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HALLAZGOS - Revista de Investigaciones • Año 6 - No. 12 • julio-diciembre de 2009 • ISSN: 1794-3841 • pp.

169-200

La inseguridad y los entornos universitarios:


una lectura desde la población más vulnerable

Carlos Andrés Muñoz Sandoval*

Resumen
Recibido: 19 de junio de 2009 El presente artículo tiene como objetivo dar a conocer los resul-
Revisado: 28 de agosto de 2009
Aprobado: 5 de octubre de 2009 tados de una investigación realizada en la localidad de Chapine-
ro, con un enfoque sociológico vinculado a la categoría miedo al
crimen, sobre la cual se indagó por primera vez en el país en el
año 2006, a pesar de cinco décadas de abordajes científicos y de
su utilidad para el ejercicio del gobierno en ámbitos internacio-
nales. Así, en este documento se brindan los primeros elementos
exploratorios de dos problemáticas: 1) la inseguridad en los en-
tornos universitarios, desde 2) la perspectiva de la población que
local, nacional e internacionalmente sufre el mayor impacto del
crimen en las ciudades, pero que, al mismo tiempo, presenta la
menor percepción de inseguridad: los jóvenes.

Palabras clave
Miedo al crimen, sociología de las emociones, sociología com-
prensiva, inseguridad, entornos universitarios.

* Sociólogo Cum Laude de la Universidad Santo Tomás, miembro de tres grupos de investigación y actual representante de la misma uni-
versidad en la Personería Local de Chapinero. Por otro lado, se debe resaltar que esta investigación, además de permitir la obtención del
título profesional, es el sustento y la bitácora del actual subcomité de Seguridad para el proyecto del Corredor Universitario; estrategia de
magnitudes distritales que lidera, desde el año 2006, el Comité Interuniversitario y Empresarial del Siete de Agosto (CIUE), compuesto en la
actualidad por veintiséis universidades y otros establecimientos de educación superior. También han sido conocedores de estos resultados
los ponentes de la Cámara de Representantes de la propuesta de Ley 179 de 2008, que tiene como objetivo la seguridad de los entornos
universitarios. Correo elctrónico: camsfun_@hotmail.com

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La inseguridad y los entornos universitarios: una lectura desde la población más vulnerable

The university insecurity and surroundings:


a reading from the most vulnerable population

Carlos Andrés Muñoz Sandoval

Abstract

The article presents the results of an investigation carried out Recibido: 19 de junio de 2009
Revisado: 28 de agosto de 2009
in the municipality of Chapinero, with a sociological approach Aprobado: 5 de octubre de 2009
focused on fear to the crime, which was investigated for the first
time in the country in 2006, in spite of five decades of scienti-
fic boardings and their use in government within international
scopes. So, this document offers the first exploratory elements
of two issues: the 1) insecurity in university surroundings, from
2) the perspective of the population that, locally, nationally and
internationally, suffers the greatest impact of crime in the cities,
but that, at the same time, has the smaller perception of insecu-
rity: the young.

Key words
Fear of Crime, Sociology of Emotions, Comprehensive Sociolo-
gy, Insecurity, University Surroundings.

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Introducción nal e internacional, con referencia, además,


a sus entornos universitarios. Este segmen-
El presente artículo brinda los resultados to de población es: los jóvenes-estudiantes.
de una investigación que indagó por una
Por tanto, se evidencia un emergente cam-
temática relacionada con la inseguridad
po de investigación, desde la categoría mie-
urbana. Tema recurrente para las diferen-
do al crimen, relacionado con la población
tes instituciones de gobierno, tanto locales
más victimizada y de menor percepción
como nacionales e internacionales, que bus-
de inseguridad junto con los entornos uni-
can establecer estrategias pertinentes para
versitarios, donde pasan la mayor parte de
enfrentar la situación, tanto desde el vértice
su tiempo social. Características emergen-
de la fuerza legítima, policial, como desde
tes de este nuevo campo de investigación
el vértice del tejido social, comunitario.
no analizados antes en el país, los cuales,
además, son temas de álgido debate en la
Los estudios sobre esta problemática, con base
actualidad1 y en la que ya se adelantan vi-
en la categoría más completa al respecto de-
sionarios proyectos2.
nominada miedo al crimen, se han desarrolla-
do principalmente en Estados Unidos (Allen Tabla 1. Porcentaje de victimización según
et ál., 1982; Ferraro, & La Grange et ál., 1985) ocupación
y Europa (Alvira et ál., 1982; Medina, 2003; Ocupación Victimización
Innes, 2004), con base en encuestas dirigidas Estudia y trabaja 29
Estudiante 22
a las víctimas de delitos y a la percepción de
Empleado 15
inseguridad de la población; al igual que a Independiente 15
detectar variables que puedan ser explicativas Desempleado 14
de la vulnerabilidad de las personas frente a Hogar 8
Pensionado 7
este fenómeno de la inseguridad.
Tabla 2. Porcentaje de percepción de aumento de
inseguridad según ocupación
En el caso nacional, en Bogotá, D.C., se llevó
Ocupación Aumento de Inseguridad
a cabo durante 2006 la primera investigación
Estudia y trabaja 27
que tuvo como objetivo indagar por la crimi- Estudiante 32
nalidad, desde dicha categoría, desarrollada Empleado 34
por la Universidad de los Andes, pero con Independiente 40
un enfoque econométrico que presenta poca Pensionado 41
Desempleado 44
claridad en la definición que adoptaron de
Hogar 49
miedo al crimen (Restrepo et ál., 2006).
Fuente: Cámara de Comercio de Bogotá. Encuesta de Per-
cepción y Victimización, 2008.
Por lo anterior, la perspectiva de la investi-
gación que aquí se presenta, tiene un funda-
mento sociológico que indaga desde dicha 1 En este sentido, el mejor ejemplo es el del Proyecto de Ley
179 de 2008 que se adelantó en Cámara, cuyos ponentes son:
categoría, de incipiente análisis en el país, la
Jaime Restrepo Cuartas y Pedro Vicente Obando Ordóñez.
problemática de la inseguridad en la pobla-
2 Tal es el caso del Comité Interuniversitario y Empresarial del Sie-
ción más victimizada (ver gráfica 1; tabla 1) te de Agosto (CIUE), para el cual los resultados aquí expuestos
y de menor percepción de inseguridad (ver son el primer soporte investigativo del Subcomité de Seguridad,
por las particularidades ya mencionadas: la evidente disonancia
tabla 2) en las ciudades, a nivel local, nacio- de la población joven-estudiante y sus entornos universitarios.

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Lo anterior tiene como base un estado del dos con la inseguridad y la percepción de
arte internacional y nacional, que no sólo seguridad realizados en el país, en particu-
tuvo como criterio de búsqueda la catego- lar los abordajes sistemáticos, por medio de
ría mencionada, sino también los estudios encuestas, realizados por la Cámara de Co-
sobre el miedo (Murcia et ál., 1998; Corpo- mercio de Bogotá, que lo ha hecho desde el
ración Región, 2003) y aquéllos relaciona- año 2000.

60 - 64

50 - 54

40 - 44

30 - 34

18 - 24

0 5 10 15 20 25
Gráfica 1. Porcentaje de encuestados víctima directa por rango de edad
Fuente: Cámara de Comercio de Bogotá. Encuesta de Percepción y Victimización, 2008.

En este contexto, la población con la cual el componente de la más baja percepción


se realizó esta investigación se caracteriza de inseguridad, se puede concluir que las
por ser jóvenes-estudiantes3 de la localidad estrategias racionales adoptadas por los
de Chapinero, que está compuesta por una estudiantes para evitar ser víctima del cri-
gran oferta de servicios de educación supe- men son aquéllas que aminoran su percep-
rior y que se ubican históricamente en los ción de inseguridad, mientras que desde el
rangos de mayor victimización y menor componente de la mayor victimización, la
sentimiento de inseguridad en el Distrito interpretación se desplaza hacia, además
Capital (Cámara de Comercio, 2008). Diso- de dichas estrategias racionales, las prác-
nancia que se ilustra, para el caso de Bogotá, ticas ociosas propias del estilo de vida de
D.C., en las tablas 1 y 2. los estudiantes universitarios, fundamen-
tales para la conformación de su identidad
Los resultados permiten obtener respues- dentro de la transición social que viven,
tas exploratorias a la disonancia que carac- que los expone frente a los momentos y a
teriza a este segmento poblacional. Desde los lugares más inseguros de sus entornos
universitarios.
3 Se debe señalar que se reconoce que la definición de juventud
presenta múltiples dificultades, que aquí no se profundizan, por
lo cual, la expresión se vincula a un elemento que les caracteriza
estructuralmente en la sociedad (Bourdieu, 2001).

