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Derecho Mexicano
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Marco Antonio Ortiz Porras
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INDICE
DERECHO PRECORTESIANO
DERECHO HISPÁNICO
DERECHO NOVOHISPANO
EL DERECHO EN LIBERALISMO
ÉPOCA JUARISTA
EL PORFIRIATO
6.- MINERÍA.
LA REVOLUCIÓN MEXICANA
LA CONSTITUCIÓN DE 1917
CONCLUSIÓN
BIBLIOGRAFÍA
INTRODUCCIÓN
En el presente trabajo con el fin de realizar el servicio social que lleva como título “HISTORIA DEL
DERECHO MEXICANO” y que todo estudiante debe realizar para bien de la sociedad, en donde
aplicara sus conocimientos, y en este caso se plasman los conocimiento de investigación,
aplicando técnicas de investigación jurídicas en todo su esplendor, en este presente trabajo hago
una recopilación de temas basados en la historia del derecho del como se ha desarrollado
técnicamente desde los comienzos de las primeras civilizaciones, en nuestro territorio de
Mexicano como lo es el DERECHO PRECORTESIANO, en donde se encuentran las culturas más
importantes por su desarrollo tales como la; Olmeca, Maya, Chichimeca, Azteca, en el que la
mayor parte de su derecho se caracteriza por ser consuetudinario, pero ya existe una clara visión
de definir los delitos y los castigos para cada uno de ellos, por otra parte se ha criticado su
crueldad del como castigar al delito, pero fue una forma en que todos estaban enterados y así
todos los habitantes de esa época lo pensaban para realizar sus conductas antijurídicas, ejemplo
de ello lo plasmamos en las primeras paginas.
Posteriormente con la conquista de los españoles, los cuales impusieron su religión y costumbres,
cambio radicalmente el derecho., primeramente veremos como adquieren su forma de derecho
de los españoles, en el capitulo del DERECHO HISPÁNICO, posteriormente veremos también como
el derecho español es impuesto en México, para los habitantes de origen netamente mexicanos y
españoles, tal como lo plasmamos en el tema del DERECHO NOVOHISPANO, en donde se plasma
algunos de los derechos de los indios de esa época. Una de las etapas importantes para México el
la independencia, cuyo evento histórico aun se encuentra en nuestras constubres mexicanas, para
que nunca se nos olvide nuestra independencia, el derecho de esa época lo podemos ver en el
tema de TRANSICIÓN HACIA LA INDEPENDENCIA.
Aunado a esto se describen la creación y desarrollo de las diferentes ramas del derecho mexicano,
en el capítulo de; EL COMIENZO DE LA “CRISIS MEXICANA” HASTA NUESTROS DÍAS. Leyes que han
servido para que en México existe democracia y bienestar social para todos, solo falta que
tengamos en mente de cada uno de loa mexicanos una cultura política de desarrollo.
DERECHO PRECORTESIANO
1. DERECHO OLMECA
IX y I a.C.
Poco y vago se sabe de los aspectos jurídicos de la cultura olmeca, la figura femenina no figuraba
en un estatus importante dentro de la sociedad, pero es cierto que para construir sus esculturas
motivaron la existencia de esclavos, sometida a una elite, en donde se dividen en dos clases una
llamada conquistadores y la otra conquistados, dicha elite de los conquistadores eran
principalmente los sacerdotes, fue un imperio de caracteres teocráticos (reyes-sacerdotes) con su
centro en actuales estados de Veracruz, Tabasco, Oaxaca, Chiapas, Guerrero y Morelos.
2. DERECHO MAYA
IV y X d.C.
El sector del derecho maya que mejor conocemos por las descripciones de los primeros
observadores españoles es el derecho político del nuevo imperio. Es discutible hasta qué grado
éste coincidían con el viejo imperio; el arte de éste nos de poco apoyo para saber si es lícita o no
tal extrapolación. El nuevo imperio era una confederación de ciudades-estados, unidas por un
lenguaje y una cultura comunes.
Nobles, sacerdotes, comerciantes y artesanos fueron sostenidos por la gran masa de agricultores,
que pagaban tributo al halah uinic, por debajo de esta clase se encontraba los esclavos, producto
de las guerras, de la venta de niños, o seres que habían nacido como tales, también por ciertos
delitos podían caer en la esclavitud (en tal caso a veces una esclavitud temporal, con el fin de
indemnizar a la víctima). Se desarrolaron en la actual región de Piedras Negras, Palenque, tulum y
chichón-itzá
o hubo ritos de pubertad, después de los cuales los adolescentes tenían que vivir
hasta su matrimonio o hasta los 18 años en casas comunales
o Hubo un fuerte tradición exogámica: dos personad del mismo apellido no debían
casarse.
o Había una responsabilidad de toda la familia del ofensor por los daños y perjuicios.
3. DERECHO CHICHIMECA.
Cultura que se desarrollo en el noroeste del país del actual territorio mexicano, entre el río Lerma,
el lago de Chapala y el actual Durango. Su o5rganización política era rudimentario, los cuales vivían
dispersos en pequeños grupos de recolectores de tunas y vainas de mezquite, o dedicados a una
agricultura primitiva, cada grupo tenia un jefe hereditario, y con fines militares o para migraciones
colectivas solían formarse confederaciones transitorias.
Entre las clases sociales faltaba la de los sacerdotes. Aunque la existencia del luto y una
antropología mágica indican que hubo, cuando menos, rudimentos de una vida religiosa, ésta de
ningún modo produjo las impresionantes manifestaciones artísticas y teocráticas que conocemos
en otras culturas precortesianas. Los chichimecas adoptaron elementos de las regiones superiores
que allí habían encontrado.
4. DERECHO AZTECA.
SIGLO X AL XV.
Su poder radico en gran parte del centro del país (llegaba hasta los océanos pacíficos y atlántico,
Oaxaca, Yucatán) y se caracterizo por ser netamente guerreros y conquistadores, es por eso que
alcanzaron gran poder militar y administrativo en todas las regiones en que dominaban.
o Al lado del rey, se formaron grupos de nobles, los cuales formaban grupos de
consejeros permanentes.
o También a lado del rey se encontraba importantes grupos de presión (la nobleza y
el sacerdocio), que dieron al ambiente político un color oligárquico, teocrático, e
incluso gerontocrático.
o El rígeme de la propiedad del maíz pertenecido más bien al derecho público que al
privado, ya que era la base del poder público.
o Algunos productos de las tierras conquistadas eran para pagar los tributos y
tenencias.
o Existía el derecho de la patria potestad, el cual implicaba poder vender a los hijos
como esclavos.
o A veces, los efectos de los castigos se extendieron hasta los parientes de cuarto
grado.
o El homicidio se castigaba con la pena de muerte, salvo que la viuda abogara por la
esclavitud.
LA COMPETENCIA para conocer de los asuntos estaba dividida de la siguiente forma, hubo una
jerarquía de tribunales aztecas comunes, desde el juez de elección popular, anual, competente
para asuntos menores, pasando por un tribunal de tres jueces vitalicios, para asuntos más
importantes, hasta llegar por un sistema de apelación, al tribunal monarca, que se reunía cada 24
días.
Paralelamente a la justicia azteca común encontramos la justicia especial para sacerdotes, asuntos
mercantiles, asuntos de familia, delitos de índole militar, asuntos tributarios y asuntos
relacionados con arte y ciencia.
EL PROCEDIMIENTO era oral mediante protocolo, el proceso no podía durar más de 80 días y los
tepantlatoanis correspondían en groso modo a la actual figura de Abogado.
En algunas regiones de México han sentido poco la influencia de nueva civilización, traída por los
españoles, ya como los indios de la sierra Alta de Chiapas, en Quintana Roo, algunas regiones
remotas de Yucatán, Campeche, los Tarahumaras, Yaquis, los Seris, Coras, etc. Encontramos
prácticas jurídicas consuetudinarias, cuya base se buscaría en balde en la legislación de las
entidades en cuestión. El derecho precortesiano sobrevive, no al margen de la legislación oficial,
sino incorporado a ella. Tratándose de este punto se debe tener cuidado de no considerar
cualquier confidencia entre el derecho moderno y el precortesiano como producto de filiación
entre ambos sistemas: muchas figuras del derecho nacen del sentido común en idénticas
necesidades sociales, y no indicar que el sistema nuevo sea una promulgación de otro anterior.
Auque la corona española no quiso eliminar todo el derecho precortesiano, y autorizo la
continuación de la vigencia de las costumbres que fueran compatibles con los intereses de la
corona y del cristianismo (leyes de indias) la superioridad de la civilización hispánica impulso a los
mismos indios a abandonar a menudo innecesariamente sus costumbres, en beneficio del sistema
nuevo.
DERECHO HISPÁNICO
Desde el siglo XII hasta el comienzo del siglo XIX, el derecho romano tuvo que imponerse al
tradicionalismo de los campesinos y de las clases feudales; encontró cierto apoyo en frecuente
alianza con el derecho canónico. Éste había recibido más consistencia por la elaboración del
decreto de graciano, y más tarde por las decretales, como una de las obras importantes bases
jurídicas de la iglesia y como la iglesia acepto el derecho romano como derecho supletorio, esta
alianza de los “dos derechos” logró cambiar el tono del sistema jurídico español de la edad media.
LA SIETES PARTIDAS fueron propuestas originariamente como una legislación modelo en la que los
juristas y legisladores españoles podrían inspirarse para sus innovaciones o interpretaciones, pero
un siglo después, bajo el régimen del bisnieto de Alfonso el Sabio, (o sea Alfonso XI) alcanzaron
oficialmente en Castilla la categoría de derecho supletorio, mediante el ordenamiento de Alcalá.
Estas partidas contienen una versión popularizada de normas romanistas, en mezcla con figuras de
inspiración visigótica feudal y canónica. En el curso de los siglos. Encontraron importantes
comentaristas (Gregorio López, sobre todo) que mediante sus glosas acercaron las siete partidas
más aún a las obras de los posglosadores.
El hecho de la continuada utilización del derecho romano, a pesar de la prohibición de 1505, fue
reconocido por una norma expedida, en 1713, por el consejo de castilla, que cuando menos
intenta el papel del derecho romano al de ser derecho supletorio.
A partir de 1810, una rama especial del derecho español llegó a tener gran importancia para
nuestro país: la rama constitucional. Durante la guerra de independencia entré España y el invasor
francés (1808-1814) surgieron dos constituciones, la de Bayona y la que emano de la resistencia
española (1810-1814), mejor llamada coma la;
1. EL DERECHO INDIANO
En la historia del derecho indiano, debemos distinguir entre dos fases: una fase inicial, en la que se
discute los fundamentos ideológicos de este derecho (cuestiones como la del derecho adquirido
de los indios respecto de sus tierras, la posibilidad de hacerles esclavos, o la de repetir a los indios
entre los españoles, como recompensa de su conducta en la fase de la conquista), y otra fase a
partir de mediados del siglo XVI, cuando estas bases comienzan a consolidarse; existe una
tranquila organización administrativa del inmenso territorio.
Una primera fuente del derecho es la legislación. De esta fuente emana una avalancha de cédulas
reales, provisionales, instrucciones, ordenanzas, autos acordados, pragmatismos, reglamentos,
decretos, cartas abiertas, etc. Algunas normas del derecho indiano valían sólo en algunos
territorios ultramarinos españoles, otras en todas las indias occidentales.
A pesar de la aureola de poder de Madrid había otorgado al virrey, la audiencia de México nunca
se subordinó completamente a la voluntad virreynal en materia administrativa y mucho menos
aún en materia judiacial. La figura del consulado figura en México en (1593) en donde la nueva
España tuvo su primer consulado en la ciudad de México, y afines de la fase virreinal también se
establecieron consulados en Veracruz, Guadalajara y Puebla. La existencia de estos consulados
añadió otro renglón más al catálogo de fuentes de fricción, existentes en la Nueva España. Dentro
del consulado de México hubo una perpetua lucha entre dos facciones: “los monrtañeses” y “los
vizcaínos”, también entre el consulado de México y los demás consulados de la nueva España
hubo conflictos.
2. LA ORGANIZACIÓN DE JUSTICIA.
La justicia estaba sujeta a un régimen de múltiples fueros, con tribunales especiales según la
materia de controversia o las partes del litigio, todos los tribunales pronuncian sus sentencias a
nombre del rey, y éste podía intervenir en los procesos mediante instrucciones ad hoc: la justicia
virreinal estaba lejos de ser una justicia independiente.
Casos de poca importancia entre colonos, podían ser juzgados ante un alcalde ordinario con
apelación ante el cabildo (eran pequeñas audiencias: le correspondían funciones judiciales,
administrativas y legislativas. Su función judicial era más bien de apelación, correspondiendo la
primera instancia a los alcaldes ordinarios.
Mediante un ligero aumento del tributo, el “medio real de ministros”, los indios mismos cubrieron
el gasto respectivo. Este nuevo juzgado no incluía la competencia de los alcaldes mayores y
corregidores: los indígenas estaban libres para optar entre estos órganos jurisdiccionales. Además
desde 1591, la corona dispuso que a cada audiencia debía ser adscrito un “protector de indios”.
Paralelamente, para aquellos litigios entre indios y españoles, que hubieran sido resueltos en
primera instancia por corregidores o alcaldes mayores, hubo apelación ante la audiencia.
Los beneficios que la corona recibió de la colonización del nuevo Mundo no consistían en tales
dividendos, que como socio de las empresas descubridoras le tocarían, sino que le llegaron por
una serie de canales fiscales distintos, los cuales analizaremos los principales tales como son
A).- MINAS: las minas (como todo el subsuela) pertenecían a la corona, independientemente de la
concesión de mercedes sobre el suelo mismo, y sólo podían ser exploradas mediante autorización
especial, que fijaba en cada caso el porcentaje del producto minero que debían entregarse al
agrario (generalmente una quinta parte). Lo mismo vale respecto de la búsqueda de oro en lecho
de ríos y de salinas. Las ordenanzas de 1573, confirman el principio de que la cuota normal era de
un 20%.
