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vidas las persona s se juntan para renovar la red de relaciones

transacciones y significados que mantienen su existencia común. D~ 2


hecho, si no nos comprometiéramos en esta continua actividad de
producción material y social, el mundo humano literalmente se caería
a pedazos. Todos los roles y estructuras sociales --desde los más
gratificantes hasta los más opresores- de algú n modo deben ser
restaurados y reproducidos con cada nuevo día.
Desde este punto de vista, la pregunta importante acerca de la ¿Los art efactos tienen política?
tecnología se convierte en: a medida que "hacemos funcionar las
cosas", ¿qué c1 ase de mundo estamos construyendo? Esto significa que
prestemos atención no sólo a la fabricación de instrumentos y procesos No existe idea más provocativa en las controversias acerca de la
fís icos, a unque por supuesto est o sigue siendo importante sino tecnol ogía y la sociedad que la noción de que los elementos técn icos
también a la producción de condiciones psicológicas, soci~les y poseen cualidades políticas. Está en di scusión el tema de que las
políticas comopartH de cualquier cambio técnico significativo. ¿Vamos máquinas, las estructuras y los sistemas de la cultura material
a diseiíar y construir circunstancias qne a umenten las posibilidades moderna pueden ser juzgados igualmente no sólo por su contribución
de creci.miento de la libertad humana, de la sociabilidad, inteligencia, a la eficiencia y productividad y por sus efedos secundarios ambien-
creati vJdad y autogobierno? O ¿nos düigimos en w1a dirección comple- tales positivos y nega tivos sino también por la manera en que pueden
ta mente diferente? encarnar formas específicas de poder y autoridad. Dado que las ide~ s
Es cierto que no todas las innovaciones tecnológicas incluyen de este tipo con stituyen una presencia persiste nte y problemática en
elecciones de gran significación. Algunos adelantos son más o menos las discusiones sobr e el significado de la tecnolog ía, merecen un a
inocuos; otros producen modificacion es sólo triviales en nuestra forma atención explícita.
de vida. Pero en general, allí donde existen cambios sust~nciales en Jo J\1 escribir a principios de la década de 1960, Lewi s Mumford dio
que hacen las personas y a costa de una inversión sustancial de e nunciación clásica a una versión del tema, sosteniendo que "desde los
recursos sociales, entonces vale la pena preguntarse de ant emano antiguos tiempos ueoliticos en el Cercano Oriente hasta nuestros días,
cuál es la calida d de los artefactos, las instit uciones y las experiencias han convivi do dos tecn ologías en forma recu rrente: una autoritaria, la
humanas que siempre están a la orden del día. otra democrática, la primera centrada en el sistema, inmensamente
Los cuestionamientos de este tipo presentan un importante poderosa, pero inh erentemente inestable ; la otra centrada en el
desafío. hacia todas las disciplinas en las ciencias sociales y las hombre, relativamente débil, pero inventiva y uurable". 1 Esta tesis se
humamdadcs. De hecho, existen gran cantidad de historiadores, ce ntra en los estudios de Mumford de la ciudad, la arquitectura y la
antropólogos, sociólogos, psicólogos y artistas cuyo trabajo ilumina historia de la técnica, y refl eja intereses dados a conocer con a nterio-
diversas dimensiones humanas de la tecnología descuidadas por ridad en las obras de Peter Kropotkin, William Morris y otros críticos
mucho tiempo. Incluso los ingenieros y otros profeniona les técnicos del industrialismo del siglo dieci nueve. Durante la década de 1970, Jos
tienen mucho que ofrecer aquí cuando halla n coraje suficiente para ir movimientos antinucleares y a favor de la energía solar en Europa y
más a llá de las categorías intransigentes de su capacit.'1ción. los Es tados Unidos adoptaron una noción similar como centro de sus
El estudio de la política aporta sus propias características en este argumentos. Según el ambientalista Deni s Hayes: "E l despliegue en
terreno. Cuando la imaginación política se confronta con las aumento de aparatos de poder nuclear debe dirigir la sociedad hacia
tec nologías como fonnas de vida, debería poder decir algo acerca de las el autoritarismo. De hecho, la plena confianza en el poder nuclear
elecciones (implícitas o explícitas) hechas en el curso de la innova ción como principal fuente de energía sólo es pos ible en un estado totalita-
tecnológica y los motivos para efectuar dichas elecciones en forma rio". Hacién dose eco en los puntos de vis ta ele muchos defensore s de la
sensnta. Esta es una tarea que emprendo en Jos próximos dos tecnología adecuada y del sendero de energía suave, Hayes sostiene
capítulos. Mediante la creación tecnológica así como mediante otr os que "las fuentes solares dispersas son más compatibles que las
medios, construimos Wl mundo para poder convivir el uno con el otro.
Mucho más de lo que hemos reconocido en el pasado, debemos admi tir
nuestra responsabilidad por lo que estarnos haciendo. 1
Lewis Mumford: "Authotitarian and Democrntic Tcchnics", 1'echnology and
Cnllnre G, 1 -H.19G4.

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tecnologías ce ntralizada s con la igualciCJd social, ln libertad y f: l socia l o económico en el cual está incluidu Est.a rnax u na, que l:n
plur alismo cul tural".:! dive1·sas va ri aciones es la premisa ce ntral de una teoría qtw pncdc
Bl afc'in de interpretar los artefactos técnicos util izando un llama r se la d eterminaci ón social d e la tecnología, es ele evidente
lenguaje político n o es en absoluto propi edad exclusiva d e los críticos sa bicluría. Sirve como ú ti l remed io para aquellas pe r so nas q u e in<lis-
de s istemas a gran escala y de alta t ecn ología. Varias gen er aciones de cri minadamente se centran en tem as ta les como "el orde nador y s us
pro pagan d istas insisten e n que lo más gra nde y m ejor qu e h icieron impactos sociales" pero no miran detrás d e los aparatos t écn icos p a ra
disponibles la ciencia y la industria fue ro n las m ejores garantías de ver las circun s tancia s sociales de s u desarrolio, despliegue y
democracia , libertad y jus ticia social . E l s is tema de fáhricas, el utilización. F.ste punto d e vista ¡>roporciona un antíd oto pa ra el
auto móvil, el teléfono, la r adi o, la television, los p rogramas espa ciales ingen uo determini sm o teenoló¡:.,rico: la idea d e que la t ecnología se
y por supu es to el poder nuclear h an sido descri tos e n un momento u d csanolla co m o ú n ico res ul tado de una dinámi ca intern a y después,
otro como fuer zas d emoc ratizantes y li ber ad ora s Según D a vid s in ninguna otra i nfluencia, m oldea a la socied ad par a que ésta se
Lillienthal en T.V.A.: Democracy on th e Morch, por ejemp lo, h alló aj u s te a s us p ntro nes. No han i d o m uy lej os aqu é llos que no r econocie-
esta prom esa en los fe rtilizadores de fosfato y en la e lectri cidnd qu e el r o n la s diversas formas en (} ti C las tecn ología s esL:1n mold eadas por las
pr ogreso t écnico ll evaba a los campesin os norteamerica nos en la fuerzas sociales y económicas.
década d e 1940.:1 1.'res d écad as má s !.arde D an iel Boorstin en The Sin embargo, el r emed io ta mbién tie ne sus defectos; tomado
Republic o{Technology exaltó la televisión por su "poder de di solver literal mente, sug iere que las tosas té:cn icas n o tje nen ni nguna
ej ércitos, destituir p residentes, cr ear un mu nd o dPmocrático comple- impor tancia. U n n vez que se ha h e eh o el trabajo d e del eclivl~ neces ario
tamen te nuevo, democrático de un a man era n unca antes im agi nada, para r evelar s u s orígenes sociules - los duei1os de l poder dt:Lds el e
incl u so en E s tado G U niclos". 4 Ape n ns se introduce una nu eva una instancia pa r ticula r de cambio tecnológico- se· h nbn\ ex plicado
invenció n, alg-ui<!l1 s e ocupa de procL1marla la sal vación de una lodo aquéllo ele impo rta ncia. E sta conclusión d a t ran quilidad a los
sociedad l ibre. científicos socia les. Confiere val idez a lo que siem p re habín n sos pe-
No es ex traiio que los s istemas técn icos de diver s a s clases estén ch;H]o: que en prim er tér mino no ex is te nada caracte rí~tico aterta d el
inte nsamente involucrado s en las condiciones d e la polít ica modern a. es tudio de la tec nología. P o r lo tnnto, p twd en r dornar a los mod e los
Los planes físico s de producci ón indu strial, la gue rra, las comunica- t o rn unes de poder social - los de pülítica de los grupos de inlr.rfis.
ciones, etcéter a ha n mod ificado en for ma fundamental el ejercicio d el política burocn1Lica, modelos m a rx ista:; d e lucha de cl a~;cs, etcétera......:.
poder y la experi encia de la ciudadanía. S in embargo, ir m üs allá ele y tendrán todo lo que necesitan. La d etermin ac ión soci,tl d e 1:.!
este h echo obvio y discuti r que ciertas tecnolog ías en sí m ism as poseen t ecnol ogía n o es , d escle es te punto de vis ta, en eseHc-ia clifere11te d e la
p r opiedades políticas pa rece, a primera vista, completam ente equi vo- d etermin a ción social de, por Pj emp lo, la política de biellesla r soc-;a] o
cado. Todos sabemos qu e la s perso nas tien e n política , no las cosas. e l sistema tributario.
Hallar ya sea virt udes o defectos e n el acer o, el plásti co, los trnn- Sin emba rg o, exis t en bue n n~ razo nes para creer que ln t ec- no-
sis tores, los cir cuitos in tegrados , las s ustancias quím icas , e tcétera logía es im porta n te e n senti d o políti c-o por propio de recho, b uenas
carece de sentido, es u na mane ra de mistificar la habilidad h umana ra zones por las cuales los model os co mt~n es d e ciencia social sólo
y evitar las verdaderas fuen tes, la s fuentes human as de libertad y expl iccm en parte lo müs intcr e s:-mtc y problemático con respecto al
opresión, jus ticia e injusticia. Culpar a los in st rumentos es i nduso Lema. Gran parle d e l pen sBmien t.o moderno político y social c-ontiene
m:ís ton to que culpnr a las víctima s cuando se trata de juzgar las pe nsam ientos r ecurrentes de lo qu ~ puede llamarse un a teoría d e
condiciones de la vida p ública. política tecnológ ica, nn exlr año híb rid o d e n ociones a menudo cr uza-
En consecuencia, he aquí un seri o con sej o a a quéll os que sueñan d as co n filosofías ortodoxns liberales, conser va doras y socia lis ta s. 5 La
co n la noción de qne los artefactos t écnicos p oseen cu alidades teoría de la política tecnológica hac·e hinca pié en el ímpetu de los
políticas: lo que importa no es la tecnología misma, sin o el sist ema sis temas sociotécniros a gr an esca la, en la re spues ta ele las sociedmles
2 Denis llnycs: Hnys ofllupe: The 'l'ransilion lo a l'ost1'elroleum World, Nueva modernas a det er m in ados imperativos t ecnológicos y en la manera en
York, W. W. Norton, 1!)77, 71, 159. [Hay ver sión castellana: Rayos de espemnza; que los objetivos humanos son podcrosame11 te l.ran sfornwdos a
trrmsicion a un mundo sin petroleo, Buenoo; Atres, Tres 'f'tcmpo;;, 1 ~)11'/. }
3 David Lillient!tal: '1'. V. A.: Democraey on /he March, Nu eva York, IIa r pcr a nd
5
La ngdon Wi nuer:Aulonomous 'l'ec/wo/ogy:'l'ecJ, nics-Ou t-o(Con/rol asa Theme
Drolhcrs, 1944, 72-ll:i.
4 Daniel J . J3oordtin: 'l'he J?epublic o[Tcclmology, Nueva York, H arpc r nncl Row, inl'oli lical1'/w ug ht, Ca ll)hridge, MlT l •,-css, l 977 .[Hay versión castc llfl na: 1'ecnolvgfa
cmlón.onw , Ba rcelona , Gili, 1!)7!>.]
1978, 7.