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Marco teórico Farral, 2000 y Hale, 1996)” (Restrepo et ál.,


2006, p. 3).
Para indagar por esta problemática, dados
los altos niveles de percepción de insegu- A pesar de las falencias anteriores, pero su
ridad y menor victimización en la ciudad fuerte enfoque empírico4, la categoría miedo
de los jóvenes-estudiantes bogotanos, lo cual al crimen deviene como la más pertinente
indica que el miedo es una construcción en el campo investigativo, en comparación
social, la sociología weberiana y la socio- con otras categorías como: victimización, per-
logía de las emociones permiten observar, cepción de inseguridad o miedo al delito. Esto
analizar e interpretar el vinculo entre las también es favorecido, porque gracias a su
expectativas subjetivas de la acción social de los amplio espectro empírico, en la actualidad
estudiantes, con base en su estructura socio- ofrece cuatro hipótesis generales con las
emocional que tiene como referente el crimen cuales los resultados de los estudios pue-
que se presenta en los entornos universita- den ser contrastados5 (Restrepo et ál., 2006,
rios. Sociologías que se articulan por el con- pp. 4-5).
cepto de la creencia.
Por este contexto de la definición de lo que
Las anteriores son las categorías funda- es el miedo al crimen, la estrategia imple-
mentales de análisis, que se profundizan a mentada fue la de considerarla como una
continuación. categoría constructo y abordar sus partes
constituyentes, miedo y crimen, con base en
la pertinencia sociológica y metodológica
Crimen y delito: una definición
posible entre ambos componentes.
necesaria
En este sentido, el vértice del miedo es con-
Desde la categoría de análisis crimen, se cebido como una emoción que se constru-
debe señalar, primero, que la categoría mie- ye socialmente6 y que, desde la perspectiva
do al crimen es un concepto relativamente de Torrente, se puede mensurar desde el
reciente, de la década de 1970, y cuya men-
surabilidad empírica es aún novedosa e in-
4 La estrategia empírica más relevante al respecto, quizás, es la
cipiente (Allen et ál., 1982, pp. 760-768).
British Crime Survey, estrategia en la que se fundamentan las
políticas de prevención de los niveles del crimen y las actitu-
En la actualidad, dichos problemas de de- des de los ciudadanos frente a él para Europa, las cuales son
realizadas de forma periódica desde el 2001; fueron reanuda-
finición conceptual son evidentes, ya que
das después de diecinueve años de haber aplicado la primer
“una conceptualización consistente sobre lo encuesta con este perfil. A pesar de lo anterior, esta encuesta
que realmente es el miedo al crimen, que os- presenta ambiguedad en la definición de dicha categoría, pues
considera que: “Fear of crime is something that may affect peo-
cila entre un estado emocional, una actitud ple from all walks of life at any stage of their lives. This makes
o una percepción, y el no uso de técnicas si- fear different from actual crime which tends to be concentrated
milares para medirlo” (Warr, 2000) genera on particular areas, victims and crimes being committed by a
small number of offenders” (http://www.homeoffice.gov.uk/rds/
no pocos óbices investigativos. Lo que no bcs1.html).
es salvado por su amplio espectro empíri- 5 Estas hipótesis se señalan en el apartado de presentación de
co; así “para el año 2000 se habían realizado resultados.
más de 800 estudios sobre el tema (Ditton y 6 El carácter social de la emoción se esclarece más adelante, en
el apartado denominado estructura socioemocional.

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sentimiento de seguridad de los individuos. Sociología comprensiva:


En esta medida, la directriz metodológica
expectativas subjetivas de la
se debe enfocar en asir el sentimiento de
inseguridad que genera, en determinados acción
individuos, ciertos objetos, situaciones o
contextos, para detectar la definición de la Para dar inicio al referente comprensivo,
emoción miedo que detentan los individuos marco general para la interpretación, la
(Torrente, 2001, pp. 147-153). Sociología para Weber, como ciencia empí-
rica de la acción, interpreta la acción social
Para el caso del componente del crimen se para explicar causalmente su desarrollo y
toman en cuenta dos fuentes: el delito y las sus efectos, cuyo objeto es una acción que
conductas desviadas. La primera fuente es significa siempre un comportamiento com-
una construcción jurídica de una conducta prensible en relación con objetos, internos o
desviada o de aquellas “conductas que vio- externos; una conducta especificada por un
lan reglas, creencias y expectativas socia- comportamiento (subjetivo) “poseído” o
les”, por lo cual se la relaciona con “lo que “mentado”, sin importar su nivel de conscien-
es indeseable, prohibido o inmoral”. Sin cia (Weber, 1958).
embargo, esto no es suficiente por lo que la
segunda fuente son las conductas desvia- No obstante, es la acción social la más impor-
das, no tipificadas en el Código Penal, son tante conducta humana, pues es aquélla que
las más importantes dentro de la definición se orienta por las acciones de los otros –los
del crimen, definidas como la trasgresión cuales pueden ser conocidos o no– y por ac-
de las reglas sociales (normas, costumbres, ciones pasadas, presentes o futuras.
valores) y, también, de los “comportamien-
tos que la sociedad define como peligrosos, En consecuencia, no toda clase de acción
amenazantes o cualquier adjetivo que ex- social ni todo contacto entre hombres es so-
prese estigma” (Torrente, 2001. pp. 30; 144)7. cial. El carácter social de la acción está dado
porque una acción con sentido propio se dirige
Por lo anterior, la categoría miedo al crimen es por la acción de otros y no porque sea idéntica
un constructo definido como el sentimiento a una acción homogénea de muchos ni a la
de inseguridad, configurado socialmente, acción de alguien influido por conductas de
que determinados individuos manifiestan otros, condicionado por la masa o por imi-
frente a determinadas conductas desviadas tación8.
y frente a ciertos delitos.
Lo que quiere decir que el actuar de la ac-
ción humana es un actuar en comunidad,
objeto primario de la sociología comprensi-
va, y no un actuar en sociedad, puesto que
este actuar se fundamenta en ordenamientos

8 La imitación no puede ser considerada como una acción social,


en la medida en que la orientación de este tipo de acciones está
7 Esta acepción parte de la idea de que existen, concebidas am- determinada por ciertas probabilidades objetivas, detectadas por
pliamente, tres tipos de reglas sociales: los valores las costum- la observación, que la determinan de forma causal la acción y
bres y las normas (Torrente, 2001. pp. 27 y 37). no por el contenido de sentido que ella pueda detentar.

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cuyo supuesto es la coherencia directa entre apto para la comparación heurística de los
el sentido subjetivo de los individuos y el ac- fenómenos sociales (Gómez de Mantilla,
tuar de hecho de los mismos individuos (We- 1988, pp. 38-45).
ber, 2001, pp. 189-191).
Con base en esta aclaración de método y de
Con base en estos planteamientos genera- la metodológica comprensiva, la primera
les, en el enfoque comprensivo, para que categoría de análisis, denominada expec-
lo observado detente cierta validez empírica, tativas subjetivas de la acción, se enmarca en
se hace necesario controlar dicha compren- la propia construcción metodológica del
sión con base en los métodos de la imputa- tipo-ideal y del método comprensivo, en
ción causal; con esto se busca comprender el general, en la medida en que dichos tipos
vínculo entre la evidencia cualitativa específica son construidos por ciertas regularidades
de una acción y la validez empírica de la ésta estadísticas9 de la conducta, a las cuales
(curso y resultados externos de la conduc- subyace determinado sentido mentado o a las
ta). Lo anterior es posible gracias al control expectativas que permiten la configuración
que ejerce el tipo de acción social que pre- de dicho sentido.
senta la mayor evidencia empírica para la
interpretación sociológica: la acción racional De manera concreta, las expectativas subjeti-
con acuerdo con fines. En este tipo de acción, vas de un individuo –unidad última de aná-
la matriz del actuar de los individuos tiene lisis para la sociología comprensiva– (We-
en cuenta, racionalmente, todos los fines ber, 2001; p. 189) orientan su acción
posibles, sopesa todos los medios para al-
canzar estos fines deseados y, a su vez, a és- [...] hacia las expectativas de una deter-
minada conducta por parte de los otros
tos con las consecuencias que dichos fines
y hacia las chances, calculadas (subje-
implican (Weber, 1958). tivamente) sobre esa base, que ofrece
la consecuencia del propio actuar. Un
Este control en la interpretación sociológi- principio explicativo en extremo im-
ca tiene el fin de comprender la conducta portante y comprensible del actuar
es [...] la subsistencia objetiva de estas
humana, que presenta múltiples motivos chances, es decir, la probabilidad ma-
por ser éstos subjetivos, pero que, al mismo yor o menor, expresable en un “juicio
tiempo, conservan regularidades; de lo an- de posibilidad objetiva”, de que estas
terior se desprende que la comparación que expectativas sean justas.
se debe realizar entre dicha acción racional
y otras acciones observadas, con múltiples Por supuesto, expectativas de seguridad o in-
motivos subjetivos, es el resultado de la seguridad, según sea el caso. Dicho juicio,
comprensión y el fin del sociólogo (Gómez evidencia una ampliación de las expectativas
de Mantilla, 1988). en toda la comunidad que permite, subjeti-
vamente, que sean consideradas por todos
Por ello, es la concepción general de la cons- los individuos como acciones racionales
trucción del tipo-ideal de acción social, con con acuerdo a fines (Weber, 2001, p. 190), lo
respecto a un fenómeno frecuente, el más que genera en los individuos involucrados
importante en la comprensión del método
weberiano, que devienen en el instrumento 9 “Si falta la adecuación de sentido nos encontramos meramente
ante una probabilidad estadística”. (Weber, 1958, p. 11).