B).- MONOPOLIOS: hubo ciertos productos que sólo podían explorarse por la corona misma como
naipe, azogue, pólvora, canela y pimienta, también la lotería estatal, organizada en 1769, dejaba
ganancias a la corona. Desde 1719, también la distribución de nieve de las cimas del popocatépetl
y del pico de Orizaba dio lugar aun estanco. Como otro estanco puede considerase el monopolio
estatal del correo, el tabaco.
E).- VENTA DE OFICIOS PÚBLICOS: la venta de ciertos oficios públicos aportaba dinero a la corona.
La administración pública bajo la casa austriaca fue plagada por el sistema de venta de oficios
públicos. Esto quiere decir que los puestos de corregidores y alcaldes mayores eran vendibles y
casi todos los puestos públicos también.
F).- DIEZMO: la posición dentro del registro patronato permitía a la corona cobrar los diezmos y
aunque también tuvo que sostener el culto, generalmente quedaba un margen disponible,
oficialmente de una novena parte.
G).- TRIBUTO: También, existió el tributo a cargo de los indios adultos (las indias quedaban
generalmente exentas, según una cédula real de 1618). Si se trataba de indios “encomendados”, la
corona no recibía tal tributo (sólo desde fines del siglo XVII, cuando la encomienda ya estaba en
plena decadencia, el encomendado debía entregar a la corona parte de los tributos cobrados por
él), pero tratándose de indios realengo, cuya cantidad aumentaba con la gradual liquidación de la
encomienda, todo el tributo era para la corona.
H).- IMPUESTO AL COMERCIO: hubo múltiples impuestos relacionados con el comercio, como la
famosa “alcabala” el cual fue un impuesto sobre ingresos mercantiles, las organizaciones de
comerciantes que antemano debían pagar a la corona cierta cantidad anual para cobrar luego el
impuesto por propia cuenta, de acuerdo con la tarifas de las variadas mercancías vendidas.
I).- PAPEL SELLADO: ciertos actos jurídicos debían constar en papel sellado, antecede de nuestro
impuesto del timbre.
J).- IMPUESTOS A FUNCIONARIOS PUBLICOS: los funcionarios civiles debían pagar un impuesto
personal. La mesada, y la media anata (mitad de un sueldo anual en el momento del
nombramiento).
K).- CONCESIÓN DE TITULOS NOBILIARIOS: para los títulos de conde o marques, la corona cobraba
un derecho llamado “de lanzas”, que podían consistir en una cantidad fuerte, por una vez, o
intereses al 5% sobre esta cantidad, anualmente.
L).- DONATIVOS FORSOZOS: fueron solicitados por la corona por en caso de emergencia, ejemplo
de ello, era que tenían que dar de donativo la cantidad de un peso, por cada indio o casta y dos
pesos por español o noble, reclamado por el ministro de indias en agosto de 1780.
M).- CONFISCACIÓN DE BIENES: la confiscación de bienes como testigo de ciertos delitos, y la pena
del “comiso y de los descaminos” de ciertos bienes (contrabando).
Múltiples son las fuentes del derecho penal, aplicando n este país durante los siglos virreinales. El
derecho indiano contienen normas panales dispersas en las leyes de indias. Varias cédulas reales
combaten la tendencia de ciertos jueces de moderar las penas previstas en las normas penales, o
de conciliar las partes en los juicios penales, recordándoles que su trabajo no es el de juzgar las
leyes, sino de ejecutarlas. Supletoriamente tuvo aquí en vigor del derecho penal castellano, que
proporciona la mayor parte de las normas aplicadas en las Indias. Este derecho en su aspecto
penal no es muy homogéneo: como su fuente debemos mencionar el FUERO JUZGO, EL FUERO
VIEJO, EL FUERO REAL, LAS SIETE PARTIDAS, EL ORDENAMIENTO DE ALCALA, LAS ORDENANZAS
REALES, LAS LEYES DE TORO, LA NOVISIMA RECOPILACIÓN, SIETE PARTIDAS, la materia probatoria
penal se encuentra combinada con la probatoria civil, este derecho penal de las Partidas combina
la tradición romana con la germánica, dejando sentir a veces cierta influencia del derecho
canónico
La detención de Fernando VII (1808) por Napoleón, en Bayonne, Francia y su renuncia bajo
intimidación, la cual abrió el camino al trono español para el hermano de Napoleón José (“pepe
botella”). La manifiesta debilidad de España, varios factores más contribuyeron a la independencia
de México y la mayor parte de la América Española. Entre ellos figuran: el rencor de los cultos y
prósperos criollos por el monopolio del poder político que los peninsulares (“gachupines”) se
arrogaban; el ejemplo de los Estados Unidos de Norteamérica e incluso el éxito de la revolución de
los esclavos negros, a la que Haití debe su independencia de Francia; la ideología de la iluminación
de Montesquieu, Voltaire, Rousseau y Raynal tan popular en su época, tan olvidado en la
actualidad, posturas que habían logrado penetrar en la nueva España a pesar del endurecimiento
intermitente de la política de la censura, la recuperación de las ideas de la Revolución francesa, y
el triunfo de esta, también jugo un papel importante el impacto de la popular obra de Alejandro
Von Humboldt que, por tono de masiado optimista sobre las potencialidades económicas de la
nueva España y el impacto de los gastos bélicos de este país estaba impidiendo que la Nueva
España pudiera realizar un enorme auge económico general. También se añade desde 1811 el
ejemplo de otros países hispanoamericanos, como es la independencia de Paraguay, la de
Venezuela, la de Argentina, de Chile, Colombia, Bolívar, de Perú, y la resistencia de las clases
superiores novohispánicas contra la reimplantación de la liberal CONSTITUCIÓN DE CÁDIZ, en
1820. En este momento conoceremos algunas características de esta constitución y empezaremos
por decir que fue promulgada el 18 de marzo de 1812. Por la corte de España, de Fernando VII,
esta constitución fue liberal, sin abandonar, empero, la idea monárquica y el monopolio de la
religión católica. Esta constitución fue la primera formal que regio a México, la cual fue una obra
buena para aquella época, entre sus principales derechos son:
o La separación de poderes
o Desde 1808, muchos criollos de la Nueva España pensaron que el momento era
oportuno para obtener una independencia regional, eliminándose para siempre la
discriminación de la era objeto por parte de los penisisulares o “gachupines”. El
ayuntamiento de México, tomó la iniciativa, disfrazando sus ideas como
manifestación de lealtad al rey Fernando VII y alegando que éste había abdicado
bajo presión “algo que México no debía reconocer como válido”. Pero otros se
consideraron amenazados por ideas de una independencia criolla, antipeninsular,
e hicieron fracasar el plan del ayuntamiento
Esta crisis de autoridad, causada por la discordia entre los ricos criollos y los poderosos
peninsulares, no tuvo resultados convenientes para ninguno de los dos, sino que preparó al
camino para un movimiento popular de indios y mestizos, que tuvo un comienzo visible en la
famosa proclamación del emocional sacerdote Hidalgo, en septiembre de 1810.
Después de la batalla en el puente calderón, el 17 de enero del 1811, Hidalgo, grande como
carismático líder de los oprimidos, pero incompetente como jefe militar fue sustituido por el
sensato Allende. Sin embargo, ya era demasiado tarde para salvar la causa de los insurgentes.
Luego de la ejecución de Hidalgo y Allende, la lucha de los Insurgentes fue continuada por
Morelos. En 1813 éste convocó al Primer Congreso de Anáhua, en Chilpancingo, que debían
preparar una constitución para la nueva nación. Un reglamento previo, obra de Quintata Roo,
sobre todo, estableció el sistema para la elección de los diputados (11 de septiembre de 1813),
pero sus 59 artículos también contienen normas constitucionales que van más allá de dicha
finalidad. Posteriormente, el 14 de septiembre de 1813, Morelos público los SENTIMIENTOS DE LA
NACIÓN, en 22 artículos, en este escrito se proclama entre otros derechos:
o la libertad de América
o la ausencia de privilegios
o soberanía popular
o el principios de nullum crimen sine lege y que la pena debe ser personal contra el
reo
o la tiranía y arbritarios los actos ejercidos contra un ciudadano sin las formalidades
de la ley
Esta constitución fue interrumpida por su derrota de Morelos, cerca de Valladolid (Morelia), y fue
infligida por Iturbide, el secreto admirador de Napoleón, a quién tomó por modelo, Morelos fue
ejecutado en 1815, y durante unos años los criollos y “gachupines” gozaron de nuevo de una
relativa paz, bajo el rey Fernando VII.
En 1820 la rebelión liberal del coronel Rafael de Riego, obligó al rey Fernando VII a acatar la
Constitución de Cádiz, que fue promulgada por segunda vez en México el 3 de mayo de 1820,
junto con la constitución regresaron las principales leyes liberales, elaboradas por la primera corte.
Los poderosos de la nueva España (incluyendo la Iglesia) recordaban de pronto los antiguos ideales
de un México independiente, que permitía guardar fuera del país aquella impía obra
revolucionaria, la Constitución de Cádiz. Surgió así el plan de la Prodesa; Agustín de iturbide se
colocó de lado de estas ideas, reconciliándose con los guerrilleros de Guerrero, último resto de la
insurrección de Hidalgo, Allende y Morelos, lo cual dio lugar al Plan de Iguala (24 de Febrero de
1821), este ofreció la corona de México independiente a Fernando VII, creo una nacionalidad
mexicana, en que peninsulares, criollos, mestizos e indios gozarían de iguales derechos. El nuevo
virrey, Juan O´Donojú, precisamente en camino para México, este plan de Iguala mediante los
tratados de Córdoba del 23 de Agosto de 1821. Estos tratados encargaron a Iturbe el gobierno
provisional, junto con un consejo de 38 miembros, que debían preparar un congreso
constituyente. El 28 de Septiembre de 1821, Iturbide proclamó solemnemente la independencia
del Imperio Mexicano.
Posteriormente el congreso Constituyente se presentó, con 120 miembros. Éste, después de varias
sesiones no muy pragmáticas, y bajo el impacto de una emocional manifestación militar-popular
(18 de mayo de 1822), nombró a Iturbide emperador, el 21 de Julio de 1822.
Visto a posteriori; la presentación de los criollos y del alto clero, de la nación la independencia, era
innecesaria: en 1823 Fernando VII barrió nuevamente el liberalismo y hasta su muerte; en 1833;
España sufrió bajo un régimen que hubiera encantado al predominante contingente conservador
de la élite mexicana de aquellos días.
En el segundo Congreso Constituyente obró en tres etapas. Primero confirmó la idea de implantar
el sistema federal (“voto por la reforma de república federal”, 12 de Junio de 1823); luego expidió
el 31 de enero de 1824 el acta constitutiva, de 36 artículos, confirmando de nuevo el federalismo,
y añadiendo otros principios básicos más como el bicamerismo (dos cámaras) y finalmente
expidió, el 4 de Octubre de 1824, la Constitución Federal. En estas obras dominó el espíritu de los
liberales, miguel Ramos Arizpe y además se inspiraron en la Constitución de Cádiz y en la
norteamericana.
Gómez Farias, asistido por Zavala y por el erudito ex sacerdote José María Luis Mora, lanzó una
legislación precursora de las Leyes de Reforma; insistiendo en que la nación mexicana había
heredado el Patronato Real, combatiendo la mano muerta, aboliendo los diezmos, prohibiendo la
política desde el púlpito; además, negó el paso a unas bulas. También limitó la jurisdicción de
tribunales militares y eclesiásticos, para evitar que protegiera a influyentes, no estrictamente
pertenecientes a la casta clerical o militar.
Con la reacción de Santa Anna contra la política de su activo y liberal vicepresidente, Gómez
Farías, se inició una nueva fase en el santanismo, que también requería una nueva expresión
constitucional. El Congreso establecido el 4 de enero de 1835 después de algunos meses, se
declaró, el tercer Congreso Constituyente; primero produjo las Bases para la nueva Constitución
(23 de Octubre de 1835) y luego, del 15 de Diciembre de 1835, al 6 de Diciembre de 1836 las Siete
Leyes Constitucionales, que además de contener importantes “derechos del hombre”, establecen
los principios centralistas, plutocráticos (ingreso mínimo para poder fungir como ciudadano) y de
tolerancia religiosa, creando además el supremo Poder Conservador, o sea, una comisión de cinco
personas que deben guardar la constitución y sostener el equilibrio constitucional entre los
poderes; comisión sólo responsable ante Dios y la opinión pública…las principales facultades de
este Supremo Poder eran:
A) Decidir sobre la nulidad de leyes o derechos anticonstitucionales si lo pide el poder ejecutivo, la
Suprema Corte de Justicia o cuando menos 18 miembros del poder legislativo.
B) Decidir sobre la nulidad de actos anticonstitucionales del poder ejecutivo, a petición del poder
legislativo o de la Suprema Corte.
El costoso, pomposo e ineficaz régimen de Santa Anna, le costó el trono en 1844, siendo su
sucesor el liberal Herrera, quien tuvo la mala suerte de que, bajo se régimen, explotara el
problema Texano (sin resolver desde 1838, ya que México nunca había reconocido la
independencia texana). Como el Congreso de Estados Unidos no quiso adoptar Texas (los Estados
norteños se opusieron a la añadidura de un Estado que reconociera la esclavitud) y como Texas
tenía miedo a los intentos mexicanos de recuperarlo, quiso colocarse bajo protectorado británico.