36 37
r
medida que se a daptan a Jos medios técnicos. Esta perspectiva Disposiciones técnicas y orden social
proporci ona un nuevo marco de interpretación y explicación para
a lgunos de los patrones más in comprensibles que se han formado en Cualquiera que h aya v:iajado por las carreteras de Estados
y alrededor del crecimiento de la cultura mate ria l moderna. Su punto Unidos y se h aya acostumbrado a ln altura normal de los pasos
de partida es la decis ión de tomar seriamen te Jos artefactos técnicos. superi ores es posible que encuentre algo un poco raro con respecto a
En lugar de insistir en que reduzcamos todo en forma in med iata a la los puentes sobre los paseos de Long Jsland, Nueva York. Muchos de
interacción de las fuerzas socia les, la teoría de la política tecnológica los pasos superiores son extraordinariam ente bajos , tienen apenas
sugiere que prestemos a tención a las ~:aracteristicas de los objetos tres metros de espacio entre el puente y la call e. Incluso aquéllos que
téwicos y a l signifi cado de esas características. Un necesario comple- hayan reparado por casualidad en esta peculiarida d estructural no
mento de, en lugar de un ree mplazo para, las teorias ele la estar ían inclinados a darle ningún significado especia l. Según
determinación social de la tecnología, este punto de vista identifica a nuestr a manera de observar cosas tales como camin os y puentes,
ciertas tecnologías como fenómenos políticos por propio derecho. Nos consideramos los deta lles de forma inocuos y rara vez nos detenemos
devuelve, por citar el precepto filosófico de Edmund Husserl , a las a pensar en ellos.
cosas mismas. Sin embargo, r esulta ser que nlrededor de doscientos pasos
A continunción de linearé e ilustran) dos ma neras en las cua les superiores bajos en Long Is land está n allí por una razón. Fueron
los artefactos pueden con te ner propiedades políticas. En primer lugar di señados y construidos a propósito de esa manera por alguien que
se encuen tran las instancias en las cuales la in vención, el diseño o el quería lograr un efecto socia l en particular. Robert Moses, maestro
a rTPglo de un di spositivo o sisl<'rna técnico específico se con vierte en con structor de caminos, parques, puentes y demás obras públicas
unn1mmera de re.s olver un tema en los asuntos de una comunidad en desde 1920 hast a 1970 en Nueva York, construyó estos pasos
particula r. Vistos bajo la luz adecuada, los ejemplos de esta cla se son superiores según especificacion es que desalen tarían la presencia de
basta nte directos y fáciles de entender. En segundo lugar se autobuses en los paseos. De acuerdo con la evidencia proporcionada
encuentran los casos que pueden denomü1arse de "tecnologías inh e- por el biógrafo de Moses, Robert A. Caro, las razones reflejan la
rentemente políLicas", sistemas h echos por el h ombre que parecen inclinación clasista y el prejuicio racial de Moses. Los bla ncos
requerir o ser fue rtemente compatibles con los tipos pnrticulares de poseedor es de automóviles pertenecientes a las clases "a Ita" y "media
relaciones polílica s.l. .as discusiones por casos de es la clase son mucho acomodada", como él las ll amaba, serian libres de utilizar los paseos
müs prol.Jlemúticas y cercanas al núcleo del asunto. Con el término para la recreación y el tránsito. En cambio, la gente pobre y los n egros,
"política" quiero decir di sposiciones de poder y autoridad en asociac io- quienes por lo general están obligados al transporte público, eran
nes humanas así también como actividades que tienen lugar dentro de alejados de esas calles debido a que los autobuses de cuatro metros de
esns disposiciones. Para lo que aq uí me ocupa, el término "tecno- alto no podían atravesar los pasos. Una de las consecuencia fue limitar
logía"abarca todo artificio práctico moderno; sin embargo, pa ra evitar el acceso de las minorías racia les y de los grupos de escasos r ecursos
confusiones, p refiero h ablnr de "tecnologías" en plural, piezas o sis- a Jones Beach , el parque público de Moses, muy aclam ado. Moses se
te mas nH1s grnndes o más pequeños ele hardware de una clase asegur ó doblemente de este resultado a l vetar una propues ta de
especHica. 6 No es mi in tención r esolver ninguno de los temas de una extensión del ferrocarril de Long Island hasta Jones I3each .
vez y para siem pre, sino indicar sus dimensiones y significados La vida de RobertMoses constituye una fascin ante historia en la
generales. hi st oria política reci ente de los Estados Unidos. Sus tran sacciones con
alcaldes, gobernadores y presidente s~ su cuidadosa manipulación de
legisla turas, bancos, s indicatos obreros, la prensa y la opinión pública
podrían ser estudiauos por los científicos políticos duran te ai'íos. Mas
los resultados más importantes y duraderos de su labor se encuentran
en sus tecnologías, Jos vastos proyectos de ingeniería que confieren a
6 .El oiJ.(niíicado ele "tecnologfa" qu e 4:'mpieo en este ensayo no aba rca ni nguna de
Nueva York la mayor parle de su forma actual. Por generaciones
l<ts deri nkiones m M1 amplias de ese concepto que se hallan en la lite ratura
después de la muerte de Moses y de que las alianzas que f(njó se hayan
contem¡xmí nen, po¡-ejemplo. lnnoción de "técnica" en los csctitos deJacqu es E l! u l. Mis disgregado, sus obras públicas, en especial las carreteras y los puentes
objetivos nqu (son m ás limitados. Para una discusión de las dilicu lt ades <¡U e surgell e rt que construyó para favorecer la utilización del automóvil y desalentar
los intentos por delinir "tec nologla", véase Autonomous 2'cciiiLOlogy, 8-12. el desarrollo del tránsito masivo, seguirán moldeando esa ciudad.