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la sensación de que no serán frustradas sus orden social se construye, subjetivamente,


propias expectativas (Gómez de Mantilla, en la representación del “como-si” webe-
1988). riano o de la apropiación que determina-
dos individuos hacen de un mandato que
En concordancia con lo anterior, quien consideran indispensable para su acción.
actúa: Ampliando este concepto, es necesario te-
ner en cuenta otros que presenta tres nexos
[...] subjetivamente cree poder esperar teóricos fundamentales por su relación con
de ellos –otros sujetos– una conducta
el orden social empírico. Éstas son: uso, orden
provista de sentido en lo subjetivo y, por
lo tanto, calcular de antemano, con un y validez (Weber, 1958).
diverso grado de probabilidad, a partir
de relaciones determinadas, provistas Por uso se debe entender la probabilidad de
de sentido, la chances de esa conducta la regularidad en la conducta cuando está
(la de otros sujetos) (Weber, 2001, p.
189). dada por el ejercicio de hecho, el cual se
podrá denominar “costumbre” cuando el
En conclusión, teóricamente, las expectativas ejercicio de hecho descanse en un arraigo
subjetivas de la acción son aquéllas sobre las duradero.
cuales “el actor cree poder orientar su propio
actuar”, y que se pueden leer como la confian- En cambio, por orden se considerará cuan-
za que un individuo deposita en su vida coti- do una acción se orienta por máximas que
diana en medio de un orden social convencio- pueden ser señaladas; siendo válido para un
nal (Weber, 2001, pp. 190, pp. 191-201)10. círculo de hombres y manifiesto en el hecho
de tener que ocultar las transgresiones y,
validez de este orden, cuando la orientación
Sociología comprensiva: orden de hecho (uso) por aquellas máximas tiene
social lugar, dado que en algún grado significati-
vo aparecen validos para la acción; es decir,
Luego, son estas regularidades en la con- como obligatorias o modelos de conducta,
ducta humana, dadas de hecho, las que en la medida en que su trasgresión no sólo
permiten asir la acción social y, según la acarreará perjuicios, sino que también gene-
magnitud (regularidad estadística; frecuen- ralmente se rechazará por el sentimiento del
cia estadística), comprender la existencia de deber del propio individuo.
un orden social empírico, con base en la repre-
sentación que de él se hacen los individuos En el campo del orden, esclareciendo más el
desde sus propias expectativas generalizadas concepto, se hablará de un orden por con-
en la comunidad. vención y no un orden por derecho, cuando
se observa su validez como garantizada ex-
De lo anterior se suscita una variación im- ternamente por la probabilidad de que una
portante, que amplía esta categoría en la conducta discordante se enfrente a la repro-
medida en que dicha representación de un bación general de la comunidad. De aquí
que se pueda llamar convención, a la cos-
10 Se videncia que es la creencia el fundamento de la acción social tumbre que se considera válida dentro de
weberiana, que se construye desde las expectativas subjetivas un grupo de hombres y es garantizada por
de los individuos y desde su propia experiencia.

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la reprobación general de la conducta de los humanas y su carácter social. Dicho núcleo


otros, en el cual la observancia de la conven- es definido por el abanico de creencias que
ción se le exige muy severamente al indivi- presentan los seres humanos, lográndose
duo como obligación o modelo y no se deja distinguir sus objetos en tres dimensiones
de ninguna manera a su libre elección; ergo, diferentes: i) observables y no observables;
la adopción como si por parte del actor. ii) físicos o mentales y, iii) reales o imagi-
nados. Esta tríada de objetos desplaza la
Por otro lado, no se hablará de un orden por característica cognitiva per se que, antaño,
derecho, en la medida en que éste está garan- conservaban los estudios sobre las emocio-
tizado externamente por la probabilidad de nes, como estados emocionales (Elster, 2002,
la coacción, física o psíquica, ejercida por un pp. 72, 78, 94, 302, 309, 315).
grupo de individuos que han sido institui-
dos con la misión de observar dicho orden y Con este marco general, los objetos de creen-
castigar su trasgresión. cias en los cuales se sustentan las emociones
humanas y la caracterización que se puede
Este esclarecimiento conceptual de un orden hacer en su interior frente al miedo, es im-
social de derecho, en la medida en que la pro- portante señalar que los antecedentes cogni-
blemática que aquí se discurre es el crimen tivos se relacionan con las creencias frente a
y no el delito, cuyo germen es una norma hechos o estados de cosas, mientras que los
positiva que sanciona ciertas conductas ti- objetos intencionales se relacionan con una
pificadas jurídicamente, puesto que es más acción o con el carácter propio de una per-
fundamental para la sociología la acepción sona (Elster, 2002, pp. 328-329).
amplia de las conductas desviadas –ausen-
tes de dicha tipificación– que los delitos. Desde la perspectiva operativa de estos apor-
tes teóricos, se puede señalar teóricamente
Estructura socio-emocional que la estructura socio-emocional de los
individuos (Elster, 2003), está compuesta
Pasando al campo de la Sociología de las por: 1) emociones núcleo, 2) emociones no-
emociones, que brinda un importante es- núcleo y 3) emociones contrafactuales (ver
quema operativo para acercarse al sustrato esquema 1). Sus propiedades se presentan
social de las emociones, se debe señalar que en el orden de 1) lo cualitativo11; 2) lo positivo
al autor elegido no hace una sociología pro- o negativo, o 3) la presencia indiscutible de
piamente de las emociones, pero sí brinda en un objeto intencional: “se sienten por algo”
sus obras importantes elementos para confi- (Elster, 1997, p. 117).
gura un sistema teórico pertinente. Brindada
esta aclaración, lo que se presenta a conti-
11 Es importante señalar que ésta es una propiedad que tiene
nuación es una configuración teórica de los contacto con los estudios psicológicos al respecto de las emo-
elementos importantes y relacionados con ciones, puesto que: “En la actualidad, existe un acuerdo genera-
este tema dentro de la obra de Jon Elster. lizado a la hora de identificar, al menos, dos de las dimensiones
que conforman la estructura afectiva, dimensiones que tienen un
carácter bipolar y que serían, por una parte, la valencia afectiva,
En este sentido, Elster señala que el núcleo que iría desde el placer o agrado hasta el displacer o desagrado,
de los actuales estudios sobre las emociones y por otra parte, el arousal o activación, que iría desde la exci-
tación o alta activación hasta la calma o baja activación” (Pérez,
es la interacción entre emoción y cognición Nieto & González, 2005, p. 142).

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EMOCIONES relacionadas Experiencias personales


NÚCLEO con las corrientes (ACTUALES)

provienen
de las

TIPOLOGÍA componentes EMOCIONES relacionadas Experiencias anteriores,


DE LAS g/les NO NÚCLEO con las futuras o posibles
EMOCIONES

EMOCIONES relacionadas Expresión “pude haber


CONTRAFACTUALES con las sido yo”

Gráfica 2. Adaptación esquemática de la Tipología de las Emociones de Elster.

En este sentido, los diferentes componentes Diseño metodológico


de las emociones, que estructuran social-
mente una emoción particular en los indivi-
El muestreo
duos, se caracterizan así:
Desde éste aspecto de la investigación, se
• Las emociones núcleo o subjetivas: pre- diseñó una estrategia de muestreo polietápi-
sentan una específica estructura perso- co por conglomerados, ya que fue necesario
nal, temporal y modal, que se derivan establecer criterios de representatividad
exclusivamente de las experiencias sub- para todas las unidades primarias de obser-
jetivas de los individuos. vación (universidades) que se encuentran
• Las emociones no-núcleo o intersubje- dentro de los lindes administrativos de la
tivas: se desprenden de las emociones localidad de Chapinero.
núcleo, pero se enfocan en aquellas oca-
siones anteriores, futuras o posibles para Es importante tener en cuenta que la posi-
las emociones núcleo, de la pérdida o ca- bilidad de obtener una gran representativi-
rencia de tales ocasiones o de las expe- dad por localidades demanda un esfuerzo
riencias de otras personas. financiero y humano, que ni siquiera los or-
• Las emociones contrafactuales: surgen ganismos distritales tienen posibilidades de
en la medida en que algo pudo haber emprender12, por lo cual la magnitud de la
sucedido, pero no sucedió y en tanto su muestra (n=160) debe ser valorada por sus
sustento sea la orientación hacia otros. características de representatividad para
cada conglomerado y no por su magnitud.
Por lo anterior, una estructura socioemocio- A su vez, este tamaño muestral está avalado
nal es aquélla que, enfocada en la observa- por la tabla para investigaciones científicas
ción de una emoción particular, el miedo en de Arkin y Colton.
este caso, articula sus componentes desde
las emociones propias de los individuos, 12 “La encuesta de victimización de la Cámara de Comercio es
insuficiente básicamente por volumen muestral, pues se hacen
pasando por las emociones de individuos 1.200 encuestas para una ciudad de veinte localidades, y se
cercanos al primero y, con aquellas emocio- necesitarían 1.000 encuestas en cada localidad para llegar a ser
nes que pueden llegar a vivir tanto el indi- representativa por localidad”. Castillo Jerónimo. Director Obser-
vatorio de Seguridad, Cámara de Comercio de Bogotá. En: Las
viduo particular como los individuos que se Cifras de Seguridad en Bogotá. Serie Mesas de Trabajo Bogotá
relacionan con él. Cómo Vamos (Casa Editorial El Tiempo; Fundación Corona; Cá-
mara de Comercio de Bogotá). No. 20, septiembre, 2006.