El espíritu de la doctrina Monroe fue más fuerte que la preocupación por el equilibrio entre los
estados esclavistas y antiesclavistas, y los Estados Unidos aceptaron la entrada de Texas a la unión
en 1846. esta decepción costó la presencia a herrera, cuyo sucesor, después de breve intervalo,
fue Gómez Farías, quien, mediante el Acta Constitutiva y de Reforma, 1847, devolvió al país la
Constitución de 1824 y entre ellas encontramos al acierto de Mariano Otero: el artículo 25, que
concede competencia a los tribunales federales para proteger a los habitantes de la república “en
el ejercicio y conservación de los derechos que le conceden esta constitución y las leyes
constitucionales, contra todo ataque de los poderes legislativos y ejecutivo, ya que la federación,
ya de los estados, limitándose dichos tribunales a impartir su protección en el caso particular
sobre el que verse el proceso, sin hacer ninguna declaración general respecto de la ley o acto que
lo motivare. Con esto, las grandes líneas del amparo ya restaba lista: control por la justicia federal,
a petición de particulares agraviados por violación de sus derechos constitucionales, y con efecto
limitados al caso concreto (o sea, sin convertir la corte en un organismo derogado de leyes). Se
nota, sin embargo, que las violaciones de los derechos constitucionales por el poder judicial, aún
queda comprendidas en los casos en que se puede solicitar amparo.
Como una especie de preconstitución, Santa Anna público en Abril de 1853 sus Bases para la
Administración de la República, que debían regir hasta la promulgación de una nueva constitución.
El hecho de que Alemán muera poco después, privó a México del hombre que quizás hubiera
tenido el prestigio sufieciente para frenar las extravagancias de Santa Anna, mismas que pronto lo
llevaron hacia la venta de otra parte del territorio, la Mesilla, en el sur del Nuevo México y Arizona,
por 10 millones de dólares (tratado Gadsen, 1854).
En relación con el derecho privado, fue importante el Código de comercio, elaborado por el
ministro de Justicia de Santa Anca, teodosio Lares, y que estuvo en vigor entre mayo de 1854 y
noviembre de 1855. Cuando este código fue derogado en 1856, más bien por aversión política
respecto de todo lo que recordaba a Santa Anna, que por defecto de calidad, algunos de los
estados promulgan código de comercio locales, inspirados en el Código Lares (mientras que los
demás regresaron a las Ordenanzas de bilbao).
En 1833 y en 1842 se publicaron nuevas ediciones de la Ordenanza Militar española de 1768, con
sus adiciones españolas y más tarde sus adiciones y modificaciones mexicanas. También seguía
teniendo gran importancia la obra española didáctico-doctrinal para el derecho militar. Los
juzgados militares de España y sus Indias, por Félix Colón de Larriétegui, el 28 de de marzo de
1842, Santa Anna también autorizó el uso oficial de una didáctica mexicana, que al igual que el
tercer turno de Colon, contiene múltiples formularios de derecho militar, el Catecismo práctico
criminal de juicios militares, de Miguel maría de Azcárate, publicado en México, en 1834.
El 18 de Octubre de 1841 Santa Anna reorganizo el ejercito; el 17 de enero de 1842 creó las
“fuerzas rurales”, a cargo de pueblos y hacendados, a la disposición del presidente; pero la gran
reforma militar de esta fase va ligada al nombre de arista, creador de la primera Ordenanza
General del Ejercito Mexicano, de 1852, que muestra un loable intento de restablecer la disciplina,
de reducir el volumen del ejercito y de eliminar la lava. Esta reforma, empero, no era duradera y,
ya en 1853, Santa Anna cambió todo el sistema, refundiendo las guardias de los estados con las
fuerzas federales, y creando así un ejercito a sus disposición personal, de unos 70 000 hombres,
fuerzas considerables que no salvó, sin embargo, ya que, en gran parte, se volvió contra él durante
la próxima crisis.
El descontento con el régimen del dictador, que ya estaba envejeciendo y a cuyo lado ya no
figuraba la compensatoria personalidad de Lucas Alemán, preparó el camino para un grupo de
liberales (Comonfort, Álvarez, Juárez y otros), que bajo la bandera del Plan de Ayutla (1854)
derrocaron a Santa Anna. Luego vemos a Juan Álvarez como presidente, y poco después a
Comorfort (con Benito Juárez como ministro de Justicia).
En el siglo pasado, “el indio” era un fenómeno de muchas facetas. En el norte vivían los “salvajes”,
no incorporados a la civilización y estructura estatal mexicanas, enemigos de los blancos,
defendiendo ferozmente sus campos y sus costumbres. Además existían pequeños propietarios,
que a menudo también podían aprovechar terrenos comunales; sus contactos con el mundo
blanco no siempre habían sido favorables y a través del siglo XIX, observamos varías revoluciones
de los campesinos, especialmente en Yucatán, Sierra Gorda, San Luís Potosí y Guerrero (“guerras
de castas”), precursores de la revolución de 1910. A veces reclamaban la devolución de tierras,
arrebatadas ilegalmente desde la conquista, y se conocen algunos casos en que realmente
obtuvieron resultados positivos.
Además hubo indios, ocupados en la minería (que continuaba ofreciendo salarios superiores a los
vigentes en otras ramas de la economía) y en la industria, una enorme cantidad de “léperos” (25%
de la población de la capital, por ejemplo), no incorporados en el sistema económicos del país,
pintoresco, divertidos, deshonestos, pero con su propio código de honor y que generalmente
afectaron simpáticamente al observador extranjero. Subsiste en aquellos años el problema de los
indios nómadas, en el norte del país, que México trataba de disciplinar mediante respectivas, ya
que eran una vida excepcionalmente ruda, en aquellas regiones. Las invasiones de los indios
norteamericanos alcanzaron incluso Zacatecas y Durango y en los estados de Chihuahua y Durango
aprobaron leyes que establecieron premios por cada “indio de armas” muerto o ligeramente más
altos prisioneros.
En general debe admitirse que los proletariados perdidos con la independencia, mientras que la
corona española les habían concedido cierta protección, que no era puramente teórica, u un
mínimo de tranquilidad, ahora las clases privilegiadas locales podían tratarles a su antojo, u la
independencia local, favorecida por el federalismo, hacía la situación peor para ellos. Además,
ellos llevaron gran parte del paso de las guerras civiles y otras. El igualitarismo formal de la era
liberal les resultaron peor que antes, el paternalismo cristianote los reyes de la casa austriaca.
La clase media era raquítica; las profesiones liberales (con excepciones de la de abogado) se
encontraban principalmente entre las manos de extranjeros. La clase media nacional comprendía
una crecida cantidad de burócratas (a menudo producto de la tendencia de recompensar favores).
EL DERECHO EN LIBERALISMO
El primer presidente bajo la nueva constitución fue comonfort, y como vicepresidente figuró
BENITO JUÁREZ, el obstinado puritano legalista, en gran parte educado hacia la ideología liberal
por Melchor Ocampo, a quien había encontrado durante su exilio en Nueva Orleáns, en los últimos
años del antanismo.
En materia legislativa, el primer triunfo de la causa liberal dio lugar a dos importantes leyes, la ley
Juárez (o sea, la ley de administración de Justicia y orgánica de los Tribunales de la federación) y la
ley Lerdo.
o abolió el fuero eclesiástico en asuntos civiles y daba opción a los clérigos para que
se sometieran a este fuero o al común, en materia penal (aunque, de acuerdo con
el derecho canónico, el fuero eclesiástico no es renunciable).
o el artículo 13 de la Constitución de 1857 iba más lejos aún, exigiendo una estricta
conexión del delito con la disciplina militar para el que el fuero de guerra pudiera
ocuparse de el.
La ley Lerdo ataco el poder económico de la iglesia. Esta ley de Desamortización (1856), en
realidad un decreto es el ejemplo de cómo de leyes bien intencionadas pueden resultar
catrastoficas para el país, por el hecho de basarse en consideraciones ideológicas abstractas y no
tomar en cuenta la reliad concreta del medio social en que trabaja.
La idea básica es de permitir que toda persona que trabajara la tierra de una corporación
eclesiástica o comunidad de indios pudiera comprarla durante un plazo de tres meses, por una
cantidad basada en la capitalización en la renta que paga, esta operación quedaría grabada por un
impuesto relativamente alto. Después de esos tres meses cualquier tercero podría denunciar la
tierra en cuestión, reclamándola en las condiciones arriba mencionadas, pero recibiendo un
premio de una octava parte sobre el precio.
La falta de fondo por parte de los campesinos, y su miedo de su excomunión explica que esta ley
haya acentuado a la tendencia hacia el latifundismo, destrozando al mismo tiempo, la propiedad
comunal de ciertos grupos de indios, que ha menudo habían logrado sobrevivir a los ataques
ilegales que los terratenientes le habían lanzado durante la fase virreynal.
A demás la iglesia, que así se vería privada de toda propiedad raíz que no necesitará directamente
para el mismo culto, quedaría expulsada de la explotación agrícola, a la cual se había dedicado, a
menudo con gran beneficio no sólo de ella misma sino de la economía mexicana en lo general
(observamos de paso que el peón de las haciendas eclesiásticas recibía generalmente un mejor
tratamiento que su colega, trabajando en un latifundio privado), también debe reconocerse que
gran parte de los beneficios obtenidos por la iglesia por la aceptada explotación de sus bienes
raíces se utilizaron para fines de enseñanza, hospitales y de beneficencia pública. Finalmente debe
criticarse la ley lerdo por:
A) dejar a la iglesia el producto neto de la venta, financiando así la rebelión eclesiástica contra el
gobierno liberal (este error fue corregido más tarde por las leyes de reforma, de Juárez, de 1859,
que preveían confiscación sin indemnización alguna).
B) otros golpes para la iglesia fueron de la erogación del decreto del 26 de junio de 1854, (de Santa
Anna) sobre la sanción estatal de los votos monásticos, el 26 de Abril de 1856.
C) el 7 de Abril de 1856, la derogación del decreto del 19 de Septiembre de 1853; que readmitían a
los jesuitas.
D) La ideología liberal corresponde también la secularización del registro civil (ley del 27 de enero
de 1857) y de los comentarios (ley del 30 de enero de 1857).
E) Por su parte, la ley Iglesias (1857), debía a la iniciativa de José María Iglesias, prohibía cobrar los
derechos parroquiales a personas que apenas tenían lo necesario para vivir (11 de Abril de 1857).
A esta época no solo debemos disposiciones de índole ideológica. La ley sobre la administración de
Justicia u orgánica de los Tribunales de la federación, que ya hemos mencionado, además de su
actitud anticlerical contiene varias innovaciones pragmáticas, y además, en otras materias, el
nuevo gobierno esperaba poder modernizar el país. El 13 de Marzo de 1857 se ordenó el
deslizamiento de terrenos baldíos de la republica, como punto de partida para una política de
colonización; el 15 de Marzo de 1857 se adopto un sistema métrico decimal francés, y el 22 de
abril de 1857 se adelantó en la legislación sobre vías de comunicación (ley de administración de
caminos y peajes). Una ley del 4 de Mayo de 1857, inspirada en la ley de enjuiciamiento civil, de
España, de 1855, vino a modernizar el procedimiento ante los tribunales del Distrito y Territorios.
Sin embargo, no sólo mediante leyes ordinarias los nuevos gobernantes querían reformar el país;
era necesario apoyar su política en una nueva constitución que diera expresión a la ideología
liberal de aquella época. Por lo tanto, se convocó a un séptimo Congreso Constituyente Mexicano,
presidio por Ponciano Arriaga (congreso cuyo historiador era Francisco Zarco). Este congreso
deliberó desde el 18 de febrero de 1856. Para el intervalo hasta que entrara en vigor la nueva
constitución, el presidente Comonfort expidió el 15 de Mayo de 1856 un estatuto orgánico
provisional de la República mexicana (1856).
Al comienzo del año siguiente, 1857, la nueva constitución estaba lista para ser firmada. Su tono
era tan anticlerical (para aquella época) que el papa mismo, Pío IX, católico que participara en su
formalización. Sin embargo, el 12 de febrero los miembros del congreso la firmaron. Esta
constitución contiene en la sección I del título I una importante lista de los derechos sociales.
Además, en sus artículos 101 y 103 reglamenta el juicio de amparo, continuando la línea que va
desde el poder conservador a la constitución yucateca de 1840, al proyecto minoritario del 1842,
las bases de 1843, hasta el artículo 25 del acta de reforma de 1847.
El aspecto criticable de esta constitución fue que, como reacción al santanismo, puso al ejecutivo a
tal punto bajo el control del congreso, que fuertes presidentes, como Juárez y Porfirio Díaz,
enfrentándose con enorme tensiones, o vislumbrado grandes posibilidades, no pudieron acatar
totalmente. A menudo, la alternativa no era su existencia de 60 años, la constitución de 1857
nunca tuvo una plena eficacia; la élite en el poder consideraba generalmente que era un
documento demasiado noble como para mezclarlo en la vil política y decidió no acatarla. En 1861,
el gobierno mexicano se enfrentaba con dos graves problemas:
A) los restos de la resistencia militar conservadora (General Márquez), y la pobreza del erario (y,
por lo tanto, la imposibilidad de pagar el ejército). El primer problema llevó hacia el intento de
Juárez de atraerse a los conservadores mediante una política conciliatoria, lo cual causó su
alejamiento de Melchor Ocampo (que poco después fue fusilado por Márquez).
B) El segundo problema llevó hacia la emisión del papel moneda (12 de Septiembre de 1862), por
primera vez en México, e hizo necesaria la declaración unilateral, por Juárez, de una moratoria en
cuanto a toda la deuda extranjera, lo cual, a su vez, motivó la intervención armada de España,
Inglaterra y Francia, concertada en el Pacto de Londres, en octubre de 1861. Cuando España e
Inglaterra se dieron cuanta de que Francia no había venido en plan de cobradora, sino para
establecer para Napoleón III una zona de influencia francesa, administrada por una persona se su
confianza, se retiraron (primavera 1862).
