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es
OBJETIVOS
Adquirir las competencias necesarias para identificar las características más importantes del
soldeo por haz de electrones, la clasificación de los diferentes procesos y parámetros a tener en
cuenta.
CONOCIMIENTOS
El soldeo por haz de electrones es un proceso de soldeo por fusión, donde el calentamiento
preciso para la fusión del material base y de aporte, se consigue mediante el impacto de un haz
de electrones, de alta densidad de energía (del orden de 108 W/cm2) con la pieza a soldar. Los
electrones que constituyen el haz, gozan de alta velocidad (del orden de 0.3-0.7 la velocidad de
la luz), al haber sido acelerados en un campo electroestático con una elevada diferencia de
potencial (25-200 KV). La conversión instantánea de la energía cinética de los electrones en
calor (se alcanzan temperaturas del orden de 14.000 ºC), al chocar con las piezas a unir,
favorece la formación de un ojo de cerradura (keyhole), mediante el cual se produce el soldeo
de las mismas.
1. Haz de electrones.
2. Electrodo.
3. Ánodo.
4. Válvula de aislamiento.
5. Prisma óptico.
6. Telescopio óptico.
7. Bobina magnética de enfoque.
8. Bobina de deflexión.
9. Pieza.
10. Cámara de vacío.
11. Bomba de vacío.
12. Válvula de vacío.
13. Válvula de vacío.
14. Cable de alto voltaje.
15. Cátodo.
El soldeo por haz de electrones posee una serie de ventajas que derivan de sus características
únicas, como son la más alta densidad de energía, su fácil control y el vacío como medio de
protección.
Ventajas
• Ofrece un perfil transversal del baño de fusión profundo y estrecho, en
comparación con los procesos de soldeo al arco. Esto nos permite ejecutar
soldaduras en grandes espesores en una sola pasada.
• El aporte térmico es más bajo, lo que reduce los problemas relacionados con la
distorsión y con las posibles transformaciones metalúrgicas en metal de soldadura y
zona afectada térmicamente. La ZAT es más estrecha.
• Se minimiza la contaminación con oxígeno y nitrógeno, en el soldeo con vacío.
• Facilita la ejecución de uniones de difícil acceso en piezas de formas complicadas,
debido a que el haz puede proyectarse a 510 mm de distancia.
• La alta densidad de energía permite soldar a altas velocidades, ya que la
velocidad de fusión de los materiales es muy alta. En este sentido se puede
considerar al haz de electrones como de alta productividad, si atendemos al
tiempo de ejecución del cordón de soldadura.
• Es un proceso que normalmente no utiliza material de aporte, salvo que se
quiera prevenir, por ejemplo, un riesgo de agrietamiento en caliente.
• Podemos soldar piezas herméticas, manteniendo el vacío en su interior, soldando a
alto vacío.
• Podemos provocar oscilación y deflexión del haz por medios magnéticos, lo que
nos permite abordar el soldeo de piezas complicadas.
• Tiene una eficiencia de conversión energética del orden del 65%, ligeramente
superior a la de los procesos de soldeo por arco y muy superior a la del láser (10%).
• Permite el soldeo de componentes sensibles al calor, sin riesgo de deterioro, lo
que lo hace muy útil en la industria electrónica.
• Permite el soldeo de materiales endurecibles sin deterioro de sus propiedades.
• Permite abordar el soldeo de materiales refractarios, reactivos y de uniones
disimilares no abordables con procesos de soldeo al arco.
Los electrones son generados cuando el filamento del cátodo se calienta (2.500 ºC), como
consecuencia del paso a su través de una corriente eléctrica (corriente del haz). La emisión de
los electrones está gobernada por el fenómeno de emisión termoiónica. Los electrones así
emitidos, y con carga negativa, son acelerados y dirigidos a un ánodo perforado, cargado
positivamente.
Sea cual sea la técnica utilizada, el cañón de electrones debe operar a un vacío de cómo
mínimo 13 mPa, siendo éste necesario para evitar la oxidación del filamento emisor,
mantener en buen estado el resto de componentes y evitar saltos de arco eléctrico entre los
electrodos.
