Está en la página 1de 23

EL ARTE PALEOLÍTICO I

El arte paleolítico es la expresión más destacada de la capacidad creativa de los hombres


del Paleolítico Superior. Según H. Breuil el arte figurado nació de ceremonias o
representaciones dramáticas en las que el actor imitaba a un animal, enmascarado con la
piel o la cornamenta del mismo, pudiéndose éstos sustituir por imitaciones.

Coincidiendo con la llegada a Europa Occidental del Homo Sapiens u Hombre


Anatómicamente Moderno (HAM), hace unos 40.000 años, durante el último período
glaciar, aparecieron las primeras manifestaciones artísticas (sobre las paredes de las
cuevas profundas, abrigos rocosos o al aire libre; otras en forma de pequeños objetos de
piedra, hueso, marfil o asta de ciervo o reno). De ello se deriva una división general en
dos grupos: el arte mueble o mobiliar (que se podía transportar) y el arte parietal (o
rupestre) en las paredes de las cuevas o sobre grandes bloques.

En 1879, Marcelino Sanz de Sautuola descubrió las pinturas en la cueva de Altamira,


pero las pinturas fueron tachadas de falsas por los prehistoriadores del momento. El
decubrimiento de cuevas con grabados y pinturas en Francia (autentificadas por Breuil)
motivó una rectificación del caso de Altamira, y la reivindicación científica de la figura
de Marcelino Sanz de Sautuola, a principios del siglo XX (1902).

1. TIPOS DE MANIFESTACIONES ARTÍSTICAS

Arte rupestre o parietal: pintado, grabado o modelado en bajorrelieves en la entrada y


en el interior de cuevas, abrigos o al aire libre. Se define por los siguientes elementos
comunes: predominio del grabado-bajorrelieve-pintura, predominio del tema
animalístico, diversidad de estilos y tamaños, figuras de perfil, movimiento, diferentes
convencionalismo para expresar la 3ª dimensión y delimitar las figuras, variedad
limitada de colores (colores básicos).
Arte mueble: pintado, modelado y esculpido en bulto redondo sobre soportes varios
(hueso, marfil, piedra o barro cocido). Se define por los siguientes elementos comunes:
predominio del grabado sobre pintura, predominio de temas animalísticos, hay figuras

1
humanas de bulto redondo, diversidad del soporte, diversidad de estilos(naturalistas y
abstractos), posibilidad de transportar o usar la figura como elemento ritual o adorno.

El arte mueble se extendió por toda Europa, desde la Europa Occidental hasta las
grandes llanuras de la oriental, llegando hasta Siberia. Se han encontrado restos en
Europa Occidental, en la cueva de La Madeleine y Lepugue (en Francia) en Europa
Central, la Venus de Willendorf (Austria), y Europa Oriental, como en el yacimiento de
Kostienski (Rusia).

El arte parietal solo ha aparecido en Europa Occidental.

2. DISTRIBUCIÓN GEOGRÁFICA

FRANCIA
PIRINEOS FRANCESES: cuevas de el Salón Noir de Niaux (en Ariege) con bisontes;
Gargas (Aventignan) con manos, la mayoría mutiladas; Isturitz (en San Martin
d’Arberoue) con tres pisos independientes llenos de pinturas, y el conjunto de grabados
al aire libre de Fornols-Haut (Camponne)
FRANCIA CENTRAL Y SUROCCIDENTAL: cueva de Lascaux (Montignac,
Dordoña) con “Sala de los Toros” y “Diverticulo” con uros, bisontes y caballos. Cueva
Les-Angles-sur-L’Anglin con relieves femeninos, Cueva de Rouffignac con
rinocerontes lanudos y mamuts; el abrigo de Cap Blanc (Dordoña), con un friso de
caballos esculpidos; Pech-Merle (Quercy), con “caballos tordos” y Roc de Sers
(Carente), con figuras zoomorfas.
PENÍNSULA IBÉRICA
En esta zona, los lugares de mayor concentración se encuentran en la cornisa cantábrica
(País Vasco, Cantabria y Asturias), también hay diversos núcleos dispersos por otras
regiones (Levante, Meseta Central, Portugal, Aragón, Extremadura y Andalucía
REGIÓN CANTÁBRICA: cuevas Peña de Candamo, con caballos y ciervos en
movimiento, Tito Bustillo (Ribadesella) con gran panel de renos y caballos bicromos y
Pindal con mamuts y peces.

2
CANTABRIA: Fuente de Salín (valle de San Vicente), con manos negativas y
positivas, Monte del Castillo (Puente Viesgo) y sobre todo la cueva de Altamira, con
su “Salón de Polícromos”, que contiene bisontes, ciervos y diversos signos, así como
una serie de grabados y figuras negras en las galerías más internas.
RESTO DE LA PENÍNSULA: cueva de los Casares (Guadalajara), con mamut, un
rinoceronte lanudo y varias formas humanas; cueva de la Griega (Segovia), con bellos
caballos grabados; la cueva del Parpalló (Valencia) con múltiples figuras y grabados; y
la Cova Fosca (Alicante) con diversas representaciones zoomorfas, bóvidos, équidos y
cérvidos.

También hay yacimientos al aire libre de cierta importancia, como Mazuco (Portugal),
donde abundan caballos, Domingo García (Segovia), en el que han hay aparecido
nuevas figuras en los últimos años (caballos, bóvidos y cérvidos) y Piedras Blancas
(Almería), con múltiples manifestaciones de caballos.