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De cada uno de los tres conglomerados (amigos y familiares); además de las creen-
construidos, se eligió por afijación propor- cias generalizadas en los estudios sobre el
cional, un número determinado de univer- tema y la probabilidad de que el encuesta-
sidades y un número específico de estu- do o su entorno social próximo pueda lle-
diantes por cada una de ellas. gar a ser víctima de algún delito. Todo lo
anterior dividido en seis módulos; a saber:
El instrumento el módulo subjetivo, el módulo intersubje-
tivo, el módulo ambientes de riesgo, el mó-
El acercamiento a la población se realizó dulo de estrategias, el módulo creencias y
con base en un instrumento tipo encuesta, el módulo de datos generales. La aplicación
dado que esta investigación buscó describir de dicho instrumento se desarrollo durante
el comportamiento de la categoría miedo al las dos últimas semanas del mes de octubre
crimen, en una población seleccionada, par- de 2008.
tiendo de un análisis exploratorio inicial, que
evidenció la ausencia de investigaciones Se debe señalar que se brindó representa-
que tomen a esta población específica como tividad según el sexo de los encuestados y
objeto de estudio y a la existencia de una según el horario de aplicación del instru-
única investigación en el país, que trabajó mento: diurno y nocturno; atendiendo a la
dicha categoría13, pero cuyo enfoque eco- posibilidad de conocer las respuestas de
nométrico no se consideró pertinente, para los estudiantes de las jornadas nocturnas.
continuar por esta línea. Todo lo anterior, relacionado con los alre-
dedores de la universidad de los estudian-
En este sentido, con base en el marco teórico tes encuestados.
de la estructura socioemocional, se elaboró
un cuestionario, previamente piloteado, di- Es necesario señalar que los datos generales
ligenciado a manera de encuesta-entrevista, o demográficos fueron dejados al final del
en el que se contemplaron dos preguntas instrumento, sobre el supuesto de que el
abiertas y las demás con sus respectivas encuestado considerara que se encontraba
categorías (31 preguntas). Estas últimas frente a un cuestionario “como cualquier
enfocadas en la percepción de seguridad/ otro” y perdiera de entrada la motivación
inseguridad frente a los días de la semana, para diligenciarlo (Babbie, 1996, p. 206); así
la jornada horaria, los ambientes de riesgo, que, con esta estrategia, se intentó comuni-
las estrategias después de alguna situación carle al encuestado que este tipo de pregun-
de delito vivida o presenciada por los estu- tas son más una curiosidad y no un atrevi-
diantes o por sus círculos sociales próximos miento del encuestador (Mayntz, 1983, p.
148).

13 De manera más concreta, esta investigación es considerada


como exploratoria, porque son muy incipientes las investigacio-
Por otro lado, en los datos generales se per-
nes sobre esta categoría y sobre la población de interés; como mitió que los encuestados que quisieran ser
se señaló, existe sólo una investigación de reciente publicación contactados dieran su correo electrónico.
desarrollada por la Universidad de los Andes. Dicha exploración
permitió formular la que se desarrolla más celosamente en este
Se obtuvo el 37,2% de correros electrónicos
documento, convirtiéndose, posteriormente, en una investigación de los encuestados, de los cuales el 15% no
descriptiva, ya que se analiza el comportamiento de una variable fue contactado. El objetivo de este contacto
macro como lo es el miedo al crimen (Medina, 2007).

179
La inseguridad y los entornos universitarios: una lectura desde la población más vulnerable

fue la posibilidad de realizar grupos foca- aplicar el método de análisis de correspon-


les por cada conglomerado, pero los correos dencias múltiples (ACM15) con el software
electrónicos que se contactaron nunca fue- SPAD 5.0, para determinar la importancia y
ron respondidos, a pesar de todas las posi- la pertinencia de las pruebas de asociación
bilidades de lugar, fecha y hora que en él y correlaciones no paramétricas aplicadas,
se brindaron. La razón que se adjudica a lo en las cuales se tuvieron en cuenta variables
anterior, es que el tema de la inseguridad independientes como el sexo, el semestre y
es delicado de tratar para los estudiantes, el estrato; empero, sólo fue explicativa la va-
como lo manifestaron durante el trabajo de riable sexo.
campo.
Por otro lado, las preguntas abiertas se ana-
Fotografías lizaron con el software ATLAS.TI, asiendo
las categorías que se presentaron como im-
No obstante estos avatares inevitables de portantes, según las establecidas en el mó-
la investigación, la estrategia cualitativa no dulo ambientes de riesgo del cuestionario
fue dejada de lado, por sus alcances en los aplicado. Posteriormente, el análisis de re-
procesos investigativos y por la necesidad des categoriales evidenció nodos de mayor
de una triangulación metodológica que este densidad cerca a las universidades que se
objeto de estudio demanda, por lo cual se georeferenciaron ulteriormente. Se debe
tomaron fotografías de los lugares de riesgo resaltar que este tipo de estrategias son pe-
real y riesgo aparente14, señalados como signifi- ticiones distritales hasta el momento solici-
cativos para los tres conglomerados; su análisis tadas por entidades públicas interesadas en
se basó en las categorías brindadas en el instru- la problemática de la inseguridad en Bogo-
mento de observación aplicado para el caso de ta, D.C. (Encuesta de Cultura Ciudadana,
los ambientes de riesgo y no desde otro enfoque 2008).
teórico-analítico (como el semiótico), ya que es
una estrategia subordinada a los hallazgos y a la En estos nodos, que señalaban lugares más o
estrategia general. menos específicos, ya que se solicitó la calle
y la carrera de su ubicación, se tomaron 190
Lo anterior, se articuló con las observaciones en fotografías sistemáticamente los días lunes,
los cuestionarios, los diarios de campo del traba- miércoles y viernes a la misma hora, duran-
jo fotográfico y las entrevistas a expertos de la te el mes de febrero del 2009. Estos días fue-
Alcaldía Local de Chapinero. ron elegidos para poder capturar con la len-
te las variaciones de los ambientes de riesgo
a lo largo de la semana y frente a la jornada
Procesamiento de datos del día que se observó en los resultados del
instrumento.
Los datos obtenidos del instrumento y de
las fotografías tomadas fueron procesados
así: de las preguntas basadas en categorías
se obtuvieron los estadígrafos descripti- 15 Este método es un análisis factorial múltiple en la que cada
“pregunta constituye una variable cuyas modalidades son las
vos e inferenciales respectivos, además de
respuestas propuestas” y se compone por el análisis de indivi-
duos, variables y modalidades de la variable (Escofier & Pagès,
14 Estos términos se aclaran en la presentación de resultados. 1992 pp. 49-53).

180
HALLAZGOS - Revista de Investigaciones • Año 6 - No. 12 • julio-diciembre de 2009

Es necesario aclarar que, dada la longitud de las 6:30 p.m. hasta las 9:00 p.m. aproxi-
entre las calles 45 y 51 por la Carrera 13, lu- madamente. Horario coincidente con el
gar inseguro para la mayoría de estudiantes trabajo de campo inicial de aplicación de
encuestados, se eligieron dos puntos inter- cuestionarios.
medios para ser fotografiados, similares a
los otros puntos señalados, a saber: las ca- Presentación de resultados
lles 47 y 49.
Para esclarecer un poco la siguiente presen-
Así, contemplando las posibles múltiples tación de resultados se debe señalar que se
relaciones entre las categorías en el ámbi- distingue heurísticamente el riesgo real, las
to del análisis cualitativo de la imagen, se situaciones y los lugares en que los encues-
aplicó el método coocurrences, con el fin de tados, sus amigos o sus familiares fueron
generar, desde los solapamientos categoria- víctima de algún delito; del riesgo aparente,
les, supercódigos; es decir, categorías resulta- enfocado en la representación que de la in-
do de la suma de las interacciones entre las seguridad los estudiantes configuran con
categorías de ambientes de riesgo y otras referencia a sus entornos universitarios (ver
emergentes, propias del análisis cualitativo Figura 3). Según el caso y en el momento
(Coulon, 1988). pertinente, estos resultados se relacionan
con los coeficientes de las pruebas de aso-
Por otro lado, se fotografiaron los lugares ciación y de correlación no paramétricas
enunciados durante el día, entre las 12:30 aplicadas, al igual que con las creencias y
a.m. y las 3:00 p.m. y en la noche después estrategias indagadas.

SUBJETIVIDAD REAL
ESTRATÉGIAS

relacionadas
con

SOCIEDAD dar de
MIEDO AL
DEL categorías INTERSUBJETIVIDAD cuenta
CRIMEN tipo
RIESGO del

relacionadas
con

CREENCIAS
AMBIENTES DE RIESGO APARENTE

Gráfica 3. Elementos expositivos de la presentación y del análisis de resultados

181
La inseguridad y los entornos universitarios: una lectura desde la población más vulnerable

Características de los nece al estrato 3 y un 5% al estrato 5. No se


presentaron estudiantes que se adscribieran
encuestados de la población
subjetivamente al estrato 1.

Caracterizando la muestra, del total de en-


cuestados un 49,4% fueron hombres y un Conglomerados
50,6% mujeres, con una edad promedio de
21,7 años, entre los 18,6 y los 24,7 años de Desde el punto de vista del muestreo apli-
edad; no obstante, y a pesar de que la edad cado, la relación de los estudiantes encues-
que divide a la población es de 21 años de tados con el crimen, se presentó una distri-
edad, la edad más frecuente fue de 23 años; bución de las proporciones, según fueron
con tendencia a que se presenten edades víctima de robo o simplemente no fueron
superiores a éstas (coeficiente de asime- víctimas. Con base en lo anterior, la gráfica
tría con una distribución leptocúrtica). Por 4 evidencia una situación manifiestamente
ejemplo, se obtuvieron edades entre 16 y diferenciada entre los tres conglomerados.
37 años de edad, ya que las edades presen-
tan alta dispersión relativa (66%) con res- Así, el conglomerado norte presenta propor-
pecto al promedio. ciones similares entre los estudiantes que
sufrieron de robo (28,2%) y los que no han
Desde la perspectiva del semestre al cual es- sido víctimas (31,3%) cerca de sus univer-
taban inscritos los estudiantes al momento sidades. Mientras que los estudiantes del
de ser encuestados, el 56,3% se encontraba conglomerado centro han sido los menos vic-
cursando entre los semestres II al V; mien- timizados (robo 25%) de la localidad, debi-
tras que los semestres VI al X se distribuyó do a que detentan la proporción más alta de
en el 35% de la muestra. Por otro lado, los estudiantes no victimizados (52,9%).
estudiantes de I semestre sólo representa-
ron el 7,5% de los encuestados. Por otro lado, para el caso del conglomerado
sur, la situación se yuxtapone con respecto
Como última característica, la variable es- al conglomerado centro, en la medida en
trato socioeconómico señala que el 57,5% que es en el que más estudiantes han sido
de los encuestados pertenece al estrato 2, víctima de robo (43,8%), en comparación
mientras que el 26,8% pertenece al estrato con los que no han sido víctima cerca a sus
4. Tan sólo el 9,3% de los encuestados perte- universidades (18,8%).