Cañones de Electrones
Existen dos tipos básicos de cañones de electrones, el del tipo diodo y el del tipo tríodo.
Parámetros de Soldeo
Los voltajes e intensidades de haz normalmente utilizados, caen en los rangos de 30-200 KV
y 0.5-1500 mA, respectivamente.
Los diámetros de foco, en los que se puede concentrar el haz, se encuentran entre 0.25 a 1.3
mm, lo que genera densidades de energía de hasta 108 W/cm2.
El producto de la intensidad del haz por el voltaje de aceleración define la potencia del haz, y en
consecuencia la cantidad de metal vaporizado y fundido.
Es posible utilizar el haz en modo pulsado con objeto de controlar el aporte térmico, o
incluso hacerlo oscilar ligeramente.
Los equipos más habituales disponen de una potencia de 30 KW, aunque los hay disponibles con
potencias de hasta 200 KW.
Parámetros Principales
• La corriente del haz, que es el número de electrones que inciden en la pieza por
unidad de tiempo (igual al número de electrones generados por el filamento por
unidad de tiempo, y estos “proporcionales” a la intensidad que circula por el
mismo).
• El voltaje de aceleración entre el cátodo y el ánodo, que imprime la energía
cinética a los electrones.
• El tamaño de foco. El grado de concentración del haz.
• La velocidad de soldeo, es decir, la velocidad relativa entre la pieza y el haz.
Dependiendo del grado de vacío al que se somete la cámara en cuyo interior se va a proceder al
soldeo de la pieza de trabajo, podemos clasificar el soldeo por haz de electrones como:
Así una cámara de 1.1 m3, requiere un equipamiento compuesto por una bomba difusora de 250
m3/min, más una bomba mecánica de 17 m3/min, para conseguir un vacío de 40 mPa en 4
minutos. Por el contrario una cámara de 11 m3, precisaría una difusora de 1070 m3/min, y una
mecánica de 37 m3/min, para lograr los mismos 40 mPa, en 12 minutos.
La baja dispersión de haz que caracteriza a este proceso sólo es posible si se garantiza un
vacío mínimo de la cámara de 0.13 Pa. Siendo así el haz puede concentrarse en un foco de
reducidas dimensiones a una distancia de decenas de centímetros. Presiones superiores,
favorecen la colisión del haz con otras partículas, provocando su dispersión y reduciendo, por
tanto, las máximas distancias cañón–pieza. Asimismo el vacío favorece la desgasificación del
baño de fusión.
Aplicaciones
Esta técnica está pensada para aplicaciones de alta precisión donde la contaminación con
oxígeno o nitrógeno puede ocasionar problemas graves. Tales aplicaciones se enmarcan
dentro de la industria nuclear, aeronáutica, electrónica y fabricación de armas (ej: misiles).
Ejemplo de elementos soldados con este proceso son, elementos de combustible nuclear,
recipientes a presión para sistemas de propulsión de cohetes, componentes de motor hechos con
metales reactivos o refractarios.
Soldeo por Haz de Electrones
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Este proceso está especialmente indicado para el soldeo de metales reactivos como el titanio o
el zirconio.
Con este proceso se consiguen los cordones más estrechos posibles, lo que incluso nos
permite soldar aleaciones con tratamiento térmico, sin que se produzca una pérdida acusada
de sus propiedades.
Ventajas y Limitaciones
Parámetros de Soldeo
El soldeo en alto vacío puede realizarse con máquinas de alto voltaje o de bajo voltaje.
Parámetro Variación
Voltaje de Aceleración 15-185 KV.
Con esta técnica se reduce el tiempo de bombeo, con lo que se eleva la productividad.
El uso de cámaras pequeñas, reducen el tiempo de bombeo a unos segundos. Esta ventaja
económica es su principal aportación.
