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JUSTIFICACION
El propósito que se desprende del presente trabajo obtenido a partir de un resumen del
Manual del Grupo Andino para el Secado y Preservado de Madera, es exponer de manera
sencilla los principios de física y termodinámica que intervienen en los procesos de secado y
preservado, con el objetivo de asegurar la eficiencia del tratamiento y consecuentemente la
utilidad y durabilidad de la madera aserrada del “pino caribe” para la gran diversidad de usos.
Muchos de los conceptos que se señalan en este resumen son del conocimiento de los
técnicos forestales, sin embargo, observaciones puntuales realizadas en plantas industriales
de Chaguaramas, nos permiten afirmar que existen las instalaciones adecuadas pero las
operaciones según mi opinión, carece de estos criterios técnicos o no están siendo aplicados
correctamente.
Por otra parte, es imprescindible adoptar un sistema normativo para la clasificación visual de
la madera aserrada del “pino caribe”, con la finalidad de hacerla competitiva y garantizar un
mercado a nivel internacional, algunos argumentos de gran relevancia permitirán la
consolidación de esta propuesta entre estos se destacan 4 aspectos de gran importancia:
a) Existe la necesidad de una Norma de Clasificación Visual, que permita mejorar la eficacia y
eficiencia del mercado en el ámbito nacional, además de visionar las exigencias de normas
internacionales.
b) El mercado debe manejar información relacionada con las potencialidades del uso de
madera aserrada de “pino caribe” de la Orinoquia Venezolana con comprobada aptitud de uso
estructural.
c) La industria que procesa la materia prima troza proveniente de las plantaciones de “pino
caribe”, debe reconocer la calidad intrínseca y lograr separar la madera de comprobada
aptitud de uso estructural de la madera sin aptitud de uso estructural.
d) La industria debe consecuentemente comprender y atender las potencialidades que ofrece
una nueva Normalización y Estandarización, a partir de la planificación de producción
mediante la aplicación de diagramas de corte que racionalicen la calidad intrínseca del “pino
caribe” de la Orinoquia Venezolana.
Entre las características visuales que se toman en cuenta para clasificar la madera aserrada
de “pino caribe” venezolano según los parámetros de Normas Internacionales se destacan por
su frecuencia e importancia, en orden decreciente los siguientes defectos: a) presencia de
leño juvenil o zona de influencia medular, b) presencia de costanera denominada arista
faltante, c) mancha azul, d) nudos y e) alabeos.
La propuesta preliminar fue realizada a finales del año 2.017, por el Ing. Pablo Ninin, profesor
de la Universidad de los Andes, se tenía previsto hacer la presentación formal a las
autoridades de Maderas del Orinoco al comienzo del 2018, sin embargo, el cambio de
autoridades de la Empresa para ese momento, desviaron la intensión de una labor que más
temprano que tarde, se hará impostergable para revertir el concepto de recurso marginal que
hemos dado injustamente al “pino caribe” y reconocer el carácter de madera estructural, con
disponibilidad inmediata y abundante para su uso en construcción y carpintería.
PRINCIPIOS BASICOS PARA EL SECADO DE MADERA
INTRODUCCION.
Desde tiempos remotos, el hombre ha reconocido las ventajas de secar la madera antes de
utilizarla.
Al descubrir que existe una Humedad de Equilibrio debido a la correlación entre el Contenido
de Humedad (CH) de la madera, por una parte y la Temperatura y la Humedad Relativa (HR)
del medio ambiente, por otra, se acepto que el aire caliente impulsado por ventiladores
permite acelerar aún más el proceso de secamiento.
No es posible alcanzar por métodos naturales contenidos de humedad menor a los
correspondientes al Contenido de Humedad de Equilibrio (CHE) del lugar.
El secado natural es apenas un pre-secado para los productos de madera que requieren un
contenido de humedad más bajo.
Se sabe que la madera es un material perecedero, pero que su vida útil puede ser alargada
en forma considerable aplicando técnicas especiales en su manejo, bien sea por cambios en
las condiciones que favorecen su destrucción o por la aplicación de sustancias toxicas que
impiden la presencia de organismos xilófagos.
La Densidad anhidra de especies tropicales cubre un rango muy amplio de 0,10 gr/cm3 para el
balso (Ochroma lagopus) hasta 1,4 gr/cm3 para el guayacan (Guaiacum officinale). La
variación tiene su explicación en la diferencia de valores entre la densidad de la sustancia
sólida que forma las paredes celulares y la densidad de esta sustancia expresada en relación
con el volumen exterior de la pieza de madera, que incluye los espacios porosos.
La Densidad Real o Densidad Relativa Real de la sustancia seca al horno, es necesaria para
calcular la proporción de poros o volumen vacio, el contenido de agua máximo que puede
aceptar y su hinchazón, se ha adoptado un valor promedio de 1,5 gr/cm3 para la Densidad
Real de la sustancia sólida de la madera.
Humedad del aire, el aire es una mezcla de gases especialmente nitrógeno, oxígeno y
pequeñas cantidades de otros gases, entre los cuales está el vapor de agua. La cantidad de
vapor de agua en el aire varía ampliamente y consecuentemente la presión parcial, a una
temperatura dada, puede variar desde cero (0%) en aire seco, hasta la presión de vapor de
aire saturado, a esa temperatura.
Contenido de Humedad de Equilibrio, en una región seca y caliente la madera sacará hasta
un CH menor que en una región fría y húmeda.
Durante el secado, se debe establecer un Gradiente de Humedad óptimo que reduzca el
tiempo de secado sin riesgos de daños en la madera.
Gradiente de Secado, es la relación entre el CH real de la madera en un determinado
momento y el CHE hacia el cual tiende la madera de acuerdo a las condiciones de
Temperatura y Humedad Relativa fijados dentro del secadero. De la magnitud de ese
Gradiente depende la forma y progreso del secado.
Secado a altas temperaturas, los esfuerzos se han dirigido a los factores que más inciden en
el secado, la Temperatura y la HR del aire que rodea la madera, cuando el aire tiene baja
humedad su capacidad de absorber agua en forma de vapor es alta y lo será aún más si se
calienta, si la HR del aire es muy baja durante las primeras etapas del secado, el CH de la
superficie disminuye rápidamente ocasionando agrietamiento. De la misma manera, si la
temperatura se eleva, el flujo de vapor de agua desde el interior hacia la superficie es más
rápido; además, se mejora su plasticidad y puede soportar tensiones internas de mayor
intensidad.
La Humedad de la Madera.
Las maderas livianas por ser más porosas, contienen mayor cantidad de agua que las
pasadas, la albura por estar conformada por células cuya función es conducción de agua
presenta un contenido de humedad mayor al duramen.
Agua Libre.
Al secarse la madera se pierde fácilmente por evaporación, hasta alcanzar el Punto de
Saturación de las Fibras (PSF) según la especie de 21- 32 %, sus paredes celulares están
completamente saturadas pero sus cavidades están vacías.
Durante esta fase de secado, la madera no experimenta cambios dimensionales, ni alteración
en sus propiedades mecánicas.
Agua de Constitución.
El agua que forma parte de la materia celular de la madera, no puede ser eliminada con
técnicas normales de secado, su separación implica la destrucción parcial de la madera.
Densidad.
Se define como la masa de una pieza de madera a un determinado contenido de humedad, en
gramos (gr), en relación al volumen de la misma pieza a igual contenido de humedad, en
centímetros cúbicos (cm3).
m (gr)
D=
V (cm3)
Un aumento del Contenido de Humedad trae un incremento de su masa en una proporción
mayor que el incremento de su volumen, la densidad aumenta. Por encima del Punto de
Saturación de las Fibras (PSF), la tasa de incremento de la densidad será mayor debido a la
estabilización del volumen.
Es importante enunciar las condiciones de humedad bajo las cuales se obtiene la densidad;
DA = Densidad Anhídrida (seco al horno); DN = Densidad Normal (12% CH);
DPSF = Densidad Punto de Saturación de Fibras (30% CH).
Densidad Relativa.
Es la relación entre la masa de una pieza de madera “seca al horno” y la masa de agua
desplazada por esa misma pieza a un contenido de humedad dado.
mo
DR = Puesto que es una relación de masas, no tiene dimensiones.
V x Da
Da, es la densidad del agua en condiciones normales 1 gr/cm 3.
Se acostumbra expresar la Densidad relativa bajo los siguientes contenidos de humedad:
mo
DRA = Densidad Relativa Anhidra.
Vo x Da
mo
DRN = Densidad Relativa Normal.
V12 x Da
mo
DRB = Densidad Relativa Básica, al 30% CH.
Vf x Da
Con el aumento del Contenido de Humedad en el rango higroscópico (0% al 30%), aumenta el
volumen debido a la hinchazón la Humedad Relativa disminuye, en el PSF la Densidad
relativa alcanza su valor mínimo y para CH mayores permanecerá constante.
Vp = volumen poroso = 1 - Vm
Densidad Anhidra DA
Vm = = = 0,667 x DA
Densidad de materia sólida 1,50
Para la condición seca al horno, la Densidad es igual a la Densidad Relativa (DA = DRA),
cuando se mide en gr/cm3.
Ejemplo; para madera con DA= 0,25 gr/cm 3; Vp = 1- 0,667 x 0,25 = 0,833 = 83,3 %, quiere
decir que la madera seca al horno el 83,3% del volumen es espacio vacío.
Máximo Contenido de Agua posible.
Representado por el agua higroscópica, fijada en un 30%, más la cantidad de agua libre en
los poros, se expresa:
Vp x Da (1 – DA/1,5) x Da
CHmax = 0,30 + = 0,30 + Da: Densidad del agua = 1 gr/cm3
DA DA
1,5 - DA
CHmax = (0,30 + ) x 100
1,5 x DA
1,5 – DRB
CHmax = x 100
1,5 x DRB
DA 0,45
DRB = = = 0,396
1 + 0,30 x DA 1 + 0,30 x 0,45
El volumen máximo de madera, hasta alcanzar el Punto de Saturación de las Fibras (PSF),
Vmax = Vf = Vo x (1 + 0,01 CHf x DRA); como el CHf = 30%
Vmax = Vf = Vo x (1 + 0,30 x DRA)
Se concluye que la Máxima Hinchazón es directamente proporcional a la Densidad Relativa
seca al horno (DRA).
Puesto que la Densidad Relativa Básica (DRB) para una madera dada es menor que la
Densidad Relativa Anhidra (DRA), la hinchazón volumétrica es mayor que la contracción
debido a que se basa en un volumen inicial más pequeño.