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Muchas de sus cstrucluras monumentales ele hormigón y acP.ro Chicago. 8 Las nuevas mri quinas , ma n ejarla s por obreros no
represen ta n una desigualdad social s istemntica, una manera de ca lificados , en efecto pr odujeron fundi ciones in f'e r iores a un cu;;L(> m ás
manej ar las relaciones entre las per son as que, después de un tiempo, a lto que con el [)roce so anteri or. De hecho, des pué s de Lr~s años de u so
se convierten en una parle m ás del panorama . Como dijo el proyecti sta las máquinas fueron aban donadas, pf~ rn para esa époc<t yR hahh1n
neoyorquino Lec I<opplcman a Caro con respecto a los puentes bajos nnnpliclo con su com etido: destruir el si 11dicnto. 1\s í, la narración de
de Wantagh Parkway: "El viejo sinvergüenza se aseguró de que los estos desarrollos técni cos e n la fábrica McCo rmic:k n o puedf~ n se r
autobuses nunca pudi era n utilizar s us malditos paseos".7 interpretados en forma adecuada fUt~ ra de la cr ónica de los intentos de
Las his torias ele la arqui tect ura , la pl anificación munic ipal y las los tn'lbajad ores de orga nizarse, la r epresión po licia l del movim ie nto
obras públicas contienen nmchos ejemplos de disposiciones físicas con obrero en Chicago dw·ante e se periodo y los t:veutos que rodearon el
propósitos políticos explícitos o impl ícitos. Pued2n sei'íala rse lns an - bombardeo e n Haym arket ~ quare. La histor ia t ecnológica y la
chas vías püblicas parisinas del ba rón Haussmann, di sefiadas bajo la h istoria política de los Esta dos Un idos es taba n en ese momento
dirección de Lui s Napoleón para prevenir cualqui er pelea call ejera de profunrlnme1rt.e r elaeio nnrlas.
las que se producían clu r.· ante la revolución rle 1848. O se pueden En los ejemplos de lo s puen te:; bajos !le Mosr!s y l<ts máquinns
visi tar cualquier cantidad de grotescas construcciones de ho rm igón y moklearloras de McConnick, se obs r:rva la irnportnn cia de la s d i~;po ­
enormes plazas constru idas en las ciudades universitarias de los s iciones t ecnológicas que preceden a l uso de los ele rnen tos en cneslión .
E stados Un idos hacia fin es de la década de 1960 y principios de la dr. ~~ s evidente qne la s tecnologíaspuechon sPr tJtiliznclas de mane ra qne
1970 para r epr irn ir· lns demostracion es estudiantiles . Los estudios de In crementen el poder, la autoridad y P! pr ivilegio de unos sobre otros;
las Tmiquinas y los in s trume ntos industriales t a mbién resultan ser por r:jemplo, el u so de la televi sión pa rn vender u n candidato. Seg11r r
inter esa ntes historias políticas, incluso algunas que viola n nu estra s nu estra acostumbrada form a de pensar las tecnologías son h erra-
expectativas n ormal es nce rca de por qué en primer términ o se r ea- mientas neutrales que puedPn ser usadas hien o mal, para binn, p:wa
lizan las in novaciones t ecnológ icas. Si supon emos que las nuevas mal o para nlgo en el m e dio de los dos. Mn s por lo ge nernl no nos
tf"!cnologíns se intr oducen para logra r u na mayor eficiencia, la hi storia detenemos a p en sar si un artefac to !lado podría haber sido diseñado
de la tecnolof_,>ia demuestra que a veces saldremos desilusionados. El y construido de manera tal que proclnjern u na serie de con secuencias
cambio tecnológico expresa una gnm cantidad de motivos humanos, lógiw y temporalmente previo!; a cuo!qu.iera de sus supuestos usos.
muchos de los cuales es el deseo de algunos de ejercer dominio sobre Despues de todo, los puen tes de Hobert Moses se ntilizaban par:1.
otros a unque se requ iere un sacrificio ocasional de ah or ro de costos y tran s portar au tomóviles clescle un pu nto hasta otro; las máquinas de
alguna violación del patr ón común de tratar de obtener más con McCormick, pura producir fundiciones fle mdal; s in em bar go, ambas
m enos. tecnol ogías, encerraban propósitos que iba n mucho más a ll;i de su uso
Un ejemplo r epresentativo lo constituye la lüstoria de la meca- inmediato. S i nuestro lenguaje moral y político para evaluar 1a
nizació n industrial del s iglo diecinueve. En la fcibr ica de segador as de tecnología in cluye sol<lmente catego rías r cl ar~i o nnda s con lw rrnm ien-
Cyrus McCormick en Chicngo a mediados de 1880, fu er on agregadas ta s Y.uso s~ ~i. no incluye ci erta aten ción a l signifícado de los rli se T'íos y
a la funtlición de m áquin as moldeador as neum ríticas, una innovación la s chsposJctoncs de nues tro s artt)fados, en ese caso estaremos ciegos
de efici encia n o comproba da, a un costo estimado de 500.000 dól ares. a mu chas cosas qu e son in telectual y pr:\clicamente crnciah:s.
La interpretación económica común nos llevaría n pensar que se tomó Debido a que este punto se enti8nde con m ayor facilidad a la luz
esta medida para moderniza r la pla nta y para lograr la clase de de intencion es particulares represe nLachs en fm·;n a fís ica, hasta aho-
eficiencia que proporciona la mecanización. Sin embargo, el hi sto- ra h e ofrecido ilustra ciones quepa rt:cen casi dig nas de un conspirad or.
riador Robert Ozanne ha colocado este desa r rollo e n un contexto mas Pero r econocer la s dimens iones políticns en la tec nología no requiere
amplio. En esa época, Cyrus McCorrnick I1 e staba t raba(lo en lucha que busquémos cons piraciones conscientes 0 intenciones maliciosa s.
con el National Union of Iron Molders (el sindicato metalúrgico). Du ra nte la flécada de 1970, el movimi ento orga nizado d e rliscapacita-
Consideró la adición de las nuevas mtiquinas como u na manera de do s en los Estados Unidos señaló las i nnnrnera b ! t~s maner;1s en las o u e
"desmalezar los malos e lementos en tre sus h ombres'', o sea, los las máquina s, los instrumentos y bs estrucLnrn s de u so corniín _;m -
obre ros calificados que hnoían organizado el sindicato 1ow1 ell t0bui>e:>, t:dificiu:,, at.:era:s, tl i::;pusilivos de plomena, et.cetcra- 1mpo-

8
Hobe11. A. Cnm: Tite J>mver R roher: Roberl Mo~es m a l lhe Fall of New York,
7
Robert Oznmoc: A Cen/ury of l ,abor-}v!wwgemenl Relatiofl s rd 1\·l d'únrticl, uw l
Nueva York , Rnndom H ouse, 1974, :·ll 8, 481, 514 , 51G, 951 -958, u5:¿_ Inlernnl i nrw l Harv~sler, Madi son, Univer~ity of Wiscon~in l'• <;Sti, J !J(i7, 20.

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sibi litaban a muchos discapacitados a moverse con libe rtad, condición h echo, la máquina e n el huer to en este caso ha sido ocasión para la
que sistemáticamente los excluía de la vida pública. Se puede decir recons trucción minuciosa d e las relaciones sociales i nvolucradas en la
que los diseños inadecuados para los discapacitados son producto más producción de tomate en la California rural.
de una negligencia de larga dala que de la intención acliva de alguien. Debido a su medida y costo de m ás de 50.000 dó lares cada una,
No obstante, una vez que el problema fue hecho público, se hizo las máquinas sólo son compatibles con una forma de cu ltivo de
evidente que la injusticia requería un r emedio. Toda una gama de tomates altamente concentrada. Con la introducción de este nuevo
artefactos han sido rediseííados y reconstr uidos para adaptarlos a método para cosechar, el número de cultivadores de tomates declinó
esta minoría. de alrededor de 4.000 a principios de la década de 1960 a cerca de 600
De h echo , muchos de los ejemplos mris importantes de tecnolo- en 1973; con todo, hubo un aumento s ustancial en las tonela das de
gías que tienen consecuencias políticas trascienden por completo las lo!n~tes p roducidos . Para fin es de la década de 1970 se calcula que se
si rnp les ealegorías de "i nlen cionados" o "no inleneionPdos". E stos son ehmmaron 32.000 empleos en la industria del tomate como conse-
ejemplos en los cuales el solo proceso de desarrollo técnico está ta n cuencia directa de la mecanización. 11 De este modo se ha producido un
if ,cl inado en u na dirección en varticular que por lo general produce a lza abrupta en la productividad para beneficio de grandes cultiva-
res ultados que algunos intereses s vciales proclaman admira bles dores a costa del sacrificio de otras comunidades agrícolas rurales.
adelantos y otros con sideran fracasos aplastantes. En estos casos no La investigación y el desarrollo de la universidad ele Californi a
es ni correcto ni perspicaz decir: "Alguien tuvo la intención de hacer de máquinas agrícolas como la cosechadora de tomates finalmente se
dañ o a otra persona". Más bien debemos decir que la plataforma convirtió en tema para un pleito entablado por a bogados de Ayuda
tecnológica ha sido preparada de antemano para favorece r ciertos Legal.Huml de Calif~rnia, organización que representa a un grupo de
intereses sociales y que al&runas pers onas inevitablem ente recibirán trabnpdores de granJa y a otras partes interesadas. La demanda est a- ' '
m::ls que otras. blecía que los fun cionarios universiturios estaban gastando d inero
La cosechadora mecánica de tomates, un artefa cto nota ble tributm·io en proyectos que be neficiaban a un puiiado de inter eses pri-
perfeccionado por los investignrlores en la universidad de Californi a vados en perjuicio de los trabajado res de grnnja, pequel'íos agri-
desde fines de la década de 1940 hastn el presente, proporciona un ~ultores, ~?n~un:i~lores. y a la California rural en general, y pedía
ejemplo ilustrativo. La máq ui na es cup?z. de cosechnr tomates en una mtervencwn JUdiCial para detener la situ ación . La universidad negó
hilera en una sola pas ndn, cortando las plantRs, sacudiéndolas h::ts la estos cargos, sei'íala ndo que aceptarlos "requería la eliminación de
que se des prenda el fruto y (en los modelos m <1s recientes) coloca ndo toda investigación con potencial de aplicación práclica"_I 2
los tomates electrónicamente en grandes góndolas de plástico que Por lo que yo sé, nadie sostuvo que el desarrollo de la cosechadora
tienen capacidad para veinticinco toneladas de producto en camino a de tomates era el resultado de una conspiración . Dos estudiant es de
la s f;~l.Jrica s de e nlatado. Para adaptarlos a los movimi entos bruscos l ~ controversia, William Friedland y Amy Barton , exoneran espe-
de estas cosechadoras en el campo, los investigadores agrícolas han Clficamenle a los creadores de la m áqui na y d el tomate duro de la r es-
producido nue vas variedades de tomates más duros , más fu ertes y ponsabi lidad de facilitar la concent ración económica de esa i ndus-
menos gustosos que los anteriores. Los ag ricultores reemplazan el tria.13 En cambio, lo que observamos aquí es un proceso social
sist ema de cosecl :a a mano, en el cual cuadrillas de trabajadores progresivo en el cual el conocimiento, la invenc.i ón t ecnológica y el
pasaba n por los campos tres o cuatr o veces, coloca ndo los tomates beneficio corporativo se fortal ecen el uno al otro formando patrones
maduros en cajones y dejando los frutos verdes para una cosecha profundamente arraigados, patrones que llevan el incon fundible sello
posterior. 9 Los estudios de California indican que el uso de la máquina del poder político y económico. Durante muchas décadas la inves-
reduce los costos en nproximadamente cinco a siete dólares pof tigación y el desarrollo agrícola en las facultades y universidades
tonelmla en co mpara ción con la cosecha a m a no. 10 S in embargo, los cedidas por el gobierno en los Estados Unidos h a tendido a favorecer
benefi cios no está n d ivididos igualmellte en la econ omía ngrícola. De
~ WilliAm II. Friccllnnd y Amy Bn1ton: "To ma lo Tcchnology", Society 13: 6,
1
9 Ln hi storin d P- ln cosechndorn <le tomnlcs "sl :i co ntnd n en Wnvnc D. Rnsm u ~sen: septJembre/oclubre HJ'lG. Véa se t n.mbién Wi ll.inm H. Friedland: Social Slt•tipwalher:;:
"Advn nccs in Am'·"·i<:an Agriculture: The Medmnicn l Tomato ll~ rvestcr ns a Cast> S~ientiji~ and 'l'ecluw logicol Researclt in California Agriculture, Univers ity of Caliliu·-
Sludy"', 'l'hcchnology mul C11lture 9, 5:ll -fi43, J!J(i8. nra, Dav1s, D(•pnrLm ent uf Applied Bchavioral Scienccs, Hescan.:h Monogr nph No.l 3
10 Amlrcw Sdunitz y David Seckler: "Mcchan.ized Agri<.:u llurc nnd r.;o,·ial Welfn re: 1974. '
12
Thc Coge of tire 'l'omn.lo 1-Inr vester·", American Jou rnnl of"Agriwllural Economic.< 52, Uniuersity o[Cali{omia Clip S heet 54: 3G rnnyo 1, 1979.
1
r.rm-!"í77 , 1 ~J70 . ~ "Toroato Technolo<.(y"