Este proceso se utiliza en la fabricación en serie de piezas pequeñas similares. Esta coyuntura
se presenta sobre todo en el campo de la automoción, especialmente en la fabricación de
componentes de cajas de cambio.
Dada la alta concentración de aire en la cámara (100 ppm), no es posible utilizar esta técnica
para el soldeo de metales reactivos (titanio o zirconio). Asimismo la presencia de moléculas de
aire en la cámara genera mayor dispersión del haz, lo que obliga a limitar las distancias
cañón–pieza. Asimismo los cordones obtenidos con la misma potencia de haz, son más anchos y
menos profundos (5-10 % menos que con alto vacío). La relación profundidad–ancho del cordón
es de aproximadamente 10:1.
Para conseguir los niveles de vacío propios de esta técnica (13 Pa) no es necesaria una bomba
difusora, bastando una bomba mecánica a tal fin. Así una bomba de 37 m3/min, vacía una
cámara de 0.14 m3 en 20 segundos, y una cámara de 0.014 m3 en tan solo 5 segundos.
Dado el sistema existente para mantener el vacío dentro del cañón, compuesto por varias
cámaras a distintas presiones con orificios de salida de reducidas dimensiones, y que opera a
presión atmosférica fuera. Este proceso no puede producir la deflexión del haz, como lo hace
el de alto vacío, lo que lo limita en cuanto al la geometría de las piezas a procesar, por razones
de accesibilidad de la unión. El haz tampoco puede sufrir oscilación con este proceso.
La relación penetración–anchura del cordón, es baja, comparada con los procesos anteriores.
La alta dispersión del haz que ocasiona la atmósfera obliga a distancias cañón-pieza pequeñas
(del orden de 4 mm).
Características Generales
El baño de fusión se caracteriza por tener un perfil más triangular, lo que repercute en un
mayor nivel de distorsión, si lo comparamos con los procesos anteriores. La contracción
transversal que sufre, no obstante, es la mitad que la que origina el TIG.
Normalmente este proceso no utiliza metal de aporte, salvo aquellos casos en los que el riesgo
de agrietamiento en caliente es alto, en cuyo caso su uso, bien en forma de alambre o como
injerto, está recomendado.
Esta técnica opera normalmente con voltajes de 150–200 KV y distancias cañón–pieza de 13-
50mm.
Para alcanzar la penetración deseada, se fija la tensión, la distancia cañón–pieza lo más baja
posible, la velocidad de soldeo lo más alta posible, y se manipula la intensidad del haz.
Un chorro de aire o de gas inerte barre transversalmente la ventana de salida del haz para evitar
la contaminación con vapores del interior del cañón.
La penetración que se consigue con helio es mayor que la conseguida con aire o argón, ya
que su menor densidad ocasiona un menor nivel de interferencias con el haz, y en
consecuencia menor dispersión del mismo. Para una penetración y distancia cañón-pieza dadas,
con helio se puede soldar a mayor velocidad que con aire o argón.
Un incremento en la potencia del haz, por encima de los 50 KW, hace más eficiente la
penetración de este proceso. Esto es debido a que el incremento de potencia del haz produce una
disminución de la densidad de la atmósfera, por incremento de su temperatura, disminuyendo a
su vez el nivel de interferencia del haz con otras partículas. Se han conseguido penetraciones
máximas de 9.5 mm.
Soldeo por Haz de Electrones
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Efecto Sobre la Penetración y la Velocidad de la Atmósfera de Protección
en el Soldeo por Haz de Electrones Atmosférico de Acero AISI 4340
Aplicaciones
Entre las aleaciones que se han soldado con éxito con este proceso, están los aceros al carbono,
aceros de baja aleación, aceros inoxidables, aleaciones base cobre, aleaciones resistentes a
la termofluencia, y aleaciones de aluminio.
El hecho de no tener que practicar el vacío, no exime a este proceso de la necesidad de disponer
de una cámara que aísle la zona de soldeo, para evitar que la emisión de rayos X, pueda
alcanzar al personal del taller.