ITALIA
Cueva Paglicci (Sur de Italia) con figuras y manos rojas; la cueva Romanelli (en la
región de Apulia, al sur) con el grabado parietal de un toro; cueva de Romito (en
Cosenza) con un toro grabado, o la cueva de Addura (Sicilia) con representaciones de
cérvidos y de figuras humanas que muestran escenas de danzas, ceremonia de iniciación
o sacrificio.

INGLATERRA
Se han identificado en la zona de Creswell (centro de Inglaterra) más de 200 figuras en
las cuevas de Church HooleMother, Mother Grundy’s y Robbin Hoods Cave.
Recientemente, se ha ampliado el inventario de cavidades en la zona del Parque
Nacional de Peak District (Norte de Inglaterra) con otro centenar de figura

3. TÉCNICAS
Las imágenes representadas no formaban escenas y estaban asociadas con un nº
abundante de signos abstractos y de carácter enigmático. Las técnicas utilizadas en el
arte Paleolítico eran sencillas, aunque utilizadas con gran maestría y eficacia, lo que
determinó representaciones de una alta calidad y perdurabilidad.

3
En el arte parietal hay que distinguir el que se encuentra en el interior de las cavidades,
del realizado en sus bocas o en abrigos abiertos y el plasmado en estaciones plenamente
al aire libre. El relieve se da más en estos últimos.

Las tres técnicas básicas empleadas en el arte parietal paleolítico son el grabado, el
bajorrelieve y la pintura. Éstas se podían hacer aisladas o combinadas entre ellas. Es
frecuente encontrar la combinación de un fino grabado lineal, a modo de esbozo, junto
con pintura.

Hay una estrecha relación entre el trabajo en relieve y los grabados, como puede
apreciarse en los modelados y grabados sobre o con arcilla. Algunas paredes de las
cuevas aparecen recubiertas por películas de arcilla, restos de las corrientes de agua
subterránea. Aquí los hombres prehistóricos también dejaron sus huellas artísticas.
Breuil, consideró que los rastros de dedos en la arcilla (macaronis) que representan
líneas sinuosas y simples siluetas de animales, serían uno de los elementos más
antiguos.

El grabado
El grabado es una incisión, un surco o entalladura generalmente sobre un soporte duro.
Para realizarlo, el hombre paleolítico podía haber utilizado un buril o simples lascas u
hojas de sílex. Si el soporte lo permitía, también se utilizaba la técnica del martillado.
Los hombres prehistóricos grababan las figuras con uno o varios trazos finos o
profundos y luego las pintaban. En otras ocasiones, se hacía la silueta con pintura y se
reforzaba el contorno con grabado. También se hacían raspados, estriados, sombreados
o simples líneas para acentuar los volúmenes. Incluso se cubrían las paredes con una
fina capa de arcilla de descomposición de la caliza con el fin de acondicionarlas para la
elaboración de las pinturas.
Pintura
Los hombres también pintaban las figuras sin emplear el grabado, silueteándolas
mediante pincel, tamponado (un útil que actuaba como un tampón y que desarrollaba un
trazo discontinuo), con trozos de carbón vegetal o los dedos.

4
Los colores básicos eran el negro (obtenido del manganeso y el carbón), el rojo (óxidos
de hierro u ocre amarillo o limonita), y el color amarillo (variedades de arcilla o de
limonita).
Se ha constatado una amplísima gama de tonalidades según el tipo de colorante
utilizado, mezclas realizadas, disolución del pigmento, cantidad o el modo de
aplicación. Además hay que tener en cuenta su posterior degradación a lo largo de los
milenios. Se han constatado ciertos ocres que van desde el marrón hasta el anaranjado, e
incluso blancos (hay un caso único como es la mano de Gargas). Estos colores se
utilizaban en seco o mezclados con agua u otros aglutinantes, como plasma sanguíneo,
grasa, agua, orina o clara de huevo. Recientemente, M. Menu y Ph. Walter han llevado a
cabo numerosos análisis de pigmentos de algunas pinturas de cuevas francesas y han
demostrado que muchos de ellos estaban preparados con agIutinantes orgánicos, como
aceites vegetales o grasas animales.

Las figuras solían ser de un solo color o rellenas de este único color. Para dar mayor
sensación de modelado, se recurría a la bicromía (las figuras aparecen rellenas de
pigmentos cuidadosamente sombreados mediante la combinación de dos colores en el
mismo animal). La tricromía sólo aparece en los grandes conjuntos pictóricos de
Altamira, Lascaux y Niaux, y son el resultado de diferentes matices y espesores de los
colorantes, combinados con raspados y finas líneas grabadas. Raramente como en el
caso del bisonte de Marsoulas (Francia) el interior de la figura estaba hecho a base de
líneas de puntos.

Bajorrelieve
La existencia de restos de pintura sobre algunos bajorrelieves (Venus de Laussel-
Francia) indica que hubo ocasiones en que se aplicó pintura sobre ellas.
Los primeros grabados conocidos estaban hechos sobre lajas de piedra y proceden de
los niveles auriñacienses del yacimiento de La Ferrassie (Francia). Eran siluetas de
animales y vulvas femeninas grabadas con un surco único, continuo, profundo y ancho.
Es posible que las incisiones anchas y toscas se hicieran mediante un útil grueso de sílex
y punzón, mientras que los grabados superficiales y finos se podrían haber hecho con un
buril o con una simple lasca con filo.

5
Las primeras esculturas en bajorrelieve estaban realizadas mediante hendiduras firmes,
anchas y profundas. El modelado es bastante deficiente y a menudo los pechos,
separación entre las piernas, vello púbico o pliegues del estómago aparecen realizados
mediante simples surcos grabados. En determinados casos es realmente complicado
diferenciar entre figuras grabadas profundamente y bajorrelieves superficiales como
puede ser el caso de la leona de Les Combarelles (Francia) o los zoomorfos de la cueva
de Isturitz (Francia).