De 1862 a1864, las tropas francesas, con ayuda de los conservadores, se dedicaron a su misión
civilisatrice, napoleón III habían encontrado a la persona que podrían administrar México en
sentido favorable a sus intereses: Maximiliano de Habsburgo. Éste, amargado por discusiones con
su hermano, el emperador Francisco José, y con su ambiciosa esposa carlota, que no estaba
satisfecha con la bucólica tranquilidad del castillo de Maximiliano en Miramar (sobre la costa
adriática), fue convencido por diplomáticos mexicanos de que él interés de su religión y la
verdadera voluntad del pueblo mexicano requerían que él aceptara el trono de México.
Entre tanto (después de una llamativa derrota en Puebla, el 5 de Mayo de 1862) los franceses
habían expulsado a Juárez de la capital. Maximiliano firmó un pacto con napoleón III, prometiendo
el pago de 260 millones de Francos por la ayuda militar francesa entre 1864 y 1867, tiempo que
necesitaría por consolidar su poder, y en mayo de 1864 Maximiliano y carlota llegaron a Veracruz
(pendiente de la llegada del nuevo soberano, México había sido gobernado por una Regencia de
los generales Almonte y J.M. Salas, y el arzobispo de Labastida).
Maximiliano, hombre de buena voluntad hacia México, pronto se encontró aislado: su negativa
para revocar la legislación juarista lo hizo sospechoso a los ojos de los conservadores. Sobre todo
en relación con el problema pendiente de los bienes de la iglesia, Maximiliano no quiso obedecer a
la presión del arzobispo De Labastida y del vaticano; declaró públicamente que su poder serían
transitorio, y sólo lo conservaría el tiempo preciso para crear en México un orden regular y para
establecer instituciones sabiamente liberales.
Otra muestra de sinceridad del liberalismo de Maximiliano fue el decreto del 26 de febrero de
1865, que confirma la libertad religiosa y la nacionalización de los bienes eclesiásticos. Juárez por
otra parte rechazo la invitación para ser consejero personal. El fin de la guerra civil
norteamericana alimento la guerrilla en México con grandes cantidades de armas, ahora
disponibles en el norte, y cuando el ejercito francés tuvo que regresar antes del plazo previsto (por
la amenaza bismarckismo), Maximiliano quiso abdicar. Carlota, empero, logró evitar esta, y
emprendió una visita a Europa para organizar una acción de auxilio: después de algunas
decepciones, al respecto, enloqueció (en 1927), finalmente murió en Bélgica) Maximiliano.
Después de vacilar mucho, decidió quedarse, y se enfrento con dignidad a su hado.
Mocionaremos algunas leyes de la legislación imperial que de ningún modo merece el descuido en
el que habitualmente la conservamos. Su fundamento era una ley del 16 de Julio de 1863 sobre la
Asamblea de Notables y sobre el poder ejecutivo, seguida por las bases para el nuevo Imperio, del
11 de julio de 1863 y finalmente el Estatuto provisional del imperio Mexicano del 10 de abril de
1865. Sobre estas bases, Maximiliano y sus colaboradores se dedicaron a una minutaría labor
legislativa:
o Las normas sobre el cuerpo diplomático del 23 de Junio de 1864 y del 2 de agosto
de 1865
o De colonización
ÉPOCA JUARISTA
En 1867, Juárez entró una vez más en la capital y un decreto del 20 de agosto de 1867 anuló con
efecto retroactivo la legislación del segundo Imperio. Esta tercera victoria del liberalismo,
comenzó equivocadamente: el presidente lesionó la sensibilidad de un joven general, Porfirio Díaz,
quien nunca olvidaría este detalle (pronto oímos de una revolución en Oaxaca, instigada por él).
Además, no había dinero, de modo que el ejército fue reducido drásticamente, lo cual lesionó
intereses. Una sequía, en 1869, agravó más la situación. Sin embargo, gracias al nuevo sentido de
nacionalidad que las desgracias de los últimos años habían dado a México, a la energía del
discutible general Sóstenes Rocha, y a figuras como Matías Romero, los próximos años no
constituyeron un fracaso total.
En cuanto a la legislación durante los últimos años de Juárez: en 1867, Sebastián Lerdo de Tejada
propuso en balde aquellas reformas que hubieran podido hacer funcionar la Constitución de 1857,
tratando de devolver cierta independencia al ejecutivo frente al congreso, pero no tuvo éxito (sólo
el 13 de Noviembre de 1874, cuando era presidente, logró algunas de sus propuestas: el retorno al
bicamerismo y la reintroducción del veto presidencial).
México había sufrido una total desorganización en materia militar, cosa natural en un ambiente de
guerra civil, mezclado con intervención extranjera. Habían surgido múltiples fuerzas irregulares,
improvisadas a menudo dedicadas al saqueo. Así se impuso la gran reforma del ejército mexicano,
de septiembre de 1867.
Desde 1867 observamos también un serio esfuerzo para mejorar la educación pública. A este tema
se refiere la Ley orgánica de la Instrucción Pública en el Distrito Federal, del 2 de Diciembre de
1867, que da una nueva base a la educación pública distrital, colocándola bajo la égida del
positivismo (A, Comte), corriente antimetafísica, pragmática. De esta organización nació la Escuela
Nacional Preparatoria, como base a las diversas carreras profesionales, con un bachillerato
variable según las necesidades de éstas.
Un importante propulsor de estas medidas fue Gabino Barreda, el cual por ser convencido
positivista, introdujo un tono pragmático, antimetafísico en la educación. La enseñanza pública era
gratuita desde 1867 y, además, desde 1869, es laica. Desde entonces, México ha insistido en estos
rasgos de la enseñanza (en la actualidad, la educación impartida por la federación, los estados y
los municipios es gratuita y a toda educación, impartida por el estado o por particulares,
tratándose de la primaria, secundaria, normal, obrera o campesina, debe ser ajena a cualquier
doctrina religiosa; a demás, la educación primaria es obligatoria, aunque, por otra parte, nos falta
todavía escuelas para toda la juventud escolarizable).
También merece mención la ley del 30 de Mayo de 1868, en la que se trata de esbozar cierta
“clasificación de rentas”, o sea, distribución entre los estados y la Federación de categorías de
impuestos. Como en los intentos anteriores (4 de agosto de 1824, 17 de septiembre de 1846, 27
de abril de 1847, 29 de mayo de 1853 y 12 de Septiembre de 1857) esta ley tampoco llevó hacía
una delimitación exhaustiva en esta importante materia.
De igual forma es importante mencionar, La ley de Orgánica del Amparo, del 20 de Enero de 1869,
además, varias normas jurídicas, sin fondo ideológico especial (por ejemplo, el establecimiento de
la obligatoriedad de las leyes por el hecho de publicarse en el diario oficial, 16 de Agosto de 1867;
la reforma de la moneda del 28 de Noviembre de 1867; la importante Ley Orgánica de Notarios y
actuarios del Distrito Federal, 29 de Noviembre de 1867; una ley sobre la protección de
antigüedades nacionales, 28 de Agosto 1868 y el establecimiento del semanario judicial de la
federación, 8 de Diciembre de 1870).
Más importante aún seria el movimiento codificador mexicano, en los próximos años. En primer
lugar debe mencionarse, al respecto, el Código civil para el distrito federal y el Territorio de la Baja
california, del 13 de diciembre de 1870.
Desde 1862, una comisión había estado trabajando para un código penal del D.F., que debía
sustituir el conjunto heterogéneo de normas, heredadas de la fase virreynal, modificadas y
adicionadas por diversas normas emanadas de las autoridades del México independiente. Los
trabajos fueron interrumpidos de Maximiliano (durante el cual fue declarado aplicable el código
francés), pero una nueva comisión (Antonio Martínez de Castro, José María Lafragua, Manuel Ortiz
de Montellano y Manuel M. de Zamacona), que pudo aprovechar el proyecto para el Código Penal
Español de 1870, trabajó desde 1868 y produjo el Código penal para el D.F y B.C. (1871) del 7 de
Diciembre de 1871, que comenzó a regir en el D.F. y el territorio de la Baja California, y, además,
en toda la República en materia federal, desde el 1° de abril de 1872. También este fue limitado
por los estados de la República (con la excepción del Estado de México).
Poco después de una precaria reelección en una lucha electoral en la cual figuraban Sebastián
lerdo de Tejada y Porfirio Díaz como adversarios, Juárez muere, en 1872. Le sucedió S. Lerdo de
Tejada, culto y capaz, caracterizado por su desconfianza en las inversiones norteamericanas,
desconfianza que lo llevó al extremo de combatir el contacto ferrocarrilero con el poderoso
vecino: “entre fuerza y debilidad conviene mantener un desierto…”
Bajo su régimen fue promulgado el Código de procedimientos civiles para el Distrito Federal, y el
Territorio de la Baja California (13 de agosto de 1872). Además, como ya mencionamos, el 13 de
Noviembre de 1874 se restableció el bicamerismo. Importante era, sobre todo, para la
incorporación de los principios de las Leyes de Reforma a la constitución en 1873. También merece
atención la Ley del timbre, del 1° de Diciembre de 1874.
La creciente impopularidad del nuevo presidente preparó el camino para la revolución de los
porfiristas (Plan de Tuxtepec). Poco después, Lerdo salió de la República y de 1876 a 1910, Porfirio
Díaz dirigió los destinos del país. México hubiera podido encontrar una suerte peor.
EL PORFIRIATO
De 1876 a 1911, México vive de nuevo bajo un despotismo ilustrado, hasta hace poco bastante
desacreditado, pero desde mucho puntos de vista comparables al régimen de los mejores
Barbones. Los principales medios para conservar el poder era el divide et impera y la censura, sólo
como último recurso, Porfirio Díaz recurrió al crimen político.
En materia jurídica anotamos algunas obras importantes de la época así como autores
importantes tales como:
La corriente de los grandes códigos mexicanos, distritales y federales, ya iniciada bajo Juárez, se
continúa con brillo, y alrededor de ellos hallamos mucha otras leyes, generalmente de buen nivel
técnico.
Catorce años después del Código Civil de 1870, el Distrito Federal recibió un nuevo código de esta
materia. Las principales diferencias entre el Código Civil de 1884 y el anterior fueron la (no muy
acertada) supresión de la Portio legítima (figura tan recomendable para reducir los efectos
dañinos del capricho del testador en perjuicio de los miembros de familia más cercanos), la
supresión de la integrum restitutio y la interdicción por prodigalidad.
Observemos aquí que los códigos civiles de 1870 y 1884, y los códigos de los estados, inspirados
en ellos, no permitían la disolución del vínculo matrimonial por divorcio, sino sólo la separación de
los cónyuges.
Una enmienda constitucional del 14.XII. 1883 otorgó a la Federación en 1883, la facultad exclusiva
de legislar en esta materia, incluyendo las instituciones bancarias (y en la materia minera), y ya en
1884 México recibió su primer Código de comercio federal (Código Barranda), inspirado en el
código italiano de 1882 (ya el 11 de diciembre de 1885 el código Barranda sufrió una importante
reforma). También se elaboró poco después una ley especial (10 de Abril de 1888), para
reglamentar la sociedad anónima (al año después, esta materia volvió a entrar en el segundo
Código de comercio (1890), para independizarse, nuevamente, en 1934).
Entre tanto, en 1885, España había promulgado su código de comercio, y ya en 1889 México
recibió un nuevo código en esta materia, que tomó en cuenta algunas soluciones españolas (este
código entró en vigor el 1° de Enero de 1890). Este código todavía es vigente (sin embargo, no
queda más que un torso de la obra original, ya que una tras otra, importantes materias del mismo
encontramos reglamentación en leyes federales especiales, sobre todo a partir de 1932; ya desde
1929 hubo varios proyectos para un nuevo código de comercio, siendo el último de 1960, pero
ninguno prosperó). Mencionemos aún, en relación con esta materia, la ley sobre el Extravío y la
caducidad de Títulos de Crédito, de 1898.
Además, el 28 de noviembre de 1889, México recibió una ley sobre marcas, sustituidas después
por la del 17 de Diciembre de 1897, y el 7 de Junio de 1890 una ley de Patentes, inspiradas en los
derechos belgas y francés. Para hacer el ambiente más atractivo, se suprimió el 2 de Junio de 1896
el principio de la explotación forzosa, necesaria para conservar una patente. En 1903, las leyes
anteriores fueron sustituidas por una de Marcas Industriales y de Comercio y otras de Patentes (en
la que aún falta el examen de la novedad de la inversión en cuestión, o de la existencia de
patentes previas). El 7 de Septiembre de 1903, México se adhirió a la Conversión de París, de 1883,
para la protección de la propiedad industrial.
El 21 de Agosto de 1889 la razón social fue trasformada en Banco de Londres y México; S.A. Desde
1872 funcionaba en México también un banco hipotecario, y en 1881, bajo la presidencia de
González, el banco Nacional de México, con capital francés, vino a enriquecer el panorama
bancario de este país. Desde entonces era frecuente la creación de nuevos bancos, mucho de los
cuales emitían sus propios billetes, de modo que le era imposible al gobierno llevar a cabo una
sensata política monetaria y crediticia central. Sólo en tiempo posrevolucionarios, México logró
centralizar la emisión de papel moneda en manos del gobierno federal. El 19 de Noviembre de
1897, una ley sobre instituciones de crédito vino a organizar esta esencial rama de la vida
económica.
6.- MINERÍA.
Esto acerca la propiedad sobre el subsuelo al régimen común de la propiedad y hacen desaparecer
el principio de la explotación para la conservación de los derechos mineros (1892). Esto, junto con
la general mejora del ambiente económico y político de México, atrajo al país la American
smelting and refining Co., la Cananea Consolídate Copper Co. Y otras grandes empresas mineras.
Desde 1900, también la industria petrolera comenzó a desarrollarse. Importantes, al respecto
(Gran Bretaña, el Águila.) la ley Petrolera del 1° de enero de 1901 sigue la tendencia liberal que
desde 1884 se manifiesta en materia minera.