El aporte térmico suministrado a la unión soldada se puede representar de forma general a través
de la siguiente ecuación:
Donde:
El aporte térmico se puede obtener mediante unas curvas, en función del espesor y el
material a soldar.
Estas curvas se elaboran teniendo en cuenta tres principios de operación del haz de electrones.
Principios de Operación
• Las variables de soldeo son servo controladas vía ordenador, lo que garantiza su
estabilidad y reproducibilidad.
• El ajuste de cada variable es independiente.
• Existen sólo cuatro variables para ajustar:
− Voltaje de aceleración.
− Intensidad del haz.
− Focalización del haz.
− Velocidad de soldeo.
Una vez determinado el aporte térmico para un material y un espesor, se puede fijar la
velocidad de soldeo (por razones de producción), y en base a los datos obtenidos a partir de las
curvas, fijar finalmente la potencia del haz, lo que supone establecer los valores de intensidad
de haz y de voltaje de aceleración.
El tamaño del foco dependerá de la geometría del baño buscada. Un incremento en el voltaje
de aceleración puede modificar el tamaño del foco, por lo que será necesario el ajuste
correspondiente, aumentando la corriente de enfoque en la bobina correspondiente. Si se
incrementa la distancia cañón pieza, será preciso disminuir la intensidad de corriente de
enfoque, para corregir el tamaño del foco.
La modificación de los valores de las variables de soldeo afecta al baño de fusión y penetración
de la siguiente forma:
El diseño y la geometría de la unión son variables básicas en el soldeo con haz de electrones.
Así un alto nivel de embridamiento en el soldeo de materiales de alto límite elástico, con poca
capacidad de deformación (aceros endurecibles y aceros de fácil mecanizado), puede ocasionar
la aparición de grietas. Tal es el caso del soldeo de uniones circunferenciales, por ejemplo la
unión de un engranaje a su eje.
Un diseño de unión que permita el desplazamiento parcial de una de la piezas a unir, y que
facilite la formación de cordones con perfil transversal de lados paralelos (no triangular)
favorece la distribución uniforme del calor y en consecuencia previene los efectos derivados
de un campo de tensiones no uniformes.
Normalmente los bordes de unión no van biselados, de hecho el chaflán puede contribuir a al
expulsión de material fundido por efecto de la tensión superficial. En este caso el material
fundido que rodea al ojo de cerradura puede fluir hacia los bordes del chaflán generando una
depresión en el centro del cordón. En estos casos sería preciso el uso de material de aporte.
Parámetros Importantes
Un perfil de baño triangular genera un mayor nivel de tensiones, teniendo estas un carácter
no uniforme, por lo que el problema de la distorsión se acentúa.
La limpieza es otro parámetro fundamental en el soldeo por haz de electrones, ya que una
pieza sucia puede:
Se prefiere la limpieza con acetona al cepillado, con este último pueden quedar embebidas
partículas en la superficie metálica de la pieza.
Los métodos de sujeción utilizados son similares a los usados en el TIG sin aporte de
material, con la salvedad de que en este caso la presión de amarre es menor, y los útiles de
sujeción han de haber sido desmagnetizados. El magnetismo residual en piezas y útiles ha de
estar en el intervalo de 5·10-5 T – 4·10-4 T. Esto puede lograrse con un equipo estándar para
ensayo por partículas magnéticas, sometiendo a la pieza a 60 ciclos de campo inductivo. El
origen de la magnetización de la pieza puede ser variado: ensayos previos por partículas
magnéticas, mecanizado electroquímico, manipulación con grúas imán o sujeción con mordazas
magnéticas.
El haz de electrones puede efectuar el punteado previo de la pieza, o realizar una pasada
previa con penetración parcial.
Con objeto de evitar los cráteres de inicio y final de soldadura se usan distintas técnicas.
Diseño de Bordes
El diseño de bordes es otro factor de suma importancia en el soldeo por haz de electrones. A
continuación se representan las uniones más comunes para la unión de piezas a tope y en
ángulo:
• Soldeo a tope.
