig. 24)
la fachada. Asimismo, el 1/2 pie exterior será pasan- - Si es necesario colocar barrera de vapor, ésta
te y continuo, manteniendo el mismo espesor en to- deberá estar hacia el interior y tratar de darle también
da la superficie y buscando un sistema de apoyo re- continuidad.
gular, según se indica en el capítulo de grietas. Todo - Si deiamos cámaras de aire intermedias donde
ello se calculará teniendo en cuenta, además, el nivel se pueda producir la condensación, deben estar pre-
de ventilación permanente del local según las normas ferentemente ventiladas y disponer de un sistema de
de condiciones térmicas. drenaje del agua que se produzca hacia el exterior. De
capitulo i Humedades y su tratamiento

25. Caso especial de condensación intersticial.

hecho, ese tipo de fachadas con cámara, que se han practica. Unas pocas medidas sirven para evitar los
dado en llamar fachadas ventiladas, es la solución con- dos tipos de causas que son el origen de las lesiones;
ceptualmente más lógica para cerramientos de loca- las mecánicas, debidas a acciones exteriores o es-
les donde se produce vapor de agua. En efecto, des- fuerzos propios, y las químicas que acaban en la co-
de el punto de vista del vapor que atraviesa el rrosión de los conductos. Veamos los dos tipos.
cerramiento, lo lógico es una composición con poros
mayores a medida que nos acercamos al exterior pa- 5.4.1 Prevención de causas mecánicas
ra evitar cualquier concentración de vapor peligrosa. Tanto si se trata de posibles acciones exteriores
Por el contrario, desde el punto de vista del agua de debidas a los movimientos de los elementos cons-
lluvia, necesitamos poros más cerrados cuanto más tructivos adyacentes, como si hablamos de los movi-
al exterior. Ambas exigencias son contrapuestas. Sin mientos de dilatación y contracción del propio tubo,
embargo, la solución de cámara exterior tras una ba- la solución está en introducir una holgura suficiente
rrera del agua de lluvia nos da una buena respuesta a entre el tubo y la sujección. Si ésta es continua (em-
las dos. En efecto, la lluvia la interceptamos con la ho- potrada en un cerramiento) la holgura la obtendremos
ja exterior (chapa metálica o fibrocemento, chapado mediante una coquilla continua de espuma plástica
de piedra, etc..) mientras que el vapor de agua se di- (normalmente PVC) o de fibra de vidrio, o, incluso, rí-
sipa en la cámara exterior y no se produce conden- gida, que permite, por una parte, libre dilatación-con-
sación intersticial, y si ésta se provoca, la cámara la tracción y, por otra, no incidencia del movimiento del
va ventilando y no se ve la mancha desde el exterior cerramiento. (Fig. 26).
(ver fig. 20).
Si la sujección es puntual, la coquilla se limita a ese
Cabe mencionar un error aparecido en algunas pu-
punto, bien sea una abrazadera, bien un elemento es-
blicaciones donde figura una membrana impermea-
tructural (forjado, por ejemplo). En este útlimo caso se
ble en la base de las cámaras de aire con aislante den-
puede recurrir a pasatubos colocados en el momento
tro y sin ningún tipo de ventilación o salida al exterior.
de hormigonar dicho elemento, consistentes en tube-
En estos casos, si se produce condensación, apare-
rías de PVC o metálicas de diámetro mayor (Fig. 27).
cen dos problemas.
Cuando las tuberías en peligro son vistas y están
- Se humedece el aislante, que pierde sus pro- al alcance de posibles impactos por el paso de per-
piedades aislantes. sonas o vehículos, hay que recurrir a una protección,
- Se empapa la base del cerramiento donde se lo que se realiza de un modo continuo si está en el
sitúa esta lámina. suelo (preferentemente tubos metálicos de mayor
Por ello, sólo será recomendable introducir dicha diámetro) o puntual si están en las paredes. En este
membrana si existe realmente esta cámara de aire y caso, se puede reducir a una protección en las partes
podemos drenarla hacia el exterior. De lo contrario bajas, mediante tubo también continuo de acero, o
acaba siendo un foco de humedad (Fig. 25). hierro de fundición, de diámetro mayor, o por medio
de rejas de variado diseño (Fig. 22).
5.4 De humedades accidentales
Prevención de causas químicas
La prevención, en este tipo de humedades, es una Debemos considerar dos tipos de casos, que la agre-
de las más claras y sencillas aunque no siempre se sión sea exterior, o que ésta venga desde el interior
Tema 4. Humedades en fachada. Filtración y condensación

76

26. Coquillas para la protección de tuberías empotra- 27. Pasatubos en fojado.


das.

Para prevenir la exterior deberemos proteger to- Bibliografía


dos los tramos de los tubos contra la corrosión me-
diante los productos adecuados, incluso si el tubo va "Conservación y Restauración de Monumentos". MANUEL CARBO-
a estar embebido en mortero de cemento. Es corriente NELL DE MASY, Barcelona, 1993.
"Curso de Patología, Conseivación y Restauración de Edificios" (to-
que el instalador piense que en este caso no va a lle-
mos 1, 2, 3y4). COAM, 19-93-1996.
gar la corrosión desde afuera, lo cual es un error. En
"Curso de rehabilitación" (10 tomos) COAM, 1987.
cualquier caso, hemos indicado en el punto anterior H. J . ELDRIGE, "Defectos comunes", Ed. G. G., 1982.
la necesidad de holgura continua, lo que significa que T. STAMBOLOV Y J . R. J . VAN ASPEREN DE BOER. "El deterioro y
este caso no debe aparecer nunca. la conservación de materiales porosos de construcción en monu-
Además de esta protección directa sobre el tubo, mentos", U. N. A. M., 1984.
puede ser conveniente una coquilla continua, sea de F. JAVIER LEON VALLEJO. "Ensuciamiento de fachadas por conta-
espuma o no (macarrones para conductos eléctricos) minación atmosférica. Análisis y prevención". Universidad de Valladolid,
para evitar posibles contactos con el yeso cuando 1990.

puede estar próximo ese material. También hay que SCHILD, OSWALD, ROGIER, SCHWEIKERT, "Estanquidad e imper-
meabilización en la edificación' (5 tomos), E.T.A., 1978.
evitar el contacto directo del tubo con las abrazade-
LYALL ADDLESON. "Fallos en los edificios", Conseio General de
ras, cuando éstas sean metálicas y de otro potencial,
Aparejadores y Arq. Técnicos 1982.
entonces, colocaremos aislantes entre los dos ele- FEDERICO ULSAMER, "Las humedades en la Construcción". CEAC,
mentos que introducen, a la vez, holgura. 1979.
Para prevenir la corrosión interior debida al fluido R. T. GRATWICK "Las humedades en la construcción. Sus causas y
o a los posibles pares galvánicos, debemos analizar, remedios". E. T A . , 1976.
en primer lugar, la posible acción química entre el lí- "Lesiones en los edificios: síntomas, causas, reparación" (2 tomos),
quido y el tubo para asegurar su ausencia. A conti- CEAC. 1981.
nuación, intentaremos que no exista ningún contacto "Patología de la Construcción. Humedades en la edificación". FRAN-
CISCO ORTEGA ANDRADE. Editan, S. A., 1989.
entre metales de distinto potencial, introduciendo man-
FRIEDRICH EICHLER. -Patología de la Construcción". Ed. 8iumne.
guitos aislantes entre ellos, cuando esos contactos
1977.
son inevitables.
"Patología de cerramientos y acabados arquitectónicos". JUAN MON-
Un caso más complejo es aquel en el que el par JO CARRIÓ, Ed. Munilla-Leria, 1994.
galvánico no aparece por contacto directo, sino a tra- ETSA Valladolid. Dep de Construcción. "Patología de fachadas ur-
vés del propio fluido y en función del movimiento de banas", Universidad de Valladolid, 1987.
éste. Ello nos obligará a estudios químicos previos A. BAGTIONIY G. GUARNEIRO "La rehabilitación de edificios urba-
que nos permitan evitar el uso de esos metales y, por nos", Ed, G. G. 1988
tanto, la aparición del par corrosivo.
capitulo i Humedades y su tratamiento

5 . Técnicas y ejemplos de hidrofugación en superficie

Manuel Carbonell De Masy


Licenciado en Ciencias Químicas

1. Introducción visibles el que se inicie el desprendimiento del


revestimiento aplicado. Y es que no basta con impedir
Una vez se ha limpiado y saneado una fachada, que el agua penetre por la fachada, hay que evitar
ésta, además de posibles pérdidas de volumen en sus también que lo pueda hacer por detrás del revestimiento
materiales, presenta una mayor porosidad en su o se forme como resultado de la condensación del
superficie y al propio tiempo continúan las mismas vapor de agua.
condiciones ambientales que la han alterado en mayor Hoy día, y gracias a estos nuevos productos,
o menor cuantía. cuando son bien aplicados, es posible lograr una
Ante esta situación se plantea la necesidad de una mayor calidad y durabilidad en los trabajos de
intervención, que tanto puede ser para reparar los restauración de fachadas antiguas pero para ello es
daños que el tiempo ha ocasionado (Restauración), necesario, que previamente a los trabajos de limpieza,
como para prevenir que no vuelvan a reproducirse en se realice un diagnóstico, y esto es tanto más
el futuro y recuperar, si es que ios hubiera, los colores necesario cuanto mayor sea el valor histórico-artístico
aplicados en origen (Conservación). del material a tratar y mayor porosidad presenten sus
Todos los materiales minerales de una edificación materiales.
antigua (piedra, ladrillo, revoco, ...etc) tienen dos cosas Los problemas que pueden surgir en la rehabilitación
en común: ser porosos y mojarse con agua, o sea, ser de una fachada antigua debido a la poca permeabilidad,
hidrófilos. La mayor o menor porosidad de un material al vapor de agua del tratamiento, junto con la confusión
es la propiedad que va a condicionar la mayor o menor que crean los que limitan ese tratamiento a dos
absorción del principal enemigo de los materiales de posiciones extremas, según dejen y no dejen respirar,
construcción: El agua. es lo que justifica que se plantee esta cuestión al inicio
En la conservación de una fachada antigua es de esta exposición.
fundamental evitar infiltraciones de agua de lluvia Cuando a mediados de los 50 se inicia en España
(hidrofugación), pero además puede ser necesario la fabricación de los polímeros sintéticos en dispersión
tratar algunos materiales para que recuperen la dureza acuosa, que son la base de las denominadas pinturas
primitiva (consolidación) y/o que a la fachada se le plásticas, el uso de estas dispersiones se extiende
dé un determinado color (decoración). también en fachadas siendo uno de sus objetivos evitar
Todo ello es posible y en breve periodo de tiempo, la entrada de agua de lluvia. Aunque ello generalmente
con los nuevos productos que la química ha se ha cumplido, también se ha podido ver transcurrido
desarrollado en las últimas décadas para su empleo un tiempo, que en bastantes fachadas, cuyo soporte
en las tareas de conservación. No obstante, hay que era muy poroso, el tratamiento a base de estos
reconocer que, a veces, el mal uso que se ha hecho polímeros en dispersión se desprendía en forma de
de estos productos ha ocasionado que aparezcan película. Ante esta realidad, y con el fin de evitar este
prematuramente defectos, siendo uno de los más nesgo, es por lo que cada vez hay una mayor
Tema 5. Técnicas yejemplos de hidrotugaaón en superficie

concienciación, y sobre todo en fachadas antiguas,


de la necesidad de los tratamientos previos de
impregnación. Estos, tanto pueden servir para conferir
propiedades hidrófugas al soporte como para que sea
consolidado y de ahí que informemos tanto de los
productos de recubrimiento como de los de
impregnación. Finalmente se explican brevemente
algunos de los ensayos que se utilizan para poder
controlar el grado de deterioro de un material y la
eficacia de los posibles tratamientos.

2. Permeabilidad al vapor de agua

La.permeabilidad al vapor de agua y los riesgos de


condensación o de retención de humedad en los
capilares de un muro por no respirar éste bien, es una
cuestión con frecuencia muy polémica que conviene
aclarar y estar en disposición de poder evaluar las
posibilidades de que surjan dichos riesgos en una
fachada antigua.
Para ello partimos de tres conceptos que conviene
recordar. E L V A T O » Mi£ CON OISICULTAD

El agua puede estar en forma líquida y como gas


(vapor). La relación entre el contenido de agua en el
aire y el que tendría sí estuviera saturado, es lo que
se define por humedad relativa (HR). La condensación 1. La protección frena la respiración.

de agua se puede alcanzar bien por un incremento de


vapor a temperatura constante, o por un descenso de Cada material tiene su propia PVA, que se mide
temperatura para un mismo contenido de agua en el con el ensayo indicado en 6.3. A su vez, a un mismo
aire. Todo ello se puede ver en un diagrama de aire material se le puede modificar su PVA, si se le aplica
húmedo o abaco psicométrico. un tratamiento en su superficie. Si éste es para
Todo material poroso en estado seco, contiene protegerlo del agua, le va a reducir su permeabilidad
siempre algo de agua, que está en equilibrio con la como consecuencia de su menor PVA (Fig. 1).
HR del aire que le rodea. Ese agua se ha formado por La tendencia moderna es hablar de la resistencia
una adsorción del vapor de agua en los capilares más a la difusión de vapor de cada material, a través del
estrechos. Si la HR es del 60% sería muy baja la factor u. Este indica para un mismo espesor, cuantas
minicondensación, ya que- en un ladrillo el contenido veces es más grande la resistencia a la difusión del
de agua sería del orden del 0,7%. Para humedades vapor u otro gas en relación al aire. En la figura 2, se
del 95%, la superficie del ladrillo incrementaría en diez expone gráficamente la resistencia que opondría a la
veces su contenido en agua pero seguiría conside- difusión del vapor de agua, un.material de un ¡.i de 100
rándose seca. Es a partir del agua que supere a la que y el aire cuyo u es 1. Multiplicando el \i de un material
le corresponde en equilibrio con la HR del aire, cuando por su espesor (E) en m, obtendríamos en metros el
el material, en este caso el ladrillo, se considera húmedo. espesor equivalente de aire (Ea).
El vapor de agua en el aire ejerce una presión,
denominada presión Darcial de vapor de agua en el
aire. Cuando se ponen en comunicación dos masas Ea = u.E
de aire que tienen diferentes presiones, a través de un
muro, el vapor del aire se difunde desde donde hay En la tabla 1 se indica de forma aproximada la
más presión. La velocidad de difusión depende de la porosidad abierta (PA) y el coeficiente u para el vapor
diferencia de presiones de vapor de agua y del ancho de agua que tendrían diversos materiales para muros
del muro así como de la permeabilidad al vapor de y tanto de los que se utilizan para su construcción
agua (PVA) que tenga ese muro. como para su protección. En dicha tabla puede
capilbio'. Humedades y su tratamiento

Ante esta difícil situación, hay que buscar soluciones 79


racionales, en las que se tengan en cuenta las
condiciones higrotérmicas existentes y huir de
situaciones extremas.
Si el soporte sobre el cual hay que dar un
tratamiento, es poco poroso como por ejemplo una
piedra granítica, es mínimo el riesgo de retención de
agua o condensación, por aplicarle una película de un
barniz o pintura. Los problemas de un mayor deterioro,
surgen cuando sobre un material muy absorbente,
Y Í S K I M T O R M W S I S T Í NCI» * LA D I 1 U 5 I C * D I « V M f , TOBO» LOS l-VAW «1»
LSS.INCUiSOL05PO<CoSOS.OrReC£fl « A V O T O M l N O t M S f T i N O A A LA D>-
como se ve en la figura 3, se aplica un tratamiento de
' - ) > Dfi . ioo4lcifiM«S _.l I L ' 8 ' muy baja permeabilidad al vapor de agua o con alto
u. Aún más grave sería, si el material está disgregado
superficialmente.
E Cada material y de acuerdo con el diagnóstico que
se tenga del mismo y de su entorno requerirá un
tratamiento, cuyo buen comportamiento ha de haber
sido comprobado previamente en laboratorio, según
los ensayos indicados en 1.
- Obviamente evitar que entre agua, tanto
procedente de lluvia como de ascenso capilar. Si hay
poca agua, hay también poca cantidad de vapor y ésta
circula muy bien. (¡Cuantos menos coches hay en las
POf? U KUKO ^' PASA.iH IGUALDAD D I T E M P O V O í EXPBSOC
-

10O V K t S " » S V A » l l OUE RX.tl.~A: carreteras, mejor se circula!).


.A
- Evitar retenciones en la difusión de vapor de
agua, que provoquen situaciones de saturación y
2. La resistencia a la difusión de vapor
especialmente cuando las temperaturas estén por
debajo de 0°C, pues las heladas podrían destruir los
observarse que a mayor porosidad (P.A), menor es la capilares de la piedra (Fig. 1). (Siguiendo con el símil
resistencia a la difusión del vapor de agua (n). del tráfico circulatorio, habría que evitar retenciones
que puedan provocar situaciones de colapso y sobre
Tabla 1: o
todo si las temperaturas están por debajo de 0 , y hay
Porosidad abierta (P.A.) y u. de difusión al vapor de agua frenazos bruscos.
(H 0) 2 Para que el revestimiento de una fachada permita
una buena respiración del vapor de agua, es necesario
P.A. u- (H 0)
2 que su espesor equivalente de aire (Ea) sea menor de
Mortero de cal 10 4m. Como ejemplo hemos considerado el de una
Mortero de cemento 20 20 película de 100 mieras de un barniz acrílico aplicada
Piedra caliza 15 25 sobre un revoco de 30mm de mortero de cemento y
Piedra granítica 3 400 con los datos de la tabla 1, se puede confirmar su
Barniz acrílico en dispersión compatibilidad y que ambos Ea sean inferiores a 4m.

-
acuosa al 25 % de sólidos 3000
Ea mort. cem.= 0.03m x 20= 0.60m
El ideal en un muro exterior de un edificio, es que Ea bar. acri. = 0.0001 Om x 3000= 0.30m
se cumpla algo que parece la cuadratura del circulo y
que consiste por una parte, en que a medida que las
diversas capas se acercan al exterior sean más porosas,
3. Impregnación hidrófuga
garantizándose que no puedan producirse conden-
saciones, y por otra, que la capa exterior sea la menos Su finalidad es transformar las propiedades hidrófilas
absorbente, o sea la menos porosa, para evitar la de los materiales minerales en hidrófugas y a la máxima
entrada de agua de lluvia. Al propio tiempo esta capa profundidad. El poder hidrófugo será tanto mayor,
tiene que tener otras propiedades, como por ejemplo cuanto mayor sea el ángulo de contacto que forma
una buena resistencia a la abrasión una gota de agua sobre la superficie hidrofugada.
Tema á. Técnicas y ejemplos de hidmfugaoon en superficie

En la actualidad los productos más utilizados para


modificar la tensión superficial de los materiales de
construcción, pertenecen a la familia de las siliconas,
y concretamente los siloxanos, diluidos en disolvente
hasta unos contenidos sólidos entre el 4 y el 8%. Una
vez evaporado el disolvente, terminan de polimerizar
con la humedad transformándose en polisiloxanos,
que producen ei efecto de perleo representado en la
lámina adjunta. Con la hidrofugación con siloxanos
prácticamente no se modifica el aspecto de la fachada
y su permeabilidad al vapor de agua y este último se
puede ver gráficamente en la figura 3. Sobre dicha
impregnación se adhiere, y más aún en los primeros
días, un tratamiento en color o incoloro a base de
polímeros en dispersión acuosa.
Las diversas marcas comerciales de hidrofugantes
para la construcción a base de siloxanos, se diferencian tic.3
fundamentalmente en su contenido sólido. En los COdTRATAMIENTO P E R M E A B L E AL VAPOR
últimos años han aparecido en el mercado, siloxanos WO ENTRA M U A . % 1 SALE VAPOR.

en fase acuosa pero su proceso de polimerización es


más lento y requieren también un soporte seco.
Para que la hidrofugación sea eficaz a largo plazo,
es necesario, que a igualdad de concentración en
siloxanos, se alcance la profundidad adecuada. Si se
aplica sólo superficialmente, o sea con rendimientos
L
inferiores a 200 gr/m ', la erosión por el viento junto
con la intemperie, afectaría en poco tiempo a su poder 3. Hidrofugación del muro.
hidrófugo. De ahí la importancia de realizar una muestra
en la fachada a hidrofugar determinando su consumo en sólido o tenga que recurrirse a un sistema de
y, transcurrida una semana, efectuar un corte en el
impregnación especial. Ello se comprende observando
soporte tratado y con una gota de agua observar la
los dibujos de la figura 4. Hay que reducir la concavidad
profundidad de la impregnación.
del perfil de dureza, pero llegando hasta el material
Para lograr una buena penetración, el soporte menos disgregado. Si ello no fuera posible habría que
mineral ha de estar bien seco. El tratamiento se inicia eliminar la zona más disgregada, y poder con menos
por la parte inferior del muro, saturando durante un penetración alcanzar la zona sana.
tiempo húmedo sobre húmedo pero sin que escurra. INunca crear costras consolidando!
La eficacia de una buena hidrofugación con En cuanto a posibles problemas que pudiera causar
siloxanos, de una piedra calcárea, se reduce a los 7 la reducción de la permeabilidad, se pueden conocer
años en un 20% y a los 15 años en un 50%-. realizando los ensayos indicados en 1.5.6, en una
muestra de la piedra a tratar. Tanto por experiencia
propia como por información de otros autores, una
4. Impregnación consolidante o selladora
reducción de la permeabilidad de hasta un 50%, no
En ocasiones, no basta con una impregnación es causa de condensaciones que puedan afectar de
hidrófuga de una materia mineral para aumentar forma significativa a la solidez de la piedra y menos si
o

su durabilidad. Es necesario que además se reduzca la temperatura ambiental supera los 0 . (Hay que tener
el exceso de porosidad que ha creado la acción del en cuenta, que una piedra deteriorada superficialmente,
tiempo y que se manifiesta en una menor dureza tiene una porosidad ya mucho mayor que la piedra
superficial. sana, por lo que la reducción de porosidad hasta
En la consolidación de una materia mineral, como igualarla con la de la piedra sana no va a modificar su
pudiera ser una piedra, que se ha transformado en capacidad respiratoria).
muy porosa, lo importante es que la penetración del Los diversos productos empleados para consolidar
consolidante llegue hasta la parte sana. No importa si un soporte muy poroso se clasifican por su composición
ello significa que haya que rebajar aún más su contenido en tres grupos.
1
capítulo Humedades y su tratamiento

b) Orgánicos 81
Todos los consolidantes orgánicos muestran al
propio tiempo propiedades hidrófugas y esta es una
gran ventaja que tienen sobre los inorgánicos.
¡•f'b P O S O I A V c f e T í i s 3 t CMtfM -<t-
Los de mayor penetración son los que se presentan
COaHt •KO^Ca.g (CP, Hj C« t
diluidos en disolvente orgánico y corresponde a
soluciones de polímeros termoplásticos bien vinílicos
o acrílicos. Estos últimos, presentan muy buena
W » . OS B ' j V t Z A
resistencia a la radiación ultravioleta y de ahí su empleo
Flgur» I para acabados transparentes al exterior. El proceso
f OESI*;A« ' " < c l de secado y por tanto de adhesión de los constituyentes
del material es físico y por tanto, se puede acelerar o
retrasar graduando el proceso de evaporación.
ATMOSFERA iNCiSsiAi-ueBANA
Los orgánicos también se presentan en dispersión
acuosa. Estas dispersiones son la base de las
denominadas pinturas plásticas en la que el tamaño
del polímero suele ser del orden de 0,15 mieras y
aunque esas dispersiones se apliquen muy diluidas
SO,H,.COiCo-» S O . C a - - H 0 - C O j
en agua, poca penetración alcazan. En estos últimos
1

años se han desarrollado unas emulsiones coloidales


con un tamaño medio de 0,05 mieras que abren un
campo muy prometedor para consolidar materiales,
sin necesidad de tener que respirar disolvente y con
la posibilidad de consolidar, aunque todavía queden
4. El mal de la piedra caliza. Solubilización y recristalización en restos de humedad, después de una limpieza acuosa.
superficie. La profundidad a alcanzar dependerá del diámetro
menor de los capilares y fácilmente se puede controlar
haciendo un ensayo previo en la propia obra.
a) Inorgánicos La consolidación con una emulsión coloidal tiene
Son los más antiguos y hay que aplicarlos muy también la ventaja de su reversibilidad, al poderse
diluidos en agua para que puedan penetrar eliminar por medio de disolventes especiales y junto
suficientemente en el interior, y en varias capas. con ello fas posibles pintadas que hubiera recibido.
Naturalmente el tamaño de la partícula a introducir ha Dentro de los productos fumógenos, los polímeros
de ser menor que la parte más estrecha del capilar por en dispersión o en emulsión, presentan, a igualdad de
donde ha de pasar. En el caso de la cal hay que tener espesor, menor resistencia a la transmisión del vapor
en cuenta que su tamaño siempre será superior a dos de agua que los polímeros en solución.
mieras y que aún muy diluidos en agua no llegan a
penetrar 1 mm, debido a su baja humectación. c) Esteres de silicato de etilo
Otro consolidante inorgánico muy empleado y de Tienen la ventaja de los orgánicos, en que por estar
menor tamaño es el silicato potásico. Endurece tanto disueltos en disolvente orgánico, penetran más, y la
en contacto con el aire como reaccionando con de los inorgánicos, por que al finalizar su proceso de
soportes calizos. endurecimiento alteran poco la respiración del material
Con el C 0 del aire, reacciona para formar un gel
2
tratado. El endurecimiento finaliza con la precipitación
de sílice y liberar el carbonato potásico, una sal soluble de sílice, pero en vez de formarse una sal soluble como
en agua. en los silicatos, se desprende alcohol.
Con el soporte calizo reacciona formándose silicato
calcico y liberándose también del carbonato calcico. Si(OC H ) + 4 H 0 = Si(OH) + 4C H OH
2 5 4 2 4 2 5

La sílice gelatinosa se transforma con el tiempo en alcohol


un material silíceo (Si 0 ) , que rellena los poros y el
2

carbonato potásico, como sólo cristaliza por debajo Si(OH) = S i 0 + 2 H 0


4 2 2

de un 40% de HR. es difícil que aparezcan manchas


blancas y al ser soluble en agua, con el tiempo lo Frente a estas propiedades, que se acercan a las
elimina el agua de lluvia. ideales, hay otras que limitan su aplicación. En primer
Tema 5 Técnicas y ejemplos de hidrofugación en superficie

lugar el lento proceso de endurecimiento y tanto mayor si hay que reponer con piedra artificial o hay restos de
cuanto más profunda sea la consolidación que se antiguas reparaciones con mortero, se van a
desea alcanzar, ya que tiene que reaccionar con agua manifestar unos contrastes que pueden afectar a su
para formar gel de sílice. El segundo inconveniente, estética. Es en estas situaciones, cuando puede
es el que carezcan de propiedades hidrófugas por lo convenir pigmentar ligeramente el tratamiento
que si así se requiere van transcurridos como mínimo transparente final y de esa forma suavizar esos
15 días, deberá aplicarse una solución de siloxanos. contrastes. Como aglutinante se pueden emplear
Por último, otra de las causas que limita la aplicación polímeros acrílicos en solución o en dispersión. Con
de estos consolidantes a trabajos de valor histórico y relación a estos tratamientos hay que destacar su
artístico, es su elevado precio y consumo. reversibilidad mediante limpieza con ciertos
disolventes que, aparte de el interés que pueda tener
por si algún día interesara su eliminación, facilita
5. Recubrimientos actuaciones antigraffiti sin dañar al soporte.

Según el diccionario de la Real Academia Española,


5.2 Ladrillo
recubrir es volver a cubrir y en lo que se refiere a la
materia mineral de una fachada, con la palabra En una manipostería antigua de ladrillo, el deterioro
recubrimiento se entiende tanto a la capa que se aplica generalmente se inicia por las juntas, que en origen
después de haberle aplicado una imprimación estaban rellenas de mortero de cal. A través de los
hidrofugante o consolidante como la última capa restos de mortero no sólo puede entrar agua, que
superficial. causa manchas de humedad en el interior de la
La necesidad de un recubrimiento y las propiedades edificación, sino que también se puede destruir el
que debe tener el mismo, dependen de las carac- ladrillo y sobre todo si hay retención de humedad en
terísticas del material a tratar y de ahí que informemos época de heladas. En estos casos, lo primero que hay
sobre ellos según la clase del material a tratar. que hacer es renovar el relleno como mínimo en los
primeros tres centímetros y con un mortero hidráulico
5.1 Piedra aditivado que impida retracciones durante su
endurecimiento.
Generalmente los tratamientos sobre la piedra
finalizan después de haber sido consolidada o En mampostería de ladrillos, levantadas con mortero
hidrofugada. Hay sin embargo situaciones en que se de cemento o mixtos de cemento y cal, los problemas
hace necesario un tratamiento posterior. de entrada de agua son debidos generalmente a
Un caso puede ser cuando las esculturas de piedra figuraciones en el propio mortero o a su encuentro con
están tan dañadas en toda la superficie que, para el ladrillo.
salvarlas y para que puedan continuar expuestas a - Si la abertura de las fisuras es inferior a 0,3 mm,
la intemperie deba aplicarse un recubrimiento, con una buena impregnación hidrófuga con siloxanos sobre
el espesor mínimo pero suficiente para rellenar todas la mampostería bien seca impediría la entrada de agua.
las fisuras y poros muy abiertos, ya que de no hacerlo, - Si la abertura es mayor, sin superar los 0,5 mm,
volverían a reproducirse los daños a medio plazo. la mejor solución es aplicar un barniz a base de una
Este recubrimiento debe estar basado en aglutinantes dispersión acrílica en dos capas y procurando que la
inorgánicos- como cal hidráulica- modificados con formulación de la segunda capa no presente pegajo-
polímeros en dispersión, para mejorar la adherencia sidad expuesta al sol para así evitar su ensuciamiento
y resistencia al agua. Otras veces se emplea un prematuro.
mortero de restauración para la piedra, diluido con Ladrillos muy erosionados se pueden salvar
la dispersión polimérica. El recubrimiento se aplica consolidándolos con esteres de silicato de etilo (c).
a espátula y al día siguiente se lijan los excesos de
espesor y las marcas de la espátula y se mantiene 5.3 Revocos de cal y estucos
húmedo durante unos días para asegurarse de su
buen endurecimiento. La eievada capacidad de absorción de agua de
Otro caso muy frecuente está relacionado con los estos revestimientos obliga a extremar precauciones
grandes contrastes de claroscuros, que aparecen en para evitar que se produzcan retenciones de humedad
una fachada de piedra antes de una limpieza, y que que afecten a su solidez.
pueden no haber sido suficientemente eliminados En eí caso de estucos esgrafiados, que hay que
cuando ésta ha finalizado. A esto hay que sumar, que renovar debido a su mal estado, antes de su eliminación.
capitulo \. Humedades y su tratamiento

hay que estampar a papel, mediante la técnica del la importancia que tiene la elección de muestras del
estarcido, los dibujos del esgrafiado existente. soporte y el significado de las diversas pruebas, en
Si el deterioro en el revoco de cal es sólo superficial, las que para cada una de ellas, se puede comparar el
habrá que tener cuidado con el sistema de limpieza comportamiento del material a tratar, según esté sin
recomendándose que sea en seco, y sobre todo, en alterar, alterado o después de recibir un tratamiento
aquellas zonas de la fachada que son las menos hidrofugante o consolidante.
soleadas. Dado que lo más probable es que quede
algo de suciedad, no se puede pensar en una solución 6.1 Porosidad abierta (% PA)
hidrófuga transparente, como podria ser un tratamiento
con siloxanos, y es necesario aplicar pinturas que le Es la relación entre el volumen de poros accesibles
den color y éstas deberían ser minerales, para evitar al agua y el volumen aparente de la probeta expresado
el riesgo de que se produzcan retenciones de humedad. en tanto por ciento.
Las pinturas minerales que actualmente se están Para su valoración se requiere realizar tres pesadas
aplicando sobre antiguos morteros de cal están en cada muestra.
modificadas con polímeros para mejorar su adherencia - Enseco: Después de haber estado en una estufa
e impermeabilidad. a 105 °C.
Las de mayor calidad están basadas en silicato - Saturado de agua: Después de haber estado
potásico y el contenido sólido del polímero sobre el sumergido 24 horas en agua y ser secada con paño
total de pintura es del orden del 5%. Son también las la superficie de la muestra.
que exigen mayor especialízación para su aplicación, - Sumergida en agua (pesada hidrostática).
ya que la adherencia sólo se logra por reacción química
del silicato con el carbonato calcico existente en el 6.2 Presencia y movimiento de agua
soporte, es necesario que esté seco y limpio, y por
2 0 5
tanto éste ha de estar limpio y seco. En soportes muy Absorción de agua por capilaridad (grs/(cm s ' )
absorbentes hay que tener la precaución de aplicar Mide la cantidad de agua absorbida en un cierto
previamente una imprimación a base de silicato sin tiempo por una superficie de una muestra prismática
pigmentar, ya que si se aplicara directamente la pintura, de un material que está inicialmente seco, en contacto
parte del silicato quedaría absorbido por el soporte y con una superficie de agua.
la pintura sería menos resistente al frote húmedo. El coeficiente de capilaridad "C", está definido por
la expresión
La otra posible pintura mineral, estaría basada
en la cal hidratada, bien en forma de polvo o le-
chada, modificándola con polímeros. Si se prepara en C » m / Yt
obra a partir de la pasta de cal, habría que añadir un m = cantidad de agua absorbida (grs/cm ) 2

15% de una dispersión polimérica al 50% de contenido t = tiempo en segundos (s)


sólido.
Aparte de las pinturas minerales indicadas, se ha Permeabilidad al agua de lluvia. (cmVt)
de reconocer que existen muchas fachadas con Mide la cantidad de agua absorbida a presión por
estucos, concretamente en Barcelona, que han sido la superficie de un material, después de un tiempo
protegidas y decoradas con pinturas plásticas mates determinado.
y se conservan en buen estado. Esto es posible en Se diferencia del ensayo anterior en la presión a
estucos de cal del orden de 1 cm de espesor que han que está sometido el agua. Ello se logra acoplando
sido bien aplicados, están exentos de sales solubles, mediante una pasta adhesiva una pipeta de vidrio
y situados en climas de temperaturas moderadas. De graduada. (Fig.5)
todas formas la permeabilidad al vapor de agua de Se llena de agua hasta una altura de 10 cms.; y
estas pinturas es siempre menor que las minerales. después a intervalos de 5, 10 y 15 minutos, se mide
el nivel de agua descendido y se va rellenando para
que al iniciar cada medida se mantengan los 10 cms.
Esta altura equivale a la presión que se produciría
6. Control de los tratamientos
cuando el agua está sometida a un viento con una
En los siguientes apartados se indican los ensayos velocidad de 143 Km/hora.
de más interés para tomar decisiones sobre los Este ensayo se puede realizar con facilidad
tratamientos a llevar a cabo muchos de los cuales en la propia obra, por lo que además de controlar la
están recomendados por RILEfvT. Hemos de destacar eficacia del tratamiento protector a las 24 horas de su
T
ema 5 Técnicas yejemplos de bidrorugaciori en superficie

5. Pipeta de vidrio graduada. 8

aplicación, permite comprobarlo también transcurridos de mucho interés para los ensayos a realizar en
unos años. laboratorio figura 6.

6.3 Permeabilidad al vapor de agua 6.3.2 Del recubrimiento por corte en cuadriculas
(g/m'dia.cm/mm Hg) Consiste en realizar cortes paralelos del
recubrimiento, separados 4 mm, y seguidamente los
Mide la cantidad de vapor de agua que atraviesa mismos cortes en perpendicular para formar un
un material poroso, en un tiempo determinado y enrejado. Luego se adhiere una cinta adhesiva y se
sometido a una diferencia de presión de vapor. tira de ella. El porcentaje desprendido se valora según
Aunque el fabricante de los productos para el una escala que va de 0 (100% adherido) a 5 (ninguna
tratamiento nos indique los valores de permeabilidad adherencia)
al vapor de los suyos, lo más práctico, es ir compro-
bando el grado de reducción de la permeabilidad de 6.4 Dureza superficial
un material como consecuencia del tratamiento
recibido, y mejor aún ver si ello puede ocasionar alguna Se puede realizar con precisión en laboratorio. En
alteración al conjunto de material tratado. obra lo más práctico es rayar con un palillo de madera.
Las figuras adjuntas (Fig. 7) representan dos Permite conocer de forma rápida aunque orientativa,
procedimientos para medir la transmisión de vapor de los diversos grados de dureza en un soporte mineral
agua de un determinado espesor de material, antes y y los resultados de la consolidación incluida su
después del tratamiento protector. La primera penetración.
corresponde al método estándar CEN'. La otra figura
corresponde a la norma francesa NF 30-704 siendo 6.5 Humedad superficial
de interés en zonas cálidas pues permite valorar la
adherencia del tratamiento después del ensayo. Este Tanto para la piedra, como para un mortero
debe realizarse a las máximas temperaturas a que endurecido se puede valorar la suma del contenido
puede estar expuesto in situ el tratamiento. de humedad y sales higroscópicas con un medidor de
su resistencia eléctrica. Es un aparato desarrollado
para medir con bastante precisión el contenido de
6.3.1 Adherencia humedad de una madera y que para la construcción
Flesistencia a tracción por arrancamiento. (N/m ) 2
es de interés por sus valores relativos, ya que también
Con este ensayo, además de valorar cuanti- mide la conductividad de las sales solubles. Consiste
tativamente la solidez del soporte, se extraen muestras en poner en contacto con el material dos agujas por
capitulo\ Humedades y su tratamiento

7. Procedimientos de medición de transmisión de vapor de agua.

las que circula una corriente eléctrica e ir anotando Composición y concentración de sales
los valores que aparecen. Se determina mediante un análisis químico. En
obra se pueden conocer orientativamente la
6.6 Solubilidad en agua concentración de algunos aniones como los sulfatos,
nitratos y cloruros por medio de unos papeles
Solubilidad del soporte mineral indicadores.
Pesando el material seco, antes y después de haber
estado 24 horas en agua podremos conocer el
porcentaje de solubilidad. Referencias

Salinidad de la solución 1 Todas las ilustraciones que figuran en este capítulo han
sido extraídas del libro del autor "Conservación y
La conductividad eléctrica de un agua depende de
restauración de monumentos". Ediciones Omega. Barcelona
la concentración de los electrolitos presentes y su 1994.
medición se realiza sumergiendo una sonda provista 2 A finales de los 70, los profesores Engelfned y Klopfer de
de unos electrodos, que están conectados a un aparato la Universidad de Dormund (A), estudiaron las ventajas
4
que da el resultado en microsiemens . La valoración que aportaban los productos fumógenos para proteger los
de su salinidad tiene dos aplicaciones en los trabajos materiales de construcción a través de su factor u..
3 A. Pien. Centre Scientifique el Tecnique de la Construction.
de conservación. Bélgica, 1984.
- Una de ellas para conocer el grado de salinidad 4 Centro de normas para la construcción en París y que
del agua utilizada en la limpieza o para preparar responde al titulo 'The International Union of Testing and
morteros. Research Laboratories for Materials and Structures".
5 Norma aceptada por la Comisión Europea y que
- La otra en los trabaios de desalinización de una corresponde a las normas DIN y BS.
piedra. La solución se prepara añadiendo a un 6 Hanna (Neurtex), Crison, Testo.
determinado volumen de agua desionizada, piedra
triturada en una concentración del 0.34%.
capítulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

89

1. Grietas en fachadas y tabiques de fábrica*

Juan Monjo Carrió


Dr. Arquitecto
Catedrático de Construcción E.T.S.A. - U.P.M.

1. Definiciones mantiene en posición, trabados, y permite al conjun-


to absorber algunos tipos de esfuerzos, sobre todo de
compresión. Se entiende, pues, que sus característi-
1.1 Cerramientos de fábrica
cas mecánicas dependerán, básicamente, de las de
Consideramos aquí cualquier tipo de muro o pared sus componentes (unidades y argamasa) pero, sobre
exterior o interior de un edificio, sin función resisten- todo, del aparejo, es decir, de la disposición relativa
te, realizados mediante fábrica de ladrillo, mampos- de dichas unidades entre sí, de su trabazón y su so-
tería, bloque de mortero o, incluso, sillería, apoyados lape, así como de la proporción entre mortero y uni-
o colgados en la estructura soporte del mismo, que dad y del tamaño de estas.
no se pueden considerar, por tanto, estabilizados por En este sentido cabe considerar el funcionamien-
carga. to mecánico básico de una obra de fábrica de hiladas
Es un tipo de técnica constructiva muy común en que corresponde a los esquemas de la figura 1.
los países de la cuenca del Mediterráneo europeo, En efecto, la carga vertical que desciende por uno
con muchos siglos de historia y con uso mantenido de los elementos constituyentes, sea de apoyos su-
en la actualidad, sobre todo en nuestro país, frente periores, sea de peso propio, se descompone en dos
a la técnica que podríamos llamar de carpintero, uti- fuerzas inclinadas perpendiculares a las superficies
lizada en los países del norte de Europa, a base de de contacto con los elementos adyacentes de la hila-
entramados de elementos lineales y complemento
de cierre a base de elementos superficiales (tablas,
tableros, etc.)
Sin duda, el funcionamiento constructivo de los
dos tipos de técnicas tiene grandes diferencias, so-
bre todo en el aspecto de su integridad física ante
movimientos del conjunto, por lo que tiene sentido
un estudio específico de cada una de ellas. En este
caso, el de las de fábrica por ser la utilizada en nues-
tros lares.
En cualquier caso, su característica principal será - o
la de estar constituidos por elementos individuales,
más o menos grandes y de carácter repetitivo, apa-
rejados entre sí mediante un mortero de unión que los

a «OZM*KTO
-cato*'*.

' Este capítulo está contenido parcialmente en otras publicaciones


del mismo autor 1. Funcionamiento mecánico de tas obras de fábrica.
Tema I. Grietas en fachadas y tabiques de fabrica

da inferior. A su vez. cada una de dichas fuerzas in- to física como mecánicamente (movimientos, varia-
clinadas se descompone en una fuerza horizontal y ciones dimensionales, etc.) de ahí la dificultad en su
otra vertical; ésta sigue transmitiendo cargas a las hi- reparación definitiva, para conseguir su desaparición
ladas subsiguientes mientras que la horizontal tiende total.
a desplazar el elemento abriendo una grieta vertical al
aparecer esfuerzos de tracción horizontal por la si-
2. Tipología
metría de las fuerzas generadas. Dichas fuerzas de-
ben ser contrarrestadas básicamente por el rozamiento En Patología los tipos de lesiones dependen di-
entre hiladas, lo que nos indica la necesidad e impor- rectamente de los procesos patológicos que las ori-
tancia del aparejo. ginan, por lo que cualquier clasificación tipológica de-
Por supuesto, cuando el muro está muy compri- bería ir ligada a los mismos y, por tanto, a sus causas.
mido verticalmente (muro de carga) el efecto del ro- No obstante, antes de entrar en ellas, conviene men-
zamiento entre hiladas es mayor y por tanto resulta cionar algunos aspectos del material afectado que
más estabilizado ante esfuerzos horizontales, sean in- también condicionan la lesión (su aspecto y su pro-
ternos o externos. ceso).

1.2 Grietas y Fisuras 2.1 Según el material

Podemos definir las grietas como todas aquellas El material y la técnica con los que están ejecu-
aberturas incontroladas de un elemento (en este ca- tadas las unidades constructivas condicionan el t i -
so de cerramiento o tabíquería, es decir, de un ele- po de grieta que puede aparecer. De ahí que deba-
mento superficial) que afectan a todo su espesor. Por mos realizar un buen análisis previo de la incidencia
el contrario, por fisura entendemos todas aquellas del material y la aparición de la grieta, complemen-
aberturas que afectan solamente a la superficie del tario al funcionamiento mecánico indicado en párra-
elemento o a su acabado superficial, del tipo que sea. fos anteriores.
Ambos tipos de lesiones son muy frecuentes en Por su sistema constructivo, el movimiento de una
los elementos superficiales de fábrica como los que obra de fábrica, por cualquiera de las causas que ve-
nos ocupan, por dos razones básicas. Por un lado, remos, facilita la aparición de las lesiones. No obs-
por su propia técnica constructiva resultan unidades tante, cabe distinguir dos tipos de grietas según la fra-
poco preparadas para resistir esfuerzos de tracción yectoria que sigan a lo largo del elemento constructivo
que, naturalmente, son el origen de estas aberturas (Fig. 2). Así podemos diferenciar:
(en definitiva se produce cuando el esfuerzo de trac-
ción generado, supera la capacidad resistente del ele- - Grieta entre el elemento unitario y el mortero
mento a dicho esfuerzo). Por otro lado, el hecho de - Grieta que rompe el elemento unitario
ser elementos básicamente superficiales y estar co-
locados en vertical, ayuda a la aparición de estas le- 2.1.1 Entre elemento y mortero
siones que, tanto por la necesidad de un apoyo line- En las primeras, el movimiento produce la separa-
al continuo en su base, como por su poco espesor, ción limpia de los ladrillos, bloques o mampuestos en
permite su rotura, atravesando todo el grueso en el general, del mortero que los une, produciéndose, por
caso de las grietas. tanto, una abertura de la junta constructiva superficial
También las fisuras atraviesan todo el espesor de entre esos elementos por alguna de estas dos razo-
la capa de acabado, que resulta, por su extrema fi- nes:
nura, más débil todavía ante los esfuerzos de trac- - Falta de adherencia suficiente entre ellos.
ción. El hecho de estar sujeta al cerramiento que le - Aparición de un esfuerzo de tracción o rasante
sirve de soporte (sea por puntos, sea de un modo en dicha |unta, superior al que es capaz de absor-
continuo) le confiere cierta rigidez, en cualquier ca- ber.
so, insuficiente, sobre todo si el que falla es el pro- En el primer caso, se puede partir de un defecto
pio soporte. de ejecución que se puede resumir en:
En cualquier caso, las roturas (grietas o fisuras) - Falta de rugosidad suficiente en los mampuestos
se producen al superar el mencionado esfuerzo y que no facilita la adherencia mecánica entre los mis-
provocan la división del elemento unitario original (el mos y el mortero de unión, adherencia basada en las
cerramiento en cuestión) en dos o más partes que bielas a compresión que forma el mortero gracias a
empiezan a actuar de un modo independiente, tan- los entrantes y salientes del elemento unitario. Cuando
capitulo II Patología e intervención en cerramientos y acabados

GRIETAS ENTRE ELEMENTO UNITARIO Y MORTERO 91


GRIETA QUE ROMPE EL ELEMENTO UNITARIO

1.
1—"—i . 1 1
1
»•

1l
t.

2. Tipos de grietas en obras de fábrica según línea de rotura.

la superficie de dicho elemento es muy lisa (cosa co- relativa de los mismos (el aparejo) (Fig.3) y que tiene
rriente en ciertas maniposterías) este tipo de grieta una indudable incidencia en la respuesta del aparejo
puede aparecer, incluso ante esfuerzos pequeños. ante los esfuerzos de tracción.
- Falta de humectación previa del mampuesto Sin ánimo de entrar en un proceso de cálculo de
que provoca una succión por parte de éste (depen- dicho coeficiente, podemos analizar su funcionamiento
diendo de su coeficiente de absorción superficial) del esquemático en los tipos de fábrica más utilizadas.
agua del mortero, que puede provocar una disminu- Así, en una fábrica de ladrillo de 1/2 pie (aparejo a so-
ción excesiva de la relación agua-cemento del mismo ga) encontramos una superficie de interfase de unos
que, a su vez, puede llegar a provocar la ausencia de 44.550 cm- por cada metro cuadrado de fábrica, mien-
fraguado en la zona de contacto y, por tanto, la no for- tras que en una de 1 pie con aparejo a tizón, dicha su-
2
mación de las bielas a compresión necesarias para la perficie sube a unos 104.850 cm , lo que nos da una
mencionada adherencia mecánica. idea evidente de su mayor capacidad de resistencia
En el segundo caso, cualquiera de los esfuerzos a los esfuerzos rasantes localizados, o, lo que es lo
o variaciones dimensionales que pueda sufrir la uni- mismo, la mayor debilidad de la primera ante la posi-
dad constructiva, acaban transformándose en un es- ble aparición de grietas provocadas por cualquier ti-
fuerzo rasante o de tracción que afecta a la interfase po de esfuerzo o variación dimensional.
(junta constructiva superficial) entre el mampuesto y Si ahora analizamos lo mismo para una fábrica de
el mortero de unión. Si existía un defecto de ejecución bloques de mortero, tendremos que en un bloque ali-
previo que producía una falta de adherencia, el men- gerado (los más corrientes en nuestro país) de 20/20/40
cionado esfuerzo provoca fácilmente la aparición de con paredes de 2 cm. de espesor y dos huecos cada
la grieta. Si, por el contrario, la adherencia era correcta, bloque, la superficie de interfase por cada metro cua-
2
se puede controlar el esfuerzo, aunque puede llegar drado es de unos 17.400 cm , inferior, incluso, a la fá-
al límite de su capacidad y romperse las bielas. En ese brica de 1/2 pie de ladrillo, lo que nos confirma la de-
momento desaparece o disminuye la adherencia y so- bilidad de este tipo de sistemas ante esfuerzos rasantes
breviene el colapso local, provocando la aparición de locales y. por tanto, la necesidad de su armado, tan-
la grieta en la interfase. to en vertical como en horizontal.
Además de estas dos razones mencionadas, que Para el caso de los bloques macizos, la superficie
pueden (y suelen) ser complementarias, cabe consi- de adherencia aumenta algo, pasando a unos 30.000
2
derar también la proporción global entre mampuesto cm por cada metro cuadrado, lo que mejora algo su
y mortero en cada unidad constructiva, que nos dará coeficiente global de adherencia, pero todavía resul-
una idea de la superficie de interfase con la que con - ta débil y considerablemente inferior al del 1/2 pie de
tamos en cada caso y, por tanto, de la capacidad de ladrillo y, por tanto, sigue necesitando la armadura de
adherencia interna de cada una de las fábricas. Es lo refuerzo, por lo menos la horizontal.
que podríamos llamar el coeficiente de adherencia Por otra parte, en estos casos comentados con-
(CAI) de cada técnica constructiva que dependerá, viene tener en cuenta, además, la rugosidad de la su-
naturalmente, del tipo de mampuesto y la disposición perficie de contacto ladrillo-bloque-mortero, con ob-
Tema 1. Grietas en faenadas y tabiaues de fábrica

'II

13 C

FABRICA DE 1/2 PIE


DE LADRILLO (A SOGA)
2 .
CAI. =44.550 c m . / m '
=1C "ir

Z3C

..i ii ii ncr

1 r.
t-

' ''
FABRICA DE I PIE
DE LADRILLO (A TIZON)
: I
C A I . =104.850 cm./m»

i x z r

FABRICA DE BLOQUE DE
MORTERO HUECOS
(20/20/40)

I C A I . =17.400 e m . / m *

FABRICA DE BLOQUES DE
MORTERO MACIZOS
(20/20/40)

C A I . =30.000 c m . / m '

3. Coeficiente de adherencia interna ( C A I . ) .


^ipilulo ¡I. Patología e intervención en cerramientos y acaoados

jeto de considerar la posibilidad y tipo de las pene-


traciones o bielas que se puedan producir. Asi. en un
ladrillo perforado, las mismas perforaciones provocan
unas bielas importantes por penetración de dicho mor-
tero en los orificios de la tabla del ladrillo, que favore-
cen la resistencia del conjunto a los esfuerzos rasan-
tes en el sentido horizontal (Fig.4). Si el ladrillo fuera
macizo, (prensado y sin perforaciones, por ejemplo)
la capacidad de respuesta de la interfase se vería muy
reducida.
En el caso de los bloques huecos, la superficie de
contacto horizontal entre bloque y mortero se queda
muy reducida (un 32% de la superficie de asiento) y
con disposición lineal, sobre las paredes, con lo que
las penetraciones que se producen gracias a la rugo-
4. Penetración de mortero en ladrillo
sidad de los cantos de esas paredes, resultan en perforado.
realidad poco efectivas. Mientras, en los bloques ma-
cizos, la superficie de contacto es mayor y más uni-
I
forme, sin embargo, al ser una superficie generalmente
más lisa, la efectividad adherente es menor, con lo que
el resultado sigue siendo también bajo.
En definitiva, vemos que la grieta que se produce
entre mampuesto y mortero de unión es muy carac-
terística de las obras de fábrica y dependen básica-
mente de su propia constitución, es decir, del tipo de
elemento unitario en lo que se refiere a tamaño, for-
ma y superficie de sus caras, y de su disposición y
trabazón interna, es decir de su aparejo.

DEBILIDAD DEL ELEMENTO


2.1.2 Rompiendo el elemento
En este segundo caso, el movimiento de la unidad
constructiva produce la rotura de los elementos uni-
dos por la argamasa, lo que suele ir unido a la rotura
de la junta entre mortero y elemento (Fig. 5).
Puede aparecer por dos razones:
- Debilidad relativa del elemento frente al morte-
ro o a la adherencia entre ambos.
- Esfuerzo perpendicular al cerramiento y muy lo-
calizado.
El primer caso, muy corriente, suele ser una com-
binación de los dos tipos de grietas en las que la le-
ESFUERZO PERPENDICULAR
sión sigue una línea marcada por el esfuerzo (normal-
mente en arco de descarga) rompiendo unas veces 5. Grieta rompiendo el elemento
por la junta y otras por el elemento, siempre que és- unitario.

te sea suficientemente débil, observándose, en oca-


siones, una predominancia de elementos partidos, lo paredes delgadas no resisten los esfuerzos de flexión
que es un índice claro de dicha debilidad. o cortantes a los que se ven sometidos en la variación
Esta, puede provocarse, a su vez. por dos tipos dimensional de la fábrica.
de causas. Bien por su poca resistencia mecánica, no En el segundo caso, suele existir una acción muy
solo a esfuerzos de tracción y cortantes, sino, inclu- localizada, lineal (vertical) y perpendicular al cerra-
so, a compresión (típico de ladrillos poco cocidos) bien miento, que introduce un esfuerzo cortante muy defi-
por su gran esbeltez longitudinal o de sus caras, co- nido que produce la rotura de la fábrica según dicha
mo en el caso de los bloques huecos en donde las linea rompiendo lo que coincida con ella, sean ele-
fama I Gneias en fachadas y iabioues de táDnca

mentos, sean juntas. Es el caso, relativamente co- internos de la fábrica, de tracción, cortantes o rasan-
rriente, del pandeo de un pilar que actúa sobre el ce- tes, según ya hemos visto.
rramiento que lo cubre, rompiéndolo por la línea de Las posibles acciones mecánicas son muy varia-
borde del pilar, o el caso de encuentros en esquina o das, por lo que habrá que agruparlas en una serie de
perpendiculares entre cerramientos en los que uno de tipos, según sean debidas a movimientos de la es-
ellos dilata, empujando perpendicularmente al otro y tructura soporte, o a movimientos del propio elemen-
partiéndolo. En todos estos casos, la aparición de las to. En cualquier caso, los efectos y el proceso son re-
grietas es prácticamente inevitable, pues si son débi- petitivos y, por tanto, se pueden agrupar en unos pocos
les las fábricas ante esfuerzos de tracción en su pro- casos, independientemente del análisis que hagamos
pio plano, más lo son, por su disposición constructi- a continuación de los distintos casos particulares. En
va, a las acciones perpendiculares a las mismas, que éste sentido, podemos considerar los siguientes tipos
de grietas (Fig. 6).
se convierten en esfuerzos cortantes transversales.
a) Por asiento puntual debido a un claro aumen-
2.2 Según la causa to de longitud de la base que provoca, bien grieta ver-
tical en el eje del asiento por aparición de tracciones
Vistos los diferentes tipos de grietas en función del horizontales en la base, bien grietas superpuestas in-
material y la técnica constructiva de la fábrica que clinadas debidas al esfuerzo cortante o bien grieta en
constituye el cerramiento en cuestión, podemos en- "V" en la parte superior.
trar en la que podríamos considerar la verdadera ti- b) Por asiento continuo, que provoca grietas en
pología de estas lesiones, es decir, la que se da en arco de descarga, bien completo, si el asiento es cen-
función de las causas que originan los procesos pa- tral, bien semiarco, si el asiento es en un lateral. Si el
tológicos que las provocan. asiento es uniforme en toda la longitud del cerramiento,
y éste es de hiladas horizontales, puede producirse
En este sentido, hay que recordar, por un lado, el
una grieta horizontal coincidiendo con una hilada en
hecho de que no es común que las causas sean in-
la parte baja del mismo, por descenso del cuerpo in-
dividuales y perfectamente identificables, por lo que
ferior del elemento.
no será fácil que sea una única causa el origen del
proceso; no obstante, para su análisis, no tendremos c) Por empuje vertical (carga) que provoca dis-
más remedio que considerarlas independientes. Por tintas grietas en función de su localización. Si en el
centro, puede producir un simple aplastamiento, con
otra parte, debemos tener en cuenta que existe siem-
aparición de alguna grieta vertical en la parte supe-
pre una causa directa que despierta un defecto (cau-
rior, acompañada de fisuras horizontales en forma
sa indirecta) iniciándose el proceso. Entonces, ¿cuál
de ondas. Si es importante, puede llegar al pandeo
debemos considerar como verdadero origen de la le-
del elemento; en este caso, distinguimos dos tipos;
sión, la causa directa o la indirecta, a los efectos ti-
pandeo fuera del plano, el más frecuente, que pro-
pológicos? duce grietas horizontales coincidiendo con los ten-
Creo que, como en todos los análisis tipológicos, deles, en el lado fraccionado, o pandeo en el propio
cualquier camino es válido mientras se llegue hasta el plano, que se transforma en esfuerzos de tracción
final, pues de lo que se trata es de recorrer los distin- horizontales que provocan grietas verticales (se-
tos tipos posibles para conocer su proceso y el modo gún vimos en 1.1).
de actuar sobre los mismos. Por todo ello, en este ca-
En el caso de los muros de dos hojas (muros ca-
so voy a considerar dos tipos de causas directas y dos puchinos) si la trabazón no es suficiente pueden pro-
de causas indirectas, como más representativas en los ducirse pandeos fuera del plano, opuestos en cada
orígenes de cada proceso patológico que conduce a una de las hojas, por lo que nos aparecen grietas en
una grieta y con resultados claramente identificables a ambas caras del muro.
los efectos del análisis tipológico que pretendo.
Si el empuje vertical es en un extremo, además de
Como causas directas voy a considerar las accio- los esfuerzos y las grietas mencionadas, es fácil que
nes exteriores mecánicas, por un lado, e higrotérmicas, aparezcan esfuerzos de tracción horizontales en la
por otro. Como causas indirectas, las deficiencias de parte alta que se traducen en grietas verticales en «V»,
proyecto y las de los materiales o de la ejecución. al igual que un asiento puntual.
Veamos. d) Por empuje horizontal. También aquí tenemos
que distinguir dos posibilidades; que el empuje sea
2.2.1 Acciones mecánicas perpendicular al elemento o que esté en su propio pia-
Es, quizás, la causa directa de las grietas más cla- no. Asimismo, habrá que tener en cuenta la sujeción
ra y más abundante, que se transforma en esfuerzos perimetral del cerramiento.
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos / acabados

6. Tipos de grietas por acciones mecánicas externas.

Si es perpendicular y puntual, provocará un ala- A) Movimientos de la estructura soporte


beo que, en función de la sujeción del cerramiento en Se refiere a todos aquellos movimientos de la es-
su perímetro, producirá un esfuerzo de tracción en una tructura del edificio, tanto elásticos como permanen-
de las caras, con grieta según una línea más o menos tes, del que nuestras fábricas son cerramiento o tabi-
inclinada. quería, y que van desde los asientos de cimentación,
Sí es perpendicular y lineal, producirá una rotura las flechas de jácenas y forjados y los pandeos, has-
más o menos limpia según el empuje, es decir, verti- ta las dilataciones térmicas de la propia estructura.
cal, en caso de pilares u otros muros perpendicula- Veamos los más importantes, de los que podremos
res, u horizontal en el caso de forjados. En este últi- extrapolar al resto de situaciones posibles.
mo, es frecuente, si se trata de ladrillo o bloque (hiladas
horizontales) que se produzca una rotación que mar- A.1 Asientos de cimentación (Fig.7)
ca una fisura en el lado convexo. No son muy corrientes en el caso de cerramien-
Sí el empuje está en el mismo plano y es puntual, tos no portantes ya que al trasmitir muy poca carga
producirá asimismo grieta horizontal coincidiendo al cimiento (sólo el peso propio) éste no suele ceder.
con las hiladas. Si es lineal, puede producir un sim- Sin embargo a veces ocurre, sobre todo en casos en
ple aplastamiento, con grietas horizontales en todo que la cimentación sea exageradamente pobre o in-
el frente, o un pandeo horizontal, con posibles grie- cluso inexistente. Cabe considerar, asimismo, ios ca-
tas verticales. sos en que existe un asiento de la cimentación (sobre
Hasta aquí hemos visto los tipos generales de todo, puntual) de la estructura del edificio, que reper-
grietas en función de los esfuerzos generados por cute en sus cerramientos y tabiques:
acciones mecánicas. Analicemos, ahora, las distin- a) Cuando el asiento es de la cimentación directa
tas situaciones reales según los dos grupos men- del cerramiento en cuestión, el proceso no puede ser
cionados. muy regular, es decir, tanto puede ser puntual como
Tema 1. Grietas en tachadas y taoioues ele iabnca

96 „) ASIENTO DIRECTO D E CIMENTACIÓN

a-I)

o) ASIENTO PUNTUAL DEL PILAR

b-1)

7. Asientos de cimentación.

generalizado, con lo que los efectos son distintos. Si to, de esfuerzo cortante en ambos lados o, en un ca-
es puntual, debido a roturas de tuberías, corrimientos so extremo de repercusión horizontal importante, grie-
de tierra, etc. (a-1) la grieta puede se vertical, en V in- ta en arco de descarga.
vertida, en el eje del asiento, por aparecer un esfuer-
zo de tracción horizontal en la base, o ligeramente in- A.2 Flechas de vigas y forjados (Fig.8)
clinada, por tramos, como esfuerzo cortante producido Es, quizás, el conjunto de casos más frecuente en
por el asiento. el origen de las grietas de cerramientos y tabiques,
Si el asiento es generalizado, debido probable- por lo que conviene distinguir varias opciones.
mente a la debilidad de la cimentación (a-2) la grieta a) Flechas de vigas. Pueden afectar directamen-
suele aparecer en forma de arco de descarga, bien te a los cerramientos que están en contacto con ellas
central, bien lateral, y con posibles incidencias de hue- o indirectamente a través de los forjados que se apo-
cos interiores en los que la grieta arranca de sus án- yan en las mismas, a otros cerramientos o tabiques
gulos superiores. que descansan sobre esos.
b) Otro caso distinto es de los asientos de la es- Los cerramientos que se apoyan sobre las vigas
tructura que repercuten en los cerramientos. Suele ser sufren un fallo de asiento, por lo que se provocarán
el asiento de una zapatas que produce la bajada ver- grietas en arco o semiarco de descarga, en función
tical del pilar que le transmite las cargas. Ello provo- de su situación relativa. Los cerramientos localizados
ca, generalmente, una falta de asiento puntual en el bajo esas vigas, pueden llegar a sufrir un empuje ver-
extremo del cerramiento en contacto con el pilar que tical, centrado o lateral, que producirá aplastamien-
viene a producir un semiarco de descarga o un sim- tos o pandeos y, por tanto, grietas verticales u hori-
ple esfuerzo cortante que se traduce en las típicas zontales según se ha comentado.
grietas inclinadas superpuestas (b-1). b) Flechas de forjados. Sus efectos son prácti-
También podrían darse el caso (b-2) de que el ce- camente iguales a los vistos para las vigas, es decir,
rramiento en cuestión fuese pasante por delante del falta de asiento con aparición de arcos de descarga y
pilar, con lo que el asiento puntual provocaría grietas empujes verticales con producción de aplastamien-
parecidas a las mencionadas en el caso anterior, es tos y pandeos, tanto en el plano como perpendicula-
decir, grieta vertical en V invertida en el eje del asien- res al mismo y provocando, por tanto, los mismos ti-
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

pos de grietas. Cabe decir, no obstante, que en este penetración de la estructura en el espesor de aquel.
caso los cerramientos que se suelen ver afectados - Por último, empuje horizontal, hacia afuera, del
son de tabiquería que, normalmente, presentan me- borde inferior del forjado, lo que produce grieta hori-
nor rigidez que los de fachada o medianería que sue- zontal en el cerramiento coincidiendo con la hilada ho-
len ir apoyados sobre vigas, por lo que la aparición de rizontal correspondiente a ese borde.
la lesión es más rápida. Finalmente, debemos considerar otro caso espe-
Por otra parte, en el caso de forjados puede apa- cífico de asiento de forjados. Se trata de tabiques tam-
recer un tipo de asiento distinto, aunque no muy co- bién perpendiculares a la dirección de apoyo de aque-
mún. Me refiero al asiento diferencial cuando el cerra- llos. Entonces, si el asiento es continuo, no se llega a
miento tiene su dirección perpendicular a la de apoyo formar arco descarga por estar muy alejados los pun-
del forjado y éste cede sólo a partir de un punto, o se tos de apoyo teórico y por tanto, de arranque del ar-
trata de dos forjados distintos yuxtapuestos. Entonces co. En consecuencia, la grieta que se produce es ho-
rizontal, coincidente con una hilada y localizada
aparece un esfuerzo cortante muy claro que provoca
aproximadamente a un metro de altura, por descen-
las típicas grietas inclinadas superpuestas. Este asien-
so de la parte inferior del tabique, dependiendo del ti-
to diferencial puede provocar, asimismo, empujes ver-
po de construcción. También podemos llegar a en-
ticales en el tabique inferior que serán del tipo puntual,
contrar este tipo de grietas horizontales en tabiques
con aplastamiento y grieta vertical en el borde.
asentados en la misma dirección de apoyo de los for-
Otro efecto, aunque puntual, de las flechas de for- jados, cuando éstos son de gran luz y los tabiques de
jados aparece en el apoyo de los muros en un zuncho gran longitud, por quedar ios arranques del teórico ar-
de fachada cuando la flecha de aquel produce un gi- co de descarga muy alejados, no obstante no es un
ro en el zuncho donde apoya el cerramiento de fa- caso tan frecuente.
chada provocando varios efectos, a saber (b-2):
- Por un lado, empuje vertical hacia abajo en la lí- A.3 Deformaciones horizontales de la estructura,
nea de borde interior del cerramiento, con posible por dilatación o por pandeo (Fig. 9)
aplastamiento. Son casos también bastante frecuentes en los que
- Por otro, pandeo fuera del plano, tanto del ce- conviene distinguir algunas situaciones más destaca-
rramiento inferior, como del superior, en función de la das:
Tema i Grietas en tachadas y tabiques de fabrica

a) Dilatación de la estructura, que provoca em-


pujes, normalmente perpendiculares a los cerramien-
tos de fachada produciendo, por un lado, grietas ho-
rizontales coincidiendo con una hilada de cerramiento
situada, bien en el borde inferior, bien en el superior
del forjado que empuja, según la construcción del en-
cuentro (a-1). Por otro, grietas verticales bastante lim-
pias en el cerramiento que rodea los pilares de las es-
quinas, aunque en este caso debemos distinguir dos
posibilidades. Que la grieta se produzca en el plano
perpendicular al de la dilatación, caso frecuente en la
esquina de una fachada orientada al Oeste con otra
orientada al Norte. La grieta aparece al Norte ya que
la dilatación mayor se produce en la fachada Oeste
(a-2).
Que la grieta se produzca en el propio plano de la
dilatación, por la aparición de esfuerzos importantes
de tracción horizontal, al estar excesivamente traba-
do el cerramiento con la estructura. Entonces la grie-
ta no es tan limpia, ya que puede aparecer en cual-
quier punto intermedio entre los dos elementos
estructurales a los que esté anclado el cerramiento.
No obstante, se suelen localizar en las líneas más de-
bilitadas, a saber, el propio encuentro con la estruc-
tura, ventanas, encuentro con otros cerramientos per-
pendiculares, pasos de instalaciones, etc. (a-3)
Un caso especial se produce cuando la deforma-
ción de la estructura horizontal no provoca la grieta
en la misma línea de apoyo, sino que produce un gi-
ro del cerramiento alrededor de un eje horizontal si-
tuado más abajo, en función de la técnica constructi-
va del mismo. Ello produce una fisura interior horizontal
en dicho muro, cuya profundidad depende del ángu-
lo de giro y de la constitución del cerramiento, (a-4)
b) Pandeos de estructura vertical, que producen
grietas muy localizadas, tanto en cerramientos de fa-
chada como en tabiques, siempre que exista contac-
to entre los dos elementos. La localización individual
permite distinguirlas de las anteriores, en el caso de
las fachadas, que suelen ser más generalizadas.
El tipo de grieta que se produce es muy limpio,
consecuencia del esfuerzo lineal del borde del pilar en
cuestión y de la sujeción del resto del cerramiento.
Por otra parte, el pandeo de un pilar puede provocar,
además, el giro de una viga o la flecha de una viga o
de un forjado, lo cual tendría las consecuencias que
ya hemos analizado en el apartado anterior.

B) Deformaciones horizontales de los


cerramientos (Fig. 10)
Se trata de los casos en que la dilatación térmica
de un cerramiento, normalmente de fachada, provo-
9. Deformaciones nonzontales de ¡a estructura. ca un empuje en otro cerramiento perpendicular a es-
capitulo il Patología e intervención en cerramientos y acabados

2.2.2 Esfuerzos higrotérmicos


Consideramos aquí el conjunto de esfuerzos pro-
vocados directamente sobre los cerramientos por va-
riaciones de temperatura o de humedad. En general,
este tipo de variaciones de las condiciones ambien-
tales provocan una dilatación de las unidades cons-
tructivas en función de sus coeficientes de dilatación
potencial y de su técnica constructiva, dilataciones
que van seguidas de las correspondientes contrac-
ciones cuando las variaciones son negativas, momento
en el cual aparecen realmente las grietas y fisuras
(Fig.11). Los cambios dimensionales afectan, sobre
todo, a los cerramientos de fachada, por ser éstos los
10. Deformaciones horizontales de cerramientos. que sufren directamente los cambios de temperatura
y más a los del Oeste y Sur, que a los del Este y Norte.
Provocan dilataciones y contracciones básica-
mente horizontales, ya que las verticales resultan
contrarrestadas por el propio peso de la unidad cons-
tructiva. En consecuencia, las grietas suelen ser ver-
ticales, ya que resultan de los esfuerzos horizonta-
les de tracción que aparecen en el cerramiento en el
momento de la contracción, ya que siempre apare-
ce algún punto de enganche, bien con la estructura
del edificio, bien con otros cerramientos perpendi-
culares.
Las lesiones suelen ser normalmente grietas que
se localizan en zonas intermedias de cerramiento en
función, bien de la longitud del mismo, bien de los po-
sibles enganches mencionados. Si estos existen, la
rotura se producirá, bien en su proximidad, bien en el
11. Cambios de temperatura punto intermedio entre ambos. Si el cerramiento re-
sulta libre'úe enganches, las grietas aparecerán a dis-
tancias ¡guales en función de la dilatación-contrac-
te, produciendo grietas verticales. Cabe distinguir dos ción que haya sufrido.
tipos por su localización, aunque el proceso patoló- En este sentido, cabe mencionar los coeficientes
gico sea el mismo: de dilatación térmica que se consideran normalmen-
a) Empuje por dilatación de una fachada sobre otra te para las fábricas y que podemos obtener del cua-
que se encuentran en una esquina. La grieta aparece dro C.1 a saber.
en el encuentro sobre la fachada que menos se dila-
ta como consecuencia del esfuerzo cortante que se - Fábrica de ladrillo 0.5 x I0-5 m/m °C
genera. En este sentido hay que tener en cuenta que - Fábrica de bloques de mortero 1x10-5 m/m C
las fachadas que sufren mayor dilatación son, por es- - Mampostería de piedra 0,5x10-5 m/m C
te orden, Oeste, Sur, Este, Norte. La grieta suele ser
limpia ya que el esfuerzo es lineal y uniforme, aunque Como ejemplo orientativo, pensemos que una fa-
mayor en las partes altas del edificio, con lo cual pue- chada dirigida a poniente puede alcanzar, en verano
de no aparecer en las partes bajas por efecto de la radiación directa, los 70 °C, en un cli-
ma como el nuestro, mientras que en invierno puede
b) Esfuerzo cortante vertical, o de tracción hori-
zontal, entre la fachada que dilata y un tabique o mu- bajar a 5° bajo cero. Tendríamos, entonces una osci-
ro interior excesivamente unido a ella. Dicho esfuer- lación anual de temperaturas de 75 °C, lo que signifi-
zo produce una grieta vertical que normalmente se ca que por cada metro la dilatación sería de
localiza en el mismo encuentro, aunque puede apa- - Fábrica de ladrillo 0,375 mm.
recer más hacia el interior, según la solución cons- - Fábrica de bloques de mortero 0,75 mm.
tructiva. - Mampostería de piedra 0.60 mm.
Tema 1. Grietas en tachadas y tabiques de fábrica

En una fachada de 20 m. de longitud, dimensión


fácilmente alcanzable, las dilataciones absolutas se-
rian:
- Fábrica de ladrillo 7,5 mm.
- Fábrica de bloques de mortero 15 mm.
- Mampostería de piedra 12 mm.

lo que nos da una idea de la importancia de esos mo-


vimientos, sobre todo, al contraer, y explica la apari-
ción de una serie de grietas en paños ciegos y conti-
nuos que podrían evitarse. De hecho, las únicas juntas
de dilatación que se realizan en los cerramientos son
las propias de la estructura que lo soporta, cuando,
lógicamente se deberían introducir otras intermedias.
Al fin y al cabo, la estructura está protegida de los
c e :\<
cambios de temperatura por el propio cerramiento,
12. Uniones constructivas mal resueltas. aunque su coeficiente de dilatación térmica (sobre to-
do en el caso del hormigón) es muy similar.

2.2.3 Deficiencias de proyecto


Trato de recoger aquí aquellos errores de proyecto,
normalmente de diseño constructivo, que facilitan la
aparición de grietas en los cerramientos y que, conju-
gados con una de las causas directas vistas en los
apartados anteriores, provocan el proceso patológico.
Naturalmente, no es posible pormenorizar todos
los errores por lo que mencionaré los que considero
más destacables y que nos permiten extrapolar sus
efectos al resto.

A) Uniones constructivas mal resueltas (Fig. 12)


Es sabido que la construcción es un proceso adi-
tivo, es decir, basado en la adición de elementos y ma-
teriales con un nivel de acabado más o menos avan-
zado, que persigue la consecución de nuevas unidades.
Así, una unidad de cerramiento (un tabique o un pa-
ño de fachada) resulta de la unión de elementos uni-
tarios (ladrillos, bloques, mampuestos, etc.) y morte-
ro que necesitan una trabazón, un aparejo, para trabajar
conjuntamente como un solo elemento. Esto normal-
mente se logra, y de no hacerlo, se trata de un defecto
de ejecución que veremos más adelante.
Sin embargo, hay ocasiones en que, desde el pro-
yecto, diseñamos la yuxtaposición de dos unidades
constructivas distintas pensando que al aplicarles un
mismo acabado superficial lograremos que trabajen co-
mo un solo elemento, lo que es imposible, sobre todo
si se trata de unidades con misiones constructivas dis-
tintas. Entonces a lo largo de su vida constructiva se
mueven de un modo independiente y se abre la grieta.
Uno de los casos más claros es la yuxtaposición
en el mismo plano de un elemento estructural (pilar o
12 b.
forjado) con un cerramiento, bien de fachada, bien de
capitiiic ii Patología e intervención en cerramientos y acabados

tabiquería, recubiertos posteriormente por un mismo


acabado, bien continuo, bien por elementos. Otras ve-
un
ces, se deja un pequeño resalto entre el plano del ce-
rramiento y el del elemento estructural, para super-
poner un pequeño recubrimiento sobre éste con un
material similar al del cerramiento antes de aplicar el
acabado común. Normalmente esta solución tampo-
co es suficiente y sigue apareciendo la grieta. En cual-
quiera de los casos, éstas suelen ser bastante limpias,
coincidiendo con la junta constructiva origen del mal,
sea ésta horizontal o vertical.
En otras ocasiones, el encuentro entre un cerra-
miento y un elemento estructural se basa en la dismi-
a) D E RETRACCIÓN b) "OLVIDO" D E JUNTA
nución de la sección del cerramiento para alojar en
ese cajeado el pilar o el frente del forjado. Esta dis-
13. Falta de juntas de retracción.
minución debilita, evidentemente, la integridad del ce-
rramiento a lo largo de ese cajeado y lo expone a su
rotura según esa línea cuando aparezca un esfuerzo
de tracción perpendicular a la misma y superior a su
capacidad, lo que puede ocurrir, bien a través del mis-
mo cerramiento, bien por la acción del elemento es-
tructural alojado que introduce un empuje sobre aquel.
En este caso las grietas son lesiones más probables
y suelen ser también limpias y coincidentes con la lí-
nea debilitada.
En otros casos, aunque el encuentro entre ele-
mento estructural y cerramiento es aparentemente co-
rrecto, sin embargo, no tiene la suficiente indepen-
dencia entre ellos para evitar la acción de uno sobre
otro, sobre todo del estructural sobre el cerramiento,
provocando las grietas que hemos comentado en apar-
tados anteriores. Es un caso típico de pandeo de pi-
lares o de dilatación de forjados de cubierta o de fle-
chas de vigas y forjados sobre tabiques y fachadas.
También aparece en el encuentro de dos elemen-
tos de cerramiento, cubierta con fachada o dos fa-
chadas en esquina, cuando uno de ellos dilata sobre
el otro. Es corriente en tableros de cubierta horizon-
tal que rompen los petos, o las grietas en los encuentros
entre fachada y medianería.

B) Falta de juntas de retracción (Fig.13)


Ya hemos visto en los apartados anteriores la im-
portancia que puede tener ia dilatación y contracción
de los cerramientos, sobre todo de fachada, como
consecuencia de los cambios de temperatura. Al con-
siderarlo en proyecto, ello se deberá traducir en la co-
locación de una serie de juntas de retracción a una
distancia tal entre ellas que no se pudiesen producir
movimientos del propio cerramiento que superasen
su cohesión interna y, por tanto, su resistencia a trac-
ción horizontal De no hacerlo asi, nos aparecerán las
mencionadas grietas verticales, bien situadas con pe-
Tema f. Gretas en fachadas y tabiques de fábrica

mento estructural. Sin embargo, los cerramientos ne-


cesitan una limitación generalmente en valor absolu-
to según veremos al hablar de medidas de preven-
ción. Ello, por el hecho de que el descenso del elemento
estructural que actúa de soporte del cerramiento su-
pone una falta de asiento que produce, como sabe-
mos, grietas muy claras y muy corrientes. Asimismo,
este descenso puede provocar cargas verticales so-
bre los cerramientos situados debajo.
Por todo ello, se hace necesaria en el diseño cons-
tructivo la limitación de las flechas en valor absoluto
y la falta de esa medida nos provocará las grietas y fi-
suras que ya conocemos.

D) Cerramientos excesivamente débiles .


Las acciones sobre los cerramientos provocan es-
fuerzos de tracción y cortantes que acaban en grie-
14. Grieta en esquina resuelta a inglete. tas en función de la capacidad mecánica de aquellos.
sin aparejo. Por eso, y teniendo en cuenta que dichas acciones no
son siempre evitables, a mayor debilidad del cerra-
miento, mayor será la posibilidad de que aparezcan
lesiones. En consecuencia, un error de diseño cons-
tructivo claro será la colocación de cerramientos muy
delgados de gran longitud, o con una gran cantidad
de instalaciones embutidas que lo debilitan. Es lo que
ocurre con el uso de tabiques de ladrillo hueco sen-
cillo para grandes luces con peligro de flechas im-
portantes, o para cuartos de baño y cocina con tube-
rías de gran diámetro que obligan a seccionar el tabique
para su alojamiento.
En estos casos, las grietas que aparezcan estarán
en función de la causa directa. Así, si se trata de fle-
cha, aparecerán arcos de descarga o grietas horizon-
tales en la parte inferior. Si se trata de rozas para tu-
bos, seguirán la línea de los conductos, etc.
15. Debilitación.
2.2.4 Deficiencias de los materiales o de la ejecución
Englobamos aquí todas aquellas causas indirec-
tas que parten de un defecto de los materiales o de
riodicidad dimensional, bien buscando los puntos más su colocación en obra, considerando, como siem-
débiles del cerramiento (huecos, rozas para instala- pre, que no vamos a poder contemplarlos todos si-
ciones, etc.) (a). no los más representativos, para de ahí extrapolar
En otros casos, el error es más aparatoso ya que sus defectos.
se basa en no respetar la junta de dilatación estruc-
tural, anulándola con el cerramiento. Naturalmente, A) Defectos de los materiales
los movimientos de la estructura forzarán la apari- Veamos los más importantes que pueden llevar a
ción de junta con la formación de la consiguiente la aparición de grietas y fisuras:
grieta vertical (b). a) Materiales demasiado porosos en fachadas, la-
dillos, bloques o mampuestos, con un alto coeficien-
C) Falta de limitación de flechas te de absorción y, por tanto, con posibilidad de varia-
La limitación de flechas está normalmente con- ción dimensional por humectación, lo que produce las
templada en la normativa estructural, pero se hace co- fisuras vistas en el apartado anterior.
mo una medida relativa, en función de la luz del ele- b) Materiales de poca capacidad mecánica, sean
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

los elementos unitarios de las fábricas (ladrillos, blo- La debilitación estará en función del tipo y
ques y mampuestos) o bien el mortero de agarre. espesor de la fábrica, así como de la dimensión del
En ambos casos, la baja resistencia a compre- conducto que debamos meter en ella. El caso
sión lleva aparejada una débil resistencia a tracción, más desfavorable (aunque desgraciadamente co-
por lo que, ante los mínimos esfuerzos, incluso los rriente) será el de la roza para conductos de fonta-
de su propio peso, aparecen las grietas. Estas, se- nería o calefacción en un tabique realizado con la-
guirán las distintas formas analizadas, aunque el he- drillo hueco sencillo, ya que nos obliga a romper
cho de que aparezcan con predominancia en el ele- prácticamente todo el espesor y dejar, en todo ca-
mento unitario o en el mortero de agarre nos indicará so, una pared del hueco, lo que resulta a todas lu-
el material defectuoso. En cualquier caso, su apari- ces insuficiente.
ción ante esfuerzos mínimos nos revelará su proce- Por otra parte, también es condicionante la dis-
dencia. Los más significativos serán los debidos a posición de la roza. Así, las horizontales bajas y las
aplastamiento (grietas y fisuras horizontales) por pe- que siguen la forma del posible arco de descarga re-
so propio en las partes bajas de la unidad. sultan más peligrosas que las verticales o las hori-
zontales altas.
B) Errores en la ejecución
También pueden ser muy variados, que habrá que 2.3 Según su movilidad
mencionar los más significativos:
a) Falta de traba suficiente entre los elementos Muchos autores consideran la distinción tipológi-
unitarios, lo que suele darse en dos tipos de casos ca entre grietas vivas y grietas muertas entendiendo
(Fig. 14). las primeras como aquellas que mantienen una mo-
a-1) Esquinas falsas, con ángulos distintos a 90°, vilidad periódica (se abren y se cierran, sobre todo se
lo que obligaría al uso de elementos aplantillados o abren) en función de los cambios de temperatura o de
bien a marcar un cuenteado fuera del plano de facha- periodos de carga y descarga, y las segundas como
da. Las soluciones incorrectas suelen pasar por cor- las que ya no sufren ningún movimiento, es decir, que
tar los elementos (normalmente ladrillos) a inglete y, no se ven afectadas por los cambios de temperatura
aunque en la mayoría de los casos se suelen introdu- ni por los estados de carga.
cir algunas grapas metálicas, éstas no son suficien- En mi opinión, esta división tipológica no es muy
tes para absorber los esfuerzos de dilatación-con- útil y, además, es prácticamente inexistente. En efec-
tracción, abriéndose la típica grieta vertical en la misma to, si partimos de la base de que una grieta parte en
esquina. Otras veces, según el sistema de trabazón dos un elemento constructivo, el resultado son dos
realizado, si éste es insuficiente, la grieta puede apa- elementos independientes desde el punto de vista de
recer por la unión entre ladrillo y mortero en el borde su movilidad, por lo que las variaciones dimensiona-
de la propia junta. les por motivos térmicos o de contenido de humedad
a-2) Uniones en el mismo plano, entre fábricas tienen que afectar forzosamente de un modo inde-
diferentes o realizadas en distintos momentos. Son pendiente; en consecuencia, la dimensión de la aber-
los casos típicos en los que, o bien se ciega un hue- tura tendrá que variar.
co existente, o se continúa una fábrica interrumpida Si consideramos solamente el estado de cargas,
con anterioridad. En estos casos la práctica corrien- en el momento en que éste varíe, también las dos par-
te es dejar muy pocos enjarjes que se acaban de- tes resultantes tendrán movimientos independientes,
mostrando insuficientes, por lo que, al aparecer los por lo que también variará la dimensión de la grieta.
primeros movimientos, se produce la grieta siguien- Solamente resultará muerta cuando el estado de car-
do la línea de los enjarjes. Esta lesión suele ser más gas no varíe, situación ciertamente poco frecuente.
evidente cuando las dos fábricas que se unen son de En definitiva, para encontrar una grieta realmente
distinto material. muerta debemos coincidir con una unidad construc-
b) Debilitación por rozas para instalaciones tiva en la que no varíe su estado de cargas, o de apo-
(Fig. 15). Muy corrientes en toda la tabiqueria interior yo, y en la que no tenga incidencia las variaciones de
para instalación eléctrica y en la de los núcleos hú- humedad y de temperatura. Podríamos llegar a en-
medos para fontanería. También aparecen en aigunos contrar una situación así en un sótano, donde la va
casos esporádicos de fachadas para saneamiento. En nación de temperaturas es mínima, en el que la grie-
cualquier caso, la roza supone una disminución del ta se hubiera producido por un asiento diferencial de
espesor del cerramiento que facilita la aparición de la cimentación en un momento determinado que pos-
grietas siguiendo su linea. teriormente se hubiera estabilizado. Sólo en este ca-
Tema l. Grietas en faenadas y tabiques de 'ábnca

so podríamos hablar de grietas muertas. Sin embar- tabique interior (central, medianero, perpendicular a
go, en todos ios casos de unidades de cerramiento fachada, do primera o última planta, etc.).
aéreas, con apoyo sobre elementos elásticos y con - El, o los, materiales afectados; el tipo de fábri-
influencia de los cambios de temperatura, no tiene ca que constituya la unidad (ladrillo a soga, a tizón,
sentido establecer esta diferencia. bloque, hormigón en masa o armado, etc.), el tipo de
En cualquier caso, si analizamos el origen de es- acabado del cerramiento en cuestión (continuo de
ta denominación, lo encontramos en el objetivo de la mortero, yeso o pintura, alicatado, chapado de pie-
reparación de los cerramientos agrietados en los que dra, empanelado, etc.); el componente de la fábrica
se buscaba primero su estabilización para poder pro- afectado (el mortero de unión, el elemento unitario, la
ceder a tapar la grieta. Para ello se realizaban unas unión entre ambos).
observaciones de movilidad de la abertura con siste- - La situación relativa de la lesión en la unidad. Si
mas bastante rudimentarios y por tanto, con niveles en una fachada, arranque, coronación, esquina, central,
de precisión muy bajos, lo que podría llevar a pensar etc. Sí en un tabique, central o lateral, alta o baja, etc.
en un determinado momento que la grieta se había - La forma y disposición; si horizontal o vertical,
estabilizado definitivamente. si en forma de arco o semiarco de descarga o incli-
En el capítulo correspondiente analizaremos este nada a 45° y repetida, si tiene bordes paralelos o con-
aspecto. Basta ahora comentar la relativa falsedad de vergentes (en V), etc.
esta distinción entre vivas y muertas y, en todo caso,
aceptar la denominación de grieta estabilizada para
3.2 Evolución temporal
aquellas cuya movilidad no supere una determinada
dimensión y, por tanto, se pueda proceder a su repa- Es, quizás, la característica más importante que
ración. debemos tener en cuenta, pues ello, unido al estudio
de otras incidencias en la estructura del edificio, nos
puede dar la pista del origen de la lesión.
3. Diagnosis
3.2.1 Comienzo
Resulta básico el que antes de proceder a la repa- En primer lugar deberemos tratar de descubrir el
ración de una unidad constructiva que ha sufrido un momento de aparición de la lesión. Para ello debe-
proceso patológico se debe llevar a cabo un estudio mos buscar indicios. Uno muy claro es la limpieza de
de la situación, lo más completo posible, que nos per- los bordes o labios de la grieta en cuestión. Unos bor-
mita alcanzar un diagnóstico, lo más preciso posible, des limpios y cortantes indican que la grieta se ha pro-
para comprender mejor el proceso patológico y sus ducido recientemente (semanas o meses, en función
causas a partir de la lesión como efecto. de la situación de la grieta, contaminación de la zona,
En el caso de las grietas, por su amplia gama de etc.). Por el contrario, unos labios romos y sucios, con
variantes, así como de posibles causas, es especial- telarañas y polvo, son indicio de que la grieta es an-
mente necesario ese estudio, por lo que conviene in- tigua (años) siendo difícil precisar su edad.
dicar los aspectos más importantes del mismo. A continuación, debemos tratar de relacionar la le-
sión con algún hecho concreto que nos pueda dar idea
3.1 Identificación de su origen. Así, analizaremos si ha habido algún mo-
vimiento estructural especial, coincidente en el tiem-
Hay que proceder, en primer lugar, a la identifica- po aproximado de aparición, que haya podido produ-
ción de la lesión, lo que se puede hacer en función cir la grieta, o bien un cambio de uso del edificio, con
de la tipología apuntada, es decir, si se trata de una aumento de las cargas, sobrecargas, o modificaciones
grieta o de una fisura y, dentro de cada una. el tipo constructivas que hayan variado la situación tensional
según el material afectado y según la causa que lo del elemento, o fenómenos meteorológicos que pue-
ha provocado. Naturalmente, se tratará de una esti- dan haber influido en el estado de la cimentación, o,
mación previa que deberá ser confirmada con el diag- por el contrario, algún error de ejecución que haya cau-
nóstico. sado la lesión desde el principio de la obra. De ese mo-
En cualquier caso, y con el fin de disponer del má- do, tendremos una idea del posible comienzo.
ximo de datos posibles, deberemos anotar, al menos:
- La, o las, unidades constructivas afectadas; si 3.2.2 Movilidad
se trata de una fachada (paño ciego, peto de terraza, Es un dato importante, tanto para conocer el pro-
antepecho, cornisa, zócalo, etc.) o si se trata de un ceso patológico, como para ver la oportunidad de su
capítulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

reparación. Se basa en conocer la separación o apro-


ximación más o menos periódica de los bordes de la
grieta, tanto en la magnitud como en el tiempo. Para
ello tenemos varios procedimientos.
Un sistema tradicional, aunque poco preciso es el
de los testigos o tarjetones de yeso. Su misión es co-
nocer si la grieta sigue abriéndose y se basa en la fra-
gilidad del yeso y su rotura al menor movimiento. Para
ello es necesario que el tarjetón sea muy fino (inferior a
2 mm.) y esté bien adherido a los lados, para lo que su
ejecución tiene que ser cuidada. Si se realiza dema-
siado grueso, o no se asegura su adherencia a los bor-
des, existe la posibilidad de que se separe el testigo
del paramento y no se pueda comprobar la movilidad.
Con este sistema, sólo se puede comprobar si la
grieta se sigue abriendo, pero no si abre y cierra; por
tanto puede servir para grietas producidas por asien-
tos de cimentación, pero no para flechas de forjado o
para dilataciones y contracciones térmicas. Por otra
parte, no se puede conocer la magnitud (ni relativa ni
absoluta) de la apertura, y si queremos conocer la
movilidad periódica, necesitamos realizar una serie de
testigos (uno mensual, o semestral) para ver el movi-
miento de cada ocasión.
Los sistemas más actuales se basan en unos apa-
ratos de medición denominados extensómetros o com-
paradores que son capaces de medir movimientos 17. Instrumentación de grieta para el seguimiento
con precisión de centésimas de milímetro y pueden de su movilidad.
hacerlo por procedimientos mecánicos o eléctricos
(Fig.16). Para su utilización, se deben recibir sendas
plaquitas metálicas o cerámicas a ambos lados de la mera idea sobre su origen o, por el contrario, variar-
abertura, pegadas normalmente con resina epoxi don- la y darnos los datos necesarios para su correcto
de se hacen unas marcas paralelas para medir la dis- diagnóstico.
tancia entre ellas (Fig.17). En cualquier caso, y tal como he apuntado en el
Se toman las medidas periódicamente y así se co- apartado anterior, una grieta siempre tendrá cierta mo-
noce la movilidad de la grieta o fisura. Si se prevé que vilidad, aunque sea de centésimas de milímetro, de-
la lesión es consecuencia de movimientos elásticos bida, por lo menos, a los cambios de temperatura o
de la estructura, la periodicidad estará en relación con de contenido de humedad de las dos partes en que
las fases de carga y descarga de la misma, o se rea- ha quedado dividida la unidad constructiva afectada,
liza una prueba de carga para llevar a cabo la medi-
por lo que nunca podremos hablar de una grieta es-
ción. Si se considera que la abertura es consecuen-
tabilizada al 100%. En cada caso, en función de la so-
cia de los cambios de temperatura, la periodicidad
lución constructiva del cerramiento lesionado, pode-
puede ser mensual o, por lo menos, semestral, con
mos establecer un porcentaje de movilidad por debajo
una duración mínima de seis meses para asegurar el
del cual podremos considerar la grieta estabilizada
cambio de temperatura en la unidad. Si se trata de un
con el objeto de proceder a su reparación. Este por-
asiento de cimentación, la periodicidad puede llegar
a ser semanal con las posibles incidencias de lluvias centaje debe ser objeto de estudio y podría constituir
fuertes o trabajos de cimentación próximos. el tema de un trabajo metódico de investigación,
En definitiva, se trata de saber la movilidad de la
abertura y su relación con otros aspectos construc- 3.3 Características físico-mecánicas
tivos o de uso, con el fin de relacionarla con su po-
sible causa, teniendo en cuenta que el resultado de En algunos casos nos podrá interesar conocer las
este estudio puede, simplemente, confirmar la pri- características físicomecánicas de los materiales le-
Tema! Grietas en lachadas y tabiques de fábrica

sionados con el fin de saber su capacidad mecánica esa disposición, bien consultando los documentos de
y comprender mejor la posibilidad de su rotura. proyecto de que se disponga.
Así. podrá ser interesante saber la resistencia a El primer procedimiento es, evidentemente, el más
compresión y a flexotracción del hormigón lesionado, fiable, aunque obliga a la destrucción parcial o local de
tanto de un cerramiento, como de una estructura, o las unidades. En cualquier caso, es inevitable (y común)
de un ladrillo y del mortero de agarre, componentes en edificios antiguos donde no se dispone de docu-
de una fábrica agrietada, o del azulejo o la piedra de mentación técnica. El segundo es el más cómodo y eco-
chapado de un acabado, etc, etc. Para ello no ten- nómico, aunque es recomendable su comprobación es-
dremos más remedio que obtener muestras de los tadística por el método de las calas, pues es relativamente
propios elementos constructivos o, en todo caso, re- corriente que la ejecución difiera del proyecto.
producirlos en probetas en caso de conocer su com-
posición original.
3.5 Diagnóstico
En el hormigón, podremos sacar testigos que nos
darán un resultado fiable, o podremos recurrir a en- Una vez en posesión de todos los datos apunta-
sayos no destructivos (esclerómetro y ultrasonidos) dos en los párrafos anteriores, asi como de otros re-
para su correlación. En los ladrillos y elementos uni- lativos a la lesión que consideremos de utilidad en ca-
tarios de fábrica, así como azulejos y piedras de aca- da caso, podremos proceder a su diagnóstico. Éste
bados, será relativamente sencillo obtener las probe- debe contener, por lo menos, los siguientes extremos:
tas directamente de las mismas. El caso de los morteros - Causa indirecta, identificando si ha existido un
de agarre será el más difícil ya que los espesores no error de proyecto, material, ejecución o mantenimiento
nos permitirán obtener testigos, por lo que habrá que (en este caso, probablemente, cambio de uso con au-
recurrir a los ensayos no destructivos o a su repro- mento de la carga o sobrecarga) tanto en lo referente
ducción, si conocemos su composición, para con- a la unidad constructiva lesionada (fachada, tabique,
feccionar las probetas de ensayo necesarias. etc.) como a la estructura que la soporta.
Además de los ensayos mecánicos, será conve- - Causa directa, que ha producido el comienzo
niente realizar algunos físicos, con objeto de conocer del proceso patológico en cuestión y que puede ha-
su porosidad y coeficiente de succión, que nos darán ber sido, tanto una variación ocasional de la sobre-
datos sobre su posible dilatación. Asimismo, será re- carga, como un asiento de la cimentación consecuencia
comendable, en muchos casos, llevar a cabo ensa- de problemas geotécnicos o de descalces, como un
yos químicos que nos den noticia de posibles com- cambio constructivo (reforma) que ha modificado la
ponentes que provoquen dilataciones o modificaciones, disposición tensional de la estructura o del propio ce-
en general, de su estructura fisicoquímica. Piénsese rramiento, como una variación periódica de las tem-
en el caso de las caolinitas de algunas arcillas, o los peraturas o de la humedad contenida que ha produ-
aluminatos de algunos cementos. cido una dilatación y contracción de la estructura o
En su conjunto, estos datos nos permitirán un diag- del cerramiento.
nóstico más completo y fiable. - Evolución del proceso y su lesión, con indica-
ción del comienzo y de la posible periodicidad así co-
3.4 Disposición constructiva mo de su estabilización.
- Lesión, con especificación de su tipo y de su
Al ser la construcción un proceso aditivo, y al origi- estado en el momento de su estudio.
narse muchas grietas como consecuencia de empu- Con todo ello tendremos lo que podríamos lla-
jes de unas unidades sobre otras, o de separación de mar el cuadro clínico de la lesión que nos permitirá
las mismas, será fundamental conocer la disposición realizar el diagnóstico y, por tanto, conocer el pro-
constructiva de los elementos afectados, tanto los en- ceso patológico lo suficientemente bien como para
cuentros entre estructura y cerramiento, como la dis- proceder a tomar las medidas adecuadas para su re-
posición de ios elementos constituyentes de una fá- paración.
brica en si, como las uniones entre distintos
cerramientos.
Para ello, será importante reproducir gráficamente 4. Reparación
los detalles constructivos afectados, para lo cual po-
dremos seguir dos caminos. Bien obtenerlos directa- Una vez con el diagnóstico de la lesión, y sólo cuan-
mente en las unidades constructivas lesionadas, a Da- do dispongamos de él, podremos proceder a estudiar
se de realización de calas que nos permitan descubrir y proponer la reparación de la unidad constructiva ie-
capitulo II. Patología e Intervención en cerramientos y acabados

síonada. Para ello y como ya se ha mencionado, de- 707


beremos actuar en primer lugar sobre la causa, y has-
ta que ésta no haya resultado eliminada no podremos
actuar sobre la lesión. Conviene, pues, que analice-
mos detenidamente ambas actuaciones, lo que hare-
mos en función del tipo de lesión y, por tanto, del pro-
ceso patológico en cuestión.

4.1 De la causa Arranque en correa

Sabemos que, como norma general en patología


constructiva, es difícil actuar sobre las causas direc-
tas, mientras que suele ser más asequible la anula-
ción de las indirectas, es decir, de los errores de pro-
yecto o de ejecución. Las grietas no se escapan a esta
situación aunque, como siempre, hay excepciones
que confirman la regla. Por ello, será necesario pasar
revista a las diversas causas que hemos apuntado co-
mo más representativas para analizar cada caso y po-
Perfil metálico entre
der extrapolar.
apoyos en el arranque

4.1.1 De las acciones mecánicas 18. Rigidización de tabiques.


Hemos distinguido dos tipos básicos, las acciones
debidas a movimientos de la estructura soporte y las
que son consecuencia de los movimientos de los ce- car que la limitación de su movimiento debe ser en
rramientos. Veamos cada una de ellas, considerán- valor absoluto, en función de su posible efecto al ce-
dolas como causas directas. rramiento afectado. Así, por ejemplo, si se trata de fle-
chas de vigas o forjados sobre los que asientan, o ba-
A) Producidas por movimientos de la estructura jo los que se encuentran, cerramientos de fábrica,
soporte convendrá que las flechas absolutas no sobrepasen
Si la causa directa que origina la grieta es una ac- los 8 mm. en ningún caso, y si se trata de pandeo de
ción sobre el cerramiento producida por el movimiento pilares, su dimensión dependerá de la reparación del
de la estructura que los soporta o está próximo a él, cerramiento, pero convendrá limitarlo a 5 mm.
nuestra actuación de reparación podrá orientarse por b) La independencia entre el elemento estructu-
dos caminos. ral y el cerramiento afectado puede ser complemen-
- La estabilización del movimiento de la estruc- taria al refuerzo, al rehacer el cerramiento roto para
tura reparar la lesión, pero será necesario, sobre todo, en
- La independencia entre la estructura y el cerra- dos tipos de casos:
miento - Cuando el refuerzo sea complicado o excesiva-
Ambos, con el objeto de anular el efecto. mente costoso y no es necesario por razones de se-
Naturalmente, las dos actuaciones pueden simulta- guridad, podremos limitar la actuación a independi-
nearse para asegurar el resultado. zar estructura y cerramiento.
a) La estabilización del elemento estructural en - Cuando las causa principal sean las variaciones
cuestión dependerá, naturalmente, del mismo, es de- dimensionales del elemento que introduce la fuerza
cir, de su función estructural, de la deformación que (sea estructura u otro cerramiento) será imprescindi-
haya sufrido y de su estado tensional. Así, si se trata ble recurrir a la independencia y no intentar reforzar la
de asiento de cimentaciones, habrá que recalzar; si unión. En este caso, además, se puede aprovechar
para aislar mejor el elemento que ha sufrido las varia-
de flechas de vigas o forjados, habrá que reforzar su
ciones dimensionales para tratar de reducirlas.
capacidad a resistir momentos positivos; si de pan-
deos de pilares, reforzaremos su sección, etc, etc. La independencia es relativamente sencilla cuan-
Naturalmente, no vamos a entrar en la descripción do el contacto entre ambas unidades constructivas
de esos tipos de refuerzos, que corresponden a los no sea imprescindible, como un tabique o una facha-
capítulos de estructuras, pero sí es importante indi- da pasante por delante de un pilar, pero resulta algo
Tema!. Grietas en tachadas y tabiques de tábnca

108 engorroso cuando el cerramiento en cuestión se asien-


ta sobre el elemento estructural. Así pues, podemos
establecer las siguientes actuaciones como propues-
tas específicas de independencia en casos concretos
que deberemos extrapolar:

Je A.1 Cerramiento sobre viga o forjado


a) Si se trata de un tabique interior, al margen de
la limitación de la flecha, o como sustitutívo, podemos
establecer un sistema de apoyo que tenga rigidez pro-
pia (Fig. 18). Distingo, básicamente, dos opciones:
a.1.) Estructura propia de apoyo, mediante un per-
MURO DE CARCA (ESTA3IUZADO) PUENTE TERMICO
fil normalmente metálico en la base que transmita la
i
carga a los extremos evitando el descenso del tabi-
que.
a.2.) Arranque con arco de correa, a base de dar-
le esta forma a las primeras hiladas hasta regularizar
la fábrica. Con ello podemos conseguir que la carga
de todo el tabique se transmita a los arranques del ar-
A. co de correa, evitando asimismo el asiento.
b) Si se trata de un cerramiento de fachada nos
encontramos con la costumbre muy extendida de apo-
yar parcialmente el cerramiento sobre el borde de los
forjados (1) (Fig.19). Entonces aparecen todos los pro-
blemas mencionados en el apartado 1.2. Para evitar-
los, aparte de limitar la flecha del zuncho de borde,
una solución muy adecuada es la independencia en-
MURO APOYADO tre fachada y estructura a base de hacer que la hoja
exterior del cerramiento sea pasante por delante de
la estructura.
Su apoyo puede efectuarse, bien mediante una es-
tructura auxiliar, similar a las que utilizamos para los
llamados muros cortina, ya que se trata de un cerra-
miento no portante, bien medíante perfiles metálicos
adosados al zuncho por su exterior en los que se li-
mita la flecha, por rigidación con el zuncho y limita-
ción de la del conjunto, o por limitación propia e in-
dependencia de los movimientos de la estructura a
POSIBLE ESTRUCTURA AUXUAR
DE CUELGUE base de anclaje a ésta por puntos de mínima defor-
mación. También podemos aumentar la rigidez de la
fábrica armándola, con lo que no depende tanto de
su apoyo en la estructura.
En cualquiera de los casos, se marca una inde-
pendencia constructiva entre ambas unidades que
permite, además de la independencia de movimien-
tos, una continuidad del espesor de la hoja del cerra-
miento y, por tanto, de su integridad, así como la no
aparición de los típicos puentes térmicos en esos pun-
tos gracias a la continuidad de la plancha aislante.

MURO "COLCAOO"
1 nota: Véase el articulo del autor titulado Errores sistemáticos en el
diseño constructivo de tachadas publicado en la revista Informes de
19. Fachadas de ladrillo colgadas de la estructura. la construcción n" 497 de mayo/¡unio de 1990.
•sapitoiv II. Patología e inten/ención en cerramientos y acabados

Estas soluciones son relativamente fáciles de apli-


car cuando se trata de obra nueva y estamos a nivel
de proyecto, por lo que insistiremos en ellas al hablar
de prevención. Sin embargo, cuando se trata de re-
parar un edificio ya construido, no siempre se pueden
aplicar. En estos casos, habrá que ver la factibilidad
real en función de la solución constructiva existente
aunque a priori las más adecuadas parecen ser:
- Introducir un elemento metálico de apoyo, des-
de el exterior en el canto del forjado, para que reciba
la carga del cerramiento y pueda ayudar a reforzar es-
tructuralmente dicho forjado, reduciendo su flecha.
- Armar el cerramiento de fábrica desde el exte-
rior introduciendo la armadura en los tendeles.

A.2 Cerramiento bajo forjado o viga


En este caso, el problema está en el empuje verti-
cal que sufre el cerramiento. Comoquiera que la unión
entre ambas unidades es necesaria para materializar
la obstrucción entre los dos espacios que divide, la
independencia consistirá en ejecutar el último tendel
con un mortero más pobre y de mayor espesor, para
que sea capaz de comprimirse sin transmitir el es-
fuerzo al cerramiento (Fig. 20). De hecho, la práctica
habitual más correcta consiste en ejecutar el trabajo
hasta la última hilada, que queda separada unos 2 ó
3 cms. del forjado. Cuando se han realizado los tabi-
ques de todas las plantas, con lo que los forjados han
recibido la sobrecarga permanente y, por tanto, han
sufrido la flecha también permanente, entonces se
procede a rellenar ese último tendel con un mortero
más pobre que el utilizado para el resto de la fábrica.
En el caso de las fachadas, si sus paños se ven
21. Independencia entre estructura y cerramiento,
interrumpidos por los forjados, el procedimiento ope-
rativo debe ser el mismo. Si, por el contrario, hemos
conseguido una hoja pasante por delante de la es-
tructura, este procedimiento ya no es necesario. interponer un material plástico de cierto espesor (1
cm) por eiemplo, una plancha de poliestireno expan-
A.3 Cerramientos adosados a estructura vertical dido, que nos permita establecer una junta de retrac-
(Fig.21) ción entre estructura y cerramiento, que posterior-
Tanto si se trata de un cerramiento de fachada como mente sellaremos con un producto elastómero por
de tabiques, debemos procurar siempre la indepen- ambos lados. De este modo, los movimientos, tanto
dencia con holgura. Constructivamente, la separación elásticos de la estructura, como de dilatación y con-
debe marcarse con algún material superficial inter- tracción del cerramiento, se verán absorbidos por la
puesto para asegurar que durante la ejecución no se solución constructiva.
depositen restos de mortero entre las dos unidades Una solución similar la utilizaremos cuando nos
que facilitaría la trasmisión de ios esfuerzos. encontremos con el empuje de un forjado de cubier-
Si el cerramiento os pasante, puede bastar con fo- ta contra un cerramiento de fachada ya existente.
rrar la estructura con un polietileno o un simple papel Entonces no tendremos más remedio que marcar la
(de sacos, por ejemplo) y marcar una distancia míni- junta y sellarla con elastómero. ya que difícilmente po-
ma de 1 cm. dremos evitar la dilatación del forjado, a menos que
Si, por el contrario, el cerramiento está a tope con construyamos encima una cámara de aire ventilada o
la estructura, entonces deberemos ir a la solución de establezcamos algún tipo de aislamiento.
Tema 1. Gretas en tachadas y tabiques de iábhca

110 ciones (empujes) de ésta sobre aquel, sino que tam-


bién impide que el cerramiento quede trabado con la
estructura y al dilatar o contraer puedan aparecer es-
fuerzos locales de tracción que lo rompan, tal como
indicábamos en el punto 2.2.1
Esta independencia es relativamente fácil de con-
JUNTA seguir en un edificio de nueva construcción, pero es
DE RETRACCION prácticamente imposible en edificios ya construidos.
PAÑO ORIENTADO
En éstos no nos queda más remedio que recurrir a in-
A ESTE U OESTE troducir juntas de retracción.

B) Juntas de retracción
Normalmente, los cerramientos de los edificios
22. Junta en retracción. disponen para su libre dilatación y contracción de
las juntas de la estructura que los soporta. Ello im-
plica el funcionamiento de ésta y aquel como un to-
B) Producidas por movimientos del propio do ante los cambios de temperatura; se considera
cerramiento una unidad constructiva a efectos de dilataciones y
Cuando el que empuja es otro cerramiento dis- contracciones.
puesto normalmente perpendicular al que sufre la le- Ello sería así sí el cerramiento fuera a la vez es-
sión, se tratará también de un caso de dilatación tér- tructura. Entonces se puede considerar parcialmente
mica, por lo que no podremos anularla. Entonces estabilizado por las cargas verticales que recibe (so-
deberemos recurrir a la independencia constructiva bre todo las plantas bajas) y, en cualquier caso, su di-
que dependerá de la situación en cada caso (Fig. 22). latación y contracción no suele encontrar otros obs-
Normalmente deberemos marcar una junta vertical táculos que frenen su movimiento e introduzcan
que sellaremos con elastómeros por el exterior y ta- esfuerzos locales de tracción. Por el contrario, cuan-
paremos con tapajuntas por el interior. do se trata de un cerramiento apoyado, o colgado, en
la estructura, la situación es distinta. Por una parte, le
4.1.2 De los esfuerzos higrotérmicos falta estabilización por carga, por lo que las dilatacio-
Al contrario que con las acciones mecánicas con- nes son más libres y actúan en toda su intensidad. Por
secuencia de la movilidad de la estructura por movi- otra, existe cierta independencia entre ambas unida-
mientos elásticos, donde podíamos intervenir tratan- des constructivas, lo que facilita la independencia de
do de limitar dichos movimientos, ante los debidos a sus movimientos térmicos; además, el cerramiento
cambios de temperatura o humedad, nuestra posible sufre antes los cambios de temperatura por lo que ini-
actuación directa es muy escasa, por no decir nula, cia antes su movilidad. Todo ello provoca un funcio-
sobre todo cuando dichos movimientos afectan di- namiento higrotérmico independiente que conlleva,
rectamente a los cerramientos. De hecho, no pode- por una parte, el peligro del enganche de las dos uni-
mos evitar que estos cambien de temperatura, sobre dades entre sí y, por tanto, la aparición de los men-
todo los de fachada, pues aunque podemos mitigar cionados esfuerzos locales de tracción. Por otra, la
algo dichos cambios mediante tratamientos exterio- necesidad evidente de juntas de retracción propias en
res que disminuyan la radiación solar directa, sin em- el cerramiento que se suman a las de la estructura
bargo a la larga, la variación térmica es inevitable y la que, naturalmente, deben respetarse.
protección implica un cambio de diseño y, por lo tan- De nuevo, esta solución es fácil de tener en cuen-
to, una variación formal importante. ta en edificios nuevos, mientras que se complica al-
En consecuencia, nuestra actuación ante un pro- go en los ya construidos, aunque no es imposible co-
blema de este tipo deberá ser forzosamente indirec- mo veremos. De hecho, cuando en un cerramiento
ta contemplando, bien la independencia entre es- aparecen grietas por retracción térmica, suele ser por
tructura y cerramiento, bien la introducción de juntas su gran dimensión horizontal, su orientación y la falta
de retracción. Veamos. de huecos o quiebros en planta que faciliten la ab-
sorción de las dilataciones. En cualquier caso, la pro-
A) Independencia pia grieta nos suele indicar el sitio de la necesaria jun-
La independencia entre cerramiento y estructura, ta de retracción, con lo que nos resuelve su estudio.
vista ya en el apartado anterior, no sólo evita las ac- Entonces, deberemos manipular la junta en ese pun-
capitulo II. Patología e Intervención en cerramientos y acabados

///

Coeficientes de dilatación lineal térmica (x 10~V * C )

Arido de grava 11.7


Arido ligero 8,1
HORMIGÓN
Arido calizo 6.0
Fábrica de bloques 5.6 a 9,4
longitud 4,0 a 8,0
Ladrillos-arcilla anchura 8,0 a 12,0
altura 8,0 a 12,0
PRODUCTOS DE A R C I L L A
longitud 11,0a 15,0
Ladrillos silicocalcáreos anchura 14,0 a 22,0
altura 14.0 a 22.0
Granito 8,5 •
Caliza 3,0 a 4,0
PIEDRA
Mármol 3,8
Arenisca 5.0 a 12.0
Yeso 13,7
ENLUCIDOS Perlita 9,3
Vermiculita 10.6
VIDRIO Luna 9,1
Transversal a la fibra 50.0 a 60.0
MADERA
En la dirección de la fibra 3,8 a 6,5
Aluminio y aleaciones 23,5
Latón 18,0
Bronce 19,8
METALES Cobre 16,9
Hierro fundido 10.6
Plomo 28,6
Acero inoxidable 17,3
Acero dulce 12,1
Acrílicos-láminas coladas 50,0 a 90,0
Policarbonato 65,0
Poliéster-30% de fibra de vidrio 18,0 a 25,0
P.V.C. rígido 42.0 a 72,0
PLÁSTICOS Fenólicos 15,0 a 45.0
Poliestireno expandido 50.0 a 70.0
Espuma rígida de poliuretano 20.0 a 70,0
Espuma de plásticos fenólicos 30.0 a 90,0
P V . C expandido 35,0 a 50.0

C U A D R O I. Coeficiente de dilatación de los materiales de construcción más corrientes.


Tema 1. Grietas en tachadas y tabiques de fábrica

112 JUNTA EN FACHADA

ESES

7
PILAR
CERRAMIENTO

SELLANTE ESPUMA PLASTICA

23. Uniones constructivas deficientes.

23. Uniones constnjctivos deficientes. a.1) Yuxtaposición incorrecta de distintos elemen-


tos (Fig. 23).
Hay que partir de la base de que dos elementos
constructivos con funciones diferentes deben mante-
nerse independientes, aunque físicamente puedan es-
tar juntos. El intento de su unión forzosa acabará en
lesión. Para repararlo no tendremos más remedio que
recuperar la independencia funcional. Así, sí están uni-
dos en un mismo plano, un elemento estructural y otro
de cerramiento, con un acabado superficial común a
ambos (pilar o forjado con fachada) deberemos mar-
car la junta constructiva y sellarla o taparla (tapajun-
tas) en función de su situación y del aspecto estético
del conjunto, ello implicará una actuación única con
la reparación del efecto. Una actuación similar será
24. Refuerzo de un forjado de viguetas metálicas mediante per- necesaria si se ha recubierto la estructura con un ma-
files por debajo de su tramo central. terial similar al del cerramiento pero de espesor insu-
ficiente.

to, introduciendo un corte lineal y separando y ade- Si se trata de unión entre cerramiento y car-
cuando sus bordes. pintería en exteriores, el sellado será también nece-
En todos los casos habrá que estudiar la distan- sario.
cia adecuada entre juntas. Para ello habrá que consi- a.2) Falta de independencia entre elementos aje-
derar, por una parte, el coeficiente de dilatación po- nos. Es el caso ya comentado de cerramientos alre-
tencial del material (ver cuadro C-1) por otra, la dedor de pilares o pasantes delante de ellos. Entonces
orientación de la fachada a los efectos de calenta- la independencia debe ser, si cabe, más patente. Para
miento por radiación y, por último, la climatología del eliminar esta causa será necesario rehacer el cerra-
lugar a los efectos de temperaturas extremas. Con to- miento y marcar más la independencia.
do ello, y limitando el movimiento máximo a 5 mm, En general, siempre que nos encontremos con ele-
obtendremos la distancia entre juntas. mentos de funciones distintas debemos cuidar su li-
bertad individual.
4.1.3 De los errores de proyecto b) Falta de juntas de retracción
Entramos aquí en el conjunto de causas indirectas La actuación se basará en marcar dichas juntas.
ya comentadas como origen de las grietas y donde Si se trata de las de dilatación de la estructura que
tendremos más posibilidades de actuar. Veamos los han sido olvidadas al ejecutar el cerramiento o el aca-
distintos casos comentados en el punto 2.2.3. bado, deberemos recuperarla cortando y sellando (o
a) Uniones constructivas deficientes tapando con tapajuntas). Si, por el contrario, se trata
Se tratará de corregir la deficiencia que. de las necesarias en el cerramiento que no se hayan
normalmente, consistirá en uno de los tipos siguien- considerado, ya han quedado comentadas en el pun-
tes: to 4.1.2.
capitulo Patología e intervención en cerramientos y acabados

c) Flechas excesivas en vigas y forjados (Fig. 24). 113


Se tratará de limitarlas mediante el refuerzo del
elemento estructural o, si es posible, independizar és-
te de los posibles cerramientos afectados.
VENDA DE
d) Debilidad de los propios cerramientos REFUERZO i
Debemos tratar de reforzarlos mediante pilastras
adosadas o armaduras en tendeles, pero lo más pro-
i NUEVAS
bable será que tengamos que demoler y rehacer con
! FISURAS
más consistencia. POSIBLES
1
Normalmente estas actuaciones no se suelen lle-
var a cabo aisladas, sino conjuntamente, en función \
t
de las causas origen de la lesión en cada caso.
s
4.1.4 De los defectos de los materiales o de la eje-
cución 25. Venda en grieta.
Normalmente, cuando un material resulta defec-
tuoso no hay más remedio que cambiarlo por otro y,
por tanto, rehacer el cerramiento afectado. En oca-
siones, sin embargo, se puede recurrir a la aplica-
ción de productos que aporten nuevas característi-
cas fisicoquímicas al material, que permitan hacer
frente a las causas directas que puedan provocar las
lesiones. En cualquier caso, la actuación afectará di-
rectamente al efecto, por lo que lo veremos en el si-
guiente punto.
Del mismo modo, los defectos de ejecución afec-
tan a la integridad o al aspecto del cerramiento, se-
gún hemos visto en el punto 2.2.4. por lo que la ac-
tuación contra ellos será también una actuación sobre
el efecto, que quedan agrupadas más adelante.
En definitiva pues, podemos concluir que la ac-
tuación sobre la causa en la mayoría de las indirectas
REPARACION POR SUSTITUCIÓN
(por proyecto, ejecución o mantenimiento) será posi- DE PIEZAS INDIVIDUALES
ble y deberá ser conjunta con la reparación del efec-
to, mientras que la actuación sobre las directas es po-
sible solo en las debidas a acciones mecánicas e
implica una actuación independiente para la causa y
para el efecto.

