Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
JC Ebook Cuando Parece Que Dios Se Ha Olvidado de Mi PDF
JC Ebook Cuando Parece Que Dios Se Ha Olvidado de Mi PDF
JORGE COTA
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
Introducción
¿Alguna vez se ha sentido como si sus oraciones rebotaran en el techo? ¿Se siente
frustrado porque parece que Dios estuviese distante o no le importa lo que le
pasa? ¿Está cansado de esperar y suplicar?
Todos en alguna ocasión u otra hemos sentido a Dios lejos. Sin embargo, su
proximidad a nosotros no depende de si lo sentimos o no. Como puede ver,
comprender el sentido de Dios durante esos momentos difíciles es vital para
nuestra vida espiritual.
Esos versículos nos dicen dos cosas sobre Dios. La primera, que Dios no tiene
prisa. La segunda, que Dios no actúa como nosotros actuamos. De hecho, su
manera de hacer las cosas está completamente fuera de lo que nosotros podemos
predecir qué hará o cuándo lo hará. Eso significa que el momento escogido de
Dios para actuar es totalmente diferente al nuestro.
2
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
Me he dado cuenta que a nadie le gusta esperar. Para mí, una de las situaciones
más difíciles donde tengo que esperar es en un restaurante. Cuando tengo hambre,
mi deseo de espera disminuye significativamente. ¿Sabía que cuando uno va a un
restaurante tiene que esperar por lo menos de seis maneras diferentes? Primero,
tiene que esperar a que lo sienten. Segundo, tiene que esperar para que le traigan
el agua. Luego, tiene que esperar a que venga el mesero y le muestre la carta.
Después, espera otra vez a que venga el mesero y le tome la orden. Después de
esto, tiene que esperar a que le traigan la comida. Por último, tiene que esperar a
que le traigan la cuenta. .No sé por qué se llaman meseros, si el que espera todo el
tiempo en la mesa es uno.
Como puede ver, tendemos a querer lo que queremos y lo queremos ¡ya! Sin
embargo, Dios nos da lo que necesitamos cuando lo necesitamos más. Hay una
enorme diferencia entre querer lo que queremos cuando lo queremos y necesitar
lo que necesitamos cuando lo necesitamos más. La diferencia entre esas dos es la
espera y no es fácil aceptarlo.
¿Qué le parece eso? Salomón el hombre más sabio que jamás haya vivido
admitió: “En ocasiones no tengo idea de lo que Dios quiere hacer”. Nosotros
como creyentes a veces vivimos en negación espiritual de lo difícil que la vida
cristiana puede ser. Si un creyente expresa dudas o frustración es considerado
como inmaduro, débil o carnal.
3
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
Una de las cuestiones que más me frustran es que la mayoría del tiempo ando a
las carreras y Dios no. Me imagino que Dios nunca tiene prisa porque él
literalmente tiene todo el tiempo del mundo.
Dios es eterno y por consiguiente no tiene conciencia del tiempo. El apóstol Pedro
estaba tratando de explicar este concepto a algunas personas que se estaban
quejando al respecto.
Sin embargo, queridos amigos, hay algo que no deben olvidar: para el
Señor, un día es como mil años y mil años son como un día.
El problema es que para mí mil años es mucho tiempo. Quiero lo que quiero y lo
quiero ¡ya! No me gusta esperar.
4
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
Quizás recuerda la historia donde Jesús se dirigía a salvarle la vida a una niña.
Mientras la multitud lo apretujaba una mujer lo interrumpió. Esta mujer había
estado enferma desde hace doce años. La verdad que no era una situación urgente.
Jesús le pudo haber dicho: “No tengo tiempo ahora, tengo que ir a salvar a una
pequeña que se está muriendo”. Pero no hizo eso. Se detuvo a ayudarle y la sanó.
¿Se dio cuenta de lo que ocurrió? Jesús escuchó que Lázaro estaba enfermo.
Muriéndose. En vez de ir corriendo a verlo, esperó dos días más.
Intencionalmente se demoró. De hecho, esperó a que muriera antes de partir a
Betania.