• Soldeo en ángulo.
• Soldeo en T.
• Unión a solape y en borde.
(e)
Esta preparación se
Esta preparación es aplica a espesores
más segura y admite mayores de 25 mm,
aporte de material. admitiendo a su vez
material de aporte.
Esta preparación garantiza alta Estas preparaciones se utilizan con el haz desenfocado
penetración. para generar cordones de mayor anchura.
El uso de cuellos de transición para convertir una unión en ángulo en una unión a tope, es
una práctica recomendable.
La presencia de grandes masas de materia magnética puede alterar la trayectoria del haz,
produciendo falta de penetración e incluso pérdida de la unión. Es preciso mantener la
separación adecuada.
Todos los materiales habitualmente soldados con procesos de soldeo por arco, lo son por haz
de electrones. Esto también afecta al soldeo de uniones entre materiales disimilares.
La formación de baños profundos y estrechos, con bajo aporte térmico y zonas afectadas por el
calor estrechas, permite obtener uniones con mejores propiedades mecánicas y menos nivel de
discontinuidades. Sin embargo el haz de electrones puede presentar problemas en el soldeo de
materiales susceptibles al agrietamiento en caliente y porosidad.
El soldeo de materiales disimilares está condicionado por las propiedades físicas del
material a unir, como son el coeficiente de expansión, conductividad térmica, punto de fusión,
y por la posibilidad de formar compuestos intermetálicos frágiles.
Los aceros al carbono presentan alta soldabilidad con respecto al soldeo por haz de electrones.
Dado el bajo aporte térmico y el rápido calentamiento y enfriamiento que caracteriza este
proceso la estructura de grano del metal de soldadura y de la zona afectada térmicamente, es
fina.
Los aceros al carbono efervescentes producen mayores niveles de porosidad. Una solución al
respecto es cubrirlos con una fina lámina de aluminio (0.25 mm) que sirve de desoxidante,
otra alternativa es la de disminuir la velocidad de soldeo, con lo que incrementamos el tiempo
de solidificación y por tanto del tiempo preciso para desgasificar el baño. Los aceros al carbono
calmados no presentan este problema.
Los aceros con contenido medio de carbono son fácilmente soldables con este proceso, salvo
los de fácil mecanización, debido a su alto contenido en elementos que facilitan el agrietamiento
en caliente (S, Se). Conforme el contenido en carbono crece, la soldabilidad del acero baja.
Los aceros dentro de esta familia con contenidos de carbono inferiores al 0.3 % son soldables
sin necesidad de precalentamiento o postcalentamiento. En caso de ser necesario, alto nivel de
embridamiento, el precalentamiento se realizará a una temperatura entre 260 – 315 ºC.
Aceros HLSA
Los aceros de alta resistencia y baja aleación (HLSA), con contenidos de carbono superiores
al 0.3 %, se sueldan preferentemente en estado de recocido o normalizado.
El soldeo de aceros con un contenido en carbono mayor de 0.5 %, presenta menos tendencia
al agrietamiento que con el soldeo por arco.
El soldeo por haz de electrones permite el soldeo a alta velocidad de aceros de herramientas,
sin necesidad de someter a la pieza a un tratamiento de recocido previo. La máxima dureza se
alcanza en el cordón de soldadura. La zona sometida a un sobrerevendio no es más ancha de la
décima del milímetro.
Una aplicación típica del soldeo por haz de electrones de este tipo de materiales, es la
fabricación de cintas de sierra bimetálica.
Una aplicación característica del soldeo por haz de electrones de acero inoxidable austenítico, es
la fabricación de discos de ruptura (dispositivos de seguridad acoplado a recipientes a alta
presión). La soldadura se hace principalmente por transparencia. Con un aporte térmico de
0.0098 KJ/mm, se pueden producir hasta 44 uniones a la hora.
Dentro de las aleaciones base níquel el Hastelloy N, Hastelloy X, Inconel 625, gozan de alta
soldabilidad.