182
HALLAZGOS - Revista de Investigaciones • Año 6 - No. 12 • julio-diciembre de 2009

Conglomerado Norte

Conglomerado Centro

Conglomerado Sur

0.0 20,0 40,0 60,0

Conglomerado Sur Conglomerado Centro Conglomerado Norte


Ninguno 18,8 52,9 28,2
Robo 43,8 25 31,3

Gráfica 4. Situación delictiva por conglomerado (porcentaje)


Fuente: cuestionario aplicado, octubre 2008

Desde la perspectiva de los días en los cuales los estudiantes sufrieron de robo, el conglome-
rado norte presentó como días álgidos de inseguridad de miércoles a viernes; mientras que
en el conglomerado centro es evidente que el viernes es el día en el que la mayoría de los estu-
diantes fueron víctima de robo. En cambio, el conglomerado sur presenta que el miércoles es el
día más inseguro, lo que lo convierte en el día en el que la mayor proporción de estudiantes
ha sufrido de robo, particularmente (ver gráfica 5).

50
45
40
35
30
25
20
15
10
5
0
Lunes Martes Miércoles Jueves Viernes Sábado

SUR CENTRO NORTE

Gráfica 5. Día en el que sufrió el delito por conglomerado


Fuente: cuestionario aplicado, octubre 2008.

Desde el vértice de la jornada en la que los robo, la situación presenta mayor homoge-
estudiantes fueron víctimas del crimen cer- neidad (ver gráfica 6).
ca a sus universidades, particularmente de

183
La inseguridad y los entornos universitarios: una lectura desde la población más vulnerable

Así, en los conglomerados norte y sur las situaciones de crimen se presentaron tanto en la jor-
nada del día como en la noche; mientras que, es evidente, en el conglomerado centro el crimen
se presentó, en su mayoría, durante la noche.

Gráfica 6. Jornada en la que ocurrieron los delitos por conglomerado (porcentaje)

100
90
80
70
60
Día
50
40 Noche
30 Ambas
20
10
0
SUR CENTRO NORTE

Fuente: cuestionario aplicado, octubre 2008.

Por lo anterior, se puede decir que el conglo- Con respecto a los lugares que relacionan
merado norte se caracteriza por haber tenido los hechos en los que ocurrieron los crime-
una proporción relativamente similar entre nes, se puede obervar que no existe un lugar
el número de estudiantes que sufrieron de en el que los hechos delictivos se relacionen
robo y aquéllos ajenos a la dinámica crimi- entre los conglomerados norte y centro con el
nológica cerca de sus universidades. Los es- conglomerado sur (ver red categorial 1).
tudiantes fueron víctima de dicho crimen, a
lo largo de la semana, durante los días miér- Esto quiere decir que con referencia a las
coles, jueves y viernes, distribuidos de ma- universidades que conforman el conglomera-
nera homogénea durante la jornada diurna do sur existieron sólo dos lugares comunes
y nocturna. en los que los estudiantes fueron víctima de
la criminalidad: el primero, relacionado con
Por otro lado, el conglomerado centro se ca- la calle 45 con carrera 13, en el que los es-
racteriza por tener a los estudiantes menos tudiantes de las universidades Santo Tomás
victimizados de la localidad, aunque se debe (Sede central), Javeriana y Piloto, vivieron
señalar que los que sufrieron de robo lo fue- o presenciaron robos; esta última universi-
ron durante el día en la jornada nocturna. dad también se relaciona con el Politécnico
Grancolombiano con respecto a la calle 51
Finalmente, el conglomerado sur presenta la con carrera 13.
más alta proporción de víctimas de robo,
con una distribución horaria de manera Desde los lugares que relacionan los conglo-
más o menos homogénea para ambas jor- merados centro y norte, se presentaron tres
nadas y, con una actividad delictiva mayor lugares delictivos, dos de ellos vinculados
durante el miércoles. a tres universidades. Así, los estudiantes de

184
HALLAZGOS - Revista de Investigaciones • Año 6 - No. 12 • julio-diciembre de 2009

las universidades Pedagógica Nacional y y Monserrate, al mismo tiempo que los es-
Monserrate, vivieron o presenciaron robos tudiantes de la EAN comparten lugares de
en la calle 72 con carrera 9; mientras que en alta inseguridad con éstas dos últimas uni-
la calle 72, en general, relaciona a las univer- versidades, ya que vivieron o presenciaron
sidades Central, Santo Tomás (Sede norte) robos en la calle 72 con carrera 11.

Red categorial 1. Lugares en los que vivieron o presenciaron el robo los estudiantes cerca a sus
universidades por conglomerado.

Fuente: cuestionario realizado, octubre de 2008

Estos datos permiten identificar nodos y Cómo se puede apreciar, son áreas y nodos
áreas de riesgo real, por calles y carreras, en que presentan bastante proximidad espacial
las cuales los estudiantes vivieron o presen- con respecto a la mayoría de universidades
ciaron los robos según los conglomerados; y otros establecimientos de educación supe-
en el caso del conglomerado sur, la carrera 13 rior de la localidad de Chapinero.
entre las calles 45 hasta la calle 51. Para el
caso de los conglomerados centro y norte, los Riesgo aparente por
vincula tan sólo un lugar de crimen, pero
inmerso en el área en la que los estudiantes conglomerados
vivieron o presenciaron los robos, que tiene
como eje la calle 72, entre la carrera 9 con la Desde la perspectiva general del riesgo
carrera 11. aparente por conglomerados, el hallazgo
del análisis de correspondencias múltiples
(ACM) permite presentar de manera dife-

185
La inseguridad y los entornos universitarios: una lectura desde la población más vulnerable

renciada, la relación que cada conglomera- Desde la parte inferior de la horizontal, los
do tiene con la percepción de seguridad/ conglomerados centro y sur –con mayor ten-
inseguridad que le genera los días de la dencia el conglomerado sur– se presenta
semana y la jornada horaria, de manera una percepción de seguridad/inseguridad,
relacional. distribuida en pares opuestos, según la ca-
lificación que le dieron los estudiantes a los
Como se representa en el gráfica 9, cerca a la días de la semana. Por ello, en este círculo
intersección entre factores se evidencia una se representan categorías opuestas para un
relación del conglomerado norte con la per- mismo día. No obstante, entre ambos círcu-
cepción de mayor inseguridad de toda la los de variables y sus respuestas propuestas,
localidad, para todos los días de la semana. existe una proporción identificable que pre-
Con una evidente diferencia con los otros senta una percepción moderada en las cali-
dos conglomerados. ficaciones de seguridad/inseguridad que les
genera los días de la semana (círculo negro).

Factor 2
Ma Muy inseguro

1.50

Mi Muy inseguro
Ambas
L Muy inseguro

Lunes
J Muy Inseguro

0.75

S Muy inseguro

L Seguro/Inseguro
V Muy inseguro Norte
J Inseguro missing category
Ma Seguro/Inseguro S Seguro
Martes
Mi Seguro/Inseguro
0
V Seguro
S Seguro/Inseguro Centro
Persecución/amenaza Ma Seguro
Noche Mi Muy seguro
Miércoles J Seguro
Mi Inseguro L Seguro Sur
Sábado Mi Seguro
Ma Muy seguro
J Seguro/Inseguro
L Muy segu S Inseguro
Viernes Ma Inseguro
S Muy Seguro J Muy seguro
Día L Inseguro
V Seguro/Inseguro V Inseguro
Jueves
-0.75 V Muy seguro

Lesion personal
-0.50 -0.25 0 0.25 Factor 1

Gráfica 7. Percepción de seguridad/inseguridad que genera los días de la semana y la jornada horaria a los
estudiantes por conglomerado.

Fuente: cuestionario realizado, octubre de 2008

Por otro lado, el día de menor importancia momentos en que los estudiantes fueron
para la configuración de los factores del víctimas o presenciaron delitos, en la confi-
ACM es el lunes y la opción de jornada ho- guración de su percepción social. Por ello se
raria “ambas”, por lo cual son contunden- relacionan fuertemente las variables de los
tes las jornadas diurna y nocturna, de los demás días de la semana (martes a viernes)
con dichas jornadas.