4.2 Del efecto

Si la actuación sobre la causa es siempre previa,


aunque no siempre posible, la del efecto es siempre
el paso final y, naturalmente, necesario para restituir
a la unidad su función constructiva.
Como es lógico, dependerá, por una parte, del ma-
terial constructivo y del tipo de fábrica de que se tra-
te y, por otra, del tipo de lesión, es decir, si es grieta
o fisura, si rompe el elemento unitario o lo separa de
la argamasa, etc. REPARACIÓN POR LIMPIEZA
Y SELLADO
En cualquier caso, antes de analizar los distintos
procedimientos de reparación, conviene recordar el 26. Actuación de reparación de grietas en fábri-
necho evidente de que un cerramiento afectado por c a s de ladrillo.
Tema 1. Gnetas en lachadas / tabiques de 'abnca

•^'«SNiaiX i«íV*--2'-?.->'-í*fi} *~~?-~*-mmMXá»UUKg


dad constructiva (valga la redundancia). Es decir, no
bastará nunca con una reparación puntual o superfi-
cial, sino que la actuación debe afectar a toda la lon-
gitud de la lesión y a todo el espesor de la unidad ro-
.,5*11*1» ;-•„;• O j , ! ' « ü w V i i i a J-¿a ta. Es como si pretendiéramos arreglar un jarrón de
porcelana aplicando el pegamento sólo por encima o
sólo en determinados puntos, en lugar de hacerlo so-
bre todo el espesor de la pieza y en toda su longitud.
Ello hace que, en principio, la mejor reparación sea la
refacción, es decir, demoler la unidad y volverla a eje-
cutar con las medidas de prevención adecuadas.
Es cierto que esta solución suele ser más costo-
sa, por lo que en algunas ocasiones en que la demo-
lición y nueva ejecución sea muy complicada, no ten-
dremos más remedio que abandonarla y tratar de
reparar la lesión directamente. Entonces debemos
pensar que corremos el peligro de que nos vuelva a
aparecer.
En algunos casos de cerramientos antiguos, con
imposibilidad de su refacción, puede ser recomenda-
ble su conservación, dejando incluso la grieta mani-
fiesta aunque obstruida con algún tipo de argamasa
o sellante que le permita recuperar su función de ce-
rramiento; ello, naturalmente, una vez que hayamos
hecho desaparecer la causa que la originaba.
En cualquier caso, sí quiero advertir sobre la inu-
tilidad de una solución chapucera, aunque desgra-
ciadamente extendida para las fábricas guarnecidas,
enfoscadas o revocadas. Me refiero a la costumbre
de sanear la grieta a base de picar el enfoscado en
un entorno de unos 10 o 15 cms. en toda su longi-
tud y aplicar un nuevo mortero con una venda o ma-
lla metálica. La solución resulta inútil por varias ra-
zones (Fig. 25).
- En primer lugar, el espesor de un mortero ar-
mado con venda (unos 2 cms. como máximo) no es
suficiente para hacer frente a un cerramiento roto con
un espesor, por lo menos, 3 veces mayor.
- Por otra parte, la venda puede ser efectiva só-
lo en el mortero protector y en su ancho, lo que hará
26 b. Sellado.
que la lesión se transmita a los bordes de la venda,
rompiendo el mortero por esos puntos.
En realidad, es como si quisiéramos reparar el ja-
una grieta ya no es una sola unidad constructiva, si- rrón de porcelana mencionado antes mediante un pa-
no dos unidades separadas por la abertura, lo que ha- pel adhesivo superficial.
ce que su movilidad higrotérmica o elástica sea inde- Así pues, necha esta salvedad inicial, pasemos a
pendiente. Ello es importante por la sencilla razón de mencionar las distintas reparaciones alternativas a la
que dos unidades, aunque las trabemos entre si de un demolición.
modo más o menos superficial o puntual, siguen sien- Debemos contemplar siempre tres actuaciones, las
do dos unidades, por lo que no habremos consegui- dos primeras simultáneas; la sustitución de los ele-
do eliminar la lesión que. más tarde o más temprano, mentos unitarios rotos, el relleno con argamasa y el
volverá a aparecer. Si queremos anularla, no tendre- trasdosado. En función del tipo de fábrica y el mate-
mos más remedio que recuperar la unidad de la uni- rial, tenemos.
capitulo ¡I. Patología e intervención en cerramientos y acaoados

4.2.1 En fábricas de ladrillo (Fig. 26)


Todos los ladrillos rotos deben ser cambiados. Para
ello, se deben eliminar y sanear las piezas afectadas
y las necesarias de su entorno para facilitar el traba-
jo, asegurando el enjarje en toda la lesión y. por tan-
to, la integridad recuperada en la unidad constructi-
va. Si es necesario, se actuará por los dos lados del
cerramiento, sobre todo si su espesor supera el pie.
Cuando sólo se pueda actuar por un lateral y cuando
el espesor supere los dos pies, en función de las difi-
cultades del trabajo, podremos reducir la sustitución
de piezas al primer pie de espesor.
Naturalmente, los nuevos ladrillos tienen que ser
iguales a los existentes, lo que a veces dificulta la ope-
27. Reparación de manipostería.
ración, sobre todo en caso de ladrillo visto y en fábri-
cas antiguas (sobre todo con ladrillos de tejar). En cual-
quier caso, en mi opinión no ofrece ninguna garantía
la costumbre, algo extendida, de realizar un mortero adición de resinas epoxi para mejorar su adherencia
con polvo de ladrillo viejo y cemento y aplicarlo sobre a las paredes. Si la separación es grande, la intro-
los restos del antiguo, ya que no recuperamos la inte- ducción del mortero se realiza con jeringas especia-
gridad del cerramiento y sólo estamos tapando la grie- les a presión. Si es escasa, será necesario abrir unos
ta, por lo que podemos asegurar que volverá a salir. orificios separados entre sí de 20 a 40 oms., según el
La colocación de los nuevos ladrillos se debe ha- sistema, para facilitar, tanto la limpieza con aire a pre-
cer recibiéndolos en toda su superficie con mortero sión, como la inyección. Esta finalizará cuando la le-
igual al del resto de la fábrica (de cal o de cemento, chada rebose por ambos lados de la grieta. Finalmente,
según el caso) aunque conviene que tenga cierta plas- procederemos a un retacado y repaso superficial que,
ticidad para que se acomode bien a las juntas y cier- en algunas ocasiones necesitará la aplicación de un
to componente expansivo, en algunos casos, para elastómero, como si de una junta de dilatación se tra-
asegurar el relleno. Para ello se puede recurrir a la in- tase, sobre todo si no hemos podido asegurar la es-
yección posterior dentro de las juntas y retacado su- tabilidad de la lesión.
perficial. En cualquier caso, es una operación algo de- Cuando la fábrica de ladrillo esté protegida con
licada que debe ser llevada a cabo por un buen oficial. enfoscado o revoco, habrá que sanearlo todo a lo
Cuando no haya habido rotura de ladrillos y se tra- largo de la lesión, rehaciéndolo hasta líneas modu-
te simplemente de una reparación entre estos y la ar- lares a los efectos de disimular lo más posible la re-
gamasa (caso de grietas horizontales por los tende- paración y, por supuesto, sin necesidad de introdu-
les, por ejemplo) bastará con limitarse al relleno de la cir vendas o mallas sobre la grieta, que no tienen
fábrica. Para ello, procederemos a sanear la grieta con ningún efecto real.
punzón hasta eliminar todo el resto de mortero anti-
guo. Entonces procedemos a inyectar el nuevo mor- 4.2.2 En fábricas de bloque
tero, con las características mencionadas en el pá- Si se trata de bloque aligerado, la solución correc-
rrafo anterior, tratando que penetre en todo el espesor ta será la sustitución de las piezas rotas, de un modo
de la fábrica, por lo que deberemos actuar por los dos similar a como indicábamos en los ladrillos, con pos-
lados. Finalmente retacamos con mortero superficial- terior relleno y retacado de las juntas. Si no hay pie-
mente. zas rotas (caso muy poco frecuente) no será fácil el
Por último, en caso de que no intentemos restituir saneado y relleno de las juntas, debido al poco espe-
el aspecto original y no nos importe que la grieta que- sor de las paredes, por lo que tendremos que repo-
de manifiesta (caso de algunas restauraciones de edi- ner los bloques afectados por la lesión.
ficios antiguos) podemos rellenar directamente. Para En el caso de fábrica de bloques macizos, el pro-
ello hay que limpiar lo mejor posible el interior y los la- ceso será el mismo, aunque ahora resultará más fácil
bios de ia grieta, lo que; en función de la dimensión el relleno de las juntas con mortero.
de la misma, haremos manualmente o mediante aire En cuanto al enfoscado o revoco superficial, ha-
a presión. Para la inyección del mortero deberemos remos lo mismo que ha quedado mencionado en el
utilizar uno muy fluido, con componente expansivo y apartado anterior.
renal. Grietas en fachadas ytatuques de farinca

116 quitamos a la habitación. Para reducir al máximo es-


te espesor se puede demoler el acabado anterior sea
guarnecido o alicatado. Es importante la sujeción con
-rj rastreles, ya que es la única manera de darle conti-
II II = J
I nuidad a la superficie de placas de cartón-yeso. De lo
T T
contrario, si las recibimos con pegotes de mortero, se
J L " z:
1i
5
acabarán abriendo las uniones. Sobre las nuevas pla-
cas reproducimos el acabado deseado.

m
En los casos de fachadas enfoscadas o revoca-

1 5
<=Z>
das, un tradosado exterior muy simple consiste en su
forro con un panel aislante de espuma, poliestireno
expandido normalmente, anclado con piezas espe-
ciales, a las que se sujeta posteriormente un revoco
APERTURA DE JUNTA monocapa armado con malla de fibra de vidrio o po-
liéster. Se trata de una solución comercial conocida
28. Juntas de retracción.
que permite, al mismo tiempo, la mejora del coefi-
ciente de aislamiento de la fachada, y sobre todo, la
anulación de los posibles puentes térmicos provoca-
4.2.3 En maniposterías (Fig. 27) dos por la estructura. En cualquier caso, el nuevo aca-
En este tipo de fábricas, sobre todo en las de can- bado exterior queda independiente del antiguo, tanto
to rodado, no suelen ser frecuentes las roturas de los a los efectos de las grietas existentes como de los
elementos unitarios, por lo que la reparación alterna- nuevos movimientos por variaciones térmicas.
tiva consistirá en el relleno o rehenchido. Para ello, y
teniendo en cuenta el importante espesor de este ti- 4.2.5 Juntas de retracción
po de cerramientos, deberemos proceder de un mo- Cuando el diagnóstico lo indique necesario, al re-
do similar a como hemos indicado para las inyeccio- parar el efecto deberemos introducir las juntas de re-
nes de fábricas de ladrillo de gran espesor, es decir, tracción requeridas. Para ello, podemos seguir dos ca-
un saneado profundo de la grieta, incluso con aire a minos. Por un lado, aprovechar la misma grieta y marcar
presión, y la abertura de orificios para facilitar la lim- la junta en esa zona, o, por otro, sobre todo si las grie-
pieza e inyección de la lechada. Si es posible, debe- tas son poco definidas o múltiples, marcar la junta de
remos reponer los mampuestos superficiales que, al retracción independientemente de la lesión. En el pri-
quitarlos, nos facilitarán el saneado de la lesión. mer caso, deberemos demoler el entorno de la grieta y
Naturalmente, este tipo de actuaciones son inde- rehacer la fábrica con la junta incorporada, marcando
pendientes, y posiblemente complementarias de los zun- los nuevos bordes y sellando con elastómero, como
chados, muy frecuentes en este tipo de fábricas cuan- una junta de dilatación convencional (Fig. 28). En el se-
do tienen una misión portante y hace falta su consolidación, gundo, podremos recurrir a cortar la fábrica existente
cosidos que se contemplan en otros capítulos. por medios mecánicos desde el exterior y en todo su
espesor procediendo posteriormente a su sellado.
4.2.4 Trasdosados
En ocasiones, la reparación por demolición o por
sustitución individual de piezas rotas no resulta ren-
5. Prevención
table, sobre todo cuando se trata de muros en blo-
ques enfoscados o guarnecidos sin ningún carácter Vistos los distintos procesos patológicos que pro-
histórico o artístico. Entonces, la solución más prác- ducen las grietas de los cerramientos de fábrica, co-
tica es dejar la lesión oculta y trasdosar el elemento nocidas sus causas, tanto directas como indirectas y
constructivo con algún sistema que ofrezca la sufi- planteadas las actuaciones de reparación, tanto de la
ciente integridad y que pueda funcionar de algún mo- causa como del efecto, creo que estamos en la me-
do independientemente del lesionado. Podemos in- jor situación para establecer las medidas de preven-
dicar dos sistemas relativamente usuales, uno para ción necesarias, entendiendo por tales todas aquellas
tabiques y otro para muros exteriores. que debemos tomar en proyecto y ejecución, así co-
En el caso de tabiques, resulta sencillo trasdosar mo en mantenimiento, para evitar que se originen y
con placa de cartón-yeso, recibido con rastreles, lo desarrollen los procesos patológicos conducentes a
que supone un espesor total de unos 3 cms. que le la aparición de esas lesiones.
capituic II Patología e intervención en cerramientos y acabados

Como se entenderá, tales medidas de prevención


estarán orientadas a anular las causas indirectas que
tienen su origen en alguna de las etapas del proceso I

de edificación (proyecto, fabricación, ejecución y man-
tenimiento) y que, como sabemos, son imprescindibles
I
para que, al aparecer la causa directa, den comienzo I ="T
al proceso patológico. Así pues, para establecer dichas I —P
i

medidas, lo mejor será recorrer esas etapas y, concre- I


tamente, la de proyecto y la de ejecución, y en cada I
I
una de ellas ver los diferentes tipos de cerramientos se-
I
gún los planteados en el apartado 2, tipología. —T

1
5.1 Medidas de proyecto
1-
Estarán orientadas a controlar los posibles movi- 1

mientos de cada una de las unidades del edificio pa-


29. Independencia fachada-estructura.
ra evitar que provoquen los temidos esfuerzos de trac-
ción locales. Podemos agruparlos en varios tipos:

5.1.1 Limitación de deformaciones estructurales


elásticas 5.1.2 Independencia
Por un lado, las flechas de vigas y forjados que Entre estructura y cerramiento o entre dos cerra-
puedan afectar a cerramientos de fábrica, bien por ac- mientos suficientemente distintos. La primera será
tuar de sustentación, bien por ejercer esfuerzos ver- obligada en encuentros que no necesiten contacto di-
ticales. Ya ha quedado reflejada la importancia de li- recto, como elementos estructurales verticales y ta-
mitar dichas flechas en valores absolutos y no relativos biques o muros. Dicha independencia se debe ase-
como establece la normativa estructural, ya que la gurar constructivamente dejando una holgura mínima
grieta se produce a partir de un determinado asiento, de 10 mm e introduciendo un elemento plástico en di-
independiente de la luz del forjado o viga. cho espacio, como poliestireno expandido o similar.
La segunda nos llevará a las juntas de retracción, que
En general, considero que para elementos hori-
veremos más adelante.
zontales sustentantes de cerramiento de fábrica no
estabilizados por cargas verticales (elementos no por- Un caso singular ya comentado es el de la inde-
tantes) las flechas deben limitarse a 8 mm en valor ab- pendencia entre cerramiento de fachada y estructura
soluto. Si se supera este valor, los tabiques y muros debido a los diferentes cambios dimensionales por
de ladrillo o de bloque pueden sufrir la lesión por asien- efecto de la temperatura entre una y otra. Mi propuesta
to en arco de descarga o en hilada horizontal. En los consiste en tratar la fachada de fábrica no portante
forjados hay que considerar además la flecha acu- como si fuera un muro cortina, con posible estructu-
mulada de la viga sobre la que apoyan. ra auxiliar de apoyo conectada a la del edificio, aun-
que con independencia de movimientos, lo que se
Por otro lado tenemos los pandeos de elementos
puede consegir por diversos sistemas, unos comer-
verticales, sobre todo pilares, que pueden introducir
cializados (anclajes) otros de diseño específico.(Fig.29).
empujes horizontales a cerramientos próximos.
También podemos recurrir a la fábrica armada por ten-
Normalmente, la solución en este caso pasará por la
deles que le confiere resistencia a flexión y tracción y
independencia entre estructura y cerramiento. Pero
permite reducir los puntos de apoyo, además de re-
cuando ésta sea problemática, como es el caso del
sistir mejor el empuje del viento. En cualquier caso,
encuentro a tope entre cerramiento y pilar, también
hay que huir de la interdependencia que supone en-
tendremos que limitar su movimiento, límite que asi-
castrar la estructura en el cerramiento de fachada a
mismo deberá estar cifrado en valor absoluto. Podemos
base de debilitar éste. Entonces, no sólo no conse-
hablar aquí de 5 mm
guimos la independencia de movimientos sino que fa-
Por extensión, deberemos limitar cualquier posible cilitamos las zonas por donde puede producirse la le-
deformación elástica de un elemento estructural cuan- sión (las debilitadas por disminución de la sección).
do esté en contacto con un elemento de cerramiento Ver también figura 19.
no portante y su independencia sea problemática.
Por último, y para evitar fisuras en techos de for- En el caso en que el cerramiento de fachada que-
jados de viguetas, correcta rigidización de estos, tan de enrasado por el exterior con el plano de la estruc-
to con zuncho perimetral como con armadura trans- tura, cada paño de fábrica queda encajado entre los
versal. elementos estructurales que lo rodean perimetral-
Tema I. Gnelas en techadas y tabiques de fábrica

Asimismo, cuanto mayor sea el tamaño del ele-


mento unitario de la fábrica, menor será el que he-
mos llamado coeficiente de adherencia de la misma,
por lo que será mas débil también la capacidad me-
cánica del cerramiento. De ahí que en las fábricas de
bloque sea conveniente su armado que constituye
un entramado rigidizador que mejora su capacidad.
También mejora la integridad de las fachadas de la-
drillo su armado por tendeles como quedó indicado.
En este sentido conviene advertir sobre la reciente
costumbre de realizar tabiques con rasillones o la-
drillos de un solo hueco y de gran tamaño. Su coe-
ficiente de adherencia resulta enormemente dismi-
30. Cerramiento enrasado con estructura. nuido. En cualquier caso, es sabido que los quiebros
en el plano confieren mayor rigidez al conjunto del
cerramiento.
En los cerramientos de hormigón armado debe-
mos analizar todos los posibles esfuerzos que vayan
a sufrir y armarlos en consecuencia. Caso especial
son los elementos prefabricados, donde debemos
pensar en los esfuerzos por manipulación, y armarlos
adecuadamente.
b) En cuanto a su espesor, estará en función del
tipo de elemento unitario y del tipo de fábrica, por lo
que resultará condicionante de la capacidad mecáni-
ca del párrafo anterior. Pero me interesa destacar aquí,
sobre todo, las variaciones de dicho espesor a lo lar-
go de la unidad constructiva; concretamente, rozas
para instalaciones en tabiques, y encastres de es-
tructura en fachadas.
En lo que se refiere a las rozas, las medidas de
31. Limitaciones de rozas. prevención son más bien de ejecución, aunque a ni-
vel de proyecto se pueden establecer condiciones
precisas en el pliego, y las NTE marcan también unas
pautas constructivas bastante claras y, en cualquier
mente, por lo que la independencia debe seguir la vía
caso, hay que evitar disminuir la sección del tabique
de la holgura mencionada antes introduciendo en los
en más de un 50%, lo que nos condicionará el tipo
laterales verticales elementos plásticos que marquen
esa independencia y permitan el libre movimiento de de fábrica a utilizar en paredes que vayan a conte-
ambos, resaltando finalmente la junta constructiva al ner instalaciones. Esta condición ya nos elimina los
exterior (Fig. 30). tabiques de ladrillo hueco sencillo ya que al rozar-
los, por su constitución, siempre perdemos más del
50% del espesor (Fig. 31).
5.1.3 Integridad del propio cerramiento
Se refiere, por un lado, a la capacidad mecánica En lo que he llamado encastres de estructura en
de la fábrica, por otro, a su espesor y, por último, a la fachadas, o simple disminución del espesor de éstas
limitación de sus variaciones dimensionales por cam- para su apoyo en la estructura, ya hemos comproba-
bios higrotérmicos. do el daño que supone para su integridad cuando pre-
a) En cuanto al primer punto (capacidad mecáni- tendemos darle un aspecto exterior de continuidad
ca) no cabe duda que cuanto mayor sea ésta, menor superficial, además de los problemas de puentes tér-
la posibilidad de fractura, aunque nos refiramos sólo micos, prácticamente inevitables.
a la resistencia a compresión. En cualquier caso, di- Mi propuesta ya figura en párrafos anteriores y con-
cha capacidad debe ir en relación con las dimensio- siste en no debilitar el cerramiento de fachada en nin-
nes de la unidad en cuestión. Las NTE de fábricas de gún punto, sino que, por el contrario, darle continui-
ladrillo dan las limitaciones correspondientes a cada dad a su espesor, haciéndolo pasante por delante de
tipo de fábrica y las sugerencias de refuerzos pun- la estructura y, en todo caso, incorporarle una es-
tuales mediante pilastras u otros elementos. tructura auxiliar que, además de permitir su cuelgue
32. Refuerzo en parte de forjado para facilitar el 1/2 pie pasante.

de la estructura principal, pueda darle rigidez, o ar-


mando la fábrica de ladrillos por tendeles.
Incluso, sin necesidad de Ir a una estructura auxi-
liar, podemos buscar el hacer la fachada pasante sin
más que añadir unos elementos horizontales de apo-
yo, con vuelo suficiente según su espesor (Fig. 32).
Esta solución, limitando convenientemente las flechas
de la estructura, resulta perfectamente funcional.
c) Finalmente, en lo que afecta a su variación di-
mensional por cambios higrotérmicos, se tratará de
seleccionar el material constitutivo de la fábrica en
función de su situación. Así, en los cerramientos de
fachada, y sobre todo en sus coronaciones, debere-
mos preferir materiales con un coeficiente de dilata-
ción potencial lo más bajo posible, y con un coefi-
ciente de absorción también bajo que conllevará unas
variaciones dimensionales pequeñas por cambio de
humedad; todo ello en función de los cuadros 1 y 2
ya mencionados.

5.1.4 Introducción de juntas de retracción


A pesar de seleccionar materiales poco porosos y
de bajos coeficientes de dilatación potencial, no po-
dremos evitar que sufran variaciones dimensionales,
por lo que deberemos prever juntas de retracción adi-
cionales a las de dilatación de la estructura, sobre to-
do en fachadas con grandes variaciones de tempera-
tura (Este, Oeste, sobre todo) y de diseño continuo,
es decir con pocos quiebros y huecos pequeños o
inexistentes. La distancia entre ellas estará en función
de una serie de factores entre los que cabe destacar,
como más importantes:
-Coeficiente de dilatación de la fábrica
-Orientación de la fachada
-Diseño del propio cerramiento (cuanto más liso y
ciego, más necesidad de juntas de retracción, por ma-
yor continuidad).
En cualquier caso, y según ha quedado mencio-
Tema I Gnetas en faenadas y tioiques de 'áonca

nado más arriba, deberemos procurar que la dilata- primero el paño continuo y después el perpendicular,
ción no supere nunca los 5 mm. en horizontal. Una lo que no da traba suficiente y facilita la lesión.
medida prudente seria dejar una junta de retracción
de fachada de fábrica entre cada dos de dilatación de 5.2.2 Rozas correctamente ejecutadas
la estructura, con lo que tendremos una distancia en- Aunque ya se ha mencionado este punto en apar-
tre juntas aproximada entre 15 y 18 mts. tados anteriores, veámoslo de un modo global. Para
ello consideramos dos aspectos básicos; situación y
5.2 Medidas de ejecución tamaño.
a) En cuanto a su situación, la normativa NTE su-
Al igual que en el proyecto, y como complemento giere que las horizontales vayan lo más altas posible,
de las medidas sugeridas para él, debemos estable- con el objeto de no facilitar el despegue del cerramiento
cer una serie de prevenciones en la ejecución para en arco de descarga cuando le falte el asiento, y que
anular en lo posible las causas indirectas de los pro- las verticales vayan de arriba a abajo y por el sitio ne-
cesos patológicos que conducen a las grietas. cesario hasta llegar al punto deseado, alejándose un
Siguiendo un camino similar al utilizado para estudiar mínimo de los bordes (25 cms. en ladrillos huecos).
Asimismo, no se recomiendan rozas curvas que pue-
la tipología del punto 2.2.4. podemos agrupar estas
dan favorecer la aparición de los arcos de descarga.
medidas en lo siguientes tipos.
b) En cuanto al tamaño, ya quedó mencionado que
5.2.1 Traba suficiente no deben degollar el espesor del cerramiento en más
Las obras de fábrica están basadas en la traba en- de un 50%, en función del tipo de fábrica. En el caso
tre sus elementos unitarios que conforma el aparejo de ladrillo hueco, ello obliga a utilizar hueco doble cuan-
de las mismas. Ello nos da, como sabemos, el en- do debamos hacer rozas, incluso para electricidad, pro-
curando no romper nunca más de un canuto. Tampoco
ganche entre elementos, que nos definirá el coeficiente
deberemos hacer rozas en los tabiques de placas ma-
de adherencia de la fábrica en función de la superfi-
cizas de escayola, ya que resulta muy posible que que-
cie de los elementos unitarios que se hallan en con-
den partidas. En general, siempre que sea posible, apro-
tacto con otros y, en definitiva, la capacidad mecáni-
vecharemos los huecos del cerramiento para los
ca del conjunto y, por tanto, su integridad. conductos. Así, en bloques de mortero podemos apro-
Dicha traba debe ser cuidada y uniforme, en ge- vechar la continuidad vertical de los huecos para llevar
neral, pero existen tres puntos donde debemos poner los conductos sin necesidad de rozar.
especial cuidado en su ejecución (Fig. 33).
a) Por un lado, las interrupciones en la ejecución
de un cerramiento que, al continuarse varios días o Bibliografía
semanas más tarde, debe mantener la misma traba
JOHN TRILL Y JACK T. BOWYER, "El caso de la esquina rota y otros
que en el resto. Para ello la única solución es dejar
problemas constructivos", Ed. G.G.. 1981.
adarajas y endejas en todas las hiladas, y no en unas
"Curso de mecánica y Tecnología en los edificios antiguos", C O A M . ,
cuantas en toda su altura, como tienen costumbre de 1987.
hacer algunos albañiles para evitar la complicación. "Curso de rehabilitación" (10 tomos). C.O.A.M., 1987.
El resultado es un punto más débil que facilita la apa- H. J . ELDRIGE, "Defectos comunes". Ed. G. G., 1982.
rición de la lesión. T. STAMBOLOV Y J . R. J . VAN ASPEREN DE BOER. "El detenoro y
b) Por otro, las esquinas, que cuando no son a 90° la conservación de materiales porosos de construcción en monu-
mentos", U.N.A.M.. 1984,
existe la tendencia a ejecutarlas a inglete introduciendo
LYALL ADDLESON. "Fallos en los edificios", Consejo General de
grapas metálicas en algunas hiladas. El resultado es
Apagadores y Arq Técnicos, 1982.
la ejecución de dos unidades de fábrica independientes
"Lesiones en los edificios: Síntomas, causas, reparación" (2 tomos)
a ambos lados del quiebro, ya que las grapas metáli- CEAC, 198!.
cas, incluso puestas en todas las hiladas, no son su- HANS PRÓPSTER, "Lesiones de solados y alicatados" (2 tomos), C E -
ficientes para trabar el conjunto. Se necesita la tra- AC. 1980.
bazón efectiva de los propios ladrillos en todas las FRIEDRICH EICHLER. 'Patología de la Construcción", Ed Blume,
hiladas para que actúe como una sola unidad. Para 1979.
ello podemos recurrir, bien a los ladrillos aplantillados, ETSA Valladolid, Dep da Construcción, "Patología de fachadas ur-
bien a dejar dientes a lo largo de la esquina, en fun- banas", Universidad de Valladolid. 1987.
ción del ángulo. A. BAGTIONIY G. GUARNEIRO, "La rehabilitación de edificios urba-
nos", Ed. G. G., 1988.
c) Por último los encuentros entre cerramientos, GABRIEL LÓPEZ COLLADO. "Ruinas en Construcciones antiguas",
más o menos perpendiculares. También en este caso MOPU, 1976.
necesitamos traba de adarajas y endejas en todas las JUAN MONJO CARRIO. "Patología de cerramientos y acabados ar-
hiladas, cuando en la realidad es muy corriente hacer quitectónicos", Ed. Muniila-Leria.
cap/lulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

121

2. Prevención del agrietamiento de fachadas


con la fábrica armada
a
Josép M. Adell Argües
Dr. Arquitecto
Profesor Titular E.T.S.A. - U.P.M.

los dedos de una sola mano. Ello ha lievado a diseñar


1. Introducción
la pieza con la proporción del ancho máximo con que
Al disponer armaduras de tendel tipo cercha [1.] se agarra, mitad del largo.
en la fábrica, además de obtener una Arquitectura Estas razones devenidas de la técnica de ejecu-
sin fisuras, también es posible abrir nuevas posibi- ción de la albañilería, que todavía se mantienen, no
lidades arquitectónicas a la obra de fábrica, tanto impiden sin embargo, poder diferenciar (entre otros
desde el punto de vista Técnico como Formal. Y en la muchos) tres tamaños básicos que conviene desta-
mayoría de los casos, éstos se obtienen con el míni- car, referidos a sus dimensiones modulares de 20, 25
mo armado requerido para controlar la fisuración. ó 30cm de longitud, con sus correspondientes de 10,
Todo ello es posible gracias al Nuevo material 12,5 y 15cm de ancho.
compuesto creado in situ con La fábrica armada, que Ello es importante por cuanto los formatos men-
al mismo tiempo que economiza la construcción de cionados están ligados a determinadas zonas geo-
la Arquitectura, incrementa la calidad de la edifica- gráficas desde hace muchos años, y la edificación en
ción. general, y más en concreto la albañilería se basa en
La fachada contemporánea con sus versiones estas medidas tradicionales en cada país. Así tene-
"ACW" y "DCW" aprovecha las ventajas de La Fábrica mos que el llamado formato Catalán (DIN) de 30x15
Armada, para ofrecer las soluciones más idóneas de que rige en el NorEste de la península, mientras que
cerramientos de hojas, o de muros de carga, en fun- el llamado formato Castellano 25x12,5 (Métrico) se en-
ción de la clase de edificación que se proyecte, y de cuentra a lo largo del resto del país. Por lo mismo con-
los tipos de materiales de fábrica que se requieran. viene conocer que en varios países de CentroEuropa
es el formato flamenco o anglosajón de 20x10 el que
se utiliza habitualmente.
2. L o s componentes de la fábrica armada Este hecho que desde muy antiguo ha condicio-
nado los gruesos de las fábricas al organizarse con
2.1 Las piezas múltiplos de las piezas locales, se hace hoy día mu-
Los ladrillos son los materiales de fábrica más tra- cho más crítico, cuando habitualmente por razones
dicionales. de economía de material y especialmente de mano de
Sus tamaños y proporciones han ido variando con obra, el aparejo utilizado es a soga (o común como
el tiemoo y las regiones geográficas, pero en su con- lo nombran en los países sin tradición como
junto han evolucionado sensiblemente poco a través Norteamérica), ya que las cualidades resistentes y es-
de la historia, si ROS atenemos a sus características tructurales de una fábrica de 1/2 pie de 10, ó 15cm
formales, dependientes de la articulación a mano por de ancho nada tienen que ver, particularmente en lo
el albañil en su puesta en obra, de manera que su an- que a esbelteces y posibles apoyos en cantos de for-
cho (y peso) viene condicionado por la aprensión con jado se refiere.
Tema 2. Prevención del agrietamiento de tachadas con la fábrica armada

durante la cocción, dejando poros cerrados capaces


de aislar y disminuir el peso de las piezas.
Las ventajas que de ello se derivan, son el in-
cremento del aislamiento térmico, y su mayor lige-
reza que facilita la manipulación de grandes for-
matos, sin perderse con ello las buenas cualidades
resistentes de la cerámica. Con los bloques se pue-
de diseñar muros de carga homogéneos de una
sola hoja.
Por otra parte, y para ser competitivos en la pues-
ta en obra, se han estandarizado los formatos en la
mayoría de los países, con un frente de 30cm de lar-
go y 19 de alto, vanándose el grueso entre 14,19,24
1 . Bloque cerámico aligerado Termoarcilla y 29cm, lo que permite barrer todo el campo de apli-
de 3 0 x 2 4 x 1 9 c m . caciones resistentes y aislantes, con una sola hoja.
Se incrementa la eficiencia de puesta en obra, ma-
chiembrando las llagas, lo que sólo obliga a colocar
Bajo estas premisas conviene dejar bien sentado, mortero en los tendeles, aplicándose en dos bandas
que algunas de las diferencias constructivas que se para romper el puente térmico.
aprecian entre los diversos países europeos, tienen su Las comparaciones que puedan establecerse en-
razón de ser en las posibilidades constructivas de sus tre las diversas patentes de BCA, por lo que a su di-
piezas, y por lo mismo, que en ocasiones trasladar las mensión se refiere, son aquí mucho más objetivas que
formas de organizar las fábricas de unos lugares a en el caso de los ladrillos. Sin embargo nos encon-
otros, pueden salirse de la lógica constructiva que los tramos ahora con que el diseño específico de las cel-
materiales posibilitan en los distintos lugares. das de cada patente tienen efectos diversos, lo que
Como es sabido la altura de los ladrillos suele os- obliga a ensayar en cada lugar las combinaciones más
cilar entre 1/6 y 1/4 de su longitud, descontando los usuales con fábrica armada.
gruesos de junta.
Desde el s.XIX la colocación de las piezas en las 2.1.2 Otros materiales de fábrica
fábricas de ladrillo se hace con el mínimo mortero, es- No abundaremos en este texto sobre las cualida-
tando diseñadas contando con el grueso de las jun- des de otros materiales de fábrica, como:
tas, que son suficientemente delgadas (o gruesas) pa- Otros Materiales Cerámicos,
ra permitir la colocación, contando con la falta de Bloques de Hormigón Hueco,
exactitud debida a la cocción cerámica. Bloques de Arcilla Expandida
Respecto a la fabricación de los ladrillos, de barro Bloque de Mortero Celular curados en
cocido, conviene decir que también aquí los tamaños Autoclave, etc..
locales influyen decisivamente en las características Cada uno de ellos tienen características propias
de las piezas del lugar, por cuanto los procesos de idóneas para determinados campos de aplicación,
prensado o extrusionado, secado, cocción, empa- donde son competitivos, especialmente con la cola-
quetado, etc.. dependen claramente del tipo y tama- boración de la fábrica armada.
ño de las piezas. Por lo que nuevamente, debemos
acompañar el factor dimensional local a la hora de
comparar las cualidades de unas piezas con otras. 2.2 El Mortero

2.2.1 Mortero bastardo


2.1.1 Bloques de cerámica aligerada Tradicionalmente el mortero o la argamasa se ha
La evolución de las técnicas actuales junto con el elaborado con diversos componentes de mezclas de
trasvase económico y cultural existente entre los di- puzolanas y cales, los morteros bastardos utilizados
versos países europeos, ha permitido desarrollar los en juntas gruesas (2cm o más) dan una cierta plasti-
Bloques de Cerámica Aligerada, con patentes propias cidad a las fábricas de albañilería, permitiendo asu-
en cada lugar, como la Termoarcilla en nuestro país mir por un lado las faltas de exactitud dimensional de
[2.j(Fig.1) los ladrillos rústicos, y por otro las deformaciones de
Estos nuevos materiales se obtienen por la mezcla la fábrica. Contribuyendo a evitar su agrietamiento, al
de arcilla y poliestireno expandido, que se consume asumir deformaciones plásticas.
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

Hoy en día se hacen mezclas para obtener el co- del mortero y la trabazón obtenida con el aparejado
lorido blanquecino que daba la cal a la argamasa, lo de las piezas, contribuyen a crear una unidad de fá-
que actualmente suele obtenerse con diversas pro- brica estable.
porciones de cementos blanco y gris, o bien con adi- Para generar la trabazón, las piezas se superpo-
tivos colorantes. nen cuidando la discontinuidad vertical de las llagas,
lo que viene dado de una manera regular por el apa-
2.2.2 Mortero de cemento rejo escogido.
Los morteros actuales suelen ser de cemento, va- Todos los tendeles de las fábricas están a nivel por
riando su proporción de arena en función de las re- razones tectónicas, constructivas y estructurales.
sistencias exigidas a la fábrica, o del tipo de junta, fi- La obra de fábrica tradicional tiene resistencia a
nura del árido... compresión sobrada respecto de la capacidad de los
Conviene recordar que para cada tipo de fábrica materiales que la componen. Su amplio grueso per-
hay un mortero adecuado, con una determinada com- mite su estabilidad sin llegar a agotar su capacidad
posición y resistencia, muchas veces función de las resistente. Su comportamiento es plástico si se acep-
características resistentes de las piezas. ta su agrietamiento, lo que es habitual en la arquitec-
Teniendo en cuenta las consideraciones previas, el tura tradicional, sin que ello suela suponer un inmi-
tipo de Mortero para la fábrica armada debe ser un nente peligro de ruina, sino una simple reacomodación,
M-80, por cuanto se requiere una resistencia mínima en razón de la imposibilidad que tienen sus compo-
para conseguir la adherencia entre el mortero y la ar- nentes de soportar tracciones.
madura para transmitir los esfuerzos apropiadamen- En este siglo el grueso de la albañilería ha llegado
te, especialmente en los solapes. a su mínima dimensión, está referida al ancho de la
Los gruesos de las juntas se estipulan hoy día en- pieza existente en el lugar y en cada país.
tre 0,8 y 1,5cm de grueso, aplicándose de 1,0 cm. có- Por otra parte es común combinar la cerámica con
mo término medio. materiales, estructuras de acero u hormigón arma-
Nuevamente hay que tener aquí en cuenta que di- do, que dada su capacidad a flexión, en ocasiones
cho grueso, particularmente con los ladrillos, también fuerzan al agrietamiento de la albañilería, por ser rí-
está relacionado con el tamaño de la pieza utilizada y gida.
su dimensión modular. Además las exigencias de calidad actuales no per-
En términos generales, el afinar hacia menos el miten aceptar su agrietamiento, ni siquiera la fisura-
grueso de junta va en beneficio del incremento de la ción sin llegar a ser visible.
resistencia de la fábrica y sus características propias, Los problemas se incrementan cuando a lo ante-
disminuyendo además los puentes térmicos y las eflo- rior se suman situaciones de esbeltez, momentos fue-
rescencias que el mortero favorece. ra del plano del muro, etc., que enseguida se dan de-
Se aconseja utilizar morteros preparados, para ga- bido a la delgadez de la fábrica.
rantizar su resistencia y características plásticas sin Todo ello lleva a que aún habiendo mejorado sen-
añadir más agua de la debida. siblemente los componentes de la albañilería, su pa-
tología ha aumentado (Fig.2)
2.2.3 Cemento- cola
Esta variante de morteros de cemento u otros pro-
2.4 Las Armaduras para la Fábrica:
ductos químicos, tiene, la particularidad de requerir
tipos y cualidades
muy poco grueso, pudiéndose aplicar a juntas de só-
lo 2 ó 3mm de grueso. Para ello se requiere que las En función de la elaboración prefabricada de las
piezas utilizadas sean de extremada planeidad y exac- armaduras cabe la siguiente clasificación:
tas dimensiones, lo que para la cerámica solamente
sería aplicable a ladrillos prensados. a) Armaduras longitudinales: barras o redondos
Las barras más utilizadas en la construcción osci-
2.3 La Fábrica tradicional lan entre los diámetros 6 y 20mm.
Por su forma lineal ofrecen cierta dificultad para
Por motivo de la acción de la gravedad, la albañi- colocarse en una ubicación precisa sobre el tendel,
lería adquiriría estabilidad con el simple hecho de api- por el albañil, ya que éste tiene que restregar las pie-
lar adecuadamente las piezas. Es obvio, sin embar- zas sobre el mortero, descolocando involuntariamen-
go, que acciones horizontales como el simple viento, te los redondos. Por otra parte, su diámetro dificulta
son capaces de impedirlo sino fuera porque el agarre hacer juntas de grueso normal.
Tema ?. Prevención del agrietamiento de faenadas con la iábnca armada

124

2 a) Inicio de una grieta en el antepe-


cho de un hueco con diferencias de ten-
sión.

2 b) Grietas en la fábrica por deforma- 3) Diversos tipos de armaduras: a) Barra b) Malla estirada
ciones estructurales en un cerramiento c) Rentangular tipo escalera d) Triangular tipo cercha, alambre
rígido. e) Triangular tipo cercha, pletina.

Las organizaciones hechas por un ferrallista Separaciones entre alambres 50, 100, 150, 200,
con barras, tampoco suelen adaptarse al grueso del 250, 280mm
tendel. 1-Para juntas de mortero normales:
Alambres longitudinales de 4 ó 5mm. de diáme-
b) Armaduras superficiales o de tendel tro.
Dado lo delgado que es el tendel es preciso utili- Su conformación triangulada la hace indeformable
zar alambres o mallas para que tengan el suficiente frente acciones horizontales.
recubrimiento de mortero. Ello lleva a la necesidad de -Adecuada para acciones verticales, horizontales,
prefabricar armaduras planas o superficiales para po- longitudinales o transversales a la fábrica, cualquiera
sibilitar su colocación (Fig.3.) que sea el ancho del tendel.
Tipos y cualidades: Para juntas de cemento cola:
* Triangular: tipo cercha [1.] Pletinas longitudinales de 2mm. grueso x 6mm. de
Celosía realizada con acero AEH-500T, constitui- ancho
da con 2 alambres paralelos, separados y unidos en- * Rectangular: tipo escalera [2.]
tre sí, por otro en diagonal continuo soldado en zig- Celosía obtenida soldando los alambres transver-
zag en su mismo plano. sales sobre los longitudinales. -
capiluio ¡I Patología e intervención en cerramientos y acabados

Su conformación rectangular es deformable fren- mentó de acero frente a la corrosión dependerá del
te a acciones horizontales (Fig.4). grueso de la sección de dicho elemento.
- Adecuada para acciones verticales y longitudi- Puesto que en albañilería los tendeles son muy fi-
nales. nos y las armaduras mucho más, es decir, de 1,5 a
* Malla estirada [3] 5mm de diámetro lo antedicho tienen que alertar enor-
Chapa calada y estirada conformando una malla. memente sobre la necesidad de evitar la corrosión con
Sus características son apropiadas para repartir algún tratamiento preventivo, sino se quiere arruinar
cargas sobre el ancho del tendel. la fábrica en poco tiempo.
- Adecuada para acciones verticales. En el hormigón armado se utilizan barras de grue-
" Otras mallas plásticas so mucho mayor que en albañilería, y además están
No son comparables por sus características téc- recubiertas de hormigón rico en cemento que las pro-
nicas con las armaduras de tendel. Se aplican para tege de la corrosión bajo 2 ó 3 cm. de grueso.
dar continuidad en revocos de mortero o tendidos de Por el contrario en la fábrica, el mortero, tiene mu-
yeso. cha menos proporción de cemento y grueso de recu-
brimiento, y las armaduras se sitúan junto a materia-
- No son adecuadas para los tendeles, les habitualmente absorbentes de la humedad. La
realidad favorece en gran manera la corrosión sino se
c) Armaduras espaciales toman medidas preventivas. Sin protección, hay co-
rrosión. (Fig.6).
Las armaduras espaciales o tridimensionales, es-
Según el EC-6, se recomiendan las siguientes pro-
tán diseñadas para aplicar en aquellas fábricas en que
tecciones [5.]:
las piezas tengan amplios huecos verticales.
"Acero sin tratamiento. En interiores sin humedad.
Actualmente sólo existe una patente: [4.] [25] (Fig.5.)
' Galvanizado de Zinc. En interiores.
Está constituida por 2 alambres longitudinales pa-
' Capa Epoxi sobre el Zinc. Zonas en que haya hu-
ralelos, separados y soldados entre sí mediante ani-
medad.
llos verticales. Estos anillos están distanciados regu-
" Armadura inoxidable. Medio muy agresivo (in-
larmente para casar dentro de los huecos verticales dustrial).
de las piezas de la fábrica, armando y reforzando al
mismo tiempo.
Las armadura espaciales, además de soportar las 2.6 Aclaración conceptual y semántica
acciones de las armaduras tipo cercha, soportan mo-
Por fábrica armada se entiende aquella que está
mentos fuera del plano de la fábrica.
regularmente armada por tendeles con armaduras pre-
Son adecuadas para armar frente a grandes soli-
fabricadas, dotando a la albañilería de capacidad a
citaciones, especialmente para empujes de terreno y
tracción de forma homogénea y sin alterar por ello
para efectos de torsión.
2.5 Las potecciones frente a la corrosión

Incluso el más inexperto sabe que el acero se co-


rroe y que el ambiente húmedo favorece dicha corro-
sión. También es notorio que la duración de un ele-

5. Armadura espacial o tridimensional,


Murfor-HE conformada por dos alambres
longitudinales soldados por anillos y verti-
4. Armadura superficial rectangular tipo escalera. Deformable an- cales distanciados regularmente, función de
te solicitaciones honzontales en el plano del tendel. los huecos de ¡as piezas cerámicas
Tema 2. Prevención cei agrietamiento de fachadas con ia fábrica armada

126

Epo>y

Epoxy (E)
n ínmJsOi p&í J M I ove
fié/a 'X"M J i * 'Life
( 1) t.JS} • •

6. a) Sin protección hay corrosión. Jardinería de hormigón ar- 6. b) Diversos tipos de protecciones del acero: recubrimiento de
mado. Acero corroído y rotura del hormigón. zinc, zinc + epoxi y acero inoxidable.

sustancialmente las cualidades del material de la fá- Aprovechando esta oportunidad que brinda la téc-
brica original (exceptuando la tracción añadida). nica de la albañilería, es posible disponer armaduras
Conviene distinguir que dicha expresión no condi- en dicho plano.
ciona al tipo de material de fábrica utilizado, y que ex- Son razones técnicas de la albañilería las que
presa una capacidad regular de armado o tracción ho- obligan a prefabricar las armaduras de tendel con
rizontal (caso de un muro). alambres, y estructurarlas para poder garantizarse
La fábrica armada por antonomasia, debe enten- su forma de trabajo adecuada con la puesta en obra.
derse aquella que está homogéneamente armada por
tendeles con armaduras prefabricadas tipo cercha, es 2.8.2 Comportamiento estructural
decir, que aprovechen las dos direcciones tensiona- Si se tiene una fábrica homogéneamente armada
les que ofrece el tendel (longitudinal y transversal), lo por tendeles se obtiene un material compuesto que
que sólo se obtiene con celosías de forma triangula- tiene capacidad a tracción en la dirección de los ten-
da [6.]. deles. Si además se han utilizado cerchas, ésta ca-
La expresión fábrica reforzada, por el contrario, se pacidad a tracción existirá en las dos direcciones del
refiere a un tipo de armado, que incrementa la capa- tendel, dada la continuidad del alambre diagonal cen-
cidad a tracción de forma localizada (caso de un car- tral que constituye la triangulación.
gadero, pilastra, etc.). En flexión vertical, el canto del material de la fábri-
Pueden obtenerse combinaciones de fábrica ar- ca ha de asumir el esfuerzo cortante, mientras que en
mada y reforzada. flexión horizontal, la armadura diagonal contribuye a
Lo expuesto se diferencia de la fábrica de la absorción de este esfuerzo.
bloque de hormigón armado (sinónimo del hormi- La fábrica homogéneamente armada por tendeles,
gón armado aplicado a bloques de albañilería), que controla la fisuración en la albañilería, dada la ductili-
obtienen su capacidad a tracción por refuerzos lo- dad que le confiere el acero. No obstante, el nuevo
calizados en zunchos o pilastras, colocando organi- material compuesto es anisótropo y por tanto hetero-
zaciones de ferralla en algunos huecos que luego rresistente, comparando las direcciones horizontales
se rellenan de hormigón. Realmente con ello se cons- y la vertical (Fig.7).
tituye un material heterogéneo que se parece más Son evidentes las ventajas que se obtienen cuan-
a un entramado de vigas y pilastras de hormigón do la fábrica tiene tracción, sobre todo si nos encon-
armado, que enmarca paños de fábrica de bloque tramos con las situaciones actuales, donde se fuerza
sin armar. involuntariamente a la albañilería a fraccionarse, cuan-
do la calidad exigida no admite su fisuración.
En flexión vertical las posibilidades de armado es-
2.7 La Fábrica Armada
tarán en función de la resistencia a compresión de
2.7.1 Organización constructiva la fábrica en la zona comprimida y del valor del cor-
Asumiendo que toda fábrica tiene superficies tante que ésta sea capaz de resistir. Así como de la
horizontales continuas, con independencia del anchura y separación vertical de los tendeles.
tipo de pieza y material que se utilice, es evidente En flexión horizontal, el caso de la acción del vien-
aue se tiene un plano donde poder armar (largo y es- to la cercha se encarga de absorber también el cor-
trecho). tante obtenido tanto si hay presión o succión.
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

2.8 Razón y Ser de la Fábrica Armada 127


¡:::i i 1
Como diría Eduardo Torroja "Cada material tiene una
personalidad específica y distinta... Antes y por enci-
o-o
ma de todo cálculo está la idea, moldeadora del ma-
terial de forma resistente para cumplir su misión" [7].
La razón y ser de la fábrica armada entendida co-
mo un nuevo material compuesto arquitectónico se
expuso ampliamente en la revista Informes de la
Construcción.
El artículo argumenta cómo la creación de la fábri-
7 b) Esquema de flexión vertical aplicable a dos ca armada como nuevo material compuesto, se apo-
materiales cerámicos distintos. ya en una razón arquitectónica, tiene un ser cons-
- Fábrica de 1 pie de ladrillo de 24x11.5x5 cm.
tructivo y es un tipo estructural [8.] (Fig.8).
- Fábrica Termoarcilla de 30x19x29 cm.
Obsérvese que el primer tendel en el bloque Nacionalmente, en la ponencia sobre La Fábrica
Termoarcilla debe contarse horizontalmente pa- Armada. Un nuevo Material Arquitectónico, se expu-
ra aumentar el brazo efectivo.
so por primera vez, el nuevo entendimiento y las po-
sibilidades de la fábrica armada [9.] (Madrid 12/91).
Internacionalmente, el paper The Architectural
Potential of Bed Joint Reinforced Masonry dio a co-
nocer las nuevas posibilidades de la fábrica armada
[10] (London 10/92).

3. La fábrica armada=Nuevo material compuesto

Ficha síntesis de la Fábrica Armada.


Para poder entender lo que a continuación se ex-
pone, es necesario hacer una significativa transpo-
sición intelectual. Se trata de imaginarse la obra de
fábrica en su conjunto, como un todo en sí mismo,
en vez de-una suma de componentes independien-
tes.
Esto implica contemplar un cambio de escala des-
de los componentes que componen la fábrica, al com-
puesto obtenido.
7 a) Fábrica cerámica sometida a flexión hon- El material al que nos referimos es, por tanto, el
zontal. Dada la simetría formal de la cercha so- edificio, el muro, el dintel, etc., en lugar de la pieza,
porta tanto las presiones como las succiones del
mortero, armadura...
viento.
Para crear la fábrica armada, simplemente hay que
armar homogéneamente por tendeles con cerchas,
una vez escogido el material de albañilería deseado,
en función de las cualidades estéticas, resistentes,
aislantes, etc. requeridas.

3.1 Componentes para crear el nuevo material


compuesto

3.1.1 Tipos de Cerchas


Para elegir la cercha adecuada, primero habrá que
decidir que tipo de protección ante la corrosión se re-
8 El arco existe aunque no se evidencie formal-
quiere, en función de que la obra de fábrica esté en
mente. La fábrica tiene vida. Arco atirantado cie-
go (J. M Adell, viviendas de plaza de la Remonta). un ambiente seco, húmedo o agresivo.
Terna 2 Prevención del agrietamiento de fachadas con la taboca armada

También deberá tenerse en cuenta, si se van a utili- Todas estas deformaciones impuestas que afec-
zar armaduras hechas con alambres o pletinas, según tan a lo largo y ancho del muro, pueden controlarse
se vayan a hacer juntas de mortero normales o finas. adecuadamente disponiendo regularmente cerchas
Por último se escoge el diámetro adecuado a las para evitar la fisuración de la fábrica.
solicitaciones. La triangulación absorbe las tensiones de la fábri-
ca no sólo a lo largo del muro, sino también en todo
3.1.2 Adecuación entre Cerchas y Materiales su ancho. Esto es muy importante para las hojas de
La armadura apropiada deberá de tener un ancho fábrica exteriores que están sometidas al calenta-
inferior en 3 ó 4 cm. al grueso del muro, siempre que miento o enfriamiento por una sola cara.
se trate de una sola hoja aparejada a soga.
Existen anchos de cerchas para cada tipo de ma- (B) : Soporta Flexión Vertical
terial y grueso de fábrica. Son muchas las ocasiones en que la fábrica debe
de salvar huecos sobre puertas o ventanas. Si el re-
3.1.3 La creación del nuevo material compuesto parto de tendeles armados dispone de alguna arma-
La regularidad de tendeles armados (su separación dura en las primeras hiladas sobre el hueco, puede
vertical) para obtener el nuevo material compuesto de- constituirse dinteles en arco de descarga atirantado,
penderá: sin tener que recurrir a materiales heterogéneos (car-
- del grueso de la fábrica (ancho pieza) gaderos) para salvar el hueco.
- de la separación vertical de los tendeles (altura Por lo mismo, una partición o cerramiento pueden
pieza) quedar sin apoyo por exceso de deformación del for-
- del diámetro de los alambres longitudinales de jado que les sustente (lo que suele darse muy a me-
la cercha nudo en el tiempo), creando tracciones en la base de
- de las solicitaciones que se deseen afrontar la albañilería capaz de agrietarla, a menos que se ha-
El nuevo material compuesto creado, es muy va- ya previsto un armado de las primeras hiladas sobre
riable en función del tipo de material de fábrica utili- el apoyo, que de darse el caso, atirantarían el arco de
zado (calidad, forma, tamaño...), pudiendo ser más o descarga en que se constituiría el muro, evitando su
menos homogéneo o heterogéneo. fisuración y agrietamiento (Fig. 10).
El mortero cumplimentará las exigencias del fabri-
cante de la pieza, recomendándose aplicar un Mortero (C) : Soporta Flexión Horizontal
M-80. Deberán seguirse los consejos de colocación Todo muro de fábrica está sujeto a acciones hori-
del Manual sobre La fábrica armada. zontales perpendiculares a su plano.
La acción del viento actúa sobre los cerramientos,
generando presiones o succiones, que también en
3.2 Nuevas Cualidades de la Fábrica Armada
ocasiones inciden sobre las-particiones, especialmente
(A): Soporta Deformaciones Impuestas durante la construcción si se trata de paños esbeltos
Las deformaciones impuestas afectan a todos los o de gran luz.
materiales en mayor o menor medida, y de forma di- El material compuesto fábrica armada, gracias a la
ferenciada en el tiempo. armadura triangulada en forma de cercha, puede ab-
Así, los materiales cerámicos dada su cocción y se- sorber importantes acciones eólicas que dependerán
gún el tipo de arcilla, tienen tendencia a absorber la hu- del:
medad del ambiente, en mayor grado después de los - ancho del muro de fábrica, es decir, ancho de la
primeros días de fabricación, lo que puede ser causa cercha
de expansión por humedad, más acusada cuando se - separación vertical de los tendeles armados
emplean las piezas los días inmediatos a su cocción. - separación horizontal de los soportes de reac-
Por el contrario, los materiales conglomerados tie- ción
nen tendencia a perder la humedad de fraguado du- La acción horizontal del empuje del terreno o del
rante los primeros días de su fabricación, lo que pue- agua también puede soportarse ventajosamente en
de producir retracciones en paños de fábrica, si se mayor o menor cuantía en función de los parámetros
construyen sin el apropiado curado del material. expuestos.
Los cambios térmicos extremos afectan a la de- Donde se prevean terremotos, la triangulación de
formación de las fábricas, produciendo dilataciones y la cercha contribuye eficazmente a evitar daños
contracciones entre día y noche, y entre estaciones (Fig. 11).
climatológicas (Fig. 9). ((A) f (B) + (C)j: Efecto de trabajo combinado
capituio II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

Según se disponga el armado, puede conseguirse 729


Previene lo fisurocidn
el efecto de trabajo combinado que resuelve el con-
Confiere ductilidod
junto de solicitaciones que se han expuesto separa-
damente para su mayor clarificación, si bien en la
realidad suelen darse conjuntamente muchas de ellas.
Nuevamente conviene recordar que el concepto de
la fábrica armada como material compuesto, afecta al
edificio en su conjunto como un todo interrelaciona-
do, cuyas acciones y reacciones, si así se han calcu-
lado y construido, pueden afrontarse por más de un
elemento a la vez. Ello permite economizar sustan-
cialmente el armado a disponer.

3.2.1 Más vale prevenir que curar:


La fábrica armada As = 0.05 % Sección fabrico
Cuando aparece una fisura o grieta en la albañile-
ría de un edificio, puede ser ya demasiado tarde pa- 9.
ra resolver adecuadamente el problema originado. De

©
haberse prevenido durante el proceso de construc-
_ , Aumenlo los p r e s t a c i o n e s
ción podría haberse evitado. , J técnicas
El coste de la reparación de las grietas, siempre es
un gasto añadido al de la construcción inicial, no me-
nos importante que el coste en imagen para el Promotor,
Constructor, Propiedad, Arquitecto, etc. (Fig. 9).
La sociedad actual está muy sensibilizada en la exi-
gencia de calidad en la construcción.
La albañilería, uno de los capítulos más tradicio-
nales de la construcción, ha experimentado en los úl-
timos años una gran evolución gracias a la mejora de
las cualidades de los materiales de fábrica. Sin em-
bargo, la rigidez propia de éstos materiales contrasta
actualmente con la capacidad de flexión que tienen
los elementos estructurales con que se combinan. Ello
puede llevar a fisurar la albañilería por concentración
de tensiones, que la fábrica no es capaz de asumir si 10.
no está convenientemente armada.
Para prevenir el problema de la fisuración en la al-
Potencio y e c o n o m i z o la
bañilería se han ideado las armaduras prefabricadas
de tendel, que se disponen en las juntas horizontales
® Arquitectura.
Sismorresistente
Construcqjón

de la fábrica.
Como resultado de aplicar C e r c h a s en obra,
se obtienen muros de un nuevo material com-
puesto fábrica armada, que tiene las cualidades
propias del material de fábrica utilizado, más una
capacidad a tracción, que aumenta las presta-
ciones de la albañilería. al tiempo que previene la fi-
suración. (Fig. 11).
Colocando Cerchas en los tendeles, regularmen-
te espaciadas a toda la altura de un muro, tanto si
se compone de piezas pequeñas o grandes, cerá-
micas o de hormigón, macizas o huecas, se consti-
tuyen paños de fábrica armada, capaces de sopor-
tar tensiones en dos planos Si además se disponen 11.
Tema 2. Prevención del agnelamienio de faenadas con la fábrica armada

varias de estas armaduras en un mismo tendel, po- de ellas paralelas una al lado de otra en la misma hi-
drán soportarse esfuerzos localizados. (Fig.10) lada, en muros gruesos, incrementándose sustancial-
Las aplicaciones más habituales del armado de ten- mente la capacidad resistente de los dinteles.
deles en la albañilería, con su correspondiente cálcu- Para evitar el posible descuelgue de la primera hi-
lo tabulado, junto con la forma de prevenir la fisura- lada del tendel, se utilizan ganchos de cuelgue apro-
ción, vienen recogidas en él: piados a la altura de cada tipo de pieza.
Para garantizar el anclaje de las armaduras, éstas
3.3 Aplicaciones de la Fábrica Armada (Fig, 9) deben prolongarse al menos 50cm. a ambos extre-
mos del hueco.
(1) : Previene la fisuración: confiere ductilidad Las aplicaciones más frecuentes se dan:
Para prevenir la fisuración de la albañilería es ne- - Frente a asientos diferenciales del terreno bajo
cesario contar con una mínima cuantía de armado que muros de carga
viene fijada por el grueso de la sección de la fábrica. - Frente a flexiones de viga/forjado bajo tabiques
El EC-6 recomienda armar con el 0,05% de la sec- y cerramientos
ción en muros normales (hasta 19cm.) y con el 0,03%, - Frente a contracción, retracción o dilatación de
muros gruesos (de 20 a 30 cm). También está limita- paños largos
da la separación vertical máxima de tendeles arma- - Frente a concentración de tensiones, alrededor
dos a 45 ó 60 cm. según países. de huecos
Según que el diámetro de los dos alambres longi- - Frente a concentración de tensiones, bajo cargas
2
tudinales de las cerchas sea de 4 mm. (25mm de área) puntuales
2
ó 5 mm. (35mm de área), y en función de la altura de
la pieza de la fábrica, podrán cumplimentarse estos (3): Potencia y economiza la Arquitectura (Fig. 11)
requisitos armando a distintos niveles. Todo lo anteriormente expuesto es apllcabe a una
La configuración triangulada de la cercha permi- o a dos hojas de fábrica de forma independíente, en
te aumentar la resistencia a compresión de la fábri- función del grueso y tipo de material que tenga cada
ca por efecto zuncho que ejerce sobre los tendeles una, y de las solicitaciones a que estuvieran someti-
armados. das. De esta forma las dos hojas de un Caw'fy Wall,
Las aplicaciones más comunes son: pueden llegar a mantener una independencia estruc-
- En el incremento de separación de las juntas de tural total.
dilatación Desde el punto de vista constructivo en muchas
- En la ejecución de dinteles de material de fábri- ocasiones, resulta muy ventajoso hacer solidario el
ca homogéneo trabajo de ambas hojas. Ya que es posible aprovechar
- En muros sometidos a la presión o succión del la mayor inercia que se obtiene de armarlas triangu-
viento lando conjuntamente, en beneficio de un significativo
- En muros sometidos al empuje del terreno, pis- aumento de las cualidades resistentes del muro ca-
cinas... puchino así construido.
- En la ejecución de cadenas de enlace y reparto Este hecho no impide que el espacio intermedio
de forjados entre las dos hojas, que no tienen por que estar cons-
truidas con el mismo tipo de pieza (aunque sí se acon-
(2) : Aumenta las prestaciones técnicas (Fig. 10) seja que sean del mismo material a efectos de defor-
Si además de armar de forma homogénea la fábri- maciones -como por ejemplo ladrillo visto/l.hueco-),
ca se requiere localizar mayor cuantía de armado en pueda dejarse vacío, rellenarse en parte con aisla-
determinadas zonas para acciones localizadas, es fá- miento, o macizarse con hormigón armado.
cil de conseguir con dicha técnica sin más que utili- En determinados casos interesa levantar las dos
zar el ancho apropiado de las armaduras, en función hojas en fases separadas, y con materiales distintos,
de las necesidades. pudiendo quedar las armaduras horizontales en es-
Bajo estos criterios, en el Manual español, el Prof. pera para el atado de ambas hoias solidariamente,
J.A. Lahuerta ha desarrollado tablas de cálculo sim- después de naber aplicado el aislamiento (si se re-
plificadas para dinteles bajo cargas de forjado. Las ta- quiere) con planchas o proyectado.
blas referidas a materiales cerámicos, se han publi- Una combinación interesante puede ser un muro
cado en El muro de ladrillo de Hispalyt [11 .j doblado de ladrillo visto/bloque termoarcilla, con ape-
Dichas tablas se han hecho utilizando las armadu- nas 1 cm. de separación entre ambos materiales, que
ras ae 50 mm. de ancho, pudiendo colocarse varias funciona excelentemente desde el punto de vista re-
capitule II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

sistente y térmico y de la humedad, al tiempo que so- CAPiuUtoOAO 2%


t
;0*C£HSACtX

131
luciona la cara externa sin tener que revocar.
El campo de aplicaciones se amplía:
- Evitando puentes térmicos, sin perder homoge-
neidad la fábrica
- Al construir muros dobles/capuchinos, con va-
rios materiales
- Al dejar esperas para solidarizar distintas fases JE GRADACION
SU«»?R*>C(A|.
'e obra
I MA«TD4*tfMTC
- Al poder construir sin tener que aparejar las piezas
' ACUSTICA
- Al incrementar la libertad técnica y formal del
' MIGaOTFMOCOAD
Arquitecto
OÍSCONOCOO
- A la Construcción Sismorresistente
[(1)+(2)+(3)]: La Idea constructiva C O R R O S lOH
DEFORMACION
Es evidente que todas estas aplicaciones de la fá- AiSCAUlCNTO T í H M C O
brica armada son posibles gracias a La Idea cons-
tructiva de colocar cerchas en los tendeles de la al- 12. Diagrama del estudio sobre las causas de deterioro en las
bañilería. obras de fábnca C.S.T.C. Bélgica 1977 - 1979.

Sólo falta acostumbrarse a utilizar los distintos an-


chos y diámetros apropiados a cada caso, capaces
de soportar los esfuerzos en el plano del tendel. A=0.05%S
Obsérvese que la armadura [1.] está organizada de 04mm 05mm
forma simétrica para evitar resultados negativos por en en
en en
errores de colocación del albañil, y que además todas en en
las cerchas están fabricadas con el adecuado trata- en g en
rn en
miento anticorrosión que cada caso requiera. ¡Hí en
en en
• j
en ED
3.4 La Fábrica, Homogénenamente Armada en en
en
if^ti en
La mejor forma de diseñar y construir para evitar en en
en en
todo tipo de problemas en la albañilería surgidos por —1 K - U . 5
su falta de capacidad a tracción, es armar de forma I m
homogénea la fábrica, es decir, a niveles regulares al-
13. Armado para el control de la fisuración de muro de 1/2 pie
rededor de los 40cm. de altura. de ladrillo métrico (según EC-6) 2,5 mi x nf con cerchas de alam-
Modulando la fachada con cierta habilidad, es bres de 4 mm. cada 40 cm. de altura. 1,6 mi. x rrí con cerchas de
posible simplificar enormemente la construcción alambres de 5 mm. cada 60 cm. de altura.
en beneficio de la calidad y economía de la edifica-
ción.
Se trata de armar conociendo y aprovechando a la ello la aplicación de las armaduras en forma de cer-
vez todas las posibilidades que el sistema ofrece, lo cha [12] (Flg.12).
que equivale a poder mterrelacionar las nuevas cuali-
dades con el campo de aplicaciones, que la fábrica 3.5.1 Tipología constructiva de muro de cerramiento
armada ofrece, es decir contemplar a un mismo tiem- En ocasiones caben varias soluciones:
po: (Í(A)+<1)I t- l(B)+(2)] + [(C)+(3)l). Se puede obtener la misma cuantía de armado del
0.05% de la sección de un muro de 1/2 pie de fábri-
ca de ladrillo visto (11,5cm), armando con cerchas en
3.5 El Control de la Fisuración
los tendeles (Fig 13):
Investigaciones hecnas en Bélgica por el C.S.T.C. - cada 40 cm. de altura (6 hiladas) con cerchas de
analizando el porcentaje de obras de fábrica agrieta- diámetro 4mm,
2

das y sus causas, al inicio del uso de la fábrica arma- Lo que supone 2,5ml x m de cerchas.
da en este país, y depués de su aplicación durante 20 - cada 60 cm. de altura (10 hiladas) con cerchas de
años, demuestran que las causas de fisuración dis- diámetro 5mm.
2

minuyen del 40 al 12%, teniendo mucho que ver en Lo que supone 1.6ml x m de cerchas.
Tema 2 Prevención del agneiammntc de fachadas con fa fábrica armada

Murlor RND.S'E 250


13. Ejecución en dos etapas de los pa-
ños de fábrica armada en esquina de 15. Cerramiento de dos hojas. Muro capuchino
cerramiento, viviendas V.P.O. atado y reforzado con cerchas a caballo de las
dos hojas.

/ ^1
A=0.03%S
4' c
\ A
v
¡ \ A
Recientemente se ha presentado en Londres un
estudio comparativo entre costes de edificios cons-
_ truidos de forma tradicional y el ahorro obtenido apli-
( r- V
-- -JT. cando los conceptos de la fábrica armada [13].

CD é y
C=t - Según la investigación de costes realizada, el aho-
en E .
r rro es muy importante en dinteles y tabiquería, sin con-
* en * y
tar además las garantías de evitar la fisuración y por
• tanto el ahorro de costes posteriores muy elevados.
_: ¡ Respecto al estudio hecho sobre la aplicación del
—•
29_ concepto de la fábrica armada en viviendas de muros
- — .— 1 m J de carga de Alemania, Italia y Suiza, el incremento me-
31
dio equivale al aumento del 0,4% del coste de la es-
14. Armado para el control de la fisuración de muro de 1 pie de tructura de muro de carga (colocando cerchas cada
grueso de fábrica cerámica. h = 40cm de altura).
2,5 mlxm' con cerchas de alambres de 5 mm. cada 40 cm. de al-
tura.
Es muy ventajoso desde el punto de vista econó-
mico, aprovechar las mayores posibilidades técnicas
que ofrece la fábrica armada a la hora de construir con
ella. Este es el caso de los muros sometidos a la ac-
3.5.2 Tipología constructiva de muro de carga ción horizontal del viento cuando los soportes estruc-
Si se trata de un muro muy grueso: turales están muy distanciados, como suele ocurrir en
Se puede obtener la cuantía de armado del 0,03% edificios industriales o grandes superficies (Fig.15).
aplicable a muros de fábrica gruesos (30cm), con cer- La mayor economía está sin embargo, en eludir los
chas los tendeles (Fig.14): costes de reparación por fisuración y agrietamiento
- cada 40cm de altura (6 hil.ladri./2 h.bloque) con que suelen darse a lo largo del tiempo en la albañile-
cercha de 5mm ría tradicional sin armar, al ser la albañilería el eslabón
2
Lo que supone 2,5ml x m de cerchas. más débil de una cadena constructiva donde los otros
componentes soportan tracciones.
3.6 Economía y Seguridad en la Albañilería La fábrica armada como material compuesto ofre-
ce seguridad y economía en la albañilería.
- Estudio comparativo de costes
capitulo II Patología e intervención en cerramientos y acabados

16. Grietas y fisuras producidas por la acción sismica.


b por alabeo del muro fuera del plano,
s por tracciones diagonales del palo de fábrica,
f por tracción a flexión en las esquinas de los huecos.

17 a) Construcción sismorresistente: el armado horizontal con


cerchas dispuestas regularmente, ha de ir combinado con el ar-
mado vertical en esquinas, junto a huecos y pilastras.

17. b) Solución Murfor acorde con la norma sismi-


ca francesa.

3.7 La Construcción Sismorresistente La reciente norma española [15] sobre construc-


ción sismorresistente no contempla apropiadamente
En zonas de grado sísmico elevado, es imprescin- las ventajas que se obtienen de aplicar la fábrica ar-
dible contemplar el armado horizontal de la fábrica si mada a la albañilería cerámica, mientras que por el
se quieren evitar daños en edificios y personas. contrarío sí recoge las ventajas de armar con redon-
Dependiendo del riesgo existente, la cuantía de ar- dos las fábricas "de bloques de hormigón hueco.
mado será distinta.
Es necesario corregir este error manifiesto de nues-
No debe olvidarse la necesidad de arriostrar tra norma, que se ha producido por el involuntario des-
unos muros de fábrica con otros, a fin de que conocimiento de la fábrica armada.
todos contribuyan a estabilizar la obra frente a las ac-
El EC-6 contempla un tipo específico de fábrica
ciones horizontales alternas y repetidas del seísmo
que llama confinada, idónea frente al seísmo y que
(Fig.16).
viene a ser la típica fábrica de bloque de hormigón
Según los expertos en la materia [14], la acción sís-
hueco con zunchos y pilastras de hormigón armado,
mica produce en la fábrica fisuras o agrietamientos de
o bien fábricas que rigidizan pórticos de hormigón ar-
tres tipos (Fig.17):
mado [16].
- por alabeo del muro fuera del plano (verticales)
- por tracciones del paño de fábrica (diagonales
en el paño) 3.8 La Normativa y la Fábrica Armada
- por tracción a flexión (diagonales en esquinas de
huecos) La Normativa española sobre fábrica de ladrillo 1 1 7 ]
Las solicitaciones que contribuyen a ese tipo de fi- no contempla el armado de la fábrica, exclusivamen-
suración, pueden absorberse en gran parte armando te plantea anclajes de atado para muros doblados. Y
regularmente con cerchas, y añadiendo suplementos sólo en otro apartado recomienda armar las juntas ba-
en esquinas y zonas criticas. jo concentración de cargas.
El armado horizontal con cerchas ha de ir combi- La Normativa europea recientemente aprobada EC-
nado con el armado vertical correspondiente, en es- 6 [5], sobre Estructuras de fábrica, que actualmente
quinas, junto a huecos de puertas y ventanas, y dis- está en fase de traducción al español, y de adapta-
poniendo pilastras cada 4 ó 5 m. ción al DNA (Documento Nacional de Adaptación) con-
Tema 2. Prevención del agrietamiento de tachadas con la fábrica armada

I.U ción internacional y merece la suficiente atención pa-


ra hacer un articulo aparte.
Los resultados de las campañas de ensayos ya
realizadas han sido publicadas nacionalmente en
Madrid 12/94, y en London 10/95 [20] [21].
Simplemente indicaremos los campos en que se
está investigando:

Tetrapilonos del Espinillo: Ensayo en obra


([(A)+(1)] + [(B)+(2)] + [(C)+(3)])

Ensayos de Dinteles a Flexión Vertical: (Fig.18)


[(B)+(2)] CEDEX-MOPTMA

Ensayos de Adherencia entre componentes: tipo


18. Ensayo a flexión vertical de dintel de Termoarcilla con fvturfor pull-out en la ETSAM y el TORROJA
en el CEDEX.
Ensayos de Dilatación en Muros Largos [(A)+(1)] en
ciudades con climatologías diversas

Ensayos de muros a Flexión Horizontal [(C)+(3)]


(Fig.19) para la Fachada Contemporánea "ACW" y
"DCW".

4. L a fachada contemporánea con la


fábrica armada

4.1 El Cavity Wall y su controversia

En otoño del 91, se publica el premio de calidad


de la fábrica de ladrillo recayendo en el edificio The
Grimaldi Park House [22] en Londres, donde se prac-
tica una solución de cerramiento autoportante de un
19. Ensayo a flexión horizontal de muro de ladrillo perforado
pie de ladrillo para la rehabilitación de un edificio his-
Malpasa con Murfor en el CEDEX.
tórico. Un planteamiento equivalente se hace en el
Atkin Building [23] utilizando un muro de 1 pie auto-
templa ampliamente la fábrica armada y en concreto
portante pasante por delante de la estructura metáli-
las posibilidades de los distintos tipos de armaduras
ca. Hammet escribirá posteriormente sobre este tipo
de tendel.
de fábricas pasantes [24].
En especial hace referencia al armado de muros
En marzo del 92 en Londres [25], se plantea un
capuchinos en donde las armaduras de tendel cum-
Congreso bajo el título: The Cavity Wall Controversy:
plen una doble función:
Have We Got It All Wrong?
- la de armar la fábrica, controlando su fisuración
En el Congreso se contraponían varias tendencias:
[18]
- los partidarios del sistema multicapas nacido a
- la de atar las dos hojas juntas (a modo de llaves principios de este siglo y que todavía se consideraba
de atado) permitiendo que trabajen solidariamente [19] adecuado, si bien cabía mejorarlo en algunos aspec-
tos [26].
3.9 Investigación con Fábrica Armada - los que planteaban que dicha solución estaba
y Cerámica agotada por haberse llegado a una excesiva compli-
cación y coste de sus componentes constitutivos, y
La investigación desarrollada, o en fase de elabo- que era necesario replantearse el volver a una solu-
ración, en España con materiales cerámicos, Ladrillos ción de muro homogéneo de una sola hoja como en
perforados. Malpesa, Bloques Termoarcilla y Armaduras la antigüedad [27] [28].
Murfor, está actualmente en la cima de la investiga- - los que proponían una hoja exterior gruesa de 1
cap/lulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

pie de fábrica de ladrillo pasante por delante de la es-


tructura, exponiendo los edificios que acababan de
ser galardonados [29].
- No faltaron tampoco los que observando con pers-
pectiva la controversia, la entendían más como una
lucha de intereses entre fabricantes de componentes
para el cavity wall, y fabricantes de materiales de ais-
lamiento [30].
En el 3IMC [10] de octubre del 92, este autor pre-
sentó el "ACW" (Autoportante Cavity Wall) con una
hoja exterior de fábrica armada autoportante de 1/2 J u n l O * 30 r»
4 . C l ~ -
pie de grueso pasante por delante de la estructura.
Este planteamiento sorprendió porque asumía parte 20 a) -ACW" Autoportante Cavity Wall.
de las ventajas de cada uno de los sistemas de la con-
troversia anterior, al tratarse de una hoja delgada, y
con muy pocos anclajes, gracias a las posibilidades
que ofrece el armado por tendeles.

4.2 La Fachada Contemporánea: Arquitectura sin


fisuras con la fábrica armada

Por La Fachada Contemporánea: Arquitectura s


in fisuras con la fábrica armada, debemos de enten-
der aquel muro de carga o cerramiento que se
aprovecha de las posibilidades de la fábrica armada
en su conjunto, tanto a efectos de controlar la fisu-
ración, como para aumentar sus cualidades técnicas. 20 b) "DCW" Dúplex Cavity Wall.
Cuando se aplica al ladrillo visto, supone una nove-
dad especial, ya que éste se aprovecha de unas ven-
tajas con las que hasta el momento no podía contar
(Fig. 20).
El "ACW" plantea una solución radical a la contro-
versia del Cavity Wall, que requiere de tiempo de re-
flexión y asimilación para poder entenderlo sin apa-
sionamiento, y llevarlo a cabo con sencillez, naturalidad
y economía, en beneficio de la mejora de la calidad
de la arquitectura, con independencia de los diversos
intereses comerciales que concurren en la construc-
ción [10].
El planteamiento del "ACW" lleva al límite la con-
sonancia entre disminución de componentes y cos-
tes, y el aumento de calidad del sistema. Se trata de
construir la hoja exterior autoportante de 1/2 pie de 21. La medianera mediterránea. Ventilación continua al apoyar
el tabique en costillas verticales.
grueso, y armada contra la fisuración, con el mínimo
de elementos de relación o conexión entre la hoja ex-
terior y la estructura. (Las relaciones se expondrán en la fábrica, que puede ser pasante, permite ventilarse
el artículo III.) a través de su cámara de aire en toda la vertical del
Al igual que en la medianera mediterránea (Fig.21) edificio.
el tabique pluvial se sostiene exclusivamente con las
costillas verticales de fábrica que sobresalen de las
4.2.1 El "ACW" y el "DCW": Diferenciación
diversas crujías, la fachada contemporánea, plantea
conexiones exclusivamente en la vertical de los so- Existen dos versiones claramente diferenciadas en
portes o muros de arriostramiento. De tal manera que la fachada contemporánea aplicada a cerramientos:
Tema 2. Prevención del agrietamiento de fachadas con ia fábrica armada

22. "ACW" Autoportante Cavity Wall:


136
proceso de construcción del "ACW" con
no|a exterior autoportante de fábrica ar-
mada.

1. " ETAPA: Levantamiento de la estruc-


tura.
1 .A.-Perfil para los anclajes de la hoja
exterior.
1 .B.-Soportes y forjados al mismo fren-
te.

2. ETAPA: Ejecución de la hoja interior


a

del cerramiento.
2.A.-Armado inferior y regular de la ho-
ja interior.
2. B.-Caja de persianas a haces de tabi-
quería.
J
3. ETAPA: Aplicación del aislamiento.
3.A.-Aislamiento aplicado en continui-
dad.
3. B.-Barrera ignífuga a nivel de forjado.

a
4. ETAPA: Construcción de la hoja ex-
terior de fábrica armada.
4.A.-Arranque en apoyo discontinuo del
muro autoportante.
4.B.-Armado de dinteles de fábrica ar-
mada.
4.C-Armado regular de la hoja exterior
de fábrica armada.
4.D.-Anclaje de la hoja exterior a los per-
files 1A.
4.E.-Relación entre carpintería, viertea-
guas, guía de persiana.
4.F.-Juntas de dilatación o cambios de
plano.
4.G.-Remate superior en peto de c u -
A D E l i : CAVITY WAfc 3m biertas o junto a forjados.

- "ACW" (Autoportante Cavity Wall) sólo compro- - El "DCW" (Dúplex Cavity Wall) es muro auto-
mete a la hoja exterior en su actuación de absorber el portante que hace trabajar solidariamente a las dos
viento (Fig. 22). hojas del cerramiento para absorber el viento. La ar-
En el "ACW" en función del 1/2 pie de ancho de los madura de tendel triangulada cumple una función dú-
ladrillos, y las correspondientes cerchas situadas ca- plex puesto que arma controlando la fisuración, al tiem-
da 40 cm. de altura, se pueden separar los anclajes po que actúa de llaves de atado entre las hojas de
hacia unos 6 m. de distancia para una acción de vien- fábrica.
to elevada, contando con el ancho del ladrillo métri- El "DCW" saca el máximo provecho de las cuali-
co o castellano, de 11,5cm de ancho. dades resistentes de la fábrica armada.
Esto hace del "ACW" una solución ideal para edi- En el "DCW", contando con el atado de 2 1/2 pies
ficios residenciales donde las luces entre soportes o de fábrica cerámica más el ancho de la cámara de
la separación de los muros de carga rondan los 6 m. aire, y situando las correspondientes cerchas cada
* Para exponer el proceso constructivo del ACW, 30 cm. de altura, los anclajes a los soportes se pue-
se ha tomado como base el cerramiento del edificio den llegar a distanciar 8 ó 9 m. Los cálculos con-
de El Espinillo en Madrid, del autor del artículo. templan un diámetro de 5mm. en el alambre diago-
Se comprende que en el "ACW", al estar desliga- nal de la cercha.
das en su totalidad las dos hojas de fábrica, es posi- En el caso del "DCW" son los edificios de naves
ble aplicar después de la cámara de aire cualquier ais- industriales, polideportivos, grandes superficies, ofi-
lamiento sobre la hoja interior y la estructura, o utilizar cinas... los económicamente rentables para ésta so-
una hoja interior de material de fábrica con suficiente lución de muro.
coeficiente de aislamiento, de modo que se ahorre co- En el "DCW" según el tipo de edificio de que se
locar otro componente en la cámara. trata, la hoja interior puede ser de material cerámico
'Capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

137

a e c

23. Centro Comercial Max Center, Erosqui. "DCW" Dúplex Cavity Wall de hoja exterior de ladrillo visto y hoja interior de ladrillo hueco
doble, Uriarte/Arechavaleta, Arquitectos, Bilbao.
a) Vista del edificio de 500 x 100 m. de planta aproximada.
b) Detalle exterior de la ejecución del cerramiento con 1/2 pie de ladrillo visto con bandas blancas.
c) Detalle del armado de las zonas curvas, Poligonal de cerchas cortadas y solapadas más de 25 cm.
d) Trasdós de la hoja exterior de fábrica armada, Armaduras Murfor RND: 5/ E-250 cada 40 cm. para trasladar la acción del viento a
costillas dispuestas cada 8 m. Armaduras Murfor RND: 4/ E-50 para armar las costillas que soportarán el viento.
e) Ejecución de la hoja interior con armado para prevenir fisuras por flechas, una vez proyectado el aislamiento continuo impermea-
ble, y colocado el babero para evitar infiltración de humedad.
f) Hoja intenor de ladnllo hueco que se casa por niveles con las hiladas previamente armadas.

aislante (Termoarcilla, Ladrillo Hueco), o bien sino pro- 4.2.2 Ventajas del "ACW" y del "DCW"
yectar el aislamiento en la cara exterior de la hoja in- Las ventajas del "ACW" y "DCW" son:
terior de la cámara. - permite los movimientos diferenciales entre la
La solución con hoja exterior de ladrillo visto e in- estructura y la fábrica sin fisurar la albañilería.
terior de ladrillo hueco, ha sido la solución adoptada - se evitan elementos de apoyo de la fábrica co-
en el Kareaga de Bilbao, donde se ha preferido pro- mo angulares.
yectar el aislamiento en la cara interior de la hoja ex - se simplifica mucho el número de juntas de di-
terior para aumentar su estanqueidad (Fig. 23). latación.
Las posibilidades arquitectónicas de la fábrica ar- - no es necesario utilizar otros componentes pa-
mada y su aplicación en la fachada contemporánea ra dinteles.
se expusieron en el 10th International Brick and Block - se puede mantener una cámara de aire vertical
Masonry Conference. en Calgary, Alberta, Canadá, 5- continua que:
7, Julio, 1994 [31] y en Florencia [32] - evita el riesgo de penetración de agua.
Tema 2. Prevención del agnetamiento de faenada-; con la fábrica armada

138 - aprovecha al máximo las cualidades resistentes


de la fábrica.
- elude utilizar gran cantidad de llaves de atado.
- ahorra costos de mantenimiento del edificio y
energía.
- aumenta la calidad del edificio al evitar su fisu-
ración.
Todas estas ventajas son mayores que el incre-
mento de coste del armado y los anclajes (Fig.24) ¡33).
Además de la solución pasante, existe la posibili-
dad de plantear una solución mixta de apoyos en los
forjados de las diversas hojas (Fig. 25).
Si el "ACW" se apoya frenteando el forjado, es re-
comendable atar las dos hojas al menos cada 60 cm.
de altura para evitar su vuelco.
En el "DCW" también puede darse la solución de
apoyar claramente la hoja interior y hacer la hoja ex-
terior pasante.
En todos los casos se cuidará al máximo la ejecu-
24. Detalle de anclaje del "ACW" planteado en las vi- ción de juntas para permitir flechar los forjados sin
viendas del Espinillo.
1. Tabicón. 2. Murfor RND 5/E805. Anclaje halfeneisen
cargar la fábrica.
HMS 25/15-D6. Anclaje Halfen ML 120/3 cada seis hi- Los límites de altura suelen plantearse entre 4 y 6
ladas. 7. Ladrillo Palau LPV-R200 240/115/50. 8. Muro plantas según países.
1/2 pie. 9. Aislamiento proyectado de 40 mm. 14. so-
porte.
4.2.3 Muro de carga homogéneo
Si en la controversia sobre el Cavity Wall, nos de-
cantamos hacia la solución de cerramiento homogé-
neo, muy adecuado para edificios residenciales, el blo-
= í que cerámico aligerado ofrece grandes ventajas
aproi
30 cm técnicas y económicas, si bien hay que contar con
añadirle un acabado de mortero de cemento o mo-
nocapa (Fig. 26)
Los planteamientos desarrollados previamente son
aquí también aplicables con la ventaja del arriostra-

•II
miento de unas fábricas con otras y el consiguiente
ahorro de la estructura de acero u hormigón armado.
Las cerchas con sus anchos variables, se acomo-
JKT» L». •-
dan perfectamente para resolver las solicitaciones de
cada paño de fábrica o zona del muro.
Así pues, es posible colocar armaduras del máxi-
2hoos 1 nota p a s a n t e 2hoias mo ancho que permita la fábrica, para zuncharla a ni-
pasantes |hO|a a p o y a d a ) apoyadas
veles regulares cada 40 cm. (2 hiladas). O por el con-
25. Tipos de apoyo posibles del "DCW" trario, pueden utilizarse armaduras más estrechas de
a) Dos hojas pasantes, b) Hoja interior apoyada y exterior pa- unos 50 mm. de ancho para acomodarse en zonas de
sante, c) Dos hojas apoyadas.
concentración de tensiones como es bajo el apoyo de
los forjados, sobre las cimentaciones y en las prime-
- ahorra impermeabilizantes, sólo se aplican en ras hiladas de los dinteles.
base de muro. También se pueden hacer muros sin cámara de ai-
- permite continuidad al aislamiento/evita puen- re utilizando dos hojas de fábrica juntas, de manera
tes térmicos. que la exterior sea de ladrillo visto y la interior de blo-
- ahorra costes de la estructura al no cargar el ce- que Termoarcilla atándose entre si regularmente por
rramiento sobre los forjados perimetrales. permitiendo niveles cada 40 cm. de altura (2 hiladas de bloque
distanciar sustancialmente los soportes del entramado. equivalentes a 6 hiladas de ladrillo), y suplementando
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

139

25. viviendas de V.P.O. deAlcalá Comunidades, Arquitecto J. M.


Montes, Alcalá de Henares (Madrid).
26. Muro de carga homogéneo de una hoja de blo-
que termoarcilla de 29 cm. Fábrica armada Murfor
RND 5/E-250 cada 40 cm. Dos armadura Murfor
RND 4/E-50 para reparto de cargas de apoyo del
en cada una de ellas el armado que las circunstancias forjado.
precisen (Fig.27).

5. La arquitectura de la plaza de la Remonta:


La lección del pasado y la innovación de la técnica I . I U I n
/ f \ II / 1

Edificio de 57 viviendas de VPO. Plaza de la


Remonta, Tetuán, Madrid. Propiedad EMV, Constructora
Corviam 1988-1991, Arquitectos J.M. Adell y
Colaboradores.
La Plaza peatonal de la Remonta (Fig.28) es una
actuación arquitectónica nueva, dentro del antiguo
barrio de Tetuán, conocido por sus buenos ejemplos
de Arquitectura de Ladrillos del siglo XIX [34].
La complejidad volumétrica y el ziz-zagueado del
solar han obligado a definir 23 tipos de viviendas dis-
tintas de entre las 57 construidas, para dar unidad de
composición a la plaza, en continuidad con las obras
existentes y resolver el programa.
El edificio de la Plaza de la Remonta, asume un do-
ble compromiso:
- corresponder con la historia del barrio, con sus
fábricas de ladrillo a tizón y sus huecos verticales;
- hacer la actuación acorde con la modernidad, con
fábricas de ladrillo a soga de amplios huecos hori-
zontales.
Su construcción supone una apuesta por el futu-
ro, con la renovación de las fábricas mediante la fá- 27. Esquema de armado de muro doblado de ho¡a ex-
brica armada. terior con ladrillo cara vista e interior con bloque ter-
moarcilla. Cerchas anchas tipo Murfor cada 40 cm de
El edificio, con sus fábricas curvas y onduladas de
altura atando ambas hoias. Suplementos con cerchas
bandas a color, constituye un telón urbano que en- estrechas en las esauinas.
Tema 2. Prevención del agrietamiento de faenadas :on 'a faónca armada

vuelve el espacio público, abriéndose en un ventanal


sobre el cielo de Madrid (Fig. 29).En este edificio, la
fábrica armada se utilizó por primera vez en España
de forma incipiente, aunque significativa.
En la esquina entre la plaza y la calle Maestros
Ladrilleros, se levanta un torreón cilindrico, que re-
mata el edificio con una terraza abierta sobre la ciu-
dad.
La fábrica armada soluciona con sencillez, homo-
geneidad y economía, las esbeltas alas que flan-
quean el torreón circular.
La combinación de armaduras de distintos anchos
permite cumplir diversos objetivos a esta fábrica ar-
mada (Fig. 30 a y b).
La Fábrica Armada soluciona económicamente:
- las deformaciones impuestas
- el peso del dintel con efecto arco
- la acción horizontal del viento
- el atado solidario de hojas sin aparejar
- el enlace de esquina en ángulo < 90°
Total: ([(A) (1)] + [(B)+(2)] + [(C)+(3)])
+

El dintel tiene 3 m de luz, 72 cm. de canto por 24


cm. de espesor. Sus proporciones afinan el discurso
técnico-formal de la fábrica armada, como indican las
coincidencias del cálculo.
El cálculo requiere sólo dos cerchas localizadas en
los primeros tendeles para soportar el dintel, traba-
jando como un arco rebajado ciego, atirantado.
Además, esta cuantía de armado coincide, dadas las
proporciones del dintel, con el armado mínimo del
0,05% de la sección, que tiene que tener para consi-
derarse fábrica armada.
Por razones constructivas, se han empleado más
armaduras que las requeridas en la cuantía de ar-
mado mínimo, distribuidas en hiladas superiores, pa-
ra atar las dos hojas a soga del muro doblado, visto
a dos frentes.
Analicemos el edificio desde la óptica de la fábri-
ca armada para reflexionar sobre sus posibilidades ar-
quitectónicas (Fig. 31):
- Con las consideraciones expuestas en "ACW",
se puede observar el edificio de la Remonta, enfo-
cándolo como si se fuera a construir el cerramiento
de hoja exterior autoportante de fábrica armada con
cerchas Murfor.
- Cogiendo el esquema del alzado:
o
1 ) Se podría plantear un cerramiento "ACW" de
tres plantas de altura, arrancando sobre el soportal,
con apoyos en los oiiares distanciados a 3,25 m. o
29. Fábricas curvas y onduladas de ladrillo a tizón con ban-
bien a 6,50 m. En ambos casos, para salvar la luz se- das de color.
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

ría suficiente armar las cuatro primeras hiladas del pe- Este dintel curvo volado en el aire, da que pensar
to inferior, de 1,2 m. de altura. sobre la necesidad de ampliar el campo de aplicación
o
2 ) A) Se podría plantear perfectamente en el peto de la fábrica armada por tendeles, hacia el armado es-
de cornisa, de 1,6 m. de canto, un dintel corrido de pacial o tridimensional. 3 D.
fábrica armada con apoyos cada 6,5 m., armando las
primeras hiladas.
o
2 ) B) También cabría la posibilidad de ir a una 6. "AIA": Hacia un Sistema de Albañilería
gran luz de 13,0 m., caso de aceptar la fisura- Integral, basado en Piezas Universales
ción. Cosa no aconsejable en este caso al tratarse adecuadas al Armado Tridimensional
de fábrica vista y al exterior, aunque pudiera hacer-
se con armaduras inoxidables. El Manual Murfor es- En "AIA" Arquitectura, Siglo XXI, desde hace tiem-
pañol, plantea poder aceptar la fisuración en dinte- po se está profundizando en las posibilidades de am-
les^.] pliar el armado de la fábrica a las tres direcciones del
Igualmente, considerando la zona del torreón cir- espacio [36].
cular: Con las cerchas se ha solucionado el armado bi-
3°) Cabría la posibilidad de solucionar el dintel cur- direccional de la fábrica por niveles horizontales, ya
vo con fábrica armada, utilizando armaduras tridimen- que estos existen regularmente por la tradicional eje-
sionales cananillos [4]. Esta armadura, permite armar cución de la albañilería.
bidireccionalmente con anillos superpuestos, que son Para poder armar en la tercera dirección (la verti-
capaces de soportar torsiones debido a sus cercos [35], cal), se requiere recurrir a una de las dos estrategias
Pero para ello sería obligado disponer de un ladri- siguientes:
llo que tuviera perforaciones verticales suficientemente - no aparejar la fábrica para tener líneas vertica-
amplias, y una buena dosis de paciencia... les.
Tema 2. Prevención del agrietamiento de 'acnaoas con la taonca arriada

142

31. Análisis de las posibilidades de la fábrica armada, considerando el cerramiento del edificio de la Plaza de
la Remonta. Esquema del alzado.

32. Piezas Ladriflor todo muro con opción de apertura para el armado vertical, quintando la flor. Sistema Allwall.

- utilizar piezas con amplias perforaciones verti- cerchas prefabricadas de La fábrica armada coloca-
cales. das en los tendeles, lo que da lugar a un armado bi-
Desde "AIA" y en coordinación con los fabricantes direccional, si se incorpora la tercera dimensión del
de ladrillo españoles HISPALYT, se está desarrollan- armado, disponiendo barras verticalmente o cerchas.
do una pieza que permita armarse verticalmente (cual- En ambos casos para poder armar en el sentido
quiera que sea el aparejo de fábrica que se utilice) y vertical, ya sea con barras, o mediante armaduras
por tanto posibilite llegar al armado espacial con ar- prefabricadas planas o espaciales, es preciso con-
maduras prefabricadas tridimensionales, o mediante tar con que las piezas de albañilería puedan tener
la combinación de armaduras bidireccionales y unidi- amplios huecos verticales donde poder enhebrar las
reccionales obteniéndose las tres dimensiones del ar- armaduras verticales con el mortero u hormigón ne-
mado. [36] cesario.
Para armar tridimensionalmente la albañilería, se
pueden utilizar armaduras prefabricadas espaciales. "ALLWALL": "SISTEMA DE ALBAÑILERIA INTE-
con anillos convenientemente distanciados y diseña- GRAL, BASADO EN PIEZAS UNIVERSALES ADE-
dos al efecto [4]. CUADAS AL ARMADO 3D", es una Nueva Técnica de
También es posible armar tndimensionalmente la Albañilería que utiliza un tipo de piezas de uso gené-
fábrica partiendo de las posibilidades que ofrecen las rico o universal, especialmente diseñadas para, si se
capítulo II Patología e intervención en cerramientos y acabados

requiere y previa su puesta en obra, practicar en ellas [14JCALVI, M. "Cálculo de estructuras de fábrica armada contra el
seísmo".
de forma sencilla amplias perforaciones verticales pa-
Informes de la Construcción, n° 421. CSIC. Madrid. Septiembre. 92.
ra armar en esta dirección.
[15]Norma Sismorresistente. BOE 8-Febrero-95.
Este es el caso de la Pieza Maestra Cerámica K7, (16JEC-6. 5.2.9. Fábrica confinada. Figura 5.14: Ejemplos de fábrica
que utilizada en origen como un Ladrillo o Bloque ce- confinada.
rámico, de cualidades y aplicación tradicionales, es- [17]NBE FL-90 Muros resistentes de fábrica de ladrillo. MOPU.
tá diseñada con unas pequeñas perforaciones verti- [18]EC-6. 5.2.2. Area mínima de armado (para evitar la fisuración).
5.4.2.2 Cavity Wail. Las armaduras de tendel pueden considerarse
cales, pero ordenadas de tal forma que mediante un
como llaves de atado .
ligero foque del albañil con su paleta, en cualquier mo-
[19)EC-6. Detalle constructivo: Figura 5.11: Ejemplos de incorpora-
mento puede convertirse en una pieza con amplias per- ción del refuerzo en la fábrica,
foraciones, capaz de armarse en dirección vertical. h) piezas con armaduras de tendel.
La aplicación de las piezas Ladriflor todomuro ya [20JADELL, J.M. I Congreso Nacional de Tecnología de la Arquitectura:
sean enteras, o en piezas subderivadas, obtenidas por Estudio del comportamiento de la Fábrica armada con materiales ce-
rámicos: (I) Flexión vertical, (II) Ensayos de adherencia. Departamento
cortes preestablecidos, abre un gran campo de apli-
de Construcción y Tecnología Arquitectónicas. ETSA Madrid, 24-
caciones a la albañilería cerámica del ladrillo o bloque 26/11/1994.
cara vista, con las ventajas técnicas que aporta el ace- [211ADELL, J.M. -Vertical Flexura! Bendlng In Untéis with Sed Joint
ro en sus diversas variantes de armado espacial, de t i - Reinforced Clay Masonry in Spain." 4th International Masonry
po tradicional, o pretensado, postensado. e t c . . tanto Conference. Proceedings British Masonry Society (Masonry 8). 23-
25/10/95
si se trata de elementos hechos in situ, como de pre-
¡22JGILL, L.A. & WARREN. P. 'The Atkin Building. Brick Cladding to
fabricados a pie de obra o en taller.
a SteelFramed Building; a differentapproach". The Brick Development
Association. London, 1987.-
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- Price companson.". Informes de la Construcción 421. Instituto Eduardo Torroja. CSIC
Proceedmgs of the Fourth International Masonry Confemnce. London. Madrid. 1071992.
Octubre, 95 [36JAIA: Arquitectura siglo XXI. Paseo Castellana, i 54. Madrid 28046.
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

145

3. Fisuras en acabados superficiales*

Juan Monjo Carrió


Dr. Arquitecto
Catedrático de Construcción E.T.S.A.-U.P.M.

1. Definiciones perponer una serie de capas, sobre todo para nuestra


cultura occidental, desde la construcción de los llama-
1.1 Fisuras dos muros romanos a base de un opus certum o faz
(facera) en cada cara, que podía ser pétreo o cerámi-
De acuerdo con lo mencionado en el capítulo 2.1, co y tenía el aspecto y la resistencia adecuada a los
hablamos de fisura como una rotura de la capa su- agentes exteriores, y un opus incertum de relleno del
perficial de los cerramientos (acabado) cuando afec- interior, a base normalmente de un opus caementicium.
ta exclusivamente a dicha capa y no a todo el espe- Esta técnica de las capas se ha mantenido a lo lar-
sor de aquellos. En este capítulo hablaremos de fisuras go de toda la historia como solución más económica
en acabados superficiales y no en muros de hormi- para construir cerramientos de fábrica de una forma
gón armado que han quedado estudiados en los ca- rápida, sin cuidar especialmente su acabado superfi-
pítulos correspondientes a estructuras. cial, para aplicarle a continuación una última capa de
Como veremos, tanto las causas que provo- acabado propiamente dicho de aspecto y resistencia
can estas roturas como su reparación suelen ser dife- adecuados a las acciones exteriores que puede su-
rentes a las que producen las grietas como roturas que frir, y unido al muro constitutivo con algún sistema de
afectan a todo el espesor del cerramiento y, por tanto, adherencia o anclaje adecuado a los materiales em-
merecen capítulo aparte, aunque en otras publicacio- pleados.
nes las he contemplado en el mismo capítulo.
Siendo esto así, esta capa externa de acabado
tendrá su propia vida constructiva que dependerá,
1.2 Acabados superficiales por una parte, del grueso del cerramiento al que es-
tá unido, y por otra, de las acciones exteriores que
Entendemos por acabado superficial cualquier ca- sobre ella actúan, siempre en función del material de
pa que constituya la protección superficial de un ce- que esté ejecutada. En nuestro caso, y como vere-
rramiento, sea continuo (enfoscados, revocos, guar- mos, su posible rotura (fisuras) serán consecuencia,
necidos, enlucidos, pinturas) o por elementos por una parte, de los movimientos del soporte al que
(alicatados, chapados de piedra, aplacados, etc.) y ya esté unida y, por otra, de sus propios cambios di-
sea adherido en continuidad, como revocos o alica- mensionales debidos a sus variaciones de tempera-
tados, ya este anclado por puntos, como los falsos tura y humedad.
techos de escayola o los chapados de piedra.
Es sabido que en la construcción de cerramientos
desde la antigüedad se ha utilizado la técnica de su- 2. Tipología

Al igual que al estudiar los tipos de grietas, pode-


mos hacerlo en función del material afectado y en fun-
' Esle capítulo está contenido parcialmente en otras publicaciones
del mismo autor ción de las causas de origen.
Tema 3. Fisuras en acaoados superiicaies

siguen la linea de la grieta o la junta constructiva del


soporte y, por tanto, suelen tener una linealidad muy
//
/ marcada, horizontal o vertical. Las terceras, finalmente,
YA
// vuelven a recordar la forma de las primeras, irregular,
/
/ aunque con localización más acusada por puntos, en
/ e i función de las zonas que han sufrido el ataque físico
/ //
/ o químico.
/
/ Podemos considerar también aquí los falsos te-
/ 1
'A chos y cielos rasos de escayola armada en los que
pueden aparecer las fisuras reflejo del forjado que los
FISURA POR REFLEJO FISURA POR DILATACON
D A SOPORTE -CONTRACCION- soporta y las propias, que en este caso (sobre todo
en los falsos techos) son debidas a la retracción hi-
1/ grotérmica y tienen también forma lineal.

2.1.2 Acabados por elementos


Nos referimos a todos aquellos basados en ele-
/ mentos repetitivos, que llegan a obra con un nivel de
acabado elevado y, por tanto, con una forma indivi-
dual definitiva, que se sujetan al soporte colocándo-
se de un modo yuxtapuesto. Dentro de ellos debemos
/ distinguir dos tipos según su forma de sujeción, que
FISURA PROPIA DE FISURA ENTRE PIEZAS condiciona el tipo de fisura que en ellos puede apa-
LAS PIEZAS (CRAQUÉLE) POR RETRACCION GENERAL
recer:
- Los adheridos al soporte de un modo continuo,
1. Fisuras en alicalados.
por medio de morteros de distintos tipos.
- Los anclados al soporte por puntos o líneas.
En los primeros, el tipo de fisura recuerda al de-
2.1 Según el material de acabado
tallado para los acabados continuos, aunque par-
Como ha quedado mencionado, debemos consi- cialmente condicionado por la integridad individual de
derar dos tipos de acabados con técnica constructi- cada elemento. Así, en función de la resistencia me-
va diferente; los continuos y los de elementos. En am- cánica de cada uno de ellos, la fisura seguirá la línea
bos pueden aparecer las fisuras de rotura teórica rompiendo, cuando sea necesario,
el elemento unitario o, por el contrario, seguirá las jun-
2.1.1 Acabados continuos tas constructivas entre elementos más próximas a la
Englobamos con este titulo todos aquellos de apli- teórica, al igual que ocurría en las fábricas de ladrillo
cación in situ en estado plástico o líquido, que poste- o de bloque (Fig.1).
riormente adquieren su integridad definitiva por en- En este sentido cabe mencionar que un acabado
durecimiento es decir, enfoscados y revocos de de este tipo (un alicatado, por ejemplo) es como una
morteros de cemento, cal y combinados con diferen- fábrica con un coeficiente de adherencia muy bajo
tes posibilidades de aditivos hidrofugantes. plastifi- (muy poca resistencia interna) y que, además, está ad-
cantes, colorantes, etc., guarnecidos, tendidos y en- herida a un soporte y, por tanto, condicionada por él
lucidos de yeso, y pinturas de todo tipo, con o sin en sus movimientos, sobre todo en las fisuras que son
áridos o mallas de refuerzo, etc. reflejo de aquel.
En general, las fisuras que puedan aparecer serán También pueden aparecer fisuras debidas al pro-
a su vez de tres tipos; las debidas al propio acabado, pio material de acabado, bien por sus características
por las características del material o por su ejecución fisicoquímicas, bien por las retracciones térmicas o
y proceso de endurecimiento, las que son reflejo de hidráulicas que pueda sufrir. En general, serán del ti-
soporte sobre el que están aplicados y las que son po de mapa aunque cabe distinguir dos variantes:
consecuencia de acciones químicas o físicas sobre el - Las que se producen en cada uno de los ele-
acabado una vez terminado (acciones meteorológi- mentos (el clásico craquélé de los azulejos) que no
cas, contaminación, heladas etc). Las primeras sue- afectan, ni se ven afectados, por las juntas.
len adquirir forma de mapa con distribución más o me- - Las que se reflejan en el conjunto del acabado,
nos uniforme y en todas direcciones. Las segundas por dilatación-contracción o por efectos del mortero
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

de agarre, que sí afectan a las juntas y se pueden ver la rotación de los muros cuando reciben un empuje
afectadas por ellas y por la resistencia mecánica dei horizontal superior.
elemento, igual que en el punto anterior. En genera!, b) También pueden aparecer fisuras, sin llegar a
cabe considerar que una |unta en estos acabados es grietas, en los casos de pandeo fuera del plano cuan-
sumamente débil con respecto al conjunto y que lo do un cerramiento recibe empujes verticales.
que realmente une a los distintos elementos es el mor- c) En general, cuando el esfuerzo que se produce
tero de agarre, bien directamente, bien a través del no es suficiente para romper el cerramiento, sí puede
soporte. serlo, sin embargo, para romper el acabado. Este es
En cuanto a los acabados anclados, solo cabe con- un caso bastante corriente en los acabados por ele-
siderar las fisuras del propio elemento, aunque las cau- mentos (alicatados y chapados de piedra) en facha-
sas pueden ser variadas. El elemento en sí puede te- das, sobre todo en petos de terraza, donde si se pro-
ner algún defecto (un pelo de cantera en una piedra, duce algún movimiento de la estructura, flecha del
por ejemplo) y lógicamente a él van a parar los distin- borde, por ejemplo, puede provocar un movimiento
tos esfuerzos originando la fisura. Otro punto conflic- del peto sin llegar a romperlo, pero sí aparece la ro-
tivo es el anclaje a través del cual se trasmiten los es- tura del acabado y. por tanto, las fisuras.
fuerzos que llegan por el soporte, o en el que se coartan d) Cuando el acabado no es capaz de seguir los
los intentos de dilatación térmica de las propias pie- movimientos de dilatación/contracción del soporte,
zas. De ahí que esos sean posibles puntos de origen pueden aparecer fisuras verticales sin que éste rom-
de las fisuras. pa. Aunque no es corriente esta situación, ya que lo
En cualquier caso, para cada material y elemento normal es que los cambios térmicos afecten más a los
habrá que tener en cuenta sus características físico- acabados que al soporte. Sin embargo, cuando aque-
químicas y su sistema de anclaje, para comprender llos son muy rígidos pueden aparecer las fisuras, co-
su fisuración. mo son los casos de alicatados que, además, están
rígidamente unidos al soporte.
2.2 Según la causa
2.2.2 Esfuerzos higrotérmicos
Al igual que en las grietas, podemos agrupar las Como queda dicho, las variaciones higrotérmicas
causas origen de las fisuras en tres grandes tipos, dos afectan de una forma radical e inmediata a los aca-
según las características propias del proceso patoló- bados debido a su situación más expuesta, de ahí que
gico (mecánicas y fisicoquímicas) y otro en función de ésta sea una de las causas más importantes como ori-
la ejecución del elemento y errores (causas indirectas) gen de las fisuras en los acabados. Naturalmente, la
que en ella se han podido introducir. En cualquier ca- variación dimensional por cambios de temperatura o
so, a los efectos del posterior diagnóstico ésta es la humedad dependerá, por una parte, de los coeficien-
tipología que más nos interesa. tes de dilatación de los materiales que constituyen la
capa de acabado y, por otra, de la situación climáti-
2.2.1 Acciones mecánicas ca y la orientación y la exposición de la fachada en
Consideramos aquí todos aquellos esfuerzos trans- cuestión. Veamos.
mitidos al acabado desde el soporte al que están uni-
dos. Son, pues, consecuencia de movimientos del so- A) Cambios de temperatura
porte que introducen esfuerzos de tracción en el Provocan como sabemos dilataciones y contrac-
acabado, movimientos que, a su vez, pueden tener su ciones según el coeficiente de dilatación térmica del
origen en acciones mecánicas sobre el soporte o en material. Ello implica posibles roturas en el momento
variaciones dimensionales del mismo por cambios de de la contracción como consecuencia de las reten-
temperatura. ciones que suponen los puntos de unión del acaba-
En general, todas las acciones mecánicas que, do al soporte. Por ello conviene analizar brevemente
según vimos, provocaban grietas en los cerramien- las distintas situaciones.
tos, pueden afectar a sus acabados provocando fi- En los acabados continuos (enfoscados, revocos
suras. No obstante, interesa destacar aquellos ca- y pinturas) como quiera que la adherencia es conti-
sos en los que pueden aparecer las fisuras sin que nua y la variación dimensional se produce en todas
exista grieta que afecte a todo el espesor del cerra- las direcciones, las fisuras pueden aparecer también
miento. Concretamente, podemos mencionar los si- en cualquier dirección, por lo que tendrán la consabi-
guientes: da forma de mapa, aunque más separadas que las
a) Por un lado la fisura horizontal que aparece en provocadas por ia retracción hidráulica que mencio-
Tema 3. Fisuras en acabados superficiales

naremos más adelante. En cualquier caso, serán más


importantes en fachadas Sur y Oeste y en las zonas
más expuestas de la fachada (salientes y partes al-
tas).
En los falsos techos de escayola exteriores, sin
embargo, las fisuras serán más lineales, marcando la
mayor dimensión de cada tramo, es decir, tendrán pre-
ferentemente una dirección perpendicular a la mayor
dimensión del paño y aparecerán normalmente en el
centro del mismo, dependiendo de sus puntos de cuel-
gue o posibles enganches en los bordes.
En los alicatados, debido a su relativa continuidad
de adherencia y a la pequeña dimensión de las pie-
zas que conlleva profusión de juntas, la rotura se sue-
2. Fisura en chapado por dilatación térmica.
le producir en éstas últimas, abriéndose las uniones.
También aparecen en las dos direcciones (horizontal
y vertical) lo que acaba provocando desprendimien-
tos, como veremos en el capítulo correspondiente.
En los chapados, al estar anclados por puntos y
ser relativamente independientes las piezas, sus unio-
nes actúan como juntas de retracción y, por tanto, no
existe rotura propiamente dicha sino abertura de di-
chas uniones al contraer. Sin embargo, sí podemos
encontrar algunas fisuras como consecuencia de la
dilatación al producirse un pandeo hacia afuera del
chapado cuando no hay juntas de dilatación suficien-
tes y las uniones entre piezas no pueden actuar co-
0) CORONACIÓN 0£ FACHADA b) MOLDURAS OE ESCAYOLA mo tales por estar colmatadas de cemento. Aparecen
sobre todo, en superficies curvas convexas donde es
3. Fisuras debidas a cambios de contenidos de humedad. más fácil la aparición del pandeo hacia afuera (Fig.2).
Entonces, la dirección de la fisura se corresponde con
la perpendicular a la dilatación.

B) Cambios de contenido de humedad (Fig. 3)


Como en el caso de las variaciones de temperatu-
ra, también las de humedad producen cambios di-
mensionales en la unidad constructiva que acaban
provocando fisuras.
En general, la humectación de un material poro-
so, como son todos los que constituyen los acaba-
dos continuos, produce su dilatación, mientras que
la desecación provoca una retracción, fenómeno por
el cual pueden aparecer las fisuras. El cuadro C.1
nos da la dilatación por humectación de los mate-
riales más empleados en cerramientos de fábrica.
Caso especial lo constituyen los elementos cerámi-
cos con alto contenido en caolinita que por su avi-
dez de agua puede alcanzar unas dilataciones de
hasta 1 cm. por cada metro.
La lesión por este defecto suele ser localizada y
presenta la forma de fisuras verticales sensiblemente
paralelas, y separadas entre sí entre 20 y 50 cm. Suelen
3. b Fisuras en molduras de escayola de
rachada
aparecer en zonas de más fácil humectación y dése-
capituio II

7-/9

Por -.--.*'•-:» M ha D M M B pueden S*J*'» v* amatado v e v a d o


La escala <Ml Mteco a pan* da 10 '•aoonas euehtatives. >-:>-, i • ' Para «l cont«r*Oo - J^ÍCII:
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I 3 i Todos ios productos a bate de dosificación, condiciones o> tipos -- maderi

CUADRO I. Movimientos relativos por humedad de distintos materiales.

cación continua. Así, las encontramos en arranques medias, como en recercados de ventanas, tan co-
de cerramientos donde aparezcan humedades de ca- rrientes en nuestras fachadas urbanas de finales del
pilaridad y, sobre todo, en las coronaciones de fa- XIX y principios de XX. El material constitutivo, la es-
chadas con escasa protección superior, donde la hu- cayola y los estucos de yeso, resulta muy higroscó-
mectación es relativamente fácil, pero más lo es la pico y en función de la humedad ambiente, cambia su
desecación debido a su alto nivel de exposición, so- contenido de agua y, por tanto su dimensión. Por otra
bre todo al oreamiento. (a) parte, cuando está seco resulta ser muy frágil, por lo
El hecho de que sean verticales se explica por la que su contracción provoca su rotura. De hecho, es
dirección lógica del esfuerzo superficial de tracción corriente encontrar todo este tipo de molduras fisu-
por contracción, que será paralelo a la coronación del radas en sentido transversal, con distancia media en-
cerramiento, siguiendo la de la franja que sufre la hu- tre fisuras, variable, entre los 30 y los 50 cms.(Fig. 3")
mectación y posterior desecación. Por esta misma razón, es fácil encontrar fisuras de
este tipo en falsos techos de escayola, sobre todo en
También podremos encontrarnos zonas puntuales
zonas de humedad cambiante como exteriores y ha-
con el mismo efecto, cuando existe una humedad lo-
bitaciones húmedas, si no se ha independizado de las
calizada, bien por filtración, bien por rotura de tube-
paredes.
rías. Entonces, la mancha de humedad con origen en
un punto provoca una dirección radial de humecta-
ción que al desecar produce fisuras irregulares en for- 2.2.3 Deficiencias de proyecto y ejecución
ma de mapa o con líneas más o menos concéntricas. Conjunto de errores de diseño y obra que introdu-
Caso aparte lo constituyen las molduras de esca- cen defectos constructivos que actúan como causas
yola en fachadas, tanto en cornisas e impostas inter- indirectas. Son normalmente problemas de aditividad,
Tema 3. Fisuras en acaoados superficiales

es decir, de unión excesivamente rígida entre elementos


constructivos diferentes que necesita cierta indepen-
dencia de movimientos o, en general, ausencia de jun-
tas que permitan esa libertad de movimiento; veamos.

A) Uniones constructivas mal resueltas


La aplicación de un acabado pasando sobre la unión
de un elemento de cerramiento con otro estructural,
lleva a la inevitable separación de éstos y a la consi-
guiente rotura de la capa de acabado en ese punto.
En realidad se trata de una grieta, ya que la separa-
ción afecta también al soporte, pero lo que de verdad
se rompe es la capa de acabado, ya que el soporte
4. Fisura en chapado de piedra con pelo de cantera. estaba ya rofo desde su ejecución, al ser una unión
defectuosa entre elementos constructivos diferentes.
De hecho, desde el proyecto diseñamos la yuxtapo-
sición de dos unidades constructivas distintas pen-
sando que al aplicarles un mismo acabado superficial
lograremos que trabajen como un solo elemento, lo
que es totalmente imposible, sobre todo si se trata de
unidades con misiones constructivas distintas.
Entonces, a lo largo de su vida constructiva se mue-
ven de un modo independiente y se abre. Uno de los
casos más claros es la yuxtaposición en el mismo pla-
no de un elemento estructural (pilar o forjado) con un
cerramiento, bien de fachada, bien de tabiquería, re-
cubiertos posteriormente por un mismo acabado, bien
continuo, bien por elementos. Se trata de fisuras muy
lineales que reproducen la unión errónea.
Por último, podemos considerar unión constructi-
va errónea al excesivo atado entre falso techo de es-
cayola y paredes, cuando la dimensión es muy gran-
de (> 4 m) o hay peligro de cambios de humedad o
5. Afogarado en enfoscado por mortero rico.
temperatura (exteriores)

B) Falta de juntas de retracción/dilatación


La importancia de los cambios dimensionales por
variaciones higrotérmicas nos indica la necesidad de
juntas que los posibilite. Por el contrario su ausencia
llevaría a la aparición de fisuras. Esto es así para to-
do tipo de acabados, tanto continuos como por ele-
mentos, aunque probablemente sean más frecuentes
y llamativas las lesiones en los continuos, ya que en
los segundos, las propias uniones entre piezas pue-
den actuar como juntas de dilatación/contracción y
absorber los movimientos. Un caso particular lo cons-
tituyen, de nuevo, los falsos techos de escayola lisa,
tanto en exteriores como en interiores.

C) Materiales inadecuados
Podemos considerar, tanto los casos de deficien-
cia en el propio material (acabados por elementos) co-
6. Afogarado en enfoscado por curado deficiente. mo en el proceso de ejecución (morteros).
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

a. - Materiales muy porosos, (piedra de chapados


o plaquetas cerámicas) con un alto coeficiente de ab- 1i ll i t J 1
sorción y, por tanto, con posibilidad de variación di- OES '- ' '••
mensional por humectación, lo que produce las fisu-
ras vistas en el apartado anterior.
b. - Elementos defectuosos,como piedras de cha-
pado con pelos de cantera, que facilitan la aparición
de fisuras y grietas, respectivamente, al aparecer el
más mínimo esfuerzo siguiendo el defecto original :
' \-
(Fig. 4).
c - Morteros de cemento excesivamente ricos, uti-
lizados como acabado superficial, que pueden tener
una retracción hidráulica y una rigidez superior a la
base sobre la que están aplicados, con la consiguiente
aparición del afogarado cuyo síntoma más claro son •Ka
las fisuras en forma de mapa, bien generalizadas, bien
por zonas. (Fig. 5).
1
— -
Estos morteros pueden ser utilizados, también pa-
ra el agarre de acabados por elementos, sobre todo
alicatados, con una retracción y rigidez que puede
7. Junta de dilatación mal hecha.
provocar fisuras superficiales por agrietamiento de las
plaquetas.

