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1. SIENDO EJEMPLO PARA SU FAMILIA. Rut 4: 12 Y sea tu casa como la casa de Fares, el que Tamar
dio a luz a Judá, por la descendencia que de esa joven te dé Jehová.
El comenzó a escribir su propia historia y a dejar una alta marcar de valores en su familia y su nación. Fue
tanto lo que su ejemplo hizo en Israel que, termino siendo un deseo de bendición de los ancianos de su
pueblo para Booz y Rut.
Ciertamente ningún padre nace con un manual de instrucciones, ni con soluciones precisas para educar
o criar a sus hijos. Pero la gran mayoría, desea ser buenos padres para sus hijos, amarlos y darles un
buen ejemplo. La Biblia comparte la historia de un varón llamado Manoa quien es visitado por un ángel
que le anunció que Dios le iba dar un hijo.
Dice Jueces 13:12: “Entonces Manoa dijo: cuando tus palabras se cumplan, ¿cómo debe ser la manera
de vivir del niño, y qué debemos hacer con él?” Este versículo nos muestra:
La fe que tiene un matrimonio ante el anuncio de que serían padres. Fe, porque la esposa de
Manoa era estéril. Sin embargo, ellos creyeron en la promesa que les fue dada por Dios.
La preocupación de educar bien a ese niño que nacería.
Dos preguntas interesante e importante, hace este padre al ángel que le anuncia y confirma del
nacimiento de este niño:
1. ¿Cómo debe ser la manera de vivir del niño?
2. ¿Qué debemos hacer con él?
Y vemos a través del pasaje cómo Dios les da instrucciones claras y específicas sobre lo que deberían
hacer con ese niño porque en el futuro, sería un instrumento de Dios.
En Deuteronomio 6:5-8, observamos las instrucciones que les da el Señor al pueblo de Israel diciendo:
“Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. Y estas
palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas
estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes”.
Hoy día muchos padres enseñan a sus hijos y les dicen: “tienes que ser alguien en la vida, sé
abogado, doctor, maestro, ingeniero, arquitecto, gana mucho dinero”.
Es bueno enseñarles a los hijos a aspirar las mejores cosas y a trabajar para alcanzar logros y
éxitos. Pero también hay que decirles: “Sé un siervo de Dios. Busca primeramente el reino de
Dios porque las demás cosas serán añadidas.
Que Dios sea el primero en nuestra vida y que si le honramos, él se encargaría de nuestros
asuntos.
Si deseamos que nuestros hijos tengan éxito en la vida, si deseas que sean personas de bien,
demos el ejemplo. Comienza enseñándoles lo principal que es amar a Dios, servirle y servir a
otros.
En 1Timoteo 4: 12Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra,
conducta, amor, espíritu, fe y pureza.
2. ENSEÑANDO AUTORIDAD A SU FAMILIA. 1 Crónicas 27: 3De los hijos de Fares, él fue jefe de
todos los capitanes de las compañías del primer mes.
En pocas palabras el hijo de Fares fue jefe de jefes. Dominaba el principio de autoridad.
En 1 Timoteo 3: 4quegobierne bien su casa, que tenga a sus hijos en sujeción con toda honestidad
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(pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?)
Pablo vio al hogar como un lugar de entrenamiento para ser buen líder en la iglesia, porque la
iglesia también es una familia. Ya que la autoridad no se exige sino que se gana a través del buen
ejemplo.
En el hogar, el hombre crece espiritualmente así como en sus relaciones. Además, desarrolla su
liderazgo espiritual, su enseñanza y su habilidad de administrar y coordinar.
El hogar es también un campo de prueba en el que puede ser probado y evaluado si es idóneo
para el liderazgo en la iglesia.
La palabra gobernar viene del griego prohistemi, La Biblia de Las Américas traduce el término
como ocuparse (en buenas obras). Se trata de gobernar con la misma actitud con la que uno se
ocupa de hacer buenas obras, con el mismo corazón, con los mismos sentimientos, con la misma
motivación.
Parafraseando el término que traducimos por gobernar es hacer un pacto con otro para
ocuparse de él como nos ocuparíamos de hacer una buena acción, fundada en el amor. Cuando
el trabajo, la economía, el ministerio presionan, ocuparse adecuadamente de las cosas de la
familia nos ofrece seguridad, estabilidad, confianza.
3. DESARROLLANDO VALENTIA EN SU FAMILIA. Nehemías 11: 6Todos los hijos de Fares que
moraron en Jerusalén fueron cuatrocientos sesenta y ocho hombres fuertes.
Hombres valerosos es un modismo que significa “guerreros”; ellos serían capaces de pelear en defensa
de la ciudad (ver v. 14). 1 Tesalonicenses 2: 1Porque vosotros mismos sabéis, hermanos, que nuestra
visita a vosotros no resultó vana; 2pues habiendo antes padecido y sido ultrajados en Filipos, como
sabéis, tuvimos denuedo en nuestro Dios para anunciaros el evangelio de Dios en medio de gran
oposición. Denuedo: tener la valentía de.
El fundamento de nuestro denuedo en hablar fue la conciencia de Dios como “NUESTRO DIOS”.
El denuedo puede ser definido como el valor para vivir una vida honesta y transparente. Se
sustenta en la convicción de los valores en nuestra vida y en la congruencia de nuestros actos
con esos valores. La palabra clave aquí es ACTUAR. No puede haber denuedo en el pensamiento.
Eliges vivir de acuerdo a la verdad y honestidad y sin embargo se levantan acusaciones en contra
tuya con el fin de molestarte o dañarte. Pero realmente tú no tienes razones para avergonzarte,
tú has actuado en función de tus valores y conciencia y aun cuando la mayoría de los que te
rodean en esa situación parece señalarte con el dedo, tú sigues actuando con valentía y te
afirmas en tus valores.
La convicción, el actuar con denuedo, es una característica que debemos buscar y fomentar en
nuestra vida. En la medida en que encontramos nuestros valores y actuamos conforme a ellos,
vamos reconociendo fortaleza, congruencia y valor cada día.