El Inconel 600 puede soldarse fácilmente asimismo y a el acero inoxidable austenítico AISI 304.
El Inconel 700, 718, X-750 y Rene 41 (endurecibles por penetración) pueden soldarse con
ciertas precauciones (limitar embridamiento). El Inconel 718 se suelda en estado de recocido o
de envejecimiento., el Inconel X-750 en estado de recocido y el Rene 41 en estado de
solubilización. Las aleaciones de moldeo 713C, GMR-235 y la de forja Waspaloy, tienen una
soldabilidad baja.
Dentro de las aleaciones base hierro, la de mayor soldabilidad es la 19-9DL, siempre que se
utilice precalentamiento. La aleación N-155 presenta buena soldabilidad, mientras que las
aleaciones 16-25-6 y la A286 presentan una soldabilidad limitada. La aleación A286 se suelda en
estado de solubilización.
Dentro de las aleaciones base cobalto al HS-21 presenta buena soldabilidad, siempre que el
nivel de embridamiento no sea alto. Las aleaciones H-31 y S-816 presentan una soldabilidad
limitada.
Se han conseguido soldaduras en una sola pasada, a penetración completa, sobre 150 mm de
aluminio, con una relación penetración a anchura de 20 a 1.El bajo aporte térmico de este
proceso y la estrecha ZAT, minimiza la pérdida de propiedades en las aleaciones tratables
térmicamente.
Las aleaciones no tratables (1XXX, 3XXX, 5XXX), son soldables por haz de electrones,
obteniéndose propiedades similares a las obtenidas con el TIG. En caso de que el material esté
endurecido por deformación, el metal de soldadura tiene las propiedades del metal base en estado
de recocido.
Las aleaciones tratables térmicamente (2XXX, 6XXX, 7XXX) son susceptibles en distinto
grado al agrietamiento y porosidad. El aporte térmico en el soldeo por haz de electrones
atmosférico es un 40 % mayor que en el soldeo de alto vacío, pero un tan solo el 32 % del
aportado por el TIG.
La alta conductividad térmica del cobre causa menos problemas al soldeo por haz de
electrones, que a los procesos de soldeo por arco, debido a que las pérdidas por conducción
térmica están compensadas por la alta densidad de energía del proceso.
Por efecto de la tensión superficial, puede ocurrir que parte del material fundido, entorno al ojo
de cerradura, sea expulsado a los bordes exteriores, causando proyecciones y aspectos de cordón
inapropiados, especialmente en cobres no desoxidados. Esto se soluciona mediante una segunda
pasada con el haz desenfocado, pasada de acabado.
La protección que proporciona el alto vacío, evita la fragilización por hidrógeno, pero no
elimina por completo la porosidad en raíz.
El soldeo del latón se ve dificultado por el alto contenido en Zn y su alta presión de vapor. Los
cobres de fácil mecanizado se consideran no soldables.
La alta presión de vapor del magnesio, temperatura de ebullición 1.107 ºC, induce la presencia
de porosidad y sopladuras.
El titanio presenta la misma soldabilidad que frente al TIG. El soldeo en alto vacío evita el
diseño y construcción de complejos útiles que garanticen en adecuado suministro de gas de
protección a la zona de soldeo.
Cuando el elemento soldado tiene que trabajar a elevada temperatura la secuencia del procesado
del material óptima es: recocido + soldadura + solubilización + maduración.
El berilio presenta alta soldabilidad con respecto a este proceso de soldeo. El bajo aporte
térmico, y los cordones estrechos previene el agrietamiento.
En el caso de equipos que trabajen sin vacío, por lo que carecen de cámaras de acero, deben
estar instalados dentro de recintos con paredes de hormigón o materiales de mayor
densidad.
Se debe a su vez realizar controles periódicos de la salud de los empleados expuestos a los
equipos.
Cursos desarrollados
de acuerdo con las INSTITUTO FEDERACIÓN
directrices que INTERNACIONAL EUROPEA
marcan: DE SOLDADURA DE SOLDADURA