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Asignatura:

Derecho procesal penal.

Facilitador:

Fernando Ozuna.

Participante:

Rossy Maitee rosario arias.

Tema:

5.

Matricula:

2018-05841.

Ubicación:

Calle 5W, Santo Domingo Este 11516

Fecha:

17/07/2019
Introducción:

El principio de legalidad es un principio fundamental del derecho público conforme


al cual todo ejercicio de potestades debe sustentarse en normas jurídicas que
determinen un órgano competente y un conjunto de materias que caen bajo su
jurisdicción. Por esta razón se dice que el principio de legalidad asegura la
seguridad jurídica. Se podría decir que el principio de legalidad es la regla de oro
del derecho público y en tal carácter actúa como parámetro para decir que un
Estado es un Estado de derecho, pues en él el poder tiene su fundamento y límite
en las normas jurídicas. En íntima conexión con este principio la institución de la
reserva de ley obliga a regular la materia concreta con normas que posean rango
de ley, particularmente aquellas materias que tienen que ver la intervención del
poder público en la esfera de derechos del individuo.

Por lo tanto, son materias vedadas al reglamento y a la normativa emanada por el


Poder Ejecutivo. La reserva de ley, al resguardar la afectación de derechos al
Poder Legislativo, refleja doctrina liberal de la separación de poderes.
1. Elabore un ensayo argumentativo de no más de dos páginas
acerca de la Primacía de la Ley Penal.

El principio de legalidad o primacía de la ley es un principio fundamental, conforme


al cual todo ejercicio de un poder público debe realizarse acorde a la ley vigente y
su jurisdicción y no a la voluntad de las personas. Si un Estado se atiene a dicho
principio entonces las actuaciones de sus poderes estarían sometidas a la
constitución y al estado actual o al imperio de la ley.

Se considera que la seguridad jurídica requiere que las actuaciones de los


poderes públicos estén sometidas al principio de legalidad. El principio se
considera a veces como la "regla de oro" del derecho público, y es una
condición necesaria para afirmar que un Estado es un Estado de derecho,
pues en el poder tiene su fundamento y límite en las normas jurídicas. En
íntima conexión con este principio, la institución de la reserva de Ley obliga a
regular la materia concreta con normas que posean rango de ley,
particularmente aquellas materias que tienen que ver la intervención del poder
público en la esfera de derechos del individuo. Por lo tanto, son materias
vedadas al reglamento y a la normativa emanada por el poder ejecutivo. La
reserva de ley, al resguardar la afectación de derechos al Poder legislativo,
refleja la doctrina liberal de la separación de poderes.

Esta relación entre el principio de legalidad y el de reserva de la ley esta


generalmente establecida -en una democracia- en el llamado ordenamiento
jurídico y recibe un tratamiento dogmático especial en el derecho
constitucional, el derecho administrativo, el derecho tributario y el derecho
penal. A cumplir una condena a los que se les implica la sentencia para
retomar el crimen que pudo haber ocurrido.

En su planteamiento original, conforme al principio de legalidad, la Administración


pública no podría actuar por autoridad propia, sino que ejecutando el contenido de
la ley. Ello obedecía a una interpretación estricta del principio de la separación de
poderes originado en la Revolución francesa.
Esta tarea de ejecución, a poco andar, llegó a ser interpretada como una función
de realización de fines públicos en virtud de la autonomía subjetiva de la
Administración, pero dentro de los límites de la ley (doctrina de la vinculación
negativa). La ley sería entonces un límite externo a la actividad administrativa,
dentro de cuyo marco la Administración es libre. El Estado sólo puede hacer o
dejar de hacer lo que la ley le permita y mande, o sea que nada queda a su libre
albedrío.
Actualmente, en cambio, se considera que es el derecho el que condiciona y
determina, de manera positiva, la acción administrativa, la cual no es válida si no
responde a una previsión normativa actual. El principio de legalidad opera
entonces como una cobertura legal previa de toda potestad: cuando la Administra
con ella, su actuación es legítima (doctrina de la vinculación positiva)

En el derecho penal rige respecto de los delitos y las penas, postura


originariamente defendida por Cesare Beccaria.
Paul Johann Anselm von Feuerbach estableció este principio en materia de
derecho penal basándose en la máxima nullum crimen, nulla poena sine praevia
lege, es decir, para que una conducta sea calificada como delito debe ser descrita
de tal manera con anterioridad a la realización de esa conducta, y el castigo
impuesto debe estar especificado de manera previa por la ley.
La legalidad penal es entonces un límite a la potestad punitiva del Estado, en el
sentido que sólo pueden castigarse las conductas expresamente descritas como
delitos en una ley anterior a la comisión del delito.
Contenido: los elementos que integran el principio de legalidad. Puede estudiarse
por un lado atendiendo al tenor literal de la legalidad desde el punto de vista
formal y en su significado material:

La legalidad en sentido formal: implica, en primer término, la reserva absoluta y


sustancial de ley, es decir, en materia penal solo se puede regular delitos y penas
mediante una ley , no se pueden dejar a otras disposiciones normativas esta
regulación, ni por la costumbre, ni por el poder ejecutivo ni por el poder judicial
pueden crearse normas penales tan solo por el poder legislativo y por medio de
leyes que han de ser orgánicas (según doctrina interpretativa del art. 81 CE) en los
casos en que se desarrollen derechos fundamentales y libertades públicas.

La legalidad en sentido material: implica una serie de exigencias, que son:

Taxatividad de la ley: las leyes han de ser precisas, ésta exigencia comporta
cuatro consecuencias:
La prohibición de la retroactividad de las leyes penales. Como regla general las
normas penales son irretroactivas, excepto cuando sean más favorables para el
reo.

La prohibición de que el poder ejecutivo o la administración dicte normas penales.


La prohibición de la analogía en materia penal, es decir, generar
razonamientos y conductas basándose en la existencia de semejanza con
otra situación parecida)
Reserva legal. Los delitos y sus penas deben ser creados por ley y solo
puedan ser creados por esta, descartándose otros medios de formación de
legislación penal, como podrían ser la costumbre o las resoluciones
judiciales.
Conclusión:

La ley es una norma, que en un estado de derecho implica un precepto dictado por
una autoridad competente y que debe ser respetado sin excepciones por quienes
habitan o conviven en ese estado. Esa ley exigirá algo o desaprobará algo que
estará en relación con la justicia y con el bien común de la comunidad. En tanto,
todas aquellas acciones que violan una ley están especialmente tipificadas en un
código, por ejemplo el penal, y por caso implicarán un castigo que estará
vinculado con la gravedad y la naturaleza de la falta.
Entonces, las leyes lo que hacen es limitar las acciones y comportamientos de los
hombres que conviven en una comunidad con la misión de ordenar y garantizar el
orden y el respeto de los derechos de todos. Al no haber una plena conciencia de
todos al respecto de lo que está bien hacer y lo que no es que para asegurar la
paz y la convivencia social debe haber leyes que sí lo aseguren y velen por ello.
Cualquier estado de derecho está regido por un sistema normativo y de
instituciones en relación a una constitución que se ocupa de garantizarnos a todos
los derechos humanos básicos.
La legalidad es el marco legal para resolver situaciones y disputas.
Desarrollo:

Esta relación entre el principio de legalidad y el de reserva de la ley esta


generalmente establecida -en una democracia- en el llamado ordenamiento
jurídico y recibe un tratamiento dogmático especial en el derecho constitucional, el
derecho administrativo, el derecho tributario y el derecho penal.

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