186
HALLAZGOS - Revista de Investigaciones • Año 6 - No. 12 • julio-diciembre de 2009

Riesgo real caso de la amenaza, que no ha sido trabaja-


da en otros estudios, ya que es una conducta
Pasando a los resultados agregados, se debe desviada y no un delito definido legalmente
comenzar por señalar que desde el compo- (gráfica 8).
nente del riesgo real de la estructura socioe-
mocional de los estudiantes encuestados Estos tres crímenes han afectado a los es-
de la localidad de Chapinero, la actividad tudiantes a lo largo de ambas jornadas
delictiva de sus entornos universitarios evi- horarias, es decir, desde la jornada diurna
dencia que se presenta una mayor propor- (31,5%) hasta la jornada nocturna (65,8%),
ción de robos, de amenazas y de lesiones con una particular distribución a lo largo
personales; esto permite ampliar el espectro de los días de la semana, pues son los días
criminológico de la población para contem- miércoles (28,8%), jueves (23,3%) y viernes
plar componentes particulares, como es el (26%), los de mayor inseguridad real para
los encuestados.

60

50

40

30

20

10

0
Robo Ninguno Lesión Amenaza Homicidio Persecu- Robo de Violación
personal sión moto o
auto
% 41,3 53,8 2,5 1,9 0,0 0,6 0 0

Gráfica 8. Delitos presenciados o vividos por los estudiantes

Fuente: cuestionario realizado, octubre de 2008

Elementos que se espacializan, en términos educación superior, alta densidad de po-


de la ubicación de los lugares de riesgo real, blación flotante, presencia de vendedores
hacia calles y carreras específicas, como lo informales y permanencia de estudiantes
son: la esquina de la Universidad Pedagó- universitarios, hasta altas horas de la noche.
gica Nacional, calle 72 con carrera 11, y la Fenómeno que presenta un aumento signi-
Carrera 13, entre las Calles 45 y 52. Lugares ficativo, durante la semana, los viernes (ver
caracterizados por la cercanía de centros de figuras 1 y 2).

187
La inseguridad y los entornos universitarios: una lectura desde la población más vulnerable

Figura 1 Figura 2

En la calle 51 con carrera 13, salida de la Uni- La calle 51 con carrera 13, salida de la Uni-
versidad Santo Tomás (sede principal), se versidad Santo Tomás (sede principal), se
presentan los lunes en la noche las siguientes presentan los viernes en la noche las siguientes
características: bajo flujo peatonal, ausencia características: alto flujo peatonal, aglomera-
de aglomeraciones y bajo número de vende- ciones y mayor presencia de vendedores ca-
dores callejeros. Además, se debe señalar la llejeros. Además, se debe señalar la ausencia
presencia de una patrulla de la policía de la de la patrulla de la policía de la localidad pre-
localidad al frente de la Universidad. sente el día lunes.

Gráfica 9. Fotografías de la calle 51 con carrera 13. Puerta de salida de la Sede Principal de la Universidad
Santo Tomás.

Fuente: trabajo de campo fotográfico, febrero de 2009

No obstante, esto no es suficiente, por lo comparten características generacionales


que se debe indagar por la estructura inter- con los encuestados, ya que dichos familia-
subjetiva de los estudiantes encuestados, la res presentaron una relación de hermanos o
cual evidencia que esta actividad delictiva de primos con el estudiante encuestado. La
descrita también afecta a sus familiares y a segunda diferencia se relaciona con la alta pro-
sus amigos, aunque con diferencias entre porción de amenazas y lesiones personales
uno y otro círculo social próximo, como se que sufrieron los amigos de los estudiantes
definen aquí. (ver gráfica 7), mucho más que la vivida por
el propio encuestado, éstas se presentaron,
La primera diferencia se relaciona con la baja predominantemente, durante la jornada
proporción de familiares víctima de robo nocturna (66,3%), distribuidos durante los
(16,5%), en las cercanías a las sedes de es- días de la semana miércoles (26,7%), jueves
tudio de los estudiantes encuestados y que (21,8%) y viernes (29,7%).

188
HALLAZGOS - Revista de Investigaciones • Año 6 - No. 12 • julio-diciembre de 2009

Gráfica 10. Delitos sufridos por amigos de los estudiantes (porcentaje)

70
60
50 61,6
40
30 36,5
20
10 1,3 0,6
0
Robo Ninguno Amenaza Lesió
personal

Fuente: cuestionario realizado, octubre de 2008

Describiendo un poco más la situación de Riesgo aparente: estructura


la intersubjetividad, los familiares y ami-
socioemocional
gos de los encuestados fueron víctimas de
robos, amenazas o lesiones personales par-
En este sentido, el componente del riesgo
ticularmente durante la jornada nocturna,
aparente de la estructura socioemocional
con un incremento desde el miércoles hasta
que se ha configurado en los estudiantes
el viernes.
encuestados está influenciado por los crí-
menes vividos por sus familiares y sus ami-
Sin embargo, dado que este es el factor
gos, en cuanto a lo que podría llegar a vivir en
real que la estructura socioemocional de
los entornos de sus universidades, ya que se
los estudiantes le brinda al sentimiento de
comienza a evidenciar la creencia de que son
inseguridad/seguridad frente a los días, la
el robo, la amenaza y la lesión personal los
jornada horaria, el robo, la amenaza y las
crímenes con los que se puede enfrentar el
lesiones personales y los ambientes de ries-
estudiante y sus círculos sociales próximos,
go que a ellos les afecta negativamente, es
cerca a los centros educativos de la locali-
necesario tener en cuenta otro elemento in-
dad de Chapinero (ver tablas 3, 4 y 5).
terno de dicha estructura: las emociones con-
trafactuales. Lo anterior permite señalar con
Tabla 3. Jerarquía de los delitos que los
rigor una estructura socioemocional, pues estudiantes podrían vivir (%)
se contemplan todos sus componentes y Delito Percentil
todas sus posibles relaciones. Por otro lado,
Robo 100%
este componente se relaciona con otros del
Lesión personal 80%
riesgo aparente, a saber: las estrategias (meca-
Amenaza 60%
nismo racional) y las creencias generalizadas
Persecución 40%
de los estudios sobre miedo al crimen.
Robo de moto o auto 20%
Homicidio 0%

189
La inseguridad y los entornos universitarios: una lectura desde la población más vulnerable

Dicha creencia, que subyace a la estructura so-


Tabla 5. Jerarquía percentílica de los delitos
posibles en los amigos de los estudiantes cioemocional, también recibe elementos para
su configuración de la jornada nocturna y de
Delito Percentil
las expectativas de inseguridad, distribuidas a
Robo 100%
lo largo de la semana, de manera ascendente
Lesión personal 83%
desde el miércoles hasta el viernes, lo cual es
Amenaza 67% consistente en el tiempo (ver gráfica 11).
Robo de moto o auto 33%
Persecución 33% Por otro lado, la formación de esta creencia
Homicidio 17% particular, también se relaciona con las ana-
Violación 0% lizadas en la investigación y que se constru-
yeron sobre la base de las hipótesis16, pro-
ducto de investigaciones internacionales
Tabla 4. Jerarquía percentílica de los delitos
posibles en los familiares de los estudiantes sobre esta categoría, a saber:
Delito Percentil
Robo 100% • Las mujeres tienen más miedo en la calle
que los hombres,
Lesión personal 83%
• Las personas mayores presentan más
Amenaza 67%
miedo en las calles que las personas jó-
Homicidio 17%
venes,
Robo de moto o auto 17% • El estado de las calles puede influir en la
Persecución 17% percepción del miedo y,
Violación 0% • Los medios de comunicación influyen
Fuente: cuestionario realizado, octubre de 2008 en la percepción del miedo.

16 A las que se hizo alusión, anteriormente, en el Marco Teórico.


10
9
8
7 Muy Inseguro
6 Muy Seguro
5
4
3
2
1
0
Lunes Martes Miércoles Jueves Viernes Sábado

Gráfica 11. Percepción de seguridad/inseguridad según los días de la semana (porcentaje y calificación
extrema de la escala)

Fuente: cuestionario realizado, octubre de 2008

16 A las que se hizo alusión, anteriormente, en el Marco Teórico.

190
HALLAZGOS - Revista de Investigaciones • Año 6 - No. 12 • julio-diciembre de 2009

Esta creencia emergente, frente a la etiolo- Riesgo aparente: ambientes de


gía delictiva en los entornos universitarios,
riesgo
se ve influenciada porque las mujeres, las
personas mayores y los mass media influyen
Con respecto a los módulos ambientes de ries-
significativamente17 en las expectativas de in-
go de los estudiantes se presentaron dos
seguridad de los estudiantes. No obstante,
grupos diferenciados de ellos, desde algu-
no se evidencia influencia de la hipótesis
nas características propias del mobiliario
relacionada con el estado que presentan las
urbano hasta otras como las sociales, confi-
calles, en particular, con su deterioro o la
guradas por el estigma18, que podrían gene-
presencia de basuras en ellas, como se re-
rar sentimiento de inseguridad/seguridad
fleja en los ambientes de riesgo ecológicos.
en los encuestados.

17 Los criterios de muy bajo, bajo, medio, alto y muy alto de la 18 El término estigma hace referencia a un atributo profundamente
escala aplicada dependen de la creencia a la cual el encuestado desacreditador, es:”una clase especial de relación entre atributo
debe responder; correlación explicada en un 61% (V Kramer = (es decir, identidad social) y estereotipo (como debe ser deter-
0,61). minados ciertos individuos)” (Goffman, 2001, pp. 12-14).