Se puede concluir también que los valores de la hinchazón y la contracción son mayores en
maderas más densas y directamente proporcionales a la Densidad Relativa o a la cantidad de
pared celular presente.
Relación entre la Densidad Anhidra, Densidad Relativa Anhidra y Densidad Relativa Básica.
Por definición la Densidad Relativa es inversamente proporcional al volumen.
Vo x DRA = V1 x DR1 = V2 x DR2 = Vf x DRB
Los valores de V y DR para la misma pieza a diferentes contenidos de humedad
DRB DRA
DRA = DRB =
1 – 0,30 x DRB 1 + 0,30 x DRA
Para calcular las variaciones de la Densidad Relativa, cuando el Contenido de Humedad (CH)
varía entre CH1 y CH2:
DR1
DR2 = siendo; CH1 y CH2 ≤ CHf
1 + 0,01 x (CH2 – CH1) x DR1
Anisotropía de la Hinchazón y Contracción.
Para una misma especie la contracción longitudinal varía inversamente con la densidad,
madera menos densa se contrae más a lo largo del grano que las piezas más pesadas de la
misma especie. En coníferas de rápido crecimiento la contracción longitudinal es excesiva.
En la dirección tangencial los límites de la contracción son 3,5% al 15% de la dimensión
verde. La contracción radial son 2,4% a 11%, para efecto de cálculo del volumen total de
contracción o hinchazón normalmente se desprecia el valor longitudinal.
1-Temperatura.
El calor es la fuente que suministra la energía cinética necesaria para la evaporación del
agua.
La velocidad de evaporación depende de la cantidad de energía suministrada por unidad de
tiempo y de la capacidad del medio para absorber la humedad. La temperatura es factor de
aceleración de la evaporación, cuanto más elevada sea la temperatura, más intensa será la
evaporación puesto que el aire podrá absorber mas humedad.
Presión Parcial.
Puesto que el aire es una mezcla de gases, la presión parcial de vapor de agua en el aire (p),
se refiere a la presión ejercida por una columna de vapor de agua sobre la superficie terrestre,
la cantidad relativa de los gases que conforman la mezcla permanecen constante, con
excepción del vapor de agua.
La cantidad de vapor de agua en el aire varía ampliamente y consecuentemente la presión
parcial, a una temperatura dada, puede variar desde cero (0%) en aire seco, hasta la presión
de vapor de aire saturado, a esa temperatura.
Otro término que expresa el contenido de vapor de agua del aire es el Contenido de Humedad
o Proporción de Humedad (W), se define como la masa de vapor de agua por unidad de masa
de aire seco, se expresa en gramos de vapor de agua por kilogramos de aire seco (gr/Kg)
0,2153 x (HA) x (T) 0,2153 x (2.887 p / T) x (T)
W= =
(pa – p) (pa – p)
621,57
W= (gr / Kg)
(pa – p)
Humedad Relativa.
Es la relación entre la cantidad de vapor de agua contenida en un volumen determinado de
aire y la mayor cantidad posible de vapor que pueda hallarse en ese volumen de aire a la
misma temperatura, se expresa;
p
HR = x 100
po
Será 100%, si la presión parcial de vapor en la atmosfera es igual a la presión de vapor
saturado, será 0% si el aire está completamente seco.
La Humedad Relativa puede definirse como la relación entre la Humedad Absoluta (HA) y la
Humedad Absoluta Saturada (HAo).
HA W CH aire
HR = x 100 HR = x 100 = x 100
HAo Wo CH saturado
(Revisar al final del capítulo II, las tabla 2.1 y 2.2 del manual del grupo andino para secado de madera)
Ejemplo; determinar la Humedad Relativa (HR) del aire al nivel del mar y a una altura de 750
m sobre el nivel del mar, la temperatura del bulbo seco es 20°C y del bulbo húmedo es 10 °C.
Utilizando las Cartas Psicométricas para el cálculo de la HR a nivel del mar, mostrada en la
figura 2.4 del manual del grupo andino para secado se lee, HR = 25%
Utilizando la ecuación de Carrier, para calcular de HR a nivel del mar, de la tabla 2.1 se tiene:
poh = 0,921 cm de Hg
po = 1,754 cm de Hg
p 0,431
HR = = x 100 = 24,6%
po 1,754
Para el cálculo de la HR a una altura de 750 m. sobre el nivel del mar; de la tabla 2.2 se
obtiene por interpolación pa = 69,4 cm de Hg. sustituyendo:
p 0,474
HR = x 100 = x 100 = 27,0%
po 1,754
La tabla 2.1 se obtiene que el aire a 10 °C y 100% de Humedad Relativa puede contener un
máximo de 9,4 gr de vapor de agua por m3.
La cantidad de vapor de agua a 80% de HR es la siguiente; 0,80 x 9,4 = 7,52 gr/m 3
La capa límite que siempre existe entre la madera y el aire, juega un importante papel en el
secado. Cuanto menor sea la capa límite, más rápida la remoción de humedad, una corriente
turbulenta es más eficaz que una corriente laminar, afecta en mayor forma la capa límite.
La velocidad del aire es de mayor importancia durante las primeras etapas de secado, sobre
todo en madera muy húmeda. Se obtiene condiciones óptimas a una velocidad de 2 m/seg.
Se puede decir que las ventajas de velocidades altas de aire disminuyen considerablemente
cuanto mayor sea el espesor de las piezas, cuanto menor sea el contenido de humedad inicial
y cuanto menor sea la temperatura inicial del bulbo seco.
Gradiente de Secado.
Es la relación entre el Contenido de Humedad real (CH real) de la madera en un determinado
momento y el Contenido de Humedad de Equilibrio (CHE) hacia el cual tiende la madera de
acuerdo a las condiciones de Temperatura y Humedad Relativa fijados dentro del secadero.
CH real
GS =
CHE
De la magnitud de ese Gradiente depende la forma y progreso del secado. Gradientes muy
elevados producen un secamiento muy rápido de las capas superficiales con el riesgo de
formación de tensiones internas, grietas, deformaciones y aún endurecimiento.
Al contrario, un Gradiente excesivamente pequeño prolonga el tiempo de secado, el Gradiente
óptimo depende de la especie, espesor de la madera, contenido de humedad inicial.
Aquellas especies con valores de contracción elevados se secan con gradientes bajos (< 2).
Agua Libre.
El desarrollo de procedimientos apropiados para la remoción del agua libre es fundamental
para secar en menor tiempo, debemos comprender las leyes que regulan el movimiento del
agua capilar durante el secado, sobre todo lo relacionado con las tensiones capilares que se
generan dentro de la madera.
Por debajo del Punto de Saturación de Fibras, las tensiones de secado, responsables de la
contracción normal de la madera, se desarrollan en las paredes celulares y son una
consecuencia del Gradiente de Contenido de Humedad entre las capas superficiales y el
centro de la madera, en condiciones extremas puede conducir a defectos como
endurecimiento, grietas superficiales e internas.
Colapso.
Se presenta cuando los esfuerzos de tensión capilar exceden la resistencia de la pieza a la
compresión perpendicular al grano. Es el resultado de un secado rápido con un Contenido de
Humedad alto, en el que todas sus cavidades celulares están completamente llenas de agua
libre y donde faltan las burbujas de aire que regularmente se encuentran en las células.
Cuando una célula contiene una burbuja de aire, la tensión capilar que se genera es
contrarrestada por la expansión de dicha burbuja, si la cavidad está llena de agua, la tensión
es transmitida a las paredes celulares, si las paredes no pueden soportar esa tensión, las
paredes son atraídas hacia el lumen originándose una contracción anormal conocida como
colapso.
La aplicación de temperaturas muy elevadas (˃ 50 o 60 °C) durante las primeras etapas de
secado, disminuye la resistencia de la madera y la hace más susceptible al colapso,
generalmente el duramen es más propenso al colapso, puede evitarse el colapso durante las
primeras etapas del proceso con el secado lento a temperatura normales.
Endurecimiento.
Inicialmente y bajo condiciones de secado normales (gradiente de secado moderado), las
capas exteriores pierden humedad rápidamente mientras el centro permanece aún húmedo,
creándose un gradiente de Contenido de Humedad que induce el flujo de agua del centro
hacia la periferia. Las capas interiores con humedad por arriba del Punto de Saturación de la
Fibra, se oponen a la contracción generándose entonces esfuerzos de tensión hacia el centro.
A medida que el secado avanza, las capas interiores alcanzan el Punto de Saturación de la
Fibra y empiezan también a contraerse. Cuando la parte central empieza a contraerse, son
ahora las capas exteriores las que tratan de oponerse a esta acción, invirtiéndose los
esfuerzos ya que la parte central estaría sometida a tensión y la periferia a compresión.
Agrietamiento Interno.
Cuando los esfuerzos asociados con el endurecimiento y el colapso son severos pueden
producir en la madera grietas que se conocen como cavidades de “media luna”.
Tabla 2.1 Presión de Vapor Saturado (po) y Humedad Absoluta Saturada (HAo)
Altitud Pa Altitud Pa
m cm Hg m cm Hg
Nivel del mar 76,0 2.100 58,6
300 73,3 2.400 56,4
600 70,7 2.700 54,3
900 68,1 3.000 52,1
1.200 65,6 4.600 42,9
1.500 63,2 6.100 34,9
1.800 60,9 9.100 22,6
El peso específico, las maderas más livianas se secan más rápidamente que las pesadas.
El espesor de la madera y el patrón de aserrado, la madera aserrada en sentido tangencial
seca más rápido que aquella en sentido radial, debido a que los radios ayudan al movimiento
del agua a lo largo de ellos. De la misma manera, las tablas aserradas en sentido tangencial
son más propensas a rajaduras y deformaciones.
La velocidad de difusión de vapor de agua en sentido longitudinal a las fibras llega a ser hasta
más de diez veces mayor que aquella a través del grano.
Métodos de Apilado.
La altura de las base de las pilas tiene su influencia puesto que la circulación del aire dentro
de la pila se hace por convección natural, el aire frio y húmedo baja y se evacua a través del
aire que circula por debajo de las pilas.
El piso de los patios de secado, deberá ser plano y bien drenado, se acostumbra utilizar pisos
con alguna inclinación (1- 2 %).
A tal contenido de humedad la madera está preparada para tratamiento con sustancias
inmunizantes y también se protege superficialmente la madera contra el ataque de hongos y
no se presentan tensiones de secado tal alta que afecten la estructura leñosa.