Observamos que la “ley minera de 1909 inicia un modelo y tardío regreso en el largo camino de las
concesiones exageradas al capital extranjero”: el grito de “México para los mexicanos” (en
realidad: “México para los mexicanos con algo de dinero”, ya comienza a penetrar inclusive en las
altas esferas del gobierno.
El código del D.F., de 1871, fue modificado varias veces bajo el porfirismo (26 de Mayo de 1884; 22
de Mayo de 1894; 6 de Junio de 1896; 5 de septiembre de 1896, el 20 de Junio de 1908 se
estableció la pena de relegación en el derecho penal distrital. Una comisión, presidida por miguel
S. Macedo, que había elaborado un amplio proyecto estaba listo, la revolución ya había
comenzado. Sin embargo, el proyecto en el Código penal del D.F. 8al mismo tiempo código penal
federal) de 1931
En materia penal federal cabe mencionar los derecho del 30 de Noviembre de 1889 y 11 de
febrero de 1890 sobre la libertad provisional y bajo caución, la ley reglamentaría de los artículos
104 y 106 de la Constitución federal, del 6 de Junio de 1896, que establece reglas especiales en
cuanto a la responsabilidad penal de altos funcionarios federales, la reglamentación de la
extradición, de 1897, y la ley reglamentaria del artículo 113 de la constitución federal, del 12 de
septiembre de 1902, que reglamenta la extradición interestatal, dentro de la República.
Importante, también, son el código de procedimientos civiles federales, del 6 de Octubre de 1897,
y el Código federal de procedimientos civiles, del 26 de Diciembre de 1908. Por su común
inspiración en la mocionada ley española, existen un mismo “aire de familia” en estos códigos
federales y en los distritales, ya mencionadas.
En materia fiscal son importantes la lucha del porfirismo contra las alcabalas, la nueva ley general
del timbre de 1887, los diversos aranceles (8 de noviembre de 1880, 30 de Junio de 1885, 1° de
Marzo de 1887, 23 de Octubre de 1891) y la supresión de la zona libre (30 de junio de 1905) que
desde 1858 habían existido en Tamaulipas, considerándose que la extinción de la extensión de la
red ferroviaria ya había acabado con el aislamiento que, en 1858, habían justificado la creación de
dicha zona. Además, muchas nuevas normas se referían a la organización interna del fisco, a la
facultad económico coactiva (8 de Agosto de 1888), y al arreglo de la deuda nacional, interior y
exterior.
Entre las medidas para ofrecer al país una base organizada para su ascenso económico, debemos
mencionar también las referentes a pesas y medidas, el sistema métrico, y el sistema monetario
(normas de 1905).
A estas medidas de higiene administrativa general podemos añadir también múltiples normas
sobre la materia de correo, como el primer código postal del 1° de Octubre de 1883, o el código
postal del 13 de Octubre de 1894, la organización del catastro, en estos años, y la reglamentación
de la expropiación, el 31 de Mayo de 1882, 12 de junio de 1883 y el Art. 8 del decreto del 3 de
Junio de 1901.
También la Ley de Extranjera y naturalización de 1886, obra sobre todo, de Ignacio L. Vallarta (y
cuya exposición de motivos es todo un trato de la materia) merece especial mención. En 1909 se
añadió a esta materia una ley sobre la inmigración.
De, importancia básica era, además, la ley orgánica de secretarías de Estado, del 13 de mayo de
1891. Además, hubo una abundante legislación sobre los deberes de los funcionarios públicos.
En cuanto al derecho de aguas debe mencionarse la Ley (muy centralista) de Vías de comunicación
y de Aguas, del 5 de Junio de 1888, el decreto del 6 de junio de 1894, que autoriza concesiones
para el aprovechamiento de aguas federales para riegos e industria y otros decreto del 18 de
Diciembre de 1896, que prevé un ratificación federal de las concesiones locales para la utilización
de la aguas federales. La federación de la materia de aguas (y de las vías generales de
comunicación) recibió un fundamento constitucional mediante la reforma del 20 de junio de 1908,
cuyo resultado es la ley del 18 de diciembre de 1908 sobre al aprovechamiento de aguas de
jurisdicción federal (reglamento del 31 de Enero de 1911). Las ideas fundamentales de esta ley
pasaron luego al quinto párrafo del artículo 27 de la Constitución de 1917.
Progresaba bajo el porfirismo, Inter alia bajo el impulso de los congresos médicos nacionales,
desde 1876, y por las actividades del Congreso Superior de Salubridad que, desde 1880, pública
también su importante boletín. Al doctor Eduardo Liceaga debe el país el código Sanitario de 1891,
poco después mejorado mediante los códigos sanitarios del 10 de Septiembre de 1894 y de 30 de
Diciembre de 1902.
Al lado de todos estos aciertos figura, empero, un desacierto: en 1900, la apertura del túnel de
tequizquiac condenó a muerte, finalmente, los largos del Valle de México, lo cual ha provocado
problemas más serios de los resueltos, además de convertir atractivos paisajes en zonas malsanas,
áridas, carentes de interés. Al lado de la sistemática deforestación del país, este ejemplo ilustra
cuán frecuente este bello país ha sufrido en sus aspectos ecológicos y estéticos, por la indiferencia
o mala información de sus gobernantes.
Debemos mencionar la actividad del “apóstol del árbol”, ingeniero Miguel Ángel de Quevedo, el
cual, desde el comienzo del siglo, consiguió que el gobierno emprendiera tareas de reforestación e
iniciara la enseñanza forestal. A pesar de sus méritos, debe reconocerse que este hombre fue el
punto de partida para aquella actitud “romántica” frente al árbol a la que debemos la equivocada
política de las vedas estériles, que convierte el bosque mexicanos rinden a la economía nacional
sólo un diez por ciento de lo que sería posible. Lo adecuado es proteger al bosque en su totalidad,
pero sacrificar el árbol cuando llega a su madurez.
Fue meritoria la labor del porfiariato en beneficio de la educación media y superior (tratándose de
educación primaria, sus resultados han sido modestos).
Es también la época de los congresos pedagógicos de 1889 y 1891 ( de los cuales el segundo
subraya la necesidad de una especial educación rural y de una información nacional del criterio
sobre la educación); desgraciadamente, la enemistad entre Baranda y José Ives limantour impidió
varias de las necesidades reformas, aunque algunos proyectos importantes llegaron al diario oficial
como obligatoria en el Distrito y los Territorios federales la instrucción elemental, laica y gratuita,
con un sistema de maestros ambulatorio, en caso de necesidad (su reglamento salió en 1891).
Importante son también el decreto del 19 de Mayo de 1896 que otorga facultades al ejecutivo
federal para reglamentar la instrucción primaria pública en el D.F., la ley del 19 de Diciembre de
1896 (Ezequiel A. Chávez) sobre la enseñanza preparatoria en el D.F., y los territorios, la reforma
de la enseñanza jurídica del 30 de Diciembre de 1897, y el plan de estudios preparatorios, de 1901,
de seis años, reducido a cinco años en 1907. En 1910, cuando fue restablecida la Universidad se
decretó la incorporación de los estudios preparatorios en la organización de la universidad. Una
gran mejora se presentó el 16 de Mayo de 1905, cuando fue creada la secretaria de Instrucción
pública y Bellas artes.
Desde el comienzo del porfiriato también observamos la preocupación del gobierno por la
enseñanza técnica, no universitaria, y por la formación de maestros para escuelas primarias. En
1979 se público el Reglamento de las Escuelas regionales de Agricultura. Tampoco fue descuidada
la educación de adultos.
Una grave problema nacional era el de procurar que tantas tierras baldías llegaran paulatinamente
a ser colonizadas por mexicanos o, a falta de mexicanos interesados, por extranjeros, importantes
materias que desde la Constitución de 1857 correspondía claramente a las autoridades federales.
Un intento de repartir los terrenos baldíos entre personas que realmente establecieran allí sus
ranchos, se encuentra en las leyes de colonización del 31 de mayo de 1875 y del 15 de Diciembre
de 1883. Esta última previó que compañías dislindadoras determinan exactamente en que tierras
no habían títulos suficientes, para declararlas propiedades nacional y fraccionarlas en beneficio de
colonizadores que recibirían un máximo de 2 500 ha. Por persona. Por sus servicios, tales
compañías deslindadotas recibirían una tercera parte de los terrenos en cuestión. Como resultaba
difícil encontrar a colonizadores adecuados, la ley del 26 de Marzo de 1894, vino a confirmar los
derechos adquiridos por las compañías sobre los terrenos así deslindando, eximiéndoles de sus
obligaciones, y el resultado final de esta política, en vez de un fraccionamiento de la tierra entre
pequeños propietarios, fue un aumento de los latifundios; además, los indios individuales a
núcleos de indios, incapaces de probar debidamente sus derechos, perdieron los terrenos
insuficientes titulados. Todo intento de protesta los abusos de las compañías deslindadotas y los
grandes terratenientes fue suprimido con ayuda de la temida policía rural, aplicándose en caso
serios incluso la “ley fuga”.
En 1910, un 80% de los campesinos no tenían tierra propia, mientras que unas tres mil familias
tenían en su poder la casi totalidad de la tierra utilizable del país. Con este aspecto sobrio del
porfirismo se relaciona también la serie de injusticias cometidas en perjuicio de los yaquis, en el fin
de privarlos de sus tierras (por ejemplo, la ejecución del líder Cajeme, autentico héroe popular, y
la venta de miles de yaquis como esclavos, sobre todo a los terratenientes de Quintana Roo).
También los mayas fueron víctimas de represión, en 1884.
El sistema de las deudas transmisibles de padres a hijos, apuntadas en las tiendas de raya, habían
creado una forma moderna de esclavitud. Sólo si el nuevo amo estaba dispuesto a liquidar la
deuda, un peón podía cambiar de hacendado; si salía sin dejar la cuenta saldada, la fuerza pública
lo devolvería a su original amo acreedor.
En esta materia se observa, por parte del México porfirista gran actividad, firmándose múltiples
tratados (para el arreglo pacífico de los conflictos internacionales, 1901; para el arbitraje
obligatorio; para la protección de la propiedad industrial, 1903; y otros) y adhiriéndose México a
diversas convenciones multilaterales (de amistad, comercio, navegación, protección de marcas. De
propiedad literaria, industrial, extradición, etc.) A esta fase pertenece también el arbritaje
respecto del Chamizal. Recordamos también que México fue seleccionado como sede de la
Segunda Conferencia de la Unión Panamericana (actualmente la OEA), en 1901- 1902.
LA REVOLUCIÓN MEXICANA
Tras la reelección de don Porfirio, Francisco I. Madero había huido del país, y probablemente
hubiera abandonado sus ambiciones políticas, si Doroteo Arango (Francisco Villa) y Pascual Orozco
no hubiera iniciado un movimiento armado, que indujo a Madero a regresar para colocar su Plan
de San Luís Potosí (octubre de 1910) entre las manos de estos caudillo.
Así fue desencadenado un movimiento, cuyo alcance Madero nunca hubiera podido pret, el cual
costó cerca de un millón de vidas, y que llevó hacia resultados políticos que él mismo (y sobre todo
sus opulentos familiares) habrían contemplado con consternación. Este movimiento, la Revolución
Mexicana, llegó a ser una de las auténticas revoluciones latinoamericanas (a lado de la boliviana, la
fracasada revolución guatemalteca, y la cubana); revoluciones que no sustituyeron una élite por
otra, sino que afectaron profundamente la reestructura social y el modo de pensar. En ella
hallamos como motores, por parte de la élite revolucionaria, idealismo combinado con indignación
por la situación existente; y por parte de varios elementos, arriba y abajo, afán de aventura y sed
de botín.
Desde la abdicación de Porfirio Díaz, el 7 de Junio de 1911, francisco I. Madero entró en la capital y
un presidente interino comenzó a preparar elecciones honradas. En esta época también se puso
en contacto con Emiliano Zapata, jefe de una confederación de guerrilleros, hombre de una
observancia fidelidad a “su gente”, no tanto interesado en ideología supranacionales o siquiera en
un general socialismo agrario nacional, sino más bien en el problema concreto de la distribución
de la tierra en Morelos (en aquella época la cuarta región azucarera del mundo, después de Hawai,
Cuba, Puerto Rico, lo cual había estimulado la acaparamiento ilegal de tierras comunales por parte
de los grandes productores). Zapata ofreció terminar su rebelión en el momento que el nuevo
gobierno lograra imponer una reforma agraria.
En Octubre de 1911, mediante elecciones limpias, Madero salió elegido como presidente y Pino
Suárez como vicepresidente. El nuevo gobierno, empero, no inspiró mucha confianza en cuanto a
su voluntad y capacidad para imponer un eficaz Reforma Agraria, ya pronto, el 28 de Noviembre
de 1911, Zapata y sus colaboradores presentaron el Plan de Ayala, que previo la entrega de una
tercera parte de los latifundios a los campesinos y la confiscación total de las tierras de los
hacendados que se opusieran el plan.
Como repercusión de este plan, Madero comenzó luego a preparar seriamente una reforma
Agraria, lo cual provocó una rebelión desde la derecha (los terrazas, de Chihuahua, con pascual
Orozco). Victoriano huerta supo derrotar a los arozquistas, lo cual concedió a este prestigio que
pronto sería tan fatal para Madero como hubiera sido una victoria de Orozco.
Inmediatamente después, Madero tenía que enfrentarse a las compañías petroleras (Shell,
Standard y Águila), inquieta por los proyectos de reforma agraria y laboral
La antipatía provocada por la actuación interesada de los familiares del presidente (por ejemplo:
su hermano Gustavo, con su “porra”, la desconfianza por parte de los agraristas, y por otra parte la
del capital nacional y extranjero, sobrecompensaron finalmente la impresión del idealismo y
bondad que produjo Madero.