D) Errores en la ejecución
Podemos considerar dos más destacados:
3. Diagnóstico
a) Deficiente ejecución de morteros superficiales
que puede presentar dos variantes: Debido a la posible confusión entre grietas y fisu-
a.1) Mal curado, con insuficiente humedad que, ras y al distinto proceso de reparación a seguir, resul-
independiente de su riqueza en cemento, puede pro- ta fundamental un correcto diagnóstico del problema
ducir un afogarado en el acabado con las consabidas que pasará, básicamente, por la identificación de la
fisuras en mapa. (Fig.6) lesión y su disposición constructiva con relación de
a.2) Poca humectación del soporte sobre el que los materiales afectados.
se aplica, que dificulta la adherencia del acabado y, La identificación se basará en la forma de la rotu-
por tanto, su integridad general, resultando una capa ra. Si es en mapa, no cabe duda de su identidad de
excesivamente delgada y sin sujeción al soporte, por fisura, afectando básicamente a acabados continuos.
tanto muy débil ante cualquier esfuerzo. Las fisuras Lo mismo ocurrirá cuando se trate de variaciones di-
suelen ser también irregulares, aunque con mayor dis- mensionales por cambios de humedad con fisuras pa-
tancia entre ellas. ralelas próximas y de pequeñas dimensiones.
b) Mala ejecución de las juntas de dilatación. Las que podrán inducir a error son las lineales de-
Normalmente ocurre en acabados continuos que, o bidas a uniones constructivas defectuosas o proble-
bien no respetan las juntas de dilatación de la estruc- mas de transmisión de esfuerzos de tracción desde
tura o del soporte, o bien no debilitan lo suficiente su el soporte. Entonces habrá que estudiar, mediante las
espesor en dichas juntas o en las de retracción pro- correspondientes calas, el alcance de la rotura para
pia. En los primeros casos, la fisura se manifiesta en confirmar su identificación. En cualquier caso y al Igual
la junta del soporte, más o menos lineal. En ios se- que hacíamos con las grietas, habrá que anotar, por
gundos, pueden aparecer en cualquier punto inter- lo menos, ios datos siguientes:
medio. (Fig. 7) - Unidades constructivas afectadas
También aparecen en acabados por elementos - Materiales rotos
cuando surgen los mismos errores. Entonces, en el - Situación relativa
primer caso la fisura suele aparecer en la junta entre - Forma y disposición
elementos más próxima a la del soporte. En el se- Podrá ser interesante también conocer las carac-
gundo, en juntas entre elementos con distancias más terísticas físícomecánicas de los materiales lesiona-
o menos regulares. dos con el fin de saber su capacidad mecánica y com-
Tema.l Fisuras en acabados superficiales

prender mejor la posibilidad de su rotura. Así, podrá 4.1 Anulación de la causa


ser interesante saber la resistencia a la compresión y
a flexotracción del azulejo o la piedra de chapado de De acuerdo con la tipología de fisuras según la cau-
un acabado, etc. Para ello no tendremos más reme- sa vista en 2.2. tenemos las siguientes actuaciones
dio que obtener muestras de los propios elementos posibles.
constructivos o, en todo caso, reproducirlos en pro-
betas en caso de conocer su composición original. 4.1.1 Por acciones mecánicas
Por último, será fundamental conocer la disposi- Comoquiera que dichas acciones mecánicas ve-
ción constructiva de los elementos afectados, tanto nían transmitidas por el cerramiento soporte, la ac-
los encuentros entre estructura y cerramiento, como tuación deberá ser sobre éste según lo que quedó vis-
la disposición de los elementos constituyentes de aca- to en el capítulo correspondiente a grietas, bien por
bado en sí, como las uniones entre distintos elemen- asientos, bien por flechas excesivas, bien por empu-
tos. Para ello será importante reproducir gráficamen- jes. Solamente cuando el esfuerzo de tracción sobre
te los detalles constructivos afectados, para lo cual el acabado sea consecuencia de la dilatación del so-
podremos seguir dos caminos. Bien obtenerlos di- porte que aquel rio es capaz de seguir por su excesi-
rectamente en las unidades constructivas lesionadas va rigidez, podemos pensar en actuar sobre el aca-
a base de realización de calas que nos permitan des- bado. Entonces deberemos recurrir a introducir juntas
cubrir esa disposición, bien consultando los docu- de dilatación que reduzcan la longitud de la variación
mentos de proyecto de que se disponga. dimensional y, por tanto, el esfuerzo de tracción con-
El primer procedimiento es, evidentemente, el más siguiente. Comoquiera que dichas juntas serán útiles
fiable, aunque obliga a la destrucción parcial o local también para facilitar la variación dimensional del aca-
de las unidades. En cualquier caso, es inevitable (y bado en general, incidiremos sobre ellas en el siguiente
común) en edificios antiguos donde no se dispone de apartado.
documentación técnica. El segundo es el más cómo-
do y económico, aunque es recomendable su com- 4.1.2 Por variaciones dimensionales
probación estadística por el método de las calas, pues Cuando se trata de dilataciones y contracciones
es relativamente corriente que la ejecución difiera del por cambios de temperatura que afectan especial-
proyecto. mente a los acabados exteriores, la única intervención
Una vez que dispongamos de todos los datos, y que parece viable es la apertura de juntas de dilata-
sólo entonces, estaremos en disposición de emitir un ción/contracción que reduzcan esas variaciones di-
correcto diagnóstico que, al igual que en los casos de mensionales y eviten la rotura ya que, evidentemen-
grietas, deberá contener, por lo menos: te, no podemos evitar la variación de temperatura.
- Causa indirecta por error de proyecto o ejecu- En los acabados continuos (enfoscados y revocos)
ción las juntas, que lo serán de retracción, deben realizar-
- Causa directa por acción mecánica o física. se buscando algún tipo de modulación en la fachada
en ambas direcciones y pueden estar distanciadas en-
tre 2 y 3 metros, procurando que coincidan en lo po-
sible con las fisuras abiertas. Ello, siempre que el aca-
4. Reparación
bado no amenace desprendimiento por rotura de su
Como siempre analizaremos el proceso de repa- adherencia al soporte ya que en ese caso habría que
ración en dos fases; anulación de la causa y repara- demoler y rehacer. Estas juntas se pueden abrir con
ción del efecto o lesión propiamente dicha. Conviene una radial que penetre, por lo menos, 1 cm y se de-
mencionar, no obstante, que los acabados son ele- ben sellar con elastómeros.
mentos constructivos relativamente débiles por su re- Para los casos de alicatados y chapados, lo lógi-
ducido espesor, por lo que cuando resultan dañados co es abrir las juntas coincidiendo con las uniones en-
por su rotura en forma de fisuras, suelen presentar tre piezas; también en las dos direcciones (horizontal
problemas de pérdida de adherencia y, por tanto, po- y vertical) y siempre que el acabado no tenga proble-
sibles desprendimientos. En consecuencia, antes de mas de desprendimiento según veremos en el capí-
iniciar su reparación conviene tener la seguridad de la tulo correspondiente. La distancia entre juntas vendrá
viabilidad de esa intervención. De lo contrario resulta dada por el coeficiente de dilatación térmica del ma-
más económico y constructivo la demolición del aca- terial y, por el gradiente de temperatura estimado se-
bado fisurado y su refacción siguiendo las adecuadas gún la situación geográfica, orientación y exposición.
medidas preventivas. No obstante, con carácter general se puede hablar de
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

colocar una junta de retracción del cerramiento entre


cada dos juntas de dilatación de la estructura, y una
junta de dilatación del acabado entre cada dos juntas
de retracción, todas ellas afectando al acabado, lo que
nos da una separación aproximada entre 7 y 10 mts,
1
tanto en horizontal como en vertical.
Por último, en los falsos techos de escayola ya ha
quedado mencionada la necesidad de abrir juntas de
retracción, con distancias aproximadas de 4 cm, me-
diante radial, siempre que el falso techo no esté ya
muy deteriorado.
Si estamos ante fisuras por variación de la hume-
dad, al estar tan localizadas en zonas muy expuestas
no tiene sentido una actuación a base de juntas de re- 8. Chapado reanclado.
tracción, sino que más bien debemos recurrir a una
reparación especifica del acabado afectado (normal-
mente revocos) lo que trataremos al hablar de la re- fábrica adherida o colgada a la que actúa de sopor-
paración del efecto. te, si resultan elementos rotos habrá que sustituirlos
individualmente, asegurando su nueva adherencia o
cuelgue. Si se trata de piezas adheridas (alicatados)
4.1.3 Por defectos de proyecto o ejecución
además habrá que cuidar el rejuntado entre las pie-
En tipología hemos mencionado el problema de las
zas.
uniones constructivas mal resueltas cuando se inten-
Cuando la fisura se dé entre piezas, en las adhe-
ta cubrir una unión entre dos elementos constructivos
ridas, lo más probable es que, además, se haya pro-
distintos con un acabado pasante. En estos casos, la
ducido separación del soporte y por tanto principio
única solución será marcar esa unión desde afuera
de desprendimiento, por lo que lo más seguro será le-
cortando y sellando el acabado. Si se trata de un aca-
vantar las piezas del borde de la lesión y reponerlas
bado continuo, el corte se podrá hacer en el mismo
adecuadamente.
punto. Si, por el contrario, se trata de un acabado por
En los casos de chapados colgados, al reponer las
elementos, podremos recurrir a cortar por la unión li-
piezas rotas resulta difícil utilizar los antiguos ancla-
neal más próxima.
jes ocultos, por lo que se suele proceder a anclarlos
En los casos en que el error cometido es la au-
desde el exterior mediante pernos químicos o mecá-
sencia de las necesarias juntas de dilatación/con-
nicos, al igual que veremos al hablar de desprendi-
tracción, debemos recurrir a abrirlas con los mismos
mientos (Fig. 8).
criterios mencionados en el punto anterior.
En cualquiera de los casos, si la fisura en el aca-
bado es consecuencia de la grieta del cerramiento que
4.2 Reparación del efecto actúa de soporte, primero habrá que dejar reparada
ésta.
Ya se ha mencionado que los pasos para anular la Por último, si se trata de falsos techos de plan-
causa sólo se deben dar cuando tengamos asegura- chas de escayola, la mejor solución será demoler y re-
da la integridad del acabado. De lo contrario procede hacer con las juntas adecuadas, ya que resulta prác-
la demolición y refacción total o parcial del mismo. ticamente imposible anular la rotura de esas planchas.
Entramos entonces en la reparación de la lesión pro-
piamente dicha. En este caso, como reparaciones al- 4.2.2 De acabados continuos
ternativas a la demolición debemos considerar la sus- Cuando la fisura es simple reflejo de la grieta del
titución de elementos rotos (acabados por elementos) soporte, su reparación será simultánea con la de és-
la reposición parcial (acabados continuos) y la pro- ta y coincidirá con lo mencionado en el capítulo de
tección superficial. Veamos. grietas. En todo caso, debemos decidir hasta donde
reponemos el acabado, lo que estará en función, por
4.2.1 De acabados por elementos una parte, de su propia integridad (no debemos dejar
Comoquiera que se trata de una segunda hoja de ninguna zona de acabado que no tenga toda su con-

' El autor ha preparado dos "Fichas ASEMAS" donde aparecen las distancias entre |untas de dilatación según el tipo de alicatado o de chapa-
do y las condiciones climáticas.
Tema 3. Fisuras en acabados superficiales

9 a. Independencia de perímetro de falso techo de escayola. 9 b. Independencia de perímetro de falso techo de escayola.

sistencia) y, por otra, del aspecto formal, ya que será pongan causas indirectas. Como ha quedado visto,
conveniente llegar hasta líneas modulares o de dibujo éstas son las que permiten que se inicie el proceso
que permitan disimular la reparación. Si, por el contra- patológico en el momento en que aparece una causa
rio, las fisuras son repetitivas y son consecuencia de la directa y, además, son las únicas sobre las que po-
propia ejecución, debemos distinguir varios casos: dremos actuar por lo general. Evitemos, pues, que
a) Si el defecto es de adherencia por incorrecta aparezcan y reduciremos el riesgo de fisuras.
preparación de la superficie del soporte (insuficiente
limpieza o humectación) estamos ante un principio de 5.1 Medidas en proyecto
desprendimiento que, como veremos en su capítulo,
nos obligará a una demolición y refacción de toda la Serán las tendentes a asegurar que el acabado sea
zona afectada. capaz de resistir con integridad las posibles acciones
b) Si el defecto es también de adherencia, pero por externas a él que podemos resumir en:
falta de rugosidad, también se tratará de un despren- a. -Acciones mecánicas
dimiento, y en este caso la refacción nos obligará, bien - Esfuerzos de tracción por movimientos elás-
a provocar la rugosidad necesaria, bien a armar el aca- ticos o térmicos del soporte;
bado. Hablaremos de ello más adelante. - Esfuerzos de tracción y cortante por unión
c) Si se trata de fisuras de afogarado, por insufi- de dos elementos distintos en el soporte.
ciente curado del mortero superficial, entonces, la ad- b. -Acciones higrotérmicas
herencia e integridad del acabado suele ser suficien- - Variaciones dimensionales generales del
te y, comoquiera que las fisuras están totalmente propio acabado por cambios térmicos;
estabilizadas, podremos proceder a tapar las lesiones - Variaciones dimensionales locales del
con un nuevo acabado superficial, que puede ser la acabado por variaciones en su contenido de hume-
propia pintura o un revoco. Solo deberemos tener la dad.
precaución de que las fisuras resultan bien rellenas. Ante la posibilidad de esfuerzos de tracción por
d) Si estamos, por último, ante fisuras por varia- movimientos elásticos del soporte recurriremos a re-
ciones de humedad, deberemos recurrir a la demoli- forzar el acabado con algún tipo de malla o estructu-
ción de toda la zona afectada y su refacción prefe- ra auxiliar: malla de fibra de vidrio o poliéster para aca-
rentemente con morteros con resinas acrílicas (con bados de adherencia continua (enfoscados, revocos
cierta elasticidad) y con armadura de fibra de vidrio o y alicatados) y estructura auxiliar soporte para cha-
de poliéster. Es posible, incluso, mantener el acaba- pados. En este último caso, sin embargo, puede ser
do y protegerlo con una pintura elástica armada que más útil el mantenimiento de juntas abiertas entre pie-
tapa las fisuras. zas para permitir su adaptación a los posibles movi-
mientos.
Ante uniones constructivas de elementos diferen-
5. Prevención tes, nunca deberemos intentar reforzar sino, por el
contrario, marcar la junta en el acabado para que no
En este último apartado vamos a tratar de recoger se vea afectado por los posibles movimientos del so-
las medidas preventivas en proyecto y ejecución con- porte. Sólo en los casos de falsos techos de escayo-
ducentes a evitar la introducción de errores que su- la, al estar colgada, se puede mantener la continui-
capitulo íi Patología e intervención en cerramientos y acaoados

dad del acabado si le damos la independencia sufi- b) Correcta composición de los morteros, que cuan-
ciente en su perímetro.(Fig.9) do son excesivamente ricos o más ricos que la base
Ante las variaciones dimensionales por cambios (caso de una segunda capa) pueden tirar por retrac-
de temperatura deberemos recurrir siempre al diseño ción hidráulica y fisurar en mapa.
de juntas de dilatación/contracción. Para ello, en los c) Correcto curado de dichos morteros una vez
acabados continuos en este caso, como reparacio- aplicados, para evitar el efecto de afogaramiento por
nes alternativas a la demolición, debemos considerar falta de humedad en su proceso de fraguado.
la sustitución de elementos rotos (acabados por ele- d) En las zonas más expuestas a los agentes at-
mentos), la reposición parcial (acabados continuos) y mosféricos (cornisas, balcones, molduras, etc.) con-
la protección superficial. Veamos. viene reforzar los revocos con mallas para reducir las
En los acabados continuos, se aprovecha la pro- variaciones dimensionales por cambios de humedad.
pia modulación de la composición formal para debi- e) Evitar el uso de acabados continuos en plata-
litar el espesor del acabado y canalizar así las posi- formas horizontales, utilizando materiales impermea-
bles fisuras por retracción térmica. En cualquier caso, bles de protección (chapas, cerámica, etc.).
dichas marcas serán necesarias, independientemen-
te de la existencia de una modulación formal. 5.2.2 Acabados por elementos
En los acabados por elementos, habrá que estudiar En los alicatados, además de la correcta prepara-
la situación de esas juntas de retracción pudiendo apro- ción del soporte como si de acabados continuos se
vechar también la composición modular. En los alica- tratara, colocación de las plaquetas con junta abierta
tados, además de su colocación con llaga abierta, de- aplicando el mortero sobre el soporte en lugar de en
beremos introducir juntas específicas según el estudio el dorso de la plaqueta. Además, utilizar plaquetas re-
de coeficiente de dilatación y gradiente de temperatu- sistentes a la intemperie (gres), con relieve de agarre
ra previsto. Entonces deberemos introducir sellantes muy marcado (preferible en cola de milano).
elastómeros o perfiles metálicos en «C». En los chapados, rechazar piedras sedimentarías
En los chapados de piedra, no tendremos más ele- con posibles pelos de cantera y anclar las piezas con
mentos para jugar que las propias juntas y las posi- elementos de acero inoxidable previamente sujetas al
bles modulaciones de fachada, que deberán sellarse soporte. El espesor de las placas debe ser superior a
convenientemente entre las piezas anexas. los 30 mm.
En los falsos techos de escayola, las juntas de re-
tracción son necesarias cuando se preven cambios
Bibliografía
higrotérmicos y cuando cualquier dimensión sobre-
pasa los 4 m. JOHN TRILL Y JACK T. BOWYER, El caso de la esquina rota y otros
problemas constructivos. Ed. G.G.. 1981.
5.2 Medidas en la ejecución Curso de mecánica y Tecnología en los edificios antiguos, C.O.A.M.,
1987.
La ejecución de los acabados debe ser especial- Curso de rehabilitación (10 tomos). C.O.A.M.. 1987.
mente cuidada por dos motivos básicos. Por un lado, H. J . ELDRIGE. Defectos comunes. Ed. G. G., 1982.
su esbeltez que puede llegar a hacer peligrar su inte- T. STAMBOLOV Y J . R. J. Van Asperen de Boer. El deterioro y la con-
gridad en el momento que no tenga la resistencia su- servación de matenales porosos de construcción en monumentos,
U.N.A.M., 1984.
ficiente o falle su adherencia al soporte. Por otro, el
mayor nivel de exposición que sufren, que los hacen LYALL ADDl ESON, Fallos en los edificios, Conseio General de
especialmente delicados. Para ello, y como comple- Aparejadores y Arq Técnicos, 1982.

mento a lo que se describa en el capítulo de des- Lesiones en los edificios: Síntomas, causas, reparación (2 tomos)
CEAC, 1981.
prendimientos de acabados por elementos y en el de
revestimientos continuos, veamos los criterios bási- Hans Própster, Lesiones de solados y alicatados (2 tomos), CEAC,
1980.
cos de su ejecución.
FRlEDRICH EICHLER Patología de la Construcción. Ed. Blume, 1979.
ETSA Valladolid. Dep de Construcción, Patología de fachadas urba-
5.2.1 Acabados continuos nas, Universidad de Valladolid, 1987
En acabados continuos debemos cuidar, por lo me- A. 8AGHONI Y G GUARNEIRO. La rehabilitación de edificios urba-
nos, los siguientes aspectos: nos. Ed. G. G., 1988.
a) Correcta preparación del soporte (rugosidad, GABRIEL LÓPEZ COLLADO, Rumas en Construcciones antiguas.
limpieza y humectación) para favorecer la adherencia, MOPU, 1976.
evitando el desprendimiento que ocasiona en primer JUAN MONJO CARRIO. Patología de cerramientos y acabados ar-
lugar fisuras. quitectónicos. Ed. Munilla-Leria.
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

157

4. Patología y reparación de pavimentos'

Juan Monjo Carrió


Dr. Arquitecto
Catedrático de Construcción E.T.S.A. - U.P.M.

1. Definiciones

Empezaremos por definir previamente lo que va-


mos a estudiar; en este caso, los tipos de pavimento
a considerar y las lesiones o procesos patológicos
más corrientes en esos elementos.

1.1 Tipos de pavimentos considerados

Podemos agruparlos en cuatro clases constructi-


vamente diferentes; soleras, de baldosas, de madera
y de láminas flexibles.

1.1.1 Soleras
1. Solera exterior.
Entendemos por tales a todos aquellos pavimen-
tos de hormigón o morteros hidráulicos de conside-
rable continuidad. En este sentido, caben dos tipos ternadamente, bien cortándose a posteriori por me-
de soluciones; las soleras de cierto espesor (>10 cms) dios mecánicos. Esta división en grandes piezas faci-
apoyadas directamente sobre el terreno compactado lita su funcionamiento constructivo, tanto ante las va-
y los morteros continuos, de espesores inferiores a 5 riaciones dimensionales por cambios de temperatura
cm, que necesita una determinada estructura rígida (las uniones actúan como juntas de dilatación, sobre
de apoyo previa, sean soleras, forjados u otros pavi- todo en exteriores) como ante su respuesta a las car-
mentos. Veamos. gas dinámicas que sufren posibilitando un mejor re-
parto de las compresiones al terreno sin introducir es-
A-Soleras propiamente dichas (Fig.1) fuerzos de flexión o cortante a las adyacentes.
Nos referimos a las que se apoyan directamente El tamaño de esas grandes baldosas estará con-
sobre el terreno compactado y constituyen un primer dicionado, pues, por el gradiente de temperaturas que
pavimento rígido, tanto en interiores como en exte- vayan a sufrir, así como por ¡as cargas ¡tipo y dimen-
riores. sión) que van a actuar sobre ellas. Ello condicionará,
Pueden estar armados o no, según la carga que asimismo, la necesidad o no de su armado.
van a recibir, y se dividen en grandes piezas rectan- La cara superior de esas soleras puede tener dis-
gulares, a modo de baldosas, bien al ejecutarse al- tintos tratamientos en función del uso previsto, des-
de el mismo hormigón reglado o ruleteado, o tratado
• Este capitulo está contenido parcialmente en otras puolicaciones
con áridos especiales de dureza como sílice, carbo-
del mismo autor rundo o viruta de acero, hasta la aplicación de mor-
Terra 4. Patología y reoaracicn de pavimentos

varían entre los 5 cm y los 0,5 cm. Necesitan una ba-


se rígida de apoyo, dado su escaso espesor, y las con-
siguientes juntas de dilatación/contracción para dis-
minuir al máximo sus movimientos higrotérmicos e
incluso reológicos.
Se pueden colocar sobre soleras, tanto recién cons-
truidas como reparadas, y sobre forjados. En ocasio-
nes se colocan también sobre pavimentos de baldo-
sas, con el consiguiente peligro de figuración por reflejo
de las uniones entre aquellas, o aumento del espesor
de colocación. En cualquier caso, se trata de morte-
ros especiales, normalmente con aditivos a base de
resinas endurecedoras y, según el espesor de la ca-
2. Pavimento de mortero. pa, con áridos más o menos gruesos y de dureza tam-
bién variable. Podemos encontrar su origen en los tra-
dicionales pavimentos continuos, tanto de mortero de
barro como de cal o de yeso.

1.1.2 De baldosas (Fig.3)


Pavimentos a base de baldosas pétreas o cerá-
micas, con sus distintas variantes cada una de ellas,
recibidas por adherencia continua mediante morte-
ros hidráulicos o cementos-cola, bien directamente
sobre el soporte, bien con intermedio de una capa
de reparto suelta que distribuye presiones e idepen-
diza, en cierta medida, el acabado del soporte.
Entonces el mortero de adherencia o capa de aga-
rre implica una sujeción relativa y más bien estable-
3. Pavimento de baldosas combinado. ce una continuidad de apoyo y una integridad de la
base del acabado. Todo ello es importante a los efec-
tos de posibles. En este apartado debemos consi-
derar también cualquier tipo de baldosa rígida con
un sistema de adherencia similar, como es el caso,
poco frecuente, de baldosas de madera o corcho con
base de mortero. En cualquier caso, el cerramiento
que actúa de soporte suele ser un forjado o una so-
lera a base de materiales rígidos y, por tanto, de po-
ca movilidad de conjunto, menor cuanto menos es-
pesor tengamos en la posible capa de reparto. En
caso que no exista esta capa, la movilidad debe ser
nula, de lo contrario, el desprendimiento resulta muy
probable.

1.1.3 De madera (Fig.4)


4. Parquet de madera.
Englobaremos aquí todos aquellos pavimentos a
base de elementos leñosos lineales clavados a una
estructura auxiliar, también de madera (rastreles, ta-
teros especiales de gran resistencia a base de resinas
bleros, etc.) sujeta o apoyada, a su vez, al forjado so-
epoxídicas, de poliuretano, etc.
porte. Debemos incluir también las soluciones más
actuales en las que el pavimento resulta adherido al
B-Pavimentos de mortero (Fkj.2) soporte, o incluso simplemente apoyado sobre el mis-
Consisten en una capa de mortero especial como mo, diferencias que debemos tener en cuenta a la ho-
acabado continuo de pavimentos, con espesores que ra de analizar las posibles lesiones, ya que el funcio-
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acaoados

namiento constructivo ante acciones exteriores (so- 159


bre todo de dilatación-contracción) es distinto.
El soporte aquí puede ser flexible, ya que el tipo de
acabado admite movimientos, y los procesos patológi-
cos estarán más bien, en función de la posibilidad de li-
bre dilatación y contracción, variaciones dimensionales
que resultan inevitables en estos materiales leñosos y
que tienen que ser considerados en su técnica de eje-
cución, tanto si se clavan (sistema convencional) como
si se pegan, como sobre todo, si se apoyan directa-
mente. De hecho, en éste último sistema, al no poder
dejar grandes holguras perimetrales para su dilatación,
a riesgo de dejar el pavimento suelto, no tenemos más
remedio que estabilizar el material a base de contra-
5. Pavimentos de linóleo.
chapados y aglomerados. Del mismo modo, en los ad-
heridos con pegamento, debemos reducir el tamaño de
los elementos para evitar grandes esfuerzos rasantes.
- Erosión química, consecuencia del ataque de
1.1.4 De láminas flexibles (Fig.5) productos químicos. Aparece, sobre todo, en locales
Constituye la gama más variada, de pavimentos donde se usan ese tipo de productos y en garajes por
que incluye todos los acabados a base de láminas su- los aceites de los coches.
perficiales y flexibles adheridas al soporte medíante
pegamentos y que exigen una preparación previa de 1.2.2 Fisuras
éste hasta obtener una superficie suficientemente pla- Lesión mecánica que afecta al pavimento como
na y lisa. La lámina, como sabemos, varía desde las acabado y que puede tener orígenes diferentes:
textiles (moquetas) hasta las diferentes plásticos, pa- - El propio soporte que, bien por discontinuidad,
sando por los aglomerados de corcho. bien por rotura, bien por movimientos elásticos (fle-
El soporte puede ser, tanto rígido como flexible, y chas) introduce esfuerzos de tracción o cortantes que
el posible desprendimiento depende de la efectividad pueden romper el pavimento, sobre todo cuando se
del material adherente y de las dilataciones y con- trata de soluciones rígidas.
tracciones del elemento que pueda introducir un efec- - Las variaciones dimensionales del propio pavi-
to rasante superior a la capacidad de adherencia. mento, o de algunos de sus componentes, como con-
secuencia de la retracción hidráulica de los morteros
1.2 Lesiones más frecuentes que los constituyen. Suele tratarse de fisuras irregu-
larmente distribuidas.
Son, básicamente, las lesiones mecánicas por - Los cambios higrotérmicos a los que se somete
su situación y función. No obstante, también debe- al pavimento, tanto interiores como exteriores, que
mos considerar las lesiones físicas, sobre todo en ex- provoca dilataciones y contracciones que producen
teriores, y las químicas en locales especiales. Veamos. fisuras según el tipo de material. Afecta, sobre todo,
a los pavimentos pétreos (hormigón, piedra, cerámi-
1.2.1 Erosiones ca, morteros, etc.) y a los de madera por la variación
Tanto desgaste superficial como pérdida de mate- de humedad.
rial. Como sabemos, puede tener tres tipos de origen,
lo que se da claramente en los pavimentos. 1.2.3 Desprendimientos
- Erosión mecánica, como consecuencia de la Resultan las lesiones quizás más llamativas, sobre
abrasión que produce el uso, que en ocasiones va todo en los de baldosas y las tarimas, y se producen
acompañada de impactos punzonantes. sobre todo como consecuencia de la pérdida de adherencia en-
en locales industriales. Afecta a todos los pavimen- tre acabado y soporte, de un modo parecido al que
tos, pero sobre todo a los más rígidos como soleras se explica en desprendimientos de fachada y que se
y continuos de hormigón y pétreos de baldosas. puede resumir en:
- Erosión física, sobre todo en exteriores como - Esfuerzos rasantes.
consecuencia de los fenómenos meteorológicos (llu- - Golpes y empujes horizontales en bordes y jun-
via, cambios de temperatura, helada, etc.). tas de dilatación.
Tema 4. Patología y reparación de pavimentos

160 1.2.6 Eflorescencias


Cristalización en la superficie del pavimento de sa-
les arrastradas por el agua hacia el exterior. Estas sa-
les pueden tener tres orígenes distintos; el terreno na-
tural, si el pavimento está apoyado sobre él y la
humedad que las disuelve es de capilaridad. La capa
de reparto o la de agarre si los áridos son efloresci-
bles o reciben óxido calcico del mortero que reaccio-
na con el C 0 del aire. El propio material del pavimento
2

(normalmente baldosas) si contiene sales solubles. En


6. Erosión mecánica puntual en solera. estos dos últimos casos, la humedad puede ser, tan-
to de capilaridad como de filtración desde el exterior.

2. Tipos de lesiones y c a u s a s

Analicemos los tipos de lesiones enumeradas en


función de la clase de pavimento afectado y de las
causas que han provocado el proceso patológico.

2.1 Soleras
7 . Fisura en pavimento continuo por flecha de forjado.
Veamos los distintos tipos de lesiones según los
dos grupos de esta clase de pavimentos.

- Filtración y dilatación de elementos en la unión 2.1.1 Erosiones


superficial. Dependerán del tipo de acabado superficial y de
- Dilatación del propio acabado. las acciones que actúan sobre ellas. Veamos.
Afecta a cualquiera de los tipos de pavimentos men- La erosión mecánica es, quizás, la más corriente
cionados. en ese tipo de pavimentos, debido a su uso en edifi-
caciones industriales. El tráfico de vehículos pesados
1.2.4 Humedades con ruedas neumáticas provoca rozamientos genera-
Nos referimos, no tanto a las que provengan des- les en las zonas rodadas, sobre todo en arranque y
de arriba como a las que aparecen desde el trasdós frenada y en zonas de curva. Sin embargo, la erosión
del pavimento, bien por capilaridad cuando el pavi- más importante la provocan los vehículos con ruedas
mento está cerca del terreno, bien por roturas de tu- pequeñas metálicas o de resinas de nylon o poliure-
berías que discurren bajo el mismo. La lesión propia- tano que provocan una acción más punzonante y rom-
mente dicha aparece como una mancha que pen, sobre todo, los cantos de las losas en las juntas
permanece más o menos tiempo y que puede ser ori- de dilatación/contracción, al suponer su paso sobre
gen de otras lesiones secundarias, sobre todo la ero- ellas un pequeño salto que implica impacto. Ello, ade-
sión física en exteriores. más de las zonas de curva y los arranques y frenadas.
También debemos considerar la erosión por impacto
1.2.5 Organismos provocada por golpes producidos por la caída de ob-
Animales, sobre todo xilófagos en pavimentos de jetos, que suele ser corriente en locales industriales.
madera. Plantas de porte en pavimentos exteriores (Fig. 6)
como consecuencia de la falta de mantenimiento, con Este tipo de erosión será más intensa cuanto me-
posibilidad de que sus raíces se introduzcan en las nor sea la dureza superficial del pavimento, tanto las
uniones y fisuras y provoquen un incremento de es- soleras propiamente dichas, incluso con superficie
tas lesiones. También hongos de pudrición de los pa- endurecida, como los pavimentos de morteros su-
vimentos leñosos que destruyen su integridad. perficiales endurecidos. Se suele provocar un des-
Estos dos últimos tipos de lesiones no pueden ser cascarillado superficial en primera instancia (alrede-
consideradas como específicas de los pavimentos, dor de 1 mm) que facilita el progreso de la erosión
por lo que no serán objeto de estudio principal. con el uso.
capitub li. Patología e intervención en cerramientos y acabados

La erosión física aparece, sobre todo, en soleras


exteriores con algún tipo de humedad previa. La más
fácil es la humedad de filtración por absorción super-
ficial que acaba provocando la meteorización con la
helada. El proceso puede empezar por cualquier pun-
to de la superficie, sobre todo si no se ha consegui-
do reducir el coeficiente de succión por debajo de
0.3%, pero suele hacerlo por los puntos dañados por
la erosión mecánica que, al haber perdido la protec-
ción superficial, presentan un mayor coeficiente de
absorción. También puede hacerlo por los bordes, a
través de las juntas si no están selladas, ya que éstos
no suelen tener la misma protección superficial im-
permeable. A partir de esos puntos débiles la erosión
va progresando. En otras ocasiones, la humedad pro-
viene del interior de la solera, bien por problemas de
capilaridad, si no existe drenaje suficiente, bien por 8. Fisura en solera por flecha de forjado.
algún tipo de humedad accidental por rotura de tu-
berías. La humedad llega hasta la superficie y se pue-
den provocar los mismos efectos erosivos enumera-
dos anteriormente.
La erosión química, por fin, aparece en locales
donde los productos utilizados pueden afectar, bien
a los álcalis del cemento, bien a alguno de los aditi-
vos utilizados en los hormigones y morteros, sobre to-
do las resinas endurecedoras, atacando sus cadenas
poliméricas. Es una lesión corriente en garajes, como
consecuencia de las grasas de los aceites de motor,
y en los almacenes de productos perecederos donde
también las grasas y los ácidos de algunos alimentos
provocan el mismo efecto. La lesión se presenta siem-
pre en forma de manchas y además en forma de pér-
dida de material superficial con levantamiento de las
protecciones endurecedoras.
9. Fisuras de retracción.

2.1.2 Fisuras
Aparecen cuando la solera sufre una tensión de maduras en las soleras puede mitigar la aparición de
tracción superior a su capacidad resistente. Ello pue- fisuras. (Fig.7 y 8)
de ocurrir por diversas causas y puede afectar a to- - Movimientos de dilatación-contracción. Dichos
do el espesor de la solera o sólo a su superficie. Veamos movimientos, como consecuencia de variaciones di-
las más corrientes. mensionales, provocan tensiones de tracción al con-
- Fallos de estabilidad en el apoyo. Puede apare- traer que pueden romper fácilmente el pavimento.
cer en soleras exteriores cuando la compactación del Suelen ser fisuras relativamente lineales, perpendi-
terreno no ha sido suficiente o falla el material de en- culares a la dirección de variación dimensional que
cachado que hace las veces de balasto. En estos ca- coincide con la mayor longitud de la pieza.
sos, las cargas dinámicas sobre la solera provocan Lógicamente, las tensiones serán mayores cuando
flexiones que las rompen. También pueden aparecer más varíe la temperatura y cuanto mayor sea la di-
en pavimentos continuos de morteros cuando se apli- mensión. En casos de piezas cuadradas, las fisuras
can sobre forjados. La flecha de estos provoca la de- pueden aparecer en los dos sentidos. Serán más fá-
formación de aquellos en las zonas de apoyo donde ciles en las soleras exteriores, aunque también apa-
recen en las interiores.
aparecen tracciones superiores, a menos que haya-
mos previsto juntas abiertas en esas líneas. En cual- Un último factor que condiciona este tipo de rotu-
quiera de los casos, la existencia de algún tipo de ar- ras es el espesor de la solera y su posible armadura,
Tema 4. Patología y reparación de pavimentos

162 pansión de algún elemento infiltrado en ella. En cual-


quiera de los casos el desprendimiento se verá ayu-
dado por un error de ejecución que haya hecho que
la unión sea pobre, bien por falta de rugosidad, si se
I
trata de adherencia mecánica, bien por falta de lim-
i t pieza o de preparación previa (humectación, produc-
tos de adherencia, etc.) según el producto.
FISURA
El esfuerzo rasante puede provocarse por varias
/ razones:
11 - Dilatación/contracción excesiva del pavimento
/—
/ respecto al soporte.
I - Flecha del soporte.
I
/
- Golpes en los bordes.
La expansión de elementos infiltrados puede ser:
DESPRENDIMIENTO
- Helada del agua, bien de capilaridad, bien de fil-
10. Desprendimiento de pavimento continuo de tración, bien accidental.
poco espesor. - Cristalización de sales en la junta provenientes
del propio soporte, del pavimento, de los productos
de adherencia, o simplemente arrastrada por el agua.
En cualquier caso, la fisuración previa puede fa-
vorecer el posterior desprendimiento.

2.1.4 Humedades
Ya hemos comentado que pueden aparecer de tres
tipos:
- De capilaridad, sobre todo en los casos de so-
leras apoyadas directamente sobre el terreno, cuan-
do el drenaje previo no existe o es insuficiente.
- De filtración, en pavimentos exteriores, que pe-
netra, tanto por la propia porosidad superficial, como
10'. Desprendimiento de mortero en solera.
por fisuras previas o, simplemente, por las juntas de
dilatación.
- Accidental, cuando se rompe alguna tubería pró-
lo que definen la capacidad mecánica. Lógicamente,
xima.
cuanto menor sea el espesor y menor la cuantía de
armado más fácil será la aparición de fisuras. Por ello,
en los casos de pavimentos de morteros de poco es- 2.1.5 Eflorescencias
pesor, donde la fisura es más probable, se suele re- Pueden provenir de cualquiera de los tres oríge-
currir a aditivos que le den elasticidad al mortero. nes mencionados en 1.2.6 aunque la más generaliza-
- Retracción hidráulica del cemento. Es un factor da es la que proviene del propio mortero u hormigón
propio del fraguado hidráulico que provoca fisuras en por carbonatación del óxido calcico que libera si se
mapa más o menos separadas. Se suele hacer frente moja excesivamente antes del fraguado.
con aditivos expansivos y con procesos de curado
muy cuidados. Suele ser muy corriente en soleras ex- 2.2 Baldosas
teriores con hormigones normales.(Fig.9)
Aparecen, básicamente, las mismas lesiones vis-
2.1.3 Desprendimientos (Fig. 10) tas para soleras, aunque con algunas particularida-
En este caso, pueden aparecer desprendimientos des que conviene mencionar.
en los pavimentos de morteros especiales sobre ba-
se rígida cuando se pierda la adherencia entre aca- 2.2.1 Erosiones
bado y soporte. Dicha adherencia se puede perder La erosión mecánica depende, evidentemente, del
por las dos causas generales en acabados continuos, material y del uso al que esté sometido. En este sen-
a saber; bien por aparición de un esfuerzo rasante pa- tido hay que indicar la particularidad de las plaquetas
ralelo a la junta superficial entre ambos, bien por ex- cerámicas vidriadas que. al tener una capa muy fina
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

d e v i d r i a d o s u p e r f i c i a l (< 0,1 m m ) a u n q u e e s u n a c a -
bado m u y d u r o , sin e m b a r g o a c a b a d e s g a s t á n d o s e
p o r el r o c e , s o b r e t o d o e n l o s p u n t o s m á s l e v a n t a d o s
(bordes) y resultan ya p i e z a s irrecuperables. A d e m á s ,
al s e r u n a c a p a t a n f i n a e s m u y d é b i l al p u n z o n a m i e n t o ,
fisurándose y facilitando s u p o s t e r i o r erosión (Fig.11).
Por o t r a p a r t e , c a b e m e n c i o n a r t a m b i é n el h e c h o d e l
gran n ú m e r o d e j u n t a s ( u n i o n e s e n t r e p i e z a s ) q u e e n
algunos casos facilitan la erosión p o r i m p a c t o en las
m i s m a s a n t e el p a s o d e v e h í c u l o s c o n r u e d a s d u r a s
de pequeño t a m a ñ o . U n ejemplo cotidiano d e e s a le-
s i ó n la t e n e m o s e n l o s p a v i m e n t o s d e b a l d o s a s d e l o s 11. Erosión de capa vidriada de baldosa cerámica.
s u p e r m e r c a d o s . Ello c o n d i c i o n a , c o m o v e r e m o s , el t i -
p o d e u n i ó n a e j e c u t a r , a h u e s o o a b i e r t a , y el t i p o d e
m a t e r i a l a c o l o c a r e n la j u n t a .

En c u a n t o a las e r o s i o n e s física y q u í m i c a , h a y q u e
i n d i c a r q u e n o s e p r o d u c i r á s o l a m e n t e e n la p r o p i a
baldosa en función del material del q u e esté hecho
(unos m á s inertes q u e otros) s i n o q u e t a m b i é n a f e c t a
al m a t e r i a l d e u n i ó n , s o b r e t o d o c u a n d o l a j u n t a e s
abierta, caso f r e c u e n t e y casi o b l i g a d o e n exteriores.
H a b r á q u e s e l e c c i o n a r el t i p o d e m a t e r i a l a u t i l i z a r y
su a p l i c a c i ó n .

12. Fisura en baldosa cerámica por flecha de forjado


2.2.2 F i s u r a s (Fig. 12)
A p a r e c e n , t a m b i é n , las f i s u r a s p o r las m i s m a s c a u -
sas generales i n d i c a d a s en soleras, a u n q u e c o n v i e n e
m a t i z a r a l g u n a s p a r t i c u l a r i d a d e s . P o r u ñ a p a r t e , la p r i -
mera fisura a p a r e c e , l ó g i c a m e n t e , e n la u n i ó n entre
b a l d o s a s , a m e n o s q u e se trate d e un e s f u e r z o m u y
m a r c a d o e n s u l o c a l i z a c i ó n , l o q u e p u e d e p r o v o c a r la
r o t u r a d e las p i e z a s . P o r o t r a p a r t e , a q u í n o s o l e m o s
tener p r o b l e m a s d e retracción hidráulica p u e s , a u n -
q u e é s t a a p a r e c e e n el m a t e r i a l d e a g a r r e , q u e d a o c u l -
t o p o r el p r o p i o p a v i m e n t o . S e p u e d e p r o d u c i r , s i n e m -
bargo, la fisura i n d i v i d u a l d e b a l d o s a s p o r f l e x i ó n
excesiva d e las m i s m a s , bien p o r s u debilidad o p o r
13. Desprendimiento de baldosas de terrazo.
error d e s u a d h e r e n c i a ( p o c o o débil m o r t e r o ) .
Por ú l t i m o , t a m b i é n las p l a q u e t a s c e r á m i c a s v i -
d r i a d a s o f r e c e n la p a r t i c u l a r i d a d d e la p o s i b l e f i s u r a - b a l d o s a y m o r t e r o , p o r ser u n a unión m e c á n i c a m e n -
c i ó n i n d i v i d u a l d e l a c a p a d e v i d r i a d o {craquelé o te más débil.
cracking) p r o v o c a d o p o r t e n s i o n e s s u p e r f i c i a l e s e n la -Por flecha del forjado soporte, q u e puede provo-
baldosa. car rotura d e cualquiera d e las d o s juntas, sobre to-
d o , si n o e x i s t e c a p a d e r e p a r t o . S i e x i s t e , la r o t u r a s e
2.2.3 D e s p r e n d i m i e n t o s (Fig. 13) s u e l e c o n c e n t r a r e n la u n i ó n b a l d o s a - m o r t e r o .
Teniendo e n c u e n t a s u sistema d e adherencia p o r b) P o r c o m p r e s i ó n d e la c a p a d e a g a r r e , c u a n d o
mortero d e agarre, p o d e m o s encontrar aquí varios ti- é s t a e s m e c á n i c a m e n t e d é b i l o ia c a p a d e r e p a r t o e s
pos d e desprendimiento según su origen: p o c o uniforme. U n c a s o particular aparece en los bor-

a)Por e s f u e r z o r a s a n t e , p r o v o c a d o : d e s y juntas d e dilatación, c u a n d o n o se establece un

-Por c o n t r a c c i ó n y dilatación d e las b a l d o s a s , c u a n - tope a la c a p a d e r e p a r t o y é s t a s e pierde provocan-

d o es exterior. La s e p a r a c i ó n s e s u e i e p r o d u c i r entre d o la f a l t a d e u n i f o r m i d a d d e a p o y o . A s i m i s m o , c u a n -
Tema 4. Patología v reparación de pavimentos

164

r- •,--

14. Eflorescencia en adoquines de morte-


ro pigmentado.
15. Desgaste de tarima.
16. 16. Apertura y desgaste de tarima.

do el borde de la pieza está sin sujeción, puede sufrir cionamiento constructivo, sus procesos patológicos
exceso de presión vertical en el mismo, superando la requieren un estudio específico.
capacidad de la capa de agarre.
c) Por dilatación de elementos infiltrados, sobre 2.3.1 Erosión
todo sulfatos arrastrados por el agua (de capilaridad Sigue dominando la erosión mecánica aunque en
o de filtración) o presentes en el mortero de agarre, este caso se reduzca al desgaste por abrasión, ya que
que afectan a la unión mortero-baldosa, levantando sus características elásticas hacen que absorba me-
ésta. jor los golpes e impactos. En cualquier caso, sí pue-
den sufrir una erosión especial las protecciones a ba-
2.2.4 Humedades se de resinas endurecedoras cuando su aplicación es
En este caso se repiten los mismos orígenes de incorrecta, produciendo descascarillados (Fig.15).
lesiones vistos para soleras, a saber, capilaridad, fil- La erosión física en este caso es prácticamente
tración, que en este caso puede facilitarse por la gran inexistente y la erosión química se limita a la presen-
cantidad de uniones, y accidental. cia de manchas. Sin embargo, aparece un nuevo tipo
de ataque que es el producido por el fuego que pro-
2.2.5 Eflorescencias voca su combustión superficial relativamente más rá-
Suelen provenir de las propias baldosas del terre- pida, con claras manchas y pérdida de material. Ello
no o del mortero de agarre. Si de las baldosas, signi- tiene cierta importancia por el problema de las colillas
fica que éstas tienen alguna sal soluble que ha sido de cigarrillos o chispas de chimeneas, además del pe-
diluida por agua de filtración. Es el caso de baldosas ligro que puede aparecer en caso de incendio.
de barro o de mortero con algún tipo de colorante
(Fig. 14). En ambas, además, si son absorbentes, es 2.3.2 Fisuras (Fig. 16)
fácil que aparezca carbonatacion del OCa cuando son En este caso se trata más bien de apertura de unio-
pavimentos exteriores y llueve antes de fraguar el mor- nes entre tablas, tanto longitudinales (principalmente)
tero de agarre. como transversales: Pueden aparecer por movimien-
tos elásticos del soporte (forjados) pero la causa prin-
2.3 Madera cipal son las variaciones dimensionales como conse-
cuencia de los cambios de humedad. Los períodos
Al ser un pavimento distinto a los anteriores, tanto de sequedad contraen la madera provocando esas
por las características de su material como por su fun- aperturas, lo que es prácticamente inevitable. No obs-
•apitiiic II, Patología e intervención en cerramientos y acabados

tante, se pueden limitar relativamente los primeros mo-


vimientos de la vida del pavimento controlando la épo-
ca del año en que se ejecuta y, sobre todo, el grado
de humedad que tiene la madera al ser colocada, se-
gún veremos en prevención.
Aparte de esas claras aperturas, pueden aparecer
esporádicamente algunas fisuras propias de la ma-
dera cuando ésta trae fendas del material, sí no se han
seleccionado las piezas a colocar.

2.3.3 Desprendimientos
Dadas sus características elásticas y su sistema de
sujeción, el desprendimiento de este acabado suele 17. Desprendimiento de tarima por dilatación.

ser siempre consecuencia de la dilatación y contrac-


ción de sus elementos, provocados por cambios de
humedad, ya que los movimientos del soporte no le
suelen afectar. Debemos distinguir varios casos:

a) Variación dimensional inevitable provocada


por los cambios de humedad ambientales. Sólo pro-
vocan desprendimiento cuando en su ejecución no se
hayan considerado las holguras necesarias en los en-
cuentros del pavimento con los elementos verticales.
Al tropezar con éstos en su dilatación, sobre todo en
la dirección perpendicular a los elementos lineales, las
tablas se empujan unas a otras y se levantan, produ- 18. Levantamiento de tarima por humedad.
ciéndose el desprendimiento, que no suele afectar a
los rastreles.(Fig.17)
La contracción puede provocar desprendimientos 2.3.4 Organismos
localizados en los puntos de anclaje, o en la unión en- Se trata de una lesión específica de estos pavi-
tre tablas, aperturas ya mencionadas con resultado mentos por su material y cuyo proceso no difiere bá-
sonoro (estallidos) que como hemos visto entra den- sicamente del descrito para estructuras de madera,
tro de la movilidad natural de este tipo de acabados. por lo que a ellas remitimos. No obstante, recordemos
Cuando los elementos son contrachapados o aglo- las lesiones más importantes; por un lado, los insec-
merados, este problema disminuye. tos xilófagos y, por otro, los hongos de pudriclón.
b) Exceso de humedad, bien por filtración des- En cuanto a los xilófagos, de los dos grandes gru-
de arriba, bien por capilaridad, bien contenida en el pos existentes, coleópteros e isópteros, los primeros
propio material, bien por accidentes en tuberías. atacan poco a los pavimentos de madera, quizás por
(Fig. 18) La filtración afecta, sobre todo, al propio pa- su localización en el edificio, aunque no cabe olvidar-
vimento, dando lugar a un efecto similar al mencio- se de ellos en cualquier diagnóstico y comprobar su
nado más arriba, incluso existiendo holgura perime- presencia a través de los posibles orificios de salida
tral suficiente. La capilaridad afecta directamente al del imago. Como sabemos, estos insectos usan la ma-
sistema de sujeción (rastreles) provocando la dilata- dera para depositar en ellas sus huevos con el obje-
ción de éstos y su desprendimiento del soporte, aun- to de que las larvas se alimenten, para lo cual van ex-
que a veces transmite directamente la humedad a la cavando galerías más o menos paralelas a sus fibras,
tabla con el resultado mencionado antes. La hume- provocando una pérdida importante de material. Existen
dad contenida en el material provoca alabeos que pue- tres tipos de familias; cerambícidos, aeróbidos y líc-
den afectar, tanto al rastrel como a la tabla, provo- tidos, conocidos como carcoma y polilla.
cando la lesión. Un caso puntual es la aportación de Los isópteros, por el contrario, sí atacan de un mo-
agua en el mortero de agarre del rastrel, que si no se do especial los pavimentos de madera. Se trata de las
deja secar lo suficiente antes de colocar la tarima, la temibles termitas, que forman colonias con una orga-
transmite a ésta y al rastrel provocando desprendi- nización social parecida a las de las hormigas y abe-
mientos. jas (Fig. 1 9 ) .
Tema I. Patología y reparación de oavmentos

166 En cuanto a los hongos, aparecen en zonas pun-


tuales con humedad permanente y poca ventilación y
se pueden considerar como agentes abióticos que
atacan sobre todo a la madera de un modo.normal-
mente agresivo. No obstante, hay una cierta variedad
de actuaciones y resultados que conviene diferenciar.
En cualquier caso, su acción consiste, con carácter
general, en alimentarse de la madera como materia
orgánica más accesible (hongos xilófagos) gracias a
su capacidad de producir enzimas que degradan al-
guno de los componentes de la madera. En general,
la acción de los hongos requiere oxígeno gaseoso y
gran cantidad de agua superior al 20% de humedad
en el elemento constructivo, unido a una temperatu-
ra suave cromprendida entre 20° y 25°C. Podemos
distinguir varios tipos:
a) Hongos cromógenos. Son aquellos cuya ac-
ción tiene como resultado exclusivamente la modifi-
cación del aspecto de la madera y sobre todo su co-
lor. Se conocen también como hongos de coloración
19. Termitas en pavimento.
azulada y no atacan a los tejidos leñosos, por lo que
el elemento constructivo sigue siendo recuperable.
Los más corrientes son el Aureobasidium pullulans y
Son insectos de origen tropical, aunque la impor-
el Sclerophoma pityuphila.
tación de maderas de ese origen desde antiguo ha
propiciado su instalación y aclimatación en climas tem- b) Hongos de pudrición, en los que el resultado
plados como el nuestro. En España, debemos distin- de su acción modifica notablemente las propiedades
guir fundamentalmente dos especies más activas en mecánicas y físicas de la madera toda vez que exis-
maderas puestas en edificios: te un ataque directo a la celulosa y a la lignina. Dentro
- Termita subterránea o Reticulitermes Lucífugus. qe este tipo de hongos podemos distinguir la pudri-
- Termita de madera seca o Criptotermes Brevis. ción por su coloración y su aspecto. Así tenemos:
La segunda habita, sobre todo, en las Islas b.1) Pudrición blanca (Polyporus borealis) en la
Canarias y ataca a la madera seca. La primera, vive que se destruye más liginina que celulosa, quedando
en toda la península y archipiélago Balear y hace sus al final ésta como un complejo más o menos blan-
nidos en tierra húmeda, próxima a los edificios. Desde quecino en forma de alveolos o vetas blancas. Queda,
allí construyen galerías hasta alcanzar la superficie asimismo, un residuo fibroso que conserva una apre-
desde donde ataca a los elementos leñosos de los ciable resistencia elástica, por lo que se le conoce
edificios empezando por los pavimentos, para lo cual también como pudrición fibrosa.
son capaces de perforar materiales duros como el b.2) Pudrición parda (Polyporus Sulfureus,
yeso y rodear los más duros, como el hormigón, me- Coniophora Cerebella, Corsilus Versicolor, etc) en la
diante túneles y puentes de un producto oscuro ob- que se ataca, sobre todo a la celulosa, dejando un re-
tenido con saliva, excrementos y tierra. Ataca prác- siduo formado por lignina que se disgrega fácilmente
ticamente todo tipo de maderas, coniferas y frondosas, con los dedos Se conoce también como pudrición cú-
y tanto su albura como su duramen, alimentándose bica. La destrucción es visible cuando la madera ha
de sus fibras, con lo que van excavando galerías pa- perdido del 10% al 20% de su peso. Entonces el ele-
ralelas a la fibra, por el interior de la madera, tapi- mento constructivo ha perdido ya del 90% al 95% de
zándolas del mismo producto oscuro descrito ante- su resistencia mecánica. Un caso curioso es el de la
riormente, ahora hecho con partículas de madera. Coniophora cerebella, que no resulta cúbica a pesar
Ello hace que a veces no se detecte su presencia de ser parda. Se desarrolla en ambientes muy húme-
hasta que el elemento leñoso está completamente dos y en un año es capaz de destruir la tarima de una
destruido y cede al pisar. Para detectar su presen- casa si ésta no estaba suficientemente seca. Otro ca-
cia hay que buscar galerías en los materiales duros, so interesante es el del llamado Merculius Lacrymans
con orificios negros de unos 2 mm. de diámetro re- u hongo doméstico, que tiene una gran potencia des-
cubiertos interiormente por la sustancia descrita. tructora muy activa y es capaz de desarrollarse en am-
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

167

20. Eflorescencia en tarima. 21. Desprendimiento de baldosas de P.V.C.

bientes secos en los que se observa una especie de cantes como usuarios consideran ese tipo de pavi-
fieltro grisáceo sobre la madera. En los húmedos de- mento de carácter temporal, por lo que su desgaste
sarrolla una masa blancuzca y algodonosa con una está de algún modo asumido. También cabe consi-
exudación que cae en gotas y de ahí su nombre. derar algún tipo de erosión química en casos espe-
b.3) Pudrición blanda, producida por la acción ciales según el uso pero, sobre todo, la provocada por
conjunta de una serie heterogénea de hongos interio- el fuego puntual, al igual que en la madera, con que-
res. Aparece con frecuencia en maderas en contacto maduras de cigarrillos.
con el suelo y su resultado se conoce también como
madera pasmada. 2.4.2 Desprendimientos
En este caso, los desprendimientos se suelen mos-
2.3.5 Eflorescencias trar, bien en forma de arrugas en las zonas centrales,
Las eflorescencias en pavimentos de madera tie- bien por levantamiento en los bordes, tanto para ta-
nen que proceder de materiales del soporte o de aga- maños pequeños (losetas) como para los grandes.
rre y requieren una humedad importante, bien de ca- Distinguimos varios tipos, según sus causas. (Fig.21)
pilaridad, bien de filtración, lo más probable es que a) Discontinuidad del soporte, bien por error de eje-
vengan del mortero de agarre de los rastreles o de la cución, bien por rotura de la papa de nivelación.
solera, si éste es el tipo de soporte. (Fig.20) Aparecen arrugas siguiendo la discontinuidad cuan-
do el elemento es de poco espesor o muy usado, o
simples ondas lineales cuando ése es de más enti-
2.4 Láminas flexibles
dad.
Se trata de un caso especial de pavimentos para b) Exceso de material, cuando no se ha tensado
usos interiores con tráfico casi exclusivo de personas, lo suficiente en su colocación o ha dilatado, normal-
por lo que están sometidos a agresiones por lo gene- mente por exceso de humedad. Aparecen ondas pa-
ral más suaves. ralelas.
c) Fallo del material adherente, normalmente en los
2.4.1 Erosión bordes, bien por fallo en su integridad, por exceso de
La erosión mecánica está provocada, básicamen- tensado o por contracción excesiva del pavimento.
te, por pisadas y supone un desgaste superficial que Aparecen levantamientos de esquinas.
depende del tipo de lámina de que se trate. En cual- d) Esfuerzo rasante por rozamiento de pisada, que
quier caso, hay que tener en cuenta que tanto fabri- produce levantamiento en los bordes de losetas, sobre
Tema 4. Patología y reparación de pavimentos

- Tratamiento superficial de resinas endurecedo-


ras de poliéster o epoxídicas, por lo general, con un
tratamiento previo de adherencia con productos si-
milares. Esta solución será adecuada cuando la ero-
sión es muy superficial y el saneado ha supuesto un
rebaje superior a los 3 mm. No obstante, habrá que
comprobar previamente la dureza de la base que nos
queda, ya que una capa fina de resinas muy duras so-
bre un soporte más blando, puede provocar fácilmente
la fisuración y consiguiente desprendimiento.
Normalmente, necesitamos resistencias a compresión
superficiales superiores a 500 kp/cnf. Para esta so-
lución, el saneado previo debe ser muy uniforme por
22. Parcheo en solera erosionado. lo que se lleva a cabo con máquinas especiales que
producen la abrasión y recogen el polvo simultánea-
mente. En algunos lugares se ha dado en llamar a es-
todo de materiales plásticos, o arrugas 'interiores en tos tratamientos pinturas antipolvo y suelen aplicarse
moquetas. Esta causa suele aparecer combinada con con rodillo.
fallo del material adherente en losetas, ayudado por pe- - Morteros autonivelantes con diferentes compo-
netración de agua u otros líquidos que lo atacan. siciones, desde mezclas de cemento y resinas, pa-
sando por resinas epoxídicas con carga de áridos es-
3. Técnicas de reparación peciales, hasta las más modernas anhidritas. Resulta
una solución similar a colocar un pavimento de mor-
Analicemos las distintas reparaciones posibles en teros especiales aprovechando una antigua solera co-
función de los tipos de lesiones enunciadas para ca- mo soporte. Se consiguen espesores de hasta 5 cm y
da uno de los pavimentos. requieren un saneado más profundo con rugosidades
superiores a los 5 mm, por lo que son válidos para so-
3.1 Soleras leras muy afectadas. Por otra parte, cuando el espe-
sor es importante (3 cm suele ser conveniente intro-
3.1.1 De la erosión ducir una malla de armado en la capa de mortero. En
Aunque la técnica general ante cualquier erosión cualquier caso, necesitamos resistencias a compre-
superficial es el saneado y la reposición, sin embargo sión en el hormigón de base superiores a los 200 kp/cnf.
conviene previamente comprobar las causas y la fun- Cuando se trata de soleras antiguas con hormigón
cionalidad de la solera. Por ello debemos analizarlo pobre (< 200 kp/cnf) lo más efectivo será desechar la
según el tipo de erosión. solera y utilizarla simplemente como una base para
En los casos de erosión mecánica, sobre todo en construir una nueva. Esta deberá tener un espesor su-
interiores, suele estar localizada en las zonas de pa- perior a 8 cm e ir armada, con conectores anclados a
so de vehículos donde también se pueden dar im- la antigua y juntas de dilatación distanciadas un má-
pactos. Por ello, hay una tendencia a los arreglos pun- ximo de 3 m, con las características mecánicas de re-
tuales y locales que no dejan de resultar parches poco sistencia a compresión y dureza superficial adecua-
estéticos y menos funcionales (Fig. 22). En estos ca- das al uso previsible.
sos, resulta recomendable la reparación general o, por En cualquiera de los casos, conviene aprovechar
lo menos, de piezas enteras llegando hasta las juntas la reparación para asegurar la resistencia de los bor-
de dilatación; incluso en los casos de erosión muy des ante la erosión mecánica. Para ello podemos re-
marcada en dichas juntas coincidiendo con las zonas currir a dos soluciones básicas; juntas de pequeña
de paso, también resulta más recomendable la repa- sección (< 2 mm) sellada con elastómeros, o juntas de
ración general. En cualquier caso, como quiera que la mayor espesor complementadas con elementos me-
erosión mecánica supone una pérdida irregular de ma- tálicos de borde, normalmente con soluciones co-
terial superficial, la primera fase de saneado implica- mercializadas que incorporan elementos de caucho
rá una abrasión unificadora para eliminar por igual la intermedio. Por lo general, constan de dos perfiles me-
capa superficial afectada, de tal modo que la nueva tálicos que se acoplan a ambos lados de la junta y un
protección tenga un espesor uniforme. Una vez sa- elemento elástico entre ellas (Fig.23). Existe también
neado, se puede proceder a dos tipos de protección: la posibilidad de colocar sistemas con perfiles en T
capituio Patología e intervención en cerramientos y acabados

también un saneado profundo con un estudio quími-


co de la lesión para evitar su nueva aparición.

3.1.2 De las fisuras


En primer lugar, habrá que conocer la causa que
ha provocado las fisuras y tratar de anularla, si es po-
sible, y a continuación actuar sobre la fisura, aunque
hay que partir de la base de que una solera flsurada,
como cualquier otro elemento constructivo rígido, se
convierte en un conjunto de piezas difíciles de reuni-
ficar.
Si se trata de un asiento del terreno por deficiente
compactación, probablemente lo más efectivo sea sa-
nar y sellar las fisuras con material elastoplástico y de-
jar que actúen las partes como piezas independien-
tes. De lo contrario tendremos que demoler, compactar
de nuevo y rehacer la solera. Si estamos ante flechas
elásticas de forjado y pavimento continuo de morte-
ros especiales, estudiaremos la posibilidad y conve-
niencia de reforzar el forjado para limitar su flecha.
I I Después, en cualquier caso, sanear y marcar de un
modo lineal las fisuras que habrán aparecido en las
23. Reparación de bordes de solera. zonas de momento negativo y dejar que sigan permi-
tiendo la movilidad del pavimento. En los casos en
que la rotura se deba a pobre resistencia a flexión de
la solera, no tendremos más remedio que demoler y
que actúan de tapajuntas y protegen los bordes con
gran efectividad aunque suponen un pequeño tropie- rehacer con mayor capacidad (más espesor o más
zo para los vehículos, sobre todo los de ruedas duras cuantía de armado).
y pequeñas. Cuando las fisuras sean consecuencia de las va-
Si la erosión mecánica ha afectado a pavimen- riaciones dimensionales por cambios de temperatu-
tos de mortero continuo de poco espesor, podremos ra, una primera actuación podría ser la de duplicar el
recurrir a la solución de capas endurecedoras si el res- número de juntas de dilatación a base de sanear las
to del espesor se puede mantener o, por el contrario, fisuras y marcar linealmente las juntas en su lugar. Sin
demoler toda la capa y rehacerla. embargo, esto nos puede dar una imagen muy irre-
Cuando se trata de erosión física en soleras exte- gular del pavimento y, en cualquier caso, la operación
riores, lo más probable es que se requiera un sanea- de saneado y marcado lineal de las nuevas juntas re-
do profundo y la colocación de una capa de mortero quiere una mano de obra muy especializada. Otra so-
especial, siempre que la dureza de la base sea sufi- lución más sencilla, válida sobre todo para exteriores,
ciente. De lo contrario, recurriremos a la ejecución de consistirá en sanear y sellar con elastoplásticos las fi-
una nueva solera anclada a la existente. En exterio- suras que se abran, al igual que se hace en carrete-
res, por otra parte, las juntas entre piezas suelen ser ras o calles. SI el pavimento está exageradamente fi-
de mayores dimensiones y requieren un sellado para surado, no habrá más remedio que demoler y rehacer.
evitar la filtración de agua en la mayoría de los casos. En cualquier caso, si se trata de movimientos de di-
Si se trata de vehículos de rueda neumática (lo más latación y contracción, nunca hay que intentar tapar
corriente) bastará utilizar sellantes elastoplásticos. En las fisuras.
las zonas en que se prevea el paso de ruedas duras
y pequeñas habrá que recurrir a soluciones de juntas 3.1.3 De los desprendimientos
como las vistas para interiores.
Puede aparecer en pavimentos continuos de mor-
La erosión química, por último, será normalmen- teros especiales y lo más probable es que la causa
te puntual o estará muy localizada, por lo que la ac- sea generalizada a toda, o gran parte, de la superíi
tuación se podrá limitar a las zonas afectadas, aun- cié. De ser así, no habrá más remedio que demoler y
que siempre debemos actuar por zonas enteras entre rehacer atendiendo las medidas de prevención. En ca-
juntas de dilatación y evitar parcheados. Se requerirá so de que se trate de un desprendimiento más o me-
Tema 4. Patología y reparación de pavimentos

nos puntual y localizado, podemos limitarnos a actuar deberemos recurrir a un abujardado o cepillado me-
sobre esas zonas procurando llegar con nuestra ac- cánico, también automático o incluso manual, has-
tuación hasta juntas de dilatación y evitar el parcheo; ta unificar la superficie. Lo mismo podremos conse-
la actuación en dichas zonas consistirá también en la guir cuando se trate de baldosas de terrazo que
demolición del mortero afectado y su refacción. En los tengan suficiente espesor de capa de acabado. Sin
casos en que se detecten causas locales de poca pro- embargo, en el resto de materiales la solución es más
tección de bordes o mala ejecución de las juntas de difícil. Así, en baldosas hidráulicas o en plaquetas
dilatación que puedan ser origen del esfuerzo rasan- cerámicas vidriadas, al ser la capa de acabado muy
te que provoca el desprendimiento, además de la re- fina, no admiten abrasión superficial. Algo similar
paración indicada será necesario aportar esas pro- ocurre en baldosas cerámicas de barro o de gres,
tecciones tanto en bordes como en juntas. donde no se puede producir esta actuación mecá-
nica superficial. En todos esos casos no habrá más
3.1.4 De las humedades remedio que sustituir total o parcialmente las baldo-
Según el tipo de humedad variará nuestra actua- sas desgastadas, en función de su aspecto y de la
ción. Si asciende por capilaridad, trataremos de rea- modulación existente en el conjunto.
lizar un drenaje perimetral por zanja, o puntual por po- También requeriría sustitución de baldosas la
zos, que consiga bajar el nivel freático, siempre que erosión de piezas producida por impactos tanto
exista algún tipo de drenaje superficial bajo la solera en el centro como en los bordes, lo que supone una
(encachado). Si esa actuación no es efectiva o no exis- ventaja general para el mantenimiento de ese tipo de
te ese drenaje superficial, deberemos plantear una pavimentos frente a los continuos. Si esta rotura se
nueva solera que, según el nivel al que podamos lle- ha producido en juntas de dilatación sin protección
gar, implicará demolición de la existente y nueva eje- de los bordes, al rehacerla habrá que introducir
cución, o utilización de la actual como base de parti- esa protección a base de perfiles metálicos de jun-
da y construcción de una nueva con las debidas ta con soluciones comerciales según se indica en
medidas preventivas de drenaje superficial o cámara prevención.
ventilada previa. Si se trata de una humedad de filtra- Si se trata de erosión física en pavimentos exte-
ción, lo más lógico será proceder al sellado superior riores, habrá que proceder normalmente a la reposi-
de todas las juntas de dilatación, así como de las po- ción de las más dañadas, o de todo el conjunto se-
sibles fisuras, no sin antes considerar el drenaje su- gún su aspecto, procurando dar a las nuevas y a las
perficial del agua de lluvia a base de ejecución, si no remanentes una protección superficial impermeabili-
existe, de sumideros en los puntos bajos y la conve- zante que evite una nueva erosión. Algo parecido ha-
niente canalización de recogida. Si se trata, en fin, de remos cuando la intensidad de la erosión sea relati-
humedades accidentales, será imprescindible la re- vamente baja y se pueda recuperar el aspecto con un
paración de las tuberías o instalación rota, lo que pro- saneado superficial. Entonces, será conveniente apli-
bablemente, obligará a una demolición parcial de la car un sellado endurecedor superficial a base de re-
solera existente, tomando las medidas adecuadas de sinas epoxídicas o acrílicas o, incluso, a base de ce-
prevención de nuevas roturas. ras naturales o artificiales que impermeabilicen la
La reparación de las humedades producirá la de- superficie.
saparición de las eflorescencias si éstas habían apa- Si estamos ante una erosión química, por el con-
recido, y será suficiente con una limpieza superficial. trario, habrá que comprobar, en primer lugar, el tipo
de producto atacante y la reacción producida para de-
3.2 Pavimentos de baldosas cidir si cabe mantener ese pavimento o procede cam-
biarlo por otro resistente a ese producto químico, en
3.2.1 De la erosión caso de que sea de uso habitual. También podremos
En la mayoría de baldosas pétreas, la erosión me- considerar la posibilidad de una protección superfi-
cánica se suele producir por el roce del uso, lo que cial al pavimento existente que proteja de la acción
implica un desgaste bastante uniforme, aunque es- química lesionante, además de resistir al resto de ac-
té localizado en las zonas de paso. Entonces, la so- ciones debidas al uso.
lución es muy sencilla y consiste en una abrasión
controlada de toda la zona hasta conseguir unificar 3.2.2 De las fisuras
la superficie e igualar el aspecto. En los casos de Si se trata de fisuras generales por flechas de for-
piedra pulida en interiores esta operación se realiza jado, habrá que analizar la conveniencia de reforzar
con máquinas pulidoras. En baldosas abujardadas. su inercia para reducir la dimensión de ¡a flecha, o de
capituio II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

INTRODUCCIÓN OE JUNTA 171


DE RETRACCIÓN
I I
3 l 1 )

te

o) OE MATERIAL D) DE PERFILES Y BANOA C ) DE PERFIL ESPECIAL


ELASTICO ELASTO-PLÁSTICA CON TAPAJUNTAS

24. Reparación de pavimento exterior por dilatación

lo contrario, simplemente sellar la fisura si ésta se ha terial tiene que estar anclado a la base y debe tener
abierto en las juntas y de una forma lineal aceptable. cierta compresibilidad para permitir la dilatación.
Si se ha roto alguna pieza, además habrá que susti- b) De material elastoplástico (siliconas). En este
tuirla. Si se trata de problemas de dilatación-contrac- caso, dada la plasticidad del material, necesitamos
ción en exteriores, habrá que introducir la junta de di- rigidizar los labios de la junta, ya que no es capaz de
latación correspondiente, buscando algún tipo de sujetar los bordes de las baldosas contiguas. Se pue-
modulación coincidiendo, a ser posible, con las unio- de recurrir a angulares metálicos según la figura, que
nes entre baldosas, y sellarla con siliconas. Si es un deben estar libres para permitir la dilatación. En cual-
problema de baldosas débiles a los esfuerzos de fle- quier caso, ésta no es una solución muy recomen-
xión, deberemos proceder a su sustitución por otras dable en pavimentos y, en todo caso, debe cuidar-
lo suficiente resistentes a ese esfuerzo en función del se la elección del elastómero, que debe tener
uso del local, algo bastante corriente en supermerca- consistencia suficiente para las acciones mecánicas
dos por la acción de los portapalets. que va a recibir.
c) Con perfil especial de junta. Se debe utilizar, so-
3.2.3 De los desprendimientos bre todo, cuando se trata de una junta de dilatación
Nuestra actuación será en función de la causa. estructural que no se ha respetado. Entonces, la jun-
ta del pavimento tiene que coincidir exactamente con
A- Dilatación del pavimento exterior (Fig. 24) ella y el perfil consta de dos piezas (angulares) que se
Si se trata de un pavimento exterior y el despren- sujetan a los bordes de la estructura, y una tercera
dimiento se ha producido por dilatación del mismo, lo que actúa de tapajuntas y que depende del uso que
más probable es que las baldosas se hayan coloca- tenga el pavimento en cuestión. Esta tercera pieza se
do con junta a hueso. Lo correcto sería demoler el pa- puede sustituir por material elástico.
vimento y rehacerlo con junta abierta. No obstante, Una vez corregida la causa, procederemos con el
ello implicaría un coste que, en ocasiones, sería ele- efecto. Para ello, debemos conocer el alcance de la
vado. Para ello, una solución alternativa consiste en, lesión, lo que es relativamente fácil mediante golpeo
una vez calculada la situación correcta de las juntas con barra de madera, para conocer su adherencia.
de dilatación-contracción necesarias, se levantan las Entonces, deberemos sustituir todas aquellas baldo-
líneas de baldosas coincidentes con ellas y se susti- sas desprendidas y rematar con un nuevo enlechado
tuyen por otras de menor dimensión, de tal modo que para retacar las nuevas uniones, así como un nuevo
queden marcadas las mencionadas juntas.También se pulido en caso de baldosas pétreas. En el caso en que
puede simplemente materializar la junta con un corte el pavimento tenga dibujos modulares, la reposición
lineal profundo y posteriormente sellado. Cuando el de baldosas cuidará el aspecto de los mismos, pro-
pavimento es de pequeñas dimensiones puede colo- curando cambiar baldosas por paños para evitar di-
carse la junta en su perímetro. En el caso de pavi- ferencias de color,
mentos con dibujos modulares, trataremos de intro-
ducir las juntas en las líneas que marcan la modulación. B- Flecha de forjado
La solución constructiva de la junta puede ser de va- Suele provocar, bien la rotura del pavimento (por
rios tipos: juntas o por baldosas) o su separación al tener las bal-
a) De material elástico, como neopreno. Dicho ma- dosas juntas a hueso. En cualquier caso, el primer pa-
fema I. Patología y reparación de pavimentos

172 i AGUA O E FILTRACION

a) FALLO GENERALIZADO

( MORTERO DE AGARRE POBRE


O DE REPARTO MAL COLOCADO )
AGUA D E CAPILARIDAD

JUNTA ABIERTA
b) FALLO PUNTUAL EN EL INTERIOR

PERFIL METÁLICO PIEZA BORDE V

^MEMBRANA
c ) FALLO PUNTUAL EN E L BORDE IMPERMEABLE

25, Compresión puntual de la capa de agarre. 26. Dilatación de elementos infiltrados.

so será reforzar el forjado y anular su movilidad. quier caso, se procurará no dejar nunca el borde de
Posteriormente procederemos a corregir el efecto. En la baldosa desprotegido.
el primer caso, lo más probable es que no se hayan
desprendido más que las baldosas rotas o del entor- D- Dilatación de elementos infiltrados (Fig. 26)
no. Habrá que cambiarlas y volver a los acabados fi- Pueden ser sales que dilaten al cristalizar o sim-
nales con enlechado, pulido, etc. En el segundo, el plemente agua que lo hace al congelarse.
desprendimiento habrá afectado a zonas amplias del a) Si se trata de sales, habrá que conocer su pro-
pavimento, por lo que procederá conocer su exten- cedencia. Si vienen del suelo en un pavimento sobre
sión y reponer todas las baldosas lesionadas, colo- solera, habrá que demoler, introducir una barrera im-
cándolas según las medidas de prevención y, prefe- permeable, un drenaje y volver a ejecutar el pavimen-
rentemente, con capa de reparto y capa de agarre. to. Si están contenidas en el propio mortero de aga-
rre, bastará con rehacer el pavimento.
C-Compresión puntual de la capa de agarre, que b) Si se trata de agua, con o sin sales (solubles o
provoca un asiento diferencial de las baldosas que reaccionan con el mortero o la baldosa) habrá que
(Fig. 25) conocer, su procedencia e introducir la correspon-
Veamos los principales casos posibles. diente barrera impermeable, previa demolición del pa-
a) Fallo generalizado por pobreza del mortero de vimento, para su posterior refacción, o establecer un
agarre o irregularidad de la capa de reparto. La solu- sistema de drenaje o incluso una cámara ventilada
ción, tanto a la causa como al efecto, pasará por re- previa.
hacer todo el pavimento.
b) Fallo puntual en el interior. Después de confir- E-Junta de dilatación de la estructura no respeta-
mar que la lesión no afecta al resto, se repondrán las da (Fig. 24)
piezas afectadas y las de su entorno, con los consi- Cuando el pavimento se realiza continuo sobre una
guientes acabados finales de unificación. junta de dilatación de la estructura, al moverse ésta,
c) Fallo puntual en el borde, provocado por un error aquel rompe. En este caso, la única solución es reha-
en su ejecución y pérdida de la capa de reparto o pun- cer el pavimento en el entorno de la junta, de acuer-
zonamiento de la de agarre. Se repondrán las baldo- do con lo mencionado en los párrafos anteriores.
sas de borde ejecutando correctamente éste con pie-
za especial que contenga la compresión lateral, con 3.2.4 De las humedades
varias opciones (perfil metálico o bordillo). En cual- La lesión y por tanto la intervención, no difiere bá-
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

sicamente de lo comentado para soleras, por lo que


al punto 3.1.4. remitirnos.

3.2.5 De las eflorescencias


La eliminación de la causa consistirá en anular la
humedad que produce la disolución de la sal, para lo
que recurriremos a lo indicado en el punto 3.1.4. Para
la corrección del efecto habrá que recurrir a algún ti-
po de limpieza, que podrá ser desde un simple cepi-
llado hasta su disolución mediante detergentes neu- - i -. M |

tros. En el caso de baldosas con abundancia de sales


solubles, como quiera que será imposible impedir la
filtración del agua de lluvia, no habrá más remedio que
sustituirlas por otras no eflorescibles. 27. Recolocación de tarima mediante pegamento.

3.3 Pavimentos de Madera con maderas algo más blandas aunque de aspecto
similar, cuidando el que el pavimento en su conjunto
3.3.1 De la erosión
pueda seguir moviéndose. Por ello, esta operación de-
Se trata, como vimos, de un desgaste por el uso.
berá realizarse en primavera u otoño para asegurar un
Al ser un material con espesor uniforme (tarimas tra-
nivel de humedad intermedio en la madera que no pro-
dicionales) la solución estará en el acuchillado y nue-
voque movimientos posteriores muy exagerados.
vo tratamiento superficial, siempre que quede espe-
sor suficiente. En las modernas tarimas a base de
aglomerado con chapado superficial, ésta solución 3.3.3 De los desprendimientos
es imposible y no hay más remedio que ir a la susti- En función de la causa tendremos:
tución de todas las piezas o, por lo menos, las más a) Falta de holguras perímetrales. El desprendi-
afectadas. miento puede haberse provocado en cualquier punto
En tarimas macizas machihembradas, cuando el del pavimento, aunque la causa esté en el perímetro.
desgaste ha llegado hasta las proximidades de la len- Por ello, habrá que analizar el alcance de la lesión y
güeta intermedia ya no admite un nuevo acuchillado, la posible consecuencia en rastreles. A continuación
pues se perdería la trabazón entre tablas. Entonces se reponen las piezas levantadas, incluso rastreles
tenemos dos soluciones alternativas. La demolición y afectados, con la consiguiente dificultad en el ma-
sustitución por otra nueva, bien total, bien parcial, o chihembrado de las tablas. Por último, se introduce la
la recuperación del material y la remodelación. En es- holgura perimetral por simple corte del borde, asegu-
te caso, se suele proceder al levantamiento y al cor- rando que queda escondido bajo el rodapié, y se pro-
te de las piezas reduciendo su sección hasta alcan- cede al acuchillado y barnizado final.
zar la madera sana (se puede obtener una sección de b) Exceso de humedad. Provoca levantamiento de-
50x15 a partir de una tabla de 70x20 ya desgastada). sigual según el foco de humedad. En primer lugar, ha-
Estas nuevas tablas se pueden colocar pegadas so- brá que localizar dicho foco e introducir la barrera im-
bre solera de mortero o clavadas sobre tablero, ha- permeable adecuada o el drenaje necesario. A
ciendo los dibujos convenientes. Si se adhieren sobre continuación, y dada la importancia que suelen tener
solera, conviene utilizar pegamentos muy elásticos estos casos, se debe proceder a levantar todas las
para absorber las variaciones dimensionales y redu- zonas afectadas, repasar la sujeción de los rastreles
cir su longitud. (Fig. 27) y rehacer el entarimado. Cuando se trate de tarimas
adheridas con colas, o simplemente apoyadas (flo-
3.3.2 De las fisuras tantes) el procedimiento será similar. En cualquier ca-
Si se trata de fendas en piezas individuales, bas- so, las piezas que resulten afectadas deben recha-
tará con su sustitución. S i estamos ante aberturas por zarse y sustituirse. Por último, se procede al acuchillado
variaciones de humedad, habrá que comprobar su di- y barnizado final.
mensión y variación. Por lo general, habrá que asumir
las aberturas como componentes del pavimento. Sin 3.3.4 De los organismos
embargo, si la dimensión es exagerada y no llegan a La actuación dependerá del tipo de organismo y
cerrar, podremos proceder a filetear esas aberturas del alcance de su acción.
Tema 4. Patología y reparación ríe pavimentos

A- Ataque de xilófagos - Tratamiento superficial de toda la madera no ata-


Se trata, por lo general, de lesiones primarias, aun- cada y. sobre todo, de la nueva, principalmente de las
que en algunos casos (termitas) se necesita un nivel prótesis que se deben aplicar como reparación del
de humedad elevado (> 20%) y entonces se facilita su efecto. Hay que considerar que la madera nueva es
presencia como consecuencia de lesiones previas de un verdadero foco de atracción para los xilófagos.
humedad, por lo que pueden pasar a considerarse le- En cualquiera de los casos, y como complemen-
siones secundarias. Así pues, en el caso de las ter- to a esos tratamientos, se cuidará la aplicación de las
mitas debemos proceder, en primer lugar, a la anula- medidas preventivas destinadas a aislar las maderas
ción de las humedades que pudieran afectar a los de la humedad y a facilitar la inspección de todos los
elementos constructivos en reparación por cualquie- elementos constructivos leñosos, tanto para com-
ra de los métodos indicados en el capítulo corres- probar su estado como para la posible aplicación de
pondiente. En cualquier caso, no hay que perder de tratamientos preventivos o curativos.
vista que una reparación bien planteada ante la exis- La reparación del efecto consistirá en una serie de
tencia de insectos xilófagos, no puede limitarse a la actuaciones constructivas que permitan el uso nor-
zona o elemento constructivo afectado, sino que, co- mal del elemento constructivo dañado, teniendo en
mo acción preventiva, debe extenderse al resto de los cuenta la inevitable adecuación de la solución a cada
elementos leñosos del edificio, aunque sin la profun- caso concreto, en función de:
didad de aquéllos, sino de un modo superficial, siem- - elemento constructivo
pre que tengamos la seguridad de que no han sido - tipo de degradación
atacados previamente. De lo contrario, debemos ac- - intensidad de la misma
tuar con la misma intensidad. Una vez tomadas esas medidas debemos proce-
El tratamiento en cuestión, será diferente según el der a la reparación del efecto. En general, podemos
tipo de insecto de que se trate y, sobre todo, de si es plantear dos tipos de soluciones:
un insecto larvario (coleóptero) o social (isóptero). Así, Sustitución
en el caso de los coleópteros, debemos aplicar pro- Consolidación y refuerzo
tectores orgánicos por inyección en las zonas en las La sustitución será imprescindible cuando el ata-
que se ha observado ataque y siempre que el ele- que sea muy profundo y general. La consolidación y
mento sea recuperable, mientras que bastará un tra- refuerzo son muy variadas y están destinadas a recu-
tamiento superficial con el mismo producto en el res- perar las características físicas y mecánicas del ele-
to del elemento no atacado, por pulverización p mento cuando éste está dañado parcialmente, va-
pincelado. En el caso de las termitas (isópteros) el tra- riando lo menos posible su aspecto. En pavimentos
tamiento curativo es algo más complicado, sobre to- se realizan con el mismo material leñoso, eliminando
do en el de las subterráneas, por la dificultad de lo- las zonas dañadas y sustituyéndolas por otras nue-
calizar el origen de sus colonias, que suelen estar fuera vas convenientemente tratadas.
del edificio e, incluso, la extensión de su ataque. En
definitiva, el tratamiento se deberá estudiar en cada B- Ataque de hongos
caso concreto, según las características del edificio y Estamos ante un caso similar al de los xilófagos,
el ataque perpetrado, pero podemos establecer una puesto que las condiciones ambientales para su apa-
serie de pasos o medidas simultáneas de carácter ge- rición son prácticamente las mismas (humedad y tem-
neral que persiguen la destrucción de las colonias y peratura elevadas) y las consecuencias en los ele-
el aislamiento, si cabe, del edificio con respecto a los mentos leñosos también (pérdida de resistencia
insectos. Veamos. mecánica). Así. pues, para eliminar las causas actua-
- Barrera química en la cimentación de carácter remos, en primer lugar, sobre las posibles humeda-
perimetral, mediante insecticidas- termícidas inyec des según las recomendaciones oportunas para, a
tados alrededor del edificio a la profundidad de sus continuación, atacar a las colonias de hongos me-
cimientos y con carácter permanente. diante protectores fungicidas en disolvente orgánico.
- Inyección del mismo tipo de insecticida termi- Estos se aplicarán en profundidad (inyección) en las
cida en las bases de los muros de carga y cerramien- maderas atacadas y superficialmente (brocha o pul-
to, teniendo en cuenta su compatibilidad química con verización) en el resto de las maderas para evitar el
la composición de la fábrica. Dicha inyección se de- contagio.
be generalizar a las partes de los muros que sirven de En cuanto a la reparación del efecto, mantenemos
apoyo a Ids distintos forjados, sí esos son de made- el planteamiento hecho para los xilófagos, conside-
ra y, por tanto, susceptibles del ataque de termitas rando las mismas posibilidades: sustitución del ele-
capitulo II Patología e intervención en cerramientos y acabados

175
Elementos Protección Producto Protector/
Constructivos Solicitada Pintura
Contra

1. Maderas en contacto con tierra Protectores oleosos


(Inmersión/impregnación)
II. Maderajes en exteriores Hongos Protectores oleosos
(Insectos) +
Influencias Protectores decorativos
Atomosféncas en colores diáfanos o
+
Esmaltes o pinturas
de disp. con colores
III. Ventanas Protectores oleosos
+
Protectores decorativos
con colores diáfanos o
+
Esmaltes
IV. Maderas en interiores Insectos Protectores oleosos
(Hongos) 0
Protectores decorativos
en colores diáfanos
+
Barniz transparente
0
Ceras

CUADRO I. ¿Qué protector o pintura debe utilizarse para diversos elementos construc-
tivos?

Clase
Situación de la madera Medidas a adoptar en cuanto a protección Tipo de protección
de riesgo

• Madera en interior en Tratamiento facultativo en función de que su Superficial


ambiente siempre seco. coste no supere el de una reparación o 1 mm < P s 3 mm.
Funciones de revestimiento 1 tratamiento curativo

• Maderas en funciones 1 Superficial


estructurales y ambiente Tratamiento preventivo aconsejable, 1 mm < P s 3 mm.
siempre seco, y/o especialmente en caso de reparaciones difíciles Media
• Maderas no estructurales y costosas 3mm<Ps75%S'
con riesgo accidental 2
de humedad

• Maderas sometidas a Media


períodos alternativos de 3 Tratamiento preventivo obligatorio 3 mm < P s 75% S*
humedad y sequedad sin Profunda
estar en contacto con el suelo P > 75% S" •

• Maderas en contacto con


el suelo o con una fuente
de humedad permanente que 4 Tratamiento preventivo obligatorio Profunda
le comunica un contenido P > 75% S*
de humedad > 20%

S" = Superficie de la sección de la pieza de madera a tratar.

CUADRO II. Protección requerida para las distintas utilizaciones


Tema 4. Patología y reparación de pavimentos

176 (PERFIL OE JUNTA)

28. Discontinuidad del soporte en pavimento flexible.

mentó o consolidación y refuerzo del mismo en fun- 4. Medidas de prevención


ción del tipo de elemento constructivo y de su fun-
ción, así como de la intensidad de su ataque, lo que De las lesiones vistas y de las técnicas de repara-
nos vendrá dado por el diagnóstico previo. ción propuestas podemos deducir las medidas de pre-
En general, para decidir el tipo de protección di- vención más adecuadas en proyecto y obra para evi-
versos autores establecen cuadros en los que se con- tar la aparición de los procesos patológicos.
sidera el tipo de elemento constructivo y su situación.
A modo de orientación se adjuntan dos cuadros: 4.1 En soleras
C.1 ."¿Qué protector o pintura debe utilizarse pa-
ra diversos elementos constructivos?" de J. Cari. 4.1.1 Para la erosión
C.2."Protección requerida para las distintas utili- Ante la erosión mecánica debemos asegurar dos
a
zaciones" de M. Angeles Navarrete. aspectos básicos. Por un lado, la resistencia superfi-
cial del pavimento ante la abrasión y el punzonamiento
y, por otro, la protección de los bordes y de las juntas
3.4 Láminas flexibles
de dilatación.
3.4.1 Erosión En cuanto a la resistencia superficial, debemos ase-
Ante la erosión de cualquier tipo, no cabe más re- gurar una resistencia a compresión superior a los 200
medio que sustituir todo el pavimento o, por lo me- kp/cnf para vehículos con ruedas neumáticas y 500
nos, las zonas afectadas hasta modulaciones com- kp/cnf para vehículos con ruedas duras y pequeñas.
pletas. La nueva lámina debe ser adecuada para el En cuanto a bordes y juntas de dilatación, será muy
tráfico a resistir. útil la colocación de perfiles metálicos y piezas espe-
ciales de juntas con bordes metálicos y relleno elás-
3.4.2 Desprendimientos tico o piezas en T protegiendo la unión, cuando sea
frecuente el paso de vehículos con ruedas duras y pe-
a) Discontinuidad del soporte. Si la discontinuidad
queñas.(ver Fig. 24)
es tal que ha provocado el desprendimiento, no ha-
brá más remedio que marcar la junta de retracción. Ante la erosión física de soleras exteriores, la me-
Para ello habrá que recurrir a perfiles especiales de dida más importante será asegurar la impermeabili-
junta que constan de los tres elementos ya indicados, dad superficial con un coeficiente de absorción infe-
a saber; piezas para los bordes sujetos al soporte y rior al 0,3%, para lo que podemos recurrir a un
que sujetan el pavimento, y pieza tapajuntas. Para la tratamiento mecánico que dé superficies muy pulidas
reparación del efecto se puede tratar de conservar el y, por tanto, deslizantes, o a protectores sellantes apli-
mismo pavimento cortándolo linealmente por la junta cados durante el fraguado o una vez endurecido.
y despegándolo en los bordes, para volver a pegarlo Ante la erosión química, la medida más adecuada
una vez colocado al perfil de la junta.(Fig.28) serán los estudios químicos previos con el tipo de pro-
b) Exceso de material. Entonces, si el material si- ductos que. según el uso previsto, puedan ser el ori-
gue siendo aprovechable, se procede a su levanta- gen de los ataques. En función de los resultados, se
miento y recolocación con la tensión necesaria. aplicarán los sellantes e impermeabilizantes superfi-
c) Fallo del material adherente. Nos vemos obli- ciales más adecuados.
gados al levantamiento del pavimento y su refacción.
En la mayoría de los casos, ni el pavimento ni la capa 4.1.2 Para las fisuras
de nivelación suelen ser recuperables, por lo que ha- Para las de origen elástico por asientos del terre-
brá que ejecutarlo desde el principio. no o flechas de forjado, asegurar la inexistencia de los
d) Esfuerzo rasante por pisada. Suele ir combi- mismos, lo que obligará a una compactación previa
nado con alguna de las dos causas anteriores, por del terreno hasta alcanzar un proctor modificado del
lo que procederemos según hemos indicado en ca- 98% y limitar las flechas de forjado por debajo de los
da caso. 8 mm en valor absoiuto. Por otra parte, también será
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

útil en algunos casos, dar una determinada resisten- baldosas tengan el espesor de material uniforme que
cia a flexión a la solera, lo que implicará su armado y permita su pulido posterior, o abrasión controlada, pa-
dependerá del tamaño de la pieza y del tipo de tráfi- ra llevar a cabo con facilidad la labor de mantenimiento
co previsto, pero nunca inferior a ios 100 kp/cnf. indicada en el apartado de reparación. En este senti-
Para las fisuras de origen térmico (dilatación y con- do, los materiales que facilitan esa labor son los dis-
tracción) la solución es doble. Por un lado, introduc- tintos tipos de piedra y los terrazos con capa de aca-
ción de juntas de retracción suficientes para que la bado superior a 1,5 cm. Por el contrario, imposibilitan
variación dimensional prevista en función de su coe- su abrasión controlada las baldosas hidráulicas y to-
ficiente de dilatación lineal y del gradiente de tempe- dos los cerámicos, principalmente aquellos con capa
superficial de vidriado.
ratura, no supere los 2 mm. Estas juntas deben com-
binarse en interiores sobre forjado con las de Para la erosión física en pavimentos exteriores, ha-
movimientos elásticos y corresponder de algún mo- brá que controlar el coeficiente de absorción superfi-
do con la modulación estructural. Por otro, podemos cial que, como sabemos, debe ser inferior al 0,3%.
recurrir a armaduras antifisuración, de colocación re- Para la erosión química, hay que conocer el tipo de
lativamente superficial, o al uso de aditivos que redu- productos que puedan atacar el pavimento y com-
cen el coeficiente de dilatación térmica. probar, con los ensayos previos necesarios, la inalte-
rabilidad química del material constitutivo de la bal-
dosa. En este sentido, los materiales más inertes son
4.1.3 Para los desprendimientos
los cerámicos y, en cualquier caso, la impermeabili-
Para los casos de pavimentos continuos de mor-
dad superficial ayuda a la resistencia.
teros especiales sobre forjados, deberemos tomar
también dos medidas. Por un lado, limitar los movi-
mientos elásticos de la estructura para evitar la apa- 4.2.2 Para las fisuras
rición de esfuerzos rasantes entre las dos capas. Por Como primera medida, reducir la flecha de los for-
otro, en caso de previsión de la lesión incluir conec- jados que vayan a actuar de soporte por debajo de
tores (normalmente metálicos) entre soporte y pavi- los 10 mm en valor absoluto. Por otra parte, asegurar
mento, lo que implica que esté armado. Por otra par- la resistencia a flexión individual de cada baldosa en
función de su tamaño y de las cargas que vayan a so-
te, también será útil la protección de bordes y juntas
portar, pero nunca inferior a los 150 kp/cnf.
para evitar golpes que introduzcan esfuerzo rasante.
Recurriremos de nuevo a perfiles metálicos normales En la ejecución, asegurar la correcta y uniforme
colocación de la capa de reparto, así como la conti-
para bordes y especiales para juntas o, por lo menos,
nuidad y resistencia de la capa de agarre (mortero
sellantes elásticos en éstas.
1/3). Si se coloca a fuego, es decir, extendiendo pre-
viamente (y únicamente) la capa de agarre, asegurar
4.1.4 Para las humedades la adherencia con la baldosa, con la correcta hu-
Para las de filtración, de nuevo dos medidas simul- mectación previa. Asimismo, en bordes y juntas de
táneas. Sellado de juntas con elastoplásticos y reduc- dilatación, asegurar la contención de la capa de re-
ción del coeficiente de absorción superficial por deba- parto mediante piezas especiales para evitar asien-
jo del 0,3% por algunos de los procedimientos tos puntuales.
comentados más arriba. Para las de capilaridad, esta-
Ante las inevitables variaciones dimensionales por
blecimiento de sistema de drenaje superficial perma-
cambios de temperatura, sobre todo en exteriores, in-
nente, bien estático a base de encachados a tubos dre- troducir juntas de dilatación en función del gradiente
nantes, bien dinámico a base de pozos y zanjas con de temperatura y del coeficiente de dilatación poten-
bombas automáticas en los casos de niveles freáticos cial del conjunto baldosa/mortero. En exteriores la co-
altos. Para las accidentales, podemos huir de la loca- locación se debe realizar con junta abierta. Para las jun-
lización de tuberías bajo la solera, aunque cuando sea tas de dilatación, es conveniente, el uso de perfiles
inevitable su presencia, deberemos cuidar su coloca- especiales con doble pieza metálica y material elásti-
ción con suficiente protección anticorrosiva y coquilla co intermedio (ver Fig. 24). En interiores, donde las va-
de espuma que las independice de la propia solera. riaciones térmicas son menores, bastará introducir jun-
tas de retracción sencillas a base de pletinas de aluminio
o latón (materiales blandos) clavadas en la capa de aga-
4.2 En baldosas
rre con modulaciones entre 3 y 5 metros.
4.2.1 Para la erosión
Para prevenir, la erosión mecánica, se deberán ele- 4.2.3 Para los desprendimientos (Fig. 25)
gir los materiales con la dureza adecuada en función En proyecto
de la abrasión previsible según el uso, pero lo más im- - Diseñar adecuadamente los bordes y cambios
portante será asegurar la posibilidad de que dichas de piano, evitando que, los cantos de las piezas que-
Tema 4. Patología y reparación de pavimentos

den vistos y que la capa de reparto y la de agarre que- pilaridad, condensación o accidental para evitar levan-
den sin sujeción, según los detalles indicados en la fi- tamientos. Uso de maderas (rastreles y tarima) con índi-
gura. ces de humedad inferiores al 10% o con humedad de
- Evitar filtraciones de agua equilibrio. Correcta sujeción de rastreles nunca con mor-
En ejecución teros de yeso por su higroscopicidad. Holgura suficien-
- Emplear, siempre que sea posible y principal- te en el perímetro, tanto en rastreles como en tarima.
mente sobre estructuras flexibles, capa de reparto y Asegurar secado total de mortero de agarre de rastreles
capa de agarre. o de solera de base, antes de colocar la tarima.
- Colocar con junta abierta en los pavimentos ex-
teriores, lo que es útil, tanto para facilitar la dilatación 4.3.4 Para los organismos
y contracción de las piezas sin que se produzcan le- Tanto para proteger de xilófagos como de colonias
vantamientos por empujes excesivos, como para evi- de hongos, las medidas preventivas están orientadas
tar filtraciones de agua por fisuras, que terminan en a evitar las condiciones favorables para su aparición.
helada y desprendimiento. Así tendremos:
- Cuidar la composición del mortero de agarre pa- - Medidas necesarias para evitar las humedades,
ra que tenga resistencia suficiente (1:4) y no conten- sobre todo las de capilaridad y las de filtración, según
ga sales o materiales orgánicos susceptibles de dila- lo escrito en el capítulo correspondiente.
tación por humedad. - Aplicación de tratamientos protectores antes de
la puesta en obra de la madera. Dichos tratamientos
4.2.4 Para las humedades a base de insecticidas de tipo orgánico, pueden apli-
Al igual que para la erosión física en pavimentos carse mediante dos tipos de técnicas, en función de
exteriores, exigir un coeficiente de absorción superfi- la naturaleza de la madera y la situación del elemen-
cial inferior al 0,3%. Además, asegurar el sellado de to constructivo en la obra. Así, para los elementos que
juntas de dilatación y ejecutar el pavimento con junta vayan a quedar vistos y aireados, bastará un trata-
abierta para que haya continuidad del mortero de aga- miento superficial a base de:
rre en dorso y junta. Por último, establecer un correc-
• Inmersión rápida
to sistema de drenaje con pendiente suficiente y su-
• Pulverización mediante aerosol
mideros adecuados.
• Pincelado.
Para los elementos en una situación más o menos
4.2.5 Para las eflorescencias
oculta, deberemos utilizar un tratamiento en profun-
La medida básica será el utilizar baldosas no eflo-
didad, mediante:
rescibles lo que probablemente obligará a ensayos de
• Inmersión prolongada
eflorescibilidad previos.
• Doble vacío
• Impregnación a presión en autoclave
4.3 En pavimientos de madera Por último, mantenimiento periódico, con obser-
vación, limpieza y reposición de productos protecto-
4.3.1 Para la erosión res, si cabe.
Seleccionar la dureza de la madera en función de
la abrasión previsible según el uso. Asimismo, aplicar
protecciones superficiales a base de resinas endure- 4.4 En láminas flexibles
cedoras (poliuretano, úrea-formol, etc.). Preferente-
mente, utilizar madera maciza con suficiente espesor 4.4.1 Para la erosión
(> 10 mm) para posibilitar su recuperación por acu- La medida más adecuada será la correcta selec-
chillado. ción del material en función de la abrasión previsible
según su uso, con la posibilidad de combinar distin-
4.3.2 Para las fisuras tos productos en función de las zonas (pasillos).
Asegurar la colocación de la madera en épocas de
humedad media (primavera u otoño) para evitar gran- 4.4.2 Para los desprendimientos
des variaciones dimensionales inmediatas; sobre to- Debemos asegurar:
do, huir de su colocación en verano. Comprobar, asi- En proyecto, continuidad del soporte y diseño de
mismo, que la madera viene suficientemente seca juntas de dilatación. En ejecución, planeidad adecua-
(humedad de equilibrio). da, colocación según recomendaciones del fabrican-
te, tanto del material adherente como de la lámina,
4.3.3 Para los desprendimientos cuidado específico en la ejecución de los bordes y res-
Asegurar la ausencia de humedades defiltración,ca- pecto de juntas de dilatación y constructivas.
caoituto II. Patología e intervención en cerramientos y acaDados

179

5. Desprendimiento y reparación de acabados


por elementos*
Juan Monjo Carrió
Dr. Arquitecto
Catedrático de Construcción E.T.S.A. - U.P.M

ciales aplicadas sobre un cerramiento, a base de ele-


1. Definiciones
mentos de forma y dimensiones definidas, y que tie-
Como en capítulos anteriores, procede definir el nen por objeto dar a dicho cerramiento unas caracte-
ámbito en el que nos vamos a mover para evitar erro- rísticas físico-químicas superficiales determinadas que
res de interpretación. En este sentido cabe indicar los incluyen por lo menos:
tipos de acabados por elementos que vamos a con- - Aspecto formal
siderar en este capítulo, así como definir lo que en- - Textura
tendemos como desprendimiento de los mismos. - Resistencia mecánica superficial (abrasión, pun-
zonamiento y golpe)
1.1 Desprendimiento - Resistencia química superficial
- Posibilidad de mantenimiento
Podemos definir como tal lesión, la separación in- Los elementos componentes llegan, pues, con un
controlada de un material de acabado del soporte so- nivel de acabado' determinado y requieren sólo su
bre el que está aplicado, separación que puede ser sujeción al cerramiento que actúa de soporte por al-
solo incipiente, manifestándose por simples fisuras o gún sistema que asegure su adherencia en función de
abombamiento, o puede ser definitiva, desprendién- las acciones exteriores que va a recibir y del propio
dose el acabado parcial o totalmente hasta dejar des- elemento, además del tratamiento de sus juntas. En
nudo el soporte. No conviene confundirlo con la pér- este sentido hay que considerar:
dida de material superficial de una unidad provocada
normalmente por fenómenos de meteorización y que. - E! sistema de sujeción, que puede ser, bási-
en su caso, debemos considerarlo como erosiones. camente, de dos tipos:
Aquí se trata del desprendimiento de una piel como • Adherencia continua, mediante morteros hi-
capa constructiva identificare físicamente del sopor- dráulicos o pegamentos
te al que estaba adherida. • Cuelgue por puntos, normalmente mediante an-
Esta separación se puede producir por varias cau- clajes metálicos
sas y dependerá del material, del propio acabado y - Las acciones exteriores que van a recibir, que
del sistema de adherencia, lo que nos dará una serie dependen de su situación, exterior o interior., orienta-
de variantes que analizaremos en la tipología. ción, clima etc.. Impacto y rozamientos suaves, en zó-
calos, cambios de temperatura, humedad y radiacio-
nes solares directas en fachadas, etc.
1.2 Acabados por elementos - El mantenimiento posterior, que puede redu-
cirse a la limpieza de mantenimiento, a simples pro-
Entiendo por tales todas aquellas capas superfi-

Ver articulo del autor titulado: El diseño constructivo, un problema


' Este capitulo está córtemelo parcialmente en otras publicaciones •]eométncr>, físico y mecánico en el n." 22 de la revista ESTUDIOS E
del mismo autor INVESTIGACIONES
r
lena 5. Desareno/miento y eparacibn de .¡cacados oor elementos

180

1. Alicatado exterior de gres. 3. Aplacado de paneles sandwich de ci

tecciones superficiales, selladoras, endurecedoras. con respuestas posiblemente distintas ante proble-
coloristas o contra organismos. mas de desprendimiento. Así, cabe mencionar, por lo
Teniendo en cuenta todos esos extremos, pode- menos:
mos distinguir los siguientes tipos de acabados. - Grapas ocultas mediante redondos galvaniza-
a) Alicatados (Fig.1) a base de plaquetas cerámi- dos (cuatro por elemento).
cas o de otro material pétreo, adheridas al soporte - Pletinas ocultas, de acero galvanizado o inoxi-
mediante mortero hidráulico o cementos-cola. Su ad- dable, en similar disposición que los anteriores, pero
herencia debe ser continua y la falta de dicha conti- con mayor entidad.
nuidad puede ser origen, como veremos, de su des- - Pletinas vistas, similares a las anteriores, pero
prendimiento. vistas y, por tanto, sin reducir la sección de la pieza y
Debemos considerar, a los efectos de acciones de fácil reposición.
sobre ellos, dos variantes importantes, interiores y ex- - Perfiles vistos, que sujetan los elementos con
teriores, ya que estos últimos sufren la acción del agua, continuidad por dos de sus lados, de acero o alumi-
de la radiación solar directa y los cambios de tempe- nio.
ratura, que son decisivos en su integridad. Asimismo, - Anclajes perforantes, con un mínimo de dos por
debemos distinguir entre los colocados a hueso y los placa, que exigen la perforación de las piezas y le sue-
que se reciben con junta abierta, por el efecto amor- len dar menor libertad de movimiento.
tiguador de ésta, tanto en filtraciones de agua como El dorso del chapado puede ir trasdosado o no
en la dilatación térmica de los elementos. con mortero (nunca debe ser yeso o escayola en ex-
b) Chapados (Fiq.2), resueltos mediante losas de teriores) en función de su integridad, del sistema cons-
piedra más o menos gruesas que van colgadas del tructivo, del funcionamiento del cerramiento, etc.
soporte, o sujetas al mismo mediante anclajes, nor- c) Aplacados (Fig. 3) por superposición de ele-
malmente metálicos, capaces de soportar el peso in- mentos superficiales o lineales de gran dimensión, so-
dividual de cada elemento sin transmitir esfuerzos gra- lapados entre sí para su estanquidad y sujetos al so-
vitatorios sobre los demás. porte mediante anclajes, bien puntuales localizados
Los anclajes pueden ser de muy diversos tipos, en sus esquinas, muchas veces aprovechando el mis-
según su situación (ocultos o vistos), su integridad, su mo anclaje para piezas yuxtapuestas, en base al so-
material, su efecto soore ei elemento etc.. todos ellos lape de las mismas, bien mediante una estructura au-
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

/Ó7

¡§§§32

A-ESFUERZO 9.-0ILATACION
RASANTE

"BIELA" A COMPRESIÓN "TETÓN" A ROZAMIENTO

4. Farola de jardín suelta. 5. Adherencia con morteros o colas.

xiliar (rastreles) sujeta al cerramiento y las piezas an- de acabado, del material constitutivo de sus elemen-
cladas a estos por puntos o por presión (clips). tos y del sistema de sujeción al soporte, de ahí que
Los desprendimientos, en estos casos, están en para estudiar su tipología lo hagamos según la clasi-
función del sistema de anclaje y de la libertad de mo- ficación vista en el punto anterior. No obstante, antes
vimiento individual de las piezas que, por su tamaño, de entrar en ella, conviene que estudiemos los tipos
sufren variaciones dimensionales relativamente im- de causas generales que pueden provocar la lesión.
portantes, sobre todo en exteriores; de ahí la necesi-
dad de establecer amplios grados de libertad en los
anclajes. 2.1 Según la causa (causas directas)
Los materiales varían, desde la madera en tablo-
Las causas indirectas, como errores de proyecto,
nes y tableros, hasta los materiales plásticos rígidos,
material, ejecución o mantenimiento, dependerán, evi-
pasando por chapas metálicas (las más abundantes)
dentemente, de cada sistema de acabado, por lo que
y de fibrocemento.
no tiene sentido estudiarlas conjuntamente, sino que
d) Elementos sueltos (Fig.4) entendiendo por ta-
quedarán indicadas en cada caso. Por el contrario, sí
les, todos los tipos de piezas auxiliares sobre para-
podemos hablar de causas directas comunes. Estas
mentos, de tipo decorativo o funcional como farolas,
dependerán, en cualquier caso, del sistema de suje-
carteles, canalones, etc, sujetos al cerramiento me-
diante anclajes puntuales o por adherencia continua ción, por lo que podremos analizarlas según los si-
y, como tales, susceptibles de desprenderse de éste. guientes tipos.
Dicho desprendimiento dependerá de los propios an-
clajes y, según el tamaño y material del elemento en 2.1.1 Acabados adheridos con morteros o colas
cuestión, de su variación dimensional por cambios tér- (Fig. 5)
micos. Comoquiera que la unión entre acabado y sopor-
te es teóricamente continua por intermedio de un pro-
ducto adherente al que podemos denominar interfa-
2. Tipología
s e , nos aparecen dos juntas superficiales; entre el
Como se ha ido viendo, los diferentes tipos de des- soporte y la interfase y entre ésta y el elemento del
prendimientos dependerán del sistema constructivo acabado Como consecuencia, la pérdida de adhe-
Tema 5. Desprendimiento y reparación de acabados por elementos

182

a ) SOPORTE SECO h ) SOPORTE SUCIO c) RUGOSIDAD ESCASA E N DORSO


DE PLAQUETA CERÁMICA

6. Falta de adherencia por error de ejecución.

rencia se puede producir en tres puntos; las dos jun- puede llegar a ser superior a la resistencia al esfuer-
tas superficiales y la propia Interfase. zo cortante de las penetraciones, rompiéndolas y fa-
En las dos juntas superficiales el desprendimien- cilitando su desprendimiento, o a la que presente el
to se producirá al romperse el sistema de adherencia, rozamiento entre materiales. En algunos casos pue-
que puede ser mecánica o química. La primera, más de darse el hecho de que dichas penetraciones re-
corriente en nuestros sistemas constructivos, se ba- sistan y ceda, sin embargo, la integridad de la propia
sa en la interpenetración de ambos elementos a tra- inferíase, pero no es lo corriente, a no ser que se tra-
vés de la junta, gracias a su rugosidad (la de uno de te de juntas con adherencia química muy bien cons-
ellos, el rígido) que produce una trabazón en base a tituida. Aún así, no es normal.
los tetones que se forman y que impiden su separa- Estos esfuerzos rasantes pueden tener diversos
ción, tanto en la dirección perpendicular a la ¡unta, co- orígenes que se pueden resumir en:
mo en la de la propia junta ya que dichos tetones ac- - Dilataciones y contracciones térmicas del aca-
túan como bielas a compresión. Para que se produzca bado.
el desprendimiento necesitamos, pues, romper estas - Movimientos elásticos del soporte.
penetraciones, bien por tracción, bien por esfuerzo
cortante. Por el contrario, la adherencia química se B) Dilatación de elementos infiltrados
basa en la unión intermolecular entre los dos produc- En el caso de las dos juntas superficiales con ad-
tos yuxtapuestos y es poco común en construcción, herencia mecánica, resulta un microespacio interme-
excepto para algunas pinturas y algunos productos a dio que es susceptible de alojar algún elemento ca-
base de resinas. Su pérdida requerirá, bien fallos en paz de dilatar, como es el agua al congelarse o diversas
su ejecución, bien la intromisión de algún otro ele- sales al cristalizar. En el primer caso, la dilatación sue-
mento que reaccione químicamente y sea capaz de le ser de un 9% y en los segundos puede alcanzar
destruir esa unión molecular. Por último, la pérdida de hasta el 35%. Dicha dilatación produce un empuje
adherencia en la propia interfase supone una pérdida perpendicular al plano de la junta que es capaz de su-
de integridad de la misma. Según todo esto, el des- perar la capacidad de adherencia de las penetracio-
prendimiento en esas juntas superficiales podrá ser nes mecánicas, bien por rozamiento, bien por resis-
por varias causas. tencia a tracción de las mismas, provocando el
desprendimiento.
A) Esfuerzo rasante En los casos de adherencia química, pueden apa-
Supone el empuje, en la dirección de la unión y recer también microespacios, huecos que facilitarían
sentidos contrarios, de los dos elementos compo- el alojamiento y la dilatación de esos elementos, ca-
nentes de una junta superficial, e implica el intento de paz ae superar su resistencia mecánica y de provo-
desplazamiento de los mismos en dichos sentidos, car el desprendimiento.
con la consiguiente pérdida de integridad de la unión.
En nuestro caso, la fuerza rasante suele afectar a las C) Falta de adherencia, propiamente dicha (Fig.6)
dos juntas superficiales, sobre todo cuando éstas se Cuando la ejecución es incorrecta, se provoca,
basan en la adherencia mecánica. Asi. dicha fuerza bien la falta de integridad de la propia interfase, bien
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

183

4
« 5 - 1
o) b) c)

7. Acabados anclados por puntos.

a) VARIACIONES DIMENSIONALES t>) HELADA c ) MOVMOírOS DE SOPORTE d) FALLO DE ADHERENCIA

(AGUA (AGUA
FILTRAOA) FILTRADA)

É
n

L
90
•'.O
8. Desprendimiento de alicatados.

la falta de penetraciones o de la unión molecular. tarse la unión molecular continua, al actuar de barre-
Cualquiera de ellas tiene como consecuencia el des- ra la suciedad y el polvo.
prendimiento, veamos los casos más comunes: c) Por último, la falta de rugosidad suficiente anu-
a) En el uso de morteros hidráulicos, cuando el la la existencia de las penetraciones necesarias (en
soporte no está convenientemente húmedo, al aplicar número y en tamaño) como para contrarrestar los es-
el mortero de agarre se produce una succión del agua fuerzos mencionados.
del mortero por parte del soporte, produciendo una
disminución de la relación agua, cemento en aquel, 2.1.2 Acabados colgados o anclados por puntos
que impide su correcto fraguado en la zona de con- o líneas (Fig. 7)
tacto. Ello hace que no se creen las penetraciones ne- En estos casos, la unión entre acabado y soporte
cesarias para la adherencia mecánica y, por tanto, que está basada en los puntos de anclaje y, por tanto, el
no exista ésta. fallo que provoca el desprendimiento puede encon-
b) Por otra parte, sí la superficie del soporte no trarse también en tres puntos (la unión del elemento
está lo suficientemente limpia de polvo o grasa, re- al anclaje, el propio anclaje y la unión del anclaje al
sulta difícil la materialización de la junta adherente, soporte) además de en el propio elemento unitario de
tanto mecánica como química. La primera, ya que la acabado.
grasa dificulta tanto el fraguado correcto (materias or- a) El primer caso suele ser por perforación del ele-
gánicas) como la penetración en las rugosidades, que mento de acabado o su rotura por punzonamiento, y
acaban rellenas. Asimismo, la existencia de polvo di- su fallo se suele provocar en el propio elemento, al
ficulta ambas cosas y favorece la absorción de agua romperse por superar la capacidad a esfuerzo cor-
y, por tanto, la disminución de la relación agua/ce- tante en la perforación.
mento necesaria para el correcto fraguado. La adhe- b) El segundo, falla, bien por corrosión del ele-
rencia química también se ve entorpecida al dificul- mento metálico que lo sustenta, bien por superarse
Tema 5. Desprendimiento y reparación de acabados por elementos

también su capacidad mecánica a esfuerzo cortante


o de tracción.
c) El tercero puede fallar por arrancamiento cuan-
do la unión no es suficientemente profunda o el ma-
terial de unión (mortero hidráulico o producto quími-
co) no está correctamente aplicado.
d) En el cuarto la debilidad del propio elemento
(la placa de piedra) debida a su poca sección o a la
existencia de pelos de cantera, facilita su rotura y des-
prendimiento.
Las acciones mecánicas que provocan los es-
fuerzos cortantes o de tracción pueden ser diversas,
aunque normalmente pueden resumirse, igual que en
los adheridos con morteros, en:
- Dilataciones y contracciones higrotérmicas del
acabado.
- Movimientos elásticos del soporte.

2.2 Según el sistema

De acuerdo con los tipos de acabados descritos,


debemos distinguir entre:

2.2.1 Alicatados (Fig. 8)


Es, quizás, uno de los acabados con desprendi-
mientos más llamativos, sobre todo en fachadas de
climas continentales. Podemos distinguir varias cau-
sas, aunque normalmente actúan combinadas simul-
tánea o sucesivamente.
a) Por variaciones dimensionales, por cambios
de temperatura, en paredes exteriores. Cuando se ha
colocado con junta a hueso, la dilatación individual de
cada elemento se acumula al ir empujándose unas a
otras hasta que el esfuerzo resultante provoca un le-
vantamiento que produce el desprendimiento entre
plaqueta y mortero por esfuerzo cortante. Es corrien-
ió. Desprendimiento de alicatado entre plaqueta
te en bordes verticales y horizontales al constituir los
y mortero.
extremos de la línea de empujes.
b) Por helada del agua localizada en la junta su-
perficial exterior, entre plaqueta y mortero (más débil presión que facilitan el que el agua infiltrada desde el
que la interior entre mortero y soporte por menos ru- exterior se localice en la junta superficial entre pla-
gosidad de la misma y, por tanto, menor adherencia queta y mortero. Dichas cámaras ayudan también a
mecánica). Este agua puede llegar, bien por filtración que el vapor de agua interior se concentre y conden-
desde el exterior, a través de las juntas, bien desde el se en las mismas.
interior por condensación intersticial del vapor de agua c) Por movimientos del soporte, normalmente
procedente de los espacios habitados en su camino elásticos, por efecto de la estructura directa (pilares y
hacia zonas de menor presión. La filtración es más fá- frentes de forjado) o indirecta (pandeo de cerramien-
cil en los alicatados con junta a hueso, al desapare- tos) aunque también pueden ser debidos a variacio-
cer rápidamente la lechada situada en las mismas, y nes dimensionales por causas térmicas, sobre todo
resulta ayudada por la discontinuidad del mortero de cuando hay discontinuidad del soporte. En cualquier
agarre, cuando éste se localiza en el centro de las pla- caso, estos movimientos introducen un esfuerzo ra-
quetas como una pellada más o menos circular, ya sante que actúa rompiendo la adherencia mecánica
que se forman una especie de cámaras de descom- de la junta entre plaqueta y mortero (la más débil) si
capitulo II Patología e intervención en cerramientos y acabados

11. Discontinuidad en el mortero de agarre. 12. Desprendimiento general de chapado de piedra.

13. Desprendimiento por dilatación.

13'. Desprendimiento por rotura por comprensión. 14. Corrosión de ganchitos recibidos con escayola.

no produce una fisura en el propio acabado, cuando Esta última, facilita la penetración de agua y su hela-
su adherencia es suficientemente fuerte (Fig. 9). da según vimos en b) (Fig. 11).
d) Fallo de la adherencia, que puede producirse
por dos razones básicas: 2.2.2 Chapados de piedra (Fig. 12)
d.1) Por error de ejecución, ya mencionado (falta La rotura de los anclajes que provoca el despren-
de humectación del soporte o falta de limpieza del dimiento se puede producir por varias causas:
mismo). a) Variaciones dimensionales que al igual que
d.2) Por falta de rugosidad suficiente en e! soporte en el caso de alicatados, suele ser acumulativa si es-
o en la plaqueta. La primera, comente en muros de tán colocadas las piezas a hueso, provocando la ro-
hormigón según el encofrado utilizado, provoca ia ro- tura, bien de los anclajes de las piezas de los bordes,
tura de la junta entre soporte y mortero. La segunda, por esfuerzo cortante, bien de los intermedios, por
la provoca entre mortero y plaqueta (Fig. 10). tracción, al levantarse las piezas por empuje entre sí,
d.3) Por falta de continuidad del mortero en todo o por arrancamiento del soporte, o por rotura de la
el dorso de la plaqueta o entre el dorso y las juntas. pieza en su enganche (menor número de casos). Según
Tema .í Desprendimiento y reparación de acaoados por eiementos

d o s o n d é b i l e s o i n c a p a c e s d e s o p o r t a r el p e s o p r o -
p i o d e l a s p i e z a s o s u d i l a t a c i ó n , l o q u e h a c e q u e la

Ff-—f f u e r z a s e a c u m u l e y l l e g u e a s u p e r a r la c a p a c i d a d m e -
c á n i c a d e l o s m i s m o s . ( F i g . 13 y 13'). El s e g u n d o s e
p r o d u c e c u a n d o existe a l g u n a filtración d e a g u a , d e s -
d e el e x t e r i o r p o r las j u n t a s , o d e l i n t e r i o r ( p e t o s d e t e -
rrazas) o, i n c l u s o , p o r c o n d e n s a c i o n e s intersticiales.
L a a p a r i c i ó n d e a g u a s e v e a y u d a d a p o r al p r e s e n c i a
d e t r a s d o s a d o s parciales d eescayola, m u y higroscó-
pica, a veces, incluso, recibiendo las grapas, hecho
d e m a s i a d o f r e c u e n t e t o d a v í a . ( F i g . 14)
c) Falta de anclajes. Aunque n o es m u y c o -
rriente, h a y o c a s i o n e s e n q u e el c h a p a d o d e p i e d r a
15. Desprendimiento por movimiento de voladizo de marquesina. s e r e c i b e (o i n t e n t a recibir) p o r m e d i o d e a d h e r e n c i a
continua c o n mortero. Suele ser en casos d e cha-
p a d o s d e p o c a altura. N o o b s t a n t e , si las p i e z a s s o n
g r a n d e s , c o n p o c a r u g o s i d a d e n el d o r s o y a d e m á s
se p u e d e n producir filtraciones d e a g u a c o n poste-
rior helada o p o s i b l e s m o v i m i e n t o s d e s o p o r t e , el
desprendimiento resulta prácticamente asegurado.
d) Movimientos de soporte q u e a l i g u a l q u e e n
alicatados, pueden ser elásticos (directos o indirec-
tos) o térmicos, p r o d u c i e n d o u n esfuerzo rasante q u e
p u e d e p r o v o c a r la r o t u r a d e a n c l a j e s o la a p e r t u r a d e
las u n i o n e s entre piezas (Fig. 15).
A d e m á s d e la r o t u r a d e a n c l a j e s , p u e d e p r o v o c a r -
s e el d e s p r e n d i m i e n t o p o r f a l t a d e i n t e g r i d a d d e la p r o -
pia pieza c u a n d o ésta es d e m a s i a d o débil (espesor d e
2 c m s . o i n f e r i o r ) o c u a n d o v i e n e c o n pelos d e cante-
16. Desprendimiento por golpe.
ra e n c a s o d e p i e d r a s s e d i m e n t a r i a s o , p o r ú l t i m o , c u a n -
d o está situada en zonas bajas (accesibles) c o n p o s i -
bles g o l p e s y n o s e p r e v é s u t r a s d o s a d o (Fig. 16).

2.2.3 Aplacados
Al estar el s i s t e m a d e c u e l g u e b a s a d o e n p u n t o s
de anclaje, l o s posibles desprendimientos vendrán
t a m b i é n m a r c a d o s , o p o r la r o t u r a d e é s t o s , o p o r la
d e l a s p i e z a s , p o r lo q u e l a s p r i n c i p a l e s c a u s a s a t e -
ner en cuenta s o n :
a) Variaciones dimensionales, que, en este ca-
so, s o n m á s i m p o r t a n t e s q u e e n l o s c h a p a d o s e n lo
que afecta individualmente a cada pieza, dada su
m a y o r l o n g i t u d . P o r o t r a p a r t e , al e s t a r las p i e z a s s o -
lapadas, n o suele haber un empuje directo d e una a
otra, sino q u e se produce a través del propio ancla-
1 7 . Rotura de placas de fibrocernento por dilatación.
j e . T o d o e l l o h a c e q u e e l e f e c t o d e la d i l a t a c i ó n s o -
b r e e s t o s s e a m a y o r y p o r t a n t o la d i l a t a c i ó n s e a c a u -
e l t i p o d e p i e d r a , la d i l a t a c i ó n p o r h u m e c t a c i ó n t i e n - sa fundamental d e esta lesión. N o obstante, hay que
de a n o recuperarse, a u m e n t a n d o las piedras s u t a - t e n e r e n c u e n t a q u e el e s f u e r z o s o b r e l o s p u n t o s d e
m a ñ o c o n el t i e m p o , s e g ú n el f e n ó m e n o c o n o c i d o c o - a n c l a j e p u e d e p r o v o c a r , b i e n la r o t u r a d e l p r o p i o a n -
m o histéresis (Fig. 13). c l a j e , p o r e s f u e r z o c o r t a n t e , b i e n l a r o t u r a d e la p i e -
b) D e s t r u c c i ó n o fallo d e l o s a n c l a j e s , bien por z a , p o r s u p e r a r la c a p a c i d a d m e c á n i c a d e l a m i s m a

r o t u r a , b i e n p o r c o r r o s i ó n . El p r i m e r c a s o , s e d a c u a n - (Fig. 17).
capitúo II Patología e intervención en cerramientos y acabados

b) D e s t r u c c i ó n o f a l l o d e l o s a n c l a j e s , q u e t a m -
bién s e p r o d u c i r á p o r r o t u r a , p o r c o r r o s i ó n o p o r a r r a n -
camiento. La primera ya ha q u e d a d o c o n t e m p l a d a en
el p á r r a f o a n t e r i o r y s u e l e a f e c t a r , s o b r e t o d o , a l o s d e
b o r d e . L a s e g u n d a e s c o n s e c u e n c i a d e la f a l t a d e p r o -
tección del anclaje o, en g e n e r a l , d e las filtraciones d e
agua q u e , e n e s t e c a s o , s e s u e l e n p r o v o c a r p o r su i n -
c o r r e c t a c o l o c a c i ó n , b i e n p o r q u e n o s e r e a l i c e el s o -
lape a d e c u a d o e n t r e l a s p i e z a s , b i e n p o r q u e el m i s -
mo anclaje no disponga de los elementos de
estanquidad necesarios. L a tercera, p o r último, se d e -
be al error e n s u c o l o c a c i ó n , b i e n p o r n o l l e g a r a la h o -
ja r e s i s t e n t e d e l c e r r a m i e n t o , b i e n p o r f a l l a r el m o r t e -
ro d e a d h e r e n c i a ( F i g . 1 8 ) .

2.2.4 Elementos sueltos


D e b e m o s distinguir varios c a s o s a los e f e c t o s d e
su d e s p r e n d i m i e n t o :
a) Elementos de gran tamaño (carteles, b a r a n -
dillas, e t c . ) a n c l a d o s e n v a r i o s p u n t o s . E n t o n c e s l a s 18. Fallo de anclajes.
causas, similares a las i n d i c a d a s e n a p l a c a d o s , s e r á n ,
bien el e s f u e r z o c o r t a n t e p o r d i l a t a c i ó n - c o n t r a c c i ó n ,
bien la c o r r o s i ó n d e l o s a n c l a j e s p o r f a l t a d e p r o t e c -
ción a d e c u a d a y filtración d e a g u a . P o d e m o s c o n s i -
derar, a d e m á s , e l e r r o r d e f i j a c i ó n , c u a n d o el a n c l a j e
n o s e h a r e a l i z a d o a la h o j a s ó l i d a d e l c e r r a m i e n t o o
falla el m o r t e r o d e a d h e r e n c i a o s u e j e c u c i ó n .
b) Elementos de p e q u e ñ o tamaño (farolas, etc.)
a n c l a d o s e n u n s o l o p u n t o . E n e s t o s c a s o s , la d i l a -
tación del e l e m e n t o n o t i e n e i m p o r t a n c i a y las c a u -
sas s e r e d u c e n al f a l l o d e l a n c l a j e , b i e n p o r e s f u e r -
zo c o r t a n t e , c u a n d o e s d e m a s i a d o d é b i l , b i e n p o r
19. Sujeción pobre.
c o r r o s i ó n si le f a l t a la p r o t e c c i ó n o e s t a n q u i d a d a d e -
c u a d a s , b i e n p o r a r r a n c a m i e n t o si la e j e c u c i ó n e s i n -
correcta (Fig. 19).
c) Elementos de fábrica (barandillas, cornisas,
etc.). L a c a u s a p r i n c i p a l s u e l e s e r la e r o s i ó n f í s i c a p o r
humectación y helada del mortero d e agarre, ade-
mas de una sujeción p o b r e , e s decir, p o c o solape o
e n c a s t r a m i e n t o d e l e l e m e n t o c o n r e s p e c t o al s o p o r -
t e al q u e e s t á a n c l a d o . T a m b i é n p u e d e n i n c i d i r o t r a s
causas inherentes al p r o p i o e l e m e n t o , tales c o m o las
variaciones d i m e n s i o n a l e s p o r c a m b i o s d e t e m p e -
r a t u r a c u a n d o t i e n e m u c h a l o n g i t u d , o la e r o s i ó n d e l
20. Desprendimiento de elementos sueltos de mor-
elemento c u a n d o es heladizo (Fig. 20). tero.