La velocidad del aire es alrededor de 1m/seg, en una pared lateral se colocan los ventiladores
y del lado opuesto se deja abierto para la salida del aire.
Otro secador de aire forzado es el llamado “bajo cubierta”, que es similar al anterior pero la
cubierta es permanente y los ventiladores estacionarios. La temperatura ambiente no es
suficiente para un proceso continuo de secado, las mejoras se orientan a elevar y mantener la
Temperatura y la Humedad Relativa del aire dentro del presecador.
Las ventajas que ofrece son: a) producción constante de madera seca, b) el abastecimiento
puede hacerse directamente del aserradero, c) la operación resulta económicamente
ventajosa, d) muy útiles para maderas blandas que son fáciles de secar.
Desventaja, exige una clasificación estricta de la madera a secar, especie, espesor, contenido
de humedad in inicial y la humedad final.
2-Sistema de Ventilación.
Ventiladores colocados sobre las pilas de madera.
Los ventiladores se montan sobre un solo eje que se extiende a lo largo de la cámara, el eje
tiene una propulsión axial, es necesario desviar el aire en un ángulo de 90°, los ventiladores
se colocan dentro de cajones o bafles cuya sección tiene forma de Z ( ) con bordes
redondeados para facilitar la circulación del aire. Con un solo motor es posible mover grandes
volúmenes de aire.
Ventilación lateral.
Los motores se instalan entre la parte lateral y la pila de madera, los ventiladores son axiales
de diámetro igual en algunos casos a la altura de la pila, se sujetan desde el piso y no exigen
un falso techo, el aire es proyectado horizontalmente atravesando la pila en dirección
transversal, el retorno se hace sobre la pila o a través de ella. Una variación consiste en
utilizar ventiladores de diámetro pequeño, de modo que el aire retorne o entre por la parte
superior de la pila.
Ventajas de este sistema, no necesita techos resistentes, los elementos de calefacción, así
como los ventiladores y motores se instalan en el piso, con poca energía se alcanzan flujos de
aire aceptable, se reduce la altura de la cámara.
3-Sistemas de Calefacción.
Son varias las fuentes energéticas utilizadas para el calentamiento del aire en el secado
artificial a temperaturas normales.
Requerimientos Térmicos.
a) para calentar el edificio y el equipo, b) calentar la madera y el agua que contiene, c)
calentar el aire hasta la temperatura programada, d) reponer el calor que sale en el aire
húmedo, las perdidas por escape y el calor que tiene la madera cuando sale de la cámara.
Brunner-Hildebrand (1987) reporta un consumo específico entre 1,5 y 4,5 kg de vapor con una
presión de 1,5 “bar” por cada kg de agua extraída de la madera.
Lo anterior depende del estado de las cámaras, de los contenidos de humedad inicial y final
de la madera, del tipo de madera y de la eficiencia en el diseño de la cámara y del equipo de
funcionamiento. La mayor demanda de calor ocurre durante la fase de calentamiento de la
cámara y de la madera.
Brunner-Hildebrand (1987) reporta una capacidad requerida de calefacción por hora para
secaderos industriales que varía entre 3.500 y 16.000 k cal / m 3, esta capacidad de
calefacción depende de la densidad de la madera, el comportamiento durante el secado y el
tipo de cámara.
La temperatura máxima del bulbo seco depende fundamentalmente del tipo de madera. Se
debe tener presente que cuando los motores de los ventiladores se colocan internamente la
temperatura no debe superar los 120 °C.
Secado por Condensación – Deshumidificadores.
El principio de operación del deshumidificador consiste en una máquina de refrigeración que
forma parte esencial de la unidad de secamiento.
Esta máquina de refrigeración trabaja como sistema de calentamiento del aire (compresor),
como deshumidificador (unidad de secamiento por condensación) y como secador con
intercambio parcial de aire (como un secador convencional).
Secado al Vacio.
Las investigaciones han comprobado, que la circulación del agua en el interior de la madera
constituye el elemento primordial en el proceso de secado. Ella es, según la especie, de 100 a
1000 veces más lenta que la velocidad de evaporación en la superficie. Por lo tanto, para
aumentar la velocidad de secado, es necesario aumentar la velocidad de circulación del agua
en el interior de la madera.
Según P. Joly y F. More (1980), el agua circula a una velocidad cinco veces mayor en un
material bajo presión de 60 mm de Hg que bajo una presión de 760 mm de Hg.
Complementariamente, es importante recalcar que la acción del vacio también se traduce en
una disminución de la temperatura de ebullición del agua, con lo cual se logra una
intensificación de la evaporación en la superficie. Como consecuencia de ello, se aumenta el
Gradiente de Temperatura en la madera ya que la superficie se enfría mas rápido que el
centro a causa de la intensa evaporación, trayendo como efecto un aumento de la velocidad
de secado.
Se ha comprobado también que para el secado de la madera es necesario suministrar la
energía calorífica requerida para extraer el agua higroscópica y para pasar el agua del estado
liquido al gaseoso. Por tal razón, además de vacio es indispensable calentar la madera. Sin
embargo, cuando se crea una depresión (vacio) alrededor de la madera, se produce un
enrarecimiento del aire ambiente, es decir, del agente de transmisión del calor por convección,
en estas condiciones es imposible calentar la madera ya que el vacio no trasmite el calor, se
debe optar por procedimientos como interrumpir el vacio a intervalos regulares y calentar la
atmósfera, colocar la madera en contacto con elementos calientes como placas metálicas o
elementos irradiantes.
El auge adquirido por las secadoras al vacio se explica por la notable disminución de los
tiempos de secado y por el desarrollo de sistemas de fabricación de las cámaras que permite
una disminución en el costo del equipo.
Apilado.
La homogeneidad del secado depende de la uniformidad del paso del aire a través de la pila
de madera. Listones y separadores se deben obtener de madera seca, preferible madera
densa, grano recto, la longitud de los separadores depende del tipo y espesor de la madera,
para coníferas el ancho del separador puede ser 50mm, es conveniente utilizar listones de
sección rectangular 20 x 30 o 25 x 50 mm, se puede optar por un solo tipo de separador en
planta que permita apilar tablas delgadas y tablones de 50 mm de espesor.
La correcta colocación de separadores reduce las deformaciones, grietas y rajaduras, sobre la
plataforma de los carros se colocan travesaños que corresponden a la base de los listones
separadores.
Control de Secado.
Para el control manual es necesario obtener muestras y colocarlas en la pila de forma que se
puedan determinar su Contenido de Humedad periódicamente.
Ventajas: a) indica la velocidad del secado, b) se detectan fallas que afectan la eficiencia de la
cámara, c) sirve para ajustar el programa de secado y los cambios climáticos, d) indica la
necesidad de tratamientos de recuperación y acondicionamiento y además la duración de
ellos, e) ayuda a determinar los horarios de secado, f) permite controlar el Contenido de
Humedad final, g) mejora la calidad de secado.
Ph -Ps Ph Ph
CH = x 100 PsH = ( ) x 100 Ps =
Ps 100 + CH ( CH /100) + 1
P actual – Ps calculado
CH actual = x 100
Ps calculado
Preparación de la Cámara.
La verificación del buen funcionamiento de la cámara comprende la revisión del sistema de
calefacción, sistema de ventilación, sistema de humidificación, sistema de control, y registro
por último, se hace una inspección general del secador.
Sistema de Calefacción.
En la misma forma en que la madera se alista para el secado, la cámara también tiene que
prepararse antes de cada carga. La calefacción comienza en la fuente generadora de energía
calórica que puede ser una caldera para producir vapor, un quemador, un conjunto de
resistencias eléctricas o un equipo de calentamiento para gases o líquidos.
Se deben revisar los ductos, registros manuales, controles de paso automáticos, trampas y
demás elementos que conducen la energía calórica.
Sistemas de Ventilación.
Funciona a base de motores ubicados dentro o fuera de la cámara, no debe olvidarse el
mantenimiento de equipos y colocación de bafles o deflectores para orientar el flujo de aire.
Sistema de Humidificación.
Está compuesto por dispositivos de inyección de vapor o agua, dispositivos del control
automático o manual y de los elementos de aspersión.
Fase de Calentamiento.
Elevar la temperatura hasta alcanzar el primer valor deseado, el proceso se hace más o
menos lento según la especie y el espesor, como regla se calcula una (01) hora de
calentamiento por cm de espesor para maderas livianas con un Contenido de Humedad
superior al 30%, dos (02) horas por cm de espesor para madera densa.
En este período debe evitarse el secado prematuro ya que provoca el endurecimiento y en
grado extremo el colapso. Es necesario mantener una Humedad Relativa elevada lo que se
logra con una diferencia Psicrométrica (∆t) muy pequeño (temperatura del bulbo húmedo será
inferior en 1 – 2 °C). El efecto de una alta Humedad Relativa puede significar la re-
humidificación superficial, resulta en la homogenización de la humedad interior de la madera.
Fase de Secado.
Cuando la madera alcanza la temperatura ideal deseada se procede a aplicar el programa de
secado, el paso inicial es bajar el grado higrométrico del aire se consigue aumentando la
diferencia psicrométrica, para continuar modificando las condiciones climáticas de la
secadora de acuerdo a los valores de Contenido de Humedad de la madera.
El secado se divide en tres periodos a) por encima del Punto de Saturación de la Fibra donde
se deba evitar temperaturas muy elevadas, b) en la zona del Punto de Saturación de la Fibra
bajar progresivamente el grado higrométrico del aire en pequeñas etapas, c) por debajo del
Punto de Saturación de la Fibra se procede a elevar la temperatura y aplicar un aire cada vez
más seco, hasta llegar al Contenido de Humedad deseado.
Algunas especies fáciles de secar (pino) solo requieren dos (02) periodos, por encima y por
debajo del Punto de Saturación de las Fibras.
Fase de Acondicionamiento.
Cuando la madera ha alcanzado en el centro o en el tercio de su espesor, la humedad final
deseada, la superficie tendrá un Contenido de Humedad inferior. Para disminuir este gradiente
causa de tensiones internas, se somete la carga al acondicionamiento que consiste en bajar la
temperatura del termómetro seco y reducir finalmente la diferencia psicrométrica y colocar la
cámara en condiciones climáticas donde el valor del Contenido de Humedad de Equilibrio se
sitúe un nivel ligeramente superior al Contenido de Humedad de la madera en su superficie.
Ejemplo: para un Contenido de Humedad final de 10% las condiciones climáticas del secador
deben regularse para producir un Contenido de Humedad de alrededor del 12%.