A pesar de la peligrosa victoria de Madero sobre Orozco, para cualquier observador objetivo era
evidente que no duraría mucho tiempo más un régimen que, a pesar de haber comenzado en un
ambiente de entusiasmo general, ya era criticado desde los ángulos tanto socialistas como
conservador.
La política, en gran parte privada, del embajador norteamericano Henry Lane Wilson, provocó, en
1913, la “decena trágica”, del 9 al 18 de febrero; ésta terminó con el plan de la Ciudadela
(¡firmando en la embajada norteamericana!), que previó la sustitución de Madero, fueron muertos
“accidentalmente”; Huerta, como presidente, provocó mucha oposición, que pronto cristalizó en
el Plan de Guadalupe, de Venusiano Carranza, Gobernador de Coagula, éste se unió precariamente
con Pancho Villa, y más firmemente con Ávila Obregón, Henry L. Wilson, entre tanto, habían sido
destituido, y reemplazado por John Lihn, el cual mandó a Washington favorables informes sobre
Venustiano Carranza.
Estaba claro que la alianza entre zapatistas, villistas y carransistas no era duradera. Los zapatistas y
del villismo, Venustiano Carranza prometió cada vez claramente que su atención no se limitaría del
campesino y del obrero; así, el movimiento constitucionalista cambió, del respecto de la
constitución, a la idea de la modificación de la misma.
Un trágico incidente en esta época fue la ocupación norteamericana de Veracruz, que dio lugar a
un juicio arbitral internacional (1914), en realidad, fue consecuencia de la política de Washington,
dirigida contra Huerta: Estados Unidos, había decretado un “embargo” sobre armas destinadas a
las tropas de Huerta, y esta medida fue amenazada por un cargamento de armas, procedentes de
Alemania, que llegaba a la costa veracruzana, de modo que Washington decidió ocupar Veracruz
con el fin de dar eficancia a dicho bloqueo. Desgraciamente, esta medida fue aprovechada por
Huerta, y disminuyó ligeramente el desprestigio de este impopular gobernante, sin poder salvarlo.
Cuando Huerta fue derrotado en 1914, y abandonó el país (llevándose parte del erario), se puso de
manifiesto la controversia latente entre villa y Carranza, que la Convención de Aguascalientes no
pudo suavizar, y el resultado fue que Carranza y obregón, desde Veracruz, organizaron la guerra
civil contra Villa y Felipe Ángeles, ligados con Zapata (entre tanto, Eulalio Gutiérrez fue nombrado
como presidente interino). La tensión entre las dos grandes fracciones encontró su cargo en
Celaya, donde Obregón perdió su brazo, ¡pero Villa mucho más! Desde entonces, éste se contentó
con ataques locales fronterizos contra los americanos, que provocaron la expedición punitiva por
parte de Pershing. Esta actitud de Villa obedeció al deseo de provocar dificultades internacionales
para los triunfadores: Carranza y Obregón, pero no tuvo mayores consecuencias.
A partir de 1914, varias leyes locales impusieron nuevas normas laborales estipulando salarios
mínimos, cancelando deudas de obreros (como en Tabasco), y fijando jornadas máximas. Son de
especial interés las leyes respectivas de Jalisco (Aguirre Berlanga); de Veracruz (Cándido Aguilar, 4
de Octubre de 1914 y 9 de Octubre de 1914), y de Yucatán, donde Salvador Alvarado, promulgó un
grupo de leyes sociales “las cinco hermanas”: una ley agraria, una fiscal, una catastral, una que
organiza el municipio libre, y una de trabajo, creando esta última las Juntas de Conciliación y un
Tribunal de Arbitraje para conflictos laborales, individuales y colectivos.
Trascendente, desde luego, fue la ley del 6 de Enero de 1915, obra de Luís Cabrera, que prevé
restituciones de tierras ilegalmente quitadas a comunidades de campesinos (sin que procediera el
argumento de la prescripción) y también dotaciones mediante la expropiación de haciendas
colindantes con grupos de campesinos, que no tuviesen tierras suficientes. Esta ley fue el punto de
partida para gran parte del artículo 27 de la Constitución de 1917.
Sin embargo, las reformas durante la revolución no se limitaban a las materias agrarias y laborales;
para dar una presión de la actividad legislativa durante estos turbulentos años, concretándonos a
las normas expedidas por la fracción que finalmente triunfaría (salvo cuando señalamos
expresamente lo contrario), y sin ambiciones de presentar un panorama completo,
mencionaremos los siguientes decretos y leyes.
Otras innovaciones en materia civil son la prohibición del pacto de retroventa (decreto del 2 de
Abril de 1917) y la nueva reglamentación de los créditos hipotecarios que hallamos en el decreto
del 3 de Abril de 1917. Varias normas se refieren también al intento de formar el castro de la
República.
El rápido descanso del valor adquisitivo del papel moneda hizo necesaria la interesante Ley de
Pagos del 15 de Septiembre de 1916, suspendida pocos meses después, el 14 de Diciembre de
1916, desde cuya fecha el régimen constitucionalistas decretó una moratoria general; de ésta
quedaba exceptuadas las rentas ( que fueron drásticamente reducidas por el decreto en cuestión).
Otras medidas se refieren la organización de los tribunales del Distrito federal (los Tribunales de
Justicia Constitucionalista, del 30 de Septiembre de 1914), o los de la Federación (ley Orgánica del
Poder Judicial de la Federación, 2 de Noviembre de 1917), y el fuero militar.
Curiosa es la prohibición de las corridas de toros (11 de Octubre de 1916), por poner en peligro,
sin la menor necesidad, la vida de un hombre, y constituir un “placer malsano”. Mencionemos
ahora los principales datos de este periodo, relevante para la historia de la educación.
En Diciembre de 1913, bajo el gobierno de Victoriano Huerta, se había promulgado una nueva ley
sobre la segunda enseñanza, que se aparta del principio positivista de ir de las materias abstractas
y general hacia la más concretas y complejas, y que separa nuevamente la segunda enseñanza de
la Universidad. Esta ley no tuvo mucho tempo en vigor: en Septiembre de 1021 el estudio
preparatorio se ajustó de nuevo a la Universidad. Desde el 7 de Enero de 1916, la enseñanza
estatal, universitaria y preparatoria, dejó de ser gratuita. El 15 de Enero de 1916, la segunda
enseñanza sufrió otra vez una amputación: en 1901 había comprendido seis años; desde 1907,
cinco y ahora se redujo cuatro. Como medida temporal, justificada por el descenso de la economía
mexicana y por la necesidad de que la juventud saliera lo más pronto posible de las escuelas para
ayudar a la reconstrucción del país, esta reducción del programa podía justificarse. Más criticable,
empero, fue la supresión de la Secretaria de Instrucción y Bellas Artes, y la descentralización total
de la enseñanza, en cuyo esencial campo dominada, hasta el régimen de Obregón, la iniciativa
municipal.
LA CONSTITUCIÓN DE 1917
La situación social, económica y política de fines del siglo XIX y la primera mitad del XX originó la
REVOLUCIÓN MEXICANA. Los campesinos no eran dueños de las tierras que trabajaban y sufrían
una vida llena de injusticias, pues los propietarios, en lugar de explotar la tierra, explotaban a los
hombres. Los obreros carecían de derechos e intolerables condiciones de trabajo pesaban sobre
ellos. Las desigualdades entre las clases sociales eran cada vez más profundas. La Constitución de
1857 había cedido su vigencia a la dictadura de un hombre, y el pueblo de México, por alcanzar la
democracia y la justicia, empuño las armas en lo que puede llamarse la primera revolución social
del siglo XX.
Después del triunfo de Carranza- Obregón, el camino estaba libre para la elaboración de una
nueva constitución cuya cuna era la ciudad de Querétaro, y cuyo biógrafo es Félix F. Palavicini.
A la creación y al funcionamiento del Congreso Constituyente respectivo se refiere las leyes del 15
y 19 de Septiembre 1916.
La influencia personal de Venustiano Carranza en esta obra fue mínima; los artículos más
importante (27 y 123) están más bien ligados a nombres revolucionario como Andrés Molina
Enríquez, Luís cabrera y Múgica. Para la elaboración del artículo 123 fue importante el discurso de
un diputado de Yucatán (región que ya había producido un nuevo derecho laboral, como hemos
visto), el obrero Héctor Victoria. También Heriberto Jara jugó un papel loble, y a Froylán Manjares
se debe la colocación de las bases del derecho obrero en un artículo aparte, 123 (y en un título
aparte, el sexto), en vez de añadirse estos principios al artículo 5, referente a la libertad
económica. En materia educativa, es esencial el artículo 3° de la Constitución de 1917, en cuyo
proyecto el término de “laica” como alternativa se propuso “racional” dio lugar a series
discusiones.
Para la relación entre Estado e iglesia son importantes el artículo5, que prohíbe los votos
religiosos, el artículo 24, que establece la libertad religiosa y prohíbe actos de culto fuera de los
templos o casa particulares, y el artículo 130, que establece la base a la que debe sujetarse el culto
religioso y la disciplina religiosa externa.
Varias actos anticlericales, durante la revolución, había anunciado ya este tono de la nueva
constitución. La verdadera o supuesta ayuda del clero al “usurpador” Victoriano huerta (las
conferencias de torreón) ofrecía una justificada o cuasi justificación para medidas anticlesiales;
durante la revolución hubo detenciones y fisulamiento de sacerdotes; muchas monjas
abandonaron sus conventos; altos clérigos salieron al destierro; en San Luís Potosí la confesión
sólo fue permitida en artículo de muerte y en presencia de un funcionario público, etc.
Otro artículo importante es el 115, con las bases para la organización del Municipio libre.
Esta constitución de 1917 fue una declaración de guerra multilateral, dirigida a los hacendados, los
patrones, el clero y las compañías mineras (que perdieron sus derechos al subsuelo). El efecto
potencialmente peligroso de la constitución, empero, fue suavizado por el hecho de que
Venustiano Carranza logró tranquilizar a la iglesia y a las compañías petroleras, mediante
promesas de que, abajo su régimen, la constitución no tendrían una eficacia total.
Después de tantos procesos y problemas el proyecto de Carranza sufrió importantísimas
modificaciones, de tal modo que la Constitución que promulgó el 5 de febrero de 1917, es, no una
reforma a la de 1857, aunque de ella hereda principios básicos, como son: formas de gobierno,
soberanía popular, división de poderes y derechos individuales, sino una nueva ley, que olvidando
los límites del derecho constitucional clásico y vigentes entonces en el mundo. Recogió en sus
preceptos los ideales revolucionarios del pueblo mexicano. Les dio forma y creó instituciones que
los realizaran en la vida futura del país.
Los diputados constituyentes fueron hombres que sentían como propia la angustia de un pueblo
que habían luchado por alcanzar un existir más digno y más justo para todos. En general. Los
constituyentes eran jóvenes, algunos sin gran experiencia política, pero todas sus limitaciones las
suplieron con una profunda visión de la realidad mexicana. Conocían, por haberlo viviendo, los
enormes problemas nacionales; contemplan cómo el pueblo habían generosamente sacrificado la
paz con la ilusión de crear un México mejor, y con honradez la Ley Suprema que establecía, al
margen de la doctrina constitucional clásica, los derechos del trabajador y las bases de la reforma
agraria.
La CROM se juntó a Obregón, en 1920, y aquel mismo año Venustiano Carranza, ya en camino para
el exilio, fue asesinado. Con el próximo régimen, de Álvaro Obregón, comienza la fase del México
moderno, producto de su revolución, pero también una fase característica por las tentativas de
suavizar ciertas esperanzas radicales que esta revolución había transmitido a la Constitución de
1917: en sinergia, el idealismo revolucionario, el aburguesamiento de los líderes y el impacto de la
economía y tecnogía moderna, han estado creando el multifacético México que hoy conocemos,
criticamos y gozamos.
La base del derecho constitucional sigue siendo hasta la fecha la Constitución de 1917, las
principales modificaciones en 1917 han sido: la añadidura de “garantías sociales” a las individuales
en primer lugar, dentro del artículo 27; originalmente dedicado al derecho en beneficio de la
comunidad. Allí se incorporó ahora la base de la reforma agraria. En segundo lugar, fuera del
capitulo de las “garantías individuales”, se introdujeron otras garantías sociales mediante la
añadidura del artículo 123, con las bases del nuevo derecho laboral. Es sobre todo en estos
artículos 27 y 123 que uno pudo ver cómo el antiguo liberalismo individual estuvo cediendo su
lugar a un nuevo ambiente de intervencionismo estatal, por que la garantías, además, ya no figura
como derechos preestatales y superestatales sino que quedan sujetas a la soberanía estatal.
E) La ampliación de la facultad de las cámaras de citar a ciertos altos funcionarios con el fin de
obtener informes
Es importante señalar que debe existir una enmienda a la tarea de poner orden sistemático en los
Art. 27, 123 y 73, ya desfigurados por tantos parches, o al traslado del tema del Ministerio Público
desde el Capitulo del Poder judicial (al que dicho ministerio no pertenece) al capitulo del Poder
ejecutivo (donde sí tendría su lugar debido)
Muy importante para la modernización del marco administrativo que don Porfirio había dado al
país fue el gobierno de Plutarco Elías calles, y la respectiva aleada de innovaciones continuó aún
bajo la “diarquía”, hasta 1930.
o Poder ejecutivo
o Población
o Inversión extranjeras
BIENESTAR POPULAR
o Salud y ecología
o Defensa nacional
JUSTICIA ADMINISTRATIVA
Lo cual veremos el derecho que se encuentran dentro de este punto ya que para este trabajo es
de gran importancia señalar los acontecimientos del derecho en esta fase de la historia:
Un primer ejemplo de estos últimos es el Tribunal fiscal de la Federación, creando por la ley de
justicia fiscal (30 de Agosto de 1936) redactada por A. Cortina, M. Sánchez Cuén y A. Carrillo. Este
tribunal forma parte del Poder Ejecutivo, pero dentro de él goza de un alto grado de
independencia. En 1946, una reforma al artículo 104-1 constitucional autorizó al Congreso a crear
recursos ante la Suprema Corte respecto de las sentencias de este Tribunal y de otros Tribunales
administrativos. Luego (1971) se creó un Tribunal especial, también fuera del Poder Judicial, para
lo administrativo-contencioso distrital.