..
~- 2 1~-·
los intereses d e g rand es empr esas de negocios a¡~r ícolas . t ·t E s debido opciones socia les de profunda importancia. E l his toriador D:.vid
~estos !x 1Lrones sutilmente arraigados que los opos itores d e tales Nohle estud ió do s clases de s istemas lle h errumi e n le1s eléctric<lS
mnovac10nes co rno la cosechad ora d e tomate:; son con s iderados é\Ulomatizadn s que poseen difer en tes res ultados en cumllo al po<ler
"~ ntitecnología" o "antiprog·r eso". Para el cosl)chero n o se trata re la tivo de control y L•·abajo e r1 ]¡ls indu s tl'ills que podría n Becar ¡1
sunplemente del símbolo d e u n orden s ocial que h enefl ri:-¡ a unos n la utiliza rlos. Demos tró qu e a pesar d e que los com ponentes büsicos
vez que castiga a otros; es verda deram en te la perso nifi ca ción de d icho electr óni cos y mecánicos d e los s iste mas d e gmbado/r<;¡;rodurción y de
orden. conf.rol numéri co son s imibres, lct e·lección d e m1 di sc i'ío y no de ot ro
Dentro d e una ca lego ría dad a de cambio tecnol ó<Yico ex isten en tie ne co nsecuencias cruci ales para lns di sp ula~ soc i ~tles en los
t~rm!tws_ gc nernl cs, do s cl<tses de opciones que: pu~,den ~recta;· la comercios . Considerar el tema solamente en cua11lo a red ucción de
clt stn[J~ClÓn re lativa del poder, la autor idad y e l privi leg io en una costos, efici en cia o la modern ización ele los equipos implica perder u n
~o~un:,d~d. A men udo la decisión crucial se r ed uce a la s imple opción elemento decisivo en la his Lnria. 15
Sl o no :¿,desa rrollamos y adoptamos el artef'aclo o no? E n los ú ]timos De ta les ejemplos me gustaría ofr ecer algunns conclusiones
ai'ios muchas d isputas locales, nacionales e internacionales acerca de general es. Estas t:orrespond en a ln in terpretación de lns tecnologías
la tecnología se_h_a n centrado en juicios "sí o no" con r especto a temas como "formns ele vi d a", p r esentadas en el cnpílu lo nnle rior , comple-
tales como ad1bvos para al im entos, pesti cidas, con strucción de tando las dim e nsiones expl icita menle políticas de tal punlo de vista.
carreteras, r l?actores nucleares, proyectos de r epresas y propues ta s d e Los objetos que clenomin a n10s "tecnologíns" consLitnye tt Hlnne-
ar111as de all;\ tecnología. La opción fundam en tal acer cu dP. un m is il rus d e con s truir orden en nues l r o mundo. Muchos nrl ef¡¡ clos y sis t.e-
an ~ib,tlíslico o ele un Lnm sporte s uper sónico es s i el elem ento va a mns técllif'os CJUe so n impor t.anLcs en In vida colidinnu co ~lif~n en
um rse a la socied ad com o parle de su equipo opc•rador. La s r azones posihi l ida<les para ordenar la aclividnd hu mana de manerns mny
dnclns a favor o en contr a con frecu encia so n la n importantes como la s di vc•r:,a s. En forma co n scien te<' inl'onscien le, del ihernd11 o involu nta-
que se refiere n a la adopc ión en una importnnte ley nu eva. riam e nte, la:;; sociedades e lige n estr nclurus tecno ltiginls que influyen
Un segundo conju nto d e opciones, ig ua !mente cr íticas en muchos en la forma ele lntbajar d e la ge nte, en su forn 1a dt~ co tnuJ•Ícar s e, de
aspectos, ti ene re lación con los rasgos específicos en el disef'ío o vinjar, ele con su m ir, etcétera , durante mn cho ti empo. En los procesos
disposición d e un sis tema téc ni co des pués d e tomada la decisión de d e Lomar d ct:is iones e5lruclura les clis li11ta s pe•·sotws oc- upan dis tintas
proc~der. Ir:c~u so. des pués de qu e una e mpresa d e se r vicio p Líblico pos iciones y poseen g rados desiguales ele pod er y ni ve les d esigu ales de
ga_n o _una lt Clbtcl_ón para con struir una gra n cenlral d e enct·g ía conc ien cia. S in lugar a dudas , la ampli tu<l d e <!l e<"ción es nwyor ~.:nnrHlo
elecln cn, qued an 1mpor l:a nles controver s ias por r estllver co n r espec:Lo un in strum enlo, si.stema o técn ica se inLrüd u <:e po r prj n1era vu..
a l t razndo de su recorrido y el di sei'ío d e su s tones; in clu s o d espu0s d e Dehi do a<¡ u e las e lect:ion es tiendc11 a fij arse ti rn 1e n1e11t.c l:ll los equipos
que u n a org a1_1iz.a ción h a d r;cid ido in sta In r un s is l e mn de onknaJores , mater ia les , las in vers iones econcirnicns y los ],ábitos socialt!S, la
pu eden s urgtr co nLrovcrsws con r es pecl.o nl tipo de co mpon entes, fl exibilidad orig in ;) ] des aparece para todo::; los p rop6~iLos p n k ti cos
p_rogramns, modos de acceso y otros r asgos específkos que in c-luirá el 1.1•1<1 vez CJUf! hn ce n los com¡wo mi ~;os ini cial<!S. En esr! sentido la s
s tstcma. Una vez que In cosech a clora m<'c<)nica clc: tonwles fue inn ova cio11es tecnológicns son si mil a r es a ]o,, d ecretos legi s lativos o
desarroll ad a en su forma básica, una nlteraei ón del di sei1o de ln s f\ tndncio nes políLi cm; C¡LW esta blecen un patr ón p:mt e l orden
importancia soeial críti ca -el agregado de clas ificad or es elPclrón icos público que perdnra n't por muel1a S t~ent:rar i ones. Po1· t:sln razó n, h
por ej e_n~pl~- m o<~ificó el carác ter de los efec tos de la máqu ina s obrd mismn atención que p rc,ünnos ;\ la ~ n ' ghL,, los r oles y las r e laciones
el cqutl 1bno ele nqueza y p od er en la agri cnlturn de Ca liforn ia. en la política tambié n dc:be mos pre,ta .- a co~~l s tales como ln cons-
Alg;.•_nns d e b s ir;vestig a cion P.s más interesantes sobre tecnología y t..run.:ión d e carreteras, la creación eh, r eJE::s tt:l cvi s ivas y la confección
pohltca h oy en 1lw se cen tran en el intento d e d em ostrar de manera d e rasgos aparentemente insig llif'i ca nLc:.:s en nneva s m .-í qtiinas. Los
de la liada y co t1creta cómo los r asgos el <~ d i,.;eí1o ap a r~nleme n tc inocuos Le m as q ue divid en o u ne n a las per sonas e n la sncicd:t<l se r t·suc1ven
en l o~ s is_Lel~tns de tn'i ns ito masivo, los proyectos hidrá ulicos, la no sólo en las instit.ncion es y pr;idicas d e la puhl.ica propiamente
rnaqumana mdus trial y olras tecnolog ías en realidad enmascaran di cha, s ino L<unb ién , e n forma no tan 0h via, e l! <llTegl o$ l:m6h1Ps de
acero y h ormig0n , c¡,}Jl..;s y semiu.ndu.:;h,rc;, L;;(;rta:.; y ~o rnillos .