El tiempo para esta fase puede considerarse del doble al contemplado para el calentamiento,
es un orden de magnitud valido en muchos casos.
Fase de Enfriamiento.
Se baja la temperatura progresivamente hasta un valor compatible y se mantiene la diferencia
psicrométrica casi igual a la fijada durante el acondicionamiento.
Programas de Secado.
El ritmo de secado y los riesgos de daños causados, son diferentes según las características
estructurales de la especie. Por esta razón las maderas requieren cambios climáticos e
intensidades diferentes. Un programa u horario de secado es una secuencia de condiciones
climáticas, Temperatura y Humedad Relativa aplicable durante el secado previamente
establecida para una especie. Los cambios se hacen de acuerdo al Contenido de Humedad
de las muestras de control o testigos. Estos programas varían según la especie, dimensiones
y calidad de la madera a secar. La variabilidad del comportamiento de la madera ante la
intensidad y frecuencia de los cambios climáticos resulta una amplia gama de programas de
secado. Se han establecido agrupaciones de madera con características similares, con un
mismo programa de secado.
Estos horarios (control con psicrómetro) son como una guía de secado ya que su optimización
está en función de la experiencia y capacidad técnica del operario.
Para el “Pinus caribaea” se puede aplicar el horario de secado “H” del Laboratorio de
Investigaciones de Productos Forestales de Princess Risborough Inglaterra (FPRL).
(Página 4-29 del Manual del Grupo Andino para Secado de Maderas)
La tabla 4.5 en la pagina 4-33 del Manual del Grupo Andino para Secado de Maderas, se
muestra que el Contenido de Humedad de Equilibrio y con este la Humedad Relativa dentro
del secadero debe ser elevada al principio, con el fin de producir un Gradiente de Secado
pequeño que permita una suave iniciación del proceso y evite la formación de grietas
superficiales.
Al principio del secado (encima del PSF) se mantiene un Gradiente de Secado constante y
equivalente al valor mínimo establecido para el grupo de madera según la especie, por debajo
del Punto de Saturación de la Fibra se puede aumentar el Gradiente de Secado haciéndolo
variar entre los valores mínimo y máximo fijados para cada grupo.
Por encima del Punto de Saturación de la Fibra (CH ˃ 30%), el Contenido de Humedad de
Equilibrio se reduce en forma lenta, por debajo del Punto de Saturación de la Fibra, se
aumenta el gradiente siguiendo las instrucciones de la tabla.
Tabla 4.5
2-Ficha de la Carga del secador y del Programa de Secado, contiene información sobre el
número o identificación del secador, número de la carga, volumen de la carga, dimensiones de
las piezas, fecha de entrada y salida, Contenido de Humedad inicial, Contenido de Humedad
final, duración del periodo de acondicionamiento y tiempo totales de secado.
3-Datos del secado, Tabla y Grafica, el valor promedio de Contenido de Humedad de la carga
calculado a partir del peso de las muestras de control permite trazar una curva de humedad
promedio en función del tiempo de secado, obteniendo una representación grafica de la
velocidad de secado, la grafica se puede complementar adjuntando el registro del programa
de secado (temperatura y humedad), esto permite comparar la velocidad de secado con las
condiciones climáticas impuestas.
4-Reporte sobre el rendimiento mensual del secadero, además de otros datos, cantidad y
costo del combustible, electricidad, stock de madera verde, organización de traslado de
madera hacia y fuera de los secadores, duración y almacenamiento de madera seca.
Control de calidad.
a) almacenamiento correcto de trozas y madera aserrada, b) precisión de las dimensiones de
madera aserrada, c) el encastillado y apilado, d) el equipo y mantenimiento del secadero, e)
los métodos de secado y el control del Contenido de Humedad final, f) la protección de la
madera seca, g) el cuidado, registro sobre el secado y producción.
Endurecimiento.
Es consecuencia de un Gradiente fuerte de Contenido de Humedad en una pieza de madera,
se debe a la aplicación de un horario de secado severo al inicio del proceso, alta temperatura
y gran diferencia psicrométrica solo aplica al final del secado, hay que eliminar el
endurecimiento para obtener madera sin tensiones, madera endurecida se tuerce durante
procesos posteriores de reaserrado o maquinado, una vaporización excesiva puede conducir
al fenómeno contrario al endurecimiento, se invierten los esfuerzos de tensión y compresión,
al final puede remediarse con un secamiento adicional para remover el exceso de humedad
de la superficie.
Se puede controlar evitando la radiación directa del sol sobre la madera húmeda, evitar la
acción de corrientes secas y fuertes sobre la madera húmeda, proteger los extremos de las
piezas con un producto que evite la rápida evaporación de la madera en sentido longitudinal.
Grietas Internas.
Un severo endurecimiento superficial puede traer como consecuencia la formación de grietas
internas, la madera con este tipo de defecto no tiene uso, se evita con la selección del
programa de secado adecuado, se debe evitar el endurecimiento superficial.
Alabeo.
Se debe a las propiedades de contracción, el propósito de la operación de secado es
mantener estas deformaciones dentro de ciertos límites, según el tipo de alabeo se pueden
producir varios tipos de deformaciones, entre estas:
Abarquillado, las caras de las piezas quedan levantadas en los bordes o cantos.
Arqueadura, alabeo a lo largo de la cara de la pieza.
Encorvadura, alabeo a lo largo del canto de la pieza.
Torcedura, las esquinas de las piezas no se encuentran en el mismo plano o se levantan una
o más aristas en direcciones diferentes.
La madera por ser un material de origen orgánico, está expuesto a una serie de ataques, bien
sea por organismos biológicos como bacterias, hongos, insectos, o por causas no biológicas,
como el fuego, desgaste mecánico y acción de la intemperie.
Cuando la madera está saturada los hongos no pueden desarrollarse por falta de aire, El
contenido de humedad más adecuado en el sustrato es de 35% a 50% de CH, la degradación
de la madera no se puede realizar si el contenido de humedad se encuentra por debajo del
20%. La temperatura que produce la muerte de los hongos se ubica entre los 50 °C, se puede
aplicar como medio de control para insectos, temperaturas mínimas de 55 °C durante un
tiempo no inferior a 60 minutos.
La dosis mínima o letal de cada preservante está dada por la menor cantidad de producto
activo en relación al sustrato, necesaria para eliminar el organismo xilófago.
La dosis mínima letal es sumamente importante para la eficacia del tratamiento preservador y
para los aspectos económicos de la impregnación.
Los tratamientos de vacio-presión requieren que la madera esté seca, por debajo del punto de
saturación de las fibras PSF, (25 a 28 % de Contenido de Humedad). Los tratamientos por
capilaridad, difusión y osmosis, la madera deberá estar humedad ya que el agua es el medio a
través del cual el preservante penetra.
Métodos de tratamiento con presión, este tipo de proceso permite regular las condiciones del
tratamiento, de modo que es posible variar la penetración y retención del preservante para
satisfacer las exigencias en la utilización de la madera.
Procedimiento Bethell o célula llena, mediante este método se procura inyectar a la madera la
mayor cantidad de líquido preservante posible, dejando la máxima concentración del producto
químico en la zona tratada. La madera a preservarse debe tener entre 25 y 28% de contenido
de humedad, estar libre de corteza y poseer las formas y medidas finales de uso.
Procedimiento Rueping, este método se emplea para tratamiento en caliente con creosota o
pentaclorofenol. Tiene como característica principal la aplicación de una presión preliminar de
aire a la madera, antes de inyectar el preservante caliente oleosoluble; al final del tratamiento
tan pronto como disminuye la presión se expande el aire comprimido en la madera y expulsa
una cantidad considerable del preservante inyectado, motivo por el cual este proceso se
conoce también como procedimiento de célula vacía.
Las medidas profilácticas conservan la calidad de la madera solo por un tiempo relativamente
corto, su efectividad depende fundamentalmente de su aplicación en el momento oportuno, es
decir, antes de que los organismos hayan logrado penetrar. Los métodos de protección
dependen de una gran cantidad de factores, entre ellos el clima, la calidad de la madera, el
tiempo de estacionamiento, el tipo de agente destructor, los medios que se tenga para la
protección y el conocimiento que se posea de la importancia del problema.
INTRODUCCION.
Se sabe que la madera es un material perecedero, pero que su vida útil puede ser alargada
en forma considerable aplicando técnicas especiales en su manejo, bien sea por cambios en
las condiciones que favorecen su destrucción o por la aplicación de sustancias toxicas que
impiden la presencia de organismos xilófagos.
Desde tiempos remotos el hombre ha tratado con los medios a su alcance, de evitar que la
madera se altere o sufra el fenómeno de pudrición, utilizando en un principio los
conocimientos empíricos o muy rudimentarios que se tenían acerca de la protección de este
material.
En 1831 el francés Jean Robert Breant ideo un sistema de aplicación de preservantes bajo
presión en cilindro cerrado. El proceso consistía en aplicar un vacio inicial a la madera para
extraer el aire de las células, inyectando luego el preservante a presión. El invento marco un
concepto totalmente diferente, ya que los procedimientos comunes consistían en el remojo de
la madera en recipientes abiertos. Breant resolvió de este modo el problema de penetrar la
madera; sin embargo, el proceso resultaba inadecuado para utilizarlo industrialmente.
Entre 1838 y 1900 se idearon varios procesos para impregnación, pero solo dos tuvieron éxito
a nivel industrial quizás porque trataban la madera con altos contenidos de humedad.
El primero fue desarrollado en Francia por Auguste Boucherie, usando el sulfato de cobre, el
segundo método, ideado por Samual Boulton en 1879, incluyó el uso de la creosota a alta
temperatura y vacio con el objeto de evaporar la humedad y mejorar su penetración.
En 1902, Max Rueping puso en práctica su método de tratamiento, consistente en aplicar
presión al aire inicial, con el que se obtuvo mayor recuperación de la creosota, dando origen a
los métodos de impregnación por célula vacía.
La madera cuando forma parte del tronco de los arboles sirve para transportar el agua y
sustancias nutritivas del suelo hacia las hojas, da soporte a las ramas que forman la copa y
fija las sustancias de reserva almacenando los productos transformados en las hojas. Todas
estas funciones determinan la naturaleza de la madera caracterizada por su porosidad y
elevada resistencia en relación con su peso.