Demasiado
Cajeros
peligroso
Puentes Muy peligroso

Parques Moderadamente
peligroso
Bares/
Poco Peligros
Calles
Nada Peligroso
Calles sucias

Falta de

Callejones

0,0 5,0 10,0

Gráfica 12. Ambientes de riesgo (mobiliario urbano) para los estudiantes (porcentaje)

Fuente: cuestionario realizado, octubre de 2008

191
La inseguridad y los entornos universitarios: una lectura desde la población más vulnerable

Como se observa en la gráfica 13, entre los En este sentido, el espectro de la proble-
ambientes de riesgo con porcentajes más mática de la población más victimizada se
bajos de inseguridad (nada peligroso), se amplía, pasando de permitir evidenciar
encuentran sólo las calles sucias, por el con- otros delitos que les afecta a los estudiantes
trario, los ambientes de riesgo considerados (lesión personal y amenaza) a subrayar las
como los más inseguros son: los callejones, condiciones urbanas que a esta población
la falta de luminosidad, los puentes, los cajeros le generan expectativas de inseguridad, brin-
automáticos, los bares/discotecas. dándole un vínculo ecológico-urbanístico
directo con el grupo social general, de la lo-
Este resultado es importante, en la medida calidad de Chapinero y del distrito capital.
en que estas expectativas de inseguridad
frente a tales ambientes de riesgo urbanos Desde la misma perspectiva de los ambien-
presenta una relación bastante cercana a tes de riesgo, los ambientes caracterizados
los ambientes de riesgo urbanos detectados como sociales (tabla 5), los estudiantes se-
para la localidad de Chapinero, ya que se ñalan, en general, una tendencia a calificar
asocian con: las calles y el espacio público con como moderadamente peligroso o demasiado
establecimientos comerciales (CCB, 2008). Por peligroso a la mayoría de los sujetos sociales,
lo anterior, un 81% de los criterios emitidos con una proporción de un 87%.
por los estudiantes se inclina por adjudicar
que, con respecto a todos los ambientes de Proporción compuesta, particularmente,
riesgo, las expectativas de inseguridad los por las altas expectativas de inseguridad que
señalan como moderadamente peligroso o de- para los estudiantes representan las pandi-
masiado peligroso. llas, la ausencia de personas y los habitantes de
calle. Otra categoría, como aglomeraciones,
También es importante señalar, con respec- es calificada como muy peligrosa.
to a los anteriores ambientes de riesgo, que
se presenta una dependencia significativa Estos resultados también permiten señalar
(p=0,00; α=0.05) entre los criterios de dema- que, para los estudiantes de la localidad de
siado peligroso, muy peligroso, moderadamente Chapinero, los vendedores callejeros son suje-
peligroso, poco peligroso y nada peligroso, con tos sociales que les generan expectativas de
respecto al ambiente de riesgo señalado19. inseguridad moderada y, particularmente, la
presencia de grupos de jóvenes como aquella
19 Asociación que tiene un poder de predictibilidad bastante alto (V categoría menor impacto negativo tiene en
Kramer=1,25) y que señala que dichos criterios son confiables y
con alta probabilidad de consistencia en el futuro. sus expectativas de inseguridad.

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Presencia de jóvenes Demasiado peligroso

habitantes de la Calle Muy peligroso

Aglomeraciones Moderadamente
peligroso
Ausencia de Personas Poco Peligroso

Pandillas Nada Peligroso

Vendedores callejeros

Recicladores

0,0 5,0 10,0 15,0

Gráfica 13. Ambientes de riesgo sociales para los estudiantes (porcentaje)

Fuente: cuestionario aplicado, octubre 2008.

En este tipo de ambientes de riesgo se pue- y nada peligroso, de los ambientes de riesgo
de evidenciar dos puntos más de vinculación dados con las expectativas de inseguridad de
entre la condición particular de este grupo los encuestados20.
poblacional joven-estudiante, con respecto
al grupo social general. Como corolario, estos vínculos del segmen-
to poblacional denominado como jóvenes-
El primer vínculo está relacionado con las estudiantes que presenta con la población
pandillas y la presencia de habitantes de calle, general, evidencian que la actividad crimi-
que es un factor relevante para la insegu- nológica de la localidad de Chapinero no
ridad de los habitantes de los barrios de la afecta diferencialmente a la población, sino
localidad de Chapinero (CCB, 2008). El se- que es la población la que afronta de mane-
gundo vínculo se relaciona con la presencia ra diferencial dicha actividad criminal. Lo
de grupos que, desde la perspectiva social anterior es corroborado por las estrategias
general, entendido como el distrito capital y que los estudiantes encuestados han confi-
especialmente los habitantes de la localidad gurado, después de una situación de crimen
es considerada una causa del aumento o de de ellos o de sus familiares u amigos, para
la permanencia de la situación de inseguri- evitar ser víctima de esta problemática en
dad que se vive en la ciudad (CCB, 2008). sus entornos universitarios.

Con respecto a los anteriores ambientes de


riesgo de tipo social, es importante señalar
que también se presenta una significativa
20 Asociación que tiene un poder de predictibilidad de 97% (V
dependencia (p= 1,067E-207; α=0.05) entre Kramer=0,97), lo que es bastante alto y permite señalar que las
los criterios demasiado peligroso, muy peli- posibles medidas adoptadas relacionadas con estos ambientes
de riesgo podrán presentan consistencia y confiabilidad para las
groso, moderadamente peligroso, poco peligroso
estrategias preventivas que sean diseñadas.

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La inseguridad y los entornos universitarios: una lectura desde la población más vulnerable

Riesgo aparente: estrategias (mecanismo Con base en lo anterior, se evidencia que


racional) frente al crimen del robo, los estudiantes
encuestados han adoptado estrategias mate-
Desde el vértice de las estrategias que los riales, evitando salir con sumas altas de dine-
estudiantes han adoptado, según la estruc- ro, con joyas o con tarjetas de crédito o débito.
tura socioemocional que se ha configurado De la misma manera, las otras estrategias
en ellos, se observa la creencia particular que elaboradas se relacionan, presumiblemen-
permite que sus expectativas de seguridad te, no sólo con el robo, sino también con las
aumenten en la medida en que se adopten amenazas y las lesiones personales, puesto
determinadas estrategias para evitar la cri- que los estudiantes buscan evitar el lugar,
minalidad de sus entornos universitarios cambiar sus rutas o salir acompañados (estra-
(gráfica 12); ya que, recuérdese, es la pobla- tegias adaptativas). Dicha adaptación preva-
ción que detenta la menor percepción de in- lece en comparación con las estrategias que
seguridad de toda la ciudad. demanda de los estudiantes evitar salir en las
noches, pasar más tiempo en la casa o cambiar
sus horarios (estrategias evitativas).

Evitar salir con joyas 10,7


Estrategias
Materiales
Evitar salir con T. de Crédito/Débito 9,5

Evitar salir con sumas altas de dinero 14,6

Enfrentar la situación 7,9

Pasar más tiempo en la casa 3,2

Evitar salir en las noches 5,9 Estrategias


Evitativas
Cambiar horarios 4,0

Cambiar rutas 12,1


Estrategias
Adaptativas Salir acompañado 14,6

Evitar el lugar 17,3

0,0 2,0 4,0 6,0 8,0 10,0 12,0 14,0 16,0 18,0 20,0

Gráfica 14. Estrategias de los estudiantes para evitar los delitos

Fuente: cuestionario realizado, octubre de 2008

Por otro lado, de la misma manera como el En consecuencia, se percibe una asociación
riesgo real se espacializa, el riesgo aparente de lugares que se vinculan con un número
también lo hace y revela que existen más lu- mayor de universidades que en el caso de
gares en los cuales los estudiantes encuesta- los lugares de riesgo real. Así, es importan-
dos presentan expectativas de inseguridad ele- te resaltar el caso de la avenida caracas, la
vadas, que se relacionan con sus entornos carrera 7, la carrera 13, la calle 76 con ca-
universitarios (ver red categorial 2). rrera 13, la calle 72 con 11, Cuatro Parques,

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Lourdes y las estaciones de Transmilenio, de ambientes de riesgo aparente generales,


en general (para el conglomerado centro y por la densidad de nodos conectados entre
norte) como nodos representativos de los ellos; por ejemplo, la carrera 13 entre calles
lugares de riesgo aparente de los estudian- 45 y 51 (con base en la red categorial 1), la
tes encuestados. Se resaltan como lugares avenida caracas y la calle 72 con carrera 11.

Red categorial 2. Lugares de riesgo aparente en las cercanías de la universidad

Fuente: cuestionario realizado, octubre de 2008

Dichos lugares, a pesar de su ambigüedad Análisis


o imprecisión, se encuentran relacionados
con aquellos lugares en los que, efectiva-
Estructura socioemocional,
mente, los estudiantes fueron víctima de la
criminalidad en sus entornos universitarios. estrategias y ambientes de riesgo
Tal es el caso de la carrera 13 y las cercanías
a la calle 72. Desde la categoría de la estructura socioe-
mocional, específicamente el componente
No obstante, esta racionalidad no permi- de las emociones núcleo, se presenta en los es-
te brindar elementos explicativos iníciales tudiantes una influencia en la configuración
para el otro componente de la disonancia de la emoción del miedo frente a tres críme-
que caracteriza a este segmento de pobla- nes en la cercanía de sus universidades: el
ción objeto de indagación: la mayor victimi- robo, la amenaza y la lesión personal. Crí-
zación. Por tantop, se debe indagar por el menes que les afectan durante ambas jor-
orden social que representan los estudiantes nadas horarias diurna y nocturna, y, en ma-
encuestados de sus entornos universitarios yor medida, durante el viernes. Emociones
en la localidad de Chapinero. nucleares o subjetivas que están presentando
un nexo socio-espacial significativo, pues