Un ,~ hi sl ori ay un anál isis cdlico de la invcsl ignción agrkola en las un ivcr><i-


11
'
1
dndcs ,'~? llc r r~s cedtdas por e l gobie rno se halla en J nmes High lowcr: llnrcl1'omal<>es, s D uvi d F. N oble: Force..; u{f'n ,dudiow A Snáalll islory pf' Mo<'hine TonlAulunw ·
Han{ ltm e.~. Cnr.. bnclge, Schenk mn n, l!J71l. ! ion., N ueva York, Alfi·.;d A J\nopf, l!Hl4 .
Tecnologías inl1erentemente políticas vari edad de tareas, desde h acer funcionar la m áquin a de vapor hasta
llevar los productos desde una habitación hasta la otra. Debido a que
Ninguno de los argumentos y ej emplos considerados hasta a hora estas tareas deben ser coordinadas y a que el tiempo de la labor está
se refiere a un reclamo más fu erte y problemático h echo a menudo en "fíjado por la autoridad del vapor", los trabajadores deben aprender a
escritos acerca de la tecnología y la sociedad: la creencia de que algu- aceptar una rígida disciplina. Según Engels, deben trabajar a hora-
nas tecnologías son por propia naturaleza politicas ele manera espe- rios regula res y estar de acuerdo en subordinar sus voluntades
cifíca. De a cuerdo con este punto de vista, la adopción de un sistema individuales a las personas a cargo de las operaciones fabriles. Si no
técnico dado, inevitablemente trae consigo condiciones para las rela- lo hacen, se arriesgan a la t errible posibilidad de que la producción se
cion es humanas que tienen un tinte político característico: por deleng a por completo, Engels no a nda con rodeos. "La maq uina
ejemplo, centrali zado o descentralizado, ig ualita rio o no igualitario, automática de una g ran fábrica", escribe, "es mucho más despótica de
r epr esivo o liberador. Esto es en defi nitiva lo que está en juego en lo que han sido nunca los p equeños capita listas que emplean obre-
aserciones come las de Lewis Mumford de que dos tradiciones de tec- ros" .l7
nología, una autoritaria, la otra dnmocráti ca, convive n en la his toria Se citan lecciones similares en el análi sis de Engels de las
occidental. E n todos los casos cilados m ás atrás las tecnologías son con di ciones n ecesarias de operación para los ferrocarriles y los barcos
relati vamente f1 exibles en diseño y arreglo y variables en cuanto a sus en el m ar. Ambos requieren la subor dinación de los trabajadores a una
efectos . Aunque podemos reconocer un r esultado en particular "a utoridad imperiosa" que se a segure de que las cosas resulten de
producido en un medio en particular, tambié n podemos imaginar con acuerdo con lo planeado. Engels advierte que lejos de ser una idiosin- ,, ·.
facilidad cómo podría haber sido construido o situado un artefacto o crasia de la organización social capitalista, las relaciones de autoridad ;L\ ·
s~stcma aproxi:nadamente similar con consecue ncias política s muy y subordinación surgen "en forma independiente de toda organización ;::!~
d_1ferentes. La Jdea que ahora debemos examin a r y eval ua r es que
c1 ert:1s clases de tecnología no permiten ta l flexibilidad y que elegirlas
signi fi ca elegir sin lugar a dudas una forma en particular de vida
social [y] se ~1o s imponen con las condiciones ma te ria les en las que
producimos y hacemos circular los productos". Nuevamente, se pro-
pone que esto sirva de severo consejo a los anarquistas quienes, según
r:':::, <:· _·,
~
¡ -,

política. Engcls , creyeron posible erradicar sirnplen1ente la subordinación y el ·"-· -~


Una manilestación extraordinariamente enérgica de una ve r- autoritarismo ele un solo golpe. Todos esos proyectos son una tonteria. ·.: ·· 1 -
sión de este argumento aparece en el corto ensayo de Friedrich Engels Las raíces del in evitable autoritarismo, sostiene, se hallan profun- ; :·, : ,_
"Sobre la autoridad", escrito en 1872. E n con test ación a los anar- d a mente implantadas en el compromiso humano con la ciencia y la
qui stas que creía n qu e la autoridad es un ma l que debe ser abolido por tecnología. "Si el hombre, con la ci encia y genio inventivo, som ete a las .;;:
completo, Enge ls hace un panegírico de la autoridad sosteniendo, fue rzas de la naturaleza, éstas se vengan de él sometiéndolo mientras
entre otras cosas, que la autorida d firme es una condición necesaria las emplea, a un verdadero despotismo independiente de toda
en la industria moderna. Para exponer su caso de la manera más organización social."18
enérf:,rica posible, pide a sus lectores que imaginen que ya se h a pro- Tienen una an tigua his toria los inten t os ele justificar la fuerte
ducido la revolución. "Supongamos que una re volm ión social h aya autorida d en base a condiciones supuestamente necesarias de
derrocado a los capitalistas, cuya autoridad dirige hoy la producción práctica técnica. Un tema fundamental en La República es el interés
...
"'
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y la circulac.ión de la riqueza. S upongamos, para adoptar enteramente de P latón por tomar prestado la autoridad de tékhne y utilizarla por
el punto de vista de los anliautoritarios , que la tierra y los inst rumen - analogía para apoyar su argumento a favor ele la autoridad del estado .
tos de trabajo se hubieran convertido en propiedad colectiva de los Entre las ilustraciones que elige, al igual que Engels, está la de un
obreros que los emplean. ¿Habría desaparecido la a utoridad o no barco e n alta mar. Dado que los graneles buques por su propia
habría hecho más que cambiar de fo rma?"16 naturaleza necesitan ser dirigidos con rnano firme, los marineros
Su respuesta se extrae de tres sist emas sociotécnicos de su deben someterse a las órdenes de su capitán; ninguna persona
época, los molinos de hilado ele algodón, los ferrocarriles y los barcos razo nable cree que los barcos pueden s er conducidos en forma
en el m a r. Observa que para convertirse en hilo terminado, el algodón democrática. Platón se explaya sugiriendo que gobernar un Estado es
se mueve por u n número de operaciones diferentes en d ilerentes un poco como ser el capitán de un barco o como ejercer la medici na
lugares de una fábrica. Los trabajadores .llevan a cabo una gran
17
IG . Fri.e dri~h E~1gels: "Sohre la autoridad", Obras Escogidas de ft{arxy Engels, Tomo Ibüi, 858.
18
V, E!.hlonnl C1encms del Hombre, Buenos Aires, 197:~. plíg . 357. Ibül, a5s, 35!J.