En la formación de la madera se distinguen células de origen temprano con paredes delgadas
y color claro y células de origen tardío con paredes gruesas y color oscuro, que dan lugar a
zonas de crecimiento diferenciadas denominadas Anillos de Crecimiento. La compleja
organización estructural de la madera la hace un material anisótropo, con propiedades
diferentes en sus tres planos normales de corte (longitudinal, radial y tangencial).
El cambium es una capa microscópica constituida por células vivas y de paredes muy
delgadas que se interpone entre la corteza y la madera. El cambium produce en mayor
proporción madera hacia la parte interior y en menor proporción corteza hacia la parte
externa.
El floema es la parte interior o parte joven de la corteza, es la porción de tejidos encargada del
transporte de agua y elementos elaborados en las hojas.
La mayoría de las diferencias entre albura y duramen son de naturaleza química, ocasionadas
por infiltración en el duramen de sustancias orgánicas como aceites, gomas, resinas, taninos,
compuestos aromáticos y colorantes, convirtiéndolo en un tejido más duradero y de color más
oscuro que la albura. La albura es permeable y puede ser tratada, el duramen de muchas
especies maderables no es permeable.
Las células que conforman las distintas maderas, cumplen distintas funciones en el árbol vivo
variando por lo tanto en su aspecto y conformación. Esta diferencia en la composición celular
de los arboles, permite agrupar las especies maderables en dos grandes clases, unas
comúnmente llamadas maderas blandas que corresponden a las coníferas y las llamadas
maderas duras correspondiente a las latifoliadas.
La madera de coníferas está formada principalmente (80-90%) por traqueidas, estas cumplen
la doble función de transportar líquidos y servir de sostén de la estructura leñosa, las
traqueidas son células dispuestas en el sentido del eje del árbol, alargadas, fusiformes de
extremos cerrados y provistas de punteaduras que permiten el paso de los líquidos.
Otro tipo de células de las coníferas se conoce como parénquima, conforman canales
orientados transversalmente al eje del tronco y cumplen la función de conducir y almacenar
sustancias nutritivas desde la corteza hacia la médula, se conoce como radios medulares.
La madera de latifoliadas tiene una estructura celular más compleja constituida por fibras, que
son células alargadas, agrupadas en haces, provistas de punteaduras para facilitar el paso de
nutrientes y que cumplen funciones de sostén del cuerpo leñoso. La fibra es el componente
principal con un 50% o más del volumen de la madera.
Las latifoliadas presentan vasos, que son elementos de conducción de agua y sales
minerales, constituido por células tubulares unidas por sus extremos generalmente abiertos,
en algunas maderas puede formar el 50% de su volumen total.
Asimismo, presentan células de parénquima para la conducción y almacenamiento de
nutrientes no solo en sentido transversal sino también en el longitudinal. Ocasionalmente se
encuentran canales gomíferos formados por células especializadas de parénquima.
Existen maderas que tienen un alto peso específico o baja porosidad, o cuyos conductos se
hallan taponados por gomas o resinas, lo cual las hace poco penetrables por líquidos y, en
consecuencia difíciles de preservar.
La Humedad en la Madera.
La relación agua-madera está sujeta a la influencia de varios factores, entre ellos, la calidad
de las fibras y el peso especifico de la madera. Así, mientras el duramen no permite
contenidos de humedad elevados, la albura, por ser más liviana y porosa, puede acumular en
agua valores superiores al 100% de su peso seco. El agua contenida en la madera se
encuentra bajo diferentes formas: agua libre, agua de saturación o higroscópica y agua de
constitución.
El agua libre es la que se encuentra ocupando las cavidades celulares o lumen de los
elementos vasculares. Al iniciarse el secado, el agua libre en los poros se va perdiendo
fácilmente por evaporación ya que es retenida por fuerzas capilares muy débiles, hasta
alcanzar el punto de saturación de las fibras (PSF) entre 21 y 32%, cuando la madera ha
alcanzado esta condición sus paredes celulares están completamente saturadas, pero sus
cavidades están vacías. Durante esta fase de secado la madera no experimenta cambios
dimensionales, ni alteraciones de sus propiedades mecánicas.
El agua de constitución es aquella que forma parte de la materia celular de la madera y que
no puede ser eliminada utilizando las técnicas normales de secado; su eliminación implicaría
la destrucción de la madera.
Hongos xilófagos.
Son los agentes responsables de la desintegración de la materia orgánica, algunos de ellos
afectan la madera lo que les ha merecido el nombre de hongos xilófagos.
Los hongos, al desarrollar sus hifas y formar el micelio, penetran en la madera y casi siempre
permanecen ocultos en ella. En consecuencia la pudrición no es fácil de reconocer en sus
etapas incipientes y cuando es posible detectarla por cambio de color o manifestaciones
miceliares de los cuerpos fructíferos, la pudrición ya se habrá generalizado.
Cuadro comparativo:
Hongos cromógenos.
Las manchas biológicas pueden tener coloración negra, azul, roja, amarilla, marrón y gris,
pero la más importante es la mancha azul o mancha de savia. Esta alteración es el resultado
de la difracción de la luz sobre los filamentos coloreados o no de los hongos responsables.
La mancha azul no causa efectos considerables sobre los esfuerzos de flexión y compresión,
pero debe considerarse como una advertencia de que las condiciones son favorables para el
desarrollo de los hongos.
Los hongos de la mancha azul no descomponen la celulosa, pero cuando el porcentaje del
manchado es alto afecta el poder del blanqueador de la pulpa. Entre los géneros de hongos
cromógenos más sobresalientes tenemos: Diplodia, Trichoderma, entre otros.
Mohos.
Son los hongos de humedad que, al igual que los cromógenos, no influyen sobre las
propiedades de resistencia mecánica, ya que se desarrollan en la superficie. Por su
crecimiento en la superficie, pueden ser eliminados por medios mecánicos sin embargo,
pueden resultar peligrosos ya que son los que crean condiciones para el desarrollo de
pudrición. Se desarrollan en los patios y depósitos de madera aserrada, cuando no se apila el
material en forma correcta y se impide de esta forma el secado rápido de la superficie.
Entre los géneros mas conocidos están: Aspergillus, Penicillium, Tórula y Trichoderma.
Humedad.
Es necesario para la germinación de las esporas, la secreción de enzimas para la
desintegración del sustrato leñoso, la absorción y transporte de sustancias nutritivas y la
constitución de nuevos tejidos. El contenido de humedad más adecuado en el sustrato es de
35% a 50%, algunas especies se desarrollan en contenidos de humedad ligeramente por
encima del 50%. La degradación de la madera no se puede realizar si el contenido de
humedad se encuentra por debajo del 20%.
Cuando la madera está saturada los hongos no pueden desarrollarse por falta de aire, de tal
forma que la inmersión total en agua es un adecuado sistema de protección.
Temperatura.
Los límites entre los cuales el crecimiento es posible, está entre los 3 °C y 42 °C, ubicándose
los valores óptimos entre 20 y 35 °C. La temperatura que produce la muerte de los hongos se
ubica entre los 50 °C, donde el tiempo de exposición juega papel importante.
Oxigeno.
Los hongos son organismos aerobios, la cantidad necesaria es relativamente baja, el aire
disponible, aun en el duramen de la madera, es suficiente para que los hongos se desarrollen
cuando los demás factores son favorables. La falta de oxigeno ejerce una acción fungistática
en los hongos; es decir, mientras el aire no sea suficiente la propagación de la pudrición será
prácticamente nula.
Alimento.
La madera constituye el medio alimenticio más adecuado para hongos xilófagos mediante el
suministro de lignina y celulosa y a través de sustancias de reserva almacenadas en sus
cavidades, representadas por azúcares y almidones. El alargamiento de la vida útil de la
madera se consigue en forma definitiva mediante la impregnación con sustancias químicas,
las cuales al envenenar el alimento impide el desarrollo de los hongos.
Valor PH.
La madera presenta un valor de PH cercano a 5 y se sabe que los valores óptimos para el
desarrollo de hongos están entre 5 y 6 es decir ligeramente ácidos.
Cabe afirmar que la humedad, temperatura, oxigeno, alimento y valor PH son factores vitales
para el desarrollo de los hongos; si uno de ellos falta, o es nocivo, la pudrición no se produce.
Ante la dificultad de controlar con ventaja estos factores, la aplicación de sustancias químicas
a la madera se presenta como el sistema más eficaz para el control de los hongos xilófagos.
Insectos xilófagos.
En el caso de escarabajos que destruyen la madera, el tiempo más largo del ciclo de vida es
el estado larvario y es precisamente la etapa en la cual lleva a cavo la destrucción para
satisfacer necesidades alimenticias. Los insectos adultos también toman parte de esta
actividad, como el caso de termites y algunos coleópteros que penetran la madera para
colocar huevos y criar sus larvas.
Alimento.
Casi todos los xilófagos se caracterizan por su preferencia un estado especial de la madera
para llevar a cavo su ataque. Existen géneros que solo atacan arboles en pie, otros árboles
recién cortados, otros lo hacen solamente a maderas secas y algunos prefieren maderas que
han sido atacadas por hongos pudridores o manchadores.
Humedad.
Se distinguen dos grupos, insectos de madera verde e insectos de madera seca. Los de la
madera verde atacan arboles vivos en decadencia o troncos recién cortados con alto
contenido de humedad. Los insectos de madera seca atacan maderas de construcción y
productos secos. A diferencia de los anteriores pasan muchas generaciones dentro del mismo
sustrato hasta que lo destruyen completamente, a este grupo pertenecen varios
representantes de las familias Annobiidae y Lyctidae, considerados junto con los termites los
más importantes en nuestro medio.
Temperatura.
Las altas temperaturas conducen en corto tiempo, a la muerte de los insectos, se puede
aplicar como medio de control para insectos, temperaturas mínimas de 55 °C durante un
tiempo no inferior a 60 minutos.
Los termites de madera seca, no requieren suministros especiales de agua, abren galerías o
aprovechan grietas existentes donde inician su actividad formando colonias poco numerosas,
con el tiempo hacen pequeños agujeros a través de los cuales eyectan residuos fecales que
son la única evidencia de la infestación. La gran cantidad de colonias en un mismo elemento
los convierte en individuos muy peligrosos.
Los termites subterráneos, construyen sus nidos fijos, desde donde se mueven los obreros en
procura de material alimenticio, requieren humedad adecuada, por ello construyen sus
termiteros en contacto con el suelo. Las colonias son muy numerosas, característica que los
convierte en individuos de mayor peligro como atacantes de edificaciones y construcciones de
madera. La presencia de tubos o caminos cubiertos sobre paredes, pisos, lo mismo que la
existencia de tierra o mezcla de arena y madera masticada en la estructura, es evidencia clara
de la infestación por termites subterráneos.