4. TÉCNICAS Y ESTILOS
Todos los métodos de trazado por adición (pintura), sustracción de materia (grabado y
escultura) o modificación de un soporte plástico (modelado y trazado digital) parecen
haber sido conocidos desde un comienzo por las primeros artistas. Cada región se
caracterizó por preferencias técnicas y estilas particulares. Algunas muestran
preferencia por los trazados lineales, otras pintura bícroma o polícroma.

Por lo general, el animal se sugiere por la cabeza y el torso (protomos). Los hombres
prehistóricos también empleaban determinadas convenciones estilísticas. Una de ellas es
el característico belfo o morro de los caballos que adoptaba la convención del llamado
pico de pato y que permite fechar con bastante precisión a los équidos que la poseen en
el Solutrense Superior. Otra, es la denominada M ventral utilizada en el Magdaleniense
para delimitar el pelaje del flanco de muchos animales.

Las convenciones también se aplicaban a pezuñas, cuernos y astas. Aquí es posible


encontrar diferentes posibilidades:

 Algunos aparecen en forma de silueta, en perspectiva simple, en los que se


ven solamente una pata delantera y una trasera, y en el caso de los bóvidos
un único cuerno, como ocurre en Ebbou (Francia).
 Representación completa de las cuatro patas y se dibujaban los dos cuernos
en una perspectiva aproximada casi a la realidad (perspectiva semitorcida)
con las patas y los cuernos del lado contrario parcialmente ocultos por el

6
cuerpo del animal. En tales casos, las pezuñas y cascos, si se dibujan, se
representan también en su verdadero perfil.
 La perspectiva torcida es una forma intermedia de dibujar las cuatro patas y
los dos cuernos o astas. Aunque el animal estaba representado de perfil, los
dos cuernos o astas se veían de frente y no en perspectiva. Los cuernos
podían estar dibujados curvados simétricamente al mismo lado de la cabeza,
o paralelamente curvados simétricamente al mismo lado de la cabeza como
en muchos bóvidos de Lascaux (Francia). Respecto a las astas se siguen
prácticas similares. Las orejas podían aparecer diversamente colocadas,
unas entre las astas o cuernos y la segunda detrás de los mismos
prácticamente a la altura del inicio del cuello, o sencillamente se omitían.
En muchos casos las pezuñas de los bóvidos y cérvidos aparecían de frente
aunque el resto del animal esté de perfil.

Nunca se representó como nosotros lo entendemos, aunque fue sugerido. También aquí
hay que evocar los animales en posición insólita y los que sólo están representados
parcialmente, como animales acéfalos, como ocurre en Altamira o Ekaín, o cabezas
aisladas, en los yacimientos del Castillo y las Chimeneas.

5. TEMÁTICA
Las representaciones artísticas se dividen en tres bloques (animales, antropomorfos o
figuras humanas y signos).

Animales o zoomorfos
El grupo más importante eran los animales, constituyen el 80% del total de las
representaciones paleolíticas. Este hecho no debe sorprender ya que se trata de
manifestaciones realizadas por pueblos cazadores-recolectores.

Los temas fundamentales del arte paleolítico giran en torno a la vida y a las costumbres
de los animales. Se muestran a aquellos animales que rodeaban a los seres humanos y
de los que frecuentemente se abastecían para poder alimentarse.

7
Incluso aparecen centenares de figuras zoomorfas que representan animales ya
extinguidos o de otras zonas climáticas.

Las figuras animales aparecían sin mostrar escenas, excepto casos excepcionales
(bisontes a la carrera-Altamira, ciervas cruzando el río-Lascaux o el bisonte embistiendo
a un hombre-Niaux).

El animal más representado en el arte paleolítico fue el caballo, aparecen en casi todas
las cavernas y en multitud de objetos mobiliares y a lo largo de todas las épocas,
especialmente en escenas de caza.
Le sigue en número de representaciones el bisonte, que todavía pervive en algunas
reservas de Europa Oriental, y el uro o toro salvaje. Su distribución es muy desigual,
posiblemente relacionado con el medio ambiente (no superaron los límites de la
Cordillera Cantábrica). En las paredes europeas aparecen representadas varias especies
de bisontes todas ellas extinguidas.
Los cérvidos vienen a continuación. Los machos y las hembras poseían unas
características morfológicas distintas. Los machos presentan grandes cuernas
desarrolladas que mudan todos los años, mientras que las hembras carecen de
cornamenta, pero las características fundamentales de éstas son tanto la cabeza como el
cuello muy alargados.
Los caprinos eran especies frecuentes tanto en el sur de Francia como en casi toda la
Península Ibérica (íbice alpino, cabra montesa y rebeco).
Los renos sustituyeron en los momentos más fríos de la época glacial a los ciervos, que
emigraron hacia el sur, dada su mayor adaptación a climas rigurosos. Su representación
es escasa.
El mamut estaba representado de manera desigual pero constante en toda la zona
eurosiberiana. Era una animal perfectamente adaptado a condiciones climáticas
extremas, y necesitado de amplios espacios abiertos para desplazarse, en la Península
Ibérica sólo se conocen casos en la Cornisa Cantábrica.

Las representaciones de carnívoros en el arte paleolítico son mucho más raras que las de
herbívoros. La mayor parte pertenecen al león de las cavernas. En las manifestaciones

8
rupestres, ninguna figura de león tiene melena y por lo tanto todas se han asociado a
hembras de la especie, pero en la actualidad se desconoce si los machos de esta especie
tenían melena al igual que los leones africanos o no. Hay representaciones en Francia,
pero no en la Península Ibérica.
Otros carnívoros representados son el lobo y el zorro. Entre los osos, destaca el oso
pardo que está pintado o grabado en varias cavidades. El oso pardo empleaba las
cuevas para invernar y parir a sus crías. El oso polar únicamente está representado en la
cueva de Las Monedas (Cantabria).