3. Diagnosis
En n u e s t r o c a s o , a d e m á s d e d e t e r m i n a r la, ó las.
C o m o e n t o d o p r o c e s o p a t o l ó g i c o , el e s t u d i o d e c a u s a s s e g ú n la t i p o l o g í a m e n c i o n a d a e n el p u n t o a n -
esta lesión n e c e s i t a r á u n análisis d e s u e v o l u c i ó n ( c a u - terior, d e b e m o s c o n o c e r la a m p l i t u d d e la l e s i ó n a f i n
sa, p r o c e s o y s í n t o m a ) p a r a s u c o r r e c t o c o n o c i m i e n - d e c o n c r e t a r el a l c a n c e d e la r e p a r a c i ó n . A s í , c u a n d o
to antes d e p r o c e d e r a t o m a r las m e d i d a s p a r a s u r e - el d e s p r e n d i m i e n t o s e a p u n t u a l y la c a u s a n o s e p u e -
paración. d a c o n s i d e r a r g e n e r a l i z a d a , la a c t u a c i ó n d e r e p a r a -
Terra 5. Desprendimiento y reoaracion, te acabados por elementos

cion se podrá concretar al elemento desprendido y su En este último caso, tenemos varios tipos de so-
entorno inmediato. Por el contrario, cuando se pueda luciones. En primer lugar, para aor/r la junta podemos
prever una generalización de la misma causa a todo optar por:
el paramento donde se ha producido la lesión, nues- a.1) Demolición parcial de líneas de plaquetas y
tra actuación se extenderá también a todo el cerra- su sustitución por otras de menor tamaño.
miento donde preveamos puede aparecer el des- a.2) Apertura de la junta de forma mecánica me-
prendimiento. diante una radial o similar.
En realidad, la mayoría de desprendimientos tie- Una vez hecho esto y para tapar la junta tenemos
nen causas generalizables a la globalidad del cerra- varias soluciones entre las que cabe destacar:
miento afectado. Así, cuando se trata de un defecto - Perfil metálico en U anclado al soporte y prote-
de ejecución, de diseño o de material, lo normal es giendo los bordes de las plaquetas.
que afecte a todo el paño realizado en las mismas con- - Material elastómero, rellenando la junta.
diciones. No obstante, cuando estemos ante una cau- b) Helada del agua en la junta superficial.
sa directa puntual, como puede ser una filtración de Habrá que analizar la procedencia de dicha agua
agua localizada o un esfuerzo mecánico en un punto y establecer las barreras adecuadas.
o elemento constructivo concreto, entonces puede Si es de condensación intersticial, barrera de va-
tratarse de una lesión puntual. por interior, aumento de ventilación o de aislamiento.
Por lo demás, la clasificación tipológica según la Si es una humedad accidental por rotura de tuberías,
causa nos permitirá alcanzar un diagnóstico sufi- reparación. Si filtración por el dorso (petos de terra-
ciente para la correcta reparación del proceso pato- za), barrera impermeable. Sin embargo, si se trata de
lógico siguiendo las pautas reflejadas en el siguien- humedad infiltrada por el propio alicatado desde el
te punto. exterior, no suele haber solución, por lo que tenemos
que ir a la demolición y nueva ejecución con la pre-
vención de junta abierta y mortero de adherencia que
describiremos en el próximo apartado. En cualquier
4. Reparación
caso, en los primeros tipos de humedad, una vez eli-
Como ya se ha mencionado en capítulos previos, pa- minada ésta, reparación parcial de las piezas lesio-
ra una correcta reparación habrá que anular primero la nadas hasta líneas modulares.
causa y solo después proceder a corregir la lesión, dan- c) Movimientos de soporte. Suelen ser elásticos
do de nuevo a la unidad constructiva su funcionalidad. por efecto de la estructura, por lo que habrá que ac-
Por la diversidad de sistemas constructivos, las cau- tuar sobre ésta, lo que a veces implicará demolicio-
sas, sobre todo las indirectas, son inherentes a cada nes parciales del propio alicatado. Una vez eliminada
uno. Por otra parte, la reparación de la lesión suele la causa y comprobado el estado general del alicata-
pasar por la reposición. Por todo ello, para el estudio do, reparación de las zonas afectadas por la lesión
de este apartado seguiremos la clasificación que he- hasta líneas modulares, siguiendo las recomendacio-
mos mencionado para los sistemas. nes de prevención.
d) Error de ejecución, tanto por falta de prepa-
ración del soporte, como por falta de rugosidad del
4.1 Alicatados
mismo o del dorso de la plaqueta, como por falta de
Su desprendimiento suele obedecer a la aparición continuidad del mortero de agarre o de mortero en
simultánea de diversas causas, por lo que nuestra ac- la junta, como por falta de protección de bordes y
tuación debe alcanzar a todas ellas. En cualquier ca- esquinas. En estos casos, el fallo suele ser generali-
so, analicémoslas separadamente. zado, por lo que no queda más solución que la de-
a) Las variaciones dimensionales, que afectan a molición y nueva ejecución según prevención.
los alicatados exteriores pueden resolverse de dos
maneras: 4.2 Chapados de piedra
- Demolición total y nueva ejecución con junta
abierta y las medidas adecuadas, según veremos en Resulta un acabado donde suele ser posible la re-
prevención. paración sin necesidad de demolición, incluso con
- Introducción de juntas de retracción modulares errores de ejecución generalizados. Podemos distin-
según necesidades funcionales y composición formal guir varios casos, según la causa:
del cerramiento, de acuerdo con los cuadros indica- a) Variaciones dimensionales del chapado por
dos en prevención. cambios higrotérmicos cuando se trata de juntas a
capitulo il Patología e intervención en cerramientos y acabados

hueso No queda más remedio que introducir juntas


de retracción a base de demoler una fila de piezas y
reponerla o abrir uniones entre piezas mediante algu-
na herramienta. El sellado de estas juntas también
puede ser de varios tipos:
- Con perfil metálico en forma de U anclado al so-
porte, según indica la figura.
- Con elastómero uniendo los labios de la junta,
teniendo en cuenta que en éste caso las piezas van
ancladas de forma independiente. No obstante, el se-
llante debe suponer una estanquidad total. 21. Reanclaje de chapado de piedra.
b) Destrucción o falta de anclajes. Si la des-
trucción se debe a filtración o condensación de agua,
primero, interrumpir ésta del modo como se ha indi-
cado en los alicatados. A continuación y en cualquier
caso, comprobar el estado del resto de los anclajes,
si es posible. En caso contrario y ante la duda, anclar
las piezas desde el exterior por alguno de estos sis-
temas.
b.1) Anclajes puntuales, mediante pernos metáli-
cos (dos por pieza) con sistema de anclaje mecánico
o químico, asegurando su agarre a la parte sólida del
soporte. Dichos anclajes se suelen profundizar en la
propia pieza y taparlos exteriormente con masilla de
marmolista (Fig. 21 y 22).
b.2) Anclajes lineales, a base de perfiles metálicos
colocados por el exterior y anclados por puntos, dis-
tribuidos de tal modo que todas las piezas resulten
sujetas por dos laterales opuestos (Fig. 23).
Sí la filtración del agua es por las juntas de cha-
pado desde el exterior, podemos proceder a un sella-
do de las mismas mediante materiales elastoplásticos
adecuados.
Si los anclajes están recibidos con escayola o el
aplacado exterior se ha trasdosado con ese material,
lo recomendable será demoler el acabado y rehacer-
lo, con objeto de evitar la absorción continua de hu-
medad por parte de la escayola, que introducirá un
factor de riesgo permanente.
c) Movimientos del soporte que, al igual que en
los alicatados, suelen ser provocados por movimien-
tos elásticos de la estructura. Por ello, actuaremos del
mismo modo que indicamos allí para, a continuación, 23. Perfiles de anclaje lineal.
comprobar el estado de anclaje de las piezas y. en su
caso, proceder al anclaje puntual o lineal de las mis-
mas.
d) Rotura de la pieza por debilidad o pelos de 4.3 Aplacados
cantera que provoca su desprendimiento. En este ca-
so, lo más recomendable será sustituir dicha pieza y Debido al sistema constructivo y a las dimensio-
anclar la nueva por medio de los anclajes puntuales nes de las piezas, las actuaciones de reparación sue-
indicados más arriba. len ser más puntuales.
Tema 5. Desprendimiento y reparación de acabados por elementos

4.5 Conclusión

Como comentario general cabe indicar que la re-


paración de un acabado pasa por tres etapas bási-
cas:
- Comprobación del estado general del acaba-
do, tanto de las zonas lesionadas como del resto, so-
bre todo de las partes que podríamos llamar sospe-
chosas.
- Demolición parcial o total del acabado y sa-
neado del mismo, lo que incluye, no sólo la parte le-
sionada sino los alrededores y, ante la duda, todo el
paño donde aparece la lesión.
24. Alicatado ejecutado con junta abierta. - Nueva ejecución de la zona saneada.
No obstante, en general, lo más seguro será sus-
tituir todo el acabado, sobre todo cuando éste es de
a) La dilatación excesiva de las piezas nos obli- adherencia continua. Por-lo contrario, en los de ad-
herencia por anclajes puntuales (acabados colgados)
gará a introducir sujeciones variables (bielas, orificios
los sistemas de reparación por anclajes exteriores per-
rasgados, etc.) siempre que la pieza sea recuperable.
miten mantener la mayor parte del acabado sin nece-
De lo contrario, deberemos sustituir todas las que re-
sidad de demolición.
sultan inutilizadas por rotura, tanto por la dificultad de
su sujeción como por la ausencia de solape con las
adyacentes. Asimismo, si dicha dilatación provoca la
rotura o desprendimiento del anclaje, habrá que re- 5. Prevención
ponerlo.
De los tipos de lesiones y causas vistos, asi como
b) La destrucción o fallo de los anclajes nos obli- de las reparaciones apuntadas, vamos a tratar de ob-
ga a una comprobación generalizada de los mismos tener las conclusiones que nos sean válidas como me-
y, en cualquier caso, a la búsqueda del origen de di- didas de prevención en proyecto y ejecución, para evi-
cha destrucción. Si ésta es debida al ataque del agua tar que nos aparezca el desprendimiento en los edificios
y posibles contaminantes contenidos en la misma, ha- de nueva construcción. Para ello, deberemos seguir el
brá que buscar su procedencia. En este caso, ade- mismo criterio empleado hasta aquí de analizar inde-
más de las condensaciones y filtraciones posteriores, pendientemente los distintos sistemas de acabado,
suele ser bastante corriente la filtración frontal por fal- aunque en algunos de ellos las medidas se repitan.
ta de solape suficiente o por falta de estanquidad del
propio anclaje. Una vez resuelto el problema, proce-
5.1 En alicatados
demos como en el caso anterior.
a) En proyecto
4.4 Elementos sueltos - Juntas de dilatación modulares, según cálculo
y uniones abiertas entre piezas (Fig.24). Para las jun-
En general, el problema se centra en los anclajes, tas de dilatación, se pueden seguir los criterios de dis-
por lo que la actuación será forzosamente puntual, re- tancias indicados en el cuadro C.1, resultado de los
poniendo los anclajes destruidos o arrancados, o me-
jorando su protección y estanquidad. Además, en los Tipo de mortero Tipo de clima
casos de elementos de gran dimensión, podrá ser ne- ' .: -.. ¡Sticai)
Suave (¿1= 40»C) Extremo (4t-* 6 0 ° C )
cesario incluir la posibilidad de la variación dimensio- (1/6) E - 200.000 kp/cnr .
r = 4.0(10 kp e = i cm 7,50 5,00
nal del mismo, tal como ha quedado indicado en los n = 3x10* m / m ° C
aplacados. (1/1) E = 2W.UO0 Iep/cm2
r - 10.S00 kp e » 3 qm 6,00 4,00
En los casos de elementos de fábrica, el des- o • 7 x \V Mm" C
prendimiento de una parte suele ser indicativo de la (C) E = 350.000 kp/cm'
r - 17.000 kp e = 2 cm 3,50 3.00
mala situación del conjunto, por lo que habrá que de- * = 10x10* m / m " C
moler el resto y rehacer el elemento tomando las pre-
CUADRO I. Distancias en metros, recomendables entre juntas
cauciones según prevención.
de dilatación de alicatados de fachada con junta abierta.
capituio !l Patología e intervención en cerramientos y acabados

trabajos de investigación dirigidos por el autor en el ALICATADO "A HUESO" (INCORRECTO) 191

ñ
DCTAen 1993/94'.
- Continuidad del soporte.
- Rigidez del soporte (ausencia de movimientos
elásticos).
- Uso de piezas especiales para bordes y cam-
bios de plano. ¿t t,- •-

b) En ejecución (Fig. 25)


- Preparación adecuada del soporte en rugosidad
y humedad.
AUCATAOO "CON JUNTA ABIERTA" (CORRECTO)
- Ejecución con junta abierta y aplicación del mor-
tero de agarre sobre el soporte con objeto de conseguir:
• Continuidad del sistema de adherencia.
• Mayor sujeción de cada pieza individual al es-
tar sujeta, no sólo por la adherencia mecánica en el
dorso sino también por rozamiento en los bordes (efec-
C l L A t í C I O N COM^ESSAW
to garra).
• Dilatación individual de cada plaqueta, anulán-
dose la adición de dilataciones. El mortero de la jun-
MORTERO
ta, más comprensible, absorbe parte de la dilatación DE AGWWE CONTINUO

de la pieza. 25. Ejecución correcta de alicatados.


• Menor posibilidad de filtración de agua des-
de el exterior al resultar más obstruida la junta en-
tre plaquetas y no producirse el efecto de cámara 5.2 Chapado de piedra
de descompresión con resultado de facilitar la en-
a) En proyecto
trada de agua, que resulta en la colocación a hue-
- Juntas de retracción, según cálculo, incluso en
so y con pellada de mortero para agarre individual
cada pieza de acuerdo con el cuadro C.2'. Cuando el
de las plaquetas. (Comprendo que esta recomen-
chapado es trasventilado se recomienda una separa-
dación en la ejecución de los alicatados supone una
ción de 6 mm entre piezas.
innovación importante en el método tradicional de
- Sistema de anclaje suficiente e individual, colo-
colocación de los mismos por medio de pelladas de
cado previamente a las placas para que estén firmes
mortero aplicadas en el dorso de la pieza, que pos-
cuando se sujeten éstas, lo que elimina los anclajes
teriormente es apretada contra el soporte, con la
con ganchos de acero colocados a la vez.
evidente discontinuidad del mortero de agarre. Sin
embargo, considero fundamental este cambio para - Soluciones de esquinas correctas o con piezas
los alicatados exteriores como única medida eficaz especiales.
para combatir los frecuentes desprendimientos de
Coef. Dilatación en m m / m ° C Cuma suave | Clima extremo
este acabado en climas continentales, razón por la (5¡» ce piedra. l(A<~Wi (Al-W)
cual está dejando de utilizarse como solución ar- C = 0.0054
Juna cada 15 m Junta cada 10 m
quitectónica).
Calizas v niarmoies
En definitiva, esta solución en la colocación del ali- C - 0.0162
Juna cada 6 m Junta cada 4 m
catado supone una medida que anula varias de las Granitos y piranas
causas comentadas en el capítulo correspondiente:
C = 0.022
- Variaciones dimensionales por cambio de tem- J'.irtü cada 4 m Junta cada 3 m
Ar=rjsci>
peratura
- Filtración de agua y consiguiente helada CUADRO II. Distancias entre iuntas de dilatación en chapado
- Fallo de adherencia de piedra monolíticos (en horizontal y en vertical).

Los Cuadros I y II forman parte de una Ficha ASEMAS elaborada por el autor.
Tema 5. Desprendimiento / reparación de acabados por elementos

- Soporte rígido. - Diseño para la protección y evacuación del agua


- Ausencia de humedades de filtración, conden- de lluvia.
sación, accidentales, etc.
- Material adecuado en: b) En ejecución
• Espesor (> 2 mm., aumentando según el tama- - Correcta ejecución del anclaje.
ño de la placa). - Protección contra la corrosión y estanquidad.
• Características fisicoquímicas según la clima- - Encastre suficiente del soporte.
tología de la zona y su contaminación ambiental (es-
tudios petrofísicos y petroquímicos previos, si es ne-
2
cesario) .
Estas recomendaciones se refieren a chapados Bibliografía
monolíticos con mortero y sólidamente unidos al so-
JOHN TRILÍ Y JACK T. BOWYER, "El caso de la esquina rota y Otros
porte. En casos de los llamados chapados trasventi-
problemas Constructivos". Ed. G. G., 1981.
lados, las juntas entre placas deben ser abiertas o, en
Curso de mecánica y Tecnología en los edificios antiguos, C.O.A.M.
todo caso, selladas con elastómeros, siempre que la 1987.
ventilación se realice por otro lado.
Curso de rehabilitación (10 tomos), C.O.A.M., 1987.
H.J. ELDRIGE, "Defectos comunes", Ed. G.G., 1982.
b) En ejecución: T. STAMBOLOV Y J . R. J. VAN ASPEREN DE BOER, "El deterioro y
- Correcta unión de anclajes al soporte. la conservación de materiales porosos de construcción en monu-
- Correcta protección de anclajes. mentos", U.N.A.M., 1984.
- Ausencia absoluta de mortero de escayola pa- SEHILD, OSWALD, ROGIER, SCHWEIKERT, "Estanquidad e imper-
ra trasdosar chapados exteriores o en locales húme- meabilización en la edificación" (5 tomos),
dos (baños, cocinas, etc.). E.T.A., 1978.
- Rechazo de piezas con pelos de cantera. LYALI ADDLESON, "Fallos en los edificios", Consejo General de
Aparejadores y Arquitectos Técnicos,
1982.
5.3 Aplacados
FEDERICO ULSAMER, "Las humedades en la Construcción", CEAC,
1979.
a) En proyecto
R, T. GRATWICK, "Las humedades en la construcción". Sus causas
- Diseño adecuado de los anclajes, con dilatación
y remedios, E.T.A., 1976.
suficiente. (Cálculo de la dilatación absoluta de cada
Lesiones en los edificios: Síntomas, causas, reparación (2 tomos) CE-
pieza según el clima y la orientación).
AC, 1981.
- Solape adecuado de las piezas.
HANS PROPSTER, "Lesiones de solados y alicatados" (2 tomos), CE-
AO, 1980.
b) En ejecución
FRIEDRICH EICHLER, Patología de la Construcción, Ed. Blume, 1977.
- Unión correcta de anclajes al soporte.
ETSA Valladolid, Dep. de Construcción, Patología de fachadas urba-
- Estanquidad adecuada de anclajes y protección nas, Universidad de Valladolid. 1987.
a la corrosión. A. BAGTIONI Y G. GUARNEIRO. "La rehabilitación de edificios urba-
nos", Ed. G. G„ 1988.

5.4 Elementos sueltos JUAN MONJO CARRIÓ. "Curso de Patología, Conservación y


Restauración de edificios. Tomo 3.° COAM.
a) En proyecto JUAN MONJO CARRIÓ. "Patología de cerramientos y acabados ar-
- Correcto diseño y selección de anclajes. quitectónicos". Ed. Munilla-Lería.

a ia agrura de los vientos, y a las repentinas aladas de piedra rezien


' Vitrubío, en su libro n." 2, establecía que para el uso de una piedra preñada con el natural humor y xugo henderse ha. y abrirase. ai des-
había que asegurar su buen comportamiento en ¡a atmósfera de la cubierto para que se pruebe qualquiera piedra quan fuerte sea, y cons-
zona, teniéndola a la intemperie un mínimo de dos años. Sólo las que tante contra las cosas adversas, y que la provocan con este primer
superaban esa prueba eran seleccionadas. Esta norma era práctica juego para la eternidad de la contienda de el tiempo, y no antes de
corriente para los antiguos. Así, también León Batista Alberto reco- dos años que conozcas las Hagas de natura, y las que habían de ha-
ge en su libro 2 las recomendaciones de Catón al respecto: Catón di- zer vicio en la obra se aparten de los más firmes. En la actualidad po-
¿e: La piedra sácala en el estío y tenia en descubierto, y ante de dos demos reducir este tiempo a semanas, basándonos en los ensayos
años no la pongas en la obra: y en el estío para que las piedras que físico-químicos de las piedras. No obstante, el utilizar materiales con
a los vientos, yelos, y lluvias, y a las demás injurias del tiempo no es- experiencia en la zona, es siempre un seguro
tán acostumbradas se acostumbren poco a poco, porque si pusieres
capáufo il Patología e intervención en cerramientos y acabados

193

6. Patología de fachadas prefabricadas de hormigón

Alfonso del Aguila García


Dr. Arquitecto
Catedrático E.T.S.A. - U.P.M

t ó n i c o s d e los edificios g ó t i c o s , r e n a c e n t i s t a s y n e o -
1. Introducción
c l á s i c o s a u m e n t a b a n s u c o n t r a s t e c o n la i n c o r p o r a -
Q u i z á s e a el a s p e c t o e x t e r i o r d e l o s p a n e l e s d e f a - ción de sombras permanentes q u e destacaban con
chada p r e f a b r i c a d o s d e h o r m i g ó n la c u e s t i ó n m á s i m - l o s p a r a m e n t o s c l a r o s l i m p i a d o s p o r la l l u v i a , c o m -
portante dentro del estudio d e su patología. p l e m e n t a n d o la m e n o r p r e s e n c i a d e u n a i m p o r t a n t e
E s t o s e l e m e n t o s s e e m p e z a r o n a utilizar e n l o s a ñ o s i l u m i n a c i ó n solar.
c i n c u e n t a y y a e n la d é c a d a d e l o s s e s e n t a s e c o m e n z ó E n la a r q u i t e c t u r a m o d e r n a s e h a t e n d i d o a f a -
a advertir l o s p r i m e r o s s í n t o m a s p a t o l ó g i c o s e n s u a p a - c h a d a s planas c o n relieves m u y limitados, f u n d a -
riencia s u p e r f i c i a l , a u n q u e m u c h o s e d i f i c i o s , e n q u e s e mentalmente por:
t u v o en c u e n t a la a c c i ó n c l i m a t o l ó g i c a , h a n l l e g a d o a a) El e n o r m e c o s t e y la d i f i c u l t a d d e e j e c u c i ó n d e
nuestros días p r e s e n t a n d o un b u e n a s p e c t o . los t r a t a m i e n t o s superficiales d e f a c h a d a . Así, el u s o
En la a c t u a l i d a d , e s t e b u e n a s p e c t o s u p e r f i c i a l h a d e la p i e d r a n a t u r a l s e h a r e s t r i n g i d o s e g ú n l o s m é t o -
llegado a ser u n a c u e s t i ó n f u n d a m e n t a l . dos tradicionales, t e n d i e n d o a un e m p l e o en f o r m a d e
En a l g u n o s s e c t o r e s s e a d j u d i c a a l o s c e m e n t e r o s p l a c a s d e l g a d a s en superficies p l a n a s s o b r e las c u a -
cierta c u l p a d e los f r a c a s o s h a b i d o s , bien p o r n o ha- les t a m b i é n a p a r e c e n l o s e f e c t o s n e g a t i v o s d e la a c -
b e r o b t e n i d o la i n f o r m a c i ó n a d e c u a d a o , h a b i é n d o l a c i ó n d e la i n t e m p e r i e p r e c i s a n d o d e u n a l a b o r d e l i m -
poseido, no haberla difundido convenientemente. pieza periódica.
S e h u b i e r a n o m i t i d o m u c h o s f r a c a s o s si n o s e h u - b) L a h u i d a d e t o d o d e t a l l e d e c o r a t i v o s u p e r f l u o .
b i e s e e x t e n d i d o el m i t o d e q u e l a s s u p e r f i c i e s d e á r i - L a a c c i ó n d e la i n t e m p e r i e s o b r e l a s f a c h a d a s v a -
d o s vistos tenían la p r o p i e d a d d e un a u t o l i m p i a d o per- ría e n r e l a c i ó n , f u n d a m e n t a l m e n t e , a t r e s f a c t o r e s :
m a n e n t e , a s í c o m o s i s e h u b i e r a l i m i t a d o el u s o d e 1. T e x t u r a s s u p e r f i c i a l e s .
hormigones d e c e m e n t o blanco o d e colores claros. 2. A c a b a d o s superficiales.
Esta previsión h u b i e r a p e r m i t i d o u n a m a y o r a c e p t a - 3. V o l u m e t r í a y d i s e ñ o g e o m é t r i c o d e las f a c h a -
ción y desarrollo d e los paneles d e f a c h a d a prefabri- das.
cados de hormigón. P a r a d e t e r m i n a r la i n t e n s i d a d d e l p r o b l e m a n o r -
T a m b i é n , h a y q u e d e c i r a q u í , q u e el h o r m i g ó n p r e - m a l m e n t e se c o m b i n a m á s d e u n factor.
f a b r i c a d o n o e s el ú n i c o m a t e r i a l q u e p a d e c e n e g a t i - El e n s u c i a m i e n t o p r o g r e s i v o d e los p a n e l e s d e f a -
v a m e n t e la a c c i ó n d e la i n t e m p e r i e . S e p u e d e a f i r m a r c h a d a u b i c a d o s en n u e s t r a s c i u d a d e s se d e b e f u n -
que todos los materiales utilizados en fachadas a c - d a m e n t a l m e n t e a la a c u m u l a c i ó n y d e p o s i t o p o r g r a -
tualmente se ensucian en m a y o r o m e n o r g r a d o , pre- v e d a d e n e l l o s d e l p o l v o s u s p e n d i d o e n la a t m ó s f e r a .
cisando una labor p e r m a n e n t e d e limpieza. Este f e n ó m e n o p r o d u c e en los cerramientos un
Las a r q u i t e c t u r a s a n t e r i o r e s a la m o d e r n a t e n í a n efecto antiestético, d á n d o l e s un aspecto envejecido
e n c u e n t a l a a c c i ó n d e la i n t e m p e r i e , h a c i e n d o q u e y o c u l t a n d o o d i s m i n u y e n d o la g a m a d e a c a b a d o s y
actuase de f o r m a positiva. Asi los detalles arquitec- formas q u e se han pretendido en proyecto.
Tema 5. Patología de fachacas pretaoncadas de hormigón arquitectónico

con los que reducir los efectos más usuales, dismi-


nuyendo asimismo los costes de mantenimiento con
una prevención de las causas de deterioro del hormi-
gón y con la utilización de capas protectoras superfi-
ciales, como barnices, láminas, imprimaciones, etc.
Es decir, hay que tender a un razonable envejeci-
miento de las fachadas realizadas con paneles prefa-
bricados de hormigón, llevando la acción de la in-
temperie a sus límites controlables.

2. Adherencia de polvo

La adherencia de polvo a las superficies de los pa-


neles depende de varias condiciones.
Por un lado, está relacionada íntimamente con la
dureza y el pulimento superficiales, que si son muy
elevados hacen que el polvo sea rechazado por dicha
capa externa y no se adhiera. En cambio, si el aca-
bado superficial es blando éste se deformará bajo el
impacto del polvo, aumentará la zona de contacto y
con ella la adherencia.
Por otro lado, hay que considerar las fuerzas de
adherencia que son proporcionales a la superficie de
contacto partícula-soporte e inversamente propor-
2
cionales a la distancia que los separa .
Por último, la adherencia del polvo aumenta con la
1. En las arquitecturas anteriores a la Moderna se au- acción de la lluvia. El agua con mayor o menor canti-
mentaba el contraste incorporando sombras permanen- dad de polvo penetra en los poros superficiales del
tes que complementaban la menor iluminación solar. panel, saturándolos de tal modo que las lluvias pos-
teriores, aunque sean intensas, no lo pueden extraer.
También se puede depositar en rincones y hendidu-
Es por su importancia por lo que habrá que estu- ras y unirse a las superficies del panel gracias a pe-
diar este problema con detenimiento, para encontrar queñas capas de alquitrán o de otras sustancias que
el diseño que dé con la solución adecuada. se han acumulado en ellas.
En lineas generales, se puede decir que los pro-
blemas que presenta la acción de la intemperie se pue-
den disminuir cumpliendo las siguientes premisas: 3. Acción de la lluvia
- Conseguir texturas gruesas.
La acción de la lluvia sobre las fachadas puede ser
- Ir a colores grises u oscuros.
beneficiosa al actuar como agente limpiador, al sacar
- Obtener superficies muy pulidas.
el polvo depositado en las mismas por el impacto del
- Interrumpir la superficie del panel por estrías ver-
agua, bien por su propio peso o impulsada por el vien-
ticales.
to, y arrastrarlo por la superficie, por lo que si en prin-
Todo ello se verá y ampliará en los apartados co-
cipio es un agente limpiador, posteriormente se con-
rrespondientes.
vierte en ensuciador.
Un aspecto importante a considerar por el arqui-
Una lluvia muy intensa producirá un efecto mayor.
tecto es estudiar previamente, en fase de diseño, las
La lluvia es un agente de gran variabilidad de ac-
condiciones de la zona donde va a ir situado el edifi-
ción, pues se puede manifestar con mayor o menor
cio, realizando un análisis de los existentes, pudien-
do entonces prevenir los efectos predecibles e inde-
seables. ' Asi se suele llamar internacionalmente al hormigón empleado para
La tecnología actual del hormigón arquitectónico' paneles de fachada.
' Cátedra de Construcción III de la ETSAB. Manual de diseño de fa-
permite al arquitecto elegir formas, texturas y detalles chadas en hormigón arquitectónico. Escofet. Barcelona 1980.
capñuto II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

cantidad, con una duración y frecuencia de distintos 195


grados, con diferentes tamaños de gotas, y con un
ángulo de caída variable según la altura considerada.
Por todo ello hará bien el arquitecto en considerar
en proyecto las características pluviométricas del lu-
gar de ubicación del edificio.
Parte de las partículas adheridas a la cara externa
de los paneles se desprenderán por acción de la llu-
via y se verán arrastradas por la misma a lo largo de
la superficie de fachada, pudiendo dar lugar a acu-
mulaciones visibles de suciedad en algunas zonas.
Se producirá un ensuciamiento variable desde la
parte superior a la inferior de la fachada que se de-
nomina en la bibliografía inglesa lavado gradual, que
puede variar desde un lavado total en los paramentos
próximos a cubiertas hasta una gran acumulación de
suciedad en los de planta baja.
El ideal sería que el agua de lluvia que cae sobre
las fachadas de un edificio cumpliera la misión de lim-
pieza, siendo a continuación eliminada al exterior.
Otro aspecto a considerar es el mojado parcial que
aparece al poco de comenzada la lluvia y que sigue
una vez finalizada hasta el momento en que se inicia
el secado. Este mojado parcial produce un mancha-
do temporal que puede ser también poco grato esté-
ticamente, sobre todo porque se manifiesta la sucie-
dad en los Inevitables cuarteados superficiales.
Los cuerpos volados y elementos salientes pueden 2. Ensuciamiento de fachada por acumulación de polvo
distribuir el agua de lluvia saturada de suciedad ca- atmosférico y lavado gradual.
yendo sobre las partes inferiores en forma de gotas
grandes y pesadas. Pueden desprenderse vertical-
mente o, más frecuentemente, inclinadas por el vien-
to, produciéndose numerosos impactos de agua su-
cia en diversas zonas de la fachada.
Este proceso de manchado pasa por diferentes fa-
ses intermedias hasta llegar a un estado permanente,
que determinará su apariencia definitiva.
Dicho problema puede disminuirse adoptando tex-
turas superficiales con relieves importantes y colores
oscuros, que puedan disimular la apariencia sucia.
También hay que considerar el agua de lluvia que
caiga continuamente sobre elementos de distintos me-
tales (bronce, cobre, acero, etc.) y que se deslice so-
bre las zonas de hormigón, lo cual podrá producir a la
larga manchas de mayor o menor importancia.
Cuando la cantidad de agua de lluvia que cae so-
bre una fachada es superior a la que puede absorber
superficialmente se produce un deslizamiento del agua
en forma de escorrentía o cursos de agua, que des-
prende y arrastra gran parte de las partículas de pol-
vo que permanecían adheridas, produciendo depósi-
tos y erosiones, que se ven constantemente
3. Ensuciamiento de fachada por acumula-
incrementadas al incorporarse al flujo del agua mate- ción de polvu atmosférico y lavado gradual.
Tema 6. Patología de faenadas prefabricadas de Hormigón arouitectomco

196

4 a) Deslizamiento de una gota de agua por una aris- 4 b) Deslizamiento de una gota de agua por una aris-
ta convexa. ta cóncava.

5. Ensuciamiento producido en el plano vertical por 6. Ensuciamiento producido por un plano vertical al
efecto de la escorrentía de agua ensuciada por el que vierten las aguas de escorrentia procedentes
polvo. de un plano horizontal. Obsérvese que el man-
chado es mayor debido a que las aguas caen con
menor velocidad y arrastrando suciedad proce-
dente del plano horizontal.

rial procedente de la suciedad arrancada y de la abra- se verá más adelante) la que producirá zonas man-
sión producida en las caras de los paneles. chadas irregulares en las fachadas, lo que constituye
El flujo del agua de escorrentía puede disminuir en la principal patología de estos elementos, que se pre-
el descenso por diversas causas: sentan habitualmente en la forma que Morris deno-
- La cantidad de agua disminuye según se va des- mina de dibujo sismográfico'.
cendiendo en al altura de la fachada. La escorrentía produce el ensuciamiento de fa-
- El fluido descendente se va haciendo cada vez chada cuando su velocidad disminuye o se detiene,
más denso al irse incorporando material desprendi- depositando el polvo contenido en el agua.
do. Veamos idealmente cómo se producirá en distin-
- El deslizamiento superficial del agua puede ser tas posiciones de planos:
disminuido o, incluso, detenido por la absorción de - Plano vertical, el mayor ensuciamiento se pro-
las caras del panel no saturadas. duce en el centro, disminuyendo hacia los extremos,
Aunque el agua discurre por las zonas de máxima por la influencia de la tensión superficial sobre la co-
pendiente, es por las aristas por donde su recorrido rriente de agua (Fig. 5).
se encuentra más afectado, así: - Si se trata del agua que cae directamente sobre
- En las aristas cóncavas, la velocidad disminui- un plano horizontal que, a su vez, la desplaza sobre
rá al ser el rozamiento mayor. (Fíg. 4b) una vertical, el polvo será desplazado hasta este últi-
- En las aristas convexas, la velocidad aumenta- mo plano, produciéndose un ensuciamiento mucho
rá al ser el rozamiento menor. (Fig. 4a)
Es la escorrentía combinada con la orientación del J
A.E.J. Morris. El hormigón premodelado en la arquitectura. Ed. G.
edificio (aquí intervendrá la acción del viento, como GiS 1981.
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

197

- 9. Disposición de petos en cubierta: inclinación de 10. Ensuciamiento tipo sismográfico bajo superficie
la albardilla hacia el interior y altura mínima de 30 achstalada.
cm. para evitar desbordamientos.

mayor que en el caso anterior, al ir el agua más man- mente inferior, que daría un efecto sombra tan usual
chada. (Fig. 6) bajo los elementos vierteaguas.
Si se tienen dos planos formando un ángulo die- Al estar utilizando hormigón, y para evitar una sec-
dro vertical cóncavo, la suciedad crecerá desde los ción debilitada, habrá que prever la situación del vier-
extremos a la arista donde será máxima al ser menor teaguas que no esté demasiado cerca del borde. Si
la velocidad del agua desplazada. (Fig. 7) se quisiera obviar la realización en el propio hormigón,
Si se consideran, por el contrario, dos planos que se pueden emplear vierteaguas de plástico, que aun-
forman un ángulo diedro vertical convexo, la suciedad que garantizan un mejor drenaje, pueden tener un efec-
será menor en la arista, al ser ahí mayor la velocidad to estético dudoso.
del agua. (Fig. 8) La sección mínima de los vierteaguas se estima en
2 2 2
Se consigue un mejor reparto del ensuciamiento yen- 4 cm ó 0,5 cm /m de fachada.
do a superficies curvas verticales, al evitar las aristas. También habrá que ir al diseño adecuado de la sec-
El arquitecto deberá prever el posible curso del ción en relación sobre todo de la inclinación del ele-
agua con una consideración especial a: elementos mento.
vierteaguas, aleros, balaustradas, muros lisos, juntas, Los petos en los bordes de las cubiertas pla-
surcos, etc. nas deben preverse de tal modo que impidan la
En el diseño de la sección del vierteaguas se de- caída del agua por la fachada desde los tejados
be tener en cuenta la inclinación de la superficie dre- planos. Para ello se les debe dar una altura interior
nada y que vayan provistos de vierteaguas que per- no menor de 30 cm, en evitación de que el agua los
mita alejar el agua por evacuación al suelo. Deben desborde, e inclinando hacia adentro la parte supe-
impedir el lavado parcial del paramento inmediata- rior. (Fig. 9)
Tema 6 Patología de tachadas pro fabricadas Je hormigón arquitectónico

198

11. Ejemplo de ensuciamiento tipo sismográfico. 12. Diferencias de ensuciamiento en un panel de superficie cón-
cava:
I. Máximo ensuciamiento
II. Superficie cóncava más o menos regularmente

Cuando se prevea la disposición de gárgolas habrá


4. Acción de la helada
que hacerlas con la prolongación suficiente para que
las aguas expulsadas no discurran por la fachada. El efecto de la acción de la helada en la superficie
La aparición de huecos en el cerramiento incor- de los paneles se favorece por la penetración del agua
poran nuevos problemas al ensuciamiento de las fa- de lluvia en las caras externas, produciéndose nor-
chadas por aguas de escorrentía, que se pueden eli- malmente un descascarillado.
minar por canalones que vayan por detrás de los El modo de disminuir el problema es fabricando
paneles de antepecho que evacúen el agua periódi- hormigones lo más compactos posible, con una
camente mediante gárgolas, o por juntas verticales relación baja de agua-cemento, así como una bue-
ocultas que canalicen el agua hasta llegar al sistema na impermeabilidad y una baja absorción de menos
de drenaje. del 2%.
Siempre habrá que tener en cuenta que el flujo de Si es necesario se pueden emplear aditivos im-
agua de lluvia proveniente de las superficies acrista- permeabilizantes, cuidando que no influyan sobre el
ladas de ventana será normalmente mayor que el pro- color del hormigón.
cedente de superficies de hormigón.(Fig. 10) Se aconseja efectuar ensayos de heladicidad de
El problema de ensuciamiento por aguas de es- los hormigones que formen parte de la cara externa
correntía es mayor en las fachadas de exposición me- del panel.
dia a la lluvia, que en las muy expuestas que estarán
muy lavadas, o en las poco expuestas que se ensu-
ciarán menos al recibir escasas cantidades de agua.
5. Acción del viento
En este caso, si existen bandas salientes, producirán
una sombra regular. El efecto de la lluvia se ve afectado por la acción
capitulo II Patología e Intervención en cerramientos y acabados

de los vientos dominantes en edificios altos, edificios Adicionalmente habrá que prever un buen recubri-
con patios, etc., pudiéndose originar remolinos y tur- miento de armaduras y no utilizar áridos blandos, fá-
bulencias que alteren el flujo natural de la lluvia. Al cilmente atacables, como las calizas.
chocar el viento con un edificio alto se divide aproxi- Otra patología de origen químico son las eflores-
madamente a los 2/3 de su altura total, fluyendo ha- cencias, que pueden aparecer con forma de polvo
cia arriba en su parte superior y descendiendo en su blanco sobre la superficie de los paneles, debido a la
parte inferior, pasando en parte a su través si la plan- precipitación de substancias alcalinas en la cara ex-
ta baja es exenta. terior al evaporarse parte del agua del hormigón.
La cantidad de agua de lluvia que cae sobre las Habrá que tomar precauciones en el empleo de ce-
distintas fachadas de un edificio varía según la orien- mentos con adiciones; un uso adecuado de adiciones
tación del mismo, recibiendo las más expuestas ma- de puzolanas o cenizas volantes pueden disminuir di-
yor cantidad de agua y más violenta, consiguiéndose cho efecto desagradable.
en ellas un lavado más elevado.
La lluvia, por la acción del viento que varía su án-
gulo de caída, se considera que desciende con un 7. L a volumetría y la forma geométrica
ángulo teórico de 10°, vertícalizándose según cae, de
manera que en los pisos superiores las gotas de llu- De la posición de las superficies de una panel de-
via llegan más horizontalmente que en los inferiores, penderá tanto la cantidad de polvo que se deposite
manifestándose en una gradación de la suciedad con sobre él, como el efecto de lavado que produce la llu-
la altura. via en el mismo.
Si son más horizontales la acción de ambos, pol-
vo y lluvia, será más intensa que si adoptan una for-
ma más vertical.
6. Acción química El efecto de lavado también dependerá de su orien-
El agua de lluvia, según el ambiente, contendrá una tación en relación a los vientos dominantes, como ya
vimos en 5.
mayor o menor concentración de gases corrosivos di-
sueltos, como el dióxido de azufre, que pueden afec- El ensuciamiento de los paneles también se verá
tar a la superficie de hormigón, que es fuertemente al- inducido, no sólo por el modelado volumétrico de sus
superficies, sino también por la protección de unos
calina. Si no está suficientemente protegida con un
elementos sobre otros, dando lugar a un sombreado
barniz (de silicona, acrílico, epoxídico, etc.) se produ-
de distinta forma e intensidad.
cirá una reacción química a medio plazo, que dará lu-
En ese caso se marcarán tres zonas diferentes de
gar a una erosión progresiva de las partículas super-
manchado. En primer lugar aquéllas que están so-
ficiales del panel.
metidas a una acción de la lluvia regular y, por tanto,
Al hidratarse el cemento se forman silicatos calci-
a un lavado uniforme. En segundo término, un área in-
cos y aluminatos hidratados, quedando un agua resi-
termedia en que la aportación de agua es variable,
dual fuertemente alcalina.
dando lugar a una zona de manchado irregular. Por
En la superficie exterior el dióxido de carbono y el último, las zonas protegidas que no reciben la acción
dióxido sulfuroso atmosféricos actúan sobre dichos de la lluvia.
silicatos y aluminatos hidratados, dando lugar a sul-
El efecto se podría asimilar al sombreado produ-
fatos y carbonatos calcicos, silicatos y alúmina.
cido por el sol sobre una fachada, con la diferencia de
Ese fenómeno puede dar lugar a cambios de as-
que para el sol se adopta una posición teórica de 45°,
pecto superficiales variables. Por ejemplo, el sulfato en tanto que el ángulo de actuación de la lluvia es va-
calcico, que es poco soluble, en los sitios lavados por riable, dependiendo principalmente del viento.
la lluvia da lugar a una limpieza superficial, en tanto
El ensuciamiento que se producirá en las tres zo-
que en las zonas resguardadas puede dar lugar a en- nas según Morris será:1

suciamientos importantes.
- Una primera zona oscurecida en aumento des-
Una buena compacidad del hormigón será impor- de la parte superior a la inferior.
tante en la protección contra dicha acción.
- Una zona de transición, de manchado irregular.
Normalmente, no será difícil de conseguir dicha pro- - Una tercera zona marcada por un manchado de-
piedad gracias a la forma de fabricación en horizon- creciente de arriba a abajo.
tal de estos elementos.de fachada, en los que la que
va a ser cara externa se encontrará en el fondo del
molde, consiguiendo la máxima densidad. • A.E.J. Morns Op. cit.
Tema o. Patología de lachadas pretaoncadas de hormigón arquitectónico

P a r t i c u l a r i z a n d o , e n las s u p e r f i c i e s v e r t i c a l e s p l a - P o r ú l t i m o , las e s t r í a s v e r t i c a l e s p u e d e n s e r v i r
nas sin p r o t e c c i ó n , lo m á s n o r m a l e s q u e s e p r o d u z - d e g u í a a la e v a c u a c i ó n d e l a g u a d e l l u v i a , y s e
c a u n m a n c h a d o d e l t i p o s i s m o g r á f i c o . ( F i g . 12). recomienda q u e se separen de otras un mínimo de
U n c a s o p a r t i c u l a r e s el q u e d i s p o n e l o s h u e c o s 25-30 cm.
d e ventana en zonas c ó n c a v a s . A q u í se producirá un
lavado a c e p t a b l e e n las s u p e r f i c i e s u b i c a d a s bajo las
ventanas. (Fig.11).
El c a s o c o n t r a r i o d e d i s p o s i c i ó n d e v e n t a n a s e n
10. Acabados superficiales
zonas c o n v e x a s d a n u n e n s u c i a m i e n t o irregular q u e La t e x t u r a y la c o m p o s i c i ó n d e l m a t e r i a l de
e s p r e c i s o r e c h a z a r . ( F i g . 13).
a c a b a d o superficial d e los paneles d e f a c h a d a in-
Si s e p r o y e c t a n e l e m e n t o s s a l i e n t e s hay q u e c o n -
fluirán e n s u l i m p i e z a y e n s u c i a m i e n t o , así c o m o su
s i d e r a r q u e s e p r o d u c i r á n p a r t e s p r o t e g i d a s d e la l l u -
t o n o y la c o n t a m i n a c i ó n a t m o s f é r i c a d e l l u g a r d e u b i -
v i a y, p o r t a n t o , s i n l a v a d o , s u r g i e n d o z o n a s m á s o
cación.
m e n o s m a n c h a d a s , d e p e n d i e n d o t a m b i é n d e la a c -
En g e n e r a l , s e p u e d e d e c i r q u e los c o l o r e s claros
ción del viento.
se e n s u c i a n c o n r a p i d e z , s o b r e t o d o e n las superfi-
Puede haber elementos retranqueados que, se-
cies p r o t e g i d a s , d a n d o lugar a un fuerte c o n t r a s t e c o n
g ú n s u p r o f u n d i d a d , p u e d e n estar, d e u n a m a n e r a m a -
l a s l a v a d a s p o r la l l u v i a q u e s e m a n t i e n e n c o m p a r a t i -
y o r o m e n o r , r e s g u a r d a d o s d e la l l u v i a y d e s u a c c i ó n
vamente m u c h o más limpias. Dicho contraste habrá
d e l i m p i e z a , d a n d o el e n s u c i a m i e n t o consecuente.
que tenerlo en cuenta c o m o premisa de diseño.
E n l a s e s q u i n a s , c o m b i n a n d o la a c c i ó n d e l v i e n t o
c o n la d e la g r a v e d a d , s e p o d r á n p r o d u c i r m a n c h a - V e a m o s las c a r a c t e r í s t i c a s d e los d i s t i n t o s a c a b a -

d o s d e s c e n d e n t e s en diagonal. dos superficiales.

T a m b i é n h a b r á q u e c o n s i d e r a r la v o l u m e t r í a d e l Los paramentos exteriores obtenidos di-

e l e m e n t o d e s d e el p u n t o d e v i s t a d e l a f a b r i c a c i ó n d e l r e c t a m e n t e d e l m o l d e e s t a r á n r e c u b i e r t o s d e la f i n a
mismo. c a p a d e la l e c h a d a d e c e m e n t o s u p e r f i c i a l , que
H a y q u e c o n s i d e r a r q u e e n la c o n f e c c i ó n d e for- ha e s t a d o e n c o n t a c t o c o n el m o l d e . En principio,
mas d i é d r i c a s p u e d e haber dificultad e n el h o r m i g o - s e r á i m p e r m e a b l e . N o o b s t a n t e , e n ella s e suelen d e -
n a d o d e las d i s t i n t a s c a r a s q u e , si n o se h a c e s u c e - sarrollar fisuras capilares c o m o e f e c t o inevitable del
s i v a m e n t e e n h o r i z o n t a l , p u e d e d a r l u g a r a la a p a r i c i ó n proceso de fraguado. Estas grietas microscó-
d e b u r b u j a s y a la s e g r e g a c i ó n d e m a t e r i a l e s , p r o p i - p i c a s n o t i e n e n ni a n c h o ni p r o f u n d i d a d s u f i c i e n t e s
c i a n d o la f i s u r a c i ó n y la a c c i ó n d e la h e l a d i c i d a d . para dar lugar a corrosión de armaduras, de pene-
tración, de h u m e d a d o de problemas d e heladicidad.
N o r m a l m e n t e , en principio, e s t a s fisuras no s o n vi-
s i b l e s , p e r o u n a v e z s o m e t i d o el p a n e l a c i c l o s d e
9. El dibujo superficial
e n s u c i a m i e n t o p o r e l p o l v o a t m o s f é r i c o y d e la l l u -

El d i b u j o s u p e r f i c i a l p u e d e s e r u n m e d i o e f i c a z p a - via, s e p u e d e n manifestar p o r un o s c u r e c i m i e n t o de

r a e n c a u z a r el a g u a e n p a n e l e s a f e c t a d o s p o r l l u v i a las m i s m a s . P r o d u c e n u n c o n t r a s t e m a y o r c o n c e -

a b u n d a n t e , en tanto q u e en p a ñ o s d e f i c i e n t e m e n t e la- m e n t o s b l a n c o s q u e c o n grises. A p a r e c e n m á s , por

v a d o s p u e d e n ser un m o t i v o d e e n s u c i a m i e n t o . los calores d e f r a g u a d o , c o n m e z c l a s ricas en ce-

L o s resaltes e n los p a r a m e n t o s p u e d e n influir d e m e n t o y c o n c e m e n t o s de alto m ó d u l o de finura, que

forma diferente sobre otras zonas según su impor- con sus contrarios.

t a n c i a y s u u b i c a c i ó n , d a n d o u n m a n c h a d o irregular. Por la m a y o r s e d i m e n t a c i ó n , se e n s u c i a n m á s p o r
Así, las m o l d u r a s v e r t i c a l e s p u e d e n servir como e s t e f e n ó m e n o las s u p e r f i c i e s h o r i z o n t a l e s q u e las v e r -
c o r t e s al c u r s o d e l a g u a p o r l o s p a r a m e n t o s , t e n i e n d o ticales.
entre ellas una separación m á x i m a d e 2 0 a 3 0 c m . H a b r á q u e tender, p u e s , a p r o c e d i m i e n t o s q u e eli-
En el c a s o d e m o l d u r a s h o r i z o n t a l e s t e n d r á n q u e m i n e n d i c h a l e c h a d a s u p e r f i c i a l si s e t e m e q u e s e v a -
ir u b i c a d a s e n z o n a s b i e n l a v a d a s p a r a q u e n o a c u - ya a producir esta patología.
m u l e n s u c i e d a d , si n o , n o p o d r á n ser r e c o m e n d a - En los paramentos de áridos vistos habrá que dis-
bles. tinguir los p r o c e d e n t e s d e m a c h a q u e o , no reco-
L a s e s t r í a s h o r i z o n t a l e s sí s o n a c o n s e j a b l e s si t i e - mendables, pues acumulan gran cantidad de sucie-
!
nen una s e c c i ó n m í n i m a d e 1 c m y se constituyen en dad, de los áridos redondeados de una limpieza
tramas compactas. p o s i b l e mejor.
capitulo II Patología e intervención en cerramientos y acabados

1 3 b
13 a
Diferencias de ensuciamiento en una fachada de paneles de superficie convexa: Mucha irregular
manchado, hace que se recomiende el rechazo de esta disposición constructiva.

chos patológicos como el que recoge la figura.


Tema 6. Patología de fachadas prefabricadas de hormigón arquitectónico

Es aconsejable seleccionar áridos de tono oscu- jores resultados. En caso de no disponer de ellas se
ro, en lugar de los de colores claros, por ser los que podrán utilizar vibradores de aguja, siempre que se
dan mejores resultados a largo plazo, sobre todo en haga un vertido del hormigón en capas relativamente
superficies bien lavadas por la lluvia en donde man- delgadas. No es recomendable en absoluto el empleo
tienen su aspecto inicial. de moldes verticales.
En fachadas poco o mal lavadas los resultados - Dosificación óptima, con un contenido de ce-
pueden ser más dudosos, recomendándose superfi- mento, el menor posible dentro de las resistencias de-
cies más lisas, donde la acumulación de polvo sea seables, una relación agua-cemento baja, dentro de
más difícil. la trabajabilidad, en evitación de fisuraciones por eva-
poración del exceso de agua de fraguado, y una gra-
Los paramentos obtenidos con tratamientos me-
nulometría adecuada.
cánicos (por ejemplo, abujardados) tienen un com-
Como complemento de todo lo anterior se reco-
portamiento similar al de los áridos vistos.
mienda la realización de ensayos de heladicidad que
Los paramentos revestidos tendrán las caracte-
nos aseguren el comportamiento correcto del mate-
rísticas de los materiales de revestimiento utilizados.
rial.
Si se utiliza piedra natural en losas planas, serán
La bibliografía americana señala también llevar a
las peculiaridades de los distintos materiales que se cabo un ensayo de absorción de agua, que nos indi-
utilicen y su grado de pulimento los que marquen su cará el posible comportamiento del panel frente a la
estado de conservación. contaminación ambiental. Para una densidad normal
Si se emplean materiales cerámicos (azulejos, pla- 3
del hormigón (2.400 kg/m ) la absorción no debe ex-
cas, gres, etc.) estos materiales son más o menos au- ceder del 5-6% del peso.
tolavables y, por ello, fáciles de limpiar. Su principal Asimismo, indicar que en el empleo de aditivos, en
problema está en el progresivo y diferencial oscureci- general aceleradores de fraguado y superplastifican-
miento de sus innumerables juntas, que constituyen tes, se deberán tener muy en cuenta sus posibles in-
una gran proporción a considerar en relación a la su- convenientes, como pueden ser las retracciones pos-
perficie total. teriores y la aparición de fisuras.
Por último hacer algunas precisiones:
- Si se desean hormigones de color, no intentar-
los lograr a partir de aditivos colorantes en la masa,
11. Requisitos del hormigón a emplear
que darán una gran imprecisión en la uniformidad de
contra la acción de la intemperie
la misma; la coloración se logrará a través del color
La calidad del hormigón es proporcional a la limi- de los áridos, que se acopiarán para la fabricación to-
tación del ensuciamiento de las superficies exteriores tal de la serie de paneles.
de tos paneles de fachada. Aquella dependerá de las - El recubrimiento de armaduras hay que respe-
propiedades de los componentes y de su correcta do- tarlo con un mínimo de 4-5 cm, empleando áridos de
sificación. tamaño de 20 mm. (Fig. 14)
Es deseable en el hormigón una baja absorción su- - Los separadores de las armaduras habrá que dis-
perficial que demandará una alta densidad (compaci- ponerlos de tal forma que no se manifiesten al exterior.
dad) en dicha capa, y que dependerá de los siguien-
tes factores:
- Impermeabilidad del molde, conseguido por la 12. Protección de las uniones
utilización de moldes impermeables, o impermeabili-
zados como por ejemplo, imprimaciones de distintas Los elementos metálicos de los anclajes en las
resinas. uniones precisan de una protección especial frente a
- Correcto curado del hormigón, lo mejor es un tra- la corrosión y la humedad.
tamiento con vapor de agua, evitándose la acción de Dicha protección puede ser:
aire seco y caliente que puede propiciar la aparición - Pintura al cinc o de resinas.
de fisuras. No obstante, como normalmente los pane- - Piezas galvanizadas.
les de fachada son elementos multicapa, la cara ex- - Piezas de acero inoxidable.
terna estará en el fondo del molde lo que propiciará un Dichos procedimientos son más costosos en el or-
secado más lento y una densidad mayor de ella. den de arriba a abajo.
- Vibrado del hormigón, que se hará preferente- Para los tratamientos con pinturas los elementos
mente por mesas vibrantes que son las que dan me- de las uniones han de ser fácilmente accesibles; si no
capitwo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

va a ser así, habrá que recurrir a los otros procedi- Pueden presentar como inconvenientes:
mientos. - Son costosos; es un coste a añadir al panel.
Para la protección contra el fuego de las uniones - Envejecimiento más o menos tardío, que se pue-
se suelen emplear morteros ricos en cemento y con de traducir en un cambio de aspecto con el tiempo y
amianto en su masa, que van a valer como tratamientos una posible descamación por zonas.
eficaces contra la corrosión. Se aconseja que el material a emplear posea un
Sí los anclajes van ubicados en oquedades del pa- Documento de Idoneidad Técnica (D.I.T.) que nos ava-
nel, habrá que cuidar que no se vean afectados por le el producto y su puesta en obra.
condensaciones o humedades, debiéndose poder ins- Otro punto de vista de enfocar el tema de ios tra-
peccionar periódicamente para vigilar su estado. tamientos superficiales es el de los distintos sistemas
Es interesante la existencia de los planos de cons- de limpieza de paneles de fachada.
trucción en donde figuren exactamente los puntos de Es primordial una elección adecuada del procedi-
anclaje. miento de limpieza, pues puede ser perjudicial para el
En la composición de los anclajes habrá que tener hormigón y su textura superficial.
en cuenta, si se utilizan metales distintos, las posibi- Para la aplicación de cualquier método de limpie-
lidades de corrosión bimetálica. za se precisará un personal adiestrado y con la expe-
Por último, indicar que hay que prever el envejeci- riencia suficiente.
miento de los materiales de sellado de juntas, tenien- Para ver la importancia y características del ensu-
do en cuenta su sustitución en el tiempo. ciamiento y elegir el método de limpieza adecuado se
recomienda un ensayo manual cepillando y con ayu-
da de agua o en seco.
6:

13. Tratamientos de las superficies Los principales métodos de limpieza son


exteriores de los paneles - Cepillado con cepillo blando, previa impreg-
nación de agua, y aclarado con chorro de agua.
Para mejorar la protección de los paneles frente a Este es un sistema lento, que no precisa mano de
la intemperie se pueden utilizar barnices varios (sili- obra especializada y, por tanto, de coste medio.
conados, siloxanos, acrílicos) que sirvan de recubri- Es un procedimiento que en algunos países es el
mientos protectores a la acción del medio ambiente único que se permite en la restauración de monu-
urbano o industrial. mentos.
No deben utilizarse a no ser que vayan a cumplir • Proyección de agua a presión, que se regula
un fin concreto. según la suciedad hasta 120 atmósferas y, también,
En primer lugar, Indicar que el hormigón arquitec- alejando más o menos el chorro de proyección.
tónico no precisa ningún tipo de barniz para cumplir La mano de obra que se requiere tiene que tener
el requisito de la impermeabilización. una cierta especializacíón.
Las principales aplicaciones de estos tratamientos El mayor inconveniente es el riesgo de infiltracio-
son: nes de agua por las juntas entre paneles o entre car-
- Reducir eflorescencias. pinterías.
- Disminuir la acción de la lixiviación de la cal que
1
• Proyección de agua caliente a presión. Es si-
puede atacar a algunos materiales de construcción, milar al anterior pero, al utilizar el agua calentada a
como el aluminio, el acero, el vidrio, etc. mas de 90°C, elimina mejor la suciedad superficial y
- Reducir la absorción de polvo y humedad de las reduce el tiempo del proceso, por lo que se reduce el
superficies del hormigón, tanto en las fases de mani- riesgo de infiltraciones.
pulación de los paneles, como en su posición defini- • Proyección de vapor de agua a presión. Es
tiva. Será especialmente útil si se están empleando parecido a los anteriores pero al utilizar vapor de agua
áridos blandos, como el mármol y la caliza. elimina más intensamente la suciedad superficial. Se
- Obtener superficies brillantes y tonos de color completa con proyección de chorro de agua para eva-
con un aspecto de superficie húmeda. cuar los restos.
Se caracteriza por tener un mayor consumo ener-
gético y menor de agua.
'Lixiviación: tratamienio de una substancia compleja por el disol • Proyección de arena en seco. Se realiza pro-
vente adecuado para obtener la parte soluble de ella. yectando arena de sílice (2-3 mm), a baja presión, se-
8
Siguiendo a Farré y Aldoma. Limpieza. Restauración. Mantenimiento
de tachadas Ed. Prensa XX. guido con chorro do agua.
Tema 6. Parcwgte de techadas cetebncadas de hormigón arauirectómco

El efecto a obtener es variable, pues se puede re- Se comienza humedeciendo los paneles. A conti-
gular la distancia de la pistola de proyección, así co- nuación se aplica el preparado, que se dejará más o
mo el tamaño de los granos de arena. menos tiempo según el tipo de suciedad. Se finaliza
Como principal ventaja a considerar es que es un limpiando con chorro de agua.
procedimientptapido, pero con los inconvenientes de
que se pueden producir daños a los relieves superfi-
ciales y que es difícil el lograr una abrasión regular en
14. Conclusión
el panel.
También hay que considerar la protección de los Decir, finalmente que el hormigón arquitectónico
operarios por el riesgo de silicosis. es un material al que no se le puede exigir una ima-
• Proyección de arena húmeda. Es un procedi- gen que se mantenga constante en el tiempo, sino que
miento menos agresivo para los operarios que el an- sufre un envejecimiento que puede ser controlado te-
terior, por ausencia de polvo contaminante. niendo en cuenta las consideraciones hechas en es-
Se proyecta la arena mojada a baja presión, con- te capítulo (fabricación, orientación de las fachadas,
siguiéndose un mayor efecto limpiador. Es un méto- medio ambiente del lugar de situación de los paneles,
do eficaz para fachadas muy sucias, pero permane- volumetría, diseño geométrico, etc.), y que precisa un
ce el riesgo para relieves superficiales. mantenimiento adecuado para lograr una protección
• Proyección de polvo de vidrio micronizado eficaz.
Es el llamado sistema de Thomann-Hanry. Se logra
una abrasión superficial más regulada, pues se tra-
baja a baja presión, pudiéndose limpiar también los
relieves superficiales. Bibliografía

Necesita de mano de obra experimentada y de un LEÓN VALLEJO •Ensuciamiento de fachadas por contaminación at-
equipo especial, que hace que no se produzca polvo mosférica". Ed. Universidad de Valladolid
contaminante. A. DEL AGUILA "Las tecnologías de la industrialización de los edifi-
• Limpieza mecánica. Se realiza mediante puli- cios de vivienda" Ed. COAM

doras, siguiendo su acción con lavado de agua. BROOKES 'Cladding of Building'. Ed. Longman. Nueva York
Farré y Aldoma "Limpieza. Restauración. Mantenimiento de facha-
Es un método rápido, pero difícil de obtener una
das". Ed. Prensa XX
abrasión superficial precisa, siendo peligroso para los
MARTÍN. "Las ¡untas en los edificios". Ed. G. Gilí
relieves.
MORRIS "El hormigón premoldeado en la arquitectura". Ed. G. Gilí
• Limpieza con preparados de ácido hi- PCI."Fachadas prefabricadas de hormigón". Ed. Blume
drofluorhídrico. Es un método de velocidad media, MONJO CARRIÓ, JUAN "Patología de cerramientos y acabados ar-
pero que es muy eficaz, incluso para molduras y relie- quitectónicos". Ed. Munilla-leria.
ves superficiales, si se realiza una aplicación cuidada.
capitulo II, Patología e intervención en cerramientos y acabados

205

7. Ensuciamiento físico de fachadas.


Limpieza y prevención
Feo. Javier León Vallejo
Dr. Arquitecto
Prof. Titular E.T.S.A. de Vailadolid

1. Introducción Y, en tercer lugar, porque la responsabilidad social


de los profesionales obliga a plantear y definir cuál de-
El fenómeno de ensuciamiento de los lienzos de fa- be ser la imagen aceptable de las fachadas urbanas
chada de los edificios, bien conocido desde la anti- compatible con su maduración natural y que implique
güedad, se caracterizaba por la lentitud de su pro- un equilibrio entre el coste de la inversión inicial (me-
gresión, acompañando de modo natural la maduración jores materiales) y el del mantenimiento corriente (lim-
de los edificios, consubstancial con el paso del tiem- pieza periódica). (Fig. 1)
po. En la actualidad, sin embargo, el proceso trans- Con miras a ese diseño equilibrado, la atención de
ciende al mero envejecimiento de la superficie ex- los responsables públicos y de los profesionales no
puesta de los materiales, llegando a suponer, en muchas debe recaer exclusivamente en las medidas correc-
ocasiones, verdaderas lesiones generalizadas. toras del ensuciamiento, es decir, el recurso a la lim-
A pesar de ello, las suciedades de las fachadas han pieza. Merece la pena actuar en otras direcciones, ur-
sido toleradas como meras afecciones normales de banísticas y arquitectónicas, lo cual parece más
las superficies, de valor estético, y escasa incidencia razonable aunque también más difícil porque se In-
en la seguridad de los edificios. Y en consecuencia, terviene, al menos parcialmente, sobre las causas del
fenómeno, y no solamente sobre las consecuencias
no se ha comenzado a actuar sobre ellas sino cuan-
aparentes o síntomas.
do hubo necesidad de rehabilitar los cascos antiguos,
por escasez de suelo urbano, o cuando nuevas polí- Sería importante, pues, convenir en una necesi-
ticas y mayores presupuestos han permitido planes dad de actuación no solamente paliativa sino también
sistemáticos de recuperación del patrimonio arqui- preventiva; y ésta debe basarse en el acuerdo gene-
tectónico monumental o de la imagen de ciertos en-
claves urbanos señeros.
Para un profesional de la arquitectura, el ensucia-
miento físico de las fachadas debe tener una signifi-
cación mucho más profunda, por varias razones. En
primer lugar, porque un fenómeno en principio apa- \-, r
- r^
rente puede conllevar otros procesos físico-químicos : — V — !

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capaces de deteriorar los materiales de revestimiento.
En segundo lugar, porque el desarrollo de las su- —X j — \
ciedades no sólo afecta a los viejos edificios, sino que,
gracias a la omnipresencia de la contaminación at- TIEMPO
mosférica, también las recientes construcciones si-
1. Proyecto inalterable pero costoso (1): proyecto de renovación
tuadas en los barrios, e incluso en las áreas rurales, periódica mediante mantenimiento. (3): diseño equilibrado entre
suelen estar afectadas en una u otra medida. envejecimiento aceptable y coste de mantenimiento (2) (21).
Tema 7. Ensuciamiento físico de tachadas. Limpieza y prevención

ral de lo que sería el ensuciamiento lesivo para las fa- variable de unas fachadas a otras y, dentro de ellas,
chadas. Esto es, establecer con claridad la diferencia entre materiales o zonas consideradas. Por consi-
entre pátina de envejecimiento natural e inevitable, y guiente, la mejor manera de poder predecir el tipo
aquellos procesos que implican una notable altera- (efecto) del envejecimiento es conocer, lo más exac-
ción de la apariencia externa tal como fue concebida tamente posible, las causas y factores intervinientes
por sus artífices, cuando el edificio adquirió su mate- y los mecanismos que regulan los distintos procesos
rialidad. que coadyuvan a la modificación de las característi-
El reto actual consiste en conocer y aplicar, siquiera cas de la piel de las fachadas. Para ello cobra indu-
elementalmente, los criterios necesarios para proyectar dable valor, desde luego, el estudio de los edificios
fachadas que tengan en cuenta el envejecimiento y existentes cuyas fachadas manifiestan ya los efectos
posean recursos suficientes para impedir los proce- aludidos.
sos más nocivos de ensuciamiento, aún sin normali- Analicemos brevemente los dos aspectos funda-
zar por no hallarse objetivamente definidos por críti- mentales que condicionan el fenómeno del envejeci-
cos y expertos de la imagen y su impacto social. miento de los revestimientos de fachadas: la natura-
Lo cual no basta para profundizar en el conoci- leza de los materiales componentes, y las influencias
miento y la correcta selección de los procedimientos, a que se hallan sometidos los paramentos exteriores
por lo demás abundantes, de limpieza y consolida- de los edificios.
ción de los materiales de revestimiento, máxime si se
tiene en cuenta que, en la mayoría de los casos, se-
2.1 Los materiales
rán los únicos medios posibles de intervención.
De manera simplificada, pueden considerarse dos
caracteres a tener en cuenta para determinar la alte-
2. Envejecimiento superficial de los ración superficial:
materiales de fachada A) La piel, o capa externa con propiedades dife-
renciadas del resto del material, de grosor muy varia-
El envejecimiento puede definirse como el conjun- ble de unos materiales a otros, y que se constituye es-
to de transformaciones experimentadas por la piel de pecíficamente ya desde el mismo momento de su
los materiales de revestimiento de las fachadas, mo- procesamiento, pero va siendo modificada y amplia-
tivadas por una serie de influencias exógenas y en- da a lo largo de su vida. Puede ser, por tanto, natural
dógenas que suelen actuar de manera simultánea. o adquirida o, más frecuentemente, una mezcla de
En condiciones óptimas, el proceso de envejeci- ambas.
miento es asumible por el edificio y se adapta bien al Es en dicha capa donde suelen tener lugar las al-
de disminución de su vida útil, teniendo en cuenta los teraciones relacionadas con el envejecimiento, sin que
costes corrientes de mantenimiento. Sin embargo, en el espesor restante se encuentre sensiblemente afec-
las condiciones más frecuentes de las áreas urbanas tado. Por ello, antes de acometer cualquier tipo de in-
densamente pobladas, el envejecimiento puede ser tervención es recomendable, si el material está sano,
acelerado significativamente, o derivar hacia proce- u obligado, si se encuentra dañado, obtener y anali-
sos gravemente lesivos para la estabilidad funcional zar los valores de los siguientes parámetros: [17]
de los materiales y elementos que componen los ce- - Grosor de la piel.
rramientos, con la consiguiente alteración de la dura- - Reflexión luminosa de la superficie.
bilidad media prevista y los gastos que genera su re- - Dureza.
paración o sustitución. - Porosidad de la capa externa.
El término envejecimiento es ciertamente amplio y, - Rugosidad de la superficie (en los no porosos).
por ello, ambiguo, dada la multiplicidad de posibles - Succión capilar y permeabilidad al agua.
causas y efectos. Depende de factores tan aleatorios - Difusividad del vapor.
como la meteorología o la composición del aerosol at- - Composición química y mineralógica.
mosférico. De otros más controlables, como las ca- La naturaleza de la piel de los materiales de cons-
racterísticas de los materiales, la composición de la fa- trucción es muy variada. Por ejemplo [17], en el hor-
chada, o el control de calidad de ejecución de la obra. migón, su espesor es, al menos, de un milímetro, rica
Y también del tipo de mantenimiento previsto, y del en cemento y muy porosa, produciéndose en ella las
realmente efectuado a lo largo de la vida del edificio. fisuras de retracción. En la piedra natural y los ladri-
Como consecuencia de ello, la alteración más o llos, es adquirida y alterada, salvo esmaltado en la ce-
menos superficial que se origina puede resultar muy rámica, y muy destacada y gruesa en algunas rocas.
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

La de los vidrios oscila entre 0,1 y 1 miera, surca- te el ensuciamiento por manchas específicas de di-
da de microtisuras, y se desarrolla a partir del moldeo, versa naturaleza e incidencia ocasional. Los tres tipos
pero también por ia exposición a la intemperie y por principales son:
los trabajos de limpieza. En los plásticos es muy va- a) Manchas debidas a efectos del fuego: generan
riable dependiendo de la naturaleza del polímero y del oscurecimiento de los materiales a causa de la oxi-
tipo de moldeo empleado. La de los metales suele ca- dación de sus componentes férricos. Suelen apare-
racterizarse por la abundancia de óxido poroso de va- cer depósitos superficiales del humo, conteniendo ho-
riable grosor (0,01 miera en el acero inoxidable). llín y cenizas.
B) La porosidad: cobra tanta importancia por su b) Manchas debidas a deyecciones de las aves:
estrecha relación con la presencia de agua y con los son difíciles de eliminar debido a la generación de áci-
procesos de alteración, que deviene el carácter clave dos sobre calizas y areniscas, o de sales que atacan
para clasificar los materiales de revestimiento en dos a todo tipo de material.
grandes grupos de dispar comportamiento. c) Pintadas: con variada incidencia según el tipo:
- Los materiales porosos: hormigón, mortero, la- - Pintura: de tipo normal o, más usual, en aero-
drillo, piedra y madera, muy sensibles a los fenóme- sol, penetran la capa superficial.
nos de envejecimiento. - Rotulador: suelen penetrar profundamente; los
- Los materiales no porosos o compactos: vidrio, colores más peligrosos son los negros y rojos.
plástico, metal y algunas cerámicas, mucho menos - Bolígrafo: contienen tintes al aceite más den-
sujetos a la meteorización y degradación superficial, sos, por lo que suelen quedar en la superficie.
aunque puedan sufrir procesos de ensuciamiento, oxi- - Pintalabios: contienen pigmentos y tintes en
dación u otros fenómenos de alteración superficial. una base grasa acida sólida, por lo que permanecen
Pero su menor presencia en el Patrimonio arquitectó- en la superficie, a no ser que sean ablandados por
nico más antiguo, y dicha menor sensibilidad al en- el calor.
vejecimiento, reducen su incidencia en la patología - Tiza: basada en yeso, con adiciones de arcilla y
general de las fachadas. cola; efecto superficial.
- Cola para pegar carteles: acción superficial; se
2.2 Influencias que experimentan los materiales ablanda fácilmente con agua o disolvente.
de fachada Conviene mencionar que ambos tipos de influen-
cias externas suelen operar a la vez por lo que su in-
Son de dos clases diferenciadas, tanto por el ori- terdependencia es un hecho destacable que deter-
gen de las acciones como por sus consecuencias. mina, corrientemente, los efectos finales del
A) Influencias exógenas: engloban todas las ac- envejecimiento-.
ciones que proceden del ambiente físico que rodea B) Influencias endógenas: proceden de los mis-
los edificios y que operan a través de dos mecanis- mos materiales constituyentes de los cerramientos,
mos principales: por lo que son intrínsecas a las fachadas, pero even-
A.1 La meteorización: conjunto de acciones físico- tuales al contrario que las exógenas dependiendo prin-
químicas que sobre los materiales ejercen los agentes cipalmente de la calidad de los materiales y del con-
climáticos, especialmente el agua y el viento, pero tam- trol de calidad de la ejecución de las obras.
bién el vapor y los gases atmosféricos, los cambios B.1 Originadas por substancias contenidas en los
térmicos y las radiaciones del espectro solar. propios materiales o transportadas a su través, y que
Este tipo de influencia afecta muy distintamente a pueden manifestarse al exterior debido a los fenóme-
los revestimientos, según su naturaleza, porosidad y nos de humectación y evaporación, o como simples
grado de protección; y, además, depende de la situa- defectos superficiales. Los tipos principales son:
ción y geometría del edificio. a) Materiales hidrosolubles y agua:
A.2 El ensuciamiento: acción ejercida por las par- - Eflorescencias: depósitos superficiales de sul-
tículas sólidas de procedencia orgánica o inorgánica, fatos y cloruros de calcio, sodio o magnesio.
a causa de su deposición, acumulación o prolifera- - Manchas de áridos (hormigón); manchas por sa-
ción sobre los paramentos, pudiendo generar otras les de los crudos: nodulos de cal en ladrillos y hor-
alteraciones físicas y químicas asociadas. Su estudio migones. Compuestos ferrosos en piedras calizas y
más detallado constituirá buena parte del presente ca- areniscas; sales de vanadio en ladrillos.
pítulo del curso. - Manchas de agua sobre arenisca como efecto
Junto a este tipo de ensuciamiento, que podría de- de una limpieza.
nominarse físico, usual en los ámbitos urbanos, exis- b) Materiales solubles en disolventes orgánicos:
Tema 7. Ensuciamiento físico de fachadas. Limpieza y prevención

- Pinturas, barnices, aceites, resinas, grasas, pro- suele predominar alguno de ellos, si bien el más fre-
ductos bituminosos, etc. cuente es el de pátina de suciedad que puede en-
c) Materiales solubles en álcalis: mascarar eventuales lesiones simultáneas.
- Pinturas y tratamientos basados en aceite de li- En este apartado analizaré el ensuciamiento co-
naza. mo fenómeno autónomo dentro del proceso general
B.2 Originadas por substancias procedentes de de envejecimiento, pero teniendo en cuenta los fac-
materiales adyacentes. La utilización de distintos ma- tores intrínsecos y extrínsecos que son determinan-
teriales en un mismo paramento de fachada puede tes en la generación y modificación de las pátinas de
provocar agresiones entre ellos, por lo general en cier- suciedad.
tas condiciones que implican la presencia de hume- Por otro lado, aún cuando el ensuciamiento bioló-
dades: de obra, escorrentías durante los sucesos llu- gico acontece a la vez y muy estrechamente unido a
viosos, o filtraciones accidentales. la formación de suciedades en las fachadas, será con-
a) Materiales solubles en ácidos y disolventes or- siderado en un apartado específico con el fin de des-
gánicos: tacar las peculiaridades de su origen y efectos visi-
- Depósitos de cal del lavado de morteros de jun- bles.
tas de fábricas o de enfoscados y hormigones que se
depositan tras la evaporación y pueden manchar y 3.1 Origen de las suciedades: la contaminación
agredir a piedras, vidrios y metales; depósitos de car- atmosférica
bonato calcico recristalizado por limpieza con ácidos.
- Depósitos de silicatos desde areniscas calcá- La causa inmediata o directa del ensuciamiento fí-
reas, e incluso de productos provenientes de la de- sico es la contaminación atmosférica y, en particular,
gradación de pinturas, sellantes y protectores. la fracción sólida o conjunto de partículas suspendi-
b) Manchas metálicas: das en el aerosol atmosférico y susceptibles de acu-
- Depósitos por lavado de materiales de hierro, mularse sobre los paramentos, provocando un cam-
cobre y sus aleaciones que han sufrido procesos de bio de color de la superficie.
oxidación-corrosión. La procedencia (y naturaleza) de dichas partículas
- Depósitos de partículas metálicas y posterior es muy vahada, abundando sobre todo: sulfatos, ni-
corrosión. tratos, hollín, silicatos, cationes metálicos, compues-
tos orgánicos, etc.
También el tamaño de las partículas es fundamen-
tal pues determinará el tiempo de permanencia en sus-
3. Ensuciamiento de fachadas
pensión atmosférica, así como el modo de producir-
Puede definirse como el cambio experimentado se la deposición sobre los paramentos: por vía seca
por la piel de una fachada como consecuencia del de- o por vía húmeda (precipitaciones).
pósito y adhesión de substancias contenidas en el ae- Según los contaminantes implicados, se distinguen
rosol atmosférico, e incluyendo la proliferación y arrai- dos tipos de ensuciamiento: [2] [17]
go de organismos vivos. - Primario: ensuciamiento físico, objeto del pre-
Como toda transformación de la capa externa de sente estudio, debido a la deposición seca de partí-
los materiales de fachada, contribuye a su envejeci- culas de distinto color al de los paramentos, en par-
miento. Aunque en principio puede considerarse un ticular hollín, ceniza, minerales y esporas.
fenómeno meramente aparente, debe ser tenido en - Secundario: ensuciamiento físico-químico que tie-
cuenta como lesión específica por ser el causante ne lugar por depósitos que interactúan con la piel de
de un considerable deterioro de la imagen de los pa- los materiales provocando reacciones químicas con
ramentos. Además conlleva, con frecuencia, otra se- secuelas físicas, y que son muy sensibles a las in-
rie de lesiones inducidas por la agresión físico-quí- fluencias del microclima.
mica de la pátina sucia sobre el substrato de material El aerosol atmosférico consta de dos grandes
sano. grupos o fracciones de partículassólidas, cuya fron-
Tomando parte de los fenómenos característicos tera se sitúa en torno a 2 mieras. Sus constituyen-
del envejecimiento, el ensuciamiento se relaciona es- tes más activos de cara al ensuciamiento son, entre
trechamente con otros procesos paralelos ya men- otros: [2] [17].
cionados, como-la meteorización, o la generación de - Hollín: conjunto de partículas de distinta proce-
manchas y eflorescencias, por lo que el aspecto final dencia, aunque predomina la de combustión incom-
de la fachada es un cúmulo de efectos entre los que pleta de motores de vehículos. De tipo molecular y t a:
:apituio II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

maño comprendido entre 0.1 y 1 miera, es un conta- Con viento, la deposición se produce mediante im-
minante ubicuo, de largo tiempo de permanencia en pacto inercial de las partículas gruesas. Para las de
la atmósfera, y suele presentar elevada tasa de de- rango comprendido entre 1 y 15 mieras, utiliza el me-
posición (10% anual) mediante mecanismos de coa- canismo de difusión turbulenta, aprovechando el mo-
gulación o coalescencia. vimiento no laminar de la estrecha capa de aire adya-
- Partículas gruesas: con tamaños por encima de cente a la superficie del material.
5 mieras, forman el grupo principal de la fracción só- La transferencia de la contaminación a la fachada
lida, en peso, del aerosol atmosférico. Comprenden: se halla sometida a la influencia de las condiciones
polvo de carbón, de mineral de hierro, cenizas, áridos meteorológicas, siendo decisiva la acción del viento,
finos y partículas o moléculas de organismos vivos del gradiente térmico y de la humedad atmosférica li-
(esporas, polen, protozoos, etc.). Todas ellas son trans- gada a los fenómenos de evaporación, condensación
portadas por el viento y, tras corto espacio de tiempo y formación de nieblas y lluvias.
de residencia en la atmósfera, se depositan con ca- B) En la segunda fase, de adhesión, las partícu-
rácter local y frecuentemente cerca de las fuentes emi- las depositadas sobre los paramentos se ligan a ellos,
soras (chimeneas de calefacción, industrias, etc.). pasando a integrar la capa de alteración constitutiva
El grado de ensuciamiento se mide por métodos ya del propio matenal de fachada y difícil de desprender
directos sobre las fachadas si hay que considerar tam- si no es mediante procedimientos específicos de lim-
bién el tipo secundario. Si no, puede llevarse a cabo pieza. Los medios de adhesión de las partículas al so-
mediante exposición de probetas, recogida de partí- porte pueden ser de cinco clases:
culas gruesas en recipientes horizontales, en combi- - Fuerza gravitatoria: mera ligazón virtual por la
nación con métodos ópticos, como el del humo ne- simple interceptación, por la superficie, de las partí-
gro, que utiliza muestras de filtros y medidas de culas que acceden por sedimentación o difusión tur-
absorción y reflexión luminosa. Si no existen partícu- bulenta. El tipo de choque producido, así como el gra-
las gruesas en suspensión, basta con el simple cál- do de rugosidad, serán determinantes; y, una vez
culo de la concentración del hollín en la atmósfera y atrapada la partícula, podrá utilizar algún otro meca-
la aplicación de su tasa o velocidad de deposición nismo de adherencia para quedar más íntimamente li-
(10-2 cm/seg). (17] gada al soporte.
- Enlace químico: por interacción del material del
soporte con la contaminación, requiriéndose general-
3.2 Mecanismo del ensuciamiento
mente la existencia de condiciones ambientales ade-
El fenómeno de formación de pátinas sucias es un cuadas, como presencia de catalizadores y, sobre to-
proceso complejo en el que intervienen numerosos do, de humedad. Algunos ejemplos frecuentes son: la
factores con implicación directa, además de la men- formación de sulfatos en soportes calcáreos, con en-
cionada interacción con otros sucesos paralelos de capsulación por el yeso de nuevas partículas deposi-
envejecimiento. Este proceso se realiza en tres fases tadas. O la carbonatación y bicarbonatación de so-
más o menos diferenciadas. [6] [11] portes de la misma naturaleza y similares efectos.
A) En la primera tiene lugar la deposición o trans- - Fuerzas moleculares: debidas a las polaridades
ferencia de las partículas contaminantes desde la at- intrínsecas o inducidas en las partículas contaminan-
mósfera a la superficie de los paramentos. Puede ser tes, de carácter estático o cambiante, y que actúan a
húmeda o seca según aproveche o no la caída del cortísimas distancias. Son frecuentes en partículas del
agua en las precipitaciones. orden de 0,01 mieras.
Por otra parte, el depósito puede suceder, cuando - Fuerzas eléctricas: muy variables y difíciles de
el aire permanece en calma, por simple acción gravi- evaluar, aumentando al decrecer la tasa de humedad;
tatoria (sedimentación), si se trata de partículas grue- aparecen cuando las partículas sucias se encuentran
sas, superiores a 15 mieras, sobre superficies hori- cargadas o presentan características eléctricas opues-
zontales o inclinadas hacia arriba. Pero no en las tas a las del material de fachada.
verticales o con inclinación hacia abajo, si no fuera por: - Tensión superficial: en la que cobra gran impor-
la elevada rugosidad del soporte: existencia de car- tancia ia presencia de agua, que condiciona la fuerza
gas electrostáticas en las partículas, en el paramento de unión en la interfase soporte/partícula/humedad.
o en ambas (electroforesis); existencia de movimien- Se necesita una cierta capacidad de mojado de la su-
tos convectivos por gradiente térmico (termoforesis), perficie del material, sobre todo en soportes vertica-
o por la aparición de otros movimientos foréticos, prin- les o con inclinación invertida. Son considerables cuan-
cipalmente de condensación del vaoor de agua do la humedad relativa del aire sobrepasa el 65%.
Tema 7. Ensuciamiento TÍSICO de tachadas. Limpieza y prevención

210 C) En la tercera etapa, de desarrollo, la suciedad 4.1 Factores relativos a los agentes climáticos
depositada y adherida va incrementándose, a la vez
que es modificada por diversos factores, que se ana- 4.1.1 El viento
lizarán a continuación: agentes climáticos: caracteres El viento ejerce una influencia clara en la disper-
de los materiales; y composición de las fachadas. Todo sión y transporte de las emisiones de productos con-
ello conduce a la constitución de pátinas de ensucia- taminantes, siendo su carácter beneficioso en rela-
miento, características y distintas para cada fachada, ción a las áreas cercanas a las fuentes de emisión.
si bien pueden simplificarse mediante modelos o ti- Puede ser negativo al actuar como vehículo capaz
pos genéricos, con objeto de permitir su análisis em- de exponer a los efectos de la contaminación otras
pírico y poder'extraer conclusiones de cara a la pre- áreas incluso muy alejadas y no responsables de di-
vención del fenómeno o a la toma de decisiones en la chos vertidos.
selección de métodos de limpieza. Allí donde el viento no actúa directamente, puede
acceder a través de turbulencias o masas desviadas
y rasantes, con una fuerza que dependerá de la velo-
cidad del viento y de la altura sobre el nivel del suelo.
4. Factores que influyen en el Esta acción indirecta puede arrastrar parte de las par-
ensuciamiento tículas más gruesas, solamente sedimentadas, o de
El fenómeno de acumulación de suciedad sobre las más pequeñas, por transferencia en régimen tur-
las fachadas es, sin duda, un hecho general e inevi- bulento. (Fig. 2)
table que sucede incluso en áreas aisladas y núcleos El efecto abrasivo o de limpieza en seco por el vien-
rurales con bajos índices de contaminación por gases to tiene una importancia relativa. Suele ser mayor en
y humos negros. Sin embargo, ello no significa que las partes más expuestas de la fachada, como esqui-
ocurra de igual manera por doquier y cualquiera que nas laterales o en la parte superior próxima a la cor-
sea la fachada en cuestión. No se trata de un fenó- nisa; también cuando la capa exterior de revestimiento
meno regido por estrictas leyes deterministas que con- se halla suficientemente alterada, como en la caolini-
duce siempre a los mismos resultados. zación de feldespatos, para permitir el arrastre apre-
Esta variabilidad radica, más que en el grado o ti- ciable de material.
po de contaminación que no deja de ser muy impor- Sin embargo, en las partes bajas de fachada, con
tante, en aquellos otros aspectos que, sin intervenir viento incidente de menor intensidad y desviado en
directamente en los mecanismos del ensuciamiento, torbellinos rasantes, así como en las partes abrigadas
son, sin embargo, capaces de influirlo y, a veces, de- por salientes u obstáculos, junto a las que aparecen
terminarlo con tal intensidad que los efectos lesivos zonas de remanso, la fuerza de abrasión disminuye
pueden alejarse mucho de las expectativas, o se pre- considerablemente, pasando a ser superior la tasa de
sentan con enorme disparidad en edificios muy cer- deposición. La pátina, en estas partes, irá aumentan-
canos y bajo semejantes índices de contaminación do lentamente si la acción del viento no es reforzada
por humos negros. por el lavado ocasionado por la lluvia.
Los factores que intervienen en la conformación La contribución del viento a la dispersión de con-
y desarrollo de las pátinas de ensuciamiento pueden taminantes se ha relacionado estrechamente con el
clasificarse en tres bloques relativos al medio mi- nivel de partículas en suspensión procedentes del trá-
era-climático que envuelve las fachadas, a la natura- fico rodado urbano, que sucede en superficie y está,
leza de los materiales de revestimiento, y a los ca- por consiguiente, menos sujeto a la influencia del vien-
racteres compositivos de los cerramientos. La to de cierta intensidad, si bien el mismo tráfico causa
incidencia de cada grupo en la evolución del proce- turbulencias de aire capaces de remover y elevar, en
so resulta difícil de cuantificar. Algunos estudios lle- alguna medida, los flujos de contaminación. Cobran
vados a cabo sobre áreas urbanas concretas [11] bastante más importancia las configuraciones urba-
permiten afirmar que los caracteres compositivos y nas en que se favorecen y dificultan dichas turbulen-
constructivos de las fachadas son fundamentales pa- cias y las corrientes de aire embocadas por las calles,
ra determinar la mayor o menor gravedad de las le- influyendo poderosamente la orientación a los vien-
siones, desde una perspectiva exclusivamente vi- tos dominantes y reinantes.
sual, por delante de otras variables como el mismo Conviene recordar, de todos modos, la contribu-
nivel de contaminación, o los factores de exposición ción de las calderas de combustión que vierten a ni-
y protección, ligados al clima y a la estructura urba- vel de cubiertas o superior, pero en que el tamaño de
na del enclave analizado. partículas y otros aspectos adicionales, como nieblas
capitulo H Patología e intervención en cerramientos y acabados

4.1.2 La lluvia batiente


La cantidad de agua de lluvia que logra alcanzar la
II superficie de una fachada es menos de la mitad de la
teórica que atraviesa una sección de aire de similar
tamaño [4]. Ello indica que más de la mitad de ese to-
tal se pierde fuera de su alcance, debido a las des-
viaciones de las trayectorias de las gotas provocadas
por el flujo de viento en su intento de rebasar el obs-
táculo. Esto ocurre en los casos de fachadas exentas
y viento ortogonal; las situaciones de hecho deben
ser, por fuerza, menos favorables, en el sentido de que
será aún menor la lluvia que bate la fachada.
La lluvia golpea principalmente la parte superior de
la fachada, así como los bordes laterales, si es exen-
ta. Esto sucede con bastante independencia de la in-
0.5 10 tensidad del fenómeno lluvioso, tal como se aprecia
VELOCIDAD OÍL VIENTO — en la figura 3.
V
La lluvia, impulsada por el viento, es afectada cuan-
2. Modelo de flujo de viento dirigido contra un obstá-
culo longitudinal de ángulos rectos. Distribución de la
do encuentra zonas de viento de diferente velocidad
velocidad para un terreno edificado. o dirección; su acomodación a la nueva situación es
casi imposible al tropezar con pequeños obstáculos,
como elementos saledizos de la fachada, viéndose
o inversiones térmicas, conducen a una deposi- abocada a chocar contra ellos y produciendo así un
ción gravitatoria casi inmediata, salvo que las emisio- buen lavado. Si encuentra un obstáculo del rango de
nes se produzcan con vientos de intensidad media un edificio, y en situación favorable, tendrá más tiem-
o alta, cuya frecuencia global no alcanza el 30% de la po de desviarse acompañando las trayectorias del
total. viento, si bien difícilmente alcanza desviaciones su-
La acción que desarrolla el viento, aislado o aso- periores a 2 metros en vertical (contra la gravedad) y
ciado con el agua, se encuentra muy relacionada con 4 en horizontal, pudiendo rebasar mejor dichos ce-
el perfil del terreno en el área metropolitana, cuya mor- rramientos.
fología es determinante del comportamiento de los En las partes inferiores de las fachadas las tra-
flujos de aire, sabiendo que los edificios actúan de yectorias de la lluvia son casi paralelas, es decir, ver-
pantalla interpuesta entre otros, lo mismo que un fren- ticales, por lo cual resulta muy difícil el lavado de los
te de calle sobre el opuesto. Con independencia de paños verticales por el agua de lluvia batiente.
que las corrientes dominantes pueden operar en rea- El factor de exposición es el parámetro fundamental
lidad oblicuamente (que sería la circunstancia más ge- en la valoración de la acción del par lluvia-viento. Se
neral) o, incluso, paralelamente, como sucede en aque- obtiene como suma de los productos de la velocidad
llas calles que son auténticas tuberías conductoras de del viento por la cantidad o altura de lluvia caída, pa-
las corrientes de aire. ra cada dirección considerada. Teniendo en cuenta
que, para una determinada orientación de fachada flu-
Dicha situación debe ser contemplada también.
ye sobre ella viento de componente perpendicular, al
Y ante la imposibilidad de analizar el flujo mismo del
que hay que sumar las incidencias de las seis direc-
aire, dado su carácter y la dificultad de medirlo, se
ciones correlativas que tienen componente en dicha
recurre a la simplificación de considerar cada fachada
dirección y que, por consiguiente, se obtendrán mul-
como un caso particular y suponer que a ella acce-
tiplicando el valor de velocidad ortogonal por los co-
de una cierta cantidad de flujo controlada por el efec-
senos de 22,5°, 45° y 77,5°. [6]
to de abrigo de los edificios enfrentados, y c u a l i f i -
Durante medio año, que en nuestras latitudes abar-
cado mediante un factor de protección, corrector de
ca generalmente las estaciones de primavera y vera-
la magnitud del viento que accedería normalmente
no, las fachadas son lavadas por agua de lluvia ba-
si el edificio estuviera totalmente aislado. Y que pue-
tiente y escurrida, mientras que durante el resto del
de adoptar diversos grados según que la fachada
año la acción de limpieza correrá a cargo casi exclu-
esté muy protegida, medianamente protegida, o des-
sivamente de la escorrentía que. por idénticas razo-
protegida.
nes, estará dotada de menor velocidad, pues el apor-
Tema 7. Ensuciamiento físico de tachadas Limpieza y prevención

212 La lluvia capaz de escurrir por la fachada lo hace


en forma de fina lámina o película (4), muy sensible a
las irregularidades del paramento, y con baja veloci-
dad, siendo durante su trayectoria descendente ab-
sorbida continuamente por el material de revestimiento
y su capa de suciedad. Las condiciones para la ab-
sorción y la formación de escorrentía, así como los
lapsos en que se producen esos fenómenos, pueden
averiguarse a través del factor de absorción y expe-
rimentalmente, según se describe en el gráfico de la
figura 5.
Una porción de las partículas de suciedad 'exis-
tentes sobre la fachada o aportadas por la lluvia, pe-
netra en la porosidad abierta con el agua absorbida
3. Actuación del par viento/lluvia sobre edificios con diferente o succionada, se haya o no formado ya la lámina dis-
grado de protección. currente, permaneciendo el resto adheridas, o sien-
do arrastradas por la escorrentía.
te es lento, continuo y poco intenso. Sin embargo, es- El agua deslizante produce una ligera erosión fi-
to no debería oponerse a que los arrastres y erosio- sicoquímica sobre el material, lo que va a favorecer
nes produzcan resultados importantes, ya que la fre- el establecimiento de caminos preferentes. Pero el
cuencia y la magnitud de los lavados suelen predominar efecto fundamental, en relación con el ensuciamien-
sobre las acciones de depósito y adhesión, siempre to, es el de lavado o arrastre parcial o total de las
que la lluvia sea capaz de alcanzar los planos de fa- partículas de suciedad depositadas. El lavado pue-
chadas. de ser sucio o limpio según las condiciones de la su-
La acción de limpieza atmosférica se produce con perficie afectada, así como del agua escurrida que
ocurrencia simultánea de viento en calma y lluvia; o lo produce.
sin lluvia pero con vientos importantes y, evidente- La escorrentía suele separarse en flujos, creados
mente, cuando suceden a la vez ambos fenómenos. sobre trayectorias preferentes por causa de los obs-
Suele haber dos períodos anuales potencialmente pe- táculos y de las rugosidades. Ello contribuye a que, si
ligrosos: final del verano, con bajo volumen de preci- el lavado es sucio, produzca unas marcas, con for-
pitaciones de mediana intensidad, baja velocidad de mas características fácilmente predecibles denomi-
viento y tráfico incrementado por los retornos de va- nadas escorreduras. (Fig.6)
caciones y reanudación de actividades. También el Otra consecuencia de la escorrentía es la de re-
comienzo del invierno, en que se incrementa el volu- distribución de la suciedad al depositar nuevamente
men de contaminación debida a la combustión de cal- las partículas arrastradas conforme va siendo absor-
deras de calefacción, y que se reparte en etapas ci- bida y, especialmente, sobre las trayectorias prefe-
clónicas con alta pluviosidad de baja intensidad y rentes.
viento medio, en las que funciona un adecuado sa- En nuestras latitudes, para situaciones de viento
neamiento, y en etapas anticiclónicas, muchas veces en calma o de muy poca importancia (0 a 1m/s), las
coincidentes con nieblas persistentes e inversiones precipitaciones de lluvia serán verticales o muy poco
térmicas carentes de lluvia y viento, y muy activas en inclinadas, por lo que su efecto básico será el sanea-
cuanto a la tasa de deposición y adhesión, por el in- miento atmosférico realizado prioritariamente en in-
cremento de la humedad relativa y las condensacio- vierno y primavera, en que se concentran las lluvias
nes. (Fig. 4) aunque sean las de menor intensidad. Otra conse-
cuencia de ese tipo de lluvias es el lavado casi exclu-
4.1.3 La lluvia escurrida sivo de las superficies horizontales que se encuentran
El agua batiente que accede a las fachadas en saledizo o en retranqueo de poca magnitud (por
durante la lluvia rebota hacia ei exterior o, lo que ejemplo, alféizares, impostas, etc.), independiente-
es normal, queda atrapada por la superficie, mente del lavado producido por el escurrimiento del
siendo parcialmente absorbida por capilaridad y ad- agua acumulada en dichas plataformas.
sorción. Al saturarse el material, o en determinadas En verano y comienzos del otoño las precipitacio-
circunstancias, el agua restante comienza a desli- nes son muy poco frecuentes pero más intensas, re-
zarse. sultando entonces limitada su acción de lavado.
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

4.1.4 La temperatura 213


La influencia de la temperatura es generalmente
beneficiosa en relación con la contaminación y, por
tanto, con el proceso de ensuciamiento. Su acción
fundamental, en los casos de situación atmosférica
normal, es la dispersión y dilución de las efusiones
contaminantes.
La excepción radica en las coyunturas en que tie-
nen lugar fenómenos de inversión térmica que impi-
den dicha acción de saneamiento cuando los efluen-
' • c r o a ot . , — -
raCCUtlCl» CK lUfWa ra) tes vierten las masas gaseosas por debajo de la capa
O«>riC*3 0€ LWVU ,»|
«(1000*0 « I C H A de inversión.
DÍLVIÉNIO (VI
La temperatura favorece el aumento de la presión
de saturación del aire que rodea las fachadas o, lo que
es lo mismo, reduce la humedad relativa y, con ello,
el riesgo de condensación que contribuye a multipli-
car el número de partículas que pueden acceder a la
superficie de los paramentos.
Menos clara es su influencia en la modificación
de la tasa de agua de lluvia que se deposita sobre
las fachadas y su consiguiente deslizamiento hasta
la absorción total, si bien, en cualquier caso, hay que
convenir en que debe reducir la masa de agua
absorbida por la porosidad del material y que, a tra-
vés del proceso de evaporación, se opone de nue-
ni»ef A: factor de cipos. > 9 • fachada mu* aipuesta. vo al flujo de deposición de las partículas sucias de
fii»«l B. i-. • I • 1 ae = fachada aapwcsta,
nival C: factor 6 ¿ f a 3 = medianamente eipueita; mayor tamaño.
nival D: factor menor Que 3 = fachada poco eipuesta

4. 4.1.5 El vapor de agua


La existencia de una humedad relativa elevada o
de nieblas más o menos persistentes, parece condu-
cir a un incremento notable de la deposición y adhe-
sión de las partículas y, por ello, del ensuciamiento de
los materiales porosos poco expuestos al azote del
agua-viento.
En esas condiciones, adquieren una pátina de en-
negrecimiento más acusada que en situaciones de
& £ &
5
í! ooe"ído .n'l. :,::ir
a v e
menor contenido de humedad del aire, para las mis-
mas condiciones de exposición y tasa de generación
20- de contaminación. Esto puede comprobarse fácilmente
sin más que comparar la situación de las fachadas de
ciudades de la cornisa cantábrica, en relación con
otras de zonas del interior o del sur. Valores persis-
tentes superiores al 65% de humedad relativa co-
mienzan a ser decisivos al respecto.
La distribución de presiones de vapor se acomo-
da a la evolución de las temperaturas medias. Su re-
lación con el sentido de la difusión de vapor es im-
.i e s c o r r e n t i » « . . c a n z a r á
c o n v a l o r i n f e r i o r al de
portante; pero como además interviene la presión de
vapor en el interior de los edificios y en la solución
constructiva de los cerramientos, el resultado de eva-
5 Influencia del coeficiente de absorción del material de una ta poración y condensación puede ser considerado
chada sobre el fluio de agua escurrida que resulta de lluvias ba-
aleatorio.
tientes de distintos tipos y frecuencias 4.
Tema 7. Ensuciamiento físico de fachadas. Limpieza yprevención

Sin embargo, parece aceptarse como norma ge- con las rocas sedimentarias y todos los pétreos arti-
neral la preponderancia de los valores de humedad ficiales. La capacidad de succión capilar de un mate-
relativa, con la conclusión de que en invierno se acu- rial homogéneamente poroso y con un contenido cons-
sa la tendencia a la condensación que favorece la de- tante de humedad define la cantidad de agua
posición/adhesión, mientras que la evaporación lo es succionada por unidad de superficie (G), como fun-
en los meses centrales del año, oponiéndose teórica- 2
ción del tiempo (t) según la relación: G = C.t" en que
mente al ensuciamiento o, al menos, dificultándolo. C es la constante capilar, que varía considerablemente
En otro orden de cosas, la abundancia de vapor para diferentes materiales. [4]
de agua en la atmósfera, coincidente con las nieblas
persistentes, genera una elevada tasa de nucleación MATERIAL DURACION DE LA ABSORCION (seg)
de partículas de polvo que, a su vez, incrementan la
facilidad de condensación del vapor y su sedimenta- Hormigón: superficie de recubrimiento vibrado 90
ción en las lluvias inapreciables con origen en las mis- Hormigón: superficie de una zona de rotura 14
mas nieblas. Enfoscado de mortero de cemento 2a5
Ladrillo caravista 11
4.2 Factores relativos a los caracteres de los Ladrillo moldeado manualmente 2
Ladrillo esmaltado 1.737
materiales
Ladrillo impregnado con silicona diluida > 3.600
4.2.1 La porosidad Ladrillo sílicocalcáreo 6a8
El agua de lluvia que incide sobre los paramentos Pintura en dispersión de 300u sobre
de fachadas puede penetrar en el seno de la porosi- enfoscado 302
dad abierta, en una cierta magnitud, dependiendo del Pintura mineral sobre enfoscado 6
índice de absorción de agua. Para ello es fundamen- Pintura a la silicona de 40u sobre hormigón > 3.600
tal la existencia de macroporos, oquedades y defec-
tos de formación del material como son las fisuracio- La influencia de la porosidad sobre el ensucia-
nes de la capa superficial. (Fig. 7) miento es doble:
La absorción de agua más importante es, sin du- - Interviene directamente en formación del agua
da la succión o absorción por los poros capilares, ca- de escorrentía, importante en el lavado indirecto y la
racterísticos délos materiales en cuya formación han redistribución de la suciedad. La porosidad, medida
intervenido fenómenos de desecación, como sucede a través del factor capilar, permite, según los resulta-

agua que escurre por la fachada (2). 7. Abertura de porosidad al exterior (6).
capitulo II, Patología e intervención en cerramientos y acabados

dos de las experiencias suecas sobre hormigones, El reforzamiento de la percepción está influido por
predecir el momento de aparición de la lámina el grado de uniformidad de las suciedades arraigadas,
discurrente, así como la extensión de su trayectoria. aumentando conforme disminuyen éstas.
(Fig. 5) El color constituye un medio de enmascaramiento
- Contribuye al desarrollo de la pátina de sucie- de la suciedad, si bien no debe utilizarse de manera
dad a causa de la penetración de las partículas en el aislada, sino en relación al resto de características del
seno de los poros, alveolares o capilares, colmatán- material que son las que inducen directamente la vi-
dolos o adheriéndose en las proximidades de las em- rulencia de la pátina.
bocaduras, lo que puede reforzar la intensidad de la Otros medios colaterales de enmascaramiento, pe-
suciedad, además de otros efectos secundarios co- ro relacionados con el contraste entre el fondo y la su-
mo la posible modificación del grado de impermeabi- ciedad, son el dibujo y algunas formas artificiales de
lidad de la superficie. Es importante la elevada poro- texturación o supratexturación.
sidad inducida en la capa de alteración química de la
superficie de ciertas rocas naturales, que multiplica la 4.2.4 Las propiedades eléctricas
magnitud de la suciedad ya encapsulada. Son difíciles de valorar pues dependen no sola-
mente de su estructura atómica y de la existencia de
4.2.2 La rugosidad (textura superficial) ionización, portadores de carga, etc., sino también de
Considero tres tipos de texturas del material ca- las características eléctricas correlativas de las partí-
racterizadas tanto por el tamaño de las asperezas co- culas de suciedad, como ya se adelantó, así como de
mo por su respuesta a la deposición y adhesión de las las del aire circundante. Por lo general, los materiales
partículas de contaminación y a la distribución del pétreos naturales y los artificiales con estructuras de
agua de lluvia escurrida [11]. La textura rugosa, as- enlaces de tipo covalente o iónico, son menos sensi-
perezas de tamaño superior a 1 mm, más sensible al bles a los fenómenos de atracción y conducción eléc-
desarrollo de la pátina pero que suele facilitar un la- trica que los que poseen enlaces metálicos o secun-
vado más regular. darios y que los no cristalinos o moleculares; tal es el
La lisa, con asperezas de tamaño comprendido en- caso de los metales, plásticos, madera y derivados
tre 0,01 y 1 mm, cuya situación intermedia respecto orgánicos.
de ambas acciones la hace muy dependiente, en su De cualquier manera, debe admitirse un porcenta-
comportamiento, del tipo de exposición a que se ha- je pequeño de partículas que son captadas y se man-
lle sometida la fachada. Y la textura pulimentada, muy tienen adheridas por tensiones electrostáticas, por
favorable para cualquier situación. energías libres de borde de grano y superficie libre de
Las diferentes texturas de los materiales, conside- los materiales de soporte, etc.
rados individualmente o en sus asociaciones más fre- Uno de los procedimientos más sencillos para mo-
cuentes se encuentran muy ligadas a los procesos de dificar el comportamiento de los materiales de reves-
formación o elaboración, a los tratamientos de aca- timiento frente a la adhesión de partículas sucias por
bado superficial y al modo de colocación en la fa- mecanismos electrostáticos, consiste en la alteración
chada. Se distinguen claramente las fábricas de pe- de la rugosidad del material. Para reducir la fuerza de
queñas piezas o de grandes bloques; los chapados adherencia es preciso disminuir la superficie de con-
con trama de rejuntados muy cerrada; los sistemas tacto que es donde se forma la doble capa de cargas
prefabricados con juntas más dispersas; y, por último, eléctricas de signos opuestos. Para ello se requiere la
los materiales que se extienden de manera continua. creación de una pequeñísima rugosidad tapizando el
Las asociaciones de tipos diferentes de materia- soporte, acorde con la naturaleza y tamaños de las
les tienen especial relevancia ya que permiten la uti- partículas, para así reducir la concentración de cargas.
lización selectiva de los materiales más eficaces fren- Por el contrario, tratamientos texturales como el
te al ensuciamiento en aquellos lugares donde se pulimento, al disminuir enormemente la rugosidad,
prevén circunstancias desfavorables, principalmente confieren una mayor superficie para la formación de
los lavados diferenciales. la doble capa de atracción electrostática, por lo que
la disminución de ensuciamiento por eliminación de
4.2.3 El color las asperezas, se halla parcialmente compensada con
La intensidad con que se perciben las lesiones en el incremento de adhesión de la suciedad por las fuer-
las fachadas es directamente proporcional al contraste zas eléctricas.
de color y tonalidad entre los materiales de revesti- Conviene recordar que el comportamiento eléctri-
miento y la pátina de suciedad. co de los materiales de revestimiento se modifica con
Tema 7. Ensuciamiento físico de fachadas Limpieza y prevención

la existencia de humedad situada entre la partícula y


el soporte, que impide la aparición de tensiones eléc-
tricas de adherencia [6].

4.2.5 Dureza
La dureza del material interviene pasivamente en
el proceso de ensuciamiento, a través de los tipos de
choques de las partículas de suciedad, que causan el
que éstas reboten hacia el exterior o bien queden atra-
padas sobre la superficie del material, según el ba-
lance de las energías de incidencia y de rechazo, así
como del tamaño de las partículas.
Tanto como la dureza intrínseca del material influ-
ye la rugosidad y porosidad abierta de su superficie,
modificando la fenomenología de los choques.
También se producen las mismas situaciones con
el choque de las gotas del agua de lluvia contra los
paramentos, pudiendo ser o no captadas por el ma-
terial de soporte, siendo inmediatamente absorbidas
por él, o constituyendo el flujo discurrente.

4.3 Factores relativos a la organización de las


A lAf(»>U A IHONtAl A.POS'FfliO B

fachadas

4.3.1 Formas y proporciones de las fachadas 8. Trayectoria e isóbaras del viento actuando en régimen de ca-
La influencia de la forma en el comportamiento de pa límite sobre un edificio esbelto exento (19).
las fachadas ante el ensuciamiento es poco conoci-
da, seguramente porque la escasez de ejemplos de Lo que permite averiguar la influencia de la forma,
tipos alejados de la corriente forma rectangular, la con- es la distribución de las líneas de flujo de aire que en-
vierten en poco relevante. Dicha forma rectangular, cuentra en su camino al edificio, así como la distribu-
poco aerodinámica, ha sido la más analizada, en com- ción de los gradientes de presión (y succión) ejerci-
binación con las proporciones en los experimentos dos sobre la superficie de las fachadas. Con ello
sobre modelos y en túneles de viento. podrán predecirse los transportes de partículas ha-
Las proporciones de las fachadas afectan direc- cia los paramentos, así como la acción de limpieza
tamente al modo de incidencia del viento que se acer- debida al simple impulso del aire. Lo mismo cabe de-
ca hacia ellas, en régimen de franja límite, es decir de cir para el agua de lluvia, por su estrecha relación con
gradiente de velocidad debido al rozamiento con los el tipo de acción del viento.
obstáculos, modificando sus trayectorias para tratar
de esquivarlo. La proporción definirá la magnitud de 4.3.2 Composición general de la fachada
las zonas que recibirán un potencial lavado. La composición general de la fachada resulta vital
En los edificios exentos, pero en general en todos, para predecir el resultado de las acciones de ensu-
el efecto de la protección o abrigo por otros obstácu- ciamiento y lavado que ocurren sobre ella. El tamaño
los, supone la disminución de la presión dinámica en y la disposición de los planos de fábrica y los de acris-
coronación, acumulándose las líneas de flujo en una talamiento suponen unas implicaciones claramente
banda más estrecha junto al borde, y un consiguien- definidas sobre los modelos resultantes.
te aumento de la zona de remolino de presión inferior Quizás el aspecto más importante sea el referente
y constante. Las mismas consideraciones serían apli- a la inclinación de los planos: efectivamente, si la in-
cables a las fachadas posterior y laterales. (Fig. 8) clinación es con la horizontal, influirá decisivamente
La manera en que las fachadas se ensucian pare- en la cantidad de partículas que se depositen por me-
ce claramente relacionada con sus proporciones a la canismos gravitatorios, a la vez que determinará la
vez que con su nivel de exposición, dependiente tan- cantidad de agua de lluvia directa que puede alcan-
to de la orientación frente a las corrientes de aire, co- zar esos planos. Pero, además, las implicaciones se
mo a la protección antes mencionada. extienden a la acción del agua escurrida, pues dichos
capitulo II Patología e intervención en cerramientos y acabados

planos inclinados no se hallan aislados, sino que son


precedidos y seguidos por otros, con los que forman
ciertos ángulos diedros, o bien constituyen superfi-
cies curvas, afectando al tipo de lavado y a la forma-
ción de manchas aisladas de suciedad. (Fig. 9)
Si la inclinación de los planos es con la vertical,
los efectos inducidos se relacionan con la orientación,
exposición y abrigo, surgiendo también los diedros
verticales capaces de modificar el volumen y forma
de las trayectorias de la escorrentía según se trate de
rincones o esquinas. (Fig. 10)
El segundo factor compositivo que afecta a la for-
mación de las suciedades es la disposición relativa de
los planos macizos, es decir su colocación en un pla-
no único general, o la aparición de unos planos avan-
zados o volados, esto es, situados a desnivel. Ello se-
rá fuente de efectos inducidos de abrigo, lavado y los
derivados de la aparición de diedros verticales y los
consiguientes efectos de arista y de rincón. Las posi-
bilidades de solucionar las fachadas con lienzos no
coplanarios son amplías, lo mismo que los modelos
de ensuciamiento resultantes. Como casos particula-
res se citan los de balcones y miradores exentos.
Por último, cabe constatar la influencia que ejer-
cen las diversas formas posibles de los huecos en la
formación de las suciedades. No obstante, este fac-
9. Desplazamiento del agua escurrida según la inclinación de
tor ha de considerarse forzosamente menor, si se com- los planos.
para con los analizados hasta el momento, siendo su
actuación un aporte más al conjunto de fenómenos textura que, si es continua en toda la fachada o en
implicados en el proceso global. grandes paños, opera distribuyendo uniformemente
el agua de lluvia escurrida. Si esta es suficiente, el la-
4.3.3 Relieve general de la fachada vado general será aceptable y beneficioso. (Fig. 12)
Los principales componentes de la textura super- La misma composición ornamental sirve, en cier-
ficial de las fachadas son: a) ornamentos, como los tos casos, como factor de enmascaramiento de la pá-
estriados y relieves, sobresalientes o rehundidos; b) tina de suciedad y de lavados irregulares débiles, al
juntas, de fábrica, de montaje o funcionales; c) sin- crear unos efectos visuales de luz y sombra, de raya-
gulares decorativos o drenajes, como impostas, cor- do o dibujo que resultan dominantes sobre la apa-
nisas, vierteaguas y gárgolas. riencia de las suciedades.
Todos los elementos componentes del relieve ge-
neral de la fachada, al suponer discontinuidades so-
bre la lisura de un paramento, constituyen fuentes 5. Ensuciamiento biológico
de acumulación de suciedad, proporcionando pla-
taformas más o menos grandes y frecuentemente Partiendo de la base de que la suciedad de origen
abrigadas. orgánico o biológico se deposita y desarrolla a la par
Aparte de la acumulación de suciedad, las dis- que la inorgánica y es, con frecuencia, enmascarada
continuidades son capaces de acumular agua de por ésta, cabe analizar brevemente ciertos aspectos
lluvia directa que es inmediatamente arrojada hacia las peculiares de las pátinas afectadas por la prolifera-
superficies inmediatas inferiores. En ciertas condicio- ción de organismos vivos que, en algunos casos, lle-
nes dichos vertidos pueden ser muy sucios y desta- gan a formar especies vegetales muy desarrolladas.
cados o bien pueden lavar irregularmente otros planos
menos limpios, ambos efectos no deseados. (Fig. 11) 5.1 Naturaleza y origen de las partículas vivas
Entre las consecuencias positivas cabe destacar
también dos: la primera seria la de crear una macro- El aerosol atmosférico contiene [17], hasta gran-
Tema 7. Ensuciamiento tísico de tachadas. Lmoieza y orevenoon

218 esporas resistentes al calor. Suelen ser sulfooxidan-


tes y heterótropas, pudiendo desarrollarse sobre subs-
trato mineral u orgánico.
- Algas: microscópicas, en forma de cistos o es-
poras menores de una miera, proceden del suelo del
que son arrastradas y transportadas por el viento, en
concentraciones muy variables. Las más comunes en
nuestras latitudes son las de tipo verde o aaui, autó-
tropas. proliferan en substratos exclusivamente inor-
gánicos y en zonas poco iluminadas. Suelen ser muy
resistentes a la sequedad.
- Hongos: están presentes en el suelo y el polvo;
proceden con frecuencia de esporas arrastradas por
10 a) Situación sobre planos curvos verticales cón-
cavos y convexos. el viento a largas distancias, permaneciendo estables
hasta 45 m de altura en concentraciones variables pe-
ro muy superiores en verano. Poseen tamaños que
oscilan entre 3 y 100 mieras, similar al del polen. Son
organismos heterótropos que se desarrollan en subs-
tratos minerales con presencia de materia orgánica.
- Liqúenes: aparecen en substratos muy conta-
minados, como organismos procedentes de la aso-
ciación simbiótica de ciertas algas y hongos.
- Plantas: en condiciones adecuadas y con pá-
tinas de suciedad avanzadas pueden proliferar otros
tipos de plantas, como musgo o verdín, heléchos, e
incluso especies más desarrolladas que aprovechan
b) Modificación del lavado por efecto del rozamiento del agua para su arraigo las zonas degradadas de los subs-
escurrida: efectos de arista y rincón. Parábolas de suciedad c a - tratos minerales y las juntas de mortero de las fábri-
racterísticas de fachadas de edificaciones externas. cas.

des alturas, partículas vivas o microorganismos, co- 5.2 Adhesión y desarrollo de la suciedad
mo bacterias, algas y hongos, en forma de fragmen- biológica
tos o esporas; granos de polen; células animales, co-
mo amebas y protozoos; e, incluso, algunos tipos de Los mecanismos de adhesión de los microorganis-
insectos. mos a los soportes de fachada son todavía poco co-
Dichos microorganismos pueden hallarse aislados, nocidos, pero se suponen de los tipos siguientes: [17]
agrupados en grandes partículas, y también adheri- - Enlaces de naturaleza electrostática.
dos a otros elementos, como granos de polvo, polen - Existencia higroscópica de vainas musgosas en
y semillas. La presencia o abundancia de estas for- torno a otros microorganismos.
mas elementales vivas depende de la calidad del ai- - Fuerzas de tensión superficial en el soporte.
re, es decir, de su grado de contaminación general, - Existencia de porosidad abierta y de humedad
pudiendo diferenciarse las atmósferas rurales de las en el soporte.
urbanas y, dentro de éstas, las muy o poco contami- El ensuciamiento biológico se acomoda a las pá-
nadas. tinas de ensuciamiento general de las fachadas con
Los principales organismos implicados en los pro- materiales pétreos, como piedra natural y ladrillo, por
cesos de ensuciamiento y degradación de ias facha- lo general más antiguas y deterioradas. Sin embargo
das son: el desarrollo de microorganismos u organismos ve-
Bacterias: tienen su origen en el suelo y en las getales superiores puede suceder en otros materiales
aguas, en especial las fecales o en proceso de depu- que en principio parecen menos sensibles al ensu-
ración. Con tamaños comprendidos entre 0,3 y 15 mi- ciamiento genérico.
eras, se encuentran en atmósferas urbanas, a baja al- Tal es el caso de las fachadas de pizarra, morte-
tura y preferentemente incluidas en gotas de agua. ro, hormigón y fibrocemento: las tejas cerámicas y de
Pueden existir en células aisladas, en colonias, o en hormigón, en que pueden existir bacterias, algas y
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

11. Efectos de la existencia de impostas salientes y remetidas. 12 a) Efectos del estriado sobre el ensuciamiento: c a -
naladuras verticales y horizontales.

