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Las batallas de Pucará, Marcavalle y Concepción fueron victorias del ejército peruano liderado por el general Andrés Avelino Cáceres contra las fuerzas chilenas invasoras durante la Campaña de la Breña, aunque al final Chile se anexionó territorio peruano y el Perú tuvo que pagar una indemnización de guerra según el Tratado de Ancón de 1883.
Las batallas de Pucará, Marcavalle y Concepción fueron victorias del ejército peruano liderado por el general Andrés Avelino Cáceres contra las fuerzas chilenas invasoras durante la Campaña de la Breña, aunque al final Chile se anexionó territorio peruano y el Perú tuvo que pagar una indemnización de guerra según el Tratado de Ancón de 1883.
Las batallas de Pucará, Marcavalle y Concepción fueron victorias del ejército peruano liderado por el general Andrés Avelino Cáceres contra las fuerzas chilenas invasoras durante la Campaña de la Breña, aunque al final Chile se anexionó territorio peruano y el Perú tuvo que pagar una indemnización de guerra según el Tratado de Ancón de 1883.
En esta fecha, se recuerda y conmemora las Batallas de Pucará, Marcavalle y Concepción,
que fueron acontecimientos bélicos favorables al ejército peruano, durante la etapa de resistencia frente al ejército invasor chileno. Estas batallas, desarrolladas en la sierra central de Perú, fueron lideradas por el general peruano Andrés Avelino Cáceres, en la denominada Campaña de la Breña, cuyo objetivo pretendía cansar al enemigo a través de una guerra de guerrillas que terminaría por derrotarlo. Pucará, Marcavalle y Concepción, fueron batallas que favorecieron al ejército peruano frente a las derrotas pasadas, sin embargo, los hacendados preferían pagar muchas veces cupo a los chilenos que aceptar las condiciones de las montoneras de Cáceres pues las represalias de los peruanos eran peores que el ataque del ejército chileno. Miguel Iglesias hombre importante en la defensa de Lima se encontraba en el norte cuando ocurrió la batalla de Huamachuco a favor de los chilenos. Hastiado de la presencia chilena y de la destrucción sistemática del país, Iglesias terminó las guerras capitulando con el enemigo. El 20 de octubre de 1883 se firmó el Tratado de Ancón entre Perú y Chile. Mediante este tratado Perú perdía para siempre la provincia litoral de Tarapacá y quedaban bajo tutela del país sureño las provincias de Tacna y Arica que tras un plebiscito debían decidir su suerte (tras 10 años de cautiverio). De igual manera, el Perú debía pagarle una fuerte suma de dinero como indemnización de guerra. El ejército chileno empezó a retirarse lentamente del Perú y hacia agosto de 1884 ya todas las tropas se habían embarcado hacia su país. Sin embargo, el Perú entró en una nueva guerra civil. Cáceres no reconocía ni la autoridad de Iglesias ni los términos del tratado firmado con Chile. Se iniciaba así el segundo militarismo y la lenta reconstrucción del Perú a manos, nuevamente, de militares y caudillos.