Las representaciones paleolíticas de peces se conocen en diversas estaciones, aunque no


son muy frecuentes. Destacan algunas por su tamaño como los salmónidos de la Grotte
du Poisson o el Pindal (Asturias). En los Murciélagos de Zuheros (Córdoba) hay varias
figuras de peces, cuya especie no se puede determinar y cueva de La Pileta (Málaga).

Las aves son igualmente muy escasas, pero poseen rasgos característicos que permiten
identificadas (lechuzas, buitres, perdices, gansos y ánades).

Hay animales cuya proporción es todavía menor y que se engloban en el grupo de


diversos como son los (conejos, serpientes¿?, rinocerontes, pingüinos).

Representaciones humanas o antropomorfas


Las representaciones humanas representan un 7% del total. Las figuras humanas se
representan más en el arte mobiliar que el rupestre y existen diferencias según el área
geográfica. Mientras que en la parte oriental de Europa la mayor parte de las
representaciones son femeninas, en el occidente eran asexuadas. Las figuras
antromorfas presentan importantes diferencias respecto a los animales, a la hora de su
representación. Los hombres aparecían de forma caricaturesca, en muchas ocasiones,
con detalles animalísticos que les daban aspecto de híbrido. El dibujo es muy pueril, con
una ejecución descuidada y con poca precisión a la hora de su representación. Las
figuras humanas aparecen muy esquematizadas, ejecución descuidada y poca precisión
a la hora de su representación.

9
Estas representaciones contrastan con el gran realismo, detallismo y la búsqueda de la
exactitud anatómica de las realizaciones zoomorfas (animales) contemporáneas. Los
investigadores creen que este contraste podía obedecer a varios motivos como que eran
seres míticos con naturaleza mixta animal/hombre, dispuestos para intervenir en
ceremonias de carácter religioso (chamanes); que el artista estaba sometido a alguna
inhibición que se desconoce, la cual le impedía representar al ser humano de forma
reconocible (un ejemplo es la prohibición de la figura humana en el arte islámico).

En algunas cuevas hay representaciones realistas (hombre-bisonte-Cueva del Castillo),


pero hay más figuras femeninas realistas que masculinas (la gran mayoría de mujeres se
presentaban desnudas o con poco ropaje).

Cronológicamente las primeras representaciones antropomorfas (fundamentalmente


vulvas femeninas) hay que encuadrarlas en el Auriñaciense y en el sudoeste francés.
Hay que esperar hasta el Gravetiense para ampliar la zona de distribución. En este
momento, los antropomorfos aparecen en forma de estatuillas en bulto redondo (en
piedra, marfil o arcilla cocida). También hay algunos en bajorrelieve como la llamada
Venus del Cuerno de Laussel.

Durante el Solutrense, las únicas manifestaciones que representan seres humanos, las
encontramos en el friso esculpido de Roc-de-Sers (Francia), mientras que en el
Magdaleniense las figuras humanas se hallaban por todas partes tanto en las paredes de
las cuevas, sobre bloques exentos, grabados en objetos de piedra, marfil o asta o bien
esculpidas en forma de estatuillas.

En varios casos las figuras humanas en bajorrelieve o profundamente incisas se


limitaban a una parte del cuerpo.

Junto a representaciones más o menos evidentes de animales o humanos, encontramos


(sobre todo en cuevas) algunas figuras extrañas de las que es difícil precisar su
naturaleza con los cuernos proyectados hacia delante. También hay otras figuras que se
engloban bajo el nombre genérico de monstruos o fantasmas.

10
La Venus
Figurillas que aparecen en el arte mueble, pequeñas esculturas de mujeres desnudas
elaboradas en piedra, marfil, asta, hueso o arcilla cocida, con una modulación
pronunciada de los atributos femeninos y con un tamaño que oscilaba entre los 5 y 25
cms.
Los investigadores han dado varias versiones sobre el significado concreto de esta
Venus (más de un centenar) que aparecen en toda Europa (desde Francia hasta Siberia),
excepto en la Península Ibérica: Madre o abuela del grupo, Diosa de la fecundidad,
Protectora de los animales, Ideal de belleza.
Con la Venus se pone de manifiesto el lugar preeminente de la mujer en la sociedad
paleolítica e incluso se considera que las Venus constituyeron verdaderos santuarios
femeninos (Willendorf-Austria, Brassempouy-Landes, Lespugue-Pirineos, Vestonice-
Rep. Checa).

Las Manos
Aparecen en el arte parietal y pueden ser negativas (siluetas con un halo alrededor) o
positivas (impresión directa de la mano impregnada de color), éstas últimas menos
abundantes. Se desconoce cuál era su función de las manos. Muchas de estas manos
aparecen mutiladas (Gargas-Francia, Maltravieso-Cáceres). En algunos casos se ha
pensado que se trataba de manos mutiladas por el frío, causas mecánicas o alguna
enfermedad, aunque también se piensa en causas menos “sangrientas”.

El predominio del color rojo se constata en todas las representaciones, le sigue el color
negro y en menor medida ocre marrón y ocre rojo amarillento. Sólo una mano tiene
color blanco.