4() •' !J7


co rn o médi c~ .. Co n~i~i ones muy similares que r equie re n gobierno acepta mos a un <l elite técnico-cienlífica-indu :;t ri al -m ililnr. S i esta s
cen tral Y acclOn d cC 1S1va e n l a acliviclad t écnica or gnnizad a t a m bié n p e r sona s no estuvie r an a cargo, no ex istiría cl poclcr nud ear" . ~() Shgtí n
crean esta n ecesl(]ad en e l gob iern o. est e concepto al g una s clases d e tecnología requier en los m ed ios
. . E n ?'. arg um ento c_le gngcl s, y en los argu mentos pmecidos, la soci;t1es que hls rodr.nn para es ta r es lructu,-udt~s de una m:1nen1
Jusb0cncwn el e_la ~uto n da d ya no se realiza con lactisicn analogía d e p a rlicu l n r , del m is mo rno(lo e n q utl un aulomóv ilJ H.:Cesit:l nrNtls pnra
P~a~on, smo mas b1e n con refer encia a la t ecnol ogía mis ma. Si el cnso poder mov er se. Los 11 r i.efactos no podrían existir como enLiclücles
bas1~0 es tan apr emiante con1o lo cr eía Engels , s e esp e r aría qu e a operadora s e!"eclivns a n~enos qoe <:oincidieran ciertas condiciones
med1da que una soci ed ad aceptara s istemas técni cos cada vez m;i s sociales y mater i;lles . El signi{icado de " requ e rido" aquí es de rH·cesi-
co m pl_icados como base mater ial , aum entaría n con si derablemente las d ad p r ádic<1 (m ;)s que l ógien). De ahí que Pl:1tón conside rarn una
probabili cl~cles de forma :; d e vida autoritari as. E l control ejercido p or n ecesidad pniclica qu e u n barco tuviera un cupitú n y una tripulación
personas 111tc:l1gentes en la cima de una rígida jerarqu ía social obed iente s in lu gar a dudas.
purccería ex trema dnm en te prudente. En es l e ¡nmf o su opini ón f~n Una segun da versión, algo más débi l, del argu mento sostiene
'·Sobre la autoricl nd" parece t:star c~ 11 desncuenlo con la pos ición d e que u na dclerminftda clase de t ec nologí:t n o r equi ere e n forma <::;Lric-
Knrl Ma rx en el vo lumen 1d e 8L Cupital. Mn r x trnta de dc~mostrnr qtte ta , pero es muy compatibl e co n un u índ rJie en pntticulnr de r e lacione:;
la ~reci ente Tlle~ani zación hani obsol e ta la d ivisión j e r ürquica de l t r a- soc iales y políticas. Muchos pnrtidnrios tle 1ü ener gía solar dicen que
baJO Y las r elncwnes d e su bordi nación que, segútl él , e ra n n ecesarias las tecnología s de esa V<Hiedad son más compntiulcs con una socieclnd
durante las primeras etnpns d e~ l a fabricaci ón moderna. "Ln Indu s tria d emocrüticn e igualitaria que los s is Ler nas ene rgétic-os b:t s:~clos en el
Modern a", escribe, "arrasa por medios t écnicos con In divi sión ma- ca rbó11 , el pt:lróleo y e l poder nuclea r; a la ve:t. n o soslie11en que LoJo
nufaclurnd or a de l trabajo, bajo la cunltodo h ombre est:i ::~Lnclo d e pies lo que se r efi e r en la energín solar req ui ere d emocracia. En resu men,
Y manos a una so!a op e r ac ión det nll nda. i\ 1 mi smo ti empo, la forma lo que e"llos a firma n es q ue la cne rgín solar és de scc n Lr a liza nle en
cnp1ta h sta de esa m d u stria r epr oduce es t n mism n di visió n d el trabajo sentido técn ico y políti co: en senti do t écni co, es much o m;\s r.azo nable
e~ una forma f.o~i avía más m on s tru os a : e n la f<.ibrica propium e nte con struir s istemas solares en unn manera disgreeada y vuslnm entc
d1 ch~, a l co n ver llr ;-~ ] obrero e n apénd ice viv iente de la m ;-ic¡uinn", 19 distribuidas que e n plantas centra lizadas a [,'ran esc-ula; e n sentido
Sc~g~1n el p~~ ~~ t?_rle v1 s ~n d_e Mnrx lns con diciones que a In la rga cl isol- político, la e nergía solar se adap t a a los intentos d e los in diviLluosy d e
ve ran la d1v1S10n cap1tah s ta d el trahnjo y faci lit a r án la n:volución L1s co munidad es locales de m ancjn r sus asuntos en form a efectiva
prolel.nria está n la t e ntes en In t ecn ología industr ial. Lns dife rencias debido a qu e eslJ n t ratand o eon sis t e m as que son más acces ib les,
e n tre la posic!ón de M arx en EL Capital y la ele Engels e n su e n s ayo comprensibles y con Lrolables que lns p oder osas f u e n tes cen Lral izndas.
plantean un a lmpOl·Lnnle cu estión para el socia l is mo: despu és de t odo Desde est e p un to de vi:,la la en ergía solar es d esenblc n o sólo por sus
¿c¡ ué es lo qu e In tecnología m ode rn a h ace p osibl e o n ece sa rio e n ln vi eL; b eneficios económ icos y amb ie n tal es, sino taml>ién po r l as insti t ucio··
política·~ L~ le ns:ón_t eórica que aqu í vemos re fl eja muchos problemas nes útil es c}ue es probable que pe r m ita en otras áreas d e la vida
en la pracllcn de l a h berta d y la autoridad que e n turbimonlos cami n os púb]ÍU'l.~ 1
d e la r evolución socü-ll ista. EnLn: estns dos versio n es del argnmenlo q u eda otra clistinción
En un a g ra n v¡:¡r ieda d de contextos se han de s a rrollado a lgunos por hacer en tre l as condiciones que son inte r n<ts a 1 f1mcionamiento de
arf,'l.lmentos acerca de que las t ec nol ogías son en a lgún sentido inh e-
r entemente políticas, es tos conceptos son demas iados para r esumir- 20 J erry Mander: Fnur Argumen!s {r>r tlte 1!/irninalinnof Tdelli.~ioll, N tJ eva Yorl<,
los aqu í. S in embargo, la l ectura lle dichas n ocion es revela que exi ste n \Villinm Monnw, lU7/l, 44 . 1.1 !u y ver,;i6n enslcliunn: C!!.tlro b111:urz:; ruzorws pMlL
do s maneras básicas de establecer e l caso. U n n de las ver sion es sos- elimitw r la teleui;:;ión, M éxito, Gedi sa, 1 !Jfltl . .l
tiene que l a adopc ión d e un si stema técni co dado efectivam e n te r e- 21
Véase, por t=jem plo, Hohm·L Argue, l3ar b.n·a Emnnuc l y fitcplwn Gnoham: 'J'/,e
q~liere la c r~nción y ma rt ten imiento de un conj nnto espt~cial d e con- Su n Ruil.!~r:;: A Peop/e's Cuide In Solar, \Viwl Wlll Wood 1-:nt:rgy in CanLilla, Toronlo,
d1c1ones socHiles com o medio oper ador d e dicho s istema. La pos ición R e ne wúhle Energy in Ca nadfl, 1978. ''Creemos qn c la dc:;centralizad6n es n n cotupo-
nenle implicilo ele In energía runovable; esto impl ica la dc:>centraliwción de los
d_c ~nge l s,es ~le esle Lipn. U n an tor con temponi n eo ofrece una opin ión HisLe mn,; e nergético:;, de las comun id ades y de l poder. Lro e nerg ia renovahle no f..:qniere
ti ll nd a r, a1 a iJ rnwr CJlte "si aceptamos las plnnLas nu cleares, ta mbi é n U U fl ru~ l l lt..: (le g (! OC.rot:ión g!g~ n lC$t~a d~ t'(\lTt"(l o re~ t l t~ Ll'tl ll Sn "\ isló!l dcslrllc livos.
N uestra:; c iudades .Y ru.,blos, que han sido depeudJCni.<::S de i n provis ióll de cn<::r~fa
<:e n lraliu~< la, pueden lograr cierlo grado de nntonomla, y por lo t a nto conlroln,· y
. ~ . K a rl Marx: El Ct,rlitlLl , Obras Escogidas de M(l.rx y E 11gels, 'l'omo I, Editor ial
1

CJcnc1us del Hombre, Buenos Aires, 19'73. a<l ministrar s us propias necesidades e nergélicas."

48
un sistema técni co deter minado y aquéll as que son externas. La tesis su funcionamiento fuera impredecible. E l sistem a social interno de la
de E ngels se refiere a las relaciones sociales in t..e rn as que supuesta-
m en te se requieren dentro de l~s fá bricas de algodón y los lerrocani-
les, por ejemplo; lo que ruchas relaciones sign ifi can para la condición
r. bomba debe ser autori tario; no existe otra forma. La situación se
p resenta como una necesidad práctica, independien temente de cual-
qui er s istema político más amplio en el que la bomba está incluida,
de la soc iedad en general es, para él, una cuestión aparte. E n con- indepen dientemente del tipo de régimen o del carácter de sus gober-
traste, el partidario de la energía solar cree que esas tecnologías son nantes. De h ech o, los Estados democráticos debP.n tratar de e ncontrar
compatil>les con la democm cia por la m rmera como aquéllas comple- maner as de a segurar que las estructuras y mentalidades socia les que
mcntun los aspectos de la sociedad apartados de la organ ización de caracterizan el m anejo de armas nucleares no se "mezclen" ni se
dich as tec nología s como tales. "viertan" e n la organización política como un todo.
Ex isten, pues, diversas direcciones que pueden seguir los argu- Por s up uesto, la bomba es un caso especial. Las razones por la s
mentos de este tipo. Las condiciones sociales proclamadas, ¿se dice cuales se necesitan relaciones de autoridad muy rígidas 'en su
que son r equeridas por, o fuertemente co mpatibles con el funcio na- presencia son clar as para cualquie ra. S in e mbargo, s i buscamos otros
m iento <.le un s istC illa técnico dstl"!rmi nado? Dichas conuiciones, ¿son casos en los cuales Lliversas variedades de tecno logía n ecesitan un
internas a ese sistema o externas (o nmbas)'? A pesar de que los patr ón especial constante de poder y autoridad, la histor ia técnica
escritos que se refi eren a es tas cuestiones a menudo no son cla ros con moderna 1;ontie ne muchísimos ejemplos.
respecto a lo que se está afi rm ando, los argumentos en esta categoría Alfred D. Chandler en The Visible !Jand, u n estudio monumen-
general son una parte importante del discurso polít:ico moderno. tal de las empresas modernas, proporciona notable documen tación
Healizan muchos in ten tos para explicar cómo se p roducen los cambios para de felldcr la hipótesis de que la construcción y la operación diaria
en la vida social a raíz de la innovación tecnol ógica. Más im portante de muchos sistemas <.le producción, transporte y comunicación en los
aún, con frecuencia se uti lizan para apoyar los intentos de justificar s ig los d iecinueve y veinte requieren el desarrollo de una forma social
o critic;u las acciones propuestas que involucra n una nueva tecno- en particular: una organización a gra n escala , ce ntralizada y j erár-
lot.ríu . .Al ofrece¡· ruzones claramente políticas a favor o en contra de la quica admi nis traua por dirigentes a ltamente capacita dos. Es típico
ndopción de una tecnología en pmticular , los argumentos de esta clase del razonam iento de Chancller su an álisis del crecimiento de los ferro-
se apmbw de oll·os, más fi·ecue ntes y müs fáci~es de veri ficar , acerca ca rriles.22
ele los costos y beneficios económicos, los tras tornos ambie nta les y los
posil>les riesgos que cntnuiarían esos sis temas técnicos oara la salud Ln tec nología hizo posible el transporte nípido y en todos los el imas; mas
y seguridad públi cas. Aquí no se trata de cuá ntos empleos se crearán, el movimiento seguro, regular y confiable de mer cader ías y pasajeros,
cuántos ingresos se generarán, cuántos age ntes con tamin ador es se así también como el mantenimiento y la repara ción continuos de las lo-
agregarün o cuántos cánceres se producirán. Más bien se trata de las com ot oras, trenes rodanles y rieles, lech os de vfas, estaciones, depósitos
de locomotorlls y otros equipos, r equerían 1u creación de una organiza-
maneras en las cuales las elecciones acerca de la t ecnología tienen ción a dministrativa grande. Implicaba la contramción de un grupo de
importan tes con secuencias para la fo rm a y calidad de lns asociaciones dirigentes para s upervisar estas actividades funcional es sobre una
hum u nas. exte nsa área geogní lica; y el nombra mie n to de una dirección adminis-
S i examinamos los patrones sociales que caracterizan los am- tmtiva de ejecutivos de media y alta categoría para supervi sar, evaluar
IJientes de los sistemas técni cos, descubrimos ciertos elem entos y y coordinm· el t rabajo de los administradores responsables de las
sistemas 4ue cnsi en forma invariable se un en a formas específicas de operaciones diarias.
organinr el poder y la autoridad. La cueslíón importante es: esta
situación, ¿,es el resultat!o <.le u na r espuesta social inevitable a lus
propiedades ingobernables en las cosas mi smas, o es en cambio un En todo su libro, Chandler señala maneras en las cuales las
patrón impuesto e n forma independiente por un e nte gobern ante, la tecnologías util.izadas en la producción y d istribución de electricidad,
clase gobernante o alguna otra in stitución social o cultura 1, para su stancias químicas y una gran variedad de elementos industriales
lograr sus pro pios propósitos? "exigían" o "r equ er ían" esta forma de asociación humana. "De ahí que,
Tomando el ejemplo más obvio, la bomba atómica es un artefacto los requerimi entos operacionales de los ferrocarriles exigían la
inh erentemente político. Mien tras exista, sus propiedades letales
exigen que sea controlada por una ca dena centralizada y rigidame n te 22
i\1 f"rcd D.Ch nndlCJ·, J r.: 'l'he Yisible Hand: 'l'he Manogerial Revulution in Ameri-
jerárquica de comando cerrada a cualquier influencia q ue hi ciera que can!Jusiness, Cambridge, Belknnp, l!J77. 244.