11. Efectos de la cornisa e imposta molduradas sobre el ensu- b) Efectos del estriado: molduras verticales y horizon-
ciamiento. tales.

hongos. Ciertos plásticos son sensibles a bacterias y y 4u°C, aunque los hongos y, sobre todo, las algas,
hongos. Las pinturas y capas plásticas y asfálticas de suelen ser muy tolerantes, llegando a resistir tem-
protección son afectadas por hongos. peraturas extremas (>50° o <0°C) en forma de es-
Los mecanismos de adhesión y desarrollo de la poras o cistos. En general se adaptan bien a los ci-
suciedad biológica precisan de algunas condiciones clos ligados a cambios higrotérmicos.
ambientales, en el aire y en el soporte, entre las que - Iluminación: los organismos que realizan la fo-
pueden destacarse: tosíntesis, como musgos, liqúenes, algas y ciertas bac-
- El pH del substrato: dependiendo la prolifera- terias, requieren luz y gas carbónico del aire. Otras,
ción y la agresión de su tolerancia relativa. Si bien exis- como hongos y bacterias no fotosintéticas son, en
ten microorganismos acidófilos y basófilos, pueden teoría, eliminadas por la radiación solar.
actuar en una ancha banda de pH, en función de su
naturaleza y la del soporte.
5.3 Efectos del ensuciamiento biológico
- Humedad: es esencial, aunque sólo inter-
viene de manera indirecta (en los intercambios Las partículas vivas contribuyen al ensuciamiento
gaseosos y en la transferencia de nutrientes). Las de los materiales de fachada, especialmente cuando
condiciones favorables de desarrollo en las facha- son capaces de proliferar y arraigar en los soportes,
das serían las de una presión líquida correspondiente desarrollando un tipo de suciedad capaz de alterar-
a una humedad ambiente próxima a la saturación, los por su sola presencia, pero también por sus for-
pero que puede ser inferior a causa de ciertas dis- mas de vida y porque extraen dei mismo substrato los
torsiones de la H.R. en la capa límite de aire próxi- nutrientes requeridos, a la vez que depositan dese-
ma a la fachada. chos perjudiciales.
- Temperatura: cada especie suele presentar una Los efectos visibles causados por organismos vi-
temperatura ideal para su crecimiento y un interva- vos difieren de los derivados del ensuciamiento por
lo fuera del cual la vida sería teóricamente imposi- humos negros y polvo atmosférico. El de las bacte-
ble. La banda ideal para la mayoría se sitúa entre 25 rias no es perceptible, lo contrario que con algas y
Tema 7. Ensuciamiento tísico de fachadas. Limpieza * prevención

hongos y, desde luego, con otras especies vegetales


superiores.
Es relativamente fácil distinguir la suciedad de ori-
gen biológico porque no deja la típica banda de mu-
gre con flecos debajo de los salientes, es decir en
zonas abrigadas y no lavadas por el agua escurrida.
Por el contrario, se localiza por encima de ellos, ex-
tendiéndose hacia los laterales como mostachos.
(Fig. 13)
El ensuciamiento por hongos se caracteriza por un
desarrollo concéntrico a partir de un punto central, ori-
gen del ataque; mientras que si se trata de suciedad
causada por mezcla de algas y hongos, el desarrollo
presenta forma de reguero cónico, descendiendo des-
de un foco elevado, próximo a borde o cornisa, don-
de el agua deslizante parece el claro vector de pro-
pagación.
Además de los efectos estéticos del ensuciamien-
to, la agresión ejercida por los organismos sobre el
substrato material es variada y considerable: la acti- I3. Ensuciamiento por hongos.

vidad bioquímica de las bacterias causa deterioro de


alvéolos y descamación en piedras naturales y de- brica sin daños derivados del mismo tratamiento. Antes
gradación de hormigones y fibrocementos. de tomar la decisión de limpiar, deberían plantearse y
Las algas pueden asimilar cal para su metabolismo, resolverse las siguientes cuestiones: [3]
utilizando el carbonato calcico resultante de su ataque
a los substratos calcáreos de piedras, morteros y hor- Consideraciones estéticas:
migones. Insertan células que provocan tensiones de - ¿Mejorará la limpieza la apariencia del edificio?
expansión, además de los incrementos de humedad - ¿Cómo se modificará el carácter visual del edi-
debidos a las vainas musgosas que les acompañan. ficio y de qué manera la limpieza descubrirá la arqui-
Los hongos atacan y destruyen las cadenas car- tectura subyacente y el color original o patinado de
bonatadas de pinturas y capas protectoras plásticas, sus materiales?
para extraer carbono libre que asimilan. Los liqúenes - ¿La nueva apariencia será compatible con la
pueden estar simplemente depositados superficial- personalidad histórica adquirida con el paso del tiem-
mente o introducidos varios milímetros en la porosi- po?
dad o las fisuras del material o por ataque químico - ¿Qué influencia tendrá la limpieza en el paisaje
que transforma los carbonatos en sales. urbano de la calle, los edificios adyacentes, la ciudad?
- ¿Cuál será el efecto visual de manchas resi-
duales que revelará la primera limpieza?
- ¿Necesita limpieza toda la fachada o sólo algu-
6. Limpieza de fachadas
nas partes y cómo afectará esto al conjunto?
La limpieza de las fábricas de albañilería es una de - ¿Qué grado de limpieza se pretende?
las técnicas más comunes de conservación de edifi-
cios y, particularmente, de los incluidos en el patri- Consideraciones técnicas:
monio histórico-artístico. Se aborda, sin embargo, des- - ¿Cuál es la naturaleza de los materiales que
graciadamente, con gran ignorancia no exenta de componen la fábrica y la de la suciedad?
irresponsabilidad. Existe un conjunto de cuestiones - ¿Hasta qué punto afecta la suciedad a la dura-
previas a responder antes de adoptar la decisión de bilidad del soporte?
limpieza de los materiales pétreos que constituyen las - ¿Existen áreas donde los efectos son especial-
fábricas de fachada, incluidos los morteros que relle- mente nocivos?
nan las juntas. La limpieza de fachadas es una com- - ¿Cuál sería el efecto de la limpieza total o par-
binación de ciencia y arte cuyo fin es encontrar un cial sobre el futuro y durabilidad de la fábrica?
equilibrio entre la eliminación de la suciedad inde- - ¿Cómo ha afectado la suciedad a las caracte-
seable y la presen/ación del soporte, substrato o fá- rísticas físicas de la fábrica?
capitulo II. Patología e Intervención en cerramientos y acabados

- Tipo de materiales pétreos y no pétreos de la fa-


chada así como la naturaleza de su textura superficial.
- Estado de conservación de materiales y ele-
mentos en las fachadas y en el edificio en general.
- Estado de los morteros de las juntas y su me-
teorización en comparación con el resto de la fábrica.
- Posible existencia de interacción negativa entre
los materiales componentes de las fábricas.
- Posibles intervenciones anteriores de limpieza,
su naturaleza y efectos sobre las fachadas.
- Otros posibles tratamientos aplicados con ante-
rioridad (consolidación, hidrofugación, pintado, etc.)
- Si la meteorización ha producido manchas, apa-
recidas durante anteriores limpiezas.
- Grado de ensuciamiento de origen atmosférico
y posibles técnicas para su limpieza.
- Posibles actuaciones necesarias, complemen-
tarias a la limpieza y su influencia sobre ésta.
13. Ensuciamiento por hongos. - Posibles trabajos previos de consolidación de
las juntas de mortero.
- Análisis de laboratorio necesario para resolver
- ¿Qué tipos y cantidades de sales solubles hay éstas y otras cuestiones; tipo de muestras.
en la costra sucia y a qué profundidad? - Protección necesaria para puertas, ventanas, etc.
- ¿Qué proporción de deterioro puede atribuirse - Protección necesaria para materiales pintados
a la suciedad y a la propia naturaleza de la fábrica? o pulidos adyacentes.
- ¿Existe pátina natural o artificial bajo la sucie- - Tipos de andamios, plataformas y elementos de
dad que no debe ser eliminada? seguridad requeridos y sus dimensiones.
- Proporciones de fachada sana respecto a las - Mínimización del impacto del tratamiento sobre
superficies erosionadas o friables. propietarios, ocupantes y usuarios del edificio.
- Elementos de la fachada afectados: sillares li- - Cumplimiento de las Ordenanzas y de legisla-
sos, cornisas, relieves, etc. y cómo deben tratarse. ción sobre Seguridad e Higiene.
- ¿Qué grado de limpieza podría conseguirse sin
dañar el material? 6.1.2 Ensayos de limpieza in situ
- ¿Qué relación existirá entre limpieza y trata- Antes de la intervención definitiva de limpieza es
mientos de sustitución o consolidación? imprescindible proceder a realizar unos ensayos de
- ¿Existe la alternativa de limpieza parcial como los efectos de distintos procedimientos posibles de
solución aceptable? limpieza sobre zonas de distinto grado de ensucia-
- ¿Hay suficiente presupuesto y especialistas pa- miento, distintos materiales o diferentes elementos
ra un tratamiento efectivo y correcto? compositivos de las fachadas. Para ello se aplican
J
tests de limpieza en áreas de 0,5 a 1 m , sobre paños
no principales del edificio, dado su carácter experi-
6.1 Actuaciones previas
mental, y la eventual decisión final de no proceder a
6.1.1 Inspección e identificación la limpieza. [3]
La primera actuación de un procedimiento de tra- Estos ensayos deben abarcar los distintos tipos
tamiento de limpieza de fachadas debería ser la ins- posibles de suciedades: por contaminación atmosfé-
pección y análisis de los paramentos para estable- rica; biológica; capas de pintura; manchas metálicas;
cer los suficientes y correctos datos de partida pintadas; manchas de otros tratamientos, etc. Los
referentes a la identificación de los materiales com- tests deben evaluarse y documentarse durante varios
ponentes y su estado de conservación, asi como la días, comprobando los efectos de la lluvia y el seca-
naturaleza y grado de incidencia de las suciedades. do. Si bien algunos controles, como eflorescencias o
En esta primera etapa, además de llevar a cabo un nuevo ensuciamiento pueden requerir un año de pla-
reportaje gráfico completo, deberían resolverse cues- zo, por lo general se recomienda un seguimiento de
tiones como: [3j al menos tres a seis semanas.
Tema 7. Ensuciamiento tísico de faenadas Limpieza y prevención

Tras las pruebas, se precisa la conformidad, por 3) Productos y técnicas de limpieza: descripción
escrito, del cliente o propietario del edificio, y del ar- de productos y técnicas recomendados o exigidos.
quitecto conservador o responsable de la interven- 4) Cumplimiento de la normativa (si existe);
ción. Las áreas ensayadas (y su correspondiente do- Ordenanzas; Reglamento de Seguridad e Higiene.
cumentación fotográfica), servirán de referencias a la 5) Andamios: estructura; plataformas de traba-
propiedad y al contratista de la limpieza. Por otra par-
jo; escaleras y montacargas; barandillas y rodapiés,
te, debería incluirse en el Piego una cláusula que con-
etc.
templase la realización de ensayos complementarios
6) Protección: de materiales adyacentes, venta-
para zonas determinadas de la fachada para las que
no son válidas las pruebas previas. nas, entorno y pavimentos; cubrición de la fachada.
7) Mano de obra y supervisión: del trabajo, cua-
A) Tipos de ensayos lificacíón de operarios, subcontratas, especialistas.
- Identificación y cuantificación de sales solubles 8) Equipos: de presión de aire y de agua; de
en el soporte (para métodos de limpieza químicos). proyección de abrasivos; equipos no permitidos.
- Medida del pH del soporte y evaluación de re- 9) Trabajos previos: rascado y reposición del mor-
siduos de limpieza química. tero de juntas; eventual sellado de juntas y grietas.
- Microscopía para análisis petrográfico de las 10) Cláusulas particulares: cambio de especifica-
propiedades y constituyentes del soporte. ciones; trabajos finales: aclarado; consolidación, etc.
- Determinación de la porosidad y la capilaridad.
- Medidas del color, incluyendo tonos, cambios
6.2 Procedimiento de limpieza y diseño del méto-
por limpieza, color original, color de pátina adquirida.
do más adecuado
- Ensayos de limpieza química: petrográficos, fí-
sicos, químicos (contenido de substancias solubles), 6.2.1 Mecanismos de limpieza
a realizar-antes, inmediatamente después y a los do- A) Desprendimiento de la suciedad
ce meses del tratamiento de limpieza. - Acción del agua o del vapor, que, con o sin la
- Ensayos de limpieza con abrasivos: determina- presencia de otro agente activo, ablanda, desprende
ción de alteraciones; aumento de la rugosidad; pérdi- o disuelve las partículas de suciedad, mediante la
da de material del sustrato; resultados de limpieza. creación de una película líquida que rebaja la fuerza
- Ensayos sobre arenisca, similares a los realiza- de adhesión de aquellas con el substrato. -
dos para limpieza química. - Disolución del soporte: de la piel de los mate-
riales destruyendo la interfase donde suceden los fe-
6.1.3 Especificaciones del pliego de nómenos de adhesión y encolado: el tipo de acción
condiciones que ejercen los ácidos utilizados en la limpieza.
Hay que convencerse de la capacidad de un buen - Disolución de los productos que cementan las
Pliego de Condiciones para conseguir un tratamiento partículas de suciedad, cuyo representante principal
de limpieza satisfactorio. Para ello, dicho Pliego de- es el yeso (sulfato calcico bihidratado), procedente de
be plantear un equilibrio entre exigencias técnicas que la reacción del anhídrido sulfúrico con la humedad
garanticen la fiabilidad de los trabajos (incluyendo es- ambiente y la cal libre de los soportes.
trictos controles y eliminando márgenes de desviación - Acciones mecánicas, como la abrasión seca o
o ajuste en la calidad), y las estipulaciones que otor- húmeda, el amolado, cepillado, etc., que desprenden
gan confianza y reconocen la capacidad de empresas la suciedad por efecto de la fuerza de rozamiento que,
cualificadas y con reconocida experiencia en ese cam- a su vez, puede erosionar la cohesión de los compo-
po profesional. nentes del material de base.
Un Pliego tipo, para limpieza de un edificio histó- - Saponificación de las grasas: reacciones quí-
rico, debería contener los siguientes apartados: micas inducidas por ácidos y álcalis al entrar en con-
1) Requisitos generales: alcance del tratamien- tacto con substancias grasas o bituminosas.
to; materiales de fachada y sus limitaciones.
2) Grado de limpieza: descripción según mé- B) Evacuación de la suciedad:
todos; ensayos de referencia a realizar por el con- - Transporte de las partículas desprendidas de la
tratista. superficie mediante aire o agua como vehículos más
capituiO II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

importantes. A veces, arranque y transporte pueden disolverlos sino, como ya se ha apuntado, mediante
obtenerse simultáneamente. En otras ocasiones se reblandecimiento, gelificación y arrastre de la sucie-
utilizan productos que extraen y acumulan en su in- dad encapsulada por agua a baja presión.
terior la suciedad desprendida.

6.3 Selección del procedimiento de limpieza


6.2.2 Método de limpieza ideal
Conviene recordar que no existen métodos intrín- Antes de tomar decisiones, y a la vista de las po-
sicamente correctos o incorrectos, sino bien o mal sibles opciones del mercado, conviene adoptar pre-
aplicados; y aptos o no aptos, dependiendo del tipo cauciones sobre los siguientes extremos:
de material, su estado de conservación, situación de - Desconfiar de los productos maravillosos y vá-
la fachada y coste de la aplicación. Debe admitirse que lidos para cualquier situación; y de la propaganda
todos los procedimientos de limpieza de grandes su- comercial de técnicas que evitan tener que recono-
perficies son abrasivos en mayor o menor medida, no cer el soporte, su estado, componentes y ensucia-
existiendo ninguno que no lo sea en absoluto. Por ello miento.
es aconsejable proteger la piel que espontáneamente - Las demostraciones no son significativas por dos
adquiere el material, como defensa, una vez elabora- razones: pueden fracasar (o dañar) con otras facha-
do y expuesto a la intemperie, y antes de que la de- das y tipos de suciedades; y porque los obreros ac-
posición de la contaminación sea irreversible o costo- túan con distinta motivación que en obra real.
sa de eliminar. Por otro lado, siempre existe un límite - No tiene sentido experimentar sobre fachadas his-
en el grado de limpieza posible cuando la pátina de tóricas o monumentales. Además, si la suciedad ha es-
ensuciamiento es más dura que el material que le sir- perado uno o varios siglos, bien puede soportar algu-
ve de soporte. Un procedimiento ideal de limpieza se- nos meses más hasta encontrar la técnica correcta.
ría el que tuviera la máxima eficacia al menor coste pe- - No debe desecharse un método por haber co-
ro, sobre todo, que fuera respetuoso con los materiales sechado uno o dos fracasos, aunque sean importan-
y con el entorno. Los requisitos serían los siguientes: tes, si en general ha dado resultados aceptables. Cada
- No abrasivo, o lo mínimo que permita evitar el fachada es un caso particular y así debe abordarse.
desgaste de la piel natural de los materiales, mante-
niendo invariables su volumen, porosidad y coeficiente 6.3.1 Criterios de selección
de saturación. - El procedimiento no debe causar daños direc-
- Debe ejercer una acción superficial, minimizan- tos o indirectos a las superficies afectadas.
do la penetración de agua y demás productos activos - La técnica debe presevar, sobre todo en la pie-
al interior de los materiales porosos. dra, la pátina o color original inherente.
- Debe evitar al máximo la disolución de la cos- - La técnica no debe generar o depositar pro-
tra de suciedad, para impedir su transporte en forma ductos residuales, como sales solubles, que perma-
de sales al interior de la porosidad. Es preferible una nezcan en el material. Debe evitar el inicio de nuevos
acción exclusiva de reblandecimiento; si hay disolu- deterioros o exarcebar los existentes.
ción de sulfatos. conviene que las sales disueltas que- - El uso de la técnica debe ser controlable en to-
den en la superficie, utilizando mecanismos de flocu- dos sus aspectos para que el operario pueda ajustar
lación, precipitación o gelificación. o interrumpir la limpieza cuando sea necesario.
- No debe ser agresivo, con un pH próximo al del Se han propuesto cuatro variables para ayudar a
material, para evitar su corrosión, solubilización o sa- encontrar el método adecuado de limpieza: [3]
linización que erosionan la piel, e intentar exclusiva- 1 - Grado de resistencia de la fábrica al deterioro
mente el reblandecimiento y desagregación de la pá- ambiental (IR).
tina de suciedad. 2- Tenacidad de la suciedad o grado de dificultad
- Debe permitir la eliminación de los barros arci- para eliminarla (IT).
llosos producidos por el ensuciamiento biológico de 3- Dureza o capacidad de la técnica de limpieza
liqúenes, musgos y hongos y, deseablemente, evitar para afectar al soporte (ID).
de nuevo su proliferación. Y también la de los resi- 4- Efectividad, o capacidad de limpieza del méto-
duos salinos, carbonosos, metálicos y orgánicos sin do elegido (IE).
Tema 7 Ensuciamiento físico de fachaoas. Umoieza '/prevención

224 TABLA I ÍNDICES l„ E l T

MATERIAL Resistencia a la SUCIEDAD Tenacidad de la


alteración ( I . ) suciedad (l-l

Morteros de cal, encalados (blandos) Polvo suelto


Calizas o morteros (blandos) Plantas trepadoras, musgo
Morteros de cal (duros) Hongos, algas
Pinturas viejas (blandas) Liqúenes
Ladrillo (poco cocido), bloque Pinturas sueltas descamadas
Revocos de cemento, estucos (viejos) Eflorescencias salinas
Areniscas meteorizadas

Hormigones (viejos, blandos) Manchas salinas


Morteros bastardos Encalados viejos
Areniscas (medianamente blandas) Encalados duros, temples
Ladrillos (medianamente cocidos)
Pinturas (viejas, duras) Aceites, grasas, manchas de comida
Morteros ricos en cemento, hormigones
Encalados (duros) Mugre (contaminación) urbana blanda

Mármoles (blandos) Excrementos de aves


Ladrillos (bien cocidos) Manchas metálicas
Piedras calizas (duras) Pastas de yeso
Piedras alteradas blandas
Costras de yeso blandas
Mármoles (duros) Alquitrán
6
Pinturas viejas duras
Areniscas (duras)
Piedras dañadas
Pizarras (duras y sanas) Escurriduras de cemento (blandas)
Mugre urbana (dureza media)
Costras negras de yeso (duras)
Esquistos (duros) Pinturas plásticas modernas
Basaltos Escurriduras de cemento (duras)
Ladrillos refractarios
Granitos Pinturas viejas muy cargadas
Cuarcitas 10 Mugre urbana (dura) 10

Entrando en tablas donde se listan las variables y da que pueda servir para la mayoría de soportes y de
se les asigna un valor numérico cuantificador, los po- suciedades, deberá ser la más agresiva si se preten-
sibles métodos a utilizar serán los que cumplan la do- de que también sea eficaz.
ble condición: 1) IE >IT y 2) ID < IR. El axioma principal de cualquier método de lim-
pieza es que no sea perjudicial para la fachada. Por
Otros principios a tener en cuenta son:
otra parte, no deben elegirse técnicas por razón de
- Los métodos de limpieza difieren ampliamente
su menor coste o efectos más rápidos. Esto depen-
en su efectividad y su dureza. de en gran medida de los procedimientos de ejecu-
- Las suciedades de distinta naturaleza u origen ción: especialización de la mano de obra, productos
difieren sensiblemente en su grado de resistencia. de limpieza, equipos empleados, etc. La inversión en
- Cuanto más agresivo es un procedimiento, más operarios y protección del entorno debería ser ele-
suciedad tenaz puede arrancar, pero al precio de ma- vada, mientras que el coste de materiales y equipos
yor impacto en los materiales de la fachada. varía según las condiciones del contrato. Las limita-
- Las suciedades menos tenaces pueden elimi- ciones del lugar de trabajo y del programa de ac-
narse mediante las técnicas menos duras. tuación pueden trastocar completamente un presu-
- Si se elige una solución de limpieza determina- puesto.
capitulo II Patología e intervención en cerramientos y acabados

T A B L A II ÍNDICES l„ E l f
225

METODO DE LIMPIEZA Dureza (l l D MÉTODO DE LIMPIEZA Efectividad (y


I. > In

Radiación luminosa Radiación luminosa


Cepillado en seco (cerdas blandas) Cepillado en seco (cerdas blandas)
Láser Láser
Agua nebulizada Soplete de soldar
Lavado con agua a muy baja presión Lavado con agua a muy baia presión
Disolventes orgánicos, decapantes
Vapor

Fregado manual con agua fría Vapor


Disolventes orgánicos
Fregado manual con agua caliente y detergente Lavado con agua a baja presión
Fregado manual con agua fría o caliente
Chorro de agua a baja presión y detergente
Agua nebulizada
Frotado mecánico Microabrasión con pistola
Agentes químicos (HF, N H F , álcalis)
4 2 Chorro de abrasivo (suave)

Chorro de abrasivo (blando) Chorro de agua a media presión


Chorro de agua a media presión Frotado mecánico
Decapantes de pintura
Abrasión manual (disco de carborundo)
Cepillado con cepillo de alambre
Agentes químicos (HF, NH^F,, álcalis)
Chorro de agua a elevada presión

Abrasión manual (disco de carborundo) Esmerilado mecánico en seco


Cepillado con cepillo de alambre
Chorro de agua a elevada presión Chorro de agua a muy elevada presión
Chorro de agua a muy elevada presión
Chorro de arena con agua

Microabrasión con pistola Chorro de arena en seco


Chorro de arena en seco
Soplete de soldar Chorro de arena con agua
Tallado manual
Esmerilado mecánico en seco
Tallado mecánico (cincel neumático) 10 Nuevo tallado 10

6.4 Evaluación de los métodos de limpieza [3] - La saturación puede activar la aparición de eflo-
rescencias. Posibles molestias a usuarios y peatones.
6.4.1 Lavado - Posible aparición de manchas, al secarse, en pie-
Recomendable para soportes de caliza, mármol y dras de color claro, por distintos motivos.
piedra artificial; y para suciedades de tipo hidrosolu- b) Agua nebulizada: rociado intermitente con una
ble. Dentro del grupo existen varias técnicas posibles: nube de gotas muy finas.
a) Agua pulverizada: rociado con lluvia de gotas - Reduce la cantidad de agua necesaria. Requiere:
gruesas. Técnica común con ciertas desventajas: lanzas ajustables con varias boquillas muy pequeñas;
- Piedra, ladrillo y materiales porosos pueden sa- equipo de control de tiempo y flujo, que debe incidir
turarse de agua, con riesgo de helada en climas fríos. sólo sobre la zona a limpiar; cepillado para eliminar la
- Puede penetrar en el edificio por ventanas y jun- suciedad ablandada, con cepillos de cerdas suaves
tas sin proteger, causando manchas y otras moles- naturales, de nylón o de bronce.
tías. - Con frecuencia debe combinarse con otros mé-
- Puede aceierar la corrosión de grapas y fijacio- todos: pastas absorbentes, abrasión selectiva, etc.
nes. Y causar pudriciones orgánicas en el muro o el - Pese a sus ventajas, no suele realizarse correc-
interior. tamente. Hay que evitar convertirlo en rociado.
Tema'. Ensuciamiento físico de facraaas Limpieza y prevención

- Puede penetrar y saturar la piedra, provocando 6.4.2 Limpieza mediante procedimientos químicos
manchas, si se usa incorrectamente. Obliga, como mínimo, al control del pH del líquido
- Requiere una eficaz protección para evitar la dis- residual y de las superficies, antes del tratamiento,
persión y mojado por el espray llevado por el viento. tras el aclarado, tras la neutralización. Con ácidos re-
c) Agua a baja o media presión: chorro de agua quiere: premojado (agua); rociado (agente); aclarado
con fuerza de hasta 70 kPa. (agua). Con álcalis: aplicación en seco; mantener; acla-
- Como complemento del premojado y primer o rado (agua); repetir el proceso cuantas veces sea ne-
último aclarado en técnicas de limpieza química. cesario.
- Puede dañar piedras frágiles o heladizas, blan- a) Con productos basados en el ácido fluorhídrico
das o meteorizadas y morteros de cal de revocos y (HF, en baja concentración):
juntas. - Se emplea para limpieza de piedra arenisca, la-
- Plantea los mismos problemas de penetración drillo, cerámica no vidriada y granito sin pulir. No apro-
y saturación al utilizar gran cantidad de agua. piada para gres y granito pulido. Tampoco para cali-
- Es importante el tamaño y forma de la boquilla, za, mármol y morteros y revocos de cal.
así como la elección de una correcta tasa de flujo. - No deposita sales solubles pero puede dejar otros
- Hay que controlar la distancia de lavado para subproductos residuales.
evitar limpieza por corte o erosión. - Requiere: profundo premojado, tiempo limitado
d) Agua a elevada presión: chorro de agua con de permanencia sin dejarlo evaporar, y buen aclara-
fuerza de hasta 140 kPa. do.
- Provoca efecto de limpieza por corte en piedras - Presenta gran capacidad de quedar retenido en
blandas, frágiles o heladizas. la porosidad y las juntas de mortero defectuosas.
- Puede romper elementos ornamentales frágiles - Deteriora inmediatamente los vidrios sin prote-
o delicados, así como esquinas de piezas, molduras. ger. Puede rayar, al escurrir, los paños inferiores.
- No debe emplearse para el aclarado Inicial de - Se usa con frecuencia tras la aplicación de un
limpiadores químicos, para evitar salpicaduras de áci- desgrasador alcalino.
do. - Requiere alto grado de protección del edificio,
- Puede erosionar e incrementar la rugosidad y el andamio, aclarado de plataformas, etc.
efecto de sombreado de superficies lisas. b) Con productos basados en ácido clorhídrico
- Es importante el control de forma y tamaño de (HCI, en baja concentración):
boquillas, presión y distancia crítica de trabajo. - No recomendables para limpieza en general.
e) Agua caliente: rociado o chorro de agua a ba- Aparece en ciertos tratamientos contra eflorescencias.
ja o media presión y a menos de 95°C. - Se usa para eliminación específica de manchas
- Incrementa la solubilidad y eficacia de limpia- de cal, cemento y otros productos alcalinos.
dores químicos alcalinos y de algunos decapantes. - Posee alta capacidad de generación y deposi-
- Mejora el comportamiento de los productos quí- ción de sales solubles.
micos, aunque puede originar vapores nocivos. c) Con ácido acético:
- Más eficacia que la fría para suciedad grasa, pu- - Se usa como ingrediente en productos patenta-
diendo requerir también distinto equipo. dos para la limpieza de piedras calizas.
- Potencial choque térmico sobre algunas fábri- - Cada vez más empleado para la neutralización
cas, pudiendo afectar a masillas de acristalamiento, de areniscas, calizas, ladrillos y cerámicas, por la ele-
herrajes y guarniciones de plástico, etc. vada solubilidad de sus sales, al actuar sobre limpia-
- Requiere medidas especiales de seguridad pa- dores alcalinos. No requiere posterior limpieza.
ra evitar quemaduras. d) Con productos alcalinos (en baja concentra-
f) Vapor: método antes muy usado, sustituido por ción):
los abrasivos. - Empleados como agentes desengrasantes pa-
- No consigue una limpieza uniforme, pudiendo ra desprender costras de suciedad de piedra arenis-
el calor dañar los ladrillos, piedras y cerámicas. ca, fábricas de ladrillo, cerámica, granito y calizas.
- Eficaz para eliminar la suciedad superficial en - Puede ocasionar graves quemaduras, requi-
rehundidos y superficies talladas. riendo medidas de protección personal y del edificio.
- Efectivo con la suciedad grasa, especialmente - Debe aplicarse a superficies profundamente pre-
en zonas donde debe evitarse al máximo el agua. mojadas, requiriendo aplicaciones repetidas con ele-
- Posibles quemaduras en operarios. Es preferible vado tiempo de permanencia, y posterior neutraliza-
un equipo a escala reducida (microchorro de vapor). ción, diferente para materiales alcalinos o silíceos.
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

- Riesgo de daños por cristalización de sales, y c) Pastas absorbentes alcalinas a base de arcilla
por residuos alcalinos, mayor en soportes muy poro- (con hidróxido sódico).
sos. - Para desengrasado inicial de areniscas, cerá-
- Puede provocar manchas oscuras en calizas que micas y ladrillos. También usadas en forma de em-
no han sido bien aclaradas. plastos.
- Riesgo de rayados y limpieza desigual si no se - Requiere neutralización, con baja concentración
aplica homogéneamente. de ácido acético o fluorhídrico, y aclarado con agua.
- Especial riesgo de daños y destrucción de pin- - Efectivo sobre soportes muy sucios donde es
turas y elementos y carpinterías de aluminio. insuficiente un corto tiempo de permanencia de líqui-
e) Con aplicación combinada de ácidos y álcalis dos y geles alcalinos para eliminar la suciedad grasa.
(en baja concentración): - Muy efectivo sobre elementos muy sucios de
- Se emplea sobre costras de suciedad modera- arenisca como pináculos, antepechos, cornisas.
das a gruesas de: - Requiere precauciones y elevado grado de pro-
Calizas: mediante prelavado alcalino y posterior tección.
lavado con ácido acético (no con HF). d) Geles alcalinos (agentes de limpieza alcalinos
Arenisca, ladrillo y cerámica, granito sin pulir: pre- en suspensión en carbooximetílcelulosa, CMC).
lavado alcalino y lavado posterior con ácido acético - No son verdaderos emplastos sino líquidos en-
o fluorhídrico (éste no debe usarse con gres o grani- grosados. Requieren alto grado de protección.
to pulido). - La consistencia del gel ayuda a reducir la pro-
- Gran potencial de alteración física y química. fundidad de penetración del agente limpiador.
Debe realizarse bien y adoptar medidas de protección. e) Decapantes alcalinos para eliminación de pin-
turas (de hidróxidos alcalinos o de disolventes).
6.4.3 Limpieza mediante emplastos, - La mayoría basados en sosa cáustica o en hi-
pastas absorbentes y geles dróxido potásico, más soluble. Requiere alta concen-
a) Emplastos de arcilla (basados en atapulgita y/o tración).
sepiolita, en capa de más de 6 mm). - Disponibles en consistencia de gel o de pasta,
- Usados para el ablandamiento de la suciedad son efectivos sobre pinturas tradicionales al aceite.
en calizas y eliminación de sales solubles. - Debe evitarse su empleo sobre maderas, en las
- A veces se aplica y se deja secar y endurecer que provoca granulado.
(verdaderos emplastos). Otras, se mantiene cubierto - Requieren neutralización y deben ser bien acla-
y húmedo, durante el tiempo de permanencia (pastas rados. Precisan alto nivel de precauciones de uso.
absorbentes). Siempre sin añadir productos químicos. - Los orgánicos son líquidos tixotrópícos y geles
- Se genera gran cantidad de barro, dada su dis- basados en cloruro de metileno y en metanol.
posición y el necesario aclarado con agua. - Son efectivos en la eliminación de capas de pin-
- Se emplea asociado a nebulización intermiten- tura modernas a base de resinas.
te sobre fachadas ornamentadas de piedra caliza.
- Técnica recomendable que no afecta al sopor- 6.4.4 Limpieza con jabones
te si es aplicada por profesionales expertos. - Deben usarse los de tipo no iónico, pues los ió-
b) Pastas absorbentes a base de arcilla y algún nicos pueden depositar sales solubles.
agente activo. - Se emplean diluidos en agua, caliente o fría,
- Para usar sobre soportes de caliza y mármol. contra la suciedad superficial, grasa y no muy ad-
También para fuertes manchas de cobre, hierro u otras. herida.
- Incluye agentes activos como el quelato de te- - Principalmente para limpieza de superficies vi-
traacetato de etileno-diamina (EDTA). driadas, en el exterior o el interior del edificio.
- Requiere ser tapado con plástico impermeable - Pueden requerir el uso de cepillos, esponjas y
durante un tiempo de permanencia de más de 24 ho- ropas especiales.
ras. - Efectivos sobre muchos tipos de fábrica al in-
- Se aplica con llana o mediante espray a presión; terior. Su acción se potencia combinada con el vapor.
recomendable para soportes con profundos relieves.
- Aclarar completamente con agua a presión, re- 6.4.5 Limpieza mediante proyección de abrasivos
cogiendo y eliminando el subproducto resultante. a) Microabrasivos (en seco).
- Puede usarse sin problemas, sobro todo en zo- - Abrasivos muy finos y ligeros lanzados por pe-
nas puntuales de creciente ensuciamiento. queñas boquillas (pistola-lápiz)
Tema 7. Ensuciamiento físico de fachadas. Limpieza y prevención

- Abrasivos: óxido de aluminio, bicarbonato só- - Suele provocar el deterioro de los planos y la al-
dico, carburo de silíceo, vidrio en cuentas o microni- teración de esquinas, molduras y relieves.
zado.
- Consigue un sensible grado de limpieza ajusta- 6.4.7 Limpieza con métodos especiales
ble a los distintos tipos de suciedad. a) Ultrasonidos: la suciedad es desalojada por la
- Su único problema es la generación de polvo, vibración ultrasónica de un desincrustador dental.
por lo que requiere protección: b) Láser: el calor generado por el haz luminoso de-
- Es el método abrasivo más inocuo, pero el más be eliminar exclusivamente la costra sin afectar al so-
lento. Debe realizarse por expertos (restauradores). porte.
- Ineficaz, como todos los abrasivos, contra su- c) Lanza de calor: debe evitarse siempre por las
ciedad profundamente arraigada o protegida en la po- roturas que ocasiona por distintas dilataciones.
rosidad. d) Inversión del yeso: recarbonatación del yeso de
b) Abrasivos en seco lanzados con aire com- las costras sucias de calizas y mármoles.
primido. e) Bacterias: reductoras de yeso (costras sulfata-
- Existe un amplio abanico.de productos abrasi- das) y digestoras de grasas.
vos, equipos y boquillas con diversos resultados.
- No debe utilizarse sobre superficies vidriadas o
6.5 Limpieza de suciedades especiales [3] [17]
pulidas de piezas cerámicas.
-• Limpia sólo parcialmente, en proporción a la ca- 6.5.1 Limpieza de la suciedad de origen biológico
pa desgastada. Alto poder destructivo (aristas, mol- - Los métodos biocidas polivalentes (sodio hipo-
duras). clorado): no son satisfactorios.
- No diferencia entre soportes blandos y duros y, - Actualmente se emplean: sales de amonio y co-
con frecuencia aumenta la rugosidad y moteado. bre, trióxido de cromo, sulfato cobre.
- Sus ventajas son la eliminación del agua (aun- - Deben evitarse: humedad, absorción y estan-
que suele requerir aclarado) y posibilidad de utiliza- camiento de agua en soporte.
ción sin limitación estacional. - La tensión capilar se opone a la capacidad de
- Suele elegirse por su rapidez y por no requerir absorber agua los organismos.
la identificación del soporte y de la suciedad.
- Requiere alta especlalización. Provoca molestias 6.5.2 Limpieza de manchas metálicas
de ruido y polvo, necesitando proteger el entorno. A) Manchas de hierro en piedras calcáreas:
c) Abrasivos lanzados con agua. - 7 partes de gllcerina, 1 p. de cítrato sódico y 6
- Las mismas consideraciones que en el caso an- p de agua caliente en una pasta de arcilla (atapulgi-
;

terior. Se emplean con abrasivos solubles. ta), que se aplica y se deja secar antes de retirarla con
- Puede añadirse algo de agua al flujo de aire más espátula de madera.
abrasivo o unirlos desde el mismo tanque. - Si las manchas son tenaces: 1 parte de citrato
- Produce molestias de ruido, agua y barrillo. La sódico y 6 de agua en barro de atapulglta que con-
nube de partículas tiene riesgos para la salud. tenga hidrosulfito sódico. La pasta se elimina con agua
- El barrillo puede bloquear la visión de la super- limpia.
ficie a limpiar. - Otras formulaciones: solución de ácidos orto-
- Es preciso recoger el barrillo en recipientes ade- fosfórico y oxálico (muy venenoso) al 10% y sal sódi-
cuados. Si se seca, supone un peligro mayor. ca de EDTA al 2%, en forma de emplasto.
d) Agua lanzada a alta presión. - Para manchas de hierro y cobre: triosulfato só-
- El chorro puede o no incluir abrasivo. La sucie- dico seguido por solución de agua oxigenada y ácido
dad es sajada del soporte produciendo mayor desgaste. cítrico o tartárico.
- Tiene similar comportamiento y limitaciones que
los abrasivos lanzados en seco o con agua. B) Manchas de cobre:
- Solución al 20% de carbonato amónico. También
6.4.6 Limpieza mecánica los emplastos de amoniaco (que además inhiben el cre-
- Se considera más una técnica de relabrado del cimiento de algas), pero debe prevenirse la formación
soporte, no recomendable como método de limpieza. de sales amónicas, muy perjudiciales para las fábricas.
- Actúa eliminando una porción de la capa su- - Otras pastas absorbentes: cloruro amónico, hi-
perficial mediante herramientas manuales o discos dróxido de aluminio y talco, siendo necesario un pre-
abrasivos. mojado y posterior aclarado total (Amoroso y Fassina).
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acatados

Solución de 570 mi de amoniaco concentrado en un eliminadas con disolventes orgánicos como parafina
litro de agua conteniendo 70 g de cloruro amónico y o petróleo, aunque con alto riesgo de extensión de las
37 g de EDTA; se añade atapulgita para hacer la pas- manchas.
ta, debiendo premojar la superficie antes de aplicar- - Se ha empleado el procedimiento de congela-
la, dejándola secar y eliminado la costra con una es- ción del material bituminoso antes de eliminarlo, pero
pátula no metálica, finalizando con un aclarado conlleva riesgo de destruir una porción del soporte.
(Ashurst). El agente quelato EDTA puede disolver la - Son efectivos los decapantes de pinturas basa-
calcita y generar manchas oscuras, debiendo em- dos en el cloruro de metileno, así como los decapan-
plearse en baja concentración y poco tiempo de per- tes que contienen cetona e hidrocarbono aromático,
manencia. aunque pueden penetrar profundamente en la poro-
sidad.
6.5.3 Limpieza de depósitos de cemento
y mortero 6.5.5 Limpieza de la suciedad de palomas
- Los productos usuales incluyen ácido clorhídri- - Su eliminación debe ser previa a los trabajos ge-
co como principal ingrediente activo. Debe aplicarse nerales de limpieza de paramentos.
muy diluido. - El grueso de la suciedad de las impostas y sa-
- El grueso del depósito debería eliminarse me- lientes puede eliminarse mediante ablandamiento con
diante raspado con espátula de madera o plástico y agua alternando con aclarados con agua sola o con-
ser abundantemente mojado antes de la aplicación teniendo jabón, evitado que éste permanezca mucho
química con cepillo. sobre el paramento para evitar la formación y pene-
- Restregar los depósitos ayuda a exponer más tración de sales.
profundamente al material a la acción del producto. - La limpieza abrasiva o química no suele ser ne-
- Las superficies tratadas deben ser totalmente cesaria.
aclaradas pues el HCI residual puede formar sales - La limpieza de suciedad de palomas se hace a
agresivas y contribuir al aumento de manchas ferro- veces necesaria por el fallo de métodos de alejamiento
sas. Cuanto antes se eliminen los depósitos más fá- de las aves, que generan otras manchas de fijaciones
cil y menos lesiva será la operación. de hierro para cables, redes y pinchos.
- Conviene eliminar previamente los posibles ge-
6.5.4 Limpieza de manchas de aceite, grasa y les de prevención de ensuciamiento de palomas, que
productos bituminosos no suelen ser efectivos. Se procede raspando las ca-
- Los productos más efectivos son: detergentes pas gruesas y posterior aplicación de decapantes a
no iónicos; disolventes a base de hidrocarburos; y base de cloruro de metileno u otro disolvente orgáni-
agentes de limpieza alcalinos. co, posteriormente aclarado con agua caliente a ba-
- Los jabones neutros con agua fría, caliente o ja presión.
white spirit se usan para manchas ligeras de aceite y
grasa en paramentos lisos. Se aplican durante pocos 6.5.6 Limpieza de sales solubles y eflorescencias
minutos, restregando con un cepillo blando antes del - La facilidad de su eliminación depende de las ca-
aclarado. racterísticas de la fábrica y la solubilidad de las sales.
- El uso de hidrocarburos es peligroso por su in- - El objetivo del método de desalinización es mo-
flamabilidad y toxicidad, pudiendo originar fuertes man- lar el muro hasta la profundidad en que se hallan las
chas. Los inconvenientes se reducen aplicándolos con sales (uno o más días), aplicar una pasta absorbente
esponjas o incluyéndolos en pastas absorbentes. arcillosa (de 15 mm de grosor) y esperar que las sa-
- Para manchas sobre mármol, la BS 6270 (1982) les se depositen en la pasta durante el secado.
recomienda la colocación sobre la zona sucia, de una - Puede mejorarse el procedimiento, aumentan-
tela de algodón sin tintar empapado en acetona y una do el volumen de sales extraído, mediante la aplica-
pasta de acetato de amito, cubriéndolo con un polie- ción de un potencial eléctrico a través del área pre-
tileno fino, para dejarlo actuar durante tres días, para mo|ada y emplastada.
después aclarar con agua limpia. Conviene ensayar - Para quitar manchas de eflorescencias la BS
antes en áreas reducidas. Para la limpieza a gran es- 6270 recomienda el cepillado ligero de las sales suel-
cala se emplean líquidos, geles y pastas absorbentes tas mediante cepillos de cerdas suaves y naturales,
alcalinas. eliminando los residuos para que no penetren de nue-
- Las manchas de alquitrán o productos bitumi- vo en la porosidad, y dejando meteorizar y lavar por
nosos de asfaltado o impermeabilización pueden ser la lluvia los paramentos.
Tema 7. Ensuciamiento tísico de fachadas. Limpieza y prevención

- A mayor escala, la limpieza de eflorescencias del fenómeno en un área determinada, pueden plan-
puede conseguirse con aspiradores industriales co- tearse algunos criterios para el proyecto de los edifi-
nectados a cepillos blandos. cios, intentando racionalizar y obietivar las conside-
- Los procedimientos químicos, potencialmente raciones acerca de los procesos lesivos de las fachadas.
peligrosos, tratan de conseguir aumentar la solubili- Es evidente, por otro lado, que son muchas y más im-
dad de las sales, para ser entonces eliminadas con portantes otras decisiones del diseño que acaso con-
aclarado. Los productos suelen contener ácido clor- travengan, en ocasiones, iniciativas de actuación fren-
hídrico, glicólico o acético. te a las suciedades indeseables.
Empero, ya es bastante conocido y asumido que
6.5.7 Limpieza de pinturas el diseño bello y funcional es aquel que logra integrar
- Lavado con agua o vapor: para pinturas al agua, y armonizar cuantos requisitos son impuestos por
combinado con raspado o cepillado. cuanto es afectado por el propio hecho arquitectóni-
- Decapantes químicos en forma de líquidos, ge- co, mediante soluciones edificatorias que satisfagan
les o pastas absorbentes, incluyendo los basados en materialmente todo ese cúmulo de exigencias duran-
disolventes, como el cloruro de metileno u otros, y los te el mayor lapso temporal posible.
de base química alcalina, como el hidróxido sódico. Hay que insistir, en que el ensuciamiento es un pro-
- Métodos abrasivos: raspado manual o con herra- ceso natural consubstantivo con el propio envejeci-
mientas mecánicas; abrasivos lanzados con aire com- miento de los edificios. Y que ese cambio paulatino
primido (con agua o en seco); relabrado del paramento. de imagen no tiene por qué resultar inadmisible si es
- Calor: mediante lanzas de aire caliente o sople- lo bastante lento y equilibrado como para ajustarse a
tes, para pinturas al óleo, en especial sobre madera. la maduración integral de su entorno material y hu-
mano. Son aquellas fachadas con deficiente com-
6.5.8 Limpieza de pintadas y tratamientos portamiento las que no pueden dejar de pasar inad-
antipintada vertidas para un observador interesado verdaderamente
- Agua caliente y detergente: para pintadas hi- en la conservación de la imagen urbana como parte
drosolubles (grasa, comida y algunos lápices). Puede de su ambiente vital.
combinarse con raspado de cepillos de cerdas sua- Es necesario, pues, despertar ese interés en auto-
ves de bronce al fósforo. ridades, críticos, constructores, usuarios, etc., pero,
- Métodos químicos, que pueden contener sobre todo, en los responsables directos de los pro-
agentes variados a controlar, si bien tienden a dos tipos: cesos patológicos de los edificios: los arquitectos que
• Los basados en agentes de hinchamiento y des- los proyectan. La objeción de que la contaminación,
prendimiento o disolución del medio que contiene el con su crecimiento incesante, es el auténtico culpa-
pigmento, tipo del cloruro de metileno (CH CI ). 2 2
ble, no deja de ser falaz a medias. Y, además, resulta
Recomendados contra pinturas en aerosol. ser argumento más difícil y costoso de encarar que lo
• Los basados en disolventes orgánicos, reco- es un simple proyecto que haya solucionado sus ce-
mendados contra pintadas de rotuladores. rramientos de manera que respondan con menor sus-
- Métodos mecánicos: limpieza abrasiva, poco ceptibilidad a los procesos nocivos de acumulación
recomendable. Mejor usar microabrasivos. de suciedad.
- Las capas que previenen las pintadas suelen No existe tampoco un consenso que determine
ser materiales fumógenos o bien oclusores de poros cuando es más respetable un edificio: si cuando está
o hidrofugantes. Los productos capaces de elimi- recién acabado o restaurado, o cuando la pátina de
narlos, una vez conocida con fiabilidad su naturale- mugre adquirida con el tiempo y la carencia de man-
za, suelen estar basados en disolventes o decapan- tenimiento le han infundido un grado de madurez acor-
tes de pinturas alcalinas, que deben actuar de, por ejemplo, con la imagen del tejido urbano ar-
ablandando las capas, para luego ser aclarados con quitectónico que le rodea y que podría compararse
agua. Los procedimientos abrasivos tampoco son con la aceptación resignada de los surcos que acom-
recomendables. pañan al envejecimiento de una persona con la que
se convive cotidianamente.
Es obvio que tal problema no tiene solución real
o, al menos, totalmente objetiva, pues depende de in-
7. Prevención del ensuciamiento
numerables condiciones y, especialmente, de las opi-
A tenor de lo expuesto anteriormente y del estu- niones y modas al respecto. Se ha llegado a consi-
dio estadístico necesario para conocer la incidencia derar, en ocasiones, que un edificio monumental clásico
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

resulta más bello con su pátina de suciedad y, a ve-


ces, de degradación físico-química. Ello pudo deber-
se a la falta de costumbre de proyectar y construir
ahora dicha arquitectura y, a fuerza de contemplarlos
siempre sucios y viejos, hayamos racionalizado y jus-
tificado una situación que seguramente hubiera asom-
brado a los arquitectos y usuarios de esos edificios
cuando fueron elevados hace cientos de años.
Parecen imponerse, por otro lado, de la mano de
los nuevos vientos restauradores y rehabilitadores del
patrimonio arquitectónico, las ventajas de los trata-
mientos y limpiezas de fachadas. Pero todos esos tra-
bajos de recuperación o de mantenimiento parecen
soluciones extremas y no, por ello, evitables a una pro-
blemática no suficientemente prevista. La estimulación
apriorística de las medidas que contribuyan a impedir,
retardar o paliar, en lo posible, las causas y los efec-
tos de las suciedades debidas a los contaminantes de
la atmósfera de las ciudades sobre las fachadas, su-
pondrán, en cualquier caso, ventajas indiscutibles, no
sólo en el terreno del ahorro económico, sino en el en-
foque correcto de cual haya de ser el cambio acepta-
ble de la imagen de dichas fachadas urbanas. (Fig. 1)
14.
Es preciso no olvidar que los edificios que hoy se
proyectan y construyen con técnicas y materiales que
les conferirán, seguramente, una mayor vida útil, cons-
afectan a las fachadas. El control del grupo tercero
tituyen el legado arquitectónico para las generaciones
podrá ejercerse o no como actuación complementa-
de los próximos siglos, quienes deberán contemplar-
ria o como recurso último en el caso de grandes difi-
los a través de la óptica del transcurso del tiempo, ver-
cultades en los dos tipos básicos de controles, lo que
dadera prueba de fuego para los modos de proyec-
será la situación más común.
tar y construir que hoy tenemos entre manos.
Si se contempla el proceso del ensuciamiento co-
mo un hecho inevitable, es decir, causado irremedia-
7.1 Control del depósito de suciedad
blemente por fenómenos difícilmente controlables, pe-
ro, a su vez, influido por otros factores no tan aleatorios 7.1.1 Propuestas ambientales y urbanísticas
pero estrechamente ligados a la morfología y mate- - Control y limitación de los vertidos de humos
rialidad de las fachadas, se tendrá una primera idea negros.
de cual debe ser la aproximación del arquitecto al di- - Ubicación adecuada de los polígonos industriales.
seño de fachadas con respuesta más adecuada a la - Dotación sistemática de vías rodadas de cir-
formación de las lesiones. cunvalación.
Efectivamente, tres han de ser las líneas básicas - Correcta regulación del tráfico rodado urbano.
de actuación que permitan algún tipo de mediación - Diseño urbanístico mejorado (anchura de vías,
en el desarrollo de las patologías: cornisas).
1. Control del grado y localización de la deposición
de partículas de polvo y contaminación atmosférica. 7.1.2 Propuestas en el ámbito arquitectónico
2. Control de la eliminación y redistribución de la A) Textura superficial de los materiales
suciedad en los paramentos de fachadas. - Reducción o supresión de la rugosidad cuando:
3. Control del grado de manifestación /aprecia- (Fig. 14)
ción de las pátinas de suciedad. • La percepción de la suciedad va a ser muy clara.
Será, entonces, decisiva la utilización de las me- • La exposición va a ser escasa o con alta protec-
didas de control de los dos primeros grupos, ya que ción.
tanto la deposición como la meteorización pertene- • La exposición es buena, en las partes no afec-
cen al ámbito de sucesos comunes y no evitables que tadas.
Tema 7. Ensuciamiento tísico de fachadas. Limpieza y prevención

• Se prevé una deposición acelerada. • Ligeros vuelos o relieves solo protegen de la llu-
• No está previsto un mantenimiento periódico. via cuando el viento está en calma.
- Uso de textura rugosa solo con regular y abun- • Mejor vuelos amplios, más efectivos cuando:
dante lavado. (Fig. 16)
- Atención especial cuando se prevean costras • La velocidad del viento es menor.
de alteración. • La fachada está más abrigada.
• La exposición es escasa.
B) Relieve y disposición de la fachada • En la cornisa los planos horizontales o muy in-
- Los relieves sólo decorativos deberían evitarse clinados son peor lavados.
casi con independencia del grado de exposición. - Impostas:
- Los planos inclinados hacia arriba sólo reco- • Similares condiciones que para la cornisa.
mendables si pueden estar sometidos a un lavado to- • Son más efectivas cuando se distribuyen varias
tal. (Fig. 15) en la altura de fachada.
- Estudiar la continuidad de dichos planos con los - Voladizos:
inmediatos Inferiores, para evitar escorreduras. • Desfases, balcones y miradores: más eficaces
si son corridos, saledizos y dispuestos uniformemen-
te en la fachada.
7.2 Control de la eliminación y redepósito de la
suciedad - Inclinación vertical de los planos de fachada:
• Hacia arriba: facilita el lavado en las plantas in-
7.2.1 Control del agua de lluvia directa feriores. En las altas no es necesario. Debe asegurar-
A) Mediante el factor de exposición se el lavado total de los planos afectados.
- Siempre es preferible una exposición elevada. • Los planos aislados requieren lavado completo
- El grado de exposición puede ser indiferente si o mantenimiento periódico. Deben estar provistos de
la protección es elevada. interruptores de escorrentía.
- En edificios exentos la exposición puede ser muy • Son interesantes cuanto más rugoso sea el ma-
variada según fachadas. terial de revestimiento.
• Hacia abajo: para lograr pátina uniforme si se
B) Mediante el factor de protección evitan escorreduras. (Fig. 17)
- Es aconsejable el menor factor de protección • Son preferibles con texturas superficiales lisas.
posible. • Los planos curvos son desaconsejables. (Fig.
- Distintos niveles de protección en una misma 18)
fachada son peligrosos. - Diedros verticales:
- La protección total actúa como una exposición • El control del ángulo diedro permite regular el
muy baja. nivel de exposición.
• En superficies curvas: recomendable el control
C) Mediante el diseño de caracteres de la del radio de curvatura y la utilización de combinacio-
fachada nes de planos cóncavos y convexos.
- Cornisas: - Situación urbana y proporciones:
japituio II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

16

• Si son fachadas entre medianerías, las mismas


consideraciones anteriores.
• Fachadas exentas: recomendable la máxima es-
beltez cuanto mayor sea la desprotección; y mínima
cuando la edificación deba ser en horizontal.
• Edificios en esquina:
• Preferible la máxima esbeltez; si no, medios pa-
ra equilibrar el lavado.
• En edificios en trama cerrada con una fachada
protegida, actuar sobre la afectada, igual que en
el caso precedente.
' En fachadas con distintas proporciones, cono-
cido el comportamiento, convienen las medidas
anteriores o bien otras para el enmascaramiento.

7.2.2 Control del agua de lluvia escurrida


A) Mediante el control de cantidad de escorrentía
- Porosidad de los materiales: (Fig. 19)
" Fachadas muy expuestas: preferible la porosi-
dad baja.
• Fachadas poco expuestas: mejor una porosi-
dad elevada.
• Casos mixtos: materiales con distintas porosi-
dades.
- Planos horizontales e inclinados:
• Supresión de planos inclinados y plataformas o
minimizar su superficie.
• Interrupción de la escorrentía mediante viertea-
guas y goterones.
• Con paños estrechos horizontales corridos pue-
de interesar el máximo lavado: en ese caso conviene
aumentar la superficie de los vierteaguas.
- Desarrollo vertical de los planos:
• Paños cortos: en situaciones poco expuestas
minimizar el lavado y la deposición con vierteaguas,
aumento de la porosidad y menor rugosidad. (Fig. 20) 19
Tema 7. Ensuciamiento n'sicc úe faenadas. Limpieza y prevención

21.

• Tamaños favorables de las estrías: entre 0,5 y


15 cm. y distancias entre elementos del orden de 25
cm. si el lavado es abundante, reduciendo la separa-
ción si la cantidad de agua disminuye.
• Mayores distancias pueden originar parábolas
caracterizadas por los efectos de arista y rincón.
- Relieves decorativos:
• Recomendables los de escasa profundidad y
uniforme distribución.
• Desaconsejables con ligera escorrentía o si son
• Paños largos: Impedir o disminuir la escorren- muy resaltados o están irregularmente repartidos por
tía, teniendo en cuenta que: el paramento.
" Los interruptores de lámina, salvo excepciones, - Juntas de materiales:
son desaconsejables. (Fig. 21) • Recomendables las de fábricas cerámicas y de
" Los estriados son peligrosos; y siempre preferi- piedra de pequeñas piezas.
bles las acanaladuras de pequeña profundidad. • Preferibles las juntas rehundidas. (Fig. 24)
" Utilizar medios de enmascaramiento. • En aplacados solo interesan cuando se trata de
• Paños largos: favorecer la escorrentía de agua, pequeñas baldosas.
es decir, el lavado: • Indiferentes o desaconsejables las de montaje
' Prever enmascaramiento en los bordes de ab- de paneles o las funcionales.
sorción. - Encuentros de elementos de fachada:
• Con vientos laterales usar elementos canaliza- • Todo encuentro de componentes importantes
dores. de fachada, sobresalientes o rehundidos comporta un
peligro por la imprevisible o compleja respuesta ante
B) Mediante el control de la trayectoria de la es- el ensuciamiento y los vertidos de agua.
correntía • Como reglas básicas pueden apuntarse las si-
- Rugosidad de los materiales: guientes:
• Usar la textura en combinación con la magnitud - Prever, por sistema, vierteaguas y goterones
del lavado y la porosidad. según el aporte de agua.
• Con abundancia de agua de lluvia la textura ru- - Transformar aristas vivas y rincones en diedros
gosa se comporta bien. Por el contrario, un pequeño en chaflán o bisel para evitar concentraciones o pa-
aporte de agua obliga a la mínima rugosidad. (Fig. 22) rábolas acusadas de suciedad. (Fig. 25)
• En situaciones intermedias: optar entre minimi- - Utilizar otras medidas de enmascaramiento, co-
zar el lavado con medidas ya apuntadas, o reforzarlo
mo textura, relieves, color, etc., si las anteriores no son
al máximo, siempre reduciendo la rugosidad.
posibles.
- Estriados:
• Recomendados cuando se prevean trayectorias
oblicuas del agua o cuando puedan producirse verti- C) Mediante el control de la redistribución de la su-
dos ocasionales. ciedad
• Acanaladuras o molduras, aunque éstas propi- - La mayoría de los redepósitos ocurren en la mi-
cian abrigos de suciedad. (Fig. 23) tad inferior del edificio si el aporte de agua es
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

235

abundante. Si es escaso y la porosidad alta, pueden


aparecer en coronación.
- Si la escorrentía es importante basta con favo-
recer el deslizamiento y autolavado por textura y
porosidad, intentando disimular los bordes de absor-
ción de la lámina.
- Con pequeño volumen de agua escurrida pue-
de interesar el aumento de la porosidad del material
(si no va a afectar sensiblemente a la durabilidad) o
utilizar medidas para ocultar las bandas de reacumu-
lación de suciedad.
- Evitar plataformas inaccesibles y disponer dre-
najes. (Fig. 26)
- Diseño y ejecución correctos de los vierteaguas.
- Evitar los aditamentos o elementos extraños a
la fachada (cableados, letreros, etc.), que ocasionan
inevitables depósitos de partículas y escorreduras.
- Emplear procedimientos complementarios de
25.
enmascaramiento.

- Adecuado en los bordes de absorción de la es-


7.3 Control del Grado de manifestación /Percepción
correntía o en otras zonas de lavados no regulares
de suciedad
(antepechos planos o con diversas inclinaciones, cur-
7.3.1 Control de la apariencia manejando los ma- vaturas, etc.).
teriales - Con intensidades intermedias de color son acon-
A) Aprovechando su rugosidad: sejables las tonalidades cálidas.
- No debe utilizarse aisladamente sino en combi- - Cuanto más obscuro sea el color del material,
nación con el color y otros factores. más capacidad tendrá de enmascaramiento.
- La rugosa debe evitarse salvo con garantías de - Son preferibles los colores no lisos, con di-
abundante lavado o con colores fuertes. bujos, marcas, decoración, etc., que favorecen
- Las de áridos vistos o que imitan fábricas u hor- mejor los efectos de ocultación de la pátina de sucie-
migón son adecuadas si van coloreadas.
dad.
B) Aprovechando su color:
- Siempre recomendable en fachadas de edificios C) Combinación y despiece de materiales:
medianamente expuestos y abrigados. - Son recomendables las combinaciones de ma-
- Interesante en fachadas poco expuestas o muy teriales porque la diversidad de texturas y coloracio-
protegidas y materiales muy degradables por el nes que ello implica contribuye a disimular la irregu-
ensuciamiento (piedra caliza y arenisca, etc.). laridad de la suciedad.
Tema 7 Ensuciamiento tísico de lachadas. Limpieza '/prevención

Bibliografía

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10 T. FISHER -"When the rain comes-'Technology Rewiew (1982)
- Como criterios generales: juntas rehundi-
11 FCO. JAVIER LEÓN VALLEJO "Ensuciamiento de fachadas pé-
das; piezas pequeñas; diferencia de color o tono en-
treas por contaminación atmosfénca. Análisis y prevención" Universidad
tre pieza y junta; coloración obscura para las piezas.
de Valladolid-Caja de Ahorros de Salamanca, 1990
(Fig. 24). 12 J . MONJO CARRIÓ "Patología de fachadas: suciedades" Cátedra
- Las zonas de colocación preferente de estos pa- Construcción IV ETSAV (1981)
ños despiezados son las indicadas antes donde 13 M. DEL MONTE/C. SABBIONI/O. VITTORI-"A/rbone carbón parti-
aparezcan diferentes lavados, redepósitos sucios, es- óles and marbre deterioration Atmospheric environment" Vol. 15, n°
correduras, manchas, etc. 5, pp 645-652 (1981)
14 E. ORCSIK -"The theoretical and practica! problems of the clea-
ning and conservation oflimestone-\"V International Restorer Seminar
7.3.2 Control de la apariencia mediante otros com-
(UNESCO) Budapest (1984)
ponentes
15 E. ORCSIK/M. ZADOR-'Test on limestone weathehng"-lnternationat
A) Impostas: Symposium. Deterioration and Protection of Stone Monuments UNES-
- Cada cierta distancia (preferentemente una o CO-RILEM Paris(1978)
dos por planta), con suficiente vuelo pero dotadas de 16 F. ORTEGA ANDRADE-"La limpieza de las piedras de construc-
vierteaguas y goterones para evitar las escorreduras. ción"-Revista Q del Consejo Superior de Colegios de Arquitectos (dic.
1983)
B) Relieves decorativos: 17 Report of technical committee 62 sel rilem -Soiling 8 Cleaning of
- Adecuados si son poco destacados y muy ho- Building Facades-Editado por L.G.W. Verhoef Chapman & Hall 1988
18T. RITCHIE-"C/ean/ng of Srickivor/c-"Canadian Building Digest n°
mogéneamente repartidos en el paramento.
194 NRCC(1978)
- Desaconsejables los aislados o muy sobresa-
19 ROBINSON/BAKER-"l/Vmd-dnven rain and buiidings"-
lientes o rehundidos.
TechnicalPaper n°11 DBR Nat. Research Council Canadá (Ottawa
1975)
C) Estriados: 20 A. SPRY-"Princ/p/es of cleaning masonry buildings" -ACNT & NTA
- Son más edecuados en forma de acanaladuras, (Melbourne. 1982)
preferentemente verticales y distribuidas a distancias 21 E.M.THEISSING-"Si;rveyof62-SCFCoi7imífee-"CIB-RILEM (1984)
cortas o medias. 22 M. WEAVFR-"Consenw>g buildings"-John Wiley & Sons, Inc. (USA.
1993)

D) Juntas: 23 R. WEBSTER-"Srone efeaning-"Donhead P. Lted. (Londres, 1992)

- Son utilizables las juntas de despiece de mate-


riales, principalmente las rehundidas. Las funcionales
o de montaje de grandes piezas son poco útiles y, a
veces, peligrosas.
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

237

8. Oxidación y corrosión de elementos


metálicos de fachada*
Juan Monjo Carrió
Dr. Arquitecto
Catedrático de Construcción E.T.S.A..- U.P.M.

rio, están combinados en diversas formas químicas,


1. Definiciones
las más corrientes, quizás, los óxidos. De ahí que a la
Definamos la lesión que vamos a tratar, asi como menor ocasión el metal tome las moléculas necesa-
los elementos constructivos que se ven afectados, an- rias de oxígeno. Dicha oxidación, en la mayoría de los
tes de entrar en el análisis de los procesos patológi- metales, produce una capa de un material suficiente-
cos consecuentes, a fin de delimitar con precisión el mente compacto y resistente como para constituir una
campo conceptual en el que nos vamos a desenvol- protección del resto del metal, protección tal que evi-
ver. ta que éste se siga oxidando, por lo que alcanza un
punto de estabilización. No ocurre así, sin embargo,
en el hierro y la mayoría de sus aleaciones, donde la
1.1 Oxidación y corrosión
capa de óxido férrico que se forma suele ser porosa
Se agrupan estas dos acciones químicas sobre los y frágil, facilitando la acumulación de agua y suciedad
metales por ser normalmente simultáneas o sucesi- que, como veremos, facilita el avance de la oxidación
vas (por lo menos en los metales férreos) y sin em- e, incluso, el paso a la corrosión.
bargo, como veremos, se trata de dos lesiones sufi- Los elementos de zinc, cobre y aluminio, metales
cientemente diferenciables. tanto en su proceso de mucho uso en las fachadas, resultan autoprotegi-
químico, como en sus resultados. En cualquier caso, dos por la capa de óxido superficial que se forma. Por
son dos tipos de procesos patológicos claramente ello cuando el elemento metálico no debe tener un
químicos en los que tiene importancia, por un lado, el contacto visual o táctil directo con los usuarios, no se
medio ambiente que rodea al elemento (acuoso o se- le aplica más protección. Sin embargo, cuando se tra-
co) y la constitución metalúrgica del propio elemento. ta de carpinterías de ventana o barandillas (cobre, alu-
minio y latón) resulta necesario algún tipo de trata-
1.1.1 Oxidación miento superficial que le de pulimento para mejorar
Así, la oxidación es un proceso por el cual la su- su aspecto y facilitar su mantenimiento, ya que la ca-
perficie de un metal reacciona con el oxígeno del ai- pa de óxido no deja de tener un aspecto rugoso y ás-
re (o del agua) que le rodea, produciéndose una capa pero. Los metales férricos, sin embargo, tales como
superficial de oxido del metal en cuestión. En el fon- el hierro y aceros, la capa de óxido no es consisten-
do, no es si no un proceso de recuperación del esta- te, por lo que se trata de evitar su aparición, bien con
do natural de dicho metal. En efecto, los metales no aceros inoxidables, bien con distintos tipos de pro-
se encuentran en la naturaleza en estado puro (ex- tecciones, como veremos, excepto en el caso de un
cepto los llamados metales preciosos) por el contra- acero especial y relativamente nuevo, el acero COR-
TEN (corrosión + tensión) en el que se ha conseguido
una aleación tal a base de diversos componentes (C.
• Este capitulo esta contenido parcialmente en otras publicaciones
Si, Mn, P, S, Cu, Cr, y Ni) además del hierro, que pro-
del mismo autor
Tema 8. Oxidación y corrosión de elementos metálicos de tachada

238

1. Oxidación de acero COR-TEN. 2. Alteración superficial por corrosión.

duce una capa de óxido que sí tiene las característi- para la creación de la pila electroquímica es necesa-
cas mecánicas suficientes como para proteger al res- ria la existencia de un fluido conductor (electrolito).
to del elemento metálico y, por tanto, estabilizar su si- Este suele ser, normalmente, el agua, que se ve po-
tuación química, por lo menos en contacto con el aire. tenciada con la presencia de sales contaminantes que
Dicha capa, no obstante, sigue teniendo un aspecto facilitan el trasvase de electrones.
poroso y rugoso que no resulta especialmente agra-
dable en una visión muy próxima, a pesar de que se
1.2 Elementos metálicos de fachada
ha utilizado con cierta profusión en edificios impor-
tantes, con un resultado final, en mi opinión, de per- Quedan incluidos en este título todos aquellos ele-
manente suciedad superficial (Fig.1). mentos metálicos que puedan aparecer en nuestras
fachadas, tanto si son parte constitutiva del edificio,
1.1.2 Corrosión bien sea como estructura (estructura vista, porches,
Si la oxidación es un simple proceso de transfor- pérgolas, etc.) bien como cerramiento (carpintería de
mación química de la capa superficial del elemento ventana, chapas, paneles, etc.) como si son elemen-
metálico, la corrosión, por el contrario, es un proceso tos complementarios del mismo, ya se trate de com-
también químico (más concretamente electroquímico) plementos al cerramiento (barandillas, rejas, persia-
por el cual se produce una degradación superficial del nas, partesoles. etc.) ya de elementos de sujeción
metal en cuestión, al haberse formado una pila elec- (abrazaderas, grapas, etc.) ya de instalaciones de dre-
troquímica en la que el metal actúa de ánodo (más ne- naje (canalones, bajantes, sumideros) ya, por último,
gativo) perdiendo partículas que, con electricidad ne- de elementos de adorno (farolas, carteles, chapas,
gativa, se desplazan hacia el cátodo (más positivo). etc.). En cualquiera de los casos, son elementos me-
Así pues, el flujo de electrones del ánodo al cátodo se tálicos expuestos a la intemperie y, sobre todo, a la
materializa con esta pérdida de partículas del metal acción directa del agua de lluvia, y sea cual sea el me-
que resulta corroído (Fig. 2). Como vemos, tanto el tal que los constituye, suelen predominar las formas
proceso patológico como la lesión final son comple- lineales y superficiales.
tamente distintos a la oxidación, aunque relaciona-
dos, por ser procesos químicos y ocurrir en los mis-
mos materiales (los metales).
En los metales donde la capa de óxido es protec- 2. Tipología
tora, el avance de la corrosión suele ser muy lento, si
no nulo. En los metales férricos, por el contrario, la ca- Aunque la tipología más clara, desde el punto de
pa de óxido no sólo no los protege de la corrosión, si- vista del proceso patológico, es el propio fenómeno
no que, como veremos, la facilita. En cualquier caso. químico o físico-químico que lo produce, sin embar-
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

go, a nosotros nos interesará también distinguir ios ti-


pos que nos aparecen en función del elemento cons-
tructivo y su disposición en la fachada. De ahí que po-
damos distinguir dos variantes en la tipología.

2.1 Según el proceso

Ya hemos visto la diferencia existente entre los dos


fenómenos químicos que provocan el proceso pato-
lógico. La oxidación y la corrosión. El primero produ-
ce una simple alteración de la superficie metálica del
elemento constructivo que, en la mayoría de los me-
tales, suele incluso ser protectora; de ahí que no ne-
cesitemos profundizar en su análisis. Por el contrario,
la corrosión resulta un proceso claramente degradante
que tiene distintas evoluciones según el fenómeno fi-
sicoquímica concreto y, por tanto, vale la pena anali-
zar con cierto detalle. Así, pues, a los efectos de es-
tudiar los procesos patológicos debidos a esta acción
química sobre los metales, veamos los distintos tipos
de corrosión que nos podemos encontrar, que de-
penderán de la pila electroquímica que se forme.

2.1.1 Corrosión por oxidación previa (Fig. 3)


Es uno de los tipos de corrosión más extendida y
aparece como un segundo paso del fenómeno de la
oxidación de los aceros, lo que hace que se conside-
ren los dos como un solo proceso patológico. En esen- 3. Corrosión por oxidación previa.
cia, en el acero, la capa de óxido de hierro, que re-
sulta porosa y fisurada, al humedecerse, bien por el
contenido de humedad ambiente, bien por agua de contaminantes. En cualquiera de los casos, el hecho
lluvia o de otras procedencias, se transforma en hi- de que la superficie del metal se oxide será debido a
dróxído férrico, que resulta con un potencial eléctrico una falta de protección adecuada del mismo que, a
superior al hierro que permanece debajo. Por otra par- su vez, se puede deber, bien a una ausencia de pro-
te, los poros de esa capa facilitan la permanencia de tección, a una protección inadecuada o, por último, a
agua que, normalmente, se ve complementada con una falta de mantenimiento del elemento que no ha
distintas sales en disolución procedentes de la con- permitido reponer la protección inicial que, por enve-
taminación ambiental. Este conjunto hace que se es- jecimiento natural, ha dejado de tener la eficacia su-
tablezca una pila electroquímica entre el hierro, que ficiente.
actúa de ánodo (polo negativo) y el hidróxido férrico
que actúa de cátodo (polo positivo) formándose una 2.1.2 Corrosión por par galvánico (Fig. 4)
comente de electrones de aquel a éste que provoca Es también un tipo de corrosión muy abundante,
la corrosión del hierro. Resulta un proceso muy co- aunque de aparición muy localizada. Surge cuando la
rriente en superficies férricas a la intemperie y sin pro- diferencia de potencial electroquímico se da entre dos
tección. metales distintos, o entre un metal y un álcali de un
El mismo fenómeno puede llegar a ocurrir en otros cemento, o un ácido contenido en maderas u otros
metales, como el aluminio o el zinc, aunque de un mo- materiales. En todos los casos se necesitará un elec-
do mucho más lento debido a la consistencia de la trolito en forma de fluido como conductor de la co-
capa de óxido que se forma en la superficie, menos rriente eléctrica que se forma.
porosa y frágil que la del hierro. Como consecuencia, El potencial eléctrico de cada metal depende, no
el proceso necesita una continuidad de la humecta- solo de él mismo, sino, además, de la naturaleza del
ción que lleva, normalmente, muchos años, aunque fluido en el que se halle, ya que es entonces cuando
puede acelerarse con la presencia de ácidos y sales dicho metal se ioniza, emite electrones y, en conse-
Tema 8. Oxidación y corrosión de elementos metálicos de lachada

241) fachadas suelen darse muchas posibilidades de este


tipo de pares galvánicos debido al uso de piezas de
acero para la sujeción de otros metales (tornillos, gra-
pas, abrazaderas, etc.).
Por otra parte, también hemos mencionado la po-
sibilidad de creación de pares galvánicos entre meta-
les y otros productos no metálicos. Resultan un nú-
mero de combinaciones posibles muy elevado, que el
profesor Bonet Ferrer ha tratado de resumir en la ta-
bla que reproducimos en el cuadro C.3, indicando el
agente corrosivo no metálico, su tipo, su origen y su
lugar de aparición, junto con los distintos metales a
los que puede atacar y los efectos que en ellos pro-
duce. También resultan casos bastante frecuentes en
las fachadas de los edificios, debido al contacto ine-
vitable entre los elementos metálicos y los pétreos o
de madera.

4. Tubería de acero corroída por par gal- 2.1.3 Corrosión por aireación diferencial
vánico en contacto con una de cobre. En este caso, la diferencia de potencial aparece en
un mismo elemento metálico cuando una porción del
cuencia, adquiere un determinado potencial electro- mismo está húmeda y la otra seca, caso muy frecuente
químico que lo hace convertirse en ánodo o en cáto- en las superficies metálicas horizontales donde per-
do, según el otro metal o elemento al otro lado de la manecen gotas de agua el tiempo suficiente o en las
pila formada. Así, según Calomelano, para una solu- partes bajas de carpinterías y barandillas que tardan
ción acuosa de cloruro sódico al 3% (atmósfera ma- más en secarse. En estos casos, el par galvánico se
rina) se dan los potenciales que se indican en la tabla produce entre la zona húmeda que actúa de ánodo y
del cuadro C.1. Según los que se hallaren en contac- la zona seca que lo hace de cátodo, con lo que la pri-
to por dicha solución, la corrosión se producirá en uno mera resulta corroída.
o en otro.
Es una situación harto frecuente en nuestras fa-
chadas, tanto en alféizares y vierteaguas de ventanas,
como en barandillas, como en carpinterías de venta-
Cuadro C.1 nas, como en cualquier elemento estructural horizon-
tal. En cualquiera de ellos existen zonas suficiente-
POTENCIALES ELECTRICOS EN UNA SOLUCION mente horizontales para la acumulación de agua o
DE CINa AL 3% RESPECTO AL ELECTRODO DE aparecen rincones y hendiduras que facilitan asimis-
CALOMELANO mo dicha acumulación puntual y, por tanto, el fenó-
Potenciales de disolución meno descrito (Fig. 5).

Acero inox. 18/8 0.10 voltios 2.1.4 Corrosión intergranular


Plomo -0,47 Resulta un tipo de corrosión ciertamente más es-
Hierro -0.60 caso. Aparece en las aleaciones metálicas donde no
Cobre -0.18 ha quedado totalmente finalizado el proceso de unión
Aluminio -0.74 de los distintos metales componentes de la aleación,
Zinc -1.06 bien sea por errores cometidos en el proceso de fa-
bricación, bien sea por las proporciones adiciona-
das. El resultado es la independencia de los crista-
Ello nos indica lo complejo que puede ser el pro- les de los distintos metales aleados, que introduce
ceso patológico. En este sentido, en su libro Materials la posibilidad de un número elevado de micropares
for Building, Lyall Addleson establece un cuadro bas- con la microcorrosión consiguiente. Aunque es un
tante completo en el que se indican los riesgos de co- fenómeno que puede darse en cualquier tipo de
rrosión por par galvánico entre dos metales y que re- aleación metálica (cualquier acero) resulta, sin em-
producimos en el cuadro C . 2 . De hecho, en nuestras bargo, muy evidente en el acero inoxidable, donde
capitvio Patología e intervención en cerramientos y acabados

241

Los símbolos situados en la intersec-


ción entre columnas indican el grado
de corrosión (ver la clave que se
incluye más adelante) L o s símbolos
colocados en el triángulo inferior
conciernen a los metales de las filas
horizontales, y los situados en el trián-
gulo superior a los metales de las co-
lumnas verticales.

Ejemplo:
(1) contacto entre aluminio y cobre:
aluminio (horizontal): •
cobre (vertical): o
(2) contacto entre cromo y acero:
cromo (vertical): o
acero (horizontal): o
Dos símbolos en un mismo triángulo
indican distintos grados de corrosión.

Clave de los símbolos:


o No aumenta la corrosión del metal.

0 Puede aumentar L I G E R A M E N T E la corrosión.


ta Puede aumentar I N T E N S A M E N T E la corrosión (el Cuando sea incviiable el contacto entre cobre, o
proceso se acelera si el metal se encuentra en pre- materiales con alto contenido de cobre y alumi-
sencia de humedad y ésta contiene sales, ácidos o nio, deberá darse a los primeros un recubrimien-
productos de combustión que actúan como elcctro- to de estaño o níquel y. posteriormente, otro de
. litos). cadmio, a fin de proteger al aluminio.
• Incluso en condiciones poco expuestas, esta combi- s L a corrosión del cobre y el latón puede acelerar-
nación no es aconsejable si existe humedad, y no se en contacto con bronce
se toman medidas de protección adecuadas 9. E n contacto con un recubrimiento de cromo grueso
en contacto con un recubrimiento de cromo de
NOTAS: poco espesor.
I Puede producirse un contacto bimetálico entre 10. Cuando está en inmersión, la corrosión del cobre
distintas aleaciones de aluminio, ya que el alu- o latón puede acelerarse en los poros o defectos
minio es más resistente a la oxidación en alea- del recubrimiento de estaño.
ciones con cobre y tiene poca resistencia en las E n condiciones de inmersión puede darse una
aleaciones con zinc. aceleración de la corrosión en uniones soldadas,
2. Pueden producirse grases corrosiones locales, de- en el cobre o sus aleaciones.
bidas al oxigeno, incluso cuando el metal está 12 E l plomo, con contacto con acero o acero galva-
totalmente destruido, o bien debido al concacto nizado, puede corroerse rápidamente si no está
entre los productos derivados de la corrosión del suficientemente ventilado.
hierro o el acero y el aluminio, o viceversa L a corrosión del acero dulce puede aumentar si
3. E l metal corroído forma una excelente capa de este metal se encuentra en contacto con hierro
protección para el acero o el hierro fundido, en fundido y. especialmente, si el área expuesta del
este último caso deben protegerse electroquími- acero es pequeña en relación con la del hierro.
camente aquellas partes del metal no cubiertas. 14. E l zinc puede acelerat la corrosión del acero si
4. L o s efectos galvánicos nocivos pueden reducirse se le calienta por encima de 6 0 * C .
empleando aleaciones de aluminio con bajo con- 15. Los productos de la corrosión del zinc son más
tenido de cobre (máximo 0 . 1 % ) . voluminosos y menos adherentes que los del cad-
5. L a corrosión del magnesio, en presencia de agua mio: de esle hecho puede depender en algunos
de mar o cualquier otro electrolito, forma álcalis casos la elección entre estos dos metales
que pueden atacar al aluminio 16. E n los contactos bimetálicos, el comportamiento
b Un -metal inoxidable- puede ser una buena pro- de las aleaciones de magnesio depende del me-
lección para un -metal corroído", siempre que dio en que se encuentren, es decir, de si el elec-
esla protección sea continua, debe lenersc en trolitopuede formar un puente pata que se pro-
cuenta que en condiciones de mucho desgaste duzca el contacto E l cuoiportamiento que se in-
cualquier capa de protección, aunque sea buena, dica en el abaco se reitere a condiciones de ex-
puede llegar a ser discontinua posición muy severas.

CUADRO II. Riesgos de corrosión por par galvánico entre dos metales según L. Addleson.
T
ema 8. Oxidación y corrosión de elementos metálicos de tachada

242 Agentes corrosivos LTectos

ORIGEN LUGAR DONDL SE DA TIPO METALES DESCRIPCION

Cemento Producios basados en Hidróxido ALUMINIO Generalmente malos, dependiendo el


Portland cementos: morteros, sódico y grado de ataque de la aleación. Esen-
pastas y hormigones. potásico. cial la protección para condiciones de
humedad.

PLOMO Malos. Esencial la protección para


ZINC condiciones de humedad

Cernemos Productos fabricados- Alcalis. ALUMINIO Generalmente malos, menos que con
aluminosos con estos cernemos. PLOMO los Portland ya que son menos alcali-
ZINC nos-

Calcio y Morteros y pastas. ALUMINIO Muy malos Esencial la protección


magnesio PLOMO contra la humedad. Efectos más lige-
libres. ZINC ros que los desentos anteriormente.

Sales Pastas de yeso. Reacción Todos los Corrosión antes del secado; que no
aceleradoras. acida metales no debe preocupar una vez la pasta se
protegidos. ha secado y no se den condiciones de
humedad.

Hormigón. Cloruro ACEROS El cloruro calcico no puede exceder


calcico suaves al 2% del peso del cemento y debe
o dulces. ser bien distribuido.

-Smoke» y Chimeneas. Dióxido de ALUMINIO Ataque rápido si hay fuerte exposi-


humo de sulfuro. COBRE ción .
chimeneas ZINC

Combustión Atmósfera. Dióxido de ALUMINIO Resistencia a la corrosión relativa-


de carbón, Agua de lluvia. sulfuro. de ACERO mente alta. A veces no progresa y ad-
fucls. carbono. quiere valores bajos En determina-
salpicaduras sulfatos y cío- das aleaciones puede ser continua y
agua de mar. ruros. seria.

ZINC La película formada no es suficiente-


mente dura y adherente para evitar
un ataque constante aunque lento.

HIERRO Y La corrosión es estimulada considera-


ACF.RO blemcnte. Es esencial una protección.

Conduccio- Conducciones y tubos Cloruros. HIERRO E l carácter ácido puede influir en la


nes y tubos de agua, sulfatos y dio- ACERO corrosión y evitar la formación de la
de agua xidos de car- capa protectora de carbonato calcico
bono.

ALUMINIO No es recomendable para aguas ordi-


narias, excelente para aguas especial-
mente tratadas para la utilización en
la industria

COBRE Corrosión apreciable en aguas no du-


ras. Aparecen manchas verdes en las
instalaciones y conducciones.

CUADRO III Riesgos óe corrosión por par galvánico entre metales y productos no metálicos, según Bonet Ferrer.
capítulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

\genles corrosivos Efectos

ORIGEN LUGAR DONDE SE DA TIPO METALES DESCRIPCION

PLOMO Ataque de aguas no duras suficiente


para provocar intoxicaciones.

Agua Estructura sumergida Cloruros HIERRO La velocidad de corrosión aumenta


de mar y conducciones. ACERO con relación al agua dulce.

ACERO Ataques localizados sobre todo en


INOX. aguas estancadas.

Madera. Elementos de madera. Acidos ALUMINIO Corrosión improbable si la madera


orgánicos COBRE está seca o el metal es buen aliado de
y sales solu- PLOMO ella. Las llaves de Al son fuertemen-
bles. ZINC- te atacadas si están expuestas a la llu-
via, no si se protegen de ella el zinc
de los canalones en contacto con te-
jas o tejados es destruido muy depri-
sa. El Al pintado puede ser utilizado
con seguridad sobre la madera.

Sulfatos Productos de limpieza, Sales solubles ZINC Puede ser atacado en parte por las
sobre todo de paredes de calcio, sales y en parte por los álcalis del mor-
de ladrillo. magnesio tero.
y potasio

Algas, Pendientes de cubiertas. Acidos ALUMINIO Ataque allí donde el agua de lluvia
mohos orgánicos y COBRE golpee sobre el metal.
y liqúenes. dióxido de PLOMO
carbono. ZINC

Agentes Cementos porosos Pequeñas COBRE Resultando atacado el cobre si con-


espumantes utilizados para cantidades tiene pequeñas cantidades de fósforo.
(no todos). los aislamientos. de amoniaco

Cenizas y Escorias y bases de Materias HIERRO Y Fuerte corrosión probable.


escorias. solubles ACERO

CUADRO III. Riesgos de corrosión por par galvánico entre metales y productos no metálicos, según Bonet Ferrer.

Corrosión por aireación diferencial en bajos de carpintería y rincones.


Tema 3. Oxidación y corrosión oe elementos metálicos de fachada

244 el único tipo de corrosión prácticamente posible es que se produce y, más adelante, plantear su aparición
precisamente ésta. y prevención.

2.1.5 Corrosión por inmersión 2.2.1 Plataformas horizontales (Fig. 6)


Existe un tipo de corrosión que no sigue la vía elec- Nos aparecen, tanto en elementos lineales (baran-
trolítica para la pérdida de material metálico, sino la dillas, estructuras, etc.) como en elementos superfi-
vía de la disolución del mismo. Este es el caso de la ciales (alféizares, albardillas, etc.). En las partes inter-
corrosión por inmersión en la que el metal resulta io- medias de dichas plataformas, cuando no tienen
nizado por su contacto con el agua, combinándose inclinación suficiente, puede aparecer la corrosión por
sus iones con los del hidrógeno de ese fluido, produ- aireación diferencial. En efecto, tanto los pasamanos
ciéndose una capa de hidróxido. Dicha capa, en fun- de barandillas, como los barrotes horizontales de las
ción del pH de la solución, puede disolverse provo- mismas, suelen exhibir zonas totalmente planas don-
cando una pérdida de material que, en definitiva, de fácilmente permanecen gotas de agua de un mo-
constituye una corrosión. Es un tipo de corrosión que do más o menos continuado (bien por goteo, bien por
afecta a la mayoría de metales, no solo a los férricos, irregularidades en su superficie) que acaban provo-
y su intensidad depende de los límites del pH dentro cando dicha corrosión. Asimismo, en alféizares de ven-
de los cuales el hidróxido correspondiente se man- tanas y albardillas de chapa metálica es corriente que
tiene estable. Dichos límites figuran en la tabla del cua- haya una inclinación muy débil o, incluso, nula, que
dro C.4 y dentro de ellos el hidróxido del metal actúa produce concentraciones localizadas de agua, ayu-
como capa protectora, mientras que fuera de ellos se dadas por las deformaciones propias de la chapa, que
disuelve. acaban en corrosión por aireación diferencial.
Aunque es una corrosión típica de los elementos Por último, dichas plataformas horizontales, si se
metálicos sumergidos, veremos que puede aparecer llegan a oxidar por falta de protección, suelen produ-
también en las fachadas (jardineras, patillas embuti- cir fácilmente la corrosión por oxidación previa en zo-
das, etc.). nas amplias.

2.2.2 Angulos diedros (Fig. 7)


Cuadro C.4 Prácticamente todos los elementos lineales y su-
LIMITES DEL pH DE DISTINTOS METALES perficiales metálicos tienen algún punto de encuentro
DENTRO DE LOS CUALES SU HIDROXIDO SE con otros elementos, verticales o de distinta inclina-
MANTIENE ESTABLE. TOMADO DEL LIBRO ción, constituyendo ángulos diedros más o menos
«PATOLOGÍA DE FACHADAS URBANAS» abiertos que facilitan, por tensión superficial, la acu-
mulación de agua y, por tanto, el retraso en su eva-
Precipitación y redisolución de los hidróxidos en
poración, lo que acaba provocando, de nuevo, la co-
función del pH
rrosión por aireación diferencial localizada.
Hidróxido de hierro-ferroso 5,8 14
2.2.3 Empotramientos (Fig. 8)
Hidróxido de hlerro-férneo 2,2 >14
Entendiendo por tales todos aquellos puntos don-
Hidróxido de aluminio 3,8 10,6
de el elemento metálico penetra en una superficie pé-
Hidróxido de zinc 6,8 13,5
trea para su sujeción. Podemos incluir aquí, tanto los
Hidróxido de cobre 5 15
elementos metálicos de barandillas y otras estructu-
Hidróxido de plomo 7,4 >14
ras, como los superficiales que actúan de alféizares o
(pH < 7: carácter ácido, pH > 7: alcalino). albardillas, como Incluso, las grapas y abrazaderas
que sirven de sujeción a otros elementos de la misma
fachada.
Esta penetración implica la aparición de dos tipos
2.2 Según el elemento constructivo de corrosiones. Por una parte, la formación de ángu-
los diedros, con la consiguiente acumulación de agua
En las fachadas podemos distinguir una serie de en ios mismos y, por tanto, la aparición de la aireación
posiciones concretas de elementos metálicos que fa- diferencial. Por otra, la inevitable separación entre el
vorecen la aparición de los fenómenos químicos de elemento metálico y el pétreo, con aparición de una
corrosión vistos en el apartado anterior. Por ello, con- abertura hacia el exterior y de una junta superficial al-
viene agruparlos para conocer el proceso patológico rededor del elemento metálico, que facilita la pene-
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

9. Abertura de unión en empotramiento y manteni-


miento de la humedad.
8. Empotramientos.
Tema 8 Oxidación y corrosión de elementos metálicos de fachada

para sujetar canalones y bajantes de zinc, etc.) con la


presencia de agua y contaminantes, se producen pa-
res galvánicos que acaban con la corrosión de uno de
los elementos. Dichos pares galvánicos aparecen, no
sólo entre el elemento de sujeción y el sujetado, sino
también entre dos elementos yuxtapuestos unidos en-
tre si por un tercero, como es el caso de algunos jun-
quillos de aluminio en carpinterías de perfiles lamina-
dos, o pasamanos de un metal sobre barandillas de
otro. Todo ello acaba en la corrosión del más débil
electroquímicamente hablando.

2.2.5 Recipientes metálicos (Fig. 11)


Aparecen esporádicamente en las fachadas en for-
ma de jardineras y canalones, aunque también pode-
mos incluir aquí todos aquellos tramos de cerrajería
en los que se facilita el embalse del agua por error de
diseño o colocación. En estos casos, el proceso de
corrosión más claro y corriente es el de inmersión.

3. Diagnosis

Estos tipos de corrosión apuntados, aunque son


perfectamente distinguibles, no suelen presentarse
aislados, sino más bien conjuntamente, de modo que
la corrosión por oxidación previa suele ser dominan-
te y aparece combinada con la de aireación diferen-
11. Recipientes metálicos.
cial. Esta última, además, puede aparecer junto a la
de inmersión en los empotramientos y junto a las de
tración de agua exterior por capilaridad, agua que per- par galvánico en encuentros entre dos metales dis-
manece en dicha junta superficial, así como en el pro- tintos y, en cualquiera de los casos, suele darse una
pio elemento pétreo en contacto, y que puede acabar ausencia de mantenimiento que facilita la falta de pro-
provocando la corrosión por Inmersión de la parte tección del elemento metálico lo que conduce a los
del elemento empotrado, con la consiguiente pérdi- distintos tipos de corrosiones, empezando por el de
da de integridad y, por tanto, del propio empotra- oxidación y siguiendo por los otros. No hay duda que
miento (Fig.9). Por último, estos empotramientos, la protección del metal impide o dificulta los procesos
gracias a la existencia de agua en ellos, pueden pro- de corrosión y, por supuesto, el de oxidación.
vocar también la corrosión por par galvánico entre el Por todo ello, será conveniente un análisis deta-
metal y los álcalis de los morteros que lo abrazan, si llado de la lesión a fin de conocer los distintos proce-
se dan en ellos. sos que hayan aparecido simultáneamente y poder
tomar las medidas oportunas para cada uno de ellos.
2.2.4 Sujeciones (Fig. 10) De lo contrario, recurriremos solamente a la limpieza
Cuando un elemento metálico se sujeta a otro, o a e imprimación que, en muchos casos, será insuficiente,
la propia tachada, mediante una segunda pieza me- según veremos. Así pues, para un correcto estudio del
tálica que actúa de abrazadera, pasador, cuelgue, etc. proceso patológico deberemos"dar los siguientes pa-
pueden aparecer los siguientes procesos. sos.
Por un lado, encuentros, ángulos y rincones, en a) Identificar el tipo, o tipos, de corrosión con los
general, donde se acumula el agua y la suciedad y, que nos enfrentamos,
por tanto, aparece el riesgo de corrosión por aireación b) De existir par galvánico, conocer y analizar los
diferencial y por inmersión. Por otro, cuando los me- elementos que han constituido la pila electroquímica.
tales utilizados son de distinto tipo (tornillos de acero c) De existir indicios de corrosión intergranular, ana-
para atar piezas de aluminio, abrazaderas de acero lizar la estructura cristalina de la aleación en cuestión.
capitulo il Patología e intervención en cerramienios y acabados

d) Si existe aireación diferencial o inmersión, ana-


lizar el detalle constructivo donde se ha producido la
corrosión.
e) Conocer el nivel de avance de la corrosión con
objeto de calibrar la posibilidad de recuperación del
elemento metálico.
Una vez dados estos pasos, se puede establecer
un diagnóstico que incluya el proceso patológico en
cuestión. Con él podemos proceder a las operacio-
nes de reparación. Veamos.

4. Reparación 12. Decapado químico de óxido.

Como siempre, habrá que actuar sobre la causa


que ha originado el proceso de corrosión para aca-
bar reparando el efecto. Esto último consistirá, bá- A) Los procedimientos mecánicos más corrientes
sicamente, en la limpieza a fondo del metal afecta- son dos; el cepillado y el chorreado
do y su imprimación protectora. En ocasiones, esta El cepillado se lleva a cabo con cepillos metálicos
operación cubrirá también la causa origen, como es y no deja de ser un sistema manual con un alcance
el caso de las corrosiones por oxidación. Pero en las relativo, sobre todo cuando la capa de óxido es dura
otras habrá que tomar unas medidas previas orien- y la geometría del elemento es complicada, por lo que
tadas a anular la causa, que conviene analizar por se debe ceñir a casos sencillos con profundidades de
separado. corrosión relativamente pequeñas.
El chorreado tiene, evidentemente, mayor energía
4.1 Corrosión por oxidación previa de abrasión, por lo que es más recomendable para
grandes superficies, capas de corrosión más impor-
Comoquiera que el origen del proceso de corro-
tantes y geometrías más complicadas. Normalmente
sión está en la oxidación superficial del elemento,
se trata de proyección de arena silícea, aunque pue-
la causa primera la constituye la falta de protección
de optarse por otro tipo de proyectil como viruta de
superficial del metal, pues como se apuntó en los
acero, granalla de plomo, etc., aunque estos cho-
primeros apartados, el metal en estado puro tiende
a volver a sus orígenes en forma de óxido reaccio- rreados metálicos pueden provocar otros problemas
nando con el oxígeno del aire. Así pues, en este ca- colaterales en el propio metal.
so, la reparación podrá ser conjunta de todo el pro- Los decapados químicos consisten en la aplica-
ceso patológico, abarcando tanto la causa como el ción superficial, por brocha o aerosol, de algún pro-
efecto, y consistirá en una limpieza profunda de la ducto químico que descomponga el óxido metálico y
superficie del elemento metálico y su nueva impri- lo convierta en una capa porosa fácil de eliminar por
mación antioxidante. Veamos los procedimientos cepillado o simple rascado (Fig. 12). Dichos produc-
adecuados y más corrientes en cada tipo de metal, tos son muy variados, en función del óxido de que se
teniendo en cuenta que la química de la construc- trate, y suelen estar sometidos al secreto comercial.
ción va evolucionando por días, por lo que conti- Sin embargo, son fácilmente obtenibles en el merca-
nuamente están apareciendo nuevos procedimien- do. El proceso se completa con un buen cepillado o,
tos que pueden convertir en obsoletos los aquí incluso, con un chorro de arena para asegurar la lim-
presentados. pieza del elemento.

4.1.1 Sistemas de limpieza 4.1.2 Sistemas de protección


Cuando se comprueba que el elemento afectado Son muy variados y se encuentran en continua evo-
es recuperable debido al ligero avance de la lesión, lución, por lo que será suficiente con indicar los tipos
se debe proceder a una limpieza lo más profunda generales más comunes. Así, deberemos distinguir
posible (teóricamente no debe quedar ningún resto entre la protección de un elemento ya colocado y una
de óxido del metal). Dicha limpieza, o decapado, vez limpio y la de un elemento desmontable y cuya
puede hacerse por procedimientos mecánicos o quí- protección puede realizarse en taller y, por tanto, en
micos. otras condiciones.
Tema 8. Oxidación y corrosión de elementos metálicos de lachada

A) Protección in situ metales son susceptibles de aleación, la adherencia


La protección deberá ser a base de productos lí- resulta mejorada.
quidos aplicados con brocha o pistola. Podemos dis- La inmersión puede realizarse también en una so-
tinguir entre protecciones no metálicas y las metálicas. lución de una sal de un metal más noble que va a ac-
a) Las protecciones no metálicas constituyen tuar de protección y que se deposita en la superficie.
una capa química resistente a la oxidación, para lo En este caso, para mejorar la adherencia y la resis-
cual incluye productos que podríamos denominar in- tencia de la capa de protección, se puede hacer pa-
hibidores de la corrosión. En este caso están las pro- sar una corriente eléctrica por la solución; es el siste-
tecciones más comunes a base de minio de plomo', ma de electrodepositación corrientemente utilizado
cromato de zinc, etc. Podemos incluir también en es- en el galvanizado.
te apartado los productos impermeabilizantes que ac- b) Por metalización, a base de proyectar sobre
túan como verdadera barrera de estanquidad y, por el elemento a proteger un chorro de gotitas del metal
tanto, dificultan la oxidación. Tenemos, así, los pro- de protección fundido. Según el tipo de proyección,
ductos bituminosos, los de caucho natural y los de se denomina cementación a este procedimiento.
caucho sintético, como el conocido caucho clorado
En cualquiera de los dos tipos de procedimientos,
(clorocaucho), el butil, etc. En cualquier caso, estas
antes de elegir el metal protector, habrá que conside-
protecciones deben aplicarse lo antes posible una vez
rar su actuación como ánodo o como cátodo respec-
limpio el elemento, para asegurar la ausencia de una
nueva oxidación superficial además de comprobar la to del metal del elemento protegido, según lo indica-
no existencia de polvo ni grasas. do en el apartado anterior. No obstante, hay que tener
en cuenta que esta protección es más uniforme, por
b) Las protecciones metálicas aplicadas in si- lo que el hecho de que la protección sea más elec-
tu, lo tienen que ser en frío y son más modernas y tropositiva no implica los inconvenientes menciona-
algo más costosas por la dificultad que supone el dos antes.
mantenimiento de metales en estado fluido y su ad- c) Por tratamientos químicos. Son técnicas más
herencia. Los más corrientes son los productos de- modernas que persiguen la transformación química
rivados de los metales de bajo punto de fusión, ta-
de la superficie del elemento metálico para hacerla
les como plomo, estaño, cadmio y zinc. En cualquier
más resistente a la oxidación y corrosión. Podemos
caso, hay que tener en cuenta el potencial electro-
mencionar dos sistemas como más representativos.
químico del metal y de la protección para cada ca-
c.1) Fosfatación, aplicado sobre todo al acero
so, ya que una protección de potencial más negati-
vo que el metal protegido funciona como ánodo, por en el que su superficie se transforma en fosfatos com-
lo que, normalmente, su actuación protectora será plejos, estables e insolubles, sin alterar el espesor de
correcta (el metal protegido permanece como cáto- la pieza ni sus propiedades físicas.
do y no se corroe). Por el contrario, una protección c.2) Protalización, utilizado, sobre todo, en el alu-
más positiva que el metal a proteger puede hacer minio y el zinc.
que éste se convierta en el ánodo de un par galvá-
nico y el resultado será su corrosión. Por ello, si se C) Acabado
da este caso, hay que asegurar que la adherencia Las protecciones indicadas hasta aquí tienen el ob-
entre las dos capas sea perfecta, para evitar filtra- jeto de impedir o dificultar la oxidación y la posible co-
clones de humedad que faciliten la aparición del par rrosión del elemento metálico, pero su aspecto final
galvánico. no suele satisfacer las exigencias de acabado nor-
males. Por una parte, su textura no suele ser pulida,
sino más bien porosa y rugosa, excepto en casos es-
B) Protección en taller
peciales (cromado, anodizado). Por otra, su colorido
Siempre que el elemento sea desmontable, su pro- es escaso y no demasiado atractivo. Por ello, cuan-
tección puede hacerse en taller, lo que resultará más do el elemento metálico debe quedar visto, se proce-
completo. En este caso, utilizaremos protecciones me- de a la aplicación de una pintura de acabado, que es
tálicas aplicadas por diversos procedimientos, de los la que debe reponerse con periodicidad (manteni-
cuales los más usuales son los siguientes: miento) y que, en cualquier caso, colabora también en
a) Por inmersión del elemento en una cuba que la protección de la pieza.
contiene el metal de recubrimiento fundido. Si los dos
Los tipos de pinturas utilizadas son también muy
variadas y no vamos a entrar en su enumeración, lo
que se saldría de los límites de este capítulo. Baste
' Si no está prohibido en algunos países por la posible contamina-
ción ambiental. indicar la necesidad de que sean elásticas (esmaltes
capitulo '! Patología e intervención en cerramienlos y acabados

Material Preparación Prolección Acabado 249

1 GENERAL Recubrimiento por una capa protectora no metálica


• Pinturas y barnices
• Lacas y esmaltes cocidos
• Productos bituminosos
• Revestimientos de caucho natural o sintético
• Esmalte vitrificados
• Productos anti-orín
Recubrimiento por una capa protectora metálica
• Metal de revestimiento electronegativo con respecto
al protegido
• Metal de revestimiento electropositivo con respecto
al protegido
• Metales utilizados
De baio punto de fusión plomo, estaño, cadmio, zinc.
Ligeros: aluminio
• Tipos de revestimiento
Por vía húmeda: Desplazamiento
Electrodepósito
Por temple Inmersión en el metal del recubrimiento
Aportación por fusión mediante soplete o arco
Por metalización Proyectando sobre la pieza gemas
de metal de recubrimiento fundido
Por placado Laminación conjunta y en caliente
del metal base y el recubrimiento
Por cementación Proyectado sobre el metal base un
chorro de metal de reubrimíento fundido
Protección por tratamientos quimicos
• Fosfatacíón
• Protalización
Protección por tratamientos anódicos
• Se emplean para el aluminio; formación de una película de alúmina
muy resistente y de fácil limpieza
HIERRO Decapado • Imprimación • Pinturas plásticas, al aceite, de aluminio
Y ACERO • Chorro de arena anticorrosiva bituminosas, etc.
• Limpieza con cepillo met. • Metalización • Sobre acero metalizado no es necesaria otra
• Decapado químico protección, salvo casos particulares o
condicionantes estéticos
ZINC - Después de un huon • Imprimación • Pinturas al silicato, plásticas, al aluminio
desengrasado de la para metales • fcn atmósferas industriales osmaltes
superficie se le aplica no férreos . sintéticos, pinturas epoxi. de poliuretano
una 'imprimación de
limpieza"
ALUMINIO • Suave lijado • Imprimación de • Pinturas gliceroftálicas. de aluminio, plásticas
• Inmersión en baños de limpieza • En atmósferas industriales: esmaltes,
fórmulas diversas para • Protección sintéticos, pinturas epoxi, de poliuretano
formar una buena anódica y otras
superficie de aoarre
PLOMO • Desengrasado y • Imprimación • Pinturas al silicato, plásticas, al aluminio
limpieza a fondo, para metales • En atmósferas industriales: esmaltes
seguidos de lijado no férreos sintéticos, pinturas epoxi, de poliuretano
de la superficie
COBRE • Limpieza a fondo • Mano de imprim • Cuando se quiera mantener el brillo metálico
y lijado para met ncffér una vez preparada la superficie, se barniza

CUADRO 5. Protección y acabado de elementos metálicos.

y lacas) y resistentes a la intemperie, lo que obligará 4.1.3 Sustitución


a seleccionarlas en función de su situación climática Cuando la corrosión esté tan avanzada que haya
y de la contaminación de la zona, así como a especi- hecho peligrar la integridad del elemento en cuestión
ficar su espesor, lo que dependerá, además, del fa- (perforación o reducción excesiva de su sección) o ha-
bricante. En general, se considera que 120 mieras es ga irrecuperable su aspecto, no hay otra solución que
suficiente, lo que implica una aplicación en, por lo me- la sustitución de dicho elemento por otro nuevo que
nos, dos capas o manos. cumpla los mismos objetivos. En este caso hay que
Como resumen general de estas dos fases (pro- cuidar su unión con el resto de piezas metálicas, lo
tección + acabado) el cuadro C.5 recoge los sistemas que suele obligar a la sustitución de tramos enteros
más empleados en función del tipo de metal en cues- del conjunto. Su protección y acabado seguirá las pau-
tión. tas indicadas en el capítulo de prevención.
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

4.2 Corrosión por par galvánico

La causa fundamental es la formación de una pila


por el contacto entre dos metales, o un metal y otro
material de distinto potencial eléctrico con la ayuda
de un electrolito. Habrá que tratar, pues, de eliminar
ese contacto.

4.2.1 Sustitución
Como medida general, siempre que sea posible,
hay que sustituir la pieza corroída por otra de un me-
tal que no provoque par galvánico y, por tanto, tenga
un potencial electroquímico más parecido al de la pie-
za que permanece. En cualquier caso, y como medi- 15. Escudos en patilla.
da de prevención, trataremos de interponer una ba-
rrera aislante entre los dos para evitar el contacto del
electrolito. 4.3.1 Plano horizontal (Fig. 13)
Serán casos aplicables aquellos en que un torni- Aparece en las zonas intermedias de los elemen-
llo de acero haya provocado par con una pieza de alu- tos; lo más directo será aumentar la inclinación de la
minio o zinc, o un junquillo de aluminio lo haga con superficie, lo que no siempre será posible. En un al-
una carpintería de acero, o una abrazadera de este féizar de ventana, habrá que desmontarlo y volverlo a
metal sujete piezas de zinc u otro similar. En todos colocar con la inclinación adecuada, lo mismo habrá
ellos habrá que eliminar la pieza de sujeción y susti- que hacer en albardillas de chapa. En los pasamanos,
tuirla por otra del mismo material que el elemento su- sin embargo, no habrá más remedio que suplementar
jetado o, además, introducir una barrera de P.V.C. o con una nueva pieza con curvatura en caballete, o ba-
neopreno (barrera anti par galvánico) entre ellos. sarnos exclusivamente en la protección antioxidante.
Asimismo, en la nueva colocación, habrá que tra- Esta, en cualquier caso, será de aplicación si quere-
tar de evitar la acumulación de agua (rincones, juntas, mos (y podemos) recuperar el elemento, previa su lim-
etc.) para dificultar la aparición del necesario electro- pieza, tal como quedó indicado en la corrosión por
lito, mediante diseño adecuado y sellantes. oxidación. De lo contrario, no quedará más solución
que la sustitución del elemento afectado por otro que
cumpla las previsiones. Por último, en las piezas es-
4.2.2 Recuperación
tructurales de zonas horizontales, si es posible, las cu-
Si la pieza afectada por la corrosión es todavía re-
briremos con albardillas con inclinación.
cuperable, y en los casos en que el par galvánico apa-
rezca entre un metal y un material no metálico, se apli-
cará un tratamiento de limpieza al elemento en cuestión, 4.3.2 Rincones (Fig. 14)
seguido de una protección del mismo antes de vol- Si es posible, hay que tratar de eliminarlos, para lo
verlo a colocar, de acuerdo con los sistemas descri- cual podemos proponer dos métodos distintos según
tos en el apartado anterior. Así tendremos casos de su situación.
piezas sujetas por abrazaderas donde la corrosión es - En empotramientos a muros pétreos, tanto en
poco avanzada, o elementos empotrados en facha- horizontal como en vertical, podremos interponer un
das pétreas donde han sufrido corrosión por par gal- escudo que, además de actuar de tapajuntas, cam-
vánico con los álcalis del cemento, etc. En estos ca- bia el diedro de 90° por otros dos ángulos más obtu-
sos, además de la limpieza y protección, en la sos y, por tanto, de menor acumulación de agua y su-
recolocación hay que cuidar la ausencia de rincones ciedad. (Fig. 15)
donde se pueda acumular el agua y la suciedad. En encuentros intermedios, en general, posibilidad
de anular los ángulos más agudos mediante masillas
y elastómeros, lo cual no siempre tiene un resultado
4.3 Corrosión por aireación diferencial aceptable desde el punto de vista estético.
Lo que si es posible, y siempre recomendable, es
Al ser la causa la acumulación diferencial de agua el procedimiento descrito de limpieza profunda y pro-
en las superficies horizontales, se tratará de eliminar tección posterior que, sobre todo en rincones, hay que
esa posibilidad: para ello podemos distinguir dos zo- intensificar y, sí cabe, aumentar el espesor de la pro-
nas claves: tección.
Tema 3. Oxidación y corrosión de eiementos metálicos de faenada

por lo que recurriremos a los productos bituminosos


SELLADO
DIRECTO o a los cauchos sintéticos.
Por último, hay que estudiar la posibilidad de que,
una vez repuesta la pieza, no le llegue el agua a la par-
te oculta (normalmente, piezas empotradas) para lo
que recurriremos a los sellados y los tapajuntas. Aquí
resulta útil, también, las piezas escudo como la indi-
cada en el punto 4.3.2., convenientemente sellada en
SELLADO sus dos uniones, o un simple sellado de la junta por
SOBRE
ESCUDO elastómeros (Fig.16).

5. Prevención

Al igual que en capítulos precedentes, vamos a


16. Reparación de corrosión por inmersión en empotramiento. tratar de obtener las medidas de prevención más im-
portantes a tener en cuenta en el diseño y ejecución
de fachadas en relación con los elementos metáli-
cos contenidos en ellas. Para ello, seguiremos la re-
4.4 Corrosión intergranular lación de elementos constructivos tipo, o sus par-
tes, que hemos mencionado. No obstante, comoquiera
Podemos considerar que existe una causa indi- que la protección antioxidante es previa y general
recta, cual es la deficiente aleación, y una directa, la para cualquier tipo de corrosión, la mencionaremos
penetración de humedad entre granulos que actúa de previamente.
electrolito acelerando la aparición de los micropares
galvánicos. 5.1 Protecciones antioxídantes y anticorrosivas
Sobre la primera, sólo podemos actuar sustituyendo
el elemento, lo que deberemos hacer, en cualquier ca- Será la primera medida preventiva a tener en cuen-
so, cuando se trate de acero inoxidable. Sobre la se- ta, y aunque su materialización se lleva a cabo durante
gunda, sin embargo, sí podemos proponer actuacio- su ejecución, sin embargo su descripción debe estar
nes correctivas, encaminadas a evitar dicha presencia contenida en los documentos escritos del proyecto
de humedad. Así, por un lado, procederemos a revisar (memoria y pliego de condiciones técnicas).
la fuente de dicha humedad y evitarla. Puede tratarse Los sistemas y operaciones a tener en cuenta coin-
de goteras y concentraciones de agua innecesarias, o ciden, básicamente, con las mencionadas en el apar-
de lesiones de humedad de los tipos conocidos. Por tado 4.1. Corrosión por oxidación, por lo que bastará
otro, podemos tratar de sellar el elemento en cuestión con enunciarlos, desarrollando, en todo caso, los que
para evitar la penetración de agua. En realidad, el se- aparezcan como nuevos, por no poder emplearse en
llado es una protección de las analizadas, que requie- los procesos de reparación.
re la limpieza previa y la pintura de acabado final.
5.1.1 Limpieza previa
4.5 Corrosión por inmersión Antes de aplicar cualquier protección, hay que ase-
gurar la limpieza del elemento metálico, de lo contra-
El contacto permanente del agua con el metal se rio tendríamos un doble peligro. Por un lado, la posi-
tratará de evitar por el ya comentado procedimiento ble falta de adherencia de la protección y, por tanto,
de la protección, aunque aquí tenemos que estable- el probable desprendimiento de esta nueva capa. Por
cer ciertos matices. otro, la permanencia de un posible foco de nuevas al-
En primer lugar, como siempre, ver si la pieza es teraciones superficiales conducentes, en definitiva, a
recuperable, lo que suele ser muy difícil en este tipo la corrosión. Los procesos mencionados pueden re-
de corrosión, ya que al estar oculta la parte de la pie- sumirse en:
za que sufre la lesión (enterrada, empotrada, jardine- - Limpieza mecánica cepillado
ras, etc.) no nos damos cuenta de ella hasta que la chorreado
corrosión es muy avanzada y, por tanto, el elemento
ha perdido su integridad. Si es recuperable, la pro- - Decapado químico arena
tección a aplicar tiene que ser del tipo impermeable, metralla
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

Comoquiera que partimos de una pieza teóricamente 5.2 Protección de plataformas horizontales
nueva, lo normal es utilizar la limpieza mecánica. (ver Fig. 13)

5.1.2 Protección Aparte de la corrosión por oxidación previa, pue-


De modo similar a como hacíamos en el apartado de aparecer la debida a aireación diferencial. La pri-
de reparación, debemos distinguir varios sistemas que mera la combatimos con las protecciones menciona-
podemos agrupar en dos tipos de técnicas: das en el punto anterior. Para anular la segunda
debemos evitar que se pueda acumular el agua por
A) Protección aplicada directamente puntos. Para ello tomaremos las siguientes medidas.
Empleando medios básicamente manuales (bro- a) Evitar el goteo directo sobre la plataforma
cha, pistola, etc.) basadas en la adherencia mecáni- b) Darle la máxima inclinación posible, bien incli-
ca o química entre el metal y el protector. Así distin- nando todo el plano (alféizares, albardillas, etc.) bien
guíamos entre: dándole curvatura transversal (barandillas, barrotes,
-Protecciones no metálicas u orgánicas, a base etc. o utilizando perfiles que tengan dicha curvatura
de aceites, betunes, cauchos, etc. que protegen o im- (tubulares o semitubulares).
permeabilizan. c) Evitar uniones de elementos horizontales que
-Protecciones metálicas, a base de metales fun- provoquen hendiduras o el uso de chapas y piezas
didos o combinaciones de ellos, aplicados en frío. con textura superficial que facilite la acumulación de
Entre las primeras, debemos mencionar, además, agua y suciedad, a menos que se evite con su gran
las lacas y esmaltes cocidos, a base de hacer pasar inclinación (escalones y plataformas de chapa estria-
el elemento metálico por el horno, una vez impregna- da).
do, hasta alcanzar la temperatura necesaria para que d) Proteger los elementos de horizontalidad inevi-
el protector adquiera la dureza requerida, solución muy table mediante albardillas con la correcta inclinación.
utilizada con chapas, tanto de aluminio, como de ace-
ro. Este tipo de protección tiene gran variedad de aca-
5.3 Protección de ángulos y rincones (ver Fig. 14)
bados y coloridos, por lo que cumple los dos fines re-
queridos con una sola capa (protección + acabado). De nuevo tenemos que luchar contra la aireación
Suelen ser productos a base de resinas fenólicas, v¡- diferencial de estos puntos por acumulación de agua
nílícas, gliceroftálicas, etc. y suciedad en ellos. Podemos distinguir tres solucio-
nes tipo, dos de ellas ya mencionadas en la repara-
B) Protección aplicada por medios especiales ción, ya que en el fondo la solución es la misma, aun-
Incluimos en este apartado todo el conjunto de pro- que en este caso tiene que venir prevista desde
tecciones por procedimientos especiales, ya mencio- proyecto:
nados, tales como: - Anulación, en lo posible, de rincones en el dise-
- por inmersión ño de piezas metálicas, sobre todo en cerrajerías. Ello,
- por electrodepositación por metalización muchas veces, implica la simplificación en el diseño
- por cementación formal, lo que no siempre es aceptable, pero otras se
- por tratamientos químicos (fosfatación, protali- puede conseguir con la disposición adecuada de las
zación)
distintas piezas. Así, por ejemplo, según Indica la fi-
Como tratamientos de prevención, no utilizables
gura, si separamos las piezas lo suficiente como pa-
en reparaciones, podemos añadir:
ra no acumular polvo y suciedad entre ellas, elimina-
a) Por laminación conjunta del metal base y del
mos parte de los focos de corrosión.
metal protector, cuando el elemento metálico en cues-
- Relleno de rincones y hendiduras con másticos
tión puede obtenerse por laminación (perfiles, tubos,
y sellantes.
etc). Es una operación que se suele realizar en caliente
y la adherencia entre ambos suele ser prácticamente -Diseño y colocación de escudos u otras piezas
perfecta. que conviertan un ángulo recto o agudo en dos án-
gulos obtusos donde es más difícil la acumulación de
b) Por anodizado, empleado en los elementos de
agua.
aluminio, que consiste en la formación de una capa
superficial de aluminio más resistente y pulido, por di-
versos procedimientos, normalmente electroquímicos. 5.4 Protección de empotramientos (ver Fig. 1 6 )
En cualquier caso, suele necesitar un posterior sella-
do con resinas para eliminar al máximo su porosidad Según vimos en reparación, se trata de combatir
y posible fisuración superficial. especialmente dos tipos de corrosión. La de aireación
Tema 8. Oxidación y corrosión de elementos metálicos de tachada

diferencial y la de inmersión, para lo cual ya quedaron te entre los distintos metales, cuando no haya más re-
mencionados los procedimientos adecuados, a saber. medio que colocarlos. Dicho material suele tratarse
- Escudo protector que actúa, además, de tapa- de láminas plásticas poco conductoras, o de uniones
juntas. puntuales de las mismas propiedades (lo que los fon-
- Sellado de la unión con elastómeros. taneros llaman manguito anti par galvánico).
- Protección previa de la parte de la pieza empo- Aunque de dudosa efectividad, algunos autores
trada. Cabe mencionar aquí el erróneo concepto que sugieren diversos órdenes de colocación de los dis-
se tiene con respecto al cemento, en el sentido de su- tintos metales en fachada, con la idea de que el agua,
poner que una pieza de acero rodeada de mortero de al discurrir verticalmente, no facilite la transmisión de
cemento o de hormigón no necesita otro tipo de pro- los electrones. En este sentido, cabe mencionar la pro-
tección previa. Ello puede ser válido para las arma- puesta de F. Eichler que dispone los distintos meta-
duras que permanecen dentro del hormigón y que, por les en el siguiente orden, desde arriba hacia abajo:
tanto, al no tener contacto con el exterior no se pue- magnesio - aluminio-manganeso - cinc - cromo - hie-
den oxidar ni corroer, aunque ya sabemos que, a ve-
rro - cadmio - níquel - estaño -plomo-cobre.
ces, son alcanzadas por el oxigeno del aire o ataca-
das por los propios álcalis. Sin embargo, nunca debe
considerarse así para aquellas piezas que tienen par-
te en el interior y parte en el exterior, ya que resulta Bibliografía
inevitable que se abra la junta constructiva entre me-
tal y mortero por diferencia en sus coeficientes de di- Curso de rehabilitación (10 tomos), C.O.A.M. 1987.
latación. Como consecuencia, el agua puede ir pene- H.J ELDRIGE, "Defectos comunes", Ed G. G 1982.
trando hasta empapar toda la pieza. SCHILD, OSWALD, ROGIER, SCHWEIKERT. "Estanquidad e imper-
meabilización en la edificación" (5 tomos), E.T.S.A. 1978.
Por otra parte, la inevitable porosidad del morte- LYALL ADDLESON, "Fallos en los edificios". Consejo General de
ro facilita también la entrada de humedad hasta una Aparejadores y Arquitectos Técnicos, 1982.
determinada zona. De ahí la necesidad de proteger FEDERICO ULSAMER, "Las humedades en la Construcción", CEAC,
contra la oxidación todas aquellas piezas que vayan 1979.
a ir empotradas. Dicha protección, por último, nos ayu- R T GRATWICK, "Las humedades en la construcción". Sus causas y
dará a combatir la posibilidad de pares galvánicos en- remedios, E.T.A. 1976.
tre metal y álcalis del cemento. "Lesiones en los edificios síntomas: causas, reparación" (2 tomos)
CEAC 1981.
FRIEDRICH EICHLER. "Patología de la Construcción". Ed Blume 1977,
5.5 Protección de uniones entre distintos metales Patología de fachadas urbanas, ETSA Valladolid, Dep. de Construcción.
Universidad de Valladolid, 1987
Se trata aquí de combatir la aparición de pares gal- A. BAGTIONI Y G. GUARNEIRO, "La rehabilitación de edificios urba-
vánicos entre metales de distinto potencial electro- nos", Ed.G.G, 1988.
químico. La solución pasará siempre por eludir, en lo JUAN MONJO CARRIÓ, Tomo 3.°. COAM. Curso de Patología,
posible, dichas uniones, empleando tornillos y abra- Conservación y Restauración de edificios".
zaderas del mismo metal. No obstante, si ello no es JUAN MONJO CARRIÓ. "Patología de cerramientos y acabados ar-
posible, se tratará de introducir algún material aislan- quitectónicos". Edición Munilla-Lería.
iXpitvto II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

255

9. Materiales, herramientas y técnicas de restauración


de las artes decorativas
Lucio Maire Dorado
Restaurador del Patrimonio Nacional

sos. Se obtiene de la cocción de pieles de conejo,


1. Introducción
presentándose comercialmente en diversos formatos,
Las técnicas que voy a exponer, se basan en los dependiendo de marcas y países.
criterios más rigurosos de conservación, restauración
y respeto hacia el autor y su obra. Cola Inglesa
Dentro de esta consideración, es imprescindible el Purificada, se hidrata en una proporción de 6 par-
conocimiento profundo y exhaustivo de las técnicas, tes de agua por una de cola, calentando sin hervir al
procesos y acabados, con el fin de realizar una ac- baño María, se diluye rápidamente sin esperar las 24
tuación correcta y un criterio lo más acertado posible. h. de hidratación, es aconsejable en las preparacio-
A lo largo de mi carrera profesional, la reintegra- nes y primeras lavadas. Tiene el grumo pequeño de
ción transparente ha sido el denominador común en coior claro y de forma escamado.
todo tipo de decoraciones y acabados, al comprobar
repetidamente que la sustitución cromática con pig- Cola Francesa
mentos de color amarillo, ocres rojos, etc. Imitando el Más dura que la inglesa, por lo que la proporción de
tono del entorno es el más correcto. la templa seria de 8 partes de agua por una de cola.
He comprobado que este tipo de reintegración a una El tiempo de hidratación debe de ser de 24 h., es
cierta distancia, los pigmentos con respecto al oro se aconsejable en las preparaciones y lavadas. Tiene el
vuelven manchas, desluciendo su acabado dorado. grumo pequeño, de color tostado y de forma esca-
Me gustaría reivindicar, como autor de obra nueva mado.
y original, que en el futuro dichas obras se reintegren
con las mismas técnicas por mí empleadas y que si- Cola Italiana
gan reflejando la vistosidad con que fueron creadas, De aspecto más gelatinoso que las anteriores, la
siempre y cuando el profesional que lo realice conoz- proporción es de 5 partes de agua por una de cola.
ca las técnicas empleadas, si no fuera de esta forma El tiempo de hidratación es de 12 h., es aconseja-
es mejor conservar sin ningún tipo de reintegración. ble en la templa de yeso. Tiene el grumo de color ocre
En primer lugar comentaré los materiales y herra- y de forma irregular.
mientas más comúnmente utilizados en las técnicas
de restauración de dorados.
Cola Española
Gelatinosa, opaca. El tiempo de hidratación es de
12 h., la proporción es de 5 partes ae agua por una
2. Materiales y Herramientas
de cola. Es aconsejable en la templa de bol y en el
La cola animal, de conejo o caliente agua de dorar. Tiene el grumo uniforme y opaco de
Es el aglutinante más utilizado en todos los proce- color ocre amarillento.
Tema 9. Materiales, herramientas y técnicas de restauración

256

1 Muestras de colas. 2. Muestras de bol.

Estas colas admiten variaciones en la proporción, Pan de Oro Fino


dependiendo del maestro dorador. Son de excelente Existen en el mercado, diversas clases de pan de
calidad, siendo un material insustituible en el proce- oro fino denominados, naranja, medio naranja, duca-
so de dorado después de tres mil años utilizándola do, transfer doble, etc., siendo el más utilizado, el de-
como aglutinante. nominado naranja de 22 K.
Las proporciones de los metales varían muy poco,
Yesos dictando la calidad y pureza. Sirva como ejemplo la
En España se ha utilizado en las primeras capas siguiente proporción de un pan de oro de 22K.: oro
(de 2 a 4) el yeso negro, con el fin de facilitar el 90%, 6 %, de plata y un 4 % de cobre.
primer recubrimiento o camón. El yeso muerto o sul- En la actualidad a diferencia del bol, si se obtiene
fato de calcio se utiliza en las siguientes capas en el mercado, calidades y tonalidades muy variadas,
(de 8 a 10), se aglutinan con cola animal y se ob- dependiendo de la reintegración deseada.
tiene ya preparado con el nombre de yeso microni- En España se dispone de una fábrica de pan de
zado. oro de excelente calidad, fiel reflejo del buen hacer del
bati-hoja Español.
Bol El pan de oro fino se presenta en el mercado, en li-
Arcilla utilizada en la parte final del proceso de do- brillos de 25 panes, con una medida de 8 x 8 cm.. de-
rado, actúa como cama del pan de oro, posibilitando bido a la excesiva finura del pan, el manejo es muy li-
el proceso de bruñido y dando color al pan de oro. si mitado, debiendo utilizar herramientas especiales,
se utiliza un bol de color rojo el oro adquiere un tono como las po-pelonesas. pinceles de una sola hilera de
más vivo, con bol ocre el tono del pan de oro es páli- pelo, el llamado plomazón, almohadilla de piel que se
do. Se aglutina con cola de conejo, y en el mercado utiliza para cortar el oro y su correspondiente cuchi-
se encuentra ya preparado y batido. llo de corte y medida especial, estas herramientas nos
Hasta hace pocos años se presentaba en pella- posibilitan maniobrar, siempre condicionados a los lí-
das y con una gama de colores muy amplia, actual- mites de elementos, como humedad, corrientes de ai-
mente se presenta en tres colores, rojo, ocreamari- re, etc..
llo y negro, el de color negro se utiliza más para el En el museo del Louvre, se puede admirar un libro
fondo de plata. Egipcio de panes de oro, muestra legítima de la anti-
Esta escasez de tonos de bol nos obliga a la mez- güedad de la técnica y materiales, así como su utili-
cla con pigmentos para conseguir igualar tonos más zación a lo largo de los siglos, en la decoración en to-
extremos. das sus variantes.
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

6. Librillos de oro fino, plata y oro falso.

Pan de Plata Agata


í ' S e presenta en el mercado en librillos de 25 panes Piedra con verola y mango, forma de ele sin án-
gual que el pan de oro fino, pero a diferencia de éste gulo, pulida y sin aristas, se emplea en el proceso
as medidas son más grandes, 1 0 x 1 0 cm. El mane- de dorado llamado bruñido o abrillantado del pan de
pjb e imposición es semejante al oro salvo en la con- oro.
Keryación y protección, debido a su rápida oxidación. El proceso de bruñido debe hacerse en condicio-
.Merece un apartado especial la llamada corladura, nes muy especiales, ni seco ni húmedo, el Intermedio
ítecnica decorativa muy empleada como sucedáneo es la clave para un buen bruñido.
. ?del pan de oro.
f i t a imitación consiste en la imprimación, una o va- Plomazón
ginas capas de barniz coloreado, templas o aguadas y Herramienta específica del oficio de dorador, así
gomas. Las corlas se han utilizado sobre todo en el como imprescindible. El plomazón posibilita el mane-
ísiglo XIX. La restauración de la plata corleada es más jo y corte del pan de oro sin tocarlo con las manos, lo
Jleómplicada que la del pan de oro, la mayoría de las lógico es que cada artesano se construya su ploma-
;i; veces se craquelan longitudinalmente, oxidándose por zón, se compone de una almohadilla de piel (ante de
% las grietas y ennegreciendo la corla por el interior, di- cabra) protegido en la mitad de su perímetro por un
•pcultando la reintegración. pergamino, que cubre la mitad de su perímetro, evi-
tando suciedad y corrientes de aire.
Oro Falso El pan se deposita en el centro de la piel, estirán-
La composición del oro falso es de cobre, dolo por medio de un soplido en el centro del pan,
>:
material muy utilizado en nuestro siglo, resaltando cortando a continuación con un cuchillo los trozos de-
s las décadas de los años 60 y 70 coincidiendo con seados.
p e | declive artesanal sufrido en aquellos años. El oro
p?falso es inalterable al Dimetil Formamida, siempre Cuchillo de Dorado
f_ que el oro falso esté adherido con templa, de esta Se utiliza para cortar el pan de oro, su longitud y
t'forma se puede comprobar si es falso o fino. Se ob- peso es variable. Los ingleses son cortos y pesados,
; tiene en el mercado en dos formatos, uno en libros los franceses largos y muy finos, italianos y españo-
' de 25 hojas de 12 x 12 cm. y otro en planchas de les largos y gruesos, mi preferencia es el cuchillo
; 100 hojas de 16 x 16 cm., se puede maniobrar fá- francés, largo, ligero, bien templado y redondeado
r
" cilmente con las manos y la protección debe de ser en la punta, reduciendo la rotura accidental del pan
de varias capas. de oro.
Tema 9. Materiales, herramientas y técnicas úe restauración..