La ausencia de contexto arqueológico en la mayoría de las cavidades impide establecer


una cronología precisa para este tipo de representaciones (F. Jordá-Magdaleniense
Medio, H.Breuil-auriñaco-perigordiense, Leroí-Gourhan-distintos períodos o estilos). El
empleo del carbono 14 está facilitando ir estableciendo gradualmente una cronología de
las manos rupestres.

11
Los Ideomorfos
Signos que muestran una gran variedad tipológica. En ellos se hace patente la capacidad
de abstracción del artista cuaternario, en cierta manera evocan nuestros fonemas
escritos. Es difícil hacer una descripción de los signos paleolíticos ya que no existe uno
que sea idéntico a otro. Sólo se aprecia una similitud entre los denominados tectiformes
(forma de techo) y los claviformes (forma de clavo). Leroi-Gourhan estableció una
clasificación en cuatro grupos, teniendo en cuenta el aspecto, posición en el interior de
la cavidad y relaciones con otras figuras:

 Signos ligeros: aislados o en serie, constituidos por puntos o


bastoncillos.
 Signos plenos: forma cuadrangular o rectangular, claviformes,
tectiformes y partes de figuras femeninas.
 Acoplamiento de signos ligeros y plenos: que determinarían las
heridas sobre figuras de animales, y ciertos accidentes naturales
subrayados con color y las manos negativas.
 Signos plenos acompañados de bastoncillos y puntos (La
Cullalvera, en Cantabria).

Posteriormente, G. Sauvet propuso una nueva tipología para los signos que englobaba
bajo 12 categorías, a través de la semiótica.

Respecto a la interpretación hay varias teorías:


- Inicialmente se pensó que los signos tenían un carácter narrativo o
pictográfico, representando armas, trampas, empalizadas o rudimentarias
construcciones.
- Ahora se definen como signos o símbolos que equivalen a determinados
iconos. Se cree incluso que los hombres paleolíticos los transmitirían de
generación en generación.

12
EL ARTE PALEOLÍTICO II

1. MANIFESTACIONES DEL ARTE MUEBLE

El Arte Mueble se refiere a los objetos menores esculpidos sobre materia ósea, asta,
marfil, piedra o madera. Muchos de estos objetos están bien fechados por haber sido
hallados en los contextos arqueológicos de los yacimientos. Las piezas de arte mueble
más importantes aparecen en el Magdaleniense.

Pequeñas esculturas que representan animales: notable realismo como caballos


esculpidos en marfil (Altos Pirineos, Francia), piezas de animales como un colgante en
forma de osezno, cabeza del toro almizclado (Saint Germain des Laye), cabeza de
caballo en ámbar (Isturitz .País Vasco Francés) y una figura de glotón en relieve, de
marfil, procedente del yacimiento de Jarama II (Guadalajara).

Esculturas aplicadas a objetos utilitarios: propulsores de ceremonia como el caballo


saltando (cuevas de Bruniquel-Montrastuc), propulsor de asta de reno (Kesserloch-
Thayngen-Schaffhausen) con la cabeza del toro almizclado, pareja de renos esculpidos
en marfil (Bruniquel-Francia), propulsor de cabritilla y los bastones de mando
perforados en asta de reno con prótomo de caballo (Mas d’Azil-Francia).
Muchos de estos utensilios (especialmente los propulsores labrados sobre asta de reno)
presentan magníficos relieves y esculturas en pleno bulto como en el propulsor de los
pájaros de Mas d’Azil, donde se representa a un cáprido que vuelve la cabeza hacia
atrás para ver cómo por debajo de la pequeña cola levantada salen dos aves estilizadas.
En la zona de los Pirineos, es probable que hubiera una importante escuela pirenaica de
escultores.

Contornos recortados: representan la cabeza o la silueta de un animal (cabras


montesas, bisontes y caballos) con los detalles representados por líneas grabadas. En su
gran mayoría tienen uno o dos agujeros, por lo que hay que considerarlos como objetos
de adorno relacionados con las vestimentas. Se han encontrado en la cueva de la Bastide

13
(18 piezas de cabras montesas y una cabeza de bisonte), Mas d’Azil, Laugerie Basse y
El Juyo (Cantabria)

2. CRONOLOGÍA Y ESTILOS

La cronología del arte paleolítico es una de las cuestiones más complejas, ya que existen
diversos problemas acerca de sus inicios y evolución estilística. Se conocen algunas
piezas de arte mueble muy antiguas (cabecita humana de Makapansgat en Sudáfrica,
datada entre 2,5 y 3 millones de años), en el Musteriense o Paleolítico Medio
conocemos la existencia de prácticas funerarias que consisten en enterrar los muertos
teñidos de ocre rojo o tendidos sobre un fondo de este color, acompañados de algunos
objetos, es posible que en este período existiera un arte primitivo sobre materiales
perecederos (pieles. cestería, cortezas de árboles, madera, etc.). Con el Paleolítico
Superior se incrementó el número de representaciones pictóricas parietales y muebles, y
por tanto, los investigadores tuvieron que buscar un método para datarlos
cronológicamente. Hay diversos sistemas para la datación:

o Que algunos fragmentos desprendidos del panel quedasen incorporados a


niveles arqueológicos.
o Que las representaciones estuvieran parcial o totalmente cubiertas por niveles
arqueológicos fechables.
o La superposición de unas figuras sobre otras.
o La similitud estílistica de las figuras con otras del arte mueble aparecidas en
niveles arqueológicos fechables.
o La evolución estílistica de lo simple a lo complejo y de lo monocromo a lo
polícromo.

Muchos de estos criterios presentan numerosos problemas y no siempre pueden ser


fiables. La reciente incorporación del C-14, ha permitido fechar las muestras de
pequeño tamaño sin dañar la pintura y obtener una serie de fechas para el arte
paleolítico.