51
creaci ón de las primeras jer a rquías administrativas en e l comercio de en el mar n eensitn ser gniado por 11na ma no d ecis iva y que ef;to sólo
los Estados U nid os.":!:! puede logra r se con u n solo eapit ún y una lripu !ación obcd ic· n L~? ;,Est.ri
¿Había otras rn n neras concebibl es d e organi~ar este conjunto de en lo conecto Cha nd ler al decir quf~ ln s propiedades de los s is tem as a
pe rsonas y m eca nismos? Chandl er muestra que una forma social g·r an escala requieren u n control ce ntrnl izado y jedrquico?
nnles dominan Le, la pequei'ía empresa d e fa milia t radicionnl, s imple- Para cont:esln res tas preg1ll .t as, debe ríumos (;X ami nnr e n dPtnlle
m ente no podía m anejar la situación en ln mayoría de los casos. Au n- los reclamos morales d e necc.,sidnd pn\cLita (incluyendo aquéllo-> en
qu e no refl ex iona con mayor profun dida d, es evidente qu e cree que las d octrinas económ icas) y com pa rarlos co11 los rcclntt10S morales de
exist e, para ser realistas, muy poca libertad en las form as ele pode1· y otr as clases, como po r ejemp lo la noc ión de que es lnw no que· los
autorida d apropindns d entro de los s istem as sociolécnicos m odernos. marineros participen en la direcf:ión de nn barco y que los trabnjnd o-
Las propiedad es de muchas tecnologías m od cmas - los oleoductos y res tengan d er <:cho a involucr arse en la administr ación y toma tle
las ref'incrías, por ¡~jemplo- son tnl es que es posible imponer decisiones en un a fabrica. Si n emhargo, es ca racterístico de las
eco nomías abrum¡)doras n g ran escala y velocidad. Si se p re te nde que sociedades hasadns en g rande Ry corn pi P.jos s i,;temn s tccnológicOf'. que
dic.:hos siste mas oper e n con ef'eclividad, eficien cia, rapi flcz y segu- las razo n1~s morales qnP. llcl seftn las de neresidm l pnir t.in1 npare7can
ridad, son necesarios ciertos requis itos de organización socia 1 in tern a; mny obsole lns, "ic'!Palislas" e irn~levn ntes. Cualq uier rc•cl:'uno que se
d e otro modo las posibi lidades m ateriales q ue l<1s tecnologí ns llloder- quiera r ealiznr a fitvor ele la lihertml, la justicia o la Ígl lnld,Hl pueden
nas ponen a dis posición no podrían explotarse. ClMml ler r e('o noce q~te neu trali;·nrse ele inlllediulo al f·ortfi·on t.a rlo con argmn<'nlos romo:
cuand o se comparan las in sti t uciones socio té~ní cas de div<'rsa s ''Mn y bien, pero ésa no es forma de admin istrar u~1 fi~not:a rri l" (o
naciones, se obser van "forma s en las cunles las actividades cult ura les , acería, o lín,~n a~rea, o sistema de comunicación, elcl-lt:rn). J\qní
l<!s valores, las ideologíns, los s is temas políticos y la estructura socia l clt:scubri m os una impm'Lan t c cualiflnd en el disnnso político mod ern o
afectan estos im per al ivos".l{ Sin emhnrgo, el peso del argu mento y la y en la f'ormn en l11 cuHI la s personas genera1rnent.f: pi ensnn con
evitlencia empírica e 11 'The Visible fland sug-i eren que, en el m ejo r de n~s pccto a qn ó mediflas se justif'ican t) ll respuesta a las posihi li rlntks
los casos, es muy improl>able que se produzca una d esviación f]lle la s tecnologías pon en a disposición. En muchos casos , decir que
s ig nificati va d el pa trón b:ísico. algunas tecnologías son in heren le mente ¡Hd ílicaf: P.quiv11l e a (,kci ro u e
E s posible que otras <lis posiciones concebibles de poder y au to- cie r las n1zones ele necesidncl J)l'iÍCtit'a ampl iít llltcnt.e accpt[Jda:; .....::en
ridad , por ejemplo, la au t otürec~:ión descentralizada y d e moc rá ti ca df!l especia !la nece!;idad de conserva r los sistema s !.e(·nológ icos crúcial es
t1·abaj ador, pruebe n ser c.:apnces de administr ar fábricas, r e finf'rías, como entidad(•:; fJUC l.r ab<1jan f•n m·monía-- tiende n a edipsar otras
s is temas el e comunicación y ferro<.:arriles tan bi en o m ejor que las clases de 1·azonaTilie n lo m onll y políl ico.
organizaciones que desnibe Chancller. La evidencia proporciona da Un inten to ele r escat.:w !u auton omía de la pol ítica, d e la atadnra
por los equipos de monta je de automóviles e11 Suecia y por las pl;mtas de las n ecesidacles p n '\eticas in volu cra la noción dt) que ln ~; co ndi ciones
dirigidas por los trabajadores en Yu goesla vi a y ot:ros puíses a m enudo de asociación h um:-tn a, qne se hallan en el fu ncionamiento interno ele
se presenta para rescatnr estas posibilidades. Incapaz d e 1·esolver las los sistemas tecnológicos con facil iclacl, pueden mantenerse separadns
controversias e n t orno a est e a sn n Lo, me limito a señala r lo que de la organización política eomo un todo. Duntlltc mneho tiempo los
con sider o la manzana d e la discord ia. La evidencia dis po n ible tiende estadoun idenses han confiado en que los an eglos de podp r y ¡¡uloriciad
a demos tra r qu e m1 1ch os s istemas tecnológi~os gra ndes y sof.sti('a do s dentro d e las eo r po raciones ¡, ,,Ju:,f.r iales, en1 p.esas <Ír: s ervieios
de h echo son muy compatibles con el control ce ntn1l izado y jerárquico. públi cos, etcétera, tenían poca r eh;tión C(Jll lns instilucionP<>, la-o
Si n embargo, la pregunta interesante ti en e que ver con la posibilidad pniclicas y las idcns públicas en ¡5CII ernl. (~u e '·Jn dem,Jcrn !:Ía se q neda
de que este patrón sea o no en algún sentido una exigenc ia d e dichos en la puerta de la fii urica" se considera un hecho de la vida q11e no tenía
sistemas, cuestión que no es meramerite e mpírica. En ddiniLiva, el nada qne ver con b práctica de la l ibertad política. P ero, ¿pueden
a sunto queda e n nues tras manos acerca de qué pasos son se pararse con tanta facilidad la política interna de la tecnología y la
prácticamente necesari os , si lo son, en el fu ncionamiento d e diversas política de la comunida d entera? Un estudio reciente de líder es
e;! ases de t ecn olog-ía y qu é necesi.tan di ch os pasos de la estructura ele empresar iales en los Estados Unidos, ejemplares contemporáneos de
1as asociaciones human as. ¿Tenía razón Platón a l decir que un barco la "mano visible del control" ele Chandler, reveló qu e se sen tían muy
impac:ienles con r especto a los eserúpulos d em ocrcüi cos tnles como "un
23 I l>fd.
hombre, un voto". E stos ejeculivos pregu 11tftn: si la democraci :~ no
1 '1 lhftl, 500 . funcion a e n U11 a empresa, la in s titución más crílica de toda la