Se han identificado 2000 especies de termites, de las cuales unas 150 atacan casas y
estructuras de madera, especialmente en zonas tropicales donde se han convertido en el
factor limitante en la utilización de la madera en programas de construcción.
El control puede hacerse mediante tratamientos especiales (gases) o por impedimentos
químicos o mecánicos para llegar a las construcciones. Sin embargo, el sistema más
apropiado para el control es la utilización de madera preservada.
Coleópteros (escarabajos).
Los escarabajos xilófagos son por lo general de tamaño pequeño, por sus requerimientos de
humedad pueden agruparse en tres categorías: (a) los que atacan madera con altos
contenidos de humedad (CH ˃ 20%); (b) los que atacan madera seca (CH de 15 a 20%)
limitando normalmente sus daños a la zona de la albura; (c) los que atacan madera muy seca
(CH < 15%).
Cerambícidos (taladradores).
Son insectos cuyas larvas se alimentan del parénquima de la madera, atacan arboles en pie
afectados por pudrición o próximos a secarse.
Escolítidos y Platipódidos.
Son denominados coleópteros de ambrosía, cuyas larvas se alimentan de las hifas del hongo
Monillia que vegeta en las galerías abiertas por los insectos adultos. Son pequeños y exigen
altos contenidos de humedad, al secarse la madera y morir los hongos de ambrosía la
abandonan en búsqueda de otras fuentes alimenticias. Las galerías quedan ennegrecidas,
característica más destacada para el reconocimiento de la actividad de estos insectos. No hay
peligro en utilizar madera que presente agujeros tipo aperdigonado o “cabeza de alfiler”
producido por este grupo de insectos, es muy difícil que afecten las propiedades de
resistencia mecánica, salvo en caso de que el daño sea de mucha consideración o cuando se
destine para fines estéticos.
Bostríchidos y Líctidos.
Son insectos que viven a expensas del parénquima de la madera. Las dos familias presentan
diferencias marcadas desde el punto de vista morfológico, pero ambas se caracterizan por
dejar un aserrín muy fino parecido a la harina de madera
Los bostríchidos son de mayor tamaño que los líctidos sus galerías tienen forma de “Y”, en
ella intervienen los adultos y las larvas. Los líctidos se distinguen por ser más pequeños y
delgados, sus hembras no penetran en la madera para depositar sus huevos, sino que lo
hacen desde afuera introduciendo solamente el aparato ovipositor en los vasos o poros de la
madera, se conocen unas 20 especies de líctidos en las zonas tropicales y templadas, se
caracterizan por su incapacidad de atacar coníferas.
Anóbidos.
Atacan maderas muy secas y viejas, los daños más importantes los producen en vigas y
columnas de madera, muebles antiguos o piezas de museo, atacan tanto a coníferas como
latifoliadas, las galerías son abiertas por las larvas después de eclosionar los huevos puestos
en galerías abiertas por otros insectos.
Perforadores marinos.
Reviste especial importancia en mares tropicales y subtropicales ya que en ellos se
encuentran todas las especies capaces de atacar la madera, se agrupan taxonómicamente en
dos grupos, moluscos y crustáceos.
Moluscos.
Todos los moluscos perforadores están incluidos en un solo orden y pertenecen a dos
familias; Teredinidae, con los géneros Teredo y Bankia y la familia Pholodiadae, con el género
Martesía.
La familia Teredinidae agrupa una serie de especies de forma muy similar a la de un gusano,
se les llama “gusano de los barcos”. La Martesía en cambio es más parecida a las almejas.
Los teredos pertenecen a la clase Bivalva, el Teredo navalis que es la principal especie de
este grupo, es bisexual; los huevos son fertilizados dentro del adulto y un gran número de
larvas son soltadas al mar. Estas larvas se establecen en la madera sumergida y después de
la metamorfosis continúan sus perforaciones.
La Martesía, presenta forma de “pera” y su cuerpo está protegido por una caparazón que
también penetra la madera por la perforación inicial, quedando así atrapado de por vida.
Crustáceos.
La especie más extendida es la Limnoria lignorum, vive en grandes comunidades y se
caracteriza por la tendencia que tiene de arrollarse en forma de bola, los adultos miden unos 3
mm de largo y prefieren el agua turbia, a diferencia de los teredos que frecuentan aguas
transparentes. El daño que causa la Limnoria en un año puede ser comparado con el que
producen los Teredos en 2 o 3 meses, debido a que no son aprisionados en la madera sino
que pueden moverse libremente. Las galerías tanto de los individuos jóvenes como adultos,
son de unos 2 mm de diámetro y la profundidad no pasa de 15 mm, por lo que los daños son
relativamente superficiales. Aunque la destrucción es menos rápida que la de los teredos, la
acción mecánica de las olas puede reducir el espesor de la madera atacada y producir el
colapso de los pilotes bruscamente.
Fuego.
La madera por ser un material combustible, crea siempre el riesgo de incendio y esa es una
de las limitantes a su mayor uso en la construcción. A pesar de su acción espectacular, la
cantidad de madera destruida por el fuego es de importancia secundaria al compararla con la
destruida por pudrición o insectos.
La impregnación con ignífugos retarda la acción del fuego porque permite una pirolisis lenta,
con producción abundante de carbón lo que va aislando la superficie de la madera evitando
además la producción de gases inflamables.
Desgaste mecánico.
Cuando la madera está sometida a condiciones de movimiento está expuesta al deterioro por
desgaste mecánico. Entre los sistemas de protección para retardar la acción del desgaste por
rozamiento se utilizan placas metálicas de asiento, como las que se utilizan en la instalación
de rieles en los durmientes de madera. La preservación con productos oleosolubles disminuye
también la acción del desgaste mecánico.
La vida útil de una madera está determinada, de una parte, por aspectos inherentes a su
naturaleza y, de otra, por las condiciones especiales de servicio.
Aquellas maderas densas y de color oscuro son usualmente mas durables, las maderas con
alta densidad son menos porosas y por lo tanto cuentan con menos posibilidad de acceso de
agua y oxigeno; las coloraciones oscuras corresponden a sustancias que reducen la
absorción de agua, o a extractos que pueden ser tóxicos para hongos pudridores.
Arboles con bajos valores de crecimiento han mostrado aumentos en la durabilidad de sus
maderas. Aparte de los factores inherentes a la madera, la durabilidad depende también de
las condiciones de utilización. Así, por ejemplo, la madera será más susceptible de ser
atacada en condiciones calidad y húmedas que en climas fríos y secos; de otro lado, la
probabilidad de ataque será mayor si esta se encuentra en contacto directo con el suelo.
Categoría AR (Altamente Resistente), pérdida de peso entre 0 y 1%, con una duración en uso
exterior de más de 15 años, son maderas de alta densidad y de duramen que no es posible
tratar.
Categoría R (Resistente), pérdida de peso entre 1 y 5%, con una duración en uso exterior de
10 a 15 años, son maderas de alta densidad y tratabilidad variable por el duramen.
Categoría MR (Moderadamente Resistente), pérdida de peso entre 5 y 10%, con una duración
en uso exterior de 5 a 10 años, son maderas de alta densidad y con posibilidad de
tratamiento.
Categoría MPR (Muy Poco Resistente), pérdida de peso entre 10 y 30%, con una duración de
uso exterior de 1 a 5 años, son maderas de densidad media y buena tratabilidad.
Categoría NR (No Resistente), pérdida de peso mayor del 30%, con una duración de uso
exterior de menor que un año, son maderas de muy baja densidad y muy buena tratabilidad.
Grupo I (muy fáciles de tratar), la albura y duramen tratadas por presión o inmersión retienen
más de 200 kg/m3 y penetración total.
Grupo II (fáciles de tratar), tratadas por presión o inmersión obtienen para la albura una
retención de 150 a 200 kg/m3 y para el duramen de 100 a 150 kg/m 3 y penetración parcial
periférica.
Grupo III (moderadamente difíciles de tratar), tratadas por presión o inmersión tienen una
retención de 100 a 150 kg/m3 para albura y 50 a 100 kg/m3 para duramen.
Grupo IV (difíciles de tratar), tratadas por presión o inmersión tiene penetración incompleta y
retención de 50 a 100 kg/m3 y cuyo duramen es imposible de tratar.
Requisitos de un preservante.
(1) Toxicidad, (2) Penetrabilidad, (3) Permanencia, (4) Inocuidad, (5) No corrosivo,
(6) No combustible, (7) Fácil de aplicar, (8) Permitir acabados, (9) No fitotóxica,
(10) Económico y Accesible.
No existe un preservante que reúna todas estas condiciones, el que cumpla con la mayoría de
los requisitos será el más conveniente.
Toxicidad.
Los preservantes deben transformar la madera en un material venenoso para los organismos
xilófagos. Para que los productos químicos ejerzan su acción letal en forma prolongada,
deben ser solubles en los líquidos celulares de los agentes de destrucción.
La creosota y el pentaclorofenol, que por su naturaleza son insolubles en agua, son
suficientemente solubles como para intervenir en la fisiología normal de los hongos e insectos.
La dosis mínima o letal de cada preservante está dada por la menor cantidad de producto
activo en relación al sustrato, necesaria para eliminar el organismo xilófago. La dosis mínima
letal es sumamente importante para la eficacia del tratamiento preservador y para los
aspectos económicos de la impregnación.
Penetrabilidad.
La profundidad que alcanza un preservante en la madera es un factor que depende del grado
de viscosidad del producto químico, de las características y contenido de humedad de la
madera y del método de tratamiento.
La viscosidad alta, como la de la creosota impide la penetración. Sin embargo, aplicando
temperaturas adecuadas se facilita la penetración por reducción de la viscosidad.
Permanencia.
La madera tratada debe durar muchos años, para que el preservante ofrezca esta garantía,
los componentes tóxicos deben ser de tal naturaleza que puedan fijarse a la madera en forma
permanente, lo cual se consigue por la formación de precipitados insolubles a reacciones
químicas, y que conservan su grado de toxicidad. En otra palabras, los precipitados tóxicos no
deben alterarse por lixiviación, volatización, o por cambios químicos.
Inocuidad.
Algunos productos ofrecen cierto riesgo para las personas que los manipulan, ya que
concentrados son tóxicos para el hombre y los animales domésticos.
No corrosivos.