14
El sistema de Breuil: se esforzó en elaborar un sistema cronológico-evolutivo para el
arte paleolítico. Estableció unas coordenadas estilísticas que iban de lo más simple a lo
más complejo y que fue ordenando en un sentido cronológico:
 Ciclo Auriñaco-Perigordiense: comenzaría por los dibujos más simples, los
dibujos laberínticos hechos con los dedos sobre arcilla (macaroni), entre los que
se identifican las primeras representaciones de animales, a los que seguirían el
nacimiento de la representación parietal, conformada por esquemas simples,
manos monocromos y perspectiva torcida (astas y cornamentas se representan de
perfil absoluto o de frente). Las manos pertenecerían a un momento antiguo de
este ciclo, "antes que cualquier otra manifestación pictórica”

 Ciclo solútreo-magdaleniense: se iniciaría con la escultura, siguiéndole


grabados y pinturas muy sencillas que se harían cada vez más complejos,
adoptando luego ciertas convenciones hasta llegar su culminación en los
modelados de arcilla y en las representaciones polícromas con perspectiva
normal o corregida. Breuil consideraba que la plenitud estaría fechada en el
Magdaleniense.

La teoría del Abate Breuil ha sido abandonada, si bien se convirtió en el punto de


partida de todos los estudios posteriores. La hipótesis presentaba inconvenientes ya que
no concedía gran importancia a la fase solutrense, se utilizaba insuficientemente el arte
mueble y no se tenía en cuenta la sucesión casi lineal de las culturas paleolíticas.

El sistema de Leroi-Gourhan: elaboró el más minucioso cuadro cronológico del arte


rupestre paleolítico, partiendo de complejos estudios estadísticos mediante la utilización
de la informática y aprovechando las dataciones del C14 y los adelantos conseguidos
con nuevos métodos de excavación. Su sistema presenta como novedad el haber fijado
una secuencia evolutiva única, con la ayuda del arte mueble. El prehistoriador dividió la
evolución en cuatro estilos básicos, además de un estilo prefigurativo:
 Estilo prefigurativo: período Chatelperroniense (hacia el 35.000 a.C) no hay
representaciones artísticas identificables, pero sí se han encontrado objetos de
adorno, placas y huesos con líneas grabadas y abundante utilización del ocre.

15
 Estilo I: Auriñaciense (30.000-27.000 a.C).

o Muestra animales representados parcialmente (de forma tosca) con


simples trazos que definen la cabeza o el lomo, que se han encontrado en
cuevas francesas (Abri Castanet, Abri Cellier, Abri de Belcayre y La
Ferrassie).
o Signos.
o Puntos y bastones.
o Figuras realistas en la pared que representan sexos (principalmente
vulvas).
o Pequeñas figuras del arte mueble en zonas de acceso de la cueva,
principalmente animales como mamut y cabeza de león, siendo las más
antiguas las encontradas en la cueva de Vogelherd (Alemania).

 Estilo II: Gravetiense y comienzos del Solutrense (25.000-18.000 a.C),


constituye el momento de máxima expansión del arte paleolítico (desde la
Península Ibérica hasta el río Don en Rusia). En el arte parietal, las pinturas y
grabados se limitan a zonas de penumbra o primeras regiones oscuras. Las
obras de arte tienen una clara unidad estilística, a pesar de la larga perduración
del período (7.000 años).

o Las figuras presentan siluetas más pronunciadas, construidas sobre una línea
fuertemente sinuosa que representa el cuello y el dorso del animal (curva
cérvico-dorsal).
o Perspectiva torcida (astas y cornamentas se representan de perfil absoluto o
de frente).
o Desproporción entre cabeza y cuerpo.
o Los animales aparecen frecuentemente sin patas. Hacia la parte baja de las
imágenes los detalles desaparecen, de forma que las patas faltan o se
representan con trazos simples.

16
o Aparecen las primeras obras parietales de atribución segura que se limitan a
las zonas de penumbra o a las primeras regiones oscuras como en el caso de
(Gargas, La Gréze, Ardéche y Gard).
o Época más rica en el arte mueble, tanto en estatuillas humanas (Venus)
como representaciones zoomorfas, entre las que destacamos los mamuts de
Dolni Vestonice, Pavlov y Prednosti (Chequia) y leones, lobos, caballos,
aves y mamuts en los yacimientos de Kostienski, Sungir, Adveevo y Ma’lta,
(llanura rusa) En Europa Occidental, destacan las representaciones de
Isturitz y Abri Labattut.
o Tanto en el arte parietal como el mueble coexisten una tendencia naturalista
y otra estilizada.

 Estilo III: Solutrense Medio y Superior y Magdaleniense antiguo (17.000-


13.000 a.C), subsisten los caracteres del Estilo II, pero con una técnica mucho
más perfeccionada.

o Se siguen construyendo las figuras a partir de la curva cérvico-dorsal,


pero presentan menos sinuosidad en los contornos (los caballos tienen un
cuerpo alargado).
o Los cuerpos presentan un gran volumen (especialmente en la parte
delantera como ocurre con los bisontes, toros y cápridos), que han hecho
que a veces se hablara de animales grávidos.
o Se atenúa la desproporción entre cabeza y cuerpo
o Las extremidades aparecen mucho más detalladas hasta los cascos y las
pezuñas, pero generalmente eran cortas y hacían que los animales
parecieran de poca altura.
o Astas, cornamentas y pezuñas se presentan en diferentes perspectivas,
desde la frontal hasta el perfil absoluto, pero lo más frecuente era la
perspectiva biangular oblicua, o perspectiva semitorcida (con un ángulo
de 45 grados).