25H dratada en una proporción de 1 parte de cola por 5


de agua ) en este caso la templa es de 1 a 8, con el
fin de que penetre lo más posible, a una temperatura
de 80°.
Una vez seca se imprimen de 8 a 10 capas templa
(la 5), más yeso a una temperatura de 40°. El proce-
so continúa con el pulido, lijando la superficie con li-
ja de madera en seco, de los números 6, 0 y 000.
a
Se imprime la 2 lavada, a una temperatura de 30°.
El siguiente paso es el embolado, bol más templa
(1 a 10), imprimando 4 capas como mínimo. El dora-
do se realiza con pan de oro fino, utilizando como ad-
hesivo una templa de agua de cola, prácticamente
agua con unas gotitas de cola, a temperatura
ambiente.
5. Plumazones. El proceso se completa con el bruñido, ya que el
oro es de acabado mate, comprobando que no esté
ni muy seco ni muy húmedo.
La protección se hace indispensable con el fin de
preservar la obra de posibles accidentes, el barniz mas
utilizado es el Zapon diluido al 50 % con Nitro, o bien
una resina llamada Paraloid B- 72, en una proporción
de 10 partes de resma por 100 de Nitro.

Dorado al Oleo
También llamado mixtión, sisa o mordiente, se
realiza sobre todo tipo de soportes, incluidas las pre-
paraciones grasas. La diferencia esencial respecto a
la técnica al agua, estriba en el adhesivo empleado.
Su acabado siempre es mate y no se puede bruñir, la
protección se realiza con barniz graso o goma laca.

Estofado
6. Hierros y espátulas.
Se llama a la decoración policroma sobre el pan de
oro, la técnica consiste en policromar con templa y
Polonesa pigmento, una vez seco se realizan incisiones con pa-
lillos de bambú o de hueso resaltando el oro del fon-
Pincel plano utilizado para manejar el pan de oro.
do combinándolo con la policromía.
Los artesanos franceses utilizan unas pinzas para ma-
nejarla. Estuco
Comenzaremos por la preparación, es decir el mor-
Hierros y Espátulas
tero ( arena y yeso), como base lavando a continua-
Son variados y con formas diferentes, desarrollan
ción con una templa de cola animal a una temperatu-
labores, enrasar, perfilar y facilitar el pulido sobre el
ra de 80°. Enluciendo con masa de estuco (escayola,
yeso.
templa y pigmento), hasta conseguir el nivel necesa-
Las espátulas sbn las mismas que se utilizan en rio. Una vez seco se pela, abrillantando con fieltros
escultura. mecánicos o pulimentos.
Estas técnicas son las auténticas y las empleadas
3. Técnicas para conseguir una reintegración transparente, sien-
do cada una de ellas una especialidad muy difícil de
Dorado al Agua aprender y empleadas erróneamente en numerosas
a
El proceso comienza con la imprimación de la 1 actuaciones. Su importancia como decoración es pri-
lavada, del soporte con agua-cola, (previamente hi- mordial e imprescindible, como lo es su conservación
capitulo II. Patología e intervención en cerramientos y acabados

y restauración. Es necesario un seguimiento químico HAVARD, H. "Dictionnaire de L ameublement et de la décoration de-


y un apoyo documental en cualquier actuación, así puis le XIII siécle ¡usqula nos jours". Paris 1.887-90 (4 vols).
como un informe de todo el proceso, especificando HOLZHAUSEN, W., "Lackkunst in Europa". Brunschweig, 1.959
materiales y técnicas, con el fin de facilitar posterio- KESEL. W. DE,. "Laques flamandes du XVII Siecie". L estampille/L'Objet
res actuaciones en el caso de producirse alguna alte- d'Art' n2 223 Marzo ! .989.
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Boston I.99I. Actas del simposium organizado en el Philadelphia SINGER, C . A,, "History of Technology". Oxford 1.954 (5 vols)
Museumof Art en 1.988. VERLET, R, "Les meubles trancáis du XVIII siécle", Paris. 1.956 (vol
HANEY & CO. J . "Trie gilders manual New York" ¿1.877?. Reedición 1, Menuiserie; vol ll.Ebénisterie)
de 1.990 a cargo de la Society of Gilders (Washington) WATIN. M. "L 'art du peintre, doreur, vemisseur", Paris 1.774 (2* ed.)
HAYWARD. CH. H "Práctica del chapeado de la madera" CEAC. MONTON, BERNARDO. "Secretos de Artes Liberales y Mecánicas",
Barcelona 1.978. recopilado y traducido de varios y selectos autores que tratan de
HAYWARD. "Uniones y ensambles de la madera". CEAC. Barcelona Pintura , Arquitectura, Optica, Química, Doradura y Charoles, con
1.983. otras curiosidades ingeniosas, Madrid, 1758
capitule III. Revestimientos continuos

263

1. Revestimientos continuos: evolución de


técnicas constructivas. Acabados actuales
Celia Barahona Rodríguez
Dra. Arquitecto
Departamento de Construcción y
Tecnología Arquitectónica U.P.M.

1. Generalidades La importancia de conocer las diversas prácticas


constructivas utilizadas a través de la Historia, para
La solución de revestir los paramentos, tanto hori- realizar este tipo de acabados, se pone de manifies-
zontales como verticales, es muy antigua. Aparece en to cuando se acometen operaciones de intervención
todos los pueblos cuya cultura ha adquirido un míni- arquitectónica encaminadas a la recuperación de edi-
mo desarrollo. ficios antiguos que presentan sus fachadas revoca-
El objetivo es doble: de una parte, mejorar el as- das o enlucidas al modo tradicional.
pecto final del paramento, de otra, preservarlo de las Aunque la conservación de los revestimientos de-
agresiones externas. be dar cabida a nuevas tendencias, técnicas y gustos
La técnica del revestimiento tradicional consiste en estéticos, también debe contemplar el hecho de que
mezclar en frío diversos materiales finamente pulve- aplicar sobre fachadas antiguas nuevas técnicas, só-
rizados: cal, yeso y arena (fundamentalmente), a los lo de parecido efecto, conduce a un falseamiento del
que se añade agua. En la actualidad se sustituyen los patrimonio común, cuando no a su pérdida total, ya
que en ocasiones, las nuevas técnicas pueden pro-
conglomerantes tradicionales, por el cemento.
En cualquier caso, la mezcla resultante se extien-
de mediante sucesivas capas muy delgadas, sobre
los paramentos, hasta conseguir un conjunto de es-
tructura pétrea, cuya dureza e impermeabilidad au-
menta con el paso del tiempo.
Aunque estos revestimientos no contribuyen di-
rectamente a la solidez del edificio, si lo hacen de for-
ma indirecta, ya que los protegen de las inclemencias
atmosféricas.(Fig.l)
De describir las características de los revestimien-
tos tradicionales, se han ocupado todos los tratadis-
tas de relieve: Vitruvio, Villanueva, Benito Bails, etc,
aunque ninguno de ellos es suficientemente explícito
en sus descripciones.
En este asunto la experiencia directa de trabajo con
los morteros es parte fundamental del resultado final,
y es que el aspecto de un revoco puede variar sus-
tancialmente, sin más que jugar con la proporción y
el color de los materiales que intervienen, con dosi-
ficación o con su puesta en obra. 1.
Tema ' Revestimientos connnuos. Evolución de técnicas constructivas

264 vocar nuevas lesiones, aparecidas como consecuen- Picado


cia de la incompatibilidad entre nuevas y antiguas téc- A la martillina
nicas o materiales. A la rasqueta

Otros acabados de difícil clasificación serían:


2. Definición de términos Grutescos
Esgrafiados
Conocido el confusionismo existente en la utiliza-
ción de alguno de los términos empleados en la téc- Con el término revoco puede describirse indistin-
nica de los revestimientos, parece necesario estable- tamente, la última capa del revestimiento, o todo el
cer, en primer lugar, algunas definiciones básicas. conjunto.
En efecto, la experiencia aconseja establecer al- En ciertas zonas de España a este tipo de reves-
gunos conceptos básicos ya que tanto la normativa timiento se le denomina estuco o estucado.
vigente, como ciertos modismos pueden conducir a
interpretaciones equivocas. Estuco, revestimiento continuo que se obtiene
En la actualidad, los revestimientos de tipo conti- aplicando sobre un enfoscado, y exclusivamente con
nuo, situados al exterior de los edificios, reciben el la técnica del tendido, sucesivas capas de mortero.
nombre genérico de revocos o estucos. El primer tér- Los morteros empleados se obtienen mezclando en
mino se utiliza prácticamente en toda España, mien- frío un conglomerante (cal, yeso o mixtos, nunca ce-
tras que el segundo se emplea fundamentalmente en
mento), un árido y agua. Los materiales empleados
Cataluña, aunque va ganando adeptos. Sin embargo,
son siempre de primerísima calidad y se utilizan fina-
y como veremos más adelante dichos términos se re-
mente molidos. La característica fundamental de los
fieren a dos tipos de acabado bien diferenciados.
estucos y que los distingue de los revocos, es la uti-
Otros términos de interés son: lización de un agua especialmente preparada para
ellos: el agua de cola, que proporciona al estuco su
Revestimiento, nombre genérico que sirve para característico aspecto compacto y homogéneo.
determinar cualquier acabado de tipo continuo.
Los morteros empleados en cada una de las capas
(dos como mínimo y normalmente tres) pueden pre-
Enfoscado, primera de las capas que componen
sentar diferentes dosificaciones y granulometrías, ade-
un revestimiento. Capa regularizadora del paramento
más de alguna otra peculiaridad. Este tipo de revesti-
base (piedra, ladrillo, etc.) que se aplica gruesa y ru-
miento suele presentar un acabado brillante, obtenido
gosa para permitir el mejor agarre de las demás ca-
fundamentalmente por alguno de estos métodos:
pas que constituirán el revestimiento. Si sólo se apli-
Por aplicación de planchas de hierro en caliente
ca esta capa, el revestimiento resultante recibe el
Por barnizado de la superficies
nombre de enfoscado.
Por frotado de las superficies con jaboncillo
La calidad de los materiales empleados y la deli-
Revoco, nombre genérico que define a los reves-
cadeza de sus acabados, hace que este tipo de re-
timientos continuos colocados al exterior de los pa-
vestimiento se reserve normalmente para las zonas
ramentos. Se obtiene aplicando sobre el enfoscado,
más nobles de los edificios.
sucesivas capas de mortero, por cualquiera de los mé-
En la actualidad se da el nombre de estuco, apar-
todos tradicionales: tendidas o proyectadas. Los mor-
te de a los revocos, a cualquier revestimiento que pre-
teros empleados se obtienen mezclando en frío un
sente un acabado brillante o con imitación a mármol,
conglomerante (cal, yeso, cemento o mixtos), un ári-
sea cual sea la técnica empleada en su ejecución.
do y agua. Los morteros empleados en cada una de
las capas (dos como mínimo y normalmente tres) pue-
den presentar diferentes dosificaciones y granulóme-
trías, además de alguna otra peculiaridad. Con este 3. Evolución de las técnicas constructivas
tipo de revestimiento pueden conseguirse fundamen-
talmente dos tipos de acabado:
3.1 Técnicas tradicionales
-ala madrileña (prácticamente una pintura al fresco)
-ala catalana con los siguientes tipos de acabado Se denominan revestimientos tradicionales, aque-
Liso, lavado o bruñido llos revestimientos que utilizan como conglomerante
Rústico o pétreo la cal, el yeso, cementos naturales o sus mezclas.
capitulo III Revestimientos continuos

US,

3. Revoco a la catalana: acabado liso lavado o bruñido.

a .8 'i i.

5. Revoco a la catalana: acabado picado.

4. Revoco a la catalana: acabado pétreo


Tema 1. Revestimientos continuos: Evolución de técnicas constructivas

266 Se denominan morteros a tas mezclas que se ob-


tienen cuando se someten una arena, un conglome-
rante y agua, a un batido intenso, hasta conseguir lle-
gar al estado pastoso. Estas mezclas son capaces, al
cabo de cierto tiempo, de adquirir la resistencia de
una piedra más o menos dura.
Por lo tanto, el resultado obtenido de estas mez-
clas se puede considerar en todo similar al de las pie-
dras artificiales. Y dado que se aplican en estado se-
milíquido, pueden introducirse por los poros e
intersticios de los otros materiales que componen la
fábrica, formando al solidificarse un solo y único ele-
mento.
Los morteros ^así preparados pueden emplearse
6. Revoco a la catalana: acabado a la martillina
en obras de fábrica o para revestimientos. Los
empleados para revestimiento, forman un grupo es-
pecial, que debe reunir una serie de características es-
pecíficas para poder cumplir con los requisitos que se
les exigen. Fundamentalmente a un mortero se le de-
be exigir buena adherencia al paramento base, ade-
cuada resistencia a los agentes agresores e invariabi-
lidad de volumen.
Tal y como han quedado definidos los morteros re-
sulta evidente que se podrían preparar infinitos tipos
de mezclas, todas diferentes, según se varíen el nú-
mero de los materiales que intervengan y la dosifica-
ción de los mismos y que muchas de ellas podrían sa-
tisfacer las condiciones de partida.
Pero en la práctica se observa cómo se han veni-
do utilizando, a través de los tiempos, sólo unas po-
cas mezclas. Y ello es debido a que las condiciones
que han de cumplir los morteros para revestimientos
continuos al exterior son muy estrictas.
7. Revoco a la catalana: acabado a la rasqueta.
La elección del tipo de mortero a utlizar para con-
seguir un revestimiento determinado viene condicio-
nado por el conocimiento previo de sus cualidades,
así como por el conocimiento del comportamiento de
todos los integrantes del soporte base del revesti-
miento.
Los diversos materiales que entran en la compo-
sición de un mortero preparado en obra se solían me-
dir por medio de carretillas, cubos, cubetas o espuertas
de poco volumen, útiles todos ellos que resultaban fá-
ciles de manejar.
De cada uno de los componentes se iban echan-
do una, dos o más medidas según la relación en que
se hubiese decidido que debían entrar con respecto
í f • «. * -. a los demás. La idea de dosificación entendida en el
v
* » • ' • V; *• « sentido estricto actual no existía, por lo que resulta
* V » # * * »
arriesgado afirmar dosificación de ningún tipo con
exactitud.
En cuanto a la cantidad de agua necesaria para el
8. Acabado grutesco amasado, la proporción más adecuada debe estable-
capitulo II!. Revestimientos continuos

cerse mediante los ensayos pertinentes. Una propor- Respecto a la forma de gastar la pasta, Fray Lorenzo 26 7
ción inadecuada de agua es la causa más frecuente de San Nicolás indica:
de los desórdenes que presentan los revocos de ye-
so y de cal. El objetivo fundamental es el de conse- Después de mezclada, y bien batida, importa que
guir una plasticidad conveniente con un mínimo de repose algunos días, como no pase por ella algún tiem-
agua. En este sentido debe considerarse la humedad po de verano, dándole soles, porque se conoce la vir-
que puede aportar la arena al establecer la dosifica- tud de la cal, y la dexa sin jugo alguno. Si se gastare
ción del mortero. la cal en tiempo de invierno, esté reposada un mes; y
Aunque se han utilizado diversos conglomerantes, si en tiempo de verano, quince días, regándola cada
la cal es el conglomerante por excelencia de los re- día: puédese tener la cal en parte húmeda, como no
vestimientos continuos. la dé el sol largo tiempo, sin que en él pierda; mas des-
pués de endurecida es costosa de ablandar, y asi es
3

3.1.1 Morteros de cal bien no exceder del dicho tiempo.


El buen resultado que se espera obtener con un re-
voco de mortero de cal depende no sólo de la prepa- Sin embargo, este tiempo de reposo del mortero
ración que se haya seguido para obtener la cal, o de antes de su aplicación, va quedando cada vez más
la calidad de la arena escogida, ya que como es lógi- reducido, hasta quedar finalmente reducido a cuatro
co preveer, la proporción en que intervengan estos in- 0 cinco horas. 1

gredientes resulta de gran importancia en el resulta- Si el mortero ha de ser coloreado en masa, se aña-
do final obtenido. de el pigmento a la mezcla con el fin de conseguir un
Se recomienda la utilización de cal apagada que mortero lo más uniforme posible. Tratándolo así se
haya permanecido, al menos treinta días en fosas de consigue que la pintura forme cuerpo con la base y
reposo, especialmente cuando el mortero que se pre- modifique su composición, aumentando su grado de
para vaya destinado a ejecutar las últimas capas del impermeabilización y resistencia.
revestimiento. Según el tipo de arena utilizada en el mortero, y el
Es preciso cuidar la operación de regado de la mez- grado de calidad de la ejecución del mismo, podemos
cla, ya que tiene gran importancia en el resultado fi- considerar dos tipos de morteros de cal: morteros pa-
nal, porque como dice Benito Bails: ra revocos y morteros para estucos.

... que al tiempo de hacerla (la mezcla) se eche el A) Morteros de cal para revocos
agua con mucha parsimonia, porque la mucha agua El revoco está constituido por una serie de capas
hace una mezcla sin virtud.' de mortero superpuestas, tendidas o proyectadas, so-
bre un paramento base. Se recomienda el empleo de
Esta mezcla se batirá hasta conseguir formar una arenas de mármol.
lechada sin grumos. El batido es una operación a la Una dosificación posible para morteros de cal ae-
que se debe prestar una gran atención por la gran in- rea, nos la proporciona Vitruvio con las siguientes pro-
fluencia que tiene en el resultado final. Vitruvio le da porciones:
tanta importancia, que llega a afirmar: 1 de cal
3 de arena
... los estucadores griegos hacen durables sus en- También afirma:
lucidos no sólo siguiendo este método, sino que aún
ponen cal y arena unidas en un mortero, y con maja- ... si la mezcla es para enlucidos (la arena) no se ha
deros de madera, baten la mezcla, y no la emplean de gastar recién cavada, porque esto la hace secar
mientras no está perfectamente pastosa. Por eso al- muy pronto y ocasiona hendiduras en ellos'.

gunos, recortando costras de enlucido de las paredes
antiguas, hacen aparadores; y adornan el enlucido de Las dosificaciones aportadas por Vitruvio para ela-
sus paredes con la alternativa de dichas costras, y de borar los morteros de cal, parece que han sido se-
espe/os un poco realzados. guidas fielmente a través de los años (si nos atene-

' Fray Lorenzo de San Nicolás. Arte y Uso de Arquitectura, XVII


1
I Bails Benito. Elementos de matemáticas, 1787 Martínez Angel Manuel, M. Diez Libros de Arquitectura, I a JC
1
!
Viatruvio Pollón, M. Diez Libros de Arquitectura. I aJC Vitruvio Polion, M. Diez Libros de Arquitectura, I a JC
Tema 1. Revestimientos continuos: Evolución te técnicas constructivas

mos a lo recogido en los tratados de construcción), glada a la calidad de una y otra materia; por lo que es
aunque no es posible considerar que estas dosifica- preciso tener o adquirir conocimiento de ambas. Lo
ciones hayan sido las únicas utilizadas. Así por ejem- más común es dar una espuerta de cal a dos de are-
plo, Fray Lorenzo de San Nicolás, en el siglo XVIII. re- na cuando menos, y tres de arena y una de cal cuan-
cogía en su obra esta otra dosificación: do más. Hay cal que todavía resiste más mezcla de
arena; pero la proporción dicha es la más usada.'
Prevenida la arena y la cal. las irás mezclando en
esta forma; si la arena es de río, se echará dos de are- Sin olvidar todo lo anteriormente expuesto, podría
na, una de cal; y si la arena es de mina, a cinco de are- avanzarse una dosificación adecuada para preparar
na dos cal, echando una vez dos de arena y una de morteros para revocos con acabados a la madrileña,
cal, y otra vez tres de arena y una de cal, mezcla que o revocos a la catalana con acabado lavado, liso o
de ordinario se hace en Madrid; mas en esto sigue el bruñido, similar a la siguiente:
6
consejo de los experimentados.
1 cal
3,5 arena de mármol o de cava
Por otra parte, hay que considerar el hecho de que
Mientras que para los revocos a la catalana, con
la obra vitruviana, ha sido traducida en diversas épo-
acabado rústico o pétreo, podría indicarse una dosi-
cas, habiendo adoptado sus traductores el texto ori-
ficación del tipo:
ginal al lenguaje y conocimientos correspondientes a
su época, por lo que es frecuente encontrar ya en es- 1 cal
tos textos algunas contradicciones de importancia. 1 arena de cava
Así, por ejemplo, Benito Bails se refiere por primera Para establecer las diferentes dosificaciones co-
vez a la utilización de la teja molida cuando dice: rrespondientes a cada uno de los morteros que van a
intervenir en la ejecución de un revoco de cal, debe
Según vitruvio y Plinio, se puede hacer excelente considerarse ante todo la posición que va a ocupar
mortero mezclando con la arena una tercera parte de cada uno de ellos dentro del conjunto, con la idea ge-
teja molida. Pero esta tercera parte de teja molida se neral de que cuanto más al exterior se localice la ca-
ha de incorporar con las dos terceras de arena antes pa, y a igualdad de tamaño del árido, menos rica de-
de medirla; por manera que para hacer después el be ser ésta en conglomerante, al objeto de evitar que
mortero, ha de haber dos partes de esta mezcla de su mayor retracción provoque el desprendimiento de
arena y teja molida con una de cal, batiéndolo todo ella.
mucho con la porción de agua necesaria.' El mismo fin puede conseguirse utilizando un mor-
tero rico en conglomerante con arena de grano muy
Por eso Bails añade, y con razón, que es arries- fino retirando luego el exceso de conglomerante una
gado dar una regla general acerca de la proporción en vez colocado.
que se han de mezclar la cal y la arena para que sal- En este sentido, las dosificaciones tipo de las di-
ga una mezcla perfecta. Porque unos casos habrá en ferentes capas de un revoco tipo podrían ser:
que sea tan árida la arena que no se logrará una mez- Primera capa o enfoscado 1 cal x 4 arena de cava
cla perfecta, aunque se mezcle por partes iguales con Segunda capa 1 cal x 3 arena
la cal, y en otras ocasiones será necesario aumentar
Tercera capa (vista) 1 cal x 3 arena
la dosificación señalada.
(con árido más pequeño)
Es por tanto una ventaja para el revoco el conse-
Villanueva, a mediados del siglo XVIII, describe así
guir que el grado de machaqueo de la arena aumen-
los límites entre los que debe moverse una buena do-
sificación de cal y arena: ...se debe evitarla demasia- te en la medida en que se la trate de utilizar en las ca-
da arena, como también la mucha cal, no tienda y ra- pas más alejadas del paramento base. En efecto, los
je la túnica delgada que se tiende sobre el jarrado. Que morteros situados más próximos a la base de la fá-
no es decir mucho, aunque un poco más adelante brica deben llevar la arena de grano más grueso con
concreta algo más: el fin de que el acabado quede lo más grueso posible
para permitir así el mejor agarre de las capas siguientes.
La proporción que ha de haber entre la cal y are- Por la misma razón se evitará extender estos morte-
na de la mezcla no es uniforme ni constante, sino arre- ros con la llana.

* Fray Lorenzo de San Nicolás. Arte y Uso de Arquitectura. XVII * Villanueva. Juan de Arte 'le Albañilería o Instrucciones para los jó-
Bails. Benito Elementos de Matemáticas, 1787 venes que se dediquen a éi. 1827
capitulo III. Revestimientos continuos

Sin embargo, es de destacar que estos datos No considero la posibilidad de utilizar morteros de
teóricos, una vez contrastados con la realidad cons- cal hidráulica para revocar, a pesar de las recomen-
truida de los revestimientos continuos madrileños, han daciones recogidas en ciertos informes, puesto que
confirmado, sin lugar a dudas, que la cantidad de are- el uso de la cal hidráulica en la historia de la cons-
na utilizada en los morteros es muy superior a la acon- trucción ha sido muy limitada, y hoy en día se emplea
sejada en los textos, llegándose incluso a detectar con el cemento como material hidráulico, con gran venta-
cierta frecuencia dosificaciones de una parte de cal ja sobre la cal hidráulica.
por cada cinco o siete partes de arena.
Aunque este hecho también puede deberse a la B) Morteros de cal para estucos
desaparición del conglomerante por los sucesivos la- Los morteros de cal preparados especialmente pa-
vados, también puede afirmarse que las variaciones ra realizar los estucos de cal presentan la misma com-
que sufren las dosificaciones de los morteros em- posición que los detallados hasta ahora, sólo que pa-
pleados para revocar son muy grandes, y esto no só- ra estos casos se reservarán los mejores materiales y
lo puede deberse a circunstancias relativas a los ma- se cuidará de realizar la ejecución con el mayor es-
teriales, sino también al hecho de que los morteros se mero.
preparaban in situ por artesanos que trataban de ob- La cal a utilizar, si es grasa, debe ser muy blanca,
tener en cada caso los mejores resultados posibles a la mejor y con más tiempo de reposo. La arena debe
partir de los materiales disponibles en el momento. ser de mármol blanco o alabastro yesoso, en polvo
Por último, informar que es frecuente comprobar muy fino y cernido por tamiz de seda.
la presencia de cemento blanco en morteros supues- La puesta en obra de los estucos varía según se
tamente de cal, con el consiguiente perjuicio final pa- trate de realizar estucos acabados en frío o en ca-
ra el producto. liente. Caso de estucar en frío, Pedro Benavent, re-
Para evitar estas sustituciones es necesario realizar comienda:
un control adecuado sobre los morteros empleados.
Aplicando sobre el mortero una pequeña cantidad ... extiéndase primero con el fratás y enlúcense lue-
de ácido clorhídrico se puede determinar si éste es de go con la paleta tres capas sucesivas por lo menos de
cal o de cemento, ya que el ácido hace desaparecer la indicada pasta sobre la pared a estucar, macha-
completamente la cal, pero deja un residuo amarillento cándolas bien, es decir, escribiendo con el fratás y lue-
ante la presencia del cemento blanco. go con la paleta arcos de circulo en su superficie y en
Tema 1. Revestimientos continuos: Evolución de técnicas constructivas

12. Monocapa: acabado tipo raspado o labrado. 13. Monocapa: acabado tipo piedra.

diversas direcciones, comprimiendo fuertemente la úl- chada de cal, jabón, cera y el color que se desee, em-
tima de e//as . 9
pleando tierras y colores minerales.
Y para estucar en caliente o al fuego: Hecha la imitación, y una vez seca la pasta, se bru-
ñe la superficie con planchas calientes hasta obtener
... se extiende con el fratás y se enlucen luego con
el brillo deseado, y si esto no es suficiente, como ocu-
la paleta dos capas sucesivas de pastas sobre la pa-
rre en Madrid por efecto de las aguas, puede barni-
red, y sobre éstas se extiende luego una tercera, for-
zarse la superficie con una mezcla de aguarrás y ce-
mada con polvo de mármol todavía más fino que el
ra, como en el estuco ordinario.
empleado en los anteriores; cuando la pasta extendi-
Si el estuco va a ir colocado al interior, se reco-
da está ya algo seca (y ello depende naturalmente del
mienda el empleo del yeso.
material de que está construida la pared, de la tem-
peratura ambiente, del grado higrotérmico de la at-
3.1.2 Morteros de cemento
mósfera, etc.), se la bruñe, pasando repetidamente por
Aunque los cementos naturales nunca fueron uti-
su superficie, y con presión, la plancha de hierro del
lizados en los morteros para revestir, coincidiendo con
estucador bien caliente y hasta tanto que la superficie
la aparición del cemento industrial, se produce un pro-
del estuco sea perfectamente brillante. Esta operación
gresivo abandono de los conglomerantes tradiciona-
de pasar el hierro o planchar el estuco debe repetirse
les, en beneficio de este último, ya que las propieda-
siempre antes que la superficie ya bruñida por vez pri-
10
des de dureza y resistencia a la humedad y a las
mera está completamente seca.
acciones mecánicas, que proporciona el cemento a
Para realizar el estucado al fuego, se puede pre- los morteros, fueron siempre muy apreciadas.
parar una mezcla como la que indicaba Martínez Angel:'' Sin embargo, es de destacar el hecho de que si
2 1/2 Cal bien el mortero de cal empleado para las fábricas fue
sustituido rápidamente por el mortero de cemento, no
11/2 Arena de mármol
ocurrió lo mismo con el mortero de cal para el reves-
timiento de las fachadas. Para éstas se siguió utili-
Este autor también describe cómo se debe ejecu-
zando durante décadas el mortero de cal, sólo a ve-
tar un estucado al fuego:
ces mejorado, con la mezcla cal y cemento.
Esfa mezcla se aligera con la cantidad de agua ne-
En efecto, el mortero de cemento, por su rápido
cesaria para efectuar el trabajo. Una vez hecho el ten-
fraguado, produce resquebrajaduras y cuarteamien-
dido de la pasta, se pinta el paramento con la tinta que
tos en los paramentos revocados, provocando las ca-
se desee o con las imitaciones que se pretenda obte-
racterísticas fisuraciones que acompañan a los revo-
ner; esta tinta se da con brocha y se prepara con le-
cos realizados con este tipo de morteros.
Por este mismo motivo tampoco se recomienda el
empleo de morteros de cemento para enfoscados que
' López Collado. Gabrile. Las ruinas en construcciones antiguas,
1976 hayan de colocarse sobre fábricas antiguas, espe-
,0
López Collado, Gabrile. Las ruinas en construcciones antiguas. cialmente en aquellos casos en que por las caracte-
1976
" Martínez Angel, Manuel Tecnología de los oficios de la Construcción.
rísticas de los materiales estructurales, se prevean mo-
1927 vimientos del conjunto.
capitulo III. Revestimientos continuos

3.1.3 Morteros mixtos


Se denominan así los morteros en que intervienen
dos o más conglomerantes diferentes. El más frecuente
de los morteros empleados en restauración es el mor-
tero de cal y cemento.
Este tipo de mortero ha de emplearse en mezcla
árida y sólo se sostienen si no se les frota demasiado,
por lo que no se recomienda el bruñido con la llana.
Para ejecutar estos morteros se comienza por mez-
clar la arena y el cemento en seco, y cuando forman
un buen mortero, se añade la cal y se procede como
en el caso de los morteros de cemento.
La arena ha de ser de la mejor clase y muy limpia.
El mortero también se puede confeccionar con arena
de río o mejor de mármol.
En cuanto a la cal se refiere, debe haber sido apa-
gada quince días antes de su uso, como mínimo.
En general, estos morteros presentan mayor ca-
pacidad de retención de agua que los de cemento, lo
que facilita su fraguado.
El empleo del mortero bastardo de cal y cemen-
to resulta bastante frecuente en restauración. Ello es 14. Monocapa, acabado gota planchada.
debido a la mejora que se introduce en el mortero de
cal con la adición del cemento, aumentando el gra-
do de impermeabilidad y de trabajabilidad de los mor- La restauración y conservación del patrimonio edifi-
teros simples. cado y la obra nueva.
El problema más significativo surge con la incom- En cuanto a la primera, ha de cuidarse especial-
patibilidad entre el yeso y el cemento, que obliga a lla- mente, la utilización del cemento en las operaciones
guear todas las juntas de la fábrica base con morte- de restauración, no sólo por la posible incompatibili-
ro de cal, con el fin de evitar problemas de dad entre materiales, si no que, por sus propias ca-
compatibilidades entre materiales. racterísticas mecánicas, el cemento puede llegar a
Otro problema que se presenta con bastante fre- provocar la ruina del revestimiento que se pretende
cuencia, es debido al empleo indiscriminado de ce- conservar.
mentos fuertemente aditividos, entre los que puede También en los últimos años, aparecen nuevos re-
considerarse al cemento blanco. Las posibles reac- vestimientos continuos, constituidos fundamental-
ciones químicas que los diversos aditivos que inter- mente por un conglomerante hidráulico (cemento fuer-
vienen en la composición de estos cementos, puedan temente aditivado), un árido y agua. A esta mezcla se
provocar en los morteros, son de difícil determinación. le agrega, ocasionalmente, colorantes.
Por ello se aconseja el empleo de cementos portland Estos nuevos revestimientos suelen presentar pro-
lo menos aditivados posible. blemas cuando se intenta su aplicación sustituyendo
La dosificación utilizada con mayor frecuencia, en revestimientos tradicionales, sin embargo, en obra
este tipo de morteros, es del tipo: nueva no presentan ningún problema. Por otra parte,
1 Cemento tanto su puesta en obra, como su limpieza y mante-
1 Cal grasa nimiento, son significativamente iguales a las técni-
6 Arena artificial cas utilizadas con los revestimientos tradicionales.
Entre los diversos productos que van aparecien-
do en el mercado, son de destacar ios denominados
3.2 Técnicas actuales
monocapas, que deben emplearse únicamente en obra
Tras unos años de abandono del uso de los reves- nueva, nunca en restauración.
timientos tradicionales y debido a la conjunción de Las mejoras que representan estos productos fren-
causas bien diferentes, vuelve con fuerza, en los últi- te a los revocos tradicionales se pueden concretar en
mos años, la idea de revestir fachadas. ios siguientes aspectos, control sistemático de la do-
Dos son los campos de aplicación en la actualidad. sificación (en fábrica), control del producto (D.I.T.) y
rema ' Revestimientos continuos• Evolución de técnicas constructivas

272 reducción de la mano de obra necesaria para su apli Colorantes. Pigmentos especiales de tipo orgá-
cación. nico estable a los rayos U.V.
Estos acabados incluyen en su composición los
siguientes materiales: Las mezclas así preparadas vienen en sacos de
fábrica y en obra se les añade el agua en la cantidad
Conglomerantes. Normalmente cementos de ba- estipulada en cada caso por el fabricante.
jo contenido en cenizas, a los que se incorporan car- Los nuevos productos se aplican directamente so-
gas sintéticas (poliestireno extrusionado triturado, per- bre las fachadas, en dos o tres manos (aunque se de-
lita o vermiculita). nominen monocapas), con espesor máximo aproxi-
mado de 15mm y mínimo de 10mm.
Cargas minerales. Arenas de sílice, lavadas y Con estos productos pueden conseguirse dos ti-
exentas de arcilla. pos de acabado:
Raspado o labrado
Aditivos. Su misión fundamental es la de modifi- Tirolesa, rugoso o gota, con las siguientes varie-
car las propiedades del conglomerante. Habitualmente dades.
se incorporan en polvo, fundamentalmente las si- Gota planchada.
guientes: hidrófugos, plastificantes, aireantes y resi- Piedra.
nas dispersables acrílicas.
capitulo III. Revestimientos continuos

273

2. Patología de guarnecidos y revocos

Luis de Villanueva Domínguez


Dr. Arquitecto
Catedrático E.T.S.A. - U.P.M.

1. Introducción romanos. Vitrubio distingue tres capas en un revesti-


miento continuo (Fig.1).
En este capítulo se trata sobre la patología de los Trullissatione, capa de base destinada a regulari-
revestimientos continuos realizados con yeso, cal o zar o preparar el paramento. Es lo más parecido, a un
cemento, en forma de pastas o morteros, que se apli- repellado o a un enyesado, destinado a cubrir las oque-
can sobre diferentes tipos de paramentos, para me- dades o zonas más hundidas de la fábrica del para-
jorar sus características constructivas, como la im- mento de base. Pero combinado con un picado de las
permeabilización, el aislamiento térmico o el acústico, zonas más salientes de dicho paramento. Aunque se
la protección contra el fuego o la regularización de la ha utilizado el término capa, no tiene por qué ser con-
humedad ambiental, o para mejorar sus característi- tinua en toda la pared y puede realizarse sólo parcial-
cas estéticas, decorando el paramento o sirviendo de mente en las zonas más desiguales.
base a la pintura. Actualmente, las fábricas suelen ejecutarse bas-
Los guarnecidos, realizados con yeso, utilizados tante aplomadas y esta capa no se utiliza en obra nue-
generalmente en interiores, y los revocos, basados en va. Sin embargo, en restauración, suele ser necesaria
morteros de cal y empleados en exteriores, no son los una preparación del soporte, bien mediante descar-
únicos revestimientos conglomerados posibles, pero nado completo del revoco existente, bien mediante
sí los más significativos, por lo que se han utilizado picado, para mejorar la adherencia del nuevo, bien
para designar el conjunto. mediante repellado parcial en las zonas desprendidas
Se excluyen las pátinas y las pinturas, así como los o dañadas, previamente descubiertas, etc.También se
revestimientos basados en morteros de resinas sinté- asimilan a esta capa, las preparaciones destinadas a
ticas. mejorar la adherencia de los soportes. En especial, se
En primer lugar se hace una breve descripción de utilizan cuando son muy compactos y poco absor
los diferentes tipos de revestimientos existentes, pa- bentes y, por tanto, poco adherentes. Se trata de ca-
ra pasar a continuación al estudio de la patología de pas o películas de anclaje, normalmente de produc-
los mismos, en los casos más frecuentes de fisuras, tos sintéticos.
desprendimientos, defectos de superficie, manchas, Opus Tectorium o Arenatum, traducido por Ortiz
humedades y eflorescencias. como arenado y jaharrado es la capa de base, equi-
valente al enfoscado o al guarnecido actuales.
Clásicamente se ejecutaba en tres capas sucesiva-
mente de granulometría más fina, hacia el exterior.
2. Tipología de revestimientos continuos
En la práctica habitual de nuestro país, se ejecuta
conglomerados
con una sola capa más bien gruesa, entre uno y dos
Se puede considerar que todas las técnicas cons- centímetros, que se deja rugosa para recibir la termi-
ructlvas occidentales derivan de los revestimientos nación.
rema 2. Patología de guarnecidos y revocos

Opus Albarium o Marmoratum, que Ortiz traduce


por estuco, es la terminación del revestimiento, ejecu-
tado a su vez en tres capas, cada vez más finas. Equivale
a los enlucidos actuales o a los estucos y revocos.
Esta última capa se complica con la terminación -i
superficial. Puede tratarse con rasqueta, martillina o
puntero, en diferentes tipos de revocos. Puede le-
vantarse para dejar vista una capa anterior, en los es-
grafiados. Puede humedecerse con agua o aguarrás
y frotarse con muñequilla, en lavados, en semiestu-
cados o en estucos en frío. Puede abrillantarse con
planchas, en los estucos en caliente. Puede dejarse
lisa y servir de base a la pintura. Puede dejarse rugo-
sa, cuando se empapela en interiores o en algunos
casos de pintura exterior. Por último, puede bruñirse,
como es el caso de algunos enfoscados restregados
con lechada de cemento.
Con la aparición de pastas y morteros aditivados,
se ha convertido en práctica habitual, realizar reves-
timientos de una sola capa, tanto con base de ce-
mento: los morteros monocapas, utilizados en revo-
cos exteriores, como de yeso: las pastas realizadas a
a b c d
base de yeso aditivado para guarnecidos interiores.
En ambos casos tanto de empleo manual, como pa- 1. Revestimientos continuos según Vitruvio.
ra ser proyectado mecánicamente. a Base de fábrica
Sin embargo, es interesante notar que la tenden- b Trullisatione
c Opus tectorium o Arenatum
cia a reducir el número de capas en los tendidos in-
d Opus Albarium o Marmoratum
teriores es ya muy antigua. En el centro de España,
se utiliza hace mucho, lo que se puede llamar un guar-
necido sobrenlucido. Consiste en amasar yeso fino o
yeso cernido con exceso de agua y repasar la prime-
ra capa, antes que haya terminado de fraguar. En * Revocos
Barcelona, se realiza una sola capa en los revesti-
mientos interiores, lo que motivó la inclusión en la nor- Se sigue la exhaustiva clasificación de López Jaén,
ma tecnológica de un denominado tendido, realizado que de modo resumido es la siguiente:
con una sola capa de yeso, para distinguirlo del guar-
necido y del enlucido. a) Revocos tendidos o a la catalana.
No parece necesario en un estudio de patología in- a1) Revoco a la madrileña. Inclusión de la pintura
dicar el modo concreto de construir los diferentes ti- con la técnica del fresco.
pos de revestimientos. Creo suficiente hacer una cla- a2) Revoco liso lavado. Capa de cal y arena cal-
sificación de los mismos, con indicación de la cárea tendida con fratás sobre el enfoscado y apre-
bibliografía donde se puede consultar estos datos. tado a punta paleta. Puede marcarse despiece en se-
* Tendidos de yeso: co. Se lava con cepillo de expulsar, para quitar la cal
y dejar la china vista.
a) Guarnecidos a3) Revoco a la martillina, con despiece y listel liso.
b) Enlucidos a4) Revoco pétreo. Cemento y china de granito. Dado
" Enfoscados de cemento o cal. a la llana, bruñido y lavado, para imitar al granito.

Para tendidos y enfoscados, puede consultarse la b) Revocos lanzados o arrojados (de carácter más
Norma Tecnológica NTE-RPG 1974, el Pliego de la rústico).
Dirección General de Arquitectura, de 1948, en su ca- b1) Revoco a la rasqueta. Alisado con rasqueta, sin
pítulo III, y el Manual del Instituto Torroja sobre reves- apretar, y cepillado.
timientos continuos conglomerados, redactado por b2) Revoco a la baviera o tirolesa, de china gruesa.
A.Prado y M.Guerra. c) Revocos embutidos o excluidos.
capitulo III. Revestimientos continuos

c1) Esgrafiados o fingidos, capas sucesivas de dis- miento en la producción de la fisura. Toda fisura o grie-
tinta trabajabilidad que permiten cortar por capas y ta supone una rotura del material, producida normal-
sacar o rellenar. mente por un esfuerzo de tracción que provoca ten-
c2) Ladrillo fingido. siones del mismo tipo superiores a la capacidad
resistente del material. Dado que la tensión a tracción
Para su ejecución puede consultarse la obra de es. por definición, inversamente proporcional a la sec-
López Jaén o el Manual del Instituto Torroja, citados ción transversal a la misma, la magnitud del espesor
en la bibliografía es de gran importancia para la producción de fisuras.
Así a doble espesor del revestimiento, doble resis-
' Estucos tencia a la fisuración del mismo.
El espesor del revestimiento también será de im-
a) Estuco piedra portancia decisiva en el aislamiento acústico al ruido
b) Estuco marmol aéreo, en la protección contra el fuego, en la resis-
b1) Estuco en frío. tencia al impacto y en la patología de manchas por
b2) Estuco en caliente. espectro de juntas, que se analiza más adelante.
En este sentido se manifiesta J.R Diehl cuando di-
ce "Debería reiterarse que ningún otro factor singular
afecta tanto al comportamiento del revestimiento con
respecto a todas sus funciones, como el espesor. La
3. Fisuras o grietas medida del espesor del revestimiento es uno de sus
Se denomina fisura toda apertura longitudinal que mejores controles de calidad posibles. La reducción
afecta sólo a la parte exterior del elemento construc- del espesor por debajo de media pulgada (12,7 mm)
tivo. Mientras que se denomina grieta, la apertura que incrementa sustancialmente la posibilidad de fractura".
afecta al elemento en todo su espesor. En general, las Por otra parte, no se puede aumentar indefinida-
grietas son de mayor ancho que las fisuras y en ellas mente el espesor del revestimiento, ya que la acción
se pueden distinguir bien sus dos bordes o labios. de su propio peso, produce desprendimientos, si su-
Todos los problemas relacionados con fisuracio- pera el límite de la adherencia al soporte.
nes, se derivan del hecho de que los materiales se Por tanto, el espesor del revestimiento es un fac-
mueven. Este movimiento puede deberse a causas tor crítico, regulado por problemas de adherencia, en
mecánicas, térmicas, humídicas o químicas. Si los ma- su valor máximo, y por problemas de resistencia, en
teriales que trabajan juntos en un elemento construc- su valor mínimo.
tivo tienen movimientos armónicos, o sea del mismo Cuando sé desee beneficiar a la obra de las ven-
tipo, orden y magnitud, como reacción a las causas tajas de un gran espesor en el revestimiento, habrá
citadas, dicho movimiento será similar en todos ellos que recurrir a la sucesión de capas, cada una en los
y no afectará a su durabilidad; pero si los movimien- límites del espesor crítico, que como máximo suele
tos son inarmónicos, los materiales del mismo ele- establecerse en 2 cm.
mento se moverán de diferente modo y antes o des-
pués se producirá la fisura.
3.2 Fisuras o grietas de dirección única y aspec-
El reconocimiento de las fisuras es un tema de ca- to rotundo
pital importancia dentro de los estudios de la patolo-
gía de la construcción. Mediante diversas técnicas se Se trata de fisuras con una dirección bien definida,
debe observar la profundidad, longitud, bordes, su- de longitud importante y con una forma neta y preci-
ciedad y movimiento de las fisuras, lo que proporcio- sa, que mantienen a lo largo de su trayectoria de mo-
na valiosos datos en el momento de diagnosticar las do claro y definido, aunque, en ocasiones, pueda in-
causas de las mismas. terrumpirse en alguna zona o ramificarse ligeramente.
En este apartado se analiza la tipología de las fi- Fig. 2 y 3
suras, por su aspecto, para después estudiar las po- Estas fisuras o grietas de aspecto rotundo son de
sibles causas constructivas y sus remedios. origen estructural o sea se deben a fallos en la estruc-
tura portante, que se manifiestan en el revestimiento.
Las causas más frecuentes de estos defectos son
3.1 Incidencia del espesor del revestimiento
la transmisión de fisuras de elementos estructurales,
Antes de nada conviene hacer una observación ge- las deformaciones estructurales y la transmisión de fi-
neral sobre la repercusión del espesor del revesti- suras de elementos de cerramiento.
Tema 2. Patología de guarnecidos y revocos

276

2. Grietas de dirección única.

• .*•„ ..

1 J

111 r

o- b C
4. Junta entre tabique y cerco con tapajuntas, 3. Grietas de dirección única.
a Tabique
b Tapajuntas
c Cerco

Otra causa común de este tipo de fisuras es la ma- Entre diferentes elementos constructivos, los re-
nifestación en el revestimiento de juntas entre diver- medios más eficaces para evitar fisuraciones consis-
sos materiales en el paramento de base. ten en controlar las juntas, como tradicionalmente se
Los diferentes materiales que constituyen la base, ha venido haciendo entre las carpinterías de madera
pueden tener movimientos diferenciales a causa de la y los guarnecidos o entre los cielorrasos y los para-
variación de la temperatura o la humedad, que no pue- mentos verticales.(Fig. 4)
den ser seguidos por el revestimiento. Por supuesto, también se deben respetar las jun-
También puede tratarse de uniones mal realiza- tas de dilatación de los elementos estructurales y, ade-
das, con falta de trabazón, como encuentros entre más, crear nuevas juntas de dilatación entre elemen-
muros o con tabiques ejecutados sin los debidos en-
tos secundarios, cuando sus coeficientes de dilatación
jarjes. Estas uniones mal realizadas tienden a abrir-
y entumecimiento y las condiciones ambientales lo
se y la junta puede llegar a manifestarse en el re-
aconsejen.
vestimiento.
Una vez analizadas y valoradas por un técnico
competente las causas de la fisuración, si el movi- 3.3 Fisuras o grietas escalonadas
miento no es peligroso para la estructura puede evi-
tarse la aparición de nuevas fisuras mediante la apli- Se trata de fisuras o grietas rectas con giros en án-
cación de una armadura resistente a tracción, como gulos rectos, que dibujan la geometría de las juntas
un velo o mallazo de fibra de vidrio, en la zona del entre las piezas que conforman la base (Fig.5)
revestimiento que tape la junta. Si se trata de guar- Se pueden considerar un caso particular del tipo
necidos y se utilizan mallazos de acero, conviene que anterior. Su origen está en los movimientos que por di-
estén galvanizados y que el yeso lleve una adición ferentes causas se producen en la base y que afectan
de hidróxido calcico, de un 6 % aproximadamente, a las juntas, por ser la zona más débil. Producen la ma-
para evitar problemas de corrosión. nifestación de las juntas, en forma de fisuras o grietas.
capitulo III. Revestimientos continuos

277

5. Fisuras escalonadas.

7. Fisura en cuadricula.

6. Fisuras en cuadricula.

Con independencia de los problemas estructura-


les o de falta de juntas de dilatación que motivan es-
tos defectos, la manifestación concreta de una fisura
en la junta denota su falta de resistencia en compa-
ración con las piezas que une. Por tanto será conve-
niente utilizar morteros de junta más resistentes o in-
cluso utilizar sistemas de armado en las juntas
previsiblemente más afectadas.
Primero hay que resolver el problema de fondo, pa-
ra luego aplicar el remedio. Este consiste en manifes- m
••f¡¿^'.: -~;~-\1r~?--r' =
tar el defecto, mediante un picado más o menos pro-
fundo del revestimiento, en la zona de la fisura, y tapar
la junta, con pasta o mortero similar al del revesti- 8. Fisura en cuadrícula.
miento, con la posible utilización de un mallazo re-
sistente a tracción.
ser estructurales, como en el caso anterior, antes de
3.4 Fisuras o grietas en cuadricula acometer la reparación del revestimiento.
Si se trata de fisuras de aspecto uniforme, su cau-
Si se trata de grietas bien definidas con algunas li-
sa puede ser una manifestación de las maestras uti-
neas centrales más gruesas, su causa más probable
es la manifestación de abombamientos o reventones lizadas para la ejecución del revestimiento, si no se ha
en el muro base del revestimiento, por acción de fle- tenido cuidado de utilizar la misma dosificación o no
xiones, pandeos, exfoliaciones, aplastamientos o in- se ha producido una correcta adherencia, entre ellas
suficiente trabazón. En este caso, los remedios deben y el relleno de los cajones. (Fig.6, 7 y 8)
capituo lll. Revestimientos continuos

279

15. Fisuras en cuarteo.

ración de la base, que debe estar bien igualada, lim-


pia y uniforme. También se deben evitar juntas de tra-
bajo o ejecutarlas con las precauciones necesarias,
cuando no haya otra posibilidad.
12. Mecanismo de producción de fisuras
Por otra parte, es ventajoso adicionar fibras a la
aleatonas. pasta, cuando se utiliza sobre soportes de albañilería,
ya que se vuelve más tenaz, evitándose las fisuras an-
te pequeñas solicitaciones, tan características de los
materiales frágiles. Este procedimiento entraña, sin
embargo, cierta dificultad de ejecución, especialmen-
te si el amasado y puesta en obra se realiza manual-
mente, por lo que suele ser más corriente pegar un
velo o fieltro de fibra de vidrio sobre la superficie Asu-
rada y enlucir encima.
Con respecto a los guarnecidos, se ha descubier-
to que, adicionando pequeñas cantidades de cal hi-
dratada al yeso, este se transforma en un material con
características de expansión-retracción similares a las
del hormigón, lo que puede evitar flsuraciones en guar-
necidos sobre elementos de dicho material.

3.6 Fisuras en cuarteo

Tienen la misma apariencia que la fisuración de la


arcilla al secarse, en forma cuarteada o de mapas
geográficos, coincidiendo normalmente sólo tres lí-
neas en cada vértice, formando ángulos obtusos, ya
que según Jolsel, cuando dos fisuras presentan un
ángulo muy agudo, una de ellas no es de retracción.
Por regla general, son más abiertas en el exterior
del revestimiento que en su interior y no tienen por
qué llegar hasta la base.
Las zonas delimitadas por la fisuración adquieren
un perfil ligeramente cóncavo, con el perímetro más
sobresaliente que el centro. (Fig. 13,14 y 15)
Se deben, a la retracción por desecación hidráuli-
14. Fisuras en cuarteo
ca. La pérdida de agua puede originarse por evapo-
capitulo III. Revestimientos continuos

tanto, si se prevé la acción de impactos un buen sis-


tema preventivo es la incorporación de fibras.
Tradicionalmente se utilizaban fibras naturales pa-
ra reforzar los guarnecidos de yeso, estas fibras, de
esparto o de sisal, van siendo sustituidas con éxito
por fibras de vidrio, tipo E. Sin embargo, en morteros
de cal y sobre todo de cemento no está recomenda-
da la fibra de vidrio E, por el ataque que le producen
los álcalis. En estos morteros pueden utilizarse fibras
de polietileno, de vidrio tipo AR, o incluso de acero.

3.8 Fisuras reviradas

Denominamos así a las fisuras cortas, paralelas y


repetidas, con dirección perpendicular a la línea de la 18. Transmisión de fisuras en revestimientos
sucesión. Aparecen en ciertas ocasiones, cuando en fibrosos.
el fenómeno que las produce hay dos direcciones per-
pendiculares de transmisión de esfuerzos o de falta
de adherencia.(Fig.19)
Suelen ser de este tipo, las fisuras producidas por
el denominado esfuerzo rasante, como el que se pro-
duce en el guarnecido sobre la junta de un tabique
que acomete directamente sobre un pilar de hormi-
gón. Los movimientos inarmónicos de dos materiales
diferentes, producen tensiones sobre el guarnecido,
que es incapaz de resistir, provocándose la fisuración.
(Fig. 20).

4. Desprendimientos

Otra patología que puede aparecer es la de los des-


prendimientos, referidos a la separación entre el re-
vestimiento y la obra de fábrica o entre la pintura y el
19. Fisuras reviradas.
revestimiento.

4.1 Separación entre el revestimiento y la base

La separación entre el revestimiento y su base tie-


ne aspecto de bolsas o abultamientos o de descon-
chones.
Siempre están causadas por una falta de la adhe-
rencia motivada por un proceso defectuoso en la eje-
cución del revestimiento, que haya impedido la debi-
da penetración de la pasta o del mortero, en estado
plástico antes del faguado, por la red capilar de la Pa-
se. Esta falta de penetración se puede deber a exce-
so de humedad, falta de limpieza o gran compacidad
en la base. (Fig. 21, 22 y 23)
La falta de adherencia también puede deberse a
un envejecimiento motivado por movimientos dife-
renciales cíclicos sucesivos por variaciones de la hu-
medad o de temperatura. Normalmente se produce 20. Esfuerzo rasante.
Tema 2. Patología de guarnecidos y revocos

21. Separación entre revestimento y base.

24. Desprendimientos.

23. Adherencia mecánica. 22. Seoaración entre revestimiento y base.

en primer lugar una fisuración en cuadrícula, ramifi- habitualmente suele hacerse en la reparación perió-
cada o en cuarteo, que progresa hasta aumentar de dica de los guarnecidos y revocos.
forma notable los labios de las fisuras, que se com-
ban produciendo abultamientos, que terminan por
4.2 Desprendimientos de las pinturas.
desprenderse. (Fig. 24)
El remedio, en el primer caso, es ejecutar el reves-
Los desprendimientos de las pinturas, que tienen
timiento sobre una base adecuadamente preparada,
mejor arreglo, pueden tener aspecto de escamas o de
mediante la limpieza del paramento, la humectación
exfoliaciones. (Fig. 25 y 26)
conveniente y, si la base es poco absorbente, la apli-
En el primer caso suele deberse a pintar sobre el
cación de una capa o mano de imprimación de aga-
revestimiento todavía húmedo.
rre. Si el defecto se ha producido, el remedio consis-
te en picar el revestimiento hasta una profundidad en En el caso de las exfoliaciones, las causas pueden
la que se encuentre bien adherido, preparar el sopor- ser debidas a humedades o inundaciones, a excesi-
te, como se acaba de indicar, y rehacer el revesti- va temperatura por la proximidad de conductos de
miento. calefacción o aire caliente, o a saponificación de pin-
En el caso de que el desprendimiento no sea total, turas al óleo sobre enlucidos con reacción excesiva-
sino que sólo afecte a las capas más superficiales, mente alcalina.
puede procederse a picar el revestimiento desprendi- En cualquier caso, el modo de arreglar el desper-
do y dar una nueva capa de terminación. Es lo que fecto, una vez producido, pasa por un rascado su-
capitulo III. Revestimientos continuos

perficial o lavado de la pintura en todas sus manos,


preparar adecuadamente el revestimiento y volver a
pintar. Para ello es conveniente dar una adecuada ma-
no de imprimación, después de que haya secado per-
fectamente la base.
El secado del yeso debe hacerse al aire, durante el
tiempo preciso, ya que acelerar el secado, mediante
corrientes de aire caliente, es peligroso.
Si no hay más remedio que pintar con una urgen-
cia tal que justifique el riesgo, debe hacerse con pin-
turas al agua, nunca con esmaltes o semejantes, y
mejor con pinturas plásticas mates lo más permea-
bles posible, para permitir que a través de la pintura
siga secando el yeso. En este caso la pintura debe lle-
var un aditivo especial antimoho. 25. Desprendimiento de pinturas.
En el caso de yeso muerto o sea aquel que ha sido
rebatido con exceso de agua, el enlucido queda muy
blando. Esta falta de dureza puede compensarse has-
ta cierto punto mediante barnices o imprimaciones pe-
netrantes, que lleguen a reforzarle en profundidad.
También es causa de desprendimiento de la pin-
tura, la presencia en el enlucido de manchas y eflo-
rescencias o una alcalinidad excesiva en el yeso,
por contener cal o determinados aditivos modifica-
dores del fraguado. Más adelante se analiza este ti-
po de defectos y se dan soluciones concretas para
remediarlos.

5. Defectos de superficie

Se trata de imperfecciones superficiales de muy


diverso aspecto y motivo, como erosiones, picadu-
ras, ampollas, rayones, etc. Esta variedad hace difícil
su sistematización, por lo que a continuación se ana- 26. Desprendimiento de pinturas.
lizan las más frecuentes.

5.1 Erosiones o cráteres

Su aspecto es el de una serie de pequeños cráte-


res de diámetro inferior 10 mm, repartidos en forma
aleatoria en la superficie del revestimiento.( Fig. 27)
Se deben a la presencia de partículas inestables
incorporadas accidentalmente en la pasta o el mor-
tero, tales como carbonilla, piritas, virutas de hierro o
sobrecocidos. También pueden aparecer por reacción
entre las impurezas en el caso, poco recomendado por
la experiencia, de mezclar yesos de diversos tipos o
procedencias. A veces ocurren por estar poco homo-
geneizados los aditivos, que se concentran en algunas
zonas, en las que superan los límites admitidos. En los
morteros, ocasionalmente, la arena puede estar con-
taminada con carbonilla, piritas o hierro. En caso de in-
corporar cal. puede entrar caliches o partículas de cal
viva, que al apagarse lo hacen de forma violenta.
27. Erosiones.
Tema 2. Patología de guarnecidos y revocos

284

29. Ampolla. 30. Surcos.

31. Surcos.

En cualquier caso, estas partículas dilatan en pre- En locales con un importante paso de personas o
sencia de la humedad y se desprenden del revesti- de mercancías deben emplearse revestimientos de
miento, produciendo las erosiones o picaduras. Como suficiente dureza superficial. Esto se consigue em-
la velocidad de dilatación en las partículas inestables pleando enfoscados o guarnecidos de yeso de alta
es muy variada, el defecto puede notarse en un lap- dureza superficial. También pueden obtenerse bue-
so de tiempo muy amplio, desde poco después de su nos resultados de dureza superficial si se utiliza una
realización, hasta pasados varios años.
pequeña relación agua/yeso en el amasado, fácil de
Para evitarlos conviene cuidar la limpieza en los
conseguir en yesos aditivados con un fluidificante.
utensilios empleados para amasar las pastas y mor-
teros, no mezclar diferentes tipos de yeso, utilizar cal Para considerar un guarnecido como de alta dure-
bien apagada y cuidar la procedencia y almacenado za, debe tener un promedio de 85 unidades Shore C,
en obra de la arena. sin obtener ningún valor por debajo de 75.

5.2 Rayones 5.3 Ampollas

Se trata de erosiones lineales producidas por ro- También se puede considerar como defectos de
zadura, generalmente del mobiliario sobre revesti- superficie las ampollas o despellejadlas, que se de-
mientos con poca dureza superficial. (Fig. 28) ben a faltas de adherencia y que son similares a los
capitulo III. Revestimientos continuos

¡¡ÜDOlsamientos, que se han tratado en el apartado an- 6.1 Eflorescencias (polvillo blanco o vitrificaciones) 285
plrior sobre desprendimientos. (Fig. 29)
!'' Al revés que las erosiones, se trata de pequeños Se deben a la presencia de sales solubles en el
Sbultamientos, producidos por alguna reacción ex- agua en fase líquida. Estas sales fluyen disueltas en
pansiva, en la zona inmediatamente situada bajo la el agua a través del revestimiento y cristalizan en la
¡superficie. En este último caso, el producto de la superficie cuando el agua líquida pasa a vapor. Pueden
^reacción trata de difundirse al exterior, sin conseguir- proceder del suelo, de los materiales de la base o del
lo, produciendo la ampolla. En ocasiones al analizar propio revestimiento. Son disueltos por el agua de as-
la referida ampolla, se observa que en su interior tie- censión capilar, de penetración o del propio revesti-
ne un polvillo blanco, parecido a una eflorescencia. miento, que por colocarse en estado plástico, es ca-
Las ampollas, despellejadlas, elevaciones superfi- paz de disolver y arrastrar esas sales. Cuando el agua
ciales después del secado y piel de sapo se producen se difunde hacia el exterior del elemento constructivo
cuando concurren simultáneamente las siguientes cau- en forma de vapor, las sales precipitan cristalizando
sas: soporte muy húmedo, mala ventilación, atmósfera en la superficie del revestimiento, ocasionando las
saturada de humedad y amasado con mucha agua. eflorescencias normalmente en forma de polvillo blan-
co o de vitrificaciones translúcidas y brillantes. Las vi-
trificaciones se producen cuando la superficie no es
5.4 Ondulaciones superficiales demasiado porosa.(Fig. 32 y 33)

También conocidas como yeso rizado. Se produ- Por su naturaleza son sulfatos, fosfatos, cloruros o
cen cuando se trabaja con la llana un revestimiento nitratos. Estos últimos con menor frecuencia. Pueden
que está demasiado fresco. El fenómeno es menos ser de presencia directa o producirse por reacción con
pronunciado sobre soportes muy absorbentes. el sulfato calcico del yeso o a partir de los carbona-
tos de la cal.
Según Foucault, su origen es muy variado. Pueden
5.5 Surcos encontrarse en impurezas de la propia materia pri-
Se trata de erosiones en forma de canalillos, mo- ma utilizada, como es el caso del sulfato magnési-
tivadas en general por el escurrimiento del agua de co, del cloruro sódico o del óxido de magnesio. En
lluvia, que disuelve parcialmente las pastas o morte- sales contenidas en la cerámica del soporte, que emi-
ros. (Fig. 30 y 31) gran a través del revestimiento, como las sales al-
El fenómeno es más importante en revestimientos calinas y las de vanadio, que pueden contener las
de yeso, por ser más soluble, y tiene menos inciden- cerámicas, y los sulfatos alcalinos que se forman por
cia en revocos de cal. Sin embargo el carbonato pue- reacción del hidróxido calcico de los cementos con
de transformarse en sulfato por acción de la lluvia aci- los silicatos alcalinos de la cerámica, en presencia
da, con lo que se vuelve soluble, pudiendo afectar de yeso. En sales, que se producen por un exceso
también el defecto considerado a los morteros de cal. o por una falta de homogeneización de ciertos adi-
Para evitarlo hay que procurar que no se formen cho- tivos, utilizados como reguladores de fraguado, co-
rrillos de agua de lluvia sobre ninguna zona del reves- mo las sales alcalinas o alcalino-térreas de cloruros,
timiento, mediante una adecuada disposición de vola- sulfatos. acetatos, boratos, citratos o fosfatos. En el
dos, repisas, peanas, vierteaguas, goterones, etc. que empleo de algunos conglomerantes-colas, que pro-
impidan la concentración del agua en puntos singula- ducen sales alcalinas. Por reacción de las sales de
res y buscando un escurrimiento uniforme de la lluvia. fosfato que se utilizan para quitar viejas capas de
pintura. Por último, en el agua de amasado, si tiene
sulfatos o si se tratara de agua de mar.
También puede producir eflorescencias la arena de
6. Manchas y eflorescencias
río, si contiene micas, los pigmentos no naturales y
Debido a que en muchos casos resulta difícil dis- la lluvia acida, que transforma superficialmente los
tinguir entre manchas y eflorescencias, se van a es- carbonatos en sulfatos.
tudiar conjuntamente. También se incluyen las man- La solubilidad de las sales varía con la tempera-
chas debidas a la humedad, en sus diferentes tura y el estado anhidro o hidratado de las diferen-
manifestaciones. tes fases. Se trata además de fases formando siste-
A continuación se resumen las causas más frecuentes ma, de modo que la presencia de una influye en el
de cada patología, con indicación de los remedios pre- resto. Todo ello dificulta la identificación de las eflo-
ventivos o curativos más adecuados en cada caso. rescencias
32. Eflorescencias. 33. Eflorescencias.

Con relación a las sales con origen en las cerámi- Es la más frecuente. Tiene forma de polvillo blan-
cas, un reciente estudio italiano ha puesto de mani- co. La Epsomita produce un efecto corrosivo al cris-
fiesto que las más frecuentes son aquellas en las que talizar en el interior del enlucido cerca de la superfi-
predomina el carbonato calcico, mezclas de carbo- cie, debido al aumento de volumen, por lo que resulta
nato y sulfato calcico, sulfato calcico, sulfatos alcali- muy peligrosa. Tiene un característico sabor salado-
nos, compuestos de magnesio y sulfato doble de cal- amargo (agua de Carabaña). Se da en yesos insufi-
cio y potasio, por este orden. En el mismo estudio se cientemente calcinados. Produce un rechazo de cual-
indican los porcentajes de los iones solubles para que quier tipo de pintura.
haya riesgo de eflorescencia media o fuerte, sobre las
cerámicas, según la tabla siguiente: 6.1.2 Sulfato sódico
Na S0
2 4 Thenardita.
Tipo de eflorescencia lón soluble
% que produce
Na S0 10 H 0 Sal de Glauber.
2 4 2
riesgo de eflorescencia
Carbonato calcico Ca++ 0,20 Es la segunda en frecuencia. Tiene forma de polvi-
Sulfato calcico Ca++ 0,10 llo blanco. Es peligrosa en presencia de humedad, por
Sulfatos alcalinos Na++ K+ 0,05 sus varias fases sucesivas de cristalización, con ex-
Compuestos de magnesio Mg++ 0,005 pansión, produciendo una especie de lepra o de de-
Sulfatos S0 -- 4 0,15 pósitos de polvo superficiales. Puede estar presente en
A continuación se indican las características de las activadores o acelerantes. También puede producirse
principales sales que producen eflorescencias, indi- de modo indirecto por reacción de carbonato sódico
cando el compuesto químico, las fases anhidras o hi- con el yeso, o a partir de los polifosfatos sódicos o de
dratadas más frecuentes y la denominación de los co- sales de etílendiamintetracético (EDTA), que forman
rrespondientes minerales: complejos que al ionizarse son capaces de despren-
der iones sodio que reaccionan con los iones sulfato.
6.1.1 Sulfato magnésico En presencia de caí ataca a las pinturas, produciendo
Mg S04 .7 H 0 2Epsomita o sal de Epson. la saponificación de los óleos.
Reichadita.
Mg SO,, .6 H 0 2Hexahidrita 6.1.3 Sulfato potásico
Mg S 0 . H 0
4 2 Kiesenita K, SOj Arcanita
capitulo III. Revestimientos continuos

De color blanco, es poco frecuente. Su recristali- 6.1.8 Nitratos 287


zación superficial suele presentar la forma de una ca- potásico. K N0 Salitre.
3

pa cristalina, difícil de eliminar. También puede crista- sódico. Na N0 . Nitratina. Nitrato de Chile. Nitrato de Perú
3

lizar en el interior de los poros superficiales con


resultados erosivos, ya que las fases hidratadas lle- De color blanco. Son bastante solubles, pero sólo
gan a aumentar hasta un 35 % el volumen con res- se produce en presencia de agua fecal, por lo que ca-
pecto a la fase anhidra. Puede estar presente en ac- da vez son menos frecuentes.
tivadores o acelerantes. Lo contienen algunas arcillas
y el agua de amasado, si es de mar o muy salada, con 6.1.9 Fosfatos
alto contenido en potasio. Como en el caso anterior, Producen manchas blanquecinas, a modo de sar-
en presencia de cal producen saponificación en las pullido, que aparecen al pintar. Se debe a la adición
pinturas al óleo. de retardadores de fraguado mal dosificados, como
suele suceder cuando la adición se hace en obra.
6.1.4 Sulfatos dobles
6.1.10 Carbonato magnésico Magnesita Mg C 0 3

de sodio y potasio: NaK (S0 ) 3 4 2 Aftitalita. Puede transformarse en sulfato magnésico y dar
de potasio y calcio: Ca K ( S O ^ . H 0
2 2 Singenita. eflorescencias. Es característica de las cales dolomí-
De características similares a las anteriores. ticas o magras.
Cdn objeto de evaluar mejor los posibles daños por
6.1.5 Sulfato de hierro. Fe S 0 2 4
eflorescencias, a continuación se indican los valores
Tiene un color pardo-amarillento característico. En de solubilidad de las principales sales, que las pro-
contacto con la atmósfera, puede reaccionar con el ducen (según F.Ortega):
oxígeno y producir óxido férrico, que produce man-
chas difíciles de eliminar. Aparece sobre todo en ce- Sustancia en equilibrio solubilidad en agua en %
rámicas mal cocidas. Es poco frecuente. con la disolución (g de sustancia anhidra
por 100 g de agua)
Sulfato magnésico S0 Mg12(H 0)
4 2 22,5
6.1.6 Sulfato de vanadio. Va S 0 2 4
Sulfato sódico SO Na 10(H O)
4 2 2 4,2
De color amarillo-verdoso fácil de identificar.
Sulfato potásico S0 K 4 2 7,2
Son poco frecuentes y están presentes en las cerá- CI Ca 6(H 0) 45,7
Cloruro calcico 2 2

micas. Para su eliminación se recomienda el trata- Cloruro sódico Cl Na 2 (H2 0) 2 30,7


miento con EDTA. siempre que no haya cal en el re- Cloruro magnésico CI Mg 6 H 0 (12H 0)
2 2 27,2
2

vestimiento. Cloruro potásico Cl K 24,6


Nitrato potásico NO3K 12,2
6.1.7 Cloruros
sódico. Cl Na Sal gema. Sal común.Halita. Para prevenir las eflorescencias no se debe reali-
potásico Cl K. Silvina zar el revestimiento hasta que esté totalmente seca la
calcico. Cl Ca
2
base cerámica. También debe evitarse los aditivos en
magnésico. Cl Mg. 6 H 0.
2 2 Bischoffita. obra, ya que pueden aportar sales solubles. Si han
de calcio y aparecido, dejarlas secar, cepillar enérgicamente y lim-
magnesio. Cl Ca. 2CI Mg. 12 H 0.
2 2 2 Tachiderita. piar en seco.
de potasio y Como aconseja Wenceslao García, tanto las eflo-
magnesio. CIK. CI Mg. 6 H 0.
2 2 Carnalita. rescencias, como la alcalinidad, deben eliminarse an-
tes de pintar, mediante cepillado y tratado de la capa
Producen manchas granulares blancas, en oca- más superficial con una disolución de sulfato de zinc
siones, manchas oscuras. Modifican la higroscopici- o de sales fluosilícicas, en concentración entre el 5 y
dad superficial del enlucido. Muchas de ellas tienen el 10 %. Conviene que el agua sea caliente y que la
un característico sabor salado o amargo. Algunos ye- disolución se pase por un tamiz fino.
sos los pueden tener como impurezas de origen, pe-
ro es más frecuente su incorporación en aditivos, re- 6.2 Manchas amarillo-verdosas
guladores del fraguado. Deben evitarse por encima de
un cierto límite muy bajo, característico de cada uno Como se ha indicado antes, se producen por la
de ellos, rebasado el cual se manifiestan. presencia de sales de vanadio en el soporte cerámi
Tema 2 Patología ae guarnecidos y revocos

288 co. Para evitarlas o corregirlas hay que tratar el so- truye los cristales en el momento en que se están pro-
porte con complexonas antes de guarnecer. duciendo, así corno por una aplicación muy enérgica
del yeso cuando el fraguado está muy avanzado, con
o sin adición de agua. Hay un momento a partir del cual
6.3 Polvillo blanco en capa interior junto a la
no se puede rebatir ni aplicar enérgicamente el yeso.
superficie (Thaumasita)
Este momento, que se materializa por la consistencia
Se trata de una criptoeflorescencia o eflores- de la pasta, está tanto más próximo al comienzo del
cencia interna, no superficial, producida por la amasado, cuanto más rápido sea el yeso.
reacción de sulfato y carbonato calcico con silica- En cualquier caso las pastas no hidratadas o insu-
to calcico, en presencia de humedad y en ambien- ficientemente hidratadas se comportan como un iner-
te frío. Se ha d e t e c t a d o principalmente c o m o te mezclado con agua, que al secar provoca la re-
ataque de sulfatos sobre las juntas de fábricas de tracción, fisuración y conversión en polvo o
ladrillo realizadas con morteros ricos en cemento y pulverización, sobre zonas más o menos extendidas
con adición de cal. Se trata de un sulfo-carbonato - de la superficie.
silicato monocálcico hidratado ( C a S i 0 . C a S 0 .
3 4

C a C 0 . 1 5 H 0 ) , con 15 moléculas de agua, que se


3 2
6.5 Manchas rojas
produce en una reacción expansiva que destroza
las estructuras previas descomponiéndolas en un Se pueden deber a esporas transmitidas al yeso
polvillo blanco untuoso, en húmedo, con consis- por maderas viejas, que se desarrollan en presencia
tencia de pasta de dientes. de humedad. En este caso, hay que evitar el contac-
Se puede producir en revestimientos realizados con to con maderas viejas, principalmente en medio hú-
morteros de cal y yeso o en zonas donde se encuen- medo. Si han aparecido, realizar un cepillado simple
tren juntos estos productos, en presencia de silicatos después del secado total.
calcicos, presentes en los todos los tipos de cemen- También puede deberse a churretones de óxido de
tos Portland, así como en las adiciones hidráulicas na- hierro producidas por la oxidación o corrosión inicial
turales o artificiales, siempre en atmósfera muy hú- de elementos de este material. En este caso será ne-
meda y fría. cesario un tratamiento superficial, tanto del hierro, cui-
dando su protección con antioxidante, como del re-
vestimiento manchado.
6.4 Empolvado (yeso muerto)

Sobre la superficie de los revestimientos de yeso 6.6 Decoloraciones oscuras (humedad)


siempre hay algo de polvillo blanco adherido, que se
nota al pasar la palma de la mano. Sin embargo, en Indican presencia de humedad, en especial si van
ocasiones, el polvo aumenta considerablemente, po- acompañadas del característico olor, que puede ser
niendo en peligro la buena adherencia de las capas de condensación, de ascensión capilar, de penetra-
de pintura. El polvo blanco se puede deber a las eflo- ción exterior o de inundaciones por defectos en las
rescencias que se acaban de estudiar, pero también instalaciones.
puede ser yeso en forma de dihidrato disgregado. Se Las humedades, con presencia de agua líquida, o
produce este fenómeno cuando en la pasta hay falta sea con el material mojado, se pueden deber a varias
de agua, antes de que se complete la hidratación del causas: ascensión capilar, penetración del agua de
yeso, motivada porque la base sea muy absorbente, lluvia, condensación del vapor de agua en los para-
el secado demasiado rápido o que una película de mentos, absorción de vapor de agua por las eflores-
aceite aisle los granos del semihidrato del agua de cencias superficiales, etc. La prevención y corrección
amasado. de humedades excede la amplitud de este estudio.
También se puede producir por falta de entrecruza-
miento de los cristales de dihidrato durante el fragua-
6.7 Manchas marrones y negras (humedad)
do del yeso, en el fenómeno denominado yeso muer-
to. La pasta se convierte en una yuxtaposición de Suelen estar acompañadas de las anteriores y de-
partículas insuficientemente ligadas. El entrecruzamiento notan un avanzado estado de ataque por humedad,
se puede impedir por exceso de agua de amasado, por ya que se deben a hongos que se desarrollan en es-
una agitación excesiva de la pasta durante el amasa- te medio.
do, batidora muy revolucionada en el caso de amasa- Como remedios hay que evitar o corregir las hu-
do mecánico, por el rebatido o agitación tardía que des- medades. En el caso de condensación, se debe cui-
capitulo III. Revestimientos continuos

289

dar en especial, la ventilación. Las humedades de as- neidad de los elementos que conforman el soporte.
censión capilar y de penetración son más difíciles de También pueden deberse al empleo de distintos por-
corregir. Si las manchas ya han aparecido hay que es- centajes de agua en amasados diferentes.(Fig. 34)
perar hasta su completo secado y cepillar enérgica- Para evitarlas se debe cuidar el espesor del reves-
mente la zona afectada, para después aplicar un fun- timiento procurando que sea el mayor posible en la
gicida y reponer la pintura. capa de terminación. También hay que cuidar las do-
sificaciones de la mezcla, manteniendo su uniformi-
dad, en especial en lo que a la cantidad de agua se
6.8 Manchas amarillentas
refiere, así como ordenar los tajos adecuadamente,
Se pueden producir por el hollín de las chimeneas, para que las interrupciones entre las jornadas de tra-
por restos de productos bituminosos o por la utiliza- bajo, se realicen en lugares disimulados.
ción de utensilios o aguas sucias, en la ejecución del Estas decoloraciones suelen desaparecer con la
revestimiento. pintura, en especial cuando se aplica una capa de im-
Sí se prevé su posible aparición, interponer una lá- primación antes de pintar. Por tanto existe más peli-
mina delgada de papel de estaño o de plástico. Si han gro de que aparezcan en los revocos coloreados en
aparecido, raspar superficialmente y volver a enlucir. masa, que son en los que hay que tomar más pre-
cauciones.
6.9 Orificios verdosos o amarillentos
6.11 Espectro de juntas o visión de viguetas
Pueden aparecer en guarnecidos de yeso por la
presencia accidental de crudos o por mala homoge- Se trata de cambios en la tonalidad de la superficie
neización de los aditivos. del revestimiento, siguiendo el dibujo de las juntas de
Se debe evitar la aplicación de aditivos en obra. Si la obra de fábrica o de las viguetas de los forjados. Se
han aparecido, raspar y volver a enlucir. originan por una diferente porosidad en el soporte, en-
tre las piezas que constituyen la fábrica y sus juntas,
6.10 Decoloraciones claras o entre las viguetas de acero del forjado y los entrevi-
gados. Dicha diferencia de porosidad origina absor-
Se trata de cambios de tonalidad en el aspecto ex- ciones diferentes de vapor de agua o distintas acu-
terior de los revestimientos, que se producen habi- mulaciones de polvo, que causan las diferencias en la
tualmente por succión irregular, debida a la heteroge- tonalidad en las partes más húmedas. (Fig. 35 y 36).
Tema 2 Patología de guarnecidos y revocos

36. Espectro de juntas y pintadas. 37. Pintadas.

La corrección de este defecto pasa por utilizar un Bibliografía


espesor suficiente en el revestimiento, que homoge-
neice la absorción superficial de vapor de agua. En -British Gypsum T h e White Book' 1986
caso de que haya aparecido puede ser necesario re- -Centre d'information du plátre "Pathologie de l'enduit en plátre" París.
hacer total o parcialmente el revestimiento, aunque 1972
normalmente bastará con aumentar una nueva capa -DIEHL J.R."ManualofLathingandPlastering". Gypsum Assotiation
en el mismo. Editio. 1965
-DIEZ REYES, M.C. "Patología del guarnecido de yeso". Bol. Inf. YE-
6.12 Manchas de aspecto graso SO n°7. Madrid, julio de 1972.
-JOISEL. A. "Fisuras y grietas en morteros y hormigones" Ed. Técnicos
En raras ocasiones pueden aparecer manchas de Asociados. Barcelona .1975.
aspecto graso en revestimientos recientes, que se -LADE Y WINKLER "Yesería y estuco" Ed. Gustavo Gilí Barcelona
pueden observar antes de ejecutar la pintura, pero que 1962.
-ORTEGA ANDRADE "Humedades en la edificación" Ed. Editan. Sevilla.
se ponen de manifiesto escandalosamente una vez
1989.
realizada ésta. Se debe a la existencia de grasa, por
-PRADO Y GUERRA 'Revestimientos continuos conglomerados",
encima del limite admisible en los conglomerantes, el
manuales del lETcc. Madrid. 1962.
agua o los utensilios utilizados en la construcción del
-RABATÉ, J.L.' La pathologie des peintures' Ed. Moniteur. Paris 1983.
revestimiento. No debe superarse un contenido del
-VILLANUEVA, L.de "Materiales de acabado interior en paredes y te-
0,2 % en sustancias solubles en éter. chos" Curso de Rehabilitación. Tomo 7. Ed. COAM. Madrid 1988.
Como prevención hay que cuidar la limpieza de los
utensilios y si las manchas han aparecido se debe eli- Otra bibliografía consultada sobre eflorescencias:

minar, mediante rascado, antes de pintar. -J.MONJO "Patología de cerramientos y acabados" Departamento
En el transcurso de la vida del revestimiento pue- de Construcción y Tecnología Arquitectónicas. U.P.M. Ed. Munilla-
den aparecer manchas de suciedad, más o menos leria. Madrid 1997
grasosas, que deben eliminarse antes de proceder a FOUCOULT "Eflorescencias en el yeso". Boletín Informativo Yeso.
la renovación de la pintura. -M.DONDI, B.FABRI, GGUARINI, M.MARSIGLI.C.MINGAZZINI "Soluble
salts and efflorescence in structural clay producís. A scheme to pre-
dict the nsk of efflorescence". Boletín de la Sociedad Española de
6.13 Pintadas Cerámica y Vidrio. Vol. 36 Núm. 6 Noviembre-Diciembre 1997.
-M.A. HALLIWELL Y N.J. Cramnod 'Deterioration of bnck retaining
También se puede considerar como defecto las pin- .vafe as a result of Thaumasite formation" Durability of Building Materials
tadas sobre los paramentos de los revestimientos con- and Components 7. 1996.
tinuos. Es muy difícil de evitar, o incluso de paliar sus -WENCESLAO GARCÍA CAMAÑO "Pinturas al exterior en revesti-
efectos. En el caso de los revocos se ensayan, todavía mientos sobre fachadas" Revestimientos de fachadas. Castilla La
sin completo éxito productos o pinturas de muy baja Mancha. 1992.
tensión superficial y de reducidísima porosidad, que por
lo tanto son muy difícil de pintar o manchar.(Fig. 36 y 37)
capitulo III. Revestimientos continuos

291

3. Revestimientos continuos: Técnicas de reparación y reposición.


Operaciones de mantenimiento
Celia Barahona Rodríguez
Dra. Arquitecta
Opto, de Construcción y Tecnología
Arquitectónica U.P.M.

1. Introducción mentos añadidos, ya que muchos de ellos suelen ser


causa de lesión, por haber sido colocados sin ningún
Aunque todo lo que nos rodea está sometido a un cuidado especial.
proceso de envejecimiento progresivo e inevitable, re- La propuesta de intervención pondrá especial cui-
sulta evidente que este proceso puede verse acele- dado en los siguientes aspectos:
rado o retardado en función del mantenimiento a que • Impedir la permanencia del agua en la fachada.
se vea sometido el objeto en cuestión. • Consolidar los elementos desprendidos.
La necesidad de conservar los revestimientos que • Sustituir los elementos en mal estado, imposi-
presentan un valor arquitectónico, artístico o ambien- bles de restaurar, pero inherentes a la fachada original.
tal, es importante, en primer lugar, por su propio va- • Restituir los origínales perdidos.
lor intrínseco (a veces por la imposibilidad de ser re- • Eliminar los elementos innecesarios o añadidos.
puestos y, siempre, por configurar la imagen de nuestras El agua presente en las fachadas puede tener un
ciudades), y en segundo lugar, por una cuestión me- origen muy diverso: de capilaridad, de cubierta, etc.
ramente económica, ya que siempre es más barato En general, que las fachadas revocadas se mojen no
conservar que reponer. representa ningún problema, el problema se presen-
ta cuando el agua permanece en ellas."
La conservación de este tipo de fachadas lleva im-
plícita la posibilidad de tener que utilizar técnicas de
reparación, consolidación o protección, de mayor com-
plejidad que las que suelen utilizarse en fachadas con-
vencionales.
En cualquier caso, la metodología a seguir será
siempre la misma. La primera fase del trabajo se con-
cretará en una toma de datos que debe reunir, en pri-
mer lugar, datos relativos a la documentación históri-
ca del edificio y su fachada. En segundo lugar un
estudio que identifique los diferentes tipos de acaba-
do que aparezcan en la fachada: materiales, morte-
ros, dosificación, puesta en obra. etc. La toma de da-
tos se completa con un estudio detenido de la patología
que afecte a dicho revestimiento. En este sentido de-
berá prestarse especial atención a los diversos ele
mentos que configuran el aspecto general de la fa-
chada, y no sólo en cuanto a los elementos originales
de la misma se refiere, sino también a los nuevos ele-
Tema 3 Revestimientos continuos: Técnicas de reparación y reposición

Para evitarlo será preciso prever sistemas ade- Por otra parte, también deberá comprobarse que
cuados para la evacuación de las aguas. En este sen- las carpinterías elegidas disponen del preceptivo go-
tido deben cuidarse especialmente la evacuación de terón, al objeto de asegurarse que la evacuación de
las aguas provenientes de la cubierta, el suelo y otros las aguas se realiza correctamente. En cualquier ca-
elementos constructivos. so siempre deberá comprobarse, que el grado de po-
La eliminación de las humedades en muros, pila- rosidad de los materiales constitutivos de la fachada
res, etc., ya ha sido estudiada con anterioridad, por lo y, sobre todo el coeficiente de absorción de su capa
tanto no haremos aqui más referencia a ellas. extenor, es el adecuado para el fin.
Sí conviene, sin embargo, recordar como proteger Tampoco conviene olvidar que el enlace entre los
del agua otros elementos constructivos que con fre- diferentes elementos constructivos próximos a las zo-
cuencia forman parte de las fachadas revocadas. nas de accidente, suele ser compiejo y que con fre-
Para evitar toda posibilidad de penetración del cuencia el agua se desplaza a través de los forjados,
agua o toda proyección de agua demasiado impor- siguiendo caminos sinuosos, manifestándose al ex-
tante, en las cornisas, se recomienda que todas las terior muy lejos de su foco original, facilitando así la
partes salientes (cornisas, molduras o encintados), se confusión.
revistan con baberos de zinc. Por ello, aunque la solución de cada uno de estos
También es frecuente la presencia de humedades problemas debe acometerse por separado, será pre-
en los puntos de anclaje de los elementos metálicos. ciso comprobar con posterioridad, la bondad del fun-
En efecto, la penetración en fachada de los anclajes cionamiento en su conjunto, para en caso de ser ne-
supone la aparición de juntas constructivas, que se cesario, proceder a adoptar las medidas correctoras
deben a las diferencias existentes entre los coeficientes que se consideren más oportunas.
de dilatación del metal, la fábrica de ladrillo y el mor- Una vez llegados a este punto conviene analizar
tero. A través de esta junta penetra el agua en el in- los resultados obtenidos y tomar una de las siguien-
terior del muro. La aparición de esta junta es tanto tes opciones: conservar el revoco existente (Limpieza
más rápida en cuanto el encuentro entre el metal y la de Fachadas), proceder a reparaciones parciales
fábrica se realice en ángulo diedro, ya que este án- (Reparación de los Revestimientos), o sustituirlo
gulo facilita la acumulación de agua en el empotra- (Sustitución de los Revestimientos). Como es lógico,
miento. también puede haber soluciones intermedias, que
En estos empotramientos pueden producirse dos afectarán sobre todo a las molduras y abultados.
tipos de corrosiones. La corrosión por inmersión, de- Analizaremos a continuación cada una de estas posi-
bida a la presencia de agua en el empotramiento, que bilidades por separado.
puede llegar a provocar la pérdida de integridad del
material, y por tanto, del propio empotramiento y la
corrosión por par galvánico provocada por la diferen- 2. Limpieza de revestimientos
cia de potencial eléctrico entre los metales y los ál-
calis de los morteros que los abrazan. Si ha de conservarse el revoco, en primer lugar, se
Para evitar la corrosión por inmersión en los em- procederá a la limpieza de la fachada.
potramientos, se debe recurrir a los sellados y los ta- La limpieza de una fachada debe ser hecha de tal
pajuntas. Aquí resultan útiles las piezas escudo, con- forma que permita su posterior restauración y acon-
venientemente selladas en sus dos uniones, ya que dicionamiento. Mediante la limpieza se consigue eli-
transforman los ángulos rectos o agudos en ángulos minar el polvo, la suciedad y las eflorescencias que
obtusos, donde es más difícil la acumulación de agua. sobre ellas se han ido acumulando con el paso del
También es útil el simple sellado de las juntas con elas- tiempo.
tómeros. El sistema variará en función del tipo de acabado
Para evitar la corrosión por par galvánico se pro- que presente el revestimiento, del grado de suciedad
cederá a la limpieza y protección de los elementos de del mismo y del tipo de manchas o suciedades espe-
sujeción, sustituyendo estos por otros del mismo ma- cíficas que sobre ella se encuentren.
terial que el elemento sujetado. Además se procede-
rá a introducir una barrera de P.V.C. o neopreno co- 2.1 Métodos de limpieza
mo barrera anti par galvánico.
En cualquier caso deben tratar de anularse los án- En cualquier caso deberán elegirse sistemas que
gulos y los rincones, rellenándolos con mastics y se- no resulten demasiado duros o abrasivos, ya que po-
llantes. drían ser causa de deterioros posteriores; pero tam-
capi!uk}\\\. Revestimientos continuos

poco deben ser excesivamente blandos, ya que una • Elevado coste por mano de obra abundante 293
limpieza incompleta también podría dañar el resulta- • Sistema lento
do final. • Filtraciones y humedad en el interior de los ma-
Los métodos que se manifiestan más adecuados teriales, con el consiguiente peligro en caso de hela-
para la limpieza de fachadas son los siguientes: das

Fachadas con revoco de cal 2.1.2 Proyección de agua fría a presión


Poco o medio sucias: Limpieza manual con cepi- El sistema consiste en proyectar agua fría medíante
llo y adición de agua. un compresor y una pistola diseñados al efecto, que
Muy sucias: Agua fría o caliente a baja presión. pulverizan agua con una presión regulable de hasta
Puede añadírsele al agua detergentes neutros. 120 atmósferas.
Según el tipo de suciedad se dará mayor o menor
Fachadas con revoco de cemento presión, al tiempo que se aleja o se acerca la pistola
Poco o medio.sucías: Limpieza con agua fría o ca- al paramento. Las pulverizaciones son de corta du-
liente a baja presión. ración y se pueden renovar si es necesario. Este tipo
Muy sucias: Las mismas técnicas con adición de de trabajo necesita mano de obra experimentada.
detergentes tensoactivos neutros. Ventajas:
• No tiene una acción abrasiva.
El grado de suciedad de una fachada queda defi- • No deteriora las aristas vivas.
nido por la oposición que esta presenta a la limpieza. • Gran espectro de aplicaciones, al poder regular
Conviene comenzar la limpieza con métodos poco la presión y la distancia de aplicación.
agresivos y en función de la oposición a la limpieza, • Consume menos agua que el método manual
ir aumentando la agresividad del método en aquellas Inconvenientes:
zonas que así lo demanden. • Riesgo de infiltraciones de agua en las fisuras y
Los diversos métodos que existen en la actualidad juntas, especialmente en fábricas y carpinterías.
para proceder a la limpieza de las fachadas pueden • Riesgo de heladas cuando se realiza en invier-
resumirse en los siguientes: no.
• Riesgo de deterioros graves a presión elevada.
2.1.1 Limpieza manual con cepillo y adición de agua
Este procedimiento consiste en una impregnación 2.1.3 Proyección de agua caliente a presión
de agua sobre el paramento cuyo fin es el de reblan- Este sistema es prácticamente igual al anterior sal-
decer la superficie del material para ayudar a des- vo que el agua se calienta a una temperatura de alre-
prender la suciedad y las posibles eflorescencias del dedor de los 95°C, conjugando así el efecto de pre-
soporte. Posteriormente se procede a un cepillado sión y temperatura.
manual del revestimiento, mediante cepillo blando de Ventajas:
nylon, cobre o latón, para no deteriorar el revoco. Por • Las mismas anteriores, más la ventaja del calor,
último se procede al aclarado del revestimiento, con lo cual permite:
abundante agua que ayude a eliminar la suciedad. • Reducción considerable de la duración del pro-
Este procedimiento es poco agresivo y con él se ceso de limpieza.
obtienen muy buenos resultados, sobre todo cuando • Eliminación de las películas de grasa y mugre
se actúa sobre materiales frágiles. Su empleo ac- de la superficie de los materiales.
tualmente ha disminuido considerablemente merced Inconvenientes:
a otras técnicas, pero en algunos países europeos • Los mismos que en el sistema anterior, con el
este es el único sistema autorizado para la restaura- inconveniente añadido de que existe riesgo de pro-
ción de monumentos históricos. vocar un choque térmico en los materiales frágiles, lo
que entrañaría desórdenes suplementarios.
Ventajas:
• Elimina ¡as sales nocivas en los materiales 2.1.4 Proyección de agua caliente o fría con adi-
• No deteriora los materiales blandos y frágiles ción de detergentes tensoactivos neutros
• Permite conservar la pátina de las piedras La aplicación de productos químicos permite fa-
• No necesita de mano de obra especializada cilitar el desprendimiento de la suciedad, ya sea por
Inconvenientes: efecto de ataques químicos superficiales o por efec-
• Consumo de agua importante tos de reblandecimiento y disolución de aquella.
Tema 3 Revestimientos continuos- Técnicas de reparación y reposición

En este sentido existen infinidad de productos quí-


micos cuya característica común es la de que, tras ser
aplicados con brochas o rodillos sobre superficies pre-
viamente humedecidas, se les deja actuar durante un
periodo de tiempo variable al final del cual son elimi-
nados mediante agua a presión. Este último aspecto
hace que este sistema sea complementario de los sis-
temas anteriores.
Entre los múltiples productos químicos que exis-
ten en el mercado para la limpieza de los materiales,
es de destacar que a las fachadas revocadas sólo pue-
den aplicárseles los productos tensoactivos neutros
y no siempre.
Ventajas:
• Mejoran la calidad de la limpieza
• Mejoran la rapidez y efectividad
Inconvenientes:
• Algunos productos pueden atacar el revesti-
miento
• Algunos productos pueden provocar eflores-
cencias
• El personal debe ser especializado y estar con- 2. Presencia de humedades.

venientemente protegido de las proyecciones


importantes proporciones de sulfato sódico, así co-
2.2 Limpieza de sales eflorescentes mo también de compuestos en los que esté presen-
te la sosa cáustica.
La causa directa de la aparición de las sales es la - Por reacciones químicas imprevistas que puedan
presencia de humedades, por lo tanto la eliminación producirse entre barnices protectores de las fábricas
de éstas, es la primera medida que ha de considerar- aplicados con anterioridad y los hidrofugantes muy
se en el problema de eliminación de las sales. utilizados hoy en día en la preparación de los para-
Existen varios sistemas de limpieza de sales, se- mentos.
gún sea el tipo de sal cristalizada, su solubilidad y el En cualquier caso, debe considerarse que en las
material sobre el cual han cristalizado. Por otra par- fábricas de ladrillo, las sales que aparecen con más
te, las sales pueden tener orígenes diversos, al tiem- frecuencia son las debidas a sulfatos y carbonatos de
po que pueden estar compuestas por numerosos ele- calcio, magnesio, sodio y potasio. En tanto que la pre-
mentos. Además, pueden estar contenidas en el propio sencia de sulfatos de hierro y cobre, nitratos y clora-
material, incorporarse a través de los materiales ba- tos, suele asociarse con la presencia de aguas sub-
se, derivarse de la descomposición del propio mate- terráneas, aguas marinas y atmósferas contaminadas.
rial o derivarse de fuentes externas. De la consideración de que cualquier carbonato
En este último caso, la aportación de sales puede puede convertirse en sulfato, se deduce el porqué es-
deberse a: tas sales son las que se presentan con mayor fre-
- Sales aportadas por los materiales de unión, ya cuencia. Todas ellas son muy solubles excepto el sul-
sea por los aglomerados o aportados, bien sean los fato calcico.
empleados en la reparación del llagueado, bien por El sulfato calcico, precisamente por su poca solu-
los materiales empleados en los morteros de los re- bilidad interviene muy poco en la formación de eflo-
vestimientos. rescencias, mientras no existan otras sales, aunque
- Por el traslado, por parte del agua de lluvia, de el material esté húmedo por un largo periodo de tiem-
sales presentes en otros materiales alejados, ya sean po.
propias o de descomposición del material. Sin embargo, la mayoría de las lesiones produci-
- Por los diversos productos de limpieza y mante- das por sales son debidas a la presencia del sulfato
nimiento utilizados en la restauración de fachadas. En magnésico. Las lesiones debidas a estas sales pue-
este sentido debe tenerse especial precaución en la den presentarse con aspectos bien diferentes. El sul-
utilización de detergentes orgánicos que contengan fato magnésico puede cristalizar fuera o cerca de la
capitulo III Revestimientos continuos

superficie y debido a su solubilidad, la sal puede ser 295


"transportada por el agua de lluvia hacia el interior de
• las fábricas. Esta posibilidad reduciría la destrucción
' de los materiales en el exterior para desplazar los ma-
yores problemas hacia el interior de los muros.
Este tipo de sales son solubles en agua, por tan-
to, su limpieza se limita a la disolución de las mismas
con la aportación de agua, procediendo a continua-
ción a pasar un cepillo de cerdas más o menos resis-
tentes en función del tipo de sal. La cantidad de agua
a aportar variará en función de la porosidad del ladri-
llo de la fachada, aunque en general será abundante.
Es por ello importante proceder a un secado forzado 3. Manchas de pinturas.
inmediato a la aplicación del agua, con el fin de ex-
traer el agua absorbida mediante secado artificial por
succión directa mediante aspiración.
gunas soluciones que resultan adecuadas para dife-
Este tipo de limpieza natural, es equivalente al que
rentes grupos de manchas.
se produce espontáneamente con el agua de lluvia.
Esta facilita la disolución y el arrastre superficial de la
2.3.1 Algas, liqúenes y musgos
sal, dificultando después su recristalización, al dismi-
• Amonio
nuir la proporción de dicha sal. El problema de este
• Solución al 1 % de dicloroformol.
proceso natural es que no se controla la absorción su-
• Solución al 2% de formol mezclado con alcohol
perficial, por lo que pueden producirse nuevas eflo- de quemar en medio acuoso.
rescencias y establecerse un sistema cíclico de le-
• Lejía.
sión-limpieza.
• Tributilo de estaño.
Cuando la sal cristalizada no se disuelve directa-
mente en agua, debe utilizarse la limpieza química. 2.3.2 M a n c h a s de pintura y pintadas
Antiguamente se utilizaba vinagre, en una solución del El tratamiento consiste en la aplicación de uno o
10%, actualmente puede utilizarse directamente áci- varios de los métodos que a continuación se expo-
do clorhídrico en la misma proporción. En todo caso nen, hasta obtener el resultado esperado, ya que la
el conocimiento cierto, del tipo de sal existente en las eliminación de la mancha depende del tipo de pintu-
fachadas, determinará el tipo de disolvente a utilizar, ra y del tiempo transcurrido desde su aplicación.
para lo cual se utilizará el mismo sistema de aplica- • Lejía alcalina. Una vez seca, se cepilla la man-
ción y secado explicado con anterioridad. cha con aporte de agua.
Más raramente pueden presentarse sales de sul- • Cloruro de metilo. Se sigue el mismo procedi-
fato potásico, que durante su cristalización tiene ten- miento anterior.
dencia a adoptar la forma de una capa cristalina o de • Metileno diclorado. Se aplica mediante una ca-
sulfato sódico que se presenta en forma de depósito. taplasma de arcilla o pintura al temple, posteriormen-
El mayor problema de estas sales se presenta cuan- te se lava intensamente con agua.
do existen en más de un estado de hidratación, ya que • Fosfato trisódico, sosa caustica, cataplasma de
pueden llegar a expandirse hasta cuatro veces su vo- arcilla y lavado final con agua.
lumen. La limpieza de este tipo de sales requiere de
medios mecánicos y precisa de especialistas que nos 2.3.3 Manchas de aceite y grasas
aseguren que la eliminación se limita únicamente a la Para la eliminación de aceites indeterminados, se
capa de sal y no afecta al material superficial del ce- puede probar en primera instancia con disolvente whi-
rramiento, lo que resulta sumamente difícil, dado el ti- te spirit aplicado con una cataplasma o una esponja.
po de instrumentos empleados en la operación. También se puede probar con tetraclorato de carbo-
no y con tricloroetileno.
2.3 Limpieza de manchas particulares Para la eliminación de aceites minerales tipo fuel,
se procederá a la limpieza con una solución de fosfa-
Resulta relativamente frecuente encontrar sucie- to trisódico, lavando la mancha luego con agua y pos-
dades puntuales o particulares que necesitan un tra- terior secado. A continuación se aplicará una pasta
tamiento específico. A continuación se proponen al- de benzol, talco y yeso, y finalmente, un cepillado.
Tema J. Revestimientos continuos Técnicas de reparación y reposición

296 Para la limpieza de manchas producidas por acei-


tes orgánicos se aplicará una pasta de un espesor de
al menos 3mm. constituida por:
• Una parte de fosfato sódico
• Una parte de perborato de sodio
• Tres partes de polvo de talco o yeso
• Una solución jabonosa o detergente en agua ca-
liente
Posteriormente deberá secarse, cepillarse y elimi-
narse mediante agua.
Para la eliminación de grasas, se cepillará el pa-
ramento con una solución jabonosa, detergente o con
fosfato trisódico.

2.3.4 Manchas de óxido de hierro


Se pueden intentar diferentes soluciones:
• Impregnar la superficie con una parte de citra-
to sódico y seis partes de agua, aplicar posteriormente
yeso molturado con hidrosulfato sódico, procediendo
después a un lavado profundo. 4. Manchas.

• Impregnar la superficie del material durante unas


horas con una solución acuosa de 100g. de ácido
oxálico por litro de agua, efectuando un posterior ce- 3. Reparación de revestimientos
pillado y un lavado abundante con agua. Para proceder a la reparación de un revoco será
• Aplicar una pasta de 1cm. de espesor como mí- preciso elegir la técnica que se considere más ade-
nimo, compuesta por una solución que contenga 1 kg. cuada, variando ésta en función, básicamente, del ti-
de citrato de sodio, 6 litros de agua y 6 litros de gli- po de lesiones que le afecten.
cerina: secar, cepillar y limpiar con agua. Una vez se han determinado las causas que han
• Aplicar una disolución compuesta de 10Ogr. de provocado las lesiones, se procede a su eliminación,
amonio difluorhidrogenado y 1 litro de agua destila- y a continuación ya se puede comenzar a reparar el
da, secar mediante papel absorbente y repetir la ope- revoco.
ración hasta obtener el resultado deseado. Si no está muy deteriorado suele acometerse una
reparación por parcheo, es decir, realizando repara-
ciones puntuales. La primera operación a efectuar se-
2.3.5 Manchas de óxido de materiales no férricos: rá la eliminación del polvo y la suciedad de la facha-
bronce o cobre da, mediante alguno de los métodos expuestos con
Efectuar una disolución con 70 gr. de amonio, 570 anterioridad. De esta forma se quita la suciedad, al
mi. de amonio concentrado, 37 gr. de ácido tetrace- tiempo que se eliminan los trozos sueltos de pintura
licodiamina etileno; mezclar estos ingredientes con y revoco descompuesto, quedando limpios también
yeso molturado y agua hasta formar una pasta blan- los bordes sueltos de las grietas y los desprendimientos.
da, humedecer el soporte antes de aplicar y cubrir con A continuación se llevan a cabo las reparaciones
una película del producto obtenido, esperar a que se- que se consideren pertinentes de acuerdo con los di-
ferentes tipos de lesión que puedan afectar a la fa-
que, lavar con agua y repetir la operación.
chada y por último se pinta la fachada.
Para las manchas de color azul, verdes o negras
producidas por sales de cobre, aplicar una pasta de 3.1 Reparación de lesiones
5mm. de espesor compuesta por 100gr. de cloruro
de amonio seco, 400 gr. de talco y 150 gr. de amo- 3.1.1 Fisuras y grietas
niaco acuoso; posteriormente, secar, cepillar y lavar En primer lugar será preciso realizar un análisis de
con abundante agua. las fisuras y grietas que pueda presentar la fachada.
capitulo III, Revestimientos continuos

5. Fisuras y grietas. 6. Abolsamientos y desprendimientos.

Para ello se realiza un levantamiento de las mismas tero, también con fibra de vidrio y se finaliza la capa
indicando su número, situación, inclinación, etc. de acabado.
A continuación se procede a comprobar la profun- Para solucionar las fisuras no estabilizadas perte-
didad de las mismas, al objeto de comprobar si afec- necientes al soporte en zonas de discontinuidad co-
tan únicamente al revestimiento o a toda la fábrica. mo juntas, cambio de material, etc. se utilizan las ma-
La reparación de las fisuras microscópicas resulta llas de refuerzo. Constituidas por fibra de vidrio en su
casi imposible, sobre todo cuando se encuentran muy interior, poseen un recubrimiento plástico resistente a
repartidas. En este caso la solución consiste en le- la alcalinidad de los cementos y las sales, que las ha-
vantar el revestimiento de toda la zona afectada, me- ce adecuadas para armar el cuerpo del revestimien-
diante la aplicación de chorro de agua caliente o in- to, para que pueda soportar las tensiones y movi-
cluso picándolo, cuando las fisuras alcancen cierta mientos de origen térmico de dilataciones y
profundidad, o el espesor del revoco así lo requiera. contracciones.
Para reparar las fisuras mayores de 1mm. se de- En cualquiera de los casos descritos, a continua-
be proceder primero a su rascado, considerando que ción, se aplica una capa de imprimación, con objeto
las que exceden de esta dimensión serán tratadas co- de aumentar la capacidad de adherencia del soporte.
mo si fuesen juntas. Para su sellado se deben utilizar Por último, se vuelven a revestir las zonas donde se
masillas acrílicas de dispersión, dadas las grandes haya eliminado el revoco, con un mortero de la mis-
propiedades elásticas que poseen estos materiales. ma dosificación que el revoco primitivo.
Esta aplicación está destinada a restablecer la estan-
queidad del soporte en las zonas agrietadas y a man- 3.1.2 Abolsamientos y desprendimientos
tenerla así en caso de agrletación posterior a la apli- Se procederá de forma análoga a la descrita para
cación. las grietas, comenzándose la reparación con el pica-
Si esta operación no fuera suficiente, se pueden do de la lesión, para proseguir con la posterior repo-
recibir al soporte unos elementos metálicos con aran- sición del revestimiento.
delas y cabeza de rosca. A continuación se aplica una Suelen presentarse problemas en los encuentros
primera capa de mortero que se termina con malla de con el mortero primitivo, por ello se ha de cuidar es-
fibra de vidrio y se coloca una raqueta de anclaje so- pecialmente el que los morteros tengan la misma com-
bre la arandela. Se tiende una segunda capa de mor- posición y dosificación. Además se cuidará espe-
Tema 3. Revestimientos continuos- récmcas de reparación y reposición

dalmente el que las zonas de reparación coincidan posible las diferencias de coloración que inevitable-
con el despiece primitivo del paramento. mente han de producirse.
La calidad de la unión del soporte con el revoco
puede verificarse mediante la prueba siguiente: se re-
3.2 Reparación de revestimientos pintados
corta una pequeña porción homogénea alrededor de
un cuadrado de revoco de superficie adecuada, que Como consecuencia directa de las operaciones de
dando dicho cuadrado recortado en sus cuatro lados. reparación, los paramentos presentan un aspecto par-
Seguidamente se une con resina epoxi a una placa cheado. Para disimularlos se pintan las fachadas en
metálica de un mecanismo especial que produce un su totalidad, ya que no es posible imitar el color pri-
esfuerzo de tracción hasta arrancarlo, este mecanis- mitivo de las mismas, bien porque el color está incor-
mo lleva una escala que indica cual es la adherencia porado en la masa del mortero, o bien por razón del
de este revoco al soporte. envejecimiento.
La reparación de una fachada pintada comienza, co-
3.1.3 Manchas y suciedades mo siempre, con la limpieza de polvo del paramento,
Se pueden eliminar con los métodos de limpieza para a continuación pasar a la reparación de fisuras y
apuntados con anterioridad, teniendo en cuenta que grietas, como se ha indicado con anterioridad. Por úl-
las manchas más difíciles de eliminar son las produ- timo, se prepara la fachada con una capa de imprima-
cidas por materias orgánicas. Para evitarlas debe cui- ción que facilite el agarre de la nueva capa de pintura.
darse especialmente el diseño de la fachada, colo- Las imprimaciones suelen ser tratamientos reali-
cando cornisas allí donde haga falta, así como zados a base de resinas sintéticas, que en ocasiones,
goterones, etc. y por su propia composición son causa de problemas
En especial y con objeto de evitar el ensuciamiento futuros, por ello se aconseja realizar un estudio pre-
de las fachadas por causa del arrastre del polvo por vio en cada caso.
el agua, se controlará especialmente la velocidad que Una vez seca la imprimación, la fachada está pre-
puede llegar a alcanzar el agua, a consecuencia de parada para recibir el acabado final de la pintura. Esta
los entrantes y salientes de la fachada. Para dismi- se aplica en finas capas, siendo generalmente sufi-
nuir la velocidad del agua por las aristas salientes, ciente la aplicación de dos manos.
se harán más rugosas las superficies, o se las re- En general se recomienda que la pintura emplea-
dondeará. Y para aumentar la velocidad en las aris- da sea fibrosa, permeable al vapor de agua y sufi-
tas entrantes, se las hará más lisas o se las redon- cientemente elástica como para poder seguir sin rom-
deará. perse los movimientos de la fábrica base.
En cuanto a la acumulación de polvo sobre Las fisuras microscópicas que no hayan podido
los paramentos horizontales, por pequeños que és- ser reparadas en su momento, quedarán ocultas por
tos sean, se podrán evitar si se les facilita una cier- esta pintura. Desde el punto de vista técnico este he-
ta inclinación. Por último, se procederá a la elimi- cho no tiene mayor importancia, porque la base ha si-
nación de los elementos extraños a la fachada que do impregnada por un producto hidrófobo y el agua
el tiempo y las nuevas instalaciones van adosando no puede penetrar en ellas, tampoco se ensancharán
a ellas. más y no se ensuciarán. Por otra parte, sólo podrán
apreciarse desde muy cerca.
3.1.4 Eflorescencias El mantenimiento de las pinturas, únicamente re-
La lluvia hace desaparecer las eflorescen- quiere un repaso y reparación periódicos, periodici-
cias. También pueden hacerse desaparecer los cris- dad que vendrá dada en función del tipo de soporte,
tales de las sales solubles con un limpiado a chorro de la situación climática y del tipo de pintura. Este re-
o con un cepillo húmedo. Si se trata de carbonato paso suele tener lugar entre 5 y 15 años después de
de cal, el agua de lavado debe estar ligeramente aci- haber sido aplicada la última capa de pintura.
dulada.
Cualquiera que sea el tipo de reparación parcial
que se haya llevado a cabo, suelen presentarse pro- 4. Sustitución de revestimientos
blemas en los encuentros con los bordes del revesti-
miento primitivo. Por ello se deben preparar áreas a Siempre que sea posible se recomienda sustituir
reparar que coincidan con despieces del revestimiento un revestimiento en mal estado por otro que tenga la
original. Y aún así se procederá posteriormente a la misma dosificación y características generales al que
pintura total del paramento, a fin de disminuir en lo sustituye, siempre y cuando éste fuese de mayor ca-
capitulo III. Revestimientos continuos

299

7. Lesiones en revestimientos pintados. 8. Sustitución de pinturas.

lidad que el sustituido y aquel no fuese el original. 2° En cualquier caso, no aplicar un revoco en el que
Para ello, al igual que en el caso descrito sobre uno de sus componentes sea yeso sobre un soporte
operaciones de reparación, será necesario estudiar húmedo, ya que la avidez de agua por el yeso, hará
las características tanto del revestimiento a sustituir que se la quite al soporte con los consiguientes pro-
como de la fábrica que va a servirle de base. blemas de retracción para la fábrica.
Consideraremos en este apartado, dos aspectos 3° En el caso en que la fábrica base lo admita, re-
diferentes: por una parte la sustitución de los revocos, sulta aconsejable la utilización del revoco de cemen-
y por otra la de las pinturas. to. En especial los denominados monocapa, aunque
estas nuevas técnicas todavía no se hayan logrado
igualar a las prestaciones de un revoco tradicional en
4.1 Sustitución de revocos cuanto a adherencia, riqueza de texturas y durabili-
dad se refiere.
Como normas generales se tomarán las siguientes
precauciones:
o
1 No utilizar nunca morteros de cemento Portland, 4.2 Sustitución de pinturas
en los siguientes casos:
a) cuando la fábrica del muro esté tomada con mor- A veces el mantenimiento se limita únicamente a
tero de cal o sea una fábrica blanda y deformable. En la pintura de las fachadas. La aplicación de una nue-
efecto, el cemento al ser más rígido que la fábrica ba- va capa de pintura requiere el decapado previo de la
se, no podrá seguir los desplazamientos de ésta y se capa anterior. El decapado se puede hacer median-
producirán fisuras. Además al ser el cemento poco te una cualquiera de estas operaciones:
permeable al agua, impedirá la evaporación de agua • Lavado con agua caliente a presión.
que suele acumular este tipo de fábrica procedente • Decapado mecánico mediante raspado o por
del interior. proyección de abrasivo.
b) cuando la fábrica esté tomada con yeso, ya que • Decapado químico mediante disolventes, deter-
el contacto cemento-yeso, en presencia de agua, da gentes, ácidos y decapantes técnicos, seguidos de
origen a sales que dañan inexorablemente el revesti- una aplicación de agua para su aclarado.
miento.
capitulo III Revestimientos continuos

301

4. Revestimientos monocapa: características


y ejecución
José Méndez Martín
Arquitecto Técnico U.P.M.