El agregado de cromatos alcalinos en las multisales modernas, tienen la misión de fijar los
componentes y contrarrestar la actividad corrosiva de algunos componentes ácidos.
No combustible.
La creosota y el pentaclorofenol contienen cierto riesgo de inflamabilidad lo cual se reduce
con la eliminación del exudado en las piezas tratadas. Las sales solubles en agua ofrecen una
mayor garantía frente a los peligros de incendio, en algunas formulas se incluyen sustancias
inhibidoras de la propagación del fuego.
Fácil aplicación.
No deben ofrecer dificultades para su incorporación a la madera.
Permitir acabados.
No deben interferir en los acabados de madera tratada.
No fitotóxico.
La madera impregnada empleada en labores agrícolas, no debe afectar por exudados a
productos que puedan crecer sobre soportes o tutores.
Económicos y accesibles.
Cuando el costo de los preservados es muy elevado, incide significativamente en el costo del
tratamiento y puede llegar a impedir que la madera tratada compita con otros materiales
capaces de sustituirla. En la selección del preservante debe tenerse en cuenta su
disponibilidad en los mercados y el destino que se le pretenda dar a la madera tratada.
Creosota ordinaria.
La creosota para preservado de madera es un destilado de alquitrán de hulla, producido por
carbonización a temperatura elevada de la hulla bituminosa, consiste principalmente en
hidrocarburos aromáticos, sólidos y líquidos que contienen notables cantidades de ácidos y
bases de alquitrán. Es más pasada que el agua e insoluble en ella.
El procedimiento para destilar el alquitrán influye en la naturaleza de la creosota, la cual no es
una sustancia simple, sino una mezcla de gran número de compuestos muchos de los cuales
tienen alta cotización en el comercio.
Creosota líquida.
Se aplica a la creosota, modificada por extracción de de los componentes que cristalizan a
temperatura ambiente, tales como naftaleno, antraceno, fenantreno y fruoreno. Esto da un
aceite completamente líquido entre 18 y 20 °C, que puede ser utilizado sin calentamiento con
brocha, aspersión o inmersión.
Productos Orgánicos.
Son sustancias oleosolubles, muchas de ellas de gran toxicidad para elementos biológicos,
presentan cualidades como: no corrosivo, gran poder de penetración, no son inflamables una
vez que el solvente se ha evaporado. La madera impregnada con estos productos puede ser
analizada fácilmente en el laboratorio y puede ser laqueada, barnizada o pintada, según
convenga para su mejor acabado.
Variando los solventes se pueden crear muchas combinaciones para dar lugar a productos
limpios, que no alteran la apariencia de la madera.
Entre los principales preservantes de este grupo figuran los naftenatos, el pentaclorofenol, el
oxido tributil estannoso y el quinolinolato 8 de cobre.
Naftenatos.
Son compuestos cerosos o gomosos, no cristalinos y solubles en aceite, se aplican por
brocha, aspersión o inmersión. El naftenato de cobre es el más generalizado en la
preservación de madera.
Pentaclorofenol.
De todos los fenoles clorados, el “penta” es el más toxico y hasta ahora, el más empleado de
los preservantes orgánicos oleosolubles. El penta, como sustancia química es un producto
seco, escamoso o granulado de color parduzco e insoluble en agua. El penta es ligeramente
ácido y reacciona con los álcalis fuertes de sodio y potasio para formar “sales solubles” en
agua que se usan para combatir la “mancha azul” en la madera.
El penta en algunos países está clasificado como cancerígeno, su uso está limitado como
preservante de madera.
Quinolinolato 8 de cobre.
Este producto se fórmula conjuntamente con repelente de agua para dar a la madera, además
de la protección contra hongos de pudrición, la máxima estabilidad dimensional. Por tanto,
reduce los cambios por efecto de humedad, se recomienda en casos en que la madera debe
estar en contacto intimo con productos alimenticios, como son los estantes de cocina,
alacenas, embalaje de frutas, etc.
Productos inorgánicos.
A este grupo pertenecen los preservantes constituidos por sales metálicas simples, dobles o
múltiples, que se solubilizan en agua. En su composición intervienen sustancias de gran poder
fungicida e insecticida, además de un fijador que impide su lixiviación de la madera tratada.
Los cromatos alcalinos que se agregan no solo son fijadores, sino que también reducen la
acidez o el efecto corrosivo de estos productos, la mayor ventaja es que se conocen
perfectamente sus componentes y sus porcentajes en la formulación, se pueden transportar
en forma concentrada y diluirla en agua, no son fitotóxicos, no aumenta la inflamabilidad, no
imparten olores a la madera y permiten buenos acabados.
Sales múltiples.
Tienen en su composición un elemento fungicida como el cobre y un insecticida como el
arsénico o el boro; además, se incluye un fijador como el cromo. La toxicidad de las sales se
expresa como “factor oxido”, que es la sumatoria de los pesos porcentuales de cada
componente, expresada como óxidos ya que son estos los que determinan la actividad tóxica
de la sal.
La retención mínima fijada para los diferentes usos de la madera tratadas se refiere siempre a
las sustancias óxidas. Esto se hace con el fin de tener una base objetiva de retención para
los productos comerciales que llegan al mercado en diferentes concentraciones.
Ejemplo, determinar el factor óxido de una sal cuya fórmula hipotética es:
Óxido crómico CrO3 – 27%
Óxido cúprico CuO – 15%
Ácido arsénico H3AsO4 – 34%
Agua – 24%
230
Entonces: ácido arsénico x = óxido arsénico
284
230
Por tanto el factor de conversión a óxido para el ácido arsénico es: = 0,81
284
Para lograr una protección efectiva de madera a la intemperie en contacto con el suelo, se
requiere, según la Norma AWPA de 1984, una absorción mínima de sales de cobre, cromo y
arsénico (CCA) de 6,0 a 9,6 kg / m3.
Por tanto se requeriría una cantidad efectiva de sal retenida entre 6 / 0,695 = 8,6 kg/ m3 y
9,6 / 0,695 = 13,8 kg/m3.
Absorción.
Es la cantidad total de preservante que queda en la madera después de tratada, depende del
sistema de impregnación utilizado, de la humedad y características de la madera a tratar y de
la naturaleza del producto químico preservante.
Los tratamientos de vacio-presión requieren que la madera esté seca, por debajo del punto de
saturación de las fibras PSF, (25 a 28 % CH). Los tratamientos por capilaridad, difusión y
osmosis, la madera deberá estar humedad ya que el agua es el medio a través del cual el
preservante penetra.
La naturaleza de los productos químicos tiene cierta influencia en la absorción, los
hidrosolubles seguidos de la creosota y los orgánicos son los que presentan mayores
absorciones, cuando la madera es tratada en las mismas condiciones.
La proporción de albura y duramen también influye en la absorción. Al respecto, existen
maderas que son fáciles de impregnar, otra resultan imposibles de preservar.
p2 – p 1 C
A= x
V 100
A: es la absorción expresada en kg/m 3
p2: peso de la madera después del tratamiento
p1: peso de la madera antes del tratamiento
V: volumen de la madera en m3
C: concentración del preservante en %
Absorción neta mínima de componentes activos (óxidos), utilizado para distintos preservantes.
Penetración.
Es la profundidad que alcanza el preservante en la madera tratada, la madera debe estar seca
y descortezada salvo en caso de tratamiento por capilaridad, difusión u ósmosis. La
penetración también está influenciada por la naturaleza del preservante.
La creosota y los preservantes orgánicos tienen un alto poder de penetración, los
hidrosolubles por ser menos viscosos deberían penetrar mejor; sin embargo, por factores de
tensión superficial y la incapacidad de mojar por completo la pared celular, son los que menos
penetran.
Total regular (Tr), toda la sección está penetrada con concentración uniforme.
Total irregular (Ti), existen lagunas muy pequeñas con secciones de mayor concentración.
Parcial regular (Pr), cuando la zona penetrada es periférica y más o menos uniforme.
Parcial irregular (Pi), la zona penetrada es periférica y presenta lagunas, sin patrón fijo.
Parcial vascular (Pv), la penetración se realiza siguiendo los elementos de conducción.
Penetración nula (Pn), no existe penetración significativa.
Retención.
Es la cantidad de óxidos del preservante que ha quedado en la madera después del
tratamiento.
La retención es equivalente a la absorción neta y se expresa en kilogramos de la sustancia
activa (óxidos del preservante) por m 3 de madera (kg/m3); en caso de productos oleosolubles,
la absorción o retención neta también se expresa en kilogramos de la sustancia activa por m 3
de madera.
Reactivos de coloración.
Para el arsénico (molibdato), la madera preservada con este producto adquiere un color azul
que se va transformando en verdeazulado, mientras que la zona a la cual no llegó el
preservante se torna anaranjado.
Para el cobre (cromo azurol S), se rocía la zona tratada, un color azul determina la
penetración de cobre en la madera impregnada.
Para el boro (extracto de cúrcuma), se rocía la madera con una solución de extracto de
cúrcuma y alcohol etílico. Transcurrido unos minutos, se vuelve a rociar con una solución que
resulta de mezclar con acido clorhídrico concentrado. El color amarillento de la madera se
transforma en rojo en la zona penetrada por el boro.
A % B % C %
Cloruro de zinc 35 Fosfato de amonio 10 Cloruro d zinc cromado 80
Sulfato de amonio 35 Sulfato de amonio 60 Sulfato de amonio 10
Acido bórico 25 Tetra borato de sodio 10 Acido bórico 10
Dicromato de sodio 5 Acido bórico 20
Descortezado.
La corteza de los arboles es impermeable a los líquidos preservantes. Hay que eliminarla
antes del tratamiento, excepto en el caso del método Bouchierie aplicado a madera rolliza con
corteza. En los productos aserrados a veces existen algunos rezagos en sus aristas, además
de obstruir la penetración de los preservantes, albergan insectos, favorecen la pudrición y
retardan el secado.
Los sistemas de descortezado son: (1) Descortezado manual, (2) Descortezado mecánico con
maquinas portátiles o estacionarias.
Secado de la madera.
El método más elemental para secar es exponiéndola al aire libre, hasta que alcance una
humedad apta para el tratamiento (20 a 25% CH), la madera debe apilarse según el tipo de
producto utilizando separadores adecuados. El apilado horizontal es el más generalizado,
existe además el apilado en triangulo, en caballete y vertical. En la industria el secado al aire
está siendo reemplazado por el secado artificial.
Labrado y taladrado.