Jesús y Lázaro eran mejores amigos. Si su mejor amigo le llama y le dice que se
está muriendo. ¿Qué haría? Inmediatamente fuera a estar con él. ¿Sí o no? ¿Cómo
cree que María y Marta se sintieron mientras esperaban a Jesús y ver que su
hermano moría?
5
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
Pues todos los animales del bosque son míos, y soy dueño del ganado de
mil colinas.
Salmos 50:10 (NTV)
¿Sabe cuál es nuestro problema? Pensamos que si Dios no actúa cuando nosotros
se lo pedimos perderemos la oportunidad o los recursos para que se nos facilite la
vida. Nos gusta estar preparados. Pero como Dios tiene todo el tiempo y los
recursos del mundo siempre llega justo a tiempo. Ni un minuto tarde ni un minuto
temprano.
¿Sabe por qué María se quedó en casa? Porque estaba enojada con Jesús. Jesús
había fracasado en la única cuestión que María le rogó que hiciera. María quizás
6
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
hasta estaba amargada. Después de todo lo que había hecho por Jesús y Jesús no
le resolvió. Recuerde que María era la que derramó un precioso perfume en los
pies de Jesús y los limpió con sus cabellos. María sin duda se sintió
menospreciada, abandonada e ignorada.
Cuántas veces ha dicho o pensado: “¿Dios, dónde rayos estabas? ¿Por qué no me
escuchas?” En esta ocasión Jesús simple y sencillamente llegó tarde. Jesús no
solamente llegó 15 minutos tarde sino cuatro días tarde. Su amigo Lázaro estaba
muerto desde hace tres días. Ahora bien, esto es muy importante de entender
porque en la mentalidad judía una persona no se consideraba muerta hasta que
terminaba el tercer día, por eso Jesús esperó tres días para ir a verlo.
María y Marta debieron haberse sentido como el profeta del Antiguo Testamento
Habacuc. Alguna vez le ha preguntado a Dios: ¿SEÑOR, por qué yo? ¿Por qué
esto? ¿Por qué ahora? ¿No te importa o qué?
7
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
Una de las cuestiones más difíciles para nosotros es comprender que Dios no le
rinde cuentas a nadie.
Así que mientras los apóstoles estaban con Jesús, le preguntaron con
insistencia: —Señor, ¿ha llegado ya el tiempo de que liberes a Israel y
restaures nuestro reino? Él les contestó: —Sólo el Padre tiene la
autoridad para fijar esas fechas y tiempos, y a ustedes no les corresponde
saberlo.
Solo Dios decide cuándo llevar a cabo lo que piensa hacer. Es interesante señalar,
que Marta intentó manipular a Jesús. Esto ocurre muy a menudo con nosotros.
Intentamos hacer tratos o promesas con Dios. “Dios, si arreglas mi matrimonio te
prometo que… Si enderezas a mi hijo rebelde te juro que…”
Dios no hace trato con nosotros porque sabe que quebraremos la promesa por eso
mejor nos ama y comprende. Pero eso fue lo que Marta estaba haciendo.
8
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
Marta pensó que podía manipular a Jesús. Le dijo: “a pesar de todo”. En otras
palabras: “Jesús, tienes otra oportunidad”.
9
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
10
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
Son esos momentos cuando nos toca esperar que Dios pule nuestro carácter. Sin
embargo, es bien fácil enojarnos porque nos choca esperar. Así como un
campesino espera su cosecha debemos esperar pacientemente.
Permítame hacerle una pregunta sobre la historia de Lázaro. ¿Qué forma fue la
mejor? ¿Hubiese sido mejor si Jesús hubiese llegado a tiempo y haberlo sanado?
¿Fue mejor haber llegado tarde y levantarlo de los muertos?