1. Introducción La creciente utilización de estos morteros, como


revestimientos continuos de fachadas, tiene sus cau-
El motivo principal de esta intervención dentro del sas entre otros factores, en la necesidad de los ar-
módulo de Revestimientos Continuos del Master de quitectos de innovar con las combinaciones de aca-
Restauración Arquitectónica, es darles una informa- bados, texturas y colores en sus edificíos.También a
ción básica que les permita conocer suficientemente causas menos nobles como por ejemplo la escasez
los morteros monocapa, sus principales característi- de mano de obra adecuada para obtener revocos y
cas y condiciones básicas do puesta en obra de los revestimientos tradicionales en calidad y precio razo-
mismos. nables. Otra causa de su crecimiento, es que su faci-
lidad de aplicación permite ajustarse a plazos y eco-
El mortero monocapa tuvo sus orígenes en Europa,
nomías de obra que otros acabados por su
concretamente en Francia, fue desarrollado por la in-
especialización más artesanal impiden obtener.
dustria del cemento, buscando una mejor y mayor apli-
cación de los morteros preparados, más allá de los Estos morteros no han venido a sustituir a los re-
usos específicos como material de agarre. vocos y revestimientos tradicionales pero sí creemos
que los complementan, donde sus características lo
El resultado que obtuvieron hace aproximadamente
permiten, con una calidad y un coste muy razonable.
25 años, es el origen de los morteros monocapas ac-
tuales. Desde la creación de estos morteros, la innova-
ción tecnológica e investigadora de la industria ha ido
La importancia de este tipo de morteros ha ido
añadiendo mejores prestaciones a los morteros, in-
aumentando paulatinamente en los últimos años, po-
dríamos decir sin caer en la exageración que el mor-
tero monocapa es un clásico dentro de los revesti-
mientos de nueva creación.
Su implantación es un hecho, así como su diver-
sa utilización por sí solo o en combinación con otros
materiales, en fachadas de todo tipo de edificios, au-
mentando su empleo en los edificios rehabilitados den-
tro de los cascos antiguos y en edificios históricos,
esta utilización ha sido posible gracias al desarrollo
de nuevos tipos de acabados que permiten un as-
pecto más tradicional en estos morteros.
Actualmente convive en nuestros barrios y ciuda-
des con materiales como el ladrillo, revocos tradicio-
nales, piedra artificial y natural, sin crear ya en esta
época una novedad, (véase foto 1). 1.
Tama 4. Revestimientos monocapa: características y e/ecucion

corporando a los mismos, los avances que se produ- Otro elemento que define al mortero monocapa,
cen en la tecnología del cemento y su aplicación en es su aplicación, podría entenderse por la literalidad
los morteros preparados industrialmente, por ejemplo del término monocapa, como aplicación en una sola
nuevos conglomerantes hidráulicos, aditivos, cargas mano. También es monocapa el caso de aplicación
ligeras etc., que añadidos a una experiencia creciente en dos manos o más, por ejemplo por ser necesarios
de las características necesarias para una buena pues- espesores de 20 mm como en este caso recomien-
ta en obra, está ofreciendo morteros de buena calidad dan los D.I.T.
en cuanto a su durabilidad y aspecto estético final. Por tanto el término monocapa se debe entender
en sentido amplio conectándolo con otros elementos
que lo caracterizan y que están en la definición indi-
cada. Monocapa, como concepto no es el número de
2. Morteros Monocapa. Concepto
manos, aunque sean éstas un elemento característi-
Es conveniente, aún sin ánimo de dar una defini- co, sino la funcionalidad que con un solo mortero de
ción académica, el definir al menos qué se entiende revestimiento se consigue; impermeabilidad, textura,
por un mortero monocapa. para así diferenciarlo de color, dureza y durabilidad.
otros morteros tanto predosificados como tradicio-
nales.
Entendemos por Mortero Monocapa, al mor-
3. Materias Primas. Composición de los
tero que se fabrica industrialmente, se entrega al
morteros monocapa
consumidor predosificado en sacos a falta sólo de
agua, se aplica generalmente en una sola mano o a Para lograr las cualidades diferenciales de un mor-
lo sumo en dos. Una vez aplicado en el soporte y tero prefabricado y modificado con aditivos respecto
completado su fraguado, confiere el aspecto defini- de los morteros de fabricación tradicional, cemento,
tivo de la fachada en textura y color, obteniéndose arena y agua, se han ido incorporando a la composi-
un revestimiento entre 12-18 mm que tiene las si- ción de los morteros monocapa diferentes materias
guientes características; aspecto estético uniforme primas que les otorgan estas cualidades.
en cuanto a texturas de acabado y colores, imper- A modo de ejemplo, se logran conseguir morteros
meable por sí solo en los espesores indicados, du- que entre sus características se cuenten el que ten-
reza adecuada para un revestimiento y comporta- gan baja tendencia a la fisuración y a su vez buena re-
miento al paso del tiempo compatible con las sistencia y compacidad así como impermeabilidad.
exigencias actuales de durabilidad en climas inclu- En un mortero tradicional es muy dificultoso el reu-
so rigurosos. nir estas cualidades, el conseguir resistencia, es a tra-
Aún a riesgo de parecer algo larga la definición, en vés del conglomerante hidráulico, cemento. También
ella podemos encontrar todas las propiedades que conocemos que un mortero de cierta riqueza de ce-
definen y diferencian a un mortero monocapa de otro mento tiene tendencia a fisurarse, si decidiéramos re-
tipo de morteros, revocos y revestimientos. bajar este porcentaje de cemento para lograr una me-
Someramente vamos a repasar estas propiedades o nor fisuración, estaríamos modificando el mortero no
elementos característicos y las consecuencias que sólo con menor resistencia, sino también con una es-
podamos extraer de ellas. tructura más porosa y por tanto con más tendencia a
Es inmanente al propio concepto de mortero mo- la permeabilidad, característica como sabemos de los
nocapa la fabricación industrial y predosificación en morteros de revestimiento para exteriores muy nega-
sacos, un elemento fundamental que caracteriza a es- tiva; esta circunstancia nos obligaría en el citado ca-
tos morteros respecto a otros tradicionales es la in- so de mortero tradicional, para evitar esta permeabi-
dustrialización, con la existencia de un control de ca- lidad, a realizar una protección del mortero, por ejemplo
lidad en su fabricación. con una pintura de exteriores.
No es necesaria la manipulación en sus compo- Como ya se puede percibir, la combinación de las
nentes, excepto añadir agua al confeccionar el mor- materia primas que componen un mortero monoca-
tero en la cantidad que indica en los propios sacos la pa, serán de distinta índole, composición y cantidad
industria actual, cumpliendo sólo este requisito y en sus componentes, de acuerdo a las características
realizando una mezcla homogénea, garantiza a priori del mortero que se desee obtener.
que las características que se buscan en el mortero Cada fabricante como es lógico dentro de unas
son las que se recogen en los documentos de ido- premisas de combinación de materias primas muy co-
neidad técnica (D.I.T). munes, emplea diferentes combinaciones cualitativas
caonulo ¡II Revestimientos continuos

y cuantitativas de acuerdo a sus líneas de investiga- La cal tiene como función básica contribuir a la
ción que se actualizan continuamente. plasticidad del mortero monocapa, y por tanto se re-
Enumeraremos las principales materias primas laciona con la mayor o menor facilidad de aplicación
que se utilizan así como las características básicas en obra, por tanto es una propiedad Importante cara
que transmiten al mortero monocapa en que se em- al resultado final de la calidad en obra, para ello es de-
plean. seable que un mortero sea fácilmente trabajable. La
función de la cal es también similar a la realizada en
Materias Primas que se emplean: morteros bastardos tradicionales.
- Conglomerantes hidráulicos
" Cemento portland Blanco
3.2 Áridos y Cargas Minerales
* Cemento portland Gris
* Cal Hidráulica Se emplean tanto arenas silíceas, como calizas, en
- Áridos, Cargas Minerales granulometrías compensadas, para contribuir a la com-
* Arenas Silíceas pacidad, impermeabilidad y resistencias mecánicas.
* Arenas Calizas Su contenido porcentual varía desde un 60-80%,
- Aditivos del peso del mortero en polvo.
* Retenedores de agua Las arenas silíceas se emplean con gran profusión
* Hidrofugantes pues su estabilidad química es muy buena, como tam-
* Aireantes bién tienen un excelente comportamiento respecto a
* Plastificantes la resistencia.
* Resinas Sintéticas Las arenas calizas se emplean si son duras, con-
- Cargas Ligeras tribuyen a la compensación de granulometría y en la
* Vermiculita dureza posterior del mortero, se aprecia su cualidad
* Perlita de forma por los granos de forma angulosa y de su-
* Bolitas de Poliestireno perficie adherente que proviene del machaqueo con
* Piedras Pómez el que se obtienen.
* Arcilla Expandida Las arenas empleadas, en general, han pasado pro-
* Rocas Volcánicas cesos de selección granulométricos y han sufrido pro-
- Fibras cesos previos de lavado que les evita entre otros el
'Minerales que existan arcillas, etc..
"Sintéticas
- Pigmentos
3.3 Aditivos
- Agua •

Tras esta relación no exclusiva, sino simplemente Como se puede observar en la relación, son varios
numerativa, veamos que papel desempeñan dentro y con diversas funciones que repasaremos breve-
de los morteros monocapa cada uno de los compo- mente.
nentes referidos. Son productos de formas pulvurulentas, que se
emplean en muy pequeñas cantidades, suelen con-
3.1 Conglomerantes hidráulicos juntamente con las cargas ligeras, las fibras y los pig-
mentos representar entre un 2-5% del peso del mor-
Como se ha indicado en la relación, los conglo- tero en polvo.
merantes son tanto los cementos Portland como las "Retenedores de agua
cales hidráulicas, su empleo en general es conjunto. Estos aditivos son básicos para la consecución
Su contenido porcentualmente está entre un 15- de un monocapa de calidad, pues son responsables
35% del peso del mortero en polvo, se puede dedu- de que no se produzca la desecación del mortero an-
cir con este dato, la variedad de combinaciones que tes de tiempo, es decir evita la pérdida del agua de
se pueden dar entre los componentes, tal como se ha amasado prematuramente con lo que se logra dar el
indicado anteriormente. tiempo suficiente a que los conglomerantes hidráuli-
En el caso de los cementos su función principal es cos fragüen adecuadamente y puedan desplegar en
conferir al mortero monocapa las propiedades de re- la pasta del mortero todas sus cualidades, contribu-
sistencias mecánicas necesarias para su utilización, ye este aditivo también a desarrollar una buena ad-
coincide pues, con la función que realiza en los mor- herencia sobre el soporte y a la composición reológi-
teros tradicionales. ca de la pasta del mortero.
Tema 4. Revestimientos monocapa: características y ejecución

Su dosificación debe ser estudiada con deteni- Por el contrario este aditivo empleado sin la dosis
miento pues un exceso de este aditivo provoca el fra- adecuada podría retrasar el fraguado de la pasta de
guado lento con lo que esto representa para el aca- mortero.
bado final, pues mientras los morteros no fragüen no " Resinas Sintéticas
se pueden realizar los acabados finales, raspado, abu- Su empleo es para obtener en la pasta de los mor-
jardado. etc. teros monocapa, mejoras en cuanto a la cohesión in-
Se emplean como retenedores de agua, caseínas, terna de los componentes.
esteres de almidón, derivados celulósicos. Otra función no menos importante que se consi-
* Hidrofugantes gue con este aditivo, es la mejora de la adherencia a
Estos aditivos contribuyen a desarrollar una de las los soportes, cualidad imprescindible conjuntamente
cualidades más apreciadas de los monocapas. la im- con la tixotropía; en cierta manera estos aditivos con-
permeabilidad. tribuyen a mejorar la impermeabilidad pero funda-
Su misión es taponar los capilares que se produ- mentalmente a través de la cohesión reseñada.
cen en el mortero una vez que se ha producido el fra- Se suelen emplear compuestos de resinas viníli-
guado, suelen actuar sustituyendo el lugar que ocu- cas y acrílicas.
paba el agua de amasado, con ello se desarrolla un
mortero con características de impermeabilidad. 3.4 Cargas Ligeras
Los productos que se emplean tienen ciertas difi-
Se emplean las cargas ligeras para aligerar la den-
cultades de compatibilidad con el cemento, suelen
sidad del mortero monocapa. Esto nos permite reba-
emplearse sales metálicas de ácidos orgánicos, es de-
jar el módulo de elasticidad del mortero, con lo cual
cir estearatos u oleatos, de magnesio, aluminio, cal.
tendremos monocapas con menor tendencia a la fi-
A fin de mejorar esta incompatibilidad con el cemen-
suración, conseguimos pues, morteros monocapas
to se emplean compuestos tensoactivos, dispersan-
más deformables, cualidad esencial del funcionamiento
tes o también ciertas cargas minerales como por ejem-
en servicio del revestimiento.
plo, bentonitas, caolines etc..
Al rebajar también el peso del mortero nos abre la
' Aireantes
posibilidad de aplicación en soportes con no altas re-
Mediante la introducción de aireantes se consi-
sistencias mecánicas superficiales, propiedad muy in-
guen pastas de morteros monocapas que sean más
teresante cara a la combinación de estos materiales con
tixotrópicas, es decir se mejora una cualidad, morte-
materiales de cerramiento de baja densidad y alto po-
ros que no descuelguen fácilmente, el mecanismo es
der aislante, es el caso de bloques de hormigón celular.
a través de conseguir morteros consistentes con me-
Se suelen utilizar como cargas ligeras generalmente
nor cantidad de agua de amasado, también pues se
vermiculitas y perlitas, ambas de origen mineral, pro-
mejora por este mecanismo la porosidad. Igualmente,
vienen de rocas micáceas y silíceas respectivamente
el aire ocluido en vez de agua, permite que el morte-
que se transforman según diversos procesos indus-
ro sea más trabajable pues se disminuye su peso.
triales, obteniéndose por esta transformación las ci-
También con su empleo, en un aspecto menos de- tadas cargas que oscilan en unas densidades de 60-
seable, se rebajan las resistencias al sustituir aire por 360 kg\m .3

agua en el volumen de la pasta.


El funcionamiento de este aditivo es sencillo, son
productos tensoactivos que en contacto con el agua, 3.5 Fibras
es decir, son solubles en él, reaccionan convirtiéndo-
Se emplean en los morteros monocapa para me-
se en burbujas de aire.
jorar las resistencias y modificar la estructura interna
Se emplean sulfonatos de alcoholes, abitatos de
de composición del mortero. También colaboran a me-
sodio, lignosulfonatos, etc..
jorar la consistencia y a mejorar la deformabilldad del
' Plastificantes mortero monocapa. Deben tener resistencia a la al-
Su función es mejorar la plasticidad de la pasta de calinidad para ser compatibles con el cemento.
mortero, para ello el aditivo evita que se desarrollen Se suelen emplear fibras de origen mineral como
morteros con disgregaciones y con bajas resistencias, fibras de vidrio o de amianto, o bien tener su origen
que se darían en los casos en que se obtuviera la plas- sintético, como los políésteres, poliamidas, etc..
ticidad mediante la adición de agua.
Colabora pues en el mantenimiento de la resis- 3.6 Pigmentos
tencia del mortero al evitar que el exceso de agua re-
baje ésta. Su función es muy clara, dotar al mortero mono-
capitulo III. Revestimientos continuos

capa de la tonalidad deseada, y prevista de antema- dicado para el empleo de agua en hormigones según
o
no, así mismo serán los responsables de que en la el articulo 6 de la EH-91.
puesta en servicio y funcionamiento del monocapa El agua de amasado oscila entre el 25%-35% del
cumpla con las expectativas estéticas que suscitó en peso en polvo, según las indicaciones de cada fabri-
el momento de su elección como revestimiento que cante para cada tipo de mortero.
no necesita de otro tratamiento para cumplir la fun- El agua a emplear en la formación del mortero de
ción estética requerida. cemento, viene muy definida en la información técni-
Actualmente se puede afirmar que están lo sufi- ca de cada producto que suministra cada fabricante,
cientemente ensayados los colores que se pueden así como en los D.I.T, y se refleja también en cada sa-
obtener a través del mortero monocapa, y por tanto co. Es temerario y desgraciadamente habitual en per-
cumplir las expectativas previstas. sonas no versadas en este tipo de productos, el mo-
Es también ya conocida la limitación que tienen dificar la cantidad de agua de acuerdo a
los colores oscuros, no son aconsejables pues ab- consideraciones de prácticas antiguas como tempe-
sorben mayor cantidad de radiación solar y por tan- ratura existente en el ambiente, tiempo útil de la mez-
to favorecen las tensiones que tienen un origen tér- cla que se ha sobrepasado y se añade agua, etc.,
mico, igualmente son propensos a sufrir cáleos y pues se destruyen las características que se han di-
decoloraciones, pues son vulnerables al paso del señado para el mortero previamente.
tiempo.
Igualmente se deben considerar las dificultades de
ejecución de monocapas con colores oscuros, pues
4. Fabricación. Normativas Aplicables.
los riegos necesarios que deben realizarse en los mor-
Documento de Idoneidad Técnica (D.I.T.)
teros monocapas para obtenerse las resistencias y ca-
Controles de calidad
racterísticas del mortero, son potenciales peligros de
que aparezcan carbonataciones y los cáleos referidos 4.1 Fabricación
en las superficies ya realizadas.
La técnica actual aconseja emplear morteros mo- Como ya hemos avanzado anteriormente, el pro-
nocapa cuyo factor de absorción de los rayos solares ceso de fabricación industrial, es una de las diferen-
sea del orden de 0,7 en cuanto a su valor máximo, la cias básicas entre los morteros monocapa y otros ti-
práctica aconseja emplear colores con factores de ab- pos de morteros. No es la diferencia del proceso, que
sorción del orden de 0,5 para tener plena confianza existe respecto otros morteros industriales, sino la ca-
en la estabilidad del color. racterística de industrialización imprescindible por las
Se utilizan pigmentos naturales de origen mineral exigencias de calidad definidas, lo que queremos des-
y artificiales o sintéticos, deben en todo caso tener la tacar.
suficiente opacidad o poder cubriente y tener resis- Las fábricas actuales de mortero monocapa, se
tencia a las condiciones atmosféricas. componen en cuanto a su instalación mecánica de
unos silos verticales de gran capacidad que sirven de
almacenamiento de los componentes que se utilizan
3.7 Agua
en mayor proporción en el mortero, se abastecen de
Incluimos el agua, de propósito como materia pri- cisternas que periódicamente suministran estos ma-
ma componente del mortero monocapa, pues sin su teriales básicos a la planta. Los componentes mino-
concurso no existe el mortero monocapa, sólo ten- ritarios se suelen ya tener predosifícados para cada
dríamos polvo de mortero monocapa. tipo de mortero, en sacos o recipientes y una vez se
Es el único componente que no tiene los controles pone en marcha el proceso se vierten en unas tolvas
de calidad realizados en fábrica e incluso es el único por cada cantidad establecida que se fabrica en una
componente que no tiene control de ensayo definido amasada.
y que se deba realizar a priori, solo se analiza, qene- Toda fábrica actual con un mínimo de garantías
ralmente a posteriori. y una vez que se detectan pro- tiene un sistema de dosificación que en general vie-
blemas que se presuman debidos al agua. ne regido por procesos mformatizados donde el error
Se confía en la bondad del agua de consumo ha- humano está limitado, pues no se realiza práctica-
bitual de cualquiera de nuestros pueblos y ciudades, mente ninguna operación manual en cuanto al empleo
quedando exentas de su aplicación las aguas con clo- de mayor o menor proporción de materiales.
ruros, sulfatos y en general las que contengan subs- Mediante procesos informáticos en los que están
tancias disueltas, realmente se trata de cumplir lo in- definidas las proporciones a emplear de las cantidades
Temad. Revestimientos monocapa. características y ejecución

de materiales, se dan instrucciones electrónicas a las del citado organismo respecto a las directrices exigi-
básculas de precisión que recogen de los silos a través óles de calidad, a productos y procedimientos no tra-
de dosificadores y cintas transportadoras los materia- dicionales de construcción.
les definidos, se transportan estos a través de las cin- Podemos concluir, que la normativa o documen-
tas a las mezcladoras, donde se realiza la mezcla de to- tos que actualmente los técnicos, deben exigir para
dos los componentes, en tiempo y cantidad prefijados tener la certeza de estar instalando un producto y
según el tipo de instalación de que se disponga. sistema de construcción no tradicional con unos de-
Son preferibles las mezcladoras de eje horizontal terminados parámetros de calidad, son los citados
pues favorecen la homogeneización de la mezcla, a D.I.T.
las de eje vertical. Será una buena práctica cara a salvaguardar la
La capacidad de una fábrica de monocapa se rige responsabilidad profesional el emplear productos y
por la capacidad de las amasadoras y su tiempo de sistemas que hayan obtenido el D.I.T, y éste sea vi-
mezclado. gente, pues se concede para cinco años y es reno-
Una vez se ha producido el mezclado se transpor- vado tras las oportunas comprobaciones pasado es-
ta el material hasta las ensacadoras donde el producto te plazo, debiendo ser solicitada la renovación por la
en polvo se almacena en sacos, en general de 25-30 empresa o fabricantes interesados.
kg-
Posteriormente, los sacos se retractilan con plás-
4.3 Documento de Idoneidad Técnica. (D.I.T)
tico y se paletizan, con lo que tras su almacenamien-
to y hasta su traslado a obra, se pone punto final al Una vez solicitado por la empresa fabricante al
proceso de fabricación. I.E.T.c.c, la expedición del citado documento, el pro-
ceso se abre siempre que el producto se lleve em-
4.2 Normativas aplicables pleando al menos 1 año.
Para ello la empresa fabricante debe de presentar
Actualmente no existen normativas aplicables en una serie de documentos-entre los que los más im-
la fabricación de morteros monocapa, propias de nues- portantes son los siguientes:
tro país.
Se utilizan como métodos de ensayo, los criterios -Nombre del producto
y parámetros contenidos en los Cahiers du Centre -Nombre del Fabricante
Scientifique et Technique du Batiment (C.S.T.B) -Definición del material
N°í777,1778,1779y 2041. -Fabricación
La U.E.A.T.C, Unión Européenne pour L'Agrément * fábricas donde se produce
technique dans la Construction, organismo de crea- * proceso de fabricación
ción en 1960, cuyo representante por nuestro país es ' controles durante y tras la fabricación
el Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo ' almacenamiento
Torroja, IETCC, así lo tiene admitido. * producción
Estos productos, o la aplicación práctica de estos -Presentación del producto
productos como morteros de revestimiento de facha- -Puesta en obra
das, son considerados como materiales y procedi- -Rendimiento y consumos
mientos no tradicionales de construcción, por lo que -Obras en que se ha utilizado
no son aplicables las normativas básicas de materia- -Ensayos
les y sistemas ensayados en procedimientos cons-
tructivos habituales. El Instituto, una vez verificados los documentos re-
El citado organismo U.E.A.T.C se creó para homolo- feridos, comprueba, tras una visita a los centros de
gar los criterios de calidad y exigencias con criterios producción, las características del material mediante
comunes en Europa, para la aprobación de materia- ensayos propios.
les y procedimientos de construcción que no estén Tras estos procesos, el Instituto elabora un expe-
sancionados por la práctica, conocimientos y norma- diente que presenta a una comisión de expertos pa-
tiva de cada país. ra su discusión y en todo caso su aprobación con las
El I.E.T.C.C. es el organismo español que está in- observaciones que se crean precisas, o bien su re-
tegrado en la citada organización U.E.A.T.C. desde chazo sino se cumplieran las premisas necesarias.
1963 y a través de decreto ministerial se le concede Ver D.I.T N°299 del Mortero monocapa para
la facultad de expedir los D.I.T, que son la expresión Revestimientos de fachadas Cotegran-Piedra NF
capitulo I I I . Revestimientos continuos

en el que se puede comprobar la profusión de datos Esta cualidad del monocapa viene definida por es-
y ensayos que integran este documento, y que tos condicionantes:
brindan al técnico que utilice este tipo de productos -baja capacidad de retracción
avalados por el D.I.T. una garantía sobre el produc- -módulo de elasticidad bajo
to empleado. -Resistencia a la tracción
La baja capacidad de retracción se obtiene a tra-
vés de una adecuada dosificación de ligantes hidráu-
4.4 Controles de Calidad
licos, es decir, a más cantidad de cemento, más pre-
A los controles que son obligatorios según el D.I.T, sencia de agua y más posibilidad de que aparezcan
se unen habitualmente los controles internos, para ve- retracciones de fraguado, también se puede producir
rificar que se están cumpliendo las especificaciones por desecación o absorción del agua de amasado.
de fabricación y calidad previstas, cuando se formu- Colaboran a evitar la aparición de retracciones, los re-
ló el producto. tenedores de agua y las fibras de celulosa.
Con este sistema de control de calidad, podemos Es importante para evitar fisuraciones que el mor-
obtener una garantía de producto indiscutible, que di- tero tenga un módulo de elasticidad bajo, con ello su
fícilmente se da en otro tipo de morteros industriales posibilidad de deformación es mayor, con lo cual so-
sin estar en posesión del D.I.T porta mejor, los movimientos del soporte de origen
Igualmente es un buen criterio al elegir un deter- térmico y estructurales.
minado monocapa, elegir el que además de disponer Los monocapas se clasifican según les cahiers de
el propio producto el D.I.T, la empresa que lo fabrica acuerdo a su módulo de elasticidad del siguiente mo-
disponga de sello AENOR. y cumpla la norma de ca- do:
lidad ISO 9001, este sello significa un criterio de cali-
dad como empresa en cuanto a procedimientos de Clasificación E(MPa) Retracción mm/Mt.
fabricación y control.
-Bajo menor de 7.000 menor de 0,7
-Medio 7.000 a 12.000 entre 0,7 y 1,2
5. Características que debe reunir -Alto más de 12 000 mayorde1,2
el mortero monocapa
A su vez y como cualidad difícil de conseguir en
El mortero monocapa como producto y como sis- morteros tradicionales, pues su elevación supone que
tema constructivo de revestimiento debe tener una se eleva el módulo de elasticidad, es que tenga bue-
serie de características y cualidades que seguida- na resistencia a la tracción, se consigue en general
mente analizaremos, así como someramente se re- con la adición de resinas.
pasarán los parámetros técnicos y de ejecución que Con éstas, se consigue que el material esté cohe-
permitirán obtener estas características. sionado y tenga tendencia a no romperse, pero se in-
tuye que esto también produce dificultad de defor-
-Impermeabilidad mación, lo que nos indica el grado de interrelación que
-Adherencia tienen estas cualidades aún contradictorias, y que se
-Permeabilidad al vapor de agua pueden combinar mediante los morteros formulados
-Durabilidad en laboratorio.

"Grado de impermeabilidad.
5.1 Impermeabilidad
¿A qué llamamos grado necesario de impermea-
La impermeabilidad es una cualidad imprescindi- bilidad? Se entiende por este concepto, a la cantidad
ble en este tipo de revestimientos, al menos en un gra- de agua que puede absorber el revoco en el ciclo llu-
do necesario que durante su vida útil preste las ca- via, y posteriormente evaporar en el ciclo siguiente de
racterísticas exigibles a un revestimiento de fachada. secado por evaporación.
Los factores de los que depende la impermeabili- Claramente se debe de decir que el monocapa no
dad son: es estanco, como tampoco lo es el ladrillo.y al con-
-Capacidad baja de fisuración trario de como sí tienen esa cualidad las láminas im-
Grado de Impermeabilidad permeabilizantes.
-Adherencia al soporte Los datos que proporcionan les cahiers franceses,
'Capacidad baja de fisuración.- sobre las clasificaciones de los morteros monocapa
Terna 4. Revestimientos monocapa: características y ejecución

308 en orden a la resistencia a la penetración de agua por 6. Ejecución y puesta en obra de


capilaridad es la siguiente: morteros monocapa

Tipo de revestimiento - Capilaridad(C) Analizamos en este apartado las condiciones ge-


muy débil capilaridad menor 1,5 nerales de aplicación y su puesta en obra de los mor-
débil capilaridad entre 1.5 y 4 teros monocapa. teniendo en cuenta que esta fase es
fuerte capilaridad igual o mayor de 4 decisiva para obtener las prestaciones de estos mor-
teros.
Los monocapas actuales tienen una capilaridad
muy débil lo que favorece el grado de impermeabili-
6.1 Útiles y herramientas. Aplicación mecánica.
dad.
Andamiajes

5.2 Adherencia al soporte 6.1.1 Útiles y Herramientas


Los útiles y herramientas que se utilizan en la eje-
Esta cualidad está muy relacionada con dos fac- cución de morteros monocapa, son comunes en su
tores, porosidad y rugosidad del soporte y con la ca- mayoría a los que se utilizan en la ejecución de otro
pacidad de retención de agua del mortero monoca- tipo de morteros pero tienen a su vez en algún caso
pa, frente al soporte y frente al ambiente térmico. particularidades especiales. A continuación reseña-
Esta adherencia es clave para mantener el revoco mos prácticamente la totalidad de los útiles que son
en servicio durante su vida útil prevista. Se debe de necesarios en la ejecución.
dar durante el fraguado, adherencia rápida o instan-
tánea y durante el revoco en servicio, adherencia a Útiles y herramientas de replanteo:
largo plazo. -Cinta métrica
De ella depende también la resistencia a movi- -Cuerdas de atirantar
mientos del soporte, movimientos de origen térmico, -Cuerdas de marcar (añiles)
etc.. -Escuadras
-Plomadas
5.3 Permeabilidad al vapor de agua -Nivel de burbuja y de manguera

Esta característica contribuye a mejorar la im- Útiles y herramientas de puesta en obra:


permeabilidad, pues permite que el vapor de agua -Llanas
que normalmente se produce en el edificio pueda, -Paletas de cuello recto
por los efectos higrotérmicos interior-exterior eva- -Miras metálicas
porarse a través del revestimiento. Sin esta cuali-
dad se producirían condensaciones en el interior del Útiles y Herramientas de planeidad:
cerramiento, o el soporte, creando efectos de de- -Paleta de aristas exteriores
gradación. -Paleta de ángulos interiores
Se debe pues conjugar, porosidad baja y alto -Llanas alargadas o longitudinales
coeficiente de permeabilidad al vapor de agua. Estas herramientas son ya peculiares de los mo-
nocapa y son necesarias para conseguir los resulta-
dos adecuados, se han ido diseñando a la vez que
5.4 Durabilidad
han ido evolucionando las técnicas de aplicación.
El mortero de revestimiento monocapa debe cum-
plir, su función en el paso del tiempo y en diversas si- Útiles y herramientas de acabados:
tuaciones medioambientales, para ello debe mante- -llanas de raspar de púas
nerse con las prestaciones anteriores indicadas, más -raspines
las cualidades que se deben exigir a cualquier recu- -cortadores de despieces de 10,15,20 mm
brimiento exterior: -alisador de despieces
-Mantener los colores dentro de una degradación -rascadores
temporal admisible -palas de proyección de árido
-Mantener las texturas elegidas Estos elementos al igual que los del apartado an-
-Mantener una resistencia superficial ad- terior son también específicos y se han creado en ge-
misible. neral con el monocapa.
capitulo III. Revestimientos continuos

Junquillos de despieces: hay que pasar dos y tres veces, (instalación de des-
-junquillos de madera pieces, extendido del mortero monacapa, acabado),
-junquillos de plástico con lo que obviamente además de las rozaduras habi-
-junquillos de aluminio tuales, el operario no tiene la perspectiva adecuada
-guardavivos de esquina con remate en PVC de trabajo y no se le puede exigir una calidad óptima.
Las dimensiones normales de los junquillos son
2500 x 20 x 7mm.
6.2 Preparación de las mezclas

6.1.2 Aplicación mecánica Esta fase es de una gran importancia, pues si la


Es muy común en Europa, y paulatinamente va ga- confección de la pasta no es correcta no tendremos
nando terreno en España, el procedimiento de pro- el mortero deseado, esto lo saben los fabricantes y
yectar la pasta de mortero a través de máquinas de también los organismos de control por lo que se inci-
proyectar morteros monocapa, que específicamente de en este aspecto en los D.I.T, y en las recomenda-
los fabricantes han ido diseñando para las caracte- ciones e información técnica de los diversos fabri-
rísticas y densidades de estos morteros. cantes, veamos las premisas básicas.
Las máquinas, realmente son de amasar-proyec- Cada producto, de cada fabricante, tendrá una can-
tar morteros pues cumplen ambas funciones. tidad de agua de amasado que debe ser respetada
Se componen de un recipiente donde se vierte el estrictamente, vendrá definida esta cantidad en por-
mortero monocapa que está almacenado en sacos, centaje del peso del polvo y también en litros por sa-
tiene una entrada de agua regulada que va a parar al co, el D.I.T exige que el envase contenga estas ins-
depósito amasador, donde el agua y el polvo del fu- trucciones.
turo mortero monocapa son mezclados a través de un El amasado puede 3er manual, mecánico por ba-
tornillo sinfín, durante el tiempo que se indique por el tidoras u hormigoneras tradicionales, o por máquina
fabricante. Una vez se consigue este amasado ho- de proyectar.
mogeneizado, a través de unas mangueras de pre- El tiempo de amasado se debe respetar, vendrá re-
sión, se conduce la mezcla hasta la boquilla de pro- cogido en las instrucciones de preparación, se debe
yección desde donde se proyecta la masa de mortero tener en cuenta que en amasados manuales se de-
a la pared que va a ser revestida. ben cuidar estos aspectos de tiempo. Este proceso
Con este procedimiento se consigue mejor rendi- dura entre 5-10 minutos según productos, fabrican-
miento de aplicación, se produce menos cansancio tes y forma de realizarlo.
en los operarios pues el extendido del mortero es un Una vez preparada la mezcla homogeneizada, se
trabajo duro y también se consigue una homogenei- debe dejar reposar unos minutos para que actúen con-
zación en la mezcla difícil de conseguir aún con bati- venientemente los aditivos en presencia de agua, pos-
doras mecánicas. teriormente estará lista la mezcla para aplicarse en la
fachada, teniendo muy en cuenta el tiempo de aber-
6.1.3 Andamiajes tura de aplicación de la mezcla.
Es conveniente incidir en un aspecto que por muy Se indica este tiempo útil de abertura en las ca-
conocido y discutido, sorprendentemente, en la prác- racterísticas del producto y en los D.I.T, pasado este
tica se descuida y lo que es peor, se olvida su inci- tiempo no será aplicada la masa de mortero pues es-
dencia en el acabado final, son los andamiajes. taría dura y descolgaría. Suele establecerse según pro-
Es obvio que para conseguir acabados de calidad, ductos y fabricantes entre 30 minutos y una hora.
es imprescindible el que se realice el revestimiento en No se debe añadir agua, en cantidad que supere
unas condiciones adecuadas, pues así el operario pue- a la especificada por el fabricante, ni en casos de ca-
de estar seguro y cómodo para obtener de su pericia lor excesivo, pues en estos casos quedará limitada la
profesional toda la calidad que estos productos ofre- aplicación como se verá posteriormente. Tampoco se
cen a priori. deben volver a amasar añadiendo agua, morteros so-
brantes o de sacos caducados.
Se deben utilizar andamiajes tubulares, tipo euro-
peo es lo ideal, con plataformas en todas sus plantas
además de los elementos de seguridad exigibles se- 6.3 Soportes
gún la normativa.
Se deben evitar los andamios colgados pues aún 6.3.1 Características que deben reunir los soportes
siendo utilizados con cierta frecuencia presentan pro- Los soportes para monocapa, deben cumplir unos
blemas, pues por una misma zona de la pared a veces parámetros básicos que en algún punto son comunes
Tema 4. Revestimientos monocapa. características y ejecución

para aplicar otro tipo de revestimientos y pintura, son "Porosidad adecuada.


los siguientes: El soporte debe tener la porosidad adecuada pa-
-Resistencia ra que pueda producirse la adherencia del producto,
-Planeidad si la porosidad fuere muy baja se podría compensar
-Limpieza este aspecto no positivo con una mayor rugosidad,
-Rugosidad y Adherencia real o artificial.
-Porosidad adecuada Es conveniente que no tenga excesiva porosidad,
-Estabilidad en ese caso se deben emplear soluciones específicas,
-Grado de humedad como veremos al estudiar los soportes habituales.

"Resistencia. "Estabilidad
El soporte debe ser resistente al paso del tiempo, El soporte debe haber realizado ya sus movimien-
y a la aplicación de productos hidráulicos sobre su su- tos previsibles, (retracción, térmicos, entrada en car-
perficie, así como tener la suficiente resistencia su- ga, etc.), pues así se pueden observar las posibles fi-
perficial para soportar el peso del revestimiento que suras y se tratarán previamente, con lo cual la Influencia
se va a aplicar. Como dato que nos permita tener un en el aspecto final no será apreciable.
orden de magnitud de la resistencia del soporte, se
puede indicar que si se va aplicar sobre soportes com- 'Grado de Humedad
puestos de mortero de cemento, este mortero debe No se aplicarán morteros monocapa sobre sopor-
tener una dosificación 1:4. tes saturados o con vías de agua.
Sí se debe de humedecer el soporte antes de apli-
car el monocapa para evitar que éste absorba agua
"Planeidad.
de amasado en tiempo caluroso o de viento fuerte se-
Este parámetro que tiene que cumplir el soporte es
co, se puede evitar este proceso si el soporte está hu-
importante en orden a obtener una planeidad final del
medecido y con humedad ambiente alta.
revestimiento adecuada.
El mortero monocapa, una vez aplicado debe te-
6.3.2 Soportes habituales
ner unas tolerancias de planeidad similares a las con-
Los soportes habituales son los siguientes:
tenidas en la N.T.E-R.P.R, 3mm de tolerancia medido
-Fábricas de ladrillo (hueco doble, macizo, sin hi-
con regla de 1 metro.
drófugos superficiales o vitrificados) (Fig. 2)
Los controles que la citada norma indican es de 1
2
-Enfoscados de mortero de cemento (dosificación
control por cada 100 m .
1:4)
De este parámetro de la norma y de los espesores
-Enfoscados de morteros preparados específicos
de aplicación normales, no menos de 10 mm, y es-
para monocapa
pesores medios de 15 mm, podemos deducir las to-
-Bloques de áridos ligeros
lerancias que podemos admitir para los soportes de
-Bloques de hormigón celular
monocapa.
-Bloques de cemento vibrado
En cualquier caso no deben tener oquedades, re- -Bloques de termoarcilla
babas de mortero, llagas sin realizar, desplomes im- -Hormigón armado
portantes no corregidos. No son admisibles soportes como el yeso, o con
grandes restos de yeso, pinturas, metales, vidrio, plás-
"Limpieza. ticos, y en general los de nula porosidad o nula rugo-
El soporte debe estar limpio de polvo, grasas, pin- sidad, así como los que tengan un módulo de elasti-
turas o restos de pinturas, desencofrantes o produc- cidad muy distinto del monocapa. pues le transmitiría
tos no estables que impidan la adherencia. tensiones superficiales inadecuadas.
En el caso de bloques de áridos ligeros, hormigón
"Rugosidad y adherencia celular, cemento vibrado y similares, se debe interpo-
La rugosidad es conveniente en el soporte pues ner entre el mortero monocapa y el soporte, una ca-
favorece la adherencia, si no existiera en el soporte, pa intermedia que evite la absorción del agua de ama-
bien por su ejecución o bien porque las característi- sado por el soporte, se utilizan para ello morteros
cas del mismo no lo permiten (hormigón) se crea una hidráulicos modificados que tienen una gran capaci-
rugosidad artificial, como veremos al ver cada tipo de dad de retención de agua para evitar este fenómeno,
soporte. así como tienen una granulometría con áridos grue-
capitulo III Revestimientos continuos

3.

sos, que favorecen la adherencia. Suelen tener un mó- elementos metálicos que pueden sufrir oxidaciones
dulo de elasticidad medio, cercano a 10.000 MPa. en la vida útil (humedad, vapor de agua etc.).
Se aplica el monocapa una vez se haya secado es- En caso de soportes adecuados por el material de
ta primera capa intermedia. que se componen, pero no por su planeidad o acaba-
Esta solución es preferible a emplear morteros tra- dos, fábricas de ladrillo en general, se realizan dos solu-
dicionales que en ocasiones se emplean indebida- ciones optativas en general, para corregir este defecto,
mente por desconocimiento, pues el efecto de dese- bien se realiza un enfoscado previo con morteros modi-
cación se mantiene en la capa intermedia lo cual sigue ficados prefabricados de módulo de elasticidad bajo, co-
siendo problemático. mo capa de igualación previa, o bien se realiza una pri-
En el caso de hormigón armado (Fig. 3), se debe mera mano con el propio producto monocapa, debiéndose
emplear la solución anterior como puente de anclaje esperar en ambos casos siete días para realizar la capa
o porosidad-rugosidad artificial, pero aplicando el mo- definitiva (recomendación incluida en los D.I.T).
nocapa antes de que se haya secado esta capa in-
termedia.
6.4 Puesta en obra. Ejecución
También en caso de superficie de hormigón arma-
do y cada vez en ocasiones más reducidas por el de- 6.4.1 Condiciones ambientales
sarrollo de nuevos productos, se empleaban para En general es admitido por los diferentes fabrican-
realizar esta rugosidad artificial como capa interme- tes y recogido en los D.I.T, el que no se deba aplicar
dia, mezclas de resinas acrilicas con áridos de sílice el mortero monocapa si la temperatura superficial del
y una vez secas se aplicaba el monocapa. soporte está por debajo de 5"C o si está por encima
U
Otra solución que se ha empleado ha sido anclar de los 30 C.
el monocapa mediante armado con malla de fibra de Si la temperatura ambiente es muy alta se debe re-
vidrio o poliéster tratada antiálcali, embutida entre dos gar el revestimiento a las 24 horas de haberse reali-
capas de revestimiento. El anclaje al hormigón se zado para favorecer el que no aparezcan fisuras de
realiza con elementos de plástico que funcionan por retracción.
expansión al introducir un bulón en su intenor, no con Igualmente, con fuerte calor o viento seco se debe
Tema 4.

4. 5

regar previamente el soporte para evitar absorciones pa o en dos capas con un espesor de la primera ca-
del agua de amasado. pa de igualación de 2-3 mm, buena práctica es ex-
Se debe evitar la aplicación lloviendo o bien que tender esta capa de igualación pero evitada a veces
pueda llover en las horas siguientes a la aplicación, por su coste añadido. Tanto en caso de una capa o
pues favorecerá este hecho la aparición de eflores- dos capas se deben obtener espesores de revesti-
cencias por carbonatación del revestimiento. miento acabado de 10 mm mínimo, en general se con-
En épocas de heladas nocturnas se debe tapar el siguen espesores medios de 15 mm.
revestimiento con lonas como mal menor si no es po- Si los espesores que se desean obtener por nece-
sible esperar a que no se produzcan éstas, así como sidades constructivas, son mayores de 15 mm, se im-
no aplicar durante las horas en que persista el efecto pone el realizarlo en dos capas para evitar descolga-
de la helada. mientos o fisuraciones.
Sin ser habitual pues es arriesgado, se pueden con-
6.4.2 Ejecución seguir espesores en dos capas mayores de 25 mm,
Se comienza extendiendo el material en bandas de en estos casos se debe armar el sistema y procu-
5-10 cms de ancho, sobre las que se asientan los jun- rando no pasar de espesores de 30-35 mm. Reiteramos,
quillos (Fig.4), realizando los despieces proyectados ni es habitual ni aconsejable el emplear estas solu-
teniendo en cuenta los siguientes condicionantes: ciones con espesores mayores de 25 mm.
Se deben tener en cuenta para cumplir los espe-
-El espesor mínimo que debe existir en las juntas sores indicados anteriormente, que para obtener los
del revestimiento debe de ser 8 mm. acabados desaparecen algunos milímetros a fin de
-La separación máxima que se recomienda entre obtener el aspecto final.
juntas de trabajo debe ser, juntas horizontales 2,20- En las juntas que se producen entre los diferen-
2,50 mts, y entre juntas verticales debe ser de 7-8 mts. tes materiales, hormigón, ladrillo, o corregidas con
-se debe distinguir entre juntas de dilatación que materiales de la misma clase pero con posibilidad de
se deben respetar (Fig. 5), juntas de trabajo, juntas de que se manifieste la fisura, entre materiales de la mis-
diseño y juntas entre diferentes materiales. ma calidad pero con junta manifestada, se debe pro-
Una vez se han efectuado los despieces se ex- ceder al armado del mortero monocapa para favo-
tiende el mortero monocapa. generalmente de una ca- recer que las diferentes tensiones que se produzcan
capitulo 111. Revestimientos

6. 7.

no manifiesten la fisura que produce la junta cons- -En caso de exposición a fuertes lluvias continuas
tructiva. es admisible el aplicar como capa de protección una
Se realiza extendiendo material en la junta y a am- pintura incolora hidrófuga, en general a base de oli-
bos lados y sobre el mismo aplicar una malla de fibra goxilosanos.
de vidrio o poliéster resistente a los álcalis, que so- -No se debe aplicar en paramentos expuestos a
brepase por cada lado de la junta 20 cms mínimo, pa- humedades freáticas o de fuerte capilaridad, como
ra posteriormente aplicar una capa que recubra esta muros enterrados etc..
malla. La malla se debe colocar entre las capas indi- -En soportes antiguos por ejemplo de rehabilita-
cadas a fin de que durante los trabajos de acabado ciones, es conveniente instalar monocapas ligeros y
no se descubra la misma (Fig. 6). en ocasiones armar el revestimiento si se tienen du-
das de la estabilidad del soporte.
6.4.3 Limitaciones de Utilización
De acuerdo a las características anteriormente enun- 6.4.4 Acabados y colores
ciadas se deben evitar las siguientes utilizaciones o Actualmente el mercado ofrece una amplia diver-
condiciones de utilización: sidad de gamas de acabado y colores, en los cuadros
-No se debe utilizar el monocapa en situaciones adjuntos se puede observar esta diversidad.
donde vaya a discurrir agua de lluvia habitualmente Se puede observar que no todos los acabados se
sin protecciones de goterones, vierteaguas, impostas pueden conseguir con todos los tipos de productos,
etc., pues su carácter no estanco en estas situacio- ni tampoco se pueden obtener todos los colores en
nes puede provocar humedades interiores, además todos los productos.
de que el agua en exceso no evaporada tras la lluvia, Estas limitaciones vienen determinadas por las
puede ser peligrosa durante los ciclos de hielo des- características de composición de los diferentes pro-
hielo por su aumento de volumen. (Fíg. 7) ductos y en el caso de áridos proyectados por la
-No se debe utilizar monocapa en lugares donde existencia de determinados colores de áridos en el
se prevean retenciones de agua, o zonas de evacua- mercado. •
ción lenta. Los acabados más utilizados de los indicados en los
-Se debe evitar la aplicación en contacto con el cuadros son el raspado y el árido proyectado, a conti-
suelo para evitar humedades capilares. nuación vamos a describir someramente el proceso de
Tema 4. Revestimientos monocapa: características y e/ecucióo

314 ejecución del árido proyectado, el proceso de ejecu-


ción del acabado raspado.
-Árido proyectado:
Una vez aplicado y regleado el mortero y tras de-
jar que haya endurecido la masa durante 15-30 mi-
nutos, se proyecta el árido seleccionado a tal fin, ca-
lizo, lavado, humedad máxima 2%, color uniforme,
dureza interna buena, y con las dimensiones elegidas
de manera uniforme según la siguiente tabla
-Fino 3-5 mm
-Mediano 5-9 mm
-Grueso 9-12 mm

Una vez proyectado el árido se embute o plancha


el árido contra el mortero para dejarlo en el mismo pla- a
no, debiendo quedar tras el árido al menos 8 mm de
mortero monocapa.
Una vez realizada esta operación se alisa con la en los morteros monocapas, así como ofrecer solu-
llana para evitar los llanazos, difíciles de evitar en es- ciones que puedan solucionar las mismas; veamos las
te acabado y observables con el sol en fachada. más frecuentes:
En la fotografía 8 se puede observar un acabado
raspado en combinación con otro material de reves-
timiento. 7.1 Fisuraciones y grietas
-Respecto de los otros acabados, un asunto im-
portante es que se deben respetar estrictamente los Dan origen a la pérdida de la impermeabilidad del
tiempos de trabajabilidad que indican las prescripcio- producto, y a patologías en ciclos hielo-deshielo que
nes de los diversos productos, antes de comenzar a pueden producir desprendimientos.
realizar los acabados finales, pues si se realizan sin la Las causas que las producen generalmente son,
dureza necesaria no darán los resultados deseados y movimientos estructurales o de origen térmico de los
esperados. soportes, asientos diferenciales, retracción durante el
fraguado por exceso de agua de amasado, pérdida
por desecación del agua de amasado, descuelgue del
producto por grosores excesivos, juntas entre dife-
7. Patología. C a u s a s . Posibles soluciones rentes materiales mal resueltas.
Mediante este apartado, nos será posible conocer Sólo se puede solucionar rehaciendo el revesti-
y detectar la patología más habitual que se presenta miento en las zonas afectadas, y según la causa, si
está o no viva la fisura, armar el nuevo revestimien-
to.
M O R T E R O S C O T E G R A N

AtlDÓ P I O Y I C T A O O í í f l f í t AS FADOS RUSTICOS

III m.
M O R T ER O S C O T E G R A N
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FRATASADO ouotmjw.

1
s
Cuadro de gamas y colores. Cuadro de gamas y colores.
capitulo III. Revestimientos continuos

Aunque los repasos en monocapas no resultan en 7.4 Carbonatación


cuanto a aspecto final adecuados, pues es difícil igua-
lar las tonalidades, es preferible esta solución a la pér- Son manchas blanquecinas que aparecen en los
dida de esta capacidad de impermeabilidad del re- morteros monocapa, cuando se ha realizado la apli-
vestimiento. cación en tiempo frío o de alta humedad ambiental,
temperaturas menores de 5°C. humedades relativas
altas o lluvia durante días después del revoco.
7.2 Abolsamientos y desprendimientos Se produce porque en estas condiciones atmos-
féricas se favorece la reacción de las sales de carbo-
Se produce este efecto, por las siguientes causas:
natos calcicos que reaccionan con el agua de ama-
heladas durante la ejecución, soporte sobre el que se
sado.
aplicó sucio o disgregado, soporte sin suficiente re-
No produce más que daños estéticos, pero da un
sistencia superficial, excesivo espesor del material
aspecto bastante negativo del revoco.
aplicado en una sola mano.
La solución recomendada es retirar las sales me-
La solución es rehacer la zona del revestimiento diante lavado con solución de clorhídrico al 10%, y
afectado nuevamente. realizar nueva capa o aplicar pintura entonadora, igual
al punto anterior.
7.3 Cambios de color Este efecto se produce con mayor facilidad con co-
lores oscuros.
No es un defecto constructivo que pueda dar
origen a que se desarrollen nuevas y más graves
7.5 Espectros
patologías como en otros supuestos, pero daña
el aspecto estético, fundamental en el mortero mo- Se llama así al efecto en el que a simple vista se
nocapa. notan las llagas del soporte base.
Las causas son múltiples, diferencias en el agua Se produce por diferente absorción del agua de
de amasado respecto de la necesaria, mala homoge- amasado durante el fraguado entre las llagas y el la-
neización de la mezcla, proyección inadecuada por drillo o bloques.
diferente presión de la máquina de proyectar, o dife- Se produce a veces permanentemente, o bien en
rente inclinación de la boquilla de proyección, sopor- épocas de humedad ambiental excesiva.
tes heterogéneos con diferente capacidad de absor- Las causas son por espesores de revestimiento es-
ción de agua (espectros), ejecución en tiempo lluvioso casos, no haber realizado una preparación del sopor-
o frío, etc., como se ve existen varias causas y es una te adecuada rellenando juntas, regularizando, no ha-
de las patologías frecuentes. ber ejecutado una capa reguladora del mismo material
Existen dos soluciones posibles, realizar una nue- o mortero de regularización, entrada de agua por ca-
va capa sobre la existente sin que exceda de 20 mm, pilaridad, etc..
solución algo antigua, y la más realizada actualmen- Según la causa deberemos actuar adecuadamen-
te, es aplicar una pintura de igualación que no for- te, si es mala solución constructiva corregirla, hume-
ma piel y su único objetivo es entonar el revesti- dades capilares por ejemplo, si es por deficiente es-
miento. pesor, aplicar una nueva capa suplementaria.
1
capitulo III. Revesilmientos continuos

317

5. Pinturas y recubrimientos.
Pliego de condiciones del sistema de pintado
y patología
José María Quixal
Licenciado en Ciencias Químicas

1. Introducción todos los requisitos necesarios para lograr un recu-


brimiento que cubra las exigencias del proyecto.
Las pinturas y recubrimientos inciden de forma no- Un sistema bien estudiado debe conseguir los ob-
table en el aspecto y el mantenimiento de las estruc- jetivos de calidad fijados por la Dirección facultativa,
turas de acero y de las fachadas pero, por desgracia, evitar anomalías y, además, conseguir el coste ópti-
se originan muchos problemas a causa de una apli- mo para las prestaciones exigidas.
cación deficiente o de un sistema inadecuado. Pero aquí entraríamos en un tema complejo por-
Los problemas más graves suelen ser debidos a que cuando hablamos de costes nos podemos refe-
un soporte en malas condiciones o a una preparación rir al precio de las pinturas empleadas expresado en
de superficie incorrecta para el sistema de pintado ptas/kg o en ptas/l o al precio del recubrimiento apli-
2

prescrito. cado, expresado en ptas/nf o en ptas/m año de vi-


Cuando surge un problema se inicia una intermi- da, incluyendo gastos de mantenimiento. Estimo que
la forma válida es en ptas/m*. año de vida.
nable discusión entre la dirección facultativa, la pro-
piedad, el contratista y el subcontratista, que ha rea- En este artículo se comenta la redacción de un
lizado el trabajo e intenta implicar como sea al fabricante Pliego de condiciones y finalmente se revisan las ano-
de la pintura. malías más frecuentes de los sistemas de recubri-
miento y se analizan las causas.
Se efectúa una inspección, se consulta el proyec-
to, el Pliego de condiciones y muchas veces resulta
que no se ha definido nada con precisión y, por tan-
to, no es posible delimitar responsabilidades, con gran 2. Pliego de condiciones
alivio del subcontratista pintor.
2.1 Información técnica
La constructora suele cubrir su responsabilidad
obligando a firmar una cláusula de garantía al sub- Para redactar un Pliego de Condiciones es preci-
contratista, cláusula de garantía redactada sin bases so recabar una información concreta de las caracte-
técnicas objetivas que no resuelve el problema airo- rísticas de la obra y de los objetivos que se pretenden
samente. alcanzar con el sistema de recubrimiento.
Las empresas de aplicación de pintura suelen ser
de tamaño reducido, a veces se constituyen para una 2.1.1 Qué se va a pintar
obra determinada y se disuelven cuando termina, lo Debe definirse el elemento a pintar, el soporte y las
que complica el cauce de la reclamación. características de diseño.
Creo que nuestro objetivo va más allá de fijar res- Eiemplos:
ponsabilidades, debe centrarse en evitar los problemas. a) Elemento a pintar
El primer paso es la redacción de un Pliego de con- Estructura de acero oculta o vista.
diciones que defina el sistema de pintado, es decir, Fachada: año de ejecución.
Terna 5. Pinturas y recubrimientos. Pliego de condiciones del sistema de pintado y patología

318 Paramentos interiores, vestíbulos, escaleras o vi-


viendas.
b) Soporte
Acero
Acero galvanizado en caliente
Hormigón ejecutado con encofrados metálicos
Mortero de cemento de acabado fratasado.
Ladrillo cerámico
Tendido de yeso
Estructura de madera de pino
c) Diseño
-Estructura metálica
Presencia de perfiles de geometría complicada que
permitan depositarse el agua de lluvia o con zonas
no accesibles al recubrimiento ( Fig. 1 )
I
-Fachadas
Paños continuos o cortados por impostas en la lí-
nea de forjados.
Los paños continuos pueden presentar problemas
de empalmes cuando se utilizan pinturas de secado
rápido en tiempo caluroso.
Edificios con molduras o relieves de estuco. : s Lv:
Paramentos de ladrillo visto: Mortero de rejuntado
paletado o llagueado.
d) Facilidad de ejecución
Fachadas: altura 1. Incidencia del diseño de los perfiles en la corrosión.
Estructuras de geometría complicada o depósitos
con grandes superficies continuas.

2.1.2 En qué condiciones se encuentra el soporte


Es preciso efectuar una inspección a la obra para Notas a la Tabla 2:
recabar una información concreta del estado del so-
porte a pintar. La inspección debe ser especialmente (1) Se produce la carbonatación del hormigón por
cuidadosa en obras de restauración arquitectónica. la reacción de los álcalis del cemento con el C 0 del 2

El sistema de pintado a prescribir tiene que ser aire. El pH se desplaza de la zona de pasivación a la
acorde con el estado del soporte. zona de corrosión del acero.
En las Tablas 1 al 7 se revisan las observaciones más
importantes a realizar en varios tipos de soportes. Notas a la Tabla 7
Notas a la Tabla 1:
(1) Grados de corrosión: (1) La madera experimenta variaciones dimensio-
A Calamina intacta nales con los cambios en el contenido en humedad.
B Restos de calamina La mayoría de las alteraciones de los parquets tienen
C Corrosión regular este origen.
D Corrosión con picaduras.
(2) El acero presenta polaridad electropositiva res-
pecto a la calamina y se corroe con formación de pi-
caduras.
(3) Puede originarse corrosión porque hay una he-
terogeneidad electroquímica.
(4) Grados Re 0 (sin alteración) a Re 10 ( Máxima
alteración)
No se aconseja repintar sin eliminar la pintura
anterior cuando el grado de corrosión es mayor de CALAMINA: Fej Oí F«i O,. F« O

Re 3 . 2. Calamina o cascarilla de comunicación.


capitulo DI, Revestimientos continuos

C*servwones =vatuaaon zomentarx» 319


Superficies sin recgpr|m.ento Observaciones t ^ " coméntanos
- Restos de grasa o laladrinas de c o l a Pueden originar problemas de adherencia si
no se eumman Acabado superficial rugosidao O De estar fratasado,
• Acero laminado en caliente
Grado 0« corrosión PatranM 'SO 8501 -1 ISIS 05 59 00) (1) - Coneskm del mortero Puede haber sufrido una penüda de ooneaion
Presencia de calamina o cascarilla de La calamina es electropositiva respecto ai por lixiviación del cemento
larmnaciOn. acero (Fig 2 ) y. ademas, se desprende con
los cambios tenrticos. (2) • Adherencia J< soporte Determinar la adherencia a tracción segün
Cordones de soldadura: escorias o Pueden originar problemas de corrosión o UNE 33.822-95 Puede ocasionar desconenes
proyecciones adherencia si no se eliminen (3) M es descierne.

-Humedad Determinar ta humedad Puede ocasionar


desconches o ampollas

Superficies pintadas • Grietas o fisuras Anaaíar el origen y tipo' vivas 0 muertas El


- Aspecto tratamiento depende ¿ti tipo
- Tipo de peitura Déte conocerse e> tapo de pavura apocada
para definir el sistema de pintado - Suciedad Producida por la contaminación ambiental
- Grado de corrosión Escala europea de grados de corrosión (SIS El diseño oe la fachada incide en la
18 51.1t >{4) acumulación de suciedad Puede ocasionar
• Adherencia al soporte. Ensayo de enrejado (UNE 48.032 80) o faltos de adherencia
ensayo a tracción (UNE-EN 24824-H)

Tabla 1. Características del soporte. Tabla 4. Características de soporte.


Acero. Enfoscados de mortero de cemento.
Obra de restauración

Observaciones Evaluación, coméntanos

- Acabado superficial
Rugosidad, coqueras Los encofrados metálicos producen superficies
muy loas de dmat adherencia

- Restos de desencofrante Pueden originar problemas de adherencia Observaciones Evaluación, comentarlos

• Humedad Puede ocasionar ampollas o desconches


-Aspecto
-Mcaftmdad Se mide con papel pH.
Puede saponificar los aceites y las resmas Dureza Determinar la dureza Snore C. Debe ser
alcidlcas y afterar los pigmentos no resistentes superior a 55 •Sh C
a los álcalis. El yeso muerto puede ocasionar el desconche
de la pintura.
- Carbón ataoor Puede ocasionar la corrosión de las
armaduras como se md»ea en el diagrama de -Humedad Pueoe ocasionar mono (temples) y ampotas.
Pourbaix ( F x j . 3 )
Elloiescenoas Producen alteraciones superficiales
• Conosión de armaduras
Grietas o fisuras Se producen por el aumento de volumen Manen». La adición incontrolada de retard adores de
onginedo por el óxido de hierro fraguado puede ocaswnar manchas que se
Mancias de óndo manílestan en el paramento pintado

Tabla 2. Características del soporte. Tabla 5. Características de soporte.


Hormigón. Tendido de yeso

Ejecución.

Observaciones " Evaluación, coméntanos Piedra de «nena rejuntado.


Mamposterta rejuntado
• Acabado superficial rugosidad Debe lener un acabado fratasado. Chapado con placas de piedra Sistema de agarre y rejuntado

- Cohesión del mortero Puede ongmar descorches si es débil Características de la piedra

- Adenerenoa al soporte OWrminar ta adherencia a tracoór según Variedad caUza. marmol, gramo, arenisca ele
UNE 63 822-95 Puede originar desconches SJ Textura fiomogenexlad. tamaño de grano.
es deficiente Porosidad absorción de agua P C capi'erxfad
Arañado superficial.
• Humedad Oeterminar la humedad Puede ocasionar
desconenes o ampollas.

•Mammp$. Dejtermmat con papel pH Penada de c©nes-jn (afemscasi


Puede saponificar los aceites y resesas Desconchados
alcidicas y alterar algunos pigmentos Giietas. friuras
Degradación superficial ¡ncideitcia y tipo
- Fisuras de retracoón Debe efectuarse un tratamiento previo. Suciedad

Tabla 3. Características del soporte. Tabla 6. Características de soporte.


Enfoscados de mortero de cemento. Obra nueva Pavimientos de piedra
Tema5. Pinturas yrecuónmientos Pliego de condiciones deisistema de pintado y patología

Observaciones
-2 o 2 4 6 8 10 12 14 I6
- - I-I. -.; óri cómanla)in
i i 1 1 1 1 r— i
- Especie ••. i " - . i . 2
Pino, roble.castaño, ce

• Aspecto Nudos lendas. gemas, ele l,6 -6 1 -


Humedad La raanedad oe a maoara esta en *que>r>«i
c o n l a s c o « x I o o n e s a m b ^ n l a l e s i F i g . 4 ) (1) l,2 --CSXJ .
Alteraciones f*ótieas
Pea • M d M • • - hQM Es preciso evaniar ia intensidad oe» ataque • 0,8 •
detectar La espeoe Je insecto que (a ocasiona

Putrefacciones bongos Es preciso evaluar ta reensided del ataque y 0,4 \


detectar el tipo de coiorHa de ñongos

0
\ i pasivacidn
Tabla 7 . Características de soporte.
Madera -0,4 corrosión N.

- 0,8 - 6
(2 ) Es preciso que la madera tenga una hume- t corrosión
dad aproximadamente superior al 18 % para que se -l,2
inmunidad
desarrollen las colonias de hongos.
- '.6 -
i
1 1 1 i i l U1 1

2.1.3 Qué se pretende -2 0 2 4 6 8 10 12 14 16


La Dirección facultativa tiene que definir las pres- PH
taciones que debe cubrir el recubrimiento y la dura-
3. Diagrama de Pourbaux.
bilidad, es decir, los años de vida que pueden exigir-
se en la cláusula de garantía.
Las prestaciones a exigir al recubrimiento tienen
que ser técnicamente viables y acordes con las soli- La radiación solar y en especial, la banda corres-
citudes que deberá soportar. pondiente a la radiación ultravioleta (UV), degrada el
Ejemplos: vehículo (el componente aglutinante o resina)) de las
pinturas y barnices y puede alterar el color de los pig-
mentos, principalmente los de tipo orgánico.
-Estructura de acero:
La degradación está ocasionada por los fotones
Protección anticorrosiva, garantía 10 años.
de la radiación solar.
Estabilidad al fuego de 60 min. (EF 60) según UNE
La longitud de onda X del espectro de la luz visi-
23-093.
ble está comprendido entre 400 y 700 nm y el de la
-Paramento de ladrillo visto:
radiación UV entre 290 y 400 nm
Impermeabilización del paramento sin modificar el
Según la ecuación de Planck, la energía del fotón
aspecto.
es inversamente proporcional a la longitud de onda
-Fachada de sillares de piedra.
de la radiación:
Protección contra las alteraciones originadas por
la contaminación ambiental.
E = h.v = h.c/>.
-Enfoscado de mortero de cemento.
Impermeabilización y acabado decorativo de una donde:
determinada textura y color. E Energía del fotón (J)
Aislamiento térmico (con una resistencia térmica h Constante de Planck
interna R definida ) y acabado decorativo. h = 6.625. 1 0 J.s M

-Estructura de madera. c Velocidad de la luz


Protección contra los agentes bióticos y barniza- c=3.10 cm/s 10

do en exteriores. k Longitud de onda.


De acuerdo con la ecuación de Planck, la energía
2.1.4 Qué solicitudes debe soportar de los fotones de la banda de radiación UV es sensi-
Es preciso conocer las condiciones ambientales blemente más elevada que de la banda de luz visible:
que tendrá que soportar el recubrimiento. La radiación solar media anual varía de forma no-
Los agentes más significativos que pueden oca- table con la localidad:
sionar la degradación son los siguientes: Nota: (1) 1 Ly(Langley)/año = 10 Kcal/m .año = 2

a) Radiación solar 41.85 KJ/ m-.año


capítulo III Revestimientos continuos

El porcentaje de radiación UV respecto al total au- 29 20 27 2C 25 24 23 321


menta con la altura (Almería: 3.42 %, Madrid: 3.52 %)
b) Humedad

RaMoón JL. nm E. 1 0 ' j / l w ó n

UV 290 3 400 6 « a 50
VMMl 400 a 700 SO a 2 8
(vioWa a foio)

La humedad ambiente es un factor determinante


del proceso de corrosión del acero y de la alteración
de la madera.

_>
Radiación Knm í . 1 0 " J/lotón

UV 290 a 400 6.9 a 5 0


ViuMe 4O0a70O 9.0 a 2 9
10' 20" 20* 40' 50" 60° 70' 80" 90* 130*
(vioWU a TOfO)
TEMPERATURAS EN GRADOS CENTISRA0CS

4. Humedad de la madera en equlibno con el ambiente.

El mecanismo de las reacciones químicas de co-


rrosión del acero es, en esquema, el siguiente:
La contaminación ambiental incrementa conside-
2
Ánodo (-) 2 Fe = 2 Fe + 4 e- rablemente la cinética de los procesos de corrosión
Cátodo(+) 0 + 2 H 0 + 4 e = 4 OH
2 2 (Tabla 9 ) y puede generar serios problemas de de-
2
2 Fe + 0 + 2 H 0 = 2 Fe + 4 OH = 2 Fe(OH)
2 2 2 gradación del hormigón, del mortero de cemento y de
2 Fe(OH) + 0 = Fe20 .H 0
2 2 3 2
las piedras.
e) Variaciones térmicas. Heladas.
Para que se produzca la corrosión del acero es, por Las temperaturas elevadas, las variaciones térmi-
tanto, imprescindible la aportación de agua. La ciné- cas estacionales y entre el día y la noche y las hela-
tica del proceso de corrosión es función de la hume- das, pueden originar alteraciones en los recubrimien-
dad relativa. La velocidad no es notoria cuando la hu- tos como cuarteamiento superficial o desconches.
medad relativa ambiente es inferior al 60 % ( Fig. 5) En las horas de insolación la temperatura superfi-
Las alteraciones de la madera están estrechamen- cial de un revestimiento de color oscuro es sensible-
te relacionadas con el contenido en humedad. Las de- mente más elevada que la temperatura ambiente. En
gradaciones bióticas exigen un umbral mínimo de hu- estos casos los gradientes térmicos superficiales en-
medad para desarrollarse. tre el día y la noche son mucho más elevados que los
c) Ambiente marino. gradientes de la temperatura ambiente.
La presencia de electrolitos ( Na-, Cl ) aumenta la f) Pluviometría.
conductividad eléctrica de la capa de óxido de hierro El recubrimiento debe garantizar la estanqueidad
e impide que actúe como pasivante. al agua de lluvia de las fachadas, especialmente en
En consecuencia, la cinética del proceso de co- zonas de elevada pluviometría.
rrosión es sensiblemente más elevada en las zonas Las alteraciones ocasionadas por la lluvia son dis-
próximas al mar. (Tabla 8 ) tintas si se producen en régimen torrencial o son re-
d) Contaminación ambiental. gulares.
La contaminación ambiental está generada por la
emisión de S 0 y N O por la industria, los vehículos
2 x

y las calderas de calefacción urbana, que ocasionan 2.2 Documentación técnica


la lluvia acida. La normativa sobre pinturas y sistemas de recu-
Los niveles de contaminación varían sensiblemen- brimiento para estructuras de acero es muy extensa
2
te entre las zonas rurales (menos de 10 mg S0 /m .d) 2 pero la relativa a pinturas para paramentos de hor-
y algunas zonas urbanas o industriales con índices migón, enfoscados, madera y otros tipos de soportes
muy elevados. es más limitada.
Tema 5 Pinturas y recubrimientos. Pliego de condiciones del sistema de pintado y patología

322 2.3 Contenido del Pliego de condiciones


Comamtrwion en NaCi Velocidad de corrosión
mg/dm" Día iirn/ano
El Pliego de condiciones debe contemplar lo si-
0,8
3.1
50
380
guiente:
11.1 950
1 . Pinturas y recubrimientos a emplear.
Fuente: B.S. 5493-1977
2. Ejecución: Preparación de superficie.
Aplicación.
3. Control de calidad.
4. Mantenimiento.
5. Garantías.
Distancia al mar Velocidad de corrosión
m mgídm'.dia (mdd) 6. Seguridad e higiene.

45 78
400 1

2.3.1 Pinturas y recubrimientos


Fuenle: Fetiú. Curso de coírosíon. 1981
Las pinturas y recubrimientos están constituidos
Tabla 8. Influencia del ambiente marino básicamente por los siguientes componentes:
Acero (Cu 0,03%). Nigeria. - Vehículo fijo (resinas o elementos aglutinantes)
- Pigmentos y cargas.
- Disolventes.
La Materia fija (o contenido en sólidos) es la suma
Contaminación en SO;
mg/dm .día7
vetoodad de conosión
..~:.iC.Z
del contenido en vehículo fijo más los pigmentos y
0.5 sr
cargas.
1.9
3,6
82
110
Las pinturas se suelen clasificar y designar indi-
cando el vehículo fijo, por ejemplo, pintura al cloro-
Fuenle: B.S. 5493- 1977 caucho.
Tabla 9. Influencia de la contaminación en S 0 . 2
Los principales tipos de vehículos fijos empleados
Acero dulce (Cu 0,03%). Gran Bretaña en las pinturas para la construcción son los siguien-
tes:
a) Pinturas en medio acuoso.
Las instrucciones y normas más usuales son las
a . 1 . Pinturas y revestimientos plásticos
siguientes:
Dispersiones acuosas de polímeros o copolímeros.
Instrucciones: Tipos de polímeros:
SSPC (Steel Structures Paint Council)
- Poliacetato de vinilo (vinílicas)
B.S. 5493 Code of practice for protective coatlng
Se plastifican con ftalato de dibutilo.
of iron and steel structures againt corrosión.
- Acrílicas o acrílicas estirenadas.
Normativa:
- De butadieno-estireno.
Las pinturas plásticas son impermeables al agua
de lluvia y permeables al vapor de agua. Se emplean
Norma Nacionalidad
en pinturas para exteriores en fachadas y en pinturas
para interiores lavables.
UNE, Comisión 48 Española a.2 Temples
INTA, Serie 16 Española
ASTM Estados Unidos A base de almidones o derivados celulósicos (me-
AFNOR Francia til o hidroximetil celulosa)
DIN Alemania
ISO Internacional
Se emplean en pinturas para interiores. No son la-
EN Europea vables.
a.3 Al silicato
A base de silicato sódico y potásico.
Se aplican en paramentos enfoscados con morte-
ro de cemento o de cal. El silicato alcalino reacciona
con la cal del soporte.
a.4. A la cal
A base de cal apagada.
capítulo III. Revestimientos continuos

120 Deben plastificarse con parafina clorada (Cereclor) 323


o con una resina larga o media en aceite (clorocau-
tío cho-alcídicas).
El clorocaucho plastificado con parafina clorada
100 tiene una excelente resistencia al agua, ácidos y ba-
ses.
El clorocaucho plastificado con resinas alcidicas
5Q
presenta mejor brochabilidad y retención de brillo.
80- Generalmente se emplean en el recubrimiento de
estructuras de acero.
'70 b.4 Acrílicas.
Las resinas acrílicas son solubles en disolventes
60 aromáticos.
Se emplean en pinturas para exteriores. Presentan
50 una excelente durabilidad y buena retención de brillo.
b.5 Resinas epoxi.
< 40 Se obtienen por condensación del Bisfenol A con
la Eplclorhidrina.
30 Pueden ser líquidas o sólidas según el peso mole-
cular. Las resinas líquidas se emplean en los recubri-
20 mientos sin disolventes.
Polimerizan por reacción con aminas, aductos de
10 aminas, poliamidas y otros compuestos.
Las resinas epoxi se caracterizan por:
Excelente resistencia a los disolventes y a los ál-
0 20 <0 60 80 100 calis.
HUMEDAD RELATIVAC/.)
Excelente adherencia porque las cadenas del po-
5. Influencia de la humedad relativa en la límero contienen grupos hidroxilo y enlaces éter que
corrosión.
les confiere gran polaridad.
Corrosión de hierro en aire con 0,01 % en
so 2
Elevada dureza y flexibilidad
Fuente UHLIG, Corrosión y control de co- Calean en exteriores
rrosión Las resinas epoxi curadas con aminas o aductos
de aminas son más duras y tienen mayor resistencia
a los disolventes y a los ácidos. Las curadas con po-
b) Pinturas en medio no acuoso. liamidas son más flexibles.
b.1. Al aceite b.6 Alquitrán - epoxi.
A base de aceites secantes al aire: linaza, tung, Sistemas de dos componentes a base de una re-
pescado, soja, etc. sina epoxi, catalizador (poliamina o pollamida ) y al-
Deben adicionarse secativos: naftenatos u octa- quitrán de hulla (coal tar pich)
natos de Pb, Co y Mn. Se obtienen recubrimientos de gran espesor (100
b.2. Resinas alcidicas (sintéticas) - 200 mm /capa) muy impermeables al agua y resis-
Resinas gliceroftálicas modificadas con aceites se- tentes a ácidos y álcalis. No pueden estar expuestos
cantes. a la radiación solar.
Las características de una resina alcídíca depen- b.7 Poliuretano.
den del contenido en anhídrido itálico y el tipo y con- Se obtienen por reacción de un ¡socianato (R-NCO)
tenido en aceite secante. Al aumentar el contenido en con un H activo liberado por un pollol, amina, ácido
aceite se incrementa la flexibilidad y el tiempo de se- carboxílico o agua.
cado. Los isocianatos aromáticos amarillean de forma
Se designan indicando el aceite y su contenido. acusada con la radiación solar.
Deben adicionarse secativos: naftenatos u octa- Los polioles utilizados son esteres saturados, po-
natos de Pb, Co y Mn. liéteres o epoxis.
Se emplean en todos los esmaltes usuales. Los principales tipos empleados en la construc-
b.3 Clorocaucho o clorocaucho-alcídicas ción son los siguientes:
Tema 5. Pinturas y recubrimientos Pliego de condiciones del sistema de pintado y patología

324
NOm.no eKtfttkWm Ageme de fetrcuiecton Observaciones

2 •OH Poeesteres saturaOos Máximas prestaxaone*


2 -COOH Prepolimeros acríbeos Pmt pera erterwes
1 H-OH Humedad del aire No pueden
(H. > 5 0 % > píg mentarse

Las características de los barnices y pinturas de


poliuretano dependen del tipo de isocianato y del agen-
te de curado empleado.
En general presentan una excelente adherencia, re-
sistencia a disolventes, ácidos y álcalis, resistencia a
la abrasión (barnices para suelos y recubrimientos de
pavimentos) y a la intemperie. CPV-
La resistencia a los álcalis es inferior a la de los re-
cubrimientos epoxi. AMUCHAMIENTO CORROSION

Se emplea el tipo Isocianato - acrílico en barnices BRILLO PERMEABILIDAD

para parquet y en pinturas de acabado para exterio- 6. Influencia de la concentración de pigmentos en volumen
res. (CPV).
En los recubrimientos de estructuras de acero se
suele aplicar una imprimación anticorrosiva, una ca-
pa intermedia y una pintura de acabado.
Las imprimaciones anticorrosivas se designan in- 2.3.2 Ejecución
dicando el pigmento anticorrosivo y el vehículo, por La ejecución comprende la preparación de super-
ejemplo, imprimación de minio de plomo al aceite. ficie y la aplicación de la pintura o recubrimiento.
Las características de una pintura dependen del
vehículo fijo, de los pigmentos y cargas, de los disol- A) Preparación de superficie
ventes y de la concentración de pigmentos y cargas La preparación de superficie incide sensiblemente
en volumen respecto a la materia fija. (CPV o PVC en en la vida de un recubrimiento pero se subestima en
la literatura anglosajona). demasiadas ocasiones. Muchos de los fallos de los
En la Figura 6 se representa, a título de ejemplo, la sistemas de pintado son imputables a una prepara-
variación de algunas características en función de la ción de superficie inadecuada. En la Tabla 12 se ilus-
CPV para un mismo tipo de pintura. tra la influencia de la preparación de superficie para
Mencionar un tipo de pintura, por ejemplo, minio un mismo sistema.
de plomo o pintura plástica acrílica, no es suficiente El Pliego de Condiciones tiene que definir con pre-
para definir un producto. cisión el procedimiento de preparación de superficie
En la Tabla 10 se indica, a título de ejemplo, la y los criterios de evaluación.
composición de varias imprimaciones de minio de plo- En la Tabla 13 se presenta esquemáticamente los
mo normalizadas con objeto de resaltar las acusadas procedimientos de preparación de superficies de ace-
diferencias entre pinturas de la misma denominación ro y los criterios de evaluación. Deben fijarse las exi-
genérica, según la norma de referencia. gencias en función del tipo de recubrimiento a aplicar
Con la denominación genérica de pinturas plásti- (Tabla 14).
cas hay grandes diferencias, para exteriores imper- En los enfoscados, por ejemplo, tiene que verifi-
meables al agua de lluvia, para interiores lavables y carse que el mortero presenta la cohesión adecuada
no lavables. La norma AFNOR NF P 84-403 clasifica y no hay riesgo de desconches.
las pinturas plásticas para recubrimiento de fachadas
según la resistencia al soporte, en los tipos indicados B) Aplicación.
en la Tabla 11. El Pliego de Condiciones tiene que definir lo si-
El Pliego de condiciones tiene que indicar todas guiente:
las pinturas que deben emplearse, fijando una espe- - Procedimiento de aplicación
cificación concreta o, en su defecto, indicando las ca- - Número de capas.
racterísticas técnicas más representativas. - Espesor de la película seca es de cada capa y el
- Influencia de la concentración de pigmentos en vo- espesor total del sistema de recubrimiento.
lumen (CPV). - Intervalo entre cada capa.
capitulo III Revestimientos continuos

INTA 16 Imprimación Pigmento. % Venicuto l*u


- Condiciones ambientales durante la aplicación y
U a M Alcid Otros
Pt*0. Fe*h
secado.
41.03 Umw pwmo 99.6 100
a) Procedimiento de aplicación.
50
41.04 A Mimo otomoóitío rtiwro 65 15 50
El procedimiento de aplicación depende de las ca-
4105 Fenókci i w » plomo 66 Fen
racterísticas de la pintura y del soporte.
(1)
Así, por ejemplo, una pintura de consistencia (vis-
4202 Sintética mimo plomo 996 100
cosidad ) elevada (empleada en capas intermedias de
42.19 Alad mimo pKvno-niiOo Oierro 43 23 100 alto espesor) no puede aplicarse con pistola aerográ-
fíca y debe utilizarse un equipo sin aire (airless).
42 20 Sfflt m e i » plomo-óijdo íneno am n*a 16-22 100
Será aconsejable pintar a brocha una estructura de
47 05 Mmo piorno ctorocaucno 6»-72 19-23 CR acero de perfilería complicada porque a pistola sería
ra dificultoso y se tendrían considerables pérdidas de
pintura.
En la Tabla 15 se enumeran algunos procedimien-
Notas: [ i j R n i n i renóeca modificada con aceite de lung
tos de aplicación usuales y se indican los tipos de pin-
(2) Clorocaucho
tura adecuados.
Tabla 10. Imprimaciones anticorrosivas de minio de plomo. Cuando intervienen varios tipos de pintura en un
mismo sistema de pintado puede ser necesario fijar
distintos procedimientos.
b) Número de capas.
El número de capas de pintura determina el espe-
sor total del sistema.
Tipo Fisuras del soporte, mm Resist a lafisuraciónpintura (1) c) Espesor de la película seca.
Presentes Previsibles V medio (2) V. min. (3)
El espesor de la película seca que se puede con-
1.1 Microlisurado 0,3 0.2
seguir con una capa depende de las características
1.2 0.5 0.7 0.5 de la pintura y del procedimiento de aplicación.
1.3 1.0 1.0 1.3 1.0
1.4 2.0 2.0 2.5 z.o Cada pintura exige que el espesor de la película
seca esté dentro de un umbral determinado.
La relación entre el espesor de la película seca, el
espesor de la película húmeda, la materia fija en vo-
Notas: (1) Ensayos en condiciones iniciales y después de envejecimiento, a *23'C y
- lOX. lumen de la pintura y el consumo teórico, es la si-
(2) Valor medio de 3 proceras. guiente:
(3) Valor mínimo de 1 procela
eS = eH. MFV

Tabla 1 1 . Pinturas plásticas:


eH - CV . 1000
Clasificación según la resistencia a fisuración del soporte.

donde:
eS Espesor película seca (um)
eH Espesor película húmeda (um)
MFV Materia fija en volumen, referida a la unidad.
?

Preparación de superficie Durabilidad del recubrimiento, anos


CV Consumo de pintura ( l / m )
Sistema 1 Sistema 2 d) Intervalo entre capas.
El intervalo entre capas depende del tipo de vehí-
E*posoon a la intemperie y limpieza con 2.3 1.2
capto mecánico culo y de las condiciones ambientales.
Decapado químico 96 a.6 Las pinturas epoxi y los barnices de urea-formol pa-
Cnorreado con arena. 10 3 9 3 ra suelos de madera, por ejemplo, presentan serios
problemas de adherencia entre capas si no se respe-
tan los intervalos fijados en la documentación técnica.
Sistema 1 Oos capas de pintura da minio de piorno y dos capas du
pintura de omdo de rwarro roro e) Condiciones ambientales.
Sisteme 2 OJS -*u*s Je p^tuia o - Je n^ri-'j ; ^
Deben fijarse las condiciones ambientales (tempe-
ratura y humedad relativa) durante la aplicación y el
Fuenle BS CP 2006-! 966 período de secado según el tipo de pintura emplea-
Tabla 12. Influencia de preparación 0o superficie soporte: acero. da. (Tabla 16).
Tema 5. Pinturas y recubrimientos. Pliego de condiciones del sistema de pintado y patología

La temperatura superficial debe ser al menos 3°C


superior al punto de rocío porque la posible capa de
agua de condensación podría ocasionar problemas • ZepHttoo manual o mecánico
de adherencia en algunos tipos de pintura. - Chorreado con agua a alia presión.
Chorreado con mafenel abrasivo y agua a presión
No debe pintarse a pistola en días ventosos por- • Chorreado con matenal abrasivo húmedo
- Chorreado con material abrasivo seco
que pueden surgir defectos superficiales y las pérdi-
das de pintura serían considerables.
Arena sMícea
En tiempo caluroso no deben pintarse paños con- Granalla de acero angular (grit)
•sfenca (shot)
tinuos de fachada bajo la acción directa del sol por- escorias de Rio Tinto (escorias de piritas)
que pueden manifestarse los empalmes. Debe definirse en tipo de matenal abrasivo y la granuiometna

Se indican, a título orientatívo, algunos ejemplos 3 Evaluación

de sistemas de pintado para estructuras de acero en Restos de óudo o catanwa


Patrones ISO 6501-1
las Tablas 17 y 18. Gradas SI 2 St 3. Sa 2. Sa 2 M . Sa 3

Rugosidad superficial R, (distancia media entie crestas y valles)

2.3.3 Control de calidad


Tienen que indicarse las características técnicas a Notas (1) U rugosálad superftaal o t ^ ^ del material
verificar, definiendo los métodos de ensayo y los cri- abrasivo

terios de aceptación o rechazo. El control de calidad


carece de rigor si no se fijan previamente los pará-
metros indicados. Tabla 13. Preparación de superficie. Acero.
Comprende el ensayo de las pinturas a emplear, el
seguimiento de la ejecución y la inspección de re- Pintura Preparación de superficie
cepción de la unidad de obra. Grados ISO 8501-1

a) Ensayo de las pinturas. SI2


Al acerté
- Ensayos de homologación. S12-SI3
McMea
Consisten en verificar que las pinturas o recubri- SI3-SJ2
Clorocaucho
mientos propuestos cumplen las exigencias del Pliego 3a2
Fenólica
de Condiciones. utoMaa Sa 2 Vi
Se efectúan antes de iniciar la ejecución. Alquitrán e p o » Sa2'¿
Puede suplirse con un certificado de homologa- Zinc Meato Sa2-Sa2H

ción de las pinturas. Epoxi Sa2Vi-Sa3


- Ensayos de identificación.
Consisten en verificar que las pinturas aplicadas
en obra son análogas a las que se homologaron en su St Cepillado mecírwco con púas de acara.
día. Sa Chorreado
Deben tomarse las muestras en los acopios de
Tabla 14. Preparación de superficies de acero según la pintura a
obra. aplicar.
La toma de muestras es una operación delicada y
si no se efectúa correctamente pueden falsearse los
resultados obtenidos en el laboratorio
Pmceo*nieoto Tipo de pintura Evaluación

2.3.4 Mantenimiento Qíocn» Imprim. Anticorrosiva a base Penetra bien en la capa de


El Pliego de Condiciones debe indicar el manteni- de aceite Óxido

miento que es preciso efectuar para la conservación Rodillo Pinturas plásticas No deja el cordón de la
•rocha
del recubrimiento y poder acogerse, si fuera preciso, Clorocaucho Tiende a formar defectos
superf»aa><s
a la cláusula de garantía exigida. Purvenzaoón aerográfica Esmaltes, lacas Acabado ««célenlo
(pistola convencional)

'•'.tv-i.íaoioi. con ¿untador


2.3.5 Garantías Zinc silicato El agitador del catderín impide
que sedimente el polvo de
onc
Debe definirse objetivamente en que estado se
Putverueción $tfi arfe
admite el recubrimiento al finalizar el período de ga- (eMMj
Pmturas de ala vtscosejad Se uMiza en recuoormentos
de capa gruesa. Deoe fijarse
el o boquilla y la presión del
rantía. caWen'n
En los recubrimientos aplicados en estructuras de
acero se suele tolerar una corrosión inferior o igual al Tabla 15. Procedimientos de aplicación.
capitulo III. Revestimientos continuos

patrón Re-3 de la norma SIS 18.51.11 ( Escala euro-


Tipo de pintura
Tajea), ag M» % pea de grados de corrosión).
Se puede cuantificar la variación de color o de bri-
Al acerle. 5 35 < 00
llo que se admite.
Alcidicas. S 35 < 90

CtafOCíWcfto. 5 " < 90


2.3.6 Seguridad e higiene
Epoal. a « (1) < 15
Debe exigirse el cumplimiento de la normativa vi-
Poauretano (2 componentes) e 35 < 30
gente de Seguridad e Higiene durante la ejecución del
PcHiuretano curado por humedad (1 Comp.) i 35 50-95
pintado.
Alquitrán apon. 10 35 < B5
Los trabajos de pintura en obra presentan un ín-
Imprlm. Zn silicato 3 15 > 50
dice de accidentes y de enfermedades profesionales
, Pusucas ( a basa da dispersiones) e 35 Q) < 75
elevado.

Notas:
(1) Algunas formulaciones especiales con catalizadores más reactivos ad-
miten temperaturas de aplicación inferiores.
(2) L a temperatura mínima de aplicación depende del punto de conden-
3. Patología
sación de la dispersión. Suelen agregarse disolventes especiales para dis-
minuir el punto de coalescencia. En los capítulos anteriores se han mencionado una
serie de causas que pueden originar anomalías en los
Tabla 16. Condiciones ambientales en la aplicación. recubrimientos.
Las anomalías suelen ser debidas a los siguientes
factores:
Cap. Pintura EspecnTcadón Met. aplicación e^iuti Intervalo, h
Sistema de recubrimiento inadecuado para el tipo
de soporte o las solicitudes que tiene que soportar.
1 Imprlm. ZrvJSOIcaM MTA tt.ua PBtoU Equipo 70-60 Pinturas no idóneas o con alguna anomalía.
deetJo. coneg-taoon
Preparación de superficie inadecuada para el tipo
2 Pint clorocaucho « T A 16.47.02 A Pistola sai aira 80-90 24-46 de pintura a aplicar.
capaaruesa.
Aplicación incorrecta o realizada en condiciones
3 Pirrt. elcldlca- IMTA 16.47.03 Pistola sin aire 30-15 48-72 ambientales desfavorables.
dorocaucho
Debería desarrollarse la casuística de la patología
Total 190 - 205 para cada tipo de soporte y de recubrimiento. Se in-
tenta un resumen en las Tablas 19 y 20.
1. Preparación de superficie. La corrosión de las estructuras de acero suele ser
Chorreado con arena silícea hasta el grado S e 2 1/2 (ISO 8501-1) con un debida a sistemas de pintado Inadecuados.
perfil de reugorisad R = 35 um. de acuerdo con la norma INTA
c
Los desconches de las pinturas aplicadas en en-
16.07.05.
2. Pintado
foscados de mortero de cemento pueden ser debidas
3. Condiciones ambientales a una deficiente cohesión del soporte.
Temperatura ambiente: interior a 35 °C
Los desconches de las pinturas plásticas aplica-
Humedad relativa ambiente: 50 a 9 0 %
das en tendidos de yeso generalmente son atribuibles
Tabla 17. Sistema de pintado Zn silicato-clorocaucho. a un guarnecido con yeso muerto
Tema 5. Pinturas y recubrimientos. Pliego de condiciones aei sistema de pintado ypatología

^2$ ' p t e p a í a c
'ó n 3 8
superficie. Anomalía
Chorreado con granalla de acaro redondeada ;sh«) hasta «** grado Sa 2 V, (ISO 3505-
1) con un perfil de rugos-dad Fíe • 25 - 35 .un. de acuerdo con la riorma INTA 16.07 ü6
- Pérdida de bono La pintura no es adecuada. Las alcídidas
retienen fren el brillo.

2 Pintado. • Cambio de coto* Los pigmentos no son estantes a la radiación


UV o a la Hicaiintriad del sooorte como et
amarillo cromo.

- Amarilleamíento. La resina no es adecuada Amarillean las


Capa Pintura Especificaaoti e, i*m Intervalo h alcidicas modificadas con aceite de linaza y
los poNureranos aromáticos.

1 Imprim. epoxi rica en zinc. INTA 16.44.14 40-45 - • Calen La pintura tiene una CPV elevada o la resma
no es adecuada. Las epoxi calean en
exteriores.
2 Pint. epoxi alto espesor UNE 20 175-85 80-100 24
Anexo H - Cuaneamiento superficial La pintura no es ftexiDte.
La CPV es elevada o se degrada la resina

3 Pint. de acabado ootiiiretano UNE 20.175-85 30 -35 24 - Ampollas.


alif ático. Anexo III Aplicación en acero. La pintura es permeable al vapor de agua o
llene un espesor insuficiente
Aplicación en morteros. La pintura es impermeable al vapor de agua e
4 Pint. de acaOado poliuretano UNE 20.175-85 30-35 24 impide la eliminación de la humedad del
aüfailco. Anexo III soporte.

-Corrosión.
Total 180-215 Aplicación en acero El sistema de pintado es inadecuado.
La pintura no contiene pigmentos
anticorrosivos, es permeable al vapor de agua
o el espesor es insuficiente.

- Mala adherencia al soporte. La preparación de superficie no es idónea


1 CC'-CiC.CT.eS -ITICiii^jl-?:. para el sistema de pintado
La ¡mprimaOón aplicada no es adecuada.
Temperatura ampíenle: 8 - 3 5 ^ 0 Se ha aplicado la pintura en un soporte con
una temperatura superficial Inferior al punto de
Humedad relativa ambiente; menor del 80 % rocío

- Mala adherencia entre capas. No se han respetado los intervalos enire


Tabla 18. Sistema de platado epoxi-poliuretano. capas presemos

Tabla 20. Patología de las pinturas.


2. Anomalías perceptibles después de un período de tiempo.

Anomalía Causas

• Descuelgue La viscosidad de la pintura no es adecuada,


debe tener un comportamiento tixotrópico.
Se aplica con un consumo excesivo

'• Mal secado o endurecimiento. Formulación incorrecta de la pintura.


En sistemas de dos componentes, relación de
mezcla errónea.
Condiciones ambientales no adecuadas.

- Piel de naranja. La viscosidad de la ptnlura no es adecuada


para del procedimiento de aplicación
Disolventes inadecuados.

- Formación de cráteres Fonnulaoón incorrecta. generalmenle


disolventes inadecuados

- Mala cubrición. Pigmentos con insuficiente poder de


cubrición o un conienido en materia fija ba(o

- Cuarteamiemo superficial. El contenido en cargas es excesivo o se


aplica en capas demasiado gruesas

Tabla 19. Patología de las pinturas.


1. Anomalías perceptibles en la aplicación o secado.
mmwmmmwmwm
capitulo IV. Patología de cubiertas

331

1. Comportamiento y diagnóstico de la cubierta

Pedro Galindo García


Dr. Arquitecto
Profesor Titular E.T.S.A. - U.P.M.

1. Introducción Entre otros datos el estudio concretó que:


-El 68% de los siniestros que se chequearon co-
La técnica de reparación de elementos construc- rrespondieron a edificios de viviendas.
tivos, exige al profesional al que se le encomienda es- -El 50% del importe total de las reparaciones que •

te tipo de trabajos, además de los conocimientos de se llevaron a cabo en edificios de viviendas, se apli-
carácter técnico que requiere su actuación profesio- caron en actuaciones de corrección de problemas de
nal competente en este campo de trabajo, una capa- estanqueidad.
cidad de análisis del proceso que ha llevado al suso- Esta fuente aporta otros datos de verdadero inte-
dicho elemento constructivo al estado de deterioro en rés para el conocimiento del comportamiento de las
que se encuentra y que se debe corregir. cubiertas que quedan expresados en los gráficos que
Ante esta situación es oportuno, antes de abordar a continuación vamos a analizar.
las propuestas de reparación de daños concretos que
vamos a encontrar en las diversas cubiertas, analizar
M -j- % EN IMPORTE
las respuestas de las mismas a través de:
69%
-Componentes constructivos que las constituyen. >.l

-Acciones que actúan sobre las cubiertas. 40 -


DETALLES
-Comportamiento de los componentes ante dichas 18% MAL
20 -
acciones. CONCEPCION CONCEBIDOS

De tal manera que, mediante el conocimiento del i' — GENERAL


DEJADOS
funcionamiento de los componentes de forma aisla- -"O - 14%
A LOS
da y como conjunto, con sus correspondientes inte- « OFICIOS

racciones, ante los diversos agentes que los afectan


60 •
podamos establecer una metodología de comporta-
miento que nos permita llegar al origen de la causa 80
78%

productora del daño antes de entrar en la reparación 100 • % EN NUMERO

concreta del mismo.


Hace años SECOTEC realizó un estudio de daños Gráfico 1. Causas de siniestro a través del proceso constructivo.
en edificios con un tamaño de muestra de 10.000 ca-
sos de siniestros con objeto de determinar las causas
de los daños. Entre otras conclusiones se obtuvo la
incidencia porcentual de las causas o agentes cau El gráfico n°1 establece las causas de los sinies-
santes de daños en cubiertas y la Incidencia, también tros a través del proceso constructivo. Es muy signi-
porcentual, del diseño y proceso constructivo como ficativo, y entre otras interpretaciones podemos pro-
causas de daños en las mismas. poner la siguiente lectura:
Tema 1. Comportamiento y diagnostico de la cuoierta

332 - la calidad del proyecto en lo que respecta a la fal-


ta o mala definición de las propuestas constructivas, -las solicitaciones inciden de una manera concreta
unida a una dejación de funciones durante la ejecu- sobre cada componente.
ción de la obra, fueron causa del 92% de los daños -el comportamiento de distintos componentes ante
detectados. Podemos deducir que, a los arquitectos, la misma solicitación da lugar a daños distintos,
como proyectistas y únicos directores de la obra de -podremos establecer relaciones efecto-causa.
edificación, nos cabe alguna responsabilidad en la
producción de daños.
Esta forma de enfocar el problema nos llevará a
En el desarrollo de estas notas se apreciará la im-
comprobar que:
portancia de los problemas derivados del comporta-
miento indebido de la cubierta causados por razones
Este estudio por componentes permite desarrollar
de diseño y ejecución.
unos esquemas que relacionan componente-solicita-
ción-comportamiento-daños-que nos serán muy vá-
lidos en el análisis de cada cubierta.
4 % EN IMPORTE 45%

-
2. L o s componentes
2»5%
16.5% A modo de recordatorio, lo que hasta el momento
11,5% VARIACION
e.3% LLUVIA se ha denominado componentes de las cubiertas son
CARGAS TERMICA
NIEVE CORRO- aquellos elementos constructivos que son comunes
CAUSAS Y

a todas ellas y cada uno tiene siempre la misma fun-


VARIAS SOBRE- SION E
CARGAS
V ción. Estos componentes podemos agruparlos en fun-
7% VIENTO «%
HIORO damentales; imprescindibles para la formación de la
1 3 %

TERMICA
cubierta, y los complementarios, que se añaden a los
2 3 % primeros para una correcta formación de aquellas.
Los componentes fundamentales son:
la base estructural
% EN NUMERO

49%
el soporte de la cobertura.
la cobertura.
Gráfico 2. Clasificación de las causas de los daños.
y los complementarios:
el sistema higrotérmico
Las conclusiones que se extraen del análisis del el sistema de evacuación.
gráfico n.°2, que establece las causas de los daños
desde la acción de los agentes externos, son inme-
Además de realizar las mismas funciones en todas
diatas:
las cubiertas, están sometidos a las mismas solicita-
ciones y su respuesta ante ellas es muy similar, esta-
bleciendo las diferencias en base a las características
-El 49% de los daños proceden de variaciones tér- de los distintos materiales con los que están realiza-
micas e higrotérmicas dos. De esta forma podremos establecer una siste-
Dilataciones, retracciones, juntas, etc. mática para el conocimiento de su comportamiento y
-El 23% proceden de penetraciones de lluvia y vien- por supuesto los daños que los afectan.
to. Estanqueidad.
-El 13% de los daños provienen de acciones mecá-
nicas. Cargas, viento. 2.1 La base estructural

Su función fundamental es la de dar sostén al


conjunto de la cubierta. Sus soluciones son muy va-
Con objeto de hacer más fluido el análisis del com-
riadas. Así, atendiendo a su tipología nos encontra-
portamiento de las cubiertas ante las diversas solici-
mos con vigas, cuchillos, forjados, mallas, bóvedas
taciones a las que están sometidas, el estudio que a
cerámicas, etc.. en razón a los materiales usados
continuación se desarrolla se va a llevar a cabo sobre
con soluciones en madera, cerámica, hormigón, ace-
cada uno de los componentes más característicos de
ro, etc.. por su ordenación espacial en lineales, en
las mismas.
capítulo IV. Patología óe cubiertas

superficiales y en espaciales, (vigas, forjados, ma- No olvidemos que este componente también está
llas). afectado por otras solicitaciones como pueden ser las
Las solicitaciones que más inciden sobre las cu- de tipo traumático producidas por paso de personas,
biertas y para las que éstas deben estar previstas son: anidamientos, incorporación de antenas, etc.

2.4 El sistema higrotérmico


- de tipo mecánico: acciones gravitatorias, viento,
acciones térmicas, variaciones de temperatura. Este componente queda incorporado definitivamente
- las propias de cada material. al conjunto constructivo de las cubiertas, cuando apa-
recen las soluciones de cubiertas no ventiladas.
Su función principal es la de conseguir que los lo-
2.2 El soporte de la cobertura cales situados inmediatamente bajo la cubierta sean
confortables, y al mismo tiempo lograr un correcto
La función principal de este componente es la de comportamiento del resto de los componentes.
servir de apoyo a los materiales de cobertura. En al- Sus solicitaciones son generalmente de carácter
gunos casos- cubiertas no ventiladas- se comple- transmitido desde el exterior, sean éstas debidas a
menta esta labor con la de producir el plano inclina- penetraciones o traumatismos.
do que facilite el desagüe del faldón.
Sus soluciones son innumerables, dependiendo 2.5 El sistema de evacuación
fundamentalmente de los materiales y técnicas cons-
tructivas propias de cada lugar- ripia, tableros cerá- Consiste su trabajo en conducir de forma ordena-
micos, prefabricados, hormigones ligeros, etc. y del da y capaz las aguas pluviales hasta la red de sanea-
tipo de cubierta. miento.
Su implantación como componente de la cubierta
Este componente es el más afectado, pues ade-
es lejano, aunque su implicación en los daños que
más de soportar las solicitaciones que inciden direc-
afectan a las cubiertas puede considerarse de mayor
tamente sobre él, fundamentalmente debidas a cam-
riesgo y cuantía, desde el momento en que para so-
bios de temperatura, los componentes más próximos
lucionar la evacuación de las aguas pluviales se adop-
van a incidir sobre el soporte transmitiéndole sus pro-
ta una posición interior- embudo- de los elementos de
pios problemas. Asi, va a estar afectado por defor-
recogida-cazoletas.
maciones provenientes de la base estructural y por
penetraciones de agua desde la cobertura, por citar
dos ejemplos. Podríamos decir, que debe ser lo sufi-
cientemente dúctil para servir de puente entre la rigi- 3. Comportamiento de los componentes
dez estructural y la sensibilidad (membranas) de los
materiales de cobertura.
Una vez establecidas las partes de las cubiertas
que tienen una misma función y por lo tanto, que van
2.3 La cobertura a estar sujetas a unos requerimientos similares, va-
mos a analizar las respuestas de estos componentes
La función fundamental, dejando al margen las de a las solicitaciones a los que habitualmente están so-
aspecto, es impedir las penetraciones debidas a la ac- metidos, por ende los posibles daños a que darían lu-
ción de los diversos agentes metereológicos. gar, y fundamentalmente sus diversas expresiones.
Sus soluciones son muy diversas dado la variedad
y evolución de los materiales empleados: desde los
más elementales, como pueden ser los productos ve- a) La expresión de un daño en un componente de-
getales, pasando por los pétreos, cerámicos, metáli- terminado nos permitirá, mediante el recorrido inver-
cos, etc. hasta los actuales derivados de hidrocarbu- so, inducir desde la expresión del daño - efecto- el
ros. Para simplificar sti estudio posterior establezco fenómeno que lo produce- causa- y mediante este
dos tipos: recurso poder proponer una acción de reparación co-
rrecta.
b) Así mismo, mediante la constatación de que cier-
tos daños proceden de determinadas cau-
- cobertura discontinua-tejas, fibrocementos, piza- sas, que habremos constatado con esta experien-
rras, etc. cia, nos permitirá proyectar con ta garantía de un me-
- cobertura continua- membranas soldadas. jor comportamiento.
Tema .'. Comportamiento ydiagnóstico de la cubierta

Este proceso de tipo deductivo, nos va a permitir te-


ner un apoyo técnico importante bajo dos aspectos:
Dadas las múltiples variantes que se plantean, tan-
to en lo que concierne a los componentes, como a las
diversas solicitaciones, se presentan unos cuadros re-
sumen, que se irán analizando en cada caso.
En dichos cuadros se hace referencia, en la ma-
yoría de los casos, sólo a solicitaciones que les afec-
tan de manera directa, obviando aquellas que les lle-
gan transmitidas desde otros componentes. También
quiero dejar constancia, que no se llega a una cuan-
tificación de los daños, sino, en general, sólo a la re-
lación solicitación-daño. Como ejemplo, podemos
decir, que las variaciones de temperatura siempre 1. Base estructural: Cuchillo con tirante peraltado, pares rigidiza-
dos con tornapuntas.
van a producir efectos de alargamientos-acorta- Daño: Rotura del par por punzonamiento.
mientos en los tableros, pero su cuantía será distin- Comportamiento: Falta de sección resitente.
ta en uno de madera, en otro cerámico, o en aquel Solicitación: Aumento de cargas-sobrecargas.
Produce daños en soporte y cobertura debido a las deformacio-
otro de chapa, y por lo tanto, los problemas que nes del par.
creen en los bordes o en las juntas de dilatación, se-
rán más o menos apreciables.
3.2 Comportamiento del soporte de la cobertura
3.1 Comportamiento de la base estructural
Como ya se indicaba, este componente se resuel-
Las solicitaciones de carácter intrínseco que afec- ve bajo innumerables soluciones que vamos a con-
tan a este componente, como quedó dicho, son de ti- cretar en dos tipos, con propuestas constructivas di-
po mecánico, térmico o reológico, que siempre van a ferentes y que además van a dar respuestas también
tener una respuesta expresada bajo la forma de de- diferentes.
formaciones, que a su vez se refleja en daños de tipo Los soportes de la cobertura recogidos en el Cuadro
traumático.(Véase Cuadro n°1) n° 2A son aquellos que se solucionan mediante el
apoyo del soporte sobre la base estructural (o ele-
En la mayoría de las ocasiones, estos daños no su-
mentos auxiliares, correas, parecillos, etc.) o sobre re-
ponen la ruina de la cubierta, aunque siempre, ante
crecidos de la base estructural- tabicas de tal mane-
situaciones de este tipo, deben tomarse las precau-
ra que existe una cierta independencia entre soporte
ciones mínimas que podrían establecerse en estabi- y base estructural.
lización mediante medios auxiliares previos al proce-
Los daños más apreciables que se advierten en es-
so de análisis, peritaje, solución de reparación.
te tipo de soportes, suelen ser.
Sin embargo, los daños parciales, sobre todo los -Rotura del tablero, que arrastra y rompe, al mate-
empujes y deformaciones, pueden arrastrar al sopor- rial de cobertura en las cubiertas transitables.
te y perjudicar a la cobertura en una acción en cade- -Empujes laterales, que afecta a las tabicas peri-
na, o bien el deslizamiento de un apoyo puede rom- metrales del cierre de la cámara ventilada.
per aleros o petos.(fotografía n° 1) Las propuestas de actuación, desde un punto de
Las propuestas de actuación, sean estas en casos vista general son:
de reparación o de nuevo diseño deben prever con
carácter general los siguientes aspectos:
-Evaluación perfecta de cargas, sobrecargas y to- -Independencia o liberalización de bordes.
das las acciones a las que van a estar sometidas. -Cálculo específico del tamaño de los cuarteles.
-Juntas. Número y tamaño.
-Limitación estricta de deformaciones.
-Rozamiento mínimo del apoyo del soporte sobre tabicas.
-Control y valoración exacta de los desplazamien-
tos en apoyos.
- Cálculo específico ante variaciones térmicas.
El Cuadro n° 2 B recoge los soportes de la cober-
- Diseño de la posición y tamaño de las juntas de
tura realizados medíante rellenos de hormigones lige-
cubierta.
capitulo IV. Patología de cubiertas

ELEMENTO SOLICITACIONES COMPORTAMIENTO DEFECTOS POSIBLES


335

FORJADOS DEFORMACIONES FLECHAS

CERCHAS FISURAS / GRIETAS

PREFABRICADOS EROSIÓN DE ENLACES

ETC.

TERMICAS ROTURA DE ENLACES


? DESPLAZAMIENTOS
EMPUJES SI BORDES

REOLÓGICAS ^CAMBIOS DE DIMENSIÓN ROTURA DE PLANO / GRIETAS


Fluencia
Retracción

CUADRO 1.1

ELEMENTO SOLICITACIONES COMPORTAMIENTO DEFECTOS POSIBLES

TABLEROS MECÁNICAS — ^DEFORMACIONES FLECHA FISURAS GRIETAS

-LLENOS- Sobrecargas MOVIMIENTO MAT COBERTURA

TERMICAS EMPUJES EN BORDE


CAMBIOS DE DIMENSION
Ac. Directa ROTURA DEL PLANO GRIETAS
Ac. Transmitida ARRASTRE (Cobertura)

HUMEDADES I ALTERACIÓN DE EROSIONES FISICAS y QUIMICAS


Penetración PERDIDA CAP AISLANTE
CARACTERÍSTICAS
CUADRO 1.2A.

ELEMENTO SOLICITACIONES COMPORTAMIENTO DEFECTOS POSIBLES

TABLEROS MECANICAS DEFORMACIONES FLECHAS


SOBRE Cargas FISURAS I GRIETAS
TABICAS Sobrecargas

TERMICAS - T DESPLAZAMIENTOS ROTURA DE ENLACES


Ac Dilecta EMPUJES sobre PETOS o ALEROS
Ac Trsnszrmidi
DE APOYOS

ROTURA DF PLANOS. GRIETAS


• CAMBIOS DE DIMENSIÓN
EMPUJE EN BORDE M A C E S
DESPRENDIMIENTOS (Cobertural

CUADRO 1.2B.
Tema i. Comportamiento y^agnóstico de ¡a cubierta

2. Soporte de la cobertura: Tablero cerámico sobre tabicas. 3. Cobertura: Productos bituminosos de aplicación m situ.
Daño: Rotura del tablero y de la cobertura por arrastre. Daño: Desaparición de paños de material impermeable.
Comportamiento: Incorrecto tamaño de los cuarteles. Juntas no Comportamiento: Envejecimiento del material. Pérdida de adhe-
adecuadas. rencia.
Solicitación: Vanaciones de temperatura, acciones transmitidas Solicitación: Acciones de meteoros (Heladas, nieve), acciones
por el pavimento. transmitidas por penetración de agua.

ros que, además de servir de apoyo a la cobertura, da El Cuadro n° 3A hace referencia a las coberturas
lugar a las pendientes para la evacuación de las aguas de tipo discontinuo, a base de piezas de pequeño ta-
pluviales. En este caso el contacto entre este com- maño y que logran la estanqueidad mediante la ade-
ponente y la base estructural es total. cuada relación de dos parámetros: longitud de sola-
Como en el caso anterior, las solicitaciones que pe e inclinación del faldón.
más les afectan son de tipo térmico, y por lo tanto su Los materiales que se utilizan suelen tener un buen
respuesta se va a expresar en aumentos o disminu- comportamiento ante las solicitaciones de carácter
ciones de su superficie, que no sólo les produce da- climático, tejas cerámicas, pizarra, piedras, incluso las
ños directos, como fisuras y roturas de los paños, si- metálicas, zinc, chapas galvanizadas o prelacadas.
no que los materiales de cobertura, que en este caso Los problemas que se producen con mayor asiduidad
están íntimamente unidos a ellos sufren los mismos proceden de solicitaciones que alteran el estado de
problemas transmitidos. equilibrio antes citado, solape-inclinación-, como pue-
Tanto en lo que concierne a actuaciones de repa- den ser el viento, los anidamientos de aves, e incluso
ración, como de obra nueva, se tendrán en cuenta el paso de personas.
prácticamente las mismas condiciones que para los En las propuestas de actuación se tendrá en cuen-
tableros sobre tabicas: ta de manera especial todas las acciones encamina-
das a mantener su posicionamiento, tales como:

-Independencia total de los bordes. -Sistema de sujeción concordante con la pendiente.


-Tamaño de los cuarteles según el tipo de relleno. -Longitud del solape de acuerdo con la pendiente.
-Juntas de cubierta. Número y tamaño. -Sustitución de elementos rotos. Plan de manteni-
-Acabado superficial del plano del soporte. miento.
-Remates en s u s encuentros con paramentos verti-
cales.

3.3 Comportamiento de la cobertura


La variante de cobertura continua se analiza
Como en el caso del soporte, este componente se
en el Cuadro n° 3 B. Esta solución impide la penetra-
divide en dos grupos que se establecen de acuerdo
ción del agua mediante soldadura continua de unas
con las dos formas más caracterizadas con la que ca-
da uno de ellos resuelve la condición de estanquei- piezas con otras, con las discontinuidades propias
dad. de las juntas.
capitulo IV. Patología de cubiertas

IT.FMETO SOLICrTACIONES C O M P O R T A M I E N T O DEFECTOS POSIBLES

337
COBERTURA TRAUMATICAS PERDIDA DE SOLAPE
D E S E Q U I L I B R I O DE
DISCONTINUA Agentes ctteoc-fes EROSIONES MECÁNICAS
SU ESTADO DESPRENDIMIENTOS

VIENTO

CICLO HTELO-AGUA ALTERACIÓN DE EROSIONES HSICAS

ORGANISMOS
CARACTERÍSTICAS

INTRINSECAS "ALTERACIÓN DE ASPECTO / PERMEABILIDAD

HELACIDAD
CARACTERÍSTICAS
C O R R O S I Ó N (Metálic!)

CUADRO 1.3A

ELEMENTO SOLICITACIONES COMPORTAMIENTO DEFECTOS POSIBLES

COBERTURA MECÁNICAS i DE FORMACIONES DESP1A2AM1ENT0S


CONTINUA FLECHAS (Mctilici)

TRAUMÁTICAS , f- DESEQUILIBRIO DE EROSIONES MECANICAS


Agentes exlerioie* PERDIDA MATERIAL
SU E S T A D O

SOI ¿ A M I E N T O

CICLO HTELO-AGUA -^ALTERACIÓN DE EROSIONES FISICAS Y QUIMICAS


ENVEJECTMTENTO (Linonis)
CARACTERÍSTICAS
DESPRENDIMIENTOS

INTRINSECAS "ALTERACIÓN DE ASPECTO


ENVEJECIMIENTO
CARACTERÍSTICAS

CUADRO 1 3B

Este tipo de cobertura se ha empezado a utilizar son daños, como ya se denunciaba en el gráfico n° 1,
de forma masiva en España no hace más de treinta procedentes del proyecto a través de propuestas no
años, y por lo tanto los productos utilizados siguen congruentes con la concepción general de la cubier-
siendo considerados materiales no convencionales. ta, o de una ejecución no correcta.
Tanto ellos mismos, como sus sistemas de aplicación Los problemas son tan variados y específicos, que
están en proceso de mejora, habiendo quedado am- se desarrollarán en el capítulo correspondiente a Daños
parados por la NBE-QB-90, y últimamente por la UNE
y reparación de cubiertas calientes.
104402. que da un paso más en las exigencias tanto
a materiales como a los sistemas.
Es de señalar que las membranas, tanto de origen 3.4 Comportamiento del sistema higrotérmico
asfáltico como las de P.V.C., son extremadamente sen-
sibles a todas las solicitaciones (sean estas climato- La aplicación de este componente, queda prácti-
lógicas, de uso, térmicas,etc.). Pero quizá la mayor in- camente limitada a las cubiertas no ventiladas. Está
cidencia de daños sobre cubiertas solucionadas con constituido por materiales con características aislan-
estas coberturas procedan de su aplicación, es decir, tes, y en casos, por otros que les dan protección an-
Tema I. Comportamiento y diagnóstico de la cubierta

338

E L E M E N T O SOLICITACIONES C O M P O R T A M I E N T O D E F E C T O S POSIBLES

AISLAMIENTO MECÁNICAS ^DEFORMACIONES MOVIMIENTO - PUENTES T.

TÉRMICO Acciones por cargas ROTURA DE PANELES

Ac. Transmitidas TRAUMATISMOS

Ac. Traumática

ACCION BIOI.OGIi

ALTERACIÓN DE PERDIDA CAPAC AISLANTE


EROSIÓN QUÍMICA
CARACTERÍSTICAS

HUMEDADES
Penetra cion

CICLO AGUA-HIELO-a.DISGREGACÓN ROTURA


EROSIÓN FÍSICA

CUADRO 1.4

ELEMENTO SOLICITACIONES COMPORTAMIENTO DEFECTOS POSIBLES

SISTEMA DE MECANICAS

EVACUACIÓN Ac Exteriores
Propio Material

TÉRMICAS OYTJvTIENTOS Desplazamientos.


Pérdida de material.
Pérdida de piezas.
Desorganización de encuentros
Rotura de empalmes
Obstrucciones
Retenciones
Penetraciones
Etc.

ACCION DE OTROS
COMPONENTES
Base
Soporte
Aislamiento

CUADRO 1.5

te agresiones de humedad, como son las barreras cor- Las propuestas de actuación pueden ser de:
tavapor.
Como puede observarse en el Cuadro n° 4, los da-
ños que afectan a este componente provienen de ac- •Nueva incorporación por carencia del mismo.

ciones derivadas del mal uso o de una incorrecta eje- -Mejora del existente.

cución, así como los producidos por penetraciones


de agua, siempre y cuando el material aislante no es- Siempre que sea posible recurriremos a operacio-
té preparado para soportar esta acción. nes no traumáticas, en cuyo caso pueden ser de uti-
capitulo IV Patología de cubiertas

lidad las intervenciones desde el exterior mediante


productos que soporten la acción del agua.

3.5 Comportamiento del sistema de evacuación

Este componente ha evolucionado en el tiempo ha-


ciéndose más complejo y de mayor riesgo en su fun-
cionamiento. De unas soluciones muy simples de re-
cogida exterior en perímetro de las aguas pluviales,
paraguas, que no creaban graves problemas de pe-
netración, se ha pasado a una alternativa de recogi-
da interior puntual embudo.
Las solicitaciones sobre este componente, sean
4. Sistema de evacuación: Cazoleta de recogida de pluviales.
del tipo que sean, siempre se traducen en traumatis-
Daño: Formación de mohos. Transmisión de humedades.
mos en forma de desplazamientos, roturas, desajus- Comportamiento: Posición y diseño no adecuado. Falta de man-
tes con otros componentes, etc. que acaban siempre tenimiento.
produciendo penetraciones. Solicitación: Mala evacuación.
Las alternativas de actuación irán encaminadas a
que todo el sistema sea muy estable mediante fija-
ciones puntuales y rígidas sobre las que flotarán los paración, puede servir también como guía en la pro-
elementos de desagüe, que permanecerán indepen- puesta de nuevas cubiertas.
dientes del resto de los componentes con objeto de En capítulos posteriores se entrará en el análisis de
que no se transmitan entre sí tensiones que acaben los daños, contemplando a las cubiertas como el con-
rompiendo las cazoletas ni los enlaces con las ba- junto de los componentes que aquí se han estudiado,
jantes. y se propondrán criterios para la reparación de las mis-
Este recorrido a través del comportamiento de los mas, aunque nunca soluciones concretas, ya que ca-
componentes de las cubiertas, que como decía al ini- da caso supone un trabajo específico de análisis; y
cio del capítulo pretende establecer una metodología cada material y sistema constructivo conlleva, así mis-
para el análisis de los daños ante actuaciones de re- mo, su propia solución.
capitulo IV. Patología de cubiertas

341

2. Aleros y cornisas

Juan Monjo Carrió


Dr. Arquitecto
Catedrático de Construcción E.T.S.A. - U.P.M.

1. Introducción

Agrupamos en este capítulo los procesos patoló-


gicos que afectan a un elemento arquitectónico muy
característico de los edificios y muy importante en la
definición volumétrica del mismo, cual es la línea que
une los planos de cubierta y fachada, cualquiera que ALERO CORNISA ( 1 )
sean los tipos de éstas.
Supone esta línea un elemento constructivo
destacado, tanto desde el punto de vista de la técnica Zl
constructiva que se usa para resolverlo como desde
el de su patología, dada su particular situación en el
edificio, con un elevado nivel de exposición y la
confluencia en él de unidades con distinta función
constructiva sometidas a acciones externas diferentes, CORNISA (2) CORNISA (3)

fachada, cubierta y estructura.


1. Aleros y cornisas.
Ello hace que sea necesario un estudio específico
de los problemas patológicos de dicho elemento, junto
con sus soluciones constructivas de reparación y
prevención, al margen de lo que se haya descrito para donde la línea afectada sea, básicamente, la superior,
los tres sistemas que en él confluyen. y otras con impostas o barandillas de diversos tipos
Constructivamente, la mencionada línea dependerá donde el proceso patológico afecte a toda una franja
de los sistemas constructivos de los planos que une. de un ancho determinado.
Así podemos hablar, básicamente de aleros y comisas Esta variedad de situaciones es la que vamos a
(Fig. 1). Los primeros, cuando se trata de una cubierta analizar.
inclinada que llegue hasta la misma fachada y la
sobrepase. Las segundas, cuando sea el plano de
fachada el que pase por delante del de la cubierta,
2. Tipología de lesiones
sea ésta plana (la mayor parte de las veces) o inclinada
(oculta). Dada la situación característica (gran nivel de
Entre los aleros, será importante la dimensión de exposición) con una marcada incidencia de los agentes
su vuelo sobre el plano de fachada y la existencia o metereológicos, y la inevitable influencia del agua de
no de canalón, sea éste oculto o visto. Entre las lluvia al ser la cubierta uno de los planos coincidentes,
segundas, nos encontraremos con coronaciones lisas los procesos patológicos que puedan afectar a nuestra
Tema 2. Aleros y cornisas

342

3. Vuelo muy escaso del alero.

como desprendimientos, grietas y fisuras, o físicas


como erosiones.
En definitiva, podemos considerar como más
destacadas las siguientes:

2. Filtración de aleros.
2.1 Humedades de filtración

Son, sin duda, las más importantes, constituyendo,


además, el origen de otras lesiones. Para analizarlas,
conviene distinguir entre aleros y cornisas, ya que la
filtración, en ambos casos, tiene procesos distintos.

2.1.1 Filtración en aleros (Fig. 2)


Debemos distinguir varios casos en función del
sistema de drenaje en el que podemos encontrar tres
variantes:
-Caída libre del agua
-Canalón visto
-Canalón oculto
Por otra parte, debemos considerar una'cuarta
variante cuando se trate de un alero lateral paralelo a
la pendiente de la cubierta.
Cuando la salida del agua se realiza por caída libre
al exterior, su filtración, al margen de la existencia de
roturas o de errores de colocación entre los elementos
de cobertura (tejas, losetas, chapas, etc.) se producirá
por la vuelta hacia atrás de la gota de agua, una vez
4. Filtración de agua en canalón visto, apoyado que rebase la línea de borde. Ello sólo será posible:
sobre moldura.
-Si no existe vuelo suficiente del elemento de
cobertura en cuestiónfFig. 3).
-Si éste no tiene goterón o inclinación suficiente
línea estarán marcados por el agua y, por tanto, las En ambos casos, la intervención del viento contra
lesiones más destacadas serán las humedades y las el alero puede provocar la filtración.
secundarias que éstas puedan originar. Cuando el drenaje se realiza por canalón visto,
Asimismo, los cambios de temperatura serán además de la filtración por alguna de las causas
determinantes, tanto por sí solos como combinados anteriores, puede provocarse también por mal
con la humedad, provocando lesiones mecánicas tales funcionamiento del canalón, lo que ocurre si,
capitulo IV, Patología de cubiertas

5. Filtración por canalón oculto en alero.

-el agua supera la capacidad del canalón y éste está


demasiado próximo a la fachada, incluso pegado a
ella o alojado sobre algún tipo de imposta, lo que facilita
el que el agua se acumule sobre ella y se filtre. (Fig. 4)
-la unión del canalón con la bajante es defectuosa
o se atasca, saliendo el agua por ese punto, penetrando
directamente en la fachada o resbalando por la bajante
con efectos similares.
El hecho de que el agua supere la capacidad del 6. Filtración en cornisas.
canalón puede producirse por diversas razones, siendo
las más usuales,
-ausencia, falta o cambio de pendiente
-falta de capacidad suficiente
-obstrucción de la bajante
Cuando el drenaje se realiza por canalón oculto la
filtración se puede producir también por diversas causas
relativas a su mala ejecución o su funcionamiento
defectuoso, de las cuales las más importantes son:
(Fig. 5)
-falta de solape suficiente del elemento sobre el
canalón
-falta de capacidad suficiente de éste
-obstrucción de sumidero o bajante
-falta de solape del lateral inferior del canalón sobre
el material de cobertura del resto del alero.
Por último, cuando se trata de un alero lateral el
problema es más reducido al seguir el agua el recorrido
paralelo al mismo. No obstante, la filtración se puede
producir igualmente, lo que dependerá, básicamente,
de dos factores:
-la pendiente del faldón (cuanto mayor sea la
pendiente menor el peligro de filtración) 7. Filtración por borde de albardilla enrasada
-la protección (falta de protección) de la línea de
separación.
debemos distinguir varios casos de lesiones, en función
2.1.2 Filtración en cornisas (Fig. 6) del tipo formal y constructivo de la cornisa y del punto
En las cornisas, entendiendo por tales las de aparición de la humedad. Así, tendremos en cuenta
coronaciones de los paños de fachada, también las siguientes filtraciones:
Tema 2. Aleros y comisas

344 -por albardilla


-por imposta
-por encuentro entre faldón y peto
-por sumidero
La filtración por albardilla se producirá por ausencia
de ésta o por su mal funcionamiento, lo que ocurrirá,
-por su rotura (grieta o fisura) o abertura de las juntas
-por excesiva porosidad y falta de pendiente
-por ausencia de solape sobre planos verticales o
del goterón correspondiente(Fig. 7)
La filtración por imposta aparecerá por razones
similares a las anteriores además de posible
8. Microcapilaridad en imposta microcapilaridad en el encuentro de la albardilla con
el paño de fachada.(Fig. 8)
La filtración por encuentro entre faldón y peto es
una de las más corrientes y aparatosas, y aparece
como consecuencia de unir, sin solución de continuidad,
la membrana impermeable del faldón de la terraza
plana con el peto, lo que produce, por lo menos, dos
posibles puntos de filtración por,(Fig. 9)
-rotura de la membrana en el quiebro, por excesiva
tensión en ese punto, al estar adherida la tela en todo
su dorso, superando el coeficiente de elasticidad de
la misma.(Fig. 10)
-despegue del borde superior de la tela del peto al
que estaba adherida, sin ningún tipo de babero de
9. Filtración por solución incorrecta de encuentro entre
protección.
faldón y peto en cubierta plana.
La filtración por sumidero, en fin, se origina por mal
funcionamiento del sistema de drenaje de la cubierta,
cuando ésta echa sus aguas contra el peto, sea plana
o inclinada, considerando, por lo menos, los siguientes
casos:
-sumidero de cubierta plana que se obstruye o que
se rompe en alguna de sus partes hasta la bajante.
- solape insuficiente sobre el peto inferior al de la
limatesa opuesta que permite la entrada del agua.
(Fig. 11)
-canalón perimetral que deja de funcionar
correctamente por,
-pendiente insuficiente
10. Rotura de la tela asfáltica en su solape al peto.
-obstrucción de bajante
-falta de solape suficiente en alguno de sus lados
-ausencia de sumidero, con salida directa del agua
a bajante o a gárgola con posible falta, o rotura de
material Impermeable a lo largo del recorrido del agua
en su salida; caso corriente, sobre todo, en terrazas y
balcones donde la salida del agua se pretende por un
tubo tangente al faldón por su parte inferior, lo cual
resulta muy difícil, sobre todo ante la más mínima
obstrucción del orificio de salida.

2.2 Humedades de condensación (Fig. 12)

11. Filtración por solape insuficiente en peto Al tratarse de un encuentro de dos planos, es casi
capitulo IV. Patología de cubiertas

inevitable la existencia de un elemento estructural lineal PUENTES TERMICOS POR ESTRUCTURAS |

que permita la sujeción de un plano con otro. En


cualquier caso, resulta algo dificultoso mantener la
continuidad del aislamiento de los dos planos en el
propio encuentro, lo que facilita la aparición de un
puente térmico lineal que, unido al mayor nivel de
exposición de ese punto, provoca condensaciones
intersticiales que acaban manifestándose como
humedades al exterior.
Aunque las posibles situaciones son muy variadas,
en función de los sistemas constructivos que se 12. Condensación en aleros y cornisas.
empleen, podemos resumirlas en dos más destacables:
-canto de forjado, o viga que se encastra en la hoja
exterior del cerramiento de fábrica o incluso sale al
exterior, impidiendo la continuidad del aislante.
-muro de carga exterior que recibe el apoyo o
empotramiento' de la estructura horizontal,
imposibilitando también el que el aislante continúe.