17
o Aparecen múltiples signos abstractos, principalmente cuadrangulares y
claviformes (como ocurre en Lascaux, Le Gabillou, Villars, El Castillo o
Pech Merle).

 Estilo IV: Magdaleniense Medio y Reciente (13.000-9.000 a.C), etapa de los


grandes santuarios y del mayor número de representaciones en arte parietal (casi
el 80% de todas las obras paleolíticas).
Leroi-Gourhan divide este estilo en dos fases:
o Estilo Antiguo: Magdaleniense Medio (13.000 y el 11.000 a.C) y que
tiene una serie de características, muchas de las cuales también se aplican
a la siguiente fase:

- El arte parietal se caracteriza por figuras que presentan mayor


proporción anatómica y minuciosidad en los detalles de las figuras,
próximas al realismo fotográfico, pero aún sin llegar a éste (hay
todavía convenciones particulares como los crines de los bisontes).
- Las astas, cornamentas y pezuñas estaban representadas por lo
común en una perspectiva normal
- Se van fijando las convenciones del modelado mediante líneas,
raspados y manchas de color, por ejemplo, la M ventral de los
caballos
- Los signos se fueron regionalizando, en el Perigord (signos
cuadrangulares muy evolucionados que llegan a ser tectiformes), en
el Pirineo surgieron (signos con heridas-Niaux y ovales-Trois-
Freres), y en la Cornisa Cantábrica (signos claviformes -Altamira y
oval). Entre los ejemplos de arte parietal de Estilo Antiguo se
encuentran Tito Bustillo y El Pindal (Cornisa Cantábrica) y
Rouffignac y Niaux (en Francia).
- Etapa de mayor nº de representaciones/manifestaciones, en especial
de bulto redondo. Como se ha comentado, aparecen diversas
tipologías como los contornos retocados, las esculturas que

18
representan pequeños animales de forma realista, y las aplicadas a
objetos utilitarios.

o Estilo Reciente: Magdaleniense Superior. El paso del estilo antiguo al


reciente se hizo aproximadamente en el 11.000-10.000 a.C. El arte típico
de este largo período desapareció de la Europa occidental tras la
emigración, la extinción o los cambios en los modos de vida de los
artistas-cazadores. Este estilo se caracteriza por:
- Grandes escenas
- Movimientos de las figuras de los animales
- Ausencia de convencionalismos
- Forma muy natural de la línea dorsal, presentando un gran
realismo fotográfico.

Entre los ejemplos de este estilo reciente, se encuentran las pinturas de


las cuevas de las Monedas (Cantabria).

Esta teoría es la más aceptada entre los investigadores, pero sigue planteando algunos
problemas, en especial en la cuestión de la cronología. La incorporación del C-14 ha
determinado que el estilo de algunos conjuntos artísticos no coincide con la fecha que le
debería corresponder según sus características.

Por esta razón, algunos investigadores dudan en establecer una evolución general de
carácter lineal, como han hecho Leroi-Gourhan y Breuil, y en su lugar hablen de una
evolución de tipo regional, con las correspondientes diferencias estilísticas y
conceptuales.

3. LA PROBLEMÁTICA DEL SIGNIFICADO

Otra de las cuestiones que también es objeto de grandes debates son los motivos que
impulsaron a los Homo Sapiens a promover el arte paleolítico.

19
Este arte que persistió durante 20.000 años no es una mera manifestación estética (el
arte por el arte) si no que hay unos contenidos de fondo que son el reflejo de unas
concepciones o ideas sociales y religiosas. Hay que tener en cuenta que aquellas obras
de arte eran producto de una sociedad de cazadores que debía contar con unas
estructuras sociales muy avanzadas. Es por ese motivo que los investigadores han
formulado diferentes teorías al respecto:
Arte por el arte: la teoría más antigua (E. Lartet y H. Christy), defendía la idea del
“arte por el arte”, es decir, que los hombres habrían grabado y pintado las paredes y los
diferentes objetos con una finalidad puramente decorativa.
El Totemismo: surge como consecuencia de la influencia de la etnología comparada
(Frazer y Tylor). El totemismo implica una correlación estrecha entre un grupo humano
y una especie animal o vegetal particular. El totemismo es una teoría relacionada con el
chamanismo. Hoy en día son las dos teorías mayormente aceptadas para la explicación
del arte paleolítico, ya que tótems y chamanes pudieron ser muy comunes en las
sociedades paleolíticas. Por el contrario, ambas teorías exigen una cierta interpretación,
ya que no poseen pruebas arqueológicas, algo que siempre ocurre con cualquier
interpretación del arte del Pleistoceno.
La Magia: en el entorno de Breuil se fueron formando varias teorías interpretativas;
desde la magia propiciatoria (Begouen) a la magia de la reproducción animal y humana
(Reinach). Se vincula el arte con ciertas actividades mágicas relacionadas con la caza, la
destrucción o la fecundidad. Identidad entre imagen y el sujeto, de manera que cuando
sobre la imagen se actuaba, también se hacía sobre la persona o el animal figurado. Los
hombres primitivos creían que al representar un animal, éste quedaba, de alguna
manera, bajo su dominio, y podía facilitar su captura.

Además, de la magia de la caza, había una magia de la destrucción, destinada a aquellos


animales que eran peligrosos para el hombre, como los felinos y los osos; con ella se
trataría de destruir otros depredadores y principales, competidores de la especie humana
en la lucha por la vida.