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La inseguridad y los entornos universitarios: una lectura desde la población más vulnerable

dichos lugares hacen parte de los entornos largo de la estructura socioemocional de los
universitarios de los estudiantes. estudiantes con el despliegue de un meca-
nismo racional, caracterizado por las estrate-
Desde esta misma perspectiva, el compo- gias adoptadas que les permiten a los estu-
nente no-nuclear o intersubjetivo de la emo- diantes universitario evitar la criminalidad
ción del miedo de los estudiantes presenta de sus entornos universitarios y continuar
una influencia de mayor impacto en su vida con su vida cotidiana, que se desarrolla en
cotidiana, ya que fortalece la influencia en la los días, en las jornadas y en los lugares
estructura de estos tres crímenes señalados percibidos y reales como los de evidente
y además la de los días de la semana más in- inseguridad.
seguros, desde el miércoles hasta el viernes.
También, define la percepción de inseguri- No obstante, esta racionalidad sólo brinda
dad que, en general, les genera la jornada elementos explicativos iníciales para un
horaria nocturna. componente de la disonancia que caracteri-
za a este segmento de población: la mayor
Finalmente, con respecto al componente con- percepción de seguridad de toda la ciudad.
trafactual o probable de la estructura emocio-
nal de los estudiantes, se puede evidenciar Orden social empírico
la creencia que son el robo, la amenaza y la
lesión personal, los crímenes con los que se En razón a la ausencia de tentativas res-
puede enfrentar, el propio estudiante y sus puestas al componente de mayor victimi-
círculos sociales próximos, en los entornos zación que proporciona la disonancia enun-
universitarios de la localidad de Chapinero. ciada, por un lado, y los análisis anteriores
y el sentimiento de seguridad/inseguridad
Lo que desencadena una tentativa regulari- que el miedo al crimen real y aparente gene-
dad que se desplaza desde la subjetividad, ra en las expectativas de inseguridad de los es-
pasando por la intersubjetiva hasta llegar tudiantes, por el otro, es necesaria la inter-
a la contrafactualidad emocional de los es- pretación de la representación que del orden
tudiantes, relacionada con la criminalidad social se hacen los estudiantes en el contexto
durante los días de la semana y durante la de las prácticas que definen su vida cotidia-
jornada de mayor inseguridad para ellos. na en sus entornos universitarios.

En consecuencia, esto fortalece las estrate- Para esto, se debe partir de la idea de que el
gias que los estudiantes configuran para orden social representado por los estudian-
afrontar el crimen de sus entornos univer- tes es, de hecho, de alta criminalidad, en el
sitarios, en la medida en que le brinda ele- cual, entre las expectativas de seguridad de los
mentos que solidifican su percepción social estudiantes con respecto a las expectativas
(Markovsky, 2000) y, por tanto, sus expec- de los otros (sean éstos delincuentes o des-
tativas de seguridad, según esta regularidad viados o de otra clase), existen niveles de
enunciada. incertidumbre en los juicios de probabilidad
objetiva que cada individuo puede hacer con
Lo anterior se puede vincular, en la medi- respecto a su seguridad.
da en que la transición que se presenta a lo

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HALLAZGOS - Revista de Investigaciones • Año 6 - No. 12 • julio-diciembre de 2009

Así, el orden social empírico que se represen- son predominantemente las adaptativas y
tan los estudiantes encuestados se compone las materiales, en menor medida las evitati-
de la creencia en las expectativas de inseguridad vas, las elegidas por esta población.
de los estudiantes que les generan el actuar
de los delincuentes y de otros desviados en Por otro lado, este tipo de actividades es
el contexto criminológico que se define por la el mejor objeto de imputación causal para
variación de los días de la semana, la jornada considerar que, la amenaza, que es una con-
horaria y los tres crímenes señalados. ducta desviada particular de este segmento
poblacional, afecte sus interacciones socia-
Dichas inseguridad es aminorada por las les, dada la confluencia de fines de todos los
expectativas de seguridad que los estudiantes jóvenes.
configuran y que se manifiestan en las es-
trategias racionales adoptadas y en la iden- No obstante, el hecho de que estas prácti-
tificación general de los ambientes de riesgo cas de ocio de los estudiantes se desarrollen
cerca a sus entornos universitarios; en los durante las características del denominado
que los estudiantes de la localidad de Cha- contexto criminológico, deviene un cambio en
pinero pasan la mayor parte de su tiempo la interpretación de tales acciones sociales ra-
social (Muñoz & Clavijo, 2007). Estos ele- cionales iníciales, pues se presenta una tran-
mentos y las creencias de los estudiantes les sición hacia acciones sociales condicionadas
permiten percibir la fluidez del orden social por la convención, ya que presentan un arrai-
empírico para desenvolverse en él. go duradero en esta población (recuérdese
que es la población históricamente más vic-
Lo anterior quiere decir que en dicho orden timizada), dada las posibles sanciones socia-
representado por la comunidad de jóvenes, les que podrían recibir de la comunidad de
se evidencia una transición que pasa de un jóvenes, aquellos estudiantes que no acojan
uso a una convención, pues, a pesar del alto estas prácticas, pues no cumplen con las ex-
nivel de probabilidad de las expectativas de pectativas que definen su estilo de vida.
inseguridad de los estudiantes que se pre-
senten durante dicho contexto criminal, la De esta manera, su orden social empírico de-
mediación de las acciones sociales raciona- viene convencional, dejando la racionalidad;
les que despliegan en estrategias adaptativas en el imperativo como-si aumenta al máximo
para evitar ser víctimas del crimen, no es las expectativas de seguridad de los estudian-
suficiente para que disminuya su alta pro- tes encuestados, dada la generalización de
porción de victimización. las prácticas en el interior de la comunidad de
jóvenes, y explica el porqué las estrategias ra-
Dicha acción racional general de los estu- cionales que los estudiantes adoptan no son
diantes, que los lleva a construir estas estra- suficientes para evitar la criminalidad de sus
tegias, tiene como fin las actividades de ocio entornos universitario y sólo influyen en que
–aquéllas diferentes a las que definen el es- su percepción de inseguridad sea menor.
tudio o el trabajo, y que genera placer en los
individuos– (Muñoz & Clavijo, 2007), para Por todo lo anterior y dada la construcción
el cual sus medios son dichas estrategias po- racional de estrategias de los estudiantes, que
sibles adoptadas por los estudiantes, pues evidencia una racionalidad diferencial entre los

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La inseguridad y los entornos universitarios: una lectura desde la población más vulnerable

estudiantes con respecto a la generalidad Las sanciones del orden social convencional de
de la población, pues éstos no se segregan la comunidad de los jóvenes, están primando
ecológicamente (Alvira et ál., 1982), se pue- en sus vida cotidianas, puesto que les brinda
de evidenciar que en el orden social empírico, la expectativa generalizada que la racionali-
representado en las expectativas de seguridad dad les va a permitir sobreponerse a la inse-
de los estudiantes, permanece la costumbre guridad de sus entornos universitarios. Evitar
de enfrentar las probabilidades de inseguri- dichas sanciones es un excelente insumo para
dad del contexto criminológico de sus entornos reconocer el otro componente de la disonan-
universitarios, al mismo tiempo, que sobre- cia, la mayor victimización de los jóvenes, ya
llevan la sanción que la convención de reali- que estas prácticas de sus estilos de vida les
zar y cumplir con las prácticas de ocio que su expone en mayor medida a las actividades
comunidad de jóvenes les demanda. criminales de la localidad de Chapinero.

Por lo tanto, son las acciones sociales con Así, a manera de conclusión general y brin-
acuerdo a valores –dentro de la represen- dando elementos para comprender el ma-
tación mental que los jóvenes tienen de ser yor nivel de victimización y la baja percep-
joven–, diferenciales con el grupo social ge- ción de inseguridad de los estudiantes con
neral, las que subyacen a la persistencia de respecto a sus entornos universitarios, pue-
realizar dichas actividades de ocio durante de ser comprendida la disonancia que les
lo momentos más inseguros de la semana. caracteriza, con base en que los estudiantes
Este valor, posiblemente, es el de la libertad universitarios se representan en el orden
por encima del de la vida u otro posible, social empírico; esto es una generalización
quizás de carácter material, que puede re- que se presenta en toda la comunidad de
presentar a la población general, pues es la jóvenes sobre sus expectativas de seguridad, lo
que se margina ecológicamente como con- cual los lleva a actuar sobre principios racio-
secuencia de la criminalidad en la ciudad. nales y les configura una baja percepción de
inseguridad; sin embargo, sus actividades
Profundizando en las consecuencias de este de ocio, las cuales definen el estilo de vida
valor diferencial, el valor de la libertad, que se de la comunidad de jóvenes, les lleva a habi-
considera en este segmento de la población, tar la ciudad y apropiársela, pero, al mismo
produce no una marginación o segregación tiempo, a exponerlos frente a la mirada de los
ecológica de los estudiantes, sino que, por el otros, los delincuentes, cuyas expectativas
contrario, los traslada a la apropiación de la sobre la población de estudiantes detentan
ciudad en un habitar-la, existir en ella y en un mayor nivel de racionalidad por los fines
los lugares que se construye en sus prácticas y medios que éstos se representan.
(parques, esquinas, calles y carreras especí-
ficas, entre otras) como comunidad de jóve- Dichos elementos son los que brindan el
nes, que les brindan los elementos identita- mayor poder de imputación causal para
rios necesarios que definen este segmento de comenzar a comprender ampliamente, sin
población para vivir en la “tierra de nadie so- estigmatizar, la disonancia enunciada que
cial”, pues es una posición social estructural caracteriza a este segmento poblacional.
transicional dentro de la sociedad bogotana
general (Bourdieu, 2002).

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