Agotado los recursos administrativos, generalmente queda a la disposición del público, el amparo
(incluso, si el derecho administrativo requiere mayores requisitos que la ley de amparo para
obtener la suspensión del acto reclamado, desde 1950 ya no es necesario agotar los recursos
administrativos).
En esta fase también fue promulgado, bajo Portes Gil, el nuevo Código Penal (D.F) de 1929 (de
1228 artículos, que es mucho), cuyo padre fue José Almaraz Harris, una obra inspirada en la
escuela Positiva, con, entre muchos rasgos, un largo catálogo de atenuantes y agravantes, y
muchas innovaciones, en teorías recomendables, pero irrealizables dentro del marco de la
economía del México de entonces.
En 1931 este código fue sustituido por el código actual (de unos 400 artículos), más eclécticos y
pragmáticos (Alfonso Zabre, Luís Garrido, Ernesto G. Garza, José Ángel Cenicero, José López Lira y
Carlos Ángeles).
Este código ha sido modificado varias veces, a cuyo respecto merece mención especial (a causa de
la confusión que ha creado en la mente de muchos) la reforma del 30 de Octubre de 1941, que
creó los delitos de disolución social. Mencionaremos. Además, la labor de la Comisión de Reforma,
de 1942.
Otra rama de los delitos que de pronto tuvo gran auge fue la aeropiratería, y México se adhirió, a
varias convenciones internacionales como la de Tokio (1968 y 1969), la de la Haya (1970 y 1972) y
la de Montreal (1974). Con Cuba se aprobó un convenio especial en 1973.
La situación política interna, a menudo crítica (sobre todo, desde los desórdenes de 1963), motivó
la aprobación por parte de México, del convenio del 2 de Febrero de 1971 (OEA) sobre el
terrorismo (1974), y una revisión de nuestro sistema penal ditrital-federal en cuento a los delitos
cometidos por pandillas (1968) y a los delitos contra la seguridad de la Nación (1970). Además
hubo varias reformas al Código penal distrital.
El proyecto oficial de un código penal tipo, que debe contribuir a la información de la legislación
penal mexicana (porte Petit), de 1963. Por lo pronto seguimos teniendo en la actualidad gran
diversidad de códigos penales (32) y procesal-penal (32 de los estados y uno de la Federación).
Una enmienda del 23 de Febrero de 1965 al artículo 18-IV constitucional, prevé medidas
especiales para menores infractores, generalizados obligatoriamente una idea que el Distrito
federal y en varios estados ya estaba poniendo en práctica desde hace mucho tiempo. El 2 de
Septiembre de 1974 se mejoró el sistema distrital, al respecto, por la introducción de los Consejos
tutelares para tales menores.
La importancia de la nueva Ley Orgánica de la Procuraduría General de Justicia del D.F. (31 de
Diciembre de 1971), que, bajo la inspiración del procurador Sergio García Ramírez, introdujo un
ambiente más técnico y moderno en esta rama. El 4 de Enero de 1980, una nueva Ley sobre la
Responsabilidad de Funcionarios federales y Altos Funcionarios de los Estados, vino a introducir
más rigor en esta rama del derecho penal.
Para aquel derecho especial que es el derecho militar penal, recordemos lo dicho sobre las
reformas de 1929 y 1933. Una reforma constitucional del 22 de Octubre de 1971 abrió la puerta
para el control de armas de fuego y explosivos, y dio lugar a la ley de 1972.
En materia penal también los estados aportaron varios aciertos y experimentos interesantes, entre
los que destaca el código de defensa social, de Veracruz de 1954 (Porte Petit), también tuvo una
notable influencia en Códigos penales locales como el de sonora (1949), Guerrero (1953) y
Michoacán (1962), interesante para esta rama son también el trato con los Estados Unidos, sobre
el intercambio de prisionero (1977) y el tratado de extradición con este país (1980).
Grave problema en relación con esta materia sigue siendo: la falta de una carrera judicial; la total
discrecionalidad del Ministerio Público en cuanto a la decisión de no consignar y de archivar una
denuncia, a cuyo respecto al amparo no procede, la corrupción, sobre todo a nivel del Ministerio
Público, la falta de un casillero judicial nacional; y en parte resultado de lo anterior un lato grado
de impunidad
En esta materia ha sido importante la creación, en 1976, del Instituto NACIONAL DE Ciencias
penales, dedicados a la investigación, pero también a la formación de agentes del ministerio
público y de la Policía Judicial
5.- DERECHO INTERNACIONAL PÚBLICO ENTRE 1920 Y 1982
Recordamos primero los puntos esenciales de la política mexicana en relación con dos grandes
organismos internacionales: la ONU y la OEA (antes Unión Panamericana). Desde el 12 de
Septiembre de 1932, México entró en la sociedad de Naciones, declarando empero, que su
entrada no implica un reconocimiento de la doctrina Monroe, mencionada en el Art. 21 del Pacto
respectivo, juzgó luego un papel loable en relación con el ataque del Japón a China (1933) y de
Italia a Etiopía (1935-1936). También llamo la atención firme de México en relación con el drama
español, Sobre todo, Isidro Fábela hizo, primero en la Sociedad de Naciones, luego en la corte
internacional de justicia, para mejorar la reputación internacional del país.
Desde el comienzo de esta organización. México ha sido miembro de las Naciones Unidas, en las
que siempre desempeño un papel activo, defendiendo el principio de la no-intervención, y
colaborando en todo lo que podía contribuir a la paz, al arbitraje internacional, al anticolonialismo,
al a condena del racismo y al desarme. Además abogó por la desnuclearización de nuestra región y
por el desarrollo del tercer Mundo. También colaboró en el marco del tratado de Montevideo (18
de Febrero de 1960) con el intento de formar una zona de libre comercio latinoamericano.
Nuestro país se adhirió a las convenciones de Ginebra del 29 de Septiembre de 1958, sobre el mar
territorial (1966), la del 27 de Abril de 1956 sobre la plataforma continental (1966) y la de 29 de
Abril de 1958 para la conservación de la fauna marítima (1966). El 20 de Diciembre de 1968, se
publico en el diario oficial nuestra adhesión a la convención de Brúcelas que, en 1948, había
revisado el sistema internacional para la protección del derecho de autor (sistema iniciado en
Berna, en 1886 y varios veces reformado).
El 3 de Febrero de 1944 se celebró el Tratado de aguas Internacionales entre los Estado Unidos y
México, que posteriormente, por no fijar concretamente la calidad del agua que los estados
Unidos debe entregar a México, dio lugar al conflicto sobre la salinidad del río Colorado, que causa
daño a la agricultura del valle de Mexicali, este interesante caso de contaminación en un plan
internacional recibió una solución en el “acta 242” del 30 de agosto de 1973 que prevé que
Estados Unidos lleve las aguas contaminadas al Golfo de Cortes.
México nunca ha renunciado a sus derechos históricos sobre Belice, pero el hecho de que Belice
haya comenzado a organizarse automáticamente, ha inducido a México a no formular
reclamaciones en perjuicio de la autónomamente de la población de Belice. Sin embargo, México
no permitirá que Guatemala intente poner a Belice bajo su influencia.
Orto grave problema internacional ha sido la situación que surgió una América central, y el
abandono de nuestra política de abstencionismo al respecto, de manera que durante la fase final
del periodo contemplado en este capítulo, nuestra crisis económica-financiera a menudo se vio
aplicada por una inconformidad con la actitud de Washington respecto al problema de Nicaragua y
el Salvador. Los refugiados políticos de Guatemala, radicados temporalmente en México cerca de
la frontera de su país, también han dado lugar a incidentes de cierta importancia, con acusaciones
recíprocas entre México y Guatemala.
6. - DERECHO INTERNACIONAL PRIVADO, 1920-1982
La parte medular de las normas sobre la compleja materia del conflicto espacial de los sistemas
legales, se encontraban desde 1932 en el código civil del Distrito federal, en los artículos 12 al 15,
los cuales, por su tendencia de reducir la aplicabilidad del derecho extranjero a un nivel mínimo,
fueron siempre considerados como excesivamente nacionalistas e incompatibles con el tono
general de esta materia en el campo comparado. Desde la crisis de 1982 estamos remediando
estos, como veremos.
También se trabajo en reformas para; la lucha contra el latifundio, creación de la Ley de Tierras
Ociosas del 28 de Junio de 1920, además del decreto del 2 de Junio de 1923 sobre al Ley de Tierras
Libres, que prevé que los mexicanos mayores de 18 años reciban terrenos nacionales bajo la
condición de ocuparles o a su explotación durante dos años consecutivos, este decreto fue
sustituido por la Ley de Terrenos Baldíos y Nacionales, Demasías y excedencias, (1950), la
expedición de la Ley de colonización del 5 de Abril de 1926 y del 9 de Abril de 1968 se publicó el
Reglamento de Colonias agrícolas. Desde el 10 de Febrero de 1926 existe el Banco Nacional de
Crédito Agrícola, y la Ley del 16 de Marzo de 1926 prevé a la creación de bancos ejidales.
Punto de partida para esta rama del derecho posrevolucionario ha sido, desde luego el Artículo
123 constitucional. Durante los primeros años hubo duda sobre la competencia de las juntas de
Conciliación y Arbitraje, allí previstas, respecto de conflictos individuales de trabajo (la
constitución hablada de “capital” y “trabajo”, no de patronos y obreros) y sobre todo, dudas sobre
el carácter de las juntas. En 1924, la Suprema Corte de Justicia decidió claramente que las juntas
eran tribunales y eliminaba toda duda sobre su constitucionalidad, actitud luego confirmada por
un famoso estudio del Lic. Narciso Bassols.
Es importante también el Estatus de los Trabajadores al servicio de los Poderes de la Unión, del 25
de Septiembre de 1938, la ley Federal de los trabajadores al Servicio del Estado, reglamentaria del
Apartado B del artículo 123 constitucional (1963), y la creación de la Ley de Pensiones Civiles de
Retiro, del 12 de Agosto de 1952. También podemos mencionar el Reglamento para el Trabajo
bancario con prohibición de sincalización y huelga, desde el 29 de Noviembre de 1937 reformado
algunas veces. En régimen de Ávila Camacho se debe la base para el sistema del Seguro Social, en
México (Ley del 19 de Enero de 1043; varias veces enmendada y renovada). El 30 de Diciembre de
1959, por la Ley del Instituto de Seguridad y servicios Sociales de los Trabajadores del Estado
(ISSSTE), tanto el ISSSTE como el IMSS extienden constantemente su benéfica acción a nuevas
capas del mundo proletario. Bajo el régimen de Echeverría, se notó una preocupación especial por
el problema de la vivienda obrera (reforma constitucional publicada el 14 de Febrero de 1972; y la
Ley del INFONAVIT, del mismo año). Intentos de disminuir el impacto de la inflación en el sector
obrero fueron la creación del fondo nacional de Protección al Consumo de los Trabajadores
(control de calidad y precios de ciertos productos). Las oficinas del Trabajo, creadas en 1911 como
dependencias de la secretaria de Fomento, se independizó el 30 de Noviembre de 1932,
convirtiéndose en secretaria del trabajo (1940) y en 1946 en Secretaria del Trabajo y Prevención
Social, desde el 11 de Octubre de 1933 funciona, además, en esta materia la Procuraduría de la
defensa del Trabajo.
La dogmática, junto con las ideas socialistas y la modernización general del ambiente mexicano,
impulsó hacia un rejuvenecimiento de la legislación civil, y siendo el código civil del Distrito y
territorios federales (1928-1932), el habitual código modelo para las entidades de al República, el
gran acontecimiento posrevolucionario en este materia ha sido la expedición del Código Civil
Distrital de 1928, elaborado desde fines de 1926. Este código entró en vigor el 1° de Octubre de
1932.
Otras reformas al Código Civil distrital bajo estos últimos regímenes han sido;
o Además quedaron fuera del Código Civil el decreto sobre la congelación de ciertas
rentas del 10 de Agosto de 1942.
o Las legislaturas de los Estados han impulsado en buscar senderos propios para su
derecho civil que ya no pueden considerarse como simples variaciones sobre el
tema del Código Civil distrital.
Durante este periodo, varios problemas se asomaron alrededor del derecho de familia: La
cuestión de si conviene separar esta materia de los códigos civiles, la multifacético discusión
alrededor del aborto, del control de la natalidad en sus múltiples formas, y de la eutanasia,
además de la repersecución de varias innovaciones en el campo médico, como son la técnica de
los trasplantes y, con ella, la donación o venta de órganos, el análisis de ADN para al
determinación de la paternidad, los cambios de sexo, el arrendamiento o préstamo de la matriz, la
congelación de embriones, la inseminación artificial, etc.
La ley que rige el Banco de México (25 de Agosto de 1025) el cual recibió el monopolio de la
emisión de moneda, incluso papel moneda. La ley de Crédito Agrícola del 10 de febrero de 1926 y
luego la que reglamenta el banco Nacional de Crédito Agrícola (15 de Marzo de 1926). El 31 de
Agosto de 1926, una nueva Ley General de Instituciones de Crédito y Establecimiento Bancario
sustituyó a la de 1924, y absorbió las mencionadas leyes sobre suspensión de pagos
refraccionarios, bancos de fideicomiso, compañías de fianzas y almacenes generales de depósito
(reglamentados por una ley porfiristas del 16 de febrero de 1900). También de 1926 son la Ley
General de sociedades de seguros, entre tanto varías veces reformadas.