2.3 Grietas y fisuras

Los cambios de temperatura y de humedad, más


acentuados en aleros y cornisas debido a su mayor
nivel de exposición, son el origen de estas lesiones
mecánicas en las que debemos distinguir algunas
variantes en función del elemento constructivo afectado.
Así consideramos, por lo menos los siguientes casos:
-grietas horizontales en el encuentro con forjado
-grietas verticales en petos y aleros
-fisuras en petos
Las grietas horizontales (Fig.13) suelen aparecer en
cubiertas planas cuando no se ha respetado la
necesaria independencia entre estructura y cerramiento
no portante de fábrica, o entre faldón superior y peto
de fábrica. En cualquier caso, la dilatación del elemento
horizontal que recibe la radiación solar directa, empuja
al peto de fábrica que descansa sobre él o, por lo
menos, está en contacto con él, rompiéndolo 13'. Grieta horizontal en peto de terraza por dilatación del forja-
horizontalmente por su punto más débil. do de cubierta.

Las grietas verticales en petos y aleros de fábrica


y hormigón (Fig. 14) son una consecuencia directa de
la ausencia de juntas de dilatación en dichos elementos.
Al contraerse, después de una dilatación, suelen abrirse
verticalmente en zonas intermedias o en puntos más
débiles, como son las esquinas y las uniones con
pilastras o elementos estructurales y. sobre todo, en
las orientaciones Este y Oeste que, como se sabe, son
las más castigadas por los cambios de temperatura.
Las fisuras en petos (Fig. 15) suelen aparecer sobre
todo por cambios de humedad cuando se trata de
materiales porosos. Estos absorben el agua de lluvia
y al secar de un modo relativamente rápido, debido a
su nivel de exposición y a su estructura porosa, 14'. Grieta en esquina de peto de cubierta plana.
Tema 2. Aleros y cornisas

346

15. Fisuras en petos.

16. Eflorescencia en peto de cubierta plana por filtración. 17. Eflorescencia puntual por humedad en sumi-
dero.

provocan fisuras superficiales (sobre todo en los -en el sumidero


acabados) que suelen tener, bien forma de mapa, bien Cuando aparece en la coronación, su causa está
forma vertical paralela. en la humedad infiltrada desde la albardilla por alguna
de las razones indicadas más arriba.
Si aparece en la imposta, su origen suele estar en
2.4 Eflorescencias (Fig. 16)
la filtración de agua por la misma o en la
Cualquiera de las humedades que hemos visto microcapilaridad; la primera surge por la parte inferior
de la moldura y la segunda por el paño vertical superior.
pueden constituirse en el origen de una lesión
Si el encuentro con el forjado coincide con una
secundarla, la más clara de ellas es la eflorescencia,
moldura horizontal, la eflorescencia puede aparecer a
más aparente cuanto más eflorescibles sean los
través de ésta. De lo contrario, si el paño en ese punto,
materiales constitutivos, sean estos los elementos
es plano, se transparentará el forjado en el mismo.
unitarios de la fábrica (ladrillos, bloques, etc.) sea el
Si el sumidero está en el perímetro y se obstruye o
mortero que los une, sea el revoco, sea, incluso,
se rompe, la filtración aparece en el punto.(Fig. 17)
hormigón.
En cualquiera de los casos, la humedad origen de
Podemos distinguir varias posibilidades en función la eflorescencia puede ser doble:
del tipo de humedad que actúe como lesión primaria -filtración desde el borde de la cubierta por mal
y, por tanto, de su situación. funcionamiento del sistema de drenaje o rotura o
Así, en los petos de terrazas (cornisas) donde la despegue de la membrana impermeable.
lesión se ve con más claridad, podemos diferenciar -condensación intersticial por existencia de puente
cuatro situaciones distintas: térmico en el punto de encuentro.
-en la coronación, propiamente dicha En los aleros, la eflorescencia queda a veces
-en la imposta o moldura horizontal disimulada por la sombra arrojada por el vuelo. No
-en el encuentro con el forjado obstante, aparece también y su origen puede ser tan
capítulo ÍV. Patología de cubiertas

variado como el conjunto de humedades de filtración


que quedaron analizadas en el punto 2.1.-, o la de
condensación del punto 2.2. En cualquier caso, su
localización es siempre similar y aparece en el plano
vertical bajo el alero, o en el propio vuelo, si éste es
de obra.

2.5 Organismos

Aunque este tipo de lesión requiere, normalmente,


un elevado nivel de protección, sin embargo puede
aparecer también en aleros y cornisas en algunos
casos que conviene analizar específicamente, aunque 18. Plantas en canalones.
nos remitamos a los aspectos generales de esta
lesión.

2.5.1 En aleros
A pesar del alto nivel de exposición, nos aparecen
varios tipos de organismos en situaciones diferentes,
a saber:
-nidos de pájaros bajo aleros
-colonias de mohos bajo aleros
-musgos y gramíneas en canalones y tejas canales
insectos xilófagos en aleros
La situación bajo alero es, sin duda, la más protegida
de esa localización por lo que no es extraño que sirva
de alojamiento de distintos organismos. Los pájaros 1 9 . Musgos y mohos en comisas defectuosas.
(sobre todo golondrinas) cuelgan de ahí sus nidos,
aunque su efecto nocivo no sea más que el estético
y, a veces, erosiones químicas parciales.
-nidos de pájaros bajo molduras
Las colonias de mohos eligen también ese nivel de
-colonias de mohos
protección, siempre que haya una humedad suficiente
-musgos y gramíneas
provocada por cualquiera de las filtraciones vistas,
acompañada de porosidad adecuada. Los nidos de pájaro aparecen en situacio-
Los musgos y gramíneas, como plantas de porte, nes similares a los aleros, es decir en partes infe-
necesitan un volumen de tierra suficiente para sus raíces, riores de molduras horizontales. Su efecto es el mis-
mo mencionado antes. Igual ocurre con las co-
de ahí que aparezcan en dos puntos clave, siempre que
lonias de mohos, buscando la protección que le
falte un mantenimiento periódico: (Fig. 18)
ofrecen todo tipo de molduras y relieves de las
En canalones, cuando la pendiente es escasa o se
coronaciones que puedan suponer un nivel de
ha producido un desprendimiento, lo que facilita la
protección suficiente.
acumulación de tierra y el arraigo de las semillas que
Los musgos y gramíneas, por último, no son de tan
llegan por el aire, lo que permite, además, el progreso
frecuente aparición en estos casos, por no disponer
de los desprendimientos.
de alojamiento para la tierra necesaria. No obstante,
En tejas canales en el mismo borde del alero, por
cuando existen plataformas horizontales y rincones
razones similares, aunque es, evidentemente, menos
suficientes, y el nivel de mantenimiento periódico es
corriente.
escaso, pueden llegar a establecerse esas plantas de
Por último, los aleros de madera, pueden verse porte, con los evidentes efectos erosivos consiguientes.
atacados por insectos xilófagos, aunque su nivel de (Fig.19)
exposición sea elevado, lo que provoca su deterioro
e, incluso, su colapso.
2.6 Erosiones
2.5.2 En cornisas
Nos encontramos también con varios tipos: Debemos distinguir entre los tres tipos generales
Tema 2. Aleros y comisas

348

20. Erosión física de petos de ladrillo. 21. Desprendimiento de tejas en alero.

de erosiones (mecánicas, físicas y químicas) aunque que los originen, aunque debemos distinguir dos tipos
las más generales sean las físicas. en función del contaminante.
Si se trata de uno atmosférico (S0 , CO, etc.) podrá
2

2.6.1 Erosiones mecánicas aparecer en coincidencia con cualquiera de las


Su causa fundamental será el viento acompañado humedades vistas y dependerá del material constitutivo.
de posibles partículas abrasivas (arena, tierra, etc.) Los más afectados serán las piedras, sobre todo las
azotando los puntos más expuestos. Resulta una calizas y el hormigón, todo ello según las reacciones
erosión muy escasa, previsible solamente en zonas químicas vistas en el capítulo correspondiente. No
geográficas muy expuestas y próximas a playas o obstante, cabe indicar que este tipo de erosiones es
zonas más o menos desérticas, además del necesario menos corriente que en las zonas bajas de los edificios
paso del tiempo. debido, precisamente, a su mayor nivel de exposición.
Si se trata de organismos, la erosión aparece en los
2.6.2 Erosiones físicas (Fig.20) puntos donde se ubican, es decir, las plataformas
Son las más corrientes y su origen está en la horizontales puede que estén más o menos protegidas
humedad previa y la colaboración fundamental de los y principalmente las molduras horizontales y recovecos
cambios de temperatura y, sobre todo, de la helada. de balaustradas y decoraciones, en general.
Aunque puede surgir en cualquiera de los puntos
donde aparece la filtración, la situación más corriente
2.7 Desprendimientos
es la de las cornisas y en ellas los tres puntos siguientes,
por orden de frecuencia. Resulta, en la mayoría de los casos, una nueva
-albardillas de coronación de petos lesión secundaria, consecuencia de las humedades de
-balaustradas, cuando existen, por la cantidad de filtración, de las grietas y fisuras y en algunos casos,
aristas que ofrecen de los organismos. Por ello conviene distinguir varios
-cornisas y molduras en general tipos:
-aleros de obra
Afectan a cualquier material pétreo o cerámico que 2.7.1 En aleros
podamos colocar en esos puntos, siendo mayor el Aparecen aquí tres tipos de desprendimientos
efecto cuanto más poroso sea. -del material de acabado
-de las tejas y losetas
2.6.3 Erosiones químicas -de los canalones
Suelen ser consecuencia de la confluencia de El material de acabado, sea continuo (el más
dos factores; la humedad de filtración y la apari- corriente) o por elementos (plaquetas cerámicas o
ción de contaminantes, bien sean de los c o n - chapado de piedra) suele desprenderse como
tenidos en la atmósfera, bien sean provocados por consecuencia de la helada del agua infiltrada por
los propios organismos que aparezcan como lesión cualquiera de los procedimientos vistos, o del agua
previa. de condensación intersticial, sobre todo en el caso de
Su situación coincidirá con la de las lesiones previas acabados por elementos y plaquetas cerámicas, así
capitulo IV Patología de cubiertas

como en chapados de piedra, por corrosión y rotura


de sus anclajes.
También pueden intervenir las grietas y fisuras que
facilitan la filtración de agua y cuyos procesos
mecánicos pueden introducir los esfuerzos rasantes
necesarios entre acabado y soporte, para provocar el
desprendimiento.
Las tejas y losetas suelen desprenderse por
confluencia de movimientos elásticos o de dilatación
que provocan un primer desprendimiento y que facilitan
la filtración de agua que llega a helarse, provocando
el desprendimiento final. A ello pueden ayudar, también, 22. Desprendimiento de canalón visto.
las raíces de las plantas de porte que pueden llegar a
alojarse en esos puntos. (Fig.21)
Los canalones, por último, suelen desprenderse
por acumulación de tierra y plantas que, al aumentar
su peso, sobrepasan la capacidad de los corres-
pondientes anclajes. A ello ayuda, también, la corrosión
de esos anclajes que debilita su capacidad y puede
provocar, por sí sola, el desprendimiento. (Fig.22)

2.7.2 En cornisas
Los desprendimientos son, en general, similares a
los de aleros, en lo que se refiere a los materiales de
acabado, y pueden cobrar especial significación los
23. Desprendimiento de plaquetas cerámicas.
de las piezas de albardilla en petos y molduras
horizontales, sobre todo los de elementos pétreos y
cerámicos. También aparecen desprendimientos de
plaquetas cerámicas, por confluencia de dilataciones
y chapados de piedra, por corrosión de anclajes. En
estos casos, su desprendimiento viene provocado,
sobre todo, por la filtración de agua por las juntas y
su posterior helada. A ello ayudan los posibles
movimientos elásticos o de dilatación del elemento
constructivo que provocan un esfuerzo rasante inicial,
así como una colocación deficiente que facilita todo
el proceso. (Fig.23 y 24)

24. Desprendimiento de chapado de piedra por corro-


2.8 Suciedades
sión de anclajes.

Resulta una lesión relativamente escasa dado el


nivel de exposición existente. No obstante, aparece
en ocasiones un lavado diferencial que depende del
diseño geométrico, pudiendo distinguir varios tipos:
-aleros laterales
-cornisas con relieves
-impostas con planos inclinados hacia abajo
En los aleros laterales surgen, sobre todo, cuando
el borde está resuelto con cobija que puede drenar
parte del agua hacia el paño vertical, provocando
churretones. (Fig. 25)
En cornisas con relieves, aparecerán lavados
diferenciales siempre que existan concentraciones 25. Churretones en alero lateral.
Tema 2. Aleros y comisas

-Estudio de los detalles constructivos de resolución


del encuentro de los planos de fachada y cubierta,
con especial atención a la existencia de elementos
estructurales lineales, a la continuidad o no del aislante
y a la existencia o no de independencia entre
cerramiento y estructura. Con ello podremos detectar,
entre otras causas indirectas, la existencia de puente
térmico, la aparición de acciones de la estructura sobre
el cerramiento, etc.
-Seguimiento de la lesión a lo largo de un periodo
de tiempo tal que nos permita conocer la incidencia
de los cambios de temperatura en los movimientos
por variación dimensional de los elementos
26. Lavado diferencial en imposta con plano indicado hacia
constructivos más expuestos, sobre todo cuando se
abajo.
trate de lesiones mecánicas como grietas y fisuras e,
incluso, de desprendimientos.
-Análisis, por último, del sistema de drenaje de las
puntuales de agua y, sobre todo, cuando las albardillas aguas de lluvia, sea abierto u oculto, sea por canalón
que protegen las plataformas horizontales no dispongan o por bajantes. Deberemos estudiar su correcto
del correspondiente goterón y estén en una situación funcionamiento, tanto desde el punto de vista del
más o menos protegida. cálculo pluviométrico (zona climática, superficies de
En impostas con planos inclinados hacia abajo, recogida, diámetros de canalones y bajantes, etc.)
o planos curvos, la ausencia de goterón en el cam- como desde la perspectiva de las soluciones
bio de plano provocará el lavado diferencial, mayor constructivas de situación y anclaje de canalones,
cuanto más protegida esté la imposta en cuestión. empalmes de todos los elementos, etc.
(Fig.26). Una vez en posesión de todos los datos necesarios,
podremos alcanzar el diagnóstico que nos permita
conocer la reparación más adecuada, así como intuir
3. Diagnóstico las medidas de prevención necesarias para evitar la
existencia de las causas indirectas que actúan como
Al no tratarse de un tipo específico de lesión, sino origen del proceso.
de una situación funcional y constructiva concreta,
con un número relativamente elevado de procesos
patológicos posibles, no podremos hablar de un único
4. Reparación
diagnóstico, sino de diagnóstico múltiple, en función
de las diversas lesiones. No obstante, esta diversidad Como siempre, al hablar de reparación y una vez
de diagnósticos tiene algo muy importante en común, alcanzado el diagnóstico correcto, pensaremos, en
que permite simplificarlo; me refiero al origen de los primer lugar, en la eliminación de la causa para, a
distintos procesos patológicos que se pueden dar, continuación, anular el efecto producido por la lesión.
que estará condicionado por su función constructiva Para estudiar las distintas soluciones, podre-
y por su nivel de exposición. La alta exposición a las mos seguir la tipología de lesiones enumerada en el
influencias atmosféricas, por un lado, la incidencia punto 2.
del agua de lluvia, por otro, y el cambio de plano
constructivo, por último, serán los tres factores básicos
4.1 De las humedades de filtración
que condicionarán el origen de la mayoría de los
procesos patológicos que ahí ocurran. A partir de esas Analicemos las mismas variantes indicadas más
premisas, no tendremos más que seguir y analizar las arriba.
diferentes lesiones, según lo recomendado en cada
caso, para alcanzar un diagnóstico correcto que nos 4.1.1 De las filtraciones en aleros (Fig.27)
permita establecer las medidas de reparación más
Si se trata de un alero frontal con caída libre, habrá
adecuadas. Así pues, como pasos comunes a dar en
que corregir la situación relativa de las piezas de
cualquiera de las lesiones que debamos analizar
cobertura del borde, bien sustituyéndolas, bien
tendremos,
actuando sobre el soporte del alero, pero, en cualquier
capitulo IV. Patología de cubiertas

27. Reparación de filtraciones en aleros. 28. Alero lateral, resuelto con teja canal.

caso, tratando de obtener, o un vuelo mayor, o una -falta de mantenimiento periódico que facilita ia
mayor inclinación, o introducir un goterón en el borde. acumulación de tierra y suciedad, lo que provoca el
Por supuesto, la sustitución de piezas será preceptiva desprendimiento por aumento de peso.
cuando esas estén rotas, lo que también favorece la En cualquiera de los casos, al colocar de nuevo el
filtración. canalón, dejar la separación suficiente del paño de la
Asimismo, será conveniente introducir una pared (>5 cms) para evitar que al rebosar el agua vaya
protección impermeable en el frente del alero, bajo el directamente al paño de fachada provocando la
vuelo de las tejas, sobre todo si no podemos filtración y asegurar la inclinación adecuada, como
aumentarlo. Dicha protección se realizará, normalmente, medidas de prevención. Por otra parte conviene
con chapa metálica lacada o aluminio. considerar la necesidad real del canalón. Si ya no es
Si se tratara de un alero lateral, las actuaciones necesario (ver prevención) será mejor elimininarlo y
serán parecidas, aunque en ese caso, si tenemos de dejar el alero con caída libre, tomando las medidas
teja curva, podremos actuar sobre la hilera del borde, indicadas.
cambiándola de cobija a canal, con el objeto de Por último, si se trata de un canalón oculto el qué
asegurar que el agua no tienda a ir hacia la pared, lo ha provocado la filtración, las medidas de reparación
que disminuirá, sin duda, el riesgo de filtración (Fig.28). irán a anular, en lo posible, las causas indirectas que
La existencia de canalón visto puede provocar la han provocado, indicadas en el punto 2.1.1.,
filtraciones si se supera su capacidad o si está a saber:
desprendido con pendientes invertidas. En el primer -asegurar el solape suficiente (> 5 cms) del elemento
caso, habrá que sustituirlo por uno de mayor capacidad, de cobertura sobre el canalón en la parte alta, lo que
una vez realizado el correspondiente cálculo. En el puede obligar a reponer las piezas correspondientes.
segundo, comprobado asimismo el cálculo, se volverá -asegurar la capacidad del canalón, previo cálculo
a sujetar adecuadamente, procurando no cometer los de superficies pluviométricas y cambio del mismo.
errores que provocaron el desprendimiento, a saber:
-limpieza de sumideros y bajantes e inclusión de
-sujeciones débiles o muy separadas elementos filtrantes de hojas y suciedad para evitar
-sujeciones metálicas sin la imprimación nuevas obstrucciones.
anticorrosiva adecuada o sin la protección necesaria -mejorar el solape del canalón sobre la parte inferior
para evitar la aparición de par galvánico (grapas de del alero, cambiando las piezas necesarias, incluso el
acero con canalón de cinc, por ejemplo) propio canalón.
Tema 2. Aleros y comisas

1 - SELLADO DE JUNTAS

PIEZAS PREFABRICADAS

2.- SUSTITUCION DE PIEZAS O NUEVA ALBARQIllLA 30. Reparación de filtración en impostas.

SIN MlUBEL CON MIU8EL

29. Reparación de filtraciones por albardilla. 31. Reparación de filtración con creación de mimbel.

4.1.2 De las filtraciones en cornisas en cuenta las siguientes medidas (Fig.30) orientadas
Siguiendo con las variantes indicadas en la tipología a evitar la microcapilaridad:
(2.1.2.) tendremos: -pequeño resalto de unos 5 cms antes de
Cuando la filtración se produce por albardilla y en encastrarse la chapa en la pared
función de su origen, la reparación seguirá una de las -máxima inclinación de la protección superior
siguientes alternativas: (Fig.29) -sellado del encuentro de la protección con la pared
-Sellado de juntas cuando se trata de piezas muy mediante material elastómero.
grandes que por retracción han abierto, o retacado de Cuando la filtración se produce por el borde de la
dichas juntas, si son piezas pequeñas. cubierta plana, en el encuentro entre faldón y peto, lo
-Aplicación de productos endurecedores más probable es que no se haya ejecutado el
correspondiente mimbel o zabaleta, por lo que la
o selladores, a base de resinas acrílicas o epo-
actuación de reparación debe orientarse a introducir
xídicas, en función del material poroso afectado por
dicho elemento constructivo, como medida de
la filtración.
prevención, que deberá contener, por lo menos: (Fig.31)
-Sustitución de las piezas de albardilla, procurando
-resalto vertical unido al faldón, e independiente,
que la nuevas tengan junta adecuada, pendiente
del peto de unos 15 cms.
suficiente y goterón en ambos lados. -lámina impermeable continua desde el faldón,
Colocación de una nueva albardilla, normalmente subiendo por dicho resalto, interrumpiéndose antes
de chapa, por facilidad, asegurando que cumple todos de llegar el peto.
los requisitos de prevención. Si la filtración se produce -protección del final de la membrana impermeable
por imposta, pueden ser válidas las medidas de mediante albardilla o babero que, sujetándose al peto
prevención indicadas para las albardillas, aunque hay vertical, solape lo suficiente el resalto nuevo del faldón
que cuidar de un modo especial el encuentro de la como para evitar que pueda filtrarse el agua por esa
protección con el paño vertical, para lo que tendremos unión.
capitulo IV. Patología de cubiertas

En los casos de cubiertas antiguas en donde se


produce filtración existiendo el mimbel, ésta se deberá
a la rotura por desgarre de la membrana impermeable,
sí existía, o a las grietas producidas entre mimbel y
peto. Entonces se debe reparar rehaciendo el mimbel,
pero nunca tapándolo, como desgraciadamente es
costumbre (Fig.32). En todo caso, si no se quiere
rehacer el mimbel por un ahorro de trabajo, la nueva
tela impermeable, por encima de la antigua cubierta,
deberá cumplir las siguientes condiciones: (Fig.33)
-estar autoprotegida (el aluminio gofrado es lo más
corriente) o protegerla posteriormente con alguno de
32. Antiguo mimbel anulado con lámina ¡npermeable con
los materiales indicados en prevención
aluminio gofrado.
-la tela del faldón sube por la pared vertical del
mimbel. interrumpiéndose ahí para dejar la ventilación
de la cámara de aire
-protección superior con la misma tela, volando
sobre el mimbel y arrancando por arriba con algún tipo
de protección:
-incluida en roza practicada en el peto
-con babero superior metálico de protección
-con pieza especial clavada al peto y sellada con
elastómeros por su borde superior.
Cuando, por último, la filtración se produce por mal
f u n c i o n a m i e n t o del sistema de drenaje, las 33. Reparación de filtraciones en mimbel existente.
actuaciones de reparación se orientarán a corregir
dicho funcionamiento a base de introducir sumideros,
si no los había, o cambiar los existentes por unos
nuevos o, simplemente, repararlos (ello, además de
asegurar una limpieza periódica como medida de
prevención):
-si no existen sumideros, con un intento de evacuar
el agua por medio de gárgolas (normalmente pequeñas)
de un modo directo, siendo éstas tubos tangentes a
la superficie del faldón, no tenemos más remedio que
anularlas y construir sumideros por debajo del nivel
del faldón (Fig. 34).
-si existen, y simplemente se obstruyen, les
añadiremos un sistema de protección filtrante peraltado
para evitar la entrada de suciedad permitiendo que 34. Sumidero previo a gárgola.
pueda drenar a pesar de las hojas y papeles.
- si el sumidero está en el borde, habrá que asegurar
que la protección vertical del peto adyacente tiene la
altura superior a las limatesas que definen el perímetro
de los faldones que vierten a este sumidero, para evitar
que se filtre el agua por dicha protección en caso de
que rebose (Fig. 35).
En cualquier caso, la colocación de nuevos
sumideros seguirá las medidas de prevención que
mencionaremos más adelante.

4.2 De las humedades de condensación

Sabemos que la corrección de dichas humedades 35. Protección peraltada de boca de sumidero
Tema 2. Aiems y comisas

36. Reparación de humedades de condensación.

tiene, en general, dos tipos de soluciones orientadas podamos recurrir a una cámara de aire interior (quizás
a eliminar la condensación intersticial a base de alejar ya existente) que sí se pueda ventilar.
la curva de temperaturas de rocío de la de las Por el contrario, la colocación de una barrera de
temperaturas del propio elemento constructivo. (Fig.36) vapor en la superficie interior es relativamente sencilla,
En unos casos se trata de aumentar el aislamiento pudiendo resolverse de varias maneras:
de dicho elemento por su exterior, lo que eleva la -alicatado o chapado de piedra interior.
temperatura del mismo y en otros, a disminuir la presión -aplicación de acabados continuos de plástico (PVC,
de vapor de agua que tiende a cruzar el cerramiento linóleo, etc.) en paredes y techos.
por dos medios clásicos: -pinturas al esmalte.
-ventilando más el local interior Si el local interior no admite ninguno de los acabados
-introduciendo una barrera de vapor en la cara por el tipo de uso que tenga, habrá que recurrir al más
interior del cerramiento. sencillo y cubrirlo posteriormente con el acabado que
El aumento de aislamiento por el exterior es la resulte funcionalmente adecuado.
solución más adecuada, aunque no siempre sea
posible. De hacerlo, será a base de un material aislante
rígido que pueda recibir de nuevo el acabado que tenía 4.3 De grietas y fisuras
originalmente, o de planchas aislantes protegidas
mediante un revoco armado, lo que permite, Al margen de lo que se haya indicado ya en los
únicamente, un acabado de tipo continuo. capítulos correspondientes como actuaciones de
En caso de resultar imposible la colocación reparación, veamos las más adecuadas para nuestro
de aislante por el exterior, podemos hacerlo por su caso, en función de los tipos de grietas y fisuras
interior, cumpliendo, por lo menos, las siguientes mencionadas en el punto 2.3.
condiciones: -En cuanto a las grietas horizontales debidas al
-que tenga barrera de vapor en su cara interior empuje producido por la dilatación del faldón de las
-que se prolongue por los elementos horizontales cubiertas planas, resulta difícil anular la causa (es decir,
la longitud suficiente como para evitar el puente térmico. la dilatación) a no ser que vayamos a una protección
La disminución de vapor de agua no siempre es superior, eliminando la radiación solar directa y
posible por un simple aumento de ventilación, que aumentando el aislamiento, lo que inutilizaría su uso.
afectará al confort climático del local, a menos que En cualquier caso, la dilatación seguiría Droduciendose.
capitulo IV. Patología de cubiertas

aunque en menor medida, pero probablemente, con


suficiente fuerza como para seguir agrietando el peto.
Por ello, en estos casos, la solución suele estar en
atacar solamente el efecto, dejando de actuar sobre
la causa. Se trata entonces de disimular el efecto, lo
que se puede conseguir de dos maneras.
-marcando la grieta de una forma regular, como si
se tratase de una junta de dilatación, con su
correspondiente sellado.
-tapando la grieta con un nuevo elemento
constructivo horizontal tipo imposta, colocado de tal
modo que siga permitiendo el libre movimiento del
faldón, pero protegiendo la grieta de las incidencias
atmosféricas.
Las grietas verticales, si se han producido en
tramos intermedios como consecuencia de la
dilatación-contracción del peto o alero, deben marcarse
y tratarse como junta de dilatación, lo que implica, de
nuevo, una actuación únicamente sobre el efecto. No
obstante, y en función de la solución constructiva en
el caso de petos, se deberán reforzar los bordes de la
nueva junta para asegurar su integridad.
Si se han producido en las esquinas, por la misma
causa, se marcará la junta de dilatación en uno de los
lados de la esquina (el menos soleado), reforzando 37. Limpieza de eflorescencias mediante agua pulveri-
asimismo los bordes. zada y cepillado.
Cabe mencionar aquí, que es práctica corriente, en
estos casos, tratar de reforzar la esquina con ataduras
metálicas, pensando, quizás, que la grieta se ha
producido por debilidad constructiva. Esta solución
4.4 De las eflorescencias
suele ser contraproducente, pues traslada la grieta al
extremo del refuerzo metálico. Para la reparación de una eflorescencia, comoquiera
En muy pocos casos la debilidad del peto es causa que se trata de una lesión secundaria que tiene por
de grietas y de ser asi existe, además, otra causa origen una humedad, el primer paso será, precisamente,
mecánica que conviene eliminar antes de reforzar. la reparación de esa humedad, lo que ya se ha tratado
Si estas grietas se han producido por movimientos en los puntos 4.1. y 4.2.
elásticos de la estructura soporte, el primer paso a dar Una vez hecho esto, procederemos a la reparación
será el refuerzo de dicha estructura o la independencia, del efecto por medio de una limpieza de la sal
si cabe, entre estructura y peto. A continuación eflorescida. Dicha limpieza en función de la sal en
eliminaremos las grietas siguiendo las indicaciones cuestión, será:
del capítulo correspondiente. -Natural, mediante agua y cepillo, cuando la sal
En cuanto a las fisuras originadas por cambios sea fácilmente soluble. El agua se suele aplicar
superficiales de humedad, la solución más efectiva pulverizada, a cierta presión, para facilitar la limpieza.
consiste en sanear el acabado continuo afectado y A continuación, debemos asegurar el secado, bien
sustituirlo por uno nuevo con armadura de malla de por medios naturales (sol y aire) bien acelerados,
poliéster o fibra de vidrio protegida contra los álcalis mediante aplicación de aireadores o calefactores, si
del cemento. El nuevo revoco debe ser muy poco cabe (Fíg. 37).
poroso (bajo coeficiente de absorción) para evitar que -Química, mediante ácidos o bases capaces de
vuelva a provocarse la lesión. En caso extremo, disolver la sal eflorescida. La aplicación de estos
podemos aplicar algún tipo de sellante o hidrofugante productos se tiene que estudiar con mucho cuida-
sobre el revoco que reduzca su coeficiente de do para que no produzcan efectos secundarios sobre
absorción. De ese modo resolveremos tanto la causa el material constitutivo de la fachada, lo que nos
como el efecto de la lesión. obliga a:
Tema 2. Aleros y comisas

-estudiar previamente las posibles reacciones establecer una limpieza periódica que impida la
químicas entre el disolvente, la sal eflorescida y los acumulación de tierra en canalones, tejas canales y
materiales constitutivos. rincones, en general, base necesaria para el
-aplicar el disolvente lo más diluido posible para, a asentamiento de los organismos vegetales. En cuanto
pesar de mantener su efecto sobre la eflorescencia, a los nidos de pájaros bajo aleros y molduras, también
evitar los posibles secundarios. la limpieza será la única defensa.
-lavar con agua después de la aplicación para En lo que se refiere a las humedades previas, ya ha
eliminar todo resto de disolvente y de eflorescencia, quedado indicado en los apartados 4.1. y 4.2. de este
asegurando el secado lo más rápido posible. capítulo.
-Mecánica, cuando la eflorescencia ha producido Para" la eliminación del efecto, habrá que proceder
una costra insoluole (muy pocas veces). Entonces, a una limpieza que, por el carácter orgánico de la lesión,
mediante abujardados o raspados manuales o mecánicos, conllevará la utilización de diversos productos químicos
procederemos a la eliminación de dicha costra. (disolventes, fungicidas, en los casos de mohos) que
Esta actuación producirá, muy probablemente, una podrán alterar la superficie de los materiales
alteración superficial del material, lo que nos obligará constructivos, lo que nos obligará a tomar medidas
a una protección posterior mediante senadores precautorias similares a las indicadas para las
transpirables o endurecedores, en función del elemento eflorescencias.
constructivo afectado. En los casos de mohos, convendrá utilizar, como
En general, una vez practicada la limpieza, suele sellante o acabado final, pinturas fungicidas que
ser conveniente una protección superficial hidrofugante dificulten la aparición de nuevas colonias.
mediante sellados o reposición de pinturas. Al hacerlo, Por último, en cuanto a las lesiones aparecidas en
hay que comprobar la adecuación de la protección los elementos leñosos de los aleros, tanto insectos
con el material soporte y, sobre todo, asegurarse de xilófagos como hongos, serán de aplicación las medidas
su permisividad al paso de vapor de agua cuando el de reparación indicadas en el capítulo correspondiente.
elemento constructivo encierra un local en uso.
Por último, cabe mencionar que, muchas veces, la
limpieza de una eflorescencia ha producido, 4.6 De las erosiones
posteriormente, la aparición de nuevas eflorescencias.
De acuerdo con la clasificación utilizada en el punto
Ello debido:
2.6., podemos distinguir.
-a la existencia de abundantes sales solubles en el
interior del material, que, al aplicar agua desde el
4.6.1 De las erosiones mecánicas
exterior a presión, ha facilitado su aparición.
Lesión muy escasa que aparece, sobre todo, en
-a las reacciones que los disolventes empleados
materiales de acabado débiles, como son los revocos
para la limpieza han producido sobre los componentes
continuos de mortero. La reparación consistirá en un
de los materiales constructivos del cerramiento.
saneado y su reposición, utilizando morteros endu-
Por ello, hay que insistir en los estudios previos de
recidos mediante resinas acrílicas o epoxídicas, o
los productos a utilizar antes de proceder a la limpieza,
armados con malla de fibra de vidrio o poliéster.
así como al pronto secado una vez terminada la
operación. Cabe mencionar que las reposiciones de mortero
deben afectar, siempre, a planos o elementos
completos, llegando hasta líneas modulares o cambios
de piano, para evitar la aparición de uniones difíciles
4.5 De los organismos de disimular.
La aparición y asentamiento de organismos en una
situación de alto nivel de exposición, como son los 4.6.2 De las erosiones físicas
aleros y las cornisas, se debe, básicamente, a dos De nuevo una lesión secundaria con origen en la
factores fundamentales; falta de mantenimiento y humedad previa cuya reparación deberá pasar por la
humedades previas. Sólo en los casos de insectos eliminación de la humedad que la ha propiciado. Una
xilófagos en aleros, la causa puede ser independiente vez reparada ésta y saneada toda la superficie afectada,
de esas, aunque sin duda, también la facilitan. se analizará la integridad resultante del elemento
En cualquier caso, las actuaciones de reparación constructivo, a la vista de la cual se decidirá:
se orientarán a eliminar la causa antes de actuar sobre -Sustituir el elemento por otro nuevo, de similares
el efecto. características aparentes pero, a ser posible, de mayor
En lo referente al mantenimiento, habrá que resistencia a la intemperie,(menor coeficiente de
capitulo iV. Patología de cubiertas

absorción y mayor resistencia a la helada) con


posibilidad de armado.
-Reparación del elemento por medio de productos
especiales denominados, comúnmente, morteros de "V.

reparación, a base de mezclas de aglomerantes


hidráulicos, resinas y pigmentos minerales. Se utilizan,
sobre todo, para reparar morteros y piedras y hay que
seguir fielmente las instrucciones del fabricante.
-Proteger el elemento afectado, si el daño ha sido
muy ligero, mediante productos selladores o
endurecedores hidrofugantes, a base de resinas
acrílicas o epoxídicas, o de siliconas, que taponan los
poros superficiales y endurecen el material.
38. Chapado de cornisa reanclado.

4.6.3 De las erosiones químicas


La actuación para su reparación deberá seguir
diferentes pasos: -proteger la superficie con pintura, selladores o
-Anulación de la humedad y de los organismos que endurecedores
sean origen de la lesión. Para alicatados
-Análisis químico del compuesto resultante de la -demoler toda la zona afectada (puede ser la
erosión con diagnóstico de los productos químicos totalidad)
que han colaborado a ella, tanto por parte del material -reponer el alicatado, cumpliendo las medidas de
constructivo, como del contaminante, sea éste prevención
atmosférico u orgánico. Para chapados de piedra
-Análisis petroquímico y petrofísico del material -demoler las piezas irrecuperables y reponer
constitutivo del cerramiento, en caso de ser pétreo, -anclar las piezas recuperables mediante las
para, además de alcanzar el diagnóstico del párrafo soluciones indicadas en el capítulo correspondiente
anterior, conocer posibles consecuencias ante los (Fig.38)
productos que se puedan utilizar para la reparación. -posible sellado de uniones
-Saneado de toda la superficie afectada hasta Para canalones y elementos sueltos
eliminar todo el material erosionado y alcanzar la parte -reponer todas las piezas recuperables
sana del mismo. -sustituir las irrecuperables, cumpliendo las medidas
-Reparación, propiamente dicha, que seguirá de prevención
alguna de las alternativas enumeradas en la erosión - si el canalón no es realmente necesario, eliminarlo
física, es decir, sustitución del elemento constructivo, Para elementos de cobertura (tejas y losetas)
reparación del mismo mediante productos especiales, -eliminar todas las piezas rotas y reponer
-sujetar las piezas sueltas
o protección de la superficie mediante selladores o
endurecedores.
4.8 De las suciedades
4.7 De los desprendimientos
De acuerdo con lo indicado en el punto 2.8., las
Al ser, básicamente, una lesión secundaria, habrá actuaciones de reparación podrán ser:
que asegurar, en primer lugar, la anulación de la lesión -En aleros laterales, posible sustitución de la hilera
primaria que la ha originado, sea humedad (la más del borde de cobijas por canales, para evitar los
frecuente) grietas y fisuras u organismos. churretones.
Una vez hecho esto procederemos a la reparación -En cornisas con relieves y en impostas con planos
del desprendimiento siguiendo lo indicado en el capítulo inclinados hacia abajo, incorporación de goterones en
correspondiente que, esquemáticamente podemos todos los cambios de plano, mediante perfiles metálicos
resumir en: anclados o chapas que faciliten el alejamiento del
Para acabados continuos agua, además de evitar concentraciones de drenaje.
-sanear con generosidad hasta líneas modulares o Una vez realizadas estas operaciones, o
cambios de planos. simultáneamente, se procederá a una limpieza de los
-reponer el revoco, cumpliendo las medidas de paños afectados, de acuerdo con las prescripciones
prevención. incluidas en el capítulo correspondiente.
Tema 2. Aleros y comisas

5. Prevención -Vuelo suficiente de las canales sobre el canalón


(> 5 cms)
Como en otros capítulos, interesa recoger en este -Mantenimiento periódico, sobre todo limpieza
apartado todas aquellas medidas que nos ayuden a (cada 6 meses y después de tormentas)
eliminar la aparición de causas indirectas en los Si canalón oculto
procesos de diseño y ejecución y. por tanto, permitan -Cálculo de sección.
prevenir la aparición de los procesos patológicos -Inclinación suficiente.
enumerados; medidas que, en su mayoría, podremos -Bajantes suficientes.
deducir de lo descrito hasta el momento. -Continuidad de lámina impermeable sobre fila
Para ello, podemos realizar un breve recorrido por inferior de tejas.
los tipos de lesiones indicadas, recogiendo,
esquemáticamente, las medidas más importantes que, 5.1.2 En cornisas
como queda dicho, afectarán a decisiones de diseño En función de la localización
y ejecución puesto que el origen de las causas directas En albardillas: (ver fig. 29)
(función constructiva y alto nivel de exposición) son -Material impermeable.
inevitables. -Inclinación hacia ambos lados (> 20%).
Goterón en ambas vertientes al primer cambio de
plano.
5.1 De humedades de filtración
-Sellado de juntas si las piezas tienen una dimensión
5.1.1 En aleros (Fig. 27) superior a 40 cms.
En función del sistema de drenaje, tendremos: -Retacado de juntas con mortero de cemento
Si caída libre de agua enrasado, para piezas menores.
-En aleros frontales En impostas y molduras horizontales, mismas
-vuelo suficiente de las tejas canales (> 5 cms) en exigencias que albardillas y además: (ver fig. 30)
función de los vientos dominantes -Resalto de 5 cms. en encuentro con paño vertical
-Inclinación máxima posible para chapas metálicas.
-goterón incluido, si es posible -Sellado con elastómeros en dicho encuentro para
-En aleros laterales, preferencia de piezas canal piezas cerámicas o pétreas.
para la hilera de borde, o pieza especial con protección En encuentro entre faldón y peto en terraza plana,
incluida ejecución de mimbel (zabaleta) cumpliendo, por lo
Si canalón visto menos: (ver Fig. 31).
-Consideración previa de la necesidad real de -Resalto vertical de 15 cms. del borde del faldón,
canalón. En realidad, el canalón es imprescindible en independiente del peto.
muy pocas ocasiones; cuando es preciso recolectar -Interrupción de la membrana impermeable en el
el agua para su uso o cuando su caída estorba el borde del resalto, sin llegar al peto.
paso de personas. Sin embargo se ha generalizado -Cuando la membrana impermeable no esté adherida
la idea de que el canalón evita la acción erosiva del (caso corriente en las de PVC) posible sujeción al peto
agua sobre la fachada, lo que muy pocas veces es mediante pieza especial sellada.
cierto. En cambio, el canalón puede introducir En sumideros:
numerosos problemas cuando no es suficiente o no -Colocación de rejilla resaltada (alcachofa) para
tiene inclinación o se obstruye la bajante. En definitiva filtrar la suciedad.
hay que diseñar preferentemente sin canalón y con -Limpieza periódica (> 6 meses).
vuelo suficiente del alero para, en su caso, preservar
la coronación de la fachada de la lluvia y evitar un 5.2 De humedades de condensación
mantenimiento costoso que, por esta razón no se
suele llevar a cabo. En estos casos, la única medida preventiva a tomar
-Cálculo de la sección necesaria en función de la será la eliminación del puente térmico en ese punto
zona pluviométrica, la superficie y la inclinación del asegurando la continuidad del aislante o de la barrera
faldón, así como del número de bajantes. de vapor, siempre que el resto del paño esté
-Sujeción adecuada correctamente calculado desde el punto de vista
-Inclinación suficiente t> 1,5%) o aumento del número higrotérmico y nos aseguremos que no se producen
de bajantes humedades de condensación intersticial en las
•Separación del paño vertical (> 5 cms) condiciones más desfavorables.
capitulo IV Patología de cubiertas

Comoquiera que en los aleros es muy frecuente el 359


hecho de que el forjado sobresalga hacia el exterior,
imposibilitando la continuidad del aislante, éste deberá
colocarse hacia el interior, por debajo del forjado, la
distancia suficiente como para anular el posible puente
térmico. (Fig. 36)

5.3 De grietas y fisuras - O

Atendiendo a las lesiones previsibles enumeradas


más arriba (2.3) tendremos:
-Para evitar las grietas horizontales en el encuentro " sJ
del peto con el forjado (Fig. 39):
39. Prevención de grietas horizontales.
-Independencia constructiva del cerramiento vertical
con respecto a la estructura, incluso holgura suficiente,
de tal modo que los movimientos de la estructura no
afecten al cerramiento. En cualquier caso, procurar no
asentar el peto sobre el forjado sino sobre el cerramiento
vertical inferior.
-En caso de que el peto apoye sobre el forjado y,
por tanto, se mueva con éste, (J.o.)
"marcar una junta de dilatación horizontal
coincidiendo con la línea inferior del forjado (punto por
donde, previsiblemente, rompería)
•colocar una imposta coincidiendo con esa misma,
a base de piezas sujetas al peto
JUNI» OE RETRACCION -
"resolver el peto con piezas prefabricadas que pasen
por delante del forjado 40. Prevención de grietas verticales.

"acabar todo el frente mediante planchas aislantes


superpuestas por el exterior, protegidas con revoco
armado
En cualquier caso, limitar la flecha absoluta de la
estructura horizontal a un máximo de 8 mms. preventiva a tomar, además de evitar las humedades,
-Para evitar las grietas verticales, tanto en aleros será el exigir y comprobar la ausencia de sales solubles
como en cornisas (Fig. 40). en los materiales constitutivos del elemento constructivo
"Introducir juntas de retracción, complementarias y de sus acabados. Concretamente, habrá que utilizar
ladrillos y bloques calificados como no eflorescibles,
a las de dilatación de la estructura, en función del
al igual que usar arenas preferentemente silíceas para
material constitutivo y del salto térmico previsible,
los morteros.
limitando en valor absoluto las dilataciones a un máximo
de 5 mm.
"Reforzar los petos en esquinas mediante el aumento 5.5 De organismos
de su sección y asegurando su enjarje
De modo similar al caso anterior, se tratará, en primer
-Para evitar las fisuras en petos, en general, re- lugar, de evitar cualquier tipo de humedades. Además,
forzar el acabado continuo mediante mallas de y con carácter específico:
poliéster o fibra de vidrio protegida contra el ataque -Evitar cl uso de materiales porosos, sobre todo en
de los álcalis. planos horizontales.
-Tratar con productos insecticidas y fungicidas
5.4 De eflorescencias cualquier elemento leñoso en esa zona.
-Mantenimiento periódico con atención a la limpieza
Teniendo en cuenta su posible origen, la medida de rincones.
Tema 2. Aleros y comisas

360 5.6 De erosiones -Ausencia, en lo posible, de plataformas horizontales


que permitan acumular suciedad de depósito.
5.6.1 De erosiones mecánicas
-Introducción de goterones en todos los cambios
Debemos procurar el empleo de materiales
de plano y. sobre todo, antes de planos inclinados
resistentes a la abrasión en zonas especialmente
hacia abajo.
expuestas a la erosión eólica.
-Eliminación de todas las posibles concentraciones
5.6.2 De erosiones físicas de escorrentías.
Además de evitar cualquier tipo de humedad como
origen de la lesión, habrá que tener en cuenta, de un
modo específico lo siguiente:
Bibliografía
-Evitar el uso de materiales de alto coeficiente de
absorción superficial. -Curso de Rehabilitación (10 tomos) C O A M 1987
-Evitar el uso de materiales heladizos. -"Defectos comunes". H.J. ELDRIDGE. De G.G. 1982
-Proteger, desde el comienzo, los materiales porosos "El deterioro y conservación de materiales porosos de construcción
medíante productos selladores y endurecedores. de monumentos", T. STAMBOLOV Y J.R.J. VAN ASPEREN DE BOER
-Evitar, dentro de lo posible, los rincones y los . U N A M 1984
elementos puntuales salientes. - "Ensuciamiento de fachadas por contaminación atmosférica". Análisis
y prevención. Universidad de Valladolid 1990. F. JAVIER LEÓN VALLEJO.
5.6.3 De erosiones químicas - "Estanquidad e impermeabilización en la edificación" (5 tomos).
De nuevo, además de evitar las humedades y de SCHILD, OSWALD ROGIER ETA 19/'8
considerar los condicionantes del punto anterior, habrá -Fallos en los edificios. Consejo general de Aparejadores y Arq.
que realizar un estudio previo de los posibles Técnicos, 1982. LYALL ADDLESON.
contaminantes ambientales y sus reacciones con los -"Las humedades en la construcción". FEDERICO ULSAMER. CEAC
materiales constitutivos para, 1979
-no utilizar los materiales atacables - "Las humedades en la construcción". Sus causas y remedios. R.T.
-protegerlos superficialmente con selladores GRATWIC. E.T.A., 1976
-"Lesiones en los edificios": sintomas, causas, reparación (2 tomos)
5.7 De desprendimientos CEAC 1981
-"Patología de la construcción". FRIEDRICH EICHLER. Ed. Blume
Las medidas preventivas para este tipo de lesiones 1977
son las generales comentadas en el capítulo -"Patología de las fachadas urbanas". ETSA Valladolid Dep. de
correspondiente y a ellas nos remitimos. Construcción , Universidad de Valladolid 1987
-"La rehabilitación de edificios urbanos". A.BAGTIONI Y G.

5.8 De suciedades GUARNEIRO. Ed. G.G. 1988.


-"Ruinas en construcciones antiguas". GABRIEL LÓPEZ COLLADO,
Asimismo, debemos remitirnos a las medidas MOPU 1976.
preventivas descritas en su capítulo, aunque como "Patología de Cerramientos y acabados arquitectónicos". JUAN
más específicas debemos mencionar: MONJO CARRIÓ. Ed. Munilla-leria. 1994.
capitulo IV. Patología de cubiertas

3. Daños y reparación de cubiertas


Pedro Galindo García


Dr. Arquitecto
Profesor Titular E.T.S.A. - U.P.M.

Esta tipología se establece en unos principios de


1. Introducción
lógica constructiva:
Estas notas que se recogen a continuación en tres a) Clasificación de los componentes con arreglo a
capítulos, corresponden a otras tantas charlas im- criterios tales que den lugar a invariantes constructivas,
partidas en la E.T.S.A.M., sobre comportamiento, da- aunque los materiales que los constituyen sean
ños y propuestas de reparación de cubiertas. heterogéneos.
Es obvio, que no se trata por lo tanto de un estudio b) Respuestas parejas ante las solicitaciones más
pormenorizado y profundo sobre la patología de las características.
cubiertas, dado que su extensión rebasaría los límites La expresión de los daños será la propia de los
materiales con los que esté resuelto el componente
de lo que puede exponerse en tan corto espacio de
afectado, pero siempre responderá a la solicitación
tiempo. Más bien se intenta dar una visión generalista
que esté actuando sobre él.
de los problemas que afectan a las cubiertas,
La clasificación tipológica se va a establecer en
acompañados de unas propuestas de intervención
base a las siguientes consideraciones:
que sirvan para establecer criterios aplicables tanto
en las operaciones de reparación, como en las
propuestas de proyecto de obra nueva. - Naturaleza de la base estructural y sus tipos.
-Condiciones constructivas del sistema.
En el capítulo anterior se han analizado los -Solución de la estanqueidad.
componentes de las cubiertas en lo que concierne a
sus tipos, comportamiento ante las distintas Se proponen tres tipos que recogen las condiciones
solicitaciones y daños que pueden inferirse de éstas. anteriores, sin considerar, como ya se ha indicado, la
Este estudio se ha realizado contemplando a cada naturaleza de los materiales.
componente independientemente de los otros y del
conjunto de la cubierta; es decir, cómo reacciona cada
TIPO I. Cubiertas de faldón estructural.
uno de ellos ante las acciones que les afectan, ya sean
La base estructural se resuelve mediante elementos
éstas de tipo directo o transferido, en casos.
lineales con pendientes variables. Los enlaces de unos
Se trata ahora de efectuar la misma labor sobre las componentes con otros suelen ser someros e
cubiertas consideradas un conjunto de componentes. independientes. La estanqueidad se resuelve mediante
Nos encontramos con la enorme dificultad del piezas pequeñas, formando una cobertura de tipo
incontable número de soluciones que habría que discontinuo que funciona mediante pendiente-solape.
analizar. Por lo tanto, llegados a este punto, es necesario TIPO II. Cubiertas de doble hoja. Ventiladas.
proponer una tipología de las cubiertas que nos permita Los elementos estructurales son de tipo superficial,
simplificar el estudio de su comportamiento como generalmente forjados, con pendiente cero. La
tales, así como las relaciones que se establecen en escorrentía se logra mediante recrecidos sobre (os que
su funcionamiento entre unos componentes y otros. se apoyan tableros de distintos materiales. La cobertura
Tema 3. Daños y reparación de cubiertas

362

TIPO DE BASE SISTEMA SOLUCION Dh


CUBIERTA ESTRUCTURAL CONSTRUCTIVO EíiTAMJIJIW)

FALDON Elementos lineales Cobertura discontinua Pendiente srJope

ESTRUCTURAL Pendiente variable Soporte liberado de la

10' < p< 90° estructura

VENTILADA Elementos superficiales Cobertura discontinua Pendiente solape

pendiente • 0" Soporte continuo


Tabicas interpuestas

NO VENTILADA Elementos superficiales Cobertura continua Membranas

Pendiente variable Soprte continuo soldadas

0"< p < 90" adherido a la base

CUADRO 2.1

está formada por pequeñas piezas sueltas o recibidas solicitaciones que se estiman más frecuentes y de
con morteros. mayor incidencia sobre las mismas que, así mismo,
TIPO III. Cubiertas de una hoja. No ventiladas han quedado concretadas. Por último, apoyándonos
Las estructuras de apoyo suelen ser, en la ma- en el análisis desarrollado en el capítulo
yoría de los casos, forjados con pendiente va- Comportamiento y diagnóstico de las cubiertas se
riable, aunque las soluciones más comunes tienen podrá establecer una sistemática entre solicitaciones-
pendiente cero. En estos casos, la escorrentía se daños-propuestas de reparación.
logra mediante recrecidos de materiales aligerados, En el estudio que se va a realizar se tendrá en cuenta
íntimamente relacionados con la base estructural. La el comportamiento de cada componente ante las
estanqueidad se logra mediante membranas soldadas solicitaciones que más le afectan, y cómo este
continuas. componente dañado incide sobre los otros.
En el Cuadro n° 1 se recoge el resumen de los tipos
antes definidos. Es claro, que en esta tipología no
entran, o al menos, lo hacen de forma muy tangencial
algunas cubiertas cuyas propuestas contienen un alto 2. Cubiertas de faldón estructural
grado de singularidad, tanto en lo que concierne a su
diseño como a los materiales que las conforman. De los tres grupos que se han establecido, este es
sin duda el que mayor número de soluciones aporta,
En el siguiente paso se hacen incidir las solicitaciones
tanto desde las propuestas constructivas, como de
más habituales sobre cada uno de los tipos de cubiertas
los materjales utilizados.
antes definidos. Las agrupamos en tres clases según
su origen: Una cubierta resuelta con cuchillos de par y pendolón
de madera, correas y ripia del mismo material y cobertura
de teja cerámica, ante solicitaciones de penetración,
-Climatológicas:Agua-Nieve. Viento. Soleamiento.
-Mecánicas: Cargas-Sobrecargas. Diferencias de sea agua o viento, va a tener la misma respuesta que
temperatura. la formada por vigas peraltadas prefabricadas de
-Acciones traumáticas de procedencia no controlada. hormigón pretensado, correas de hormigón y cobertura
de fibrocemento. Las diferencias se van a establecer
en las acciones trasmitidas, en cómo inciden sobre los
Este planteamiento, permite la asociación de las
distintos materiales que las forman.
cubiertas en tres tipos que van a dar unas respuestas
muy similares por sus propias características Siguiendo el criterio de análisis establecido pasamos
constructivas. Por otro lado, la acción de las a estudiar este tipo de cubiertas.
capitulo ¡V Patología de cubiertas

2.1 La cobertura que sería la penetración del agua; bien por acción
combinada, bien por alteración de la estabilidad del
Como es obvio, la función principal de la cobertura material de cobertura.
es impedir el paso del agua en sus diversas formas, La penetración directa del viento queda parcialmente
(lluvia, nieve, rocío,etc.) además de conseguir un paliada en las cubiertas, en las que la cobertura ha
acabado y aspecto determinado de la coronación del sido realizada sobre un tablero. En aquellas que carecen
edificio. de soporte, caso de las realizadas en materiales tales
En este tipo de cubiertas, ésta función se realiza como fibrocemento, poliéster, chapas plegadas u
mediante piezas de tamaño pequeño o mediano onduladas, etc. puede entrar agua de forma directa,
yuxtapuestas. Se logra la estanqueidad por la entre las juntas.
combinación de la pendiente del faldón y la longitud Las acciones correctoras de carácter general se
del solape de dichas piezas,(tejas, pizarra, piedra, centrarían en:
fibrocemento.etc).
Estas peculiares condiciones constructivas -Mejora del anclaje y posición de las piezas.
nos llevan a las siguientes situaciones de com- -Sellado de juntas en los materiales que lo permitan.
portamiento:
Dado que la acción del viento produce daños, del
2.1.1 Acción del agua mismo género que otras solicitaciones de carácter
Esta acción en sí, no produce daños sobre la traumático, creando vías de penetración de agua,
cobertura, se presupone que la cobertura está dañada, cuyos efectos están contemplados en el apartado 2.1.1
sea por rotura de piezas o por desplazamiento de las se han recogido al final del punto 2.1 algunas propuestas
mismas debidos a otras acciones, lo que va a crear de reparación que contemplen conjuntamente esta
vías de penetración de agua. Más que a la propia problemática.
cobertura afecta a los otros componentes, cuyos
daños se expresarán de una manera u otra, según 2.1.3 Acción del soleamiento
los materiales que se hayan utilizado para su Este fenómeno produce efectos de envejecimiento
realización. en los materiales. Los usados en el tipo de cubiertas
La madera sufrirá deterioros que sucesivamente que estamos analizando no son todos degradables,
producirán pudricíones, alabeos, deformaciones. ya que la mayoría son de origen pétreo, cerámico, o
El acero quedará afectado por un proceso progresivo derivados del cemento. Solamente los de componente
de pérdidas de protecciones, corrosiones, disminución metálico quedan afectados por el soleamiento.
de la capacidad resistente, etc. Las acciones de reparación se dirigen a recuperar
El hormigón armado, cuyo estado de trabajo supone las protecciones de los acabados, o en el peor de los
estar fisurado, puede sufrir corrosiones de las casos a la sustitución de piezas excesivamente
armaduras, expansión de las mismas, y pérdida de dañadas.
capacidad portante.
Un daño de menor cuantía, como es la rotura o 2.1.4 Acción de cargas y sobrecargas
desplazamiento de unidades pertenecientes a la Nunca se estiman sobre la cobertura acciones de
cobertura, con fáciles soluciones de reparación puede tipo mecánico en forma de cargas y sobrecargas. En
llevar a situaciones complicadas y costosas. las consideraciones de visitas de personas por
Se proponen como criterios de actuación mantenimiento, se propone una carga puntual de 100
con carácter general ante este tipo de daños los Kg. actuando directamente sobre las correas, u otro
siguientes: elemento resistente.
Los daños derivados del paso de personas o cargas
- C o n t r o l p e r i ó d i c o del e s t a d o de la c u b i e r t a . de cualquier tipo sobre la cobertura, se considerarán
Mantenimiento. como acciones traumáticas no controladas.
-Recuperación del estado funcional de la cobertura.
-Mejora de la e s t a n q u e i d a d por p r o c e d i m i e n t o s 2.1.5 Acción de la temperatura
complementarios. Esta solicitación, siempre la vamos a considerar
bajo la forma de un diferencial de temperatura, es decir,
como el agente que produce los movimientos de
2.1.2 Acción del viento alargamiento-acortamiento de los diferentes materiales
Esta solicitación tiene dos efectos, uno de carácter y sistemas de la cubierta.
directo, la propia penetración del viento, y otro indirecto, Este problema no afecta en forma determinante a
rema 3 Daños yreparación de cubiertas

los sistemas de cobertura que estamos estudiando, pendiente y solape se puede solucionar aumentando
dado el pequeño tamaño de las piezas y la liberalización la longitud del mismo mediante una actuación
de unas respecto a las demás. generalizada sobre la cubierta. En algunos casos, que
No obstante, en aquellas soluciones cuyas piezas asi lo permitan, es más eficaz la sustitución de la
se anclan mecánicamente y dos o más en el mismo cobertura.
mecanismo de sujeción, se pueden producir desgarros -Membranas. Podemos considerar esta solución
de los materiales. como un caso límite ante problemas de penetración
El problema se corrige incorporando las tolerancias de agua, por un generalizado mal comportamiento de
dimensionales que para cada material y tamaño de la cubierta originado por falta de pendiente. Agotadas
pieza sea precisa para absorber los movimientos otras posibilidades, esta propuesta nos lleva a levantar
relativos. toda la cobertura, y siempre que las características
del soporte lo permitieran, extender una membrana
2.1.6 Acciones traumáticas impermeabilizante sobre el mismo. En caso contrario,
Estas solicitaciones imprevisibles en el diseño uso debería adoptarse un nuevo soporte. Como se pude
y mantenimiento de las cubiertas, tienen múltiples ver una acción compleja y costosa.
procedencias. El tránsito de personas no expertas, la
incorporación incontrolada de equipos de instalaciones, 2.2 El soporte de la cobertura
anidamientos de aves, etc.
Su corrección corresponde a intervenciones de uso, Ante el pequeño tamaño de las piezas que forman
mantenimiento y conservación, y por lo tanto deberían la cobertura, se necesita un plano de apoyo entre los
recogerse en un plan de mantenimiento. Como elementos lineales de la estructura y la susodicha
recomendaciones de carácter preventivo y curativo, cobertura. No obstante, encontramos cubiertas
podrían citarse: adscritas a esta tipología cuya cobertura es capaz de
salvar las luces entre sus apoyos, tal es el caso de los
-Manual de tránsito de personas por la cubierta. fíbrocementos, chapas de acero, poliéster, etc.
-Previsión de la posición de nuevos equipos de Este componente tiene relación inmediata tanto con
instalaciones. la cobertura como con la base estructural, por lo que
-Tipología de anclajes. Solo a elementos estructurales. se ve afectado por acciones transmitidas de tipo muy
-Soluciones de estanqueidad para estas implan- diverso. Así puede verse sometido a problemas de
taciones. tipo térmico, de penetración de agua, de movimientos
-Propuestas ecológicas para el desarraigo de aves. y deformaciones derivadas de la estructura, por lo que
el requisito más importante del soporte va a ser la
Las soluciones concretas suponen el desarrollo de compatibilidad con el resto de los componentes.
un pequeño proyecto de implantación, que introducirá
en cada caso las especificaciones a que dieran lugar 2.2.1 Solicitaciones de tipo climatológico
los materiales, y el procedimiento constructivo de cada Se recogen en este apartado las acciones de agua,
cubierta afectada. viento y soleamiento cuya incidencia es siempre
Como operaciones de carácter concreto a llevar a transmitida desde el exterior a través de la cobertura,
cabo en la reparación de los daños anteriormente debido al mal funcionamiento de la misma, como ya
citados se proponen: vimos. Su corrección obliga a actuar sobre las causas
origen del daño, como ha quedado visto.
-Retejos. Operación de sustitución de elementos Cuando el soporte ha quedado dañado, su
dañados que puede llevarse a cabo por unidades corrección nos lleva a sustituciones parciales o de la
sueltas, parcialmente o en la totalidad de la cubierta, totalidad de la cubierta, manteniendo los materia-
ante roturas, pérdidas de posición de los elementos, les y técnica original. Lo más correcto, una vez
etc. efectuado el levantamiento de la cubierta a ese nivel,
-Anclajes. Actuación de tipo general, es decir sobre es introducir una solución con nuevas técnicas y
toda la cubierta, debida a pérdida de solapes, y de materiales siempre que sean compatibles con el resto
posicionamiento de las piezas de la cobertura. Consiste de los componentes.
en la mejora de la fijación de las piezas al faldón Esta práctica de sustitución de soportes de la
mediante recuperación y/o sustitución del sistema cobertura es bastante corriente en cubiertas de madera
existente. En este caso, la nueva fijación debe ser de edificios de los cascos antiguos de las ciudades.
compatible con el tipo de material y con la pendiente. Una vez levantada la cobertura y el tablero de ripia, y
Solapes. La falta de una relación correcta entre partiendo de una base estructural en buen estado, se
capitulo IV Patología de cubiertas

colocan tableros hidrófugos de madera directamente 2.3.1 Acciones de comportamiento mecánico


sobre los pares, (picadero o hilera) previa nivelación Los daños procedentes de este tipo de
del plano de apoyo, se protege con una membrana solicitaciones, tienen siempre expresiones traumáticas
impermeable de terminación rugosa, cerámica o y además suelen desarrollar secuencias de deterioro
mineral, sobre la que se fijan de nuevo las piezas de progresiva lo que permite su detección, y mediante
cobertura recuperadas o nuevas. un análisis precoz, pueden ser reparados antes de
llegar a una situación irreversible.
2.2.2 Acción de la temperatura La forma más correcta de abordar estos problemas
Las consideraciones tenidas en cuenta en el es recurrir a un peritaje de cálculo y comportamiento
apartado 2.1.5 son también válidas para este caso. a deformación de la estructura, incluso con aportación
Nos encontramos en una situación muy pareja. de datos del estado y características actuales de los
Generalmente, los tableros están realizados con piezas materiales, obtenidos mediante ensayos de información.
relativamente pequeñas y fijadas a la base estructural En todos los casos, este comportamiento defectuoso
independientes unas de otras, con lo que son muy se debe a una incorrecta relación entre las acciones
poco sensibles ante esta solicitación. y el dimensionado de la pieza, cuya causa puede ser
Debe tenerse en cuenta, también en este caso, debida a múltiples motivos, podemos citar:
las soluciones consistentes en anclar varias piezas
medíante un solo elemento de fijación común a to-
-Incorrecta evaluación de las posibles cargas actuantes.
das ellas, que puede impedir el desplazamiento de
-Aumento de cargas no previstas en el cálculo.
unas respecto a otras. Su corrección es la considerada -Alteración de las características mecánicas de los
en 2.1.5. materiales. Corrosión.
-Deformaciones diferidas no previstas. Flechas diferidas
2.2.3 Acción de cargas y sobrecargas en hormigón.
Esta solicitación no es determinante en el -Soluciones de enlace en apoyos no correctas, etc.
funcionamiento del soporte, pues suele estar resuelto
con piezas pequeñas que se apoyan sobre elementos
estructurales muy próximos, y por su rigidez admiten Aún sin llegar a un estudio profundo de cálculo
las solicitaciones producidas por las cargas podemos establecer unos principios básicos de
permanentes y las sobrecargas de nieve y viento. actuación mediante la utilización de la lógica
No obstante, ante cargas traumáticas no constructiva:
controladas, pueden producirse roturas que llevan
correcciones de sustitución, bien de la pieza dañada,
(caso del fibrocemento) o de paños completos con -Aligeramiento de las cargas de la cubierta, mediante
levantamiento previo de la cobertura. sustitución de la cobertura y soporte, por otros
materiales más livianos, que sean compatibles con el
resto de la cubierta.
2.3 La base estructural -Refuerzo de la estructura aumentando su capacidad
portante mediante acoplamientos de materiales idóneos
Por definición, en estas cubiertas los componentes a la solicitación que la afecta.
estructurales se resuelven mediante soluciones lineales, -Estabilización de las soluciones de enlace de las
más o menos complejas, sobre las que se extienden barras.
los tableros de apoyo de la cobertura. Estas estructuras -Mejora de los sistemas de apoyo, posibilitando
tienen una doble función; ser el elemento portante de desplazamiento y giros de los mismos.
la cubierta y proporcionar la Inclinación apropiada al
faldón.
Las acciones que se han venido considerando sobre
los anteriores componentes, se pueden concretar en
dos sobre la estructura: 2.3.2 Acciones de penetración
Al considerar la acción del agua en el apartado
-Solicitaciones que tienen una respuesta de carácter 2.1.1 se han establecido las consecuencias inmediatas
mecánico. Cargas, sobrecargas, viento, temperatura, de este agente sobre tres tipos de materiales básicos
etc. en la propuesta constructiva de estas cubiertas,
-Solicitaciones que afectan a las propiedades (madera, acero, hormigón). Las consecuencias se
intrínsecas de los materiales. Fundamentalmente traducen en pudriciones, corrosiones, roturas, etc.
penetración de agua. que afectan a las características de los materiales y
Tema 3- Daños y reparación de cuóienas

366 de forma directa a su capacidad resistente. En este uno de los componentes de las cubiertas de faldón
caso nos remitimos a lo indicado en el apartado estructural que hemos analizado.
anterior. Estos tres cuadros se han ordenado en
Las penetraciones de agua dan lugar a procesos consideración al material con el que se resuelve la
más lentos y menos ostensibles que las solicitaciones base estructural. Se hace un recorrido, en cada uno
de cargas. Se pueden controlar mediante un plan de de ellos, por los distintos componentes.
mantenimiento, como ya se ha indicado. Las La lectura de los cuadros es inmediata. Cada uno
reparaciones, si los daños no han afectado aún a la consta de cuatro columnas:
estructura, son muy fáciles, eficaces y poco costosas,
en tanto en cuanto se produzcan sobre la cobertura
o el soporte.
-La primera determina el componente.
-La segunda lista los elementos más característicos
2.4 Cuadros resumen de cada componente.
-La tercera señala los posibles daños que les afectan.
Se presentan a continuación tres cuadros n.° 2 , 3 -La cuarta propone algunas soluciones ante estos
daños.
y 4 resumen, en los que se hace un recorrido por cada

ELEMENTO DAÑO ACTUACION

l.l.-BASE III- APOYOS ASIENTO. FRACTURA * Aapliacioa zona apoyo R


ESTRUCTURAL EMPUJES * EliaaiaU apatizante. Separación. — R
PUDRJC IONES * StMdC / Refaorw I Ventilación R

11.2.- PARES PUDRICIONES * Refuerzo. Acr^aMoatoa


TIRANTES SECCIÓN [NSUFICLENTE Refuerza. AtfUmUin—
CORREAS

113.- CUCHILLOS DESAJUSTE DE NUDOS Refuerzo de nudos


F r o t a n general R
Sustitución S

1.14- AUXILIARES Refaerzo. Analailaala»

1.2.-SOPORTE 12.1- PARECILLOS PUDRICIONES ' Refaerzo. InterpaaiciOB _


TABLERO SECCIÓN INSUFICIENTE . Sustitución

1.2 2.- TABLERO PUDRICION * Susti tocios: T . Aglomerados N


"Onaefai"+Tablero»_ N
íirEtdiiM^-Onduiinc _ N

MOVIMIENTOS Anclaje. SajetioB.

O . - AISLAMIENTO 13 1- AISLAMIENTO NO EXISTENCIA * uscot-poreción citerior (C.N.V.) _ N


TÉRMICO * Incorporación interior (C.V.) N

1.4.-COBERTURA 14.1- DISCONTINUA PÉRDIDAS DE PIEZAS Retejaste , R


ROTURAS Retejada R
MOVIMIENTOS Nueva ordenación. Sujeción S
PENETRACIONES I Pendiente / Solape . __j— R
I * incorporación membrana N
ENCUENTROS / BORDES * Solución cenaL -Geometría" N

CUADRO 2.2 Procedimiento constructivo: MADERA


capitulo IV. Patología de cubiertas

367

ELEMENTO DAÑO ACTUACION

2.1.- B A S E 2 11- APOYOS ASIENTO FRACTURA Ampliación L M I apoya. R


ESTRUCTURAL EMPUJES " Fiemen lo desloaste. Apoyo. R
CORROSIÓN Protección. Reíaarz» R

2 12- PARES CORROSION Protección. Reinaría. R


TIRANTES SECCION INSUFICIENTE Refuerzo (Tipo ae acera). R
CORREAS

2.2.-TABLERO 22 1- TABLERO ROTURA FISURACION Refaerzo correal


SOPORTE SI CORREAS SECCIÓN INSUFICIENTE Moruro • aiaDa
(METALICAS) AUMENTO CARGAS Jauta». Cuartete». (amas, i i i m i . )

MOVIMIENTOS Soltar enlace* bordea. .


PENETRACIONES Mejorar eataaquidad (Mecnb.)

2 2 2- TABLERO ROTURA Sustitución (Ruina)


PREFABRICADO PENETRACIONES Mejora ettanquidad (Memb.l

2J.- TABLERO 23 1- FIBROCEMENTO ROTURA Sustitución (P. y/o T.) _ . S


COBERTURA CHAPA PENETRACIONES Mejora solape» y uniones ft
Estanquidad juntas R
Estanquidad anclajes . K

2.4.-A1SLANTE 24 1- AISLAMIENTO DETERIORO


TÉRMICO - Tablero soporte * Incorporación citerior ( C L ) N
- Tablero cobertura * lncorp. eiteriar • 2* cebes-tara N

NO EXISTENCIA
- Tablero soporte lncorp. C I L ( C L ) <5«A N
lncorp. eiL + 2'cobes-L N
• lncorp. int (C.V.) N

- Tablero cobertura . lncorp. eiL + 2 ' cobert. N

lncorp. ioL (C.V.) N

2.5.- C O B E R T U R A 2.5 I - DISCONTINUA (VER I 4 1.)


(>20%)

CONTINUA (VER CUBIERTAS


NO V E N T I l A D A S l

CUADRO 2.3 Procedimiento constructivo: A C E R O


Tema 3 Daños y reparación de cuoiertas

368

ELEMENTO DAÑO ACTUACIÓN

3.1.- BASE 31I- VIGAS PRJNC DANOS MECANICOS


E.STR I ICTirR.A L - Flexjon PoitCMdo ( l U f W .
• Refuerzo pletinas • R. Epos. R
• Conante * Refuerzo piedla i • R. Epoi — R

3.1.2 - CORREAS DAÑOS MECANICOS Sustitución ,

3 13 - PLACAS DANOS MECANICOS * Estructura auiüiar .

3 14- APOYOS ASENTO FRACTURA Ampliación una apoyo R


EMPUJES • Neo preño» • "Cato" R

3.2.- S O P O R T E 3 2 TABLERO ROTURA FISURACION Mortero • mili» R


TABLERO & CORREAS SECCION INSUFICIENTE Juntas. Cuarteles (mas.. 3i3 rn2.)

MOVIMIENTOS Soltar enlaces bordes . R


PENETRACIONES Mejora estanquidad (Memb.) R

3 2 2.- TABLERO ROTURA Sustitución S


PRFFABRJCADO PENETRACIONES Mejora estanquidad (Memb.) R

3J.-SOPORTE 33 1- FIBROCEMENTO ROTURA Sustitución (P. y/o T. ) S


COBERTURA PENETRACIONES Mejora solapes y uniones R
Estanquidad juntas R
Estanquidad anclajes R

J.4.- AISLAMIENTO (VER 2.4.)


TÉRMICO

3.5.- C O B E R T U R A (VER 2 5.)

CUADRO 2.4 Procedimiento constructivo: HORMIGON


capitulo IV. Patología de cubiertas

de las piezas entre sí. La fijación y estabilidad se logra


3. Cubiertas ventiladas
mediante morteros hasta una pendiente aproximada
Las cubiertas así denominadas constituyen un del 40%. A partir de este punto la fijación debe realizarse
grupo que tienen en común la misma ordenación mediante medios mecánicos.
constructiva de sus componentes, un comportamiento La cobertura tipo teja árabe y algunas planas, sean
térmico e hidrotérmico de la misma naturaleza en todas cerámicas o de mortero de cemento, se suelen fijar
sus variantes y la misma solución para lograr la mediante morteros de agarre.
estanqueidad. Las de fibrocemento, aleaciones ligeras, pizarra,
Como ya quedó fijado al establecer el agrupamiento zinc, etc. siempre por medios mecánicos, indepen-
de las cubiertas, sus componentes -base estructural, dientemente de la pendiente. El elemento sustentante
soporte y cobertura- se resuelven bajo estas premisas: podrá ser el propio tablero con terminación de mortero,
-La base estructural está formada por planos rastreles, o capas de yeso maestreado de 40 mm. de
completos -forjados- con pendiente cero, horizontales. espesor.
-El soporte de la cobertura, lo constituyen planos
continuos de muy diversa naturaleza, tanto en lo que A) Acciones climatológicas
concierne a los materiales utilizados en cada caso, En el apartado 2.1. del capítulo anterior, se ha hecho
como a su ordenación y combinaciones posibles. Estos un análisis del comportamiento de estas coberturas
planos están separados de la base estructural mediante ante las acciones de viento, agua, soleamiento y
tabicas interpuestas, lográndose de esta manera la temperatura. Como recordatorio, se puede establecer
pendiente necesaria, y la cámara ventilada característica que:
de estas cubiertas. Es decir, la solución constructiva -El viento produce desplazamientos de las piezas
se ha realizado mediante dos hojas. de cobertura, con pérdida de posición y posibilidad
-La cobertura, generalmente, es de tipo discontinuo. de roturas, creando vías de penetración de agua y/o
En faldones con pendiente superior al 15%, sus nieve.
soluciones son similares a las cubiertas de faldón -El agua de lluvia o la nieve no afecta de forma
estructural (teja, pizarra, zinc, etc.). En las de pendiente directa a la durabilidad ni degrada a los materiales
inferior al 3% con tránsito de personas, suelen ser cerámicos, pétreos o derivados del cemento. No así
pavimentos cerámicos adheridos al soporte. a los metálicos a los que puede producir corrosiones.
Como acabamos de ver, la organización de Los mayores problemas causados por el agua provienen
estas cubiertas responden a soluciones muy si- de combinación con otras solicitaciones -viento, uso
milares, tanto en lo que respecta al proceso indebido de la cubierta, anidamientos, etc- que
constructivo como al comportamiento hidrotérmico. producen traumatismos permitiendo la penetración
Sin embargo, para conseguir un análisis más del agua.
minucioso de los daños se separarán las transitables -El soleamiento y las temperaturas, así como los
de las no transitables. cambios de las mismas, no afecta de forma
determinante a los materiales antes citados, sobre
todo teniendo en cuenta el reducido tamaño de las
3.1 Faldones con pendiente > 15%
piezas.
Las NTE-QT recogen este tipo de cubiertas, Prácticamente se pueden concretar los daños
mezcladas con otras constructivamente dispares, (de derivados de los agentes climáticos, como procesos
faldón estructural) bajo la denominación común de de pérdida de posición-vías de penetración- y
tejados. En este estudio, se incluyen solamente las humedades transmitidas a otros componentes.
que responden a las condiciones preestablecidas. Dado que este tipo de daños van a ser producidos
Estas cubiertas han tenido un campo de por otras solicitaciones de la cobertura, abordaremos
implantación muy limitado. Hoy día ha quedado más adelante las propuestas de reparación de manera
reducida su propuesta al ámbito rural y los edificios conjunta.
de tipo unifamilíar.
B) Acciones traumáticas
3.1.1 La cobertura Se incluyen en este grupo las solicitaciones
Las soluciones de este componente son similares procedentes de cargas no controladas sobre la cubierta,
a las de las cubiertas de faldón estructural; piezas de como pueden ser el tránsito de personas para
pequeño tamaño que logran la estanqueidad por mantenimiento, la implantación de equipos,
combinación de la pendiente del faldón y el solape nstalaciones diversas, etc. que suponen acciones
Tema 3. Daños y reparación de cubiertas

incontroladas sobre materiales muy frágiles que les del tablero, al cubrir con sus solapes estos posibles
producen movimientos, arrastres, roturas, etc. volviendo movimientos.
a la situación anterior de penetración de agua.
En todos los casos contemplados la expresión -Éstas situaciones no suelen ser fuente de graves
del daño nos conduce al mismo final: penetra- problemas. Se podrían disminuir los movimientos del
ciones de agua-humedad, que van a afectar de manera tablero incorporando por encima del mismo, una capa
más directa al soporte de la cobertura, aunque en de paneles de un producto aislante intemperie (célula
casos progrese el daño, llegando a otros cerrada) y volviendo a recuperar la cobertura a modo
componentes. de protección pesada.
Como criterios de reparación de los daños
producidos en/y por la cobertura pueden proponerse
actuaciones del tipo:
B) Penetraciones de agua
Siempre proceden de problemas originados en la
-Si la penetración de agua no ha progresado y por lo cobertura que han quedado reflejados en el apartado
tanto no están dañados otros componentes, a 3.1.1. Así mismo, se han recogido las propuestas de
excepción de la cobertura, se llevarán a cabo retejas actuación ante estos daños.
con mejora de los anclajes o del material dé agarre. Los sistemas constructivos actuales, proponen
-Cuando la penetración procede de una incorrecta
como tableros materiales degradables ante la acción
relación de la pendiente del faldón y el solape entre
piezas, siempre que la longitud máxima del solape lo del agua, como pueden ser los aglomerados. En estos
permita, puede llevarse a cabo una nueva ordenación casos, con mayor razón, deben protegerse los tableros
del material de cobertura, aumentando la longitud de con membranas.
solape.
-En ciertos casos, no se reunirán los requisitos para 3.1.3 La base estructural
realizar la operación antes citada. Debe recordarse Este componente, como ha quedado ya definido,
que en este.tipo de cubiertas, siempre existe un soporte está constituido siempre por planos completos sobre
que reproduce el plano completo de la cubierta, sobre los que apoyan los tabiquillos de recrecido. Los bordes
. el que puede aplicarse una membrana bituminosa, tradicionalmente se solucionan mediante aleros, es
. con la que se logrará mejorar la estanqueidad. decir, los forjados vuelan sobre ios cerramientos
verticales, separando totalmente la cubierta de las
fachadas.
3.1.2 El soporte de la cobertura La cubierta, por lo tanto, es una unidad completa,
Como ya quedó dicho, la cobertura de tipo e independiente del resto del edificio. Su único nexo
discontinuo, formada por pequeñas piezas, necesita de unión es la base estructural, cuya interferencia con
un plano completo de apoyo que constituye el soporte los paramentos verticales es ajeno a este estudio.
de la misma. Este plano se realiza mediante muy Al ser las dimensiones de los forjados relativamente
diversas técnicas constructivas. pequeñas, sus movimientos tienen una amplitud
Sobre el soporte, que en estas cubiertas le perfectamente asumible por los tableros. A su vez
llamaremos tablero, van a incidir fundamentalmente deben estar independizados de las tabicas, con lo que
dos tipos de acciones: las de origen térmico y las de alejan aún más la dependencia entre la base estructural
penetración de agua. y el soporte.

A) Acciones térmicas 3.1.4 Otras consideraciones


Los tableros tradicionales se realizaban c o n La base funcional de estas cubiertas es que posean
materiales cerámicos a base de dos roscas dobladas una cámara ventilada entre la base estructural y el
tomadas con yeso negro y mortero respectivamente. soporte. A veces, se han perdido o tapado las troneras
Hoy día se realizan mediante procedimientos con menor de ventilación, por lo que se pueden producir roturas
incidencia de mano de obra y cada vez más próximos de los tableros, por una mayor amplitud en los
a sistemas preindustrializados. movimientos de los mismos, o humedades de
En iodos los casos, este componente posee unas condensación interior.
condiciones de rigidez que ante demandas de. tipo
térmico va a responder con movimientos y en algunas La corrección de estos daños es inmediata. Supone
ocasiones con roturas. Las coberturas discontinuas la recuperación del funcionamiento de la cámara
van a absorber con facilidad este comportamiento ventilada.
capitulo IV Patología de cubiertas

Actualmente las NTE-QT recomiendan extender Era habitual en estas circunstancias calafatear las
mantas de material aislante sobre los forjados. En las grietas para impedir el paso de agua, encontrándose
cubiertas ventiladas anteriores a los años cincuenta, aún numerosas cubiertas reparadas de esta manera.
no existe tal componente por lo que es aún más Como es obvio, los betunes se endurecían volviendo
importante la ventilación correcta de la cámara. a aparecer las grietas y las penetraciones.
La forma de paliar los movimientos consistirían,
desde un plano de actuación teórico, en recortar el
3.2 Faldones con pendiente < 3%
tamaño de los cuarteles aproximando las juntas y
Este tipo de cubiertas tienen una gran tradición, eliminar de manera absoluta el rozamiento del tablero
aunque su utilización masiva surge para dar respuesta a las tabicas. Estas serían las condiciones ideales para
a una tipología edificatoria con continuidad de los su buen funcionamiento. Se proponen como medidas
paramentos verticales, eliminando los aleros y más realistas:
acroterios, permitiendo al mismo tiempo el tránsito de
personas. -Reducir la amplitud de los movimientos haciendo
La NTE-QAT contempla este tipo de cubierta que las diferencias de temperatura que inciden sobre
conjuntamente con ciertas soluciones de no ventiladas el conjunto cobertura-tablero sean menores. Esto se
transitables, en razón a su mismo uso, denominándolas logra protegiendo la superficie con aislamientos, que
tienen una acción directa sobre los componentes
azoteas. Esta clasificación por usos puede inducir a
perturbados. En ningún caso supone un cambio del
errores de interpretación ante las distintas soluciones comportamiento ventilado de la cubierta.
constructivas. -Al mismo tiempo, se corrige la penetración de agua
El proceso de análisis de los daños, sigue la misma extendiendo membranas impermeables flotantes, por
secuencia que las anteriores. lo que es muy recomendable que su sistema de fijación
sea no adherido. La posición de la membrana con
respecto al aislamiento puede sujetarse a un orden
3.2.1 La cobertura
convencional o invertido.
La diferencia más característica de estas cubiertas
con el resto de las ventiladas estriba precisamente en -Dado el uso transitable del que gozan estas cubiertas,
las soluciones antes indicadas se protegerán siempre
la cobertura, dado que tiene que permitir el tránsito
con pavimentos.
de personas. Este requerimiento se soluciona a base -Se insiste una vez más que estas soluciones no
de pavimentos tomados con materiales de agarre en suponen un cambio en el comportamiento del conjunto
toda la extensión del plano. de la cubierta, sino medidas para controlar los
Esta condición constructiva establece una movimientos, impedir el paso del agua y posibilitar su
dependencia total entre el soporte y la cobertura. uso transitable.

A) Acciones climatológicas B) Acciones traumáticas


En el caso que nos ocupa, no se considera la acción
Vienen generadas por el propio uso transitable de
del viento debido a la estabilidad del material de la cubierta, por implantación de instalaciones, por
cobertura, rígidamente conectado al soporte. Así acciones incontroladas como anidamientos u otros.
mismo, la incidencia del soleamiento sobre los Se expresan en forma de roturas parciales de los puntos
materiales cerámicos (baldosas) es prácticamente nula. más sensibles, generalmente las tabicas y baberos
El agente climatológico que más incide sobre perimetrales que producen la estanqueidad de la
el conjunto soporte-cobertura es la temperatura, cámara.
bajo la forma de diferencias noche-día o verano- En el caso de implantación de bancadas o elementos
invierno, produciendo movimientos de gran amplitud de anclaje de instalaciones, que obligan a romper el
que rompen los paños de forma altamente agresiva, tablero, para apoyar en la base estructural, debe tenerse
y provocan empujes laterales sobre los bordes, en cuenta que:
causando traumatismos en las tabicas y baberos
perimetrales. -Las superficies de contacto se realizarán sobre el
Combinada esta acción térmica con el agua de lluvia propio forjado independizando todo el perímetro de
se producen penetraciones que pueden seguir la bancada del tablero, además su plano de terminación
progresando afectando al resto de componentes y al superará el de éste, permitiendo realizar la tabica de
propio edificio. Se presentan por lo tanto dos acciones ventilación a su alrededor.
conjuntas que en todos los casos deben resolverse al -Los deterioros parciales suponen actuaciones de
reposición de los mismos.
mismo tiempo.
Tema 3. Daños y reparación ae cuDierias

3.2.2 El soporte de la cobertura 4. Cubiertas no ventiladas


Este componente está íntimamente relacionado con
la cobertura, como se ha visto en el apartado anterior, 4.1 Introducción
en el que se han expuesto algunos de los daños que
les afectan, y se han hecho propuestas de reparación Siguiendo los criterios establecidos en la tipificación
basadas en criterios fundamentados en su de las cubiertas, este grupo responde a la existencia
comportamiento. de los siguientes parámetros:
Los daños propios del tablero se expresan como -La base estructural forma planos completos, con
o
deformaciones surgidas de cargas y/o sobrecargas no pendientes que pueden cubrir desde 0 a 90°.
previstas, situación ésta por lo demás bastante rara. -El soporte puede ser la propia base estructural
inclinada o materiales ligeros formando capas de
-Las intervenciones de reparación en estos casos pendientes, que reproducen una superficie llana
supone levantar los paños afectados (siempre entre completa.
juntas) y reponer con técnicas y materiales compatibles -La estanqueidad se logra mediante materiales
con los existentes, a ser posible iguales,
bituminosos soldados entre sí, que permiten cubrir
toda la superficie de forma continua.
Estas cubiertas que integran sus componentes en
3.2.3 La base estructural
una hoja, tienen que dar respuesta a nuevas demandas
Sirve las premisas de comportamiento establecidas
en el apartado 3.1.3 con una sola diferencia. En este funcionales que se derivan de su propia propuesta
caso, las fachadas tienen continuidad y superan el constructiva. Además deben incorporar materiales y
plano de la cubierta, razón por la que los forjados sistemas que hagan nuevas funciones como
pueden afectar a los paramentos verticales, con compatibilizar unos componentes con otros, lograr el
empujes horizontales. nivel de confort exigido, proteger el sistema, etc.
Las soluciones de reparación son muy traumá-ticas, Por lo tanto, a los tres componentes básicos de
de gran coste y en general poco eficaces. Co-mo cualquier cubierta- base estructural, soporte de la
medida atenuante se puede citar la incorporación de cobertura y cobertura- se incorporan los aislamientos,
aislamientos por el exterior, de muy lejano efecto. barreras cortavapor, capas separadoras, protecciones
de las membranas y/o aislamientos, etc.
3.2.4 Otras consideraciones Todo ello organizado mediante un bloque compacto
En algunos casos, por un desconocimiento del que lleva a la dependencia funcional de los
funcionamiento de estas cubiertas, se han cerrado o componentes entre sí, y a la transmisión directa del
sellado las perforaciones de ventilación de la cámara, comportamiento de cada uno a los otros.
produciendo daños en el tablero. Las solicitaciones a las que están sometidas estas
cubiertas pueden afectar a varios componentes
-Siempre deben mantenerse abiertos y limpios los simultáneamente, situación que no se produce en las
orificios de ventilación. otras cubiertas estudiadas, dada la independencia de
unos con otros. Esto supone que los posibles daños
El sistema de evacuación es interno y está sean de tipo más generalizado, pudiendo afectar, en
solucionado mediante cazoletas sifónicas pegadas casos, al conjunto de la cubierta.
a los paramentos verticales. Los daños que producen Ante esta situación, lo más oportuno y eficaz, es
son de diversa índole, entre otros podemos citar: estudiar los daños en las cubiertas no ventiladas a
-Retención de agua en el sifón, como es lógico, que través del análisis de sus componentes, desde su
en tiempo frió puede helarse. Pequeña cantidad de comportamiento intrínseco y los daños que producen
agua y en forma de lámina prácticamente. para llegar a los que afectan a los demás.
-Obstrucciones de las rejillas de protección por En este sentido, se van a plantear en este capítulo
acumulación de restos indiscriminados, en particular las respuestas de corrección de los daños sobre
hojas de árboles. cubiertas no ventiladas ya terminadas, proponiendo
-Transmisión de humedad desde las cazoletas a al mismo tiempo las exigencias o medidas que deben
los paramentos próximos por retenciones. contemplarse en la solución constructiva de las de
obra nueva.
- Todas las actuaciones a que dan lugar estos Para facilitar la lectura de las propuestas a llevar a
problemas son de mantenimiento, reduciéndose las cabo en su reparación, se establecen dos grupos de
reparaciones a los daños específicos. actuaciones. Los identificados con la letra a) responden
•xpituto IV. Patología de cubiertas

a posibles medidas de corrección de los daños


bituminosos. Con anterioridad a la aparición de
existentes. Los señalados con la letra b) recogerán normativa de carácter preceptivo, los criterios de
propuestas de buena construcción a llevar a cabo en diseño y aplicación podrian calificarse de dudosamente
la ejecución de nuevas cubiertas. objetivos.
Al final del análisis de cada componente se -La compleja situación con la que se encontraron los
acompaña un cuadro resumen de las consideraciones proyectistas: nuevos materiales y técnicas de
expuestas. Estos cuadros están organizados en dos aplicación, comportamiento y compatibilidad de los
componentes, usos y protecciones, etc. sin base
partes. En la zona de la derecha aparecen las
técnica contrastada, ha dado lugar a soluciones
actuaciones del grupo-a), antes citado, correspon- incorrectas.
dientes a medidas de corrección. En la zona de la -Al no estar sancionada la ejecución por una técnica
Izquierda, se proponen las medidas a tener en cuenta constructiva de carácter tradicional, ha supuesto que
en el proyecto de obra nueva. muchos problemas actuales procedan de una
deficiente ejecución llevada a cabo por mano de obra
no especializada.
Otras consideraciones
Antes de entrar en el estudio de los daños en las
cubiertas no ventiladas, quiero hacer unas reflexiones
sobre ciertos aspectos que pueden ayudar a conocer Estas consideraciones avalan lo que se proponía
mejor las causas de los problemas de comportamiento anteriormente, en cuanto a llevar a cabo el análisis de
de las mismas, y que ya fueron señalados en el los daños en estas cubiertas mediante el estudio de
desarrollo del tema Comportamiento y diagnóstico de cada componente, tanto en lo concerniente a las
la cubierta. solicitaciones externas, como en el cumplimiento de
las exigencias de proyecto y ejecución.
Este tipo de cubiertas son de muy reciente
implantación en España. Se puede estimar que esta
técnica de ejecución difícilmente sobrepasa el medio 4.2 Base estructural
siglo. La promoción en gran escala de productos
bituminosos para la impermeabilización de cubiertas Este componente, como ha quedado establecido,
no va más allá de la década de los cincuenta, y la se expresará siempre como un plano completo resuelto
aplicación masiva de estos productos se centra a mediante técnicas muy diversas (forjados
mediados de los sesenta. unidireccionales o bidireccionales, losas, chapas
Ante estas circunstancias, nos encontramos que metálicas, prefabricados.etc).
pesan sobre el comportamiento de las cubiertas no Su función es siempre de tipo resistente, estando
ventiladas, además de las solicitaciones externas a sujeto, a solicitaciones que se traducen en
las mismas, vicios derivados de la propia propuesta deformaciones, dilataciones, contracciones, tensiones
de proyecto y de la ejecución, fomentados por una termo-hidrométricas, etc., y a su vez él puede incidir
utilización novedosa de materiales y sistemas, que han con este comportamiento sobre el soporte y la
creado un proceso degenerativo de la cubierta desde membrana.
la propia concepción de la misma.
4.2.1 Acción de la temperatura
Se pueden señalar, entre otras muchas, como causas
En general, en este tipo de cubiertas, la base
que han incidido en la calidad e irregular
estructural no está sujeta a grandes esfuerzos de
comportamiento de estas novedosas cubiertas
dilatación-contracción ya que las diferencias de
circunstancias tales como:
temperatura están bastante controladas en razón a
las protecciones aislantes, por lo que los movimientos
-Los materiales bituminosos son de reciente creación
y desde su aparición en los mercados han evolucionado debidos a esta causa son de pequeña amplitud. No
técnicamente de una manera eficaz pero rapidísima, obstante, deben establecerse juntas de dilatación en
lo que ha obligado a los otros componentes, de carácter los encuentros con petos de fachada.
convencional, a adaptarse a sus demandas, lo que no
siempre se ha sabido solucionar de la manera más Ante la imposibilidad de separar la base estructural de
adecuada. los paños verticales, por el gran traumatismo que se
-La normativa que contempla la ejecución de estas originaría y que sería fuente de nuevos daños, se
cubiertas es de muy reciente creación -NBE.QB.90- puede aumentar la capacidad aislante de la cubierta
y así mismo, las UNE.104 que establecen las mediante soluciones invertidas, con objeto de disminuir
condiciones que han de cumplir los materiales los diferenciales térmicos sobre todos los componentes.
Tema 3. Daños y reparación de cubiertas

4.2.2 Acciones de cargas gravitatorias 4.3 Soporte. Capa de pendientes


La causa que origina el mayor número de daños en
los elementos estructurales procede de una incorrecta Como ya se ha indicado, el soporte de la cobertura
evaluación de las cargas que van a soportar. Las en estas cubiertas, tiene además la función de lograr
deformaciones excesivas por causas tan diversas las pendientes que permitan la evacuación de las aguas
como cambios indiscriminados de soluciones pluviales.
estructurales o usos, flechas diferidas no controladas, Se resuelve mediante rellenos de diversos materiales,
etc. son fuentes de daños que afectan a la correcta aunque_predominan los morteros y hormigones
evacuación de la cubierta. aligerados vertidos directamente sobre la base
Las soluciones con pendientes muy bajas, exigen un estructural. Estas soluciones dan lugar a una íntima
estricto cálculo a deformación, particularmente cuando relación de los dos componentes, quedando afectados
la base resistente establece directamente la pendiente fundamentalmente por los movimientos originados por
de la cubierta, pues pueden producirse contrapendientes su retracción hidráulica, que a su vez puede dañar a
con retenciones de agua no controladas que en un las membranas.
proceso cíclico de acumulación de agua- deformación Cuando la pendiente sea superior al 5% ésta debe
puede llevar al colapso a la estructura.
lograrse por inclinación de la base estructural. En estos
casos es recomendable lograr una terminación
Los daños estructurales procedentes de cargas superficial de la misma no agresiva, para evitar posibles
superiores a las previstas o del mal comportamiento punzonamientos de la membrana, sobre todo en
estructural, siempre van a llevar a soluciones de
soluciones adheridas.
reparación de tipo traumático, bien sean de refuerzo
de la propia estructura, bien de disminución de las Los daños en el soporte no suelen detectarse
cargas permanentes mediante sustitución de las capas fácilmente de una forma directa, se suelen detectar a
de rellenos por otras más ligeras. Placas de aislamiento través de aquellos elementos constructivos a los que
conformadas de espesor decreciente. transmite su comportamiento.
Los daños debidos al irregular comportamiento del
soporte van a afectar fundamentalmente a la membrana
y a otros elementos, por transmisión de esfuerzos. En
4.2.3 Acciones traumáticas
lo que respecta a su propio funcionamiento y misión
Otras fuentes de daños muy generalizadas son las
no son determinantes.
implantaciones de instalaciones o pasos de las
mismas a través de la cubierta. Las realizadas a
4.3.1 Acción de la temperatura
posteriori de la ejecución son fuentes de penetración
Como siempre, ésta solicitación da lugar a cambios
aunque su propuesta y ejecución sea esmerada, ya
de dimensión. Afectan al propio componente
que producen traumatismos en el conjunto de los
produciéndole fisuras y/o roturas, a los elementos del
componentes, afectando a membranas, aislamientos,
perímetro (petos, chimeneas, casetones) que soportan
barreras, soportes, etc.. En las que se realicen como
los empujes debidos a los cambios dimensionales, y
obra nueva, deben preverse pasatubos y/o anclajes
las membranas íntimamente relacionadas con él
para las mismas.
(sistema de fijación adherido).
El mal funcionamiento de la base estructural siempre
Las fisuras y grietas que procedan de retracciones
lleva a reparaciones traumáticas de alto costo y con
originadas durante el fraguado, están en movimiento
la posibilidad de crear nuevas fuentes de daños. Es,
constante de apertura y cierre, afectando a las
por lo tanto, un componente que debe cuidarse en la
membranas a las que pueden llegar a romper.
propuesta del proyecto y durante la ejecución. Como
medidas más elementales, se tendrán en cuenta los Los cambios dimensionales del soporte producen
siguientes aspectos: (véase cuadro 4.1.) empujes sobre los elementos verticales situados por
encima de la cubierta, casetones, chimeneas, petos,
a) Limitación estricta deflechasen el cálculo estructural. etc. a los que deforma, agrieta, y en casos llega a
b) Creación de juntas en los encuentros con romper.
paramentos verticales. Como medidas de reparación podemos mencionar:
c) Previsión y colocación de pasatubos para conductos
que atraviesen la cubierta y anclajes para sujeción de a) Creación de juntas en encuentros con elementos
elementos de instalaciones u otros. verticales. Si fuera posible aumentar el número y
d) No realizar mediante recree/dos o rellenos pendientes tamaño de las mismas.
superiores al 5%. b) Aumentar la protección aislante con objeto de
capítulo IV. Patología de cubiertas

EXIGENCIAS COMPORTAMIENTO AFECCION INTERVENCION

RIGIDEZ: DILATACIONES ROTURAS Mayor aúl. exterior


- Deformación RETRACCIONES (Soporte Membrana) Juntas aumentar
- Fisuración

JUNTAS en pelos DEFORMACIONES RETENCION AGUA _ I Mayor pendiente


- d = 10 m. clima h y¿ Flechas ¡ (Más carga permaiiente)
- d - 8 m. clima c y f

CAMBIOS GRIETAS Juntas


PASATUBOS DE DIRECCIÓN ROTURAS
ANCLAJES
(Actuación previa)

I N C L I N A R p>5%

CUADRO 4.1. Base estructural.

NTE-QAT) se ha considerado al soporte con capacidad


disminuir los movimientos excesivos del soporte.
Solución invertida. para conseguir el aislamiento de la cubierta. Por las
c) Introducir capas separadoras entre soporte y características del propio material, así como por su
membrana con objeto de evitar punzonamientos de ejecución no controlada, pierde gran parte de sus
la misma. Esta solución supone acciones de tipo características de aislamiento. Esta situación puede
traumático con reposición de la membrana y subsanarse de una manera limpia y poco traumática,
aislamiento. mediante la incorporación de materiales aislantes por
el exterior, convirtiendo a la antigua cubierta en
invertida.
4.3.2 Previsiones para evitar daños procedentes A continuación se presenta el cuadro 4.2 resumen
de la ejecución desarrollado con los criterios fijados anteriormente.
Es recomendable la utilización de soluciones muy
estables térmicamente para evitar situaciones como
4.4 Membranas
las estudiadas en el apartado anterior. Así mismo, se
tendrán en cuenta las siguientes consideraciones en La membrana es el componente más característico
la realización del soporte, para un correcto de este tipo de cubiertas. Su función es la más
funcionamiento del mismo y liberar en lo posible a los importante: producir la estanqueidad de la misma.
otros componentes que pueden quedar afectados.
Una gran parte de las exigencias constructivas de
la cubierta en general y de ciertos componentes en
a) Ante la aplicación de sistemas de fijación adheridos, particular, Se establecen con objeto de facilitar el
debe realizarse una terminación superficial del soporte correcto funcionamiento de la membrana.
que evite el punzonamiento de las membranas. La expresión de los daños que afectan a las
b) En soluciones no adheridas, se interpondrá una membranas son siempre de tipo traumático sobre la
capa separadora antipunzonante y antiadherente. misma:
c) Se comprobará.la llanura del plano con objeto de
evitar retenciones de agua. Las pendientes realizadas
con rellenos estarán comprendidas entre el 1 % y el 5%.
d) No deben aplicarse las membranas sobre soportes -Desgarros y/o roturas de las láminas por arrastres.
que contengan un grado de humedad superior al 8%. -Perforaciones por punzonamiento.
-Cuarteados y agrietamientos por envejecimiento.
-Rotura de soldaduras entre láminas o con el soporte.
-Traumatismos por uso indebido.
4.3.3 Otras consideraciones
En ciertos casos, (así sigue contemplándose en la
Tema 3. Daños y reparación de cubiertas

376
EXIGENCIAS COMPORTAMIENTO AFECCION INTERVENCION

ESTABILIDAD: USURAS - GRIETAS MEMBRANA Cap» separadora


(Dilat-Retracc ) (Adherida)

SEPARACIÓN
DE PETOS EMPUJES HORIZONTALES _ ROTURA PETOS Juntas
(a= 135°)

ESPESOR M Í N I M O
> 2 cm CONTRA PENDIENTE _ _ AGUA ESTANCADA Aumentar pendiente
(Placas II celular.)
PENDIENTE
1% < P < 5%
TERMINACION SUPERE MEMBRANA . Capa separadora
JUNTAS (Punzonamiento)
- Estructurales
- Propias GRADO HUMEDAD MEMBRANA Ventilación
(Bolsas. Vapor ocluida)
RESISTENCIA
> 75 Hg/cm2
PERDIDA CAPACIDAD AISI. .. CONFORT - "I Aisl. - Cub. Inven.
TERMINACIÓN
(Acabado-regulación)

GRADO DE
HUMEDAD (<8%)

CUADRO 4.2 El soporte de la cobertura.

El mal comportamiento de las membranas origina afectando a las membranas, sobre todo en soluciones
penetraciones de agua que producen, a su vez, daños adheridas.
funcionales en el edificio, y en otros componentes. Ante situaciones de este tipo se proponen solu-
Asi, los materiales aislantes pierden sus propiedades, ciones de independencia de los componentes, entre
las bases estructurales metálicas pueden estar otras:
sometidas a procesos corrosivos, etc.
Estas penetraciones suponen que la membrana se a) Levantado de la membrana afectada y mejora de
la compatibilidad entre materiales mediante
ha deteriorado por acciones agresivas de otros
incorporación de capas separadores antipun zonantes
componentes, o porque se ha hecho un uso no
y antiadhesivas.
adecuado de la cubierta, e Incluso porque no se ha b) Elección de nueva membrana que cumpla con los
elegido un sistema correcto de aplicación y/o protección niveles de punzonamiento establecidos por la UEAtc
de la membrana. ante los requerimientos de esa cubierta.
En todos los casos de roturas de la membrana se
debe analizar, con sumo cuidado la propuesta
Las actuaciones sobre los soportes son más
constructiva con la que se ha llevado a cabo la ejecución
complejas y menos eficaces.
de la cubierta, contemplando, al menos, los siguientes
extremos:
4.4.2 Daños en la membrana procedentes de las
protecciones
4.4.1 Daños en la membrana procedentes del Las protecciones, tanto las pesadas colocadas in
soporte situ como las ligeras, son inherentes a las membranas,
Los soportes de origen hidráulico -morteros sobre las que inciden de muy diversa forma.
aligerados- causan punzonamientos a la membrana Los daños originados por las protecciones pesa-
debido a la superficie irregular y agresiva de los mismos. das sobre las membranas, siempre se producen
Así mismo, el proceso de fraguado ocasiona por acción directa. Se expresan estos daños mediante
fisuraciones por retracción en la superficie del mismo, perforaciones, rasgados, roturas, etc.. Si la membrana
capitulo IV. Patología de cubiertas

no está afectada gravemente con roturas que obliguen conjunto, aunque se lleve a cabo mediante un
a su sustitución, la solución más eficaz podría ser: sobredimensionamiento.

a) En el caso de cubiertas no transitables, levantado 4.4.4 Daños procedentes de uso incorrecto


de la protección de grava e incorporación de una capa Como sabemos, las cubiertas no ventiladas tienen
separadora de protección contra el punzonamiento.
dos usos:
b) En el caso de cubiertas transitables, puede adoptarse
la solución anterior. No obstante, ante tránsito muy -Transitables peatonalmente o con tráfico rodado.
agresivo, se puede colocar sobre la membrana, previa -No transitables.
interposición de una capa separadora antipunzonante, Los problemas surgen cuando no se adecúa el uso
una capa de protección a base de mortero de cemento, proyectado con el real, produciéndose traumatismos
sobre la que se volvería a restituir la cubierta. que llevan a roturas, perforaciones, desgarros.etc. para
cuya solución me remito a los casos anteriores.
Las protecciones ligeras producen efectos de otra
naturaleza sobre la base bituminosa. Pueden ser daños 4.4.5 Previsiones para evitar daños procedentes
de acompañamiento de los materiales, que se traducen de la ejecución
en deformaciones de las autoprotecciones metálicas, Se proponen en este apartado unas consideraciones
o derivados de los agentes climáticos sobre dichas que deberían tenerse en cuenta en la propuesta del
autoprotecciones que las degradan perdiendo sus proyecto, referente a las condiciones a cumplir por las
propiedades. membranas, tanto como material, como en lo referente
a su puesta en obra. En la columna de la izquierda del
Ante estas degradaciones del material las acciones Cuadro n° 4.3, quedan recogidas y a las que se asignan
de reparación suponen la sustitución dé la membrana, el tipo b).
o al menos de la zona dañada.

4.4.3 Daños procedentes de movimientos de la b) La membrana se adecuará a la climatología de la


cubierta zona. En Climas cálidos van bien láminas APP. En fríos
Al analizar el comportamiento de la base estructural las SBS resisten mejor.
y el soporte, se ha visto en cuanto afectan los b) Se propondrán membranas que cumplan con los
diferencíales de temperatura a estos dos componentes niveles de solicitación P-1 a P-4 establecidos por la
UEAtc, referentes a los distintos tipos de uso.
y cómo transmiten sus efectos al resto de los elementos
b) Así mismo, se comprobará su clasificación en lo
que constituyen la cubierta. referente a la resistencia al punzonamiento, tanto
La membrana es el componente más afectado por estático como dinámico.
los mismos, sobre todo cuando está adherida b) El sistema de fijación quedará establecido en función
totalmente al soporte, ya que esto implica acompañar de los siguientes parámetros:
a otro material, cuyas características físicas y mecánicas -Tipo de soporte y terminación superficial del mismo.
son de índole muy distinta. -Pendiente del faldón.
Las soluciones han quedado fijadas en situa- -Uso. Tipo de protección.
ciones análogas ya estudiadas. Se propone como -Climatología.
respuesta más idónea ante estas situaciones, adoptar -Puesta en obra, procedimientos y mano de obra,
-b) No se colocarán membranas en aquellas situaciones
medidas que permitan liberar unos componentes
climatológicas adversas tales como:
de otros. -Con altas y/o bajas temperaturas.
-Con vientos fuertes.
-Con lluvia. El soporte no tendrá más del 8% de grado
Ante roturas de la membrana debidas a.estos de humedad interior.
movimientos, debe levantarse la misma y actuar sobre b) Se recomendarán los productos amparados por
ol soporte, y si es posible sobre la base estructural, DIT.
creando juntas e independizando los elementos
verticales. Como segundo paso, se elegirá la membrana
más adecuada a las temperaturas de la zona. En tercer
lugar, se propondrá un sistema de fijación de la Como en apartados anteriores se presenta el cuadro
membrana que permita su independencia del soporte n° 4.3 que recoge las recomendaciones presentadas
V como última medida, se aislará eficazmente el en este apartado.
Tema 3. Daños y reparación ae cubiertas

378 EXIGENCIAS COMPORTAMIENTO AFECCION INTERVENCION

RESISTENCIA A PUNZONAMIENTO _W MEMBRANA Protección Capa,


PUNZONAMIENTO (Estático/Dinámico) AISLAMIENTO separadora
(Soporte * membrana) Roturas Cumplir Niveles
ponzoña.estalica-L. 2 solicitación U.E.At.c.

ESTANQUIDAD FISURACION MEMBRANA Mejora soporte


Material Cambio sist fijación
Proyecto

COMPATIBILIDAD MOVIMIENTOS MEMBRANA Sustitución


Soporte (Sist. fijac.) Solapes - Soldadura parcial/total
Protección
Pendiente

ESTABILIDAD
DEL MATERIAL TRAUMATISMOS T O T A L CUBIERTA Sustitución parcial
Climatología Uso/paso s/anclajes. Sustitución total
Bajas/AJtas T.
Viento
COLOCACIÓN
Mino de obra
Procedimiento
DFT.
Material Sistema

CUADRO 4.3. Las membranas.

4.5 Protecciones. sus acciones sobre los componentes inmediatos -


membranas o aislamientos- pueden causarles graves
Como ya se ha indicado, las protecciones son deterioros, que generalmente se traducen en
inherentes a las membranas, por lo tanto todas estarán perforaciones y roturas.
acompañadas de su correspondiente protección, sea
ésta pesada o ligera, según uso y/o pendiente del
a) Si la membrana no ha sido deteriorada, se debe
faldón.
levantar la protección e interponer.entre ésta y la
Su función, como su nombre indica, consiste en rnembrana una capa separadora antipunzonante.
proteger a la membrana de solicitaciones de muy b) En el caso de estar afectada la membrana debe
diversa naturaleza. Entre otras, cabe destacar la de colocarse una nueva, con las características idóneas
producir la defensa de la membrana ante solicitaciones ante el punzonamiento, bien pornúéva incorporación
climatológicas tan dispares como las radiaciones o por sustitución, y colocar la protección en condiciones
correctas.
ultravioleta, viento, cambios de temperatura otros. En
las cubiertas transitables además, permitirá el tránsito
de personas y/o vehículos. En cuanto a las condiciones a tener en cuenta en
el proyecto, se pueden establecer estas consi-
deraciones:
4.5.1 Comportamiento de las protecciones pesadas
Las protecciones pesadas, que generalmente se -Siempre debe preverse y colocarse capas
realizan in situ están resueltas mediante materiales separadoras que impidan el punzonamiento de los
pétreos (gravas), cerámicos y de cemento (pavimentos) componentes que se encuentran inmediatamente
o aglomerados asfálticos y de hormigón (caminos de debajo.
rodadura), entre otros. -En su condición de lastre las protecciones pesadas
de grava deben repartirse de forma que en los bordes
Estos materiales son muy resistentes a las acciones y esquinas se acumule más cantidad. El espesor
de los agentes climatológicos y al uso para el que han mínimo será de 5 cm.
sido propuestos. Los daños que les afectan a ellos -La pendiente con protecciones pesadas no debe
directamente son prácticamente nulos, sin embargo, sobrepasar el 5%.
capitulo IV Patología de cubiertas

-Deberá prohibirse de torma explícita en el proyecto grado de compatibilidad con otros materiales. Así, 379
el tránsito de cualquier tipo sobre protecciones de como ya ha quedado dicho va a ser un elemento de
grava. protección de los soportes de morteros aligerados y
de la propia base estructural, ante las diferencias de
temperatura. En otros casos, se le va a requerir como
4.5.2 Comportamiento de las protecciones ligeras soporte de la membrana impermeable. Lo que exige,
Las protecciones ligeras o autoprotecciones, que para su utilización como t a l , deberá estar
llamadas asi por estar incluidas en la misma constitución acreditado por el DIT correspondiente o documento
de las láminas, están resueltas mediante terminaciones similar.
superficiales de distinto tipo: metálicas, cerámicas o Los materiales que se utilizan como aislantes tienen
pétreas. muy diverso origen: vegetales, minerales, plásticos,
Los daños en las protecciones ligeras tienen dos etc. Todos y cada uno de ellos pueden tener una
orígenes principalmente: respuesta adecuada al fin que se les encomienda,
siempre y cuando cumplan estas condiciones:
De estas condiciones que han de cumplir los
-El comportamiento de la propia autoprotección.
-El uso no correcto de la misma, (tránsito peatonal). aislamientos como material y en sus condiciones de
aplicación se deducen los daños que pueden incidir
sobre ellos y a su vez ellos transmiten, a los otros
En los daños de procedencia del propio componentes:
comportamiento, se deben indicar los problemas de
deformación que surgen ante los diferenciales de
alargamiento-acortamiento en las láminas con -Que su conductibilidad térmica corresponda al valor
protección de aluminio, entre éste y la base bituminosa. exigido por el cálculo. Tanto en sus características
Las retenciones de agua -charcos- atacan a la como en sus espesores.
-Que su posición en la cubierta sea la adecuada a sus
autoprotección y la membrana. La NBE-QB-90
propiedades. Se hace especial mención a los
establece las pendientes mínimas para estas problemas de punzonamiento y de intemperie.
soluciones. -Que permita la aplicación en caliente de membranas
En cuanto a los daños producidos por el uso no en sistemas adheridos.
adecuado de la cubierta, derivado del tránsito de
personas sobre láminas autoprotegidas, son de carácter
traumático, con rotura de membranas y como mínimo -Perforaciones, roturas.
pérdida de la protección. -Pérdida de capacidad aislante.
-Compatibilidad con la membrana.
Se pueden proponer soluciones de fácil
a) Las reparaciones son de sustitución parcial o total incorporación:
de la membrana, en situaciones de roturas,
perforaciones o falta de protección.
b) Cuando los daños procedan de falta de pendiente
debe sustituirse el sistema completo por otro más a) En cubiertas invertidas, sustitución del material •
adecuado a dichas condiciones. aislante por otro con las características adecuadas a
las solicitaciones de que son objeto:
-Espesores correctos y de acuerdo al cálculo.
El resumen de estas consideraciones queda -Propiedades intrínsecas para permanecer a
intemperie.
expuesto en el cuadro n° 4.4.
-Resistencia a compresibilidad y punzonamiento
b) En el caso de cubiertas convencionales, la sustitución
4.6 Aislamiento del aislamiento supone operaciones traumáticas y
caras. Se puede llevar a cabo la incorporación por el
El aislamiento térmico está constituido por capas exterior de nuevas capas de aislamiento, convirtiendo
de materiales porosos que tienen como principal a la cubierta en otra de tipo invertido.
función la de conseguir la mayor resistencia térmica
posible, con objeto de lograr un nivel confortable
térmicamente en los locales bajo cubierta y en el
En este caso, lo dicho para las actuaciones de
edificio en general.
reparación de los daños de los aislamientos, es válido
Además, se le va a requerir otras funciones para las consideraciones a proponer en el proyecto.
complementarias, que le van a obligar a tener un alto
Tema 3. Daños y reparación de cubienas

380
EXIGENCIAS COMPORTAMIENTO AFECCION INTERVENCION

LASTRE NO A D E C U A D A MEMBRANA V Sustituir


Viento-agua A l . USO AISLAMIENTO Adecuar C . S .
Peso (grava) Roturas

DEFENSA NO A D E C U A D A A L A
Cond. atmosféricas PENDIENTE
Radiaciones
Cambios de temperar grava p<5% GRAVA _ Adecuar protección
Contramcendios baldosa p<5% (3%) Movimiento y/o sist. de fijación

autoprot. !%<p TRAUMATISMOS Adecuar al uso


Tránsito

COMPATIBILIDAD PUNZONAMIENTO MEMBRANA Incorporar CS.


Membrana Protecciones AISLAMIENTO
Uso - Tránsito
Pendiente

CUADRO 4.4. Las protecciones.

Me refiero a los aspectos de cálculo, posición, El componente más perjudicado, en todos los casos
características a cumplir por los materiales, etc. que es la membrana, que va a sufrir daños de índole tan
deben expresarse en el proyecto y tenerse en cuenta diversa como:
en la ejecución de la obra.
En el cuadro n° 4.5 se puede observar que las -Arrastres provocados por adherencia de la membrana
exigencias para incorporar en el proyecto (primera a componentes, que pueden llevarla a la rotura al
columna) y los problemas derivados del comportamiento impedir sus movimientos.
(segunda columna), son de la misma índole. -Deterioros químicos de la membrana por
contaminación.
4.7 Capas separadoras -Punzonamientos procedentes de los materiales de
protección debidos a su propia incidencia o al mal
Se integran en la cubierta en distintas posiciones, uso de los mismos.
en consonancia con la función específica que en cada -Posibilidad de daños por falta de protección al fuego.
caso deben solucionar. Entre las más habituales
podemos citar: Las intervenciones de reparación de esta situación
siempre tienen carácter de incorporación o de
-Compatibilizar materiales impidiendo su conta- sustitución de las capas separadoras correspondientes,
minación. a las necesidades creadas.
-Proteger de los punzonamientos a la membrana. En cuanto a las propuestas de proyecto son de la
-Impedir a la membrana adherirse a otros componentes. misma índole.

Los daños que las afectan, proceden de los a) Incorporación dé las capas separadoras en el lugar
componentes a los que están amparando, de su propia adecuado a la función a desarrollar.
funcionalidad con respecto a la misión que deben b) Elección del tipo de material más adecuado a la
cumplir, a su incorporación en el lugar adecuado, e solicitación demandada.
incluso a su existencia.
capitulo ¡V Patología de cubiertas

EXIGENCIAS COMPORTAMIENTO AFECCION INTERVENCION

COMPATIBILIDAD PUNZONAMIENTO M AISLAMIENTO Cumplir


Soporte MEMBRANA normas U.E.A.Lc.
Membrana (adh )

FUEGO TOTAL Cumplir M.O/M.I.

CAPACIDAD
AISLANTE DEGRADACION CONFORT Sustitución
K. Suficiente y BIOLÓGICA
constante

ESTABILIDAD CUMPLIMENTO K. CONFORT


DIMENSIONAL Espesor ± 2 mm
Variaciones dimensión Aumentar
Incorporar(V. loo.)

COLOCACION NO EXISTENCIA _ CONFORT


Capas
Juntas > 3 mm.

CUADRO 4.5. El aislamiento.

EXIGENCIAS COMPORTAMIENTO AFECCIÓN INTERVENCIÓN

ANTIADHTRENTF ELECCION Membranas Sustitución


NO ADECUADA

ANTICONTAMINA NT.
NO EXISTENCIA Membranas Incorporación

ANTIPUNZONANTE

PROTECCION
CONTRA FUEGO

CUADRO 4.6. Las capas separadoras.


Tema 3. Daños y reparación de cubiertas

4.8 Puntos singulares -Análisis de la causa y proceso de los daños.


-Conocimientos constructivos mínimos del técnico
Se podrían denominar de esta manera aquellos para proponer la reparación. Materiales y sistemas.
puntos de las cubiertas cuya propuesta y ejecución -Seguimiento de la ejecución. Control de la obra.
requieren una especial dedicación y una concreción
específica de cada uno de ellos.
Sus daños no proceden de solicitaciones de carácter Bibliografía
general ni su comportamiento se sujeta a unas reglas
más o menos genéricas. Siempre sus daños son de ADDLESON, Lyall. "Fallos en los edificios". Consejo General C.O.A.A.T.
tipo concreto y en respuesta a las soluciones de España 1982.
establecidas en el proyecto y, así mismo, a los procesos ARGUELLES. Ramón, y otros autores. "Diseño y cálculo de estructuras
-

de ejecución, mano de obra, y control ejercido. de madera . C.O.A.M. 1988.


ARRIAGA. Francisco y otros autores. "Guía de la madera" AI.T.I.M.
Ante estas condiciones, los daños deben analizarse 1994.
en cada caso, bajo las condiciones de la propuesta CASSINELLO, Fernando. "Carpintería". Editorial Rueda 1973.
constructiva concreta para cada caso, características CUBA, Juan de. "Aplicaciones del plástico en la construcción".
de los materiales utilizados para su ejecución, Ediciones C.E.A.C. 1987
solicitaciones a las que están sometidos, etc. ElCHLER.Friedricn. "Patología de la construcción". Editorial Blume y
Como puntos singulares podemos citar: Editorial Labor. 1974.
ELIZAGA. José Andrés y otros autores. "Expertos en mantenimiento".
C.O.A.M. 1987
-Encuentros con paramentos verticales. Petos,
GRAU ENGUIX, Joaquín, y otros autores. "El tablero aglomerado en
casetones, etc
la construcción". ODITA 1979
-Juntas de dilatación.
IBORRA, Santiago. "El sistema de cubierta invertida". Dow Chemical
-Elementos de desagüe. Cazoletas.
Ibérica 1987.
-Instalaciones de ventilación. Shunt
LAUDINI, Franco y RODA, "Riccardo Construiré a regola darte".
-Bancadas.
Volumen 3. BE-MA Editrice 1990.
MARTIN. Bruce. "Las juntas en los edificios". Editorial Gustavo Gili
Queda dicho que los daños son muy concretos en 1981.
cada caso, y por lo tanto sus respuestas de reparación MINISTERIO DE OBRAS PÚBLICAS Y URBANISMO.
deben ajustarse a cada caso. Como consideraciones NTE-QTF Teiados de Fibrocemento
de tipo general, se recomienda: NTE-QTG Tejados galvanizados.
NTE-QTL. Tejados de aleaciones ligeras.
NTE-QTR Tejados de pizarra.
a) Independizar lo más posible cada elemento singular NTE-QTT. Tejados de teja.
del faldón, mediante la creación de juntas. NTE-QTZ. Tejados de zinc.
b) Los elementos a incorporar, cazoletas/cordones, Ministerio de Obras Públicas. 1988
etc. serán preferiblemente prefabricados y formarán MINISTERIO DE OBRAS PÚBLICAS Y URBANISMO.
un cuerpo estable con la membrana. NBE-QB-90. Cubiertas con materiales Bituminosos.
c) Deberán seguirse las recomendaciones del Dirección General para la Vivienda y Arquitectura.MOPU 1989.
fabricante, expresados en los DIT u otros documentos MORITZ, Karl. Manual de cubiertas planas en la construcción Editorial
oficiales, para compatibilizar los sistemas. Blume 1969
MUTn, A. y PROVENZIANI, D. "Tecniche construttive perl'architettura"
Edizioni Kappa 1989.
Como se indicó al inicio del capítulo, este recorrido Varios autores. Curso de patologia.Conservación y restauración de
por las cubiertas no ventiladas tiene un carácter de edificios. Tomo I. C.O.AM. 1991
estudio generalista. Las propuestas concretas de Varios autores. Curso de patologia.Consetvación y restauración de
reparación en cada caso deben sujetarse a tres edificios. Tomo II C.O.AM. 1991.
principios: Varios autores Curso de rehabilitación/ C.O.A.M. La Cubierta C.O.A.M.
1984.
i
'|gr Texto del Master de Restauración Arquitectónica
Departamento d e Construcción y Tecnología Arquitectónicas.
- •* Universidad Politécnica de Madrid. Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid
i

Patología y técnicas de intervención.


Fachadas y cubiertas

m u n i l l a - l e r í a

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