La magia de la fertilidad tenía como finalidad la reproducción de las especies que eran
cazadas, representando animales de sexo opuesto en escenas previas a la cópula con la

20
intención de aumentar el número de animales que iban a ser cazados. En muy pocos
casos se distingue el género de los animales y los genitales los representaban, casi
siempre, de una manera muy discreta.
El Estructuralismo: la teoría de Leroi-Gourhan y de su colaboradora Annette Laming-
Emperaire valoraba la posible relación de las figuras entre sí y su situación topográfica
en los muros y paredes de las cuevas.
Leroi-Gourhan consideraba las cuevas como verdaderos santuarios en el que
bisontes, uros, mamuts y caballos formarían la base sólida del bestiario, asociando unas
figuras con otras, y que por su importancia y supuesta carga simbólica, ocuparían los
paneles centrales, mientras que los otros animales, como ciervos y cabras, eran
considerados como complementarios.
Los santuarios aparecían organizados en torno a dos principios, masculino y
femenino, que en muchas ocasiones aparecen asociados como reflejo de una visión
dualista del Cosmos.
Teniendo en cuenta que casi la mitad de los animales representados eran caballos y
bisontes (uros), Leroi-Gourhan llegó a la conclusión que debían representar dos temas o
principios acoplados o yuxtapuestos. Lo masculino (al que denominó A) sería
representado por los caballos, mientras que lo femenino (al que denominó B) sería por
el bisonte.
A unos y a otros animales (caballo-masculino y bisonte-femenino) se asociaban signos
con idéntico valor. Leroi-Gourhan también dividió los signos en dos grupos: a
(masculino) y b (femenino).

La teoría de Leroi-Gourhan tiene como elemento innovador el considerar que las


paredes reflejaban escenas narrativas, frente a otros investigadores que defendían la idea
que se trataba de una superposición de figuras. Lo importante no era la posición de
cada una de ellas, sino lo que realmente cada animal significaba por sí mismo.

En cambio, mantenía algunas de las propuestas de Breuil y sus seguidores, como la


idea de la fecundidad y de concebir las cuevas como grandes santuarios.

21
Si bien esta teoría ha sido aceptada por numerosos investigadores, otros la critican. La
interpretación se ha basado en simples deducciones, sin base sólida argumental. No
explican porqué fueron realizadas las pinturas, ni la importancia del número de animales
representados, o el porqué de la "técnica naturalista" en vez de esquemática.
Medio de comunicación y Semiología: ideada por Ucko y Rosenfeld y completada por
G. Sauvet (1977, 1988), considera el arte como medio de comunicación de motivación
variada: económico, social, religiosa, simbólica, etc., de manera que el contexto
condicionaba la elaboración del arte.

Esta teoría puede estar relacionada con la teoría chamánica, podrían tratarse de
representaciones que los chamanes pintaron para que perduraran sus historias y
narraciones. Por lo tanto esta interpretación se puede mezclar con lo mistérico, lo
chamánico, la magia propiciatoria, para la caza y la fertilidad.
La Teoría Chamánica: ideada por Jean Clottes y David Lewis-Williams, parte de la
premisa de la existencia de ciertas formas de chamanismo en todas las tribus y pueblos
en las diferentes partes del mundo. Esta teoría se basa en el propio sistema nervioso
humano, capaz de generar estadios de conciencia alterada y alucinaciones. Para estos
autores, la cueva se convirtió en un lugar muy especial, a través de los cuales el hombre
contactaría con el mundo de los espíritus. Todas las partes de la cueva tenían un
significado propio, tanto el suelo, las paredes, las diferentes galerías, y las imágenes
representadas en los diferentes lugares de las cuevas, reforzarían el cosmos chamánico.
Para ellos el chamanismo es el origen de todo el arte paleolítico. No eran imágenes para
propiciar la caza, sino imágenes surgidas de un estadio de conciencia alterada
(puntuaciones, zig-zags, parillas y líneas onduladas).

Las criaturas medio humanas y medio animales son consideradas también como
presentaciones chamánicas, transformadas parcialmente en el transcurso de las
alucinaciones.

En cuanto al arte mueble, la teoría chamánica también da una interpretación al respecto.


Sostiene que se trataban de objetos rituales, cuyo uso se limitaba a circunstancias
especiales.

22
Para Clottes y Lewis-Williams las actividades chamánicas se iniciaban en el exterior de
cueva, donde también hay manifestaciones artísticas, que pudieron ser realizadas en el
transcurso de los ritos. Dentro de la cueva, hay diferentes partes, quedando excluidas
para los no iniciados las partes más profundas o de difícil acceso a la misma, reforzando
su contenido espiritual no artístico de la propia presentación, ya que esa representación
artística no estaba concebida para la visión y disfrute de todos

4. LOS TIEMPOS EPIPALEOLÍTICOS

Con los cambios climáticos del final de la última glaciación (hacia 11.000/10.000 B.P)
que se tradujo en una variación del paisaje y la emigración de los grandes animales, se
produjo un eclipse en la actividad artística, con la gran desaparición de las grandes
obras rupestres. Es posible que la actividad se mantuviera sobre soportes que no han
llegado a nosotros.

Hay lugares que muestran un tipo de arte Epipaleolítico como los cantos pintados con
motivos geométricos (cueva de Mas d’Azil, Lepenski Vir). El poblado de Lepenski Vir
presenta habitáculos de forma triangular que incluía un pequeño santuario pétreo. En
cada uno de estos “altares” se han encontrado esculturas realizadas sobre grandes cantos
rodados, de formas ovoides o esféricas. Se trata de figuras toscas, pero expresivas, y con
unas dimensiones entre 25 y 50 centímetros. Su iconología incluye estilos variados con
representaciones humanas (grandes cabezas sobre cuerpos casi inexistentes), peces,
cabezas de ciervo y formas abstractas.

23

También podría gustarte