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A todos nos pasaba algo semejante había cosas que nos preocupaba que
no se podía compartir con los padres, se lo hacía con amigxs que Vivian lo mismo
o hermanos mayores que lo habían pasado. O mejor tener al profe de Biología y
jefe de enfermeros, se le consultaba de sexualidad abriendo el abanico que iba
desde tener una clase que se hablaba del desarrollo genital hasta hablar de
métodos anticonceptivos. Nos permitió desarrollar nuestras preocupaciones en
conjunto si la mayoría estaba en lo mismo pasando la adolescencia, y si algo no
podía responder en la clase nos derivaba a un clínico a los varones o ginecóloga a
las chicas, nos facilitaba el turno.
Así que no había de otra en esa tarde había que llamar al profe hasta creo
que también lo llamo la preceptora, el curso sabía lo que sucedía si lo charlamos
en grupo en la clase de Biología hace dos semanas, los chicxs “yuyo” 17 años su
novia también de la misma edad iban a ser padres. El llanto o el miedo es como
comunicarlo a los padres, por suerte estaba JOEY quien hizo más sencillo la
comunicación con los mayores. Hoy los chicos siguen juntos familia numerosa
cinco hijxs, padrino del mayor Mariano y si lleva el nombre del profe.
Heterogeneidad ambiental
Medio día en el trabajo (2010), escuchando la radio reconozco una voz, la noticia
unos locos vecinos de San Isidro no tienen mejor idea que levantar un muro en la
calle Uruguay limite con San Fernando, culpabilizando a los vecinos
sanfernandinos de Villa Jardín del aumento de los delitos en su distrito. La
reportera entrevista a un grupo de docentes y alumnos de la secundaria de Villa
Jardín, marca la reportera “no sabes el parecido del docente que acaba de hablar
con el líder de los ramones”, ya no hay dudas aplaudo quien sino tenía que estar
era el profe para señalar las injusticias de los vecino de San Isidro. La creación
del muro es un acto violento, que posee un transfondo en el desamparo, es decir
la inexistencia de otro de los cuidados materiales, encarnado en la figura del
Estado.
Pero hay otro tipo de desamparo que Perla Zelmanovhich 2 identifica que es el
desamparo subjetivo que se identifica con la inexistencia de otro de los cuidados
simbólicos, ante las propias pulsiones violentas tanto internas como externas del
humano. A estas violencias exógenas Silvia Bleichmar 3 las nombra “malestar
sobrante” porque son evitables por medio de la existencia del otro de los cuidados
del más vulnerable; Zelmanovhich agrega que cuando se invierte la vulnerabilidad
se deja a los más jóvenes “expuestos a la crudeza de la crisis, con la carga
adicional de su culpabilizaciion, que llega en casos extremos a la criminalización”,
esto fue vivido crudamente en los 90, el futuro se presenta como un lugar no
permitido para todos, es un lugar degradado socialmente.