De 1931 debe mencionarse la Ley Monetaria y la próxima gran innovación fue la Ley General de
Instituciones de Crédito, del 28 de Junio de 1932, basta ya no en una distinción entre diversos
tipos de bancos, sino en una clasificación de determinadas operaciones bancarias.
Una gran serie de leyes empezaron a dividirse la cuales originalmente se encontraban en el Código
de Comercio como lo son:
En 1940 se expidieron varias normas para reglamentar el comercio de valores de bolsa coma; la
Ley que Establece Requisitos para ka Venta al Público e Acciones de Sociedades Anónimas, en
1941 debe mencionarse la nueva reglamentación de las Instituciones de Crédito y Organizaciones
Auxiliares, la Ley de Cámaras de comercio y de la Industria, la creación de Banco nacional de
Fomento Cooperativo y, sobre todo, la nueva Ley Orgánica del Banco de México; y de 1942
merece mención la reforma del derecho relativo a las quiebras y la suspensión de pagos.
Muchas de estas nuevas leyes repiraron un ambiente incompatible con el neo-liberalismo que
desde 1982 se introdujo en México, de manera que tuvieron que suavizar en los años posteriores a
la crisis de 1982.
La crisis económica mexicana de 1982 había tenido una larga gestación, caracteriza sobre todo por
un endeudamiento irresponsable, hecho bajo la ilusión de una gran prosperidad futura, basada en
nuestras riquezas petroleras. Después de los triunfos de la OPEP durante los setenta, empero, el
mercado petrolero se desquició gravemente en 1981, y el fundamental desequilibrio financiero de
México surgió a la luz del día en Agosto de 1982.
Veamos las innovaciones jurídicas más destacadas de 1982 hasta nuestros días. La evolución
jurídica debe valorizarse coma parte del conjunto general de los problemas nacionales, a menudo
tendremos que mencionar los factores meta-jurídicos con que nuestro derecho está conectado.
Entre los demás cambios constitucionales (los cuales son muchos) durante el periodo de 1982 a
1997, conviene mencionar el cambio del sistema educativo, necesario por las nuevas relaciones
entre la iglesia y el Estado; la formal obligatoriedad de la educación secundaria (1993); el
reconocimiento del pluriculturalismo de la nación mexicana (1992); la modificación del sistema
Agrario, con una capitis deminutio del ejido y la posibilidad de que sociedades mercantiles se
dediquen a la agricultura (1992); la autonomía del Banco de México respecto del ejecutivo Federal
(1993); la duplicación diputados de Partidos (1986) y la introducción del principio de
proporcionalidad en las Cámaras de Senadores, junto con el aumento de los senadores de 2 a 4
por entidad, además de la generalización de la Presidencia federal debe ser de hijo de mexicanos
que a su vez sean mexicanos por nacimiento, la reforma zedillista de la S. Corte (1994); la
separación entre la PGR y la asesorías Jurídicas del gobierno federal (1994); el fortalecimiento del
sistema de defender la Constitución mediante la creación de las acciones de inconstitucionalidad
(reforma al artículo 105, en 1996), y la revisión total de la relación entre Estados e Iglesia,
heredada de la fase juarista y la de Revolución Mexicana (enmienda del Artículo 130, en 1992).
Se modifico el perfil del Distrito Federal, por la creación de la actual Asamblea de Representantes,
fase intermedia en el camino hacia un congreso local.
La intima relación con la materia constitucional se encuentra el nuevo Código Electoral, del 12 de
Febrero de 1987, bajo cuyas normas se llevaron acabó las elecciones del verano de 1988. Fue
creado un Tribunal de lo Contencioso Electoral. En 1997, la Ley General del Sistema de Medios de
Impugnación en Materia federal fue otro paso hacia un sistema electoral federal equitativo.
A este respecto, una Ley federal del Mar (8 de Enero de 1986) es el logro principal de este periodo.
Una proposición de Miguel Gonzáles Avelar, de pedir la anulación del arbitraje acerca de la isla de
Clipperton (un asunto que cobró un nuevo interés a la luz de la posibilidad de minería submarina
desde aquel atolón el momento parece no haber tenido mucha repercusión práctica.
En años recientes se ha creado la Secretaria de Seguridad Pública Federal, con la nueva policía
federal preventiva.
Una nueva Ley del 5 de enero de 1983 revisa las directrices para la planeación apuntando hacia
una economía mixta en un ambiente democrático y con respecto a las garantías individuales. Un
papel central, al respecto, correspondía a la Secretaria de programación y Presupuesto, que
actuaba siempre en delicado balance con la Secretaria de Hacienda y Crédito público, balance no
siempre exento de fricciones y conflictos.
Otro importante producto de legislación económica en tiempo del salinismo, fue la Ley de
Comercio exterior (1993), que, por ejemplo, prevé las cuotas compensatorias en caso de que
México sea víctima de prácticas desleales de parte de otros países.
En la rama de salubridad hubo gran actividad, cristalizando en la Ley General de salud (1984) y
luego la Ley de Salud del D.F. (1887). La proliferación del SIDA, en este periodo colocó a las
autoridades ante tareas nuevas, incluyendo las de orientación general del público (este nuevo
problema también requerirá de cierta normas penales, como en el supuesto de contagio
imprudencial).
El creciente interés del público por la materia ecológica, y la progresiva involucración de ONGs al
respecto, condujo hacia la promulgación de una tercera Ley Federal sobre la ecología, la actual Ley
General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente.
La pesca, ahora objeto de una propia secretaria de estado, ha sido reglamentada varias veces
desde la importante Ley de 1972, quitándose a la luz del neo-liberalismo trabas a la iniciativa
privada y algunos monopolios que habían tenido cooperativas. En 1981 se publicaron normas
vigentes para el Distrito federal, contra la crueldad hacia los animales.
A fines del 1991 el gobierno dio el gran paso, proponiendo una reforma AL Artículo 130 y a otros
artículos constitucionales que habían albergado un radicalismo anticlerical, con sorprendente
facilidad, estas propuestas obtuvieron las mayorías necesarias. Entre cosas, las iglesias
recuperaron en esta forma su personalidad jurídica (la cual, desde luego, también implica ciertas
responsabilidades fiscales. No hay miel sin hiel…).
Una Ley de asociaciones Religiosas y Culto Público de 1992 reglamenta ahora esta delicada
materia de la relación entre el Estado y las iglesias. Todas éstas deben registrarse, y el poder
ejecutivo decidirá hasta qué grado pueden tener propiedades inmobiliarias.
En los últimos años se han presentado muchas reformas parciales en nuestros códigos
fundamentales sobre esta materia, pero generalmente se considera que, en medio de la crisis, no
es oportuna la elaboración de códigos completamente nuevos.
Una innovación radical, empero, fue emprendida en nuestro sistema de amparo, como
consecuencia de la reforma al artículo 107 constitucional, que encontramos en fecha 10 de agosto
de 1987, que llevó hacia la reforma a la Ley de Amparo, publicada el 5 de enero de 1988. Se
trataba de un traslado fundamental del control de legalidad hacia los Tribunales Colegiados de
Circuito (actualmente, al comienzo de 1998, más de ochenta), mientras que la Suprema Corte
conserve básicamente el control de la constitucionalidad, y la tarea de eliminar contradicciones
entre decisiones divergentes que lleguen desde el nivel de circuito, además de gozar de una
facultad de atraerse las controversias sobre su legalidad que le parezcan de importancia especial.
Luego, en los primeros días, se presentó en esta materia un auténtico terremoto, con la Reforma
judicial de Zedillo. Los 26 Ministros de la S. Corte fueron pensionados, y sustituidos por once
ministros, ya no inamovibles sino nombrados por 15 años. Todo lo referente a la supervisión y el
nombramiento de los demás jueces federales fue quitado a estos ministros, y entregados a un
Consejo de judicatura (en el cual el impacto directo del Poder Ejecutivo es mínimo).
Como una de las promesas electorales de Miguel de la Madrid había sido la moralización de la vida
pública, al comienzo de su régimen se presentó un conglomerado de nueva normas acerca de la
responsabilidad de funcionarios públicos. Se trataba de:
a) Una enmienda constitucional de los artículos 108 a 114 (todo el título IV), con eliminación del
jurado popular y la introducción del concepto de “servidores públicos”.
b) Una nueva Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos (1982) de la que resulta Inter
alia que también los empleados del sector paraestatal son “servidores públicos”.
Un interesente paso ha sido la despenalización del cheque sin fondos. Una de las grandes
preocupaciones de nuestra procuraduría ha sido la lucha contra el narcotráfico que,
evidentemente, tiene su dimensión trasnacional, agraviada por el nuevo sistema norteamericano
de la “certificación”.
Es importante para México que, desde 1987, el gobierno estadounidense deba certificar
anualmente si otros países colaboran lealmente con la lucha contra las drogas, para que estos
países puedan continuar gozando de ciertos favores económicos; luego, el congreso
estadounidense, en caso de tener dudas acerca de la sinceridad de la política antidrogas del país
en cuestión, puede anular esta certificación, en cuyo caso la presidencia norteamericana puede
declarar eventualmente que, de todos modos, “por razones de Estado”, permitirá que siga las
medidas de apoyo económico.
México no pudo hacer mucho para suavizar el impacto de la Ley Simpson-Rodino (1986) sobre
nuestro “indocumentados” en Estados Unidos, que agravan nuestro problema de desempleo,
además de privarnos de las diversas que suelen corresponder a las remesas desde los Estados
unidos, a los familiares.
Es natural que México se haya acercado a los demás países latinoamericanos que tienen grandes
deudas externas (“Club de Cartagena”). Sin embargo, hasta ahora han tenido a la presión por
parte de ciertos grupos políticos para una repudiación unilateral, aunque fuera parcial, de la deuda
externa.
La situación política de Guatemala ha dado lugar a un importante influjo de guatemaltecos hacia el
sur de nuestro país; en parte viven en campos especiales, para cuyo manejo estamos bajo cierta
vigilancia de parte de la organización que tienen la ONU para los refugiados.
En 1991, salinas dio otra sorpresa, al tocar enérgicamente una institución tradicionalmente
considerada como “intocable”: el ejido. Modificó la Constitución introduciendo una libertad mayor
individual del campesino en su decisión de quedarse dentro del sistema ejidal, o de sustituir sus
derechos ejidales por formas más tradicionales de propiedad y abriendo el campo para la
inversión de parte de sociedades anónimas, inclusive con participación extranjera, cuyo terrenos
pueden tener hasta 25 veces el tamaño máximo que la Ley ahora permite que individuos tengan
en propiedad: un cambio megatónico en esta materia: Nuevos tribunales agrarios están
actualmente ocupándose de la tarea, antes atribuida a la secretaría de la Reforma Agraria, de
dirimir las controversias agrarias pendientes.
La política del gobierno, hasta 1994 en las manos expertas del ministro Farell, se enfrentaba a una
tarea delicada: la de mantener la paz social a pesar de la mengua del poder adquisitivo de los
salarios mínimos, y en la fase de los “Pactos”, la de convencer a la masa de la necesidad de la
política antiinflacionario, con sus topes de los aumentos salariales.
La segunda Ley Federal de Protección al Consumidor (1992), más eficaz que su predecesor de
1975, introduce en México el fenómeno de las acciones de grupo, class action, que la Procuraduría
federal de la Defensa del Consumidor puede ejercer en representación de todo un grupo de
consumidores, no individualmente señalados.
Entre los nuevos códigos estatales destacan el de Quintana Roo, por su estructura original, que
recuerda el Código Civil Alemán. Este código hace un intento de reglamentar el sistema del
“tiempo compartido”. En Hidalgo (1983) y en Zacatecas (1986) Ha prosperado la tendencia del
derecho familiar de salir de los códigos civiles, para tener un propio domicilio en Códigos
familiares. (En Hidalgo el Código Familiar queda incluso completado por un Código de
Procedimientos Familiares.).
14.- DERECHO MERCANTIL
En las nuevas normas sobre la propiedad industrial desapareció tácitamente la liga obligatoria
entre marcas extranjeras y nacionales, medida echeverrista que a causa de las protestas por parte
del mundo de los negocios, habían sido objeto se suspensiones anuales; además, el plazo de
protección en materia de inventos, después de su reducción echeverrista de 15 a 10 años, fue de
nuevo aumentado a 14 años.
CONCLUSIONES
En el presente trabajo realice un semblanza de manera general de las leyes que han estado
vigentes durante la vida de México, así como desde el comienzo de las culturas precortesianas,
cabe hacer mención que hace mucha falta en el quehacer legislativo para promover leyes más
justas y equitativas, es importante reflexionar hoy en día del como realizar las leyes fiscales, las
cual es el uno de los temas más sonados en la actualidad y que creo que es un punto interesante
para la vida de México, pero esto se deberá tratar muy especialmente ya que estamos hasta el
tope de los gobierno y partidos que sólo buscan su beneficio personal, cuando debería ser para el
país, esto se les ha olvidado a los hombres que llevan las riendas de la Administración Público que
de uno o de otro modo nosotros lo hemos puesto, esto será posible cundo se cambie la forma y
estructura de la políticas, en el presente trabajo vemos con claridad que han existido hombre
hombres concientes de libertad, de democracia y de justicia, pero la finalidad del trabajo es que se
comprenda del como se va concibiendo la cultura de Ley en donde todos tenemos parte, y que
cada día más se va moldeando por los principios del ciudadano mexicano y que cada uno de
nosotros nos toca llevarla a cavo, para que México siga teniendo un Estado de Derecho.
BIBLIOGRAFÍA
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Martha Morineau Idearte, Román Iglesias Gonzáles, DERECHO ROMANO, Edit., Harla, 2 da.
Edición, México, 1992.
Guillermo F. Margadant S., INTRODUCCIÓN A LA HISTORIA DEL DERECHO MEXICANO, Editorial,
Esfinge, decimoctava edición, México, 2001.