Jesús no tuvo ningún problema en pararse frente a la tumba y gritar: “¡Lázaro, sal
fuera!” Me imagino que las personas que estaba observando todo esto pensaron
que Jesús estaba loco. Estoy seguro que uno que otro se rió de Jesús cuando dijo:
“Quiten la piedra”. Apuesto a que todos se quedaron atónitos cuando Lázaro
salió tambaleando de la tumba. De hecho, se quedaron tan congelados que Jesús
tuvo que decir: “Por el amor de Dios alguien desátelo”.
11
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
Pongamos esto en contexto. Estos versículos dicen que Dios probó a Abraham.
Ahora bien, Abraham ya había sacrificado su casa. Se mudó a una tierra
desconocida. Había vivido por fe después de que Dios le dio la promesa de que
tendría un hijo a los 100 años de edad. Ahora que por fin tenía el hijo que Dios le
había prometido. Dios le dice que lo sacrifique. De hecho, Dios fue tan claro que
sacrificara a su hijo Isaac; le dijo: “Toma a tu hijo, tú único hijo, sí, a Isaac, a
quien tanto amas”.
12
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
Esta es la historia más difícil en la Biblia. Francamente no sé por qué Dios le hizo
esta petición a Abraham. Lo que sí sé es que los pensamientos de Dios no son mis
pensamientos.
Tengo un presentimiento que Dios le dijo a Abraham que sacrificara al hijo que
amaba porque no le interesó dejar morir a su otro hijo, al que no amaba.
La mayoría de las veces Dios nos enfrenta en nuestro propio terreno y es por eso
que hacer tratos con Dios no es algo bueno. Porque al que mucho se le da, mucho
se le es requerido.
Creo que Abraham era responsable por esto porque siempre empujó a Dios hasta
los límites. Sin embargo, a pesar del por qué, Dios no tuvo ninguna intención de
13
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
matar a Isaac. Inclusive Abraham sabía eso porque le dijo a sus sirvientes que él y
el muchacho regresarían.
Como puede ver, Dios nunca llega temprano. Siempre llega justo a tiempo. El
carnero no fue proveído hasta que el cuchillo estaba en el aire.
No tenga miedo
Existen 366 versículos en la Biblia que nos dicen: “No temas”. Uno para cada día
del año y otro por si las dudas.
No se preocupe
La preocupación es una actividad inútil. Es como apalear humo. Le dará algo que
hacer pero no obtendrá ningún resultado. Alguien dijo: “La preocupación es el
interés que pagamos hoy por los problemas que surgirán en el mañana”. Así que
no se preocupe. Ponga su confianza en Dios no en las circunstancias.
14
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
No se desanime
No se desespere
Dios es paciente con nosotros y a veces se demora por nuestro propio bien.
15
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
Reflexión
Gracias Dios por tus buenos consejos. Confesamos que a veces esperar no nos
gusta. Vivimos en una sociedad que ofrece gratificación instantánea y
francamente no nos gusta esperar. Gracias por recordarnos que nuestros
pensamientos no son tus pensamientos.
Si te encuentras leyendo este e-book y estás pasando por una situación difícil en tu
vida y quizás te estás preguntando ¿Por qué? ¿Por qué yo? ¿Por qué esto? Y
desearías que Dios te pudiera enviar un mensaje del cielo dándote una respuesta.
Ten la certeza que Dios escucha tus plegarias. No te desanimes ni desesperes, él
llegará justo a tiempo.
Lo más importante que quiero que sepas es que Dios te ama. Dios no está enojado
ni tampoco te quiere castigar. Su profundo deseo es llegar justo a tiempo a tu
vida. No está interesado en tu pasado sino en tu futuro. De manera que si nunca
has invitado a Dios a tu vida hoy es el momento ideal para que lo hagas. Ahí
donde estás por qué no le dices quedito: “SEÑOR, gracias por amarme tanto.
Perdóname por todas la veces que me equivoqué en la vida. Te invito a mi
corazón. Ayúdame a ser la persona que tú me diseñaste que fuese. Amén”.
16
Cuando parece que Dios se ha olvidado de mí
Más de la Vida
Calle Ana 3750-1
Residencias Imperiales 21285
Mexicali B.C. México
(686) 566-4411
jorgecota.com
17