El labrado, taladrado u otros cortes que se hacen a la madera para su instalación, deben
practicarse antes del tratamiento preservante, así se evita el desperdicio de madera
preservada y la ruptura de la capa protectora que siempre debe estar intacta para que sea
efectiva. Si se realiza en forma contraria es preciso impregnar la zona descubierta.
Incisiones.
Son perforaciones de forma variada que se hacen en las superficies de madera difíciles de
preservar, se realiza para favorecer la penetración y distribución uniforme del preservante. En
postes y durmientes de madera impermeable es indispensable ejecutar incisiones, estas se
realizan en la zona de empotramiento hasta 30 cm por arriba de la línea del suelo, en los
durmientes se hace en las cuatro caras.
Los tratamientos por brocha y aspersión son temporales y deben repetirse periódicamente, su
uso está limitado a madera para interiores o protegida de la intemperie.
Doble difusión.
Tiene por objeto formar sales de difícil lixiviación dentro de la madera. Esto se logra
agregando separadamente a la madera sales o más productos hidrosolubles, que al
reaccionar forman precipitados insolubles en agua. Normalmente se utiliza el sulfato de cobre
seguido de una solución que contenga cromato sódico. Al igual que en el caso anterior, la
madera se almacena en cobertizos, donde se mantiene en atmosfera saturada de humedad o
cubiertas con lonas o telas plastificadas que impiden su secado para poder completar el
proceso de difusión del preservante. Concluida esta fase, la madera se deja secar
normalmente.
El mayor inconveniente del método radica en que no se puede utilizar mezclas de productos,
ya que casi siempre tienen tendencia a reaccionar químicamente entre si y precipitar en forma
de compuestos insolubles, impidiendo la penetración en la madera.
Procedimiento Rueping.
Este método se emplea para tratamiento en caliente con creosota o pentaclorofenol. Tiene
como característica principal la aplicación de una presión preliminar de aire a la madera, antes
de inyectar el preservante caliente oleosoluble; esta presión inicial suele ser de 4 a 5 kg/cm 2.
Luego se llena el autoclave con el producto químico impregnante de manera que el aire
inyectado quede aprisionado en la madera. El preservante está contenido en un recipiente
denominado tanque Rueping, que se encuentra a cierta altura sobre el autoclave y a la misma
presión del aire comprimido en este (en el autoclave).
Por medio de tuberías se deja fluir el preservante en el autoclave mientras el aire asciende al
tanque Rueping para ocupar el espacio que deja el preservante. Una vez que se ha cumplido
con esto, se hace penetrar el preservante oleosoluble dentro de la madera mediante la
aplicación de una presión mayor hasta obtener la absorción deseada, comprimiendo aun más
el aire que había quedado en la madera.
Finalmente se disminuye la presión, se vacía el autoclave y se somete la carga a un vacio
final, como en el proceso Bethell.
Tan pronto como disminuye la presión se expande el aire comprimido en la madera y expulsa
una cantidad considerable del preservante inyectado, motivo por el cual este proceso se
conoce también como procedimiento de célula vacía.
El vacio final acelera la recuperación del preservante y acorta el periodo durante el cual la
madera exuda. Con el procedimiento Rueping se consigue una retención neta limitada pero
una penetración más profunda que por el proceso de célula llena.
Procedimiento Lowry.
Se trata de otro proceso de célula vacía. Diferente del método Rueping solamente en el hecho
de que no implica el uso de una presión preliminar de aire, ya que una vez introducida la
madera en el autoclave e inundado con el preservante, se eleva la presión del tratamiento
hasta los niveles deseados y se mantiene por el tiempo necesario.
Luego se restablece la presión atmosférica en el autoclave y se evacua el preservante. Por
último se práctica el vacio final ya indicado en los tratamientos anteriores y se da por
terminado el proceso. Cabe mencionar que al no elevar tanto la presión del aire inicial en la
madera, se consigue en las mismas condiciones mejores penetraciones y retenciones que con
al sistema Rueping.
La utilización de madera preservada debe justificar plenamente los costos del tratamiento,
proporcionando un periodo de servicio que no debe ser inferior a cuatro veces su durabilidad
natural. El complimiento de estos objetivos requiere en principio una definición de los términos
“calidad y control de calidad”, con miras a proporcionar tanto a procesadores como a usuarios,
herramientas para obtener un producto que cumpla con la función asignada.
La calidad.
Se define como el grado en que un producto satisface los requerimientos de un consumidor,
de tal manera que cumpla la función que se espera de él, al mejor precio posible. La calidad
es una propiedad intrínseca del producto y, como tal, es una responsabilidad del fabricante; es
el resultado de una labor integrada que involucra a todas aquellas personas que tienen
responsabilidades en las diferentes etapas del ciclo industrial.
El control de calidad.
Comprende todas las actividades que se deben desarrollar en la empresa con el fin de
alcanzar sus objetivos de calidad y consiste en investigar, desarrollar, diseñar, fabricar y
vender productos que sean los más económicos y útiles para satisfacer los requerimientos del
consumidor.
1-Control de calidad de la materia prima, se debe hacer una inspección del material que se
encuentra completamente manufacturado y listo para la aplicación del preservante.
Calidad de la madera, verificar el cumplimiento de los requisitos de calidad bajo los cuales se
adquiere de los proveedores tales como especie, dimensiones, nudos, curvatura, rajaduras,
ataque de hongos e insectos.
Manufactura o acabado, se verifica requisitos de diseño establecidos tales como dimensiones,
torneado, aserrado, número y diámetro de perforaciones, cortes y marcas.
Contenido de humedad, verificar la correcta reducción del contenido de humedad hasta
alcanzar el porcentaje máximo establecido por las especificaciones técnicas respectivas.
Determinación de la penetración.
Se realiza mediante la utilización de un barreno de incremento, el cual permite la obtención de
tarugos que conformarían la muestra para el análisis y sobre las cuales se puede medir la
profundidad de penetración.
Determinación de la retención.
La retención real del preservante se puede obtener mediante la aplicación de métodos
químicos cuantitativos, espectrofotometría de absorción atómica, o espectroscopia de rayos X.
A continuación se indican algunas formulas que permiten conocer datos del desarrollo de un
proceso de impregnación y que pueden ser utilizadas para el control de calidad de la madera
tratada.
Calculo de la cantidad necesaria del preservante.
Para calcular la cantidad de preservante que debe ser absorbido por la carga de madera para
alcanzar la retención mínima según sus distintos usos, se puede aplicar la formula:
R x Vc
Vp =
Cxd
Vp = volumen del preservante que debe ser absorbido, en litros (lt).
R = retención, en kg de preservante seco (componente activo) por m 3 de madera (kg/m3).
C = concentración del preservante, en kg de componente activo por kg de solución.
D = densidad del preservante utilizado en el tratamiento, a la temperatura de trabajo, en kg/lt.
Vc = volumen de la carga de madera en m3.
Determinación de la retención.
La retención del producto preservante seco se determina aplicando la formula:
Anp x n x C
R=
Vc
R = retención del producto preservante seco (componente activo), en kg/m 3.
Anp = absorción neta promedio de la carga de madera, en kg/pieza.
n = número de piezas de la carga de madera.
C = concentración del preservante, en kg de producto activo por kg de solución.
Vc = volumen de la carga de madera en m3.
Certificación de calidad, la certificación tendrá como base toda la información y los registros
gráficos de la operación completa mantenidos en el laboratorio de control de calidad y se
garantizará al usuario el cumplimiento de las especificaciones técnicas establecidas en las
normas.
Las medidas profilácticas conservan la calidad de la madera solo por un tiempo relativamente
corto, su efectividad depende fundamentalmente de su aplicación en el momento oportuno, es
decir, antes de que los organismos hayan logrado penetrar. Los métodos de protección
dependen de una gran cantidad de factores, entre ellos el clima, la calidad de la madera, el
tiempo de estacionamiento, el tipo de agente destructor, los medios que se tenga para la
protección y el conocimiento que se posea de la importancia del problema.
Almacenamiento en el bosque.
Los arboles y las trozas en el bosque son invadidos en pocas horas, después de la tumba y el
troceo, por esporas de hongos y grupos de insectos xilófagos, sobre todo en un clima cálido y
húmedo que proporciona condiciones ambientales óptimas para el desarrollo de agentes
destructores (alta humedad relativa combinada con alta temperatura).
La mejor medida profiláctica sería un inmediato transporte al sitio de procesamiento y una
rápida transformación, si esto no es posible se deben tomar medidas preventivas como:
2-Los extremos de las trozas expuestos al sol y al agua son el punto de mayor vulnerabilidad,
el rápido secamiento facilita el agrietamiento a lo largo de la fibra y se incrementa el aire
disponible para el ataque de los agentes destructores, la mejor protección de los extremos es
el sellado, los materiales selladores pueden ser pintura a base de caucho, parafina caliente,
una mezcla de cal y sal o un sellador a base de una resina sintética mezclado con un
preservante.
Las aspersiones con pentaclorofenato de sodio, tetracloruro de sodio o con sales CCA y CCB
a baja concentraciones son las más indicadas. La fumigación de las trozas con un
preservante inmediatamente después del apeo, es el sistema profiláctico más apropiado para
las condiciones tropicales.
La duración de la efectividad del tratamiento se ve afectada por muchos factores que obligan
a aplicar refuerzos, especialmente cuando la madera debe recorrer grandes distancias bajo
condiciones que permiten el lavado rápido del producto.
Almacenamiento en patios.
La madera rolliza susceptible de ataque deberá tratarse en el patio con productos que tengan
acción sobre hongos e insectos, contra hongos se puede usar solución de sulfato de cobre al
2%, a la que pueden agregarse pentaclorofenato de sodio y bórax, en diferentes porcentajes,
para reforzar la actividad del cobre.
Las aspersiones con aceite que contengan acido cresílico o hexacloruro de benceno y
pentaclorofenato son igualmente muy eficaces, sobre todo en climas tropicales.
Todas las aspersiones a base de aceite deben ser aplicadas preferiblemente sobre una
superficie seca, ya que la aplicación sobre madera mojada reduce en forma pronunciada la
eficiencia del tratamiento profiláctico.
Baño profiláctico.
Toda la madera aserrada susceptible del ataque de hongos cromógenos e insectos, debe
pasar de forma inmediata por un baño profiláctico de una solución de productos químicos
como el pentaclorofenato de sodio, fosfato etilmercúrico, bórax u otras sustancias apropiadas.
La concentración correcta de estos baños debe ser controlada en forma periódica para
garantizar una óptima protección durante el proceso de secado.