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sociedad, ¿cómo puede esperarse que _funci~ne en el_ gobi~n~o de una s~steni~o, caracterizan a las tecnologías intrínsecamente políticas.
na ción en particular cuando ese gobwrno wtenta 111terfenr con los S1guc s1endo verdad que en un mundo en el cual los seres humanos
logros 'de la empresa'? Los a~tores _del informe obs~~van que _los prod_ucen y manLienen sistemas mtificiales, nada se "requiere" en
criterios de autoridnd que func10nan b1en en la corporacJOn se convter- sentido absoluto. No obstante, una vez que se inicia una operación,
ten pura los empresarios en "el modelo deseable para co_mpnr,?~·..co~ las una vez que artefactos tales como las plnntas n ucleares han sido
rel:.tciones polílicns y económicas en el r~sto de la soc1_e~ad .2" M l~n­ ~on~tnúdas y puestas en marcha, las clnses de razonamiento que
trns que estos descubrimientos están leJO~ de ser deCJSl~os, refleJa n Jusbfican la adnptación de la vida social a los requerimientos técnicos
una opinión cada vez m ás común en el pms: lo que ~ os ~tlm~1as tales surgen con tanta espontaneidad como las flores en primavera. En las
como la crisis energética n ecesitan no es una red1stnbucJón de la palabras de Ayr?s: "Una vez que comience el reciclaje y el riesgo de
riqueza o una mayor pnrticipación pública sino más bien, una rob_o del plutoniO sea real y no hipotético, el gobierno se sentirá
dirección centralizada a nivel público y privado más poderosa. o?lJgado a viola r la defensa de los derechos civiles".26 Después de un
Un caso especialmente representa tivo en el que los requer imien- Cierto_ pun lo, ~quéll os que no puedan aceptar los rígidos requerimien-
tos operacion a les de un sistema técnico podrían influ_ir en la cal.idad tos e 1mperattvos serán considerados soñadores y necios.
de la vida pública es aquél de los debates acerca de los nesgos del poder
nuclear. A medida que se agota la r eserva de uranio para los reactores
nucleares, se propone como combustible alternativo el p]uton io, g~ ne­ Las dos variedades de interpretación que señalé indican de qué
rado co mo subproclucto en los núcleos de los reactores. Lns consabt_das manera los a_rtefactos pueden tener cualidades políticas. En el primer.
objeciones al reciclaje de plutonio se c~ntr~n en l o~ costos eco n ó ~lJcos caso adverlm1os cómo algunos rasgos específicos en el disei'io o
innceptables, en los riesgos ele~ contammac1ón ambtental y los pehgros disposi~iones de un aparato o sistema pueden proporcionar un medio
en lo que se refiere a la proliferación internacional de armas nuclea- convemente para el establecimiento de determinados criterios de
res mt1s allá de esta!'; preocupaciones, existe otra serie ele peligros no poder y autoridad en un ambi ente dado. Las tecnologías de esta clase
Ln n' apreciados: Jos que involucrnn el sacrificio de prerrogativas poseen cierta flexibilidad en la dimensión de su forma material.
civiles·. El uso extendido de plutonio como combustible au menta la Pre_cisamente debido a que son flexibles, sus. consecuencias para la
posibi lidad de que esta sustancia tóxica sea robada por los terro~islas, soc1ed~ d de?en enLende~·se con referencia a los actores sociales capa-
el crimen or ganizndo u otras personas. De esta manera exJst? la ces de mf1':11r en la elección de diseiios y disposiciones. En el segundo
posibilidad, para n ada Lrivinl, de que ~enga n que toma rse med1das cas~ exammamos formas en las cuales las propiedades ingobernables
extraordinarias para proteger el plutonio del robo y pn,·a recobrarlo en de c1ertas clases de tecnología est::ín fuerte, y tal vez inevitablemente
caso de que la sustancia sea robndn. Los trabajadores en la industria ligadas a modelos pmticulares inslitucionalizndos de poder y autori~
nuclear así también como los ciudadanos comunes bien podrían estar dad. En este ca so la deci sión inicial de adoptar algo o no es decisiva con
expuestos a iuspecciones de seguridad, vigilancia secreta, intercep- respecto_a las consecuencias. No exis ten disposiciones o diseños físicos
ción de líneas telefónicas, informadores e incluso medidas de emer- al~ernattvo ~ q~e establezca_n una difere~cia significativa; más aún, no
gencia bajo ley marcial: todo esto justificado por la neces idad de ex1sten posJbJhdades genumas para la mtervención creativa de dife-
sn l vaguardar el plutonio. . . rent~s sistemas sociales -capitalista o socialista- que pudieran
E l estudio de Russell W. Ayres de las ramJ!icac10nes legales del mo~lf]car la_intratabilidad de la entidad o alterar en forma signifi-
reciclaje ele plutonio coucluye: "Con el paso del tiempo y el aumento en cativa la cah dad de sus efectos políticos.
la cantidad ·de plutonio existente se hará presión para elimin ar las A menudo lo que está en discusión es qué variedad de
]j mitaciones tradicionales que las cortes y legislaturas imponen sobre i~terp~etación se ap!ica a un caso determinado; alguna de estas
las actividades del ejecutivo y para desarrollar un fuerte poder central d1scuswnes son apasionadas, acerca del significado de la tecnología
mejor preparado para exigir e~tóctas gara n tí~s". Afi_rma ~~1e "unn vez para nuestra forma de vida. Aquí me he colocado en una posición
que s e haya robado una cantidad de pl~tomo, la s1LuacJOn será La.~ " aii? b os1y ", ya que me parece que ambas clases de comprensión son
terrible que se pondrá al país patas arnba hasta tanto se recupere . aplicables en diferentes circunstancias. De hecho, puede suceder que
Ayres anticipa y se preocupa por las clases de pen samiento que, he dentro de un complejo determinado de tecnología -por ejemplo, un
26
25 Leonnrd Si !k y Da vid Vogel: _Ethics Wl!,l Pro{ils: 1'he _Crisis o( Confi<lencc in Ru ssel W. Ayres: "Policing Plulonium: The Civil Libertics FallouL" Haruard
American Bnsiness, Nueva York, Sm1on nntl Schusler, 197b, 191. Civil Righls-Ciuil Liberlies Law Reuiew 10, ]97G, 44::1, 413-414, :n4. '

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ó)
sistema de comunicac ión o de transporte- a lgu nos aspecto~; sean 0
flexibles en cuan to a sus posibil1dades p ara 1a sotie(la<l, mie ntras que
otros nspecLos pu eden ser (par a l.J ien o para m al ) ingobern ables por
compl eto. L as dos vari ed a des d e interpretación que examiné aquí
pued en superponer se y cruzarse en muchos puntos.
Por supuesto, estos so n temas con los cunle,; la gente puet~e n o
esün· de acuerdo. De esta ma nera , algun os defensores de la e ner gw de~
Tékhne y Poli téia
fuentes r enovables ah ora creen que por lin descuhrieron un g-ru po de
tecnolo¡:,rías intrín secamP.nte d emocrrítícns, i guali ta~·i As y ~om unita­
rias. A mi mejor saber, s in embargo, las consccut:ncws socw les d e la A íin de lograr una compren sión politicn <le la tecnología, es
con s trucción de sistemas o e energía r enovable d epender á, co n segu- preciso que exam inem os el mundo de las herramientas y los instru-
ridad, de las configuraciones específi cas tanto del hardware co;no t!e m e ntos d esde un nuevo punto de vista. Ya hemos co menzado a
las in stit uciones sociales cr eadas pnrn trne rnos esa en er g 1a . E s n·conoccr algunns de las formas en las que las condiciont'S de poder,
posible qu e descub ramos algu na manern de conver tir la pri ncesa _e n autorid ad, libertad y justicia social es tan proft111damente fijad as f!n
un a cenicienta. En comparación, los de fensores d el desarrol lo n 1tenor lus estr ucturas técnicas. Desde este punto de vi~Ln nin gún as¡>t·!dO de
d el poder nucl ear parecen cr<:er que csü\1~ trabajando en una la t ec nología rnotlerna puede ser jn:t.gado nellt.ntl a priori. Se cleLcn
tecnología baslanle flexible cuyos cfedos socwles adve:·so_:o pueden esc rutar todas las vnricilHdes de hardware y ~us eorrespondi,~nt.es
ser solucionRclos si se mod ifican los pn nnnd r os d e thse no de los formas d e vida social para snLeYs i so n amig as o en emigus d f: la idea
r eactores y de los s istemas de desech os nucleares. ~or las raz~n es de una socieda(l justa.
ant0.s expuestas, cr eo que esLin c-omp le tamen~e C'qu;,voca_d os. S 1, es Pero, ¿en qué puede eo11Lrihüir el l~sLu dio de la rwlít ica con
posible que podamos man ejar algunos d e los "n esgas kwa la sa~ud r especto n nuestra forma de pen~nr acerca llel rci11o de lns cos;, s
púb lica y la seguridad que producen el pod er 1~uclear. Pero a m_edJ(~a in s t rum entales? ¿Dónde podemos buscar n na teoría política de la
que la sociednd se adapln a l os rasgos n~ás pel1 ~rosos y en ap anenc1u t ecnologíu?
indelebl es d el poder nucl!:ar, ¿cuál ser a el prec10 a largo alcance que
deberá pagar la humanidad? ._
Mi convicción de que deberíRmos prcstnr mayo1· atcn c10n a los Una clásica analogía
objet os tétllicos en s í mismos n o significa que poda mos ignora r los
contextos en los cua les se s itúan dichos objetos. E s muy posible que un En el capítulo anterior advertí q ue exisle, arra igado e n el
barco en el mar requiera, como insis tían P latón y :Rngels, un ~~lo pensamient o p olítico occiden tal, u na púder osa anal ogút que une la
capitán y un a tripulación obedi en te. Pero un_ b_arco fue ra de servi CIO: práctica de la tecnología con Lt de la polílica . En sus La Re¡mólim, Las
anclado en el pumto, sólo n eceslta un v1g llan te. Enten der qu; Leyes, l!,'l Estwlisla y otros di,'\ logos, Platón sosti e ne que <~1 arte ()e
tecnología s y qué contex tos son importantes p~ra no:olros, y P?r ~Lle, gohernar es téhhne , una d e las artes p r ácticas. /\l ignal qur. la
es u na tarea que debe abarcar tanto el es tucho ele SJstemas tecm cos arquitectur n, la tejeduría, la cGnstr ncción <k buque!; y •l.-mtís nrks y
específicos y su hi storia, como una minuciosa compren s i?n (le los
conceptos y controver sias de la teo ría políll~a. En nu~ stro l~c n:po las
p er sonas a m enudo están di spu esta ~ a Teah~é~r camh1~s _dras~Jcos :n
su forma de vida para dar cab1da a 1a mnovac10n t ecnolog¡ca m1enbas
que se r esisten a camb ios s imil ares qu_e se ju_stifi ca ~ en el terreno
¡ oficios, la política es un área de p nid.ica eon s u propio co noei mif~nlo
específico, su s propias h abilidades especiales. Como h e m os visto, uno
de los propósitos del argum e nto de Platón em d esacreditar n aqu é!los
que creían que los a s untos de la vida pública podían ser dejados en
m a nos de simples aprendices, las m asas d emocn1 ticas. Pero mñs allá
político. Aunqu e no exi sta otra r azón mas q ue esa, es nn porlante que de todo es to es eviden te qu e cr e ía qu e el ar te d n la política podía ser
te ngnmos un panorama más claro d e estos a s un tos que lo q ue h as ta 1 d e utili dnd d e la misma m aner a qne cualqu ier otro téldme , proclueír
ahora ha s ido nuestra cos tumbre. !
trabajos bien h echos <le va lo.- du, fu le• u.
Los t rabajos qu e P latón tenia en me n te eran buenas consti Lu cio-
t nes , productos extr emadamente bien h echos d e a r quitec tura política.
Politéia, el t.ítulo d e La Repúhli('a en ~:,rriego, signitica la constitución

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